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Antecedentes
  • Cámara de Diputados
  • Sesión Ordinaria N° 17
  • Celebrada el
  • Legislatura Extraordinaria número 319
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Intervención
MISIÓN CUMPLIDA POR UNA DELEGACIÓN DEMOCRATACRISTIANA EN LA UNIÓN SOVIÉTICA.

Autores

El señor VIERA-GALLO (Presidente).-

Antes de entrar a la Hora de Incidentes y en cumplimiento de un acuerdo de esta Sala, hará uso de la palabra el Diputado señor Eugenio Ortega , para dar, cuenta de una misión cumplida por una delegación democratacristiana en la Unión Soviética. Debo hacer dos advertencias.

Se ha solicitado que la Comisión de Régimen Interno, Administración y Reglamento pueda sesionar paralelamente con la Sala, para estudiar la propuesta del nuevo Reglamento de la Cámara de Diputados. Sin embargo, en la reunión de Comités, no se consideró conveniente que así fuera.

Hago presente que el tiempo que ocupe el Diputado señor Ortega en su informe, no se descontará del tiempo de su Comité en la Hora de Incidentes.

En consecuencia, la sesión se entenderá prorrogada por todo el tiempo que utilice en el uso de la palabra el Diputado señor Ortega. Una vez que él termine su informe, el que no dará origen a un debate empezará la Hora de Incidentes.

Hay dos proyectos de acuerdo que votaremos cuando llegue el momento oportuno.

El señor VIERA-GALLO (Presidente).-

Tiene la palabra el Diputado señor Eugenio Ortega.

Ruego a los señores Parlamentarios tomar asiento.

El señor ORTEGA .-

Gracias, señor Presidente.

Todos los señores Diputados tienen conciencia cabal de la importancia del proceso que está viviendo en este momento la Unión Soviética.

Me tocó participar en una misión de la Democracia Cristiana, invitado por el Instituto de Ciencias, para analizar, justamente, el proceso de la perestroika y los procesos de democratización en América Latina.

Tuvimos la oportunidad de entrevistamos con diferentes personeros del Partido Comunista de la Unión Soviética, del Gobierno, del Soviet Supremo, y también de las Universidades, de los sindicatos y de los estudiantes.

La historia de la perestroika es de una data bastante más larga de la que aparece desde abril de 1985. La perestroika tiene una base histórica en aquel proceso largo de sometimiento del pueblo soviético al stalinismo, que dio origen a una purga que tocó de frente y muy directamente al propio Partido Comunista de la Unión Soviética.

Muchos de sus personeros se sometieron a un régimen de terror, que durante el tiempo y el transcurso de los años, fue gestando un gran anhelo polar, específicamente en ese Partido, por estructurar un nuevo régimen y un nuevo sistema más humano.

La iniciación de las transformaciones soviéticas en el tiempo de Kruschev fueron aplastadas finalmente por el aparato del propio Partido, sometiéndose, finalmente, a un régimen, durante el tiempo de Brezhnev, en el que se congeló todo el proceso de cambios iniciado por Kruschev en el XX Congreso de ese Partido.

El mantenimiento de un espíritu de rebeldía contra el esquema estatista y totalitario existente en ese país y hoy día reconocido, hizo que muchos prohombres de ese Partido el PCUS iniciaran el proceso de disidencia, cuyo personaje principal estuvo encanado en el físico Zakarov.

Todavía la sustentación oficial de las transformaciones soviéticas está inspirada en el pensamiento según versa en los documentos oficiales de Lenin. Personalmente, creo que son los heterodoxos Backunin y Rosa de Luxemburgo los que criticaron el proceso stalinista, los que realmente inspiran este cambio tan radical que se está viviendo en la Unión Soviética. Al final, es el triunfo de los mencheviques, de la socialdemocracia, del humanismo democrático y de un socialismo con cara humana.

