Ronaldo Muñoz fue religioso y presbítero, y uno de los teólogos más relevantes de la corriente de la teología de la liberación en América Latina. Pero un teólogo que vivió su vida y pensó su teología desde la práctica cotidiana junto a las comunidades populares de su país, Chile. Fue un apasionado por Jesús de Nazaret, por el proyecto del Reino de Dios, por la hermandad universal.