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Historia de la Ley

Historia de la Ley

Nº 20.840

Sustituye sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional.

Téngase presente

Esta Historia de Ley ha sido construida por la Biblioteca del Congreso Nacional a partir de la información disponible en sus archivos.

Se han incluido los distintos documentos de la tramitación legislativa, ordenados conforme su ocurrencia en cada uno de los trámites del proceso de formación de la ley.

Se han omitido documentos de mera o simple tramitación, que no proporcionan información relevante para efectos de la Historia de Ley.

Para efectos de facilitar la revisión de la documentación de este archivo, se incorpora un índice.

Al final del archivo se incorpora el texto de la norma aprobado conforme a la tramitación incluida en esta historia de ley.

1. Primer Trámite Constitucional: Cámara de Diputados

1.1. Mensaje

Fecha 22 de abril, 2014. Mensaje en Sesión 20. Legislatura 362.

MENSAJE DE S.E. LA PRESIDENTA DE LA REPÚBLICA CON EL QUE INICIA UN PROYECTO DE LEY QUE SUSTITUYE EL SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UN SISTEMA ELECTORAL PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL.

SANTIAGO, 22 de abril de 2014.-

MENSAJE N° 076-362/

A S.E. EL PRESIDENTE DE LA H. CÁMARA DE DIPUTADOS

Honorable Cámara de Diputados:

Tengo el honor de someter a vuestra consideración un proyecto de ley que tiene por objeto reformar el sistema con el que se eligen los diputados y los senadores y que, además, introduce otro conjunto de cambios al estatuto de los parlamentarios.

I.- ANTECEDENTES

El Congreso Nacional de Chile es una institución fundamental de la democracia chilena. En nuestro Congreso Nacional deben manifestarse los anhelos del Pueblo. Constituye el principal foro para los debates de nuestra democracia. Es aquí donde deben discutirse nuestras diferencias y gestarse los verdaderos acuerdos nacionales.

Contradiciendo nuestra tradición republicana, la dictadura del general Pinochet diseñó un Congreso Nacional jibarizado en sus atribuciones y damnificado, además, por un sistema de elección excluyente. A pesar de importantes reformas logradas en las últimas dos décadas, sigue existiendo una brecha entre el Congreso Nacional que tenemos y el que Chile desea y necesita.

La existencia del sistema electoral binominal es uno de los factores que afecta negativamente la representatividad de nuestro parlamento. Éste es un juicio que comparte una parte ampliamente mayoritaria del país.

En relación a esta materia, y durante la legislatura pasada, se produjo un valioso acercamiento de posiciones entre los sectores de la entonces oposición y Renovación Nacional. Esa convergencia tuvo el efecto concreto de eliminar, finalmente, el guarismo 120 del texto de la Constitución Política, mediante la ley N° 20.725.

Hoy tenemos la gran oportunidad de profundizar ese camino, dejando definitivamente atrás el sistema electoral binominal e impulsar un conjunto de reformas que terminen por darle a nuestro Congreso Nacional toda la fortaleza y prestancia que se merece.

Este proyecto, en todo caso, no parte de cero. He pedido que se consideren atentamente todos los estudios que sobre el particular se han publicado en las últimas décadas. Quiero destacar, particularmente, los resultados de la Comisión Especial que, por iniciativa de la Presidenta que firma este nuevo proyecto, encabezó Edgardo Boeninger el año 2006.

En la redacción de este mensaje se han tomado en cuenta, también, todos los muchos proyectos de ley que se han presentado en el pasado. Allí están, como antecedente muy importante, los Mensajes que, en su oportunidad, presentaron los ex Presidentes Aylwin, Frei y Lagos. También ha habido sobre este asunto numerosas Mociones. Sin pretender exhaustividad, quisiera mencionar a muchos de los Parlamentarios y Parlamentarias y ex Parlamentarios que han dado patrocinio a proyectos de ley que apuntaban en la misma dirección de esta iniciativa.

Entre los H. Senadores debo recordar en este momento a las señoras Isabel Allende y Lily Pérez y a los señores Francisco Chahuán, Eugenio Tuma, Patricio Walker, Carlos Cantero, Carlos Bianchi, Antonio Horvath, Ricardo Lagos Weber, Jaime Quintana, Juan Pablo Letelier, Alberto Espina, Fulvio Rossi y el ex senador señor Carlos Larraín.

Entre los H. Diputados quiero mencionar especialmente a los señores Pedro Araya (hoy senador), Gabriel Ascencio, Pepe Auth, Pedro Browne, Aldo Cornejo, Felipe Harboe (hoy senador), Gustavo Hasbún, Fernando Meza, Cristián Monckeberg, Nicolás Monckeberg, Ricardo Rincón, Alberto Robles, Marcelo Schilling, Carlos Montes (hoy senador), Guillermo Tellier y el ex diputado señor Jorge Burgos.

Como puede apreciarse al revisar el listado de patrocinantes, el empeño por sustituir el sistema electoral binominal constituye un objetivo muy transversal que convoca a líderes de muy distintas filiaciones políticas.

En lo inmediato, esta convergencia se expresó con mucha fuerza durante el año 2013 con ocasión de las reflexiones y debates producidas en la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento del Senado.

II.- OBJETIVOS DEL CAMBIO EN EL SISTEMA ELECTORAL.

Seis son, a lo menos, los objetivos que inspiran la fórmula que se propone:

1.- Reducir la desigualdad del voto

La diferencia de valor del voto en Chile, según el lugar donde se emite, es demasiado alta y obstaculiza la igualdad del voto. No se puede emprender una reforma sin reducir significativamente esta desigualdad inaceptable en cualquier democracia.

Todo esfuerzo de igualación del valor del voto hace imprescindible incrementar el número de diputados y senadores del país, para no verse obligados al imposible de disminuir la representación de algunos territorios escasamente poblados.

Chile tenía en 1973 una Cámara de 150 diputados y un Senado de 50 miembros, con mucho menos de la mitad de electores que hoy día. Con esos números, el rediseño de distritos y circunscripciones permitiría reducir de manera muy significativa la desigualdad actual del valor del voto entre ciudadanos de distintos territorios. La propuesta considera, además, que los distritos correspondientes a zonas extremas en el Norte y en el Sur Austral merecen un criterio especial de sobrerrepresen-tación, más allá de su población electoral, todo ello en razón de propugnar su mayor integración.

2.- Permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas

La vía para posibilitar el ingreso al Congreso Nacional de las corrientes más significativas de la sociedad es la de reducir el número de distritos y circunscripciones para que se elijan más escaños en cada uno de ellos. Sólo así podrán ingresar al Parlamento sectores de menor votación pero suficientemente significativos de la sociedad, que sin duda merecen estar representados, y la democracia se completará y fortalecerá con su participación. Tanto más escaños del total de diputados se elijan en distritos grandes, menor será la barrera de ingreso al Parlamento y mayor será la inclusión.

3.- Aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos

Se busca que los electores recuperen totalmente la decisión respecto de quiénes son sus representantes, para lo cual es indispensable que todas las formaciones políticas puedan concursar con sus propios candidatos y que las grandes competencias internas en los partidos y entre partidos se resuelvan de cara a la ciudadanía en las mismas elecciones. Esto se logra definiendo distritos que elijan un número mayor de diputados, pero también permitiendo que las listas electorales presenten más candidatos que los que se eligen en cada territorio electoral.

Con ello crecerán la competencia y la incertidumbre respecto de quiénes serán electos y la norma general será que siempre algún sector político resultará ganador de la elección como resultado de la competencia, lo que motivará una mayor participación electoral, que hoy es voluntaria.

4.- Facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías

Con la conformación de un sistema de distritos y circunscripciones que mayoritariamente eligen un mínimo de tres parlamentarios y en su mayoría cinco a ocho, se propende a que la ventaja de votos de un sector sobre otro se traduzca en ventaja equivalente en la representación parlamentaria. Al mismo tiempo, se asegura que en todos los territorios la minoría tenga también expresión parlamentaria.

5.- Promover un Congreso que refleje la diversidad de la sociedad

Se requiere un sistema electoral que aliente a los partidos políticos y a los pactos a presentar a la ciudadanía nóminas de candidatos que reflejen toda la diversidad ideológicas, de género, edad, origen étnico, social y cultural del país. Esto, junto con la representación de todas las corrientes políticas, es el mejor antídoto contra el distanciamiento ciudadano de la política. Así el Congreso Nacional recupera vigor como lugar de encuentro y debate de todos los puntos de vista y posiciones relevantes en la sociedad.

Los distritos que elijan más diputados y listas que puedan presentar más candidatos, permitirán aplicar una ley de cuotas que obligue a las listas a presentar elencos de candidatos con la proporción de mujeres que se determine necesaria para cambiar la desigual representación de género que tiene hoy el Congreso Nacional.

6.- Evitar que queden fuera candidatos con grandes votaciones

Uno de los defectos más visibles del sistema electoral binominal es que candidatos con altas votaciones (sobre 20 o 25%) pueden quedar fuera del Congreso, provocando gran frustración de sus electores.

En distritos que mayoritariamente eligen 5 o más escaños, esto pasa a ser imposible y queda como probabilidad excepcional sólo en un pequeño número de distritos que elije 3 ó 4 escaños.

III.- CONTENIDOS DE LA PROPUESTA DE REFORMA ELECTORAL

1.- Principios

El proyecto se inscribe en el contexto de la tradición republicana chilena, en el sentido que cada una de las Cámaras responderá, principalmente, a un principio de representación particular. En el caso del Senado, el criterio básico es el equilibrio entre los distintos territorios. Tratándose de la Cámara de Diputados, el principio rector debe ser la igualdad en el voto de todos los chilenos.

Como se verá, no se trata, sin embargo, de principios que se apliquen de modo absoluto. De esta manera, el criterio del equilibrio territorial no obsta a que, en el Senado, se consulte –de manera complementaria- una mayor representación relativa para las zonas más pobladas.

Por otra parte, en cuanto a la Cámara de Diputados, el proyecto propone conciliar el principio de igualdad de voto con el propósito de no castigar en demasía la representación política de las zonas extremas del territorio.

2.- Para el Senado

La Cámara Alta elegirá 50 senadores y cada región pasará a ser una sola circunscripción. Cinco de las regiones mantienen el número actual de 2 senadores a elegir, mientras las otras 10 lo aumentan, reduciendo así la desmesurada desigualdad en el valor del voto según el lugar donde se emita, permitiendo que se exprese la mayoría y que siempre esté representada también la minoría.

Uno de los principios que rige la distribución de los asientos en el Senado de la República es la igualdad política entre las 15 regiones del país. Por ello, 3/5 de los escaños se distribuyen de manera igualitaria, de manera que cada región, con independencia de su número de electores, tendrá un mínimo de dos representantes en el Senado.

Los restantes 20 senadores se elegirán en las regiones con mayor número de electores, evitando que una asignación muy alta a la Región Metropolitana pueda poner en cuestión el carácter esencialmente territorial de la representación en esta Corporación.

En síntesis:

-Se mantiene la elección de dos senadores en las regiones menos pobladas (Tarapacá, Antofagasta, Atacama, Los Ríos, Aysén y Magallanes, agregándose la circunscripción Arica-Parinacota, también con 2 senadores);

-Las regiones de O’Higgins, Coquimbo y Los Lagos pasan de 2 senadores a elegir 3 cada una;

-Las regiones de Valparaíso, Maule, Bio Bio y Araucanía, que hoy día eligen 4, pasarán a elegir 5 senadores cada una;

-Por último, la Región Metropolitana elegirá 7 senadores.

De los 12 nuevos escaños senatoriales, 3 irían a la Región Metropolitana, 2 a la nueva región de Arica y Parinacota, se agregaría uno adicional en cada una de las otras 7 regiones más pobladas. Con esto, la gran mayoría de los senadores (76%) serán electos en circunscripciones de 3, 5 ó 7 escaños.

1. Para la Cámara de Diputados

Se propone una Cámara de Diputados integrada por 155 miembros.

El territorio nacional se divide en distritos plurinominales que eligen un número variable de diputados que se determina en atención al número de electores, propendiendo al mayor logro posible del principio de igualdad de voto, teniendo presente, sin embargo, las siguientes restricciones estructurales; las que se explicitan para efectos de la cabal comprensión de la fórmula:

a) La extensión territorial de los distritos no excederá los márgenes de una Región.

b) Los nuevos distritos se constituyen a partir de la agregación de distritos hoy existentes;

c) La asignación del número de escaños no reducirá, en términos absolutos, la representación que tienen hoy los distintos territorios;

En concreto, la propuesta que estoy presentando establece un total de 28 distritos que eligen entre 3 y 8 diputados cada uno (con un promedio de 5.53). Debo indicar que esta distribución inscribe la formula que se propone en el terreno de los sistemas proporcionales moderados o atenuados.

En el caso de la legislación electoral chilena antes de 1973, los 150 diputados se escogían en base a 27 agrupaciones departamentales (con un promedio de 5.55). El promedio de diputados por distrito, por lo mismo, es muy parecido al que considera este proyecto. La diferencia estriba, sin embargo, en la distribución.. Antes de 1973 existían 4 agrupaciones territoriales que elegían más de 9 diputados (una de ellas elegía 18) y había otras 2 que elegían sólo 2 diputados. Como se ha indicado, la formula que propongo reduce el rango de variación o los límites de distribución, pues todos los distritos eligen entre 3 y 8.

Precisamente en atención a los rasgos descritos es que seguirán existiendo incentivos para que los partidos políticos se agrupen en grandes conglomerados y no se producirá una fragmentación excesiva en la representación política.

De los 35 escaños adicionados a la actual integración de la Cámara, un total de 23 se asignaron para corregir la subrepresentación de los grandes centros urbanos del país (15 a la Región Metropolitana, 4 a la Región de Valparaíso y 4 a la Región del Bío Bío).

Los otros 12 escaños nuevos se asignan, a razón de uno por región, a todas y cada una de las demás regiones del país. No se ha querido, en este punto, discriminar entre esas regiones.

Estoy consciente, por supuesto, que esta decisión atenúa la dirección central de la reforma en el sentido de apuntar a la igualdad del voto. Me parece, sin embargo, que este ajuste está ampliamente justificada por las siguientes razones:

- Al interior de algunas de esas 12 regiones, el distritaje actual castiga una zona en relación a la otra. La adición de un escaño permite corregir ese defecto, sin reducir un diputado a un área geográfica.

- En el caso de otras regiones, de menor población, han pesado consideraciones geopoliticas y de integración nacional. Es el caso de las zonas extremas de nuestra República, tanto en el norte como en el sur. Por lo mismo, Arica y Parinacota, Tarapacá, Aysén y Magallanes quedan con tres diputados, obteniendo una ganancia neta en su cuota de representación.

Estoy convencida, entonces, de la necesidad de conciliar dos aspectos del valor de la igualdad. Por un lado, aquel que toma en cuenta la igualdad en el peso del voto y, por el otro, aquel que busca proporcionar a todos nuestros compatriotas la posibilidad que, tratándose de la Cámara Política, opere una fórmula que permita la representación más cabal y precisa de mayorías y minorías.

1.- Propuestas para aumentar la inclusión y representatividad

a) Se propone que los partidos o pactos puedan presentar hasta un número de candidatos que doble el número de cargos a elegir. Esta idea permitirá aumentar las opciones a disposición de los electores y facilitará la renovación de los representantes.

b) Con el objeto de avanzar hacia un Congreso que represente adecuadamente a hombres y a mujeres, se propone incorporar una cuota de género, requiriendo a cada partido político, integre o no un pacto, que su nómina total de postulantes a la Cámara y al Senado cumpla el requisito de que ningún género esté representado por sobre 3/5 ni por debajo de los 2/5 del total. Esta norma se propone como transitoria, aplicable a las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el entendido que su propósito es romper una situación inicial en la que operan fuertes e invisibles barreras de entrada.

c) Se propone, complementariamente, establecer un mayor aporte fiscal para los partidos en función del número de mujeres que elijan, tanto a la Cámara de Diputados como al Senado, ello para alentarlos a presentar candidatas en territorios donde tengan reales posibilidades de éxito. La norma descrita también se aplicaría transitoriamente a las próximas 4 elecciones parlamentarias.

d) Se establece, finalmente, un mecanismo de actualización de la distribución de escaños que opere cada 12 años, en función de las variaciones en el número de electores de cada territorio.

Paralelamente a esta reforma legal, presentaré un proyecto de reforma constitucional que complementa los contenidos de esta iniciativa. En la referida reforma se propone:

- Establecer que las vacancias que se produzcan, sea por fallecimiento, incapacidad o incompatibilidad sobreviniente, sean provistas por el partido al que pertenecía el parlamentario, con una persona seleccionada por medio de una elección abierta a todos los militantes de esa colectividad y los ciudadanos independientes de la circunscripción o distrito, regulada y administrada por el Servicio Electoral.

- Eliminar la inhabilidad que impide que dirigentes sindicales y gremiales puedan ser candidatos al Parlamento.

Es por todas las consideraciones anteriores, que vengo en presentar el siguiente

PROYECTO DE LEY:

“Artículo Primero.- Modifícase la ley N° 18.700, Orgánica Constitucional de Votaciones Populares y Escrutinios, de la manera que a continuación se señala:

1) Modifícase el artículo 3° bis en el siguiente sentido:

a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, a continuación del inciso primero:

"En las elecciones de Diputados y Senadores, al interior de cada pacto electoral, uno o más partidos políticos podrán subpactar entre sí. También podrán subpactar uno o más partidos políticos con candidatos independientes.".

b) Intercálase el siguiente inciso cuarto, nuevo, a continuación del actual inciso tercero, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo respectivamente:

"En la declaración de candidaturas de cada partido, haya o no pactado, ningún género podrá superar el 60% del total de candidaturas presentadas. La infracción a lo señalado precedentemente, en atención a lo dispuesto en el artículo 2° de la presente ley, acarreará el rechazo de todas las candidaturas del partido que no hayan cumplido con este requisito.".

c) Agrégase, en el inciso final, a continuación de la frase "que hubieren constituido un pacto", la frase "o subpacto".

d) Agrégase, en el inciso final, a continuación de la frase "Se podrá dejar sin efecto un pacto", la frase "o subpacto".

2) Sustitúyese el inciso 1° del artículo 4° por el siguiente:

"En el caso de las declaraciones de candidaturas para la elección de Diputados y Senadores, los partidos políticos o los pactos electorales, podrán incluir para cada distrito o circunscripción hasta el doble de candidatos que corresponda elegir.".

3) Agrégase el siguiente inciso segundo, nuevo, al artículo 18:

"En el mismo plazo para reclamar establecido en el inciso anterior, los partidos o pactos podrán corregir la proporción de sus candidaturas declaradas, ajustándola al porcentaje de género dispuesto en el artículo 3° bis.".

4) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de Parlamentarios, el Tribunal proclamará elegidos a los candidatos, conforme a las reglas establecidas en el procedimiento que a continuación se detalla:

1.-El Tribunal determinará las preferencias emitidas a favor de cada lista y de cada uno de los candidatos que la integran.

2.-Se aplicará el sistema electoral de coeficiente D'Hondt, procediendo de la siguiente manera:

a) Se dividirán los votos de cada lista por uno, dos, tres y así sucesivamente hasta la cantidad de escaños que corresponda elegir.

b) Se ordenarán los números que han resultado de estas divisiones en orden decreciente hasta el numeral correspondiente a la cantidad de escaños que elige cada distrito.

c) A cada lista o pacto electoral, se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b).

Para efectos de la aplicación del coeficiente D'Hont, se considerará como un partido dentro del pacto electoral al conjunto de candidaturas independientes que no sean parte de un subpacto.

3.-En el caso de las listas conformadas por un solo partido político, el Tribunal proclamará electos a los candidatos que hubieren obtenido las más altas mayorías individuales de cada lista de acuerdo a los escaños que le correspondan a cada una de ellas luego de la aplicación descrita precedentemente.

4.-En el caso de los pactos electorales, conformados por dos o más subpactos o partidos, para determinar cuántos cupos le corresponden a cada uno de ellos se aplicarán las siguientes reglas:

a) Se calculará el total de los votos de cada partido político o subpacto.

b) Se dividirá por 1, 2, 3 y así sucesivamente, hasta la cantidad de escaños asignados al pacto electoral.

c) A cada partido o subpacto electoral se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b) de este numeral.

d) El Tribunal proclamará elegidos a los candidatos que hubieren obtenido las más altas mayorías individuales de cada subpacto o partido dentro de un pacto electoral, de acuerdo a los cupos obtenidos por cada uno de ellos.”.

5) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de Diputados que se indica en el artículo siguiente.”.

6) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1° distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos; que elegirá 3 Diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña Colchane, Pica y Pozo Almonte; que elegirá 3 Diputados.

3° distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal; que elegirá 5 Diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen; que elegirá 5 Diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela; que elegirá 7 Diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué; que elegirá 8 Diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca; que elegirá 8 Diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú; que elegirá 8 Diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia; que elegirá 7 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín, La Granja; que elegirá 8 Diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén; que elegirá 6 Diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana; que elegirá 7 Diputados.

13° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo; que elegirá 5 Diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué , San Pedro y Padre Hurtado; que elegirá 6 Diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa; que elegirá 5 Diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones; que elegirá 4 Diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael; que elegirá 7 Diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco; que elegirá 4 Diputados.

19° distrito, constituido por las comunas Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ranquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel; que elegirá 5 Diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana; que elegirá 8 Diputados.

21° distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Alamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Angeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja; que elegirá 5 Diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino; que elegirá 4 Diputados.

23° distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén; que elegirá 7 Diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco; que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas, Los Muermos; que elegirá 4 Diputados.

26° Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena; que elegirá 5 Diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel; que elegirá 3 Diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica; que elegirá 3 Diputados.”.

7) Agrégase el siguiente artículo 179 bis, nuevo:

“Artículo 179 bis.- Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada doce años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior.

En la asignación de las 155 diputaciones, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se ceñirá al siguiente procedimiento:

a) Los primeros 84 escaños se asignarán de modo igualitario entre los 28 distritos, correspondiendo tres diputados a cada uno de ellos, independientemente de su número de electores.

b) Los restantes 71 diputados se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración al número de electores de cada uno de ellos, en base a la última información del Servicio Electoral.

c) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir más de 9 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo de la letra anterior, uno o más distritos superen dicho límite, los escaños excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

d) Para efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente en el tercer día hábil del mes de enero de 2021, de 2033, de 2045 y así cada doce años.

e) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta ocho horas siguientes.

Dentro de los cinco días siguientes a la notificación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral dio aplicación a las letras a), b) o c) de este artículo.

Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de Febrero del año de que se trate. En caso de producirse algún cambio en la distribución de diputados, el texto del artículo 179 de esta ley se entenderá modificado, en lo pertinente, de pleno derecho y se aplicará en su forma así corregida en la elección inmediatamente siguiente.”.

8) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 50 miembros.

Para la elección de los Senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada Circunscripción elegirá el número de Senadores que se indica a continuación.

1a., Circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, elegirá 2 Senadores.

2a. Circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, elegirá 2 Senadores.

3a. Circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, elegirá 2 Senadores.

4a. Circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, elegirá 2 Senadores.

5a. Circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, elegirá 3 Senadores.

6a. Circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, elegirá 5 Senadores

7a. Circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, elegirá 7 Senadores.

8a. Circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, elegirá 3 Senadores.

9a. Circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, elegirá 5 Senadores.

10a. Circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, elegirá 5 Senadores.

11a. Circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, elegirá 5 Senadores.

12a. Circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, elegirá 2 Senadores.

13a. Circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, elegirá 3 Senadores.

14a. Circunscripción, constituida por la XI Región Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, elegirá 2 Senadores.

15a. Circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, elegirá 2 Senadores.”.

9) Derógase el artículo 181.

10) Agrégase el siguiente artículo 23 transitorio, nuevo:

“Art. 23.- La regla especial del inciso cuarto del artículo 3 bis sólo tendrá aplicación en los procesos electorales parlamentarios de 2017, 2021, 2025 y 2029, luego de lo cual dejará de tener vigencia.”.

11) Agrégase el siguiente artículo 24 transitorio, nuevo:

“Art. 24.- Para los efectos de completar la nueva integración del Senado de la República, en las elecciones parlamentarias que deben celebrarse en Noviembre de 2017, corresponderá que se renueven completamente las circunscripciones que corresponden a regiones impares.

En el caso de las circunscripciones que corresponden a las regiones pares y Metropolitana, los parlamentarios elegidos en 2013 seguirán en sus funciones hasta completar su período de ocho años. En las elecciones de 2021, estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde.”.

Artículo 2°.- Agrégase en la ley N° 19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del gasto electoral, el siguiente artículo segundo transitorio, nuevo, pasando a ser el actual artículo transitorio, único, a ser “Artículo primero transitorio”:

“Artículo segundo transitorio.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y solo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hubieren sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a que ellas pertenecieren, tendrán derecho, por cada una de ellas, a un monto adicional para efectos de reembolso de hasta 500 UF.”.

Artículo 3°.- El presente proyecto de ley se financia con cargo a los recursos contemplados en la Ley de Presupuesto para la partida 02 Congreso Nacional.

En lo que respecta al artículo 2° de esta ley se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la ley de presupuesto respectiva.”.

Dios guarde a V.E.,

MICHELLE BACHELET JERIA

Presidenta de la República

RODRIGO PEÑAILILLO BRICEÑO

Ministro del Interior

ALBERTO ARENAS DE MESA

Ministro de Hacienda

XIMENA RINCÓN GONZÁLEZ

Ministra Secretaria General de la Presidencia

1.2. Informe Financiero

Fecha 23 de abril, 2014.

Ministerio de Hacienda Dirección de Presupuestos

Reg. 187-EE 23.04.2014 .

I.F. N° 41

Informe Financiero

Proyecto de Ley que Sustituye el Sistema Electoral Binominal por un Sistema Electoral Proporcional

Mensaje N° 076-362

I.- Antecedentes

El proyecto de ley tiene por objeto sustituir el actual sistema electoral Binominal por un sistema electoral Proporcional, con la finalidad de fortalecer la representatividad en el Congreso Nacional y de esa forma posibilitar el ingreso a dicha Institución de las corrientes más significativas de la sociedad. Para lo anterior, se propone reducir el número de distritos y circunscripciones para que se elijan más escaños en cada uno de ello, favoreciendo el ingreso al Parlamento de sectores de menor votación pero suficientemente significativos de la sociedad.

La propuesta, implica modificar la Ley N° 18.700 Orgánica Constitucional de Votaciones Populares y Escrutinios, aumentando el número de Senadores y Diputados.

Junto a lo anterior, se incluye un artículo que modifica la Ley N° 19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, para dar vida a la propuesta de reembolsar a los partidos políticos, por cada mujer electa como Diputada y Senadora, con UF 500 a partir de las elecciones de! año 2017.

II.- Efecto del Proyecto sobre los Gastos Fiscales El presente proyecto de ley no irrogará un mayor gasto fiscal en lo que respecta a la composición del Parlamento.

No obstante, existirá un mayor gasto por lo dispuesto en el artículo 2°, que a modo ilustrativo considerando las mujeres electas como Parlamentarias en el último proceso eleccionario, habría significado un mayor gasto de UF 10.500 (M$ 250.000 aproximadamente), de haberse aplicado esta norma.

El presente proyecto de ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la Ley de Presupuestos, para la partida 02 Congreso Nacional y en lo que respecta a lo dispuesto en el artículo 2°, se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la respectiva Ley de Presupuestos.

SERGIO GRANADOS AGUILAR

Director de Presupuestos

Visación Subdirección de Presupuestos:

Visación Subdirección de Racionalización y Función Pública

1.3. Oficio Indicaciones del Ejecutivo

Indicaciones del Ejecutivo. Fecha 05 de mayo, 2014. Oficio en Sesión 21. Legislatura 362.

FORMULA INDICACIÓN AL PROYECTO DE LEY QUE SUSTITUYE EL SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UN SISTEMA ELECTORAL PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL. (BOLETÍN N° 9326-07).

Santiago, 5 de mayo de 2014.-

Nº 92-362/

A S.E. EL PRESIDENTE DE H. CÁMARA DE DIPUTADOS

Honorable Cámara de Diputados:

En uso de mis facultades constitucionales, vengo en formular la siguiente indicación al proyecto de ley del rubro, a fin de que sea considerada durante la discusión del mismo en el seno de esa H. Corporación:

AL ARTÍCULO 1º

Para incorporar en el numeral 21° del artículo 179, propuesto en el numeral 6) del proyecto, entre las expresiones “Quilleco,” y “Santa Bárbara,” la expresión “Alto Biobío,”.

Dios guarde a V.E.,

MICHELLE BACHELET JERIA

Presidenta de la República

RODRIGO PEÑAILILLO BRICEÑO

Ministro del Interior y Seguridad Pública

ALBERTO ARENAS DE MESA

Ministro de Hacienda

XIMENA RINCÓN GONZÁLEZ

Ministra Secretaría General de la Presidencia

1.4. Oficio Indicaciones del Ejecutivo

Indicaciones del Ejecutivo. Fecha 01 de julio, 2014. Oficio en Sesión 40. Legislatura 362.

FORMULA INDICACIONES AL PROYECTO DE LEY QUE SUSTITUYE EL SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UN SISTEMA ELECTORAL PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL (Boletín N° 9326-07).

Santiago, 1 de julio de 2014.-

Nº 241-362/

A S.E. EL PRESIDENTE DE LA H. CÁMARA DE DIPUTADOS

Honorable Cámara de Diputados:

En uso de mis facultades constitucionales, vengo en formular las siguientes indicaciones al proyecto de ley del rubro, a fin de que sean consideradas durante la discusión del mismo en el seno de esa H. Corporación:

AL ARTÍCULO PRIMERO

1) Para modificar la letra a) del número 1 del artículo primero del Proyecto en el siguiente sentido:

“a) Intercálese el siguiente inciso segundo, nuevo, a continuación del inciso primero:

“En las elecciones de Diputados y Senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.”.”.

2) Para sustituir la letra b) del número 1) del artículo primero, por la siguiente:

“b) Intercálanse los siguientes incisos cuarto y quinto, nuevos, a continuación del actual inciso tercero, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a Diputado o Senador que hayan declarado los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el 60% del total de candidaturas declaradas a Diputados y Senadores respectivamente. La infracción a lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a Diputados o a Senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.

Para el cálculo de la proporción de hombres y mujeres establecida en el inciso anterior, se excluirán aquellas candidaturas proclamadas por el Tribunal Calificador de Elecciones para la elección definitiva de parlamentarios en los distritos electorales y circunscripciones senatoriales en que se hayan celebrado elecciones primarias, en virtud de lo dispuesto en los artículos 30 y 31 de la ley N° 20.640.”.”.

3) Para sustituir la letra c) del numeral 1) del artículo primero, por la siguiente:

“c) Agréguese en el inciso final, a continuación de la frase “que hubieren constituido un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.”.

4) Para sustituir la letra d) del numeral 1) del artículo primero, por la siguiente:

“d) Agréguese en el inciso final, a continuación de la frase “Se podrá dejar sin efecto un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.”.

5) Para sustituir el número 2) del artículo primero por el siguiente:

“2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 4° por el siguiente:

“En el caso de las declaraciones de candidaturas para la elección de Diputados y Senadores los partidos políticos o pactos electorales podrán presentar en cada distrito o circunscripción un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción de que se trate.”.”.

6) Para intercalar el siguiente numeral 3), nuevo, al artículo primero, pasando el actual numeral 3) como numeral 4), y así sucesivamente:

“3) Reemplázase, en el artículo 10, la cifra “0,5” por la cifra “0,25”.”.

7) Para sustituir el numeral 3), que ha pasado a ser nuevo numeral 4) del artículo primero, por el siguiente:

“4) Sustitúyese el artículo 17 por el siguiente:

“Art. 17. El Consejo del Servicio Electoral, dentro de los diez días siguientes a aquel en que venza el plazo para declaración de candidaturas, deberá dictar una resolución, que se publicará dentro de tercer día en el Diario Oficial, que se pronunciará sobre:

a) La aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidaturas independientes. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 25, 48 y 50 de la Constitución Política de la República, o que se encuentren en alguna de las situaciones previstas en el artículo 57 de la Constitución. Asimismo deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los Párrafos 1° a 3° de este título.

b) La aceptación o rechazo de la totalidad de las declaraciones de candidaturas a Diputado o Senador, según corresponda, declaradas por cada partido político, en conformidad a lo dispuesto en el inciso cuarto y quinto del artículo 3 bis. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a Diputado o a Senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con la proporción de sexos establecida en el inciso cuarto y quinto del artículo 3 bis.

Los partidos políticos cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a Diputado o Senador, según corresponda, fueren rechazadas en conformidad a lo dispuesto en la letra b) de este artículo podrán, dentro de los tres días siguientes a la fecha de la publicación de la resolución a que alude el inciso primero, corregir ante el Servicio Electoral la proporción de sus candidaturas declaradas, retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas, ajustándose al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso cuarto y quinto del artículo 3 bis. Dentro de los cinco días siguientes de vencido este plazo, el Consejo del Servicio Electoral dictará una nueva resolución aceptando o rechazando las declaraciones nuevas y rechazando o aceptando, según proceda, la totalidad de las declaraciones de candidaturas a Diputados o a Senadores, según corresponda, la que deberá ser publicada dentro de tercer día en el Diario Oficial.”.”.

8) Para agregar el siguiente numeral 5), nuevo, a continuación del actual numeral 3) que ha pasado a ser 4), pasando los siguientes numerales a ordenarse correlativamente:

“5) Sustitúyese el artículo 18 por el siguiente:

“Art. 18. Los partidos políticos y los candidatos independientes podrán, dentro de los cinco días siguientes a la publicación de la resolución a la que se refiere el inciso primero del artículo anterior, reclamar ante el Tribunal Calificador de Elecciones por los rechazos de declaraciones fundadas en el incumplimiento de los requisitos establecidos en la letra a) del artículo 17. Este Tribunal fallará en el término de diez días contando desde la interposición del reclamo y su resolución se notificará al Director del Servicio Electoral y a los interesados por carta certificada.

El plazo para interponer la reclamación ante el Tribunal Calificador de Elecciones cuando se funde en incumplimiento de los requisitos de la letra b) del artículo 17, se contará, respecto de los partidos políticos que corrijan ante el Servicio Electoral la proporción de sexos de las declaraciones de candidaturas a Diputado o Senador, desde el día de la publicación de la resolución que dicta el Servicio Electoral en conformidad a lo dispuesto en el inciso final del artículo 17.”.”.

9) Para sustituir el numeral 4), que ha pasado a ser numeral 6) del artículo primero del proyecto, por el siguiente:

“6) Sustitúyase el artículo 109 bis por el siguiente:

“Art. 109 bis.- En el caso de elecciones de Parlamentarios, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme a las reglas establecidas en el procedimiento que a continuación se detalla:

1.- El Tribunal Calificador de Elecciones determinará las preferencias emitidas a favor de cada lista y de cada uno de los candidatos que la integran.

2.- Se aplicará el sistema electoral de coeficiente D´Hondt, procediendo de la siguiente manera:

a) Se dividirán los votos de cada lista por uno, dos, tres y así sucesivamente hasta la cantidad de escaños que corresponda elegir.

b) Se ordenarán los números que han resultado de estas divisiones en orden decreciente hasta el numeral correspondiente a la cantidad de escaños que elige cada distrito electoral o circunscripción senatorial.

c) A cada lista o pacto electoral, se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b).

Para los efectos de la aplicación del coeficiente D´Hondt, se considerará como un partido dentro del pacto electoral al conjunto de candidaturas independientes que no sean parte de un pacto.

3.- En el caso de las listas conformadas por un solo partido político, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará electos a los candidatos que hubieren obtenido las más altas mayorías individuales de cada lista de acuerdo a los escaños que le correspondan a cada una de ellas luego de la aplicación descrita precedentemente.

4.- En el caso de los pactos electorales, para determinar cuántos escaños le corresponden a cada uno de ellos se aplicarán las siguientes reglas:

a) Se calculará el total de los votos de cada partido político o, en su caso, de la suma de cada partido político y las candidaturas independientes asociadas a ese partido.

b) Se dividirá por uno, dos, tres y así sucesivamente, hasta la cantidad de escaños asignados al pacto electoral.

c) A cada partido o, en su caso, a cada partido y las candidaturas independientes asociadas a ese partido se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b) de este numeral.

d) El Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos que hubieren obtenido las más altas mayorías individuales de cada partido o, en su caso, de cada partido considerando las candidaturas independientes asociadas a dicho partido, dentro de un pacto electoral, de acuerdo a los cupos obtenidos por cada uno de ellos.”.”.

10) Para reemplazar la letra b) del actual numeral 7), que ha pasado a ser numeral 9), que agrega el artículo 179 bis, por la siguiente:

“b) Los restantes 71 diputados se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos oficiales proporcionados por el último censo oficial de población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas.”.

AL ARTÍCULO 2°

11) Para sustituir el artículo segundo del proyecto, por el siguiente:

“Artículo 2°.- Modifíquese la ley N° 19.884 sobre Transparencia, Límite y Control de Gasto Electoral, de la manera que a continuación se señala:

1) Sustitúyese en el artículo 4° inciso segundo, sexta línea, la expresión “dos centésimos de Unidad de Fomento”, por la expresión “una centésima de Unidad de Fomento”.

2) Sustitúyese en el artículo 4° inciso tercero, tercera línea, la expresión “tres centésimos de unidad de fomento” por la expresión “uno coma cinco centésimos de Unidad de Fomento.”.

3) Agrégase el siguiente artículo segundo transitorio, nuevo, pasando a ser el actual artículo transitorio, único, a ser Artículo primero transitorio:

“Artículo Segundo Transitorio.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y sólo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a Diputadas y a Senadoras que hubieren sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los Partidos Políticos a que ellas pertenecieren, tendrán derecho, por cada una de ellas, a un monto adicional de 200 UF, para efectos de reembolso. Las candidatas electas, por su parte, tendrán derecho a un monto adicional de 300 UF, para efectos de este reembolso.”.”.

12) Para agregar el siguiente artículo 3°, nuevo, pasando el actual artículo 3° a ser artículo 4°:

“Artículo 3°.- Modifícase la ley N° 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos, de la siguiente manera:

1) Sustitúyese en el inciso 1° del artículo 6° la cifra “0,5” por la cifra “0,25”.

2) Sustitúyese el inciso 1° del artículo 7°, por el siguiente:

“Cumplidos los requisitos a que se refieren los artículos 5° y 6°, y reunido el número de afiliados a que alude este último artículo en una de las Regiones en que se divide políticamente el país, se solicitará al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos. La solicitud deberá ser firmada por el presidente y por el secretario del partido en formación.”.

3) Sustitúyese el numeral 2 del artículo 42, por el siguiente:

“2°.- Por no alcanzar, en la Región en que está legalmente constituido, el dos coma cinco por ciento (2,5%) de los sufragios válidamente emitidos en la última elección de diputados. En el caso de los partidos que se encuentren inscritos en más de una Región, la disolución procederá cuando no hayan alcanzado el indicado umbral del dos coma cinco por ciento (2,5%) en más de la mitad de dichas Regiones.”.

4) Sustitúyese el inciso final del artículo 42, por los siguientes incisos:

“No obstante, si un partido político incurriere en la situación prevista en el número 2° de este artículo, pero eligiere al menos dos parlamentarios, sean Diputados o Senadores, conservará su calidad de tal.

Si incurriere en la situación prevista en el número 4° en una o más Regiones, pero mantuviere el mínimo de ellas exigido por la ley, conservará su calidad de tal, pero no podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2° en aquellas donde su número de afiliados hubiere disminuido en más de un cincuenta por ciento. El Director de Servicio Electoral anotará esta circunstancia al margen de la respectiva inscripción en el Registro de Partidos Políticos.”.”.

Dios guarde a V.E.,

RODRIGO PEÑAILILLO BRICEÑO

Vicepresidente de la República

MAHMUD ALEUY PEÑA Y LILLO

Ministro del Interior y Seguridad Pública (S)

ALBERTO ARENAS DE MESA

Ministro de Hacienda

XIMENA RINCÓN GONZÁLEZ

Ministra Secretaría General de la Presidencia

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Ministerio de Hacienda

Dirección de Presupuestos Reg 03/AA

IF N° 41 23-04-2014

IF N° 063 02-07-2014

INFORME FINANCIERO COMPLEMENTARIO

Indicación al Proyecto de Ley que sustituye el Sistema Electoral Binominal por un Sistema Electoral Proporcional.

Mensaje N°241-362

Boletín n° 9326-07

Antecedentes

La presente indicación agrega un artículo segundo transitorio nuevo, pasando a ser el actual Artículo Transitorio único, Artículo Primero Transitorio.

En este artículo segundo transitorio se establece que para los efectos del reembolso por cada candidata mujer electa en las elecciones parlamentarias de los años 2017, 2021, 2025,2029, la distribución de las UF 500 se realizará de la siguiente forma:

UF 200 para los partidos políticos a los que pertenezcan;

UF 300 para las candidatas electas

Esta indicación no irroga gasto fiscal adicional a lo informado en el IF N° 41 de fecha 23 de abril del presente año

SERGIO GRANADOS AGUILAR

Director de Presupuestos

1.5. Oficio Indicaciones del Ejecutivo

Indicaciones del Ejecutivo. Fecha 09 de julio, 2014. Oficio

FORMULA INDICACIONES AL PROYECTO DE LEY QUE SUSTITUYE EL SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UN SISTEMA ELECTORAL PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL (Boletín N°9326-07).

Santiago, 09 de julio de 2014.-

Nº263-362/

A S.E. EL PRESIDENTE DE LA H. CÁMARA DE DIPUTADOS

Honorable Cámara de Diputados:

En uso de mis facultades constitucionales, vengo en formular las siguientes indicaciones al proyecto de ley del rubro, a fin de que sean consideradas durante la discusión del mismo en el seno de esa H. Corporación:

AL ARTÍCULO PRIMERO

1) Para agregar, al final de la letra b) del número 1) del artículo primero, a continuación del punto final de dicho literal, que ahora pasa a ser punto seguido, la siguiente expresión:

“Asimismo, para el cálculo de la proporción de hombres y mujeres establecida en el inciso anterior, si dicho resultado no diese un número entero, deberá aproximarse al entero inmediatamente superior.”.

2) Para sustituir, en el inciso segundo de la letra c) del numeral 2.- del artículo 109 bis propuesto en el numeral 4) que ha pasado a ser numeral 6) del artículo primero del proyecto, la expresión “que no sean parte de un pacto.”, por la expresión “que sean parte de dicho pacto y no estén asociadas a un partido político.”.

3) Para agregar, en el numeral 4), que ha pasado a ser numeral 6), el siguiente inciso final al artículo 109 bis propuesto:

“En caso de empate entre candidatos de una misma lista o entre candidatos de distintas listas, que a su vez estuviesen empatadas, el Tribunal Calificador de Elecciones procederá, en audiencia pública, a efectuar un sorteo entre ellos, procediendo a proclamar elegido al que salga favorecido.”.

4) Para reemplazar, en el numeral 7), que ha pasado a ser 9), que agrega el artículo 179 bis, la frase “cada doce años” del literal d) de dicho artículo propuesto, por la frase “cada diez años”.

5) Para eliminar, en el número 7), ahora número 9) del artículo primero del proyecto, la letra a) del artículo 179 bis propuesto, pasando la letra b) a ser letra a) y así sucesivamente.

6) Para reemplazar, en el actual numeral 7) que ha pasado a ser 9), la que ha pasado a ser letra a) del artículo 179 bis propuesto, por la siguiente:

“a) Los 155 Diputados se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial del población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consiste en distribuir a prorrata los escaños entre los distritos electorales, aplicándose el método dispuesto en el artículo 109 bis de la presente ley.”.

7) Para intercalar, en el numeral 7) que ha pasado a ser 9), la actual letra c) que ha pasado a ser b) del artículo 179 bis propuesto, entre las expresiones “podrá elegir” y “más de 9 diputados.” la expresión “menos de 3 diputados, ni”.

8) Para sustituir, en el actual numeral 7) que ha pasado a ser 9), la actual letra d) que ha pasado a ser c), del artículo 179 bis propuesto, por el siguiente:

“c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente en el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al año del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con el año de en que se celebran elecciones de Diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente en el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.”.

9) Para agregar, el siguiente numeral 14), nuevo:

“14) Agréguese el siguiente artículo 25 transitorio, nuevo:

“Art. 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral, a que se refiere el artículo 179 bis, se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.”.”.

Dios guarde a V.E.,

MICHELLE BACHELET JERIA

Presidenta de la República

RODRIGO PEÑAILILLO BRICEÑO

Ministro del Interior y Seguridad Pública

ALBERTO ARENAS DE MESA

Ministro de Hacienda

XIMENA RINCÓN GONZÁLEZ

Ministra Secretaria General de la Presidencia

1.6. Oficio Indicaciones del Ejecutivo

Indicaciones del Ejecutivo. Fecha 11 de julio, 2014. Oficio en Sesión 48. Legislatura 362.

RETIRA INDICACIÓN QUE INDICA AL PROYECTO DE LEY QUE SUSTITUYE EL SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UN SISTEMA ELECTORAL PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL (Boletín N° 9326-07).

Santiago, 11 de julio de 2014

Nº 280-362/

A S.E. EL PRESIDENTE DE LA H. CÁMARA DE DIPUTADOS

Honorable Cámara:

En virtud de mis atribuciones constitucionales, vengo en retirar la indicación número 11), formulada al artículo 2° del mensaje Nº 241-362, de 1 de julio de 2003.

Dios guarde a V.E.

MICHELLE BACHELET JERIA

Presidenta de la República

RODRIGO PEÑAILILLO BRICEÑO

Ministro del Interior y Seguridad Pública

ALBERTO ARENAS DE MESA

Ministro de Hacienda

XIMENA RINCÓN GONZÁLEZ

Ministra Secretaria General de la Presidencia

1.7. Oficio Indicaciones del Ejecutivo

Indicaciones del Ejecutivo. Fecha 14 de julio, 2014. Oficio en Sesión 48. Legislatura 362.

FORMULA INDICACIONES AL PROYECTO DE LEY QUE SUSTITUYE EL SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UN SISTEMA ELECTORAL PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL (Boletín N°9326-07).

Santiago, 14 de julio de 2014.-

Nº281-362/

A S.E. EL PRESIDENTE DE LA H. CÁMARA DE DIPUTADOS

Honorable Cámara de Diputados:

En uso de mis facultades constitucionales, vengo en formular las siguientes indicaciones al proyecto de ley del rubro, a fin de que sean consideradas durante la discusión del mismo en el seno de esa H. Corporación:

AL ARTÍCULO 2°

- Para sustituir el artículo segundo del proyecto, por el siguiente:

“Artículo 2°.- Modifíquese la ley N° 19.884 sobre Transparencia, Límite y Control de Gasto Electoral, de la manera que a continuación se señala:

1) Sustitúyese en el artículo 4° inciso segundo, sexta línea, la expresión “dos centésimos de Unidad de Fomento”, por la expresión “una centésima de Unidad de Fomento”.

2) Sustitúyese en el artículo 4° inciso tercero, tercera línea, la expresión “tres centésimos de unidad de fomento” por la expresión “uno coma cinco centésimos de Unidad de Fomento.”.

3) Agrégase el siguiente artículo segundo transitorio, nuevo, pasando a ser el actual artículo transitorio, único, a ser Artículo primero transitorio:

“Artículo Segundo Transitorio.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y sólo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a Diputadas y a Senadoras que hubieren sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los Partidos Políticos a que ellas pertenecieren tendrán derecho a un monto de 500 UF, por cada una de ellas.”.”.

Dios guarde a V.E.,

MICHELLE BACHELET JERIA

Presidenta de la República

RODRIGO PEÑAILILLO BRICEÑO

Ministro del Interior y Seguridad Pública

ALBERTO ARENAS DE MESA

Ministro de Hacienda

XIMENA RINCÓN GONZÁLEZ

Ministra Secretaria General de la Presidencia

1.8. Oficio Indicaciones del Ejecutivo

Indicaciones del Ejecutivo. Fecha 22 de julio, 2014. Oficio en Sesión 49. Legislatura 362.

FORMULA INDICACIÓN AL PROYECTO DE LEY QUE SUSTITUYE EL SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UN SISTEMA ELECTORAL PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL (Boletín N° 9326-07).

_______________________________

SANTIAGO, 22 de julio de 2014.-

Nº 312-362/

A S.E. EL PRESIDENTE DE LA H. CÁMARA DE DIPUTADOS

Honorable Cámara de Diputados:

En uso de mis facultades constitucionales, vengo en formular la siguiente indicación al proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por un sistema electoral proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del congreso nacional, a fin de que sea considerada durante la discusión del mismo en el seno de esa H. Corporación:

AL ARTÍCULO 2°

Agréguese el siguiente literal d) al artículo 2° del Proyecto, con el siguiente texto:

“Agréguese el siguiente artículo tercero transitorio, nuevo, con el siguiente texto:

“Artículo Tercero Transitorio.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025, y 2029, las candidatas a Senadoras y Diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley, de 0,0100 de Unidades de Fomento, por cada voto obtenido por cada candidata a Diputada o Senadora.”.”

Dios guarde a V.E.

MICHELLE BACHELET JERIA

Presidenta de la República

RODRIGO PEÑAILILLO BRICEÑO

Ministro del Interior y Seguridad Pública

ALBERTO ARENAS DE MESA

Ministro de Hacienda

XIMENA RINCÓN GONZÁLEZ

Ministra Secretaria General de la Presidencia

1.9. Informe de Comisión de Constitución

Cámara de Diputados. Fecha 23 de julio, 2014. Informe de Comisión de Constitución en Sesión 51. Legislatura 362.

INFORME DE LA COMISIÓN DE CONSTITUCIÓN, LEGISLACIÓN Y JUSTICIA RECAIDO EN EL PROYECTO DE LEY QUE SUSTITUYE EL SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UN SISTEMA ELECTORAL PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL.

__________________________________________________________________

BOLETÍN N° 9.326-07-1

HONORABLE CÁMARA:

La Comisión de Constitución, Legislación y Justicia viene en informar, en primer trámite constitucional y primero reglamentario, el proyecto de la referencia, originado en un mensaje de S.E. la Presidenta de la República.

Para el despacho de esta iniciativa, S.E. la Presidenta de la República ha hecho presente la urgencia la que ha calificado de “simple” para todos sus trámites constitucionales, motivo por el cual esta Cámara cuenta con un plazo de 30 días para afinar su tramitación, término que vence el día 23 de agosto próximo por haberse dado cuenta de la urgencia en la Sala el día 24 de julio, recién pasado.

Durante la discusión de este proyecto de ley, vuestra Comisión contó con la asistencia del Ministro del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo Peñailillo Briceño; de la Ministra de la Secretaría General de la Presidencia, señorita Ximena Rincón González; del Ministro Secretario General de Gobierno, señor Álvaro Elizalde Soto; de la Ministra Directora del Servicio Nacional de la Mujer, señora Claudia Pascual Grau; de la Subsecretaria del Ministerio Secretaría General de la Presidencia, señora Patricia Silva Meléndez y el asesor legislativo del Ministerio del Interior, señor Rodrigo González.

CONSTANCIAS REGLAMENTARIAS PREVIAS.

1) La idea matriz o fundamental del proyecto es la de sustituir el sistema electoral binominal por uno proporcional inclusivo y fortalecer la representatividad del Congreso Nacional.

2) Normas de carácter orgánico constitucional.

Se encuentran en esta situación las siguientes disposiciones del proyecto de ley en informe:

a) Artículo 1°, que introduce modificaciones a la ley N°18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios.[1] Esta norma debe ser aprobada con el voto conforme de las tres quintas partes de los diputados y senadores en ejercicio, de conformidad con lo dispuesto en el inciso segundo de la disposición decimotercera de la Constitución Política de la República.

b) El artículo 2°, que introduce modificaciones a la ley N°19.884, sobre Transparencia, Límite y Control de Gasto Electoral.[2] Este artículo debe ser aprobado con el voto conforme de las cuatro séptimas partes de los diputados y senadores en ejercicio, de conformidad con lo dispuesto en el inciso segundo del artículo 66 de la Constitución Política de la República.

c) El artículo 3°, que introduce modificaciones a la ley N°18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos.[3] Esta norma debe ser aprobada con el voto conforme de las cuatro séptimas partes de los diputados y senadores en ejercicio, de conformidad con lo dispuesto en el inciso segundo del artículo 66 de la Constitución Política de la República.

3) Normas de quórum calificado.

No hay.

4) Requiere trámite de Hacienda.

Si.

5) El proyecto fue aprobado, en general, por mayoría.

En sesión 16ª, de 20 de mayo de 2014, se aprobó en general por 9 votos a favor y 4 en contra.

Votaron por la afirmativa los diputados señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Monckeberg, don Cristián; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Votaron por la negativa la diputada señora Turres, doña Marisol y los diputados señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Urrutia, don Osvaldo.

5) Se designó Diputado Informante al señor Rincón, don Ricardo.

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I.- ANTECEDENTES GENERALES.

1.- Consideraciones previas.

Señala el mensaje que el Congreso Nacional de Chile es una institución fundamental de la democracia chilena. En nuestro Congreso Nacional deben manifestarse los anhelos del Pueblo. Constituye el principal foro para los debates de nuestra democracia. Es allí donde deben discutirse nuestras diferencias y gestarse los verdaderos acuerdos nacionales.

Añade que, contradiciendo nuestra tradición republicana, la dictadura del general Pinochet diseñó un Congreso Nacional jibarizado en sus atribuciones y damnificado, además, por un sistema de elección excluyente. A pesar de importantes reformas logradas en las últimas dos décadas, sigue existiendo una brecha entre el Congreso Nacional que tenemos y el que Chile desea y necesita.

La existencia del sistema electoral binominal es uno de los factores que afecta negativamente la representatividad de nuestro parlamento. Éste es un juicio que comparte una parte ampliamente mayoritaria del país.

Agrega el mensaje que, en relación a esta materia, y durante la legislatura pasada, se produjo un valioso acercamiento de posiciones entre los sectores de la entonces oposición y Renovación Nacional. Esa convergencia tuvo el efecto concreto de eliminar, finalmente, el guarismo 120 del texto de la Constitución Política, mediante la ley N° 20.725.

Hoy tenemos la gran oportunidad de profundizar ese camino, dejando definitivamente atrás el sistema electoral binominal e impulsar un conjunto de reformas que terminen por darle a nuestro Congreso Nacional toda la fortaleza y prestancia que se merece.

Este proyecto, en todo caso, no parte de cero. El Ejecutivo ha considerado atentamente todos los estudios que sobre el particular se han publicado en las últimas décadas. Destaca, particularmente, los resultados de la Comisión Especial que, por iniciativa de la Presidenta Bachelet, encabezó Edgardo Böeninger el año 2006.

Menciona el mensaje que, en su redacción, se han tomado en cuenta, también, todos los muchos proyectos de ley que se han presentado en el pasado. Allí están, como antecedente muy importante, los mensajes que, en su oportunidad, presentaron los ex Presidentes Aylwin, Frei y Lagos. También ha habido sobre este asunto numerosas mociones. Sin pretender exhaustividad, menciona a muchos de los parlamentarios y Parlamentarias y ex parlamentarios que han dado patrocinio a proyectos de ley que apuntaban en la misma dirección de esta iniciativa.

Entre los H. Senadores cabe recordar a las señoras Isabel Allende y Lily Pérez y a los señores Francisco Chahuán, Eugenio Tuma, Patricio Walker, Carlos Cantero, Carlos Bianchi, Antonio Horvath, Ricardo Lagos Weber, Jaime Quintana, Juan Pablo Letelier, Alberto Espina, Fulvio Rossi y el ex senador señor Carlos Larraín.

Entre los H. Diputados, menciona el mensaje, especialmente a los señores Pedro Araya (hoy senador), Pepe Auth, Pedro Browne, Aldo Cornejo, Felipe Harboe (hoy senador), Gustavo Hasbún, Fernando Meza, Cristián Monckeberg, Nicolás Monckeberg, Ricardo Rincón, Alberto Robles, Marcelo Schilling, Carlos Montes (hoy senador), Guillermo Tellier y a los ex diputados señores Gabriel Ascencio y Jorge Burgos.

Añade el mensaje que, como se puede apreciar al revisar el listado de patrocinantes, el empeño por sustituir el sistema electoral binominal constituye un objetivo muy transversal que convoca a líderes de muy distintas filiaciones políticas.

Finaliza señalando que, en lo inmediato, esta convergencia se expresó con mucha fuerza durante el año 2013 con ocasión de las reflexiones y debates al interior de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento del Senado.

2.- Objetivos y contenido del mensaje.

A.- Objetivos del cambio en el sistema electoral.

Señala el mensaje que son seis, a lo menos, los objetivos que inspiran la fórmula que se propone:

a) Reducir la desigualdad del voto.

La diferencia de valor del voto en Chile, según el lugar donde se emite, es demasiado alta y obstaculiza la igualdad del voto. No se puede emprender una reforma sin reducir significativamente esta desigualdad inaceptable en cualquier democracia.

Todo esfuerzo de igualación del valor del voto hace imprescindible incrementar el número de diputados y senadores del país, para no verse obligados al imposible de disminuir la representación de algunos territorios escasamente poblados.

Chile tenía en 1973 una Cámara de 150 diputados y un Senado de 50 miembros, con mucho menos de la mitad de electores que hoy día. Con esos números, el rediseño de distritos y circunscripciones permitiría reducir de manera muy significativa la desigualdad actual del valor del voto entre ciudadanos de distintos territorios. La propuesta considera, además, que los distritos correspondientes a zonas extremas en el Norte y en el Sur Austral merecen un criterio especial de sobrerrepresentación, más allá de su población electoral, todo ello en razón de propugnar su mayor integración.

b) Permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas

La vía para posibilitar el ingreso al Congreso Nacional de las corrientes más significativas de la sociedad es la de reducir el número de distritos y circunscripciones para que se elijan más escaños en cada uno de ellos. Sólo así podrán ingresar al Parlamento sectores de menor votación pero suficientemente significativos de la sociedad, que sin duda merecen estar representados, y la democracia se completará y fortalecerá con su participación. Tanto más escaños del total de diputados se elijan en distritos grandes, menor será la barrera de ingreso al Parlamento y mayor será la inclusión.

c) Aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos.

Se busca que los electores recuperen totalmente la decisión respecto de quiénes son sus representantes, para lo cual es indispensable que todas las formaciones políticas puedan concursar con sus propios candidatos y que las grandes competencias internas en los partidos y entre partidos se resuelvan de cara a la ciudadanía en las mismas elecciones. Esto se logra definiendo distritos que elijan un número mayor de diputados, pero también permitiendo que las listas electorales presenten más candidatos que los que se eligen en cada territorio electoral.

Con ello crecerán la competencia y la incertidumbre respecto de quiénes serán electos y la norma general será que siempre algún sector político resultará ganador de la elección como resultado de la competencia, lo que motivará una mayor participación electoral, que hoy es voluntaria.

d) Facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías.

Con la conformación de un sistema de distritos y circunscripciones que mayoritariamente eligen un mínimo de tres parlamentarios y en su mayoría cinco a ocho, se propende a que la ventaja de votos de un sector sobre otro se traduzca en ventaja equivalente en la representación parlamentaria. Al mismo tiempo, se asegura que en todos los territorios la minoría tenga también expresión parlamentaria.

e) Promover un Congreso que refleje la diversidad de la sociedad.

Se requiere un sistema electoral que aliente a los partidos políticos y a los pactos a presentar a la ciudadanía nóminas de candidatos que reflejen toda la diversidad ideológica, de género, edad, origen étnico, social y cultural del país. Esto, junto con la representación de todas las corrientes políticas, es el mejor antídoto contra el distanciamiento ciudadano de la política. Así el Congreso Nacional recupera vigor como lugar de encuentro y debate de todos los puntos de vista y posiciones relevantes en la sociedad.

Los distritos que elijan más diputados y listas que puedan presentar más candidatos, permitirán aplicar una ley de cuotas que obligue a las listas a presentar elencos de candidatos con la proporción de mujeres que se determine necesaria para cambiar la desigual representación de género que tiene hoy el Congreso Nacional.

f) Evitar que queden fuera candidatos con grandes votaciones

Uno de los defectos más visibles del sistema electoral binominal es que candidatos con altas votaciones (sobre 20 o 25%) pueden quedar fuera del Congreso, provocando gran frustración de sus electores.

En distritos que mayoritariamente eligen 5 o más escaños, esto pasa a ser imposible y queda como probabilidad excepcional sólo en un pequeño número de distritos que elije 3 ó 4 escaños.

B.- Contenidos de la propuesta de reforma electoral.

a) Principios.

El proyecto se inscribe en el contexto de la tradición republicana chilena, en el sentido que cada una de las Cámaras responderá, principalmente, a un principio de representación particular. En el caso del Senado, el criterio básico es el equilibrio entre los distintos territorios. Tratándose de la Cámara de Diputados, el principio rector debe ser la igualdad en el voto de todos los chilenos.

Como se verá, no se trata, sin embargo, de principios que se apliquen de modo absoluto. De esta manera, el criterio del equilibrio territorial no obsta a que, en el Senado, se consulte –de manera complementaria- una mayor representación relativa para las zonas más pobladas.

Por otra parte, en cuanto a la Cámara de Diputados, el proyecto propone conciliar el principio de igualdad de voto con el propósito de no castigar en demasía la representación política de las zonas extremas del territorio.

b) Para el Senado.

La Cámara Alta elegirá 50 senadores y cada región pasará a ser una sola circunscripción. Cinco de las regiones mantienen el número actual de 2 senadores a elegir, mientras las otras 10 lo aumentan, reduciendo así la desmesurada desigualdad en el valor del voto según el lugar donde se emita, permitiendo que se exprese la mayoría y que siempre esté representada también la minoría.

Uno de los principios que rige la distribución de los asientos en el Senado de la República es la igualdad política entre las 15 regiones del país. Por ello, 3/5 de los escaños se distribuyen de manera igualitaria, de manera que cada región, con independencia de su número de electores, tendrá un mínimo de dos representantes en el Senado.

Los restantes 20 senadores se elegirán en las regiones con mayor número de electores, evitando que una asignación muy alta a la Región Metropolitana pueda poner en cuestión el carácter esencialmente territorial de la representación en esta Corporación.

En síntesis:

- Se mantiene la elección de dos senadores en las regiones menos pobladas (Tarapacá, Antofagasta, Atacama, Los Ríos, Aysén y Magallanes, agregándose la circunscripción Arica-Parinacota, también con 2 senadores);

- Las regiones de O’Higgins, Coquimbo y Los Lagos pasan de 2 senadores a elegir 3 cada una;

- Las regiones de Valparaíso, Maule, Bio Bio y Araucanía, que hoy día eligen 4, pasarán a elegir 5 senadores cada una;

- Por último, la Región Metropolitana elegirá 7 senadores.

De los 12 nuevos escaños senatoriales, 3 irían a la Región Metropolitana, 2 a la nueva región de Arica y Parinacota, se agregaría uno adicional en cada una de las otras 7 regiones más pobladas. Con esto, la gran mayoría de los senadores (76%) serán electos en circunscripciones de 3, 5 ó 7 escaños.

c) Para la Cámara de Diputados.

Se propone una Cámara de Diputados integrada por 155 miembros.

El territorio nacional se divide en distritos plurinominales que eligen un número variable de diputados que se determina en atención al número de electores, propendiendo al mayor logro posible del principio de igualdad de voto, teniendo presente, sin embargo, las siguientes restricciones estructurales; las que se explicitan para efectos de la cabal comprensión de la fórmula:

i) La extensión territorial de los distritos no excederá los márgenes de una Región.

ii) Los nuevos distritos se constituyen a partir de la agregación de distritos hoy existentes;

iii) La asignación del número de escaños no reducirá, en términos absolutos, la representación que tienen hoy los distintos territorios;

En concreto, la propuesta que estoy presentando establece un total de 28 distritos que eligen entre 3 y 8 diputados cada uno (con un promedio de 5.53). Debo indicar que esta distribución inscribe la fórmula que se propone en el terreno de los sistemas proporcionales moderados o atenuados.

En el caso de la legislación electoral chilena antes de 1973, los 150 diputados se escogían en base a 27 agrupaciones departamentales (con un promedio de 5.55). El promedio de diputados por distrito, por lo mismo, es muy parecido al que considera este proyecto. La diferencia estriba, sin embargo, en la distribución. Antes de 1973 existían 4 agrupaciones territoriales que elegían más de 9 diputados (una de ellas elegía 18) y había otras 2 que elegían sólo 2 diputados. Como se ha indicado, la fórmula que propongo reduce el rango de variación o los límites de distribución, pues todos los distritos eligen entre 3 y 8.

Precisamente en atención a los rasgos descritos es que seguirán existiendo incentivos para que los partidos políticos se agrupen en grandes conglomerados y no se producirá una fragmentación excesiva en la representación política.

De los 35 escaños adicionados a la actual integración de la Cámara, un total de 23 se asignaron para corregir la subrepresentación de los grandes centros urbanos del país (15 a la Región Metropolitana, 4 a la Región de Valparaíso y 4 a la Región del Bío Bío).

Los otros 12 escaños nuevos se asignan, a razón de uno por región, a todas y cada una de las demás regiones del país. No se ha querido, en este punto, discriminar entre esas regiones.

Agrega el mensaje que, existe el convencimiento que esta decisión atenúa la dirección central de la reforma en el sentido de apuntar a la igualdad del voto. Sin embargo, este ajuste está ampliamente justificado por las siguientes razones:

- Al interior de algunas de esas 12 regiones, el distritaje actual castiga una zona en relación a la otra. La adición de un escaño permite corregir ese defecto, sin reducir un diputado a un área geográfica.

- En el caso de otras regiones, de menor población, han pesado consideraciones geopolíticas y de integración nacional. Es el caso de las zonas extremas de nuestra República, tanto en el norte como en el sur. Por lo mismo, Arica y Parinacota, Tarapacá, Aysén y Magallanes quedan con tres diputados, obteniendo una ganancia neta en su cuota de representación.

Es por ello, añade el mensaje, que existe el convencimiento de la necesidad de conciliar dos aspectos del valor de la igualdad. Por un lado, aquel que toma en cuenta la igualdad en el peso del voto y, por el otro, aquel que busca proporcionar a todos nuestros compatriotas la posibilidad que, tratándose de la Cámara Política, opere una fórmula que permita la representación más cabal y precisa de mayorías y minorías.

d) Propuestas para aumentar la inclusión y representatividad.

i) Se propone que los partidos o pactos puedan presentar hasta un número de candidatos que doble el número de cargos a elegir. Esta idea permitirá aumentar las opciones a disposición de los electores y facilitará la renovación de los representantes.

ii) Con el objeto de avanzar hacia un Congreso que represente adecuadamente a hombres y a mujeres, se propone incorporar una cuota de género, requiriendo a cada partido político, integre o no un pacto, que su nómina total de postulantes a la Cámara y al Senado cumpla el requisito de que ningún género esté representado por sobre 3/5 ni por debajo de los 2/5 del total. Esta norma se propone como transitoria, aplicable a las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el entendido que su propósito es romper una situación inicial en la que operan fuertes e invisibles barreras de entrada.

iii) Se propone, complementariamente, establecer un mayor aporte fiscal para los partidos en función del número de mujeres que elijan, tanto a la Cámara de Diputados como al Senado, ello para alentarlos a presentar candidatas en territorios donde tengan reales posibilidades de éxito. La norma descrita también se aplicaría transitoriamente a las próximas 4 elecciones parlamentarias.

iv) Se establece, finalmente, un mecanismo de actualización de la distribución de escaños que opere cada 12 años, en función de las variaciones en el número de electores de cada territorio.

Finalmente, añade el mensaje que, paralelamente a esta reforma legal, se presentará un proyecto de reforma constitucional que complementa los contenidos de esta iniciativa. En la referida reforma se propondrá:

- Establecer que las vacancias que se produzcan, sea por fallecimiento, incapacidad o incompatibilidad sobreviniente, sean provistas por el partido al que pertenecía el parlamentario, con una persona seleccionada por medio de una elección abierta a todos los militantes de esa colectividad y los ciudadanos independientes de la circunscripción o distrito, regulada y administrada por el Servicio Electoral.

- Eliminar la inhabilidad que impide que dirigentes sindicales y gremiales puedan ser candidatos al Parlamento.

II.- DISCUSIÓN GENERAL Y PARTICULAR DEL PROYECTO.

1.- Debate previo.

Cabe hacer presente que, como bien señala el mensaje, la reforma al sistema electoral, específicamente en lo que se refiere al binominal, ha sido objeto de un profundo estudio e intenso debate en el seno de vuestra Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, a través de la tramitación de numerosos proyectos de ley, iniciados en mensaje o en moción.

En ese sentido, a fin de enriquecer el contenido de la historia de la ley, es que se transcribe a continuación, una síntesis de las opiniones vertidas en esa valiosa discusión:

A.- Ex Presidente de la República, señor Ricardo Lagos Escobar.

Hizo presente que los sistemas electorales tienen por objeto representar adecuadamente a los ciudadanos en sus preferencias.

Añadió que la democracia es por esencia representativa. Dependerá de las características de la sociedad la forma en cómo se representa las diversas preferencias ciudadanas.

Expresó que a diferencia de lo que ocurre en aquellos países donde existen sólo dos grandes partidos, en nuestro país, a partir del año 1850 es posible constatar la existencia de al menos seis tendencias mayoritarias.

Recordó que el primer esfuerzo para modificar el sistema electoral se produjo el año 1870. El Parlamento de aquella época sufría un extraordinario intervencionismo del Poder Ejecutivo, que nombraba a los Intendentes y éstos a los Alcaldes, quienes administraban el sistema electoral. Por ello plantearon las siguientes reformas:

- Establecer nuevamente el carácter secreto del voto;

- Que el voto pueda ser acumulativo. Al respecto recordó que hasta esa fecha los diputados se elegían por listas, de modo que la que resultaba ganadora se hacía de todos los cargos; y

- La creación de circunscripciones por conjunto de provincias, ya que hasta esa fecha la circunscripción del Senador alcanzaba a todo el país.

Durante las negociaciones que se produjeron por esos años, la oposición demandaba la acumulación del voto. Finalmente se optó por acumular los votos en el caso de los diputados y votar por listas en el caso de los Senadores.

En ese entonces se exigía un cierto nivel de renta para contar con derecho a sufragio. Por ello, Manuel Antonio Matta exigió establecer la siguiente presunción de derecho: todo aquel que sabe leer y escribir se presume cuenta con la renta suficiente para votar. De esta forma se buscaba ampliar el ejercicio del derecho a sufragio.

A partir del año 1891 se instaura en el país un régimen parlamentario, que subsistió hasta el año 1920, cuando Arturo Alessandri plantea el establecimiento de una nueva Constitución Política, con el fin de dar término al parlamentarismo. Para ello convocó a una Asamblea Constituyente, la que conformó una Comisión de “58 hombres buenos”, que representaban a todo el espectro político.

La Constitución de 1925 consagró el sistema proporcional

Destacó que en las elecciones que se llevaron a cabo el año 1925 resultó elegido como diputado independiente por el distrito de Santiago, el señor Jorge Alessandri Rodríguez , quien obtuvo votos suficientes para elegir a cuatro diputados.

Concluyó que en una perspectiva histórica, el sistema electoral proporcional ha sido el que siempre se ha aplicado en el país

Continuando con su repaso por la historia de Chile en esta materia, recordó que el llamado “Bloque de Saneamiento Democrático”, opositor al Gobierno del Presidente Ibáñez, exigió se implementara la obligatoriedad de la inscripción en los registros electorales. Para ello se estableció que la cédula de identidad no tendría valor si no se exhibía conjuntamente con la inscripción en los registros electorales

Al respecto hizo presente que el Presidente Jorge Alessandri Rodríguez , el año 1962 dispuso que la cédula de identidad no tuviera valor alguno si no se acreditaba haber sufragado en la última elección.

Destacó que si hubiera existido un debate democrático real en el país jamás se habría aprobado un sistema electoral como el que rige hoy

Hizo un llamado a consensuar un sistema que permita procesar las diferencias entre los partidos. Ello supone medir adecuadamente las diversas tendencias que existen en la sociedad, situación que no ocurre hoy. Más aún, se han registrado prácticas del todo inconvenientes al amparo del actual sistema binominal

En la práctica el verdadero competidor del candidato es su compañero de lista, con excepción de aquellos pocos distritos donde es posible doblar a la otra lista

Hizo presente que pequeños cambios en las votaciones que se producen al interior de las coaliciones, generan efectos devastadores. A vía de ejemplo, recordó que el año 1997, la Democracia Cristiana alcanzó un 29% de los sufragios, eligiendo 9 senadores. Por su parte, el sub pacto Partido Socialista, Partido por la Democracia y Partido Radical alcanzó un 21% eligiendo sólo un senador. Sin embargo, el año 2003 se produjo la situación inversa

En este mismo sentido, señaló que en la última elección parlamentaria, la Unión Demócrata Independiente obtuvo en la elección de diputados cinco puntos más que Renovación Nacional. Con esa escasa diferencia, el primero tiene el doble de diputados respecto del segundo

Preguntó si es razonable un sistema electoral de esta naturaleza

Recordó que a raíz de los resultados que se produjeron en la primera elección parlamentaria, Renovación Nacional se constituyó en el partido más grande de la oposición de la época. Informó que con tales resultados electorales, fue invitado a conversar por representantes de la Unión Demócrata Independiente para estudiar la posibilidad de establecer un sistema proporcional

Añadió que el sistema electoral que nos rige, así como los sesenta distritos en que se divide el país, se establecieron con posterioridad al plebiscito del año 1988, una vez que ya se conocían los resultados del mismo

Manifestó que algunos diputados en ejercicio tuvieron alguna vinculación con lo que sucedía por aquellos años, de modo que podrían ilustrar a la Comisión cuáles fueron los criterios que se tuvieron a la vista a la hora de confeccionar los distritos

Recalcó que no conoce un sistema electoral donde el voto de cinco ciudadanos sea equivalente al de un ciudadano. Ello es lo que ocurre hoy con los actuales distritos

Todo sistema electoral que se precie de cumplir con el principio de igualdad ante la ley, no alcanza a tener la relación de uno a dos

En virtud de lo expuesto, consideró fundamental en el debate que se desarrolla el rehacer los distritos

Recordó que la Constitución de 1925 establecía el número de 147 diputados, teniendo el primer distrito de la provincia de Santiago 15 diputados y los otros tres distritos cinco cada uno

Asimismo, se establecía que los distritos se ajustarían automáticamente cada diez años, una vez que se aprobara el censo por el Congreso Nacional. La solución que hallaron los parlamentarios de la época, para que no se efectúe un redistritaje consistió en no aprobar los censos.

Por ello, comparte la propuesta de una de las mociones, en orden a efectuar tal redistritaje después de un período, para que posteriormente ello ocurra de manera automática

Consideró que los distritos actuales son igual de perversos que el sistema binominal, porque la representatividad del voto de los ciudadanos difiere según cuál sea el distrito en que sufraga

Manifestó que existen tres elementos centrales en el debate: El sistema electoral, la forma en que se hicieron los distritos y los altos quórums que se requieren para reformar la Constitución

Afirmó que entendía que se exigieran quórums especiales para ello. Destacó que en el derecho comparado se ha establecido que una reforma constitucional aprobada en una legislatura debe ser refrendada por la legislatura siguiente

Con todo, destacó que los quórums establecidos para reformar la Constitución y las leyes orgánicas constitucionales, son de tal entidad, lo que sumado a un sistema electoral que tiende al empate de las fuerzas políticas, hace muy difícil llevar a cabo reformas de envergadura

Informó que en dos oportunidades ha propuesto como una medida inicial para terminar con el sistema binominal, que cada partido presente tantos candidatos como cargos a elegir.

Manifestó que las negociaciones políticas que genera el sistema binominal provocan rechazo en la ciudadanía. Públicamente las coaliciones han concordado, en reiteradas oportunidades, en colocar un candidato débil como compañero de lista de uno fuerte, de modo de asegurar a este último su elección. Más aún, en ocasiones se ha llegado al extremo de llevar un solo candidato, como ocurrió con el ex Almirante Arancibia

Recordó que el año 1989 se efectuó la primera negociación entre el Gobierno y la oposición de la época. En esa oportunidad se logró eliminar el artículo 8° de la Constitución, se redujo el período presidencial de ocho a cuatro años, se eliminó la facultad presidencial de disolver la Cámara de Diputados, entre otras enmiendas

Sin embargo, manifestó que la Constitución de 1980 tenía un vacío: uno de los pocos Títulos de la Carta Fundamental que tenía quórum bajo era el de la reforma constitucional. En consecuencia, un Parlamento por mayoría absoluta podía cambiar el quórum de dicho Capítulo y abrir de esa forma, la llave para reformar la Constitución

Tal fórmula era un poco riesgosa. Por ello, la primera exigencia del Gobierno de la época fue aumentar el quórum del Capítulo de la reforma a la Constitución

A medida que las negociaciones fueron avanzando, confluyeron los puntos de vista de la Concertación con los de Renovación Nacional. Casi al finalizar las mismas, la piedra de tope que debieron enfrentar Patricio Aylwin y Sergio Onofre Jarpa , fue la oposición del Ministro del Interior de la época, señor Carlos Cáceres , a modificar el sistema electoral.

Junto con ello se solicitó terminar con la institución de los senadores designados. Lo único que se obtuvo fue un aumento de las circunscripciones, de modo de disminuir la relevancia de los senadores que no fueron elegidos en forma democrática

Hizo presente que en ese momento correspondía terminar con las negociaciones que se habían iniciado .No obstante, se convino en un acuerdo de caballeros, que los votos de los diputados y senadores de la Concertación y de Renovación Nacional estarían disponibles para efectuar las correspondientes modificaciones

Tal acuerdo fue ratificado en la casa de don Ricardo Rivadeneira. Éste participó en las llamadas “negociaciones técnicas” y efectuó un esfuerzo sincero para poder cumplir con el citado compromiso. Destacó que hace veintitrés años está esperando que Renovación Nacional cumpla lo acordado.

Asimismo, destacó los esfuerzos realizados durante los Gobiernos de los ex Presidentes Aylwin y Frei. En este sentido, hizo presente que se ha dicho que durante su Gobierno permaneció impasible en La Moneda, sin impulsar iniciativa alguna para modificar el sistema electoral. Al respecto recordó que en abril del año 2000 solicitó al Presidente del Senado, el Senador Andrés Zaldívar, que organizara un grupo de trabajo en el que participaran todos los sectores políticos, a fin de procurar alcanzar un acuerdo en materia de reformas constitucionales, de modo de poder contar con una Constitución Política que pueda superar los estándares democráticos. Para ello resultaba necesario terminar con el sistema electoral binominal y con los llamados “enclaves autoritarios”

Dos días después que diera la conferencia de prensa efectuando el mencionado llamado al Presidente del Senado, dirigentes de la UDI manifestaron que sus ideas apuntaban en un sentido diametralmente opuesto, por lo que no participarían de la citada Comisión

Ante tal negativa, utilizó la tribuna más importante con la que cuenta un Presidente de la República, esto es, los mensajes que se dirigen al Congreso Pleno. En cuatro de los seis mensajes formuló un llamado explícito a terminar con el sistema electoral binominal. En uno de ellos sostuvo que este sistema era un cáncer que corroía la Democracia chilena y que no estaba acorde con nuestras tradiciones

Al final de su período, se constituyeron grupos de trabajo en el Parlamento, en los que participaba en representación del Ejecutivo el Ministro del Interior de la época, señor José Miguel Insulza. Fruto de ese trabajo se terminaron prácticamente todos los enclaves autoritarios. Por ello aceptó reformular la Constitución, hacer un solo cuerpo con todas las modificaciones y poner su firma en ella.

Sin embargo, no fue posible terminar con el sistema electoral binominal. En esa oportunidad expresó que no firmaría una reforma constitucional si el sistema electoral binominal se mantenía en ella. En virtud de lo expuesto se acordó sustraer el sistema electoral de la Constitución y trasladarlo a una ley orgánica constitucional, fijando para su modificación los mismos quórums que se requieren para una reforma constitucional

Destacó que en el discurso que emitió cuando se promulgó la Constitución hizo expresa mención que “esa Constitución pasaba el test democrático”. Ello no significa que comparte todo lo que esa Constitución establece. No es lo mismo que la Carta Fundamental consagre un rol subsidiario o activo por parte del Estado. Estimó que después de la crisis económica mundial que se ha debido enfrentar, resulta aún más clara la importancia del Estado en este ámbito. Sin embargo, sostuvo que el hecho que nuestra Constitución fije un rol subsidiario del Estado no la hace menos democrática, por obsoleta que considere esa posición

Reiteró que el sistema binominal no es democrático y debe ser modificado

Recordó que junto con promulgar la nueva Constitución, envió al Congreso Nacional, con fecha 19 de diciembre de 2005, un proyecto de reforma constitucional, que establecía un sistema proporcional, representativo de los ciudadanos y que considere las necesidades de las diversas regiones del país

Ese proyecto fijaba un plazo de dos años para dictar la ley electoral respectiva, sin los quórums a los que se refirió anteriormente. Fue ingresado con discusión inmediata. En la Comisión se aprobó el día 20 de diciembre por siete votos a favor y cinco en contra. Al día siguiente fue votado en la Sala, donde se registró una mayoría a favor del proyecto. 59 diputados votaron a favor, hubo 39 abstenciones y un voto en contra. Sin embargo, por no alcanzar el quórum necesario, el proyecto fue rechazado

Ante ello, hizo uso de la opción que permite el artículo 68 de la Constitución y recurrió al Senado. Desgraciadamente, en la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia del Senado, los senadores Chadwick , Larraín y Espina resolvieron que la facultad que el citado artículo concede al Presidente de la República sólo se aplicaba a los proyectos de ley y no a los proyectos de reforma constitucional, declarando inadmisible su petición, por tres votos contra dos.

El Presidente del Senado de la época, señor Sergio Romero , compartió la opinión emitida por aquella Comisión, por lo que se procedió al archivo del proyecto.

Ante tal situación recurrió al Tribunal Constitucional, quien falló en su favor, en sentencia de fecha 6 de agosto del año 2006

Desde aquella fecha, su proyecto de reforma constitucional se encuentra “durmiendo” en el Senado, aunque ahora hay senadores que desean reactivarlo

Explicó que efectuó este relato en respuesta a los dichos de un Presidente de partido, quien sostuvo que “Lagos estuvo seis años en La Moneda y nada hizo para terminar con el sistema binominal”

El actual sistema electoral ha incidido en la pérdida de legitimidad del sistema político. Ello ocurre cuando un sector minoritario ejerce su derecho a veto en función de los siguientes elementos: El sistema binominal, el distritaje y los quórums

Destacó que cualquiera sea la naturaleza del proyecto de ley, se suele exigir “un peaje” para aprobarlo. Cuando el ex Presidente Frei envió un proyecto de ley para implementar la jornada escolar completa, era necesario mantener el IVA, impuesto que por esa fecha debía disminuir. La oposición de la época condiciono el apoyo a la mantención del IVA siempre que se estableciera que los colegios particulares subvencionados también tendrían derecho a los recursos fiscales. De lo contrario, no se aprobaría la iniciativa

Lo mismo ocurrió cuando envió al Congreso Nacional el proyecto de ley que implementaba el AUGE, iniciativa que consideraba la existencia de un fondo común, el que debió ser eliminado. Hizo presente que el Presidente Piñera convocó a una Comisión para actualizar el AUGE. Ésta por mayoría de votos estimó indispensable que exista un Fondo Común, tal como lo planteaba el proyecto de ley enviado durante su mandato.

Recalcó que en una democracia lo sano es que el gobernante de turno pueda ejecutar su programa, porque tiene la mayoría necesaria en el Parlamento. En los veinte años de gobiernos de la Concertación la mayoría no se pudo hacer valer, por el veto ejercido desde el Parlamento

Por último, respecto de la propuesta de convocar a una Asamblea Constituyente, sostuvo que cuando una instancia de esa naturaleza se conforma, no existe un grupo que se beneficie con el statu quo, porque se parte desde “cero”. Cuando los estudiantes proponían terminar con el binominal, lo hacían porque ello permitirá con una legislación más adecuada

Destacó que en un sistema electoral que conduce al “empate” se realza la importancia de los llamados “díscolos”. Informó que en reiteradas oportunidades tuvo que llamarlos por teléfono, a fin de procurar ordenar a su coalición. Con este sistema electoral “el que tiene mantiene”, lo que hace aún más difícil su modificación, porque en definitiva se estará reformando el sistema que le ha permitido al diputado o senador conservar su escaño parlamentario

Manifestó que se requiere un gran coraje para imitar lo obrado por las Cortes en España, donde a la muerte de Franco se estableció que el Parlamento siguiente sería una Asamblea Constituyente, la que redactó una Constitución partiendo desde “cero”

En nuestro país se ha optado por un camino diverso. Sin embargo, estimó inviable que 23 años después se continúe ejerciendo el derecho a veto sobre el sistema electoral, que juega un rol esencial en la representatividad de las autoridades

Destacó la importancia de la invención de la imprenta y el desarrollo de los periódicos en la Revolución Francesa. Dado que la ciudadanía estaba informada, tenían derecho a participar en las decisiones de la nación

Enfatizó que lo ocurrido con la llamada “primavera árabe” y con las redes sociales, hará que la forma en que se entenderá nuestra democracia futura sea diversa a la actual

Los avances tecnológicos están permitiendo regresar al concepto de Democracia de Atenas, donde los líderes emitían y recibían opiniones y donde todos escuchaban y opinaban. Gracias a las nuevas tecnologías de la información, todos somos emisores y receptores. En consecuencia, el ejercicio de delegar el voto en un representante ante el Congreso Nacional permite hacerle presente a éste en qué puntos de su gestión lo apoya y en cuáles no

Hizo presente que en algunos países se permite derogar una ley aprobada por el Parlamento a través de un plebiscito

En este mismo sentido, mencionó lo que ocurre con el partido pirata de Alemania. En éste sus militantes no se conocen, ya que sólo interactúan a través de twitter. Este partido ha alcanzado más del seis por ciento de la votación en los distritos donde ha participado

Uno de sus dirigentes era un profesor universitario que había alcanzado altos niveles de apoyo, a partir de sus opiniones en las redes sociales. Sin embargo, el votar de una determinada forma un proyecto de ley, le significó la pérdida de la mayoría de los votos que había obtenido al interior de su partido. Con la misma facilidad que había alcanzado una importante mayoría, ésta le fue arrebatada

En este sentido, expresó que deben crearse instituciones capaces de recoger los cambios que ha experimentado el mundo

El primero de los temas que debe tratarse es el cambio del sistema electoral

El Parlamento de 1870 fue capaz de avanzar en la libertad electoral y en los sistemas representativos. Más adelante, el Bloque de Saneamiento Democrático fue capaz de introducir la cédula única para terminar con el cohecho. Años después el Congreso Nacional también fue capaz de introducir el voto obligatorio. Estimó que hoy es posible pasar a un sistema electoral más representativo

Consultado acerca si el cambio a un sistema de inscripción automática con voto voluntario generará mayores incentivos a modificar el sistema binominal, o bien, el cambio mencionado es neutro para estos efectos, señaló que la inscripción automática es un avance importante. Sin embargo, advirtió que no constituye un incentivo para concurrir a votar la sensación ambiente que existe, en orden a que cualquiera sea la votación, el resultado será siempre un empate, lo que ahora es más grave, ya que el sufragio es voluntario. Afortunadamente, la elección parlamentaria se realiza conjuntamente con la presidencial, donde no se puede producir un empate

Reiteró que como Presidente de la República se manifestó a favor del voto voluntario. No obstante, ha cambiado de opinión, ya que ahora prefiere que el voto sea obligatorio. El votar implica una responsabilidad con el país

Frente a la consulta acerca de que materias debieran tener quórums especiales, señaló que sólo debieran exigirse quórums más altos para modificar la Constitución. Sugirió establecer para ello la mayoría absoluta de dos parlamentos sucesivos. Ello permite consultar a la ciudadanía sobre la reforma aprobada

Consultado acerca de cómo mantener una adecuada representación de las regiones, afirmó que la proporcionalidad debe ser entendida de dos maneras. En primer lugar, proporcionalidad respecto del número de ciudadanos que se requiere para ser elegido parlamentario, la que hoy no existe. Hoy algunos requieren quintuplicar los votos que necesitan otros para ser elegidos diputados, por la forma en que se confeccionaron los distritos. Recordó que éstos se hicieron de forma tal de favorecer a quienes estuvieron por la opción Si en el plebiscito de 1988

En segundo lugar, la proporcionalidad dice relación con la forma en que se representarán las diversas tendencias que existen en la sociedad

Hoy existen al menos siete partidos políticos con representación parlamentaria. Hizo presente que en nuestra historia siempre han existido dos partidos en la derecha, uno o dos en el centro y un par en la izquierda. Hay que buscar un sistema que refleje esa pluralidad y no uno que agrupe a los partidos existentes en dos coaliciones

El sistema electoral vigente obliga a los partidos a realizar una negociación espantosa por los cupos a ojos de la ciudadanía, a fin de procurar que todos resulten representados

Consideró importante que exista inscripción automática, una ley de primarias y que haya más candidatos que cupos por llenar en el Parlamento

En algún momento se planteó el permitir que existan tantos candidatos como partidos existen y que posteriormente resulten elegidos quienes integren las listas que alcancen más votos. Sin embargo, algunos se opusieron al interior de la Concertación, haciendo presente su dificultad para tener candidatos

Hizo presente que estos temas no corresponde resolverlos con “la calculadora en la mano”

Frente a la consulta acerca de cómo la ausencia de capacidad para efectuar modificaciones relevantes afecta la legitimidad de las instituciones, indicó que se debe llegar a un sistema electoral que refleje la riqueza y diversidad de los distintos partidos políticos que existen. En este sentido, recalcó que el sistema binominal constituye una camisa de fuerza, que obliga a que sólo postulen dos candidatos por coalición, lo que apunta en una dirección opuesta a lo que ha ocurrido históricamente en nuestro país

B.- Decano de la Facultad de Derecho de la Universidad de Las Américas, señor Patricio Zapata.

Señaló que no vale la pena hablar de un buen sistema electoral o del mejor que pueda haber, en abstracto, si no se aterriza el análisis en nuestro país en el contexto actual, por lo que sí cabe reflexionar en torno a cuál sería un buen sistema electoral para Chile hoy. A su juicio, cumpliría con esta condición aquél que satisfaga los siguientes requerimientos:

a) Ser valorado positivamente y considerado legítimo por la opinión pública;

b) dar cuenta de las tradiciones y costumbres políticas del pueblo, y

c) proveer bienes que se estiman valiosos para la comunidad.

Indicó que si bien no es posible descartar a priori la posibilidad de que exista un sistema electoral mayoritario que cumpla con estos requisitos, es posible afirmar que el actualmente vigente no lo hace. En efecto, aun cuando la ciudadanía carece de un conocimiento cabal del asunto, no lo valora positivamente, a la vez que no da cuenta de las costumbres y tradición política chilena, ni proporciona bienes que son esencialmente importantes en términos de competitividad y dinamismo del sistema político. A partir de ello, concluyó que el binominal no es un buen sistema electoral para Chile hoy.

Manifestó que, en general, es importante distinguir dos cuestiones:

i) El derecho de todo ciudadano a tener un voto igual en la elección de los representantes en la Cámara política, de modo que el voto tenga el mismo peso independientemente de la ubicación geográfica del que sufraga, lo que se trasunta en una exigencia del derecho constitucional contemporáneo y en un derecho fundamental. En los países, se establecen umbrales máximos de desproporción aceptables, superados los cuales se contemplan medidas drásticas de corrección. Así, en Francia, el Consejo Constitucional tiene la facultad de invalidar un sistema si existe una desproporción significativa en el peso de los electores en los distintos distritos, pues, por ejemplo, no puede haber un distrito con 100.000 electores y otro que sólo tenga 50.000. Es habitual, entonces, que los países cuenten con sistemas de redistribución de escaños periódicos, definidos, con la participación de organismos técnicos, que funcionan en base al censo, que en el caso de Chile, estuvo contemplado en la Constitución de 1925, pero no se implementó. En ella, se hablaba de un parlamentario por cada cierto número de individuos y fracción superior a 15.000. Precisó que, normalmente, en la segunda Cámara no se exige el cumplimiento de una proporcionalidad y así, en Estados Unidos, se eligen dos senadores tanto en California como en Rhode Island, aun cuando la diferencia es abismante en lo que respecta a la cantidad de electores.

ii) La conveniencia o no de propender a que exista proporcionalidad entre votos de partidos y escaños, lo que es asunto de política pública, opinable y discutible, pero no involucra un derecho fundamental. Indicó que este tema ha sido abordado en forma relevante a lo largo de la historia de Chile y, de hecho, el primer Congreso Nacional fracasó por los intentos de los habitantes de la ciudad de Santiago de aumentar unilateralmente su representación a doce diputados, en circunstancias que según el acta convocatoria de la Primera Junta de Gobierno le correspondía elegir sólo a seis, lo que provocó enérgicas protestas de Bernardo O’ Higgins, entonces diputado por Laja , a quien le parecía importante la forma de distribuir los escaños, así como también la reacción del Coronel Tomás de Figueroa, cuyo temor por esta decisión, que consideraba una maniobra para aumentar el poder de los exaltados en ese primer Congreso, fue una de las motivaciones para encabezar el golpe de febrero de 1811.

Comentó que en el primer Senado se manifestó una preocupación por establecer una cierta proporcionalidad. Así, en el Reglamento Constitucional de 1812, se establecía que el Senado estaría compuesto por siete individuos, reelegibles, que durarían tres años en sus cargos. Asimismo, se señalaba que esta Cámara era representativa, correspondiendo dos a cada una de las provincias de Coquimbo y Concepción, y tres a la de Santiago

Relató que bajo la Constitución de 1833, se aumentó el número de diputados, eligiéndose, de acuerdo con el artículo 19, uno por cada veinte mil almas, y por una fracción que no bajara de diez mil (doce mil, en 1874). Así, en 1834, hubo 57 diputados (siete por Santiago, tres por San Fernando , dos por Rancagua , dos por Talca y 25 uninominales); en 1867, hubo 96 diputados (ocho por Santiago; cinco por Rancagua); en 1874, con el voto acumulativo, hubo 108 diputados (diez por Santiago) y en 1912, se aumentó el número a 118 (trece por Santiago y siete por Valparaíso). Se evidencia, así, que correspondía a las zonas con más población, elegir a un mayor número de diputados. El Senado, por su parte, se componía de veinte senadores, elegidos por electores especiales, que se nombraban por departamentos en número triple del de diputados al Congreso que correspondía a cada uno y en la forma que establecía la ley de elecciones. No obstante, tras la reforma constitucional de 1874, el Senado se compuso de miembros elegidos en votación directa por provincias, correspondiendo a cada una elegir un senador por cada tres diputados y por una fracción de dos Diputados. Así, en 1876, había 34 senadores, de los cuales cuatro eran elegidos por Santiago, y en 1921, esa cantidad ascendía a 37, de los cuales seis representaban a la capital.

En tanto, bajo la Constitución de 1925, se establecía que en las elecciones de diputados y senadores se debía emplear un procedimiento que diera por resultado en la práctica una efectiva proporcionalidad en la representación de las opiniones y los partidos políticos. La Cámara de Diputados se componía de miembros elegidos por departamentos o por las agrupaciones de departamentos colindantes, dentro de cada provincia, que estableciera la ley, en votación directa y en la forma que determinase la ley de elecciones, correspondiendo elegir un diputado por cada treinta mil habitantes y por una fracción que no bajase de quince mil. Se optó en esa época por escaños agrupados en distritos plurinominales, con un par de distritos binominales en la Cámara de Diputados. Así, en 1926, hubo 132 diputados (18 correspondían al primer distrito de Santiago); en 1933, se eligieron 143; en 1961, 147 y en 1973, 150. A partir de la reforma constitucional de 1874, se utilizó el sistema de la cifra repartidora establecido en la ley electoral, para reemplazar al de voto acumulativo vigente bajo la Constitución de 1833

Por su parte, según el artículo 40 de la Carta Fundamental, el Senado se componía de miembros elegidos en votación directa por las nueve -diez desde 1969- agrupaciones provinciales que fijaba la ley, en atención a las características e intereses de las diversas regiones del territorio de la República. A cada agrupación correspondía elegir cinco senadores. Dicha norma constituye un anticipo del concepto legal de región, que se introduce en nuestra estructura administrativa en 1974, absorbiendo a las provincias. En consecuencia, la representación del Senado no era de individuos, sino de regiones

Señaló que bajo la Constitución de 1980, se establece que la Cámara de Diputados está integrada por 120 miembros elegidos por los distritos electorales que establezca la ley orgánica constitucional respectiva. Por su parte, el Senado, antes de la reforma constitucional de 2005, se integraba con miembros elegidos en votación directa por cada una de las trece regiones del país, correspondiendo a cada región elegir dos senadores en la forma que determinase la ley orgánica constitucional respectiva, debiendo integrarse también por ex Presidentes y nueve senadores designados. Tras la citada reforma, se estableció que el Senado se compone de miembros elegidos en votación directa por circunscripciones senatoriales, en consideración a las regiones del país, encomendando a la ley orgánica constitucional respectiva la determinación del número de senadores, las circunscripciones senatoriales y la forma de su elección. A su vez, el artículo decimotercero transitorio prescribe que la ley orgánica constitucional que determina el número de senadores, circunscripciones y forma de elección requiere del voto conforme de los 3/5 de los diputados y senadores en ejercicio

Sostuvo que se han efectuado varios estudios respecto de la forma en que se resolvió el sistema electoral que se utiliza en la actualidad y la distribución de los distritos, entre los que destacan una publicación del profesor Ricardo Gamboa , en la Revista de Estudios Políticos de la Universidad Católica de Chile y una tesis del profesor Daniel Pastor, en que se realiza un seguimiento del trabajo llevado a cabo en la comisión de estudios de las leyes orgánicas constitucionales entre 1982 y 1988, concluyéndose que la decisión de establecer un sistema electoral binominal obedeció a la idea de propender a la existencia de dos grandes fuerzas políticas. Se disputan la autoría del sistema el profesor Carlos Cruz Coke y el abogado Arturo Marín , que aparece entrevistado en la publicación del profesor Gamboa , donde explica los argumentos que se tuvieron en consideración para implementarlo. Se sostiene, además, que el diseño de los distritos cambió luego del plebiscito de 1988, ya que se reasignaron diez diputados de acuerdo con los resultados obtenidos en distintas zonas. Precisó que el primer diseño se dio a conocer en un evento académico organizado por el Instituto de Ciencias Políticas de la Universidad Católica.

A modo de conclusión, hizo presente que desde muy temprano, Chile ha buscado dar un peso equivalente al sufragio de los ciudadanos, independientemente del lugar que habiten. Destacó que desde 1925, se han diferenciado los principios de representación de ambas Cámaras. Mientras cada diputado representa un número aproximadamente equivalente de habitantes, los senadores representan zonas. En este sentido, resulta discutible que en el proyecto de reforma constitucional impulsado por el entonces Presidente de la República, don Ricardo Lagos , a fines de 2005, se contemplara una norma que no permitía tal distinción, al indicar al legislador que debía buscar una proporcionalidad de ideas y de regiones en ambas Cámaras. Ello resultaba confuso, pues es imposible representar en forma simultánea proporcionalmente a los habitantes y equitativamente, a las regiones, a menos que se establezca que una Cámara representa a los ciudadanos y la otra, a las regiones.

Igualmente, hizo notar que, luego de adoptar sistemas electorales mayoritarios durante las primeras décadas de vida republicana, desde 1874 en adelante, Chile optó por sistemas proporcionales, siempre en la modalidad de distritos plurinominales, lo que ha tenido gran importancia en nuestra historia. Planteó que hasta 1874, la ley electoral permitía a las mayorías el dominio incontrarrestable de las Cámaras, sobre todo en el Senado, donde se elegían los senadores por listas completas. En ese contexto, valoró la visión de la clase política, que por esos años discutió la posibilidad de implementar un sistema electoral diferente. Resaltó, en particular, la clarividencia del Partido Conservador Católico, en cuyas manos estaba el gobierno, encabezado por don Federico Errázuriz , quien acabó por dar la espalda a dicho partido y expulsar a los conservadores de su administración. No obstante, un año antes de que ello se produjera, dicho conglomerado político votó a favor del sistema de voto acumulativo, que permitió a las minorías opositoras tener acceso al Congreso. Gracias a esta reforma de 1874, el mencionado partido, ya fuera del gobierno, logró tener representación parlamentaria, y lo propio sucedió con el Partido Radical, lo cual permitió que se comenzara a dibujar el paisaje político multicolor de nuestra república. Trajo a colación que el entonces capitán de fragata Arturo Prat Chacón , en su memoria de grado, elogió la reforma constitucional de 1874, en cuanto posibilitó la representación proporcional de las distintas ideas, sin duda bajo el influjo de su tío, don Jacinto Chacón , quien fuera diputado liberal. Este sistema y el de cifra repartidora, después de 1925, permitieron la expresión de cinco o seis corrientes políticas relevantes, con un ligero premio para las más fuertes y con la posibilidad de ingreso al sistema de partidos emergentes (ej. la Falange Nacional). Afirmó que, sin duda, estas opciones institucionales contribuyeron a asegurar la presencia, y consolidación de varias subculturas políticas, fenómeno que ha caracterizado la cultura política nacional.

En relación con la proporcionalidad, señaló que un sistema electoral es proporcional cuando tiende estructuralmente a producir una cierta equivalencia entre el porcentaje total de los sufragios que obtiene una fuerza política y el porcentaje total de escaños que ella consigue en definitiva. Sin embargo, el solo hecho que bajo un sistema se produzcan resultados relativamente proporcionales no lo califica, per se, como sistema proporcional. El resultado anotado puede deberse al efecto de circunstancias políticas contingentes o de pactos u omisiones a nivel de la oferta de candidatos. En efecto, un sistema mayoritario puede arrojar resultados proporcionales, como ocurrió durante la República de Weimar, en Alemania, que estaba dividida en distritos uninominales, no obstante lo cual los resultados de las elecciones daban cuenta de que las fuerzas políticas estaban representadas en forma equivalente en el Reichstag, por cuanto se trataba de un sistema uninominal, en que los ciudadanos estaban distribuidos a lo largo del territorio, concentrándose en zonas, intereses socioeconómicos y creencias religiosas distintos, con lo que había 100 diputados del Centro Católico; 100, de la Social Democracia; 80 del Partido Nacional Alemán. Los primeros eran elegidos en las zonas católicas de Alemania (Renania y Bavaria); los segundos en las urbes del centro, y los terceros en la zona de Prusia. Una configuración similar ha impedido que en el Reino Unido, que tiene un sistema mayoritario, el partido que gane las elecciones obtenga el 90% de los escaños. En efecto, el sur de Inglaterra ha sido hegemónicamente conservador durante los últimos ochenta años, mientras el norte es laborista, gracias a lo cual el partido político que logra diez puntos de ventaja sobre el segundo no consigue arrasar en la representación parlamentaria

Dio a conocer que hace 35 años, Carolina Ferrer y Jorge Russo efectuaron una simulación sobre lo que habría ocurrido en nuestro país si se hubiese establecido un sistema mayoritario uninominal, para resolver los problemas de falta de competencia. Pese a los problemas metodológicos y limitaciones que presenta el ejercicio, referido a los años 1961, 1965 y 1969, en supuestos de elecciones con pactos incluidos, éste arrojó los siguientes resultados:

- En 1961, el entonces Frente Democrático (centroderecha, que aglutinaba a los conservadores, liberales y radicales, que apoyaban a don Jorge Alessandri) , se habrían quedado con el 96,4% de los escaños y la Izquierda Marxista, con el 3,6% restante. La Democracia Cristiana, pese a contar con el 16% de los votos en la elección de esa época, se habría quedado sin representación parlamentaria.

- En 1965, la Democracia Cristiana habría obtenido el 71% de los escaños, y la centroderecha, el 14%, al igual que la Izquierda Marxista

- En 1969, la Izquierda Marxista se habría quedado con el 86,2% de los escaños; la Democracia Cristiana, con el 10,3% y la centroderecha con el 3,4%

Indicó que, de acuerdo con este ejercicio, los resultados no difieren mucho si se consideran elecciones sin pactos para esos mismos años. En consecuencia, afirmó que un sistema uninominal, que en algunos escenarios puede producir una apariencia de proporcionalidad, en otros contextos culturales o históricos puede producir el efecto de que el ganador se quede con todo. Especificó que debe tenerse en cuenta que si se ha instalado este sistema, los actores políticos se comportan de modo tal de evitar este tipo de resultado, por lo que se tenderá a formar alianzas y celebrar acuerdos

Planteó que se ha sostenido que el sistema binominal sería proporcional en consideración a los resultados electorales obtenidos a partir de su implementación. Existen estudios, como el del profesor Eugenio Guzmán , del Instituto Libertad y Desarrollo, que destacan la proporcionalidad de este sistema, pero ello no ha sido posible sino gracias a los acuerdos, pactos, negociaciones, omisiones. Los partidos negocian los cupos en las listas teniendo en cuenta los porcentajes de votación y los dirigentes realizan para ello un ejercicio de ingeniería, el cual no es necesariamente bien valorado por la opinión pública ni por los propios partidos, con lo que se consigue que un sistema que no ha sido estructuralmente diseñado para ser proporcional, acabe siéndolo.

Dio a conocer que la proporcionalidad puede ser

a) Estricta, por la vía de crear un distrito nacional único, como en Israel, donde el 1% de los votos corresponde al 1% de los escaños, o bien, de contar con un sistema de distritos plurinominales donde se elijan más de ocho diputados por distrito, como sucede en algunos países de América Latina

b) Corregida, en un sistema de doble voto, como en Alemania, donde pese a la proporcionalidad estricta, el que obtiene menos del 5% queda fuera

c) Moderada, como sucede en un sistema de distritos plurinominales donde se elijan cinco, seis o siete diputados por distrito

La proporcionalidad será estricta o moderada en un sistema de distritos plurinominales, según la magnitud de los distritos

Manifestó que mientras los sistemas proporcionales estrictos garantizan representación equivalente a todas las fuerzas políticas y los proporcionales corregidos garantizan representación equivalente a todas las fuerzas políticas que superen un umbral mínimo, los proporcionales moderados establecen condiciones que hacen posible la representación, aunque no necesariamente equivalente, de minorías significativas (de un 10% nacional para arriba)

Expresó que la magnitud de los distritos, esto es, la definición del número de parlamentarios que elige cada distrito, es el criterio clave para evaluar el grado de proporcionalidad de un sistema. Si todos o la mayoría de los distritos plurinominales eligen dos, tres, cuatro, o cinco parlamentarios estaremos ante una proporcionalidad bajísima. Si se combinan distritos que eligen tres, cuatro o cinco parlamentarios y otros distritos que elijan siete o más parlamentarios, se obtiene un sistema que arrojará típicamente proporcionalidad moderada. Si todos los distritos plurinominales eligen siete o más parlamentarios, el sistema se acerca naturalmente a la proporcionalidad estricta. Sólo puede hablarse seriamente de proporcionalidad si existe un porcentaje razonable de distritos que elija siete o más parlamentarios, o dicho en otras palabras, que al menos el 25% de los escaños sean alcanzables por fuerzas del 10% de los votos. Si todos los distritos eligen cuatro por distrito, no cabe hablar, seriamente, de proporcionalidad, aun cuando, obviamente, esa fórmula sea marginalmente más proporcional que un binominal puro

En un análisis comparativo de proporcionalidades, se puede apreciar que en Chile, antes del golpe militar de 1973, el 42% de los escaños era accesible a minorías significativas (6 de los 29 distritos elegían siete o más diputados, mientras que los restantes 23, elegían un menor número de representantes, de modo que 63 de los 150 escaños eran accesibles para los partidos pequeños y medianos). La elección de los primeros diputados de la Falange Nacional, se debió a que en Antofagasta se elegían doce; en Valparaíso, once y una cantidad similar en Santiago, pues si no hubiesen habido distritos de ese tamaño, dicho partido tendría que haberse aliado a otro o sencillamente haberse marginado del Congreso

Relató que, actualmente, en España el 58% de los escaños es accesible a minorías significativas: 17 de los 52 distritos eligen más de siete diputados en un sistema de proporcionalidad moderada, que es criticado severamente por los españoles, quienes consideran que favorece el duopolio del PP y el PSOE, aun cuando es más proporcional que el de Chile antes de 1973. En Argentina, el 76% de los escaños es accesible a minorías significativas (1 distrito de 70 elige más de siete diputados) y en Brasil, la totalidad de los escaños cumple con esta condición, en un sistema que fomenta el multipartidismo. Hay prácticamente diez partidos importantes en el Parlamento brasileño, siendo difícil la gobernabilidad.

Señaló que si se aplica este análisis a los proyectos en debate, se tiene que la moción de los Diputados señores Burgos , Ascencio , Browne , Díaz , Chahin , Harboe ; Monckeberg , don Cristián ; Montes , Saffirio y Schilling, que sustituye el sistema electoral binominal por uno de representación proporcional (boletín N° 8343-07), propone aumentar el número de diputados a 150, de modo que el 31% de los escaños sea accesible a minorías significativas (6 de los 28 distritos eligen más de 7 diputados; los otros 22, eligen una menor cantidad de diputados. Se pueden elegir ocho como máximo y la media es de 7.7 en los distritos que eligen más de 7.

En la moción de los Diputados señores Auth , Araya , Browne , Cornejo , Díaz , Harboe, Meza ; Monckeberg , don Cristián ; Rincón y Teillier , que modifica la ley N° 18.700, Orgánica Constitucional de Votaciones Populares y Escrutinios, con el objeto de darle mayor proporcionalidad y representatividad al sistema electoral (boletín N° 8436-06), se mantiene el número de diputados en 120, de suerte que el 78% de los escaños es accesible a minorías significativas (8 de los 18 distritos eligen más de 7 diputados, cuatro de los cuales eligen un máximo de 16, siendo la media 11.8).

En consecuencia, aseveró que es notoriamente más proporcional la propuesta contenida en esta última moción, de manera que podría formularse en su contra la crítica consistente en fomentar el multipartidismo o la fragmentación, que no puede esgrimirse respecto de la primera de las mociones analizadas.

Indicó que una segunda forma de comparar ambos proyectos se basa en analizar la forma en que se aborda el peso igualitario del voto, que se refleja en la siguiente tabla

Explicó que la moción signada con el boletín N° 8343-07 logra que la distribución de los escaños se asimile más a la de la población. Así, por ejemplo, la Región Metropolitana pasaría a tener el 32,7% de los diputados; la del Biobío, el 12%, y la de Valparaíso, el 10,7%, mientras que en el caso de la moción contenida en el boletín N° 8436-06 no se produce cambio alguno respecto de lo que sucede actualmente con el peso del voto, pues este proyecto mantiene la cantidad de diputados a elegir. Indicó que esto último implica pagar dos costos: difícilmente se podrá corregir la diferencia de peso entre el voto de los ciudadanos de Linares y los de Maipú, o de los de Aysén con los de Puente Alto y subsistirán varios distritos binominales en el caso de las regiones extremas. En cambio, si se aumenta la cantidad de diputados a 150, desaparecerían los distritos binominales y se puede corregir en parte la distorsión de población explicitada

Hizo presente que hace un año y medio, el gobierno conservador de David Cameron cumplió con el compromiso de someter a plebiscito el sistema electoral británico uninominal mayoritario y el pueblo se expresó manifestando su preferencia porque éste se mantenga, por cuanto lo sienten validado y legítimo.

Destacó la importancia de justificar adecuadamente el bicameralismo, en razón de las críticas que se formulan contra la institución parlamentaria, pues resulta valioso que dos corporaciones respondan a un propósito específico propio, que realicen una contribución singular, complementándose, sin ser una copia de la otra. Una señal en este sentido se dio en la reforma constitucional de 2005, en la que se fortalecieron las facultades fiscalizadoras de la Cámara

Opinó que sería lógico mantener la noción del Senado como una corporación que representa a regiones, siendo ideal que paralelamente se impulsara una regionalización más profunda acompañada de una descentralización política. En Alemania, el Bundesrat (la Cámara Alta) representa a los länder, entre los cuales está Bavaria, que lucha por sus intereses más allá de las diferencias entre socialdemócratas y democratascristianos. Cada región está representada por tres, cuatro o cinco senadores, aunque la diferencia entre ellas en términos de población, justificaría que alguna de ellas tuviese muchos más representantes. Comentó que en Francia y España, es incierto el futuro del Senado, dado que no existe claridad respecto de su razón de ser y se considera irrelevante, inútil, vinculándoselo al término de carreras políticas.

Agregó que debería insistirse en el esfuerzo por hacer de la Cámara una expresión más fiel de la ciudadanía, pues todos los ciudadanos de la República han podido votar simultáneamente para elegir a los diputados, siendo por ello la única entidad que puede fiscalizar los actos del gobierno,. Así también, debería ponerse un dique al esfuerzo por hacer del Senado una Cámara que represente a la población, por lo que en ese aspecto reconoció la sabiduría del constituyente de 1925, al establecer que cada región sería representada por igual número de senadores. Recalcó que ambas cámaras deberían tener distintos criterios de representación para que justifiquen su existencia, ya que de lo contrario surgen argumentos para quienes postulan el unicameralismo como opción. A su juicio, no corresponde por ahora discutir si se ha sido fiel a la idea de las regiones como unidades coherentes y en qué medida las decisiones de crear nuevas regiones responden a ese ideal

Finalmente, hizo presente que no es necesario, para que exista proporcionalidad, que todos los distritos elijan más de siete diputados, pues de ser así, la Cámara tendría que estar compuesta por más de 400 miembros. Aclaró, entonces, que para que haya una proporcionalidad moderada deben coexistir aquellos distritos que, en atención a la cantidad de habitantes, eligen tres o cuatro diputados, con otros, que elijan siete u ocho, de manera que las fuerzas significativas que concentran el 10 ó 15% puedan elegir parlamentarios sin verse forzadas a una alianza o acuerdo por conveniencia. Comentó que antes de 1973, hubo cierto consenso en torno a los complejos efectos que generan los pactos, que de hecho se prohibieron en virtud de las reformas de los años 1958 y 1962, restableciéndose, en virtud de la aplicación de un resquicio, en las elecciones de marzo de 1973, en que se presentaron la UP y la CODE

Precisó que un sistema binominal unido a la existencia de pactos provoca un nivel enorme de ingeniería y de manejo cupular, sin perjuicio de que existan sistemas peores. En España, por ejemplo, las listas de los parlamentarios son definidas por las directivas de los partidos que fijan el orden de elección de los postulantes, con lo cual se rompe el vínculo entre los ciudadanos y los parlamentarios. Sostuvo que así como establecer en Chile un sistema en que se vote por la lista de los partidos es negar la propia historia, también lo es tener un sistema uninominal, como el que se ha propuesto, o el binominal, actualmente existente. Sin embargo, la fuerza de la historia ha sido tal que pese a los veinte años transcurridos desde la implementación de este último subsisten los partidos políticos y el Partido Comunista ha podido sobrevivir un largo período sin representación parlamentaria

C.- Abogado constitucionalista señor Francisco Cumplido.

Se refirió, en primer término, a la necesidad de legislar sobre esta materia.

Relató que su experiencia, tanto como profesor de Derecho Constitucional como de ex Ministro de Justicia, le permiten concluir inequívocamente que para resolver el conflicto político, económico, social y cultural por la vía institucional, el régimen político democrático exige que los órganos de gobierno representen cabalmente a los ciudadanos, es decir, procesen las demandas y las resuelvan racional y justamente.

Trajo a colación que las crisis de representatividad pueden contribuir, entre otras causas, a crisis constitucionales. Al efecto, comentó que la elección de diputados de 1973 se realizó a partir de los datos del censo efectuado en 1930, lo que le motivó a afirmar en un estudio publicado en 1970, en la Revista Cuadernos de la Realidad Nacional de la Pontificia Universidad Católica de Chile, que la Cámara de Diputados representaba a un país irreal, puesto que no se había considerado el gran desarrollo poblacional como consecuencia de la emigración de la gente desde el campo a las ciudades. Adicionalmente, los distritos se habían diseñado sobre bases que no contemplaban intereses comunes, siendo éstos, incluso, contradictorios.

Por otra parte, hizo presente que la renovación parcial del Senado sólo permite reformas que reflejan realidades políticas superpuestas,- la actual y la de cuatro años atrás-, es decir, una lenta transformación social, sin que dicha corporación y la Cámara de Diputados hayan logrado representar concepciones globales, como la modernización del ex Presidente Alessandri Rodríguez ; la revolución en libertad del ex Presidente Frei Montalva y el socialismo a la chilena del ex Presidente Allende.

Sostuvo que el sistema electoral binominal, que no es mayoritario ni proporcional, limita aún más los procesos de cambio, porque obliga a los partidos políticos a constituir grandes coaliciones. Afirmó que la combinación de la falta de representatividad de los diputados y la renovación parcial del Senado con el sistema binominal puede producir una crisis de representatividad de la ciudadanía. Cuando falla la institucionalidad sólo queda la negociación política a través del diálogo, proceso que impide la anarquía y la violencia

Hizo notar que en los acuerdos celebrados entre los representantes de la Concertación de Partidos por la Democracia y el Partido Renovación Nacional con el gobierno del General Pinochet, se estimó necesario que la transición del autoritarismo a la democracia fuera pacífica, moderada y gradual. No obstante que los representantes de la Concertación sostuvieron que era conveniente sustituir el sistema electoral por uno proporcional restringido, no hubo acuerdo, dejándose la resolución definitiva al futuro Congreso Nacional. Sin embargo, los proyectos de reforma sobre la materia, enviados por los ex Presidentes Aylwin , Frei Ruiz Tagle y Lagos, no fueron aprobados.

Manifestó que uno de los problemas que deben resolverse para la elección de los diputados, en el entendido de que éstos representan a la población, es determinar si se tomará en cuenta el censo de 2002 o el efectuado este año, para la conformación de los distritos. A este respecto, hizo notar que la realidad política del año 2002 es distinta a la actual y que, en razón de la entrega provisoria de los resultados del censo llevado a cabo en 2012, existe un plazo razonable para estructurar los distritos a partir de estos últimos datos, en función de la cantidad de diputados que se acuerde elegir (120 ó 150)

Estimó que es oportuno efectuar una reforma electoral hoy por hoy, por cuanto el voto voluntario y la inscripción automática crean incertidumbre, la cual reviste importancia para llevar a cabo este tipo de reformas. Recordó que en la década de los sesenta, el entonces Senador señor Francisco Bulnes Sanfuentes intentó llevar a cabo una reforma constitucional para adecuar el número de diputados a la población. En esa época, los tres profesores titulares de Derecho Constitucional de la Universidad de Chile,- entre los que se incluye, junto a don Jorge Ovalle Quiroz , fueron citados por la Comisión de Constitución del Senado, donde propusieron varias soluciones, que no avanzaron en su materialización, hasta que el entonces Senador señor Raúl Ampuero les representó que perdían el tiempo con las soluciones propuestas, por cuanto éstas eran comparadas por los senadores con los últimos resultados electorales. Relató que, en ese entonces, don Jorge Guzmán Dinator conversó con el Presidente de la Comisión de Constitución del Senado y se decidió que los profesores no seguirían concurriendo a esta instancia.

Afirmó que en el derecho comparado, los censos y la distribución del número de diputados que a cada distrito corresponde son aprobados por el Tribunal Calificador de Elecciones, idea que ha sido recogida en algunos proyectos de reforma constitucional, y que le parece adecuada. Igualmente, advirtió que la doctrina recomienda que en la constitución geográfica de los distritos se considere la situación y los intereses comunes de sus habitantes. En este sentido, hizo hincapié en que no puede repetirse la situación ocurrida en 1970, donde se agrupaban en un mismo distrito Las Condes, Vitacura y Pedro Aguirre Cerda , pese a los intereses disímiles de sus habitantes.

Sugirió tener presente, como caso excepcional, la representación de las zonas extremas del país, que han disminuido su población, asignándoseles un número adicional de diputados en los distritos respectivos

Acto seguido, expuso el siguiente cuadro, en el que, a partir del informe provisorio del censo de 2012, se determina cuántos diputados deberían elegirse en cada una de las regiones, según si la cantidad máxima a elegir son 150 ó 120

Precisó que, según el censo, la población total del país asciende a 16.572.475 habitantes, de modo que si se eligen 150 diputados, cada uno de ellos representaría a 110.483 personas, mientras que si se eligen 120, cada uno de ellos representaría a 138.104 habitantes.

Sostuvo que en las regiones XI y XII, deberían agregarse diputados (2 en el caso de la primera y 1 en el caso de la segunda), en tanto que la Región Metropolitana concentraría notoriamente la mayor cantidad

Enfatizó que en nuestro sistema constitucional, la Cámara de Diputados representa a la población, en tanto que el Senado, a las regiones

Finalmente, manifestó su preocupación por cuanto pareciera no haber soluciones por la vía institucional ni a través del diálogo en lo que respecta a la reforma del sistema electoral, debido a lo cual se generan situaciones de violencia como las que se han observado en los últimos dos años

Hizo presente que la reforma constitucional de 2005 tuvo su origen en dos mociones parlamentarias presentadas por senadores pertenecientes a la Concertación de Partidos por la Democracia y a la Alianza por Chile, y por los senadores institucionales Parra y Silva Cimma , las que fueron acumuladas en un solo texto para su tramitación.

Tras dicha reforma constitucional, los senadores son elegidos en votación directa por circunscripciones senatoriales, en consideración a las regiones del país, las que, junto a la forma de elección, son determinadas por una ley orgánica constitucional, manteniéndose el mandato por ocho años y la renovación alternada cada cuatro. Además, la disposición transitoria prescribe que el Senado estará integrado únicamente por senadores electos en conformidad con el artículo 49 de la Constitución y la Ley Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios vigente a la fecha de promulgación de la reforma constitucional. No obstante, las modificaciones a la referida ley que digan relación con el número de senadores, las circunscripciones existentes y el sistema electoral vigente (el binominal), requerirán del voto conforme de las tres quintas partes de los diputados y senadores en ejercicio, es decir, se protege lo vigente con una ley orgánica constitucional especial que, por su alto quórum, requeriría para su modificación un gran acuerdo en un Poder Legislativo en que las Cámaras fueron elegidas con el sistema binominal

Se señala que en el estudio publicado en la Revista Cuadernos de la Realidad Nacional, en 1970, ya mencionado en esta exposición, “el profesor Cumplido propuso los siguientes requisitos para que, conforme a la institucionalidad, pueda efectuarse un cambio social

1. El poder constituyente y el poder Legislativo deben estar formados por órganos elegidos sobre bases que permitan la representatividad de una sola realidad política;2. El procedimiento de reforma constitucional debe permitir que en ella se institucionalice oportunamente la idea de derecho mayoritaria en la comunidad, y en caso de conflicto, siempre debe existir la posibilidad de consulta ciudadana;3. El Parlamento debe ser unicameral en los estados unitarios como Chile (el unicameralismo ha sido propuesto, entre otros, por los profesores Mario Quinzio Figueiredo y Guillermo Bruna Contreras).

Se relata que el Grupo de Estudios Constitucionales- "Grupo de los 24"-, nacido a la vida pública en 1978, en sus Propuestas Democráticas, señala: "estamos de acuerdo en que el parlamento debe seguir siendo íntegramente generado por votación popular, tener preponderancia en el ejercicio de la función legislativa, y disponer de efectivos poderes de control o fiscalización". Aunque algunos de sus miembros abogaban por el unicameralismo, la mayoría estimaba necesario mantener el sistema bicameral.

