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Historia de la Ley

Historia de la Ley

Nº 21.274

Proyecto de ley que suspende por el lapso de dos años la aplicación de los artículos 1° y 2° de la ley N° 20.261, que crea un examen único nacional de conocimiento de medicina, incorpora cargos al Sistema de Alta Dirección Pública y modifica la ley N° 19.664

Téngase presente

Esta Historia de Ley ha sido construida por la Biblioteca del Congreso Nacional a partir de la información disponible en sus archivos.

Se han incluido los distintos documentos de la tramitación legislativa, ordenados conforme su ocurrencia en cada uno de los trámites del proceso de formación de la ley.

Se han omitido documentos de mera o simple tramitación, que no proporcionan información relevante para efectos de la Historia de Ley.

Para efectos de facilitar la revisión de la documentación de este archivo, se incorpora un índice.

Al final del archivo se incorpora el texto de la norma aprobado conforme a la tramitación incluida en esta historia de ley.

1. Primer Trámite Constitucional: Senado

1.1. Moción Parlamentaria

Moción de Alejandro Navarro Brain, Yasna Provoste Campillay, Jaime Quintana Leal, Juan Ignacio Latorre Riveros y Rabindranath Quinteros Lara. Fecha 25 de marzo, 2020. Moción Parlamentaria en Sesión 6. Legislatura 368.

Proyecto de ley, iniciado en moción de los Honorables Senadores señor Navarro, señora Provoste y señores Latorre, Quintana y Quinteros, que, por un periodo de dos años, crea un examen único nacional de conocimiento de medicina, incorpora cargos al Sistema de Alta Dirección Pública y modifica la ley N° 19.664.

Boletín N° 13.359-11

Actualmente, nuestro país enfrenta una dura crisis sanitaria, en el contexto de la pandemia de COVID-19, decretada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), el pasado 11 de marzo de 2020, que hasta el momento reporta 419.000 contagiados y más de 18.700 muertos, en al menos 186 países del mundo [1]. En nuestro país, según cifras oficiales del Ministerio de Salud, las cifras al día de hoy alcanzan los 1.142 contagiados y 3 muertos [1], y se pronostica un aumento considerable en los próximos días.

Dicha situación, encuentra al sistema público de salud en una condición de especial vulnerabilidad, en el que solo durante el primer semestre de 2018, murieron 9724 pacientes en lista de espera [2], un 54% más que en el mismo periodo de 2017, lo que nos habla de la tendencia al aumento.

En consonancia con ello, el ministro de Salud, Jaime Mañalich, ha señalado que actualmente en nuestro país faltan 20.000 médicos [3], lo que estaría lejos de subsanarse, de acuerdo con un informe del MINSAL, que pronostica que de aquí al 2030, el déficit estaría recién en 7.200 médicos, solo en el sistema público [4].

Al respecto, el mismo Ministro Mañalich ha señalado que un refuerzo importante para nuestro sistema sería la incorporación de médicos extranjeros, pero que debido al Examen Único Nacional de Conocimientos de Medica (EUNACOM), muchos de ellos no pueden ejercer: "Cuando decimos un camino concreto para resolver este problema es permitir el ingreso y trabajo de médicos calificados, nos encontramos con una resistencia, una barrera laboral enorme (...) tenemos en Chile 3500 médicos venezolanos calificados que no

pueden ejercer por el examen, porque esto, porque lo otro (...) en manos de una institución privada, ni siquiera en manos del Estado" [5].

Al respecto, cabe señalar que el EUNACOM ha sido un examen ampliamente cuestionado, no solo porque está a cargo de una corporación privada ejerciendo regulaciones públicas, sino porque tampoco se ha estimado por la autoridad como un mecanismo indispensable para el ejercicio de la medicina en el sector público; así por ejemplo, el Ministerio de Salud extendió los plazos para su rendición en 2019 [6], y la Contraloría General de la República dictaminó que los médicos sin EUNACOM podía atender en la salud pública ante la falta de profesionales.

Es por ello, que en la actual crisis sanitaria por COVID-19 que se suma a la crisis que arrastra el sistema de salud de manera regular, es que parece razonable y necesario aplazar el EUNACOM, con la finalidad de asegurar la dotación de médicos en el sistema de salud.

Proyecto de ley

Artículo único:

Suspéndase por un periodo de dos años, a partir de la promulgación de esta ley, los artículos primero y segundo de la ley 20.261 que crea examen único nacional de conocimientos de medicina, incorpora cargos que indica al sistema de alta dirección pública y modifica la ley n°19.664.

[1] ¿ https:/www.rtve.es/noticias/20200325/mapa-mundial-del-coronavirus/1998143.shtml
[2] https://www.minsal.cl/nuevo-coronavirus-2019-ncov/casos-confirmados-en-chile-covid-19/
[3] https://www.cnnchile.com/pais/pacientes-fallecidos-lista-de-espera-en-2018-minsal 20190213/
[4] https://www.eldinamo.com/nacional/2019/11/14/medicos-extranjeros-eunacom-deficit-salud/
[5] https://www.t13.cl/noticia/nacional/informe-encargado-minsal-12-anos-podrian-faltar-7200-medicos-salud-publica
[6] https://www.eldinamo.com/nacional/2019/11/14/medicos-extranjeros-eunacom-deficit-salud/
[7] https://www.biobiochile.cl/especial/noticias/reportajes/reportajes-salud/2019/02/08/minsal-extiende-permiso-temporal-para-medicos-sin-eunacom-pese-a-anuncio-de-santelices-en-la-camara.shtml

1.2. Informe de Comisión de Salud

Senado. Fecha 20 de mayo, 2020. Informe de Comisión de Salud en Sesión 26. Legislatura 368.

?INFORME DE LA COMISIÓN DE SALUD recaído en el proyecto de ley, en primer trámite constitucional, que suspende por el lapso de dos años la aplicación de los artículos 1° y 2° de la ley N° 20.261, incorpora cargos al Sistema de Alta Dirección Pública y modifica la ley

N° 19.664.

BOLETÍN N° 13.359-11.

HONORABLE SENADO:

La Comisión de Salud cumple con emitir su informe acerca del proyecto de la suma, iniciado en moción de los Honorables Senadores señora Yasna Provoste Campillay y señores Juan Ignacio Latorre Riveros, Alejandro Navarro Brain, Jaime Quintana Leal y Rabindranath Quinteros Lara.

El texto que se propone a la Sala en el presente informe está conformado por un artículo único. De acuerdo con lo dispuesto en el artículo 127 del Reglamento de la Corporación, la Comisión discutió en general y en particular esta iniciativa de ley.

A una o más de las sesiones en que se analizó esta iniciativa legal asistieron, además de los miembros de la Comisión y del Honorable Senador señor Alejandro Navarro Brain, las siguientes personas:

- De la Superintendencia de Salud: el Superintendente, señor Patricio Fernández.

- Del Ministerio de Salud: el Asesor Legislativo, señor Jaime González.

- De la Asociación de Facultades de Medicina de Chile (ASOFAMECH): la Presidenta Dra. Patricia Muñoz Casas del Valle, Decana de la Facultad de Medicina Universidad Diego Portales.

- Del Colegio Médico de Chile A.G.: la Presidenta, Dra. Izkia Siches; el Secretario Nacional, Dr. José Miguel Bernucci, y el Abogado Jefe, señor Adelio Misseroni.

- Del Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina (EUNACOM): el Director, Dr. Beltrán Mena Concha.

- De la Corporación Nacional Autónoma de Certificación de Especialidades Médicas (CONACEM): el Presidente, Dr. Lorenzo Naranjo Tapia.

- De la Comisión de Revalidación y Postgrado Agrupación ELAM – CHILE: el representante, Dr. Lautaro Ferrada.

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CONSTANCIAS

El proyecto que se propone en este informe no requiere un quorum especial de aprobación ni afecta la organización y atribuciones de los tribunales de justicia.

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OBJETIVO DEL PROYECTO

El proyecto de ley propone suspender por dos años el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina (EUNACOM), con la finalidad de asegurar la dotación de médicos en el sistema de salud, en el contexto de la actual crisis sanitaria desatada por el coronavirus causante de la pandemia Covid-19.

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ANTECEDENTES DE DERECHO

- De la Constitución Política de la República, los ordinales 9° y 18° del artículo 19.

- Ley N° 20.261, que crea el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina, incorpora cargos que indica al sistema de alta dirección pública y modifica la ley N°19.664.

- Decreto con fuerza de ley N°1, del Ministerio de Salud, de 2005, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley N° 2.763, de 1979 y de las leyes N° 18.933 y N° 18.469.

- De la ley N° 19.650, que perfecciona normas del área de la salud, el artículo 6°.

- De la ley N° 20.129, que establece un Sistema Nacional de Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior, el artículo 27.

- Decreto N° 8, del Ministerio de Salud, de 2009, reglamento del Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina.

- Del decreto N° 110, del Ministerio de Salud, de 1963, el artículo 89.

- Decreto Nº 4, del Ministerio de Salud, de 2020, que decreta Alerta Sanitaria por el período que señala y otorga facultades extraordinarias que indica por emergencia de salud pública de importancia internacional (ESPII) por brote del nuevo Coronavirus.

- Decreto Nº 6 del Ministerio de Salud, de 2020, que modifica el decreto Nº 4 recién mencionado.

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ANTECEDENTES DE HECHO

La moción que da origen a este proyecto de ley expone las cifras de enfermos y fallecidos por causa de la pandemia de Covid-19 a la época de su presentación, marzo de 2020. Esta situación encuentra al sistema público de salud en una condición de especial vulnerabilidad: sólo durante el primer semestre de 2018 murieron 9.724 pacientes en lista de espera, un 54% más que en el mismo periodo de 2017, lo que revela una tendencia en aumento.

Manifiestan los suscriptores de la iniciativa que el Ministro de Salud ha declarado que en Chile hay un déficit de 20.000 médicos, cifra que está lejos de mejorar, pues un informe del mismo Ministerio estima que recién el año 2030 esa carencia se habrá reducido, en el sector público, a unos 7.200 facultativos.

También se invocan expresiones del Ministro, en el sentido de que un refuerzo importante para nuestro sistema sería la incorporación de médicos extranjeros, muchos de los cuales no pueden ejercer, debido al Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina (EUNACOM).

Expresa la moción que el EUNACOM ha sido un examen ampliamente cuestionado, no solo porque está a cargo de una corporación privada que ejerce una función pública, sino porque la autoridad no lo ha estimado como un mecanismo indispensable para el ejercicio de la medicina en el sector público. En sustento de esto se manifiesta que el Ministerio de Salud extendió los plazos para su rendición del examen en 2019 y que la Contraloría General de la República ha dictaminado que los médicos que no han aprobado el EUNACOM pueden atender en la salud pública, ante la falta de profesionales.

En conclusión, dada la actual crisis sanitaria por COVID-19, que se suma a la crisis que arrastra el sistema de salud, los autores estiman razonable y necesario aplazar el EUNACOM, con la finalidad de asegurar la dotación de médicos en el sistema de salud.

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DISCUSIÓN EN GENERAL

Al iniciar el estudio del proyecto de ley en informe, la Comisión de Salud recibió a la Presidenta de la Asociación de Facultades de Medicina de Chile (ASOFAMECH) y Decana de la Facultad de Medicina de la Universidad Diego Portales, Doctora Patricia Muñoz Casas del Valle, quien explicó que la Asociación que representa nace en el año 1960, con la misión de velar por la calidad de la educación médica en Chile. Se constituyó oficialmente el año 1962, con cuatro universidades: de Chile, de Concepción, Católica y Austral y se invitó al Servicio Nacional de Salud de la época a formar parte de la Asociación, participación que con el tiempo se fue debilitando. En 1972, ASOFAMECH propuso crear la Comisión Nacional Docente Asistencial (CONDAS). A partir del año 1981 aparecen universidades privadas, cuya calidad fue cuestionada en debates públicos.

En el lapso de tiempo indicado, la Asociación de Facultades de Medicina de Chile ha mantenido su misión y visión de ser un referente a nivel nacional e internacional.

El año 1999 la idea de un examen nacional para acreditar la calidad de la enseñanza de la medicina se plantea en el seno de la Asociación. Entre 2001 y 2003 se lo pone en marcha blanca, de manera voluntaria, hasta que en el año 2008 se impone por ley la obligatoriedad del examen, como requisito de calidad habilitante, para médicos chilenos y extranjeros.

La Asociación ha dado un fuerte impulso a la educación médica y ha realizado alianzas operativas con el Colegio Médico, la Asociación de Estudiantes de Medicina de Chile, la Sociedad de Educación Médica, la Asociación de Sociedades Científicas y otras organizaciones.

El examen médico nacional, pasó a llamarse Examen Único Nacional de Conocimientos en Medicina y, mediante el Programa de Mejoramiento de la Calidad y la Equidad en la Educación Terciaria (MECESUP) [1], se desarrolló un perfil común del egresado de las Escuelas de Medicina de Chile. En ello participaron ocho Facultades de Medicina, que fijaron un nivel de competencias mínimo.

El EUNACOM es un examen teórico-práctico de medicina general, que vela por la calidad de los profesionales médicos formados en el país, para garantizar que nuestra población reciba una atención médica que cumpla estándares mínimos; reúne criterios detallados de conocimientos para poder ejercer la profesión en Chile. Está a cargo de la Asociación de Facultades de Medicina de Chile (ASOFAMECH), de acuerdo a la ley promulgada el año 2008, que señala que el examen se le entregará a aquella asociación que reúna el mayor número de universidades.

Informó que la Asociación que representa está compuesta por 20 universidades, tanto públicas como privadas.

Desde 2009 se aplica el EUNACOM, que consta de una parte práctica y una teórica. La ley N° 20.261 exige la obtención de un puntaje mínimo de aprobación de 51%, para postular a ser contratado en establecimientos de salud municipal y estatal, otorgar prestaciones FONASA en la modalidad de libre elección o postular a programas de especialización médica. En el caso de titulados en el extranjero, la aprobación del EUNACOM significa la revalidación automática del título. Pueden homologar la sección práctica los egresados de escuelas de medicina chilenas con programas acreditados y quienes habiendo obtenido su título en el extranjero lo hayan revalidado en la Universidad de Chile. La sección teórica no es homologable.

Desde que el examen fue consagrado por ley, todos los médicos daban las sesiones teórica y práctica. Así se constató que si no se aprobaba el teórico la reprobación del práctico era muy elevada.

El año 2015 se decidió que todos los extranjeros que aprobaran la parte teórica del examen podían dar el examen práctico y el resultado fue una correlación bastante satisfactoria entre ambas partes del examen.

El EUNACOM ha servido para realizar un análisis interno de los resultados en las escuelas, con la finalidad de realizar mejoras continuas; análisis por áreas de contenidos y mejoras curriculares; análisis globales en áreas específicas y diversos estudios para análisis comparativos con los resultados de la Prueba de Selección Universitaria (PSU), con las notas de enseñanza media, la repitencia, y la duración de la carrera.

Aclaró que en muchos otros países existen exámenes similares al chileno. Desde el año 1997 se realiza en España un examen de ingreso a las Residencias [2], a cargo del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. En Panamá, el Ministerio de Salud encomienda a la Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá la aplicación y organización de un examen único, para seleccionar postulantes a plazas de residencias. En México existe el Examen Nacional de Aspirantes a Residencias Médicas. En América latina, hay 9 países que cuentan con un examen de ingreso centralizado a nivel nacional.

Fenómenos sociales relevantes que tienen relación con el examen son los siguientes:

Sostuvo la expositora que, si bien el umbral de aprobación legal del examen puede parecer bajo, en la actualidad no es posible aumentarlo sin afectar sustancialmente el número de médicos legalmente habilitados para ejercer en el sistema de salud público.

En relación con el proyecto de ley en discusión, se hizo cargo, en primer término, del argumento sobre emergencia sanitaria debida al Covid-19. Al respecto, la posición y argumentos de la Asociación, son los siguientes:

1.- No es necesario suspender el examen mediante un proyecto de ley, dado que el Estado de Catástrofe provee instrumentos jurídicos para reprogramarlo.

2.- Suspender por dos años la vigencia de los dos primeros artículos de la ley N° 20.261 puede tener efectos permanentes en el aseguramiento de la calidad en la formación médica.

3.- El examen fue creado para cautelar que de las escuelas de medicina, incluidas las nuevas, egresen médicos con competencias necesarias para ejercer la profesión, retroalimentando el proceso docente y mejorando la calidad de la formación.

4.- El examen ha sido un gran aporte y una herramienta que ha contribuido significativamente a la estandarización de la calidad de la educación médica en Chile.

5.- Hay acuerdo unánime de todos los decanos para no suspender esos artículos y, en cambio, prorrogar por un año la fecha de rendición del EUNACOM.

6.- El examen otorga garantías de que la población reciba una atención médica que cumple con estándares mínimos de calidad.

Añadió que desde el punto de vista jurídico no es necesario suspender dichos artículos por cuanto existen dos decretos que resuelven el problema, derivados del estado de Emergencia Sanitaria en que se encuentra el país.

El decreto N° 4 del Ministerio de Salud, de 05 de febrero de 2020, publicado en el Diario Oficial el día 08 del mismo mes, en su artículo 4°, otorga a los Servicios Públicos del país facultades extraordinarias para disponer de todas o algunas las medidas que indica. El numeral 7 de ese artículo permite la contratación de médicos que hayan obtenido su título en el extranjero y que ese título se encuentre revalidado, aun cuando no hayan finalizado su aprobación del EUNACOM. Explicó que hay muchos médicos que han aprobado la parte teórica, pero les falta la aprobación de la parte práctica.

Posteriormente, el decreto N° 6, de 06 de marzo de 2020, publicado en el Diario Oficial el 07 de marzo, modifica el Decreto anterior y agrega en el artículo 4° un numeral 14, nuevo, que autoriza la contratación y ejercicio de médicos titulados en el extranjero cuyo título no esté revalidado o habilitado en Chile.

Concluyó, entonces, que cualquier médico extranjero, en este momento de emergencia sanitaria, puede ejercer la profesión, sin haber dado el examen.

En relación con el segundo argumento para suspender el EUNACOM contenido en la moción, constituido por afirmaciones relativas al examen, explicó que ellas son un tema en sí mismo que tiene repercusiones y requiere de un análisis más profundo y una discusión reflexiva, basada en datos concretos, y no debiera ser motivo de presión para instalar una legislación de emergencia y un mecanismo para contar con médicos extranjeros en la condición de emergencia sanitaria que vive el país.

Aclaró que ASOFAMECH no pretende eludir la discusión sobre el EUNACOM, sobre el cual pueden existir distintos puntos de vista, pero esta materia no puede quedar secuestrada por una solución de emergencia. El examen es perfectible y se encuentra en permanente revisión.

La suspensión de ambos artículos produce un gran daño al examen mismo, puesto que todos los equipos de trabajo, administrativo, técnico y de contenidos, quedan desarticulados por dos años, al cabo de los cuales retomar todo el trabajo con un equipo consolidado es muy difícil. La prórroga, en cambio, brinda una oportunidad para perfeccionar el sistema.

La Asociación estima importante y necesario mantener el EUNACOM y realizar en él un perfeccionamiento continuo, para lo cual se ha contratado la asesoría de la Junta Nacional de Examinadores Médicos (NBME [3]), que presta asistencia para perfeccionar cada vez más el examen.

La intención es avanzar e incorporar EUNACOM práctico estandarizado a través de exámenes clínicos y objetivos.

Por último, señaló que ASOFAMECH está dispuesta a definir un nuevo perfil del egresado de medicina, en trabajo conjunto con el Ministerio de Salud y de acuerdo con las necesidades del país.

El Director del Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina, EUNACOM, doctor Beltrán Mena Concha, se refirió a los riesgos o consecuencias que a su juicio podría tener la suspensión del examen.

En primer lugar, destacó el párrafo final de los argumentos de la moción, que señala que la finalidad de esta iniciativa es asegurar la dotación de médicos en el sistema de salud y que para ello se considera razonable y necesario suspender la vigencia de la ley N° 20.261, por un lapso de dos años.

El EUNACOM se utiliza para asegurar las competencias mínimas del médico que ejerce en Chile y, al mismo tiempo, garantizar equidad en la asignación de becas de especialidad.

El objetivo número uno, que es habilitante, autoriza el ejercicio de la profesión si se cumple el mínimo de puntaje de conocimiento requerido, que es el 50%. El segundo objetivo se enfoca en los mejores puntajes, y permite otorgar la primera beca a quien obtenga los mejores puntajes y luego a los que siguen en puntuación.

Adujo que no es razonable suspender el examen, por diversas razones.

Desde el año 2015 a la fecha, del total de médicos chilenos egresados que han rendido el examen, ha reprobado un 5%; se trata de postulantes que no pudieron acreditar poseer las competencias mínimas; si se suspendiera el EUNACOM, más de 400 médicos chilenos estarían ejerciendo sin tener esas competencias mínimas.

Por otra parte, si se elimina el examen surgirá un problema grave para seleccionar equitativamente a quienes son idóneos para ganar la beca de especialización, dada la diversidad de escalas de notas que aplica cada universidad. Además, para abrir las puertas a los médicos extranjeros se debería crear instrumentos que aseguren que cuenten con las competencias adecuadas.

Indicó que el puntaje promedio de los chilenos que rinde el examen está en torno al 70%; como el puntaje de aprobación es 50%, el promedio está 20 puntos por encima de las competencias mínimas. En el caso de los extranjeros, el promedio es de 43%, es decir, están por debajo de esas competencias mínimas.

De los extranjeros que han dado el examen desde el año 2015, hasta la fecha 6.203 lo han reprobado y 1.500 de ellos han obtenido un puntaje menor al 20%; sin el EUNACOM ellos estarían ejerciendo la medicina. Muchos de los extranjeros que han aprobado han dado el examen varias veces, casi 500 requirieron dar el examen en cinco oportunidades, para aprobarlo.

Por otra parte, señaló que no es necesario suspender el examen, bajo el argumento de asegurar el recurso médico, como demuestra el hecho de que el año 2019 se entregó certificado completo, teórico y práctico, a 2.661 médicos extranjeros, esto es, 1.000 personas más que los egresados chilenos, que en el mismo año fueron 1.700.

En el período de 2015 a 2020, casi 7.000 médicos extranjeros han recibido su certificación en EUNACOM. Por tanto, no se puede argumentar que hay una discriminación o un filtro; el proceso aprueba más extranjeros que chilenos. Declaró que, en ese lapso, cada año el número de médicos formados en Chile ha aumentado significativamente.

El examen programado para julio de este año fue suspendido por iniciativa propia, por razones sanitarias. El que debe rendirse en diciembre no se puede suspender, porque la ley obliga a realizarlo al menos una vez al año. Sugirió la posibilidad de restringir esta iniciativa legal a algo más acotado, como sería la suspensión del examen de diciembre, dada la contingencia.

El señor Director ofreció colaboración, a fin de ajustar otras consecuencias de la suspensión, no mencionadas en el proyecto de ley, como lo que ocurrirá con las becas.

El Honorable Senador señor Chahuán explicó que se ha sostenido que el Decreto N° 6, antes mencionado, autoriza la contratación de médicos extranjeros, sin exigirles que hayan rendido y aprobado el EUNACOM, durante el período en que está vigente el estado de catástrofe.

En segundo lugar, estimó que la capacidad operativa de EUNACOM para hacer frente a la gran cantidad de solicitudes para rendir el examen es insuficiente. Señaló ser partidario de que otras organizaciones y universidades puedan tomar el examen, para no dar la impresión de que ASOFAMECH ostenta una especie de monopolio. Hizo presente que hay una importante cantidad de médicos extranjeros imposibilitados de rendir el examen.

En tercer lugar, formuló un juicio crítico sobre la forma en que se realiza el examen. Por ejemplo, para certificar una especialidad o una subespecialidad médica que no está registrada en Chile no se justifica interrogar al candidato sobre medicina general y en esos casos el examen debiera versar sobre las especialidades.

El Honorable Senador señor Girardi señaló que la discusión se relaciona con el establecimiento de criterios de equidad, porque es inaceptable la existencia de dos tipos de salud, una para personas con altos ingresos y una salud para pobres. Es un problema social y ético complejo.

En salud las personas no tienen posibilidad de evaluar las ofertas, no opera el mercado y existe una asimetría enorme de información en perjuicio de los pacientes, que no tienen la posibilidad de verificar si quien los atiende tiene la idoneidad profesional y el conocimiento mínimo. El examen, que se puede perfeccionar, debe garantizar una calidad mínima, para que todos los chilenos tengan una atención adecuada.

Por otra parte, consideró que el problema no es la falta de médicos, sino la distribución de los mismos. El sistema público de salud está totalmente desfinanciado, porque la salud no ha sido una prioridad para muchos gobiernos, como lo demuestra un aporte fiscal bajísimo, del 3,1% del PIB. El déficit en infraestructura y de médicos en la atención primaria de salud no es un problema de las universidades, sino que es estructural, es consecuencia del modelo de salud basado en una lógica neoliberal de mercado, en lugar de una lógica sustentada en el aseguramiento del derecho a la salud.

No hay un déficit de médicos, aseveró Su Señoría, sino un sistema de salud que no los está incorporando y que no está destinando los recursos necesarios. Esa lógica de mercado que opera en la salud está motivando que las remuneraciones que ofrecen las clínicas privadas capturen a todos los profesionales. El mismo sistema de Garantías Explícitas en Salud estimula un círculo perverso, pues en la medida en que el sector público no puede cumplir, está obligado a comprar servicios al privado. Otro factor de peligro es que una insuficiente formación médica genere la migración al sector privado del recurso humano calificado.

La Honorable Senadora señora Ebensperger manifestó su desacuerdo con el proyecto, pues a su juicio las exposiciones de los invitados han sido contundentes. Es necesario asegurar las competencias mínimas de quienes ejercen la medicina, sean chilenos o extranjeros; además, el EUNACOM es importante para asegurar la equidad en la distribución de becas.

El Doctor Beltrán, haciéndose cargo de las dudas manifestadas sobre la capacidad de la Asociación para responder a la demanda, explicó que años atrás, cuando se produjo una llegada masiva de extranjeros a Chile a partir de 2014, hubo una crisis de crecimiento que ya está superada y en la actualidad ASOFAMECH está en condiciones de tomar examen a todos quienes lo requieran. En el campo teórico están tomando del orden de 10.000 exámenes por año y en el práctico están cerca de 3.000 anuales.

Sobre el hecho de que el examen formule a un especialista preguntas de medicina general, señaló que, luego de un estudio sobre la curva de olvido realizado a los médicos extranjeros, se demostró que es inversa y por cada año transcurrido desde la titulación la calificación de los que dan el examen mejora en 0,7 puntos.

La doctora señora Muñoz aclaró que desde hace dos a tres años los médicos que llegan a Chile con una especialidad no dan el EUNACOM, si bien pueden hacerlo voluntariamente. La entidad que realiza el examen de especialidad es la Corporación Nacional de Certificación de Especialidades Médicas (CONACEM). La Corporación, mediante una decisión transitoria, no exige el examen práctico a aquellos especialistas que han aprobado el examen teórico, por tanto hoy eso no es hoy un problema.

Respecto del déficit de médicos, concordó con lo planteado por el Senador señor Girardi. Actualmente los médicos se desempeñan mayoritariamente en el área privada y no existen cargos suficientes en el sistema público para que sea capaz de atraerlos al nivel de la atención primaria de salud. Tratándose de especialistas, informó que se concentran en tres regiones: la Metropolitana, la de Valparaíso y la del Biobío.

Las universidades están formando alrededor de 1.400 especialistas por año y ofrecen esos cupos al Ministerio de Salud, en distintos hospitales a lo largo de Chile.

El Secretario Nacional del Colegio Médico de Chile A.G., doctor José Miguel Bernucci, expresó que el decreto que declara la alerta sanitaria permite contratar médicos que no tengan convalidado su título, lo que es aplicable a los médicos generales como a los especialistas, por tanto, el Ministerio de Salud tiene ya la potestad para realizar esas contrataciones, por el tiempo que dure la emergencia sanitaria.

A diferencia de la realidad que había años atrás, actualmente se cuenta con una dotación de médicos importante, el problema es que en la institucionalidad pública de salud no hay cargos disponibles. De tal manera que atraer al país a más médicos sólo facilitará su incorporación al sector privado y no provocará un beneficio para el 80% de la población que se atiende en FONASA. La principal queja de los médicos que terminan su especialidad es que no están los cargos disponibles. De manera que si se quiere atraer más médicos al nivel regional, lo primero que se debe hacer es generar los cargos en el sector público.

El problema actual, que la crisis provocada por COVID-19 está demostrando, es de infraestructura. El Gobierno habilitará en regiones 1.700 camas de hospitales tipo 1, 2 y 3, de mediana y alta complejidad; para atender en esos hospitales probablemente faltarán especialistas, más que médicos generales, ya que la mayoría de esos establecimientos son centros derivadores a instituciones privadas. La suspensión del EUNACOM por dos años incrementará la disponibilidad de médicos generales, pero no de especialistas.

Señaló que si con el decreto de alerta sanitaria la autoridad tiene la facultad de contratar hoy mismo a los médicos que se requieren y si se genera la cantidad de cargos necesarios para poblar el nivel público con médicos especialistas, el Colegio Médico propone autorizar por ley para ejercer la profesión, a los médicos que están a la espera de que CONACEM entregue los resultados de sus postulaciones. Explicó que en la actualidad hay entre 2.500 a 2.800 médicos, principalmente de las especialidades de mayor carencia, que están esperando el resultado de la convalidación de sus títulos.

La propuesta es que se autorice a esos médicos para que puedan trabajar por el período de dos años como especialistas y que al término de ese plazo, habiendo finalizado los trámites de CONACEM, puedan seguir aportando al país.

El Abogado Jefe del Colegio Médico de Chile A.G., señor Adelio Misseroni, expuso que el proyecto de ley, tal como está estructurado, no responde a los objetivos consignados en la exposición de motivos de la moción, porque habla que hay numerosos médicos extranjeros a la espera de ejercer en Chile; sin embargo, suspender la aplicación del EUNACOM no les permite ejercer, porque no están habilitados para ejercer la profesión en Chile. En cambio, tendrían que ser habilitados de acuerdo con el Estatuto de la Universidad de Chile, que otorga a esa universidad la potestad de revalidar títulos en Chile.

La carrera de medicina tiene cuatro vías para su revalidación en Chile. Por la Universidad de Chile, aprobar el EUNACOM, certificación de la especialidad por CONACEM y autorización de la Secretaría Regional Ministerial, en los casos excepcionales que establece el Código Sanitario; por tanto, hay medios suficientes para incorporar médicos titulados en el extranjero.

La ley N° 20.985 introdujo un artículo 2 bis nuevo en la ley N° 20.261, que establece que los médicos especialistas titulados en el extranjero no necesitan revalidar su título en la Universidad de Chile ni a través del EUNACOM, sino que, certificando su especialidad en CONACEM, pueden ejercer la medicina en Chile en su especialidad y en el sector privado.

Por lo expuesto, el Colegio Médico propone modificar el texto del proyecto y establecer un artículo único, que señale que durante un plazo a determinar, los médicos a que se refiere el inciso segundo del artículo 2 bis de la ley N° 20.261 podrán ejercer la especialidad en Chile en el sector público, sin haber obtenido la certificación correspondiente, siempre que hubieren presentado su solicitud antes de la entrada en vigencia de esta ley y que, una vez vencido el plazo que se fije, para continuar ejerciendo la profesión deberán someterse a los sistemas generales de revalidación de título que establece el ordenamiento jurídico chileno.

El Colegio Médico hizo llegar una propuesta que alcanza el objetivo que busca el proyecto de ley, pues permitiría incorporar entre 2.500 y 2.800 médicos que están tramitando la certificación de su especialidad en CONACEM.

El Honorable Senador señor Navarro manifestó que la emergencia que enfrenta el país involucra la seguridad nacional. Señaló que la moción excluye el tema de CONACEM porque afecta a los especialistas y lo que se desea es abrir debate y poner sobre la mesa que Chile vive un estado de excepción único en el mundo, que está provocando miles de muertes; además, nuestro país muestra un estado catastrófico en materia de salud pública y en el ámbito económico.

Los especialistas señalan que el sistema de salud público chileno va a colapsar en mayo. La pregunta ineludible es si en ese contexto hay que innovar o no.

La principal crítica que se ha hecho a los gobiernos de Francia, Italia y Estados Unidos, es que no han actuado a tiempo. Abrir debate respecto de la capacidad de nuestros profesionales para enfrentar esta pandemia es urgente y necesario.

Comentó que hay una contradicción con la apreciación del Ministro de Salud, respecto del déficit de médicos. El deber del legislador es garantizar que haya personal adecuado en calidad y cantidad y suspender el EUNACOM no implica ningún tipo de ofensa corporativa.

El Estado tiene la obligación de aumentar los recursos ahora, para contratar más médicos en los servicios de urgencia, que están saturados de personas contagiadas y de personas con otras dolencias de data anterior, que están siendo postergadas por la urgencia.

Manifestó su acuerdo con la propuesta del Colegio Médico, en orden a autorizar para ejercer a aquellos médicos que están a la espera de los resultados de CONACEM.

Finalmente, manifestó que los colegisladores deben conocer cuánto dinero recaudan las entidades que gestionan el examen y consultó por qué razón está en manos de una entidad privada, como la ASOFAMECH, y no en las del Estado.

El Honorable Senador señor Chahuán hizo presente que los decretos que declararon la alerta sanitaria autorizan a los Servicios de Salud para contratar médicos titulados en el extranjero cuyo título no esté revalidado o habilitado en Chile [4].

En su opinión, la calificación de esos facultativos no debiera ser competencia exclusiva de ASOFAMECH, sino que también debieran poder hacerla las universidades.

El Presidente de la Corporación Nacional Autónoma de Certificación de Especialidades Médicas (CONACEM), doctor Lorenzo Naranjo, señaló que para el mundo médico la certificación es un tema muy delicado e importante, pues debe asegurar a todos los pacientes la calidad en la prestación de salud, tanto en el sector privado como en el público.

CONACEM es una corporación de derecho privado creada en el año 1984, por el Colegio Médico de Chile, la Asociación de Facultades de Medicina, las Sociedades Científicas y la Academia de Medicina.

En los últimos dos años una cantidad importante de candidatos ha postulado a la certificación, como resultado de la ley que permitió que los médicos extranjeros con especialidad pudiesen postular a ser certificados como especialistas, sin tener necesidad del reconocimiento de su calidad de médico cirujano mediante el EUNACOM.

En 2019, haciendo un enorme esfuerzo, CONACEM certificó a 1.207 especialistas, de los cuales 933 son médicos con formación en el extranjero, mayoritariamente de nacionalidad venezolana (737). Actualmente hay 1.300 aspirantes en etapa de postulación.

Añadió que, como una manera de colaborar a resolver el déficit de especialistas, sin por ello omitir el aseguramiento de que efectivamente los postulantes mantienen una calidad aceptable, los candidatos que obtienen un 70% de aprobación en sus pruebas escritas son eximidos del examen práctico y se les entrega en forma inmediata el título de especialista. Lo anterior ha contribuido a solucionar el problema de listas de espera y ha generado, por otra parte, una serie de críticas provenientes del mundo académico, que estima que el examen práctico debiera realizarse de todos modos.

Indicó que, para acelerar el proceso de los exámenes prácticos, CONACEM han tomado un camino distinto, que se denomina “Evaluación Clínica Objetiva Estructurada”, proceso de una duración de dos a tres horas que permite evaluar simultáneamente grupos de 15 a 20 médicos.

Aclaró que para CONACEM apoyar la decisión de suspender el EUNACOM para que médicos ejerzan en nuestro país es un tema delicado. Entienden que hay una situación de emergencia, sin embargo, las situaciones de emergencia deben ser resueltas con mecanismos de emergencia. Entonces, si ya hay un decreto que permite contratar médicos extranjeros sin EUNACOM, por un período de tiempo, es resguardo suficiente, pero hacerlo por ley es más complejo, porque es frecuente que la vigencia de las leyes se prolongue en el tiempo y no son normas fácilmente modificables, con lo cual ya no se trata de una fórmula de emergencia, sino de un mecanismo que se mantiene en el tiempo y permite el ejercicio de médicos extranjeros que no han revalidan su título en forma correcta.

Señaló que el 50% de quienes postulan al EUNACOM o a su reconocimiento como especialista, no aprueba. Lo cual muestra que su formación es deficiente; pero los ciudadanos requieren que las personas que los atiendan tengan una buena formación, para lo cual debe exigirse el cumplimiento de ciertos requisitos, ya que de lo contrario se arriesga la calidad de la atención médica y no es aceptable que esa calidad deficiente opere en el sistema público de salud, que es el que se hace cargo de las personas más modestas de nuestro país.

El doctor Naranjo reiteró que CONACEM certifica especialistas. Los interesados postulan por dos vías: aquellos que han dado el EUNACOM y aspiran a obtener su certificación, porque además son especialistas formados en el extranjero, y aquellos que son especialistas en el extranjero y deciden certificarse inmediatamente, a pesar de no tener aprobado el EUNACOM.

Se puede dar el examen de especialidad sin tener aprobado el EUNACOM, pero ocurre que la persona que se certifica en esa forma puede ejercer exclusivamente en un hospital público y en su especialidad, lo cual implica limitaciones importantes en el ejercicio de la profesión.

Informó que CONACEM cuenta con un comité por cada una de las especialidades, sea ésta primaria o derivada. Primaria, es aquella que no requiere tener una primera especialidad para tener la segunda, por ejemplo, cirujano. Derivada, como la de cirujano cardiovascular, es la que requiere primero certificarse como cirujano y luego como cirujano cardiovascular. Actualmente hay 64 comités de especialidades primarias y derivadas, que reciben los antecedentes del candidato y los analizan. Si los antecedentes son los requeridos y se cumplen los requisitos generales y específicos, esa persona queda en condición de dar el examen teórico.

El examen teórico se da dos veces al año, en todas las especialidades. Quien aprueba ese examen con un porcentaje igual o superior a 70% obtiene la certificación de especialidad de inmediato, de lo contrario, debe dar el examen práctico. Respecto de este último hay innovaciones: se toma en grupo, dentro de un hospital, lo que redunda en mayor rapidez. Este proceso se ha ocupado en dos especialidades: anestesia y cirugía.

El Superintendente de Salud, señor Patricio Fernández, observó algunos inconvenientes en el proyecto de ley en estudio. Declaró que alcanzar el sistema de certificación actual es el resultado de un gran esfuerzo y reconoció que a veces se ha transformado en una barrera de acceso al sistema público.

El proyecto de ley propone suspender los primeros dos artículos de la ley N° 20.261, con lo cual se paraliza toda la institucionalidad del EUNACOM, porque su funcionamiento tiene como respaldo legal precisamente esos dos artículos.

La suspensión del artículo 1° deja sin efecto la exigencia del examen para tener por revalidado el título, lo que significa que el objetivo que se busca con el proyecto de ley no se alcanza, sino que la situación empeora, porque los médicos extranjeros podrían optar a una habilitación mediante la revalidación del título por la Universidad de Chile o por aplicación de un tratado internacional o por autorización de la SEREMI de Salud.

El EUNACOM tiene tres objetivos; el primero es ser requisito de ingreso para acceder a cargos o empleos de médico cirujano; el segundo es que puedan otorgar prestaciones en la modalidad de libre elección de FONASA y, en tercer lugar, permite acceder a becas de especialidad o subespecialidad.

Consideró pertinente que se contemple la posibilidad de que la Superintendencia abra un registro transitorio para estos profesionales. Actualmente el problema de la contratación está solucionado por una creación jurisprudencial administrativa validada por la Contraloría General de la República; además, el decreto de alerta sanitaria también lo permite. Sin embargo, no se cuenta con un registro de las personas que se encontrarían en esta condición transitoria, lo que es relevante, toda vez que el proyecto de ley permite que estas personas entreguen prestaciones GES.

Estimó deseable que la propuesta que se apruebe esté acotada al requisito para acceder a un cargo o empleo, sin afectar los otros objetivos del EUNACOM.

El Honorable Senador señor Navarro explicó que el proyecto de ley buscaba suspender el examen en consideración a la crisis provocada por la pandemia, que hará colapsar el sistema público y privado. En países de Europa han fallecido aproximadamente 80 médicos por efecto de dicha crisis.

Consultó por la proyección de la situación de colapso del sistema privado a causa del COVID-19, en particular, sobre la capacidad de las Isapres y el sistema privado para enfrentar la contingencia.

Señaló que no parece razonable que en medio de esta crisis los médicos se estén preparando para dar las pruebas del EUNACOM o de CONACEM, ni en junio ni en diciembre, porque la situación de excepción durará largo tiempo y esos médicos deben estar disponibles para ayudar en la crisis. Estimó que hay que despejar toda preocupación que no sea enfrentar la pandemia más grande en la historia de la humanidad y de Chile.

Afirmó que en Chile hay un déficit de médicos y de especialistas, por lo que se requiere una modificación urgente del sistema y trajo a colación que en la sesión pasada ASOFAMECH señaló que sobraban médicos y que el problema radica en la insuficiente dotación de cargos de planta.

Finalmente planteó ser partidario de que tanto la acreditación del EUNACOM como la que está a cargo de CONACEM estén en manos públicas, porque al estar en manos privadas hay conflicto de interés con el Colegio Médico y con los especialistas.

La Honorable Senadora señora Ebensperger, tomando pie en las expresiones vertidas por los representantes del Colegio Médico, el Director del EUNACOM y la representante de ASOFAMECH, quienes señalaron claramente la importancia del Examen como modo de asegurar las competencias mínimas de todos los médicos y de garantizar la equidad en la distribución de becas, manifestó que resulta obvia la necesidad y conveniencia de buscar una fórmula intermedia. Probablemente suspender el EUNACOM por dos años parece excesivo, si se considera las bondades de este examen.

Estimó que dos años son un plazo excesivo. El examen se rinde dos veces en el año, junio y diciembre; el de junio es voluntario y ya fue suspendido para este año; no es posible suspender el de diciembre porque está fijado por la ley. En consecuencia, correspondería sólo suspender el de diciembre de este año, porque el próximo obligatorio, de acuerdo a la legislación vigente, sería en diciembre de 2021, época en que eventualmente la crisis ya podría estar superada.

Certificar especialidades también es asegurar la capacidad profesional y brindar a los pacientes la tranquilidad que puede darles que los especialistas que ejercen en el país lo hacen con todas las competencias que se requiere. Consultó al doctor si hay alguna posibilidad de suspender el examen de CONACEM, al menos por un año, o reducir la aplicación en el tiempo de este proyecto de ley al mínimo posible, de manera de enfrentar la crisis pero, al mismo tiempo, asegurar la finalidad que ambos exámenes buscan.

El doctor Naranjo aclaró que la certificación en Chile es un acto voluntario, de modo que CONACEM, como corporación de derecho privado, puede continuar con su trabajo; otra cosa es si la autoridad sanitaria va a exigir la certificación de especialidad para ejercer en un determinado lugar, ella tendrá que definir si exigirá el requisito de ser especialista para ejercer en nuestro país.

Estimó que a los problemas contingentes o de urgencia se debe dar una solución contingente y urgente, lo cual se aparta de las decisiones habituales que se toma para resolver. Manifestó dudas sobre si se requiere una ley para enfrentar la actual situación de emergencia o basta con un decreto que permita que los médicos, de acuerdo con la legislación vigente, puedan ser contratados. Indicó que le preocupa que la contratación de médicos extranjeros se transforme en un sistema permanente.

Señaló que en Chile prácticamente no hay intensivistas, la mayor parte de los médicos que trabajan en las unidades de cuidados intensivos e intermedios no son especialistas, sino que son internistas con especialidades en otras áreas, como anestesistas; sin embargo, se desempeñan en las unidades de cuidados intensivos, lo cual es un problema no resuelto, que se hace mucho más evidente en una situación de pandemia como la actual.

Concordó en que hay déficit de especialistas en nuestro país; además, están mal distribuidos territorialmente. Expresó que en los últimos años el Ministerio de Salud ha desarrollado políticas de Estado acertadas, que van en la línea correcta, facilitando la formación de miles de especialistas. Efectivamente, la comparación con países de la OCDE muestra que tenemos un déficit de médicos del 50%; pero para cambiar eso se debe destinar a salud un porcentaje del PIB que permita contratar un número suficiente de médicos, habilitando al efecto vacantes y hospitales.

Precisó que CONACEM ha realizado un enorme esfuerzo, para certificar la mayor cantidad de médicos extranjeros, asegurando que posean los conocimientos y habilidades que se requieren para que ejerzan su especialidad, intentando simplificar el procedimiento. Destacó que el año 2019 certificaron a 1.200 médicos, este año, en cambio, será difícil homologar ese resultado, por el problema de pandemia.

El asesor legislativo del Ministerio de Salud, abogado señor Jaime González, declaró que la creación de un registro a cargo de la Superintendencia de Salud no requiere patrocinio, pues el Ejecutivo ostenta la potestad reglamentaria, que puede ejercer a través del Ministerio de Salud.

El señor Superintendente expresó que no existe un registro de la situación real de los médicos que están en situación de precariedad. Confirmó que sin necesidad de una ley se ha ido construyendo una jurisprudencia administrativa para solucionar el tema; sin embargo, toda jurisprudencia puede ser modificada. El principal problema detectado es que la práctica está tergiversando lo que la normativa establece y probablemente hay Servicios de Salud que han contratado especialistas, no todos con el EUNACOM aprobado.

Declaró estar de acuerdo con la propuesta, en los términos planteados por el Senador Chahuán y mostró disposición a apoyarla.

El Honorable Senador señor Chahuán reconoció la buena disposición del Ejecutivo para apoyar este proyecto de ley, con las modificaciones propuestas. Estimó que así se resuelve el problema planteado en el proyecto de ley que presentó el Senador Navarro y el Senador Quinteros y permite aprobarlo en general, para luego revisarlo en particular.

El Honorable Senador señor Navarro afirmó que el propósito de este proyecto es generar mano de obra especializada en el tema de salud. Anunció que presentaría una indicación sobre los sumarios administrativos y personal especializado que puede ser incorporado, porque se debe contar con todos en esta emergencia y las sanciones administrativas que no sean de efecto crítico, debieran ser suspendidas, para habilitar a esos funcionarios y reintegrarlos al servicio.

Informó que en la región que representa, el Estado está contratando a honorarios a médicos, enfermeras y auxiliares, generando una categoría de funcionarios de segunda clase, pues no tienen previsión social, cobertura médica, ni contrato indefinido. Si se enferman, como es altamente probable, quedan en una situación muy precaria.

La Honorable Senadora señora Ebensperger planteó la posibilidad de votar en general el proyecto de ley y abrir un plazo de indicaciones que de tiempo al Ejecutivo para presentar su proposición y votar en particular la próxima semana.

La Comisión entiende que el articulado genera dudas de constitucionalidad, pero aspira a que en la discusión en particular se formulen indicaciones que subsanen los eventuales reparos.

- Puesta en votación la idea de legislar, fue aprobada por la unanimidad de los miembros de la Comisión, Honorables Senadores señoras Goic y Ebensperger y señores Chahuán, Girardi y Quinteros.

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DISCUSIÓN EN PARTICULAR

Dentro del plazo fijado al efecto por la Comisión se formularon 11 indicaciones, cuyo tenor se transcribe a continuación.

- La indicación N° 1, del Honorable Senador señor Chahuán, sustituye el artículo único por el siguiente:

“Artículo único.- Suspéndase por el plazo de dos años, contados desde la publicación de esta ley, aprobar el examen único nacional de conocimientos de medicina establecido en el artículo 1° de la ley 20.261, como requisito de ingreso para los cargos o empleos de médico cirujano en los Servicios de Salud creados por el artículo 16 del decreto con fuerza de ley N° 1, del Ministerio de Salud, de 2005; en la Subsecretaría de Salud Pública y en las Secretarias Regionales Ministeriales de Salud, en los establecimientos de carácter experimental creados por el artículo 6° de la ley N°19.650, y en los establecimientos de atención primaria de salud municipal.

En el caso de los médicos que hubiesen obtenido su título profesional en el extranjero, en el plazo máximo de tres meses desde la publicación de la presente ley, el Ministerio de Salud dictará un Reglamento que fijará el procedimiento para acceder a los cargos o empleos de que trata el inciso precedente, sin perjuicio del estricto cumplimiento de la normativa sobre permanencia en el país. Para todos los efectos legales, se entenderá que los profesionales habrán revalidado transitoriamente su título profesional de médico cirujano, quedando habilitados para el ejercicio de la profesión.

Asimismo, por el lapso de dos años contados desde la publicación de esta ley, los médicos cirujanos a que se refiere el inciso segundo del artículo 2 bis de la ley N° 20.261, podrán ejercer su profesión en Chile, aun cuando no hubieren obtenido la certificación de su respectiva especialidad o subespecialidad de conformidad con las normas establecidas en el número 13 del artículo 4 del decreto con fuerza ley N° 1, de 2005, del Ministerio de Salud, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley N° 2.763, de 1979, y de las leyes N° 18.933 y N° 18.469, siempre que hubieren presentado su solicitud de certificación a alguna de las entidades certificadoras autorizadas por el Ministerio de Salud durante la vigencia de esta ley. El ejercicio de su profesión quedará limitado al de la especialidad o subespecialidad cuya certificación hubiere solicitado, y sólo para el sector público. Transcurrido el plazo antes señalado, para continuar ejerciendo la profesión de médico cirujano deberán obtener la certificación de su es-parcialidad o subespecialidad de conformidad con lo preceptuado por el artículo 2 bis de la ley N° 20.261, o bien revalidar su título de conformidad con lo establecido por el artículo 1 de la referida ley, o por el artículo 3 del D.F.L N° 153, del Ministerio de Educación, de 1981, que aprobó el Estatuto de la Universidad de Chile.

La Superintendencia de Salud deberá implementar un registro público especial en el Registro Nacional de Prestadores Individuales de la Superintendencia, para los médicos que resultaren transitoriamente habilitados, siendo obligación del prestador institucional contratante, informar oportunamente a la Superintendencia de tal contratación. La infracción a la obligación de informar por parte de los prestadores públicos de salud será sancionada en conformidad al artículo 174 del Código Sanitario.”.

- La indicación N° 2, del Honorable Senador señor Girardi, reemplaza el Artículo único por el siguiente:

“Artículo único.- En caso de declararse Estado de Excepción Constitucional de Catástrofe y cuando la autoridad sanitaria respectiva haya Declarado Alerta Sanitaria, los servicios de salud creados por el artículo 16 del decreto con fuerza de ley N.º 1, del Ministerio de Salud, de 2005; en los establecimientos de carácter experimental creados por el artículo 6º de la ley Nº 19.650, y los establecimientos de atención primaria de salud municipal podrán contratar médicos cirujanos que no cumplan el requisito de aprobación del examen único nacional de conocimiento de medicina establecido en la ley N° 20.261, con la exclusiva finalidad de apoyar la emergencia. Así, los servicios anteriormente enunciados, que hayan contratado médicos cirujanos bajo esta modalidad deberán finiquitar las prestaciones, finalizado el Estado de Excepción y el Decreto de Alerta Sanitaria.”.

- La indicación N° 3, del Presidente de la República, sustituye el artículo único por el siguiente:

“Artículo único.- Suspéndase, por el plazo de dos años contado desde la publicación de esta ley, el requisito de aprobar el examen único nacional de conocimientos de medicina establecido en el artículo 1° de la ley N° 20.261, para ingresar a los cargos o empleos de médico cirujano en los Servicios de Salud creados por el artículo 16 del decreto con fuerza de ley Nº 1, de 2005, del Ministerio de Salud, que fija texto refundido coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979 y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469; en la Subsecretaria de Salud Pública; en las Secretarias Regionales Ministeriales de Salud; en los establecimientos de carácter experimental creados por el artículo 6º de la ley Nº 19.650; y en los establecimientos de atención primaria de salud municipal.

En el caso de los médicos que hubiesen obtenido su título profesional en el extranjero, para acceder a los cargos o empleos de que trata el inciso precedente, podrán obtener una habilitación temporal, por un plazo de dos años contado desde la publicación de la ley, para lo cual deberán sujetarse al procedimiento que fijará un reglamento que dictará el Ministerio de Salud, dentro del plazo de 3 meses de publicada la presente ley en el Diario Oficial, el cual además establecerá los requisitos para acreditar y validar su formación profesional.

Asimismo, por el lapso de dos años contado desde la publicación de esta ley, los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en el extranjero y aquellos a los que se refiere el inciso segundo del artículo 2 bis de la ley N° 20.261, quedarán habilitados para ejercer su especialidad en Chile, aun cuando no hubieren obtenido la certificación de su respectiva especialidad o subespecialidad de conformidad con las normas establecidas en el número 13 del artículo 4 del decreto con fuerza ley Nº 1, de 2005, del Ministerio de Salud, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979, y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469, siempre que hubieren presentado su solicitud de certificación a alguna de las entidades certificadoras autorizadas por el Ministerio de Salud durante la vigencia de esta ley, o bien la hubiesen presentado con anterioridad y se encontraren en trámite.

Transcurrido el plazo de dos años contado desde la publicación de la presente ley en el Diario Oficial, para continuar ejerciendo la profesión de médico cirujano y su especialidad, los profesionales deberán obtener la certificación de su especialidad o subespecialidad de conformidad con lo preceptuado por la legislación vigente en la materia.

La Superintendencia de Salud deberá implementar un registro público especial en el Registro Nacional de Prestadores Individuales de la Superintendencia, para los médicos que resultaren transitoriamente habilitados para ejercer su profesión y especialidad en Chile de conformidad a la presente ley, siendo obligación de la entidad contratante, informar a la Superintendencia de Salud, en el plazo de 30 días corridos, mediante el envío de un oficio que informe de tal contratación. La infracción a la obligación de informar por parte de las entidades contratantes será sancionada en conformidad al artículo 174 del Código Sanitario.”.

