La gestión de China, Corea y Japón para iniciar sus procesos de vacunación

Desde el inicio de la pandemia se habla de una vacuna milagrosa que sea capaz de regresar a todo el mundo a su funcionamiento ideal. Aunque la gran mayoría de los países aún espera completar las dosis, su creación y distribución se ha realizado con una sorprendente rapidez, al punto que está presente en varios países, entre ellos China, Corea y Japón. Revisaremos su experiencia, a continuación.

Todas las esperanzas puestas en las vacunas

Desde la aparición del virus a finales de 2019, se dio inicio a la carrera científica con el objetivo de encontrar una cura. Es importante considerar que para el desarrollo de vacunas y su administración se requieren años de investigación y estudios. Sin embargo, en esta oportunidad y con el fin de retornar pronto a la normalidad, grandes laboratorios en distintos lugares del mundo han estado enfocados en desarrollar un remedio en el corto plazo.

Para muchas personas, resulta aún imposible que la vacuna contra el Covid-19 se haya logrado en tiempo récord, con resultados favorables en diferentes variables entre cada producto. De esta manera, según el sitio del New York Times para el seguimiento de los procesos de vacunación, se contabilizan 64 vacunas siendo ensayadas clínicamente en humanos, de las cuales 20 han logrado avanzar a su etapa final de testeo.

Distintos laboratorios se están encargando de abastecer a diversos países con cantidades de dosis que varían según la población y la urgencia sanitaria en cada contexto. Por su parte, los países que están obteniendo esta opción, han tenido que definir los criterios con los que seleccionarán a quienes recibirán este beneficio según las prioridades de las autoridades.

Con el fin de conocer estas distintas realidades, sus prioridades y desafíos, mostraremos a continuación cómo este proceso se ha dado inicio en algunos de los países asiáticos y de qué manera se proyectan sus acciones.

China y su lógica de autoabastecimiento

Es el lugar donde se tomaron las primeras medidas para controlar los contagios, acciones que llevan más de un año para mantener a sus habitantes seguros y con las transmisiones bajo control.

De inmediato, importantes laboratorios del territorio y del mundo comenzaron su investigación. Según una nota del New York Times, hasta el momento, el país no ha entregado ningún dato de seguridad y eficacia de las cinco vacunas en etapa de prueba tardía que se encuentran allí en desarrollo, sin embargo, funcionarios han comentado que es probable que varias logren ser autorizadas.

Se estima que hay 4,5 millones de dosis aplicadas en la nación hasta el 31 de diciembre, cuyas inyecciones responsables de evitar el contagio en China pertenecen a laboratorios propios como Sinopharm o Sinovac Biotech.

Por otro lado, el gobierno chino expresó que se les dará prioridad a los profesionales de la salud, pilotos, personas que trabajen en la industria de la importación de alimentos, además de quienes sean de alto riesgo de contraer el virus debido a su exposición.

Actualmente, el objetivo de China es lograr vacunar a 50 millones de personas antes del Año Nuevo Chino que se realizará el 12 de febrero, una cifra bastante ambiciosa ya que se estima que cientos de millones de personas viajen para esta celebración.

La determinación de Corea para erradicar el virus lo antes posible

Otro de los primeros países en tomar medidas tempranas para reducir la alta tasa de contagios fue Corea del Sur. Según el sitio de conteos de Google, durante los primeros días de enero de 2021 registraba un total de 66.686 casos de contagios, cifra alarmante para las autoridades que temen la aparición de un rebrote próximamente. Si bien se han tomado decisiones como la prohibición de realizar reuniones privadas de más de cuatro personas a lo largo de todo el país, existe un gran interés por lograr la inmunidad contra el virus con un completo abastecimiento de vacunas.

Se estima el primer envío de dosis durante enero de 2021, luego de que en diciembre se afirmó que existe un acuerdo con AstraZeneca con el fin de destinar 20 millones de dosis, según Sangmi Cha en una nota de Reuters. Además, se incluyen 106 millones de dosis, las cuales dependen del laboratorio del cual proceden para considerar la cantidad de dosis que deben ser otorgadas a cada persona. De esta manera, se asegura la administración de los 52 millones de habitantes, aunque la cobertura pueda aguantar una diferencia de cuatro millones más. En concreto se planifica comenzar la administración de las inyecciones en febrero con las prioridades correspondientes.

Asimismo, se sabe que existen otros acuerdos con diferentes proveedores, en donde se incluye Pfizer Inc, Johnson & Johnson 's Janssen, Moderna Inc. Además de haber entrado a la iniciativa COVAX que consiste en una alianza que busca asegurar que las vacunas de distintas procedencias sean entregadas de manera equitativa.

