Labor Parlamentaria

Participaciones

  • Alto contraste

Disponemos de documentos desde el año 1965 a la fecha

Antecedentes
  • Cámara de Diputados
  • Sesión Ordinaria N° 15
  • Celebrada el
  • Legislatura Ordinaria año 1969
Índice

Cargando mapa del documento

cargando árbol del navegación del documento

Homenaje
HOMENAJE AL DIA DE LA INFANCIA. OFICIO

Autores

El señor VIDELA (Vicepresidente).-

En cumplimiento de un acuerdo adoptado por la CAMARA, corresponde rendir homenaje al Día de la Infancia.

Tiene la palabra la señora Silvia Alessandri.

La señora ALESSANDRI (doña Silvia).-

Señor Presidente, Honorables Diputadas y Diputados, se ha querido distinguir a la que habla con el honor de representar ante ustedes -en esta oportunidad en que se rinde un homenaje al niño chileno- la opinión y el sentir del Partido Nacional.

Tarea grata es ésta para una madre de familia, que, por su calidad de tal, se encuentra, mejor que nadie, en situación de comprender y dar su verdadero alcance y trascendencia a los problemas que afectan a los niños de su Patria, en cada uno de los cuales no puede dejar de ver la imagen de sus propios hijos.

El hecho de que los niños constituyen y encierren en sí el futuro de los pueblos no es tan sólo un concepto usado y repetido por quienes defienden sus derechos, sino una verdad irrefutable. Un país en donde se atiende a las necesidades de la infancia en forma preferencial, dándose la importancia que merece a su desarrollo físico, a su formación intelectual y afectiva, a su defensa ante la ley, es, sin lugar a dudas, un país que progresa.

Con satisfacción podemos, los* chilenos destacar la preocupación permanente que ha movido a nuestros hombres de Gobierno a actuar siempre, con sincero interés, en favor de la infancia y de la juventud de nuestro pueblo. Prueba evidente de ello es la abundante legislación que los favorece, entre las que se destacan, como hitos sobresalientes de nuestro progreso, la Ley de Instrucción Primaria Obligatoria, la que creó las Juntas de Auxilio Escolar, la que estableció el Consejo de Defensa del Niño, como, asimimo, el decreto supremo mediante el cual fue creada la Comisión Interministerial de Protección de Menores en Situación Irregular, organismo que antecedió al actual Consejo de Menores.

La celebración del Día de la Infancia en todos los países del mundo fue propuesta por la Unión Internacional Pro Bienestar de la Infancia, en 1952. Así, en octubre de 1953, se celebró esta festividad bajo los auspicios de la organización mencionada; organización no gubernamental y que mantiene relaciones consultivas con la UNICEF. Participaron en ella, la primera vez, cuarenta naciones.

En 1954, la Asamblea General de las Naciones Unidas votó una moción estableciendo el Día Universal de la Infancia, como una celebración anual de "fraternidad y entendimiento mundial entre los niños".

Esta celebración ha sido aceptada con cordialidad y cariño en la mayor parte de los países del orbe, de los cuales más de ochenta participaron en ella en 1988.

La fecha establecida para ella no es la misma en todas partes, variando notablemente de un país a otro, a lo largo de casi todos los meses del año. En el nuestro no se le ha fijado todavía una fecha determinada.

Los propósitos de esta celebración encierran, a la vez, fundamentos educacionales y de recreación para los propios niños, tratándose por una parte de atraer la atención de los gobiernos y del público -en general acerca de sus necesidades y, al mismo tiempo, de honrar a la infancia mediante actos y ceremonias dedicadas a ellos. En algunos países, el Día de la Infancia es una festividad establecida por los propios gobiernos y, en otros, una simple celebración que se prepara a iniciativa de organizaciones privadas que se interesan en la situación del niño y en sus problemas.

