- Alto contraste
Asia Pacífico | Observatorio Parlamentario
Iniciativa de Australia para el Pacífico
22 septiembre 2008
Es un hecho que Asia está emprendiendo iniciativas potentes de integración, tales como la Cooperación para Shanghai, Japón con la doctrina Fukuda del océano Pacífico como mar interior; Rusia acercándose a China y a la India con proyectos de seguridad y la iniciativa de Australia, basada en el éxito de la integración de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN+3 y otros).
Es un hecho que Asia está emprendiendo iniciativas potentes de integración, tales como la Cooperación para Shanghai, Japón con la doctrina Fukuda del océano Pacífico como mar interior; Rusia acercándose a China y a la India con proyectos de seguridad y la iniciativa de Australia, basada en el éxito de la integración de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN+3 y otros).
Ahora que Chile firmó un TLC con Australia, interesa reflexionar respecto de la conexión con la iniciativa de Australia al Asia.
Australia reconoce en un reciente documento oficial de agosto de este año, que Asia Pacífico será el centro geo-estratégico y geo-económico de mayor gravitación en los cambios del presente siglo con lo cual, ellos sienten una gran responsabilidad, por la cantidad de asiáticos estudiando y viviendo allí. Existe en la actualidad una conexión impresionante entre ambos continentes, tanto geográfica como de infraestructura e intercambios económicos y humanos.
Australia reconoce que estamos entrando en el “Siglo del Pacífico”, ya que se estima que para el 2020, Asia será responsable del 45% del PIB mundial, de un tercio del comercio internacional y casi un cuarto de los gastos militares, con un crecimiento más rápido de la población, procesos de urbanización, lo que incrementará las presiones sobre los recursos naturales y en particular, sobre la energía. Más de la mitad del consumo global de energía vendrá desde Asia al 2020. Australia, al igual que otros países del Asia, está temeroso del enorme poder que están adquiriendo China e India a futuro y preocupada cómo China se insertará en el mundo global en términos de sistemas financieros, de información y probablemente políticos. Algo que no sabemos, dada las peculiaridades políticas, culturales y ancestrales de China, fuertemente confuciana. Incluso la evolución del concepto de seguridad nacional le preocupa a Australia, en términos amplios de seguridad alimenticia, del agua (que se prevé será un bien escaso) y las enfermedades derivadas de las pandemias. Estos nuevos conceptos de seguridad traerán en su visión, consecuencias estratégicas y mayores competencias y rivalidades. Por ello, para fortalecer dicha seguridad en un sentido amplio, propone, en conjunto con EEUU y Singapur, iniciativas en el largo plazo en una acción que sea no solamente regional sino también global. ¿Por qué con Singapur? Porque tiene influencia en Asean, que reconoce ha crecido y madurado, dejando atrás los esquemas políticos de la guerra fría e integrándose de manera real y pragmática.
APEC necesita evolucionar más como un área de libre comercio de las 21 economías que la componen, idea que Chile y EEUU han impulsado para convencer a los asiáticos para ir a un TLC regional, algo que por supuesto, en el esquema que ellos están, parece lejano.
Lo que Australia desea es desarrollar un concepto de la Comunidad del Pacífico estable, abierta y próspera que abra canales entre los distintos países en donde Australia juegue un rol importante en abrir instancias de diálogo entre EEUU, China, Japón, Corea, Asean y otros. Esto es, ser un interlocutor y conductor de los desafíos que vienen por delante, tales como el cambio climático, la liberalización económica, la cooperación en seguridad y en el manejo de los desastres.
Llama la atención que en este esquema no aparece la Cuenca del Pacífico de América del Sur, ya que Australia menciona la necesidad de tener conversaciones para ampliar la iniciativa al Asia. Este es un proyecto de largo plazo (al 2020). Cuando Australia se opuso a nuestro ingreso al APEC, la situación era diferente, dado que no éramos socios comerciales. Ahora cabe preguntarnos qué papel ocuparíamos en esta iniciativa y si Australia desea ser un interlocutor de Chile en Asia.
Al margen de lo anterior, pienso que Chile deberá tomar iniciativas en la Cuenca Americana del Pacífico y liderar procesos sub regionales en esta área, por supuesto sin dejar de lado nuestra apertura de años al Asia Pacífico. Siento que habiendo sido nosotros pioneros en la apertura económica primero unilateral, luego bilateral y regional en la política al Pacífico, nos hemos quedado atrás, quizás aún buscando esfuerzos de corto plazo, con visiones estrechas que no reconocen como Australia la gravitación de la Comunidad del Pacífico en este siglo. Chile debe pensar qué posiciones adoptará frente a la doctrina Fukuda, a la iniciativa de Australia y a impulsar una mayor apertura de APEC, antes que se produzca un quiebre de esta importante Comunidad. El Pacífico sudamericano y algunos países de América Central podrían entrar como parte del esquema, sin abandonar los otros. Tarea para empresarios, académicos y por supuesto, para el gobierno.
