Labor Parlamentaria
Diario de sesiones
- Alto contraste
Disponemos de documentos desde el año 1965 a la fecha
Índice
- DOCUMENTO
- PORTADA
- I. ASISTENCIA
- ASISTENCIA A SESIÓN DE SALA
- Jaime Quintana Leal
- Sergio Mariano Ruiz Esquide Jara
- Francisco Chahuan Chahuan
- ASISTENCIA A SESIÓN DE SALA
- II. APERTURA DE LA SESIÓN
- III. ACTAS
- IV. CUENTA
-
V. OBJETO DE LA SESIÓN
.
- EXPOSICIÓN DE MINISTRA DEL TRABAJO Y PREVISIÓN SOCIAL SOBRE ESTADO DE LA NACIÓN EN MATERIAS DE COMPETENCIA DE SU CARTERA.
- ANTECEDENTE
- INTERVENCIÓN : Adriana Munoz D'albora
- INTERVENCIÓN : Felipe Salaberry Soto
- INTERVENCIÓN : Carolina Goic Boroevic
- INTERVENCIÓN : Pedro Araya Guerrero
- INTERVENCIÓN : Osvaldo Raul Andrade Lara
- INTERVENCIÓN : Nicolas Monckeberg Diaz
- INTERVENCIÓN : Fernando Meza Moncada
- INTERVENCIÓN : Lautaro Carmona Soto
- INTERVENCIÓN : Maria Angelica Cristi Marfil
- INTERVENCIÓN : Tucapel Jimenez Fuentes
- INTERVENCIÓN : Osvaldo Raul Andrade Lara
- INTERVENCIÓN : Mario Bertolino Rendic
- INTERVENCIÓN : Aldo Cornejo Gonzalez
- INTERVENCIÓN : Jose Perez Arriagada
- INTERVENCIÓN : Ernesto Silva Mendez
- INTERVENCIÓN : Enrique Jaramillo Becker
- INTERVENCIÓN : Fuad Eduardo Chahin Valenzuela
- INTERVENCIÓN : Claudia Nogueira Fernandez
- INTERVENCIÓN : Guillermo Leon Teillier Del Valle
- INTERVENCIÓN : Ricardo Enrique Rincon Gonzalez
- INTERVENCIÓN : Cristina Girardi Lavin
- INTERVENCIÓN : Carlos Alfredo Vilches Guzman
- EXPOSICIÓN DE MINISTRA DEL TRABAJO Y PREVISIÓN SOCIAL SOBRE ESTADO DE LA NACIÓN EN MATERIAS DE COMPETENCIA DE SU CARTERA.
- CIERRE DE LA SESIÓN
- VIII. DOCUMENTOS DE LA CUENTA
- DEBATE
- AUTOR DE UN DOCUMENTO
- Gaspar Alberto Rivas Sanchez
- AUTOR DE UN DOCUMENTO
- DEBATE
Notas aclaratorias
- Debido a que muchos de estos documentos han sido adquiridos desde un ejemplar en papel, procesados por digitalización y posterior reconocimiento óptico de caracteres (OCR), es que pueden presentar errores tipográficos menores que no dificultan la correcta comprensión de su contenido.
- Para priorizar la vizualización del contenido relevante, y dada su extensión, se ha omitido la sección "Indice" de los documentos.
REPÚBLICA DE CHILE
CÁMARA DE DIPUTADOS
LEGISLATURA 358ª
Sesión 21ª, en miércoles 5 de mayo de 2010
(Especial, de 16.35 a 19.28 horas)
Presidencia de la señora Sepúlveda Orbenes, doña Alejandra, y del señor Becker Alvear, don Germán.
Secretario accidental , el señor Álvarez Álvarez, don Adrián.
Prosecretario accidental , el señor Landeros Perkic, don Miguel.
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ÍNDICE
I.- ASISTENCIA
II.- APERTURA DE LA SESIÓN
III.- ACTAS
IV.- CUENTA
V.- OBJETO DE LA SESIÓN
VI.- DOCUMENTOS DE LA CUENTA
ÍNDICE GENERAL
Pág.
I. Asistencia 4
II. Apertura de la sesión 7
III. Actas 7
IV. Cuenta 7
V. Objeto de la sesión.
- Exposición de ministra del Trabajo y Previsión Social sobre estado de la Nación en materias de competencia de su cartera 7
VI. Documentos de la Cuenta.
1. Oficio del Senado por el cual comunica que accedió a la solicitud de archivo, previo acuerdo de la Cámara de Diputados, de los proyectos, (boletines N°s 4308-06; 4501-06 y 4938-06) 46
2. Proyecto iniciado en moción del Diputado señor Rivas, que “Tipifica el delito de hostigamiento.”. (boletín N° 6925-07) 46
- Oficios del Tribunal Constitucional por los cuales pone en conocimiento de la Cámara de Diputados los siguientes requerimientos de inaplicabilidad por inconstitucionalidad:
3. artículo 38 ter de la ley N° 18.933. Rol 1273-08-INA. (4265) 48
4. artículo 309 Código de Aguas. Rol 1309-09-INA. (4269) 48
I. ASISTENCIA
-Asistieron los siguientes señores diputados: (115)
NOMBRE (Partido* Región Distrito)
Accorsi Opazo, Enrique PPD RM 24
Aguiló Melo, Sergio PS VII 37
Alinco Bustos René PPD XI 59
Álvarez-Salamanca Ramírez, Pedro Pablo IND VII 38
Andrade Lara, Osvaldo PS RM 29
Araya Guerrero, Pedro PRI II 4
Arenas Hödar, Gonzalo UDI IX 48
Ascencio Mansilla, Gabriel PDC X 58
Auth Stewart, Pepe PPD RM 20
Baltolu Rasera, Nino UDI XV 1
Barros Montero, Ramón UDI VI 35
Bauer Jouanne, Eugenio UDI VI 33
Becker Alvear, Germán RN IX 50
Bertolino Rendic, Mario RN IV 7
Bobadilla Muñoz, Sergio UDI VIII 45
Browne Urrejola, Pedro RN RM 28
Burgos Varela, Jorge PDC RM 21
Calderón Bassi, Giovanni UDI III 6
Campos Jara, Cristián PPD VIII 43
Cardemil Herrera, Alberto RN RM 22
Carmona Soto, Lautaro PC III 5
Castro González, Juan Luis PS VI 32
Cerda García, Eduardo PDC V 10
Ceroni Fuentes, Guillermo PPD VII 40
Cornejo González, Aldo PDC V 13
Cristi Marfil, María Angélica UDI RM 24
Chahin Valenzuela, Fuad PDC IX 49
De Urresti Longton, Alfonso PS XIV 53
Delmastro Naso, Roberto RN XIV 53
Díaz Díaz, Marcelo PS IV 7
Edwards Silva, José Manuel RN IX 51
Eluchans Urenda, Edmundo UDI V 14
Espinosa Monardes, Marcos PRSD II 3
Estay Peñaloza, Enrique UDI IX 49
Farías Ponce, Ramón PPD RM 30
García García, René Manuel RN IX 52
García-Huidobro Sanfuentes, Alejandro UDI VI 32
Girardi Lavín, Cristina PPD RM 18
Godoy Ibáñez, Joaquín RN V 13
Goic Boroevic, Carolina PDC XII 60
González Torres, Rodrigo PPD V 14
Gutiérrez Gálvez, Hugo PC I 2
Gutiérrez Pino, Romilio UDI VII 39
Hales Dib, Patricio PPD RM 19
Harboe Bascuñán, Felipe PPD RM 22
Hasbún Selume, Gustavo UDI RM 26
Hernández Hernández, Javier UDI X 55
Hoffmann Opazo, María José UDI V 15
Jaramillo Becker, Enrique PPD XIV 54
Jarpa Wevar, Carlos Abel PRSD VIII 41
Jiménez Fuentes, Tucapel PPD RM 27
Kast Rist, José Antonio UDI RM 30
Latorre Carmona, Juan Carlos PDC VI 35
Lemus Aracena, Luis PRI IV 9
León Ramírez, Roberto PDC VII 36
Lobos Krause, Juan UDI VIII 47
Lorenzini Basso, Pablo PDC VII 38
Macaya Danús, Javier UDI VI 34
Marinovic Solo de Zaldívar, Miodrag IND XII 60
Martínez Labbé, Rosauro RN VIII 41
Melero Abaroa, Patricio UDI RM 16
Meza Moncada, Fernando PRSD IX 52
Molina Oliva, Andrea IND V 10
Monckeberg Bruner, Cristián RN RM 23
Monckeberg Díaz, Nicolás RN RM 18
Monsalve Benavides, Manuel PS VIII 46
Montes Cisternas, Carlos PS RM 26
Morales Muñoz Celso UDI VII 36
Moreira Barros, Iván UDI RM 27
Muñoz D'Albora, Adriana PPD V 9
Nogueira Fernández, Claudia UDI RM 19
Norambuena Farías, Iván UDI VIII 46
Núñez Lozano, Marco Antonio PPD V 11
Ojeda Uribe, Sergio PDC X 55
Ortiz Novoa, José Miguel PDC VIII 44
Pacheco Rivas, Clemira PS VIII 45
Pascal Allende, Denise PS RM 31
Pérez Arriagada, José PRSD VIII 47
Pérez Lahsen, Leopoldo RN RM 29
Recondo Lavanderos, Carlos UDI X 56
Rincón González, Ricardo PDC VI 33
Rivas Sánchez, Gaspar RN V 11
Robles Pantoja, Alberto PRSD III 6
Rojas Molina, Manuel UDI II 4
Saa Díaz, María Antonieta PPD RM 17
Sabag Villalobos, Jorge PDC VIII 42
Sabat Fernández, Marcela RN RM 21
Saffirio Espinoza, René PDC IX 50
Salaberry Soto, Felipe UDI RM 25
Sandoval Plaza, David UDI XI 59
Santana Tirachini, Alejandro RN X 58
Sauerbaum Muñoz, Frank RN VIII 42
Schilling Rodríguez, Marcelo PS V 12
Sepúlveda Orbenes, Alejandra PRI VI 34
Silber Romo, Gabriel PDC RM 16
Silva Mendez, Ernesto UDI RM 23
Squella Ovalle, Arturo UDI V 12
Tarud Daccarett, Jorge PPD VII 39
Teillier Del Valle, Guillermo PC RM 28
Torres Jeldes, Víctor PDC V 15
Ulloa Aguillón, Jorge UDI VIII 43
Uriarte Herrera, Gonzalo UDI RM 31
Urrutia Bonilla, Ignacio UDI VII 40
Vallespín López, Patricio PDC X 57
Van Rysselberghe Herrera, Enrique UDI VIII 44
Vargas Pizarro, Orlando IND XV 1
Velásquez Seguel, Pedro IND IV 8
Venegas Cárdenas, Mario PDC IX 48
Verdugo Soto, Germán RN VII 37
Vidal Lázaro, Ximena PPD RM 25
Vilches Guzmán, Carlos UDI III 5
Von Mühlenbrock Zamora, Gastón UDI XIV 54
Walker Prieto, Matías PDC IV 8
Ward Edwards, Felipe UDI II 3
Zalaquett Said, Mónica UDI RM 20
-Concurrieron, además, la ministra del Trabajo y Previsión Social , señora Camila Merino, y el ministro de Minería , señor Laurence Golborne.
-Se contó con la asistencia, además, de los senadores señores Jaime Quintana; Mariano Ruiz-Esquide, y Francisco Chahuán.
II. APERTURA DE LA SESIÓN
-Se abrió la sesión a las 16.35 horas.
La señora SEPÚLVEDA, doña Alejandra (Presidenta).- En el nombre de Dios y de la Patria, se abre la sesión.
III. ACTAS
La señora SEPÚLVEDA, doña Alejandra ( Presidenta ).- El acta de la sesión 15ª se declara aprobada.
El acta de la sesión 16ª queda a disposición de las señoras diputadas y de los señores diputados.
IV. CUENTA
La señora SEPÚLVEDA, doña Alejandra ( Presidenta ).- El señor Prosecretario va a dar lectura a la Cuenta.
-El señor LANDEROS ( Prosecretario accidental ) da lectura a la Cuenta.
-o-
La señora SEPÚLVEDA, doña Alejandra ( Presidenta ).- El honorable Senado ha solicitado el acuerdo de la Cámara de Diputados para remitir al archivo los siguientes proyectos de ley, todos iniciados por moción:
1. El que traslada el “Día del Huaso” al 1° de septiembre, que fue despachado por esta Corporación el 22 de agosto de 2006.
2. El que establece el “Día de la Comuna y del Mundo Rural”, que fue aprobado por la Cámara de Diputados el 23 de noviembre de 2006, y
nombrar las regiones, permitiendo su nombre abreviado, sin derogar sus denominaciones legales, que fue aprobado y despachado por la Cámara de Diputados en junio de 2007.
¿Habría acuerdo?
No hay acuerdo.
V. OBJETO DE LA SESIÓN .
EXPOSICIÓN DE MINISTRA DEL TRABAJO Y PREVISIÓN SOCIAL SOBRE ESTADO DE LA NACIÓN EN MATERIAS DE COMPETENCIA DE SU CARTERA.
La señora SEPÚLVEDA, doña Alejandra ( Presidenta ).- Esta sesión tiene por objeto escuchar la exposición de la ministra del Trabajo y Previsión Social, señora Camila Merino Catalán, respecto del “Estado de la Nación, en materias de competencia de la Secretaría de Estado a su cargo”, en cumplimiento de lo preceptuado en el inciso segundo del artículo 37 de la Constitución Política de la República y en el número 9 de los acuerdos reglamentarios, aprobados el 14 de mayo de 2009, cuya prórroga se acordó por los Comités el 23 de marzo de 2010.
En esta sesión, se utilizará el siguiente procedimiento:
Luego de la intervención de la ministra, cada bancada designará un diputado que dispondrá de cinco minutos para hacer sus comentarios.
En seguida, dentro del término de noventa minutos, distribuidos proporcionalmente entre las bancadas, los diputados podrán hacer uso de la palabra por el tiempo que cada Comité les asigne.
Tiene la palabra la ministra del Trabajo y Previsión Social, señora Camila Merino Catalán.
La señora MERINO ( ministra del Trabajo y Previsión Social).- Señora Presidenta , en primer lugar, haré un diagnóstico de cómo se encuentra el mercado del trabajo; en segundo lugar, expondré sobre nuestro programa de trabajo y de gobierno y, finalmente, entregaré las conclusiones.
Es bastante complejo hacer un diagnóstico, porque el mercado del trabajo y todas las materias que maneja mi cartera son muy variadas; además, son muchos los números y las estadísticas. En el resumen que voy a hacer, trataré de mostrarles lo más relevante. Después, sobre la base de este diagnóstico, daré las razones por las cuales hemos definido las diferentes medidas que incluimos en nuestro Programa de Gobierno.
¿Cómo está constituida nuestra fuerza laboral? ¿Cuántos son los trabajadores ocupados? Entregaré algunas cifras que voy a explicar.
La población de nuestro país alcanza a 17 millones de habitantes, de la cual el 78 por ciento es mayor de 15 años, 13,2 millones de personas que están en edad de trabajar. Las que quieren trabajar, es decir, la fuerza laboral, llega a 7,4 millones, que representa el 56 por ciento, y los inactivos, 5,8 millones, que representan el 44 por ciento.
Hoy, 6,8 millones -un número muy impresionante- de personas están ocupadas. Esto nos indica que sólo el 51 por ciento de los mayores de 15 años tienen empleo y un 49 por ciento no lo tiene; están inactivas, tal vez, porque no quieren trabajar, aunque es posible que sí deseen hacerlo.
El porcentaje de las personas ocupadas se reparte en 62 por ciento de hombres y 38 por ciento de mujeres, es decir, la población laboral femenina es mucho menor que la masculina.
Como decía, el número de personas ocupadas es bastante bajo. Las cifras nos indican que sólo representan el 51 por ciento. Si comparamos ese porcentaje con el de los de países desarrollados, concluiremos que estamos bastante mal en esta materia.
Al analizar las cifras de la OCDE sobre la tasa de personas desocupadas entre 15 y 64 años, veremos la gran diferencia que existe en el caso de las mujeres. En nuestro país, la tasa de mujeres ocupadas es de 43 por ciento, frente a un 58 por ciento de la OCDE.
Si observamos la evolución de la tasa de ocupación, es decir, cuántas personas en edad de trabajar han conseguido empleo, comprobaremos que durante los últimos 15 años la tasa de ocupación se ha mantenido en 51 por ciento. Pero, ha habido un cambio si comparamos la situación de hombres con la de las mujeres. El porcentaje de éstas ha subido en alrededor de 7 por ciento, y el de los hombres ha bajado; por lo tanto, el porcentaje total se ha mantenido.
La baja tasa de ocupación se agrava en los segmentos de jóvenes y mujeres. Del 51 por ciento de ocupación, en las mujeres baja al 38 por ciento; igual porcentaje se observa en el caso de los jóvenes. Esto quiere decir que sólo el 38 por ciento de las mujeres y de los jóvenes tienen un empleo. Es decir, existe una alta tasa de desempleo en estos dos segmentos. En las mujeres llega casi al 10 por ciento, y en los jóvenes, al 16 por ciento. Entonces, tenemos una baja tasa de ocupación y un alto porcentaje de desempleo. Hay muchos jóvenes que quieren trabajar, pero no lo pueden hacer.
Obviamente, este problema es más grave en los quintiles de más bajos ingresos. Por ejemplo, en el primero sólo el 19 por ciento de las mujeres tiene trabajo. En este primer quintil, el nivel de desempleo llega al 29 por ciento.
Respecto de los jóvenes, sucede algo similar en el primer quintil: un bajo porcentaje de empleo, 21 por ciento, y una alta tasa de desempleo, 35 por ciento.
Como conclusión, tenemos dos problemas, principalmente en los segmentos de las mujeres y de los jóvenes.
¿Cómo se distribuyen los diferentes puestos de trabajo? ¿Cuáles son los segmentos en los cuales el porcentaje de empleo es mayor?
El comercio absorbe el 21 por ciento de los puestos de trabajo, distribuidos en forma equitativa entre hombres y mujeres.
En casi todas las actividades tenemos una buena participación de hombres y mujeres, salvo en la construcción, que está dominada por los hombres. En cambio, en el servicio doméstico, tenemos mayor incidencia de las mujeres.
Ahora, respeto de los contratos de los trabajadores dependientes, es importante destacar que sólo el 68 por ciento tiene contrato a plazo indefinido; el 32 por ciento restante, es a plazo fijo o por faena. Esto no es muy bueno, porque impide relaciones de largo plazo, inversión en capacitación, en capital humano.
También existen las relaciones laborales informales. Un 20 por ciento de los trabajadores dependientes no tienen contrato escrito. Esta cifra corresponde a la última encuesta del INE, publicada la semana pasada.
