Labor Parlamentaria
Diario de sesiones
- Alto contraste
Disponemos de documentos desde el año 1965 a la fecha
Índice
- DOCUMENTO
- PORTADA
- OTROS DOCUMENTOS DE LA CUENTA
- DEBATE
- RETIRO PATROCINIO DE PROYECTO
- Francisco Chahuan Chahuan
- RETIRO PATROCINIO DE PROYECTO
- DEBATE
- LICENCIA MÉDICA
- Maria Isabel Allende Bussi
- LICENCIA MÉDICA
- DEBATE
- I. ASISTENCIA
- ASISTENCIA A SESIÓN DE SALA
- Carlos Ignacio Kuschel Silva
- Pedro Hector Munoz Aburto
- ASISTENCIA A SESIÓN DE SALA
- II. APERTURA DE LA SESIÓN
- III. ACTAS
- IV. CUENTA
- V. OBJETO DE LA SESIÓN
- ANÁLISIS DE LA GRAVE CRISIS QUE AFECTA A LA AGRICULTURA. Proyectos de acuerdo.
- ANTECEDENTE
- INTERVENCIÓN : Jose Perez Arriagada
- INTERVENCIÓN : Javier Hernandez Hernandez
- INTERVENCIÓN : Pablo Galilea Carrillo
- INTERVENCIÓN : Marco Antonio Nunez Lozano
- INTERVENCIÓN : Mario Venegas Cardenas
- INTERVENCIÓN : Carlos Recondo Lavanderos
- INTERVENCIÓN : Rene Manuel Garcia Garcia
- INTERVENCIÓN : Ramon Farias Ponce
- INTERVENCIÓN : Fidel Edgardo Espinoza Sandoval
- INTERVENCIÓN : Fernando Meza Moncada
- INTERVENCIÓN : Jorge Eduardo Sabag Villalobos
- INTERVENCIÓN : Eugenio Tuma Zedan
- INTERVENCIÓN : Jose Ramon Barros Montero
- INTERVENCIÓN : Rosauro Martinez Labbe
- INTERVENCIÓN : Jaime Quintana Leal
- INTERVENCIÓN : Alejandra Sepulveda Orbenes
- INTERVENCIÓN : Enrique Jaramillo Becker
- INTERVENCIÓN : Sergio Ojeda Uribe
- INTERVENCIÓN : Pedro Pablo Alvarez Salamanca Buchi
- ANTECEDENTE
- PRESENTACIÓN PROYECTO DE ACUERDO
- Pablo Galilea Carrillo
- Claudio Alvarado Andrade
- Jose Perez Arriagada
- Sergio Ojeda Uribe
- Alejandra Sepulveda Orbenes
- Roberto Delmastro Naso
- Jose Ramon Barros Montero
- Alejandro Miguel Sule Fernandez
- Mario Bertolino Rendic
- Enrique Jaramillo Becker
- Carlos Recondo Lavanderos
- Eugenio Tuma Zedan
- Fernando Meza Moncada
- PRESENTACIÓN PROYECTO DE ACUERDO
- DEBATE
- ANTECEDENTE
- ANTECEDENTE
- PRESENTACIÓN PROYECTO DE ACUERDO
- Rosauro Martinez Labbe
- Jose Perez Arriagada
- Pablo Galilea Carrillo
- Alejandro Miguel Sule Fernandez
- Javier Hernandez Hernandez
- Ramon Farias Ponce
- Enrique Estay Penaloza
- Alejandra Sepulveda Orbenes
- Marco Antonio Enriquez-ominami Gumucio
- Mario Bertolino Rendic
- Carlos Recondo Lavanderos
- Eugenio Tuma Zedan
- Fernando Meza Moncada
- PRESENTACIÓN PROYECTO DE ACUERDO
- DEBATE
- ANTECEDENTE
- ANTECEDENTE
- PRESENTACIÓN PROYECTO DE ACUERDO
- Jose Ramon Barros Montero
- Pedro Pablo Alvarez Salamanca Buchi
- Javier Hernandez Hernandez
- Carlos Recondo Lavanderos
- Alejandra Sepulveda Orbenes
- Gaston Von Muhlenbrock Zamora
- German Verdugo Soto
- Rosauro Martinez Labbe
- Juan Masferrer Pellizzari
- Enrique Estay Penaloza
- Eugenio Tuma Zedan
- Fernando Meza Moncada
- Sergio Correa De La Cerda
- Mario Bertolino Rendic
- PRESENTACIÓN PROYECTO DE ACUERDO
- DEBATE
- ANTECEDENTE
- ANTECEDENTE
- PRESENTACIÓN PROYECTO DE ACUERDO
- Jose Perez Arriagada
- Jaime Quintana Leal
- Enrique Accorsi Opazo
- Fernando Meza Moncada
- Alejandra Sepulveda Orbenes
- Jose Ramon Barros Montero
- Pablo Galilea Carrillo
- Alejandro Miguel Sule Fernandez
- Sergio Ojeda Uribe
- Rosauro Martinez Labbe
- Jorge Eduardo Sabag Villalobos
- Eugenio Tuma Zedan
- Manuel Monsalve Benavides
- Guillermo Ceroni Fuentes
- PRESENTACIÓN PROYECTO DE ACUERDO
- DEBATE
- ANTECEDENTE
- ANTECEDENTE
- PRESENTACIÓN PROYECTO DE ACUERDO
- Eugenio Tuma Zedan
- Fernando Meza Moncada
- Jaime Quintana Leal
- Jose Perez Arriagada
- Enrique Jaramillo Becker
- Guillermo Ceroni Fuentes
- PRESENTACIÓN PROYECTO DE ACUERDO
- DEBATE
- ANTECEDENTE
- ANÁLISIS DE LA GRAVE CRISIS QUE AFECTA A LA AGRICULTURA. Proyectos de acuerdo.
- CIERRE DE LA SESIÓN
Notas aclaratorias
- Debido a que muchos de estos documentos han sido adquiridos desde un ejemplar en papel, procesados por digitalización y posterior reconocimiento óptico de caracteres (OCR), es que pueden presentar errores tipográficos menores que no dificultan la correcta comprensión de su contenido.
- Para priorizar la vizualización del contenido relevante, y dada su extensión, se ha omitido la sección "Indice" de los documentos.
REPÚBLICA DE CHILE
CÁMARA DE DIPUTADOS
LEGISLATURA 356ª
Sesión 70ª, en martes 2 de septiembre de 2008
(Especial, de 17.05 a 19.33 horas)
Presidencia de los señores Encina Moriamez, don Francisco,y Ceroni Fuentes, don Guillermo.
Secretario, el señor Loyola Opazo, don Carlos.
Prosecretario, el señor Álvarez Álvarez, don Adrián.
ÍNDICE
ÍNDICE GENERAL
Pág.
I.Asistencia4
II.Apertura de la sesión7
III.Actas7
IV.Cuenta7
V.Objeto de la sesión.
Análisis de la grave crisis que afecta a la agricultura. Proyectos de acuerdo7
VI.Documentos de la Cuenta.
1.Oficio de S. E. la Presidenta de la República, mediante el cual hace presente la urgencia “suma”, para el despacho del proyecto que “crea el Defensor del Ciudadano”. (boletín N° 342907)
Oficios de S. E. la Presidenta de la República, mediante los cuales hace presente la urgencia “simple”, para el despacho de los siguientes proyectos:
2.“Crea el Ministerio, el Servicio de Evaluación Ambiental y la Superintendencia del Medio Ambiente”. (boletín N° 594712)
3.“Crea el Fondo de Fomento de la Productividad de las Zonas Extremas, establece una bonificación a la contratación de mano de obra en las regiones y en las provincias que indica, crea el Fondo de Fomento y Desarrollo de las regiones extremas, y prorroga los incentivos para el desarrollo económico de las Regiones de Aisén y de Magallanes y de la provincia de Palena”. (boletín N° 599027)
IX.Otros documentos de la Cuenta.
1.Comunicación del diputado señor Chahuán por la cual informa que retira su firma del proyecto que “traslada festividad de la Virgen del Carmen”. (boletín N° 602306).
2.Certificados médicos de la diputada señora Allende, doña Isabel, por el que cual informa que deberá permanecer en reposo los días 2 y 3 de septiembre en curso, y del diputado señor Aedo que comunica que, por grave enfermedad de su señora madre, no le será posible asistir a las sesiones de los días 2, 3 y 4 de septiembre.
I.ASISTENCIA
Asistieron los siguientes señores diputados: (112)
--Accorsi Opazo, Enrique
--Aguiló Melo, Sergio
--Alinco Bustos, René
--Alvarado Andrade, Claudio
--Álvarez-Salamanca Büchi, Pedro
--Álvarez Zenteno, Rodrigo
--Araya Guerrero, Pedro
--Arenas Hödar, Gonzalo
--Ascencio Mansilla, Gabriel
--Barros Montero, Ramón
--Bauer Jouanne, Eugenio
--Becker Alvear, Germán
--Bertolino Rendic, Mario
--Bobadilla Muñoz, Sergio
--Schilling Rodríguez, Marcelo
--Cardemil Herrera, Alberto
--Ceroni Fuentes, Guillermo
--Correa De la Cerda, Sergio
--Cristi Marfil, María Angélica
--Cubillos Sigall, Marcela
--Chahuán Chahuán, Francisco
--De Urresti Longton, Alfonso
--Delmastro Naso, Roberto
--Díaz Del Río, Eduardo
--Díaz Díaz, Marcelo
--Dittborn Cordua, Julio
--Duarte Leiva, Gonzalo
--Egaña Respaldiza, Andrés
--Eluchans Urenda, Edmundo
--Encina Moriamez, Francisco
--Enríquez-Ominami Gumucio, Marco
--Errázuriz Eguiguren, Maximiano
--Escobar Rufatt, Álvaro
--Espinosa Monardes, Marcos
--Espinoza Sandoval, Fidel
--Estay Peñaloza, Enrique
--Farías Ponce, Ramón
--Forni Lobos, Marcelo
--Fuentealba Vildósola, Renán
--Galilea Carrillo, Pablo
--García García, René Manuel
--García-Huidobro Sanfuentes, Alejandro
--Girardi Briere, Guido
--Godoy Ibáñez, Joaquín
--Goic Boroevic, Carolina
--González Torres, Rodrigo
--Hales Dib, Patricio
--Hernández Hernández, Javier
--Insunza Gregorio De Las Heras, Jorge
--Isasi Barbieri, Marta
--Jaramillo Becker, Enrique
--Jarpa Wevar, Carlos Abel
--Jiménez Fuentes, Tucapel
--Kast Rist, José Antonio--Latorre Carmona, Juan Carlos
--Leal Labrín, Antonio
--León Ramírez, Roberto
--Lobos Krause, Juan
--Lorenzini Basso, Pablo
--Martínez Labbé, Rosauro
--Masferrer Pellizzari, Juan
--Melero Abaroa, Patricio
--Meza Moncada, Fernando
--Monckeberg Bruner, Cristián
--Monckeberg Díaz, Nicolás
--Monsalve Benavides, Manuel
--Montes Cisternas, Carlos
--Moreira Barros, Iván
--Mulet Martínez, Jaime
--Nogueira Fernández, Claudia
--Norambuena Farías, Iván
--Núñez Lozano, Marco Antonio
--Ojeda Uribe, Sergio
--Olivares Zepeda, Carlos
--Ortiz Novoa, José Miguel
--Pacheco Rivas, Clemira
--Palma Flores, Osvaldo
--Paredes Fierro, Iván
--Pascal Allende, Denise
--Paya Mira, Darío
--Pérez Arriagada, José
--Quintana Leal, Jaime
--Recondo Lavanderos, Carlos
--Robles Pantoja, Alberto
--Rojas Molina, Manuel
--Rossi Ciocca, Fulvio
--Saa Díaz, María Antonieta
--Sabag Villalobos, Jorge
--Saffirio Suárez, Eduardo
--Salaberry Soto, Felipe
--Sepúlveda Hermosilla, Roberto
--Sepúlveda Orbenes, Alejandra
--Silber Romo, Gabriel
--Sule Fernández, Alejandro
--Súnico Galdames, Raúl
--Tarud Daccarett, Jorge
--Tohá Morales, Carolina
--Tuma Zedan, Eugenio
--Turres Figueroa, Marisol
--Ulloa Aguillón, Jorge
--Uriarte Herrera, Gonzalo
--Valcarce Becerra, Ximena
--Valenzuela Van Treek, Esteban
--Vallespín López, Patricio
--Vargas Lyng, Alfonso
--Venegas Cárdenas, Mario
--Venegas Rubio, Samuel
--Verdugo Soto, Germán
--Vidal Lázaro, Ximena
--Von Mühlenbrock Zamora, Gastón
--Walker Prieto, Patricio
--Ward Edwards, Felipe
Asistieron, además, los ministros de Agricultura, doña Marigen Hornkohl; de Economía, Fomento y Reconstrucción (S), don Jean Jacques, y de Hacienda (S), doña María Olivia Recart.
Concurrieron, también, los senadores Carlos Kuschel y Pedro Muñoz.
II.APERTURA DE LA SESIÓN
Se abrió la sesión a las 17.06 horas.
El señor ENCINA (Presidente).-
En el nombre de Dios y de la Patria, se abre la sesión.
III.ACTAS
El señor ENCINA (Presidente).-
El acta de la sesión 65ª se declara aprobada.
El acta de la sesión 66ª queda a disposición de las señoras diputadas y de los señores diputados.
IV.CUENTA
El señor ENCINA (Presidente).-
El señor Prosecretario va a dar lectura a la Cuenta.
El señor ÁLVAREZ (Prosecretario) da lectura a la Cuenta.
V. OBJETO DE LA SESIÓN
ANÁLISIS DE LA GRAVE CRISIS QUE AFECTA A LA AGRICULTURA. Proyectos de acuerdo.
El señor ENCINA (Presidente).-
La presente sesión, motivada en una presentación suscrita por 40 señores diputados, tiene por objeto “analizar la grave crisis que atraviesa la agricultura en Chile”.
Se encuentra presente la ministra de Agricultura, señora Marigen Hornkohl Venegas . El ministro de Hacienda, señor Andrés Velasco , envió sus disculpas.
Tiene la palabra el diputado señor José Pérez .
El señor PÉREZ.-
Señor Presidente, tengo entendido que, además de la ministra de Agricultura, estaban citados los ministros de Economía y de Hacienda.
El señor ENCINA (Presidente).-
Señor diputado, el ministro subrogante de Economía, Fomento y Reconstrucción está presente y, reitero, el ministro de Hacienda envió sus disculpas.
Solicito autorización de los señores diputados y las señoras diputadas para que ingrese a la Sala la señora subsecretaria de Hacienda.
¿Habría acuerdo?
Acordado.
Cito a reunión de Comités, sin suspender la sesión.
En el tiempo previo de 15 minutos, tiene la palabra el diputado señor José Pérez .
El señor PÉREZ.-
Señor Presidente, es evidente que la agricultura atraviesa por una situación extremadamente crítica. Por eso, convocamos a esta sesión especial para analizar en profundidad la materia.
El sector agrícola es el que otorga la mayor cantidad de mano de obra a hombres y mujeres. Por lo tanto, si se descuida este rubro, el efecto es muy negativo.
Recuerdo a los señores diputados que el año pasado el país sufrió una gran cantidad de heladas, que abarcaron desde la zona norte hasta una buena parte de la zona sur. Debido al tremendo daño sufrido por la fruticultura, horticultura, cultivos y los sectores ganadero y forestal, el Gobierno decretó zona de emergencia en una gran cantidad de comunas.
