Firma del TPP llegará al Congreso para su discusión durante el año legislativo de 2016

Luego de cinco años de negociaciones, nuestro país junto a Australia, Brunei, Canadá, Estados Unidos, Malasia, México, Japón, Nueva Zelandia, Perú, Singapur y Vietnam -que juntos representan el 40% del Producto Interno Bruto Mundial- llegaron a un acuerdo final para crear un mega pacto regional con 30 capítulos para mejorar el acceso a los mercados, establecer nuevas reglas de origen, transparentar los procesos aduaneros, entre otros. Más detalles sobre este acuerdo en la siguiente nota.

Un tratado que va más allá de la eliminación de aranceles

Después de cinco años de negociaciones, en la ciudad de Atlanta, Estados Unidos, las doce naciones integrantes pudieron firmar el Acuerdo Transpacífico de Libre Comercio (TPP), luego de intensas negociaciones entre ministros y secretarios de gobierno. Tal acuerdo tiene un significado especial para los actores exportadores e importadores de nuestro país, ya que es el tratado comercial más sofisticado firmado hasta ahora.

Para Andrés Rebolledo, director de Relaciones Económicas Internacionales (Direcon) este acuerdo sirve para que nuestro país amplíe sus oportunidades comerciales y pueda diversificar su oferta exportadora. “Si bien Chile ya tiene acuerdos con todos los miembros del TPP, no todos presentan el mismo grado de profundidad, por lo tanto este tratado permitirá terminar con exclusiones a nuestro sector agroalimentario”, señaló.

Respecto a esta sofisticación comercial que ayudaría a consolidar algunos mercados con los que nuestro país mantiene TLC vigentes, Rebolledo afirmó que hay países específicos donde nuestro intercambio podría intensificarse. “Mientras que con Australia tenemos casi el 100% del comercio con arancel cero, los tratados bilaterales con países como Japón, Malasia y Vietnam poseen importantes exclusiones, especialmente en el sector agroalimentario”, agregó.

De esta manera, los 30 capítulos contemplan el acceso a los mercados, certificación de origen, obstáculos técnicos de comercio, requisitos fitosanitarios, defensa comercial, participación en licitaciones públicas, inversiones, exportación de servicios, homologación de sistemas de telecomunicaciones, entrada temporal, servicios financieros, propiedad intelectual, medioambiente, derecho laboral, coherencia regulatoria, competitividad y fomento a las pequeñas y medianas empresas.

Ventajas en la acumulación de origen y la certificación sanitaria

La firma del TPP no solo reducen los aranceles con el 40% de la economía mundial, sino también que se establecen nuevas normas para facilitar la acumulación de origen que permitiría que productores nacionales puedan participar en cadenas globales de valor. Es decir, que una empresa chilena pueda tomar insumos o partes de un país del bloque e incorporarlos a sus productos de exportación, cumpliendo con las reglas de origen que permiten beneficios de preferencia arancelaria en la zona.

De igual manera, entre los puntos negociados se encuentra la facilitación de normas para regular los requisitos sanitarios y fitosanitarios, condición que permitiría que los productos chilenos ingresen a los puertos del bloque con condiciones favorables que perdurarán en el tiempo. Esta es una medida que podría beneficiar directamente a los productores agroalimentarios y pesqueros.

Al respecto, Rebolledo valoró las nuevas condiciones comerciales negociadas por los 12 países, ya que plantean una nueva forma de comercio más dinámica y con mayor cooperación. “Creemos que para Chile el TPP abrirá oportunidades para mejorar las condiciones de acceso de varios de sus productos emblemáticos a la región Asia Pacífico y al mismo tiempo abrirá la puerta a nuevos encadenamientos productivos y a la incorporación de Chile a las cadenas globales de valor”, afirmó.

Nuevas oportunidades para la agroindustria

Esta nueva asociación establece reglas de negociación que resultan claras, tanto a los exportadores de bienes y servicios, como a quienes los demandan. De esta forma, el TPP incluye un protocolo de solución de conflictos entre socios que acelerará los procesos y equilibrará la justicia a favor de agentes comerciales que históricamente han estado a merced del carácter monopólico de algunos intereses.

Esta situación podría beneficiar directamente a los exportadores frutícolas de nuestro país, quienes han tenido que sortear una gran cantidad de obstáculos para exportar mercancías a países con TLC. Para Ronald Bown, presidente de la Asociación de Exportadores de Fruta (Asoex) el TPP podría incrementar el intercambio con países determinados con los que hoy existen algunas barreras.

“Chile tiene un plan de apertura de mercados para varias especies frutales en diferentes países, especialmente en algunos miembros del TPP. Esperamos que el tratado permita acelerar dichos procesos, como en el caso de Vietnam, y así continuar avanzando en la diversificación de mercados para nuestra fruta”, explicó.

Facilidades para los textiles y transparencia en procesos aduaneros

Otro de los logros conseguidos en este tratado es la eliminación de aranceles para los productos textiles y prendas de vestir. Esta decisión se considera, ya que estas industrias son importantes al crecimiento económico en los mercados de varios socios del TPP. Si bien la mayoría de los aranceles serán eliminados de inmediato, aquellos relacionados con productos considerados sensibles, tendrán plazos más largos.

Para reflejar estos cambios, se contemplan compromisos en materia de cooperación y Aduanas con el fin de evitar la evasión de impuestos, contrabando y fraude, así como una salvaguarda especial al textil específico para responder al daño grave a la industria nacional en el caso de un aumento repentino de las importaciones. El trabajo en las aduanas se considera como una continuidad al trabajo iniciado por la OMC para facilitar el comercio.

En este sentido todos los firmantes del TPP acordaron normas para mejorar la transparencia en los procedimientos aduaneros y garantizar la integridad en la administración de estas instituciones. Estas nuevas normas beneficiarían la actividad comercial de las pequeñas y medianas empresas, ya que podrán realizar sus procesos de envío e ingreso de bienes y servicios con reglas igualitarias para todos y totalmente transparentadas.

Para Roberto Matus, gerente general de Amcham, este acuerdo regirá el comercio internacional del siglo XXI y beneficiará especialmente a nuestro país, cuyo crecimiento económico está estrechamente ligado a la evolución del comercio internacional. “La región Asia Pacífico es un significativo eje de crecimiento a futuro del país y el TPP será el vehículo de integración económica con esa región, lo cual es totalmente consistente con la política exterior de Chile que busca desarrollar vínculos más sólidos y profundos en esa zona, tanto en términos políticos como económicos”, sostuvo.

Inicio del trabajo parlamentario

Si bien se materializó el cierre de las negociaciones, el trabajo para su aprobación final dependerá de la etapa técnica de revisión legal de los textos y su ratificación en los Congresos de los doce países integrantes. Si bien este trámite podría comenzar a realizarse a principios del 2016, el trabajo de informar a los congresistas se realizará de inmediato mediante reuniones oficiales.

Según Rebolledo, en ella se explicará con más detalle los puntos planteados en las conclusiones. “Varios parlamentarios ya han manifestado interés por conocer los detalles del acuerdo. Esta iniciativa también se extenderá a empresarios, al público interesado y a la sociedad civil en general para que conozcan los elementos de este acuerdo y despejen las dudas respecto a sus beneficios”, afirmó.