La alianza entre el Jardín Botánico Nacional y el Jardín Botánico de Jindai-Tokio permitirá crear una colección pública de Sakuras y la interrelación de profesionales chilenos y nipones para dar vida al proyecto.
JARDIN JAPONES, JARDIN BOTANICO VINA DEL MAR, CONVENIO CHILE JAPONLa alianza entre el Jardín Botánico Nacional y el Jardín Botánico de Jindai-Tokio permitirá crear una colección pública de Sakuras y la interrelación de profesionales chilenos y nipones para dar vida al proyecto.Biblioteca del Congreso Nacional de Chile
Un valioso convenio binacional se firmó este jueves 29 de enero de 2015, en el Jardín Botánico de Viña del Mar, entre el Jardín Botánico Nacional y el Jardín Botánico de Jindai Tokio, con el objetivo de crear, mediante un financiamiento compartido, un Jardín Japonés al interior del recinto viñamarino.
La ceremonia contó con la presencia del Embajador de Japón en Chile, Naoto Nikai, del Intendente de la región, Ricardo Bravo Oliva y de diversas autoridades chilenas y niponas.
"Esta alianza viene a profundizar los lazos de amistad y cooperación entre Chile y Japón, en el ámbito de la conservación de la naturaleza y su riqueza biológica, toda vez que en una primera etapa se crean en Chile dos colecciones públicas de Sakuras, una de las cuales, con más de 45 cerezos, se encuentra ya en el Jardín Botánico fruto de un convenio entre la Corporación Nikkei y la Fundación Jardín Botánico Nacional, donde anualmente se celebra el Hanami, costumbre tradicional japonesa de disfrutar de la belleza de las flores", aseguró Jorge Burgos, Director de Jardín Nacional - Chile.
Los principales impactos del convenio están relacionados con la interrelación de profesionales chilenos y japoneses en al ámbito de la cooperación internacional, lo que permitirá mejorar la oferta científica y turística así como calidad de la experiencia de las más de 180 mil personas que visitan anualmente el Jardín Botánico en Viña del Mar.
"Se generará un nuevo producto de alto valor estético e interés vegetacional y además atractivo, que se sumará a lo ya existente en nuestro jardín, pero aumentado su aporte a nivel del turismo nacional e internacional", agregó Burgos.
Si bien aún no hay plazos concretos, pues tras la firma la parte chilena debe enviar un informe que contenga los detalles presupuestarios y logísticos del proyecto, se estima que para el año 2017 la colección ya esté disponible para los miles de visitantes que cada año ingresan al Jardín Botánico de Viña del Mar.
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