Labor Parlamentaria
Diario de sesiones
- Alto contraste
Disponemos de documentos desde el año 1965 a la fecha
Índice
- DOCUMENTO
- PORTADA
- I. ASISTENCIA
- II. APERTURA DE LA SESIÓN
- III. TRAMITACIÓN DE ACTAS
- IV.
CUENTA
- DEBATE
- MOCIÓN INADMISIBLE
- Carlos Antonio Karim Bianchi Chelech
- MOCIÓN INADMISIBLE
- DEBATE
- V.
ORDEN DEL DÍA
-
MODERNIZACIÓN DE MINISTERIO DE DEFENSA NACIONAL
- ANTECEDENTE
- INTERVENCIÓN : Jorge Patricio Arancibia Reyes
- INTERVENCIÓN : Eduardo Frei Ruiz-tagle
- INTERVENCIÓN : Sergio Romero Pizarro
- INTERVENCIÓN : Jaime Gazmuri Mujica
- INTERVENCIÓN : Jose Antonio Gomez Urrutia
- INTERVENCIÓN : Hosain Sabag Castillo
- INTERVENCIÓN : Jorge Patricio Arancibia Reyes
- INTERVENCIÓN : Camilo Escalona Medina
- INTERVENCIÓN : Sergio Romero Pizarro
-
MODERNIZACIÓN DE MINISTERIO DE DEFENSA NACIONAL
- PETICIONES DE OFICIOS
- PETICIÓN DE OFICIO : Maria Soledad Alvear Valenzuela
- PETICIÓN DE OFICIO : Roberto Munoz Barra
- PETICIÓN DE OFICIO : Sergio Romero Pizarro
- PETICIÓN DE OFICIO : Sergio Romero Pizarro
- CIERRE DE LA SESIÓN
Notas aclaratorias
- Debido a que muchos de estos documentos han sido adquiridos desde un ejemplar en papel, procesados por digitalización y posterior reconocimiento óptico de caracteres (OCR), es que pueden presentar errores tipográficos menores que no dificultan la correcta comprensión de su contenido.
- Para priorizar la vizualización del contenido relevante, y dada su extensión, se ha omitido la sección "Indice" de los documentos.
REPÚBLICA DE CHILE
DIARIO DE SESIONES DEL SENADO
PUBLICACIÓN OFICIAL
LEGISLATURA 357ª
Sesión 62ª, en miércoles 4 de noviembre de 2009
Extraordinaria
(De 11:26 a 13:48)
PRESIDENCIA DEL SEÑOR JOVINO NOVOA VÁSQUEZ, PRESIDENTE
SECRETARIO, EL SEÑOR CARLOS HOFFMANN CONTRERAS, TITULAR
Í N D I C E
Versión Taquigráfica
Pág.
I. ASISTENCIA.....................................................................
II. APERTURA DE LA SESIÓN.............................................
III. TRAMITACIÓN DE ACTAS.............................................
IV. CUENTA............................................................................
V. ORDEN DEL DÍA:
Proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que moderniza el Ministerio de Defensa Nacional (3994-02) (queda pendiente su votación particular)¿
Sesión secreta..........................
Peticiones de oficios (se anuncia su envío)¿¿¿¿¿¿¿.
I. ASISTENCIA
Asistieron los señores:
--Alvear Valenzuela, Soledad
--Arancibia Reyes, Jorge
--Ávila Contreras, Nelson
--Bianchi Chelech, Carlos
--Cantero Ojeda, Carlos
--Coloma Correa, Juan Antonio
--Escalona Medina, Camilo
--Flores Labra, Fernando
--Frei Ruiz-Tagle, Eduardo
--Gazmuri Mujica, Jaime
--Girardi Lavín, Guido
--Gómez Urrutia, José Antonio
--Horvath Kiss, Antonio
--Kuschel Silva, Carlos
--Longueira Montes, Pablo
--Matthei Fornet, Evelyn
--Muñoz Aburto, Pedro
--Navarro Brain, Alejandro
--Novoa Vásquez, Jovino
--Ominami Pascual, Carlos
--Orpis Bouchón, Jaime
--Pérez Varela, Víctor
--Pizarro Soto, Jorge
--Romero Pizarro, Sergio
--Ruiz-Esquide Jara, Mariano
--Sabag Castillo, Hosaín
Concurrieron, además, los Ministros de Defensa , señor Francisco Vidal Salinas; Secretario General de la Presidencia , señor José Antonio Viera-Gallo Quesney, y de Justicia, señor Carlos Maldonado Curti; los Subsecretarios de Guerra, señor Gonzalo García Pino; de Aviación, señor Raúl Vergara Meneses, y de Investigaciones, señor Ricardo Navarrete Betanzo.
Actuó de Secretario el señor Carlos Hoffmann Contreras, y de Prosecretario, el señor José Luis Alliende Leiva.
II. APERTURA DE LA SESIÓN
--Se abrió la sesión a las 11:26, en presencia de 15 señores Senadores.
El señor NOVOA (Presidente).- En el nombre de Dios, se abre la sesión.
III. TRAMITACIÓN DE ACTAS
El señor NOVOA ( Presidente ).- Se dan por aprobadas las actas de las sesiones 59ª y 60ª, ambas ordinarias, en 27 y 28 de octubre del año en curso, respectivamente, que no han sido observadas.
IV. CUENTA
El señor NOVOA (Presidente).- Se va a dar cuenta de los asuntos que han llegado a Secretaría.
El señor ALLIENDE ( Prosecretario ).- Las siguientes son las comunicaciones recibidas:
Mensajes
Veintitrés de Su Excelencia la Presidenta de la República:
Con el primero retira y hace presente la urgencia, calificada de "discusión inmediata", respecto del proyecto, en segundo trámite constitucional, que modifica el Código Penal y el decreto ley N° 321, de 1925, para sancionar el femicidio, aumentar las penas aplicables a este delito y modificar las normas sobre parricidio (boletines números 4.937-18 y 5.308-18, refundidos).
Con el segundo y el tercero retira y hace presente la urgencia, calificada de "suma", acerca de las siguientes iniciativas:
1.- Proyecto, en segundo trámite constitucional, que modifica la ley N° 19.284, sobre establecimiento de normas para la plena integración social de personas con discapacidad (boletín N° 3.875-11).
2.- Proyecto de ley, en trámite de Comisión Mixta, que crea el Ministerio de Seguridad Pública y el Servicio Nacional para la Prevención del Consumo y Tráfico de Drogas (boletín N° 4.248-06).
Con los ocho siguientes retira y hace presente la urgencia, calificada de "simple", respecto de los siguientes asuntos:
1.- Proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que crea el Fondo de Innovación para la Competitividad (boletín Nº 3.588-08).
2.- Proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que moderniza el Ministerio de Defensa Nacional (boletín N° 3.994-02).
3.- Proyecto, en trámite de Comisión Mixta, que modifica la ley que establece un sistema de responsabilidad de los adolescentes por infracciones a la legislación penal (boletín N° 5.458-07).
4.- Proyecto, en segundo trámite constitucional, que enmienda el artículo 104 de la ley N° 18.834, cuyo texto refundido, coordinado y sistematizado se contiene en el decreto con fuerza de ley N° 29, de 2004, del Ministerio de Hacienda, para permitir que las personas que se enfermen durante sus vacaciones puedan hacer uso de licencias médicas (boletín N° 5.709-06).
5.- Proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que crea la comuna de Rahue, en la Región de Los Lagos (boletín N° 6.084-06).
6.- Proyecto, en segundo trámite constitucional, que modifica la ley N° 19.132, de Televisión Nacional de Chile (boletín N° 6.191-19).
7.- Proyecto, en segundo trámite constitucional, que enmienda la Ley General de Pesca y Acuicultura en materia de acuicultura (boletín N° 6.365-21).
8.- Proyecto de ley que crea la Superintendencia de Obras Públicas (boletín N° 6.366-09).
Con los doce últimos retira la urgencia que hizo presente para el despacho de las siguientes iniciativas:
1.- Proyecto, en segundo trámite constitucional, que modifica la ley Nº 18.290, de Tránsito, para crear el sistema de licencias de conducir con puntaje (boletín Nº 3.376-15).
2.- Proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que tipifica los delitos de tráfico ilícito de migrantes y trata de personas y establece normas para su prevención y más efectiva persecución criminal (boletín N° 3.778-18)
3.- Proyecto de ley que enmienda diversos cuerpos legales en materia de orden público (boletín Nº 4.832-07).
4.- Proyecto de ley, en trámite de Comisión Mixta, sobre comercio ilegal (boletín N° 5.069-03).
5.- Proyecto, en segundo trámite constitucional, que modifica la ley N° 20.066, de violencia intrafamiliar, y otros cuerpos legales para incluir el maltrato al adulto mayor en la legislación nacional (boletines números 5.376-18; 5.142-18; 5.055-18; 4.691-18 y 4.167-18, refundidos).
6.- Proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que sanciona el acoso sexual a menores, la pornografía infantil y la posesión de material pornográfico infantil (boletín N° 5.837-07).
7.- Proyecto que establece una nueva Ley Orgánica Constitucional de los Partidos Políticos (boletín N° 5.887-06).