De igual manera, es paradójica la situación coreana, puesto que se encuentra en una ubicación de afinidad política y proximidad geográfica a países que son los grandes proveedores y quienes además tienen los más importantes laboratorios clínicos. A pesar de estos antecedentes, ha demorado su abastecimiento hasta la fecha en comparación con otros territorios extracontinentales.

La gran espera japonesa ante la vacuna

En el caso de Japón, la llegada de la vacuna de Pfizer se deberá esperar hasta finales de enero, según informó el Primer Ministro Suga, luego de tomar la decisión de negociar directamente con el laboratorio estadounidense y pasar por alto al Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar. La demora de su ingreso al país se debe a una gran cautela por parte del Ministerio de Salud en relación con los medicamentos que se les aplican a los habitantes y los posibles efectos posteriores que estos puedan sufrir.

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Una nota del Asia Nikkei comenta que se tiene previsto que el país sea abastecido con suficientes dosis que permitan vacunar 60 millones de personas con la vacuna Pfizer, la cual tiene que ser administrada en dos dosis con tres semanas de diferencia. Además, se espera vacunar a otros 20 millones de personas con Moderna y 60 millones con AstraZeneca.

Por lo pronto, se tiene organizado cómo será el proceso desde la llegada del medicamento, considerando primero a las y los trabajadores médicos, para posteriormente en marzo poder continuar con las personas mayores. Finalmente, el resto de las personas iniciaría su vacunación en abril.

El minucioso proceso que Chile debe afrontar

Chile es uno de los país que más pronto ha tenido acceso a una de las vacunas. En ese contexto, consultamos a la doctora Claudia Cortés, infectóloga y vicepresidenta de la Sociedad Chilena de Infectología, quien comenta que aún nos encontramos en un proceso inicial.

El abastecimiento de inyecciones en Chile está a cargo de Pfizer/BioNTech y el primer cargamento arribó el 24 de diciembre 2020, lo cual da luces a los chilenos de lograr volver a la normalidad. “Han llegado 20.000 dosis de vacunas al país, eso alcanza para el 0,006% de la población que tiene que vacunarse. En Chile hay 500.000 funcionarios de la salud, y esto alcanza solo para el 2% de ellos. Sabemos que vienen más dosis en camino, pero hasta que no estén disponibles y básicamente hasta que no estén distribuidas a lo largo del territorio nacional, todavía no podemos estar más tranquilos. Es necesario vacunar al 80% de la población para poder dejar un poco más atrás esta pandemia.”, expresó.

Continuando con lo anterior, mencionó su parecer respecto de la selección que realizó para determinar los primeros grupos que contarán con el beneficio. “La priorización que hizo el CAVEI es muy buena. En Chile se ha demostrado que el personal de salud se infecta tres veces más que el resto de la población, por lo tanto está bien que hayan iniciado con ellos al estar expuestos a enfermarse y hospitalizarse más. Posteriormente se continúa con los adultos mayores por sobre los 65 años, que son quienes tienen la mortalidad más alta. Finalmente se seguirá con las personas que tengan otras enfermedades. Es un buen plan.”, comentó.

Por otro lado, una dificultad frente a la aparición de la vacuna que la doctora no considera menor, enfoca a quienes no están de acuerdo con este método. “Uno de los desafíos más importantes es que la población entienda lo relevante de vacunarse. Hay algunos movimientos antivacunas, que existían previamente, y tener control por sobre esos grupos y poder hacer entender a la población la relevancia de la vacuna es algo fundamental.”, sentenció.

Manteniendo el sentido de las complejidades que pueden surgir, menciona que “El proceso de vacunación está recién partiendo, es largo, de varios meses, que se extenderá hasta que no estén vacunados 15 millones de personas en el país. Nunca ha habido un proceso de vacunación tan grande. En Chile la vacuna que más se coloca anualmente es contra la influenza y abarca a 5 millones, por lo tanto tiene una serie de desafíos logísticos muy importantes, hasta que no esté vacunada gran parte de la población, aún debemos respetar las medidas sanitarias de utilizar mascarilla, lavándonos las manos, manteniendo el distanciamiento físico, etc.”, comunicó.

Finalmente, expresó su visión frente a las expectativas que existen de dejar atrás la crisis sanitaria: “Creo que es una equivocación pensar que la vacunación nos va a volver a la normalidad durante el primer trimestre del año, ya que se está realizando muy lentamente, esto tomará más de tres meses.”, concluyó.

Por equipo Asia Pacífico: asiapacifico@bcn.cl