También estamos mal en capacitación, puesto que la recibe menos del 15 por ciento de nuestra fuerza laboral. Son 940 mil personas, con un promedio de sólo 30 horas por cada una. Es decir, se capacita poco y por escaso tiempo. No se mejora la empleabilidad porque la capacitación no es pertinente ni de calidad. En definitiva, no se capacita en forma adecuada y la calidad también es discutible.
Otro problema es que los subsidios que otorga el Estado se concentran en las grandes empresas; las pequeñas y las microempresas no los reciben, a pesar de necesitarlos mucho, porque no tienen recursos suficientes para invertir. Además, no llegamos a los trabajadores menos calificados que necesitan nuestro apoyo.
En cuanto a las remuneraciones, el 6,4 por ciento de las personas gana menos que de un ingreso mínimo, principalmente son trabajadores que laboran por tiempo parcial; el 31,4 por ciento percibe entre uno y 1,5 ingresos mínimos; el 17 por ciento recibe entre 1,5 y 2 ingresos mínimos. En resumen, se puede apreciar que más del 50 por ciento de los trabajadores tienen remuneraciones inferiores a dos ingresos mínimos mensuales.
No tenemos muy buenas encuestas sobre remuneraciones. Me he referido a una que se hizo en 2008. Es una materia en la cual deberíamos profundizar para entender bien la forma en que se distribuyen las remuneraciones.
En una comparación entre hombres y mujeres, las mujeres tienen menores ingresos que los hombres.
Ahora, en relación con los cumplimientos laborales, algunos aspectos importantes son la prevención de riesgos, los manuales de higiene y seguridad y los comités paritarios.
Las empresas que cumplen son las grandes y las medianas. Donde hay más problemas es en las pequeñas y microempresas. En ese segmento, debemos dar apoyo y capacitación para que los derechos de los trabajadores se respeten.
En cuanto a sindicación, la población afiliada a sindicatos activos está creciendo y llegamos a casi 900 mil personas, lo que representa un 12 por ciento: porcentaje bajo, pero que va en aumento.
En relación con los pensionados, en Chile hay 2,2 millones de pensionados por diferentes causas: por vejez, 59 por ciento; por invalidez, 19 por ciento, o por sobrevivencia, es decir un viudo o una viuda que reciben pensión.
Las pensiones se distribuyen de la siguiente manera: 34 por ciento en las administradoras de fondos de pensiones, 36 por ciento en el sistema antiguo y 29 por ciento lo constituyen las pensiones básicas solidarias.
Ha habido un aumento de las pensiones con aportes solidarios, que hoy ascienden a 960 mil, con un 50 por ciento de la población más necesitada.
Este año ese porcentaje va a subir, porque vamos a cubrir el 55 por ciento.
En cuanto a los fondos de pensiones, hoy llegan a 120 mil millones de dólares. La baja se debe a la crisis, pero los fondos se han recuperado.
Ahora me referiré al programa de trabajo.
Nuestra visión como ministerio y como Gobierno es tener un Chile con buenos empleos y trabajadores orgullosos por sus aportes, comprometidos en convertir a Chile en un país desarrollado y seguros de contar con una red de oportunidades y de seguridades en caso de dificultad.
Para cumplir este objetivo teníamos cinco ejes de acción, pero después del terremoto agregamos un punto muy importante de ayuda a los damnificados: Primero, crear un millón de empleos; segundo, mejorar la cobertura en la calidad de la capacitación, tercero, respetar y hacer respetar los derechos de los trabajadores; cuarto, propiciar una relación constructiva y participativa en el mundo del trabajo y, quinto, implementar la reforma previsional.
En cuanto al plan de reconstrucción, tenemos cuatro medidas: la primera, sesenta mil nuevos incentivos al empleo en las zonas de catástrofe; veinte mil empleos para la construcción con el Cuerpo Militar de Trabajo.
Al respecto, ya hemos empezado a contratar a la gente, estamos presentes en más de sesenta comunas. Con ello esperamos ser un aporte a los trabajadores que van a tener empleo, lo que, además, permitirá recuperar los espacios de sus comunas.
También contamos con cuarenta mil nuevos cupos de subsidios al empleo para las zonas más afectadas por el terremoto, es decir, desde la Quinta hasta la Novena regiones.
Se ha aprobado el aumento del beneficio de cobertura de seguro de cesantía, que agradecemos, porque permitirá beneficiar a más de noventa mil personas de las zonas afectadas.
Debemos prepararnos en capacitación para la reconstrucción, porque vamos a requerir gente preparada, en una cifra cercana a los ochenta mil.
Luego enviaremos al Congreso un proyecto relativo al precontrato, que permite usar la franquicia tributaria para capacitar antes de contratar.
El último punto se refiere a la cobranza de cotizaciones previsionales. Muchas empresas han tenido problemas financieros y queremos darles una ayuda para pactar el pago de las deudas previsionales y asegurar que los trabajadores tengan las cotizaciones a su haber.
Ya presentamos ese proyecto y esperamos que sea aprobado por ustedes.
Muchos de los proyectos elaborados para ayudar a la gente afectada por el terremoto ya están estructurados y han empezado a dar frutos. Lo bueno es que ahora tenemos más tiempo para dedicarle a la gente a más largo plazo.
El primer gran desafío es crear un millón de empleos en cinco años. Eso significa 200 mil empleos al año. El promedio de generación de empleos en los últimos diez años ha sido de 123 mil puestos de trabajo, por lo tanto, aspirar a 200 mil constituye un gran desafío.
¿Cómo vamos a concretar el aumento en la generación de empleos?
Primero, volviendo a crecer al 6 por ciento anual; segundo, haciendo más eficiente el mercado de trabajo.
En las medidas que vamos a implementar para hacer más eficiente el mercado de trabajo, la primera se refiere a conectar mejor la oferta con la demanda de trabajo para trabajadores menos calificados.
Ahí tenemos tres medidas concretas: el mejor funcionamiento de las oficinas de intermediación laboral; la creación de una nueva bolsa nacional de empleo, que fue licitada y se adjudicó a trabajando.com. Esa bolsa va a funcionar dos años, es un proyecto que estudiaremos detenidamente y esperamos que cuando terminen los dos años podamos perfeccionarlo aún más, porque lo consideramos clave para una buena conexión entre la gente que busca empleo y los trabajos disponibles.
Lo último es el bono de intermediación laboral para colocar a la gente menos calificada.
Otro punto es mejorar la productividad de la empleabilidad, respetando las particularidades sectoriales. Proponemos la adaptabilidad pactada, que fue una de las propuestas de la Comisión Meller, donde se flexibilizan algunas restricciones existentes en el Código del Trabajo cuando hay acuerdo entre sindicatos y empleadores.
Otro aspecto en el que queremos legislar es en el teletrabajo, porque creemos que es una muy buena manera de incorporar a personas que quieren trabajar desde sus casas, especialmente mujeres.
También queremos mejorar el ingreso mínimo. Tendremos una discusión a fines de junio sobre él y hemos creado una comisión técnica para estudiar y proponer las mejores prácticas para fijarlo. Hay gente que se beneficia, obviamente, la que gana el sueldo mínimo, pero tenemos que cuidar que eso no genere problemas de desempleo, sobre todo en los sectores que más nos preocupan, en las mujeres y los jóvenes.
También complementaremos eso con la implementación del ingreso ético familiar, que es una de las promesas de nuestra campaña.
Tenemos que perfeccionar y extender a otros sectores vulnerables el subsidio -que hoy existe- de contratación de jóvenes en situación de pobreza.
Queremos profundizar la inserción de la mujer en el mundo del trabajo, para lo cual es muy importante acceder a mejor cobertura en salas cunas y también aumentar el posnatal a seis meses, que también fue una de nuestras promesas de campaña.
En ese sentido, será de mucha ayuda la Comisión Mujer, Trabajo y Maternidad, que lanzó nuestro Presidente , porque con eso vamos a conseguir buenos derechos para las mujeres, pero también aseguraremos su inserción en el mundo laboral.
Por último, queremos perfeccionar el seguro de cesantía, porque hoy muchas personas no lo reciben y los fondos son bastante exiguos.
En cuanto a capacitación, nuestro plan es beneficiar a 1,2 millones de personas.
Para ello, es muy importante mejorar el sistema de capacitación en su conjunto, el que debería cumplir los siguientes objetivos: ayudar a la gente que realmente lo necesita, los trabajadores con menor calificación; mejorar la empleabilidad, llegar a las pymes y no sólo a las grandes empresas. Es vital entregar más poder de decisión a los trabajadores; alinear el sistema de capacitación con el sistema de certificación de las competencias laborales y coordinarlo con la entrega de más empleos.
Esperamos definir este proyecto en 2010 para implementarlo en los años siguientes.
El tercer punto es respetar y hacer respetar los derechos de los trabajadores. Aquí es clave mejorar la efectividad de la Dirección del Trabajo. Eso pasa por muchas cosas, como estandarizar los procesos, definir los protocolos de inspección, aumentar las inspecciones, mejorar la fiscalización. Eso pasa por capacitar a los inspectores, diseñar plan de inspección para cubrir todos los sectores, identificar las malas prácticas sectoriales, capacitar a las pymes, porque queremos que aprendan y conozcan los derechos laborales. Muchas veces no cumplen porque no saben.
También buscamos fortalecer y promover la mediación entre empleadores y trabajadores y las buenas prácticas laborales. Ahí incluimos los derechos laborales que no se cumplen debido a que la ley no es muy clara al respecto, como es el caso del N° 6 del artículo 159 del Código del Trabajo.
En cuanto a propiciar una relación constructiva y participativa en el mundo del trabajo, creemos que el diálogo social es clave para avanzar en beneficio de todos. Ahí las mesas tripartitas compuestas por sindicatos, empleadores y gobierno, son un mecanismo para conocer las oportunidades, problemas y soluciones.
También es relevante la negociación colectiva. Deseamos aumentar las materias a negociar, dar un impulso a la Escuela de Formación Sindical, porque necesitamos buenos dirigentes sindicales, que puedan defender correctamente los derechos de los trabajadores. Asimismo, queremos evitar las malas prácticas que no permitan la sindicación.
En la implementación de la reforma previsional, hay muchos temas pendientes. Este año debemos construir muchos hitos, en los que estamos trabajando fuertemente. En primer lugar, tenemos que adjudicar el Fondo de Educación Previsional, proceso que está en licitación. Son 1.500 millones de pesos destinados a enseñar a la gente a respetar y a preocuparse de su previsión, de su futuro.
Por otra parte, tenemos que desarrollar un nuevo instrumento para determinar los beneficiarios del pilar solidario, quién recibe la Pensión Básica Solidaria. Debe estar terminado a fines de julio.
También se va a aumentar la cobertura de la Pensión Básica Solidaria de 50 por ciento a 55 por ciento y se incrementará la pensión máxima solidaria de 150 mil pesos a 200 mil pesos.
Estimamos que en julio se sumarán 100 mil nuevos beneficiarios a los 900 mil que habían, que tendrán los beneficios de estos aportes especiales para lograr una mejor pensión.
Además, en julio se pondrá en marcha una AFP para los nuevos afiliados al sistema. Licitamos el Seguro de Invalidez y Sobrevivencia. Al respecto, hemos tenido bastante éxito, se han reducido las tasas de 1,8 a 1,5. Eso es muy positivo, porque tendremos un ahorro.
Esas son las actividades de la primera parte de la reforma que se implementará este año.
En la segunda parte, queremos seguir perfeccionando el funcionamiento del sistema de administradoras de fondos de pensiones, sobre todo el diseño de los multifondos. Se sabe que las AFP manejan muchos recursos. Es importante que se haga en la forma más eficiente posible, sin poner en riesgo los recursos de los trabajadores.
Por otro lado, debemos disminuir los costos de operación del sistema de las AFP, algo que se ha hecho con la licitación, porque le ha entregado más competencia. Pero debemos seguir reduciendo los costos, porque impactan directamente en la pensión de los trabajadores.
Asimismo, deseamos introducir mejoras al sistema previsional en general. Debemos tener más personas cotizando. Por eso, son importantes los subsidios que se entregarán a los jóvenes. Hay que seguir mejorando la educación y, de alguna manera, incentivar la incorporación de los independientes.
En general, queremos mejorar nuestro servicio a los usuarios del sistema. Para eso, necesitamos realizar un diagnóstico acerca de los tiempos de respuesta para asegurar la buena calidad del servicio.
Como conclusión, creemos clave el diálogo y llegar a consensos con los parlamentarios, a fin de mejorar los beneficios a los trabajadores, dar más empleos y mejorar sus derechos laborales.
Sin embargo, como el mundo cambia, debemos hacer modificaciones y adaptarnos a las nuevas exigencias del mercado. Eso lo podemos hacer cumpliendo los derechos de los trabajadores y tratando de buscar las soluciones.
En este nuevo entorno, la capacitación es clave. Es cierto que todos somos importantes, pero la manera de mejorar las remuneraciones es que la gente sea más productiva, y la única forma de lograrlo es con la capacitación.
Debemos desarrollar nuevas relaciones laborales basadas en la confianza, en las que haya discusión, pero con respeto, y disposición al diálogo para resolver los problemas. En ese aspecto, nos queda mucho por avanzar.
El último punto dice relación con la reforma previsional. Fue acordada por todos ustedes y su implementación debe hacerse con mucho cuidado, porque aquí estamos trabajando con fondos importantes para el futuro de las personas. Sin duda, debe ser perfeccionada con el acuerdo de ustedes.
Muchas gracias.
La señora SEPÚLVEDA , doña Alejandra ( Presidenta ).- En los cinco minutos previos, tiene la palabra la diputada Adriana Muñoz.
La señora MUÑOZ (doña Adriana).- Señora Presidenta , en primer lugar, saludo a la ministra y le agradezco este detallado informe, que da cuenta de las líneas que orientarán al actual Gobierno en materia de tareas y programas vinculados con la situación de los trabajadores.
Me alegro de su intervención, porque nos permite conocer en forma integral, no sólo el diagnóstico, sino las líneas de acción importantes relacionadas con el sistema previsional, negociación colectiva y derecho de los trabajadores.
En ese punto, me gustaría proponer avanzar en un tema en el que tal vez podríamos lograr acuerdo: la modificación del concepto de empresa, porque eso permitiría ampliar la negociación colectiva.
Al respecto, la Cámara aprobó un proyecto de ley hace bastante tiempo, el que está en el Senado sin ser tramitado.
Si modificáramos el concepto de empresa, podríamos poner el acento en la multiplicidad de RUT que permite el actual sistema. Almacenes París, por ejemplo, abarca alrededor de 180 empresas. Es decir, 180 RUT están cobijados bajo ese nombre genérico. Podríamos ampliar la negociación colectiva si se visualiza la existencia de más trabajadores en una misma empresa.
Ese es un punto importante. Desde hace mucho tiempo hemos insistido en ello, lo que queremos es avanzar en lograr un acuerdo con la ministra en esta propuesta de trabajo.
Por otra parte, nos preocupa esto de crear empleos masivos en las zonas de catástrofe. Estamos de acuerdo en que es necesario y urgente, para ello se anuncian sesenta mil nuevos incentivos de empleos, veinte mil para la reconstrucción, cuarenta mil nuevos cupos para subsidios, etcétera. Sin embargo, quiero poner el acento en las zonas que no vivimos la catástrofe, respecto de las cuales, sin mezquindad ni falta de espíritu solidario, no puede dejar de existir una preocupación.
Represento a la Región de Coquimbo, una zona que se ha visto afectada por una sequía muy fuerte. El 60 por ciento de las comunas están sin agua. Eso también es una catástrofe natural, además es una de las regiones que permanentemente está sometida a la falta de agua.
Me preocupa que en este esfuerzo de crear una cantidad suficiente y significativa de puestos de trabajos en las zonas de catástrofe, no se generen empleos en nuestra zona, en donde hay que recurrir en forma permanente a programas de emergencia para obtener trabajo.
Por ejemplo, recientemente sostuvimos una reunión con el ministro de Agricultura y nos enteramos de que la Comisión Nacional de Riego destinará 1.200 millones de pesos para la zona de reconstrucción, lo que obviamente podría haber servido para obras menores en nuestra zona, además de proveer agua y generar nuevos empleos. Lo mismo podría suceder ahora con los fondos destinados a programas de emergencia de empleo en otras regiones.
También quiero llamar la atención respecto del posnatal. Hemos recibido con muy buen ánimo a la comisión formada por el señor Presidente para estudiar el tema, además de que existen propuestas de muchos parlamentarios como, por ejemplo, de la diputada Goic y del diputado Accorsi , que también se encuentran trabajando en la materia. Sin embargo, hemos visto con preocupación la propuesta del Gobierno, en el sentido de aceptar la extensión de seis meses, pero en forma flexibilizada. Es decir, dividiendo la jornada. Ello significa que las mamás tendrán un apego a medias con sus hijos. La idea de un posnatal de seis meses es con jornada completa, sin la variable de flexibilización a este derecho que estamos tratando de instaurar.
Me gustaría dejar planteado estos tres puntos, como elementos de debate.
Por último, quiero traer a colación, ya no en materia de propuestas, sino de mecanismos y de procedimientos entre el Gobierno y el Congreso Nacional, una observación crítica a lo que está ocurriendo. Permanentemente, estamos siendo sometidos a urgencias, lo que, en este momento, me parece bien por la dramática situación que se vive por las consecuencias del terremoto, pero no creo que sea recomendable para una buena relación entre el Parlamento y el Gobierno continuar con ese procedimiento, más aún si se trata de debatir temas de gran importancia.
Por ejemplo, y sin ir más lejos, ayer la Comisión de Trabajo se abocó a la discusión del proyecto que modifica el N° 6 del artículo 159 del Código del Trabajo, que se refiere al término del contrato de trabajo por casos fortuitos o fuerza mayor. Al respecto, solicitamos que se retirara la urgencia por cuanto se trataba de un tema importante que no podía ser discutido en tan poco tiempo, y no se accedió a ello. Por eso, tengo la sensación de que estamos transformándonos en una Cámara que es casi como un buzón exprés de tramitación de proyectos: Al respecto, repito, algunas urgencias se justifican plenamente por consecuencias del terremoto en las zonas afectadas, pero en estos otros temas, donde vamos a establecer normas permanentes que van a acompañar la relación laboral, me parece que no es una manera de desarrollar esta agenda, que es nutrida, compleja y apunta, desde nuestro punto de vista, al igual que el de ustedes, a instalar relaciones decentes y justas entre empresarios y trabajadores.
Quiero dejar planteado el problema, a fin de que no se siga abusando o usando las urgencias para impedir un debate profundo de estas materias.
