Hijo del ex parlamentario Rafael Luis Gumucio Vergara, y de Amalia Vives Vives. En 1939 contrajo matrimonio con Marta Rivas con quien tuvo tres hijos. Sobrino de Rafael Vives Vives, abuelo de Marco Antonio Enríquez-Ominami Gumucio, diputado y candidato en las elecciones presidenciales de 2009, 2013 y 2017.

De 1927 a 1930 vivió en Lovaina, Bélgica, junto a su padre quien había sido desterrado por el entonces presidente Carlos Ibáñez del Campo. Durante el exilio murió su madre.

Realizó sus estudios secundarios en el Colegio de los Sagrados Corazones de Santiago. Terminada su etapa escolar ingresó a la Universidad Católica de Chile donde egresó de la carrera de Derecho. En 1927 efectuó cursos de perfeccionamiento en Lovaina, Bélgica.

Finalizados sus estudios universitarios ejerció su profesión en el estudio de su padre. Entre 1938 y 1941 se desempeñó como administrador de propiedades y también se dedicó a la labor docente como profesor de Hacienda Pública en la Facultad de Economía de la Pontificia Universidad Católica de Chile. En forma paralela, en 1941, se desempeñó como Fiscal de la Caja de Crédito Hipotecario.

Inició sus actividades políticas como estudiante universitario al ocupar la presidencia del centro de alumnos de Derecho. En 1934 se incorporó a la Juventud Conservadora, en la que permaneció hasta 1938, siendo uno de los fundadores de la Falange Nacional. En este partido alcanzó los cargos de presidente entre 1954 y 1957, siendo su último presidente.

Entre 1938 a 1941 fue electo regidor por Santiago durante el gobierno de Pedro Aguirre Cerda. Entre 1942 y 1943 se desempeñó como comisario general de Subsistencias y Precios. En 1944 fue director general del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) y luego participó en diversas comisiones fiscales de organización administrativa en diferentes servicios.

Fue subsecretario de Hacienda entre 1945 y 1952, durante los gobiernos de Juan Antonio Ríos y Gabriel González Videla. En tal calidad, en 1950 encabezó la delegación chilena en la reunión del General Agreement on Tariffs and Trade (GATT), celebrada en Inglaterra.

En 1957 fue uno de los fundadores del Partido Demócrata Cristiano, colectividad donde asumió como primer presidente. Anteriormente fue presidente de la delegación chilena ante el Congreso Mundial Demócrata Cristiano realizado en Milán (1957). Fue presidente nuevamente de este partido entre 1967 y 1968.

En 1965 viajó a Ginebra para asistir al Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas donde fue miembro de la Comisión de los Derechos del Hombre.

Hacia 1969 renunció a la Democracia Cristiana y se incorporó al Movimiento de Acción Popular Unitaria (MAPU), siendo uno de sus fundadores. En 1971 junto con un sector cristiano del MAPU y ex militantes de la Democracia Cristiana, dejó la colectividad para participar en la constitución del Movimiento de Izquierda Cristiana. A partir del 17 de agosto de 1971, participó en la Comisión Política de esa colectividad.

Entre el 4 al 7 de agosto de 1969 asistió a la IV Asamblea Ordinaria del Parlamento Latinoamericano de Bogotá. En 1972 viajó a París como integrante de la Comisión Renegociadora de la Deuda Externa durante el gobierno de Salvador Allende.

En 1973, una vez finalizado su período como parlamentario, asumió la presidencia del partido Federado de la Unidad Popular. Ese mismo año fue nominado por el presidente Salvador Allende como embajador de Chile en Francia. Sin embargo no llegó a asumir el cargo, pues fue exiliado tras el Golpe Militar del 11 de septiembre de 1973.

Entre 1973 y 1983, como exiliado en Francia, participó activamente en la lucha contra el régimen de Augusto Pinochet Ugarte, siendo recibido por el entonces presidente François Mitterrand. El 6 de octubre de 1975, tras el atentado que afectó a Bernardo Leighton Guzmán y a su esposa, viajó a Roma.

Regresó del exilio en 1983, y su primera actividad fue participar en una masiva Liturgia en la Parroquia San Luis Beltrán de Pudahuel, y colaborar con la oposición al régimen militar.

Murió el 28 de junio de 1996, en Santiago. Fue despedido en una Liturgia presidida por su hermano el padre Esteban Gumucio SS.CC junto a una treintena de sacerdotes

En noviembre de 1993 fue homenajeado en la Casa de Ejercicios San Francisco Javier. En esta ocasión se le entregó una distinción especial por parte de la Confraternidad Cristiana de Iglesias y pronunció su último discurso.

