El presente ensayo, inédito en su tipo, efectúa un análisis crítico del denominado interés superior del niño, niña o adolescente, consagrado desde hace ya algunos años en nuestro ordenamiento jurídico gracias a la incorporación de la Convención de los Derechos del Niño de 1989. En tal sentido el autor, profesor de Derecho Civil, reflexiona que si bien estamos en presencia de un principio de gran importancia, cuyos aportes beneficiosos han sido indiscutibles, encubre aspectos negativos, como el de desplazar gradualmente a las reglas normativas, pudiendo de este modo llevar a decisiones contradictorias. Para justificar su aserto, efectúa un análisis histórico de los principios, reglas y normas, y concluye que los principios no siempre solucionan los conflictos sometidos, pues son más bien argumentos de tópica y dialéctica (en su sentido brindado por Aristóteles y Cicerón). Asimismo, acompaña numerosa jurisprudencia que, haciendo referencia al interés superior del niño, resuelve a veces de manera contradictoria los asuntos llevados a los tribunales.