Aunque la ley menciona el arbitraje institucional en Colombia, en realidad no existe. Se puede decir que el arbitraje nacional colombiano es ritual-legal con prevalencia del ad hoc. Se analiza la cuestión del arbitramento, la proveniencia de las reglas, la ley del proceso tanto para el fondo como para el trámite. Sea cual fuere el tipo de decisión adoptada, se trata de garantizar en el proceso arbiral, los principios superiores del debido proceso y del respeto del derecho de defensa. Se concluye que los diferentes tipos de arbitramento no son más que intentos para llegar a una solución o a la solución equitativa si se falla "ex aequo et bono". El laudo siempre va a ser revisable y juzgable por el juez ordinario o natural y se cumple en el momento en que se solicita su cumplimiento en algún país determinado, salvo que por convenio internacional se haya excusado el "exequatur".