Colegio San Rafael Arcángel -LOS ANGELES - Región del Biobío


Título iniciativa:

Proyecto de ley que busca transformar el sistema penitenciario a cárceles autosustentable.



Definición alternativa:

El sistema penitenciario en Chile se encuentra al borde del colapso, no existe infraestructura ni personal suficiente para dar abasto al elevado número de reclusos.
El informe sobre gasto promedio mensual por interno año 2021, publicado por el ministerio de justicia el 14 de julio del año 2022, indica que, entre 2020 y 2021, el gasto por mantención se incrementó en un 8,67 % en el sistema cerrado tradicional, pasando de un gasto de $935.205 a $1.016.245. Contrario a lo que la mayoría de la población piensa, los gastos antes mencionados no van en directo beneficio del interno, esta cifra incluye todos los gastos indirectos que conlleva el mantener un sistema penitenciario nacional, mantención de la infraestructura, personal de resguardo, sistema de salud al interior del recinto, traslados, alimentación, talleres de reinserción, etc.
Pese a esta elevada cifra, que corresponde al doble de un salario mínimo en Chile, nuestro sistema penal se encuentra colapsado. Al mes de febrero, datos oficiales establecen en 47.360 el número de personas privadas de libertad. Lo que significa una sobrecarga del 110% a la infraestructura que posee el país, en relación a esto el secretario de Estado afirmó que Chile ha mejorado su infraestructura carcelaria , pero que el fenómeno del hacinamiento hoy en día es complejo. De acuerdo con Emol, la región más complicada es Atacama, que tiene alcanza el 173,9% debido a que alberga 894 presos pese a que la capacidad es para 514; y le sigue Maule, que actualmente registra una población carcelaria de 2.424 para 1.588 cupos (152,6%).
El problema del hacinamiento en el sistema carcelario, genera un ambiente propicio para que los derechos fundamentales de las personas no sean respetados, al respecto un informe emanado desde el instituto nacional de derechos humanos (2022) indicaba que:
De las 83 cárceles existentes en territorio nacional, 19 superan el 140 por ciento de su capacidad. Las que se encuentran en estado más crítico son la Cárcel de Taltal, con un 265,6 por ciento; la de Copiapó, con un 220,7 por ciento; la ex Penitenciaría de Santiago, con un 203,8 por ciento; y Petorca, con un 200 por ciento. El informe precisó también que 23 cárceles no poseen acceso a servicios higiénicos al interior de sus celdas, por lo que durante el tiempo que pasan encerrados en ellas deben realizar sus necesidades en baldes, bolsas u otro tipo de recipientes. Además, el texto señala que en 11 de los penales revisados no existen camas para todos los reclusos, por lo que algunos de ellos duermen en baños, pasillos y suelo. Si bien existen camas para cada uno de los internos, en varias celdas hay camarotes para cuatro personas, situación que implica que quien duerme en la superior queda a centímetros del cielo de la celda, se lee en el documento. En cuanto a la alimentación, se reveló que hay grandes falencias, ya que el tiempo entre la última comida y la primera del día siguiente, puede superar las 16 horas. Incluso en el penal de Valparaíso llega a las 20 horas.
Pese al enorme gasto estatal, Chile presenta un escenario complejo, cárceles hacinadas, déficit en número de personal capacitado y falta de elementos de seguridad, (en 2021 se logró aumentar el gasto asignado a Gendarmería de Chile en un 4.95%). Y en paralelo presenciamos un aumento de delincuencia, el ingreso de bandas delictivas internacionales en extremo peligrosas, alta tasa de reincidencia que bordea el 70 %, y todo esto coronado por una política incongruente, donde se legisla a favor del endurecimiento de penas aflictivas, algo absolutamente insostenible en el tiempo.
Esto nos hace pensar, que la solución no va únicamente por el camino de asignar más recursos, sino que es necesario reorientar el sistema completo. Hasta ahora el Estado se ha hecho responsable de la reinserción, pero ¿Cuánto aporte real existe por parte de los reclusos? No se trata sólo de una cifra monetaria, sino de la disposición física y mental para su reinserción, las cárceles se han convertido en escuelas del delito.


Propuesta legislativa:

Proponemos un proyecto de ley que reoriente los gastos de mantención del sistema penitenciario actual a cárceles autosustentables, con trabajo de los reclusos que contribuyan a su reinserción social.
Y es que, así como se defienden los derechos humanos al interior de la cárcel, de igual manera se debería defender el derecho y deber del trabajo al interior de las mismas, puesto que la prisión sólo limita el derecho al libre desplazamiento de las personas.
Es injusto e insostenible a nivel económico, que el Estado siga costeando el incremento de la población penitenciaria, quienes en su mayoría se mantienen recluidos, sin producir y con excesivo tiempo de ocio, si actualmente existe la posibilidad para un recluso de trabajar remuneradamente ¿Por qué la mayoría lo rechaza?
Porque no existe un real espíritu de superación, porque muchos de los reclusos han visto desvirtuados sus valores. Un artículo publicado por la universidad de Valencia titulado La construcción del ocio en adolescentes y su influencia en el desarrollo de trayectorias delictivas , señala que a mayor ocio desestructurado, mayor profundización en la trayectoria delictiva.
En un contexto no ecológico, la autosustentabilidad se refiere a la capacidad de una entidad ya sea una organización, un proyecto o incluso un individuo debe mantenerse y funcionar de manera independiente sin depender de recursos externos o de ayuda externa, se trata de ser capaz de sostenerse a sí mismo y de generar los recursos necesarios para su propia subsistencia o continuidad. Si incluimos dentro de nuestra legislación el deber del recluso de hacerse responsable de sus gastos a través de un cobro básico, ( ej, alimentación, lavandería etc), estaremos reorientando los gastos de mantención del sistema penitenciario que actualmente solo descansa en hombros estatales hacia cárceles autosustentables.
Implementamos opciones de trabajo para los detenidos a través de un procedimiento de cobro y deuda (en caso de rechazo de la oportunidad, esta será impuesta a su familia), mediante labores básicas como; agricultura, ganadería, carpintería, gastronomía, entre otros, esto acompañado de supervisión por parte de gendarmería y precauciones.

Referencias iniciativa:

https://www.emol.com/noticias/Nacional/2023/04/13/1092115/poblacion-penal-extranjera-chile-regiones.html
Estudio del INDH sobre cárceles chilenas revela la cruda realidad de los reos
MINISTERIO DE JUSTICIA Y DERECHOS HUMANOS GENDARMERÍA DE CHILE
https://www.24horas.cl/actualidad/nacional/sobrepoblacion-carcelaria-en-chile-piden-seguridad-y-segregacion-para-reclusos
Traba jo penitenciario como un derecho y un deber
Informe sobre gasto promedio mensual por interno año 2021.
INFORMACIÓN ESTADÍSTICAS INDULTOS, TRASLADO DE PERSONAS CONDENADAS, REBAJA DE CONDENA.docx