Labor Parlamentaria

El señor MULET (de pie).-

Señorita Presidenta, por su intermedio saludo a la señora Aurora Williams , ministra de Minería, y al señor Máximo Pacheco , presidente del directorio de Codelco.

El objeto de esta sesión es conocer en profundidad, analizar y discutir el anuncio de asociación público-privada entre Codelco y SQM para el desarrollo en conjunto de las actividades productivas y comerciales del litio en el salar de Atacama hasta el año 2060, y las consecuencias que este acuerdo tiene para nuestro país.

Cuando el Presidente Boric dio a conocer la Estrategia Nacional del Litio, en abril del año 2023, fui uno de los que apoyó su decisión, especialmente porque se hacía cargo de cuatro temas fundamentales que comparto.

Con esta estrategia se buscaba asegurar el involucramiento del Estado en todo el ciclo industrial mediante la creación de un instituto tecnológico y de investigación para la generación e internalización de conocimientos en torno al litio y los salares, el desarrollo de actividades público-privadas, la sostenibilidad política y social, el garantizar una adecuada modernización del marco institucional, entre otras materias.

Se señala también en la Estrategia Nacional del Litio que “el Estado pondrá visión estratégica de largo plazo en todo el ciclo productivo, desde la exploración hasta la agregación de valor, además de regulaciones claras para asegurar la sostenibilidad y la reinversión en el desarrollo del país”. Agrega que “los privados podrán aportar (…) capital, innovación tecnológica y redes en el mercado”.

Asimismo, se señala que “Corfo solicitará a Codelco la búsqueda de los mejores caminos para lograr desde ya la participación del Estado chileno en la explotación del litio en el salar de Atacama, negociando en primer lugar con SQM, cuyo contrato vence precisamente en 2030”.

Además, se agrega que “en primer lugar, en caso de conformarse una empresa público privada que explote el litio del Salar de Atacama, ésta tendrá una participación mayoritaria del Estado”, 50 por ciento más 1.

Respecto de la cuestionada historia de SQM, a mi juicio, no hubo un camino viable mejor para implementar su estrategia y apurar el tranco, ya que la ventana de oportunidades en que el litio es un buen negocio es una ventana corta en el tiempo.

¿Es el acuerdo de Codelco bueno para Chile? ¿Se hizo o no lo correcto? ¿Fue transparente el proceso? Son algunas de las preguntas que queremos contestar en estos breves minutos. También me haré cargo de algunas críticas que se han hecho a este acuerdo.

Sobre la importancia del litio, la electromovilidad, la cuarta revolución industrial, internet, las energías renovables, la fisión nuclear, el tritio no me detendré, porque no hay tiempo.

Lo interesante de cualquier debate de minería de esta envergadura es trascendental para el país.

No nos olvidemos de que este país se funda con la plata proveniente del yacimiento de Agua Amarga, en Vallenar; se consolida con la plata de Chañarcillo; sigue con el salitre, el caliche sangriento, que nos costó incluso una revolución; luego, llegó el cobre, la viga maestra. Hoy día tenemos una oportunidad más con el litio y tenemos que hacer bien las cosas.

Este es un debate importante, un debate de país, donde Chile, si hace bien las cosas, puede captar miles y miles de millones de dólares para satisfacer las demandas de nuestros compatriotas. Hacerlo bien requiere, obviamente, un esfuerzo para que estos recursos no se dilapiden. Por eso, es un tema importante para nuestro país.

Quiero hacer un breve paréntesis y recordar a un político chileno, don Narciso Irureta , a quien dedico mi intervención. En el año 1969, don Narciso alertó al país respecto del litio. Siendo diputado denunció en la Sala que una gran compañía minera, Anaconda , estaba pidiendo pertenencias mineras sobre todo el salar de Atacama, incumpliendo los compromisos que ya tenía con Chile producto de los acuerdos a los que había llegado con el gobierno del Presidente Frei Montalva .

Narciso Irureta hace la denuncia y alerta, en el año 1969, en una intervención en la Cámara de Diputados, de la importancia que tendría el litio en el futuro. ¡Y vaya que tuvo razón don Narciso ! No se equivocó.

Después se produjo la nacionalización del cobre. Cuando llegó la dictadura militar, el litio pasó a tener interés solo para la Corporación de Fomento a la Producción, la Corfo.