Indudablemente, cuando se decreta zona de emergencia, hay que conseguir los recursos frescos del Ministerio de Hacienda y no sacarlos del Indap, del SAG o de otros servicios, que después no cuentan con los dineros para cumplir con los compromisos adquiridos con los pequeños agricultores.
Al efecto negativo de las heladas y la posterior sequía en los rubros mencionados, es necesario añadir el alza en el precio del petróleo, lo que trae como consecuencia un mayor costo a la hora de emprender los cultivos, así como el alza de 250 a 300 por ciento de semillas, fertilizantes, insecticidas y otros.
A continuación, voy a hacer una comparación de precios de algunos productos tomando en cuenta el período 2007-2008:
Las cifras demuestran el importante aumento de los precios de los fertilizantes, lo que no se compadece con el precio final del producto. Esta situación afecta a la producción de carne, de leche y a distintos cultivos. A lo anterior, es necesario añadir el bajo precio del dólar, que repercute negativamente en los productos de exportación.
Por otra parte, el próximo año se avecina el reavalúo de los bienes agrícolas, lo que constituirá la gota que rebosará el vaso. Hace algún tiempo, en virtud de un proyecto de acuerdo aprobado por la Cámara, se acordó oficiar a su excelencia la Presidenta de la República a fin de que instruyera las medidas necesarias con el objeto de postergar esa medida para después de 2009.
También preocupa lo que acontece en el sector forestal. En más de alguna oportunidad hemos planteado a la ministra de Agricultura la situación relativa a los recursos recibidos por algunos pequeños y medianos agricultores para forestar, en consideración a lo preceptuado en el decreto ley Nº 701, que establece una bonificación estatal para esa actividad. Como consecuencia de las heladas se quemaron los eucaliptos, y por efecto de la sequía se perdieron eucaliptos y pinos, en particular los primeros. Esos agricultores deberían haber recibido un nuevo crédito y habérseles condonado el anterior. Hablamos de pequeños agricultores, la mayoría de los cuales ha operado con Indap o con el BancoEstado.
Para mayor desgracia, los terrenos quedan afectados por el hecho de que sus dueños recibieron un crédito del Estado. En los lugares donde hubo pérdidas totales no es posible cultivar trigo, avena o cualquier otro producto, debido a que el terreno se encuentra bonificado por el Estado para forestarlo. Si, a pesar de todo, el agricultor desea cultivar esas tierras, es necesario desafectarlas y éste debe devolver los dineros entregados por el Estado, lo que resulta imposible, pues los ha ocupado en cultivar. Este tema no ha sido abordado en forma oportuna. En el mejor de los casos, recién el próximo año se repondrán las plantaciones que sucumbieron en su totalidad.
Por otro lado, existe preocupación por la asociatividad en el ámbito agrícola. Como se sabe, muchos agricultores forman comités para producir más, obtener mejores precios por sus productos y, por ende, mejores resultados económicos. Sin embargo, en este caso, se predica una cosa y, en la práctica, se hace otra. Pondré un ejemplo.
Nestlé , empresa grande y poderosa, elabora sus productos a partir de la producción lechera de pequeños y medianos agricultores. Por su parte, todos los productos que se exportan deben ser examinados por un veterinario, el que trabaja prácticamente todos los días de la semana para seleccionar los productos que se almacenan en los contenedores que luego serán transportados a distintos países. La remuneración de ese veterinario supongamos que percibe 2 millones 500 mil pesos no guarda relación con lo que paga Nestlé, cantidad infinitamente superior. Esto significa que por el hecho de que un ente del Estado presta un determinado servicio, se realiza un negocio a costa de los pequeños y medianos agricultores, quienes finalmente terminan pagando ese servicio.
Las cooperativas agrícolas, como Bioleche, ubicada en la región del Biobío, agrupan a una importante cantidad de pequeños y medianos agricultores. En el caso de la cooperativa mencionada, sus integrantes han logrado mantenerla en pie, con esfuerzo y sacrificio, durante muchos años. El manejo contable interno es revisado en forma permanente por consultoras que la cooperativa contrata para tranquilidad de sus asociados. No obstante ello, cada semestre el Ministerio de Economía envía funcionarios del departamento de cooperativas a fin de que, durante una semana, lleven a cabo consultorías. En otras palabras, las consultoras no ocupan más de 20 días al año a fin de revisar el manejo contable interno de Bioleche. Con todo, el Ministerio de Economía cobra en forma exagerada por esos servicios. En 2006, por ese concepto se desembolsaron 8.113.000 pesos; en 2007, 8.236.000 pesos y, en lo que va corrido de 2008, 9.342.000 pesos. ¿Quién paga esas consultorías? El pequeño productor, que debe hacer frente a los gastos que demanda su cooperativa.
En consecuencia, por una parte se incentiva la asociatividad y se exige una mejor calidad de producción, y por otra, los organismos del Estado a cargo del tema el SAG y el Ministerio de Economía cobran por los servicios que prestan, lo que resulta lamentable.
Hace un año denuncié una situación que preocupaba a campesinos de la Octava y Novena regiones: me refiero a la plaga que afectó a 80 mil hectáreas de bosque de pino insigne. Solicité que se investigara la situación a fin de detectar la enfermedad que afectaba a esos bosques y su grado de avance. Sin embargo, hasta el momento, no hemos recibido ninguna respuesta del SAG. La “Revista del Campo”, suplemento del diario “El Mercurio”, publicó un artículo que señala que las vides están contagiándose de la polilla lobesia botrana, la que está causando efectos nefastos en la Región Metropolitana norte y en parte de la Región del Maule. Si no se aplican medidas oportunas para solucionar ese problema, nos encontraremos con serios inconvenientes a la hora de exportar determinados productos. Esto acontece exclusivamente porque no se está ejerciendo un control adecuado de las importaciones. Las cajas de embalaje de madera deberían incinerarse en los puertos y no ingresarlas, pues en su interior traen polillas y larvas. Una vez propagadas, es poco o nada lo que se puede hacer. Así ha ingresado un sinnúmero de plagas al país. Por ello, es de gran importancia que la agricultura sea analizada en la real situación que hoy la afecta.
En cuanto al sector forestal, quiero referirme fundamentalmente a los pequeños y medianos agricultores, muchos de los cuales no han recibido respuesta al problema denunciado hace ya bastante tiempo. Un menor número de gente está recibiendo plantas en las últimas semanas, pero no es todo el universo afectado en las regiones Octava y Novena.
Hay que exigir que Hacienda devuelva al Indap los recursos que ocupó en la emergencia, porque es indispensable atender oportunamente la demanda de los pequeños y medianos agricultores. Existe una falencia enorme especialmente en las regiones Octava y Novena, sin perjuicio de lo que acontezca en otras, donde los agricultores van a pedir recursos para proyectos de mejora de suelos y la respuesta que reciben es que deben volver en quince días o al mes siguiente, y aún no están los recursos. A esa gente le cuesta llegar a los lugares donde están las respectivas oficinas; deben tomar locomoción y hacer sus gastos. La temporada va avanzando y, como en todas las cosas, las siembras que no se efectúan dentro del plazo oportuno, en la época adecuada, siempre traen malos resultados.
Por eso, señor Presidente, por su intermedio pido encarecidamente a la señora ministra que administre las medidas del caso al objeto de que se puedan conseguir los recursos que hoy le faltan al Indap para cumplir con su función y también al Servicio Agrícola y Ganadero, que está con falencias para los programas habituales, fundamentalmente el de recuperación de suelos.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Para iniciar el debate, tiene la palabra el diputado señor Hernández .
El señor HERNÁNDEZ.-
Señor Presidente, como parlamentario de la zona sur, que representa un distrito de la provincia de Osorno donde la agricultura es mucho más que una actividad productiva, un verdadero motor del desarrollo, quiero expresar mi preocupación por lo que está ocurriendo en especial con el programa de suelos degradados, cuyo propósito es revertir los procesos de erosión de los suelos y la pérdida sostenida de fósforo, que es algo fundamental en nuestra zona.
El sistema de recuperación de suelos degradados nace como una forma de mejorar la competitividad de los suelos agrícolas del sur, con ocasión de la firma del Tratado Mercosur. Lamentablemente, con el tiempo, el sentido original se ha ido desvirtuando y, más encima, el programa ha sido víctima de distintos recortes presupuestarios. Ante cualquier emergencia agrícola, en cualquier lugar del país, el ministerio recorta los recursos de este programa. Tradicionalmente, éstos son devueltos, a excepción de lo ocurrido este año, justo cuando los agricultores han debido enfrentar un aumento del 300 por ciento en el precio de los fertilizantes fosfatados, por lo que el impacto del recorte es mucho mayor.
Por ello, los agricultores del sur piden y yo, como diputado de una zona agrícola, reitero que, en justicia, sean repuestos los recursos comprometidos para este año. Una emergencia como la sufrida por la zona central, debido a la plaga que afectó a las uvas, es importante y debe ser atendida; pero no tiene nada que ver con los recursos del sistema de recuperación de suelos degradados, ya que el presupuesto del SAG contempla una glosa para emergencias sanitarias, a la cual debió proveerse de los recursos frescos necesarios para su control. De no reponerse esos millonarios recursos, se estará faltando a un compromiso del Gobierno con los agricultores del sur y se estará pasando por alto lo que el Congreso Nacional aprobó, puesto que uno, como diputado, vota a favor del presupuesto de la Nación partiendo de la base de que lo que allí se establece se cumplirá, lo que en este caso claramente no ha ocurrido.
Aún más, el Gobierno, con su actuar, se está poniendo en contraposición con lo que sus mismos representantes pregonan y hacen, por cuanto, por un lado, el Ministerio de Economía está dando un fuerte impulso a los programas de mejoramiento de la competitividad y, por otro, el Ministerio de Agricultura recorta los recursos de los programas de suelos degradados, cuyo principal objetivo es mejorar dicha competitividad.
En el fondo, debemos, de una vez por todas, solicitar que ese programa, cuyo efecto sobre la economía y el erario es positivo, se transforme en ley por, al menos, diez años más. Así, permitirá mejorar la competitividad y disminuirá el riesgo de degradación de los suelos. El programa no debe seguir entendiéndose como un subsidio más, sino como una inversión del Estado en sus recursos naturales.
Señor Presidente, por su intermedio pido a la ministra de Agricultura y al ministro de Hacienda que restituyan los millonarios recursos del programa de suelos degradados, tanto para el SAG como para Indap, que fueron reasignados para otros efectos a la zona central del país.
Además, debemos comenzar a pensar en la administración de esos recursos en el largo plazo, para no tener que pasar cada año por esta discusión. Para eso, tal vez el camino sea que dichos recursos no estén inmersos en el presupuesto de un servicio y que se cree una ley especial para su administración. Así, podremos proyectar y asegurar su correcta ejecución en el tiempo.
Señor Presidente, deseo expresar a la señora ministra que éste es un gran tema de futuro, como también debieran serlo proyectos orientados a mejorar la productividad en nuestros campos, a introducir más tecnología y mayor especialización en cada zona, a desarrollar grandes iniciativas para los pequeños agricultores que les permitan competir con las grandes empresas y con los subsidios que se entregan en otros países.
En fin, aspiro a más esfuerzos de la cartera que dirige la señora ministra, orientados en los sentidos macro y micro, con visión de futuro, una visión que debe ir mucho más allá del funcionamiento de las ferias o del precio circunstancial de la carne o de las verduras en ciertas épocas del año. No niego que eso es importante, sobre todo debido al período de inflación que estamos viviendo; pero en la medida en que se trabaje con proyección de futuro en proyectos que mejoren la eficiencia y la calidad de nuestra agricultura, tendremos un país mejor.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Pablo Galilea .
El señor GALILEA.-
Señor Presidente, se nos ha convocado a esta sesión especial debido a los difíciles momentos que vive nuestra agricultura. Los costos de producción han aumentado considerablemente; los fertilizantes han tenido alzas estratosféricas que superan el 50 por ciento; el petróleo ha subido más de 80 por ciento; el costo del kilovatio hora ha tenido incrementos superiores a 70 por ciento; el transporte, la maquinaria y prácticamente todos los costos asociados a las labores del campo han aumentado.
Debido a los tremendos inconvenientes que se están produciendo en el agro, el Senado de la República, a través de su Comisión de Agricultura, pidió a la Fiscalía Nacional Económica una investigación del mercado de los abonos y fertilizantes, con el objeto de determinar el alcance de las alzas de precios en ese mercado.
Es tan grave esta situación que pido a la Cámara hacerse parte de la solicitud que el Senado hizo a la Fiscalía Nacional Económica, de manera de tomar conocimiento de los posibles carteles que existan en la venta de fertilizantes en el país, porque esta situación está afectando a un importante sector de la economía.
Sin duda, esto ha traído serias complicaciones. Por lo tanto, se requieren análisis técnicos y políticas públicas que ayuden a recuperar la competitividad. En forma creciente, el Ministerio de Agricultura ha ido perdiendo la perspectiva sobre lo técnico y ha adquirido mayor peso político; se privilegia el rol asistencial y de compra de conciencia, y pierde relevancia la implementación de políticas que generen condiciones para el desarrollo del sector. Para muestra, un botón. Ayer, en un canal de televisión, escuché a la señora ministra expresar su alegría por la decisión de los supermercados de importar carne, lo que, como es obvio, traería como consecuencia disminución en los precios, pues, a su juicio, los productores se han puesto de acuerdo para subirlos. Esto es no entender el problema, es no entender la situación de la ganadería. Es absolutamente irracional pensar que 100 mil productores se van a concertar para subir los precios.
¡Por favor! Esas declaraciones están bien para otras autoridades, pero no para la ministra de Agricultura, porque su deber es defender los intereses del sector agrícola.
En la misma entrevista es justo reconocerlo, la ministra nos daba la buena noticia que todos o al menos parte de los chilenos comeremos en estas Fiestas Patrias empanadas de wagyu, es decir, vacuno japonés.
El problema agrícola debe ser abordado de manera seria. El país se ha fijado como meta ser potencia alimentaria mundial, un gran desafío que podría quedar me temo en un lindo eslogan.
Son muchas las preguntas y también muchas las respuestas para lograr ese fin: ¿Estamos trabajando para alcanzar tan ambicioso objetivo? ¿Será posible lograrlo con la pérdida de competitividad que ha tenido el sector? ¿Cómo enfrentaremos la mayor presión competitiva que ejerce el resto del mundo? ¿Cómo se enfrentarán las exigencias ambientales y cuál será nuestra política en esta materia? ¿Cómo se hace frente al alza de precios de los alimentos? ¿Se hará sólo con declaraciones desinformadas y demagógicas? ¿Cómo afectará a nuestra agricultura el calentamiento global y el cambio climático? ¿Cuándo se creará un fondo permanente para las emergencias agrícolas? O, ¿se tendrá que desvestir a un santo para vestir a otro, como ha ocurrido recientemente?
La frecuencia de las emergencias agrícolas, como heladas, sequías, erupciones volcánicas, nevazones, inundaciones y plagas, hace necesario contar con un presupuesto permanente para su atención. ¿Qué dice el Ministerio de Hacienda sobre el tema? La sola inasistencia del ministro a esta sesión es una muestra clara del interés que tiene el Gobierno por la agricultura. Necesitamos respuestas del Ministerio de Hacienda, pero lamentablemente el jefe de la cartera no asistió.
Deseo formular otras preguntas: ¿Cuál es la política que se adoptará para dar continuidad al programa de recuperación de suelos degradados? ¿Estará bien que, durante el presente año, con el objeto de destinar fondos a los programas de emergencia agrícola específicamente, la de la polilla de la vid, el SAG haya recortado el presupuesto del sistema de incentivos de recuperación de suelos degradados? En las regiones del sur, este recorte ha perjudicado a quienes postularon a la bonificación estatal, convencidos de que se respetarían los marcos presupuestarios originales. Se necesitan políticas de largo plazo y no decisiones de última hora.