8.- Proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, sobre modificación de diversos cuerpos legales con el objeto de modernizar el Ministerio de Relaciones Exteriores (boletín N° 6.106-10).
9.- Proyecto de reforma a la Carta Fundamental, en segundo trámite constitucional, que crea la Defensoría de las Personas (boletín N° 6.232-07).
10.- Proyecto que modifica el Código Orgánico de Tribunales y la ley N° 19.665 en las materias que indica (boletín N° 6.244-07).
11.- Proyecto, iniciado en moción del Senador señor Navarro, que modifica la ley N° 19.537, sobre Copropiedad Inmobiliaria, en lo referido a la tenencia de animales domésticos (boletín N° 6.265-14).
12.- Proyecto de ley, iniciado en moción de los Senadores señores Girardi, Kuschel, Ominami y Ruiz-Esquide, sobre responsabilidad por daños ocasionados por animales potencialmente peligrosos (boletín N° 6.499-11).
--Quedan retiradas las urgencias, se tienen presentes las nuevas calificaciones y se manda agregar los documentos a sus antecedentes.
Oficios
Cuatro de la Honorable Cámara de Diputados:
Con el primero comunica que prestó su aprobación al proyecto de acuerdo aprobatorio del "Acuerdo de Servicios Aéreos entre los Gobiernos de las Repúblicas de Chile y de la India, suscrito en Santiago el 21 de abril de 2008" (boletín N° 6.650-10).
--Pasa a la Comisión de Relaciones Exteriores.
Con el segundo y el tercero comunica que aprobó las enmiendas propuestas por el Senado, en el segundo trámite constitucional, a los siguientes asuntos:
1.- Proyecto de ley que establece que copia del contrato de trabajo podrá estar en el lugar de desempeño de las funciones u otro lugar fijado con anterioridad e informado previamente a la Inspección del Trabajo (boletín N° 6.155-13).
2.- Proyecto de ley que fija normas especiales para las empresas de menor tamaño (boletín N° 5.724-26).
--Se toma conocimiento y se manda archivar los documentos junto con sus antecedentes.
Con el cuarto comunica que rechazó la proposición de la Comisión Mixta constituida para resolver las divergencias suscitadas entre ambas Cámaras con ocasión de la tramitación del proyecto que modifica la ley N° 17.336, sobre propiedad intelectual (boletín N° 5.012-03).
--Queda para tabla.
Informes
Nuevo segundo informe de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento recaído en el proyecto, en segundo trámite constitucional, que modifica el Código Penal y el decreto ley N° 321, de 1925, para sancionar el femicidio, aumentar las penas aplicables a este delito y modificar las normas sobre parricidio (con urgencia calificada de "discusión inmediata") (boletines números 4.937-18 y 5.308-18, refundidos).
De la Comisión de Agricultura, recaído en el proyecto que impide la constitución de derechos de aprovechamiento de aguas, en virtud del artículo 4° transitorio de la ley N° 20.017, de 2005, en determinadas zonas o áreas (con urgencia calificada de "suma") (boletín N° 6.681-01).
--Quedan para tabla.
Declaración de inadmisibilidad Moción del Senador señor Bianchi --Se declara inadmisible por corresponder a una materia de la iniciativa exclusiva de Su Excelencia la Presidenta de la República , conforme a lo dispuesto en el número 6° del inciso cuarto del artículo 65 de la Constitución Política.
El señor NOVOA (Presidente).- Terminada la Cuenta.
El señor NOVOA ( Presidente ).- Antes de entrar al Orden del Día, debo informar a la Sala que se solicitó aplazamiento de la votación acerca del proyecto que moderniza el Ministerio de Defensa Nacional, ubicado en el primer lugar de la tabla de esta sesión.
Por lo tanto, en esta oportunidad nos abocaríamos a los cuatro artículos que hay que debatir.
Ahora, dado que se pidió aplazar la votación, sugiero que las normas que reglamentariamente hay que dar por aprobadas las veamos también en la próxima sesión en que se trate la iniciativa, porque podrían sufrir alguna modificación al emitirse pronunciamiento sobre las restantes.
Entonces, se haría la relación y quedaría pendiente hasta la próxima sesión en que se analice el proyecto todo lo que implique votación, incluidas las normas que deben darse por aprobadas reglamentariamente, pero agotando el debate hoy.
¿Le parece a la Sala?
--Así se acuerda.
El señor NOVOA ( Presidente ).- En segundo lugar, el señor Ministro de Defensa Nacional solicitó que el inicio de la discusión tenga carácter secreto, porque quiere entregar información que estima conveniente considerar antes de efectuar la votación.
Si les parece a Sus Señorías, después de la relación de la iniciativa constituiremos la Sala en sesión secreta para oír la exposición del señor Ministro .
--Así se acuerda.
V. ORDEN DEL DÍA
MODERNIZACIÓN DE MINISTERIO DE DEFENSA NACIONAL
El señor NOVOA ( Presidente ).-
Proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que moderniza el Ministerio de Defensa Nacional, con segundo informe y nuevo segundo informe de la Comisión de Defensa Nacional e informe de la Comisión de Hacienda y urgencia calificada de "simple".
--Los antecedentes sobre el proyecto (3994-02) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican:
Proyecto de ley:
En segundo trámite, sesión 47ª, en 2 de septiembre de 2008.
Informes de Comisión:
Defensa Nacional, sesión 11ª, en 15 de abril de 2009.
Defensa Nacional (segundo), sesión 47ª, en 9 de septiembre de 2009.
Hacienda, sesión 47ª, en 9 de septiembre de 2009.
Defensa Nacional (nuevo segundo), sesión 61ª, en 3 de noviembre de 2009.
Discusión:
Sesiones 12ª, en 28 de abril de 2009 (se aprueba en general); 50ª, en 15 de septiembre de 2009 (vuelve a Comisión por acuerdo de Comités).
El señor NOVOA (Presidente).-
Tiene la palabra el señor Secretario.
El señor HOFFMANN ( Secretario General ).-
Cabe recordar que este proyecto contaba con segundo informe de la Comisión de Defensa Nacional e informe de la Comisión de Hacienda, y que la Sala, en sesión de 15 de septiembre último, tras un acuerdo de Comités, acordó devolverlo a la de Defensa Nacional para un nuevo segundo informe.
Esos informes dejan testimonio, para los efectos reglamentarios, de que no fueron objeto de indicaciones ni de modificaciones los artículos 2°, 4°, 6°, 9°, 12 a 14, 17, 19, 22, 24, 27 a 32 y 37, y los artículos transitorios 1°, 4°, 5° y 7°. Todas estas disposiciones conservan el texto aprobado en general, por lo cual reglamentariamente corresponde darlas por aprobadas.
No obstante, conforme a lo expresado por el señor Presidente y al acuerdo adoptado al respecto por la Sala, esa aprobación automática operará en la próxima sesión en que se vuelva a tratar este asunto.
Los artículos 4°, 6°, 27 y 28 tienen carácter orgánico constitucional, por lo que para su aprobación se requieren los votos conformes de cuatro séptimos de los Senadores en ejercicio.
La Comisión de Defensa Nacional efectuó al texto despachado en general diversas enmiendas, las cuales fueron aprobadas por unanimidad, con excepción de cuatro, que el señor Presidente pondrá en votación oportunamente.
Por su parte, la Comisión de Hacienda introdujo una sola modificación al texto despachado por la de Defensa Nacional, la que fue acordada por consenso.
Cabe tener presente que, como establece el Reglamento, las enmiendas aprobadas por unanimidad deben ser votadas sin debate, salvo que algún señor Senador solicite discutirlas o que existan indicaciones renovadas.
Las enmiendas unánimes recaídas en los artículos 7°, 10, 16, 23 y 38 y en el artículo 3° transitorio son de rango orgánico constitucional, por lo que para su aprobación se necesitan los votos conformes de cuatro séptimos de los Senadores en ejercicio.
Asimismo, es menester señalar que los artículos 34 y 35 son de quórum calificado, por lo que para su aprobación se requieren los votos favorables de la mayoría absoluta de los Senadores en ejercicio.
El señor NOVOA (Presidente).- Terminada la relación.
Se va a constituir la Sala en sesión secreta.
SESIÓN SECRETA
--Se constituyó la Sala en sesión secreta a las 11:35, a solicitud del señor Ministro de Defensa Nacional.
--Se reanudó la sesión pública a las 12:34.
El señor NOVOA (Presidente).-
Corresponde tratar la primera norma que tuvo votación dividida y que es de carácter bastante general.
Creo que el debate de la primera enmienda al artículo 1° es la ocasión adecuada para que, tanto el Presidente de la Comisión , el Honorable señor Frei -quien ha pedido la palabra-, como los demás señores Senadores no solo analicen la norma de manera especial, sino para que expongan también cualquier planteamiento de tipo general.
Tiene la palabra el señor Secretario.
El señor HOFFMANN ( Secretario General ).-
Señores Senadores, en consideración a que, en virtud del acuerdo adoptado, las votaciones fueron postergadas, corresponde debatir la modificación que sustituye el inciso quinto del artículo 1°, y que expresa:
"En caso de crisis internacional que afecte la seguridad exterior del país, el Presidente de la República dispondrá la activación de los planes de la defensa nacional respectivos.".
