Después de ocupar una posición marginal en los análisis estratégicos de fines del siglo XX, la seguridad alimentaria es hoy un tema central en la agenda internacional. Actualmente se observa una toma de conciencia sobre el alcance del proceso de incremento del precio de los alimentos registrado en años recientes y sobre la necesidad de generar una nueva mirada acerca del rol de la agricultura y de su aporte al desarrollo económico. El interés de la CEPAL por el sector agrícola no es nuevo, sino que se remonta a los orígenes de la Comisión, cuando en los años cincuenta se empezaba a configurar su enfoque sobre el desarrollo. Aunque se ha dicho que en ese período la CEPAL le asignó poca importancia al desarrollo de la agricultura, a diferencia de lo que ocurría con la industria, lo cierto es que siempre se percibió que ambos sectores debían desarrollarse simultáneamente. Puesto que entonces el sector agrícola era fundamental en las economías de América Latina, la CEPAL impulsó el desarrollo industrial en el entendido de que fomentaba el desarrollo agrícola, ya fuera en su rol de comprador y elaborador de materias primas o como sector que absorbía mano de obra agrícola de baja productividad, que era excedentaria en el campo en el marco de las tendencias de largo plazo del cambio estructural.