Posteriormente, los militares nacionalistas pusieron su atención en el litio, y en 1976 se incluye como sustancia de interés nuclear; al año siguiente, en 1977, la Corfo manifiesta su atención en el salar de Atacama y hace las gestiones que permiten que hoy el litio esté en manos del Estado.

Durante la década del 80, la Corfo crea dos empresas con participación de capitales norteamericanos para trabajar el litio en el salar de Atacama.

El año 1995, SQM se hace de una de esas empresas y toma el control, porque Corfo le vende su parte del proyecto.

El litio comienza a ser muy relevante para la electromovilidad.

Siguiendo la historia, en 2010, el Presidente Piñera llama a un proceso de licitación, que queda anulado, se invalida y no se puede llevar a cabo por completo, lo cual es muy importante para la conclusión.

Posteriormente, la Presidenta Michelle Bachelet , en 2014, creó la Comisión Nacional del Litio, donde se hace un gran estudio. Presidía esa comisión la ministra Aurora Williams, que está aquí presente, y se entrega un informe en el año 2015, que señala, entre otras cosas, aspectos muy relevantes.

Me permito leer dos o tres.

La comisión constató la ausencia del Estado en las actividades relacionadas con la producción del litio y, por ende, la necesidad de que el Estado se involucre y sea garante en este recurso mineral y en su explotación, de manera de que maximice y capture su renta económica con una mirada de largo plazo.

Se recomienda una serie de modificaciones a contratos y otras materias, hasta que en 2018 se llega al acuerdo que lleva adelante el señor Eduardo Bitran , que modifica los contratos después de una serie de incumplimientos de Albemarle y de la compañía SQM.

El entonces Presidente Piñera se hizo cargo de la Estrategia Nacional del Litio en 2023 y la entrega al país. Ya había fracasado el Presidente Piñera , en su segundo mandato, en otro proceso de licitación, que fue anulado por la Corte Suprema.

Boric señala, en su estrategia nacional, un conjunto de medidas que buscarían aumentar las riquezas para el país, desarrollando una industria clave como paso fundamental para vincular el desarrollo económico de Chile con un cambio hacia una economía verde a nivel global. Ya nos referiremos a algunos de esos aspectos.

Se elabora el memorándum de entendimiento al que llega Codelco, cumpliendo el encargo del Presidente de la República, y, posteriormente, se transforma en el acuerdo que se suscribió el 31 de mayo del presente año, en que se establecen formalmente dos períodos para regular estas asociaciones. En el primero, asumirán los actuales contratos de Corfo y SQM hasta diciembre de 2030, y, en el segundo, el proyecto Salar Futuro, que será regido por los nuevos contratos suscritos por Corfo y Minera Tarar desde el 2031 hasta el 2060. No me voy a detener en eso, porque ustedes los conocen, y quiero más bien hacer un juicio a valor.

El acuerdo al que llegó Codelco con SQM fue fruto de una serie de críticas, pero también hubo personas que lo valoraron, como el entonces ministro Laurence Golborne , quien señala que es un acuerdo “ganar-ganar”, donde las dos partes ganan. Por otra parte, Marcos Lima , expresidente de Codelco -hombre experto en esta materia-, señala que es un acuerdo exitoso para las partes. Indica que no es fácil llegar a un acuerdo y que ambas partes han tenido sus ganancias.

La Sonami establece una mirada crítica respecto del acuerdo, pero es una mirada que tiene que ver más bien con la ideología de quienes hoy conducen la Sonami. Señala que podría desincentivar la inversión privada en el sector minero del litio, debido a la preferencia del gobierno por un control mayoritariamente estatal. Obviamente, es una mirada crítica que tiene un sesgo válido, pero detrás hay una ideología. En el fondo, dice que le gustaría que explotaran solo los privados, que siguieran, seguramente, quienes están explotando hoy en día.

Tianqi Lithium , socio de SQM, también entrega una mirada crítica, y lo señala, fundamentalmente, por una discusión dentro del propio SQM respecto de su participación. Es una pelea entre accionistas.

Esto es extremadamente importante y relevante, pero el tiempo es muy corto. Me voy a ir a la parte final, porque me interesa que quede claro el juicio de valor que hago sobre esto.

Se ha criticado por distintos actores el método de negociación directa que hizo Codelco con SQM. Se ha sostenido que este proceso debió haberse hecho por licitación internacional. Se ha señalado que de esa forma hubiera sido más transparente y el Estado de Chile podría haber captado más renta. Se ha dicho que la licitación pública es el mejor proceso.

