Colegio Pedro De Valdivia -peñalolen -PEÑALOLEN - Región Metropolitana


Título iniciativa:

Eliminar atribución parlamentaria de aumento en asignaciones



Definición alternativa:

Somos alumnos del colegio Pedro de Valdivia Peñalolén y nuestro proyecto, con el cual participaremos en el torneo Delibera, será Eliminar atribución de aumento en asignaciones parlamentarias, esto quiere decir que los señores Diputados y Senadores no tengan el poder de legislar de forma unilateral y sin ningún tipo de control externo, este proyecto nosotros lo definiremos como MENSAJE ya que al influir en el presupuesto anual del parlamento lo convierte en responsabilidad del poder ejecutivo, teniendo los parlamentarios una real importancia en este ítem ya que son los que aprueban los presupuestos para los estamentos públicos y de igual forma negociando con el comité de asignaciones parlamentarias los reajustes anuales a los montos.
Actualmente el sueldo de los parlamentarios Chilenos asciende a $8.605.477 y su asignación parlamentaria que se divide en lo siguiente, personal de apoyo: 5.617.500, asesorías externas: 2.775.600 y gastos operacionales: 5.602.600, lo cual da un total por parlamentario de: 13.995.700 los Diputados y 17192836 los Senadores.
Las razones son muchas y variadas. A continuación detallaremos aquellas que a nuestro parecer son las más relevantes y que nos llevan a realizar este cambio, luego explicaremos los beneficios y mejorías que con este cambio se lograrían.
Además de que la atribución parlamentaría de aumento de asignaciones propio va en contra de la constitución de la República en su capitulo lV, articulo 52 que habla de las atribuciones exclusivas de los diputados; el articulo 53, de las atribuciones de los senadores; el articulo 54, de las atribuciones del congreso; y el articulo 55, del funcionamiento del congreso, demás esta decir que ninguno de estos artículos nombra ni hace referencia a que los parlamentarios puedan sesionar para aumentar sus asignaciones.
Al realizar una comparación con la realidad en la región y algunos países de Europa nos damos cuenta de lo excesivamente alto que es el montó destinado a asignación y dieta parlamentaria.
Argentina. La misma polémica que se vivió en Chile sucedió en febrero de este año en Argentina, donde diputados y senadores aprobaron por unanimidad un aumento de 100% en sus sueldos brutos, justo en momentos en que la Presidenta Cristina Fernández llevaba a cabo un plan de reducción del gasto fiscal. De todos modos, considerando que el tamaño de la nación trasandina es mucho mayor que el nuestro, la dieta y las asignaciones de sus parlamentarios es bastante menor a la de sus pares chilenos: $3.840.000 de sueldo y $1.755.000 por bonos de desarraigo, sumando $5.595.000 en total. (1)
España, Los senadores españoles son conocidos en Europa como los más austeros de la zona: su sueldo es de 1.798.280 pesos. A esa cifra suman $1.164.760 como "indemnización" para alojamiento y mantención en Madrid y $1.917.820 para transporte, incluidos viajes aéreos y terrestres, lo que suma en total $4.880.860.
Francia, El Senado francés dispone de $4.538.850 como sueldo bruto para sus miembros. Las asignaciones parlamentarias se desglosan en $3.835.650 para todos los gastos que puedan tener en el ejercicio de su función, $4.825.240 para pagar a tres asesores legislativos y beneficios como oficina en el Palacio de Luxemburgo, alimentación y 40 pasajes ida y vuelta entre París y sus respectivas circunscripciones.
Uruguay, Los uruguayos también destacan por su acotado presupuesto parlamentario. Los senadores de ese país reciben $3.611.510 de dieta y pueden asignar un máximo de $2.242.520 para asesores, $537.374 para secretarios, $404.658 para difusión y $112.860 para teléfono. Entotal,$6.908.922.
¿Qué ocurriría si los profesores, empleados públicos, privados y todos los trabajadores de este país pudieran sesionar para aumentar sus asignaciones? ¿Acaso son los parlamentarios diferentes ante la ley?
Además, hemos notado que la desaprobación a los parlamentarios ha sido muy alta los últimos años, lo que podría reflejar la poca representación por parte de dichos políticos con respecto a sus electores. A continuación adjuntamos datos respecto a lo antes dicho y seguido de esto les mostraremos un cuadro resumen con los gastos que se deben cubrir con las asignaciones parlamentarias.





El resultado del último ajuste a las asignaciones fue 2.900 millones anuales para la cámara y 1.400 para el Senado. El primero ejecutándose desde el primero de enero del año 2012; el segundo desde el mes de Mayo, el Día del Trabajador exactamente. Es decir, 9 millones de dólares en un año en asignaciones parlamentarias. Eso es más del 40% de lo que costaba rebajar impuestos en Aysén. Y todo en medio del posible escenario ante una crisis internacional, repetido una y otra vez en los discursos del gobierno y del ministro de Hacienda, con quien se negoció todo.