La Comisión la aprobó con los votos de los Senadores señores Arancibia , Flores, Gazmuri y Prokurica y la abstención del Honorable señor Zaldívar .
El señor NOVOA (Presidente).-
En discusión.
Tiene la palabra el Honorable señor Arancibia.
El señor ARANCIBIA.-
Señor Presidente , en verdad, me encuentro en una situación compleja, pero la voy a enfrentar tomándome algunos espacios de libertad. Espero que los señores Senadores me den el respaldo necesario para ello.
Como manifesté en mi introducción al comienzo de la sesión, este proyecto es distinto del que dimos cuenta en la oportunidad anterior y recoge un poco la propuesta de la Cámara de Diputados en el primer trámite constitucional. Por lo tanto, de aprobarse aquí, probablemente tenga un trámite expedito en esa rama legislativa.
El punto central es el siguiente: a raíz de lo establecido en el artículo 1°, se vuelve, en principio, a designar autoridades militares superiores en caso de crisis o conflicto internacional y a determinar en qué momento deberán intervenir.
El cambio más importante contenido en la propuesta dice relación a la figura del Jefe del Estado Mayor Conjunto.
Antes de entrar en el detalle de la disposición, quiero expresar algo que inició el señor Ministro de Defensa en su intervención secreta, en cuanto a que hoy día el desarrollo de las Fuerzas Armadas en Chile es realmente importante. Y tal hecho hay que reconocerlo y aplaudirlo.
Este requerimiento adicional, este potenciamiento, este gasto, esta inversión efectuada para el desarrollo de fuerzas obedece a tres elementos fundamentales. El señor Ministro resaltó dos. Y uno de ellos es el de la conducción conjunta.
No cabe duda de que la conducción conjunta -y creo que nadie en esta Sala podría discutir que se trata de un elemento fundamental en cualquier concepción de empleo estratégico de fuerzas- debe ser el eje central sobre el cual se articule cualquier maniobra. Por lo tanto, la iniciativa, al avanzar en esa dirección, está dando la respuesta adecuada que hacía falta.
El señor Ministro se refirió al gasto operacional. Ciertamente, todos somos conscientes de que en el análisis del Presupuesto de la Defensa no hay una cobertura de los déficits que registra cada institución, los cuales, como él expresó, se cubren eventualmente mediante un traspaso de fondos de la Ley Reservada del Cobre.
Pero hay un asunto de máxima importancia y que hasta el momento ha estado resuelto: el de la conducción superior de la Defensa Nacional.
En el proyecto en debate, esa responsabilidad, esencialmente política, la va a asumir, apoyando la gestión del Ministro del ramo, el Subsecretario de las Fuerzas Armadas.
Eso es muy trascendente, porque hasta ahora -lo digo con un conocimiento de causa del cual los señores Senadores podrían no estar enterados- esto era un juego militar; una concepción que, desde las hipótesis de conflicto hasta la forma en que el país debería enfrentarlo, con una planificación primaria -cómo operarían en tal caso los Ministerios del Interior, de Relaciones Exteriores , de Defensa, de Economía y de Hacienda- estaba determinada bajo criterios y en un mundo militar, y aprobada, como se señaló acá, en 2001 por el Gobierno de la época.
Al respecto, voy a hacer una referencia que no puedo soslayar.
El planteamiento de cambiar la Hipótesis Vecinal Máxima (HV3) por ser insostenible, y pasar a una HV1 con una maniobra diplomática para evitar el conflicto, se inició cuando el Senador que habla se desempeñaba como Jefe del Estado Mayor de la Defensa Nacional y el actual Senador señor Frei era el Presidente de la República , quien fue aprobando las distintas etapas.
Pero vuelvo al tema central.
Este era un juego militar que se planteaba, firmaba y aceptaba. Y eso fue lo que orientó -y tiene toda la razón el señor Ministro -, a partir de ese instante, todo el esfuerzo desarrollado hasta la fecha en cuanto a adquisiciones militares, reestructuración de las fuerzas y modernización de ellas, para poder cumplir con el plan específico aprobado en aquella época. Es decir, las compras no se han hecho a tontas y a locas, de acuerdo a la inspiración momentánea de un genio creativo, sino que obedecen a una planificación específica, efectuada con mentalidad y procedimientos militares.
El proyecto en análisis contiene una gran modificación en ese sentido: crea la Subsecretaría para las Fuerzas Armadas, a la que le corresponderá fijar las políticas castrenses, las políticas de defensa nacional y la planificación primaria, conforme a esa apreciación global político-estratégica que planteé hace un rato.
O sea, estamos tratando de producir en el país, en este nivel de conducción superior de la Defensa Nacional, una adecuada integración entre el mundo político y el militar para llegar a una solución adecuada a los requerimientos necesarios cuando Chile se vea enfrentado a un conflicto en el futuro.
A mi juicio, este es uno de los cambios importantes. Se ha dejado un poco de lado, como que resultase muy claro lo relativo al Subsecretario para las Fuerzas Armadas, y hemos centrado gran parte del debate en la figura del Jefe del Estado Mayor Conjunto .
Esa figura incorporada en la modificación pertinente del artículo 1° -más adelante la examinaremos en detalle- constituye una pieza clave.
Si lo conjunto es relevante, quien ejerza esa conducción no puede tener un rol secundario. Es preciso empoderarlo -como se dice acá- para que ejerza en plenitud la responsabilidad que se le asigna.
Eso es lo que buscaba el proyecto. Y lo hizo en dos etapas. En la primera presentación que hicimos acá, lo quisimos llevar a una expresión extrema, diciendo que era tan importante el cargo que, para otorgarle realmente más preeminencia, la elección del Jefe del Estado Mayor Conjunto debía nacer de los propios Comandantes en Jefe, vale decir, de las máximas autoridades uniformadas.
No se contó con los respaldos políticos necesarios y, como Sus Señorías bien saben, el proyecto se devolvió a la Comisión para que analizáramos el punto e hiciéramos una propuesta que tuviera mejor suerte que la anterior. Y la que estamos presentando ahora es la siguiente: que ese oficial sea elegido de entre los que ostentan tres estrellas: Vicealmirantes, Generales de División y Generales de Aviación.
La idea es que se elija a una persona de selección; que se le asigne esa responsabilidad de primer nivel y, junto con ello, que se le dé el empoderamiento, la investidura, los galones y las estrellas, que en el mundo militar tienen sentido. Y créanme señores Senadores que así es.
Si no le fijáramos tales atributos, tendrá que ejercer una conducción con limitaciones, frente a los objetivos dispuestos en la iniciativa.
Podría argumentar largamente al respecto. Pero creo que estoy en condiciones de pedir a los miembros de esta Corporación que hagan fe en alguien que vivió estas situaciones y que, con un grado subalterno, tuvo que lidiar para llevar adelante las propuestas hechas durante el Gobierno del actual Senador señor Frei a fin de llegar con algo concreto y específico ante autoridades que eran superiores en jerarquía a la figura del Jefe del Estado Mayor Conjunto y que se mantenían muy férreamente alrededor de la Hipótesis Vecinal 3.
Tuvimos, entonces, que hacer un verdadero trabajo, una construcción. Y a lo mejor algunos me podrán decir: "¿Ve que era posible?". ¡Sí, claro que lo era! Pero la verdad es que la dificultad de plantearlo y de llevarlo adelante me lleva a recomendar que la persona que defienda esa visión, esa estructura, esa doctrina conjunta, debe estar al menos al mismo nivel, sentado inter pares, en el ejercicio de la definición de esa solución estratégica, que todos esperamos que sea la correcta.
El proyecto considera aquello.
Se habla a veces de la complejidad que reviste el poner a este cuarto jefe de una Fuerza Armada en una mesa de cuatro, que le va a dar preeminencia a esa Fuerza respecto de las otras.
Deseo ser enfático en dos temas. Porque estoy tratando de despejar materias que probablemente saldrán al tapete en una discusión futura.
Quiero decir que es más potente tener a un Jefe de Estado Mayor Conjunto primus inter pares que tener a ese Jefe de Estado Mayor subordinado a su respectivo Comandante en Jefe y a la posibilidad de que el día de mañana él sea designado primera autoridad de su institución, a propósito de un debate o una discusión que pueda suscitar diferencias entre ambos.
Así como nosotros, inter pares, evidenciamos diferencias que pueden ser violentas y expresarse en una forma bastante potente, en una mesa militar se produce el mismo efecto. Sin embargo, si uno de los cuatro queda subordinado a cualquiera de los otros tres, esa potencia se va a ver disminuida. Y eso lo considero absolutamente inconveniente. Por eso he defendido esta postura.
Sea su origen desde la Junta de Comandantes en Jefe o desde la base de los Generales de tres estrellas, el Jefe del Estado Mayor Conjunto debe tener una cuarta estrella y dedicarse exclusiva, fuerte y potentemente a la conducción conjunta de todas las Fuerzas Armadas, al revés de los Comandantes en Jefe, cuyo foco de atención, durante las 24 horas del día, está en la conducción de su respectiva institución, ocupándose de problemas administrativos, judiciales, de motivación, de inspección, de armado de la estructura, etcétera. Son tan grandes los problemas de conducción de una fuerza que difícilmente le permitirían a una de esas autoridades mantener un tercio de su cerebro dedicado a la conducción conjunta de las Fuerzas Armadas.