Esas serían mis inquietudes, pero también propuestas y observaciones en materia de procedimientos y metodología de trabajo, que nos van a permitir legislar mejor para contribuir a que las relaciones entre trabajadores y empresarios sean más justas, más humanas, más dignas y más decentes.
He dicho.
La señora SEPÚLVEDA, doña Alejandra ( Presidenta ).- Señora diputada , su señoría ocupó sus cinco minutos previos, más dos minutos del tiempo de su bancada.
Solicito el acuerdo de la Sala para que ingrese el subsecretario, señor Claudio Alvarado.
No hay acuerdo.
Solicito el acuerdo de la Sala para que ingrese el subsecretario del Trabajo, señor Marcelo Soto.
No hay acuerdo.
Solicito el acuerdo de la Sala para que ingrese el subsecretario de Previsión Social, señor Augusto Iglesias.
No hay acuerdo.
Tiene la palabra el diputado señor Salaberry.
El señor SALABERRY.- Señora Presidenta , antes de realizar mi intervención, quiero recordar, a quienes se han opuesto al ingreso de los subsecretarios, que esta sesión es, precisamente, para conocer los programas y planteamientos que hará el Gobierno en materia sectorial laboral. Por lo tanto, los llamaría a reconsiderar su decisión, salvo que no quieran saber cuáles son estas materias.
En esta oportunidad, quiero recordar algunos hechos recientes, en particular, la última celebración del 1 de Mayo.
El sábado recién pasado se encendieron algunas campanas de alerta en la opinión pública, a propósito del tema de la moral. Una llamada de atención para aquellos dirigentes políticos que en días previos a la celebración del 1 de Mayo se presentaban como los defensores de los intereses de los trabajadores y en una posición distinta a la del actual Gobierno y a la de parlamentarios de la Coalición por el Cambio. Esos dirigentes recibieron una sorpresa. Fueron los propios trabajadores los que demostraron que no son propiedad de un sector político determinado de nuestra sociedad. Asimismo, hago un llamado de atención a la dirigencia sindical, que anunciaba que miles de trabajadores marcharían por las calles de nuestro país para celebrar el 1 de Mayo y demostrarle al Gobierno su capacidad de concentración. Sin embargo, eso no se cumplió, lo que, a mi juicio, tiene que ver con que no hemos aprovechado las oportunidades para enfrentar de una manera distinta el mundo del trabajo, su relación con los políticos y de cómo una legislación más moderna da cuenta de que nuestra sociedad también cambia.
Por ello, la intervención de la señora ministra apunta en el sentido correcto, porque nos invita a tener una mirada más moderna de las relaciones laborales y también abordar, de una vez por todas, un diálogo en materia laboral. Además, de aprovechar de terminar con aquella añeja visión de los explotados versus los explotadores, que en varias oportunidades me correspondió discutir en otros períodos parlamentarios cuando aprobábamos determinados derechos para los trabajadores y trabajadoras de nuestro país, muchas veces en acuerdo con los empleadores.
A propósito de esta invitación, debería haber un diálogo y ponernos de acuerdo en que para la estabilidad del desarrollo productivo de nuestro país debe haber acuerdos generales, pero también sectoriales en materia laboral, principalmente si se piensa en que no podemos contar con una misma legislación para las grandes empresas, que pueden ponerse de acuerdo de manera más fácil con sus trabajadores, y para las pequeñas y medianas empresas, a las que les resulta más difícil llevar adelante un proyecto de desarrollo productivo, ya que muchas veces sus recursos son escasos.
Hace algunos años, parlamentarios de la Coalición por el Cambio le hicimos presente al entonces ministro del Trabajo , hoy colega en este Hemiciclo, algunas propuestas legislativas, relacionadas con la sectorización de la legislación laboral.
El diálogo al que la ministra nos invita tiene que ver con que no es lo mismo una legislación sobre los salmoneros en el sur, el mundo agrícola en el centro sur o lo que sucede con los trabajadores del sector informático.
Estas verdaderas mesas de carácter sectorial deberían generar de esa manera una aproximación a no sólo el respeto de los derechos del trabajador, en concordancia con su realidad, sino que también debería ser una oportunidad para promover un diálogo al interior de las empresa y de los distintos mundos productivos, en los que el instrumento que debe privilegiarse para ese diálogo es la negociación colectiva, pero con el reconocimiento de los distintos sectores y actores de la empresa.
Además, esperamos que se contenga un acuerdo básico para que el proyecto productivo sea viable; de no ser así, esos trabajadores o trabajadoras no van a tener empleo.
Lamentablemente, la excesiva politización en la discusión de la negociación colectiva llevada adelante por algunos dirigentes de la Concertación, antes gobernante, o la politización de algunas entidades de carácter sindical, llevó a veces a que el objetivo de promover una moderna visión de la negociación colectiva, generara la paralización de empresas. Ello, muchas veces, para el cumplimiento de objetivos meramente políticos.
La renovación de este instrumento -en ocasiones de carácter técnico- de negociación colectiva para promover también el diálogo al interior de las empresas debería ser una impronta de esta invitación que hace la señora ministra.
Por lo tanto, celebramos la creación de una Escuela Nacional Sindical como lo ha señalado la señora ministra.
Quiero terminar con un último concepto: el cambio a que nos ha invitado el Gobierno tiene que ver con un mundo laboral donde se termina con la visión de trabajadores explotados versus empleadores explotadores, y surge lo que se denomina en el concierto internacional como respeto al trabajo decente, al que emana no sólo de nuestras tradiciones, sino también de acuerdos internacionales, al que es capaz de desarrollarse con dignidad y seguridad; pero no habrá trabajo decente si los chilenos y chilenas no tienen trabajo.
Contar con más y mejores empleos como resultado de mayor capacitación va a significar un cambio en el mundo laboral, una mirada moderna que puede desterrar definitivamente la visión de confrontación permanente entre trabajadores y empleadores.
He dicho.
La señora SEPÚLVEDA , doña Alejandra ( Presidenta ).- Tiene la palabra la diputada señora Carolina Goic, por cinco minutos.
La señora GOIC (doña Carolina).- Señora Presidenta , esta importante sesión coincide con el inicio de un gobierno de coalición distinta a la del anterior.
Por lo tanto, debemos sincerarnos para establecer de qué manera vamos a enfrentar el debate en materia laboral.
Si lográramos claridad frente a los trabajadores que nos están mirando, se justificaría lo que estamos debatiendo en esta sesión.
Me alegro, al igual que varios de los colegas presentes, de abordar los temas que desde hace mucho tiempo queríamos tratar.
Sin embargo, ese acuerdo que tenemos en los titulares, diría, en términos periodísticos, en la cuña, no siempre se refleja en el debate del proyecto específico.
La diputada señora Adriana Muñoz recordaba un proyecto presentado por diputados de la Alianza y de la Concertación.
Muchas mociones parlamentarias buscan proteger a los trabajadores injustamente despedidos y sin indemnizaciones, por la causal señalada en el N° 6 del artículo 159 del Código del Trabajo, “Caso fortuito o fuerza mayor”.
Sin embargo, desde que formo parte de la Comisión del Trabajo, por primera vez, no escuchamos a los trabajadores en un tema tan importante, porque teníamos una urgencia difícil de explicar.
Se podría decir: “Sí, debemos legislar rápido, porque tenemos que resolver las situaciones de los trabajadores que hoy enfrentan juicios y necesitan estar mejor protegidos”, pero los parlamentarios de la Alianza negaron la posibilidad de contar con una ley interpretativa.
Se trataba de aprobar una simple indicación para incorporar en el texto vigente la interpretación de caso fortuito o fuerza mayor.
En la práctica, tiene que ver con la inexperiencia, con el hecho de que todavía no afinamos los criterios, con un timing, y que creo esa no va a ser la lógica para lo que resta de ahora en adelante, porque efectivamente queremos avanzar.
En la agenda, me preocupa la ausencia de la defensoría laboral.
Si un proyecto permite modificar las relaciones laborales -lo planteaba el diputado Salaberry - es el de la defensoría laboral, porque éste va a permitir a los trabajadores, defendidos por abogados especialistas, sentarse frente a sus empleadores. Muchas cosas que antes ni siquiera reclamaban los trabajadores, hoy se están planteando y resolviendo. Me refiero a que la reforma está funcionando.
Sin embargo, la defensoría laboral depende de la aprobación de recursos en la ley de Presupuestos, año a año. ¿Por qué no creamos la institucionalidad del defensor laboral? Esa materia la hemos discutido varias veces en la Cámara.
Me gustaría aumentar la cobertura del seguro de cesantía y no eliminar las indemnizaciones por años de servicios.
Debemos hacernos cargo de un tema de mayoría. En este país la mitad de los empleos no dura más de cuatro meses; ni siquiera hablo de once -para no pagar la indemnización-, sino de cuatro meses. Entonces, ¿por qué tenemos que restar o eliminar derechos adquiridos para un grupo minoritario de trabajadores?
Al respecto, la bancada de la Democracia Cristiana ha sido muy clara: estamos dispuestos a apoyar a los trabajadores, pero no a retroceder en sus derechos adquiridos.
Me gustaría que la ministra no presente en la comisión del ingreso mínimo una alternativa que implique un salario menor para los jóvenes y las mujeres.
Todos queremos avanzar en aumentar la empleabilidad de jóvenes y mujeres, pero no a costa de precarizar, de otorgar un salario mínimo aún menor al que hoy existe.
Me preocupan los datos que la ministra nos ha entregado respecto de cómo se ha ido extendiendo el pago de una remuneración que no permite la subsistencia de una familia.
Todos estamos dispuestos a discutir de manera más amplia este tema.
Como bancada hemos presentado varias mociones, algunas requieren el patrocinio del Ejecutivo, para eliminar la práctica de negociar con grupos distintos del sindicato como una forma de fortalecerlo. Ojalá contemos con patrocinio para ello.
La diputada Muñoz recordaba la modificación del concepto de empresa que aprobamos en la Cámara en 2007, cuando la Concertación tenía mayoría. Después, en el Senado no pudimos seguir avanzando. Todos sabemos, porque lo dicen los trabajadores en las audiencias, que allí hay una causa que es la raíz de muchos de los abusos que se cometen. Tenemos que abordarla y está hecha la propuesta. ¿Por qué no retomar ese trabajo? Porque es fácil decir también que no se han hechos cosas. Espero que las declaraciones que hemos escuchado hoy signifiquen que se cuenta con los votos que antes no estuvieron disponibles para abordar ciertas materias; que, efectivamente, el cambio, la madurez política que va adquiriendo el país en procesos democráticos nos ayudan a enfrentar estas discusiones desde otra perspectiva.
El 10 de septiembre de 2007 presentamos una reforma a la Constitución que garantiza los derechos a la negociación colectiva y a la huelga a todos los trabajadores, tanto de los sectores público como privado, y hemos escuchado a senadores de la Derecha decir que quieren que se presente un proyecto. Ahí está la iniciativa. Demos la señal de que son derechos de todos los ciudadanos y de que tenemos tiempo para debatir respecto de cómo se aplicarán en la práctica.
Finalmente, quiero hacer notar un tema sobre el cual se ha trabajado bastante y que, como bancada, además, hemos planteado: la extensión del postnatal a seis meses. Hoy, hemos escuchado que más que trabajar en dicha extensión es mejor flexibilizar el prenatal. Ojalá no perdamos el sentido original y que una Comisión ad hoc -me parece un buen procedimiento- discuta la posibilidad de contrastar en detalle el trabajo que hemos hecho al generar acuerdos sobre estas materias que, si las miramos con perspectiva de país, escuchando y representando a los trabajadores, nos van a permitir efectivamente avanzar.
He dicho.
La señora SEPÚLVEDA , doña Alejandra ( Presidenta ).- Tiene la palabra el diputado Pedro Araya.
El señor ARAYA.- Señora Presidenta , he escuchado con bastante atención la exposición de la ministra Camila Merino . Aprovecho de desearle mucho éxito en su gestión, pues sabemos que su cartera es bastante compleja.
Tenemos un Código del Trabajo que data de principios de los 80, es decir, es una legislación laboral que no da cuenta de lo que es actualmente el mercado del trabajo. Por ejemplo, no se hace cargo de las ideas de los jóvenes, de la empleabilidad de las mujeres o de algunas nuevas formas de trabajo que han aparecido, como las que se pueden realizar por medios electrónicos, por ejemplo, a través de internet.
En esta línea, uno espera que exista un esfuerzo para modernizar nuestra legislación laboral, acorde con el siglo XXI, que responda efectivamente a lo que está pasando en el mercado del trabajo.
Dicho esto, quiero reiterar, una vez más, el compromiso de los diputados del PRI e Independientes, en el sentido de seguir colaborando con el mundo del trabajo y sacar adelante aquellas demandas más sentidas.
Me referiré a varios puntos que planteó la ministra y que me llamaron mucho la atención.
En primer lugar, manifestó que se pretende revisar la indemnización por años de servicio. Al respecto, pido que precise muy bien lo que está pensando el Gobierno en esta materia, porque esa conquista fue producto de la lucha de los trabajadores. Se trata de una materia fundamental. Quiero saber si el Gobierno está considerando rebajar los años de servicio y cuál es la fórmula, porque aquí se anunció como título, pero me gustaría conocer en detalle esa materia.
En segundo lugar, se señaló que había que mejorar y estandarizar los procedimientos en la inspección del trabajo, sobre lo cual estoy muy de acuerdo. Hoy, las inspecciones del trabajo no dan abasto para atender a las numerosas personas que diariamente recurren a reclamar por despidos injustificados, por abusos de empleadores, etcétera. ¿Proyecta el Gobierno aumentar el número de inspectores del trabajo? Porque, hoy, por ejemplo, en el distrito N° 4, que represento, que es una zona bastante compleja, porque buena parte del mercado laboral de la Segunda Región lo constituye el sector minero, existe la Inspección del Trabajo de Antofagasta, donde, de vez en cuando, un inspector debe ausentarse de la ciudad para fiscalizar a una compañía minera.
Hay comunas, como Taltal, a las que un inspector del trabajo asiste en forma ocasional. En Mejillones no hay inspección del trabajo.
Entonces, es correcto estandarizar procesos, como, asimismo, contar con una planta de inspectores del trabajo adecuada para lo que demanda el país en la actualidad.
Me preocupa, también, que la ministra haya señalado en el punto 4° de su exposición que hay que mejorar la negociación colectiva. Pero, a renglón seguido, expresa que se van a ampliar las materias sobre las cuales se puede negociar colectivamente. ¿Sólo se van a ampliar dichas materias o vamos a avanzar en una negociación colectiva de verdad, donde efectivamente haya sindicatos fortalecidos y trabajadores capaces de sentarse a la mesa de igual a igual con los empleadores? ¿Va a existir la posibilidad de negociación interempresa? ¿Planea el gobierno modificar el Código del Trabajo respecto de una práctica tan nefasta como los reemplazos en caso de huelga? ¿Se está pensando en el fortalecimiento de la negociación colectiva o la modificación va a ser más bien de carácter cosmético?
Al respecto, cuando nuestro colega Osvaldo Andrade era ministro del Trabajo , hicimos esfuerzos por llevarle un proyecto para fortalecer la negociación colectiva que, lamentablemente, no generó los consensos necesarios para enviarlo a la Cámara de Diputados. En esta nueva lógica del mercado del trabajo nacional, y la realidad que todos vemos día a día, se hace del todo necesario contar con sindicatos que efectivamente tengan capacidad de negociación colectiva.
En este mismo sentido, otro proyecto relacionado con la sindicación automática fue presentado durante la legislatura pasada; tampoco ha sido despachado y sería importante que el Gobierno hiciera presente la urgencia. En él se propone que cada trabajador que se incorpore a una empresa, integre automáticamente el sindicato más grande. Si después no quiere estar sindicado, podría renunciar.
Ese proyecto se presentó bajo la lógica de que hoy, aunque no queramos reconocerlo -así ocurre en reiteradas ocasiones, por la inspección del trabajo y los juzgados del trabajo-, hay muchas prácticas antisindicales encubiertas en numerosas empresas, lo que demanda que fortalezcamos los sindicatos y a sus integrantes, dotándoles de poder de negociación. Creemos que la sindicación automática va a ser una herramienta eficaz para que los sindicatos puedan ser verdaderos representantes de los trabajadores.
Comparto lo expresado por algunos colegas que me antecedieron en el uso de la palabra, en cuanto a que debemos pensar en legislaciones laborales distintas. No es lo mismo una normativa para una gran empresa que para una pyme que tiene dos o tres trabajadores. De una vez por todas, hay que hacerse cargo de esta materia. Repito que no podemos aplicar la misma carga a un pequeño empresario que emplea a dos trabajadores, que a quien ocupa doscientos o trescientos trabajadores. Quizás sería importante, y un buen desafío, que el gobierno empezara a estudiar una nueva legislación laboral.
Como último punto, me interesa hacerle el siguiente comentario a la ministra.
La Cámara hizo grandes esfuerzos para sacar adelante la reforma laboral que, al parecer, dio resultados; pero, de acuerdo a conversaciones que sostengo, especialmente con trabajadores que deben recurrir al sistema judicial, nos encontramos con la traba de que las defensorías laborales no están dando abasto para atender a esos trabajadores. Tal vez, no fueron suficientes los cálculos que se tuvieron en mente cuando se concibió la planta o el programa de la defensoría laboral. Como bien dijo la diputada Goic , éste es un programa. Nos gustaría que se instaurara un sistema de defensa de los trabajadores que les permita enfrentar adecuadamente los procesos laborales.
Pido a la ministra que revise lo que está ocurriendo, porque mi impresión es que existe un número importante de trabajadores que son despedidos de sus empleos y no pueden acceder a la nueva justicia laboral, porque no cuentan con abogados que los representen, sea porque la defensoría laboral tiene una carga pesada de trabajo, sea porque los cortes de remuneraciones que se piden, muchas veces, no les permiten ingresar. Uno sabe que cuando un trabajador es despedido, son pocos los abogados que se arriesgan a tomar un caso contra resultados. Muchos trabajadores ven que hay un muy buen sistema judicial, pero se les cierra la puerta de acceso; en definitiva, no pueden contar con la defensoría.
Por último, a mi juicio, es muy importante lo que dijo la ministra, en cuanto a que en materia laboral es donde más tenemos que dialogar. Es necesario establecer una mesa de negociaciones entre el Gobierno y los trabajadores donde también los parlamentarios podamos plantear nuestros puntos de vista.
He dicho.
El señor BECKER (Vicepresidente).- Tiene la palabra el diputado Andrade.
El señor ANDRADE.- Señor Presidente , por su intermedio, también doy las gracias a la ministra por su presentación.
Voy a plantear una cuestión previa, no necesariamente un pronunciamiento especial.
