Las medidas de Corea del Sur para apoyar a las Pyme en tiempos de coronavirus

Los efectos de la pandemia en la economía mundial se reflejan principalmente en las dificultades por las que atraviesan las pequeñas y medianas empresas (Pyme). Esto ha llevado a que Corea del Sur tome una serie de medidas que apuntan a quitarle presión a los actores más vulnerables de la economía y a futuro potenciar el sector exportador. Más detalles de estas medidas, en la siguiente nota.

Fondos de emergencia y facilitación de créditos

Apenas comenzó a incrementarse la cantidad de contagiados por coronavirus a mediados de marzo, el gobierno surcoreano anunció que las pequeñas y medianas empresas recibirán un fondo de emergencia con el fin de brindarles un estímulo en momentos de dificultad. El paquete de financiamiento, consistente en 39 mil millones de dólares, fue uno de los primeros pasos para frenar la presión de las medidas de la pandemia sobre la economía, además de recortes de tasas de interés y presupuestos adicionales.

Adicionalmente, el gobierno ha emitido garantías de préstamos para que las empresas de menor tamaño puedan acceder a créditos de una manera más fácil, además de mejores condiciones, señala una nota de Reuters. A esto se suma que bancos comerciales y cajas de ahorro han accedido para que los préstamos se reinviertan en las Pyme.

Un artículo de Lee Ho-Jeong en el Korean Joongang Daily, señala la forma cómo estas medidas fueron adoptadas inicialmente, teniendo como eje central a las pequeñas empresas, no solo a las que generan ingresos bajo el umbral de los 100 millones de wones, sino también a aquellas que tienen puntajes bajos para obtener financiamiento. Para ello, el presidente Moon pidió que las instituciones financieras simplifiquen la aprobación de préstamos. “Lo más importante es la velocidad”, señaló.

Sin embargo, las medidas económicas han ido más allá y las autoridades a comienzos de junio anunciaron un paquete de medidas orientadas a resguardar la economía de lo que llaman “el shock de la pandemia”, que no solo tendrá implicancias locales, sino que se advierte como una gran recesión que vivirá la comunidad internacional.

Frente a este escenario, el ministro de Economía y Finanzas, Hong Nam-ki, presentó el paquete titulado “salvaguardar la resiliencia económica”, que contiene medidas fiscales a implementar durante la pandemia, pero también políticas preliminares para prepararse una vez que la crisis del Covid-19 se haya resuelto. Para Choi Jae-hee del Korean Herald señala en una publicación que estas medidas post pandemia representan un hito económico, razón por la cual recibe el nombre de “la versión coreana del New Deal”, pues además de los programas de ayuda a las familias, establece préstamos de emergencia a las empresas de menor tamaño.

Pero también la connotación de New Deal se explica por el plan de estímulos para las exportaciones, que además de incentivos y beneficios fiscales, se llevarán a cabo programas de apoyo dirigidos por el gobierno. Es decir, será el gobierno quien guiará la preparación de la economía local frente a los cambios estructurales, por ejemplo en cuanto a la transformación digital o la gestión ecológica de las empresas.

La OCDE y su preocupación por las medidas de apoyo a las Pyme

La preocupación por las pequeñas y medianas empresas, y su desempeño durante y luego de la crisis epidemiológica, ha sido una constante en los gobiernos de todo el mundo, principalmente en aquellas economías abiertas centradas en el intercambio comercial. Pero también ha sido una preocupación de la OCDE, que en consideración de los efectos de la pandemia, publicó un reporte de políticas donde entrega una serie de recomendaciones a sus miembros.

Una de las principales es que los bancos centrales y los bancos comerciales realicen las acciones necesarias como eliminar requisitos de reserva o adoptar políticas monetarias o comprar paquetes de préstamos, con el fin de apoyar a las empresas de menor tamaño. Más aún, se recomienda que se amplíen los criterios de reconocimiento para ser considerado como Pyme, pues de esta manera se extenderían los beneficiarios de estas medidas, a modo de respaldar a una mayor cantidad de personas.

Aunque el organismo destaca el caso de Corea del Sur por cuanto el fondo de emergencia ha sido de apoyo directo a las Pyme y ha permitido que las empresas puedan mantener a sus empleados, hace un llamado para que también se tomen acciones que contribuyan a ayudar a empresas que se encuentren en dificultades.

Proyecto para optimizar la entrega de créditos a las Pyme en nuestro país

Un proyecto para modificar la ley 20.575 con el fin de que se permita que durante estados de excepción constitucional, más empresas de menor tamaño obtengan créditos bancarios, independientemente de su situación en Dicom. Una de sus autoras, la diputada Carolina Marzán, comentó que es necesario que en medio de la pandemia, se asegure el acceso de las Pyme y microempresas a los beneficios que entrega el gobierno.

En su opinión, las medidas anunciadas por el gobierno tienen que llegar a las micro, pequeñas y medianas empresas que se han visto afectadas por los cierres, producto de la pandemia. “El gobierno anunció un plan marco que permitiría garantizar nuevos créditos para las mipymes y complementa la capitalización del Fondo de Garantías de Créditos FOGAPE que fue aprobado. Según lo que indicaba el proyecto estas medidas buscan entregar acceso a líneas de crédito de capital de trabajo para el 99% de las empresas chilenas, para que de esta manera puedan sortear los efectos económicos que está produciendo la propagación del coronavirus. Sin embargo, es un hecho de pública notoriedad que los créditos bancarios no son concedidos a personas, naturales o jurídicas, que estén en el registro actualizado que contiene información financiera y comercial de personas naturales y empresas, es decir, que están en Dicom”, señaló.

A tale efecto, considera que es necesario eliminar transitoriamente el registro. “Esto a efectos de facilitar préstamos a micro, pequeña y mediana empresa, por la importancia que estas revisten en y para la economía chilena y la expresa necesidad de su subsistencia. En el entendido que este registro es para la evaluación de un riesgo respecto el potencial cliente, esto se compensa con la posición del Estado como garante de dicho crédito, sobre todo considerando que si una persona no paga, la banca privada percibe el 85% del total del crédito de igual forma, por lo que el riesgo se ve reducido de manera ostensible”, agregó.

En relación a la forma como este proyecto beneficiaría a los emprendedores de su región, la diputada Marzán comentó que la reactivación económica será una etapa fundamental y donde las empresas más golpeadas son aquellas que emplean a gran cantidad de personas. “La Región de Valparaíso va a la baja en materia de comercio y empleabilidad. Entonces ¿Qué herramientas entregamos para solucionar esto? Si se habilita un sistema de préstamos lo fundamental es que lleguen a quienes efectivamente requieran y no se convierta en una posibilidad de captación de clientes bancarios con la venia del Estado, sino que aquellas empresas que necesitan para subsistir, puedan acceder de manera real al préstamo, sin obstáculos, sin barreras. Este proyecto va en esa dirección, en la lógica de que la eliminación de este filtro histórico sea un aliciente para la activación económica, el empleo y el comercio. ”, sentenció.