Ley de Reinserción Carcelaria


Liceo de Hombres Manuel Montt - PUERTO MONTT - Región de los Lagos



Si alguien ha cometido una falta a la ley, ¿Es la privación de libertad un mecanismo suficiente para su reintegración a la sociedad? Si bien es cierto, un centro penitenciario cumple el papel de “restringir” ciertos derechos a quienes transgreden las normas establecidas, no podemos desconocer el espíritu detrás de la Ley Orgánica de Gendarmería, que en su artículo 3, sección e: indica que corresponde a esta institución “Readaptar a las personas privadas de libertad en orden a eliminar su peligrosidad y lograr su reintegración al grupo social

Somos conscientes del estigma que recae sobre los miles de hombres y mujeres que cumplen pena aflictiva, y vemos como este estigma los lleva a reincidir en delitos similares a los que le habían llevado al sistema penitenciario originalmente.

Existe una creencia social arraigada según la cual, las cárceles cumplen la función de castigar con el mayor rigor posible a quien haya cometido el delito: Castigar no reinsertar. Esto queda demostrado en las cifras oficiales señaladas por Paz Ciudadana y Escuela de Gobierno UAI, según la Base de datos de condenados de Gendarmería de Chile, indicando que un 50,5% de los condenados a encierro vuelven a cometer un delito que anteriormente les llevo al sistema penitenciario.

Según las cifras entregadas por el Instituto Nacional de Derechos Humanos, el hacinamiento de las cárceles alcanza un 300%, de esta manera podemos demostrar fehacientemente que la vida dentro de estos recintos es denigrante.  Lo cual es preocupante si se considera que el Estado, por cada uno de los más de 54 mil internos de las cárceles chilenas, invierte hasta $350.000 mensuales en cárceles tradicionales y $550.000 en concesionadas, según datos entregados por el Ministerio de Justicia en Agosto de 2011.

Por lo tanto, si dentro del recinto penitenciario al reo no se le enseña que hay una vida después del periodo de reclusión, ni se educa a ser un miembro útil  a la sociedad, existen varias probabilidades de que esta persona reincida en sus delitos.

Lo anterior pone de manifiesto nuestro fracaso como sociedad, pues recae también sobre nosotros el deber de asumir parte de la responsabilidad que como sociedad nos compete sobre quienes tomaron el camino indebido, es entonces donde debemos trabajar por fortalecer un sistema que no sólo prive de libertad, sino que enseñe también a ejercerla. Después, mientras con una mano castiga, con la otra,  la misma sociedad promueve e instala desigualdades, desconociéndolo de sus propias capacidades inherentes, y es aquí en la cárcel, un lugar de prejuicios y donde a todos se les clasifica con la misma talla, donde quienes tal vez, como último recurso humano, se les puede ayudar de manera incondicional como prójimos.

Es por esto, que nuestra moción, la cual manda a reformular el sistema de reinserción y que sería postulada por la comisión de constitución, legislación y justicia de la Cámara de Diputados, tiene por fin un apoyo múltiple; por un lado, entregar la educación suficiente para que el reo pueda ejercer una un oficio entregado directamente por una institución debidamente acreditada; y además brindarle apoyo psicológico para que así entender que dentro de su persona existen aptitudes aun sin desarrollar, y así a partir desde la baja peligrosidad, darle un trabajo para desarrollar estas capacidades. Junto con esto, el procedimiento significará ingresos, los cuales se dividirán en tres partes: Una, en apoyo a la misma familia del reo, para evitar la falta de quien puede ser el sustento de su familia; segundo, parte de esta iría para el auto-financiamiento del proyecto, y por ultimo un ahorro que se hará mediante un deposito a una cuenta corriente a nombre del mismo reo. Nuestra moción además, tiene por exigencia que un quinto de los reos que cumplen pena aflictiva tengan acceso a estos beneficios, ya que actualmente según datos de Gendarmería menos del 2% acceden a ellos.


No debemos olvidar, que estas leyes penales buscan la protección del débil frente al fuerte, siendo en este caso, y lo cual nos motivó, en proteger los derechos de quien ha cometido un delito. Por lo mismo, nuestra moción tiene por el fin apoyar al reo, para así eliminar el peligro que la misma sociedad lo llevó a realizar y así finalmente, demostrarle las capacidades suficientes para volver a coexistir armónicamente en nuestra sociedad.

La igualdad es un derecho, y a él toda persona debe tener acceso.