El fomento de la economía maorí en Nueva Zelandia

La ausencia de una legislación adecuada, investigación limitada, sistemas de gobernanza ineficientes, entre otros, limitaban el aporte de la economía maorí al PIB de Nueva Zelandia, lo que llevó al gobierno a tomar medidas correctivas.

Entre ellas, está la incorporación de la visión Mātauranga, en 2010 por parte del Ministerio de Ciencia e Innovación, en todas las áreas prioritarias de inversión el país.

La visión Mātauranga se puede definir como "el conocimiento o la comprensión de todo lo visible e invisible que existe en el universo", y se usa a menudo como sinónimo de sabiduría”. Incorpora elementos epistemológicos propios de la cultura maorí, que tienen que ver, principalmente, con la consideración del entorno (naturaleza) en el proceso de construcción del conocimiento. Por tanto, esta visión está dotada de aspectos que le dan un enfoque sostenible con el medio ambiente.

La incorporación de esa visión en las inversiones en ciencia e innovación, les ha brindado a los maoríes capacidad de investigación, innovación e inversión. Así también ha fomentado las conexiones entre ellos, el gobierno y la industria para así apoyar estrategias de investigación y desarrollo dirigidas por las comunidades. Todo esto en miras de la asociación con socios comerciales regionales, para explotar el potencial exportador de las pymes maoríes.

Asimismo esta medida dió pie a que en 2011, el Ministerio de Negocios, Innovación y Empleos (MNIE) y el Ministerio de Desarrollo Maorí (MDM) crearan el Grupo de Desarrollo Económico Maorí Independiente, cuyo fin era elaborar un plan de acción económico, que fue presentado en 2012 y fue diseñado para aprovechar la experiencia de estrategias e iniciativas anteriores de la misma índole, reconociendo que el pueblo maorí es fundamental para el desarrollo de Nueva Zelandia.

El plan de acción 2012 – 2017 buscó, a corto plazo, proponer medidas que incentivaran el desarrollo económico de los maoríes, en conjunto a un plan a largo plazo llamado “Estrategia económica maorí al 2040”.

Este último incluía 26 puntos de acción en áreas como la educación y la capacitación en el trabajo, gobernanza de los activos maoríes, acceso al capital y productividad de la tierra, incluido temas relacionados a la alfabetización digital, desarrollo de las TIC’s, innovación y desarrollo, apoyo a organizaciones que realizan investigaciones relacionadas a Mātauranga .

Políticas para el desarrollo económico maorí

A partir de los planes establecidos en 2012, el MNIE y el MDM mediante el Grupo de Desarrollo Económico Maorí Independiente, desarrollaron un conjunto de medidas, de apoyo comercial para negocios maoríes de cualquier tipo. Se ha invertido en fortalecer los emprendimientos maoríes mediante una estructura de oficinas descentralizadas en las regiones de Nueva Zelandia, las que prestan apoyo y orientación a los emprendimientos maoríes. Ello considerando la importancia del desarrollo económico maorí y los efectos positivos que este produce a la economía neozelandesa.

En el plan de acción 2017 - 2020 son tres las prioridades que marcan la agenda:

1. Mejorar la capacidad empresarial básica entre los maoríes 2. Mejorar la conectividad de las empresas 3. Aumentar el número de empresas maoríes sostenibles y en crecimiento.

Por su parte, el Fondo de Innovación Maorí invierte en iniciativas que desarrollen capacidades y contribuyan al logro de objetivos del plan de acción y la agenda de crecimiento empresarial para colectivos maoríes, a través de asesoría empresarial profesional y tutorías para identificar oportunidades de mercado y hacer crecer los negocios existentes. Así también, mediante capacitaciones en torno a gobernabilidad y desarrollo de la gestión, instruyendo a los colectivos en planificación estratégica y otras habilidades comerciales.

Empresas Maoríes y la Sostenibilidad Ambiental

La economía maorí incluye una gama de organizaciones, las que se han establecido como parte de un proceso con el gobierno neozelandés, para rectificar las infracciones del Tratado de Waitangi de 1840.

Muchos de los activos que se desarrollan en la economía maorí son de propiedad colectiva, porque están en tierra donde habitan organizaciones tribales. Estas organizaciones tienen grandes cantidades de activos en servicios forestales, culturales y recreativos. Por otro lado, los fideicomisos regulados por la Ley de Tierras Maoríes de 1993 están involucrados en la agricultura y silvicultura.

En los últimos años las organizaciones maoríes han participado en la producción de energía renovable. Desde el cultivo de hierbas para la producción de biocombustibles, coadministración de parques eólicos con empresas estatales dedicadas a energía y empresas de producción de ERNC.

También, destaca la participación de empresas maoríes en otras áreas de producción:

Algunas de las empresas maoríes están formadas para proporcionar una vía para la expresión cultural y/o fomentar el orgullo y mantener la cultura, el idioma y las artes.

En este sentido, el enfoque adoptado por Nueva Zelandia, busca apoyar a la industria maorí mediante la promoción de un entorno competitivo y justo para las empresas, que elimine la competencia abierta con productos y servicios de países con bajos índices de derechos humanos, de trabajadores y con prácticas ambientales deficientes.

El conjunto de herramientas empleadas en las políticas, busca posicionar la producción maorí a nivel internacional, para ampliar el alcance de estas empresas, y como consecuencia, que crezcan y sean sostenibles en el tiempo, generando importantes aportes a la economía neozelandesa.