Ninguna necesidad hay de que yo haga resaltar la conveniencia que habría en obtener que el Día de la Infancia fuera celebrado universalmente con la importancia que merece tener, pues de ello derivaría, sin duda alguna, un mayor interés de parte de los gobernantes y de todo el mundo por resolver en forma definitiva los problemas que afectan a la infancia y a la adolescencia.

A la constante preocupación de nuestro Gobierno en favor de los niños de Chile, cabe agregar la admirable labor de la UNICEF en nuestro país, que recientemente ha decidido contribuir, con un aporte superior a los cinco millones de escudos, a la atención y desarrollo de diversos programas en favor de la infancia y de la juventud chilenas.

El plan, amplio y cuidadosamente trazado, comprende la creación de centros de enseñanza primaria e intermedia, como asimismo la iniciación de cursos para la capacitación de un elevado número de jóvenes en materia de pesca, construcción, ganadería, forestación y mecánica agrícola.

En materia de salubridad, el Servicio Nacional de Salud -bajo el auspicio del mismo programa- desarrollará acciones de protección materno-infantil, atención médica, saneamiento del medio, mejoramiento nutricional, educación sanitaria, etc., organizándose durante el período que abarcará el programa, tres hospitales centros de base, de los cuales dependerán numerosos centros rurales. Se ha atendido, asimismo, a la capacitación de auxiliares de enfermería y saneamiento.

En cuanto a los rubros Alimentación y Nutrición, se efectuarán, en el curso del programa, investigaciones para determinar el estado clínico-nutricional de la población y de la producción y consumo de alimentos, y se desarrollarán actividades de educación en nutrición, a través de las escuelas y sobre la población en general.

Es muy grato para la que habla dejar constancia en esta oportunidad de la valiosa contribución al mejoramiento de la alimentación infantil que constituyen las iniciativas del parlamentario doctor Gustavo Monckeberg-, entre ellas su patrocinio al proyecto de ley -pendiente en la actualidad de la resolución del Honorable Senado- que hará posible la adquisición o elaboración de mezclas de alimentos proteicos destinados a ser consumidos por la mujer próxima a ser madre, por las nodrizas, los preescolares y los escolares de Chile. Debo destacar, asimismo, la actuación de un equipo encabezado por el doctor don Fernando Monckeberg, que tiene a su cargo el desarrollo de un plan de nutrición que favorece al niño, centralizado en el Hospital Francisco Arriarán de esta capital, aun cuando extiende su acción a lo largo de todo el territorio.

El programa que patrocina la UNICEF contempla también diversas iniciativas sobre promoción y acción social y protección de menores, todo lo cual nos permite formarnos una idea clara de su enorme importancia.

El Partido Nacional -al que represento-. compenetrado de la trascendencia que encierra para el futuro de Chile la formación a alto nivel, físico e intelectual, de nuestros niños, ha hecho suyos los postulados que constituye cada uno de los Derechos otorgados por la UNICEF a todos los niños del mundo. La acción de nuestro partido propenderá, pues, en todo momento y a través de cada uno de sus miembros, a obtener para los niños cuantas garantías contribuyan a protegerlos, a favorecerlos y a obtener para ellos el sentimiento de respeto y unción con que consideramos a la flor, la cual, según sea el cuidado y el amor con que la dejemos abrirse a la luz de la vida, llegará a convertirse en un hermoso fruto o en un fruto vano.

El amor y la comprensión que se debe a los niños, el tratamiento que reciban de sus mayores, la seguridad en que se desarrolle su mente, el cultivo de sus aptitudes, la protección y el socorro a que son acreedores -todos éstos, hermosos postulados que ojalá el mundo entero acepte un día como principios inviolables- tendrán para nosotros la importancia más alta y el sentido de verdaderos ideales, por cuya materialización bien vale la pena llegar a los mayores sacrificios.

Rindo, pues, con afecto de mujer y de madre, en nombre de mi partido, un homenaje sincero de afecto y de comprensión a todos los niños de Chile.

Top