La Ley N° 20.005, publicada el 18 de marzo de 2005, se titula: “Tipifica y Sanciona el Acoso Sexual”. La norma se dictó en el gobierno de Ricardo Lagos Escobar (2000-2006), e introdujo modificaciones legales respecto al acoso sexual, definiéndose este concepto como “requerimientos de carácter sexual, no consentidos por quien los recibe y que amenacen o perjudiquen su situación laboral o sus oportunidades en el empleo”.
El contexto histórico de esta Ley responde a profundas trasformaciones culturales y en el mundo del trabajo, así como en la opinión pública tanto en Chile como en el mundo. De acuerdo al Informe emanado por la Comisión de Trabajo de la Cámara que analizó esta Ley, “la legislación sobre el concepto de acoso sexual surgió en la segunda mitad de la década de 1970 en los Estados Unidos”, lo que representa un primer gran precedente sobre la importancia de regular esta materia, clave para promover la igualdad de género. Como lo señala el mismo Informe, “esas decisiones formularon la tesis de que unas relaciones de índole sexual en el lugar de trabajo pueden imponer al empleador ciertos deberes y obligaciones… (En consecuencia), dejó de considerarse el acoso sexual como un problema personal entre dos personas”. Desde los años ochenta, este tipo de leyes que sancionaban el acoso sexual se extendieron a diversos países desarrollados, aunque hacia 1993 en sólo nueve países existían definiciones legales explícitas basadas en este concepto.
En Chile, el progreso del movimiento feminista fue importante durante la dictadura militar, a la vez que la presencia de los derechos de la mujer se hizo más relevante en la institucionalidad durante la transición democrática, por ejemplo, con la creación del Servicio Nacional de la Mujer (SERNAM) (Ley N°19.023, 1991). Otro factor de importancia al respecto fue el aumento del número de trabajadoras en la fuerza laboral chilena. Según un informe elaborado por el Instituto Nacional de Estadísticas, si en 1986 la tasa de participación de la mujer se elevaba al 29,1% de la fuerza laboral total, en 1990 se incrementó al 31,3%, y en 2000 al 36,5% del total de trabajadores . Esta situación, junto a los factores anteriormente señalados consolidaron un cambio cultural respecto al papel y a la valoración de la mujer en el mundo del trabajo, lo que hizo necesaria la existencia de alguna normativa que sancionara el acoso u hostigamiento sexual a que se ven enfrentadas muchas trabajadoras, con el fin último de proteger la integridad física y psíquica de las mujeres chilenas.
El texto de la Ley N°20.820, incluye tres artículos que incorporan diversas modificaciones al Código del Trabajo, Estatuto Administrativo y al Estatuto Administrativo para Funcionarios Municipales.