Labor Parlamentaria
Diario de sesiones
- Alto contraste
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Índice
- DOCUMENTO
- PORTADA
- I. ASISTENCIA
- II. APERTURA DE LA SESIÓN
- III.
CUENTA
- DEBATE
- MOCIÓN INADMISIBLE
- Baldo Prokurica Prokurica
- Jorge Patricio Arancibia Reyes
- Jose Garcia Ruminot
- Antonio Horvath Kiss
- Jose Ruiz De Giorgio
- MOCIÓN INADMISIBLE
- DEBATE
- IV.
ORDEN DEL DÍA
-
CREACIÓN DE FONDO DE INNOVACIÓN PARA COMPETITIVIDAD
- ANTECEDENTE
- INTERVENCIÓN : Ramon Vega Hidalgo
- INTERVENCIÓN : Roberto Munoz Barra
- INTERVENCIÓN : Evelyn Matthei Fornet
- INTERVENCIÓN : Carlos Fernando Flores Labra
- INTERVENCIÓN : Rafael Moreno
- CIERRE DE LA SESIÓN
-
CREACIÓN DE FONDO DE INNOVACIÓN PARA COMPETITIVIDAD
- ANEXO SESIÓN
- MOCIÓN DE LOS HONORABLES SENADORES PROKURICA, GARCÍA, HORVATH Y ROMERO CON LA QUE INICIAN UN PROYECTO QUE MODIFICA LA LEY ORGÁNICA CONSTITUCIONAL DEL CONGRESO NACIONAL PARA ESTABLECER LA REPRESENTACIÓN DE MINORÍA EN LA CONFORMACIÓN DE LAS MESAS DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS (4057-07)
- AUTOR DE UN DOCUMENTO
- Baldo Prokurica Prokurica
- Jose Garcia Ruminot
- Antonio Horvath Kiss
- Sergio Romero Pizarro
- AUTOR DE UN DOCUMENTO
- MOCIÓN DEL HONORABLE SENADOR SABAG CON LA QUE INICIA UN PROYECTO DE LEY SOBRE RETIRO DE PROPAGANDA ELECTORAL Y REPARACIÓN DE DAÑOS QUE ÉSTA HUBIERE CAUSADO (4058-06)
- AUTOR DE UN DOCUMENTO
- Hosain Sabag Castillo
- AUTOR DE UN DOCUMENTO
- PROYECTO DE ACUERDO DE LOS HONORABLES SENADORES PROKURICA, ARANCIBIA, FERNÁNDEZ, HORVATH, OMINAMI, ROMERO, RUIZ Y VEGA MEDIANTE EL CUAL PROPONEN SOLICITAR A SU EXCELENCIA EL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA LA ADOPCIÓN DE MEDIDAS QUE PERMITAN A VOCALES DE MESA QUE CUMPLAN FUNCIONES EN LA PRÓXIMA ELECCIÓN PRESIDENCIAL RECIBIR UNA COLACIÓN ADECUADA (S 834-12)
- PRESENTACIÓN PROYECTO DE ACUERDO
- Jorge Patricio Arancibia Reyes
- Sergio Fernandez Fernandez
- Antonio Horvath Kiss
- Carlos Ominami Pascual
- Baldo Prokurica Prokurica
- Sergio Fernandez Fernandez
- Sergio Romero Pizarro
- Jose Ruiz De Giorgio
- Ramon Vega Hidalgo
- PRESENTACIÓN PROYECTO DE ACUERDO
- MOCIÓN DE LOS HONORABLES SENADORES PROKURICA, GARCÍA, HORVATH Y ROMERO CON LA QUE INICIAN UN PROYECTO QUE MODIFICA LA LEY ORGÁNICA CONSTITUCIONAL DEL CONGRESO NACIONAL PARA ESTABLECER LA REPRESENTACIÓN DE MINORÍA EN LA CONFORMACIÓN DE LAS MESAS DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS (4057-07)
Notas aclaratorias
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REPÚBLICA DE CHILE
DIARIO DE SESIONES DEL SENADO
PUBLICACIÓN OFICIAL
LEGISLATURA 353ª
Sesión 49ª, en miércoles 14 de diciembre de 2005
Extraordinaria
(De 12:23 a 13:54)
PRESIDENCIA DE LOS SEÑORES SERGIO ROMERO PIZARRO, PRESIDENTE,
Y JAIME GAZMURI MUJICA, VICEPRESIDENTE
SECRETARIO, EL SEÑOR CARLOS HOFFMANN CONTRERAS, TITULAR
____________________
Í N D I C E
Versión Taquigráfica
Pág.
I. ASISTENCIA.........................................................................................................
II. APERTURA DE LA SESIÓN...............................................................................
III. CUENTA...............................................................................................................
IV. ORDEN DEL DÍA:
Proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que crea Fondo de Innovación para la Competitividad (3588-08) (queda pendiente su discusión general)¿¿¿
I. ASISTENCIA
Asistieron los señores:
--Aburto Ochoa, Marcos
--Arancibia Reyes, Jorge
--Ávila Contreras, Nelson
--Boeninger Kausel, Edgardo
--Canessa Robert, Julio
--Cariola Barroilhet, Marco
--Coloma Correa, Juan Antonio
--Cordero Rusque, Fernando
--Espina Otero, Alberto
--Fernández Fernández, Sergio
--Flores Labra, Fernando
--Foxley Rioseco, Alejandro
--Frei Ruiz-Tagle, Eduardo
--García Ruminot, José
--Gazmuri Mujica, Jaime
--Horvath Kiss, Antonio
--Larraín Fernández, Hernán
--Martínez Busch, Jorge
--Matthei Fornet, Evelyn
--Moreno Rojas, Rafael
--Muñoz Barra, Roberto
--Naranjo Ortiz, Jaime
--Núñez Muñoz, Ricardo
--Ominami Pascual, Carlos
--Orpis Bouchón, Jaime
--Páez Verdugo, Sergio
--Parra Muñoz, Augusto
--Pizarro Soto, Jorge
--Prokurica Prokurica, Baldo
--Romero Pizarro, Sergio
--Ruiz De Giorgio, José
--Ruiz-Esquide Jara, Mariano
--Sabag Castillo, Hosaín
--Silva Cimma, Enrique
--Vásquez Úbeda, Guillermo
--Vega Hidalgo, Ramón
--Viera-Gallo Quesney, José Antonio
--Zaldívar Larraín, Andrés
Concurrieron, además, el señor Ministro de Hacienda , y los señores Coordinador de Políticas Económicas y asesores del Ministerio de Hacienda.
Actuó de Secretario el señor Carlos Hoffmann Contreras, y de Prosecretario , el señor José Luis Alliende Leiva.
II. APERTURA DE LA SESIÓN
--Se abrió la sesión a las 12:23, en presencia de 22 señores Senadores.
El señor ROMERO (Presidente).- En el nombre de Dios, se abre la sesión.
III. CUENTA
El señor ROMERO (Presidente).- Se va a dar cuenta de los asuntos que han llegado a Secretaría.
El señor ALLIENDE ( Prosecretario ).- Las siguientes son las comunicaciones recibidas:
Oficios
De la Honorable Cámara de Diputados, mediante el cual comunica que aprobó el informe de la Comisión Mixta constituida para resolver las divergencias suscitadas entre ambas Cámaras durante la tramitación del proyecto que modifica la ley Nº 19.903 en lo relativo al cobro de aranceles por parte de los conservadores de bienes raíces (boletín Nº 3.642-07).
--Queda para tabla.
De la Excelentísima Corte Suprema, con el que emite su parecer acerca del proyecto de ley que modifica normas sobre patria potestad (boletín N° 3.592-18).
--Se toma conocimiento y se manda agregar el documento a sus antecedentes.
Informes
De la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento, recaído en el proyecto de ley, en primer trámite constitucional, que establece normas especiales para el enjuiciamiento de los delitos que indica (boletín N° 4.026-07).
De la Comisión de Hacienda, recaído en el proyecto de ley, en primer trámite constitucional, que crea el Consejo Superior de Empresas Públicas; regula a las Empresas de Auditoría Externa; modifica estatuto de los directores de las sociedades anónimas, las normas de administración de éstas y los estatutos de las empresas públicas (boletín N° 3.949-05).
--Quedan para tabla.
Mociones
De los Senadores señores Prokurica, García, Horvath y Romero, con la que inician un proyecto que modifica la Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional para establecer la representación de la minoría en la conformación de las Mesas de la Cámara de Diputados y del Senado (boletín N° 4.057-07).
--Pasa a la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento.
Del Senador señor Sabag, con la que inicia un proyecto de ley sobre retiro de la propaganda electoral y reparación de los daños que ésta hubiere causado (boletín N° 4.058-06).
--Pasa a la Comisión de Gobierno, Descentralización y Regionalización.
Proyecto de acuerdo
De los Senadores señores Prokurica, Arancibia, Fernández, Horvath, Ominami, Romero, Ruiz y Vega, mediante el cual proponen solicitar a Su Excelencia el Presidente de la República la adopción de medidas que permitan a los vocales de mesa que cumplan funciones en la próxima elección presidencial recibir una colación adecuada (boletín N° S 834-12).
--Queda para el Tiempo de Votaciones de la próxima sesión ordinaria.
Declaración de inadmisibilidad
Moción de los Senadores señores Prokurica, Arancibia, García, Horvath y Ruiz
--Se declara inadmisible por referirse a una materia de la iniciativa exclusiva de Su Excelencia el Presidente de la República , de conformidad con lo dispuesto en el número 2° del inciso cuarto del artículo 65 de la Carta Fundamental.
El señor ROMERO ( Presidente ).- Si le parece a la Sala, se enviará el oficio correspondiente al Ejecutivo , en nombre de los señores Senadores autores de la moción.
El señor PROKURICA.- Sí, señor Presidente.
--Así se acuerda.
El señor ROMERO (Presidente).- Terminada la Cuenta.
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El señor ROMERO ( Presidente ).- Informo que, en relación con el proyecto de acuerdo de la Honorable Cámara de Diputados que aprueba el Acuerdo entre el Gobierno de la República de Chile y la Organización de las Naciones Unidades, signado con el número 3 del Orden del Día y que cuenta con informe de la Comisión de Relaciones Exteriores, el Ministro Secretario General de la Presidencia , don Eduardo Dockendorff, me ha planteado la posibilidad de sacarlo de la tabla, en espera de que el señor Canciller esté presente en la sesión.
Si le parece a la Sala, se procederá conforme a lo solicitado por el Ejecutivo .
El señor ARANCIBIA.- Me parece.
--Así se acuerda.
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El señor ROMERO (Presidente).- Tiene la palabra el Honorable señor García.
El señor GARCÍA.- Señor Presidente , las Comisiones unidas de Economía y Agricultura están convocadas a sesión para las 13:30 de hoy, con el objeto de analizar el proyecto de ley relativo a los efectos de la capa de ozono.
Por lo tanto, solicito autorización para que puedan funcionar paralelamente con la Sala a partir de esa hora.
El señor ROMERO ( Presidente ).- Si no hubiere inconveniente, se accedería a la petición formulada por el señor Presidente de la Comisión de Economía .
--Así se acuerda.
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El señor HORVATH.- ¿Me permite, señor Presidente?
El señor ROMERO (Presidente).- Tiene la palabra Su Señoría.
El señor HORVATH.- Señor Presidente , junto con el autor de la moción referida al proyecto que modifica la Ley sobre Aviación Comercial, solicitamos ampliar hasta hoy, a las 16, el plazo, para la presentación de indicaciones, con el objeto de analizarlo en forma integral y sobre la base de las intervenciones habidas en su momento en la Sala.
El señor ROMERO (Presidente).- Si le parece a los señores Senadores, se accederá a lo solicitado.
