El Plan Global 30, la estrategia de internacionalización de las universidades japonesas

Desde el año 2009 que el Gobierno de Japón comenzó a inyectar recursos en un grupo de 13 universidades, conformando el Plan Global 30, que busca atraer a 300.000 nuevos estudiantes extranjeros para 2020 y de paso aumentar la influencia nipona en el orbe. Conversamos sobre esta estrategia, y la posibilidad de implementar algo similar en Chile, con Manfred Wilhelmy, Director Ejecutivo de la Fundación Chilena del Pacífico.

A la conquista del mundo académico

Hace solo dos años, el gobierno japonés mostró su preocupación por la baja oferta de idioma inglés en los programas de pregrado y postgrado que ofrecían sus principales universidades, puesto que redundaba en una baja preferencia de los estudiantes extranjeros por elegir al país para continuar sus estudios, y perjudicaba de paso el ascenso de las instituciones educacionales niponas en el ranking de de la región.

Fue por estos motivos que el Ministerio de Educación japonés seleccionó a 13 universidades (Universidades de Nagoya,  Kyoto, Osaka, Tohoku, Tsukuba, Tokio,  Kyushu, Ritsumeikan, Keio, Sophia, Meiji,  Waseda y Doshisha) para lanzar la estrategia de internacionalización Global 30. Todas estas casas de estudio reciben fondos del Gobierno, y la meta es, durante los primeros 5 años de Global 30 (hasta 2014) crear 33 programas de pregrado y 124 de postgrado en idioma inglés, junto con optimizar las capacidades institucionales para recibir estudiantes internacionales y mejorar la oferta existente en cultura y educación japonesa.

Además, se abrirán oficinas de representación en países estratégicos, administradas por cada una de las 13 universidades de Global 30 (al menos dos por universidad), para ayudar en el reclutamiento de estudiantes internacionales y fomentar que los universitarios japoneses estudien en el extranjero.

Manfred Wilhelmy: “Las universidades chilenas se deberían vincular con las de Global 30”

Según el  Director Ejecutivo Fundación Chilena del Pacífico, en cuyo boletín de junio se publicó un artículo de Global 30, "este plan es una respuesta de los japoneses tras darse cuenta que estaban atrasados respecto a la competencia, ya que dentro de las 100 mejores universidades de Asia Pacífico hay muchas australianas y otras de la región que tienen el idioma inglés, por lo que están buscando disminuir esa brecha", aseguró.

Respecto a la posibilidad de implementar un plan similar en Chile, Wilhelmy fue enfático en señalar que "estamos muy por detrás de las universidades top, en América Latina recién la UNAM de México está en el lugar 222, la PUC 331, la Universidad de Chile 337, por lo que soy muy escéptico en cuanto a implementar un plan de este tipo, y si bien podemos ser atractivos para estudiantes internacionales que quieren saber algo de la región, no lo somos para quienes quieran llegar a un nivel muy alto en disciplinas específicas. A Chile no va venir alguien a hacer un Ph.D en alguna disciplina dura, ya que salvo en algunos nichos, estamos muy por detrás en el ranking internacional".

Asimismo, apuntó que "lo primero que debe hacer Chile es subir la calidad básica de las universidades y hacerlas atractivas para el extranjero. Los japoneses están reconociendo que el idioma japonés es un problema, mientras que la barrera del español es mucho menor y es un idioma que va en alza internacionalmente, por lo que a futuro podríamos estar mejor que ellos en ese sentido, pero nos falta descontar mucho terreno".

Finalmente, Wilhelmy sostuvo que "si nosotros estamos mirando a las universidades del Asia Pacífico, sería interesante darle prioridad a Japón si es que una universidad chilena está pensando en algún tipo de alianza internacional y vincularla con alguna de las trece que son miembros de la Global 30, porque ahí el estudiante o el académico chileno se van a encontrar con un ambiente más preparado y de mejor acogida", concluyó.