No podemos perder de vista que ese programa fue creado para mejorar la competitividad de la agricultura tradicional y como compensación por la firma del Mercosur.
El señor ENCINA (Presidente).-
Ha terminado su tiempo, señor diputado.
El señor GALILEA.-
Señor Presidente, estamos ante un claro incumplimiento del Gobierno, pues se olvida de los compromisos adquiridos hace algunos años.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Marco Antonio Núñez .
El señor NÚÑEZ.-
Señor Presidente, voy a ilustrar mi intervención con algunas cifras que nos han hecho llegar el Ministerio de Hacienda y el Instituto Nacional de Estadística, INE, sobre la realidad que vive nuestra agricultura.
Debemos entender que estamos ante un escenario económico internacional extremadamente complejo. No obstante, Chile, un país de ingreso medio y que intenta que su agricultura forme parte relevante de su crecimiento, ha logrado con éxito que sus exportaciones crezcan anualmente. Así lo indican algunas cifras. Sólo cuatro datos: en lo que va de este año, las actividades silvoagropecuarias, comparadas con las de 2007, crecieron en promedio 5,2 por ciento; las exportaciones del sector agrícola, comparadas a igual período, 2 de septiembre del año pasado, aumentaron 12,1 por ciento; la intención de siembra esto es muy importante, porque nos ilustra sobre las expectativas y las decisiones que están adoptando los grandes, medianos y pequeños actores del sector agrícola ha aumentado, en comparación al año pasado, 6,1 por ciento promedio. De los 15 cultivos que monitorea el Instituto Nacional de Estadísticas, 12 aumentarán su superficie de siembra en comparación al año pasado.
El presupuesto del Ministerio de Agricultura, entendido en el contexto de transformar a Chile en una potencia agroalimentaria, ha recibido 40 mil millones de pesos adicionales, es decir, 13 por ciento más de lo que aprobó el Congreso, para enfrentar la contingencia, en especial las sequías y lo acontecido en Aisén.
Se ha combatido con éxito lo afirmo, porque represento al valle de Aconcagua la mosca de la fruta y se han provisto los recursos y la asistencia necesarios para que los agricultores de la zona central combatan, también con éxito, la polilla de la vid o lobesia botrana.
Distintos serían los escenarios si el Ministerio de Agricultura no hubiese prestado la atención debida para controlar la mosca de la fruta y la polilla de la vid, plagas que habrían destruido nuestra capacidad exportadora de frutas.
Esa es una realidad que está matizada por el bajo precio del dólar, aunque ha ido en aumento en forma regular lo que favorecerá las exportaciones de la próxima temporada; el alto precio de los fertilizantes; la demanda internacional de alimentos…
El señor ENCINA (Presidente).-
Ha terminado su tiempo, señor diputado.
El señor NÚÑEZ.-
Señor Presidente, en resumen, necesitamos fortalecer la ley sobre incentivos para la recuperación de suelos degradados. Lo mismo, respecto de la ley de fomento al riego y drenaje, sobre todo para la construcción de embalses. Al respecto, debiéramos tener un debate, dada la importancia que tiene para la agricultura y para el país mantener esta ley, que vence en 2009.
Termino mis palabras felicitando a los integrantes de la Comisión de Agricultura, de la cual formo parte, porque la situación no es fácil y requerimos de esa ayuda, que debe orientarse particularmente a esas dos leyes.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Mario Venegas .
El señor VENEGAS (don Mario).-
Señor Presidente, deseo reiterar algo que ya he puesto en conocimiento de las autoridades del sector. Me refiero a la preocupación manifestada por las organizaciones de mi región, la de La Araucanía, específicamente las de la parte norte de la provincia de Malleco, en relación con los recursos destinados a enfrentar las emergencias agrícolas, como la sequía, las heladas y, hoy, las inundaciones, y la forma como éstas han impactado en los presupuestos ordinarios del ministerio y del Indap, particularmente en algunos de sus programas, como el de incentivos para la recuperación de suelos degradados.
Sin embargo, plantear el problema como una crisis es una exageración; es más, no me gustó la forma en que se redactó la citación: “analizar la grave crisis que atraviesa la agricultura en Chile”, toda vez que un análisis serio no nos dice que estamos en crisis, no obstante reconocer el alza internacional de algunos alimentos.
El sector agrícola muestra dinamismo, y las cifras lo avalan. La actividad silvoagropecuaria creció 5,2 por ciento durante el primer semestre de este año: 3,5 en el primer trimestre y 6,9 en el segundo; las exportaciones sectoriales subieron 12,1 por ciento, a julio de 2008, comparadas con igual período del año pasado; las importaciones de insumos y maquinarias, a pesar de los altos precios, también han aumentado significativamente: 23 por ciento los agroquímicos y 20 por ciento los fertilizantes. Asimismo, la intención de siembra indica que los agricultores van a sembrar, porque, como nunca, algunos productos alternativos han alcanzado precios muy elevados.
Las malas noticias son por todos conocidas, como el significativo aumento del precio de algunos insumos, en especial de los fertilizantes. Aquí tengo algunos datos acerca de este impacto. Respecto de 2006, el precio de la urea ha aumentado en 41 por ciento; el del superfosfato triple, en 200,3 por ciento, y el del fosfato diamónico, en 199 por ciento.
Ciertamente, todas esas alzas producen impacto en la agricultura, razón por la cual cobra importancia un proyecto de acuerdo, del que soy autor y que presenté junto con otros diputados, para solicitar a su excelencia la Presidenta de la República que ordene el estudio de una fórmula de subsidio para el sector agrícola. Afortunadamente, la Presidenta Bachelet acaba de anunciar en Bulnes algunas medidas que apuntan en ese sentido y que tienen por objeto favorecer, básicamente, a quienes son beneficiarios de los Programas de Desarrollo Local, Prodesal . En todo caso, lamento tener que señalar que, en mi opinión, la cobertura es insuficiente, por lo que sería muy razonable hacer un esfuerzo mayor a los 8.000.000.000 de pesos que se comprometieron.
En suma, estamos preocupados por la situación por la que atraviesa el agro, pero eso no significa avalar la tesis planteada por algunos en cuanto a que dicho sector se encuentra en crisis.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Carlos Recondo .
El señor RECONDO.-
Señor Presidente, no estoy de acuerdo con quienes sostienen que la agricultura está atravesando necesariamente por una crisis. Por lo tanto, coincido con el diputado que me antecedió en el uso de la palabra en cuanto a que el objeto de esta sesión no puede ser debatir sobre una supuesta crisis en la agricultura. Es cierto que el sector enfrenta un escenario internacional y económico complejo, dado el aumento del precio de los insumos, el alza del precio de la energía y el aumento de la inflación. Sin embargo, se da la paradoja de que ese escenario debiera ser una gran oportunidad para el sector agrícola, porque, a la par, se ha producido un alza muy importante del consumo mundial de alimentos y, consecuentemente, un aumento muy importante en el precio de los productos agrícolas.
Entonces, si estamos ante un escenario favorable, la pregunta que cabe hacer a mi juicio, la que le da más sentido a esta sesión es cómo responde el Ministerio de Agricultura ante esa situación compleja, por una parte, pero que constituye una gran oportunidad para el desarrollo de la agricultura nacional, dadas las condiciones de consumo, de demanda y de precios internacionales.
Considero que es en torno de esos aspectos debe centrarse el debate.
En mi opinión, el Ministerio de Agricultura debiera poner el acento en el fomento de los programas que incentivan la mayor productividad y competitividad de los factores de producción, porque ésa es la forma correcta de aprovechar la gran oportunidad que se nos presenta.
Debemos discutir, entonces, en torno a si estamos aprovechando esa oportunidad y si la acción del Ministerio de Agricultura se ha centrado en programas y objetivos que fomentan la competitividad y la productividad de esos factores.
Mi respuesta a esa interrogante es que no está respondiendo en esas materias. ¿Por qué? Porque el Ministerio de Agricultura está virtualmente desfinanciado para responder a esas necesidades. Y está desfinanciado porque los principales programas para mejorar la competitividad, como el que se ha mencionado en forma reiterada en esta sesión, de recuperación de suelos degradados, sufrieron un recorte drástico en los recursos inicialmente considerados.
Recordemos que dicho programa surgió precisamente para incentivar la productividad y la competitividad de la agricultura nacional, a partir de un compromiso que asumió el Estado con el sector agrícola luego de las rebajas de aranceles derivadas de la suscripción de diversos acuerdos internacionales, en especial el del Mercosur, que abrió en forma muy abrupta al país a la competencia internacional, que si bien es necesaria, demandó una atención especial para el sector agrícola, en cuanto a otorgarle los incentivos que merece y requiere para enfrentar esa mayor competitividad.
Entre los compromisos que en ese contexto adquirió el Estado, uno fundamental dice relación con el programa de recuperación de suelos degradados. Sin embargo, la realidad actual, por lo menos en las regiones que represento, la de Los Ríos y la de Los Lagos, muestra que los recortes presupuestarios alcanzan al menos al 80 por ciento del programa.
¿Por qué digo eso? Porque el monto original que consideraba para este año el presupuesto del programa era de poco menos de 3.200.000.000 de pesos, de los cuales 1.200.000.000 correspondían a compromisos que se arrastraban del año anterior, por lo que sólo 1.900.000.000 constituían recursos nuevos. Pero resulta que se hizo una reducción presupuestaria de 1.460.000.000 de pesos y, al final, sólo quedaron 290.000.000 disponibles. Ahora bien, si esas cantidades las llevamos a número de hectáreas que podrían beneficiarse, resulta que con el presupuesto original alcanzaba para 16.000 hectáreas, en tanto que los recursos que quedaron disponibles sólo alcanzan para beneficiar a 2.700. ¿Cuánto es, entonces, lo que se redujo el programa? Ochenta y tres por ciento.
El programa en cuestión es el más importante para incentivar la competitividad y la productividad de la agricultura nacional, pero de todas maneras se recortó en 83 por ciento, tanto para los agricultores atendidos por el SAG como para los que atiende el Indap. Es decir, el recorte afectó a todos los agricultores, no obstante que se trata de una herramienta indispensable para el sector.
Por lo tanto, creemos que estamos ante un problema serio.
Otro problema importante que hay que abordar es la confusión permanente que se produce en el Ministerio de Agricultura entre su rol de fomento y su rol social, que apunta a ayudar a combatir la pobreza. Me parece que falta conceptualizar adecuadamente los objetivos de la política sectorial y diferenciarlos de los objetivos de la política social.
Es tan evidente esa confusión, que ante los reclamos plenamente justificados de los agricultores, de las organizaciones gremiales de agricultores y del Congreso Nacional por la rebaja presupuestaria de los programas más importantes, que impiden cumplir los compromisos con el sector agrícola, el Ministerio responde al menos así lo anunció la ministra de Agricultura con un programa social de última hora que consiste en destinar 8.000.000.000 de pesos mucho más que lo que se ha recortado al programa de recuperación de suelos para distribuirlos entre los agricultores pertenecientes al Prodesal, a través de bonos de 93.000 pesos para cada beneficiario. Es decir, se trata de una ayuda para los agricultores más pequeños, para los más modestos, por lo que en realidad constituye una política social.
Lamentablemente, se entrega a un mes y medio de la elección municipal, con el argumento de que es para compensar el alza de los fertilizantes. Pero si a esos mismos agricultores les vienen postergando desde marzo la entrega de recursos para sus planes de recuperación de suelo con la excusa de que no había recursos para atender esos requerimientos, con lo cual han visto postergadas sus posibilidades de cultivo y de fertilización. Sin embargo, ahora se dice que en compensación por el alza del precio de los fertilizantes, se les entregará un bono de 93.000 mil pesos.
No se entiende la forma en que el ministerio quiere enfrentar esta situación que, desde mi punto de vista, es una oportunidad que lamentablemente se está desaprovechando, debido al manejo que el Ministerio de Agricultura está haciendo de los programas y de las políticas que se están implementando.
En el presupuesto de la nación, en la partida de la subsecretaría, existe una asignación por concepto de Compromiso con la Agricultura que asciende a 10.640.000.000 de pesos, dinero que se gastaría en virtud de lo acordado en la Quinta Subcomisión Mixta de Presupuestos, instancia que estableció que esos recursos debieran ser destinados preferentemente a los programas de recuperación de suelos, de riego y a los Programas de Desarrollo Local, Prodesal .
A pesar de que hemos solicitado información en reiteradas oportunidades por medio de la Comisión de Agricultura de la Cámara de Diputados, hasta ahora no hemos recibido respuesta del ministerio sobre el grado de avance y la forma como se han gastado los recursos consignados en el Compromiso con la Agricultura.
Finalmente, solicito que se nos informe sobre la cantidad de pequeños agricultores que se atienden con el Indap que tienen planes de manejo pendientes por falta de presupuesto, para que tengamos claridad sobre el desfinanciamiento del Ministerio de Agricultura.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor René Manuel García .
El señor GARCÍA (don René Manuel).-
Señor Presidente, lamento que se destine tan poco tiempo para discutir un tema tan importante para el país. Sería recomendable que dispusiéramos del tiempo necesario para intervenir con tranquilidad en una materia de tanta trascendencia.
Sólo me referiré al pequeño agricultor. Cuando se mencionan los bonos de 200 mil pesos que se están entregando, es necesario precisar que el abono ha subido tres veces y, por lo tanto, el dinero destinado a ese objetivo rinde mucho menos que antes.
Esta sesión se ha citado con el objeto de analizar la grave crisis de la agricultura en el país. Al respecto, me atrevo a afirmar que esa grave crisis se debe, justamente, a la falta de protección a la agricultura, en las distintas instancias.
En consecuencia, el llamado que corresponde hacer ahora es a no descuidar nuestra agricultura en su integridad, porque la única manera de controlar el alto IPC es mediante la ayuda al agricultor, sea pequeño, mediano o grande, para que produzca. Éste es el fondo del problema. No tengamos miedo de entregar los recursos necesarios para contar con una agricultura potente, sana y productiva. Entonces, no tiene mayor importancia que se recorran los supermercados.
Cuando defendemos la agricultura, créanme que nuestro objetivo final es proteger al consumidor. A mayor producción, menor es el aumento de los precios de los productos. Si un supermercado dispone de un stock de sólo diez lechugas, obviamente serán carísimas; pero si tiene quinientas, bajará su precio. En el fondo, la defensa de la agricultura significa que el consumidor tenga más posibilidades de elegir y a menores precios. Es en ese punto donde debemos que centrar nuestros esfuerzos. No sacamos nada con citar a una sesión para analizar la crisis de la agricultura si no tenemos claridad respecto de las soluciones que se requieren.
Lo único que pido a la señora ministra es que se aborde el problema agrícola en su conjunto, y lo único que solicitan los agricultores es contar con las condiciones adecuadas para producir.
No importa el presupuesto que destine el Ministerio de Agricultura para lograr ese objetivo, por una razón muy simple: el 90 por ciento de él se recupera, porque se trata de créditos. Es decir, los agricultores no están pidiendo nada extraordinario, sino sólo que se preocupen por las condiciones para producir. Si al agricultor se le presta dinero, cuando llegue el período de cosecha, lo devolverá. Por lo tanto, no me refiero a los bonos. Si queremos una agricultura verdaderamente productiva, se deben facilitar las condiciones para que los agricultores puedan comprar los abonos necesarios.
Espero que la ministra tome en cuenta lo que le voy a recomendar: reestructure el Indap, para que se adapte a las condiciones de productividad de los agricultores. No pueden limitarlos y entregarles recursos sólo para que siembren un reducido número de hectáreas en circunstancias de que disponen de cuatro, cinco o diez hectáreas. No limitemos la producción por falta de recursos. Al final, esos dineros se devolverán. Se trata de préstamos a corto plazo que redundarán en mayor productividad, menores precios y reducción del IPC.