A lo anterior, dicho Grupo agrega las siguientes propuestas:

1. La Cámara de Diputados debería contar con 150 miembros, elegidos por distritos electorales constituidos por provincias, fracciones de provincias o agrupaciones de provincias, cada una de las cuales elegiría entre un número mínimo de dos y un máximo de seis diputados en proporción a su población determinada por el último censo. Para estos efectos, el censo debía ser aprobado por el Tribunal Calificador de Elecciones, el que fijaría el número de diputados que correspondería elegir a cada distrito electoral.2. El Senado debería integrarse por cincuenta senadores. Algunos de los miembros del Grupo, eran partidarios de que fuesen elegidos por un colegio electoral nacional. Sin embargo, la mayoría prefería que se eligieran por circunscripciones electorales formadas por regiones o agrupaciones de regiones, a razón de cinco por cada circunscripción.3. Debería aplicarse el procedimiento de representación proporcional, rechazándose el procedimiento electoral de colegios múltiples uninominales y los sistemas mayoritarios.4. Debería otorgarse derecho a voto a los chilenos residentes en el extranjero.

Se señala, igualmente, que en un proyecto de Nueva Constitución elaborado por el profesor Humberto Nogueira Alcalá , en el que colaboró el profesor Cumplido, se postuló un sistema de gobierno semirepresentativo y un Congreso bicameral, en que la Cámara de Diputados estaría integrada por 150 miembros, elegidos por distritos electorales en proporción a la población y de acuerdo con el sistema electoral proporcional. El Senado se compondría por 50 miembros, elegidos por circunscripciones regionales, por el mismo sistema electoral, renovándose ambas Cámaras totalmente cada cuatro años.

Se hace notar que aunque el profesor Cumplido siempre ha estado en desacuerdo con el Senado elegido por parcialidades, si se mantiene en el futuro el bicameralismo, abogaría por la revisión de la integración geográfica de los distritos, de acuerdo con sus intereses comunes para la elección de los diputados, y que el Senado estuviese compuesto por sesenta y cinco senadores, elegidos tres por región y el resto, en elección nacional. Igualmente, se advierte que es partidario de aplicar para la elección de los miembros de ambas Cámaras un sistema electoral proporcional y de renovación total cada cinco años, aumentando el mandato del Presidente de la República a igual período, de modo que haya elecciones simultáneas de diputados, senadores y Presidente de la República. En suma, se propugna el gobierno de la mayoría con el respeto del derecho de las minorías a participar, donde los conflictos no solucionados, sean resueltos en definitiva por la ciudadanía, por plebiscitos debidamente informados en sus alternativas.”

Frente a la consulta respecto de la crisis de representatividad, expresó que la descontextualización de la política es un problema serio y recordó que la transición del gobierno militar hacia la democracia fue consensuada y, por consiguiente, en 1989 se logró reformar la Constitución en la medida que la situación política del momento permitía. Indicó que al descontextualizar los acontecimientos, se analizan los hechos del pasado a partir de los del presente, lo cual no significa que el contexto se mantenga invariable y, en ese sentido, si éste se modifica, es necesario adecuar la organización política a esa nueva realidad

En relación con la crítica manifestada a los quórum especiales, comentó que se transigió entre la exigencia de tres quintos y la mayoría absoluta, con lo cual se logró facilitar la reforma de ciertas materias, siendo factible hoy establecer este último quórum, sin perjuicio de que se corra el riesgo de la consolidación de un régimen que no permita, en el futuro, captar nuevas mayorías absolutas. En efecto, cuando se obtuviese este quórum, se podría modificar todo y el gobernante de turno, entonces, puede adecuar la Carta Fundamental según sus intereses políticos. Por ello, se ha resuelto, en muchas constituciones, exigir un mínimo más para reformar su texto

Planteó que si se agrega, además de la mayoría absoluta, la posibilidad de que el Presidente convoque a plebiscito con dicho quórum, el Congreso resulta desplazado a un segundo plazo. Precisó que este mecanismo, en el contexto de la democracia digital, presenta el inconveniente de no dar lugar a un debate previo, en el cual la ciudadanía pueda tomar conocimiento de aquello que se somete a su decisión, prevaleciendo las emociones o sentimientos sobre la lógica, lo que implica un grave riesgo

Señaló que el contexto en que se vive hoy la política es distinto del de ayer, existiendo un desarrollo de la movilización social ante el inusual debilitamiento de la legitimidad de los partidos políticos, que son los llamados a contribuir a formar la conciencia política de los ciudadanos y que están en riesgo de ser reemplazados por la democracia digital, que se caracteriza por la ausencia de debate y un mero intercambio de ideas. Precisó que, por ello, el plebiscito sólo se permite cuando existe discrepancia entre el Congreso y el Presidente de la República en torno a una reforma constitucional, insistiendo el primero en el texto aprobado por ambas Cámaras, pues ha habido un debate previo

Reconoció que el elector común no dispone de mucha información y que, en realidad, tampoco la desea en abundancia, y tiende a actuar emocionalmente por la propaganda. Surge, entonces, el deber de los políticos en orden a explicar al electorado las ideas que representan los candidatos. Se atrevió a asegurar que, en estas elecciones municipales, concitarán la preferencia de la ciudadanía los postulantes que enarbolen la bandera del plebiscito, porque la gente desconoce el real alcance de este último. En ese sentido, hizo hincapié en la responsabilidad que compete en esta materia a los parlamentarios, en el marco de un sistema presidencial de Ejecutivo vigorizado, donde el Presidente de turno es, en algún punto, abandonado por los partidos políticos

Llamó a situar el debate en el contexto actual y no en el que hubo durante el gobierno militar o en la negociación que permitió transitar hacia un régimen democrático y que ha evolucionado gracias a diversas reformas constitucionales. Indicó que la labor de los partidos políticos consiste en ilustrar a la ciudadanía para que vote conforme a un proyecto político determinado

Planteó que debería haber un mayor número de candidatos, porque si se eligen sólo dos personas, es difícil que se produzca una apertura. Hay estudios que demuestran la reelección del 30% o, de incluso, el 70% de los parlamentarios, en circunstancias que se requiere oxigenar las listas, lo que no obsta al sistema de representación proporcional

D.- Abogado constitucionalista señor Jorge Correa.

Manifestó su preocupación por cuanto la crisis de representatividad podría transformarse en una crisis institucional y, en definitiva, política. Indicó que, lamentablemente, el país se encamina hacia esta consecuencia, que sería inevitable, si no se producen cambios en los sistemas de representación. Planteó que en ese contexto, se comprende el llamado a una asamblea constituyente efectuado por partidos políticos relevantes en el quehacer nacional, por cuanto ello no es posible en nuestro sistema sin acuerdo de las dos terceras partes de los miembros de la Cámara de Diputados y del Senado, que no es esperable que se produzca si se considera que tampoco lo ha habido para concretar las reformas electorales. En consecuencia, el llamado a la asamblea constituyente se traduce, políticamente, en una convocatoria a pasar por encima de las instituciones, esto es, a que los adherentes a los partidos que la han efectuado acumulen un grado de frustración respecto de una reforma que no se puede concretar por la vía constitucional y que sólo puede llevarse a cabo al margen de la institucionalidad. A su juicio, hay grupos relevantes en nuestro país que propugnan directamente un quiebre institucional o, al menos, coquetean con esa idea, lo que constituye una señal inequívoca de la crisis de representatividad que se encamina a una crisis constitucional, salvándose exclusivamente la presidencia de la República, que, sin embargo, presenta señales de estar en riesgo.

En efecto, si se considera que los candidatos aparecen como una suerte de salvadores de la institucionalidad, al margen de sus colectividades, que pasan a ser para ellos un cierto lastre electoral, se puede afirmar que incluso la presidencia de la República tiene problemas serios. Mientras Michelle Bachelet logra el 50% de empatía con la ciudadanía, ningún miembro de su coalición supera el 2% de aprobación. Por su parte, Laurence Golborne , se instituye como candidato presidencial por ser el salvador de los mineros, ya que el hecho de liderar el rescate de estos últimos lo ha catapultado. Ello evidencia que, en alguna medida, la ciudadanía busca en la presidencia de la República personas determinadas, mas no colectivos ni instituciones.

Opinó que el sistema binominal fue diseñado para evitar la alteración de la institucionalidad del gobierno militar por mayorías ocasionales y obligó a concordar una transición pactada, que en lo sustancial ha funcionado. Sin embargo, el país perdió politización, disminuyó fuertemente la participación electoral, se ha hecho evidente la falta de renovación en los partidos políticos y han caído en descrédito algunas instituciones, como el Congreso. En tales condiciones, la repolitización desafía lo establecido, por lo que es urgente lograr una canalización a través de las instituciones.

A su juicio, la estabilidad del país ha sido posible gracias a que la presidencia de la República ha sido ejercida por personas que se entienden formando parte de un colectivo, el cual a partir de las discusiones que provocan las políticas públicas que diseña el Ejecutivo, obliga a una segunda mirada, habiendo un reemplazo de un grupo por otro en la alternancia en el poder, o simplemente uno de ellos se ha mantenido en el gobierno. De esta manera, se comprende que este último está en manos de un grupo determinado que persigue un cierto proyecto y no de caudillos, fórmula gracias a la cual pudo gobernar, incluso, el régimen militar, si se considera que tras él había un grupo relevante de opinión que representaba un proyecto político.

Señaló que, en términos generales, los partidos políticos no se renuevan, con excepción de la UDI, habiendo cada vez menos participación electoral. En este escenario, los movimientos sociales autónomos tienden a ser más desafiantes en su relación con las instituciones constituidas. Estimó que las crisis se presentan cuando se generaliza la apreciación de que la política regular no está en condiciones de afrontar los desafíos del país y que, por ahora, se ha podido contener la situación sólo porque aquéllos no son tan dramáticos y porque tales desafíos están a cargo más bien del Ejecutivo y no del Congreso Nacional, como ha podido constatarse en el tema estudiantil, en el entendido que el gobierno está en manos de grupos que tienen una ideología y un proyecto político. Sin embargo, esta realidad puede cambiar y de hecho, se encuentra en un proceso de transformación, si se atiende a la presentación de las candidaturas presidenciales ya mencionadas, cuya adhesión no guarda relación con los partidos a los que pertenecen ni con un proyecto político, lo que nos aproxima a una crisis constitucional.

Aseguró que si bien el sistema binominal no es la causa de todos estos problemas, hace muy difícil su superación, por cuanto no permite la oxigenación de la política, que es una suerte de coto cerrado al que no se puede ingresar con facilidad, de modo tal que los problemas de la política pasan a ser los problemas de los políticos y no del país. En efecto, este sistema electoral impide el surgimiento de una tercera fuerza política, que sólo podría aspirar a estar representada por concejales, lo que resulta poco atractivo para la formación de nuevos partidos, que acaban desprestigiándolo, como ha sucedido con el Partido Comunista y hoy por hoy con el PRO y, posiblemente, el PRI, que constituyen una alternativa por ser puros, no estar contaminados, ni tener responsabilidad en lo que sucede con la política nacional.

Adicionalmente, el sistema binominal evita la movilidad al interior de los partidos, ya que al presentarse dos candidatos por coalición o uno por partido en cada distrito o circunscripción, no permite la renovación. Con ello, surgen alternativas difíciles de sostener en un régimen democrático, como la limitación de la reelección de autoridades tras cumplir determinados años en los cargos, lo que no se aviene con la idea de que la ciudadanía tenga más posibilidades de elección.

Planteó que el problema que implica el sistema binominal no radica en haber favorecido a la Concertación de Partidos por la Democracia o a la Alianza por Chile, discusión inútil e innecesaria, ya que probablemente ha beneficiado a ambos sectores, sino más bien en poner en riesgo su subsistencia, dado que podría sepultar a ambas coaliciones antes de permitir que surjan alternativas, sin que se produzca renovación dentro del sistema. En consecuencia, al desprestigio del Congreso se suma la posibilidad de tener un Presidente de la República que no cuente con un grupo político de referencia, lo que es muy grave para el país.

Indicó que lo anterior hace indispensable reformar el sistema electoral, pues de lo contrario, en vez de políticos tendremos demagogos y caudillos. Recordó que la percepción de que el problema político sobrepasa las instituciones fue la causante, en gran medida, del quiebre de la democracia y a ella se atribuye también el surgimiento de todos los caudillismos latinoamericanos.

Planteó que, en definitiva, el sistema binominal será reemplazado por aquél que estén dispuestos a respaldar los más resistentes al cambio. Sin embargo, advirtió que, probablemente, haya una sola oportunidad para llevarlo a cabo y, en ese entendido, no es factible pensar que puede modificarse el sistema una vez y luego volver a cambiarlo. Aseguró estar convencido de que es necesario instalar ciertas ideas en torno al nuevo sistema, que debería comenzar a regir en unos años más, refiriéndose a las siguientes

1. La reforma debe ser sustancial, ya que al ser imperiosa su necesidad, agravaría la situación un cambio frustrado. En ese contexto, deberían eliminarse todos los distritos binominales, sin perjuicio de que, como consecuencia de la transacción política, pudieran mantenerse dos o tres en esta condición. 2. En cada distrito deberían elegirse como mínimo tres diputados, en un número que sea idealmente impar. Las circunscripciones deberían ser grandes, abarcando cada una de ellas una región, que puede ser dividida en algunos casos, como el de la Región Metropolitana. 3. Debería haber más candidatos que cargos a elegir. A su entender, el proyecto que propone elegir a los mejores terceros, destraba el empate, pero el problema que se enfrenta no guarda relación con esto último sino con la falta de renovación. Por ello, es imperioso permitir el ingreso de nuevas fuerzas y propender a la movilidad en el interior de las existentes. Así, la elección de 30 diputados y 5 senadores para los mejores terceros premia a las mismas coaliciones o a una nueva fuerza, que tendría que presentar candidatos en todo el país para lograr elegir, con suerte, un senador.

Sostuvo que un sistema de esta naturaleza presenta los siguientes inconvenientes:

a) Se otorga un peso excesivo a la Región Metropolitana, aspecto que debería ser corregido. Si la Cámara de Diputados debe representar a los habitantes de todo el país, pero no se desea una sobrerrepresentación de dicha región, habrá que buscar una fórmula para mitigar esta situación.

b) Se corre el riesgo de contar con coaliciones gubernamentales débiles, razón por la cual últimamente se ha defendido la permanencia del sistema binominal. No obstante, el fuerte presidencialismo imperante en nuestro país dificulta la concreción de dicho riesgo, siendo improbable que una coalición opositora sea tan impenetrable para un Presidente de la República, que le impida gobernar. Podrían existir gobiernos cuya coalición no obtenga la mayoría en el Congreso, realidad que se presenta hoy, pero es difícil que el primer mandatario tenga que lidiar con una coalición opositora que sea mayoría en el Congreso. Indicó que en un sistema de representación proporcional, los jefes de Estado tienen una presencia muy significativa, aunque no mayoritaria, en ambas Cámaras, al igual que la oposición, que se presenta como alternativa del Gobierno, y que existen algunos grupos que pueden ser decisivos en sus votaciones, lo que cambia la fisonomía de la política chilena, sin que ello conlleve que una coalición no pueda gobernar. Esta última está llamada a atraer, encantar y seducir a los grupos minoritarios para obtener sus votos.

Respecto de las leyes de quórum, opinó que ellas ocasionan un daño mayor a la política en nuestro país que el sistema binominal. Precisó que, desde el punto de vista teórico, envenena de elitismo a la democracia, porque son excluyentes al sostener implícitamente que las mayorías políticas de hoy no pueden modificar lo que las mayorías políticas o gobiernos de facto de ayer establecieron.

Sostuvo que las leyes de quórum llevan ínsito el mensaje de que una mayoría es mejor que la otra, con lo cual clausuran el debate, argumento inconcebible en una democracia, cuya esencia consiste en reconocer a todas las personas como iguales en dignidad y derechos, como consecuencia de lo cual la única manera de zanjar las disputas es por mayoría. De lo contrario, un grupo le dice a otro que no puede cambiar las cosas sólo porque aquél es mejor y más inteligente, con lo que se niega la igualdad. Ello, sin perjuicio de las excepciones existentes, por cuanto las minorías pueden impedir que se cambien las reglas del juego establecidas en la Constitución, que permiten la mantención de la democracia. En su texto se consagran las reglas políticas más básicas y los derechos esenciales de la persona humana, que tienen como fundamento la igual dignidad. Sin derecho a la libertad, a la propiedad, a asociarse y a tener libertad de conciencia no es posible constituir un juego democrático en que todos nos respetemos como iguales en dignidad y derechos. A su juicio, los derechos económicos y sociales no se justifican desde esta perspectiva, razón por la cual no deberían incluirse en la Carta Fundamental. Esta última permite, en consecuencia, justificar que ciertos preceptos no puedan ser disponibles por una mayoría y que sus cláusulas sean supramayoritarias, no así las demás, como las leyes de quórum, que corroen e irritan a la democracia.

Afirmó que hoy las personas no son dueñas de su propio destino, porque el sistema les dice que la mayoría de ayer o el gobierno de facto del pasado son mejor que ellas. En el fondo, las leyes de quórum tratan a la población como si estuviese compuesta por minusválidos o menores de edad, con lo cual aquélla se comporta como tal, desafiando al sistema.

Sostuvo que nuestra Constitución es antidemocrática porque la mayoría no puede disponer en materias que no deben formar parte de aquélla. Hizo notar que es la más extensa y rígida del mundo, porque no las reglas supramayoritarias exceden su texto al abarcar, además, las leyes orgánicas constitucionales.

Por otra parte, señaló que desde el punto de vista práctico, estas leyes tampoco son justificables, pues dificultan el cambio y fuerzan la celebración de acuerdos, lo que si bien ayer pudo dar resultados, hoy no puede considerarse inteligente y pone en riesgo la democracia. Aseveró que la revisión de las leyes orgánicas constitucionales no sólo es un imperativo moral o ético, sino una exigencia de supervivencia de este tipo de régimen.

Finalmente, respecto de la crisis de representatividad, señaló que se percibe que es consecuencia de la información que proporcionan los medios de prensa, que desprestigia a la política, y a si aquélla puede ser superada mediante la introducción de modificaciones al sistema o pese a ello, se mantendrá el descrédito.

A su juicio, será inevitable que la población en el futuro desconfíe del poder y lo critique, fenómeno que puede apreciarse a nivel mundial. Aclaró que, no obstante los reparos formulados al sistema binominal, está consciente de que su reforma no conseguirá que la gente vuelva a confiar en el mundo del poder. Planteó que, no obstante, lo anterior difiere de la crisis de representatividad y que debería causar inquietud el hecho de que ésta se traduzca en que la protesta ciudadana no desee canalizarse por la vía de las instituciones. Puntualizó que las señales más claras de que nos encaminamos hacia una crisis constitucional, esto es, a un golpe de Estado o a un quiebre de la democracia, se aprecian en el conflicto estudiantil, cuando los estudiantes deciden no acudir al Congreso para concretar la reforma del sistema educativo, porque sienten que no los representa, así como también en que una fracción importante de la política está dispuesta a quebrar el sistema por considerar que no es posible lograr la reforma dentro del mismo, postura a la que se adscriben varios partidos de la Concertación, todo lo cual representa un riesgo para el sistema democrático. Entonces, el problema no radica en que los medios desprestigien a la política, sino en que la gente desafía a los políticos e intenta conseguir objetivos prescindiendo de aquélla, porque éstos no dan el ancho para enfrentar los problemas que la afectan. A su juicio, si esta percepción se instala en nuestro país, la democracia sufrirá un quiebre indefectiblemente.

Señaló que en este escenario, algunos desafían al sistema constitucional para cambiarlo, arrasando con la coalición gobernante, que obviamente se opondrá a la instalación de una asamblea constituyente, que equivale a un llamado a romper la democracia y a desplegar violencia. Admitió no tener claridad respecto del espacio que deberían ocupar los partidos en este contexto, no obstante lo cual pronosticó que aquéllos que no estén dispuestos a cambiar el sistema, se quedarán al margen de la discusión. Precisó que cuando un sector convoca a una asamblea constituyente, o sea, a cambiar el sistema desde afuera, y el otro, lo defiende, aquellos grupos políticos que propugnan un cambio desde el interior del sistema son desplazados, al enfrentarse los dos sectores en pugna, lo que dificulta lograr una salida política consensuada.

Expresó su convicción de que la UDI es el único partido que ha opuesto abiertamente resistencia a la modificación del sistema binominal, aun cuando las dificultades no se presentan sólo en él, sino en los cálculos que realizan todos los sectores, pues a ningún parlamentario en ejercicio le conviene el cambio del sistema gracias al cual resultó electo.

Reconoció los aportes del mencionado sistema a la transición chilena, no obstante lo cual señaló que es válido preguntarse si sigue siendo útil. Manifestó que, aun cuando no maneja datos específicos, en el derecho comparado es posible encontrar ejemplos de sistemas electorales donde el número de candidatos es mayor que el de los cargos a elegir, modificación que sería muy relevante introducir en nuestro país para oxigenar a la política.

Ahora bien, reflexionó en torno a la posibilidad de que dicho cambio sea considerado, a la postre, como insuficiente y tardío, por cuanto en la aplicación del sistema binominal se advierte que aunque haya dos candidatos por lista, en los hechos hay uno solo, que normalmente es quien está en ejercicio del cargo y ostenta, de por sí, un porcentaje de votación que facilita su elección. En consecuencia, el mencionado sistema impide que se produzca una competencia real, por lo que se corre el riesgo de que la implantación del referido cambio tenga que convivir con esta situación del “candidato asegurado”. Por otra parte, si bien la existencia de más candidatos que cargos a elegir posibilita una renovación al interior de las coaliciones, no permite la existencia de terceras fuerzas, en circunstancias que las dos coaliciones mayoritarias carecen de representación y legitimidad suficientes en la imagen pública para excluirlas, lo cual obliga a que tales fuerzas, que evidentemente hoy pugnan por ser consideradas, sean incluidas en el marco de una competencia real.

Reafirmó su pensamiento en cuanto a que las leyes orgánicas constitucionales son una negación de la democracia en un grado más alto que el sistema binominal y no un elemento que contribuye a dar estabilidad, por cuanto implícitamente se excluye a otros de la discusión. Argumentó que la democracia surge constitutivamente como una afirmación de que todos somos iguales en dignidad y derechos, circunstancia que le da legitimidad. En ese contexto, la única forma de resolver las diferencias, que es compatible con esta idea, es por mayoría, pues si se exige el voto conforme de tres quintos o cuatro séptimos, se le está diciendo a los dos quintos o tres séptimos, en su caso, que como no son iguales, se les excluye de la capacidad de reformar lo que se estableció en el pasado.

Aseveró que las leyes orgánicas constitucionales son excluyentes y elitistas, pues implícitamente conllevan el mensaje de que la mayoría de ayer es mejor, por lo que debe mantenerse, pero esta situación deriva en la inestabilidad del sistema, por falta de legitimidad. Si bien admitió que la estabilidad es un valor que deberían tener las leyes y la Carta Fundamental, comentó que esta última es la que ha sido mayormente modificada, precisamente porque carece de legitimidad. Indicó que esta situación es causante de que la gente busque alternativas fuera del sistema o contra este último, pues puede ser reprochado por estimarse antidemocrático. En efecto, el Congreso no logra imponerse ante el país argumentando que ha resuelto un tema por mayoría, ya que su autoridad se encuentra debilitada, pues sus bases de constitución también lo están, y entonces, aparecen las dificultades de no haber logrado resolverlo porque no se alcanzó el quórum exigido.

Sostuvo que las leyes de quórum calificado también son incompatibles con la democracia y que, a lo más, en temas delicados, podría exigirse la mayoría en ejercicio. Planteó que sólo la Constitución requiere supramayoría porque establece las reglas del sistema y derechos cuya modificación altera la democracia o, incluso, la pone en riesgo, pero en todo lo demás debería bastar la mayoría simple para introducir cambios.

E.- Experto electoral, señor Andrés Tagle Domínguez.

Respecto de la eliminación del guarismo “120 diputados” de la Constitución y modificar el quórum de las leyes orgánico constitucionales, hizo presente que la Constitución de 1925 disponía que “En las elecciones de diputados y senadores se empleará un procedimiento que dé por resultado en la práctica una efectiva proporcionalidad en la representación de las opiniones y de los partidos políticos.”

Por su parte, el proyecto enviado por el ex Presidente Lagos establecía que “En las elecciones de diputados y de senadores se empleará un procedimiento que dé por resultado una efectiva proporcionalidad en la representación popular, así como una adecuada representación de las regiones del país.”

Como se puede apreciar, ambos textos difieren, ya que la anterior Carta Fundamental apuntaba a consagrar un sistema que diera por resultado una efectiva proporcionalidad en la representación de las opiniones y de los partidos políticos, mientras que en el proyecto enviado por el ex Presidente, se aludía a la proporcionalidad en la representación popular.

Hizo presente que existen dos proporcionalidades que considerar en los sistemas electorales: La proporcionalidad entre votos y escaños o en la representación parlamentaria de los conglomerados y partidos y la proporcionalidad en la representación popular, o en la representación de los electores o también conocido como “igualdad del voto”.

Manifestó que resulta importante tener claro de cual se trata cuando se habla de proporcionalidad de un sistema electoral.

En este sentido, advirtió que resulta muy difícil conciliar proporcionalidad en la representación de los electores con una adecuada representación de las regiones, ya que ello sólo se logra con parlamentos muy grandes.

En nuestro país, si se asigna un parlamentario a la región menos poblada, como la XI, a la Región Metropolitana corresponderían 58 diputados, para mantener un correlato de proporcionalidad entre el voto de ciudadanos de una y otra región, con lo que se llegaría a un Parlamento de 149 miembros, como se aprecia en el siguiente cuadro:

En virtud de lo expuesto, concluyó que resulta muy difícil compatibilizar “una efectiva proporcionalidad en la representación popular, así como una adecuada representación de las regiones del país”, como lo propone el proyecto antes mencionado.

Destacó que la propuesta no aclara que factor debe predominar, si la efectiva proporcionalidad en la representación popular, o una adecuada representación de las regiones. Como nada se señala al respecto, podría estimarse que el sistema binominal cumple con tal exigencia.

Expresó que los sistemas electorales son métodos matemáticos mediante los cuales los votos de una elección se transforman en escaños en un parlamento. En este sentido, manifestó que la proporcionalidad entre votos y escaños se puede medir, por lo que resulta factible comparar entre sistemas.

Al respecto, sostuvo que si se analiza el sistema binominal en la historia, se puede constatar la diferencia que se ha producido entre el porcentaje de parlamentarios que cada coalición ha elegido, versus el porcentaje de sufragios obtenido, como consta en el siguiente cuadro:

Explicó que mientras más se acerque a “cero” la diferencia entre uno y otro porcentaje (votación versus parlamentarios electos), más proporcional será el sistema electoral.

Declaró que en general las dos coaliciones grandes obtienen una diferencia “positiva”, en el sentido que alcanzan un porcentaje mayor de parlamentarios respecto del porcentaje de votos obtenidos en la elección, en desmedro de las listas chicas, que obtienen una diferencia negativa, si se comparan los factores antes indicados. Más aún, en las tres primeras elecciones parlamentarias la Concertación alcanzó a tener en la Cámara de Diputados un quórum suficiente para aprobar leyes orgánicas constitucionales, sin haber alcanzado similar porcentaje de votos en las urnas.

Destacó que el año 2009 se produce una situación particular, ya que ambas coaliciones obtienen similares votaciones (43,5% la Alianza y 44,4% la Concertación), pasando a ser determinante lo que resuelvan las listas pequeñas, que obtienen cinco diputados.

Concluyó que la diferencia antes explicada, ha favorecido a la Concertación en tres oportunidades (1989, 1997 y 2001) y a la Alianza por Chile en otras tres elecciones (1993, 2005 y 2009).

Además comentó que la diferencia promedio se reparte entre la Alianza y la Concertación en forma bastante proporcional. Esta suerte de “índice de desproporcionalidad” se reparte en un 4,7% a favor de la Alianza y 4,2% a favor de la Concertación.

Asimismo, del cuadro antes expuesto se puede concluir que siempre que una coalición ha obtenido una mayoría en los votos, ésta se ha visto reflejada en la composición de la Cámara.

Hizo presente que listas pequeñas, como la presentada por el Juntos Podemos, si bien alcanzan un porcentaje considerable de votos, no eligieron diputado alguno en las elecciones de 1993, 1997, 2001 y 2005. En este último año obtuvieron una votación equivalente al 7,4%, la que no les permitió elegir diputados. Este pacto obtuvo una diferencia negativa que en promedio alcanzó al 4,4%.

Sin embargo, otras listas pequeñas, que han promediado una votación cercana al 12,2% si han elegido parlamentarios en catorce oportunidades en cinco de las seis elecciones, lo que demuestra que el sistema no es de por si excluyente con las listas más pequeñas.

Recalcó que nunca se ha producido un empate en la Cámara de Diputados y que si bien existe un perjuicio para las llamadas “listas chicas”, no hay exclusión de partidos, ya que en la última elección resultaron ocho partidos con representación parlamentaria, de un total de doce.

Por otra parte, señaló que se suele afirmar que el sistema binominal conduce al empate entre las fuerzas políticas, porque un 34% de la votación equivaldría a un 65%, ya que en ambos casos se obtendría un escaño parlamentario, como se aprecia en el siguiente cuadro:

Sin embargo, no se aprecia el efecto del sistema binominal en la siguiente hipótesis:

Destacó que si una lista alcanza un 32%, siendo doblada por la otra, no obtiene escaño alguno.

Consultado acerca de en cuántos países existe el sistema binominal, respondió que sólo en Chile. En seguida, reiteró que este sistema no conduce al empate porque nunca las votaciones son parejas en los sesenta distritos. Manifestó que ello ocurre en todas partes del mundo.

Afirmó que existen distritos donde la Alianza suele no obtener diputados y otro donde acostumbra doblar.

A continuación puso como ejemplo las consecuencias de la aplicación de un sistema proporcional, como el correspondiente a la elección de concejales. Al respecto exhibió el siguiente cuadro:

Con este sistema, en tres ocasiones la Concertación se ha visto favorecida en mayor grado que la Alianza, al comparar el porcentaje de votación con el porcentaje de concejales electos (2000, 2004 y 2008). A su vez, en otras dos oportunidades la favorecida fue la actual coalición de gobierno

Enfatizó que el sistema binominal ha tenido un comportamiento muy proporcional, repartiendo la diferencia de más escaños y votos en forma pareja entre las dos listas grandes

Añadió que el comportamiento es muy similar a otros sistemas proporcionales como el empleado para la elección de Concejales.

Asimismo, sostuvo que el sistema genera gobernabilidad, estabilidad democrática, acuerdos, crecimiento económico y prosperidad.

Sin embargo, reiteró que su mayor problema es la predictibilidad de sus resultados, lo que puede influir en una baja participación. Sin embargo, ese mismo efecto lo pueden producir las encuestas.

Por último, expresó que este sistema produce problemas para los conglomerados de más de dos partidos, los que deben omitirse en ciertos territorios electorales.

A continuación, analizó cada una de las propuestas presentadas en la Cámara de Diputados.

Consultado acerca de la propuesta que establecía que el número de parlamentarios se fijara en forma automática, en base a los resultados del censo, señaló que es inadecuado utilizar el censo para determinar el número de parlamentarios a elegir, porque la población de un distrito y los electores del mismo no caminan de la mano. Por de pronto recordó que es factible que vengan a sufragar los chilenos que residen en el extranjero y que no son considerados en el censo. Además suele ocurrir que las personas que residen en un distrito se encuentren inscritas en otro.

Asimismo, destacó que el beneficio a las listas grandes es similar al binominal, pero privilegiando a la más votada. Estas listas se continuarían beneficiando del “índice de desproporcionalidad” antes explicado. Si en el sistema binominal tal índice llegaba a un 8,9%, con este sistema se disminuye a un 8,4%, lo que significa un descenso más bien menor.

Hizo presente que con esta propuesta la Alianza por Chile hubiera obtenido el 2009 tres diputados más que la Concertación, pese a que alcanzó una votación menor. Asimismo, permitiría la elección de parlamentarios por parte del Partido Comunista.

Sostuvo que con votaciones similares (2009) la Coalición mejora su representación y no se registran cambios en la mayoría de la Cámara. Por su parte, las listas chicas obtienen una mínima representación debido principalmente al aumento del número de diputados.

Expresó que el beneficio a las listas grandes es similar al que genera el binominal, creciendo levemente, pero privilegiando a la más votada. Por su parte, las listas chicas mantienen igual representación. Asimismo, al igual que otra de las mociones, contempla una medida impopular, como lo es, el aumento del número de diputados.

En relación a los efectos del sistema binominal en el Senado, presentó el siguiente cuadro:

Expresó que en la Cámara Alta los efectos del sistema binominal son diversos. La diferencia entre el porcentaje de senadores electos respecto de los sufragios emitidos es considerable. En el caso de la Alianza por Chile se llega a un 7,7% promedio y en el caso de la Concertación sólo se llega al 0,8%.

Por lo tanto, si se produce un beneficio importante a favor de la segunda mayoría.

Explicó que el cuadro expuesto contiene una votación combinada. Sólo el año 1989 se eligieron senadores en todo el país. A partir del año 1993 se fue renovando parcialmente. Por ello, en el año 1993 se incluyeron las votaciones alcanzadas en las circunscripciones que se hicieron elecciones, a las que se sumaron aquellas circunscripciones que no la tuvieron, en base a los resultados de la elección anterior. De este modo, la votación representa a los senadores en ejercicio del período.

Por ello se explica que la Alianza el año 2009 aparezca con una votación inferior a la Concertación, en circunstancias que ese año la superó en sufragios emitidos.

Sin perjuicio de lo expuesto, destacó que la mayoría de la Concertación siempre se ha reflejado en la composición de los senadores elegidos.

A continuación analizó los efectos del sistema binominal al interior de los pactos, para lo cual expuso el siguiente cuadro:

Señaló que también se suele criticar al sistema binominal por las diferencias que genera al interior de los pactos. Es así como la UDI con un 24,6% de la votación eligió cuarenta diputados, lo que representa un tercio del total. Por su parte, Renovación Nacional obtuvo el 18,65% de la votación y eligió sólo dieciocho diputados, lo que representa el quince por ciento de los diputados electos.

En la Concertación la situación fue más pareja, siendo favorecido el PPD, cuyo porcentaje de diputados electos supera en 3,1% a la votación alcanzada.

Hizo presente que en el caso de la Alianza por Chile, tanto la UDI como Renovación Nacional llevaron candidatos prácticamente en todo Chile. En cambio la Concertación, por contar con más partidos en su interior, llegó a un acuerdo para pactar por omisión.

Sin embargo, hizo presente que la situación recién descrita varía en el Senado. La UDI allí obtiene el 22,7% de la votación y sólo eligió tres senadores, lo que corresponde al 16,7% de los senadores electos, lo que arroja una diferencia negativa de - 6%.

Por su parte, Renovación Nacional obtuvo el 18,8% de la votación, lo que le permitió elegir a seis senadores, lo que representa el 33,3% de los senadores electos, con una diferencia positiva de 14,5%.

En la Concertación la Democracia Cristiana alcanzó un 15,2% de la votación, con la que eligió a cuatro senadores, lo que representa un 22,2% de los senadores electos, con una diferencia en su favor de un 7%.

Del cuadro antes citado se desprende que el partido más votado no necesariamente alcanzará un mayor porcentaje de senadores electos.

Lo expuesto demuestra que la competencia al interior de los pactos responde más bien a una competencia de personas y no de partidos.

Sostuvo que no es efectivo que el sistema binominal fomente la competencia al interior de los pactos. En todo sistema proporcional sucede exactamente lo mismo, como se puede apreciar en la elección de concejales.

Por último, formuló una serie de recomendaciones técnicas a considerar al efectuar las modificaciones al sistema electoral. En primer lugar, expresó que terminada la inscripción automática se deberían usar a los inscritos para medir la proporcionalidad en electores y para determinar los escaños que elige cada territorio. Recalcó que no se debe usar la población para ello.

Asimismo, para el cálculo de la cifra repartidora sugirió usar la redacción de la ley municipal, recientemente modificada por la ley de inscripción automática.

Añadió que la modificación de los distritos implica necesariamente una modificación de las circunscripciones senatoriales que están definidas en base a la numeración de los primeros. Al respecto hizo presente que si se modifica la composición de los distritos indirectamente se estará cambiando la circunscripción senatorial, lo que tiene un quórum diverso de aprobación. Debe resolverse que quórum se aplicará para la aprobación de esa norma. Reiteró que no se puede modificar los distritos sin alterar las circunscripciones, porque de no hacerlo, las referencias quedarán mal hechas.

Al finalizar su exposición, concluyó que la mayoría de las críticas al binominal carecen de fundamento empírico.

Las propuestas proporcionales moderadas no producirían cambio significativo alguno de la representación en la Cámara, mucho menos con los actuales niveles de votación. Por otra parte, consideró que las propuestas que buscan una alta proporcionalidad, favorecen a las listas chicas, que pueden terminar de árbitros en el parlamento, afectando la gobernabilidad.

En este sentido citó el mensaje enviado al Senado por la ex Presidenta Bachelet el año 2006, donde sostenía que ““un sistema electoral que incentive, de hecho, la proliferación de las fuerzas políticas representados en el Parlamento por no disponer un umbral de entrada y que no posee estímulos para la formación y mantención de coaliciones fuertes -incluidos los mecanismos vigentes en Chile de pactos y sub pactos nacionales-, puede generar una fragmentación no deseada del sistema político y, en consecuencia, coaliciones débiles e inestables. Para contribuir al desarrollo de este principio, el número de partidos debe ser relativamente reducido; es decir se debe propender a un sistema electoral que desincentive la proliferación de los partidos”.

“No ayuda a la gobernabilidad y a la formulación de políticas públicas la existencia de partidos pequeños, de escasa adhesión popular, que puedan ejercer una especie de veto a través de una representación marginal o que se convierten en árbitros de la relación Gobierno-Oposición”

Destacó que los sistemas mayoritarios han demostrado que contribuyen a contar con democracias más estables, como sucede en Estados Unidos e Inglaterra

Por su parte, países que tienen sistemas proporcionales, han presentado serios problemas de gobernabilidad, como ocurrió en Israel, donde terminaron optando por un régimen parlamentario

F.- Profesor de la Cátedra de Política Latinoamericana de la Escuela de Gobierno de la Universidad de Chile, señor Cristián Pertuzé Fariña.

Expresó que un sistema electoral es mucho más que una fórmula. En él se deben entender incorporados los siguientes aspectos:

- Aspectos sociológicos, que dice relación con la idiosincrasia de la ciudadanía y con la percepción que ésta tiene del sistema electoral.

- Aspectos geográficos, dado que no es lo mismo formular una propuesta para un país con vastas regiones extremas y alejadas de un único centro, como sucede en Chile, que para un país con otras características.

- Aspectos demográficos. Señaló que el sistema electoral debe estudiar especialmente los fenómenos de agrupación de ciudadanos.

- Aspectos políticos. El sistema debe propender a garantizar la gobernabilidad y la eficacia, tanto en el plano legislativo, como en el plano gubernamental.

Entre las principales críticas que se han formulado al sistema binominal, se cuentan las siguientes:

a) Hoy existe la percepción que el sistema binominal atenta contra una adecuada representatividad.

b) Excluye a fuerzas menores que cuentan con respaldo ciudadano.

c) Genera una convergencia en torno a dos grandes bloques políticos, lo que responde más bien a lógicas del pasado o electorales.

d) Lo anterior trae como consecuencia que exista poco dinamismo al interior de los partidos y las coaliciones. Impide en cierta forma que se produzcan readecuaciones de las coaliciones políticas.

e) Existe una evidente desproporcionalidad del voto.

f) Por la predictibilidad de los resultados, la lucha electoral se produce al interior de las coaliciones, en circunstancias que un sistema electoral debe propender a que se marquen las diferencias entre las diversas listas en competencia. De antemano se conoce que será electo en la inmensa mayoría de los casos, un candidato de cada lista.

g) Crítica a la legitimidad del sistema.

Añadió que, en términos generales, la reforma al sistema electoral debe procurar alcanzar los siguientes objetivos: mayor representatividad, competencia, igualdad del voto y gobernabilidad.

En relación a la representatividad, indicó que ésta tiende a ser mayor con un sistema proporcional.

Respecto de la competencia, sostuvo que en la medida que aumente la incertidumbre tiende a aumentar la participación, a lo que ha contribuido la decisión de adoptar el sistema de inscripción automática y voto voluntario.

En cuanto a la igualdad del voto, sostuvo que se debe propender a que el voto de cada ciudadano valga lo mismo.

Por último, respecto a la gobernabilidad, el sistema debe propender a generar las mayorías necesarias para gobernar.

Manifestó que la reforma debe procurar conjugar una adecuada proporcionalidad del voto, con una representación suficiente de las diversas regiones y zonas del país.

Declaró que un aspecto que también debe resolverse al abordarse la reforma, es la participación de los incumbentes en ella. Afirmó que al examinar las propuestas formuladas se puede constatar que tienden a mantener los distritos, efectuando adecuaciones en ellos, sin efectuar un redistritaje. Existe el riesgo de establecer los nuevos distritos pensando en la forma en que se verán favorecidos.[4]

Por otra parte, reiteró que se debe propender a que el “peso del voto” sea similar entre los ciudadanos. Con todo, hizo presente que para ello debe estarse a los electores de un distrito o circunscripción y no a su población.

Añadió que, si para fomentar la competencia, se incrementa el número de candidatos, ello significará que la competencia al interior de la lista aumentará, agudizando el problema que se desea combatir.

Hizo presente que la reforma debe procurar aumentar la sensación de importancia del voto.

A continuación expuso un cuadro donde se compara la proporcionalidad del voto, considerando las siguientes tres iniciativas:

Respecto a la magnitud de los distritos, destacó que a mayor tamaño de éstos son mayores los incentivos a la fragmentación.

En los distritos donde se eligen dieciséis escaños, obteniendo el 5,8% de los votos se asegura un escaño. En los distritos que eligen ocho diputados, con el 11,11% se elige a un diputado. Por tanto, para un partido puede resultar muy atractivo competir sin pactar con otros, porque alcanzando la cifra indicada obtiene el cargo.

G.- Cientista político, señor Tomás Duval Varas.

Se refirió a las barreras de entrada que existen, entendidas como el piso necesario que se exige a un candidato o a un partido, para ser electo.

Expresó que existen diversas apreciaciones en torno a la votación mínima que se debe exigir para participar en la distribución de escaños. Destacó que este tema constituye un elemento importante, que no ha sido considerado por las diversas iniciativas en discusión.

Añadió que el establecimiento de un piso mínimo a escala estatal perjudica a los partidos que tienen una presencia concentrada en unos pocos distritos, como los partidos regionalistas.

Si se establece en cada distrito perjudica a los partidos menores que tienen un apoyo disperso.

Con todo, aclaró que el hecho que la barrera legal se supere, no significa que un partido pueda hacerse con un escaño. La barrera efectiva se sitúa entre el umbral de representación que garantiza el escaño y el umbral de exclusión que asegura que no será alcanzado.

Agregó que el efecto reductor de la fragmentación se aprecia a partir de una barrera efectiva del 6%. Con ese piso se evita una excesiva fragmentación de los partidos.

En segundo lugar, se refirió a la existencia de pactos y subpactos. Expresó que si se avanza hacia un sistema proporcional es evidente que será necesario contar con ellos. Recalcó que los pactos debieran tener un carácter nacional para ser efectivos.

Por otra parte, planteó el tema del financiamiento de la política, que estimó debe ser abordado.

En relación al límite a la reelección de los parlamentarios, manifestó que se opone a ella. Significa una pérdida en la libertad de decisión de los ciudadanos. Declaró que sólo deben fijarse límites para la reelección presidencial.

Con esa decisión se infiere un daño a los partidos políticos. Si un senador elegido por ocho años no puede postular a la reelección, no tendrá incentivos para conservar una adecuada relación con el partido político que lo postuló ni con sus electores.

Asimismo, se produce una pérdida de experiencia al interior del Congreso Nacional en el marco del proceso legislativo.

Respecto de las mociones en discusión, sostuvo que la propuesta de establecer diputados adicionales no rompe el binominalismo.

Valoró las propuestas que mejoran la magnitud de los distritos actuales.

Por otra parte, consideró que si se desea realmente fomentar la competencia, deben establecerse distritos que elijan una cifra impar de diputados, para que existan ganadores y perdedores. Con ello, las personas sentirán que el voto emitido valió la pena.

H.- Cientista político señor Genaro Arriagada.

Afirmó que el país atraviesa por una crisis política de magnitud y una especie de contradicción, ya que si bien hace mucho tiempo don Aníbal Pinto

advirtió que teníamos un gran desarrollo político, pero un escaso crecimiento económico, en las actuales circunstancias se presenta la situación inversa, si se tiene en cuenta la espectacularidad de las cifras de la economía de los últimos veinticinco años y el deterioro progresivo del sistema político. Indicó que las expresiones de dicha crisis son muy evidentes y se traducen en:

a) El descrédito del Gobierno y de la oposición. Generalmente, cuando el primero baja su nivel de aprobación, la segunda lo aumenta y viceversa, pero en este caso, según las encuestas, ambas fuerzas se ven disminuidas en niveles importantes

b) El descrédito del Congreso, de los partidos políticos y de la figura presidencial, aspectos de los cuales es necesario hacerse cargo

c) El sistema es incapaz de procesar las demandas, que escogen como canal las manifestaciones en las calles, sin buscar soluciones en las instituciones

d) La política está siendo constantemente sacudida por la presencia de outsiders que no tienen la representación de los partidos políticos y que surgen como figuras mesiánicas, en algunos casos, capaces de cambiar el sistema político, lo cual es muy preocupante, por cuanto en el futuro podría aparecer uno con gran influencia.

e) Los resultados de las elecciones municipales revelan una situación muy dramática, cual es el alto grado de abstención en la votación.

Señaló que los factores mencionados precedentemente se combinan y son difíciles de separar, pues no constituyen hechos aislados, sino que se interconectan y retroalimentan. En algunos casos, el aumento del desprestigio del Congreso y de la figura presidencial hace perder fuerza a otros elementos del sistema político. Por su parte, la alta abstención constituye un llamado a extraer de este último los procesos y conflictos para llevarlos a las calles.

A su juicio, sería un error que, a la luz de lo ocurrido en las elecciones municipales, el tema de la reforma política se concentrara en el análisis del voto voluntario versus el voto obligatorio.

Aseveró que el sistema electoral estaba gravemente enfermo desde antes, dada la crisis de participación. Trajo a colación que del total de inscritos en el padrón electoral, sólo el 57% votó en las últimas elecciones presidenciales, en tanto que 23 años antes, en el proceso en que fue electo Aylwin , participó el 82%. Esta desafección se manifestaba, además, en que la cantidad de inscritos en el padrón electoral se mantenía fija en alrededor de 8.300.000. En consecuencia, los resultados de las elecciones municipales se refieren a un universo electoral que fue aumentado en 5.000.000, sin una preparación previa, mientras que las cifras obtenidas con anterioridad se relacionan con el universo que estaba inscrito en los registros electorales. Tras un análisis de estos datos, se puede concluir que no ha habido un cambio tan brusco en la abstención, sino el agravamiento, en la última elección, de una tendencia que ya era preocupante.

Señaló que el hecho de la abstención plantea la existencia de un sistema político que está dividido en dos. Comentó que en un artículo de prensa había sostenido que los hijos de la dictadura, esto es, aquéllos que fueron opositores o partidarios de ella y que tuvieron este régimen como primera experiencia política, estaban inscritos, a diferencia de los hijos de la democracia, vale decir, quienes no tienen un recuerdo de ese período de la historia, que no tenían interés en inscribirse. Ante esta situación, el sistema político está dividido en dos universos: uno conformado por personas que superan los 40 años, que participa en los procesos inscribiéndose y votando, y que tiene, prácticamente, el monopolio de las candidaturas y el otro, compuesto por quienes no alcanzan la edad mencionada, no se han inscrito, no votan y difícilmente pueden acceder a las listas de candidaturas. Opinó que la fórmula para enmendar esta situación, consistente en la inscripción automática y el voto voluntario, en vez de solucionar el problema, creó otros nuevos, sin conseguir su propósito, aspecto que debería ser analizado

Asimismo, manifestó sus aprensiones por cuanto la elite política no desea ver la crisis. Afirmó que la clase política en nuestro país es muy notable y que los estudios dan cuenta de la calidad de la representación en el Congreso, como por ejemplo, el efectuado por la Consultora Seminario, donde se señala que los niveles de educación en la Cámara de Diputados son similares a los que tienen los 500 ejecutivos más altos del mundo de la empresa privada, siendo aún mayor el nivel en el Senado. Acotó que en América Latina, es difícil encontrar una clase política más educada que la nuestra, lo que no significa que pueda eximirse de sorpresivos ataques de ceguera, con la finalidad de ocultar un hecho evidente, como el que se analiza.

Consideró que una de las peores maneras de evitar la crisis es sostener que los problemas políticos no figuran en las encuestas de opinión pública, pues con ese criterio nadie se habría preocupado de grandes temas que no aparecen en ellas, como los equilibrios macroeconómicos, la regla fiscal y la energía, siendo esta última el principal problema económico del país. En consecuencia, el hecho de que no figure una demanda por una reforma política en las encuestas no quiere decir que no sea un problema urgente

Estimó necesario analizar los tres elementos fundamentales del sistema político, a saber, el sistema electoral, los partidos políticos y el régimen de gobierno, en el entendido que estas instituciones representan un conjunto de elementos que, aunque diversos, deben estar armónicamente relacionados entre sí. Afirmó que ningún sistema electoral vale más que el sistema político en el cual está inserto y que no tiene sentido contar con uno de muy buena calidad si hubiese una anarquía de partidos, incapaces de ordenar y representar a la opinión pública, o bien, con uno que sea perfecto en un sistema político que se estructura en torno a un cesarismo plebiscitario o a un líder carismático, que no está sujeto a controles que permitan la existencia de un eficaz Estado de Derecho. En consecuencia, la reforma del sistema electoral requiere una mirada conjunta al tema de los partidos políticos, teniendo presente que hay algunos de estos sistemas que no son compatibles con cualquier sistema político. Así, por ejemplo, un sistema electoral de representación proporcional pura no es compatible con un sistema parlamentario y un sistema de partidos políticos altamente fragmentado sólo es compatible con un hiperpresidencialismo, pues de lo contrario se produce un caos. Entonces, existe un equilibrio entre el sistema político (presidencial, semipresidencial o parlamentario), el sistema electoral y el sistema de partidos

En relación con la reforma del sistema electoral, aseveró que el binominal es una curiosidad y una anomalía, pues, básicamente, en el mundo sólo hay dos sistemas: uno de representación proporcional y otro, de representación mayoritaria. Mientras el primero es de justicia electoral, al propender que un determinado porcentaje de los votos se traduzca exactamente en el mismo porcentaje de escaños (42% de los votos obtiene el 42% de los cargos), el segundo no tiene por objeto la justicia electoral, sino conseguir un gobierno de claras mayorías, lo que da lugar a que, como ocurre en la política inglesa, el 40% de los votos permita obtener el 60% de los parlamentarios, organizando por esa vía un buen gobierno

Indicó que el sistema binominal no está presente en otros lugares del mundo y no aspira a reflejar el electorado del mismo modo que la representación proporcional, pues no tiene por objeto la justicia electoral, mas tiende a impedir la primera mayoría y a establecer controles por la vía de subsidiar a la segunda fuerza electoral. Precisó que en los sistemas de representación mayoritaria, el ganador se lleva todos los escaños, en tanto que en los de representación proporcional, consigue sólo lo que le corresponde de acuerdo con el porcentaje de votos obtenidos. En cambio, en el sistema binominal, hay un cierto castigo a la primera fuerza electoral, que puede llegar a ser muy alto, con el objeto de favorecer a la segunda. Agregó que ello puede dar origen a una injusticia muy grande, en el supuesto imaginario de una votación en que los porcentajes sean del 66% para una fuerza y del 34%, para la otra. Sin embargo, estimó que no estriba allí el mayor problema, pues en nuestro país hay dos fuerzas políticas que son más bien cercanas en cuanto a nivel de votación, de modo que, aunque en teoría el sistema pueda ser injusto, en la práctica, cualquier sistema permitiría lograr resultados cercanos al empate

Estimó que los problemas del sistema binominal se resumen más bien en los siguientes aspectos:

a) Obliga a constituir dos grandes coaliciones, a diferencia del sistema de representación mayoritaria, que favorece la existencia de dos grandes partidos. En este sentido, hay una especie de camisa de fuerza sobre partidos que son distintos, pero no pueden romper su alianza, a fin de evitar su anulación.

b) En razón de lo anterior, el sistema facilita un alto grado de manipulación, ya que en el intento de constituir las dos coaliciones, en el marco de nuestro sistema político tradicionalmente pluripartidista,- con siete partidos significativos y tres de menor importancia-, en cada elección se hace necesario configurar un bipartidismo de facto, para lo cual se requieren hábiles negociadores políticos que lo construyen sobre la base de un reparto de cupos y de dobles exclusiones, vale decir, donde se lleva un candidato viable, asegurándose la elección de este último en un cargo parlamentario, o bien, se postula un candidato de un partido fuerte, junto a otro, que pertenece a uno más débil. Precisó que el sistema siempre ha funcionado de esta manera y que en 1989, cuando la DC estaba en la cúspide de su poder electoral, le correspondió encabezar, junto a Edgardo Boeninger , las negociaciones, donde tuvieron que hacer esfuerzos para convencer al partido que no podía tener candidatos en el 25% de las agrupaciones, esto es, en quince de sesenta agrupaciones, pues de lo contrario hubiera arrasado con la representación del PS, del PPD y del PRSD, escenario que se repitió en las elecciones siguientes, donde el partido no pudo llevar candidatos en trece agrupaciones.

Planteó que esta manipulación permite determinar con claridad la existencia de candidatos seguros en el 85% de los distritos y en un porcentaje más alto en el caso de los senadores, lo cual da lugar a que entre los parlamentarios se imponga la teoría del uti possidetis, esto es, la idea de continuar en la posesión de los cargos que se tienen, con lo cual algunos exigen que les sea asignado el único cupo que corresponde a su partido, porque, de acuerdo con la geografía electoral, aquél garantizaría la seguridad de la elección.

Comentó que esta crítica contra el sistema binominal se ha esgrimido desde distintos frentes. Así, Oscar Godoy , distinguido cientista político, señala que la manipulación significa la destrucción de todo vestigio de libertad para elegir, quedando radicada en las minorías dirigentes que atribuyen las candidaturas. De este modo, este autor afirma que la competencia por los cargos parlamentarios tiende a desaparecer.

Trajo a colación que en la elección senatorial de 2001, donde correspondía elegir senadores en nueve circunscripciones, en las listas parlamentarias de la derecha se admitió competencia únicamente en dos regiones: en la de Tarapacá, entre Julio Lagos y Jaime Orpis , y en la Novena Sur, entre José García y Eduardo Díaz ; en otras cuatro, se llevaron candidatos únicos (en la de Atacama, Baldo Prokurica ; en la Quinta Costa, Jorge Arancibia ; en la Novena Norte, Alberto Espina , y en la de Aysén, Antonio Horvath ). En tres de estos casos, la candidatura única se logró defenestrando a candidatos alternativos, como Germán Chadwick , en la Región de Atacama; Sebastián Piñera , en la de Quinta Costa, y Francisco Prat , en la Novena Norte, donde era senador. En otras tres, los candidatos nombrados por los partidos ( Sergio Romero , en la Quinta Interior; Juan Antonio Coloma , en la Séptima Norte, y Hernán Larraín , en la Séptima Sur) fueron acompañados por candidatos que no representaban una amenaza para nadie, y que obtuvieron el 2,9%, el 1,6% y el 2% de los votos, respectivamente. Indicó que en la Concertación, igualmente es posible encontrar casos similares al reseñado, pues el sistema se presta para un alto grado de manipulación, cuyo ejemplo más fuerte es el comentado. Puntualizó que basta con saber que un partido elige diputados en un distrito determinado, para que el cupo sea reclamado por el incumbente, de manera tal que normalmente el candidato es acompañado por otro, de un partido más débil, que no representa una amenaza.

c) El binominal no sólo da pie a estas manipulaciones, sino que pone graves obstáculos a la competencia, por las siguientes razones:

i) Reduce las opciones a únicamente dos coaliciones y, entonces, para elegir 120 diputados, no hay más de 240 candidatos que están en las listas de las dos fuerzas viables, pero la cantidad de candidatos que tienen esta última condición es muchísimo menor. Por ello, las posibilidades de que resulte electo un candidato que no integre tales listas son prácticamente nulas y, de hecho, han sido muy pocos los que lo han logrado

ii) Se hace difícil el lanzamiento de candidaturas nuevas, en razón de la limitación a dos cupos en cada lista. Aun cuando la directiva de un partido no acepte la teoría del uti possidetis, es difícil que alguien desafíe al incumbente y logre arrebatarle el único cupo que aquél tiene en la lista, sobre todo si se trata de una persona joven. En efecto, mucha gente que fue inscrita automáticamente se ve imposibilitada de tener acceso a una lista parlamentaria, a menos que la directiva que conforma esta última decidiera defenestrar a algún incumbente por alguna razón. Si bien en alguna medida esta realidad puede ser rectificada, ello supone un cambio importante en la legislación para los efectos de permitir la realización de elecciones primarias, en las cuales habría que enfrentar el problema de la competencia y del financiamiento. Manifestó que, obviamente, quien desafía a un incumbente prácticamente no puede competir si este último cuenta con un conjunto de asignaciones que, aunque legítimas, constituyen un privilegio respecto del desafiante, en términos de sedes, secretarías, cuentas de teléfonos, correspondencia, etc.

Señaló que un sistema electoral que no favorece la competencia provoca un progresivo rechazo de gente que no quiere participar y que considera que no tiene sentido votar si no se puede tener candidatos que efectivamente la representen. Indicó que, en suma, a los dirigentes estudiantiles, que pueden estar equivocados en sus demandas, se les permite inscribirse, pero no se les da la posibilidad de tener candidatos que tengan su edad y piensen como ellos.

iii) Se dificulta la representación de las fuerzas menores y, por esa vía, se produce un hecho bastante complicado, como es que a un partido que tiene el 5 o el 7% de los votos le convenga negociar para efectos de conseguir dos o tres cupos en forma segura, a cambio de no llevar candidatos en 57 de los 60 cupos. Ello crea un profundo resentimiento hacia el sistema, porque, por ejemplo, hay lugares donde en veinticuatro años no ha habido un candidato democratacristiano, y en el caso del PC, el acuerdo que celebre para obtener tres cupos seguros, implica que en 57 de los 60 distritos no podrá llevar candidatos

iv) Se fomenta la partitocracia, por cuanto esta última sólo es evitable permitiendo la competencia. Si se deja la confección de las listas a los acuerdos entre los partidos que conforman la coalición, el poder de las directivas de los partidos, a través de sus representantes, que son los negociadores, es muy abrumador

Manifestó que si se modifica el binominal, debería buscarse un sistema que mantenga un reducido número de partidos y no adoptar jamás la representación proporcional total, toda vez que esta última conduce a una fragmentación excesiva del sistema de partidos. Opinó, tal como lo hacen Sartori y otros, que un sistema político no puede funcionar con más de cinco o seis partidos. Comentó que en Brasil enfrentan un serio problema de corrupción, que ha sido alentado, en forma importante, por la aludida fragmentación del sistema de partidos, tal como ha ocurrido en Ecuador, país este último donde resulta conveniente dividir un partido en pos de un premio. En efecto, ocurrió una vez que entre el momento de la elección y el juramento, el 25% de los candidatos que resultaron electos por algún partido, renunciaron a su militancia y en su calidad de independientes comenzaron a negociar sus votos directamente con el gobierno, a cambio de prebendas, dinero, beneficios para los parientes, etc. Indicó que en lugares donde no hay corrupción, pero sí una alta fragmentación, los partidos pequeños pueden tener más peso que los grandes, como ocurre en Israel, donde un partido religioso pequeñísimo pesa más que el Partido Laborista.

Manifestó ser partidario de una representación proporcional con un umbral del 5%, que puede provocar el mismo efecto de disminuir la cantidad de partidos que produce el binominal. Señaló que tras la República de Weimar, cuando se creó la República Federal Alemana, se estableció que un partido que tiene menos del 5% de los votos no tiene derecho a representación parlamentaria, más sí a existir como tal. Si se aplicara en Chile este criterio, habría menos partidos que los que existen bajo el actual sistema electoral

Consideró relevante aumentar el número de distritos y, en tal sentido, las propuestas que se han presentado le parecen adecuadas, ya sea que se elijan tres, cinco, siete o más parlamentarios por distrito. Indicó que mientras más grande sea éste, resulta más fácil la representación proporcional y, por el contrario, si es pequeño, es más difícil obtenerla

Planteó que para efectos de facilitar una mejor relación política, sería recomendable que, al interior de las listas, se promuevan sistemas claros de pactos y subpactos, de manera tal que los partidos puedan competir. Destacó por sobre todo la importancia de aumentar la competencia, aspecto que consideró crucial

Señaló que si, por factores políticos que no desea juzgar, no se logra arribar a un acuerdo en materia de aumento del número de parlamentarios- idea que parece ser impopular-, o en torno a una redistribución de los distritos, con el fin de posibilitar la elección de más de dos candidatos, sería aconsejable implementar una medida de mitigación, cual es que se continúen eligiendo dos candidatos por distrito, pero que en las listas hayan seis postulantes, de modo tal que no sólo hayan 240 candidatos reales, sino 1.440, lo que permitiría a los partidos abrir espacios de participación a mujeres y jóvenes y, a continuación, establecer un sistema en virtud del cual se podrían fijar cuotas para los efectos de que en las listas hubiera cupos para candidatos menores de 35 años o un porcentaje determinado de mujeres. Acotó que, al aumentar la cantidad de candidatos, las directivas de los partidos políticos perderían parte de su poder en la conformación de las listas

Enfatizó que si se cambia el sistema electoral, lo que por cierto considera necesario, debe enfrentarse la situación de los partidos políticos, que están gravemente enfermos y que ocasionan, en razón de este estado, un problema no menor

Sostuvo que si se analiza la historia de los partidos en los últimos cuarenta años, se aprecia que, por ejemplo, la DC tuvo en algún momento 120.000 militantes antes del plebiscito, que han disminuido gradualmente. Por otra parte, la cantidad de participantes en las elecciones internas de los partidos disminuye progresivamente de año en año y, en consecuencia, en algunos de ellos se ha instituido la práctica de multiplicar la votación por tres para los efectos de que los resultados puedan presentarse al público, sin que aparezca como evidente que sólo participan 12.000 o menos militantes de un universo de 100.000. Hizo hincapié en la gravedad de esta situación porque los partidos, al reducirse de este modo, se transforman en oligarquías que tienen el monopolio de la fijación de las candidaturas. Así, por ejemplo, si alguien compite por una candidatura senatorial en un electorado de 300.000 habitantes, es probable que ésta sea determinada por un universo partidario de 4.000 militantes. Dado que, de acuerdo con el sistema binominal, hay una alta probabilidad de que resulte electo quien se presente, el problema está en lograr que dicho universo elija a quien así lo desea, como candidato del partido. Lamentó que los partidos se hayan reducido, que no realicen campañas para la inscripción de nuevos militantes y que sea prácticamente imposible ingresar a sus filas, por cuanto resulta más cómodo controlar al partido, que es la base de la representación, en la medida en que tenga menos militantes. Concluyó que la reforma del sistema electoral debería ir aparejada de una apertura de los partidos políticos y que la participación de los ciudadanos en ellos debería ser voluntaria, a través del registro electoral, sin pasar por el control de las máquinas internas. Debería, además, fomentarse la inscripción de nuevos militantes que le den vida y establecer una regulación pública de estas entidades, en el entendido que es inaceptable que, superando en importancia a las sociedades anónimas, desde el punto de vista del poder que generan a través de las autoridades que salen de sus filas y de la conformación de la burocracia pública, no estén sujetas, por ejemplo, al control de una Superintendencia

Asimismo, hizo hincapié en la necesidad de dar mayor transparencia y supervisar los mecanismos electorales de decisión interna. Argumentó que los procesos de esta índole que se llevan a cabo a nivel nacional son cada vez más cuestionados. Si bien se critica bastante el sistema electoral venezolano, la oposición de ese país realizó unas elecciones primarias, donde votaron 3.300.000 personas, para lo cual solicitó ayuda al sistema electoral nacional, de modo que se pudo controlar adecuadamente dicho proceso. Consideró que el mecanismo de las primarias para la nominación de los abanderados más importantes es fundamental, ya que ha podido explicar algunos resultados obtenidos en las recientes elecciones municipales. Finalmente, enfatizó la importancia de garantizar una cierta disciplina al interior de los partidos, porque el “camisetazo” de que se habla en Ecuador o el transfuguismo de Brasil son factores de corrupción, así como también recalcó la necesidad de buscar un equilibrio entre el financiamiento de los presupuestos de los parlamentarios y de los partidos, puesto que si es público, en el caso de los primeros y no en el de los segundos, los partidos dependen de los recursos de que dispongan los parlamentarios para los efectos de desarrollar sus propias estructuras

Añadió que concuerda con la afirmación de que no se puede considerar al sistema binominal como culpable de todos los males. Insistió en que debe haber un equilibrio entre el sistema electoral, los partidos y el sistema político. Manifestó su preocupación por cuanto este último, que en sí es una suerte de acuerdo entre caballeros, que negocian y se reparten el poder, es observado con profunda desconfianza por una gran masa, en una sociedad que se ha tornado compleja, lo cual configura una crisis política. Todo indica que el sistema funciona bien aparentemente, pero hay una gran cantidad de gente que no lo quiere, lo que se traduce en la falta de participación en las elecciones, los bajos niveles de aprobación del Congreso y el deterioro de la figura presidencial. Consecuentemente, el sistema político no está funcionando y cuando ello ocurre, se corre el riesgo del advenimiento de un estallido. Comentó que en Venezuela, la acumulación de los defectos del sistema trasuntó en el surgimiento de una figura que concitó el respaldo del 80% de la población, incluida la derecha, que barrió con el sistema. Algo similar sucedió en Chile, en 1952, con Ibáñez.

Hizo hincapié en que ningún sistema electoral es perfecto, razón por la cual no podría instalarse, por ejemplo, uno de representación proporcional pura, pero con un umbral del 5%, no habría más de siete partidos y existiría competencia, con lo cual el sistema podría ser más amable. Añadió que el binominal no existe en otro país y que el sistema mayoritario, que sería de su gusto, es muy peligroso en una sociedad un tanto dividida, como la de Chile y Latinoamérica, en general, porque la fuerza política que obtenga el 42% de los votos y el 60% de los parlamentarios, puede cambiar la Carta Fundamental. Indicó que en los países latinoamericanos debe tenerse cuidado con la instalación de las denominadas democracias totalitarias, donde una fuerza tiene el 60% de los votos y puede destruir el estado de derecho, siendo necesario, por tanto, establecer una suerte de contrapeso

Opinó que la poca participación en los procesos electorales, revela que el sistema está enfermo y se necesita descubrir una fórmula para fomentarla. Si sólo participa el 40%, el 60% puede en algún minuto desentenderse de las leyes y de las autoridades y preferir la movilización social en las calles. Recordó que la causa fundamental de la crisis de 1973 no está representada en la junta militar que dio un golpe de Estado sino en el conflicto permanente que hubo entre la DC, la izquierda y la derecha para destruir el sistema político. Por ello, manifestó la preocupación que le invade cuando logra ver síntomas que le recuerdan esta situación que le tocó vivir y aseguró que, por ejemplo, le importa que Camila Vallejos tenga un cupo en las listas del PC y que en la DC haya candidatos que tengan menos de 45 años, que puedan competir en condiciones de equidad. De esta manera, se invita a los jóvenes a participar realmente en el sistema político, pues a través de la inscripción automática se les abrieron las posibilidades de participar en las elecciones, manteniéndose cerradas las puertas para las candidaturas que quisieran presentar. Manifestó su molestia con la partitocracia y con la designación a dedo de los candidatos, pues el sistema se presta para un grado de manipulación muy fuerte. En efecto, es fácil obtener un cupo en un distrito donde la Concertación no gana, pero en aquéllos donde efectivamente puede elegir un parlamentario, se producen peleas brutales, que pueden sincerarse con las primarias, pero este mecanismo funciona con partidos amplios, pues no tiene sentido que voten 400 para elegir un candidato a diputado que compita en un distrito donde votan 100.000. En consecuencia, se necesita un sistema electoral que controle a los partidos políticos para evitar los escándalos que se producen hoy en las elecciones internas de los partidos. Las primarias requieren de una Superintendencia y de la ampliación del número de militantes de los partidos, pues no puede ocurrir que 100.000 militantes designen los candidatos para competir en un padrón electoral de 13.000.000, ya que se estaría en presencia de una oligarquía que se autoasigna el derecho a nombrar candidatos. Por ello, destacó la importancia de acometer la reforma electoral junto con la de los partidos políticos. I.- Profesor de Derecho Constitucional de la Universidad Católica de Chile, señor Germán Concha.

Previno, en primer término, que en su exposición dará a conocer su opinión respecto de la reforma al sistema electoral, la cual no representa a la casa de estudios en que imparte clases. Asimismo, aclaró que, en lugar de referirse separadamente a cada una de las mociones en debate, analizará los siguientes temas, sin perjuicio de advertir que algunos de los proyectos requieren una reforma constitucional previa:

a) Eliminación de referencias al sistema electoral en la Carta Fundamental.

Señaló que se podría sostener que no es tan relevante que estas referencias estén presentes en la Constitución, por cuanto el número de parlamentarios y la forma de efectuar la elección deberían establecerse en la ley, en atención a que la Carta Política debe reservarse para los aspectos más importantes. No obstante, los redactores de la Constitución de Estados Unidos no siguieron este criterio y estimaron que estas referencias eran relevantes, pues el mecanismo que se establezca en esta materia produce efectos de tal magnitud, que se justifica incluirlo en las normas mínimas comunes. En consecuencia, si no se incorporan en la Constitución, estas reglas deberían estar contenidas, al menos, en una ley de quórum más alto, no sólo para dar señales respecto de su trascendencia, sino para evitar la tentación de intentar modificarlas cuando los resultados de las elecciones no son buenos para un sector, que desea, por tanto, ajustarlas para revertir esta situación en el siguiente proceso electoral. Entonces, es preferible que la modificación de tales reglas se torne más difícil, con el fin de mantenerlas, independientemente de los resultados.

b) Reducción del quórum de las leyes orgánicas constitucionales.

Argumentó que si todas las referencias al sistema electoral son trasladadas desde la Constitución a la ley orgánica constitucional y se reduce, paralelamente, el quórum de estas últimas a la mayoría absoluta de los diputados y senadores en ejercicio, se produce un alejamiento importante de aquella regla más alta que debería abordar estas materias para dificultar su modificación y tener mayor duración. Adicionalmente, se produciría una distorsión porque el último acuerdo constitucional adoptado sobre el tema supuso eliminar en la Carta Fundamental la referencia electoral en lo que respecta a la elección de los senadores, trasladándola a la ley orgánica constitucional, estableciéndose que en esa parte, la reforma de dicha ley requería del voto conforme de las tres quintas partes de los diputados y senadores en ejercicio (disposición decimotercera transitoria de la Carta Fundamental). En consecuencia, al rebajar el quórum de las leyes orgánicas constitucionales se estaría dando un paso en sentido contrario al de la última decisión que se adoptó en relación con esta materia. A su juicio, sería preferible mantener un quórum más alto en temas relevantes como el sistema electoral, de modo que sea difícil modificar la opción que se tome.

c) El aumento del número de candidatos a las elecciones.

Se ha propuesto, por ejemplo, la presentación de seis candidatos por lista, o del doble de los cargos que corresponda elegir, con lo cual se apunta a ampliar las opciones. No obstante, este planteamiento presenta un inconveniente, que se ha hecho presente también respecto del sistema binominal, cual es la lucha fratricida entre los integrantes de un pacto, que ven al compañero de lista como su competidor. Este efecto, se agudizaría en el caso de que la lista esté conformada por más de dos candidatos, pues en el binominal existe, teóricamente al menos, una posibilidad de que ambos resulten electos. En cambio, si una lista está compuesta por seis candidatos para llenar dos cupos, se sabe de antemano que cuatro de ellos sobran. Comentó que en las elecciones municipales, donde se utiliza el sistema proporcional en el caso de los concejales, el número máximo de candidatos por lista coincide con la de cargos a elegir. Declaró desconocer en qué medida la excesiva oferta de postulantes es útil, si puede, en definitiva, inducir a confusión a los electores. Consideró que es preferible recurrir a un sistema de elecciones primarias, donde puede efectuarse una discusión previa en forma ordenada, antes que tener una gran cantidad de candidatos. Indicó que puesto que se exige, a quienes desean ser candidatos independientes, obtener un cierto umbral de firmas, se les estaría perjudicando, ya que los partidos podrían aumentar indefinidamente la cantidad de candidatos sin verse limitados por este tipo de barreras.

d) Ajustes en materia de determinación de los distritos.

Este tema es recurrente en todos los sistemas institucionales, independientemente del sistema electoral que se elija y guarda relación con los desajustes que presenta el padrón electoral en términos de distribución de personas respecto de lo que ocurre en los hechos en el país a medida que evoluciona. Hay zonas que en un momento determinado concentraban una cierta cantidad de población y tenía sentido que fuesen consideradas equivalentes a otras, pero transcurridos treinta o cuarenta años la situación puede haber cambiado notablemente, de modo tal que dos distritos que fueron similares en sus inicios, pueden ser completamente distintos, si uno de ellos aumentó bastante su población y el otro se estancó. Si se asume que la base para las elecciones es poblacional, se hace necesario efectuar, cada cierto tiempo, ajustes en los distritos. Sin embargo, ello genera un problema práctico, toda vez que es complejo para un parlamentario modificar la base sobre la cual resultó electo, en tanto ya la conoce. Así, en general, los cambios en los distritos son consecuencia de un gran acuerdo político, cuando existe un problema grave de desajuste que afecta a todos los sectores que, por tanto, están dispuestos a asumir la modificación, con el costo que ello implica en algunas definiciones. Otra opción, que no se ha llevado a la práctica, pero que conceptualmente es posible, consistiría en utilizar una fórmula similar a las de las leyes de tarifas, esto es, determinar un mecanismo para efectuar el rediseño cada cierto período, a partir de una serie de antecedentes, donde la única intervención posible consistiría en cargar la base de datos, de modo tal que los cambios se producirán al combinarse una serie de factores que se establecieron previamente y que pueden ser la base poblacional, el crecimiento, etc. No obstante, igualmente presenta un inconveniente con el sistema de la inscripción automática, pues la base que se utiliza en este caso es el padrón electoral y en las elecciones municipales se pudo constatar que los datos del Registro Civil arrojaban que algunas personas estaban inscritas en un determinado lugar porque habían efectuado allí su último trámite, considerándose, entonces, como su domicilio, o bien figuraban inscritas en el lugar de nacimiento. Indicó que hubo mesas donde nadie concurrió a votar, lo que podría explicarse porque las personas a las cuales les correspondía sufragar en ellas tal vez no habían realizado trámites desde 1985, época en la cual el Registro Civil comenzó a solicitar información sobre el domicilio, posiblemente se encuentran fallecidas y se les ha asignado como lugar de votación aquél en que nacieron. Estas distorsiones son complejas al momento de efectuar el rediseño de los distritos, pues es necesario determinar el padrón que se utilizará y la forma de depurarlo, sin perjuicio de que a medida que se efectúen nuevas elecciones, se irán actualizando los datos. Concluyó que no es fácil ajustar la distribución de los distritos sin que ello se entienda como una manera de beneficiar o perjudicar a una determinada fuerza política.

e) Combinación entre el sistema binominal y otra fórmula.

Se ha propuesto, para los diputados, elegir la tercera mayoría o la segunda individual, si no corresponde al otro pacto, y para los senadores, un cálculo proporcional de los votos de la lista, para completar un cierto número. Asimismo, se ha planteado elegir una cantidad de senadores sobre una base nacional, esto es una gran circunscripción, equivalente a la del Presidente de la República, de modo que en esta materia hay varias alternativas. No obstante, consideró que no está clara la conveniencia de que para generar un mismo órgano existan dos sistemas muy distintos, que respondan a lógicas diferentes, por cuanto los incentivos se cruzan, de modo que no se puede ver claramente cuál de ellos prima, o dicho de otro modo, en qué medida la incorporación de un sistema proporcional montado sobre un sistema más mayoritario será capaz de mantenerlo, arreglarlo o perjudicarlo. Además, se corre el riesgo de dar origen a categorías de parlamentarios elegidos por votación popular, enfrentando a los que son electos directamente con aquéllos que constituyen una especie de segunda opción, lo que es inconveniente para el sistema institucional. Comentó que otra posibilidad, ya rechazada en Chile, es contar con parlamentarios que no tengan origen en el voto popular, sino que sean designados por otra vía, lo que fue fuertemente criticado, tal como lo sería que un parlamentario esté en condiciones de afirmar que ha ganado una elección a diferencia de otros, que son consecuencia de una suerte de repechaje. Opinó que deberían establecerse con claridad los incentivos para todo el sistema de elección de parlamentarios.

f) Reemplazo del sistema binominal por otro sistema electoral.

En términos conceptuales, es necesario optar entre un sistema mayoritario, donde se da preferencia a la estabilidad, y un sistema proporcional, en que se privilegia la representatividad o la diversidad de los representantes, mas ninguno es perfecto. En la última elección de John Major , en el Reino Unido, y en la primera elección de George Bush en Estados Unidos, se demuestra que con menos votos, pero bien distribuidos, es posible ganar, porque las mayorías se concentran de tal manera que se pueden obtener más cargos teniendo menos votos, pues donde se gana se obtienen menos votos, pero se logran mejores resultados en más lugares. Indicó que el sistema mayoritario, que funciona del modo señalado, presenta una distorsión, al igual que el sistema proporcional, pues no existe una forma de traducir en forma exacta el número de votos en cantidad de escaños, sino que se trata más bien de fórmulas de acercamiento para dar una mayor representatividad a la segunda o a la tercera fuerza, asumiendo el riesgo de la dispersión y de la inestabilidad que ello conlleva y con los incentivos a la formación de partidos “de esquina”, que los sistemas mayoritarios tienden a eliminar, porque fuerzan a que las proposiciones apunten al grueso de los votantes. En cambio, los sistemas proporcionales incentivan las posiciones extremas o particulares para garantizar la supervivencia de las agrupaciones que las defienden.

Sostuvo que el binominal procura el equilibrio, a través de un sistema mayoritario atenuado, de modo que para derrotar a la segunda fuerza se requiere traspasar un cierto umbral. Curiosamente, respecto de este sistema electoral confluyen críticas contrapuestas, pues hay quienes lo atacan por ser poco representativo, al igual que los sistemas mayoritarios, pero al mismo tiempo, se le acusa por no dejar que la mayoría haga lo que quiera, lo que podría decirse respecto de un sistema proporcional. Dado que mediante el binominal se pretende equilibrar ambos sistemas, resulta lógico que reciba ambas críticas. El mayor reparo que se formula en su contra es que sería causante, en buena parte, de la disminución de la participación electoral. Sin embargo, en las elecciones municipales se pusieron a prueba dos sistemas (uno mayoritario en la de alcaldes y otro proporcional, en la de concejales), y participó apenas el 40% de los inscritos, lo que permitiría concluir que este efecto no guarda relación con el binominal. De hecho, si se revisa la historia de las elecciones a partir de 1989, se puede constatar que hay menos participación en las municipales que en las parlamentarias, donde funciona el sistema binominal. En consecuencia, la participación en los sufragios se relacionaría más bien con una sensación o percepción del electorado acerca de que en las elecciones se pueda resolver algo más importante y de que, en realidad, es posible decidir algo relevante si se concurre a votar.

Opinó que la baja participación en las elecciones municipales debió haberse previsto al plantear el sistema de voto voluntario, ya que este último da cuenta de la participación efectiva, que no excede del porcentaje ya indicado. Acotó que en Suiza, conocido como uno de los grandes países democráticos, el 40% del electorado concurre a votar, porcentaje que se asimila al de Estados Unidos y Francia. Concluyó que esta situación no es mala necesariamente y que sólo lo sería si esta baja participación se debiera a una situación que impidiera votar a las personas, por ejemplo, por un defecto en el sistema, lo que implicaría el enfrentamiento de mucha gente con ganas de sufragar con un sistema que se lo impide. Algunos atribuyen a la desidia la poca concurrencia a las urnas, mas no es así necesariamente, pues podría tratarse, paradójicamente, de una sensación de estabilidad, propia de los países en desarrollo o en vías de desarrollo, donde la gente siente que, por ejemplo, en esta elección no hubo nada tan relevante en juego. Indicó que más que la desidia, podría existir la sensación de que si no se acude a votar, la vida no cambiará radicalmente para mal. En este sentido y, a partir del análisis de algunos resultados de las elecciones municipales, se podría advertir que uno de los grandes motivadores de participación electoral en un sistema de voto voluntario es el oponerse a un candidato en concreto e impedir que resulte electo, pues, de acuerdo con una serie de estudios, es más fácil catalizar en contra de un interés general que a favor de este último.

Se ha señalado que el binominal subsidia la representación entre el 3% y el 5%, lo que estaría confirmado en algunos estudios y resulta curioso, pues según los resultados de las elecciones de diputados efectuadas a partir de 1989 hasta la fecha, los expertos en materia electoral interpretan que dicho subsidio ha favorecido en tres ocasiones a la Concertación (elecciones de 1989, 1997 y 2011) y en otras tres, a la Alianza (elecciones de 1993, 2005 y 2009), de modo que ha operado en ambos sentidos.

Igualmente, se ha afirmado que el binominal excluye a una cantidad importante de personas porque no resultan electos, pero debe considerarse que todos los sistemas provocan este efecto, pues tienen un cierto umbral de votos. Esta crítica es dura al impetrarse contra un sistema mayoritario, pues a su alero quien obtiene el 49% de los votos ante otro, que logró el 51%, se queda sin ningún cargo, de modo que su exclusión es clara. Hay casos de personas que han resultado electas en el binominal como independientes- es el caso de Marta Isasi y de Carlos Bianchi- pero admitió desconocer si este sistema excluye en mayor o menor medida que un mayoritario puro. Manifestó dudas en torno a que el binominal excluya a personas que forman parte de movimientos sociales, por cuanto el ex presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago, que fue candidato a alcalde en estas elecciones municipales, no resultó electo pese a que en ellas se aplicó el sistema mayoritario, que le exige obtener más votos que su contendor, sin que pueda afirmarse inequívocamente que ha habido una exclusión.

Indicó que, por otra parte, se señala que el binominal mantiene un cierto empate a nivel nacional, lo cual es discutible por cuanto supone que los votos en Chile están distribuidos en forma homogénea, lo que se desmiente al revisar los resultados de las elecciones municipales y de las últimas parlamentarias, ya que es posible reconocer que hay distritos donde se impone una determinada fuerza y otros, en que impera la contraria, sucediendo los mismo en el caso de los partidos dentro de los pactos. Si bien se puede argumentar que ello se vincula con la historia, ya que los caudillos más importantes han sido de un determinado partido, pero dentro de ciertas comunas o distritos, ha habido diferencias dentro del mismo pacto entre los resultados que obtienen los partidos que lo componen, de modo que los votos no se encuentran rígidamente distribuidos, sobre todo en el marco de un sistema de voto voluntario, donde no hay un universo fijo que concurra a sufragar y el incumbente tiene la ventaja de ser más conocido. Indicó que en el sistema de voto obligatorio, la persona que no está interesada en sufragar, que no se informa acerca de los candidatos y concurre a las urnas sólo para evitar la multa, puede que vote por el candidato que postula a la reelección sólo porque es el único que le resulta familiar. En cambio, en el sistema de voto voluntario, quien no tiene interés en las elecciones, no participa, con lo cual se abre un espacio muy grande a las nuevas fuerzas que intenten convencer a los desencantados de adherir a sus posturas y de votar.

Señaló que una de las paradojas de los sistemas electorales consiste en que en la medida en que funcionan bien, suavizan la crisis y el enfrentamiento, haciendo que el proceso electoral sea menos dramático y más fluido. Aseguró que uno de los más grandes éxitos de la democracia como sistema institucional es extraer la violencia de la política y asegurar el traspaso pacífico del poder y que un buen sistema electoral debería apuntar a los mismos objetivos, de modo que la gente sienta que no es tan grave que sus candidatos pierdan una elección, lo que no revela falta de interés, sino una mayor estabilidad del país y de su institucionalidad. En este sentido, llamó a ser cautos y evitar que la alteración del binominal implique un retroceso

Respecto del rol del binominal, concordó con los planteamientos que se han formulado en relación con el que tuvo durante la transición, sin perjuicio de lo cual aclaró que en su exposición analizó este último en calidad de una herramienta permanente, reconociendo que no es un instrumento perfecto, en el entendido que ha funcionado tratando de cumplir el rol de un sistema mayoritario sin los problemas que se asocian a éste en su forma más pura y que radican en que con el 45% de los votos nacionales, se puede controlar los 2/3 de la Cámara, lo que da un amplio margen para modificar todo. Sin embargo, el binominal impide este efecto, pero es capaz de proporcionar la estabilidad propia de un sistema mayoritario, lo que redunda en un equilibrio. Como consecuencia lógica de lo anterior, es natural que existan menos opciones, ya que éstas se tienden a concentrar con el afán de conseguir más votos. Indicó que es fundamental determinar si se desea un sistema electoral con competencia potencial o real, entre candidatos efectivos, porque puede ocurrir que se abran las alternativas, pero que en los hechos no haya competidores por falta de piso electoral. En este último caso, no se trataría de un problema del sistema institucional, por lo que, en su opinión, más que aumentar los cupos en una misma lista, que implica elegir entre más personas que sustentan una misma visión, sería conveniente que otras corrientes de pensamiento puedan presentar candidatos. Por otra parte, para generar los cupos de las listas, hay que avanzar en la realización de elecciones primarias, pero para tener una competencia real, es necesario identificar la existencia de trabas efectivas para la presentación de candidaturas que no pertenezcan a una lista. Sin embargo, los resultados de las elecciones municipales, donde entraron en juego un sistema proporcional y uno mayoritario, no son muy distintos a los del binominal en términos de quiénes resultan vencedores. Consideró que el problema radica en que se compara un sistema con defectos con un mundo ideal y perfecto, donde todo está en equilibrio, lo que no existe en ningún lugar, de modo que es necesario compatibilizar y asumir ciertos costos en pos de las ventajas que se desean obtener

Por otra parte, advirtió que debe tenerse en consideración que tenemos un sistema rígido con la estructura de los sistemas presidenciales, razón por la cual no se puede exigir al Congreso que funcione como lo hace el Parlamento en un sistema parlamentario y que cuando se produzca un problema político importante se desarme para convocar a elecciones nuevamente y rebarajar las fuerzas. Los sistemas presidenciales rigidizan la duración de los cargos y tanto el Presidente como los parlamentarios se mantienen en ellos por el período en que fueron elegidos, salvo que incurran en alguna inhabilidad. Es natural, entonces, que los sistemas de elección de estas autoridades tengan umbrales más altos, máxime si se considera que con las reformas efectuadas a la Constitución, se perdió la lógica original que contemplaba la renovación de la Cámara a los cuatro años, al cumplirse la mitad del período presidencial, que inicialmente era de ocho años. Ello permitía una evaluación por parte de la opinión pública, de modo similar a lo que ocurre en Estados Unidos con el Presidente, ya que los representantes duran dos años. Implicaba que en la mitad de su período, se podrían reajustar las fuerzas con el propósito de validar políticas. Sin embargo, actualmente se elige a los parlamentarios conjuntamente con el Presidente y dejan sus cargos al unísono, lo que implica la ausencia de una fórmula para enfrentar una situación crispada y darle una solución. Por ello, es razonable que el sistema cuente con mecanismos que incentiven posiciones moderadas para evitar las situaciones de crispación, que no tienen salida al no existir la posibilidad de convocar a elecciones intermedias

J.- Profesor de Derecho Constitucional de la Universidad Católica de Chile, señor Miguel Ángel Fernández.

Explicó que, en primer término, su exposición tiene por objeto examinar el sistema electoral desde el ángulo estrictamente constitucional, puesto que es indispensable determinar la competencia que tiene el legislador para definir dicho sistema, ya sea para modificarlo de manera sustancial o para introducirle algunas adecuaciones.

El sistema electoral puede definirse como el conjunto de principios, instituciones y normas que tienen por objeto transformar la voluntad de los ciudadanos, manifestada a través del sufragio, en decisión o representación política.

Las normas constitucionales que actualmente regulan dicho sistema en Chile, tratándose de las elecciones parlamentarias, comienzan con lo dispuesto en el artículo 18 de la Carta Fundamental, que establece una disposición general en materia electoral. Conforme al inciso primero de este precepto, el sistema electoral es público y corresponde a una ley orgánica constitucional- en realidad son varias- determinar su organización y funcionamiento, regular la forma en que se realizarán los procesos electorales y plebiscitarios, en todo lo no previsto por esta Constitución y garantizar siempre la plena igualdad entre los independientes y los miembros de partidos políticos tanto en la presentación de candidaturas como en su participación en los señalados procesos.

En lo que interesa al sistema de elección parlamentaria, lo más relevante de dicha disposición estriba en que la plena igualdad entre independientes y militantes de partidos políticos, tanto en la presentación de candidaturas como en la participación en dichos procesos constituye un principio, que el legislador no sólo no puede eludir, sino que tiene que realizar, en cumplimiento de una obligación impuesta por la Carta Fundamental, aspecto que debe tener en cuenta el legislador al rediseñar o modificar el sistema electoral y que admite un margen amplio de interpretación. La definición del sistema electoral, por razones obvias, está fuertemente centrada en los partidos políticos, mas no debe olvidarse el principio señalado.

Asimismo, destacó que, tratándose de leyes orgánicas constitucionales, el quórum parlamentario requerido para su modificación es de cuatro séptimos de los diputados y senadores en ejercicio, de acuerdo con el inciso segundo del artículo 66 de la Carta Fundamental, y que debe someterse, obligatoriamente, a control preventivo del Tribunal Constitucional, según su artículo 93, inciso 1°, N° 1.

En segundo lugar, dio a conocer que el inciso primero del artículo 47 de la Constitución señala que la Cámara de Diputados está integrada por 120 miembros elegidos en votación directa por los distritos electorales que establezca la ley orgánica constitucional respectiva, por lo que, desde el punto de vista de la competencia del legislador electoral, debe considerarse que la Constitución fija el número de diputados; impone que la votación para elegirlos sea directa e indica la denominación de la unidad territorial sobre la cual se eligen, llamándola distrito, pero sin establecerlos ni fijar reglas para su determinación. Sostuvo que la modificación del número de miembros de la Cámara, propuesta en algunas mociones, requiere, por tanto, una reforma constitucional.

Por su parte, el artículo 49, esta vez referido al Senado, estipula que se compone de miembros elegidos en votación directa por circunscripciones senatoriales, en consideración a las regiones del país, cada una de las cuales constituirá, a lo menos, una circunscripción. La ley orgánica constitucional respectiva determina el número de senadores, las circunscripciones senatoriales y la forma de su elección, de tal manera que -siempre desde el ángulo del margen de decisión legislativa- hay que considerar que la Constitución exige que los senadores sean elegidos en votación directa por unidades territoriales que denomina circunscripciones, respecto de las cuales, a diferencia de lo que ha establecido en la Cámara de Diputados, sí introduce un criterio para su configuración, consistente en que su base serán las regiones del país, cada una de las cuales corresponde, al menos, a una de ellas. En razón de esto último, nos enfrentamos a una inconstitucionalidad por omisión respecto de las Regiones de Arica y Parinacota y de Los Ríos, desde que ellas fueron creadas, en razón de la falta de los respectivos cupos senatoriales

El citado artículo 49 agrega que la ley orgánica constitucional respectiva determinará el número de senadores, las circunscripciones senatoriales, con la ya aludida condición de base regional, y la forma de su elección. Además, la misma ley debe señalar qué regiones concurrirán a elegir senadores en cada oportunidad, pues la renovación de la Cámara Alta tiene que efectuarse alternadamente.

A estas normas, se agregan las siguientes reglas:

a) De acuerdo con el inciso segundo del artículo 51, las elecciones de diputados y senadores deben realizarse conjuntamente y, conforme al artículo 26, ese mismo día se realiza la primera o única vuelta para elegir también al Presidente de la República, el tercer domingo de noviembre del año anterior a aquél en que deba cesar en el cargo el Jefe del Estado que esté en funciones;

b) Al tenor de la misma norma, los parlamentarios pueden ser reelegidos;

c) No proceden elecciones complementarias, de acuerdo al inciso final de aquel artículo 51;

d) El escrutinio general y la calificación de las elecciones parlamentarias corresponde al Tribunal Calificador de Elecciones, al tenor del artículo 95, y

e) De acuerdo con el inciso segundo de la decimotercera disposición transitoria, incorporada en virtud de la reforma constitucional de 2005, las modificaciones a la Ley Orgánica sobre Votaciones Populares y Escrutinios que digan relación con el número de senadores, las circunscripciones existentes y el sistema electoral vigente, requerirán del voto conforme de las tres quintas partes de los diputados y senadores en ejercicio.

Hizo presente que en las tres materias referidas, esto es, el número de senadores, las circunscripciones existentes y el sistema electoral vigente, el quórum parlamentario de aprobación de las modificaciones es de tres quintos de los senadores y diputados en ejercicio y no de cuatro séptimos, conforme a la regla general en materia de leyes orgánicas constitucionales, ya mencionada, en relación con el inciso segundo del artículo 66 de la Carta Fundamental.

Advirtió que la legislación más estricta se encuentra acotada por la disposición transitoria, pues ella se refiere nada más que al número de senadores y no de diputados, desde que éste se encuentra establecido en la Constitución; a las circunscripciones senatoriales -debiendo respetarse la base regional-, pero no a los distritos, cuya reforma sólo requerirá de cuatro séptimos de parlamentarios en ejercicio. Precisó que si en el futuro se crean nuevas circunscripciones, su modificación requerirá el voto conforme de los cuatro séptimos de los parlamentarios en ejercicio, pues la mencionada disposición transitoria se refiere únicamente a las circunscripciones existentes a la fecha de la reforma constitucional de 2005.

Empero, la duda que podría plantearse es si la tercera materia a que alude la norma transitoria, consistente en el sistema electoral vigente se refiere nada más que a los senadores y no a los diputados, cuyo sistema electoral podría ser aprobado sólo contando con los cuatro séptimos de parlamentarios en ejercicio. Al respecto y recordando el acuerdo político de 6 de octubre de 2004, que facilitó la citada reforma constitucional, el profesor Emilio Pfeffer la circunscribe al Senado, de modo que en el caso de los diputados, rige el quórum aplicable a las leyes orgánicas constitucionales. Indicó que si existiese un acuerdo político para avanzar en un proceso de perfeccionamiento del sistema electoral parlamentario o de cambio radical del mismo, no parece razonable que se produzca de un día para otro, de una sola vez, sino que debería pensarse en un proceso progresivo donde puedan evaluarse los impactos de la reforma. En ese contexto, podría aplicarse un determinado sistema electoral a una de las Cámaras y la otra, sujetarse a otro distinto, como ocurre en el modelo norteamericano.

Concluyó que el legislador tiene un margen bastante amplio de competencia, ya que hay pocas normas en la Carta Fundamental sobre el sistema electoral, entre las que destaca la que consagra el principio de igualdad entre militantes e independientes, que es relevante en el ámbito de la determinación de las unidades territoriales, donde se centra uno de los cuestionamientos al sistema electoral vigente, por existir importantes diferencias entre los distritos, ya que aquellos que tienen pocos electores eligen la misma cantidad de parlamentarios que los que tienen una mayor población, sobre todo a partir del proceso de inscripción automática. Los cuestionamientos de constitucionalidad no son fácilmente visualizados frente a proyectos o ideas abstractas, pues la evaluación del apego a la Constitución se plantea frente a disposiciones concretas y mecanismos específicos en sistemas electorales precisos

Manifestó que el sistema binominal, que se aplica a la elección de los parlamentarios merece críticas y puede ser corregido o modificado sustancialmente. Consideró innecesario referirse a las ventajas del mecanismo binominal hoy vigente, tendiente a la conformación de grandes coaliciones de partidos, que evita la actuación aislada asociada al multipartidismo, considerado una de las causas de la crisis institucional que terminó con el quiebre del régimen democrático en 1973. En este sistema, derivado del beneficio a la minoría, el programa del gobierno debe, ejecutarse, necesariamente, con respeto por ella, pues se torna imperativo buscar el acuerdo y generar consensos, al menos, en las cuestiones consideradas fundamentales por el régimen jurídico en vigor, lo cual se comprueba por la exigencia de quórum especialmente altos para reformar la Constitución y aprobar o modificar las leyes interpretativas de aquélla y también las leyes orgánicas constitucionales

Por su parte, los defensores del sistema proporcional sostienen que éste se aviene mejor con la realidad multipartidista de Chile, donde el mecanismo binominal obliga a alianzas que no son siempre deseadas por convicción, sino efectuadas por conveniencia electoral. Además, refleja de manera más fiel el pluralismo imperante en nuestra realidad y, por ello, es más coherente con el principio democrático de la representación popular. Por ende, se sostiene, el sistema binominal sobrerrepresenta a algunos, beneficia sólo a las dos coaliciones mayores, provocando la exclusión del Parlamento de grupos o partidos que, teniendo alguna relevancia en las preferencias del electorado, no integran alguna de las dos grandes coaliciones

Tras este breve análisis, planteó las siguientes ideas, desde la perspectiva constitucional, en torno de la eventual modificación del sistema para elegir a nuestros parlamentarios

a) El sistema hoy vigente coadyuvó a que la transición política en Chile se llevara a cabo pacíficamente, sobre la base de los acuerdos y poniendo a las fuerzas políticas en la necesidad de contribuir a ese proceso desde el Parlamento

Es indudable que, transcurridos más de veinte años de vigencia del binominal, se ha vuelto un mecanismo extraordinariamente predecible, debido a la existencia de un régimen de partidos políticos y coaliciones, prácticamente, inalterado y de un padrón electoral congelado, hasta la elección municipal realizada recientemente, bajo el sistema de inscripción automática y voto voluntario, por primera vez, aunque, por su naturaleza local, no está llamada a servir de parámetro exacto para lo que sucederá, el próximo año, en las elecciones conjuntas de parlamentarios y Presidente de la República

Si a ello se agrega que, como consecuencia inevitable de aquella predictibilidad, se repiten algunas prácticas que afianzan todavía más aquella falta de sorpresa y competencia -inherente a todo sistema electoral que se precie de democrático, tales como las listas de candidato único; los postulantes que no realizan esfuerzo alguno, pues se saben derrotados; las negociaciones partidistas con escasa participación de sus militantes, y la discriminación de que son objeto los candidatos independientes, se focaliza la visión negativa el sistema, quedando sus aspectos positivos en desventaja

En esta línea de pensamiento, sin embargo, es claro que, en parte por la naturaleza del sistema y, en otro tanto, por aquellas prácticas reprochables, el más severo cuestionamiento se vincula con su falta de representatividad. Con todo, esta última, más que una crítica al sistema electoral, alcanza a todo el sistema político e incluso lo trasciende, imputándose a otras actividades públicas e, incluso, privadas de relevancia para el interés general

Por ello, la sola modificación del sistema electoral para elegir senadores y diputados, sea perfeccionando el existente o cambiándolo por uno nuevo, no será suficiente para superar ese reproche y otros que se formulan a la actividad política, en general, y al desempeño parlamentario, en particular, vinculados a la crisis de representación, esto es, al hecho de que la ciudadanía no se sienta representada ni satisfecha con las instituciones públicas e incluso, algunas privadas de trascendencia

Es necesario, por ejemplo, que exista una mayor competencia, lo que contribuiría a reforzar la legitimidad del sistema electoral, y de paso, la del Congreso y los partidos políticos; aumentar el número de candidatos en las listas, fijar una fórmula mixta de diputados nacionales y distritales, como la que se propone en el boletín N° 3976-06,. No obstante, hizo hincapié en que lo anterior no representa la gran solución ni el elemento más importante para fomentar la mayor vinculación entre la ciudadanía y los parlamentarios. Opinó que a la reforma o modificación del sistema electoral deben sumarse otras iniciativas, tales como

- La realización de elecciones primarias cuyo procedimiento sea realmente utilizado, implementándolo con carácter obligatorio. Algunos resultados interesantes de las elecciones municipales están precisamente asociados a la utilización de este mecanismo

- El rediseño de los distritos para que exista efectiva igualdad entre los ciudadanos que votan en cada uno de ellos, con las dificultades que en todo caso ello implica

Asimismo, indicó que hay otros aspectos que si bien no se vinculan directamente con el sistema electoral, se relacionan con el funcionamiento del Congreso, y que deberían abordarse, entre los cuales mencionó:

- legislar para que, al menos, el estándar hoy vigente para los funcionarios de la Administración Pública, en materias de probidad y transparencia, sea también aplicado a los diputados y senadores, sin perjuicio de reconocer el avance que se ha conseguido en este ámbito, en virtud de las últimas modificaciones a la Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional

- introducir mecanismos de democracia semidirecta, como la iniciativa popular de ley, el referéndum y la revocatoria

- establecer controles heterónomos respecto del uso de recursos públicos por los parlamentarios y por el Congreso Nacional, garantizando siempre la autonomía de esta institución, cuya legitimidad arranca directamente de la votación popular

Enfatizó que sin cambios de esta naturaleza y otros semejantes, la sola modificación del sistema electoral será insuficiente, pudiendo provocar algunos problemas adicionales en el futuro.

Por último, dado que la Constitución sólo impone, en materia electoral, respetar la plena igualdad entre militantes de partidos e independientes y establece pocas reglas específicas para la selección de los parlamentarios, sin definir un sistema determinado, resulta más útil fijar un criterio para su modificación: avanzar en términos progresivos, no traumáticos, ya sea hacia un modelo diametralmente distinto, de corte proporcional, o hacia un perfeccionamiento del actual, ensayando fórmulas mixtas, por ejemplo, bajo la estructura que propone el proyecto presentado por el Diputado Asencio , se mantiene la actual estructura, admitiendo que una porción de la Cámara de Diputados sea elegida conforme a criterios de proporcionalidad; o avanzar paulatinamente con la implementación de un nuevo sistema, por ejemplo, por regiones o introducir mayor proporcionalidad en la Cámara y mantener el binominal en el Senado.

Añadió que, en relación con la afirmación de que la gente no quiere el sistema político o el electoral, aclaró que en realidad desean ser parte de éstos y contribuir de algún modo, pues no siente que el voto tenga trascendencia e influencia en la selección de los candidatos, a la vez que desconoce el programa de estos últimos, ya que los debates se difunden a través de la televisión en horarios de madrugada, e incluso se elude la pertenencia a un partido político determinado. Para corregir esta situación, hay fórmulas que pueden implementarse en el corto plazo, como el aumento del número de candidatos y otras, de más largo aliento, como la iniciativa popular de ley, la introducción de referéndum, la revocatoria, etc

Por otra parte, se preguntó si el sistema electoral será modificado para forzar a los partidos a actuar como deberían hacerlo en cualquier sistema. Al parecer, la modificación en esta materia no puede ser aislada y parece lógico exigirles cambios en la forma en que se conducen para lograr superar los defectos o errores en que incurren, como la omisión de primarias, la falta de una efectiva participación interna y de convocatoria a candidatos jóvenes

K.- Investigador del Programa Sociedad y Política, Instituto Libertad y Desarrollo, señor Jorge Ramírez Rojo.

Afirmó que los datos que emanan de la encuesta del Centro de Estudios Públicos efectuada en diciembre del año 2006 demuestran que un cincuenta por ciento de los chilenos se mostraba proclive a cambiar el sistema electoral, versus un cuarenta y siete por ciento que era partidario de mantenerlo. Hoy la situación ha cambiado. Si bien se mantienen los porcentajes que apoyan un cambio del sistema, los partidarios de mantener el sistema binominal disminuyen a un 17%. De igual magnitud es el alza de las personas que no saben o no contestan la encuesta, como se aprecia en el siguiente cuadro:

Por otra parte, destacó que el Instituto Nacional de la Juventud efectuó una encuesta en el primer semestre del año 2012, la que refleja un gran desconocimiento del sistema electoral. Es así como un 22% de los jóvenes piensa que el sistema binominal se utiliza para la elección presidencial, un 15% cree que se utiliza en la elección de Alcaldes y un 15% piensa que se ocupa para la elección de concejales.

Por otra parte, expresó que existe el mito que el sistema binominal genera una sobre representación de la derecha en el Congreso Nacional, en desmedro de la Concertación. Sin embargo, si se examina el índice de desproporcionalidad, que es la diferencia entre el porcentaje de escaños versus el porcentaje de votos, es posible constatar un empate, dado que en tres oportunidades la Concertación se ha visto favorecida por el sistema electoral (elección parlamentaria de 1989, de 1997 y en la del año 2001). Por su parte, la Alianza se ha visto favorecida también en tres ocasiones: El año 1993, el 2005 y el año 2009, según se puede apreciar en el siguiente cuadro:

Añadió que no existe un sistema de agregación de preferencias que sea perfecto y el sistema binominal, como todos los sistemas, posee falencias, siendo la más importante la que apunta a que las dos grandes coaliciones se ven sobre representadas y la competencia se produce al interior de la coalición.

A continuación mencionó algunos criterios a partir de los cuales es posible evaluar el sistema binominal, de acuerdo a lo planteado por el profesor alemán, Dieter Nohlen: representación; concentración y efectividad; participación; simplicidad y legitimidad.

El primer criterio, representación, consiste en que la gran mayoría de las fuerzas políticas a nivel nacional se vean representadas en el Congreso Nacional

El segundo criterio, concentración y efectividad, quiere expresar la idea que el Congreso posea capacidad política y ejerza una acción gubernamental

Por último, los criterios restantes apuntan a la necesidad que el sistema propenda hacia la participación y que sea simple. Respecto a la legitimidad, ésta se vincula a que el sistema sea aceptado por la generalidad de los actores políticos y por la sociedad civil en su conjunto

Hizo presente que, como sostiene Sartori , los sistemas electorales no son más que fórmulas que transforman votos en escaños y que el desarrollo de la democracia es mucho más que la perfección de sus sistemas electorales (O` Donnell , 2004). Por ello, sostuvo que el énfasis debe estar puesto en una reforma integral del régimen electoral.

El sistema electoral es sólo una dimensión del régimen electoral. Éste incorpora el carácter del voto, voluntario u obligatorio; el carácter de la inscripción, automática o voluntaria; la estructura del financiamiento político; el adecuado funcionamiento del organismo “contralor”, que en Chile es el Servicio Electoral, ; la regulación en torno al funcionamiento de los propios partidos (primarias) y el sistema electoral

Respecto del financiamiento, propuso aumentar los recursos que se otorgan al candidato desafiante, para que la competencia sea más justa respecto del parlamentario en ejercicio

Citó lo expuesto por Rafael López Pintor , quien sostuvo que “la frecuencia de las reformas de los sistemas electorales está en proporción inversa a la estabilidad política del país”. Al respecto señaló que democracias como la estadounidense y la inglesa no cambian su sistema electoral.

Por su parte, Carina Perelli , directora de Asistencia Electoral de las Naciones Unidas, ha manifestado que se debe prestar atención a la fantasía electoralista “un cambio en la fórmula de representación no modificará hábitos instaurados de la ciudadanía, ni dará respuesta por sí solo a fenómenos tales como la exclusión, la apatía…”.

En relación a las principales falencias que presentan los sistemas proporcionales, como el que propone la moción 8343-07, indicó que la doctrina ha sostenido que “La combinación de presidencialismo y multipartidismo hace que las democracias estables sean difíciles de mantener”, agudizándose el problema cuando la fragmentación del sistema de partidos se incrementa (Mainwaring , 1993)

Por su parte, Patricio Navia y Cristóbal Aninat han señalado que “Quienes postulan un sistema proporcional para Chile cometen el error de olvidar las tensiones que produce tener un sistema presidencial fuerte como el chileno, junto a un régimen de representación proporcional en la composición del Congreso”.

Según Eduardo Alemán (2012) la instauración de un sistema proporcional con distritos de gran magnitud, podría generar una disminución en la responsabilidad individual de los legisladores para sus distritos; efectos en la rendición de cuentas y posiblemente debilitaría la gobernabilidad, ya que existirían bajos incentivos para formar coaliciones estables; con el consiguiente incremento del poder de los partidos “bisagra”.

Expresó que se consideran distritos grandes aquellos que eligen sobre seis parlamentarios

El profesor Bruce Ackerman ha señalado que “La forma más tóxica de división de poderes es la combinación constitucional de un Presidente popularmente electo junto con un Congreso electo por un sistema de representación proporcional (…) Si un sistema electoral de representación proporcional es deseable, el sistema estadounidense de división de poderes no lo es, ya que el costo potencial de la representación proporcional en términos de estabilidad política del régimen es mucho más alto en los sistemas presidenciales que en los parlamentarios.” L.- Coordinador de Políticas Públicas del Instituto Libertad y Desarrollo, señor José Francisco García.

Hizo presente que se suele omitir como argumento lo expuesto por el profesor Ackerman , en orden a que la peor combinación que se puede efectuar es la de un sistema proporcional con un régimen presidencial.

Por otra parte, expresó que Libertad y Desarrollo ha elaborado una propuesta que han denominado “Incrementalismo en dos pasos”

Recordó que se han implementado una serie de medidas y restan otras por hacer, las que deben ser necesariamente evaluadas

En este sentido, recalcó que se debe implementar y evaluar las siguientes reformas: Inscripción automática y voto voluntario; voto de los chilenos en el extranjero; Primarias; límites a la reelección de autoridades electas; elevar o eliminar los umbrales de gasto electoral permitidos para candidatos desafiantes, en particular mujeres y el redistritaje

Hizo presente que Libertad y Desarrollo no es partidario de exigir vínculo alguno a los chilenos que viven en el extranjero

Una vez que hayan sido evaluadas las reformas políticas recién enunciadas, con posterioridad a las elecciones del año 2013; se podría estudiar la posibilidad de incorporar reformas al sistema electoral, teniendo presente las siguientes cuestiones fundamentales: que se aplique en las elecciones del año 2017; llevar a cabo un redistritaje y buscar potenciar el efecto mayoritario del sistema electoral actual

Destacó que una de las principales críticas que se han formulado al proyecto presentado por el diputado Burgos , en el que participó el profesor Zapata , dice relación con la cantidad de poder que se le arrebata a las regiones. En un país como el nuestro, donde se pretende seguir avanzando en materia de regionalización, parece complejo otorgar más poder a la Región Metropolitana.

El avanzar en materia de proporcionalidad en el voto, genera tensión respecto de la representación que se le otorga a las regiones

Hizo presente que en la literatura es posible hallar contundentes argumentos a favor de un sistema mayoritario. Es así como se ha planteado que la fórmula mayoritaria es la más antigua y simple en lo que respecta a la familia de los sistemas electorales. El producto buscado con este tipo de sistema es la estabilidad del gobierno y su efectividad. Es un sistema simple, donde con completa claridad el electorado asimila las “reglas del juego” y propicia ganadores que son responsables de un área geográfica bien delimitada con un fuerte vínculo elector/representante fortaleciendo la relación principal/agente ( Farrell , 2011). Asimismo, se ha dicho que entrega estabilidad en los patrones de gobernanza; favorece a los partidos de base amplia y propende a la moderación programática por la búsqueda del votante mediano y propicia un control de daño al sistema democrático, al hacer más complejo el acceso al Congreso a partidos de ideologías extremas o antisistema.

A su vez, Nohlen (2004) agrega entre las ventajas las siguientes: prevención contra la fragmentación partidaria; fomento de la alternancia en el ejercicio del poder, ya que variaciones pequeñas en las relaciones de fuerza de los partidos en términos de votos pueden resultar en grandes variaciones en términos de escaños; facultad de decisión directa del gobierno a través de los votantes y no a través de los partidos mediante negociaciones de coalición pre y post-electorales.

Finalmente Farrell (2011) y Aninat y Navia (2005) agregan como cualidad el hecho que el sistema mayoritario no distorsiona la voluntad popular, terminando con candidatos electos como producto de fórmulas. Existirían más distritos con menos electores en cada uno. En distritos más pequeños, en tanto, representantes de partidos regionales o independientes podrían acceder a escaños sin mayor dificultad.

Expresó que las alternativas que existen para aumentar el “efecto mayoritario” son básicamente dos, una moderada y una más radical: Aumentar el número de candidatos por lista bajo el sistema binominal; pudiendo ser regla por default en distritos o circunscripciones donde no existan primarias, o bien avanzar hacia un sistema uninominal

En el esquema de primarias voluntarias, lo más probable es que serán muy pocos los distritos donde éstas se lleven a cabo. En este sentido, se puede establecer que en aquellos lugares donde no existieron primarias necesariamente se debe aumentar el número de candidatos

Agregó que la otra alternativa, como ya lo adelantó, es avanzar hacia un sistema uninominal. Un sistema de esta naturaleza reduce los costos de información y permite al electorado identificar con mayor facilidad a los candidatos

Hizo presente que un 32,4% de las democracias establecidas poseen este sistema y dos mil millones de personas canalizan su preferencia política por esta fórmula

Destacó que se trata de un sistema simple, donde con completa claridad el electorado asimila las “reglas del juego” y propicia ganadores que son responsables de un área geográfica bien delimitada con un fuerte vínculo elector/representante, fortaleciendo la relación principal/agente. Asimismo, favorece a los partidos de base amplia y propende a la moderación programática por la búsqueda del votante mediano y presenta los demás beneficios expuestos anteriormente

Recalcó que es compatible con un sistema presidencialista como el nuestro

M.- Directora del Programa Político de la Fundación Chile 21, señora Gloria De La Fuente González.

Manifestó que se ha señalado en reiteradas oportunidades que estamos en un momento si no de crisis, al menos de cierta complejidad para nuestro sistema político y nuestra democracia. Las evidencias de ello y sus causas son múltiples.

Desde la perspectiva de las evidencias, diversos estudios muestran señales preocupantes en nuestro sistema político. Sistemáticamente las encuestas del Centro de Estudios Públicos, del PNUD (Auditoría a la Democracia), de la Universidad Diego Portales, del CERC y otras, muestran niveles bajos de confianza en las instituciones propias de la democracia como el Congreso, los partidos, los tribunales de justicia y el gobierno. Bajo nivel de simpatía respecto a los partidos políticos (LAPOP 2010, el más bajo de América Latina) y en general, una visión muy negativa respecto a su labor y los intereses a los que obedecen (Auditoría a la Democracia).

Al respecto citó la siguiente encuesta: Consultados sobre cuánta confianza se tiene en las siguientes instituciones, la respuesta de los encuestados fue la siguiente:

Añadió que a lo expuesto se agrega la preocupante señal dada por la baja participación en la elección municipal de octubre de 2012 que, por debajo de todos los pronósticos y siendo la primera elección con inscripción automática y voto voluntario, alcanzó apenas 40% de concurrencia a las urnas.

Sostuvo que desde el punto de vista de las causas, es posible hacer algunas afirmaciones y levantar algunas hipótesis.

Hace más de una década se viene observando en Chile aquello que el Informe de Desarrollo Humano de 1998 señalaba como la paradoja del “modelo de modernización chileno”, caracterizado por condiciones objetivas de mejora en los estándares de vida de las personas y de cierta insatisfacción a nivel de los individuos. Esta perspectiva ha sido refrendada por el informe del año 2012, que da cuenta de una disociación entre el proyecto de vida personal y el valor que se le asigna a la vida social y las instituciones propias de la política.

La “normalidad” democrática llegó con el cambio de signo político y desplazó la lógica de la transición chilena, esto es, el temor a la regresión autoritaria, la desmovilización y el orden público. El Informe de Desarrollo Humano de 2012 da cuenta también de una sociedad que ha perdido el miedo y una élite que ha acuñado miedos relevantes.

El sistema político en su conjunto tiene problemas para procesar las demandas de una sociedad que se ha transformado. En parte esto puede explicarse por un sistema político cuya rigidez y empate, hace difícil generar acuerdos para procesar transformaciones relevantes, entre otras cosas, por los altos quórum de algunas leyes.

En este sentido, tan relevante como discutir la reforma al sistema electoral y al sistema político en Chile, es debatir sobre el conjunto de elementos que componen el régimen electoral: financiamiento de la política, la reforma a los partidos políticos, que forma parte de las reformas políticas propuestas por el gobierno, limitación a los mandatos, iniciativa popular de ley, entre otros. En ello también se puede incluir algunos incentivos para la participación de los ciudadanos en los procesos electorales, mejorando por ejemplo el acceso a medios de comunicación, establecer transporte público gratuito el día de las elecciones, establecer feriados, etc. La posibilidad real de crear efectos sustantivos y no sólo hacer cambios en los procedimientos en el sistema político dependerá del impacto que puede tener un conjunto de medidas y no sólo reformas o leyes parciales.

Sin perjuicio de ello, no cabe duda que la reforma al sistema electoral para la elección de parlamentarios, llamado sistema binominal, se ha transformado en un objetivo clave para la calidad de nuestra democracia en, al menos, dos sentidos:

‐ Se ha transformado en un símbolo de los problemas de competencia y participación de nuestro sistema político. En la encuesta CEP junio- julio el 49% de las personas señalaba que el sistema binominal en lo esencial debiera cambiarse, mientras apenas el 17% afirmó que en lo esencial debiera mantenerse.

- El sistema fue creado en un contexto político que buscaba garantizar la gobernabilidad por sobre la representación. Más allá de las condiciones particulares de su origen no democrático, lo cierto es que la existencia y permanencia de una democracia madura depende también de la capacidad de sus instituciones para adaptarse a las transformaciones de la sociedad. Dicho de otra manera, un sistema que fue creado, entre otras cosas, para generar gobernabilidad, hoy genera justamente una amenaza contra ella, frente a las trabas evidentes que produce. A saber:

- Sobre la representación de los partidos. A vía de ejemplo mencionó que para alcanzar un escaño es casi siempre necesario pactar. El Partido Comunista tuvo un porcentaje mayor de votos el 2005, que el 2009, sin embargo, sólo en la última elección, tras un pacto con la Concertación, logró elegir tres parlamentarios;

- La sub y sobre representación dada la magnitud (número de parlamentarios) y la configuración dispar de los distritos y circunscripciones (dimensión territorial y población) a lo largo del país;

- Los problemas que genera el hecho que la competencia se produzca al interior y no entre las coaliciones políticas.

El argumento anterior se refrenda considerando que el sistema efectivamente ha tendido en los últimos años a la dispersión. Hoy existen diecisiete partidos políticos legalmente constituidos en Chile y sólo nueve de ellos tienen representación parlamentaria. Si bien es cierto que muchos de éstos fueron creados en los últimos años, preguntó si el sistema les ofrece una oportunidad fuera de los dos grandes bloques.

Manifestó que, de acuerdo a lo que señala la literatura, un sistema electoral es el modo según el cual el elector manifiesta a través del voto el partido o el candidato de su preferencia y la manera en que esta preferencia se traduce en escaños. Para esto, los sistemas electorales establecen normas para cuatro áreas ( Dieter Nohlen ): 1. Distribución de circunscripciones electorales (mapa electoral): magnitud de escaños y formas de representación.2. Candidaturas: personal, lista o plancha (cerrada, bloqueada, no bloqueada, etc.).3. Votación (un voto, dos votos, varios votos, etc.).4. Conversión de votos en escaños (fórmulas de mayoría y proporción).

Generalmente la discusión sobre la reforma al sistema electoral en Chile en los últimos veinte años ha estado muy concentrada en el punto 1, esto es, configuración de un mapa electoral, y algo en el punto 4, que dice relación con el método de conversión de votos en escaños y consecuencias sobre la representación y el comportamiento electoral. Se ha discutido mucho menos en la forma de las candidaturas, que pueden tener incidencia sobre la personalización de la política y la relevancia de los partidos, y sobre el sistema de voto. En Chile por tradición existe el sistema de voto único.

Del mismo modo, cuando se aborda una reforma electoral es en general deseable considerar otros elementos que tienen que ver con el régimen electoral y la forma en que éstos interactúan con la reforma: ley de partidos, primarias, financiamiento de la política y las campañas, etc.

Adicionalmente, es preciso que la discusión de una reforma al sistema electoral sea integral y no mínima, es decir, debe considerar también las cuotas de género y los incentivos a la incorporación de mujeres al Parlamento para dejar de ser uno de los países que más deuda tiene sobre esta materia en la región latinoamericana. Pese a lo que se señale, la incorporación de las mujeres al parlamento es un tema de reforma electoral.

Indicó que también es relevante considerar la discusión sobre la representación de minorías y la participación de los residentes en el exterior, particularmente si se considera que este último punto ha sido materia de la agenda de reformas políticas de esta administración y también de los gobiernos anteriores.

Otra cuestión relevante es quien discute y se responsabiliza del diseño, por cuanto la forma en cómo se discute una reforma electoral es muy importante para efectos de su legitimidad. La experiencia internacional en democracia muestra que ésta puede ser fruto de una comisión de expertos, como fruto de un diseño constitucional más amplio que incluya un referéndum nacional, como en el caso de Nueva Zelanda o que los ciudadanos participen en el diseño del nuevo sistema, como el caso de Columbia Británica en Canadá. La sugerencia es considerar algo similar a lo que realizó la Comisión Boeninger en el año 2006, pero de carácter más transversal y que trabaje con un cronograma ajeno a los eventos electorales de corto plazo.

Al respecto destacó la importancia que exista un órgano independiente que cada diez años pueda observar la composición de los distritos de acuerdo a la población.

En relación a las mociones de reforma al sistema binominal que discute la Comisión, afirmó que tienen la particularidad de buscar enfrentar uno de los problemas más relevantes del sistema electoral para la elección de parlamentarios, que es la brecha que existe entre los distritos respecto al valor votante/escaño, que es un problema importante., pero no el único. Destacó que en algunos casos se contempla el aumento de candidatos, que hoy se restringe de manera significativa, y mecanismos de actualización del número de representantes, de acuerdo a criterios de población.

No obstante, declaró que ésta puede ser también una oportunidad para introducir otros criterios, ya que se puede aprovechar esta instancia para desarrollar una discusión de más largo alcance y cuya profundidad sea mayor.

N.- El encargado del Área Político Electoral del Instituto Libertad, señor Pablo Lira Rojas.

Afirmó que existe evidencia suficiente para estar alerta ante los fenómenos que están ocurriendo en las democracias del mundo y también en la de nuestro país. Los partidos tienen la obligación de escuchar a la ciudadanía, anticiparse a problemas políticos futuros, y proponer soluciones que eviten dichos problemas.

Hoy en día se puede apreciar un aumento en la desconfianza de los ciudadanos hacia las instituciones políticas, sociales y económicas y los representantes de éstas. En consecuencia, ha bajado la participación en los canales formales establecidos en el sistema democrático y hay una creciente participación en canales no institucionales de nuestra democracia, con un alto grado de frustración, polarización social y violencia. Por lo mismo, se produce un cuestionamiento a la legitimidad de nuestro sistema democrático y sus instituciones. De esta manera, se abren los espacios al populismo, personalismo, y regímenes poco gobernables.

Añadió que al analizar la conveniencia de realizar cambios a los sistemas electorales hay que partir de la base de que ningún sistema electoral es perfecto. Es cierto que son significativos e influyentes en la conformación de pactos electorales y conductas políticas, pero la relación no es unidireccional y no son los únicos elementos del sistema político a considerar.

Manifestó que la discusión debe centrarse no sólo en la necesidad de un cambio o reforma al sistema binominal, sino también en los efectos que se buscan conseguir con estas modificaciones y los principios o bases que las sustentan. Preguntó si se busca un sistema más proporcional y representativo o si se busca la conformación de pactos y alianzas o de mayorías.

