Labor Parlamentaria

El señor CIFUENTES (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Gaspar Rivas .

El señor RIVAS.-

Señor Presidente, este proyecto de ley es muy importante y muy interesante, porque va en la línea de lo que está pidiendo la ciudadanía. Sin embargo, como ya se comentó, si no existen más recintos carcelarios, terminará siendo letra muerte, porque los jueces van a hacer todo lo posible, van a utilizar todos los subterfugios legales por no enviar a estas personas a la cárcel, si no, por dejar de enviar a otras que deberían estar ahí.

Desgraciadamente, en nuestro país las cárceles son como irse al cielo. Todo el mundo quiere irse al cielo, pero nadie quiere morirse, que es el prerrequisito de aquello. Todo el mundo quiere más cárceles, pero nadie las quiere cerca de su casa. Es comprensible. ¿Quién va a querer tener a ese tipo de vecinos cerca de su casa?

Por eso, deberíamos reflotar la idea muy mal comunicada hace muchos años por el señor Joaquín Lavín de construir cárceles en una isla, esto es, colonias penales.

La isla de Tasmania, al sur de Australia, nació como una colonia penal en el siglo XIX, y nadie se murió ni se cayeron los derechos humanos, ni la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, ni nada.

En la Guayana Francesa hasta hace poco más de cien años existió la isla del Diablo, y nadie se murió, no se acabaron los derechos humanos ni nada de esas cosas.

Tenemos otorgado por la naturaleza uno de los archipiélagos más ricos y más diversos en el sur de Chile. ¿Por qué no mandamos a esas lacras asquerosas allá? A ver si se rehabilitan ahí con programas de rehabilitación. Y los que no tengan rehabilitación, porque hay muchos que no quieren rehabilitarse, se pudrirán en las islas del sur de Chile, porque es allí donde tienen que estar.

Los jueces de garantía, que son los que hasta el día de hoy los siguen liberando, una y otra vez, por la puerta giratoria, que más que puerta giratoria parece un ventilador por lo fuerte que gira, también deberían ir a la cárcel. Ellos son un peligro para la sociedad y son los que deberían ir a juicio por traicionar a la ciudadanía, que les exige hacer justicia, la que requiere enviar al delincuente a la cárcel, castigarlo, y a la víctima entregarle protección, no como lo hacen ellos, que es completamente al revés.

He dicho.