En consecuencia, nos encontraríamos en un conflicto si designáramos a uno de los Comandantes en Jefe, a última hora, para hacerse cargo del Estado Mayor Conjunto; le estaríamos asignando una responsabilidad que ciertamente sería capaz de enfrentar, pero no en las condiciones de aquel que lleva uno, dos o tres años planificando, observando, ejercitando.
Entonces, señores Senadores, si lo conjunto es una necesidad fundamental de cara a la conducción de la estrategia militar de hoy y de siempre, yo les pido que frente a esta materia no existan dos opiniones distintas -respetables, por cierto, si se producen-, por cuanto quien ejerció las potestades y encabezó las actividades en cuestión les encomienda encarecidamente que observen con particular atención el proyecto que nos ocupa, dado que viene a resolver esencialmente ese tema.
He dicho.
El señor NOVOA (Presidente).-
Tiene la palabra el Honorable señor Frei.
El señor FREI (don Eduardo).-
Señor Presidente , es un privilegio para todos nosotros tener la oportunidad de concurrir a legislar sobre la reforma más importante de que haya sido objeto el Ministerio de Defensa desde sus inicios.
Por primera vez tendremos un Ministerio de Defensa Nacional organizado de manera integral, en base a criterios modernos ampliamente consensuados, con claras estructuras de mando, responsabilidades, mecanismos de control y transparencia, regulación de la integración civil-militar y un Estado Mayor Conjunto a la altura de las necesidades de la defensa de Chile en un mundo globalizado, altamente tecnológico y complejo.
A mi juicio, nuestro país, a la altura de su desarrollo, se merece y necesita un Ministerio así.
Chile se ha modernizado e integrado al mundo a niveles nunca vistos y difíciles de percibir para muchos. Las esferas de interés del país llegan bastante más allá de nuestros límites terrestres, marítimos y aéreos. Necesitamos paz, democracia y progreso en América Latina y en el mundo entero.
Los barcos que llevan nuestros minerales, nuestra fruta, nuestro vino, nuestra celulosa y cientos de otros productos -por no decir miles- a todos los rincones de la Tierra deben navegar por mares seguros y llegar a puertos y mercados donde el respeto a las leyes, a las costumbres y a la palabra permitan establecer relaciones de largo plazo en el interés mutuo de chilenos y extranjeros.
En los últimos años hemos optado por ser un actor en un mundo global, manteniendo relaciones y vínculos con países con los que nos unen diversos intereses económicos, políticos y culturales en todo el orbe. Ello trae consigo múltiples responsabilidades, entre otras, contribuir, en razón de nuestras posibilidades, al mantenimiento de la paz, no solo dentro de nuestras fronteras, sino donde las circunstancias lo ameriten.
La participación de nuestras Fuerzas Armadas en operaciones de paz viene de muchos años, pero con su presencia en Haití por primera vez adquirió dimensiones y complejidades altas y desafiantes.
Lógicamente, hay que felicitar a nuestras Fuerzas Armadas por el trabajo que allí han realizado. No tengo duda de que esta experiencia será clave para futuras operaciones de paz que necesariamente vendrán para el país.
Por eso, el ejemplo de la fuerza de paz combinada con Argentina, denominada "Cruz del Sur", experiencia pionera en Latinoamérica, resulta de vital importancia y no obsta -a propósito de la consulta que hizo el Senador señor Romero - a que nuestros vecinos realicen actividades con otros países, como también podemos hacerlas nosotros. Es decir, no se trata de una actividad única y exclusiva.
Este proyecto es un paso más en el proceso de modernización de nuestra Defensa, iniciado hace más de quince años, cuando el Ministro Pérez Yoma lideraba la Cartera del ramo. Publicamos el primer Libro de la Defensa e hicimos muchas otras cosas.
Hoy todos, dentro y fuera de Chile, reconocen como un gran logro la política de defensa y de relaciones cívico-militares conducida por los Gobiernos de la Concertación, en gran armonía con nuestras propias Fuerzas Armadas y lógicamente también con la participación de la Oposición.
Pero eso, que ahora se ve claro y obvio, antes no lo era para ninguno de los actores involucrados. Los temores y desconfianzas en este ámbito eran enormes al retorno de la democracia. Hoy podemos sentirnos orgullosos, todos, de haber construido tanta armonía, una visión de futuro compartida y la solución a complejos asuntos.
No es casualidad que las Fuerzas Armadas aparezcan sistemáticamente entre las instituciones más apreciadas por la ciudadanía. Ellas se han ganado esa confianza en el proceso de cambio, reconciliación y profesionalización, donde cada sector ha puesto su colaboración para hacer de nuestras instituciones una causa de orgullo y garantía de nuestra seguridad.
La modernización de la Defensa es un tema complejo. Incluye la reforma y dignificación del servicio militar, que hoy cumplen, en forma ciento por ciento voluntaria, jóvenes que ven allí una gran oportunidad de aprender, servir y formarse. Como dijo denantes el señor Ministro , muchos de ellos ven ahí la posibilidad de completar su cuarto medio.
También se ha iniciado la modernización de la carrera militar con la Ley de Tropa Profesional. Se han abierto las instituciones militares a las prácticas de diversos cultos religiosos. Se ha actualizado la formación y entrenamiento por ramas, conjunto y combinado, a nivel nacional e internacional.
No es casualidad que un destacado Presidente latinoamericano haya señalado que las Fuerzas Armadas chilenas son las más profesionales del subcontinente. Es el fruto de un largo y sistemático trabajo.
Esta modernización también ha requerido una actualización del material de guerra. Ello era indispensable, porque nuestros sistemas de armas se encontraban obsoletos, eran caros de mantener y hasta peligrosos de operar.
Chile no está ni estará en una carrera armamentista. No la queremos ni la necesitamos. Chile se ha ganado una altura político-estratégica internacional sobre la base de nuestra democracia, del respeto al Derecho Internacional, del apoyo al multilateralismo y de la confianza en los medios jurídicos y diplomáticos para resolver los conflictos, lo que nos permite encarar el futuro con tranquilidad.
Nuestra vocación de paz interna, vecinal e internacional es a toda prueba. No vivimos hoy amarrados a temores, inseguridades o rencores, sino confiados en que el Derecho, la fraternidad, los intereses económicos, sociales y culturales compartidos y la racionalidad de nuestros líderes y de nuestros vecinos nos llevarán a encontrar los caminos de un futuro de armonía e incluso de integración profunda con Argentina, Bolivia y Perú , así como con el resto de los países latinoamericanos y del mundo entero.
Mucho se ha logrado, pero mucho también falta por hacer.
Por ejemplo, falta modernizar a fondo la justicia militar; seguir profesionalizando la carrera militar; corregir errores e injusticias en los sistemas previsionales (nos encontramos constantemente con la demanda de diversos sectores que plantean la posibilidad de incluirlos en la ley de protección o en la reforma previsional, y sabemos que eso es imposible); establecer un sistema de financiamiento de las inversiones en defensa transparente, democrático y técnicamente controlado y con visión de largo plazo, que permita derogar la Ley del Cobre, la cual produce severas distorsiones que terminarán por dañar más que ayudar a la Defensa y a las propias Fuerzas Armadas.
El proyecto que estamos prontos a aprobar constituye un paso importante, en un largo camino con el que estoy personalmente comprometido. La presente iniciativa es mucho más que estructuras y funciones: es una visión para el siglo XXI de lo conjunto, de la transparencia y la eficiencia, de nuestra responsabilidad internacional y de protección de nuestros derechos y soberanía; es el instrumento para planificar un futuro de paz y seguridad para todos los chilenos.
He dicho.
El señor NOVOA (Presidente).-
Tiene la palabra el Senador señor Romero.
El señor ROMERO.-
Señor Presidente , no cabe la menor duda de que nos encontramos frente a un proyecto extraordinariamente trascendente e importante. Y no es el primero que atañe a Defensa que posee esas características.
Hace algunos años el Senado tomó la iniciativa para crear un cuerpo legal destinado a dar organicidad a las misiones de paz. Ello, obviamente, ha implicado un reconocimiento no solo interno, pues en muchos países miran esta expresión del Senado -naturalmente, en conjunto con el Ministerio de Defensa y la Cámara de Diputados- como un ejemplo de la forma en que la modernización de las situaciones que se van planteando debe tener un respaldo legal y una orgánica propia. Eso es incuestionable.
El segundo proyecto relacionado con Defensa es el que hoy analizamos. Este, sin duda, ha implicado un compromiso de parte del Senado y de su Comisión de Defensa.
A mí me correspondió, en la primera parte de su tramitación, ser Presidente de dicho órgano técnico. Y abordamos la iniciativa como política de Estado, porque sentimos que las políticas internacionales y las de Defensa involucran a todos los sectores. Se deben enfrentar con una mirada de país para entender exactamente de qué se está hablando.
Desde esa perspectiva, siempre me pareció fundamental escuchar a todos los sectores. Y ese fue un trabajo dedicado, que luego fue desarrollado, naturalmente, por la Comisión de Defensa.
Incluso, los propios Diputados que no habían quedado realmente satisfechos con lo que ocurrió en el primer trámite participaron de manera muy activa en esta segunda instancia constitucional, que es la que hoy está realizando el Senado.
