Nació el 24 de marzo de 1877 en Santiago. Hijo de Rafael Bautista Gumucio Larraín, escritor y político conservador y Gertrudis Vergara Correa. Se casó con Amalia Vives Vives con quien tuvo nueve hijos: Vicente, Joaquín, Amalia, Lucía, Juanita, Pablo, Pedro, Teresita y Rafael Agustín Gumucio Vives.

Inició sus estudios en el Colegio de los Padres Franceses y los terminó en el Colegio San Ignacio. Continuó su formación superior en la Escuela de Derecho de la Universidad Católica en Santiago donde obtuvo el título de abogado, en 1904. Su tesis se tituló: "De la naturalización y de sus efectos políticos y civiles".

Entre 1888 a 1897, fue profesor de Derecho Internacional en la Universidad Católica. Al mismo tiempo, desarrolló su carrera profesional de manera independiente especializándose en la tramitación de juicios civiles.

Se dedicó al periodismo como redactor y luego director del diario El Porvenir, perteneciente al Arzobispado y de El Diario Popular, entre 1906 a 1908. También fue redactor del Diario La Unión de Valparaíso y de El Diario Ilustrado, entre 1908 a 1915 y en 1924. Además, fue redactor y director de la revista Zig-Zag. En 1927, se jubiló de sus labores en El Diario Ilustrado luego de más de 20 años de desempeñarse en la prensa.

Entre 1932 a 1936, formó parte de la Caja Hipotecaria donde también fue consejero y fiscal de la misma, a partir de 1941 y hasta su muerte en 1947.

Militante del Partido Conservador y gran defensor de sus ideales. Entre otras responsabilidades, dirigió el Centro Conservador en 1907; fue delegado por Valparaíso en Ia Convención de la Juventud Conservadora, en 1913; y miembro de Junta Ejecutiva del Partido en 1921.

Junto a un grupo de parlamentarios y políticos fueron fervientes opositores del presidente Carlos Ibáñez del Campo quien finalmente ordenó su detención. Muchos protestaron solicitando su liberación, especialmente el Partido Conservador, pero no fueron escuchados. A fines de febrero de 1927, tuvieron que abandonar el país rumbo a Ecuador luego de haber sido deportados. Entre 1927 a 1930, vivió en Lovaina, Bélgica junto a su hijo Rafael Agustín Gumucio Vives. Durante su exilio murió su esposa y solo pudo regresar a Chile gracias a la mediación de la Iglesia Católica.

Hacia 1931, inició un fructífero diálogo con jóvenes conservadores de la época quienes tuvieron un espacio para manifestarle ideas opuestas a las suyas. Destacaron Eduardo Frei Montalva y Manuel Garretón Walker que lo acercaron al Social Cristianismo, le expusieron sus críticas al capitalismo individualista y le mostraron su cercanía con la Doctrina Social de la Iglesia Católica. Este intercambio lo hizo comprender la necesidad de revisar sus antiguas concepciones y fue el punto de partida para el surgimiento de la Falange Nacional en 1935 y su posterior transformación en el Partido Demócrata Cristiano.

El 25 de noviembre de 1941 ocurrió la muerte del presidente Pedro Aguirre Cerda quien no pudo terminar su mandato. Fueron convocadas Elecciones Presidenciales para el 1º de febrero de 1942 y Carlos Ibáñez del Campo se presentó como candidato con el apoyo del Partido Conservador. Este hecho marcó su retiro de la colectividad hasta 1946 cuando retornó para apoyar la candidatura presidencial de Eduardo Cruz-Coke a las Elecciones de ese mismo año.

Murió el 14 de junio de 1947 en Santiago.

La Santa Sede lo condecoró con el Pro Eclesia et Pontifice. El Papa Pío XII le entregó la bendición apostólica In Artículo Mortis.

En 1932 se integró al Club de la Unión.