El agricultor no está pidiendo ni llorando para que le regalen las cosas; déjenlo producir y verán cómo el IPC comenzará a bajar.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Ramón Farías .
El señor FARÍAS.-
Señor Presidente, sólo me voy a referir a tres temas, uno de los cuales ya se lo he planteado a la señora ministra: el problema relacionado con la modificación del plano regulador de la Región Metropolitana, que afectará a alrededor de 10 mil hectáreas de suelos agrícolas, rurales, que se convertirán en urbanos. Éste es un problema bastante grave, que beneficiará a las empresas constructoras en desmedro de la agricultura.
¿Qué hará el Ministerio de Agricultura al respecto? En una visita que realicé hace algún tiempo junto con el diputado Gabriel Silber , expusimos el tema. Al respecto, deseo saber qué resguardos tomará el Ministerio de Agricultura ante este problema que enfrenta la Región Metropolitana.
En segundo lugar, me interesa un tema que también se ha mencionado en la Comisión de Agricultura. Aprovecho la presencia de la señora subsecretaria de Hacienda, que ha estado muy atenta al desarrollo de esta sesión, para consultarle sobre lo que ocurrirá con los dineros del presupuesto de Agricultura que se han utilizado en las emergencias. Debido a las emergencias que hemos enfrentado durante el año, que han sido muchas y complicadas, se ocuparon recursos del presupuesto regular del Ministerio de Agricultura, pero Hacienda no los ha repuesto, lo cual afecta directamente a los programas regulares de ese ministerio, que no se están llevando a cabo o se están implementando a medias. Por lo tanto, deseo saber si Hacienda devolverá esos recursos. Es de plena justicia que lo haga.
Globalmente, para este año se aumentó el presupuesto del Ministerio de Agricultura, pero se ha visto disminuido por la vía de la utilización para situaciones de emergencia, lo que me parece bastante grave.
Finalmente, felicito al Ministerio de Agricultura por las encuestas que realiza a los precios de distintos productos agrícolas, que incluye las frutas, las verduras y la carne, lo que permite conocer su variación en los supermercados. Esas encuestas han significado que los supermercados y los grandes productores equilibren los precios para que no se produzca un desbande incontrolable, como el que estaba ocurriendo con la carne, en que algunos abusadores no se pueden calificar de otra forma subían artificialmente su precio a propósito de la cercanía de las celebraciones de Fiestas Patrias y del natural aumento de su consumo.
Pido encarecidamente que mis dos consultas sean respondidas por parte de las representantes de los Ministerios de Agricultura y de Hacienda.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Fidel Espinoza .
El señor ESPINOZA (don Fidel).-
Señor Presidente, en primer lugar, coincido plenamente con los colegas que han señalado que los términos en que está redactada la convocatoria a esta sesión es un tanto extrema. Al decir “la grave crisis que atraviesa la agricultura en Chile”, nos estamos excediendo en la conceptualización de la temática.
No obstante lo anterior, es necesario reconocer, con absoluta responsabilidad, que al menos se está viviendo una situación bastante compleja y difícil, que me temo se puede ver traducida en escenarios de conflicto durante los próximos meses, no sólo en relación con los pequeños agricultores, que son los que me interesa defender aquí, porque los medianos y grandes se pueden defender solos, ya que cuentan con los recursos para hacerlo, aunque a algunos diputados les interese abogar por ellos. Los medianos y grandes agricultores no merecen ser protegidos por las políticas públicas del Estado.
Como decía, esa compleja situación puede significar que, al momento de recurrir a los productos que genera la pequeña agricultura, que ha disminuido la cantidad de hectáreas destinada a la siembra debido a la fuerte alza que han tenido los fertilizantes, se generen complicaciones en los mercados de consumo. Se trata de un tema que debe ser analizado con absoluta responsabilidad.
En esta ocasión, me voy a referir a algunas temáticas que, en mi opinión, son perfectibles y es importante que la señora ministra aquí presente las atienda en función de lo que uno recoge en las visitas permanentes que realiza a los sectores rurales, sobre todo, porque represento un distrito con altos índices de ruralidad extrema.
A pesar de que se han creado programas fabulosos, como el de Desarrollo Local, Prodesal , que ha permitido entregar herramientas a los pequeños agricultores que no quedaban incluidos en los programas habituales de ayuda del Indap, porque muchas veces los apoyos e incentivos están direccionados a pequeños o medianos agricultores, que no son los que más lo necesitan. Hay comunas donde se ha pasado de la raya en ese ámbito, razón por la cual los agricultores vienen expresando su reclamo en forma persistente.
Señor Presidente, antes de referirme al fondo del tema, por su intermedio quiero decir a la señora ministra que, hace algunos días, en una visita al sector Los Cañones en plena actividad de intervencionismo político, según algunos parlamentarios, pero trabajando en terreno como lo he hecho en forma permanente durante estos cuatro años de diario quehacer, estuve reunido en la comuna de Fresia con pequeños agricultores de Traiguén, Cañones, Río Blanco y Esperanza, quienes reclamaban por la burocracia del sistema que impera en las regiones. Me señalaron que todavía no reciben el apoyo que entregó el Gobierno para paliar la sequía que sufrieron a principios de año, debido a lo cual se están muriendo sus bueyes, que constituyen su principal herramienta de trabajo.
Desde ese punto de vista, quiero que se haga el respectivo análisis, ya que, muchas veces, a la ministra se le entregan cifras y números desde las regiones, pero sus representantes, como el seremi de Agricultura de la región, no salen nunca a recorrer y a conocer estas realidades.
Actualmente, existe una situación bastante compleja y es necesario que se modifique en el sentido de entregar esos apoyos. Pienso que lo que se ha hecho con este bono de apoyo a los pequeños agricultores va en el sentido que ellos siempre han pedido, es decir, que los beneficios del Estado estén dirigidos a los que más lo necesitan. Recién señalaba un colega que no se entregarán más recursos para suelos degradados y que eso afectará a los pequeños agricultores. Pero eso no es tan así, porque no se modifican los recursos que entrega el Indap, sino los del SAG, que generalmente han estado dirigidos a otro grupo de agricultores, es decir, no a los que viven de siete u ocho vaquitas, sino a los que ordeñan entre ochenta y cien.
Entonces, debemos hablar a los chilenos con la verdad, porque muchas veces se utilizan los medios de comunicación para entregar informaciones que no corresponden a la realidad.
Es de enorme relevancia focalizar los recursos no sólo hacia los pequeños agricultores de los Programas de Desarrollo Local. Sabemos que allí están los que más lo requieren, pero también hay un segmento importante de pequeños agricultores que no forman parte de esos programas, porque en los últimos años han sido beneficiarios de recursos de Indap, pero requieren con urgencia de apoyo, sobre todo de fertilizantes, rubro en el que más los está golpeando la crisis, con la consecuente precaria situación económica que los aflige. Hay agricultores que nos han dicho que sembraban dos o tres hectáreas de papas y que hoy no les alcanza ni para una hectárea, lo que nos preocupa mucho. Hacia ellos se deben focalizar los esfuerzos con el objeto de ir en su resguardo.
Como parlamentario que ha visitado en forma permanente los sectores rurales, debo señalar que es necesario dirigir hacia esos objetivos los recursos y no intervenir tratando de falsear la realidad, diciendo que las reasignaciones que se están haciendo por parte del ministerio perjudicarán a esos pequeños agricultores. Seguramente, disminuirá la cantidad de recursos que han recibido por largos años. Hay agricultores que por sí solos pueden tener la posibilidad de satisfacer sus necesidades y de afrontar las alzas que, lamentablemente, se han producido en los mercados internacionales.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Fernando Meza .
El señor MEZA.-
Señor Presidente, los cálculos para entregar la ayuda por parte del Indap se hacen con los precios del año anterior. Por ejemplo, hace un año, el kilogramo de grano para alimentar los animales costaba 6 pesos, y hoy, 20 pesos; una hectárea de empastada costaba 250 mil pesos, y hoy, 700 mil pesos. Por lo tanto, no esperemos que bajen los precios de la carne porque las hermanitas de la caridad no están representadas, precisamente, por los agricultores. Ellos también tienen que ganar su dinero.
Hoy se habla de una ayuda de 8.000.000.000 de pesos, dispuesta en conjunto por la Presidenta de la República y la ministra de Agricultura, para ir en ayuda de los pequeños agricultores, a fin de paliar el alza en el precio de los fertilizantes. La medida se ha dispuesto para los pequeños agricultores que están inscritos en el Programa de Desarrollo Local, lo que va en desmedro absoluto de los pequeños agricultores particulares, que son muchos más que los diez mil pequeños agricultores que hay en La Araucanía. Entonces, hay un agravio comparativo y un maltrato que sería necesario reconocer y corregir.
El Programa de Desarrollo Local utiliza recursos del Estado. Por ello, hay que tener claro que, independientemente de quien sea el alcalde, son recursos que se utilizan políticamente en época electoral. Puedo dar fe de ello porque, en estos precisos momentos, en la Región de La Araucanía hay muchos alcaldes que están utilizando esos 90 mil pesos con fines exclusivistas y dejando de lado a una gran masa de pequeños agricultores, sin los cuales las ciudades como lo he dicho muchas veces no pueden subsistir. El campo puede vivir sin la ciudad; la ciudad no puede vivir sin el campo.
Por lo tanto, mi llamado de atención es para tratar de enmendar esta situación. Se está privilegiando a un sector que necesita estos recursos, en desmedro de un vasto sector de agricultores, entre los cuales están muchas amas de casa que en el campo se dedican a producir y que no tienen ningún recurso para hacerlo de mejor manera.
Lo que más se produce en la Región de La Araucanía son las papas. El diputado Tuma representa el distrito 51, donde se produce mucho la papa. Sin embargo, este bono para fertilizantes se entrega exclusivamente para el maíz, para el arroz que allí no se produce y, en parte, para el trigo. De manera que hay algunos pequeños agricultores de la región que están enfrentando una serie de dificultades, debido a la ignorancia que se advierte de parte del Gobierno respecto de su existencia.
Por otro lado, quiero saber cómo fiscaliza el Ministerio del Trabajo a sus expertos en el tema agrícola. ¿Cómo se fiscaliza el trabajo de Indap? ¿Cómo es posible que el director regional del Indap de La Araucanía, señor Andrés Montupil , haga un pseudotrabajo, maltratando de palabra y de hecho a cientos de pequeños agricultores? Se trata de modestos campesinos, a quienes insulta en su despacho con ocasión de la entrega de los pocos aportes que el Gobierno otorga para ir en ayuda de la pequeña agricultura familiar campesina.
Es hora de que se terminen los cuoteos políticos que, a fin de cuentas, han sido el tenor en algunos casos en materia de agricultura y particularmente en el Indap. Soy de opinión de que el cargo no lo pido para mi partido ni para ningún otro lo ocupe una persona que sepa de agricultura, que se la juegue por los pequeños agricultores, que se embarre los pies, que ensucie los zapatos, que se moje, que salga a la calle y que trabaje de verdad por satisfacer las necesidades de la humilde clase campesina.
En la Conaf pasa exactamente lo mismo. ¿Cómo es posible que en una región como la de La Araucanía haya destinado el noventa y tanto por ciento de su personal para atender sólo a una comuna, en desmedro de las restantes? ¿Cómo es posible, entre otras cosas, que se haya repartido de tan mala forma la misericordia?
La ministra declaró a la comuna de Loncoche, en la Región de La Araucanía, zona de emergencia agrícola. ¿Saben cuántos pequeños agricultores de esa comuna fueron favorecidos? Apenas 53, en forma directa …
El señor ENCINA (Presidente).-
Señor diputado, ha terminado su tiempo.
El señor MEZA.-
… y otros 50, en forma indirecta.
Por eso, solicito que las atenciones sean repartidas en mejor forma.
Por desgracia, no dispongo de más tiempo. Tengo aquí algunas situaciones muy importantes que le voy a transmitir a la ministra en forma personal, pero lo haré en forma privada y no pública, como podría ser a través de un documento.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Jorge Sabag .
El señor SABAG.-
Señor Presidente, desde que tengo uso de razón, la agricultura ha vivido situaciones de crisis y emergencia tras emergencia.
Por eso, necesitamos una institucionalidad permanente y personal especializado para atender este tipo de situaciones, porque los funcionarios del Indap y de otros organismos deben descuidar sus tareas habituales para atenderlas.
Quiero reiterar que es necesario que el Ministerio de Hacienda devuelva los recursos al Ministerio de Agricultura, con el objeto de que pueda cumplir con los compromisos adquiridos a raíz de las últimas emergencias. Pero lo más importante es mirar a futuro. Lo que nosotros queremos es una agricultura moderna, que se anticipe a los problemas. Es necesario modernizar la información y disponer de sistemas de alerta temprana que se desarrollen mediante una red de estaciones agrometeorológicas automáticas que entreguen información en tiempo real y que permitan anticiparse a eventos como sequía, heladas, incendios forestales y avenidas de ríos, a fin de evacuar oportunamente a las personas.
Cabe mencionar que desde la Octava Región hacia el sur no existe ningún centro de agrometeorología que permita anticiparse a los eventos, razón por la cual creo necesario resaltar este aspecto.
Asimismo, quiero enfatizar que es necesario tener un programa de profesionalización de la actividad campesina que, si bien existe, es demasiado lento. Si queremos que el país sea una potencia agroalimentaria, necesitamos más recursos y mayor control del cumplimiento de las metas. Durante el 97 por ciento del tiempo total de los cultivos se riega en exceso, 100 ó 200 por ciento más de lo que realmente requieren las plantaciones.
Por eso, hay que poner énfasis en la transferencia tecnológica, a fin de poder cumplir con estos objetivos. Hoy, cualquier persona da charlas y la gente queda igual que antes. Además, necesitamos que todas las instituciones relacionadas con la investigación se acerquen más al campesino, puesto que hoy sólo responden a una política de los rubros más rentables, dejando a los pequeños agricultores sin asesoría técnica. Requerimos pequeños centros de desarrollo tecnológico a escala de la agricultura familiar campesina para que los agricultores tengan protagonismo. La tendencia mundial es que la investigación se realice en conjunto con los campesinos, es decir, que haya una investigación participativa.
Necesitamos también diversificar nuestra oferta productiva e intensificar los rendimientos. ¿Por qué hoy los agricultores venden sus propiedades a las empresas forestales? Porque no tienen otra alternativa, no tienen otra opción que vender sus tierras a las grandes empresas forestales que han avanzado en forma gigantesca, en muchos casos, devastando la pequeña agricultura.
El señor ENCINA (Presidente).-
Señor diputado, ha terminado su tiempo.
El señor SABAG.-
Para finalizar, sólo quiero decir que es necesario modernizar nuestra agricultura, para lo cual se requieren más recursos y mucho más personal.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Eugenio Tuma .
El señor TUMA.-
Señor Presidente, en verdad, creo que no hay una agricultura en crisis, sino campesinos en crisis, porque no cuentan con el apoyo del Estado para superar la situación que están viviendo desde hace muchos años.
No quiero responsabilizar al Ministerio de Agricultura de que miles de campesinos no reciban ayuda del Estado porque no está definido que el Ministerio de Agricultura deba hacerlo. Cuando algunos parlamentarios hacemos gestiones para conseguir recursos para los pequeños agricultores, para la agricultura familiar campesina, con el objeto de ayudarlos a superar las limitaciones que tienen para comprar los fertilizantes que en los últimos dos años han subido de precio cuatro veces, se traspasan recursos al Ministerio de Agricultura que, a su vez, los distribuye entre los agricultores más conocidos que figuran en una nómina, lo que facilita que los funcionarios puedan atenderlos. Creo que los recursos que se les entreguen a través de los Prodesal les serán muy útiles. Pero, más lo necesitan los agricultores que no reciben ayuda de los Prodesal, los que no tienen posibilidades de créditos, de ayuda solidaria, etcétera.
