Mitzy Lagos y los residuos electrónicos: “El mal manejo de los metales afecta los asentamientos humanos”

Mitzy Lagos es ingeniera ambiental especializada en reciclaje de residuos eléctricos y electrónicos. En su opinión, la Ley REP hará transformaciones profundas, razón por la cual requiere de cierta gradualidad. Más detalles de sus planteamientos y las líneas de acción de Midas Chile que coinciden con los planteamientos del Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 12, sobre producción y consumo responsables. Sus definiciones en la siguiente entrevista.

Principales líneas de acción de Midas

”Midas tiene 18 años de trayectoria y hace 12 una de las visiones fue desarrollar el reciclaje propiamente tal y, sin saberlo, empezamos a dar los primeros pasos avanzados hacia la minería urbana. Esto porque Midas es metalúrgica y mecánica, dos palabras de procesos industriales que definen nuestra marca.

En aquel entonces teníamos el proceso metalúrgico desarrollado, que son los hornos de exposición con los que contamos hoy en día, tanto para aluminio como para cobre. Nosotros partimos con el proceso minero -en ese tiempo sin asociarlo mucho al reciclaje- pero al poco tiempo cuando quisimos regular la actividad con todos los permisos sanitarios, desde la Seremia de Salud nos dijeron que lo que hacíamos no era un proceso metalúrgico, ni algo industrial, sino reciclaje".

En ese contexto, comenta que hace 15 años el reciclaje todavía era una actividad muy informal asociada a algunas malas prácticas, por lo que había una negación de parte de la empresa. "Nosotros quisimos reinventarlo. Desde ahí partimos tratando de cambiar el rubro, formalizando e incorporando a la parte metalúrgica que ya teníamos desarrollada el reciclaje por residuos complejos".

¿Por qué son complejos? porque un residuo electrónico está compuesto de muchos materiales, de familias de materiales, que después dentro de cada familia se desglosa un grupo también amplio. Hay plásticos, metales, pero si miramos la lista de plásticos con los que nos encontramos que oficialmente son categorías del 1 al 7, en el caso de los metales tienen una infinidad de metales y aleaciones metálicas”.

Efectos negativos de los residuos electrónicos

”Hay estudios recientes que han abordado esto. La cantidad de sustancias que contiene un equipo electrónico, por ejemplo un celular, alcanza hasta 60 elementos de la tabla periódica y entre ellos algunos son metales inocuos para el medio ambiente y para la salud de las personas, y otros son complejos.

Hemos visto en algunos casos que el manejo de los metales puede afectar los asentamientos humanos. En Arica, por ejemplo, hay pasivos ambientales y hay otros efectos nocivos asociados a la contaminación que se genera cuando se dejan equipos electrónicos a la intemperie, o inclusive en los vertederos.

Esto sucede porque los metales reaccionan ante la humedad y ante otras sustancias que hay en el suelo, teniendo como consecuencia la contaminación de las napas subterráneas. También, hay otra cadena de contaminación de la flora y fauna, y finalmente nosotros, que consumimos plantas y animales contaminados con estos metales. Si bien son pequeñas trazas, su efecto es acumulativo. Por lo tanto, esto siempre nos va a afectar”.

Puntos de reciclaje para crear conciencia en los niñas, niños y adolescentes

”Ese es uno de los proyectos a los que más cariño le tenemos. Partimos con una idea y nos costó concretarla. Estuvimos mucho tiempo trabajando internamente y cuando logramos lanzarla, no esperábamos la recepción que logró. Lanzamos este programa a través de redes sociales con jóvenes, porque al principio cuando ideamos el proyecto nos acercamos a las direcciones de los colegios y ahí nos topamos con muchas trabas, porque los adultos tenían más reticencia a esta actividad.

Era complejo administrarlo, hacerse responsable y motivar a los alumnos. En cambio, cuando cambiamos la estrategia decidimos ir a los alumnos que eran los que debían darle vida al proyecto en sí. La recepción fue tremenda.

Hubo directores de colegio que al principio no estaban muy convencidos y tuvimos que darle garantías como empresa de que esto no iba a ser un punto muerto, sino que se trata de un punto de reciclaje vivo, con el compromiso de nuestra empresa de hacernos cargo de toda la cadena. Porque en reciclaje no basta con poner contenedores lindos y con colores, el trabajo fuerte y la responsabilidad está en recolectar a tiempo y darle el tratamiento adecuado a esos residuos.

Lo bonito de este proyecto fue eso, que la comunidad escolar completa, -alumnos, padres, profesores- se comprometieron a participar y a mantenerlo activo. Nosotros partimos el 2019 y luego vinieron todos los meses complejos, pero aún así se mantienen y el ánimo de los muchachos ha estado alto a pesar de la pandemia, a pesar de que no pudieron ir a sus colegios.

Ahora que se están reanudando las clases los y las jóvenes están empezando nuevamente a reciclar. Nosotros siempre hemos dicho que la educación -en todos los aspectos que involucran a la sociedad- es el pilar fundamental. En el cuidado del medioambiente esto no es distinto, al contrario, es mucho más imperioso porque si un niño o niña recibe la educación ambiental que corresponde en sus etapas iniciales de desarrollo, va a mantener esos hábitos en el correr de su vida.