Expresó que constituye un error pensar que la única forma de la clase política de validarse, es decir, de generar más confianza en la población, de combatir el desencanto y la desafección, y de tener más legitimidad ante la ciudadanía, sea sólo por medio de realizar cambios al sistema binominal. Seguramente podría influir, pero no va a ser “el” elemento determinante en la percepción de la gente sobre la política.

Sostuvo que deben esperar ver el comportamiento y nivel de participación de los votantes en las próximas elecciones de diputados, senadores y de Presidente de la República antes de realizar cambios al sistema binominal. Ello no significa que el debate se postergue hasta que las elecciones hayan finalizado. Hay que aprovechar lo que queda de este año y el siguiente para realizar las discusiones y los estudios pertinentes en la materia, para tener la nueva normativa lista para las elecciones de 2017. Es tarea de los políticos convencer a la ciudadanía de que es conveniente esperar para hacer los cambios y no apresurarse mayormente.

Después de la alta abstención en las municipales recién pasadas, a la incertidumbre propia y normal en las democracias respecto a quienes ganan las elecciones, hay que sumar las dudas sobre el porcentaje de la población que concurrirá a las urnas en los próximos comicios. El voto obligatorio y el padrón electoral anterior garantizaban un porcentaje de votantes, que si bien fue disminuyendo con el paso de los años, de cierta forma hacia predecible algunos resultados.

Señaló que no parece recomendable añadir otro elemento más de incertidumbre para la siguiente elección de diputados y senadores, menos considerando la alta abstención que se produjo en las recientes elecciones municipales. Si bien en éstas vota menos gente que en las parlamentarias y presidenciales, hizo presente que en ellas no rige el sistema binominal. La última elección municipal demostró que la baja participación no es responsabilidad de este sistema.

Agregó que no cree que los problemas de la democracia chilena se solucionen únicamente con reformas al binominal. Manifestó que es hora de tomar una amplia agenda de reformas a los partidos políticos que consideren el financiamiento público, más y efectiva transparencia, mayor vinculación con la sociedad, profundizando de esta forma su democracia interna, complementando la entrada en vigencia de la inscripción automática y el voto voluntario, debiendo aceptar los partidos el desafío de realizar primarias a todo nivel.

Estimó razonable que quienes están a favor de un cambio o reforma al sistema electoral busquen la mayoría suficiente en el Congreso para hacer las modificaciones. Sin embargo, dada la importancia de este tema, más que los respaldos mínimos habría que procurar generar amplios acuerdos políticos con todos los actores involucrados. Lo anterior complejiza las discusiones y negociaciones, pero resulta necesario con el objetivo de lograr cambios que convenzan realmente a los actores y que éstos den legitimidad a las nuevas reglas del juego, para así evitar que en el corto plazo el debate sobre el sistema electoral vuelva a ser un tema prioritario en la agenda.

Destacó que, más allá de legislar para buscar mejorar la calidad de la democracia, la principal tarea de resolver los problemas de rechazo a la clase política es de los partidos y de los políticos, por medio de sus prácticas y convicciones. La gran lección que dejan las elecciones municipales del 28 de octubre pasado es que en general no supieron descifrar los códigos actuales, ni interpretar la realidad de los chilenos hoy en día. Tampoco supieron convocar al electorado a las urnas, ya que realizaron sus campañas pensando en su experiencia anterior.

Añadió que la Comisión de Perfeccionamiento Institucional de Renovación Nacional efectuó una propuesta de modificación del sistema electoral. En el marco de esa propuesta se llevó a cabo un estudio en la Región Metropolitana para determinar el grado de conocimiento del sistema binominal.

Es así como realizaron una encuesta telefónica, en la que preguntaban cuáles son los problemas que el Gobierno debería enfrentar con mayor fuerza, en la cual la reforma al sistema binominal marcaba sólo un 3%, como se aprecia en el siguiente cuadro:

También preguntaban a los encuestados si conocían o no el sistema binominal. De quienes señalaron conocerlo (48%), sólo un 31% sabía que se utiliza en la elección de diputados y senadores, como se aprecia en el siguiente cuadro:

En el estudio antes citado se efectuaba una propuesta específica de reforma al sistema electoral. Allí se señalaba que “para mejorar su representatividad y proporcionalidad, sin perder las ventajas de la gobernabilidad normalmente asociadas a los sistemas similares al vigente la Comisión ha evaluado dos alternativas posibles:

1.- Cupo compensatorio a fuerzas relevantes: (Propuesta basada en la elaborada por la Comisión Electoral de Renovación Nacional del 2006)

- Esta reforma fue consensuada y propuesta por la Comisión de Renovación Nacional del año 2006 al gobierno de la ex presidenta Bachelet , en un contexto en que el PC estaba fuera del Congreso. Sin embargo, la misma no tuvo ninguna acogida en ese momento.

- Se requiere un umbral electoral mínimo de ingreso al Congreso para grupos relevantes.

- Aumentar el número de escaños de la Cámara de Diputados, sólo y exclusivamente si la ciudadanía lo establece así.

- Dicho aumento operaría solamente si uno o más partidos políticos, considerados individualmente, obtienen un 7% o más de los votos válidamente emitidos en el plano nacional y, sin embargo, no consigan representación parlamentaria. Es decir, el aumento es potencial y, en la práctica, procura y busca compensar una voluntad ciudadana no representada en la legislatura. La misma no pretende satisfacer un interés de los partidos políticos existentes de aumentarse los cupos en el Congreso.

- Los diputados que resulten electos bajo los cupos compensatorios quedarán adscritos a los distritos en los cuales compitieron electoralmente.

- La propuesta de un cupo compensatorio es sólo para la Cámara de Diputados y no para el Senado

2.- Reagrupación de distritos y circunscripciones (Propuesta elaborada por la Comisión de Perfeccionamiento Electoral de Renovación Nacional del 2012)

- Esta alternativa de modificación del sistema electoral procura aumentar la proporcionalidad y representación principalmente por la reagrupación de los distritos y circunscripciones electorales. Dicha alternativa consiste en lo siguiente:

- Mantiene los 120 diputados, y se crea la Circunscripción 20 de Arica- Parinacota, aumentando a 40 el número de senadores.

- Reduce de 60 a 34 los distritos y deja en 20 las circunscripciones.

- Agrupa o fusiona ciertos distritos y circunscripciones actuales, sin romper la unidad de las regiones, de manera de configurar distritos y circunscripciones más grandes en los que se elijan más de 2 diputados, según sea el caso. Esto con el objeto de que la oferta de candidatos para los ciudadanos sea más amplia.

La propuesta de modificación de las circunscripciones se resume en el siguiente cuadro

Ñ.- Cientista político del Instituto Libertad, señor Pablo Rodríguez Núñez.

Afirmó que los cambios en el sistema electoral deben apuntar a dar mayor representatividad, proporcionalidad y competencia, pero manteniendo la gobernabilidad y estabilidad que ha caracterizado al país desde el retorno a la democracia. En ese sentido se debe evitar llegar a modelos proporcionales puros que dificulten la búsqueda de acuerdos y la toma de decisiones. Sin embargo, es necesario encontrar la forma de fomentar que otras fuerzas o partidos nuevos pero significativos a nivel electoral tengan cabida en el Congreso.

Asimismo, hay que generar las condiciones para que el gran número de ciudadanos que no participan en los cauces institucionales de la democracia se incorporen al proceso democrático, y tender a mantener el peso relativo para las regiones en el Congreso respecto a la configuración actual y sobre todo en relación a Santiago.

Expresó que se deben evitar que las principales pugnas por los cupos se den al interior de los pactos. Para ello se debe incentivar la competencia entre alianzas y también se debe impedir que existan candidatos blindados por pactos o partidos. Además, estimó que se debe aumentar la oferta de candidatos, presentando por partidos tantos candidatos como cargos a elegir.

Al mismo tiempo, no compartió la opinión de hacer cambios orientados hacia sistemas mayoritarios para la elección de diputados y senadores, ya que no están en la tradición cultural de nuestro país. Enfatizó que un Congreso debe representar adecuadamente a la sociedad, lo cual no lo garantiza un sistema que busca generar mayorías y no acuerdos ni consensos. Elecciones mayoritarias están más acordes a los objetivos que tienen los comicios de alcaldes y de Presidente.

Entre los cambios que se puedan hacer al sistema electoral indicó que se debe evitar imponer un aumento en el número de diputados o senadores. Esta medida será impopular, ya que en vez de acercar la política y generar mayor confianza en la población, será vista como un cambio “cosmético”, que en definitiva profundizará la distancia ciudadana hacia las instituciones. A pesar que pueden existir buenas razones para proponer ampliar el número de diputados y senadores, esta medida sería tan mal vista por la gente como el tema del aumento de las asignaciones parlamentarias. Hay que proponer reformas que mantengan los 120 diputados y que los senadores suban a 40 para darle representatividad a la región de Arica y Parinacota que hoy no la tiene.

En este sentido, la mejor opción es mantener los actuales números de diputados y senadores, y realizar reagrupaciones de los actuales distritos en base a las circunscripciones vigentes o considerando a las regiones. De esta forma se generará un aumento en la magnitud de los cargos a elegir por distritos o circunscripciones, y por consiguiente tendería a aumentar la proporcionalidad del sistema.

O.- Director del Área de Estudios de la Fundación Jaime Guzmán, señor Guillermo Ramírez.

Comentó que esta entidad ha estado trabajando en materia de reformas políticas y que en la última semana de julio se publicó, en un paper denominado “Ideas y Propuestas” (N° 105), disponible en la página web de la institución, una serie de simulaciones, a partir de datos obtenidos en elecciones pasadas, de las distintas propuestas y proyectos de ley que tienen por objeto modificar el sistema binominal.

Opinó, a título personal, que las simulaciones no sirven de mucho, pues el comportamiento de los partidos políticos y de los candidatos cambia si lo hace también el sistema electoral, con lo cual se pone en duda la confiabilidad de las mismas. Aclaró que en su exposición se referirá a los distintos sistemas posibles.

Señaló que el sistema electoral es sólo una parte del régimen electoral, que abarca, además, elementos tales como el carácter voluntario u obligatorio del voto y de la inscripción; la estructura del financiamiento político, el funcionamiento de los organismos contralores y de justicia electoral, la regulación de los partidos políticos, como por ejemplo, las primarias y otros aspectos normativos, como el límite a la reelección. En su apreciación, en el último tiempo se ha discutido bastante sobre el régimen electoral, lo que implica un avance.

Manifestó que el análisis del sistema electoral debe efectuarse a la luz de estos otros elementos mencionados, pues un estudio aislado parece no ser conveniente. En efecto, si nuestro sistema electoral fuese muy complicado y difícil de entender, habría una menor participación y sería aconsejable que el voto fuese obligatorio, más si es más simple, no hay problemas en que éste sea voluntario.

Expresó que el régimen electoral es sólo una parte del sistema político, cuyos elementos son innumerables, siendo de gran relevancia el sistema que se adopte entre el presidencialismo, vigente en nuestro país, y el parlamentarismo, propio de países europeos. Precisó que en este análisis asumirá la mantención del régimen presidencial en Chile, sin perjuicio de las conversaciones sostenidas entre representantes de la DC y de RN para avanzar hacia uno de carácter parlamentario. Al mismo tiempo, el hecho de que los sistemas electorales funcionen de mejor o peor manera dependiendo del régimen de que se trate, permite concluir que no estamos frente a un tema de principios, pues lo que puede ser beneficioso para un sistema político, puede no serlo en otro, de modo que en materia de sistema electoral, el debate debe centrarse no en los principios, sino en aquello que resulte más conveniente para Chile, según las características de nuestro sistema político.

Dio a conocer que el binominal es un sistema proporcional de magnitud 2, que, según algunos, implica la existencia de elecciones y de primarias en forma simultánea, puesto que al interior de las coaliciones se produce competencia, con lo cual el mismo día de la elección habría una suerte de primarias. Puntualizó que hay ciertos mitos en torno a este sistema electoral: el primero indica que ha beneficiado particularmente a un sector político, en circunstancias que ha ayudado por igual a las dos principales coaliciones. En efecto, benefició a la Concertación más que a la Alianza en las elecciones de diputados de 1989, 1997 y 2001, mientras que favoreció a la Alianza más que a la Concertación en las elecciones de diputados de 1993, 2005 y 2009, siendo de menos del 5% la diferencia promedio entre la cantidad de votos y la de escaños obtenidos por estos conglomerados, de modo que la desproporción no es tan grande. Por su parte, el segundo mito dice relación con que este sistema no es del agrado de la mayoría de la gente, por lo que podría influir en la participación electoral. No obstante, en las elecciones municipales de 2000 votaron 7.089.886 personas, en tanto que en las parlamentarias de 2001, participaron 7.034.292, y en ambas se abstuvo alrededor de 1.000.000. Precisó que se considera dicho año porque en él no hubo elección presidencial, con lo cual es posible medir en forma más pura el efecto del voto en el sistema binominal. La comparación de estos datos permite concluir que la participación en ambas elecciones resulta prácticamente equivalente, con una diferencia de 1,5 votos por mesa, en circunstancias que en las elecciones municipales rigen los sistemas mayoritario y proporcional, y en las parlamentarias, el binominal.

Planteó que la principal fortaleza de este último radica en que ha brindado estabilidad, muestra de lo cual es que en 22 años se haya discutido escasamente respecto de la modificación al sistema electoral, siendo su principal debilidad el traslado de la competencia al interior de los pactos. Aclaró que en este análisis debe tomarse conciencia de que no hay un sistema electoral perfecto, de modo que el nuestro, como los demás, tiene aspectos positivos y negativos.

Sostuvo que la función de un sistema electoral consiste en transformar votos en escaños, proporcionando, idealmente, representatividad, estabilidad y legitimidad.

Explicó que en la doctrina, los sistemas electorales se clasifican en:

a) Mayoritarios, en los que se elige sólo un legislador por distrito, cuya principal fortaleza es la estabilidad, siendo propio de los países anglosajones, como Estados Unidos e Inglaterra.

b) Proporcionales, en los que se eligen dos o más legisladores por distrito, siendo su principal virtud la proporcionalidad, el cual es utilizado en casi todos los países de Europa.

c) Mixtos, que incorporan elementos de los dos sistema anteriores, como ocurre en México y Alemania.

Comentó que Maurice Duverger , politólogo francés, fundador del Instituto de Estudios Políticos de Burdeos, representante del Partido Socialista Europeo en el Parlamento Europeo, acuñó –entre otros– el término semipresidencial y ha sido un gran estudioso de los sistemas electorales. Este autor planteó las siguientes tres leyes sociológicas en política: 1. Un sistema electoral mayoritario conduce a dos grandes partidos.2. Un sistema electoral proporcional conduce a un multipartidismo.3. Un sistema electoral mayoritario con segunda vuelta conduce a un multipartidismo con dos grandes coaliciones.

Indicó que si bien el binominal es proporcional, al ser de grado 2, se asimila en sus efectos a uno mayoritario con segunda vuelta, lo cual explica que tengamos un multipartidismo con dos grandes coaliciones.

Por su parte, Scott Mainwaring , experto en política comparada y uno de los 400 autores más citados del mundo en temas de sistemas electorales y partidos políticos, ha sostenido que “el hecho que democracias presidenciales con multipartidismo tengan tan malos resultados no ha recibido la debida atención. Ninguna de las 31 democracias estables del mundo tienen esta configuración, y existe sólo un ejemplo en la historia –Chile desde 1933 a 1973– que la tuvo”. En el fondo, este autor advierte acerca de los pésimos resultados que producen los regímenes presidenciales con un sistema electoral proporcional y, por tanto, multipartidismo, y denomina democracias estables a aquéllas que tienen, al menos, 25 años de estabilidad política, en las que no ha habido golpe de Estado ni guerras o motines civiles, de modo que faltan aún tres años para que Chile sea incluido dentro de esta categoría. Concluyó que de mantenerse el sistema binominal, nos constituiríamos en el segundo ejemplo histórico de estabilidad política con presidencialismo y multipartidismo, tras la experiencia del propio país durante el período que comprende los años 1933 a 1973.

Señaló que según este autor, el presidencialismo multipartidista es más proclive que el parlamentarismo o que el presidencialismo bipartidista a provocar un estancamiento entre el Ejecutivo y el Legislativo, produciendo inmovilismo. A diferencia de los sistemas parlamentarios, los presidenciales no tienen mecanismos para asegurar mayoría en el parlamento. El partido del presidente suele tener mayoría –o casi– en sistemas bipartidistas, pero casi nunca en sistemas multipartidistas, de modo que se ve obligado a formar coaliciones en el Parlamento para cada tema. En este sentido, los sistemas presidenciales multipartidistas se parecen a gobiernos de minoría parlamentaria, con la diferencia de que en la mayoría de los sistemas parlamentarios el gobierno dura mientras obtenga apoyo mayoritario en los temas claves. En este sentido, cuando se aproximan las elecciones, hay momentos políticos difíciles, o bien se producen crisis institucionales, la situación explota y se enfrentan el Ejecutivo y el Parlamento, lo que ocasiona un desequilibrio político importante. En consecuencia, este autor concluye que un régimen presidencialista se aviene con un sistema mayoritario, que promueva dos grandes coaliciones, como ocurre en Chile, o dos partidos, como en el caso de los países anglosajones.

En el mismo sentido, acotó que en el polémico libro “La nueva división de poderes”, de Bruce Ackerman , publicado en 2007, se señala que la forma más tóxica de división de poderes es la combinación constitucional de un presidente popularmente electo (régimen presidencial) junto con un Congreso elegido por un sistema de representación proporcional, con lo cual este autor arriba a la misma conclusión formulada por el anterior.

A mayor abundamiento, citó el paper “Reformas políticas: los avances y lo que falta”, de Cristóbal Aninat y Patricio Navia , publicado para Expansiva, se plantea que quienes postulan un sistema completamente proporcional para Chile “cometen el error de olvidar las tensiones que produce tener un sistema presidencial fuerte como el chileno, junto a un régimen de representación proporcional en la composición del Congreso”. Estos cientistas políticos proponen la adopción de un sistema mayoritario para las elecciones legislativas del país; la creación de 120 y 38 distritos uninominales para la Cámara y el Senado, respectivamente, y de un organismo independiente para el diseño y rediseño periódico de los distritos electorales. Estos autores advierten sobre la necesidad de preocuparse por la cantidad de electores por diputado, que en nuestro país es muy desigual, lo que pudiera constituir un primer paso para responder a la crítica de escasez de proporcionalidad que se esgrime respecto del binominal.

Comentó que en Chile hay varios sistemas electorales simultáneos. Así, para elegir al Presidente, se utiliza uno mayoritario con balotaje; en el caso de los parlamentarios, rige el binominal; en el de los alcaldes, el mayoritario y en el de concejales, el proporcional, con lo cual se puede intuir lo que ha ocurrido con este último sistema electoral en Chile. Así, en la pasada elección municipal, hubo en promedio, en cada una de las comunas, más del doble de listas para concejales que la cantidad de candidatos a alcaldes, lo cual refleja el efecto del multipartidismo que produce un sistema proporcional, en contraposición con el efecto propio de uno mayoritario, que propicia dos partidos. Además, las papeletas de votación eran enormes para la elección de concejales, a lo que se suma la dificultad para entender el sistema y explicar a la gente las razones por las cuales un candidato no fue electo a pesar de haber obtenido más votos

Afirmó que el sistema proporcional es útil y recomendable en

- Los regímenes parlamentarios, donde se deben formar coaliciones para tener un gobierno estable y no hay atomización de partidos políticos (España, Bélgica , Holanda , Portugal , Suecia , Suiza, etc.);

- Las democracias emergentes o nuevas. Así, por ejemplo, en Lesotho se ocupaba un sistema mayoritario, donde el partido que ganó las elecciones obtuvo todos los escaños excepto uno, con el 60% de los votos, lo que provocó motines y el colapso del gobierno, situación similar a la que se produjo en Mongolia, en el año 2000, donde el partido gobernante obtuvo el 95% de los escaños con el 58% de los votos.

Si hubiese habido en Chile un sistema mayoritario para las elecciones de 1989, la Alianza por Chile habría obtenido el 15% de los escaños, con el 34.2% de los votos, en la democracia incipiente de la década de los noventa, considerando que hubiesen sido electos sólo 60 diputados, ya que habrían sesenta distritos y en un sistema mayoritario se elige un diputado por distrito.

- Los países con diferencias étnicas importantes. En Irak, en 2004, se adoptó un sistema proporcional con el fin de no dar una ventaja excesiva a los Chiitas por sobre los Sunitas, Kurdos, Cristianos, etc., como habría ocurrido bajo un sistema mayoritario. Al haber más partidos que representen a todas estas etnias o religiones, se asegura que éstas tengan una adecuada participación en el Congreso

P.- Director del Instituto de Investigación en Ciencias Sociales (ICSO), de la Facultad de Ciencias Sociales e Historia de la Universidad Diego Portales, señor Claudio Fuentes.

Señaló que la discusión sobre este tema es fundamental aun cuando no haya ánimo político de desarrollarla más. Destacó la importancia de analizar, en términos de cifras, la participación electoral, es decir, la cantidad de personas que concurren a votar y están interesadas; la confianza social hacia sistema político, la identificación con partidos y coaliciones y los niveles de representación. A su juicio, en los últimos veinte años se han producido cambios importantes en la sociedad chilena y ha aumentado la brecha entre el sistema político y la sociedad.

Indicó que si se considera la proporción entre la cantidad de votos y la edad de los votantes, se advierte que desde 1989 hasta la fecha hay una tendencia a un declive constante en la participación de las personas mayores de dieciocho años, con ciertos altibajos. La participación de los mayores de dieciocho años ha disminuido del 82%, en 1989, al 41% en las recientes elecciones municipales. Estimó que los resultados de estas últimas representan la culminación de un proceso de desafección de la ciudadanía de más larga duración, en el cual hubo una cierta paralización en razón de la existencia de un sistema de inscripción voluntaria y voto obligatorio. Tras la modificación en esta materia, se ha hecho evidente el mayor desinterés de la población en participar. En el siguiente gráfico, se aprecia la evolución de la participación electoral en el período 1989-2012:

Comentó que se confirma la brecha entre el sistema político y la sociedad si se tiene en cuenta la identificación con los partidos políticos. Entre los años 2005 y 2012, según una encuesta de opinión de la UDP, el porcentaje de gente que no se identifica con estas agrupaciones, ha aumentado del 50% al 74%. Precisó que para esta medición no importaba con qué partido se identificaban las personas, pues está referida a todo el espectro político. Señaló que del 50% de las personas que se identificaban con algún partido en el año 2005, ha habido un retroceso a alrededor del 37%. En el siguiente gráfico, se exhiben los resultados de la citada encuesta nacional de la UDP, en que se consultaba cuál de los siguientes partidos políticos representaba mejor los intereses, creencias y valores del encuestado. La línea superior representa la respuesta “No se identifica”, esto es, ninguno de los partidos representa una opción, mientras que la línea inferior considera la mención a cualquier partido.

En relación con la autoidentificación ideológica en el eje de derecha o izquierda, ante la pregunta formulada por CEP-Chile, en torno a la posición con la que simpatiza o se identifica más el encuestado, ya sea de derecha, centro-derecha, centro, centro-izquierda, izquierda, se aprecia una disminución importante en la identificación con alguna de estas ideologías y el incremento de quienes no se identifican con ninguna. A ello se suma el resultado de la última encuesta CEP, donde el 46 ó 48% no se identifica con un eje ideológico, lo que no significa que la gente carezca de posiciones políticas respecto del Estado, del mercado y una serie de temas, ya que por el contrario, la sociedad chilena, en estas materias y en temas valóricos, se identifica con ciertas posturas y se divide por ello. En conclusión, la sociedad sería menos ideológica y menos identificada con partidos políticos, que tienden a no representar los intereses de aquélla con mayor intensidad que hace siete años. En el siguiente gráfico, se establece que en 1993, el 83% se autoidentificaba con una ideología, en tanto que este porcentaje disminuyó al 64% en 1999; al 68% en 2005 y al 55% en 2009. Paralelamente, aumentó el porcentaje de personas que no se autoidentificaban con la derecha o la izquierda, del 8% en 1993, al 28% en 1999, al 26% en 2005 y al 37% en 2009.

Hizo hincapié en que uno de los problemas del sistema radica en la representación y, al efecto, comentó que la participación de las mujeres en el Congreso no excede del 14% o del 15% en nuestro país, porcentaje que está bajo el promedio en América Latina y en el mundo, donde alcanza el 19,3%. Con ello, se ubica en el lugar N° 37 en un ranking de 42 países que se aprecian en el gráfico siguiente. Indicó que se está en un nivel más bajo del desarrollo que deberíamos tener si se considera, además, la representación de minorías étnicas y de otros grupos de la sociedad.

Por otra parte, se aprecia una fuerte reducción de la confianza en las instituciones de representación, particularmente en los partidos políticos, donde sólo alcanza al 4%; el Congreso, que es inferior al 10%, en circunstancias que entre los años 2003 y 2004 había sido de alrededor del 22%; en los tribunales y en el Ejecutivo. En general, en las sociedades, sobre todo en sistemas presidenciales, el alto nivel de confianza en el gobierno produce como efecto el aumento del correspondiente a las demás instituciones, a diferencia de lo que ocurre en nuestro país, lo que es preocupante, por cuanto revela una división entre la percepción de confianza hacia el Ejecutivo, que puede subir o bajar mucho, y la que existe hacia otras instituciones, especialmente los partidos y el Congreso, que históricamente han tenido bajos niveles de confianza. Acotó que tratándose del Poder Judicial, de Carabineros de Chile y de la Iglesia Católica, los altos niveles de confianza que han tenido tradicionalmente han disminuido en los últimos dos años en un promedio de alrededor del 20%, por distintas razones. En el siguiente gráfico, se aprecian los resultados de la encuesta nacional de la UDP, en que las líneas representan, en orden decreciente, al gobierno, a los tribunales, al Congreso y a los partidos.

Dio a conocer que la encuesta latinoamericana de la Universidad Católica de Ciencia Política realizada este año compara los países de América en lo que respecta a niveles de simpatía hacia los partidos y Chile figura como el penúltimo, con un porcentaje del 14, 1% que sólo supera a Guatemala (12,9%), como se aprecia en el gráfico siguiente. Ello refleja una brecha asociada a la crisis de las instituciones y a la confianza en las mismas.

La mencionada encuesta proporciona, igualmente, información respecto de los niveles de satisfacción con la democracia, ubicándose nuestro país en el tercio más bajo en relación al resto de los países de América, como se aprecia en el siguiente gráfico:

A modo de conclusión del análisis de estos antecedentes, hizo presente la necesidad de tener en cuenta que el contexto de las reformas políticas es relevante para mejorar la calidad de la representación.

En relación con los resultados que se pretenden obtener a través de la reforma al sistema electoral, señaló que las propuestas se pueden evaluar en función de su coherencia externa, es decir, de su forma de interactuar con otras reformas, y de su coherencia interna, esto es, su capacidad de representación, de gobernabilidad (eficacia o eficiencia) y de identificabilidad.

Manifestó que la reforma electoral no puede desentenderse de otras. Así, un mejoramiento en los niveles de representación debe estar vinculadoa, por ejemplo, a la reforma a la legislación de los partidos (creación, financiamiento electoral, primarias, democracia interna), pues forman un todo con el tema de la reelección de los congresistas, el mandato presidencial, el sistema de votaciones, el balance entre los poderes Ejecutivo y Legislativo, los quórum, los mecanismos de participación, la descentralización, etc.)

Indicó que el sistema de elección de concejales perjudica a los partidos pequeños porque el porcentaje de votos que éstos obtienen es mayor al de concejales que resultan electos, pese a que por ser proporcional debería lograr una mejor distribución. En consecuencia, un sistema de este tipo no garantiza necesariamente la proporcionalidad, ya que esto se vincula a otros factores que interactúan con él y producen efectos en el sistema político, como las barreras de entrada para la formación de nuevos partidos, el financiamiento de estos últimos, el acceso a los medios de comunicación para dar a conocer sus propuestas, etc. En la siguiente tabla, se indica el porcentaje de votos obtenidos por las coaliciones y los partidos pequeños en las elecciones de concejales de 2008 y el porcentaje de estos últimos en cada uno de ellos.

Acto seguido, dio a conocer su evaluación respecto de las mociones presentadas a la luz de los siguientes conceptos:

1. La representación, es decir, de qué manera los votos se traducen en escaños, para lo cual es necesario analizar el tamaño de los distritos, la magnitud del umbral y la fórmula matemática que se utiliza. Mientras mayor sea la proporcionalidad, mayor es la representación, no obstante lo cual debe reconocerse que con ello se dificulta la eficacia, pues si hay demasiados partidos, es problemático reunirlos en grandes coaliciones estables que garanticen acuerdos, para lograr gobernabilidad.

En este orden, hizo presente que si bien el binominal teóricamente conduce a la formación de grandes partidos, en la práctica, tras 22 años de aplicación en Chile, se puede advertir que ello no ha ocurrido, puesto que han aumentado los partidos y las coaliciones, que tienen una menor disciplina interna y ha habido un incremento de los díscolos. La idea de que los independientes se marginen de los conglomerados no es culpa de este sistema electoral, sino de otros factores que intervienen. Planteó que un sistema demasiado proporcional genera problemas de eficacia y gobernabilidad, lo cual se soluciona con la magnitud de los distritos, la fijación de umbrales altos que impidan que partidos muy pequeños tengan representación en el Congreso y la fórmula matemática.

2. La efectividad, que guarda relación con la posibilidad de establecer acuerdos y formar mayorías, lo que supone incentivos para constituir alianzas y es propio del sistema binominal. Precisó que dichas alianzas permiten sólo en cierta medida gobernar, por cuanto interactúan con un sistema fuertemente presidencialista, en que el Ejecutivo impone su agenda al Legislativo a través de las urgencias. 3. La identificabilidad. Existe un debate en torno a si es mejor establecer un vínculo cercano entre el representante y el ciudadano, el que se produce cuando hay una lista abierta, en la que el candidato compite en representación de alguien que lo reconoce, o establecer un vínculo programático, que se presenta en listas cerradas y bloqueadas, donde se disputa el programa, es decir, el ciudadano se identifica con ciertos partidos que representan determinadas ideas, por lo que el candidato pierde importancia. Mientras mayor sea el vínculo personal, será menor la vinculación programática, ya que se vota más bien por el carisma de la persona, lo que se puede apreciar hoy en las campañas, en que los candidatos se desmarcan de los partidos en la propaganda.

Comentó que al evaluar los distintos sistemas, debe considerarse que no hay uno mejor que otro en términos generales, ya que presentan un buen comportamiento en ciertos aspectos mas no así en otros. En el análisis efectuado por Payne , Carrillo , Zovatto y Allamand en el libro “La política importa”, de 2002, se abordan los distintos mecanismos de representación electoral, señalándose que la evaluación del binominal es baja en cuanto a representatividad; alta, en identificabilidad y mediana en efectividad, ya que para poder gobernar es necesario que el Ejecutivo tenga mayoría en el Congreso.

A modo de conclusión, afirmó que la reforma al sistema binominal no resolverá el problema de la representación, pues se requieren reformas paralelas, por ejemplo, en materia de barreras de acceso adicionales al financiamiento, a la democracia interna de los partidos y a la creación de estos últimos. Comentó que el Ejecutivo ha elaborado un proyecto sobre este tema, que debería analizarse paralelamente a la reforma al sistema electoral.

Asimismo, señaló que esta última exige la consideración de los tres principios antes enumerados, a saber, la representatividad, la efectividad y la identificabilidad. Manifestó ser partidario de aumentar los niveles de proporcionalidad, lo que ayudaría a incrementar la diversidad en un cierto margen y a lograr un cierto equilibrio.

Consideró que la presencia de independientes en subpactos es negativa y reduce la disciplina, a la vez que criticó a las listas abiertas en cuanto tienden a personalizar el voto, razón por la cual sugirió incentivar el voto programático y exigir, ya sea en la ley de votaciones y escrutinios o en la de partidos, que estos últimos coloquen sus logos en las campañas, como ocurre en otros países, con el fin de aumentar la identificabilidad con estos conglomerados, que deberían ser objeto de una reforma

Agregó que la reforma al sistema electoral no resolverá los problemas de falta de representatividad, pues se trata de un tema estructural de cambio social. Indicó que esta situación ya se ha vivido en Chile bajo las Constituciones de 1833 y 1925, con sus respetivas reformas, lo cual revela la existencia de ciclos de ajuste de las instituciones frente a cambios sociales, como el que se produce hoy. Precisó que hay políticas de largo plazo, tales como

- La implementación de programas de educación cívica en los colegios, en el entendido que es fundamental inculcar desde tempranas edades, la valoración de la democracia y de las instituciones, con lo cual se evitaría la ignorancia respecto de las funciones de las autoridades y su desconexión con ellas. Indicó que en Estados Unidos existe el Día de la Democracia, donde los niños conversan acerca de la Constitución y se fomenta la cultura cívica desde las etapas preescolares

- La reforma a los partidos políticos, en el sentido de legislar sobre el financiamiento público de estas entidades para fines de formación de militantes y simpatizantes; de brindarles apoyo técnico legislativo e infraestructura para su funcionamiento, aun cuando se trate de una medida impopular. Esta propuesta transversal, que corresponde a Salvador Valdés, integrante del CEP, es fundamental porque sólo a través de la regeneración podrán mejorar la calidad de la política en Chile. Igualmente, debería fomentarse la democracia interna y revisar los padrones, tema que deberá abordarse en las primarias, ya que el manejo de estos últimos representa un problema de poder

En lo que respecta a la manera en que se puede gestarse una propuesta de reforma al sistema electoral, consideró que debería tratarse el tema en instancias amplias, donde se escuche a la ciudadanía, lo que aumentaría la transversalidad y la posibilidad de lograr acuerdos. Recordó al efecto la experiencia de las comisiones desarrolladas bajo el gobierno de la ex Presidenta Bachelet , en materia de educación y de pensiones, donde se efectuaron consejos amplios y transversales. La reforma de la Constitución se gestó en un proceso cerrado y sólo el 8% de los actores que intervinieron era ajeno al Congreso.

Declaró ser partidario de convocar a una asamblea constituyente, a la luz de experiencias exitosas, como la colombiana, en 1991, que podría replicarse en Chile, pues en ese país, no habiendo crisis de por medio, un movimiento ciudadano propuso una reforma, que fue recogida por el Presidente, en una comisión ampliada donde se arribó a un acuerdo, de modo que la Constitución de Colombia goza de una fuerte legitimidad y es una de las más avanzadas de América Latina. Indicó que es erróneo asociar la asamblea constituyente con la experiencia de Ecuador y Venezuela, pues generar reformas políticas involucrando actores tiene un efecto muy positivo en la legitimación de las mismas

Q.- Director del Área de Estudios de la Fundación Jaime Guzmán, señor Guillermo Ramírez.

Reconoció que es preocupante la baja confianza que existe en las instituciones y concretamente, en los partidos y en el Congreso. Comentó que recientemente se ha publicado la Encuesta de Desarrollo Humano del PNUD, en que se aborda este tema en forma interesante, señalando que el chileno estaría decepcionado de las instituciones porque no se ha cumplido lo que se le prometió. En efecto, están en entredicho el mensaje que se da a los jóvenes para que estudien, ya que tendrán espacio en el mundo laboral y obtendrán un buen sueldo, o el que insta a la gente para que se preocupe del medio ambiente y se abstenga de utilizar los vehículos para movilizarse, sin poner a su disposición ciclovías suficientes. Acotó que, en términos de desarrollo humano, las personas avanzan más rápido que las instituciones y es necesario que éstas se pongan al día. Si bien podría plantearse que esto es un tema de tiempo, juicio que comparte, ello no significa que deba abandonarse la preocupación de hacer algo al respecto y esperar simplemente a que la sociedad y las instituciones se actualicen.

Señaló que cuando se compara un sistema presidencial y uno parlamentario se aplica siempre el criterio del accountability, que básicamente se refiere a la rendición de cuentas y se sostiene que el primero de los sistemas falla en este aspecto, a diferencia del segundo, lo cual explica la desconfianza en la política en nuestro país, a lo que se agrega el desconocimiento de la población respecto de las diferencias en las funciones de las distintas autoridades. Así, la persona que reclama por la calidad de la educación de sus hijos o por la falta de iluminación de la calle en que vive, desconoce a quién debe pasarle la cuenta o, dicho de otro modo, cuál es el ente responsable de aquello, lo que se traduce en la principal dificultad de un sistema presidencial y se produce, como consecuencia, una desconfianza institucional generalizada. En cambio, en el caso de los sistemas parlamentarios, dado que el Parlamento controla al Ejecutivo, se identifica plenamente al responsable, pues se culpa a la coalición gobernante si algo no funciona. Hizo notar, sin embargo, que durante los 20 años en que la Concertación estuvo en el poder, haciéndose cargo del gobierno y controlando la Cámara de Diputados, en general, siempre se llevó el reconocimiento de los aspectos positivos, pero también las críticas por aquello que no funcionaba bien. En tanto, bajo el gobierno del actual mandatario, que no cuenta con la mayoría en ninguna de las Cámaras y que se enfrenta a esta acelerada desconfianza en las instituciones propia de los últimos dos años, existiría, en su opinión, un vacío en términos de que no se sabe quién es el responsable o a quien pasarle la cuenta.

Planteó que para corregir esta situación debe optarse por uno de los siguientes caminos: mantener el presidencialismo y establecer un sistema electoral mayoritario para las elecciones parlamentarias, con lo cual generalmente el gobierno tendrá mayoría en el Congreso y será efectivamente el responsable de lo que suceda, o bien transitar hacia un régimen parlamentario con un sistema electoral proporcional, con lo cual se consigue el mismo efecto en términos políticos.

En relación con el tema de las encuestas, añadió que en el set de preguntas que se incluyen en las que se realizan en Estados Unidos se incluye una que tiene por objeto saber si el consultado votó o no en la última elección, consulta que no habría revelado ningún dato importante en Chile si se hubiese considerado en las encuestas previas a las elecciones municipales, por el cambio de sistema de voto obligatorio a voto voluntario. Indicó que por esta misma razón, nuevamente habrá problemas con las encuestas para las próximas elecciones presidencial y parlamentaria, pues no será posible aún identificar con claridad quiénes irán a votar.

Finalmente, manifestó que las propuestas de reemplazo del sistema binominal apuntan hacia una mayor proporcionalidad, aun cuando en algunas mociones se establecen fórmulas mixtas, sin que ninguna de ellas corrija de manera absoluta la sobrerrepresentación, que siempre ha sido objeto de crítica en el sistema binominal. Declaró que ante la posibilidad de elegir entre una de tales propuestas y este último, prefiere mantener la situación actual, ya que si se desea modificar habría que aumentar la competencia por una de dos vías: establecer un sistema mayoritario o eliminar las listas en el binominal, con lo que el sistema sería más directo y ganarían los dos candidatos que obtengan más votos, lo cual puede ser más fácil de entender para la ciudadanía.

2.- Audiencia Pública.

De conformidad con lo dispuesto en el artículo 211 bis del Reglamento de la Cámara de Diputados, vuestra Comisión realizó una audiencia pública destinada a escuchar a las instituciones o entidades que tuvieran interés en la materia a que se refiere el proyecto. En ese sentido, se recibió a:

A.- Asociación Americana de Juristas-Rama Chilena.

El Presidente de la entidad, don Ramón Vargas , indicó que desde hace bastantes años, ha realizado estudios, debates y foros en relación con los problemas constitucionales de Chile y, en particular, con el llamado sistema electoral binominal.

Tal sistema al exigir el doblaje de una lista sobre otra para obtener mayoría, crea una situación de empate político en una instancia fundamental del país, como es el Parlamento

Esta situación ha creado dificultades enormes e impide que se manifieste, efectivamente, la mayoría; que se exprese el soberano, que es el pueblo; impide que la mayoría logre hacer gobierno con las facultades que normalmente éstos tienen, cuando alcanzas las mayorías correspondientes

Añadió que si se analiza el derecho comparado es posible constatar que la exigencia del doblaje es excepcional. Por ejemplo, en Inglaterra, con el cuarenta y seis por ciento de los votos, el partido que triunfa en las elecciones obtiene mayoría absoluta. Es así como con el cuarenta y dos por ciento de los votos, la señora Thatcher

realizó reformas fundamentales en toda la estructura económica de Inglaterra.

Hizo presente que cuando se discutió en la Comisión de Estudios Constitucionales la forma cómo se elegirían los parlamentarios, se plantearon varias opciones. En esa instancia quien principalmente objetó el sistema binominal que se proponía fue el jurista Jaime Guzmán. Éste sostuvo que le parecía bien que en cada distrito se elijan tres o un parlamentario. Si eran dos, ello llevaría al empate político, lo que podría traer graves consecuencias de tensiones sociales y políticas en el país. Acertó respecto del pronóstico del empate, pero no así sobre las graves tensiones políticas que se producirían en el país durante estos años.

Sostuvo que lo expuesto se agrava por los excesivos quórums que consagra nuestra Constitución, los que tampoco existen en la mayoría de los países. De este modo, si quien obtiene mayoría alcanza tres o cuatro diputados más que la otra fuerza, no podrá hacer modificaciones en leyes tan fundamentales, como, por ejemplo, la propia Constitución y en las leyes orgánicas constitucionales

Recalcó que comparten el contenido del proyecto. Estimó positivo que se hayan establecido números impares de parlamentarios a elegir por distrito, porque en otros proyectos que se han presentado se ha propuesto se elijan números pares. Si son cuatro los cupos, una fuerza política con el cuarenta por ciento de los votos puede elegir la mitad del Parlamento. Es decir, se mantiene el mismo vicio que se produce con el sistema binominal. Por ello destacó que los escaños a elegir deben ser impares

Por otra parte, estimó correcta la disposición que consagra que los partidos o pactos lleven como candidatos el doble de los que van a ser elegidos, por cuanto permitirá que gente que no es parlamentaria participe del proceso eleccionario. En el sistema binominal actual el diputado o senador en ejercicio parte con una gran ventaja sobre la persona que no ha tenido una actuación tan destacada o que no ha figurado de la misma manera ante la opinión pública. Con esta propuesta el electorado tendrá más opciones para escoger.

Durante la discusión que se ha planteado a través de los medios de comunicación, se ha sostenido que el sistema binominal forma parte de los sistemas mayoritarios, lo que no es efectivo. Éstos se denominan de tal forma porque favorecen a la mayoría, lo que no sucede en el sistema binominal, el que beneficia a la segunda fuerza y perjudica a la tercera y demás fuerzas.

Por otra parte, señaló que se ha objetado el aumento de parlamentarios y el consiguiente aumento del gasto. Al respecto indicó que resulta difícil crear un sistema proporcional sin aumentar el número de parlamentarios

Por último, afirmó que compartían el establecimiento de una cuota a favor de las mujeres

B.- Corporación Mujeres Líderes para Chile.

La representante de la Corporación, señora Javiera Arce expresó que el sistema binominal, ha traído consecuencias negativas para la calidad de la democracia chilena, convirtiéndose en una camisa de fuerza que ha retrasado el avance de la sociedad, debido al empate existente en el Congreso, impidiendo legislar reformas profundas y trascendentales para Chile.

La ciudadanía al ver el estanco en que se encuentra nuestra democracia institucionalizada, cada vez posee opiniones más negativas acerca de las instituciones políticas, siendo entre ellas el Congreso Nacional y los partidos políticos, quienes encarnan las peores cifras de valoración negativa en los sucesivos estudios de opinión pública

Añadió que Luna y Altman plantean que pese a que Chile posee una fortaleza institucional, y una estabilidad de sus partidos políticos, estos conviven con las características de sistemas de partidos inestables: baja legitimidad y escaso enraizamiento social. El reciente informe de Naciones Unidas, Auditoría a la Democracia: más y mejor democracia para un Chile inclusivo, lanzado el día viernes 16 de abril recién pasado, presenta conclusiones decidoras. La democracia chilena posee áreas grises, falencias y contradicciones. El sistema político actual posee desigualdades sociales y políticas, generando una amplia desafección y una escasa valoración ciudadana a la política.

Destacó que la democracia es la única forma de gobierno aceptada, sin embargo su funcionamiento está constantemente cuestionado. Puntualizó que sobre el sistema de representación el citado informe es taxativo, éste tiende a excluir sistemáticamente a grupos/sectores de una comunidad, también los procesos de selección son considerados poco transparentes o parciales, cuestionando con profundidad el sistema electoral binominal.

Agregó que el proyecto de ley posee objetivos claramente definidos. En primer lugar reducir la desigualdad del voto, aduciendo razones de carácter geográfico/demográfico, que han producido inequidades en la representación política formal actual, vale decir que todas las regiones poseen prácticamente la misma cantidad de representantes, pero se produce una fuerte asimetría entre el número de electores y representantes por distrito, sobre exigiendo a los y las representantes de las regiones más pobladas en relación a los otros de regiones con menor población

Indicó que el segundo objetivo esbozado en el texto dice relación con los umbrales exigidos para ingresar al Congreso, los que se estiman demasiado altos. El Congreso Nacional hasta ahora no es fiel expresión del pluralismo social chileno, por lo que la reforma al sistema electoral, buscará hacerse cargo de la exclusión política producida hasta ahora.

Dentro de la lógica de la representación de las minorías el proyecto incluso busca incrementar en un cupo aquellas regiones que poseen menos población, como es el caso de las regiones del extremo norte y sur, incrementando el número de parlamentarios de 2 a 3 diputados

En un tercer apartado el objetivo del proyecto busca aumentar la competitividad e incertidumbre de quienes resulten electos. Con el sistema binominal, es muy fácil determinar antes de la competencia electoral quién obtendría el triunfo y quién no. Salvo los casos sorpresivos de los famosos doblajes, mayor incertidumbre no existe.

Hizo presente que otra de las injusticias del sistema dice relación con la exclusión de candidatos con altas mayorías, como ocurrió con Marisela Santibáñez en el distrito 30 para la elección 2013.

Por otra parte, se refirió a las acciones afirmativas consagradas en el proyecto. Se supone que los puestos deben ser para personas mejor calificadas y capaces. Con todo, resulta evidente que existen grupos de personas que poseen mayores privilegios que otros desde su nacimiento. Rawls sostuvo que “los talentos naturales como criterio para conceder puestos, pueden considerarse tan arbitrarios como concederlos conforme con la raza o el sexo porque las personas no son responsables de estos talentos”. Para corregir estas asimetrías, se generan medidas de acción afirmativa. Iris Young señala que “fueron creadas para compensar prácticas discriminatorias, para mitigar la influencia de los prejuicios actuales y de la ceguera de instituciones y personas que toman decisiones”.

Manifestó que las instituciones producen y reproducen desigualdades, Bourdieu bien lo demostró al estudiar el sistema educativo francés. El sistema electoral binominal también ha reproducido desigualdades, pero de distinto tipo, castigando con dureza la representación femenina en el Congreso Nacional

En relación a la iniciativa en discusión, expresó que el proyecto representa un tránsito hacia un sistema de representación más democrático que el binominal. La ampliación de la magnitud de los distritos y circunscripciones genera espacios de competencia más amplios, mayor incertidumbre, e inclusión de terceros actores políticos, no como ocurre con el sistema binominal, que sólo permite el ingreso de dos fuerzas políticas, sobre representando a las minorías

Asimismo, consideró positivo que se reconozca la necesidad de una medida de acción afirmativa para nuestro país, y la posibilidad de incluir una norma transitoria de carácter obligatorio para incluir en las listas un mínimo de 40% de mujeres obligatorio por partido. Pese a que las listas abiertas no benefician la elección de las mujeres, pero sí su nominación, y el diseño más efectivo para ellas es la lista cerrada y bloqueada (Ríos, 2006,8), sostuvo que impulsar una compensación económica, ayudará a contrarrestar los efectos distorsionadores de la competencia política

Destacó que existen estudios que avalan que las mujeres poseen mayores dificultades para conseguir recursos pecuniarios para sus candidaturas, por lo que una compensación económica será fundamental al momento de enfrentar el proceso electoral. Sin embargo, expresó que el proyecto es poco claro al indicar que el incentivo al resultado contemplará un máximo de hasta quinientas unidades de fomento. Preguntó si su procedimiento de entrega será bajo la normativa establecida en la ley sobre transparencia, límite y control del gasto electoral. Asimismo, preguntó si la expresión “hasta” dependerá del número de escaños del distrito/circunscripción a postular. Si ello es así sostuvo que la suma es insuficiente. En un escenario de lista abierta y con distritos ampliados, las campañas incrementarán su costo

Recordó que el año 2013, el Presidente Sebastián Piñera ingresó un proyecto de ley para La Igualdad de Oportunidades entre Hombres y Mujeres en cargos de Elección Popular. En él, más allá de las diferencias expresadas con anterioridad respecto al enfoque de dicho proyecto por circunscribir sólo al aspecto económico a la escasa presencia de mujeres en política, siendo que existe una institucionalidad poco amigable para su desarrollo, éste planteaba incentivos económicos para las colectividades que llevaran un mayor número de candidatas, y también integraba incentivos económicos al resultado. Éstos consistían en que cada partido que supere en al menos un 20% el porcentaje de candidatas inscritas en total por todos los partidos en la última elección de igual naturaleza, y supere el porcentaje de candidatas inscritas por ese mismo partido en la elección última elección de igual naturaleza, si el partido hubiese presentado candidatos a dicha elección, tendrá derecho a un reembolso adicional equivalente a 0,0135 unidades de fomento, por cada voto obtenido por cada candidata.

Dicho reembolso se dividirá entre el partido y la candidata que corresponda en un 30% y 70%, respectivamente. Adicionalmente, se disponía que cada partido tendrá derecho a un reembolso equivalente a 0,009 unidades de fomento, por cada voto obtenido por cada candidata que haya resultado electa, siempre que cumpla con las condiciones establecidas en el número anterior

Propuso mirar con detención el citado proyecto e incorporar algunos de tales aspectos

Por otra parte, señaló que si bien el proyecto advierte y da cuenta de la necesidad de la generación de cuotas electorales para mujeres, ello debe ir acompañado de una serie de modificaciones. En primer lugar la Constitución Política debe indicar en su articulado el reconocimiento de la igualdad sustancial entre hombres y mujeres. En segundo lugar la normativa debe ir acompañada de una modificación a la ley de partidos políticos que incluya facilidades para la nominación de mujeres como candidatas, debido a que en tal proceso son ellas las que poseen mayores problemas para instalar sus candidaturas

Manifestó que otro de los aspectos a advertir es el gran tamaño de circunscripciones/distritos. Recalcó que la propuesta de redistritaje parece ser más homogénea que la que posee el actual sistema electoral, y es más homogénea que la propuesta de redistritaje realizada por el gobierno de Sebastián Piñera el año 2013. Sin embargo, ello podría conllevar al encarecimiento de las campañas políticas, generando incentivos para profundizar redes clientelares y supeditar el éxito de las candidaturas al factor económico. En ese sentido, indicó que la modificación legal debe ir acompañada por fuertes y efectivas restricciones al límite del gasto electoral y fiscalización constante durante la campaña, más allá de las rendiciones realizadas al final del proceso, que presentan sumas inverosímiles en el total de la rendición de gastos en el Servicio Electoral. Para ello será fundamental incrementar las atribuciones políticas del Servicio Electoral

C.- Corporación Humanas.

La representante de la institución, señora Camila Maturana expresó que reformar el sistema electoral es una necesidad ampliamente compartida por distintos actores políticos. Así quedó de manifiesto en el debate de la ley que modificó la Constitución para eliminar el guarismo 120 que habilitó esta discusión parlamentaria.

La insuficiente representación de las distintas fuerzas políticas del país, la sobre representación de dos coaliciones que ha obstaculizado la representación política de las mujeres y, además, el origen inconsulto del régimen, son algunos de los principales problemas que han devenido en la crisis de legitimidad de la clase política y la creciente insatisfacción ciudadana que se expresa de múltiples modos, siendo uno de ellos, la bajísima participación en el último importante proceso eleccionario del país

En este escenario, valoró la presentación de la propuesta de la Presidenta Michelle Bachelet.

Añadió que lo más novedoso para el Parlamento se vincula con la incorporación de la paridad como una dimensión sustantiva de la representación política. Cualquier debate serio sobre democracia representativa y, en particular, sobre el sistema electoral, debe incorporar la participación política de las mujeres y la representación de sus intereses en los espacios de decisión

Evidentemente, lo mencionado ha sido preocupación del actual Gobierno, pero también lo fue de la administración anterior. Como ya se señaló, el Presidente Sebastián Piñera incluyó la participación política de la mujer en su programa, pero, además, presentó un proyecto orientado al financiamiento especial de la participación política femenina.

Indicó que esta materia no solo ha sido de interés para las autoridades nacionales, sino también, y muy fuertemente, para organismos internacionales que desde hace más de quince años han reprochado al Estado los bajos niveles de participación política de la mujer y, especialmente, la falta de medidas especiales para corregir el problema. La baja participación femenina en espacios de decisión públicos deja en evidencia la discriminación de género que aún existe en el país, pero también es un déficit del sistema político que requiere ser abordado, pues debilita la democracia

Hizo presente que esta problemática tiene dos dimensiones. Por una parte, la subrepresentación de las mujeres obstaculiza la adecuada representación de los intereses del género en la toma de decisiones y, por otra, dificulta alcanzar la igualdad de derechos en una serie de ámbitos. Esta última dimensión está vinculada con la esfera de los derechos humanos, pero también con la democracia, puesto que la insuficiente representación de las mujeres demuestra que el sistema político como está formulado no es capaz de representar adecuadamente a las ciudadanas y ciudadanos del país, por lo tanto, no se cumple el mandato de representación igualitaria propio de un Estado de derecho democrático

Destacó que la Constitución Política consagra que las personas nacen libres e iguales en dignidad y derechos y asegura la igualdad ante la ley, es decir, que en Chile no hay personas ni grupos privilegiados y que hombres y mujeres somos iguales ante la ley. Además, la Carta Fundamental en su artículo 5° establece: “El ejercicio de la soberanía reconoce como limitación el respeto a los derechos esenciales que emanan de la naturaleza humana. Es deber de los órganos del Estado respetar y promover tales derechos, garantizados por esta Constitución, así como por los tratados internacionales ratificados por Chile y que se encuentren vigentes”.

Afirmó que entre los tratados internacionales que consagran y protegen los derechos civiles y políticos de hombres y mujeres, en igualdad de condiciones, destacan el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, la Convención Americana sobre Derechos Humanos y la Convención para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer. Dichos tratados señalan, entre otros, el derecho a votar y concurrir a los procesos eleccionarios, a participar de las decisiones y a ocupar cargos públicos en igualdad de condiciones. Además, la Convención para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, a fin de asegurar alcanzar los objetivos de igualdad, oportunidades y trato, mandata a los Estados a adoptar medidas especiales de carácter temporal que consisten, obviamente, en un tratamiento diferenciado por un cierto tiempo, que no constituyen discriminación, sino, por el contrario, son precisamente las medidas que los Estados han convenido para poner fin o corregir la discriminación existente

Sostuvo que, lamentablemente, dicho mandato constitucional y las obligaciones internacionales para eliminar la discriminación en Chile no se han cumplido y los organismos internacionales desde hace quince años vienen señalando la baja participación de las mujeres en espacios de decisiones de los más diversos ámbitos, la mantención de un régimen electoral que no asegura la representación adecuada en el Parlamente que, además, es desfavorable a la participación de las mujeres y, también, la inexistencia de medidas especiales que permitan corregir estos problemas. Informó que se refiere a las recomendaciones realizadas por el Comité de Derechos Humanos en 1999 y el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer en el mismo año; sugerencias que debieron ser reiteradas en 2006 y 2007, respectivamente. Posteriormente, en 2009, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos destacó, entre los factores bases de la deficiente participación política, el impacto negativo del sistema electoral binominal, el deficiente funcionamiento de los partidos políticos, la existencia de estereotipos y prejuicios machistas al interior de las colectividades y la falta de medidas especiales. En 2009, tras este diagnóstico, el Estado de Chile se comprometió a reformar el sistema electoral y en 2012 fue nuevamente sometido a un examen ante el Comité para la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, luego de que se profundizaron todas las mencionadas recomendaciones

Hizo presente que desafortunadamente, la preocupación y el análisis detallado que los organismos internacionales han prestado a la situación de Chile contrastan con el bajo interés que, hasta ahora, el Parlamento chileno ha demostrado para debatir estos temas

En los últimos años, se han debatido y aprobado una serie de reformas políticas que no han incorporado la paridad como una dimensión sustantiva de la representación política y que han omitido mecanismos para asegurar el equilibrio de género. Añadió que resulta ampliamente conocido que Chile se encuentra por debajo del promedio regional de participación política en el Parlamento (se ubica en el vergonzoso lugar 92 de 189 países) y que los países no avanzan espontáneamente en la eliminación de la discriminación contra las mujeres. Por ello, se requieren medidas especiales para corregir el problema, como lo señalan los organismos internacionales y lo confirma la experiencia comparada

Respecto de la propuesta de la Presidenta Bachelet , que como medida de paridad, incorpora a los partidos un mandato obligatorio para que ningún sexo supere el 60 por ciento de las listas de candidatura, señaló que con ello se asegura que ningún sexo quede por debajo del 40 por ciento. Destacó que ésta es una medida de paridad, no una ley de cuotas. El cumplimiento de la proporción 60/40 por ciento se resguarda con una sanción que impide la inscripción de la lista, o sea, es una sanción estricta, porque para el Gobierno de la Nueva Mayoría este proyecto está abocado a que se cumpla.

Destacó que la decisión de incluir obligatoriamente a mujeres en la lista es la medida mínima que existe en los países para garantizar que al menos puedan competir o participar de los procesos electorales

Manifestó que en un próximo debate se debiese incorporar a los órganos de los partidos políticos. Ahí es necesaria la participación de las mujeres; asimismo, en las elecciones de alcaldes y alcaldesas, concejales y concejalas, y de consejeros y consejeras regionales. Asimismo, sostuvo que esperaba que esta medida de paridad sea considerada en la conformación de los gabinetes y en el conjunto de autoridades gubernamentales; en la designación de embajadores y embajadoras, en los representantes de organismos internacionales y en empresas públicas

En cuanto a las barreras económicas adicionales que enfrentan las mujeres para participar en la política y, en particular, en los procesos electorales, señaló que se requiere incrementar el aporte público a las candidatas. Sugirió revisar el proyecto que presentó el gobierno anterior, que dirige el aporte a todas las candidatas.

Respecto del aporte fiscal a quienes resulten electas, afirmó que este aporte debe ser precisado, puesto que no se indica con claridad cómo se calcula ni cuál es el monto. Indicó que deben incrementarse en forma significativa los recursos para las campañas de mujeres y corregir el destino de este aporte adicional, que no puede corresponder exclusivamente a los partidos políticos, sino a las candidatas o bien una distribución.

Por último, hizo presente que se requiere implementar mecanismos efectivos para el control del gasto electoral. Con la legislación actual es posible no cumplir este límite, sin ninguna consecuencia para los candidatos. La estrecha relación que existe entre el dinero y la política es negativa para la democracia chilena, y más aún para las mujeres. Por lo tanto, se requiere reducir los límites de vigentes y revisar los ítems que pueden ser considerados como gasto electoral, a fin de incorporar como gastos a rendir aquellos en los que incurren principalmente las mujeres, como por ejemplo el cuidado infantil

D.- Asociación de Organismos No Gubernamentales, Acción AG.

La Secretaria Ejecutiva de la entidad, señora Loreto Bravo señaló que el reciente informe de PNUD, Auditoría a la Democracia, demuestra fehacientemente la crisis de representatividad en nuestro sistema político, la falta de confianza explícita y un abstencionismo en picada que está entre los más altos del mundo. Es decir, este es un problema que compete a las organizaciones de la sociedad civil y a quienes representan al Poder Legislativo.

Manifestó que en base a un conjunto de indicadores y análisis disponibles en www.auditoriaalademocracia.org , se afirma en el citado informe que “el sistema político no se ha hecho cargo oportunamente de materias como la desigualdad social y política, la desafección y la escasa valoración ciudadana de la política y sus instituciones…” (PNUDH, 39) El informe advierte que el descontento se expresa crecientemente en la deslegitimación de las decisiones políticas, lo que evidentemente entraña un enorme riesgo para la gobernabilidad y niega la condición de posibilidad de cualquier proyecto de desarrollo país que exija concitar adhesión social mayoritaria.

Expresó que para la organización que representa este diagnóstico no es nuevo, y forma parte de un discurso que ha intentado instalar y dialogar con el mundo político desde hace años. La inversión que el sistema político haga en ampliar y perfeccionar los márgenes de inclusión y participación ciudadana, va en beneficio de mejores estándares democráticos.

Entre las falencias que el citado informe refiere para explicar las debilidades de nuestra democracia está precisamente, la deslegitimidad de la constitución, pero también “la falencia de la representación en el legislativo, acentuada por un sistema de partidos que se ha ido debilitando y permanece cerrado a la ciudadanía…” (PNUDH, 39)

El citado informe describe y fundamente una serie de problemas que constituyen, a su juicio, argumentos suficientes para aprobar la idea de legislar sobre el cambio del sistema binominal para, a lo menos perfeccionar su proporcionalidad, e introducir mecanismos que amplíen la representatividad de la sociedad en su diversidad, de género, etnia, edad

Manifestó que la participación política formal en elecciones y partidos ha ido en descenso sostenido desde 1989, especialmente entre los jóvenes y los más pobres. Asimismo, Chile tiene un bajo nivel de asociatividad respecto de los otros países de América Latina.

Aseveró que en Chile resulta indispensable mejorar los niveles y formas de representatividad, a través de mecanismos que garanticen su legitimidad y fortalezcan el sistema democrático. Estimó necesario superar la exclusión que ha devenido del sistema vigente, el que debe ser más transparente, y debe asegurar la posibilidad real de gestionar intereses legítimos y divergentes. En el actual sistema no sólo están y han estado excluidos diferentes corrientes de pensamiento que no participan de los grandes pactos gobernantes, también las mujeres, los jóvenes, las personas de regiones y los pueblos originarios

Destacó que el Congreso está muy lejos de representar descriptivamente a la sociedad chilena y en su complejidad política. Esta es una oportunidad para introducir correcciones que no son por sí solas suficientes, pero que abonan en el camino que urge seguir

Indicó que otro elemento de la situación expuesta dice relación con la crisis de confianza en las instituciones, expresada en un abstencionismo que crece a una velocidad vertiginosa. Se contagia de sectores juveniles a amplios sectores de la población.

Añadió que todas las cifras y análisis indican que cuando las mujeres logran ser candidatas, obtienen resultados favorables para los partidos que representan. Sin embargo, también es efectivo que las mujeres tienen dificultades para ser vistas en su liderazgo político, y para confíen en que si asumen su liderazgo obtendrán el apoyo en igualdad de condiciones que los hombres

Agregó que atendiendo a la crisis de confianza y a la necesidad de mejorar los estándares éticos de la política, los y las ciudadanas debieran poder esperar que sean los partidos políticos quienes lideren procesos de largo aliento para densificar la reflexión y el trabajo político-ideológico en su propio seno en orden a superar tendencias culturales de discriminación. Lo mismo se espera de las instituciones republicanas responsables de la convivencia en democracia. Si una ley de paridad impone dificultades a los partidos, esta dificultad debe ser abordada como un programa de mejoramiento de la relación de la entidad con sus integrantes y electores

Sostuvo que llama la atención que son las organizaciones de la sociedad civil y no los partidos políticos los que han instalado niveles más alto de exigencias a las sociedades democráticas y umbrales mayores de cumplimiento a la convivencia en derechos y democracia. Es desde el seno de estas organizaciones que han surgido denuncias y propuestas para superar todas las profundas desigualdades y la injusticia social del sistema político y económico vigente. Destacó que son las ONG de mujeres las que han ido por delante documentando la discriminación, la violencia y la exclusión política. Por su parte, añadió que son los movimientos ambientalistas quienes han denunciado y fundamentado el riesgo que corren nuestros recursos naturales con la fiebre privatizadora y desregulada del extractivismo. Al respecto comentó que si las instituciones políticas, están siempre por debajo de esta corriente social de reconocimiento de derechos y perfeccionamiento democrático, sólo arriesgan profundizar su falta de legitimidad y su obsolescencia

Por otra parte, hizo presente que la subrepresentación de las mujeres en cargo de representación política es otro signo de nuestro déficit democrático. Chile, como en otros aspectos de la equidad de género, tiene un evidente retraso respecto de países comparables en estadio de desarrollo que ya han incorporado leyes de cuotas desde hace más de una década. Costa Rica garantiza un 40% desde 1997, mientras países como Brasil, México , Perú , Colombia entre otros, fluctúan entre 25 y 30%.

Reconoció que el establecimiento de este mecanismo, no garantiza que las mujeres ocupen escaños en igual proporción que la cuota de candidaturas garantizada. Ello porque los partidos no respetan el espíritu de las leyes o porque a falta de incentivos fuertes o sanciones significativas lisa y llanamente no la cumplen. Por lo tanto junto con defender la incorporación del mecanismo de candidaturas paritarias, expresó que éste debe ser resguardado por procedimientos que no permitan que las maquinaciones, el estilo autoritario de los partidos y el peso de la cultura de la discriminación debiliten un logro que favorece no sólo a las mujeres sino a la mejor democracia

E.- Comunidad Mujer.

Su representante, señora Maricel Sauterel , sostuvo que en Chile, las mujeres están subrepresentadas.

Manifestó que la falta de participación es un problema mundial. Sin embargo, en nuestro país estamos profundizando esta situación. A vía de ejemplo, señaló que en el mundo la participación de mujeres en los parlamentos es del 21,8 por ciento y a nivel regional, en América Latina y El Caribe, participa el 25,2 por ciento, como se aprecia en la siguiente lámina

Informó que en los últimos diez años América Latina ha sido la región que más ha avanzado en participación política de las mujeres. Ello se debe principalmente a que catorce países de la región cuentan con medidas de acción positiva, por ejemplo, cuotas, o en sus Constituciones se ha consignado la paridad

Al respecto, indicó que nuestro país de alguna manera hace bajar las cifras de la región, porque sólo asciende al 15,8 por ciento. Entre 1995 y 2013 se ha aumentado 9 puntos. Incluso, nuestro país figura por debajo de los estándares y promedios de todas las regiones, salvo, el empate técnico que se registra con los países árabes

Por otra parte, señaló que de acuerdo con la última elección, de los parlamentos que renovaron sus cámaras en 2013, Chile fue uno de los países que menos creció. Lo hizo en un 1,7 por ciento, es decir, de 22 parlamentarias se pasó a 23, conforme se aprecia en la siguiente lámina

En América Latina somos el país que figura más abajo en las cifras. Por ejemplo, Cuba tiene un 48,9 por ciento; Ecuador , 38,7; Argentina, 36,6; Honduras , 25,8 y Paraguay, 17,5.

Señaló que el gran problema que existe en el país, más allá de los estructurales y culturales, dice relación con el funcionamiento de los partidos políticos y con la nominación de candidaturas, las cuales están muy por debajo de la población y del porcentaje de electorado que representan las mujeres en el país y del porcentaje de militancia que ellas registran. A vía de ejemplo, informó que las mujeres participan en un 45 por ciento en el partido que menos mujeres tiene y en un 60 por ciento en el partido que más mujeres presenta, que es la UDI

Por otra parte, destacó el bajo porcentaje de nominaciones para las elecciones parlamentarias, según se aprecia en la siguiente lámina

Señaló que el promedio, en general es de un 19 por ciento. En la última elección parlamentaria, la Democracia Cristian, que tiene un 46 por ciento de militancia femenina, presentó un 11 por ciento de candidatas; el PPD, con un 49 por ciento de militancia femenina, presentó 12 por ciento de candidatas; el Partido Socialista, con 45 por ciento de militancia femenina, presentó 27 por ciento de candidatas; Renovación Nacional, que tiene un 53 por ciento de militancia femenina, presentó un 29 por ciento de candidatas; la UDI, que tiene 60 por ciento de militancia femenina, presentó el 14 por ciento de mujeres candidatas.

En la última elección hubo cien candidatas, que representaban el 18,8 por ciento de los candidatos totales. De ellas, 46 de ellas tenían alguna posibilidad de ser electas porque eran independientes por el cupo o pertenecían a uno de los dos bloques con mayor representación parlamentaria. De las 46 candidatas, 23 salieron electas, es decir, el 50 por ciento. Es más, de las 46 candidatas, el 30 por ciento tenía posibilidades reales de ser electa. Por lo tanto, es posible concluir que las mujeres son un buen negocio en la política

Destacó que los países que han avanzado sustancialmente en la participación política de la mujer básicamente han implementado cuotas, que han avanzado de ser cuotas para las mujeres a cuotas de género, como en el caso del proyecto de ley, que establece que ningún sexo puede sobrepasar un determinado porcentaje.

Además, con el tiempo tales países han ido adecuando sus legislaciones. Argentina partió en 1991 con un 30 por ciento de cuota para las mujeres y con el tiempo lo fue adecuando y ha hecho cuatro modificaciones importantes. Se entendió que el 30 por ciento era el techo; sin embargo, dos años más tarde se estableció que no era solo el techo, sino un mínimo. Posteriormente, se instauró constitucionalmente la paridad o la acción afirmativa, y más tarde la alternancia en las listas. Se estableció que la cuota se aplicaba al distrito y no a la lista nacional; además, se le otorgó poder a la ciudadanía, al electorado, de impugnar las listas en caso de que consideraran que no se estaba cumpliendo con la norma.

Indicó que la tendencia siempre ha sido tener un 30 por ciento de cuotas, pero los países que últimamente han aplicado la norma están entre el 40/60 o 50/50 por ciento, porque tienen cuotas paritarias, según se aprecia en la siguiente lámina

Añadió que hay variables electorales que dan mayores oportunidades a la elección de mujeres: que un sistema electoral sea proporcional, que exista una magnitud distrital alta, que el tipo de lista sea cerrada, que tenga mandato de posicionamiento y que haya sanciones efectivas y aplicadas

Por otra parte, mencionó como aspectos positivos del proyecto de ley en discusión, el que establezca un sistema electoral proporcional, aunque moderado. Ello implica que aumenta el número de candidatos, por lo tanto, hay mayores posibilidades para las mujeres de ser candidatas, porque los partidos van a tener más oportunidades de poner candidatos diversos.

En segundo lugar, se establece un equilibrio de género, 40/60. Es más bien una tendencia hacia la paridad y no una cuota para las mujeres.

En tercer lugar, se establecen sanciones efectivas, de modo que los partidos no pueden inscribir sus listas si no cumplen con la norma.

Por último, el proyecto consagra incentivos económicos poco significativos, pero de todas maneras es un avance

En seguida, formuló algunas observaciones al proyecto en discusión

a) La magnitud de los distritos; podrían ser más amplios. Si se considera la historia, entre 1953 y 1973, de distritos de magnitud 2, hay 0 diputada electa; de distritos de magnitud 3, hay 0 diputada electa. Sobre 5, las mujeres comienzan a ser parte de las listas

b) La cuota de género de un 40%/60%, es el piso mínimo. En eso no se puede retroceder. Debe mantenerse porque coloca a Chile dentro del estándar mundial, ya que como país estamos comprometidos con las metas del Milenio: tener en 2015 el 40 por ciento de mujeres elegidas para cargos en el poder local y en el Legislativo y aún estamos lejos de cumplir

Agregó que el tema de la cuota debiera ser como en Argentina, por distrito, y no a la lista nacional, de manera que en todos los distritos los electores tengan la posibilidad de escoger entre un hombre y una mujer

Además, se deben aumentar los recursos para las mujeres electas; se debe poner límites a la reelección; trabajar paralelamente en la ley de partidos políticos, en temas relacionados con la democracia interna de los partidos y en el tema del financiamiento

Hay otras medidas, por ejemplo el caso ecuatoriano, que a pesar de tener una lista abierta –todos los demás países tienen listas cerradas-, estableció alternancia en la lista

¿Qué significa aquello? Que se obliga a los partidos políticos a que en la lista vaya alternadamente el nombre de un hombre y de una mujer. No pueden ir primero los hombres y las mujeres al final. Eso se hace, en general, en listas cerradas. La novedad es que Ecuador, teniendo lista abierta, lo hace igual. No es por orden alfabético. Le ha dado muy buenos resultados, porque tiene casi un 40 por ciento de mujeres electas. Ecuador es uno de los casos más exitosos, porque además tiene paridad constitucional

Con ello, se eliminó del discurso público la expresión de que “no hay mujeres”. Se eliminó también la referencia a que la cuota es un privilegio y que las mujeres deben llegar por mérito propio. Se posicionó en el discurso público el derecho de las mujeres a participar y que ya no es un problema de capacidad, sino de oportunidades. También se estableció constitucionalmente la paridad, la que también se reconoció en los puestos de designación

En el caso de Irlanda, tiene financiamiento para los partidos políticos y si éstos no cumplen con la normativa interna dentro de sus partidos o para los candidatos, reciben un 50 por ciento menos para el funcionamiento del año siguiente

Añadió que estas exigencias no obedecen a que a las organizaciones de mujeres se les ocurra hacerlas, sino porque hay una percepción positiva de parte de la ciudadanía

En el informe de la Auditoria a la Democracia, de manera regular, la opinión de la ciudadanía es que apoyan en más de un 70 por ciento la aplicación de una medida de acción impositiva como las cuotas

En otras encuestas que ha hecho Comunidad Mujer, cuando se plantea cuáles son las distintas alternativas para que las mujeres se incorporen a la política, un 84 por ciento dice que exista límite a la reelección; un 77 por ciento, que los partidos destinen recursos para la formación política y liderazgo de las mujeres; un 72 por ciento está a favor de las cuotas; un 63 por ciento a favor del cambio al binominal y un 40 por ciento -es menos popular-, que los partidos políticos reciban recursos adicionales por cada mujer electa

F.- Central Unitaria de Trabajadores.

Su Secretario General, don Arturo Martínez , señaló que la CUT valora la iniciativa que propone cambiar el sistema electoral binominal, ya que ha ocasionado profundos daños a la política chilena; la ha afectado negativamente ante la ciudadanía e, incluso, ha deteriorado la imagen de quienes se dedican a esta noble función.

El sistema actual tiene un manifiesto sentido de exclusión política, por cuanto obliga a los dirigentes sindicales y gremiales a renunciar a sus cargos para ser candidatos. Por eso, esperan que el Parlamento repare esta situación de exclusión que durante muchos años les ha afectado

Añadió que, en particular, fue afectado por esta situación. En 2009 tuvo que renunciar a la presidencia de la CUT para ser candidato a diputado. Al ser derrotado en las elecciones, tuvo que dirigir la CUT de hecho durante tres años. Felizmente, fue reconocido y se dio la posibilidad de que se legitimara su cargo, dado que los trabajadores le eligieron

El actual sistema tiene una tremenda desigualdad en cuanto al voto. Hay candidatos que obtuvieron una alta votación respecto de otros, que representan distritos más pequeños, pero no fueron elegidos

En su caso, obtuvo 38.500 votos, lo que representa un 23,5 por ciento de los votos, y no resultó electo, en circunstancias de que otros diputados y senadores consiguieron muchos menos votos y sí están en el Parlamento. Por tanto, es fundamental resolver el problema de representación política

Al aumentar el proyecto el número de parlamentarios a elegir generará una representación de todos los sectores del distrito

Agregó que creen que es importante hacer un debate a fondo respecto del cambio del sistema binominal e instalar un sistema electoral mucho más democrático, que permita resolver los problemas de fondo, porque la ciudadanía sabe con anticipación que serán elegidos un representante de cada pacto

Terminar con esto significa que la ciudadanía se reencuentre con la política, que haya incertidumbre por el resultado de la elección, que concurra a votar y que entienda que las cosas no están arregladas. De esa manera se puede hacer una política más cercana a la gente y que se termine la tremenda desconfianza que las personas tienen respecto de la política y, desgraciadamente, de los políticos

Por otra parte, se aprecia mucho que la iniciativa termine con la exclusión de género. La idea del proyecto va en una dirección correcta. Sin embargo, les gustaría encontrar mecanismos que no solo premien a los partidos por poner mujeres en sus listas, sino que también se establezcan sanciones a los partidos que no lo hacen

En cuanto al aumento del número de los diputados, y de senadores, creen que no debiese implicar mayor gasto para el Estado. Hay que tener cuidado sobre ese punto, porque puede significar un rechazo de la ciudadanía, ya que no está dispuesta a aumentar los parlamentarios e incrementar los costos del Estado. Esto no significa desvalorar el noble ejercicio de la política que ejercen los parlamentarios, pero como están las cosas, si se hiciera una encuesta a la ciudadanía para saber si quiere más parlamentarios o no, creo que ganaría el no

Para finalizar, plantea un tema conflictivo para el Parlamento, en el sentido de que los nuevos candidatos estarán en desventaja en los distritos respecto de quienes ya han participado en períodos legislativos anteriores, no solo porque ya tienen redes, conocen el distrito y tienen sus acuerdos políticos, sino porque el último mes de campaña el Parlamento acuerda liberarlos de sus funciones, pero igual se les paga el sueldo para que hagan campaña. Mientras tanto, un candidato nuevo llega en malas condiciones al distrito y tiene que enfrentar la campaña con sus propios recursos. Creo que hay una desventaja que se debe resolver

Concluyó que, en definitiva, como Central Unitaria de Trabajadores están de acuerdo con la iniciativa, valoran los esfuerzos del Gobierno para presentar el proyecto y destacan el trabajo del Parlamento para terminar con el sistema binominal. Pero también quieren expresar que ojalá haya un profundo debate democrático, que se escuche a todos los sectores y se obtenga un mejor sistema electoral, lo que la ciudadanía va a valorar

G.- Observatorio de Género y Equidad.

Su representante, doña Teresa Valdés , expresó que el Observatorio de Género y Equidad, es una organización de mujeres que trabaja desde hace muchos años y mira con especial gusto este proyecto, porque da la posibilidad de una mejor democracia. Concretamente, la cuota paritaria 40/60, propuesta al sistema electoral, la hace más representativa. El hecho de que no estén las mujeres, quienes son la mitad de la población, hace que nuestra democracia hasta ahora esté en deuda.

Añadió que esta cuota paritaria complementa las transformaciones sociales y culturales en curso. Dada la participación económica de las mujeres en edad de trabajar, que gira en torno al 45 por ciento, hace muy absurdo que en las decisiones políticas solo lleguen al 15 o al 18 por ciento, en el caso de los gobiernos locales. Además, se pone al día con los estándares de los países que miramos con ojos largos y en especial con el modelo europeo. Si el siglo XX fue el del cambio de lugar de las mujeres en la sociedad, con la mayor transformación política, económica y cultural vivida por Occidente, el siglo XXI tendría que ser el siglo de la igualdad en la diversidad y de la corresponsabilidad en los asuntos públicos y privados

Señaló que si se mira la historia, la Revolución Francesa afirmó la libertad, la igualdad y la fraternidad en nombre del universalismo. Se elaboró la declaración de los derechos del hombre y del ciudadano y, sin embargo, Olimpia de Gouges elaboró la declaración de los derechos de la mujer y de la ciudadana, muriendo en la guillotina por haberse insubordinado al rol.

Sin embargo, trazó en el horizonte líneas con las cuales la mujer sigue luchando. Este universalismo fue el que animó a las sufragistas del mundo occidental para luchar y terminar con la cuota del 100 por ciento que se habían autoasignado los varones y se suponía que eran sistemas democráticos

Así se inició el largo camino de igualdad de derechos y de dignidad de mujeres y de hombres, que se consagró en 1948 con la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Hay que decir que en Chile, en la primera mitad del siglo XX, gracias a la acción concertada de mujeres de todo el país y de todas las condiciones sociales, fue posible, con decenios de lucha, lograr que los parlamentarios varones aprobaran terminar con la cuota del 100 por ciento. Con una ley que daba la condición de ciudadana en 1949 y que por primera vez les permitió votar en una elección en 1952. Después de obtenido el derecho a voto ha habido avances de las mujeres, pero han sido tremendamente lentos

La década del 70 marcó un momento muy importante a nivel internacional, pues se realiza la Primera Conferencia Mundial de la Mujer, el día internacional de la mujer y el decenio de la mujer. En 1979, que es nuestro parámetro principal de derechos humanos de las mujeres, se organizó la Convención sobre la Eliminación de Todas Formas de Discriminación contra la Mujer. Allí se estableció qué era la discriminación, se validaron las medidas de acción afirmativa para reducir esa brecha histórica entre mujeres y hombres, y se establecieron mecanismos para avanzar, siendo obligatorio para todos los países que la ratificaran. Chile la ratificó en 1989

Sucesivas conferencias han profundizado esa agenda y avanzando en el tema de la participación y el desarrollo. No es posible concebir un país con buenos niveles de desarrollo, al que todos aspiramos, sin una participación estratégica de las mujeres

Finalmente, cuando se establecen las metas del milenio en el 2000, en la ONU, todos los gobiernos del mundo, concluyen que es fundamental la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres, lo que es necesario para terminar con la pobreza y llevar al país hacia el pleno desarrollo. Si queremos alcanzar el desarrollo, definitivamente, las mujeres tienen que tener un lugar no solo en la fuerza de trabajo, sino que también en la toma de decisiones políticas

En 2006, la Presidenta Bachelet , al instalar la paridad en su gabinete y al conformar una comisión que tuvo la tarea de desarrollar una propuesta de reforma al sistema electoral, abrió dos debates: primero, el de la acción afirmativa y el de la paridad. Lamentablemente, como sucede en este país, las cosas se dicen por arriba y los debates no han sido en profundidad.

Añadió que, aportando al debate de este proyecto, hay otros elementos que le dan más valor aún a su propuesta. El fundamento, es que el género humano tiene una dualidad sexual. Es decir, el hecho básico es que todas las sociedades están conformadas por mujeres y hombres, algo que hasta ahora no se refleja en el quehacer político y social

Se trata de pasar del individuo abstracto, que puede estar en una declaración universal, hacia un individuo concreto, que es sexuado. No hay personas que no sean sexuadas. Ahí, entonces, viene esta tensión entre la igualdad y la diferencia; que si somos iguales, que si no lo somos; qué bueno que seamos mujeres y hombres, etcétera. En el fondo, se genera el debate, porque plantea preguntas a la representación política. ¿Quién representa plenamente al ser humano? ¿Lo representan solo los hombres, solo las mujeres o la presencia simultánea de ambos

Agregó que, en el debate, uno entiende que la igualdad se opone a los privilegios y la discriminación. Esa es la línea y por eso se quiere más igualdad, que no haya privilegios, que no haya discriminación. Y la diferencia se opone a la idea de todos iguales, todos semejantes. Cuando se está hablando de paridad se combinan ambas cosas. El desarrollo democrático ha tratado de terminar los privilegios en favor de la igualdad, pero aún quedan los pasos hacia la condición de las mujeres

Formuló la pregunta acerca de ¿cuál es la persona humana que está en la Declaración Universal de los Derechos Humanos? ¿Cuál es el sujeto de los derechos? ¿Cuál es el sujeto de los derechos inalienables? Evidentemente, que es un individuo concreto; hombre y mujer sexuada, no es en abstracto. En este sentido la paridad es el reconocimiento en la dualidad sexual del género humano y la paridad se ubica por una parte en la perspectiva universalista, pero por otro lado trae a la luz a los individuos concretos que son hombres y mujeres. Aquí, también reconoce que hay una pluralidad irreductible, básica que es que somos hombres y mujeres. Por lo tanto, la representación siempre tiene que tener esa alteridad: hombres y mujeres base de la representación

Mencionó que, en el fondo, lo que se está viendo con este proyecto y con toda la noción de paridad que se ha instalado en Francia, España, países de América Latina, como Ecuador y Costa Rica, es que hay una refundación del pacto social. Tenemos que volver a vernos, pero ya no como ser humano abstracto, sino que como un ser humano concreto y al mismo tiempo reconocer que las mujeres pueden representar al universal. O sea, Michelle Bachelet es Presidenta de todos los chilenos y chilenas, no es representante solo de las mujeres, sino que de toda la sociedad.

Eso es un avance considerable porque siempre se ha pensado que las mujeres representan solo a las mujeres. No, las mujeres representan al todo, así como los hombres han representado al todo, con o sin el apoyo de ellas

Sin embargo, las reformas requieren otras reformas, así como la incorporación de la cuota paritaria es muy oportuna. En todos los países en que se ha incorporado la cuota ha sido en el momento en que se amplía el número de parlamentarios, pues en ese momento es más fácil incorporarla porque ahí no se está dando la pelea de género

Añadió que, entre las leyes complementarias que deben modificarse está la de los partidos políticos porque tienen que democratizarse, ser transparentes y deben tener su cuota paritaria interna también. Es desde ahí de donde se desarrolla gran parte de la actividad política en nuestro país. Si no viene desde los órganos que actúan en la política, difícil es que se consiga todo lo que se quiere a nivel de las instancias de representación

También en la ley de financiamiento público de la actividad política. La limitación efectiva del gasto electoral, la inscripción voluntaria, o sea, lo que quedó como tope de gasto es una cosa absolutamente absurda que, obviamente, privilegia a los mismos de siempre

Son necesarias las leyes de cuidado y de corresponsabilidad para que se combinen los roles productivos y reproductivos de las mujeres y de los hombres. Mantener a las mujeres solas a cargo de las tareas reproductivas significa algo extremadamente complejo porque es muy difícil ser la única responsable de ellas. Debe existir apoyo de políticas públicas y el Estado, como responsable del bien común, también tiene que preocuparse de cómo es que las mujeres no queden exclusivamente a cargo de tareas que les inhiben la posibilidad de participar

H.- Instituto Libertad y Desarrollo.

Su representante, don Jorge Ramírez , manifestó que tienen algunas consideraciones previas a exponer, en particular, en lo referido a la parte netamente electoral, a partir de un enfoque sistémico. La literatura en ciencia política da cuenta de manera bastante robusta de un proceso de sinergia negativa entre sistemas presidencialistas y electorales proporcionales e incluso se ha llamado como un subtópico dentro de la política comparada en América Latina, que es la difícil combinación. En Chile tenemos un sistema hiperpresidencialista, y así se le ha denominado, con un sistema proporcional.

Dentro de esa nutrida literatura, destaca el texto de Scott Mainwaring , de 1993, llamado “América Latina: evaluando la difícil combinación”. Algunos autores como Ackerman dicen que es una combinación tóxica porque los sistemas electorales –esta es la famosa Ley de Duverger en sistemas electorales- condicionan en alguna medida los sistemas de partido. Tener un sistema altamente proporcional podría generar algún grado de fragmentación política y esto, conjugado con un presidente que necesita mayorías, podría generar una combinación algo problemática.

Añadió que, para ser completamente honesto desde el punto de vista intelectual, también hay un conjunto de literatura, en particular dos artículos: uno de Chasquetti y, otro, de Cheibub, que han matizado esta tesis de la difícil combinación. La han matizado a partir de la política comparada, ya que Chasquetti, por ejemplo, señala que la difícil combinación se podría superar si es que existen coaliciones suficientemente robustas, que permitan que la fragmentación se limite a partir de un ordenamiento político que se estructura mediante coaliciones estables. Por otra parte, Cheibub , en un estudio de 2007, plantea que los problemas del presidencialismo no pueden ser atribuidos al hecho de que este se conjugue con un sistema proporcional, sino más bien obedece a otro tipo de causas.

Agregó que, con las prevenciones y matices que la literatura reciente ha planteado respecto del tópico de la difícil combinación, esta no parece ser una cuestión trivial y que se deje aislada del debate y de la discusión, más aun cuando la propuesta de reforma electoral que está en discusión plantea y supone algunos incentivos que podrían, de hecho, debilitar la estructuración política bajo el modelo actual de coaliciones

Añadió que, entrando al detalle en el análisis de la propuesta, un tema importante es el del aumento de la magnitud de distrito. Entiéndase por magnitud de distrito el número de escaños a repartir por unidad electoral. La premisa por la cual se estructura el proyecto es que se parte del punto de vista de que a mayor magnitud de distrito, es decir, a mayor número de escaños a repartir por unidad electoral, se va a disminuir la desproporcionalidad electoral, entendiendo desproporcionalidad como la diferencia que se genera entre el número de escaños y el número de votos. Esto no es necesariamente así. La literatura más reciente documenta que la reducción de la desproporcionalidad electoral del sistema no es lineal al aumento de la magnitud del distrito

El siguiente gráfico de John Carey , connotado politólogo, y de Simon Hix , de 2011, representa la desproporcionalidad electoral y la magnitud de distrito. A medida que aumenta la magnitud de distrito el cambio en ningún caso es lineal. Por tanto, el cambio, estadísticamente significativo, o la reducción, estadísticamente significativa de la desproporcionalidad electoral, solo se generan de manera evidente hasta el quinto distrito del M5. Es decir, el cambio del M5 al M6, al M8, lo que se reduce, en términos de desproporcionalidad, es prácticamente insignificante. Esto se ratifica, si es que se simula la propuesta de reforma, con los datos de 2013 o, inclusive, con los de elecciones anteriores.

Añadió que, probablemente, se puede afirmar que las simulaciones electorales tienen algunos supuestos y ello es cierto. La simulación electoral solo se hace cargo de la dimensión mecánica del sistema. Los sistemas electorales tienen efectos a nivel de comportamiento, por tanto, la simulación en ningún caso captura ese efecto, pero sí es interesante ver cómo se captura el efecto mecánico. Si se simula, con los datos de la pasada elección de 2013, la propuesta de reforma del Ejecutivo con los resultados del sistema electoral binominal ve que la disminución en términos de desproporcionalidad es insignificante. Las diferencias son de un castigo de un 0,2 por ciento de desproporcionalidad a la Alianza y un bono –si se quiere llamar así- de más 0,3 a la Nueva Mayoría y es el mismo patrón para con las elecciones anteriores, como lo ilustra el siguiente cuadro

Por lo tanto, uno de los objetivos o de las ideas matrices del proyecto, que es la reducción de la desproporcionalidad, no se estaría generando, considerando la simulación y la evidencia de John Carey y de Simon Hix

Respecto del mismo tema del aumento de M, la sugerencia es que el aumento de este, si es que se está pensando en orientar hacia un sistema proporcional, debiera ser más acotado. Debiera ser una estructura 2, 4, 6 o, por de pronto, similar a la estructura de la fórmula del pacto RN-DC, porque John Carey , en un artículo de 2006, de la Revista Ciencia Política, plantea que el aumento de M tiene las siguientes implicancias: 1. Disminuye el incentivo que tienen los políticos y los partidos políticos para establecer coaliciones y, 2. Complica los mecanismos electorales para otorgar recompensas y castigos a cada uno de los políticos. Esto es básicamente lo que se conoce en literatura, como identificabilidad electoral, rendición de cuentas o accountability.

Añadió que, en algunas discusiones de esta misma Comisión, se tendía a asociar esta práctica con el clientelismo. Sin embargo, estimó que ello no es del todo preciso, porque el clientelismo es una mala práctica que hay que tender a erradicar, pero no por ello se va a imposibilitar que los legisladores, como representantes de la ciudadanía, tengan un vínculo y, a su vez, los electores puedan exigirles rendición de cuentas y tener algún grado de presencia a nivel territorial

Por lo tanto, añadió, Carey plantea que un ligero incremento de M, de la magnitud del distrito, es decir, orientar a un sistema proporcional más moderado, dejaría intacto el resto del sistema electoral y proporcionaría ventajas considerables en cuanto a representatividad, quizá limitando al mismo tiempo las concesiones relativas a los otros ideales.

Respecto de la situación de los independientes, agregó, bajo el modelo propuesto, claramente, se encuentran en una situación desfavorable respecto de los competidores de lista. Este es un hecho de la causa

En promedio, los independientes deberán competir contra más de 30 candidatos en cada uno de los distritos bajo la regla del Mx2, debiendo hacer frente desde votaciones individuales a votaciones de lista

Cabe recordar que se dijo que, en ningún caso, los candidatos que obtienen una muy buena performance electoral, o sea, que tienen una buena votación, no resultarían electos. Ello no es del todo preciso, porque si esa persona es independiente y compite en un escenario de tres listas, lo más probable es que no resulte electo. Es cosa de hacer la simulación

Agregó que la famosa regla del Mx2, no es un estándar en la experiencia comparada. Si uno mira los diseños electorales en el mundo -basta ir a cualquier libro de Pippa Norris o a un Manual de IDEA Internacional- la norma es tender a presentar el número de candidatos a partir de la regla de M, o sea, número de cargos a repartir, número de candidatos

Por ello, esta medida, a su juicio, repercutirá en un efecto de saturación en las campañas

También, añadió, hay un problema de identificabilidad electoral, que es uno de los principios que todo sistema electoral debería considerar en su diseño, es decir, que los ciudadanos sean capaces de entender las reglas del juego, saber quiénes van a ser sus representantes y a partir de ahí exigir cierto grado de vinculación y rendición de cuentas

En promedio, incluso, en un escenario conservador y considerando los distritos grandes, se va a tener más de 64 candidatos por distrito, en los megadistritos, lo cual supone un problema de efecto saturación que podría ser bastante complicado

Mencionó que en relación con el tema de los megadistritos, está el problema para la rendición de cuentas. Según Gary Cox, connotado politólogo, la rendición de cuentas de los legisladores con su circunscripción electoral es una de las tres dimensiones cruciales de promover en cualquier sistema electoral

En cuanto al aumento de diputados, mencionó que es un tema claramente sensible. A su juicio, debería ser un tema instrumental para la reducción de la desigualdad del voto, que es una de las ideas matrices que está en el proyecto. El problema es que, al calcular la desigualdad del voto con el proyecto actual, uno ve que, incluso, otras propuestas, como la del pacto RN y DC, que tienen un aumento menor en el número diputados y de senadores, corrigen de mejor manera la desigualdad del voto. Entonces, si uno de los principios orientadores de la reforma es corregir la desigualdad del voto, en principio, no tendríamos problemas con aumentar el número de parlamentarios si, en verdad, estamos obteniendo un resultado óptimo en términos de reducir la desigualdad del voto. Incluso, conocemos proyectos que se han discutido en esta misma Comisión que corrigen de mejor manera este problema

Por otra parte, hay criterios poco claros en la asignación de nuevos escaños. Ello parece preocupante. Por ejemplo, al nuevo distrito N° 4 se le asignan cinco escaños, con menos electores que los distritos N°s 2, 16, 18, 22 y 25, siendo todos de regiones. Por lo tanto, ¿cuál es el criterio

Por último, planteó algunas precauciones, sobre todo, desde el punto de vista político

Primero, hay generación de sobre expectativas. El efecto “arrastrados”, que es lo más cuestionado del sistema electoral binominal por parte de la ciudadanía, es decir, los candidatos que con la tercera mayoría, muchas veces, resultan electos, seguirá produciéndose. Cualquier persona que conozca de sistemas electorales y, aún más, de sistemas proporcionales sabe que, incluso, este efecto se podría agudizar. Entonces, basta que la ciudadanía se percate de lo anterior para que el nuevo sistema comience a ser cuestionado

Segundo, los sistemas de lista abierta, como el chileno, con distritos más grandes y doble número de candidatos, podría repercutir en un debilitamiento de las agrupaciones partidarias

Tercero, como respuesta natural a la configuración de los megadistritos, la reducción del límite del gasto electoral en los nuevos distritos solo beneficiará a los incumbentes o, en su defecto, a la lista de incumbentes

Cuarto, los distritos excesivamente grandes terminarán alejando más a los ciudadanos de la política, ya que éstos, en muchos casos, no son capaces de distinguir quiénes son sus dos representantes del distrito. Si no se acompaña el sistema de voto voluntario, con medidas que incentiven la participación, se podría tener, como peligro, una mayor abstención electoral

Para evitar ello, sugirió las siguientes medidas

Primero, acotar el aumento de la magnitud distrital a un máximo de seis, a partir de toda la evidencia que se ha entregado

Segundo, definir criterios claros para la nueva asignación de escaños, que no se presten para una lectura en clave de ventaja o aprovechamiento político

Tercero, permitir que candidatos independientes puedan suscribir pactos instrumentales frente al Servel para remediar su situación de desventaja

Por último, considerar la alternativa de un sistema de orientación mayoritaria, atendiendo al principio de la difícil combinación, que puede ser un sistema estrictamente uninominal, aunque, atendiendo a la tradición política chilena de multipartidismo. También podría ser un sistema uninominal que maximice la competencia con un complemento de proporcionalidad. Por ejemplo, frente al caso de la participación femenina, que podría verse desfavorecida en el caso del sistema uninominal, se podría establecer un complemento de proporcionalidad a través de listas cerradas donde cada partido pueda definir de manera voluntaria el número de candidatas en cada una de las listas

2.- Discusión General

Durante la discusión general el Ministro del Interior, señor Rodrigo Peñailillo , expresó que se inicia la discusión de un proyecto de reforma política largamente analizado y esperado en estos 24 años de democracia. La Presidenta de la República ha decidido presentar a tramitación del Congreso, el proyecto de ley que termina con el régimen electoral binominal.

Se propone en su reemplazo un nuevo sistema electoral proporcional moderado, para mejorar la calidad y representatividad de nuestra democracia. Se presenta este proyecto con la firme convicción y la esperanza de que este cambio político es posible, porque el país está maduro para estos cambios

Añadió que el régimen electoral binominal que fue diseñado para una democracia asustada, que había que proteger, ya no da para más. Seguramente, no van a faltar voces de sectores siempre renuentes al cambio, que dirán que esta reforma no es un tema que interese a la gente, que las preocupaciones de la ciudadanía son otras, que no le interesa la política

Expresó que no comparte ese juicio. Lo que la ciudadanía rechaza, lo que no le gusta, es la mala política. Ese tipo de política en la que se le ofrece algo a la gente y luego no se le cumple

Al respecto preguntó quiénes de los que han ido a elecciones no han escuchado a la gente diciéndoles en tiempo de campaña, “ahora se acuerdan de nosotros”. Lo que la ciudadanía demanda son buenas leyes. Que estén sintonizadas con los requerimientos de estos nuevos tiempos

Se ha visto en años recientes a las familias, jóvenes, a regiones, a la clase media, que se movilizan por mejores políticas públicas y leyes. Lo que la ciudadanía de diferentes formas está pidiendo, es que el sistema político permita canalizar sus inquietudes y demandas. Que sea más representativo

Indicó que el Gobierno cree profundamente en la democracia, en la fortaleza de sus instituciones, en el rol fundamental de los partidos políticos y del Congreso, para canalizar las demandas y aspiraciones ciudadanas y transformarlas en buenas leyes

Manifestó que el sistema binominal es un régimen de efectos políticos perversos, por las siguientes razones: porque ha anulado la competencia electoral verdadera, porque ha ido concentrando el poder de decisión en las directivas partidarias, en vez de la ciudadanía, porque en vez de abrir la democracia, la ha ido cerrando a los independientes y nuevas fuerzas, porque ha limitado la participación política de las mujeres, porque se ha transformado en una camisa de fuerza para los propios partidos y porque fue pensado para que existiesen dos bloques y grandes partidos, y en la última elección parlamentaria compitieron trece partidos políticos

Añadió que llevamos más de un cuarto de siglo con el régimen electoral y, a la luz de sus resultados, hoy es posible afirmar que no le hace bien a la salud de la democracia

Desde la recuperación de la democracia, se han conocido diversas iniciativas legales para cambiar el binominal, muchas de los cuales quedaron en la etapa de estudio y no fueron presentadas

Informó que el proyecto que expone ante la Comisión no parte de cero. Asume e incorpora la continuidad de iniciativas y debates generados en el país, y muy en especial el proyecto de la Comisión Böeninger, establecida en el primer Gobierno de la Presidenta Bachelet , como así también el proyecto de reforma al binominal liderado por los senadores Ignacio Walker y Carlos Larraín.

Informó que son al menos seis los objetivos que inspiran la fórmula que se propone

En primer lugar, avanzar en reducir la desigualdad del voto. La superación de la desigualdad es una tarea central de largo aliento, que está en el centro del quehacer del Gobierno, la que también se expresa en el terreno de la democracia

Nadie podría negar que el régimen binominal se basa en la desigualdad del voto. No se puede emprender una reforma, sin reducir significativamente esta desigualdad.

No resulta justo que el voto de un ciudadano de una determinada región valga cinco veces más que el voto ciudadano de otra región del país. Ello atenta contra el principio democrático de la igualdad del voto ciudadano

Si se está de acuerdo en este principio, se debe concordar que cualquier esfuerzo para igualar el voto ciudadano pasa por aumentar el número de diputados y senadores del país. De lo contrario, se debería quitar parlamentarios a regiones y territorios menos poblados.

Sostuvo que deben existir equilibrios regionales. En esta propuesta se ha tenido una consideración especial hacia los distritos correspondientes a zonas extremas en el norte y en el sur del país, más allá de su población electoral, atendida la unidad e integración al país

Otro objetivo de la reforma es abrir las compuertas de la democracia para permitir la representación de corrientes políticas significativas y de nuevos actores políticos y sociales.

El binominal es un régimen electoral que excluye a terceras fuerzas y limita el acceso de los independientes. La exclusión política a la larga debilita a la propia democracia.

Chile es hoy un país más diverso y pluralista que hace treinta años. Es un imperativo de estos tiempos, abordar la exclusión de nuevos actores políticos y sociales, que pugnan por entrar al sistema. Así también, la dificultad para que los independientes puedan ingresar al Parlamento

Indicó que el camino que hace posible el ingreso de las corrientes más significativas de la sociedad es el de reducir el número de distritos y circunscripciones para que se elijan más escaños en cada uno de ellos

Sostuvo que al tener distritos grandes, como los de 6 y 8 diputados, se contribuye a bajar las barreras de ingreso y se permite que lleguen al Parlamento sectores minoritarios de la sociedad y que merecen estar representados. Es necesario abrir las puertas para construir una democracia más inclusiva. Hay que avanzar hacia una democracia más participativa y convocante para la ciudadanía, aumentando la competitividad

Existe un gran desafío político, que motiva la reforma electoral propuesta: el imperativo de convencer, seducir y motivar a votar a miles de ciudadanos que están inscritos con el voto voluntario y que se resisten a ejercer su derecho ciudadano

El sistema binominal es un régimen electoral que ha ido debilitando la competitividad. Se sabe en un ochenta por ciento quiénes van a resultar electos en los distritos. Los partidos toman en sus manos la designación de los candidatos y debilitan ese poder ciudadano

No es interesante para esta ciudadanía -resistente a ejercer sus derechos políticos- ir a votar cuando no hay competencia real, cuando el sistema no es competitivo

La voluntariedad del voto conlleva a la necesidad de tener un sistema electoral más competitivo para fortalecer la democracia. Sostuvo que es necesario dar un paso muy decidido para trasladar el poder decisorio de las elites políticas a la ciudadanía y eso pasa por poner fin al binominal.

Hay que generar más competencia en las elecciones, hacerlo más atractivo para la ciudadanía, para que vayan a votar. Indicó que para lograr competitividad se requiere que los distritos elijan un número mayor de diputados, pero también que las listas presenten más candidatos que los que se eligen en cada territorio electoral. Ello con el propósito de facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías

El proyecto va a permitir que en los distritos que eligen un mínimo de 3 y en su mayoría de 5 a 8, el sector mayoritario gane con claridad pero, al mismo tiempo, se asegure que la minoría también tenga representación

Asimismo, el proyecto propone fortalecer la participación política de la mujer. Existe una Presidenta reelecta, la primera en la historia de Chile. A pesar de este avance significativo del rol político de la mujer en nuestro país, el sistema, incluyendo a los partidos y al régimen electoral, se ha quedado atrás de este cambio político y cultural. Seguimos teniendo un sistema político que limita el espacio a la participación política de la mujer. Chile está bajo el promedio de participación de la mujer en los parlamentos en América Latina y en los países de la OCDE

Las mujeres son la mitad de la ciudadanía que vota y solo tienen en torno a un 15% de parlamentarias. Ello no es justo. Es parte de la desigualdad de género de nuestra democracia que se desea cambiar

Añadió que el proyecto propone evitar que queden fuera candidatos con grandes votaciones. Uno de los defectos visibles del binominal es que candidatos con altas votaciones -sobre 20 o 30%- quedaron fuera del Congreso, como ha sucedido varias veces desde 1990 a la fecha

En distritos que mayoritariamente eligen 5 o más escaños, esto pasa a ser imposible y queda como probabilidad excepcional sólo en un pequeño número de distritos que elige 3 o 4 escaños

Informó que el proyecto de ley consta de tres artículos, que modifican la ley N°18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios y la ley N°19.884, sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, agregando a esta última, un artículo segundo transitorio

Se modifica el artículo 109 bis de la ley N°18.700, estableciendo que el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará a los candidatos ganadores, conforme a las reglas del sistema electoral de coeficiente D’Hondt. Esta regla se aplica tanto a los pactos, a las listas conformadas por un solo partido, y a los independientes, que se considerarán como un partido dentro de un pacto electoral cuando no formen parte de un subpacto

También modifica el artículo 178 de la misma ley, estableciendo que habrá 28 distritos electorales para la Cámara de Diputados, eligiendo el número de diputados que se señala para cada uno de ellos

Asimismo, se modifica el artículo 180, estableciendo que el Senado se compone de 50 miembros, y cada región constituirá una circunscripción senatorial, eligiendo el número de senadores que indica dicha norma.

Definió al nuevo régimen electoral como un sistema proporcional moderado, considerando que en cada distrito se elegirán un promedio de 5.5 diputados, en base al coeficiente D’Hondt para la designación de candidatos electos. El sentido fundamental es pasar de distritos binominales, que eligen sólo dos escaños, a distritos plurinominales, que eligen entre 3 a 8 escaños según el número de ciudadanos que agrupen. Como no se afectan o dividen los distritos actuales, a ninguno de ellos se le quitan diputados y se respeta la región como unidad territorial representada

Cinco regiones mantienen el número actual de dos senadores a elegir, mientras las otras diez lo aumentan, reduciendo así la desmesurada desigualdad en el valor del voto según donde se emita, permitiendo que se exprese la mayoría y que siempre esté representada también la minoría

El principio que gobierna la distribución de los asientos en el Senado de la República es la igualdad política entre las 15 regiones del país. Por ello, 3/5 de los escaños se distribuyen de manera igualitaria, de manera que cada región, con independencia de su número de electores, tendrá un mínimo de dos representantes en la Cámara Alta

Los restantes 20 senadores se elegirán en las regiones con mayor número de electores, evitando que una asignación muy alta a la Región Metropolitana pueda poner en cuestión el carácter territorial de la representación en esta Corporación

La propuesta reduce las diferencias en el valor del voto, pero también se asigna un valor fundamental a la necesidad de representación de todas las regiones.

Se propone una Cámara de Diputados integrada por 155 miembros.

Un componente central del proyecto es un nuevo distritaje electoral de 28 distritos sobre la base de la fusión de los distritos existentes y aumento del número de parlamentarios. La propuesta que se presenta al Congreso Nacional establece un total de 28 distritos que eligen, entonces, entre 3 y 8 diputados cada uno

Mencionó tres criterios del distritaje: La extensión territorial de los distritos no excederá los márgenes de una región; los nuevos distritos se constituyen a partir de la agregación de distritos hoy existentes y la asignación del número de escaños no reducirá, al menos en términos absolutos, la representación que tienen hoy los distintos territorios

Destacó que el 75% de los nuevos senadores, es decir, 9 de los 12 senatoriales adicionales, van a regiones

La Región Metropolitana queda con 3 nuevos senadores, un 15% del total a pesar de que tiene el 39% de los ciudadanos del país Y en relación al redistritaje, la aplicación del principio de la igualdad del voto no se ha extremado para no caer en un centralismo de un sistema proporcional extremo. El 57% de los nuevos escaños adicionales van a regiones: Valparaíso y Bío-Bío suman 4 cada una y los otros van uno a cada una de las 12 regiones restantes. La Región Metropolitana elige 15 adicionales, aumentando levemente su representación en la Cámara del 26,6% al 30,3%. Aun así la Región Metropolitana queda sub representada en relación al 39% de su población electoral

También hizo hincapié en la extraordinaria dificultad que existe en el régimen binominal de que logren entrar al sistema independientes o terceras fuerzas, que requerirían de votaciones del orden del 26% para ser electos

Al aumentar el tamaño del distrito y el número de parlamentarios a elegir, se abren posibilidades para que entren nuevos actores: las barreras de entrada en los distritos que eligen entre 5 y 8 diputados, y que constituyen el 82% de la nueva Cámara, se sitúan entre el 10 al 17%

Destacó que el proyecto de ley contiene cuatro propuestas de reforma complementarias

1.- Se propone que los partidos o pactos puedan presentar hasta un número de candidatos que doble el número de cargos a elegir

2.- Se propone incorporar una cuota de género, requiriendo a cada partido político, integre o no un pacto, que su nómina total de postulantes a la Cámara y al Senado cumpla el requisito de que ningún género esté representado por sobre 3/5 ni por debajo de los 2/5 del total.

3.- Se propone, complementariamente, establecer un mayor aporte fiscal para los partidos en función del número de mujeres que elijan tanto a la Cámara como al Senado, para que se presenten candidatas con posibilidades de éxito,

4.- Se establece un mecanismo de actualización de la distribución de escaños que opere cada 12 años en función de las variaciones en el número de electores de cada territorio

En relación al redistritaje futuro, se plantea que el Consejo Directivo del Servicio Electoral cada doce años actualice la distribución de escaños de acuerdo a criterio de población

Finalmente, respecto a la entrada en vigencia para completar la nueva integración del Senado, indicó que el proyecto de ley establece que, en las elecciones parlamentarias de 2017, se renovarán completamente las circunscripciones de las regiones impares. En el caso de las pares y Metropolitana, los parlamentarios electos el 2013 seguirán en funciones hasta completar su período. En las elecciones de 2021 estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde

El cambio al binominal es una reforma de un gradualismo político razonable para tener un Parlamento con el sistema proporcional moderado para el año 2022

En materia de financiamiento del aumento del número de parlamentarios, se propone que se realice de acuerdo al Presupuesto del Congreso para el año 2018

En síntesis, sostuvo que este proyecto va a dar más poder a los ciudadanos, va a terminar con el empate en la disputa política que era la regla general y aumentará la competencia, estimulando la participación electoral de la ciudadanía; contribuirá a terminar con la exclusión, permitiendo que entren terceras fuerzas a la política. Asimismo, va permitir que se cuente con más mujeres y jóvenes en el Parlamento; va a dar más posibilidades a los independientes, va a reducir la desigualdad del voto y va a ser un avance en una democracia ciudadana y de calidad

Valoró positivamente la disposición favorable de los parlamentarios independientes, así como también de nuevas fuerzas como es el caso de Amplitud y destacó también que Renovación Nacional ha estado desde hace mucho tiempo por cambiar el binominal

Concluyó que este Congreso tiene la oportunidad histórica de dar paso a una reforma política del régimen electoral, que va a contribuir a una democracia moderna, ciudadana, representativa y al fortalecimiento de la institucionalidad y estabilidad del país

El diputado señor Squella señaló que como miembro de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, no solo en este período legislativo, sino también en el anterior, ha tenido la oportunidad de revisar en varias ocasiones proyectos de este tipo. De hecho, había uno muy similar que sirvió de base para su elaboración, que estudiaron y analizaron con destacados invitados como, por ejemplo, el ex Presidente Lagos, quien también concurrió a exponer su visión al respecto.

Indicó que éste es el primer proyecto que se presenta, con un número tan significativo de parlamentarios. Destacó que su partido es el único que defiende la visión de que no es necesario un aumento de parlamentarios para lograr ciertos objetivos que se están planteando dentro del mensaje

A su vez, llama la atención que, incluso, con este significativo aumento, el mayor que se ha visto en los proyectos que tratan esta materia en los últimos 20 años, no se corrijan los problemas que en el mismo mensaje se plantea tiene el sistema binominal

En primer lugar, la igualdad del voto. Evidentemente, resulta complejo lograr una aproximación debido a las concentraciones que tienen los núcleos urbanos de nuestro país. Por ejemplo, si existiera un solo senador que represente a la Región de Aysén, tendrían que existir 57 senadores en la Región Metropolitana, y todos concuerdan que no es eso lo que se quiere para el país

Por lo tanto, desde ese punto de vista, es evidente que la igualdad del voto no es una máxima que se va a lograr en escenario alguno.

A su juicio, se debe enfatizar la distinción entre la manera de elegir una Cámara y otra. Estimó se podría haber sido más incisivo, en el sentido de que la Cámara de Diputados vaya a la paridad en la igualdad del voto, desde el punto de vista del representante versus elector, y que el rol que todas las regiones del país se encuentren igualmente representadas, sea asignado principalmente al Senado. Al menos, en la redacción original del proyecto, ello no se logra apreciar

Expresó que el ejercicio de simulaciones con los datos que se cuentan -que, por cierto, tienen errores, porque no comprenden el nuevo escenario con la cantidad y con la magnitud de candidatos, pero en algo se puede graficar- no logra, en caso alguno, corregir la sobrerrepresentación de las listas grandes versus las pequeñas, pues si se suman todas las elecciones parlamentarias desde 1989 en adelante, se puede constatar un 9,5 o 9,6 por ciento de sobrerrepresentación de las listas grandes, llámese Alianza o Concertación, que apenas baja a un 9 por ciento y que, evidentemente, la distribución no es tan pareja Concertación versus Alianza, como lo fue el promedio de 1989 en adelante, sino que abiertamente favorece a la antigua Concertación, hoy Nueva Mayoría

Afirmó que es aspiración de todos que exista una mayor cantidad de sectores representados en el Congreso Nacional, lo que no se va a lograr si esos grupos pequeños no forman parte de los grandes pactos

Sostuvo que resulta necesario buscar una solución a la situación de los independientes fuera de pacto, porque si hoy es complejo competir con listas completas, al menos, con dos personas, entre comillas, en igualdad de condición, en el caso de un distrito de ocho escaños en donde más aún, gracias a la alternativa de llevar el doble de candidatos, van a tener que competir contra 16 personas. Si a ello se le agrega que la naturaleza propia de los candidatos independientes es tener más fuerza en una ciudad y en un territorio determinado, más complejo será cuando se le sumen 10 o 15 ciudades importantes, como en el caso concreto de los 28 distritos que se está proponiendo aprobar

En relación con ese mismo punto, añadió que no es bueno generar esta suerte de macrodistritos. Si hay algo que los diputados presentes y quienes han sido parlamentarios saben es que la ciudadanía demanda una mayor cercanía, lo que será muy difícil de cumplir

Informó que en el caso de los independientes, desde el punto de vista de las cuotas, en la UDI siempre se ha hecho un esfuerzo importante de incluir candidatas sin la necesidad de imponer mecanismos obligatorios

Sostuvo que ello resultará muy complejo. Exigir que se deba cumplir con un 60 por ciento de un género determinado no deja, de plano, ninguna alternativa a un partido político o a un pacto que en su totalidad quiere presentar solo tres candidatos y que perfectamente podría ser un partido o un movimiento naciente que pretenda plantear una lista con las tres personas que le gustaría que llegaran al Congreso

Añadió que buena parte de los problemas que se presentan en este proyecto, precisamente, tienen que ver con el redistritaje que está ofreciendo el mensaje

Preguntó cómo la Presidenta exige a otro Poder del Estado, a través de un mensaje, cumplir a futuro cuotas que le fueron imposibles de ejecutar en la confección de su equipo de trabajo, incluso proponiéndoselo internamente

Si se hace el ejercicio de echar abajo la nómina entera de candidatos y esa ficción se extrapola a la nómina de ministros, subsecretarios, intendentes y gobernadores, habría reprobado prácticamente todas las nominaciones, porque no cumplirían con la cuota, salvo en el caso de las gobernaciones. Solicitó un poco más de coherencia e incentivar la incorporación de las mujeres en el debate nacional y en el ámbito legislativo con algún grado de realidad

Por último, concluyó que se ha intentado confundir los intereses políticos con los de la ciudadanía, pero éstos no van de la mano. En otras palabras, se ha instalado la idea de que el sistema binominal genera una serie de distorsiones y otros conflictos, pero el proyecto perpetúa las mismas distorsiones, con la única diferencia que se escogen en la misma elección a más de dos personas. Más aún, la elección que propone el sistema binominal sigue vigente en siete regiones del país. En ese contexto, teniendo a la vista los epítetos que se le han formulado al sistema binominal, señaló que ignoraba cómo se puede elaborar un proyecto en donde se mantiene dicho mecanismo vigente en siete regiones del país

La diputada señora Turres, doña Marisol , hizo un llamado al Gobierno a repensar lo que significa el redistritaje para el sur del país. Cuando se legisla en general, sin mirar las distintas situaciones geográficas y climatológicas, no se considera la realidad de las personas. En ese sentido, este redistritaje hace tremendamente difícil el ejercicio parlamentario en terreno, especialmente en la zona sur e, indudablemente, conlleva a un alejamiento o distanciamiento entre los representados y los futuros parlamentarios.

Asimismo, respecto de la representación de las mujeres o aquellos aspectos que el proyecto alude como representación femenina, hizo presente que a través de los años ella ha evolucionado. En principio se oponía radicalmente a legislar sobre cuotas. Estimó que hoy hace falta ayuda, y está dispuesta a tratar el tema. En este sentido, consideró que el proyecto es absolutamente insuficiente

Hizo presente que a las mujeres les cuesta mucho participar en política por la mayor dificultad para recaudar recursos para financiar las costosas campañas y por lo complejo que es mantener un equilibrio entre la labor parlamentaria y la vida de familia

Aún existe un sistema con rasgos de machismo, donde los varones, muchas veces, dejan el hogar y el cuidado de los niños a cargo de la mamá, por lo tanto, ejercen la actividad parlamentaria con bastante más libertad o con un menor costo

Obviamente, la existencia de distritos enormes, por una parte, significa un aumento sustancial del costo de cualquier campaña, lo que significa una mayor dificultad para las mujeres en términos de acceder a recursos para financiarlas.

En países como el nuestro, donde se observa un aumento sostenido de la delincuencia y una disminución de la edad en que los niños y jóvenes se inician en el crimen, es importante la presencia y compañía de la madre en el hogar y, de alguna manera, con este proyecto, se avanza en sentido contrario, pues será bastante más difícil para cualquier mujer pensar en ejercer un cargo. Las circunscripciones son territorios bastantes más grandes que los distritos. Por ello, la propuesta del proyecto referida a establecer distritos prácticamente del mismo tamaño de las circunscripciones electorales dificulta aún más la situación

El diputado señor Ceroni afirmó que el binominal es un sistema que constituye una herencia de la Dictadura y ahora, por fin se podrá construir un sistema electoral que realmente refleje lo que la gente quiere y anhela. La ciudadanía desea representantes que expresen lo que ellos plantean en sus distritos.

Muchas veces se ha sostenido que los distritos van a ser mucho más grandes y ello complicará la cercanía que se debe tener con la gente. Sin embargo, estimó que a través de los años el papel de los parlamentarios se ha desvirtuado. Lo que más le interesa a la ciudadanía no es necesariamente su proximidad, sino que realicen de buena forma su tarea acá y que, ojalá, trabajen más elaborando leyes que convengan a sus intereses

Recalcó que hay que cambiar la cultura del clientelismo y el papel de asistente social. La gente debe comprobar que los parlamentarios cumplen su labor promoviendo leyes eficientes; al entender ello, se percatarán que es mil veces preferible que no los visiten tanto, sino que cumplan bien su obligación como legisladores

Por otro lado, es injusto que distritos con 120 mil habitantes elijan los mismos dos parlamentarios que aquellos cuya población supera los 300 mil habitantes

El diputado señor Andrade valoró la actitud de la Nueva Mayoría, en orden a estar disponible para cambiar el sistema, pese a que esta coalición ganó las últimas elecciones con el actual sistema, y lo hizo con una diferencia importante. Hoy son mayoría, tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado, a pesar del sistema binominal. No obstante, están dispuestos a hacer un cambio e incorporar incertidumbre al sistema.

El proyecto también habla bien de la generosidad del pacto político programático que sustenta a este Gobierno, porque a pesar de haber obtenido resultados tan favorables en la última elección con el sistema binominal y de su triunfo, la Nueva Mayoría y su Gobierno están en condiciones de proponerle al país una reforma que le incorporará incertidumbre a su propia electividad, lo que habla bien de la madurez de esta coalición

Informó que hoy en una interesante conferencia de prensa dada por importantes personeros de la UDI, senadores y diputados, se desmoronó el último bastión, la última muralla, el último contrafuerte que existía para discutir el binominal. La UDI se abrió a la posibilidad de conversar sobre este sistema. Incluso, fue más allá. Propuso un sistema uninominal, y en subsidio de aquello, se abrió un proporcional corregido.

Respecto del proyecto, hizo presente que con el diputado Pepe Auth tienen el mismo problema. Cada vez que hay elecciones, deben explicar a sus electores que ellos valen menos que el resto de los chilenos y que su voto es varias veces menor. Ellos hacen la misma contribución al país. En general, son pobres, probablemente solo pagan IVA y no otros impuestos, y sus casas no superan las dos mil unidades de fomento, pero son chilenos.

Añadió que el núcleo y la impronta política ideológica de este nuevo régimen de la Presidenta Bachelet , es la lucha contra la desigualdad. Este proyecto también ataca al núcleo de la desigualdad en Chile, porque cuando la iniciativa se apruebe podrá decir a sus electores que tal vez no son iguales, pero están un poco más cerca que el resto, son un poco más iguales.

En segundo lugar, este proyecto genera incertidumbre, algo propio de cualquier sistema electoral, esto es, que no se sepa de antemano quién va a ganar. Con ello se le dice al país que el sistema permitirá que no se conozca de antemano quién va a ganar o a perder. Entonces, no va depender de que uno se ponga de acuerdo en la oficina del partido quien se elige, sino que deberán dar la pelea ante la ciudadanía

Cuando Salvador Allende era senador recorría Chiloé , Aysén y Magallanes ; Carmen Lazo recorría todo Santiago , y Palestro recorría el tercer distrito, desde San Miguel hasta la Cordillera. Sin embargo, pareciera que ahora no se puede caminar tanto, por la lejanía. Destacó que no hubo casa que Palestro no recorriera, con lo grande que era su distrito. Entonces, tales argumentos esconden el temor a la incertidumbre, el no saber de antemano si uno será electo. Si hay un sistema electoral que garantiza certeza, no sirve.

Estimó positivo que se garantice un sistema de cuotas y una representación de las zonas extremas, por lo que la absoluta proporcionalidad significaría que a Arica, Aysén y Magallanes solo les corresponda elegir un diputado. El Gobierno intenta evitar que ello suceda y lo repara por la vía de garantizar una representación que va más allá de su proporcionalidad, pero que tiene sentido por su condición de zona extrema.

Por otra parte, el proyecto incorpora mayor competencia, lo que significa que en el distrito de los más solventes también va a haber discusión, porque ya no está asegurado el único doblaje que tiene un sector de este país

Sostuvo que pese a que no es materia de este proyecto, propuso terminar con la odiosa discriminación que hay con los dirigentes sindicales. No tiene sentido mantener esta arbitraria y odiosa discriminación de que por ser dirigente sindical no pueden ser candidatos al Parlamento

El diputado señor Monckeberg , don Cristián , sostuvo que no es primera vez que Renovación Nacional ha estado presentes en grandes acuerdos.

Recordó que en 1995 plantearon la eliminación de los senadores designados, incluidas otras reformas a la Constitución. Luego vino la inscripción automática, el voto voluntario, la ley de primarias y la elección de consejeros regionales, que inició la Presidenta Bachelet en su administración anterior y luego concretó el ex Presidente Piñera.

Informó que los parlamentarios y la comisión política de su partido están en disposición de avanzar

Celebró la invitación a que se sume Renovación Nacional y todos los partidos de oposición y los movimientos. Estas reformas toman mayor valor cuando son apoyadas transversalmente. Con todo, reconoció lo difícil que resulta alcanzar la unanimidad. Destacó que se trata de reformas de 50 a 100 años plazo. Por lo tanto, cambiar un sistema electoral o modificar la Constitución recopilando uno a uno los 72 votos que se necesitan en la Cámara de Diputados o los que se requieren en el Senado, no es una buena fórmula

Destacó que el promedio de la duración de los acuerdos electorales en nuestro país es de 47 años y fracción

Compartió la argumentación expuesta respecto de la desigualdad del voto. Hay parlamentarios que han sido electos con 10 mil u 8 mil votos. Existe una desigualdad gigante que hay que corregir

Añadió que respecto de la competencia, existe temor. El ex ministro Edgardo Böeninger lo planteó en una ocasión en que hizo un gran esfuerzo por aprobar su proyecto. El rechazo no fue de los partidos de oposición, sino del propio oficialismo, porque no les acomodaba el redistritaje que se estaba planteando.