Desde luego, hubo avances significativos, señalados no solo por el Ministro , sino también por el actual Presidente de la Comisión de Defensa . Y me alegro de verdad de que esto haya sido un esfuerzo compartido, porque no cabe la menor duda de que se trata de un esfuerzo país.
En su oportunidad, manifesté que la presente iniciativa -lo expuse en la Comisión- implicaba una transformación profunda de la Defensa, lo que ameritaba no solo un detallado análisis de las materias comprendidas, sino también poder entender que, a estas alturas del actual mandato presidencial, la implementación de tales modificaciones debía ser llevada a cabo por el próximo Gobierno, cualquiera que este fuera. El Ejecutivo acogió dicho planteamiento, y estableció, en el artículo 6º transitorio -en aquel entonces solo se hablaba de la parte referida al Ministerio de Defensa propiamente tal-, que aquella tenía que ser iniciada por la Administración que se instalará en marzo del año que viene.
Agradezco, desde luego, dicho compromiso, en orden a que esa sea una decisión que adopten quienes la soberanía popular establezca como sus mandatarios en las próximas semanas.
Me parece que en esta materia hay dos aspectos.
En primer lugar, pienso que la nueva estructura que se le ha dado al Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y a su Jefatura está comprendida dentro de mi planteamiento en cuanto a que sea ejecutada e implementada por el próximo Gobierno. Considero razonable que así sea, para que de cualquier lectura que se haga -lo dije en la Comisión- no aparezca como que las cosas quedan amarradas. Y usé el término "amarradas" porque en el pasado hubo críticas respecto de los amarres que pudieron haberse efectuado en alguna etapa pretérita de la vida cívica de nuestro país.
Sin embargo, también manifesté en algún momento del debate que había una cuestión constitucional que debía ser resuelta. Creo que es el momento de plantearlo, por cuanto no cabe la menor duda de que nosotros tenemos que hacer las cosas bien y evitar que el día de mañana alguien sostenga que nos apartamos de alguna preceptiva constitucional o institucional.
Análisis de destacados centros de estudio de nuestro país no solo se han referido a la relevancia de los avances -son muchos y aquí ya se han señalado-, sino que también han hecho presente que el nombramiento del Jefe del Estado Mayor Conjunto, dadas sus atribuciones -no su estructura-, requeriría una reforma a la Carta.
El Jefe del Estado Mayor Conjunto poseerá importantes atribuciones operativas sobre las Fuerzas Armadas. Los artículos 1º, inciso séptimo, y 26 le otorgan completo poder sobre las tropas y medios en operaciones militares y será el responsable de ellas en caso de crisis internacional o de guerra. Además, como ocurre en la actualidad, tendrá bajo su mando las tropas que participen en operaciones de paz y las agregadurías militares.
Lo que señalan dichos centros de estudios -y debemos prestarles atención- es que desde el punto de vista constitucional lo más complejo es el rango que se le otorga al Jefe del Estado Mayor . Y aquí el Presidente de la Comisión de Defensa hizo observaciones al respecto.
El artículo 26 del proyecto viene creando, en el hecho, casi un "cuarto Comandante en Jefe" -eso es lo que dicen los centros de estudios-, que no se halla establecido en ninguna de las normas constitucionales a que hice referencia, y que sería designado y removido casi -¡casi!- en los mismos términos previstos para los Comandantes en Jefe de las Fuerzas Armadas.
Así las cosas, de la Constitución se puede concluir que el Presidente de la República tiene amplias atribuciones para "disponer" de las fuerzas militares y para "organizarlas y distribuirlas" -esto lo digo entre comillas, a objeto de destacar el contenido del número 17º del artículo 32 de la Carta, que se refiere a las atribuciones del Primer Mandatario-, tanto en caso de paz como de guerra -la norma constitucional no distingue-, según la apreciación que él mismo tenga de las necesidades de la seguridad nacional.
Refuerza la idea de que el poder presidencial es total en esta materia la circunstancia de que la Constitución agrega a continuación, en el número 18º -como si el numeral precedente no fuera suficiente-, que en caso de guerra el Presidente de la República asume -comillas- "la jefatura suprema de las Fuerzas Armadas".
No se halla establecido en ninguna parte que el Primer Mandatario deba delegar en un jefe militar específico la conducción de las operaciones. Si eso se considera una solución adecuada al problema, lo apropiado sería que esa figura quedara contemplada en la Carta Fundamental, modificando las atribuciones que allí se otorgan al Presidente de la República .
Finalmente -estoy refiriéndome a los análisis de los centros de estudio a que hice alusión-, se señala que en relación con el mando de tropas, el Jefe del Estado Mayor Conjunto, en el ámbito de la activación de la planificación secundaria (crisis o guerra), tiene el problema de que el paso desde un sistema de paz a otro de crisis implica costos de ajuste que el proyecto no ha considerado o se han asumido como no demasiados importantes. Dichos costos, sin embargo, pueden ser muy significativos y derivan finalmente de la necesidad de reconfigurar el sistema de defensa para un funcionamiento que hasta ese momento existía más en la teoría que en la práctica.
La necesidad de adecuarse a una cultura organizacional distinta, en instantes en que la coordinación, fruto del entrenamiento y experiencias previos, es esencial, implicaría una tensión enorme sobre el sistema de defensa, justo en el momento en que debe estar en el nivel más alto de sus capacidades, como lo hemos escuchado aquí.
Hay, por lo tanto, un problema de eficiencia en la forma en que el proyecto resolvería las funciones del cargo en cuestión.
Señalo lo anterior, señor Presidente , porque me parece que, estando de acuerdo completamente en la necesidad y la oportunidad de que se vaya hacia una modernización, esta debe ser considerada en todos los aspectos institucionales y constitucionales a que haya lugar. Y, en este sentido, obviamente, tenemos la mejor disposición para poder enfrentarla.
Por lo demás, existe un proyecto que hoy día está en alguna Comisión -tengo entendido que en la de Constitución-, que hace referencia al tema de los Comandantes en Jefe, y en el que perfectamente se podría realizar la adecuación, con el objeto de evitar una dilación en el tiempo. Quizás, a través de una indicación sustitutiva, sería posible efectuar el correspondiente ajuste, y así, entonces, tener la oportunidad de hacer las cosas bien.
A mí me parece que esta es una materia delicada, que tiene como único espíritu llevar a cabo una reforma completa, orgánica y que se ajuste por entero a las inquietudes institucionales y constitucionales que a veces surgen de manera sorpresiva y sorprendente en este mundo tan especial en que vivimos.
Por ello, hago este planteamiento en un sentido absolutamente constructivo, porque considero que debemos estar muy atentos. Y el Tribunal Constitucional en su oportunidad tendrá, por cierto, que resolver este punto.
Entonces, estimo fundamental que nosotros escuchemos las explicaciones que al respecto nos puedan dar quienes hoy día representan al Ejecutivo.
He dicho.
El señor NOVOA (Presidente).-
Tiene la palabra el Honorable señor Gazmuri.
El señor GAZMURI.-
Señor Presidente, se ha abundado en la importancia que reviste este proyecto de ley. Y no voy a ahondar en ello.
Sin duda, desde el punto de vista de la Defensa Nacional, esta es la modificación más sustantiva que se realiza en los últimos cincuenta o sesenta años.
Se ha efectuado un trabajo bastante acucioso tanto en las Comisiones del Senado como de la Cámara de Diputados. Y hemos llegado a un acuerdo casi completo respecto de una modificación central que se hace al Ministerio de Defensa Nacional. En la práctica, sobre este asunto yo tomo lo manifestado por el Senador señor Arancibia en lo referente a esa enmienda, que es muy sustantiva y que quizás en este debate no se le ha dado la importancia que merece, dado que la discusión se ha centrado en uno de los elementos: el Estado Mayor Conjunto.
Pero yo quisiera señalar que vamos a tener, finalmente, un Ministerio de Defensa Nacional en forma. Y esto implica una modificación muy de fondo. Creo que nunca lo tuvimos en la historia, sino que hemos contado con una institucionalidad que ha funcionado en ciertos momentos, con la cual incluso el país dirigió y libró varias guerras victoriosas en el siglo XIX. No obstante, desde la perspectiva institucional, sin duda, siempre hemos tenido un Ministerio muy débil. Y eso, en un Estado moderno, no es razonable.
Así que yo me felicito de haber contribuido a que llegáramos a un acuerdo muy sustantivo en la materia, en el que se incluye un elemento que señalaba el Senador señor Romero y que nos pareció razonable a todos, cual es que la implementación de esta reforma tan de fondo del Ministerio de Defensa ocurra durante el próximo Gobierno y no al término de una Administración. Por eso, ese compromiso específico quedó consignado en el articulado transitorio.
Por consiguiente, no abundaré sobre ello porque, además, creo que el proyecto de ley es suficientemente claro y explícito. Son pocas las normativas que se pueden leer directamente y de las que uno queda enterado por completo. Como no se refiere a otras leyes, me parece que su texto es muy nítido.
La iniciativa define la estructura, las funciones de cada uno de los niveles, del Ministro, de los dos Subsecretarios, de la Junta de Comandantes, en fin. A mi juicio, se establece una definición muy precisa de una estructura que es muy superior a la que hoy existe.
