La planificación familiar continúa en China

Un solo hijo por pareja y el que tenga dos, multa. Así ha sido la política de estado chino aplicada desde la década de los 70’ que busca frenar el alto crecimiento poblacional del gigante asiático. Las consecuencias están a la vista, 300 millones de personas menos que lo esperado hace dos décadas.

Chile tiene tasas de natalidad cada vez más parecidas a la de países desarrollados, nacen menos niños y hay cada vez más adultos, sin embargo es una tendencia no impuesta. En la nación más populosa del mundo vemos una norma planificada de manera prolija y establecida por ley desde el año 2001.

En 1949, cuando fue fundada la República Popular, eran sólo 541 millones, tras 58 años de gobierno comunista alcanzan los 1319 millones. Beneficios como una pensión social para quienes sigan esta disposición y penalizaciones de hasta 13 mil dólares para lo que no acaten el reglamento son los dos escenarios de la normativa.

Elevar la calidad poblacional y mejorar la estructura poblacional son las ideas fuerza que hacen que el Estado mantenga ininterrumpida la polémica medida. Esto ha llevado que la tasa de natalidad haya bajado, en los últimos cinco años de 14,03 a 5,87 por millar de individuos al 2007.

Pero toda norma tiene excepciones, ejemplo de ello es que existen zonas (como las rurales) donde en casos especiales se puede tener dos y hasta tres hijos. Además las minorías étnicas que también gozan de esta posibilidad.

Si todo sale como está planificado el 2050 China alcanzará los 1600 millones de habitantes quedando por debajo de su vecina India que hoy tiene el segundo lugar en número de habitantes.