Por otra parte, hizo presente que existe un proyecto de ley que termina con la reelección indefinida, que se encuentra actualmente en segundo trámite constitucional en el Senado

Añadió que también se debe abordar el reemplazo parlamentario.

Por último, destacó la necesidad de terminar con el hiper presidencialismo agobiante que hoy existe. Aclaró que no está sugiriendo pasar a un sistema parlamentario, sino que propone buscar una suerte de mejor equilibrio de funciones y de facultades.

Una de las razones que explican el desprestigio del Congreso dice relación con las pocas funciones que ejerce en comparación con un alcalde, un ministro o una presidenta o Presidente de la República

El diputado señor Browne, don Pedro , sostuvo que el sistema binominal fue defendido como un dogma, sin entender que, se trata simplemente de un mecanismo de elección, que cuando no representa de buena manera y cuando no está acorde a los tiempos o al ritmo de la democracia de un país, simplemente hay que modificarlo.

Recordó que el año 2010, con el diputado Monckeberg trabajaron para avanzar en un cambio al sistema binominal. Sin embargo, se enfrentaron con muchas barreras en su propio sector, lo que, en definitiva, los llevó a la convicción de que el sistema se cambiaría cuando les diera la espalda, lo que ocurrió en la última elección. Además, sostuvieron que cuando fueran minoría, serían espectadores del cambio y no protagonistas, como pudo ocurrir si hubiesen impulsado una reforma a partir de 2010.

Compartió la idea de avanzar en terminar con la actual desigualdad del voto, así como también con el empate permanente que genera el sistema binominal en algunos distritos. Es ese mismo empate el que termina con una competencia completamente fratricida dentro de las propias coaliciones por lograr ese escaño asignado a una y otra.

También consideró necesario avanzar en la fijación de cuotas, aunque tiene algunos reparos, no por las cuotas propiamente tal, sino porque éstas contradicen la ley de primarias. Si en todos los distritos se hicieran primarias y los hombres resultaran vencedores, no se cumpliría con la ley de cuotas al momento de la elección. La solución está en no aplicar esa cuota donde hubo primarias

Agregó que el aumento de parlamentarios es, evidentemente, el tema más difícil. Estimó necesario conocer en mayor profundidad los costos de esta decisión y contar con mayor claridad de parte del Ejecutivo. Señaló que esta medida es una consecuencia de tener un sistema más representativo y con mayor proporcionalidad del voto. Si ello no se hace, evidentemente habría que terminar con la representación parlamentaria en las zonas extremas, o llegar al extremo que Santiago tuviese más de cien parlamentarios en la Región Metropolitana, lo que sería absolutamente absurdo. Por tanto, resulta evidente que se debe llegar a un término medio y eso significa un aumento de parlamentarios.

Junto con el diputado Monckeberg presentó una propuesta, antes del acuerdo entre Renovación Nacional y la Democracia Cristiana, en la misma línea y muy similar a las bases de este proyecto. Informó que se restringieron en la cantidad de parlamentarios propuestos, porque en ese entonces era muy difícil plantear un aumento mayor. Sin embargo, para realmente avanzar en una proporcionalidad adecuada en el voto y una mejor representación sí se requerían más parlamentarios. Evidentemente, para mejorar esas condiciones era necesario un número mayor que los 134 que propusieron.

Respecto del distanciamiento con la gente que producirían los distritos grandes, señaló que se debe analizar la labor que cumplen. Hoy utilizan un cuarenta por ciento de su tiempo, de los días hábiles, en el trabajo legislativo en el Congreso y el otro sesenta por ciento lo ocupan en su distrito. Comentó que existe tiempo suficiente para que la labor legislativa sea mucho más intensa de lo que es hoy

Por último, expresó que el prohibir que los independientes no se puedan agrupar en listas resulta contradictorio con una mejor representación y con los afanes de avanzar en contra de la exclusión.

El diputado señor Auth afirmó que un sistema electoral no es otra cosa que el mecanismo a través del cual los votos de la gente se transforman en escaños. Al evaluar el sistema binominal como la manera en que se traducen los votos y la preferencia ciudadana en escaños, es posible sostener que se trata de un sistema democrático, pero que genera distorsiones.

Durante siete elecciones parlamentarias ha regido este sistema, y por alguna razón hoy existe un diagnóstico común respecto que es la hora de cambiarlo

Felicitó la decisión del Gobierno. Nunca hubo uno completamente resuelto para poner a los parlamentarios frente a la decisión de elegir entre la comodidad de continuar con el mismo sistema o cambiarlo por otro que obviamente genera incertidumbre, por lo desconocido.

Reconoció que la presentación de esta iniciativa fue posible por el acuerdo entre Renovación Nacional y la Concertación en el Senado, que terminó con la eliminación del guarismo 120.

Hoy todo el mundo sabe que es imposible reducir la desigualdad del voto sin incrementar el número de parlamentarios, porque el único otro camino posible es reducir el número de parlamentarios que tienen las zonas sobrerrepresentadas, que son amplios territorios de Chile.

Explicó que el sistema binominal no es el causante de la desigualdad del voto, sino la forma de dividir los distritos, porque si en cada uno de los sesenta distritos hubiera doscientos mil electores, no habría desigualdad en el voto, aunque los distritos fueran binominales. El problema es que éstos se hicieron con el resultado de la elección del Sí y el No a la vista. La única explicación de por qué la Región de La Araucanía tiene más diputados que la Región del Maule es porque en la primera le fue bien al Sí en la elección de 1988.

Sostuvo que cambia completamente la competitividad del sistema al pasar de distritos y circunscripciones, que eligen dos representantes, a distritos y circunscripciones que elijan más de esa cifra, porque al elegir solo dos, casi todos los actores, al comenzar la batalla, saben que en un 90 por ciento de los territorios da lo mismo sacar 33 por ciento de los votos que sacar 60 por ciento, pues igual se elegirá un diputado por coalición, porque la expectativa de doblar no existe. Da lo mismo sacar 20, 30, 40, 50, 55 y 60 por ciento. Ello conduce inevitablemente a que los candidatos fuertes normalmente estén acompañados de uno débil, porque la expectativa de doblar no existe, y es imposible ganarle a un candidato de gran envergadura. En consecuencia, el nivel de incertidumbre de la elección se reduce de manera increíblemente significativa. Si no hay incertidumbre, obviamente no hay competitividad verdadera.

En cambio, en el sistema que elige 4, 5, 6 o 7 diputados, si se obtiene el 35 por ciento de los votos se elegirán un número determinado de escaños, pero si obtiene 40 por ciento probablemente elegirá otro más; si obtiene 50 por ciento, elegirá otro. Es decir, todos los partidos, las listas y, sobre todo, los candidatos sabrán que sus votos pueden redundar en que habrá un diputado o un senador adicional. Ello es fundamental, porque estimula la competencia

Ningún partido va a poner candidatos acompañantes “livianos”, porque siempre habrá una posibilidad de elegir un parlamentario más. Esa es la base fundamental del sistema

Añadió que la incertidumbre va a ser mayor, porque la probabilidad de que entren terceros, que no están ni en una ni en otra coalición, va a crecer considerablemente

Hizo presente que en general no sirve analizar los resultados futuros con los resultados pasados. Destacó que en un distrito que elige 8 diputados, una fuerza política que obtenga 11 por ciento tendrá garantizado su ingreso al Parlamento; en un distrito de 7, lo hará con un 12 por ciento; en un distrito de 5, con un 17 por ciento. Ello significará que las coaliciones no van a ser forzadas, sino voluntarias.

Preguntó qué resulta más injusto, que Jaime Guzmán , con 16 por ciento, más su compañero de lista, que sumaron 31 por ciento, elijan un senador, o que Ricardo Lagos haya perdido, con 30 por ciento de la votación. Aseveró que las dos cosas son igualmente injustas, porque el 30 por ciento que votó para que hubiera un senador de la Alianza, en 1989, merecía un senador, pero el 30 por ciento que votó por Ricardo Lagos, para que hubiera un senador del progresismo, también lo merecía.

Por último, destacó que los que más se oponen son quienes no se piensan nunca como mayoría. Buscan cómo defender su condición de minoría, en lugar de pensar en generar condiciones para ganar la mayoría. Cuando uno mira el futuro desde la desesperanza, en el sentido de que nunca se será mayoría, obviamente que le interesará que nunca haya un número impar. Sin embargo, todos los actores políticos se organizan para conseguir los votos de la mayoría y, por lo tanto, querrán un sistema electoral donde ocurran dos cosas básicas: primero, que la mayoría se exprese mayoritariamente; segundo, que la minoría tenga garantías de existir en todos los territorios de Chile y ello es lo que garantiza el proyecto

El diputado señor Chahin felicitó al Gobierno, por tomar la iniciativa, con una voluntad real, para terminar con uno de los candados más significativos que dejó la dictadura en materia de participación y de democracia.

Indicó que los parlamentarios debieran ser los primeros interesados en abordar la crisis de confianza que tiene la ciudadanía respecto del Congreso, entre otras razones porque hay una debilidad en la representatividad. Siguen existiendo sectores políticos y sociales excluidos del Parlamento, a pesar de los esfuerzos que se han hecho. Por ejemplo, el pacto contra la exclusión, de la Nueva Mayoría, buscaba incluir a más actores políticos y sociales en el Parlamento, pero todavía existe un déficit en esa materia

Manifestó que se debe demostrar el compromiso efectivo de los parlamentarios de la Nueva Mayoría, para no buscar excusas y apoyar con fuerza esta iniciativa del Gobierno de la Presidenta Bachelet y sacarla adelante lo antes posible.

Valoró la disposición de Amplitud y el compromiso de Renovación Nacional con la Democracia Cristiana, que fue generando condiciones políticas para buscar un camino de entendimiento que les permita discutir el fin del sistema binominal

Comentó que para que sean sustentables las grandes reformas se requieren grandes acuerdos. Esa era la lógica de Edgardo Boeninger. Sin embargo, hizo presente que muchos en su momento le dieron la espalda a quien fuera un gran promotor del fin del binominal.

Sostuvo que existen tentaciones para buscar excusas de toda naturaleza y se puede recurrir a los argumentos más nobles, por ejemplo que podrían perjudicarse los territorios menos poblados, que no se corrige absolutamente la desigualdad del voto, entre otros. Sin embargo, todos saben que el gran argumento es que la incertidumbre les complica

Este proyecto también incidirá en la forma como se ejerce la labor parlamentaria. Se deberá cambiar la manera en que se enfrentan las elecciones, pero también deberán cambiar muy radicalmente la forma en que ejercen la citada labor, y eso naturalmente que implica un trabajo mayor y un desafío enorme. Añadió que lo que hace falta en nuestra democracia es que las cosas no sean tan predecibles

Reafirmó el compromiso de la Democracia Cristiana de aprovechar esta oportunidad político-histórica y poner fin al sistema binominal.

En segundo término, valoró la necesidad de terminar con exclusiones odiosas, como ocurre con el mundo sindical, lo que aparece en la exposición de motivos del proyecto. También expresó que comprendía la necesidad de seguir avanzando en la incorporación de la mujer en la política. Sin embargo, añadió que nuestro país tiene una deuda muy importante con nuestros pueblos originarios. No se puede dejar sin respuesta un cuestionamiento legítimo de nuestros pueblos originarios respecto de cómo se garantiza no solo su participación, sino que su representación efectiva, porque hoy en la práctica están fuera del Estado

El diputado señor Coloma señaló que se ha logrado establecer, con una habilidad comunicacional impresionante, que el gran beneficiado del binominal es la Derecha. Ello no es efectivo. En la elección de 1989, con el 51 por ciento de los votos, la Concertación obtuvo el 57 por ciento de los parlamentarios. Posteriormente, con el 55 por ciento de los votos, alcanzó el 58 por ciento de los parlamentarios; con el 50 por ciento de los votos, alcanzó el 57 por ciento de los parlamentarios; con el 47 por ciento de los votos, el 51 por ciento de los parlamentarios; con el 51 por ciento de los votos, el 54 por ciento de los parlamentarios. La elección de 2009, con el 44 por ciento de los votos le permitió obtener el 47 por ciento de los parlamentarios, y en la elección de 2013, si bien no posee la cifra exacta, es donde la Concertación obtuvo proporcionalmente, por lejos, la mayor diferencia.

Por ello, sostener que el sistema binominal solo ha favorecido a la Derecha es una mentira.

Además, indicó que afirmar que los problemas del país se solucionan con más políticos es no entender lo que en la práctica está sucediendo. Los problemas del país están lejos de solucionarse con más políticos. Basta con 120 parlamentarios. Es una cifra perfectamente razonable

Rectificó los dichos del diputado Andrade , quien afirmó que el proyecto termina con la gran desigualdad de los votos. Si se llega a aprobar esta reforma, al unir los distritos N° 26 y N° 29, que serían los que le correspondería representar, se elegiría un parlamentario por cada 193 mil personas versus la Región de Aysén, con 45 mil en la actualidad. Es una diferencia al día de hoy de 4,2. Realizada la modificación se pasaría a elegir un parlamentario por cada 110 mil, versus Aysén que elige uno por cada 30 mil, una diferencia de 3,80 y tantas veces. O sea, de 4,2 a 3,80 y fracción.

Recordó que el sistema proporcional para Chile no es algo nuevo. Dicho sistema se aplicó y llevó al fracaso del sistema político existente

Además, hizo presente que el sistema que se pretende aplicar respecto de la elección parlamentaria, es el mismo que se aplica para los concejales

En 2008, diez concejales con primeras mayorías perdieron, no fueron electos, y diez concejales que obtuvieron menos de un uno por ciento fueron elegidos concejales. O sea, en este caso no se asegura necesariamente a los parlamentarios o concejales que el hecho de ser primera mayoría u obtener grandes porcentajes asegure la elección. En la práctica, ello no ocurrió en 2008

Destacó que la UDI está dispuesta a modificar el sistema binominal, pero sin aumentar el número de diputados. Consideró importante mantener el número de parlamentarios que actualmente existe

Por último, solicitó que el Ejecutivo sincere el tema de los gastos. Decir que aumentar en 30 por ciento del número de parlamentarios no va a generar ningún mayor gasto es querer tapar el sol con un dedo. De lo contrario, habría que reconocer que el Parlamento ha tenido un presupuesto excesivo en un 30 por ciento que se ha malgastado desde 1990

El diputado señor Insunza sostuvo que hoy resulta posible apreciar el fracaso de las pretensiones del sistema binominal, porque éste quiso introducir en Chile una especie de bipartidismo y ello no se produjo. Estaba asociado a la idea de que iba a traer más estabilidad, pero ésta no ha sido producto de esas variables, sino que más bien de un conjunto de otros elementos como son la madurez del sistema político y sobre todo de las agendas que han ido dando paz social en Chile.

Añadió que cualquier sistema electoral también tiene que hacerse cargo de la historia real de un país. En este sentido se ha propuesto implementar un sistema uninominal. La Derecha, en su configuración actual, con ese sistema probablemente no obtendría más de un 20 por ciento. Por ello, un régimen uninominal sería conveniente para la Nueva Mayoría, pero no daría cuenta del sistema político real del país.

Sostuvo que en Chile, más que la tendencia de tener solo partidos grandes y fuertes, se ha tenido más bien una cultura de coaliciones grandes con diversidad de partidos y, por tanto, con la configuración de pactos sobre la base de esas distinciones.

Este sistema proporcional, que es moderado, no es el mismo sistema que existía antes de 1973, ya que antes había algunos distritos con 19 parlamentarios. Por lo tanto, existe un factor de diferenciación respecto de lo que existía previamente, y eso tiende a la configuración de coaliciones, pero con una variable que no existía previamente, que es más determinante en la formación de las coaliciones: la segunda vuelta presidencial.

Ello es lo que hace que este proyecto se vincule más con la historia política real del país y desde ese punto de vista introduce un factor que es sano, que las distintas fuerzas se puedan expresar y compitan entre sí; que esos proyectos puedan mostrarse con cierta nitidez; que no tengan que hacer enormes arquitecturas de pactos por omisión, que son los que han dado forma a las presiones electorales mayoritarias en el último tiempo

Por otra parte, se debe reconocer que tanto en la fuerza de la Nueva Mayoría como de la Alianza, el sistema electoral binominal, al trasladar la competencia al interior de las coaliciones, también genera un daño a su propia gobernabilidad. Ello ha quedado demostrado porque instala las pretensiones hegemónicas de una fuerza, o de una fuerza que empieza a perfilar una mayoría y, por lo tanto, tiene esa pretensión hegemónica que termina generando un factor de disociación interna, y eso tampoco es sano para la gobernabilidad del país

Desde ese punto de vista, reiteró que este proyecto se vincula mucho más con la historia política del país, con nuestra cultura y con lo que se necesita para darle una sana gobernabilidad.

En segundo lugar, respecto del redistritaje, coincidió con los planteamientos de los diputados Ceroni y Browne en cuanto a que el actual diseño tiende a fomentar una cultura más clientelista que, al final, es un campo propicio para los distintos tipos de populismo que hacen mal al país.

Al mismo tiempo, la cercanía a la que se ha aludido no se va a perder en la medida en que todos los parlamentarios, en la dinámica real, van a tener algunos puntos más fuertes, pero van a ir en coalición y, por lo tanto, también irán con otros candidatos, incluso de sus propios partidos, que les van a permitir tener un factor de crecimiento

Desde ese punto de vista estimó valiosa la fórmula Nx2, ya que permite a los propios partidos ir marcando una diversidad que en algunos casos es territorial, que es de género, que eventualmente también puede ser étnica, que puede ser el canal real de expresión de candidatos más jóvenes y de dirigentes sindicales o gremiales de distinta naturaleza

Desde esa perspectiva, estimó que esta fórmula representa mejor esa diversidad, en un espacio de competencia, pero también de mayor colaboración. No en esta competencia fratricida del sistema binominal, en que sale uno u otro, sino que abre la posibilidad de esa ampliación

La misma razón se puede argüir respecto de los costos, porque los distritos más grandes generan parte de esa barrera, pero no si es concebida bajo esta fórmula de las listas, porque en definitiva son más los candidatos que se van sumando a la posibilidad de ser electos.

Estimó razonable el planteamiento efectuado por algunos parlamentarios independientes, en el sentido de buscar en la discusión legislativa la forma de resguardar ese punto, pues es valioso, tanto para su inclusión en los pactos como para que puedan pactar, porque también fortalece a los partidos.

El diputado señor Saffirio recalcó que esta discusión no solo apunta a avanzar en un proceso de reforma del sistema electoral. Se está efectuando un gran esfuerzo político por recuperar no sólo la representatividad electoral, sino la legitimidad institucional, pues desde el punto de vista estrictamente político, en su acepción más amplia, el gran perjuicio que ha causado la aplicación del sistema electoral binominal tiene que ver con el deterioro progresivo de la percepción que los ciudadanos tienen de la política y de los políticos.

Estimó que se puede discutir acerca de si hay más o menos diputados y probablemente se puede arribar a acuerdos que se vinculan con la forma de distribuir los distritos. Sin embargo, hay un tema central del que no se puede prescindir, que es la rigurosidad y el cuidado con que se tiene que producir este debate. Se debe revertir la caída de la percepción ciudadana, entendiendo que no obstante su condición de incumbentes están disponibles para crear condiciones electorales más complejas o difíciles de las que han enfrentado en el pasado, con lo cual evidentemente la percepción ciudadana va a comenzar a revertirse no respecto de los diputados individualmente considerados, sino de la institución Congreso Nacional en su conjunto

Añadió que, respecto del tamaño de los distritos, se produce una paradoja muy grande. Participó como encargado juvenil, en la primera campaña electoral de don Renán Fuentealba Moena , quien era el presidente nacional de la Democracia Cristiana, en el verano de 1973, y su circunscripción era Biobío, Malleco y Cautín. No había aviones, se viajaba en tren; los caminos no eran los que hoy existen, no había correo electrónico. En otras palabras, las condiciones en que un senador de la República ejercía sus funciones en aquella época eran francamente dramáticas.

Curiosamente, los ciudadanos y los electores entendían que no podían tener esa cercanía tan inmediata con su parlamentario ya que debía cumplir sus funciones legislativas

A partir del retorno a la democracia comienza a producirse una enorme confusión, que generan los propios parlamentarios, respecto de la naturaleza de sus funciones, y en vez de tener diputados en los distritos muchos pretendían ser alcaldes

Hubo un momento, desde el punto de vista legal, en que un diputado o un senador que se atribuía el uso o la asignación de recursos públicos podía ser destituido de su cargo. En la actualidad es muy frecuente ver a diputados construyendo puentes y asignando recursos del Ministerio de Obras Públicas, sin que sufran consecuencias negativas por ello

La propia institucionalidad, los propios parlamentarios, en el ejercicio de sus funciones, fueron creando condiciones para esta confusión

Destacó que se produce una paradoja, porque esta cercanía, en relación con el tamaño de los distritos, nunca había generado una distancia tan grande entre el Parlamento y los ciudadanos. Por lo tanto, se puede concluir razonablemente que la cercanía con los electores no tiene que ver con las dimensiones del distrito

En tercer lugar, expresó que el ciudadano común no tiene expectativas de que se cambie el binominal, porque no creen a los parlamentarios. De alguna forma, la percepción de los ciudadanos es que son una suerte de cofradía en que se arreglan para repartirse una cuota de poder razonable, donde primero les toca a unos y luego a otros. Por ello, hizo un llamado a efectuar un esfuerzo para romper esa lógica que los está autodestruyendo en la percepción de los ciudadanos

Propuso definir los tiempos legislativos de tal forma que su condición de incumbentes les permita que la reforma al sistema electoral no la hagan cada vez con la calculadora electoral en la mano

El avance del tiempo y la demora en el despacho de este proyecto de ley va a significar, irremediablemente, que cada vez que se acerque la elección, la calculadora va a estar más presente, y se van a ir retrasando los procesos y lo más probable es que si llegan a algún acuerdo, van a querer hacer aplicable esta reforma no en la próxima elección, sino que en la siguiente, y generarán una nueva sensación de desconfianza ciudadana

Finalmente, propuso sincerar el financiamiento de la reforma. Es muy importante que este Congreso pida el apoyo del Ejecutivo para hacer una simulación respecto de lo que en realidad significa el incremento de los parlamentarios, con términos muy objetivos, en un escenario de aprobación del proyecto de ley, independientemente de cuál sea el origen de los recursos con que se financie

Sostuvo que no parece razonable, que no exista una cifra con la cual trabajar, y que en forma previa se esté definiendo quién va a pagar la cuenta. Es preferible definir el monto del incremento en materia de gastos. La democracia tiene un costo y el país tiene que pagarlo, pero a renglón seguido se debe definir con exactitud si es posible que este Congreso, por la vía de las reasignaciones presupuestarias, pueda financiar ese incremento del gasto o, en su defecto, si puede financiar un porcentaje del incremento del gasto y la diferencia podrá compartirse en el proyecto de ley de Presupuestos 2018

El diputado señor Gutiérrez señaló que esta reforma profundiza nuestra democracia. El envío de esta iniciativa es una decisión que requiere coraje y valentía, pues si se basan en las encuestas, puede que este no sea el tema que más le guste a la ciudadanía. Sin embargo, se consideró que la iniciativa serviría para mejorar la calidad de nuestra democracia.

En segundo lugar, recordó un documento que se llama “Sufragio universal y la nueva institucionalidad”, elaborado por Jaime Guzmán , el año 1, número 1, de 1979, publicado en la revista “Realidad”. Para no tergiversar sus grandes reflexiones, pasó a leerlas: “Desde el ángulo del sufragio universal, que es el tema de estas reflexiones, el enfoque medular de la nueva institucionalidad, podría sintetizarse en los siguientes aspectos:

1.- Se escoge el sufragio universal como método ampliamente predominante, pero no excluyente para generar las autoridades políticas.” Jaime Guzmán

realiza una síntesis de cómo ve la futura institucionalidad. Primero, señala que hay que escoger el sufragio universal -una gran concesión-, método ampliamente predominante, pero no excluyente para generar las autoridades políticas.”

Luego agrega: “En última instancia, no debemos olvidar que el sufragio universal no agota la voluntad más profunda y permanente de la Nación. Salvaguardar a esta de posibles avalanchas electorales efímeras...”. O sea, hay que cuidar la democracia de simples mayorías

“2) Se sitúa el sufragio universal dentro de ciertos límites en cuanto a la esfera de las opciones legítimas

Si uno de los mayores inconvenientes del sistema reside en que permite su utilización por quienes quieren destruirlo, y abolir además la libertad como forma de vida, su mantenimiento exige regularlo en este aspecto capital

3) Se configura un marco institucional que favorece un ejercicio responsable y constructivo del sufragio universal.

Conviene insistir en que ninguna norma jurídica es capaz de asegurar que no prevalezca la demagogia. Pero lo que sí puede hacer es dificultar la acción de esta, en lugar de estimularla, como ocurría en el régimen institucional que hizo crisis en 1973. Colocar las mayores trabas a la demagogia y formar una conciencia cívica que la refuerce, es el único camino posible que favorece el progreso espiritual y material del pueblo.”.

Finalmente, concluye: “El sistema democrático basado en la generación de las autoridades por un sufragio popular realmente libre, constituye un ideal que solo funciona adecuadamente en países de alto desarrollo económico, social y cultural. Implantado en otras condiciones, su estabilidad será siempre precaria y su ejercicio puede entrañar un grave peligro para la subsistencia de la libertad y la seguridad, como asimismo para el avance hacia el progreso.”.

Sostuvo que hemos estado esclavizados a esta concepción y no se puede seguir en esa condición. Esa concepción cree que hay que desconfiar del sufragio universal que, además, es solo un derecho que se ejerce en una economía próspera y no en una supuestamente precaria como la nuestra. Esta concepción es la que ha subsistido hasta ahora y es la que está en cuestionamiento.

El proyecto acaba con un empate ficticio encargado de “proteger la democracia”. El sistema binominal se confeccionó para proteger la democracia precisamente del sufragio universal, porque éste destruyó la democracia de 1973.

La diversidad de la representatividad, que se está asegurando con este proyecto, permitirá superar estas concepciones anacrónicas, antidemocráticas, que, de una vez por todas, Chile debe abandonar.

El diputado señor Trisotti expresó que la expectativa de la población es que esta iniciativa no prosperará. Esta baja expectativa está dada en que les exigen que se preocupen de otros temas que la comunidad y los vecinos perciben como más importantes.

Sin embargo, afirmó que le preocupan las altas expectativas que la clase política se ha dado respecto de un proyecto de esta naturaleza que, en definitiva, va a resolver una serie de cuestionamientos o de mala percepción que tiene la ciudadanía hacia la clase política. Aunque estimó que muchos de esos cuestionamientos no apuntan hacia el sistema electoral, sino más bien por muchas conductas que es posible evidenciar dentro de los parlamentarios.

Por otro lado, se ha planteado la cercanía como un elemento, el que a su juicio -como diputado de una zona extrema- no deja de ser importante. Se han dado ejemplos de parlamentarios de otras épocas, que representaban grandes extensiones de terrenos. Sin embargo, parte del cambio que han percibido y vivido como sociedad va en que la población no solo quiere conversar y tener mayor contacto con los diputados. Muchas veces, en sus distritos no se logra entender gran parte de las discusiones que se dan en el centro, en Santiago o en Valparaíso, porque varios de sus vecinos están más preocupados del terremoto que de las modificaciones al sistema binominal o de la reforma tributaria.

Preguntó por la facultad que se concedió al Consejo Directivo del Servicio Electoral, sobre la asignación de los 155 escaños para diputados.

En segundo término, coincidió con varios diputados respecto de la necesidad de sincerar el costo extra que trae consigo este proyecto a través del aumento de los diputados.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, informó, previamente, que se debe reparar un error, dado que se omitió la Comuna de Alto Biobío.

Respecto de la situación de los dirigentes sindicales y gremiales, en el mensaje se señala que en forma paralela se va a presentar un proyecto de reforma constitucional que elimine esa incompatibilidad. En el mismo sentido de la norma mencionada con antelación, se presentaría uno para establecer el sistema de reemplazo en caso de fallecimiento, incapacidad o inhabilidad. Ambas son reformas constitucionales.

Con respecto a la contradicción de las primarias versus cuotas, estimó que ello debe ser analizado en el seno de la discusión legislativa.

En materia de pueblos originarios, sostuvo que la idea es discutirlo en el contexto de la agenda propia de éstos. Dentro del programa de gobierno está el compromiso de la creación del ministerio.

Entando al análisis del proyecto en discusión, señaló que la reforma sustituye el sistema electoral binominal por uno proporcional inclusivo, con el fin de fortalecer la representatividad del Congreso Nacional.

Añadió que los grandes principios que inspiran esta reforma suponen dar más poder a la ciudadanía, mayor representatividad al Congreso Nacional y reducir la desigualdad del voto.

El diagnóstico apunta a que los partidos nominan a los ganadores y la gente, en definitiva, no elige. En el sistema binominal los ciudadanos tienen una limitada oferta de candidatos sobre los cuales elegir; se fuerza a que los partidos tengan que negociar entre ellos quiénes van a ser los candidatos y éstos se restringen a los cupos que tiene el sistema, dos en cada caso, lo que, obviamente, limita la diversidad de oferta a la ciudadanía y traslada la decisión a los negociadores, no al elector. Destacó que existe poca incertidumbre y la sensación que el voto nada cambia.

El sistema binominal, con su limitada oferta, vuelve poco atractivo el ir a votar, la ciudadanía siente que la decisión ya está adoptada y que este acto es meramente formal; ya que las definiciones las efectuaron los partidos y no el ciudadano, porque no tiene una gama dentro de la cual optar en la elección. El ciudadano siente que sólo confirma una decisión ajena. En un contexto de voto voluntario ello pone en riesgo el sistema democrático. Concluyó que producto de lo expuesto hay una baja participación y, por lo tanto, un debilitamiento de la democracia.

En segundo lugar, indicó que el sistema binominal margina a fuerzas políticas con importante apoyo ciudadano, pero que no están dentro de las dos grandes coaliciones. Al dejar fuera del Parlamento a sectores políticos relevantes de la ciudadanía, éste pierde relevancia, porque deja de ser el punto de encuentro donde las distintas visiones de la sociedad puedan debatir y acordar las cuestiones esenciales de la vida en común. La exclusión parlamentaria empuja a las fuerzas políticas no representadas a buscar expresión extra institucional y a radicalizar su posición contra el sistema que los excluye. En conclusión, hay una pérdida de credibilidad en el Parlamento, como lugar de encuentro de las fuerzas políticas, con un debilitamiento consiguiente a la democracia.

Añadió que la propuesta de un nuevo sistema electoral proporcional, inclusivo y representativo, procura dar más poder a la ciudadanía, alcanzar mayor representatividad y reducir la desigualdad del voto.

Respecto de la reducción de la desigualdad del voto, la diferencia de valor del voto en nuestro país, según el lugar donde se emite, es demasiado alta y obstaculiza la igualdad del voto. No se puede emprender una reforma sin reducir significativamente esta desigualdad, que es inaceptable en cualquier democracia.

Chile en 1973, tenía una Cámara de Diputados de 150 diputados y un Senado de 50 miembros, con mucho menos de la mitad de electores de hoy. Con esos números, el rediseño de distritos y circunscripciones permitiría reducir de manera muy significativa la desigualdad actual del valor del voto entre ciudadanos de distintos territorios.

La vía para posibilitar el ingreso al Congreso Nacional de las corrientes más significativas de la sociedad es reducir el número de distritos y circunscripciones para que se elijan más escaños en cada uno de ellos. Solo así podrán ingresar al Parlamento sectores de menor votación pero suficientemente significativos en la sociedad que, sin duda, merecen estar representados, pues la democracia se completará y fortalecerá con su participación en el Parlamento. Tanto más escaños del total de diputados se elijan en distritos grandes, menor será la barrera de ingreso al Parlamento y, por lo tanto, mayor será la inclusión.

En relación al aumento del número de diputados y senadores explicó que ello es imprescindible para disminuir la diferencia de valor del voto. Para ello existen dos alternativas: o se aumenta el número de parlamentarios, y para ello se debe reducir el número de distritos, o se disminuye el número de parlamentarios en circunscripciones o distritos que sean más pequeños.

Destacó que para permitir la diversidad, existe una sola alternativa: aumentar el número de parlamentarios. Todo el esfuerzo de igualación del voto hace imprescindible incrementar el número de diputados y senadores, para no verse obligados a disminuir la representación de algunos territorios escasamente poblados.

El proyecto también pretende aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos. Se busca que los electores recuperen totalmente la decisión respecto de quiénes son sus representantes. Para ello es fundamental que todas las formaciones políticas puedan concursar con sus propios candidatos y que las grandes competencias internas en y entre partidos se resuelvan por la ciudadanía.

Indicó que ello se logra definiendo distritos que elijan un mayor número de diputados, pero también permitiendo que las listas electorales presenten más candidatos que los que se eligen en cada territorio electoral. De esta forma, serán los ciudadanos quienes resolverán, sobre la base de una gama de candidatos mucho más diversa. La reforma asegura que candidatos con buena votación no queden fuera del Parlamento. En las últimas elecciones candidatos con muy buena votación que, a veces, son la segunda mayoría individual, no resultan electos, como ocurrió con Marisela Santibáñez.

Añadió que el proyecto facilita la expresión de las mayorías y la representación de las minorías. Con la conformación de un sistema de distritos y circunscripciones que mayoritariamente eligen un mínimo de tres parlamentarios y en su mayoría de cinco a ocho, en el caso de los diputados, se propende a que la ventaja de votos de un sector sobre otro se traduzca en ventaja equivalente en la representación parlamentaria. Al mismo tiempo, se asegura que en todos los territorios la minoría tenga también expresión parlamentaria.

Sostuvo que con la reforma crecerá la competencia, la diversidad y la incertidumbre respecto de quiénes serán electos. La norma general será que siempre algún sector político resultará ganador de la elección como resultado de la competencia, lo que motivará una mayor participación electoral, que hoy es voluntaria.

Informó que en materia de diputados, se establecen 28 distritos, se eligen entre tres y ocho diputados en cada uno de ellos, con un promedio de 5,53 diputados por distrito. Esta nueva configuración tiene las siguientes limitaciones: la extensión territorial de los distritos no excederá los márgenes de una región; los nuevos distritos se constituyen a partir de la agregación de distritos hoy existentes, se suman distritos; la asignación del número de escaños no reducirá, en términos absolutos, la representación que tienen hoy los distintos territorios.

De los 35 escaños adicionados a la actual integración de la Cámara de Diputados, un total de 23 se asignaron para corregir la subrepresentación de los grandes centros urbanos del país: 15 a la Región Metropolitana, 4 a la Región de Valparaíso y 4 a la Región del Biobío. Los otros 12 escaños nuevos se asignan, a razón de uno por región, a todas y cada una de las demás regiones del país.

En el caso del Senado, se elegirán 50 senadores y cada región pasará a ser una sola circunscripción, con lo que se corregirán los defectos que tenían las regiones de Los Ríos y de Los Lagos, donde había mezclas de comunas respecto de las regiones. Además, se crea la circunscripción de Arica y Parinacota. Cinco de las regiones mantienen el número actual de 2 senadores a elegir, mientras las otras 10 lo aumentan, reduciendo así la desmesurada desigualdad en el valor del voto según el lugar donde se emita, permitiendo que se exprese la mayoría y que siempre esté representada también la minoría.

Manifestó que uno de los principios que rige la distribución de los asientos en el Senado de la República es la igualdad política entre las 15 regiones del país. Por ello, tres quintos de los escaños se distribuyen de manera igualitaria, de manera que cada región, con independencia de su número de electores, tendrá un mínimo de dos representantes en el Senado y de ahí hacia arriba, según el aumento que propone el proyecto.

Los restantes 20 senadores se elegirán en las regiones con mayor número de electores, evitando que una asignación muy alta a la Región Metropolitana pueda poner en cuestión el carácter esencialmente territorial de la representación en el Senado.

Es así como se mantiene la elección de dos senadores en las regiones menos pobladas, Tarapacá, Antofagasta, Atacama, Los Ríos, Aysén y Magallanes, agregándose la nueva circunscripción Arica-Parinacota, también con 2 senadores. Las regiones de O’Higgins, Coquimbo y Los Lagos pasan de 2 senadores a elegir 3, cada una. Las regiones de Valparaíso, Maule, Biobío y Araucanía, que hoy eligen 4, pasarán a elegir 5 senadores, cada una. Por último, la Región Metropolitana elegirá 7 senadores. De los 12 nuevos escaños senatoriales, 3 irían a la Región Metropolitana, 2 a la nueva región de Arica y Parinacota, se agregaría uno adicional en cada una de las otras 7 regiones más pobladas. Con esto, la gran mayoría de los senadores, el 76 por ciento, serán electos en circunscripciones de 3, 5 o 7 escaños.

A continuación expuso el siguiente cuadro sobre el valor del voto en el Senado:

En esta lámina se puede apreciar lo que ocurre por región en cuanto a los electores, el número de escaños actuales, la proporción de electores versus escaños y lo que ocurre con el proyecto de ley. Tomando el ejemplo de las Regiones Metropolitana y de Aysén, que son casos extremos, en la actualidad la primera tiene 5.188.038 electores, elige a 4 senadores de dos circunscripciones y la relación electores-escaños es de 1.297.010 electores por legislador. La propuesta es pasar a 7 senadores, con lo que la relación electores-escaños sería de 741.148. En el caso de la Región de Aysén, hoy son 91.321 electores, 2 senadores y la relación electores-escaños es de 45.661 y el proyecto propone mantener tal relación. Ahora, al comparar la Región de Aysén con la Metropolitana, esta última tendría que contar con 113 senadores para alcanzar exactamente la misma proporción. O sea, no hay un efecto de concentrar y dar más representantes a la Región Metropolitana. Explicó que el proyecto privilegia la unidad territorial y de representación, estableciendo una unidad básica, que es de dos senadores por circunscripción, pudiendo llegar hasta 7, que es la de mayor representación.

Por otra parte, señaló que se propone que los partidos o pactos puedan presentar hasta un número de candidatos que doble el número de cargos a elegir. Ello permitirá aumentar las opciones a disposición de los electores y facilitará la renovación de los representantes, lo que se conoce como “N x 2”.

Asimismo, con el objeto de avanzar hacia un Congreso que represente adecuadamente a hombres y a mujeres, indicó que el proyecto propone incorporar una cuota de género, requiriendo a cada partido político, integre o no un pacto, que su nómina total de postulantes a la Cámara de Diputados y al Senado cumpla el requisito de que ningún género esté representado por sobre los tres quintos ni por debajo de los dos quintos del total. Esta norma se propone como transitoria, aplicable a las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el entendido de que su propósito es romper una situación inicial en la que operan fuertes e invisibles barreras de entrada; vale decir, lo que se pretende es instalar un cambio cultural que permita dar visibilidad y establecer la práctica de elegir mujeres en el Parlamento.

Complementariamente, afirmó que el proyecto propone establecer un mayor aporte fiscal para los partidos en función del número de mujeres que elijan, tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado, con el fin de alentarlos a presentar candidatas en territorios donde tengan reales posibilidades de éxito. Es decir, no solo cumplir con la formalidad, sino que llevar candidatas donde realmente puedan ser elegidas. La norma descrita también se aplicaría transitoriamente a las próximas 4 elecciones parlamentarias.

Por último, hizo presente que se establece un mecanismo de actualización de la distribución de escaños, que opera cada 12 años, en función de las variaciones en el número de electores de cada territorio.

Además, el mensaje compromete la presentación de otras reformas, como establecer el mecanismo de reemplazo en caso de vacancia por fallecimiento, incapacidad o incompatibilidad sobreviniente, las que serán provistas por el partido al que pertenecía el parlamentario con una persona seleccionada por medio de una elección abierta, es decir, permitir la participación de todos los militantes de esa colectividad y a los ciudadanos independientes de la circunscripción o distrito, regulada y administrada por el Servicio Electoral. Asimismo, se asume el compromiso de terminar con la inhabilidad de los dirigentes sindicales y gremiales para que puedan ser candidatos al Parlamento.

El diputado señor Browne expresó que hoy se contraponen dos intereses o principios importantes para llevar adelante la reforma: la representación de las regiones, no sub representarlas respecto de las grandes urbes, principalmente, la Región Metropolitana y, por otro lado, la proporcionalidad del voto.

Sostuvo que ahora existe la oportunidad de otorgar un sentido diferente a ambas Cámaras. Perfectamente se podría avanzar a 15 circunscripciones con tres senadores por región, quedando con 45 senadores. Con ello, cada región tendría exactamente la misma representación en el Senado y así se avanzaría hacia una proporcionalidad del voto mucho más estricta en la Cámara de Diputados, lo que permitiría cumplir con ambos principios: que todas las regiones tengan representación y que se cumpla con la proporcionalidad. De esa forma las Cámaras tendrían orígenes diferentes en su concepción de cómo se establecen.

Preguntó qué piensa el Ejecutivo respecto de la posibilidad de implementar un sistema similar al de Nueva Zelanda, donde existe un padrón paralelo para los pueblos originarios y las personas que pertenecen a tales pueblos determinan si pertenecen al padrón nacional o al de pueblos originarios, y dependiendo qué proporción es uno del otro será la cantidad de diputados que eligen los pueblos originarios por ese padrón.

Asimismo, preguntó cómo se efectuaría el reemplazo de los independientes. En el caso de los partidos está claro, porque se reemplaza a través de una elección complementaria, única y exclusivamente determinada por candidatos del partido que ha perdido el cupo.

Por otra parte, aseveró que se contrapone a una mejor competitividad el hecho de poner el doble de candidatos por lista. Evidentemente, ello complica a quienes participarían de manera independiente, fuera de pacto, porque si los dos grandes bloques llevan 16 candidatos cada uno, el candidato independiente sería invisible ante tanta oferta.

Por último, preguntó qué criterios se utilizarán para el redistritaje que llevará a cabo el Servicio Electoral cada doce años.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Rincón, doña Ximena, respecto de la vacancia en el cargo, sostuvo que antes de la Constitución de 1980, la norma señalaba que cuando quedaba la mitad o más del período se realizaba una elección complementaria, la que no tenía lugar en caso contrario. Añadió que esta materia es una de aquellas que debe debatir el Parlamento, tal como ocurre con los independientes en el caso de vacancia.

El Ministro del Interior, señor Rodrigo Peñailillo, destacó que uno de los temas que pretende resolver el proyecto es aquel que dice relación con la desigualdad del voto.

En segundo lugar, indicó que la importancia de las regiones, en especial, de las zonas extremas, ha sido resaltada en el proyecto.

Sostuvo que si se aplicara el criterio sugerido por el diputado Browne, esto es, fijar 15 circunscripciones que elijan tres senadores, cada una de ellas, significaría que la Región del Biobío, la de Valparaíso, la del Maule y la de la Araucanía perderían un senador.

A la hora de la distribución de los nuevos senadores, se debe respetar aquellas regiones que tienen mayor electorado. Por ello, en ocho regiones se registra un incremento parejo de un escaño y en el caso de la Región Metropolitana, de tres.

Respecto de los pueblos indígenas señaló que ese tema implica un debate de fondo que no se ha producido en el país. Toda la experiencia internacional indica que los países se guían por un padrón paralelo y, por tanto, por una cantidad de escaños fijos, acordes a ese padrón.

Añadió que es necesario construir un mecanismo y consultar con las comunidades y pueblos indígenas en todo el país porque, además, depende de la etnia el nivel de representación. En ese sentido, indicó que hay distintos modelos que se podrían usar, ya sea uno global, que represente al conjunto, o asignar el cupo específico, dependiendo de la importancia de esa etnia en el país o en la región.

El diputado señor Coloma hizo hincapié en el tema de los independientes. Efectivamente, en la fórmula del “N x 2”, tendrán la obligación de sumarse a un pacto político, porque de no hacerlo quedarán excluidos. En distritos donde compiten con 10, 12 o 14 candidatos de una misma coalición o de algún pensamiento similar, en la práctica, significa que no tendrán una real opción de ser electos, lo que terminaría en un instante con los candidatos independientes y los obligaría a constituirse en partidos políticos.

Preguntó si existe algún estudio que permita establecer, a nivel mundial o regional, cuál es la proporción o el número de electores que en otros países eligen a un diputado. Consideró deseable conocer la experiencia comparada respecto del número de parlamentarios que se eligen en relación a la población.

Asimismo, preguntó la opinión del Ejecutivo respecto de lo que ocurrirá con la ley de primarias. Si cada coalición política tendrá 10, 12 o 16 candidatos, en la práctica, las primarias pasarán a ser letra muerta.

Por otra parte, en relación a la actualización de los distritos, señaló que la forma en que se pretende efectuarla, a través de un decreto del Servicio Electoral, que modifica de pleno derecho la ley, parece inconstitucional, porque no corresponde que a través de un decreto se modifique una disposición legal. Por ello, estimó necesario estudiar una fórmula respecto de cómo asegurar que sea el Parlamento el que produzca esta modificación.

Añadió que cuando se produzca esta nueva asignación de escaños, necesariamente, los centros urbanos quedarán sobrerrepresentados respecto de lo que pretende inicialmente en este proyecto de ley. Estimó necesario buscar algún mecanismo para que se resguarde un número mínimo por regiones, porque en la práctica, la tendencia será que en los distritos de la Región Metropolitana suba el número de parlamentarios a elegir.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, respecto del efecto del nuevo sistema electoral en las primarias, señaló que éstas son voluntarias.

En segundo lugar, recordó que se establecieron justamente por la falta de competencia del sistema electoral de nuestro país. Parecían un buen mecanismo para dar expresión a las distintas sensibilidades, posiciones y liderazgos que existían, pues el sistema electoral encasilla con un número de candidatos demasiado reducido para que la ciudadanía pudiera optar y las primarias resolvían aquello. Estimó que siguen teniendo vigencia en el caso de las presidenciales, porque el número de candidatos siempre va a ser menor, al igual que en el caso de los senadores donde solo hay dos escaños, y también en el de los alcaldes.

Finalmente, respecto de las facultades que se confieren al Servicio Electoral, señaló que la Constitución de 1925 establecía que cada diez años el Congreso debía efectuar la adecuación y corrección del sistema, pero ello nunca se hizo, porque los propios incumbentes eran quienes debían hacerlo. Por ello el proyecto mandata al Servicio Electoral para hacer la adecuación con criterios específicos. Recordó que en la última elección de los candidatos a consejeros regionales el Servicio Electoral adecuó el número de éstos por circunscripción provincial por el número de electores que había, porque tuvo que retrotraerla al censo anterior, ya que el último no era oficial, pues no tenía validez. La experiencia empírica señala que cuando el Congreso tuvo la facultad nunca la ejerció, porque significaba afectar sus propios derechos y en la realidad actual, en el caso de los consejeros regionales, fue el Servicio Electoral el que efectuó las correcciones de acuerdo con el número oficial de habitantes que tenía el país.

La diputada señora Turres, doña Marisol, manifestó que establecer distritos más grandes significa que se debe contar con muchos más recursos para financiar una campaña.

Preguntó si se modificarán las normas referidas al gasto electoral. Si el objetivo es permitir que más personas puedan acceder a cargos de elección popular, el tema de los recursos puede terminar constituyendo un obstáculo.

Tener distritos tan grandes, de alguna manera va a limitar la participación, por muchas ganas que tenga una persona de ser candidato.

Preguntó si existirá un nuevo límite al gasto electoral.

Consideró positivo que el Servicio Electoral proponga los cambios a los distritos, pero sería interesante que esa propuesta se remita, se analice, se modifique y se ratifique por el Congreso, de acuerdo a los datos que entregue dicho servicio.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, respecto de la participación de la mujer en política y el gasto y financiamiento electoral, afirmó que tiene la convicción que se requiere enfrentar este tema con normas que permitan más fiscalización y transparencia del gasto electoral.

En segundo lugar, señaló que probablemente pueden existir territorios más acotados desde el punto de vista de la extensión geográfica, pero desde la perspectiva del gasto de la publicidad pueden resultar más onerosos. A vía de ejemplo, una gigantografía monumental en Maipú o en Puente Alto, cuesta varios millones de pesos, pudiendo superar los 10 millones de pesos. Sin embargo, en la comuna de Linares la misma gigantografía puede llegar a costar dos millones y medio de pesos. Añadió que los avisos en las radios que se escuchan en la capital, cuestan bastante más que en radios de comunas más pequeñas. En otras palabras, es efectivo que la extensión probablemente hace incurrir en mayores gastos desde el punto de vista del traslado, pero, por otro lado, en las zonas urbanas, que son más concentradas, el costo de la publicidad es mayor.

El diputado señor Chahin preguntó cuál es el argumento o antecedente que existe para que el proyecto autorice la posibilidad de subpactos entre partidos. Hasta 1973, en un sistema proporcional, ello no estaba permitido.

En relación con la distribución de parlamentarios y las facultades que se le otorgan al Tribunal Calificador de Elecciones, expresó que no es comparable lo que ocurre en los consejos regionales con el Congreso. Es un cambio demasiado fuerte el regular los distritos por una norma que requiere de los tres quintos de los diputados y senadores en ejercicio a delegar tal facultad al Consejo Directivo del Servicio Electoral. Asimismo, desestimó el argumento que apunta a descalificar al mundo parlamentario para efectuar tales modificaciones por su calidad de incumbente, pues la propia modificación al sistema binominal demuestra lo contrario.

En relación a la modificación que se propone efectuar a la ley sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, que dispone que solo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hubieren sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a que ellas pertenecieren, tendrán derecho, por cada una de ellas, a un monto adicional para efectos de reembolso de hasta 500 Unidades de Fomento, expresó que no resulta claro cómo operará, pues la norma consagra que el reembolso será hasta ese monto. Preguntó quién define cuánto se reembolsará, dado que de la redacción se desprende que tal devolución puede ir desde 1 hasta 500 Unidades de Fomento.

Manifestó que ya que se discutirá la ley de financiamiento debiera estudiarse además el establecimiento de otros incentivos a los jóvenes, que no tienen patrimonio como para endeudarse.

Por último, respecto de los pueblos originarios, informó que existen dos proyectos de reforma constitucional que apuntan en la línea de lo planteado por el ministro Rodrigo Peñailillo y el diputado Pedro Browne, a saber, contar con un padrón especial, paralelo, y escaños garantizados. Además, se encuentra ingresada la iniciativa presentada por el ex diputado Huenchumilla, que proponía establecer diez diputados y cuatro senadores. Posteriormente, junto al diputado Tuma, el año 2012, presentaron otra reforma que establecía doce diputados y cinco senadores.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, señaló que, respecto de los subpactos, el Ejecutivo desea escuchar y recoger las opiniones de los parlamentarios para decidir el camino a seguir en esa materia.

Asimismo, en relación con las facultades que se otorgan al Servicio Electoral, aclaró que no ha pretendido instalar una sospecha sobre los legisladores. Solo ha proporcionado un dato objetivo de la norma que existía antes de la Constitución de 1925, norma que no se aplicó.

Aclaró que el incentivo no es de hasta 500 Unidades de Fomento. En este sentido, el mensaje está mal redactado, por lo que el diputado Fuad Chahin tiene razón en su comentario.

El diputado señor Squella consideró positivo el mecanismo de asignación automática de distritos, facultad que ejercerá el Servicio Electoral. Asimismo, valoró que a futuro exista claridad respecto de cómo se van a distribuir los escaños, en función de las variaciones de la población. Con todo, estimó atendible la aprensión del diputado Coloma en torno a la atribución que se le otorga al Servicio Electoral y a la naturaleza de la norma que lo pone en ejecución.

No obstante, manifestó que no se entiende por qué razón no se aplicó ese criterio en la creación de los distritos. Recordó que respecto de la distribución de los escaños existen ciertas incongruencias. A vía de ejemplo se comparó la situación de Copiapó versus la de Iquique, que se igualaría en 12 años más.

Añadió que dadas las condiciones de nuestro país, es imposible llegar a una igualdad total. Además, compartió la idea de buscar una diferenciación entre el Senado y la Cámara, en el sentido de atender al territorio en la Cámara Alta y a la población en la Cámara de Diputados.

En segundo lugar, valoró que exista una política de discriminación positiva en materia de cuotas, sea transitoria, aunque mantiene su convicción que ello resulta innecesario.

Preguntó cómo se resolverá la solicitud de otros sectores para tener sus respectivas cuotas.

Respecto de la vacancia, sugirió se revise el trabajo que se hizo en esta Comisión, que no fue respaldado por la Sala.

Por último, sostuvo que con este sistema propuesto, por mucho que bajen los umbrales, deberá competirse con 100 candidatos, por lo que igualmente le resultará complejo a los independientes alcanzarlos. Por ello, hizo presente que el sistema no solo perjudica a los independientes fuera de pacto, sino además a los grupos chicos o a los pactos menores que no están en las grandes listas.

El diputado señor Auth informó que hizo el ejercicio de aplicación del mecanismo a la situación de hoy y, concluyó que genera una situación más desigual de lo que propone el proyecto en materia de igualdad de voto. Por lo tanto, sugirió revisar esta materia.

Esta desigualdad se genera porque el proyecto propone que todo distrito parta con tres diputados. Por ende, 84, o sea, más de la mitad de los diputados, se reparten simplemente por territorio, y el resto se asigna en función de la población. Entonces, la Región Metropolitana, que creció del 26,6 al 30,3 por ciento, retrocede en representación. Sugirió que la situación inicial se acerque más bien a dos de base, o sea, a 56, y el resto asignarlo de manera proporcional. De hecho, indicó que compartía la misma línea de los diputados Squella y Browne, en el sentido de que la Cámara sea cada vez más representativa de las personas, y el Senado, del territorio.

En segundo lugar, consultó cuál es la disposición del Ejecutivo respecto de la objeción a los independientes. Es cierto que va a bajar la barrera de ingreso, lo que vale para las listas chicas y los independientes. Sin embargo, un independiente va a competir con un paquete de candidatos. Por lo tanto, se podría pensar en la posibilidad de que dos o más independientes pudieran concurrir al Servicio Electoral a declarar que comparten principios y programas, tal como lo hizo el año 2005 el diputado Walker con el Partido Comunista. Hay quienes han planteado que ello podría ser automático, alternativa de la que discrepa completamente, porque un candidato neonazi y uno de ultraizquierda podrían convivir obligadamente, lo que significaría que habría que pedirles una declaración expresa de su voluntad de pertenencia a una instancia común.

En tercer lugar, respecto de las primarias parlamentarias, recordó que las únicas que hubo fueron las que efectuó Renovación Nacional.

Por otra parte, sugirió rebajar el límite de gasto electoral por lo menos a la mitad. En primer lugar, porque el financiamiento va a seguir igual, es decir, seguirá siendo por voto, pero repartido en más personas. Sin embargo, el límite de gasto se aplica a cada candidato. Por lo tanto, si hay 530 mil electores y alrededor de 200 y tantos millones de límite de gasto, cifra que desde ya la considera sideral, se pasará a un millón de electores y a más de 400 millones de límite de gasto.

Por tanto, el problema no es la mayor cantidad de candidatos, sino que quien pueda gastar 400 millones de pesos va a tener una ventaja gigantesca sobre el resto. Por lo tanto, se manifestó partidario de reducir a la mitad, de 0,03 unidades de fomento como está planteado el límite de gasto, a 0,015 UF. Destacó que se puede rebajar el límite de manera considerable, dado que existió un alza importante por efecto de la inscripción automática.

Respecto a los subpactos, sostuvo que de acuerdo a la Constitución de 1925 éstos no existían, pero ello era así porque tampoco existían los pactos. Es más, en la Constitución de 1925 estaban prohibidos los pactos electorales, por lo que en las elecciones de 1957, 1965 y 1969, cada partido político concurría por separado. Solo un resquicio legal de 1973 permitió que la Derecha junto con la Democracia Cristiana formaran el CODE, y los partidos de la Unidad Popular formaran el Partido Federado de la Unidad Popular.

El Ministro del Interior, señor Rodrigo Peñailillo, respecto de los independientes, indicó que en el proyecto se les considera como parte de un pacto y los que no están en subpactos; van a ser considerados como partido dentro del pacto a la hora del coeficiente. Con ello, obviamente surge un elemento relevante y a favor para quienes son independientes y están en una lista o un pacto.

Por otro lado, expresó que el Gobierno está disponible y abierto a considerar otra opción. En esa línea, se deben explorar fórmulas que permita pactar a independientes, siempre que compartan proyectos políticos de una misma orientación.

Sobre el gasto electoral, si bien no es materia de este proyecto, sostuvo que aún hay mucho espacio para trabajar.

El diputado señor Soto sostuvo que el sistema binominal claramente ha demostrado su incapacidad para solventar y acoger todos los planteamientos que necesita nuestro país.

Además, ha sido fuente de muchos vicios, tanto hacia afuera como hacia adentro de las coaliciones. En ese sentido, reconoció que como Concertación abusaron de ese sistema. Los casos más emblemáticos ocurrieron cuando se llevó un solo candidato por coalición.

Expresó que apoya el fin al binominal por dos razones. En primer lugar, porque el proyecto constituye una propuesta programática de la Presidenta, en el sentido de mejorar la política y la democracia. En segundo lugar, porque el distrito 30 que representa, se transformó en un distrito simbólico, en orden a que el sistema binominal no representaba los intereses de la gente. En ese distrito, la candidata del PRO, señora Marisela Santibáñez, ocupó el primer lugar, con una votación muy importante: 26,7 por ciento, lo que significa que 39.000 electores votaron por ella y ninguno de ellos entendía por qué, si había obtenido el primer lugar, no iba a ocupar un escaño en el Congreso. Debido a la votación que ella obtuvo, se comprometió con los electores de Marisela Santibáñez y con los suyos a votar el fin del sistema binominal, para que nunca más ocurra una situación como la descrita.

En segundo lugar, añadió que uno de los grandes problemas que tiene nuestra democracia dice relación con la desafección de la gente. No quieren participar en nuestras elecciones. En las últimas elecciones municipales la abstención fue de un 60 por ciento y en las parlamentarias, de un 50 por ciento.

Sugirió estudiar la posibilidad de estimular la participación de los electores. Los electores necesitan facilidades para ir a votar, porque al interior de las ciudades, y también de los distritos, se producen importantes dificultades de desplazamiento para llegar al lugar de votación.

Al respecto se han formulado varias propuestas. Una de ellas es facilitar los desplazamientos a través del transporte público. También se ha sugerido establecer algún puntaje adicional en la postulación a fondos públicos.

El Ministro del Interior, señor Rodrigo Peñailillo, sostuvo que tanto en primarias presidenciales como en la elección presidencial en sí, Chile tiene que avanzar mucho más en otorgar facilidades para que los electores puedan votar. Al rediseñar el sistema de votaciones se enteraron de personas que tuvieron que cruzar toda una comuna para llegar a su lugar de votación.

Informó que ha tenido la experiencia de ser observador electoral, lo que le ha permitido comprobar que en muchos países la votación se hace en el barrio, en la cual nadie necesita transporte público, o lo utilizan solo en situaciones muy especiales. Aun cuando es difícil llegar a ese nivel de acercamiento de los recintos electorales, es factible estudiar la posibilidad de contar con transporte público gratuito.

Añadió que se podría contar con mesas en los terminales de buses, en los aeropuertos y en otros lugares de fácil acceso para que las personas voten aun no estando en el territorio.

El diputado señor Auth sostuvo que el problema planteado se soluciona con el voto electrónico.

El diputado señor Monckeberg, don Cristián, respecto de las atribuciones que se conceden al Servicio Electoral en materia de re distribución de escaños, expresó que restar facultades al Congreso, quizás no sea lo más conveniente. Manifestó que se podría establecer que el Servicio Electoral efectúe una proposición, la que debiera ser resuelta por la Cámara en un plazo determinado.

En relación a los reemplazos, el Ejecutivo procura privilegiar al partido que eligió al parlamentario. El proyecto dispone lo siguiente: “Establecer que las vacancias que se produzcan, sea por fallecimiento, incapacidad o incompatibilidad sobreviniente, sean provistas por el partido al que pertenecía el parlamentario, con una persona seleccionada por medio de una elección abierta a todos los militantes de esa colectividad y a los ciudadanos independientes de la circunscripción o distrito,...”.

Preguntó por qué razón no se utiliza la misma fórmula de reemplazo de los concejales, que ya es suficientemente democrática. La elección complementaria debiera operar cuando no resulte posible recurrir al candidato más votado de la lista, de los que no resultaron electos, o bien, cuando el diputado a reemplazar sea independiente.

Por otra parte, afirmó que compartía la idea de fijar un límite a la reelección, aun cuando esta propuesta se justificaba mucho más en el marco del sistema binominal, porque la competencia era mucho menor, y por tanto, el incentivo a ser reelegido por 20 o 30 años era más factible.

Respecto de la posibilidad de establecer el voto electrónico, señaló que ello resulta un poco complejo. Si hoy se cuestiona el programa referido a la visa con Estados Unidos, con mayor razón se cuestionará que toda la información esté digitalizada y se sepa cómo vota cada uno.

Compartió la idea de buscar fórmulas que permitan la votación en el barrio.

El diputado señor Jackson valoró el esfuerzo de intentar dejar atrás el sistema binominal.

Además, valoró la inclusión del mecanismo de cuotas, como acción afirmativa, para que un género no esté sobrerrepresentado y exista mayor diversidad, así como también compartió la idea que este mecanismo sea transitorio, porque pretende alcanzar un cambio cultural.

Con todo, advirtió que no desearía que un proyecto de estas características se perdiera por detalles que se pueden mejorar para que la iniciativa sea una realidad lo antes posible, en las próximas elecciones.

En este sentido, expresó que es efectivo que con la proporcionalidad se bajan las barreras, que en términos porcentuales, necesitaría un independiente para ser electo. Sin embargo, existen más barreras que solo la referida a la proporción de votos. A vía de ejemplo, indicó que al ser más grandes los distritos, las campañas serán más costosas. Asimismo, deberán reunirse más firmas.

Otra barrera se vincula a la fórmula del Nx2, esto es, se duplica la cantidad de personas con las que se tiene que competir. A vía de ejemplo, en un distrito donde se eligen ocho escaños, el independiente competiría contra 16 candidatos por lista. Entonces, si son tres listas, se competiría contra 48 personas. Por ello, se podría llegar al absurdo que un diputado independiente obtenga la mayoría de los votos, y quede fuera de los ocho diputados electos.

Por otra parte, puntualizó que resulta importante establecer por ley un mecanismo para reactualizar en doce años más los distritos.

Asimismo, estimó necesario establecer una fórmula para el reemplazo de los parlamentarios.

Respecto de los pactos entre independientes, manifestó que debieran permitirse, siempre y cuando muestren voluntad conjunta a un proyecto, y su carácter podría ser transitorio, si es que se modifica la ley de partidos políticos, de modo de bajar las barreras de entrada a nuevos actores emergentes. Recalcó que sería positivo que al menos se plasmara la idea que dos o más candidatos independientes tengan la posibilidad de hacer un pacto para hacer frente a la opción que tienen los partidos de tener tantos candidatos.

Respecto del gasto electoral señaló que una de las externalidades negativas que tiene este proyecto es que pone a competir más candidatos en distritos más grandes; por lo tanto, inevitablemente se aumenta el gasto electoral.

Sugirió definir con propiedad en qué consiste la propaganda electoral. En la práctica seis meses o un año antes de la elección, informalmente, y sin que se llame “propaganda electoral”, lo que hacen algunos candidatos es poner letreros donde no aparece la frase “vote por”. Indicó que se debe hacer un esfuerzo importante en limitarla, asegurando que exista información equitativa sobre los proyectos de los candidatos hacia los electores.

Respecto del gasto que implicaría este proyecto, recordó que existe una iniciativa, para establecer por ley, tal como ocurre en todos los países del mundo, el sueldo o dieta de los parlamentarios. De lo contrario, si se amarra a la Constitución la dieta de los parlamentarios, siempre existirá una excusa para no reducirla.

Finalmente, respecto al voto electrónico expresó que hoy no existen excusas tecnológicas para no pensar en que éste puede ser viable. Los mecanismos de encriptación pueden asegurar que no haya ningún burócrata que vea cómo se votó.

El diputado señor Trisotti señaló que una norma del proyecto establece que al inscribir las candidaturas de cada partido, ningún género podrá superar el 60 por ciento del total de candidaturas presentadas. La disposición siguiente establece que cada uno de los partidos políticos o los pactos electorales podrá incluir para cada distrito o circunscripción hasta el doble de candidatos. Hoy haciendo una simple operación matemática, en las regiones de Arica y Parinacota, de Tarapacá, de Coihaique y Punta Arenas se eligen tres escaños en cada uno de esos distritos, y existen tres regiones donde la circunscripción también es de tres senadores, las regiones de Coquimbo, del Libertador Bernardo O'Higgins y de Los Lagos. Por tanto, existe una imposibilidad matemática de que los partidos cumplan la norma. Puede llevar dos hombres y una mujer, o viceversa, y en ninguna de las dos hipótesis se cumple con lo establecido en la disposición, toda vez que en ambos casos no se cumpliría con el límite del 60 por ciento.

Hizo presente que al consagrar el citado límite no se establece en forma expresa que se está aludiendo a porcentajes nacionales. Estimó necesario precisar esa disposición.

El diputado señor Andrade aclaró que tiene el mayor interés en que participen los independientes y que se les proporcionen todas las condiciones para que lo hagan en forma adecuada. Sin embargo, no se puede llegar al extremo de perjudicar a los partidos políticos para ello.

Existe el riesgo de proteger de tal forma el interés de los independientes sin considerar que la institución más relevante, desde el punto de vista de la participación democrática, son los partidos, los cuales van a quedar en una situación de desmedro.

Destacó que una de las razones por las cuales se ha pensado en que se presenten más candidatos dice relación con posibilitar la mayor participación de interesados y, al mismo tiempo, que la ciudadanía tenga mayores alternativas para optar. Sin embargo, para resolver el problema de los independientes se propone que haya menos candidatos.

Invitó a los independientes a que militen en un partido o que formen uno.

Añadió que éste podría ser un buen momento para encontrar alguna solución al problema de los aportes reservados a las campañas, que es donde con mayor nitidez se manifiesta el desequilibrio al que algunos han aludido.

Por otra parte, solicitó se estudie la posibilidad que los trabajadores del comercio tengan derecho a feriado el día de las elecciones. Los trabajadores que están obligados a trabajar ese día tienen solo tienen dos horas para ir a votar. Recordó que tal día cierran los malls, pero no el resto del comercio.

El diputado señor Gutiérrez respecto de la representación política de los pueblos originarios, hizo un llamado a discutir el tema en serio. La cuota que se fija en beneficio de la mujer, como una discriminación positiva y temporal no guarda relación con el tema de la representación política de los pueblos originarios. Según el Convenio 169, son los propios pueblos originarios los que deberían determinar su representación política y decidir cómo la eligen.

El diputado señor Saffirio compartió la idea que es posible recurrir a un mecanismo que permita reconocer los usos y costumbres de los pueblos originarios para la elección de sus autoridades.

La Ministra Directora del Servicio Nacional de la Mujer, señora Claudia Pascual, afirmó que la modificación del actual Sistema Electoral Binominal permitirá avanzar hacia una democracia más inclusiva en nuestro país. Ello implica un cambio de paradigma que no le teme a las mayorías y, por supuesto, incorpora a las minorías.

Añadió que dos son los factores que alejan la política de las personas. El sistema electoral binominal hace que la intención del voto, que manifiestan las ciudadanas y ciudadanos de nuestro país, sea irrelevante en el sentido de que, muchas veces, los parlamentarios se encuentran preelectos. El sistema actual define ex ante quienes serán elegidos o elegidas, incluso, si han perdido en las urnas. Por lo demás, el sistema electoral binominal establece barreras de entrada a los colectivos y partidos políticos más pequeños, pues persigue generar que sólo dos bloques se disputen el poder.

Los objetivos generales del proyecto son: facilitar la expresión de la mayoría y representación de las minorías; evitar que queden fuera candidatos y candidatas con grandes votaciones; promover un Congreso Nacional que refleje la diversidad de la sociedad; cambiar la desigual representación de género que tiene hoy el Congreso Nacional y alentar a los partidos políticos y pactos a presentar nóminas que representen la diversidad de género existente en el país.

Asimismo, también se pretende el reducir la desigualdad del voto. Para que el voto de las ciudadanas y de los ciudadanos de las comunas más pobladas y las menos pobladas se encuentren en una razonable proporción es necesario aumentar el número de diputados y diputadas, senadores y senadoras. De esta forma no se perjudica a las regiones más extremas, habitualmente menos pobladas, ni tampoco a las más habitadas y menos representadas.

Otro objetivo que persigue el proyecto apunta a permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas. Para que corrientes políticas que tienen una votación menor, pero suficientemente representativa, puedan ingresar al Parlamento, es necesario disminuir el número de distritos y circunscripciones, aumentando el tamaño de los que quedan.

Por último, el proyecto también procura aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos y elegidas. Este objetivo se logra permitiendo que las listas electorales presenten más candidatos y candidatas que los que se eligen en cada territorio electoral.

Respecto del contenido del proyecto desde una perspectiva de género, señaló que la iniciativa propone incorporar una cuota de género. Además, incorpora incentivos financieros para los partidos políticos en función de las mujeres electas.

En las nóminas totales de postulantes a la Cámara de Diputados y al Senado de cada partido -integre o no un pacto- no puede haber ningún género representado por sobre de los tres quintos ni por bajo de los dos quintos del total. Es decir, no pueden superar el sesenta por ciento ni estar por bajo del cuarenta por ciento del total de candidatos y candidatas en la lista nacional.

La infracción a la norma sobre el contenido de las nóminas acarrea el rechazo de todas las candidaturas del partido que no hayan cumplido con dicho requisito, sin perjuicio de otorgar la posibilidad de corregir la proporción de candidaturas al porcentaje de género establecido.

Los partidos políticos a los que pertenecen las diputadas y senadoras electas tendrán derecho, por cada una de ellas, a un monto adicional para efectos de reembolso de hasta 500 unidades de fomento y solo por una vez.

Tanto la cuota de género como el incentivo financiero tienen carácter transitorio y se aplicarán a las próximas cuatro elecciones parlamentarias: 2017, 2021, 2025 y 2029.

Explicó que la norma se propone como transitoria, en el entendido que la cuota de género tiene como propósito corregir la situación desigual inicial, en la que operan fuertes e invisibles barreras de entrada para la mayor representación de mujeres en el Parlamento. El incentivo financiero se entiende como una medida que promueve la presentación de candidatas en territorios donde efectivamente tengan reales posibilidades de ser electas, por lo tanto, el incentivo es al resultado y no a la mera candidatura.

Como antecedente, respecto de la correlación que tiene esta propuesta de reforma electoral, a propósito de medidas y avances sugeridos y de otros países, destacó la resolución de las Naciones Unidas 66/130 para la promoción de la mujer y su participación en la política. Entre otras medidas la Asamblea General de las Naciones Unidas exhortó a los Estados miembros a:

- Fortalecer el fundamento jurídico del equilibrio de género en los niveles nacional, subnacional y local.

- Alentar a los partidos políticos a suprimir barreras que discriminen contra la participación de la mujer.

- Introducir reformas en el financiamiento de la política o en otros ámbitos que estimulen a los partidos políticos a aumentar el número de mujeres candidatas, especialmente, donde no existan cupos, o a reservar fondos para las candidatas y/o las secciones femeninas dentro de los partidos políticos.

Respecto de las cuotas en América Latina y El Caribe, el impulso de la IV Conferencia de Beijing (1995) plantea como meta alcanzar el acceso efectivo de las mujeres en la toma de decisiones políticas en un 50 por ciento para el 2005.

No obstante, para el 2014 el promedio de América Latina, El Caribe y Península Ibérica alcanza solo un 24,5 por ciento a nivel regional, cifra que se encuentra por encima del promedio mundial del 21,8 por ciento.

Indicó que con el objeto de corregir la igualdad efectiva de las mujeres en el acceso a cargos de decisión o elección popular, algunos Estados han venido impulsando leyes de cuotas; en tanto medidas compensatorias y temporales que han tenido como objetivo asegurar un porcentaje mínimo de mujeres en los parlamentos latinoamericanos.

La aceleración en la inclusión de mujeres en los cargos de elección popular en América Latina ha estado determinada, entre otros factores, por la aplicación de los mecanismos de cuotas. En ausencia de estas medidas, la mayor inclusión de mujeres en política, si bien es un proceso que puede darse por sí solo, se produce a un ritmo muy menor.

A continuación, expuso un cuadro que contiene información sobre los países que han incorporado algún sistema de cuotas y su impacto en la inclusión de mujeres en el Parlamento:

La segunda columna indica la cuota mínima de mujeres establecida en sus normativas. La tercera indica la representación, previo al sistema de cuotas, y la última columna se refiere a la representación al 2014.

Por ejemplo, Argentina tiene una cuota establecida de 30 por ciento. Su representación de mujeres en el parlamento, antes de implementar el sistema de cuotas, era de un 6 por ciento. Al 2014, es de un 37,75 por ciento, lo que demuestra claramente el aumento y la celeridad con que se puede avanzar.

Bolivia tiene una cuota de 30 por ciento, un 11 por ciento previo al sistema de cuotas y un 36,3 por ciento al 2014.

Brasil tiene una cuota de 30 por ciento, un 7 por ciento previo al sistema de cuotas y un 12,3 por ciento al 2014.

Colombia tiene una cuota de 30 por ciento en el Poder Ejecutivo, sin embargo, no tiene una cuota respecto del Poder Legislativo. Su representación es del 14,5 por ciento en su Parlamento.

Costa Rica tiene una cuota de 40 por ciento, un 14 por ciento previo al sistema de cuotas y un 38,6 por ciento al 2014.

Ecuador tiene una cuota de 50 por ciento, un 4 por ciento previo al sistema de cuotas y un 41,6 por ciento al 2014

El Salvador tiene una cuota de 30 por ciento, pero esta cuota fue aprobada en 2013. Hoy están en un 26,2 por ciento.

Honduras tiene una cuota de 30 por ciento, un 9,4 por ciento previo al sistema de cuotas y un 25,8 por ciento al 2014.

México tiene una cuota de 30 por ciento, un 17 por ciento previo al sistema de cuotas y un 35,9 por ciento al 2014.

Panamá tiene una cuota de 30 por ciento, un 8 por ciento previo al sistema de cuotas y un 8,5 por ciento al 2014.

Perú tiene una cuota de 30 por ciento, un 11 por ciento previo al sistema de cuotas y un 22,3 por ciento al 2014.

República Dominicana tiene una cuota de 30 por ciento, un 12 por ciento previo al sistema de cuotas y un 15,1 por ciento al 2014.

Uruguay no tiene sistema de cuotas.

Venezuela tiene un sistema de cuota de 50 por ciento que fue aprobado y luego derogado. Hoy solo tiene el 17 por ciento.

A continuación, se refirió a la situación actual de las mujeres en el Parlamento Europeo.

Bélgica tiene una cuota mínima de mujeres establecida de 50 por ciento, lo que significa paridad absoluta. La representación al 2014 es de 40,35 por ciento.

Francia tiene una cuota mínima de mujeres establecida de 50 por ciento. La representación al 2014 es de 24,35 por ciento.

Eslovenia tiene una cuota mínima de mujeres establecida de 35 por ciento. La representación al 2014 es de 20,4 por ciento.

España tiene una cuota mínima de mujeres establecida de 40 por ciento. La representación al 2014 es de 36,6 por ciento.

Los países nórdicos tienen una cuota voluntaria de los partidos políticos. No es una cuota que se da a la lista, sino que cada partido coloca sus cuotas y finalmente la representación que ellos tienen es cercana al 40 por ciento.

Islandia tiene cuota voluntaria de partidos políticos y, al 2014, tiene una representación de 39,7 por ciento.

Noruega tiene una cuota voluntaria de partidos políticos y, al 2014, tiene una representación de 39,6 por ciento.

Suecia tiene una cuota voluntaria de partidos políticos y, al 2014, tiene una representación de 45 por ciento.

Respecto de la participación política de las mujeres en Chile, indicó que las mujeres constituyen el 50,52 por ciento del total de la población del país. De las casi 9 millones de mujeres -más de la mitad de la población- tan solo 19 participan en la Cámara de Diputados, con el 15,83 por ciento y 6 mujeres en el Senado, con el 15,79 por ciento.

La actual subrepresentación de mujeres en el Parlamento es uno de los déficits más evidente de la democracia en Chile, caracterizando el terreno político en base a la desigualdad de género existente en el país.

El gráfico de barras muestra el mismo dato mencionado, recoge la proporción de hombres y mujeres en el Parlamento.

Agregó que la Unión Interparlamentaria, UIP, ha informado que hasta septiembre de 2013, de un total de 188 países, que muestran y comparten sus datos, que se clasifican por orden del porcentaje de mujeres en la Cámara Baja y Alta, Chile ocupa el lugar número 94. También ha indicado que la participación de las mujeres en los parlamentos en América Latina es del 24.5 por ciento y Chile se encuentra 9 puntos porcentuales bajo el promedio regional.

Informó que en términos de militancia, según el Servicio Electoral, hasta el año 2013, en los partidos políticos las mujeres representaban la mitad de los 901.791 militantes que hay en el país, un 50.4 por ciento. No obstante, sus candidaturas y representación en cargos de votación popular no superan el 16 por ciento, con excepción de las elecciones presidenciales y de concejales. En concejalías se alcanza alrededor de un 24.6 por ciento de representación.

Los resultados de las elecciones municipales de 2012 arrojaron que las mujeres representan un 12.5 por ciento de los alcaldes y alcaldesas, y un 24.9 por ciento de los concejales y concejalas del país. El 12.5 por ciento de los alcaldes equivale a 43 municipios en todo el país que están dirigidos por alcaldesas.

En las elecciones parlamentarias de 2013, 12 mujeres fueron candidatas al Senado y 88 a la Cámara de Diputados, representando un 18.8 por ciento del total de postulantes al Congreso Nacional, tanto diputados como senadores.

Destacó que la subrepresentación de las mujeres en el Parlamento no se condice con la fuerte presencia en las organizaciones territoriales y funcionales como juntas de vecinos, centros de padres y apoderados, consejos comunales, organizaciones comunitarias, y organizaciones de la sociedad civil en general, en las cuales participan las mujeres.

La subrepresentación de mujeres en Chile fundamenta la existencia de una normativa explícita que incorpore el principio de paridad en los atributos del nuevo sistema electoral.

Recalcó que la ausencia de mujeres no se debe a un tema de capacidades o de mérito. Destacó que hay barreras culturales, políticas y económicas que impiden el acceso de las mujeres a cargos de poder. No es justo que la mitad de la población sea excluida de las discusiones más relevantes sobre el destino de nuestra nación.

En ausencia de mecanismos de cuotas, y según el actual ritmo de incorporación de mujeres a la representación parlamentaria, podrían pasar cuarenta años para llegar a una representación equilibrada entre hombres y mujeres, según datos y cálculos de la CEPAL de 2012.

El criterio de cuota en la presente ley puede ser utilizado como una herramienta de cambio social para permitir que las barreras culturales sean superadas.

Manifestó que el peso simbólico de las cuotas en la mayor inclusión de mujeres en política significa avanzar en el perfeccionamiento de procesos electorales y mejoras en la calidad de nuestra democracia.

Los incentivos y mandatos específicos que obligan a los partidos políticos al cumplimiento de la ley deben entenderse como una condición habilitante para la mayor presencia de mujeres en los espacios de decisión, lejos de ser considerados como un premio o castigo.

Afirmó que las cuotas permiten que el esfuerzo de acceder a cargos de representación política no resida exclusivamente en las mujeres en forma individual, sino en quienes controlan el proceso de selección o designación de candidaturas.

Las normativas específicas con criterio de paridad vienen a corregir la desigualdad en la representación política de más de la mitad de la población en Chile y suponen que las capacidades de liderazgo político son las mismas en hombres y mujeres.

Expresó que la ausencia de las mujeres en la generación de las leyes deja al Congreso ciego ante las necesidades de la mitad de la población. Las experiencias e intereses específicos de las mujeres deben estar representados y garantizados en la particularidad del sistema electoral y en el conjunto de la cultura política del país.

El diputado señor Chahin señaló que existe consenso en generar incentivos como los que están contemplados en el proyecto. Si uno de los objetivos de esta reforma al sistema electoral es incluir en el Parlamento a sectores políticos y sociales que están excluidos, que sea un mejor espejo de la sociedad, es indispensable avanzar en mecanismos como el que esta iniciativa contiene.

Preguntó cómo se llega a la cifra del 40 por ciento. Si se observa los indicadores de América Latina, en general, los países están en el orden del 30 por ciento y, en el margen, hay algunos que están en el 20 y otros en el 40. En este sentido, preguntó por qué no se hace un esfuerzo por tratar de equipararnos al resto de los países de América Latina.

En segundo lugar, hizo presente que el bono que se propone constituye un incentivo económico al partido. Preguntó si se ha considerado conceder un beneficio directo a las candidatas.

El diputado señor Auth expresó que la ley de cuotas que se propone es posible, justamente, porque se está cambiando el sistema binominal por uno proporcional. De otro modo, sería imposible.

Indicó que si se observa lo que ocurre en los países de América Latina y del mundo, se puede constatar una correlación evidente entre la participación de mujeres y el tipo de sistema electoral. El sistema proporcional está asociado a una mayor presencia de mujeres.

Manifestó que hay países en que el efecto de la ley de cuotas ha sido menor, porque existe un comportamiento cultural de los electores que los lleva a votar más por hombres que por mujeres. En nuestro país ocurre la situación inversa. Sin embargo, se eligen menos mujeres, única y exclusivamente por la limitada oferta de candidatas. De hecho, hay una correlación muy alta entre la proporción de candidatas que se presenta y las que acceden al Congreso.

Destacó que existe ceguera de parte de los partidos, que tienden a ver siempre mejores candidatos en el género masculino. En este sentido, estimó adecuado aplicar una cuota obligatoria.

Añadió que se debería facilitar el acceso de las mujeres, generando un incentivo adicional directamente a ellas en la devolución fiscal y no a sus partidos. Es decir, si la devolución general es de 0,03 UF por voto obtenido, sería un incentivo real si las mujeres recibieran 0,045 UF, es decir, un 50 por ciento adicional, de carácter transitorio. Si solo se incentiva al partido, probablemente habrá grandes dificultades para cumplir la cuota, pero si también se rebaja la barrera de acceso a las mujeres, se podría complementar y hacer más fácil la aplicación de la citada cuota.

Por último, en relación con las primarias y la dificultad que ella genera para aplicar la cuota, indicó que en México, donde ocurre una situación similar, se excluye de la ponderación a los candidatos elegidos en primarias.

Preguntó qué ocurriría si un partido sometiera todas sus candidaturas a primarias y resultaran electos 80 hombres y 20 mujeres, en orden a como respetar la cuota exigida por ley.

El diputado señor Squella respecto a los datos proporcionados por la Ministra, más otros que dicen relación solo con los países que integran la OCDE, señaló que le asisten dudas en orden a si la cuota obligatoria genera efectos permanentes.

Al analizar los países de la OCDE, solo un tercio tiene cuota obligatoria y solo siete superan el promedio. Con ello se evidencia que el efecto concreto de la cuota obligatoria no necesariamente cumple sus efectos. Al establecer cuotas transitorias, que consideró un buen mecanismo de discriminación positiva, se debe analizar la siguiente elección al término de su aplicación.

Agregó que también existe una gran cantidad de países que han implementado la cuota voluntaria, como Finlandia, Islandia, Noruega, Dinamarca, Holanda, Suecia. La mayoría de tales países cuenta con más del 40 por ciento de participación femenina y tienen cuota voluntaria. Es decir, la voluntariedad tiene efectos bastante más contundentes que la obligatoriedad.

En relación a las primarias, afirmó que una buena alternativa está dada por la experiencia mexicana. Otra solución consistiría simplemente en que la cuota se exija para la inscripción en las primarias, es decir, que se excluya del universo total exigido para la cuota a aquellas candidaturas que provienen de una primaria.

Por último, hizo presente que le asisten dudas respecto de la constitucionalidad del artículo. A fines de los 90, el Tribunal Constitucional se pronunció sobre la intención de establecer vía ley requisitos adicionales para las candidaturas. En ese momento, tal tribunal fue tajante al establecer que esa materia era propia de la Constitución. Preguntó si el Ejecutivo ha estudiado esta situación.

El diputado señor Saffirio aclaró que no se está legislando para fijar una cuota mínima de 40 por ciento en beneficio del género femenino, sino que se está estableciendo que ningún género puede superar el 60 por ciento.

Por otra parte, señaló que desde el punto de vista de la impronta de los partidos frente a los ciudadanos, en orden a estimular económicamente a los partidos, el cambiar representatividad por dinero le produce cierta incomodidad. Que los partidos sean incapaces de creer que la presencia de mujeres en sus nóminas sea un valor en sí, y que ese valor, como no es considerado como tal, tenga que ser sustituido por otro que es el dinero le resulta cuestionable.

El diputado señor Ceroni señaló que de la lectura del mensaje se desprende que se está otorgando un mayor aporte fiscal a los partidos en función del número de mujeres que elijan, tanto la Cámara de Diputados como el Senado, con el fin de alentarlos a presentar candidaturas en territorio donde tengan reales posibilidades de éxito. Con ello se está sugiriendo algo inaceptable: Que se otorga más dinero para que los partidos no burlen la disposición y, finalmente, se presenten candidatas en aquellos sectores donde tengan mayores posibilidades de éxito.

El diputado señor Coloma preguntó si se estudió algún sistema distinto al de la ley de cuotas para incentivar la participación de las mujeres.

La diputada señora Alvarez, doña Jenny, sostuvo que no se refleja en el proyecto la posibilidad de proporcionar mejores condiciones a las diputadas que lleguen en algún minuto al Congreso, o a aquellas que son madres o que sean madres mientras son diputadas, porque en el Congreso no están dadas las condiciones para algo tan esencial y vital como tener un lugar donde las diputadas puedan estar con sus bebés.

En cuanto al tema de los recursos, expresó ser partidaria de aumentar el dinero que se otorga por voto a las mujeres candidatas que participen en las elecciones, en atención a que siempre tienen menos posibilidades de obtener recursos. Destacó que hay muchas mujeres que tienen las ganas de participar, pero no existen las condiciones ni los recursos que permitan tal participación.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señorita Rincón, doña Ximena, respecto de las dudas de constitucionalidad que genera la norma preguntó por qué razón podría afectar la norma constitucional de igualdad entre hombres y mujeres una norma como la que se propone.

Lo que pretende el proyecto es velar para que esa igualdad esté presente en el Congreso. Destacó que el proyecto no establece que el porcentaje mínimo de mujeres sea 40 por ciento, sino que se exige que el máximo por género sea de 60 por ciento.

Recalcó que en la práctica los partidos políticos no presentan mujeres en los lugares en que existe la posibilidad que sean electas. Además, cuando se revisan los distintos estudios respecto de esta materia, es posible comprobar que las mujeres tienen mejor porcentaje de elegibilidad que los hombres.

Por otra parte, cuando se discutió el proyecto de ley de primarias, se presentaron varias indicaciones para establecer como obligatorias las cuotas en la iniciativa, y al menos en la Comisión de Gobierno del Senado, en la que participaron muchas mujeres y organizaciones, se sostuvo que ello no era posible, porque su discusión correspondía efectuarla en el marco del proyecto de cambio del sistema electoral.

Añadió que tal como se encuentra redactado el proyecto, probablemente las primarias no van a ser necesarias.

La Ministra Directora del Servicio Nacional de la Mujer, señora Claudia Pascual, respecto de la pregunta efectuada por el diputado Chahin respecto de por qué se fijó un piso de 40 por ciento, en circunstancias que las mujeres son la mitad de la población, afirmó que cualquier mujer podría recoger la inquietud y aumentar dicha cuota al cincuenta por ciento. Sin embargo, tal como ocurre en los sistemas en que se ha implementado la ley de cuotas, se recurre más bien a un criterio de paridad. Los países que incorporan dicho criterio siempre fijan un rango de entre 40 y 60 por ciento para cualquiera de los dos géneros, en el entendido de ponerle un límite máximo a la representación o a la participación. Por lo tanto, efectivamente, la cuota puede ser un número cualquiera. Si bien es una cifra arbitraria, estimó indudable que es mucho más proporcional y más justo avanzar de manera más acelerada en una respuesta que permita una incorporación mayor de las mujeres a cargos de representación.

Informó que existen encuestas que demuestran que la distancia que existe respecto de las mujeres con el Parlamento tiene que ver con que éste no representa los fenómenos y los problemas de éstas. Ello ocurre porque no se representan con la fuerza suficiente las experiencias de vida y los problemas de las mujeres en nuestro país.

En cuanto a las razones que existen para establecer un incentivo al partido, señaló que se concede a las colectividades políticas, porque es allí donde se encuentran las primeras barreras, muchas veces invisibles o culturales.

Recalcó que en el Congreso no hay mujeres con menos méritos que los hombres para llegar al Parlamento. Decir eso resulta casi ofensivo.

Nadie puede sostener que se le va a regalar el cupo a una mujer que no tiene méritos. Al Congreso deben llegar las y los mejores, en función del mérito, pero no puede haber una restricción previa que subrepresente a las mujeres. En ese sentido, el incentivo es a las colectividades políticas, porque éste se concede al resultado. Añadió que existen experiencias varias, tanto al interior de los partidos que establecen cuotas para sus dirigencias internas, y otras, como el caso español, que tiene listas cerradas y para cumplir con el porcentaje de cuotas de mujeres, las ponen, pero no van en el primer lugar de la lista. Por lo tanto, como la lista es cerrada, siempre es un hombre el representante y con ello se cumple la cuota.

Por ello el incentivo es al resultado y no solo cumplir con otorgar el 40 por ciento del cupo para las mujeres.

Añadió que se deberá discutir si este incentivo es incompatible con otros, en relación con la candidatura de una mujer. En este sentido, aclaró que esta ley no es de financiamiento de las campañas.

Por otro parte, estimó necesario discutir en el Congreso el incluir criterios de cuotas en la ley de primarias legales.

Es indudable que el sistema de primarias tenía una justificación en la medida de un sistema electoral binominal que no permitía la mayor competencia. Sin embargo, si se permite que cada partido y cada pacto pueda llevar Nx2, en cada uno de los distritos y de las circunscripciones, se está aumentando ostensiblemente la posibilidad de competir y, por lo tanto, muchas veces pudiera darse el caso de que se traslada la competencia definitoria a la elección y no necesariamente al proceso previo que pudiera estar dado por una primaria.

En relación con las preguntas del diputado Squella, sobre la obligatoriedad o no de la cuota, señaló que en los países nórdicos, las políticas con perspectivas de género constituyen una política de Estado y no una medida aislada. Son países que llevan décadas tratando de avanzar en una política de Estado con perspectivas de género transformadoras, en el sentido de permitir que las mujeres tengan una representación, una participación y un acceso a la toma de decisiones de una forma más igualitaria y más equilibrada.

La Directora (S) del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera, a partir del análisis del proyecto en general, hizo presente, en primer lugar, que cualquier eventual modificación al distritaje establecido, no debiera efectuarse durante un año en que corresponda la realización de elecciones generales.

Por otra parte, y teniendo en consideración los alcances que las reformas incluidas en este proyecto de ley pudieran tener respecto de otros cuerpos normativos, precisó que si la modificación contemplada en el inciso cuarto nuevo del artículo 3° bis de la Ley N° 18.700, relativa a la obligación impuesta a los partidos políticos de que en sus declaraciones de candidaturas ningún género pueda superar el 60% del total de candidaturas presentadas, es aplicable a la Ley N° 20.640, que establece el Sistema de Elecciones Primarias; en especial, considerando lo dispuesto en el artículo 13, que hace aplicable las exigencias prescritas en el artículo 3 bis de la Ley N° 18.700, y el artículo 35, que consagra el efecto vinculante de las elecciones primarias, sugirió la incorporación de una norma que de manera expresa regule el ámbito de aplicación en las elecciones primarias que se realicen.

También estimó necesario precisar los alcances que el proyecto tendrá en la ley 18.695, en atención a la aplicación que de la norma contenida en el artículo 3° bis se hace a las elecciones municipales.

Finalmente, hizo presente los efectos que los plazos contemplados en el presente proyecto pudieren tener en relación a lo prescrito en el actual artículo 9 de la Ley N° 18.700, de acuerdo al cual los partidos políticos deben remitir al Servicio Electoral un duplicado de sus registros generales de afiliados, cuyo primer cierre se debe realizar 9 meses antes del vencimiento del plazo para declarar candidaturas y, el segundo cierre, dos meses antes de ese plazo.

Respecto al articulado del proyecto, efectuó los siguientes comentarios:

1.- En relación al artículo 3° bis hizo presente lo siguiente:

a) Sugirió mantener la expresión “elecciones parlamentarias”. Además es incongruente que un partido pueda pactar entre sí.

b) Estimó necesario precisar si la modificación que incorpora un nuevo inciso cuarto, es aplicable a la ley N°20.640, que establece el sistema de elecciones primarias, en especial considerando lo dispuesto en el artículo 13, que hace aplicable las exigencias prescritas en el artículo 3° bis de la ley 18.700 y el artículo 35, que consagra el efecto vinculante de las primarias. Sugirió incorporar una norma que de manera expresa regule el ámbito de aplicación en las elecciones primarias que se realicen.

c) Asimismo, propuso precisar los alcances que esta modificación tiene en la ley N°18.695, en atención a la aplicación que de la norma contenida en el artículo 3° bis se hace a las elecciones municipales.

d) Comentó que el inciso cuarto lleva implícito el establecimiento de una obligación para los partidos políticos en orden a presentar más candidatos para poder cumplir con el porcentaje establecido e implica la imposibilidad manifiesta de presentar un solo candidato.

e) Respecto del mismo inciso, sostuvo que se debe precisar el ámbito de aplicación de la exigencia, en orden a que ningún género podrá superar el 60% del total de candidaturas presentadas, de modo de aclarar si se refiere a un distrito electoral específico, o bien dice relación con toda la elección de que se trate, por ejemplo, la elección de diputados a nivel nacional.

f) Expresó que la voz “género” es impropia, puesto que el sentido con que es utilizado en el proyecto no corresponde a alguno de los significados más amplios del Diccionario de la Real Academia y tampoco se encuentra en armonía con las expresiones que el legislador emplea en otras leyes del sistema electoral público, donde se refiere a “hombre” o “mujer”.

Al respecto, el miembro del Consejo Directivo del Servicio Electoral, señor Alfredo Joignant, recordó que para la elección primaria de parlamentarios de Renovación Nacional hubo una precandidata, Valentina Verbal, cuyo sexo estaba completamente en duda. Vale decir, ella apelaba a una lógica más bien de género que de sexo para inscribir su candidatura. Sin embargo, el tema se resolvió por otra vía. Por ello, destacó que el problema no es abstracto.

La Directora (S) del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera, hizo presente que se debe considerar los efectos que los plazos contemplados en este proyecto pueden tener respecto del artículo 9 de la ley 18.700, en virtud del cual los partidos políticos deben remitir al Servicio Electoral un duplicado de sus registros generales de afiliados, cuyo primer cierre se debe realizar nueve meses antes del vencimiento del plazo para declarar candidaturas y el segundo cierre dos meses antes de dicho plazo.

En relación a la modificación que se propone efectuar al artículo 18, destacó que ésta implica entregar al Tribunal Calificador de Elecciones una facultad que según la legislación actual, compete de manera exclusiva y excluyente al Consejo Directivo del Servicio Electoral, puesto que al permitir a los partidos políticos “corregir” la proporción de las candidaturas declaradas ante este servicio, se traduciría en la práctica a que se declararán candidaturas nuevas directamente en esa instancia, y sería ese Tribunal el que tendría que verificar el cumplimiento de los requisitos legales exigidos a las candidaturas, materia propia del Servicio Electoral. Asimismo, advirtió que el vocablo “corregir” es incorrecto, porque se trataría de una actuación más bien administrativa y no de una acción de reclamo que debe deducirse ante el mencionado Tribunal.

Respecto al artículo 109 bis que se propone incorporar, efectuó los siguientes comentarios:

1.- Sugirió agregar en el inciso primero, a continuación de la palabra “Tribunal”, la frase “Calificador de Elecciones”.

2.- En el numeral 2 afirmó que no resulta conveniente señalar Coeficiente D’Hont, sino que es preferible aludir a un sistema de representación proporcional.

3.- En el numeral 2 letra b), propuso agregar a continuación de la palabra distrito, la frase “circunscripción senatorial”.

4.- En el numeral 2 letra c), donde el proyecto establece que, “Para efectos de la aplicación del coeficiente D'Hont, se considerará como un partido dentro del pacto electoral al conjunto de candidaturas independientes que no sean parte de un subpacto.”, advirtió nuevamente que no sería procedente el señalamiento expreso del coeficiente D’Hont, dado que se singulariza en las letras el procedimiento a seguir. Asimismo considerar como un solo partido político a todas las candidaturas independientes, entre las que evidentemente no existiría afinidad de principios, constituye una vulneración a lo prescrito en el artículo 18 de la Constitución Política de la República.

El miembro del Consejo Directivo del Servicio Electoral, señor Gonzalo Molina, expresó que hace algún tiempo en los tribunales electorales de regiones se dictaron varios fallos en los que se hizo una interpretación que requirió, con posterioridad, que la ley se tuviera que corregir para aclarar la forma en que se aplicaba la cifra repartidora. Por lo tanto, lo más lógico es aplicar el mismo sistema que ya ha regido de manera clara, y que no existan otras interpretaciones, en vez de hacer una designación genérica como está hecha en la ley respecto de la aplicación de este sistema.

La Directora (S) del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera, en relación al nuevo artículo 179 bis que se propone incorporar, sostuvo que el articulado hace coexistir dos sistemas distintos de base para establecer los distritajes, luego hay una incongruencia entre las letras a y b con la c, dado que en las primeras se habla de electores y en la c) de población.

Por su parte, en la letra b), respecto de la frase final, en base “… a la última información del Servicio Electoral.”, la estimó insuficiente, puesto que no precisa la fuente de la que este Servicio deberá extraer la información, es decir, del Registro Electoral o de un Padrón Electoral determinado. El artículo 179 bis, nuevo, señala que corresponderá al Servicio Electoral y, en forma específica al Consejo Directivo, modificar o actualizar, cada doce años, la situación distrital.

Advirtió una incongruencia. Se están estableciendo los distritos en relación con la población, porque se está repitiendo lo que se consagra en la ley. Cuando se le permite al Servicio Electoral actualizar los distritos se alude al electorado.Ello encierra un peligro, que se vincula a lo que ocurría anteriormente con la junta inscriptora, cuando artificialmente se trasladaba a personas a votar a otras comunas. De acuerdo con la nueva distribución de distritos, de 60 a 28, va a ser muy fácil trasladar a personas en algunas partes. Estimó más lógico que la fórmula fuese una distinta a la del electorado.

Asimismo, a fin de uniformar la norma y con el propósito de reflejar más fielmente la representatividad, y tomando como precedente lo establecido por el legislador en otros cuerpos normativos; a saber, Ley N° 19.175, Orgánica Constitucional sobre Gobierno y Administración Regional, sostuvo que debería utilizarse como fuente de información los datos oficiales proporcionados por el último censo oficial de población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).

En cuanto al nuevo artículo 23 transitorio que se propone incorporar, señaló que esta norma limita la aplicación a las parlamentarias. Al respecto preguntó qué ocurre con las declaraciones de la Ley N° 18.695, de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 107 de la referida ley.[5]

Por último, respecto de lo dispuesto en el artículo 2° del proyecto, sugirió aclarar este precepto, toda vez que la definición y naturaleza del “reembolso” definido en el artículo 15 de la citada Ley N° 19.884, no corresponde al concepto utilizado en el proyecto. En consecuencia, propuso reemplazar dicha expresión por una nueva forma de financiamiento fiscal que se pague directamente y a todo evento a los partidos políticos, y que corresponda a un monto determinado de unidades de fomento por cada mujer candidata que haya sido proclama electa.

Añadió que se debe considerar que el beneficio no alcanza a las candidatas mujeres independientes que lleve un partido en un pacto, ya que la norma propuesta se refiere a “los partidos políticos a que ellas pertenecieren”.

El diputado señor Saffirio preguntó la opinión del Servicio Electoral respecto de la representación de los pueblos originarios en el Parlamento. Una de las fórmulas que se ha planteado decía relación con la opción de poder contar con un registro electoral para quien reconociera su adscripción o su pertenencia a una determinada etnia, y que optara por votar de acuerdo con su condición indígena, o de acuerdo con el padrón o registro electoral común, y que ese registro paralelo indígena pudiera dar pie a que tuvieran una representación en el Parlamento, que se determine previamente en la propia ley electoral.

El diputado señor Auth hizo presente que ya existe un protopadrón, que es un medio habilitado para votar en las elecciones de la Conadi. En consecuencia, éste sería una base para construir un padrón.

Por otra parte, sostuvo que la exigencia de la cuota ha de hacerse a las candidaturas aceptadas y no a las candidaturas presentadas. Compartió el criterio del Servicio Electoral, en orden a que esta situación debe resolverse en esa instancia y no en tribunales electorales. En consecuencia, lo que se debe hacer es crear un espacio temporal de corrección, en que el partido involucrado complementa aquello que le falta para cumplir con la norma, para que luego el Servicio Electoral dé por buena la inscripción.

En este sentido, aclaró que la cuota se aplica a la totalidad de los candidatos y, si el partido no cumple con esa totalidad, es el partido entero y todos sus candidatos quienes no cumplen.

A propósito de los independientes dentro de la lista y que el proyecto los da por subpactados, sostuvo que no desean establecer una desventaja que los perjudique al aumentar el número de candidatos y el tamaño de los distritos, por lo que esa eventual desventaja podría ser suplida, en parte, por la posibilidad de que ellos también constituyan listas, siempre pensando en que lo han de hacer voluntariamente y frente al Servicio Electoral.

En consecuencia, añadió que se podría establecer que cuando se incluyan dentro de una lista, no sean automáticamente declarados como subpacto, que es lo que hace el proyecto de ley. Por ejemplo, si hay una lista de 10 candidatos con 3 independientes que no pertenecen a ninguno de los partidos, el proyecto los pone como subpacto en forma automática.

Respecto del debate que dice relación con aludir a los electores o a la población, señaló que en el contexto de distritos tan grandes pensar en desplazamientos que hagan variar el resultado de la elección es propio de ciencia ficción. Los partidos están teniendo cada vez menos capacidad de movilizar. En consecuencia, llamado a optar entre las cifras del Registro Civil y del Servicio Electoral determinando el número de electores o al Instituto Nacional de Estadísticas, estableciendo el número de personas, tiende a creerle más al Servicio Electoral. Además, son los electores mayores de 18 años los que están representados y no la población.

El diputado señor Coloma respecto del reembolso de 500 unidades de fomento estimó que se está cometiendo un error, dado que se produciría una injusticia para con la candidata que pierde, quien además quedaría con una deuda producto de la campaña.

Solicitó se efectúe una simulación respecto de cómo quedaría conformado la distribución de escaños según distritos si se aplicara ahora la fórmula que se está proponiendo para 2029, a fin de determinar cuál es la desproporción o qué regiones se verían afectadas o cuáles se verían favorecidas.

La Directora (S) del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera, afirmó que pondrán esta información a disposición de la Comisión.

El miembro del Consejo Directivo del Servicio Electoral, señor Alfredo Joignant, sostuvo que si se opta por aludir al elector y no a la población, retrotraer la decisión de los consejeros a un año antes, descomprime la situación.

Respecto de la consulta efectuada por el diputado Saffirio acerca de la representación de pueblos originarios, a título personal, expresó que no tiene dificultad alguna. Consideró que habría que usar como base de trabajo el registro indígena que existe en Conadi, el que debería complementarse con un futuro censo.

El diputado señor Soto preguntó si existen las condiciones para consagrar el voto por correspondencia, el voto electrónico, u otras medidas que faciliten la participación de la gente.

El diputado señor Auth afirmó que conocía países donde existe el voto electrónico in situ, no el voto electrónico a distancia. Ello permitiría que las personas voten en el lugar más cercano a su casa, para lo cual se podría estructurar un sistema donde el lugar de votación se encuentre, como máximo, a diez cuadras de distancia de todas las casas de Chile, donde las personas con su sola huella digital puedan acceder a su voto.

Por otra parte, preguntó por qué razón ha disminuido la oferta de información a los especialistas en materia de resultados electorales. Antes era posible consultar tales antecedentes en el sitio www.elecciones.cl. Asimismo, existía una página web excelente que se podía ver hasta cada mesa, información que desapareció por completo.

La Directora (S) del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera, explicó que recibieron desde el Ministerio del Interior los datos de las elecciones anteriores en unos formatos absolutamente ilegibles para su sistema.Inf9ormó que están trabajando desde el año pasado en la obtención de toda la información para subirla a la red de la mejor manera posible.

En cuanto a las fórmulas existentes para fomentar la participación ciudadana, destacó que existen muchas alternativas, entre las que se cuenta el voto asistido, que ya existe; el voto anticipado, para el caso de la persona que el día de la elección no va a estar en su hogar. En otros países existe hasta el voto domiciliario, para quienes no se pueden mover, donde las personas se inscriben y, la mesa va a su casa a buscar el voto. Como organismo técnico, están en condiciones de llevar a la práctica todo lo que el Parlamento y el Ejecutivo establezcan.

El profesor de Derecho Constitucional de la Pontificia Universidad Católica de Chile, señor Miguel Ángel Fernández señaló que la legislación complementaria que defina el sistema electoral parlamentario debe respetar tanto las normas constitucionales directamente vinculadas con ese sistema como otras más específicas.

Indicó que las normas constitucionales que actualmente regulan el sistema de elección parlamentaria en Chile comienzan con lo dispuesto en el artículo 18 de la Carta Fundamental que establece una disposición general en la materia, al tenor de su inciso primero: "Habrá un sistema electoral público. Una ley orgánica constitucional determinará su organización y funcionamiento, regulará la forma en que se realizarán los procesos electorales y plebiscitarios, en todo lo no previsto por esta Constitución y garantizará siempre la plena igualdad entre los independientes y los miembros de partidos políticos tanto en la presentación de candidaturas como en su participación en los señalados procesos (...)".

Por ende y en lo que interesa al sistema de elección parlamentaria, lo más relevante de dicha disposición estriba en que hay un mandato claro al legislador de quórum reforzado para que regule todo el sistema electoral y, en segundo lugar, se le impone realizar esa labor cumpliendo la obligación de respetar la plena igualdad entre independientes y militantes de partidos políticos, tanto en la presentación de candidaturas como en la participación en dicho proceso.

En relación con lo primero, tratándose de leyes orgánicas constitucionales, el quórum parlamentario requerido, para su modificación, es de cuatro séptimos de los diputados y senadores en ejercicio, de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 66 inciso segundo de la Carta Fundamental, debiendo someterse, obligatoriamente, a control preventivo del Tribunal Constitucional, según su artículo 93 inciso primero N°1.

Sin embargo, en este caso, cabe considerar lo dispuesto en la décimo tercera disposición transitoria, al tenor de la cual, las modificaciones a la Ley Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios que digan relación con el número de senadores, las circunscripciones existentes y el sistema electoral vigente, requerirán del voto conforme de las tres quintas partes de los diputados y senadores en ejercicio.

En segundo lugar, destacó que deben considerarse otras disposiciones constitucionales que contribuyen a completar el conjunto de normas contenidas en la Carta Fundamental que regulan las elecciones parlamentarias.

Así, lo dispuesto en el artículo 19 N° 15° inciso quinto, al tenor del cual: "Una ley orgánica constitucional establecerá un sistema de elecciones primarias que podrá ser utilizado por dichos partidos para la nominación de candidatos a cargos de elección popular, cuyos resultados serán vinculantes para estas colectividades, salvo las excepciones que establezca 1° dicha ley. Aquellos que no resulten elegidos en las elecciones primarias no podrán ser candidatos, en esa elección, al respectivo cargo".

Por su parte, expresó que se debe considerar lo dispuesto en los artículos 47 y 49 de la Constitución. El primero de ellos señala en su inciso 1°, que la Cámara de Diputados está integrada por miembros elegidos en votación directa que durarán cuatro años en sus cargos. La ley orgánica constitucional respectiva establecerá el número de diputados, los distritos y la forma de elección.

El artículo 49, esta vez referido al Senado, estipula que éste se compone de miembros elegidos en votación directa por circunscripciones senatoriales, en consideración a las regiones del país, cada una de las cuales constituirá, a lo menos, una circunscripción. La ley orgánica constitucional respectiva determinará el número de senadores, las circunscripciones senatoriales y la forma de su elección. Los senadores duran ocho años y se renuevan alternadamente, conforme determine aquella ley.

Finalmente, indicó que se deben tener en cuenta algunas normas constitucionales adicionales:

Primera, que, de acuerdo al artículo 51 inciso segundo, las elecciones de diputados y senadores deben realizarse conjuntamente y que los parlamentarios pueden ser reelegidos. Pero, conforme al artículo 26, las elecciones se deben realizar el mismo día en que se lleve a cabo la primera o única vuelta para elegir también al Presidente de la República, el tercer domingo de noviembre del año anterior a aquel en que deba cesar en el cargo el Jefe del Estado que esté en funciones.

Segunda, no proceden elecciones complementarias, de acuerdo al inciso final de aquel artículo 51; y

Tercera, que el escrutinio general y la calificación de las elecciones parlamentarias corresponde al Tribunal Calificador de Elecciones, al tenor del artículo 95.

Manifestó que el principio rector más importante de nuestro sistema electoral que, a pesar de todas las enmiendas constitucionales que han incidido en materia electoral, no ha sido jamás modificado, consiste en la plena igualdad, es decir, en la consecución de la isonomía absoluta entre militantes de partidos políticos e independientes, de tal manera que el legislador no puede trazar diferencia alguna entre unos y otros.

Por ello, estimó que es inconstitucional, por ejemplo, que los independientes no puedan pactar con otros candidatos de la misma naturaleza, sino sólo con partidos políticos, o la ventaja que representa que los partidos puedan presentar el doble de candidatos que los cargos a elegir.

Por otra parte, conforme también al principio de igualdad, consideró inconstitucional el nuevo artículo 24 transitorio, que permite una diferencia injustificada entre las regiones impares frente a las pares y Metropolitana, provocando que, hasta 2021, el Senado completo no quede integrado en conformidad con la ley, pues estas últimas sólo completarán el número de elegidos en esa fecha.

En 2017, en consecuencia, deberían elegirse todos los senadores que propone la reforma por las regiones impares y también aquellos "nuevos senadores" de las pares y Metropolitana, debiendo durar estos últimos, por esa única vez, cuatro años en sus cargos.

Asimismo, el artículo 179 bis nuevo autoriza al Servicio Electoral para actualizar, cada 12 años, la asignación de los 155 escaños de diputados. Al respecto señaló que dicha habilitación sólo se considerará ajustada a la Constitución si se sigue la jurisprudencia contenida en los considerandos 15° a 19° de la sentencia pronunciada por el Tribunal Constitucional el 20 de noviembre de 2012, Rol N° 2.324 3. Con todo, será inconstitucional si se persevera en la línea jurisprudencial iniciada con el considerando tercero de la sentencia pronunciada el 5 de abril de 1988, rol N°53.

En segundo lugar, afirmó que la actualización debe hacerse considerando la totalidad de la población en cada distrito y no sólo los electores, a fin de evitar distorsiones artificiales mediante el "acarreo" de ciudadanos, para lo cual tiene que considerarse el último censo de población.

En cuanto a la regla de género, sostuvo que el proyecto propone intercalar un inciso cuarto nuevo, en el artículo 3° bis de la ley: "En la declaración de candidaturas de cada partido, haya o no pactado, ningún género podrá superar el 60% del total de candidaturas presentadas. La infracción a lo señalado precedentemente, en atención a lo dispuesto en el artículo 2° de la presente ley, acarreará el rechazo de todas las candidaturas del partido que no hayan cumplido con este requisito".

Dicha norma se complementa con lo dispuesto en el artículo segundo transitorio, conforme al cual: "Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y solo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hubieren sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a que ellas pertenecieren, tendrán derecho, por cada una de ellas, a un monto adicional para efectos de reembolso de hasta 500 unidades de fomento".

Aseveró que resulta muy útil la norma transitoria, porque aclara que la alusión al “género” contenida en el nuevo inciso cuarto es a “hombres” y “mujeres”.

Con todo, estimó inconstitucional una norma de esta naturaleza. La posibilidad de fijar cuotas mínimas a las representantes del sexo femenino o máximas a los del masculino en el acceso a los cargos públicos es inconstitucional, en virtud de lo dispuesto en el artículo 19 N°16 inciso tercero de la Carta Fundamental.

En efecto, los cargos públicos, sean o no de elección popular, son un trabajo, puesto que se trata de actividades remunerativas lícitas, salvo en el caso de las labores que se desempeñan ad honorem. De manera que, por ejemplo, el oficio parlamentario o el cargo de Ministro o Subsecretario de Estado y, desde luego, el de Presidente de la República, son trabajos que se encuentran, entre otros preceptos, regidos por el artículo 19° N° 16° inciso tercero de la Constitución, ya que ellos no constituyen un pasatiempo, diversión o entretenimiento.

Por ende, respecto de los cargos públicos, sean o no de elección popular, queda prohibido discriminar, salvo por idoneidad y capacidad -la cual será calificada por el pueblo en la elección o por la autoridad competente en la designación- o conforme a la exigencia de nacionalidad chilena o límites de edad que, para determinados casos, pueda imponer la Constitución o la ley.

Además y a mayor abundamiento, en el caso de los cargos de elección popular, la Carta Fundamental proscribe toda forma de discriminación cuando obliga a la ley respectiva a garantizar la plena igualdad entre los independientes y los miembros de partidos políticos, con lo cual la isonomía al interior de uno y otro grupo, con mayor razón, también habrá de ser completa.

Añadió que en el contexto de la adecuada autonomía que la Constitución les reconoce como grupos intermedios, es posible que el estatuto interno de un partido político contemple normas de diferenciación inversa, siempre y cuando se ajusten a la Constitución y a la ley orgánica constitucional respectiva en relación con las labores allí desempeñadas que no sean remuneradas y, por ende, que no constituyan trabajo, en el sentido dispuesto por el artículo 19 N° 16 de la Carta Fundamental.

Para que la fijación de cuotas, al interior de un partido político o de cualquier otro grupo intermedio, se ajuste a la Constitución, debe ser autorizada por la ley, ya que la reserva incide en el ejercicio de derechos fundamentales. Al respecto recordó que dicha ley, en el caso de los partidos, es de rango orgánico constitucional, conforme al artículo 19° No 15° inciso quinto de la Carta Fundamental. Una vez autorizado por la ley, el estatuto respectivo puede aplicar esa normativa legal, detallándola y complementándola debidamente, en ejercicio de la adecuada autonomía que la Carta Fundamental reconoce y asegura a los grupos intermedios.

En consecuencia, consideró que resulta inconstitucional reservar cuotas respecto de los cargos públicos, sean o no de elección popular. Con todo, respecto de los puestos directivos al interior de los partidos políticos u otros grupos intermedios, que no sean constitutivos de trabajo, es posible establecer dicha reserva, incluso por razón de sexo, si así lo autoriza la ley orgánica constitucional respectiva.

Por otra parte, el proyecto de ley señala, como fuente de los recursos para financiarlo, en su artículo 3°, los ya contemplados en la Ley de Presupuesto para la partida 02 Congreso Nacional. Sin embargo, tratándose de su artículo 2°, o sea, el ya referido monto adicional por mujer electa, se dispone que "… se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la ley de presupuesto respectiva". Sobre el particular manifestó que dicho precepto es inconstitucional conforme a lo dispuesto en el inciso 4° del artículo 67 de la Carta Fundamental que señala que "No podrá el Congreso aprobar ningún nuevo gasto con cargo a los fondos de la Nación sin que se indiquen, al mismo tiempo, las fuentes de recursos necesarios para atender dicho gasto'.

En otras palabras, no basta para cumplir el estándar requerido por la Constitución con indicar que, en otra oportunidad, se establecerán los recursos en la ley de presupuestos, sino que es necesario señalar, con precisión, la fuente de donde ellos provendrán (artículo 24 de la ley orgánica del Congreso Nacional), ahora, en el proyecto de ley sobre reforma al sistema electoral.

Al respecto, el Tribunal Constitucional ha resuelto que: "Que, de acuerdo con la ya transcrita norma del artículo 64 de la Constitución Política, para que el Congreso Nacional pueda pronunciarse sobre un gasto no previsto debe, "al mismo tiempo', esto es, en el mismo acto de su aprobación, "indicar" las fuentes de recursos necesarios para atenderlo".

Expresó que la mayor ventaja del mecanismo binominal hoy vigente, consiste en tender a la conformación de grandes coaliciones de partidos, evitándose la actuación aislada asociada al multipartidismo, que fue considerada una de las causas de la crisis institucional que terminó con el quiebre del régimen democrático en 1973.

Ello, sin obstaculizar la ejecución de su programa por el gobierno, con respeto de las minorías, pues se torna imperativo buscar el acuerdo y generar consensos, al menos, en las cuestiones consideradas fundamentales por el régimen jurídico en vigor, lo cual se comprueba por la exigencia de quórums especialmente altos para reformar la Constitución y aprobar o modificar las leyes interpretativas de aquélla y también las leyes orgánicas constitucionales.

Por su parte, indicó que los defensores de los sistemas proporcionales sostienen que éstos se avienen mejor con la realidad multipartidista de Chile, donde el mecanismo binominal obliga a alianzas que no son siempre deseadas por convicción, sino efectuadas por conveniencia electoral. Además, sostienen que refleja de manera más fiel el pluralismo imperante en nuestra realidad y, por ello, es más coherente con el principio democrático de la representación popular. Por ende, se sostiene que el sistema binominal sobre representa a algunos y beneficia sólo a las dos coaliciones mayores, provocando la exclusión del Parlamento de grupos o partidos que, teniendo alguna relevancia en las preferencias del electorado, no integran alguna de aquellas dos alianzas políticas mayores.

Manifestó que en lo personal rescataba lo útil que ha resultado el sistema hoy vigente para coadyuvar a que la transición política en Chile se llevara a cabo como ocurrió, es decir, pacíficamente, sobre la base de los acuerdos y poniendo a las fuerzas políticas en la necesidad de contribuir a ese proceso desde el Parlamento.

Sostuvo que resulta indudable y esto no es monopolio de ningún sistema electoral, que, transcurridos más de veinte años de vigencia del nuestro, con un régimen de partidos políticos y coaliciones, prácticamente sin cambios, y con un padrón electoral congelado, hasta las últimas elecciones municipal, presidencial y parlamentaria, gracias al sistema de inscripción automática y voto voluntario, se ha vuelto un mecanismo extraordinariamente predecible.

Añadió que si a ello se agrega que, como consecuencia inevitable de aquella predictibilidad, van apareciendo y se repiten algunas prácticas que afianzan todavía más la falta de sorpresa y competencia, inherente también a todo sistema electoral, tales como las listas de candidato único; los postulantes que no realizan esfuerzo alguno, pues se saben derrotados; las negociaciones partidistas con escasa participación de sus militantes; y la discriminación de que son objeto los candidatos independientes, entonces, se va focalizando la visión negativa el sistema, quedando sus aspectos positivos en desventaja.

En esta línea de pensamiento, destacó que resulta claro que, en parte por la naturaleza del sistema y, en otro tanto, por aquellas prácticas reprochables, el más severo cuestionamiento se vincula con su falta de representatividad.

Con todo, estimó necesario convenir que ésta, más que una crítica al sistema electoral, alcanza a todo el sistema político y, aún, lo trasciende, imputándose a otras actividades públicas e, incluso, privadas de relevancia para el interés general.

Por ello, la sola modificación del sistema electoral para elegir senadores y diputados, sea perfeccionando el existente o, más todavía, cambiándolo por uno nuevo, no será suficiente para superar ese reproche y otros que se formulan a la actividad política en general, y al desempeño parlamentario en particular.

A vía de ejemplo señaló que resulta necesario que el procedimiento de primarias sea real y lealmente utilizado, implementándolo con carácter obligatorio. Asimismo, estimó preciso introducir mecanismos de democracia semidirecta, como la iniciativa popular de ley, el referéndum y la revocatoria; legislar para que, al menos, el estándar hoy vigente para los funcionarios de la Administración Pública, en materias de probidad y transparencia, sea también aplicado a los diputados y senadores. Por último, señaló que se debe pensar en controles heterónomos respecto del control del uso de recursos públicos por los parlamentarios y por el Congreso Nacional, garantizando siempre, obviamente, la autonomía de esta institución, cuya legitimidad arranca directamente de la votación popular.

Sin cambios de esta naturaleza y otros semejantes, la sola modificación del sistema electoral será insuficiente.

En relación precisa con la eventual reforma del sistema electoral, dado el amplio margen con que los ha dotado la Constitución, que -en abstracto, sólo les impone respetar la plena igualdad entre militantes de partidos e independientes y define pocas reglas específicas para la selección de los parlamentarios, sin definir un sistema determinado, consideró más útil fijar un criterio: Avanzar en términos progresivos, sea que se vaya hacia un modelo diametralmente distinto, de corte proporcional, o que se perfeccione el actual.

Concretamente, estimó interesante la estructura que propuso, en su momento, el entonces diputado Asencio que, manteniendo la actual estructura, admite que una porción de la Cámara de Diputados elegida conforme a criterios de proporcionalidad, o avanzar paulatinamente con la implementación de un nuevo sistema de mayor proporcionalidad en la Cámara, sobre la base de la población y, en cambio, para el Senado dividir cada una de las regiones del país en tres circunscripciones eligiendo al candidato que obtenga más votos, de tal manera que todas las regiones queden igualmente representadas en la Cámara Alta, pues todas ellas contribuyen igual a Chile. Finalmente, debe crearse un distrito en que se agrupen los chilenos que votan en el extranjero para que elijan un diputado, excluyéndolo del distrito con menos población de entre los demás.

El señor Mauricio Morales, cientista político y profesor de la Facultad de Ciencias Sociales e Historia de la Universidad Diego Portales, aclaró que el sistema electoral binominal, por fórmula de cálculo, pertenece a la familia de los sistemas electorales proporcionales, siendo el menos proporcional de todos.

Manifestó que toda reforma electoral debe garantizar tres cuestiones básicas: estabilidad política, representación y competencia. Sostuvo que el proyecto avanza en la dirección correcta al entregar mayor proporcionalidad a los resultados y, probablemente, mayor igualdad del voto.

Añadió que en la literatura politológica de los noventa, se pensaba que los presidencialismos eran causantes de las crisis políticas y de la caída de la democracia. Sin embargo, de 2000 en adelante, se descubrió que tanto los sistemas presidenciales como los parlamentarios tenían, exactamente, las mismas probabilidades de caídas. No es efectivo que el presidencialismo genere causas para provocar crisis en la democracia, sino, por el contrario, los países inestables adoptaron el presidencialismo, en consecuencia, no es cierto que el tipo de sistema o de régimen cause inestabilidad.

Expresó que los principales puntos de discusión que se han generado a partir de esta iniciativa dicen relación con los subpactos entre partidos; con la regla M x 2 o N x 2; los sistemas de suplencia y la ley de financiamiento de partidos.

Respecto de la reelección de los legisladores indicó que hoy son 103 los que serían reelectos con el nuevo sistema.

En relación con el gasto en campaña hizo presente que la aprobación del voto voluntario produjo una baja en la participación de la ciudadanía. Se pasó del 84 por ciento de la población en edad de votar en 1989, al 42 por ciento. Por lo tanto, si hay menos votos, existirá menos reembolso. En consecuencia, concluyó que si se mantiene esta combinación, la política se va a seguir oligarquizando.