--Así se acuerda.
IV. ORDEN DEL DÍA
CREACIÓN DE FONDO DE INNOVACIÓN PARA COMPETITIVIDAD
El señor ROMERO ( Presidente ).-
Corresponde continuar la discusión general del proyecto de ley de la Honorable Cámara de Diputados que crea el Fondo de Innovación para la Competitividad, con informe de la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología.
--Los antecedentes sobre el proyecto (3588-08) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican:
Proyecto de ley:
En segundo trámite, sesión 16ª, en 3 de agosto de 2004.
Informe de Comisión:
Educación, sesión 46ª, en 8 de noviembre de 2005.
Discusión:
Sesiones 47ª, en 9 de noviembre de 2005 (queda para segunda discusión); 48ª, en 13 de diciembre de 2005 (queda pendiente su discusión general).
El señor ROMERO ( Presidente ).-
Solicito autorización para que ingresen a la Sala don Marcelo Tokman, Coordinador de Políticas Económicas del Ministerio de Hacienda , y don Jorge Rodríguez y la señora Jacqueline Saintard, asesores de esa Cartera de Estado.
--Se accede.
El señor ROMERO ( Presidente ).-
Ayer quedaron inscritos para intervenir los Senadores señores Vega, Muñoz Barra, Flores, Moreno y Matthei.
Tiene la palabra el Honorable señor Vega.
El señor VEGA .-
Señor Presidente , este proyecto me parece tremendamente oportuno. Chile lo necesita hoy día si quiere alcanzar el nivel de desarrollo que pretende con la globalización.
Sin duda, se trata de una iniciativa muy compleja y que no resuelve por sí sola el problema de la investigación y el desarrollo en un país que viene emergiendo del subdesarrollo.
Asimismo, no soluciona lo relacionado con la innovación tecnológica, porque ésta es una conclusión del conocimiento, del saber -producto de la investigación de miles de años, desde (qué sé yo) antes de Cristo- que han logrado los países desarrollados.
Por esa razón, no debemos confundir los objetivos del proyecto con las legítimas aspiraciones regionales que algunos señores Senadores plantearon respecto a los recursos que genera el royalty.
Aquí hablamos de principios, de orígenes del saber, que son problemas que atañen a los niveles nacional, regional y mundial.
A los efectos de una definición clara de estos conceptos y procedimientos, la Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo (OCDE) publicó en 1992 un conjunto de directrices, conocidas como Manual de Oslo. En este proyecto debemos integrarlas, con el fin de evitar confusiones respecto de lo que significan innovación, investigación y desarrollo.
Estamos ante una decisión estratégica, de Estado.
Son muchos los ejemplos del efecto multidisciplinario de estas grandes decisiones. La Europa milenaria, como dije, logró concatenar el conocimiento del espacio desde antes de Cristo, con Aristarco de Samos; luego, con Ptolomeo, Galileo y Newton; y ahora, con los espectaculares observatorios astronómicos espaciales y con una sonda en Marte.
Ésa es la conclusión de un proceso milenario.
Por tal motivo, debemos tener mucho cuidado, para orientar el esfuerzo exactamente en esa dirección.
Sin embargo, para llegar a esos niveles de excelencia, nuestro problema interno radica en la estructura educacional superior. Ahí se halla la génesis de todas las complicaciones.
Cuando los jesuitas llegaron a integrar nuestros conocimientos, lo primero que hicieron fue instaurar la escuela primaria. ¡Y ahí nos quedamos! Después de cien años se impartió la enseñanza secundaria, y luego, la universitaria.
Por fortuna, contamos con tres o cuatro universidades que, por su antigüedad, se encuentran preocupadas de la investigación y el desarrollo. Esas instituciones llegaron a la conclusión de que la investigación y el desarrollo, inevitablemente, constituían una conclusión de su conocimiento y una mirada permanente de veinte años hacia adelante. Recién estamos comenzando esta tarea.
Pero esta situación no la va a resolver la iniciativa en debate, sino la madurez que logremos a través de ese conocimiento para que realmente motivemos la investigación y el desarrollo.
Y ahí viene el primer gran problema.
Nosotros somos los usuarios de lo que estas universidades y los países desarrollados se encuentran realizando desde hace mucho tiempo en ese ámbito. Los europeos y los norteamericanos están mirando veinte o treinta años hacia adelante. En nuestro caso, nos hallamos detrás, y malamente, como operativos.
Por ejemplo, en el campo de la aeronáutica -situación que todos ustedes conocen-, hoy día vemos que el Airbus 340 se encuentra completamente computarizado. Toda la ingeniería tiene que ser estudiada en Europa; en Francia, específicamente. Todos los pilotos deben entrenarse además en esa nación; son instruidos acá, pero, por el uso de simuladores, etcétera, es preciso que vayan allá, porque sus científicos son los generadores de la tecnología. Y para poder hacer una operación al 80 ó 90 por ciento de su eficiencia y utilidad, nosotros tenemos que acceder a su conocimiento.
Lo mismo pasa con los computadores. En cuanto al teléfono celular, se usa en un 20 por ciento de su verdadera capacidad. Por tanto, perdemos el 80 por ciento restante, pues no hemos logrado en la parte material un nivel de eficiencia respecto de los modelos tan complejos que nos llegan con tecnología avanzada.
Ése es el problema.
Así que el proyecto de ley apunta hacia allá: a una definición doctrinaria y de objetivos en esta materia; a la integración de los esfuerzos hechos a nivel nacional, que son importantes.
Chile está a la cabeza en Latinoamérica, con un gasto de 0,7 por ciento de su PIB en investigación y desarrollo. Deberíamos invertir 3 ó 4 por ciento, como en la actualidad lo hacen los países desarrollados.
Por esa razón, y gracias a nuestras antiguas universidades, tenemos una posición privilegiada. Y dar el salto para traspasar esa "línea roja" y entrar en esos veinte años de investigación y desarrollo que nos llevan de ventaja las naciones desarrolladas, es lo que busca el proyecto de ley en debate.
No estamos hablando de regionalización. Ése es otro cuento.
Entiendo perfectamente bien ese problema. La minería tiene gran capacidad de innovación tecnológica. Tal vez ahí contamos con una ventaja comparativa de tremendo beneficio para el país. No olvidemos que se trata de clusters mineros a los que concurren logísticamente miles de pequeñas industrias con su apoyo y en su beneficio. Y es ahí, entonces, donde podríamos generar un valor agregado interno orientado a la racionalización de un sistema de tal naturaleza. En eso estamos de acuerdo.
Ésas son las definiciones políticas que debe adoptar la comisión pertinente y por ello es importante que funcione a nivel nacional.
En los países subdesarrollados la innovación tecnológica no se genera directamente desde la empresa. En cambio, en los desarrollados se realiza en forma directa a partir de ella. Es decir, la empresa paga la innovación tecnológica; contrata a las universidades; establece las definiciones, los objetivos, y trae a los doctores y los pone en la primera línea de combate para que vayan mirando cuál va a ser su desarrollo. Así sucedió con todos los sistemas computacionales, cibernéticos, que hace veinte años no existían. Hoy día la medicina, la agricultura, la minería, las ciencias del espacio, se sustentan sobre el tremendo desarrollo cibernético que lograron estas empresas mediante su propia definición de investigación y desarrollo.
Y esta materia requiere una redefinición para nosotros.
Sabemos que el problema no lo va a solucionar este proyecto de ley; pero él representa un punto de partida, en lo general, importante.
El Consejo Nacional de Innovación para la Competitividad va a definir los objetivos, los plazos medianos y largos de los proyectos necesarios; las prioridades que han de establecerse; la coordinación que es preciso dar a las múltiples instituciones que se hallan trabajando en esta materia en Chile y que han hecho grandes aportes para una mayor participación en la relación del nivel académico con el sector empresarial privado y el Estado.
En los países desarrollados tiene que existir forzosamente este triunvirato, que es el que sostiene el modelo económico que se está globalizando, pues necesitan de esa estructura.
La iniciativa se perfeccionará a través de las indicaciones correspondientes. Pero creo que es el momento oportuno para partir con una reflexión, con una solución y con un apoyo al modelo económico que opera en una globalización de esta naturaleza.
Anuncio que votaré favorablemente el proyecto.
El señor ROMERO (Presidente).-
Tiene la palabra el Honorable señor Muñoz Barra.
El señor MUÑOZ BARRA.-
Señor Presidente , sin duda, este proyecto tendrá una enorme trascendencia -tal como lo señalamos ayer; y hoy seguramente se va a reafirmar- para el progreso del país a través de la creación de un Fondo de Innovación para la Competitividad y su correspondiente institucionalidad. Ello permitirá fortalecer y articular las iniciativas públicas y privadas, lo que, a su vez, va a producir un desarrollo, no sólo a nivel nacional, sino también para nuestras regiones, porque van a ganar en competitividad y podrán dinamizar su perspectiva a fin de alcanzar una sociedad de mayor bienestar y equidad.
A mi juicio, el proyecto impactará tanto en el desarrollo de la ciencia, la tecnología y las universidades cuanto a favor de un Chile -reitero- más competitivo.
Quiero destacar lo que planteó el Ministro de Hacienda , don Nicolás Eyzaguirre , en la Comisión de Educación, Ciencia y Tecnología del Senado, de la cual soy integrante.
Dicho Secretario de Estado sostuvo que, si bien Chile ha tenido un alto crecimiento económico, no ha traspasado aún la barrera del subdesarrollo. Creo que es bueno recordarlo en esta sesión.
El mismo Ministro señala que el actual modelo económico requiere una reorientación que incorpore, a la existencia de recursos naturales que exporta, la innovación tecnológica que hace posible obtener ventajas comparativas a través de la elaboración de productos sofisticados.
A esa nueva estrategia el señor Ministro la ha denominado "de encadenamiento hacia atrás y hacia los lados". Es decir, sostiene que a través de ello se potencian la condición de Chile como productor de materias primas y la industria relacionada con la extracción de éstas.
Comparto la propuesta del señor Eyzaguirre . Y para ello se requiere disponer, entre otras cosas -es lo que estamos viendo esta mañana-, de una normativa jurídica que permita estimular la innovación de los recursos productivos.
Si observamos -y es bueno comparar- cuánto invierten los países en ciencia y tecnología, constataremos que los más ricos tienen la más alta inversión, y los pobres, la más baja. Por consiguiente, fácil resulta concluir que existe una correlación positiva entre inversión en ciencia y tecnología y desarrollo económico-social.
Recordaré algunas cifras.
Estados Unidos, nación que va a la vanguardia en desarrollo científico y tecnológico, destina a tal propósito 2,6 por ciento de su producto interno bruto; Alemania , 2,3 por ciento, y Chile, 0,7 por ciento. Y debemos tener presente que en 1999 el porcentaje del PIB dedicado a ciencia y tecnología en nuestro país fue de 0,55 por ciento.
Es una realidad, entonces, que los productos nuevos y útiles, que son consecuencia del desarrollo científico y tecnológico, generan mayor riqueza que una industria tradicional que se anquilosa.
Por ejemplo, el desarrollo de la vacuna contra la hepatitis B por la empresa norteamericana Chiron produjo en un año ingresos por 250 millones de dólares. Y cabe señalar que esa compañía fue fundada por un científico chileno de altos méritos: el doctor Pablo Valenzuela .
Otro ejemplo: Finlandia, país cuya población alcanza a los cinco millones de habitantes, durante la década de los ochenta decidió impulsar una activa política de desarrollo científico y tecnológico, la cual le ha permitido alcanzar competitividad en todo el mundo, entre otras áreas en telefonía celular; asimismo, decidió incrementar la inversión en ciencia y tecnología, elevándola a 3 por ciento del PIB. Hoy, en el mundo, las ventas en telefonía celular basadas en la tecnología finlandesa superan los 20 billones de dólares.