Por eso, ruego a la ministra que, considerando las inundaciones que están afectando a las regiones del sur, en particular a la Novena, se entregue atención preferente a los pequeños agricultores que no pueden sembrar y que sólo pueden recurrir a una economía de subsistencia. De lo contrario, en noviembre o diciembre tendremos que ayudarlos con cajas de alimentos porque no tendrán qué comer.
En relación con los recursos que administra el Indap lo he conversado con la subsecretaria, en el próximo proyecto de Ley de Presupuestos debe incluirse una glosa especial que considere recursos frescos, separados, sin necesidad de recurrir a los fondos corrientes de que disponen los distintos organismos del Estado, como los ministerios del Interior y de Agricultura. Deben considerarse recursos para atender las situaciones de emergencia con rapidez y flexibilidad.
Por último, las sequías que vivimos este año no se debieron sólo a falta de lluvias, sino a que el Estado no dispone de una infraestructura de riego adecuada que permita atender a los miles de pequeños agricultores que se ven imposibilitados de recibir ayuda, de manera que, aun con sequía, puedan disponer de agua suficiente, igual que los grandes agricultores, que con la ayuda del Estado sí pueden regar y, por lo tanto, tener pasto.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Ramón Barros .
El señor BARROS.-
Señor Presidente, ante todo, quiero saludar a la ministra de Agricultura, a la subsecretaria y al ministro subrogante.
Hemos sido citados para analizar algunos tópicos relacionados con la crisis que está viviendo la agricultura.
Potencia agroalimentaria, ha sido el emblema del actual Gobierno, en relación con la gestión agrícola. Para adentrarse en la problemática del sector agrícola hay que entender que la actual crisis dice relación con su rentabilidad, porque el incremento de los costos no ha sido compensado, durante muchos años, con el precio de venta de los productos. Además, la luz de esperanza que afloró este año para algunos cultivos como el trigo y el maíz se apagó rápidamente por el alza impresionante que han experimentado los insumos y los servicios, lo que ha generado nuevamente un escenario que nos hace recordar la historia que nos tocó vivir durante los últimos años: la escasísima rentabilidad del sector agrícola.
Por otra parte, me parece preocupante el excesivo tiempo que ha dedicado el Ministerio a resolver problemas menores. Por ejemplo, no me parece bien que la ministra de Agricultura reemplace al señor Roa , del Sernac, y haga una comparación del precio que tiene una lechuga en el Jumbo y en el Líder. No me parece bien, porque si existe un organismo para eso además, el señor Roa lo hace muy bien, no está bien que la ministra ocupe su tiempo en obtener prensa, informando a los chilenos si una lechuga cuesta más en el Líder, en el Jumbo o en el mercado de Lo Valledor. Creo que en nuestro país hay problemas mucho más importantes de los cuales hay que hacerse cargo como, por ejemplo, el desarrollo agrícola.
Durante el último año hemos visto que la ministra y su equipo decretaron rápidamente estados de emergencia agrícola en alrededor de 300 comunas, procediendo a entregar bonos de toda índole. A mi juicio, algunos eran muy necesarios; pero, lamentablemente, según mi entender y el de muchos, la rigurosidad que ameritaba la situación, en orden a entregar esos bonos, no fue, por decirlo en forma delicada y reiterativa, de lo más rigurosa.
Eso lo planteé en alguna oportunidad en la Comisión. Hay personas que, mereciendo recibir, no recibieron nada, mientras otros recibieron mucho sin merecerlo. Ese procedimiento se debe corregir. Lo digo sin el ánimo de criticar, sino porque son temas que debemos tratar, y así lo he planteado en la Comisión, como corresponde.
No he hecho públicas estas cosas, porque no me parece que debamos tratarlas por la prensa. En efecto, ya que hemos alcanzado entendimiento y la ministra concurre a la Comisión, es ahí donde hay que plantear las inquietudes, porque es de seriedad básica hacerlo de esa forma.
Con el correr de los días, nos dimos cuenta de que la situación fue enfrentada, lamentablemente, con la reducción de programas permanentes. Por ejemplo, algunos han mencionado la reducción en el programa de recuperación de suelos degradados, lo que, como es obvio, genera desconcierto y molestia entre los beneficiarios de dichos programas, que ven con decepción la falta de recursos para sustentar planes permanentes.
Si Chile quiere transformarse en una potencia agroalimentaria, debe tener un ministerio técnico potente. Se requiere personalidad para exigir un presupuesto acorde a los objetivos planteados. Problemas como la lobesia botrana, la dioxina en los cerdos, los eventos climáticos, los constantes requerimientos que hacemos al SAG con motivo de los tratados de libre comercio, dejan de manifiesto la fragilidad del presupuesto del Ministerio de Agricultura, situado hoy alrededor del 1,3 por ciento del presupuesto nacional. Así no podemos tener potencia agroalimentaria, y eso no es culpa de la ministra.
Estamos dispuestos a dar una pelea en ese sentido. Chile es un país en el que amplios sectores viven de la agricultura. Por lo tanto, debemos esforzarnos para que sea una potencia agroalimentaria, para lo cual necesitamos un ministerio potente.
Hay sectores en los cuales la relación entre distintas actividades productivas está causando estragos. Me refiero a sectores, por ejemplo, que tienen consolidada su producción de vinos finos, de frutas de exportación, pero que se ven invadidos, por ejemplo, por la producción de cerdos y aves.
Desde hace mucho tiempo estamos tratando la zonificación y me gustaría saber cuáles son las condiciones para evitar problemas a ambos sectores productivos. Valles como Napa , Sonoma , Quebec o Burdeos tienen zonificaciones en las cuales un sector ya está consolidado en el turismo, en el vino, en equis producto. No pueden ser proyectos para emprender.
El fin de semana pasado, en la comuna de Palmilla, fui testigo presencial cuando una planta de riles se reventó. Si hubiera habido algún extranjero, o si yo fuera extranjero, nunca más compraría un producto de ese sector.
En ese sentido, debemos avanzar, porque se trata de una tarea mucho más importante que el precio de las lechugas en el Jumbo y el Líder.
Por otro lado, hay temas básicos, como los que he planteado, a los que el Ministerio no asigna importancia alguna. Incluso, la ministra se contradice respecto de su discurso ante la Sociedad Nacional de Agricultura, SNA, de mayo pasado, con la forma en que hablamos en tono saludable y amigable.
Es fundamental la creación de un fondo de emergencia agrícola para obtener recursos. Los productores agrícolas, independientemente de su tamaño, deben batallar no sólo con los problemas técnicos propios de su actividad productiva, sino, además, con los avatares de la naturaleza.
En eso no se puede improvisar. Por lo tanto, se deben institucionalizar las respuestas del Gobierno para que el país logre ser una potencia agroalimentaria. Hay que adoptar medidas distintas, no sólo reaccionar, lo que muchas veces lleva a improvisar y cometer muchos errores.
Se debe garantizar, además, una mejor competitividad. Eso implica establecer mecanismos que eviten con fuerza las distorsiones del mercado externo o la baja del dólar, que ha afectado en forma dramática el desarrollo de la agroexportación. Esto ha generado, sólo en el valle que represento, sobre 1.500 hectáreas de frutales y viñas que se han arrancado, que han vuelto a los cultivos tradicionales, lo que implica pérdida de puestos de trabajo.
El Ministerio debe ser más protagonista, puesto que, de lo contrario, no conduce al desarrollo del sector.
Preocupa, por último, el regreso a políticas asistencialistas, como la entrega de bonos sólo a algunos agricultores, que se manifiestan con mayor fuerza e históricamente en períodos preelectorales, como en 2004 y 2005; luego, por el escándalo que se produjo, se suspendieron.
Ahora, nuevamente se plantea la entrega de bonos agrícolas. Me carga que se manosee a los agricultores en tiempos preelectorales. Creo que se debe ayudar a la agricultura con cariño, en forma técnica. No podemos estar, permanentemente, ante dos años de elecciones, ofreciendo 60, 80 ó 100 lucas. Además, como bien dijo el diputado Meza , el Prodesal lo dirigen alcaldes de uno y otro lado, que manejan absolutamente a su arbitrio y sin la más mínima fiscalización la entrega de los bonos. Por eso se produce el descontento y la angustia al ver cómo algunos alcaldes, de uno y otro lado me consta, benefician a sus amigos, muchos de los cuales a veces ni siquiera son agricultores. Sin embargo, como vienen elecciones y se requieren los votos, se incurre en esa clase de prácticas quiero ser honesto en un sector y en otro. Creo que eso hay que pararlo definitivamente.
Por último, señor Presidente, por su intermedio quiero expresar a la ministra mi actitud permanente de colaboración en todos los planes en los cuales se requiera nuestro apoyo.
Debo reconocer que me ha dado pena, en algunos casos, haber sido franco al plantear determinadas situaciones, para luego saber que todas las soluciones se canalizan por otras vías. Sin embargo, eso no me amilana. Como paso todo el día en el campo, tengo la tranquilidad de que cumplo lo que prometo. Los agricultores son mis amigos, me convidan siempre a todas partes, no necesito que me inviten las autoridades. Siempre voy a estar con ellos, porque para eso me eligieron; ellos me formaron, me educaron, me dieron su amistad. Voy a seguir viviendo junto a ellos, y la única razón por la cual estoy en la Cámara de Diputados es para defender a productores y pequeños productores, como mis vecinos, y defender el mundo rural, que reitero, más que un negocio, es una forma de vida, de la cual me enorgullezco de formar parte. Ésa es la razón por la cual hoy hablo con sinceridad y fuerza.
He dicho.
Aplausos.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Rosauro Martínez .
El señor MARTÍNEZ.-
Señor Presidente, en días pasados, los integrantes de la Comisión de Agricultura adoptaron dos resoluciones que reflejan muy bien la situación que estamos viviendo.
Primero, acordaron no continuar el estudio de los proyectos existentes en la Comisión mientras el Gobierno no restituya los recursos económicos del sistema de incentivos para la recuperación de suelos degradados.
Segundo, acordaron solicitar a su excelencia la Presidenta de la República una audiencia con el objeto de concordar políticas así lo dice el oficio para enfrentar las urgentes dificultades por las que atraviesa el agro chileno; abordar la necesidad de que los recursos para enfrentar las emergencias, que se repiten con periodicidad en el sector, estén considerados en el presupuesto de la nación, para evitar el menoscabo de los programas permanentes del Ministerio de Agricultura, y realizar una evaluación de los compromisos presidenciales asumidos respecto de la agricultura familiar campesina.
Ambas acciones, acordadas por unanimidad en la Comisión de Agricultura, revelan preocupación general, por la sencilla razón de que las cosas no se están haciendo bien, y eso va más allá de las sensibilidades políticas de cada uno. Afortunadamente, existe coincidencia en que la situación es compleja y que, por tanto, requiere de una acción decidida del Gobierno para encauzar el rumbo. De lo contrario, no sólo no vamos a cumplir el desafío que tenemos y que nos involucra a todos, sino que debido a la actual coyuntura mundial, enviaremos a muchos de nuestros compatriotas directamente a la pobreza.
Aquí hay dos elementos en juego. Uno, de naturaleza económicoproductiva: ser potencia agroalimentaria. El otro, de carácter social, derivado del aumento y la volatilidad de los precios de los productos de primera necesidad.
Al respecto, es oportuno recordar, como lo hice la semana pasada en el Congreso chileno de desarrollo rural, organizado por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura, Iica , el impacto que está provocando esta situación en el país. Para ello, recurrí a las palabras del profesor Óscar Melo , académico de la Universidad Católica, quien señaló, con mucha propiedad, que “todos los países han perdido un poco de competitividad, pero Chile ha sufrido alzas más importantes”.
Lo más preocupante son sus efectos sociales. Se estima que esto podría aumentar el número de pobres en 350 mil personas aproximadamente, debido al círculo que se produce en países como el nuestro, en el que el incremento de los costos de producción fertilizantes, combustibles y otros genera inflación. Esta situación, al impactar en el precio de los alimentos, también provoca inflación y, por ende, afecta el crecimiento, lo que se traduce, finalmente, en pobreza. La razón radica en el alto porcentaje que las familias pobres destinan a este rubro.
Si existe coincidencia respecto de lo mucho que se juega el país y que esta realidad va mucho más allá de la lógica GobiernoOposición dicotomía que no está entre mis preocupaciones, porque comprendo muy bien que si nos equivocamos y seguimos con esta mirada complaciente de justificarlo todo, nadie gana ¡al contrario, todos perdemos!, ¿por qué no avanzamos? ¿Qué nos falta para potenciar nuestro desarrollo agrícola?
La respuesta, hay que decirlo con franqueza, es por falta de voluntad política y la existencia de una concepción equivocada en la aplicación de las iniciativas que se diseñan que, por lo general, responden más a esfuerzos particulares que a una visión integral derivada de una política agrícola real, de Estado.
Como no podemos vivir de lamentos y de diagnósticos, debiéramos enmendar el rumbo. Por eso, solicito a la señora ministra la adopción de las siguientes medidas:
1. Reponer de inmediato el marco presupuestario del SAG del año 2008.
2. Garantizar que se respete el equilibrio presupuestario entre el Indap y el SAG en partes iguales.
3. Concentrar la ayuda sólo en fósforo y cal, porque corresponde a lo que permite la Organización Mundial del Comercio, OMC. El resto sólo se presta para dudosos resultados, abusos y manejo político.
4. Que el Sistema de Recuperación de Suelos Degradados, Sirsd , se concentre esencialmente en la zona sur y se respete su sentido original, cual era compensar a los pequeños y medianos agricultores por la firma del Mercosur y la rebaja arancelaria.
5. Que, tal como plantea el proyecto de acuerdo que presentamos, se envíe una iniciativa destinada a administrar los recursos derivados del Sirsd y así garantizar por ley su financiamiento.
6. Suspender la aludida resolución Nº 2.238.
7. Mantener y complementar las tres barreras actuales en los otros dos puntos ya conocidos.
8. Implementar horarios flexibles y variables, conforme al comercio que se detecte.
9. Modificar las disposiciones legales para aumentar sustancialmente el valor de las multas, incluyendo la requisición del camión, por atentar contra un bien nacional de carácter público.
10. Disponer de barreras modernas, con estándares y señalética acorde con la importancia del tema, y evaluar la conveniencia de un sistema mixto temporal, a fin de evitar todo riesgo innecesario para nuestro patrimonio sanitario.
Espero que de una vez por todas se apunte a las necesidades reales del sector y que, más allá de las visiones de cada uno, trabajemos por la implementación de medidas eficaces para hacer realidad lo que queremos para el país y, por cierto, enfrentar con urgencia el tema alimentario y las consecuencias sociales que conlleva.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Quintana .
El señor QUINTANA .-
Señor Presidente, aquí se ha hablado de la “crisis del agro” lo dice la convocatoria, pero no sé si los parlamentarios estamos llamados a realizar esa calificación. Sin embargo, sé que la agricultura está pasando por una situación muy delicada, especialmente en el sur del país.
De lo manifestado en el debate, concluyo que hay dos visiones, respecto de dos agriculturas completamente distintas, lo que me preocupa. Una es la agricultura de exportación, competitiva, que se encuentra del Maule hacia el sur, como dicen algunos, que no tiene nada que ver con la otra, ubicada más al sur. En la medida en que no se adecue la institucionalidad a esa realidad distinta, y la materia no se aborde de manera correcta, subsistirán los problemas.
