Catálogo Bibliográfico

Luego de la Gran Depresión que azotó al mundo en 1929, y especialmente después de la II Guerra Mundial, se instaló la idea de que el Estado debí­a dirigir y controlar la economí­a porque era el gran creador de valor. Así­, se crearon grandes empresas estatales ineficientes y otras que lisa y llanamente solo perdí­an los recursos de quienes las financiaban: los ciudadanos. Eran enormes elefantes blancos que daban empleo unos años pero que luego terminaban siendo cooptadas por polí­ticos. No generaban valor y se llevaban toda la plata de los contribuyentes que podí­a ser utilizada, por ejemplo, en servicios sociales. Excepciones hubo muy pocas y estos despilfarros se pagaban con dolorosas inflaciones y aumentos interminables de impuestos. Esta idea, popularmente en esos años conocida en Latinoamérica como polí­tica de "sustitución de importaciones", es la que se está instalando nuevamente en el mundo, especialmente después de la crisis subprime del año 2008 y ahora luego de la pandemia del 2020. A pesar de que los más diversos paí­ses mejoraron sus í­ndices de desarrollo humano justamente después de que desaparecieron estas ideas durante los años 70, estas doctrinas vuelven de la mano de teóricas como Mariana Mazzucato, una economista italiana que escribió un libro llamado El Estado Emprendedor. Este libro, escrito por McCloskey y Mingardi, rebate las ideas de Mazzucato, explicando por qué se basa en una teorí­a económica errada y obsoleta. Explica, además, que fueron las ideas de diferentes personas colaborando entre ellas sin la coerción del Estado las que hicieron posible el desarrollo artí­stico, cultural y económico de los seres humanos en los últimos 300 años. Nunca el poder coercitivo del Estado, sino que la libertad de los seres humanos causada por la revolución polí­tica y retórica de la Ilustración.

Parte I. Ideas económicas populares pero equivocadas

Capí­tulo 1. Introduciendo a Mazzucato

Capí­tulo 2. El estatismo y sus aliados

Capí­tulo 3. La intervención estatal no es inocente

Parte II. La innovación ha operado siempre de manera ascendente

Capí­tulo 4. El Gran Enriquecimiento emanó de la libertad no del Estado

Capí­tulo 5. <> desde arriba no es su explicación

Capí­tulo 6. Desde abajo hacia arriba si funciona

Capí­tulo 7. La historia económica refuta a Mazzucato

Capí­tulo 8. Modelo lineal

Capí­tulo 9. Internet, por ejemplo, no fue inventado por el Estado

Capí­tulo 10. Desde abajo hacia arriba, por lo tanto, funciona bastante bien

Capí­tulo 11. Uno debe comparar al Estado con un ejemplo de la economí­a

Parte III. El estatismo jamás ha funcionado

Capí­tulo 12. El Estado debe tener un rol, pero no ser el director

Capí­tulo 13. Debido a razones comprensibles, el Estado es malo

Capí­tulo 14. La mayorí­a de los gobiernos son, al final demostrablemente incompetentes

Capí­tulo 15. Un Estado capaz de prever el futuro es inconcebible

Capí­tulo 16. La hipótesis de los mercados significativamente imperfectos nunca ha sido puesta a prueba

Capí­tulo 17. La stakeholder theory es defectuosa

Parte IV. La economí­a polí­tica de Mazzucato es totalmente iliberal

Capí­tulo 18. Mazzucato desconfí­a de la gente común y corriente

Capí­tulo 19. El control keynesiano suprime la dignidad

Capí­tulo 20. El mercado es acorde con nuestra dignidad

Parte V. El liberalismo conduce a ptofundos errores técnicos

Capí­tulo 21. Los errores económicos de los abogados y de los economistas anteriores a 1870

Capí­tulo 22. El estatismo desde arriba hacia abajo y preocupado del legado son liberales

Capí­tulo 23. La falacia de la cadena de oferta que sustenta al método Mazzucato

Capí­tulo 24. La concatenación de la acción humana vuelve a la teorí­a del valor-trabajo

Capí­tulo 25. ¿Qué clase de economí­a desean las personas?.

McCloskey, Deirdre N.