Creo que por la experiencia que ha tenido nuestro país en diferentes épocas de la historia y en diferentes procesos, no es posible afirmar categóricamente que una licitación pública es el mejor camino para una negociación de esta envergadura. Por ejemplo, conocemos con antecedentes concretos los procesos de licitación que se hicieron durante la dictadura militar, donde estudios posteriores determinaron que las licitaciones de importantes paquetes accionarios de grandes empresas fueron subvaloradas. No obstante, también en democracia hemos tenido licitaciones bastante malas para el Estado de Chile, como la licitación de Ferronor o como la propia parte de Corfo que compró SQM, en que los precios aparecen extremadamente bajos.

Para no ir más lejos, solo hace poco se han objetado procesos importantes, como licitaciones del Registro Civil o de la Junaeb, que han sido judicializadas y han debido ser anuladas. Así, el proceso de licitación por sí solo no es garantía.

Por ello, no creo que sea posible afirmar categóricamente que un proceso de licitación internacional para abordar este tema tan complejo, como el salar de Atacama, habría sido el mejor método. El camino de la empresa pública, que en algún momento planteamos algunos, también estaba cerrado, porque este Parlamento no tiene los votos para aprobar y financiar una empresa pública.

¿Qué pasa con la transparencia de este proceso, que se dice que no fue la correcta? Honestamente, creo que el acuerdo cumple con niveles de transparencia, ya que estuvo sometido a escrutinio público permanentemente, con una amplia y ardua discusión abierta de personas y empresas directamente involucradas, o con interés en la explotación del litio; con la academia y expertos; con empresas chilenas y extranjeras de gran envergadura; con actores públicos y privados, algunos involucrados directamente, como accionistas de SQM; con representantes de los pueblos originarios, y con esta propia Cámara de Diputados. Nunca se hizo pública ninguna oferta concreta alternativa a Codelco, pese a estar expresamente facultado para recibirla, incluso durante la negociación, como lo señala la cláusula 11 del memorándum de entendimiento.

Por último, sobre la captación de renta, que para mí fue decisivo para tomar una posición y aprobar, y dar mi opinión favorable, puedo concluir que es bastante adecuada. Conforme con los antecedentes entregados por la compañía Codelco, se podría llegar a captar hasta el 85 por ciento de la renta económica de la explotación del litio en el salar de Atacama, considerando los ingresos del Estado por las utilidades, el hecho de ser propietario del 50 por ciento más una acción de la empresa, por las rentas de arrendamiento que se perciben, por las pertenencias mineras que son propiedad de Corfo, por los impuestos a la renta y otros que se debe pagar y por la ley del impuesto a la minería o royalty. Se puede llegar al 85 por ciento.

Incluso hay algo más, que no es renta, pero no deja de ser interesante: los fondos de los trabajadores suman un 13,8 por ciento de la propiedad de la compañía a través de las AFP, lo que indirectamente entrega una renta social.

Les recuerdo a los honorables colegas que, aunque no es exactamente igual, por el área de la minería extractiva y las grandes inversiones que requieren los yacimientos de cobre, en el royalty de la gran minería llegamos al 46,5 por ciento de carga potencial máxima de la renta imponible operacional.

En un estudio de la Cepal, llamado Renta económica, régimen tributario y transparencia fiscal de la minería del litio en la Argentina, Bolivia (Estado Plurinacional de) y Chile, de 2022 -hace poco tiempo-, realizado por el economista Michel Jorratt , se señala: “En términos acumulados, se observa que el Estado se apropió de 1.508 millones de dólares, equivalentes a un 36% de las rentas económicas. Por su parte, el sector privado se apropió de 2.699 millones de dólares, que representan un 64% de las rentas económicas generadas durante el período.”.

Entonces, llegar al 85 por ciento en esto es, obviamente, satisfactorio. Una empresa del Estado no da; no hay acuerdo en este Parlamento para hacer una empresa pública, de manera que el camino es el adecuado.

Por último, con todo lo expuesto, y en un ambiente de aguda desconfianza pública que vive nuestro país desde hace mucho, donde no es habitual resaltar lo positivo, sino más bien la desconfianza y el reproche, me permito saludar positivamente este acuerdo que recoge la experiencia de sucesivos gobiernos y actores políticos, como don Narciso Irureta , a fines de los años sesenta del siglo pasado, hasta el actual Presidente Gabriel Boric , que se condice con su Estrategia Nacional del Litio y salvaguarda los intereses de Chile.

He dicho.

-Aplausos.