(1) - http://www.emol.com/noticias/nacional/2012/04/20/536666/asignaciones-parlamentarias-lo-que-reciben-los-senadores-chilenos-y-el-resto-del-mundo.html


Propuesta legislativa:

¿Por qué se establecieron asignaciones parlamentarias en el pasado y cuál es la razón que las justifica hoy? 
Estas asignaciones tienen su justificación en la naturaleza misma de las funciones de los parlamentarios, pues ellos deben desempeñar sus labores tanto en el lugar en que funciona el Congreso como en todo el país, particularmente en las localidades que los han elegido democráticamente, debiendo tener un permanente contacto con las personas que residen en las mismas, con el fin de estar al tanto de sus necesidades y requerimientos, y así deliberar sobre cuáles son las mejores leyes para regir a la comunidad y orientarlos hacia el bien común. Para ello, necesitan trasladarse y contar con oficinas y el personal para atenderlas, en uno o en distintos lugares, según sea la extensión territorial o la cantidad de habitantes del distrito o circunscripción que representan. Sin perjuicio, por cierto, que en la calidad que invisten, deban participar en actos, foros, seminarios, y cualquier otra clase de actos, en todo el territorio nacional.
Como se puede leer en los párrafos anteriores nosotros no estamos en contra de que existan las asignaciones parlamentarias ya que creemos que son un ítem vital en la labor legislativa de estar cerca de las personas.
Como se explico con anterioridad, este proyecto es un MENSAJE y para que pueda ser ley es necesario sumar un párrafo al artículo 66 de la ley orgánica del Congreso, perteneciente a la ley N° 18.918 explicitando lo siguiente Los parlamentarios no podrán sesionar para aumentar su asignación parlamentaria y se regirán por el monto que fije el comité de asignaciones parlamentarias y esta cifra se ajustará todos los años de acuerdo al IPC (Índice de precios al consumidor).
En virtud de lo dicho anteriormente, proponemos que el reajuste a las asignaciones parlamentarias sea el IPC del año anterior de cada período, que considera las alzas o bajas en los precios de una canasta de bienes y servicios de consumo adquiridos por los hogares. Esto contribuiría a la no devaluación de las asignaciones parlamentarias a lo largo de los años y a la imparcialidad al momento de determinar dichas asignaciones, ya que, es tarea de una institución externa (Instituto Nacional de Estadísticas) el cálculo del índice antes mencionado, de forma que se adapte más a la situación real del país y a lo que el Gobierno pueda entregar.
En virtud de la inflación que puede tener el país a lo largo de los años (que en algunos casos es sumamente significativa) y la necesidad de objetividad en las modificaciones de la asignación parlamentaria, proponemos que esta se realice en base a la tasa de variación del IPC de cada período, que considera las alzas o bajas en los precios de una canasta de bienes y servicios de consumo adquiridos por los hogares. Esto contribuiría a la no devaluación de las asignaciones parlamentarias a lo largo de los años y a la imparcialidad al momento de determinar dichas asignaciones, ya que, es tarea de una institución externa como el INE (Instituto Nacional de Estadísticas) el cálculo del índice antes mencionado.

Al respecto de estas medidas y además de adaptar los ajustes a la situación actual del país, creemos que no solo es una señal para disminuir en algo el gasto que hoy dispone el parlamento de los recursos fiscales, sino también en cuanto a la reducción de ciertos privilegios que creemos que no son justificados y que pueden enviar una señal importante dada la desconfianza que existe de la labor política desde la sociedad o ciudadania.

Al llevar a cabo nuestras medidas, los parlamentarios alcanzarían un estatus similar al de sus electores en cuanto a las atribuciones de sus labores (entendiéndose así, como la limitación al aumento deliberado de asignaciones y autoasignado).
Creemos que un requisito esencial de quienes son Parlamentarios es la vocación de servicio público y queremos dar énfasis en que esto puede dar una señal importante en torno a la vocación y una oportunidad para que los honorables demuestren que la desigualdad para ellos también es un problema.
Nosotros creemos en los parlamentarios y en su labor, es por esto que buscamos reforzar la confianza en ellos, eliminando una facultad que causa malas interpretaciones por parte de los ciudadanos y la aplicación de nuestras medidas no pretenden disminuir el monto de sus ingresos para cubrir los gastos que demanda la labor parlamentaria, lo que buscamos es generar un cambio gradual y que a futuro no se interponga con el desarrollo de su excelsa labor y continúen siendo la piedra angular de la Democracia.