Por otro lado, destacó que en todo sistema proporcional se compite con el compañero de lista. Sin embargo, en el sistema binominal ello es más visible.

También se ha sostenido que a mayor magnitud de distrito, es decir, al aumentar el número de diputados a elegir por distrito, disminuyen las exigencias. Si con el sistema binominal se requería el 33,3 periódico más un voto para asegurar un escaño, con ocho, se necesitará, aproximadamente, 11,11.

Afirmó que se ha dicho reiteradamente que los sistemas de mayoría generan mejores democracias y mejor desarrollo humano. Al respecto indicó que junto al Observatorio Electoral de la Universidad Diego Portales recopilaron información de más de 100 o 120 países del mundo, llegando a la conclusión estadística de que aquellos que adoptan sistemas proporcionales tienen, incluso, mayores niveles de desarrollo humano: Finlandia, Holanda, Noruega. Hay quienes podrían sostener que los presidencialismos de mayoría funcionan mucho mejor: Malawi, Ruanda, Botswana, Mali, son ejemplo de ello. Sin embargo, la democracia funciona mal. Reiteró que no existe una relación tan directa entre el tipo de sistema electoral, la calidad de la democracia y el desarrollo económico o humano de esa democracia. Al respeto expuso la siguiente lámina:

Añadió que hoy la Nueva Mayoría, que está impulsando la reforma tiene una desproporción de 8,4 puntos. Es decir, con el 47,59 por ciento, la Nueva Mayoría adquirió el 55,8 por ciento de los escaños, y la Alanza, con una desproporción mucho más baja, también se está beneficiando del sistema, según se aprecia en la siguiente lámina:

El problema que presenta el actual sistema dice relación con la marginación de las terceras listas, que tienen un nivel de desproporcionalidad negativo bastante evidente.

Respecto del número de candidatos, indicó que en el caso de los diputados el promedio alcanza a 415 y en el de los senadores, llega a 92 y 93 candidatos.

En relación con los criterios para definir el número de candidatos, expresó que existen tres alternativas. Primero, el número de candidatos va a ser igual a M (es decir, el número de diputados o senadores a elegir); Segundo, Mx2 (es decir, duplicar el número de candidatos). Tercero, M+2 (es decir, colocar un techo a la proliferación de candidatos).

Sostuvo que es posible concluir que si se utiliza la fórmula Mx2, desaparecen las primarias, porque no tendría sentido hacerlas. Añadió que se podría establecer una fórmula alternativa, por ejemplo, en los distritos pequeños que reparten dos senadores y tres o cuatro diputados usar la fórmula Mx2. En lo distritos o circunscripciones más grandes se podría utilizar la fórmula M+2, o bien recurrir a algún mecanismo que no haga explotar el número de candidatos.

A continuación expuso la siguiente lámina referida al resultado de la elección de los Cores.

Cada punto es una circunscripción provincial para elegir Cores. Según se aprecia, a mayor número de candidatos a Core, mayor fue la votación nula y blanca. Es decir, que a mayor fragmentación, mayor desinformación para la gente cuando ingresa en la cámara secreta. Hay una relación positiva entre la fragmentación o el número de candidatos, y la votación nula y blanca, por una cuestión de costos de información.

Señaló que en un distrito que reparte ocho escaños podrían competir fácilmente 150 candidatos. Por ejemplo, el distrito 10 agrupa Santiago, Providencia, Ñuñoa, La Granja, San Joaquín y Macul y será parte de la circunscripción de la Región Metropolitana, que elige siete senadores. Fácilmente se podría llegar a 80 candidatos a diputados y, en el Senado, si se presentan cinco listas, se podría llegar a 70 candidatos, lo que en conjunto suman 150.

A todo lo anterior hay que agregar los potenciales candidatos a Core. En la última elección contabilizó 66 candidatos que, sumados a la cifra anterior, da como resultado más de 200 candidatos.

Manifestó que compartía la idea de duplicar el número de candidatos en los distritos pequeños, de modo de aumentar la oferta. Sin embargo, en los distritos grandes se debe buscar la forma de fijar un techo al número de candidatos. No es correcto que se compita con 200 candidatos.

Recalcó que es partidario del proyecto. Sin embargo, aclaró que le interesa que la democracia funcione bien.

Sugirió efectuar un cambio al calendario electoral. Propuso agrupar la elección de Presidente de la República, senadores y diputados. Respecto de los intendentes, alcaldes, cores y concejales, para evitar el exceso de fragmentación en el caso de cores y concejales, si serán elecciones concurrentes, propuso listas cerradas y bloqueadas.

Indicó que la respuesta automática del político a esta alternativa es la siguiente: es antidemocrática. Sin embargo, Uruguay y Costa Rica, que son los dos países que tienen mejor calidad de democracia en Latinoamérica, junto con Chile, aplican lista cerrada y bloqueada. Éste no es un predictor de inestabilidad, sino de todo lo contario: ordena. Por lo tanto, las primarias pueden ser utilizadas para que los electores decidan qué lugar va a ocupar cada candidato en la lista.

Ésta es una sugerencia difícil de aplicar en Chile, porque estamos acostumbrados al voto preferencial, es decir, al voto por candidato, no por lista. Sin embargo, si se desea empezar a abrir las puertas de la democracia, eligiendo intendentes, alcaldes, cores, concejales, Presidente, senadores y diputados, la fragmentación podría perjudicar. Con poca gente votando y aumentando los costos de información, no solo aumenta la desafección, sino también aumentará la votación nula y blanca.

Afirmó que en un modelo estadístico, en un trabajo con comunas y circunscripciones provinciales, la votación nula y blanca explota en las circunscripciones provinciales con preeminencia de población rural. Ello significa que se está sesgando socioeconómicamente el voto. Está demostrado que las comunas ricas votaron más que las comunas pobres.

Por otra parte, manifestó que la reforma que se propone corrige sustantivamente la igualdad del voto. Sin embargo, sostuvo que aún existe un problema en la Región Metropolitana, porque está subrepresentada en 8,6 puntos. Representa el 38/39 por ciento de la población y se le asigna una porción muy inferior en porcentaje de escaños.

A continuación expuso la siguiente lámina:

La línea roja corresponde a lo que se llama malapportionment, es decir, la diferencia entre el porcentaje de población por distrito y el porcentaje de escaños que se le asigna a cada distrito. La línea azul corresponde a la situación actual.

Explicó que esta situación se corrige con el proyecto en discusión. Los distritos que estaban muy sobrerrepresentados –aquellos que están en azul- bajan sustantivamente, de manera razonable.

Añadió que en el siguiente gráfico se puede observar la población en edad de votar y el censo, por cada uno de los distritos.

Ambas variables están correlacionadas. Sin embargo, en los distritos más grandes, es decir, La Florida-Puente Alto Pudahuel-Maipú, hay una población sustantivamente mayor a lo que pronostica la población en edad de votar.

Compartió la opinión del profesor Fernández, en orden a que la asignación se debería hacer por habitantes. Sin embargo, si se hace por electores, el resultado será el mismo.

En las siguientes láminas señaló que se demuestra que el redistritaje no es “un traje a la medida”. Sin embargo, sí lo hubo al elaborar los distritos, después del plebiscito de 1988:

En las láminas se observa la votación por el sí y el tamaño de los distritos en términos de volumen población. Todos los distritos tenían dos escaños a repartir. A la opción “Si” en los distritos más grandes le fue peor; en los más pequeños, le fue mejor. Allí es donde se genera el problema de la sobrerepresentación.

Añadió que calculó el malapportionment distrital con el porcentaje de votos que obtuvo la Nueva Mayoría y resultó que no hay ninguna tendencia. El distrito 4 se escapa un poco de la norma. Sugirió disminuir el número de diputados que allí se eligen.

Por último, se refirió al gasto en campaña de todos los diputados elegidos y también de los que perdieron. Según las declaraciones el 53 por ciento de ese gasto corresponde a la Alianza, el 39 por ciento a la Nueva Mayoría. El gasto por voto recibido en la Alianza es de 3.591 pesos y en la Nueva Mayoría es de 2.292 pesos.

La siguiente lámina muestra los que más gastaron. Los 20 primeros son de la Alianza: Ernesto Silva, Felipe Kast, Nicolás Mönckeberg, Juan Antonio Coloma, Gustavo Hasbún, Jaime Bellolio, Ignacia Golborne, Joaquín Godoy, Javier Macaya y Mónica Zalaquett.

Concluyó que los que más gastan son los que tienen miedo. Si se hace el cálculo de acuerdo al resultado que obtuvieron, los incumbentes que perdieron pagaron 3.113 pesos por voto.

Respecto de la relación entre gasto y voto, indicó que a los desafiantes les rinde mucho el gasto, pues no son conocidos. Al incrementar el gasto van aumentando y van cosechando más rápido los votos. A los que el distrito ya conoce, por más recursos que se destinen, menor será el retorno. La recta, en el caso de los desafiantes es directa y en el caso de los incumbentes, es plana, muy pareja. El problema es que no se puede definir cuándo es el momento de frenar el gasto, porque es imposible saberlo.

Por género, se ha dicho que las mujeres siempre corren en desventaja, pero si uno observa la relación entre gasto y éxito, las mujeres tienen un comportamiento más o menos similar al de los hombres. Por eso, si se observa la tasa de nominación de mujeres, en promedio, desde 1989 en adelante, es 85/15 -85 hombres y 15 mujeres, la tasa de elegibilidad es 30 por ciento de hombres y 22 por ciento de mujeres. La magnitud de gasto es bastante similar entre hombres y mujeres. Por tanto, sostuvo que la solución no está en entregar a los partidos 500 unidades de fomento, sino en nivelar la cancha antes; es decir, al momento de la nominación.

Respecto de los subpactos, indicó que no debiesen existir dentro de las listas. Si el argumento apunta a aumentar la oferta, al hacer subpactos la estaría raleando. Si se desea aumentar la competencia, se tiene que apuntar a que todos “se rasquen con sus propias uñas” y presenten sus respectivos candidatos.

Además sugirió intentar mejorar el principio de “una persona-un voto”, pero sin dañar el mapa. Por ejemplo, el distrito que mencionó anteriormente efectivamente causa un problema.

En tercer lugar, expresó que se debe estudiar una propuesta de ley de financiamiento público de partidos.

Finalmente, respecto del artículo 179 bis, señaló que no sólo se generará un problema en términos de las atribuciones que se otorgan al Servicio Electoral para asignar los distritos, sino que, además, es probable que en doce años más se disminuyan los escaños asignados a regiones para trasladarlos a la Región Metropolitana.

Sugirió establecer límites para las regiones, con el fin de que no pierdan poder, pero el problema se va a mantener al interior de ellas, porque los distritos rurales van a tener que ceder escaños a los distritos urbanos por una cuestión de peso poblacional.

El diputado señor Auth manifestó que le asistía una duda respecto de la supuesta inconstitucionalidad por la desigualdad existente entre los independientes y los partidos. De ser tal, habría que declarar como inconstitucional todo lo ocurrido desde 1989 hasta esta fecha, puesto que los independientes compiten en desigualdad de condiciones con partidos que estructuran listas y, como se sabe, la ley define a cada independiente como una lista en sí misma. No puede ser inconstitucional aquello que, simplemente, repite algo que ya está consagrado y que ha operado durante todo este período.

Respecto de la inconstitucionalidad de la cuota, señaló que entendía el argumento de igualdad en el acceso a los cargos públicos, y la objeción constitucional si se tratara de cargos reservados para un sexo u otro. Con todo, aclaró que no es el cargo el reservado. Lo que está definido, simplemente, es la cuota de candidatos a dicho cargo.

En cuanto al derecho a voto de los chilenos en el exterior y la necesidad de crear un distrito que los agrupe y represente, señaló que si se les otorgaba el derecho a voto en las parlamentarias, que hoy no tienen, naturalmente, deberían ejercerlo respecto de ellos mismos en un distrito y circunscripción. Con todo, la ley que acaban de aprobar solo permite el voto de chilenos en el extranjero para las primarias presidenciales y en la elección presidencial.

Concordó con la proposición efectuada por el profesor Morales sobre los Cores y la necesidad de que sea lista cerrada.

Estimó positiva la propuesta del mismo profesor, en orden a limitar el número de candidatos en los distritos más grandes.

Sobre la relación dinero-elección, consideró indispensable establecer una norma que limite el gasto electoral, porque ya se multiplicó en un 50 por ciento por efecto de la inscripción automática. Con la aprobación de esta iniciativa crecería nuevamente, por lo que, a su juicio, debería disminuir el límite de gasto electoral de 0,03 UF a lo menos a la mitad, a 0,015 UF.

El diputado señor Chahin compartió la visión del diputado Auth, en cuanto a que en el tema de las cuotas no habría vicio alguno de constitucionalidad.

El profesor Fernández sostuvo que se debería garantizar la igualdad entre independientes y partidos. El profesor Morales señaló que no es partidario de los subpactos entre partidos, porque, de alguna manera, se distorsiona la proporcionalidad. Preguntó si es mejor que no existan los pactos, y no solo los subpactos. En ese escenario habría mayor igualdad entre partidos e independientes y no existiría el problema de M o N+2 o Nx2. Así se alcanzaría una verdadera proporcionalidad, porque cada uno de los partidos o los independientes, usando el lenguaje del profesor Morales, “se rascaría con sus propias uñas.”

El diputado señor Squella sostuvo que si uno de los efectos que busca el proyecto de ley es ampliar la cantidad de candidatos, a su parecer, con la propuesta se concentra y se disminuye a un puñado de personas.

En cuanto a la constitucionalidad de la cuota que se propone, solicitó que esta innovación se analice a la luz del artículo 13 de la Constitución Política, ya que por el hecho de ser ciudadano se otorga el derecho a sufragio, el derecho a optar a cargo de elección popular, sin establecer más requisitos. Recordó que en el pasado el Tribunal Constitucional no permitió que a través de la ley se exijan requisitos adicionales para ser candidatos.

Al inscribir las candidaturas en el Servicio Electoral es necesario cumplir con los requisitos exigidos. Uno de ellos sería cumplir con una cantidad determinada de postulantes según el género, en la plantilla que presenta. Entonces, a la luz del inciso segundo del artículo 13 de la Constitución Política, preguntó si habría algún rasgo de inconstitucionalidad en la propuesta.

Peguntó como se enmarca en nuestra Constitución la propuesta de otorgar una cuota determinada en el Parlamento a los pueblos originarios.

El profesor de Derecho Constitucional de la Pontificia Universidad Católica de Chile, señor Miguel Ángel Fernández señaló que ante la pregunta si son inconstitucionales las diferencias existentes en la legislación vigente entre militantes e independientes, afirmó que muchas de ellas si lo son. Es efectivo que hay diferencias que son inevitables por la naturaleza de pertenecer uno a un partido y el otro ser independiente. Si se está discutiendo esta iniciativa, estimó que se debe aprovechar para que esas diferencias al menos se estrechen. Una muy buena medida, aunque sea mínima, sería que puedan ir varios independientes con la misma sintonía en una lista única.

Respecto de la pregunta del diputado Chahin, sobre el tema de los pactos, señaló que no tenía clara la respuesta. Estimó que por definición no pueden eliminarse los pactos. Sostuvo que no es razonable, desde el punto de vista de las convergencias, de las negociaciones y de los acuerdos políticos, eliminar por ley los pactos. Es poco consistente con la posibilidad de admitirlos como elemento de acuerdo entre fuerzas políticas dentro del sistema político.

En estricto rigor, afirmó que parece mucho más consistente que no los haya. Sin embargo, ello provocará, probablemente, que cada partido tenga el doble de candidatos, con lo cual la afectación de los independientes, que es el punto de partida, será mucho mayor.

Sostuvo que el tema de los pactos representa un reconocimiento de la posibilidad de forjar acuerdos. Por ejemplo, hizo presente que consideraba más razonable tener sistemas electorales que tiendan más bien a la formación de dos grandes coaliciones que al multipartidismo. No los eliminaría por esas otras razones, aunque provoque impacto en lo otro.

Respecto de las cuotas, expresó que desde el punto de vista de la estructura constitucional, focalizando el tema en el ámbito del acceso a la función, al trabajo, lo que la Constitución protege no es el trabajo en sí mismo, sino que es precisamente el acceso. Son los caminos de ingreso, en este caso, a la tarea pública o a una contratación privada o lo que fuere. El ejemplo más típico es la libertad de expresión. La Constitución no garantiza el momento en que uno se está expresando, sino que garantiza que no existan obstáculos previos al ejercicio de esa libertad. El ejemplo es el de la censura previa.

En materia de libertad de trabajo ocurre lo mismo. Si se ponen barreras, requisitos o reglas de entrada al sistema se provocará el efecto de disminuir el acceso. Es efectivo que no hay un cuoteo en términos de que el 25 por ciento de la representación parlamentaria deban ser mujeres, pero el hecho de que exista un régimen de cuotas en la presentación de los candidatos es lo que resulta inconsistente con la Constitución, si lo que se está garantizando es que no existan barreras de entrada o reglas artificiales, que terminen provocando un efecto no deseado o no buscado desde el punto de vista del acceso.

El diputado señor Saffirio sostuvo que lo que el proyecto consagra es que ningún género pueda superar el 60 por ciento. Por tanto, afirmó que mantiene ciertas dudas respecto del argumento esgrimido por el profesor Fernández.

El profesor de Derecho Constitucional de la Pontificia Universidad Católica de Chile, señor Miguel Ángel Fernández, reconoció que el mensaje tiene una sutileza que es interesante. Con todo, consideró que igualmente esa regla de inclusión o de exclusión, depende de cómo se mire, puede entorpecer o afectar la regulación de la garantía constitucional antes señalada.

Respecto de la consulta formulada por el diputado Squella, en cuanto a lo dispuesto en el artículo 13 de la Constitución, manifestó que desde luego, el tema se vincula con el artículo 19, número 17, que garantiza el acceso a las funciones y empleos públicos. La doctrina en ese punto está conteste que tal norma no se refiere sólo a la administración pública, sino que a todos los cargos. Por ello, se usa la expresión funciones y empleos. Dentro de las funciones están las constitucionales, como la parlamentaria.

Tal norma establece que para acceder a las funciones y empleos públicos sólo se deberán cumplir los requisitos que establezca la Constitución y las leyes, de tal manera que se podría contraargumentar que la ley está habilitada -en este caso orgánica constitucional- para señalar los requisitos para acceder a la función parlamentaria. Un requisito es el de la inscripción de la candidatura y la aceptación por parte del Servicio Electoral. Lo que estaría haciendo la ley es fijar una condición a los partidos políticos respecto de sus listas de inscripción. Incluso, el proyecto plantea un período de corrección en el evento que sea rechazada por no cumplir con los porcentajes máximos o mínimos.

Añadió que no se exigen otros requisitos a los candidatos que los que dispone la Constitución. Lo que hace el proyecto es establecer una regla de carga o de obligación de cumplimiento de las listas, por parte de los partidos políticos. En virtud de lo expuesto, estimó más fuerte el argumento de inconstitucionalidad del acceso al trabajo que el que podría argüirse utilizando como fundamento el artículo 13.

El señor Mauricio Morales, cientista político y profesor de la Facultad de Ciencias Sociales e Historia de la Universidad Diego Portales, sostuvo que existen dos tipos de desafección: una contingente y una estructural. La desafección contingente obedecería fundamentalmente a cuestiones de costos. Antes existía el costo por inscribirse; ahora, el costo es por votar.

Indicó que es efectivo que hay personas que tienen su domicilio en el extremo opuesto al lugar de votación de la comuna y, por lo tanto, la georreferenciación de los locales de votación, en conjunto con el domicilio, puede ser una medida adecuada, pero ello no va a corregir el problema de fondo. Hizo presente que hay una desafección estructural que requiere otro tipo de tratamiento.

Respecto de las cuotas, señaló que éstas funcionan mucho mejor en sistemas electorales de lista cerrada y bloqueada, donde los partidos colocan el orden de las candidaturas, y la ley los obliga a establecer a algunas mujeres en los primeros lugares de ese ranking. Funcionan de manera más compleja en los sistemas de lista abierta, porque no hay ningún constreñimiento creíble para los partidos, salvo que se establezca un bono económico.

En relación a la pregunta del diputado Chahin referida a los pactos y subpactos, sostuvo que eliminar los pactos podría traer más fragmentación, desinformación y obligaría a las coaliciones a armarse después de la elección, lo que podría ser muy tortuoso. Añadió que el costo por negociación podría ser mucho más alto.

Reiteró que si bien es cierto que el sistema binominal constriñe la competencia, el problema que se puede presentar es que utilizar la fórmula del Mx2 parejo puede llevar al otro extremo, es decir, a la proliferación.

En cuanto a los independientes fuera de pacto, señaló que una ley no podría obligar a un independiente a sumar con otro, es decir, un independiente de Derecha no debería sumar sus votos con un independiente de Izquierda.

Manifestó que no cree que el problema de un independiente sea competir versus 16 candidatos, si hoy lo están haciendo frente a un partido político completo con el sistema binominal. Si se presenta un independiente fuera de pacto éste conoce las condiciones. Si no desea enfrentarlas, deberá entrar a alguna coalición como independiente dentro de la lista.

Respecto de la reelección, indicó que por principio está en contra de limitarla, porque hacerlo supone que en el último período los legisladores no van a tener mucho incentivo para funcionar como tales, porque saben que se les va a acabar su fuente laboral. Añadió que limitar la reelección, adicionalmente, trae otro problema: produce legislaturas muy novatas, como ocurre en Costa Rica. En México hoy se avanza hacia la reelección tanto de diputados como de senadores.

Por último, destacó que existe un argumento alternativo respecto del hecho de asociar el sistema binominal con estabilidad o suponer que el binominal es causa de estabilidad. Ésta no se logra necesariamente con un determinado sistema electoral, sino que depende de la madurez de la clase política.

El diputado señor Ceroni señaló que en un informe de la Cepal se sostiene que si nada se hiciera en materia de fomento de la participación de la mujer en política, un cierto equilibrio se produciría en 40 años más. Desde ese punto vista, la normativa legal tiene por objeto acelerar estos procesos, porque si se espera que se produzcan en forma espontánea los cambios culturales, éstos nunca se producirán.

Preguntó qué alternativas existen para provocar el mismo efecto de las cuotas, sin que tal solución sea vista como una norma inconstitucional.

La diputada señora Turres, doña Marisol, señaló que el electorado desea tener más cerca a su parlamentario, lo que se complica si se aumenta el tamaño de los distritos.

Teóricamente, podría afirmarse que el trabajo parlamentario debiera concentrarse más en legislar. Sin embargo, por más que traten que las personas lo perciban de esa forma, ello no ocurre en la práctica. La gente quiere a sus alcaldes, concejales y parlamentarios lo más cerca posible para ser oídos.

Distritos tan grandes perjudican a las localidades y comunas más pequeñas, porque los parlamentarios van a destinar más tiempo a las comunas más grandes.

Respecto de la participación de las mujeres en política, sostuvo que lo bajo de ésta se explica por su disminuida participación en el mundo laboral y por un tema cultural.

Indicó que durante muchos años estuvo en contra de fijar cuotas por ley. Sin embargo, llegó a la convicción que a veces los cambios culturales hay que forzarlos un poco. A vía de ejemplo citó lo ocurrido con la ley del Tabaco. Un porcentaje de fumadores en nuestro país estaba furioso cuando se dictó la ley que prohíbe fumar en espacios públicos y privados. Sin embargo, hoy ellos ya no alegan, sino que apagan su cigarro antes de ingresar a un local, o bien, fuman fuera de los hogares, de los restaurantes, de los pubs, etcétera.

Preguntó cómo incentivar la participación de la mujer.

El profesor de Derecho Constitucional de la Pontificia Universidad Católica de Chile, señor Miguel Ángel Fernández señaló que a través de los partidos políticos y desde el punto de vista de su institucionalidad interna, el legislador sí podría establecer reglas que incentivaran o provocaran la participación de la mujer al interior de los partidos.

Sostuvo que se debe procurar incentivar su participación a través de la reforma de la ley de Partidos Políticos, incluso, tal vez fijando cuotas a nivel de los órganos de integración de la colectividad, de tal manera de relevar la presencia de la mujer dentro de los partidos, lo cual provoca o ayuda a su participación como candidata en las respectivas listas.

El señor Morales afirmó que si se analiza las cuotas en América Latina, en general, el porcentaje de mujeres aumenta en aquellos países que utilizan cuotas comparados con los que no las utilizan. En los países europeos la democracia es más avanzada, el proceso de integración de la mujer ha obedecido no a las instituciones electorales que se establecen, sino que al proceso de desarrollo normal que tiene este tipo de países.

Añadió que existe una hipótesis en orden a que en los países en que las mujeres participaron más activamente y de manera organizada en las transiciones a la democracia tienen mayor representación femenina que aquellos donde éstas fueron menos relevantes.

Por otra parte, hizo presente que esta legislatura es la que tiene la renovación más baja desde 1993 en adelante. Se renovaron 41. Se venía renovando a tasas de 50, en 1993 y 1997, luego se bajó a 45 o 44, para subir posteriormente a 47. Por lo tanto, ésta ha sido la más baja.

Respecto del tamaño de los distritos, señaló que tiene razón la diputada Turres cuando afirma que existirán distritos muchísimos más grandes en comparación con los que hay en el binominal. Sin embargo, recordó que cuando Mario Palestro fue diputado por San Miguel tenía que recorrer todo el distrito hacia la cordillera, en ese tiempo con menor población, pero territorialmente muy similar. Reiteró que es efectivo que habrá megadistritos; sin embargo, resulta discutible que la cercanía con el elector disminuya, porque en distritos grandes, donde existan ocho diputados, será posible tener todavía una cercanía razonable.

El diputado señor Squella expresó que el proyecto, en términos generales, favorece fuertemente la reelección de los incumbentes. Si es que se extrapola el redistritaje con la distribución de los escaños adicionales, de 120 saldrían electos 103. Añadió que se favorece también la sobrerrepresentación de las listas grandes versus las chicas.

Uno de los grandes temas que se cuestiona al binominal es la posibilidad de que salgan personas electas, sin tener los votos de las dos primeras mayorías, algo que resulta evidente y obedece a la lógica de listas. Al respeto preguntó si con el proyecto de ley en discusión ello se incrementa o se reduce.

El señor Mauricio Morales, cientista político y profesor de la Facultad de Ciencias Sociales e Historia de la Universidad Diego Portales, señaló que naturalmente habrá diputados electos con menor porcentaje de votos, porque a la octava cifra, es decir, el octavo electo, lo hará con una porción de votos más baja. Sin embargo, como el sistema primero reparte por lista, después por subpacto y finalmente por candidato, de todas maneras parece representar el principio de mayoría. Hizo presente que en el caso de los concejales, en la actualidad hay algunos electos con el 0,5 por ciento de los votos. Recalcó que ello no significa un problema de representatividad para la democracia, porque el primer criterio de representación para estos sistemas electorales proporcionales son las listas, el segundo, los partidos y, tercero, los candidatos.

Explicó que distinta sería la situación si se aplicara el sistema electoral que utilizó Chile entre 1874 y 1925, a saber, el de voto acumulativo, en el cual todos los partidos llevaban sus candidatos y eran electos, los más votados, o sea, los cinco primeros. Destacó que ello genera un problema de coordinación brutal para los partidos políticos. Entre otras cosas, por este motivo en 1925 se avanzó hacia a un sistema proporcional.

Manifestó que el tener candidatos con poco porcentaje de votos no es un problema en sí. Por ejemplo, don Patricio Aylwin fue electo por el 45,2 y Michelle Bachelet por el 25,5 por ciento de la población en edad de votar.

Recalcó que esta Comisión tiene el mandato y la obligación, no solo de estudiar los cambios al sistema electoral, sino también mejorar el régimen electoral, es decir, estimular la participación ciudadana. La georeferenciación que va a hacer el Servicio Electoral es una medida razonable, tal como la locomoción gratuita. Sin embargo, tales medidas no corregirán el problema de fondo. Existe una desafección estructural que no tiene una solución contingente, por ahora.

El diputado señor Auth aseveró que resulta efectivo que podrían ser electas personas con pocos votos, pero lo que también es evidente es que nadie con muchos votos quedará marginado como ocurre en el sistema binominal. Es decir, nadie con 25, 27 o 30 por ciento de los votos, como ha ocurrido, quedará fuera porque en un distrito de 7 u 8 diputados, es imposible que alguien con votos personales superiores al 10 por ciento quede marginado. Podrán ser electos candidatos con pocos votos, pero no quedarán fuera candidatos con grandes votaciones, que es lo que ocurre hoy.

El diputado señor Soto expresó que en el sistema uninominal que promueve la UDI la exclusión es todavía más manifiesta, porque en ese caso solo entra la primera mayoría y quedan todas las demás fuera. Claramente, en esta situación no existe ninguna garantía de que las votaciones altas importantes sean electas, porque se elige solo uno. Incluso, si se hace un análisis de las votaciones de la última elección en la Región Metropolitana los absurdos son increíbles. De 16 distritos de la Región Metropolitana, 12 habrían elegido a candidatos solo de la Nueva Mayoría y solo 2 de la Alianza. Sin duda, ello no corresponde a las proporciones que hay, en general, en el país. Las distorsiones que se pueden producir con un sistema uninominal parecen ser mayores que las del binominal.

El señor Mauricio Morales, cientista político y profesor de la Facultad de Ciencias Sociales e Historia de la Universidad Diego Portales, sostuvo que lo que se debe privilegiar en un sistema de partidos como el chileno son, precisamente, los partidos políticos. La legislación debe conducir al fortalecimiento de los partidos y no a seguir personalizando la política.

Hizo presente que le correspondió elaborar un trabajo sobre percepciones de corrupción en América Latina y sistemas electorales. Concluyó que los sistemas electorales del mundo que promueven la mayor personalización de la política, son los que generan mayores niveles de corrupción. Por ejemplo, en Brasil hay un distrito que elige 70 diputados, Sao Paulo, por lo que hay diputados con bajos porcentajes de votación, y como no los conoce nadie en el distrito resulta más probable que puedan tener prácticas corruptas.

Añadió que en países estables, hay distritos que eligen 40 diputados, pero lo hacen con listas cerradas y bloqueadas, que es una variación del sistema electoral proporcional.

La señora María Antonieta Saa expresó que se opone al sistema electoral binominal, al que considera perverso. Entre otras razones, porque permite que los candidatos elegidos permanezcan muchos años en sus cargos, lo que, finalmente, hace que lleguen a ser muy conocidos por sus electores y nuevamente reelegidos. A vía de ejemplo señaló que en las elecciones realizadas en su distrito ella era conocida en un 99 por ciento, mientras que su compañero de lista lo era solo en un 9 por ciento. En consecuencia, el sistema binominal da lugar a una competencia absolutamente desleal.

Hizo presente que existen 12 países con ley de cuota en América Latina. En Costa Rica, las mujeres tienen un 50 por ciento de participación en las candidaturas y son electas un 39 por ciento. En Argentina, la cuota es 30 por ciento y las electas alcanzan al 39 por ciento. En general, los países con cuotas tienen en promedio un 25,1 por ciento de elección de mujeres y los que no tienen cuota un 15 por ciento.

Añadió que el sistema binominal hace muy difícil la existencia de mujeres candidatas; porque solo contempla dos candidatos por coalición. Además destacó que la mayoría de las mujeres que acceden a ser candidatas y también algunos hombres; son seleccionadas porque tienen un pariente masculino con un apellido conocido. Por lo tanto, como ese nombre o apellido resuena en el electorado, lo más probable es que sean electas y tengan un rendimiento electoral positivo.

Recordó que las mujeres se incorporaron a la política en el siglo XX. Antes existía una división muy fuerte entre su trabajo y el de los hombres. A lo largo de la humanidad, en el mundo público, el género femenino no tenía participación. Este sistema de división de la labor de los hombres en el mundo público y de las mujeres en el privado, a cargo de la reproducción, hizo fijar roles muy rígidos entre ambos géneros, y se vio a estas últimas solo como reproductoras de la especie.

Recalcó que existe la convicción que ese es el espacio femenino y que, en cambio, el masculino es el de la política, la producción, las artes, etcétera. Sin embargo, el avance de la humanidad ha ido negando lo anterior, porque en la Revolución Industrial se necesitó la mano de obra femenina y en ese momento no importó el rol asignado a cada género, y las mujeres y los niños se incorporaron a las textiles, a un trabajo que era hiperexplotado.

Manifestó que en Chile a las mujeres les ha resultado difícil entrar en la política. A fines del siglo XIX, en San Felipe, un grupo de mujeres fueron a inscribirse a los registros electorales. Sin embargo, el encargado les dijo que no podían, porque la ley establecía que solo podían hacerlo los chilenos, no las chilenas.

Agregó que también les ha sido difícil ser ciudadanas. Ya la Revolución Francesa engañó a las mujeres con el lema Igualdad, Libertad y Fraternidad, ya que frater en latín significa hermano, y soror, hermana. O sea, la igualdad y la fraternidad era entre los hombres, y la libertad también.

Afirmó que siempre ha existido rebeldía de parte de las mujeres hacia este rol; lo que ha generado tremendas consecuencias. Al respecto recordó la Inquisición a fines de la Edad Media en la que, de acuerdo a algunos historiadores, murieron más de 2.000.000 de mujeres en dos siglos, porque se alejaban del citado rol. Se trataba de viudas o desamparadas que se iban a vivir a los bosques, inventaban medicinas, por lo que eran calificadas de brujas y quemadas.

A fines del siglo XIX en Chile ya se registran reclamos de las mujeres para participar en la política. Indicó que costó más de medio siglo llegar a ser ciudadanas. En 1919 hubo un partido de mujeres -por supuesto no legal- que pedía dicha calidad, lo que finalmente se consiguió en la década del 50. Por un lado, los sectores más conservadores se oponían porque con ello las mujeres abandonarían su rol principal. Por otra parte, la Izquierda se oponía a otorgarles el derecho a sufragio, porque votarían por la Derecha. Todas esas consideraciones hicieron que la mujer alcanzara el derecho a voto recién en 1949, e inscribirse en los registros electorales el año 1951.

Recordó que lo anterior, fue precedido de grandes movimientos: el Movimiento de Emancipación de las Mujeres Chilenas, Memch; la Federación Chilena de Instituciones Femeninas, Fechif, hubo marchas en la calle, y eventos que no están consignados en la historia, porque en ella solo se registran los acontecimientos públicos, por ende, los de los hombres. Señaló que en el colegio nunca le enseñaron que hubo rebeliones de mujeres para conquistar el derecho a voto.

Por otra parte, hizo presente que resulta difícil que las mujeres participen en política, ya que ésta tiene toda una lógica masculina: las horas de reunión, no hay jardines infantiles en los partidos para cuidar a los niños. Además en el imaginario cultural la política es de los hombres.

Añadió que en virtud de todo lo expuesto, para las mujeres resulta muy difícil ser elegidas como candidatas, sobre todo en el sistema binominal,

Puntualizó que gracias al empuje de la sociedad civil, en Chile hay mujeres en cargos muy destacados, como, por ejemplo, la Presidenta de la República. La ciudadanía fue el factor fundamental para que ella fuera candidata de la Concertación, en un primer momento, y luego de la Nueva Mayoría. Recordó también a Soledad Alvear y a Evelyn Matthei. Citó estudios que señalan que las mujeres son más elegibles que los varones.

Hizo presente que lo consagrado en el proyecto no constituye una ley de cuotas, sino una paridad, que protege tanto a hombres como a mujeres, ya que ellas nunca podrán ser más del 60 por ciento, así como ellos no serán menos del 40.

El diputado señor Squella señaló que efectivamente las mujeres tienen una tasa de elegibilidad más alta que los hombres. Afirmó que le ha correspondido formar parte de la comisión electoral de su partido. Cuando aparece una mujer dispuesta a ser candidata, todos tratan de que así ocurra, porque saben que tiene una tasa mayor de elegibilidad.

Por tanto, la traba para contar con mayor cantidad de representantes mujeres pasa por una decisión propia de ellas. Por ello, estimó que la disposición en comento no generará mucho impacto.

Los partidos políticos, al ver que no hay mujeres dispuestas a asumir la tarea de ser representantes o a ser candidatas, van a llenar con su RUT y les solicitarán su disposición para figurar en la papeleta únicamente para cumplir con el objetivo de inscribir la plantilla entera, pero posibilidades de elegibilidad sin hacer campaña no hay ninguna.

Añadió que la única alternativa es que ese artículo apunte, más que a las candidatas, a la elegibilidad. Esto es, que se asegure que un determinado porcentaje del Congreso sean mujeres, lo que sería inconstitucional.

Preguntó cómo corregir el tema de fondo, en orden a cambiar la cultura existente.

La diputada señora Turres, doña Marisol, señaló que la forma en que el proyecto aborda la participación de la mujer es absolutamente insuficiente.

Indicó que el temor que sienten muchas mujeres es que se llenen cupos solo con nombres, pero no necesariamente con espacios en los que haya posibilidad real de ganar. Dicho de otra forma, que con el objeto de dar cumplimiento a la ley se pongan los nombres de mujeres en algunos distritos o circunscripciones, sabiendo que, sea hombre o mujer, no hay posibilidad alguna de ganar.

Cuestionó que el proyecto solo incorpore la disposición en las elecciones parlamentarias y no en las municipales.

Hizo presente que el hecho que existan mujeres participando genera una suerte de ola. Es así como en su distrito existen cuatro comunas y la UDI tiene un concejal en cada una de esas cuatro comunas. Destacó que las cuatro son mujeres. Recalcó que ello no es casual.

Por otra parte, consideró un poco caricaturesco el bono que se paga por cada mujer electa. Sostuvo que sería deseable que efectivamente hubiera un apoyo especial en términos de incentivos monetarios a la mujer candidata.

La señora María Antonieta Saa señaló que no creía que los partidos sólo vayan a conseguirse el rut de mujeres, para que éstas finjan ser candidatas.

Sostuvo que esta medida que contempla el proyecto obligará a los partidos a hacer un esfuerzo de reclutar mujeres y de tratarlas bien. Por lo tanto, los partidos políticos debieran trabajar al respecto. Si no lo hacen, las mujeres también sabrán que hoy existe una posibilidad mayor de llegar a ser candidata. En consecuencia, podrá haber mayor empuje para llegar a serlo.

Compartió la observación de la diputada Turres, en orden a extender las exigencias que se imponen en el proyecto y los beneficios que éste concede a las elecciones municipales y de cores.

El diputado señor Saffirio, don René manifestó que los partidos tienen un comportamiento en forma previa a los procesos electorales, y otro distinto a la hora de adoptar decisiones relevantes.

Compartió lo dicho por la diputada Turres y el diputado Squella, en orden a que lo dispuesto actualmente por el proyecto es insuficiente. Con todo, sostuvo que la idea de reembolsar a los partidos por las candidatas que resulten electas no lo convence, porque los partidos no estarían adoptando decisiones acordes con lo que la ciudadanía busca, que es dar condiciones de equiparidad en la competencia.

Añadió que se podrían otorgar estímulos adicionales a las mujeres candidatas y no solo a las que resulten electas. Con todo, sostuvo que aunque no le agrada, si es necesario entregar un incentivo a los partidos para que tengan candidatas mujeres, por el período señalado en el proyecto, habrá que hacerlo.

Preguntó por qué razón no se exigen los porcentajes que fija el proyecto también en el distrito o la circunscripción y no solo a nivel nacional.

El diputado señor Auth sostuvo que si se investiga el comportamiento electoral, por lo menos desde hace diez años, es posible comprobar que las mujeres y los hombres votan indistintamente por hombres y mujeres. Ya no existe, como en otros países, un prejuicio de los hombres que no votan por mujeres o de las propias mujeres que no votan por mujeres.

Tampoco es efectivo que las mujeres obtienen, sensiblemente, más votos que los hombres. Lo único que explicaría que las mujeres representen solo un 16 por ciento de los parlamentarios, es que solo existe un 16 por ciento de oferta.

Respecto al acceso al financiamiento indicó que quienes ya están en el círculo tienen mayores posibilidades de acceder a éste y quienes están fuera -las mujeres-, tienen mayor dificultad. Por lo tanto, recalcó que si hay algo en lo que hay que intervenir en materia financiera, es en la porción que se le devuelve a la candidata. Consideró equivocado premiar al partido, porque este ya está obligado por la ley. Preguntó por qué razón se premia al partido para hacer algo a lo cual está obligado.

Propuso que en lugar de otorgar doce millones de pesos por candidata electa, se establezca que las mujeres reciban como devolución 0,45 unidades de fomento por voto en vez de 0,03 unidades de fomento; es decir, un 50 por ciento adicional.

Manifestó que el tercer obstáculo que existe es el filtro de los partidos. Estimó evidente que los partidos tienen más facilidad para identificar las fortalezas de los candidatos que las virtudes de las candidatas.

Expresó que en todos los sistemas proporcionales donde se ha aplicado ley de cuotas ha subido sensiblemente la proporción de mujeres en el Parlamento. Hizo presente que existe un caso paradigmático, México, donde el comportamiento de hombres y mujeres, desde el punto de vista del voto todavía no supera el machismo cultural mexicano. Ellos tienden a votar más por hombres; sin embargo, la introducción de la cuota de representación en el Parlamento ha subido sensiblemente la participación de la mujer.

Respecto de los dichos del diputado Saffirio señaló que si es difícil aplicar una cuota per se, es imposible hacerlo a un territorio específico. Por ello, la cuota debe, necesariamente, aplicarse al elenco completo. Los que piensan que eso va a permitir que el partido destine a las mujeres a los peores territorios, enfrentan dos problemas: primero, que cuando se cambie el sistema electoral no va a saber cuáles son los peores territorios, porque el nivel de incertidumbre respecto del resultado va a variar considerablemente. En segundo lugar, aseveró que puede resultar posible destinar a las mujeres a distritos que se encuentren dentro del veinte por ciento peor, pero resulta completamente imposible hacerlo respecto del 40 por ciento.

El señor Marco Enríquez-Ominami recomendó a la Comisión que considere el informe que en 2009 se aprobó por unanimidad en la Sala, evacuado por la Comisión Especial de Estudio del Sistema Político Chileno.

Sostuvo que los elementos favorables que aprecian en la propuesta dicen relación con poner término a un enclave autoritario, a un sistema electoral definido en dictadura; sobre cuotas, se propone por primera vez una reforma que incorpora la dimensión de género en el Parlamento, y, en cuanto a criterios, se observa un esfuerzo por superar las distorsiones del gerrymandering, malapportionment y sobrerrepresentación de fuerzas políticas.

Respecto de las debilidades del proyecto, en primer lugar, hizo presente que existe un problema de legitimidad, que no tiene solución, puesto que el origen del Congreso emana de un sistema que tiene cierto vicio en su inicio. Recordó el caso de Marisela Santibáñez, candidata por San Bernardo, que obtuvo la mayor votación, pero no resultó electa diputada, lo que expresa de manera hiperbólica el drama del sistema binominal.

En segundo lugar, indicó que el proyecto aumenta el tamaño de los distritos sin que se resuelva lo que el diputado Auth expresó en su minuto, sobre el financiamiento, su tamaño, su origen, sus límites, lo que estimó, se encuentra en el corazón de la desconfianza de la ciudadanía hacia la política.

En tercer lugar, las disposiciones sobre el género y el incentivo económico.

En cuarto lugar, advirtió que el proyecto no se pronuncia sobre pueblos originarios. Al respecto señaló que ellos habían propuesto que la Conadi estableciera al menos tres distritos y una gran senaturía nacional con cuotas y que se pudiera votar según los criterios actuales de la propia Conadi.

En quinto lugar, recordó que la ley de partidos y de financiamiento del gasto electoral no se ha logrado modificar del todo sustantivamente y también fue creada en dictadura. Sobre el particular, afirmó que la creación del Partido Progresista vía notaría fue un calvario de cuatro años. Luego, durante la última elección presidencial, fue posible constatar las controversias que se generaron respecto del proceso de recolección de las firmas. Indicó que vivió en carne propia en 2009, la asimetría brutal y las barreras que significaron entrar a una campaña presidencial, donde se produjo cierta arbitrariedad por parte de los notarios para cobrar por firma, pues los montos eran desde cinco mil pesos hasta la gratuidad. Así, 36.000 firmas ante notario a cinco mil pesos cada una significan, en sí mismo, una barrera de entrada no resuelta democráticamente.

Informó que su propuesta apunta a establecer un sistema proporcional competitivo, con una unidad base por región, una magnitud de los distritos de 4 a 7, cuando una región excede esa magnitud, debe dividirse en 2 distritos; que se elijan 5 representantes base, más aquellos que sean proporcionales a su población, vale decir, si hay 15 regiones, 5 por región, 75 representantes como piso, manteniendo la doctrina de Pinochet respecto de las regiones, en el sentido de que hubiese representación igualitaria entre regiones y estableciendo una fórmula electoral de D’Hont que permita elegir a los parlamentarios, en proporción al apoyo de cada lista y dentro de ésta a aquellos candidatos más votados. Ello da un número total de 150 congresistas, conforme se aprecia en la siguiente lámina:

Indicó que las ventajas de un sistema proporcional competitivo son la proporcionalidad, la competitividad, el reflejo de una sociedad multipartidista, desincentiva la atomización, reduce el espacio del gerrymandering o “distritos amañados”, reduce la desigualdad del voto entre regiones.

Asimismo, como sucede en decenas de países, propuso el unicameralismo, que es una controversia muy importante y nada fácil de resolver.

La magnitud máxima por distrito propuesta es de 7, se ubica bajo el número de concejales electos en las principales comunas, que son 10, desincentivando el fraccionamiento y estimulando la formación de coaliciones y pactos, también entre independientes. Recordó que Chile tiene un sistema multipartidista bien hipócrita, ya que producto del sistema binominal se ha transformado en un bipartidismo. Sostuvo que el multipartidismo se corrige por la vía de un sistema proporcional competitivo, pero sin excesos.

Al utilizar las regiones como unidades base, una unidad de existencia real, con identidad propia, el proporcional competitivo reduce el espacio para estas prácticas nocivas.

Añadió que el sistema proporcional competitivo limita el malapportionment, ya que busca promover un equilibrio entre el principio de igual proporción de votantes por escaño en todo el país, y la realidad del mismo, con importantes desequilibrios de población en su geografía. Además, estimula la representación de los electores en zonas extremas.

Destacó que mientras en el sistema binominal la máxima diferencia en la relación escaños-electores por región es de 27 veces, en el sistema que proponen es de 6,75 veces, lo que acorta la brecha.

Respecto del unicameralismo, expresó que hay múltiples países que lo adoptaron. En un país no federal, como Chile, la tradición de tener Senado se puede explicar, a su entender, por las siguientes razones: la primera, que tenga funciones claramente distintas de la Cámara de Diputados, lo que no ocurre. A vía de ejemplo señaló que los senadores Girardi, Navarro y el ex senador Ávila fueron grandes diputados fiscalizadores y en el Senado han hecho lo mismo que en la Cámara de Diputados: fiscalizar, que no es propiamente una atribución del Senado. La segunda, el origen electoral, democrático, es muy parecido a la Cámara de Diputados, pues existe el absurdo caso de Aysén donde el distrito es igual a la circunscripción, por lo que tampoco se cumple esta idea. En Japón y en otros países existe el Senado plurinominal nacionalista, se tratan proyectos nacionales de país, pero el origen es local, donde un diputado defiende su zona y un senador defiende el interés nacional. Recordó que a propósito de la reforma tributaria un senador se manifestó en contra del impuesto a los alcoholes, porque afecta a su región, haciendo exactamente lo mismo que el diputado por Coquimbo y La Serena.

Respecto de la discusión sobre el aumento de cupos aseveró que el argumento de la Alianza es tan absurdo como sostener por qué no se consagra un solo diputado para ahorrar. Cualquier sistema representativo y participativo requiere de proporción y, por tanto, aumentar los cupos no es un delito en sí mismo y es casi un paso inevitable.

Indicó que hicieron el esfuerzo de saber cómo sería la composición unicameral por regiones. Con este sistema la Primera Región tendría seis representantes, cinco de base más uno en función de su cantidad de electores. Como ese número de representantes se encuentra en un rango de magnitud definida de 4 a 7, la Primera Región constituye un solo distrito. Lo mismo ocurre en un conjunto de regiones. La Segunda Región, en cambio, eligió ocho representantes, cinco de base más tres por su proporción de habitantes, y se transforma en dos distritos de cuatro cada uno. La región con más representantes sería la Metropolitana, que elegiría 35 representantes y conformaría siete distritos, de cinco diputados o diputadas por distrito, conforme se aprecia en la siguiente lámina:

Respecto de las candidaturas independientes expresó que el proyecto presenta algunos problemas. Los candidatos podrán presentarse en solitario o en listas con un número de candidatos que puede ser hasta el doble de los escaños a elegir. Las listas podrán conformarse entre varios partidos, un partido e independientes. Para facilitar la presentación de candidaturas independientes y ajustar los requisitos al nuevo padrón, propuso reducir a la mitad las adhesiones hoy necesarias para inscribir esas candidaturas y abrir acceso al financiamiento público para los gastos necesarios en la inscripción de independientes.

Manifestó que el tema de los notarios es un drama y hoy está judicializado Hizo presente que algunos notarios no les quisieron recibir sus firmas.

Sobre la reelección, propuso que los representantes solo puedan ser reelectos en una oportunidad. Con todo, reconoció que tienen una baja convicción en esta materia. En México está prohibida la reelección. Sin embargo, la no reelección per se no garantiza lo que uno busca.

Por último, señaló que su propuesta considera fundamental implementar mecanismos que promuevan la representación de sectores sociales subrepresentados como mujeres, jóvenes y pueblos originarios. Lo anterior, a través de cuotas electorales y un financiamiento público de la política.

La Directora Ejecutiva de la Fundación Progresa, señora Patricia Morales manifestó que si bien la ley de cuotas es necesaria, no resuelve el problema de la paridad y la participación de las mujeres en política.

Recalcó que los recursos que se entregarían a las mujeres electas no tienen mayor sentido si no están estrictamente relacionados con el gasto total autorizado por el Servicio Electoral en ese distrito.

Estimó adecuado establecer un incentivo monetario, pensado para un momento transicional, de modo de fomentar la participación de las mujeres, considerando la dificultad de acceso al financiamiento. Sin embargo, sostuvo que conceder 12 millones de pesos constituye casi un insulto.

Consideró urgente establecer una relación estricta entre el monto que se les entregaría a las mujeres electas y el gasto electoral permitido.

Añadió que resulta necesario que el proyecto se haga cargo del financiamiento de la política, porque una de las principales barreras de entrada para las mujeres o para un nuevo partido o fuerza política dice relación con los recursos económicos.

El diputado señor Coloma preguntó la opinión de los invitados sobre la norma del proyecto que permite llevar el doble de candidatos por cupos o escaños a elegir. Ello significaría que las otras fuerzas deberán competir al menos contra 16 candidatos de la Alianza y otros 16 de la Nueva Mayoría, en aquellos distritos que elijan 8 diputados.

El diputado señor Andrade consideró un error plantear el tema referido a las cuotas desde la lógica de una supuesta oposición de los partidos. Además, se inventa un adversario que no es tal.

Añadió que la doctora Bachelet fue candidata del Partido Socialista desde que postulaba a concejala.

Más aún, hizo presente que la Presidenta del Senado también es una mujer.

Manifestó que el tema de la participación de la mujer es bastante más amplio que la sola representación política. También existen problemas en el ámbito del mercado de trabajo, en el de la cultura, en lo doméstico.

Destacó que tiene la convicción que a la política chilena le hace falta una representación más diversa. En este sentido, el mundo de la mujer juega un rol trascendental.

Por otra parte, recordó a muchas mujeres que han efectuado grandes aportes, entre las que mencionó a Laura Allende y Fidelma Allende; Carmen Lazo, quien elegía a tres parlamentarios en un distrito más grande de los que hoy se vislumbran.

En relación con los pueblos originarios, señaló que le preocupa que cada vez que se alude a ellos y a su representación se piense en una determinada región. Hizo presente que en su distrito viven tantos o más mapuches que en la Región de La Araucanía.

Asimismo, consideró muy interesante la propuesta de Marco Enríquez-Ominami respecto del tema del unicameralismo. El sistema político chileno no admite más la existencia de dos cámaras. Consideró innecesaria la distinción entre Cámara de origen y Cámara revisora, dado que ambas tienen una composición política similar. Al respecto preguntó si los diputados que pasan a ser senadores modifican su manera de ser o de pensar.

Por último, en relación a los independientes sostuvo que nunca ha entendido que es ser independiente en la sociedad chilena, dado que no se sabe si se está aludiendo a una independencia de un partido o de la posición política. Puntualizó que un independiente que participa en política tiene una opinión política.

Agregó que ha llegado a la conclusión que se trata de una posición cómoda, porque tiene la ventaja que no se incorpora a proyectos colectivos, porque cuando uno lo hace incuestionablemente tiene que entregar un poco de su soberanía política y efectuar concesiones, porque se incorpora a un esfuerzo en que participan otros. Entonces, concluyó que si hay algunos que quieren gozar del privilegio de no incorporarse a un esfuerzo colectivo, que asuman el costo de ello.

Indicó que además se ha solicitado que quienes sí hacen el esfuerzo de ceder parte de su soberanía y la entregan a un colectivo para hacer política, generen privilegios para aquellos que no están dispuestos a efectuar un esfuerzo similar. Estimó que ello constituye un exceso.

El señor Squella señaló que, al igual que Marco Enríquez-Ominami, es un convencido de que una buena manera de mejorar la democracia, en el ámbito del Congreso Nacional, es mejorar las condiciones de los candidatos desafiantes.

Al respecto recordó que en sesiones pasadas un profesor de la Universidad Diego Portales sostuvo que no hay un sistema mejor elaborado para favorecer a los incumbentes que el diseñado en el proyecto. Si hoy los 120 diputados fueran a la reelección, se elegirían 103.

Preguntó si han pensado en mecanismos para mejorar y perfeccionar este proyecto de ley y que pudieran ser incorporados a través de una indicación, de modo de favorecer a los desafiantes.

Por otra parte, recordó que la Ministra Directora del Servicio Nacional de la Mujer señaló que es importante que haya más mujeres en el Parlamento, para que defiendan los temas de las mujeres. Aseveró que no comparte esa lógica.

En este sentido preguntó si se debiera dar cabida, en la lógica de de elegir a alguien que se preocupe de los intereses particulares, a quienes forman parte de una orientación sexual distinta.

El señor Enríquez-Ominami hizo presente que ningún sistema electoral es perfecto. Todos tienen asimetrías y externalidades negativas.

Respecto de los cuestionamientos que se han efectuado al aumento de parlamentarios, afirmó que así como se critica la cifra de 155, también se podría cuestionar la existencia de 120 diputados y proponer su disminución.

Añadió que antes de preguntarse por el número de diputados se podría analizar el rol de los gobernadores. Al respecto preguntó cuáles son sus atribuciones.

Sobre la recolección de firmas para una candidatura o para la formación de un partido político, señaló que propuso que éstas se hagan ante el Servicio Electoral. Sin embargo, este servicio no tiene sucursales en todas las comunas. El Servicio Electoral debiese estar llamado a realizar tal labor, pero tiene pocos funcionarios. Por ende, hay que fortalecerlo.

Respecto de los independientes, expresó que existe la independencia de los partidos, en el sentido de no obligar a que cualquier ciudadano que quiera estar en política a militar en un partido. El monopolio de la política no lo pueden tener los partidos.

Por otra parte, sostuvo que ningún país, ni siquiera Estados Unidos, ha resuelto seriamente el tema del financiamiento.

Estimó que el financiamiento público emparejaría la cancha, siempre que solo exista el financiamiento público. En otras palabras, prohibir el aporte de los privados. Sin embargo, tal medida sería muy controversial y permitiría que algunos afirmen que se está dando el monopolio de la actividad política al Estado.

Informó que el Partido Humanista hizo una simulación de lo que habría sucedido con este sistema electoral con los resultados del año 2013. La Nueva Mayoría habría aumentado en un 8 por ciento su sobre representación; la Derecha, en un 6 por ciento, y si todas las terceras fuerzas se hubiesen aliado, habrían entrado con 10 diputados y 2 senadores.

Aclaró que no les asiste el ánimo de castigar al incumbente. Sí se trata de dar garantías, de permitir que exista oxigenación.

El diputado señor Chahin informó que una de las conclusiones del V Congreso Ideológico de la Democracia Cristiana, en materia de reformas políticas, considera la necesidad de avanzar hacia un Congreso Unicameral.

Sin embargo, hizo presente que dicho debate requiere de una reforma constitucional, por lo que analizar esta propuesta solo constituye un muy buen ejercicio académico y político, porque no existe posibilidad de incorporar esta materia en el proyecto.

Preguntó si elaboraron alguna propuesta de perfeccionamiento al proyecto que sea viable bajo la actual Constitución.

Por otra parte, consideró interesante establecer gradualidad en la ley de cuotas, obviamente, partiendo de un piso más bajo que el que establece el proyecto de ley y, llegando a un tope más alto.

En este mismo sentido, afirmó que está de acuerdo en que más que premiar al partido, como lo hace el proyecto, debe mejorarse el financiamiento a las campañas de las candidatas, con una mayor devolución fiscal en razón de los votos obtenidos.

Afirmó que no es efectivo que existan muchas candidatas que demandan cupos. Tampoco es cierto que sean las directivas de los conglomerados políticos, a través de sus consejos nacionales, las que, de alguna manera, cierran todas las puertas a la participación de la mujer.

Respecto de la participación de los pueblos originarios, indicó que no se puede asimilar la cuota de género a una cuota para los pueblos originarios, porque se trata de realidades distintas y, en consecuencia, discusiones diferentes.

El año 2012, junto al diputado Joaquín Tuma, presentaron un proyecto de reforma constitucional, que recoge en parte la propuesta realizada en 1994 por el entonces diputado Francisco Huenchumilla, que creaba un padrón especial y distritos con curules asegurados en la Cámara de Diputados y en el Senado. Ahora, si se incorpora como una cuota del partido determinado, también, se puede cumplir con una determinada cuota de candidatos y no elegir a ninguno.

Por lo tanto, más que incorporarlos en este proyecto, estimó que ambas materias, la tratada en este proyecto y la participación de los pueblos originarios, deben ser abordadas por carriles distintos.

En el ámbito de los pactos y los subpactos, recodó que uno de los temas que se ha planteado dice relación con la norma que permite que exista el doble de candidatos que escaños a elegir, porque generaría una asimetría demasiado grande para las candidaturas independientes fuera de pactos.

Preguntó la opinión de los invitados sobre la existencia de subpactos entre partidos y, además sobre la posibilidad de volver al sistema vigente hasta antes de 1973, en el que no existían pactos.

El diputado señor Auth coincidió con la idea de implementar un sistema proporcional de características similares a las descritas por Marco Enríquez-Ominami y Patricia Morales.

El proyecto establece un sistema basado en un tamaño distrital de 3 a 8 diputados. La propuesta de Marco Enríquez apunta a establecer distritos de 4 a 7 diputados. Además, introduce un elemento muy atractivo que muchos, entre los que se cuenta, apoyan: la unicameralidad.

También coincidió con la idea de que el proceso de reformas no estará completo mientras no se realicen modificaciones a la ley de Financiamiento y a la ley de Partidos Políticos.

Hizo presente que el límite al gasto en promedio aumentó un 50 por ciento cuando se adoptó el sistema de inscripción automática, porque los inscritos crecieron de 8 a 13 millones. Ahora nuevamente crecerá el límite, debido a la creación de distritos más grandes. Po ello estimó necesario rebajar el límite del gasto, que hoy es 0,03 unidades de fomento por voto.

Por otra parte, consideró una alternativa viable el establecer progresividad en la cuota, para terminar en la paridad completa.

Asimismo, coincidió en la necesidad de permitir en la ley que dos o más independientes fuera de pacto puedan constituir uno, cumpliendo el mismo requisito que deben cumplir los partidos cuando conforman un pacto: firmar un compromiso que refleja cierta identidad programática y de principio. Ello amortiguaría de manera muy decidora el efecto que tiene la desigualdad respecto del número de candidatos.

También coincidió con la propuesta de rebajar la barrera de inscripción a los candidatos independientes. Hoy es 0,5 por ciento de quienes participaron válidamente en la última elección.

Destacó que si se está fuera de los dos grandes bloques, la posibilidad que tiene de convencer al electorado de que su candidatura es viable, es muy baja. Los electores siempre tienen dos dimensiones a la hora de decidir su voto, una dimensión instrumental y otra expresiva. Explicó que la persona se expresa a través del voto, pero también desea que el parlamentario una vez electo, le sirva. Quien está fuera de pacto, solo alude a la dimensión expresiva, pero si se eligen cinco, seis o siete, resulta obvio que la credibilidad electoral de esos candidatos va a crecer.

Añadió que resulta evidente que la barrera de ingreso a las nuevas fuerzas se reduce.

El señor Enríquez-Ominami reconoció que su propuesta tiene algo de voluntarista. Sin embargo, recordó que el año 2008 plantearon la implementación del voto voluntario, sin haber masa crítica. La tarea de este Congreso, también es ser un refugio para el voluntarismo político, para que se exprese un punto de vista distinto.

Respecto de las cuotas, propuso establecerlas en forma progresiva, vale decir, iniciar el régimen con 40 por ciento, en el segundo período electoral, 45, y en el tercero, 50.

En relación a la fórmula de N x 2, consideró una fortaleza del proyecto el hecho que se pueda llevar el doble de candidatos. Esa cantidad de cupos es un valor positivo y garantiza que los más pequeños puedan articularse en políticas de alianzas y participar con alguna expectativa de salir electo.

En relación a los independientes, indicó que también tendrán que aprender a aliarse. Se puede salir electo como independiente, pero no gobernar, por razones obvias, porque el Congreso expresa fuerzas culturales y políticas y, por lo tanto, la política de alianza es inevitable. Con todo, discrepó con el diputado Andrade, ya que considera que los partidos no deben tener el monopolio de la política.

El experto electoral, señor Andrés Tagle sostuvo que se ha invocado a la proporcionalidad como la razón fundamental para sustituir el sistema electoral, en atención a la desproporcionalidad que tendría el actual sistema. En este sentido, expuso el siguiente cuadro, que mide la desproporcionalidad en la Cámara de Diputados:

Indicó que este cuadro refleja la diferencia del porcentaje de escaños que obtienen las listas, respecto de su votación. El sistema binominal, en la experiencia de siete elecciones que se han efectuado con ese sistema, ha hecho que las listas grandes tengan un 9,5 por ciento más de escaños que votos, en perjuicio de las listas pequeñas, que no obtienen escaños en la Cámara.

Reiteró que en general, la desproporcionalidad a favor de las listas grandes no cambia sustancialmente con las propuestas que se han efectuado, es decir, se mantiene entre 9,5 y 9,6 por ciento. Incluso, en algunos casos sube levemente.

En los cuadros se observa una tendencia, en orden a que la desproporcionalidad favorece en forma muy pareja a las dos listas grandes y no favorece a la segunda mayoría, como se ha dicho.

Por su parte, añadió que en el caso de la elección de los concejales, que se realiza mediante un sistema proporcional, claramente se genera una importante desproporcionalidad en torno a un porcentaje del 7,8 por ciento, a favor de las listas grandes, la que también se reparte en forma pareja.

Destacó que un aumento significativo de 35 diputados, no mejora la desproporcionalidad. Incluso, con aumentos más moderados, como la propuesta Renovación Nacional – Democracia Cristiana, o sin aumento, como la del ex Presidente Piñera, se alcanzan cifras similares de proporcionalidad.

A continuación expuso el siguiente cuadro, referido al Senado:

Comentó que en esta institución ocurre algo parecido a lo que sucede en la Cámara. La desproporcionalidad a favor de las listas grandes fluctúa entre el 7 y 8 por ciento. En este caso, el binominal sí tenía una distribución muy favorable hacia la lista con menos votos, es decir, a la Alianza. Las demás propuestas son relativamente parecidas respecto de la forma cómo se reparte la desproporcionalidad, con beneficio en general hacia las listas más votadas; en este caso, la Concertación.

Afirmó que en el mensaje se esgrime que la igualdad en el voto es el principio rector del proyecto. Hoy nuestro sistema privilegia la representación regional con el 73 por ciento en la Cámara de Diputados y con el noventa por ciento en el Senado; dado que las regiones solo representan el sesenta por ciento de la población. Por ello se produce la fuerte desigualdad del voto que existe hoy. Otorgar mayor representación a territorios, en algunos casos extremos, con una baja población electoral es lo que provoca la distorsión a la que hizo referencia.

Esta distorsión se puede medir de varias formas, sin embargo, la forma más sencilla de hacerlo consiste en medir la diferencia de electores por diputado, entre el mayor, es decir, el que tiene más electores por diputado y el que tiene menos. El sistema binominal tiene una diferencia de 6,3 veces. La propuesta del gobierno del ex Presidente Piñera, sin aumentar diputados, baja a 4,6, por el solo hecho de fusionar distritos. La propuesta del Gobierno de la Presidenta Bachelet, la baja a 3,9 veces, pero con un aumento significativo de diputados. El acuerdo Renovación Nacional- Democracia Cristiana la bajaba mucho más aún, y lo hacía aumentando solo en catorce diputados.

Recalcó que en la propuesta del Gobierno actual, el aumento de diputados no se está utilizando para mejorar la igualdad del voto, como se ha sostenido especialmente en el mensaje. Además, no se está repartiendo correctamente ese incremento hacia los distritos que tienen mayor número de electores y, por lo tanto, tienen mayores méritos para recibir este aumento. Éstos se concentran en la Región Metropolitana, porque allí es donde se produce la mayor desigualdad.

En la misma línea, indicó que existen inconsistencias en la asignación de los nuevos escaños, como se aprecia en la siguiente lámina:

Explicó que hay distritos, como el nuevo de la Primera Región, de la Sexta Sur, de la Séptima Sur, de la Novena Norte y de la Décima Norte, que eligen entre tres y cuatro diputados. Todos esos distritos tienen más electores que la Tercera Región, que elige cinco diputados. Destacó que hay una clara y fuerte inconsistencia.

Estas diferencias son significativas. Reiteró que no se han asignado los diputados buscando igualdad del voto.

Advirtió que está usando electores del padrón electoral utilizado en las elecciones presidenciales y parlamentarias de 2013. En el mensaje presidencial se aludió a cifras distintas. Corresponde a la información de 2012 o de algún padrón provisorio.

Indicó que existen otras inconsistencias. Si se compara un distrito de la Región Metropolitana con otros de regiones, por ejemplo, el distrito 9, conformado por los antiguos distritos 17, 18, 19, y el distrito 12, conformado por el 26 y 29, que eligen siete diputados, teniendo más electores, que los distritos de regiones, como Quinta Cordillera, Quinta Costa y Octava Costa, que eligen ocho con menos electores. Algo similar ocurre en los nuevos distritos 11, 14 y 13 respecto de la Cuarta Región, de la Séptima Norte y de la Novena Sur.

Preguntó por qué razón la distribución de los nuevos escaños no se hizo para buscar la igualdad del voto, a pesar de que el mensaje así lo señala.

Señaló que es efectivo que se va a mejorar el acceso al Parlamento por la vía de bajar los umbrales para ser electo. Sin embargo, preguntó cuál será el beneficio efectivo para las listas menores. En general, históricamente, las otras listas más pequeñas no han alcanzado tales votaciones. La mejor votación del Partido Comunista fue en 1997, con un 7.5 por ciento del promedio nacional y el PRI y el PRO no han superado el 5.5 por ciento. Es decir, registran votaciones muy bajas, aun para los nuevos umbrales. Además hizo presente que ahora los liderazgos locales pierden importancia, porque se fusionan los distritos. Antes, una persona podía tener un liderazgo en un territorio, pero ahora éste se duplica o triplica; por tanto, puede que tal liderazgo ya no exista o se diluya, por la amplitud del tamaño del nuevo distrito. A vía de ejemplo, citó el caso de muchos ex alcaldes que han tenido liderazgo en una comuna, que han sido electos como parlamentarios por el sistema binominal. Al aumentar el tamaño de los distritos, ese liderazgo se diluye.

Destacó que el sistema propone la elección por lista con pactos y subpactos. Indicó que la elección por lista es consustancial a los sistemas proporcionales. Los sistemas que eligen más de un parlamentario por territorio, normalmente, operan con pactos. Por lo tanto, en todos ellos puede ocurrir que sean electos parlamentarios que obtuvieron menos votos que otros que pierden.

Añadió que también se ha planteado evitar las listas y hacer una elección de las primeras mayorías en los sistemas proporcionales. Si ello se lleva a cabo, surgirá en forma inmediata la llamada ingeniería electoral; que llevará a los partidos a reducir su oferta de candidatos. En el caso del distrito de San Bernardo, por ejemplo, donde perdió Marisela Santibáñez, teniendo primera mayoría, si no hubiese listas, saldrían electos los más votados. En tal caso, probablemente la Concertación hubiera llevado un candidato, la Alianza otro. Lo expuesto significaría que se enfrentaran solo tres candidatos. La suma de los votos que hoy tienen las listas se hubiera repetido en un solo candidato. Cuando no existe esta acumulación de votos, hay una ingeniería electoral que, además, es muy perversa porque se hace reduciendo la opción de candidatos hacia el electorado.

Reconoció como un problema evidente del sistema binominal el hecho que resulta muy predecible respecto de los candidatos que van a salir electos, justamente por la poca cantidad de candidatos que permite.

Para la proporcionalidad es fundamental la lista con pactos y subpactos, dada nuestra realidad, ya que están operando importantes alianzas políticas. Si no se permiten, se dará paso a la ingeniería electoral, con una reducción fuerte de candidatos.

Por otra parte, sostuvo que el aumento de los candidatos al doble también resulta innecesario. Al respecto hizo presente una contradicción. Si se plantea que no haya subpacto, menos sentido tiene que haya el doble de candidatos, porque nunca se va a usar. Si no hay subpacto, se va a hacer ingeniería electoral, lo que llevará a reducir el número de los candidatos.

Añadió que otro problema vinculado al aumento de los candidatos dice relación con que tal incremento puede anular la aplicación de la ley de cuotas que se plantea en el proyecto, porque, a la larga muchos partidos sabiendo que cuentan con la posibilidad de llevar muchos candidatos, usarán el máximo permitido de modo de cumplir con las cuotas que exige la ley, rellenando la lista, por ejemplo, con mujeres militantes de su partido, que proporcionen su RUT y se presten para ser candidatas, pero que no harán una campaña real. De ese modo se completarían las listas para cumplir fácilmente con la cuota.

Respecto de las cuotas por género, sostuvo que la norma debe establecerse a nivel de la Constitución, no a nivel de la ley. Puede haber un problema si la modificación es solo legal, porque la ciudadanía, que está consagrada en la Constitución, otorga, además del derecho a voto, el derecho a postular a cargos de elección popular. La norma propuesta en el proyecto sobre las cuotas restringe esa postulación, llegando incluso a anular una declaración de candidatura y hacer que todos queden fuera de ella. Reiteró que se están exigiendo requisitos o condiciones adicionales a la postulación de parlamentarios, más allá de las establecidas en la Constitución.

Hizo presente que existen fallos del Tribunal Constitucional sobre esta materia, que han rechazado el establecimiento de nuevos requisitos para ser parlamentario, como por ejemplo, una declaración respecto del consumo de droga.

En relación con la cifra repartidora, señaló que llama la atención la redacción utilizada y la descripción del método de D´Hondt. Destacó que el texto del proyecto se encuentra incompleto, porque no contempla los empates a nivel de listas, al interior de las listas, entre listas, al interior de los subpactos, etcétera.

Advirtió que tal redacción es diferente a la consagrada en las leyes municipales y de consejeros regionales vigentes y puede producir problemas de interpretación en los tribunales electorales. Hizo presente que en el gobierno pasado se modificó la ley electoral en dos oportunidades, debido a que tribunales electorales regionales aplicaban criterios distintos respecto del método D´Hondt. El Servicio Electoral solicitó al gobierno aclarar el tenor de la redacción.

Por otra parte, no se contempla un subpacto automático que sume votos a los candidatos de un partido que van en pacto electoral. Expresó que en el sistema de concejales y consejeros regionales existe un subpacto automático: dos partidos en pacto no necesitan subpactar para sumar sus votos y determinar a los ganadores. Esta iniciativa no lo contempla, por lo tanto, tienen que formalizar el subpacto.

Además, afirmó que la redacción que permite los subpactos es diferente a la de la Ley de Elecciones Municipales y a la de consejeros regionales; se plantean dudas si rige para todos los territorios electorales, esto es, se genera la duda si está integrado siempre por los mismos partidos o en un territorio podría integrarlo uno y, en otro, otros. También existen dudas sobre el derecho de los independientes a celebrar subpactos. En ese sentido, recomendó copiar la norma que regula las elecciones municipales.

Respecto al pacto automático de independientes indicó que el proyecto dispone que todas las listas independientes sumarían como si fuera una sola, aunque estas personas pueden provenir de posturas diametralmente distintas del espectro político. Entonces, se puede dar el caso de que el voto de una persona, por ejemplo, muy identificada con la Derecha Independiente pueda terminar eligiendo a un candidato muy de Izquierda y viceversa, sin que sea la intención del electorado que su voto ayude al otro. Por lo tanto, estimó que al menos, debiera existir un acuerdo entre ellos, un subpacto formal y no automático.

Respecto del subpacto formal señaló que debe considerarse que a los independientes se les estaba otorgando las ventajas de un partido político sin serlo. Si a alguien se le da la ventaja de fusionar votos sin ser partido político, entonces, preguntó qué razón existiría para constituir partidos políticos. Sería más conveniente formar asociaciones de independientes que no tienen regulación alguna.

En cuanto a la reasignación del número de diputados a los distritos cada 12 años, preguntó por qué razón solo se reasigna 71 de los 155 diputados propuestos; dado que los 84 restantes se asignan en forma pareja, tres diputados por distrito. Recalcó que si de verdad se busca igualdad del voto, se deberían distribuir los 155 con un mínimo y un máximo; es decir, se distribuyen los 155 cupos y, luego del primer ejercicio, aquellos que no alcanzan a obtener 3 o 2 escaños, según el mínimo que se fije, se asigna ese mínimo y con el resto se hace una nueva distribución. El mismo mecanismo se puede aplicar respecto del máximo. Indicó que este procedimiento ya se encuentra redactado incluso para los consejeros regionales, que tienen un mínimo de 2.

Manifestó que esta propuesta tendrá como consecuencia la disminución de escaños en muchos territorios, en beneficio de Santiago. El proyecto dispone que la distribución la efectúe el Servicio Electoral de forma proporcional. Al respecto expresó que se debe definir qué se entiende por proporcional. Hay muchos métodos proporcionales, siendo el D’Hondt solo uno de ellos.

Sostuvo que no corresponde otorgar tal facultad al Servicio Electoral. Debe ser la propia ley la que determine el método a utilizar.

Asimismo, hizo presente que la reasignación debe efectuarse por electores, usando el padrón de la elección anterior y no por habitante. Si se busca la igualdad del voto tal igualdad se refiere a quienes votan, los que están en los padrones, pues con la inscripción automática están perfectamente identificados, con nombres y apellidos.

Señaló que si se utiliza a los habitantes, se está aludiendo a las cifras del Censo. Hizo presente que estos siempre contienen estimaciones de población. Añadió que las proyecciones de población que ha efectuado el Instituto Nacional de Estadísticas han resultado bastante equivocadas, pues sobreestimó mucho la población en base al Censo, en el sentido de que crecerían comunas como San Bernardo y Puente Alto. Si bien es cierto crecieron de forma importante, no se cumplieron las proyecciones de la citada institución.

Por último, respecto de las primarias parlamentarias, indicó que la ley referida a ellas suponía la vigencia del sistema binominal. No se puede llevar a cabo esta reforma sin modificar la ley de primarias. Puede ocurrir que las primarias parlamentarias pierdan sentido, especialmente si se aprueba la norma que permite llevar el doble de candidatos que escaños a elegir.

El señor Máximo Pavez, asesor legislativo de la Fundación Jaime Guzmán, expresó que el sistema electoral es solo una parte del régimen electoral. Si se pretende mejorar la actividad política se deben revisar varias instituciones jurídicas y políticas y no solo el sistema electoral.

Expresó que no se debe modificar el sistema electoral sin considerar el régimen político de nuestro país.

Indicó que el sistema binominal es un sistema proporcional de magnitud dos. Algunos lo describen como un sistema en que hay elecciones primarias, en forma simultánea. Se presentan los candidatos del cada sector político, eligiendo la ciudadanía a uno por sector. Destacó que este sistema ha ayudado a las dos principales coaliciones políticas.

Manifestó que se ha sostenido que el sistema ha subsidiado permanentemente a un sector por sobre el otro. Indicó que luego de revisar las estadísticas, es posible constatar que en cuatro elecciones ha beneficiado a la Concertación más que a la Alianza; en tres, beneficia más a la Alianza que a la Concertación.

Expresó que en un trabajo elaborado por la Fundación Konrad Adenauer, en 2006, el señor Pepe Auth sostuvo que “la verdad es que después de cuatro elecciones no existen ni el empate de la minoría con la mayoría ni la pretendida desproporcionalidad que subsidiaría a la segunda fuerza en desmedro del bloque mayoritario…”. “El sistema binominal es, en rigor, un sistema que distribuye escaños entre los principales pactos con alto grado de proporcionalidad…”.

Señaló que también se ha sostenido que el sistema binominal desincentivaría la participación, lo que estimó cuestionable. Si se analiza la participación de la ciudadanía en las elecciones municipales es posible constatar que es básicamente la misma que existe en las elecciones parlamentarias. Por tanto, resulta difícil sostener que hay un sistema que desincentiva la participación de la gente, comparado con otro.

Destacó que la principal fortaleza del sistema binominal dice relación con la estabilidad que ha producido en el sistema político. Asimismo, su principal debilidad apunta a trasladar la competencia al interior de los pactos. Con todo, hizo presente que este proyecto nada cambia en esta materia, más aún, lo empeora.

Res Pública emitió un informe sobre la tasa de recambio, analizando diversos sistemas electorales. A continuación expuso la siguiente lámina:

Explicó que la mayoría de los regímenes analizados son parlamentarios. En Chile la tasa de recambio de los parlamentarios es de 38,8 por ciento, lo que consideró razonable, considerando que nuestro país tiene un régimen presidencial. Por tanto, el sistema binominal además de proporcionar estabilidad, reparte proporcionalmente o subsidia más o menos por igual a la primera mayoría y tiene una tasa de recambio bastante razonable en comparación con otros sistemas.

Añadió que entre los fundamentos del mensaje se señala que esta modificación constituye una prioridad de la ciudadanía. Al respecto exhibió cifras de la encuesta CEP sobre esta materia:

Indicó que reformar el sistema electoral binominal constituye una de las últimas prioridades que tienen los chilenos.

Agregó que el año 2012 el Instituto Nacional de la Juventud realizó una auditoría a la democracia, orientada a jóvenes entre 18 y 29 años, respecto del conocimiento del sistema binominal. El cincuenta y cuatro por ciento de los encuestados no sabe cuál es el sistema electoral que se aplica en las elecciones presidenciales. Un veintidós por ciento señaló que en las elecciones presidenciales se aplica el sistema binominal. El sesenta por ciento de los encuestados declara no saber el sistema electoral que rige para las elecciones del Poder Legislativo. El setenta y tres por ciento de los encuestados no es capaz de nombrar a cinco diputados de la República.

Por otra parte, destacó que la función del sistema electoral es transformar votos en escaños, debiendo cumplir con los siguientes tres pilares: representatividad, estabilidad y legitimidad.

En segundo lugar, peguntó si conviene aplicar un sistema proporcional en el país. Hizo presente que los sistemas mayoritarios se aplican en los países que gozan de mayor estabilidad. A vía de ejemplo mencionó a los Estados Unidos.

Destacó que Maurice Duverger, politólogo francés, representante del socialismo internacional, fue quien acuñó el término semi-presidencial y enunció tres leyes sociológicas: un sistema mayoritario conduce a dos grandes partidos; un sistema electoral proporcional conduce a un multipartidismo y un sistema electoral mayoritario con segunda vuelta conduce a un multipartidismo con dos grandes coaliciones, que es lo que sucede en Chile.

Agregó que el profesor Scott Mainwaring, uno de los autores más citados del mundo en temas electorales, trató de comparar todos los regímenes políticos del mundo. Dicho autor sostiene que las democracias estables son aquellas que duran por lo menos treinta años con un mismo sistema electoral. Asimismo, hace presente el mencionado profesor, que las democracias presidenciales con multipartidismo, en general, tienen malos resultados en el mundo. Ninguna de las treinta y un democracias más estables del mundo tienen la combinación de presidencialismo con proporcionalidad. Sólo existe un ejemplo en la historia, que fue el caso de Chile entre 1933 y 1973.

Concluyó que en el derecho comparado existe un juicio crítico de la fórmula de contar con un sistema presidencialista junto con un sistema proporcional, dado que la presencia de un presidencialismo con un multipartidismo puede significar que en un determinado momento las negociaciones entre el Congreso y el Ejecutivo queden en un punto muerto, porque, a final de cuentas, el Presidente de la República estará obligado a formar coaliciones para cada proyecto.

En este mismo sentido, señaló que Bruce Ackerman, ha dicho que “la forma más tóxica de división de poderes es la combinación constitucional de un Presidente, popularmente electo, con un Congreso, electo por un sistema de representación proporcional.”

Por su parte, entre los autores nacionales mencionó lo expuesto por los profesores Patricio Navia y Cristóbal Aninat, quienes señalan que los que postulan un sistema completamente proporcional para Chile: “cometen el error de olvidar las tensiones que produce tener un sistema presidencial fuerte como el chileno, junto a un régimen de representación proporcional en la composición del Congreso”.

Asimismo, relató su experiencia como candidato a concejal de Conchalí en la primera elección con voto voluntario en Chile. Hizo presente que en su comuna se presentaron 49 candidatos. Para la ciudadanía resultó difícil conocer y entender lo planteado en la campaña, existiendo tantos candidatos, más allá de los que competían por la Alcaldía.

Recalcó que la literatura comparada recomienda utilizar sistemas proporcionales cuando hay sistemas parlamentarios, como ocurre en el mundo europeo, o bien, cuando existen democracias nuevas. Al respecto citó los casos de Lesotho y Mongolia que, siendo democracias nuevas, aplicaron sistemas mayoritarios. En Lesotho, el partido que ganó las elecciones obtuvo todos los escaños excepto uno, con el sesenta por ciento de los votos. En dicho país se registraron motines y el gobierno colapsó. En Mongolia, el año 2000, el partido gobernante obtuvo el noventa y cinco por ciento de los escaños con el cincuenta y ocho por ciento de los votos.

En el caso de Chile, al revés, si en 1989 se hubiese aplicado un sistema mayoritario la Alianza por Chile, con el treinta y cuatro por ciento de los votos, habría obtenido el quince por ciento de los escaños.

Además, en países donde existen diferencias étnicas, como una elección en Irak o en otros países del mundo africano; se requiere de un sistema proporcional como un requisito para corregir los problemas de la democracia.

Por otra parte, hizo presente que a las listas se les permite llevar el doble de candidatos respecto de los cargos que se eligen. Aseveró que no existe razón alguna para establecer una norma como ésta. Ella generará más confusión, más gasto y más campañas. Con la legislación actual ya existen distritos en los cuales se han presentado diez o más candidatos. Con la modificación propuesta se pueden registrar más de cincuenta candidatos a diputados.

Estimó preferible que las personas elijan entre menos personas, de modo de otorgar más legitimidad a los votos.

Sostuvo que la norma propuesta genera un perjuicio directo a los candidatos independientes. Recordó que la Constitución consagra la plena igualdad entre independientes y miembros de partidos políticos, para evitar el monopolio de los partidos políticos en la actividad política nacional. Destacó que un independiente va a tener que ganar a todos los candidatos de una lista para llegar a ser diputado.

Añadió que contando con el doble de candidatos respecto de los escaños a elegir, muchos partidos políticos van a optar por rellenar la lista con personas del otro género o sexo, lo que de paso, llevará a terminar con las primarias.

En segundo lugar, expresó que la cuota de género resulta de dudosa constitucionalidad. Sostuvo que en el futuro otros sectores podrán demandar que se les asegure una cuota. De persistirse en esta norma, sugirió utilizar el término “sexo” y no “género”, por razones de certeza jurídica, en atención a los múltiples “géneros” cuya existencia se ha invocado.

Respaldó la idea que el incentivo se otorgue por diputada electa. Si se desea que existan más mujeres en el Congreso, la cuota debiera enfocarse a que los partidos logren que sus candidatas sean elegidas y no solo que sean candidatas.

Respecto del aumento del número de parlamentarios, expresó que resulta difícil sostener que no existirá un incremento en los gastos. La propuesta del Gobierno incluye por ejemplo, un distrito compuesto por las comunas de Cerrillos, Maipú, Colina, Pudahuel, Quilicura y Estación Central, fusionando los actuales distritos 16 y 20. Indicó que resulta imposible que un diputado no quiera tener sedes en cada una de las comunas que componen su distrito.

Sostuvo que el aumento de cupos de los parlamentarios, va a propender a que los incumbentes se reelijan porque el umbral será más bajo. Hoy, si un diputado se elige con un veintitrés por ciento, en los distritos nuevos requerirá de un diez por ciento.

Por otra parte, afirmó con el proyecto de ley que propone el gobierno se le acaba de notificar a los vecinos de Lampa, Colina y Til Til que nunca van a conocer a su diputado porque, al final del día, el candidato de ese distrito privilegiará las comunas de Pudahuel y Maipú, que son los lugares donde se encuentran concentrados los votos. Asimismo, hizo presente que serán campañas tremendamente costosas.

Recalcó que la única competencia que existirá se producirá al interior de las listas, tal como ocurre con los concejales.

Manifestó que casos como el ocurrido con Marisela Santibañez se repetirán, tal como sucede hoy con concejales que contando con una buena votación no alcanzan a ser electos.

Respecto de la asignación automática de escaños indicó que se trata de una materia propia de ley.

Por último, expresó que la división territorial debe ser más pequeña, para aumentar la cercanía y el accountability ciudadano.

El señor Andrés Velasco, fundador del Movimiento Fuerza Pública, mencionó tres problemas que aquejan a nuestro sistema político y que se deben corregir: falta de participación electoral, falta de representatividad y falta de legitimidad:

A continuación expuso tres láminas que pertenecen a la Auditoría a la Democracia, realizada por el PNUD, referidas a los tres defectos antes enunciados de nuestro sistema democrático:

Destacó que estas láminas muestran el bajo porcentaje de personas en edad de votar que participan en las elecciones. Si se observa el porcentaje de personas que participan, como proporción de los que pudieron haber participado, la tendencia de largo plazo apunta dramáticamente hacia abajo. Ello no responde únicamente a la transición de un sistema de voto obligatorio a uno voluntario, dado que la tendencia provenía desde mucho antes.

Sostuvo que el sistema binominal está vinculado con la baja participación de la ciudadanía.

En segundo lugar, expresó que si uno pregunta a los ciudadanos si están contentos con la representatividad de sus parlamentarios, es posible constatar una brecha muy grande entre lo que la gente quiere, lo que aspira a tener, lo que las encuestas demuestran y lo que la gente observa.

En la lámina se aprecia que el ochenta por ciento de las personas piensa que los parlamentarios deberían representar a todos los chilenos. En los hechos, solo el once por ciento piensa que ellos representan efectivamente a todos los chilenos.

Por otra parte, ante la pregunta si deberían los parlamentarios representar a su partido político, el cinco por ciento de las personas piensa que ello debiera ser así, pero el cincuenta y seis por ciento estima que efectivamente así ocurre.

En tercer lugar, ante la pregunta sobre las instituciones en las que se confía en Chile, declaró que resulta claro que existe una crisis de credibilidad en todas ellas, no solo en las políticas y en las parlamentarias. Tres encuestas elaboradas por el PNUD: una, de 2008; otra, de 2010 y la última de 2012 demuestran que, en general, todas las instituciones vienen con su credibilidad a la baja, siendo el Congreso una de las que ha sufrido una de las principales mermas.

Ante la pregunta ¿tiene usted confianza en la siguiente institución? la suma de la respuesta mucha confianza y bastante confianza, en el caso del Congreso Nacional, no alcanza el 15 por ciento.

Manifestó que existe un vínculo entre el sistema binominal y los fenómenos recién expuestos.

En primer lugar, destacó que el sistema binominal reduce el incentivo a participar. Un joven que nunca ha votado sabe que un escaño en más del 90 por ciento de los distritos parlamentarios en Chile se lo lleva una de las grandes coaliciones, y el otro se lo lleva la otra. Por lo tanto, es mínima la posibilidad de que ese joven, con su voto, pueda cambiar esa situación.

En segundo lugar, indicó que la competencia suele darse al interior de las listas y no entre ellas. Sin embargo, al interior de éstas tampoco hay gran competencia, porque, muchas veces, se presenta un candidato conocido, con recursos, con figuración nacional, frente a un candidato joven que, muchas veces, no tiene ni el nombre ni los recursos, por lo que la competencia es más ficticia que real. Aseveró que ese joven que nunca ha votado se pregunta si va a incidir su voto en el resultado. La respuesta muchas veces es negativa.

Por otra parte, expresó que ante esta Comisión se presentaron cifras que dejan en evidencia que el sistema, al privilegiar a dos grandes coaliciones, por razones muy atendibles, deja fuera, además, a partidos pequeños y a movimientos, lo que produce un sesgo muy importante contra las candidaturas independientes, a menos que los partidos pequeños pacten con una de las grandes coaliciones, lo cual ha ocurrido. Sin embargo, advirtió que en el momento en que esa negociación se hace fuera del Congreso o fuera del espectro de decisiones de los ciudadanos, la convierte en una decisión por secretaría.

Además hizo presente que este sistema ha redundado en un Parlamento poco diverso.

En cuanto a la legitimidad, señaló que hay situaciones en que incide mucho más la negociación por secretaría que el peso en el margen de un voto. Además, se produce un hecho que si bien no es exclusivo del sistema binominal y no va a desaparecer enteramente con esta modificación, igualmente genera molestias: que haya personas que sin haber obtenido la mayor votación resulten elegidas, y aquellas con una altísima votación, no lo sean. Ahora, si se analizan los detalles técnicos y las cifras repartidoras y la ley de D’Hondt, ello es explicable, pero a juicio de muchos ciudadanos lo expuesto resulta muy difícil de entender.

El mensaje de la Presidenta de la República consigna varios objetivos que persigue el proyecto, de los cuales destacó el de reducir la desigualdad en el peso del voto y otorgar más competitividad al sistema. Cuando se alude a la incertidumbre, se está refiriendo a que el resultado no esté predefinido y las decisiones de los votantes incidan de nuevo. Ello también se vincula al hecho que los candidatos de partidos más pequeños o candidatos independientes que, a pesar de sacar una votación potente, dado que los umbrales en el sistema binominal son muy altos, quedan fuera, lo que resta representatividad, legitimidad y competitividad al sistema.

Expresó que este proyecto da pasos muy importantes para alcanzar los objetivos que persigue. Estimó que el Ejecutivo ha dado un paso en la dirección correcta. Sin embargo, para alcanzar tales objetivos se requiere de otras medidas complementarias.

Manifestó que sería absolutamente impresentable e incomprensible que, existiendo la ley y estando potencialmente los votos para un acuerdo, esta decisión se postergue o se adopte en los próximos tres años, para aplicar el nuevo sistema en la elección siguiente.

Asimismo, preguntó cuál debe ser la diferencia en el rol que representan y que llevan a la práctica ambas cámaras. El proyecto dispone que los senadores se elegirán por un sistema proporcional, avanzando por tanto hacia la representación poblacional, proporcional al número de electores y no sencillamente territorial, es decir, estableciendo un número fijo por cada territorio o región. Por ello, sostuvo que quizás éste sea un momento para reflexionar acerca de si debiera existir una distinción entre el mecanismo que se utiliza para elegir a los miembros de una u otra Cámara.

En este contexto, estimó que un posible modelo podría consistir en que la Cámara de Diputados ejerza la representación poblacional y, en consecuencia, que exista cierta proporcionalidad, que hoy no se cumple, entre el número de electores y el de escaños por distrito, de modo que no sea muy distinto el número de personas que eligen a cada diputado. Por su parte, el Senado podría ejercer la representación territorial. Puntualizó que al avanzar hacia la introducción de criterios poblacionales en la fórmula para elegir senadores, como hace el proyecto, se reduce el sentido de representación territorial.

Un modelo alternativo podría consistir en exacerbar el concepto de representación poblacional, en el caso de los diputados, y transitar hacia un concepto de senadores nacionales o regionales o de megarregiones, de modo que estuviera claro a quién representan y cuál es el concepto al que obedece la elección de los diputados frente a un rol distinto y distintivo de los senadores.

Como un aspecto cuestionable del proyecto hizo presente que la fusión de distritos existentes y la creación de distritos más grandes implicará un aumento del costo de las campañas, porque mientras más grande el distrito, más recursos se necesitan. Por lo tanto, señaló que si no se adoptan precauciones, se corre el riesgo de que junto con bajar una barrera de entrada, el umbral para ser elegido, se crea al mismo tiempo, otro obstáculo de ingreso que es el dinero. Puede ocurrir que, considerando que el proyecto de ley pretende generar más competitividad y renovación en el sistema político, la barrera financiera sea la que, al final, termine marginando a las caras nuevas, a los jóvenes, a los independientes y a las regiones.

Añadió que la escasez de recursos podría motivar el desarrollo de técnicas de ingeniería electoral y, en consecuencia, que se opte por realizar candidaturas de nicho, porque es barato. Dicha opción puede ser útil desde el punto de vista de viabilizar una candidatura, pero resta legitimidad y transparencia al sistema. Por ello, sería importante que junto con aumentar el tamaño promedio del distrito, también aumente el financiamiento promedio.

Afirmó que si bien es cierto que al haber distritos más grandes y potencialmente más candidatos que escaños, las primarias pierden el carácter de esenciales que tenían bajo el sistema binominal. Sin embargo, ello no significa que necesariamente, dejen de ser útiles. Recalcó que en el caso que existan más candidatos de un partido, de una coalición, que escaños, o más postulantes que vacantes en la lista de candidatos, la decisión debiera adoptarla la ciudadanía. Por ello estimó importante preservar el sistema de primarias.

Sin embargo, recordó que el sistema de primarias no es obligatorio, por lo tanto, si los partidos quieren soslayarlo y elegir por secretaría a sus candidatos lo pueden hacer. En segundo lugar, advirtió que el sistema de primarias no cuenta con financiamiento. Por tanto, existe una asimetría, porque hay un sistema legal de elección de parlamentarios que sí tiene financiamiento y un sistema igualmente legal de primarias que no lo tiene.

Respecto de la existencia de pactos y subpactos, indicó que si el proyecto pretende bajar las barreras de entrada, posibilitar el ingreso de nuevos actores y facilitar la representación de distintos grupos que hoy no están en el Congreso Nacional, los pactos y, en especial, los subpactos pueden constituirse en una barrera de entrada. Por ello, especialmente en el caso de los subpactos, estimó necesario introducir modificaciones al proyecto.

Desde el punto de vista de los grupos más pequeños, de los independientes, de las regiones y de las minorías, la existencia de pactos y subpactos puede terminar perjudicando los objetivos que el proyecto pretende alcanzar.

En relación con los incentivos y cuotas de género, compartió el objetivo del proyecto, en orden a aumentar la diversidad en el Parlamento y, en especial, la representación de las mujeres chilenas que hoy están muy subrepresentadas, lo que nos transforma en uno de los Congresos de América Latina y del mundo donde la proporción de mujeres legisladoras está entre las más bajas.

Para alcanzar dicho objetivo, consideró adecuado utilizar más de un instrumento, porque se pueden fijar cuotas, establecer incentivos monetarios o usar ambos mecanismos.

Expresó que el incentivo debiera estar dirigido al candidato y no al elegido. Si se aumenta el financiamiento solo para candidatos electos, se crea una razón para que los partidos que no quieren cumplir con el requisito lleven candidatos “galletas”. Ello unido a que se está permitiendo dos veces más candidatos que escaños. Recalcó que el incentivo debiera ser para toda candidata y no solo para la que resulte elegida.

Asimismo, consideró necesario cambiar el sistema de reemplazo de los parlamentarios que dejan de ejercer su función. Propuso volver a la norma vigente en la antigua democracia chilena, pre 1973, de elecciones complementarias, de modo que los reemplazantes no se elijan por secretaría, sino que se elijan de modo abierto, transparente, competitivo y de cara a la ciudadanía. Si el reemplazo se hace imprescindible en la segunda mitad de un período, en vez de una elección abierta podría llevarse a cabo una primaria, la que debe ser abierta para que participe todo ciudadano que esté en el padrón electoral y no solo los militantes de los partidos políticos.

Por último, en forma complementaria al cambio en el sistema electoral, estimó imprescindible facilitar y conceder incentivos para que los ciudadanos y ciudadanas concurran a votar, entre lo que se cuenta el transporte gratuito.

Informó que en países desarrollados, para que las mujeres puedan concurrir a votar, especialmente aquellas con hijos pequeños, se habilita en los lugares de votación un sector seguro para dejar a los niños. Otros países, incluyendo a Colombia, otorgan incentivos no monetarios a las personas para que vayan a votar. Por ejemplo, si se postula a un subsidio habitacional y no votó, figurará más abajo en la lista. De esa manera, la sociedad da una señal de que votar no solo es un derecho, sino también contiene un elemento de deber de participación democrática.

Propuso estudiar la posibilidad de implementar el voto electrónico, el voto a distancia y la votación temprana, no solo el día de la elección.

El profesor de Derecho Constitucional y Decano de la Facultad de Derecho de la Universidad de las Américas, señor Patricio Zapata señaló que existe una enorme dificultad en modificar las leyes electorales de los países.

Hizo presente que en estos procesos es posible constatar dos tipos de situaciones: En primer lugar, puede ocurrir que un grupo político que obtuvo un buen resultado en las elecciones desee aprovechar esa mayoría para cambiar las reglas, de modo de mejorar aún más sus propias posibilidades. A vía de ejemplo, mencionó lo ocurrido con Forza Italia de Silvio Berlusconi, quien ganó las elecciones en 2006, con un sistema mixto. Una de las primeras decisiones que adoptó consistió en aprovechar esa mayoría alcanzada en las urnas para hacer un cambio y establecer lo que él pensaba eran condiciones aún más favorables para Forza Italia. Sin embargo, cuando tuvieron lugar las elecciones de 2008, su conglomerado perdió con las reglas que Berlusconi pensaba eran las más adecuadas.

Un segundo escenario posible tiene lugar cuando hay fuerzas políticas que históricamente han triunfado con ciertas reglas, pero avizoran en el horizonte la posibilidad de una derrota. Entonces, tratan de aprovechar las mayorías de que todavía disponen para hacer un cambio, que, de alguna manera, amortigüe o haga más suave lo que es una caída en ciernes. Recordó que en tal conducta incurrió el Partido Socialista Francés en 1985; cuando vieron venir a través de las encuestas una victoria de la centro derecha francesa. Dicha colectividad modificó el histórico sistema francés de distritos uninominales con doble vuelta, que de aplicarse significaría que la derecha arrasara y que los socialistas quedaran con veinte o treinta diputados. Ante ello optaron por un sistema proporcional. Recordó que Francia tuvo durante dos años un sistema proporcional, que, efectivamente, en este caso, cumplió su propósito, porque amortiguó la caída, ya que la centroderecha obtuvo apenas una mayoría. Sin embargo, tal decisión tuvo un costo: significó que el Frente Nacional, un partido de ultraderecha, que con el sistema normal francés no entraba al Parlamento, en esa ocasión obtuvo treinta y cinco diputados de un total de 500 o 490 diputados.

Indicó que citaba estos ejemplos porque demuestran como decisiones de este tipo están absolutamente guiadas u orientadas por los intereses más egoístas de quienes disponen de una mayoría contundente.

Añadió que resulta más raro o infrecuente que se produzca un acuerdo en realizar un cambio del sistema electoral y que éste no se encuentre dirigido directa o inmediatamente a generar mejores condiciones para los que están impulsando el cambio. Destacó que ello ocurrió en Chile en 1874. Existía un sistema mayoritario durante el período Portaliano, pero en un momento de lucidez de liberales y conservadores se estableció un sistema de voto acumulativo, que permitió que las minorías se incorporen al Parlamento.

Recordó que los conservadores estuvieron durante los cuarenta años anteriores a la fecha antes indicada, bajo la protección del Palacio de la Moneda. Ellos ignoraban que un año después de esta reforma electoral, serían expulsados del gobierno por el señor Federico Errázuriz Zañartu. Éste, junto con expulsar a los conservadores, se alió con los radicales, iniciando los primeros un largo periplo de cuarenta años fuera del gobierno. Sin embargo, la reforma electoral que habían convenido un año antes les permitió tener, aun en los momentos más difíciles, acceso al Parlamento. Así, un Zorobabel Rodríguez, un Abdón Cifuentes, pudieron llegar al Parlamento y mantener viva una tradición política. Si no hubiera existido el voto acumulativo esas expresiones políticas no hubieran tenido la oportunidad de manifestarse.

Expresó que en 1925 se produce otro momento de lucidez de la clase política. El voto acumulativo tiene la virtud de permitir que las minorías se incorporen. Funciona dando a los ciudadanos la oportunidad de hacer dos cosas distintas: se puede repartir los votos entre los distintos candidatos o bien, se puede concentrar o acumular los cinco votos en un candidato. A las fuerzas minoritarias, lo que les conviene es acumular sus votos en un solo nombre para que éste logre entrar al Parlamento. Ese año se cambió el voto acumulativo por el voto con sistema de cifra repartidora o voto D’Hondt, que en ese momento era una relativa novedad. Recordó que el matemático belga, Augusto D’Hondt, creó este mecanismo a fines del siglo XIX para hacerse cargo de la realidad de su patria, la que tiene distintas tradiciones políticas, una social cristiana, una social demócrata, una liberal y una conservadora. Este matemático entendió que un país con esas familias políticas, debía tener un sistema que reflejara en lo posible la existencia de tales familias.

Por su parte, afirmó que Luis Claro Solar, en 1925, y especialmente don José Maza, incorporaron a nuestra vida política el sistema de cifra repartidora como un perfeccionamiento respecto del voto acumulativo, pero siempre pensando en buscar mecanismos electorales que permitieran la expresión de nuestras distintas familias políticas.

Recalcó que así como en 1874 o en 1925, hoy se puede producir esa peculiar confluencia que permita una reforma electoral que no sea ni la reforma tipo Berlusconi, de 2006, ni la reforma Mitterrand, de 1986, que se hicieron para liquidar al adversario o para mejorar las posibilidades electorales de la coalición que impulsa los cambios.

Expresó que lo que impera en una reforma, en términos de John Rawls, es un egoísmo esclarecido. Una decisión sobre un sistema electoral está muy condicionada por los egoísmos de los distintos actores. En este sentido, aseveró que resulta hipócrita cuando un actor, en estas discusiones, le dice al otro: ¡piensa en la Patria, piensa en Chile, piensa en la República y no pienses en tus intereses!, como si alguno de los que participa en esta conversación no estuviera absolutamente pendiente de sus posibilidades y sus expresiones.

Añadió que hay otra faceta de este proyecto que apunta en la dirección de facilitar que se produzca una confluencia que permita una modificación al sistema electoral: El hecho que el Parlamento estaría votando por dos dibujos o trazados de distritos. Señaló que se han analizado y detectado los defectos y fallas que exhibe este nuevo mapa electoral y las incoherencias que pueden existir entre el dibujo de un distrito y otro. Recalcó que la facticidad juega un papel evidente. Indicó que ésta significa que existe un conjunto de condicionantes que han impedido e impiden que en esta primera etapa se pueda hacer un tipo de diseño o de dibujo que calce perfectamente con lo que se podría llamar un ideal normativo, vale decir, avanzar más decididamente hacia el igual peso en el voto de todos nuestros compatriotas.

Por ello resulta tan importante el segundo dibujo que contempla el proyecto, aquel que está contemplado como mecanismo de actualización periódica, sobre la base de pautas objetivas y que empezaría a regir en tres elecciones más.

Agregó que al aprobarse esa fórmula que avanza más perfectamente hacia la idea de igualdad de voto se justifica mejor el avance más modesto a que se llega con el dibujo actual, y permite defender el proyecto constitucionalmente, de cara a la exigencia de igualdad que, crecientemente, está siendo planteada por los distintos tribunales.

Informó que en la República Federal Alemana existe un sistema que intenta conciliar varios bienes al mismo tiempo. Por un lado, que los ciudadanos alemanes tengan un parlamentario suyo propio, por lo que la mitad de los diputados alemanes son elegidos por distritos pequeños uninominales. Sin perjuicio de ello, la otra mitad de los diputados son elegidos en voto proporcional. Por tanto, los alemanes tienen un segundo voto en el que si existe proporcionalidad.

Además tienen la cláusula del cinco por ciento de umbral mínimo. Indicó que el tribunal constitucional alemán ha aceptado dicho umbral con dudas, con titubeos, porque entiende que esa cláusula deja fuera ciertas miradas. La comunidad alemana se pierde el aporte que puede significar un punto de vista; que puede o pudo corresponder a la visión de un euroescéptico, de un ambientalista, de la izquierda proletaria, entre otras. Con todo, advirtió que este umbral debe ser excepcional. Cuando los alemanes pretendieron llevar la cláusula del cinco por ciento a la representación que envían a Estrasburgo, al Parlamento Europeo, el tribunal constitucional resolvió que se permitía fijar dicho umbral mínimo, porque se entendía que resultaba necesario para la gobernabilidad de esa república, para que no proliferen tantos partidos. Sin embargo, para efectos del Parlamento Europeo, lo que les interesa como alemanes es que todas las miradas, todos los puntos de vista, se expresen en ese parlamento, por lo que anuló la regla del cinco por ciento para tales elecciones.

Por su parte, recordó nuevamente la reforma electoral de Silvio Berlusconi, de 2006. Éste creó un bono o premio a la fuerza más votada. A Berlusconi le preocupaba que existiera la posibilidad que existieran tres o cuatro fuerzas importantes y ninguna de ellas con suficiente fuerza para gobernar. Entonces, estableció un bono de 155 diputados a la más votada, sin importar el porcentaje que alcanzara. Vale decir, si la primera fuerza tenía el 24 por ciento; la segunda, 22, y la tercera, 20; a la primera se le entregaban 155 diputados, lo que prácticamente garantizaba una mayoría absoluta propia. Indicó que existían precedentes de esta naturaleza en la historia italiana. Para la elección de 1925, con la ley Acerbo[6] se creó un bono más grande: el partido que tenía más votos se llevaba dos tercios de los diputados. Otro precedente estuvo vinculado a la Democracia Cristiana, la que en 1953 aprobó una ley parecida y estableció que si un partido tenía más del cincuenta por ciento de los votos, entonces, le correspondía el sesenta por ciento de los diputados. Sin embargo, señaló que a Berlusconi todo le salió mal, porque la fuerza más votada fue el Partido Democrático, de centro-izquierda, y Mario Monti se quedó con los 155 diputados.

Además Berlusconi estableció que por primera vez los italianos ya no votarían por un diputado, sino por la lista, tal como en España. Entonces, en las elecciones de 2008 los italianos votaron por Forza Italia o Partido Democrático, los que hicieron listas cerradas. Por tanto, del número de votos del partido dependen los diputados que se eligen, en el orden en que han sido puestos por su secretaría general o directiva. Ello asegura disciplina, ya que los díscolos, los rebeldes, no salen elegidos, porque las directivas de los partidos los ponen en el último lugar de la lista.

El Tribunal Constitucional Italiano eliminó esa parte de la ley, estableciendo que el ciudadano debe tener algo que decir, no solo del partido, respecto de quiénes serán sus representantes.

Hizo presente que no estaba seguro de compartir tal argumento. Sin embargo, reconoció que ya no resulta tan sencillo, a la hora de discutir un sistema electoral, el invocar argumentos vinculados a la gobernabilidad o a la eficacia, sin poner en un lugar muy importante los derechos políticos de los ciudadanos. Hoy existe una conciencia colectiva, en virtud de la cual el ciudadano, no solo en Chile, sino que en cualquier parte del mundo, está reclamando un grado de incidencia mayor.

Puntualizó que el mecanismo que se aplicará en doce años más es importante, porque va a reestablecer un equilibrio mayor entre la forma en que están representados los ciudadanos de los grandes centros urbanos y las zonas menos pobladas.

Por otra parte, respecto de la cuota que fija el proyecto, señaló que es efectivo que hay profesores que sostienen que bajo nuestra Constitución la acción afirmativa o discriminación positiva no sería aceptable. Ello se planteó a propósito de la ley Zamudio, la cual fue aprobada en la Cámara de Diputados con una habilitación para que el Congreso adoptara medidas de acción afirmativa. Sin embargo, en el Senado hubo mayor resistencia.

Señaló que existe un contexto en que algunas cuotas son perfectamente coherentes con el artículo 19, número 2, de la Constitución Política. Lo que prohíbe dicho artículo son leyes que establecen diferencias arbitrarias. Manifestó que es evidente que si el Congreso, a la hora de hacer una distinción, tiene en sus manos un conjunto de antecedentes, de estadísticas o de estudios como los que, por ejemplo, ha trabajado el Programa de las Naciones unidas para el Desarrollo Humano, PNUD, que justifican esa distinción o ese trato distinto, una buena parte de la objeción desaparece. Por tanto, ya no es arbitraria la distinción, sino que es razonable en la medida en que existan tales antecedentes. Por ello estimó importante que antes de aprobar una norma como la propuesta se acopien, se alleguen y se acompañen a la historia legislativa los antecedentes mencionados, de modo que si en seis meses o en un año más alguien recurre al Tribunal Constitucional no podrá sostener que se adoptó esta decisión sin tener una base empírica.

En segundo lugar, destacó que en la propia Constitución, en su capítulo I, establece que es deber del Estado promover la integración armónica de todos los sectores de la Nación, agregando a continuación que también debe “asegurar el derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional.”

Añadió que la cuota propuesta es de carácter temporal o transitoria. Por lo tanto, no está pensada desde el paternalismo o desde una perspectiva del género que hoy está infrarrepresentado como minusválido, como grupo o sector que necesita permanentemente un apoyo, lo que a su juicio, sería lesivo del principio de igualdad, en términos de igual trato o de igual dignidad.

La cuota propuesta busca romper una barrera de entrada, es decir, visibilizar, por el tiempo suficiente, a un grupo de personas en la confianza de que éstas no necesitan, luego de que se ha roto esa barrera de entrada, adicionales apoyos, ayudas subsidios o muletas.

Indicó que está demostrado que, una vez que las mujeres se incorporan en ciertos espacios, pueden perfectamente competir en iguales o mejores condiciones que los hombres.

Respecto del número de diputados, manifestó que tuvo a la vista un trabajo que elaboró Res Pública, el que fue coordinado por el señor Klaus Schmidt-Hebbel. El resultado del trabajo de este grupo transversal se tradujo en una propuesta de una Cámara de Diputados de 162 miembros.

Añadió que cuando estudió este tema concluyó que el número óptimo de diputados sería de 186, en atención a factores como una adecuada relación entre los ciudadanos y los parlamentarios y a la historia de nuestro país. Al respecto indicó que cuando estaba trabajando en el diseño de los diversos mapas electorales, no le resultó cómodo juntar realidades políticas que históricamente han sido distintas. A vía de ejemplo explicó que la restricción numérica obliga a juntar en un mismo distrito a Talca y a Curicó. Más allá de que esas ciudades se encuentren separadas por apenas 90 kilómetros, cualquiera que conozca la historia de nuestro país, sabe perfectamente que para un talquino compartir representación con un curicano es una cuestión mayor.

Al proponer un número de diputados también tuvo a la vista el número de comisiones permanentes y de comisiones especiales.

Sostuvo que en la discusión del número diputados hay que participar con una mente amplia y abierta, con la misma disposición con la que se discutió en su momento el número de fiscales o el de defensores y no preguntando cuántos sueldos más significaría el tener que gastar en más diputados o senadores. Indudablemente, el costo del nuevo sistema procesal penal fue cien veces mayor que lo que significó financiar los sueldos de los treinta y un jueces del crimen, sus treinta y un secretarias y sus treinta y un máquinas de escribir. Sin embargo, el país hizo la reflexión correcta respecto del tipo de justicia que se quería y luego se estudió el tema de los recursos que se necesitarían para contar con el nuevo sistema procesal penal.

Expresó que ha escuchado que algunas personas han planteado que es posible lograr los objetivos de representatividad con los mismos ciento veinte diputados. Además, simultáneamente, se critica que el proyecto del Gobierno cree distritos muy grandes.

Indicó que cuando escuchó este argumento sintió que había un nuevo desafío a la lógica y a las matemáticas: con los mismos ciento veinte diputados se puede lograr una verdadera proporcionalidad. Ello significa, por lo menos, varios distritos que eligen 5, 6, 7 u 8 diputados. Al respecto preguntó cómo se logra mayor proporcionalidad con 120 diputados y con distritos pequeños. La única forma de lograr proporcionalidad con 120 diputados es teniendo enormes distritos, en términos geográficos y poblacionales. Entonces, el diputado no solo tendría que estar preocupado de 20 comunas, sino de 25 o 28.

Por lo tanto, la inercia hacia un número como 150 o 155 no responde solo a la tradición. Podrían ser 180 o 100 diputados. Recalcó que lo importante es que el número al que se arribe sea fruto de una reflexión de fondo.

Concluyó que nos encontramos en un momento histórico, en el que un país puede decidir un cambio de sistema electoral sin que estén poniéndose sobre la mesa los intereses egoístas de un bando que aprovecha una mayoría coyuntural, sino que abriéndose a la posibilidad de un acuerdo muy amplio, muy transversal y que puede durar 30 o 40 años. Añadió que se trata de seguir permitiendo que en nuestro país se expresen las distintas familias. Señaló que, en el esfuerzo de creatividad que se ha desplegado en las últimas semanas, ha aparecido la idea de un sistema uninominal mayoritario. Este sistema adolece de un defecto gravísimo: desconoce nuestra historia. Destacó que no somos Estados Unidos, ni el Reino Unido; no somos un país de conservadores y laboristas, ni de republicanos y demócratas. Por el contrario, en nuestro sistema político es posible reconocer a varias familias. Tanto es así, que esta realidad resistió la camisa de fuerza del binominal a punta de blindajes, de pactos de omisión, de acuerdos populares que tuvieron un enorme costo ciudadano, pero que permitieron la subsistencia de una tradición radical laica, una comunista en la última elección, una social cristiana, una Derecha liberal y otra Derecha conservadora.

Reiteró que no concordaba con la idea de implementar un sistema uninominal mayoritario para Chile, donde la votación es tremendamente homogénea. Advirtió que el uninominal mayoritario no hace tanto daño en el Reino Unido, porque el sur de Inglaterra es conservador y el norte es laborista, de manera que no importan las diferencias nacionales, porque están representadas las dos fuerzas. Por su parte, afirmó que quien conozca la realidad política de Estados Unidos sabe que es un país dividido en estados demócratas y republicanos, en consecuencia, el sistema mayoritario no significa que desaparezca un sector político.

Por último, hizo presente que cuando se hicieron ejercicios en Chile, respecto del resultado electoral que se obtendría aplicando el uninominal mayoritario a la realidad política nacional, el resultado fue que un sector, la Centro Derecha, obtendría 3 o 4 escaños.

Consultado sobre la situación en que quedarían los independientes y sobre la posibilidad de llevar el doble de candidatos que cupos o escaños por llenar, manifestó que tiempo atrás Genaro Arriagada planteó como una reforma menos óptima, suponiendo que no se pueda modificar el sistema electoral binominal: que se aumentara el número de candidatos que presentaban los pactos. De esta manera, se ofrecería más alternativas a los ciudadanos.

Informó que una vez que comenzaron a trabajar en esta iniciativa, tuvieron en mente la importancia de que hubiera cuotas en las candidaturas de las distintas listas. Para efectos de hacer operativas las cuotas del cuarenta por ciento, resulta necesario que exista un número de candidatos mayor.

Por tanto, por una parte se cumple con el propósito de ofrecer a los ciudadanos más alternativas y por otra, se permite hacer un esfuerzo real, no simbólico, de establecer una ley de cuotas. Ello significa un movimiento fuerte dentro de los partidos políticos. Explicó que puede resultar muy difícil de establecer, en forma imperativa, inmediata y no gradual, que el cuarenta por ciento de los candidatos de un partido deben pertenecer a un género determinado, si se mantiene la norma que el número de candidatos de los partidos sea igual al de parlamentarios por elegir. En tal evento, se podría terminar durante la tramitación parlamentaria con una cuota del diez por ciento; siendo tremendamente cándido.

Por consiguiente, sostuvo que se deben considerar los dos factores conjuntamente. Por una parte, aumentar la posibilidad de que los ciudadanos tengan más alternativas. Reconoció que en distritos que eligen ocho diputados, dieciséis candidatos puede resultar excesivo. Sin embargo, en aquellos donde se eligen tres diputados, seis candidatos no parece exagerado.

Estimó que la propuesta permite viabilizar distintos objetivos. Con todo, reconoció que la fórmula Nx2 produce efectos colaterales para los independientes, los que no fueron intencionales.

Respecto de los independientes, expresó que conceptualmente, le resulta difícil pensar que personas que han optado por no militar en un partido político, gocen de la principal ventaja de pertenecer a uno: el llevar listas. De alguna manera, ello va en contra del fortalecimiento de las instituciones políticas.

Añadió que la reducción del umbral deja posibilidades a aquellos candidatos independientes más fuertes. Estimó que se podría permitir las listas de independientes y su participación en los pactos y, eventualmente, en subpactos, haciendo un pequeño sacrificio doctrinario, en la medida en que simultáneamente se haga un reforzamiento de la ley de partidos políticos y se fortalezca su actividad. Es decir, que en forma paralela se trabaje en una ley que establezca mayores controles, mayor transparencia, recursos para la formación y el funcionamiento de las instituciones partidarias.

Manifestó que como resultado de esta reflexión, habría que ser heterodoxo para no dar la señal que se quiere castigar a los ciudadanos independientes. Ello significa permitir listas de independientes con algún tipo de regla para que no sean demasiado oportunistas; un acuerdo en torno a alguna declaración, algún tipo de signo o señal que les permita formar parte de pactos y de subpactos. Sin embargo, desde el punto de vista de la igualdad, podría ser defendible si, además, se trabaja en una ley de partidos políticos que los robustezca.

Consultado sobre su afirmación en orden a que resultaba imposible alcanzar una mayor proporcionalidad, sin aumentar el tamaño de los distritos, sostuvo que lograr mayor proporcionalidad, no igual peso en el voto, con 120 diputados y con distritos más pequeños, es imposible. Es efectivo que se puede mejorar el peso del voto en el corto plazo con una iniciativa como la del ex Presidente Piñera.

En materia de igualdad de peso, esta iniciativa tiene dos etapas: una ley corta para las próximas tres elecciones y una larga que establece un mecanismo automático que es mucho mejor en términos de igualdad de peso que el del ex Presidente Piñera. El problema de esta iniciativa es que la mayoría de los distritos eligen cuatro diputados, hay varios que eligen dos y algunos seis. Este defecto también lo presenta la iniciativa presentada por los senadores Walker y Chahuán.

Informó que colaboró con diputados de esta Comisión en lo que se llamó el proyecto Auth-Burgos-Monckeberg-Schilling, el que proponía establecer una Cámara de 150 diputados, con distritos que eligen cinco, siete y ocho diputados.

Añadió que no comparte el contenido del proyecto presentado por el ex Presidente Piñera. Perfectamente podría sostenerse que se trata de un sistema binominal 2.0, en el sentido de que le hace la vida más fácil al duopolio, porque desaparecen los conflictos al interior de la Derecha y de los bloques dentro de la Concertación, ya que todos obtienen al menos un escaño con distritos que eligen cuatro diputados.

Expresó que en esta iniciativa al menos la mitad de los distritos elige un número impar de diputados. Distritos de cinco, de siete, de seis y de ocho diputados efectivamente significan más competencia, más proporcionalidad y más fuerza emergente.

Interrogado sobre la combinación de sistema proporcional con presidencialismo, señaló que varios cientistas políticos han sostenido que constituye una mala mezcla el combinar el presidencialismo y el multipartidismo. No obstante, en lo que respecta a la experiencia chilena de 1932 a 1973, su desenlace negativo no se debió al sistema electoral. Si bien en 1973 se produjo la caída de nuestra democracia, Chile fue el último país de una serie de ocho naciones sudamericanas que tuvieron golpes de Estado: Brasil y Perú en 1964; Argentina en 1966, con la caída de Illia, y Uruguay con Bordaberry en 1973. Hubo golpes de Estado en todos los países, menos en Colombia y en Venezuela. En algunos países había bipartidismo, tripartidismo y, en otros, multipartidismo. Por tanto, el golpe de Estado no fue responsabilidad del sistema electoral.

Añadió que Scott Mainwaring sostiene que la experiencia chilena muestra que puede funcionar un presidencialismo con un sistema pluripartidista. Durante estos veinte años se ha mejorado ese rendimiento. Reformas como, por ejemplo, reducir el período de seis a cuatro años; la simultaneidad de las elecciones tanto presidenciales como parlamentarias, y la segunda vuelta presidencial, disminuyen la posibilidad que un Presidente de la República quede solo o en minoría.

Lo propio del presidencialismo es que se elige al Presidente por un período fijo, por lo tanto, siempre existe la posibilidad que se quede en minoría. El único sistema que resuelve ese problema es el parlamentarismo. Nunca va a haber un jefe de gobierno con minoría. Indicó que dado el problema estructural del presidencialismo, se han ejecutado reformas que apuntan a minimizar esa posibilidad.

Por otra parte, recordó que el sistema binominal prometió reducir el número de partidos. Sin embargo, el Ministro del Interior de la época en que se diseñó este sistema aceptó modificar el trazado original, incorporando los pactos. Esta medida se adoptó a petición del entonces Presidente de Renovación Nacional, don Sergio Onofre Jarpa, quien efectuó este requerimiento a raíz de la división que sufrió ese partido cuando la UDI optó por escindirse del mismo. La decisión de permitir los pactos aseguró la subsistencia del multipartidismo. En Chile existen hoy seis o siete partidos, al igual que antes de 1973. Entonces, es injusto sostener que el proyecto va a aumentar el número de partidos o la fragmentación, porque la situación actual es más o menos parecida a lo que existía antes de 1973.

Manifestó que bajo el sistema binominal también se ha producido la situación en virtud de la cual el Parlamento es rehén del voto de un independiente. Ello que muchos presentan como un fantasma que va a ocurrir si tenemos sistema proporcional inclusivo, es algo que se ha vivido los últimos cuatro años.

Por último, consultado sobre el redistritaje, expresó que él fue partidario que hubiera distritos con un mínimo de tres diputados, porque la idea original apuntaba a eliminar completamente el binominal en todo el territorio. En el proceso de confección del nuevo mapa electoral se fue intentando buscar un equilibrio. Por ello se concedieron nuevos diputados a la Región Metropolitana y a las regiones V y VIII. Sin embargo, hizo presente que el propósito era evitar que el proyecto apareciera como una medida centralizadora. Por ello, se fueron agregando parlamentarios a las regiones del Maule, de Los Ríos y de Los Lagos. Así, se llegó a un momento en que todas las regiones, menos una, tenían más representación parlamentaria: la Región de Atacama. Ante tal escenario, parecía lógico y se presentaba mejor ante el país que como resultado del aumento del número de diputados, todas y cada una de las 15 regiones del país aumentaran en al menos un diputado.

Explicó que diez regiones aumentan en un diputado y las regiones más pobladas aumentan en número mayor.

