Entrevista: Juan Bustos y su admiración por China

En agosto de 2007, tras su visita al gigante asiático para participar en la II Reunión Formal del Comité de Diálogo Político entre la Asamblea Popular Nacional de la República Popular China y el Congreso Nacional de Chile, el fallecido Presidente de la Cámara de Diputados, Juan Bustos, conversó con el Portal Chile Asia Pacífico y nos entregó sus impresiones del país asiático y los principales puntos de interés con Chile, en un diálogo que recordaremos a continuación.

Diputado, ¿Cómo describiría las relaciones parlamentarias entre Chile y China?

Excelentes. Los chinos siempre nos han atendido con mucha amabilidad y el trato parlamentario es muy cariñoso, muy afable, en general de mucho respeto y admiración. Ellos tienen además una gran confianza en el pueblo chileno y quieren tener una relación más estrecha con nosotros. Chile fue el primer país latinoamericano que estableció relaciones diplomáticas con ellos, y siempre nos lo recuerdan. Eso hace que sientan una cercanía aún mayor con nuestro país.

¿Qué temas se trataron durante su último viaje?

Mi visita estuvo en el marca de una gira parlamentaria para tratar aspectos de tipo político económico. Tuvimos una reunión con el Presidente de la Cámara China y tratamos diversos temas, en lo que fue una muestra de interés mutuo muy importante. Tuvimos además varias reuniones con diversos representantes chinos y posteriormente bajamos a Guangzhou para encontrarnos con el Gobernador de la provincia, con el que tocamos diversos asuntos, especialmente económicos, de intercambio comercial con Chile.

Según su experiencia, ¿Qué le interesa de nuestro país a China?

Primero, hay que decir que los chinos nos tienen una gran estimación, son muy abiertos con nosotros y siempre están interesados en que tengamos buenas relaciones. En segundo término, a los chinos les interesa mucho el intercambio entre sus provincias y nuestras regiones, que lleguen a un contacto, lo que tiene gran importancia para nosotros desde el punto de vista cultural y económico. Convengamos también que la relación económica con China es muy importante para ambos, sobre todo pensando que Chile es un país que tiene sus puertas abiertas y tratados con Estados Unidos y Europa, contando además con una posición privilegiada en el Pacífico, lo que constituye una gran ventaja con respecto a nuestros vecinos sudamericanos,como Argentina, Brasil, Bolivia, Paraguay, Venezuela, etcétera. Tenemos una ubicación muy afortunada, que fomenta aún más las relaciones con China.

¿Qué le llamó la atención de China, desde el punto de vista cultural?

Mi primer viaje fue hace algunos años con una delegación del Partido Socialista, y la reciente fue la segunda. Y desde la primera oportunidad me llamó mucho la atención que ellos logran mantener hasta hoy un equilibrio entre la tecnología y su cultura milenaria. Toda su historia y su tradición la mantienen y eso se puede ver en todo. En las ciudades, por ejemplo, como Beijing y Shanghai, se puede apreciar como la modernidad va de la mano de esta historia, que ellos valoran enormemente.

¿En qué se beneficia el ciudadano común con estas visitas?

Estas visitas son de suma importancia para ir afiatando los lazos, lo que es importante para todos los chilenos. Por ejemplo, para los comerciantes de Valparaíso, cuyos productos están entrando fuertemente en el comercio chino. Los convenios permiten que se pueda vender mucho a China, para lo que debemos aumentar nuestra productividad, exigiendo por ello el crear más empleo para responder a la demanda, logrando también que podamos obtener productos chinos a bajo precio. Todo esto beneficia directamente al ciudadano común, y no nos olvidemos que China es una potencia mundial, que nos puede aportar mucho de su experiencia política y riqueza cultural.

¿Usted le recomendaría a un chileno que viaje a China?

Sí, por supuesto. En la medida que se pueda ir, porque no es barato el viaje, yo le diría que lo visite, porque es un país impresionante y que nos puede enseñar mucho. Yo tengo muchos recuerdos de mis visitas a China, que guardo con cariño. En mi último viaje me traje algunos muy característicos: unos pandas de peluche, que a mis nietos les gustaron mucho.