El Sida en Asia: la epidemia en ascenso

China: cambios sociales, agujas, prostitución y prejuicio van de la mano

Uno de los datos del estudio que más sorprende guarda relación con que la rapidez de los cambios sociales y económicos en China están contribuyendo a un aumento del Sida. Mientras las estrictas medidas policiales durante la segunda mitad del siglo XX ayudaron a limitar el comercio sexual y lo convirtieron en clandestino, las reformas realizadas a partir de los años 80, creando un clima cultural más liberal y sumado al aumento de las diferencias de ingresos, han facilitado el resurgimiento de este comercio.

Las infecciones por VIH se han generalizado en toda China. Tanto así que no queda ninguna provincia sin portadores, siendo las más afectadas Guangdong, Guangxi, Henan, Xinjiang y Yunnan. Se estima además que la cifra total de infectados supera los 700.000, y que casi la mitad de ellos contrajo el virus por medio de la inyección de drogas con agujas contaminadas, mientras una proporción similar lo hizo luego de mantener  relaciones sexuales no protegidas.

El tema del uso de drogas inyectables mezclado con el comercio sexual es uno de los aspectos más preocupantes de la epidemia en China, ya que un número creciente de sus mujeres se está inyectando drogas y casi el 50% de las que lo hacen también ejercen el comercio sexual. El círculo se completa al constatar que muchos usuarios masculinos de drogas inyectables también pagan por tener relaciones sexuales, a menudo sin utilizar preservativos. Sin embargo, las autoridades del gigante asiático han comenzado a realizar esfuerzos tendientes a reducir el riesgo de contagio, como el establecimiento de más de 700 centros de intercambio de agujas. Otra de las medidas que se han tomado para contrarrestar el auge de contagios ha sido la promoción de preservativos enfocado a quienes ejercen el comercio sexual y sus clientes. Sin embargo, a pesar de que se prevén resultados positivos, los bajos niveles de conocimiento sobre el VIH y salud reproductiva sumado a la negativas de los clientes a utilizarlos ha dificultado en demasía un buen término del plan.

El informe concluyó sobre China que es necesario preocuparse del contagio entre hombres homosexuales, tema dejado de lado y que constituye casi el 7% del total, integrar a la sociedad civil a los programas y luchar contra el gran estigma con que se asocia al VIH, apreciable, por ejemplo en el 45% de enfermeras que afirmaron no querer trabajar en salas de Sida. Por otra parte, se valoraron avances en la respuesta a la epidemia: se ha dispuesto de pruebas gratuitas en más de 3000 centros en las 31 provincias chinas y se estima que unos 30.000 pacientes reciben actualmente el tratamiento respectivo.

India: propagación e ignorancia

Las nuevas estimaciones indican que casi 3 millones de indios viven hoy con VIH, siendo la realidad muy diversas según la región que se analice. Es así como se aprecia claramente un mayor número de contagiados en cuatro de los estados del sur: Andra Pradesh, Karnataka, Maharahstra y Tamil Nadu. Sin embargo, la propagación es un tema general siendo el principal factor de contagio las relaciones sexuales no protegidas entre quienes ejercen el comercio sexual, sus clientes y sus demás parejas respectivas.

India nos aporta además datos preocupantes: en el distrito de Bagalkot, en el norte de Karnataka, 2,9% de la población tiene Sida, mientras en algunas aldeas encuestadas en número de contagiados llegó al 8,2%. Por si fuera poco, en varias localidades sobre el 70% de los participantes en el estudio nunca habían visto un preservativo, y menos de uno de cada diez (9%) lo habían utilizado alguna vez.

La ONU y la OMS concluyeron sobre el país que se hace esencial el incremento de la cobertura de prevención para sus poblaciones con máximo riesgo, que asegure la existencia de un entorno jurídico e institucional más propicio que permita ponerla en práctica.

Asia meridional y sudoriental: avances, retrocesos y el preocupante caso de Vietnam

Aunque la prevalencia global del VIH en adultos en Asia meridional y sudoriental todavía es relativamente baja (0,3%), la epidemia afecta a un gran número de personas: se estima que en 2007 había unos cuatro millones de personas que vivían con el VIH en esta subregión con tendencias epidémicas variables. Mientras el Sida está aumentando en Vietnam e Indonesia, en Myanmar, Tailandia y, sobre todo, Camboya se nota un descenso en la prevalencia del VIH.

Es así como en Asia, sólo China, la India y Tailandia tienen más personas que viven con el VIH que Vietnam, donde la epidemia parece estar creciendo. Tanto, que el número estimado de personas que viven allí con Sida se ha multiplicado por más de dos entre 2000 y 2005. Las encuestas indican que una casi increíble proporción de los hombres jóvenes solteros de esa nación visita a trabajadoras sexuales. 22% de todos los hombres jóvenes solteros, entre 15 y 24 años.

Otro punto negativo dentro del área lo marca Indonesia, país donde está creciendo con mayor rapidez el contagio, con 200.000 portadores, dentro de este archipiélago en extremo poblado (119 habitantes por kilómetro cuadrado versus 22hab/km² en el caso de Chile). Grave también es la situación en Papua Nueva Guinea donde el VIH en adultos subió al 2,4% y llegó al 3,2% en las tierras altas remotas.

Muy distinto es el caso de Tailandia, país que acostumbraba a sumar anualmente 140.000 contagios en promedio, disminuyendo paulatinamente para llegar a 16.000 durante 2007. Y su vecino, Myanmar, también está mostrando signos positivos: el VIH en mujeres embarazadas atendidas en dispensarios prenatales ha disminuido de un 2,2% en 2000 a un 1,5% en 2006. En Malasia, en tanto, la epidemia se concentra principalmente en torno a las prácticas inseguras de inyección de drogas, y se estima que más de las dos terceras partes de las infecciones se han producido por este motivo. Filipinas continúa teniendo un número bajo de contagiados, aunque aumentó preocupantemente de 193 en 2003 a 309 en 2006, mientras en Nepal, Bangladesh, y Sri Lanka se registraron índices muy bajos de portadores, con un 1% en el caso del primero y 0,1% en los dos últimos.

¿Qué ocurre en Chile?

A pesar de las diferencias culturales, la situación de Sri Lanka y Bangladesh es muy similar a la de nuestro país, en el que, según un informe entregado por el Ministerio de Salud en 2006, el porcentaje de portadores nacionales alcanza al 0,1%, de la población, con predominio en hombres homo o bisexuales. Desde que se determinó el primer caso de Sida en Chile, en 1984, hasta junio de 2000 se han notificado a 3.741 portadores de los cuales un 93% se ha contagiado a través de relaciones sexuales. Las regiones más afectadas son la Metropolitana y de Tarapacá.

También existen diversas ONG creadas para informar a los portadores nacionales. Así nació Vihsida.cl, sitio se entrega información sobre el tratamiento, vacunas, hospitales, y derechos legales, entre otros contenidos. "La mayoría de estas personas se atendían en Hospitales públicos y el trato médico-paciente dejaba bastante que desear por lo inhumano y discriminatorio, totalmente diferente al trato dado a una persona atendida en una Isapre o sistema privado de salud", aseguran los encargados del sitio web. El Conasida, organización gubernamental encargada de la prevención del VIH en nuestro país, está de acuerdo en la importancia de informar sobre el virus a la población; enfocando los esfuerzos en tocar temáticas como la pareja única, el uso de preservativo y la abstinencia sexual. "Solo así podemos combatir la propagación del virus, que ya ha afectado a casi 6.000 chilenos", concluyó la directora de la institución, Edith Ortíz.