Inauguración
Carolina Córdoba presentó su obra en ArteBCN como parte de la “Muestra Bipersonal”, inaugurada en octubre de 2019.
Sobre mi historia
“Mis mejores recuerdos de infancia son en el jardín. A menudo tenía las manos llenas de arcilla reteniendo la textura de una hoja sin saber que hacía entonces mis primeros grabados, o escogía cuidadosamente ciertas flores para elaborar algo parecido a un atol que terminaba en garabato sobre alguna pared de la casita de juegos.
La primera formación académica la hice en el Conservatorio de Castella, ahí jugué y soñé con la danza, la música, el teatro, las letras y la plástica.
Un poco más grande aprendí a dibujar en el movimiento. El escenario era la página en blanco que imaginaba y rayaba, rasgaba, doblaba, arrugaba y mordía. Aunque en la bidimensionalidad estas acciones se me hacen más difíciles, sigo teniendo la misma sensación lúdica cuando experimento en mi taller.
Me gradué en Artes Plásticas con énfasis en Grabado y me egresé de la Maestría Académica en Artes de la Universidad de Costa Rica. También fui bailarina de la compañía de danza de esa misma universidad, de la Compañía Nacional de Danza y de otras compañías independientes”.
Mi exposición: “Sospecha de Constelaciones Craqueladas”
“Chile me conecta a mi propia historia, aunque soy de Costa Rica, aquí hay una coordenada que traza hasta Centroamérica una línea energética. Se dice que cada persona es un mundo, complejo en su propia individualidad, pero en comparación somos menos que un puntito en el vasto universo. Entonces, hago trazos de punto a punto haciendo conexiones, que van dando lugar a formas particulares. Ellas, son la construcción de lugares colectivos de la suma de lugares únicos. Son el resultado de la cohesión de formas diversas. La amalgama de lo distinto.
La fotografía principal en cambio, aquella que no muestro aquí, es todavía más grande, es el TODO, es la suma de estas constelaciones múltiples y se llama “entrelazado cuántico”. Tal vez esa verdadera imagen escapa a mi imaginación y creatividad. Por eso, en este caso solo muestro algunos atisbos, una visión a las comunidades entre los más cercanos. Mi propósito es hacer un recordatorio de la importancia de sabernos uno, uno con el universo, uno con cada ser del planeta, indivisibles, hermanados y de la mano, capaces de manifestar grandeza, aunque a veces, sospecho, también historias craqueladas”.
