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Asia Pacífico | Observatorio Parlamentario

Guillermo Ray: “De Taiwán me llevaría a Chile la importancia y gratuidad que dan a la educación”

11 mayo 2009

Guillermo tiene 29 años, es ingeniero agrónomo y vive en la provincia de Taiwán desde hace dos años. Y desde allá nos cuenta lo que ha podido aprender sobre las estrictas normas educacionales de la población, lo cerrado del mercado laboral y los valores de su sociedad.

Guillermo tiene 29 años, es ingeniero agrónomo y vive en la provincia china de Taiwán desde hace dos años. Y desde allá nos cuenta lo que ha podido aprender sobre las estrictas normas educacionales de la población, lo cerrado del mercado laboral y los valores de su sociedad.

El motivo de mi llegada a Taiwán

Siempre tuve ganas de conocer culturas tan distintas a las de occidente y la provincia de Taiwán nos daba la posibilidad, a la empresa que represento y a mí, de abrirnos un camino en un lugar tan remoto y desconocido. Para mi fue todo un reto y un orgullo haberme venido a este país que sólo me ha brindado buenos momentos. Es que aquí he tenido la posibilidad de desarrollarme profesionalmente en un mercado en donde las cosas se manejan muy distintas a la experiencia que tenía, por ejemplo de Estados Unidos, aprender de una cultura distinta a la mía, conocer maneras diferentes de pensar y actuar y poner a prueba mis capacidades.

Un estilo educativo exigente

Una de las cosas que más me ha llamado la atención es el estilo educativo taiwanés. Y es que es muy distinto al chileno, ya que aquí la calidad de la educación estatal está muy por encima de la educación privada, y es completamente gratuita. El sistema educacional es muy exigente, los niños estudian muchísimo y pasan prácticamente todo el día en el colegio.

Otra cosa interesante es que existen establecimientos privados a los que los jóvenes pueden asistir después de su horario escolar para ahí realizar sus tareas o reforzar alguna asignatura, dichos centros son sumamente comunes y útiles ya que sus padres trabajan y no tienen con quien dejar a sus hijos luego de la jornada escolar.

Por otro lado pero no menos importante, es la preocupación que existe por el idioma inglés. Es bastante común que los niños y adolescentes lo manejen, al igual que los adultos lo entiendan o se den entender. Aquí se hace mucho énfasis en la educación con respecto al idioma, cosa muy distinta a nuestro país lamentablemente.

Sobre el sistema laboral

Aunque no lo conozco muy en profundidad, ya que no trabajo en una empresa nacional, de acuerdo a conversaciones con amigos y conforme lo que he visto relacionándome con mi trabajo, les puedo contar que el concepto de aguinaldo voluntario como en Chile no existe. Acá es ley, por lo tanto, en Año Nuevo chino a cada trabajador se le entrega dicho ¨aguinaldo¨, que corresponde a más de la mitad de su sueldo. Por otro lado, se protege mucho al trabajador nacional con respecto al extranjero, quiero decir que es muy raro que a la hora de dar un trabajo privilegien a alguien de afuera por sobre un taiwanés. Cuando una empresa contrata a un extranjero tiene que justificar con hechos el por qué de ello y debe además demostrar las capacidades que tiene, que por supuesto no le fueron posibles encontrar en un local.

Los rasgos distintivos de la especial cultura taiwanesa

En la provincia de Taiwán es muy común encontrar empresas familiares y me llama muchísimo la atención la capacidad que tienen los habitantes de separar dichos lazos con su trabajo, quiero decir, que mientras trabajan mantienen muy delineadas sus posiciones jerárquicas dentro de la empresa, lo que les permite poder llevar adelante su compañía sin ningún problema.

Por otro lado, me llama la atención la amabilidad que tienen los taiwaneses con el turista en la calle. Siempre están dispuestos a ayudarte y si te ven perdido o desorientado se acercan a ofrecerte su ayuda, incluso si no hablan inglés, eso me conmueve muchísimo, sin embargo entre ellos mismos son más bien fríos e impersonales.

Otro punto distintivo de esta cultura es el respeto a los mayores y la tremenda inversión en parques para la recreación de niños y adultos. Aquí se nota que es una gran preocupación cuidar su entorno y hay mucho interés por la calidad de vida, esto se ve reflejado en el cuidado del cuerpo, el hacer deporte todos los días (muy temprano en las mañanas y hasta muy tarde en la noches se ve gente haciendo deporte en los parques, de todas las edades).

No puedo olvidar otros dos puntos que son la gran seguridad con la que puedes vivir en este país y que uno se encuentra en un entorno de gente muy trabajadora.

Guillermo Ray después de su paso por la provincia de Taiwán

Al llegar aquí uno tiene que adaptarse a olores, comida y clima muy distintos los de Chile, pero creo que la vida en esta provincia china me ha hecho crecer mucho. Estar en un lugar con una cultura diametralmente opuesta es increíble, te das cuenta que se abre un mundo ante ti, pones a prueba todas tus capacidades sobre todo la de adaptación. La isla ha sido una experiencia increíble y gratificante.

Quien quiera venir para acá debe hacerlo con muchas ganas de experimentar, y estar con una mente abierta a cosas diferentes, debe ser gente preparada para que existan situaciones a veces adversas, por ello la adaptación es fundamental.

Finalmente, si pudiera llevarme algo de acá a Chile, creo que serían buenos candidatos el respeto por su país, la fuerte cultura de reciclaje, la importancia que le dan a la educación, (la gratuidad de la misma), la salud de primer nivel para todos y a muy bajo costo, la seguridad y la capacidad de extraer lo bueno y aplicarlo en su país para crecer.


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