Política de Nutrición en Escuelas de Australia fue comentada por la diputada Cristina Girardi

La diputada Cristina Girardi comentó algunas de las características de la Política de Nutrición en Escuelas de Nueva Gales del Sur. La estrategia de alimentación saludable en los comedores escolares y la educación nutricional presente en los programas de educación física, fueron valorados por la parlamentaria, quien es además presidenta de la Comisión de Educación. Más de esta política y opiniones, a continuación.

Política de nutrición en las escuelas

El logro de una vida saludable se consigue desde varias maneras, una de ellas es la nutrición que juega un papel gravitante en la longevidad, pero también en el fortalecimiento del sistema inmune y el desarrollo de habilidades, entre ellas las cognitivas y emocionales. La FAO en su informe La Importancia de la Educación Nutricional reconoce que las personas que no reciben una cantidad suficiente de energía o nutrientes esenciales, “no pueden llevar una visa sana y activa, lo cual comporta deficiencias en el desarrollo físico y mental”.

Debido a que los niños son los principales afectados de la mala nutrición, debido a que se encuentran en etapa de crecimiento y en pleno proceso aprendizaje, el Estado juega un papel importante en llevar adelante políticas que promuevan no solo la reducción del hambre, también una dieta equlibrada y saludable, con el fin de poner freno a enfermedades ampliamente extendidas en la población, como la obesidad y la diabetes. Es por ello que la educación nutricional es vista por la FAO como un derecho, ya que “el público necesita de información y capacitación para ser consciente y aprender a participar en la adopción de decisiones que le afectan”, señala.

Sin embargo, el campo de acción para promover prácticas de alimentación saludable involucra a toda la sociedad, pues gran parte del bienestar a futuro de los niños depende de lo que coman. De esta manera las familias, las escuelas, actores relacionados con la agricultura y las autoridades locales, son responsables de comunicar este derecho, además de brindar los espacios de educación para crear un entorno propicio y garantizar el acceso a los alimentos saludables.

Estos principios planteados por la FAO son recogidos en Australia por la Política de Nutrición en Escuelas, llevada adelante por el gobierno territorial de Nueva Gales del Sur. En ella se plantea que en todas las escuelas se debe promover una alimentación saludable y buena nutrición, principalmente a través de la comida que se suministra en los comedores escolares y, sobre todo, en la educación de niños. En ambas se brinda información sobre los efectos perjudiciales de los alimentos y bebidas azucaradas, las grasas saturadas y la necesidad de comer frutas y verduras.

Tales características fueron comentadas por la diputada Cristina Girardi, quien en el contexto de nuestra realidad nacional valoró la posibilidad de que exista una política en este ámbito, pero recalcó la necesidad de integrar a los productores locales. “Hay iniciativas parecidas pero no están articuladas. A mí me tocó participar en una mesa en el Ministerio de Agricultura, porque había trabajado con Economía, que las manipuladoras de alimentos se hicieran cargo ellas y crearan microempresas, consiguieran alimentos en el mercado local y funcionaran en cadenas más cortas en la entrega de alimentos a los niños. Que pudieran en algunos sectores comprarle a los pescadores artesanales, agricultores locales, ferias, etc. Esa mesa existe en el Ministerio de Agricultura, que es la de encadenamiento productivo, feria, pescadores artesanales, pero que no se ha integrado con la Junaeb”, señaló.

Educación nutricional como pilar de la salud

La necesidad de incorporar hábitos de alimentación saludable en los niños pertenecientes a sectores más vulnerables y brindar educación sobre la manera de utilizar los alimentos como una fuente de salud, se expresan en el proyecto de ley para incorporar criterios de alimentación escolar saludable en los programas de la Junaeb. Su autora, la diputada Cristina Girardi, comentó que esta iniciativa busca cambiar las pautas de alimentación de las personas. “También se vincula con otros proyectos que he presentado, por ejemplo el de los medicamentos, el exceso de ritalín y el sobre diagnóstico porque hoy lo que se sabe es que el tipo de alimentación que tenemos no solo causa enfermedades como hipertensión y diabetes, sino que también influye en la conducta de los niños. Y en vez de cambiar la alimentación los llenamos de drogas, entonces son proyectos que están muy vinculados con una mirada un poco más crítica de lo que está pasando hoy”, afirmó.

Asimismo, la parlamentaria recalcó la importancia de la Junta de Auxilio Escolar y Becas en este cambio. “La Junaeb es la que alimenta a gran parte de los niños que hoy están en condición de vulnerabilidad y son más afectados por el tipo de alimentación que se está consumiendo, esto es que tienen mayores índices de obesidad, hipertensión, diabetes y también tienen más problemas respecto de la conducta, relacionado con el tipo de alimentación que están consumiendo. En la alimentación, la política puede generar cambios muy importantes y esto se discutió en el frente contra el hambre y la malnutrición que presido, que es un frente que está acompañado por la FAO a nivel latinoamericano y donde el tema de la nutrición escolar se discute en todo la región y de cómo en Chile se ha puesto en cuestión por la forma de operar que tiene la Junaeb a través de las licitaciones”, explicó.

Por último, se refirió a los conceptos que desarrollaría esta incorporación en la ley. “Como nosotros no tenemos iniciativa parlamentaria en términos de la organización de cómo opera el sistema, pusimos algunos conceptos. En primer lugar la alimentación saludable y qué es lo que entendemos por ella. Dos, que la alimentación que se entregue tiene que considerar la condición de salud de los niños. No es lo mismo alimentar un niño obeso, o a un niño autista, con déficit atencional o que tiene una alergia alimentaria. Todos son distintos y la alimentación tiene que adecuarse a eso, no es que tú desarrolles un tipo de alimentación para cada caso en específico, pero se pueden utilizar productos que sirven para todos”, finalizó.