Ahora bien, señor Presidente , el proyecto también incorpora el establecimiento de una estrategia nacional de innovación para la competitividad o "estrategia de innovación".
Sobre esta materia, al calor de las intervenciones habidas en la Comisión que integro, me parece necesario hacer, respetuosamente, las siguientes reflexiones.
En primer lugar, está claro que la política macro de desenvolvimiento científico y tecnológico debe ser parte de una estrategia nacional de desarrollo productivo que propenda a la equidad y a ganar competitividad para nuestra economía en el mercado externo.
En tal sentido, es importante que la política se oriente a la creación de nuevos productos, es decir, a diversificar la producción para los mercados interno y externo, aprovechando nuestras materias primas, a fin de, gradualmente, ir equilibrando la proporción actual de 85 por ciento de exportación de recursos naturales a favor de la exportación de productos sofisticados.
Para ello es necesario, pues, que el Estado defina áreas y programas prioritarios de desarrollo nacional con relevancia estratégica, pensando en cómo insertarse mejor en la economía globalizada a partir de las ventajas que tiene Chile en algunos rubros productivos de bienes y servicios y en sus posibilidades de mejoramiento tecnológico que garanticen el incremento de esas ventajas. Estos programas pueden ser diversos y estar dirigidos, por ejemplo, a las explotaciones forestales, a la elaboración de nuevos productos de cobre o a la descontaminación ambiental.
Asimismo, resulta menester orientar la innovación tecnológica hacia las pymes -de las cuales tanto se habla-, con el propósito de mejorar sus procesos productivos, la calidad de sus productos o la innovación de éstos.
Es sabida la significación que tienen las pequeñas y medianas empresas para la generación de empleo y como potencial exportador. Sin embargo, se ha constatado que no son muy entusiastas para incorporar nuevas tecnologías en sus procesos, en gran medida por falta de recursos y de oportunidades.
También es relevante formar profesionales que puedan participar activamente en el mundo de la tecnología. Ello significa crear nuevas carreras o posgrados y estimular cursos de perfeccionamiento o de capacitación para investigadores científicos y tecnológicos, profesionales, empresarios, técnicos, profesores.
Un objetivo prioritario debe ser el incremento del número de científicos con que cuenta el país.
Diferentes proyectos que hemos estado analizando en la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología apuntan en la dirección que estoy señalando.
Asimismo, en esta materia, se debe capacitar y formar personas para que puedan desempeñarse laboralmente con mayores competencias tecnológicas. Encuestas especializadas constatan que quienes han recibido capacitación laboral han incrementado su remuneración en 24 por ciento con respecto a aquellos que no la han recibido. En Chile, la tasa más alta de capacitación la ostentan las grandes empresas, lo que, indudablemente, les da ventajas con relación a las medianas y pequeñas, que exhiben índices más bajos. La diferencia radica en que las empresas que más capacitan logran más alta productividad, por la mejor calidad de la mano de obra o del capital humano empleado.
También se deben aprovechar intensamente las posibilidades que brindan tratados internacionales suscritos por Chile. En este ámbito, el Tratado de Asociación con la Unión Europea es un buen modelo, que permite la colaboración científico-tecnológica entre los países de la Unión y el nuestro. Y existe un importante Tratado de Colaboración Científica y Tecnológica con España, que ha posibilitado la incorporación de científicos nuestros en investigaciones realizadas en esa nación.
Lo anterior, desde mi punto de vista, requiere imaginación creativa y financiamiento. Al respecto, Chile debe proponerse, en el corto plazo, invertir al menos uno por ciento del PIB en ciencia y tecnología. Los dos pilares del desarrollo económico y social de las naciones más avanzadas son la educación y el desenvolvimiento científico y tecnológico. Y nuestro país, por supuesto, debe seguir la misma senda.
En el transcurso del día de ayer -y con seguridad lo propio ocurrirá hoy-, distinguidos señores Senadores han anunciado su voto en contra del proyecto. Yo pienso que se debe meditar una decisión de tal naturaleza, porque durante la discusión particular será factible perfeccionar el texto en discusión.
En mi opinión, Chile necesita una legislación, una institucionalidad sobre la materia, pues el desafío de la globalización nos impide tener vacilaciones en el ámbito de que se trata.
Por eso, anuncio mi voto favorable a la iniciativa que nos envió el Poder Ejecutivo .
He dicho.
El señor ROMERO (Presidente).-
Pidió la palabra el señor Ministro, quien tiene preferencia.
El señor EYZAGUIRRE ( Ministro de Hacienda ).-
Señor Presidente , en primer lugar, quiero excusarme por no haber participado en la sesión de ayer. Sus Señorías saben que, por ley, el Ministro de Hacienda debe concurrir a las reuniones sobre política monetaria celebradas por el Consejo del Banco Central, órgano que de manera autónoma fija las fechas pertinentes. En consecuencia, me fue imposible estar al mismo tiempo en dicho Consejo y en el Honorable Senado.
Por eso, ya presente hoy, doy las excusas del caso.
Ahora bien, el tema que nos convoca esta mañana es de extraordinaria importancia. En general, la evidencia económica mundial da cuenta de que, por desgracia, los países con mayores recursos naturales tienden a ser relativamente menos desarrollados, dando lugar a lo que se llama la "maldición de los recursos naturales". Son pocas las naciones -y por ello, muy relevantes- que, no obstante tener la bendición de los recursos naturales, han logrado ser a la vez muy desarrolladas. Los casos más salientes son los de los países nórdicos y, particularmente, el de Australia. Y en todas estas naciones se cumple una tríada que es fundamental para evitar la referida "maldición".
La primera, una gran fuerza de la educación.
La segunda -y muy relevante-, una inmensa apertura de la economía y una profunda significancia del mercado en la asignación de recursos. Fue, por ejemplo, lo que Chile efectuó hace más de veinte años. Y también lo realizaron Australia -ello permitió evitar la decadencia del continente durante el siglo XX-, Finlandia y otros países.
La tercera, aun teniendo una buena educación y una estructura de comercio internacional abierta, es la calidad de las políticas públicas en materia de innovación, ciencia y tecnología. Éstas requieren una programación estratégica, un pensar el país a largo plazo, porque, dados los altos costos y los problemas vinculados con la propiedad intelectual que tienen la innovación y la investigación, resulta imposible que el sector privado las realice por sí solo.
Es por eso que durante más de tres años nos hemos abocado a observar las mejores prácticas internacionales y la realidad institucional de los países que han sido exitosos en este emprendimiento.
Lo que hoy propone el Fondo no es baladí; no se trata de algo inventado en una reunión a puertas cerradas, sino que es producto de un esfuerzo muy sistemático desplegado para recoger las mejores experiencias.
¿Y qué nos dicen las mejores experiencias? Que, en general, los países que lograron cambiar su estructura productiva para ir a recursos naturales con mayor innovación y tecnología han conseguido una unión de la actividad de la ciencia y la investigación con la de la empresa y la producción. Es el caso típico de nuestro país, donde la innovación y la ciencia aparecen como compartimientos estancos desvinculados del proceso productivo.
En función de esa vinculación, cuya concreción es compleja, hemos observado las mejores prácticas. Y yo les diría que, en esencia, importa preservar los siguientes puntos.
En primer lugar, la institución que realice la planificación estratégica y finalmente efectúe la asignación de los recursos públicos para ciencia y tecnología debe hallarse a nivel presidencial. Si está en un nivel intermedio, dado que en el corto plazo no es muy popular dedicar recursos a la investigación y a la ciencia, en general se tiende a producir un mal uso de ellos.
En segundo término -sé que el Honorable señor Viera-Gallo y otros señores Senadores intervinieron en este sentido, y por eso estoy dando la explicación del caso-, en esta institución de nivel presidencial es absolutamente imprescindible generar pesos y contrapesos tanto al interior del sector público como entre éste, el sector privado y el que produce la ciencia y la tecnología.
Si diéramos a este ente la forma de un Ministerio de la Ciencia y la Tecnología, ocurriría inevitablemente que éste sería un foco de captura por parte de quienes deseen los recursos públicos para, en el fondo, producir la ciencia y la tecnología que ellos quieran y no lo que demande el país.
Por consiguiente, atendido que la ciencia y la tecnología tienen que ver con los recursos generales de la nación (Hacienda), con el proceso de formación de recursos humanos (Educación) y con la empresa productiva, el capital semilla, la incubadora de nuevas empresas (Economía), son imprescindibles. Y ésa es la experiencia de Finlandia, de Australia, de Nueva Zelandia, donde los Ministerios de esas áreas hacen de peso y contrapeso.
No obstante -así lo demuestra la experiencia internacional-, cuando el sector público domina completamente la asignación de recursos, es posible que, por un problema político, él sea capturado por los oferentes de ciencia y tecnología y que terminemos con Ministerios llenos de institutos tecnológicos que, en definitiva, no le rindan cuenta a nadie.
Por ello, la segunda conclusión es que resulta menester que en la comisión de alto nivel que estructure el gasto en ciencia y tecnología esté presente además el sector privado. Pero como es posible que éste intente capturar los recursos públicos para evitar gastar en lo que habría gastado de cualquier modo, es menester que la ciencia y la tecnología se encuentren también presentes en el Consejo de Innovación. Y por eso la propuesta incluye a representantes de los mundos de la ciencia y de las políticas públicas.
Finalmente, en cuanto a esta estructura, que es balanceada, se observan en la evidencia internacional fuertes economías de aglomeración. Y si sólo procuramos que exista contrapeso entre los Ministerios y que, además, estén apropiadamente representados el sector privado y aquellos que conocen de la ciencia y la tecnología, es posible que todo el esfuerzo termine concentrado, por ejemplo, en Santiago. Porque evidentemente, por economías de aglomeración, de carecerse de una política explícita que propenda a la distribución regional de los recursos, va a ocurrir que todo terminará concentrándose en el lugar que, por economías de escala, tendrá los mejores científicos y tecnólogos y, al menos, las sedes de las más importantes empresas.
Por tal motivo, el proyecto procura un delicado balance, conforme al cual 25 por ciento de los recursos deberá necesariamente aplicarse en las Regiones, pero en una forma en que exista sinergia con lo que se hace en el resto del país.
Sus Señorías comprenderán que si el Fondo financia un Doctorado en Ingeniería de Minas (recursos humanos) en Iquique, por ejemplo, pero simultáneamente no incentiva, por la vía de grants o de beneficios tributarios, para que las empresas de la minería introduzcan tecnología, estaremos generando cesantes ilustrados en dicha ciudad. Por tanto, es menester que lo que se realice en materia de recursos humanos en Iquique sea consistente con los incentivos otorgados a las empresas mineras para que introduzcan innovación.
En consecuencia, resulta fundamental que la definición del 25 por ciento que va a Regiones se produzca en tándem, en sinergia, en coherencia con lo que se hace con el cien por ciento de los recursos del país.
Ahora -con esto finalizo-, es obvio que no tendría sentido discutir sólo respecto a los recursos adicionales establecidos en la ley sobre impuesto específico a la minería. El Consejo de Innovación debe tener una palabra. Y ya existe una comisión presidencial que está trabajando para elaborar propuestas que sirvan como base al trabajo de dicho Consejo acerca de los recursos que el país gasta, y muy mal, que no tienen vinculación alguna entre el sector privado y el sector público, entre la universidad y la tecnología, entre los recursos humanos y los sectores punta de la economía.
Por tanto, estamos en presencia de un proyecto que tiene la flexibilidad -muchos señores Senadores lo señalaron- para acoger en el debate particular la sensibilidad más fina, pero que recoge, no algo que se le ocurrió a un burócrata sentado en su escritorio, sino un trabajo sistemático de observación de las mejores prácticas de los países punta en estas materias y que sigue los criterios que he consignado.
