Augusto Vicuña Subercaseaux

Reseñas biográficas parlamentarias



Nació el 15 de mayo de 1882; hijo de Claudio Vicuña Guerrero y de Lucía Subercaseaux Vicuña.

Se casó con María García Huidobro Guzmán y tuvieron un hijo.

Estudió en el Instituto Nacional de Buenos Aires, Argentina y Colegio de los Sagrados Corazones; cursó Leyes de la Universidad del Estado (Universidad de Chile); juró como abogado el 21 de junio de 1905; su tesis se tituló
“Doctrina Monroe”.

Se dedicó a las actividades de su profesión, la que ejerció libremente; fue profesor de Derecho Constitucional en la Universidad de Chile, y del Patronato de la Infancia; consejero de instrucción primaria; director de la Sociedad de Instrucción Primaria; miembro del Comité organizador del Primer Congreso de Gobierno Local; secretario del Primer Congreso Científico Pan-Americano celebrado en Chile.

Desde su juventud militó en el partido Liberal Democrático; presidente del Centro Juvenil Liberal Democrático y posteriormente vicepresidente del partido.

Se dedicó también a escribir en la prensa artículos de actualidad política y sobre principios de derecho constitucional; en todos sus escritos defendía el régimen presidencial e invocaba en su apoyo el recuerdo y las doctrinas de Balmaceda.

Fue regidor de la municipalidad de Santiago en 1909 y después actuó como secretario de la Junta de Reforma Municipal.

Elegido diputado para el periodo 1912-1915, por Santiago; integró la Comisión Permanente de Asistencia Pública y de Culto y la de Instrucción Pública.
Reelecto para el siguiente periodo, 1915-1918; fue miembro de la Comisión Permanente de Gobierno.
En el periodo 1926-1930 fue nuevamente elegido diputado por la Séptima Circunscripción Departamental "Santiago"; fue primer vicepresidente de la Cámara, 1o. de marzo al 4 de octubre de 1926; integró la Comisión Permanente de Reforma Constitucional y Reglamento.

En 1930 se fue del país y permaneció en Europa, con residencia en Paris, acompañado de su señora.

Cuando cayó el regimen ibañista estaba en Chile, en Santiago y desde el principio figuró, en agosto de 1931, entre los dirigentes del nuevo partido de la Unión Republicana.

Fue socio del Club de La Unión; miembro de la Junta de Vecinos de Santiago en 1924.


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