¿La Unión de Asia Pacífico?

¿Se imagina un futuro en el que tener nacionalidad chilena sea lo mismo que tener la japonesa o la india, gracias a que todos los países son parte de una misma comunidad? Bueno esa es la idea que Kevin Rudd tiene para el Asia Pacífico, convertir a la región en una comunidad del mismo estilo que la Unión Europea.

El premier australiano anunció, el pasado miércoles 5 de junio en un discurso, que su objetivo para la región del Asia Pacífico es crear una comunidad que integre a los 21 miembros de APEC y a la India, para el 2020.

En su discurso el mandatario alabó la idea de los dirigentes europeos, que en 1950 decidieron crear la Unión Europea (UE). "Este es el espíritu que tenemos que capturar en nuestro hemisferio" pero "con una mayor diversidad en los sistemas políticos y estructuras económicas, en los niveles de desarrollo, en las creencias religiosas, en las lenguas y las culturas, que nuestros socios en Europa", dijo Rudd.

En lo concreto esta comunidad significaría un acuerdo regional de libre comercio y un espacio para la cooperación en cuanto a terrorismo, seguridad energética y de recursos e incluiría a países como Estados Unidos, Japón, China, India, Indonesia.

Le preguntamos sobre las posibilidades de que el Asia Pacífico sea convierta en una comunidad tan integrada como la UE, a Roberto Durán, profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad Católica, quién nos contó porqué cree que esta idea no tiene mucho futuro.

Primero el académico nos comentó que la experiencia unificadora europea, que tiene más de 51 años, no es homologable ni extrapolable. “Es un proceso en el que se han amalgamado experiencias únicas, del todo intransferibles”, afirmó.

Un ejemplo es lo ocurrido en Latinoamérica, en donde llevamos 46 años intentado un proceso similar sin éxito. Además, de los muchos otros ensayos que han tenido resultados aún peores, como el del continente africano.

Otro punto importante que destaca Durán es que el continente asiático no tiene experiencias unificadoras, habiendo más énfasis nacionalistas, centrados en perfilar los regímenes políticos de cada país.

Es que las políticas exteriores de los países APEC han predominado estricta y mayoritariamente los factores comerciales, pero no en una integración en lo político. “Percibo en las consideraciones del Primer Ministro Rudd un esfuerzo por dotar de un nuevo estilo a la política exterior australiana, para diferenciarse de los gobiernos anteriores”, nos explicó el académico.

Motivos por los que el profesor concluye que ésta es una innovación más retórica que sustancial.