Los cambios que se están produciendo en ese país podrían resumirse en cinco grandes temas:

En primer lugar, en la concepción del rol del propio Partido Comunista y de su separación del Estado Soviético. Es sabido que durante este proceso de 70 años de dominio del Partido Comunista en la Unión Soviética, el Estado y el Partido se confundían en una sola unidad de acción. Hoy día el Partido Comunista ha perdido el monopolio ideológico y partidario. Se genera una autonomía del Estado. Por primera vez, se estructura un Estado con un proceso de autonomía del rol del Partido. Al mismo tiempo, toda la sociedad soviética, de una u otra manera, estaba dominada por el Partido. Lo reflejan los documentos oficiales de ese Partido. Las Universidades, la educación y las fábricas, estaban sometidas a la ideología oficial. Con la perestroika el cambio más radical se da, a mi entender, en el término del monopolio ideológico del Partido Comunista y en la separación de los roles del Partido y del Estado.

Un segundo cambio fundamental, a mí ^entender, en el proceso soviético, es la estructuración de un régimen político de Gobierno, que se inicia con la elección del Congreso en los Diputados del pueblo, 2.350 diputados, que tienen la función de elegir al Presidente de la República y de efectuar las reformas constitucionales. Funciona sólo dos veces al año y es el que da origen a la elección del Soviet Supremo, del Congreso, que funciona permanentemente y está compuesto por dos Cámaras, la Cámara de la Unión y la Cámara de las Nacionalidades.

En tercer cambio fundamental en el proceso de la perestroika es la instalación de un Estado de Derecho en el cual, en forma procesal, se establecen y se garantizan las libertades individuales. Es importante, porque en la expresión concreta de la vida diaria del ciudadano soviético el espacio de libertad de expresión, de organización, de religión y de cultura es una realidad que tiende a entronizarse en la vida social.

Especial mención cabe respecto de la libertad religiosa. Hace pocos días, en un diario de la capital, un obispo ortodoxo decía que se habían devuelto más de 3.000 iglesias en esa expresión religiosa.

Tuve una larga conversación con un Obispo Católico de Lituania, quien me manifestó que en la práctica religiosa, la libertad de credo se había entronizado en la Unión Soviética con la perestroika.

Un cuarto cambio fundamental es la instalación en la Unión Soviética de algunos partidos que están en este momento en formación: el Partido Social Demócrata, el Partido Demócrata Cristiano y el Partido Liberal.

Comienza un pluralismo, político que da origen eh el interior del Partido Comunista y fuera de él a grandes cambios que, en el futuro, tendrán una incidencia enorme en la posibilidad de una competencia política dentro de la Unión Soviética.

La verdad es que el Partido aún conserva el monopolio de las empresas. Tuvimos la oportunidad de visitar una industria, en la cual el comisario político y la dirigenta Konsommol se presentaron como los responsables máximos de la fábrica.

También en los liceos. Es así como se observa en la Plaza Roja, todavía, a los niños jurando su lealtad al marxismo-leninismo cuando pasan a ser pioneros de ese partido.

Existe aún una cierta sacralización de Lenin.

Otro ámbito de la reforma llevada a cabo en la Unión Soviética es la economía. El objetivo fundamental de esta reforma está orientado a establecer, primero, un término definitivo del estatismo, de la burocracia estatal y dé la planificación centralizada, y a entronizar en la Unión Soviética, dentro de su esquema económico, un sistema que, según el Presidente de la Comisión Ideológica del Partido Comunista, Vladimir Medvedev miembro del Buró Político y Secretario General del Comité Central, en la Unión Soviética, uno de los grandes logros de ese país, es la existencia de una economía de mercado en la cual se pueda establecer un ámbito de libertad para las empresas anteriormente centralizadas.

Dice Medvedev: "Cuando se logra evitar la tergiversaciones especulativas, el mercado es uno de los adelantos más grandes de la civilización humana y sería absurdo renunciar a emplear esta forma económica sólo porque se utiliza por el otro sistema social".

El problema fundamental que se plantea es el hecho de que la economía soviética está regulada, tiene precios artificiales y, sobre todo, no posee una experiencia diferencial de los encargados de las empresas para desarrollar una economía competitiva.

El estatismo, es cierto, y lo dicen los propios textos de los dirigentes oficiales del Partido, ahogó la iniciativa. La ausencia de incentivos a la creatividad ahogó también la capacidad de los hombres y de las empresas para modificar, para estructurar un sistema en el cual cada persona o cada empresa tuviera la posibilidad de desarrollarse con autonomía.