Estuve en la celebración de la CUT y sólo recibí abrazos. En consecuencia, posiblemente, los que se han ocupado de esto son los que nunca han ido y nunca van a ir. Asumamos que quienes fueron y corrieron el riesgo de ser probablemente maltratados, a lo menos tuvieron la valentía de asistir.
Por su intermedio, señor Presidente , señalo a la ministra que asumo su invitación a participar. Queremos colaborar por el bien de Chile, de sus trabajadores y de los que buscan empleo, pero sin exagerar en el cuidado de los que dan empleo. Es posible dar empleos decentes, y para ello ni siquiera hay que ser santo, pues basta con ser un buen empleador. Por eso queremos que la agenda busque dar empleos, buenos y justos, como señaló la ministra en su presentación.
Al respecto, consignemos el aporte de la OIT. Un empleo justo, decente -como dijo otro colega- es aquel que tiene un salario justo, con seguridad social, con organización y capacidad de negociación, con equilibrio en las relaciones laborales y con diálogo institucionalizado. Estos elementos deberían ser los que informen la agenda.
Por eso, hemos dicho que echamos de menos una agenda del Gobierno en materia laboral.
De la ministra hemos recibido un conjunto de temas que interesan al Gobierno. Lo bueno sería transformarlos en una agenda, para colaborar en ellos. Es necesario saber cuáles son las iniciativas, los contenidos, el cronograma, qué va primero y qué después; qué está previsto para este año, porque eso no lo sabemos todavía. Créame, señora ministra, por su intermedio, señor Presidente ; que contar con esa agenda afirmaría mucho la posibilidad de diálogo entre Oposición y Gobierno. Lo que hemos tenido hasta ahora, como se dijo anteriormente, son iniciativas vinculadas a la reconstrucción, con urgencia calificada de suma y, en consecuencia, el diálogo necesario, que es propio de un Congreso, no se ha podido desarrollar.
Queremos colaborar. Por eso, sólo expresaré unas ideas generales, porque esto da para un diálogo más largo y fructífero.
En el ámbito previsional, se proponen varios temas. Sin embargo, hay algunos ausentes y que vale la pena consignar. Nada se dice del compromiso de eliminar el 7 por ciento que se descuenta a los pensionados para salud. Hoy los parlamentarios de la Concertación presentamos, un proyecto de ley para disminuir en forma gradual -tal como lo señalaban los programas de los cuatro candidatos a la presidencia y, por cierto, del que fue elegido- ese 7 por ciento. Está allí, espero que el Gobierno lo patrocine y que entre nosotros no se dé una discusión formal, sino que nos hagamos cargo del contenido de esa injusticia que todos consignamos en su oportunidad y que había que resolver.
Nada se dice tampoco sobre la inequidad del antiguo sistema previsional de reparto, con el que todavía tenemos problemas. Permítame, señora ministra, por su intermedio señor Presidente ; consignar al respecto tres o cuatro ideas. Todavía no eliminamos las incompatibilidades para los regímenes previsionales y no hemos homologado los requisitos para pensionarse por vejez. Tenemos distintos estatutos. Hay que hacerse cargo de los requisitos para que las viudas de los exonerados accedan a la pensión de sobrevivencia. Es decir, hay temas pendientes del antiguo sistema de reparto y, como bien lo decía la ministra en su exposición, es bastante importante el número de pensionados que todavía permanece afiliado él, aun cuando está por fenecer.
En el sistema actual también hay temas que resolver. No me refiero sólo a la implementación de la reforma previsional, que felizmente este Gobierno vienen reconociendo como una de las políticas públicas más exitosas y que por eso va a incorporarse a ella.
Permítaseme, al respecto, sugerir algunas ideas, que pueden ser importantes.
El pago automático de la pensión básica de invalidez cuando se transforma en pensión básica solidaria de vejez y el acceso automático a las pensiones asistenciales de los discapacitados mayores de 18 años. Temas que deben abordarse, toda vez que constituyen gravámenes muy complejos para los beneficiarios de este sistema.
La reforma que presentamos para terminar con el 7 por ciento de cotización consigna resolver el problema que nos quedó pendiente en relación con los pensionados básicos solidarios que aportan ese porcentaje y de los que no lo aportan, que son los antiguos carentes de recursos.
Entiendo que no es la idea de este Gobierno y no está en mi agenda insistir en la AFP pública, que la Cámara aprobó en su momento; sin embargo, anuncio que es nuestro interés que se persevere en ese esfuerzo, sobre todo desde la perspectiva de la competencia.
O sea, en materia previsional, hay mucho por hacer.
En materia laboral, que decir.
Hay algunos temas que vale la pena consignar, que la ministra en su presentación los intitula, pero que no generan contenidos y no sabemos adónde apuntan. A los que han leído completo el informe de la OCDE y no se han quedado sólo en aquello que les interesa, les recuerdo que uno de los primeros temas que se destacan es la preocupación por el mejoramiento de la fiscalización de la Dirección del Trabajo en materia de subcontratación. Este es un problema que hay que resolver. Una posibilidad podría ser darle titularidad a la Dirección; otra, generar una discusión respecto de su institucionalidad. Consignemos que la Dirección del Trabajo tiene una megafunción que vale la pena discutir. Revisar la institucionalidad y fortalecer la fiscalización asistida es una buena perspectiva para enfocar el problema, ello no sólo pensando en los pequeños empleadores.
En materia de normativa laboral también hay muchas cosas que vale la pena consignar y que no están incluidas en el itinerario de ideas que nos planteó la ministra.
Fíjense que más de la mitad de los trabajadores en Chile recibe menos de 250 mil pesos mensuales. Entonces, hablar hoy de cómo participan en las utilidades de una empresa y, en consecuencia, de la gratificación o de la participación o de que la productividad efectivamente se exprese en mejores salarios, es un tema pendiente, pero no está consignado en las ideas de este Gobierno.
Lo mismo pasa con los derechos laborales de los trabajadores de empresas en quiebra. No hay nada respecto del trabajo pesado. En Chile no existen incentivos para que las empresas mejoren las condiciones del trabajo pesado, y por una razón muy simple: si intervienen al respecto, no pueden evitar la asignación de trabajo pesado de una determinada función. Éste es un tema que a las empresas también interesa.
Tampoco existen condiciones para generar una sala laboral en la Corte Suprema, que sería la continuidad natural de la ley que estableció los nuevos tribunales laborales. No hay iniciativa respecto del artículo 384 del Código del Trabajo y la posibilidad de huelga en las empresas que atienden servicios de utilidad pública; tampoco hay iniciativa respecto de los trabajos a honorarios, que de decente tiene bien poco. Con franqueza asumo que en esto, el Gobierno anterior fue muy lento. Lo asumo derechamente, lo que no significa que no nos hagamos cargo del problema. No hay ninguna iniciativa, aunque algo se hizo, respecto del concepto de empresa y el fenómeno del multirut. Algo se señala, pero, ¿qué vamos a hacer sobre la materia? ¿Cómo evitamos eso?
Tampoco hay nada en relación con un tema muy de fondo; la revisión del concepto básico del Código del Trabajo, en definitiva, cómo equilibramos los actores y no seguimos con un Código del Trabajo cuyo nudo central es proteger a los que dan empleo en desmedro de los que no lo dan.
La ministra anunció -me felicito por ello- otra iniciativa para enfrentar una modificación más sustantiva del seguro de cesantía. Hay otra respecto del pre y posnatal. Al respecto, advierto que si la discusión sobre el pre y posnatal pasa por la flexibilización de normas laborales para posibilitar el acceso de la mujer al trabajo, vamos a tener un debate muy de fondo, porque tenemos un problema.
No hay iniciativa respecto de la ampliación del subsidio al empleo, particularmente sobre las mujeres y de los jóvenes. Tengo entendido -sería bueno que la ministra lo precisara- que la asignación de dinero para financiar los subsidios al empleo, a propósito de la reconstrucción, se relaciona con los fondos que en el Ministerio del Trabajo había para los programas Mujeres Jefas de Hogar y Jóvenes al Bicentenario. O sea, desvestimos un santo para vestir a otro. En efecto, de la presentación se colige interés manifiesto por los subsidios al empleo en la reconstrucción. Espero que ello sea exitoso.
De paso, ministra, por su intermedio, señor Presidente; le hago presente una preocupación.
No sabemos cuál es el estatuto jurídico de los trabajadores contratados por el Cuerpo Militar del Trabajo. Se dice que son funcionarios públicos, y la Dirección del Trabajo señala que no los pueden fiscalizar, porque no son trabajadores sujetos al Código del Trabajo. Ahí no hay contratación de mujeres; se están pidiendo requisitos que son propios de funcionarios públicos. ¿Qué pasa con estos estatutos? ¿Qué pasa si esos trabajadores se quieren organizar sindicalmente? O sea, hay un conjunto de externalidades que no hemos previsto y que pueden significar un problema.
La defensoría laboral sigue estando pendiente. Su institucionalización era un compromiso que tenían todos los actores. No queremos un programa que esté sujeto a los vaivenes de la discusión presupuestaria, sino una institucionalidad propia que se haga cargo de eso, que, además, ha sido muy exitosa.
Estamos por discutir en su mérito el perfeccionamiento del seguro de cesantía y de las indemnizaciones. No estamos cerrados. Como ambos son derechos de los trabajadores, nuestro planteamiento es debatirlos en ese mérito. Si ambos son derechos, veamos cómo los ampliamos y mejoramos su cobertura, a fin de que más trabajadores accedan a ellos. Si la perspectiva del Gobierno es disminuir por aquí para dar por allá y, al final, el resultado es saldo cero, evidentemente participaremos en la discusión.
Sólo me queda decir a la ministra que estamos dispuestos a poner el diálogo social como centro de la actividad laboral, pero para eso son necesarios dos requisitos básicos: institucionalización del diálogo laboral y reconocimiento de sus actores. El diálogo laboral lo hacen instituciones en concreto, los empleadores y el sindicato. En su presentación no vi ninguna formulación de cómo mejorar la sindicación en el país. Hagamos un proceso más simple, ampliemos las materias -no es un problema-, pero que la titularidad del sindicato sea el centro del diálogo.
He dicho.
El señor BECKER ( Vicepresidente ).- Tiene la palabra el diputado señor Nicolás Monckeberg.
El señor MONCKEBERG (don Nicolás).- Señor Presidente , cuando el fin de semana vi en la televisión la noticia de los altercados y las pifias en el acto de la CUT, tenía algunas dudas de por qué se produjeron, pero ahora me queda absolutamente claro.
Cuando uno escucha intervenciones como la reciente, constata que no hubo una sola palabra de autocrítica de quienes durante veinte años tuvieron la responsabilidad de solucionar todos los problemas que hoy los impresionan y que afectan al mundo de los trabajadores. Más aún, esas palabras provienen de quien fue ministro del Trabajo durante aquellos años. Es claro que él tenía la responsabilidad directa de no decir, después de su gestión, que los problemas se mantenían intactos, como los denunció hoy día. Entonces, no nos sorprendamos que, en mayor o menor grado, con o sin televisión, existan pifias, agresiones, votaciones bajísimas en las elecciones, porque la gente en Chile hace mucho tiempo que vota por lo que ve más que por lo que escucha.
En verdad, hoy estamos en un punto de partida en el que hay que ser francos y directos. Debemos romper el doble bloqueo, por así llamarlo, que existe en las relaciones laborales de nuestro país, porque indesmentiblemente, desde la óptica empresarial, se plantea que cualquier modificación al actual régimen laboral, con excepción de algunas que ellos mismos pueden proponer, es sencillamente antiinversión o antiempleo y, desde la óptica sindical, en algunos casos, cualquier reforma necesaria es vista como una pérdida de derechos laborales o sencillamente la precarización del empleo. Así las cosas, ¿en qué estamos? En un completo inmovilismo. Cada uno se aferra a su dogma, a sus posiciones y todo queda estático. Las cifras no engañan. Aquí se ha dicho que la brecha del desempleo juvenil prácticamente no ha cambiado en Chile. ¡Para qué hablar de la precariedad del empleo! En 1994, el 80 por ciento de los contratos eran indefinidos, con derecho a indemnización. Hoy, lo son menos del 50 por ciento. La informalidad en el empleo, especialmente de los sectores más pobres, tampoco ha mejorado sustantivamente en los últimos años.
También existen déficit en la calidad y en la intensidad de la fiscalización de nuestros organismos administrativos. No se han visto resultados. Se fiscaliza poco lo que realmente es importante y mucho lo que no es tan relevante. ¡Para qué mencionar las bajas remuneraciones y las tasas de participación de la mujer en el empleo! Es cierto que, en los últimos 15 años, ha aumentado de 34,6 a 38 puntos, pero, ¡por favor!, eso es lejos el resultado más bajo que podríamos presentar. Somos un país que está a más de 10 puntos de nuestros vecinos, Argentina y Uruguay, en participación de la mujer en el mercado laboral.
Por lo tanto, me habría gustado escuchar en muchas de las intervenciones que alguien se hiciera cargo del diagnóstico que nos hizo la ministra, que es el punto de partida del actual Gobierno. No es un buen diagnóstico, pues presenta realidades crudas y, lo que es peor, se han venido postergando por 15 ó 20 años y no han tenido soluciones drásticas.
¿Quién es el único que hoy puede romper el doble bloqueo que nos tiene inmovilizados? Sencillamente, el actual Gobierno que, al proponer un alza transitoria en los impuestos para financiar la reconstrucción, ya ha dado un buen paso, porque está demostrando algo que hasta ahora no había ocurrido: que no va a ser adicto a ningún fundamentalismo. Más aún, el sello proemprendimiento del actual gobierno nos permite ir mucho más lejos y ser más innovadores que los gobiernos de la Concertación, que durante veinte años, vivieron atrapados entre el veto de los dirigentes de la CUT y la censura de los dirigentes empresariales. Los resultados están a la vista.
¿Por dónde debemos avanzar? En un primer eje debemos ser capaces -la ministra lo dijo- de incorporar en nuestro debate elementos que modernicen la relación laboral a través de la promoción de las negociaciones al interior de la empresa y que dichas negociaciones realmente produzcan resultados objetivos, mejores estándares y cautivar, al mismo tiempo, la supervivencia y proyección de la empresa. Éstas no son sólo palabras, las cifras -los resultados y la realidad-, son golpeadoras. Las tasas de sindicación en Chile durante los últimos 15 años no han subido. Se ha hablado más que nunca del tema, sin embargo, las tasas de sindicación han bajado: en 1995, 16.7 y, en 2006, 14.0.
Se ha hablado más que nunca de negociaciones colectivas al interior de la empresa. En 1995, superábamos las 220 mil; en 2006, bajaron de las 180 mil.
Incluso, el año 2005 se hizo la encuesta Encla , que nadie puede decir que fue dirigida, pues la mandó a hacer el gobierno. ¿Saben qué respondieron los trabajadores? El 50 por ciento no estaba interesado en participar en un sindicato. La encuesta establecía la posibilidad de señalar si la razón de la no participación se debía a prácticas antisindicales o por temor a despidos. La cifra de trabajadores que respondieron esas alternativas es notoriamente menor. Cerca de un 50 por ciento dijo que no le interesaba participar en los sindicatos. ¿Qué quiero decir con esto? Que no hagamos un baile de máscaras. Si realmente creemos que debe aumentar la negociación colectiva y la negociación al interior de la empresa, debemos preguntarnos por qué hasta ahora lo hemos hecho mal y por qué esas tasas de sindicación son las más bajas, como dijo la OIT. Somos el país miembro de la OIT con las tasas de sindicación más bajas y eso, por supuesto, hay que cambiarlo, pero no diciendo simplemente, en cuatro líneas: “Hagamos sindicación obligatoria y que todo lo que no pueden hacer los trabajadores sea por obligación con el sindicato.” Ésa es la solución más fácil, pero más ineficiente, porque no enfrenta el problema de fondo.
Hay que ser francos, la sola reivindicación de los derechos laborales está obsoleta. Ningún país desarrollado sigue esa fórmula. Hoy, más que perder un derecho laboral, el verdadero peligro que viven nuestros trabajadores es perder su trabajo; por lo tanto, en ese plano tenemos que modernizar nuestro actuar. Parece impensable, porque no están los votos en el Congreso, avanzar hoy en esa dirección. Si no erradicamos la desconfianza antisindical de un sector importante del empresariado y el prejuicio brutal que existe en el otro sector, no podremos salir de este inmovilismo.
Quiero destacar los tres ejes del programa laboral que la ministra nos ha planteado en su exposición. Es correcto y acertado que centralice el actuar en aumentar los niveles y la calidad de la capacitación. Hoy la protección primera del trabajador es que tenga empleo y acceda a mejores condiciones. Se ha gastado mucha plata en capacitación, pero mi balance es que se ha capacitado mal y poco. Las franquicias para capacitar siempre son insuficientes y los escándalos en los programas de capacitación se han transformado en un hecho habitual en nuestro país.
En el segundo punto tiene razón la señora ministra cuando, sin temor, plantea que debemos establecer una comisión técnica para determinar el salario mínimo. ¿Qué duda cabe si el propio ex ministro ha señalado que la OIT formula claras críticas a la forma como en el último tiempo se ha planteado y establecido el salario mínimo en nuestro país?
Por último, también tiene mucha razón la ministra cuando expresa la escasa cobertura que tiene el sistema de indemnización por años de servicio. Éste es un punto emblemático. Definitivamente, podemos pasarnos los próximos diez años intentando ganar elecciones, diciendo que vamos a defender la indemnización por año de servicio. Me gustaría que después de ese discurso siempre se dijera que ello se hace por defender al 6 por ciento de los trabajadores chilenos, quienes actualmente reciben la indemnización por año de servicio.
Es irresponsable mantener un sistema indemnizatorio que sólo beneficia al 6 por ciento -como lo hizo la Concertación durante veinte años-, elitista y discriminatorio, pues el grueso de los trabajadores no tiene indemnización en Chile. Por lo tanto, es imperativo cambiarlo por un sistema de indemnización a todo evento o por el fortalecimiento del seguro de cesantía o, sencillamente, por un sistema con mayor cobertura. ¡Pero dejar las cosas como están por mantener un discurso es, sencillamente, dar la espalda a los trabajadores, y más pifias vamos a tener en los sucesivos actos de la CUT!
Este tema se debe analizar en forma seria. El derecho virtual a la indemnización por año de servicio que hoy existe debe transformarse en un derecho real, y yo seré el primero en cooperar en esa línea.
Finalmente, siento que ésta es la oportunidad para que este Gobierno haga lo que no se ha hecho en los últimos veinte años: empezar a reparar la gigantesca deuda que tiene el Estado con un grupo de trabajadores que componen la administración pública. Definitivamente, sus condiciones laborales no califican en los parámetros de trabajo decente ni mucho menos de empleo justo como aquí se ha dicho.