Me referiré en forma telegráfica a la emergencia. Al respecto, es necesario destacar la buena disposición de la ministra, que siempre ha estado preocupada de las diferentes situaciones que ha vivido el país, sobre todo la zona sur debido a las inclemencias. Sin embargo, muchas veces los instrumentos que se han diseñado como respuesta no sé si la razón podrá encontrarse en Hacienda no han sido suficientemente eficaces. Prueba de ello es que los recursos asignados para paliar la emergencia provocada por el déficit hídrico en enero llegaron a algunas personas ahora en invierno, y miles de familias sencillamente no los han recibido.
Respecto del riego, debo decir que está dirigido a los agricultores medianos y grandes. En efecto, para tener acceso al apoyo del Estado se requiere contar con la respectiva prefactibilidad, y los estudios de preinversión los hacen quienes disponen de recursos.
Por esa razón, después que se construyeron los canales de riego Faja Maisan y 21 de Mayo, en La Araucanía no se ha podido abordar el gran tema relacionado con el canal de riego Chufquén , que beneficia a los pequeños agricultores que carecen de recursos para los estudios de la prefactibilidad.
En cuanto a las dificultades para sembrar en las regiones del sur tal vez ahí reside la crisis debido a la inflación y a que se han triplicado los precios de los insumos agrícolas, es un problema que no se resuelve con los 8.000.000.000 de pesos que se anunciaron.
Comparto lo que señalaron colegas de La Araucanía y de otras regiones del sur, sobre todo lo que dijo el diputado Fernando Meza en relación con lo que ocurre en nuestra región, donde existe una excesiva politización y falta de rigurosidad técnica de algunos organismos del agro, según sus palabras. Sin embargo, no comparto sus dichos en cuanto a que los alcaldes estarían haciendo uso político por medio del Prodesal. Me refiero al bono predial que acaba de ser anunciado por el Gobierno.
He conversado con alcaldes de mi distrito, quienes me han dicho que la situación es todo lo contrario. Es inquietante lo que están haciendo, porque están tomando distancia en esta materia debido a que saben que existe un problema. En comunas como Galvarino, el bono predial alcanzará para 300 pequeños agricultores y 2 mil quedarán sin ayuda, por lo que no podrán sembrar; tendrán que cambiar su cultivo a avena y no podrán vender lo poco que comerciaban. Eso sucede por no sembrar en invierno y tampoco durante la primavera, todo lo cual redundará en el precio del trigo y del pan, y en la inflación del segundo semestre.
El alcalde de Lautaro me dijo que la plata asignada a su comuna alcanzará para 400 pequeños agricultores adscritos al Programa de Desarrollo Local, Prodesal , pero que 3 mil quedarán sin beneficio. En consecuencia, enfrenta un problema serio.
Por eso, es muy difícil que los alcaldes, de cualquier signo, hagan política en esa materia. Tomarán distancia y esto quedará a lo que resulte.
Valoro el enorme esfuerzo realizado por la ministra de Agricultura. He visto la prontitud con que ha llegado a Lonquimay, Melipeuco y otras comunas, con su equipo de apoyo, en los momentos más duros de las emergencias. Pero hoy se requiere el bono predial. Es probable que sea necesario disponer de más recursos. En caso contrario, miles de pequeños agricultores no podrán sembrar.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra la diputada señora Alejandra Sepúlveda .
La señora SEPÚLVEDA (doña Alejandra).-
Señor Presidente, en primer lugar, saludo a la ministra de Agricultura y a los subsecretarios presentes.
Respecto de la situación en análisis, creo que no nos queda más que suspirar. Cuando la Presidenta asumió la Primera Magistratura y llegó a La Moneda, nombró a distintos ministros. No tengo nada personal contra nadie, pero echo de menos al ministro Rojas, porque era un hombre con el cual podíamos tener diferencias, pero era posible discutir y analizar técnicamente los problemas.
Perdóneme, señor Presidente, pero su señoría me conoce: me cuesta hablar de agricultura sin decir absolutamente la verdad.
En términos personales, no tengo nada en contra de la ministra; pero, para hablar de agricultura el subsecretario conoce muy bien esto, necesitamos gente que sepa lo que significa el sector. Me preocupa que cada día el ministerio pierda más su consistencia. Hoy, ¿qué es? ¿El ministerio de la emergencia? ¿El ministerio que distribuye la pobreza? ¿O se trata del Ministerio de Agricultura, que hace fomento productivo? Ésa es mi complicación.
Cuando me refiero a esa pérdida de consistencia, estoy diciendo que el SAG se complica con el Ministerio de Salud en relación con la dioxina; que la Fundación para la Innovación Agraria, FIA, se nos enreda en materia de innovación con la Corfo, ya que ahí está la plata; que la Conaf se enreda con el ministerio respectivo en relación con los espacios naturales o protegidos. Hoy, esas muchas cosas que se enredan no permiten al ministerio tener consistencia, de manera de saber hacia dónde va. Ésa es mi dificultad. Por eso, el problema es más profundo que aplicar el programa de recuperación de suelos o poner en ejecución el Prodesal. ¡Eso da lo mismo si se sabe hacia dónde se va! Pero ¿hacia dónde vamos? Señor Presidente, por su intermedio quiero expresar a la subsecretaria que se necesita decisión y voluntad política para ir en defensa de la agricultura, en especial, de la pequeña agricultura. Esta actividad produce el alimento. Por lo tanto, al contar con ese apoyo podría bajar el IPC y mejorar las tasas de empleo, ya que es el sector que produce el mayor número de puestos de trabajo.
Entonces, reitero, se necesita una decisión política para defender a los agricultores y los recursos.
Tengo serias discrepancias con el presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura, Luis Schmidt , en términos conceptuales y de planificación respecto de lo que hay que hacer en el Ministerio de Agricultura. Sin embargo, sí estoy de acuerdo con él en cuanto a que existe un virtual estado de quiebra. En su momento, el subsecretario de Agricultura dijo que faltaban 25 mil millones de pesos en el ministerio, que se ocuparon en emergencias. Son cifras de esa Secretaría de Estado. Eso fue lo que nos dijeron en la Comisión.
¡Por favor, no me respondan con los 8.000.000.000 de pesos que se destinarán a la entrega de bonos! Digámoslo con toda claridad: el bono es solamente para autoconsumo. Lo digo, porque participé con productores en la Mesa del trigo, de la Novena Región. Repito: ese bono no es productivo ni ayudará a mejorar el actual déficit.
Señor Presidente, su señoría sabe que la agricultura me apasiona. Para eso vine a la Cámara, no para otra cosa.
Hoy, en mi región existe cero inversión en materia de revestimiento de canales y riego. Me preguntó si alguien en la Sala tiene alguna apreciación diferente al respecto. Actualmente, no hay presupuesto para aspectos tan importantes como el riego y la recuperación de suelo.
El señor ENCINA (Presidente).-
Terminó su tiempo, señora diputada.
La señora SEPÚLVEDA (doñaAlejandra).-
Señor Presidente, si seguimos así, las cosas estarán mucho más complicadas el próximo año.
Finalmente, llamo a la señora ministra a preocuparse del personal del ministerio, porque lo está pasando muy mal.
He dicho.
-Aplausos.
El señor ENCINA (Presidente).-
En el tiempo del Comité Socialista, tiene la palabra, el hasta por cuatro minutos, el diputado señor Enrique Jaramillo .
El señor JARAMILLO.-
Señor Presidente, agradezco al Comité Socialista por los minutos que me concedió.
También agradezco la presencia de la señora ministra, quien siempre está dispuesta a tratar de solucionar las dificultades que aquejan a la gente del agro.
Deseo expresar con mucha fuerza no espero sacar aplausos ni mucho menos que la agricultura no está en crisis. Debemos alegrarnos por contar con tecnología avanzada. Sin embargo, es necesario adecuarse al momento que vive el mundo en materia de producción de alimentos.
Como el tiempo es corto, voy a ir directo al grano. Deseo referirme al programa de suelos degradados, tan vapuleado. Junto con el ex senador Páez , fuimos autores de esa gran iniciativa, que hoy es el centro de discusión y preocupación de tantos. El programa está funcionando en la Región de Los Ríos y, en relación con Indap no se le han quitado los fondos, de lo cual soy testigo.
Me alegró escuchar a un colega que hay que referirse al problema relacionado con los carteles de los fertilizantes. En esa materia es necesario hacer una tremenda fiscalización, tarea en la que también cabe una gran responsabilidad al Ministerio de Agricultura. Dichos carteles de los fertilizantes están provocando un enorme daño en relación con los costos de producción.
Señor Presidente, dado que está próxima la discusión del proyecto de ley de Presupuestos de la Nación, por su intermedio deseo solicitar a la señora ministra su especial preocupación respecto de los programas de riego, que son fundamentales en el sur. Allí los pequeños y medianos agricultores lisa y llanamente no son beneficiarios de programas de apoyo. Los grandes agricultores cuentan con agrónomos y técnicos que los asesoran para hacer sus proyectos. Por lo tanto, son los grandes beneficiarios en materia de riego. Pero es hora de que las autoridades se preocupen de que los beneficios también lleguen a quienes menos tienen.
Otro tema de especial preocupación para quien habla, porque lo conocí en décadas anteriores en mi calidad de entonces dirigente gremial del agro, dice relación con la masa ganadera. Desde hace más de diez años existe el mismo número de animales, es decir, una masa ganadera de menos de cuatro millones de ejemplares. Para un país que crece, ese aspecto debiera constituir una tremenda preocupación.
Hace algunas décadas existió un banco ganadero. Por lo tanto, como está próxima la discusión del proyecto de ley de Presupuestos de la Nación, invito a las autoridades del Ministerio de Agricultura a reflexionar sobre el tema. En ese sentido, sería importantísimo ayudar al pequeño agricultor mediante la entrega de un par de vaquitas y algunas ovejas. En el pasado, el banco ganadero fue esencial para el desarrollo de la pequeña agricultura. En consecuencia, se necesita contar con el banco ganadero y con apoyo en materia de riego, aspectos fundamentales para seguir creciendo.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Ojeda .
El señor OJEDA.-
Señor Presidente, coincido con que el objeto de la sesión no es analizar la grave crisis que atraviesa la agricultura. Tal vez, la finalidad de la citación podría haber sido, por ejemplo, establecer los fundamentos para una política que constituya a Chile en una potencia alimentaria. De ese modo, habríamos enfocado el tema desde una perspectiva macro y también abordado sus detalles.
Curiosamente, la mayor parte de los ministros que han dejado sus cargos han recibido aplausos. Por ejemplo, don Jaime Campos , del Partido Radical, recibió un galardón de la Sociedad Agrícola y Ganadera de Osorno, Sago , por su excelente desempeño como ministro de Agricultura. Por su parte, el ministro Álvaro Rojas a quien se echa de menos también recibió el reconocimiento de todos los agricultores. La actual ministra, señora Marigen Hornkohl , no lo ha hecho mal. De hecho, algunos diputados han reconocido su labor. Por mi parte, debo señalar que he mantenido una comunicación fluida y directa con la actual secretaria de Estado, lo que es positivo. De igual manera, ella ha mantenido una buena relación con los agricultores.
Me referiré a las materias tratadas en la 14ª reunión ordinaria del Consejo Agropecuario del Sur, CAS.
Todos los ministros concluyeron que el alza del precio de los alimentos a escala internacional forma parte de un nuevo escenario que presenta oportunidades y amenazas para la región. Todos los países integrantes del CAS son autosuficientes en la producción de alimentos, importantes exportadores agrícolas y pueden ser considerados como grandes potencias alimentarias.
La región es una de las pocas del planeta que está en condiciones de aumentar rápidamente la producción de alimentos, de modo de atender la creciente demanda mundial. Sin embargo, las alzas en los precios de los alimentos afecta el bienestar de los sectores más vulnerables de nuestra sociedad, lo que abre un doble desafío: refuerza la necesidad de redistribución del ingreso, a fin de garantizar el acceso a los alimentos, e incrementa y diversifica la oferta alimentaria.
Es necesario hacer presente que estos desafíos aparecen en un contexto de incertidumbre de los mercados, costos crecientes de los insumos y mayor presión sobre los recursos naturales. Las medidas tendientes a hacer efectiva la redistribución y el acceso a los alimentos son de exclusiva incumbencia de los gobiernos nacionales.
Por ello, es importante que el Gobierno impulse medidas que tiendan a transformar a Chile en una potencia alimentaria. Ese esfuerzo debe estar exento de discriminación. Por el contrario, debe existir un tratamiento ecuánime para todos los sectores agrícolas. Los medianos y pequeños agricultores son los que más sufren las contingencias de la agricultura, naturalmente en las zonas donde se emplaza esa actividad.
Difícilmente podrá encontrarse en el pasado reciente un año con tantas emergencias climáticas, volcánicas y sanitarias como éste. A pesar de ello, no se ha dejado de avanzar y ha habido situaciones muy bien manejadas por el Gobierno.
No se puede aspirar a ser potencia alimentaria si el Gobierno, por ejemplo, resta recursos para la recuperación de los suelos degradados, tema sobre el cual se ha hecho hincapié durante la sesión. También es necesario que los pequeños y medianos agricultores accedan a un bono, para lo cual se han destinado recursos por 8 mil millones de pesos. Es cierto que se han planteado algunas objeciones respecto de ese tema. Con todo, es necesario que sea entregado tanto a los que se encuentran adscritos al Prodesal como a los independientes.
Existe un grupo de pequeños campesinos, los chacareros, que viven con lo mínimo. Por ello, se hace necesario ayudarlos. No podemos estar tranquilos o conformes sabiendo que ese sector ni siquiera es considerado desde el punto de vista electoral. Son grupos muy pequeños, de mucho sacrificio, que se ven muy afectados cada vez que se producen cambios climáticos. Por ello, solicito que esas personas sean atendidas en mejor forma.
Así como hemos enfrentado el problema de la leche, de la carne y del trigo, con el concurso de todos los chilenos podremos solucionar las dificultades que todavía subsisten en nuestra agricultura.
He dicho
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra el diputado señor Álvarez Salamanca .
El señor ÁLVAREZ-SALAMANCA.-
Señor Presidente, la situación de los fertilizantes requiere de la máxima preocupación de las autoridades de Gobierno, dada la ostensible diferencia que presentan los precios nacionales respecto de los internacionales, al punto de que, desde 2007, su precio se ha incrementado en Chile a niveles hoy insostenibles para los productores agrícolas. Incluso más, en algunos casos, han llegado a tener un aumento del 200 por ciento.
A mi juicio, estamos en presencia de un verdadero cartel, en que algunos cuantos importadores, no más de cinco, y el gran productor de salitre chileno, la Sociedad Química y Minera de Chile, Soquimich , se ponen de acuerdo en los precios y el asunto termina con montos impagables.
Creo que estamos ante una violación muy clara de la libre competencia, regulada por el DFL Nº 1, de 2005, del Ministerio de Economía, Fomento y Reconstrucción, que fija el texto refundido del decreto ley Nº 211, de 1973.
Entiendo que un componente significativo del alza de los fertilizantes se vincula con los precios de importación, como ocurre en el caso de la urea, los superfosfatos y los sulfatos de amonio y diamónico. Sin embargo, en el caso del salitre, la situación no me parece explicable.
Cuando el precio del dólar estaba un 15 por ciento más bajo que hoy, los precios de los fertilizantes seguían incrementándose, y hoy se disparan a montos, como decía, insostenibles. A mi juicio, no hay relación explicable entre el precio del dólar y los precios de los fertilizantes.