- La indicación N° 4, del Honorable Senador señor Quinteros, introduce las siguientes modificaciones en el artículo único:

a) Reemplazar la expresión “dos años” por “un año”.

b) Reemplazar la expresión “promulgación” por “publicación”.

- La indicación N° 5, del Honorable Senador señor Navarro, agrega el siguiente nuevo artículo segundo:

“Suspéndase por un periodo de dos años, a partir de la promulgación de esta ley, el artículo segundo bis de la ley 20.261 que crea examen único nacional de conocimientos de medicina, incorpora cargos que indica al sistema de alta dirección pública y modifica la ley N°19.664.”.

- La indicación N° 6, del Honorable Senador señor Navarro, agrega el siguiente nuevo artículo segundo:

“Aquellos médicos especialistas que, habiendo obtenido su título en el extranjero, hayan sido contratados por los servicios de salud entre los años 2015 y 2020, y que hayan cumplido al menos dos años de trabajo, serán registrado en la Superintendencia de Salud por un periodo no menor a diez años, con la sola constancia del desempeño satisfactorio de sus labores.”.

- La indicación N° 7, del Honorable Senador señor Navarro, agrega el siguiente nuevo artículo segundo:

“Aquellos médicos generales que, habiendo obtenido su título en el extranjero, hayan sido contratados por al menos dos años en los Servicios de Salud entre los años 2010 y 2020, serán registrados en la Superintendencia de Salud, con la sola presentación de su documentación contractual y un certificado de antigüedad.”.

- La indicación N° 8, del Honorable Senador señor Navarro, agrega el siguiente nuevo artículo segundo:

“Aquellos médicos generales que, habiendo obtenido su título en el extranjero, hayan aprobado total o parcialmente el Examen Único Nacional de Conocimiento de Medicina, previo a la promulgación de esta ley, serán registrados en la Superintendencia de Salud, quedando eximidos de cualquier otro sistema de acreditación para dichos efectos.”.

- La indicación N° 9, del Honorable Senador señor Navarro, agrega el siguiente nuevo artículo segundo:

“Quedarán suspendidas por dos años, las sanciones administrativas, por sumario o investigación sumaria, dictadas en los últimos tres años en contra de funcionarios y funcionarias de la salud.”.

- La indicación N° 10, del Presidente de la República, incluye el siguiente artículo transitorio:

“Artículo transitorio.- La vigencia de la presente ley será por un plazo de dos años contado desde su publicación en el Diario Oficial. Sin perjuicio de lo anterior, transcurrido dicho plazo, los médicos cirujanos o especialistas que tuvieren contratos vigentes en virtud de la presente ley, podrán mantenerlos por el tiempo restante para terminar su proceso de aprobación del examen único nacional de conocimientos de medicina, o certificación de la especialidad.”.

- La indicación N° 11, del Honorable Senador señor Girardi, agrega los siguientes artículos primero y segundo transitorios, nuevos:

“Artículo transitorio primero: En el contexto de la pandemia de Covid-19 y durante el tiempo que la Autoridad Sanitaria mantenga la vigencia del Decreto de Alerta Sanitaria postergase el examen único nacional de conocimiento de medicina planificado y anunciado para el 16 de diciembre de 2020 para el 17 de marzo de 2021, dejando sin efecto por esta única vez el artículo 11 del Decreto n° 8 de 2009 del Ministerio de Salud, que obliga a la Asociación a cargo del examen a rendir el examen al menos una vez al año.

Esta postergación no afectará en ningún caso, la obligación de la Asociación a realizar el examen a lo menos una vez más durante el año 2021.

La autoridad administrativa competente, deberá adecuar los llamados regulares a concurso para programas de especialización médica planificados para el año 2021, de tal manera de incluir a aquellos que rindieron el examen en marzo de 2021.

Artículo transitorio segundo: Aquellos médicos cirujanos que sean contratados en virtud del Decreto N° 6 de fecha 06 de marzo de 2020 que modifica el Decreto N°4 de 2020, del Ministerio de Salud, que decreta alerta sanitaria por el periodo que se señala y otorga facultades extraordinarias que indica por emergencia de salud pública de importancia internacional (ESPII) por brote del nuevo coronavirus (2019-NCOV), sin el examen único nacional de conocimiento de medicina, deberán cesar sus servicios finalizado el Estado de Excepción y el Decreto de Alerta Sanitaria.”.

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Se inició el debate con la indicación N° 3, del Presidente de la República, que propone un artículo sustitutivo de la moción.

A la última sesión en que la Comisión consideró este proyecto de ley comparecieron telemáticamente la Presidenta del Colegio Médico y el representante de los médicos extranjeros residentes en Chile, doctor Lautaro Ferrada.

La Presidenta del Colegio Médico de Chile A.G., doctora Izkia Siches, manifestó representar la voz de la comunidad médica, no solo del Colegio Médico, sino también de la Academia Chilena de Medicina, de la Asociación de Sociedades Científicas-Médicas de Chile y de la Asociación de Facultades de Medicina, y declaró que todas esas colectividades rechazan el proyecto de ley que suspende por dos años la exigencia del EUNACOM.

Puntualizó que el proyecto pretende eliminar transitoriamente un sistema que la comunidad médica valora, lo que no tiene fundamento en el contexto de pandemia, ya que la declaración de alerta sanitaria permite contratar, por lo menos hasta el mes de abril del año 2021, a médicos extranjeros sin EUNACOM, no revalidados y a estudiantes de medicina. La Contraloría General de la República lo ha refrendado, y actualmente es posible que, en situaciones excepcionales, se pueda contratar a esos médicos.

La oposición a eliminar las exigencias de estándares mínimos para el ejercicio de la medicina en Chile se asienta en la finalidad de dar una señal de justicia, en el sentido de que la calidad de los profesionales médicos que entregan la atención sanitaria en los distintos niveles socioeconómicos debe ser uniforme; indicó que gran parte de los profesionales médicos sin EUNACOM son contratados en lugares más marginales del país.

Manifestó que siempre han valorado a los profesionales extranjeros, muchos de los cuales han aprobado los exámenes en cuestión y se han incorporado a la red sanitaria. Estimó que cualquier política abierta a la inmigración de profesionales debe ir acompañada de un sistema de certificación de competencias mínimas, que garantice la seguridad de la población.

El Colegio Médico, en particular, ve con preocupación el avance de este proyecto de ley. Destacó que el Ministro de Salud se había referido en dos oportunidades a este proyecto, instando a los Senadores a aprobarlo. Dijo que el Ministro históricamente ha tenido una postura contraria a este examen, lo que se ha discutido en la Mesa Social Covid-19. Aseguró que no ha existido ninguna comunicación del Gobierno con el Colegio Médico ni con las instituciones señaladas previamente, para conversar sobre las opciones de recurrir a un instrumento como el planteado en el proyecto, en situaciones de pandemia como la que el país enfrenta.

Manifestó que la comunidad médica estima que es un error avanzar dando señales que debilitan el instrumento que asegura estándares de calidad mínimos y valoró el rol de los médicos formados en el extranjero, por su labor y compromiso con el sistema de salud chileno, pero estimó que es necesario que esta excepción de contratar a médicos sin el examen, se restrinja solamente al período de tiempo que dura la pandemia y no se traduzca en una ley.

Expresó que el interés del Gobierno al calificar de suma urgencia este proyecto genera desconfianza, porque no tiene ninguna justificación técnica y muestra interés por avanzar en la tramitación de un proyecto que da una señal contraria a la que la comunidad médica espera del Ejecutivo; así se ha comunicado al Presidente de la República y a los Ministros que encargados de la gestión de los proyectos de ley en el parlamento.

Se presenta un proyecto de ley que enfrenta a la comunidad médica con el parlamento y con el Ejecutivo en el momento en que el país debe estar más unido que nunca, sostuvo la expositora. Se gasta un tiempo valioso en discutir un proyecto de ley que no tiene ningún fundamento técnico, ni es requerido en este momento.

Indicó que ha conversado con el doctor Beltrán Mena, quien le informó que tiene la capacidad necesaria para ejecutar el examen en diciembre de este año. Como Presidenta del Colegio Médico solicitó a los parlamentarios de esta Comisión rechazar estas medidas o bien postergar el proyecto.

Declaró que es sorprendente que se haya declarado de urgencia un proyecto como este, lo que da la impresión de que hay la intención de aprovechar el contexto de pandemia para un proyecto que siempre ha sido rechazado por la comunidad médica en su totalidad.

No es una señal correcta, no sólo para la comunidad médica, sino también para los estándares y para los propios profesionales médicos formados en el extranjero, porque genera la percepción de que hay distintos niveles de calidad en quienes están ejerciendo la profesión en nuestro país.

La doctora Siches manifestó no estar de acuerdo en que el proyecto encuentra su fundamento en la pandemia. Este proyecto de ley, de autoría del Senador señor Navarro, el Colegio Médico siempre lo ha considerado un mal proyecto. Si ahora el Gobierno quiere apoyarlo, ponerle suma urgencia es un aprovechamiento por parte del Ejecutivo, pues si se trata de enfrentar la pandemia debe haber un trabajo conjunto. Dar una tramitación apresurada a un proyecto que no tiene fundamento técnico, ya que hoy es posible contratar en la red sanitaria a profesionales médicos no acreditados, es cuestionable.

Al planteamiento del doctor Ferrada, en el sentido de analizar las reevaluaciones, ofreció compartir un documento que ha elaborado el Colegio Médico, sobre la reevaluación de CONACEM y de EUNACOM, procesos que se puede mejorar, pero no mediante un proyecto con suma urgencia, que elimina la vigencia de un instrumento necesario.

De acuerdo con la normativa de la alerta sanitaria los médicos se pueden incorporar a la red, de hecho, en el registro de profesionales para Chile hay más de 600 médicos inscritos, muchos de ellos son de nacionalidad venezolana, algunos obtuvieron su formación en Cuba, Ecuador y Colombia y lo más probable es que se incorporen a la respuesta sanitaria. El Colegio es partidario de que ello ocurra, pero considera que la señal de debilitar el procedimiento de evaluación es contradictoria, y por ello atribuye responsabilidad al Ejecutivo, particularmente al Ministerio de Salud.

Como Presidenta del Colegio Médico expresó su rechazo al avance de este proyecto y solicitó que no continúe su tramitación en el tenor planteado, o bien, que se acuerde realizar un trabajo más detallado, contando para ello con la validación del Ejecutivo.

El representante de los médicos extranjeros residentes en Chile, doctor Lautaro Ferrada, planteó que ASOFAMECH, ASEMECH, ASOCIMED, EUNACOM, CONACEM y el Colegio Médico de Chile A.G., son entidades privadas relacionadas entre sí, que han entregado similares puntos de vista en esta discusión, apreciaciones que calificó de insólitas, dada la situación epidemiológica del país, que necesita con urgencia más recursos humanos y sanitarios.

Doscientos cincuenta y siete alcaldes de Chile vienen señalando desde hace años la necesidad de terminar con las trabas a la incorporación de médicos extranjeros. Ellos no quieren más muertes de pacientes en listas de espera, por una atención médica que no llega; tampoco quieren funcionarios y médicos afectados por esta pandemia. Actualmente hay más de 1.000 funcionarios en que el examen ha dado resultado positivo para Covid-19; ellos dejan de atender, para pasar a cumplir cuarentena, y ha habido que lamentar el fallecimiento de algunos de ellos.

Comunicó que la agrupación de médicos extranjeros residentes en Chile cuenta con personalidad jurídica y agrupa a poco más de 8.000 médicos; incluye tanto médicos chilenos que estudiaron en el extranjero, como médicos de otras nacionalidades.

Celebró la intención de la Superintendencia de Salud de registrar a los médicos de manera provisoria, y quizás permanente de aprobarse esta ley, ya que eso les permitirá otorgar licencias médicas, realizar prestaciones en salud en la modalidad de libre elección, disminuir las listas de espera y atender pacientes afectados por la pandemia Covid-19.

Informó que a la fecha hay 49.299 médicos inscritos en la Superintendencia de Salud y exhortó a los representantes del Colegio Médico para que no exija la aprobación de EUNACOM para registrarse en ese gremio.

Indicó que son insuficientes las facultades para la contratación inmediata de médicos no acreditados, autorizadas por el decreto de 6 de marzo de este año, del Ministerio de Salud, a las cuales se refiere el Colegio Médico, debido a que muchas entidades de la administración de salud, tanto municipal, como de los Servicios, las han interpretado como una sugerencia; por ello la aprobación de este proyecto de ley y de las indicaciones que se han formulado les darán un soporte legal y seriedad.

Informó que las agrupaciones que representa acordaron solicitar a la Comisión de Salud del Senado que suspenda la aplicación de los artículos 1° y 2° de la ley N° 20.261, como también la suspensión por dos años de la ley N° 19.664, debido a la actual situación de emergencia sanitaria del país.

Además, solicitó considerar la incorporación de los siguientes planteamientos:

1.- Registro inmediato en la Superintendencia de Salud, por un plazo no inferior a diez años, con la sola constancia del desempeño satisfactorio de sus labores, de aquellos médicos especialistas, que, habiendo obtenido un título universitario en el extranjero que acredite su especialidad médica, hayan sido contratados por los Servicios de Salud entre los años 2015 y 2020 y que hayan cumplido dos años o más de antigüedad en dichos servicios.

2.- Registrar a aquellos médicos generales que han obtenido un título universitario en el extranjero que los acredite, hayan sido contratados por al menos dos años en los servicios públicos, entre los años 2010 y 2020, con la sola presentación de su documentación contractual y un certificado de antigüedad, pudiendo además participar en los concursos para becas de especialidad y subespecialidad médica, sin cumplir otros requisitos para dichos fines.

3.- Registrar a aquellos médicos generales que, habiendo obtenido un título universitario en el extranjero, hayan aprobado total o parcialmente el EUNACOM antes de la promulgación de esta ley, quedando eximidos de cualquier otro sistema de evaluación o acreditación para dichos efectos.

4.- Registrar de manera permanente, como un gesto de agradecimiento del Estado de Chile a su labor profesional, quedando eximidos de cualquier otro sistema de evaluación o acreditación, a aquellos médicos especialistas y generales que, habiendo obtenido un título universitario en el extranjero, han prestado servicios en la actual emergencia sanitaria atendiendo a pacientes.

5.- Que aquellos médicos especialistas y médicos generales que han obtenido un título universitario en el extranjero e inicien sus labores en las direcciones de salud municipal o en los Servicios de Salud, sean incorporados bajo la modalidad de contrato a plazo fijo, con los correspondientes beneficios que la ley laboral señala.

Finalmente, el doctor Ferrada señaló que todas las agrupaciones a las que representa concuerdan en que en el futuro el proceso de acreditación profesional debe pasar a manos del Estado de Chile, y quedar sujeto a la ley de transparencia [5], para lo cual ofreció participar en una mesa de trabajo técnico.

Expresó que CONACEM ha rechazado las postulaciones de 1.000 médicos que obtuvieron su especialidad en el extranjero, apelando a la diferencia de mallas curriculares, y ha exigido nuevos exámenes como prerrequisitos.

Denunció que hay demoras de dos o más años en la asignación de los tribunales que toman los exámenes; ha existido filtración de exámenes de oftalmólogos en el año 2018, invalidando la prueba, con lo cual, el Estado chileno pierde valiosos recursos humanos.

El Colegio Médico, en el actual escenario de pandemia, plantea inscribir de manera automática en el registro de la Superintendencia a cerca de 2.000 médicos que ya culminaron su etapa de especialización y están a la espera de tribunales de CONACEM para su certificación, como también la incorporación de cerca de 1.700 estudiantes que cursan el penúltimo y último año de la carrera de medicina; a este respecto manifestó estar de acuerdo, si también se incorporan los cerca de 2.500 médicos especialistas extranjeros y los cerca de 3.000 médicos generales extranjeros en etapa de acreditación. Así disminuiría considerablemente la brecha de médicos en los servicios públicos.

Expresó no estar de acuerdo con la contratación de médicos recién egresados, como segunda línea, ni con la de médicos ya agotados, de la primera línea. Estimó que son los médicos extranjeros que deben cubrir esa carencia, ya que hay especialistas urgenciólogos, internistas, intensivistas, cirujanos, anestesistas, muchos de los cuales tienen experiencia en emergencias sanitarias y, como tercera prioridad, considerar los otros recursos médicos sugeridos por el Colegio Médico de Chile.

Por último, sostuvo la necesidad de contar con médicos que provienen desde el extranjero, como las brigadas internacionales de Cuba, Rusia y China, que cuentan con vasta experiencia en temas de desastre y pandemia y que ya han estado en el país, luego del terremoto del año 2010.

El doctor Ferrada señaló que la ley N° 20.261 da al Ministerio de Salud la atribución de acreditar a los médicos. Enfatizó que las organizaciones de médicos extranjeros jamás se han planteado en contra de los procesos de acreditación. Indicó que el EUNACOM podría ser tomado por el Estado, en lugar de entregarlo a la Asociación de Facultades de Medicina de Chile, mecanismo que ha ido creando tensión entre las comunidades médicas extranjera y nacional, por la poca transparencia del proceso y los grandes intereses económicos involucrados, que estimó del orden de $5.000.000.000 anuales.

Establecer límites de un año o dos, es un tema complejo de discutir ante la situación sanitaria que vive el país, porque no se sabe cuánto tiempo durará esta crisis.

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La Honorable Senadora señora Ebensperger señaló ser partidaria del examen del EUNACOM y de la certificación de las especialidades. Recalcó la importancia de contar con normas que aseguren la calidad y la igualdad en la postulación a becas.

Sin embargo, señaló que el país está en una situación especial; reconoció que en un comienzo tuvo reparos sobre el proyecto de ley, particularmente porque consideró que era de iniciativa exclusiva del Ejecutivo, lo cual se ha subsanado con la indicación que ha presentado el Presidente de la República.

Hay algunos puntos de la presentación de la doctora Siches que señaló no entender; por ejemplo, éste no es un proyecto impulsado por el Ejecutivo, sino que es iniciado por moción parlamentaria y, una vez aprobado en general, se solicitó al Ejecutivo que presentara indicaciones. Manifestó su desacuerdo con la suposición de intenciones, particularmente del Ejecutivo, que emitió la doctora Siches.

En segundo lugar, en la primera ocasión en que se escuchó al Colegio Médico, éste no se manifestó en contra de suspender el EUNACOM e hizo llegar una propuesta, que fue recogida en parte por algunas indicaciones, por lo cual resulta difícil entender un cambio tan drástico de posición.

Es importante tener presente en proyectos como éste que no se puede dejar de tomar en cuenta la realidad de las regiones, particularmente de las zonas extremas, donde la falta de médicos en general y de especialistas en particular, genera situaciones muy complejas; como no hay más profesionales que se quieran trasladar a esas zonas se debe buscar la forma para que los médicos se desempeñen en todas las regiones del país.

Observó que la indicación del Ejecutivo se plantea de manera adecuada, y consideró importante rebajar la suspensión del EUNACOM a un año, lo que implica postergar el examen de diciembre de este año, ya que el de junio fue suspendido.

Respecto de las certificaciones de CONACEM, manifestó su disposición a incorporar un artículo transitorio, con algunas modificaciones que aseguren que los dos años planteados para continuar ejerciendo no obedezcan a falta de antecedentes de los médicos o especialistas o a una dilación en la entrega de los mismos.

Respecto de la presentación del doctor Ferrada, planteó que los profesionales médicos, para poder trabajar en Chile, tienen una forma de acreditarse que está determinada por la ley, al igual que todo otro profesional que debe acreditar su título y realizar exámenes antes de ejercer; no se observan motivos por los cuales se deba eximir a los médicos de ese procedimiento, más aun cuando de ellos depende la salud y la vida de las personas.

La Honorable Senadora señora Goic sostuvo que las indicaciones presentadas por los parlamentarios son inadmisibles, porque versan sobre funciones de la Superintendencia de Salud, de las Secretarías Regionales Ministeriales de Salud y del Ministerio de Salud, cuyo desenlace depende del resultado de la votación de las indicaciones del Ejecutivo.

Destacó que todos los miembros de la Comisión han estado abiertos a realizar este debate y que se aprobó la idea de legislar justamente para hacer posible la discusión.

La Honorable Senadora señora Ebensperger observó que la indicación N° 4, del Senador señor Quinteros, rebaja a un año la suspensión y estimó que esa indicación no es inadmisible.

El Honorable Senador señor Chahuán solicitó al Gobierno sincerar la discusión en términos de habilitar los cargos necesarios para contar en el sistema público de salud con una dotación profesional suficiente. Frente a la imposibilidad de practicar el EUNACOM, sería necesario contar con más personal de salud, particularmente médicos que estén en la primera línea.

El Honorable Senador señor Girardi sostuvo que se debe separar los temas que están en discusión. Lo que ha revelado esta pandemia es que tenemos un sistema de salud precario e insuficiente para enfrentar la magnitud de los problemas que tiene la sociedad, no es capaz de resolver los problemas en una situación de normalidad, donde hay 2.000.000 personas en lista de espera, justamente porque lo que falta es el recurso humano. Faltan 3.000 médicos especialistas en el sistema hospitalario, faltan 3.000 médicos, por lo menos, en el sistema de atención primaria y estimó que eso no se puede resolver en esta discusión.

El tema de fondo tiene que ver con una concepción de salud que no ha sido reconocido y enfrentado como un tema relevante, como un tema prioritario, como un derecho social garantizado; esta minusvaloración se expresa en que el financiamiento que el Estado otorga a la salud es uno de los más bajos de los países de la OCDE; el promedio del financiamiento fiscal a la salud en los países OCDE es de 8% en promedio, mientras que Chile le destina 3,1%.

Por otra parte, en el sector público no hay cargos disponibles y los profesionales de la salud pública tienen una remuneración que está por debajo de los precios de mercado, lo que ha generado un traspaso de recursos humanos calificados desde el sistema público de salud al sector privado, generando además una inmensa ganancia de las clínicas privadas, a partir del GES, sistema que obliga a derivar pacientes al sector privado cuando no hay especialistas en el sistema público.

El modelo deteriora la capacidad formativa, porque los privados no forman recursos humanos. El déficit que se vive no sólo es de atención a las personas, que genera listas de espera, sino que lo más grave es la pérdida de calidad del recurso humano.

Con este proyecto, en lugar de resolver los problemas de fondo, se buscan fórmulas paliativas. Propuso hacer un trabajo conjunto, para coordinar la forma en que Chile puede formar a los especialistas que necesita en todos los hospitales.

Sostuvo que se requiere que en Chile exista una sola medicina, para todos los habitantes; actualmente hay dos: los sectores de ingresos medio y alto pueden acceder a atención de salud de calidad y los sectores de menores recursos no tienen garantizada una salud de calidad.

A través del EUNACOM se busca generar una equidad mínima en salud. Señaló no estar de acuerdo en que los médicos que atienden en comunas pobres carezcan de la formación suficiente y que los médicos de calidad solo estén disponibles para aquellas personas que tienen altos ingresos.

Una garantía mínima de equidad e igualdad es garantizar a toda la población, particularmente a sectores de pocos ingresos, que el médico que lo va a atender tiene el conocimiento suficiente. Una institución como EUNACOM es fundamental para el país, porque genera equidad, no discrimina, porque se le aplica por igual a chilenos y a extranjeros.

Estimó que hoy el Ejecutivo tiene todos los elementos para resolver los problemas de la pandemia y lo instó a usarlos; la normativa aplicable en época de pandemia permite contratar a todas las personas que se requiera, para lo cual no se necesita una ley; los instrumentos y recursos están, solo falta la voluntad política.

La Honorable Senadora señora Goic dijo que hay dos discusiones, una de las cuales versa sobre la constitucionalidad del proyecto. El decreto de alerta sanitaria N° 4 y sus modificaciones confieren a las Secretarías Regionales Ministeriales y a los Servicios de Salud la facultad de contratar médicos que hayan obtenido su título en el extranjero, incluso si su título no se encuentra revalidado o habilitado en Chile.

A su vez, señala la posibilidad de contratar en calidad de honorarios a los profesionales de los servicios de salud y establecimientos de carácter experimental que hayan suscrito convenios de dedicación exclusiva, no siéndoles aplicables a ellos la prohibición que se establece en la ley N° 20.909 y sus reglamentos, por el tiempo que se extienda la alerta sanitaria.

En suma, queda absolutamente despejado que actualmente el Ministerio de Salud tiene la facultad para contratar a todo el personal que sea necesario.

La otra discusión se plantea en torno a si en este caso es necesaria una ley, solución que a juicio de Su Señoría confunde. Lo mismo que la fijación de un plazo de tres meses para dictar el reglamento, en circunstancias que se requiere contratar médicos ahora y la autoridad sanitaria tiene las atribuciones para hacerlo.

Si es necesario perfeccionar el EUNACOM y las herramientas actuales es algo que se debe discutir abiertamente y manifestó estar disponible para ello. Hoy más que nunca se requiere avanzar en acuerdos, sobre todo si afectan a personas enfrentadas a mucha tensión, como son los profesionales de la salud.

- Puesta en votación la indicación N° 3, se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señora Ebensperger y señor Chahuán. En contra lo hicieron los Honorables Senadores señora Goic y señor Girardi. Se abstuvo el Honorable Senador señor Quinteros.

Por lo tanto, de conformidad con el artículo 182 del Reglamento del Senado, el empate producido en la votación dio lugar a que ella se repitiera de inmediato.

- En la segunda votación, la indicación N° 3 fue rechazada por mayoría de votos. En contra se manifestaron los Honorables Senadores señora Goic y señores Girardi y Quinteros. Votaron a favor la señora Ebensperger y el señor Chahuán.

El Honorable Senador señor Quinteros, al fundar su voto, expresó que ha presentado una indicación que reduce a un año la suspensión del EUNACOM, porque es un convencido de que con esta pandemia la salud pública en Chile tiene que cambiar. Ha quedado de manifiesto la fragilidad del sistema público de salud.

Hoy el Ejecutivo tiene facultades para contratar personal médico. No todos los médicos acceden a lugares rurales e insulares, por ello, le interesa cambiar el sistema y que los exámenes o la habilitación de los títulos obtenidos en el extranjero sean susceptibles de ser mejorados, tal como lo señaló en esta Comisión la ASOFAMECH.

Se trata de aprovechar esta instancia para bregar por una medicina de igual calidad para todos los niveles de la población.

La indicación N° 10, del Presidente de la República, que incorpora un artículo transitorio que se ocupa de la vigencia de la norma permanente contenida en la indicación N° 3, corrió igual suerte que ésta.

- Se dio por rechazada con la misma votación anterior, esto es, por mayoría de votos. En contra se manifestaron los Honorables Senadores señora Goic y señores Girardi y Quinteros. Votaron a favor la señora Ebensperger y el señor Chahuán.

Acto seguido se resolvió la indicación N° 4, del Honorable Senador señor Quinteros, que modifica el artículo único de la moción.

- Fue rechazada por cuatro votos contra uno, emitido por el autor de la proposición.

- Por último, las restantes indicaciones,

Nos 1, 2, 5, 6, 7, 8, 9 y 11, fueron declaradas inadmisibles por la señora Presidenta de la Comisión.

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En atención a los acuerdos colacionados en el presente informe, la Comisión de Salud somete a la consideración del Senado la aprobación en general del siguiente

PROYECTO DE LEY:

“Artículo único.- Suspéndese por un período de dos años, a partir de la promulgación de esta ley, los artículos 1° y 2° de la ley N° 20.261, que crea examen único nacional de conocimientos de medicina, incorpora cargos que indica al sistema de alta dirección pública y modifica la ley N°19.664.”.

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Acordado en sesiones de fechas 31 de marzo de 2020, con asistencia de los Honorables Senadores señores Rabindranath Quinteros Lara (Presidente), señoras Carolina Goic Boroevic y Luz Ebensperger Orrego y señores Francisco Chahuán Chahuán y Guido Girardi Lavín, y de 7 de abril y 12 de mayo del año en curso, con asistencia de los Honorables Senadores señoras Carolina Goic Boroevic (Presidenta) y Luz Ebensperger Orrego y señores Francisco Chahuán Chahuán, Guido Girardi Lavín y Rabindranath Quinteros Lara.

Tres miembros de la Comisión expresaron que aprueban el texto y contenido del presente informe, mediante correos electrónicos dirigidos al Secretario que autoriza.

Valparaíso, 20 de mayo de 2020.

FERNANDO SOFFIA CONTRERAS

Secretario

RESUMEN EJECUTIVO

INFORME DE LA COMISIÓN DE SALUD RECAÍDO EN EL PROYECTO DE LEY, EN PRIMER TRÁMITE CONSTITUCIONAL, QUE SUSPENDE POR EL LAPSO DE DOS AÑOS LA APLICACIÓN DE LOS ARTÍCULOS 1° Y 2° DE LA LEY N° 20.261, INCORPORA CARGOS AL SISTEMA

DE ALTA DIRECCIÓN PÚBLICA Y MODIFICA LA LEY N° 19.664.

(BOLETÍN Nº 13.359-11)

I. PRINCIPAL OBJETIVO DEL PROYECTO PROPUESTO POR LA COMISIÓN: suspender por dos años el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina (EUNACOM), con la finalidad de asegurar la dotación de médicos en el sistema de salud, en el contexto de la actual crisis sanitaria desatada por el coronavirus causante de la pandemia Covid-19.

II ACUERDOS: aprobado en general (unanimidad 5 x 0). En el debate en particular la mayor parte de las indicaciones fueron declaradas inadmisibles, salvo las Nos 3, 4 y 10, que se rechazaron. No hubo indicaciones aprobadas.

III. ESTRUCTURA DEL PROYECTO APROBADO POR LA COMISIÓN: consta de un artículo.

IV. NORMAS DE QUÓRUM ESPECIAL: no tiene.

V. URGENCIA: suma, vence el 28 de mayo en curso.

VI. ORIGEN e INICIATIVA: iniciado en moción de los Honorables Senadores señora Yasna Provoste Campillay y señores Juan Ignacio Latorre Riveros, Alejandro Navarro Brain, Jaime Quintana Leal y Rabindranath Quinteros Lara.

VII. TRÁMITE CONSTITUCIONAL: primer trámite.

VIII. INICIO DE LA TRAMITACIÓN: 25 de marzo de 2020.

IX. TRÁMITE REGLAMENTARIO: primer informe, en general y en particular.

X. NORMAS QUE SE MODIFICAN O QUE SE RELACIONAN CON LA MATERIA:

- De la Constitución Política de la República, los ordinales 9° y 18° del artículo 19.

- Ley N° 20.261, que crea el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina, incorpora cargos que indica al sistema de alta dirección pública y modifica la ley N°19.664.

- Decreto con fuerza de ley N°1, del Ministerio de Salud, de 2005, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley N° 2.763, de 1979 y de las leyes N° 18.933 y N° 18.469.

- De la ley N° 19.650, que perfecciona normas del área de la salud, el artículo 6°.

- De la ley N° 20.129, que establece un Sistema Nacional de Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior, el artículo 27.

- Decreto N° 8, del Ministerio de Salud, de 2009, reglamento del Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina.

- Del decreto N° 110, del Ministerio de Salud, de 1963, el artículo 89.

- Decreto Nº 4, del Ministerio de Salud, de 2020, que decreta Alerta Sanitaria por el período que señala y otorga facultades extraordinarias que indica por emergencia de salud pública de importancia internacional (ESPII) por brote del nuevo Coronavirus.

- Decreto Nº 6 del Ministerio de Salud, de 2020, que modifica el decreto

Nº 4 recién mencionado.

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Valparaíso, 20 de mayo de 2020.

FERNANDO SOFFIA CONTRERAS

Secretario de la Comisión

[1] Fruto de un acuerdo entre el Gobierno de Chile y el Banco Mundial de 1998
[2] Período de especialización de un médico en un hospital una vez finalizados sus estudios de licenciatura. Fuente: RAE (Diccionario de la Lengua Española).
[3] National Board of Medical Examiners. Ver en https://www.nbme.org/.
[4] Numeral 14 del artículo 4° del decreto N° 4 del Ministerio de Salud de 2020 modificado por el decreto N° 6 del mismo Ministerio y año.
[5] Ver ley N° 20.285 sobre acceso a la información pública.

1.3. Discusión en Sala

Fecha 27 de mayo, 2020. Diario de Sesión en Sesión 30. Legislatura 368. Discusión General. Pendiente.

SUSPENSIÓN TEMPORAL DE EXAMEN ÚNICO NACIONAL DE CONOCIMIENTOS DE MEDICINA (EUNACOM)

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Proyecto de ley, en primer trámite constitucional, iniciado en moción de los Senadores señor Navarro, señora Provoste y señores Latorre, Quintana y Quinteros, que suspende por el lapso de dos años la aplicación de los artículos 1° y 2° de la ley N° 20.261, que crea un Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina, incorpora cargos al sistema de Alta Dirección Pública y modifica la ley N° 19.664, con informe de la Comisión de Salud y urgencia calificada de "suma".

--Los antecedentes sobre el proyecto (13.359-11) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican:

Proyecto de ley (moción Senadores señor Navarro, señora Provoste y señores Latorre, Quintana y Quinteros):

En primer trámite: sesión 6ª, en 25 de marzo de 2020 (se da cuenta).

Informe de Comisión:

Salud: sesión 26ª, en 25 de mayo de 2020.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

La iniciativa tiene por objeto suspender por dos años el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina (Eunacom), con la finalidad de asegurar la dotación de médicos en el sistema de salud en el contexto de la actual crisis sanitaria desatada por el coronavirus, causante de la pandemia COVID-19.

La Comisión de Salud deja constancia de que el texto que se propone a la Sala está conformado por un artículo único, por lo que, conforme a lo dispuesto en el artículo 127 del Reglamento de la Corporación, lo discutió en general y en particular a la vez.

No obstante, deja constancia, asimismo, de que, en atención a los acuerdos consignados en su informe, somete a la consideración de la Sala la idea de legislar sobre la materia, lo que es consistente con lo resuelto por los Comités en orden a conocer el proyecto solo en general.

La Comisión de Salud aprobó la idea de legislar por la unanimidad de sus miembros, Honorables Senadores señoras Goic y Ebensperger y señores Chahuán, Girardi y Quinteros, y no le introdujo al proyecto ninguna modificación.

El texto que se propone aprobar se transcribe en la página 36 del informe de la Comisión y en el boletín comparado que sus Señorías tienen a disposición, tanto en el SIL como en la plataforma que estamos utilizando en esta sesión.

Hago presente que el Ejecutivo presentó una indicación para reemplazar el artículo único y agregar un artículo transitorio, la que, de aprobarse en general el proyecto y abrirse plazo para formular indicaciones, se remitiría a la Comisión junto con el texto aprobado en general.

Es todo, señora Presidenta.

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Gracias, señor Secretario .

Le voy a dar la palabra, en primer lugar, al Senador Rabindranath Quinteros.

El señor QUINTEROS.-

Señora Presidenta , este proyecto fue ingresado el 25 de marzo del año 2020 como un apoyo a los establecimientos de salud en la actual crisis sanitaria, suspendiendo por dos años el Eunacom como requisito de ingreso de médicos cirujanos a los servicios de salud, a los establecimientos de carácter experimental y a la atención primaria de salud municipal.

En ningún momento este proyecto pretendía hacerse cargo de la discusión de fondo sobre la conveniencia o la utilidad del Examen Único como política pública.

Quiero recordar que cuando se estableció este Examen Único se visibilizaron dos posturas.

Hay quienes lo valoran como mecanismo idóneo para asegurar la calidad asistencial, homologando y exigiendo mínimos comunes a los conocimientos de los médicos nacionales y extranjeros, como parte de la política de Estado destinada al aseguramiento de la calidad asistencial desde el ámbito de los prestadores individuales, lo cual se instituyó con la reforma de salud del año 2005, versus quienes alegan que este instrumento se ha utilizado para impedir o discriminar en el ejercicio a profesionales de otros países o a los propios nacionales titulados en el extranjero.

Sin embargo, durante la tramitación de este proyecto han ocurrido varios hechos que son relevantes bajo mi punto de vista.

Primero, el Gobierno ha adoptado medidas sanitarias extraordinarias que permiten a la Subsecretaría de Redes Asistenciales (abro comillas) "autorizar la contratación y ejercicio de médicos titulados en el extranjero cuyo título no esté revalidado o habilitado en Chile". Y autoriza a los servicios de salud (abro comillas nuevamente) "a efectuar la contratación del personal de acuerdo a lo establecido en el artículo 10 del Código Sanitario, además de otros mecanismos de contratación previstos en la legislación vigente, y a realizar los traslados del personal que se requiera desde otras dependencias o establecimientos mediante los correspondientes cometidos o comisiones de servicio". Estas medidas van en el mismo sentido que este proyecto de ley.

El artículo 7 también habla de "contratar médicos que hayan obtenido su título en el extranjero y que este título se encuentre revalidado, aun cuando no hayan finalizado su aprobación del Eunacom".

A lo anterior, Presidenta , debe añadirse la doctrina establecida uniformemente por la Contraloría General de la República desde el año 2012, que acepta la contratación de profesionales sin Eunacom en virtud del deber constitucional del Estado de otorgar asistencia de salud a la población y de los principios de continuidad y servicialidad de la Administración Pública cuando existe escasez de médicos.

Asimismo, quiero hacer notar que desde el año 2019 la Contraloría estableció que esos médicos tampoco requieren de inscripción en el registro de la Superintendencia para otorgar prestaciones GES.

Por otra parte, el día 22 de marzo de este año, el sitio "www.eunacom.cl" informó la suspensión del examen correspondiente a julio del año 2020, por lo cual los exámenes teóricos aprobados en julio del 2018 se extenderán hasta el 16 de diciembre de este año.

En mi opinión, Presidenta , estos antecedentes solucionan la contingencia actual, lo que no haría necesario continuar con la tramitación de este proyecto y así priorizar otras iniciativas que sí requieren de texto legal para apoyar las gestiones que se están realizando para el control de la crisis sanitaria.

Es todo, Presidenta .

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Gracias, Senador Quinteros.

Ofrezco la palabra al Senador Insulza.

El señor INSULZA.-

Presidenta, la verdad es que yo se la había pedido antes de que hablara el Senador Quinteros, por lo que, después de haberlo escuchado a él, no tengo nada que agregar.

Es claro que la emergencia, como tal, no existe y que de hecho se está permitiendo la referida contratación. Además, en lo personal, no me parece razonable ir en contra de la opinión de todas las organizaciones médicas del país, que han pedido que este proyecto no se apruebe.

Así que yo le retiro mi apoyo y quedo disponible tanto para aquello, si fuera posible, como para votarlo en contra, que es lo más seguro.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

A continuación, tiene la palabra el Senador Latorre.

El señor LATORRE.-

Algo pasa con el video.

Si quiere, Presidenta , le da la palabra a otro colega mientras continúo tratando de arreglar el problema.

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Muy bien.

Senador Girardi, tiene la palabra.

El señor GIRARDI.-

Presidenta , yo solo quiero hacer un comentario general, porque concuerdo plenamente con lo que señaló el Senador Rabindranath Quinteros , quien efectuó una muy clara exposición sobre la materia.

Quiero decir por qué el Eunacom es importante.

Para mí, es un instrumento de equidad, de igualdad. ¿Por qué señalo esto? Porque creo que el gran problema que existe en Chile es el de la desigualdad en el ámbito de la salud. En la atención primaria faltan 3 mil médicos; en los hospitales faltan 3 mil especialistas; tenemos una infraestructura deficiente, y tenemos una inmensa lista de espera, fundamentalmente por la falta de profesionales, tanto en el sistema hospitalario como en el sistema de atención primaria.

El problema es que la gente que posee dinero tiene la posibilidad de contar con una medicina de calidad garantizada y certificada. Cualquier persona que vaya a una clínica de cierto renombre, de cierto estatus, va a disponer de médicos con certificación de título, de especialidades, y que exhiben, por así decirlo, una garantía de calidad en cuanto a que por lo menos cumplen con un estándar mínimo.

En salud aquello resulta fundamental. Si una persona lleva a su hijo a un centro hospitalario y alguien no es capaz de diagnosticarle una neumonía o le aplica un tratamiento equivocado, nos encontramos con que los médicos pueden ser muy útiles, pero también tremendamente peligrosos en relación con las negligencias médicas si no tienen la competencia ni la idoneidad adecuadas.

¿Qué sucede? Que aquí también hay un tema de asimetría de información. Cualquiera de nosotros -y uno mismo, que es médico-, no puede empezar a discutir con el facultativo el diagnóstico que le hizo, los exámenes que le tomó, el tratamiento que le indicó. No tiene la información. Y, aunque la tuviera, no puede hacer nada, porque, en tal caso, lo más probable es que el médico le diga: "Mire, si no está de acuerdo, cámbiese de profesional".

A mí me parece que esto es muy importante. Una vez en Cerro Navia realizamos una prueba, un test de conocimientos mínimos que no pasó ningún médico. Yo consideré tremendamente riesgoso que en Chile hubiera dos medicinas: una para los ricos, para las personas de más recursos, y otra para los más pobres, que deben ir a consultorios donde no tienen garantizada la calidad de los prestadores.

Normalmente, los médicos que no alcanzan la calificación o la acreditación no están en las grandes clínicas privadas ni en las consultas: están en los sectores populares o en la atención primaria.

Y me parece un deber ético del Congreso garantizar una cierta calidad mínima de salud a las personas de menores recursos, que son las que tienen una carga de enfermedad más alta. Los más pobres tienen un 190 por ciento más de obesidad, un 320 por ciento más de diabetes y un 380 por ciento más de riesgo de padecer hipertensión o también cáncer.

Las personas de menos recursos no tienen la posibilidad de saber si quien las está atendiendo es un buen o un mal profesional. En Chile no puede haber una medicina para pobres, que no esté certificada, que no esté garantizada y que brinde una atención que no resuelva los problemas o que incluso cause negligencias.

Entonces, ¿por qué considero que el Eunacom genera garantías de calidad y de igualdad? Porque es una examen que se les hace a chilenos y extranjeros, que no discrimina. A mí me da lo mismo si el médico o la doctora que está entregando una prestación es de aquí o de afuera. Lo que yo le pido es que tenga un nivel mínimo de conocimientos. Creo que lo peor que podríamos hacer es permitir que facultativos, independientemente de su nacionalidad, puedan ejercer una práctica para la cual no cuentan con las competencias necesarias.

El Eunacom no es un examen que certifique a quienes obtienen el puntaje máximo, sino que establece un puntaje mínimo, lo cual es totalmente razonable. Resulta que algunas personas se presentan, lo repiten varias veces y obtienen puntajes mínimos, ¡mínimos!

Por eso, nosotros tenemos que asegurar que cualquier chileno o chilena, cualquier ciudadano extranjero, migrante o no, que vaya a la atención de salud, reciba una prestación que esté debidamente garantizada. Y que cualquier médico, chileno o extranjero, haya cumplido el requisito de una calificación mínima.

Aquello es fundamental, porque, si no, los riesgos son enormes.

¿Por qué el Gobierno -me pregunto yo- quiere eliminar el Eunacom?

Este es el primer paso. Porque, claro, en vez de resolver...

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Le vamos a reactivar el audio, Senador.

El señor GIRARDI.-

Gracias.

Me preguntaba por qué el Gobierno quiere eliminar o eventualmente postergar el Eunacom. Es como el "sillón de don Otto": en vez de resolver los problemas de fondo; en vez de resolver el déficit de especialistas con médicos garantizados y certificados, sean extranjeros o chilenos; en vez de resolver el déficit de médicos de atención primaria (3 mil), independientemente de que sean chilenos o extranjeros, el Gobierno opta por una vía que pone en riesgo algo que, en mi opinión, es patrimonio del país.

Yo les pregunto a ustedes por qué Chile, que gasta 700 dólares per cápita en salud, muestra indicadores equivalentes en muchas enfermedades a Estados Unidos, que gasta cerca de diez mil dólares per cápita.

Díganme ustedes, ¿es por nuestra tecnología? ¿Es por nuestra infraestructura? ¿Es por nuestra hotelería? ¡Por ninguna de esas razones! Es porque Chile, en universidades públicas y privadas, ha logrado tener un patrimonio de calidad en los trabajadores y profesionales de la salud, que es de excelencia. Pero este patrimonio está en crisis, porque cuando los médicos se van del sistema público al privado y no hay especialistas en el sistema público no solo significa que estén dejando de atender, sino que también de formar, porque son los maestros, ya que en el sistema privado no se forma a profesionales.

Si a eso, más encima, ustedes le agregan la existencia de facultativos de la atención de salud sin una calidad certificada, entonces pondremos en riesgo el patrimonio que le ha permitido a Chile incluso enfrentar esta pandemia con una baja mortalidad y exhibir indicadores que no se condicen con lo que el país invierte en salud, porque Chile invierte un tercio de lo que invierten las naciones desarrolladas respecto a su aporte fiscal en salud. Y eso solo ha sido posible porque tanto las universidades públicas como privadas todavía mantienen un nivel de excelencia en la formación de los profesionales y trabajadores de la salud, que está muy por sobre el de otros países latinoamericanos.

¡No pongamos en riesgo eso! Porque es un capital, es un patrimonio que ha sido más importante hasta ahora que el patrimonio de tecnología, de infraestructura o de recursos financieros, y si lo ponemos en riesgo, entonces no vamos a disponer de nada.

Yo digo que tenemos una responsabilidad. Y, por eso, concuerdo con la opinión del Colegio Médico y de todas las instituciones especialistas, no porque sea médico, sino porque es algo que tenemos que resguardar y es una medida de equidad garantizarle a cada chileno, sobre todo a los más pobres, que cuando vaya a una consulta quien los atienda sea una doctora o un doctor, independientemente de su nacionalidad, con un nivel mínimo de conocimientos. Y eso vale para chilenos y para extranjeros, sin discriminación.

No hacerlo significaría discriminar a los más pobres de este país.

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Anteriormente, omití darle la palabra a la Senadora Goic para que diera cuenta del informe de la Comisión.

Tiene la palabra, Senadora.

La señora GOIC.-

Gracias, Presidenta.

Creo que es bueno que, a pesar de estar sesionando en un formato telemático, mantengamos nuestras tradiciones. Esto con el fin de complementar el informe que entregó el Secretario y también clarificar algo de lo que planteó que no es correcto.

La Comisión de Salud ya no recomienda la aprobación del texto de este proyecto, y es importante que los colegas conozcan la discusión particular que se llevó a cabo en su interior.

Esta iniciativa efectivamente plantea suspender por dos años el requisito del Eunacom para certificar el ejercicio de la medicina en el país, en virtud de la pandemia, en el caso de profesionales médicos extranjeros y nacionales.

Nosotros aprobamos este proyecto en general, con muchas dudas respecto de su admisibilidad, para posibilitar el debate, y creo que ese fue el espíritu de todos.

Sin embargo, presentadas once indicaciones, todas las formuladas por parlamentarios fueron declaradas inadmisibles y trabajamos sobre la base de una que presentó el Gobierno. Esta fue rechazada por tres votos en contra, del Senador Girardi, del Senador Quinteros y del mío, y por dos votos a favor, de la Senadora Ebensperger y del Senador Chahuán.

O sea, este informe contiene más bien la propuesta de rechazo del contenido del proyecto, que es equivalente, después de haber hecho la discusión, a rechazarlo en general.

Y el motivo es muy simple. No se trata de que uno no tenga toda la disposición a respaldar la contratación de médicos extranjeros durante la pandemia, sino de que este texto no es necesario. Y quiero dar a conocer a los colegas lo que señala el decreto número 6, del 6 de marzo de 2020, del Ministerio de Salud, que modifica el decreto de alerta sanitaria número 4, que establece en su número 14 la facultad que otorga a los Servicios de Salud del país para autorizar la contratación y ejercicio de médicos titulados en el extranjero, cuyo título no esté revalidado o habilitado en Chile.

El Senador Quinteros ya expresó también lo mismo; pero quiero reiterarlo como parte del informe de la Comisión. O sea, hoy día se están contratando médicos extranjeros y no hay ningún impedimento para ello. Por ende, este proyecto no es necesario, y por eso, lo que hacemos es rechazar el texto.

Es más, el 23 de abril el propio Gobierno lanzó la plataforma "Yo sirvo a mi país", con el objeto de implementar el referido decreto, y ahí se llama a médicos extranjeros, y también a quienes están estudiando y que todavía no han completado su proceso de titulación, para que puedan participar a propósito de la pandemia.

El propio Ministro de Salud , Jaime Mañalich , señaló el 13 de mayo de este año que se han inscrito en el referido programa 8.200 personas, siendo contratadas hasta esa fecha 1.600. Estas son las palabras del Ministro de Salud , y dentro de aquellas están extranjeros que no han aprobado el Eunacom.

Entonces, el mismo Ministro afirma en sus reportes, y cito entre comillas: "El decreto de alerta sanitaria nos permite contratar a personas que no tengan esta certificación" -con relación al Eunacom- "para trabajar en particular como médico", respondiendo en ese momento a la pregunta que formulaba un periodista.

Lo que nosotros pedimos es un mínimo de rigurosidad. Si queremos revisar como Parlamento, si el Ministerio de Salud, si el Ministro Mañalich quiere revisar el Eunacom o los procedimientos de certificación que hoy día existen, hagamos ese debate, pero creo que estas iniciativas lo que hacen es confundir.

Y hoy día existe un problema con el ejercicio de la autoridad en el caso del Ministro Mañalich , porque dice una cosa pero después hace otra. Por un lado, nos dicen que se contratan médicos extranjeros, que se puede hacer, que está el decreto de alerta sanitaria. Y, por otro lado, se presenta una indicación en un proyecto de ley que confunde, que establece un reglamento, y en que se dispone que, a partir de aprobada la ley, en tres meses más estará disponible para la contratación de médicos extranjeros.

El decreto de alerta sanitaria lo permite, no estamos hablando del decreto de excepción, mientras estén las condiciones necesarias para ello.

Entonces, lo que quiero señalar con mucha claridad es que hoy día la gente necesita certeza y también los médicos extranjeros, a quienes valoramos, de que podrán ser contratados. No confundamos con iniciativas como esta, por muy bien intencionadas que sean.

Yo, además, respeto y valoro mucho el aporte de los médicos extranjeros: los conozco, veo cómo operan en mi Región, en particular, en el centro de rehabilitación. O sea, son un aporte. Y no quiero que en ningún momento esto se confunda con impedirles su ejercicio.

Creo que nosotros, como Parlamento, estamos llamados a tener un mínimo de rigurosidad cuando tramitamos estas iniciativas, y por eso me parece que una vez que hemos permitido dar la discusión, aquí lo que corresponde es rechazar en general este proyecto, que el Ministerio siga hoy día contratando a los médicos extranjeros que se requieran de acuerdo al llamado que se ha hecho, y no cuando se haya tramitado una iniciativa de este tipo, que no es necesaria.

A mayor abundamiento, ya lo ha mencionado el Senador Quinteros, está también la posibilidad que ha manifestado la Contraloría en cuanto a contratar médicos extranjeros que no hayan rendido el examen en aquellas zonas donde se necesitan. Es decir, aquí hay evidencia de sobra acerca de cómo se puede resolver el problema.

Entonces, el llamado a los colegas es, ojalá, a poder actuar en sintonía con eso, y aprovechar el tiempo para discutir los próximos proyectos de la tabla.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra la Senadora Allende.

La señora ALLENDE.-

Presidenta, en aras del tiempo, dadas las intervenciones de los Senadores Quinteros y Girardi, y ahora de la Presidenta de la Comisión, yo por lo menos siento que no hay mucho más que argumentar y solo quiero manifestar lo siguiente.

Pienso que lo que plantea la iniciativa es equivocado, porque ya se ha dicho claramente que en este momento existen las facultades para que el Ministerio pueda contratar médicos extranjeros para apoyar en aquellos servicios donde se requiera. Eso es lo primero, que incluso fue reafirmado por la Contraloría.

Lo segundo, que me hace mucho peso, son los argumentos que daba el Senador Girardi, que son ciertos. No podemos desconocer que existe escasez de médicos en la atención primaria; pero nosotros necesitamos, queremos y valoramos que, junto con el objetivo de aumentar la cantidad de profesionales, se aseguren sus competencias, sus conocimientos. ¿Por qué? Porque estamos hablando de la salud humana. Y, por lo tanto, es sumamente importante que no terminemos, como ya ocurre en nuestro país, con una salud privada para aquellos que tienen la posibilidad de comprar seguros, como son las isapres, y con una salud pública donde se atiende el 80 por ciento de la población.

Por lo tanto, esto es un instrumento que permite garantizar la calidad y que ha sido valorado internacionalmente.

Por último, en dos palabras, me hace mucho peso, además de los argumentos que hasta ahora se han entregado, que la Academia Chilena de Medicina, la Asociación de Sociedades Científicas-Médicas de Chile, la Asociación de Facultades de Medicina de Chile, y finalmente, la Presidenta del Colegio Médico nos estén pidiendo que no aprobemos este proyecto; porque, además, tiene un plazo excesivamente amplio, en circunstancias de que ya existen los instrumentos pertinentes, como se ha dicho.

Por tanto, Presidenta , yo votaría en contra, si es necesario.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador Chahuán.

El señor CHAHUÁN.-

Presidenta , Honorable Sala, efectivamente, el decreto N° 6, del estado de catástrofe, establece la posibilidad de contratar médicos extranjeros por un año, sin haber rendido el Eunacom.

La Comisión, para este efecto, recibió a todos los actores incumbentes. Y, básicamente, como el examen de Eunacom no se va a poder realizar en los próximos meses, la idea impulsada desde los parlamentarios y respaldada por el Ejecutivo es, primero, poder conformar un registro de aquellos médicos extranjeros que sirven en el servicio público.