En el sector público los trabajadores no negocian colectivamente, sino que lo hacen de hecho. Muchos, no tienen protección frente al despido, no cuentan con contratos de trabajo, sino, muchas veces, sólo prestan servicios a honorarios, y cuando van a la Dirección del Trabajo, les responden que no tienen competencia para fiscalizar esas reparticiones.
En estos veinte años nada se ha hecho para que el Estado sea un mejor empleador. Es más, se permite, a sí mismo, lo que sanciona al sector privado. Es una deuda que el actual gobierno debe corregir, pues, lamentablemente, no vimos avance en este campo.
Termino señalando que la adhesión de los trabajadores de este país no se gana tomándose fotos o caminando en marchas para la prensa. Pido a la ministra que, en materia laboral, el Gobierno hable menos y haga más de lo que se ha hecho en los últimos veinte años.
He dicho.
El señor BECKER ( Vicepresidente ).- Tiene la palabra, hasta por cinco minutos, el diputado señor Fernando Meza.
El señor MEZA.- Señor Presidente , quiero agradecer la presencia de la señora Camila Merino , ministra de Trabajo y Previsión Social , en esta sesión especial.
Indudablemente, hay temores en el mundo sindical, y, según manifestaba el diputado señor Nicolás Monckeberg , hay poca sindicación en Chile, por lo que hay que buscar las causas. Éstas tienen que ver simplemente con el temor que existe en el alma de los trabajadores que intentan asumir responsabilidades gremiales.
Hasta hace poco, incluso, ahora mismo, existen enormes empresas, supermercados y malls que operan con distintas razones sociales -para el aseo, la reposición, la seguridad- y se atomizan, lo que complica a los trabajadores para exigir sus derechos sindicales y laborales.
Junto con la diputada Carolina Goic -mientras fue presidenta de la Comisión de Trabajo- analizamos estos temas y propusimos proyectos de ley para ir haciendo cada vez más factibles los derechos laborales y fomentar el gremialismo.
Señor Presidente , por su intermedio, quiero preguntar a la señora ministra respecto de los despidos que están ocurriendo, por ejemplo, en la Sociedad Química Minera de Chile, de propiedad del señor Ponce Lerou , que ella conoce muy bien. ¿Cómo van a remediar esa situación? Existe una enorme cantidad de trabajadores despedidos que han sido recontratados con sueldos ínfimos e indignos. Menciono este caso como ejemplo de los temas que están enrareciendo el panorama laboral en Chile Si bien es cierto que los cambios de gobiernos traen aparejados cambios en las personas de confianza, parece que se está llegando, como en el caso de María Elena , a niveles más incómodos.
Por otra parte, ¿qué hará usted y su ministerio para fortalecer el gremialismo que, si es fuerte, ayudará a despegar y a potenciar la economía nacional? ¿Qué se va a hacer en negociación colectiva, indemnización por años de servicios y posnatal de seis meses, antigua aspiración de las mujeres de Chile y de nosotros, los médicos?
Ahora, persiste el vergonzoso descuento del 7 por ciento a los jubilados y montepiados que señalaba el diputado señor Andrade , ex ministro del Trabajo . La gente nos pasó la cuenta, por no asumir su eliminación oportunamente. ¡Es vergonzosa la estafa que se comete con ellos al descontarles el 7 por ciento para salud, cuando se supone que tienen derecho a atención gratuita! ¿Qué hacer para reconocer la deuda histórica de los profesores?
Hace más de ocho años la bancada radical, junto con otros diputados, dialogó con los ministros de Hacienda , de Trabajo y de Salud para tratar de terminar con este vergonzoso descuento. ¡Dios quiera -como dicen los ateos que ustedes tengan la suerte de dar con la clave para solucionar este problema! Son temas que los radicales esperamos que se aclaren.
A continuación, me referiré a una demanda de los gremios del sector de la salud. Los representantes de la Fenpruss, Fentess , Fenfussap, Fenats Unitaria y Confenats , con quienes recientemente me he reunido, están muy preocupados, pues desde el año pasado se realiza un descuento económico a los dirigentes, porque cuando tienen turnos no pueden realizar actividades gremiales. También hay que apuntar al fortalecimiento del movimiento sindical, porque ellos -los dirigentes- están volviendo a sus labores dentro del hospital a costa del trabajo dirigencial.
Señora ministra, entonces, hay dirigentes de primera y de segunda categoría. Creemos que el Ministerio de Salud se debe hacer cargo de este problema. Hay una grave vulneración de los derechos laborales. ¿Sabían ustedes que los dirigentes gremiales de la salud tienen derecho a 10 días de vacaciones, y que en los siguientes se consideran los sábados y domingos? Es decir, no son ciudadanos como los demás a la hora de tomar sus vacaciones.
Por último, en cuanto al endeudamiento a que se refiere el artículo 96 del Estatuto Administrativo, al gremio de la salud se le permite endeudarse sólo hasta un 15 por ciento de su escuálido sueldo base. Ellos, como mínimo, solicitan que se fije en 30 por ciento, porque tienen hijos que estudian y créditos que conseguir. De la señora ministra depende que ellos puedan ser ciudadanos al igual que el resto a la hora de pedir mejores condiciones de vida.
He dicho.
El señor BECKER (Vicepresidente).- Tiene la palabra, por cinco minutos, el diputado señor Lautaro Carmona.
El señor CARMONA.- Señor Presidente , para algunos de nosotros es una coincidencia significativa que la exposición de la ministra del Trabajo se produzca cuatro días después del 1 de Mayo, toda vez que permite reivindicar las formulaciones que las organizaciones de trabajadores le han hecho al país. Los trabajadores hablaron al país y no sólo a los trabajadores, porque ellos también tienen una idea de sociedad.
Me parece importante que distintas bancadas quieran pasar lista al éxito que tuvo la convocatoria a la movilización del 1 de Mayo. Es bueno que los trabajadores estén atentos a ello, porque será una motivación especial que nos permitirá masificar aún más estas actividades.
No es conveniente caer en la ligereza de disminuir -sobre todo cuando se es gobierno o se forma parte de un partido de gobierno- el impacto y el significado que tuvo la movilización de los trabajadores, la que también se realizó a nivel nacional
Serían muy significativas para un diputado de comienzos del siglo pasado las afirmaciones que han hecho aquí algunos parlamentarios de que se liquide la existencia de la explotación de unos por otros por la vía de una intervención. Me refiero al diputado Luis Emilio Recabarren .
Incluso, la crisis del sistema neoliberal que recorrió el mundo hace poco tiempo puso de relieve los aportes intelectuales, particularmente en la economía, que hizo Carlos Marx , quien precisó el concepto de la plusvalía a propósito de la explotación del hombre por el hombre.
Considero que nadie podría afirmar que el aporte de un trabajador temporero a la economía equivale exactamente a lo que él recibe como salario y no hay allí un uso abusivo de la falta de puestos de trabajo y de una legislación que los proteja para que ellos no tengan que aceptar trabajos con ingresos precarios por obligación o por un sentido de responsabilidad para con sus familias.
La propia Iglesia reconoce que los ingresos que reciben los trabajadores chilenos del quintil más bajo no tienen que ver con su aporte a la economía ni tampoco con lo que requiere su familia.
Estas son cuestiones que están en la mirada que cada uno tiene respecto del trabajo y de a quién hay que proteger.
Se hace una alusión un poquito provocadora con el movimiento sindical respecto a las tasas de sindicación, sin mencionar el perfeccionamiento que han logrado los mecanismos antisindicales, lo que unido a la precariedad del empleo permite que se abuse y se impida la sindicación.
Por lo tanto, si el problema está en la falta de conciencia de los trabajadores, propongo la sindicación automática y desafiliación voluntaria, negociación por rama y por sindicato interempresa.
No he escuchado que es la hora de plantearse una reforma laboral real, que permita que los trabajadores afiliados sientan que tienen la posibilidad de lograr ingresos mayores mediante la negociación.
Existe una gran cantidad de temas que deberían abordarse de inmediato. Por ejemplo, se habla de la contingencia que ha producido la catástrofe, pero me preocupa que ella no se traduzca en puestos de trabajo para tareas productivas, ya que éstas las ejecutan quienes están haciendo el servicio militar obligatorio.
La previsión y el derecho a la salud requieren cambios fundamentales en favor de los trabajadores, porque la sociedad ha tomado nota de que una parte de la relación empresario-trabajador es más débil.
Considero que la riqueza de los países la producen los trabajadores, por lo que se les debe dedicar mucho más atención y entregar más justicia social.
Finalmente, está la indemnización por años de servicio y el seguro de cesantía. No debería ser una dicotomía, sino que medidas complementarias. Si a alguien le llama la atención que sólo el 6 por ciento de los trabajadores reciba indemnización, debe preguntarse quién desbancó ese derecho a la mayoría de los trabajadores para que llegáramos a un porcentaje tan limitado. Hay que preguntarse si es justo que los trabajadores reciban un mes por año, sin límite de once meses, ojalá a todo evento y según la cantidad de años que trabajaron. Así se estableció y aplicó en el pasado, y el país no quebró.
Por lo tanto, vamos a seguir defendiendo la indemnización por años de servicio para los trabajadores y exigiendo un seguro de cesantía serio.
He dicho.
El señor BECKER ( Vicepresidente ).- Tiene la palabra la diputada señor María Angélica Cristi.
La señora CRISTI (doña María Angélica).- Señor Presidente , felicito a la señora ministra por su exposición y por la valentía de asumir un cargo de tanta importancia para los trabajadores chilenos, que le exigirá compatibilizar muchos intereses, lo que va a ser una tarea difícil, pero el objetivo es hacerla mejor, con el fin de que los trabajadores puedan tener una mejor vida, un mejor trabajo, un mejor sueldo e infinitas soluciones para sus problemas.
Es verdaderamente lamentable que la Oposición haya impedido que los subsecretarios acompañasen a la ministra en la Sala. Creo que es la primera vez que tenemos una ministra del Trabajo incluyendo las del gobierno anterior, a la que no se le ha permitido ingresar a la Sala con sus subsecretarios. Pareció un acto de revanchismo porque algunas veces no dejamos entrar a los subsecretarios de los gobiernos pasados. Recuerdo en forma muy especial a un subsecretario que denegó la entrada a Chile de los inculpados por el asesinato de Jaime Guzmán , porque, a su juicio, no existían garantías ni seguridad para que fueran juzgados. En consecuencia, pedimos especialmente a la Presidenta de la República de la época que no nombrara o removiera de su cargo a ese subsecretario, pero no lo logramos, por lo que no dejamos entrar a ese subsecretario a la Sala ni a la Comisión de Defensa. Ocupó ese cargo por muchos años, a pesar de eso y de otras situaciones complejas.
En todo caso, debo recordar al diputado Carmona que ya no existe el servicio militar obligatorio, sino que el servicio militar voluntario. Un detalle.
Quiero encauzar mi intervención desde otro punto de vista.
Debemos considerar que la satisfacción de los trabajadores va directamente ligada a la satisfacción que tengan en su vida familiar y de cómo responden a las necesidades de la familia.
Por otra parte, cada día se hace más importante la incorporación de la mujer al mundo del trabajo. Me alegro la forma en que el gobierno acogió ese proceso. De hecho, la idea es que las mujeres ocupen 600 mil puestos de trabajo del millón que se van a crear.
Sin embargo, para que las mujeres puedan integrarse al mundo del trabajo se requiere de una serie de políticas importantes y que se considere también un elemento de justicia esencial. No es posible que Chile sea uno de los países con los índices más bajos de incorporación de la mujer al mundo laboral, ya que trabaja alrededor del 40 por ciento de las mujeres versus el 60 por ciento de los hombres.
Además, en las mujeres más pobres se dan los peores índices, ya que la mayoría son jefas de hogar. Incluso, entre las mujeres indigentes existe la más alta concentración de jefas de hogar, no tienen quién las ayude y difícilmente se pueden incorporar al mundo del trabajo porque no tienen capacitación. La segunda categoría está compuesta por las mujeres más pobres y, por último, las que no son pobres.
Las mujeres más pobres tienen las remuneraciones más bajas, las mayores desigualdades de sueldo y la mayor cantidad de horas de trabajo. O sea, la concentración de la pobreza está en las mujeres, ya que no se incorporan al mundo laboral y, si lo están, sufren las mayores desigualdades.
Por lo tanto, el plan de capacitación que ha mencionado la ministra es esencial para las mujeres, especialmente para las de los sectores de mayor necesidad.
Además de los subsidios que se van a dar para la capacitación laboral, también es importante la bonificación a la contratación de mujeres y jóvenes, como se ha hecho en el pasado; la contratación de mujeres de baja calificación, todo lo que se ha planteado en estos días que tiene que ver con la Comisión de Familia, como la extensión de la cobertura preescolar, la ampliación de horarios en salas cunas y en jardines infantiles; el cuidado de la atención escolar, la flexibilización laboral, a la que muchas personas se oponen. Al respecto, hay que recordar que ésta no es solamente para las mujeres, sino que también para los hombres. Si pretendemos que el país avance en materia laboral, debemos hacer lo mismo que hacen los países desarrollados. Muchos hombres pueden trabajar desde sus hogares en el teletrabajo. Lo mismo se aplicará para las mujeres. No se trata de una flexibilización laboral sólo para las mujeres.
Hay algo que siempre me ha llamado mucho la atención en materia laboral. Como no soy miembro de la Comisión de Trabajo, lo plantearé aunque parezca algo un poco extraño.
La mayor parte de la discusión se concentra siempre en la sindicación, en la negociación colectiva o en otros temas. Me pregunto, ¿por qué no nos preocupamos mucho más de terminar -que no sea a la fuerza- con los abusos cometidos en contra de los trabajadores? ¿Por qué no reparamos en detectar, por ejemplo, que solamente un 6 por ciento de ellos recibe indemnización?
Los tribunales del trabajo son súper drásticos frente a las denuncias que se formulan. Entonces, ¿por qué a veces funcionan y otras no?
¿Por qué no se fomenta un incentivo para los trabajadores por ganancias de las empresas? ¿No sería una manera de compensar -como dijo un señor diputado - a quienes hacen el trabajo de Chile? Las grandes estructuras están hechas por trabajadores, especialmente obreros. Estuve en la inauguración del edificio Titanium, el más alto de Chile, orgullo de la construcción, pero, ¿quiénes lo construyeron? Obviamente, participaron arquitectos e ingenieros, pero fue construido por los trabajadores que, en su mayoría, no tienen casa. Me duele el alma saber que trabajadores que construyen miles de metros cuadrados, muchas veces no tienen su propio hogar. ¿Por qué no podemos fomentar un mayor subsidio para que los trabajadores vivan en forma digna? Son preguntas que me hago, pero no tengo respuestas.
También quiero hacer una sugerencia a la señora ministra. Sé que en el Ministerio del Trabajo existe una oficina de información, reclamos y sugerencias que atiende consultas y opiniones de la ciudadanía y con la cual se puede comunicar directamente con el servicio. Muchos trámites y consultas se hacen a través de internet, pero las mujeres indigentes y los trabajadores más pobres no saben usar esa red o no tienen acceso a ello, aunque este medio tan importante haya aumentado su cobertura. Entonces, quienes más necesitan consultar no lo pueden hacer.
Por lo tanto, sugiero que se implemente una línea telefónica directa, como lo han hecho otros servicios, para que las personas hagan sus consultas y resuelvan sus dudas.
Por último, me parece espectacular que el nuevo Gobierno acoja con tanta rapidez la iniciativa para prolongar el postnatal -estuvo en tabla en el gobierno anterior por más de dos años-, lo que va a permitir que muchas mujeres se incorporaren al mundo del trabajo o que no lo pierdan por acceder a la maternidad. Ese es un tema relevante. Los autores de la moción son la diputada Goic y el diputado Accorsi ; sin embargo, el Gobierno la acoge seriamente en una comisión de expertos para hacerla realidad.
Más allá de los acomodos necesarios de que puede ser objeto, lo importante es que las mujeres, las madres chilenas, van a estar protegidas. No solamente en el mundo laboral, sino también en relación con el bien superior del niño, el estado psicológico de la madre y el aumento de la natalidad que hace falta. El mundo del trabajo es un tremendo enjambre que abarca todas las áreas de la sociedad. Desde mi punto de vista, no puede estar restringido solamente a la permanente discusión de la sindicación y la negociación colectiva.
He dicho.
El señor BECKER ( Vicepresidente ).- Tiene la palabra el diputado Tucapel Jiménez.
El señor JIMÉNEZ.- Señor Presidente , saludo a la ministra, ya en la Comisión le deseé el mayor de los éxitos en su gestión. Si le va bien, también debería irles bien a los trabajadores.
He escuchado varias exposiciones de mis colegas y quiero referirme a algunas de ellas.
Muchos han hablado del acto de la Central Unitaria de Trabajadores del 1 de Mayo, de las pifias y de los insultos, pero no todos los recibimos. Yo, por lo menos, he ido todos los años y no fui objeto de ningún insulto ni tampoco los colegas Carlos Montes y Osvaldo Andrade . Habría que analizar el motivo de esos insultos. Alguien me decía que se debe a que no soy un rostro conocido. Puede ser así. Pero Osvaldo Andrade y Carlos Montes son conocidos y tampoco los recibieron. Debemos preguntarnos, ¿cómo les iría en estos actos a los colegas de la Alianza? Si alguna vez van a asistir sería importante saber cómo los van a recibir, sobre todo a quienes participan en la Comisión de Trabajo.
En la exposición de la señora ministra se habla de un millón de empleos. Aquí es sumamente importante que se hable de un empleo decente, como lo ha planteado la OIT.
Se ha hablado de cobertura y de calidad de la capacitación, así como de implementar una reforma al sistema de capacitación, pero no sabemos cómo se llevará a cabo. Se señala su objetivo, pero desconocemos los pasos que se darán para lograrlo.
Además, se habló de fortalecer y perfeccionar la negociación colectiva y la capacidad negociadora de los sindicatos, cuestiones que nos parecen muy importantes. A lo mejor, tenemos diferencias en cómo creemos que se puede mejorar la capacidad negociadora de los sindicatos. Estoy convencido de que mientras más poderosos y fuertes sean, los conflictos disminuyen. Así sucede en los países desarrollados donde los sindicatos son una fuerza poderosa. Entonces, ¿cómo los fortalecemos? Existen varios proyectos que me gustaría que abordáremos para saber cuál es la disposición del Gobierno, como la sindicación automática y la negociación colectiva.
El diputado Monckeberg dijo que habrá disminución en la sindicación y la ministra en su presentación expresó que va en aumento. Por supuesto, bajó, pero dio vuelta la curva. Los argumentos son distintos. Entiendo y tengo la convicción de su baja. Por eso, presentamos el proyecto de ley de sindicación automática, que descansa en la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, cuyo envío a la Comisión de Trabajo solicitaré.