Muchas gracias.
---------
El señor OMINAMI.-
Pido la palabra.
El señor ROMERO (Presidente).-
La tiene, Su Señoría.
El señor OMINAMI.-
Señor Presidente , solicito recabar el acuerdo necesario para que la Comisión de Hacienda sesione paralelamente con la Sala, en forma muy breve, a fin de tratar el proyecto que modifica la Ley de Pesca y Acuicultura, con urgencia calificada de "suma". Se trata de aspectos muy puntuales que, a mi entender, podríamos resolver rápidamente.
Por cierto, si hubiera alguna votación en el Hemiciclo, interrumpiríamos de inmediato la reunión.
El señor ROMERO ( Presidente ).-
Si le parece a la Sala, se accederá, una vez que termine de intervenir la Senadora señora Matthei, integrante de la Comisión de Hacienda.
--Se autoriza.
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El señor ROMERO (Presidente).-
Tiene la palabra la Honorable señora Matthei.
La señora MATTHEI.-
Señor Presidente , en la discusión habida aquí se han enredado, de alguna manera, dos visiones distintas sobre el tema que nos ocupa.
Por un lado está todo lo relativo al royalty, al origen de las platas y al problema de las Regiones del norte, cuyas estructuras productivas se encuentran excesivamente concentradas en la minería, con las dificultades que ello implica cuando las minas se agotan o cuando el precio de los minerales baja mucho.
Por otra parte se encuentra el determinar cuál es la mejor estructura para una adecuada investigación científica o tecnológica y, sobre todo, para un apropiado adelanto tecnológico y, por lo tanto, un mayor valor de nuestros productos.
Me parece que el debate en esta Sala ha estado tironeado por ambas visiones.
Cuando uno escucha al Senador señor Boeninger o al Ministro de Hacienda , ¡qué duda cabe de que nuestra organización en materia de investigación científica y tecnológica, adelantos, incorporación de tecnología a los productos, etcétera, se halla subdesarrollada!
Debemos avanzar hacia un sistema donde el dinero primero se acreciente, pero, además, se utilice bien y no sea capturado ni por el sector público -por funcionarios- ni por el privado. Eso es obvio y en tal sentido apunta el proyecto.
Sin embargo, leí también el discurso del Senador señor Núñez y no puedo dejar de concordar absolutamente con él.
En verdad, las Regiones mineras iniciaron la lucha por el royalty con el objetivo de diversificar sus estructuras productivas. Todas se preocuparon de conseguir los votos suficientes para su aprobación, con la esperanza de que algo de eso quedara en el norte. Y ello no está contenido en la iniciativa.
Soy representante de la Cuarta Región, donde, si bien hay cierto desarrollo de la agricultura, el peso lo sigue haciendo la minería. Y, en realidad, toda la gente esperaba que el royalty implicara algún tipo de mejora en el empleo, en el desenvolvimiento de la zona, en las expectativas hacia el futuro.
Señor Presidente, voy a votar en contra del proyecto, no por oponerme a lo que propone, sino, sencillamente, porque no resuelve para nada el tema del aporte a la zona norte. Allá existen muchas necesidades y no todas se relacionan con el desarrollo científico.
Por ejemplo, en la Región de Coquimbo se requiere efectuar estudios sobre cómo disminuir costos en las plantas que procesan los minerales de los pequeños mineros; cómo mejorar el cultivo de avalones, en cuanto a si sólo se pueden desarrollar en el mar o también en piscinas, fuera de él; cómo introducir variedades que ocupen menos agua, para optimizar su uso, etcétera.
Como dije, señor Presidente , allá se precisa dinero, no sólo para desarrollo científico y tecnológico, sino también para otras cosas. Falta más infraestructura: necesitamos el paso Aguas Negras; necesitamos el embalse El Vato y todo un sistema de embalses precordilleranos, de manera que cuando llueva el agua no esté a los dos días en el mar; necesitamos apoyo en la comercialización y, en general, en la actividad de las áreas de manejo; necesitamos ayuda en la producción de quesos de cabra; necesitamos respaldo en la floricultura; necesitamos ver cómo se puede desarrollar el cultivo de semillas híbridas; necesitamos más trabajo; necesitamos mayor diversificación de la estructura productiva.
Por eso resulta tan desagradable discutir esta iniciativa, porque se hace desde dos perspectivas distintas y que difícilmente se pueden amalgamar.
No puedo olvidar, señor Presidente , que el dinero con el cual se propone abordar el desarrollo científico provendrá del royalty, ni que la lucha por éste la dieron las Regiones mineras con el objeto de obtener más recursos para diversificar su estructura productiva. Y, en la que represento en el Senado, nadie entendería que aprobáramos un proyecto que finalmente no significa nada para sus habitantes. ¡Nada!
De otro lado, entiendo el esfuerzo del Senador señor Boeninger y el trabajo que se ha realizado aquí para contar con una organización más racional en materia científica.
Esos fueron los motivos que nos impulsaron a pedir, una y otra vez, que por lo menos durante algún tiempo los recursos quedaran aparte y no se integraran todos en un solo fondo nacional, donde de alguna manera la estructura se halla muy centralizada.
No es posible, en esta discusión, obviar el hecho de que los dineros provendrán del royalty. ¡No es posible! Y creo que ningún Senador o Diputado de las Regiones mineras permitirá que, en definitiva, esos recursos se centralicen por completo y no contribuyan a entregar a sus pobladores lo que tanto anhelan.
Cuando el precio del cobre y de otros minerales estuvo bajo, en Andacollo el 90 por ciento de la gente debe de haber estado cesante; en Illapel, las banderas negras flameaban casi todas las semanas; en Combarbalá, todo el mundo se encontraba sin empleo; en Ovalle, la desazón de los pequeños mineros era terrible. Y ahora que subieron los precios, tampoco los están gozando, porque son tan altos los costos de maquila, de procesamiento de los minerales de los pequeños mineros, que prácticamente no se benefician de ello. Es cierto que se han abierto más minas, las que, de alguna forma, han vuelto a producir. Pero se necesitan caminos, equipamiento, inversiones en las plantas, como en la de la ENAMI, en Ovalle. Se requieren muchas cosas, pero el proyecto no da ninguna respuesta.
Repito: valoro lo que se ha hecho en orden a contar con una estructura razonable en materia de desarrollo científico y tecnológico. Pero no le puedo dar vuelta la espalda a la gente de mi Región, que luchó por el royalty.
Y, justamente por eso, cuando se discutía la iniciativa sobre royalty manifesté, de modo reiterado, que el camino más conveniente era aumentar las patentes de las grandes empresas mineras, pues era la única forma de asegurar que ese dinero quedara en zonas donde existe minería.
No hay que olvidar que la idea del royalty nació en las Regiones del norte, donde alcaldes y concejales de todos los partidos políticos empezaron a ver cómo podían obtener más recursos para diversificar la estructura productiva, ya que son los municipios los que se enfrentan con la cesantía, con la tremenda desesperanza que genera la falta de trabajo.
Así nació el tema del royalty. Yo les dije muchas veces: "Los van a hacer lesos. Van a aprobar el royalty y no se va a gastar ni un peso en estas Regiones". Y eso es exactamente lo que está sucediendo.
Entonces, si el Gobierno no quiere sufrir una derrota en este proyecto tan importante -y va a sufrirla, porque no tendrá los votos suficientes para aprobarlo-, de alguna manera debe destinarse parte de los dineros del royalty a aumentar la infraestructura y a ayudar a las Regiones del norte. No pueden asignarse en su totalidad a investigación científica. Se tendrá que estudiar de dónde obtener más recursos para este efecto. Pero a nosotros nos resulta imposible aprobar o apoyar una iniciativa que, en el fondo, obvia el hecho de que las platas provendrán de la riqueza minera de dichas Regiones y éstas no van a recibir nada.
Por lo tanto, de mantenerse el texto actual, con gran pesar anuncio mi voto en contra.
El señor GAZMURI (Vicepresidente).-
Tiene la palabra el Honorable señor Flores.
El señor FLORES.-
Señor Presidente , me ha ido preocupando el estado de ánimo imperante en la Sala a medida que avanza la discusión. Ayer había una ausencia general de Senadores -al parecer, existían muchas otras tareas- y, pese a la importancia del tema, pocos le dan pelota.
También tenemos la cuestión planteada por los Senadores señora Matthei y señor Núñez , relativa a las Regiones.
Creo que aquí hay tres problemas: el de la estrategia de desarrollo competitivo del país; el de la apropiación de los dineros por los científicos nacionales -que son quienes se están movilizando para obtener este dinero-, el cual no responde necesariamente a una estrategia de desarrollo; y el regional.
En fin, existe una ensalada grande que va a impedir que el proyecto se apruebe. Y quiero dedicar mi intervención a agregar más ingredientes a la ensalada, para que esté completa, los cuales tienen que ver con la cosa competitiva.
Estamos hablando de este asunto como si Chile fuera una aldea y hubiera que guardar la platita. Porque las únicas consideraciones que tenemos son las experiencias narradas por el señor Ministro de Hacienda.
Debo hacer presente que entre tecnología y ciencia existe una diferencia esencial, que nuestros científicos no cachan o no les gusta cachar. He hablado suficiente con ellos para saber que es así.
Esa diferencia dice relación, primero, a que la tecnología debe vender productos y financiarse; y segundo, a que para que eso ocurra tiene que entrar a tiempo. Su timing es fundamental, y es muy distinto según el tipo de industria de que se trate.
Por ejemplo, ¿cómo se explica el acierto notable de un país chico, como Finlandia, con Nokia? Las ventas de dicha empresa alcanzan a alrededor de 40 mil millones de dólares al año. Vende 7 millones de celulares al mes en el mercado interno -en una nación con menos de 4 millones de habitantes-, más otros 6 millones que le compran los chinos. Ésas son las proporciones.
Ahí es esencial el talento de alguien. ¿Por qué no lo hizo la Ericsson? Motorola no podía competir con Nokia.
Entonces, la cosa es tener el timing, la suerte, y saber que hay riesgo.
Por lo tanto, respecto de la tecnología, uno debe entender quiénes son los que administran el riesgo. A lo menos, yo sé que en la informática y en la biotecnología están los capitalistas de riesgo a nivel mundial. ¡A ellos no les importa fracasar: saben que le van a achuntar!
Voy a contar una historia -no ocuparé más de dos minutos- que me parece interesante dar a conocer: la de Google.
Google es una empresa que siete años atrás no existía. La fortuna de cada uno de sus dos dueños -a los 32 años de edad- alcanza a 12 mil millones de dólares. Uno es hijo de una maestra rusa que emigró a Estados Unidos, y el otro, americano. Hace cinco años trataron de vender la compañía en un millón de dólares. Nadie se las quiso comprar. ¡Y bendita sea! Por eso en la actualidad tienen lo que tienen. Su valor aproximado es de 120 mil millones de dólares. Vale más que el producto nacional bruto de Chile. Ochenta por ciento de los productos que ofrece son gratis.
Ése es el tipo de economía que tenemos que explicarnos. Por un lado, usarlo y por otro, defendernos.
Además, ¿qué lograron? ¡Cambiar el mundo!
Hoy día, a mi juicio, el mayor enemigo de los periódicos chilenos es Google -no "La Tercera" ni "El Mercurio"-, porque les va a quitar los avisos económicos.
Esos avisos se pagarán en dólares y los pequeños empresarios chilenos serán lo más beneficiados con ese buscador. Tendrán la posibilidad de vender sus productos de Iquique o de Molina, por ejemplo a India, porque un avisito permite que alguien de ese país los compre. Y ese avisito sólo se paga si el productor tiene éxito. Porque no paga por el aviso, sino por el número de pedidos.