Interrogado sobre la propuesta de modificar nuestro sistema bicameral para reemplazarlo por uno unicameral, señaló que prefiere el sistema actual. Sostuvo que por una parte se cuenta con una Cámara que representa el presente y otra que tiene un rezago incorporado estructuralmente, al elegirse por parcialidades. Este diseño fue relevante en un determinado momento. A vía de ejemplo, recordó que la Democracia Cristiana arrasó en las elecciones de diputados de 1965, cuando obtuvo 82 de los 147 diputados. Sin embargo, en las elecciones senatoriales el citado partido eligió 11 de los 20 escaños en disputa. Los otros 25 senadores provenían de la elección de 1957.

Recalcó que consideraba positivo el diálogo que se produce entre las dos cámaras, no solo porque la tradición chilena es bicameral desde 1823, sino porque permite discusiones más complejas.

Sin embargo, estimó que podría analizarse la manera en que los proyectos ingresan por la Cámara. Los gobiernos despliegan toda su energía para que se aprueben rápido en la Cámara, para luego negociar en el Senado partiendo de cero. Posteriormente el proyecto regresa a la Cámara a un tercer trámite, obligando a esta última a pronunciarse, limitándose a aprobar o rechazar las enmiendas efectuadas por el Senado. Ello ha generado la sensación que no se aprecia el trabajo desarrollado por la Cámara de Diputados.

Una solución consistiría en que la mitad de los proyectos partieran por la Cámara y la otra mitad por el Senado, de manera de restablecer una relación un poco más equilibrada entre ambas Cámaras.

La Oficial de Gobernabilidad del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, señora Marcela Ríos informó que semanas atrás publicaron el informe de auditoría a la democracia, elaborado por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo.

En éste se contempla un capítulo relativo a elecciones, en el cual efectúa una evaluación sobre la forma en que está funcionando el sistema electoral.

Indicó que en dicho documento se plantea que el sistema binominal, basados en datos de los últimos 20 años, tiene un efecto negativo en la representación, en cuanto a que efectivamente ha sobrerrepresentado a las dos principales fuerzas, en desmedro de las terceras y cuartas fuerzas y de los independientes. Además, el partido más favorecido en cada coalición es el partido más grande, lo que ha ido cambiando con el tiempo, dependiendo de la votación que va obteniendo cada partido.

Asimismo, se sostiene que este sistema incentiva poco la competencia, dado que los resultados son bastante predecibles, lo que hace que en muchos casos los ciudadanos sientan poco entusiasmo por participar electoralmente, sobre todo en aquellos casos donde las coaliciones tienden a blindar a los incumbentes y no generar competencia, de tal forma de mantener los escaños de cada partido y de cada coalición.

Añadió que el informe también demuestra que, si bien el sistema binominal no es el causante, si influye negativamente en dos ámbitos. En primer lugar, en aumentar las barreras para el acceso de mujeres. Sobre este fenómeno existen a su vez dos razones. La evidencia internacional demuestra que los sistemas con magnitud de distrito más pequeño son los sistemas menos amigables para la elección de mujeres y, mientras más grande la magnitud de distrito y más proporcional el sistema, más mujeres son electas. Por el contrario, los sistemas uninominales son los menos amigables o donde menos mujeres son electas. Sin embargo, destacó que ello también sucede porque el sistema binominal incide fuertemente en cristalizar prácticas de nominación en los partidos políticos, que tienden a ser cerradas y centralizadas, porque este sistema fue diseñado para transformar un sistema históricamente multipartidista en uno bipartidista.

Indicó que los datos que existen respecto de la evolución del número de partidos muestran que el sistema binominal no ha tenido efecto en disminuir sui cantidad, como se aprecia en la siguiente lámina:

Expresó que en la última elección se presentaron catorce partidos y en esta Cámara hay más de ocho partidos representados. Chile sigue siendo un país con un sistema multipartidista, que está por encima del promedio de América Latina en número de partidos. Después de veinticuatro años, esta especie de camisa de fuerza que se le trata de imponer al sistema de partidos, no tuvo el efecto de disminuir su número, pero sí ha producido un efecto en las prácticas de nominación y en la conducta de las elites partidarias que contribuyen a la sensación de la ciudadanía de que los partidos son lejanos, que las decisiones las toman unas elites entre cuatro paredes y que hay poca competencia o poca receptividad en la forma en que se definen las candidaturas.

Por otra parte, hizo presente que las encuestas de opinión demuestran que se trata de un sistema electoral que tiene baja legitimidad entre los ciudadanos, lo que ha redundado en una baja confianza de los ciudadanos hacia el Congreso.

Puntualizó que los datos demuestran estabilidad y baja volatilidad, pues las dos coaliciones se llevan una proporción importante de los votos.

A continuación expuso una lámina referida a la relación entre votos y escaños en la Cámara de Diputados y en el Senado, desde 1989 en adelante:

A continuación expuso la siguiente lámina referida a la distancia entre la ciudadanía y los partidos.

La línea superior muestra la proporción de escaños que se han llevado los principales partidos o coaliciones durante los últimos 24 años, lo que refleja enorme estabilidad. En cambio, las líneas inferiores muestran la identificación de los ciudadanos con los partidos y los votos que reciben los mismos partidos en comparación con los escaños. Mientras los escaños se reparten igual, los partidos han bajado la cantidad de votos. También ha bajado enormemente la identificación de los ciudadanos. A principios de los noventa más del setenta por ciento decía identificarse con algún partido o coalición. Hoy, esa proporción está levemente sobre el treinta por ciento. Vale decir, en veinticuatro años, un cincuenta por ciento de personas dejó de sentirse identificado con un partido político.

Por otra parte, hizo presente que una de las distorsiones del sistema produce dice relación con el triunfo de candidatos que en la elección resultan terceros o cuartos, quedando al margen candidato que obtuvieron mayor votación. Al respecto expresó que en general, los beneficiados han ido cambiando a lo largo del tiempo, como lo refleja la siguiente lámina:

Recalcó que esta situación le resulta muy difícil de entender a la ciudadanía. Indicó que resulta complejo explicarle a las personas que llegará al Congreso una persona que obtuvo muchísimos menos votos que otra persona que quedó al margen.

En este mismo sentido, explicó que en términos de competencia, hicieron un cálculo para determinar si ésta aumentaba o disminuía. Para ello crearon un indicador para medir qué porcentaje es altamente competitivo. Para que la competencia entre compañeros de lista sea alta, debe existir una diferencia de menos del 5 por ciento. En cambio, se considera poco competitiva cuando la diferencia está entre el 10 y 20 por ciento o más. El análisis efectuado lleva a concluir que el sistema sigue siendo poco competitivo, como lo refleja la siguiente lámina:

Añadió que más del treinta por ciento de las competencias tienen una diferencia de votos de más del veinte por ciento entre los dos compañeros de lista. Por tanto, sigue existiendo una proporción de competencia bastante baja en comparación con otros sistemas electorales con lista abierta.

Por otra parte, respecto de la rotación de los parlamentarios, expresó que el sistema chileno no tiene peores niveles de rotación que otros sistemas, a pesar de que existe una sensación instalada de que existe poca rotación y que se privilegia a los incumbentes. Sin embargo, los datos demuestran que no hay necesariamente menos rotación que en otros sistemas, aunque los ciudadanos tienen una percepción de que ello no es así.

En cuanto a la desigualdad del voto, señaló que los sistemas electorales en lo más básico tienen por objeto traducir los votos en escaños. También tienen un rol esencial en determinar cuán proporcionales son los cuerpos legislativos. En este sentido, indicó que los sistemas electorales inciden en la determinación de quiénes llegan o no al Parlamento. Asociado a la forma en que están elaborados los distritos y el mecanismo electoral, se encuentra el tema de la incidencia en el valor del voto.

Recordó que el mapa electoral que acompaña al sistema binominal fue elaborado entre el plebiscito de 1988 y la elección de 1989. Explicó que un indicador que se utiliza en ciencia política para medir cuán bien asignados están los escaños por electores, muestra que considerando la igualdad del voto para 2013, el 30,73 por ciento de los escaños del Senado están mal asignados y el 16 por ciento en la Cámara de Diputados, según se aprecia en la siguiente lámina:

Hizo presente que ello ocurre por la disparidad en la distribución de los electores y la población. Explicó que hicieron un cálculo para la Cámara de Diputados y para el Senado, con el objeto de mostrar una igualdad ideal en que todos los escaños estuvieran repartidos de forma adecuada. El estudio arrojó que hay distritos que están sobrerrepresentados y otros muy subrepresentados, según se aprecia en las siguientes láminas:

En la lámina se observa que las barras que apuntan hacia abajo son bastante más largas que las que apuntan hacia arriba, lo que significa que hay más subrepresentación que sobrerrepresentación. Así, los distritos 20 y 29 –Maipú y Puente Alto- son los más subrepresentados en todo el país.

En el Senado ello es aún más acentuado, dado que la subrepresentación de la Región Metropolitana en relación con la sobrerrepresentación de otras circunscripciones es enorme, según se aprecia en la siguiente lámina:

Respecto del tema del género, expuso la siguiente lámina:

Indicó que en esta presentación se observa la evolución de la presencia de mujeres en la Cámara de Diputados y en el Senado. Explicó que el enorme aumento que se aprecia en el Senado se explica porque de dos aumentó a cinco el número de senadoras. Ese dato es anterior al reemplazo de la ex senadora Rincón por un senador, por lo que bajó del 18,4 a alrededor del 15 por ciento.

Explicó que la imagen presenta la evolución de la participación de la mujer durante 24 años. En la Cámara de Diputados se ha producido un aumento más sistemático, a pesar de que no es drástico, pues sigue en torno al 15 por ciento.

Pese a lo expuesto, hizo presente que Chile se encuentra lejos por debajo del promedio de América Latina, llegando a un 24 por ciento; lejos del promedio mundial, de los países de la OCDE, de los países nórdicos y de los estados árabes, según se aprecia en la siguiente lámina:

Señaló que existe una abundante discusión respecto de las razones que explican la subrepresentación de las mujeres en el Congreso, en particular, y en otros cargos de elección popular. La razón más básica, más simplista apunta al hecho que los partidos nominan a muy pocas mujeres como candidatas.

De todas las elecciones parlamentarias, desde 1989 a 2013, el noventa por ciento de candidatos fue de sexo masculino, según se aprecia en la siguiente lámina:

Añadió que en algunos partidos, sobre todo en los grandes, como la Democracia Cristiana, la UDI y en parte en Renovación Nacional, el promedio de candidaturas de mujeres en algunos casos no ha llegado ni al diez por ciento. El partido con el porcentaje más alto es el Partido Humanista, que sólo ha conseguido un escaño en 24 años, seguido del Partido Socialista, con 19 por ciento; el Partido Comunista, con 18 por ciento; el PPD, con 16 por ciento; el Partido Radical, con 7 por ciento.

En síntesis, de lo expuesto se desprende que el problema básico que explica el por qué hay pocas mujeres en el Congreso se vincula al hecho que los partidos nominan muy pocas mujeres a competir.

Destacó que si solo compite un siete por ciento de candidatas mujeres, constituye un gran logro que exista un quince por ciento de mujeres en el Congreso, porque las que compiten son mujeres excepcionales en la esfera política, que han logrado superar las barreras de nominación.

Asimismo, expresó que hasta que comenzaron las mesas mixtas en la última elección, siempre se contó con datos electorales desagregados por sexo, que mostraron claramente que los electores no discriminan a las mujeres. Por el contrario, hombres y mujeres votan por igual por hombres y mujeres y las mujeres votan un poco más por mujeres que los hombres por hombres. Por lo tanto, las mujeres tienen un leve subsidio de dos o tres puntos porcentuales en resultados electorales, lo que permite constatar que el problema no radica en que los electores no voten por las mujeres, sino que compiten muy pocas.

Aclaró que las cuotas de género en el mundo están diseñadas para que los partidos aumenten la cantidad de mujeres que nominan a las elecciones. Toda la evidencia de la Unión Europea, de la Unión Interparlamentaria, de IDEA International, de Naciones Unidas, apunta a que las cuotas han sido el único mecanismo que ha sido eficaz para aumentar la cantidad de mujeres que compiten en la elección y que ha permitido elevar la cantidad de mujeres electas.

Informó que América Latina es la segunda región con mayor cantidad de mujeres en sus Parlamentos y la que ha aumentado más rápidamente en los últimos treinta años. Cerca de seis o siete países han superado el treinta por ciento de mujeres en los congresos, lo que se debe a la aprobación de leyes que fijan cuotas electorales.

A continuación expuso la siguiente lámina, sobre el efecto de las cuotas de género en América Latina:

Explicó que la línea superior alude a los países de América Latina que tienen cuotas de género; la línea rosada representa a los países que no tienen cuota. Chile, en amarillo, está en línea con los países que no tienen cuota. Concluyó que la diferencia es de más de diez puntos porcentuales en presencia de mujeres en los Congresos entre países que tienen y no tienen cuotas.

Informó que en Ecuador, Argentina, Costa Rica, México, Bolivia, Perú, las mujeres han llegado significar más del treinta y cinco por ciento del Parlamento en la última elección, como se aprecia en la siguiente lámina:

Destacó que el Senado de Argentina está conformado por alrededor de un cuarenta y cinco por ciento de mujeres. Entre los países comprendidos en la presentación, mencionó especialmente a Ecuador, en el que ha aumentado de manera exponencial la participación de la mujer.

Por su parte, los países que no tienen cuota de género, tienen en promedio bajos niveles de participación de las mujeres, con la excepción de Nicaragua, único país en la región que tiene una fuerte representación de mujeres, sin tener una cuota electoral, según se aprecia en la siguiente lámina:

Reiteró que los otros países de América Latina que no tienen cuotas, como Chile, tienen todavía muy bajos niveles de representación. Los peores son Guatemala y Colombia, que aparecen muy estancados en los últimos años.

Afirmó que se ha generado una discusión en torno a si las cuotas funcionan mejor o peor en algunos países. Al respecto indicó que las cuotas son más efectivas en sistemas de representación proporcional, donde la magnitud de los distritos es más alta y funcionan con listas cerradas. Con todo, advirtió que también han funcionado en sistemas como el nuestro. Por ejemplo, en el caso de Perú, donde hay listas abiertas y sistema proporcional más moderado, la cuota ha tenido un efecto bien impresionante. De hecho, destacó que todos los países vecinos, Bolivia, Perú y Argentina, utilizan cuotas, y tienen más de un treinta por ciento de mujeres en el Congreso.

En este sentido, expresó que lo único que ha permitido acelerar el proceso de incrementar la participación de las mujeres en los Congresos de América Latina son las leyes de cuotas. En muchos países de Europa, los partidos tienen cuotas voluntarias y no cuotas electorales. En América Latina, muchos partidos han adoptado cuotas internas en forma voluntaria. Sin embargo, la gran diferencia que existe entre América Latina y Europa radica en que los partidos europeos cumplen las cuotas voluntarias que se autoimponen.

Sobre la propuesta que se contiene en el proyecto, considerando cómo se interactúa con la ley de partidos, los problemas que enfrentan los partidos políticos y nuestra democracia, en términos de representación y de relación de las instituciones con la ciudadanía, afirmó que el proyecto está bien encaminado, que en algún sentido recoge los acuerdos y la discusión que se ha venido dando en el mundo académico y político acerca de cuál sería una buena fórmula para reemplazar el sistema binominal.

Sostuvo que existe suficiente evidencia para demostrar que un sistema proporcional moderado puede resolver algunos de los problemas que presenta el sistema binominal, como los temas de representatividad y los niveles de competencia.

Añadió que en la medida en que se busca reemplazar el sistema y no modificarlo, puede mejorar la legitimidad del sistema electoral y quizás también la opinión de los ciudadanos sobre el Congreso Nacional, aunque ello es algo más de fondo, que no responde solo al mecanismo electoral.

Manifestó que ciertos aspectos del proyecto podrían ser mejorados o revisados, sobre todo en cuanto a la proporcionalidad. En la mayoría de los distritos que eligen menos de cinco diputados, las probabilidades que terceras o cuartas fuerzas puedan llegar al Congreso son muy bajas. Ello significa que el proyecto sigue tratando como clientes preferentes o privilegiando a las dos principales coaliciones y a los partidos grandes.

Más allá del tamaño de los distritos, destacó que la evidencia internacional y las experiencias en democracias avanzadas demuestran que cuando se desea modificar o reemplazar un sistema electoral, ese diseño debiera ser realizado con los criterios técnicos más transparentes posibles y que éstos sean conocidos y consensuados. En este sentido, indicó que en el ideal de los mundos, la propuesta de mapa electoral debiera haber sido realizada por un órgano autónomo del Congreso, ojalá con criterios técnicos más claros de los que están especificados en el proyecto.

Aseveró que esperar cuatro elecciones para que el Servicio Electoral efectúe una reasignación de escaños es un tiempo excesivamente largo, considerando que ya se viene arrastrando un mapa electoral por veinticuatro años, el que fue diseñado de una manera no participativa, en un período en el que no existían condiciones democráticas y donde se buscó privilegiar ciertos sectores políticos y zonas del país.

El efecto que tiene el proyecto en mejorar la igualdad del voto no es tan significativo. Estimó que debiera profundizarse, por lo menos, en la Cámara de Diputados.

Afirmó que se mantiene una fuerte desigualdad en el poder del voto. Persiste una alta sobrerrepresentación de algunos distritos y regiones, privilegiando a esos electores en desmedro de otros. Especialmente afectados quedan los electores de Regiones Metropolitana, de Valparaíso y del Biobío.

Añadió que el proyecto destaca la importancia de avanzar hacia la igualdad del voto y que existe una distinción en la fundamentación de la representación en la Cámara y en el Senado. En la Cámara Alta se parte del supuesto que la representación es más regional. Sin embargo, la fórmula propuesta mantiene una lógica un poco dual, en la que ambas Cámaras tienden a tratar de avanzar en alcanzar más igualdad en el voto y en la representación proporcional, pero en ninguna de las Cámaras se alcanzan claramente los objetivos propuestos.

Estimó más apropiado que en la Cámara de Diputados se avance directamente hacia la igualdad del voto, y que no se busque compensar a las regiones donde viven pocos electores, con criterios que no son los de la igualdad del voto. En este mismo sentido, hizo un llamado a subsanar la subrepresentación que hoy enfrentan los electores que viven en la Región Metropolitana, de Valparaíso y del Biobío. Asimismo, consideró necesario que en el Senado se avance con claridad hacia una representación regional, en la que no se busque compensar la igualdad del voto. Además, indicó que se debe asumir que mantener un sistema bicameral implica que ambas Cámaras tienen una legitimidad de origen, un tipo de representación distinta, que en el Senado existirá representación regional, y en la Cámara de Diputados se salvaguardará que no siga ocurriendo la situación actual, en la que el voto de una persona que vive en Maipú o Puente Alto vale ínfimamente menos de alguien que vive en Coyhaique o en Copiapó.

Sostuvo que la lógica de repartir escaños en las regiones que ya están sobrerrepresentadas, se podría subsanar juntando otros distritos o, por lo menos, efectuar un esfuerzo para entregar mayor cantidad de escaños a las regiones que están subrepresentadas. Reiteró que la Región Metropolitana se mantiene enormemente subrepresentada con este proyecto.

Destacó que quienes están subrepresentados son los electores, las personas que viven en Puente Alto y en Maipú. No es de la ciudad de Santiago la subrepresentada, sino que sus electores. Por lo tanto, es la opinión de las personas que se concentran en las comunas más pobres de estas grandes ciudades las que se están viendo menos representadas en el Congreso.

Por otra parte, respecto del funcionamiento de los partidos, sostuvo que los partidos se han debilitado y que existe un conjunto de incentivos institucionales que no ayudan a contar con partidos fuertes. La ley de Partidos Políticos sospecha de ellos y trata de reducir todo lo que pueden hacer. Además se financia que los partidos hagan elecciones, pero no cuentan con recursos destinados a la educación cívica, a fortalecer liderazgos ni hacer trabajos programáticos.

Manifestó que los sistemas potencian los liderazgos individuales en desmedro de la disciplina partidaria. Lo opuesto a ello es contar con listas cerradas. Señaló que avanzar a un sistema que contara con lista cerrada sería la forma más eficiente de imponer mayor disciplina y acción colectiva de los partidos. Reconoció que resultaría complejo adoptar una decisión de esa naturaleza en el país. Sin embargo, consideró factible buscar otras opciones y complementarlas con este proyecto.

Algunos mecanismos que se podrían agregar podrían consistir en entregar a los ciudadanos la oportunidad de votar simultáneamente por candidatos y partidos. En este sentido exhibió una papeleta de Australia, donde este sistema funciona.

Señaló que este mecanismo permite generar incentivos para que los partidos, durante las elecciones, se comporten como tales, que pongan sus símbolos que los identifican.

Indicó que en la medida en que las listas sigan siendo abiertas, primará las votaciones individuales y los incentivos van a seguir puestos en la competencia con el compañero de lista.

Por último, insistió en la necesidad de revisar la ley de financiamiento electoral y la ley de partidos políticos.

El Director de la Escuela de Ciencia Política de la Universidad Diego Portales, señor Claudio Fuentes señaló que la función básica de un sistema electoral consiste en traducir votos en escaños. Sin embargo, existe abundante literatura que ha demostrado consistentemente que un sistema electoral cumple también otras funciones.

En primer lugar, puede incentivar o desincentivar la inclusión de grupos sociales o políticos al sistema político. Al respecto indicó que la magnitud de distritos o los umbrales para ser electos afectan las posibilidades que grupos de la sociedad participen en el juego político.

En segundo lugar, afirmó que un sistema electoral cumple una función relevante asociada a la competencia dentro de las coaliciones, como lo hace el sistema binominal, o entre las coaliciones, ya sea entre agrupaciones políticas o entre candidatos individuales.

En tercer lugar, expresó que un sistema electoral tiene un efecto en la gobernabilidad propia del sistema político. A vía de ejemplo sostuvo que en regímenes presidenciales se debe propiciar la formación de coaliciones y no la fragmentación del sistema. La combinación de un sistema presidencial con uno multipartidista como el chileno, podría provocar situaciones de crisis que se deben evitar.

Por otra parte, manifestó que todos comparten el ideal democrático que consiste en que los electores voten en base a propuestas programáticas o ideas y no en base a la relación directa o individual que se establece entre un candidato y un elector.

Por último, puntualizó que un sistema electoral puede favorecer el debate de ideas o estimular el personalismo en el vínculo entre electores y representantes. Por ejemplo, algo tan simple como la estructura de la papeleta, el permitir votar por un partido o por una persona influye seriamente en el propósito de incentivar ideas o el voto individual por una persona.

Advirtió que un sistema electoral no puede analizarse en forma aislada, sino que deben considerarse otros efectos en otras normas asociadas a la ley de partidos, financiamiento electoral, régimen de gobierno, etcétera.

A vía ejemplar, sostuvo que se podría avanzar hacia un sistema proporcional perfecto, pero ello no significaría una competencia perfecta, porque en nuestro país existe una barrera a la competencia, constituida por el financiamiento de campañas. Como en Chile es mayoritariamente privado, quienes tienen acceso a recursos económicos parten con una ventaja comparativa respecto de quienes no lo tienen.

Recomendó reducir las expectativas respecto del efecto que podría producir un eventual cambio en el sistema electoral. Dados los problemas de desigualdad política e inexistencia de inclusión, expresó que el efecto de una modificación al sistema electoral es limitado, ya que además se requiere efectuar una serie de modificaciones adicionales.

Manifestó que uno de los problemas del actual sistema binominal es la excesiva sobrerrepresentación de algunos territorios en perjuicio de otros, lo que se conoce como malapportionment. En este sentido, indicó que el proyecto avanza razonablemente en reducir fuertes desigualdades del voto en algunos territorios, sin llegar a perjudicar las zonas menos pobladas.

Desde el punto de vista del derecho comparado, y considerando veinticinco democracias bicamerales, Chile es el cuarto país que más sobrerrepresenta. Vale decir, nuestro país ocupa el cuarto lugar entre aquellos países donde el principio de una persona un voto se cumple menos.

A continuación expuso la siguiente lámina:

Afirmó que en la imagen se observa un índice donde la suma de diferencias absolutas entre el porcentaje de población y el porcentaje de escaños por distrito; básicamente, muestra hasta qué punto hay relación entre un voto y una persona. Chile, en general, tiende a una relación de sobrerrepresentación o, malapportionment.

Advirtió que la lámina se refiere sólo a la Cámara de Diputados. En general, en todos los países bicamerales se tiende a sobrerrepresentar. Sin embargo, se observa que la sobrerrepresentación de la Cámara de Diputados es más extrema en el caso chileno.

Por lo tanto, estimó positivo que el proyecto apunte a resolver la mala representación, asociada a la desigualdad del voto. Ello se logra con la reducción de distritos, con el aumento de la cantidad de diputados por distritos y, adicionalmente, con el incremento del número de diputados y senadores.

A continuación expuso la siguiente lámina sobre la relación entre electores y diputados:

Respecto de la relación electores-escaños en la Cámara Baja, hizo presente que hay países como Estados Unidos, Brasil, Colombia, con sobre 60, 100 o 300 millones de electores, donde es imposible tener cámaras de mil o dos mil representantes. Sin embargo, en Chile un diputado representa en promedio a 103.800 electores, lo que está sobre la media de los países de las Américas. El proyecto resolvería la relación representantes-electores, pues bajaría a un representante por cada ochenta mil electores y quedaría un poco bajo el promedio de Canadá.

Destacó que algunos sectores políticos han criticado la propuesta, porque favorecería el centralismo. Estimó que ello no se sustenta en los datos. Así, al observar la redistribución de los escaños por parte de la iniciativa, los electores de la Región Metropolitana representan el treinta y nueve por ciento del país y con la propuesta los diputados de dicha región pasarían a representar de un 27 a un 30 por ciento. Es decir, el alza en beneficio de la Región Metropolitana es de apenas un tres por ciento. A su vez, las cuatro regiones menos pobladas, I, XI, XII y la XV, que contienen el 4,7 por ciento de los electores, pasarían del 6,6 por ciento al 7,72 por ciento en la representación de diputados; es decir, mejora en poco más de un punto.

En el Senado la desproporción es significativamente mayor. Manifestó que la propuesta es muy moderada, dado que pese a que la Región Metropolitana representa el 39 por ciento de los electores, la iniciativa eleva esa representación del 10 al 14 por ciento. En las zonas menos pobladas, en las regiones ya mencionadas el porcentaje quedaría prácticamente igual en un 16 por ciento. Es decir, en el Senado casi no se modifica la “mala” representación que existe en el país.

Añadió que el segundo objetivo buscado explícitamente por el proyecto es el de la inclusión por dos vías: el aumento de la magnitud de distrito, es decir, el número de asientos en competencia en cada distrito, y por la vía de mecanismos de acción afirmativa o cuotas para la inclusión de más mujeres en el Congreso.

Como la barrera de entrada para resultar electo, con toda seguridad, se reducirá de 33,3 por ciento, en el sistema binominal, a 11,1 por ciento en distritos que tienen 8 asientos, y cómo es posible presentar un mayor número de candidatos, entonces es esperable que se incremente la posibilidad para que representantes de partidos más pequeños puedan ser electos. Añadió que no se verá una explosión de partidos o una excesiva fragmentación, porque la presencia de partidos no solo depende del sistema electoral que se tenga, sino también de otros factores, como por ejemplo el financiamiento de la política y las normas que definen la formación y disolución de partidos. De hecho, estimó muy improbable que la cantidad de partidos en competencia se altere, porque hoy nuestra democracia coloca fuertes trabas para la formación de partidos.

Para crear un partido, se requiere reunir un número de firmas equivalentes al 0,5 por ciento de los electores que sufragaron en la elección de diputados en, al menos, ocho regiones del país o en tres regiones contiguas. Cada ciudadano debe concurrir a un notario para protocolizar su afiliación y el partido en formación tiene 210 días para cumplir con este requisito. La disolución se produce cuando el partido no alcanza el cinco por ciento de los sufragios válidamente emitidos en cada una, de a lo menos de las ocho regiones o en cada una de las tres regiones contiguas.

Manifestó que como resulta engorroso y costoso formar partidos y como los electores confían muy poco en los partidos tradicionales, se observa una creciente tendencia hacia el surgimiento de candidaturas independientes, porque es muy difícil acceder al sistema político vía nuevos partidos.

Expresó que el sistema político no debiese favorecer a las candidaturas independientes, sino que favorecer a la formación de partidos. La democracia requiere partidos fuertes que rindan cuenta ante la ciudadanía. Indicó que, una democracia sana, vigorosa, necesita de buenos partidos. Ello estimularía una mayor inclusión y competencia. Sobre este particular afirmó que se podrían otorgar facilidades para la recolección de firmas. Por ejemplo, el Servicio Electoral podría centralizar el proceso a partir de una plataforma única de afiliaciones a partidos políticos.

Asimismo, preguntó si es adecuado desincentivar la formación de partidos regionalistas. El regionalismo en nuestra legislación es visto como una amenaza al Estado-Nación. Sostuvo que esta concepción es heredera del siglo XIX, de la disputa entre los federalistas versus los centralistas.

Propuso facilitar la formación de partidos, haciendo más fácil la recolección de firmas y permitiendo que puedan formarse partidos en regiones. Ahora bien, advirtió que mantendría las exigencias para la disolución de partidos. Es decir, sugirió facilitar el ingreso de nuevos partidos y al mismo tiempo hacerles costoso que se mantengan.

Por otra parte, valoró el establecimiento de las cuotas que consagra el proyecto. Éste dispone que en cada partido en el total de su nómina de candidatos a la Cámara y al Senado, ningún género podrá estar representado por sobre el sesenta por ciento ni por debajo del cuarenta por ciento del total.

Sin embargo, hizo presente que una de las interrogantes que, inmediatamente, surge es la relevancia que ocuparán las mujeres en las listas, más aún cuando se trata de listas abiertas donde su posibilidad de ser electas no depende tanto del lugar que ocupan en la papeleta, sino de los recursos con que cuentan y de la decisión del partido de privilegiar determinadas candidaturas en ciertos distritos. De ello dependerá que haya más mujeres electas.

Indicó que para resolver este problema el Ejecutivo propone un incentivo de quinientas unidades de fomento para los partidos políticos por cada mujer que resulte electa. Sobre este punto advirtió dos problemas: En primer lugar, expresó que se trata de un monto marginal en relación al esfuerzo que hacen los partidos en las campañas electorales. A vía de ejemplo expresó que en la última elección la UDI, no los candidatos de ese partido, declaró haber desembolsado poco más de 1.550 millones de pesos en la campaña de diputados. Si obtuvieron seis congresistas mujeres, entre senadoras y diputadas, recibirían el 3,3 por ciento de su desembolso declarado. Por su parte, la Democracia Cristiana declaró 956 millones de pesos y obtuvo dos representantes mujeres. Es decir, recibiría el 2,3 por ciento de su desembolso declarado como partido. Reiteró que no se considera el gasto que cada candidato hace en la campaña electoral, sino solo los partidos. Por lo tanto, el impacto de las quinientas unidades de fomento por candidata electa es, a su entender, totalmente marginal al total de un esfuerzo de campaña electoral.

En segundo lugar, señaló que si bien existe un problema de las directivas de los partidos políticos en cuanto a no estimular la presentación de candidaturas de mujeres para el Congreso, a su entender, la principal barrera de acceso se encuentra en la actual desigualdad de competencia entre candidaturas de hombres y mujeres en materia de recursos financieros. Hizo presente que un mejor incentivo consiste en entregar un subsidio estatal superior a candidatas no incumbentes, de modo de resolver un problema de desigualdad estructural, de competencia asociada a los recursos para financiar sus campañas.

También en relación con la inclusión, recalcó que resulta evidente que otro de los grandes asuntos pendientes en Chile dice relación con la subrepresentación de minorías étnicas en las instituciones de representación. Sostuvo que ésta es una oportunidad histórica para resolver esta deuda. Sugirió crear un distrito único nacional indígena, asignando un número adecuado de escaños, de cinco a siete, para que los ciudadanos que deseen inscribirse en un registro indígena propio puedan hacerlo y elegir a sus representantes independientemente del lugar donde vivan.

Respecto de la competencia, indicó que la propuesta original consideró una reducción en el número de distritos y un aumento en el número absoluto de congresistas, de modo de de permitir un mayor número de opciones para la ciudadanía a la hora de votar. Recordó que el proyecto propone que el número de candidatos por lista sea hasta el doble de número de cargos a elegir.

Explicó que como se trata de listas abiertas y los electores deben elegir dentro de ellas, el principal incentivo de un candidato es asegurar su propia elección y, en segundo lugar, asegurar votos para su lista. Con el sistema binominal la competencia está claramente centrada en derrotar al compañero de lista, mientras que con esta propuesta se modera, aunque no se elimina completamente, aquella competencia intra-coalición.

Destacó que si existen tres, cuatro o cinco listas en competencia, se presentaría el siguiente escenario, distinguiendo si se eligen dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete u ocho diputados:

Explicó que el cuadro supone que se presenten dos candidatos más que escaños a elegir, y no la fórmula originalmente propuesta en el proyecto en discusión. Vale decir, si se eligen ocho escaños, más dos, podrían presentarse hasta diez candidatos por lista; con tres listas serían treinta candidatos; con cuatro listas, cuarenta candidatos y cinco listas, cincuenta candidatos. Recalcó que la oferta que existirá será muy grande, lo que genera un problema de identificabilidad.

Indicó que en un escenario electoral como el propuesto, esto es, proporcional, con listas abiertas y voto personalizado, existirá un gran número de candidatos en la papeleta. Desde el punto de vista de los electores resultará difícil identificarlos, dado el crecimiento exponencial de la oferta de los mismos. En ese contexto, el financiamiento electoral adquirirá mayor relevancia de la que hoy tiene, dada la estructura de financiamiento electoral en Chile, principalmente proveniente de donaciones privadas, donde es posible presenciar campañas muy desiguales. Por otra parte, advirtió que si el límite al financiamiento de campañas electorales es por candidato, si hay listas con tres o cuatro candidatos del mismo partido, el límite para esa colectividad aumenta exponencialmente.

Sostuvo que este tema debe discutirse, porque genera desigualdad de límites y de acceso a recursos para competir en esos escenarios.

Asimismo, indicó que los incumbentes mantendrán la opción del vínculo directo con sus electores, pero además se reducirá el umbral de seguridad para ser electo. No es 33 por ciento, sino que llega hasta un 11 por ciento. Por tanto, señaló que se hará mucho más sencilla la reelección.

Ante el actual escenario y con el objetivo de favorecer competencias más justas, sugirió, en primer lugar, colocar límites razonables a la reelección de candidatos al Congreso. La tasa de reelección hoy no es tan alta, tiende a ser de 60 o 70 por ciento. Informó que es mucho más baja que en Estados Unidos. Sin embargo, con este modelo podría aumentar.

Asimismo, propuso establecer límites al gasto electoral por partidos y no por candidatos como hoy sucede, ya que, de lo contrario, se generará una fuerte desigualdad de competencias en el sistema político.

También propuso reformar la ley de financiamiento electoral; establecer un sistema de reemplazo para representantes a partir de una elección complementaria, tanto para representantes de partidos políticos como de candidaturas independientes.

Por otra parte, sugirió establecer la inhabilidad de los congresistas para desempeñarse como funcionarios públicos en otros poderes del Estado una vez electos, ya que esto daña seriamente el vínculo entre representantes y electorado.

Afirmó que uno de los principales desafíos de esta reforma será reducir los incentivos personalistas de la política. En un sistema como el binominal, en que solo se eligen dos escaños por distrito, el objetivo del voto personalizado es generar una mayor identificabilidad entre el representante y los electores. Desde el punto de vista de la teoría democrática, aquello es positivo si existen mecanismos efectivos de rendición de cuentas, es decir, si no hay clientelismo. Si no existen mecanismos de rendición de cuentas lo natural es que se establezcan relaciones de intermediación clientelar entre representantes y electores, cosa que ocurre en el caso de Chile.

Indicó que en un escenario como el de la reforma propuesta, por tratarse de listas abiertas, en que se debe votar por un solo candidato, es esperable que se produzca un mayor incentivo para la personalización de la política. Los candidatos tendrán sus nichos, sus bolsos de votos y, tal como ocurre hoy, establecerán redes de intermediación para asegurar su votación. Como además existe una fuerte desconfianza social hacia los partidos políticos, el principal incentivo de los candidatos será buscar un sello propio, lejos de las tiendas políticas. El mayor número de candidatos en la papeleta tenderá a diluir el vínculo entre representantes y representados. Advirtió que la situación es preocupante, dado que, de aprobarse la reforma el 86 por ciento de electores de Chile deberá decidir en distritos superiores a cinco asientos, a lo que debe sumarse un sistema de financiamiento electoral que se sustenta en la capacidad individual de recolectar recursos.

Para revertir la situación antes descrita y favorecer el debate de ideas por sobre la personalización de la política sugirió establecer un mecanismo mixto de voto por candidato y por lista, es decir, que las personas puedan votar por una lista si es que no quieren votar por uno de los 10 o 15 candidatos que la integran. En el caso del voto por lista, éste se distribuye proporcionalmente de acuerdo a los candidatos que se presentan. Este sistema podría incentivar el voto más programático.

Por otra parte, sugirió establecer la obligación que los candidatos de partidos se identifiquen en su propaganda con los emblemas de los partidos. Asimismo, propuso imponer el deber de acompañar junto con la inscripción de la candidatura, la especificación de programas de trabajo. También propuso otorgar financiamiento estatal permanente para partidos políticos, con propósitos específicos de apoyo a la generación de plataformas programáticas, formación y difusión de ideas en la sociedad.

Por último, hizo presente que un sistema presidencial, con un sistema de representación multipartidista, puede provocar situaciones de crisis o de paralización si es que no se forman adecuadamente coaliciones. Recalcó que el debate sobre el sistema electoral debiese vincularse necesariamente a una discusión mayor y que dice relación con el régimen de gobierno.

Estimó necesario que el Congreso se abra a discutir la opción de un sistema semipresidencial, de modo de fomentar la formación de coaliciones y permitir, de esa forma, reducir las tendencias hacia la fragmentación en un escenario de alta competencia y de mayor cantidad de partidos políticos en el sistema chileno. Afirmó que nuestra democracia requiere incentivar el debate de ideas, la formación de coaliciones y una moderada competencia. El proyecto actual enfatiza bastante en el tema de la representación y la competencia, y lo logra; sin embargo, hay que avanzar en el tema del debate de ideas, en el de la gobernabilidad y, finalmente, en el de la inclusión.

El Decano de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo, señor Eugenio Guzmán señaló que en un sistema electoral es posible hallar seis elementos. En primer lugar, se encuentra la fórmula. Al respecto indicó que la fórmula D´Hondt genera un sesgo a favor de la primera mayoría. Siempre que haya asociaciones entre un partido grande y uno pequeño, va a ganar el grande. Para solucionar ese problema se han creado otras fórmulas y distintos mecanismos numéricos.

El segundo elemento es el tamaño del distrito, es decir, cuántos parlamentarios elige cada uno. El tercer elemento está dado por la conformación territorial del distrito. El cuarto elemento es la población del distrito. El quinto elemento es la forma de presentación de los candidatos, y por último, el rol de los partidos.

Aseveró que los sistemas electorales no son fáciles de modificar. En los últimos cincuenta o sesenta años no se han producido cambios radicales, excepto en Nueva Zelanda. Informó que en Israel, en la Knesset, se efectuaron cambios específicos a partir de la entrada del Shinui y de otros grupos, pero, en general, no constituyen cambios relevantes. Inglaterra ha tenido por más de cien años el mismo sistema electoral. Italia y México hicieron algunos ajustes menores.

Destacó que no existe un sistema óptimo, sino que hay tantos sistemas como coyunturas y países.

Destacó que en los 150 países en donde hay elecciones, en todos hay variaciones, cambios, umbrales distintos, listas y mixturas. A vía de ejemplo mencionó el sistema turco, que fue hecho básicamente, para excluir a los kurdos, con un umbral de 10 por ciento.

Hizo presente que los sistemas electorales no operan en forma aislada, sino que interactúan con las instituciones más próximas. Por ejemplo, el régimen presidencial existe en forma combinada con un sistema proporcional en América Latina. En Europa hay sistemas parlamentarios, con sistemas proporcionales y mayoritarios.

Manifestó que también incide en los sistemas electorales las listas, pactos o subpactos, así como el diseño bicameral y el voto voluntario.

Indicó que uno de los objetivos que persigue el proyecto es reducir la desigualdad del voto. Para ello, uno de los factores a medir dentro de las propuestas es la proporcionalidad poblacional. Para medir este índice se utiliza en literatura la fórmula que aparece en la siguiente lámina:

En la primera columna se alude al actual sistema binominal, cuyo índice de proporcionalidad poblacional es 16 por ciento; en cambio, la propuesta del Gobierno tiene un 10 por ciento. Sin embargo, destacó que se puede disminuir el número de parlamentarios y mantener el mismo nivel o uno parecido, o mejorar la proporcionalidad territorial, sin que aumente en demasía el número de parlamentarios.

Recalcó que no es efectivo que con menos diputados no se pueda tener mejorías en términos de proporcionalidad. Junto con ello, señaló que existe el interés de asegurar que la representación de Santiago no crezca en demasía.

En segundo lugar, afirmó que en el mensaje se recuerda que en Chile, el Congreso estaba compuesto por 150 diputados y 50 senadores. Hizo presente que con ese criterio debiésemos tener 210 diputados. Expresó que es efectivo que mientras más grandes son las poblaciones, más grandes son los parlamentos; aunque ello no siempre se cumple. Por ejemplo, el de India tiene 1000 parlamentarios, pero debería tener alrededor de 10.000.

Añadió que otro de los objetivos que persigue el proyecto dice relación con el criterio de sobre representación que se otorga a las zonas extremas, Norte, Sur y Austral, más allá de su población electoral, en razón de propugnar su mayor integración. Sin embargo, advirtió que hoy ya la tienen. En algunos distritos, como el 59 y 60, hay alrededor de 50.000 electores y, obviamente, esos votos valen mucho más que los de Curicó o Los Ángeles.

Sostuvo que el problema radica en no amplificar en demasía la representación de la Región Metropolitana.

Indicó que un cuarto objetivo del proyecto apunta a permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas. Aseveró que teóricamente ello no es cierto. Si por corrientes significativas se entienden a aquellas que tienen un porcentaje promedio superior al 11 por ciento teórico, el proyecto alcanza ese objetivo en algunos distritos que eligen ocho diputados. Sin embargo, hizo presente que ninguno de los partidos no tradicionales alcanza dicho promedio. Si se trata de partidos con menor votación ello será posible si y solo si participan en listas o pactos como sucede actualmente.

Advirtió que en la medida en que los distritos son más grandes, el costo para los partidos pequeños será mayor. En ese sentido, aseveró que no es efectivo que el proyecto mejore tanto en relación con la situación actual.

Al respecto mencionó el cambio que va a significar el nuevo distrito tres, conformado por los actuales distritos números tres y cuatro:

Explicó que estratégicamente el candidato se concentraba en Calama, si era del distrito tres, o en Antofagasta. Ahora se concentrará en esas dos ciudades y ya no va a importar la votación de las personas de Tal Tal, Tocopilla o Sierra Gorda, porque tienen menos población.

Expresó que entendía que los autores del proyecto tuvieron en cuenta la necesidad de articular una propuesta que no altere en demasía los actuales distritos por razones políticas, que son muy atendibles.

En 1993, el Presidente Aylwin presentó un proyecto a esta Cámara en que si se alteraban las comunas, que era lo que correspondía. En este caso, la forma en que se agruparon las comunas aumentará significativamente los costos, no solo en términos de costo de población, sino también de distancia.

Manifestó que para visualizar si los partidos de menor votación van a tener mayor representación, realizó una serie de ejercicios, que se aprecian en la siguiente lámina:

Explicó que los partidos más pequeños, que aparecen en la última columna, no van a obtener representación. Destacó que la simulación se hace con las elecciones municipales, porque son las que más se asemejan a las elecciones parlamentarias diseñadas en el proyecto.

A continuación explicó la siguiente simulación:

Manifestó que si el Partido Comunista en algún momento opta por ir fuera de la Nueva Mayoría, no obtendría tan buenos resultados, por lo tanto, necesita estar en una coalición. De igual forma, si la Alianza tuviera una fracción de ella que opte por ir por fuera, tampoco tendría buenos resultados.

Indicó que la siguiente lámina se refiere a lo que ocurre al interior de cada coalición:

Expresó que este ejercicio demuestra que si se compite en conjunto con un partido muy grande al lado, lo que ocurre en el subpacto DC-PR, el partido más pequeño, en este caso el Partido Radical, no habría obtenido representación.

Destacó que se han llevado a cabo estrategias efectivas, para optimizar el rendimiento electoral. A vía de ejemplo, mencionó la adoptada el año 2008, en que separaron dos listas, y opera una ganancia, que se radica en el partido más grande, en este caso el PPD. Ello opera solo si las otras coaliciones no se dividen, porque entonces los efectos empiezan a diluirse. Lo mismo ocurrió el año 2012. A continuación expuso una simulación efectuada con los datos que emanan de las elecciones municipales del año 2008 y 2012:

Concluyó que no es efectivo lo que se señala en el proyecto, en orden a que los partidos chicos vayan a tener mayor representación.

Manifestó que otro objetivo que se propone el proyecto es aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos. Al respecto indicó que ello no necesariamente está vinculado al sistema electoral. Chile tiene altas tasas de incumbencia. Afirmó que si los partidos estiman que un parlamentario puede perder, no lo llevan de candidato.

Al respecto exhibió la siguiente lámina:

Expresó que otra ventaja del sistema chileno dice relación con las altas tasas de recambio. No siempre se reeligen los mismos. La tasa de recambio es muy alta, cercana all 40 por ciento.

En este sentido, la siguiente lámina refleja la posición de Chile en el mundo en esta materia:

En esta lámina se puede apreciar que Chile tiene una alta tasa de incumbencia, pero también una alta tasa de recambio. Otros países tienen alta tasa de incumbencia, como Estados Unidos, pero muy baja tasa de recambio.

Reiteró que la competitividad y la incertidumbre de los resultados no se vinculan necesariamente con el sistema electoral, porque todos los sistemas presentan el mismo problema de incumbencia. Hizo presente que estamos viviendo un ciclo en el que probablemente ha caído mucho la identificación con un partido político determinado, tal como lo muestra la siguiente lámina:

Expresó que otro objetivo que menciona el proyecto apunta a facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías. Al respecto señaló que no necesariamente se cumplirá con ese objetivo.

Por su parte, el objetivo de promover un Congreso que refleje la diversidad de la sociedad, se cumplirá en la medida que se le brinde espacios en los pactos como ocurre hoy.

Asimismo, respecto del objetivo de evitar que queden fuera del Congreso candidatos con grandes votaciones, indicó que ello ocurre por el efecto de las listas o pactos, por lo tanto, puede que siga ocurriendo. Por ejemplo, indicó que si va un independiente de candidato probablemente pierda.

Aseveró que la gran pregunta que puede formularse dice relación con que si el sistema va a ser capaz de sostener las coaliciones en el largo plazo. Estimó que las hace más febles.

El profesor de Derecho Constitucional de la Pontificia Universidad Católica de Chile, señor Germán Concha afirmó que no existe un sistema electoral perfecto. Todos responden a cierta combinación de objetivos, metas o valores que se buscan proteger o defender. Al juzgarlos es necesario examinar qué se está prefiriendo y, por lo mismo, dejar en claro cuáles son esos objetivos. Manifestó que lo que se puede ganar en variedad de la representación, se puede perder en términos de estabilidad o gobernabilidad.

Añadió que los sistemas electorales tienen por objeto traducir votaciones en escaños, por lo tanto, en poder público. Por ende, es legítimo que todos estén interesados en saber el resultado de ese proceso, lo que complejiza todas las reformas al sistema electoral, porque en el fondo todos tienen la tentación de ponerse en el escenario de lo que ocurrirá con el nuevo sistema que se propone como alternativa.

Por ello, en el pasado se propuso que la reforma a los sistemas electorales debiese aprobarse en un determinado momento y ponerse en vigor tres elecciones después.

Sostuvo que se trata de recuperar la idea del “velo de la ignorancia”, es decir, se debe diseñar un sistema de forma tal que se ignore a quién se está beneficiando.

En tercer lugar, advirtió que los sistemas electorales generan incentivos en el comportamiento de los candidatos en el largo plazo. Por ejemplo, según como se cuenten los votos o se diseñen los distritos en los sistemas, se decidirá qué tipo de campaña se hace.

En relación con las consideraciones específicas del proyecto, expresó que éste apunta a que la gente participe más en cuanto votante, pero que además se obtenga un Parlamento más representativo, en términos de las corrientes políticas o de quienes lo integren.

Al respecto indicó que no hay evidencia que demuestre consistentemente que el sistema electoral es el que define si se participa más o menos por parte de los votantes. En Chile, la historia no muestra que los sistemas con elección proporcional, que es el caso de la elección de concejales, tengan una mayor o mejor participación que las parlamentarias, que tiene el sistema binominal.

Lo que motiva la participación es la sensación por parte de la ciudadanía que se esté discutiendo algo que para cada persona resulta importante y que la lleva a participar, sobre todo en esquemas de voto voluntario. Además de ello se requiere que la decisión respecto de quién va a ganar no esté resuelta; por lo que la participación de cada uno tiene sentido.

Indicó que uno de los grandes temas de las democracias masivas consiste en cómo convencer a una persona que administra un solo voto de que ese solo voto tiene sentido en un universo total de diez millones. Éste es uno de los grandes argumentos que existen en favor de los sistemas uninominales, porque lo que hacen es achicar los distritos, y al hacerlo y poner un solo candidato en la elección se le acerca al público y la discusión es más estrecha, por definición.

Agregó que es cierto que en un sistema proporcional se busca aumentar la variedad. Técnicamente, se los clasifica como sistemas que buscan dar algún grado de representación a la minoría. En esa línea, el sistema proporcional se basa en un sistema matemático que busca traducir, de la manera más fiel posible, los votos en cargos, con el consiguiente problema que dice relación con que las preferencias de la población no se distribuyen homogéneamente.

Sostuvo que resulta efectivo que con un sistema proporcional se busca aumentar la variedad de la representación, pero también es cierto que ello se traduce en una mayor dificultad para formar coaliciones estables, porque tiende a dividir, a aumentar la variedad y, por lo tanto, aumenta las alternativas más que a tratar de generar dos o más fuerzas fundamentales y estables.

Más aún, afirmó que se puede producir un cierto incentivo a moverse hacia discursos más extremos, por la vía de entender que allí puede existir ese nicho de votos que permitan salir elegidos, abandonando los discursos más centristas.

En este sentido, destacó que la combinación de un régimen presidencial con un sistema proporcional es muy compleja, porque genera una situación en la que existe un poder muy fuerte, en la presidencia, y una situación en que el Congreso está particularmente atomizado, lo que genera un riesgo muy importante tanto para la dificultad práctica de hacer gobierno como para los equilibrios entre Congreso Nacional y Presidencia de la República.

Por ello, afirmó que los diseños más exitosos, como el presidencialismo americano, existe un Presidente fuerte, pero con un parlamento con sistema mayoritario, uninominal, lo que genera una fuerza estable, un compensador real.

Por otra parte, respecto de la igualdad del voto, indicó que es un tema complejo de discutir. En primer lugar, porque no existe un número mágico, para lograr el umbral perfecto. En segundo lugar, señaló que resulta muy difícil de alcanzar. En tercer lugar, expresó que no es lo mismo tener cinco parlamentarios en un distrito, que tiene cierta cantidad de personas, y proceder a dividir el total de esos votantes por el total de los parlamentarios. Es muy difícil que se distribuyan exactamente, como si fuera un juego matemático, donde cada uno de los cinco parlamentarios se va a llevar un quinto de la población.

En este sentido, puntualizó que es distinto cuando se tiene un solo distrito con un solo parlamentario, siendo ese distrito de menor tamaño. Por lo tanto, si se quiere acercar el parlamentario al votante, el único modelo que lo permite es el sistema uninominal, porque tienen un solo parlamentario por distrito.

Añadió que la igualdad del voto presenta algunos problemas que hacen complejo avanzar. En primer lugar, ante la vieja discusión campo-ciudad, el tema de la igualdad del voto es muy prociudad; al interior de los distintos centros del país es procentro, es decir, es más pro Santiago que pro regiones, y al interior de las regiones es prociudad grande en desmedro de las más chicas.

Evidentemente, lo que hace es concentrar el peso electoral en las urbes. A vía de ejemplo sostuvo que si se agrandan los distritos se produce un efecto doble, porque geográficamente existirá un distrito de mayor tamaño, con mayor población, lo que aumentará los costos de hacer campaña en todo el lugar y llevará a que el candidato se concentre en los lugares más poblados, y su discurso se concentrará también en los problemas de las zonas más pobladas, porque es allí donde están los votos y, en consecuencia, se irá dejando de lado a las zonas menos pobladas.

Al respecto se ha sostenido que este problema se corregiría por el efecto de lista, al segmentar el distrito y distribuir candidatos a cada uno de las zonas. Comentó que ello presenta dos límites. El primero es natural, es decir, solo funciona si todos los miembros de la lista saben que van a salir elegidos, situación que es virtualmente imposible. Por lo tanto, siempre habrá al menos uno que no va a estar dispuesto a ir a la zona más perjudicial, porque corre el riesgo de perder. Además, lo expuesto se ve agravado por el proyecto, dado que se permite llevar el doble de candidatos que cupos a elegir. Ello quiere decir que serán diez candidatos quienes competirán por cinco cargos, por lo que resulta evidente que no existirá distribución de territorios al interior del distrito, por lo que todos tenderán a concurrir a los lugares donde haya más votación.

Indicó que el distrito grande tiende a complicar especialmente a los independientes, a quienes les cuesta armar una campaña de ese tamaño y lograr el alcance que tiene una lista. En este sentido, hizo presente que en nuestro ordenamiento constitucional se establece la obligación de garantizar la igualdad de oportunidades de los independientes frente a los militantes de partidos políticos.

Por otra parte, recordó que se ha invocado como argumento a favor del cambio del sistema el hecho que existen candidatos con altas votaciones que no resultan electos en virtud del binominal. Al respecto explicó que ello no es un efecto del sistema binominal propiamente tal, sino de todos los sistemas que tienen listas.

Destacó que se puede aumentar el tamaño del distrito para que el coeficiente de elección baje y de esta forma se asegure que la segunda mayoría resulte electa, pero puede quedar al margen la tercera.

Si en la lista participa un candidato que reúne muchos votos, es muy posible que produzca un efecto chorreo respecto de los demás candidatos de la lista.

Recalcó que la única manera que esta consecuencia no se produzca es tener un sistema que no tenga listas.

Respecto del propósito del proyecto de aumentar la competencia, señaló que siempre se ha sostenido que ésta debe darse para con la lista contraria y no hacia el interior de la propia lista. Sin embargo, en la medida que la lista tenga más candidatos que cupos a elegir, inevitablemente la competencia se producirá primero al interior de la lista, porque habrá más candidatos para el mismo mercado o segmento original.

Añadió que en un sistema de voto voluntario en primer lugar se debe motivar a los más cercanos, a los que formarán parte de la red del candidato, porque supone una lógica de campaña distinta.

Manifestó que ello también perjudica a los independientes, porque si no compiten en un pacto les va a ser muy difícil, o casi imposible, ser electos con un sistema como el que se propone en el proyecto.

Por otra parte, consideró necesario que el votante promedio entienda con relativa facilidad por qué razón salió elegido uno y no otro. Reglas muy sofisticadas generan la sensación de que algo oscuro está sucediendo.

Por último, respecto de las razones que motivarían a los ciudadanos a votar de una manera u otra y hasta qué punto la legislación o la autoridad puede intervenir para “corregir esas motivaciones” expresó que existe una delgada y compleja línea, donde por un lado se halla la información, la educación, la alusión a la participación y a la importancia de expresar la voluntad política de cada uno de los miembros de la comunidad y por otro, existe una visión en la que se empieza a poner en duda la habilidad de ciertas personas para decidir, o la validez de la decisión.

Advirtió que transitar ese camino puede terminar conduciendo en un sentido contrario al sufragio universal igualitario. Éste se basa en la idea de no discutir los motivos que las personas tienen para votar, sino que con cumplidos ciertos requisitos objetivos básicos se les permite a todos votar, porque se trata de un derecho esencial.

La discusión de si unos votos están mejor preparados que otros para votar conduce al sufragio censitario, a otras lógicas, a otros sistemas, y supone una transformación mucho mayor.

La Presidenta de Evolución Política, Evópoli, señorita María Francisca Correa señaló que les asiste la convicción de que es positivo para nuestro sistema político avanzar en reformas sustantivas que fortalezcan la calidad de nuestra democracia.

Estimó necesario contar con un sistema que posibilite una mayor competencia y mejor representación de las diversas posiciones y proyectos políticos que hoy se desarrollan en nuestra sociedad, otorgándole, a su vez, una mayor legitimidad ante la ciudadanía. Por ello, declaró que son partidarios de avanzar hacia un sistema electoral proporcional moderado. Sin embargo, consideró innecesario el aumento del número de parlamentarios para generar una mayor representatividad de los electores. Al respecto recordó que el acuerdo político suscrito entre Renovación Nacional y la Democracia Cristiana, contemplaba un aumento de parlamentarios inferior al del proyecto presentado por el Gobierno.

Sobre el particular, manifestó que tal aumento tendrá un impacto presupuestario y producirá efectos en el trabajo de los parlamentarios. El revisar el informe financiero, no permite conocer cómo se va a implementar esta reforma, sin que ella signifique un costo, si efectivamente contempla un aumento considerable de parlamentarios.

Además hizo presente que los distritos de gran magnitud dificultan la competencia para los nuevos actores. Vale decir, beneficia a los más conocidos; por lo tanto, favorece significativamente a los incumbentes y eleva el costo de las campañas electorales, ya que el aumento de los distritos implica incurrir en un mayor gasto para informar a la población sobre las candidaturas.

Destacó que el proyecto presentado por el Ejecutivo no respeta uno de los criterios para los cuales fue formulado, que es acercarse al ideal de la igualdad en el peso del voto entre todos los ciudadanos, dado que el aumento de diputados no necesariamente está basado en criterios poblacionales. Es decir, el proyecto señala que esta reforma apunta en la dirección de tener una mejor representación, según la población de cada territorio. No obstante, hay distritos que con poblaciones similares eligen distinto número de diputados. Por ejemplo, el distrito N°2, con 222.025 electores, elige 3 diputados. En cambio, el nuevo distrito N°4, con 221.606 electores, elige 5 diputados. Por tanto, recalcó que existe una contradicción entre lo fundamentos del mensaje con su contenido.

Por otra parte, expresó que el proyecto propone el sistema denominado N x 2. Al respecto sostuvo que ello genera un mayor costo de información para los electores. En los distritos que eligen ocho diputados, podrán presentarse hasta dieciséis candidatos por pacto, por lo que será más difícil que las personas puedan identificarse con su candidato afín.

Asimismo, la iniciativa favorece la elección de los candidatos más conocidos, beneficiando a los incumbentes y perjudicando la competencia.

Sobre este particular, propuso que se permitan tanto candidatos como escaños a elegir, o bien, que se aplique la regla N + 2, esto es, que se permita llevar dos candidatos más que los escaños a elegir.

Respecto de las cuotas, valoró la participación activa de las mujeres en política, así como también las acciones transitorias que fomenten su participación. En este sentido, advirtió que el proyecto incurre en una confusión, al hablar indistintamente de sexo y género, cuando no son lo mismo. En algunas partes del proyecto se hace alusión al sexo de las personas y en otra parte ocupa un criterio de igualdad de género. Sobre el particular, indicó que, de prosperar esta disposición, prefiere que las cuotas se fijen de acuerdo al género, lo que hace imperativo aprobar la ley de Identidad de Género.

En cuanto a la inhabilidad gremial, consideró razonable mantener la actual normativa, que establece que las personas que tienen un cargo gremial lo puedan ejercer hasta el momento de la inscripción de su candidatura. Añadió que esta norma es de menor entidad que la que se exige a ministros, intendentes, gobernadores, alcaldes y jueces. Además preserva la competencia leal y transparente, pues evita que el cargo de carácter gremial se confunda con los intereses partidistas o políticos de la candidatura respectiva.

Finalmente, estimó necesario implementar modificaciones adicionales al proyecto, particularmente la que limita la reelección de diputados y senadores. Al respecto recordó que se encuentra en el Senado en segundo trámite constitucional, el proyecto de reforma constitucional que modifica el artículo 51, referido a la elección de diputados y senadores, boletín N° 8221-07, donde se propone un máximo de dos reelecciones para diputados y una para senadores, lo que fue aprobado en la Cámara de Diputados.

En segundo lugar, consideró necesario aclarar qué ocurrirá con la ley de primarias de aprobarse esta iniciativa. Al aumentar la cantidad de diputados y senadores habrá más candidatos por partido, por lo que dicha ley no sería relevante. Además hizo presente que las primarias podrían afectar a las cuotas por género establecidas en el proyecto.

El señor Ignacio Astete, representante del Partido Autonomista Mapuche Wallmapuwen, afirmó que valoraban la intención de reemplazar el sistema binominal por uno proporcional, lo que permitirá democratizar aún más al país. Sin embargo, hizo presente que la naturaleza atenuada de la fórmula propuesta, principalmente en el caso de La Araucanía, no cambiará mucho el panorama político.

Indicó que en el caso de Malleco, la región se divide en dos circunscripciones y hoy cuenta con cuatro diputados. La propuesta consiste en mantener los cuatro diputados.

Respecto de Cautín, informó que esta provincia hoy cuenta con seis diputados y la propuesta consiste en aumentar en un escaño.

Sostuvo que resulta poco probable que otra fuerza política logre obtener un escaño.

Por otra parte, destacó que el proyecto ha omitido toda referencia a las organizaciones étnicas que buscan participar en política, porque no propone medida especial alguna para la participación de los pueblos indígenas y, en particular, para el pueblo mapuche.

Consideró tal omisión como una discriminación étnica, que genera el efecto de mantener la exclusión política de los pueblos indígenas, de los órganos que conforman la voluntad política nacional y regional.

Recalcó que tal situación resulta inaceptable. De acuerdo al principio de igualdad y no discriminación, consagrado en los principales instrumentos internacionales de derechos humanos y en el fallo del caso Yatama versus Nicaragua, de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, cuya jurisprudencia es vinculante para Chile y los demás países del continente, el Gobierno tiene el deber de eliminar los obstáculos jurídicos e institucionales y disponer de las medidas especiales que resulten necesarias para posibilitar el libre ejercicio de los derechos políticos de los pueblos indígenas en condiciones de igualdad con el resto de la población.

Añadió que de acuerdo al fallo mencionado, la participación de los pueblos indígenas en la vida política y en los eventos electorales puede realizarse a través de sus propias organizaciones, sin que para ello se exija constituirse en un partido político.

Por otra parte, afirmó que la declaración de las Naciones Unidas sobre el derecho de los pueblos indígenas, consagra el derecho de los mapuches y de los pueblos indígenas del mundo, a la autodeterminación, a la autonomía y a participar de la vida política del país, si así lo estiman. En tanto, el Convenio N°169 consagra el derecho de los pueblos indígenas a participar de las instituciones administrativas y electivas que toman decisiones sobre asuntos que les conciernen, para lo cual los gobiernos deben establecer los medios que así lo posibiliten.

Destacó que ambos instrumentos fueron suscritos y ratificados durante la primera administración de la Presidenta Bachelet, por lo que consideró inaceptable que el actual Gobierno no haya hecho mención alguna sobre los pueblos indígenas en el proyecto en discusión.

Recordó que durante la primera administración de la Presidenta Bachelet se anunció la realización del plan Re-conocer: Pacto Social por la Multiculturalidad. Entre sus medidas se contemplaba la elección directa de representantes de los pueblos indígenas en la Cámara de Diputados, en el Senado, en los consejos regionales, y en los concejos municipales, como una medida para profundizar y perfeccionar la política y, en palabras de la Presidenta, asumir como una diversidad que tuviese la representación política que le corresponde.

En virtud de lo expuesto, durante el primer trimestre del 2009 se llevó a cabo una consulta nacional de pueblos indígenas, en la que se requirió la opinión sobre una fórmula de representación parlamentaria que considerara escaños en la Cámara de Diputados y una representación proporcional en los consejos regionales, cuyos cargos serían electos de un padrón indígena especial. A pesar de que la consulta no se ciñó a los estándares internacionales, las respuestas obtenidas fueron favorables al establecimiento de un sistema de escaños reservados como el propuesto. Sin embargo, el Gobierno desistió de tramitar el proyecto, con lo cual no solo incumplió las directrices internacionales y recomendaciones recibidas sobre el tema, sino que ni siquiera fue capaz de sostener los compromisos políticos que voluntariamente había adquirido.

Concluyó que la propuesta que reemplaza el sistema binominal por uno proporcional moderado, no asegura por sí mismo la representación de los pueblos indígenas y de los mapuches en el Congreso Nacional. Indicó que ello sería consecuencia de la moderación del nuevo sistema, que exige, al igual que el binominal, un elevado umbral de votos, puesto que el número de escaños a elegir no cambia sustancialmente.

Agregó que la instauración de un sistema proporcional para la elección de un congreso representativo y que busque reflejar la diversidad de la sociedad, entre ella la de origen étnico, debe forzosamente incorporar medidas especiales que ayuden a vencer los obstáculos que encuentran los pueblos indígenas para obtener una representación parlamentaria. Esta medida, que bien puede tener el carácter de transitoria, como en el caso de las mujeres, puede incluir la fórmula de escaños reservados, sin ser necesariamente la única.

Por otra parte, sostuvo que la reformulación del sistema electoral no tiene sentido sin que al mismo tiempo se reemplace la ley de Partidos Políticos para permitir, entre otros aspectos, la creación de partidos regionales. Una medida de este tipo guarda estrecha relación con la intención de avanzar en la descentralización del país, puesto que no tiene coherencia política escoger democráticamente a la primera autoridad regional y al consejo regional en elecciones en las que solo participan los partidos nacionales.

De igual modo, señaló que la creación de un distrito único electoral regional para la elección de todos los cargos públicos, desde los parlamentarios hasta los consejeros regionales, bajo un sistema electoral proporcional, es la única fórmula que haría posible la representación de todas las fuerzas políticas que conviven en el territorio; específicamente, en la Araucanía.

Respecto del cambio de la ley de financiamiento, en orden de apoyar a las campañas electorales de los grupos con menos recursos, manifestó que ello podría equiparar las condiciones de la contienda electoral en un distrito de mayor magnitud.

Recalcó que no puede haber una reforma sustantiva al sistema político si ésta no está vinculada a la demanda general por la convocatoria a una asamblea constituyente y la redacción de una Constitución Política que siente las bases de una convivencia plurinacional basada en la justicia, la solidaridad y el reconocimiento a los derechos de todos.

El ex Presidente de la República, señor Ricardo Lagos Escobar señaló que los sistemas electorales no se construyen en el vacío, sino que dan cuenta de las realidades políticas de determinadas sociedades. Algunas, como la nuestra, sociedades pluripartidistas.

Afirmó que la historia de nuestro país, desde la época en que la suerte se selló en Lircay a favor de los pelucones, demuestra que Chile es pluripartidista. En consecuencia, el sistema electoral debe estar construido para captar esas diferencias.

Añadió que después del gobierno de Montt, existen liberales y conservadores, nacionales o monttvaristas, un partido radical que nace poco después, a mitad del siglo XIX, aproximadamente en 1860 y un partido demócrata que nace en 1870. Es decir, en el siglo XIX se registran tres, cuatro o cinco partidos políticos. Entonces, el sistema político está destinado a recoger esa diversidad.

Indicó que en el siglo XX siempre hubo un par de partidos al lado de la Derecha, otro par más al lado de la Izquierda y otros que podrían ser de centro. Expresó que lo más complejo de un parlamento es adaptar los sistemas electorales a las cambiantes condiciones políticas, porque el sistema electoral no tiene como propósito modificar la situación política generada por las corrientes de opinión, sino al revés, el objetivo de un sistema electoral es capturar esas corrientes de opinión que conforman la sociedad y su forma de expresión en el Parlamento.

Recalcó que los parlamentarios de Chile son herederos de una honorable tradición. Quienes han estado en Congreso anteriormente fueron capaces de enfrentar todos los conflictos que se generan al interior de un parlamento, discutiendo una legislación electoral. En distintos momentos, luego de muchas discusiones, fue posible introducir modificaciones a la legislación electoral.

La Constitución de 1833, consagraba un presidencialismo más que exagerado, donde el Presidente de la República en la práctica era el gran elector. Pese a ello, treinta años después se llega a los constituyentes de 1870, quienes reconocen que ha llegado el momento de reducir el poder presidencial, terminando con las reelecciones después de los cinco años. En consecuencia, se acaban los decenios en la historia de Chile, aflora la necesidad de terminar con el gran elector.

Recordó que en el Chile de 1870 se establece que ahora serán los grandes contribuyentes los que elijan, se consagra el voto acumulativo para los diputados y el voto en lista cerrada para los senadores. Claramente, para conseguir estabilidad, ambos mecanismos tienden a privilegiar a la mayoría.

Hizo presente que la elección del Presidente de la República se hacía mediante electores, los que eran elegidos por la ciudadanía. Recordó que en la elección de 1920 la discusión de los electores fue muy compleja y se necesitó un tribunal de honor para dirimir quién iba a ser el Presidente de Chile a partir de 1920.

Destacó que ese Congreso, a raíz de las exigencias de algunos parlamentarios, estableció como gran contribuyente a aquel que supiera leer y escribir. En consecuencia, se suponía que tenía ingresos para calificar y no necesitaba demostrar que era gran contribuyente. Ello significó que bastaba saber leer y escribir para abrir el abanico electoral.

Añadió que ese parlamento consagra la exigencia de voto secreto, una vez que se establece que bastaba saber leer y escribir para poder votar.

Agregó que la Constitución de 1925 establece por primera vez el sistema proporcional. Asimismo, esa Constitución dispuso que la Cámara de Diputados representa a la ciudadanía, en tanto el Senado representa en ese momento las distintas provincias del país. Por lo tanto, el Senado estaba constituido por un conjunto de provincias que formaban las nueve circunscripciones electorales. Posteriormente, en el período del Presidente Frei Montalva, la Región de Chiloé, Aysén y Magallanes pasó a formar la décima circunscripción.

Concluyó que cada treinta o cuarenta años el Congreso fue capaz de enfrentar una modificación electoral, asumiendo las nuevas realidades del país.

Treinta años después de la Constitución de 1925, se establecieron los distritos parlamentarios de acuerdo al censo de la década de 1920. Los distritos debían modificarse cada diez años con un nuevo censo, conforme a la nueva realidad demográfica del país. Sin embargo, para no tener que asumir los nuevos distritos electorales, en el Congreso Nacional se tomaba nota cuando llegaba el censo enviado por la Dirección de Estadísticas y Censos, sin que éste fuera aprobado. Por ello se siguió funcionando con 147 diputados. Por lo tanto, el número de parlamentarios se mantuvo sin modificaciones desde 1925 hasta 1973.

Añadió que treinta años después de aprobada la Constitución de 1925, la institución del cohecho era bastante conocida; el rol del dinero resultaba fundamental en las campañas. Después de una elección complementaria, en 1958, cuando ya estaban en carrera los candidatos presidenciales de la época, ante el triunfo del candidato que representaba, por decirlo de alguna forma, la futura candidatura de Jorge Alessandri, se conformó el llamado Bloque de Saneamiento Democrático. Bajo ese bloque se realizó una modificación electoral de envergadura en el fondo de los temas, porque a partir de allí se estableció, en primer lugar, inscripción obligatoria, que equivale a la actual inscripción automática. Como en ese tiempo no había computadores, la inscripción obligatoria se efectuó de la siguiente manera: la cédula de identidad no valía si no tenía al mismo tiempo la inscripción electoral de aquel que demandaba la utilización de dicha cédula.

Destacó que la inscripción obligatoria, equivalente a la automática actual, que ahora costó tanto, fue hecha en un período de cuatro meses: entre mayo y agosto de 1958.

En segundo lugar, resaltó la aparición de la cédula única. Hasta ese momento, los votos los elaboraba cada candidato, lo que permitía en cierta forma controlar el voto. Se le solicitaba a la persona que no se diera vuelta en la caseta donde estaban los votos de todos los candidatos, sino que entrara con el voto guardado en la camisa, de modo de comprobar que no sacara un voto de otro candidato. Recalcó que el paso a la cédula única, que hoy parece obvio, fue un paso monumental en la pureza del sistema electoral en Chile.

Hizo presente que quienes aprobaron las modificaciones reseñadas a la legislación electoral, ignoraban las consecuencias de las mismas. Asimismo, recordó que también se derogó la ley de defensa permanente de la democracia, de manera que pudieran votar los veintitantos mil comunistas que fueron borrados de los registros electorales.

Preguntó si tales modificaciones sería posible llevarlas a cabo en el Chile de hoy.

Manifestó que quien estableció el sufragio obligatorio fue: don Jorge Alessandri Rodríguez, el año 1962.

Añadió que con la dictadura de Pinochet, se instauró el sistema binominal. Recalcó que en ciencia política nadie conoce un sistema electoral de esta naturaleza, porque no se entiende un sistema donde el 65% sea equivalente al 35%. No se entiende un sistema donde se produce un empate y no se establecen mayorías que mandan, ordenan y desarrollan su programa, y minorías que tienen que hacer el rol propio de éstas, es decir, ser opositores y fiscalizar.

Concluyó que resulta evidente que no existe igualdad ante la ley. En primer lugar, porque los actuales distritos fueron confeccionados después del plebiscito del año 1988.

Manifestó que en ciencia política se acepta que exista una relación de 1 a 1.7, entre el valor del voto de los ciudadanos. Si es de 1 a 2, no queda otra alternativa que redistritar, porque es inaceptable que los ciudadanos no sean todos iguales. En nuestro país la relación es de 1 a 5.

A lo expuesto debe añadirse que como el resultado más probable de la elección es que se produzca un empate, el verdadero competidor del candidato es el compañero de lista. Indicó que ello ha llevado a que se produzcan acuerdos para colocar compañeros de listas débiles, de modo de garantizar la elección de los incumbentes.

Indicó que el número de competencias ha tendido a decrecer. En las elecciones de senadores de 1989, en las listas de la Concertación o de la Alianza, había mucha más competencia que en 2013. El sistema, en su perversidad, hace que hoy el compañero de lista termine siendo un contendor fácil. Aseveró que esto es lo peor que le puede ocurrir al sistema democrático chileno. Se ha reemplazado a los grandes contribuyentes por los grandes electores, que son los encargados de las negociaciones en cada uno de nuestros partidos políticos.

Reiteró que la configuración de los distritos surgió en función del triunfo del Sí o del No. Tuvieron que aceptar elecciones parlamentarias con los distritos confeccionados al gusto de quien perdió. Preguntó por qué razón se sobre representa las comunas rurales, donde triunfó el Sí y por qué razón se castiga al norte y a los grandes centros urbanos como la Región Metropolitana, Valparaíso y Concepción.

En virtud de lo expuesto, se planteó la necesidad de modificar el sistema binominal, iniciándose la negociación con el gobierno de la época, por el año 1989. Recordó que se produjo un entendimiento con Renovación Nacional. En esa instancia se hizo presente la necesidad de modificar el artículo 8°, que hacía imposible que participaran en las elecciones quienes pertenecían al Partido Socialista. Hizo presente que un número importante de militantes no pudo participar en las elecciones porque no se les alcanzó a levantar las condenas que provenían de la época de la dictadura.

Afirmó que lo único que se logró, en materia de reforma al sistema electoral, fue aumentar el número de circunscripciones senatoriales. En un principio eran 26 senadores electos, dos por región. Aquellas regiones de mayor población tendrían dos circunscripciones, con lo que se aumentaba de 26 a 38 senadores.

El contar con nuevos 12 nuevos senadores elegidos diluía un poco la importancia de los nueve senadores designados. Hizo presente que el Ministro del Interior de la época, señor Carlos Cáceres, fue inflexible, porque según él no tenía atribuciones para aceptar más modificaciones. Destacó que en ese momento se produjo un debate interno muy grande en la Concertación. Los negociadores, desde el punto de vista técnico, eran Francisco Cumplido y José Antonio Viera-Gallo. Por su intermedio, se les informó que solo se aceptaría aumentar el número de senadores. Indicó que había que aceptar o rechazar la propuesta del Gobierno. Algunos, como él, se inclinaron por rechazarla, lo que significaba que no se realizaba reforma alguna a la Constitución. Sin embargo, ello permitía mantener abierta la única ventana que existía para modificar la Constitución. Los quórum que se exigían para ello eran muy altos. Sin embargo, el capítulo de reforma a la Constitución estaba excluido de aquellos que tienen un quórum especial, por lo tanto, la manera de reformar la Carta Fundamental era introduciendo modificaciones al capítulo de reforma a la Constitución, que requería quórums más simples.

Recordó que a raíz de las diversas visiones que existían en la Concertación debió enfrentarse al ex Presidente Aylwin. Él sostenía que la solución consistía en llegar a un entendimiento con Renovación Nacional para modificar el sistema binominal en la primera legislatura. Hizo presente que tuvo la sensación que si persistía en su negativa al acuerdo con el Gobierno de la época se rompía la Concertación.

Manifestó que el presidente Aylwin hizo un gran esfuerzo en terminar con el sistema binominal, con el llamado proyecto Boeninger, que se envió en su período. Luego, el Presidente Frei mandó un nuevo proyecto, también inspirado en muchos de los razonamientos de Boeninger. En su caso, en abril de 2000; vale decir, a menos de un mes de haber sido elegido Presidente, le propuso al Presidente del Senado, Andrés Zaldívar, que formara una comisión parlamentaria bicameral para introducir modificaciones a la Constitución, comenzando por el sistema binominal. Los partidos opositores respondieron que no aceptarían formar parte de Comisión alguna.

Añadió que en cuatro de los seis mensajes presidenciales hizo referencia expresa a la necesidad de modificar el sistema binominal. En el mensaje presidencial de 2004 afirmó que: “Señalé aquí, en este Congreso Pleno, hace dos años, el 2002, lo reitero hoy, 2004: el sistema binominal va a ser la muerte de nuestro sistema democrático. “

Por otra parte, expresó que cuando hizo presente que no estaba disponible para firmar una Constitución que mantuviera el sistema binominal, le ofrecieron excluir el sistema electoral de la Constitución, pero manteniendo los quorum que la propia Constitución establece para modificarlo.

Por ello, al promulgar las reformas constitucionales, sostuvo que esa Constitución no era la que deseaba, pero que aprobaba el test democrático.

Recordó que después de la promulgación de las reformas constitucionales, envió un proyecto de reforma constitucional el 20 de diciembre de 2005, antes de la segunda vuelta presidencial. Esta Comisión de Constitución, Legislación y Justicia de la época fue muy expedita: el 20 de diciembre aprobó por 7 votos a favor y 5 en contra esa enmienda constitucional. Al día siguiente se trató en la Sala de la Cámara de Diputados, donde hubo una mayoría de 58 votos a favor, un voto en contra y 39 abstenciones al proyecto, por lo que fue rechazado porque no alcanzó el quorum requerido. En vista de ello, recurrió al artículo 68 de la Constitución, que permite insistir en el Senado con un proyecto de ley rechazado en la Cámara de Diputados. En la Cámara Alta la iniciativa pasó a la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia y no se votó, sino que se interpretó que a las modificaciones constitucionales no se les aplicaba el artículo 68, a sugerencia de los entonces senadores Chadwick, Larraín y Espina. En vista que se había rechazado la fórmula, y que no compartía la tesis del Senado, en orden a que el artículo 68 no resultaba aplicable a las reformas constitucionales, con la colaboración de 20 senadores, recurrió al Tribunal Constitucional, porque el Senado de la República no había cumplido con sus deberes. En agosto -cuando ya no era Presidente- el Tribunal Constitucional le encontró la razón, estableciendo que el Senado de la República no había actuado conforme a derecho.

Volviendo a la discusión de esta iniciativa, expresó que compartía los seis objetivos que el mensaje menciona. El primero es reducir la desigualdad del voto. Al respecto señaló que si bien se reduce la desigualdad del voto, todavía en algunos distritos hay una diferencia de uno a cuatro.

Otro objetivo que persigue el proyecto es aumentar la competitividad y tener mayor incertidumbre respecto de quienes son elegidos, aumentando el número de candidatos. Recordó que efectuó esa sugerencia más de una vez. Indicó que ha leído los planteamientos de los independientes, quienes estiman que el permitir el doble de candidatos que escaños por llenar va en desmedro de ellos. Sostuvo que la forma de resolver esa dificultad consiste en permitir a los independientes formar listas. Consideró muy relevante mantener esta disposición porque permitirá oxigenar el sistema.

Por otra parte, afirmó que es efectivo que para que esta reforma sea viable resulta indispensable que se unan los actuales distritos, de manera que cada uno de los incumbentes participen en la próxima elección por el mismo distrito que hoy representan. Reconoció que entendía tal decisión desde una perspectiva de realismo político. Sin embargo, la entendía como una transición. Por ello, si se ha esperado veinticinco años para llegar a este momento, estimó inadecuado esperar otros doce años para que el Servicio Electoral rediseñe el número de escaños que elige cada distrito, según el número de electores. Recordó que en el llamado “proyecto Boeninger” se disponía que ello ocurra en la próxima legislatura.

Hizo presente que el año 2017 se llevará a cabo un nuevo censo, por lo que no habría problema alguno para que el año 2021 el Servicio Electoral ejerza las facultades que se le otorgan.

Señaló que estaba de acuerdo con que esta facultad se la otorgue a un organismo técnico como el Servicio Electoral, porque para los efectos de hacer un cálculo estadístico, no es necesario recurrir al Parlamento.

El representante del Instituto de Asuntos Públicos, señor Jaime Baeza señaló que para determinar si es necesario aumentar el número de parlamentarios, es útil conocer la proporción de votantes por representantes en el derecho comparado. En este sentido, manifestó que esta proporción es más o menos pareja entre los países más desarrollados, según se aprecia en la siguiente lámina, que se refiere a la proporción de votantes por representantes en los países de la OCDE:

La proporción mayor de habitantes por representante la tiene Estados Unidos. Explicó que ello se vincula con el tipo de régimen político y con la subdivisión administrativa de ese país.

Informó que el promedio de la OCDE es de 99.668 votantes por representante, siendo la mediana 101.213 votantes por representante. Sin embargo, si no se consideran los casos outliers, casos que claramente desvían la curva media, en términos de los resultados de la cantidad de votantes por representante, la proporción se reduce a 82.700 votantes por representante. Explicó que para llegar a esta nueva cifra se excluyó a Islandia, porque tiene alrededor de 5.000 votantes por representante, es decir, tiene una dimensión demasiado pequeña, y a Luxemburgo, que tiene una proporción que está en el orden de los 17.000 votantes por representante. Al respecto hizo presente que se trata de países que tienen menos de medio millón de habitantes. También excluyó a dos países particularmente grandes, por su naturaleza federal: Estados Unidos y México.

Hizo presente que Chile, en el caso de la Cámara Baja, tiene 145.417 votantes por representante, asumiendo el dato del Instituto Nacional de Estadísticas, en cuanto a que seríamos alrededor de 17.450.000 habitantes en el país y considerando, además, que todos los mayores de 18 años están inscritos automáticamente en los registros electorales. Con el actual proyecto presentado por el Gobierno, esta proporción pasaría a ser de 112.580, que no es ideal, pero que se acerca más a los promedios de los países de la OCDE.

Expresó que debe existir una relación que tenga algún grado de racionalidad entre la necesidad de representación y que los votantes conozcan a quién los representa, con una mejor calidad de la política. En el fondo, la idea de menor proporción también va de la mano de países con más alto desarrollo humano y con un régimen parlamentario que se escapa de nuestra realidad.

Explicó que en los países federales, tanto de la OCDE como fuera de ésta el promedio es bastante más alto. En este caso, considerando a Estados Unidos, el promedio es de 210.982 votantes por representante, pero si se excluye dicho país el promedio disminuye a 125.877, lo que está más cercano a la media internacional de la OCDE.

Hizo presente que en el caso de los países federales existen legislaturas locales con atribuciones de orden presupuestario, de gastos y legislativas propiamente tal; por lo que existen más instancias de intermediación tanto en el nivel político como en el de toma de decisiones de una sociedad. En este contexto, el Parlamento federal, como el caso alemán o el Congreso de los Estados Unidos de Norteamérica, cumplen un rol distinto, más bien de la macropolítica y de la macrodistribución de recursos. Por lo tanto, las instancias de intermediación no solo son más, sino también más profundas, y, en ese contexto, nuestra naturaleza unitaria nos impide tener ese grado de intermediación, por lo que es necesario subsanarlo de alguna manera, como lo hacen no solo los regímenes parlamentarios, sino también los unicamerales.

Informó que, entre otros, el profesor Robert J. Gary-Bobo de Paris School of Economics, desarrolló, a partir de algunos cálculos que se hacían en los cuarenta y los cincuenta, una suerte de proporción ideal: 4/10 de la raíz cuadrada de la población del país. De acuerdo con el señor Gary-Bobo, tal fórmula refleja una proporción que permitiría distribuir de manera sana y en una curva de normalidad la cantidad de votantes por representantes.

Para dicho profesor Norteamérica es un ejemplo de subrepresentación en el nivel federal.

Por otra parte, indicó que una menor cantidad de habitantes por representantes, tiene directa relación con países de más alto nivel de desarrollo. Probablemente, la única excepción es Australia que está por sobre la media. Con todo, hizo presente que se trata de un sistema federal, con parlamentos locales y grados de intermediación importante. Al respeto expuso la siguiente lámina:

Si se observa algunos de los ejemplos de la lámina, se puede comprobar que en su inmensa mayoría, los regímenes parlamentarios corresponden a países de más alto desarrollo humano y de mayor satisfacción con la actividad política, porque los ciudadanos conocen a sus representantes, saben quiénes son, y, por tanto, existe un mejor y más profundo sentido de lo público y de lo político.

Respecto de la situación en Sudamérica expuso la siguiente lámina:

Hizo presente que 1 significa bicameralidad y 0 no bicameral. Están consignados los diputados y senadores, donde los hubiera, y la proporción de votantes por representante. La más alta proporcionalidad se produce en los regímenes federales. Es decir, no solo en los países de la OCDE, sino que en nuestra propia región, existe una correlación entre federalismo y mayor cantidad de habitantes por representantes, mientras que en aquellos países de carácter unitario la cantidad de representantes es menor.

La proporción de la región es 166.525 votantes por representante. La proporción en los países unitarios es 110.694. En virtud de lo expuesto concluyó que el proyecto del Gobierno tendería a equivaler no solo con la región, sino también con los países de la OCDE. La propuesta del Ejecutivo claramente mejora la proporción y nos sitúa más de acuerdo a los estándares internacionales, no solo de la región, sino también respecto de los países más desarrollados.

Reconoció que la propuesta no es ideal, particularmente si se la compara con las proporciones de regímenes parlamentarios. Agregó que dentro de los presidencialismos unitarios, todavía existe espacios por mejorar en los niveles de representación, lo que implicaría contar con alrededor de 200 diputados, número que permitiría una proporción más menos en la media.

Por otra parte, advirtió que la idea de establecer en un país unitario un sistema electoral uninominal es bastante bizarra. Dicho sistema se vincula con regímenes de orden federal o regímenes parlamentarios en el sistema Westminster; dos realidades que nos son absolutamente ajenas.

Respecto de la bicameralidad expresó que en general en los países con dos Cámaras, existe una de naturaleza poblacional, es decir, de distribución por número de habitantes la Cámara de Diputados, y otra de distribución territorial, que sería el Senado de la República. La experiencia comparada señala que en la mayoría de los países, sobre todo en los de naturaleza parlamentaria, el Senado o Cámara Alta dice relación con resolver problemas de disputas territoriales, o de disputas autonómicas, como el caso español. En otros países, como Chile, se trata de Cámaras revisoras, pero con un contenido territorial.

Por lo tanto, la discusión sobre cuántos senadores deben componer la Cámara Alta y cuál es la naturaleza de la proporcionalidad que debe darse en dicha instancia, lamentablemente, no debe separase de un tema central que es la elección directa de los intendentes regionales.

Preguntó si se aumentará el número de senadores si se crean más regiones o bien, se redistribuirá su número para que esas regiones, más menos, tengan la misma correspondencia poblacional que plantea el proyecto del Gobierno.

Existe la pretensión de crear regiones nuevas por parte no solo de diputados de la República, sino también de fuerzas vivas y de personas que habitan en regiones. Al respecto estimó que tenemos demasiadas regiones.

Señaló que prefería que existan menos regiones con mucho más poderes y mucha más capacidad de decisión, que muchas regiones donde el poder está absolutamente disgregado y, por lo tanto, no está en ninguna parte. Dicha problemática tiene directa relación con la naturaleza del Senado como una instancia de representación que no es poblacional necesariamente, sino territorial, porque, de lo contrario, no se entendería el número de senadores que contiene el proyecto para las regiones extremas, en que el número de habitantes es menor. Sin embargo, consideró de toda lógica que se mantengan esas cifras en las regiones extremas, no solo por un tema geopolítico, sino también para incentivar la participación de esas zonas, integrarlas al resto del territorio nacional y, además, tarde o temprano, incentivar cuotas de poder que hagan más valorable hacer política y ser parte de esas regiones.

Entendiendo que la naturaleza de este país seguirá siendo unitaria, es posible comprender el sentido de generar un grado de proporcionalidad como se sostiene en el mensaje. Con todo, advirtió sobre la necesidad de discutir la naturaleza bicameral de Chile.

Por otra parte, manifestó su desacuerdo con la norma transitoria que regula la forma de integrar el Senado, dado que en las regiones pares recién el año 2021 elegiría la totalidad de los senadores. La experiencia chilena demuestra que en 1990 hubo senadores por cuatro años y se pudo trabajar con normalidad.

En cuanto a los pactos y regímenes políticos, se ha formulado una prevención sobre la imposibilidad de un buen funcionamiento de un sistema presidencialista con un sistema multipartidario. Al respecto indicó que el propio profesor Mainwaring, de la Universidad de Notre Dame, cambió su opinión inicial, dado que los años y la literatura han demostrado que la construcción de coaliciones permite el funcionamiento del presidencialismo. La evidencia empírica demuestra, así como estudios de Javier Zelaznik en Argentina e Ivana Dehesa en Bolivia, entre otros, que la construcción de coaliciones permite un correcto funcionamiento del presidencialismo. Por lo tanto, la construcción de coaliciones para evitar una fragmentación en el sistema de partidos y una fragmentación excesiva al interior de ambas cámaras es algo que sirve.

No obstante, sostuvo que la construcción de subpactos tiende a ser problemática porque generaría micromanejos. En vez de generar coaliciones amplias que permitan alcanzar acuerdos, empezarían problemas o micromanejos políticos al interior. En ese sentido, afirmó que la idea es generar lealtades a partir de lo que Riker establece, en su estudio clásico sobre elección racional y coaliciones mínimas ganadoras, como mínimos programáticos o sugeribles para funcionar.

Por último, respecto de los distritos, sostuvo que subsisten algunos problemas de gerrymandering en ellos. Este concepto dice relación con un dibujo poco claro, o mañoso como señala parte de la literatura, en la confección de los distritos.

Señaló que el proyecto genera distritos muy grandes, donde muchas veces se confundiría el territorio jurisdiccional del diputado con el del senador que representa esa región.

Además el proyecto genera un problema de costos. Destacó que el tema del financiamiento de la política es central. Indicó que el problema radica, más que en el límite máximo al gasto, en quién y cómo los paga.

Hizo presente que existirá la dificultad referida al exceso de candidatos y a la necesidad que los electores manifiesten una sola preferencia. Sostuvo que hay países donde existen las llamadas “listas sábanas”, donde se vota simplemente por la lista y, además, por algún candidato en particular. Sin embargo, si existe una lista que, efectivamente, parece una sábana, donde el elector tiene que encontrar una preferencia dentro de esa lista, se le hace al ciudadano la vida un poco compleja, no solo en términos de hallar la preferencia, sino porque, además, se le obliga a un nivel de diferenciación e identificación con un candidato que no existe en la realidad. Consideró que el proyecto podría permitir votar por más de un candidato.

Recalcó que el establecimiento de un sistema proporcional resulta adecuado.

Por último, hizo presente dos casos complejos en el re distritaje. Santiago se cambiaría de circunscripción electoral para el Senado. En segundo lugar, expresó que Coronel y Lota son un solo lugar, pero quedarían en distritos diversos.

El cientista político y jefe de Estudios de Horizontal Chile, señor Daniel Brieba destacó que la democracia nacional es, en algunos aspectos, de muy alta calidad, por lo que no es efectivo que estemos en una situación de crisis grave. En algunos aspectos, como en nuestro Estado de Derecho, la protección de libertades y la corrupción, somos un país que está bien situado en cualquier indicador internacional. Sin embargo, nuestra democracia sí tiene problemas en algunos otros aspectos, no tanto de protección de derechos, sino más bien de la calidad de la representación.

En cuanto a los síntomas de los problemas en la calidad de la representación, aseveró que son múltiples. Desde 1990 a 2013, según la encuesta CEP, ha bajado la adhesión a partidos políticos en Chile de 80 a poco más de 30 por ciento, según se aprecia en la siguiente lámina:

Si se compara a nivel de América Latina, según la encuesta de Lapop, estamos penúltimos en adhesión. En Chile solo un 14 por ciento simpatiza con algún partido, según se aprecia en la siguiente lámina:

Añadió que también existen problemas con el eje Izquierda-Derecha, que parece significar cada vez menos, porque somos el país de América Latina en que menos gente es capaz de contestar esa pregunta. Si es que la persona se califica de Izquierda o de Derecha: un 38 por ciento no puede ponerse en una de ambas escalas, según consta en el siguiente cuadro:

Respecto del interés en la política, según Latinobarómetro, Chile es el país con menos interés en toda la región.

En cuanto a la participación en las últimas elecciones de Presidente de la República, exhibió el siguiente cuadro:

Chile corresponde a la barra roja. Si se aprecia al resto de los países, meridianamente democráticos, Chile está entrando en la liga de los países con menor participación electoral.

Concluyó que hay bajo interés en la política; baja y decreciente identificación con partidos políticos, coaliciones e incluso con el eje izquierda/derecha; baja y dispareja participación política institucional, porque las personas de mayor edad votan más que los jóvenes.

Además, desde 2011 ha sido posible constatar un alza en la participación política no institucional, manifestaciones, y una baja y decreciente confianza en partidos, en el Congreso y en otras instituciones políticas.

Lo recientemente expuesto es efectivo tanto si nos comparamos con otros países, como si nos comparáramos con nosotros mismos en el pasado.

Explicó que las causas de este fenómeno de desafección con la política son complejas y variadas. La política es un tema muy complejo y el sistema electoral es solo una parte de una pieza mucho mayor. Algunas de las causas son indirectas y de largo aliento, como el proceso de modernización socioeconómica y sus consecuencias culturales, la individualización de las personas; su distancia con las organizaciones intermedias, no solo los partidos políticos.

Otras causas están más directamente vinculadas con la política: hay alineamientos ideológicos congelados; una política todavía estructurada en torno al sí y al no; nuevos movimientos políticos ideológicos que no encuentran su espacio en las coaliciones.

Por su parte, hizo presente que también existen problemas con las reglas del juego, siendo el sistema binominal, parte de éstas.

Destacó que existen tres reformas claves para mejorar la calidad de la representación: la relación del dinero y la política; los partidos políticos y el sistema electoral.

Sostuvo que la interacción entre las tres es mucho más importante que lo que puede lograr cualquiera por separado.

Respecto del contenido del proyecto de ley, expresó que en relación a la magnitud de lo distritos, el cambio que se propone es bastante moderado. Al respecto exhibió la siguiente lámina:

La imagen muestra una tabla de Carey y Hix en la que se aprecia cuál es la magnitud mediana, el distrito típico, en distintas democracias del mundo. Los DM=1 son los sistemas uninominales, todos los demás son sistemas proporcionales. Chile, tiene actualmente magnitud 2, tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado, y con el proyecto actual pasaríamos a magnitud 3 en el Senado; la magnitud mediana, el distrito mediano y de 5 en la Cámara, lo que nos deja, según la comparación, absolutamente dentro de la tipicidad de un país promedio en términos de magnitud.

Indicó que hay quienes sostienen que si se cambia el sistema electoral ello significará que se generarán diez mil facciones de partidos. Al respecto advirtió que el sistema electoral pese a su importancia, no determina por sí solo la cantidad de partidos que hay en un país.

A continuación exhibió la siguiente lámina:

Señaló que en Estados Unidos en la última elección el 96 por ciento de los votos para los principales dos partidos, significó que se lleven el cien por ciento de los escaños en el Congreso.

En el Reino Unido, en la última elección los dos partidos principales sacaron el 65 por ciento de los votos y, gracias al sistema uninominal, se llevaron el 87 por ciento de los escaños, pese a que solo dos de cada tres personas escogió a uno de los dos partidos principales.

En India, la democracia más grande del mundo, que también tiene un sistema uninominal, en la última elección apenas el 50 por ciento de los votos fueron a alguno de los dos partidos principales.

Concluyó que cualquier análisis que ponga al sistema electoral como determinante principal del número de partidos de un país, es altamente sospechoso. Sin embargo, estimó importante que los sistemas electorales faciliten la conformación de pactos allí donde hay muchos partidos.

Respecto de la desigualdad del voto, exhibió la siguiente lámina:

Esta imagen contiene una tabla de Samuels and Snyder, de 2001, con setenta países democráticos. En el lado izquierdo Chile aparecía en el lugar 11, como el país con mayor desigualdad de voto en el mundo.

En el Senado, en la tabla de la derecha, Chile aparece en el lugar 9. Sin embargo, hizo presente que la mayoría de los otros países son federales, lo que explica la mayor desigualdad del voto en esos territorios. Sin contar a los países federales, solamente Bolivia y la República Dominicana tienen mayor desigualdad en el voto que nosotros en la Cámara Alta.

Reiteró que Chile tiene una muy alta desigualdad en el voto. En ese sentido, sostuvo que el proyecto avanza modestamente en reducir dicha desigualdad.

Respecto de la proporcionalidad de la propuesta exhibió la siguiente lámina:

Este cuadro compara la desproporción actual, el premio que reciben la Concertación y la Alianza bajo el sistema vigente, bajo el proyecto actualmente en discusión, bajo el proyecto que presentó el gobierno anterior, y el proyecto llamado acuerdo RN-DC, tanto para los diputados como para los senadores. Al respecto expresó que los números son relativamente similares. Este proyecto mejora en el margen un poco la proporcionalidad respecto del binominal. Recalcó que no hay grandes efectos sobre la proporcionalidad, todas disminuyen el premio de la Alianza en 1 a 2 puntos en la Cámara y de 2 a 5 puntos en el Senado. Ello resulta inevitable, ya que el sistema binominal es matemáticamente el sistema electoral que maximiza el rendimiento en escaños de la votación de la segunda mayoría.

Añadió que si se cambia al sistema uninominal, a la Alianza bajo tales reglas, le iría peor, y en cualquier sistema proporcional también perdería algo. Recalcó que no hay manera de evitar que ello ocurra. Reiteró que solo se alcanza una muy modesta mejora en la proporcionalidad.

Sin embargo, si se reduce la mirada a la proporcionalidad del proyecto, se trataría de un análisis incompleto porque lo que el proyecto está cambiando en el fondo son los incentivos del juego.

En primer lugar destacó que se abre el espacio a minorías importantes, votaciones de aproximadamente doce por ciento en distritos grandes y de quince a diecisiete por ciento en distritos medianos, no así a quienes obtengan cinco por ciento. En este sentido aclaró que se abre el espacio a minorías relevantes, terceras y cuartas fuerzas y no a la fuerza número diez.

Añadió que todas las grandes votaciones saldrán electas. Por consiguiente, se trata de un sistema que produce muchos ganadores, lo que ayuda a la legitimidad y a la representación. Si una persona vota por un candidato que entra al Congreso, tiene un sentimiento de eficacia de su voto, y es distinto si uno vota por alguien que pierde. En ese sentido, los sistemas que producen más ganadores, son mejores porque ayudan a la representación.

Además recalcó que aumenta la competencia tanto dentro de cada pacto como entre los pactos. Ello ocurre porque al existir incertidumbre, no se sabe a quién corresponderá el último cupo en un sistema proporcional. Por lo tanto, la lógica para cada candidato es hacer toda la campaña que pueda, porque cada voto adicional le sirve a él y a su pacto. En el margen, siempre conviene luchar por cada voto extra, lo que no sucede con el sistema binominal, a menos que exista la percepción que se puede doblar o que está en riesgo ser doblado.

Manifestó que el proyecto también contempla otro incentivo: la “nacionalización” de los partidos, en especial de la Concertación, en el sentido que todos los partidos podrán presentar candidatos en todos los distritos, lo que es muy positivo, porque ayuda a la representación. Si se tiene partidos que se presentan en algunos distritos y no en otros, termina con exclusiones territoriales y afecta la capacidad de representar de cada partido. Con el proyecto todos los partidos podrán presentar candidatos a lo largo del territorio, en vez de tener que omitirse en algunos lugares.

Con ello se abre espacio, en especial a la coalición de la Alianza para permitir el surgimiento de más partidos.

Añadió que el proyecto también significará una flexibilización en las coaliciones. En el sistema actual, cuando un partido abandona una de los pactos, prácticamente se “suicida”. En cambio, con el sistema contemplado en el proyecto se paga un costo, porque siempre hay un premio por ir en coalición. Sin embargo, ese costo no es tan alto. Dicho de otra forma, hay un incentivo a las coaliciones, pero éstas no son camisas de fuerza.

Respecto del número de candidatos, señaló que la fórmula propuesta puede generar dos serios problemas. En primer lugar, de identificación, porque la gente tiene poca información sobre política. En los gráficos, exhibidos se pudo constatar el poco interés que existe sobre la política, por lo que pedirles que seleccionen cuál es su candidato preferido, entre sesenta candidatos resulta muy difícil. Por ello es partidario de reducir la cantidad de candidatos.

Añadió que además existe un riesgo de fraccionamiento. Anteriormente, hizo presente que, en términos de la magnitud del distrito, no hay un problema serio porque aumentar a tres o a cinco la magnitud mediana es razonable, pero añadió que si además se duplica la cantidad de candidatos, los partidos podrían terminar usando el sistema electoral como forma de resolver problemas internos, es decir, como un mecanismo de democracia interna donde un partido que tiene mucho espacio puede llevar tres candidatos, lo que hace, en ese sentido, que cada facción lleve su propio candidato. Esta situación tiende a confundir al electorado y a generar, de facto, partidos distintos.

Por lo tanto, consideró que el fraccionamiento de los partidos entre sus facciones, expresándose en el sistema electoral, constituye un peligro, en el sentido de que el sistema de partidos se jibarice y los partidos actuales se disuelvan en dos o tres.

Asimismo, sostuvo que al haber más candidatos existe una pérdida de accountability individual. Ello constituye un desafío. Hoy la gente ya logra identificar cuáles son sus dos diputados o dos senadores, pero cuando sean “sus 8 diputados” será mucho más difícil seguirle la pista a cada uno, por lo que la representación individual se lesiona un poco.

Indicó que al haber tantos senadores o diputados, según el caso, hay un riesgo en el sentido de que haya especialización en la competencia y nichos territoriales o sociales, donde un parlamentario se especializa en adultos mayores, jóvenes, etcétera. Por otro lado, quita visibilidad, lo que lleva a acrecentar algunos problemas de clientelismo y personalización de la política. Sin embargo, es muy difícil pedirle a un sistema electoral que solucione los problemas de clientelismo en la política. Este es un problema mucho más profundo, respecto del cual ya se han referido famosos cientistas políticos, como Dieter Nohlen.

Por lo tanto, concluyó que existe un riesgo en esta competencia a nivel micro que se puede dar. Con todo, reconoció que al sistema electoral no se le puede exigir que solucione el problema del clientelismo.

Asimismo, hizo presente que las cúpulas partidarias van a perder parte de su poder de nominación porque, al haber tantos candidatos, tendrán menos poder de bloqueo. Sin embargo, al mismo tiempo, van a poder reemplazar con mayor facilidad a un incumbente que se ponga díscolo. Si hay más candidatos, el díscolo puede postular por fuera, lo que hace que el partido tenga menos riesgo al perder un diputado que se puso díscolo, lo que significa que como partido no arriesga tanto en términos de perder la representación en ese distrito.

Por último, respecto de las campañas en territorios más grandes, señaló que el dinero importará más que ahora.

Sobre la cuota, que en rigor es una norma de paridad, consideró que el cuarenta por ciento constituye una cifra exigente.

Esta medida se presenta como una discriminación positiva temporal, pero está orientada a un fin que es claramente permanente, esto es, la igualdad sustantiva por sexo en la representación. Ahora, una vez que se acepta que éste es un principio importante a defender, tiene que ser cumplido, con o sin cuota. Entonces concluyó que si es temporal o no, es irrelevante, porque si se exige la cuota y luego hay que eliminarla, sin que se cumpla con los objetivos de igualdad perseguidos, se genera un problema. Si ya se aceptó que este principio es importante y hay que satisfacerlo, entonces habrá que reinstaurarlo si posteriormente no se cumple el objetivo buscado.

Añadió que en la medida que se impone un criterio grupal, se está afirmando que efectivamente no se puede tratar a todos exactamente por igual, porque hay un criterio grupal que satisfacer, en este caso la cuota del cuarenta por ciento, lo que no está considerado en la teoría de la representación clásica. En segundo lugar, se refirió a la idea republicana de la representación puramente ideológica, es decir, que las personas son meras portadoras de ideas y donde su cuerpo y sexo dan lo mismo, porque lo que ellos representan es una ideología, por lo que si es mujer u hombre es meramente accidental. Aseveró que un proyecto de esta naturaleza, rompe con la mencionada idea republicana. Por lo mismo, abre la puerta conceptual, no necesariamente la política, a nuevas desigualdades formales de trato a otros grupos, por ejemplo, si se piensa en una cuota indígena.

Informó que existe un estudio reciente de Krook y O’Brien que muestra que de 71 países que tienen medidas de cuota, 34 de ellos solo tienen cuotas o asientos reservados para mujeres, 21 para minorías étnicas y solamente 16 para ambos grupos al mismo tiempo, es decir, para mujeres y para minorías. Por lo tanto, en la práctica, no es evidente que conceder un tipo de cuota necesariamente implique la otra. En eso, los países se permiten cierta flexibilidad.

Indicó que el único argumento a favor de la cuota es la efectiva igualdad de oportunidades. Sin embargo, señaló que hay otros dos argumentos que son relevantes. En una democracia, el Congreso tiene una importancia simbólica muy importante, por lo que una norma de paridad como ésta protege y expresa el status de las mujeres como iguales ciudadanos en la esfera pública.

Si se aprecia un Congreso donde solamente hubiera hombres, efectivamente, ello lesiona en algún nivel la idea que las mujeres son iguales ciudadanas en la esfera pública, por mucho que sus derechos civiles estén igualmente garantizados.

En tercer lugar, estimó que la mayor paridad de género puede contribuir a una mayor diversidad epistémica, en términos que las mujeres aportan no solo ideas distintas, porque ello depende de la ideología de cada cual, sino que maneras de razonar que son diversas, así como maneras de interactuar y de llegar a acuerdo. Por lo tanto, pueden significar posibles mejoras en las dinámicas internas y grupales.

Manifestó que la justificación del proyecto se funda en la idea de romper con barreras estructurales o sistemáticas en contra de las mujeres en política, basado en la premisa que existe una discriminación que no es formal, sino informal, de parte de cúpulas partidarias masculinas, en contra de potenciales candidatas.

Al respecto indicó que le subsisten dudas en orden a si existen estudios que demuestren o avalen la aseveración anterior. Preguntó si será esa la razón principal de la baja tasa de candidaturas femeninas.

Afirmó que si concuerda en un aspecto de esta propuesta. Si se observa la oferta de candidatas de los distintos partidos en la última elección, ella fluctúa entre el 6 y el 28 por ciento. El solo hecho de que haya tanta variedad sugiere que efectivamente hay una oferta de candidatas que está siendo subutilizada, y prácticas partidistas que pueden hacer una diferencia relevante. La diferencia es muy grande entre el 6 y el 28 por ciento, por lo que resulta claro que lo que sucede dentro del partido es muy importante.

Sin embargo, hizo presente que existe poca atención sistemática a barreras distintas a la discriminación en los procesos de nominación de candidaturas, en el sentido de la oferta, es decir, de cuántas mujeres quieren ser candidatas y por qué no lo son, si es que lo quieren.

En este sentido, estimó fundamental el financiamiento de las campañas de candidatas, porque ello constituye una barrera efectiva a la entrada, cuyo impacto podría ser incluso mayor que la discriminación informal por parte de las cúpulas.

Expresó que si se desea realmente que haya más mujeres en política es necesario manejar el control de los cupos en las nominaciones, pero también aumentar la oferta de candidatas mujeres.

Por último, en resumen, estimó que la disminución a lo desigual del voto es deseable y debiese ser profundizada, ojalá al menos para la Cámara de Diputados, porque el Senado tiene una lógica de mayor representación territorial que lo hace más difícil.

Aseveró que el aumento a 155 diputados no es descabellado en absoluto, pero tampoco es imprescindible. En ese sentido, estimó que los dos extremos son malos. Se pueden lograr los mismos efectos con un incremento menor. Sin embargo, estimó que el incremento de senadores de 40 a 50 –incorporando los dos de Arica- tiene justificación.

Destacó que la propuesta para la Cámara, que propuso la Democracia Cristiana con Renovación Nacional, mezclada con la propuesta del Gobierno para el Senado, si se modera la afición –quizá excesiva- por magnitudes impares en el Senado, puede ser una solución razonable. O sea, más allá de si esa es la solución ideal, todas las propuestas que están sobre la mesa tienen similitudes importantes. Se ha abierto un espacio en el que todos podrían quedar satisfechos. Se podría aumentar menos la cantidad diputados y lograr los mismos efectos.

Reiteró que constituye una mala idea que se lleve el doble de candidatos que cupos por llenar. Estimó más natural que el número de candidatos sea igual al de escaños por llenar o por último una combinación. Por ejemplo, que sea la misma cantidad de candidatos que escaños en el distrito, pero con un mínimo de cuatro candidatos para solucionar el problema de circunscripciones senatoriales que van a elegir solo dos senadores. Para no reproducir la lógica del binominal en esos espacios y para que todos los partidos relevantes puedan llevar candidaturas, garantizar un mínimo de cuatro candidatos, independiente del tamaño del distrito parece razonable.

Por otra parte, expresó que no logra apreciar razones convincentes para eliminar los subpactos. Sostuvo que éstos permiten diferenciar la intensidad de las alianzas con otros partidos. Por ejemplo, un partido puede querer entrar en un pacto amplio que garantice gobernabilidad a un candidato presidencial con tres, cuatro o cinco partidos, pero dicha colectividad tiene una relación especial y una alianza ideológica más robusta con uno de ellos y quiero subpactar con él para que sus votos se agrupen. Ello incentiva a la formación de coaliciones más amplias, porque permite, en vez de tener que competir por separado, juntar a todos dentro de un gran paraguas dentro del cual se manifiestan ciertas diferencias internas. Ello es inevitable en un contexto tan multipartidista y tan ideológicamente diverso como el chileno.

Recordó que el profesor Claudio Fuentes sugirió establecer la posibilidad de votar por la lista completa en vez de hacerlo solo por un candidato individual. Si van a existir tantos candidatos votar por una lista disminuye el personalismo y fortalece el voto ideológico. Sostuvo que ello es algo que Chile necesita. La personalización de la política es un peligro. Además hizo presente que resulta mucho menos costoso para cualquier persona, en vez de tener que informarse sobre 60 candidatos, interiorizarse de las posiciones de los partidos que compiten. Esta medida además permitirá disminuir los votos blancos y nulos.

Respecto de la cuota, expresó que está a favor de ella. Sin embargo, sostuvo que estos cambios deben ser graduales porque obedecen a razones que no son meramente institucionales, sino también culturales más profundas. Ningún partido llegó al 30 por ciento de candidatas, aunque el Partido Socialista y Renovación Nacional estuvieron muy cerca de llevar ese porcentaje de candidatas, hay partidos que están muy lejos. Entonces, establecer un treinta por ciento para las próximas elecciones y un cuarenta por ciento en 8 años parece una solución razonable y además va a permitir a los partidos adaptarse.

Por su parte, indicó que resulta difícil entender por qué esta norma no se extiende a los concejales y a los consejeros regionales. Si se estima que la igualdad de género es un principio importante de defender en términos de la representación, no hay razón alguna para que se aplique solamente el Congreso.

En la misma línea, señaló que el financiamiento público directo y robusto para candidatas resulta esencial. Expresó que tal decisión puede ayudar a hacer viable la ambiciosa cuota del cuarenta por ciento. Destacó que más que normarla y obligar a llevar un piso mínimo de un cuarenta por ciento de candidatas, deben adoptarse medidas para que realmente exista esa oferta de candidatas.

Asimismo, concordó en que resulta fundamental que la reforma esté plenamente operativa antes de 2017, incluyendo al Senado, pues es muy difícil justificar ante la ciudadanía una solución distinta a esa.

El Secretario General de la Central Autónoma de Trabajadores, señor Alfonso Pastene, expresó que la organización sindical que representa valora y hace suya la idea de desterrar el sistema binominal. Al mismo tiempo, demanda que el nuevo sistema cumpla, real y verdaderamente, con los objetivos que señala el mensaje presidencial, los cuales, analizados desde su visión de ciudadanos y trabajadores, no superan los problemas que la filosofía del binominal impuso a la sociedad, sino que, por el contrario, los profundiza y legítima.

La gran mayoría de la ciudadanía y de la representación política en el Parlamento concuerdan en que Chile no puede seguir constituyendo el Congreso Nacional a través del sistema binominal.

Indicó que uno de los objetivos de este sistema fue fomentar la creación de grandes alianzas de partidos políticos para que compitieran entre ellas, para lograr mayoría al interior del Parlamento. Con todo, advirtió que aquello nunca sería realidad ni tampoco se representaría la voluntad popular, debido a la existencia de los senadores designados y a la fórmula del doblaje.

Añadió que uno de los argumentos que se esgrimió fue que la igualdad en la representación entre las diversas alianzas provocaría por sí misma la tan esperada tranquilidad social, que permitiría presentar al país como una fructífera zona de inversión a los capitales extranjeros. A lo expuesto se deben sumar los altos quorums para efectuar cambios. Lo anterior dio paso a la política de los consensos, de lo posible, del gatopardismo, del maquillaje y de la letra chica.

Asimismo, hizo presente que el sistema binominal desproporcionó la representación de los partidos, de sus alianzas y de sus representantes; creó el duopolio político, dejó a la gran mayoría de la ciudadanía ajena a las grandes decisiones políticas y transformó al que debería ser ciudadano en su real expresión, en un cliente o votante. Mientras tanto, en los partidos políticos, el inscrito, porque ya no era militante, se convirtió en un miembro del lote, que debía obedecer al dueño del mismo. Lo expuesto ha provocado la baja militancia y la casi nula credibilidad en lo que hoy se llama clase política, pues carece de vinculación con la ciudadanía.

Según las últimas estadísticas del Servicio Electoral, del año 2012, que coinciden con una encuesta de la ONG Activa, solo el cinco por ciento de la población con derecho a voto pertenece a un partido político y la militancia se desglosaría de la siguiente manera: Democracia Cristiana, 117.208; Partido Socialista, 109.661; Partido por la Democracia, 99.389; Renovación Nacional, 90.029; Partido Radical Social Demócrata, 86.999; Unión Demócrata Independiente, 77.753; Partido Comunista, 46.792; Movimiento Amplio Social, 38.112. Esta militancia no está reflejada en la representación que hoy existe en el Parlamento.

Por otra parte, una de las últimas encuestas de Adimark señala que el sesenta y seis por ciento desaprueba el desempeño de la Alianza por Chile y solo el veinte por ciento lo aprueba. En relación con la Concertación, el 64 por ciento tiene una mala visión de dicho conglomerado y solo el 21 por ciento tiene una opinión positiva. En cuanto a la Nueva Mayoría, el 57 por ciento la desaprueba y el 31 por ciento le puso una calificación positiva.

En lo relativo al Parlamento, dicha encuesta concluyó que el 74 por ciento desaprueba la gestión de la Cámara de Diputados y solo un 16 por ciento la aprueba. En cuanto al Senado, el 74 por ciento no aprueba su trabajo y solo el 18 por ciento aprobó su gestión.

Afirmó que espera que a través de este proyecto se inicie un verdadero acercamiento entre la política partidista y la ciudadanía, porque Chile necesita recuperar su confianza en las instituciones políticas y en quienes la representan. Es fundamental para la democracia y para su fortalecimiento, instituciones políticas partidarias representativas y confiables, pero también entregarle verdaderas posibilidades de representación a las colectividades emergentes y a los independientes, cuestión que el actual mensaje no lo consigna, e incluso establece una mayor asimetría que el actual sistema entre las grandes coaliciones de partidos tradicionales con las fuerzas emergentes, incluidos los y las independientes.

Manifestó que el mensaje establece la exclusividad para constituir pactos electorales y subpactos a los partidos políticos, y obliga a los independientes que deseen formar pactos o subpactos a efectuarlos con los partidos, lo que violenta gravemente el principio de igualdad frente a la ley.

Por otra parte, indicó que el proyecto permite incluir en cada distrito o circunscripción hasta el doble de candidatos que corresponda elegir. De aprobarse esta indicación, se estaría falseando el sistema. Inscribir el doble de candidatos a elegir podría servir para inscribir a jóvenes o mujeres solo como pantalla, pero sin ninguna posibilidad de ser elegidos.

Destacó que para desempeñar el cargo de parlamentario son fundamentales la capacidad de liderazgo, las competencias respectivas, sus ideas, las que no dependen del sexo de la persona. Por lo tanto, establecer una discriminación positiva a un sexo para conformar una lista en nada ayuda a superar un problema cultural de nuestra sociedad. Por lo demás, sostuvo que el mensaje emplea la expresión de género para distinguir hombres y mujeres, lo que académicamente no es correcto por cuanto la Real Academia Española no solamente reconoce el género masculino y femenino, sino también otros.

Afirmó que implícitamente, el mensaje señala un nuevo financiamiento para los partidos políticos, con el que no están en desacuerdo. Sin embargo, si esta idea prospera, solicitó que se inste a cada una de las bancadas y/o al Ejecutivo, para que se elabore un proyecto de ley desde el Estado, a fin de que exista un financiamiento al movimiento sindical, tal como hay en muchos países, como Uruguay, Argentina y Brasil.

Por otra parte, expresó que se debería regular las formas de reemplazar al parlamentario que por diversas causas no finaliza su período. Estimó que este reemplazo debería efectuarse a través de votación popular, tal como ocurría antes de 1973.

Indicó que otra de las omisiones del mensaje dice relación con la cantidad de reelecciones que puede tener un diputado o un senador, las que no deberían ser más de dos reelecciones consecutivas.

Asimismo, señaló que apoyan la reforma constitucional a través de la cual se elimina la antidemocrática e injusta inhabilitación que impide a los dirigentes sindicales y gremiales postular a cargos parlamentarios. Añadió que espera que éste sea un primer paso para establecer en nuestro país una nueva y legítima Constitución, a través de una asamblea constituyente.

El Coordinador Nacional de Revolución Democrática, señor Pablo Paredes sostuvo que esta iniciativa de carácter histórico viene a corregir elementos tremendamente importantes y que se enmarca en el proceso de profundización de la democracia.

Manifestó que nuestra democracia presenta importantes déficits, entre los cuales, el sistema binominal es quizás uno de los que más distancian a la ciudadanía de la política y de la labor representativa del Congreso. El último informe del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) “Auditoría a la Democracia”, da cuenta de un creciente cuestionamiento a la posibilidad de las autoridades electas de representar eficazmente los intereses de la ciudadanía en general, señalando que el sistema binominal tiene efectos en los niveles de competencia, sobrerrepresenta a las dos coaliciones más grandes en desmedro de terceras y cuartas fuerzas políticas, y contribuye en generar incentivos en procesos de nominación para blindar incumbentes, disminuyendo los incentivos para la renovación generacional y de género en el legislativo.

Expresó que por tal razón comparte los objetivos de este proyecto, a saber, reducir la desigualdad del voto, permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas, aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos, facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías, promover un Congreso que refleje la diversidad de la sociedad y evitar que queden fuera candidatos con grandes votaciones.

Sin embargo, advirtió que si bien es uno de los pilares que debe ser reestructurado, no es el único. En efecto, consideró que éste es un proyecto paradigmático, que lo valoran en cuanto a sus objetivos, pero que requiere ir acompañado de proyectos que introduzcan modificaciones a la Ley de Partidos Políticos y a la Ley de Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, como parte de una agenda completa de reformas políticas.

Añadió que nuestro país espera participar de un proceso constituyente, por lo tanto, hay preguntas más profundas, como si se desea o no un órgano legislativo unicameral o bicameral, que deben ser respondidas en el marco de ese proceso, y no en esta ocasión.

Respecto al proyecto actualmente en tramitación, formuló las siguientes observaciones:

1. Valoró la iniciativa de dejar atrás el sistema binominal y la intención del proyecto de darle más proporcionalidad a la Cámara y al Senado.2. Apoyó la inclusión de cuotas de género como mecanismos de acción afirmativa que buscan aumentar la inclusión política de las mujeres en espacios de representación. Las cuotas no son cupos garantizados para las mujeres, son porcentajes que se establecen para las listas de candidatos a alguna elección, de manera que ningún sexo supere al otro en un determinado porcentaje o cuota. En América Latina hay 12 países con cuotas en los sistemas de elección. Aquellos más avanzados han instalado cuotas progresivas que tienden a la paridad 40% y 60%. Chile no cuenta con cuotas en su sistema de elecciones. La prueba está a la vista, sólo existe un 16% de mujeres en el Congreso, ubicándonos bajo el promedio de América Latina y el mundo. En este sentido, el proyecto en tramitación apunta en el camino correcto. Estimó necesario expandir su lógica a otros cuerpos normativos, tales como la ley orgánica constitucional de municipalidades, para elección de concejales y alcaldes y la ley sobre Transparencia, Control, y Gasto Electoral.

Además del incentivo al resultado, propuso aumentar el financiamiento público al inicio de las campañas a los partidos que tengan un determinado porcentaje superior de candidatas inscritas en relación al número de candidatas electas en elecciones anteriores.

También propuso modificar la ley de primarias. Ella establece actualmente en el inciso segundo de su artículo 16 que “Los partidos políticos cuyos estatutos dispongan medidas de acción afirmativa procederán conforme a ellas al seleccionar sus candidaturas para las elecciones primarias.” Al respecto estimó necesario contemplar una norma que supla el vacío eventual de los estatutos de los partidos y que, en coherencia con las propuestas anteriores, establezca como requisito para participar del proceso de primarias que el partido o pacto declare un número no menor al 40 ni mayor al 60% de mujeres en sus candidaturas a nivel nacional. Ahora bien, para hacer compatible la cuota en el proceso de primarias con la cuota en el proceso de elecciones a parlamentarios, debiera complementarse el artículo 3° bis inciso cuarto de la ley N°18.700, de modo de no hacer aplicable esa disposición a aquellos partidos o pactos que se hayan sometido a la ley de primarias para la nominación de sus candidatos.

Asimismo, consideró necesario modificar la ley N°19.175, orgánica constitucional sobre gobierno y administración regional, para la elección de consejeros regionales.

Expresó que mientras no se eliminen las importantes barreras que hoy dificultan la constitución de los partidos políticos y la mantención de su calidad de tales, resulta imprescindible que exista la posibilidad de pactar entre independientes, como forma de integrar a las fuerzas políticas emergentes y como mecanismo de construcción de mayorías al interior de la Cámara y el Senado.