Segundo, se pretende establecer la posibilidad, y eso es parte también de lo que nos piden el Ejecutivo y el Ministerio de Salud, de aprobar en general el proyecto para que vuelva a la Comisión y, en definitiva, se pueda ingresar una indicación del Ejecutivo para radicar lo que se propone solamente respecto de las especialidades.

Tercero, se busca hacerse cargo, adicionalmente, de las brechas de especialistas que hoy día existen en nuestro país, que son cerca de 3.800 médicos; pero, adicionalmente, colaborar en el combate a la crisis sanitaria.

Yo entiendo que hay algunos reparos por parte del Colegio Médico, y también de universidades y otros estamentos, respecto de la posibilidad de que los médicos extranjeros sin Eunacom puedan ser contratados para prestar servicios en el servicio público, valga la redundancia. Ciertamente, la idea es cambiar la indicación inicial presentada por el Ejecutivo , para poder radicarla solamente en los especialistas.

Nosotros hemos discutido largamente respecto de si el Eunacom es o no aplicable a todos y cada uno de los especialistas. Somos partidarios de abordar y avanzar en un examen de especialidades; y, por lo mismo, hago un llamado a que, tal como lo está pidiendo el Ministerio de Salud, aprobemos el proyecto en general, y que vaya a la Comisión, para un nuevo segundo informe, a fin de revisar la indicación que presentará el Ejecutivo , que solamente se abocará a los especialistas médicos que puedan prestar un servicio.

Yo fui voto de minoría en la Comisión, junto con la Senadora Luz Ebensperger. Hemos escuchado la voz de todos los actores, también del Colegio Médico, pero ciertamente hoy día se requieren especialistas para colaborar en la operación de los ventiladores mecánicos, que son absolutamente necesarios.

Por tanto, hago el llamado para que, en definitiva, aprobemos el proyecto en general; o, en su defecto, que vaya a un segundo nuevo informe, que es la otra posibilidad, a la Comisión de Salud para que se pueda conocer la indicación que quiere presentar el Ejecutivo sobre el particular.

Someto la solicitud a la consideración de la Mesa.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador Guillier.

El señor GUILLIER.-

Señora Presidenta , solo para aportar al debate, quiero mencionar que en la Región de Antofagasta, según el ex Director de Salud de la Región , el doctor Zamir Nayar , alrededor del 40 por ciento de los médicos que están en la red pública primaria y hospitalaria son extranjeros. Aún más, el 55 por ciento de las horas médicas las tienen facultativos extranjeros, porque los médicos chilenos poco se interesan en el sistema público.

Solo como antecedente, en Calama, donde el porcentaje es mayor que en Antofagasta, incluso la evaluación de la ciudadanía de la calidad de las prestaciones de los médicos es muy buena. En realidad, el nuevo hospital de Calama, Carlos Cisternas , está dentro de los mejores evaluados en Chile,

Al respecto, también quiero señalar que he tenido que ser mediador en más de una ocasión ante ciertas reclamaciones presentadas por personal de la salud extranjera por trato discriminatorio, dificultades -ustedes saben que hay intereses gremiales también de por medio-, y he tenido que hablar con el Ministro de Salud , el doctor Jaime Mañalich , e incluso he viajado acompañado por consejeros regionales, que están en el sector de salud, para plantear ese tipo de problemas.

Por lo tanto, cuando hablé con el Ministro Mañalich respecto de este proyecto, era para hacer más transparente, menos burocrático y menos discriminatoria o arbitraria la decisión, sobre todo a nivel de autoridades locales. Por razones que sería largo detallar, pero que han sido planteadas tangencialmente en el Senado en algún proyecto, tenemos problemas de gestión asociados también a cierto uso político de los espacios públicos de salud para coparlos o para discriminar a algunas personas.

Entonces, con el propósito de que exista más transparencia y claridad nos parecía conveniente la existencia de una legislación para la emergencia. Nadie está cuestionando la necesidad del Eunacom, creo que efectivamente es un mecanismo de protección; por lo demás, muchos profesionales rinden exámenes cuando salen de las universidades para acreditarse, y eso también me parece razonable.

Sin embargo, aquí se está hablando de una crisis, y todos nosotros hemos hecho referencia a que la crisis obliga a ser más flexible. A veces, se afecta a intereses gremiales, y yo lo entiendo. Pero es claro que esto apunta a profesionales especialistas, que en su mayoría están trabajando, a quienes hay que renovarles los contratos, en lo cual ha habido lentitud y burocracia.

Por lo tanto, se buscaba transparentar, agilizar y evitar el factor discriminatorio que de pronto tienen que enfrentar médicos extranjeros.

De hecho, si se comparan o revisan las condiciones de sus contratos: los descansos, la forma en que rinden el Eunacom, se observa que normalmente son altamente exigentes y, a veces, abusadoras. Y lo que estoy contando es anterior a la crisis, a la pandemia, es del año pasado, principalmente. Y quiero decir que me parece muy bien el discurso del Eunacom, no lo estamos cuestionando; pero creo que la emergencia requiere que todos se abran, porque el propio Sistema de Salud en Antofagasta está al borde del colapso.

Todos los días estoy recibiendo reportes de los samus y de otros sectores que están ahí en la batalla inmediata, y nadie que haya mirado con objetividad y sin tener intereses de por medio ha desconocido la enorme calidad de los médicos que han llegado. Son médicos especialistas precisamente en aquellas especialidades que en Chile no existen; pero donde también, digamos las cosas con franqueza, hay barreras de entrada para especialidades que son bastante identificables, por lo demás, y sobre las cuales no quiero abrir ahora el fuego, porque no es mi intención.

Aterricemos que estamos en una crisis y que las cosas no funcionan tan fluidamente como uno quisiera, a lo menos en mi Región.

Por eso, yo voy a apoyar el proyecto.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra la Senadora Luz Ebensperger.

La señora EBENSPERGER.-

Presidenta, yo encuentro que aquí no se han entregado todos los antecedentes de este proyecto. Efectivamente, cuando se presentó varios de los miembros de la Comisión entendimos que era inadmisible, razón por la cual hablamos con el Ejecutivo .

Y escuchamos a gran cantidad de personas, a todos los involucrados: a la organización encargada de la rendición del Eunacom, a la Presidenta que reúne a todos los decanatos de las escuelas de medicina, al Colegio Médico, al encargado de Conacem, etcétera.

En tales intervenciones, efectivamente los encargados del Eunacom nos dijeron que ellos no eran partidarios de esto, que el examen de julio ya se había corrido y que no podían suspender el de diciembre de este año, porque eso era materia de ley. La fecha de julio la habían puesto ellos; pero la otra estaba fijada por ley, y solo un proyecto podía modificar la rendición de ese examen, cuya finalidad es mantener y asegurar la calidad de los médicos generales y buscar un equilibrio más justo en la postulación de las becas. De lo contrario, el único criterio sería las notas de las universidades, caso en el cual estas, para obtener más becas, podrían jugar con los notas, lo que es peligroso.

En la primera sesión en que vimos este proyecto escuchamos al Colegio Médico, que señaló que estaba en contra de postergar el Eunacom, por las mismas razones antes señaladas. Pero planteó que avanzáramos en colaborar con el tema de las especialidades mediante la suspensión del proceso de certificación por dos años. De hecho, este organismo mandó una proposición de indicación escrita a la Comisión de Salud.

Frente a ello, el Ejecutivo actuó.

Muchas veces aquí se evidencia un doble discurso: para algunas cosas, sirve que el Gobierno haga algo y, para otras, no importa que tenga la facultad; en ocasiones decimos que hay que legislar, pero otras veces, para qué vamos a hacerlo si existe la facultad respectiva.

Pues bien, aquí el Gobierno, acogiendo lo que ustedes han criticado en otros casos, presentó indicaciones para hacer admisible este proyecto. En una de ellas propuso lo que el Senador Navarro sugirió, en orden a suspender el Eunacom por dos años, y en la otra acogió la indicación del Colegio Médico tendiente a suspender la certificación ante la Conacem para las especialidades.

El Colegio Médico volvió a insistir en que está en contra de este proyecto; luego se va acogiendo.

Hoy día el Ejecutivo señala que lo relativo al Eunacom está resuelto por el decreto respectivo, no así lo concerniente a los especialistas, porque, de acuerdo al artículo 112 del Código Sanitario, la facultad que tiene el Ministerio para autorizar, vía decreto, la contratación sin este examen es para médicos generales. Por tanto, esta parte está resuelta, pero no la relativa a los especialistas.

Entonces, yo solicito que se apruebe la idea de legislar, que se envíe la iniciativa nuevamente a la Comisión y que al menos volvamos a discutir el tema de los especialistas.

Nadie quiere que haya médicos sin calidad. Todos esperamos que los chilenos se atiendan con los mejores médicos. Pero también todos queremos que todos los chilenos tengan médicos.

Antes de esta pandemia, señora Presidenta , ya había una grave crisis por falta de especialistas, sobre todo en regiones. Imagínese cómo se ha agudizado con esta pandemia, en que se requieren más manos, en que hay médicos contagiados, en que se necesita recambio.

Les solicito a los Senadores que han dicho en todos los proyectos que hemos tratado que tenemos que actuar con sentido de urgencia frente a esta pandemia que no neguemos la posibilidad a todas las regiones del país, sobre todo a las extremas, de que por un período acotado -eran dos años; si quieren, se puede acotar a uno o al período de esta pandemia exclusivamente- se permita suspender la certificación a aquellos médicos, chilenos o extranjeros, que han obtenido su especialización en el extranjero.

Señora Presidenta, creo que los chilenos necesitan que al menos volvamos a ver esta materia, de manera acotada, en la Comisión de Salud.

Pido, por favor, que se apruebe este proyecto en general...

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Concluyó su tiempo, Senadora.

Tiene un minuto más.

Está sin micrófono.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Ahora se le activó.

La señora EBENSPERGER.-

Para terminar, quiero decir que comparto lo que ha señalado el Senador Guillier.

Efectivamente quienes más sufrimos esta dificultad somos las regiones extremas; más aún, históricamente, las del norte.

Pido solidaridad a todos los Senadores, a fin de no quitarles a los chilenos de regiones la posibilidad de contar con médicos especialistas.

Se dice que todos queremos la misma salud, okay. Pero actuemos en consecuencia. Hoy día se requiere eso, Presidenta .

Voy a votar a favor de este proyecto en general, para que vuelva a la Comisión y se vea ahí la indicación del Ejecutivo.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

El Senador Insulza me ha solicitado la palabra por un punto de reglamento.

El señor INSULZA.-

No sé si corresponde, señora Presidenta , pero yo creo que a estas alturas necesitamos la opinión del Ministerio de Salud.

No estoy en condiciones de afirmar lo que han sostenido algunos Senadores acá, en cuanto a que el Ministerio estaría presentando una indicación y quiere que esta se discuta.

La noticia que yo tengo -y lo digo responsablemente- es que dicha Cartera no quiere que se apruebe este proyecto. Por tanto, me gustaría saber cuál es la opinión del Gobierno. Pero entiendo que no hay ningún representante del Ministerio de Salud en la Sala.

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

No. No hay.

Vamos a seguir el debate. Hay muchos Senadores inscritos.

Continuaré dando la palabra y luego veremos cómo se resuelve el tema de la indicación.

Senadora Aravena, tiene la palabra.

La señora ARAVENA.-

Señora Presidenta , seré bien breve.

Leí en detalle los informes de la Comisión y varios antecedentes, incluido el decreto respectivo del Ministerio de Salud, específicamente su artículo 4º, numerales 4, 5 y 7, donde no solo se hace mención precisa de que se va a liberar del Eunacom a médicos -no habla de especialistas o no especialistas; simplemente habla en general, que es lo que corresponde- para contratarlos durante esta pandemia, sino que también se incorpora a todos los funcionarios que se hayan acogido al incentivo al retiro, a fin de incluir más equipo médico, y se agrega a todos los alumnos de último año de todas las carreras vinculadas a la salud.

Al igual que muchos que me antecedieron en el uso de la palabra, creo que uno de los grandes capitales que tiene efectivamente nuestro país es el capital humano vinculado a la salud, y los indicadores de salubridad en Chile son del más alto estándar.

Me complica mucho esto, porque es enredoso. Mirando el título del proyecto y su sentido, pienso que pierde lógica el que estemos legislando para hacer algo que ya está definido en un decreto desde el sábado 8 de febrero de este año. Entonces, me parece bastante insólito que estemos dedicando tiempo a una materia respecto de la cual el Ministerio tiene autonomía para actuar.

Si alguien piensa que debiera revisarse lo relativo al Eunacom, bien. Pero hay que mirar siempre, ¡ojo!, que todas las estadísticas -y así lo dicen los informes que despachó la Comisión- señalan que efectivamente hay una brecha bastante importante en los resultados de nuestros alumnos de Medicina egresados respecto de los médicos que vienen del extranjero -¡es muy importante!-; sobre todo, cuando esos profesionales van a atender a las personas con menos recursos de este país.

La verdad es que me parece un sinsentido, considerando lo que se lee en los documentos que nos han entregado, que estemos legislando este asunto, porque el Gobierno tiene la facultad para ello desde hace tres meses. Si queremos buscar otras cosas, bueno, será otro proyecto de ley, otra resolución; pero, claramente, no le veo asunto a estar hoy día tramitando esta iniciativa.

Voy a votar en contra, pues para mí esto no tiene ningún sentido.

Muchas gracias.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador Durana.

El señor DURANA.-

Señora Presidenta , el proyecto de ley propone suspender por dos años el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina con la finalidad de asegurar la dotación de médicos en el sistema de salud en el contexto de la actual crisis sanitaria desatada por el COVID-19, causante de esta pandemia.

Las autoridades de salud han declarado que actualmente en nuestro país faltan 20 mil médicos, lo que estaría lejos de subsanarse, y se pronostica que, de aquí al 2030, el déficit estaría recién en 7.200 médicos, solo en el sistema público.

Considerando esta problemática, los decretos publicados en el Diario Oficial con relación a la alerta sanitaria efectivamente autorizan a los servicios de salud del país para contratar médicos que hayan obtenido su título en el extranjero, aunque no esté revalidado o no haya finalizado su aprobación en el Eunacom.

Yo también apoyo la indicación del Ejecutivo, porque permite incorporar la especialidad médica obtenida en el extranjero, estableciendo, fundamentalmente, un mecanismo ante la Corporación Nacional Autónoma de Certificación de Especialidades Médicas (Conacem). Ello es tremendamente importante, porque genera un plazo de dos años para regularizar la situación, mediante la rendición de exámenes de la respectiva especialidad, de lo cual llevará registro la Superintendencia de Salud .

Asimismo, es importante recordar el dictamen de la Contraloría General N° 12.393, de 16 de febrero de 2016, en respuesta a Seremi de Salud de Arica y Parinacota, quien consultaba si se podía autorizar transitoriamente a una persona que había obtenido su título de médico cirujano en Bolivia y su especialidad en reumatología en Brasil, sin contar con el Eunacom, para desempeñarse en un hospital de la región.

La Contraloría tomó como fundamento que la autoridad administrativa pertinente puede disponer de contrataciones con el fin de hacer efectivos el derecho constitucional a la protección a la salud y los principios de servicialidad del Estado y de continuidad del servicio público.

De esta forma estableció que "en situaciones especiales de escasez de médicos, cuando ello sea imprescindible para asegurar la entrega de las prestaciones de salud, es admisible que el sistema público de salud recurra transitoriamente a la contratación de médicos que hayan obtenido su título en el extranjero, aun cuando estos no hubieren rendido y aprobado el EUNACOM".

Para ello, la entidad señala que es necesario acreditar de manera efectiva la carencia de médicos, presupuesto que no se cumplía en ese caso específico, pero que hoy obviamente es una necesidad en todo el país, especialmente en la Región de Arica y Parinacota.

Asimismo, señaló que "en el evento que se practiquen contrataciones de médicos que no han aprobado el mencionado examen, la autoridad administrativa pertinente deberá adoptar las medidas tendientes a que en lo sucesivo se regularice la situación de dichos profesionales, mediante la rendición y aprobación de dicha prueba".

En definitiva, nunca quedan exentos de tener que aprobar la prueba del Eunacom.

La falta de médicos especialistas es una realidad que ha estado en nuestro sistema de salud desde hace años. La pandemia del COVID-19 simplemente ha evidenciado este problema con más fuerza.

Frente a una situación de tal gravedad, como es esta pandemia, es necesario adoptar medidas de urgencia al respecto, ya que de nada sirve tener la infraestructura para atender a los pacientes si no se cuenta con los médicos capacitados para operarlos.

A lo anterior se suma la interrogante de qué pasará con posterioridad a la pandemia, considerando el constante aumento de las listas de espera para otras prestaciones que han sido suspendidas.

Por ello, es necesario agilizar los procesos de certificación de médicos cirujanos y especialistas, pero encontrando un mecanismo que logre un justo equilibrio entre la celeridad que se requiere y el aseguramiento de la calidad y los conocimientos mínimos de los médicos que ingresan a la red. Solo así se puede garantizar la disponibilidad de médicos suficientes y capacitados para atender las necesidades de salud de la población, en especial en una situación tan crítica como la que se vive hoy en el país y en el mundo.

Finalmente, es importante hacer presente que en regiones...

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Concluyó su tiempo, Senador Durana.

Se quedó sin micrófono. Le van a dar un minuto más.

El señor DURANA.-

Por favor.

Quiero terminar.

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Continúe.

El señor DURANA.-

Quiero terminar manifestando que en regiones extremas, como Arica y Parinacota, donde tenemos una facultad de Medicina que aún no cuenta con egresados y donde faltan incentivos para que más profesionales de la salud se incorporen a nuestras comunidades, la participación de médicos extranjeros, en particular de especialistas, adquiere una vital importancia.

No es posible que los ariqueños y los parinacotenses deban recurrir constantemente a centros de salud de la ciudad de Tacna, Perú, con todo los riesgos que ello significa, cuando con esta modificación legal podemos permitir que los médicos extranjeros que ahora residen en nuestra región presten sus servicios en la red pública de salud, cumpliendo con los reglamentos y protocolos que se determinen y con el mismo grado de responsabilidad que se les exige a los médicos nacionales.

Manifiesto mi aprobación a este proyecto de ley, porque es un aporte a la salud de nuestro país, la que no debe ser limitada por intereses gremiales o burocracias administrativas.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador Latorre.

¿Senador Latorre?

Senador, ¿está conectado?

Si no, pasemos al siguiente orador.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Lo vamos a contactar.

Está conectado, pero parece que no está frente a su computador...

¡Ahí llegó!

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Sí.

Senador Latorre, tiene la palabra.

El señor LATORRE.-

Gracias, señora Presidenta.

Seré muy breve.

Quiero manifestar que yo efectivamente patrociné esta iniciativa. El Senador Navarro me invitó a apoyarla. Esto fue hace bastante tiempo, al inicio de todo, cuando veíamos la situación más compleja que estaban viviendo otros países y advertíamos que llegaría a Chile. O sea, fue una manera de anticiparse.

En ese sentido, valoro la intención del Senador Navarro al presentar esta moción. Dado que Chile contaba con estos antecedentes acerca de cómo han ido sufriendo los sistemas de salud, ha tenido el tiempo suficiente para prepararse y anticiparse a estas realidades. Fue con ese ánimo, con esa intención que apoyé la solicitud del señor Senador .

Sin embargo, al poco tiempo, cuando se empezó tramitar el proyecto en la Comisión de Salud, recibí mucha información del Colegio Médico, de la Academia Chilena de Medicina, de las sociedades médicas, de la Asociación de Facultades de Medicina de Chile, todas las cuales fueron sacando sus declaraciones al respecto. Ahí me fui adentrando en el detalle de esta materia, antecedentes que hasta ese momento yo no tenía.

Efectivamente, el Gobierno no necesita este proyecto de ley para contratar médicos extranjeros que aún no hayan rendido el Eunacom o, incluso, estudiantes de Medicina de sexto año en adelante. Eso hoy día lo puede hacer. Por tanto, para enfrentar la emergencia sanitaria, esta iniciativa no es necesaria.

Considerando lo anterior, ahora me preocupa que el Ejecutivo se involucre en este proyecto, dándole patrocinio mediante una indicación y poniéndole urgencia. Tengo sospechas de que acá podría haber, en el fondo, una jugada más allá de la emergencia por esta pandemia, que sería relajar, de alguna manera, el sistema de estándares que debería cumplir todo médico que opere en el sistema público de nuestro país, o en el privado también, para atender la salud de la población.

Cualquier médico, sea chileno o extranjero, debe atenerse a estándares de calidad y de formación, supervisados adecuadamente por la autoridad sanitaria, pero también por todas las agrupaciones interesadas en este ámbito, las que me parecen muy relevantes. Hablo no solo del Colegio Médico, sino también, por ejemplo, de la Asociación de Facultades de Medicina de Chile. En ello no veo una defensa corporativa, sino más bien una preocupación por los estándares.

En resumen, para la emergencia sanitaria, este proyecto no es necesario. El Gobierno puede ahora, ¡ahora!, contratar médicos extranjeros que no tengan rendido el Eunacom y estudiantes de Medicina de último año. ¡Eso lo puede hacer hoy sin esta iniciativa!

La otra discusión creo que es más de fondo, y no deberíamos aprovechar la pandemia para darla.

Por lo mismo, le manifesté en su momento al Senador Navarro que había que tener ojo con insistir en este proyecto, considerando todas las iniciativas en esta materia.

Hoy día retiro mi apoyo al proyecto. No voy a votar a favor de él. Pero reitero que me parece preocupante el otro asunto que señalé.

Pienso que los países que tienen buenos sistemas públicos de salud cuentan con buenos estándares; forman a sus profesionales en las facultades de medicina de las universidades públicas; preparan a la gente para el sistema público, y planifican como Estado las herramientas y recursos que necesitan (cuántos médicos se requieren en todo el sistema de atención primaria y en los hospitales, cuántos se precisan por cada especialidad, etcétera).

Esa tarea se debe ir haciendo como un esfuerzo del Estado y como algo centralizado. Eso no se deja entregado al mercado y no sucede lo que ocurre en Chile con estos incentivos, en que, en el fondo, la carrera de Medicina es cara y hay gente que busca formarse por muchos años, pagando bastante dinero, para después ir a trabajar y ganar plata en el sector privado, en las clínicas y en sus consultas privadas. Eso es completamente al revés de lo que necesita el país. Chile requiere formar muy buena gente para trabajar en un sistema público de salud. Además, entendiendo la salud como un derecho social, universal, y con una tutela del Estado y de las universidades estatales muy fuerte. Y eso implica otra lógica de financiamiento y entender la salud como derecho social y no como mercado.

Entonces, en resumen, no voy a apoyar este proyecto, por todos los antecedentes que han llegado después de haber presentado la iniciativa...

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Gracias, Senador Latorre.

Está sin micrófono.

Está sin micrófono, Senador.

Secretario, dele un minuto para que concluya.

El señor LATORRE.-

Ahí sí.

Disculpe. No me había dado cuenta.

Muy breve, señora Presidenta .

Simplemente, mi llamado al Gobierno es a que no use la pandemia para generar discusiones que pueden ser complejas, conflictivas en términos de estas acreditaciones, sino que utilice las herramientas que posee para contratar a las personas que necesita hoy. No requiere este proyecto de ley. Esta iniciativa no es necesaria para enfrentar la urgencia.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Senador Moreira, tiene la palabra.

El señor MOREIRA.-

... ( falla de audio en transmisión telemática).

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Está con audio.

Ahora lo cortó.

Hay que entregarle de nuevo el audio. Lo habilitan desde Informática.

Es que usted lo apagó, Senador. Recién lo apagó.

Hay que entregarle de nuevo el audio.

Deje tranquilo su computador. Ya le van a habilitar el audio.

Quédese tranquilo, Senador.

Hay que dar el audio al Senador Moreira, señor Secretario .

Señor Secretario ...

¡Ahí! Ahí está.

El señor MOREIRA.-

¡Algo pasa! Cada vez que voy a hablar yo, algo pasa. ¡Siempre!

Señora Presidenta , voy a ir al grano altiro.

Lo que aquí me queda claro es que ahora le están echando la culpa al Presidente de la República por la pandemia ¡de un proyecto que presentó el Senador Navarro y que tenía una orientación distinta!

La iniciativa del Senador Navarro, que se la han derrumbado, puede que haya tenido muy buena fe, no lo dudo, porque valoro el cariño con el cual atienden los médicos extranjeros. Y lo reconozco porque en las regiones como la nuestra, a los sectores rurales, llegan esos médicos, porque los otros no lo hacen, por razones económicas, porque no les conviene.

Yo valoro eso. Pero también entiendo que se buscaba una solución, por lo que dijo el Senador Navarro, en el sentido de permitir la entrada de estas personas sin rendir durante dos años el examen. Pero finalmente el Ejecutivo reparó eso -no era necesario- de la ley.

¡Pero no pueden decir que el Gobierno está usando la pandemia para este debate!

Aquí la discusión la puso el Senador Navarro; la puso el Colegio Médico, que pidió -es lo que hay que votar, porque es necesario que se apruebe- el tema relacionado con las personas que tienen que dar el examen o efectuar la certificación de las especialidades, sean médicos chilenos o extranjeros.

Por lo tanto, ahí no hay ninguna discriminación arbitraria. Eso es lo importante, porque ello no se puede solucionar vía decreto.

La indicación que ha pedido el Colegio Médico es un beneficio importante, porque hoy día se necesita la especialidad. Pero, claramente, el debate lo estamos dando hace mucho tiempo, porque los médicos que llegan a nuestras regiones no son profesionales con las mayores capacidades, pero sí convencen por el cariño, por la forma de atender a los chilenos que tienen las personas extranjeras.

Yo quisiera decirle -por su intermedio, señora Presidenta - al Senador Navarro que si yo hubiese firmado su proyecto no lo hubiera abandonado, hubiera estado con él hasta el final.

Me gustaría que me aclararan un poco más cuál es la vía para que se apruebe este proyecto o la indicación.

Sería importante, porque hay evidentemente una confusión: o rechazamos definitivamente el proyecto o vuelve a Comisión y allí se aprobaría la indicación, por lo que la iniciativa ya tendría otra orientación.

He dicho.

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Solicito el acuerdo unánime para prorrogar la sesión por una hora, porque quedan varios inscritos.

¿Habría acuerdo?

No dan el acuerdo.

Entonces, debemos levantar ahora la sesión.

Si no da el acuerdo el Senador Moreira, tendríamos que levantar la sesión.

Usted recién habló, Senador, y va a dejar a seis colegas sin poder intervenir.

Senador Moreira, estoy pidiendo el acuerdo para prorrogar la sesión por una hora.

El señor MOREIRA.-

Pero mi pregunta es si el proyecto se vota hoy día.

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Se vota hoy día. Estamos...

El señor MOREIRA.-

Eso quería saber.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

¡Pero para eso tenemos que hacer uso de la palabra!

El señor MOREIRA.-

Está bien. No hay problema.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Para eso estoy pidiendo el acuerdo.

El señor MOREIRA.-

Está bien.

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Acordado.

Tiene la palabra el Senador Navarro.

El señor NAVARRO.-

Señora Presidenta , no perdamos jamás la capacidad de asombro. Es peligroso. Cuando las sociedades o las autoridades pierden la capacidad de asombro pueden devenir muchos males. Es una alarma interna, y siento que la estamos perdiendo.

No he escuchado a ningún Senador de los que han votado en contra contextualizar la pandemia. Y no sé si están tan aislados por la cuarentena -yo estoy en cuarentena voluntaria-, pero hoy día superamos a China en el número de contagios, pasamos los ochenta y dos mil. ¡Chile supera a China! ¡Mil trecientos noventa millones de habitantes versus dieciocho millones!

Al Presidente Piñera lo llama Donald Trump y no lo llama Angela Merkel. Y la sensación, por lo que escucho en la Sala, es que la pandemia está controlada.

¡Estamos en una crisis! ¡El Ministro Mañalich ha dicho que se le vino abajo el castillo de naipes porque se sedujo por diversas fórmulas y proyecciones epidemiológicas que se cayeron! ¡Ese es el reconocimiento más claro del fracaso! ¡Ha reconocido que han fracasado las políticas públicas del Gobierno! Y, por cierto, no nos damos cuenta.

Este proyecto de ley se anticipó a lo que venía. Lo presentamos precisamente, a contrario sensu de lo que plantea el Senador Latorre, porque esto se veía venir. Era claro que esto iba a crecer, porque no había cuarentena. Alberto Fernández puso en cuarentena el 20 de marzo a toda Argentina y hoy día allí tienen doce mil contagiados, mientras en Chile hay ochenta y dos mil; en Argentina se contagian setecientas treinta personas al día y en Chile se contagian cuatro mil.

Entonces, yo no entiendo a esta Oposición.

En el primer lugar de la tabla debatimos un proyecto de ley que prohibía el corte de servicios y decíamos que se podía hacer por decreto. Pero ¡en algunas cosas sí y en otras no!

Entonces, debiéramos decirle al Gobierno que todas las materias, como el tema de los permisos de circulación, las regulara por decreto. Pero ¡no!, los estamos abordando con proyectos de ley. Y yo espero que esta iniciativa sea aprobada.

¡Se mueren más personas en Chile por falta de médicos que por COVID-19! ¡Se mueren más personas en Chile por la falta de médicos! ¡Faltan tres mil novecientos médicos!

Las listas de espera mataron solo el año 2018 a diez mil ochocientas personas, que murieron esperando o una consulta médica o a un médico especialista. ¡Y muchos Senadores de regiones deberían saberlo, porque se muere la gente en sus regiones, donde no hay médicos!

¡En las zonas extremas no hay médicos! ¡Los médicos chilenos no quieren ir a trabajar a las zonas extremas!

Escucho al Senador Girardi y, con todo el cariño que le tengo, más parece una defensa corporativa del Colegio Médico.

Ni el Senador Girardi ha dado el Eunacom. Y Beltrán Mena , que es quien dirige este cuento, este negocio de 8 millones de dólares al año, tampoco ha dado el Eunacom, y ¡peor aún!: ¡no ejerce la medicina! ¡El que toma el examen no ejerce la medicina y no ha dado el Eunacom!

¿Creen que Enrique Paris ha dado el Eunacom? ¿Piensan que es especialista? Pregúntenle al doctor Paris dónde obtuvo la especialidad, si dio el Conacem. ¡No ha dado el Conacem!

La Asofamech, el Colegio Médico y todas las organizaciones a las que se han referido las Senadoras y los Senadores son privadas. ¡Todas privadas! Y le aceptamos a un ente privado que determine las políticas públicas en salud. O sea, una asociación interesada, las que forman médicos, el Colegio Médico, determinan quiénes trabajan o no en la salud pública de los pobres. Eso es: el sector privado lo define.

Y, por tanto, yo veo una posición egoísta, mezquina, absolutamente poco seria.

Se nos plantea que los pediatras van a ir a entubar, que los estudiantes de medicina van a ir a entubar. Hay médicos cubanos, venezolanos, ecuatorianos, ¡con veinte años de experiencia, intensivistas! ¡Y van a poner a un estudiante de medicina a entubar! Yo les pregunto a algunos de ustedes: ¿van a aceptar que un estudiante de cuarto o quinto año vaya a poner un tubo? Yo preferiría un intensivista cubano, venezolano, con veinte años acreditados de labor, porque no estamos hablando de médicos que han egresado hace uno o dos años.

La Senadora Goic falta de manera total y absoluta en su informe, un informe parcial, interesado. Ella no señaló en su informe que el Ministro Mañalich mandó una indicación sustitutiva, que aprobaba este proyecto, y lo rechazaron. Los Senadores de Oposición lo rechazaron. Y el Ministro Mañalich apoya esta iniciativa, porque necesita este instrumento. Las certezas de que habla la Senadora Goic no son certezas, no...

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Senador, no tiene micrófono.

Le van a dar un minuto.

Espere un poco.

Ahora sí.

El señor NAVARRO.-

La Senadora Goic presentó un informe en que falta a la verdad. La definición de la Contraloría no está permitiendo contratar. Y son necesarios los médicos.

Yo solo digo que aquí hay un feroz lobby del Colegio Médico. Este actúa como un verdadero cartel, y no solo ahora. En el año 2016, con Bachelet de Presidenta, 247 alcaldes, incluso el alcalde De la Maza , de la UDI, firmaron una carta para que permitieran contratar médicos extranjeros. Pero el lobby del Colegio Médico lo impide.

¡En las regiones no hay médicos!

Asuman la responsabilidad de impedir que se contraten médicos extranjeros, porque van a faltar. Los hijos de nosotros y todos los Senadores van a tener médicos, mientras los hijos de los pobres no van a tener médicos. Y yo quiero ver cómo vota este Senado.

Señora Presidenta , estoy molestísimo.

Creo que el descarado lobby del Colegio Médico ha logrado un pacto en este Senado.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador Prohens.

El señor PROHENS.-

Señor Presidenta , quería plantear el tema de reglamento, porque tengo entendido -y lo dijo el Secretario al inicio de su presentación- que había una indicación del Ejecutivo que era distinta a la que se dice que se trató en la Comisión. Y esa no la conoce nadie.

Entonces, o se nos da a conocer esa indicación ahora o lisa y llanamente este proyecto vuelve a la Comisión para que analice la indicación sustitutiva del Gobierno, en la cual deja de lado el Eunacom y se concentra en el Conacem, que es lo que planteaba recién el Senador Navarro .

El objetivo del Conacem son las especialidades médicas. En regiones lo que no tenemos son especialistas, y así lo han dicho por años, no es un tema de la pandemia. Regiones como las de Atacama y de Aysén son las con menos especialistas por habitante.

Por lo tanto, creo que esta es una tremenda oportunidad para que las regiones del norte, y todas en general -son cuatro o cinco las que están más o menos bien; el resto sufre carencia de especialistas-, podamos resolver la falta de especialistas, hoy día en la pandemia y con posterioridad a ella. Si las listas de espera están quedando guardadas por proteger a la población de esta pandemia, pero deberemos hacernos cargo de este problema el día de mañana.

En consecuencia, señora Presidenta , me parece que se hace supernecesario que nosotros conozcamos la indicación que ingresó el Ejecutivo el día 20, que es posterior a la decisión de la Comisión, reflejada en el informe que estamos analizando hoy día, para ver qué posibilidades existen de que el proyecto vuelva a la Comisión y se analice desde el punto de vista de lo que estamos hablando.

Hoy día el problema no son los médicos generales, sino los especialistas que se están pidiendo. Hablo de chilenos que han hecho sus cursos en el extranjero, de chilenos que han realizado los cursos de especialistas acá y que por un asunto de tiempo y de especialidad el Conacem se demora más o menos en certificarlos para que puedan trabajar como tales. Y también me refiero a médicos extranjeros que poseen especialidades y que hoy no están en condiciones de ejercer porque el Conacem no tiene el registro.

Por consiguiente, pienso que hoy día se hace necesario que este proyecto sea visto de nuevo por la Comisión, porque lo que estamos conversando ahora no es lo mismo que trató la Comisión en su minuto. Y, obviamente, Chile no se puede dar el lujo de desperdiciar a este grupo de médicos que han dado la prueba, que no han tenido registro, y a otros que vienen de afuera, para poder enfrentar esta pandemia.

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Señor Senador, lo que puede informar la Mesa es que el Ejecutivo presentó una indicación a destiempo -el 20 de mayo-, porque ya se había emitido el informe de la Comisión. Se trata de una indicación sustitutiva.

Entonces, para poder tramitar y conocer la indicación sustitutiva, este proyecto, sin votarlo, debería ser devuelto a la Comisión, para que ahí se pueda conocer. Es lo que ha planteado la Senadora Ebensperger .

Repito que es una indicación sustitutiva, y para conocerla, la iniciativa tendría que volver, sin votarse, a la Comisión, de manera de que emita un nuevo informe que podamos tratar en Sala.

Esa es la información reglamentaria que podemos entregar.

Le voy a dar la palabra al señor Secretario para que refrende estas normas reglamentarias.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias, señora Presidenta .

Efectivamente, el Ejecutivo presentó una indicación el 20 de mayo. Es una indicación sustitutiva que, en el fondo, reemplaza el texto del proyecto de la referencia que se está conociendo.

En tal sentido, si el texto de la Comisión se vota ahora y se rechaza, llega hasta acá la tramitación del proyecto. Ahora bien, si hay acuerdo de la Sala, la iniciativa puede volver a la Comisión para que emita un nuevo informe, siempre y cuando la Sala faculte para que la Comisión, en este nuevo informe, conozca y tramite en general y en particular el proyecto, para que pueda considerar un nuevo texto.

Ese tendría que ser el acuerdo de la Sala, es decir, enviarlo de vuelta a la Comisión para que esta lo trate en general y en particular, conociendo también la indicación que se remitiría.

Eso es todo, señora Presidenta.

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Gracias.

La Senadora Goic, Presidenta de la Comisión, me ha pedido la palabra por un tema de reglamento.

Senadora Goic, puede intervenir.

La señora GOIC.-

Señora Presidenta, era justamente para clarificar.

A mí me parece bien insólito este procedimiento, como Presidenta de la Comisión . No sé qué otra información tienen los colegas, el Senador Quinteros o el Senador Girardi, respecto de esta indicación.

Ahora entiendo la confusión.

Quiero señalar que no es correcto lo que menciona el Senador Navarro . Yo dije que hubo once indicaciones, diez de las cuales fueron declaradas inadmisibles, y aquella sobre la cual nos pronunciamos, que fue la que presentó el Ejecutivo en su momento, fue rechazada con 3 votos en contra y 2 a favor. Esa indicación planteaba la suspensión por dos años, junto con otros aspectos, incluido el registro. Y el mismo asesor del Ministro señaló que no era necesario tampoco que ello fuera en una ley, pues ellos tenían la facultad para crearlo en la Superintendencia.

Entonces, de verdad me parece insólito que nos enteremos así de que hay una indicación sustitutiva. Creo que una deferencia mínima es plantearlo, para poder entender. Porque en el fondo hemos estado haciendo la discusión sobre un tema distinto todo este rato.

En consecuencia, señora Presidenta, pido que se vote el proyecto en general, tal como me han planteado y hemos argumentado desde el principio en esta discusión.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Senador Quintana, tiene la palabra.

El señor QUINTANA.-

Señora Presidenta , yo también creo que este proyecto debe votarse en general, como corresponde. Cualquier cosa se puede resolver en la Comisión, ya sea la indicación u otra. Si está fuera de plazo, yo no me preocuparía por las formas.

Lo decía recién un colega. Estamos con ochenta y tres mil contagiados y con más de ochocientos fallecidos. Al ritmo que vamos, el 1° de junio, que es la fecha en que íbamos a tener la Cuenta Pública, seguramente estaremos con más de cien mil contagiados y con más de mil fallecidos, lo que resulta lamentable.

Entonces, señora Presidenta , no estamos en una discusión económica, donde evidentemente todas las miradas son válidas; estamos ante un tema eminentemente clínico.

Yo respeto mucho la opinión del Colegio Médico y también la de los colegas de la Comisión de Salud; pero evidentemente aquí hay un intento de bloquear esta iniciativa. ¡Eso es muy claro!

Ahora, frente a la pregunta que hacía el Senador José Miguel Insulza de qué opina el Gobierno, ciertamente hubiésemos esperado también que estuviera presente en esta discusión. Yo al menos he visto en dos ocasiones, en los reportes diarios que hace el Ministro Mañalich , un emplazamiento directo al Ejecutivo a aprobar este proyecto.

Entonces, para mí la primera duda es si no nos iremos a equivocar.

He sido bien crítico de las cuarentenas dinámicas, del cambio de estrategia permanente del Gobierno. Ya habrá tiempo para analizar eso; pero hoy día estamos frente a una crisis compleja.

Comparto lo dicho por el Senador Navarro: aquí ha habido un lobby tremendo. Yo también he recibido mensajes de las sociedades médicas; los he leído; no me he reunido con ellos, porque esas reuniones tendría que haberlas declarado conforme a la ley sobre lobby. Eso es evidente, y no porque estemos en una pandemia. Se trata de un gremio muy respetable.

Pero en el Gobierno de la Presidenta Bachelet , incluso en la primera Administración del Presidente Piñera , recuerdo de manera palmaria cuando se quiso establecer aumentar las especialidades, las becas a través de las universidades: hubo una posición cerrada como gremio, comprensible por lo demás, de las sociedades de especialización.

Entonces, creo que es un argumento a tener en consideración, pero no es lo central.

Lo central, señora Presidenta , es que ni el decreto de marzo del Gobierno ni el dictamen de la Contraloría permiten abocarse a resolver el problema que está planteado en este proyecto -se podrá mejorar; se acotarán los plazos, en fin- y que tiene que ver con los especialistas: la certificación de especialistas no está solucionada.

Creo que el colega Latorre se equivoca, porque los médicos que están atendiendo en las urgencias, los urgenciólogos, y ya ni siquiera en la primera línea, sino también en la segunda línea -conozco bien la realidad del Hospital Regional de Temuco-, han tenido que ser preparados en muchos casos, médicos chilenos por supuesto.

El Senador Girardi señaló: "Es que tenemos un déficit de 3 mil médicos en la atención primaria y de 3 mil médicos en la atención hospitalaria". Pero no nos dice cómo se va a resolver ese déficit, cuando tenemos 8 mil médicos extranjeros esperando por este proceso, cuando nadie puede discutir que hay médicos venezolanos, por ejemplo, que están obligados a dar el Eunacom, porque hay otros países con los cuales Chile tiene convenio, y pueden pasar incluso por una vía más rápida.

Hay médicos venezolanos anestesistas, traumatólogos, justamente las especialidades que hoy día se requieren.

Entonces, uno se pregunta: ¿No nos vamos a equivocar?

Una Senadora decía: "No. Esto está horrible; está todo malo; no sigamos con esta cuestión: que se rechace de una vez".

¡Cuidado!

En verdad, creo que aquí hay bastantes razones...

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Por favor, dele un minuto más, señor Secretario .

Su Señoría está sin audio.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Le vamos a activar el micrófono nuevamente.

El señor QUINTANA.-

Gracias.

Decía, señora Presidenta , que, además, lo que estamos haciendo no es nuevo. Este proyecto entró hace dos meses.

En Estados Unidos esto lo está llevando a cabo el experto epidemiológico a quien tanto ha criticado el propio Donald Trump : él impulsó esto mismo en todos los estados, con legislaciones estatales, para permitir que entraran los médicos.

En España el 15 por ciento de los médicos que hoy día están atendiendo la crisis son extranjeros, a los cuales se les posibilitó también una certificación rápida, como contempla esta iniciativa.

Creo, pues, que no es el momento para descalificar las razones de los médicos gremiales, atendibles por cierto; pero nosotros estamos para cumplir otro propósito.

En esto no quiero que el Ministro Mañalich me critique por haber rechazado un proyecto que probablemente en los próximos días va a ser tremendamente necesario.

Voto a favor.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Bianchi.

El señor BIANCHI.-

Señora Presidenta , he seguido con mucha atención la discusión, y estoy tratando de poner mi decisión en equilibrio, porque es imposible desconocer que aquí hay presiones gremiales. Ha sido así.

Tengo que poner en equilibrio mi juicio, porque de lo que entendí del dictamen de la Contraloría y del decreto del Gobierno es que hoy día sí es posible la contratación de los médicos generales extranjeros. Eso es factible. Pero aquí estamos hablando de los especialistas, tan necesarios. Y yo debo defender aquello que represento, que es la Región de Magallanes. Lo dijeron varias Senadoras y varios Senadores con respecto a lo que vivimos en localidades más apartadas, más distantes: la realidad que tenemos en las regiones extremas es precisamente la falta de especialistas.

He conocido casos de médicos extranjeros, en particular en la localidad de Puerto Natales, en que hubo experiencias negativas y también he sabido de casos de médicos connacionales en que igualmente los resultados no fueron positivos. O sea, hoy día yo no pondría ese juicio valor: si es extranjero o no, o si es peor o mejor.

Yo siento y creo que los médicos especialistas extranjeros hoy son una enorme necesidad; es decir, es imperioso contar con estos profesionales, y luego realizar la certificación correspondiente.

Voy a dejar de lado las presiones de los gremios, que pueden ser muy legítimas, y trataré de poner mi posición en defensa de aquellas personas, mujeres y hombres, de localidades apartadas, de regiones extremas que no cuentan con la atención de los especialistas. En época de pandemia obviamente resulta absolutamente urgente y necesario el poder contar con ellos y con ellas.

No tengo dudas de que el Gobierno con esta metodología podrá, además, hacerles un seguimiento a esos especialistas y la capacitación respectiva. Sin embargo, a mí me gustaría saber su postura. Yo lamento que no esté aquí el Ejecutivo , pues era tremendamente necesario contar con su presencia en la materia que estamos discutiendo, fundamentalmente por lo que nos hallamos viviendo como país.

Entonces, hago fe de que esto va a permitir que en localidades apartadas, en regiones extremas contemos con más especialistas, los cuales hoy día no tenemos.

Sobre esa base voy a votar favorablemente este proyecto.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Diversos Senadores han solicitado la palabra para hacer un punto de reglamento. Esto lo dejaré para el final de todas las intervenciones, luego de que resolvamos lo relativo a este proyecto de ley.

Tiene la palabra el Senador señor Sandoval.

El señor SANDOVAL.-

Señora Presidenta , sinceramente voy a pedir algunas grabaciones, porque van ser dignas de repetirse en algún minuto.

El Senador Girardi hizo una tremenda defensa de los grandes logros médicos que se han alcanzado a pesar de todas las limitaciones, y nos puso al nivel de Estados Unidos. ¡El Senador Girardi!

Según el Ministerio de salud, tenemos un déficit de más de 20 mil médicos especialistas y para el 2030 se estima que llegaría a 7.200.

¿Cómo resolvemos estos problemas?

Los decretos números 4 y 6 del Ministerio de Salud sin duda han sido un avance. ¡Pero ello no es suficiente!

El Senador Bianchi recién señaló lo que les significa a las regiones... (falla de audio en transmisión telemática)... el problema de los especialistas.

Tengo un caso que me presentaron ayer, y la persona me decía: " Don David , dígalo nomás". Pamela Chacón , mamá de un niño que necesita una atención especialista en inmunología e infectología: ¡no contamos con esos especialistas en la Región! ¡Estos casos deben derivarse a otros lados! Y nos piden mandar a estos pacientes a diferentes hospitales, con todos los riesgos que hay hoy día. ¿Y por qué? En la Región de Aysén obviamente lo que menos tenemos son especialistas.

En ese contexto, ¿a qué echamos mano?

Sin duda ha estado presente una presión gremial, un lobby absolutamente fuerte y feroz, como aquí se ha señalado.

Me acuerdo cuando, a propósito de la colusión de las farmacias, se discutió un proyecto en materia de incentivos en la venta de productos farmacéuticos. ¿Se acuerdan de la famosa "canela"?

Creo que aquí, señora Presidenta , debemos poner sobre la marcha como cuestión prioritaria la necesidad de atender a las personas. ¿Y normalmente quiénes son los más afectados? Los más humildes; la gente que más precisa atención.

¿Dónde están los especialistas que el Estado ha formado a lo largo de tantos años? ¿Dónde se va la inmensa mayoría? No se van precisamente al Hospital de Coyhaique. Para lograr llevar a alguno para allá debemos generarle todo un entorno en materia de protección, de vivienda, de subsidios, de beneficios y de asignaciones adicionales. Ello, para que puedan ir a desempeñarse en esos rincones de nuestro territorio.

Por eso me parece absolutamente razonable este proyecto, independientemente de que sí creo que hay que resguardar todo lo relacionado con la celeridad y el aseguramiento de la calidad.

¿Qué dice en definitiva la indicación del Ejecutivo? Distingue con claridad los médicos cirujanos y los especialistas, exigiéndoles a estos últimos incluso haber iniciado su proceso de certificación.

¿Cuál es el problema? ¿Cómo nos vamos a hacer cargo, además, de lo que ha significado esta pandemia en cuanto a la postergación de miles de atenciones médicas de las famosas listas de espera?

¡Eso no se está atendiendo hoy día!

¿Qué va a pasar después de esto? ¿La pandemia que nos afecta se va a acabar con el estado de excepción que estamos viviendo hoy día, cuando sabemos que esto se va a terminar única y exclusivamente cuando tengamos una vacuna que permita su reversión?

Por lo tanto, si esta materia ha generado algunas dudas e inquietudes, pienso que lo ideal es que se discuta.

Voy a votar absolutamente a favor. Quiero destacar esta vez al Senador Navarro, con quien rara vez nuestro sector está de acuerdo.

Señor Senador, cuando señala que a su derecha votan siempre en un sentido, aquí la mayoría del sector a su derecha siempre lo estará apoyando en esta iniciativa, porque efectivamente esta idea, su finalidad apunta en una muy buena dirección.

Lamento que algunos hayan bajado las firmas de su proyecto, porque lo considero un error. Creo que quienes así han procedido lo hicieron porque han respondido precisamente a las fuertes presiones gremiales planteadas sobre este tema. Es una pena carecer de libertad para expresar nuestras opiniones y que de alguna manera tengamos que ver este tipo de influencias.

Sí estimo que habrá que mejorar esta iniciativa. Sin duda que deberemos hacerlo. En ese contexto, la idea va en la dirección correcta, pues resuelve un problema serio, gravísimo. Además, necesitamos estos médicos especialistas no en tres, cuatro, cinco o seis años más: los requerimos hoy día para hacerle frente a la pandemia que estamos viviendo y también los vamos a necesitar una vez que pasemos este problema tan grave para volver a poner en orden el sistema de atención médica de la inmensa mayoría de los chilenos a lo largo de nuestro país.

Voto absolutamente a favor de este proyecto.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Galilea.

El señor GALILEA.-

Señora Presidenta , voy a reforzar un poco lo que han dicho quienes intervinieron ahora último: los Senadores Sandoval , Navarro y Quintana .

Creo que acá se ha producido cierta confusión. Y me parece que la Senadora Carolina Goic tiene razón en cuanto a que aquí hay discusiones paralelas porque no se tuvo a la vista la indicación sustitutiva que estamos mirando el día de hoy.

En tal sentido, y para dar cuenta de que en realidad durante este debate se produjo una confusión, quiero aclarar varias cosas.

Primero, acá nadie está pretendiendo eliminar el Eunacom, que es un examen válido, que a mi juicio todos compartimos, que efectivamente da certezas de conocimientos de médicos que hayan obtenido su título en el extranjero y que quieran ejercer la medicina en Chile.

Eso está fuera de toda discusión.

También se halla fuera de toda discusión que hoy día, en virtud del decreto de estado de excepción constitucional de catástrofe, el Ministerio de Salud tiene posibilidad de contratar a médicos extranjeros y también a los alumnos que cursan sexto y séptimo años de medicina, que están haciendo el internado.

Sin embargo, acá estamos tratando de resolver una situación de emergencia que constará de dos fases.

La primera tiene que ver con contar con manos, ojos y todo para poder resolver todas las urgencias relativas al COVID-19, lo que es estrictamente inmediato. Pero después viene un período que no es nada de corto, en que vamos a tener que ponernos al día con la multitud de enfermedades AUGE, particularmente cirugías, que han quedado completamente postergadas por la emergencia que estamos viviendo hoy.

Ahí somos varios los que pensamos que hay que tomar una medida excepcional.

Yo sé cuál es la aprensión que subsiste aquí, porque la han señalado el Colegio Médico y también el Senador Girardi: en el fondo, el temor es que haya médicos malos para los pobres y médicos buenos para los ricos.

No obstante, pienso que ello nace de un prejuicio. Porque en verdad uno no tiene por qué presumir que un médico venezolano -aquí, en Talca, hay muchísimos médicos venezolanos de la mejor de las calidades- o un médico cubano sean malos.

Lo que queremos es que exista la posibilidad de que se atienda a nuestra población durante algún tiempo.

Entonces, uno puede tener cierto prejuicio. Entiendo el del Senador Girardi y otros. Pero entre no prestar ninguna atención o que se dé a través de médicos con años de experiencia, que están titulados en otros países, sinceramente prefiero que nuestra población reciba esa atención.

Esa la estimo una decisión obvia como política pública.

Por consiguiente, señora Presidenta, estamos parados frente a decisiones que debemos tomar.

La primera, a mi juicio la más sencilla, es que no votemos hoy día: esto es, que devolvamos el proyecto a la Comisión a fin de que analice la nueva indicación que ingresó el Gobierno después de evacuados los informes y que ojalá llegue a un acuerdo para resolver esta materia y se vote lo más rápido posible.

La otra alternativa es votar hoy y aprobar el proyecto en general para que vuelva a la Comisión, y sobre esa base revisar la indicación que acaba de ingresar el Ejecutivo.

Tenemos esas dos opciones.

Quizás lo más fácil es volver rápidamente el proyecto a la Comisión para que haga un análisis final y podamos pronunciarnos sobre ello.

Pero más allá de la forma, yo estoy de acuerdo con los últimos Senadores que intervinieron. Acá hay que dar respuesta a una situación absolutamente extraordinaria que tendremos en atención de salud, donde vamos a requerir especialistas, y particularmente cirujanos, porque después de toda la emergencia del COVID habrá una cola enorme de pacientes a quienes habrá que saber responder.

Por eso la indicación del Gobierno da esta alternativa por solo dos años, con una supervisión estricta. La gente se tendrá que inscribir, y la Superintendencia de Salud deberá llevar un control de todo esto.

Esa es la decisión mínima que debemos tomar ante una situación de completa emergencia.

He dicho.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra la Senadora Ximena Órdenes.

Voy a terminar de dar la palabra a todos los Senadores y Senadoras, y... (falla de audio en transmsión telemática)... al final.

La señora ÓRDENES.-

Señora Presidenta , quiero dar algunas cifras, porque el Ministerio de Salud, a través del Departamento de Estudio, Planificación y Control de Gestión de Recursos Humanos, estableció hace menos de un año un déficit de cerca de 4.900 médicos especialistas.

