Un vínculo directo entre China y Taiwán

Hoy es un día histórico para la población china, es el día en que, por primera vez en 60 años, un avión comercial emprende vuelo desde China y aterriza en Taiwán, inaugurando el primer vínculo oficial entre el continente y la isla. Así, en la madrugada china, 258 pasajeros arribaron en Taipei, llevando a cabo una acción tan simple, que hasta sólo un par de meses parecía un sueño.

Así el Airbus A330 de la empresa China Southern Airlines aterrizó en el aeropuerto Taoyuan de Taipei –que hasta el 2006 llevaba el nombre de Chiang Kai-Shek- inaugurando así los 36 vuelos que cada fin de semana conectarán ocho aeropuertos taiwaneses, con cinco de las ciudades más importantes de China.

Este nuevo vínculo, cambia absolutamente el panorama anterior, en el que los pasajeros chinos y taiwaneses para cruzar el estrecho debían hacer transbordo en un tercer país, con la excepción de algunos “charters”. Y lo más importante del hecho, es que es uno de los primeros frutos de las renovadas relaciones entre estas partes, que han vivido casi 60 años de enemistad.

Hace poco más de un mes el Kuomintang (KMT) asumió el gobierno de Taiwán, con Ma Ying-jeu como Presidente, y desde entonces se han logrado muchos avances en las relaciones sino-taiwanesas. Es que estrechar los vínculos con China fue una de las principales promesas de la campaña electoral del KMT.

Sin embargo, para Martín Pérez Le-Fort, director del Centro Asia Pacífico del Instituto de Estudios Internacionales de la Universidad de Chile, estos hechos están aún en el plano de lo simbólico, y no necesariamente se van a transformar en cambios políticos.

“Este es un acercamiento para disminuir tensiones, pero no significa que el problema de la unificación china se vaya a resolver”, señala Le-Fort, quién especifica que la profundidad de los símbolos es la pregunta de fondo, “en qué se van a traducir estos gestos”.

“La idea es generar un espacio idílico que permita abrir el diálogo”, añade el académico, al explicar que existen muchas tensiones entre China y Taiwán, incluso en el plano militar, por lo que es necesario, como primer paso, relajar las situación a través de hechos como éste.

“Lo central es que de la perspectiva política, no parece que la situación de Taiwán con respecto a la República Popular China vaya a cambiar”, concluye.