Por su parte, valoró que el proyecto prometa el fin de la prohibición a dirigentes sindicales a ser parlamentarios.

Consideró necesario transparentar y uniformar el criterio utilizado para el aumento del número de parlamentarios. Propuso que se clarifique el procedimiento a futuro para la asignación de los cupos parlamentarios, mediante una fórmula objetiva que dependa exclusivamente del Servicio Electoral con los datos actualizados de población extraídos del censo oficial.

Respecto al número de candidatos, consideró necesario posibilitar la presentación de hasta el mismo número de candidatos como escaños corresponda ocupar en cada distrito o circunscripción. La cifra actual dificulta la elección de mujeres, independientes y grupos políticos emergentes, y obstaculiza la recepción de la necesaria información con que deben contar los ciudadanos respecto de sus candidatos en aquellos casos en que la papeleta contempla un alto número de ellos.

Sobre el reemplazo de parlamentarios anunciado en el mensaje presidencial, propuso reformar el artículo 51 de la Constitución, de modo tal que el sistema de reemplazo ante una vacancia sea igualitario para independientes y militantes de partidos políticos, contemplando la votación popular complementaria, con excepción de las vacancias producidas un año antes de una nueva elección de representantes. En ambos casos debe considerarse la obligación de mantener el sexo de quien deja la vacancia, en caso que ésta sea mujer.

Asimismo, propuso limitar la reelección de los representantes del Congreso a dos para diputados y uno para senadores, reformando el ya mencionado artículo 51 de la Constitución.

Sobre las barreras de acceso a jóvenes a cargos de elección popular, propuso bajar la edad como requisito para ser Parlamentario, igualando la edad para elegir a la edad para ser electo en el caso de los diputados (18 años), y reduciendo la edad mínima para ser electo senador desde los 35 años exigidos actualmente a los 30 años exigidos hasta 1973.

En cuanto a los mecanismos para incentivar la participación en elecciones, propuso facilitar el ejercicio del voto en Chile y en el extranjero, incluyendo el voto anticipado (postal y electrónico), abriendo la posibilidad de votar en todo Chile por los candidatos de la circunscripción y distrito que por domicilio le correspondan y asegurando la gratuidad del transporte público en el día de las elecciones.

En relación al voto de los chilenos en el extranjero, estimó necesario incluir el voto de éstos en la elección parlamentaria a través de la conformación de una circunscripción especial para quienes viven fuera de Chile y han acreditado su residencia ante algún consulado, dando cuenta así de la existencia de una región extranjera.

El señor Víctor Manuel Rebolledo señaló que en los últimos cien años ésta es la tercera vez que se aborda una instalación integral, global, de un nuevo sistema electoral. Ocurrió en 1925, con la Constitución de ese año; en 1988, año en que la Junta de Gobierno promulgó la ley N° 18.700. En esa época el entonces Poder Legislativo lo constituían los cuatro generales que integraban la Junta Militar de Gobierno. Ahora el Congreso Nacional está confrontado, por tercera vez en cien años, a la enorme responsabilidad de diseñar un sistema electoral, base de nuestro sistema institucional político.

Destacó que la opción de reemplazar el sistema binominal parte de un amplio consenso político. Se ha hecho lugar común en distintos sectores políticos, con excepciones minoritarias, que el sistema binominal no da para más; porque está en la base de la pérdida de calidad de la política, de la pérdida de prestigio, del descrédito creciente de la política, de los partidos políticos y desde luego del propio Parlamento.

Desde ese punto de vista, el impulso del proyecto, no viene dado tan solo, como ocurrió durante muchos años, por un sector político que se sintió perjudicado por él.

Añadió que muchas veces se ha sostenido que es imposible reformar un sistema electoral por un Parlamento que esté funcionando normalmente, salvo si hay un quiebre, una crisis, una revolución, porque se parte de la premisa que será muy difícil para los propios interesados poner sobre su interés personal el interés general de redibujar los distritos en los que tienen que concursar.

Manifestó que el proyecto contiene tres aspectos esenciales.

En primer lugar, se pasa de sesenta distritos binominales a veintiocho distritos múltiples, plurinominales, que eligen desde tres a ocho diputados, lo que permite pasar de un sistema binominal mayoritario, con todas las dificultades que generó, a un sistema proporcional. Ello resuelve algunas de las externalidades y efectos más negativos generados por el sistema binominal durante estos años. Como señala el mensaje, la representación de fuerzas políticas relevantes en un sistema binominal mayoritario se castiga desde la tercera fuerza hacia abajo, deja fuera del Parlamento a corrientes políticas históricas que cuentan con un apoyo ciudadano electoral relevante. Esas fuerzas políticas, gracias al carácter binominal mayoritario, no pueden representarse en el Parlamento. Al respecto proporcionó algunos ejemplos emblemáticos: En 1989, en el distrito de Copiapó, el Partido Comunista obtuvo el 27 por ciento y fracción de los votos y quedó fuera del Parlamento. En Cerro Navia, alcanzó el 24 por ciento y también quedó fuera.

Indicó que el sistema no da cuenta de un sistema partidario de al menos cinco o seis fuerzas políticas relevantes. Además, cierra espacios a la emergencia de nuevas fuerzas políticas que tienen derecho, en la medida en que conciten adhesión electoral, a representarse en el Parlamento.

Expresó que este aspecto resulta crucial porque, a su vez, resuelve otro de los efectos nefasto del sistema binominal, cual es, propiciar el empate. La democracia y las elecciones están hechas para que una vez expresada la soberanía popular, se configuren mayorías y minorías, no empates.

Afirmó que si se examinan las siete elecciones parlamentarias que se han realizado bajo la vigencia del sistema binominal, en más del noventa por ciento de ellas se ha empatado, sin que se configure, independiente del voto de la gente, una mayoría y una minoría que correspondan a la expresión de la soberanía popular. Concluyó que probablemente este elemento, a su vez, sea la base del descrédito del sistema, no solo del sistema electoral sino que también de la falta de credibilidad en que ha caído el conjunto del sistema político.

Recalcó que la esencia del proceso de abandono del sistema binominal para avanzar al sistema proporcional, radica en establecer distritos plurinominales múltiples de mayor tamaño. No hay caminos intermedios.

En segundo lugar, sostuvo que el proyecto resuelve un segundo problema grave y objetable del sistema binominal: la desigualdad del voto. La igualdad del voto es un concepto de la esencia del régimen democrático, que tiene tres dimensiones conceptuales: la universalidad, que significa que todo ciudadano, sin discriminación, tiene derecho a votar; su carácter secreto, esto es, que el ciudadano pueda ejercer sin ninguna interferencia su libre albedrío y, desde luego, el carácter igualitario del voto, es decir una persona un voto de igual valor.

Si se analiza el desarrollo de nuestro derecho público en materia electoral, siempre se avanzó en la dirección de consagrar el principio de la igualdad del voto en todos estos aspectos, partiendo en 1870, con el voto censitario; luego en 1925, con el requisito de saber leer y escribir; desde 1934 a 1949, se incorporó el voto femenino; en 1972, se concedió derecho a voto a los analfabetos y finalmente, en semanas recientes, se consagra el derecho a voto de los chilenos en el extranjero.

Recordó que el carácter secreto del voto se estableció en la práctica en 1958, cuando se instauró la cédula única para superar la práctica del cohecho. Por otra parte, la Constitución de 1925, al establecer el sistema de distritos y de circunscripciones electorales de manera bastante rigurosa, determinó que cada persona emitía un voto de igual valor, y se fijaron 25 distritos, 136 diputados, sobre la base del censo de 1920, lo que permitía que la equivalencia del voto de esos 25 distritos fuera de un valor bastante semejante.

Aseveró que la orientación de nuestra legislación en orden a ir mejorando, consagrando y aproximando el ideal de la igualdad del voto como principio esencial de un régimen democrático, tuvo un quiebre violento entre 1988 y 1989 con la ley N° 18.700. La junta militar de gobierno inició la tramitación de un proyecto en agosto de 1988 y, posteriormente, con los resultados del plebiscito del Sí y del No en la mano, procedieron a reestructurar y establecer el dibujo final de los distritos en un ejercicio bastante impúdico de lo que en ciencia política se llama gerrymandering, es decir, la manipulación del dibujo de los distritos con el propósito de favorecer a un sector y desfavorecer a otro.

Lo expuesto quebró el principio de igualdad del voto de una manera absolutamente grave en relación con lo que en ciencia política y en doctrina se consideran límites tolerables de división del valor del voto entre un distrito y otro, hasta 1,5, 1,6 y hasta 2 por ciento. Acá hay diferencias de hasta 5 y 6 veces en el valor del voto en la configuración actual de los distritos.

Expresó que el proyecto no propone resolver este problema, sino avanzar en su solución, o sea, mejorar el principio de igualdad del voto. Indicó que entendía esta opción, de no ir más lejos en orden a restablecer este principio relevante, se vincula a una mirada de realismo político, por lo que se ha optado por la agregación de distritos, para generar unos más grandes que permitan la proporcionalidad. Esta decisión se adoptó considerando lo inconfortable que resulta para quienes tienen que aprobar la iniciativa, dado que probablemente muchos de ellos aspiran legítimamente a su reelección. Comentó que con realismo se pensó que una reestructuración integral destinada a restablecer rigurosamente el principio de igualdad del voto, posiblemente habría requerido un redibuje de distrito, que difícilmente hubiera sido aprobado en el Parlamento.

Pese a lo expuesto, manifestó ser partidario de reducir el plazo de 12 años que consagra el proyecto para proceder a la redistribución de escaños.

Respecto del aumento de parlamentarios, expresó que llamaba la atención que jamás, mientras el Senado tuvo más de treinta y ocho senadores, con los senadores designados, los sectores que han esgrimido este argumento no lo representaron como un problema de gasto. Ahora si lo hacen. Por ello estimó que puede tener legítimas dudas del soporte de esa argumentación.

Por otra parte, sostuvo que se ha tratado de dar un carácter de dogma de fe a la norma que fija el límite el número de candidatos, establecido en la Cuarta Comisión Legislativa, lo que no tiene antecedentes en nuestros anteriores sistemas electorales. Informó que ha revisado numerosa legislación electoral comparada, europea y latinoamericana, y ha constatado que esa norma no existe en parte alguna.

Destacó que toda norma jurídica busca proteger un bien jurídico. Al respecto preguntó cuál puede ser el bien jurídico protegido desde el punto de vista del derecho público el limitar el número de candidatos.

Si se analiza el debate que se generó a mediados de 1988, cuando se promulgó la ley Nº 18.700, resultó bastante evidente que esa norma buscó generar una dificultad a una coalición que en ese minuto estaba integrada por catorce partidos, apostando que sería imposible que concordaran en una lista única, atendida la necesidad de hacer pactos por omisión. En la práctica, esa norma, en su afán de generarle una dificultad a una coalición, propiciaba incentivar la fragmentación.

Manifestó que esta norma generó el efecto más nefasto del sistema electoral vigente, porque, en definitiva, instaló, como fuente de generación del Parlamento de una manera predominante, a las cúpulas políticas de las dos grandes coaliciones, y menoscabó de manera sustancial hasta el día de hoy el ejercicio del voto ciudadano, de la soberanía popular, como fuente y generación del Congreso de la República.

En el minuto en que termina la negociación de las dos grandes coaliciones ya se puede saber, más o menos, quiénes van a integrar en un 70 u 80 por ciento el Congreso Nacional. Probablemente, esto generó la mayor animadversión, la mayor distancia y mayor objeción ciudadana al sistema electoral, incluso más que el carácter mayoritario del sistema binominal.

Cerrado el debate, vuestra Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, en su sesión 16ª, de 20 de mayo de 2014, aprobó en general el proyecto de ley en informe, por 9 votos a favor y 4 en contra.

Votaron por la afirmativa los diputados señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Monckeberg, don Cristián; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Votaron por la negativa la diputada señora Turres, doña Marisol y los diputados señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Urrutia, don Osvaldo.

Los diputados integrantes de la Comisión fundamentaron su voto, de la siguiente manera:

El diputado señor Andrade señaló que en el nuevo ciclo político instalado con la elección de la Presidenta Bachelet, cuyo foco central es la lucha contra la desigualdad y el abuso, se ha generado una convicción ciudadana de que el sistema electoral binominal es parte de la desigualdad que se genera entre los ciudadanos del país. El proyecto de ley en discusión en lo medular intenta que los chilenos, en nuestra condición de ciudadanos, tengamos el mismo valor. Es decir, que un elector de un distrito, desde el punto de vista de su relevancia electoral, pese lo mismo que el de otro. Hasta ahora existe una flagrante violación a ese principio.

Sostuvo que desde ese punto de vista, no se puede sino estar de acuerdo con un proyecto de esta naturaleza. Recalcó que en este nuevo ciclo, la desigualdad en materia de ciudadanía también es un asunto del cual es necesario hacerse cargo.

Hizo presente que el proyecto también considera un reconocimiento a la representación de las regiones con menos densidad electoral, razón por la cual el proyecto no contempla un sistema estrictamente proporcional. Se les reconoce su condición especial y de privilegio, dada su condición de zonas extremas.

Indicó que el proyecto incorpora una cuota de género, de modo que la ciudadanía reconozca que la participación de la mujer es una necesidad del sistema político. Además, en el mensaje se anuncia el término de la odiosa y arbitraria discriminación respecto de los dirigentes sindicales, ya que ellos hoy no pueden ser parte de un escrutinio popular como una elección.

El diputado señor Ceroni sostuvo que este proyecto de ley resulta fundamental para fortalecer nuestra democracia. Además, expresó que al efectuar estos cambios, es posible relevar ante la ciudadanía la importancia del Congreso. Muchas veces se piensa que estas modificaciones del sistema político no se vinculan con el interés contingente de las personas, en orden a vivir en una sociedad más justa. Por el contrario, este cambio va a permitir que las personas se sientan mejor representadas en el Congreso, al existir un sistema más proporcional, en el que su voto se encuentre en igualdad de condiciones a través de todo el país y que no existan las diferencias que permite el sistema binominal. En resumen, señaló que este proyecto permitirá que finalmente, las mayorías se expresen en el Congreso como tal para que puedan producir los cambios que la ciudadanía quiere, para mejorar su nivel de vida. Éste se mejora a través de las autoridades que eligen, especialmente, en el Poder Legislativo y en el Ejecutivo.

La diputada señora Turres, doña Marisol, manifestó que están de acuerdo en la necesidad de reformar nuestro sistema electoral. Sin embargo, destacó que al calificarse con suma urgencia el proyecto los obliga a pronunciarse sin haber tenido la posibilidad de debatir y de hacer propuestas antes de la votación en general.

Afirmó que en el proyecto hay aspectos respecto de los cuales no están de acuerdo. En primer lugar mencionó el aumento de los parlamentarios. Al respecto manifestó que es posible hacer reformas a nuestro sistema electoral sin necesidad de aumentar de 120 a 155 el número de diputados. Ello constituye un exceso que significará mayores gastos. En segundo lugar se refirió al redistritaje. Recalcó que no es lo mismo mirar un mapa a constatar in situ lo que significa cada distrito. El nuevo sistema implica dificultades para desplazarse dentro de los nuevos distritos que se crean.

Finalmente, hizo presente que concordaba en gran parte con las exposiciones efectuadas por las distintas organizaciones no gubernamentales que representan básicamente a mujeres.

Hizo presente que a través de los años, ha modificado su posición sobre esta materia. Hace ocho años, cuando llegó al Congreso Nacional, estimaba que las mujeres aumentarían su participación en el Parlamento en forma natural. Sin embargo, ello no ha sucedido. Por el contrario: ha ido disminuyendo la cantidad de candidatas.

Sostuvo que el Ejecutivo contaba con su apoyo para incentivar a las mujeres a participar de manera más efectiva en política y eliminar las barreras de acceso existentes.

El diputado señor Chahin valoró la convicción, voluntad y decisión política del Gobierno de impulsar el largamente esperado cambio del sistema electoral.

El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo Humano ha sostenido que no se alcanzará una distribución de la riqueza sustantiva si no mejora también la distribución del poder. Por ello, las reformas políticas son tan importantes. Esta modificación no sólo permitirá avanzar en materia de igualdad del voto, sino que también permitirá mejorar la representatividad del Congreso Nacional, de modo que éste refleje de mejor manera la sociedad chilena, desde el punto de vista político, social y cultural, para que no queden excluidas minorías relevantes y para que no se intente consagrar artificialmente un empate que distorsiona la voluntad de los ciudadanos.

También estimó relevante que en el proyecto se incluya un incentivo a los partidos para mejorar la equidad de género, por la vía de consagrar ciertos requisitos.

Finalmente, hizo presente la necesidad que no solo se reconozca constitucionalmente a nuestros pueblos indígenas, sino que también, reconociéndonos como un Estado plurinacional, además se garantice la adecuada participación de éstos.

El diputado señor Coloma anunció su voto en contra del proyecto.

Manifestó que todas las inequidades o problemas en materias de salud, de pensiones y de delincuencia en nuestro país, no se van a resolver aumentando el número de parlamentarios. Las personas que los votaron y que los apoyaron para ser elegidos ignoraban que uno de los primeros proyectos que votarían sería uno que consagra un aumento tan potente del número de parlamentarios.

Señaló que desde un principio solicitaron información acerca de cómo se pretendía financiar este proyecto. Se les informó que se recurriría a fondos de la Cámara, pero hasta la fecha no han recibido una respuesta concreta al respecto.

No basta afirmar que se financiará con fondos propios, porque en la práctica, esa respuesta hace pensar que los fondos anteriormente fueron mal gastados, lo que se niega a creer.

El diputado señor Gutiérrez recordó a Gladys Marín, quien fue una gran luchadora contra la exclusión. La llamada transición democrática tuvo para su colectividad un sesgo de exclusión y de marginalización.

Gladys Marín hizo grandes esfuerzos para alcanzar el fin del sistema electoral binominal. En muchas oportunidades hubo candidatos del Partido Comunista de Chile que obtenían muy buenas votaciones, pero el sistema electoral los excluía.

Ella propuso el año 1997 alcanzar un acuerdo nacional para terminar con los obstáculos instalados por la dictadura. Lamentablemente, fue rechazado.

Posteriormente, el año 2005, se le propuso a la entonces candidata Michelle Bachelet, en su primera postulación a la Presidencia de la República, concordar ciertos puntos para que le proporcionaran su apoyo en la segunda vuelta. Gracias a ella y a sus iniciativas, se permitió que el Partido Comunista se incorporara dentro del conglomerado de la Concertación y que eligieran tres diputados. Hoy la Presidenta continúa por la misma senda, al enviar un proyecto para terminar con el sistema electoral binominal y cambiarlo por uno proporcional.

Añadió que el sistema binominal que legó la dictadura por tantos años tenía entre otros propósitos, excluir al Partido Comunista.

Por último, manifestó que constituye una falsedad el culpar al sistema proporcional de la crisis de 1973.

El diputado señor Insunza señaló que vale la pena preguntarse cuáles son los valores que la sociedad chilena le está pidiendo a la democracia. Éstos son atributos que van cambiando en el tiempo. Cuando luchaban contra la dictadura, pensaban en cosas que hoy parecen mínimas, pero que en ese entonces no lo eran: la libertad, el derecho de opinar sin temor a la represión; el poder manifestarse sin temor a que la CNI anduviera detrás de ellos.

Esas expresiones de justicia, de libertad, eran los fundamentos iniciales que exigían a la democracia. Hoy, paulatinamente, la sociedad chilena también ha demandado condiciones de igualdad, y que aquello que estimaban como garantía de calidad en distintos aspectos, pueda materializarse. Añadió que hoy también se exige a la democracia que aquellos derechos fundamentales que se declaran puedan vivirse realmente, que no solo sean enunciados, sino parte de la vida.

Consideró que esta exigencia a la democracia proviene de una ciudadanía mucho más activa y que desea participar, que tiene más acceso a la información, que se forma su propia opinión de las cosas y quiere expresarlo.

Indicó que las dificultades que enfrentan en diversos aspectos institucionales, uno de ellos, de manera fundamental y decisiva, el sistema electoral, está dando cuenta de ello. Hoy, la ciudadanía exige una democracia en la que pueda expresarse con canales de participación, con diversidad. Afirmó que el proyecto presentado por el Gobierno se vincula con esa exigencia ciudadana, pero también con una tradición de país que deben ser capaces de encauzar apropiadamente.

Expresó que este estado de la sociedad chilena actual poco a poco deja atrás la noción del peso de la noche portaliana; vale decir, el concepto de que hay cosas que se pueden resolver solo a nivel de élite, debido a una apatía ciudadana.

Añadió que la iniciativa propone un sistema proporcional moderado, que abrirá la competencia y permitirá que no exista seguridad en el voto, que haya diversidad de candidatos, más mujeres, más jóvenes, dirigentes sindicales y que, por lo tanto, en cada elección haya una expresión real de la sociedad chilena.

Sostuvo que no constituye una exageración el concebir una Cámara de Diputados con 155 miembros, si en 1973 había 150 diputados, en circunstancias de que la población era mucho menor.

El diputado señor Monckeberg, don Cristián, anunció su voto a favor. Con todo, aclaró que su voto no significa que les guste el proyecto, pues esta iniciativa del Gobierno es una propuesta más de las muchas que se han presentado.

Indicó que aspiraba a que la UDI se sume a la tarea de generar un gran acuerdo, de modo que todos participen en la sustitución del sistema electoral.

Reiteró que el proyecto en las actuales condiciones no les agrada, entre otros aspectos, por el desmedido aumento de parlamentarios.

Hizo presente que se acerca más a sus posiciones el acuerdo que generaron con la Democracia Cristiana, el que no solo tiene un significado técnico o electoral, sino también político. Tal significó un diálogo importante en el Congreso, distinto del Gobierno.

Señaló que esperaba que este primer paso para cambiar el sistema electoral signifique, al mismo tiempo, mejorar la institucionalidad política y las instituciones democráticas.

Afirmó que nadie piensa que el cambio del sistema electoral –como ha señalado más de algún diputado- va a transformar a Chile.

Informó que Renovación Nacional votará a favor, porque es decisión de su partido el avanzar en esta materia.

Expresó que deben procurar intentar que éste sea el inicio de grandes acuerdos con el Gobierno en materias que son de interés para el país. Agregó que no resultará posible coincidir en todo, pero al menos, se deben hacer esfuerzos para discutir las materias que forman parte del programa de Gobierno de la Presidenta Bachelet, que tuvo una amplia mayoría.

Por último, advirtió que no se pueden demorar una eternidad en aprobar esta reforma.

El diputado señor Saffirio expresó que forman parte de una Corporación que gradualmente ha ido perdiendo prestancia, presencia y legitimidad, no solo electoral, sino que política, en la más amplia acepción de la palabra.

Compartió lo señalado por el diputado Cristián Monckeberg, en orden a estar disponibles para avanzar en un acuerdo lo más amplio posible, de manera que lo que resulte de este proceso sea un sistema electoral que no sólo permita recuperar y mejorar los niveles de representatividad del Congreso, sino además relegitimar la política y a los políticos.

Destacó que quienes deseen ser candidatos en el futuro, saben que se están poniendo obstáculos muy superiores a los actuales para volver a cumplir las funciones que ejercen hoy. No obstante, indicó que esperan que sean capaces de votar favorablemente un proyecto que, desde el punto de vista electoral, les impone exigencias muy superiores a las actuales.

Este proceso constituye un inicio para recuperar la legitimidad de la política y la percepción ciudadana de los políticos, pero, sobre todas las cosas, es un acto de responsabilidad, en cuanto tiene que permitir que el Congreso Nacional, en su conjunto, y la Cámara de Diputados, en particular, sea percibida por los ciudadanos como un órgano en el cual están representadas todas las corrientes políticas.

El diputado señor Soto expresó que están dando un paso histórico en orden a cambiar un sistema electoral ideado en una época de estado de excepción constitucional, aprobado en plena dictadura y con un Poder Legislativo constituido por muy pocas personas, ninguna de ellas elegida por el pueblo.

Puntualizó que, como han dicho diversos expertos, este sistema fue “un traje a la medida” de la dictadura. Se ideó un distritaje mañoso, luego de conocer el resultado del plebiscito.

Estimó que los niveles de abstención y de desprestigio de la clase política a que se ha llegado son síntomas claros de que parte de la ciudadanía se siente excluida, sin representación en el Congreso Nacional.

En la última elección municipal, seis de diez chilenos no participaron, decidieron abstraerse de las decisiones de su gobierno comunal. En la elección parlamentaria y presidencial, cinco de diez ciudadanos no participaron. Claramente, esas no son bases sanas ni sólidas para seguir construyendo una democracia como la que todos desean.

Señaló que el sistema proporcional que se propone da debida cuenta de las necesidades de inclusión de las terceras y cuartas mayorías.

Con todo, hizo presente que le preocupa la cantidad de candidatos que se puedan presentar en cada lista. Manifestó que resulta necesario escuchar las preocupaciones de las candidaturas independientes.

Asimismo, afirmó que se debe incentivar la participación de la ciudadanía, con medidas como la georeferenciación del voto, es decir, acercar las urnas a los electores. Estimó absurdo que actualmente se obligue a los electores, sobre todo en las comunas o distritos grandes, a cruzar todo el distrito, muchas veces usando dos o tres medios de locomoción para acercarse al lugar de votación.

El diputado señor Urrutia, don Osvaldo, sostuvo que al interior de su partido están estudiando otras alternativas para modificar el sistema electoral. Sin embargo, expresó que no les agrada el aumento desmedido de parlamentarios. Tampoco comparte la concentración y el gran aumento de parlamentarios que se produce en la Región Metropolitana.

El diputado señor Squella afirmó que no comparte la celeridad con que se está tramitando esta iniciativa, dado que para que entre en vigencia este proyecto deben pasar dos o tres años.

Expresó que todos desean mejorar nuestro sistema democrático. Sin embargo, están convocados para pronunciarse sobre este proyecto de ley. Éste dentro de sus principales objetivos, pretende alcanzar mayor igualdad en el voto y mayor proporcionalidad entre las fuerzas políticas representadas en el Congreso Nacional. Con todo, afirmó que la herramienta que se utiliza para ello, cual es, el aumento significativo del número de parlamentarios, es inadecuada.

En el mensaje se sostiene que la igualdad del voto y la mayor proporcionalidad se logrará con un aumento de 47 parlamentarios. Pues bien, de las pocas intervenciones de distintos expositores e invitados que han concurrido a la Comisión, ha quedado claro que ello no es efectivo.

Añadió que más allá de no cumplir con los objetivos, se pone una traba importante a la participación de los Independientes, quienes van a quedar prácticamente excluidos si están fuera de pacto. Además, se generan 28 macrodistritos que alejan al parlamentario del representado, situación que se aleja de lo que está demandando la ciudadanía.

Por otra parte, indicó que se están generando expectativas desmedidas. Al respecto aseveró que constituye un error el hacer creer a la gente que modificando el sistema electoral a través del cual se elige a los parlamentarios, de la noche a la mañana se van a mejorar las condiciones en el país.

Hizo presente que no desean ser responsables de un aumento de parlamentarios de tanta magnitud. Sin perjuicio de ello, reiteró su interés por colaborar y contribuir a encontrar un proyecto de ley que conforme a la totalidad de las fuerzas políticas que intervienen en la acción política en el país.

El diputado señor Rincón expresó que pocas veces a los legisladores les corresponde participar en un momento histórico.

Valoró la voluntad de los actores políticos que el año pasado gatillaron la creación de conciencia en el país, en orden a que resulta posible discutir este tema. Hizo presente que no solo se refería al acuerdo RN-DC, sino también al ex Presidente de la República, quien envió posteriormente un proyecto para terminar con el sistema electoral binominal.

Por otra parte, respecto de la fijación de cuotas, señaló que ha quedado acreditado en la Comisión que resulta necesario emparejar la cancha. Chile tiene una de las peores representaciones de mujeres, no solo de América Latina, sino del mundo.

3.- Discusión Particular.

Artículo 1°, N°1, letra a)

S.E. la Presidenta de la República, formuló indicación para reemplazar la letra a) por la siguiente:

“a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, a continuación del inciso primero:

“En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.”.”.

El diputado señor Auth hizo presente que los diputados señores Andrade y Soto presentaron una indicación para reponer el texto original propuesto por el Ejecutivo en esta materia, el que permitía los subpactos.

El diputado señor Andrade sostuvo que constituye un error político y técnico electoral la idea de suprimir los subpactos entre partidos.

Es un error desde el punto de vista político, porque permite a dos o más partidos expresar una cierta identidad. Carece de todo sentido político que los partidos anulen o eliminen la facultad de constituir asociaciones de carácter electoral. Significa negarse a priori a utilizar un instrumento que en definitiva dependerá de los propios partidos si finalmente se usa o no. Es resorte del pacto el determinar cuáles subpactos se permitirán. Por tanto, dicho de otra forma, no podrían existir subpactos sin acuerdo del pacto.

Añadió que la existencia de subpactos al interior de un pacto electoral permite que diversas colectividades se asocien por razones de afinidad política ideológica o por razones de índole coyuntural, mejorando su performance electoral.

Expresó que en el ámbito de la Concertación y de la Nueva Mayoría ya cuentan con experiencia en materia de subpactos. Estos han permitido generar el llamado “eje histórico”, el que ha sido de gran importancia para la transición.

Destacó que llama la atención que hoy quienes han manifestado una especial preocupación por la mantención del citado eje, aparentemente se oponen a la materialización de los subpactos.

Por otra parte, hizo presente que el Partido Socialista ha sido parte del debate en esta materia, llegando a un acuerdo con otras fuerzas. Más aún, materializó dicho acuerdo y retiró una indicación que habían presentado, precisamente en cumplimiento del mismo acuerdo. Recalcó que en política los acuerdos se honran. Ello le otorga prestigio a la actividad y seriedad a las instituciones.

El diputado señor Chahin señaló que la indicación presentada por diputados socialistas apunta en una dirección contraria a la presentada por la Presidenta de la República.

Destacó que han respetado el acuerdo al que llegó el Gobierno con Amplitud. Agregó que esta indicación responde a un acuerdo de la Democracia Cristiana con el Ejecutivo. Indicó que esta indicación permite alcanzar mayor proporcionalidad. La existencia de subpactos apunta en sentido contrario.

El diputado señor Auth sostuvo que la ley en materia municipal permite la existencia de subpactos. Tal opción puede o no ser utilizada por los partidos que componen el pacto. En un principio la Democracia Cristiana subpactó con el Partido Radical. Posteriormente cambió la integración de los subpactos, dado que por una parte se unió el PPD con el Partido Radical y el Partido Socialista con la Democracia Cristiana.

Añadió que la existencia o no de subpactos no tiene efecto electoral alguno, porque ningún partido suscribirá un pacto donde la integración de los subpactos le resulte perjudicial. A vía de ejemplo, señaló que el PPD no suscribirá pacto alguno donde la Democracia Cristiana subpacte con el Partido Socialista, obligando al PPD a subpactar con partidos menores.

Estimó que este debate resulta desproporcionado. Es irrelevante que existan o no subpactos.

El diputado señor Saffirio lamentó que en las postrimerías del debate sobre el reemplazo del sistema electoral éste se centre en las consecuencias que significará para cada partido en las próximas elecciones, las modificaciones que hoy se discuten.

Discrepó del diputado Chahin. Afirmó que constituye un error votar según cuál sea la rentabilidad inmediata para un partido determinado.

El diputado señor Insunza expresó que debiera legislarse pensando en cómo estructurar sistemas de coaliciones y las diversas alternativas que éstas pueden tener a la hora de participar en una elección. Desde esta perspectiva la existencia de subpactos ofrece mayor espacio para la formación de coaliciones amplias y para preservar de mejor manera los equilibrios al interior de las coaliciones.

La existencia de subpactos constituye una medida técnica para la configuración de las coaliciones, aunque presenta también componentes políticos. Añadió que así lo demuestra la experiencia de las elecciones municipales, donde se ha utilizado el sistema de subpactos.

Hizo presente que la existencia de subpactos incluso permite su omisión en algunos distritos, precisamente para efectos de alcanzar mayor equilibrio al interior de las coaliciones.

Afirmó que las aprensiones que su existencia genera son infundadas. Toda coalición funciona sobre la vigencia de un consenso suficiente para que ésta tenga viabilidad.

El diputado señor Ceroni sostuvo que el Pacto permite que los partidos que lo integran conversen de manera más armoniosa. El subpacto introduce un elemento que puede ser conflictivo al interior del Pacto. Puede ocurrir que una serie de partidos subpacten, arrinconando a otro que no lo integra, el que quedará en una situación desmedrada.

Preguntó cómo evitar que los partidos dominantes subpacten en perjuicio de los partidos más pequeños.

El diputado señor Auth sostuvo que la existencia o no de subpactos pasa a ser crucial en los distritos pequeños, donde se eligen pocos diputados o senadores. A vía de ejemplo, mencionó el caso de aquellas circunscripciones que eligen dos senadores. Como solo podrán postular tres candidatos, si subpactan dos partidos un candidato puede verse enfrentado a la suma de otros dos.

Por ello, expresó que él jamás permitiría que un candidato del PPD se enfrente a dos candidatos de otro subpacto.

Por otra parte, expresó que el argumento a favor del subpacto está dado por otorgar una herramienta adicional a la coalición, porque puede ocurrir que un determinado partido para subsistir deba recurrir al subpacto.

Cuando no hay subpactos el número de candidatos que lleva cada partido pasa a ser decisivo, y aumenta la importancia de la negociación, porque igual existirá segunda cifra repartidora, la que se aplicará al partido. Por ello, el partido que cuente con dos o tres candidatos tendrá una superioridad neta sobre el partido que solo tiene un candidato y no tiene la posibilidad de subpactar con partido alguno.

Sometida a votación la indicación se aprobó por 7 votos a favor, 5 en contra y una abstención. Votaron por la afirmativa la señora Molina, doña Andrea y los señores Chahin, don Fuad; Coloma, don Juan Antonio; Monckeberg, don Nicolás; Rincón, don Ricardo; Squella, don Arturo y Van Rysselberghe, don Enrique. Votaron por la negativa los señores Andrade, don Osvaldo; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Se abstuvo el señor Ceroni, don Guillermo.

Artículo 1°, N°1, letra b)

Los señores Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Rincon, don Ricardo y Saffirio, don René, formularon indicación para sustituir la letra b), por la siguiente:

“b) Intercálanse los siguientes incisos cuarto y quinto, nuevos, a continuación del actual inciso tercero, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a Diputado o Senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el 60% del total respectivo. La infracción a lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a Diputados o a Senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.

Para el cálculo de la proporción de hombres y mujeres establecida en el inciso anterior, se excluirán aquellas candidaturas proclamadas por el Tribunal Calificador de Elecciones para la elección definitiva de parlamentarios en los distritos electorales y circunscripciones senatoriales en que se hayan celebrado elecciones primarias, en virtud de lo dispuesto en los artículos 30 y 31 de la ley N° 20.640. Asimismo, para el cálculo de la proporción de hombres y mujeres establecida en el inciso anterior, si dicho resultado no diese un número entero, deberá aproximarse al entero inmediatamente superior.”.”.

El diputado señor Rincón explicó que su indicación solo tiene por objeto mejorar la redacción de la presentada por el Ejecutivo.

La diputada señora Turres, doña Marisol, manifestó que la fijación de cuotas no garantiza una mayor participación de la mujer en política. Con todo, anunció que igualmente votará a favor de esta modificación.

Sostuvo que es necesario modificar la ley de partidos políticos para incentivar la participación de las mujeres. Añadió que la propuesta que contiene este proyecto en la materia resulta insuficiente, sin perjuicio de que las perjudica en términos de opinión pública.

La diputada señora Sabat, doña Marcela agradeció al Gobierno el haber presentado esta propuesta. Indicó que la experiencia comparada demuestra que ésta es la única vía para aumentar el número de parlamentarias mujeres. Además de ello, contribuirá a alcanzar el cambio cultural que Chile necesita para que exista menor desigualdad.

Sometida a votación la indicación fue aprobada por diez votos a favor y dos abstenciones. Votaron a favor las señoras Sabat, doña Marcela y Turres, doña Marisol y los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Auth, don Pepe; Rincón, don Ricardo; Soto, don Leonardo y Trisotti, don Renzo. Se abstuvieron los diputados señores Coloma, don Juan Antonio y Squella, don Arturo.

Artículo 1°, N°1, letras c) y d)

S.E. la Presidenta de la República, formuló indicación para reemplazar las letras c) y d), por las siguientes:

“c) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “que hubieren constituido un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.”.

d) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “Se podrá dejar sin efecto un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.”.

Sometidas a votación ambas letras, fueron aprobadas por siete votos a favor, cinco en contra y una abstención. Votaron por la afirmativa la señora Molina, doña Andrea y los señores Chahin, don Fuad; Coloma, don Juan Antonio; Monckeberg, don Nicolás; Rincón, don Ricardo; Squella, don Arturo y Van Rysselberghe, don Enrique. Votaron en contra los señores Andrade, don Osvaldo; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Se abstuvo el señor Ceroni, don Guillermo.

Artículo 1°, N°2

El Ejecutivo formuló indicación para sustituir el numeral por el siguiente:

“2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 4° por el siguiente:

“En el caso de las declaraciones de candidaturas para la elección de Diputados y Senadores los partidos políticos o pactos electorales podrán presentar en cada distrito o circunscripción un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción de que se trate.”.”.

El diputado señor Coloma expresó que su sector está por mantener una cierta lógica respecto de la forma en que funcionan las elecciones el día de hoy, en el sentido de permitir que existan tantos candidatos como escaños por llenar.

El diputado señor Saffirio recordó que existe una disposición en esta iniciativa que obliga a que ningún género pueda superar el sesenta por ciento del total de candidaturas presentadas. Por tanto, mientras más se reduce el número de candidatos mayor será la dificultad para cumplir con la citada regla.

Sometida a votación la indicación del Ejecutivo se aprobó por 7 votos a favor y 4 en contra. Votaron por la afirmativa los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Rincón, don Ricardo y Soto, don Leonardo. Votaron por la negativa los señores Coloma, don Juan Antonio; Saffirio, don René; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

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S.E. la Presidenta de la República formuló indicación para intercalar el siguiente N°3, nuevo:

“3) Reemplázase, en el artículo 10, la cifra “0,5” por la cifra “0,25”.”.

Sometida a votación la indicación fue aprobada por siete votos a favor, uno en contra y cuatro abstenciones. Votaron por la afirmativa los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Votó por la negativa el señor Trisotti, don Renzo. Se abstuvieron la señora Turres, doña Marisol y los señores Chahin, don Fuad; Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

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Los señores Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo, formularon indicación para agregar, en el artículo 1°, el siguiente N°4, nuevo:

“4) Sustitúyese el artículo 17 por el siguiente:

“Art. 17. El Consejo del Servicio Electoral, dentro de los diez días siguientes a aquel en que venza el plazo para declaración de candidaturas, deberá dictar una resolución, que se notificará por carta certificada a los partidos, que se pronunciará sobre:

a) La aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidaturas independientes. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 25, 48 y 50 de la Constitución Política de la República, o que se encuentren en alguna de las situaciones previstas en el artículo 57 de la Constitución. Asimismo deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los Párrafos 1° a 3° de este título.

b) La aceptación o rechazo de la totalidad de las declaraciones de candidaturas a Diputado o Senador, según corresponda, declaradas por cada partido político, en conformidad a lo dispuesto en el inciso cuarto y quinto del artículo 3 bis. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a Diputado o a Senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con la proporción de sexos establecida en el inciso cuarto y quinto del artículo 3 bis.

Los partidos políticos cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a Diputado o Senador, según corresponda, fueren rechazadas en conformidad a lo dispuesto en la letra b) de este artículo podrán, dentro de los tres días siguientes a la fecha de la notificación de la resolución a que alude el inciso primero, corregir ante el Servicio Electoral la proporción de sus candidaturas declaradas, retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas, ajustándose al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso cuarto y quinto del artículo 3 bis.

Dentro de los cinco días siguientes de vencido el plazo para reclamar de la resolución del Consejo del Servicio Electoral, éste dictará una nueva resolución aceptando o rechazando las declaraciones nuevas y rechazando o aceptando, según proceda, la totalidad de las declaraciones de candidaturas a Diputados o a Senadores, según corresponda, la que deberá ser publicada dentro de tercer día en el Diario Oficial. En tal oportunidad se publicarán en el Diario Oficial, asimismo, la aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidaturas independientes.”.”.

El diputado señor Rincón explicó que la indicación suscrita por él y por otros diputados es muy similar a la presentada por el Ejecutivo. La única diferencia radica en la publicidad de la resolución que dicta el Consejo del Servicio Electoral. Mientras en la indicación del Ejecutivo dicha publicidad se efectúa mediante la publicación de la resolución en el Diario Oficial, en la indicación de los diputados se realiza mediante una notificación por carta certificada a los partidos.

De esta forma se pretende que el error, casual o deliberado, de los partidos al confeccionar la declaración de candidaturas, sea ignorado por los demás partidos, de modo que procuren cumplir con la cuota en aquellos distritos donde les resulte más conveniente, perjudicando de esta forma, a los partidos que si cumplieron con la ley. Sólo existirá publicidad erga omnes una vez que hayan vencido los plazos de reparación.

El diputado señor Auth concordó con lo expuesto por el diputado Rincón. Sin embargo, estimó insuficiente el plazo de tres días que se concede a los partidos políticos para corregir ante el Servicio Electoral la proporción de sus candidaturas declaradas, retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas.

El diputado señor Chahin manifestó que debiera permitirse que la notificación se efectúe a través de un correo electrónico, para lo cual los partidos políticos debieran registrar ante el Servicio Electoral su correspondiente correo.

El diputado señor Soto sugirió estudiar la posibilidad que sean notificados personalmente los apoderados de las candidaturas, o bien por carta certificada.

El diputado señor Rathgeb hizo presente que existe jurisprudencia que ha restado validez a la notificación por correo electrónico.

Sugirió mantener las dos formas de notificación, vale decir, tanto el correo electrónico como la carta certificada.

El diputado señor Squella recordó que cada vez que se ha efectuado una modificación relevante a los procedimientos, ya sea laborales, penales o de familia, se ha permitido expresamente que se efectúe la notificación por correo electrónico.

Sin ir más lejos, hizo presente que en la reciente reforma tributaria aprobada por esta Corporación se facultó al Servicio de impuestos Internos a efectuar determinadas notificaciones a través de un correo electrónico. Con todo, a modo de adoptar ciertos resguardos, sugirió que la notificación se efectúe por carta certificada, junto con el correo electrónico.

El diputado señor Coloma advirtió que si se aceptan ambas formas de notificación debe aclararse a partir de qué momento se empiezan a computar los plazos que la norma establece.

El diputado señor Auth señaló que la exigencia de la cuota se refiere a las candidaturas declaradas por los partidos políticos ante el Servicio Electoral. Hizo presente que si un partido político tiene dificultades para cumplir con la cuota exigida por la ley puede optar por declarar deliberadamente candidaturas de mujeres, a sabiendas que éstas no cumplen con todos los requisitos para postular, sólo con la finalidad de cumplir con la citada cuota. De esta forma habrá cumplido con dicha exigencia, sin importar si posteriormente tales candidaturas son objetadas. Por ello propuso que el requisito de la cuota se vincule a las candidaturas aceptadas y no solo a las declaradas. Consideró inútil aprobar una ley que traiga consigo una “trampa asociada”, permitiendo eludir el cumplimiento del objetivo que persigue la norma.

El asesor legislativo del Ministerio del Interior, señor Rodrigo González afirmó que la duda planteada por el diputado Auth fue advertida al momento de redactar la indicación. Por ello se exige al Consejo del Servicio Electoral pronunciarse sobre las inhabilidades o incompatibilidades que existan, de acuerdo a lo dispuesto en la letra a) del artículo 17 propuesto. Solo una vez que se haya despejado cuáles son las candidaturas aceptadas se procede a efectuar el cálculo de la cuota.

Sometida a votación la indicación fue aprobada por la unanimidad de los diputados presentes. Votaron por la afirmativa las señoras Sabat, doña Marcela y Turres, doña Marisol y los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Coloma, don Juan Antonio; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Soto, don Leonardo; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

Posteriormente, la Comisión acordó, por la unanimidad de las diputadas y diputados presentes, las siguientes enmiendas a la indicación ya aprobada:

1.- Para incorporar en el encabezado del artículo, a continuación de la expresión “plazo para” la siguiente: “efectuar la”.

2.- Para sustituir en el mismo encabezado del artículo la expresión “por carta certificada a los partidos” por la siguiente oración: “al correo electrónico que los partidos políticos y candidatos independientes deberán informar al momento de la declaración, la”.

3.- Para reemplazar en el inciso segundo la expresión “tres días” por la siguiente: “cuatro días hábiles”, y

4.- Para reemplazar en el inciso segundo la expresión “de la notificación de la resolución” por la siguiente: “del despacho del correo electrónico que notifica la resolución”.

Votaron por la afirmativa la señora Molina, doña Andrea y los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Coloma, don Juan Antonio; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Monckeberg, don Nicolás; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Soto, don Leonardo; Squella, don Arturo y Van Rysselberghe, don Enrique.

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Artículo 1°, N°3 (ha pasado a ser N°5)

S.E. la Presidenta de la República formuló indicación para reemplazar el N°3 (ha pasado a ser N°5), por el siguiente:

“3) Sustitúyese el artículo 18 por el siguiente:

“Artículo 18.- Los partidos políticos y los candidatos independientes podrán, dentro de los cinco días siguientes a la publicación de la resolución a la que se refiere el inciso primero del artículo anterior, reclamar ante el Tribunal Calificador de Elecciones por los rechazos de declaraciones fundadas en el incumplimiento de los requisitos establecidos en la letra a) del artículo 17. Este Tribunal fallará en el término de diez días contando desde la interposición del reclamo y su resolución se notificará al Director del Servicio Electoral y a los interesados por carta certificada.

El plazo para interponer la reclamación ante el Tribunal Calificador de Elecciones cuando se funde en incumplimiento de los requisitos de la letra b) del artículo 17, se contará, respecto de los partidos políticos que corrijan ante el Servicio Electoral la proporción de sexos de las declaraciones de candidaturas a Diputado o Senador, desde el día de la publicación de la resolución que dicta el Servicio Electoral en conformidad a lo dispuesto en el inciso final del artículo 17.”.”.

El diputado señor Rincón recordó que en la pasada sesión el diputado Chahin sostuvo que la nueva propuesta del Ejecutivo no resuelve aquella situación en que el Servicio Electoral acepta una declaración de candidaturas de un partido político y otra colectividad o un candidato independiente la impugna, porque entiende que no se ha cumplido con la cuota de género.

El diputado señor Chahin hizo presente que la norma solo permite accionar a quienes desean impugnar la resolución del Servicio Electoral que rechaza la declaración de candidaturas. Sin embargo, no existe la posibilidad de impugnar la resolución de dicho Servicio que acepta la candidatura, cuando se estime por otro partido, que no se ha cumplido con la cuota.

El asesor legislativo del Ministerio del Interior, señor Rodrigo González, expresó que lo expuesto por el diputado Chahin es una consecuencia de la decisión adoptada por la Comisión, en orden a que la resolución del Servicio Electoral que acepta o rechaza candidaturas sea notificada por correo electrónico a cada uno de los partidos y no a través de una publicación en el Diario Oficial, como contemplaba originalmente el proyecto. Si se hubiera mantenido el criterio inicial, todas las colectividades tendrían legitimación activa para reclamar de lo resuelto por el citado Servicio. Sin embargo, se argumentó en la Comisión que tal publicación otorgaba a los demás partidos una ventaja respecto del partido objetado, dado que podrían reprogramar sus candidaturas de una forma más conveniente a sus intereses. Como se adoptó la decisión de notificar de la señalada resolución a través de un correo electrónico, solo el partido afectado está en condiciones ya sea, de corregir el contenido de la lista hasta cumplir con la cuota del cuarenta por ciento, o bien, de impugnar la resolución.

Sometida a votación la indicación fue aprobada por la unanimidad de los diputados presentes. Votaron por la afirmativa la señora Sabat, doña Marcela y los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Coloma, don Juan Antonio; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Soto, don Leonardo; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

Posteriormente, la Comisión, por la unanimidad de las diputadas y diputados presentes acordó reemplazar, en el inciso primero del artículo 18, aprobado en la indicación anteriormente mencionada, la frase “cinco días siguientes a la publicación de” por la frase “siete días hábiles siguientes al despacho del correo electrónico que notifique”.

Votaron por la afirmativa la señora Molina, doña Andrea y los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Coloma, don Juan Antonio; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Monckeberg, don Nicolás; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Soto, don Leonardo; Squella, don Arturo y Van Rysselberghe, don Enrique.

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Los señores Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo formularon indicación para intercalar el siguiente N°6, nuevo:

“6) Sustitúyese el inciso cuarto del artículo 24, por el siguiente:

“Los partidos, dentro de cada lista, pondrán los nombres de los candidatos ordenando a sus integrantes con alternancia entre los candidatos hombres y las candidatas mujeres, asignándoles un número correlativo desde el uno hasta la cantidad total de candidatos declarados para la misma circunscripción senatorial o distrito electoral, comenzando la numeración con los candidatos a Senadores y siguiendo con los candidatos a Diputados.”.”.

Sometida a votación la indicación se aprobó por 7 votos a favor, 2 en contra y 2 abstenciones. Votaron por la afirmativa los señores Andrade, don Osvaldo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Votaron por la negativa los señores Coloma, don Juan Antonio y Squella, don Arturo. Se abstuvieron los señores Ceroni, don Guillermo y Trisotti, don Renzo.

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Los señores Andrade, don Osvaldo y Soto, don Leonardo, formularon indicación para intercalar el siguiente N°7, nuevo:

“7) Intercálase en el inciso final del artículo 24, entre las expresiones “candidato” y “habrá” la frase “y del nombre de la lista respectiva”.

El diputado señor Soto explicó que la indicación tiene por objeto introducir la votación por la lista, de manera alternativa a la votación por el candidato.

Durante la discusión general de esta iniciativa numerosos cientistas políticos invitados a la Comisión sugirieron permitir la votación por la lista, de manera de compensar la personalización del voto que se irá produciendo con el sistema proporcional.

Hizo presente que los pactos tienen interés de diferenciarse unos de otros, de forma de contar con un sello propio que los distinga. Estimó que ésta puede constituirse en una herramienta eficaz para fomentar la discusión de ideas y programas, y no solo las diferencias puntuales que existan entre cada candidato.

Añadió que con esta indicación también se incentiva la formación de pactos electorales.

El diputado señor Auth sostuvo que esta propuesta se aleja de la tradición chilena, dado que siempre se ha votado por una persona dentro de una lista.

Indicó que compartía el objetivo de terminar con esta costumbre, permitiendo que se vote por la lista. Destacó que esta forma de sufragar existe en muchos países. En Suecia más de la mitad de los electores vota por la lista.

Hizo presente que una consecuencia de esta modificación es que adquiere mayor gravitación la discusión programática frente al carisma individual de cada candidato. Asimismo, el pacto adquiere mayor importancia frente a la persona del candidato y del partido.

El diputado señor Chahin apoyó la idea de fortalecer la discusión programática. Destacó que en elecciones de organizaciones estudiantiles del país también se permite la opción de votar por la lista.

Con todo, advirtió que se acaba de aprobar la idea de incorporar la fotografía del candidato en el voto. Esta propuesta, a su juicio, apunta en el sentido contrario. En la práctica esta innovación puede generar confusión en el electorado, dado que se podrá votar por la lista en las elecciones parlamentarias y no en las municipales ni en la de consejeros regionales. Manifestó que debiera permitirse en todas las elecciones que se realizan en el país.

El diputado señor Squella hizo presente que hubiera sido deseable contar con más tiempo para estudiar esta propuesta.

Recordó que en las elecciones de las organizaciones estudiantiles de la Universidad Católica también se permitía votar por la lista. Destacó que esta forma de sufragar facilitaba la votación de aquel elector más desinteresado en la política. Con ello se termina por alejar al ciudadano de lo que sucede en el Congreso Nacional. Hizo presente que los compromisos que se adquieren durante las campañas son personales y no son asumidos por las listas.

El diputado señor Andrade afirmó que cuando se efectúa este tipo de propuestas muchos suelen decir que valoran la intención de los autores, pero al mismo advierten que puede ser muy radical o que altera las tradiciones del país. Los argumentos que se esgrimen provienen desde el temor. En este caso en particular, existe temor de otorgar al ciudadano la libertad de optar por votar por el candidato o por la lista.

Se le está otorgando a los electores mayores espacios de libertad a la hora de sufragar y quienes la invocan con frecuencia para defender sus posturas hoy se oponen a esta propuesta.

Expresó que esta innovación también constituye un equilibrio frente a lo recientemente resuelto por esta Comisión, en orden a incorporar en el voto una fotografía del candidato.

Manifestó que tanto en la Nueva Mayoría como en la Alianza por Chile cuentan con electores que votan por uno u otro pacto, con independencia de los partidos que los integran.

El diputado señor Nicolás Monckeberg señaló que cuando al elector se le permite votar por un pacto político integrado por partidos que tienen profundas diferencias, en vez de ampliar las libertades se la están restringiendo.

El elector no podrá optar por los candidatos de un partido determinado, o bien, por el propio partido político. La única opción es votar por el pacto o por el candidato.

El diputado señor Gutiérrez destacó que el actual sistema electoral fomenta la competencia al interior de la lista. Con esta propuesta se fomenta la cooperación entre los candidatos que la integran. Asimismo, constituye un incentivo para que las coaliciones marquen las diferencias que las separan de la otra, porque hoy suele ocurrir que las campañas de los candidatos tienden a mimetizarse.

El diputado señor Coloma valoró que exista una preocupación por resaltar el papel de los partidos políticos, dado que se han aprobado modificaciones que apuntan en el sentido contrario.

Añadió que esta indicación valora menos el rol de las personas en política. Asimismo, lamentó que una propuesta de tal relevancia se haya presentado a última hora, sin otorgar el tiempo suficiente para estudiarla con mayor detención.

El diputado señor Chahin preguntó si esta indicación exige efectuar alguna modificación a la fórmula de calcular los escaños que corresponden a cada pacto o partido.

El diputado señor Auth manifestó que ello no es necesario. Con todo, advirtió que a la hora de calcular el reembolso que corresponde a cada candidato, es necesario establecer que aquel reembolso que corresponde a la lista será prorrateado entre los candidatos que la integran.

El diputado señor Soto expresó que si bien esta modificación se efectúa a las normas que regulan el sistema electoral, ocasionará efectos en el régimen político, los que, sin duda, serán positivos. Se fortalecerá la libertad del elector.

Compartió lo expuesto por el diputado Monckeberg, en orden a que lo ideal sería que el elector pudiera optar por votar por el candidato, por el partido, por el subpacto o por el pacto.

Asimismo, concordó en que esta propuesta en el futuro debiera extenderse a las elecciones municipales y de consejeros regionales. Con todo, advirtió que el Ejecutivo, en el caso de la ley de cuotas, ha optado por implementarla gradualmente, haciendo efectiva su aplicación solo para las elecciones parlamentarias. Similar criterio se está utilizando ahora.

El diputado señor Nicolás Monckeberg sostuvo que antes de votar esta indicación debiera resolverse si habrá o no subpactos. Aprobar esta indicación sin antes resolver lo expuesto puede significar que se elijan candidatos con una muy escasa votación, que solo saldrán electos por la votación obtenida por la lista.

En los países donde se vota por lista se produce un distanciamiento enorme entre el parlamentario y la ciudadanía, porque el primero estará más preocupado de responder a la directiva del partido político que lo puso en la lista, antes que a sus propios electores.

El diputado señor Ceroni expresó que lo relevante es que las personas voten por ideas y programas. Consideró que esta indicación constituye un aporte en el sentido indicado. Añadió que debiera buscarse una fórmula para permitir que en la publicidad de los candidatos se dé a conocer las propuestas de la lista que integran.

Indicó que se deberán efectuar campañas de información a la ciudadanía para dar a conocer esta innovación. Además destacó que esta indicación dará la opción a los electores de votar por el pacto que los representa, pese a que no le satisface ninguno de los candidatos que integran la lista respectiva.

El diputado señor Andrade hizo presente que la posibilidad que salgan electos parlamentarios con baja votación es la misma permitiendo el voto por la lista o sin esta opción.

El diputado señor Auth explicó que resulta difícil de conceptualizar esta nueva posibilidad de votar por la lista como una restricción a la libertad, porque en la práctica lo que se está haciendo es otorgar al elector una nueva alternativa a la hora de resolver como ejerce su sufragio. Como señalaba el diputado Ceroni, ahora la persona, pese a que no le agrada candidato alguno, podrá igualmente votar por el pacto que la representa. Ahora bien, compartió la idea de extender esta facultad y permitir votar por el partido o por el subpacto.

Hizo presente que existen dos extremos en esta materia: Por un lado, aquellos países donde la lista es cerrada, por tanto, el orden en que se eligen los parlamentarios lo determina el partido respectivo y por otro, el sistema chileno, donde los candidatos hacen esfuerzos para que el partido no aparezca en la publicidad y solo se resaltan los atributos personales del candidato. Esta indicación constituye un aporte, dado que constituye un pequeño movimiento desde el individualismo hacia lo colectivo.

Sometida a votación la indicación fue aprobada por ocho votos a favor y cinco en contra, refundiéndose en un solo numeral con la indicación anterior, por contener modificaciones al mismo artículo 24.

Votaron a favor los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Votaron en contra la señora Molina, doña Andrea y los señores Coloma, don Juan Antonio; Monckeberg, don Nicolás; Squella, don Arturo y Van Rysselberghe, don Enrique.

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Los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Insunza, don Jorge; Núñez, don Daniel; Rincón, don Ricardo; Soto, don Leonardo y Squella, don Arturo formularon indicación para intercalar el siguiente N°7, nuevo:

“7) Para intercalar en el inciso final del artículo 24, entre las expresiones “habrá” y “una raya horizontal” la siguiente oración: “la fotografía del candidato, si la hubiere acompañado en su declaración, en el tamaño y colores de impresión que determine el Servicio Electoral; y”.”.

Sometida a votación la indicación fue aprobada por 12 votos a favor y una abstención Votaron a favor la señora Molina, doña Andrea y los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Monckeberg, don Nicolás; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Soto, don Leonardo Squella, don Arturo y Van Rysselberghe, don Enrique. Se abstuvo el señor Coloma, don Juan Antonio.

En virtud de la aprobación de las dos últimas indicaciones al inciso final del artículo 24, cuyo contenido es diverso, la Secretaría de vuestra Comisión, en ejercicio de sus atribuciones, las refundió de la siguiente forma:

“Agrégase al artículo primero el siguiente numeral, nuevo:

…) Sustitúyese el inciso final del artículo 24 por el siguiente:

“Al lado izquierdo del número de cada candidato y del nombre de la lista respectiva, habrá una raya horizontal a fin de que el elector pueda marcar su preferencia completando una cruz con una raya vertical. Asimismo, también habrá al lado izquierdo del número de cada candidato una fotografía de éste, si la hubiere acompañado en su declaración, en el tamaño y colores de impresión que determine el Servicio Electoral.”.”.

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Los señores Andrade, don Osvaldo y Soto, don Leonardo, formularon indicación para intercalar el siguiente N°7, nuevo:

“7) Intercálase en el inciso primero del artículo 65, entre las expresiones “lado izquierdo” y “del número” la siguiente: “de la lista, o al lado izquierdo”.

Sometida a votación la indicación fue aprobada por ocho votos a favor y cinco en contra. Votaron a favor los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Votaron en contra la señora Molina, doña Andrea y los señores Coloma, don Juan Antonio; Monckeberg, don Nicolás; Squella, don Arturo y Van Rysselberghe, don Enrique.

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Los señores Andrade, don Osvaldo y Soto, don Leonardo, formularon indicación para intercalar el siguiente N°8, nuevo:

“8) Intercálase en el numeral 6) del artículo 71, entre la expresión “por” y la frase “cada uno de los candidatos” la siguiente frase: “cada lista y por”.

Sometida a votación la indicación fue aprobada por ocho votos a favor y cinco en contra. Votaron a favor los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Votaron en contra la señora Molina, doña Andrea y los señores Coloma, don Juan Antonio; Monckeberg, don Nicolás; Squella, don Arturo y Van Rysselberghe, don Enrique.

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Los señores Andrade, don Osvaldo y Soto, don Leonardo, formularon indicación para intercalar el siguiente N°9, nuevo:

“9) Intercálase en el inciso primero del artículo 87, entre la expresión “candidato” y la preposición “en”, la frase “o por cada lista cuando corresponda”.

Sometida a votación la indicación fue aprobada por ocho votos a favor y cinco en contra. Votaron a favor los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Votaron en contra la señora Molina, doña Andrea y los señores Coloma, don Juan Antonio; Monckeberg, don Nicolás; Squella, don Arturo y Van Rysselberghe, don Enrique.

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Artículo 1°, N°4 (ha pasado a ser N°10)

El Ejecutivo formuló indicación para sustituir el numeral 4) por el siguiente:

“4) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de Parlamentarios, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme a las reglas establecidas en el procedimiento que a continuación se detalla:

1.- El Tribunal Calificador de Elecciones determinará las preferencias emitidas a favor de cada lista y de cada uno de los candidatos que la integran.

2.- Se aplicará el sistema electoral de coeficiente D´Hondt, procediendo de la siguiente manera:

a) Se dividirán los votos de cada lista por uno, dos, tres y así sucesivamente hasta la cantidad de escaños que corresponda elegir.

b) Se ordenarán los números que han resultado de estas divisiones en orden decreciente hasta el numeral correspondiente a la cantidad de escaños que elige cada distrito electoral o circunscripción senatorial.

c) A cada lista o pacto electoral, se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b).

Para los efectos de la aplicación del coeficiente D´Hondt, se considerará como un partido dentro del pacto electoral al conjunto de candidaturas independientes que no sean parte de un pacto.

3.- En el caso de las listas conformadas por un solo partido político, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará electos a los candidatos que hubieren obtenido las más altas mayorías individuales de cada lista de acuerdo a los escaños que le correspondan a cada una de ellas luego de la aplicación descrita precedentemente.

4.- En el caso de los pactos electorales, para determinar cuántos escaños le corresponden a cada uno de ellos se aplicarán las siguientes reglas:

a) Se calculará el total de los votos de cada partido político o, en su caso, de la suma de cada partido político y las candidaturas independientes asociadas a ese partido.

b) Se dividirá por uno, dos, tres y así sucesivamente, hasta la cantidad de escaños asignados al pacto electoral.

c) A cada partido o, en su caso, a cada partido y las candidaturas independientes asociadas a ese partido se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b) de este numeral.

d) El Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos que hubieren obtenido las más altas mayorías individuales de cada partido o, en su caso, de cada partido considerando las candidaturas independientes asociadas a dicho partido, dentro de un pacto electoral, de acuerdo a los cupos obtenidos por cada uno de ellos.”.”.

El diputado señor Insunza preguntó cuál es el sentido del párrafo final del numeral 2) de la indicación, que dispone que para los efectos de la aplicación del coeficiente D´Hondt, se considerará como un partido dentro del pacto electoral al conjunto de candidaturas independientes que no sean parte de un pacto. Sostuvo que la frase final resulta innecesaria. Ésta en su redacción original si tenía sentido, porque aludía a los independientes que, formando parte de un pacto, no integraban subpacto alguno.

Asimismo, afirmó que la redacción de la letra d) del numeral 4) induce a equívocos.

El diputado señor Chahin compartió la observación formulada por el diputado Insunza.

El diputado señor Coloma señaló que la norma aludida por el diputado Insunza permitiría crear de facto un pacto entre los independientes, sin importar las diversas orientaciones que ellos pudieran tener.

Manifestó que la ley que regula las elecciones municipales exige que los partidos que formen un pacto deben tener un proyecto común.

El diputado señor Insunza aclaró que la norma en discusión alude a los independientes que formen parte de un pacto.

El diputado señor Nicolás Monckeberg afirmó que de la redacción propuesta por el Ejecutivo se desprende que todos los independientes que no formen parte de un pacto, por disposición de la ley se entenderá que forman parte de un pacto, cualquiera sea la sensibilidad política del independiente.

El diputado señor Schilling sostuvo que la confusa redacción de la norma, puede deberse a un interés de favorecer las candidaturas de los independientes. Sin embargo, el resultado al que se llega se presta para confusiones.

Hizo presente que desde siempre se ha criticado al sistema binominal por permitir que sean electos parlamentarios por el “arrastre” de votos del compañero de lista.

Para resolver dicho defecto anunció la presentación de una indicación que establezca que “En el caso de elecciones parlamentarias, las candidaturas son individuales, para los efectos de la presente ley resultaran electos por cada lista del partido o del pacto, el número de candidatos que determine la cifra repartidora, los cuales serán determinados en orden decreciente de votación hasta el número de escaños que elige cada lista.” Con tal indicación se garantiza que sean electos las primeras mayorías individuales.

El Ministro del Interior, señor Rodrigo Peñailillo explicó que la norma aludida dice relación con los independientes que forman parte de un pacto, limitándose a establecer que éstos serán considerados como un partido.

El diputado señor Soto hizo presente que la frase final es la que induce a error, al establecer que ”..se considerará como un partido dentro del pacto electoral al conjunto de candidaturas independientes que no sean parte de un pacto.”

Sometida a votación la indicación del Ejecutivo se aprobó por la unanimidad de los diputados presentes. Votaron por la afirmativa la señora Molina, doña Andrea y los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Coloma, don Juan Antonio; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Monckeberg, don Nicolás; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Soto, don Leonardo; Squella, don Arturo y Van Rysselberghe, don Enrique.

Posteriormente, a propuesta del diputado señor Chahin, vuestra Comisión acordó por once votos a favor y dos en contra, suprimir el inciso segundo del literal c) del numeral 2) del artículo 109 bis, contenido en la indicación del Ejecutivo, recién aprobada.

El diputado señor Auth hizo presente que de aprobarse la eliminación de tal párrafo, los candidatos independientes competirán en forma desigual con los candidatos de los partidos políticos. La propuesta del Ejecutivo permite que los independientes del pacto compitan en igualdad de condiciones con los partidos.

El diputado señor Coloma expresó que lo expuesto por el diputado Auth dependerá de las características de cada distrito. Si se trata de un distrito que elige tres diputados, por lo que sólo habrá cuatro candidatos, el subpacto de hecho que se formaría entre los independientes podría terminar perjudicando a los partidos políticos.

Por otra parte, advirtió que acaban de votar por eliminar los subpactos y ahora se estaría aprobando un subpacto de hecho entre los independientes.

La ministra señorita Rincón hizo presente que para salvar las observaciones que se han formulado el Ejecutivo ha presentado una indicación en tal sentido. (Fue rechazada).

El diputado señor Insunza expresó que lo expuesto por el diputado Coloma tiene fundamento, porque en los distritos pequeños efectivamente lo partidos podrían quedar en desventaja frente a un “subpacto de independientes”.

Sugirió que esta norma que permite considerar a los independientes como un partido no se aplique en determinadas hipótesis. En el caso que se trate de listas más amplias, igualmente debe evitarse que los independientes queden en una situación desmedrada frente a los partidos políticos.

El diputado señor Auth compartió lo expuesto por los diputados Insunza y Coloma. Con todo, advirtió que resulta difícil que los partidos accedan a suscribir un pacto que los termine perjudicando.

Son los partidos los que inscriben un Pacto. Por ello, será difícil que éstos permitan que en una circunscripción donde se eligen dos senadores participen de la lista dos independientes frente a un candidato de un partido político.

El diputado señor Soto recalcó que solo excepcionalmente los independientes formarán parte de un Pacto electoral y ello ocurrirá solo en el evento que los partidos que lo conforman así lo acepten.

El diputado señor Chahin hizo presente que la indicación genera un subpacto de pleno derecho entre los independientes que forman parte de un pacto.

Votaron por la afirmativa la señora Molina, doña Andrea y los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Coloma, don Juan Antonio; Gutiérrez, don Hugo; Monckeberg, don Nicolás; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Squella, don Arturo y Van Rysselberghe, don Enrique. Votaron en contra los señores Insunza, don Jorge y Soto, don Leonardo.

Finalmente, vuestra Comisión, a propuesta del Ejecutivo, acordó, por la unanimidad de los diputados presentes, agregar, en este numeral 4), el siguiente inciso final al artículo 109 bis, propuesto en la indicación original:

“En caso de empate entre candidatos de una misma lista o entre candidatos de distintas listas, que a su vez estuviesen empatadas, el Tribunal Calificador de Elecciones procederá, en audiencia pública, a efectuar un sorteo entre ellos, procediendo a proclamar elegido al que salga favorecido.”.

Votaron por la afirmativa la señora Molina, doña Andrea y los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Coloma, don Juan Antonio; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Monckeberg, don Nicolás; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Soto, don Leonardo; Squella, don Arturo y Van Rysselberghe, don Enrique.

Artículo 1°, N°5 (ha pasado a ser N°11)

El diputado señor Squella señaló que ellos son partidarios de mantener el número de 120 diputados, sobre la base de treinta distritos, los que eligen dos, cuatro y seis diputados.

Sometido a votación el numeral del texto original del mensaje, se aprobó por 8 votos a favor y 4 en contra. Votaron por la afirmativa los diputados señores Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Schilling, don Marcelo y Soto, don Leonardo. Votaron por la negativa los señores Coloma, don Juan Antonio; Monckeberg, don Nicolás; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

Artículo 1°, N°6 (ha pasado a ser N°12)

El Ejecutivo formuló indicación para incorporar en el numeral 21° del artículo 179, propuesto en este numeral, entre las expresiones “Quilleco,” y “Santa Bárbara,” la expresión “Alto Biobío,”.

El diputado señor Nicolás Monckeberg señaló que les asiste la convicción sobre la necesidad de sustituir el sistema binominal y avanzar hacia un sistema proporcional.

Destacó que la propuesta de Renovación Nacional diseña un redistritaje más proporcional que el que contiene la del Gobierno y lo logra sólo con 144 diputados. Manifestó que están dispuestos a aumentar el número de parlamentarios de manera prudencial, a fin de alcanzar una mayor igualdad en el voto.

Indicó que la propuesta del Gobierno contiene visos de desproporcionalidad exagerada. Ello ocurre al interior de cada región. Mientras algunos diputados de regiones tienen un peso relativo de treinta mil electores hay otros parlamentarios, también de regiones, que llegan a triplicar esa cifra.

Recalcó que el aumento de diputados propuesto por el Ejecutivo responde más a criterios políticos que técnicos.

El diputado señor Squella sostuvo que su partido está por la alternativa de distribuir el universo de 120 diputados en treinta distritos, que eligen dos, cuatro y hasta seis diputados.

Destacó que se mantiene el número de diputados elegidos por regiones. Además hizo presente que se alcanza una igualdad en el voto muy similar a la que se contiene en la propuesta del Ejecutivo, con menos diputados.

Se acordó someter a votación la indicación del Ejecutivo, junto con el resto del numeral original del mensaje. Se aprobó por 8 votos a favor y 4 en contra. Votaron por la afirmativa los señores Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Schilling, don Marcelo y Soto, don Leonardo. Votaron por la negativa los señores Coloma, don Juan Antonio; Monckeberg, don Nicolás; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

Artículo 1°, N°7 (pasó a ser N°13)

El diputado señor Chahin preguntó cuándo comenzaría a operar la primera reasignación de escaños.

Asimismo, sugirió modificar la fecha en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá para modificar los escaños. Estimó que el lapso que media entre enero del año 2021 y la fecha de la elección es muy breve. Propuso adelantarlo en un año, de modo de evitar que el mismo año de la elección se estén reasignando cupos.

El Ministro del Interior, señor Rodrigo Peñailillo, anunció que el Ejecutivo no tiene inconveniente alguno en adelantar la fecha en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral se reúne para actualizar los escaños.

El diputado señor Coloma hizo presente que la actualización de escaños se efectuará doce años después la asignación.

El asesor legislativo del Ministerio del Interior, señor Rodrigo González explicó que el artículo establece que el primer redistritaje lo llevará a cabo el Servicio Electoral en el mes de enero el año 2021. De allí en adelante la actualización operará cada doce años. El diputado Chahin ha propuesto adelantar la fecha a enero del año 2020, de modo que el nuevo distritaje estará operativo en la elección del año 2021.

El diputado señor Squella destacó que se ha elaborado una simulación de lo que ocurriría si la reasignación de escaños se efectúa considerando los electores de cada distrito y las diferencias que se generan si tal reasignación se lleva a cabo considerando la población de cada distrito, en base a los datos oficiales proporcionados por el último censo oficial de población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas.

Hizo presente que se debiera consignar el mecanismo expreso que se considerará a la hora de distribuir proporcionalmente los escaños. Si bien al parecer todos entienden que se está aludiendo al coeficiente D’Hondt, estimó necesario explicitarlo.

Destacó que, por naturaleza, la reasignación de los escaños debiera realizarse en base a los electores y no considerando la población del distrito. Si se utiliza este último criterio, desechando el primero, la cantidad de parlamentarios que corresponderá a la Región Metropolitana será aún mayor, dado que le corresponderían siete nuevos diputados y si se consideran solo los electores tal aumento de parlamentarios en la Región Metropolitana llegaría solo a cinco.

Por otra parte, consideró preferible otorgar al Servicio Electoral la facultad de reasignar los 155 escaños, fijando un mínimo y un máximo de diputados por distrito.

Por último, advirtió que si se persevera en utilizar el criterio de los habitantes por sobre los electores, la desigualdad del voto en el país aumentará aún más. Es así como se llegaría a un índice de 5,05 de desigualdad. En cambio, si se utiliza el factor de los electores tal índice llegaría sólo a 3,74.

El señor Peñailillo recalcó que la regla de D’Hondt no guarda relación con la reasignación de los escaños, sino que se vincula a la atribución definitiva del escaño, una vez que se ha efectuado la elección.

El diputado señor Squella explicó que la letra b) del artículo 179 bis dispone que “Los restantes 71 diputados se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos”. Al respecto indicó que el Servicio Electoral debe saber a qué tipo de proporcionalidad se debe someter.

El diputado señor Soto recordó que diversos invitados a la Comisión hicieron presente la dificultad que existiría en que un ente administrativo, como el Servicio Electoral, termine determinando el número de escaños de cada distrito.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señorita Ximena Rincón expresó que en la última elección de los consejeros regionales se debía determinar cuántos consejeros correspondía elegir en cada circunscripción provincial. Recordó que como no se contaba con el censo oficial, hubo múltiples circunscripciones en las que con los nuevos datos con que se contaba extraoficialmente, se ganaba un consejero, así como había otras que perdían uno.

En virtud de lo expuesto, sugirió revisar el contenido de la legislación que regula la elección de los consejeros regionales.

El señor González hizo presente que en el caso de la elección de los consejeros regionales la ley alude a la proporción entre población y consejeros.

Destacó que para efectos de llevar a cabo la reasignación de escaños, el Servicio Electoral no podrá ejecutar esa tarea en forma arbitraria, sino que deberá someterse a las reglas que se fijan en esta ley.

Hizo presente que el tope de nueve escaños impedirá la conformación de mega distritos.

El diputado señor Squella preguntó si en la ley que regula la elección de consejeros regionales existe una remisión al artículo 109 de la ley de Votaciones Populares y Escrutinios. Manifestó que si ello es efectivo, existiría entonces una alusión expresa a la regla D’Hondt. Añadió que era necesario fijar a que proporcionalidad se está aludiendo, de modo de salvar aquellas situaciones en que se generan decimales.

El diputado señor Coloma reiteró la importancia de la decisión de calcular la reasignación de escaños sobre la base de habitantes o electores. Si se calcula la reasignación en base a los electores la paridad en el voto llega a una cifra equivalente a 3,7. Si el cálculo se efectúa en base a los habitantes se dispara esa cifra a 5,05. Ello significará que la zona de Valdivia pierda un parlamentario en beneficio de la Región Metropolitana.

El diputado señor Insunza aclaró que la discusión de esta norma comprende tres temas diversos: si el cálculo para la reasignación de diputados se hace en base a habitantes o a electores; precisar una fórmula matemática que oriente al Servicio Electoral en el cálculo de la proporcionalidad y desde cuándo se efectuará la reasignación de escaños.

Respecto del primer punto, manifestó que prefería la opción de calcular la reasignación en base a la población del distrito y no de los electores. Si se opta por esta última opción se estará afectando a los sectores más populares o de más bajos ingresos.

Recalcó que la indicación que opta por hacer el recálculo en base a los electores, de materializarse, presentaría un sesgo clasista bien marcado.

Por otra parte, expresó que aludir expresamente al sistema D’Hondt para llevar a cabo la reasignación de escaños no agrega mayor complejidad al proceso.

Por último, compartió la inquietud planteada por el diputado Chahin. Si se llevará a cabo un censo el año 2022 y la próxima elección tiene lugar el año 2025, perfectamente se podrían definir los escaños con mayor anticipación.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, anunció que se revisaría la redacción que alude a la aplicación del criterio de proporcionalidad para redistribuir los escaños.

En segundo lugar, aclaró que el Ejecutivo ya ha adoptado la decisión que el recálculo se efectúe en base a la población y no a los electores. Indicó que la misma opción se adoptó a propósito de la definición del número de consejeros regionales que corresponde a cada provincia.

En tercer lugar, hizo presente que si se realizará un censo el año 2017, éste será útil para la elección inmediatamente posterior.

Con todo, indicó que es necesario que el Servicio Electoral acote con anticipación el número de escaños que se eligen en cada distrito.

Anunció la presentación de una indicación que aclare los puntos que aún se encuentran oscuros.

El diputado señor Squella respecto de los dichos del diputado Insulza manifestó que no se entendía a qué se refería al expresar que la opción de efectuar el recálculo en base a los electores era una decisión de corte “clasista”.

Reiteró que tiene a mano una simulación de lo que ocurriría con la reasignación de escaños utilizando los electores del año 2013 y otra con los datos que arroja el censo del año 2002. Con estos últimos la III y IV región perderían un escaño, la V perdería dos. Por su parte, La Florida y Puente Alto aumentarían su representación.

Hizo presente que no se requiere presentar una indicación para que la reasignación de escaños se haga en base a los electores, dado que el mensaje original presentado por el Ejecutivo utiliza ese parámetro, el que fue sustituido con la indicación en discusión.

El diputado señor Chahin hizo presente que ha presentado una indicación para otorgar más tiempo al Servicio Electoral. Sin embargo, como el censo se realiza cada diez años y la reasignación cada doce años, para enero del año 2032 se llevará a cabo una reasignación el mismo año en que se efectúa el censo.

Sugirió establecer que el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá con un determinado plazo de antelación a la elección, para efectos de llevar a cabo la reasignación de escaños.

El diputado señor Ceroni sostuvo que si la nueva indicación que reemplaza la letra b) aludirá a la población estimada en el censo oficial, también debiera modificarse el literal a), que alude a electores y no a habitantes.

El diputado señor Insunza afirmó que el proyecto de ley reasigna los escaños en base a la población y no en base a los electores.

Solicitó al Ejecutivo que uniforme la redacción del artículo, de modo de despejar las dudas, en cuanto a que la reasignación de diputados se efectuará en base a la población y no a los electores.

Si se opta por este último criterio, recordó que la experiencia del voto voluntario demostró que los electores de los distritos de población acomodada registran mayor participación que los electores de distritos más populares. Por tanto, si la reasignación se efectúa en base a quienes participaron en la última elección, ello llevará a aumentar los escaños de los distritos de los sectores medios y altos.

El diputado señor Andrade sostuvo que los parlamentarios son elegidos para representar personas más que intereses o clases. Por ello, reducir la representación sólo a los electores presenta un sesgo reduccionista. Estimó que el concepto de población es más amplio. Indicó que no aprecia mayor dificultad en que la consecuencia de utilizar el parámetro de la población por sobre los electores sea aumentar los escaños en un distrito en desmedro de otros.

El diputado señor Coloma reiteró que el mensaje original opta por el criterio de electores por sobre el de la población. Es así como el actual literal b) del artículo 179 dispone que “b) Los restantes 71 diputados se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración al número de electores de cada uno de ellos, en base a la última información del Servicio Electoral.”

El hecho que hayan votado más personas en los distritos de clase media alta no guarda relación alguna con el tema en discusión, porque el concepto “electores” alude a las personas con derecho a voto y no a las que efectivamente sufragaron.

El diputado señor Squella recalcó que el mismo Gobierno al principio optó por el criterio de los electores, el que a través de la indicación presentada, fue reemplazado por el de la población.

En refuerzo de su argumento a favor de utilizar a los electores, indicó que el padrón electoral es conocido por todos, lo que no sucede con los datos que emanan del censo.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, indicó que siempre es posible auditar los datos del censo. Aclaró que el censo fija el número de habitantes para efectos de efectuar la reasignación de escaños.

El Ejecutivo formuló indicación para reemplazar, en el inciso primero del artículo 179 bis que agrega este numeral, la frase “cada doce años” por la frase “cada diez años”.

Sometida a votación la indicación se aprobó por 10 votos a favor y una abstención. Votaron por la afirmativa la señora Turres, doña Marisol y los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Soto, don Leonardo; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo. Se abstuvo el señor Coloma, don Juan Antonio.

El Ejecutivo formuló indicación para eliminar la letra a) del artículo 179 bis, pasando la letra b) a ser letra a) y así sucesivamente.

El diputado señor Auth explicó que la fórmula de asignación de los escaños, estableciendo una base igualitaria de tres por distrito, generaba un resultado de mayor desigualdad del voto respecto del punto de partida que proponía este proyecto.

Para resolver este problema se elimina la base igualitaria de distribución de 84 escaños entre los 28 distritos y en reemplazo de ello se establece que los 155 diputados se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos. Sin embargo, se mantendrá un piso mínimo de tres diputados y un techo de nueve diputados por distrito.

Por tanto, en el futuro la reasignación de los distritos se producirá en los distritos de tamaño intermedio, porque los de tamaño grande compensarán a los de tamaño pequeño.

Sostuvo que se producía un retroceso en la igualdad en el voto porque más de la mitad de los escaños se distribuían de manera paritaria y solo 71 escaños se distribuían de manera proporcional.

El diputado señor Squella sostuvo que la indicación resulta adecuada. Sin embargo, expresó que se lograría una mayor proporcionalidad si el piso es más bajo.

Anunció la presentación de una indicación para establecer que ningún distrito podrá tener menos de dos diputados ni más de ocho.

El diputado señor Rincón explicó que al llevar los 155 diputados a distribución se evita que aquellos distritos chicos puedan crecer en forma desproporcionada.

El diputado señor Squella indicó que en las simulaciones acompañadas en la pasada sesión llamaba la atención que los distritos más pequeños terminaban igual eligiendo cuatro diputados.

Con la nueva propuesta se deja de lado la distribución igualitaria que se hacía de los primeros 84 escaños, lo que parece razonable.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, sostuvo que la indicación recoge la discusión realizada en esta Comisión, mejorando sustantivamente la proporcionalidad del voto.

El diputado señor Coloma indicó que al fijar el techo y el piso de número de diputados a elegir por distrito entre 9 y 3, se mantendrá la desproporcionalidad en el voto.

El diputado señor Auth explicó que la distancia entre el distrito más sobre representado y el más sub representado de todas maneras se va a reducir. No se igualará completamente, porque se ha tomado la opción de mantener una representación importante en aquellas zonas geográficas más alejadas.

Sometida a votación la indicación se aprobó por la unanimidad de los diputados presentes. Votaron por la afirmativa la señora Turres, doña Marisol y los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Coloma, don Juan Antonio; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Soto, don Leonardo; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

El Ejecutivo formuló indicación para reemplazar la letra b) del artículo 179 bis, que ha pasado a ser letra a), por la siguiente:

“a) Los 155 Diputados se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial del población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consiste en distribuir a prorrata los escaños entre los distritos electorales, aplicándose el método dispuesto en el artículo 109 bis de la presente ley.”.

El diputado señor Coloma explicó que votará en contra, porque se ha tomado la opción de utilizar como parámetro para la reasignación de escaños los datos que emanan del censo de la población y no los electores, lo que contribuirá a afectar aún más el principio de igualdad en el voto.

Sometida a votación la indicación se aprobó por 8 votos a favor y 4 en contra. Votaron por la afirmativa los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Votaron por la negativa la señora Turres, doña Marisol y los señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

El Ejecutivo formuló indicación para intercalar en la letra c) del artículo 179 bis, que ha pasado a ser letra b), entre las expresiones “podrá elegir” y “más de 9 diputados.” la expresión “menos de 3 diputados, ni”.

Sometida a votación la indicación se aprobó por 8 votos a favor y 4 en contra. Votaron por la afirmativa los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Votaron por la negativa la señora Turres, doña Marisol y los señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

El Ejecutivo formuló indicación para sustituir la letra d) del artículo 179 bis, que ha pasado a ser letra c), por la siguiente:

“c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente en el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al año del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con el año en que se celebran elecciones de Diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente en el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.”.

El diputado señor Auth hizo presente que el censo especial que se realizará el año 2017 será considerado para todos los efectos, como censo oficial.

El diputado señor Squella anunció su abstención, en razón a que prefieren que la reasignación de escaños se efectúe en base a electores y no a la población.

Sometida a votación la indicación se aprobó por 8 votos a favor y 4 abstenciones. Votaron por la afirmativa los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Se abstuvieron la señora Turres, doña Marisol y los señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

Sometido a votación el resto del artículo 179 bis, contenido en este numeral, se aprobó por 8 votos a favor y 4 abstenciones. Votaron por la afirmativa los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Se abstuvieron la señora Turres, doña Marisol y los señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

Artículo 1°, N°8 (pasó a ser N°14)

El diputado señor Squella expresó que la posición de su partido es no aumentar el número de senadores, a excepción de dos que se sumarían para representar a la región de Arica y Parinacota.

Afirmó que la única diferencia respecto de la situación vigente hoy dice relación con aquellas regiones donde hay dos circunscripciones, pasan a ser una sola, que elige cuatro senadores.

El diputado señor Nicolás Monckeberg señaló que tiempo atrás suscribieron un acuerdo con la Democracia Cristiana, el que también fue suscrito, entre otros, por el Senador Rossi. Por ello, la propuesta de Renovación Nacional recoge casi en su totalidad el contenido de dicho acuerdo.

Expresó que resulta difícil de entender la que efectúa el Gobierno. Hizo presente que en regiones donde los criterios de proporcionalidad e igualdad en el voto aconsejan que se elijan seis senadores, el Ejecutivo propone que sólo cuenten con cinco representantes. Por otra parte, hay regiones donde se aumenta a tres el número de senadores, sin que exista justificación para ello. Destacó que el contenido del proyecto del Gobierno refleja una obsesión por contar con circunscripciones que elijan un número impar de senadores, lo que sólo se explica por razones políticas.

Sometido a votación el numeral original del mensaje, se aprobó por 8 votos a favor y 4 en contra. Votaron por la afirmativa los señores Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Schilling, don Marcelo y Soto, don Leonardo. Votaron por la negativa los señores Coloma, don Juan Antonio; Monckeberg, don Nicolás; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

Artículo 1°, N°9 (ha pasado a ser N°15)

Sometido a votación se aprobó por la unanimidad de los diputados presentes. Votaron por la afirmativa los señores Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Coloma, don Juan Antonio; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Monckeberg, don Nicolás; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Schilling, don Marcelo; Soto, don Leonardo; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

Artículo 1°, N°10 (ha pasado a ser N°16)

Sometido a votación se aprobó por 8 votos a favor y una abstención. Votaron por la afirmativa los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Monckeberg, don Nicolás; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Soto, don Leonardo y Squella, don Arturo. Se abstuvo el señor Coloma, don Juan Antonio.

Artículo 1°, N°11 (ha pasado a ser N°17)

Sometido a votación se aprobó por 11 votos a favor y una abstención. Votaron por la afirmativa los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Coloma, don Juan Antonio; Gutiérrez, don Hugo; Monckeberg, don Nicolás; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Soto, don Leonardo y Squella, don Arturo. Votó por la negativa el señor Urrutia, don Ignacio.

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S.E. la Presidenta de la República formuló indicación para agregar al artículo 1° el siguiente N°18, nuevo:

“18) Agrégase el siguiente artículo 25 transitorio, nuevo:

“Art. 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral, a que se refiere el artículo 179 bis, se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.”.”.

El diputado señor Chahin recordó que en pasadas sesiones se señaló que la primera reasignación de escaños se haría con posterioridad al censo que se llevará a cabo el año 2017.

El diputado señor Rincón aclaró que el censo abreviado que se hará el año 2017 es de carácter excepcional.

El diputado señor Chahin indicó que el censo será abreviado respecto del número de preguntas que se efectuarán. Para efectos de reasignar los escaños si será útil.

El diputado señor Rincón manifestó que también fue materia de discusión el hecho que el censo no sea llevado a cabo durante un año electoral.

El diputado señor Chahin reiteró que si la facultad que se otorga al Consejo Directivo del Servicio Electoral se utiliza a partir del censo del año 2017, no significa que la reasignación de escaños rija para las elecciones de ese mismo año.

Con la norma propuesta por el Ejecutivo la reasignación se hará incluso después de las elecciones del año 2021.

El diputado señor Saffirio preguntó si el censo que se llevará a cabo el año 2017 tiene el carácter de censo oficial.

La ministra Secretaria General de la Presidencia, señorita Ximena Rincón, hizo presente que el próximo censo se realizará el año 2022. Informó que el censo que se llevará a cabo el año 2017 si tiene carácter oficial.

El diputado señor Auth recordó que en la sesión en que se discutió este tema se señaló que la realización del censo abreviado tiene por objeto reestructurar las políticas públicas que se ejecutan en el país a partir de los datos que emanen del citado censo. Por tanto, si las cifras que emanan de él constituirán la piedra angular de, entre otras materias, los beneficios que otorga el Estado, no parece lógico que esos mismos datos no sirvan para reasignar los escaños que corresponden a cada distrito.

Dilatar hasta el año 2024 la reasignación de escaños apunta en el sentido contrario a lo solicitado por esta Comisión, en orden a procurar que el principio de igualdad en el voto rija a la brevedad en el país.

Reiteró que es necesario que la primera reasignación ocurra cuanto antes. Para que ésta tenga lugar en las elecciones del año 2021 resulta necesario estarse a los datos que emanen del censo del año 2017.

La ministra Secretaria General de la Presidencia, señorita Ximena Rincón, aseveró que la modificación que se está discutiendo constituye en si una reasignación. La indicación permite que las futuras reasignaciones se efectúen cada diez años.

El diputado señor Squella recordó que él era partidario que la reasignación se efectúe en base al padrón electoral del momento.

Hizo presente que la indicación permite que las reasignaciones se efectúen cada diez años.

El diputado señor Rincón preguntó si existe alguna norma jurídica que otorgue al censo del año 2017 el carácter de oficial.

La ministra Secretaria General de la Presidencia, señorita Ximena Rincón, informó que a la fecha no existe acto administrativo alguno que permita afirmar que tal censo tendrá el carácter de censo oficial. Solo existe un anuncio efectuado por la Presidenta de la República. La norma que continúa vigente es aquella que dispone que los censos se realizan cada diez años, siendo el próximo el que se llevará a cabo el año 2022.

El diputado señor Chahin afirmó que existen actos administrativos que crean la Comisión Censal del año 2017, la que es presidida por el Ministro de Economía.

Reiteró que el censo del año 2017 sólo apuntará a medir las variables demográficas de la población. Por ello, solicitó que se adelante el ejercicio de las facultades que se otorgan al Consejo Directivo del Servicio Electoral.

El diputado señor Saffirio recalcó que hasta ahora, más allá de declaraciones de algunas autoridades, no existe censo oficial para el año 2017.

Sometida a votación la indicación se aprobó por 11 votos a favor, uno en contra y una abstención. Votaron por la afirmativa la señora Sabat, doña Marcela y los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Coloma, don Juan Antonio; Gutiérrez, don Hugo; Lavín, don Joaquín; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Soto, don Leonardo y Squella, don Arturo. Votó por la negativa el señor Chahin, don Fuad. Se abstuvo el señor Urrutia, don Ignacio.

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S.E. la Presidenta de la República formuló indicación para intercalar el siguiente artículo 2°:

“Artículo 2°.- Modifícase la ley N° 19.884 sobre Transparencia, Límite y Control de Gasto Electoral, de la manera que a continuación se señala:

a) Sustitúyese en el inciso segundo, sexta línea, la expresión “dos centésimos de Unidad de Fomento”, por la expresión “una centésima de Unidad de Fomento”.

b) Sustitúyese en el inciso tercero, tercera línea, la expresión “tres centésimos de unidad de fomento” por la expresión “uno coma cinco centésimos de Unidad de Fomento.”.

El diputado señor Coloma hizo presente que para otras indicaciones que modifican la ley sobre límite y control del gasto electoral se sostuvo que las modificaciones a dicha ley se tratarían en un mensaje diverso que enviaría la Presidenta de la República en un futuro cercano. Ahora se está modificando el criterio utilizado anteriormente.

La ministra Secretaria General de la Presidencia, señorita Ximena Rincón, destacó que se ha ampliado el tamaño de los distritos electorales, por lo que indirectamente se está aumentando el límite autorizado de gasto electoral.

El diputado señor Auth recordó que esta indicación se generó a partir de la discusión realizada en el seno de esta Comisión. Hizo presente que el límite al gasto electoral ya había aumentado a raíz del proceso de inscripción automática.

Sometida a votación la indicación se aprobó por 10 votos a favor, uno en contra y 2 abstenciones. Votaron por la afirmativa la señora Sabat, doña Marcela y los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Lavín, don Joaquín; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Votó por la negativa el señor Urrutia, don Ignacio. Se abstuvieron los señores Coloma, don Juan Antonio y Squella, don Arturo.

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Los señores Andrade, don Osvaldo y Soto, don Leonardo, formularon indicación para intercalar el siguiente artículo 3°, nuevo:

“Artículo 3°.- Agrégase en el artículo 14 bis de la ley N°19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, el siguiente inciso final:

“Tratándose de votaciones a listas a las que se refiere el inciso primero del artículo 65 de la ley N°18.700, el derecho al reembolso se hará a los candidatos que las integren, a prorrata de sus votaciones individuales.”.”.

Sometida a votación la indicación fue aprobada por ocho votos a favor y cinco en contra. Votaron a favor los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Votaron en contra la señora Molina, doña Andrea y los señores Coloma, don Juan Antonio; Monckeberg, don Nicolás; Squella, don Arturo y Van Rysselberghe, don Enrique.

Artículo 2°

El Ejecutivo formuló indicación para reemplazarlo por el siguiente:

“Artículo 2°.- Agrégase en la ley N°19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, el siguiente artículo segundo transitorio, nuevo, pasando a ser el actual artículo transitorio, único, a ser “Artículo primero transitorio”:

“Artículo segundo transitorio.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y sólo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a Diputadas y a Senadoras que hubieren sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los Partidos Políticos a que ellas pertenecieren tendrán derecho a un monto de 500 UF, por cada una de ellas.”.”.

La ministra Secretaria General de la Presidencia, señorita Ximena Rincón, señaló que el Ejecutivo, después de analizar el debate desarrollado en esta Comisión sobre la materia, optó por retirar la indicación presentada e impulsar nuevamente el texto original, a fin que los partidos cuenten con un incentivo real para presentar candidatas donde existan condiciones reales de elegibilidad.

El diputado señor Saffirio hizo presente que le llamaba poderosamente la atención que después de todos los argumentos vertidos en favor de otorgar incentivos económicos directamente a las candidatas, el Ejecutivo haya resuelto reimpulsar la iniciativa original, en orden a conceder a los partidos un beneficio económico por candidata electa.

Recordó que la discusión en la Comisión se centró en otorgar el incentivo económico a las candidatas en general o solo a las candidatas electas. Siempre se puso en tela de juicio el aporte a los partidos, porque éstos reciben recursos a partir de la votación que obtienen a nivel nacional.

Manifestó que entendía que la filosofía que inspiraba esta modificación apuntaba a contar con mayor número de candidatas en lugares donde existan posibilidades que sean realmente electas. Sin embargo, expresó que no entendía la razón por la cual se retoma esta idea, pese a que había sido duramente cuestionada en la Comisión, más allá de la presentación en el futuro de eventuales indicaciones que tengan por objeto favorecer directamente a las candidatas al Parlamento.

Añadió que si el Ejecutivo persiste en esta indicación, bajo el pretexto de la presentación futura de indicaciones que favorezcan a las candidatas, él solicitará que se suspenda la votación de esta disposición hasta conocer el texto definitivo de las mencionadas indicaciones.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, expresó que el Ejecutivo pretende que existan candidaturas de mujeres en distritos donde haya reales posibilidades que resulten electas. Por ello se otorga un incentivo a los partidos por candidata electa.

Anunció que el Gobierno se encuentra estudiando una indicación que contemple un mayor reembolso por votos obtenidos por parte de las candidatas mujeres. Por ello, se está analizando conceder un reembolso de alrededor de mil pesos por voto obtenido, a diferencia de lo que ocurre hoy, en que el reembolso alcanza una cifra cercana a los setecientos pesos.

El diputado señor Squella sostuvo que una de las críticas que se formula al sistema binominal dice relación con que los resultados son fácilmente predecibles. Por ello, se supone que en el nuevo sistema habrá un mayor grado de incertidumbre. En este sentido, hizo presente que no habrá forma de determinar qué distritos son más favorables que otros, por lo que los partidos no podrán de antemano saber cuáles son los distritos donde la mujer tiene más posibilidades.

En virtud de lo expuesto, el incentivo que se propone aparece solo como un premio a los partidos políticos, más aún si se considera que en las listas las mujeres deben representar al menos el cuarenta por ciento de las candidaturas.

Manifestó que el incentivo debiera favorecer una mayor visibilidad de las mujeres en campaña, para lo cual lo aconsejable es beneficiar directamente a la mujer candidata, sea o no electa.

El diputado señor Soto hizo presente que esta indicación los ha sorprendido, porque esperaban que tanto el incentivo a los partidos por candidata electa, como el beneficio que se otorgará a todas las candidatas, sean tratados de manera conjunta.

La única forma de favorecer la participación de la mujer es aumentar el financiamiento electoral para ellas, mejorando el reembolso a las candidatas, sean o no electas.

El diputado señor Ceroni señaló que es necesario reembolsar en mayor medida a las mujeres candidatas, hayan sido electas o no.

Respecto de la propuesta en discusión, la consideró adecuada, porque llevará a los partidos a tener una especial preocupación al elegir los distritos donde postularán las mujeres.

La diputada señorita Sabat, doña Marcela, sostuvo que el espíritu de esta indicación se encuentra íntimamente ligado a la ley de cuotas. Esta última ley sin el incentivo a los partidos no producirá resultado alguno. Para que efectivamente aumente la participación de las mujeres en el Congreso Nacional el incentivo debe otorgarse por candidatas electas.

Consideró necesario que el beneficio se conceda al colectivo que respalda a las candidatas. Si solo se otorga a las candidatas será insuficiente. Recordó que ella presentó una indicación para que el financiamiento que se da a los partidos se destine únicamente a implementar programas, seminarios o cualquier otra actividad de capacitación que fomente la participación social y política de la mujer.

El diputado señor Browne sostuvo que para que realmente se alcance una mayor participación de la mujer en política se requiere que se le otorguen cupos en la lista, que éstos se concedan en distritos donde tengan reales posibilidades de ser electas y que existan mujeres que tengan interés en participar.

Agregó que la existencia de cupos para las mujeres candidatas se resuelve con la cuota mínima del cuarenta por ciento de mujeres candidatas en las listas de cada partido.

Por su parte, el incentivo económico directo en beneficio de toda candidata favorecerá sin duda la participación de la mujer, ya que éste hará más viable las campañas de las mujeres, al contar con un mayor financiamiento.

Por último, hizo presente que la cuota mínima de candidatas mujeres y el mayor financiamiento de sus campañas resulta insuficiente. Es necesario que las candidatas sean acompañadas en su esfuerzo por los partidos que las respaldan. Por ello, el incentivo económico que se concede al partido ayudará a que la estructura partidaria se ponga al servicio de las candidatas.

Compartió la idea de destinar parte de esos recursos a actividades de capacitación de las mujeres, pero no el total de los mismos, de modo de permitir que los partidos puedan apostar a la elección de una candidata, favoreciéndola con recursos, con cargo a un eventual reembolso en el evento que resulte triunfadora.

El diputado señor Andrade recalcó que el objetivo principal de la iniciativa en discusión apunta a reemplazar un sistema electoral binominal por uno proporcional y a lograr mayores grados de igualdad en el voto de los chilenos.

Indicó que resulta efectivo que existe una situación de injusticia estructural en desmedro de la mujer. A propósito del imperativo ético que significa que el voto de los chilenos valga por igual se ha procurado hacerse cargo de la mencionada situación, promoviendo medidas a favor de la participación de la mujer.

Hizo presente que el Gobierno ha planteado que tales medidas a favor de la mujer serán transitorias, hasta que el tiempo disipe la situación vigente en perjuicio de la mujer. Por ello, si el objetivo es superar tal situación lo correcto es otorgar el beneficio a todas las mujeres candidatas, sin excepción.

Añadió que en virtud de lo expuesto celebra el anuncio efectuado por la Ministra Rincón, en orden a que se presentará una indicación para otorgar un reembolso mayor a las mujeres candidatas.

Por otra parte, manifestó que pese a que respaldará la indicación en discusión, no comparte el fundamento de la misma. La experiencia demuestra que en la medida que existan más candidatas mayores serán las parlamentarias electas. Por tanto, el acento debiera ponerse en aumentar el número de candidatas. Para ayudar a alcanzar este último objetivo será de mucha utilidad el aumento del reembolso a las candidatas mujeres.

Recalcó que resulta mucho más relevante para el fin que se persigue el otorgar beneficios a las mujeres candidatas que los incentivos que se propone entregar a los partidos.

Reiteró que este incentivo a los partidos no significará que lo partidos designen a las mujeres en los distritos más favorables. Hizo presente que se encuentra demostrado que los chilenos votan indistintamente por hombres y mujeres. Por ello, sostuvo que el fundamento de la indicación parte de la base de una premisa equivocada.

El diputado señor Coloma compartió el diagnóstico del diputado Andrade. Solicitó que antes de votar se conozca el contenido de la indicación anunciada y de su correspondiente informe financiero, de modo de conocer los recursos involucrados. No corresponde tratar estos temas en forma separada.

Destacó que prefiere otorgar directamente el beneficio a las mujeres candidatas y no a los partidos políticos.

El diputado señor Insunza expresó que el objetivo que persigue ésta y otras medidas es procurar aumentar la participación de la mujer en el Congreso Nacional. Para ello resulta fundamental el contar con la ley de cuotas, que solo lo permite un sistema proporcional.

Señaló que la ley de cuotas resulta insuficiente si no va acompañada de un incentivo como el propuesto.

Afirmó que la experiencia ha demostrado que los reembolsos, en el mejor de los casos, no llegan al veinte por ciento del total de gasto de una campaña parlamentaria.

En este sentido, sostuvo que resulta mucho más relevante la indicación anunciada por la ministra Rincón que el incentivo que se propone otorgar a los partidos, para favorecer la elegibilidad de las candidatas.

Hizo presente que los partidos políticos no contribuyen en forma significativa a las campañas de los candidatos.

Añadió que podría sustituirse este aporte a los partidos por una contribución inicial a las campañas, dado que el reembolso está sujeto a un factor de incertidumbre, por lo difícil que resulta cuantificarlo en forma previa a la elección.

El diputado señor Chahin compartió la necesidad de otorgar un aporte directo a la candidata.

Con todo, estimó que la propuesta del Ejecutivo puede ser útil para el fin que se persigue.

Indicó que la desigualdad estructural a la que se refirió el diputado Andrade, desde el punto de vista económico, también puede apreciarse en otros grupos de la sociedad. A vía de ejemplo, podría sostenerse que los candidatos desafiantes o los jóvenes también padecen de una situación de injusticia estructural, por lo que podría llegarse a otorgar reembolsos diferenciados según al grupo al que se pertenezca.

Sostuvo que los partidos siempre procuran que sus candidatos sean competitivos en todos los distritos. Lo que el incentivo pretende es que el partido político concentre otro tipo de energías o esfuerzos en las campañas de las candidatas.

La ministra Directora del Servicio Nacional de la Mujer, señora Claudia Pascual, expresó que el proyecto de ley tiene como norte reemplazar el sistema binominal por uno más proporcional y avanzar hacia mayores grados de igualdad en el voto de los chilenos, de modo que contar con un sistema electoral que represente adecuadamente a las mayorías y también a las minorías relevantes.

Asimismo, el proyecto también persigue ayudar a corregir la sub representación que tienen las mujeres en el mundo de la política. Ésta se produce no por falta de méritos ni capacidad de las mujeres, sino porque históricamente el espacio público ha sido reservado para los hombres, destinándose las mujeres a las labores domésticas.

Añadió que este proyecto busca colaborar en el término de la citada sub representación. Las mujeres que llegan a ser candidatas son pocas. En segundo lugar, no siempre cuentan con los apoyos colectivos, con las redes ni con el financiamiento suficiente para solventar una campaña.

Indicó que en el debate desarrollado en la Comisión se ha planteado que debe procurarse que más mujeres sean candidatas, lo que se logra con el piso mínimo de un cuarenta por ciento de candidatos para cualquiera de los géneros. Asimismo, para procurar asegurar el apoyo del colectivo, el proyecto establece un incentivo para la colectividad por candidata electa. Esta medida constituye un refuerzo a la voluntad del sistema político de aumentar el número de parlamentarias.

Sostuvo que ambas medidas se complementan y apuntan a corregir la sub representación antes aludida.

Recordó que sin la implementación de estas medidas Chile podría tardar hasta cuarenta años en tener una representación equilibrada de hombres y mujeres. Las medidas transitorias que se proponen buscan acelerar este proceso en pos de alcanzar el citado equilibrio entre ambos sexos.

El diputado señor Saffirio reiteró que no corresponde que la Comisión se pronuncie sobre esta indicación mientras no llegue la indicación anunciada por el Gobierno referida al aumento del reembolso para las candidatas mujeres.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, afirmó que esta indicación y la que se anunció para mejorar el reembolso para las candidatas mujeres verán sobre materias distintas.

Esta indicación pretende que los partidos, al cumplir con la cuota mínima de candidatas que fija esta ley, las postulen en distritos donde tengan reales posibilidades de ser elegidas.

Expresó que el Gobierno, recogiendo el debate desarrollado en esta Comisión, se ha comprometido a presentar una indicación que aumente el reembolso de los gastos electorales para las candidatas mujeres.

Sometida a votación la indicación, se aprobó por 8 votos a favor y 4 en contra. Votaron por la afirmativa la señora Sabat, doña Marcela y los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Insunza, don Jorge; Núñez, don Daniel; Rincón, don Ricardo y Soto, don Leonardo. Votaron en contra los señores Coloma, don Juan Antonio; Saffirio, don René; Squella, don Arturo y Urrutia, don Osvaldo.

La señorita Sabat, doña Marcela y los señores Monckeberg, don Cristián y Monckeberg, don Nicolás formularon indicación para agregar al artículo 2° transitorio, aprobado en virtud de la indicación anterior, el siguiente inciso segundo nuevo:

“Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.”.

La diputada señorita Sabat, doña Marcela, expresó que esta indicación pretende que el incentivo que se otorga a los partidos políticos se destine a fomentar la participación de mujeres en política.

Manifestó que hubiera preferido que tal destinación sea obligatoria, con sanciones asociadas al incumplimiento, como contemplaba la indicación original.

Sometida a votación la indicación, se aprobó por la unanimidad de los diputados presentes. Votaron por la afirmativa la señorita Sabat, doña Marcela y los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Coloma, don Juan Antonio; Gutiérrez, don Hugo; Lavín, don Joaquín; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Soto, don Leonardo; Squella, don Arturo y Urrutia, don Ignacio.

S.E. la Presidenta de la República formuló indicación para agregar al artículo 2°, un artículo 3° transitorio del siguiente tenor:

“Artículo tercero transitorio.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025, y 2029, las candidatas a Senadoras y Diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley, de 0,0100 de Unidades de Fomento, por cada voto obtenido por cada candidata a Diputada o Senadora.”.

El diputado señor Auth agradeció que el Ejecutivo haya accedido a la solicitud efectuada por esta Comisión, en orden a adicionar al premio por candidata electa, un incentivo a todas las mujeres candidatas. Cada candidato recibe 0,03 unidades de fomento por cada voto obtenido. De aprobarse esta indicación las candidatas mujeres recibirán como reembolso 0,04 unidades de fomento por cada voto obtenido.

Con este incentivo adicional los partidos políticos debieran contar con mayores posibilidades de hallar mujeres disponibles para ser candidatas y de esa forma, cumplir con la cuota que este mismo proyecto impone.

El diputado señor Urrutia, don Ignacio, señaló que si bien compartía el contenido de la indicación, consideró excesivo que el beneficio se extienda hasta el año 2029.

Sometida a votación la indicación fue aprobada por diez votos a favor y tres abstenciones. Votaron por la afirmativa la señorita Sabat, doña Marcela y los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Soto, don Leonardo y Urrutia, don Ignacio. Se abstuvieron los señores Coloma, don Juan Antonio; Lavín, don Joaquín y Squella, don Arturo.

Todas estas indicaciones, junto a las que introducen modificaciones a los artículos 4° y 14 bis del mismo cuerpo legal, la Secretaría los sistematizo en un solo artículo 2°, de acuerdo a las facultades conferidas por vuestra Comisión.

**************

El Ejecutivo formuló indicación para agregar el siguiente artículo 3°, nuevo, pasando el actual artículo 3° a ser artículo 4°:

“Artículo 4°.- Modifícase la ley N° 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos, de la siguiente manera:

1.- Sustitúyese, en el inciso primero del artículo 6°, la cifra “0,5” por la cifra “0,25”.

2.- Sustitúyese el inciso primero del artículo 7° por el siguiente:

“Artículo 7°.- Cumplidos los requisitos a que se refieren los artículos 5° y 6°, y reunido el número de afiliados a que alude este último artículo en una de las Regiones en que se divide políticamente el país, se solicitará al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos. La solicitud deberá ser firmada por el presidente y por el secretario del partido en formación.”.

3.- Introdúcense al artículo 42 las siguientes modificaciones:

a) Sustitúyese el numeral 2 por el siguiente:

“2°.- Por no alcanzar, en la Región en que está legalmente constituido, el dos coma cinco por ciento (2,5%) de los sufragios válidamente emitidos en la última elección de diputados. En el caso de los partidos que se encuentren inscritos en más de una Región, la disolución procederá cuando no hayan alcanzado el indicado umbral del dos coma cinco por ciento (2,5%) en más de la mitad de dichas Regiones.”.

b) Sustitúyese el inciso final por los siguientes incisos:

“No obstante, si un partido político incurriere en la situación prevista en el número 2° de este artículo, pero eligiere al menos dos parlamentarios, sean Diputados o Senadores, conservará su calidad de tal.

Si incurriere en la situación prevista en el número 4° en una o más Regiones, pero mantuviere el mínimo de ellas exigido por la ley, conservará su calidad de tal, pero no podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2° en aquellas donde su número de afiliados hubiere disminuido en más de un cincuenta por ciento. El Director de Servicio Electoral anotará esta circunstancia al margen de la respectiva inscripción en el Registro de Partidos Políticos.”.”.

Los señores Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Rincón, don Ricardo y Saffirio, don René, formularon indicación para intercalar en el artículo 3°, nuevo, propuesto por la indicación del Ejecutivo, el siguiente numeral 2), pasando el numeral 2 a ser numeral 3 y el numeral 3 a ser numeral 4:

“2.- Agrégase en el inciso segundo del artículo 6°, a continuación del punto aparte (.) que pasa a ser punto seguido (.), la siguiente oración:

“Los notarios no podrán negarse a recibir la declaración a que hace referencia este artículo bajo circunstancia alguna y no podrán cobrar por este servicio.”.

El diputado señor Squella expresó que en el mensaje original no se contemplaban modificaciones a la ley orgánica constitucional de partidos políticos. El propio Ejecutivo ha anunciado que enviará un proyecto de ley que realice modificaciones profundas a dicha ley. Estimó preferible tratar tales modificaciones en una iniciativa diversa.

El diputado señor Auth hizo presente que se están abordando modificaciones al sistema electoral que impactarán en el conjunto del sistema político. La rebaja en los umbrales para formar un partido político apunta precisamente a la necesidad de fortalecerlos. La idea es permitir que se creen y que se mantengan vigentes con mayor facilidad.

Sometido a votación el N°1 propuesto por el Ejecutivo se aprobó por 8 votos a favor y 4 en contra. Votaron por la afirmativa los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Votaron en contra la señora Turres, doña Marisol y los señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

Sometida a votación la indicación de los señores Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Rincón, don Ricardo y Saffirio, don René, se aprobó por 8 votos a favor y 4 abstenciones. Votaron por la afirmativa los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Se abstuvieron la señora Turres, doña Marisol y los señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

El diputado señor Coloma expresó que con esta modificación se facilitará la constitución de partidos políticos en zonas que quizás no requieren de más colectividades. La existencia de una gran cantidad de partidos políticos puede terminar debilitando el propio sistema político.

El diputado señor Auth sostuvo que parece un despropósito que existiendo corrientes políticas relevantes al interior de determinadas regiones, las que muchas veces incluso eligen parlamentarios, deban competir en calidad de independientes, porque para constituirse como un partido político deben estar inscritos en tres regiones contiguas.

Esta propuesta solo viene a legalizar una situación que hoy ocurre en los hechos.

El diputado señor Squella reiteró que las modificaciones a la ley de partidos políticos, por su complejidad, debieran discutirse por cuerda separada.

Sometido a votación el N°2 propuesto por el Ejecutivo (pasó a ser N°3), se aprobó por 8 votos a favor, uno en contra y 3 abstenciones. Votaron por la afirmativa los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Votó en contra el señor Coloma, don Juan Antonio. Se abstuvieron la señora Turres, doña Marisol y los señores Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

Sometida a votación la letra a) del N°3 propuesto por el Ejecutivo (pasó a ser N°4), se aprobó por 8 votos a favor y 4 abstenciones. Votaron por la afirmativa los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Se abstuvieron la señora Turres, doña Marisol y los señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

El diputado señor Coloma recordó que el diputado Andrade durante toda la discusión del proyecto se pronunció a favor de fortalecer los partidos políticos. Con esta modificación se facilita la subsistencia de decenas de partidos políticos, lo que tiende a debilitar el sistema político vigente.

Sometida a votación la letra b) del N°3 propuesto por el Ejecutivo (pasó a ser N°4), se aprobó por 8 votos a favor, uno en contra y 3 abstenciones. Votaron por la afirmativa los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo. Votó en contra el señor Coloma, don Juan Antonio. Se abstuvieron la señora Turres, doña Marisol y los señores Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo.

El señor Chahin, don Fuad formuló indicación para agregar a la indicación del Ejecutivo un nuevo N°3, del siguiente tenor:

3.- Modifícase el artículo 26 en el siguiente sentido:

a) Suprímese en el literal d) la frase “la aprobación de un pacto electoral en elecciones de Parlamentarios o su retiro del mismo, y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal”.

b) Incorpórase el siguiente literal e), pasando los actuales literales e) y f) a ser f) y g) respectivamente:

“e) Aprobar un pacto electoral en las elecciones de parlamentarios o su retiro del mismo y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal;”.

El diputado señor Chahin explicó que la ley de partidos políticos vigente genera importantes trabas para los procesos de ingreso o retiro a los Pactos y para las proclamaciones de los candidatos a la presidencia de la República. Hizo presente que esta facultad debiera radicarse en los Consejos Generales de las colectividades. De esta forma se evitaría un trámite innecesario que se realiza hoy, que supone la concurrencia de un notario en cada una de las regiones, para certificar la voluntad de los militantes, trámite que no pasa de ser una mera formalidad.

El diputado señor Squella sostuvo que el mensaje dice relación con la sustitución de un sistema binominal por uno proporcional .La indicación en discusión apunta a las facultades de los Consejos Generales de los partidos políticos, materia que no guarda relación con las ideas matrices del proyecto de ley en discusión.

El diputado señor Chahin hizo presente que ya se han aprobado indicaciones, tanto del Ejecutivo como de parlamentarios, que modifican la ley de partidos políticos. Destacó que la indicación se refiere a la aprobación de los pactos electorales, materia que está íntimamente ligada al objetivo principal que persigue esta iniciativa.

Sometida a votación la indicación fue aprobada por ocho votos a favor, tres en contra y dos abstenciones. Votaron a favor los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; y Soto, don Leonardo. Votaron en contra la señorita Sabat, doña Marcela y los señores Coloma, don Juan Antonio y Urrutia, don Ignacio. Se abstuvieron los señores Lavín, don Joaquín y Squella, don Arturo.

*************

Artículo 3° (pasó a ser artículo 4°)

Sometido a votación se aprobó por 10 votos a favor y 3 abstenciones. Votaron por la afirmativa

Sometido a votación el artículo fue aprobado por diez votos a favor y tres abstenciones. Votaron a favor la señorita Sabat, doña Marcela y los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Gutiérrez, don Hugo; Rincón, don Ricardo; Saffirio, don René; Soto, don Leonardo y Urrutia, don Ignacio. Se abstuvieron los señores Coloma, don Juan Antonio; Lavín, don Joaquín y Squella, don Arturo.

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III.- DOCUMENTOS SOLICITADOS, PERSONAS ESCUCHADAS POR LA COMISIÓN.

Vuestra Comisión escuchó a las organizaciones y personas que se individualizan en e os acápites correspondientes a la Audiencia Pública y la Discusión General del proyecto.

IV.- ARTÍCULOS QUE DEBEN SER CONOCIDOS POR LA COMISIÓN DE HACIENDA.

De conformidad a lo establecido en el Nº 4 artículo 287 del Reglamento de la Corporación, la Comisión dejó constancia que los números 3 y 4 del artículo 2° y el artículo 4° (artículo 3° del mensaje) del proyecto de ley en informe deben ser conocido por la Comisión de Hacienda.

V.- ARTÍCULOS E INDICACIONES RECHAZADAS O DECLARADAS INADMISIBLES.

A.- Indicaciones rechazadas.

Se rechazaron las siguientes indicaciones:

1.- Del señor Rathgeb, don Jorge, para agregar al artículo 1° el siguiente N°1:

“1.- Incorpórase al artículo 3° el siguiente inciso tercero, nuevo:

“Asimismo, los candidatos a senadores y diputados, deberán presentar su programa de trabajo con objetivos y metas para el período parlamentario al cual postulan, los que quedarán a disposición de la ciudadanía.”

2.- De los señores Andrade, don Osvaldo y Soto, don Leonardo, para reemplazar la letra a) del N°1 del artículo 1°, por la siguiente:

“a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, a continuación del inciso primero:

"En las elecciones de Diputados y Senadores, al interior de cada pacto electoral, uno o más partidos políticos podrán subpactar entre sí. También podrán subpactar uno o más partidos políticos con candidatos independientes.".”.

3.- De S.E. la Presidenta de la República para sustituir la letra b) del N°1 del artículo 1°, por la siguiente:

“b) Intercálanse los siguientes incisos cuarto y quinto, nuevos, a continuación del actual inciso tercero, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a Diputado o Senador que hayan declarado los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el 60% del total de candidaturas declaradas a Diputados y Senadores respectivamente. La infracción a lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a Diputados o a Senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.

Para el cálculo de la proporción de hombres y mujeres establecida en el inciso anterior, se excluirán aquellas candidaturas proclamadas por el Tribunal Calificador de Elecciones para la elección definitiva de parlamentarios en los distritos electorales y circunscripciones senatoriales en que se hayan celebrado elecciones primarias, en virtud de lo dispuesto en los artículos 30 y 31 de la ley N° 20.640.”.”.

4.- De S.E. la Presidenta de la República para agregar, al final de la letra b) del N°1 del artículo 1°, a continuación del punto final de dicho literal, que ahora pasa a ser punto seguido, la siguiente expresión:

“Asimismo, para el cálculo de la proporción de hombres y mujeres establecida en el inciso anterior, si dicho resultado no diese un número entero, deberá aproximarse al entero inmediatamente superior.”.

5.- De los señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo para reemplazar el N°2 del artículo 1° por el siguiente:

“2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 4° por el siguiente:

“Las declaraciones de candidaturas a Senadores o Diputados que presenten los partidos políticos o los pactos electorales podrán incluir, como máximo, el número de candidatos a cargos a elegir por circunscripción senatorial o distrito según corresponda”.”.

6.- De las señoras Álvarez, doña Jenny; Carvajal, doña Loreto; Cicardini, doña Daniella; Fernández, doña Maya; Girardi, doña Cristina; Hernando, doña Marcela; Pacheco, doña Clemira y Sepúlveda, doña Alejandra y los señores Aguiló, don Sergio; Arriagada, don Claudio; Melo, don Daniel; Poblete, don Roberto; Saffirio, don René y Urizar, don Christian, para agregar en el artículo 4°, propuesto en el N°2 del artículo 1° del proyecto, un nuevo inciso tercero del siguiente tenor:

"Las listas de cada distrito o circunscripción deberán ser conformadas con criterios de paridad, por lo tanto, ninguno de los géneros podrá superar el sesenta por ciento en cada lista. Igualmente, cada lista deberá ordenar a sus integrantes según mandato de posición, vale decir, cada lista deberá ordenar a sus integrantes con alternancia entre los candidatos de cada sexo".

7.- De la señora Turres, doña Marisol y los señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo, para intercalar el siguiente N°3, nuevo:

“3) Reemplázase, en el artículo 10, la cifra “0,5” por la cifra “0,3”.”.

8.- De los señores Mirosevic, don Vlado y Jackson, don Giorgio, para intercalar en el artículo 1°, el siguiente N°4, nuevo:

4) Reemplázase el artículo 11 por el siguiente:

“Artículo 11.- El patrocinio de candidaturas independientes deberá suscribirse ante el organismo público que la ley determine por ciudadanos con derecho a sufragio que declaren bajo juramento o promesa no estar afiliados a un partido político legalmente constituido o en formación, y cuyos domicilios electorales registrados en el Registro Electoral correspondan al distrito o circunscripción senatorial, según se trate de elecciones de Diputados o Senadores.

La nómina de patrocinantes deberá señalar en su encabezamiento el nombre del candidato y el acto electoral de que se trate. A continuación, deberá dejarse expresa constancia del juramento a que se refiere el inciso anterior y de los siguientes antecedentes: primera columna, numeración correlativa de todos los ciudadanos que la suscriban; segunda columna, sus apellidos y nombres completos; tercera columna, número de la cédula nacional de identidad; cuarta columna, indicación de su domicilio electoral, con mención de la comuna; quinta columna, firma del elector o su impresión dactiloscópica, si no pudiere firmar, la que se estampará en línea enfrentando los datos de su filiación personal.

Lo dispuesto en este artículo y en el precedente no se aplicará a los independientes incluidos en una declaración de candidaturas de un pacto electoral del que participe uno o más partidos políticos.”.

9.- De S.E. la Presidenta de la República, para intercalar en el artículo 1° un nuevo N°4, del siguiente tenor:

“4) Sustitúyese el artículo 17 por el siguiente:

“Artículo 17.- El Consejo del Servicio Electoral, dentro de los diez días siguientes a aquel en que venza el plazo para declaración de candidaturas, deberá dictar una resolución, que se publicará dentro de tercer día en el Diario Oficial, que se pronunciará sobre:

a) La aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidaturas independientes. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 25, 48 y 50 de la Constitución Política de la República, o que se encuentren en alguna de las situaciones previstas en el artículo 57 de la Constitución. Asimismo deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los Párrafos 1° a 3° de este título.

b) La aceptación o rechazo de la totalidad de las declaraciones de candidaturas a Diputado o Senador, según corresponda, declaradas por cada partido político, en conformidad a lo dispuesto en el inciso cuarto y quinto del artículo 3 bis. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a Diputado o a Senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con la proporción de sexos establecida en el inciso cuarto y quinto del artículo 3 bis.