Ello es mayor de lo que se estimaba en el 2017. Por lo tanto, claramente existe un déficit. Y esto tiene expresión particularmente en las regiones. Eso lo notamos.

Primera pregunta: tenemos déficit, ¿pero dónde se concentran en su mayoría los especialistas? Más del 50 por ciento en la Región Metropolitana, en circunstancias de que el 60 por ciento de la población chilena vive en regiones.

Eso lo sé porque, además, represento a una región extrema. Y señalo esto porque un paciente de oncología debe viajar a Santiago, a Valdivia; alguien con problemas oftalmológicos es derivado a Osorno. Y así tenemos a muchos habitantes de zonas extremas recorriendo distintas regiones, algunas que ni siquiera conocen, que las visitan por primera vez a raíz del padecimiento de una enfermedad. Y esto genera mayor tensión en los pacientes que ya cuentan con una patología de base.

Entonces, considero que es momento, más allá de la pandemia, de abordar esta materia.

Porque acá nadie se hace la pregunta. Es cierto que puede haber países que tienen cierto prestigio. Efectivamente, hubo en ellos formación de capital humano, particularmente en temas de salud y gozan de reconocimiento internacional. Pero nadie ha señalado que los médicos del resto de las naciones del mundo sean malos profesionales.

Es como decir: "No: los abogados de tal parte son buenos; los otros son malos".

Me parece que hay que tener un estándar; creo que deben cumplir con ciertas normativas y obviamente dar garantías a la ciudadanía. Pero acá los más pobres y los que viven en territorios más complejos -aislados, rurales, en fin- son los que están pagando el costo de no tomar cuestiones como esta y abordarlas en su justa medida.

¿Cuántos especialistas se forman en Chile? En algunos casos, ¡dos por año! Y para qué hablar de especialistas en terapia oncológica, en salud mental, en psiquiatría.

Con ese estándar no cubriremos nunca la demanda y no vamos a resolver los problemas de listas de espera.

Yo voy a votar a favor, Presidenta .

Ahora, desde otro punto de vista, se ha planteado el tema de la indicación sustitutiva. ¿Qué está pasando ahí? Primero, ¿por qué no está presente el Ministerio de Salud? ¿Por qué las indicaciones están llegando de tal forma que nos tienen enredada la conversación hoy día? Yo me inclino por votar a favor esta iniciativa, pero podríamos haber tenido mucho más clara la línea de la votación.

La indicación sustitutiva, además, no puede ser anunciada por parlamentarios. Acá tiene que ser el Ejecutivo el que, a través de la Presidenta de la Comisión de Salud , como corresponde, haga esta conversación, a fin de que tengamos claridad para ver cómo abordamos una situación que es tan sensible, tan urgente. El déficit de especialistas, particularmente en regiones, es abismante. Y las listas de espera en Chile no las vamos a cambiar si no tomamos medidas incluso más allá de la pandemia. Hoy día vamos a notar el déficit, porque se cayó el velo de todo y la desigualdad quedó expresada de manera muy manifiesta.

Es lo que quería señalar, Presidenta , y por eso hago las preguntas: ¿dónde están los especialistas? ¿Cuál es el déficit? ¿Cuántos formamos por año?

Acá hay que tomar otras medidas.

Porque nadie dice que los asistentes sociales de un lado son buenos y los otros, malos; los abogados, en fin. Pasa en esta profesión.

Entonces, me parece que igual hay que avanzar en esta conversación.

Yo voy a votar a favor, pero evidentemente quedo con dudas respecto a la indicación sustitutiva que ha presentado el Ejecutivo.

Gracias, Presidenta .

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Voy a ofrecer la palabra por el tema reglamentario, para dilucidar si votamos ahora el proyecto o lo enviamos de vuelta a la Comisión para que conozca la indicación sustitutiva que ha mandado el Ejecutivo .

La Presidenta de la Comisión, Senadora Goic, tiene la palabra.

La señora GOIC.-

Presidenta, quiero volver a clarificar aquí lo que sucedió.

Yo tuve conocimiento de la indicación hace dos minutos, después de que la recibió la Secretaría de la Comisión de Salud.

En consecuencia, hemos estado tramitando durante este tiempo un proyecto con un contenido distinto a lo que es la voluntad del Ejecutivo. Y eso está fuera absolutamente de los procedimientos que nosotros tenemos. O sea, no conocíamos la indicación que plantea un contenido distinto. Y a mí me parece que se requiere un mínimo de deferencia. Y no tiene que ver con la forma, sino con la tramitación del proyecto el que el Ministerio hubiera comunicado esto a los miembros de la Comisión. Me habría gustado que hubiera estado presente, si no el Ministro , alguien del Ministerio también. Los Subsecretarios y otras personas pueden hoy día ilustrar este debate. Pero, dado que el contenido de la indicación es distinto a lo que nosotros rechazamos, hemos acordado -y en esto hemos conversado telefónicamente durante la sesión con el resto de los miembros de la Comisión- pedir a la Sala que no se vote, que se establezca el procedimiento para que ingrese formalmente la indicación, de manera que podamos conocerla y pronunciarnos sobre ella.

Nos parece que es lo que corresponde. Si no, estaremos confundiendo dos debates que no ayudan a una legislación donde todos queremos aportar. Todos queremos que existan más especialistas; creo que nadie tiene problemas con los médicos especialistas extranjeros, pero es fundamental poder clarificar de qué estamos hablando.

Entonces, yo solicitaría que se respaldara el acuerdo de la Comisión de Salud, a fin de que esto pueda volver a ella para su revisión, y después lo llevaremos a la Sala, con una opinión fundada y conversada sobre el texto que propone el Ejecutivo .

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador Quinteros.

El señor QUINTEROS.-

Presidenta, estoy totalmente de acuerdo con que el proyecto vuelva a la Comisión de Salud, tal como plantea su Presidenta.

Es increíble cómo ha cambiado esto. O sea, se ingresa una indicación que nadie conoce, sin comunicárselo a los miembros de la Comisión o a la Presidenta .

Así que me parece que lo más adecuado es que esto vuelva a la Comisión, porque ha cambiado absolutamente el tema que estábamos discutiendo.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra la Senadora Ebensperger.

La señora EBENSPERGER.-

Presidenta, yo creo que hubiera sido importante votar, porque ya se ha dicho todo. Pero no tengo problema en que el proyecto vuelva a la Comisión, si eso es lo que mayoritariamente quiere la Sala.

A mí me parece que lo importante es avanzar en el tema de los especialistas.

Ahora, el Ejecutivo presentó una indicación y creo que hubo todo un enredo entre la Sala y la Comisión, porque esta última trató en general y en particular la iniciativa. En ese entendido, creo yo que el Ejecutivo presentó esta indicación a la Sala el día 20, la semana pasada -no recuerdo bien la fecha, pero no fue a última hora-, en el entendido de que ya la Comisión había visto en general y en particular el proyecto. Ahí se produce todo el error. Y cuando la presentó a la Sala -por lo que me señala el Ejecutivo -, se le dijo que solo se vería en general, que ese era el acuerdo de los Comités. Y ese es todo el tema.

Yo hubiera votado el proyecto. Si la mayoría solicita que vuelva a la Comisión, no voy a oponerme, porque creo que lo importante es que sigamos analizando este tema. Ojalá lleguemos a un acuerdo.

Creo que efectivamente están las facultades respecto del Eunacom, pero no así respecto de los especialistas, de los que tanta necesidad hay en regiones, Presidenta.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador Chahuán.

El señor CHAHUÁN.-

Presidenta, ciertamente acá se pudo haber resuelto el procedimiento -coincido en eso con la Presidenta de la Comisión-, pero lo que acordamos es que el proyecto vuelva a verse en la Comisión, con la indicación renovada del Ejecutivo que en definitiva nos va a contribuir a la posibilidad de salir del déficit de especialistas.

Por tanto, yo diría que lo más riguroso es que vuelva a la Comisión y se conozca el nuevo texto, más que llegar a una votación con un articulado que va a ser completamente distinto.

En consecuencia, apoyo la idea de que la iniciativa vuelva a la Comisión y de que se revise la indicación renovada del Ejecutivo.

Por supuesto, me habría gustado una mejor comunicación entre el Ejecutivo y la Presidenta de la Comisión, pero ciertamente agradezco la buena voluntad de ella para darle curso a este proyecto.

Ojalá el acuerdo de la Comisión pueda ser ratificado por la Sala.

Muchas gracias.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador Girardi.

El señor GIRARDI.-

Presidenta , solo quiero clarificar algunos temas, particularmente el que ha señalado el Senador Rodrigo Galilea, por su intermedio. Porque yo he sido muy claro. Yo he dicho que el Eunacom es un examen que establece una garantía de calidad, impide que haya una salud para ricos y otra para pobres, y debe ser para médicos chilenos y extranjeros. Para todos y todas.

Por lo tanto, no me parece que aquí se desvirtúe lo que yo he señalado. Yo nunca he hablado de los médicos extranjeros. A mí me da exactamente lo mismo si el médico es chileno o extranjero. Me parece que lo importante es que ese médico o doctora tenga la calificación, independientemente de su nacionalidad. Y lo reitero nuevamente.

En segundo lugar, uno debiera preguntarse por qué en Chile existe un déficit de más de 4 mil especialistas y 3 mil médicos en la atención primaria. Y es porque no tenemos una política, no hay voluntad -y no solo en este Gobierno; tampoco la hubo en los anteriores- de formar los especialistas.

¿Cómo va a ser posible que un país sea rehén -entre comillas- de las sociedades médicas y de los colegios profesionales?

¿No tienen los gobiernos y el Estado de Chile la facultad de establecer una ley que obligue a la formación de aquellos médicos especialistas que faltan?

Nosotros en reiteradas oportunidades, en distintos gobiernos, le hemos pedido a los Ministerios que hagamos una evaluación de todos los especialistas que faltan, hospital por hospital, y que se formen por ley los especialistas para esos hospitales. Si a Coyhaique le falta un cirujano general, que se forme el cirujano general para Coyhaique.

Claro, pero no hay voluntad.

Es más, no solamente hemos planteado eso. Porque muchas veces los médicos se forman y luego pagan la fianza, se la pagan las clínicas. Hemos propuesto, incluso, que el Ejecutivo tenga la posibilidad de establecer una norma legal... (falla de audio en transmisión telemática)...

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Actívele el micrófono, señor Secretario , porque quedó hablando sin audio.

Guido, hay que pronunciarse sobre el tema reglamentario, porque el debate ya se hizo.

El señor GIRARDI.-

Señora Presidenta , estoy de acuerdo. Este es un tema mayor. No se puede seguir escondiendo la pelota. Aquí tenemos que tener una política de formación de especialistas.

Yo estoy de acuerdo en que el proyecto vuelva a la Comisión, pero no nos hagamos los lesos. El problema de fondo no se va a resolver por la vía del Asofamech o del Eunacom. Yo creo que necesitamos una formación de especialistas y no podemos dejarles a las asociaciones gremiales o a las sociedades médicas determinar si va a haber dos radiólogos por año. Eso debe ser una ley.

A mí me parece que es lo que tenemos que hacer, y financiarlo. ¡Si este es un problema de financiamiento al final!

Entonces, ¡hagámoslo! Si tenemos la voluntad, digámosle al Ejecutivo que envíe el proyecto definitivo, y aprobémoslo con sanciones, para que el médico que no cumple no pueda ejercer en Chile.

¡Eso es lo que necesitamos! Y si son médicos especialistas y tienen la pertinencia, incorporémoslos de todas maneras. Yo no tengo ningún problema con eso, independientemente de su nacionalidad.

Pero no nos hagamos los lesos, Presidenta ...

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Tiene la palabra el Senador Navarro para pronunciarse sobre el tema de reglamento, no para abrir de nuevo el debate, que ha sido suficiente. Por favor, señale solo si el proyecto va a Comisión o se vota ahora.

El señor NAVARRO.-

Presidenta, si el consenso es que vaya a Comisión para ver la indicación del Ejecutivo , conforme, pero también tiene que preservarse la facultad parlamentaria de presentar otras indicaciones. O sea, no solo vamos a discutir la indicación del Ejecutivo.

Yo, por ejemplo, anuncio que presentaré una indicación para levantar todas las suspensiones a los intensivistas, que son los médicos esenciales hoy día, tanto del sector privado como del sector público, sea cual sea el motivo por el que se les haya sancionado. Es indispensable que se les permita retornar. Cuando la batalla de Santiago se libra, todos los soldados sirven. Por lo tanto, tiene que haber una política más coordinada, mucho más amplia.

Esa indicación fue rechazada en la Comisión la vez pasada. Y, como digo, se trata de suspender todas las sanciones administrativas, a fin de que los intensivistas puedan prestar servicios en el sector público en esta pandemia, porque a partir de esta noche los médicos son dioses: deciden quién vive y quién muere, ya que faltan camas y no hay capacidad para todos los pacientes. Por tanto, los requerimos a todos en la primera línea.

Estoy de acuerdo en que el proyecto vuelva a la Comisión, pero, Presidenta , cada día que pasa es un retraso. Esto tiene que ir después a la Cámara de Diputados. Yo pediría que la Comisión lo despachara mañana. Me preocupa que pasen la próxima semana y la subsiguiente, y lleguemos tarde con este proyecto de ley a la demanda ciudadana del derecho a la vida, porque el colapso en Santiago viene, y se va a hacer sentir no solo en la Capital, sino también en regiones.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador Insulza.

El señor INSULZA.-

Voy a compartir plenamente la propuesta de devolver esta iniciativa a la Comisión, por lo siguiente.

A mí me pasaron un proyecto -acá está el documento- que suspende por dos años el Eunacom, y bueno, naturalmente, como ya se está contratando a los médicos extranjeros sin necesidad de ese examen, su articulado resultaba improcedente.

Y a mitad de camino el proyecto cambió. Incluso, uno podría discutir si la idea matriz es la misma, porque no tiene nada que ver con el Eunacom: ahora se trata de los especialistas.

Yo pido, entonces, que vuelva a la Comisión y ojalá lo acordáramos todos, porque en realidad estamos hablando de dos proyectos completamente distintos.

Si hubiera que votar en regla, habría que rechazar este proyecto y decirle al Ejecutivo que presente el de los especialistas, pero entiendo que estamos en un momento de emergencia. Entonces, tomemos el camino más rápido y devolvámoslo a la Comisión.

Gracias.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador Quintana.

El señor QUINTANA.-

Presidenta , el camino más sencillo fue ese, no el camino con más sentido de urgencia, que es lo que tenemos en este momento. Es probable que algunos colegas no hayan visto el informe de la Universidad de Washington, que hoy día el Ministro refutó y criticó, pero sé que ese informe, que es lapidario para Chile respecto de las próximas tres semanas, en el caso de Estados Unidos ha sido muy certero.

Por lo tanto, el camino que estamos tomando, sencillo pero más largo, muestra que aquí, de parte de algunos sectores, no hay interés en aprobar esto luego.

Y es falso que este sea un proyecto improcedente. Lo hemos dicho desde el principio. Lo que pasa es que los autores no pudimos hablar al comienzo, porque bueno, se partió más tarde, pero, efectivamente, este proyecto tiene dos aspectos: la suspensión del Eunacom -ese es un tema- y la certificación de las especialidades, cosa que no resuelven ni la Contraloría ni el Ministerio.

O sea, dos meses, Presidenta , ¡dos meses! Este es el primer momento en que la Sala, virtual hoy día, se encuentra en condiciones de pronunciarse sobre aspectos clínicos, hospitalarios. No habíamos tenido ninguna discusión como esta, y algunos querían rechazar el proyecto.

Entonces, está bien escuchar al Colegio Médico, pero escuchemos más a los barrios, a las juntas de vecinos, a los Cesfam, a los pobladores, como han dicho el Senador Bianchi y el Senador Guillier . O sea, la gente tiene una tremenda valoración por este tipo de profesionales, los facultativos, que van a escasear, lamentablemente, en las próximas semanas.

Por eso, si la Comisión de Salud unánimemente plantea esto, está bien, pero pediría, sí, que el plazo de indicaciones sea, ojalá, de 48 horas como máximo.

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Me parece que el Senador García-Huidobro había pedido la palabra también.

¿Es sobre reglamento?

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

No, Presidenta, era para intervenir, pero sin duda lo más importante en este momento es colaborar.

Yo consulté recién a médicos de mi Región cuánto está demorando hoy día rendir el examen de especialidades, desde que un médico se inscribe: ¡entre cuatro y seis meses! Esa es la realidad.

Por lo tanto, seamos realistas. Necesitamos tener el máximo de instrumentos para ir en apoyo, justamente, de la gente que está sufriendo.

Y lo que viene después, tal como lo han dicho muchos de los señores Senadores, va a ser muy complejo: las listas de espera, las postergaciones de cirugías, etcétera.

Entonces, creo que nosotros tenemos una tremenda responsabilidad y comparto plenamente que este proyecto debemos despacharlo, a lo más, dentro de 24 o 48 horas.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador Soria.

El señor SORIA.-

... (falla de audio en transmisión telemática)... mañana y le damos duro.

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

No se escucha.

El señor SORIA.-

¡Ah, no se escucha!

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra.

El señor SORIA.-

Presidenta, colegas, yo digo: 24 horas. Ojalá mañana en la mañana lo tengamos resuelto y en la tarde nos ocupamos de otras normas en favor de nuestros hermanos chilenos y extranjeros que viven acá.

Apuremos los ritmos; podemos; hay capacidad. Todos tienen experiencia... (falla de audio en transmisión telemática)...

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Gracias, Senador Soria .

Entonces, tomemos la decisión.

Consulto: ¿se vota hoy día o va a la Comisión para conocer la indicación del Ejecutivo?

La decisión mayoritaria, entiendo, es que vaya a Comisión.

Acordado.

Ustedes han planteado un plazo: que ojalá pudiéramos verlo la próxima semana de vuelta en la Sala. Porque vamos a sesionar la próxima semana. Yo quiero convocar a una reunión de Comités el lunes, para que podamos organizar las sesiones, como conversábamos en la mañana, y retomar el horario normal, los martes y miércoles, a fin de ordenar mejor el trabajo de Comisiones y de Sala.

Entonces, la idea es que el martes o el miércoles en la tarde podamos tener ya el informe, para ponerlo en votación.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Presidenta ...

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

Tiene la palabra, señor Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Entiendo que se acuerda unánimemente que el proyecto vuelva a la Comisión, para que lo conozca en general y en particular nuevamente, pues ese es el espacio que va a tener para modificar el texto. Si no, no se puede hacer.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Así es, en general y en particular.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Perfecto.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador Navarro.

El señor NAVARRO.-

Presidenta, solo pido que se ponga en el primer lugar de la tabla el día martes. La Comisión de Salud puede sesionar el lunes -está trabajando de manera muy intensa-, para que el martes podamos tenerlo ya en el primer lugar de la tabla, a fin de despacharlo ese mismo día. De esa manera, la Cámara de Diputados lo podría ver, ojalá, el miércoles.

Creo que la indicación consensuada va a operar muy rápido, porque va, además, con el apoyo del Ejecutivo.

Eso es, Presidenta .

Las cifras de este fin de semana van a ser dramáticas. Solo quiero decir: actuemos a tiempo, no lleguemos tarde.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

Muy bien. El día martes en la tarde, al confeccionar la tabla, vamos a proponer que se ponga en primer lugar.

Tiene la palabra la Senadora Rincón.

La señora RINCÓN.-

Presidenta, consulto si podemos ver la posibilidad de hacer el viernes la reunión de Comités, para poder ordenar con tiempo las sesiones y la tabla. Considérelo y nos comunica. Solo eso.

La señora MUÑOZ (Presidenta).-

No, el día lunes, porque el viernes lo tengo completo.

¿Puede ser el lunes, a las 9:30?

De todas maneras, lo coordinaremos con el señor Secretario . Pero sería bueno reunirse en Comités los días lunes, para tener una visión más rápida.

Entonces, señor Secretario , el acuerdo es que el proyecto vuelva a la Comisión de Salud para su tramitación en general y en particular. Y la propuesta es ubicarlo en la tabla del día martes, lo cual vamos a concordar con los Comités en la reunión que tendremos al inicio de la próxima semana.

--El proyecto vuelve a la Comisión de Salud para su discusión en general y en particular.

1.4. Nuevo Primer Informe de Comisión de Salud

Senado. Fecha 02 de junio, 2020. Informe de Comisión de Salud en Sesión 31. Legislatura 368.

?NUEVO PRIMER INFORME DE LA COMISIÓN DE SALUD recaído en el proyecto de ley, en primer trámite constitucional, que suspende por el lapso de dos años la aplicación de los artículos 1° y 2° de la ley N° 20.261, incorpora cargos al Sistema de Alta Dirección Pública y modifica la ley N° 19.664.

BOLETÍN N° 13.359-11.

HONORABLE SENADO:

La Comisión de Salud cumple con emitir su nuevo primer informe acerca del proyecto de la suma, iniciado en moción de los Honorables Senadores señora Yasna Provoste Campillay y señores Juan Ignacio Latorre Riveros, Alejandro Navarro Brain, Jaime Quintana Leal y Rabindranath Quinteros Lara.

Con fecha 27 de mayo del presente, la Sala acordó devolver el proyecto a la Comisión de Salud para nuevo primer informe y la autorizó nuevamente para discutir la iniciativa en general y en particular.

El texto que se propone a la Sala en el presente informe está conformado por un artículo único y un artículo transitorio. De acuerdo con lo dispuesto en el artículo 127 del Reglamento de la Corporación, la Comisión discutió en general y en particular esta iniciativa de ley.

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A una o más de las sesiones en que se analizó esta iniciativa legal asistieron, además de los miembros de la Comisión y del Honorable Senador señor Alejandro Navarro Brain, las siguientes personas:

- Del Ministerio de Salud: el Asesor Legislativo, señor Jaime González.

- De la Corporación Nacional Autónoma de Certificación de Especialidades Médicas (CONACEM): el Presidente, Dr. Lorenzo Naranjo Tapia.

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CONSTANCIAS

El proyecto que se propone en este informe no requiere un quorum especial de aprobación ni afecta la organización y atribuciones de los tribunales de justicia.

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OBJETIVO DEL PROYECTO

El proyecto de ley, en su nueva formulación, habilita temporalmente a los médicos cirujanos que indica, para ejercer sus especialidades en el sector público.

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ANTECEDENTES DE DERECHO

- De la Constitución Política de la República, los ordinales 9° y 18° del artículo 19.

- Ley N° 20.985, que establece normas sobre certificación de especialidades médicas obtenidas en el extranjero.

- Ley N° 20.261, que crea el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina, incorpora cargos que indica al sistema de alta dirección pública y modifica la ley N°19.664.

- Decreto con fuerza de ley N°1, del Ministerio de Salud, de 2005, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley N° 2.763, de 1979 y de las leyes N° 18.933 y N° 18.469.

- De la ley N° 19.650, que perfecciona normas del área de la salud, el artículo 6°.

- De la ley N° 20.129, que establece un Sistema Nacional de Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior, el artículo 27.

- Decreto N° 8, del Ministerio de Salud, de 2009, reglamento del Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina.

- Del decreto N° 110, del Ministerio de Salud, de 1963, reglamento de la Ley N° 15.076, Estatuto Médico-Funcionario, el artículo 89.

- Decreto Nº 4, del Ministerio de Salud, de 2020, que decreta Alerta Sanitaria por el período que señala y otorga facultades extraordinarias que indica por emergencia de salud pública de importancia internacional (ESPII) por brote del nuevo Coronavirus.

- Decretos Nº 6 y N° 10, del Ministerio de Salud, de 2020, que modifican el decreto Nº 4 recién mencionado.

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ANTECEDENTES DE HECHO

La moción que da origen a este proyecto de ley expone las cifras de enfermos y fallecidos por causa de la pandemia de Covid-19 a la época de su presentación, marzo de 2020. Esta situación encuentra al sistema público de salud en una condición de especial vulnerabilidad: sólo durante el primer semestre de 2018 murieron 9.724 pacientes en listas de espera, un 54% más que en el mismo periodo de 2017, lo que revela una tendencia en aumento.

Manifiestan los suscriptores de la iniciativa que el Ministro de Salud ha declarado que en Chile hay un déficit de 20.000 médicos, cifra que está lejos de mejorar, pues un informe del mismo Ministerio estima que recién el año 2030 esa carencia se habrá reducido, en el sector público, a unos 7.200 facultativos.

También se invocan expresiones del Ministro, en el sentido de que un refuerzo importante para nuestro sistema sería la incorporación de médicos extranjeros, muchos de los cuales no pueden ejercer, debido al Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina (EUNACOM).

Expresa la moción que el EUNACOM ha sido un examen ampliamente cuestionado, no solo porque está a cargo de una corporación privada que ejerce una función pública, sino porque la autoridad no lo ha estimado como un mecanismo indispensable para el ejercicio de la medicina en el sector público. En sustento de esto se manifiesta que el Ministerio de Salud extendió los plazos para su rendición del examen en 2019 y que la Contraloría General de la República ha dictaminado que los médicos que no han aprobado el EUNACOM pueden atender en la salud pública, ante la falta de profesionales.

En conclusión, dada la actual crisis sanitaria provocada por el COVID-19, que se suma a la crisis que arrastra el sistema de salud, los autores estiman razonable y necesario aplazar el EUNACOM, con la finalidad de asegurar la dotación de médicos en el sistema de salud.

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DISCUSIÓN EN GENERAL Y EN PARTICULAR

El debate habido en este trámite reglamentario de nuevo primer informe se realizó en torno a la indicación sustitutiva presentada por el Presidente de la República durante la discusión en general.

- Indicación del Presidente de la República, para sustituir el texto del proyecto de ley por el siguiente:

“Artículo Único.- Por el lapso de dos años contado desde la publicación de esta ley, los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en el extranjero y aquellos a los que se refiere el inciso segundo del artículo 2 bis de la ley N° 20.261, quedarán habilitados para ejercer su especialidad en Chile, aun cuando no hubieren obtenido la certificación de su respectiva especialidad o subespecialidad de conformidad con las normas establecidas en el número 13 del artículo 4 del decreto con fuerza ley Nº 1, de 2005, del Ministerio de Salud, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979, y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469, siempre que hubieren presentado su solicitud de certificación a alguna de las entidades certificadoras autorizadas por el Ministerio de Salud durante la vigencia de esta ley, o bien la hubiesen presentado con anterioridad y se encontraren en trámite.

Los médicos que hubiesen obtenido su especialidad médica en el extranjero, al igual que su título profesional, se encontrarán eximidos por el plazo de dos años contado desde la publicación de esta ley, del requisito de aprobar el examen único nacional de conocimientos de medicina establecido en el artículo 1° de la ley N° 20.261, para ingresar a los cargos o empleos de médico cirujano en los Servicios de Salud creados por el artículo 16 del decreto con fuerza de ley Nº 1, de 2005, del Ministerio de Salud, que fija texto refundido coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979 y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469; en la Subsecretaria de Salud Pública; en las Secretarias Regionales Ministeriales de Salud; en los establecimientos de carácter experimental creados por el artículo 6º de la ley Nº19.650; y en los establecimientos de atención primaria de salud municipal.

Transcurrido el plazo de dos años contado desde la publicación de la presente ley en el Diario Oficial, para continuar ejerciendo la profesión de médico cirujano y su especialidad, los profesionales deberán haber obtenido la certificación de su especialidad o subespecialidad, según corresponda, de conformidad con lo preceptuado por la legislación vigente en la materia.

La Superintendencia de Salud deberá implementar un registro público especial en el Registro Nacional de Prestadores Individuales de la Superintendencia, para los médicos que resultaren transitoriamente habilitados para ejercer su profesión y especialidad en Chile de conformidad a la presente ley, siendo obligación de la entidad contratante, informar a la Superintendencia de Salud, en el plazo de 30 días corridos, mediante el envío de un oficio que informe de tal contratación. La infracción a la obligación de informar por parte de las entidades contratantes será sancionada en conformidad al artículo 174 del Código Sanitario.

Artículo Transitorio.- La vigencia de la presente ley será por un plazo de dos años contado desde su publicación en el Diario Oficial. Sin perjuicio de lo anterior, transcurrido dicho plazo, los médicos cirujanos o especialistas que tuvieren contratos vigentes en virtud de la presente ley, podrán mantenerlos por el tiempo restante para terminar su proceso de aprobación del examen único nacional de conocimientos de medicina, o certificación de la especialidad, siempre y cuando dicha demora no les sea imputable.”.

La Comisión conoció también una indicación del Honorable Senador señor Navarro:

- Indicación del Honorable Senador señor Navarro, para agregar un artículo transitorio del tenor siguiente:

“Artículo transitorio.- Quedarán suspendidas por dos años, las sanciones administrativas, por sumario o investigación sumaria, dictadas en los últimos cinco años en contra de funcionarios y funcionarias de la salud.”.

El asesor legislativo del Ministerio de Salud, abogado señor Jaime González explicó la indicación del Ejecutivo, cuyo artículo único comprende cuatro incisos, y un artículo transitorio. Precisó que la indicación incorpora solamente una acreditación para médicos especialistas y no incursiona en el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina.

El inciso primero otorga un plazo de dos años, para que los médicos cirujanos que obtuvieron su especialidad en el extranjero y facultativos chilenos que hubieren obtenido un título de médico otorgado por Universidades reconocidas por el Estado, así como para aquellos médicos extranjeros que obtuvieron el título de médico general y su especialidad en el extranjero, puedan acreditarse para ejercer en Chile su especialidad, por un período de dos años.

El inciso segundo, hace referencia derechamente a los médicos extranjeros, porque entienden que los primeros pueden trabajar en el territorio de la República y a aquellos médicos con títulos obtenidos en el extranjero y con especialidades obtenidas también en el extranjero, de manera que tengan el mismo plazo para incorporarse a los hospitales de la red pública, a la Subsecretaría de Salud Pública, a las Secretarías Regionales Ministeriales y a la atención primaria de salud.

El inciso tercero fija un plazo de dos años, contado desde la publicación de la ley, para obtener la certificación de especialidad o subespecialidad.

El inciso cuarto establece que la Superintendencia de Salud deberá implementar un registro público especial, para los médicos que resultaren transitoriamente habilitados conforme al presente proyecto de ley y obliga a las instituciones prestadoras que contraten a dichos profesionales, a informar a la Superintendencia, estableciendo una sanción para el caso de incumplimiento.

Finalmente, el artículo transitorio permite que los médicos que tengan contrato vigente y no hubieren obtenido su acreditación en el lapso de dos años de vigencia de esta ley, puedan conservar su contratación hasta que concluya su proceso de certificación, siempre que la demora no les sea imputable.

En definitiva, CONACEM se mantiene como entidad acreditadora y certificadora de las especialidades médicas.

El Honorable Senador señor Navarro solicitó conocer los argumentos del Ejecutivo para desechar la primera parte de su propuesta de suspensión del EUNACOM. Indicó que el argumento de los médicos extranjeros que están en Chile es la cantidad de trabas que deben sortear para ejercer su profesión, a la vez que hacen presente que el decreto N° 4, del Ministerio de Salud, de 2020 [1], no es utilizado para la contratación de médicos extranjeros.

Requirió saber si la indicación presidencial se refiere a los especialistas ya inscritos y que están en espera de la acreditación, el número de médicos que se contempla contratar y de cuáles especialidades.

La Honorable Senadora señora Ebensperger manifestó su conformidad con el proyecto y con la indicación presentada, porque permitirá hacerse cargo de la realidad de regiones donde hacen falta especialistas.

Recalcó que no se opone a la eliminación del EUNACOM, porque entiende que el decreto de excepción constitucional, que permite al Ministerio de Salud y a los Servicios de Salud de cada región contratar médicos generales, alcanza el mismo objetivo que persigue la moción. Lo que no está cubierto es la contratación de especialistas, porque el artículo 112 del Código Sanitario sólo permite contratar médicos habilitados para el ejercicio profesional.

Recordó que el Colegio Médico no está de acuerdo con la prórroga del EUNACOM, pero sí lo está con resolver el tema de las especialidades médicas, para lo que aportaron, a modo de sugerencia, una propuesta de indicación.

La crisis sanitaria que se vive actualmente amerita un proyecto de ley en este sentido, afirmó Su Señoría.

El Honorable Senador señor Girardi sostuvo que lo más importante es tratar las causas y no los síntomas o efectos de un problema. La lógica indica que, atenido lo ocurrido con esta pandemia, se adopte una política permanente. No es adecuado esconder la realidad, en Chile hay un problema estructural, existe un déficit grave de especialistas en hospitales y de médicos en consultorios, de lo cual es consecuencia las largas listas de espera y gastos importantes causados por las derivaciones al sector privado.

Señaló no tener problema en acoger lo propuesto en este proyecto de ley como una solución transitoria, a condición de abordar también el problema de fondo. No basta con plantear que el monopolio de las sociedades médicas impide la formación de especialistas. La ley está por sobre los gremios y lo que ella establece se transforma en un mandato para todos.

Estimó que las especialidades se deben formar en función de las necesidades del país, lo que implica gasto, pero también se requiere crear cargos en la red pública, lo que exige un aumento sustancial del presupuesto en salud para cubrirlos.

Solicitó escuchar al presidente del CONACEM en relación con la indicación que se discute y oír al Ejecutivo sobre el modo en que va a enfrentar el problema de fondo.

El Honorable Senador señor Chahuán estimó que la norma, como ha sido planteada por el Ejecutivo, en el sentido de reducir la solución al caso de los especialistas, por un plazo acotado y estableciendo un registro especial, es una fórmula adecuada.

El déficit de especialistas en las regiones Metropolitana y de Valparaíso asciende a 3.900 médicos; a nivel nacional dicha carencia bordea los 5.000 profesionales, lo que justifica lo necesaria que es esta indicación.

La Honorable Senadora señora Goic estimó que este proyecto de ley no es necesario para contratar médicos especialistas, en vista del texto del decreto de alerta sanitaria.

Consideró que el Ejecutivo debe aclarar no sólo lo que ocurre actualmente a raíz de la pandemia, sino lo que sucederá una vez que ella haya pasado. Se constata cómo se acumulan en forma alarmante garantías incumplidas del GES, cómo engrosan las listas de espera. Consultó si lo propuesto para este proyecto de ley apunta a enfrentar esa etapa posterior.

Añadió que otro tema que le preocupa es la forma de contratar especialistas. Si el objetivo es contar con ellos una vez superada la pandemia, es necesario saber cuáles y cuántos son los cargos en el sistema público que los acogerán, su distribución por regiones y su correlato en el presupuesto. Estimó que eso es un mínimo para dar seriedad a la discusión.

También solicitó que se informe la cantidad de contrataciones de internos en medicina y de médicos generales que no han rendido el EUNACOM y en qué lugares han sido contratados.

Otra preocupación es la forma que tiene contemplada el Ministerio para establecer un filtro mínimo que corrobore la especialidad de cada médico.

Respecto del articulado, manifestó su preocupación por la frase final del artículo transitorio, que señala que una vez expirado el plazo de dos años de vigencia de la ley se empieza a contar un nuevo término, para que quienes aspiran a la certificación de especialidad completen el proceso. La frase es interpretable y puede dar extender una solución transitoria por mucho tiempo más.

La Honorable Senadora señora Ebensperger sugirió eliminar el artículo transitorio.

En segundo lugar, compartió los dichos del Senador Girardi, sobre la necesidad de formación de especialistas y consultó al Ejecutivo si tiene sustento el rumor de que el Ministerio de Salud aportó recursos para la formación de especialistas, pero hubo cupos vacíos porque las universidades argumentaron que no tenían capacidad para preparar un número mayor de los que ya forman.

En cuanto a la facultad de contratar especialistas por el decreto N° 4, señaló entender que sólo permite la contratación de médicos generales sin el EUNACOM y no la de especialistas.

El Honorable Senador señor Quinteros manifestó su acuerdo con aprobar el proyecto, con las observaciones planteadas, pero solicitó tener la seguridad de que los médicos seguirán trabajando en el sistema de salud chileno y que cubrirán plazas que se requieren en diversas regiones y comunas del país.

El abogado señor Jaime González explicó que el decreto de alerta sanitaria sólo permite la contratación de médicos generales, en virtud del artículo 112 inciso tercero del Código Sanitario. El Ministerio de Salud puede reconocer el título por causales excepcionales y por expresa disposición del Código Sanitario, pero no puede reconocer especialidades. Es por ello que se desistió de eliminar el EUNACOM y, en reemplazo de ello, se ha puesto el foco en un mecanismo especial para acreditar especialidades médicas.

Argumentó que la importancia de este proyecto de ley se relaciona con dos temas: el primero, es contar con un número suficiente de especialistas para enfrentar la pandemia; el segundo, es revolver el retraso de las listas de espera en el sector público, para lo que se requiere que especialistas médicos formados se incorporen a la red.

No hay duda de que más médicos se desempeñan en el sector privado que en el público. Hay 28.635 médicos generales en el sector privado y 25.218 en el público, en circunstancias de que el sector público atiende al 80% de la población. Añadió que en el sector privado hay 9.049 médicos extranjeros y en el sector público hay 5.983.

Puntualizó que la mayoría de los médicos extranjeros que se encuentran en el sector privado son especialistas, que se acogen a la homologación directa autorizada por tratados vigentes en Chile, que permiten el ejercicio profesional.

Confirmó que el déficit de especialistas en el sector público es de, al menos, 4.900 médicos.

La Honorable Senadora señora Goic consultó si los médicos de países que tienen tratados con Chile deben rendir igualmente la acreditación en CONACEM, en el caso de las especialidades.

El abogado señor González explicó que para ejercer la medicina en nuestro país se requiere estar en posesión de un título otorgado por una universidad del Estado o reconocida por éste. También son reconocidas universidades de países con los que hay un tratado ratificado y vigente en Chile; están en el caso España, Ecuador, Colombia, Uruguay y Argentina. Esos médicos pueden ejercer directamente en el sector privado, una vez que revalidan, pero no lo pueden hacer en el sector público. Para acreditar su especialidad, tienen que acudir a la CONACEM.

Hay muchos médicos que ejercen su especialidad sin reconocimiento de CONACEM, pero están validados para ejercer su título de médico, porque se lo permite la normativa vigente; por eso actualmente hay más médicos extranjeros en el sector privado que en el sector público.

Es importante captar para el sector público a aquellos médicos que tienen sus títulos homologados y revalidados, para que contribuyan a resolver las listas de espera.

Informó que este proyecto de ley repite casi la misma fórmula de una ley promulgada el año 2015, que permitía a aquellos médicos con títulos obtenidos en el extranjero ejercer su especialidad, mientras revalidaban su título. Al igual que en el caso del 2015, el actual proyecto establece que esos médicos pueden ejercer la medicina en el ámbito de su especialidad y en el sector público solamente.

Este proyecto innova, en la medida que establece un registro provisional, a cargo de la Superintendencia de Salud, que hace posible conocer quiénes son los médicos que ingresan al sector público, sin perjuicio de otros mecanismos de control de gestión aplicables en el sector público, y porque establece una sanción para aquellos prestadores que no informen al registro los médicos contratados por este mecanismo.

Informó que el Ejecutivo está de acuerdo con la sugerencia de incorporar en el inciso primero a aquellos médicos nacionales o extranjeros que hayan obtenido su especialidad en Chile, de manera que se sometan al mismo mecanismo, con el objetivo de que se sumen a la fuerza de trabajo que está promoviendo el Ministerio de Salud. Igualmente, indicó que se acoge la sugerencia de eliminar el artículo transitorio, porque el límite temporal a la habilitación para el ejercicio de la profesión está suficientemente claro en el proyecto de ley.

La Honorable Senadora señora Goic observó que no queda claro en el texto propuesto por el Ejecutivo, que la habilitación sea solamente para ejercer en el ámbito de su especialidad.

El Honorable Senador señor Quinteros consultó si los problemas de convalidación de los médicos extranjeros, particularmente los de nacionalidad venezolana, se deben a la inexistencia de convenios con universidades de ese país.

El señor González señaló que la mayoría de los médicos extranjeros que están en el sector público son venezolanos y el problema es que no hay un tratado de homologación con Venezuela.

Puntualizó que el interés es reclutar a médicos especialistas, muchos de los cueles pueden haber obtenido su especialidad en países que no tienen tratado de homologación, pero existe un mecanismo adecuado para reconocer a ese médico especialista como personal calificado.

Aclaró que no se incorporará a profesionales que carezcan de las competencias adecuadas para ejercer su especialidad. En ese sentido, se ha sostenido conversaciones con directores de servicio, que son los que hacen la contratación directamente; además, esos médicos quedan sujetos a la calificación de sus pares, además de cumplir con el requisito de, al menos, estar inscrito en CONACEM.

Expresó que la Subsecretaría de Redes Asistenciales está trabajando en reclutar a no menos de 1.000 médicos especialistas, para lo cual se está provisionando los cupos.

Señaló que se ha provisionado cupos para otro tipo de profesionales de la salud nacionales, como enfermeras, kinesiólogos, tecnólogos médicos o técnicos en enfermería. En cada servicio se ha ido agregando una dotación de al menos 200 a 300 personas, a lo cual se debe adicionar los equipos que han formado las Secretarías Regionales Ministerial.

Indicó que lamentablemente la provisión de médicos ha sido baja, porque existe limitación legal para contratar, salvo mediante los mecanismos que ha indicado la Contraloría General de la República en diversos dictámenes, que permiten la contratación de profesionales extranjeros en virtud del principio de servicialidad [2]. Añadió que la Subsecretaría está trabajado para que, una vez aprobado el proyecto de ley, se cuente con al menos 1.000 cargos de especialistas a nivel nacional, que se podrán sumar, por el período de dos años, al esfuerzo por superar la pandemia.

La Honorable Senadora señora Goic solicitó que el Ministerio de Salud suministre formalmente un documento que acredite la existencia de tales cargos y del financiamiento para contratar a los especialistas que los cubrirán.

El Honorable Senador señor Girardi destacó que este proyecto de ley no se hace cargo del problema de fondo, que es la carencia de más de 4.000 especialistas en los sistemas de atención de salud y de cerca de 3.000 médicos en la atención primaria.

Solicitó al Gobierno que, además de transparentar si hay voluntad para proveer los cargos, dé a conocer el plan de formación de especialistas que resolvería el tema de fondo. Se trata de un problema estructural que está destruyendo el sistema público de salud: al no haber especialistas no hay formación médica, en los establecimientos privados no se hace formación médica, la hace el sistema público. Así se está deteriorando gravemente la calidad de la formación en salud y se está traspasando recursos al sector privado.

Estimó que, de no contar con un plan nacional de formación médica, el sistema ingresará en una espiral de daño estructural de las políticas de salud, que no se resuelve incorporando médicos extranjeros o chilenos formados en el extranjero, sin acreditación en Chile, lo que finalmente va a perjudicar a los chilenos de menores recursos.

Se debe formar a todos los especialistas que requieren las regiones, comprometiendo recursos, tanto para la formación, mediante becas, como en la provisión de cargos.

El Honorable Senador señor Chahuán manifestó que corresponde avanzar en lo propuesto por el Gobierno, que constituye la herramienta para resolver el déficit de especialistas. Hay mucho por hacer en materia de salud, pero es necesario hacerse cargo de los temas uno a uno. Este es un proyecto de ley que busca resolver un problema puntual.

Poco se puede avanzar si el artículo 19 de la Constitución Política de la República consagra derecho a la salud, pero no hay médicos especialistas suficientes.

El Honorable Senador señor Navarro señaló que una decisión en torno a este proyecto de ley debe estimular una reacción del Gobierno. Enfatizó que los alcaldes carecen de recursos para contratar médicos generales y que en la atención primaria de salud hay un déficit importante de dichos profesionales, nivel sanitario que ha sido dejado de lado en la actual emergencia.

Refiriéndose a la indicación de su autoría, manifestó que tiene por objeto permitir la incorporación del personal de salud que ha sido suspendido por temas administrativos, para que esté disponible durante esta crisis.

Señaló que le gustaría que también se hubiera eliminado transitoriamente la exigencia de rendir el EUNACOM y argumentó que hay decenas de denuncias de hospitales que para contratar médicos generales exigen la acreditación por universidades chilenas y certificación; por lo tanto, no están procediendo conforme al decreto N° 4.

La Honorable Senadora señora Ebensperger expresó su acuerdo en debatir el fondo del problema no resuelto, que es la falta de especialistas en Chile.

Este proyecto de ley aspira a dar una solución acotada a la crisis sanitaria, que requiere una respuesta urgente y prioritaria, y no pretende resolver el tema de fondo.

Luego, consultó por la carga de trabajo que ha asumido la CONACEM, desde el 18 de octubre de 2019, fecha del estallido social, hasta la fecha, en plena pandemia. Requirió saber si se ha avanzado y ha aumentado esa carga de trabajo, de manera de hacer posible entregar con mayor prontitud el número de especialistas que el país necesita.

La Honorable Senadora señora Goic recordó que una de las inquietudes planteadas es la forma de garantizar un filtro mínimo, que acredite una atención médica de calidad.

La Honorable Senadora señora Ebensperger estimó que el proyecto es necesario para el escenario de pandemia que se vive. El número informado de especialistas en espera, que supera los 1.200, es importante y se debe acotar los plazos para evaluar a los postulantes.

Expresó que debe quedar claro que terminado el plazo de vigencia de esta ley el médico no puede seguir trabajando, mientras no se certifique en CONACEM y, además, que debe ejercer su especialidad sólo en el sector público.

El abogado señor Jaime González señaló su disposición a hacer ajustes al texto de la indicación del Ejecutivo, sobre la base de las observaciones formuladas en el transcurso de la discusión.

Destacó dos innovaciones relevantes que contiene el proyecto de ley: permite contratar médicos especialistas en las COMPIN y en la Subsecretaría de Salud Pública e incorpora a la atención primaria de salud, que podrán contratar especialistas, principalmente ginecólogos y pediatras.

El Presidente de la Corporación Nacional Autónoma de Certificación de Especialidades Médicas (CONACEM), doctor Lorenzo Naranjo, se refirió a la indicación sustitutiva del Ejecutivo, que propone que médicos especialistas extranjeros puedan ejercer su especialidad por un plazo de dos años, sin tener aprobado el EUNACOM ni reconocimiento de CONACEM.

El Honorable Senador señor Girardi afirmó que para resolver el problema de fondo se debe constituir una mesa de trabajo que avance en el diseño de una política de formación de especialistas, con la participación de la Comisión de Desafíos del Futuro, Ciencia, Tecnología e Innovación, para así incorporar a la tarea al mundo científico y a todas las universidades.

Manifestó su preocupación por los 249 médicos que resultan rechazados y propuso establecer una suerte de filtro, conforme al cual los rechazados no puedan ser contratados en el marco de esta ley.

Expresó su desacuerdo con permitir la contratación de aquellos que no tienen formación universitaria en su especialización, de personas que no cuentan con certificación universitaria en sus propios países.

Planteó que no hay justificación, cuando se tiene la potestad legal, para no gestionar con las universidades cupos de formación; el marco legal que fija una ley es obligatorio para todos y los establecimientos universitarios no podrían negarse a asignar cupos de formación de especialistas, si una ley se los exige.

El instrumento para gestionar los cupos debe ir acompañado de financiamiento. Normalmente, el tema pasa por que no se entregan los recursos para financiar las becas.

Estimó que la propuesta es imprecisa, porque que señala que los médicos con título y especialidad en el extranjero pueden trabajar en su especialidad en Chile, sin distinguir entre el ámbito público o privado, por un plazo de dos años, sin tener ninguna evaluación ni obtener un reconocimiento. Observó que la redacción de la indicación no permite concluir que es exclusivamente para ejercer en el ámbito público, sino que en todo el sistema sanitario.

Calificó de grave el hecho de que médicos ejerzan sin contar con una certificación, lo cual atenta contra la calidad de la medicina y contra el derecho de los pacientes a tener una atención de eficacia garantizada.

Informó que en el año 2019 CONACEM certificó a 1.207 especialistas, la mayoría de ellos, por la ley N° 20.985. Al analizar las nacionalidades, el mayor número lo constituyen venezolanos, con 737 especialistas certificados, seguidos de argentinos, 42, cubanos, 40 y 61 médicos chilenos formados en el extranjero, que reconocieron su título a través de CONACEM.

El año 2019 postularon 1.359 médicos, de los cuales 249 fueron rechazados, por no cumplir los requisitos mínimos para ser reconocidos como especialistas. Observó que los médicos que no reúnen los requisitos mínimos no deberían ser contratados en virtud de este proyecto de ley.

Actualmente hay 945 médicos que están en espera de rendir el examen escrito de CONACEM y 309 que esperan rendir el examen práctico.

El 45% de los médicos que se presentan al examen escrito no lo aprueban, por no tener los conocimientos teóricos mínimos para ejercer la especialidad. Informó que algunos médicos han dado el examen por tercera vez y no lo han aprobado.

Estimó que 1.250 médicos extranjeros, aproximadamente, podrían ser beneficiados por este proyecto de ley. En la actualidad no hay más médicos extranjeros en Chile, porque el flujo se detuvo por los acontecimientos de octubre del año pasado y ahora no pueden llegar, como resultado de la pandemia.

Un número importante de médicos venezolanos, aproximadamente el 50%, no tiene una formación universitaria, sino que son personas que han realizado lo que se denomina “residencias asistenciales programadas”. Se trata de programas de los hospitales para formar especialistas, que no tienen reconocimiento universitario. CONACEM, haciendo un esfuerzo especial en estos casos, ha aceptado certificar a algunos de ellos, siempre que se encuentren inscritos como tales en el Colegio Médico de Venezuela.

Aclaró que CONACEM debe evaluar distintos ámbitos, dependiendo de cada especialidad, para otorgar la certificación. Para simplificar el proceso se ha eximido de la rendición del examen práctico a quienes aprueban el 70% del examen escrito, porque sobre el 90% de esos médicos aprueba el examen práctico. Añadió que esta política se seguirá manteniendo.

Por otra parte, informó que están trabajando para tomar exámenes escritos a distancia, debido a la imposibilidad de tomarlos presencialmente en el actual escenario de emergencia sanitaria, de manera de seguir avanzando en la certificación.

Comentó que la comunidad médica no está de acuerdo con este proyecto, porque no es partidaria de eliminar la certificación de los conocimientos y competencias que sirven para garantizar la calidad de los médicos y la seguridad de la población.

Sostuvo que si se aprecia un déficit de especialistas, no tiene sentido que este año se hayan reducido las vacantes para su formación.

Señaló que la mayoría de los postulantes extranjeros son de especialidades básicas, esto es, medicina interna, cirugía, ginecobstetricia, pediatría, radiología y anestesiología.

Opinó que este proyecto de ley es innecesario y si la idea es asegurar una adecuada dotación de especialistas la mejor alternativa es implementar una política de formación de especialistas en Chile.

La Honorable Senadora señora Goic consultó por los plazos que demora el proceso de dar el examen teórico, a contar desde que el médico presenta sus antecedentes en CONACEM

El doctor Naranjo informó que la certificación de especialistas demora entre 18 y 24 meses, por la enorme cantidad de candidatos que hay, sin embargo, se estima que con la modificación que se va a implementar el proceso de certificación podrá disminuir a un año. Añadió que en ninguna parte del mundo se certifican médicos en tiempos más acotados que los señalados, porque es un proceso que requiere diversas etapas. A su vez, tampoco hay país que no exija examen de reconocimiento para médicos extranjeros.

El Honorable Senador señor Quinteros hizo presente que el proyecto se ha acotado bastante; a su juicio, corresponde contemplar otras excepciones, como excluir a quienes han reprobado dos o tres veces el EUNACOM y aquellos cuyas especialidades no han sido certificadas por las universidades de su país.

La pandemia ha venido demostrando que la salud pública no está preparada; es cierto que se ha realizado un tremendo esfuerzo para habilitar hospitales, pero se debe planificar una política de Estado para que la salud pública sea universal y de iguales garantías a toda la población.

La Honorable Senadora señora Goic manifestó su acuerdo en excluir de la norma a aquellos que han sido rechazados por CONACEM, que la contratación quede acotada para el sector público y en eliminar el artículo transitorio.

Propuso que sea el Ministerio de Salud el que establezca las normas operativas o técnicas para que en el momento de la contratación de estos profesionales se exija la documentación que demuestre la posesión de la especialidad.

El Honorable Senador señor Navarro recordó que el Gobierno requiere este instrumento en momentos en que las personas se están muriendo, en que hay miles de contagiados. No se está discutiendo una autorización administrativa, sino que se está hablando de contratar mano de obra especializada, para salvar vidas en el contexto de una emergencia sanitaria.

Señaló no comprender la razón de que una entidad privada, como la CONACEM, siga tomando este examen y sea la que define quienes trabajarán en el sistema público, en lugar de sea el Estado, con sus universidades.

Llamó a aprobar este proyecto, que facilita la contratación de especialistas para incorporarlos al sistema.

El Honorable Senador señor Girardi reiteró la idea de constituir una mesa de trabajo, pues de lo contrario en dos años más el deterioro en materia de especialistas será mayor que el actual y ya no habrá posibilidad de resolverlo. El tiempo ha demostrado que la debilidad de las instituciones públicas, particularmente del sector salud, genera mucho riesgo en un mundo incierto, en el que lo más probable es que se produzcan nuevas pandemias.

La Honorable Senadora señora Goic señaló compartir la creación de esa mesa y propuso invitar al Gobierno a participar en ella. En todo caso, queda pendiente que el Ejecutivo formalice los cargos que van a estar disponibles y traiga a la Comisión, visada formalmente por la Dirección de Presupuestos, la ampliación de plazas, el lapso de tiempo en que se proveerán y los recursos asociados.

El abogado señor Jaime González presentó una propuesta de redacción que recoge e incorpora al texto de la proposición presidencial las sugerencias de la Comisión.

