Sinólogo Augusto Soto analizó la lógica política detrás del nuevo gobierno chino

La designación del Buró Político en 2012 y la presidencia de Xi Jinping el 2013 han generado grandes expectativas en China. No obstante, por la magnitud de los desafíos el gobierno necesita hacer esfuerzos mayores. Esta fue una de las ideas expuestas en la conferencia “China: nuevo gobierno, nuevos desafíos” dictada por el sinólogo y académico de la Universidad de Barcelona, Augusto Soto, quien explicó la lógica política detrás de este nuevo gobierno.

El evento organizado por el Centro de Estudios Latinoamericanos sobre China de la Universidad Andrés Bello, en conjunto con la Fundación Chilena del Pacífico, contó con la moderación de los académicos Fernando Reyes Matta y Manfred Wilhelmy.

El nuevo liderazgo de Xi Jinping

El 14 de marzo de 2013, luego de la confirmación de la Asamblea Nacional Popular se designó a Xi Jinping como nuevo Presidente de la República Popular China, sustituyendo a Hu Jintao, quien ostentó este cargo desde 2003. El recién designado Presidente es más joven que los anteriores, algo que también se ve reflejado en toda la elite política cuya edad promedio es de 63 años.

Para el sinólogo Augusto Soto, la designación de Xi Jinping comienza con grandes expectativas, pues cuenta con experiencia en la administración de grandes proyectos, entre los que se encuentra la organización de los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, además de haber ostentado cargos en el Partido Comunista chino, la Asamblea Popular Nacional y la Comisión Militar Central.

Según Soto provenir de una misma provincia, universidad o el mismo colegio, podría ser una palanca de ascenso que está permitiendo a los ciudadanos a ocupar cargos públicos, como es el caso de Xi Jinping.

La diversidad del Buró Político

Para el experto, la nueva administración elegida en noviembre de 2012 podría dar a entender a occidente que comienza una nueva era, ya que ninguno de sus líderes nació antes de 1944, además cuentan con dos mujeres. A este hecho se suma que hay una composición más heterogénea, donde hay menos ingenieros y mayor cantidad de otras profesiones.

De acuerdo al especialista, esta diversidad profesional se complementa con una amplia experiencia en la administración de provincias, tanto de aquellas con éxito económico, como lugares donde los recursos naturales son escasos. Sin embargo, el Buró Político no cuenta con delegados de las provincias más numerosas, tampoco representantes de las minorías.

Asimismo, señaló que en cinco años más el Buró Político deberá cambiar. “El ascenso de los nuevos miembros dependerá de la realidad de China en aquel entonces, como por ejemplo el éxito de la lucha contra la corrupción que desde los años 80 se ha venido llevando a cabo sin grandes éxitos”.

El curso de la economía y sus desafíos

Si bien no se harán grandes reformas internas como se espera desde occidente, en el ámbito internacional se seguirá favoreciendo la economía exportadora. Para Augusto Soto se continuará buscando una mejor posición en el panorama económico internacional, enalteciendo la relación con los Brics y la Unión Europea.

Por otra parte, la economía podría verse beneficiada con el gobierno de Xi Jinping, quien en su primer discurso como Presidente el 17 de marzo de 2013, se refirió a hacer esfuerzos por lograr el sueño chino, consistente en expandir la prosperidad al mundo y todas las generaciones.

Según planteó el especialista, el logro de esta iniciativa se podría realizar a través de enmiendas a la Constitución para lograr mayores libertades de una clase media en expansión, que además cuenta con una batería de nuevas demandas que hacen de la transformación una tarea compleja.

De igual manera, para lograr la proyección de la imagen de China contemporánea, el presidente Xi Jinping ha puesto en cargos clave a personal bilingüe, con buena preparación y con capacidad de entregar mensajes en distintos idiomas, utilizando diversos códigos que se adapten a las diversas formas de comunicación.

Para finalizar, Augusto Soto concluyó que “si China no entiende los códigos y la forma como piensa occidente, no logrará que occidente comprenda como piensan en China”.