¡Eso es lo que se está vendiendo! Así está operando el sector.
En el área de la minería la situación es totalmente diferente. Los americanos se encuentran fuera. Son australianos, canadienses y sudafricanos los que participan en esa actividad. Y todos están en nuestro país. Entonces, debemos hacer alianzas con ellos, porque juegan con otro ritmo. En ese ámbito, tenemos assets notables que no estamos usando.
Una persona increíble como Diego Hernández maneja desde Chile el negocio mundial relativo al cobre del grupo BHP Billiton: las minas en Perú, Australia y todas las que le pertenecen. Y si queremos meternos en serio en la biotecnología minera, precisamos asociarnos con ese tipo de grupos. Felizmente, parece que esa compañía va a invertir dinero en la Fundación Chile. Y Diego Hernández entrará ahí. Habrá que seducirlo para que se meta en la cuestión biotecnológica minera. Eso sí puede ser un gran negocio.
Ayer escuché decir al Honorable señor Núñez que debemos hacer algo serio en minería. Estoy de acuerdo. Pongamos la mejor Escuela de Minas en el norte, donde sea, pero hagámoslo con esos gallos. Solos, no.
Ése es un problema distinto. Hay otra ley para fomentar los recursos de auxilio a Regiones. Ésa es otra cosa, completamente diferente. No metamos estos pasteles juntos. ¡Y los estamos juntando!
Podría mencionar otros ejemplos. Tomemos el caso de la biotecnología, que nos interesa mucho. Hay que sostener discusiones políticas sobre esa materia, porque es muy política.
La biotecnología tiene, por lo menos, tres aspectos. El primero de ellos se vincula con la medicina. En Chile hay gente que está realizando descubrimientos importantes que pueden tener efectos sobre el cáncer. ¿Vamos a hacer algo al respecto o no? ¿Cómo? Hoy día ninguno de los empresarios nacionales se encuentra capacitado para invertir en este campo, pues carecen de conocimientos y no pueden tomar ese riesgo. Entonces, ¿cómo lo haremos?
Totalmente diferente es el caso de la biotecnología con relación al mundo vegetal (forestal, agrícola), donde existen problemas políticos muy grandes. Una parte significativa de nuestro Parlamento se opone a intervenir en ese ámbito, si bien otros apoyarían una decisión en tal sentido. El debate es mundial.
Debemos elaborar una política sobre el punto. ¿Vamos a ser un país involucrado en la biotecnología y en la producción de transgénicos o nos vamos a excluir de esos procesos? Ésa es una discusión política. Si no la hacemos, nadie, ni de aquí ni de fuera, va a invertir en ello.
Después tenemos la biotecnología de los materiales, que nos afecta porque el cobre es un material. Al final, los productos mineros se transforman en materiales, no en minas. Éstas constituyen el mecanismo. Ahora, si vamos a actuar en este campo, debemos hacerlo con grandes capitales. Y lo que el Gobierno ha realizado con Biosigma me parece un paso sumamente importante. Pero no conversamos de esto.
A continuación quiero poner el tema de la señora Juanita.
Este asunto no aparece en las elecciones presidenciales, ni en las de Diputados y Senadores. Hablar de los problemas de invención de empleo y de innovación no atrae votos y, por lo tanto, no aparece en nuestras conversaciones ni en la prensa. La pregunta es cómo vamos a producir la emoción espiritual necesaria para que el país tome en serio ese desafío.
En lo que todos estamos de acuerdo con el señor Ministro es en que tal desafío es fundamental. Si hay dos cosas en las que Chile está jodido, es en educación y en el asunto que nos ocupa. En eso consiste la maldición a que aludía el señor Ministro . Pero si el país no tiene vocación política al respecto, no lo vamos a poder concretar, y estaremos dándonos vuelta y hablando generalidades, generalidades y generalidades y no seremos capaces de sentir las pasiones indispensables para ello.
Porque sólo con pasiones van a aparecer empresarios emprendedores en este ámbito. Sólo con pasiones va a haber financistas de riesgo. Sólo con pasiones llegarán inversionistas extranjeros. Sólo con pasiones vamos a producir los nuevos Pablo Valenzuela .
Pablo Valenzuela tiene 65 años. Y si no hubiera tenido la suerte de estar en la Universidad de California en el momento en que se creó la biotecnología, no habría alcanzado el éxito. Nosotros también tuvimos suerte. Porque si Pablo Valenzuela no existiera, no se habría descubierto -con una inversión de un millón y medio de dólares- la vacuna para los salmones. Porque hay que tener ese talento, con ese background, para poder hacer esas cosas.
La pregunta es cómo vamos a producir las demás.
¿Saben los señores Senadores qué pasa hoy día? Hay biotecnólogos chilenos con nivel de máster desempleados. ¿Cómo vamos a invertir más si no contamos con estrategia?
Por eso, la parte más sustantiva del proyecto -tendría que felicitar a sus autores por ello, si bien creo necesario abrirla mucho más- es aquella que plantea una estrategia de innovación productiva, que, en el fondo, constituye una estrategia de desarrollo.
Ayer el Senador señor Larraín decía que le preocupaba que esta cuestión quedara, al final, en manos de un sistema presidencialista, donde hay una autoridad máxima única. Pienso que el problema no es que ella quede radicada en una sola persona. Lo relevante es que permee toda la sociedad.
En mis viajes con el Senador señor Foxley y en otro con el Honorable señor Boeninger aprendí un par de cosas que quisiera compartir.
Me interesó cómo procede Finlandia. Allí se inventó un curso, denominado "Finlandia 2010" (el que se creara en Chile debería ser "2015"). A él se invita todos los años a 40 personas, de diversos sectores -parlamentarios, empresarios, etcétera-, para recorrer y observar el mundo. Dura más o menos un mes. Y al regreso se elabora una memoria. De esa manera se va acumulando una experiencia, que consiste en entender que los países chicos deben saber qué pasa en el mundo y dónde se tienen que poner. Porque la transformación es demasiado grande.
La Universidad de California, en San Francisco, se encuentra construyendo 25 edificios, con un costo de 500 millones de dólares cada uno, para biotecnología, con su laboratorio. Me parece que en Sydney, Australia, hay uno de las mismas características.
Nosotros no tenemos ninguno. Y como no lo vamos a tener nunca, requerimos la habilidad de Singapur y de Finlandia para saber en qué tiempo y dónde diablos crearlo. Pero para eso debemos tener pasiones. Y en esta discusión veo que las pasiones ya están jodidas.
Entonces, sería un primer gran triunfo si lográramos entender cómo Chile va a lograr una estrategia de desarrollo que no surja de un plan ni de un edicto presidencial, sino de una conversación en la cual alineemos las voluntades -habrá diferencias- y se creen espacios para invertir. Pero también para que los jóvenes puedan decir: "Aquí está mi futuro; no sólo en las leyes, en el cine o en los MBA", como ocurre hoy día.
Sin esas tres pasiones no vamos a conseguir ninguna cosa grande.
Por lo tanto, mi proposición -en parte coincide con la del Senador señor Viera-Gallo- es que analicemos el problema en varios niveles.
Confiemos en que la comisión creada por el Presidente Lagos funcione más allá del tiempo programado y asigne recursos durante el primer año. Hagamos una discusión seria para saber en qué consiste una estrategia de innovación y desarrollo. Creemos las instituciones para que eso ocurra, que deben ser tan serias como otras que hemos inventado, por ejemplo, el Banco Central. Es decir, debe haber prospectiva abierta, una manera de realizar esa conversación.
Eso, por un lado.
En segundo término, definamos el problema de las Regiones y saquemos ese asunto del proyecto. Son dos cuestiones distintas. Si hay que asignar una parte de los recursos a las Regiones, hagámoslo. Esa decisión podríamos tomarla pronto.
La señora MATTHEI .-
Exacto.
El señor FLORES.-
En tercer lugar, creo que debemos clarificar la discusión de fondo. Porque no se necesitan 120 millones de dólares, sino mil millones; o simplemente 20. Hay que recordar que los chinos y los indios, con menos del 0.6 por ciento del PIB, se están transformando en líderes.
Discrepo del Honorable señor Vega en que esto sólo se hace en Europa y Estados Unidos. La ciencia y la tecnología del siglo XXI serán asiáticas, porque Asia ya tiene todas las capacidades y el volumen de mercado. El 80 por ciento de los profesores del MIT y de la Universidad de Berkeley -las grandes escuelas de ingeniería del mundo- son de origen chino.
Estoy seguro de que será así. Lo están haciendo con mercado y con talento. China no es un país capitalista: tiene estrategia de desarrollo. ¡Nosotros necesitamos estrategia de desarrollo!
Entonces, discutamos este problema. Sé que a algunos colegas no les gusta.
¿Cómo se hace estrategia de desarrollo en el siglo XXI? Es una buena pregunta. Tengo algunas ideas, pero es un tema discutible.
Por ello, sugiero que separemos las materias, porque a cada asunto debemos meterle el humor adecuado. Y en la medida en que estemos con el humor incorrecto, discutiremos las cosas de mala manera.
Deberíamos estar felices de que el país tendrá estrategia de desarrollo tecnológico; pero estamos enredados. Deberíamos estar felices de que las Regiones mineras recibirán algo; pero ahora surge otra cosa.
Además, comprendo que este proceso debe realizarse -y en esto coincido con el señor Ministro - sin dejarse capturar por los intereses de algunas personas que hoy día apuntan a los fondos de CORFO y de CONICYT, porque lo que ven es más dinero para sus propósitos. Pero así no habrá estrategia de desarrollo.
En consecuencia, anuncio que votaré a favor del proyecto y que presentaré las indicaciones correspondientes.
He dicho.
El señor GAZMURI (Vicepresidente).-
Tiene la palabra el señor Ministro. Luego, el Senador señor Moreno.
El señor EYZAGUIRRE ( Ministro de Hacienda ).-
Intervendré después, señor Presidente .
El señor GAZMURI (Vicepresidente).-
Al final del debate, antes de la votación.
Tiene la palabra el Honorable señor Moreno.
El señor MORENO.-
Señor Presidente , presento mis excusas a la Sala del Senado por no haber podido estar presente ayer cuando se inició el debate del proyecto. Razones de fuerza mayor me impidieron concurrir a la sesión.
Sin embargo, leí con atención los discursos de cada uno de los señores Senadores que intervinieron ayer y escuché los de esta mañana.
Obviaré la presentación formal del proyecto, porque el debate ya se ha iniciado.
En primer lugar, considero indispensable dejar constancia, no sólo en la Versión Taquigráfica sino también en el debate, de la génesis de la iniciativa, porque eso puede explicar muchas intervenciones o actitudes posteriores que tendrán tanto los Senadores como los Diputados en el curso de la tramitación.
El proyecto que nos ocupa surge de una forma distinta de la que hoy día conocemos. Llegó en julio de 2004, a través de un mensaje que el Ejecutivo envió a la Cámara de Diputados para crear, por medio de la denominada "regalía minera" -impuesto ad valórem-, un Fondo de Innovación para la Competitividad.
Esa idea -deseo que esto quede registrado en la Versión Taquigráfica de esta sesión- fue impulsada durante años por alguien que, por distintas circunstancias, hoy no está con nosotros: el entonces Senador Jorge Lavandero . Él fue quien durante largos años luchó por la creación del royalty y para generar los recursos sobre los cuales hoy día debatimos.
Pienso que ello debe quedar en la historia del Senado, porque, cualesquiera que sean las situaciones vividas por ese ex Parlamentario, no cancelan la verdad de lo ocurrido.