- La indicación del Presidente de la República, fue aprobada con modificaciones, por la unanimidad de los miembros de la Comisión, Honorables Senadores señoras Goic y Ebensperger y señores Chahuán, Girardi y Quinteros.

- Finalmente, atendido el contenido de las disposiciones del articulado aprobado en particular, para una adecuada técnica legislativa se propone sustituir en el registro correspondiente el nombre del proyecto de ley por el siguiente:

“Proyecto de ley que habilita temporalmente a los médicos cirujanos que indica, para ejercer sus especialidades en el sector público.”.

- La indicación del Honorable Senador señor Navarro fue declarada inadmisible por la señora Presidenta de la Comisión.

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TEXTO DEL PROYECTO

En atención a los acuerdos colacionados en el presente informe, la Comisión de Salud somete a la consideración del Senado la aprobación en general y en particular del siguiente

“PROYECTO DE LEY QUE HABILITA TEMPORALMENTE A LOS MÉDICOS CIRUJANOS QUE INDICA, PARA EJERCER SUS ESPECIALIDADES EN EL SECTOR PÚBLICO:

Artículo Único.- Por el lapso de dos años contado desde la publicación de esta ley, los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en Chile o en el extranjero y aquellos a los que se refiere el inciso segundo del artículo 2 bis de la ley N° 20.261, quedarán habilitados para ejercer su especialidad en el sector público de salud en todo el territorio nacional, aun cuando no hubieren obtenido la certificación de su respectiva especialidad o subespecialidad de conformidad con las normas establecidas en el número 13 del artículo 4° del decreto con fuerza ley Nº 1, del Ministerio de Salud, de 2005, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979, y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469, siempre que hubieren presentado su solicitud de certificación a alguna de las entidades certificadoras autorizadas por el Ministerio de Salud, durante la vigencia de esta ley o bien la hubiesen presentado con anterioridad y se encontrare en trámite.

Los médicos que hubiesen obtenido su especialidad médica en el extranjero, al igual que su título profesional, y que se encuentren en el presupuesto del inciso anterior, se encontrarán eximidos por el plazo de dos años, contado desde la publicación de esta ley, del requisito de aprobar el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina establecido en el artículo 1° de la ley N° 20.261, para ingresar a los cargos o empleos de médico cirujano en los Servicios de Salud creados por el artículo 16 del decreto con fuerza de ley Nº 1, del Ministerio de Salud, de 2005, que fija el texto refundido coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979 y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469; en la Subsecretaría de Salud Pública; en las Secretarías Regionales Ministeriales de Salud; en los establecimientos de carácter experimental creados por el artículo 6º de la ley Nº 19.650, y en los establecimientos de atención primaria de salud municipal.

Transcurrido el plazo de dos años contado desde la publicación de la presente ley en el Diario Oficial, para continuar ejerciendo la profesión de médico cirujano y su especialidad, estos profesionales deberán haber obtenido la certificación de su especialidad o subespecialidad, según corresponda, de conformidad con lo preceptuado por la legislación vigente en la materia.

La Superintendencia de Salud deberá implementar un registro público especial, en el Registro Nacional de Prestadores Individuales de la Superintendencia de Salud, para los médicos que resultaren transitoriamente habilitados para ejercer su profesión y especialidad en Chile de conformidad a la presente ley, siendo obligación de la entidad contratante informar tal contratación a la Superintendencia, mediante oficio que deberá enviar dentro del plazo de 30 días corridos, contados desde la suscripción del contrato. La infracción a la obligación de informar por parte de las entidades contratantes será sancionada en conformidad al artículo 174 del Código Sanitario.

Artículo Transitorio.- Podrán acogerse a la habilitación temporal que autoriza la presente ley los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en centros de formación universitaria y que no hayan reprobado los exámenes en procesos de calificación anteriores rendidos ante la Corporación Nacional Autónoma de Certificación de Especialidades Médicas.

El Ministerio de Salud dictará las normas operativas para la aplicación de la presente ley.”.

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Acordado en sesiones de fechas 01 y 02 de junio de 2020, con participación telemática de los Honorables Senadores señoras Carolina Goic Boroevic (Presidenta) y Luz Ebensperger Orrego y señores Francisco Chahuán Chahuán, Guido Girardi Lavín y Rabindranath Quinteros Lara.

Valparaíso, 11 de junio de 2020.

FERNANDO SOFFIA CONTRERAS

Secretario

RESUMEN EJECUTIVO

NUEVO PRIMER INFORME DE LA COMISIÓN DE SALUD RECAÍDO EN EL PROYECTO DE LEY, EN PRIMER TRÁMITE CONSTITUCIONAL, QUE SUSPENDE POR EL LAPSO DE DOS AÑOS LA APLICACIÓN DE LOS ARTÍCULOS 1° Y 2° DE LA LEY N° 20.261, INCORPORA CARGOS AL SISTEMA DE ALTA DIRECCIÓN

PÚBLICA Y MODIFICA LA LEY N° 19.664.

(BOLETÍN Nº 13.359-11)

I. PRINCIPAL OBJETIVO DEL PROYECTO PROPUESTO POR LA COMISIÓN: habilitar temporalmente a los médicos cirujanos que indica, para ejercer sus especialidades en el sector público.

II ACUERDOS: aprobado en general y en particular (unanimidad 5 x 0).

III. ESTRUCTURA DEL PROYECTO APROBADO POR LA COMISIÓN: consta de un artículo permanente y un artículo transitorio.

IV. NORMAS DE QUÓRUM ESPECIAL: no tiene.

V. URGENCIA: suma, vence el 11 de junio en curso.

VI. ORIGEN e INICIATIVA: iniciado en moción de los Honorables Senadores señora Yasna Provoste Campillay y señores Juan Ignacio Latorre Riveros, Alejandro Navarro Brain, Jaime Quintana Leal y Rabindranath Quinteros Lara.

VII. TRÁMITE CONSTITUCIONAL: primer trámite.

VIII. INICIO DE LA TRAMITACIÓN: 25 de marzo de 2020.

IX. TRÁMITE REGLAMENTARIO: primer informe, en general y en particular.

X. NORMAS QUE SE MODIFICAN O QUE SE RELACIONAN CON LA MATERIA:

- De la Constitución Política de la República, los ordinales 9° y 18° del artículo 19.

- Ley N° 20.985, que establece normas sobre certificación de especialidades médicas obtenidas en el extranjero.

- Ley N° 20.261, que crea el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina, incorpora cargos que indica al sistema de alta dirección pública y modifica la ley N°19.664.

- Decreto con fuerza de ley N°1, del Ministerio de Salud, de 2005, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley N° 2.763, de 1979 y de las leyes N° 18.933 y N° 18.469.

- De la ley N° 19.650, que perfecciona normas del área de la salud, el artículo 6°.

- De la ley N° 20.129, que establece un Sistema Nacional de Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior, el artículo 27.

- Decreto N° 8, del Ministerio de Salud, de 2009, reglamento del Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina.

- Del decreto N° 110, del Ministerio de Salud, de 1963, reglamento de la Ley N° 15.076, Estatuto Médico-Funcionario, el artículo 89.

- Decreto Nº 4, del Ministerio de Salud, de 2020, que decreta Alerta Sanitaria por el período que señala y otorga facultades extraordinarias que indica por emergencia de salud pública de importancia internacional (ESPII) por brote del nuevo Coronavirus.

- Decretos Nº 6 y N° 10, del Ministerio de Salud, de 2020, que modifican el decreto Nº 4 recién mencionado.

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Valparaíso, 11 de junio de 2020.

FERNANDO SOFFIA CONTRERAS

Secretario de la Comisión

[1] Es el que decreta Alerta Sanitaria y otorga facultades extraordinarias por emergencia de salud pública.
[2] Que encuentra su referente normativo en el inciso cuarto del artículo 1° de la Constitución Política de la República.

1.5. Discusión en Sala

Fecha 02 de junio, 2020. Diario de Sesión en Sesión 31. Legislatura 368. Discusión General. Se aprueba en general y particular.

SUSPENSIÓN TEMPORAL DE EXAMEN ÚNICO NACIONAL DE CONOCIMIENTOS DE MEDICINA (EUNACOM)

El señor QUINTEROS ( Vicepresidente ).-

Proyecto de ley, en primer trámite constitucional, iniciado en moción de los Senadores señor Navarro, señora Provoste y señores Latorre, Quintana y Quinteros, que suspende por el lapso de dos años la aplicación de los artículos 1° y 2° de la ley N° 20.261, que crea un Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina, incorpora cargos al sistema de Alta Dirección Pública y modifica la ley N° 19.664, con primer informe de la Comisión de Salud y certificado con motivo del nuevo primer informe que la Sala del Senado, en sesión del 27 de mayo de 2020 pasado, solicitó a dicha instancia, remitiéndole la iniciativa y autorizándola para discutirla en general y en particular a la vez, y urgencia calificada de "suma"

--Los antecedentes sobre el proyecto (13.359-11) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican:

Proyecto de ley (moción Senadores señor Navarro, señora Provoste y señores Latorre, Quintana y Quinteros):

En primer trámite: sesión 6ª, en 25 de marzo de 2020 (se da cuenta).

Informe de Comisión:

Salud: sesión 26ª, en 25 de mayo de 2020.

Salud (certificado): sesión 31ª, en 2 de junio de 2020.

Discusión:

Sesión 30ª, en 27 de mayo de 2020 (queda pendiente la discusión en general y la Sala acuerda que vuelva a la Comisión de Salud para un nuevo primer informe).

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Esta iniciativa tiene por objeto permitir la contratación en el sector público de médicos especialistas que hubieren obtenido su título o especialidad en el extranjero por un plazo de dos años, con la finalidad de asegurar la dotación de médicos en el sistema de salud en el contexto de la actual crisis sanitaria generada por el coronavirus, causante de la pandemia COVID-19.

La Comisión de Salud, en su primer informe, aprobó la idea de legislar por la unanimidad de sus miembros, Senadores señoras Goic, Ebensperger y señores Chahuán, Girardi y Quinteros.

En particular, aprobó esta iniciativa con la modificación y la votación que se registran en su certificado, reemplazando el artículo único por un texto compuesto por un artículo único y un artículo transitorio.

Asimismo, la Comisión hace presente que, atendido el contenido de las disposiciones del articulado que despachó en particular, para una adecuada técnica legislativa sugiere sustituir en el registro correspondiente el nombre del proyecto de la ley por el que ya había adelantado con anterioridad el Senador señor Ossandón. La Sala tomó conocimiento del cambio de nombre y lo respaldó.

El texto que se propone aprobar se consigna en la página 2 y siguientes del certificado de la Comisión de Salud, así como en el boletín comparado que Sus Señorías tienen a su disposición, tanto en el SIL como también en la plataforma en la que figuran los documentos y papeles pertinentes.

Es todo, señor Presidente.

El señor QUINTEROS ( Vicepresidente ).-

Gracias, señor Secretario .

En discusión general y particular el proyecto.

Le voy a ofrecer la palabra a la Presidenta de la Comisión de Salud y, posteriormente, al representante del Ministerio de Salud, señor Jaime González.

Tiene la palabra, Senadora Goic.

La señora GOIC.-

Gracias, Presidente.

Yo deseo recordar, a propósito de este nuevo primer informe, que el proyecto en debate lo vimos en la Sala la semana pasada y tuvimos conocimiento de una indicación del Ejecutivo que lo que hacía era, a diferencia de lo que planteaba inicialmente el articulado, acotar la exención de rendir el Eunacom y las pruebas de certificación solo a los especialistas, excluyendo a los médicos generales.

Quiero reconocer el ánimo de diálogo y de acuerdo que tuvimos en la Comisión. Sesionamos el lunes y hoy en la mañana, y generamos esta indicación, que es acordada sobre la base del planteamiento de la indicación del Ejecutivo.

Estuvieron sobre la mesa la indicación que presentó el Ejecutivo y otra que presentó el Senador Navarro, que planteaba que quedarían suspendidas por dos años las sanciones administrativas por sumario e investigación sumaria dictadas en los últimos cinco años en contra de funcionarios y funcionarias de la salud.

Como la indicación del Senador Navarro fue declarada inadmisible, seguimos trabajando sobre la del Ejecutivo.

En cuanto a esta última, acordamos permitir que médicos especialistas que han cursado su especialización en el extranjero -pueden ser extranjeros o chilenos- ejerzan sin necesidad de haber cumplido las pruebas que hoy se establecen, por un plazo acotado de dos años.

Cabe recordar que la indicación contemplaba un artículo transitorio que hacía que transcurrido el plazo de dos años se pudiera también continuar, dependiendo de cuándo se aprobara el examen.

Nos pareció que el plazo de dos años era suficientemente acotado. Una vez pasados los dos años, se exige que efectivamente se hayan completado las pruebas de validación.

Lo segundo es dejar circunscrito esto solamente al sector público. Tal como estaba la indicación del Ejecutivo, se interpretaba que podría ser para el sector público y privado. Esto, en función de que implica un mayor control de requisitos, en circunstancias de que la lógica de trabajo de los equipos de salud en el sector público es distinta.

Después, otro de los acuerdos que generamos es que aquellos médicos que no cuenten con formación de su especialización acreditada por una universidad de su país no pueden acceder a la habilitación. Y esto nos lo explicaba el doctor Naranjo , de Conacem. Hay ciertos programas de estudio en el extranjero que más bien son habilitaciones presenciales, son de práctica en terreno o en un hospital, lo que es distinto a la enseñanza universitaria, que es la rigurosidad mínima que se requiere. Estamos hablando de especialistas que van a ejercer, además, su especialidad.

Lo tercero es que el Ministerio de Salud va a tener que establecer los requisitos para certificar a los médicos especialistas y proceder a su contratación.

Acá, si bien en general son los servicios de salud los que contratan, planteamos que durante este período de dos años debiera existir una revisión de requisitos mínimos, y el Ministerio de Salud va a estar a cargo de eso.

Y, tal cual lo ha señalado el Secretario en la relación, con esto cambia el nombre del proyecto. Ya no se trata de suspender el Eunacom como requisito por dos años. Por eso, proponemos que en adelante se lo conozca como "proyecto de ley que habilita temporalmente a los médicos cirujanos que indica para ejercer sus especialidades en el sector público".

De esta manera, considera en su inciso primero el habilitar por el lapso de dos años -insisto- en el sector público, siempre y cuando los especialistas hayan hecho su solicitud de certificación en alguna de las entidades autorizadas por el Ministerio de Salud.

El inciso segundo dispone que "Los médicos que hubiesen obtenido su especialidad médica en el extranjero, al igual que su título profesional, y que se encuentren en el presupuesto del inciso anterior, se encontrarán eximidos por el plazo de dos años" del requisito de aprobar el Eunacom para ingresar también a los cargos o empleos de médico cirujano en los servicios de salud, en la Subsecretaría de Salud Pública, en las secretarías regionales ministeriales de salud, en establecimientos de carácter experimental y también en la atención primaria de salud municipal.

De acuerdo al inciso tercero, cumplidos los dos años, estos profesionales deberán haber obtenido la certificación de su especialidad de conformidad con lo preceptuado en la legislación vigente.

En el inciso cuarto el texto establece la facultad de la Superintendencia de Salud de "implementar un registro público especial en el Registro Nacional de Prestadores Individuales de la Superintendencia". Esto es fundamental para la fiscalización y la transparencia.

Y el artículo transitorio indica que "Podrán acogerse a la habilitación temporal (...) los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en centros de formación universitaria y que no hayan reprobado los exámenes en procesos de calificación anteriores rendidos" ante la Conacem.

Este punto lo tratamos mucho con el Director de la Conacem . Aquellos que han reprobado recientemente quedan excluidos de poder utilizar o acogerse a los beneficios de esta ley.

A su vez, se dispone que será el Ministerio de Salud el que dictará las normas operativas para la aplicación de esta ley, como les señalaba.

Esta indicación, con las modificaciones que acordamos, fue aprobada unánimemente por los cinco miembros de la Comisión.

Es importante también contarles a los colegas que acá tuvimos un debate, creo que muy bueno, respecto a los temas de fondo, que significaron también algunos compromisos.

Esto, lo que hace es, de alguna manera, poner un parche a un problema que es mucho más grande, que es la falta de especialistas, sobre todo, en las regiones, en zonas que son menos atractivas. Hay que ver cómo se aborda eso. Nosotros acordamos crear una mesa de trabajo, con participación de la Comisión de Salud y la Comisión de Futuro, como lo hemos hecho en otras cosas, para construir una estrategia de inteligencia artificial que presentamos al Presidente . Lo que queremos es asumir una labor conjunta para tener un plan real de formación de especialistas, en el que podamos trabajar con las universidades, con el Colegio Médico, con la Conacem, con el Gobierno, pero abordando el problema de fondo, porque esto es algo que lleva muchos años. No obstante, aún no se ha enfrentado cómo efectivamente garantizamos que se forme la cantidad de especialistas necesarios, que estén las becas, que estén después los cupos, que todo el sistema se coordine en función de las prioridades sanitarias.

Y el Gobierno quedó formalmente de traer el compromiso que existe de cupos para especialistas, para saber cómo está planificado ese aumento y tener una idea de los recursos que están contemplados, con la visación del Director de Presupuestos.

Nos parece que eso nos permite también asumir el debate de fondo.

Solamente para ilustrar a los colegas, quiero decirles que nosotros hoy día recibimos al Director de la Conacem, quien nos dio los antecedentes de qué estaba sucediendo.

La Conacem, a diferencia del Eunacom, que es para los médicos generales, es el examen que tienen que dar tanto los extranjeros como los nacionales -o sea, los que estudian en Chile- para quedar habilitados como médicos.

La Conacem lo que hace es certificar especialidades. Nosotros ya hicimos hace algunos años una modificación en virtud de la cual los médicos, en la medida en que se acreditan en Conacem, no tienen que dar el Eunacom. Esto es diferenciando, haciéndose cargo de que son contenidos mucho más específicos.

Nos señalaba que el año pasado se certificaron 1.207 especialistas, de distintas nacionalidades: 737 de esos 1.207 eran venezolanos; 42 argentinos; 40 cubanos; 61 chilenos formados en el extranjero.

Hubo una postulación el 2019 de 1.359 médicos. Y de ese grupo, 249 médicos fueron rechazados por no cumplir los requisitos mínimos para ser especialistas. O sea, ni siquiera en las pruebas, sino porque no cumplían los requisitos mínimos.

Actualmente hay 945 médicos que están a la espera de rendir el examen escrito de la Conacem, y 309, aguardando el examen práctico.

Nos señaló que el 45 por ciento de los médicos que se presentan al examen escrito no lo aprueban, ¡45 por ciento! Esto significa que no tienen los conocimientos mínimos para ejercer la especialidad. Estamos hablando del teórico.

El proceso también se ha facilitado. En el caso de aquellos que cumplen con el 70 por ciento en el teórico, no se les toma el práctico, lo cual representa una forma de agilizar el procedimiento. Así como también si están trabajando hoy día en una modalidad que permita dar el examen a distancia. O sea, se entiende que es algo que no puede esperar a que terminemos con la pandemia, sino que se debe facilitar.

Finalmente, nos expuso que el universo de los médicos que podrían ser beneficiados por este proyecto, de acuerdo al registro que ellos tienen, abarca unos 1.250 profesionales extranjeros, quienes de alguna manera están a la cola, o sea, se encuentran inscritos para rendir los exámenes.

Él nos planteó que las certificaciones en algunos casos demoran entre 18 y 24 meses, e hizo presente las medidas que están tomando para agilizar dicha tramitación.

Tuvimos una buena conversación con el Director. Nos señaló que también coincidía en la necesidad de que, junto con la aprobación de este proyecto, se incremente esta mesa, para que nos permita en un tiempo breve hacer una propuesta país respecto de cómo enfrentamos la situación de la falta de especialistas. La idea es, de alguna manera, ponerle el cascabel al gato en conjunto. O sea, esto no se trata de ciertas sociedades médicas o del Colegio Médico, o de agrupaciones gremiales o de universidades que quieran cerrar la puerta, sino de poner los datos sobre la mesa. Y eso requiere que estén los recursos por parte del Ministerio, requiere que estén los cupos, que estén las becas, que esté coordinado con lo que entregan las universidades, y nos parece que desde ambas Comisiones, como ha ocurrido en otros casos, podemos hacer una contribución real.

Lo que sugerimos es aprobar este proyecto, y yo me alegro mucho además, como Presidenta de la Comisión , de que, después de un debate que fue difícil, hayamos generado este acuerdo.

Solo debo señalar que el representante del Ministerio de Salud, don Jaime González , quien está con nosotros, reiteró que hoy día existe la posibilidad, a través de un decreto sanitario, tal como lo habíamos planteado, de contratar médicos que no hayan cumplido con el requisito... ()...en el caso de los especialistas era necesaria esta excepción.

falla de audio en transmisión telemática

Ahí hay un debate, pero finalmente acordamos todos que, en los términos y con los resguardos necesarios, conviene aprobar este proyecto.

Gracias, Presidente .

El señor QUINTEROS ( Vicepresidente ).-

Le ofrezco la palabra a don Jaime González, del Ministerio de Salud.

El señor GONZÁLEZ ( Asesor Legislativo del Ministerio de Salud ).-

Presidente , muchas gracias.

Primero, quiero valorar el acuerdo que se logró en la Comisión de Salud. Fue un debate enriquecedor, en el que pudimos mejorar la indicación presentada por el Ejecutivo, como bien dice la Honorable Senadora Carolina Goic.

Este proyecto de ley lo que hace es permitir que por el lapso de dos años se puedan incorporar a los distintos servicios de salud médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad tanto en Chile como en el extranjero.

Esta iniciativa nos habilita también para incorporar médicos en la atención primaria de salud y en la Subsecretaría de Salud Pública, pensando particularmente en reforzar a los equipos de la Compin, que se han visto tan afectados por el brote de COVID-19 y que sin duda han aumentado su carga de trabajo.

Asimismo, establece un registro especial para la Superintendencia de Salud, con el objeto de que pueda registrar a los médicos que se contraten en el marco de esta normativa, lo cual, como muy bien dice la Senadora, nos permitiría contar con una fuerza de por lo menos 1.200 profesionales que están rindiendo su examen de especialidad en la Conacem.

Hoy día existe una brecha de especialistas, de médicos en general, en el sector público y privado. Al respecto, es menester recordar que en el sector público se atiende el 80 por ciento de la población, y está equiparada la cantidad de médicos chilenos que trabajan en ambos sistemas, que son cerca de 20 mil. Pero en lo que se refiere a extranjeros y especialistas, hay un claro déficit. Sin duda existen muchos menos especialistas en el sector público que en el sector privado, y hay una brecha de especialistas extranjeros en el sector público. La diferencia es de por lo menos 3 mil médicos.

El proyecto de ley pretende capturar el interés de aquellos especialistas chilenos formados en nuestro país y de aquellos especialistas extranjeros que hayan obtenido su título por homologación, a través de algunos tratados ratificados y vigentes por Chile, para que se sumen a la fuerza del Ministerio de Salud.

En definitiva, la iniciativa de ley busca que podamos sumar a esos médicos especialistas a nuestra red de salud, para que puedan atender no solamente la pandemia, que significa una merma de profesionales de la salud al estar atendiendo por brote de COVID-19, sino para que después puedan resolver la lista de espera GES, que se encuentra atrasada o demorada producto del mismo brote.

Presidente , eso es.

Valoro el acuerdo que se logró en la Comisión de Salud, con presencia de la Conacem. Sin duda que este proyecto de ley va a beneficiar a los médicos especialistas que hayan obtenido su especialidad tanto en Chile como en el extranjero, además de aquellos que hayan obtenido una formación universitaria, para que se puedan sumar rápidamente a la red de prestadores públicos institucionales.

Muchas gracias, Presidente .

El señor QUINTEROS ( Vicepresidente ).-

A usted, don Jaime.

Señor Secretario, tiene la palabra para dar a conocer los tiempos que le corresponden a cada bancada en este debate.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias, señor Presidente .

A la bancada del Comité Partido País Progresista e Independiente le corresponden cuatro minutos; al Comité Partido Evópoli, dos minutos; al Comité Partido Unión Demócrata Independiente, trece minutos; al Comité Partido Revolución Democrática, dos minutos; al Comité Partido por la Democracia e Independientes, once minutos; al Comité Partido Renovación Nacional e Independientes, trece minutos; al Comité Partido Socialista, diez minutos, y al Comité Partido Demócrata Cristiano, siete minutos.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Bien.

Vamos a hacer cumplir los tiempos, ya que queda otro proyecto más en tabla, y la idea es alcanzar a ver las tres iniciativas previstas para esta sesión.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Está solicitada la palabra por parte del Senador señor Girardi, de la bancada del Partido PPD, por siete minutos.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador Girardi.

El señor GIRARDI.-

Señor Presidente , creo que hemos logrado un avance, pero yo lo quiero poner en contexto.

Esta no es una solución definitiva; es hacerse cargo del síntoma de una enfermedad mayor. Es, en cierta forma, una medida paliativa, que no resuelve en nada el problema estructural. Y si este Congreso no ayuda a resolverlo, junto con el Gobierno, yendo al fondo del asunto, lo más probable es que una vez pasada la pandemia tengamos una situación gravísima de todas las patologías que están hoy día en lista de espera, que seguramente han aumentado por haberse tenido que diferir las patologías GES. Vamos a tener más de 2 millones de personas en listas de espera, y seguirá habiendo falta de acceso a la salud y de oportunidad y calidad en la salud.

Por lo tanto, creo que el compromiso que tuvimos al resolver esto, que es sintomático y que no va a las causas, debe ir acompañado de la decisión y la voluntad del Gobierno y de este Congreso de resolver los temas de fondo.

En Chile faltan, de acuerdo a los distintos estudios, solo en el sistema hospitalario, más de 4 mil médicos especialistas. Y eso es muy grave, porque al no haber médicos especialistas en los distintos hospitales, las consecuencias primero las sufren los pacientes, que tienen largas listas de espera, que carecen de atención de calidad con oportunidad, pero también las sufren aquellos pacientes que no son GES, que no tienen ninguna posibilidad de acceso a la salud de manera oportuna, la cual, si ni siquiera la tienen aquellos con garantías AUGE, menos la tendrán quienes no disponen de ellas.

Esa es una situación dramática, y este stock va a ir aumentando progresivamente hasta hacerse inmanejable, convirtiéndose en una bola de nieve.

En segundo lugar, tenemos el riesgo de que esta pandemia se cronifique, que mientras no haya vacuna se mantengan brotes y situaciones de alto requerimiento de acceso al sistema hospitalario.

En tercer lugar, pueden venir nuevas pandemias. Eso es lo más probable; así lo establecen todos los modelos.

Luego, el hecho de que no tengamos especialistas genera una debilidad estructural, aun cuando yo considero que tal vez uno de los mayores patrimonios que tienen el sistema público y la salud chilena es la calidad de sus recursos médicos. Porque son los especialistas de los hospitales públicos los que forman a todos los médicos y los equipos de salud, sean profesionales médicos o de otras profesiones, dado que en Chile la formación de los profesionales de la salud no se hace fuera del sistema público, en clínicas privadas. Las clínicas privadas se benefician de la formación impartida en los hospitales. Al no haber especialistas en los hospitales, no hay recursos calificados que mantengan un nivel de calidad en lo que es este patrimonio. Chile todavía puede decir que tiene un muy buen nivel en la formación de profesionales de la salud que le permiten enfrentar esta pandemia y otras situaciones.

Luego tenemos un sistema muy concreto, donde se produce un traspaso de los pocos recursos que posee el sistema público y que terminan en el sistema privado, por las compras de servicios. Dado que no hay posibilidades de responder, particularmente a las patologías AUGE, por la ausencia de especialistas, se difieren o se trasladan los recursos a las clínicas privadas, que son las que están haciendo el mayor negocio.

Yo creo que aquí uno incluso podría considerar que existe una suerte de pecado planeado, una inconsistencia que no es tan inconsistente, que responde a una visión ideológica: dejar que por la vía vegetativa el sistema vaya muriendo, vaya perdiendo a sus especialistas, para que sean las clínicas privadas las que vayan asumiendo, por la lógica de la gravedad, el reemplazo, en la medida en que se están llevando a todos los especialistas del sector público. Pero eso es pan para hoy y hambre para mañana, porque, finalmente, el ecosistema de la salud va a sufrir un deterioro gravísimo, particularmente en la formación de recursos humanos.

Entonces, a mí me parece que esa es la tarea fundamental: la formación. Y hay que formar especialistas a lo largo de todo Chile; hay que formar cuatro mil especialistas, hospital por hospital. Pero acá hay un discurso que señala: "Bueno, es que aquí hay limitaciones, de las sociedades médicas, de los colegios médicos". Yo digo: no hay que preguntarles a las sociedades médicas ni al Colegio Médico si hay que formar especialistas. No pueden ser las sociedades médicas de oftalmología o cualquiera que sea la que decida si se van a formar especialistas en oftalmología, en otorrinolaringología o en lo que sea. Es una ley de la república la que debe establecer aquella obligación.

Tampoco las universidades pueden decir: "Mire, no podemos formar porque no tenemos cupos". Este es un problema de recursos y de obligación. Toda universidad con vocación pública, particularmente las que son del Estado, tienen la obligación de formar todos los especialistas que el país necesite y que la ley establezca que se requiere formar.

Muchas veces se esconden acá otros problemas; se esconde que no están los recursos destinados, primero, para la formación, para las becas, para formar médicos o médicas y otros profesionales de la salud y, por lo tanto, se aduce que las universidades no quieren, pero más bien se trata de que no están disponibles los recursos. Y tal vez el tema más de fondo es que no están los cupos. Porque, si tú formas cuatro mil especialistas, debes tener cuatro mil cargos, que, evidentemente, ¿qué significan? Recursos adicionales.

Y esto no lo digo solo por este Gobierno, porque tampoco se ha hecho en ningún otro. Ningún Gobierno ha resuelto el problema, el cual se sigue postergando para el que viene. Sin embargo, esto ya no puede seguir así.

Además, debemos tener una política de incentivo para que los médicos trabajen 44 horas y los hospitales funcionen hasta la ocho de la noche. Hay que nivelar las remuneraciones de los especialistas de los hospitales para que no se los lleven las clínicas privadas. Hay que generar incentivos de formación permanente, de investigación, de docencia para que a un facultativo, aun cuando no gane lo mismo que en una clínica privada, le resulte atractivo quedarse en el sistema público.

Estos son los temas que debemos abordar, y abordar por ley. Tiene que haber una decisión. Y deben establecerse los recursos, porque, si no, creo que vamos a llegar a una situación de extrema vulnerabilidad, particularmente para el mundo que viene.

Nosotros nos opusimos a la eliminación del Eunacom porque este permite equidad. Lo hemos dicho: en nuestros país hay médicos, chilenos o extranjeros, que pueden no tener el nivel de formación suficiente y que van a ir a atender a los ciudadanos más pobres, quienes no van a tener cómo calificar o cómo certificar que el profesional que los está atendiendo posee los conocimientos mínimos. Un médico puede ser muy útil, pero también puede ser tremendamente peligroso si no tiene la formación suficiente. No es la gente de altos ingresos la que va a tener problemas para la certificación de sus médicos: son las personas de menores recursos.

Por lo tanto, rendir el Eunacom es una exigencia para chilenos y extranjeros por igual, para garantizarle a nuestra comunidad, sobre todo a la gente más vulnerable, que el médico o el profesional que la atiende reúne los conocimientos mínimos...

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Gracias, Senador.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

A continuación está inscrito, por el Comité Partido País Progresista e Independientes, el Senador señor Navarro, hasta por cuatro minutos.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Tiene la palabra.

El señor NAVARRO.-

Gracias, Presidente.

En el debate de la Comisión de Salud estuvo hoy día el doctor Lorenzo Naranjo , Presidente de Conacem (Corporación Nacional Autónoma de Certificación de Especialidades Médicas), que interviene como juez y parte en una atribución que el Estado de Chile le da para entregar datos de conocimientos que solo esta entidad privada maneja. Porque es una entidad privada, lo mismo que el Eunacom. Ambos son organismos privados que tienen facultades de regulación de políticas públicas. Son un híbrido que debe terminar.

Yo quiero al Estado resolviendo los temas de Estado, y a los privados, ganando dinero, como lo hacen, por cierto, Eunacom y Conacem, porque los exámenes tienen costo.

Desde el 2009, y con la ley N° 20.985, de 12 de enero de 2017, que incorporó un artículo 2 bis a la ley que creó el Examen Único, se han certificado, hasta la fecha, un total de 1.200 especialistas. De ellos, 1.036 lo hicieron bajo la ley N° 20.985. O sea, no se les exigió el Eunacom para acreditar. La mayor cantidad de especialistas certificados, por nacionalidad, son: de Venezuela, 737; de Argentina, 42; de Cuba, 40, y chilenos formados en el extranjero, 61.

¿Quién resulta beneficiado? Conforme a dicha ley, reformatoria de la N° 20.261 y que suspende Eunacom y Conacem por dos años, se inscribieron 1.359 postulantes a la espera de tribunales de exámenes, de los cuales 249 ya fueron rechazados por incompatibilidad de las mallas curriculares. Según ellos, no reúnen los requisitos para poder certificarse, bajo dictámenes que, por cierto, resultan inapelables en el sistema actual.

Desde luego, Presidente , faltan médicos y faltan especialistas.

El Estado señala tener la capacidad para contratar médicos sin Eunacom. La pregunta que le hicimos hoy día al abogado del Ministerio de Educación -porque la verdad es que no estaba ni el Ministro ni el Subsecretario , sino un abogado para un debate jurídico, cuando este tema también es, en esencia, político- es cuántos médicos generales han sido contratados bajo este sistema.

Porque faltan médicos en los consultorios para hacer la trazabilidad, el seguimiento, el aislamiento, que es donde ha fallado el sistema, lo cual está provocando que en Chile haya hoy un millón de contagiados. Así lo señaló el Senador Girardi y así lo dicen los chinos y los italianos. Se multiplica cada contagiado por seis o por doce. Si vamos a la media de diez, después del contagiado diagnosticado 108 mil, ¡nos da más de un millón de contagiados en Chile! O sea, ¡viene lo peor!

¡Bien! Tenemos un proyecto que libera del Eunacom. Pero está lo de la Conacem. En mi opinión, debe aprobarse, para dejar a todos los que puedan ingresar. Se ha excluido a los médicos que han sido rechazados en el examen y a priori se ha excluido también a otros profesionales.

Yo solo quiero hacer presente que no tenemos una información de proyección de parte de Mañalich -la sesión especial que pedimos aún no se fija- para saber lo que viene, para que el señor Ministro , que dice que se le derrumbó el castillo de naipes, que navega por un mar oscuro y que no conoce el hacinamiento, reconozca el fracaso de la política de salud pública, la cual nos está costando 108 mil contagiados y una proyección que todavía no calculamos.

Esta ley es necesaria. Si vamos a contratar más especialistas, bueno, hagámoslo. Hay déficit de médicos en Chile: para la pandemia, pero también para atender las enfermedades GES, las especialidades, las patologías.

El año 2018, 11.800 personas murieron en Chile por falta de una consulta médica o por falta de una operación quirúrgica. ¡11.800! Claramente, la gente se muere esperando en las listas médicas. Se murieron en los gobiernos de la Concertación, se mueren en el Gobierno de Piñera, porque faltan médicos. ¡Cuatro mil médicos!

Yo solo espero que, de aprobarse esta ley, aunque sea para los especialistas, el Gobierno pueda asignarles plazas de contratación y claridad sobre dónde van a ir.

Yo les pregunto a los Senadores que son de regiones: ¿cuántos médicos de especialidad van a ir a las regiones extremas? ¿Cuántos va a contratar el Gobierno? ¡No lo sabemos! Estamos aprobando una ley, y el Gobierno va a decidir.

Yo no sé qué especialista que se halle trabajando en la Región Metropolitana, que es donde se concentran, va a tener la solidaridad de ir a trabajar a Punta Arenas, de ir a trabajar...

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Gracias, Senador.

Se cumplieron sus cuatro minutos.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Señor Presidente , por el Comité Partido Renovación Nacional e Independientes, ha solicitado la palabra el Senador señor Galilea, quien dispone de cinco minutos.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Senador Galilea, tiene la palabra.

El señor GALILEA.-

Gracias, Presidente.

Yo quiero partir agradeciendo a la Comisión de Salud, que vio este proyecto, por haber logrado acuerdo y unanimidad. Cuando lo discutimos en Sala la semana pasada, hubo voces bastante disidentes, por distintas preocupaciones, válidas o no, pero creo que el impulso que le dimos al texto al señalar que era obligación, en estos momentos, tomar una medida extraordinaria para contar con todos los recursos médicos, particularmente especialistas, en los próximos dos años, creo que finalmente permeó a todos los Senadores involucrados. Así que yo creo que hoy día vamos a lograr unanimidad para su aprobación.

Pero el que ahora vayamos a aprobar este proyecto de ley no significa, Presidente, que podamos tapar el sol con un dedo, porque, efectivamente, tal como señalaron los colegas que me antecedieron, la falta de especialistas médicos en Chile es un problema absolutamente severo.

A mí me tocó conocerlo muy de cerca como Intendente de la Región del Maule . En esa época, con el Gobierno regional decidimos dar un paso que parecía muy obvio y que, a pesar de lo obvio y natural, costó y fue un parto lograr que cristalizara. Simplemente, dijimos algo muy natural, que puede ocurrir también en muchas otras regiones del país: "Bueno, ¿por qué diablos si en la Región del Maule, en Talca específicamente, tenemos tres, cuatro, cinco escuelas de medicina, no hay ninguna posibilidad de preparar especialistas acá?".

Entonces tomamos la decisión, como Gobierno regional, de poner los recursos, de comprometer a las universidades, de comprometer al servicio de salud, de coordinar a todas estas instancias y adecuar los hospitales públicos y los Cesfam para que ello pudiese funcionar, para que quienes estaban ejerciendo la especialidad tuvieran los campos médicos necesarios.

Eso, que parece tan obvio y tan natural, como decía, fue todo un parto, desde todo punto de vista: desde la Diprés, que consideraba que no podíamos invertir plata en este tipo de proyectos; desde el Ministerio de Salud, en Santiago, que estimaba que empezar a descentralizar la formación de especialistas podía generar algún extraño fenómeno que nunca supieron explicar cuál era. En definitiva, fue piedra tras piedra tras piedra. Creo que nos demoramos dos años en hacerlo realidad.

Aun así, nos topamos con un problema increíble. Necesitamos oncólogos, tenemos postulantes para oncología, pero simplemente nos dan dos cupos. O necesitamos oftalmólogos, y nos dan un cupo. O necesitamos desesperadamente anestesiólogos, y nos dan seis cupos. Esa especie de tiranía, que no sé si es de los colegios profesionales o de las universidades -no sé muy bien de dónde viene-, es algo que hay que terminar cuanto antes, Presidente .

Hoy día estamos dando un paso importante para lo que es la emergencia y para los dos años que vienen, pero aquí hay que revolver de raíz aquel problema, que no tiene ninguna presentación y ninguna justificación.

No solamente sufrimos atrasos en las enfermedades GES, sino que también se observa un universo de atrasos en las enfermedades no GES, que debemos resolver en nuestro país a través de especialistas.

Así que nuevamente expreso mis felicitaciones por haber dado este paso; pero, insisto, debemos enfrentar esta herida que tenemos en la salud chilena, pública y privada, contando con los especialistas que se requieren para dar atención oportuna a toda nuestra población.

Muchas gracias.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Señor Presidente , ha solicitado la palabra, por el Comité de la Democracia Cristiana, la Senadora señora Goic, que dispone de siete minutos.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Tiene la palabra.

La señora GOIC.-

Gracias, Presidente.

La verdad es que voy a hacer una intervención bastante breve; ya me extendí en el informe, donde creo que di cuenta del trabajo que se hizo.

Solamente quiero reiterar que esta no es la solución, y que de lo que queremos hacernos cargo, en serio, es del problema de fondo.

Esto es un parche, que con los límites y los resguardos necesarios, nos parece razonable. Hoy día hay una cola importante y una demora en la acreditación de especialistas. Por lo tanto, existiendo los resguardos en materia de requisitos mínimos y considerando que estamos en el ámbito del sector público, donde es posible tener mayor control, parece razonable dar el espacio. Pero, para resolver lo que han planteado muchos colegas y que también vivimos nosotros en una región extrema como Magallanes, aquí se necesita una coordinación de todos los actores. Los profesionales que se forman, los cupos que ofrecen las universidades, obedecen a prioridades sanitarias.

Lo digo por lo que pasa con el cáncer. Tenemos déficit de oncólogos y, al ritmo de formación anual que llevamos -eran doce al año, necesitamos llegar a cuatrocientos y ahora tenemos del orden de los ciento cincuenta-, ¿cuándo vamos a lograr la cantidad de oncólogos que efectivamente se requieren?

Sin embargo, esa es una discusión bastante más amplia que la que estamos efectuando hoy día, para habilitar a médicos que se han especializado en el extranjero. Y es el tema de fondo que, en mi opinión, la gente espera que abordemos.

Ahí es fundamental el compromiso del Gobierno, compromiso que vamos a cobrar respecto de la existencia de los cargos. Muchas veces me ha tocado apoyar personalmente a especialistas que quieren irse de Magallanes porque no tienen el cargo disponible, el cual no se genera. Y si no están los recursos, no sacamos nada con crear las capacidades. Esto debe obedecer a una planificación conjunta con los distintos actores, a mediano plazo, con los fondos necesarios y diferenciando a las regiones.

Creo que esa mirada es muy muy importante.

Los Gobiernos regionales, tal como indicaba el colega que me antecedió en el uso de la palabra, tienen mucha disposición a colaborar. Entonces, que eso también se valore.

Yo me quiero quedar con ese espíritu, con esa tarea, que asumimos con entusiasmo.

Hay que reconocer que este proyecto tiene hoy los resguardos de fondo, que para muchos era quizás lo más importante, para garantizar que los médicos que van a ejercer como especialistas cumplan también con requisitos de calidad. Lo que debemos cautelar es, primero, la atención de salud, pero también la equidad en cuanto a que aquella sea una atención de calidad. Y la discusión se dio en ese sentido.

Así que espero que el proyecto se apruebe para que podamos pasar a la discusión de fondo.

Por lo expuesto, Presidente, respaldo el texto tal como fue aprobado en la Comisión.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Gracias, Senadora.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Señor Presidente , por el Comité de la Unión Demócrata Independiente, solicitó la palabra la Senadora señora Luz Ebensperger, quien dispone de trece minutos.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Tiene la palabra, Senadora.

La señora EBENSPERGER.-

Gracias, Presidente.

No creo que ocupe tanto tiempo. Como se ha dicho, hubo unanimidad en la Comisión y espero que la misma se dé ahora en la Sala.

Quiero partir justamente valorando el acuerdo alcanzado en dicho organismo y, en tal sentido, destacar la disposición de su Presidenta, la Senadora Goic, para llegar a un consenso.

Deseo destacar también la disposición del Ejecutivo , que recogió todas las aprensiones que en esta materia expresaron los distintos Senadores, así como el doctor Naranjo , Presidente de Conacem , quien hoy día partió con una posición muy contraria a cualquier cosa de este proyecto y terminó coincidiendo con el texto que hoy la Comisión de Salud le propone a esta Honorable Sala.

Me alegro, asimismo, de la decisión que el Senado tomó la semana pasada. Cuando uno escuchaba los discursos, veía que la mayoría de los Senadores y las Senadoras estaban por rechazar el proyecto porque entendían que con el decreto 66, relativo a la crisis, era posible que el Ejecutivo contratara médicos sin necesidad de contar con el Eunacom, cosa que es verdad, pero que no se aplica a los especialistas.

Hoy día, nosotros oímos una clara exposición del Ministerio de Salud, que señaló el número de facultativos que hay en el sector público: 25.218. Estos 25.218 médicos atienden al 80 por ciento de la población que recurre al sector público. En el sector privado, en tanto, hay 28.635 médicos.

Es claro que existe un déficit de médicos en el sistema público en general que este proyecto no pretende corregir. Lo que este hace es resolver un problema puntual durante dos años, por la crisis sanitaria que estamos enfrentando producto de la pandemia.

Este proyecto pretende entregarle a la ciudadanía, a ese 80 por ciento que se atiende en el sector público, los especialistas que se requieren, más aún con la crisis sanitaria que estamos viviendo.

El déficit de especialistas alcanza a 4.900 profesionales en nuestro país. Y un déficit de 60 especialistas muestra la Región que represento, la Región de Tarapacá, que corresponde a una zona pequeña, con 300 mil habitantes y un hospital.

Y, como mencionaba el Senador Galilea -por su intermedio, señor Presidente -, cuando me tocó ser Intendenta de la Región de Tarapacá hicimos exactamente lo mismo: obtuvimos los recursos del Gobierno regional, con la aprobación del Gore, y establecimos un programa de la mano con el Servicio de Salud de Iquique, incluso con la participación del Alcalde de la época, con la autorización del Ministerio de Salud, pero cuando llegamos a las universidades a buscar los cupos para implementar esas becas no siempre estaban disponibles.

Entonces, hoy día este proyecto nos va a solucionar un problema claro, necesario y urgente.

¿Vamos a resolver el problema de fondo que mencionaba el Senador Girardi, por su intermedio, Presidente ? No, por cierto que no. Y hay ahí un compromiso para que trabajemos el tema de fondo, a los efectos de que tengamos una política clara, permanente y duradera en el tiempo que se aboque a responder cómo, a nivel país y desde el Ministerio de Salud y del Gobierno, del actual y del que venga, vamos a enfrentar en el futuro la formación de especialistas en procesos mucho más precisos, mucho más transparentes, mucho más rápidos y no por ello menos exigentes.

Explicaba hoy día el doctor Naranjo , Presidente de Conacem , que entre 18 a 24 meses se demoran en aprobar, en certificar a un médico especialista. Esa es una brutalidad de tiempo para nuestras necesidades actuales. Hay 1.250 médicos hoy día esperando que Conacem finalice el proceso de certificación de su especialidad.

Señor Presidente , de aprobarse el presente proyecto, el Ejecutivo estará en condiciones -así lo señaló y se comprometió a mandar un oficio en tal sentido- de disponer de mil cargos para la contratación de especialistas cuando la iniciativa se convierta en ley.

Yo lo considero un buen proyecto, y espero que se apruebe, ojalá por unanimidad. Hoy día no solo le estamos hablando a Santiago, que puede reunir la mayor cantidad de habitantes, pero siempre o generalmente se argumenta y se legisla pensando en Santiago. Ahora estamos hablándoles también a aquellas regiones que se encuentran abandonadas, sobre todo en las zonas extremas.

Hoy día les estamos diciendo: van a contar con una herramienta para, al menos por dos años, contratar a los especialistas que ahora no tienen la posibilidad de contratar.

Por eso, señor Presidente , muy contenta voy a aprobar este proyecto, al igual que mi bancada, mediante el cual se está autorizando, por el lapso exclusivo de dos años, a contar de la publicación de esta ley, para que se pueda contratar a aquellos médicos que hayan obtenido su especialidad, en Chile o en el extranjero, en el sector público, que era otra de las aprensiones manifestadas. Esta normativa va a operar solo para el sector público. Y transcurridos los dos años, dichos médicos deberán obtener su certificación en Conacem.

Quiero recordar que a fines del 2014 y comienzos del 2015 ya se aprobó una norma similar, y sin pandemia, también originada en el déficit de especialistas. Y la diferencia con la norma actual radica en dos cosas, que además se mejoran: primero, se establece un registro para que se lleve el control de quiénes van a ser contratados durante estos dos años como especialistas en el servicio público, y se disponen sanciones contra quienes no cumplan con la normativa a la cual hay que atenerse para poder utilizar lo contemplado en esta norma.

Finalmente, en un artículo transitorio se acoge otra de las aprensiones, relacionada con que a la excepcionalidad en la certificación de la especialidad solo podrán acogerse aquellos médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en centros de formación universitaria. Por lo tanto, no aplica a cualquier médico, sobre todo a aquellos que hayan obtenido una especialidad en centros que no son universidades.

Señor Presidente , como viene hoy día redactado, mediante la indicación sustitutiva del Gobierno el proyecto cumple su objetivo, que, siendo pequeño, no es menos importante y que se halla radicado en esta excepcionalidad sanitaria que estamos viviendo y, asimismo, existe el compromiso, no solo de la Comisión de Salud, de tratar el tema de fondo para que tengamos una política clara en la materia y avancemos seriamente para solucionar esta criticidad de especialidades que existe en el país, para acortar los plazos: ¡Dos años! para certificar una especialidad no parece lógico frente a las necesidades que mostramos.

Y tal vez habría que formular un llamado, no sé cómo se podría hacer, para cambiar el nombre del proyecto, porque originalmente se llamaba según la excepción que planteaba al Eunacom, cosa que ya no está en su texto, y a lo mejor debiera denominarse de otra manera.

Muy contenta por la solución que vamos a obtener, sobre todo para las regiones, voy a votar favorablemente, y así también lo hará mi bancada.

Gracias, señor Presidente.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Seguimos con las intervenciones, señor Secretario.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Señor Presidente , se encuentra registrado para el uso de la palabra, por el Comité Partido Por la Democracia e Independientes, el Senador señor Quintana, hasta por seis minutos.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador Quintana.

El señor QUINTANA.-

Señor Presidente , me alegro por el tono con que se está desarrollando esta discusión, porque hace tan solo una semana ocurrió algo bastante distinto. Por eso partí agradeciendo a la Presidenta de la Comisión de Salud , Senadora Carolina Goic , y también a quienes la integran, porque la semana anterior pudimos haber cometido un error inexcusable: estuvimos a punto de desechar este proyecto.

Y quiero ser en este punto extraordinariamente claro. Lo dijimos con el Senador Navarro, autor de la iniciativa, nosotros recibimos una presión brutal, pocas veces vista antes, del Colegio Médico.

Esas mismas sociedades médicas que tanto han aportado hoy día al país en medio de la pandemia, en que sus profesionales están arriesgando su vida; sin embargo, en una dinámica gremial, habían ejercido una fuerte presión para que el proyecto no se aprobara.

Yo concuerdo también con lo que señalaba el Senador Navarro, quien me invitó a ser parte de esta moción, en el sentido de que es muy curioso, porque aquí tenemos una corporación privada que establece regulaciones públicas. Y esa ya no es la tendencia.

En estos ámbitos, la prueba de Selección Universitaria, la PSU, si podemos compararlo, es una prueba que hasta hace poco -ahora va a ser reemplazada por una prueba con menos conocimientos específicos- la tenía a cargo el Demre, que es una agrupación de universidades públicas fundamentalmente, tradicionales del Cruch, y ahora va a depender del Ejecutivo , del Gobierno.

Es evidente que corresponde a una tarea que requiere regulación pública y no es normal que esté en manos de privados. Y después nos preguntamos ¿por qué durante todo este tiempo no hemos avanzado en resolver un tema central?

Entonces, me alegro, reitero, de que se haya encontrado una solución. No es que aquí se haya traído un proyecto distinto, más allá de que cambie el nombre, y se hayan establecido regulaciones, sino que se siguen manteniendo los dos años.

Nosotros fuimos extraordinariamente claros la semana anterior en el sentido de que no bastaba el decreto que establecía el estado de excepción para decir que esto no se necesitaba, porque no estábamos dando respuestas al tema central sobre la falta de especialistas. Y en el número del déficit de especialistas hay cifras bastante variables. Hay algunos que hablan que entre 4 mil y hasta 20 mil son los médicos que faltan hoy día, si sumamos la red hospitalaria y la red de atención primaria.

Hay una proyección, entiendo que del propio Ministerio de Salud, que señala que hacia el 2030, si mantenemos la dificultad actual para formar especialistas, tendríamos un déficit de 7.200 facultativos.

Entonces, el problema es real.

Y creo que a veces nos falta escucharnos un poco más o buscar maneras de reflexionar en conjunto. Porque también fuimos muy claros: una cosa son los médicos generales, pero los que están atendiendo, los que están entubando, los que están en la primera línea son médicos especialistas.

Todos conocemos médicos que han sido contagiados. El propio doctor González , de nuestro policlínico del Senado -no sé si todos los colegas saben- ha permanecido durante varios días en la UCI. Bueno, lamentablemente, esa es la realidad de muchos médicos en Chile que necesitan ser reemplazados en medio de esta pandemia.

Además, y es lo que siempre estuvo en el espíritu del proyecto, esto permitirá abordar y resolver la enorme lista de espera que tendremos una vez que pase la pandemia con los mil trescientos médicos que se suman ahora, en la medida que el Gobierno cumpla lo que ha comprometido en cuanto a proveer estos cargos, y, efectivamente, la indicación sustitutiva plantea una mejor regulación de aquello, contratos, en fin.

Pero seamos claros, durante estos años, en distintos Gobiernos -por lo menos en los últimos tres o cuatro- hemos venido hablando de que faltan especialistas, de que hay programas y de que se forman cuatrocientos al año. Pero esa cifra es completamente insuficiente.

Pueden estar los recursos, pueden estar los campos clínicos, pueden estar las universidades puestas en ello, pero si no están los formadores... Por eso las sociedades médicas -reitero- son muy importantes: las mismas que habían bloqueado el avance de este proyecto, las mismas que están entregando tanto en el control de la pandemia, hoy día, felizmente, también han facilitado este acuerdo.

Son intensivistas, son anestesistas, o sea, cualquiera que recorra los hospitales de este país se da cuenta de que hay médicos venezolanos por todos lados, y la opinión mayoritaria, de los directores de hospitales, de los directores de los servicios de salud, es que son profesionales altamente calificados, y no solo para conocer una realidad epidemiológicamente tan distinta a la que tenemos hoy día en Chile, sino más aún cuando hay que atender urgencias como las que se están enfrentando en un momento tan difícil, cuando el país ha pasado los cien mil contagios y los mil fallecidos.

