Diputado Aldo Cornejo valoró experiencia de Australia en la planificación urbana para prevenir desastres

El diputado Aldo Cornejo, representante del distrito 13 y ex alcalde de la ciudad de Valparaíso, comentó algunas de las medidas de planificación urbana que ha implementado Australia para prevenir emergencias, particularmente incendios forestales que afectan la ciudad. Los elementos en común entre la realidad chilena y la australiana en las consideraciones del parlamentario, a continuación.

Establecimiento de espacios abiertos para facilitar la evacuación

Tal como sucedió en Valparaíso con dos incendios forestales en 2014 y 2017 que afectaron a extensas zonas urbanas, Australia ha sido un país de grandes incendios. El 7 de febrero de 2009 el estado de Victoria tuvo el siniestro más impactante en su historia. Conocido popularmente como el "sábado negro", arrasó con 405 mil hectáreas, 1.800 casas y 189 personas fallecidas. Una vez terminada la emergencia, entre las políticas adoptadas por el gobierno australiano fue la conformación de una comisión especial cuya conclusión fue que los incendios forestales tendrían relación con el cambio climático y las condiciones favorables que se generan para la rápida propagación del fuego.

Tomando en consideración las dificultades para controlar este fenómeno, dicha Comisión reconoció que la preparación para los siniestros es de responsabilidad compartida entre los ciudadanos, bomberos, gobiernos locales y central. Para materializar lo anterior, el Departamento de Planificación tomó como primera decisión la construcción de espacios públicos más amplios como calles y parques, para una evacuación ágil. Con el establecimiento de rutas de emergencia para el desplazamiento de personas, se logra además un mejor ingreso de los cuerpos de rescate y combate del fuego.

Esta acción fue comentada por el diputado Aldo Cornejo a la luz de la realidad de Valparaíso, para quien es necesario que se tomen medidas similares en la ciudad que representa. “La primera afirmación que podría hacer es que a diferencia de ese caso en Australia, en planificación urbana y desarrollo de las ciudades chilenas es un tema absolutamente ausente de todos los gobiernos sin excepción. Ni siquiera preocupa al Ministerio de Vivienda y Urbanismo, más bien se dedica a construir viviendas y no tiene mucha inclinación por los temas urbanos, ni el desarrollo patrimonial. Un tercio de los municipios de Chile no tiene plano regulador, muchas veces no lo tienen porque su confección y tramitación cuesta mucho dinero y no tienen recursos para poder hacerlo, de modo que lo primero que diría es que en prevención hay una completa ausencia del Estado en materia de planificación y en la preocupación por las ciudades, su desarrollo, cómo se conforma, dónde se construye, qué se construye, etc.”, comentó.

Asimismo, la decisión del gobierno de Victoria de establecer amplios espacios en las calles para que funcionen en momentos de emergencia como cortafuegos, fue valorada por el parlamentario. “Esto es algo que puede ser muy útil, pero para el caso específico de Valparaíso es más difícil, ya que se trata de una ciudad que ha crecido al margen de cualquier norma urbana, al margen de cualquier planificación. De manera que, luego de los últimos dos incendios, buscar de qué manera se puede modificar el plano regulador y de alguna manera reestructurar la ciudad. No es fácil porque hay asentamientos urbanos que llevan muchos años, no es fácil cambiarlos y desalojar determinados sectores. Aunque sí se puede hacer un esfuerzo en la dirección de lo que hizo Australia, de ensanchar calles, mejorar la conectividad, particularmente en la parte alta de la ciudad, ver de qué manera se pueden recuperar mayores espacios públicos porque hoy en los cerros no hay por la densidad habitacional, mucha construcción en quebradas de muy poca accesibilidad. Es un gran desafío pero para el cual, los municipios que son responsables de aquello, requieren de un apoyo técnico y financiero de parte del gobierno central”, añadió.

Limitación en el establecimiento de estaciones de servicio cerca de bosques

Otra de las medidas adoptadas en Melbourne fue la limitación de estaciones de servicio y cualquier otro tipo de industria que maneje materiales altamente combustibles. Mediante criterios de planificación urbana, aquellas actividades productivas que manipulan elementos inflamables no podrían emplazarse cerca de bosques ni de las zonas consideradas de alto riesgo. “Este tipo de precauciones de la ubicación de las bombas de bencina, incluso la ubicación estratégica de los cuarteles de bombero o de la policía es algo importante, pero para el caso de Valparaíso no obedece a ninguna planificación urbana. En Valparaíso hay ejemplos a la vista, en la parte alta de Placeres hay una instalación policial que está en una quebrada que es completamente insegura y de difícil acceso para responder ante una emergencia policial, lo mismo pasa con los cuarteles de bomberos. No cabe ninguna duda que en eso no hay planificación y hay mucho que aprender de experiencias como esta”, señaló.

Sobre este punto, el diputado agregó que este tipo de medidas deberían estar incorporadas en los planos reguladores de las ciudades con el fin de prevenir emergencias, incluso conflictos sociales. “Estamos frente a una absoluta falta de planificación urbana. Hay muchas ciudades con problemas, por ejemplo Limache, que está en pie de guerra porque se instala una termoeléctrica. La pregunta va más allá de los temas ambientales ¿por qué se instaló ahí? ¿Por qué el plano regulador de Limache permite instalar una termoeléctrica? La respuesta es sí. ¿La termoeléctrica va a pagar el permiso de construcción? la respuesta es sí. Entonces, después de la autorización vienen los reclamos, en circunstancias que tendríamos que partir porque las ciudades tengan planos reguladores y planificaciones urbanas donde se permita o no se permita la instalación de estos proyectos. Los responsables de establecer un plano regulador son los alcaldes y concejales, por lo que resulta contradictorio ver que quienes llevan la batuta en este tipo de temas sean precisamente algunos alcaldes que no han modificado sus planos reguladores y que no planifican sus ciudades. Los resultados están a la vista”, opinó.

Limitación en la altura de los edificios

En proximidad a las áreas forestales, el gobierno de Victoria estableció que todos los edificios deben construirse proporcionalmente según los estándares de control de riesgo de incendios, es decir, con dimensiones y materiales adecuados. Eso significa que la cantidad de personas en dichas edificaciones debe ser reducida en relación a la cercanía con las zonas de peligro y los materiales utilizados en su construcción deben tener la capacidad de soportar altas temperaturas. “Comparto absolutamente esa medida de la limitación en la altura, no solo en las ciudades como Valparaíso sino en general. La experiencia desde el punto de vista del manejo de emergencias y del desarrollo no se aconseja tener torres de 20 pisos, eso atenta contra la posibilidad de tener una buena calidad de vida. En Valparaíso esto se justifica plenamente ya que hay un derecho que no está consagrado en la Constitución que es el derecho a la vista y la construcción en altura rompe la armonía del anfiteatro, de manera tal que se regule la altura me parece extraordinario”, puntualizó.