El debate -yo no diría de fondo, porque esto también lo es- más complejo, más complicado, fue el relacionado con el Estado Mayor Conjunto, sus funciones y la designación de su Jefe.
En tal sentido, se llevó a cabo una reforma sustantiva, donde el elemento conjunto -ya se dijo en la sesión secreta- es el que se precisa desarrollar, por cuanto está insuficientemente desarrollado en nuestro esquema de conducción militar. En la tradición internacional, en el Derecho y la experiencia comparados hay muy distintos modelos para resolver esta materia, que es común a todas las fuerzas armadas modernas.
Debo manifestar que, desde el punto de vista personal, me incliné al inicio de la discusión por que el cargo de Jefe del Estado Mayor tuviera la conducción de las fuerzas en tiempos de paz y en tiempos de guerra. Este esquema funciona en muchos países del mundo, y me parecía que resolvía de mejor manera lo vinculado con el reforzamiento del elemento conjunto.
En ese momento se dio un argumento que era atendible, cual es que una fórmula de ese tipo, de una u otra manera, contradecía la cultura y la tradición militar chilena. La idea de que hubiera un comandante que mandara todas las fuerzas, siendo un esquema teóricamente posible, resultaba contradictorio con nuestra larga tradición.
Ese argumento, finalmente, me hizo fuerza. Si hubiera habido acuerdo mayoritario al respecto, yo habría estado por una conducción conjunta en tiempos de paz y en tiempos de guerra. Porque entiendo también que en las Fuerzas Armadas las tradiciones, las culturas, son elementos que se deben respetar, que hay que tomar en consideración. A veces es preciso efectuar transformaciones en esa cultura. Pero me pareció que había que buscar una solución que tuviera en cuenta esta peculiaridad especial.
De allí surgieron dos elementos conceptuales.
El primero: el Jefe del Estado Mayor Conjunto asume la conducción de las fuerzas solo en tiempos de crisis y de guerra; eso queda en el texto. Asimismo, era preciso determinar cómo se designaba y qué características tenía esta figura, que, sin duda, es muy importante.
Llegamos en la Comisión a un primer acuerdo, bastante mayoritario, en cuanto a que asumiera la Jefatura del Estado Mayor Conjunto un Comandante en Jefe en ejercicio, quien sería reemplazado, obviamente, al momento de su nuevo nombramiento. Nos pareció la mejor fórmula para reforzar precisamente lo que la iniciativa quiere fortalecer: el mando conjunto.
Por tanto, se trata de alguien que, por su grado y experiencia, pueda desempeñar, con la restricción de que ejerce el mando efectivo de las fuerzas solo en tiempos de crisis y de guerra, y cuando sean destinadas a operaciones de paz.
Pero al final esa fórmula produjo diversas resistencias. A mi juicio, era la óptima.
Quienes la habíamos estado impulsando y votando nos dimos cuenta de que eventualmente no contaríamos con mayoría para una proposición de ese tipo en la Sala del Senado.
Y el realismo indica que, al no tener mayoría, hay que tratar de encontrar una alternativa que cuente con el voto mayoritario y que sea satisfactoria.
Eso es lo que ha expuesto el Presidente de la Comisión . La fórmula propuesta para su aprobación en este trámite consiste en lo que ha explicado el Senador -y ex almirante- señor Arancibia : el Jefe del Estado Mayor Conjunto será designado por el Presidente de la República de entre los Oficiales Generales de tres estrellas, el que al momento de asumir será ascendido al grado de General de Ejército , Almirante o General del Aire.
En mi opinión, con ello se garantiza mínimamente que el Jefe del Estado Mayor Conjunto pueda desempeñar sus funciones.
Yo no veo razón alguna, de acuerdo con la objeción surgida, para mantener al Jefe del Estado Mayor Conjunto con tales atribuciones y con un grado inferior al de los Comandantes en Jefe. Eso sería volver prácticamente a lo que existe hoy, o peor aún, porque ese oficial con menor grado que los Comandantes en Jefe tendría una cantidad de atribuciones, otorgadas por la ley en proyecto, muy superiores a las del actual Jefe del Estado Mayor . Por consiguiente, podría haber una dificultad permanente para que ese Jefe del Estado Mayor cumpliera las funciones que la normativa le entrega y que nadie ha objetado.
Creo que sería completamente coherente decir que dicho Jefe sea un Oficial General de 3 estrellas, pero entonces revisemos cuáles son las atribuciones del Estado Mayor Conjunto.
Entregarle la preparación estratégica, la doctrina, en fin, el conjunto de facultades con que contará este nuevo Estado Mayor a un oficial que no tenga el mismo grado que los Comandantes en Jefe sería crear un problema.
Entonces, si vamos a designar a un general de 3 estrellas, revisemos todo el concepto.
Por eso, invito a la Sala del Senado a aprobar la propuesta que viene planteada de manera unánime, porque la discutimos muy, muy largamente y estudiamos las distintas alternativas. En todos nosotros imperó el ánimo de dar un paso trascendente hacia delante en la modernización del Ministerio de Defensa, en reforzar el elemento conjunto, en generar la institucionalidad que permitiera ese fortalecimiento del Estado Mayor Conjunto -que será distinto del actual, por sus atribuciones- y en darle a ese Jefe las condiciones mínimas para que cumpla las tareas que le encargará la ley.
Como digo, desde mi punto de vista, no es la fórmula óptima -es la tercera mejor-, pero la que se está proponiendo aquí: discutir lo relacionado con el grado, sería como enviar -ya que el ex almirante hizo la relación- un "torpedo" muy fuerte a un elemento central del proyecto. O sea, no estamos discutiendo un asunto de detalles al debatir sobre el problema del grado; estamos discutiendo si le vamos a entregar al Jefe del Estado Mayor Conjunto las condiciones para que cumpla lo que la propia ley en proyecto le encarga.
Así que, en ese sentido, invito a que aprobemos la fórmula propuesta por el Presidente de la Comisión de Defensa.
El señor HOFFMANN (Secretario General).-
En este momento han llegado a la Mesa tres mensajes de Su Excelencia la Presidenta de la República mediante los cuales retira y hace presente la urgencia, calificada de "suma", respecto de las siguientes iniciativas:
1) Proyecto, en segundo trámite constitucional, que modifica el Código Penal y el decreto ley Nº 321, de 1925, para sancionar el femicidio, aumentar las penas aplicables a este delito y modificar las normas sobre parricidio (boletines números 4.937-18 y 5.308-18, refundidos).
2) Proyecto de ley que crea el Instituto Nacional de Derechos Humanos (boletín Nº 3.878-17).
3) Proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, sobre información, orientación y prestaciones en materia de regulación de la fertilidad (boletín Nº 6.582-11).
--Quedan retiradas las urgencias, se tienen presentes las nuevas calificaciones y se manda agregar los documentos a sus antecedentes.
El señor NOVOA ( Presidente ).-
Señores Senadores, el día de ayer ingresó el proyecto de ley que crea el Tribunal Ambiental (boletín Nº 6.747-12).
El trámite que se le dio fue enviarlo a la Comisión de Medio Ambiente y Bienes Nacionales.
Ahora, como se trata de la creación de un tribunal, procede también remitirlo a la Comisión de Constitución.
Mi sugerencia al respecto es que pase a las Comisiones de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento y de Medio Ambiente y Bienes Nacionales, unidas, y a la de Hacienda, en su caso.
--Así se acuerda.
El señor NOVOA (Presidente).-
Tiene la palabra el Senador señor Gómez.
El señor GÓMEZ.-
Señor Presidente , hago la salvedad de que no participé en la discusión del proyecto en la Comisión de Defensa. Sin embargo, después de leerlo, debo decir que los integrantes de dicho órgano técnico han hecho un trabajo en profundidad.
Solo quiero formular una observación.
Aunque entiendo que la iniciativa está muy centrada en la operatividad y desarrollo del Estado Mayor Conjunto que se va crear y en una serie de otras disposiciones, echo de menos en ella un aspecto que me parece esencial y respecto del cual probablemente no se llegó a acuerdo y, por lo tanto, no se discutió, o tal vez el Ejecutivo no lo planteó.
Hay un elemento en la formación de las Fuerzas Armadas que resulta indispensable. En mi opinión, debiera estar también considerada aquí la posibilidad de que el Ministerio de Defensa tenga participación.
Todos sabemos que en el país hubo un tiempo en que vivimos épocas difíciles; que las Fuerzas Armadas se salieron del cauce institucional y dieron un golpe de Estado; que se cometieron violaciones a los derechos humanos en extremo graves.
Por lo tanto, al recordar algo tan doloroso como los hechos descritos, resulta esencial que, en un proyecto que entrega el ejercicio de funciones tan importantes al Ministro y a la Cartera del ramo, que exista también una participación real, clara, buena y precisa del Ministerio de Defensa en el desarrollo de valores democráticos y de una actividad por la vía de la docencia para la formación de los miembros de las Fuerzas Armadas.
Obviamente, hoy las Instituciones Armadas son muy distintas de las que mencioné con anterioridad. Y todos lo reconocemos. Han experimentado cambios importantes, formalizados por los distintos Comandantes en Jefe. Pero, sin perjuicio de eso, es necesario discutir -no sé si en este proyecto o en otro- acerca de lo que significa la formación de las personas que las integran.