En segundo término, el proyecto entró -como recordé- a la Cámara Baja, donde tuvo un trámite bastante rápido. Sin embargo, ¿qué ocurrió? Esa rama legislativa aprobó una serie de ideas -entre ellas, la creación del mecanismo para distribuir los recursos del Fondo-, pero rechazó, por falta de quórum -no porque se haya perdido por votos en dicha Corporación-, la posibilidad de crear el impuesto ad valórem en la regalía que se aplica a la explotación de los minerales.
En consecuencia, se produjo un hecho anómalo, y la Cámara de Diputados no supo si enviar o no el proyecto al Senado, dado que había aprobado sólo una parte y la otra no reunió el quórum constitucional necesario.
El Presidente de la República envió un oficio a la Cámara Baja para pedirle que despachara la iniciativa, de acuerdo con el artículo 65 de la Constitución, a fin de que el Senado se pronunciase respecto de la necesidad de crear el impuesto ad valórem.
El proyecto llegó a esta Corporación, donde hubo un debate arduo y extenso. Pero se dio la anomalía de que, a pesar de que en esta Alta Cámara se registraron 26 votos a favor y 13 en contra, el elevado quórum exigido, de dos tercios, que no se ha modificado en la Constitución vigente, impidió que una abrumadora mayoría convirtiera en ley lo que la Cámara de Diputados aprobó. Y ahí radica la trampa, que sigue pendiente: por los elevados quórum requeridos (cuatro séptimos o tres quintos), la voluntad de un cuerpo corporativo como el Senado de la República no pudo llevarse adelante.
¿Qué ocurrió? El proyecto quedó absolutamente trunco, en el sentido de que resultó como un chasis sin motor.
Restaba la instancia de una Comisión. Se mandó el proyecto a la de Educación del Senado para que discutiese la creación del Fondo. Pero la iniciativa carecía de sustancia y empezó a dormir -porque no tenía ningún sentido tratarla-, hasta que, mediante una indicación sustitutiva, el Ejecutivo propone lo que hoy día estamos discutiendo, que, en el fondo, ya no es el royalty, sino un proyecto que genera recursos de otra manera.
Ésa es la verdad y debe quedar establecida.
¿Por qué menciono esto aquí? No sólo para la historia de la ley. Porque los representantes de las Regiones mineras, tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados, tenían, no únicamente la imagen, sino también la voluntad política de ver qué parte de los fondos -si no todos ellos- se invertiría en el desarrollo de las zonas de donde se extraían recursos de tal naturaleza.
Y esto es lo que aflora en el debate de hoy.
Nadie ha dicho, en ninguna de las intervenciones que he leído, que no está de acuerdo en crear un mecanismo para distribuir fondos que mejoren la competitividad o la innovación tecnológica. ¿Pero por qué se anuncian votos en contra? Porque una destacada Senadora y varios Honorables colegas dicen: "No es esto lo que le dio origen al proyecto. Los fondos se están distribuyendo de manera distinta y, al final, la disolución de estos recursos va a generar frustración respecto de lo que fue la idea original, la idea matriz...
El señor GAZMURI ( Vicepresidente ).-
Perdón por interrumpir a Su Señoría.
Pido a los señores Senadores que están a mi izquierda que no hagan una sesión paralela y permitan escuchar al Honorable señor Moreno.
El señor MORENO.-
Gracias, señor Presidente . Puedo hablar aunque no me presten atención los Senadores señores Cariola y Orpis .
El señor GAZMURI (Vicepresidente).-
Pido respeto para con el orador, señores Senadores.
El señor MORENO.-
Continúo.
Por lo tanto, señor Presidente , ¿qué se halla en juego hoy? La creación de un mecanismo. Porque los fondos comenzarán a acumularse, estimándose que para 2006 se contará, teóricamente, con unos 80 millones de dólares, en tanto que en régimen, según la estabilidad o no del alto precio del cobre, se dispondrá de 180 a 200 millones de dólares anuales adicionales. Y se nos ha hecho una proposición.
Por mi parte, acepté una invitación del señor Ministro de Hacienda , al igual que algunos otros señores Senadores, gracias a lo cual pudimos conocer previamente algunos de los lineamientos de que se trata. Agradezco esa posibilidad. Expusimos algunos planteamientos y, obviamente, no todo ello es acogido en el proyecto. Lo acepto. Pero ciertas cosas dichas por quienes representábamos a Regiones mineras no se hallan consignadas, aspecto que no creo que sea menor, a raíz de lo que he leído y escuchado de las intervenciones.
Mas quiero ir al fondo de la situación. Se propone crear un Consejo que fije una estrategia -¿quién estará en desacuerdo con ello?- de largo plazo: doce años y que puede ir siendo ajustada cada cuatro años, de acuerdo con la forma en que el pueblo chileno escoge a su Mandatario. Está bien. He observado que doce años es un período demasiado extenso, pero no haré cuestión al respecto. ¿Dónde reside la dificultad? En que el organismo se halla claramente subordinado al menos a tres ministerios, si no a cuatro. El Presidente de la República nombra un experto y se registra una representación de tres personas que ocupan los cargos más importantes dentro del aparato del Gobierno. La pregunta que me hago es si esas autoridades no necesitarán otra comisión que efectúe el trabajo. Y ahí inmediatamente surge la gran interrogante de si no generaremos, sin buscarlo ni quererlo, una burocracia que termine por consumir parte del Fondo que se crea.
Se ha precisado que la Secretaría Ejecutiva de la entidad se hallará radicada en la Subsecretaría de Economía. Es algo que debe explicarse, porque la Cartera de Economía cumple otras funciones. Y, por lo tanto, si el Ministerio de Hacienda y la Dirección de Presupuestos son los que resolverán, prefiero que se encuentre en esta última Secretaría de Estado. Lo digo francamente. Porque es mejor saber con quién se entenderá quien distribuye los fondos y no que ello diga relación a otro ente. Y con lo anterior no quiero desmerecer en modo alguno el esfuerzo al respecto.
¿Cuál es el tercer argumento? La baja participación de personas con una competencia real acerca del tema que se debe resolver. En consecuencia, en el debate en la Comisión se hizo referencia largamente a la necesidad de sustituir algunos de los integrantes por otros que contaran con idoneidad científica.
Pero, además, hubo un elemento que no se tuvo presente. La Confederación de Trabajadores del Cobre concurrió a la Comisión y preguntó: "¿Por qué se hallan considerados los empresarios y no nosotros? Nosotros, que tenemos toda la disponibilidad para colaborar, que estamos extrayendo el mineral, ni siquiera hemos sido contemplados en la proposición.". Habiendo escuchado lo anterior el órgano técnico, hice mío tal planteamiento y anuncié que por lo menos formularemos indicación, aunque resulte inadmisible, para que esa representación, si seguimos pensando que los recursos provienen precisamente del trabajo de dicho sector, sea incluida.
En estos días nos hemos impuesto por la prensa de la creación por el Primer Mandatario de una comisión, presidida por nuestro colega y amigo Edgardo Boeninger . Aquí he escuchado las opiniones del Senador señor Flores y leí las del Honorable señor Viera-Gallo y otras. La verdad es que se trata de algo que contradice un poco al propio proyecto. Y como me acostumbraron a leer con algún sentido cartesiano, la verdad es que debo concluir que las premisas deben ir en orden. Al recoger el antecedente, no puedo esconder que me parece -y así se lo hice ver privadamente al señor Ministro de Hacienda - que la adopción de esa medida antes de que el Senado celebrara el presente debate implicaba expresarle: "¿Sabe? La discusión de ustedes está un poco de más.".
Como me gusta decir las cosas de una sola vez y clara y directamente, tuve la posibilidad, en un encuentro en que participamos con el señor Ministro , de manifestarle mi opinión, como asimismo lo hice, cuando tuvo la gentileza de llamarme por teléfono para hablar sobre el tema, con el señor Marcelo Tokman .
En realidad, creo que la comisión no debió ser anunciada antes del debate en que nos hallamos. Esta Corporación merece respeto. No hago cuestión del derecho del Presidente , pero no puedo callar que existen fueros que deben ser considerados. Y en este caso ello no ocurrió.
Desde ese punto de vista, lo que corresponde es seguir. Se lo escuché recientemente al Senador señor Flores, y entiendo que el Honorable señor Viera-Gallo también lo había expuesto. No se trata de que no queramos el proyecto, pero no estamos satisfechos con la forma en que se ha planteado. Por lo tanto, ¿qué es lo que cabe? Una posibilidad es someterlo a votación, con el objeto de ver qué pasará en el próximo Gobierno. Porque no se despachará del Congreso antes de abril o mayo de 2006. Lo sabemos todos. No tiene cómo. ¿Y cuál podría ser la fórmula? Aprobarlo en general y pedirle al señor Ministro de Hacienda , aquí presente, que se comprometa a que con las Comisiones o una comisión ad hoc del Senado se formule una nueva proposición que busque conciliar los criterios en debate.
Porque, si no, vendrá la presentación de indicaciones y cada uno de nosotros formulará un conjunto de ellas que, en el fondo, demorarán o incluso podrán llevar a votaciones que no sean las que se esperan para aprobar el texto.
Yo, por lo menos, me hallo en la mejor disposición para crear el sistema. Como lo he dicho en las discusiones anteriores, no tengo tiempo para explicar cuáles son las áreas en que deberíamos concentrarnos; pero claramente surge una gran pregunta. Porque los dos grandes instrumentos que se hallan diseñados y en funcionamiento, que son la Corporación de Fomento y la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica -los cuales localizan los recursos, bien o mal, para el tipo de desarrollo de que se trata-, quedan en el Consejo con el carácter de invitados con derecho a voz y sin una función real, cuando sabemos que hoy toda la gente recurre a ellos o postula o lucha en esas instancias para sacar sus proyectos. Y, por lo tanto, me parece -por decir lo menos- que ése también es un hecho anómalo. Ambos organismos deberían integrar la entidad, porque tienen la capacidad de ejecutar. Es una opinión distinta de lo expresado en el proyecto.
Dejo formulada la sugerencia, señor Presidente .
Todos queremos que la iniciativa avance. El nuevo Gobierno deberá formular una precisión o reiterar lo que se ha planteado. Es obvio. Y tendrá la posibilidad, tanto en el Senado como en la nueva Cámara de Diputados, de llegar a un acuerdo sobre la base de ajustar el que el organismo mencionado sea realmente de carácter presidencial y cumpla con el rol de fijar una estrategia, además de incluir dentro de sí los instrumentos que ejecutarán la distribución de los fondos.
Ésos son mis puntos de vista, señor Presidente. Y quería dejarlos consignados en la historia del debate.
Nada más.
El señor GAZMURI ( Vicepresidente ).-
Ha terminado justo en su tiempo, señor Senador.
Tiene la palabra el señor Ministro y luego se votará, salvo alguna proposición en contrario.
El señor EYZAGUIRRE ( Ministro de Hacienda ).-
Seré muy breve, señor Presidente , sin perjuicio de recoger las observaciones formuladas.
Deseo consignar, en primer lugar, que la discusión presenta un cierto parecido a las obras de Eugenio Ionesco, por cuanto lo que el Ejecutivo intenta con el proyecto es autolimitarse. El impuesto a la minería ya se encuentra aprobado y comenzará a rendir recursos a partir del 1º de enero próximo. Por lo tanto, de no mediar ninguna iniciativa legal, el futuro Gobierno, incluidos su Ministro de Hacienda y su Director de Presupuestos , será amo y señor para disponer de esos fondos en lo que se le antoje, obviamente sometido a la aprobación del Parlamento.
Y digamos las cosas como son.
Conversamos con los Ministros de Finlandia y de Dinamarca, países que hace 30 años, habiendo sido tradicionalmente proveedores alimentarios del gran mercado del COMECON, se encontraron, al comenzar la decadencia de ese bloque, con que si no innovaban simplemente se estancaban. Así, lograron aumentar el gasto en ciencia y tecnología de 0,5 por ciento del producto interno bruto al 4 por ciento.
