Los procesos de transición en América Latina tienen en común el hecho de que las Fuerzas Armadas volvieron a sus cuarteles, asegurándose un alto grado de impunidad por los crímenes cometidos. Esto pone en cuestión la solidez de las democracias en construcción. A propósito de los últimos acontecimientos ocurridos en Venezuela y Perú surge la interrogante de cuán sólidas y estables se presentan hoy las nacientes democracias latinoamericanas, surgidas después de un largo período de regímenes autoritarios inspirados en la doctrina de seguridad nacional.