Proyecto busca crear la región de Ñuble

Actualidad Territorial



El 20 de agosto de 2015, la Presidenta Michelle Bachelet firmó el proyecto de ley que pretende crear una nueva división regional para Chile, en este caso la Región de Ñuble. Esta décimo sexta macrodivisión administrativa abarcaría exclusivamente el actual territorio de la provincia del mismo nombre, estableciendo como capital regional a la ciudad de Chillán.

Figura 1. Mapa del proyecto para crear la Región de Ñuble


Fuente: Elaboración propia.

Más allá de las consideraciones políticas o técnicas que conlleva la discusión del proyecto, existen ciertos aspectos territoriales que son interesantes de destacar, particularmente aquellos relacionados con la conformación del espacio regional actual y del proyectado.

Aspectos preliminares

El proyecto firmado mantiene el territorio actual de la Provincia de Ñuble, estableciendo tres subdivisiones provinciales (Diguillín, Itata y Punilla), y abarcando 21 comunas. La extensión total de la nueva región sería de 13.100 km2, lo que la convertiría en la menor división en su tipo, siendo superada incluso por la Región Metropolitana, que en la actualidad es la más pequeña. Las cifras indican que la superficie de Ñuble queda por debajo de todas las regiones actuales, incluyendo a Los Ríos y Arica-Parinacota, las dos últimas unidades creadas ya hace 8 años atrás (2007).

Superficies y densidades poblacionales de algunas regiones de Chile

Como se observa en la tabla 1, un elemento a considerar es que la menor extensión areal de la futura región de Ñuble se traduce en una mayor densidad poblacional, lo que contrasta con el panorama que presentan otras unidades, como Los Ríos y Arica-Parinacota, dato que resulta interesante de considerar toda vez que además la diferencia de tamaño se expresa solo en poco más de 3 mil km2.

Aspectos demográficos

Respecto del escenario proyectado, luego de la subdivisión de la región original, en este caso la del Biobío, el proyecto le restaría prácticamente un tercio de su superficie, pasando de 37 mil km2 a un poco más de 24 mil km2. Esta diferencia haría caer a la Región del Biobío del puesto 8 al 10, en el ranking de superficie de la división político administrativa regional.

Sin embargo, a pesar de la modificación del territorio de la región del Biobío, se proyecta que la densidad poblacional no se vería mayormente afectada, incluso variaría muy levemente, pasando desde 56,7 hab/km2 a 54,3 hab/km2. Este antecedente, no se replica en la proyectada Región del Ñuble, pues a pesar de la superficie menor, la densidad no consigue replicar los valores actuales.

Población, superficie y densidad poblacional provincial, Región del Biobío

Como se observa en la tabla 2, una nueva región de Ñuble genera una relación demográfica asimétrica con la región del Biobío, en más de 1 millón de habitantes. Sin embargo, esta proporción no es del todo desventajosa, si se compara con el resto de las regiones de Chile, ya que en términos demográficos Ñuble quedaría en el puesto 11 de 16 regiones, superando a los anteriores proyectos en la materia.

Respecto de la configuración regional, Ñuble se presentaría como fuertemente primada por las comunas que constituyen la conurbación Chillán-Chillán viejo, en desmedro de las otras nuevas provincias, que resultarían mucho menos pobladas. Este desequilibrio se vuelve aun más evidente al observar las proyecciones de crecimiento de las comunas comprometidas en el proyecto.

Población por comuna y provincia para la Región de Ñuble proyectada

De la conformación proyectada de las provincias, se puede observar la importante diferencia entre Diguillín y el resto, donde prácticamente cuadruplica la población de Itata o de Punilla. Por su parte, la dotación interna de habitantes en cada nueva provincia también es un punto a realzar, ya que en el caso de Diguillín se encontraría fuertemente primada y funcional a Chillán; mientras que en el caso de Punilla, San Carlos se presenta muy por sobre el resto de las comunas en términos demográficos; y finalmente Itata es muy parejo en términos de población, no siendo evidente la diferencia entre la capital provincial propuesta y el resto de las comunas.

Aspectos Socioeconómicos

La conformación socioeconómica de la región de Ñuble, aunque con algunos matices, presenta un índice de pobreza que se asemeja al valor de la actual Región del Biobío (21,5%), aun cuando se puede señalar que en prácticamente todos los casos supera el índice nacional (14,4).

Pobreza por comuna, Provincia de Ñuble

Valores país disponibles en: http://observatorio.ministeriodesarrollosocial.gob.cl/layout/doc/casen/publicaciones/2011/CASEN_2011.pdf

Como se puede observar en la tabla 4, no existen diferencias de consideración al momento de caracterizar la pobreza en la región proyectada. Salvo algunas excepciones, como Chillán, Ránquil, Quillón o Ñiquén, en general la pobreza supera el 20%. Además la región proyectada supera ampliamente el valor país, y se posiciona mayoritariamente por sobre el valor regional actual del Biobío. Esta situación presenta un desafío importante para Ñuble, y le confiere una cierta homogeneidad en el desarrollo de acciones y estrategias futuras.