Nosotros sabemos que con esto no se gana ninguna elección, porque la señora Ema -como alguien dijo- no va a lograr establecer inmediatamente una relación entre tener un laboratorio de biotecnología y la suerte de sus hijos.
Según muy bien indicó el Senador señor Flores, o tenemos una postura nacional y concretamos esto, o nos estancamos y quedamos liquidados. No es una cuestión de partidos políticos, sino un tema país.
Entonces, todo lo que queremos es autolimitarnos. Hemos dicho: "No somos nosotros los expertos; por tanto, busquemos a los mejores en cada área: los tres Ministros que establecen el equilibrio; el mejor experto científico, el mejor experto tecnológico, el mejor experto educativo, el mejor experto en políticas públicas, todos los cuales harán una propuesta al Presidente de la República , quien, al aprobarla, se comprometerá".
Por ello, esta Comisión será completamente autónoma para decidir respecto de estos y otros dineros en relación con el desarrollo de la ciencia y la tecnología -estos fondos, Senadora señora Matthei , no son sólo los del royalty-, con el objeto de pensar en el país del mañana.
Sin embargo, ¿me dicen que prefieren que el futuro Ministro de Hacienda y el futuro Director de Presupuestos asignen los recursos a su entera discreción? Si es así, no estoy entendiendo la conversación.
Esto es perfectible. En tal sentido, acojo lo señalado por el Honorable señor Moreno. Si Sus Señorías deciden formar una comisión ad hoc -son soberanos para ello- integrada, por ejemplo, por Senadores de las Comisiones de Hacienda, de Minería, de Economía y de Educación, para hacer la cirugía fina, considerando la idea general de que se trata de algo supraejecutivo y más allá del ámbito del Director de Presupuestos, que busque pensar el futuro de Chile y replantear la asignación de estas platas, yo estoy encantado con ello.
Quiero decir a la Senadora señora Matthei que las utilidades del cobre no son sólo para las Regiones mineras, sino para todo Chile. El país ha tratado siempre de salir de esta maldición, o bendición. Asimismo -a pesar de que Su Señoría lo sabe-, no es construyendo infraestructura como Chile va a eludir tal situación.
En Irlanda -que tiene 20 por ciento más de ingreso per cápita que las demás naciones de la OCED-, hay pésimos caminos. ¡Pésimos! Pregunté por qué. Me dijeron que lo importante es gastar el presupuesto para que el país sea competitivo. Las vías terrestres irlandesas, con más o menos hoyos, determinan que el nivel de bienestar de la gente sea más alto o más bajo. No obstante, se preocupan mucho de la infraestructura que les permita ser más competitivos, como en el caso de los puertos.
En esa perspectiva, estoy de acuerdo en que el paso Aguas Negras tiene sentido dentro de un concepto de estrategia de desarrollo. Sin embargo, hoy día no hay entidad alguna que piense por nosotros este tipo de estrategias, salvo el Ministro que habla, cuando planifica con el Director de Presupuestos, para luego venir a las diversas Comisiones del Parlamento a tratar de que Sus Señorías aprueben las distintas partidas.
Estamos haciendo un acto gigantesco de desprendimiento para lograr que el país se piense a sí mismo a futuro.
El tema de las Regiones mineras -la pobreza no es exclusiva de ellas, pues se encuentra también en la Octava, en la Séptima- debe ser discutido en el contexto del FNDR. Si lo relativo a las patentes mineras no estaba separado en forma adecuada, yo estoy disponible, en el contexto de la conversación que propone el Senador señor Moreno, para que se garantice que esos dineros vayan exclusivamente a tales Regiones.
Pero no creamos que haciendo infraestructura o fabricando automóviles -como se pensaba en el pasado- vamos a salir de la dependencia del cobre.
¿Saben cómo lo resolvieron los australianos? Ya no sólo venden cobre. Este año, en Perth van a llegar a 2 mil millones de dólares en servicios tecnológicos para la minería. Porque, a partir del metal rojo, han desarrollado conocimientos. No nos engañemos. No tratemos de tapar el sol con un dedo. Ni construyendo infraestructura ni fabricando automóviles lograremos el desarrollo. La única forma es que el cobre, el salmón y la agroindustria hagan un cluster, a fin de que se junten con el conocimiento.
Eso es lo que la Comisión propone hacer. Nos estamos desprendiendo de una facultad privativa del Ejecutivo , para que el país se piense a sí mismo. ¡Cómo vamos a estar en contra de eso!
Gracias, señor Presidente.
El señor GAZMURI (Vicepresidente).-
Cerrado el debate.
Sólo daré la palabra para asuntos de orden, porque todos los señores Senadores tuvieron derecho a los quince minutos reglamentarios.
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El señor OMINAMI.-
Deseo plantear una cuestión de orden, señor Presidente, respecto del proyecto que introduce modificaciones a la Ley General de Pesca, en materia de acuicultura.
Pido que se modifique la autorización para que la Comisión de Hacienda funcione simultáneamente con la Sala. Se amplió el plazo para presentar indicaciones. Han ingresado varias de ellas. Por lo tanto, me parece que lo pertinente es que también la Comisión de Intereses Marítimos, Pesca y Acuicultura las conozca.
La solución más simple consiste en que se autorice a sesionar en la tarde a ambas Comisiones, unidas.
El señor GAZMURI ( Vicepresidente ).-
¿Habría acuerdo?
--Se autoriza.
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El señor GAZMURI ( Vicepresidente ).-
Se ha pedido fundamentar el voto. Por lo tanto, se tomará votación nominal.
El señor NÚÑEZ.-
Antes de proceder a ella, señor Presidente , me parece importante que la Sala se pronuncie respecto de la sugerencia del Honorable señor Moreno, porque podría hacer variar el pronunciamiento.
El señor GAZMURI ( Vicepresidente ).-
Le recuerdo, señor Senador, que ayer se acordó que, después de que se aprobara en general la iniciativa, resolveríamos qué Comisión iba a ser la encargada del segundo informe, entendiendo que debe ser una muy especial. Se ha sugerido que participen cuatro Comisiones: Gobierno, Hacienda, Educación y Minería. Y alguien, además, propuso Economía.
Como eso se planteó ayer, propongo votar primero y después determinar si deben ser Comisiones unidas, una nueva Comisión...
El señor LARRAÍN .-
Una especial.
El señor GAZMURI ( Vicepresidente ).-
...o una especial -el tema está completamente abierto- la que prepare el segundo informe. Yo seguiría ese camino. Se han hecho dos proposiciones.
Tiene la palabra el Senador señor Boeninger, sólo para ese asunto.
El señor BOENINGER.-
Señor Presidente , efectivamente hay que votar, pero teniendo en mente que no debiera haber una aglomeración o sumatoria de sucesivas Comisiones para el segundo informe, sino una única, ad hoc, especial o como quiera llamarse, que reúna a la gente que, desde distintos ángulos, se interese en el tema.
Ésa debiera ser la forma de abordar el análisis en particular.
El señor GAZMURI ( Vicepresidente ).-
Tiene la palabra el Honorable señor Moreno.
El señor MORENO.-
Señor Presidente , el problema no es si se vota primero o después. Lo relevante es la pregunta que hicimos al señor Ministro de Hacienda : ¿está en posición de proponer él un mecanismo que recoja los criterios aquí formulados, sin variar la esencia básica del proyecto, con el objeto de solucionar lo aquí planteado?
El procedimiento puede ser el que ya se ha usado en otras oportunidades: que el Senado constituya un grupo especial de trabajo para estudiar la materia.
Lo que yo no quiero es que, una vez aprobado el proyecto, entremos a discutir acerca de un mecanismo formal que no resuelva la situación. Ahí es donde pueden surgir las dificultades.
Por lo tanto, pido al señor Ministro que nos dé su opinión antes de votar.
El señor GAZMURI ( Vicepresidente ).-
El señor Ministro dijo en su intervención que estaba completamente disponible para incorporar todos los elementos que habían surgido en el debate.
Si es así, y como percibo que hay bastante acuerdo en que esto requiere una discusión más de fondo -se han expresado muchos criterios distintos-, propongo que, antes de la votación, acordemos lo siguiente: que se constituya una comisión especial que no sea una sumatoria de otras específicas; que encarguemos a la Mesa la proposición sobre cómo integrarla, para que lo haga presente en la próxima reunión de Comités y que, en función de eso, procedamos a votar en general.
La señora MATTHEI.-
Señor Presidente , pido que se suspenda la sesión por cinco minutos para conversar esto tranquilamente, porque aquí hay dos problemas distintos: uno, cómo estructurar institucionalmente el desarrollo tecnológico, la competitividad, etcétera; y otro, el anhelo de las Regiones mineras.
En consecuencia, solicito una suspensión para resolver cómo abordar esas dos materias, las cuales debieran analizarse en forma paralela. No es razonable que una influya sobre la otra, que es lo que va a suceder si no llegamos a un acuerdo antes.
El señor MUÑOZ BARRA.-
Señor Presidente , deseo hacer presente un aspecto reglamentario.
El señor GAZMURI ( Vicepresidente ).-
A mi juicio, en cinco minutos no lograremos ningún acuerdo.
La señora MATTHEI .-
Yo creo que sí.
El señor MUÑOZ BARRA.-
¿Me permite?
El señor GAZMURI (Vicepresidente).-
En estas condiciones, pongo en votación el proyecto.
El señor MUÑOZ BARRA.-
Señor Presidente , la Comisión Especial para la Sociedad de la Información y el Conocimiento del Senado podría servir de base para incorporar a todos los Senadores interesados en el tema. Si no me equivoco, la preside el Honorable señor Fernando Flores , quien ha demostrado un vasto dominio sobre la materia.
El señor NÚÑEZ.-
Yo también quiero hacer una proposición, señor Presidente .
El señor GAZMURI (Vicepresidente).-
Tiene la palabra, el señor Senador.
El señor NÚÑEZ.-
En mi opinión, las Comisiones más idóneas para estos efectos son la de Hacienda y la de Minería. Son ellas las que deberían trabajar unidas.
Si no se adopta algún procedimiento que nos asegure una discusión a fondo, algunos vamos a tener que votar en contra. Y una discusión de ese tipo únicamente se logrará si intervienen dos Comisiones, sin perjuicio de que puedan participar en el debate todos los interesados.
Repito: creo que las Comisiones adecuadas son la de Hacienda y la de Minería. Recordemos que el proyecto nació, básicamente, en la última de las mencionadas, a propósito del royalty.
En consecuencia, si hubiera acuerdo en cuanto a que esos dos organismos -a los cuales podrían sumarse Senadores ajenos a ellos- son los que deberían discutir en paralelo los dos temas indicados por la Honorable señora Matthei , nosotros votaríamos a favor.
El señor GAZMURI ( Vicepresidente ).-
El asunto es el siguiente: desde el punto de vista reglamentario, tengo que poner en votación el proyecto. Ahora, como se ha suscitado un problema para el segundo informe, propongo esperar el resultado de aquélla y según él determinar qué Comisiones deberían estudiar en detalle la iniciativa.
La señora MATTHEI.-
Al revés, señor Presidente .
El señor PROKURICA.-
No, señor Presidente , porque con eso pasaría lo mismo que ha ocurrido históricamente en el Senado: se aprueba la idea de legislar, pero, como en la generalidad de los casos las materias son de iniciativa exclusiva del Presidente de la República , se acaba la discusión.
El Senador señor Núñez ha formulado un planteamiento; la Honorable señora Matthei , otro. Yo creo que el camino va en esa línea.
Nadie quiere hacer tropezar el proyecto, señor Presidente ; pero, si nos obligaran a votar en este minuto, por lo menos yo lo haría en contra.
