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Asia Pacífico | Observatorio Parlamentario

El rol de la Oficina Nacional de Estadísticas de Corea en la implementación de los censos

13 enero 2016

La Kostat entrega información sobre demografía y economía a más de 350 organismos del Estado, incluyendo industrias, instituciones financieras, centros de investigación, empresas de agricultura, silvicultura y pesca.

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El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) en conjunto con la Asociación Chilena de Municipalidades (AChm) realizará en todas las comunas de nuestro país el Pre-censo 2016, cuyo fin es actualizar la cartografía de vivienda, hogares y personas de cada área que será utilizada en el censo de 2017. Para conocer más cómo se está llevando a cabo la investigación censal en Asia y compararla con la situación en Chile, presentaremos el caso de Corea donde un instituto estadístico de carácter autónomo, se encuentra preparando su segundo censo electrónico. Más detalles en las siguientes líneas.

Las cifras censales de Corea

Corea del Sur es uno de los países con la densidad de población más alta del mundo, con 503 habitantes por kilómetro cuadrado. El 2015 lo cerró con 50,4 millones de personas, un millón de personas más desde la última medición poblacional realizada durante el censo de 2010. Esta tendencia permite proyectar una tendencia de crecimiento, debido a que en las últimas cinco décadas la población surcoreana ha aumentado en un 102%, ya que para 1960 eran 25 millones.

La gran mayoría de la población está concentrada en Seúl, donde habitan 24,5 millones de personas, siendo la ciudad más densamente poblada de los países OCDE. Este fenómeno se explica por la rápida migración desde el campo, ocurrida durante la década de los ochenta y noventa. No obstante lo anterior, la población también ha sido moldeada por la migración internacional, ya que existen más de 1,1 millones de extranjeros residentes, entre los que destaca un 56,5% de inmigrantes chinos y 43 mil profesores de inglés provenientes de países anglosajones.

En esta línea, el Comisionado de Estadísticas de Corea (Kostat) -organización perteneciente al gobierno central- se encargada de llevar a cabo todos los servicios de información demográfica para el país. Adicionalmente esta organización coordina todos los estudios estadísticos del Estado, labor que cumple gracias a la exclusividad que le otorga la Ley de Estadísticas, con el fin de evitar que otros organismos impongan cifras oficiales.

Una oficina de estadísticas autónoma

La toma de decisiones por parte de los gobiernos y el diseño de políticas públicas necesita de bueno datos estadísticos. Para ello los censos son un instrumento importante en el suministro de información social y económica. Asuntos como la población, vivienda, incluso negocios, son convertidos en datos que resultan fundamentales para el éxito de proyectos públicos y privados.

Si bien el Censo es el instrumento de investigación más importante de la Kostat, esta organización estatal de carácter autónomo produce datos estadísticos a más de 61 áreas del gobierno para la toma de decisiones. Durante la presentación del último Censo realizado en Corea el 2010, el presidente de la Kostat afirmó que si el gobierno coreano fallara en sus estadísticas, los daños podrían ser irreversibles para la economía y la sociedad. “Para prevenir esto, establecemos una metodología actualizada todos los años según estándares de calidad internacional que nos permita compilar los datos actuales para que podamos proyectarlos a largo plazo”, señaló.

De tal manera, la Kostat entrega información directa a más de 350 organismos del Estado, incluyendo industrias, empresas del Estado, instituciones financieras, centros de investigación, agricultura, silvicultura y pesca. “Consideramos la estadísticas oficiales como un bien público que beneficia a la sociedad, por eso la imparcialidad debe estar garantizada a través de métodos objetivos y científicos que nos lleve a respuestas más exactas y eficientes”, agregó el titular de Kostat.

Para Mauro Grossi, presidente del Consejo de la Sociedad Civil del Instituto Nacional de Estadísticas de Chile, es importante que este tipo de instituciones tenga un alto grado de autonomía, ya que cumpliría de mejor manera con su rol técnico. "Tiene que ser una institución absolutamente autónoma que permita definir las políticas públicas de largo plazo y no dependiente del presupuesto de una determinada administración, pero sobre todo independiente, capaz de entregar una información objetiva y precisa que beneficie a todos los actores políticos y sociales por igual", coincidió.