Veo que solo en el artículo 17 se habla de esta materia al establecerse que "La Academia Nacional de Estudios Políticos y Estratégicos dependerá del Ministerio de Defensa Nacional, a través de la Subsecretaría de Defensa.".
Señor Presidente , por supuesto, voy a apoyar el proyecto, pues avanza en la línea señalada por quienes son más expertos en esta Sala con relación a la estructura de un Ministerio de Defensa. Empero, considero indispensable que en algún minuto se puedan discutir todos los programas que implican formación e instalación de los valores democráticos que deben existir en las Instituciones Castrenses.
Por lo menos en esta iniciativa, que tal vez no tiene esa finalidad, ello no se manifiesta claramente.
Solo he querido hacer ese punto, señor Presidente . Y reitero que votaré a favor.
El señor NOVOA (Presidente).-
Tiene la palabra el Honorable señor Sabag.
El señor SABAG.-
Señor Presidente, desde luego, felicito a los integrantes de la Comisión de Defensa, pues realizaron un trabajo muy serio y profesional, y han concitado acuerdos.
Estuve revisando los informes, y creo que 95 a 98 por ciento de los artículos fueron aprobados por unanimidad, salvo uno, donde hubo cuatro votos a favor y uno en contra. De modo que existió un gran consenso.
Es muy sensible lo relativo a nuestras Fuerzas Armadas, las cuales se rigen por la misma normativa desde hace 67 años, en circunstancias de que en todo el mundo se han registrado enormes avances en lo concerniente a la modernización de las instituciones de aquella índole en su parte directiva. Nosotros teníamos una situación muy anacrónica en tal aspecto. Pero es evidente que con la ley en proyecto se modernizará a nuestros Institutos Castrenses, dándoseles la relevancia que merecen.
Señor Presidente , sé que en las Fuerzas Armadas -el Senador señor Arancibia podría ilustrarme un poco, dada su proveniencia de una de sus ramas-, donde las jerarquías siempre son muy respetadas, ya la primera antigüedad recibe un grado por sobre el contingente que egresa junto con ella.
Pues bien, en este proyecto, entiendo, los tres Comandantes en Jefe integran el Estado Mayor Conjunto. Pero sucede que el Jefe de este organismo será nombrado de entre un General de División, un Vicealmirante y un General de Aviación. Por lo tanto, su rango estará bajo el de los Comandantes en Jefe. Yo pregunto, entonces: ¿no se producirá algún tipo de celo? Porque es evidente que, en cuanto a grado, dicho Jefe tendrá menor categoría que estos últimos.
Desconozco la sensibilidad existente al respecto. Y por eso me interesa conocer la opinión del Senador señor Arancibia .
A mí se me ha explicado cómo va a funcionar el Estado Mayor Conjunto, y también lo he leído en el proyecto.
En todo caso, lo propuesto me parece adecuado. Creo que por esa vía nos modernizaremos, aparte que se contempla una actuación de nuestras Fuerzas Armadas en épocas de conflicto y de paz.
Tenemos un gran reconocimiento por nuestras Instituciones Castrenses. En ellas descansan la defensa de la patria y la seguridad nacional. Por lo tanto, siempre deben ser muy eficientes, apreciadas y profesionales.
Con su venia, señor Presidente , le concedo una interrupción al Honorable señor Arancibia.
El señor NOVOA (Presidente).-
Tiene la palabra Su Señoría.
El señor ARANCIBIA.-
Señor Presidente , en la estructura superior, los Comandantes en Jefe, quienes representan la cabeza de sus Instituciones, se relacionan entre sí en un orden jerárquico institucional que no obedece a la antigüedad en la respectiva rama. De hecho, el Comandante en Jefe de la Armada es menos antiguo, pues egresó de la Escuela Naval después que los otros Comandantes en Jefe desde sus respectivas escuelas matrices. Pero la forma de relacionarse entre ellos es la de inter pares. Y la Armada constituye la segunda jerarquía, por la fecha de su creación.
En este caso, el Estado Mayor Conjunto tendría la cuarta antigüedad jerárquica natural en esa relación inter pares.
Por ejemplo -y Sus Señorías pueden consultarlo-, la relación entre el Almirante González y el General Izurieta, quien está por terminar su período y debe de ser unos cuatro años más antiguo, es inter pares.
Se trata de una aclaración importante.
Por otro lado, señor Presidente , quiero hacerme cargo en forma muy rápida de lo que manifestó el Senador señor Gómez .
Según la letra b) del artículo 3° del proyecto, al Ministerio le corresponderá "Estudiar, proponer y evaluar las políticas y normas aplicables a los órganos que integran el sector defensa y velar por su cumplimiento.".
En ese ámbito cabe todo lo que Su Señoría expresó, y un poco más.
Muchas gracias por la interrupción.
El señor NOVOA (Presidente).-
Tiene la palabra el Honorable señor Escalona.
El señor ESCALONA.-
Señor Presidente , esta iniciativa y su aprobación representan un proceso que ha venido viviendo nuestro país, que abarca, naturalmente, al Ministerio de Defensa Nacional y a las Fuerzas Armadas, pero que va mucho más allá de la materia en sí misma.
Creo que, en rigor, expresa una etapa de normalización institucional en Chile -tenemos el privilegio de haberla vivido-, ya que no es dato propio de la existencia de las naciones el que cuenten con un largo período de desarrollo y normalidad de las instituciones que posibilite llevar adelante la modernización del Ministerio de Defensa Nacional.
Me alegro en primer lugar por esa Cartera, porque no cabe duda de que actualmente tiene una organización enteramente anacrónica. Y lo expreso con el debido respeto a sus autoridades aquí presentes, quienes además son muy apreciados amigos nuestros. Empero, esta estructura, con un Ministro y cinco Subsecretarios, uno por cada rama de las Fuerzas Armadas, más Carabineros e Investigaciones, está enteramente obsoleta.
Dicho con absoluta crudeza, el tener dependencias civiles simplemente para evacuar los trámites administrativos de las Fuerzas Armadas y de Carabineros e Investigaciones no corresponde a lo que debe ser la organización de un Ministerio de Defensa moderno.
Así que, por sí solo, el avance en este punto ya es esencial.
Y luego viene el esfuerzo a que se han referido acá representantes de los diferentes partidos y bancadas con relación al trabajo de las distintas ramas y al hecho de que si no hay una labor conjunta no es posible enfrentar los desafíos del mundo moderno.
Lo anterior significa claramente que el Jefe del Estado Mayor Conjunto, en los términos que plantea el proyecto, viene a resolver una necesidad que se había hecho evidente en el curso de las últimas décadas.
Se ha señalado acá que nuestra tradición como país es exclusivamente la existencia de las jerarquías expresadas en los Comandantes en Jefe.
Yo deseo agregar, ya que nos acercamos al Bicentenario, que aquella no es la única tradición de Chile. Y lo comento como dato histórico, no por preciosismo, sino porque no siempre existió este tipo de organización.
De hecho, la etapa portaliana de nuestra nación es muestra de un tipo de organización enteramente distinto. La autoridad civil era tan fuerte que incluso las estructuras militares dependían en forma directa de los diferentes intendentes.
Entonces, en nuestra tradición existen también otras experiencias.
Así, los dos conflictos bélicos que vivimos en el siglo XIX se dieron con una organización distinta de la actual. Además, fueron eventos históricos que nuestro país logró resolver exitosamente -como es de conocimiento público- y donde la figura de un Jefe del Estado Mayor Conjunto que asumía la conducción de todas las fuerzas demostró ser plenamente eficaz desde el punto de vista de los objetivos estratégicos nacionales que en ese momento se propuso Chile.
Entonces, hay un aval que confirma que lo que estamos a punto de aprobar ahora tiene raíces en nuestra propia historia nacional.
Por consiguiente, lo significativo es que aquí se corrobora que el tiempo -no es tan largo- que nos separa desde la época de un alejamiento entre la civilidad democrática y las Fuerzas Armadas se supera en función de una definición común.
Creo que el hecho de que tanto el grueso de las fuerzas con representación parlamentaria -puede haber excepciones; siempre son legítimas, y forman parte de la diversidad del país- como el liderazgo expresado en las actuales jefaturas institucionales de las Fuerzas Armadas coincidan en el proyecto de ley que moderniza el Ministerio de Defensa Nacional es, a decir verdad, un buen augurio de que Chile entra al bicentenario en muy buen pie.
He dicho.
El señor NOVOA ( Presidente ).-
No hay más Senadores inscritos.
Ha pedido la palabra el Ministro señor Vidal.
El señor VIDAL ( Ministro de Defensa Nacional ).-
Señor Presidente , el Honorable señor Romero hizo algunas observaciones de carácter constitucional que nos gustaría despejar de inmediato a través del Subsecretario de Guerra . Son interpretables, pero deseamos que no quede la otra interpretación posible.
El señor NOVOA (Presidente).-
Con la venia de la Sala, tiene la palabra el señor Subsecretario.
El señor GARCÍA ( Subsecretario de Guerra ).-
Señor Presidente , en el marco de la tramitación de este proyecto de ley hubo dos compromisos a raíz de las sugerencias señaladas aquí por el Senador señor Romero .