Creemos que los trabajadores tienen miedo a sindicarse. Uno de los argumentos más importantes de los trabajadores es que una vez que se sindican son despedidos de sus trabajos. Hay varios factores. Los sindicatos deben tener mayor presencia y protagonismo y debe haber una autocrítica de los dirigentes sindicales. Pero el principal motivo es el miedo.
Otro proyecto que nos interesa discutir es el que ingresó hoy, que elimina el 7 por ciento de salud que se le descuenta a los jubilados.
Por último, se habla de respetar los derechos de los trabajadores. Tengo la absoluta certeza de que la señora ministra está convencida de eso, pero -lo dijo el diputado Meza - sigo preocupado por lo que está pasando en el sector público. Entiendo y no hay ninguna discusión en cuanto a que las personas de confianza del antiguo gobierno sean despedidas, pero se está produciendo un hecho extraño, volver a exonerar por causas políticas. Ya van más de quinientos trabajadores despedidos. No sé a qué cifra se va a llegar. Se despide por tener una ideología, por pertenecer a algún partido político, sin haber sido operadores políticos ni personas de confianza.
Me han dicho que la señora ministra recibió el oficio que envió la intendenta de la región de Atacama a todos los directores regionales. Consta de tres páginas y un anexo en que se solicita información sobre personal de planta, a honorarios, a contrata, años de servicio y militancia, así como otros antecedentes relevantes, por ejemplo, si es dirigente de algún gremio o sindicato, etcétera.
Por su parte, se escucha al Presidente de la República -me parece que la señora ministra también lo ha dicho- expresar que no habrá despidos por pertenecer a algún partido político, pero ya no se habla sólo de partidos políticos sino también de si las personas son dirigentes sindicales o pertenecen a algún gremio.
Pido a la señora ministra que tome cartas en el asunto y se preocupe del tema. Van más de quinientas personas despedidas, y se ha instalado la incertidumbre en todo el sector público, lo que es preocupante también para la productividad. Porque no hay peor escenario que el que los trabajadores laboren con la incertidumbre de no saber si el día de mañana serán o no despedidos por haber pertenecido, pertenecer o tener una ideología determinada.
Por último, reitero mi petición a la señora ministra de que tome cartas en el asunto, para terminar con los despidos que se están produciendo en el sector público.
He dicho.
El señor BECKER (Vicepresidente).- Tiene la palabra, por dos minutos, el diputado señor Osvaldo Andrade.
El señor ANDRADE.- Señor Presidente , no se gana la voluntad de los trabajadores invitándolos a almorzar con la televisión; sino con una persistente tarea de muchos años.
Los problemas laborales en Chile no empezaron hace 20 años, sino mucho antes. Y lo interesante es tener una posición respecto de ellos. Ponerse al medio siempre es fácil. Decir que la culpa la tienen éstos y aquéllos desde el medio, cual Pilatos, siempre es fácil. Pero reitero que lo importante en materia laboral es que uno tenga una posición y se juegue por ella.
En consecuencia, que se diga que tal cosa no se hizo años atrás puede ser válido. Eso debemos asumirlo. Pero históricamente hablando, cada cual fija la temporalidad que quiere. Y puedo asegurar, por lo menos de parte de quienes hemos estado en el tema laboral toda la vida, que las materias laborales son de hace más de veinte años.
Por otra parte, hemos tratado de colaborar con una intervención que apunta a mejorar lo que nos han planteado el Gobierno y la ministra. Ésa ha sido nuestra tónica: mejorar la agenda legislativa, darle mayor contenido. No queremos ni vamos a detenernos en intervenciones pequeñas que a lo único que apuntan es a buscar responsabilidades, a pedir explicaciones de por qué se hizo esto y no lo otro. Si fuera por eso, habría mucho que decir, particularmente a aquellos que en su vida han tenido una conducta más bien antitrabajador. Y eso es mejor decirlo de una vez por todas.
Lo más importante es desprender del mensaje de los trabajadores del 1 de Mayo el planteamiento del presidente de la Central Única de Trabajadores . Detrás de toda la parafernalia propia de una actividad de masas como ésa, él dijo: “El mundo del trabajo está dispuesto a conversar.”.
Está la disposición de conversar, de dialogar. La iniciativa está en el Gobierno.
Nosotros también estamos dispuestos a colaborar con esa iniciativa. Pero conversar con los trabajadores significa hacerse cargo también de su identidad.
He dicho.
El señor BECKER ( Vicepresidente ).- Tiene la palabra, por seis minutos, el diputado señor Mario Bertolino.
El señor BERTOLINO.- Señor Presidente , en primer lugar, saludo y felicito a la ministra, así como a los subsecretarios y a su equipo de trabajo, por la forma ágil con que hemos venido trabajando, particularmente en la Comisión de Trabajo. Prueba de ello es que en estos 54 primeros días de Gobierno la Comisión ha despachado dos proyectos: el que flexibiliza los requisitos de acceso para obtener beneficios del seguro de cesantía de la ley N° 19.728 y el que modifica el numeral 6 del artículo 159 del Código del Trabajo, puesto que a los cinco días de haber asumido el Gobierno ya se estaba pidiendo el estudio de este informe para buscar una forma de ser equitativos y tener una sola vara para medir la situación de despido forzoso.
Este Gobierno tiene la oportunidad histórica de avanzar en una mirada modernizadora de las relaciones laborales, que además conjugue la necesaria protección de los trabajadores con el fortalecimiento del empleo y las fuentes de trabajo.
Todos sabemos que la mejor protección para un trabajador es que tenga empleo. Puede haber discursos, variadas fórmulas, mucha legislación, pero si ésta no favorece el empleo, nos quedaremos sólo en “cantos de sirena” y en música.
Mucho de eso ha sucedido hasta ahora. Prueba de ello es que no se ha querido asumir que el mundo cambió. Estamos en un mundo competitivo, donde cada medida que se toma y que aumenta la carga al emprendedor o empleador con la justificación de que se está mejorando la condición del trabajador, muchas veces perjudica al empleado y, lo que es peor, no le da la oportunidad al que no tiene trabajo.
Por eso, siempre el límite de la política, a mi juicio errada, de aumentar las cargas sobre la contratación la paga el trabajador, porque va en la línea de destruir el empleo y, obviamente, no produce el efecto de crecimiento y desarrollo que todos queremos.
La ministra -y hay señales claras recogidas por la prensa- ha manifestado una apertura ejemplar para tratar y conversar con todos los sectores, sin discriminación. Nuestro país debe tomar muy en serio el diálogo social. Los desafíos de la globalización no pueden esperar y deben abordarse como la ministra lo ha expuesto: en forma técnica y con la participación de todos los sectores; porque, sin duda, una tardanza en esta tarea nos hará tener menores oportunidades de empleo y seguramente también lo pagaremos con destrucción de fuentes de trabajo.
Me pregunto cuántas oportunidades hemos perdido en los últimos tiempos en la instalación de empresas extranjeras en nuestro país, donde se nos había dicho que se podían implementar, por ejemplo, sistemas de servicios remotos radicados aquí como plataforma central, dada la condición estable y de garantías que otorga Chile, pero también -todos lo sabemos- se nos fueron plantas manufactureras que querían instalarse acá por la falta, única y exclusiva, de una coherencia legal en materia laboral de acuerdo a los nuevos tiempos.
Es un hecho que nuestra legislación laboral no ha progresado en los últimos años como todos hubiésemos querido para estar a la altura de las circunstancias y de la competitividad internacional, lo cual, desgraciadamente, ha privilegiado en alguna forma la confrontación laboral por sobre el entendimiento y las propuestas de flexibilización.
El programa que nos expuso la señora ministra avanza en el sentido correcto de modernizar nuestro sistema laboral, haciendo de la capacitación -como bien lo decía el diputado Nicolás Monckeberg - un elemento central, al contrario de las administraciones anteriores, en que la labor de los organismos técnicos en la materia no avanzó como correspondía para beneficiar a los trabajadores. Desafortunadamente, el comportamiento de nuestro mercado de trabajo demuestra aquello, dado que tenemos una muy baja incorporación de jóvenes y mujeres al mundo productivo.
Creo relevante el proyecto de tecnificar la Dirección del Trabajo. Es fundamental hacerlo, dado que ese organismo debe ser proactivo en el cuidado del empleo. Acá no se trata de cuidar al empleador o al trabajador, sino el empleo, porque sirve a ambas partes y también beneficia al Estado, a la nación y a todos los chilenos.
Es importante que se respeten los derechos de los trabajadores sí o sí, pero también lo es el que se considere que la flexibilización que requieren los nuevos tiempos no es una pérdida de condiciones o de situaciones adquiridas.
Por ello, creo que estamos en la senda correcta y valoro la actuación que han tenido la ministra y su equipo.
He dicho.
El señor BECKER (Vicepresidente).- Tiene la palabra el diputado señor Aldo Cornejo.
El señor CORNEJO.- Señor Presidente, por su intermedio, quiero hacer, brevemente, un par de peticiones a la señora ministra del Trabajo.
En todos los proyectos que han ingresado en el último tiempo con motivo del terremoto: el que flexibiliza los requisitos de acceso para obtener beneficios del seguro de cesantía, el relativo a la pesca artesanal, el que otorga facilidades para pagar las cotizaciones previsionales a los trabajadores, se han incluido todas las regiones declaradas zona de catástrofe.
Por tanto, quiero pedir a la señora ministra del Trabajo que en el proyecto que otorga facilidades para el pago de deudas previsionales incorpore a las regiones Quinta, Metropolitana y Novena, pues donde existe la misma razón, debe existir la misma disposición. No veo ningún argumento para que regiones que fueron declaradas zonas de catástrofe queden al margen de un beneficio destinado a ayudar a los trabajadores y, en particular, a los pequeños y medianos empresarios que, con motivo del terremoto, pueden verse impedidos de pagar las cotizaciones oportunamente.
Asimismo, en nombre de la bancada de la Democracia Cristiana, pido que el proyecto de ley que ingresó a esta Corporación y que se ha discutido en la Comisión de Trabajo y Seguridad Social, respecto de la modificación del artículo 159, número 6 del Código del Trabajo, tenga el carácter de norma interpretativa, porque no parece adecuado que existan dos regímenes distintos. Los trabajadores que fueron despedidos antes de la promulgación de esta ley no podrán gozar de sus beneficios cuando ella entre en vigencia.
Me parece que, en ese caso, se justifica plenamente que la seguridad jurídica, que es el fundamento de la irretroactividad, dé paso al principio de la justicia y que todos puedan gozar de los mismos beneficios, ya que sus despidos se produjeron con ocasión del mismo fenómeno, el terremoto del 27 de febrero. De modo tal, que le pido a la ministra del Trabajo , por su intermedio, señor Presidente , que los temas a los que me he referido en mi intervención sean considerados por el Ejecutivo , que tiene iniciativa exclusiva en estas materias.
He dicho.
El señor BECKER ( Vicepresidente ).- Tiene la palabra el diputado señor José Pérez.
El señor PÉREZ (don José).- Señor Presidente , en primer lugar, saludo a la ministra del Trabajo y Previsión Social .
En el escaso tiempo del que dispongo me quiero referir a la indemnización a todo evento.
El Decreto Supremo, de fecha 10 de marzo de 2000, recoge en un solo texto el conjunto de modificaciones realizadas a las normas legales que regulan la relación laboral en nuestro país.
Dicho texto, en su capítulo IV, artículos 146 al 152, establece las normas que regularán, para los efectos de esta ley, la función laboral de trabajadores de casa particulares y de trabajadores que realizan acciones similares en instituciones de beneficencia cuya finalidad sea la atención de personas en un ambiente familiar y el art. 163, inciso cuarto, señala las normas sobre su desahucio.
Se estima que el universo de estos trabajadores en el país superaría los 350 000 contratos laborales.
En 1992, a iniciativa de los senadores Williams Thayer , Sergio Jarpa y Ricardo Hormazábal y el apoyo del Ejecutivo de la época, se dictó la ley Nº 19 010, de 29 de noviembre de 1990, que tuvo por objeto la creación de un fondo especial de desahucio, logrando de esta forma que la totalidad de los trabajadores ya mencionados accedieran a una indemnización a todo evento al término de su contrato. Para estos efectos, se estableció un reajuste general de sus remuneraciones en un 4,11%, porcentaje que implementó el referido Fondo de Desahucio que ha funcionado por espacio de veinte años, sin contratiempo alguno, eliminando, de paso, cientos o miles de juicios laborales que, eran constantes antes de la aplicación de esta ley.
En 2005, en la misma Comisión de Trabajo del Senado, pero en esta ocasión los senadores Mario Ríos y Augusto Parra , formularon indicación para extender el beneficio a la totalidad de los contratos laborales del país. En dicha ocasión, los senadores mencionados proponían, sobre la base de la modificación del artículo Nº 164, que establece la alternativa de pactar contractualmente indemnización a todo evento a partir del séptimo año laboral, modificar dicho plazo, permitiendo la suscripción de contratos desde el primer mes de labores.
En esa misma ocasión, se analizaron dos alternativas: la primera, observar que la sola modificación del referido artículo 164, permitía acuerdos individuales, no obligatorios para las partes contratantes y, la segunda, más completa y claramente más necesaria, asumir la creación de un Fondo de Desahucio a fin de incorporar el desahucio a todo evento, todo lo cual, significaría aumentar en un 4,11% la totalidad de las remuneraciones, en este caso, todas a costa del empleador, poniendo fin por una parte al 95 por ciento de los juicios laborales por desahucio y, por la otra, ampliar de esta forma, un nuevo trato laboral.
Ambas indicaciones, no fueron acogidas por el ejecutivo de la época.
Es necesario tener presente que en matera laboral, nuestro país, así lo estimamos, ha tenido un desarrollo admirable. El antiguo “peón”, sería después el “obrero”, luego, el “trabajador”, más adelante el “personal de la empresa”, en años posteriores, el “recurso humano”, para situarse en nuestros días en la realidad, con la denominación de “capital humano”.
Efectivamente, esta expresión de “capital humano”, reconoce una realidad que las empresas más desarrolladas bien conocen. Las inversiones sobre capacitación, antaño solo de responsabilidad del Estado, hoy, alcanza niveles interesantes en la empresa privada. La razón es simple, práctica y real; el conflicto del empleado con el empleador en nuestros días muestra una dimensión cada día menor, la contraparte, conflictiva y difícil que fue la tónica de la relación laboral, ha tenido un cambio de tal profundidad que hoy dicho problema se sitúa en los resultados de la empresa, más allá de nuestras propias fronteras. El empleador será mejor o peor, no tanto por su relación laboral, sino que por el éxito alcanzado por el producto elaborado. Lo mismo ocurrirá con el trabajador. La mayor estabilidad laboral se la dará el éxito de su empresa, en este cada día más difícil y competitivo campo comercial, adquiriendo conciencia de que es un capital de la empresa en que trabaja Tal es así que, existiendo inquietudes por las actuales leyes laborales, que ahora vamos estudiar, lejos, la opinión pública está radicada en el problema que origina la comercialización, reemplazando en la mayoría de los casos al conflicto laboral tan propio de años anteriores.
Así las cosas -Chile tiene TLC con el 80 por ciento del PGB mundial y con el 70 por ciento de la población del orbe-, es absurdo mantener disposiciones, como las que hoy ejemplarizamos, que más bien son temas de conflicto más que de soluciones. Por ello, nuestra disposición es avanzar a las modificaciones de nuestro Código del Trabajo en lo que respecta a la indemnización a todo evento.
Nuestra disposición a una nueva normal legal.
1.- Visto lo anterior, manifestamos nuestro decidido apoyo a una norma que permita a los trabajadores del país incorporar en sus contratos el desahucio a todo evento y por tanto, apoyaremos la creación de un Fondo Nacional de Desahucio para cumplir tales objetivos.
2.- Sobre lo mismo, expresamos nuestro interés para que ese desahucio no tenga límites en años laborales. Nos parece al revés de lo que se pueda sostener, que la estabilidad laboral será más extensa si este desahucio se extiende por toda la vida laboral-contractual.
3.- Igualmente, nos parece necesario compartir, muy referencialmente por ahora, la idea de establecer un período de tiempo, seis meses concretamente, para que, considerando las características de esta nueva disposición, empleadores y empleados, concuerden con aquellos trabajadores contratados, un valor del desahucio eventual que podrían obtener a fin de incorporarse plenamente a la nueva ley. Si no existiera acuerdo, se mantendrán con las normas actuales hasta el término del contrato.
4.- Reconocemos que la aplicación de una norma legal que pague el desahucio a todo evento, sin excepciones, traerá paz social laboral, obligará a los empleadores a cuidar y proteger al trabajador eficiente, quien, a su vez, tendrá mayores libertades para optar a nuevos trabajos sin perder el patrimonio que significa tal desahucio.
5.- Con respecto a lo propuesto, en el sentido de extender o ampliar el Seguro de Cesantía, si bien es cierto, no nos opondremos a su estudio, nos parece que la alternativa aquí expuesta es de mayor relevancia, porque, insistimos, se fortalece la relación empleador-empleado.
Haré entrega a la ministra del Trabajo y Previsión Social de una copia de mi intervención para que estudie y tenga en consideración lo planteado, pues buscamos el beneficio de los trabajadores del país.
He dicho.
El señor BECKER (Vicepresidente).- Tiene la palabra el diputado señor Ernesto Silva.
El señor SILVA .- Señor Presidente , saludo a la ministra del Trabajo , agradezco su presencia en esta Sala y le deseo mucho éxito en su labor, que sea la ministra de la creación de nuevos puestos de trabajo, ese es su gran desafío.
Una de las principales razones por las que Sebastián Piñera ganó la elección presidencial es que los chilenos quieren más y mejores trabajos. La Concertación no fue capaz de enfrentar con éxito el problema del desempleo y crecer al ritmo que el país necesita, con empleos dignos que incorporen muchas más personas al mundo del trabajo, lo que les permitiría salir de la pobreza y mejorar su calidad de vida.
Quiero traducir las palabras de la ministra del Trabajo y Previsión Social en algunos hechos concretos. Si Chile tuviese tasas de ocupación cercanas a las señaladas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), o a las de los Estados Unidos -varía un poco dependiendo de la realidad de cada país-, en Chile habría trabajando un millón más de personas. ¡Un millón más de chilenos con trabajo!
Por lo tanto, nuestro foco de atención debe ser la creación de empleos. Si tuviéramos un millón más de personas trabajando y se les pagara el sueldo promedio, Chile tendría un ingreso adicional de 8 billones de dólares al año. ¡Eso es generar oportunidades! Si se pagara el sueldo mínimo habría 3,8 billones de dólares más de ingreso y de oportunidades para las familias.
