Labor Parlamentaria

El señor KAISER.-

Señorita Presidenta, ya en la Biblia se hacía mención a los siete años de vacas gordas y a otros siete de vacas flacas. Hasta los faraones sabían que había que construir graneros para los tiempos de sequía.

El clima es cíclico, el clima es un sistema dinámico; por lo tanto, hablar de cambio climático es simplemente repetir un concepto.

El cambio climático es lo único permanente en este planeta, porque de otra manera seguiríamos metidos en la edad del hielo, y la última edad de hielo, la pequeña edad de hielo, fue en la Edad Media. De hecho, todavía estamos dos grados y algo por debajo del promedio de temperatura que existía en Europa cuando menos en el año 1.000 y algo.

En Dinamarca se cosechaba uva y se producía vino, y lo mismo en Inglaterra, mientras hoy en día eso es impensable, y con dos grados más, se sorprenderán, pero el mundo no se había venido abajo.

Ahora hablan de calentamiento global, perfecto, hablemos del hiato del calentamiento global. Entre 1998 y 2014, período en que se emitió más CO2 que en todo el período histórico anterior -en el siglo, cuando menos-, no subió la temperatura. De hecho, estudios científicos reportaban el año pasado que la Antártica mostraba 600 gigatoneladas más de hielo que en 2014.

Entonces, ¿qué está sucediendo aquí? Estamos hablando de la creación de fondos que van a ser administrados por el Estado, es decir, por políticos, para mitigar consecuencias desastrosas de situaciones que de todas maneras deberíamos enfrentar, desde Obras Públicas, desde Conaf , desde las municipalidades, etcétera; pero no, la culpa la tiene el cambio climático, no los giles que andan con fosforitos, por el tema, por ejemplo, de los incendios.

Este ha sido un tremendo negociado para muchas megacorporaciones que, de la mano de esto, han ido impulsando el supuesto cambio de matriz energética en Occidente, que ha hecho que nuestras economías se transformen en inviables en la competencia con China, mientras en China construyen en un mes más centrales a carbón que todas las que cerró Chile, y eso durante ya 30 años.

Sin embargo, acá nos seguimos comprando el cuento de que aquí todo es responsabilidad del ser humano.

Voy a decir una cosa: estoy de acuerdo con crear un fondo para mitigar catástrofes naturales; de hecho, deberíamos planificar de la mano de lo que son los ciclos de la naturaleza.

Hoy en día hay inundaciones y mañana sequías. Siempre ha existido eso, y siempre va a existir, pero no nos compremos el discurso, que sirve solo a ciertos intereses económicos, de que, si pagamos suficientes impuestos, si permitimos que nos suban suficientemente los precios de la energía, vamos a poder salvar el planeta, porque eso no es cierto. Solo es cierto para aquellos que cotizan en la bolsa.

He dicho.