Sistema urbano

Respecto de la jerarquía urbana, la región de Ñuble se basaría en una capital de al menos 146.701 habitantes, cifra que aumentaría al juntar la conurbación Chillán-Chillán Viejo para alcanzar 165.528 personas, rango de población que le permitiría optar a una denominación de ciudad intermedia, por debajo de Concepción, que pertenece a una categoría de metrópoli regional de segundo orden, y por debajo también del Gran Concepción, que posee una jerarquía de metrópoli regional de primer orden, presentando un marco en el que se debería potenciar la nueva cabecera regional, a fin de que la población no perdiera acceso a servicios e infraestructura pública actual, satisfecho hoy en día por la ciudad de Concepción.

Categorización de las cabeceras comunales, por provincia, región proyectada de Ñuble

Como se observa en la tabla 5, el sistema urbano de la nueva región quedaría representado por sólo una ciudad de tipo mayor (Chillán o la conurbación con Chillán Viejo), para posteriormente desplegarse un grupo de entidades de categoría ciudad pequeña (8 en total), y en mayor medida, desarrollarse en base a entidades tipo pueblo (12 en total). Esta situación expone una nueva región fuertemente primada y nodal, funcional a la ciudad cabecera: Chillán, tal y como ya se ha consignado previamente en este reporte.

Figura 2. Proporcionalidad de las cabeceras comunales proyecto región de Ñuble.


Fuente: Elaboración propias, basado en INE (2005), Ciudades, Pueblos, Aldeas y Caseríos.

Otro aspecto relevante a analizar en la generación de una nueva región es la variación en la relación “distancia localidades-capital regional”, un factor de importancia respecto del acceso a servicios e infraestructura pública. En una primera lectura, resulta evidente el descenso generalizado de la distancia, y de los tiempos de desplazamiento entre lo que es la actual capital regional y la nueva capital propuesta.

El promedio de las distancias entre Chillán y las cabeceras comunales es 51 kilómetros, muy inferior a los 107 kms promedio que actualmente separa a Concepción de las ciudades principales de la provincia de Ñuble. En general se produciría un ahorro en las distancias al crearse una nueva región.

Distancia de las cabeceras comunales de la Provincia (Región) de Ñuble a las capitales regionales (actual y proyectada)

De lo que se puede observar en la tabla 6, existe una importante mayoría de comunas que obtendrían una ganancia en kilómetros de cambiar su dependencia administrativa, ahorro que promedia los 64 kilómetros. En ese sentido, destacan el ahorro en distancia de cabeceras como San Carlos, San Gregorio, El Carmen o Pinto.

De la misma manera también queda de manifiesto, la situación de dos comunas con carácter limítrofe entre la proyectada Región de Ñuble y la futura Región del Biobío, particularmente en los territorios de la proyectada provincia de Itata, donde en general, la ganancia en términos de desplazamiento no es tan evidente en todas las cabeceras comunales, incluso reportándole un incremento en la distancia a recorrer a la capital regional, como es el caso de Coelemu y Treguaco.

Conclusión

Habiendo recorrido algunos aspectos territoriales respecto del nuevo proyecto de Región del Ñuble se puede señalar que la región de Ñuble es un proyecto que posee características territoriales bien definidas.

En términos demográficos, la región proyectada se encuentra dotada de una población que le entregaría una base significativa de población, posicionándola en el puesto 11 de 16 regiones. Además, la separación de Biobío no provocaría una variación significativa de la densidad demográfica en la región madre; no así en la región proyectada, donde si se experimentaría una caída de la densidad demográfica, la que de todas maneras seguiría siendo mayor que varias regiones actuales.

La distribución de la población al interior de la nueva región se presenta como fuertemente nodal, y primada por la conurbación Chillán-Chillán Viejo, lo que se puede presentar como una ventaja en comparación con la relación actual entre Concepción y las cabeceras comunales, toda vez que existe una evidente vocación natural del territorio de Chillán como lugar central para Ñuble.

La condición socioeconómica proyectada para la nueva región, presenta una cierta homogeneidad respecto de la distribución territorial de la pobreza. Salvo algunas excepciones, la proporción de población pobre supera el 20% en Ñuble, lo que la hace más alta que el valor país, pero se alinea con los valores regionales para el año 2011.

La configuración regional y el sistema de asentamientos urbanos, se basa principalmente en entidades pobladas del tipo pueblo (menos de 5 mil habitantes en el año 2002), siendo secundadas por ciudades pequeñas (menores de 100 mil habitantes) y sólo una ciudad mayor conurbada (entre 100 mil y 500 mil, y donde se juntan dos ciudades como Chillán y Chillán Viejo).

La relación de distancia entre las cabeceras comunales de la actual provincia de Ñuble y la capital regional actual y la proyectada, expone que la creación de la región se traduciría ampliamente en un ahorro en la distancia de desplazamiento para prácticamente todas las comunas, a excepción de las que se podrían considerar como adyacentes o limítrofes entre Biobío y Ñuble.