Miguel Luis Amunátegui Reyes

Reseñas biográficas parlamentarias



Nació en Santiago, el 20 de febrero de 1862; hijo de Gregorio Víctor Amunategui Aldunate y Josefa Reyes Cotapos.

Se casó con Josefina Johnson Gana, el 23 de diciembre de 1892 y tuvieron once hijos.

Estudió en el Colegio José María Fredes hasta 1874 y luego en el Instituto Nacional, desde donde pasó a las disciplinas del Derecho; se recibió de abogado en el año 1884. Este mismo año comenzó a ser examinador en establecimientos particulares de enseñanza y profesor de castellano en el Colegio Ingles de Mr. Radford, donde enseñó hasta marzo de 1912.

Fue electo diputado suplente por Pisagua, periodo 1888 a 1891; estuvo pronto a actuar como suplente del diputado Alcibíades Roldán Álvarez, pero el titular no lo dejó jamás con su asidua asistencia a las sesiones.

Aunque alejado de la política, fue miembro del partido Liberal Doctrinario; fue director del Partido Liberal en 1924.

El 20 de octubre de 1891 comenzó a hacer clases en el Instituto Nacional, donde fue nombrado profesor de Gramática Castellana. En 1893 se incorporó a la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad y el 6 de julio de 1894 a las Cátedra de Derecho Civil en la respectiva Escuela.

Desde muy joven demostró su afición a las investigaciones gramaticales y jurídicas; se dedicó a la enseñanza y a las letras, figurando a la cabeza de los publicistas chilenos. Desde 1885 había comenzado a publicar. Ese año se editó "Don Andrés Bello i el Código Civil chileno", al que siguieron 31 títulos de obras jurídicas, históricas y lingüísticas, siendo respectivamente las más enjundiosas de cada disciplina, "Imperfecciones i erratas manifiestas en la edición auténtica del Código Civil Chileno"; "Don Antonio García Reyes i algunos de sus antepasados a la luz de documentos inéditos"; y "Apuntaciones lexicográficas”.

Durante 18 años presidió la Academia Chilena de la Lengua; durante el período, ésta fue casi su única preocupación. Le cedió su propia casa heredada y la vieja “Picantería” sirvió para sesiones de la corporación. En ausencias reiteradas del secretario, él mismo redactaba las actas y mantenía la correspondencia con las academias similares de Hispanoamérica. Dirigió un tiempo el Boletín, impulsó los trabajos lingüísticos y se empeñó porque ingresasen a la Academia filólogos, lexicógrafos y gramáticos.

En el año 1915 obtuvo su jubilación como profesor, por una ley especial; pero sí, continuó con su labor intelectual y su tarea de escritor docente y jurídico.

Miembro de la American Association of Teachers of Spanish de New York; de la Real Academia Hispano-Americana de Ciencias y Artes de Cádiz; correspondiente del Ateneo Ibero-Americano de Buenos Aires; miembro honorario de la Academia Colombiana de la Lengua.

Miembro de las Facultades de Leyes y de Filosofía y Letras de la Universidad de Chile; en el año 1900 fue designado miembro correspondiente de la Academia Española, a solicitud de algunas personalidades.

Caballero Comendador de la Orden del Libertador, título honorífico que en 1948 le otorgó Venezuela, por su labor de difusión de la obra de Andrés Bello.

Por el año 1937 ya estaba alejado de todo tipo de actividad.

Después de una larga enfermedad y de estar completamente ciego, dejó de existir el 18 de octubre de 1949.

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