Andrea Mella y los efectos del aprendizaje de chino mandarín en pacientes con Alzheimer

"Enseñanza de chino mandarín para la tercera edad. El caso de pacientes con Alzheimer". Es el nombre del trabajo que Andrea Mella ha venido desarrollando el último año y que resalta las cualidades del chino mandarín -caracterizado por ser pictográfico y tonal- en su capacidad de mejorar la motricidad fina y la interacción social, pero también en la reducción de la ansiedad y el estrés, a través de actividades lúdicas y colaborativas. Más de esta investigación, en la siguiente entrevista.

Enseñanza del idioma a personas de la tercera edad con deterioro cognitivo

”Este trabajo se fundamenta en cómo la enseñanza del chino mandarín dirigida a personas mayores, especialmente aquellas que padecen Alzheimer mejora su bienestar social y emocional. La idea de aprender un idioma va más allá de adquirir nuevas palabras, se trata de un medio para estimular el cerebro, mejorar la calidad de vida y fomentar la interacción social y familiar.

Está inspirado en mi propia experiencia con mi madre, donde observé que el aprendizaje del chino, un idioma pictográfico y tonal, es particularmente adecuado para promover la creatividad y la actividad cerebral, ya que requiere un enfoque en habilidades distintas a las que se utilizan en otros idiomas. También mencioné cómo estas actividades, cuando se realizan de manera lúdica y colaborativa, ayudan a mejorar el estado emocional de los participantes, reduciendo la ansiedad y el estrés.

Un aspecto clave de mi presentación fue la integración de cuidadores y familiares en el proceso de aprendizaje, lo que refuerza los lazos entre los seres queridos y crea un ambiente de apoyo y aprendizaje compartido”.

Efectos del aprendizaje de idioma chino en personas con Alzheimer

”El aprendizaje de un idioma como el chino tiene un impacto significativo en el bienestar cognitivo y emocional de los adultos mayores, especialmente aquellos que padecen Alzheimer. Esta actividad, que requiere concentración y activa diversas áreas del cerebro, estimula la cognición, mantiene la mente activa y combate el deterioro mental. A través de actividades diseñadas especialmente para este grupo de edad, como la visualización de los caracteres chinos a través de ejercicios de caligrafía, se fomenta la memoria, la motricidad y la concentración, lo que puede ayudar a mitigar los efectos del Alzheimer en términos de pérdida de memoria y agilidad mental.

Desde el punto de vista emocional, las personas mayores encuentran alivio en las actividades lúdicas relacionadas con el aprendizaje del idioma. La naturaleza divertida y relajante de estos ejercicios contribuye a reducir los niveles de ansiedad y estrés, que son comunes en personas con deterioro cognitivo. Enfrentarse a una nueva actividad y lograr pequeñas metas, como escribir correctamente un carácter chino, les brinda una sensación de logro y satisfacción personal, lo que refuerza su autoestima y bienestar”.

En algunas de las actividades de caligrafía china los participantes comienzan dibujando con el dedo, luego con un lápiz y, finalmente, con un pincel de agua. Esta actividad no solo fomenta la motricidad fina, también introduce a los adultos mayores de manera táctil en el mundo de los caracteres chinos. Otro ejemplo es el papel recortado, una técnica tradicional china que permite seguir patrones y formas específicas mientras los estudiantes trabajan en la coordinación ojo-mano. Estas actividades visuales y prácticas son excelentes para fomentar la concentración y ofrecer una distracción de los pensamientos ansiosos.

Además, el karaoke es otra actividad que ha funcionado bien, utilizando canciones como "Zhongguo da changcheng" para enseñar sobre la cultura. A través de la música, los participantes no solo aprenden palabras nuevas, sino que también disfrutan del proceso en un ambiente relajado y social. El componente social de estas actividades es fundamental para reducir la sensación de aislamiento y promover un sentido de pertenencia y diversión entre los participantes. Crear un ambiente positivo y acogedor contribuye significativamente a disminuir la ansiedad y el estrés”.

¿Cómo superar la frustración en el aprendizaje?

”Mantener la motivación y evitar la frustración en personas mayores, especialmente en aquellas con Alzheimer, requiere una atención cuidadosa a su estado emocional y capacidad de concentración. Es fundamental ofrecer actividades accesibles y bien explicadas. Las instrucciones deben ser simples y directas, acompañadas de demostraciones visuales. Además, es clave dividir las tareas en pasos pequeños y manejables. Por ejemplo, al enseñar un carácter chino, se comienza con trazos sencillos y se avanza gradualmente hacia formas más complejas solo cuando el participante se siente cómodo.

La paciencia y la empatía son esenciales. Es importante observar cómo reaccionan los participantes a cada actividad, ya que algunos pueden desmotivarse rápidamente si sienten que no están progresando. Para evitar esto, es útil finalizar la sesión con una pequeña victoria, como completar un carácter o una forma de papel recortado. Esto les proporciona una sensación de logro y mantiene alta su motivación. Además, integrar a familiares y cuidadores en el proceso brinda un apoyo adicional, creando un ambiente de trabajo colaborativo en el que todos están involucrados”.

Otros métodos existentes para enseñar idioma chino a personas mayores

”No existen métodos establecidos de enseñanza de caracteres chinos diseñados específicamente para personas mayores con deterioro cognitivo. Sin embargo, hemos desarrollado actividades según cada caso para hacer el aprendizaje más accesible y efectivo. Este tipo de prácticas adaptables a sus capacidades cognitivas y motrices, permite que en cada tarea, por más pequeña que sea, se concrete sin sentirse abrumados.

También se incorporan elementos visuales que facilitan la memorización, como el uso de pizarras de agua y papel recortado, los cuales ayudan a reforzar patrones sin la presión de memorizar grandes volúmenes de información. Aunque no existe un método único ni universal para este tipo de enseñanza, estas adaptaciones pueden ayudar a que las personas mayores con deterioro cognitivo se involucren de manera más activa en el proceso de aprendizaje y disfruten de la experiencia”.

Método aplicable a políticas para personas mayores

”Este tipo de actividades podrían ser parte de una política integral para el cuidado y la estimulación de personas mayores. La enseñanza del chino mandarín no solo fomenta la estimulación cognitiva, sino que también ofrece una vía creativa y divertida para mejorar su bienestar emocional. Estas actividades lúdicas permiten mantener su cerebro activo mientras disfrutan de un entorno relajado y positivo.

Desde la perspectiva de las políticas públicas, integrar estas actividades dentro de programas de envejecimiento activo podría ser una excelente manera de mejorar la calidad de vida de las personas mayores. Además, al involucrar a los cuidadores y familiares en el proceso de aprendizaje, se fortalece el apoyo emocional y se crean oportunidades para mejorar las relaciones interpersonales. En un mundo donde la población está envejeciendo rápidamente, estas actividades podrían ser una herramienta poderosa para promover un envejecimiento saludable y activo”.

Por equipo Asia Pacífico: asiapacifico@bcn.cl