Ahora que Chile firmó un TLC con Australia, interesa reflexionar respecto de la conexión con la iniciativa de Australia al Asia.
Australia reconoce en un reciente documento oficial de agosto de este año, que Asia Pacífico será el centro geo-estratégico y geo-económico de mayor gravitación en los cambios del presente siglo con lo cual, ellos sienten una gran responsabilidad, por la cantidad de asiáticos estudiando y viviendo allí. Existe en la actualidad una conexión impresionante entre ambos continentes, tanto geográfica como de infraestructura e intercambios económicos y humanos.
Australia reconoce que estamos entrando en el “Siglo del Pacífico”, ya que se estima que para el 2020, Asia será responsable del 45% del PIB mundial, de un tercio del comercio internacional y casi un cuarto de los gastos militares, con un crecimiento más rápido de la población, procesos de urbanización, lo que incrementará las presiones sobre los recursos naturales y en particular, sobre la energía. Más de la mitad del consumo global de energía vendrá desde Asia al 2020. Australia, al igual que otros países del Asia, está temeroso del enorme poder que están adquiriendo China e India a futuro y preocupada cómo China se insertará en el mundo global en términos de sistemas financieros, de información y probablemente políticos. Algo que no sabemos, dada las peculiaridades políticas, culturales y ancestrales de China, fuertemente confuciana. Incluso la evolución del concepto de seguridad nacional le preocupa a Australia, en términos amplios de seguridad alimenticia, del agua (que se prevé será un bien escaso) y las enfermedades derivadas de las pandemias. Estos nuevos conceptos de seguridad traerán en su visión, consecuencias estratégicas y mayores competencias y rivalidades. Por ello, para fortalecer dicha seguridad en un sentido amplio, propone, en conjunto con EEUU y Singapur, iniciativas en el largo plazo en una acción que sea no solamente regional sino también global. ¿Por qué con Singapur? Porque tiene influencia en Asean, que reconoce ha crecido y madurado, dejando atrás los esquemas políticos de la guerra fría e integrándose de manera real y pragmática.
APEC necesita evolucionar más como un área de libre comercio de las 21 economías que la componen, idea que Chile y EEUU han impulsado para convencer a los asiáticos para ir a un TLC regional, algo que por supuesto, en el esquema que ellos están, parece lejano.
Lo que Australia desea es desarrollar un concepto de la Comunidad del Pacífico estable, abierta y próspera que abra canales entre los distintos países en donde Australia juegue un rol importante en abrir instancias de diálogo entre EEUU, China, Japón, Corea, Asean y otros. Esto es, ser un interlocutor y conductor de los desafíos que vienen por delante, tales como el cambio climático, la liberalización económica, la cooperación en seguridad y en el manejo de los desastres.
Llama la atención que en este esquema no aparece la Cuenca del Pacífico de América del Sur, ya que Australia menciona la necesidad de tener conversaciones para ampliar la iniciativa al Asia. Este es un proyecto de largo plazo (al 2020). Cuando Australia se opuso a nuestro ingreso al APEC, la situación era diferente, dado que no éramos socios comerciales. Ahora cabe preguntarnos qué papel ocuparíamos en esta iniciativa y si Australia desea ser un interlocutor de Chile en Asia.
Al margen de lo anterior, pienso que Chile deberá tomar iniciativas en la Cuenca Americana del Pacífico y liderar procesos sub regionales en esta área, por supuesto sin dejar de lado nuestra apertura de años al Asia Pacífico. Siento que habiendo sido nosotros pioneros en la apertura económica primero unilateral, luego bilateral y regional en la política al Pacífico, nos hemos quedado atrás, quizás aún buscando esfuerzos de corto plazo, con visiones estrechas que no reconocen como Australia la gravitación de la Comunidad del Pacífico en este siglo. Chile debe pensar qué posiciones adoptará frente a la doctrina Fukuda, a la iniciativa de Australia y a impulsar una mayor apertura de APEC, antes que se produzca un quiebre de esta importante Comunidad. El Pacífico sudamericano y algunos países de América Central podrían entrar como parte del esquema, sin abandonar los otros. Tarea para empresarios, académicos y por supuesto, para el gobierno.