El señor GAZMURI ( Vicepresidente ).-
La Mesa no desea forzar una situación que contraríe a Sus Señorías.
Entiendo que hay dos propuestas básicas respecto al tema de la Comisión. Una es la planteada por el Senador señor Núñez , quien sugiere que la discusión particular de la iniciativa quede a cargo de las Comisiones de Minería y de Hacienda, unidas. Y la otra -que no está formalizada- es la manifestada por el Honorable señor Moreno, según la cual esa tarea debe ser realizada por una comisión especial o ad hoc.
Entonces, si le pareciera a la Sala, podríamos resolver primero el tema del procedimiento.
¿No hay acuerdo?
Entonces, voy a suspender la sesión.
El señor ZALDÍVAR (don Andrés) .-
Señor Presidente , quiero hacer una propuesta.
El señor GAZMURI (Vicepresidente).-
De acuerdo con lo expresado por la Senadora señora Matthei, voy a suspender la sesión por 10 minutos.
El señor ZALDÍVAR (don Andrés) .-
Pido la palabra.
El señor GAZMURI ( Vicepresidente ).-
No para argumentar, señor Senador .
El señor ZALDÍVAR (don Andrés) .-
No, señor Presidente , sino para efectuar una propuesta.
Como se ha hecho anteriormente cuando ha existido la necesidad de designar una comisión especial, lo que corresponde es que los Comités se reúnan y determinen el tipo de organismo que debe examinar en particular la iniciativa y su forma de integración. Así se ha procedido en otras oportunidades. Por ejemplo, cuando se trató la Ley de Cultos.
Entonces, ¿por qué no se resuelve el problema en Comités y luego el señor Presidente hace una proposición a la Sala? Porque no corresponde que acá, entre nosotros, decidamos el procedimiento y si debe ser una Comisión o Comisiones unidas.
El señor GAZMURI ( Vicepresidente ).-
Si le pareciera a la Sala, se suspendería ahora el debate sobre el proyecto, citaría a una reunión de Comités a las 15:30 y en la sesión ordinaria de la tarde traería una propuesta respecto del procedimiento.
¿Habría acuerdo?
Acordado.
Se levanta la sesión.
--Se levantó a las 13:54.
Manuel Ocaña Vergara,
Jefe de la Redacción
ANEXO SESIÓN
MOCIÓN DE LOS HONORABLES SENADORES PROKURICA, GARCÍA, HORVATH Y ROMERO CON LA QUE INICIAN UN PROYECTO QUE MODIFICA LA LEY ORGÁNICA CONSTITUCIONAL DEL CONGRESO NACIONAL PARA ESTABLECER LA REPRESENTACIÓN DE MINORÍA EN LA CONFORMACIÓN DE LAS MESAS DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS (4057-07)
Honorable Senado:
En conformidad al artículo 4° de la Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional, cada una de las Cámaras tiene la facultad privativa de dictar sus propias normas reglamentarias para regular su organización y funcionamiento interno. El mismo texto legal establece, en su artículo 5°, que el Congreso Nacional deberá instalarse día 11 de marzo siguiente a una elección de senadores y diputados, y que se entenderá instalado el Congreso Nacional luego de la investidura de la mayoría de los miembros de cada Cámara y de que hayan sido elegidos los integrantes de las respectivas Mesas.
Según se establece tanto en el Reglamento de la Honorable Cámara de Diputados como en el de esta Honorable Corporación, corresponde que en la Sesión de Instalación, que se celebra al inicio de cada Período Legislativo, se proceda a la elección de la Mesa respectiva. En el caso del Senado, del Presidente y el Vicepresidente y, en el de la Cámara de Diputados, del Presidente, un primer Vicepresidente y un segundo Vicepresidente.
Como es sabido, las reglas que rigen actualmente la elección de las Mesas de ambas Cámaras no prevén que en ellas quede debidamente representada tanto la mayoría como la minoría de los integrantes de cada corporación, por lo que ha ocurrido que, en ocasiones por períodos prolongados, ellas queden integradas únicamente por el sector político mayoritario, excluyendo de toda participación a la minoría en la dirección de la respectiva Cámara.
Esta práctica excluyente, que afortunadamente no se ha impuesto aún en el Senado, perjudica la gobernabilidad que es deseable en todo cuerpo colegiado, a la vez que atenta contra el pluralismo democrático que es de esperar en la conducción de corporaciones representativas de la voluntad popular y esencialmente deliberantes, pues excluye de toda ingerencia y participación a un sector de la ciudadanía, por la vía de marginar a sus representantes de la dirección de la corporación para la cual ha sido elegido democráticamente.
Parece razonable y más ajustado a los principios del pluralismo y la democracia representativa, que se reconozca a la minoría el derecho a integrar las instancias directivas de ambas Cámaras, a lo menos al nivel de sus Vicepresidencias, a fin de dar a las Mesas un carácter plural e integrador y no uno unilateral y excluyente.
Por las razones expresadas, tenemos el honor de proponeros el siguiente
PROYECTO DE LEY:
Articulo único.- Agrégase al artículo 4° de la ley N° 18.918, Orgánica Constitucional del Congreso Nacional, el siguiente inciso segundo, nuevo:
"Las normas que regulen la elección de los integrantes de las respectivas mesas deberán asegurar que en ellas estén representadas tanto la mayoría como la minoría del total de los miembros de cada cámara.".
(Fdo.):Baldo Prokurica Prokurica Senador.- Jose García Ruminot, Senador.- Antonio Horvath Kiss, Senador.- Sergio Romero Pizarro, Senador.-
MOCIÓN DEL HONORABLE SENADOR SABAG CON LA QUE INICIA UN PROYECTO DE LEY SOBRE RETIRO DE PROPAGANDA ELECTORAL Y REPARACIÓN DE DAÑOS QUE ÉSTA HUBIERE CAUSADO (4058-06)
Honorable Senado:
FUNDAMENTOS
En septiembre pasado se realizaron las últimas modificaciones a la Ley N° 19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, con las que se terminó de establecer un sistema de financiamiento mixto para las campañas políticas que se realicen en el país, en el que se asegura el aporte del Estado a la vez que se autorizan y regulan las donaciones y contribuciones de los particulares a los candidatos de los partidos políticos e independientes que participen en los comicios para elegir Presidente de la República, senadores, diputados, alcaldes y concejales.
Aunque aún es prematuro evaluar el funcionamiento de este cuerpo legal, es evidente a los ojos de la ciudadanía que, paralelamente al tema de los gastos que se puedan realizar en los períodos electorales y al control de estos, en cada campaña se producen daños a las propiedades públicas y privadas, así como efectos perniciosos en el ornato público e incluso situaciones que deben ser resueltas por la Justicia.
A pesar de que en los últimos actos electorales, las municipalidades han ido asumiendo con mayor decisión la tarea de reponer el orden público, con cargo a los candidatos por los costos que demanda dicha labor, resulta un hecho objetivo que en muchos sectores no se restituye plenamente el ornato y el orden a la situación previa a las campañas.
Del mismo modo, los particulares que se sienten vulnerados en sus derechos por las campañas habitualmente no consiguen una reparación del perjuicio, aun cuando recurran a los tribunales correspondientes, lo que representa un desincentivo para que las personas hagan valer sus derechos.
En virtud de esta situación, y ante el deber de los dirigentes políticos y de los candidatos de contribuir al orden en las ciudades y por intermedio de ello fortalecer el prestigio de la actividad política, se hace necesario establecer una garantía para que los responsables de las campañas limpien y retiren toda la propaganda y asuman la responsabilidad que les compete por los perjuicios provocados durante los períodos electorales y, cuando así ocurre, respecto a los procesos judiciales que se puedan iniciar por parte de quienes sienten vulnerados sus derechos y su dignidad.
Considerando lo anterior, y en especial el hecho de que la simple voluntad no ha sido suficiente hasta la fecha para garantizar el respeto a los derechos ciudadanos e individuales, se hace necesario vincular el cumplimiento del deber de promover el orden en las ciudades con el financiamiento público de las campañas como medio coercitivo, de modo que los responsables de cualquier abuso o atropello o quienes no retiren efectivamente la totalidad de su propaganda cumplan con sus obligaciones legales, políticas y sociales.
La presente iniciativa apunta a impedir que se vean favorecidos con el reembolso legal por los gastos de campaña realizados con cargo al erario público aquellos candidatos que no hayan resuelto satisfactoriamente todas las exigencias legales, tanto en lo relativo a la restitución del orden y el ornato en la propiedad pública y privada como lo que se refiera a cualquier situación que deba ser resuelta por los tribunales.
Por todo lo anteriormente expuesto, y en uso de mis atribuciones constitucionales, vengo en someter a la consideración del H. Senado el siguiente:
PROYECTO DE LEY
Artículo Único: Agréguense los siguientes incisos al artículo 15° de la Ley N° 19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral:
"Del mismo modo, los candidatos deberán presentar ante el Servicio Electoral certificados emitidos por las municipalidades y juzgados de policía local de todas las comunas correspondientes al territorio por el cual participaron en las elecciones, sean estas presidencial o parlamentarias, que acrediten que han retirado todo tipo de propaganda y que han reparado los daños causados durante el período legal de campaña en las propiedades públicas y privadas.
"Además, los candidatos deberán presentar certificados de las Cortes de Apelaciones correspondientes que acrediten que no existen procesos pendientes por demandas presentadas con motivo de la realización de las campañas electorales."
(Fdo.):HOSAIN SABAG G., Senador.
PROYECTO DE ACUERDO DE LOS HONORABLES SENADORES PROKURICA, ARANCIBIA, FERNÁNDEZ, HORVATH, OMINAMI, ROMERO, RUIZ Y VEGA MEDIANTE EL CUAL PROPONEN SOLICITAR A SU EXCELENCIA EL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA LA ADOPCIÓN DE MEDIDAS QUE PERMITAN A VOCALES DE MESA QUE CUMPLAN FUNCIONES EN LA PRÓXIMA ELECCIÓN PRESIDENCIAL RECIBIR UNA COLACIÓN ADECUADA (S 834-12)
Honorable Senado:
Que, el próximo domingo 15 de Enero se llevará a cabo en todo el país la votación correspondiente a la segunda vuelta de la elección presidencial.
Que, con ocasión del acto electoral 167.785 ciudadanos deberán desempeñarse como vocales de las mesas receptoras de sufragios de mujeres y varones, en los 1447 locales de votación habilitados en todo el territorio nacional.
Que, no obstante su relevancia cívica, lo cierto es que esta carga pública representa una significativa cuota de sacrificio para quienes deben soportarla, los que además de aportar su trabajo y dedicación, deben sufragar los gastos que les origina su permanencia en los locales de votación, como lo es proveerse de alimentación, y
Que, si bien no es posible disponer de una retribución para las mujeres y hombres que ese día deberán dedicarlo al servicio cívico de sus comunas, es razonable y justo proveerlos, al menos, de un aporte en la alimentación necesaria para soportar esa larga jornada.
En base a los antecedentes precedentes someto a consideración de el H. Senado, el siguiente
PROYECTO DE ACUERDO
Solicitar a Su Excelencia el Presidente de la República que disponga las medidas tendientes a que el día de la próxima elección presidencial se provea a todos los vocales de mesa de una colación que contenga los elementos nutritivos necesarios, según la realidad geográfica de cada lugar, que permita a dichos ciudadanos desarrollar su labor cívica sin contratiempos.
(Fdo.): Jorge Arancibia Reyes, Senador.— Sergio Fernández Fernández, Senador.— Antonio Horvath Kiss, Senador.— Carlos Ominami Pascual, Senador.— Baldo Prokurica Prokurica.- Sergio Fernández Fernández, Senador.— Sergio Romero Pizarro, Senador.— José Ruiz De Giorgio, Senador.— Ramón Vega Hidalgo, Senador.