El primero, relativo a la estructuración del Ministerio. Y eso está en el artículo 6º transitorio, definido como un mandato que va a acontecer más allá del 30 de marzo -existe una norma explícita-, puesto que toda la implementación de aquel -tanto las plantas de las Subsecretarías de Defensa Nacional como la del Estado Mayor Conjunto- va a ser definida con posterioridad.
Entonces, eso está cumplido.
Ahora, las observaciones constitucionales -en el hecho, no son del Honorable señor Romero sino de un instituto del que Su Señoría hizo mención- constituyen una posibilidad interpretativa que la Comisión resolvió agregando a la iniciativa un artículo 37, nuevo.
Eso es lo primero que hay que precisar, en el sentido de que tales observaciones obedecen al momento en que el proyecto ingresó a segundo trámite constitucional.
Entonces, se trata de observaciones desfasadas.
Pero, entendiendo que no fuesen desfasadas, lo cierto es que se alojan en una interpretación extraordinariamente literalista de la Constitución.
Y voy a poner un ejemplo.
La interpretación literalista de la Carta Fundamental es que el Presidente de la República asume la jefatura suprema de la nación en caso de guerra.
¿Qué significa eso?
En el siglo XIX significaba que él realmente ejercía la jefatura suprema, con toda una estructuración, donde había una dimensión del gabinete que se trasladaba ante una situación de guerra y el país quedaba bajo otras circunstancias.
Pues bien, hoy, siglo XXI, no es factible esa interpretación. Sin embargo, por lo mismo, la conducción política superior en caso de guerra queda absolutamente en manos del Presidente de la República .
Y lo que hace este proyecto de ley es distinguir tres niveles: el administrativo, de la organización del Ministerio; el estratégico, de la determinación militar y del uso de la fuerza, y el político.
El nivel político, según esta iniciativa, no significa deteriorar las facultades del Primer Mandatario , sino fortalecerlas. Porque lo que hace este proyecto es pasar de la conducción estratégica colectiva -como hoy existe- a una conducción estratégica individual, con responsabilidades clarísimas.
¿Por qué digo aquello? Porque si uno interpreta la Constitución como ha de hacerlo -en un marco amplio y finalista-, también debería cuestionar la facultad presidencial de disponer de las fuerzas de aire, mar y tierra, organizarlas y distribuirlas.
¿Cómo se organiza hoy día esa atribución? A través de una serie de facultades que la Ley Orgánica Constitucional de las Fuerzas Armadas les confiere a los Comandantes en Jefe para hacer proposiciones.
¿Dónde está aquella facultad? La mandató dicha Ley Orgánica Constitucional. Porque -y con esto cierro- las atribuciones del Primer Mandatario son especiales, no exclusivas. Esta no es una facultad que no pueda ejecutarla en coordinación con otras autoridades, sino al revés.
El proyecto potencia la capacidad política. Y todas las normas del artículo 1º le otorgan al Presidente de la República una enorme responsabilidad: para que active planes y para que nombre al Jefe del Estado Mayor Conjunto . Y, ante circunstancias críticas -esperamos que nunca acontezcan-, le dan capacidad para utilizar la dimensión estratégica de la fuerza.
Esa es, pues, la facultad constitucional.
Por último, si hubiera dudas -para el Ministerio de Defensa y para el Gobierno nunca han existido-, este proyecto de ley (y en particular el artículo mencionado) se halla sometido al control preventivo y obligatorio del Tribunal Constitucional.
Se trata, entonces, de cuestiones que se verán en ese momento. O sea, es indudable que desde el inicio ellas van a ser resueltas en esa dimensión. Y tenemos la impresión, por la amplia tradición de jurisprudencia interpretativa constitucional, de que la tesis literalista no va a tener acogida en el citado Tribunal.
El señor NOVOA (Presidente).-
Tiene la palabra el Senador señor Romero.
El señor ROMERO.-
Señor Presidente , no voy a entrar en una controversia constitucional. Solo deseo puntualizar dos cosas.
En primer lugar, yo nunca he dicho que no comparta -lo señaló el señor Subsecretario - la tesis de los centros de estudios públicos a que me referí. Y son varios los centros que piensan en términos literalistas, como manifestó el señor García .
En segundo término, estoy de acuerdo en que afortunadamente existe en este país un Tribunal Constitucional.
Ahora, cuando el referido órgano deba resolver esta situación, tendrá que hacerlo a la luz del debate que aquí se ha producido. Y yo tampoco he descartado -porque todavía no hemos votado- la posibilidad de hacer reserva de constitucionalidad sobre el punto. Y no quisiera que el señor Subsecretario me abrumara con argumentos, para poder efectuar el día martes, a lo mejor, reserva en tal sentido.
Simplemente, lo que estoy destacando es que se deben hacer las cosas bien.
Por cierto, respeto la opinión del señor Subsecretario . Y estoy seguro de que él también respeta el parecer de otras personas sobre la materia.
He dicho.
El señor NOVOA ( Presidente ).-
En todo caso, quiero aclarar que la norma que vamos a votar la próxima semana -porque fue objeto de votación dividida- no necesariamente se refiere al punto planteado por el Senador señor Romero . Él se halla contenido en otros incisos del artículo 1º, que, de acuerdo con la interpretación hecha aquí, no son de quórum especial.
Por lo tanto, si existe alguna reserva de constitucionalidad, deberá formularse en su momento, cuando pongamos en votación todas las modificaciones que fueron aprobadas por unanimidad.
Ha concluido el debate sobre una enmienda al artículo 1º que fue aprobada por mayoría.
Se ha solicitado aplazamiento de la votación. Por lo tanto, queda cerrado el debate y el pronunciamiento respecto de esta norma se verificará en la próxima sesión.
Tiene la palabra el señor Secretario.
El señor HOFFMANN ( Secretario General ).-
La Comisión de Defensa Nacional recomienda un artículo 11 del siguiente tenor:
"La Junta de Comandantes en Jefe será convocada por el Ministro de Defensa Nacional , quien la presidirá y estará integrada por el Comandante en Jefe del Ejército, de la Armada, de la Fuerza Aérea y por el Jefe del Estado Mayor Conjunto. El subjefe del Estado Mayor Conjunto actuará como secretario de la misma.".
La disposición se aprobó con los votos a favor de los Honorables señores Arancibia , Flores, Gazmuri y Prokurica , y el pronunciamiento en contra del Senador señor Zaldívar .
El señor NOVOA (Presidente).-
En discusión.
Ofrezco la palabra.
Ofrezco la palabra.
El señor ROMERO.-
Si se va a votar la próxima semana, señor Presidente , ¿por qué no dejamos pendiente también el tratamiento del punto? Porque, si no, nos vamos a encontrar con una situación...
El señor NOVOA (Presidente).-
El acuerdo era discutir el proyecto hoy.
El señor ROMERO.-
Pero la Sala puede resolver, ya que es un solo artículo,...
El señor NOVOA ( Presidente ).-
Quedan dos disposiciones más.
El señor ROMERO.- En todo caso, son pocas, señor Presidente. De lo contrario, vamos a votar algo sin entender bien el contenido.
Además, hay muy pocos Senadores en la Sala.
El señor NOVOA ( Presidente ).-
Son tres los artículos que fueron objeto de un pronunciamiento dividido. El último de ellos es, precisamente, el más complejo. No tengo inconveniente en que sean discutidos y votados en la próxima sesión, sobre todo porque el rechazo fue del Honorable señor Zaldívar, quien no se encuentra presente.
Si le parece a la Sala, se procederá de esa forma.
--Así se acuerda.
PETICIONES DE OFICIOS
El señor HOFFMANN (Secretario General).- Han llegado a la Mesa diversas peticiones de oficios.
El señor NOVOA (Presidente).- Se les dará curso en la forma reglamentaria.
--Los oficios cuyo envío se anuncia son los siguientes:
De la señora ALVEAR:
Al señor Ministro de Obras Públicas, a la señora Ministra de Bienes Nacionales y a la señora Ministra Presidenta de la Comisión Nacional del Medio Ambiente, para que se informe sobre EFECTOS DE EXTENSIÓN DE COSTANERA NORTE EN COMUNA DE LO BARNECHEA.
Del señor MUÑOZ BARRA:
Al señor Contralor General de la República, para pedir INVESTIGACIÓN DE INTERVENCIÓN POLÍTICA DE SECRETARIO REGIONAL MINISTERIAL DE OBRAS PÚBLICAS DE LA ARAUCANÍA.
Del señor ROMERO:
A la señora Ministra de Vivienda y Urbanismo y al Jefe del Servicio de Vivienda y Urbanización de la Región de Valparaíso, a fin de solicitar información sobre VIVIENDAS PENDIENTES PARA COMITÉ HABITACIONAL "VILLA LAS GOLONDRINAS", PUTAENDO,
y al Jefe de la Quinta Zona de Carabineros y al Prefecto de Carabineros de Aconcagua, respecto de ENFRENTAMIENTO DE DELINCUENCIA EN CURIMÓN.
El señor NOVOA (Presidente).- Se levanta la sesión
--Se levantó a las 13:48
Manuel Ocaña Vergara
Jefe de la Redacción