Tengo antecedentes de que el precio promedio de importación de productos como el fosfato de amonio, los superfosfatos y la urea ha aumentado de manera significativa. Pero, en la misma línea, también puedo decir, que los precios internos reales de los fertilizantes al productor mostraron un crecimiento mucho mayor que el de los precios de importación, lo que afecta la competitividad y, obviamente, los precios que debe pagar el productor agrícola, lo que provocará que el veranito de San Juan que tuvieron los agricultores durante la temporada pasada desaparezca de una plumada.
Me gustaría que, tal como hizo la Comisión de Agricultura del Senado en forma unánime, la Cámara acordara hacerse parte de la investigación que efectuará la Fiscalía Nacional Económica sobre la materia, de manera que sus conclusiones sean enviadas a los parlamentarios.
He dicho.
El señor ENCINA (Presidente).-
Tiene la palabra la ministra de Agricultura, señora Marigen Hornkohl .
La señora HORNKOHL (ministra de Agricultura).-
Señor Presidente, más allá de la vehemencia, de las posiciones disímiles mostradas por los parlamentarios de las distintas bancadas y del enredo que se le produjo a la estimada diputada señora Sepúlveda , agradezco la convocatoria a esta sesión y el aporte hecho por todos los diputados y diputadas que participaron en su discusión.
El debate sostenido en esta sesión se relaciona con el rol clave y fundamental que hoy juegan las políticas de agricultura en todo el mundo como verdadero motor de desarrollo de las naciones. Ciertamente, el caso de Chile no es diferente. Por el contrario, la situación de la agricultura en el país es absolutamente distinta de lo que era hace 20 ó 25 años. De eso dan cuenta no sólo quienes saben del tema, sino también los miles de hombres y mujeres de campo que hoy ven que, gracias a su esfuerzo, existe una posibilidad real de desarrollo humano, personal y económico en ellos, sus familias y en nuestro país.
Hay quienes han hablado de una crisis en la agricultura chilena. Igualmente, hay quienes parecen estar atrapados en el pesimismo. En ese plano, junto con hacer un llamado a la tranquilidad, invoco seriedad y responsabilidad al abordar el tema. Estamos abiertos y dispuestos a las críticas. Ellas sirven y ayudan a mejorar, siempre y cuando sean serias, documentadas, alejadas de los malos augurios y con respaldo en la realidad.
Afortunadamente, las cifras entregadas por el Banco Central confirman lo que han dicho no sólo la Presidenta de la República o la autoridad económica, sino organismos internacionales, como el Fondo Monetario Internacional y la Cepal. El último informe sectorial del Banco Central demostró que la agricultura es un sector con fuerte dinamismo y que ése ha sido su comportamiento durante el primer semestre de este año.
El interés de los parlamentarios se relaciona con la capacidad de crecimiento y desarrollo de la agricultura. Por ello, no debemos perder el tiempo ni tampoco el enfoque, por lo cual es necesario llevar adelante una agenda sustantiva en estas materias. Compartiré con ustedes algunos rasgos de ella.
Las cifras hablan por sí solas. Tenemos un claro dinamismo en los indicadores de crecimiento, de exportaciones de productos, de importaciones de insumos y, en especial, de intenciones de siembra.
Con miras al bicentenario y en coherencia con la misión de hacer de Chile una potencia alimentaria y forestal lo han señalado algunos parlamentarios, el cono sur se encuentra en una situación privilegiada. En atención a que Chile tiene un rol muy prioritario en esta tarea, hemos abierto una agenda estratégica, clara, sustantiva e innovadora.
Por ello, quise prepararme como Dios manda por lo demás, es la tónica en todas las tareas que emprendemos en el ministerio, para lo cual diseñé una presentación especial para esta ocasión. A partir de ella podremos hacernos cargo de los datos y de las cifras mencionados por muchos parlamentarios. Sin embargo, también resulta útil tenerlas de manera ordenada e insertas en un marco conceptual.
La actividad silvoagropecuaria creció en 5,2 por ciento durante el primer semestre. Al 31 de julio, las exportaciones sectoriales también se incrementaron en 12,1 por ciento. La recepción de leche durante los primeros siete meses aumentó en 8,1 por ciento. Las intenciones de siembra indican que la superficie de cultivo aumentará en 6,1 por ciento en la temporada 20082009. Por su parte, a pesar de los costos, las importaciones de agroquímicos aumentaron en 23 por ciento y las de fertilizantes, en 20 por ciento.
Si se comparan las tasas de empleo del trimestre mayojulio de este año con las de igual período del año pasado, es posible señalar que éstas cayeron, lo que se traduce en 17 mil personas sin empleo. Sin embargo, quiero hacer hincapié en que la desocupación sectorial sigue siendo más baja que la nacional. Lo mismo ocurre con las tasas de crecimiento. Se trata de un dato no menor.
Estas cifras nos permiten ser optimistas de manera responsable. Hemos crecido y vamos a seguir creciendo. Vienen meses aún más auspiciosos. Por eso, quiero decir a los honorables parlamentarios que queremos trabajar más y mejor, y, sin duda, escucharlos.
En 2007, el sector agrícola creció en 3,5 por ciento. Ése fue un año en que no enfrentamos contingencias económicas internacionales, como las de este año, con las fluctuaciones del dólar y del petróleo, por ejemplo, ni tampoco tuvimos sequía.
Si seguimos mirando las tablas, apreciamos los aumentos de exportaciones, en que se advierte cuáles han aumentado más. Luego, hablamos de un sector que seguirá creciendo con intenciones de siembra, como lo venimos observando.
Ojalá que estos datos sean de utilidad para los honorables parlamentarios en su diario trabajo por mejorar a Chile.
Cuando vemos la evolución de los productos en julio del 2008, observamos asimismo que hay una variación positiva. Claramente, el mejoramiento de los precios también dice relación con el de las condiciones de quienes están dedicados a la productividad.
Veamos en seguida la evolución de los precios de los fertilizantes. Aquí hemos observado variaciones insospechadamente grandes y, por eso, pongo a disposición de los señores diputados lo siguiente:
En primer lugar, un estudio realizado por Odepa que da cuenta acuciosamente de lo que está ocurriendo en relación con el tema. Al respecto, ciertamente nos interesa la opinión de ustedes.
En segundo lugar, hemos solicitado a la Fiscalía Nacional Económica que haga la investigación correspondiente, porque también debemos ocuparnos de lo que ocurre en esta materia.
Finalmente, la semana pasada, cuando convoqué a los ministros de Agricultura del Mercosur, en mi calidad de presidenta pro témpore de la organización, nos abocamos a varios temas relativos al problema alimentario. Uno de los acuerdos más sustantivos que contrajimos con los ministros de Brasil, Uruguay , Paraguay , Bolivia y Argentina fue abordar el tema de los fertilizantes de manera conjunta, porque cuando hacemos política internacional en el mundo de la agricultura, lo hacemos también con miras a apuntalar a nuestra agricultura y a nuestros agricultores.
A continuación, podemos ver otros datos, como la producción por hectárea, en la que hay márgenes económicos bastante interesantes en las papas, en el maíz, en el trigo y el arroz, cifras que respaldan justamente que no estamos viviendo una crisis en la agricultura.
Además de la agenda, que es sustantiva, innovadora y de futuro, hemos debido apoyar a los agricultores afectados por el déficit hídrico, porque también debemos preocuparnos del que demanda, del que más necesita; no podemos dejar botado, sobre todo, al pequeño agricultor. Esto no es demagogia, no es politiquería; es hacerse cargo de la primera responsabilidad, de atender al que lo necesita. Por eso, declaramos a doscientas veintidós comunas bajo emergencia agrícola. Al respecto, quiero saber si hay aquí algún parlamentario que se opuso en el momento en que todos necesitaban.
Hoy, claro, hemos superado la sequía, pero pareciera que hubiéramos olvidado la angustia de tanta mujer y tanto hombre del agro que requería nuestro apoyo. Fueron atendidas ciento diez mil familias. El monto ejecutado ascendió a 16.700 millones de pesos, de los cuales más de 12.400 millones fueron entregados directamente a los usuarios afectados. El resto ustedes lo saben se distribuyó mediante sistemas transparentes y ordenados, de concursos especiales del programa de suelos degradados y de concursos extraordinarios de riego por montos por adjudicar de más de tres mil diez millones de pesos y de mil trescientos millones de pesos, respectivamente.
Adicionalmente, de los 16.706 millones de pesos, cerca del 58 por ciento se concentró en las regiones del sur. (Curiosamente, se trata de aquéllas desde las cuales hemos recibido grandes críticas). En Biobío, por un monto total de más de tres mil quinientos millones de pesos, que representa el 21,45 por ciento del total; en La Araucanía, por un monto total de tres mil trescientos noventa y seis millones de pesos, que representa el 20,32 por ciento del total; y en Los Ríos y Los Lagos, que concentran el 16,48 por ciento del total, por más de dos mil setecientos millones de pesos.
Los principales instrumentos ejecutados por región fueron los concursos extraordinarios por sequía de la Comisión Nacional de Riego, el sistema de recuperación de suelos degradados del SAG y el bono de emergencia de Indap.
El segmento “Otros” considera bonos para obras menores de riego y praderas suplementarias; subsidios de siniestralidad de Indap, operativos sanitarios del SAG y el programa de empleos de emergencia agrícola de Conaf.
Señor Presidente, hemos enfrentado de manera oportuna, exitosa y eficiente emergencias climáticas, volcánicas y sanitarias, y, sin embargo, no hemos dejado de avanzar en lo sustantivo que aquí se nos demanda. Me parece bien que se haga.
En los últimos ocho meses, hemos sido capaces de responder a contingencias muy duras que han golpeado a la agricultura. Por ejemplo, una de las sequías más severas de los últimos años; entrega de recursos, alimentos y soporte para el traslado de animales de los ganaderos de las zonas afectadas por los volcanes Chaitén y Llaima ; combate contra la mosca de la fruta; recursos y asistencia a los agricultores de la zona central para el combate de la lobesia botrana o polilla de la vid.
Esto lo hacemos y lo seguiremos haciendo con ganas, con entusiasmo, porque nuestra agricultura también debe ser protegida.
También es preciso decir que tenemos la casa ordenada. El presupuesto del Ministerio de Agricultura para 2008 que los señores parlamentarios conocen muy bien, porque lo aprobaron el año pasado, de trescientos treinta y tantos mil millones de pesos, casi seiscientos millones de dólares, ha recibido cuarenta mil millones de pesos adicionales; es decir, 13 por ciento más que lo aprobado por el Congreso Nacional. Al 31 de julio de 2008, la ejecución del presupuesto ministerial era de 52 por ciento, cifra superior a la histórica. En 2006 y 2007, a esa misma fecha, esa ejecución alcanzaba el 45 por ciento.
Hay un cuadro los señores parlamentarios pueden disponer de él en relación a las variaciones presupuestarias de 2008, en millones de pesos.
Pero también quiero hablar del futuro y de lo que estamos haciendo en la agenda sustantiva. ¿Cuáles son los avances de la agenda estratégica 20082010? Hemos diseñado y puesto en marcha el cluster de los alimentos. Me refiero a rubros productivos específicos en los cuales, en conjunto con el Ministerio de Economía, la Corfo y las instituciones del Estado vinculadas a la innovación, hemos trabajado en diseñar un foco de atención especial en frutas y hortalizas, en alimentos procesados, en aves y cerdos, en bobinos, en vinos y, en el futuro, en la leche.
Al respecto, quiero hacer una aclaración. Quien sabe sobre política pública, sabe que debe coordinar y debe atender distintos ámbitos al mismo tiempo. Aquí no se trata de mirar una política desde un punto de vista meramente lineal y de arriba hacia abajo, sino intersectorialmente, y de manera integral, hacerse cargo de las tareas. Eso es lo que estamos haciendo.
Hemos perfeccionado y ampliado el seguro agrícola, instrumento importante ante la contingencia; pero, por sobre todo, un instrumento importante cuando debemos crear una agricultura del conocimiento, de la autosustentabilidad, del futuro, como motor de desarrollo, de manera que nuestros agricultores sean verdaderos emprendedores, empresarios y productores, y no solamente sujetos de políticas asistenciales del Estado.
El seguro agrícola ya ha crecido en 15 por ciento, gracias a recursos fiscales que hemos adicionado para ampliar su cobertura, los tipos de riesgo y los sectores geográficos que cubre.
Estamos concluyendo el programa de rehabilitación de morosos del Indap. Hasta el momento, siete mil pequeños agricultores han sido rehabilitados y dos mil están listos para suscribir su rehabilitación total y seguir siendo beneficiarios de tan importante institución.
Hemos fortalecido el programa de riego, con más de dieciséis mil millones de pesos para 2008, además del presupuesto regular. Los honorables diputados lo saben muy bien. El próximo año, en sus distritos y regiones, verán como muchos se benefician con obras de riego, que permitirán abordar los problemas de agua en forma estructural y no sólo responder a las circunstancias de la sequía.
Hemos abierto importantes mercados de exportación: lácteos, carne de cerdo, cerezas y ciruelas a China; carnes de ave y cerdo a Singapur; naranjas y pomelos a Estados Unidos de América. Al respecto, aconteció un hecho de cual nada han dicho los medios de comunicación, no obstante tratarse de una buena noticia. Hace una semana, tuvimos de visita al viceministro de Agricultura de Estados Unidos de América, con quien, después de años de trabajo conjunto, sellamos la apertura total del mercado estadounidense para Chile, y viceversa. Esto significa integrarse a la economía del mundo con hechos concretos, y es el resultado del trabajo esforzado de todos nuestros agricultores.
Estamos poniendo en marcha un importante programa de mejoramiento de la competitividad de los granos de la pequeña agricultura; me refiero a los fertilizantes.
Aquí me detengo para hacer un comentario al respecto. Se trata de los 8 mil 500 millones de pesos adicionales que anunció la Presidenta Bachelet hace algunos días, en la comuna de Bulnes. Son los nuevos recursos que ha puesto el Estado a través de la autoridad económica.
Con todo, no vamos a perder el foco. Es cierto, tuvimos que ocupar recursos destinados originalmente a los medianos productores del sur para hacer frente a la polilla de la vid. Cuando hubo que reponer esos recursos, lo hicimos en magnitud muy superior, porque de allá se sacaron alrededor dos mil millones de pesos y acá se pusieron cerca de de 8 mil millones de pesos. Hemos decidido poner más a favor de los pequeños agricultores, de la agricultura familiar campesina.
Hemos escuchado con mucho respeto y atención a los diputados, porque sus opiniones son importantes y necesarias para nosotros. Su aporte para que Chile crezca y se desarrolle por medio de la agricultura, independientemente de sus posiciones, es necesario.
Por eso, espero que lo que resta de mi intervención sea escuchado con atención o, al menos, en silencio.
Decía que el programa de recuperación de suelos degradados del SAG sufrió un recorte. Sin embargo, el Gobierno decidió hacer un nuevo esfuerzo y puso recursos a disposición de los agricultores, no por una actitud asistencialista, como se me ha criticado. Curiosamente, algunos sectores critican nuestra preocupación por los más pobres. Pareciera ser que para algunos es mala política preocuparse de la redistribución del ingreso en el sector agrícola. Sin embargo, seguiremos poniendo recursos donde más se necesitan, de manera de dar oportunidades de surgir a más de 200 mil pequeños productores agrícolas, que son los que verdaderamente necesitan del apoyo de un país que crece y se desarrolla.
A mi juicio es lo que pensamos en el Gobierno, la mejor manifestación de solidaridad es que el Estado se haga cargo de los que nada tienen o de los que tienen poco; dicho de otra forma, que los que puedan hacerse cargo de sí mismos den la oportunidad para que el Estado haga lo que le corresponde.