Por último, quisiera hacer un planteamiento, para no llegar tarde a otra discusión, a la Senadora Goic , Presidenta de la Comisión de Salud ; a la Senadora Luz Ebensperger ; a todos los colegas de la Comisión de Educación: varios Senadores también presentaron un proyecto, hace dos meses, para establecer una mejor coordinación en la atención primaria con las seremías de salud.

El Gobierno, en la última semana, viene enfatizando fuertemente el aislamiento de las personas contagiadas. Bueno, cuando uno conversa, recorre y está con los municipios, se nos señala que la preocupación que hay respecto al dictamen de la Contraloría en función de los datos de las personas hace muy difícil que los funcionarios municipales se sumen a este esfuerzo.

Entonces, se están contratando ochocientos rastreadores. Pero cuando alguien de una seremía de Salud, de cualquier región del país, trata de que esa persona contagiada vaya a hacer cuarentena a las residencias que se están fortaleciendo en la última semana -cosa que se valora, aunque debería haber partido con mucha fuerza hace un mes-, se da cuenta de que está muy lejos de ese territorio y de poder acceder para convencer o persuadir a esas familias. Eso sí lo pueden hacer los municipios.

En consecuencia, yo creo que es urgente mejorar la coordinación de la atención primaria. Más allá de que a los alcaldes no les guste este proyecto, hay que hacerse responsables también en el manejo de datos, que son temas sensibles. Yo llamo... ()

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El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Gracias, Senador.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Señor Presidente , por el Comité de Renovación Nacional ha solicitado la palabra el Senador Chahuán, hasta por cuatro minutos.

El señor CHAHUÁN.-

Señor Presidente , Honorable Sala, tenemos en el sector público 3.066 especialistas menos que en el sector privado y una cobertura del 80 por ciento de la población de nuestro país. El déficit y la brecha de especialistas, si contáramos tan solo la Región Metropolitana y la Región de Valparaíso, alcanzan a cerca de 3.900 médicos. Y si uno hiciera una proyección, podríamos partir de un piso de 4.900 médicos especialistas. Y como lo señalaba el Senador Quintana , para el 2030 podríamos llegar incluso a 7.200, lo que sería un piso si consideramos la ampliación de nuevas patologías GES. Por tanto, estamos hablando de una necesidad real.

Quiero valorar el acuerdo que logramos en la Comisión, la conversación y el diálogo con el Ministerio de Salud, y también con los distintos miembros del órgano técnico, que nos ha permitido tomar todos y cada uno de los resguardos.

Primero, el registro de médicos especialistas, y segundo, de aquellos que puedan trabajar solo en el sector público.

Tercer elemento, yo diría determinante, que exista una formación universitaria de las especialidades médicas.

Cuarto resguardo, que no se hubiese reprobado el examen de la Conacem recientemente.

Por tanto, hay un abanico de medidas, como resguardar un tiempo definido, dos años, para eximir del Eunacom. Estamos ciertos de que este es un avance importante, pero no definitivo. Porque acá lo que hay que sincerar, en definitiva, es de cuántos recursos dispondrá el Ministerio de Salud para la contratación de nuevos especialistas. Este es el tema de fondo. Lo hemos planteado y hemos pedido un oficio de la Comisión de Salud al Ministerio del ramo para este efecto.

Para clarificar lo planteado por la Senadora Ebensperger, efectivamente acordamos cambiar el título de la iniciativa por "Proyecto de ley que habilita temporalmente a los médicos cirujanos que indica para ejercer sus especialidades en el sector público", que es acotado, específico y referido a resolver una urgencia.

Efectivamente, como se planteaba en la sesión pasada de Sala, el decreto 6 del estado de catástrofe habilita por un año para la contratación de médicos extranjeros; pero, ciertamente, creemos que es mejor hacerlo por ley, estableciendo todos y cada uno de los resguardos, y además en diálogo con la Conacem, que cambió el tono de la conversación desde el inicio de la sesión hasta el final, acordando finalmente avanzar en esta dirección.

Sin lugar a dudas, creemos que este es un paso hacia delante; pero lo relevante es que el Ministerio de Salud también pueda sincerar la conversación respecto de cuántos recursos se van a invertir para resolver las brechas de especialistas.

Creemos que estamos aportando al debate. Felicito a los autores y, por supuesto, desde la Comisión de Salud estamos comprometidos para seguir trabajando por una mejor salud pública.

He dicho.

El señor QUINTEROS ( Vicepresidente ).-

Gracias, Senador Chahuán.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Señor Presidente , también ha solicitado la palabra, por el Comité Evópoli, el Senador Kast, hasta por dos minutos.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador Kast.

El señor KAST.-

Señor Presidente , la verdad es que este proyecto, siendo muy respetuoso con sus autores, con los cuales no coincido, era muy dañino en sus inicios. De hecho, buscaba eliminar el Eunacom, que es un certificado de calidad básico a que tiene derecho hoy día no solamente la ciudadanía, sino sobre todo los sectores más vulnerables.

En un comienzo, efectivamente podía generar una baja en la calidad de una especialidad que afortunadamente en Chile todavía tiene un prestigio muy importante.

Por eso, creo que lo que hicieron muchas de las asociaciones de médicos y el Colegio Médico, lejos de ser algo que me gustaría criticar, en este caso fue favorable: ellos se preocuparon de que efectivamente la medicina no fuese una disciplina ejercida sin un mínimo de certificación.

Hay muchos médicos extranjeros que han llegado a Chile y que han pasado el Eunacom, y, por lo tanto, están ejerciendo dando toda la tranquilidad a sus pacientes de que cuentan con las competencias.

Agradezco a la Comisión y al Ejecutivo , que efectivamente le dieron un giro al proyecto en el sentido de que finalmente esto no se trata del Eunacom, sino de las especialidades. Creo que el Conacem se está demorando un tiempo inaceptablemente largo, hay que apurar ese proceso para las especialidades. Me alegra que haya cambiado el título del proyecto de ley, que es muy distinto al original, porque claramente ojalá en otras especialidades tuviésemos el prestigio de garantía de calidad que tienen los médicos en nuestro país, y que hoy día están dando todo por nosotros en medio de la pandemia.

Además, hoy existe un decreto que permite solucionar el problema de la transitoriedad para los médicos generales, y, por lo tanto, el giro que hizo el Ejecutivo con esta iniciativa, me parece positivo y, ciertamente, tenemos una deuda importante con los especialistas en el largo plazo, de la cual espero que el Gobierno se pueda hacer cargo a la brevedad posible.

Por eso, obviamente valoro la iniciativa y espero que la aprobemos.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Gracias, Senador.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Señor Presidente , también ha solicitado la palabra, por el Comité del Partido Socialista, el Senador señor José Miguel Insulza, dentro de los diez minutos de su Comité.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador Insulza.

El señor INSULZA.-

Señor Presidente, no creo que me ocupe tanto tiempo. Cuando alcanzamos acuerdos todo el mundo se pone contento y el clima mejora. Y esta vez parece que sí estamos todos de acuerdo, porque ciertamente es un buen proyecto.

Yo iba a votar en contra del anterior, lo digo francamente. Pienso que ha cambiado casi totalmente. Se mantienen los dos años de plazo y otras cosas, pero en lo fundamental se ha dirigido a lo que más nos toca en las regiones, que es la falta de especialistas. Mi región, señor Presidente -lo he dicho muchas veces-, a mi juicio, es la más postergada en materia de salud, y no es solamente por la falta de camas suficientes en un período normal o porque los servicios son más pobres que en otra parte del país, sino por la falta de especialistas, fundamentalmente.

La verdad es que nosotros casi no tenemos especialistas. En una región que posee la tasa más importante de adultos mayores, por ejemplo, no existe ningún geriatra, ¡ni uno solo!

Entonces, este proyecto apunta a suplir las necesidades que tenemos en tiempos normales. ¡Imagínese si no lo necesitaremos en tiempos de pandemia, como los de ahora!

Por lo tanto, creo que este tema no admite ninguna discusión. Estoy absolutamente a favor de la iniciativa.

Considero que es una gran noticia para los habitantes de mi región, pues no van a tener que ir a Antofagasta, que es lo que les queda más cerca, para atenderse con especialistas. Y como ha dicho la Senadora Ebensperger, no mejoramos mucho yendo a Iquique -es cierto, para serle bien franco-, porque también faltan muchos especialistas allá. Y tampoco tendrán que ir a Tacna, que es peor, donde está el Hospital de la Solidaridad, que se hace cargo de una enorme cantidad de gente que viaja desde Arica, lo que ahora no sucede porque está cerrada la frontera.

Entonces, es una buena noticia esta iniciativa. Yo quiero valorar eso.

Deseo agradecerle a la Senadora Goic, por haber llevado adelante este proyecto, y destacar la comprensión de todos los miembros de la Comisión y del Ministerio, porque, para todas nuestras regiones, sin duda esta es una gran noticia.

Muchas gracias, Presidente .

El señor QUINTEROS ( Vicepresidente ).-

Continuamos, señor Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias, señor Presidente .

Dentro del tiempo del Comité Partido Renovación Nacional e Independientes, el Senador Pugh ha solicitado intervenir en los restantes cuatro minutos.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador Pugh.

El señor PUGH.-

Señor Presidente, sin lugar a dudas, esta pandemia ha desnudado las grandes falencias de este país. Y de eso debemos hacernos cargo. Ya lo vimos en el proyecto anterior, relacionado con la brecha digital.

Hoy la brecha sanitaria es mucho más sensible, porque es precisamente una crisis sanitaria la que estamos enfrentando, y hay que enfrentarla con todos los actores que se encuentren disponibles.

Por eso, la fórmula a la que se ha llegado, que establece que en dos años se va a regularizar un proceso que ha tomado mucho tiempo, va a permitir incorporar médicos especialistas al servicio de salud público, donde se atiende el 80 por ciento de la población del país, tal como ya se ha mencionado.

¿Qué debemos entender? Que esto es solo transitorio. Tenemos que seguir avanzando para lograr algo que ya se ha explicado: el problema de los especialistas es que se concentran básicamente en la Región Metropolitana.

Estudios revelan que dicha región tiene menos del 50 por ciento de la población nacional, pero concentra sobre el 70 u 80 por ciento de médicos en algunas especialidades, lo que hace muy difícil a las regiones poder desarrollarse.

Es fundamental, entonces, mejorar la calidad de vida. Pero también hay que hacerse cargo del perfil epidemiológico y de la forma en que está cambiando todo el desarrollo de las personas.

Hoy se da una situación que antes no experimentábamos: las personas viven mucho más. Tal como lo señaló el Senador Insulza -por su intermedio, señor Presidente -, se requieren entonces especialistas con los que hoy no contamos: los geriatras. Existen muy pocos, casi cien en el todo el país. Obviamente, con esa cantidad no podremos hacernos cargo de nuestros adultos mayores.

Hoy se necesita que los especialistas se dediquen a lo que la urgencia está demandando. Básicamente, van a tener que ser intensivistas o urgenciólogos, porque deberán relevar a todos los que estén en esos cargos.

Tal como lo señaló el Senador Girardi -por su intermedio, señor Presidente -, se está acumulando una gran cantidad de horas médicas, listas de espera gigantescas, para diferentes procedimientos, incluso en cirugías. Para ello vamos a necesitar más profesionales.

De ahí la necesidad de aumentar la cantidad de contratos. No sacamos nada con habilitarlos si no tienen la posibilidad de contar con contratos. Y no me refiero a contratos de veintidós horas, que les permiten trabajar solo un par de horas al día, sino a contratos de cuarenta y cuatro horas, con lo cual estarían con dedicación completa. Así, los hospitales públicos podrían funcionar mañana y tarde para terminar con las listas de espera.

En lo personal, valoro y aprecio mucho el trabajo que realizan los médicos. Dirigí a 420 profesionales cuando fui director de un hospital institucional, y aprendí del juramento que los médicos hacen y que hoy más que nunca están poniendo en práctica.

También debemos entender que un médico es quien prepara a otro médico; de ahí que resulta tan importante disponer de campos clínicos. Cuando esos campos clínicos son financiados por el Estado y las universidades del Estado los están preparando, obviamente debemos tener un plan para poder aumentar la cantidad de cupos que necesita el sector público. Probablemente, esto será materia de una discusión posterior.

Por lo pronto, hay que hacerse cargo de la urgencia.

¡Bienvenidos los médicos!

Destaco también el acuerdo que se pudo lograr entre todos los actores: el Gobierno, las bancadas que representamos y el gremio del sector, que es muy importante considerar, porque no se puede hacer medicina sin los médicos.

Valoro el cambio de nombre del proyecto y espero que los especialistas puedan integrarse lo más rápido posible.

Necesitamos alentar a todos los profesionales del área de la salud; unirnos a ese aplauso colectivo que los chilenos hacen por ellos todos los días a las 21 horas, porque están hoy en esa primera línea, dando todo lo que se requiere.

Finalmente, hago un llamado a la gente para que se cuide, pues la salud es un tema personal. Los médicos solo se van a hacer cargo de lo malo que nosotros hayamos hecho a nuestra salud.

Por eso, señor Presidente, voto a favor.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Continuamos con las intervenciones, señor Secretario.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias, Presidente .

Ha solicitado la palabra la Senadora Allende, en el tiempo que le resta al Comité Partido Socialista, que son siete minutos y cincuenta y tres segundos.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Tiene la palabra la Senadora Isabel Allende.

La señora ALLENDE.-

Señor Presidente , quiero sumarme también a las palabras que se han expresado en torno al trabajo que realizó la Comisión de Salud. Creo que fue prudente que el proyecto se enviara de nuevo a dicho órgano y se abriera ese espacio de discusión.

Yo fui una de las personas que se opusieron la vez anterior, porque, tal como estaba el texto, no me parecía. No solo no me parecía, consideraba muy razonables y sensatos los argumentos que nos entregaron las sociedades médicas, el Colegio Médico, los especialistas. Resulta muy muy importante velar por la calidad de la medicina que se entrega, sobre todo al 80 por ciento de la población que se atiende en el sistema público. Y eso es justamente de lo que se trata.

Creo que el prestigio que ha ganado el Eunacom no lo podemos dejar de lado. Es un instrumento que permite certificar el grado de conocimiento que poseen los médicos extranjeros o chilenos, de modo que puedan ejercen en Chile con tranquilidad. Por algo han pasado esa prueba.

Pero ahora nos hemos concentrado en los especialistas. Y me parece muy bien, porque, aunque esta medida va a ser puntual, transitoria, solo por dos años, considero que es un tema que debe estar presente en la discusión más de fondo. Tenemos que abordar el asunto estructural: no es posible que en nuestro país falte una cantidad importante de especialistas en el sector público y que los que haya sean menos de los que atienden en el ámbito privado; en circunstancias, como hemos dicho, de que el sistema público atiende al 80 por ciento de la población.

Solo en la Región de Valparaíso, hasta el año 2018, faltaban más de 516 especialistas. Entonces, es muy dramático que se concentre la mayoría de ellos en la Región Metropolitana y exista un número escaso en las zonas más alejadas. Esto genera lo que conocemos estructuralmente como las famosas "listas de espera", que dan cuenta de la falta de atención.

Eso desnuda una vez más lo que es el actual sistema. No tenemos garantizado un sistema único de salud, un plan único que permita atender con dignidad y eficiencia.

Lamentablemente, una vez más evidenciamos el contraste que existe entre quienes se atienden en el sector público, donde hay largas listas de espera, y quienes se atienden en el sector privado, donde hay más especialistas y, obviamente, son otras las condiciones.

Entonces, me parece muy importante que avancemos en esta materia. Me alegro del espacio técnico y de diálogo que se va abrir, del cual nos contaba la Presidenta de la Comisión de Salud , para seguir tratando los temas más estructurales.

¡Claro!, hay que poner más recursos, porque una vez que se forman los especialistas deben tener garantizados sus cargos, garantizadas sus becas. No tiene sentido hacerlos estudiar o pasar por exámenes de certificación si después no van a estar asegurados. Y ese es un gran tema. Lamentablemente, a pesar de los esfuerzos que hemos hecho en los últimos años, en que se ha aumentado el presupuesto en salud, como se ha visto desde el Gobierno pasado -supongo que el Gobierno actual no los va a reducir en tiempos de pandemia, obviamente-, sigue habiendo mucha diferencia entre un médico del sector público y uno del sector privado.

Tenemos otras deficiencias estructurales, pero, por tiempo, no me voy a referir a ellas.

Sin embargo, resulta vergonzoso que, encima de eso, o sea, de la falta de especialistas en la salud pública y de la falta de recursos, se gaste dinero en el sector privado al contratar clínicas para dar atención garantizada. ¡Doblemente falla!

Finalmente, quiero referirme a algo que es importante: con la tremenda crisis que tenemos, producto de esta pandemia, resulta doloroso que no se hayan tomado en consideración a los consultorios de atención primaria. Si hay un nivel local, territorial, que conoce a las familias, su composición, sus vulnerabilidades, sus enfermedades, sus necesidades, es el de los consultorios de atención primaria.

Y el Gobierno ha mostrado una gran tozudez al no querer escucharlos y concentrarse solamente -como todos los días oímos- en las cifras, en los ventiladores mecánicos, en fin. El problema es mucho más que eso.

Por lo tanto, hago un llamado a que consideremos también a la atención primaria.

Aprovecho de decir, una vez más, que debemos rendir nuestro homenaje a aquellos que día a día arriesgan su salud, su vida y la de sus familiares. Estoy hablando no solo de los médicos, sino de todo el personal de salud.

Por eso duele escuchar -y lo oímos en esa sesión, a mi juicio, histórica en la cual recibimos a todos los gremios de la salud- la gran cantidad de demandas que todavía no han sido bien resueltas, no solo en cuanto a las horas extraordinarias, sino también en lo que respecta a la aplicabilidad de los programas de gestión.

Por suerte ahora se empiezan a poner remedios.

Pero aún falta habilitar residencias para aquellos que no pueden cumplir la cuarentena, y así evitar que contagien a sus familiares. Eso, entre muchos otros temas que todavía están pendientes.

Nosotros, como Senado, mandamos los oficios. Esperemos que el Ministerio de Salud nos responda. Tenemos el compromiso de hacer una sesión especial con el Ministro para hacerle ver estas materias, que no son menores.

No es posible que no seamos capaces de proteger, ¡de proteger!, a todo el personal sanitario que trabaja en esta pandemia con los elementos básicos, con los cuales no siempre cuenta.

Por supuesto, votaré a favor.

Considero que este proyecto avanza en una línea muy potente y necesaria, dada la tremenda crisis que se ha generado en nuestro país por la falta de especialistas y las tremendas listas de espera, lo que ha significado a veces la mortalidad o el agravamiento de las enfermedades.

Por estas razones, voy a respaldar la iniciativa.

Espero que, después de estos dos años, Conacem certifique y haga las exigencias correspondientes, porque, si hay algo que no queremos, es bajar la calidad de la atención. Es importante que los médicos se formen en aulas universitarias y que las pruebas sean exigentes. Siempre se ha reconocido que la formación de los médicos debe mantenerse como una de las mayores exigencias, por cuanto trabajan con la vida humana. Por tanto, no podemos disminuir la calidad en eso.

Ese elemento siempre tiene que estar presente en el horizonte. Y entiendo que eso era lo que motivaba a las sociedades médicas que nos escribieron en la primera sesión en que tratamos este tema.

He dicho.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Gracias, Senadora.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Señor Presidente , no hay más inscritos para el uso de la palabra.

El señor QUINTEROS ( Vicepresidente ).-

¿Queda tiempo de la bancada socialista?

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Sí. Queda un minuto y veintinueve segundos.

El señor QUINTEROS ( Vicepresidente ).-

Mejor voy a aprovechar después, en la fundamentación.

En votación general y particular el proyecto.

--(Durante la votación).

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Voy a consultar por la opción de voto de las señoras y los señores Senadores.

Senador señor Pedro Araya, ¿cómo vota?

El señor ARAYA.-

A favor, señor Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

Senador señor Bianchi, ¿cómo vota?

El señor BIANCHI.-

Brevemente, señor Secretario , quiero partir felicitando el acuerdo que se logró en la Comisión de Salud.

Efectivamente, este proyecto significa un enorme avance y resuelve una situación de urgencia en todo nuestro país, fundamentalmente en las regiones extremas, donde la carencia de médicos especialistas es de todos los días.

Muchas personas de Puerto Natales y de la Región de Magallanes, en general, tienen que acudir a Argentina, porque en sus zonas extremas sí cuenta con los especialistas que nuestro país no tiene.

Por eso, valoro que se habilite de manera temporal, por dos años, a estos médicos extranjeros especialistas, quienes, sin duda alguna, van a llenar el enorme vacío que existe en Chile en esta materia.

Las largas listas de espera y los traslados que todos los días presenciamos de magallánicas y magallánicos a otras ciudades del país, porque no están los especialistas en nuestra región, dan cuenta de una situación de dolor y de preocupación para quienes vivimos en zonas extremas.

Por lo tanto, quiero valorar el que podamos contar ahora con una cantidad significativa de médicos especialistas.

Espero que el Gobierno -este y los que vengan- se coloque como misión final llenar los casi cuatro mil cupos de especialistas que hoy día nos faltan a lo largo de todo Chile.

Voto favorablemente.

El señor QUINTEROS ( Vicepresidente ).-

Continuamos, señor Secretario .

¿Señor Secretario ?

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Me recuperé, señor Presidente .

Se me había caído la señal.

¿Cómo votó el Senador señor Bianchi?

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

A favor.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

Senador señor Castro, ¿cómo vota?

El señor CASTRO.-

A favor, señor Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

Senador señor Chahuán, ¿cómo vota?

El señor CHAHUÁN.-

A favor, señor Secretario .

Estas son las oportunidades en que la política restablece el diálogo y se vuelve a convertir en un instrumento para resolver los problemas de los chilenos.

Voto favorablemente, señor Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

Senador señor Coloma, ¿cómo vota?

Senador señor De Urresti, ¿cómo vota?

Hay que activarle el micrófono al señor Senador.

Ahora sí, Senador.

El señor DE URRESTI.-

Gracias.

Voy a fundamentar el voto, porque aquí hay algo extraño.

Todos los gobiernos, todas las autoridades, han señalado que vamos a aumentar en cobertura de médicos especialistas. Y eso no se produce.

Aquí existe una situación que mantiene, especialmente en el caso de los especialistas, una limitación. Y eso debe ser denunciado.

Esta iniciativa avanza -me parece bien la negociación-, pero aquí hay gato encerrado: siempre los especialistas están en el sector privado y permanecen solo un par de horas en el sector público. En determinadas ciudades atienden especialistas, pero en otras, pese a tener una gran cantidad de población, no. Se registra una sobreconcentración en la Región Metropolitana.

Entonces, hay que sincerar las cosas.

A mí me gustaría contar con más información de las sociedades médicas, y debiera haber más control en cuanto a la formación. Es necesario saber cuánta gente se está formando y cuántas universidades públicas tenemos en ello, pues no parece suficiente la formación actual.

Entonces, debemos sincerarnos en esto.

Me da la impresión de que hay un poquito de juego de máscaras en muchos de estos aspectos que no van al tema de fondo.

Nosotros necesitamos más médicos, en especial comprometidos con el sector público, formados para servir a la gente, para atender a los más necesitados, para estar donde se los requiere y no simplemente en los lugares de mayor confort, como las clínicas o en las grandes ciudades.

Insisto en mis observaciones.

Voy a votar a favor, porque creo que el proyecto es un avance, pero sigo manteniendo mis dudas respecto a la distribución y al control que se ejerce sobre las especialidades, tanto para la supervisión y el estándar de calidad como para la oferta de los especialistas.

Creo que el Gobierno, principalmente el Ministerio de Salud, no debiera permitir aquello.

La sociedad se ha cansado de muchos abusos y aquí claramente hay una asimetría, una situación que no es adecuada.

Voto a favor, señor Presidente.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

El Senador señor De Urresti vota a favor.

Senador señor Durana, ¿cómo vota?

El señor DURANA.-

Voy a justificar mi voto, señor Secretario .

Voto a favor porque las regiones extremas van a ser tremendamente beneficiadas por la incorporación de médicos especialistas, a fin de permitir atender efectivamente la salud de las personas, en especial, las de regiones como la de Arica y Parinacota, que se encuentra a 300 kilómetros de la ciudad más cercana de Chile, por lo que, inevitablemente, muchos de sus habitantes van a atenderse a la vecina ciudad de Tacna, Perú.

Esta iniciativa va a permitir que la gente pueda atenderse en Chile en igualdad de condiciones, de acuerdo con el mismo grado de responsabilidad que se les exige a los médicos nacionales, y significará un aporte en tiempos de pandemia, lo que, obviamente, ante la gran necesidad de incrementar profesionales del área de la salud, será tremendamente valorado por la comunidad, y en especial por quienes vivimos en zonas más extremas.

Voto a favor, señor Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

El Senador señor Durana vota a favor.

Senadora señora Ebensperger, ¿cómo vota?

La señora EBENSPERGER.-

A favor, señor Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

La señora Senadora vota a favor.

Senador señor Elizalde, ¿cómo vota?

El señor ELIZALDE.-

A favor.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

El Senador señor Elizalde vota a favor.

Senador señor Galilea, ¿cómo vota?

El señor GALILEA.-

A favor.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

El Senador señor Galilea vota a favor.

Senador señor García-Huidobro, ¿cómo vota?

Senador señor García Ruminot, ¿cómo vota?

Senador señor Girardi, ¿cómo vota?

El señor GIRARDI.-

A favor.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

El Senador señor Girardi vota a favor.

Senadora señora Goic, ¿cómo vota?

La señora GOIC.-

A favor.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

La Senadora señora Goic vota a favor.

Senador señor Guillier, ¿cómo vota?

El señor GUILLIER.-

¿Me permite, señor Secretario ? Voy a fundamentar el voto.

Primero, quiero agradecer tanto a los médicos chilenos que han estudiado en el extranjero y que han vuelto a Chile como a los médicos extranjeros que han buscado en nuestro país un espacio para hacer su contribución y su aporte a la calidad de vida de la gente.

En la Región de Antofagasta el 40 por ciento de los médicos de la red pública son extranjeros. Y si consideramos las horas médicas, más del 55 por ciento de ellas son cubiertas por doctores extranjeros. Ellos están en la red pública primaria y hospitalaria.

Por lo tanto, a ellos el agradecimiento, sobre todo, en esta hora muy difícil.

Ahora, ¿por qué no un simple reglamento y por qué es necesaria una legislación? Porque el proceso de acreditación no solo es lento y burocrático -llega a demorar hasta dos años-, sino que también muchas veces a los médicos o a las doctoras se les somete a un proceso arbitrario, injusto, con permisos que se les niegan o que se les descuentan de los días de descanso, o con discriminación a la hora de los contratos.

Por consiguiente, aquí hay un problema mayor por resolver no solo respecto del proceso de acreditación en lo estrictamente académico-técnico, sino también en cuanto a los intereses y las barreras que se cruzan, en una profesión que puede ser muy lucrativa para algunos, pero que perjudica al resto de los chilenos que se quedan sin atención.

La buena noticia de esta noche es que el 80 por ciento de los chilenos verán mejorada, sobre todo en regiones, su atención con más certeza, con más seguridad, porque se incorporarán más de mil doscientos médicos que, de otra manera, tendrían que esperar quizás hasta dos años para poder integrarse al sistema.

Otra cosa que no quiero dejar pasar es la necesidad de darles un trato justo, no discriminatorio, para que esos médicos extranjeros puedan ejercer en Chile y ojalá quedarse en nuestro país. Si no fuese por ellos, en el norte de Chile, y particularmente en mi región, tendríamos un desastre sanitario. De eso estamos hablando.

Por eso, esto requiere ser abordado con una legislación, que va a durar dos años. Y espero que al entregarles estabilidad a los médicos extranjeros y al personal de la salud de formación en el exterior (por cierto, también técnicos), ellos se vayan metiendo más en el conocimiento del sistema de salud chileno y puedan rendir en su momento los exámenes respectivos y quedarse en nuestro país, en donde serán siempre bienvenidos y recibirán el agradecimiento de la ciudadanía, que, entre paréntesis, valora extraordinariamente bien, por lo menos en la Región de Antofagasta, el aporte de los médicos extranjeros.

Voto a favor, señor Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

El Senador señor Guillier vota a favor.

Senador señor Harboe, ¿cómo vota?

El señor HARBOE.-

Señor Presidente , si me permite fundamentar mi voto.

El señor QUINTEROS (Presidente).-

Tiene la palabra, Senador.

El señor HARBOE.-

Señor Presidente , lo primero que corresponde es agradecer a los cientos de médicos, hombres y mujeres, nacionales y extranjeros, que hoy día están en la primera línea cuidándonos y ayudando a la gente y arriesgando su vida, ya con algunos mártires. Y no solo a los médicos, sino a todo el personal de salud en general.

En segundo lugar, evidentemente, tenemos una situación extremadamente desigual.

Por una parte, a nivel regional contamos con menos médicos de los que se requieren para cubrir las necesidades, tanto en salud primaria como en otro tipo de atención. Y eso es extremadamente delicado. Dicha necesidad se incrementa o se manifiesta aún más tratándose del sector público. Ello es extremadamente delicado, porque en muchos lugares lamentablemente no están los grados, no están los cargos creados para contratar médicos para nuestras regiones.

Eso se traduce, en la práctica, en parte de la indignación de los ciudadanos, quienes señalan con razón que las personas que viven en Santiago tienen más probabilidades de sobrevida frente a una enfermedad que aquellas que habitan en regiones. Y la gente que vive en Santiago y se atiende en la salud privada tiene aún más posibilidades de sobrevida. En consecuencia, se requiere un cambio en esta materia.

He escuchado muchos discursos, pero hay gente acá que lleva diez, doce, quince, veinte años trabajando en los temas de la salud, por lo que lamento profundamente que no se haya logrado, por ejemplo, poner coto a la influencia de las sociedades médicas. ¡Es francamente inaceptable que las sociedades médicas definan cuántos oftalmólogos, cuántos anestesistas debe haber en el país y que, existiendo tantos candidatos a ser oftalmólogos, anestesistas, mantengan una determinada cantidad, demasiado limitada, justamente para conservar los precios!

A mí me parece bastante inaceptable que después de tantos años no se hayan hecho modificaciones, tanto en Gobiernos anteriores como en este Gobierno. Me parece francamente inaceptable.

Una preocupación que tengo es que si uno establece un mecanismo sin ningún tipo de barrera de entrada puede que haya médicos sin las competencias adecuadas. Ahora, ¿es el momento para estar exigiendo esto? Yo creo que no.

Por eso, dada la emergencia de la situación, voy a votar a favor.

Lo que sí me preocupa, tal como dijo en su oportunidad el Colegio Médico, es que no vaya a ser cosa que terminemos con los médicos no certificados en el sector público y los médicos certificados en el sector privado. Eso sería extremadamente delicado.

Por tal razón, pienso que también es importante lo que se hizo en la Comisión de Salud, particularmente por la Senadora Carolina Goic, para poder avanzar en esa materia.

En consecuencia, voy a votar a favor.

Pero -insisto- me parece que también debemos enfrentar el tema de fondo: no es posible que Chile esté cooptado por las sociedades médicas. Aquí hay una necesidad estratégica que debe ser enfrentada por el Gobierno de turno.

Voto a favor.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

El Senador señor Harboe vota a favor.

Senador señor Huenchumilla, ¿cómo vota?

El señor HUENCHUMILLA.-

Señor Secretario , voy a fundamentar mi voto brevemente.

A mi juicio, este es un gran proyecto de ley. Es un gran proyecto de ley porque esta pandemia es de las más graves que ha sufrido la humanidad en siglos.

La iniciativa fue muy bien trabajada por la Comisión de Salud y muchos otros Senadores. Y creo que eso debemos reconocerlo. ¿Por qué? Porque el proyecto consigue dos cosas. Por un lado, afrontar la crisis de manera excepcional, permitiendo una regla de carácter excepcional, cual es que a los médicos se les exima por dos años de la acreditación o de la certificación. Pero, al mismo tiempo, la iniciativa limita esta medida a dos años, por lo que se resguarda la calidad de formación de los médicos, porque estos profesionales trabajan ni más ni menos que con la vida de las personas. Entonces, me parece que este proyecto logra bien hacer compatible la urgencia con la necesaria formación.

Dicho eso, tengo cuatro cosas que hacer presente.

En primer lugar, acá se establece un marco de facultades para el Gobierno y, por lo tanto, el éxito de esta iniciativa dependerá de la gestión que haga el Ministerio de Salud adecuadamente entre los distintos sistemas hospitalarios que hay en el país.

En segundo lugar, el plazo de dos años pasa volando. Entonces, cuando este se cumpla, debemos preocuparnos de contar con una política definitiva respecto de esta situación.

En tercer lugar, tenemos que prever que en la próxima Ley de Presupuestos se establezcan los recursos suficientes para que esta contratación sea efectiva en el curso del año 2021, y habrá que hacer lo mismo en la Ley de Presupuestos del año siguiente.

Y, por último, concuerdo plenamente con lo señalado por la Senadora Isabel Allende en cuanto a que la salud primaria es vital. En consecuencia, el Gobierno debe trabajar con todos los sistemas, pero también con las municipalidades y la salud primaria, pues ellas son el Estado más cerca de la gente, y es allí adonde acuden primero los sectores más necesitados.

Por todas esas razones, señor Presidente, voto favorablemente este proyecto.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

El Senador señor Huenchumilla vota a favor.

Senador señor Insulza, ¿cómo vota?

El señor INSULZA.-

Voto a favor, señor Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

El Senador señor Insulza vota a favor.

Senador señor Kast, ¿cómo vota?

El señor KAST.-

Voy a justificar mi voto, señor Presidente .

Me sumo a un proyecto que en un comienzo de verdad parecía muy peligroso y que podría haber provocado un daño tremendo a la salud pública en Chile.

Quiero felicitar a los miembros de la Comisión de Salud y al Ejecutivo por haber dado un vuelco y logrado que esta iniciativa, que podría haber sido un riesgo para la calidad de la salud pública, se transformara en un proyecto positivo, necesario, relevante, con pertinencia, que efectivamente moverá la aguja en el sentido correcto.

De hecho, tiene la virtud de plantear un tiempo acotado por dos años, dado que la certificación de los especialistas está tomando un tiempo que es realmente excesivo y no corresponde. Y espero que también este proyecto genere la posibilidad de discutir después, en el mediano plazo, cómo funciona ese sistema.

Por lo tanto, me alegra que el nombre de la futura ley ya no sea "Eunacom", porque no tiene ninguna relación con aquello, y ojalá que nos permita contar con más especialistas en regiones.

La Región de La Araucanía es de las que más necesita este proyecto y, por lo mismo, creo que va en la dirección correcta.

Dicho lo anterior, aprovechando la instancia de este proyecto, quisiera adicionalmente agradecer a muchos médicos, chilenos y extranjeros, que han pasado por el Eunacom, por certificaciones muy duras, y que son parte de esa comunidad. Y espero que el Gobierno se comprometa también a fomentar la formación de especialistas.

Si hoy día la pandemia no ha causado el daño que podría haber generado, sabiendo que estamos en las horas más críticas, ha sido en buena medida por la calidad de nuestros funcionarios de la salud. Además del esfuerzo que ha hecho el Gobierno, sin lugar a dudas, estos funcionarios en cada rincón de Chile han sido los que han permitido salvar muchas vidas.

Por lo señalado, voto a favor de este proyecto.

Felicito una vez más a la Comisión de Salud por haberle dado un giro a una iniciativa que podría haber hecho mucho daño, transformándola en una medida muy positiva. Y también felicito al Ministerio de Salud por haber sido parte de este proceso.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Gracias, Senador.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

El Senador señor Kast vota a favor.

Senador señor Lagos, ¿cómo vota?

Senador señor Latorre, ¿cómo vota?

El señor LATORRE.-

Voy a fundamentar brevemente mi voto, señor Secretario , señor Presidente .

La semana pasada retiré mi apoyo a este proyecto, dado que consideraba que en un contexto de pandemia si bien es necesario relajar los estándares de acreditación por la necesidad sanitaria, esta iniciativa en sí misma no es imprescindible, porque el Ejecutivo ya cuenta con facultades amplias para poder contratar, incluso así lo dice el decreto sanitario, a alumnos de sexto, de séptimo año o a médicos extranjeros para cubrir en contexto de pandemia las necesidades sanitarias.

Por eso, atendiendo al contexto de pandemia, retiré mi apoyo.

Sin duda, creo que el Senador Navarro tenía una buena intención con esta propuesta, pero me preocupa que a partir de la pandemia se esté extendiendo por dos años la posibilidad de bajar estos estándares de calidad, que por lo demás son estándares internacionales, para médicos especialistas tanto extranjeros como chilenos.

Aprobando normas como esta lo único que vamos a hacer es seguir profundizando la segregación y la desigualdad: una salud pública para pobres, una salud privada para ricos. Y, a la vez, continuaremos promoviendo la transferencia de recursos del sector público al privado, porque en el sector privado estarán los especialistas con acreditación, mientras que en el sector público se encontrarán los especialistas sin acreditación, y eso puede ser una realidad permanente que contribuya a la segregación de nuestro sistema de salud.

Yo espero que en la Cámara de Diputados se acote el período de relajamiento de estándares solo a la pandemia y que no se extienda por dos años.

Por eso voy a votar en contra, señor Presidente.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Gracias, Senador.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

El Senador señor Latorre vota en contra.

Senador señor Letelier, ¿cómo vota?

El señor LETELIER.-

Señor Presidente , quiero plantear solo dos ideas.

Primero, la necesidad de especialistas no es un problema de los territorios que habitamos. El problema es que no existan especialistas en la salud pública, y eso ocurre a lo largo de todo el territorio nacional.

La ausencia de especialistas a 100 kilómetros de Santiago, en la capital de O'Higgins, es dramática. La gente debe viajar desde Paredones , desde Santa Cruz no a Rancagua, sino que todos deben trasladarse a Santiago para buscar especialistas, oncólogos, traumatólogos, dermatólogos o muchos otros, porque en el sector público de nuestra región hay escasez de especialistas.

Creo que el desafío es generar las condiciones para que muchos especialistas que están en nuestro país, extranjeros o chilenos que estudiaron en el exterior, efectivamente puedan mostrar sus conocimientos y sumarse a aquellos que cuentan con esa capacidad.

Este proyecto es absolutamente distinto al que inicialmente se presentó, porque en primera instancia se proponía que esto abarcara a todos los médicos generales, sin condiciones de control, y eso evidentemente traía riesgos, tal como lo plantearon varios colegas que son médicos, médicas.

En esta ocasión voy a votar a favor, entendiendo que la medida propuesta es por un período acotado y que se construyó un acuerdo para este fin.

Pero no puedo dejar de expresar mi inquietud, como lo señaló el Senador Latorre, pues se deberían perfeccionar los mecanismos para asegurar que no baste con que alguien diga que es especialista en los certificados, sino que ya deberíamos tener una homologación entre nuestro país y muchas otras naciones, para saber qué especialistas están bien formados en otros países y cuáles necesitan ciertos filtros adicionales.

En todo caso, como hay un acuerdo, voto a favor, señor Presidente .

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Gracias, Senador.

Continuamos.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Senador señor Moreira, ¿cómo vota?

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Senador Moreira.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Ahí está activado el micrófono.

El señor MOREIRA.-

Sí.

El Senador Moreira, el Honorable Senador Moreira vota a favor.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

El Senador señor Moreira vota a favor.

Senador señor Navarro, ¿cómo vota?

Senador señor Navarro, ¿cómo vota?

El señor NAVARRO.-

Voy a fundamentar mi voto, señor Secretario .

Señor Presidente , ¡más médicos para Chile!, es una consigna, una lucha que levantamos hace muchos años.

En el 2016, 245 alcaldes -incluyendo al alcalde De la Maza , de Las Condes- firmaron una carta para exigir que médicos extranjeros, médicos cubanos, médicos venezolanos vinieran a Chile, porque aquí la gente se muere esperando una operación quirúrgica o a un especialista.

No es un tema de calidad: ¡la gente se muere!

Los médicos chilenos no quieren irse a las zonas extremas. Y los médicos extranjeros y los médicos chilenos que estudiaron en el exterior han venido a suplir aquello de manera muy solidaria.

Por tanto, yo espero que los mil médicos comprometidos, no por el Ministro , sino por el abogado del Ministerio, porque el Ministerio no asistió a este debate en la Comisión de Salud, sean exigidos por la Oposición del Senado, constituida como tal, porque hoy día vamos a aprobar la ley en proyecto, pero en verdad ahora falta que el Gobierno diga cuántos médicos especialistas contratará.

Señor Presidente, hay 5 mil médicos extranjeros en Chile. De ellos, cientos dieron el examen teórico del Eunacom y efectivamente pueden ser contratados por aquel.

Este proyecto trae una buena nueva, y por eso me alegro de haber sido autor de la moción respectiva y de haber puesto sobre la mesa este tema, de lo contrario no se debate, porque la oposición del Colegio Médico, de la Asofamech y de la Conacem, entidades privadas que se resisten a aquello de manera permanente, no es lícita, porque... ()... a manos del Estado, no ha permitido que ellos estén.

falla de audio en transmisión telemática

Hay 2.400 médicos chilenos... ()... especialistas y no hay capacidad en Conacem, no hay capacidad en esta entidad privada para tomarles el examen. Ahora podrán incorporarse y yo me alegro de verdad, de corazón, porque muchos chilenos van a tener acceso a ello, porque hoy día no cuentan con esa alternativa.

falla de audio en transmisión telemática

Lamento, sí, que médicos extranjeros que estén trabajando en el sistema no puedan incorporarse. En particular, aquellos que hoy día laboran no tendrán ese acceso.

Señor Presidente, aquí no hablamos de calidad, sino de la posibilidad de salvar vidas.

El colapso de estos 108 mil contagiados, del millón de contagiados potenciales que hay nos obliga a tomar medidas extraordinarias. Y yo me alegro de que este proyecto de ley se apruebe.

Llevo treinta años en Fonasa, y voy a seguir luchando para que la salud pública en Chile sea de calidad; pero este es el momento de luchar contra la muerte, de luchar contra una pandemia. Y bienvenidos todos los que quieran sumarse a ello.

Agradezco el apoyo leal de la Senadora Provoste, quien firmó este proyecto. Lamento el retiro del Senador Latorre, porque la verdad es que esta iniciativa sí va a contribuir. Y espero que el Colegio Médico deje de actuar como lo ha hecho; que piense realmente que Chile requiere estos médicos, y no solo realice una defensa corporativa.

No voy a recordar la frase que decía el propio Salvador Allende del Colegio Médico, que señalaba en otro contexto, pero a ratos me parece...

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Se terminó el tiempo de Su Señoría.

El Senador señor Navarro vota a favor.

Senadora señora Órdenes, ¿cómo vota?

La señora ÓRDENES.-

Voto a favor, señor Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

La Senadora señora Órdenes vota a favor.

Senador señor Ossandón, ¿cómo vota?

El señor OSSANDÓN.-

A favor, Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

El Senador señor Ossandón vota a favor.

El Senador señor Pérez, ¿cómo vota?

El Senador señor Pizarro, ¿cómo vota?

El Senador señor Prohens, ¿cómo vota?

El señor PROHENS.-

Secretario, voto a favor de este proyecto. Sin embargo, quiero decir un par de cosas.

Hoy día estamos hablando de médicos. Pero yo me imagino que los médicos no van a ser contratados para atender consultas: tendrán que hacer intervenciones quirúrgicas y un sinnúmero de otras cosas que conlleva la especialidad de quienes se pretende contratar.

Por lo tanto, si esto no va a acompañado -y lo digo con conocimiento de causa, porque hoy día sostuve una reunión en un hospital de mi Región- del equipo con que debe contar ese médico para entrar a un pabellón, esto tampoco nos va a servir mucho.

Está el señor González escuchando, y creo que también ese tema lo deben de tener resuelto, porque una de las carencias más grandes que hay en regiones es la falta de complementación de los médicos con su equipo para poder realizar los trabajos que sean necesarios.

Una de las condiciones más importantes que se dan respecto de las regiones para los efectos de contar con médicos extranjeros es que ellos no tienen arraigo en el país, y por eso buscan un lugar donde trabajar y establecerse. Esto es muy relevante para todas las regiones con esta carencia de especialistas.

Asimismo, pienso que el tema de las sociedades médicas, como lo dijo el Senador Harboe, es algo que debe analizarse, estudiarse en conjunto con el Ministerio, porque ese es un tremendo cuello de botella. No puede ser que estas sociedades sean las que nos digan cuántos especialistas por cada área deberán existir en nuestro país, porque, como lo señaló muy bien Su Señoría, ellas están cuidando su nicho. Pero a nosotros nos interesa contar con más otorrinos, más dermatólogos, más oftalmólogos, a fin de dar mayores espacios de atención y terminar con las listas de espera, que son consecuencia de la falta de médicos especialistas necesarios para poder atender a toda la población.

Por último, me parece que lo de las once horas de los médicos en la salud pública no debiera continuar, porque muchos de ellos concurren esas horas para firmar convenios con los hospitales regionales y así poder operar a sus pacientes privados. Mínimo debieran ser veintidós horas, porque ¿qué hace un médico atendiendo dos horas diarias en un hospital público? Absolutamente nada, o muy poco. Necesitamos ampliar eso. Si duplicamos las horas de esos médicos, vamos a doblar las horas médicas en los hospitales públicos.

Por lo tanto, ahí hay un tema que debiéramos trabajar como Congreso, junto con el Ministerio, para revertir algunas de las cuestiones que se dan día a día, que se comentan pero que no son abordadas.

Así que voto a favor de este proyecto, porque es muy trascendente en especial para las regiones. Uno de los problemas de la sobrepoblación que se registra en Santiago es que los médicos se van a estudiar afuera, pues no tienen cabida para hacer las especialidades, por los pocos cupos que existen. Más de trescientos médicos por año no pueden estudiar especialidades porque no están los... (

falla de audio en transmisión telemática).

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Se le terminó el tiempo a Su Señoría.

El Senador señor Prohens vota a favor, como señaló.

Senadora señora Provoste, ¿cómo vota?

La señora PROVOSTE.-

Señor Presidente , creo que esta discusión nos permite hacer un abordaje mucho más integral respecto de los problemas que aún subsisten en el sector de salud y de salud pública en particular.

Esta iniciativa pone de relieve que hoy día los médicos puedan concentrar sus esfuerzos en no tener ninguna otra distracción más que prestar la debida atención, que es tan requerida en estos tiempos.

Sabemos que el Colegio Médico ha hecho un gran esfuerzo por mantener un estándar adecuado en materia de calidad de la atención de aquellos que acceden al sistema de salud a través del examen único nacional, con el propósito de dar certezas en el sentido de que quienes están al frente de la atención realmente tengan los conocimientos, las capacidades y las habilidades para resolver los problemas de salud de la población.

Eso lo quiero valorar, porque aquí en ningún momento el Colegio Médico ha estado disponible para eliminar el examen único nacional que le da seguridad, certezas a la ciudadanía.

Además, quiero aprovechar este momento para hacer un público reconocimiento a la labor del Colegio Médico particularmente en esta pandemia. Ha sido una voz que de verdad ha permitido alertar, anticiparse, aunque no siempre se lo ha escuchado como quisiéramos; pero también en las regiones esta entidad ha jugado un rol muy importante en la aglutinación de las organizaciones sociales.

¿Qué nos preocupa? Que hoy día, frente a la emergencia sanitaria que estamos viviendo, el Gobierno, a través del Ministerio de Salud, se aproveche de ciertas iniciativas: por ejemplo, seguir insistiendo en el seguro catastrófico de salud, donde se busca inyectar recursos públicos al presupuesto del sector salud para comprar tratamientos solo de aquellos que puedan pagar el deducible que les exige dicho seguro; es decir, continuar profundizando una lógica de mercantilización de la salud que, por cierto, nosotros no vamos a apoyar.

Señor Presidente , dado el marco de la catástrofe que estamos viviendo y que el Gobierno tiene las facultades, conforme lo ha establecido la Comisión de Salud, para permitir que se flexibilice el Eunacom, lo que buscamos es que hoy día nadie se distraiga en que debe rendir este examen, sino que se dedique a brindar atención especial para salvar vidas, que es el propósito fundamental.

Quisiéramos que la misma disposición del Ministerio de Salud para buscar acuerdos con la Comisión la pudiéramos ver también en el Ministerio de Educación para resolver de una vez por todas y dar certezas a los profesores y a las profesoras de Chile en el sentido de que no serán sometidos este año a la evaluación docente, con el propósito de apoyar desde el punto de vista biopsicosocial a los estudiantes sin tener que estar pensando cómo en estas circunstancias tan extraordinarias van a rendir el proceso de evaluación docente.

Es similar a lo que hoy día estamos viviendo, y por eso queremos que se concentren en la emergencia.

Voto a favor.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Gracias, señora Senadora.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

La Senadora señora Provoste vota a favor.

Senador señor Pugh, ¿cómo vota?

El señor PUGH.-

Voto a favor, señor Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).- Gracias.

El Senador Pugh vota a favor.

Senador señor Quintana, ¿cómo vota?

El señor QUINTANA.-

Voy a fundamentar, señor Presidente .

Efectivamente, lo que tenemos es un porcentaje de letalidad que está subiendo día a día. Por supuesto, a nivel de contagiosidad estamos dentro de los doce o quince países con más contagios en el mundo, incluso superando a Brasil en cuanto al porcentaje de contagiosidad. Y si las cifras no son más dramáticas aún de lo que podrían ser se debe fundamentalmente al recurso humano compuesto por los médicos, los técnicos, las enfermeras, los kinesiólogos, por todos los trabajadores de la salud, que ya tienen sobre los cuatro mil contagiados.

Diría que de todos los proyectos que se han aprobado (económicos, sociales y también algunos de alcance sanitario) en los noventa días de pandemia que justamente se cumplen ahora, este claramente es el que se mete en los establecimientos clínicos, hospitalarios, e incide directamente en la salud.

Por eso reitero: esta iniciativa perfectamente pudo haberse desechado la semana pasada. Afortunadamente, eso no ocurrió. Y destaco el rol de la Comisión de Educación, pero también de quien impulsó este proyecto, el Senador Navarro, y hay que reconocerlo. Las pequeñeces en esto no sirven, como venir a decir que este es un proyecto totalmente distinto; que el anterior era casi un peligro para la sociedad. ¡Por favor! La esencia del proyecto es exactamente la misma. Dijimos: "Más de 1.300 médicos". En su gran mayoría van a ser venezolanos, y ya están inscritos los que podrán acceder a esto.

No es que un título o una especialidad sea algo que se compre en la calle; nadie inventa una especialidad para irse a certificar o para ser contratado. Eso no es posible.

Señalamos también que iba a ser por dos años: ¡es por dos años!; que era para los especialistas: claro, se sacó a los médicos generales, pero siempre se indicó que los médicos especialistas eran los que se requerían en la primera línea; siempre se habló de que iba a ser sin Eunacom: ¡es sin Eunacom!, más allá de que se cambie el nombre.

Entonces, basta una lectura somera de esta iniciativa y de la indicación sustitutiva del Gobierno para darnos cuenta de que va absolutamente en la línea del proyecto original.

En La Araucanía esto era necesario hace una semana, cuando casi lo dejamos caer, y es más necesario hoy día.

El propio Ministro Mañalich hace tres semanas le hizo un llamado al Congreso a aprobar este proyecto en los mismos términos en que estaba. Sin duda, hay que reconocer el aporte que se le hizo en la Comisión: existe más regulación. No es efectivo que haya habido un relajo en la calidad. ¡Cuidado! Uno tiene que mirar todos los antecedentes.

Por de pronto, la Contraloría ¿qué ha señalado respecto del examen de Eunacom? En sus dictámenes ha dicho que no aporta mayor calidad al proceso formativo como ente certificador de quienes finalmente van a los centros asistenciales.

A mi juicio, tenemos mucho que avanzar en formar especialistas; en que no se dejen presionar los órganos públicos y autónomos como el Congreso. Por supuesto, también hay que escuchar fundamentalmente a todas las sociedades que comparecen.

Creo que este es un gran proyecto, y lo ha sido siempre.

Voto a favor.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

El Senador Quintana vota a favor.

Senador señor Quinteros, ¿cómo vota?

El señor QUINTEROS.-

Secretario, tal como se ha dicho acá, esta es una medida extraordinaria.

Esta normativa va a permitir disponer de más personal de salud por los próximos dos años, pero no agota la gran discusión de fondo: ¿cómo nos hacemos cargo como país de la gran brecha de especialistas que hoy existe en el sistema público de salud?

¡Ese es el gran tema!

Para eso necesitamos que el Estado genere las condiciones a fin de preparar más especialistas, y que estos puedan incorporarse al sistema público de salud. Este proceso debe ser ampliamente participativo, abarcando a todos los sectores, llámese colegios profesionales, universidades, autoridades sanitarias.

De igual manera, y sin que ello signifique sacrificar en grado alguno el estándar de calidad de los profesionales sanitarios que tienen hasta el día de hoy, considero preciso revisar cómo somos capaces de adaptar nuestros procesos de certificación, revalidación, reconocimiento de títulos, de tal forma que estos sean más expeditos y así permitir un acceso más rápido, sobre todo a las regiones en los casos... ... necesarias para que estas puedan desempeñarse a lo largo de todo el país.

(falla de audio en transmisión telemática)

Como hablamos de medidas extraordinarias, y aquí se dijo que estas deben darse cuando hay situaciones de emergencia, quiero señalar, con la misma fuerza, que ojalá se entienda que estamos en una situación de emergencia y que hay que establecer medidas extraordinarias para que los pescadores artesanales, los mipymes, los colectiveros, los feriantes, los trabajadores a honorarios también reciban de parte del Estado una ayuda en los momentos tan difíciles que están viviendo.

Voto a favor.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

El Senador señor Quinteros vota a favor.