Hoy, es evidente que los grupos más vulnerables y excluidos del mundo del trabajo son los jóvenes y las mujeres, especialmente los más pobres. Queremos que la principal preocupación del Gobierno sea dar trabajo y oportunidades. Para lograr tal objetivo se requiere que la regulación y el mercado laboral sean capaces de reconocer la naturaleza y el contexto distinto que enfrentan los jóvenes y las mujeres para incorporarse al mercado del trabajo.
Necesitamos con urgencia dar pasos hacia la adaptabilidad y hacia la creación de trabajos amables, compatibles con una nueva familia y con la realidad que enfrenta Chile.
Hemos visto en el debate de las últimas semanas que nuestro país hará un esfuerzo por crear más emprendimiento. No sé por qué en Chile se critica al emprendedor, se lo castiga y se le quitan los recursos. Chile y su Gobierno deben crear las condiciones para que surjan nuevos emprendimientos, porque los emprendedores son los que crean trabajo.
La invitación a la ministra es a trabajar de la mano con el Ministerio de Economía para remover no los lomos de toro, sino los verdaderos cerros que impiden a los emprendedores avanzar hacia la creación de nuevos empresas que den trabajo en Chile. En ese sentido, espero que pronto veamos una agenda concreta y conjunta que dé vida a lo que ha anunciado el Ministerio de Economía esta semana, en torno a avanzar en la reducción de trámites para la creación de empresas y para facilitar la vida del emprendedor.
En segundo lugar, la Concertación nos entregó un país menos productivo. Lamentablemente, en materia de productividad, en promedio, el Gobierno de la Presidenta Bachelet decayó 1,6 por ciento, lo que provoca que nuestros trabajadores pierdan oportunidades y que la forma en que enfrentamos el futuro nos aleje del estándar que queremos.
El mejor remedio para ello es la capacitación y la educación. Se debe trabajar en conjunto con el Ministerio de Educación y con las instancias que el Gobierno determine a fin de que las personas estén mejor preparadas para los nuevos desafíos de Chile. Hay áreas que nos van a demandar nuevos servicios, globales, outsourcing y otros donde se requiere capacitación, lo que significa oportunidades para incorporar a un mayor número de personas al mundo del trabajo.
En ese sentido, la productividad y la creación de empleo deben ser focos prioritarios. No se puede lograr todo al mismo tiempo, hay que escoger. El Presidente de la República fue elegido, entre otras razones, por su capacidad para crear más empleo, algo que la Concertación no tuvo en los últimos años.
La catástrofe del 27 de febrero pasado ha implicado para el Congreso Nacional y el Gobierno la implementación de una serie de medidas, entre ellas, ampliar los beneficios del Seguro de Cesantía, avanzar en todo lo relacionado con el bono marzo, discutir el financiamiento de la reconstrucción del país, etcétera.
Creo que es tiempo de avanzar también en medidas pro adaptabilidad y flexibilidad en las zonas más afectadas. Hoy se ha dado a conocer la caída de 2,8 por ciento de la actividad económica en marzo, porcentaje que debemos dar vuelta en forma rápida por la vía de la inversión y del trabajo.
Por eso, pido a la ministra, por su intermedio señor Presidente , que el Gobierno considere la posibilidad de evaluar proyectos que establezcan mayor flexibilidad, adaptabilidad y creatividad para crear, con urgencia, una mayor cantidad de empleos en las zonas más afectadas. Asimismo, le reitero mis deseos de éxito y ojalá sea reconocida -sé que va a ser así- como la ministra que creó mucho empleo y que permitió el salto definitivo de la incorporación de la mujer y de los jóvenes al mundo del trabajo. Ese es el desafío fundamental.
Hoy, tenemos mucho por avanzar.
He dicho.
El señor BECKER (Vicepresidente).- Tiene la palabra el diputado don Enrique Jaramillo.
El señor JARAMILLO.- Señor Presidente , en primer lugar, un saludo muy especial a la ministra del Trabajo , quien inicia las sesiones sobre lo que hemos llamado el “estado de la Nación”, de acuerdo con una norma reglamentaria de la Cámara de Diputados.
Las cifras estadísticas no son las que quisiéramos y los culpables no son ni unos ni otros, pero es nuestra realidad. Curiosamente, algo beneficioso de esta Cuenta es la posibilidad que nos da la tragedia, el sismo, para que la cesantía existente en el país sea considerada por aquellos que hoy van a tener la posibilidad de reconstruir el país.
Quiero abocarme a lo que aparece en los ejes de acción.
Se dice que vamos a mejorar la OMIL, una oficina interesante e importante que se encuentra en los municipios de las distintas comunas. Pero eso es discutible, porque ellas son solamente un instrumento de inscripción y estadística, aquí se dice que lo vamos a mejorar. Entonces, ahora vienen las preguntas pertinentes que por intermedio de la Mesa quiero hacer a la señora ministra.
¿Cómo vamos a mejorar lo que a mi juicio está bien? Porque funcionan bien, me considero ministro de fe en ello.
Otro punto que siempre me crea un poco de confusión es cuando se dice que se creará un millón de empleos. Entiendo que eso esté dentro de las promesas del actual Gobierno, pero ¿de qué mejor oferta se trata? ¿Habrá mejor oferta para trabajos calificados? También se señala que habrá mejor productividad en el período y que con eso mejoraremos la empleabilidad y se aumentará el salario mínimo. Pero esas son opiniones y no resultados. Allí me confunde un poco esto de dar a conocer como eje de acción lo que estoy comentando, aun cuando debo reconocer que hay muchas buenas ideas en ello.
El señor BECKER ( Vicepresidente ).- Señor diputado , le informo que queda un inscrito del Comité del PPD y sólo le quedan dos minutos cuarenta segundos.
El señor JARAMILLO.- Entonces, acortaré mi intervención.
Solicito a la señora ministra su intervención personal en algo a lo cual se refirió claramente mi colega Tucapel Jiménez . No queremos que en el país exista de nuevo un estamento de exonerados políticos, porque los despidos se están produciendo en todas las reparticiones, en todos los ministerios, en el sector público. Por lo tanto, pido su intervención personal en ello. Se lo solicito respetuosamente por quienes son los ejes y jefes de hogar.
He dicho.
El señor BECKER (Vicepresidente).- Tiene la palabra el diputado don Fuad Chahín.
El señor CHAÍN.- Señor Presidente, en primer lugar, saludo a la ministra.
En segundo lugar, quiero referirme a algunos puntos muy particulares, básicamente reforzar lo planteado por el colega Aldo Cornejo , respecto de incorporar a la Región de La Araucanía en el proyecto de ley sobre deuda previsional que el Ejecutivo ingresó al Congreso Nacional, fundamentalmente porque no sólo está en el decreto de zona de catástrofe, sino porque la parte norte de la región, la provincia de Malleco -que represento en la Cámara-, fue gravemente afectada por el terremoto. Por lo tanto, por un hecho de realidades absolutamente necesario, pido que también se considere a la Región de La Araucanía en dicha iniciativa.
Por lo anterior, adhiero a la solicitud planteada por el diputado Aldo Cornejo .
También, quiero insistir con mucha fuerza en que se le dé el carácter de interpretativa a la modificación del artículo 159 del Código del Trabajo, ya que, de lo contrario, se le resta toda eficacia. Podrá servir para enfrentar situaciones que se generen después del próximo terremoto o catástrofe, pero para el que ocurrió el 27 de febrero pasado va a tener nula aplicación, lo que puede significar que esa normativa tenga poca eficacia en el logro de sus objetivos, producto de que no se le está dando el carácter de interpretativa para que efectivamente tenga efecto retroactivo. Además, el propio Ejecutivo, a través de la Dirección del Trabajo, emitió un dictamen interpretativo, su dictación hace absolutamente coherente dar el carácter de interpretativo a la disposición que ese proyecto de ley plantea modificar.
Quiero referirme también a un punto bien específico. Entiendo perfectamente que ha cambiado la metodología de medición sobre empleo a nivel nacional aplicada por el INE; entiendo también que esto se produce por planteamientos de organismos internacionales, como la OIT y la OCDE. También he escuchado que no es comparable ni empalmable la metodología anterior con ésta y, por lo tanto, no puede significar una muestra de la variación del empleo; no obstante, me preocupan las consecuencias de aquello.
En la última medición con la metodología anterior, de noviembre de 2009 a enero de 2010, la Región de La Araucanía registraba un 11,5 por ciento de desempleo, con el primer lugar a nivel nacional; con la nueva metodología el resultado es distinto, un 8,2 por ciento de desempleo, pasando al octavo lugar a nivel nacional, lo que podría ser motivo de alegría si ello fuera el reflejo de la realidad, pero el desempleo sigue siendo el principal flagelo de nuestra región.
El cambio de metodología castiga fundamentalmente a las regiones con alto porcentaje de población rural, como ocurre en la Región de La Araucanía y, sobre todo, de pequeños campesinos. En otras regiones existen más de tres mil comunidades indígenas y muchísimos asentamientos de pequeños campesinos que, según esta encuesta, por el solo hecho de mejorar un cerco en algún campo o dar forraje a los animales quedan fuera de la categoría de desempleados, aunque no tengan un trabajo remunerado, ya que, potencialmente, en algún momento, podrían tener algún ingreso por la vía de la rentabilidad que les da ese trabajo, cuestión bastante poco real.
Por lo tanto, sólo por el cambio de metodología, hoy hemos pasado al octavo lugar de una manera artificial, aun cuando es la región con más desempleo. Si bien eso no lo podemos comparar, sí puede tener en las regiones un efecto en las políticas públicas, fundamentalmente de generación de empleo. No me gustaría que debido al cambio en la metodología quede fuera un desempleo escondido y disimulado, como el rural, y se rebajen los planes de empleo de emergencia y todas las líneas de bonificación a la contratación y también aquellas que incentivan el desarrollo económico y la inversión en nuestra región.
Quiero agregar que no sólo estamos mal en las cifras de desempleo. La Araucanía es la región que tiene peores índices de desarrollo humano en el país. A nuestra región el Estado llegó 70 años más tarde. Mientras en septiembre próximo el resto de Chile va a cumplir 200 años de vida independiente, nosotros deberíamos celebrar sólo 129. Esa brecha de 70 años de presencia del Estado es la causa más profunda de las dificultades que tenemos hoy.
En los últimos años, la inversión extranjera en la Región de La Araucanía ha sido cero. Por lo tanto, nos preocupa que hoy, cuando entramos en la dura estación de invierno y ya no es posible que sus habitantes se trasladen al norte -llegan hasta Curicó - para trabajar como temporeros, con los datos entregados se recorten, además, los programas de empleo y de bonificación a la contratación de mano de obra. Me preocupa sobremanera el impacto que pueda tener este cambio de metodología en las políticas públicas.
Por eso, le solicito a la ministra que se mantengan no sólo los programas de empleo para 2009, sino que se aumenten para el presente año, porque nosotros no hemos sufrido sólo el terremoto del 27 de febrero pasado, sino, además, el terremoto verde de la tremenda crisis agrícola producida por las inclemencias climáticas, aparte del terremoto permanente de pobreza que nos ha afectado desde hace muchos años.
He dicho.
El señor BECKER ( Vicepresidente ).- El diputado Tucapel Jiménez nos ha recordado que hoy la ANEF cumple 67 años.
Por lo tanto, le enviamos un saludo a todos sus dirigentes y, a través de ellos, a todos los empleados públicos de Chile.
(Aplausos en la Sala).
Tiene la palabra la diputada señora Claudia Nogueira.
La señora NOGUEIRA (doña Claudia).- Señor Presidente, en primer lugar, doy la bienvenida a la ministra del Trabajo.
De su exposición veo con preocupación la desatención de nuestro sistema productivo respecto de la inserción de la mujer en el mundo del trabajo.
En esta materia, el camino de las políticas públicas no ha posibilitado sino pequeños mejoramientos en los niveles de participación de la mujer en el empleo, ya que las tasas de incorporación avanzaron lentamente durante dos décadas, para casi congelarse en los últimos cinco años, a la vez, las mujeres conforman mayoritariamente los deciles de menores ingresos. Con esto se concluye que, además de participar muy poco en el trabajo, las mujeres son peor remuneradas que los hombres. Sobre esta materia existen varias consideraciones que toda política pública en materia laboral no puede dejar de abordar.
En primer término, puedo señalar que el sistema productivo general adolece de una ineficacia crónica para generar nuevos empleos a los que pudieran acceder las mujeres. Diversas regulaciones, rigidez de la normativa sobre jornada laboral y falta de preparación para el emprendimiento y capacitación ocupacional para el empleo hacen que la falta de trabajo implique tasas crónicas de entre el 6 y el 10 por ciento de cesantía, arrastradas por décadas, más allá de las crisis económicas que cíclicamente debemos enfrentar.
El costo de esta incapacidad de generar empleos y emprendimientos lo pagan, sin duda, las mujeres y los jóvenes, con tasas de desempleo normalmente más altas que el promedio nacional. A mi juicio, esto se explica porque a la hora de seleccionar a un trabajador, al no existir pleno empleo, el empleador prefiere hombres y no mujeres, ya que éstas deben cargar con el estigma de ser trabajadoras de mayor costo, elemento asociado a las contingencias de maternidad y cuidado familiar.
Aquí radica otro de los problemas no resueltos por el Estado durante las últimas décadas: el cuidado infantil y la maternidad se han asociado a los costos del empleador y no a políticas de seguridad social.
Hoy, el empleador debe asumir costos directos, como son el financiamiento de las salas cuna y del período de alimentación de los menores de dos años, y costos ocultos, que implican menor productividad, por el reemplazo de mujeres que hacen uso de licencias maternales. Otro costo oculto difícil de dimensionar es el asociado a la falta de flexibilidad para la rotación de personal sujeto al fuero maternal. Es necesario recordar que desde que una mujer queda embarazada, prácticamente goza de fuero por espacio de dos años, en circunstancias de que la rotación normal del mercado laboral para los trabajadores contratados a plazo indefinido es de diez meses, según información del seguro de cesantía.
La gran oportunidad de cambio laboral en este Gobierno radica en dar una mirada modernizadora a los elementos que impiden que la mujer pueda ingresar en mayor porcentaje al mercado del trabajo, removiendo estos costos directos y ocultos mediante la seguridad social, es decir, sacándolos de la esfera del empleador. Aparte de los efectos ya descritos, el hecho de que estos costos radiquen en el empleador significa una clara y fuerte discriminación hacia las mujeres que laboran en empresas de menores recursos, ya que éstas eluden el cumplimiento de las normas por ser imposibles de asumir económicamente. Esto implica que existen mujeres clase A, que laboran en empresas grandes, que cumplen con normas y beneficios legales, y mujeres clase B, que quedan sometidas a las precariedades de una empresa pequeña.
La pregunta de fondo, creo, debe ser: ¿cómo nuestra sociedad puede tolerar este estado de cosas? La respuesta, espero, debe ser el resultado de una mirada desapasionada y desideologizada de las políticas públicas, a fin de avanzar hacia una mayor dignidad de la mujer en el mundo del trabajo. La sociedad debe invertir en mayor justicia social, y el programa que hoy nos presenta la ministra del Trabajo apunta a ello, con una mirada modernizadora, en que la capacitación ocupa un eje central y la revisión de los factores de inserción de la mujer al mundo del trabajo parece ser una preocupación radical y definitiva. Eso se agradece.
Aprovecho esta oportunidad para felicitar la creación de la Comisión Mujer, Trabajo y Maternidad, porque creo sinceramente que, por fin, en ella se van a recoger las necesidades laborales de las mujeres tantas veces postergadas y les va a ofrecer verdaderas oportunidades laborales.
He dicho.
El señor BECKER ( Vicepresidente ).- Tiene la palabra el diputado señor Guillermo Teillier.
El señor TEILLIER.- Señor Presidente , se ha dicho que se debe generar más empleo en el país, estoy muy de acuerdo con ello. Sin embargo, tengo una gran duda respecto de las cifras dadas por la ministra, que ha hablado de crear un millón de nuevos empleos.
Según lo expresado, durante los últimos diez años se generaron 123 mil empleos, en promedio. Es decir, sobre este promedio se van a crear unos 75 mil puestos de trabajo. En total, se va a llegar a 385 mil nuevos empleos. Pero, como en Chile existen aproximadamente 700 mil cesantes, todavía estaríamos lejos de resolver el problema.
Es una gran cifra, pero me gustaría saber cómo se va a lograr, qué tipo de empleos se van a crear, qué salarios se pagarán y qué derechos van a tener esos trabajadores.
También estoy muy de acuerdo con crear las condiciones para que empresarios y trabajadores se puedan sentar a dialogar. Hemos sido testigos de conflictos que han durado meses, incluso, de la criminalización de ellos por las fuerzas represivas, en circunstancias de que los trabajadores sólo reclamaban el derecho de sentarse a dialogar con los dueños de las empresas que, por lo general, se ocultan detrás de una serie de empresas subcontratistas.
Por eso, es bueno que luchemos en conjunto por lograr un diálogo entre trabajadores y empresarios, pero siempre que sea en igualdad de condiciones. No puede ser que los empleadores se sienten a conversar con todos los derechos a su alcance y los trabajadores, prácticamente, sin ninguno, porque eso crea una asimetría y una debilidad muy grande en el mundo laboral.
También estamos por el desarrollo de los emprendedores y de las pymes, que son las que generan más empleos. Pero también queremos que estos empleos sean muy dignos y que la modernidad llegue realmente a todos los trabajadores, porque no puede ser que ésta se quede enredada sólo en las grandes y medianas empresas.
En el mundo desarrollado, sus trabajadores tienen muchos más derechos que los nuestros. Aspiramos a lograr los mismos derechos.
Por último, el hecho de que algunos se atrevieran a asistir a la celebración del 1 de Mayo de la CUT es un acto de valentía. Y a pesar de lo que ocurrió, espero que sigan haciéndolo, porque es bueno darse cuenta de cuál es el sentir real de los trabajadores.
Me gustaría que aquellos que nunca han participado en actos de la CUT, antes de criticar a los que fueron, se den una vueltecita a las manifestaciones que hacen los trabajadores.
Siempre he asistido y he sido bien recibido, otros colegas no lo fueron tanto, pero era preciso que pasaran ese trago amargo; qué bueno que lo hicieron y ojalá sigan al lado de los trabajadores.
He dicho.
El señor BECKER ( Vicepresidente ).- Tiene la palabra el diputado Ricardo Rincón.
El señor RINCÓN.- Señor Presidente , quiero reiterar algo que ya se ha dicho -siempre es bueno profundizar-, relativo a lo que constituyó un consenso en la campaña presidencial pasada: aumentar el período del posnatal a seis meses. Espero que la ministra refuerce esa medida, porque no es posible que se esté pensando en flexibilizar el prenatal o en compensar días haciendo un mix entre el pre y el posnatal.