Esa ha sido la lógica que ha imperado en muchas políticas públicas de nuestro Gobierno. Desde luego, la política de previsión social, para hacer frente a una sistema en el que cada cual se rascaba con sus propias uñas. Hoy, gracias a ustedes, señores diputados, tenemos un sistema solidario, que permite que el que no se puede autosustentar reciba el apoyo del Estado.
Lo mismo reza para otros campos. Por lo tanto, tenemos que ser solidarios para desarrollar la productividad, la innovación y el emprendimiento a favor de los que menos tienen.
También hemos diseñado y puesto en marcha distintos programas adicionales, como el de control y erradicación de la polilla de la vid, para proteger a muchos grandes, medianos o pequeños agricultores, que representan a Chile con sus uvas y sus vinos en el resto del mundo, calidad de la que también disfrutamos en el país. Otro programa es el de control y erradicación de la tuberculosis bovina.
Adicionalmente, hemos preparado importantes proyectos de ley relativos a la producción y comercialización de aceites de oliva, a derechos de los obtentores de nuevas variedades vegetales, a la continuidad de la ley de riego y a la creación de la Agencia Chilena de Inocuidad de los Alimentos. Por eso, esperamos que la honorable Cámara de Diputados, en especial su Comisión de Agricultura, luego de esta sesión retome el trabajo legislativo con nuestras iniciativas.
Para enfrentar el futuro y los desafíos que nos plantea el mundo, constituimos el Consejo de Cambio Climático y Agricultura.
Señalaré algunas tareas en las que pondremos énfasis en los meses venideros: conclusión del proceso de rehabilitación de la deuda morosa de Indap; incorporación de la industria láctea al cluster de los alimentos; envío al Congreso Nacional del proyecto de prórroga y perfeccionamiento de la ley de riego; lanzamiento de la política de desarrollo genético animal y vegetal; constitución de la unidad de consumidores en Odepa e implementación de la ley del bosque nativo, que tantos años de aporte y trabajo costó al Congreso Nacional; preparación del proyecto de ley para el Ministerio de Agricultura y la Alimentación; erradicación de la polilla de la vid; implementación, en conjunto con el Ministerio de Salud, del programa oficial de monitoreo de dioxinas; lanzamiento de la política nacional de inocuidad de los alimentos y constitución del Consorcio Tecnológico de los Alimentos Funcionales.
Esta lista, que parece interminable, constituye las tareas en que pondremos énfasis en los meses venideros. Cuando hablo de meses venideros, me refiero a lo que resta de este año y a la parte inicial del próximo. Nuestra agenda es más nutrida, y los miembros de la Comisión de Agricultura lo saben, como también lo saben los diputados que siempre han estado atentos a los temas relacionados con la agricultura, sea acompañándonos en nuestras visitas a regiones o aconsejándonos sabiamente. A ellos, muchas gracias.
Finalmente, me haré cargo de algunos comentarios e inquietudes que se han planteado en esta Sala.
Se nos preguntó por la necesidad de que exista un Fondo de Emergencia Agrícola. Al respecto, deseo expresar que quien habla preparó una propuesta, que está pronta a ser evaluada en el seno del Gobierno, de manera de contar con un fondo y una política de emergencia, materia a la que deberán concurrir el Estado y sus instituciones en conjunto con el sector privado, porque es una tarea de todos.
Respecto de la modificación del plano regulador de la Región Metropolitana, tenemos nuestra opinión y estamos siendo parte de los procedimientos regulares al efecto por medio de la ministra de Vivienda, quien, de manera muy abierta y cooperativa, ha puesto sobre la mesa la visión de la cartera de Agricultura sobre el buen uso de las mejores tierras de Chile que, como he dicho, están en dicha región.
En cuanto a la red agrometeorológica, es una de las tareas que tenemos en mente. Por lo tanto, señor Presidente, por su intermedio deseo expresar al honorable diputado que planteó el tema, que vamos a requerir su apoyo y su orientación para hacerlo mejor.
Se nos preguntó sobre la zonificación. Sé que el diputado que lo hizo, que siempre nos entrega su aporte en la Comisión de Agricultura, se refirió a lo que ocurre en el valle de Casablanca. Le respondo que es una materia que se analiza y administra en la lógica de las comisiones regionales de medio ambiente y, respecto del caso particular, sé que la Corema respectiva ha puesto los puntos sobre las íes para avanzar en el desarrollo productivo, pero preservando los valles y los ámbitos en los cuales se produce lo mejor de nuestra tierra. En eso no me pierdo, porque soy coherente y me la juego cuando considero que corresponde hacerlo.
Cuando asumimos un rol en el sondeo de precios, no lo hicimos pensando en hacerlo a la liviana. La tarea que hemos realizado en esta materia es el mejor ejemplo de la forma como hacer de una contingencia, una oportunidad para todos los chilenos.
En abril, tras una dura temporada de verano a causa de la sequía y ante el alza de los precios de algunos productos hortofrutícolas, decidimos crear una herramienta a fin de ayudar a consumidoras y consumidores a manejar mejor su presupuesto. No lo hace el señor Roa , del Sernac, porque quien conoce de agricultura, sabe que para referirse a los productos silvoagropecuarios es necesario tener conocimientos técnicos, ya que existen diferentes variedades y calidades, y son muchas las especificidades que se deben tener en consideración. Por lo tanto, nada mejor que la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias, Odepa para encargarse de esa tarea. Con dicho organismo construimos un modelo de evaluación que mide en ferias y supermercados las variaciones de precios de las veinte principales frutas y verduras que forman parte de la canasta de productos del IPC.
¿Cuál ha sido la respuesta de la ciudadanía? La mejor de todas. Como impera una economía social de mercado, debemos velar por que los mercados se comporten libremente, pero de manera transparente y en beneficio de la sociedad.
Reitero que hemos tenido la mejor de las respuestas, porque dueñas y dueños de casa han manifestado gran interés y, además, agradecen la posibilidad de disponer cada semana de esos indicadores, pues les permiten tomar decisiones informadas.
Tal ha sido el interés que, ante las variaciones al alza en el precio de las carnes, decidimos aplicar el mismo sistema en carnicerías y en supermercados respecto de este producto. Si con la otra medición nos fue bien, con este segundo sondeo nos ha ido aún mejor. No me refiero a mí o al Gobierno, sino al bolsillo de chilenas y chilenos.
Estos sondeos también se han constituido en un incentivo para que los productores ofrezcan productos de calidad y a precios accesibles. Tanto es así, que los supermercados han dado una clara señal de aceptación. En efecto, han hecho un esfuerzo adicional para proponer ofertas especiales y más convenientes a sus clientas y clientes, y, además quiero valorar esa actitud de los supermercados han comprometido su gestión para que no existan alzas de precios durante las próximas Fiestas Patrias.
Lo que digo no es para la risa, porque nuestra cultura, nuestra identidad y la celebración de las Fiestas Patrias constituyen aspectos importantes en la vida de los chilenos.
Estos instrumentos permitirán que las chilenas y los chilenos podamos disfrutar de un buen asado durante las próximas festividades patrias y, seguramente como aquí también se ha mencionado, influirá positivamente en el IPC, esto es, en una menor inflación.
Considero que la reacción de los supermercados es un aporte a fin de transparentar el mercado, garantizar el ejercicio de la libre competencia, mejorar la oferta y permitir que las personas arreglen su presupuesto.
Sinceramente, valoro y agradezco los aportes. Soy de quienes piensan que en toda crítica siempre hay, al menos, una parte de buena intención que debemos rescatar.
Ése ha sido el espíritu permanente con el que hemos trabajado en el gobierno de la Presidenta Bachelet , porque consideramos que, en nuestra calidad de servidores públicos, debemos velar para que en nuestro país las cosas sean cada día mejores.
Estoy cierta de que Chile también los países que integran el Mercosur puede ser una potencia agroalimentaria y forestal si somos capaces de llevar adelante buenas políticas públicas, bien focalizadas, bien orientadas y con horizonte.
No me importa gastar mucho tiempo en realizar tareas que pueden ser consideradas menores, porque debemos destinar todas nuestras energías en cumplir plenamente con el mandato que nos han dado. Energías y ganas me sobran, así como también agradecimientos por los aportes que nos han hecho esta tarde.
Muchas gracias, señor Presidente.
He dicho.
Aplausos.
El señor ENCINA (Presidente).-
El señor Secretario va a dar lectura al primer proyecto de acuerdo.
El señor LOYOLA (Secretario).-
Proyecto de acuerdo Nº 630, suscrito por los diputados señores Galilea , Alvarado , Pérez , Ojeda ; la señora Sepúlveda , doña Alejandra , y los señores Delmastro, Barros, Sule , Bertolino , Jaramillo , Recondo , Tuma y Meza , que en su parte resolutiva dice:
“La Cámara de Diputados acuerda:
Solicitar a S.E. la Presidenta de la República que:
Ordene la inmediata restitución de los fondos asignados al programa de Sistema de Incentivos para la Recuperación de Suelos Degradados (Sirsd), redistribuidos para el financiamiento de instrumentos de emergencia agrícola.
Considere una provisión permanente y no simbólica de fondos para las emergencias agrícolas en el Presupuesto de la Nación, asignados al Ministerio de Agricultura y provistos directamente por el Ministerio de Hacienda.
Analice la posibilidad de otorgarle por ley, al programa de Sistema de Incentivos para la Recuperación de Suelos Degradados (Sirsd) el carácter de permanente.
Invierta en el desarrollo de nuevas técnicas productivas y de manejo de suelos en zonas agroecológicas vulnerables.
Evalúe los impactos del programa sobre los objetivos de éste, en especial, en la pequeña agricultura”.
El señor ENCINA (Presidente).-
En votación.
El señor ENCINA (Presidente).-
Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:
El señor ENCINA (Presidente).-
El señor Secretario va a dar lectura al siguiente proyecto de acuerdo.
El señor LOYOLA (Secretario).-
Proyecto de acuerdo Nº 631, suscrito por los diputados señores Martínez , Pérez , Galilea , Sule , Hernández , Farías , Estay , la señora Sepúlveda , doña Alejandra , y los señores Enríquez-Ominami, Bertolino , Recondo , Tuma y Meza , que en su parte resolutiva dice:
“La Cámara de Diputados acuerda:
Solicitar a S.E. la Presidenta de la República que:
1. Envíe al Congreso Nacional un proyecto de ley que administre los recursos derivados del Sistema de Incentivos para la Recuperación de Suelos Degradados, especificando, entre otras variables, su finalidad, ámbito de aplicación, vías y procedimientos por los cuales los agricultores podrán acceder, responsables, periodicidad, control, rendición de cuentas. En tal sentido, instruya a los ministros de Hacienda y de Agricultura.
2. Disponga, con la mayor brevedad, que los ministerios correspondientes repongan en calidad de urgente el marco presupuestario al Servicio Agrícola Ganadero (SAG) para el año en curso”.
El señor ENCINA (Presidente).-
En votación.
El señor ENCINA (Presidente).-
Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:
Accorsi
Se abstuvieron los diputados señores:
El señor ENCINA (Presidente).-
El señor Secretario va a dar lectura al siguiente proyecto de acuerdo.
El señor LOYOLA (Secretario).-
Proyecto de acuerdo Nº 632, suscrito por los diputados señores Barros, Álvarez-Salamanca , Hernández , Recondo , la señora Sepúlveda , doña Alejandra , y los señores Von Mühlenbrock , Verdugo , Martínez , Masferrer , Estay , Tuma , Meza , Correa y Bertolino , que en su parte resolutiva dice:
“La Cámara de Diputados acuerda:
Solicitar a S.E. la Presidenta de la República que garantice los recursos tendientes a la erradicación total de la plaga lobesia botrana (polilla del racimo de la vid), por parte del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), instruyendo en tal sentido a la ministra de Agricultura”.
El señor ENCINA (Presidente).-
En votación.
El señor ENCINA (Presidente).-
Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:
Alinco
Votó por la negativa el diputado señor
Se abstuvieron los diputados señores:
El señor ENCINA (Presidente).-
El señor Secretario va a dar lectura al siguiente proyecto de acuerdo.
El señor LOYOLA (Secretario).-
Proyecto de acuerdo Nº 633, suscrito por los diputados señores Pérez , Quintana , Accorsi , Meza , la señora Sepúlveda , doña Alejandra , y los señores Barros, Galilea , Sule , Ojeda , Martínez , Sabag , Tuma , Monsalve y Ceroni , que en su parte resolutiva dice:
“La Cámara de Diputados acuerda:
Solicitar a S.E. la Presidenta de la República que:
1. Adopte con urgencia las políticas necesarias para asignar los recursos correspondientes para los pequeños y medianos agricultores para la presente temporada, así como también ir en ayuda de la agricultura nacional, que atraviesa en el último tiempo por una difícil y compleja situación.
2. Instruya a los ministros de Agricultura y de Economía, Fomento y Reconstrucción, respectivamente, estudiar la posibilidad de rebajar los cobros excesivos efectuados tanto a través del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) a las empresas exportadoras de productos lácteos, cárneos y forestales, como por el Ministerio de Economía, Fomento y Reconstrucción por medio del Departamento de Cooperativas a las cooperativas existentes a lo largo del país.
3. Postergue el reavalúo de bienes raíces agrícolas, que debería llevarse a cabo en julio de 2009, en atención a la ya desmedrada situación de la agricultura nacional.
4. Dé una solución, con la mayor brevedad, a aquellos agricultores que tienen sus predios afectados por el decreto ley Nº 701, de 1974, procediendo a condonar sus deudas y entregarles nuevos recursos para volver a plantarlos”.
El señor ENCINA (Presidente).-
En votación.
El señor ENCINA (Presidente).-
Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:
Accorsi
Se abstuvo el diputado señor
El señor ENCINA (Presidente).-
El señor Secretario va a dar lectura al último proyecto de acuerdo.
El señor LOYOLA (Secretario).-
Proyecto de acuerdo Nº 634, suscrito por los diputados señores Tuma , Meza , Quintana , Pérez , Jaramillo y Ceroni , que en su parte resolutiva dice:
“La Cámara de Diputados acuerda:
Solicitar a S.E. la Presidenta de la República que:
1. En la elaboración de la ley de Presupuestos 2009, se consigne una glosa presupuestaria donde se establezcan recursos significativos e independientes de los programas normales de los ministerios destinados a financiar emergencias de distinta naturaleza, que tengan flexibilidad y rapidez en la asignación a los servicios que van a ser ejecutores de la ayuda a las distintas poblaciones del país.
2. Diseñe un programa para la infraestructura de riego preferentemente a aquellos predios menores a diez hectáreas, que permita atender especialmente a los pequeños agricultores, en el que se consideren los estudios, los sondajes, los diseños, la inscripción de derechos de agua y la ejecución de obras de riego.
3. Destine montos significativos de recursos, al objeto de favorecer con un subsidio o bono para los fertilizantes a todos aquellos pequeños agricultores de economías de subsistencia, a fin de permitir, al menos, la siembra de entre media y una hectárea, cuyos productos les asegurará la alimentación en los próximos meses.
4. Establezca un programa permanente del Estado destinado a realizar un acompañamiento de capacitación productiva a los sectores que no tienen ingreso alguno, pero sí cuentan con alguna potencialidad, que les permita orientar su esfuerzo a asegurar un ingreso periódico”.
El señor ENCINA (Presidente).-
En votación.
El señor ENCINA (Presidente).-
Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:
-- Los textos íntegros de los proyectos de acuerdo figuran en la página de internet de la Cámara de Diputados, cuya dirección es: www.camara.cl/pacuerdo/
El señor ENCINA (Presidente).-
Por haber cumplido con su objeto, se levanta la sesión.
Se levantó la sesión a las 19.33 horas.
TOMÁS PALOMINOS BESOAÍN ,
Jefe de la Redacción de Sesiones Subrogante.