Senadora señora Rincón, ¿cómo vota?

La señora RINCÓN.-

Voy a fundamentar mi voto.

Señor Presidente, me voy a pronunciar a favor de este proyecto de ley.

Quiero partir por felicitar al Senador Navarro . Su insistencia ha logrado que todos se pongan de acuerdo. El trabajo que ha hecho la Comisión de Salud, liderada por la Senadora Goic, así lo demuestra. Y deseo felicitarlos a todos por aquello.

De acuerdo a los datos que nos entrega la autoridad en el Ministerio, faltan 20 mil médicos en nuestro país, y de aquí al 2030 el déficit sería de 7.300.

Sin lugar a dudas, el propio Ministro plantea un hecho que no es menor. Dice en sus intervenciones que es fundamental incorporar médicos extranjeros.

La pandemia que vivimos, con el COVID-19, hace que la situación en salud sea aún más dramática. Cuando miramos la inequidad, nos damos cuenta de que educación y salud son dos áreas en que ella existe, y se ve de manera más brutal en el territorio, en nuestras regiones.

Quienes estamos tomando las decisiones sobre lo que pasa en nuestro país, debemos entender que hay que hacer esfuerzos de urgencia y que debemos acelerar el tranco.

Leía hace un rato una columna de Hugo Herrera en La Segunda, donde decía que hay un desajuste entre los anhelos y las pulsiones de la ciudadanía y la institucionalidad y los discursos dominantes, y que algunos han pasado a ser un tapón hermenéutico.

Señor Presidente, creo que en materias de salud y de educación estamos al debe con la ciudadanía.

Esta iniciativa viene a hacerse cargo de una urgencia, pero que no está presente solo por el COVID, sino porque hemos permitido que la inequidad se instale.

En nuestra Región del Maule se hicieron esfuerzos, y hay que reconocerlo. El Senador Galilea, ex Intendente, a quien me tocó apoyarlo en esa idea, elaboró un proyecto para tener especialistas en la zona.

Pero, sin duda, lo planteado por el Senador Harboe es algo que debemos revisar: quiénes son los que definen cuántos especialistas hay; cómo estos obtienen becas y recursos.

Por primera vez estamos abordando aquello en el Senado.

Así que apoyo esta modificación, pero tenemos una deuda de la que hay que hacerse cargo, y debemos avanzar en tal sentido.

El señor QUINTEROS ( Vicepresidente ).-

Continuemos, señor Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Sí, le vamos a consultar al Senador Sandoval.

¿Cómo vota Su Señoría?

Ahí está activado su micrófono.

El señor SANDOVAL.-

Señor Presidente , sin duda, valoro la iniciativa del Senador Navarro. Hay que reconocer su visión respecto de este tema. Asimismo, deseo rescatar las palabras del Senador Prohens en cuanto a cómo se maneja esta materia; las expresiones del Senador Bianchi, desde las regiones extremas; lo expresado por el Senador Durana, quien planteaba lo que significa hacer salud en las regiones.

Quienes vivimos en regiones como las nuestras sabemos, particularmente nuestros vecinos, nuestras comunidades, lo que ello significa. En la Región de Aysén lo más común es que los pacientes que se hallan con algún requerimiento deban trasladarse a centros hospitalarios del resto del país. Muchas veces uno involucra en ello todo lo que envuelve en lo humano, en lo familiar, en lo afectivo.

Evidentemente, es una deuda enorme la que existe en este contexto.

Por eso, no podemos menos que respaldar este pequeño avance. Aquí no se ha asumido cabalmente todo el conjunto de problemas que tienen el manejo de las especialidades médicas, la influencia de las entidades gremiales, la que me parece absolutamente inaceptable en la construcción de un país que quiere avanzar en materia de salud. La salud es uno de los bienes más preciados para la comunidad y es, también, una primera prioridad en lo que significan las demandas respecto de calidad en la atención.

Por eso, valoramos el paso que se da. Creo que esta iniciativa ha puesto sobre la mesa la necesidad de avanzar en otros ámbitos, en cómo somos capaces de construir, en definitiva, una atención que asegure calidad en todos los niveles. Recordemos que en la tramitación de la ley de educación se prometía calidad para todos, en todos los rincones de Chile, pero ello no ocurrió. La salud es otro sector social de nuestro país que, evidentemente, está en gran, gran deuda.

Es un avance, no todo lo que quisiéramos. En ese sentido, hay deudas pendientes. Pero lo más importante es que quede en la mesa el debate. Y espero sinceramente que el Ministerio de Salud -por favor, Jaime , llévele al Ministro este requerimiento- lo escuche, porque hay que seguir avanzando en cómo construimos una verdadera política en esta materia, que asegure a todas las comunidades, en todos los rincones, un acceso digno, de calidad; a fin de que no tengamos que seguir trasladando a nuestra gente por diferentes partes del país para acceder a lo más básico: la salud.

Voto a favor.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Senador señor Soria, ¿cómo vota?

El señor SORIA.-

Le pido un minuto, Presidente.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Tiene la palabra, señor Senador.

El señor SORIA.-

Voto a favor para que todos los chilenos podamos tener los mismos años de vida, como ocurría antiguamente con la salud, que en gran parte era responsabilidad de los alcaldes. Ahora la siguen teniendo, pero muy restringida.

Yo creo que ahora se abrieron las puertas. Este equipo que entra va a llegar a todo Chile y vamos a poder decir: "Todos somos iguales".

¡Tarea para mis colegas alcaldes!

Nosotros en la alcaldía de Iquique compramos hospitales movibles -como cuatro- y los llevábamos a las poblaciones. Se compró el mejor equipamiento para el hospital, que atendía a 180 mil personas. Le pusimos ocho equipos -nos dio la plata el core-, que cubrían todas las especialidades del hospital. Y lo hicimos en el consultorio Videla. Eso significó que el hospital pudo realizar 90 mil cirugías críticas. Y nosotros le sacamos lo más chico que había.

Se puede y se hace. Y no necesitamos tanto más que una conversa con el Ministro de Salud de esa época. Así lo logramos. Pero hoy creo que es el gran salto adelante. Aprovechémoslo.

Nosotros les damos nuestra experiencia, lo ratón que hicimos, lo chico que somos en Iquique, más lo que hacen ustedes... ¡Cambió la vida para todos los chilenos! ¡Por fin vamos a vivir todos por igual!

Porque no viventodos igual. Los que tienen más, viven más. Y los que tienen en la medianía, se mueren antes.

Nosotros hemos tratado de cambiar eso en Iquique. Y creo que ahora, gracias a lo que ha hecho, con claridad absoluta, todo el equipo de Senadores de Derecha, de Izquierda, de Centro, lo vamos a lograr. Y eso es lo que nos deja la pandemia: un Chile en que todos somos iguales.

Gracias, señor Presidente.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

El Senador señor Soria vota a favor.

Senadora señora Van Rysselberghe, ¿cómo vota?

La señora VAN RYSSELBERGHE.-

Voto a favor.

Creo, sí, que este proyecto tiene grandes desafíos aún por delante. Es decir, acá se está dando la posibilidad de que médicos especialistas puedan validarse a pesar de que no han sido validados hoy día por universidades chilenas. Sin embargo, pienso que la situación lo amerita y que el Ministerio de Salud tiene por delante desafíos que, no tengo ninguna duda, va a poder cumplir.

Así que, porque lo considero un aporte a la salud pública chilena, con convicción, voto a favor.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

Senadora señora Von Baer, ¿cómo vota?

La señora VON BAER.-

Voto a favor, Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

Senador señor Allamand, ¿cómo vota?

Senadora señora Allende, ¿cómo vota?

La señora ALLENDE.-

A favor, señor Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

Senadora señora Aravena, ¿cómo vota?

La señora ARAVENA.-

Voy a fundamentar en dos minutos mi voto, señor Secretario .

En primera instancia, estaba muy preocupada por el proyecto original y no lo iba a votar a favor. Y no creo que sea una pequeñez el preocuparnos de la calidad de los profesionales que ejercen en el ámbito más importante, que es la vida de los chilenos, sobre todo cuando el país ostenta una salud pública de las mejores del mundo.

Por otro lado, también me parece un despropósito pretender hoy día plantear que solo los médicos extranjeros nos vendrán a dar un alivio. Porque, en estricto rigor, hemos celebrado durante estos días y aplaudido a los médicos que, incluso, han perdido la vida cuidándonos del COVID.

Efectivamente, hoy día tenemos una baja mortalidad, porque hay que reconocer que los equipos médicos y todos los funcionarios de salud de este país hacen un gran trabajo.

Sin duda, van a ser un tremendo aporte los médicos extranjeros. Y creo que el proyecto quedó -felicito a la Comisión por ello- bastante más asertivo, ya que no porque hoy día visualicemos un problema tan grande como el de las especialidades vamos a tomar decisiones apresuradas.

Habrá que mejorar el Eunacom y la prueba de especialidad. Habrá que hacerla más ágil, porque dos años es realmente una exageración. Pero uno no puede, si le ha ido bien con una fórmula, cambiarla cien por ciento.

Por último, creo que el Ministerio de Salud tiene un lugar muy importante. Y sería conveniente que al cabo de un año se evalúe esta medida, en el entendido de que, según las estadísticas y lo que informó la Comisión, de mil a mil doscientos médicos que realizan la prueba de especialidad, 45 por ciento la reprueba. Eso implica que 540 médicos no cuentan con los conocimientos de especialidad.

Entonces, a mí me preocupa -lo reitero- que esos médicos hoy día van a estar ejerciendo y trabajando en nuestros hospitales públicos con la gente que más lo necesita y que no tiene la posibilidad de elegir más que el sector público.

Con eso no quiero minusvalorar a nadie; quiero simplemente ser pragmática. La calidad de la atención médica y de salubridad en Chile tiene que ser extraordinaria en lo público y en lo privado. Nunca voy a cesar de pensar que la calidad es algo esperable y alcanzable. Y no tiene por qué disminuir eso.

Por lo tanto, voy a aprobar esta medida, pero haciendo ver mis aprensiones respecto de que espero que se haga una evaluación de ella, para que no tengamos ningún problema más adelante.

Muchas gracias.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

La Senadora señora Aravena vota a favor.

Senador señor Coloma, ¿cómo vota?

Senador señor García-Huidobro, ¿cómo vota?

Senador señor García Ruminot, ¿cómo vota?

El señor GARCÍA.-

Voto a favor, señor Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

Senador señor Lagos, ¿cómo vota?

Senador señor Montes, ¿cómo vota?

Senador señor Pérez, ¿cómo vota?

El señor PÉREZ VARELA.-

Pido la palabra, Presidente.

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Tiene la palabra, señor Senador.

El señor PÉREZ VARELA.-

Gracias.

Mi voto es favorable.

A mí siempre me llamó mucho la atención la propuesta original de eximir de un determinado examen a un número importante de médicos, porque la modernidad apunta en otra dirección. Nosotros mismos en el Senado hemos aprobado una serie de normas que buscan elevar el estándar de los servicios que se les entregan a los chilenos. Y no solamente me refiero a los servicios directos y profesionales, sino también a las cosas materiales que compran. Se trata de mejorar el estándar, la calidad de ello. Por lo tanto, era un contrasentido.

Me parece bien la indicación para los especialistas como un elemento de emergencia frente a la situación que nos provoca la pandemia. Y estoy de acuerdo con algunas Senadoras que escuché en el sentido de pedir evaluación durante un año.

Reitero: la tendencia mundial y, por cierto, en Chile es exigir cierto estándar, ciertas certificaciones, ciertos rangos de calidad a todos los servicios materiales, inmateriales, y elementos que la ciudadanía necesita adquirir. Y no me parece que los médicos deban estar al margen de eso.

Así que voto favorablemente, con la prevención de que esta materia se debe reevaluar cada cierto tiempo para ver cuál ha sido el beneficio que la ciudadanía ha obtenido.

Gracias, Presidente .

El señor QUINTEROS (Vicepresidente).-

Gracias, señor Senador.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Senador señor Pizarro, ¿cómo vota?

El señor PIZARRO.-

Voto a favor.

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Señora Presidenta , Senadora señora Muñoz, ¿cómo vota?

La señora MUÑOZ ( Presidenta ).-

A favor, señor Secretario .

El señor GUZMÁN ( Secretario General ).-

Gracias.

El señor QUINTEROS ( Vicepresidente ).-

Terminada la votación.

--Se aprueba en general el proyecto (37 votos a favor y 1 en contra) y, por no haberse solicitado plazo para presentar indicaciones, queda aprobado también en particular y despachado en este trámite

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Aravena, Ebensperger, Goic, Muñoz, Órdenes, Provoste, Rincón, Van Rysselberghe y Von Baer y los señores Araya, Bianchi, Castro, Chahuán, De Urresti, Durana, Elizalde, Galilea, García, Girardi, Guillier, Harboe, Huenchumilla, Insulza, Kast, Letelier, Moreira, Navarro, Ossandón, Pérez Varela, Pizarro, Prohens, Pugh, Quintana, Quinteros, Sandoval y Soria.

Votó por la negativa el señor Latorre.

1.6. Oficio de Cámara Origen a Cámara Revisora

Oficio de Ley a Cámara Revisora. Fecha 02 de junio, 2020. Oficio en Sesión 27. Legislatura 368.

Valparaíso, 2 de junio de 2020.

Nº 201/SEC/20

A S.E. EL PRESIDENTE DE LA HONORABLE CÁMARA DE DIPUTADOS

Tengo a honra comunicar a Vuestra Excelencia que, con motivo de la moción, informe, certificado y antecedentes que se adjuntan, el Senado ha dado su aprobación a la siguiente iniciativa, correspondiente al Boletín número 13.359-11:

PROYECTO DE LEY:

“Artículo único.- Por el lapso de dos años contado desde la publicación de esta ley, los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en Chile o en el extranjero y aquéllos a los que se refiere el inciso segundo del artículo 2 bis de la ley N° 20.261 quedarán habilitados para ejercer su especialidad en el sector público de salud en todo el territorio nacional, aun cuando no hubieren obtenido la certificación de su respectiva especialidad o subespecialidad de conformidad con las normas establecidas en el número 13 del artículo 4° del decreto con fuerza ley Nº 1, del Ministerio de Salud, de 2005, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979, y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469, siempre que hubieren presentado su solicitud de certificación a alguna de las entidades certificadoras autorizadas por el Ministerio de Salud, durante la vigencia de esta ley o bien la hubiesen presentado con anterioridad y se encontrare en trámite.

Los médicos que hubiesen obtenido su especialidad médica en el extranjero, al igual que su título profesional, y que se encuentren en el presupuesto del inciso anterior, se encontrarán eximidos por el plazo de dos años, contado desde la publicación de esta ley, del requisito de aprobar el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina establecido en el artículo 1° de la ley N° 20.261, para ingresar a los cargos o empleos de médico cirujano en los Servicios de Salud creados por el artículo 16 del decreto con fuerza de ley Nº 1, del Ministerio de Salud, de 2005, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979, y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469; en la Subsecretaría de Salud Pública; en las Secretarías Regionales Ministeriales de Salud; en los establecimientos de carácter experimental creados por el artículo 6º de la ley Nº 19.650, y en los establecimientos de atención primaria de salud municipal.

Transcurrido el plazo de dos años contado desde la publicación de la presente ley en el Diario Oficial, para continuar ejerciendo la profesión de médico cirujano y su especialidad, estos profesionales deberán haber obtenido la certificación de su especialidad o subespecialidad, según corresponda, de conformidad con lo preceptuado por la legislación vigente en la materia.

La Superintendencia de Salud deberá implementar un registro público especial, en el Registro Nacional de Prestadores Individuales de la Superintendencia de Salud, para los médicos que resultaren transitoriamente habilitados para ejercer su profesión y especialidad en Chile de conformidad a la presente ley, siendo obligación de la entidad contratante informar tal contratación a la Superintendencia, mediante oficio que deberá enviar dentro del plazo de 30 días corridos, contados desde la suscripción del contrato. La infracción a la obligación de informar por parte de las entidades contratantes será sancionada en conformidad al artículo 174 del Código Sanitario.

Artículo transitorio.- Podrán acogerse a la habilitación temporal que autoriza la presente ley los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en centros de formación universitaria y que no hayan reprobado los exámenes en procesos de calificación anteriores rendidos ante la Corporación Nacional Autónoma de Certificación de Especialidades Médicas.

El Ministerio de Salud dictará las normas operativas para la aplicación de la presente ley.”.

- - -

Dios guarde a Vuestra Excelencia.

RABINDRANATH QUINTEROS LARA

Vicepresidente del Senado

RAÚL GUZMÁN URIBE

Secretario General del Senado

2. Segundo Trámite Constitucional: Cámara de Diputados

2.1. Informe de Comisión de Salud

Cámara de Diputados. Fecha 08 de septiembre, 2020. Informe de Comisión de Salud en Sesión 74. Legislatura 368.

?INFORME DE LA COMISIÓN DE SALUD RECAÍDO EN EL PROYECTO DE LEY QUE HABILITA TEMPORALMENTE A LOS MÉDICOS CIRUJANOS QUE INDICA, PARA EJERCER SUS ESPECIALIDADES EN EL SECTOR PÚBLICO.

BOLETÍN N°13.359-11 (S).-

________________________________________________________________________

HONORABLE CÁMARA:

La Comisión de Salud viene en informar, en segundo trámite constitucional y primero reglamentario, el proyecto de la referencia, originado en moción de los senadores Juan Ignacio Latorre, Alejandro Navarro, Yasna Provoste, Jaime Quintana y Rabindranath Quinteros.

CONSTANCIAS REGLAMENTARIAS PREVIAS.

1) La idea matriz o fundamental del proyecto.

Cabe hacer presente que el Senado, en su primer informe, indicó que la idea matriz o fundamental del proyecto era suspender por dos años el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina (EUNACOM), con la finalidad de asegurar la dotación de médicos en el sistema de salud, en el contexto de la actual crisis sanitaria desatada por el coronavirus causante de la pandemia Covid-19.

Con posterioridad, en un segundo informe, el Senado se abocó al análisis de una indicación sustitutiva del texto original de la moción, y si bien la idea matriz no fue alterada, cabe hacer presente que su objetivo fue variado en el sentido que mediante el proyecto de ley, se propone habilitar en forma temporal a los médicos cirujanos que indica, para ejercer sus especialidades en el sector público aun cuando no hubieren obtenido la certificación exigida de su respectiva especialidad o subespecialidad según las normas generales vigentes, en los casos que se indican en la normativa que se informa.

2) Normas de carácter orgánico constitucional.

No hay.

3) Normas de quórum calificado.

No hay.

4) Normas que requieren trámite de Hacienda.

No hay normas que el Senado haya dispuesto informar por su Comisión de Hacienda.

5) El proyecto fue rechazado, en general, por la mayoría absoluta de los diputados de la Comisión (7 votos en contra y 6 a favor).

Votaron en contra las diputadas y diputados Castro, Cariola, Ricardo Celis (Presidente), Crispi, Ibáñez, Rosas y Torres.

Votaron a favor las diputadas y diputados Andrés Celis, Durán, Gahona, Macaya, Ossandon y Sanhueza.

6) Diputado informante: señor Juan Luis Castro González.

I.- RESUMEN DE LOS FUNDAMENTOS DE LA MOCIÓN.

En la exposición de motivos de la moción original, los patrocinantes hicieron presente las cifras de enfermos y fallecidos por causa de la pandemia de Covid-19 a la época de su presentación, marzo de 2020, y que tal situación encontraba al sistema público de salud en una condición de especial vulnerabilidad: sólo durante el primer semestre de 2018 murieron 9.724 pacientes en lista de espera, un 54% más que en el mismo periodo de 2017, lo que revela una tendencia en aumento.

Manifiestan los suscriptores de la iniciativa que el Ministro de Salud ha declarado que en Chile hay un déficit de 20.000 médicos, cifra que está lejos de mejorar, pues un informe del mismo Ministerio estima que recién en 2030 esa carencia se habrá reducido, en el sector público, a unos 7.200 facultativos.

También se invocan expresiones del Ministro, en el sentido de que un refuerzo importante para nuestro sistema sería la incorporación de médicos extranjeros, muchos de los cuales no pueden ejercer, debido al Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina (EUNACOM).

Expresa la moción que el EUNACOM ha sido un examen ampliamente cuestionado, no solo porque está a cargo de una corporación privada que ejerce una función pública, sino porque la autoridad no lo ha estimado como un mecanismo indispensable para el ejercicio de la medicina en el sector público. En sustento de eso se manifiesta que el Ministerio de Salud extendió los plazos para la rendición del examen en 2019 y que la Contraloría General de la República ha dictaminado que los médicos que no han aprobado el EUNACOM pueden atender en la salud pública, ante la falta de profesionales.

Finalmente, se indica que dada la actual crisis sanitaria por COVID-19, que se suma a la crisis que arrastra el sistema de salud, se estima razonable y necesario aplazar el EUNACOM, con la finalidad de asegurar la dotación de médicos en el sistema de salud.

II. RESUMEN DEL CONTENIDO DEL PROYECTO APROBADO POR EL SENADO.

El proyecto de ley aprobado por el Senado está constituido por un artículo permanente y uno transitorio.

Mediante el artículo único permanente se dispone que por el lapso de dos años contado desde la publicación de esta ley, los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en Chile o en el extranjero y aquéllos a los que se refiere el inciso segundo del artículo 2 bis de la ley N° 20.261 quedarán habilitados para ejercer su especialidad en el sector público de salud en todo el territorio nacional, aun cuando no hubieren obtenido la certificación de su respectiva especialidad o subespecialidad de conformidad con las normas establecidas en el número 13 del artículo 4° del decreto con fuerza ley Nº 1, del Ministerio de Salud, de 2005, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979, y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469, siempre que hubieren presentado su solicitud de certificación a alguna de las entidades certificadoras autorizadas por el Ministerio de Salud, durante la vigencia de esta ley o bien la hubiesen presentado con anterioridad y se encontrare en trámite.

Su inciso segundo consagra que los médicos que hubiesen obtenido su especialidad médica en el extranjero, al igual que su título profesional, y que se encuentren en el presupuesto del inciso anterior, se encontrarán eximidos por el plazo de dos años, contado desde la publicación de esta ley, del requisito de aprobar el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina establecido en el artículo 1° de la ley N° 20.261, para ingresar a los cargos o empleos de médico cirujano en los Servicios de Salud creados por el artículo 16 del decreto con fuerza de ley Nº 1, del Ministerio de Salud, de 2005, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979, y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469; en la Subsecretaría de Salud Pública; en las Secretarías Regionales Ministeriales de Salud; en los establecimientos de carácter experimental creados por el artículo 6º de la ley Nº 19.650, y en los establecimientos de atención primaria de salud municipal.

Asimismo, se propone que transcurrido el plazo de dos años contado desde la publicación de la ley en el Diario Oficial, para continuar ejerciendo la profesión de médico cirujano y su especialidad, esos profesionales deberán haber obtenido la certificación de su especialidad o subespecialidad, según corresponda, de conformidad con lo preceptuado por la legislación vigente en la materia.

Encomienda a la Superintendencia de Salud la obligación de implementar un registro público especial, en el Registro Nacional de Prestadores Individuales de la Superintendencia de Salud, para los médicos que resulten transitoriamente habilitados para ejercer su profesión y especialidad en Chile de conformidad a esta ley, siendo obligación de la entidad contratante informar tal contratación a la Superintendencia, mediante oficio que deberá enviar dentro del plazo de 30 días corridos, contados desde la suscripción del contrato. La infracción a la obligación de informar por parte de las entidades contratantes será sancionada en conformidad al artículo 174 del Código Sanitario.

Su artículo transitorio permite acogerse a la habilitación temporal que autoriza esta ley, a los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en centros de formación universitaria y que no hayan reprobado los exámenes en procesos de calificación anteriores rendidos ante la Corporación Nacional Autónoma de Certificación de Especialidades Médicas. Se mandata, además, al Ministerio de Salud para que dicte las normas operativas que hagan aplicable la ley.

III. SÍNTESIS DE LA DISCUSIÓN EN LA COMISIÓN, Y ACUERDOS ADOPTADOS.

A) Discusión general.

• Intervenciones en el seno de la Comisión.

a) El asesor legislativo del Ministerio de Salud, señor Jaime González Kazazian, luego de compartir que un artículo transitorio en una ley eminentemente transitoria puede no ser lo correcto como técnica legislativa, y luego de referir los hitos de la tramitación legislativa de este proyecto, estimó que su idea central no es nueva, sino que replica la idea ya contenida en la ley N° 20.985, la cual fue aprobada en un contexto sin pandemia.

En cuanto a estadísticas que sirvieran para ilustrar el debate, refirió que según registros de la Superintendencia de Salud, en el sector público ejercen 20.135 médicos chilenos y 19.586 en el sector privado. A su vez, en el sector privado ejercen 9.046 médicos extranjeros, mientras que en el sector público lo hacen 5.083. Así, hay cerca de cuatro mil médicos extranjeros de diferencia entre los que ejercen en uno u otro sector de salud, no obstante que en el sector público se atiende el 80% de la población.

En tal sentido, manifestó que el proyecto no implica un beneficio hacia los médicos extranjeros, sino que a favor de todos aquellos que han realizado estudios de especialidad en el extranjero, y a diferencia de legislaciones previas, no acota los permisos de contratación a los cargos propios de la Subsecretaría de Redes Asistenciales, sino que la permite también a los de la Subsecretaría de Salud Pública, lo que permitirá fortalecer las Comisiones de Medicina Preventiva e Invalidez (Compin). De igual manera, se permitirá la contratación en los establecimientos de la Atención Primaria de Salud.

En cuanto a la necesidad de este proyecto, refirió que una vez transcurrida la pandemia, se verán acumuladas las prestaciones no Covid-19 que deberán ser resueltas y, a ello se agrega que durante la pandemia el 10% de los contagiados corresponde a funcionarios de la salud. De esa situación, se deduce que varios médicos no podrán ejercer, sobre todo especialistas que trabajan en camas clínicas y que resuelven las patologías GES, las que también se verán retrasadas. Por tanto, se busca abordar el problema de retraso en el tiempo de certificación de especialistas en el país, lo que importa una baja cantidad de profesionales especialistas, de una manera similar a como se realizó en 2015 durante el segundo mandato de la expresidenta Michelle Bachelet.

Bajo ese contexto es que se ha presentado la urgencia a este proyecto, a fin de actuar en el período de pandemia y post pandemia, teniendo presente que en el Senado se aprobó por unanimidad, y se acogieron todas las precisiones observadas y expuestas, en el Senado en su primer trámite constitucional, por Conacem y por Eunacom.

Consultado por la Comisión sobre la necesidad de legislar en esta materia, atendido que en virtud del estado de excepción constitucional el ministerio de Salud había dispuesto la contratación de este tipo de especialistas, manifestó que igualmente es necesario legislar pues si bien es correcto que se puede contratar a personas que no han acreditado sus especialidades en el país, sólo pueden ser contratados como médicos generales y no como especialistas para resolver especialidades.

En tal sentido, si el deseo es que ellos puedan otorgar prestaciones GES de especialidades, deben estar inscritos en el registro correspondiente de la Superintendencia de Salud, y ello sólo pueden hacerlo en tanto hayan acreditado su especialidad en el país. Por ello, con esta iniciativa podrán hacerlo mientras están en dicho proceso, y no únicamente una vez acabado el mismo.

b) El Presidente de la Corporación Nacional de Certificación de Especialidades Médicas (Conacem), señor Lorenzo Naranjo Tapia, hizo presente que la visión que tiene del sistema de salud público del país es producto de los cuarenta y cinco años que ha trabajado el él, y en base a ello es que formula sus opiniones.

Consideró necesario señalar que la tramitación del proyecto varió en el tiempo, pues en un inicio, proponía suspender la realización del Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina (Eunacom), idea que no contó con apoyo por lo que no prosperó; con posterioridad se ingresó una indicación del Ejecutivo para sustituir el texto original, disponiendo que se habilita a los médicos cirujanos que cuentan con formación en el extranjero, para ejercer su especialidad en el sector público.

Entiende que la situación inicial que motiva el proyecto es la pandemia de Covid-19, pero luego de oír la discusión habida en el Senado se dio cuenta que ella en realidad busca abordar la falta de especialistas, fundamentalmente, en regiones y en lugares más alejados, déficit no completamente definido, pero que se estima en cinco mil.

Al respecto, recordó que a inicios de año hubo una interesante discusión sobre la cantidad de becas de especialización que se gestionarían por vía ministerial, atendido que las universidades no ofrecían mayor disponibilidad de becas de formación.

De igual manera, hizo presente que el 90% de los especialistas del país se forma en el sector público, y se concentran en la Región Metropolitana, sin perjuicio que existen centros de formación médica y de especialistas en Antofagasta, Valdivia o Temuco, y que es evidente que para algunas patologías se tiene que concentrar la atención en determinados lugares, como los centros especializados para el cáncer o para cirugías cardiacas.

En cuanto a observaciones al proyecto de ley, manifestó que en el Senado observaron que no se precisaba si los especialistas que se acogerían a esta ley podrían ejercer en el sector público y privado, y fruto de ello se precisó que tendrían que trabajar en el sistema público. Asimismo, que deberían acreditar su especialidad por estudios universitarios, y que no haber sido rechazados ante Conacem en algún intento de certificación, observaciones que fueron acogidas según da cuenta el texto despachado del Senado e ingresado en la Cámara de Diputados.

Sin embargo, manifestó que si bien es cierto que siempre se sabe cuando se inicia un proceso especial, no se sabe con certeza cuándo termina. Así, si bien esta ley dispone que su vigencia es de dos años, podría prorrogarse en el futuro, como ocurrió con la ley N° 20.985, que establece normas sobre certificación de especialidades médicas obtenidas en el extranjero, en virtud de la cual se inició una discusión de carácter temporal y terminó siendo permanente.

Cabe tener presente sí, dijo, que la idea es no disminuir la calidad de atención que se presta al paciente, pues ello habitualmente redunda en su peor recuperación. Es un riesgo que se persigue disminuir con los procesos de certificación. En cuanto a estos últimos, como entidad certificadora reconocer que no han sido perfectos pero ello se ha ocasionado también, por el significativo aumento de solicitudes, que la Corporación no estaba preparada para recibir. Se han efectuado enormes esfuerzos para avanzar, tanto en los tiempos como en la calidad del proceso: durante 2019 se habían certificado cerca de 1.207 especialistas, cifra que fue superior a la de años anteriores, pero la crisis social de octubre y la pandemia de este año han dificultado seguir ese ritmo. A su juicio, por modesto que sea un país, debe exigir la certificación de los profesionales que prestan servicios en su interior. Y si bien dichos procesos no deben ser sencillos, los procesos de certificación no debiesen durar más de un año, y es a ese plazo al que están dirigiendo sus esfuerzos.

Para ello existe un comité dentro de cada especialidad médica, quienes revisan entre otros antecedentes la validez de los antecedentes entregados por los postulantes y la bitácora de cirugías de los dos últimos años. En cuanto a la bitácora, destacó que descubren problemas tales como falta de conocimientos de cirugía laparoscópica o imagenología obstétrica, y ese tipo de déficit deben ser revisados y superados, pues pueden importar un deterioro en la calidad de las prestaciones que se otorgan a los pacientes.

En cuanto a las etapas de examinación, para el teórico, resaltó que a pesar de tratarse de profesionales adultos, se tiene los mismos problemas de todo alumno por lo que si se pueden conseguir las preguntas antes del examen, se las consiguen y para ello tienen que modificar las preguntas permanentemente a fin de tener la seguridad de que no sean conocidas con antelación. En cuanto a la rendición, manifestó que el 45% de los candidatos reprueba el examen teórico, para el cual debe aprobar el 65% de las preguntas. Sin embargo, para aquellos que un porcentaje de aprobación superior al 70%, se decidió que no den el examen práctico, pues sobre esa cifra, prácticamente el 90% de los postulantes con toda seguridad lo aprueba. Por su parte, el examen práctico es casi imposible ejecutarlo en la forma tradicional, en el cual un candidato está una semana en un servicio clínico tomando atenciones con diferentes especialistas que evalúan su trabajo, pues los candidatos son muchos no solo de Conacem, sino también de Eunacom y demás instituciones.

Finalmente, manifestó que por el trabajo que se ha realizado y por las medidas adoptadas para que los profesionales de la salud que ejercen en el país cuenten con las habilidades necesarias, es que no todas las instituciones médicas del país están de acuerdo en que se legisle en esta iniciativa, pues se teme la pérdida de calidad profesional.

Terminada su exposición, y en respuesta a las consultas y observaciones de la Comisión, manifestó que la Comisión de Salud del Senado acogió de forma correcta la totalidad de las observaciones que hicieron al proyecto, en referencia a que se acote la habilitación solo para el sistema público, por un plazo determinado y que la especialidad sea acreditada solo por estudios universitarios.

Compartió la idea de que haber autorizado a los especialistas postular a las acreditaciones de Conacem sin necesidad de haber rendido el Eunacom, permitió la masiva postulación que generó una crisis en el sistema, la que han tratado de resolver disponiendo un procedimiento que en lo posible no supere los doce meses, sea que se apruebe o no este proyecto de ley. Piensan abrir sedes regionales para no concentrar toda la acreditación en Santiago.

Estuvo de acuerdo en avanzar hacia la existencia de un convenio latinoamericano de reconocimiento mutuo de profesiones y especialidades, a fin de generar una mayor posibilidad de trabajo en el ámbito latinoamericano, pero asegurando la calidad, pues no todas las universidades tienen la misma calidad de formación, lo que es riesgoso al momento de otorgar las prestaciones médicas, y que se ha manifestado en la tasa de reprobación de los exámenes teóricos.

c) La presidenta del Colegio Médico de Chile, señora Izkia Siches, indicó que no es un mero capricho de la comunidad médica el oponerse a este tipo de iniciativas legales. Recalcó que bajo la actual dirección de ese Colegio se ha instado por fortalecer el sector público de salud, y no solo se ha acotado a los temas propios de los profesionales, sino al gran abanico de la seguridad social, ámbito en el que se incluyen las propuesta como las de un seguro único en salud.

Destacó que los mecanismos de certificación de habilidades tienen como imperativo ético el acceso y la justicia en las prestaciones de salud; no se persigue la creación de perfiles ‘de excelencia’ sino que se busca aminorar los errores médicos, atendido que un error médico produce secuelas y daños, a veces irremediables, en la población. Uno de los principales problemas que ocurren en los sistemas sanitarios es el diagnóstico incorrecto o tardío; en el caso chileno, los indicadores de algunas comunas son equivalentes a los países desarrollado, y en otras, a los de países muy pobres.

En todo el mundo se han ido creando entidades certificadoras, y quien quiera ejercer en esos países debe someterse a sus procesos internos de certificación. El sistema de certificación ha ido cambiando en el país a través del tiempo, pero es forma no racional, sino que respondiendo a contingencias que si bien desde una perspectiva parlamentaria se podría estimar que tienden a beneficiar a la ciudadanía, en la realidad, lo que hacen es fragilizar y fragmentar el sistema.

Ya en la Constitución Política se dispone que no se puede poner restricciones a la libertad de trabajo y al ejercicio profesional, salvo casos de sanidad pública, y por ello se cuenta con legislación especial en el ámbito educacional y sanitario. Lamentablemente, durante los debates legislativos no ha habido suficiente diálogo para exponer la realidad sanitaria, y entonces surgen situaciones tales como que en la ley de educación superior se encomendó al Consejo Nacional de Acreditación abocarse a este ámbito, quedando el sistema mutilado pues se eliminó la única entidad sanitaria que tenía la capacidad de acreditar programas de formación en especialidades médicas.

Ha surgido un entramado difícil de comprender integrado, entre otros, por convenios bilaterales y decretos con fuerza de ley, mediante los cuales se regula la forma en que un profesional puede ejercer en Chile, ya sea que haya estudiado en el país o en el extranjero. Aparte de lo que ya existía en la Universidad de Chile, se transformó el Eunacom de ser un examen interno para homogeneizar a los profesionales formados en el país, en un certificado habilitante para ejercer. Pero posteriormente, para las especialidades se dispuso que no se requiere Eunacom sino la acreditación de Conacem y así, de esa manera, quienes ya tenían años de conocimiento específico en una materia no necesitaban acreditar conocimiento en aspectos en que no ejercían desde años.

A pesar de eso, se defendía la existencia de tales entidades acreditadoras, y ojalá que los programas de acreditación fuesen incrementándose a fin de acompañar a los médicos formados en el extranjero para que completen las habilidades que no poseen. Idealmente primero en el sector público, pero a la luz de la jurisprudencia del Tribunal Constitucional, en Rol N° 7.962, de 4 de junio de 2020, resulta complejo insistir en que se acote al sector público si ese Tribunal ya dispuso que no es constitucional tal restricción.

El Colegio Médico presentó en marzo de 2019, al Ministerio de Salud, una propuesta para abordar los diversos aspectos de la acreditación en el país, tanto en sus aspectos generales como de especialidades. Y aun cuando se había mostrado voluntad para avanzar en el tema, en el contexto de la pandemia el gobierno decidió apoyar esta moción, cambiando su idea inicial de suspender el Eunacom a suspender la acreditación de la especialidad.

Sin embargo, parece contradictorio que desde el Ministerio se quiera contar con más especialistas, ahora sin acreditación, si resulta que igualmente faltan cargos en el sector público, esto es, los profesionales que terminan sus estudios no tienen cargos a los cuales postular en la red de atención. A pesar de los compromisos contraídos para el aumento de cupos, tanto de este como de anteriores gobiernos, eso no se ha efectuado y, al final, los servicios y establecimientos de salud públicos terminan contratando profesionales vía convenios.

A su vez, más allá de la contingencia, resulta contradictorio que informe a la ciudadanía que se quiere contar con profesionales que no han acreditado sus competencias o especialidades, pues terminan estableciéndose diferencias de trato que pueden afectar la tasa de sobrevida y los resultados en materia de salud.

Es sabido que este Ministro de Salud (señor Paris) ha mantenido en el tiempo una postura contraria al Eunacom y a mecanismos de habilitación y certificación, y no ha existido comunicación del gobierno con la comunidad médica sobre las ideas contenidas en este proyecto. La comunidad médica rechaza la señal de debilitar un instrumento que asegura estándares mínimos de atención; es imposible aceptar la existencia de estándares de primera y de segunda categoría.

No obstante lo anterior, manifestó que valora el rol de los médicos formados en el extranjero por su gran aporte al sistema de salud de Chile, pero desconfían del interés del gobierno en dar suma urgencia al actual proyecto, pues se requiere mantener, fortalecer y perfeccionar mecanismos de habilitación y certificación de los médicos. En momentos en que el país debe estar más unido que nunca, se presenta esta iniciativa legal que no hace más que enfrentar a la comunidad médica con el gobierno y el Congreso.

Terminada su exposición, y en respuesta a las consultas y observaciones de la Comisión, manifestó que es necesario que el Ministerio explicite cuál es el nivel de expansión médica que estima necesario para atender los requerimientos de la población, atendido que en paralelo a esta ley se está incentivando la postulación a contrataciones en el sector salud y, actualmente, no existen cargos disponibles en la red sanitaria.

De igual manera, reiteró que no se trata de un problema de mala voluntad hacia quienes han estudiado en el extranjero, sino que de constatar que la realidad muestra que la formación es disímil en los diversos países: un alto porcentaje no logra aprobar ni siquiera los exámenes teóricos. La medicina es una profesión en la cual hay que estar al día pues avanza en forma veloz. En ciertas circunstancias, puede ser peor un mal diagnóstico que una no atención. Para asumir un adecuado desafío, se deben acelerar los procesos de certificación. La pregunta puede apuntar a consultar si alguien de quienes participan en esta discusión estaría dispuesto a atenderse con un médico no certificado

d) El Director Ejecutivo de Eunacom, señor Beltrán Mena, manifestó que en el Senado lo primero que se debió hacer fue aclarar la gran confusión que existe sobre la regulación dispuesta para el ejercicio de los médicos generales y especialistas en el país, y fruto de esa aclaración, se ingresaron modificaciones en virtud de las cuales la actual redacción del proyecto poco tiene que ver con el anterior originalmente presentado por algunos senadores. Se entendió que no es necesario suspender la aplicación del Eunacom, toda vez que una decisión en tal sentido ya está disponible en virtud del decreto de emergencia sanitaria.

Si bien se valoró el rechazo transversal que generó el suspender la aplicación del Eunacom, pues evita desmantelar el sistema completo, constata que se pierde la mitad del tiempo en defenderlo en lugar de mejorarlo. Actualmente, están trabajando con el National Board Medical, sistema de examen más importante del mundo, a fin de contar con asesoría técnica para perfeccionar el instrumento. Por ello, es mala noticia retroceder en su aplicación.

Dado ese giro en la discusión legislativa, poco tiene que ver su intervención con aspectos propios del Eunacom. Sin perjuicio de ello, recordó que durante la discusión del proyecto que devino en ley N° 20.985, le manifestó al doctor Lorenzo Naranjo, presidente de Conacem, que según sus estimaciones esa Corporación recibiría unas 1.500 postulaciones para acreditar a postulantes. Ante esa aseveración, el doctor Naranjo manifestó que no tenían las condiciones para recibir esa cantidad de solicitudes. Por ello, Conacem está tensionado y no puede cumplir con su función. Es comprensible la crítica, pero también las razones que han ido creando esta situación pueden deberse, en parte a improvisaciones legislativas. Eso explica las demoras que hoy se critican y que son reconocidas por la propia Conacem, y que intentan abordar mediante modificaciones a sus procedimientos.

En cuanto al texto de la indicación sustitutiva ingresada en el Senado, refirió que el mismo fue corregido, pues inicialmente no especificaba la manera de determinar quien era especialista, y por ello se acotó que fuese aquel que hubiera completado estudios universitarios de especialidad, no bastando la mera experiencia para asumirse como especialista, pues esa apertura es muy peligrosa. A su vez, se eliminó un posible resquicio que se permitía mediante un artículo transitorio, en virtud del cual aquellos que tuvieran contrato vigente al término de la vigencia de la ley, podían seguir ejerciendo mientras estuviese vigente ese contrato. Se eliminó, por cuanto se podía incentivar la celebración de contratos de último minuto y sin fecha de término, lo que vulneraba el carácter temporal de la iniciativa.

A continuación, y luego de referir esquemáticamente las diversas maneras en que los profesionales médicos se certifican para ejercer como médico general o especialista en el sector público o privado, habiendo realizado sus estudios en Chile o en el extranjero, consideró que este proyecto de ley no contribuye a simplificar ese sistema.

Asimismo, indicó que a su juicio, el inciso segundo genera mayor confusión, pues las personas a quienes pretende beneficiar con la eximición del Eunacom ya cuentan con ese beneficio. De igual manera, que siendo esta una legislación temporal, no se entiende la existencia de un artículo transitorio, si toda esta legislación es transitoria.

Visto todo lo anterior, señaló que el Ministerio de Salud tiene un argumento cuando plantea que mientras se están abocando a atender la pandemia, se está generando una lista de espera en otras prestaciones médicas que es difícil de subsanar, y por eso serán bienvenidos aquellos nuevos especialistas que puedan abocarse a atenderlas. En tal sentido, si Conacem es capaz de realizar las acreditaciones necesarias en el plazo, no les compete pronunciase, pero el argumento sigue vigente y por ello la discusión consistía en atender cuál es un peor riesgo, si aquel que se puede generar por permitir que profesionales de la salud que no han sido acreditados atiendan a la población, o el hecho de no contar con profesionales suficientes para atender las listas de espera que se están generando. Es claro que se aumenta el riesgo de error médico con esta iniciativa, pero debe enmarcarse en el contexto de la emergencia.

Terminada su exposición, y en respuesta a consultas y observaciones de la Comisión, señaló que en relación a los médicos extranjeros que postulan a acreditación, se trata de personas que estudiaron en países como Cuba, Colombia o Venezuela, y pocos en Argentina o Perú. En la rendición del Eunacom se evalúan personas que han estudiado en una gama de 270 universidades. Explicó que a raíz de su trabajo ha conocido esas universidades, y la diversidad es inmensa; no deben existir prejuicios, pero la calidad de unas respecto de otras es inmensa.

Indicó que, más allá de las personas que han aprobado el Eunacom, que es una cantidad significativa, asusta la cantidad que no lo ha aprobado no obstante haber rendido 11 o 14 veces el examen respectivo. Entonces, la cuestión central de este proyecto es que efectivamente se aumentará el riesgo, y por ello se ha acotado mediante la norma aprobada en el Senado, a que la especialidad se acredite con estudios universitarios y no con la mera práctica, lo que aminora el riesgo, aun cuando no lo elimina.

La disyuntiva es, si al aprobar este proyecto de ley, cuál es el mal menor: no contar con personal para atender a los pacientes, o contar con profesionales pero respecto de los cuales se desconocen sus habilidades por ausencia de certificación.

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• Votación en general del proyecto.

La Comisión, habiendo escuchado por una parte los argumentos y opiniones emitidas por el representante del Ejecutivo, y luego de recibir las opiniones, explicaciones y observaciones de las personas e instituciones individualizadas precedentemente, que permitieron a sus miembros formarse una idea de la iniciativa legal sometida a su conocimiento, rechazó por mayoría de votos la idea de legislar (7 votos en contra y 6 a favor).

Votaron en contra las diputadas y diputados Castro, Cariola, Ricardo Celis (Presidente), Crispi, Ibáñez, Rosas y Torres.

Votaron a favor las diputadas y diputados Andrés Celis, Durán, Gahona, Macaya, Ossandón y Sanhueza.

Se manifestó, por quienes votaron en contra, que no resulta clara la necesidad de dictar esta normativa, dadas las atribuciones con las que cuenta el Ministerio durante este estado de excepción constitucional. En tal sentido, convendría analizar el balance que dicha Secretaria de Estado ha efectuado, a propósito de tales atribuciones y las contrataciones realizadas a su alero.

De igual manera, se agregó que no parece pertinente legislar en este tema, si se toma en cuenta que uno de los problemas que enfrenta el proceso de acreditación de especialidades, es que se ha concentrado totalmente en Conacem en vez de instar por la creación de mas entidades acreditadoras, sobre todo si se tiene en cuenta que la legislación nacional permite su existencia.

b) Discusión particular.

No hubo discusión particular, atendido que se propone rechazar la idea de legislar sobre la materia.

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EL SIGUIENTE ES EL TEXTO DEL PROYECTO DE LEY PROPUESTO EN EL OFICIO DE LEY REMITIDO POR EL SENADO

“Artículo único.- Por el lapso de dos años contado desde la publicación de esta ley, los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en Chile o en el extranjero y aquéllos a los que se refiere el inciso segundo del artículo 2 bis de la ley N° 20.261 quedarán habilitados para ejercer su especialidad en el sector público de salud en todo el territorio nacional, aun cuando no hubieren obtenido la certificación de su respectiva especialidad o subespecialidad de conformidad con las normas establecidas en el número 13 del artículo 4° del decreto con fuerza ley Nº 1, del Ministerio de Salud, de 2005, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979, y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469, siempre que hubieren presentado su solicitud de certificación a alguna de las entidades certificadoras autorizadas por el Ministerio de Salud, durante la vigencia de esta ley o bien la hubiesen presentado con anterioridad y se encontrare en trámite.

Los médicos que hubiesen obtenido su especialidad médica en el extranjero, al igual que su título profesional, y que se encuentren en el presupuesto del inciso anterior, se encontrarán eximidos por el plazo de dos años, contado desde la publicación de esta ley, del requisito de aprobar el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina establecido en el artículo 1° de la ley N° 20.261, para ingresar a los cargos o empleos de médico cirujano en los Servicios de Salud creados por el artículo 16 del decreto con fuerza de ley Nº 1, del Ministerio de Salud, de 2005, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979, y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469; en la Subsecretaría de Salud Pública; en las Secretarías Regionales Ministeriales de Salud; en los establecimientos de carácter experimental creados por el artículo 6º de la ley Nº 19.650, y en los establecimientos de atención primaria de salud municipal.

Transcurrido el plazo de dos años contado desde la publicación de la presente ley en el Diario Oficial, para continuar ejerciendo la profesión de médico cirujano y su especialidad, estos profesionales deberán haber obtenido la certificación de su especialidad o subespecialidad, según corresponda, de conformidad con lo preceptuado por la legislación vigente en la materia.

La Superintendencia de Salud deberá implementar un registro público especial, en el Registro Nacional de Prestadores Individuales de la Superintendencia de Salud, para los médicos que resultaren transitoriamente habilitados para ejercer su profesión y especialidad en Chile de conformidad a la presente ley, siendo obligación de la entidad contratante informar tal contratación a la Superintendencia, mediante oficio que deberá enviar dentro del plazo de 30 días corridos, contados desde la suscripción del contrato. La infracción a la obligación de informar por parte de las entidades contratantes será sancionada en conformidad al artículo 174 del Código Sanitario.

Artículo transitorio.- Podrán acogerse a la habilitación temporal que autoriza la presente ley los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en centros de formación universitaria y que no hayan reprobado los exámenes en procesos de calificación anteriores rendidos ante la Corporación Nacional Autónoma de Certificación de Especialidades Médicas.

El Ministerio de Salud dictará las normas operativas para la aplicación de la presente ley.”.

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Se designó Diputado Informante al señor Sergio Gahona Salazar.

* * * *

Tratado y acordado, según consta en las actas correspondientes a las sesiones de 11 de junio, y 8 de septiembre de 2020, con la asistencia de las diputadas y diputados Juan Luis Castro González, Karol Cariola Oliva, Andrés Celis Montt, Ricardo Celis Araya (Presidente), Miguel Crispi Serrano, Jorge Durán Espinoza, Sergio Gahona Salazar, Diego Ibáñez Cotroneo, Javier Macaya Danús, Ximena Ossandon Irarrázabal, Patricio Rosas Barrientos, Gustavo Sanhueza Dueñas y Víctor Torres Jeldes.

Asistieron, además, los diputados Jose Miguel Castro Bascuñán y Marcela Hernando Pérez y el exdiputado Jaime Bellolio Avaria.

Sala de la Comisión, a 8 de septiembre de 2020.-

ANA MARÍA SKOKNIC DEFILIPPIS

Abogado Secretaria de la Comisión

2.2. Discusión en Sala

Fecha 29 de septiembre, 2020. Diario de Sesión en Sesión 78. Legislatura 368. Discusión General. Se aprueba en general y particular sin modificaciones.

HABILITACIÓN TEMPORAL A MÉDICOS QUE INDICA PARA EJERCER ESPECIALIDADES EN EL SECTOR PÚBLICO (SEGUNDO TRÁMITE CONSTITUCIONAL. BOLETÍN N° 13359-11)

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

Corresponde tratar el proyecto de ley, iniciado en moción, que habilita temporalmente a los médicos cirujanos que indica para ejercer sus especialidades en el sector público.

Por acuerdo de los Comités Parlamentarios, para la discusión de este proyecto se otorgarán cinco minutos base a las bancadas que tengan dos o más Comités y tres minutos al resto, más treinta minutos distribuidos en forma proporcional.

Diputado informante de la Comisión de Salud es el señor Sergio Gahona .

Antecedentes:

-Proyecto del Senado, sesión 27ª de la presente legislatura, en miércoles 3 de junio de 2020. Documentos de la Cuenta N° 3.

-Informe de la Comisión de Salud, sesión 74ª de la presente legislatura, en martes 22 de septiembre de 2020. Documentos de la Cuenta N° 33.

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado informante.

El señor GAHONA (de pie).-

Señor Presidente, en nombre de la Comisión de Salud, me corresponde informar el proyecto de ley, en segundo trámite constitucional y primero reglamentario, que habilita temporalmente a los médicos cirujanos que indica para ejercer sus especialidades en el sector público, iniciada en moción de los senadores Juan Ignacio Latorre , Alejandro Navarro , Yasna Provoste , Jaime Quintana y Rabindranath Quinteros .

Constancias reglamentarias previas Idea matriz o fundamental del proyecto

El Senado, en su primer informe, indicó que la idea matriz o fundamental del proyecto era suspender por dos años el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina (Eunacom), con la finalidad de asegurar la dotación de médicos en el sistema de salud en el contexto de la actual crisis sanitaria desatada por el coronavirus, causante de la pandemia por covid-19.

Con posterioridad, en un segundo informe, el Senado se abocó al análisis de una indicación sustitutiva del texto original de la moción, y si bien la idea matriz no fue alterada, cabe hacer presente que su objetivo varió, en el sentido de que ahora se propone habilitar en forma temporal a los médicos cirujanos que indica para ejercer sus especialidades en el sector público, aun cuando no hubieren obtenido la certificación exigida para ejercer su respectiva especialidad o subespecialidad, según las normas generales vigentes, en los casos que se indican en la iniciativa en informe.

Discusión general del proyecto

Para la discusión general de la iniciativa, se contó con la participación permanente del asesor legislativo del Ministerio de Salud, quien refirió los hitos de la tramitación legislativa de este proyecto, luego de lo cual manifestó que su idea central no es nueva, sino que replica la idea ya contenida en la ley N° 20.985, aprobada en un contexto sin pandemia.

En cuanto a estadísticas que sirvieran para ilustrar el debate, indicó que, según registros de la Superintendencia de Salud, 20.135 médicos chilenos ejercen en el sector público y 19.586 lo hacen en el sector privado. A su vez, en el sector privado ejercen 9.046 médicos extranjeros, mientras que en el sector público lo hacen 5.083. Así, hay cerca de 4.000 médicos extranjeros de diferencia entre los que ejercen en uno u otro sector de salud, no obstante que en el sector público se atiende el 80 por ciento de la población.

En tal sentido, el proyecto no implica un beneficio hacia los médicos extranjeros, sino a favor de todos aquellos que han realizado estudios de especialidad en el extranjero. Además, a diferencia de legislaciones previas, este proyecto no acota los permisos de contratación a los cargos propios de la Subsecretaría de Redes Asistenciales, sino que los amplía a los de la Subsecretaría de Salud Pública, lo que permitirá fortalecer las comisiones de medicina preventiva e invalidez (Compin). De igual manera, se permitirá la contratación en los establecimientos de la atención primaria de salud.