Por su intermedio, señor Presidente , quiero decir a la ministra que debido a la legislación vigente los bebés prematuros son castigados, porque nacen antes de lo previsto, a veces por condiciones biológicas o de la naturaleza, y no tienen la culpa de que el embarazo no haya llegado a término. Repito, son castigados por la legislación que regula el pre y el posnatal, ya que por el solo hecho de haber nacido antes, a veces a los siete meses de gestación, automáticamente termina el prenatal y comienza el posnatal, que no compensa en modo alguno su condición de prematuro.
Es evidente que el posnatal debe ser de seis meses, como lo hemos planteado varios, partiendo por la diputada señora Carolina Goic . Todos los estudios indican ese lapso de tiempo como el período mínimo para una buena lactancia y la base para la crianza de un niño sano en nuestra sociedad, sin considerar los elementos del apego y la consolidación de la familia, que por cierto también redunda en ello.
En consecuencia, debe ser un tema analizado en profundidad, para que terminemos con la injusticia que afecta a todos por igual en nuestra sociedad, porque un bebé prematuro puede nacer en cualquier familia chilena.
No puedo dejar de reforzar lo dicho por el diputado Aldo Cornejo , en el sentido de que es imprescindible, necesario y de justicia que exista una conceptualización de la causal de fuerza mayor. Entendemos que el Gobierno comparte ese criterio, pero esperamos que esa conceptualización no sea para el próximo terremoto en Chile, en 25 años más, y que, por lo tanto, tenga el carácter de norma interpretativa, única forma de que, incorporada a la norma vigente, se aplique en beneficio de los trabajadores que han perdido su trabajo en estos meses, injustificadamente, como consecuencia del terremoto.
Si el Gobierno considera adecuada esa conceptualización, no puede ser que su aplicación se haga en 15, 20 ó 25 años más, cuando debería hacerse hoy; de lo contrario, al final va a ser simplemente legislación para el futuro y no para lo que la sociedad demanda hoy para resolver problemas provocados por el terremoto.
He dicho.
El señor BECKER ( Vicepresidente ).- Tiene la palabra la diputada Cristina Girardi.
La señora GIRARDI (doña Cristina).- Señor Presidente , sólo quiero plantear dos temas que me parecen importantes de aclarar.
Cuando la propuesta define el salario mínimo, cabe hacer presente que hay una distinción entre salario e ingreso ético, este último es el salario más subsidio.
El subsidio tiene como propósito paliar una carencia; el salario dice relación con la fuerza de trabajo, de la que el trabajador es dueño; no carece de ella. Por lo tanto, más que hablar de un ingreso ético deberíamos hablar de un salario ético, constituido por la fuerza del trabajador.
Un segundo punto sobre el que quiero llamar la atención son los programas de capacitación. Ojalá que no se conviertan en cursos referidos a distintas situaciones, sino a un proceso de formación continua, que tenga que ver con el desarrollo de las capacidades de los trabajadores; no como las actuales ofertas de capacitación que satisfacen más las necesidades de los OTEC y de los organismos que participan en las licitaciones.
Por otra parte, es necesario incentivar la educación técnica superior. Después de la educación media, muchos jóvenes quedan fuera de la formación técnica superior porque es privada pagada, por lo tanto, un gran número de ellos, de los más desposeídos, no logran ingresar a ella.
En relación con la reforma previsional, me parece que hay dos temas ausentes: la eliminación gradual del 7 por ciento que se les descuenta a los jubilados para salud, que fue un compromiso de campaña. Sería interesante que la dispusiera el proyecto, así como el subsidio o la pensión básica solidaria por invalidez no debe ser la misma que la pensión básica de vejez.
La gente con algún grado de invalidez muchas veces todavía está en edad de trabajar, tiene familia y otros requerimientos que no dicen relación con una jubilación, sino, fundamentalmente, con sobrevivir en edad joven para sostenerse a sí mismos y a sus familias.
Finalmente, hace tres semanas le hice una propuesta al ministro de Mideplan referida al Programa Chile Crece Contigo, aprobado por ley y que se supone tiene continuidad, de manera coherente con otros programas del Fosis, de apoyo a la microempresa, para que trabaje con mujeres, con microempresarias; que genere posibilidades de trabajo al licitar parte del programa Chile Crece Contigo entre microempresarias de nuestro país.
He dicho.
El señor BECKER (Vicepresidente).- Tiene la palabra el diputado Carlos Vilches.
El señor VILCHES.- Señor Presidente , quiero sumarme al deseo de que a la señora ministra del Trabajo le vaya muy bien y tenga mucho éxito, porque el mundo laboral es muy complejo y difícil.
Hoy hemos visto cómo el ex ministro del Trabajo , diputado Osvaldo Andrade , ha dado una clase de todo lo que dejó pendiente la Concertación durante sus veinte años de gobierno. Es una vergüenza, pero es así, y lo digo porque hay mucho por hacer en el mundo laboral.
Hay algo que le duele muchísimo a la Concertación: la flexibilización de las medidas y de las leyes laborales. Siempre hemos tenido problemas con eso.
Por eso ahora quiero hacerles un llamado e invitarlos a que cooperen con la legislación que debemos elaborar para corregir, modernizar y flexibilizar las leyes laborales.
La ministra ha entregado un diagnóstico de la cesantía de las mujeres y de los jóvenes, pero hay un mundo que todavía no está catastrado y es el que quiero representar en esta Corporación. Me refiero a la pequeña minería, uno de los sectores en que existe más trabajo informal. Los trabajadores carecen de previsión y de seguridad. Por eso, sería un gran avance lograr una forma de modernizar las leyes que faciliten la manera de contratarlos. Miles de trabajadores están en esas condiciones. Lo digo responsablemente, porque los conozco y sé lo que ha ocurrido.
Por eso, es necesario fortalecer las direcciones regionales del Trabajo, porque falta personal para la fiscalización del cumplimiento de las leyes laborales.
Quienes trabajamos para proteger a los trabajadores, advertimos esta falencia y carencia de personal, que heredó este Gobierno. Esperamos que sea corregida en el más breve plazo.
He dicho.
El señor BECKER (Vicepresidente).- Hago presente que no hay más diputados inscritos y que a la bancada de la UDI le quedan cuatro minutos.
Tiene la palabra la señora ministra.
La señora MERINO, doña Camila ( ministra del Trabajo y Previsión Social).- Señor Presidente , en primer lugar, agradezco a los señores diputados sus comentarios, sugerencias y buenos deseos.
Como Gobierno, debo decir que valoramos el diálogo, porque la manera de avanzar en el perfeccionamiento de las leyes es trabajando en conjunto.
Asimismo, nos preocupamos del manejo de las urgencias. Como lo dispuesto en algunos proyectos iba en directo beneficio de las personas afectadas por el terremoto, sus emergencias fueron calificadas de suma, pues necesitábamos que fueran despachados lo antes posible. Pero en los proyectos de largo plazo, la tramitación no tiene por qué ser del mismo modo. Valoramos la discusión conjunta, porque los enriquece y será mejor para los trabajadores.
Me parece muy positivo que compartamos el diagnóstico y los ejes de acción en estos cuatro años. Hoy, necesitamos crear más empleos, en especial para las mujeres y los jóvenes. La mejor manera de hacerlo es mediante la capacitación, con el resguardo de sus respectivos derechos.
Como lo expresaron varios diputados, hay muchas cosas por hacer. En esta breve presentación, tratamos de resumir los ejes más importantes, las medidas y las claves a aplicar sí o sí. Sin embargo, quedaron muchas afuera. Eso no significa que no las vayamos a utilizar. Estamos gustosos de recibir sus sugerencias para incorporarlas a este plan de Gobierno. Pero, como dijo el diputado Silva, debemos tener un buen foco de atención para lograr por lo menos lo esbozado acá.
Vamos a trabajar mucho para sacar más leyes, en lo que, sin duda, necesitaremos la colaboración del Congreso Nacional. Muchas cosas se pueden perfeccionar y recibiremos con agrado sus recomendaciones.
Tal vez algunos temas quedaron fuera. Me gustaría referirme, por ejemplo, al del sector público. El Ejecutivo quiere un buen Estado, moderno, lo que pasa por contar con gente muy motivada, cuyos derechos sean respetados. En ese aspecto, estamos muy atrasados y, gustosamente, dispuestos a abordar ese complejo problema, que no se ha solucionado en muchos años. Creemos que se debe conversar y buscar soluciones para responder a esos trabajadores.
El diputado Jaramillo comentó que las Oficinas Municipales de Intermediación Laboral estaban funcionando bien. A propósito de ello, tengo algunos informes del gobierno anterior. Es importante tomar en cuenta los diagnósticos de los gobiernos anteriores. En el caso de las OMIL, algunos diagnósticos plantean que no están funcionando bien. De hecho, hay recomendaciones para mejorarlas. Estoy en condiciones de anunciar que vamos a ocuparlas para perfeccionar el sistema.
Es clave que los trabajadores jóvenes, con menos calificación, puedan encontrar trabajo. A veces, no lo logran porque no saben cómo informarse o dónde recurrir. Eso se puede mejorar.
En cuanto al sistema de capacitación, en el gobierno anterior se hizo mucho acerca del diagnóstico. Hoy, existe consenso en que el sistema no funciona bien, pero se debe avanzar en la búsqueda de soluciones. No hay claridad en ese aspecto, pero mi objetivo en 2010 es tratar de construir la propuesta para mejorarla e implementarla durante los próximos años, porque ésta será una gran reforma de capacitación.
La diputada Cristina Girardi mencionó que la capacitación debe ser muy coordinada con la educación técnica. Ahí estamos un poco descoordinados; debemos permitir que ese trabajador saque un título. Si tuvo una mala educación, deberíamos resolver ese problema con una buena capacitación.
En cuanto al proyecto de ley que presentamos para repactar la deuda previsional, que se restringió a ciertas regiones, quiero decir que estamos dispuestos a estudiar la incorporación de las Regiones de Valparaíso y de La Araucanía.
El tema de los multirut es un objetivo a resolver. Vamos a ver cómo lo transformamos en una iniciativa concreta.
Seguiremos perfeccionando el trabajo de los tribunales laborales, con justicia, obviamente. Trataremos de convertir el programa de Defensoría Laboral en una institución.
En cuanto a la Dirección del Trabajo, la manera de mejorar sus funciones, junto con todas las medidas que mencionamos con anterioridad, es con más fiscalización y más gente en terreno. A eso, destinaremos a más funcionarios que están realizando labores más bien administrativas. En la Dirección del Trabajo laboran más de 2.200 personas. Estamos convencidos de que podemos poner más gente de cara al público para fiscalizar, mediar y conciliar.
Ésa es una reforma que estamos realizando en forma interna, basados en un diagnóstico efectuado por los mismos funcionarios, quienes afirman que pueden destinarse más personas a terreno.
En resumen, hay mucho por hacer. A lo mejor en esta presentación no respondimos todas las inquietudes. Pero estamos dispuestos a conversar con cada uno, a recibir sus sugerencias y a estudiar los proyectos que les interesen para integrarlos a este programa.
Nos gustaría trabajar en un diálogo franco, porque, al final, nos une el mismo sueño: ayudar a las personas más aproblemadas que
necesitan trabajo y, en lo posible, un buen trabajo.
Muchas gracias.
El señor BECKER ( Vicepresidente ).- Por haber cumplido con su objeto, se levanta la sesión.
-Se levantó la sesión a las 19.28 horas.
TOMÁS PALOMINOS BESOAÍN,
Jefe de la Redacción de Sesiones.
VIII. DOCUMENTOS DE LA CUENTA
1. Oficio del Senado.
“Valparaíso, 4 de mayo de 2010.
Tengo a honra comunicar a vuestra excelencia que el Senado, en sesión de esta fecha, ha accedido a la solicitud de la Comisión de Gobierno, Descentralización y Regionalización, en orden a disponer el archivo de los siguientes proyectos de ley:
1) El que traslada el Día del Huaso al 1° de septiembre (Boletín N° 4308-06).
2) El que establece el día de la comuna y del mundo rural (Boletín N° 4501-06).
3) El que prohíbe el uso de números para designar las regiones, permitiendo su nombre abreviado, sin derogar sus denominaciones legales (Boletín N° 4938-06).
La citada Comisión fundó su petición en lo dispuesto en el inciso tercero del artículo 36 bis del Reglamento del Senado.
En razón de lo anterior, la Corporación acordó solicitar previamente el acuerdo de esa Honorable Cámara, a fin de proceder al archivo de las referidas iniciativas.
Dios guarde a vuestra excelencia.
(Fdo.): JORGE PIZARRO SOTO, Presidente del Senado ; CARLOS HOFFMANN CONTRERAS, Secretario General del Senado ?.
2. Moción del Diputado señor Rivas.
Tipifica el delito de hostigamiento. (boletín N° 6925-07)
“El Código Penal do nuestro país, en su Libro Título VI, que tipifica los delitos cometidos por particulares contra el orden y la seguridad pública, considera como ilícito el proferir amenazas en contra de las personas o su propiedad
Sin embargo, la realidad práctica es mucho más compleja en lo referente a las relaciones humanas y, constantemente, vemos que existen personas que son, literalmente, hostigadas, molestadas o acosadas por otras, sin que nunca lleguen a ser propiamente amenazadas, Este hostigamiento, que muchas veces se inmiscuye en la esfera privada de la víctima, no sólo puede llevarse a cabo en la presencia física de ésta, sino que, con los adelantos tecnológicos de nuestra época, también a través de medios de comunicación, como aparatos de telefonía o Internet. En el ámbito de las relaciones de pareja esta situación suele darse reiteradamente y, la verdad leal dicha, quien bis realiza, consciente de que está causando una molestia a la víctima, no recibe una sanción penal. Incluso, en algunas ocasiones, se hostiga en público con la deliberada intención de perjudicar la honra del acosado.
En la actualidad y de acuerdo a nuestra normativa penal vigente, ante una situación como esta, la víctima nada puede hacer, a menos que quien lo molesta lo golpee o le profiera amenazas, casos en los cuales se configuran los delitos ya tipificados de lesiones o amenazas, respectivamente. Pero si ello no ocurre, la víctima se encuentra impotente, viéndose obligado a tener que soportar el acoso, sabiendo que no existe sanción a dicha conducta, por lo demás, del todo reprochable.
El espíritu de este proyecto es, de esa forma, llenar este vacío legal y dar castigo a quienes derechamente molestan a otras personas, importunándolas, de manera absolutamente ilegítima y no amparada por el derecho, muchas veces para hacerlas ceder en algo a lo que, en principio, me niegan y, en muchas otras, utilizando maliciosamente la presencia de terceras personas para menoscabar la honra y moral de la víctima.
Si bien es sólo una de las formas en las que esta conducta puede darse, es muy recurrente que personas hostiguen a sus parejas (o a quienes lo fueron) Estas situaciones pueden desembocar en un posterior delito de homicidio o lesiones, razón por la cual aparece como muy conveniente terminarlas de raíz, antes de que deriven en estos ilícitos, por la vía (le tipificar la conducta de acoso u hostigamiento como un delito en sí mismo.
Mención especial merece el caso que se produce cuando tina persona, siendo titular de alguna acción o recurso legal contra otra, causa Una evidente, clara e innegable molestia, por.la vía de acosar al sujeto pasivo con este pretexto. Si bien se reconoce que no existe amenaza en informar el ejercicio legítimo de un derecho, no es presentable que la puesta en conocimiento ole dicho derecho conlleve un hostigamiento indebido e imprudentemente.
Por tanto, considerando los fundamentos expuestos, se propone el siguiente
PROYECTO DE LEY:
Artículo 1°. Agréguese al Título VI del Libro II del Código Penal, un numeral 17, titulado Del hostigamiento a las personas.
Artículo 2°. Agréguese, a continuación del numeral indicado en el artículo precedente, el texto que sigue: “artículo 341 bis. El que hostigare a otro será sancionado con la pena de presidio menor en su grado mínimo.”
Artículo 3°. Agréguese, a continuación, un inciso 2° al artículo precedentemente indicado, el que rezará “Se entenderá por hostigamiento toda aquella acción ilegítima, ejecutada por cualquier medio o forma idónea para ello, que constituya un acoso o molestia para la víctima, ya sea que ésta se lleve a cabo de forma reiterada, en distintas oportunidades, o bien, durante un lapso prolongado, en una sola oportunidad. También incurrirá en este delito quien, al informar de su derecho a ejercer alguna acción o recurso legal que por una razón legítima pueda hacer valer contra la víctima, lo haga de una forma claramente imprudente, invasiva y pertinaz, de la que inequívocamente se desprenda que causa una molestia, ya sea que lo haga personalmente o por interpósita persona.”
Artículo 4°. Agréguese, a continuación, un inciso 3° al mismo artículo, el que rezará “Si el hostigamiento buscare obtener un determinado comportamiento de la víctima, en el cual ésta no consentiría de no mediar éste, se aplicará la pena de presidio menor en su grado medio. En igual pena incurrirá aquel que, con conocimiento de ello, hostigare a otro en una circunstancia o lugar tal que pudiere provocar deshonra o menoscabo moral a la víctima.”
3. Oficio del Tribunal Constitucional.
?Santiago, 20 de abril de 2010.
Oficio N° 4265
Remite sentencia
Excelentísima señora
Presidenta de la Cámara de Diputados:
Tengo el honor de remitir a V.E. copia autorizada de la sentencia de fecha 20 de abril de 2010, dictada por esta Magistratura en autos Rol N° 1.273-08-INA, sobre acción de inaplicabilidad por inconstitucionalidad.
Dios guarde a V.E.
(Fdo.): MARCELO VENEGAS PALACIOS, Presidente; MARTA DE LA FUENTE OLGUÍN, Secretaria
A LA EXCELENTÍSIMA SEÑORA
PRESIDENTA DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS
DOÑA ALEJANDRA SEPÚLVEDA ORBENES
HONORABLE CÁMARA DE DIPUTADOS
PRESENTE”.
4. Oficio del Tribunal Constitucional.
?Santiago, 20 de abril de 2010.
Oficio N° 4269
Remite sentencia
Excelentísima señora
Presidenta de la Cámara de Diputados:
Tengo el honor de remitir a V.E. copia autorizada de la sentencia de fecha 20 de abril de 2010, dictada por esta Magistratura en autos Rol N° 1.309-09-INA, sobre acción de inaplicabilidad por inconstitucionalidad.
Dios guarde a V.E.
(Fdo.): MARCELO VENEGAS PALACIOS, Presidente; MARTA DE LA FUENTE OLGUÍN, Secretaria
A LA EXCELENTÍSIMA SEÑORA
PRESIDENTA DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS
DOÑA ALEJANDRA SEPÚLVEDA ORBENES
HONORABLE CÁMARA DE DIPUTADOS
PRESENTE”.