El senador Patricio Aylwin Azócar, pronunció la siguiente intervención en la Sesión 16ª Especial, celebrada el jueves 22 de octubre de 1970. A esa fecha, era militante del Partido Demócrata Cristiano e integraba el Senado en representación de la Sexta Agrupación Provincial Curicó, Talca, Linares y Maule, período 1965 a 1973.
Esta intervención del Senador Aylwin, tiene lugar en el marco de la discusión de la Ley N° 17.398, sobre Reforma Constitucional, conocida como “Estatuto de Garantías Constitucionales”, publicada el 9 de enero de 1971. Esta ley es fruto del acuerdo entre la Democracia Cristiana y los dirigentes de la Unidad Popular, en que permitió una reforma constitucional para asegurar el respeto de una serie de garantías, entre ellas: el pluralismo partidista, la libertad de información, la libertad de enseñanza, la autonomía universitaria, las organizaciones sindicales y Comunitarias, la libertad persona, y el Estado de Derecho y Poder Judicial. Todo lo anterior, representaba el esfuerzo de la Democracia Cristiana para consagrar en la Constitución Política un límite al futuro Gobierno y de evitar de esta forma, lo que para algunos actores políticos, la conducción del país hacia un sistema totalitario, en el marco de la experiencia internacional de los gobiernos de signo político semejante. Por otra parte, buscaba cumplir con la tradición republicana: elegir, de acuerdo a la legislación de la época, al candidato con la primera mayoría relativa, en caso de le correspondiera al Congreso Pleno ejercer esta facultad.
En su intervención, el Senador Patricio Aylwin, pronunciada dos días antes del Congreso Pleno para elegir al Presidente de la República, entre los candidatos Salvador Allende y Jorge Alessandri, quienes obtuvieron la primera y segunda mayoría relativa en la elección de 4 de septiembre de 1970, explica cuál es objeto de la reforma: “Precaver las más flagrantes violaciones a las normas de convivencia democrática en que suelen incurrir los regímenes políticos dominados por ciertos sectores totalitarios de inspiración marxista”; se refiere a los que según su opinión, eran los riesgos implícitos del Programa de la Unidad Popular para la democracia, aunque reconoce la trayectoria pública de Salvador Allende como garantía democrática, entre ellos, el sistema de partido único, monopolio de los medios de comunicación, estatización completa de la educación, la politización de las Fuerzas Armadas, restricción o supresión de las libertades personales, etc. Luego, analiza en qué consisten y cuáles son los fundamentos de cada una de las garantías que comprende el proyecto de Reforma Constitucional. En resumen, esta intervención ofrece un completo análisis de las reformas introducidas a la Constitución de 1925, desde la mirada de la Democracia Cristiana y las expectativas frente a un gobierno de la Unidad Popular, en el contexto de las experiencias internacionales semejantes y la importancia de la “vía chilena al socialismo”.