Reseña

Nació en Iquique, el 26 de noviembre de 1887.

Hijo del oficial Pedro Antonio Barra y de la ciudadana alemana Matilde Woll Schultz, quienes terminada la Guerra del Pacífico se trasladaron de Lima a Iquique donde formaron familia. Fue el mayor de diez hermanos.

Se casó con Clara García Corvalán y tuvieron siete hijos.

Estudió en el Liceo de Iquique.

En 1907, fue testigo directo de la matanza de la Escuela Santa María de Iquique, sobreviviendo a la masacre, hechos que lo marcaron y junto con otros connotados dirigentes obreros, escindidos del Partido Democrático prepararon las bases para fundar en Iquique en 1912, el Partido Obrero Socialista, junto a Luis Emilio Recabarren Serrano.

Se desempeñó en actividades comerciales en Iquique hasta 1921, entre éstas en la Mercería El Candado.

Se dedicó también a la política y al periodismo; colaboró junto a Recabarren en el diario “El Despertar de los trabajadores”, desde 1912 a 1921 y fue nombrado director de dicho diario, cargo que ejerció entre 1921 y 1924.

Tras la muerte de Recabarren, asumió como director del diario “Justicia” que se editaba en Santiago, y que era propiedad de la Federación Obrera de Chile (FOCH); estuvo en este puesto hasta 1927. En 1934 se hizo cargo de la gerencia de la Empresa Editora Barra y Compañía Ltda., que publicaba el diario “Frente Popular”. Desde 1940 fue gerente general de la Empresa Antares, editora de los diarios “El Siglo” de Santiago (del que fue su primer director en 1940), “El Frente popular” de Iquique, "El popular" de Antofagasta, el “Frente popular” de Concepción y el "Frente popular" de Copiapó.

Militó en el Partido Democrático y Partido Comunista de Chile.

Fue deportado en 1927 por el gobierno de Carlos Ibáñez del Campo; viajó a México, Perú y Cuba.

Regresó al país en 1932 y volvió a la vida política, como secretario del Socorro Rojo Internacional hasta 1933.

Fue regidor y alcalde de la municipalidad de Lota.

Fue elegido diputado en 1925, por la 17ª Circunscripción Departamental "Puchacay, Rere y Lautaro", período 1926-1930.

Durante el gobierno de Gabriel González Videla debió permanecer en la clandestinidad producto de la promulgación de la Ley de Defensa Permanente de la Democracia.

Su labor política estuvo relacionada con los más desposeídos, especialmente los obreros del salitre en el Norte Grande, los mineros del carbón de Lota y Coronel y los campesinos mapuches de Ranquil.

Murió en Santiago, en 1958.