Censo electrónico para reducir la tasa de errores

Los censos se constituyen de indicadores numéricos que muestran la imagen social, económica y cultural de una nación, principalmente la imagen que –para el caso de Corea- se produce cada cinco años. La recolección de antecedentes que engrosa los indicadores numéricos se logra a través de un método de encuesta universal, donde un entrevistador visita cada hogar en un área determinada.

Según Mauro Grossi es imprescindible, para que un censo sea bueno debe utilizar a su favor las tecnologías de la información y la comunicación. "Esto permite registrar los datos de muchos lugares a los cuáles hoy no se tiene acceso. Hoy están dadas las condiciones técnicas y la plataforma tecnológica para tener censos de ese tipo en el mundo, no concibo ver un censo moderno de otra manera", señaló.

Es producto de esta necesidad de registrar mejor los datos y superar obstáculos en la información recolectada que muchos países han implementado el censo electrónico. Casos como en Australia con el E-Census -que pretende registrar al 70% de la población 2017- destacan por su confianza en el sistema para abarcar las zonas rurales. Para el caso de Corea, sin embargo, durante 2010 el 30% del universo censal fue logrado por cuestionarios voluntarios en línea y otro 30% por encuestas telefónicas realizadas por un robot.

En relación a las características de este censo electrónico, Grossi afirmó que la tecnología permite avanzar en varios asuntos que antes no se consideraban. “La ventaja del censo electrónico es que puede llevarse a cualquier zona geográfica. Desde un tablet se recoge la información para luego conectarla a un servidor central, esta es una cualidad que pocos instrumentos de investigación tienen, más si se trata de fenómenos sociales”, afirmó.

Otra de las ventajas del censo electrónico en Corea es que su infraestructura electrónica e informática pueden ser utilizadas en varios censos, no solo en los que se llevan a cabo cada 5 años, sino también en el censo agrícola, pesquero y forestal, así como el económico. Esto se suma a que puede ser utilizado tanto en el formato web como en la visita puerta a puerta.

Una oficina como la Kostat y un censo electrónico en Chile

Los censos no solo pueden aplicarse en el universo de un país, sino también en ámbitos locales, esto ha llevado a que en Chile se lleve a cabo el 2016 el pre-censo municipal. Sin embargo, la mayoría de los instrumentos aplicados se logran a través de encuestadores cara a cara. "Se van a hacer pruebas de tecnologías electrónicas para que sean implementadas en futuros censos. Se está trabajando para implementar el censo electrónico el 2017", recalcó.

Respecto a la utilidad del pre-censo como antesala de un Censo nacional, Grossi destacó que si bien el del 2017 será un censo abreviado, es un excelente instrumento de medición. "Es un censo piloto que permite conocer las distintas condicionantes para poder hacer un despliegue total. Con el pre censo se van a visitar las comunas y determinar cuál es la realidad. Según esa realidad se puede saber cuántos voluntarios se necesitan en función de los que se tienen, cuánto se van a demorar y cuántos recursos se necesitan. Hay comunas que son más fáciles que otras, ya que cuentan con distintas formas de propiedad, es decir si son residenciales o comerciales. Hay localidades donde incluso no pueden llegar los voluntarios, entonces el pre-censo sirve para conocer con anticipación todos estos problemas", afirmó.

En cuanto a la importancia de realizar un censo cada cinco años, señaló que es una buena medida, que debe sustentarse según el tipo de información. "Según su propósito, es necesario saber para qué se hace un censo. Hay censos que se pueden realizar cada 20 años incluso, pero todo va a depender de la información que se necesita. Hoy es una buena medida porque estamos suscribiendo una serie de condicionantes a nivel internacional, que nos da una serie de requisitos para estandarizar los tiempos", sostuvo.


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