Quizás sea ésta una de las mayores dificultades de la perestroika. Hay mercado negro; hay problemas de suministro de bienes de consumo y de bienes de capital, y gran dificultad en la obtención de divisas. El cambio negro, en este momento, es de uno a veinte. La inflación y el desempleo potencial en la Unión Soviética puede acarrear graves problemas de costos para la sociedad.

La otra gran dificultad está centrada en el problema de las nacionalidades. En la Unión Soviética existen, como ustedes saben, señores Diputados, 15 Repúblicas; 38 pequeños estados, regiones y ciudades autónomas; alrededor de cien etnias, y cinco religiones diferentes. Forma parte de Europa, del Medio Oriente y de Asia.

La unidad nacional, que sostenía y articulaba el Partido Comunista, se debilita al disminuir la cohesión y el control que ese Partido ejercía sobre el Estado y la sociedad. La desintegración de esa unidad como consecuencia de los espacios de libertad que posibilita la perestroika, constituye un grave riesgo político y militar para el Presidente Gorbachov , sobre todo cuando éste debe enfrentar en julio próximo el XXVIII Congreso de ese Partido, en el cual se tomarán definiciones políticas de primera importancia para su futuro.

En este contexto, es obvio que llegar a ese Congreso con los conflictos internos del Partido; con Lituania independiente a. pesar de los derechos que pueda tener este país para ello; con los problemas de Azerbaidján, de Letonia, de Estonia, de Ucrania y de otras repúblicas implica un serio problema para el proceso de la perestroika.

Paradójicamente, Juan Pablo II puede transformarse en una gran ayuda para Gorbachov, ya que el Sumo Pontífice, comprendiendo el deseo de independencia de estas Naciones, ha pedido prudencia a las exageraciones nacionalistas/ de modo que ellas puedan autocontrolarse y desarrollarse en un proceso creciente de autonomía.

El problema de Lituania resulta especialmente grave, pues la URSS requiere con urgencia el apoyo occidental. Obviamente, situaciones como las de Lituania y Letonia, en este momento, son un obstáculo para estas relaciones de cooperación con Occidente.

El resurgimiento de los sentimientos nacionales es una de las grandes frustraciones del ideologismo clásico marxista-leninista, que pronosticaba que el internacionalismo proletario era capaz de superarlos. En la actualidad, para la perestroika constituye uno de los más difíciles problemas junto a los ya mencionados de la reforma económica y de las dificultades sociales. Estos pueden resultar extremadamente difíciles y colocar la viabilidad de la perestroika en cuestión.

Otro aspecto que vale la pena mencionar se refiere a la perestroika y la cultura. Como se sabe, el pueblo ruso tiene una larga historia de humanismo y de desarrollo espiritual y cultural. En la actualidad, es cierto, se ha abierto un gran espacio a la libre expresión cultural. Los perseguidos escritores disidentes de ayer son leídos con avidez por el pueblo soviético. Se publican, en millones de ejemplares, obras como " Doctor Jivago ", de Pasternak; " Réquiem ", de Akhmatova; "Gulag", de Solzhenitsyn. También se publican otros trabajos de disidentes como Jossif Broski , Youli Daniel y Andrei Siniavski.

El teatro y la pintura soviética presentan cambios significativos. Hoy día es posible ver en los museos soviéticos a pintores de renombre internacional que estuvieron prohibidos y otros desacreditados, como Chagall, Kandisnki y Chemiakine.

Un aspecto de especial importancia es el procesó de perestroika y las relaciones internacionales. Durante estos años, se ha pretendido cambias la concepción de que la Unión Soviética debía ser la cabeza de la revolución proletaria mundial. Lo dice el mismo Vladimir Medvedev , cuando señala: "El Partido Comunista evolucionó desde las ideas según las cuales todo el planeta se hallaba en el umbral de una revolución proletaria mundial hacia la coexistencia pacífica, como ley fundamental de la época; desde la visión del mundo como dos monolitos enemigos que se enfrentan uno a otro hacia la comprensión de su variedad social, la intervinculación de ambos sistemas y la necesidad de que cooperen en el marco de la civilización humana. Hoy sobran razones para afirmar que ya no sirven las ideas de que el socialismo y el capitalismo pueden desarrollarse por separado".

