El plan de subvención aérea para mejorar la conectividad de comunidades remotas en Australia

El Plan de Subvención de Servicios Aéreos Remotos (RASS) permite que empresas operadoras aéreas ofrezcan sus servicios a precios más bajos y, con esta modalidad, mejorar el acceso a servicios de salud, educación, trabajo, empleo, comercio, turismo y otras actividades comerciales. Más detalles de esta política, en la siguiente nota.

Medidas especiales para mejorar el acceso a lugares remotos

Australia es el sexto país más grande del mundo, con una superficie que supera los 7,6 millones de kilómetros cuadrados. Estas grandes dimensiones no sólo hacen que tenga una gran diversidad geográfica y climática, sino también una gran cantidad de desafíos en la conectividad de sus territorios.

Un ejemplo de esto es Kimberley, ubicada en Australia Occidental, un territorio tropical en el norte del país y uno de los más lejanos de Sydney y Melbourne. Con una población de 34 mil habitantes, se compone de un 40 por ciento de personas descendientes de los primeros pueblos australianos, lo que hace que sea además una región geográfica, cultural y lingüísticamente diversa.

Aunque se trata de una economía rica en minerales, perlas, petróleo y también turismo, por su ubicación geográfica y su composición demográfica, forma parte de los territorios beneficiados por el Plan de Subvención de Servicios Aéreos Remotos (RASS por sus siglas en inglés) que tal como su nombre lo dice, subvenciona el servicio regular semanal de transporte con el fin de mejorar la conectividad con las áreas más aisladas.

Esta subvención forma parte del Programa de Acceso a la Aviación Regional (RAAP por sus siglas en inglés) y no sólo beneficia a pasajeros, sino también mercancías. Dentro de estas, se incorporan: medicamentos, materiales educativos, alimentos frescos y otros suministros que sean requeridos con urgencia.

Pero para acceder a este beneficio, los pueblos o regiones no solamente necesitan estar asentadas en un área geográficamente remota, sino que deben realizar una postulación para constituirse como una comunidad RASS. Por lo general, han sido granjas estacionales de ganadería y comunidades indígenas. En ambos casos, la población puede variar entre seis y 200 personas, incluso cambiar durante las estaciones del año.

Requisitos para conformarse como una comunidad RASS

Para calificar como receptor de los beneficios aéreos del Plan de Subvención de Servicios Aéreos Remotos, es necesario cumplir con ciertos criterios. El principal es la demostración de necesidad de un servicio aéreo semanal. El segundo, es que la ubicación sea lo suficientemente remota en términos de superficie, pero también en cuanto al tiempo de transporte.

Este requisito basado en la lejanía no es un criterio subjetivo, sino una categoría de clasificación geográfica estándar, utilizada por la Oficina de Estadística de Australia. Pero esto no se queda solamente ahí, también se incorporan otras características que contribuirían en esa clasificación, como que el asentamiento esté a más de dos horas de ida de algún centro que proporcione bienes y servicios esenciales. Incluso, estar a más de una hora de otro lugar que reciba servicios de transporte aéreo semanal.

Además de todo esto, es necesaria la disposición de infraestructura adecuada para recibir el servicio aéreo semanal, esto es, la mantención de un aeródromo que cumpla con los estándares de seguridad establecidos en la regulación de aviación civil, especialmente en cuanto al transporte de pasajeros. Lo mismo sucede en las condiciones para el funcionamiento de una torre de control que permita notificar cambios y novedades a los pilotos.

Con estos y otros requisitos establecidos por el Departamento de Infraestructura, Transporte y Desarrollo Regional, las comunidades remotas pueden acceder al beneficio para una mejor conectividad.

Proyecto para fijar una cuota de asientos para habitantes de zonas extremas

Con una orientación similar a la del caso Australiano, de incluir y conectar de mejor manera a los habitantes de zonas remotas con los grandes centros urbanos, un proyecto para modificar el Código Aeronáutico fue presentado en la Cámara de Diputadas y Diputados, con el propósito crear una plataforma de transferencia de pasajes y equipaje, pero además para establecer el derecho de embarque prioritario por motivos de urgencia y una cuota de asientos para habitantes de zonas extremas.

Su autora, la diputada Javiera Morales comentó la forma cómo nació este proyecto. “Surge a raíz de que los magallánicos y las magallánicas estamos viendo un aumento de los pasajes aéreos a valores nunca antes vistos, en trayectos desde y hacia la región. Algunos pasajes han superado el millón de pesos y, en tramos entre Concepción y Punta Arenas, alcanzaron los 500 mil pesos. Como equipo junto a ocho consejeros regionales recogimos las inquietudes y presentamos una denuncia ante la Fiscalía Nacional Económica en contra de la aerolínea Latam, para solicitar que investigue si existe un eventual delito de abuso de posición dominante por parte de la empresa”, señaló.

En la misma línea, comentó las acciones y las razones por las cuales propone una diferenciación de pasajes. “Si bien Fiscalía admitió la solicitud de indagatoria, entendemos que estas investigaciones toman tiempo y por lo tanto, hemos optado por otros caminos como enviar oficios al Sernac y a la Junta de Aeronáutica Civil respecto si se han respetado los valores operacionales de los vuelos aéreos por parte de la empresa. En paralelo, decidimos presentar el proyecto que llamamos “Ley de Pasajes Preferentes”, que consta de tres ejes relativos al tema. El primero es establecer que las aerolíneas destinen una cantidad de cupos para las y los residentes de Zonas Extremas del país a un precio accesible. Segundo, priorizar a las y los pasajeros que presenten una emergencia médica certificada. Y tercero, crear la Plataforma de Transferencia de Pasajes Aéreos y Equipaje para quienes necesiten vender su pasaje o equipaje cuando no lo puedan usar”, explicó.

En relación a la manera como con el establecimiento de una cuota de pasajes a un precio fijo se ayuda a personas con necesidades de salud, explicó que esta iniciativa surgió gracias a un caso. “Incluimos las emergencias médicas dentro de la iniciativa debido a que en Magallanes un padre de familia, Gino Torres, estuvo cuatro años esperando un donante para que le realizaran un trasplante de riñón. Cuando ese día llegó, lo llamaron para que se trasladara a Santiago durante esa misma jornada, debido a lo acotado que son los tiempos que tienen en este tipo de procedimiento. Entonces, la familia tuvo que peregrinar de aerolínea en aerolínea buscando un pasaje de último minuto, cuando todos se encontraban vendidos. Vivieron una angustia en un momento que debería haber sido una alegría para ellos. Por casos como éste, que se encuentran debidamente certificados por parte de un médico, proponemos que las aerolíneas deben priorizarlos y embarcarlos en el vuelo más próximo al destino requerido junto a su acompañante, si es que es necesario, y así evitar generar una preocupación adicional a las personas y sus familias”, sostuvo.

Sobre la posibilidad de que en el futuro, a las razones de extrema urgencia se le puedan sumar motivos de no urgencia, como por ejemplo, traslado de estudiantes universitarios, o de productos médicos. “Las razones de urgencia médica quedan acotadas a aquellas que tienen debida certificación. Respecto a razones no urgentes, estamos enfocados en el transporte de pasajeros y pasajeras. Es por ello que planteamos que exista una cantidad de pasajes a un precio preferente a aquellos que acrediten residencia en zonas extremas, tal como sucede con Rapa Nui. La iniciativa deja abierta la posibilidad de que las aerolíneas puedan tener convenios con gobiernos regionales o municipalidades”, sentenció.

Por equipo Asia Pacífico: asiapacifico@bcn.cl