En el futuro, van a tomar decisiones de consumo pensando en el impacto ambiental que genera su acción de consumo. Obviamente cuando termine la vida útil de los productos que consumen, van a tener absolutamente incorporado el chip del reciclaje y de la reutilización, que es el otro desafío que hay hoy”.

Futuro del reciclaje de residuos eléctricos y electrónicos en Chile y la Ley REP

”La Ley REP incorpora los residuos eléctricos y electrónicos, es parte de sus seis productos prioritarios. De hecho, nosotros como Midas estamos participando en el Comité Operativo Ampliado que está redactando el reglamento que va regir para regular la responsabilidad del productor de estos aparatos. Está incorporado y va a ser el tercer o cuarto reglamento que va a salir de la Ley REP.

Sin duda esta ley en su conjunto es una revolución de la economía y nuestras conductas de consumo también. Va a ser lento, es un cambio tan grande que no va a hacer de un día para otro y es bueno que así lo sea, porque cuando son cosas muy rápidas puede pasar el efecto que todos conocemos hoy: el Transantiago.

Es mejor que sea lento, que la ley contemple la gradualidad. Por eso también se han ido incorporando de a poco los productos prioritarios, avanzando cada uno con su reglamento. En el caso de los aparatos eléctricos y electrónicos, creo que es uno de los residuos más fáciles de reciclar porque no son de consumo masivo como un envase y embalaje, que es otro de los productos que incluye la ley.

Los residuos electrónicos tienen un valor más alto en el mercado. Por ejemplo, un celular puede costar hasta un millón de pesos, entonces las personas lo tienen más tiempo en sus casas y lo cuidan más.

Si bien hoy hay productos electrónicos que catalogaría como desechables, creo que la ley va a avanzar más lento de lo que quisiéramos, pero en forma segura para generar el cambio. Ya hay conciencia, lo que falta es que haya una infraestructura amable y cómoda para las personas, porque una parte de las personas pueden ser voluntariosas y van a ir a buscar la alternativa, pero hay una gran mayoría que todavía no tiene esa voluntad porque no ha tenido la educación ambiental, por lo tanto, hay que motivar y facilitar las cosas.

Por eso en Midas hemos impulsado, con una empresa de telecomunicaciones, un programa muy interesante de reciclaje para la recolección de celulares, donde ellos en cada una de sus tiendas a lo largo de Chile tienen un buzón. Entonces, en sus tiendas existe la opción de dejar el celular o accesorio ahí. Eso ha sido muy bien recibido por la sociedad porque facilita el reciclaje. La Ley REP va a hacer que eso se replique con otros productos, entonces como consumidor ya no vamos a tener la excusa de que no hay lugares dónde reciclar”.

¿Cómo el Parlamento podría contribuir en la labor ambiental y en el reciclaje

”Primero que todo, dándole las directrices legislativas acorde a la realidad. Es necesario que los legisladores estén un poco más involucrados, que es la crítica que se hace respecto de las necesidades de la ciudadanía. Eso implica conversar con los actores relevantes de cada una de las materias que ellos quieren abordar.

Mientras tengamos una ley o proyectos de ley que recojan las necesidades de la sociedad, a través de la comunicación directa con los ciudadanos, con las empresas, o con las asociaciones de consumidores, por ejemplo, van a poder tener una visión más clara sobre qué proponer y ojalá ponerse de acuerdo para que las iniciativas salgan en forma expedita y gradual.

Es importante entender que los grandes cambios suceden de a poco, el reciclaje es un cambio cultural de la economía circular en sí. Es un tema de hábito y los hábitos se van creando de a poco, cuando ya somos personas adultas y los niños y niñas desde que nacen.

Nuestro Poder Legislativo tiene que enfocarse en eso y brindarnos a las empresas y a los ciudadanos las facilidades para poder colaborar en esas iniciativas. Pero también colaborar con la opinión si es que no hay otras instancias de participación. Creo que la Ley REP es una de las leyes más necesarias, era muy necesario que la implementáramos.

A raíz de esto, con los efectos del cambio climático que ya estamos viendo, las personas también están más conscientes de los efectos que producen sus hábitos de consumo. Pero falta guiarlos para saber cómo contribuir positivamente a que esos efectos no sean tan graves, es decir, a mitigar esos efectos. Nosotros como empresa tratamos de hacer nuestra parte y desde los inicios instauramos la minería urbana sin saberlo.

Esto implica que le damos una alternativa a los residuos y empleo a los mismos chilenos. Tratamos de generar valor en Chile transformando los residuos en materia prima con una pureza similar a la que si se extraen estos metales desde la tierra. Lo que al final conlleva a que tengamos toda una sinergia de cosas positivas para el medio ambiente, para la economía y para la sociedad. Al fin y al cabo es lo que se traduce en sustentabilidad o sostenibilidad”.