Esta afirmación, hecha por un personero del rango de Medvedev, se ve confirmada por numerosas expresiones concretas en contra de toda forma de violencia en la lucha sociopolítica.

Tanto los científicos que participaron en el seminario, cómo los dirigentes del partido que visitamos, el Presidente de la Comisión Internacional del Soviet Supremo, el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista para Asuntos Internacionales, nos señalaron en forma reiterada lo mucho que valoraban la transición hacia la democracia en Chile a través de un método no confrontacional. Nos dijeron que para ellos significaba un aporte a la Humanidad.

En la URSS existe verdadero pánico de que al interior de sus fronteras renazca la cultura de la confrontación y de la violencia. Ellos la han sufrido como pocos países en la tierra. Se calcula que en el transcurso de este siglo murieron en la guerra civil, en la primera guerra mundial, en las purgas stalinistas y en la segunda guerra mundial, alrededor de 70 millones de soviéticos.

Por eso, el propio Ministro de Defensa de la URSS, General Dimitri Iasov , señala en un notable escrito reciente: "Los efectos desastrosos causados por la guerra son enormes, irreparables y trágicos". Quiero llamar la atención sobre las siguientes palabras del Ministro de Defensa soviético. Dice el General: "Además, con la aparición de las armas nucleares, la guerra pierde todo sentido, ya que en un conflicto nuclear no habrá ni vencedores ni vencidos, y con él no se alcanzará ningún objetivo político, solamente la destrucción de la civilización y el término de la vida en la Tierra". Pero hay un elemente* adicional. El General dice que "la guerra convencional entre las grandes potencias y sus coaliciones nos amenazaría también con una catástrofe global, vista la eficacia de ciertas armas clásicas modernas, el nivel de urbanización y el desarrollo de la industria química y nuclear".

Estos conceptos son importantes, porque, de triunfar la perestroika, pueden augurar una nueva etapa en las relaciones internacionales y en especial, una seguridad para todo el género humano.

Él humanismo es la gran reivindicación del proceso de la perestroika. "El hombre y su dignidad debe volver a ser la medida de toda nuestra política", reconocen una y Otra vez políticos y científicos soviéticos. El renacimiento de un humanismo traicionado es la gran reivindicación espiritual de los que anhelan la democracia para la URSS. De triunfar este socialismo humanista, democrático y pacifista, toda la Humanidad sentirá esperanza y alivio. El retomo a viejas formas totalitarias sólo será posible si se desarrolla una designación de la vida social y de la unidad de la Nación.

Por eso, el respaldo internacional" a la perestroika es un factor clave para que pueda triunfar.

Señor Presidente, quiero proponer a la Mesa que tenga a bien estudiar la posibilidad de invitar a 4 Diputados de diferentes corrientes políticas para que visiten esta Cámara y, así, poder contar con una versión directa, tanto de las corrientes liberal, demócrata cristiana y socialdemócrata, como del partido comunista.

Creo que un diálogo entre nosotros, por la importancia que ellos dan a Chile y por la que, ciertamente, tiene este proceso, sería de tremenda significación para esta Cámara.

La gran esperanza de la perestroika radica en la reserva espiritual de ese pueblo. Gorbachov lo sabe y él apela para darle más sustento a "su revolución". Por eso también se afirma, una y otra vez, que ella debe servir para despertar "el espíritu del hombre libre", que ahogado ayer por las formas totalitarias, hoy resurge de las cenizas de un pasado de dolor y obscuridad. Este espíritu humanista y pacífico es el que la Humanidad entera espera que triunfe con la perestroika.

No puedo dejar de mencionar lo que significó para mí participar en una misa en una iglesia ortodoxa el día de Pascua de Resurrección. Soy creyente, y sentí, en el grito de la liturgia pascual, el grito de esperanza y de alegría del pueblo soviético. En Leningrado, el grito del Obispo anunciando que Jesucristo resucitó, me hizo sentir que el hombre soviético, la libertad, el espíritu humano, la bondad y la fraternidad también estaban resucitando en ese pueblo.

Muchas gracias.

Aplausos en la Sala y en las tribunas.

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