Durante el régimen militar de Augusto Pinochet fue columnista de las revistas Apsi y Análisis de oposición a la dictadura.

En marzo de 1989 fundó junto a Matilde Chonchol, José Aldunate SJ, Julio Silva Solar, Jaime Escobar y un grupo de laicos, pastores y sacerdotes, fundó la revista ecuménica Reflexión y Liberación, la cual dirigió hasta el momento de su muerte.

A fines de 1994 terminó su libro de memorias "Apuntes de Medio Siglo".

Fue socio del Club de La Unión.

Integró el Directorio del periódico Fortín Mapocho.

Su perfil parlamentario se centró en materias relacionadas con pensiones, sindicalización, reajuste de remuneraciones, recursos naturales, etc. También de preocupó de aquellos temas relacionados con la autorización de empréstitos municipales, con el objeto abordar las tareas propias del desarrollo y adelanto local.

De las quince mociones presentadas entre los años 1965 – 1973, siendo Senador, se destaca aquella que “Crea un Fondo de Pensiones para jubilados, montepiados y viudas de la Empresa Portuaria de Chile”, pues, según consta en la Sesión Ordinaria N° 1 del Senado, celebrada el 04 de junio de 1969, “Los obreros portuarios jubilados, viudas y montepiados atraviesan por una situación difícil de orden económico, que es necesario reparar con urgencia. Las pensiones de ese personal son muy bajas si se comparan con los sueldos y salarios que hoy día se paga al personal en actividad.” Para el diputado y senador, la previsión de los ciudadanos y ciudadanas, fue un tema que marcó su trabajo parlamentario. La sindicalización de los trabajadores, es otro de los temas de los que se ocupó, junto a su compañero Alberto Jerez, presentó un proyecto de ley que “Establece nuevas normas aplicables a la elección de los dirigentes sindicales y al cumplimiento de sus funciones”. Entre los fundamentos de la iniciativa citada anteriormente y que da cuenta la Sesión Ordinaria N° 9 del Senado, celebrada el 11 de abril de 1972, se dice que el “proyecto pretende contribuir a que las promociones de dirigentes sindicales chilenos sean, cada día, mayores en número y mejores en calidad. Ello es requisito necesario para que puedan cumplir con éxito la trascendental responsabilidad que les cabe de conducir a las amplias masas de trabajadores hacia la obtención plena del poder político, social y económico en nuestra patria”.

De sus setecientas sesenta intervenciones en Sala, en el periodo 1965 – 1973, cabe destacar aquellas relacionadas con la discusión de los “Convenios del Cobre”, donde tuvo una destaca participación, creación del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, creación del Ministerio del Mar, protección de los menores. Asimismo, toma parte en los grandes debates que se produjeron durante el Gobierno de la Unidad Popular, como por ejemplo, la Reforma Constitucional para la incorporación de bienes de producción a área social de la economía nacional. A este respecto, en la Sesión Especial N° 14 del Senado, celebrada el 29 de octubre de 1971, el Senador hace presente los medios utilizados por la oposición para enfrentar al Gobierno: “En el lapso de un año ya hemos conocido la utilización de algunos de estos recursos. Primero, el pánico económico con todas sus secuelas. Luego, el crimen político del General Schneider; los intentos de sedición; el boicoteo sistemático de todas las iniciativas del Gobierno (…), la farisaica campaña de defensa del Estado de derecho y la libertad. (…) Se quieren los cambios; se acepta el socialismo; se dice ser partidario de la recuperación de las riquezas básicas del país y de todas aquellas industrias o empresas llamadas estratégicas; pero el esfuerzo dramático hecho por un Gobierno para, sin salirse de la ley, caminar aceleradamente en la realización de los objetivos de que dicen ser partidarios, es boicoteado sistemáticamente.” La intervención citada, refleja el clima político del país al inicios del Gobierno del Presidente Allende y los esfuerzos de sus partidarios para llevar a cabo las propuestas de su Programa.

Durante su permanencia en el Senado, realizó trece homenajes. La Sesión Ordinaria N° 15 del Senado, celebrada el 28 de junio de 1966, da cuenta del homenaje a la memoria del Presidente Juan Antonio Ríos, quien “con carácter indomable, luchó, dentro de su partido y fuera de él, contra el fanatismo y el sectarismo que limitan y entraban toda acción de bien común. Fue así como logró imponerse como el líder de una línea política abierta y amplia que permitiera acoger las voluntades dispuestas a realizar tareas de unidad nacional.”