En cuanto a la necesidad de este proyecto, se hizo presente en la comisión que, una vez transcurrida la pandemia, se verán acumuladas las prestaciones no covid-19 que deberán ser resueltas, y a ello se agrega que el 10 por ciento de los contagiados durante la pandemia corresponde a funcionarios de la salud, de lo cual se deduce que varios médicos no podrán ejercer, sobre todo especialistas que trabajan en camas clínicas y que resuelven las patologías GES, las que también se verán retrasadas.

Por tanto, se busca abordar el problema de retraso de certificación de especialistas en el país, que importa una baja cantidad de profesionales especialistas, de una manera similar a como se realizó en 2015, durante el segundo mandato de la entonces Presidenta Michelle Bachelet .

Bajo ese contexto es que se ha hecho presente la urgencia para este proyecto de ley y el gobierno ha dado su opinión favorable a esta moción parlamentaria, a fin de actuar en el período de pandemia y pospandemia, teniendo presente que en el Senado se aprobó por unanimidad y se acogieron todas las precisiones observadas y expuestas en el Senado en el primer trámite constitucional por la Conacem y por representantes del Eunacom.

En cuanto a la necesidad de legislar en esta materia, atendido que, en virtud del estado de excepción constitucional, el Ministerio de Salud ha dispuesto la contratación de este tipo de especialistas, es dable constatar que es igualmente necesario legislar, pues si bien es correcto que se pueda contratar a personas que no han acreditado sus especialidades en el país, solo pueden ser contratados como médicos generales, pero no como especialistas para resolver asuntos propios de las especialidades.

En tal sentido, si el deseo es que ellos puedan otorgar prestaciones GES de especialidades, deben estar inscritos en el registro correspondiente de la Superintendencia de Salud, y ello solo pueden hacerlo en tanto hayan acreditado su especialidad en el país. Con esta iniciativa podrán hacerlo mientras están en dicho proceso, y no únicamente una vez acabado el mismo.

Aparte de la intervención de representantes del Ejecutivo, la Comisión escuchó al presidente de la Corporación Nacional de Certificación de Especialidades Médicas (Conacem), la presidenta del Colegio Médico de Chile y el director ejecutivo del Eunacom.

Resumen del contenido del proyecto aprobado por el Senado

El proyecto de ley aprobado por el Senado, que no fue objeto de modificaciones por parte de nuestra comisión en este primer trámite reglamentario, porque fue rechazado por esta, está constituido por un artículo permanente y uno transitorio.

Mediante el artículo único permanente, se dispone, en el inciso primero, que por el lapso de dos años, contados desde la publicación de esta ley, los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en Chile o en el extranjero y aquellos a los que se refiere el inciso segundo del artículo 2 bis de la ley N° 20.261 quedarán habilitados para ejercer su especialidad en el sector público de salud en todo el territorio nacional, aun cuando no hubieren obtenido la certificación de su respectiva especialidad o subespecialidad de conformidad con las normas establecidas en el número 13 del artículo 4° del decreto con fuerza ley Nº 1, del Ministerio de Salud, de 2005, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979, y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469, siempre que hubieren presentado su solicitud de certificación a alguna de las entidades certificadoras autorizadas por el Ministerio de Salud durante la vigencia de esta ley o bien la hubiesen presentado con anterioridad y se encontrare en trámite.

Su inciso segundo consagra que los médicos que hubiesen obtenido su especialidad médica en el extranjero, al igual que su título profesional, y que se encuentren en el presupuesto del inciso anterior, se encontrarán eximidos por el plazo de dos años, contados desde la publicación de esta ley, del requisito de aprobar el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina, establecido en el artículo 1° de la ley N° 20.261, para ingresar a los cargos o empleos de médico cirujano en los servicios de salud creados por el artículo 16 del decreto con fuerza de ley Nº 1, del Ministerio de Salud, de 2005, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979, y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469; en la Subsecretaría de Salud Pública; en las secretarías regionales ministeriales de Salud; en los establecimientos de carácter experimental creados por el artículo 6º de la ley Nº 19.650, y en los establecimientos de atención primaria de salud municipal.

Asimismo, se propone que transcurrido el plazo de dos años, contado desde la publicación de la ley en el Diario Oficial, para continuar ejerciendo la profesión de médico cirujano y su especialidad, esos profesionales deberán haber obtenido la certificación de su especialidad o subespecialidad, según corresponda, de conformidad con lo preceptuado por la legislación vigente en la materia.

Encomienda a la Superintendencia de Salud la obligación de implementar un registro público especial, en el Registro Nacional de Prestadores Individuales de la Superintendencia de Salud, para los médicos que resulten transitoriamente habilitados para ejercer su profesión y especialidad en Chile de conformidad a esta ley, siendo obligación de la entidad contratante informar tal contratación a la Superintendencia, mediante oficio que deberá enviar dentro del plazo de treinta días corridos, contados desde la suscripción del contrato. La infracción a la obligación de informar por parte de las entidades contratantes será sancionada en conformidad al artículo 174 del Código Sanitario.

Su artículo transitorio permite acogerse a la habilitación temporal que autoriza esta ley, a los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en centros de formación universitaria y que no hayan reprobado los exámenes en procesos de calificación anteriores rendidos ante la Corporación Nacional Autónoma de Certificación de Especialidades Médicas. Se mandata, además, al Ministerio de Salud para que dicte las normas operativas que hagan aplicable la ley.

Votación en general del proyecto

La comisión, tras haber escuchado los argumentos y opiniones emitidos por el representante del Ejecutivo, y luego de recibir las opiniones, explicaciones y observaciones de las personas e instituciones individualizadas precedentemente, que permitieron a sus miembros formarse una idea de la iniciativa legal sometida a su conocimiento, rechazó por mayoría de votos la idea de legislar, por 7 votos en contra y 6 a favor.

Votaron en contra los siguientes diputados y diputadas: Juan Luis Castro , Cariola , Ricardo Celis (Presidente), Crispi , Ibáñez , Rosas y Torres.

Votaron a favor los siguientes diputados y diputadas: Andrés Celis , Jorge Durán , Gahona , Macaya , Ossandón y Sanhueza .

Es todo cuanto puedo informar.

He dicho.

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

En discusión el proyecto. Tiene la palabra el diputado Daniel Verdessi .

El señor VERDESSI.-

Señor Presidente, este proyecto colabora con el servicio público de salud. El proyecto original suspendía la aplicación del Eunacom por dos años, con la finalidad de asegurar la dotación de médicos en el sistema de salud en medio de la pandemia. La posterior indicación del Ejecutivo sustituye el texto original para permitir a los médicos que hayan obtenido su especialidad en universidades chilenas reconocidas por el Estado o en el extranjero ejercer en el sector público por dos años. El organismo a cargo de controlar, evaluar y establecer un mecanismo de control de estos médicos será la Superintendencia de Salud.

Quiero señalar que, basado en mi experiencia -hasta hace dos años era médico de urgencias en el hospital Carlos van Buren -, valoro de forma muy importante el aporte que hacen los médicos extranjeros a la salud en Chile, y les hago un homenaje.

Como médico especialista en el servicio de urgencias, me tocó hacer turnos completamente solo, sin nadie que me acompañara. Una vez llegó el director del hospital y me dijo: “Tengo un médico venezolano, a ver si nos puede ayudar”. Lo recuerdo perfectamente. Se trataba del doctor Luis León , quien me ayudó a operar urgencias extremas, demostrando su calidad, pues era un gran cirujano.

También pude conocer a otros médicos especialistas que se integraron y contribuyeron, especialmente en la gestión del servicio de urgencias. Creo que sin el aporte de todos ellos habríamos estado en graves problemas, porque todavía no hemos resuelto nuestra falta de especialistas.

No visualizo en los argumentos que se dan para rechazar este proyecto argumentos que vayan en contra de lo público. Los médicos extranjeros que laboran en el sector público tienen mecanismos de evaluación que, a mi juicio, son un poco exagerados para algunos de ellos y muy pocos para otros. Tenemos convenios antiguos, del siglo pasado o antepasado, por ejemplo, con Ecuador, a cuyos médicos no se les piden esos requisitos porque existe un convenio.

Después de evaluar la situación actual de las unidades de emergencia de los servicios quirúrgicos, necesitamos apoyo en el sector público, no así en el sector privado, donde labora una gran cantidad de médicos chilenos y una cantidad menor de extranjeros.

Debemos tener una mirada de protección a lo público. Considero que no tenemos mayores riesgos, porque los mecanismos de control que tiene el sistema público, en especial a través de la Superintendencia de Salud, son muy estrictos. La historia de las universidades de Venezuela, Perú y Ecuador es suficiente para decir que un médico especialista surgido de ellas tiene la capacidad suficiente para trabajar en el país, especialmente en este periodo. Por lo tanto, me parece que es prudente el plazo de dos años para evaluar su gestión.

Los jefes de unidades de emergencia y los colegas médicos saben claramente quiénes tienen las competencias necesarias y no un simple examen de Eunacom, que me parece anacrónico y poco afortunado, pues evalúa elementos que no son de la acción directa de los médicos.

Por lo tanto, de acuerdo a mi postura personal y a mi experiencia en el servicio público de salud, votaré a favor el proyecto.

He dicho.

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra la diputada Ximena Ossandón

La señora OSSANDÓN (doña Ximena).-

Señor Presidente, este proyecto propone regular ciertos aspectos dada la compleja situación que vamos a enfrentar tras esta pandemia, en la que los hospitales han estado centrados en el tratamiento de pacientes aquejados de covid-19. Todos sabemos cómo han aumentado las listas de espera. Por eso, de alguna forma, nos debemos hacer cargo de solucionar el problema.

El proyecto señala que los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en Chile o en el extranjero -también pueden ser chilenosvan a quedar habilitados para ejercer su especialidad en el sector público de salud en todo el territorio nacional -hoy sí están habilitados para el sector privado-, aun cuando no hubieren obtenido la certificación de su respectiva especialidad o subespecialidad.

La habilitación es por el plazo de dos años, lo que es muy importante tener en claro. Con ello se beneficiará a muchos médicos especialistas chilenos y extranjeros.

Cabe indicar que los médicos deben certificar su especialidad en Chile, por lo que no deben haber reprobado el examen realizado por Conacem. En esa prueba, el médico se inscribe y entrega los certificados correspondientes, y este órgano certifica que el médico puede rendir la prueba de su especialidad y cuándo le corresponde darla. Este proceso no es como el de la prueba Eunacom , sino que puede durar, incluso, dos años.

Con ello se derriba el mito de que cualquier persona podrá acogerse al beneficio de este proyecto. Eso no será así, ya que, como dijo el diputado que me antecedió en el uso de la palabra, hay un mecanismo de control: tienen que presentar sus papeles, y este organismo certifica que esa persona que viene del extranjero, o ese chileno que regresa al país, desarrolló su especialidad.

Insisto: es muy importante esto de los dos años para continuar ejerciendo la profesión de médico cirujano y su especialidad. Esos profesionales van a tener que aprobar sí o sí el examen de la Conacem. Si el médico lo aprueba, quedará eximido de rendir el Eunacom, porque lo que necesitamos en Chile son muchísimos especialistas, y eso nadie lo puede poner en duda.

Se permite a médicos con títulos obtenidos en universidades reconocidas por el Estado y especialidades en el extranjero ejercer en el sector público por dos años. Disculpen que sea reiterativa, pero efectivamente no se trata de médicos cualesquiera; no son médicos que provienen de cualquier universidad o de cualquier país. Y, curiosamente, hay más médicos extranjeros ejerciendo la profesión en el sector privado que en el público.

Este proyecto no tiene como objetivo debilitar el sector público de salud -es lo que se le ha criticado-, sino apoyarlo. Lo que se busca es hacer viable la atención pública de salud. Estamos viviendo una pandemia y todos sabemos que el sector salud, cuando termine la pandemia -ojalá sea luego-, va a volver a estar recargado en consideración a las extensas listas de espera en todas las especialidades.

Los profesionales de la salud que se admitirán son profesionales. Aquí no viene cualquier persona, sino especialistas. Lo único que resta por analizar son los requisitos formales y necesarios para la persona que hizo su especialidad, los que pueden ser dejados a un lado en épocas de crisis. Señalo esto, porque se hizo exactamente lo mismo en el período de Michelle Bachelet. Incluso, se prorrogaron los permisos para que los profesionales pudieran continuar ejerciendo su especialidad. Esta moción es mucho más restrictiva.

Por eso, me sorprende que algunos se asusten por esta medida. Primero que todo -repito-, se trata de profesionales, no de personas cualesquiera. Hablamos de gente capacitada que tendrá que acreditarse. Por ahora, por el lapso de dos años, contado desde la publicación de esta ley en proyecto, los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en Chile o en el extranjero, y aquellos a los que se refiere el inciso segundo del artículo 2 bis de la ley N° 20.261, quedarán habilitados para ejercer su especialidad en el sector público de salud en todo el territorio nacional, aun cuando no hubieren obtenido la certificación de su respectiva especialidad o subespecialidad, lo que no quiere decir que no se deberán acreditar en el futuro.

Para terminar, siento que lo perfecto es enemigo de lo bueno. Es importante mirar con realismo la situación actual del país, también la pasada. No digamos que las listas de espera se han solucionado alguna vez. Por eso, creo, compañeros, que debe primar la sensatez y el sentido de realidad. Debemos enfrentar lo que se viene con los insumos que tenemos a mano para salir del mejor modo posible de esta crisis sanitaria en que nos encontramos.

He dicho.

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra, vía telemática, el diputado Ricardo Celis Araya .

El señor CELIS (don Ricardo) [vía telemática].-

Señor Presidente, antes de ser diputado, hasta el 10 de marzo de 2018, trabajé en el sistema público de salud y cumplía turnos, de modo que conozco el sistema. Además, soy académico de la Universidad de La Frontera y he participado en procesos que tienen que ver con la certificación de especialistas.

Debo señalar que hay roles distintos: está el centro formador, el acreditador y la superintendencia. La superintendencia no tiene el rol de acreditar o certificar las competencias. La persona que atiende a un paciente ya tiene las competencias, las habilidades y los elementos suficientes para entregar la atención de calidad que se requiere, ya sea en el sistema público o en el privado.

Mi voto en contra en la Comisión de Salud tuvo que ver fundamentalmente con que se pretende hacer un baipás al sistema de certificación. Uno puede entender perfectamente que esto ocurra en tiempo de pandemia y que sea absolutamente imprescindible llevarlo a cabo. Sin embargo, hay un tema muy relevante: hoy existe un decreto de alerta sanitaria y un estado de excepción constitucional. El Ejecutivo tiene absolutamente todas las facultades para contratar los médicos que el sistema público requiera. No hay ningún obstáculo; lo puede hacer, porque tiene todas las facultades para ello. Basta con que tome la decisión. Por lo tanto, saltarse el proceso de acreditación so pretexto de que hoy vivimos una urgencia, me parece que no corresponde, ya que de todos modos el Ejecutivo puede contratar los médicos que el sistema necesite.

En segundo lugar, habría que preguntarse por qué no se están llevando a cabo prestaciones, por qué la lista de espera está aumentando. La respuesta es porque el sistema está funcionado a un 25 o a un 30 por ciento de su capacidad y se está enfocando en tareas vinculadas fundamentalmente con la covid-19, no porque falten especialistas. Las camas críticas y complejas necesarias para cierto tipo de cirugías están siendo ocupadas y destinadas a enfrentar la pandemia.

Los especialistas están; especialistas hay.

Reitero: las listas de espera que vamos a tener por un par de años más -la pandemia se va a extender durante todo ese tiempono tienen que ver con la falta de especialistas, sino con la capacidad operativa del sistema, la que se encuentra disminuida, porque las camas y las atenciones están destinadas a la covid-19.

Ahora bien, un tema realmente importante que nos señalaron representantes del Colegio Médico -me parece absolutamente atendible y razonabletiene que ver con la falta de especialistas y las razones de ello. ¿Se debe a que no hay especialistas disponibles o a que no hay cargos formales y permanentes en el sistema público para los especialistas? Uno de los puntos que es importante analizar tiene que ver con que el sistema público está debilitado, porque no tiene una oferta de cargos suficiente, no se ha fortalecido, no tiene espaldas y estamos haciendo baipás innecesarios so pretexto de la pandemia.

Mi voto en contra en la Comisión de Salud tuvo que ver fundamentalmente, primero, con que no hay que baipasear este tema; segundo, la superintendencia no es acreditadora; solamente tiene sistema de registro; tercero, no hay suficientes cargos para especialistas en el sistema público, y cuarto, la autoridad sanitaria, con estado de alerta sanitaria y con estado de excepción constitucional decretado, puede abordar esto sin ninguna dificultad. Si quiere hacerlo, lo puede hacer.

Repito: no es necesario hacer baipás ni tomar caminos cortos, sino acreditar las competencias, una de las grandes tareas que asumió el país.

He dicho.

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Sergio Gahona Salazar .

El señor GAHONA.-

Señor Presidente, desde el anuncio del primer contagiado por covid-19 en el mundo, el gobierno ha estado preocupado de entregar al sistema de salud las herramientas necesarias para el correcto combate contra la pandemia.

Antes de la llegada de los primeros contagiados a Chile, ya estaba unificada la red de salud. A los pocos días llegaban los ventiladores, camas, hospitales modulares y, además, la entrega adelantada de cinco hospitales. Aumentar la capacidad de la atención era el objetivo, y se logró bien.

El día de hoy estamos deliberando si se entrega al sistema de salud una herramienta más, capaz de aumentar su recurso más valioso: los profesionales que ahí trabajan. En ese sentido, en virtud de este proyecto de ley, se permite prorrogar la rendición del examen de especialidad a quienes, luego de terminados completamente sus estudios en universidades reconocidas por el Estado, quieran postular para trabajar en el sistema público de salud y no solo en el sector privado.

Los nuevos ventiladores y las camas UCI sirven mucho, pero sirven más cuando hay una mayor cantidad de profesionales que saben operarlos. Así, para incorporar más médicos especialistas al sistema de salud, es necesario aprobar esta iniciativa que posterga temporalmente esas exigencias.

No se pone en peligro la calidad de las atenciones que se recibirán por parte de los profesionales que se incorporarían al sistema, porque solo podrán postular a esta prórroga quienes hayan completado sus estudios en instituciones reconocidas y respetadas, y terminado el período de dos años deberán rendir el examen correspondiente para mantener esa posición.

Esto es necesario ahora; es importante contar con esta herramienta para aumentar la dotación de médicos especialistas en todo Chile y así continuar esta ardua lucha contra la covid-19. Aún así, este proyecto de ley también pone los ojos en lo que se viene después del coronavirus.

De los cientos de problemas que trajo la covid-19, uno de ellos tiene relación con los pacientes no contagiados con el virus. Han quedado atrasados un sinfín de atenciones, prestaciones, tratamientos y controles médicos. Para cuando se tenga una vacuna contra el virus, se pronostica que la demanda por atenciones no relacionadas con la covid-19 será significativamente más alta en comparación con otros períodos.

Entonces, ¿quién podría estar en desacuerdo con esta iniciativa, que beneficia especialmente a las zonas y regiones más aisladas, donde la escasez de médicos especialistas en estas situaciones de urgencias es importante?

En pocas palabras, hoy debemos aprobar este proyecto de ley que busca solo postergar -no cancelar ni eximirla rendición del examen de especialidad, permitiendo el ingreso de muchos nuevos médicos al sistema público de salud, no solo para combatir la pandemia en el corto plazo, sino también para apoyar el otorgamiento de atenciones y tratamientos que no se pudieron dar con anterioridad.

En nombre de las regiones más apartadas, donde la gente no tiene especialistas, les pido a todos aprobar este proyecto.

He dicho.

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra la diputada Alejandra Sepúlveda Orbenes .

La señora SEPÚLVEDA (doña Alejandra).-

Señor Presidente, primero, no sé quién se podría oponer a este proyecto. Cuando uno recorre las regiones y los sectores más alejados de esas regiones, se da cuenta de que no tenemos especialistas y que, además, no tenemos ninguna posibilidad de tenerlos.

Y frente a los problemas que hoy tenemos con la pandemia y las listas de espera en relación con todas las patologías que no son respiratorias y que no tienen que ver con el AUGE, cabe expresar: ¡Por Dios que tenemos dificultades hoy!

He escuchado, con mucha paciencia, lo que han planteado los diputados que hoy están en contra del proyecto, y ellos, más bien, plantean problemas estructurales que tenemos en el sistema, como la falta de cupos, las capacidades operativas, etcétera. Pero esos son los problemas estructurales que hoy tenemos.

Sin embargo, lo que se pide en este proyecto de ley es hacer una excepción por un período limitado de tiempo, con médicos que ya hicieron su especialidad y que están esperando el momento para ser certificados; pero, además, será con una supervigilancia no solo de la superintendencia, sino también de todo el sistema que está al interior de los hospitales o de los consultorios que, sin duda, también van a revisar lo que hará cotidianamente esa persona hasta que se pueda chequear efectivamente sus habilidades, si es que se necesita chequearlas.

Al respecto, puedo señalar que tengo una experiencia espectacular en San Fernando, con un traumatólogo venezolano que ha facilitado todo el proceso y que está operando. Espero que no se vaya al sector privado; debemos ver cómo podemos retener a los buenos especialistas en el sector público.

Me cuesta entender que no podamos hacer esta excepcionalidad. También se puede hacer a través de una resolución del Ejecutivo, pero hoy este proyecto está aquí en esta Sala. Entonces, entreguemos todas las posibilidades, absolutamente todas. Si debemos hacer este proyecto de ley, que es una moción, votemos a favor, y si se hace con una resolución del Presidente de la República, también apoyemos. Hagamos todo lo que sea necesario; no nos neguemos a algo tan importante y necesario como es tener médicos especialistas.

Por ejemplo, en las regiones, ¿cuándo vamos a tener la posibilidad de tener un endocrinólogo o un dermatólogo? No tenemos esos especialistas; no tenemos esa posibilidad.

Entonces, frente a esta alternativa, no queda más que votar a favor. Hace algún tiempo tuvimos una reunión con varios profesionales que estaban por rendir este examen, pero no se daban las condiciones para hacerlo, y lo único que ellos querían era servir en la atención primaria, en los hospitales y en el sector público. Frente a esa vocación, sería una tontera votar en contra y no abrir la posibilidad de que ellos puedan ejercer en el sector público, y retenerlos. Posteriormente, ellos pueden rendir el examen, después de este paréntesis de dos años.

Por eso, los invito a votar a favor.

He dicho.

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Jorge Sabag Villalobos .

El señor SABAG (vía telemática).-

Señor Presidente, hoy la red pública de salud atiende al 80 por ciento de la población. Sin embargo, el 53 por ciento de los médicos ejercen en el sistema privado de salud. Por lo tanto, aquí hay una brecha que se arrastra por mucho tiempo y que se ha profundizado en este período de pandemia.

Las listas de espera para realizar una cirugía han aumentado en forma considerable. Por lo tanto, es razonable esta excepcionalidad para aumentar la dotación de médicos especialistas solamente por el lapso de dos años desde que sea publicada la ley en el Diario Oficial, período durante el cual estos médicos especialistas deberán regularizar su situación y obtener la certificación respectiva.

Con esta futura ley se permitirá a médicos con títulos obtenidos en universidades reconocidas por el Estado y especialidades en el extranjero ejercer en el sector público por dos años. Transcurridos esos dos años, para continuar ejerciendo la profesión de médico cirujano y sus especialidades deberán obtener la certificación que establece la legislación nacional. Por lo tanto, se permite a médicos con títulos y especialidades obtenidas en el extranjero ejercer, por un plazo de dos años, en el sector público.

En la Región de Ñuble, que represento, hay déficit de especialistas: faltan geriatras, diabetólogos, endocrinólogos, gastroenterólogos, especialistas en enfermedades respiratorias, en imagenología, etcétera. Muchas especialidades van a poder ser resueltas con este proyecto de ley. De manera que estos médicos, aun cuando no hubieren obtenido la certificación de su especialidad, van a poder ejercer siempre que hubieren presentado su solicitud de certificación durante la vigencia de esta ley o con anterioridad a ella.

Por eso, vamos a votar a favor.

Represento a un mundo rural donde obtener un especialista es muy difícil, y con esta iniciativa vamos a dar la oportunidad a miles de chilenos y chilenas para que puedan tener a un especialista que, posteriormente, pueda regularizar su situación.

He dicho.

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra la diputada Karol Cariola Oliva .

La señorita CARIOLA (doña Karol) .-

Señor Presidente, se han dicho varias cosas que, evidentemente, a todos nos preocupan.

No es primera vez que hemos planteado la necesidad de fortalecer el sistema de salud público, la necesidad de democratizar el acceso a la salud, como un derecho fundamental, y la posibilidad de planificar de mejor manera el desarrollo de la salud pública, a partir de la distribución de médicos y especialidades, tanto en la Región Metropolitana como en las demás regiones.

Originalmente, este era un proyecto de ley que, tal como lo estableció el Senado, suspendía por dos años el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina (Eunacom); sin embargo, el Ejecutivo presentó una indicación sustitutiva, donde varió la idea matriz del proyecto, para habilitar temporalmente en el sector público a médicos cirujanos con especialidades, cuando estas no tengan una certificación. Son cosas distintas. Acá, no hay que confundir la certificación con la rendición del Eunacom.

Cada vez que hemos conversado con médicos extranjeros, a quienes les tenemos una gran valoración, por la contribución que hacen a la salud pública de nuestro país, han planteado que no quieren que se elimine la rendición del Eunacom ni que se soslaye la certificación. Es más, el Colegio Médico nos planteó, en la Comisión de Salud, que no estaban de acuerdo con esta fórmula para resolver el problema, porque una cosa es la certificación y otra distinta es la rendición del Eunacom.

Me parece muy importante señalar que, a propósito de esta indicación sustitutiva del Ejecutivo, que establece artículos permanentes, no transitorios, como era la propuesta original, se genera un problema relacionado fundamentalmente con la técnica legislativa que se utilizó, pues una medida de este tipo necesariamente debe ser de carácter transitorio y condicionada fundamentalmente a la pandemia, como han dicho algunos colegas. En eso, el diputado Ricardo Celis fue muy claro al establecer que hoy el gobierno tiene las facultades para adoptar medidas administrativas en esa dirección, que se acoten fundamentalmente a las necesidades de la pandemia. Pero cuando esto no es transitorio, si bien tiene un plazo en relación con el Eunacom, y no se establece en relación con la certificación, nos parece preocupante.

Además, que el gobierno se haya negado permanentemente a fortalecer al sector público de salud y a desestimar los mecanismos de certificación de habilidades, que, justamente, buscan otorgar más calidad y resguardo a la salud pública para el 80 por ciento de la población que se atiende en el sector público, me parece que puede llegar a ser, al menos, una tremenda irresponsabilidad.

La función de la certificación de especialidades es disminuir el espacio para que la comisión cometa errores en la praxis médica, ya que dichos errores producen secuelas que, muchas veces, pueden ser fatales o irreversibles.

Por tanto, pregunto: ¿Por qué no nos abrimos a discutir mejor una planificación a largo plazo de los médicos, de los profesionales y técnicos de la salud que necesitamos, de los salarios con los que compite el sector público en relación con el sector privado, que no tienen regulación? ¿Quiénes de esta Cámara estarían dispuestos a atenderse con un profesional no certificado o no acreditado? Finalmente, lo que estamos haciendo es que solo un sector de la población quede condenado a esta incertidumbre.

Creo que eso no corresponde, y me parece fundamental, al hablar de especialidad, hacer la diferencia entre un médico general, un médico cirujano y una especialidad.

Hubo todo un conflicto en el policlínico Maruri , cuando médicos generales se hicieron pasar por especialistas y atendieron especialidades sin tener los conocimientos.

Por eso, como bancada, vamos a rechazar este proyecto.

He dicho.

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Gustavo Sanhueza Dueñas .

El señor SANHUEZA.-

Señor Presidente, no me sorprende escuchar por parte de la izquierda obstruccionista que van a rechazar este proyecto -qué duda cabe-, si han tratado de obstruir todo lo que propone el gobierno en beneficio de nuestro país. Por algo está parada la reformulación del Fonasa, que contribuiría a mejorar los estándares de la salud en nuestro país y que beneficiaría, precisamente, a ese 80 por ciento que se atiende en el sector público. Indudablemente, cuando hay algún proyecto de ley que va en beneficio de la ciudadanía, la izquierda obstruccionista nuevamente va a decir que lo rechaza.

¿De qué se trata este proyecto?

En una época de crisis, de pandemia, donde sabemos que muchos procesos van a ser retrasados, incluso, las pruebas del Eunacom, Chile va a necesitar con mayor urgencia especialistas que puedan ayudar durante el período de pospandemia. Una vez que pase esta crisis sanitaria, producto de la covid-19, sabemos que todos los centros de salud se van a ver atiborrados de gente que buscará respuestas a sus necesidades de salud, porque mucha gente ha postergado sus visitas a los especialistas, precisamente por temor a contagiarse de la covid-19.

Cuando la crisis por la pandemia comience a bajar, obviamente, esas consultas médicas van a aumentar. ¡Por eso es tan necesario tener una cantidad de especialistas disponibles para esas atenciones!

Este proyecto de ley no está otorgando especialidades por decreto a nadie; es gente que ha hecho sus estudios. Hablamos de profesionales de la salud que ya tienen un título que los acredita como médicos; solo no han terminado los procesos administrativos para acreditarlo en nuestro país, pero de sus estudios realizados en el extranjero hay constancia, lo que permite que sean validados en nuestro país.

Así que, con mucha fuerza, con mucha convicción, pensando en los chilenos y chilenas que necesitan un especialista, voy a aprobar el proyecto.

He dicho.

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Javier Macaya Danús .

El señor MACAYA.-

Señor Presidente, valoro este proyecto, que nació como una moción de los senadores Navarro, Latorre , entre otros, el cual fue objeto de una indicación sustitutiva por parte del Ejecutivo, en consideración a una realidad que todos conocemos: que en Chile hay déficit de médicos. Tenemos cerca de 20.000 médicos menos de los que debería haber. Hay una proyección al 2030 que habla de 7.200 médicos menos de los que necesitaremos.

Desde esa perspectiva, quiero poner de relieve el rol que han cumplido los médicos extranjeros, porque ha sido muy importante en la posibilidad de ir generando el desatochamiento de las listas de espera y atender en lugares donde muchas veces los médicos nacionales no han tenido la oportunidad de concurrir.

Por eso, para nosotros es fundamental aprobar este proyecto. Resulta inexplicable la oposición que han mostrado algunos parlamentarios. Lamentablemente, en la Comisión de Salud no se concurrió con los votos que se necesitaban para enviar el informe aprobado a la Sala, lo que creo que se hizo, quizás, faltando de alguna manera al espíritu que vive nuestro país actualmente. Ante circunstancias excepcionales hemos tenido la capacidad de aprobar medidas excepcionales durante los últimos meses, fruto de la pandemia. Estamos hablando de una circunstancia excepcionalísima, que no solo significa que hoy tengamos déficit de médicos, lo que ya hemos conocido históricamente en Chile, sino que lo tengamos pospandemia. Por eso, el horizonte de dos años plazo que establece este proyecto es muy relevante. Dado el énfasis que se ha dado al tratamiento de la covid-19 como enfermedad y dado lo que va a significar el aumento de las listas de espera poscovid-19, es muy importante generar esta excepcionalidad por dos años.

Es falso que se trate de una medida que no se preocupa de la calidad. Se trata de médicos que hayan iniciado el trámite de certificación y que no pueden haber reprobado anteriormente el examen de la Conacem. Es evidente que estamos hablando de personas que tengan la especialidad médica, que hayan obtenido el título médico universitario en el extranjero y que ya hayan iniciado el trámite de certificación. Producto de la pandemia es evidente que la burocracia ha significado que trámites que antes demoraban menos tiempo, hoy demoren más.

El rol que han cumplido los médicos extranjeros en desatochar las listas de espera hoy, y el que también van a cumplir quizás en el período pospandemia es muy relevante. Por eso, este proyecto es muy importante.

La iniciativa dispone que los médicos que hubiesen obtenido su especialidad médica en el extranjero, al igual que su título profesional, se van a encontrar eximidos por el plazo de dos años del requisito de aprobar el Eunacom para ingresar a los cargos o empleos de médico cirujano en los servicios de Salud, en la Subsecretaría de Salud Pública, en las seremis de Salud, etcétera.

Creo que también es útil recordar que en el decreto de alerta sanitaria ya se permitió contratar a médicos que hayan obtenido su título en el extranjero y que este título se encuentre revalidado, aun cuando no hayan finalizado el Eunacom; eso ya está aprobado. Lo que busca este proyecto es tener especialistas, es tener cirujanos, es tener aquellas especialidades cuya carencia es justamente la principal causante de las listas de espera en nuestro país. Desde esa perspectiva, no solo hay que pensar en el tiempo de pandemia, en lo que estamos viviendo hoy en nuestros servicios de Salud, sino en la realidad que vamos a vivir en los próximos dos años.

Las certificaciones se han demorado en muchos casos no porque los médicos extranjeros hayan querido que se demoraran o porque no estén disponibles para demostrar sus conocimientos; las certificaciones se han demorado también por el período de pandemia que estamos viviendo.

Por eso, es falso cuando se dice que este proyecto va a generar un problema a la calidad. Lo que harán las personas que rechacen este proyecto será generar un manto de protección a aquellos médicos nacionales especialistas que no quieren la irrupción de los médicos extranjeros en un momento en que el déficit de médicos es muy importante.

Por eso, por el rol que han cumplido los médicos extranjeros en la solución de los problemas de salud de nuestro país, creo que es muy relevante aprobar este proyecto. La bancada de diputados de la UDI va a concurrir unánimemente a su aprobación. Esperamos lo mismo de aquellos parlamentarios que se oponen quizás con un fin desde la perspectiva de la salud pública, que entiendo y con el cual empatizo; pero estamos hablando de un momento excepcional en la historia de Chile.

Así como hemos aprobado suspensiones de créditos, el retiro del 10 por ciento de los fondos de las AFP y otras medidas que son absolutamente excepcionales en tiempos de pandemia, aprobemos este proyecto e incorporemos a la fuerza médica de Chile a médicos extranjeros que hoy están significando un aporte en el sector público de salud.

He dicho.

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Víctor Torres Jeldes .

El señor TORRES.-

Señor Presidente, solo tengo un minuto para tratar de explicar por qué hay que rechazar este proyecto de ley.

La verdad es que esta es una muy mala idea. Una vez más el gobierno quiere tratar de resolver sus problemas de desidia frente a la situación de la salud pública chilena a costa de la calidad de la atención y poniendo en riesgo la vida de los pacientes.

Eliminar cualquier posibilidad de tener una prueba que certifique y garantice la calidad de quienes van a atender a los chilenos y chilenas en el servicio público -esto no tiene nada que ver con el sistema privado-, obviamente es algo que pone en riesgo a muchos chilenos y chilenas.

Ni siquiera la pandemia justifica la desidia que ha tenido el gobierno, que hoy perfectamente podría autorizar a las universidades y a otras entidades para certificar a médicos extranjeros. En cambio, ¿qué hace? Una iniciativa de ley para, durante dos años, no certificarlos y poner, insisto, en riesgo la salud de las personas, lo que no se justifica en lo absoluto.

Por eso, llamo a rechazar este proyecto.

He dicho.

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Miguel Crispi Serrano .

El señor CRISPI.-

Señor Presidente, creo que en este proyecto tenemos una urgencia compartida. Sin embargo, puede ser que este proyecto termine siendo un atajo con terribles consecuencias.

La Constitución establece la libertad de trabajo, pero también establece que esa libertad es restringida en casos de sanidad pública. ¿Por qué lo hace? Porque las consecuencias de la libertad de trabajo en el ámbito de la salud pueden no revertirse, como la pérdida de la vida de una persona o que se trunque su futuro por una cirugía mal hecha.

Ese es el peso del voto que tenemos que ejercer hoy. Tenemos que tomarle el peso a si en ese voto en positivo estamos disponibles a correr ese riesgo. Y como bien decía el diputado Torres, no me parece razonable que estemos disponibles a correr ese riesgo solo para el sector público. Es decir, en el sector público tendríamos un estándar más bajo de cuidado, en relación con las capacidades que tienen los profesionales de la salud, por ejemplo, para realizar una intervención quirúrgica.

Por otro lado, esta discusión no es nueva. El año pasado hubo una movilización tremenda de médicos especialistas que tenían un acuerdo con el gobierno, por año, de ir aumentando los cupos en el ámbito del sector público. Ese acuerdo no se ha cumplido.

Por lo tanto, hoy se intenta generar un atajo que nos puede terminar llevando a terribles consecuencias.

Por esa razón rechazamos este proyecto en la comisión. Escuchamos distintas opiniones, pero, al final, sin perjuicio de que hubiera argumentos de ambos lados, me parece que en el ámbito de la salud los atajos no valen.

Este es un proyecto que no tiene que ver con la migración -bienvenida la migración-; tiene que ver con un bien superior, que en este caso es el cuidado de los pacientes, el cuidado de las personas que necesitan una atención de salud.

Si estamos tan de acuerdo en que no es tan importante el Eunacom, que es desmedido o de una época anterior, entonces eliminémoslo. Eliminemos esa prueba si no es tan relevante. Pero la verdad es que nadie ha propuesto eso, porque sabemos que es necesario que en el ámbito de la salud tengamos una prueba que garantice los conocimientos y certifique ciertas capacidades que son, de verdad, de primera necesidad para el país. Reitero: nadie ha propuesto su eliminación.

Por lo tanto, no me parece bien que avancemos en la dirección de bajar las garantías que tienen los y las pacientes al momento de atenderse.

Por eso, invito a rechazar este proyecto, porque en el ámbito de la salud los atajos no valen. Quizás conocemos a un médico que sin tener rendida la prueba es excepcional, pero no podemos legislar en función de las excepciones; tenemos que legislar en función de la norma, y la norma es que necesitamos estándares altísimos para la atención de los pacientes en la salud pública y en la salud en general.

Por eso, desde Revolución Democrática, en la bancada del Frente Amplio, vamos a rechazar este proyecto y así esperamos que ocurra en el común de la Sala.

He dicho.

El señor UNDURRAGA (Presidente).-

Cerrado el debate.

-Con posterioridad, la Sala se pronunció sobre este proyecto de ley en los siguientes términos:

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

Corresponde votar en general el proyecto de ley, iniciado en moción, que habilita temporalmente a los médicos cirujanos que indica para ejercer sus especialidades en el sector público.

Hago presente a la Sala que el proyecto de ley trata materias propias de ley simple o común.

En votación.

-De conformidad con lo dispuesto en el Reglamento, el señor Secretario tomó de viva voz, por el sistema telemático, las votaciones de los diputados Pedro Pablo Álvarez-Salamanca , Sebastián Álvarez , Tucapel Jiménez , René Alinco y Jaime Mulet .

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 88 votos; por la negativa, 47 votos. Hubo 7 abstenciones.

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Alessandri Vergara , Jorge , Flores García, Iván , Melero Abaroa , Patricio , Rojas Valderrama , Camila , Alinco Bustos , René , Flores Oporto , Camila , Mirosevic Verdugo , Vlado , Romero Sáez , Leonidas , Álvarez Ramírez , Sebastián , Fuentes Barros , Tomás Andrés , Mix Jiménez , Claudia , Rosas Barrientos , Patricio , Alvarez-Salamanca Ramírez , Pedro Pablo , Fuenzalida Cobo, Juan , Molina Magofke , Andrés , Sabag Villalobos , Jorge , Amar Mancilla , Sandra , Fuenzalida Figueroa , Gonzalo , Morales Muñoz , Celso , Saffirio Espinoza , René , Ascencio Mansilla , Gabriel , Gahona Salazar , Sergio , Morán Bahamondes , Camilo , Sanhueza Dueñas , Gustavo , Auth Stewart , Pepe , Galleguillos Castillo , Ramón , Moreira Barros , Cristhian , Santana Tirachini , Alejandro , Baltolu Rasera, Nino , García García, René Manuel , Mulet Martínez , Jaime , Sauerbaum Muñoz , Frank , Barros Montero , Ramón , Garín González , Renato , Muñoz González , Francesca , Schalper Sepúlveda , Diego , Berger Fett , Bernardo , Hernández Hernández , Javier , Noman Garrido , Nicolás , Sepúlveda Orbenes , Alejandra , Bernales Maldonado , Alejandro , Hoffmann Opazo , María José , Norambuena Farías, Iván , Silber Romo , Gabriel , Bobadilla Muñoz , Sergio , Jürgensen Rundshagen , Harry , Núñez Urrutia , Paulina , Tohá González , Jaime , Carter Fernández , Álvaro , Kast Sommerhoff , Pablo , Olivera De La Fuente , Erika , Torrealba Alvarado , Sebastián , Castro Bascuñán , José Miguel , Keitel Bianchi , Sebastián , Ossandón Irarrázabal , Ximena , Trisotti Martínez , Renzo , Cid Versalovic , Sofía , Kort Garriga , Issa , Parra Sauterel , Andrea , Troncoso Hellman , Virginia , Cruz-Coke Carvallo , Luciano , Kuschel Silva , Carlos , Paulsen Kehr , Diego , Undurraga Gazitúa , Francisco , Cuevas Contreras, Nora , Lavín León , Joaquín , Pérez Lahsen , Leopoldo , Urrutia Soto , Osvaldo , Del Real Mihovilovic , Catalina , Longton Herrera , Andrés , Pérez Olea , Joanna , Urruticoechea Ríos , Cristóbal , Díaz Díaz , Marcelo , Lorenzini Basso , Pablo , Prieto Lorca , Pablo , Van Rysselberghe Herrera , Enrique , Durán Espinoza , Jorge , Luck Urban , Karin , Ramírez Diez , Guillermo , Verdessi Belemmi , Daniel , Durán Salinas , Eduardo , Macaya Danús , Javier , Rathgeb Schifferli , Jorge , Von Mühlenbrock Zamora , Gastón , Eguiguren Correa , Francisco , Marzán Pinto , Carolina , Rentería Moller , Rolando , Walker Prieto, Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Alarcón Rojas , Florcita , Crispi Serrano , Miguel , Labra Sepúlveda , Amaro , Santana Castillo, Juan , Álvarez Vera , Jenny , Espinoza Sandoval , Fidel , Leiva Carvajal, Raúl , Santibáñez Novoa , Marisela , Barrera Moreno , Boris , Fernández Allende, Maya , Mellado Pino , Cosme , Schilling Rodríguez , Marcelo , Boric Font , Gabriel , Girardi Lavín , Cristina , Monsalve Benavides , Manuel , Soto Ferrada , Leonardo , Brito Hasbún , Jorge , González Gatica , Félix , Naranjo Ortiz , Jaime , Teillier Del Valle, Guillermo , Calisto Águila , Miguel Ángel , Gutiérrez Gálvez, Hugo , Núñez Arancibia , Daniel , Torres Jeldes , Víctor , Cariola Oliva , Karol , Hernando Pérez , Marcela , Nuyado Ancapichún , Emilia , Vallejo Dowling , Camila , Carvajal Ambiado , Loreto , Hirsch Goldschmidt , Tomás , Orsini Pascal , Maite , Velásquez Núñez , Esteban , Castillo Muñoz , Natalia , Ibáñez Cotroneo , Diego , Pérez Salinas , Catalina , Vidal Rojas , Pablo , Castro González, Juan Luis , Ilabaca Cerda , Marcos, Rocafull López , Luis , Winter Etcheberry , Gonzalo , Celis Araya , Ricardo , Jackson Drago , Giorgio , Saavedra Chandía , Gastón , Yeomans Araya , Gael , Cicardini Milla , Daniella , Jiménez Fuentes , Tucapel , Saldívar Auger, Raúl.

-Se abstuvieron los diputados señores:

Celis Montt , Andrés , Jiles Moreno , Pamela , Pérez Arriagada , José , Venegas Cárdenas , Mario , Jarpa Wevar , Carlos Abel , Mellado Suazo , Miguel , Soto Mardones, Raúl.

El señor UNDURRAGA (Vicepresidente).-

Por no haber sido objeto de indicaciones, el proyecto además queda aprobado en particular, con la misma votación.

Despachado el proyecto.

2.3. Oficio de Cámara Revisora a Cámara de Origen

Oficio Aprobación sin Modificaciones . Fecha 29 de septiembre, 2020. Oficio en Sesión 96. Legislatura 368.

VALPARAÍSO, 29 de septiembre de 2020

Oficio N° 15.917

A S.E. LA PRESIDENTA DEL H. SENADO

La Cámara de Diputados, en sesión de esta fecha, ha aprobado, en los mismos términos en que lo hiciera ese H. Senado, el proyecto de ley que habilita temporalmente a los médicos cirujanos que indica, para ejercer sus especialidades en el sector público, correspondiente al boletín N° 13359-11.

Lo que tengo a honra decir a V.E., en respuesta a vuestro oficio Nº 201/SEC/20 de fecha 2 de junio de 2020.

Devuelvo los antecedentes respectivos.

Dios guarde a V.E.

FRANCISCO UNDURRAGA GACITÚA

Presidente (A) de la Cámara de Diputados

MIGUEL LANDEROS PERKI?

Secretario General de la Cámara de Diputados

3. Trámite Finalización: Senado

3.1. Oficio de Cámara de Origen al Ejecutivo

Oficio Ley a S. E. El Presidente de la República. Fecha 30 de septiembre, 2020. Oficio

Valparaíso, 30 de septiembre de 2020.

Nº 502/SEC/20

A SU EXCELENCIA EL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA

Tengo a honra comunicar a Vuestra Excelencia que el Congreso Nacional ha dado su aprobación al siguiente

PROYECTO DE LEY:

“Artículo único.- Por el lapso de dos años contado desde la publicación de esta ley, los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en Chile o en el extranjero y aquéllos a los que se refiere el inciso segundo del artículo 2 bis de la ley N° 20.261 quedarán habilitados para ejercer su especialidad en el sector público de salud en todo el territorio nacional, aun cuando no hubieren obtenido la certificación de su respectiva especialidad o subespecialidad de conformidad con las normas establecidas en el número 13 del artículo 4° del decreto con fuerza de ley Nº 1, del Ministerio de Salud, promulgado el año 2005 y publicado el año 2006, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979, y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469, siempre que hubieren presentado su solicitud de certificación a alguna de las entidades certificadoras autorizadas por el Ministerio de Salud, durante la vigencia de esta ley o bien la hubiesen presentado con anterioridad y se encontrare en trámite.

Los médicos que hubiesen obtenido su especialidad médica en el extranjero, al igual que su título profesional, y que se encuentren en el presupuesto del inciso anterior, se encontrarán eximidos por el plazo de dos años, contado desde la publicación de esta ley, del requisito de aprobar el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina establecido en el artículo 1° de la ley N° 20.261, para ingresar a los cargos o empleos de médico cirujano en los Servicios de Salud creados por el artículo 16 del decreto con fuerza de ley Nº 1, del Ministerio de Salud, promulgado el año 2005 y publicado el año 2006, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979, y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469; en la Subsecretaría de Salud Pública; en las Secretarías Regionales Ministeriales de Salud; en los establecimientos de carácter experimental creados por el artículo 6º de la ley Nº 19.650, y en los establecimientos de atención primaria de salud municipal.

Transcurrido el plazo de dos años contado desde la publicación de la presente ley en el Diario Oficial, para continuar ejerciendo la profesión de médico cirujano y su especialidad, estos profesionales deberán haber obtenido la certificación de su especialidad o subespecialidad, según corresponda, de conformidad con lo preceptuado por la legislación vigente en la materia.

La Superintendencia de Salud deberá implementar un registro público especial, en el Registro Nacional de Prestadores Individuales de la Superintendencia de Salud, para los médicos que resultaren transitoriamente habilitados para ejercer su profesión y especialidad en Chile de conformidad a la presente ley, siendo obligación de la entidad contratante informar tal contratación a la Superintendencia, mediante oficio que deberá enviar dentro del plazo de 30 días corridos, contados desde la suscripción del contrato. La infracción a la obligación de informar por parte de las entidades contratantes será sancionada en conformidad al artículo 174 del Código Sanitario.

Artículo transitorio.- Podrán acogerse a la habilitación temporal que autoriza la presente ley los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en centros de formación universitaria y que no hayan reprobado los exámenes en procesos de calificación anteriores rendidos ante la Corporación Nacional Autónoma de Certificación de Especialidades Médicas.

El Ministerio de Salud dictará las normas operativas para la aplicación de la presente ley.”.

- - -

Hago presente a Su Excelencia que esta iniciativa de ley tuvo su origen en moción de los Honorables senadores señor Alejandro Navarro Brain, señora Yasna Provoste Campillay, y señores Juan Ignacio Latorre Riveros, Jaime Quintana Leal y Rabindranath Quinteros Lara.

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Dios guarde a Vuestra Excelencia.

ADRIANA MUÑOZ D´ALBORA

Presidenta del Senado

RAÚL GUZMÁN URIBE

Secretario General del Senado

4. Publicación de Ley en Diario Oficial

4.1. Ley Nº 21.274

Tipo Norma
:
Ley 21274
URL
:
https://www.bcn.cl/leychile/N?i=1150483&t=0
Fecha Promulgación
:
06-10-2020
URL Corta
:
http://bcn.cl/2ln67
Organismo
:
MINISTERIO DE SALUD
Título
:
HABILITA TEMPORALMENTE A LOS MÉDICOS CIRUJANOS QUE INDICA, PARA EJERCER SUS ESPECIALIDADES EN EL SECTOR PÚBLICO
Fecha Publicación
:
10-10-2020

LEY NÚM. 21.274

     

HABILITA TEMPORALMENTE A LOS MÉDICOS CIRUJANOS QUE INDICA, PARA EJERCER SUS ESPECIALIDADES EN EL SECTOR PÚBLICO

     

    Teniendo presente que el H. Congreso Nacional ha dado su aprobación al siguiente proyecto de ley, iniciado en moción de los Honorables senadores señor Alejandro Navarro Brain, señora Yasna Provoste Campillay, y señores Juan Ignacio Latorre Riveros, Jaime Quintana Leal y Rabindranath Quinteros Lara,

     

    Proyecto de ley:

    "Artículo único.- Por el lapso de dos años contado desde la publicación de esta ley, los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en Chile o en el extranjero y aquellos a los que se refiere el inciso segundo del artículo 2 bis de la ley Nº 20.261 quedarán habilitados para ejercer su especialidad en el sector público de salud en todo el territorio nacional, aun cuando no hubieren obtenido la certificación de su respectiva especialidad o subespecialidad de conformidad con las normas establecidas en el número 13 del artículo 4º del decreto con fuerza de ley Nº 1, del Ministerio de Salud, promulgado el año 2005 y publicado el año 2006, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979, y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469, siempre que hubieren presentado su solicitud de certificación a alguna de las entidades certificadoras autorizadas por el Ministerio de Salud, durante la vigencia de esta ley o bien la hubiesen presentado con anterioridad y se encontrare en trámite.

    Los médicos que hubiesen obtenido su especialidad médica en el extranjero, al igual que su título profesional, y que se encuentren en el presupuesto del inciso anterior, se encontrarán eximidos por el plazo de dos años, contado desde la publicación de esta ley, del requisito de aprobar el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina establecido en el artículo 1º de la ley Nº 20.261, para ingresar  a los cargos o empleos de médico cirujano en los Servicios de Salud creados por el artículo 16 del decreto con fuerza de ley Nº 1, del Ministerio de Salud, promulgado el año 2005 y publicado el año 2006, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado del decreto ley Nº 2.763, de 1979, y de las leyes Nº 18.933 y Nº 18.469; en la Subsecretaría de Salud Pública; en las Secretarías Regionales Ministeriales de Salud; en los establecimientos de carácter experimental creados por el artículo 6º de la ley Nº 19.650, y en los establecimientos de atención primaria de salud municipal.

    Transcurrido el plazo de dos años contado desde la publicación de la presente ley en el Diario Oficial, para continuar ejerciendo la profesión de médico cirujano y su especialidad, estos profesionales deberán haber obtenido la certificación de su especialidad o subespecialidad, según corresponda, de conformidad con lo preceptuado por la legislación vigente en la materia.

    La Superintendencia de Salud deberá implementar un registro público especial, en el Registro Nacional de Prestadores Individuales de la Superintendencia de Salud, para los médicos que resultaren transitoriamente habilitados para ejercer su profesión y especialidad en Chile de conformidad a la presente ley, siendo obligación de la entidad contratante informar tal contratación a la Superintendencia, mediante oficio que deberá enviar dentro del plazo de 30 días corridos, contados desde la suscripción del contrato. La infracción a la obligación de informar por parte de las entidades contratantes será sancionada en conformidad al artículo 174 del Código Sanitario.

    Artículo transitorio.- Podrán acogerse a la habilitación temporal que autoriza la presente ley los médicos cirujanos que hayan obtenido su especialidad en centros de formación universitaria y que no hayan reprobado los exámenes en procesos de calificación anteriores rendidos ante la Corporación Nacional Autónoma de Certificación de Especialidades Médicas.

    El Ministerio de Salud dictará las normas operativas para la aplicación de la presente ley.".

    Y por cuanto he tenido a bien aprobarlo y sancionarlo; por tanto, promúlguese y llévese a efecto como Ley de la República.

     

    Santiago, 6 de octubre de 2020.- SEBASTIÁN PIÑERA ECHENIQUE, Presidente de la República.- Enrique Paris Mancilla, Ministro de Salud.

    Lo que transcribo a Ud. para su conocimiento.- Saluda atentamente a Ud., Paula Daza Narbona, Subsecretaria de Salud Pública.