Académicos analizaron cambios y tendencias en la relación de América Latina y China

La llamada diplomacia académica hizo gala durante el segundo seminario internacional China y América Latina: Enfoques Multidisciplinarios realizado el 8 de noviembre de 2017, pues convocó a una gran variedad de expertos provenientes de distintos países y donde el foco estuvo centrado en la relación sino-latinoamericana. Aprovechamos esta convocatoria para conversar con dos especialistas el futuro de América Latina y China, quienes nos entregaron sus definiciones. Más detalles a continuación.

Cambios que implican desafíos y oportunidades

La globalización implica transformaciones estructurales que se nos presentan como un gran desafío para los gobiernos como para los propios ciudadanos. Es por esto que Anna Protsenko, investigadora en estudios latinoamericanos en la Academia de Ciencias de Rusia en Moscú, señala que los países de la región no podemos quedarnos encerrados en nuestras propias fronteras cuando se evidencian oportunidades tan amplias, principalmente por la emergencia de China y su creciente influencia en nuestro continente.

En ese sentido, la académica afirma que estamos viviendo la transición a un sistema internacional del cual aún no tenemos consenso. ”Todavía estamos viviendo el tránsito más grande entre sistemas internacionales, sabemos que después de la caída de la URSS comenzamos un nuevo paradigma, pero luego no hemos sabido -de acuerdo al mismo mundo académico- qué es lo que pasa luego, dónde ubicar a China como potencia y si pasamos a una nueva etapa o no. Tampoco dónde transcurren los principales cambios. Quizás el proteccionismo contemporáneo es solo una respuesta inmediata y táctica a la crisis financiera de 2008 o es un signo más grande que en una nueva etapa tiene características muy propias que aún nos falta analizar”, analizó.

Por su parte, Rubén González Vicente, investigador en Relaciones Internacionales de la Universidad de Leiden coincide en que estamos inmersos en un sistema distinto donde son otros los actores que lideran los procesos políticos, económicos y culturales. En este escenario, los países latinoamericanos entrarían en una relación más dinámica con el gigante asiático. “Estamos entrando en una nueva etapa entre América Latina y China, en un contexto complejo marcado por la disminución de los precios de los recursos naturales -que para muchos países de la región es su ventaja comparativa en el contexto de globalización- y por el proceso de ralentización de la economía china”, explicó.

Tales cambios supondrían una gran cantidad de oportunidades a futuro. “Las inversiones chinas van a venir con sus retos, por ejemplo en el impulso de la internacionalización de empresas de infraestructura, que pueden ser importantes para la región, pero significan desafíos desde la perspectiva medioambiental. En principio lo que están argumentando muchos expertos es que América Latina tiene que intentar ir más allá de la exportación de recursos naturales sin valor agregado y abrir nuevas oportunidades con la deslocalización posible de empresas, con actividades industriales con alto contenido energético como las siderúrgicas para llevarlas a lugares donde están los recursos naturales”, agregó.

Más de las opiniones de Anna Protsenko y Rubén González-Vicente, en el siguiente video.