Los partidos políticos cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a Diputado o Senador, según corresponda, fueren rechazadas en conformidad a lo dispuesto en la letra b) de este artículo podrán, dentro de los tres días siguientes a la fecha de la publicación de la resolución a que alude el inciso primero, corregir ante el Servicio Electoral la proporción de sus candidaturas declaradas, retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas, ajustándose al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso cuarto y quinto del artículo 3 bis. Dentro de los cinco días siguientes de vencido este plazo, el Consejo del Servicio Electoral dictará una nueva resolución aceptando o rechazando las declaraciones nuevas y rechazando o aceptando, según proceda, la totalidad de las declaraciones de candidaturas a Diputados o a Senadores, según corresponda, la que deberá ser publicada dentro de tercer día en el Diario Oficial.”.”.

10.- De los señores Jackson, don Giorgio y Mirosevic, don Vlado, para intercalar en el artículo 1° el siguiente N°8, nuevo:

“8) Sustitúyese el artículo 30 por el siguiente:

“Artículo 30.- Se entenderá por propaganda electoral toda aquella manifestación pública, escrita o audiovisual que promocione el nombre, apellido, partido político al que pertenecen candidatos determinados o que utilice cualquier otro medio de identificación que esté dirigida a obtener apoyo electoral. También lo será la que induzca a apoyar alguna de las proposiciones sometidas a plebiscito. Dicha propaganda sólo podrá efectuarse en las oportunidades y en la forma prescrita en esta ley.

No se entenderá como propaganda electoral la difusión de información sobre actos políticos y actividades habituales del funcionamiento de los partidos y autoridades políticas, así como la realización de entrevistas periodísticas.

Para los plebiscitos comunales la propaganda sólo podrá comprender las materias sometidas a consideración de los vecinos, sin aludir a asuntos ideológicos, de carácter partidista o de política contingente.

El financiamiento de los gastos que se realicen en propaganda electoral o plebiscitaria sólo podrá provenir de personas naturales con derecho a voto en Chile.

La propaganda electoral por medio de la prensa, radioemisoras y canales de televisión sólo podrá efectuarse desde el trigésimo y hasta el tercer día anterior al de la elección o plebiscito, ambos días inclusive.

Con todo, tratándose del caso previsto en el inciso segundo del artículo 26 de la Constitución Política, la propaganda electoral sólo podrá efectuarse desde el decimocuarto y hasta el tercer día anterior al de la votación, ambos días inclusive.

Se prohíbe la propaganda electoral en cinematógrafos y salas de exhibición de videos y la que en cualquier lugar o forma se realice por altoparlantes fijos o móviles, con la única excepción de la transmisión de discursos pronunciados en concentraciones públicas.”.”.

11.- De los señores Andrade, don Osvaldo; Ceroni, don Guillermo; Jackson, don Giorgio y Rincón, don Ricardo, para intercalar en el artículo 1° el siguiente N°9, nuevo:

“9) Para agregar en el inciso primero del artículo 32, a continuación del punto seguido (.) que sigue a la expresión quioscos, la siguiente oración “Se prohíbe toda propaganda política en la vía pública.”

12.- De S.E. la Presidenta de la República, a la indicación que formulara al N°4 del artículo 1° (ha pasado a ser N°10), para sustituir, en el inciso segundo de la letra c) del numeral 2.- del artículo 109 bis propuesto, la expresión “que no sean parte de un pacto.”, por la expresión “que sean parte de dicho pacto y no estén asociadas a un partido político.”.

13.- De los señores Andrade, don Osvaldo y Soto, don Leonardo, para reemplazar, en el N° 4 del artículo 1° (ha pasado a ser N°10), el encabezado del artículo 109 bis propuesto, por el siguiente:

“Artículo 109 bis.-“En el caso de los pactos electorales, conformados por dos o más subpactos o partidos, será condición necesaria para la existencia del subpacto contar con la unanimidad de los partidos integrantes del pacto. Para determinar cuántos cupos le corresponden a cada uno de ellos se aplicarán las siguientes reglas:”.

14.- Del señor Rincón, don Ricardo, para reemplazar en el párrafo segundo de la letra c) del numeral 2) del artículo 109 bis, propuesto por el N°4 del artículo 1° (ha pasado a ser N°10), la expresión “que no sean parte de un pacto” por la siguiente: “que sean parte de dicho pacto”.

15.- Del señor Rivas, don Gaspar, para sustituir el N°4 del artículo 1° (ha pasado a ser N° 10), por el siguiente:

“10) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de Parlamentarios, el Tribunal proclamará elegidos Senadores o Diputados a los dos candidatos que hubieren obtenido individualmente el mayor número de sufragios. En caso de empate entre candidatos, el Tribunal procederá a efectuar un sorteo entre ellos en audiencia pública y proclamará electo al que salga favorecido.”.”.

16.- De los señores Monckeberg, don Cristián y Monckeberg, don Nicolás, para sustituir en el N°5 del artículo 1° (pasó a ser N°11), la expresión “veintiocho” por “veintinueve”.

17.- De los señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo para sustituir el N°5 del artículo 1° (pasó a ser N°11) por el siguiente:

11) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- La Cámara de Diputados se compone de 120 miembros.

Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá 30 distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”.

18.- De los señores Monckeberg, don Cristián y Monckeberg, don Nicolás para reemplazar el N°6 del artículo 1° (ha pasado a ser N°12), por el siguiente:

“12) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1° distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos; que elegirá 2 Diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña Colchane, Pica y Pozo Almonte; que elegirá 2 Diputados.

3° distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal; que elegirá 4 Diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen; que elegirá 4 Diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de Paihuano, La Higuera, La Serena, Vicuña, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela; que elegirá 6 Diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de Cabildo, Calera, Hijuelas, La Cruz, La Ligua, Nogales, Papudo, Petorca, Puchuncaví, Quillota, Quintero, Zapallar, Calle Larga, Catemu, Llay-Llay, Los Andes, Panquehue, Putaendo, Rinconada, San Esteban, San Felipe, Santa María; que elegirá 5 Diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Limache, Olmué, Quilpué, Villa Alemana, Concón, Viña Del Mar; que elegirá 5 Diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Isla de Pascua, Juan Fernandez, Valparaíso, Algarrobo, Cartagena, Casablanca, El Quisco, El Tabo, San Antonio, Santo Domingo; que elegirá 5 Diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú; que elegirá 8 Diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia; que elegirá 7 diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín, La Granja; que elegirá 8 Diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén; que elegirá 6 Diputados.

13° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana; que elegirá 8 Diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo; que elegirá 5 Diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué , San Pedro y Padre Hurtado; que elegirá 7 Diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa; que elegirá 4 Diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones; que elegirá 4 Diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael; que elegirá 6 Diputados.

19° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco; que elegirá 4 Diputados.

20° distrito, constituido por las comunas Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ranquil, Quillón, Bulnes, Cabrero, Yumbel, Coronel, Florida, Hualqui, Penco, Santa Juana, Tomé; que elegirá 6 Diputados.

21° distrito, constituido por las comunas de Hualpén, Talcahuano, Chiguayante, Concepción, San Pedro de la Paz; que elegirá 6 Diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Arauco, Cañete, Contulmo, Curanilahue, Lebu, Los Alamos, Lota, Tirúa, Alto Biobío, Antuco, Laja, Los Angeles, Mulchén, Nacimiento, Negrete, Quilaco, Quilleco, San Rosendo, Santa Bárbara, Tucapel; que elegirá 5 Diputados.

23° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino; que elegirá 4 Diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén; que elegirá 6 Diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco; que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas, Los Muermos; que elegirá 4 Diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena; que elegirá 5 Diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel; que elegirá 2 Diputados.

29° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica; que elegirá 2 Diputados.”.”.

19.- De los señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo para sustituir el N°6 del artículo 1° (pasó a ser N°12), por el siguiente:

“12) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er. distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos; que elegirá 2 diputados;

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Huara, Alto Hospicio, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte; que elegirá 2 diputados;

3º distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal; que elegirá 4 diputados;

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen; que elegirá 4 diputados;

5º distrito, constituido por las comuna de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela; que elegirá 6 diputados;

6º distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay y Catemu; que elegirá 4 diputados;

7º distrito, constituido por las comunas de Olmué, Limache, Villa Alemana Quilpué, Viña del Mar y Concón; que elegirá 4 diputados;

8º distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua; San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca; que elegirá 4 Diputados;

9º distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Conchalí, Huechuraba, Independencia y Recoleta; que elegirá 4 Diputados;

10º distrito, constituido por las comunas de Quinta Normal, Cerrillos, Estación Central, Cerro Navia y Santiago; que elegirá 4 diputados;

11º distrito, constituido por las comunas de San Ramón, San Miguel, San Joaquín, Macul, Ñuñoa y Providencia; que elegirá 4 diputados;

12º distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén; que elegirá 4 diputados;

13º distrito, constituido por las comunas de Pirque, Puente Alto, San José de Maipo y la Florida; que elegirá 4 diputados;

14º distrito, constituido por las comunas de La Pintana, El Bosque, La Cisterna, Pedro Aguirre Cerda, La Granja y Lo Espejo; que elegirá 4 diputados;

15º distrito constituido por la comuna de Buin, Calera de Tango, Paine, San Bernardo y Maipú; que elegirá 4 diputados;

16º distrito, constituido por las comunas de Melipilla, Alhué, Curacaví, María Pinto, San Pedro, Talagante, El Monte, Isla de Maipo, Padre Hurtado, Peñaflor, Pudahuel, Lo Prado y Renca; que elegirá 4 diputados;

17º distrito, constituido por la comuna de Rancagua; Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa; que elegirá 4 diputados;

18º distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones; que elegirá 4 diputados;

19º distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro, San Rafael; que elegirá 6 diputados;

20º distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco; que elegirá 4 diputados;

21º distrito, constituido por las comunas de Chillán, Chillán Viejo, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco Yungay, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ranquil, Quillón, Bulnes, Cabrero, Yumbel, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana; que elegirá 6 diputados;

22º distrito, constituido por la comuna de Talcahuano, Hualpén, Concepción, Chiguayante y San Pedro de la Paz; que elegirá 4 diputados;

23º distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Alamos, Cañete, Contulmo, Tirúa; Alto Biobío, Los Angeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja; que elegirá 4 diputados;

24º distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino; que elegirá 4 diputados;

25º distrito, constituido por la comuna de Padre Las Casas, Temuco, Carahue, Cholchol, Nueva Imperial, Saavedra, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén; que elegirá 6 diputados;

26º distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco; que elegirá 4 diputados;

27º distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo; Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos; elegirá 4 diputados;

28º distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco; Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena; que elegirá 4 diputados;

29º distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel; que elegirá 2 diputados;

30º distrito, constituido por las comunas de Natales, Cabo de Hornos, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Navarino y La Antártica; que elegirá 2 diputados.”.”.

20.- De la señorita Cicardini, doña Daniella; de la señora Pacheco, doña Clemira y de los señores Espinoza, don Fidel; Lemus, don Luis; Melo, don Daniel; Poblete, don Roberto y Urizar, don Christian, para sustituir en el N°6 del artículo 1° (pasó a ser N°12), los distritos 6 y 7 por los siguientes distritos 6, 7 y 8 nuevos, pasando el distrito 8° actual a ser distrito 9° y así correlativamente hasta el distrito N°29:

“6° distrito, constituido por las comunas de la Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu; que elegirá 5 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Olmué, Limache, Villa Alemana, Quilpué, Viña del Mar, Concón, que elegirá 6 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca; que elegirá 5 diputados.”

21.- De los señores Monckeberg, don Cristián y Monckeberg, don Nicolás para introducir las siguientes modificaciones al N°7 del artículo 1° (pasó a ser N°13), que incorpora un nuevo artículo 179 bis:

a) En el inciso primero, sustitúyanse los guarismos “155” y “28” por “144” y “29” respectivamente.

b) En el inciso segundo, sustitúyase el guarismo “155” por “144”.

c) En el literal a) sustitúyase los guarismos “84” y “28” por “58” y “29” respectivamente; y la expresión “tres” por “dos”.

d) En el literal b), sustitúyase los guarismos “71” y “28” por “86” y “29” respectivamente

22.- De S.E. la Presidenta de la República para reemplazar la letra b) del artículo 179 bis, contenido en el N°7 del artículo 1° del proyecto (ha pasado a ser N°13), por la siguiente:

“b) Los restantes 71 diputados se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos oficiales proporcionados por el último censo oficial de población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas.”.

23.- De la señora Turres, doña Marisol y de los señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo, para reemplazar en la letra c) del artículo 179 bis, contenido en el N°7 del artículo 1° (ha pasado a ser N°13), la frase “Ningún distrito podrá elegir más de 9 diputados.” por la frase: “Ningún distrito podrá elegir menos de 2 diputados ni más de 8.”.

24.- De los señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Trisotti, don Renzo para sustituir el N°8 del artículo 1° (ha pasado a ser N°14), por el siguiente:

8) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 40 miembros.

Para la elección de los miembros del Senado, cada región constituirá una circunscripción senatorial y elegirá la cantidad de Senadores que a continuación se indican:

1a. Circunscripción, constituida por la XV Región Arica y Parinacota, que elegirá 2 senadores;

2ª. Circunscripción, constituida por la I Región, de Tarapacá; que elegirá 2 senadores;

3a. Circunscripción, constituida por la II Región, de Antofagasta; que elegirá 2 senadores;

4a. Circunscripción, constituida por la III Región, de Atacama; que elegirá 2 senadores;

5a. Circunscripción, constituida por la IV Región, de Coquimbo; que elegirá 2 senadores;

6a. Circunscripción, constituida por la V Región, de Valparaíso, que elegirá 4 senadores;

7a. Circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, que elegirá 4 senadores;

8a. Circunscripción, constituida por la VI Región, del Libertador General Bernardo O'Higgins; que elegirá 2 senadores;

9a. Circunscripción, constituida por la VII Región, del Maule; que elegirá 4 senadores;

10a. Circunscripción, constituida por la VIII Región, del Biobío; que elegirá 4 senadores;

11a. Circunscripción, constituida por la IX Región, de la Araucanía; que elegirá 4 senadores;

12a. Circunscripción, constituida por la XIV Región, de los Ríos; que elegirá 2 senadores;

13a. Circunscripción, constituida por la X Región, de los Lagos, que elegirá 2 senadores

14a. Circunscripción, constituida por la XI Región, Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo; que elegirá 2 senadores y,

15a. Circunscripción, constituida por la XII Región, de Magallanes y de la Antártica Chilena; que elegirá 2 senadores.

25.- De los señores Monckeberg, don Cristián y Monckeberg, don Nicolás para reemplazar el N°8 del artículo 1° (ha pasado a ser N°14), por el siguiente:

“14) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 46 miembros.

Para la elección de los Senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada Circunscripción elegirá el número de Senadores que se indica a continuación.

1a., Circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, elegirá 2 Senadores.

2a. Circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, elegirá 2 Senadores.

3a. Circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, elegirá 2 Senadores.

4a. Circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, elegirá 2 Senadores.

5a. Circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, elegirá 2 Senadores.

6a. Circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, elegirá 5 Senadores

7a. Circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, elegirá 8 Senadores.

8a. Circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, elegirá 2 Senadores.

9a. Circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, elegirá 4 Senadores.

10a. Circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, elegirá 5 Senadores.

11a. Circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, elegirá 5 Senadores.

12a. Circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, elegirá 2 Senadores.

13a. Circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, elegirá 2 Senadores.

14a. Circunscripción, constituida por la XI Región Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, elegirá 2 Senadores.

15a. Circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, elegirá 2 Senadores.”.”.

26.- Del señor Rathgeb, don Jorge, para suprimir en el N°10 del artículo 1° (ha pasado a ser N°16) el guarismo “2017”.

27.- De los señores Fuenzalida, don Gonzalo y Rathgeb, don Jorge, para reemplazar el N°11 del artículo 1° (ha pasado a ser N°17) por el siguiente:

“17) Agrégase el siguiente artículo 24 transitorio, nuevo:

“Artículo 24.- Para los efectos de completar la nueva integración del Senado de la República, en las elecciones parlamentarias que deben celebrarse en Noviembre de 2021, corresponderá que se renueven completamente las circunscripciones que corresponden a regiones pares.

En el caso de las circunscripciones que corresponden a las regiones impares, los parlamentarios elegidos en 2017, de acuerdo a las normas vigentes, seguirán en sus funciones hasta completar su período de ocho años. En las elecciones de 2025, estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde.”.”.

28.- De los señores Coloma, don Juan Antonio; Squella, don Arturo y Trisotti don Renzo, para sustituir en el inciso primero del artículo 6° de la ley N° 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos, la cifra “0,5” por la cifra “0,3”.

29.- De los señores Fuenzalida, don Gonzalo y Rathgeb, don Jorge, para suprimir en el artículo 2°, que incorpora un nuevo artículo segundo transitorio a la ley N°19.884, sobre Transparencia, Límite y Control del gasto electoral, el guarismo “2017”.

30.- De las señoras Alvarez, doña Jenny; Cicardini, doña Daniella; Carvajal, doña Loreto; Cariola, doña Karol; Fernández, doña Maya; Molina, doña Andrea; Provoste, doña Yasna y Sabat, doña Marcela, para agregar el siguiente artículo 4°, nuevo:

“Artículo 4°.- Incorpórase el siguiente artículo 5° bis, nuevo, a la ley N°20.640, sobre sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, parlamentarios y Alcaldes:

“Artículo 5° bis: La ley de primarias legales vigente en el país solo será aplicable a los cargos uninominales de Presidente de la República y Alcaldes.”.”.

31.- Del señor Rivas, don Gaspar, para agregar el siguiente artículo transitorio:

“Artículo transitorio.- Las normas contenidas en este proyecto de ley sólo serán aplicables a las elecciones parlamentarias que se lleven a cabo con posterioridad a su promulgación como ley de la República.”.

B.- Indicaciones declaradas inadmisibles.

Se declararon inadmisibles las siguientes indicaciones:

1.- De las señoras Alvarez, doña Jenny; Carvajal, doña Loreto; Cicardini, doña Daniella; Fernández, doña Maya; Girardi, doña Cristina; Hernando, doña Marcela; Pacheco, doña Clemira y Sepúlveda, doña Alejandra y de los señores Arriagada, don Claudio; Melo, don Daniel y Saffirio, don René, para agregar al N°2 del artículo 109 bis propuesto en el N°4 del artículo 1° (ha pasado a ser N°10) los siguientes incisos:

“En todo caso se aplicará el criterio de acción afirmativa consistente en un factor de corrección (multiplicación), de 1.3 a los votos de los candidatos o candidatas cuya votación no haya alcanzado el 30% del total de la votación de la lista, de manera que al menos el 30% de ellas ocupen el cargo respectivo.

Si determinados los candidatos elegidos para ocupar los cargos resultare que no se completara el cupo del 30% de acción afirmativa en favor de las candidatas, deberá llenarse la diferencia faltante con las candidatas no elegidas de mayor votación, cediendo su cupo los candidatos de la misma lista, que hayan ocupado los últimos lugares, de modo que cada lista mantenga el número de electos determinado por la cifra repartidora.”.

2.- De los señores Jackson, don Giorgio y Mirosevic, don Vlado para sustituir el N°17 del artículo 1°, por el siguiente:

“17) Agrégase el siguiente artículo 24 transitorio nuevo:

“Artículo 24.- Para los efectos de completar la nueva integración del Senado de la República, en las elecciones parlamentarias que deben celebrarse en Noviembre de 2017, corresponderá que se renueven completamente todas las circunscripciones.

En el caso de las circunscripciones que corresponden a las regiones pares y Metropolitana, los parlamentarios elegidos en 2017 tendrán por esta única vez un período de 4 años. En las elecciones de 2021, estas circunscripciones volverán a elegir a sus representantes, por un período de ocho años, regularizando su situación.”.”. (Materia de reforma constitucional contenida en un proyecto de ley).

3.- Del señor Chahin, don Fuad, para sustituir en el artículo segundo transitorio, propuesto en el artículo 2°, la oración “que hubieren sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a que ellas pertenecieren, tendrán derecho, por cada una de ellas, a un monto adicional para efectos de reembolso de hasta 500 UF.” por la siguiente:“, se autorizará la devolución de los gastos que hubieren incurridos para efectos de la elección, por una suma que no podrá exceder del equivalente, en pesos, a seis centésimos de unidad de fomento, multiplicado por el número de sufragios obtenidos por ellas en la respectiva elección.

Para llevar a cabo la devolución a que hace referencia el inciso anterior, se ceñirá por lo dispuesto en el artículo 15 de la ley N°19.884 sobre transparencia, límite y control del gasto electoral.”. (Iniciativa exclusiva por implicar gasto).

4.- De las señoras Alvarez, doña Jenny; Girardi, doña Cristina; Pacheco, doña Clemira; Pascal, doña Denise; Rubilar, doña Karla; Sabat, doña Marcela y Vallejo, doña Camila y los señores González, don Rodrigo; Melo, don Daniel; Saffirio, don René y Soto, don Leonardo, para agregar el siguiente artículo 3°:

“Artículo 3°.- Agrégase un nuevo artículo 15 bis a la ley N°19.884, sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, del siguiente tenor:

“Artículo 15 bis.- Finalizado el proceso de elecciones de senadores y diputados, procederá, con cargo fiscal, un reembolso adicional de gastos a aquel establecido en esta ley en los siguientes términos:

1) Cada candidata mujer tendrá derecho a un reembolso adicional equivalente a 0,0150 unidades de fomento, por cada voto obtenido por cada candidata.

2) Adicionalmente, cada partido tendrá derecho a un reembolso equivalente a 0,009 unidades de fomento, por cada voto obtenido por cada candidata que haya resultado electa.

Los reembolsos adicionales contemplados en este artículo serán temporales y se aplicarán hasta la elección parlamentaria del año 2029, debiendo evaluarse su prórroga en dicha oportunidad.”.”. (Iniciativa exclusiva por implicar gasto).

5.- De los señores Jackson y Mirosevic, don Vlado, para agregar el siguiente artículo 3°:

“Artículo 3°.- Sustitúyese el artículo 16 de la ley N°19.884, sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, por el siguiente:

“Artículo 16.- Los aportes de campaña electoral serán públicos y se consignará la identidad del aportante, salvo las excepciones que señale esta ley.”.”.

Esta indicación fue declarada admisible por la Presidencia de la Comisión. Sin embargo, vuestra Comisión, por la mayoría de los diputados presentes, acordó declararla inadmisible, particularmente, por estimar que no correspondía a las ideas matrices del proyecto en informe.

6.- De los señores Jackson y Mirosevic, don Vlado, para agregar el siguiente artículo 4°:

“Artículo 4°.- Sustitúyese el artículo 17 de la ley N°19.884, sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, por el siguiente:

“Artículo 17.- Podrán ser anónimos todos los aportes privados en dinero cuyo importe no supere el equivalente en pesos a diez unidades de fomento. No obstante, cualquier aportante podrá solicitar se consigne su identidad y el monto de su contribución.

En todo caso, durante el período de campaña electoral, ningún candidato o partido político podrá recibir, por concepto de aportes anónimos, más del veinte por ciento del límite de gastos electorales definido en esta ley.

No podrán existir aportes reservados.”.”. (Por no corresponder a las ideas matrices del proyecto).

7.- De los señores Jackson y Mirosevic, don Vlado, para agregar el siguiente artículo 5°:

“Artículo 5°.- Deróganse los artículos 18 y 19 de la ley N°19.884, sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral. (Por no corresponder a las ideas matrices del proyecto).

8.- De los señores Jackson y Mirosevic, don Vlado, para agregar el siguiente artículo 6°:

“Artículo 6°.- Sustitúyese el artículo 24 de la ley N°19.884, sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, por el siguiente:

“Artículo 24.- Prohíbense los aportes de campaña electoral provenientes de personas naturales extranjeras, con excepción de los efectuados por extranjeros habilitados legalmente para ejercer en Chile el derecho a sufragio. Prohíbense también los aportes de campaña electoral provenientes de toda persona jurídica a excepción del Fisco, de acuerdo a lo prescrito en el párrafo 2° de la presente ley, y de los partidos políticos.”.”. (Por no corresponder a las ideas matrices del proyecto).

9.- De los señores Jackson y Mirosevic, don Vlado, para agregar el siguiente artículo 7°:

“Artículo 7°.- Agrégase en la ley N°19.884, sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral el siguiente artículo segundo transitorio, pasando el actual artículo transitorio único, a ser artículo primero transitorio:

“Artículo segundo transitorio.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y solo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hubieren sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a que ellas pertenecieren, tendrán derecho, por cada una de ellas, a un monto adicional para efectos de reembolso de hasta 500 UF.”.”. (Iniciativa exclusiva por implicar gasto).

9.- De las señoras Álvarez, doña Jenny; Carvajal, doña Loreto; Cicardini, doña Daniella; Fernández, doña Maya; Girardi, doña Cristina; Hernando, doña Marcela; Pacheco, doña Clemira y Sepúlveda, doña Alejandra y los señores Aguiló, don Sergio; Arriagada, don Claudio; Melo, don Daniel; Poblete, don Roberto; Saffirio, don René y Urizar, don Christian, para reemplazar en el artículo segundo transitorio, propuesto en el artículo 2°, la frase final "de hasta 500 U.F." por otra del siguiente tenor:

"desde 1500 a 2000 unidades de fomento de acuerdo al tamaño del distrito o circunscripción". (Iniciativa exclusiva por implicar gasto).

*************

VI.- TEXTO DEL PROYECTO APROBADO POR LA COMISIÓN.

Por las razones señaladas y por las que expondrá oportunamente el señor Diputado Informante, esta Comisión recomienda aprobar el siguiente:

PROYECTO DE LEY:

Artículo 1°.- Modifícase la ley N°18.700, Orgánica Constitucional de Votaciones Populares y Escrutinios, de la manera que a continuación se señala:

1) Modificase el artículo 3° bis en el siguiente sentido:

a) Intercálase el siguiente inciso segundo:

“En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.”

b) Intercálanse los siguientes incisos cuarto y quinto, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. La infracción a lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.

Para el cálculo de la proporción de hombres y mujeres establecida en el inciso anterior, se excluirán aquellas candidaturas proclamadas por el Tribunal Calificador de Elecciones para la elección definitiva de parlamentarios en los distritos electorales y circunscripciones senatoriales en que se hayan celebrado elecciones primarias, en virtud de lo dispuesto en los artículos 30 y 31 de la ley N° 20.640. Asimismo, para el cálculo de la proporción de hombres y mujeres establecida en el inciso anterior, si dicho resultado no diese un número entero, deberá aproximarse al entero inmediatamente superior.”.

c) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “que hubieren constituido un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

d) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “Se podrá dejar sin efecto un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 4° por el siguiente:

“En el caso de las declaraciones de candidaturas para la elección de diputados y senadores los partidos políticos o pactos electorales podrán presentar en cada distrito o circunscripción un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción de que se trate.”.

3) Reemplázase, en el artículo 10, la cifra “0,5” por el guarismo: “0,25”.”.

4) Sustitúyese el artículo 17 por el siguiente:

“Artículo 17.- El Consejo del Servicio Electoral, dentro de los diez días siguientes a aquel en que venza el plazo para efectuar la declaración de candidaturas, deberá dictar una resolución, que se notificará al correo electrónico que los partidos políticos y candidatos independientes deberán informar al momento de la declaración, la que se pronunciará sobre:

a) La aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidaturas independientes. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 25, 48 y 50 de la Constitución Política de la República, o que se encuentren en alguna de las situaciones previstas en el artículo 57 de la Constitución. Asimismo deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los Párrafos 1° a 3° de este título.

b) La aceptación o rechazo de la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, declaradas por cada partido político, en conformidad a lo dispuesto en el inciso cuarto y quinto del artículo 3° bis. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o a senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con la proporción de sexos establecida en el inciso cuarto y quinto de dicho artículo.

Los partidos políticos cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, fueren rechazadas en conformidad a lo dispuesto en la letra b) de este artículo podrán corregir ante el Servicio Electoral la proporción de sus candidaturas declaradas dentro de los cuatro días hábiles siguientes a la fecha del despacho del correo electrónico que notifica la resolución a que alude el inciso primero, retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas, ajustándose al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso cuarto y quinto del artículo 3° bis.

Dentro de los cinco días siguientes de vencido el plazo para reclamar de la resolución del Consejo del Servicio Electoral, éste dictará una nueva resolución aceptando o rechazando las declaraciones nuevas y rechazando o aceptando, según proceda, la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputados o a senadores, según corresponda, la que deberá ser publicada dentro de tercer día en el Diario Oficial. En tal oportunidad también se publicarán en el mismo medio la aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidaturas independientes.”.

5) Sustitúyese el artículo 18 por el siguiente:

“Artículo 18.- Los partidos políticos y los candidatos independientes podrán reclamar ante el Tribunal Calificador de Elecciones por los rechazos de declaraciones fundadas en el incumplimiento de los requisitos establecidos en la letra a) del artículo 17, dentro de los siete días hábiles siguientes al despacho del correo electrónico que notifique la resolución a que se refiere el inciso primero del artículo anterior. Este tribunal fallará en el término de diez días contado desde la interposición del reclamo y su resolución se notificará al Director del Servicio Electoral y a los interesados por carta certificada.

El plazo para interponer la reclamación ante el Tribunal Calificador de Elecciones cuando se funde en incumplimiento de los requisitos de la letra b) del artículo 17, se contará, respecto de los partidos políticos que corrijan ante el Servicio Electoral la proporción de sexos de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, desde el día de la publicación de la resolución que dicta el Servicio Electoral en conformidad a lo dispuesto en el inciso final del artículo 17.”

6) Modifícase el artículo 24 de la siguiente forma:

a) Sustitúyese el inciso cuarto por el siguiente:

“Los partidos, dentro de cada lista, pondrán los nombres de los candidatos ordenando a sus integrantes con alternancia entre los candidatos y las candidatas, asignándoles un número correlativo desde el uno hasta la cantidad total de candidatos declarados para la misma circunscripción senatorial o distrito electoral, comenzando la numeración con los candidatos a senadores y siguiendo con los candidatos a diputados.”

b) Sustitúyese el inciso final por el siguiente:

“Al lado izquierdo del número de cada candidato y del nombre de la lista respectiva, habrá una raya horizontal a fin de que el elector pueda marcar su preferencia completando una cruz con una raya vertical. Asimismo, también habrá al lado izquierdo del número de cada candidato, una fotografía de éste, si la hubiere acompañado en su declaración, en el tamaño y colores de impresión que determine el Servicio Electoral.”

7) Intercálase en el inciso primero del artículo 65, entre las expresiones “lado izquierdo” y “del número” la siguiente: “de la lista, o al lado izquierdo”.

8) Intercálase en el numeral 6) del artículo 71, entre la expresión “por” y la frase “cada uno de los candidatos” la siguiente frase: “cada lista y por”.

9) Intercálase en el inciso primero del artículo 87, entre la expresión “candidato” y la preposición “en”, la frase “o por cada lista cuando corresponda”.

10) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de parlamentarios, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme a las reglas establecidas en el procedimiento que a continuación se detalla:

1.- El Tribunal Calificador de Elecciones determinará las preferencias emitidas a favor de cada lista y de cada uno de los candidatos que la integran.

2.- Se aplicará el sistema electoral de coeficiente D´Hondt, procediendo de la siguiente manera:

a) Se dividirán los votos de cada lista por uno, dos, tres y así sucesivamente hasta la cantidad de escaños que corresponda elegir.

b) Se ordenarán los números que han resultado de estas divisiones en orden decreciente hasta el numeral correspondiente a la cantidad de escaños que elige cada distrito electoral o circunscripción senatorial.

c) A cada lista o pacto electoral, se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b).

3.- En el caso de las listas conformadas por un solo partido político, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará electos a los candidatos que hubieren obtenido las más altas mayorías individuales de cada lista de acuerdo a los escaños que le correspondan a cada una de ellas, luego de la aplicación descrita precedentemente.

4.- En el caso de los pactos electorales, para determinar cuántos escaños le corresponden a cada uno de ellos se aplicarán las siguientes reglas:

a) Se calculará el total de los votos de cada partido político o, en su caso, de la suma de cada partido político y las candidaturas independientes asociadas a ese partido.

b) Se dividirá por uno, dos, tres y así sucesivamente, hasta la cantidad de escaños asignados al pacto electoral.

c) A cada partido o, en su caso, a cada partido y las candidaturas independientes asociadas a ese partido se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b) de este numeral.

d) El Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos que hubieren obtenido las más altas mayorías individuales de cada partido o, en su caso, de cada partido considerando las candidaturas independientes asociadas a dicho partido, dentro de un pacto electoral, de acuerdo a los cupos obtenidos por cada uno de ellos.

En caso de empate entre candidatos de una misma lista o entre candidatos de distintas listas, que a su vez estuviesen empatadas, el Tribunal Calificador de Elecciones procederá en audiencia pública a efectuar un sorteo entre ellos, proclamando elegido al que salga favorecido.”

11) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”

12) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.-Los distritos electorales serán los siguientes:

1° distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos; que elegirá 3 diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte; que elegirá 3 diputados.

3° distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal; que elegirá 5 diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen; que elegirá 5 diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela; que elegirá 7 diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué; que elegirá 8 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca; que elegirá 8 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú; que elegirá 8 diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia; que elegirá 7 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín, La Granja; que elegirá 8 diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén; que elegirá 6 diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana; que elegirá 7 diputados.

13° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo; que elegirá 5 diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué , San Pedro y Padre Hurtado; que elegirá 6 diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa; que elegirá 5 diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones; que elegirá 4 diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael; que elegirá 7 diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco; que elegirá 4 diputados.

19° distrito, constituido por las comunas Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ranquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel; que elegirá 5 diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana; que elegirá 8 diputados.

21° distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Alamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Angeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja; que elegirá 5 diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino; que elegirá 4 diputados.

23° distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén; que elegirá 7 diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco; que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas, Los Muermos; que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena; que elegirá 5 diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel; que elegirá 3 diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica; que elegirá 3 diputados.”

13) Agrégase el siguiente artículo 179 bis:

“Artículo 179 bis.-Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior.

En la asignación de las 155 diputaciones, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se ceñirá al siguiente procedimiento:

a) Los 155 diputados se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consiste en distribuir a prorrata los escaños entre los distritos electorales, aplicándose el método dispuesto en el artículo 109 bis de esta ley.

b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 diputados ni más de 9 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo de la letra anterior, uno o más distritos superen dicho límite, los escaños excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al de la realización del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con aquel en que se celebran elecciones de diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente en el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.

d) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta ocho horas siguientes.

Dentro de los cinco días siguientes a la publicación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral dio aplicación a las letras a) y b) de este artículo.

Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de Febrero del año de que se trate. En caso de producirse algún cambio en la distribución de diputados, el texto del artículo 179 de esta ley se entenderá modificado en lo pertinente, de pleno derecho y se aplicará en su forma así corregida en la elección inmediatamente siguiente.”.

14) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 50 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación.

1a. circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, elegirá 2 senadores.

2a. circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, elegirá 2 senadores.

3a. circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, elegirá 2 senadores.

4a. circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, elegirá 2 senadores.

5a. circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, elegirá 3 senadores.

6a. circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, elegirá 5 senadores

7a. circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, elegirá 7 senadores.

8a. circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, elegirá 3 senadores.

9a. circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, elegirá 5 senadores.

10a. circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, elegirá 5 senadores.

11a. circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, elegirá 5 senadores.

12a. circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, elegirá 2 senadores.

13a. circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, elegirá 3 senadores.

14a. circunscripción, constituida por la XI Región Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, elegirá 2 senadores.

15a. circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, elegirá 2 senadores.”.

15) Derógase el artículo 181.

16) Agrégase el siguiente artículo 23 transitorio:

“Artículo 23.- La regla especial del inciso cuarto del artículo 3° bis sólo tendrá aplicación en los procesos electorales parlamentarios de 2017, 2021, 2025 y 2029.”

17) Agrégase el siguiente artículo 24 transitorio:

“Artículo 24.- Para los efectos de completar la nueva integración del Senado de la República, en las elecciones parlamentarias que deben celebrarse en noviembre de 2017, corresponderá que se renueven completamente las circunscripciones que corresponden a regiones impares.

En el caso de las circunscripciones que corresponden a las regiones pares y Metropolitana, los parlamentarios elegidos en 2013 seguirán en sus funciones hasta completar su período de ocho años. En las elecciones de 2021, estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde.”.

18) Agrégase el siguiente artículo 25 transitorio:

“Artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis, se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.”.

Artículo 2°.- Modificase la ley N°19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, de la manera que a continuación se señala:

1) Modifícase el artículo 4° de la siguiente forma:

a) Sustitúyese en el inciso segundo la expresión “dos centésimos de unidad de fomento”, por la expresión “una centésima de unidad de fomento”.

b) Sustitúyese en el inciso tercero, la expresión “tres centésimos de unidad de fomento” por la expresión “uno coma cinco centésimos de unidad de fomento.”.

2) Agrégase al artículo 14 bis el siguiente inciso final:

“Tratándose de votaciones a listas a las que se refiere el inciso primero del artículo 65 de la ley N°18.700, el derecho al reembolso se hará a los candidatos que las integren, a prorrata de sus votaciones individuales.”

3) Agrégase el siguiente artículo segundo transitorio, pasando a ser el actual artículo transitorio, único, a ser “Artículo primero transitorio”:

“Artículo segundo transitorio.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y sólo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hubieren sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a que ellas pertenecieren tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento, por cada una de ellas.

Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.”

4) Agrégase el siguiente el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero transitorio.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025, y 2029, las candidatas a senadoras y diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 de unidades de fomento, por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.”

Artículo 3°.- Modifícase la ley N° 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos, de la manera que a continuación se señala:

1) Modificase el artículo 6° de la siguiente forma:

a) Sustitúyese en el inciso primero la cifra “0,5” por el guarismo: “0,25”.

b) Agrégase en el inciso segundo, a continuación del punto aparte (.), que ha pasado a ser punto seguido, la siguiente oración: “Los notarios no podrán negarse a recibir la declaración a que hace referencia este artículo bajo circunstancia alguna y no podrán cobrar por este servicio.”

2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 7° por el siguiente:

“Artículo 7°.- Cumplidos los requisitos a que se refieren los artículos 5° y 6° y reunido el número de afiliados a que alude este último artículo en una de las regiones en que se divide políticamente el país, se solicitará al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos. La solicitud deberá ser firmada por el presidente y por el secretario del partido en formación.”.

3) Modifícase el artículo 26 de la manera que a continuación se señala:

a) Suprímase en el literal d) la oración “la aprobación de un pacto electoral en elecciones de parlamentarios o su retiro del mismo, y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal”.

b) Incorpórase el siguiente literal e), pasando los actuales literales e) y f) a ser f) y g) respectivamente:

“e) Aprobar un pacto electoral en las elecciones de parlamentarios o su retiro del mismo y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal;”.

4) Modificase el artículo 42 de la siguiente forma:

a) Sustitúyese el numeral 2 por el siguiente:

“2°.- Por no alcanzar en la región en que está legalmente constituido, el dos coma cinco por ciento de los sufragios válidamente emitidos en la última elección de diputados. En el caso de los partidos que se encuentren inscritos en más de una región, la disolución procederá cuando no hayan alcanzado el indicado umbral del dos coma cinco por ciento en más de la mitad de dichas regiones.”

b) Sustitúyese el inciso final por los siguientes incisos:

“No obstante, si un partido político incurriere en la situación prevista en el número 2° de este artículo, pero eligiere al menos dos parlamentarios, sean diputados o senadores, conservará su calidad de tal.

Si incurriere en la situación prevista en el número 4° en una o más regiones, pero mantuviere el mínimo de ellas exigido por la ley, conservará su calidad de tal, pero no podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2° en aquellas donde su número de afiliados hubiere disminuido en más de un cincuenta por ciento. El Director de Servicio Electoral anotará esta circunstancia al margen de la respectiva inscripción en el Registro de Partidos Políticos.”

Artículo 4°- El presente proyecto de ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la Ley de Presupuesto para la partida 02 Congreso Nacional.

En lo que respecta al artículo 2° de esta ley se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la Ley de Presupuesto respectiva.”.

***************

Tratado y acordado en sesiones de 6, 7, 12, 19 y 20 de mayo; 2, 3, 4, 10, 11, 17, 18 y 30 de junio; 2, 8, 9, 15, 22 y 23 de julio de 2014, con la asistencia de la señorita Sabat, doña Marcela; de las señoras Molina, doña Andrea y Turres, doña Marisol y de los señores Andrade, don Osvaldo; Auth, don Pepe; Ceroni, don Guillermo; Chahin, don Fuad; Coloma, don Juan Antonio; Gahona, don Sergio; Gutiérrez, don Hugo; Insunza, don Jorge; Lavín, don Joaquín; Monckeberg, don Cristián; Monckeberg, don Nicolás; Núñez, don Daniel; Rincón, don Ricardo (Presidente); Saffirio, don René; Schilling, don Marcelo; Soto, don Leonardo; Squella, don Arturo; Trisotti, don Renzo; Urrutia, don Ignacio; Urrutia, don Osvaldo y Van Rysselberghe, don Enrique.

Asistieron, además, las señoritas Cariola, doña Karol; Cicardini, doña Daniella; Fernández, doña Maya; Núñez, doña Paulina; y Vallejo, doña Camila; las señoras Alvarez, doña Jenny; Carvajal, doña Loreto; Hernando, doña Marcela; Sepúlveda, doña Alejandra y Provoste, doña Yasna y los señores Aguiló, don Sergio; Becker, don Germán; Boric, don Gabriel; Browne, don Pedro; Carmona, don Lautaro; Castro, don Juan Luis; Espejo, don Sergio; Fuenzalida, don Gonzalo; Jackson, don Giorgio; Kast, don Felipe; León, don Roberto; Letelier, don Felipe; Mirosevic, don Vlado; Morano, don Juan Enrique; Núñez, don Marco Antonio; Rocafull, don Luis; Santana, don Alejandro; Silva, don Ernesto; Ulloa, don Jorge; Urizar, don Christian y Vallespín, don Patricio.

Sala de la Comisión, a 23 de julio de 2014

[1] El Tribunal Constitucional en su sentencia Rol N°2152-11 de 19 de enero de 2012 señaló: “DECIMONOVENO.- Que las disposiciones contenidas en el ARTÍCULO SEGUNDO del proyecto que modifica la Ley N° 18.700 Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios según corresponda son propias de las leyes orgánicas constitucionales sobre Sistema Electoral Público sobre Votaciones Populares y Escrutinios y sobre Sistema de Registro Electoral a que se refieren los incisos primero y segundo del artículo 18 de la Constitución Política y de la Ley Orgánica Constitucional sobre el Tribunal Calificador de Elecciones a que se refieren los incisos primero y sexto del artículo 95 de la Ley Fundamental;”.
[2] El Tribunal Constitucional en su sentencia Rol N°376 de 17 de junio de 2003 señaló que: “DECIMOTERCERO. Que
[2] El Tribunal Constitucional en su sentencia Rol N°376 de 17 de junio de 2003 señaló que: “DECIMOTERCERO. Que resulta evidente a la luz de lo expuesto en los considerandos anteriores que las normas del proyecto sometido a control de constitucionalidad forman parte por su propio contenido de las leyes orgánicas constitucionales a que se refieren los artículos 18 inciso primero y 19 Nº 15 inciso quinto de la Carta Fundamental con excepción de sus artículos 31 y 59;”. Ratifica este parecer en su sentencia Rol N°2152-11 de 19 de enero de 2012 al señalar: “VIGESIMOTERCERO.- Que las disposiciones contenidas en el ARTÍCULO SEXTO del proyecto que modifica la Ley Nº 19.884 sobre Transparencia Límite y Control del Gasto Electoral son propias de las leyes orgánicas constitucionales sobre Sistema Electoral Público sobre Sistema de Registro Electoral y sobre Transparencia Límite y Control del Gasto Electoral a que se refieren los incisos primero y segundo del artículo 18 de la Constitución Política y de la Ley Orgánica Constitucional de los Partidos Políticos a que se refiere el artículo 19 N° 15 inciso quinto de la Constitución Política;”.
[3] El Tribunal Constitucional en su sentencia Rol N°2152-11 de 19 de enero de 2012 señaló: “VIGESIMOSEGUNDO.- Que las disposiciones contenidas en el ARTÍCULO QUINTO del proyecto que modifica la Ley Nº 18.603 Orgánica Constitucional de los Partidos Políticos son propias de las leyes orgánicas constitucionales sobre Sistema Electoral Público y sobre Sistema de Registro Electoral a que se refieren los incisos primero y segundo del artículo 18 de la Constitución Política y de la Ley Orgánica Constitucional de los Partidos Políticos a que se refiere el artículo 19 N° 15 inciso quinto de la Constitución Política;”.
[4] Gerrymandering: es un término de ciencia política referido a una manipulación de las circunscripciones electorales de un territorio uniéndolas dividiéndolas o asociándolas con el objeto de producir un efecto determinado sobre los resultados electorales.
[5] Artículo 107.- Las candidaturas a alcaldes y concejales sólo podrán ser declaradas hasta las veinticuatro horas del nonagésimo día anterior a la fecha de la elección correspondiente. Tales declaraciones sólo podrán incluir hasta tantos candidatos como cargos corresponda elegir en la respectiva comuna o agrupación de comunas. Las candidaturas a alcalde y concejal son excluyentes entre sí. Una misma persona sólo podrá postular al cargo de alcalde o de concejal en una sola comuna.
[6] Ley electoral italiana propuesto por Baron Giacomo Acerbo y aprobada por el Parlamento Italiano en noviembre de 1923 - El objetivo de la misma era dar al partido de Mussolini la mayoría de los diputados.

1.10. Informe Financiero

Fecha 23 de julio, 2014.

Reg.76 / FF

I.F. N°41 23/04/2014

I.F. N"67 23/07/2014

Informe Financiero Complementario

Indicación al Proyecto de Ley que sustituye el Sistema Electoral Binominal por un Sistema Electoral Proporcional

Mensaje N° 312-362

Boletín N° 9326-07

La presente indicación agrega el literal d) al artículo 2° del Proyecto, con un texto que agrega un nuevo artículo tercero transitorio.

Este artículo tercero transitorio establece que, para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a Senadoras y Diputadas, tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, equivalente a 0,01 unidades de fomento, por cada voto obtenido por cada candidata a Senadora o Diputada.

La actual indicación irrogará un gasto adicional respecto a lo informado en el IF N° 41 de 23 de abril pasado, equivalente a 0,01 UF multiplicada por el número de votos que obtengan las candidatas en las elecciones correspondientes, A modo ilustrativo, considerando el número de candidatas a Parlamentarias en el último proceso eleccionario, la aplicación de esta norma habría significado un gasto de UF 20.557.

Dicho mayor gasto será financiado con cargo a los recursos que se provean en la Ley de Presupuestos del año respectivo.

Sergio Granados Aguilar

Director de Presupuestos

Visación Subdirección de Presupuestos:

Visación Subdirección de Racionalización y Función Pública:

1.11. Informe Financiero

Fecha 04 de agosto, 2014.

Ministerio de Hacienda

Dirección de Presupuestos

Reg. 371-EE 04.08.2014

I.F. N° 69

Informe Técnico Complementario

(A los Informes Financieros N° s. 41, 66 y 67)

Correspondiente al Proyecto de Ley que Sustituye el Sistema Electoral Binominal por un Sistema Electoral Proporcional

1.- El proyecto de ley sustituye el artículo 180 de la Ley N° 18.700, disponiendo que el Senado se compondrá de 50 Senadores, aumentando en 12 los cupos de Senadores que se incorporarán al Parlamento, como resultado de la nueva configuración de las circunscripciones senatoriales y la cantidad que se elegirá en cada una de ellas.

En el año 2018, se incorporarán los primeros 5 senadores y en 2022 los restantes 7 senadores.

Por efecto de lo dispuesto en el artículo 62 de la Constitución Política de la República, existirá un mayor desembolso por concepto de Dieta Parlamentaria, estimándose en M$ 430.274 para el año 2018 y en régimen para el año 2019 la suma de M$ 516.329. Para el año 2022, el gasto se incrementaría en M$ 722.860.

2.- Por otra parte, al sustituirse los artículos 178 y 179 de la Ley N° 18.700, se dispone que la composición de la Cámara de Diputados estará integrada por 155 Diputados, aumentando en 35 los actuales cupos de Diputados, derivado de la configuración de los distritos electorales y la cantidad que se elegirá en cada uno de ellos, los cuales se incorporarán en el año 2018.

Por efecto de lo dispuesto en el artículo 62 de la Constitución Política de la República, existirá un mayor desembolso por concepto de Dieta Parlamentaria, estimándose en M$ 3.011.917 para el año 2018 y en régimen para el año 2019 la suma de M$ 3.614.300.

3.- El siguiente cuadro muestra los desembolsos incrementales por concepto de Dietas, que se generan en los años respectivos:

En virtud del acuerdo político, de no incurrir en un mayor gasto fiscal por estos conceptos, será necesario efectuar los ajustes para adecuar los presupuestos de ambas corporaciones a los nuevos requerimientos, en consonancia con lo previsto en el artículo 68 de la Ley N° 19.918 Orgánica Constitucional del Congreso Nacional. Consecuentemente, será necesario que el Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias incorpore a contar del año 2018 estas adecuaciones en sus futuras Resoluciones.

4.- Adicionalmente, por lo dispuesto en el artículo segundo transitorio y la incorporación del literal d) al artículo 2°, de la Ley N° 19.884, se estima para el año 2018, sobre la base del último proceso eleccionario, un mayor gasto fiscal de UF 31.057, recursos que se proveerán en la ley de Presupuestos respectiva.

5.- Finalmente, la nueva composición del Parlamento generará gastos de habilitación e infraestructura, por una vez, los que se pueden financiar con los recursos que anualmente se consultan en los presupuestos de ambas Corporaciones.

1.12. Informe de Comisión de Hacienda

Cámara de Diputados. Fecha 11 de agosto, 2014. Informe de Comisión de Hacienda en Sesión 54. Legislatura 362.

BOLETÍN Nº 9326-07

INFORME DE LA COMISIÓN DE HACIENDA RECAÍDO EN EL PROYECTO DE LEY QUE SUSTITUYE EL SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UNO DE CARÁCTER PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL

HONORABLE CÁMARA:

La Comisión de Hacienda informa el proyecto de ley mencionado en el epígrafe, en cumplimiento del inciso segundo del artículo 17 de la ley N° 18.918, Orgánica Constitucional del Congreso Nacional, y conforme a lo dispuesto en el inciso segundo del artículo 220 del Reglamento de la Corporación.

CONSTANCIAS REGLAMENTARIAS PREVIAS

1.- Origen y urgencia

La iniciativa tuvo su origen en la Cámara de Diputados por un mensaje de S.E. la Presidenta de la República, con urgencia suma.

2.- Artículos que la Comisión Técnica dispuso que fueran conocidas por ésta.

El artículo 2°, numerales 3) y 4) y el artículo 4°. Habida consideración del informe financiero complementario, la Comisión estimó de su competencia los numerales 11), 12) y 14 del artículo 1°, situación que somete a consideración de la Sala según se expondrá más adelante (página 19), conforme con lo dispuesto por oficio N° 11.347, de 1 de julio de 2014, de la Comisión de Régimen Interno Administración y Reglamento.

3.- Disposiciones o indicaciones rechazadas

Se rechazaron, de conformidad con el inciso segundo del artículo 220 del Reglamento, las siguientes indicaciones (página 22):

1) De los diputados (as) señores (as) Provoste, Lorenzini, Ortiz, Flores, Aguiló, Girardi, Sabat, Pascal, Boric, Hernando, Pacheco, Morano, Arriagada, Soto, Vallejo, Fernández, Carvajal, Jackson, Cariola, Molina, Ojeda, Monsalve, Saffirio, Torres, Cicardini, Walker, Vallespín, Sepúlveda, Kast y Melo.

Para agregar el siguiente artículo 4° nuevo al proyecto:

“Artículo 4°: Incorpórase el siguiente inciso primero, nuevo, al artículo 13 de la ley N°20.640 que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, parlamentarios y alcaldes, pasando el actual inciso primero a ser segundo y así sucesivamente:

“Respecto de las primarias que se realicen para elecciones parlamentarias o de alcaldes, cada partido político o pacto, según corresponda, conformará las declaraciones de candidaturas de la respectiva elección primaria sin que ningún sexo supere el 60% de las mismas. En los casos en que solo hubiere 2 o 3 candidaturas, al menos una de ellas deberá ser de sexo distinto a las otras dos”.”.

2) De los (as) diputados (as) señores (as) Kast, Lorenzini, De Mussy, Aguiló, Girardi, Cicardini, Walker, Fernandez y Santana.

Para incorporar un artículo 3° nuevo, pasando el actual artículo 3° a ser 4°, del siguiente tenor:

“Artículo 3°: Modifícase el decreto supremo N°100, de 2005, del Ministerio Secretaría General de la Presidencia, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado de la Constitución Política de la República de Chile, de la manera que a continuación se señala:

1) Agrégase en el artículo 47 el siguiente inciso tercero nuevo:

“Los diputados sólo podrán ser elegidos en el mismo distrito por tres periodos consecutivos”

2) Agrégase en el artículo 49, un nuevo inciso tercero del siguiente tenor:

“Los senadores solo podrán ser elegidos en la misma circunscripción por dos periodos consecutivos.”.

3) Elimínase la frase final del inciso segundo del artículo 51, que señala “Los parlamentarios podrán ser reelegidos en sus cargos.”.”.

3) De los (as) diputados (as) señores (as) Kast, Lorenzini, De Mussy, Aguiló, Girardi, Cicardini, Walker, Fernandez y Santana.

Para incorporar el siguiente artículo transitorio:

“Artículo transitorio.- Las modificaciones establecidas en los numerales 1) y 2) del artículo 3° entrarán en vigencia al momento de su publicación, siendo el período en ejercicio a la fecha de ésta, el primero para efectos de la reelección.”.

4) De los (as) señores (as) Monsalve, Aguiló, Lorenzini, Pascal, Fernández, Schilling y Ortiz.

Para agregar en el artículo 2° del proyecto los números 3), 4), 5) nuevos, pasando los actuales 3) y 4) a ser 6) y 7), respectivamente.

“3) Modifícase el artículo 16 en los siguientes términos:

“Artículo 16.- Todos los aportes de campañas electorales serán públicos, de conformidad con lo que señalan los artículos siguientes.”.

4) Suprímase los artículos 17, 18 y 20.

5) Suprímase en el artículo 21 la frase “Tendrán el carácter de públicos” y agrégase al comienzo de dicho artículo la siguiente frase. “Todos los aportes tendrán el carácter de públicos, especialmente”.”.

5) De los (as) señores (as) Monsalve, Auth, Lorenzini, Schilling, Ortiz, Fernández, Pascal y Aguiló.

Para incorporar en el artículo 2° del proyecto los numerales 2), 3), 4) y 5) nuevos, pasando los actuales numerales 2), 3) y 4) a ser 6), 7) y 8).

“2) Agrégase en el artículo 8° el siguiente inciso primero, pasando el actual inciso primero a ser segundo:

“Sólo podrán efectuar aportes de campaña personas naturales.”.

3) Derógase el artículo 10°.

4) Modifícase el artículo 19 de la siguiente forma:

a) Suprímese la frase “que sea persona natural y”.

b) Suprímese la frase “La destinación de los aportes hechos por personas jurídicas solo podrá hacerse por mandato especial.”.

5) Modifícase el párrafo 4° del Título II de la siguiente forma:

a) Sustitúyese el artículo 24 por el siguiente:

“Artículo 24.- Prohíbense todo tipo de aportes de campaña electoral provenientes de personas jurídicas de derecho privado, nacionales o extranjeras.”.

b) Suprímese el inciso segundo y siguientes del artículo 25.”.

4.- Modificaciones introducidas al texto aprobado por la Comisión Técnica y calificación de normas incorporadas

No hubo.

5.- Disposiciones que no fueron aprobadas por unanimidad

Todas las disposiciones fueron aprobadas por mayoría de votos.

6.- Se designó Diputado Informante al señor Pepe Auth.

Asistieron a la Comisión, durante el estudio del proyecto, las siguientes personas:

• El Presidente de la Cámara de Diputados, diputado señor Aldo Cornejo.

• El Secretario General de la Cámara de Diputados, señor Miguel Landeros,

• El Ministro del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo Peñailillo.

• La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón.

• La Ministra Directora del Servicio Nacional de la Mujer, señora Claudia pascual.

• La Subsecretaria del Ministerio Secretaría General de la Presidencia, señor Patricia Silva.

• El Director de Presupuestos, señor Sergio Granados.

Normas de competencia de la Comisión.

La Comisión de Constitución Legislación y Justicia, dispuso que esta Comisión tomara conocimiento de los numerales 3) y 4) del artículo 2° y del artículo 4° del proyecto (ver página 19).

Propósito de la iniciativa

a) Reducir la desigualdad del voto. Se hace presente en el Mensaje que Chile tenía en 1973 una Cámara de 150 diputados y un Senado de 50 miembros, con mucho menos de la mitad de electores que hoy día. Con esos números, el rediseño de distritos y circunscripciones permitiría reducir de manera muy significativa la desigualdad actual del valor del voto entre ciudadanos de distintos territorios. La propuesta considera, además, que los distritos correspondientes a zonas extremas en el Norte y en el Sur Austral merecen un criterio especial de sobrerrepresentación, más allá de su población electoral, todo ello en razón de propugnar su mayor integración.

b) Permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas. Para lo cual, se reduce el número de distritos y circunscripciones para que se elijan más escaños en cada uno de ellos.

c) Aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos.

Se señala que este objetivo no solo se logra definiendo distritos que elijan un número mayor de diputados, sino que también permitiendo que las listas electorales presenten más candidatos que los que se eligen en cada territorio electoral.

d) Facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías. Se explica que con la conformación de un sistema de distritos y circunscripciones que mayoritariamente eligen un mínimo de tres parlamentarios y en su mayoría cinco a ocho, se propende a que la ventaja de votos de un sector sobre otro se traduzca en ventaja equivalente en la representación parlamentaria. Al mismo tiempo, se asegura que en todos los territorios la minoría tenga también expresión parlamentaria.

e) Promover un Congreso que refleje la diversidad de la sociedad. Se señala en el Mensaje que los distritos que elijan más diputados y listas que puedan presentar más candidatos, permitirán aplicar una ley de cuotas que obligue a las listas a presentar elencos de candidatos con la proporción de mujeres que se determine necesaria para cambiar la desigual representación de género que tiene hoy el Congreso Nacional.

f) Evitar que queden fuera candidatos con grandes votaciones. Se precisa que en distritos que mayoritariamente eligen 5 o más escaños, esto pasa a ser imposible y queda como probabilidad excepcional sólo en un pequeño número de distritos que elije 3 ó 4 escaños.

Síntesis descriptiva del proyecto:

Cuenta con 4 artículos, cuyo contenido general es el siguiente:

- El artículo 1° a través de sus 17 numerales, modifica la ley N°18.700, Orgánica Constitucional de Votaciones Populares y Escrutinios.

- El artículo 2° a través de su 4 numerales, modifica la ley N°19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral.

- El artículo 3° cuenta con 4 numerales que modifican la ley N° 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos.

- Finalmente, el artículo 4° se hace cargo de la incidencia presupuestaria del proyecto, señalando que éste se financiará con cargo a los recursos contemplados en la Ley de Presupuesto para la partida 02 Congreso Nacional y en lo que respecta al artículo 2°, con los recursos que en su oportunidad provea la Ley de Presupuesto respectiva.

En particular, las normas que la Comisión técnica puso en conocimiento de ésta establecen:

Artículo 2°.-

- N°3) agrega un nuevo artículo 2° transitorio a la ley N°19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, asignando un monto de 500 UF para el partido político al que pertenezca la candidata mujer a diputada o senadora, proclamada electa por el Tribunal Electoral.

- N° 4) agrega un nuevo artículo 3° transitorio a la ley N°19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, creando el derecho a reembolso adicional con cargo fiscal, de gastos electorales a las candidatas a diputadas y senadoras de 0,0100 UF por cada voto obtenido.

Ambos numerales se aplicarán en las elecciones de los años 2017, 2021, 2025 y 2029.

Artículo 4°.-

Señala que los gastos que genere el proyecto serán financiados con cargo a los recursos contemplados en la Ley de Presupuestos para la partida 02 Congreso Nacional y en lo que respecta al artículo 2°, con los recursos que en su oportunidad provea la Ley de Presupuestos respectiva.

Incidencia en materia presupuestaria y financiera

El informe financiero, de 23 de abril de 2014, que se acompañó al momento de la presentación del proyecto, establece:

I.- Antecedentes

El proyecto de ley tiene por objeto sustituir el actual sistema electoral Binominal por un sistema electoral Proporcional, con la finalidad de fortalecer la representatividad en el Congreso Nacional y de esa forma posibilitar el ingreso a dicha Institución de las corrientes más significativas de la sociedad. Para lo anterior, se propone reducir el número de distritos y circunscripciones para que se elijan más escaños en cada uno de ellos, favoreciendo el ingreso al Parlamento de sectores de menor votación pero suficientemente significativos de la sociedad.

La propuesta, implica modificar la ley N° 18.700 Orgánica Constitucional de Votaciones Populares y Escrutinios, aumentando el número de Senadores y Diputados.

Junto a lo anterior, se incluye un artículo que modifica la ley N° 19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, para dar vida a la propuesta de reembolsar a los partidos políticos, por cada mujer electa como Diputada y Senadora, con UF 500 a partir de las elecciones de! año 2017.

II.- Efecto del Proyecto sobre los Gastos Fiscales

Asevera que el presente proyecto de ley no irrogará un mayor gasto fiscal en lo que respecta a la composición del Parlamento.

No obstante, existirá un mayor gasto por lo dispuesto en el artículo 2°, que a modo ilustrativo considerando las mujeres electas como Parlamentarias en el último proceso eleccionario, habría significado un mayor gasto de UF 10.500 (M$ 250.000 aproximadamente), de haberse aplicado esta norma.

El presente proyecto de ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la Ley de Presupuestos, para la partida 02 Congreso Nacional y en lo que respecta a lo dispuesto en el artículo 2°, se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la respectiva Ley de Presupuestos.

El informe financiero complementario (15.07.14) señala:

Que se adjunta a indicación que agrega un artículo segundo transitorio nuevo, pasando el entonces artículo transitorio único a ser primero transitorio. En este nuevo artículo se establece que, para los efectos de las elecciones parlamentarias de los años 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las candidatas electas a Diputadas y Senadoras, los partidos políticos a que ellas pertenecieren tendrán derecho a un monto de UF 500, por cada una de ellas. Se señala que esta indicación no irroga gasto fiscal adicional a lo informado en el informe financiero de 23 de abril del año en curso.

El informe financiero complementario (23.07.14) señala:

Que acompaña a indicación agrega el literal d) al artículo 2° del Proyecto, con un texto que agrega un nuevo artículo tercero transitorio.

Este artículo tercero transitorio establece que, para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a Senadoras y Diputadas, tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, equivalente a 0,01 unidades de fomento, por cada voto obtenido por cada candidata a Senadora o Diputada.

La actual indicación irrogará un gasto adicional respecto a lo informado en el IF N° 41 de 23 de abril pasado, equivalente a 0,01 UF multiplicada por el número de votos que obtengan las candidatas en las elecciones correspondientes. A modo ilustrativo, considerando el número de candidatas a parlamentarias en el último proceso eleccionario, la aplicación de esta norma habría significado un gasto de UF 20.557.

Dicho mayor gasto será financiado con cargo a los recursos que se provean en la Ley de Presupuestos del año respectivo.

El informe complementario (04.08.14) presentado a la Comisión de Hacienda, señala:

El proyecto de ley sustituye el artículo 180 de la Ley N° 18.700, disponiendo que el Senado se compondrá de 50 Senadores, aumentando en 12 los cupos de Senadores que se incorporarán al Parlamento, como resultado de la nueva configuración de las circunscripciones senatoriales y la cantidad que se elegirá en cada una de ellas.

En el año 2018, se incorporarán los primeros 5 senadores y en 2022 los restantes 7 senadores.

Por efecto de lo dispuesto en el artículo 62 de la Constitución Política de la República, existirá un mayor desembolso por concepto de Dieta Parlamentaria, estimándose en M$ 430.274 para el año 2018 y en régimen para el año 2019 la suma de M$ 516.329. Para el año 2022, el gasto se incrementaría en M$ 602.383 y para el año 2023, el gasto adicional en régimen se estima en M$ 722.860.

Por otra parte, al sustituirse los artículos 178 y 179 de la ley N° 18.700, se dispone que la composición de la Cámara de Diputados estará integrada por 155 Diputados, aumentando en 35 los actuales cupos de Diputados, derivado de la configuración de los distritos electorales y la cantidad que se elegirá en cada uno de ellos, los cuales se incorporarán en el año 2018.

Por efecto de lo dispuesto en el artículo 62 de la Constitución Política de la República, existirá un mayor desembolso por concepto de Dieta Parlamentaria, estimándose en M$ 3.011.917 para el año 2018 y en régimen para el año 2019 la suma de M$ 3.614.300.

El siguiente cuadro muestra los desembolsos increméntales por concepto de Dietas, que se generan en los años respectivos:

En virtud del acuerdo político, de no incurrir en un mayor gasto fiscal por estos conceptos, será necesario efectuar los ajustes para adecuar los presupuestos de ambas corporaciones a los nuevos requerimientos, en consonancia con lo previsto en el artículo 68 de la ley N° 19.918 Orgánica Constitucional del Congreso Nacional. Consecuentemente, será necesario que el Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias incorpore a contar del año 2018 estas adecuaciones en sus futuras Resoluciones.

Adicionalmente, por lo dispuesto en el artículo segundo transitorio y la incorporación del literal d) al artículo 2°, de la Ley N° 19.884, se estima para el año 2018, sobre la base del último proceso eleccionario, un mayor gasto fiscal de UF 31.057, recursos que se proveerán en la Ley de Presupuestos respectiva.

Finalmente, la nueva composición del Parlamento generará gastos de habilitación e infraestructura, por una vez, los que se pueden financiar con los recursos que anualmente se consultan en los presupuestos de ambas Corporaciones.

Debate de las normas sometidas a la consideración de la Comisión.

- Señor Rodrigo Peñailillo, Ministro del Interior y Seguridad Pública.

Expresó que se propone un sistema proporcional moderado y que son seis los objetivos que este busca: reducir la desigualdad del voto; permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas; aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos; facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías; promover un Congreso que refleje la diversidad de la sociedad y evitar que queden fuera candidatos con grandes votaciones.

Explicó que se propone respecto del Senado, La Cámara Alta elegirá 50 senadores y cada región pasará a ser una sola circunscripción. Cinco de las regiones mantienen el número actual de 2 senadores a elegir, mientras las otras 10 lo aumentan.

Respecto de la Cámara de Diputados, señaló que se propone una Corporación integrada por 155 miembros, para lo cual el territorio nacional se divide en distritos plurinominales que eligen un número variable de diputados que se determina en atención al número de electores, propendiendo al mayor logro posible del principio de igualdad de voto, teniendo presente, teniendo presente las siguientes consideraciones: la extensión territorial de los distritos no excederá los márgenes de una Región; los nuevos distritos se constituyen a partir de la agregación de distritos hoy existentes y la asignación del número de escaños no reducirá, en términos absolutos, la representación que tienen hoy los distintos territorios.

En concreto, la propuesta establece un total de 28 distritos que eligen entre 3 y 8 diputados cada uno (con un promedio de 5.53). Debo indicar que esta distribución inscribe la fórmula que se propone en el terreno de los sistemas proporcionales moderados o atenuados.

Enfatizó que obviamente crear escaños tiene un costo pero que no irroga mayor gasto fiscal y puede hacerse con cargos a los recursos de ambas corporaciones, no es un costo actual sino diferido al año 2018 y 2022, de acuerdo al calendario en que se irán complementando los nuevos escaños. Acotó que estos costos que se pueden asumir haciendo con tiempo los ahorros y ajustes necesarios.

Agregó que por gasto por concepto de dieta parlamentaria, en ocho años más cuando esté en plena vigencia (2022) el costo total será 4.800 millones de pesos, sin perjuicio de los incentivos y reembolsos que se establecen en el proyecto para las candidatas mujeres.

Manifestó que se este proyecto es una reforma necesaria para el país: mejora la calidad de la democracia, otorga mayor legitimidad al sistema y generar canales de participación política. Agregó que a partir de ahora y en un plazo de 3 años el Congreso podrá analizar y decidir de manera autónoma las modalidades de ahorro y las reasignaciones presupuestarias para hacer frente a estos cambios a partir del año 2018.

Recalcó que tiene la más alta consideración por el Parlamento, parlamentarios y la función parlamentaria y manifestó desde la perspectiva del financiamiento de esta reforma, la disposición del Gobierno para trabajar en conjunto y colaborar en esta tarea y la calidad el trabajo parlamentario en las nuevas condiciones del sistema político electoral.

Acotó que el Ejecutivo no puede asegurar cómo se administrarán o redistribuirán los recursos a futuro, en base a la independencia del Poder Legislativo, consagrada en el artículo 68 de la Ley Orgánica del Congreso Nacional.

Expresó que hay consenso ampliado para cambiar el sistema y mejorar el sistema electoral y que hoy se cumple con el programa de Gobierno.

- Señora Ximena Rincón, Ministra Secretaria General de la Presidencia.

Manifestó que es una reforma que es parte de los compromisos de Gobierno y que tiene como sustento por una parte, el cambio al sistema electoral y por otra, al sistema de representación. Agregó que no solo se efectúa mediante la opción de presentar más candidatos sino también mediante incentivos de género. Aclaró que la reforma apunta en dicho aspecto a garantizar espacios para las mujeres en la competencia y no un escaño.

Hizo presente sus deseos en orden en orden a que las modificaciones del proyecto, con el debate parlamentario, sean aprobadas también en la Comisión de Hacienda.

- Señora Claudia Pascal, Ministra Directora del Servicio Nacional de la Mujer.

Expresó la necesidad de avanzar en el proyecto en estudio y precisó que en este se incorporó el criterio de paridad de género o cuota, mediante el incentivo a los partidos cuyas candidatas mujeres resulten electas; como asimismo, un reembolso adicional por gasto electoral para las candidatas, sean o no electas. Especificó que ambos beneficios tienen un carácter transitorio para las próximas 4 elecciones, en el entendido que la cuota de género tiene como propósito corregir la situación desigual inicial, en la que operan fuertes e invisibles barreras de entrada para la mayor representación de mujeres en el Parlamento. El incentivo financiero se entiende como una medida que promueve la presentación de candidatas en territorios donde efectivamente tengan reales posibilidades de ser electas, por lo tanto, el incentivo es al resultado y no a la mera candidatura.

Como antecedente, respecto de la correlación que tiene esta propuesta de reforma electoral, a propósito de medidas y avances sugeridos y de otros países, destacó la resolución de las Naciones Unidas 66/130 para la promoción de la mujer y su participación en la política.

- Señor Sergio Granados, Director de Presupuestos.

Procedió a destacar las cifras que constan en el informe financiero y que constan en el presente informe.

El señor Mönckeberg expresó respecto del informe financiero que la ley lo exige como requisito para la tramitación de un proyecto de ley y manifestó respecto del presentado, que se trata más bien de una hoja de cálculo y que el único índice preciso que se señala es respecto del punto cuarto, en el incentivo al género. Manifestó que respecto del mayor gasto en dietas parlamentarias no se precisa la fuente de financiamiento y expresó que ningún acuerdo político puede pasar por sobre la Constitución y pidió seriedad para realizar los cambios propuestos.

El señor Melero manifestó que Chile no necesita nuevos parlamentarios, y no le parece que el Ejecutivo le traspase la responsabilidad de la modificación al Congreso. Solicitó al Ministro los antecedentes e informes en que basa su afirmación, en orden a que ambas corporaciones se hagan cargo del mayor gasto del proyecto. Citó los artículos 17 de la Ley Orgánica del Congreso Nacional y el artículo 220 del Reglamento de la Corporación, en cuanto a los requisitos que deben cumplir los proyectos de ley que irroguen gasto fiscal.

El señor Aguiló expresó que es un orgullo para los presentes que se haya cumplido con tanta prontitud y capacidad al enviar un proyecto de ley que la sociedad chilena hace 25 años reclama. Agregó que hay el partido más subisdiado por el sistema binominal es la UDI y enfatizó que fueron precisamente los partidos de la Nueva Mayoría los que solicitaron que esta reforma no implique mayores gastos, precisamente porque ha sido el Congreso la institución que más aumentos ha experimentado en su presupuesto en los últimos años.

El Señor Santana expresó que es una historia repetida y que lo mismo pasó con la reforma tributaria y probablemente el proyecto se arregle en el Senado. Recalcó la importancia de discutir con un informe financiero claro y preciso, con fundamentación técnica. Solicitó al Presidente de la Comisión, suspender el debate mientras no se cuente con las cifras precisas respecto de los costos del proyecto.

El señor Andrade, expresó que se trata de una discusión paradojal, ya que una coalición que ha ganado en las urnas cambia el sistema en el que resultó electo. Expresó que honra que se proponga una modificación de esta naturaleza, ya que aquí (en el proyecto) también se lucha contra la desigualdad, la desigualdad de los votos de los ciudadanos. Agregó que es de toda lógica que el Congreso se haga cargo del problema de legitimidad y que asuma el costo: la discusión debe centrarse en la voluntad del parlamento en hacer el esfuerzo para relegitimar su propio prestigio.

El señor Auth expresó que el Gobierno identifica los costos y traspasa la decisión de asumir el costo por parte de una determinada entidad. Las asignaciones no son otra cosa que la distribución que hace el Consejo de Asignaciones Parlamentarias de los fondos disponibles y tales fondos serán tanto como es posible para el parlamento. El único costo de este proyecto, es la dieta parlamentaria que en régimen que equivale a un 4,9% de presupuesto de Congreso. Si hay convicción de cambio, hacerse cargo de esto con reasignaciones para él al menos es razonable. Finalmente planteó cuáles son los supuestos del incentivo ya que declaró preferir supuestos en base al éxito del incentivo (en materia de cuota de género).

El señor Silva manifestó que en la UDI se tiene la convicción que este proyecto no mejora la representación. Planteó que con el aumento de parlamentarios y en el esquema planteado estiman que no habrá mayor calidad de la representación o que se vaya a legislar mejor. Hoy se debate el financiamiento, valoró que se reconozca por el Gobierno que el proyecto tiene costo fiscal y lo que queda por dilucidar es cómo se asumirán esos costos. Solicitó informes: al Presidente de la Corporación sobre los ítems que serán reasignados dentro del presupuesto de la Cámara en razón del proyecto; a la Biblioteca del Congreso Nacional para que emita un estudio sobre los informes financieros, e indagar en cuántos de ellos se hizo referencia a un acuerdo político; a la Biblioteca del Congreso Nacional para que informe sobre las responsabilidades del Director de presupuestos por no indicar los costos y no señalarlos en el informe financiero; a los ministerios y subsecretarías para que informen sobre los gastos en asesorías; a la Biblioteca del Congreso Nacional, un estudio de los informes financieros, en los proyectos donde se aumentaban los cargos al interior del Poder Judicial y finalmente, solicitó copia del acuerdo político al que se hace referencia en el informe financiero del proyecto en estudio. Ninguno de las referidas solicitudes de información se aprobó por parte de los integrantes de la Comisión.

El señor Ortiz, hizo presente que en el informe de Constitución queda claro que la UDI no quiere la reforma. Expresó que en el sistema actual no se demuestra el valor del voto de los ciudadanos. Enfatizó que las fuerzas políticas deben estar representadas en el Congreso Nacional y se declaró partidario de cambiar el binominal por uno proporcional.

El señor Melero aclaró, ante los dichos de otros parlamentarios sobre la voluntad de la Alianza para cambiar el binominal, que ellos están disponibles para efectuar los cambios, pero no de la forma en que como se plantea, esto es, con más parlamentarios y más recursos.

Por su parte, el señor Ortiz señaló que en la Comisión Técnica (Comisión de Constitución, Legislación y Justicia) se volvió a fojas cero en relación con las cuotas de género durante elecciones primarias y manifestó su intención de incluirlo en el debate. Anunció que existe una indicación transversal para ser incorporada durante la sesión.

El señor Monsalve, reiteró que la postura de los diputados de la Nueva Mayoría es que el parlamento enfrente la crisis de legitimidad de la política haciendo cambios al sistema político. Agregó que la ciudadanía no solo solicita reformas, sino también austeridad y la pregunta que hoy se plantea es si el Parlamento está dispuesto a asumir los costos de esta reforma. Anunció una indicación que va en la dirección del proyecto, en orden a transparentar los aportes de las campañas: que éstos sean públicos y terminar con el financiamiento por parte de empresas.

El señor Macaya aclaró que sí tienen la voluntad de avanzar en el cambio al sistema, pero lo que no pueden admitir es lo que se está diciendo a los chilenos respecto de la institucionalidad: lo que se ha realizado en cuanto al gasto en el parlamento en los últimos 24 años. Enfatizó que sí tendrá costo fiscal, independiente de quien lo asuma. Manifestó su preocupación sobre la utilización o mala utilización de los recursos y fondos del Parlamento en todo este tiempo. Explicó que es esa señal la que le preocupa: una falacia publicitaria de asignaciones mal empleadas o uso indebido, ya que es desprestigiar el rol del Congreso. Expresó, que están convencidos (diputados de regiones) que el único contrapeso al poder centralista de la Región Metropolitana es la mayor representación del resto del país y en igualdad de condiciones. Recalcó que el proyecto es excesivamente centralista y redundará en la pérdida de cercanía con los electores ya que existirán distritos imposibles de abarcar, ello sin considerar la reducción de recursos que contempla el proyecto.

- Señor Aldo Cornejo, Presidente de la Cámara de Diputados.

Señaló que es complejo o casi imposible desdoblarse de su condición de Presidente y la de parlamentario de Gobierno, por lo que tiene una opinión política y legislativa del proyecto. Solicitó, a propósito de la intervención del diputado Macaya, tener un debate en serio sobre el Congreso Nacional y de las instituciones que forman parte del sistema democrático.

Agregó que uno de los argumentos que se han esbozado en relación con los recursos del proyecto y los costos que debería asumir la Corporación para afrontar el mayor número de parlamentarios, es que dicha premisa podría constituir una suerte de menoscabo de la independencia o autonomía del Congreso Nacional. Recordó que la autonomía del Congreso Nacional corresponde a una vieja discusión que surge desde el nacimiento de la figura del parlamento en la Edad Media, el que como todos saben, surge para crear un contrapeso al poder del rey. Acotó que esta discusión no tiene perfiles acabados y responde a la dinámica histórica de las democracias que conocemos, antecedente del que no escapa nuestro país.

Dijo que si hiciera una comparación del nivel de autonomía e independencia del Congreso Nacional, previo al golpe de Estado del año 73 y lo que ha sido bajo el imperio de la Constitución del año 80 a la fecha y sin perjuicio de las reformas del año 2005, se puede decir que este Parlamento ciertamente ha perdido: recordó que jamás se recuperó la iniciativa en materia presupuestaria y que no se contaba con un supra poder como el Tribunal Constitucional que resulta una suerte de Cámara revisora de las decisiones autónomas y soberanas del Congreso. Agregó que tampoco hoy el Parlamento tiene un rol en el nombramiento de generales de las Fuerzas Armadas y embajadores. Concluyó que en la historia constitucional chilena no ha habido una constitución más presidencialista que la actualmente vigente y aspira que en el momento oportuno, cuando se discuta una nueva Constitución, se cuente con la prudencia y la altura de miras para decidir el Parlamento y democracia que queremos construir y donde efectivamente haya un contrapeso al Poder Ejecutivo, independiente de su color político.

Luego, respecto del costo del proyecto, en cuanto a que constituiría un menoscabo de la autonomía financiera, expresó que es un debate en curso y que dicha autonomía fue perdida hace un rato. Recordó que fue la propia Corporación la que equivocadamente (equivocación que él declaró asumir en lo que le corresponde), enajenó legislativamente hablando, sus atribuciones para determinar el monto de las asignaciones parlamentarias a un organismo autónomo –el Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias- respecto del que, aún cuando sus miembros son nombrados por el Congreso, los fondos para el ejercicio de la función parlamentaria, están por él determinados, escuchando solamente a las comisiones de Régimen Interno de cada corporación para tales efectos.

En razón de lo expuesto, expresó no estar de acuerdo con la idea de que porque el Poder Ejecutivo les señale en un Mensaje que deban financiar el mayor costo, con cargo a sus propios recursos, preferiría, en ese caso, avanzar en la discusión de la autonomía financiera de un poder el Estado, autonomía, que al tenor de la experiencia dejada por la historia previa al año 73, debe ejercerse de forma responsable y prudente y sin interferir en la labor de administrar los recursos del Estado que le corresponde al Ministerio de Hacienda.

Respecto del costo financiero, manifestó que le parece, a partir de la propuesta del Ejecutivo sobre la reasignación de recursos, que una alternativa es, a partir de las cantidades que se destinan para financiar los gastos de la actividad parlamentaria se pudiera dividir ese monto total entre todos (incluidos los parlamentarios nuevos).

Agregó que esta reasignación tiene aristas en las que se debe buscar el equilibrio. Expresó que a la brevedad debe constituirse un grupo que haga un estudio o informe sobre la forma en que la Cámara pueda abordar con rigor un plan de racionalización de sus gastos y enfatizó al diputado Macaya, que no implica estar disponible para decir que el resto de las presidencias hicieron mala gestión de los recursos y recalcó que tiene la mejor opinión de todos quienes han ejercido el cargo de Presidente (a) de la Corporación.

Manifestó que respecto del sistema electoral cada cual puede tener la opinión que quiera y no hay dogma sobre el particular, pero no le parece responsable que por una discrepancia política se termine afectado la legitimidad y “prestigio” de la Corporación, recalcó que está disponible para estudiar fórmulas de racionalizar recursos y que ello no implica un reconocimiento de la dilapidación de recursos en el ejercicio de las labores del Congreso.

Recordó que cuando se incorporó la normativa que creó el Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias, se reconoció por primera vez en nuestra historia político-constitucional la labor de representación inherente al cargo parlamentario. Agregó que él está disponible para que en el momento oportuno, con la seriedad y altura de miras que se requiera, respetar y hacer cumplir lo preceptuado en el Reglamento de la Corporación, esto es, que ningún proyecto de ley afecte o puedan menoscabar el ejercicio cabal y oportuno de funciones de los diputados, bajo este Gobierno o el que le siga.

Finalmente, recordó lo señalado por el Ministro del Interior en la sesión pasada, en orden a que tiene la más alta consideración y estima por el Parlamento y la labor parlamentaria y la disposición del Ejecutivo para trabajar en conjunto y colaborar en esta tarea y la calidad el trabajo parlamentario en las nuevas condiciones del sistema político electoral, él no se siente menoscabado por el esfuerzo riguroso y serio que se plantea en el proyecto y solicitó considerar la fórmula que sugirió.

Solicitó se diera la palabra al Secretario General de la Corporación para que ilustrara a la Comisión sobre las cifras y presupuesto de la Cámara de Diputados.

- Señor Miguel Landeros, Secretario General de la Cámara de Diputados.

En primer lugar, recordó a los integrantes de la Comisión la forma cómo se aprueban los gastos del Congreso Nacional y particularmente, de la Cámara de Diputados. Explicó que el gasto considerado en el presupuesto vigente y en materia de dietas parlamentarias corresponde a $12.391.886.881, y en materia de asignaciones al de $ 21.179.006.912, (ambas cifras anuales). Precisó que esta última se desglosa en varios ítems.

Hizo presente que el artículo 62 de la Constitución Política de la República, establece la dieta parlamentaria y que asciende al monto de $8.605.477, por diputado (valores brutos). Precisó que la dieta está establecida en función de la remuneración de un ministro de Estado, por lo que en la medida que el sueldo de aquél no varíe, no variará tampoco la dieta. La ley de reajuste del sector público se establece su valor y este corresponde al grado A de la escala de remuneraciones del sector público: precisamente por este aspecto y por ser de origen constitucional es que es complejo modificar este ítem por la vía legal.

En cuanto a las consecuencias del proyecto en este ítem, señaló que tendrá un costo de $2.905.042.478 al año 2018 y de $3.614.300.461 al 2019. Es imposible obviar en la ley de presupuestos respectiva, ya que hay gastos establecidos en leyes permanentes que no se puede obviar.

Explicó que, en cambio las asignaciones parlamentarias son variables. En el año 2011 el Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias estableció los montos para cada ítem y precisó que de mantenerse el nivel actual, el gasto total involucrado ascendería a $7.713.682.634 en 2018 y a $ 9.596.956.320, en 2019, cifras que suponen los montos actuales. Acotó que podría suceder que durante la discusión de la Ley de Presupuestos de este año los parlamentarios pueden reducirlas y en base a dicha rebaja, en diciembre el Consejo haga los ajustes procedentes.

Finalmente recordó que la Ley de Presupuestos contempla para la Cámara de Diputados la cifra de 58.504.000 millones, cifra que fue incrementada por efecto del reajuste aprobado durante el mes de mayo y por la ley de incentivo al retiro.

El señor De Mussy manifestó que desde la calle no se entiende, ya que nadie cree que esto mejorará la política, hizo un llamado a hacer un debate en serio y planteó la factibilidad de dividir los distritos para que sean efectivamente representativos y enfocar el debate en la forma de realizar el trabajo parlamentario. Anunció una indicación para limitar la reelección de parlamentarios. Preguntó al señor Landeros (Secretario General de la Corporación) si es que efectivamente y legalmente esto se puede financiar mediante la reasignación de los dineros internos. Expresó que ha sido una discusión sucia y poco transparente. Hizo reserva de constitucionalidad y solicitó que se le quitara la urgencia al proyecto para sincerar el debate y propuso, en caso de ser factible si se pueden hacer ahorros, que se hagan desde ya y no esperar hasta el 2018.

El señor Jaramillo expresó su malestar por las palabras del Diputado De Mussy cuando y recalcó que se trata de un cambio profundo en la historia del país, se quiere sinceridad y representación plena de la ciudadanía y manifestó su disposición para buscar las alternativas que se requieran.

El señor Lorenzini (Presidente de la Comisión) expresó que al tenor de las respuestas dadas por los invitados el financiamiento está resuelto: se redistribuirán los fondos ya que las dietas parlamentarias no pueden bajarse ya que estas son un símil a la remuneración de un ministro de Estado. Enfatizó que la discusión de los recursos y fondos para los nuevos diputados se discutirá en el presupuesto para el año 2018, el tema que hoy les convoca es simplemente si a partir del 2018 habrá más parlamentarios y mayor representatividad de la mujer en el Congreso y si hoy se acaba con el sistema binominal.

El señor Walker felicitó al Presidente de la Corporación por su exposición.

A continuación, lamentó el nivel del debate y de populismo y el afán de ensuciar las instituciones democráticas que tanto costó recuperar y particularmente las expresiones de los diputados señores Macaya y De Mussy. Explicó que en el debate se debe distinguir las dietas, las asignaciones y los gastos. Las dietas están fijadas por la Constitución y lo que hace el informe financiero en este punto es simplemente multiplicar el número de parlamentarios por el monto de la dieta. Agregó que no es materia de esta Comisión pronunciarse sobre el aumento o rebaja de aquella. Respecto de las Asignaciones Parlamentarias recordó que hace seis años éstas son determinadas por un órgano externo e independiente que señala el monto necesario para cumplir las funciones del cargo parlamentario (legislativas, fiscalizadoras y de representación). Finalmente, respecto de los otros gastos que genera la reforma, será el Congreso del año 2017 para el ejercicio presupuestario del 2018 que determinará los recursos que sean necesarios para ello. Hizo presente que esta Corporación ya aprobó un proyecto de ley que actualmente está en el Senado, para limitar la reelección de parlamentarios.

El señor Lorenzini (Presidente de la Comisión) citando el artículo 67 de la Ley Orgánica del Congreso Nacional, explicó que es la Ley de Presupuestos la que debe consultar los fondos necesarios para el funcionamiento del Congreso.

El señor Aldo Cornejo, Presidente de la Cámara de Diputados manifestó que la discusión sobre los gastos del Congreso o de la Cámara de Diputados se determina en la Comisión de Régimen Interno y a la Comisión de Hacienda le corresponde pronunciarse en la tramitación de la Ley de Presupuestos.

El señor Santana consultó cómo se va a financiar el aumento de parlamentarios y explicó que Renovación Nacional está disponible para democratizar este país, pero no para hacerse parte de un proyecto donde un ítem importante no se transparente, explicó que en el informe financiero se aplica una regla de tres y no hay un análisis serio en él, porque se debe aclarar cómo se hará el gasto. Agregó que el señor Cornejo (Presidente de la Corporación) no entregó cifras exactas de cómo se hará la reasignación. Por su parte, el Gobierno ha dicho tácitamente que hay recursos que se malgastan y le traspasa la responsabilidad al Congreso para que se distribuyan acá. Finalmente solicitó que si es ese modo de proceder, que la racionalización de los recursos sea a partir de enero de 2015.

El señor Mönckeberg expresó que el informe financiero tiene un solo objetivo: señalar la fuente de financiamiento de este proyecto. Agregó que en la Cámara de Diputados los gastos son dietas y asignaciones y todo lo de dieta, sí debe implicar un aumento en la Ley de presupuestos porque no se puede hacer por asignación y solicitó que el informe financiero se corrija en tal sentido o se de una explicación. Respecto de las asignaciones, el Presidente de la Cámara sugirió una comisión para que analice cómo se hará esa redistribución lo que significa que hoy el proyecto se votará sin tener todos los antecedentes necesarios. Expresó que lo único que quiere evitar, porque, recalcó, no tener cara para mirar a los chilenos el 2017 y decir que esta reforma sí requerirá más recursos. Finalmente, expresó que acá no se hace populismo o demagogia pero si se habla de austeridad, qué sentido retrasarla y solicitó se aplique desde ahora.

El señor Melero manifestó, al tenor de lo explicado por el Secretario de la Cámara que por concepto de dieta en el año 2108 se requeriría un aumento, a continuación lo citó: “imposible obviarlo en la ley de presupuestos”. Agregó que el tratamiento de la dieta es distinto y preguntó al Ministro del Interior, si en la elaboración de la Ley de Presupuestos 2017 se considerará ese aumento. Manifestó que el informe financiero hace referencia a un acuerdo político que afirmó conocer y en el que no se menciona lo de no incurrir en mayor gastos fiscal. Hizo reserva de Constitucionalidad en virtud del artículo 67 inciso cuarto de la Constitución Política de la República, ya que no se señala la fuente de los recursos para atender el gasto que irroga el proyecto.

El señor Auth hizo presente que hasta hace poco la UDI y otros con menos convicción se opusieron al cambio del binominal. Que antes el reparo era la estabilidad que brindaba el sistema, hoy en cambio son las cifras. Explicó que la diferencia está en que si dicho gasto se solventará con los mismos recursos. Consultó durante su exposición el texto a través del cual el ex Presidente del Senado (señor Escalona) en razón de la eliminación del cargo de senadores designados, sugirió al Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias una alternativa para reasignar los recursos adicionales en el personal y los senadores. Queda claro que las asignaciones parlamentarias son en función estricta del presupuesto disponible para ambas corporaciones y consultó al Secretario General de la Corporación si el Consejo ha de definir en base al presupuesto disponible el monto de las asignaciones.

El señor De Mussy consultó al Secretario General si es factible legalmente que del propio presupuesto de la Cámara de Diputados se puedan pagar las dietas; las formas en que se pueden ahorrar recursos y qué ítems son los que serían reasignados.

El señor Aguiló expresó que según lo señalado por el Secretario General, el presupuesto asciende y a partir de la instalación de la nueva cámara, se tendrá un 6,3% en materia de dietas. Concluyó que si se congelara el reajuste de las dietas, se lograría el incremento que se requiere.

El señor Kast, don Felipe, manifestó su disposición para avanzar en la modificación al binominal y a su parecer, es una idea que está instalada. Por lo anterior, señaló que no se explica la necesidad de aumentar el número de parlamentarios, pregunta que no se ha transparentado, por qué es necesario de aumentar el número de parlamentarios, siente que está instalada la idea que el binominal se debe cambiar.

El señor Granados, Director de Presupuestos, aclaró que en el informe financiero complementario, la idea del párrafo 4 es reproducir el artículo 3 del mensaje original (hoy 4°) y que es común a todo el proyecto de ley. Respecto de los otros gastos señalados, explicó que están estimados en base a lo ocurrido en la última elección parlamentaria y dejó los antecedentes a disposición de la Comisión.

El señor Peñailillo, Ministro del Interior y Seguridad Pública, expresó que hoy se propone modificar un sistema electoral que ha subsidiado a las minorías. Se busca poner término a esto, lo que dignifica la política y permite que el Parlamento tenga la representatividad que se requiere en una sociedad que también ha cambiado y que tiene nuevas fuerzas y nuevas demandas. Expresó que ha llegado la hora de hacerse cargo, reasignando los recursos y en tal sentido, expresó su disposición para el debate que deba efectuarse en su oportunidad.

El señor Landeros, Secretario General de la Cámara de Diputados, explicó que los ajustes no se hacen hoy porque está vigente hasta marzo de 2018 el acuerdo N°1 del Consejo de Asignaciones, que fija sus montos y él como Secretario de la Cámara, tiene comprometida su palabra y tiene una obligación de cumplir. Aclaró que no sobra el dinero y recordó que bajo las presidencias tanto del Diputado Melero como Mönckeberg se hicieron muchos esfuerzos de ahorro. El ahorro no se puede poner en un fondo aparte ya que va al saldo final de caja. Recordó que existe la Comisión Revisora de Cuentas que es la contralora interna de los gastos y el Comité de Auditorías Parlamentarias. Explicó que hay muchos ítems en que se pueden hacer ahorros, así por ejemplo durante la presidencia del Diputado Mönckeberg, don Nicolás se redujo los viáticos al extranjero. La forma es una decisión política y por ende es muy difícil estimar los costos involucrados de aquí al 2017 tanto en dietas y en asignaciones.

Agregó que lo que sí se puede hacer si es que así lo deciden políticamente, para hacer una compensación de gastos internos, hoy la única opción de hacerlo es a través del reajuste de las asignaciones parlamentarias y puede ser la vía rápida o lenta. La primera: decidir no reajustar las asignaciones a partir del año 2015. La segunda: que al año 2017 se haga la rebaja por este concepto y que en base a valores actuales sería de $3.500.000 por parlamentario.

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Artículos sometidos al conocimiento de la Comisión:

Las normas que la Comisión técnica consideró de la competencia de esta Comisión son los numerales 3) y 4) del artículo 2° y el artículo 4°.

Otros artículos de competencia de la Comisión:

Habida consideración del tercer informe complementario, de fecha 4 de agosto de 2014, que especifica los incrementos en gastos que significará para el Congreso Nacional el aumento en el número de parlamentarios, es que la Comisión estimó que también se encuentran dentro de su competencia los numerales 11), 12) y 14) del artículo 1° del proyecto, los cuales determinan el aumento en 35 diputados y en 12 senadores, el número total de parlamentarios del Congreso Nacional, lo cual tiene, conforme con el citado informe financiero, incidencia en materia presupuestaria y financiera, habida consideración de los dispuesto en el artículo 62 de la Carta Fundamental.

Es por ello que, conforme con lo dispuesto en el oficio N° 11.347 (1 de julio de 2014) de la Comisión de Régimen Interno, Administración y Reglamento, es que somete, en lo pertinente, al superior criterio de la Sala esta decisión, haciendo presente la imposibilidad de suspender la tramitación de un proyecto con urgencia suma para seguir en forma precisa lo señalado en el referido oficio.

VOTACIÓN

Indicaciones

Se presentaron indicaciones, todas ellas incorporando disposiciones nuevas, del siguiente tenor:

1) De los diputados (as) señores (as) Provoste, Lorenzini, Ortiz, Flores, Aguiló, Girardi, Sabat, Pascal, Boric, Hernando, Pacheco, Morano, Arriagada, Soto, Vallejo, Fernández, Carvajal, Jackson, Cariola, Molina, Ojeda, Monsalve, Saffirio, Torres, Cicardini, Walker, Vallespín, Sepúlveda, Kast y Melo.

Para agregar el siguiente artículo 4° nuevo al proyecto:

“Artículo 4°: Incorpórase el siguiente inciso primero, nuevo, al artículo 13 de la ley N°20.640 que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, parlamentarios y alcaldes, pasando el actual inciso primero a ser segundo y así sucesivamente:

“Respecto de las primarias que se realicen para elecciones parlamentarias o de alcaldes, cada partido político o pacto, según corresponda, conformará las declaraciones de candidaturas de la respectiva elección primaria sin que ningún sexo supere el 60% de las mismas. En los casos en que solo hubiere 2 o 3 candidaturas, al menos una de ellas deberá ser de sexo distinto a las otras dos”.”.

La señora Provoste, señaló que es una indicación transversal que busca incorporar es poner un punto sobre la participación de la mujer en política y que hoy está sub representada y que ubican al parlamento chileno dentro de los últimos parlamentos del mundo en cuanto a la participación de mujeres. La incorporación de cuotas al proyecto, busca hacer justicia sobre la debida representación de la mujer en democracia y la equidad de género. Explicó que de aprobarse el texto tal como lo despachó la comisión técnica no se lograría el espíritu que la Presidenta Bachellet señala en el mensaje, que es garantizar que ninguno de los dos sexos tenga más de 60%. En las elecciones primarias quedó excluida la cuota de género y por eso hoy tratan de reincorporarla.

2) De los (as) diputados (as) señores (as) Kast, Lorenzini, De Mussy, Aguiló, Girardi, Cicardini, Walker, Fernandez y Santana.

Para incorporar un artículo 3° nuevo, pasando el actual artículo 3° a ser 4°, del siguiente tenor:

“Artículo 3°: Modifícase el decreto supremo N°100, de 2005, del Ministerio Secretaría General de la Presidencia, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado de la Constitución Política de la República de Chile, de la manera que a continuación se señala:

1) Agrégase en el artículo 47 el siguiente inciso tercero nuevo:

“Los diputados sólo podrán ser elegidos en el mismo distrito por tres periodos consecutivos.”.

2) Agrégase en el artículo 49, un nuevo inciso tercero del siguiente tenor:

“Los senadores solo podrán ser elegidos en la misma circunscripción por dos periodos consecutivos.”.

3) Elimínase la frase final del inciso segundo del artículo 51, que señala “Los parlamentarios podrán ser reelegidos en sus cargos.”.”.

3) De los (as) diputados (as) señores (as) Kast, Lorenzini, De Mussy, Aguiló, Girardi, Cicardini, Walker, Fernandez y Santana.

Para incorporar el siguiente artículo transitorio:

“Artículo transitorio.- Las modificaciones establecidas en los numerales 1) y 2) del artículo 3° entrarán en vigencia al momento de su publicación, siendo el período en ejercicio a la fecha de ésta, el primero para efectos de la reelección.”.

El señor Kast explicó que la indicación propuesta replica el espíritu de tantas mociones que duermen en el Congreso Nacional y limita la reelección de diputados y senadores. Destacó que tiene por objeto permitir la entrada de nuevas fuerzas políticas y evita que la presente reforma sea un traje a la medida de las fuerzas que actualmente están en el Congreso.

4) De los (as) señores (as) Monsalve, Aguiló, Lorenzini, Pascal, Fernández, Schilling y Ortiz.

Para agregar en el artículo 2° del proyecto los números 3), 4), 5) nuevos, pasando los actuales 3) y 4) a ser 6) y 7), respectivamente.

“3) Modifícase el artículo 16 en los siguientes términos:

“Artículo 16.- Todos los aportes de campañas electorales serán públicos, de conformidad con lo que señalan los artículos siguientes.”.

4) Suprímase los artículos 17, 18 y 20.

5) Suprímase en el artículo 21 la frase “Tendrán el carácter de públicos” y agrégase al comienzo de dicho artículo la siguiente frase. “Todos los aportes tendrán el carácter de públicos, especialmente”.”.

5) De los (as) señores (as) Monsalve, Auth, Lorenzini, Schilling, Ortiz, Fernández, Pascal y Aguiló.

Para incorporar en el artículo 2° del proyecto los numerales 2), 3), 4) y 5) nuevos, pasando los actuales numerales 2), 3) y 4) a ser 6), 7) y 8).

“2) Agrégase en el artículo 8° el siguiente inciso primero, pasando el actual inciso primero a ser segundo:

“Sólo podrán efectuar aportes de campaña personas naturales.”.

3) Derógase el artículo 10°.

4) Modifícase el artículo 19 de la siguiente forma:

a) Suprímese la frase “que sea persona natural y”.

b) Suprímese la frase “La destinación de los aportes hechos por personas jurídicas solo podrá hacerse por mandato especial.”.

5) Modifícase el párrafo 4° del Título II de la siguiente forma:

a) Sustitúyese el artículo 24 por el siguiente:

“Artículo 24.- Prohíbense todo tipo de aportes de campaña electoral provenientes de personas jurídicas de derecho privado, nacionales o extranjeras.”.

b) Suprímese el inciso segundo y siguientes del artículo 25.”.

El señor Monsalve explicó que estas indicaciones van orientadas a mejorar la democracia y transparentar los aportes a las campañas, estableciendo por una parte, la publicidad de los aportes, y por otra, eliminar del sistema de financiamiento los aportes de personas jurídicas, las empresas. Solicitó el patrocinio del Ejecutivo para avanzar en este punto.

Rechazo de las indicaciones presentadas

El señor Lorenzini (Presidente de la Comisión) declara, de conformidad con el inciso segundo del artículo 220 del Reglamento de la Corporación, rechazadas regamentariamente la totalidad de las sindicaciones presentadas (números 1, 2, 3, 4 y 5) por cuanto se refieren a disposiciones que no han sido sometidas a la competencia de la Comisión.

(Dicha norma establece que la Comisión de Hacienda conocerá en forma exclusiva de los artículos de los proyectos informados por las comisiones técnicas que tengan incidencia en materias presupuestarias y financieras del Estado, y de sus organismos y empresas. Además, establece que las indicaciones que excedan ese ámbito se tendrán por no formuladas).

La Comisión estimó que los numerales 11), 12) y 14) son de su competencia y los incorporó a la votación. Estas normas son del siguiente tenor:

“Artículo 1°.- Modifícase la ley N°18.700, Orgánica Constitucional de Votaciones Populares y Escrutinios, de la manera que a continuación se señala:

11) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”

12) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.-Los distritos electorales serán los siguientes:

1° distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos; que elegirá 3 diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte; que elegirá 3 diputados.

3° distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal; que elegirá 5 diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen; que elegirá 5 diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela; que elegirá 7 diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué; que elegirá 8 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca; que elegirá 8 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú; que elegirá 8 diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia; que elegirá 7 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín, La Granja; que elegirá 8 diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén; que elegirá 6 diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana; que elegirá 7 diputados.

13° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo; que elegirá 5 diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué , San Pedro y Padre Hurtado; que elegirá 6 diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa; que elegirá 5 diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones; que elegirá 4 diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael; que elegirá 7 diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco; que elegirá 4 diputados.

19° distrito, constituido por las comunas Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ranquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel; que elegirá 5 diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana; que elegirá 8 diputados.

21° distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Alamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Angeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja; que elegirá 5 diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino; que elegirá 4 diputados.

23° distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén; que elegirá 7 diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco; que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas, Los Muermos; que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena; que elegirá 5 diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel; que elegirá 3 diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica; que elegirá 3 diputados.”.

14) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 50 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación.

1a. circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, elegirá 2 senadores.

2a. circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, elegirá 2 senadores.

3a. circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, elegirá 2 senadores.

4a. circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, elegirá 2 senadores.

5a. circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, elegirá 3 senadores.

6a. circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, elegirá 5 senadores

7a. circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, elegirá 7 senadores.

8a. circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, elegirá 3 senadores.

9a. circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, elegirá 5 senadores.

10a. circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, elegirá 5 senadores.

11a. circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, elegirá 5 senadores.

12a. circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, elegirá 2 senadores.

13a. circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, elegirá 3 senadores.

14a. circunscripción, constituida por la XI Región Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, elegirá 2 senadores.

15a. circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, elegirá 2 senadores.”.”.

Sometidos a votación, en forma conjunta, los numerales 11), 12) y 14) del artículo 1°, fueron aprobados por la mayoría de votos favorables de los diputados señores Sergio Aguiló; Pepe Auth; Enrique Jaramillo; Pablo Lorenzini; Manuel Monsalve; José Miguel Ortiz; Raúl Saldívar (por el señor Schilling), y Matías Walker. Votaron en contra los diputados señores Felipe de Mussy; Osvaldo Urrutia (por el señor Macaya); Patricio Melero; Alejandro Santana, y Ernesto Silva.

Fundamentación del voto:

El señor Melero expresó su profunda convicción de que este es un proyecto de ley perjudicial para el Congreso. Chile no necesita más parlamentarios, es una reforma excesiva y realizada a la mano de la mayoría, sólo para beneficiarse y perpetuarse. Destacó que sí irroga gasto y se está vulnerando el artículo 67 de la Constitución Política de la República.

El señor Ortiz destacó que este proyecto representa una aspiración de muchos desde la campaña del No, razón por la cual vota con mucha fuerza a favor.

El señor Walker lamentó el argumento de desestabilización del sistema democrático que se ha invocado por algunos.

El señor Santana expresó que se está en un punto de inflexión: hacerlo de frente a la ciudadanía, por lo anterior, expresó su voto en contra.

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Numerales 3) y 4) del artículo 2°, del siguiente tenor:

“Artículo 2°.- Modificase la ley N°19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, de la manera que a continuación se señala

3) Agrégase el siguiente artículo segundo transitorio, pasando a ser el actual artículo transitorio, único, a ser “Artículo primero transitorio”:

“Artículo segundo transitorio.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y sólo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hubieren sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a que ellas pertenecieren tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento, por cada una de ellas.

Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.”

4) Agrégase el siguiente el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero transitorio.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025, y 2029, las candidatas a senadoras y diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 de unidades de fomento, por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.”.”.

Sometidos a votación en forma conjunta los numerales 3) y 4) del artículo 2°, fueron aprobados por la mayoría de votos de los diputados señores Sergio Aguiló; Pepe Auth; Enrique Jaramillo; Pablo Lorenzini; Manuel Monsalve; José Miguel Ortiz; Raúl Saldívar (por el señor Schilling); Alejandro Santana, y Matías Walker. Se abstuvieron los diputados señores Felipe de Mussy; Osvaldo Urrutia (por el señor Macaya); Patricio Melero, y Ernesto Silva.

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Artículo 4°, del siguiente tenor:

“Artículo 4°- El presente proyecto de ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la Ley de Presupuesto para la partida 02 Congreso Nacional.

En lo que respecta al artículo 2° de esta ley se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la Ley de Presupuesto respectiva.”.

Sometido a votación el artículo 4°, fue aprobado por la mayoría de votos favorables de los diputados señores Sergio Aguiló; Pepe Auth; Enrique Jaramillo; Pablo Lorenzini; Manuel Monsalve; José Miguel Ortiz; Raúl Saldívar (por el señor Schilling), y Matías Walker. Votaron en contra los diputados señores Felipe de Mussy; Osvaldo Urrutia (por el señor Macaya); Patricio Melero; Alejandro Santana, y Ernesto Silva.

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Tratado y acordado en sesiones de fechas 5 y 6 de agosto de 2014, con la asistencia de los Diputados señores Pablo Lorenzini (Presidente de la Comisión); Sergio Aguiló; Pepe Auth; Felipe De Mussy; Enrique Jaramillo; Javier Macaya; Patricio Melero; Manuel Monsalve; José Miguel Ortiz; Alejandro Santana; Marcelo Schilling; Ernesto Silva; Matías Walker; Osvaldo Urrutia (por el señor Macaya), y Raúl Saldívar (por el señor Schilling). Asimismo asistieron los señores (as) Aldo Cornejo; Loreto Carvajal; Daniella Cicardini; Renzo Trisotti; Roberto León; Felipe Kast; Maya Fernández; Cristina Girardi; Yasna Provoste; Clemira Pacheco; Lautaro Carmona; Jenny Álvarez; Marco Antonio Núñez; Issa Kort; Marcela Sabat; Nicolás Monckeberg; Ignacio Urrutia; Paulina Núñez; Arturo Squella; Leopoldo Pérez; Osvaldo Andrade, y Pedro Browne.

SALA DE LA COMISIÓN, a 11 de agosto de 2014.

1.13. Discusión en Sala

Fecha 13 de agosto, 2014. Diario de Sesión en Sesión 55. Legislatura 362. Discusión General. Pendiente.

SUSTITUCIÓN DE SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UNO DE CARÁCTER PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECIMIENTO DE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL (Primer trámite constitucional. Boletín N°9326-07)

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde tratar el proyecto de ley, en primer trámite constitucional, que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional.

Diputados informantes de las comisiones de Constitución, Legislación y Justicia, y de Hacienda, son los señores Ricardo Rincón y Pepe Auth, respectivamente.

Antecedentes:

-Mensaje, sesión 20ª de la presente legislatura, en 6 de mayo de 2014. Documentos de la Cuenta N° 1.

-Informe de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, sesión 51ª de la presente legislatura, en 5 de agosto de 2014. Documentos de la Cuenta N° 9.

-Informe de la Comisión Hacienda, sesión 54ª de la presente legislatura, en 12 de agosto de 2014. Documentos de la Cuenta N° 4.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Tiene la palabra el diputado informante de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia.

El señor RINCÓN (de pie).-

Señor Presidente , en representación de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, vengo en informar sobre el proyecto de ley, en primer trámite constitucional y primero reglamentario, originado en un mensaje de su excelencia la Presidenta de la República , que sustituye el sistema electoral binominal por un sistema electoral proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional.

La idea matriz o fundamental de este proyecto de ley es sustituir el sistema electoral binominal por uno proporcional inclusivo y fortalecer la representatividad del Congreso Nacional.

Señala el mensaje que el Congreso Nacional de Chile es una institución fundamental de la democracia chilena. En él deben manifestarse los anhelos del pueblo, ya que constituye el principal foro para los debates de nuestra democracia y es allí donde deben discutirse nuestras diferencias y gestarse los verdaderos acuerdos nacionales.

Añade la iniciativa que, contradiciendo nuestra tradición republicana, la dictadura del general Pinochet diseñó un Congreso Nacional jibarizado en sus atribuciones y damnificado, además, por un sistema de elección excluyente.

A pesar de importantes reformas logradas en las últimas dos décadas, sigue existiendo una brecha entre el Congreso Nacional que tenemos y el que Chile desea y necesita.

La existencia del sistema electoral binominal es uno de los factores que afecta negativamente la representatividad de nuestro Parlamento. Este es un juicio que comparte una porción ampliamente mayoritaria del país.

Agrega el mensaje que, en relación con esta materia, durante la legislatura pasada se produjo un valioso acercamiento de posiciones entre los sectores de la entonces Oposición y Renovación Nacional, que tuvo el efecto concreto de eliminar, finalmente, el guarismo “120” del texto de la Constitución Política.

Añade el mensaje que hoy tenemos la gran oportunidad de profundizar ese camino, dejando definitivamente atrás el sistema electoral binominal e impulsar un conjunto de reformas que terminen por dar a nuestro Congreso Nacional toda la fortaleza y prestancia que se merece.

Este proyecto, en todo caso, no parte de cero. El Ejecutivo -por su intermedio, señor Presidente , agradezco a los ministros de Estado presentes esa postura- ha considerado atentamente todos los estudios que sobre el particular se han publicado en las últimas décadas. Destaca, particularmente, los resultados de la Comisión Especial que, por iniciativa de la Presidenta Bachelet , encabezó Edgardo Böeninger el año 2006.

Menciona el mensaje que, en su redacción, se han tomado en cuenta, también, muchos proyectos de ley que se han presentado en el pasado. Allí están, como antecedente muy importante, los mensajes que en su oportunidad presentaron los entonces Presidentes Aylwin, Frei Ruiz-Tagle y Lagos.

También ha habido sobre este asunto numerosas mociones que apuntaban en la misma dirección de la iniciativa en informe.

Añade el mensaje que el empeño por sustituir el sistema electoral binominal constituye un objetivo muy transversal que convoca a líderes de muy distintas filiaciones políticas.

Agrega la iniciativa del Ejecutivo que sus objetivos y contenido son los siguientes:

1. Cambio en el sistema electoral.

Señala el mensaje que al menos seis son los objetivos que inspiran la fórmula que se propone:

a) Reducir la desigualdad del voto.

La diferencia de valor del voto en Chile, según el lugar donde se emita, es demasiado alta y obstaculiza la igualdad del voto. No se puede emprender una reforma sin reducir significativamente esa desigualdad inaceptable en cualquier democracia. Todo esfuerzo de igualación del valor del voto hace imprescindible incrementar el número de diputados y senadores del país, para no verse obligados al imposible de disminuir la representación de algunos territorios escasamente poblados, pero que el Ejecutivo considera políticamente importantes para el desarrollo inclusivo de la nación.

La propuesta considera, además, que los distritos correspondientes a zonas extremas en el norte y en el sur austral merecen -pongo énfasis en esto- un criterio especial de sobrerrepresentación, más allá de su población electoral, todo ello en razón de propugnar su mayor integración e inclusión política y social.

b) Permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas. Permitir ello es otro de los objetivos.

La vía para posibilitar el ingreso al Congreso Nacional de las corrientes más significativas de la sociedad es la de reducir el número de distritos y circunscripciones para que se elijan más escaños en cada uno de ellos. Solo así podrán ingresar al Parlamento sectores de menor votación, pero suficientemente significativos de la sociedad que, sin duda, merecen estar representados, y la democracia se completará y fortalecerá con su participación. Tanto más escaños del total de diputados se elijan en distritos grandes, menor será la barrera de ingreso al Parlamento y mayor será la inclusión.

c) Aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos.

Se busca que los electores recuperen totalmente la decisión respecto de quiénes son sus representantes, para lo cual es indispensable que todas las formaciones políticas puedan concursar con sus propios candidatos y que las grandes competencias internas en los partidos y entre partidos se resuelvan de cara a la ciudadanía en las mismas elecciones. Esto se logra definiendo distritos que elijan un número mayor de diputados, pero también permitiendo que las listas electorales presenten más candidatos que los que se eligen en cada territorio electoral.

Con ello crecerán la competencia y la incertidumbre respecto de quiénes serán elegidos, y la norma general será que siempre algún sector político resultará ganador de la elección como resultado de la competencia, lo que motivará una mayor participación electoral, que hoy es voluntaria. La idea es terminar con el uno y uno, así como generar competencia e incertidumbre real.

d) Facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías.

Con la conformación de un sistema de distritos y circunscripciones que mayoritariamente eligen un mínimo de tres parlamentarios, y en su mayoría de cinco a ocho, se propende a que la ventaja de votos de un sector sobre otro se traduzca en ventaja equivalente en la representación parlamentaria. Al mismo tiempo, se asegura que en todos los territorios la minoría tenga también expresión parlamentaria.

e) Promover un Congreso que refleje la diversidad de la sociedad.

Se requiere un sistema electoral que aliente a los partidos políticos y a los pactos a presentar a la ciudadanía nóminas de candidatos que reflejen toda la diversidad ideológica, de género, edad, origen étnico, social y cultural del país. Esto, junto con la representación de todas las corrientes políticas, es el mejor antídoto contra el distanciamiento ciudadano de la política.

Los distritos que elijan más diputados y listas que puedan presentar más candidatos permitirán aplicar una ley de cuotas que obligue a las listas a presentar elencos de candidatos con la proporción de mujeres que se determine necesaria para cambiar la desigual representación de género que tiene hoy el Congreso Nacional.

f) Evitar que queden fuera candidatos con grandes votaciones.

Uno de los defectos más visibles del sistema electoral binominal es que candidatos con altas votaciones, sobre 20 o 25 por ciento, pueden quedar fuera del Congreso Nacional, provocando gran frustración de sus electores, como ha ocurrido permanentemente.

En distritos que mayoritariamente eligen cinco o más escaños, esto pasa a ser imposible, y queda como probabilidad excepcional solo en un pequeño número de distritos que elige tres o cuatro escaños.

2. Contenidos de la propuesta de reforma electoral.

a) Principios.

El proyecto se inscribe en el contexto de la tradición republicana chilena, en el sentido de que cada una de las cámaras responderá principalmente a un principio de representación particular. En el caso del Senado, el criterio básico es el equilibrio entre los distintos territorios. Tratándose de la Cámara de Diputados, el principio rector debe ser la igualdad en el voto de todos los chilenos, conciliándolo con el propósito de no castigar en demasía la representación política de las zonas extremas del territorio nacional, por las razones que he señalado.

b) Para el Senado.

La Cámara Alta elegirá cincuenta senadores, y cada región pasará a ser una sola circunscripción. Cinco de las regiones mantienen el número actual de dos senadores a elegir, mientras las otras diez regiones lo aumentan, reduciendo así la desmesurada desigualdad en el valor del voto según el lugar donde se emita, permitiendo que se exprese la mayoría y que siempre esté representada también la minoría.

Uno de los principios que rige la distribución de los asientos en el Senado de la República es la igualdad política entre las quince regiones del país. No olvidemos que aún hay una región en Chile que no tiene representación en el Senado, cual es Arica y Parinacota.

En consecuencia, la igualdad de representación de todas las regiones de Chile queda, por el proyecto, absolutamente garantizada, terminando con una discusión que lleva varios años en el Congreso y que no ha podido ser zanjada aún respecto de una región sin representación senatorial.

Por ello, tres quintos de los escaños se distribuyen en forma igualitaria, de manera que cada región, con independencia de su número de electores, tendrá un mínimo de dos representantes en el Senado. Los restantes veinte senadores se elegirán en las regiones con mayor número de electores, evitando que una asignación muy alta a la Región Metropolitana pueda poner en cuestión el carácter esencialmente territorial de la representación de dicha Corporación.

c) Para la Cámara de Diputados.

Se propone una Cámara de Diputados integrada por ciento cincuenta y cinco miembros.

El territorio nacional se divide en distritos plurinominales que eligen un número variable de diputados que se determina en atención al número de electores, propendiendo al mayor logro posible del principio de igualdad de voto, teniendo presente, sin embargo, las siguientes restricciones estructurales:

i) La extensión territorial de los distritos no excederá los márgenes de una región.

ii) Los nuevos distritos se constituyen a partir de la agregación de distritos ya existentes;

iii) La asignación del número de escaños no reducirá, en términos absolutos, la representación que tienen hoy los distintos territorios.

En concreto, añade el mensaje, la propuesta presentada establece un total de veintiocho distritos que eligen entre tres y ocho diputados cada uno.

Precisamente, en atención a los rasgos descritos es que seguirán existiendo incentivos para que los partidos políticos se agrupen en grandes conglomerados y no se produzca una fragmentación excesiva en la representación política.

De los treinta y cinco escaños adicionados a la actual integración de la Cámara, un total de veintitrés se asignaron para corregir la subrepresentación de los grandes centros urbanos del país, quince a la Región Metropolitana, cuatro a la Región de Valparaíso y cuatro a la Región del Biobío. Los otros doce escaños nuevos se asignan, a razón de uno por región, a todas y cada una de las demás regiones del país. No se ha querido en este punto discriminar entre esas regiones.

Agrega el mensaje que existe el convencimiento de que esta decisión atenúa la dirección central de la reforma, en el sentido de apuntar a la igualdad del voto. Sin embargo, este ajuste está ampliamente justificado por las siguientes razones:

-Al interior de algunas de esas doce regiones, el distritaje actual, que se denominará a futuro redistritaje, castiga una zona en relación a la otra. La adición de un escaño permite corregir ese defecto, sin reducir un diputado a un área geográfica.

-En el caso de otras regiones de menor población, han pesado consideraciones geopolíticas y de integración nacional. Es el caso de las zonas extremas de nuestra república, tanto en el norte como en el sur del país. Por lo mismo, Arica y Parinacota, Tarapacá, Aysén y Magallanes quedan con tres diputados, obteniendo una ganancia neta en su cuota de representación.

d) Propuestas para aumentar la inclusión y representatividad.

i) Se propone que los partidos o pactos puedan presentar hasta un número de candidatos que doble el número de cargos a elegir. Esta idea permitirá aumentar las opciones a disposición de los electores y facilitará la renovación de los representantes.

ii) Con el objeto de avanzar hacia un Congreso que represente adecuadamente a hombres y a mujeres, se propone incorporar una cuota de género, requiriendo a cada partido político, integre o no un pacto, que su nómina total de postulantes a la Cámara y al Senado cumpla el requisito de que, en definitiva, ningún género esté representado más que el otro; en concreto, que ninguno esté representado por sobre 3/5 ni por debajo de los 2/5 del total, lo que en términos porcentuales se ha denominado regla del 60/40,. Esta norma se propone como transitoria, aplicable a las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el entendido de que su propósito es romper una situación inicial en la que operan fuertes e invisibles barreras de entrada para las mujeres del país.

Se propone, complementariamente, establecer un mayor aporte fiscal para los partidos en función del número de mujeres que elijan tanto en la Cámara de Diputados como en Senado, ello para alentarlos a presentar candidatas con altas posibilidades de éxito y resultado electoral. La norma descrita también se aplicaría transitoriamente a las próximas cuatro elecciones parlamentarias.

Se establece un mecanismo de actualización de la distribución de escaños que opere cada 12 años, en función de las variaciones en el número de electores de cada territorio. Esa es la propuesta del mensaje, la cual fue objeto de algunas modificaciones.

Finalmente, añade el mensaje que, paralelamente a esta reforma legal, se presentará un proyecto de reforma constitucional que complementará los contenidos de esta iniciativa. En la referida reforma se propondrá establecer que las vacancias que se produzcan, sea por fallecimiento, incapacidad o incompatibilidad sobreviniente, sean provistas por el partido al que pertenecía el parlamentario, con una persona seleccionada por medio de una elección abierta a todos los militantes de esa colectividad y los ciudadanos independientes de la circunscripción o distrito, regulada y administrada por el Servicio Electoral. Asimismo, se propondrá eliminar la inhabilidad que impide que dirigentes sindicales y gremiales puedan ser candidatos al Parlamento.

Para la discusión de esta iniciativa, la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia destinó 19 sesiones ordinarias y especiales, más una audiencia pública, en las cuales escuchó a organizaciones y personas interesadas en emitir su opinión acerca del proyecto de ley en informe, destacando, incluso, la presencia del ex-Presidente de la República don Ricardo Lagos Escobar , en los prácticamente cuatro meses de trabajo legislativo de la Comisión.

Durante dicho debate, la Comisión introdujo numerosos cambios al proyecto original, los cuales se pueden sistematizar de la siguiente forma y que son los que llegan a la Sala aprobados por esa instancia como informe final:

Subpactos.

Se elimina la figura de los subpactos, reemplazándola por la posibilidad de los partidos políticos integrantes de un pacto para asociarse con candidatos independientes.

Paridad.

Se mantiene el tope de que los candidatos hombres o candidatas mujeres no podrán exceder del 60 por ciento del total de las candidaturas declaradas, pero se precisa que para calcular dicha proporción se excluirán las candidaturas proclamadas por el Tribunal Calificador de Elecciones en los distritos y circunscripciones en que se hubieren celebrado elecciones primarias.

El proyecto original contemplaba que para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029 los partidos políticos que tuvieran mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que resultaren elegidas, recibirían, por cada una de ellas, un monto adicional para reembolso con un tope de hasta 500 unidades de fomento. Esa disposición se modificó, en el sentido de suprimir la expresión “hasta”, pasando el monto adicional a ser una cantidad fija de 500 UF por cada candidata elegida. Junto con ello, se agregó un inciso que establece que los partidos políticos que reciban esos recursos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.

Sin perjuicio del incentivo a los partidos políticos, mencionado anteriormente, se incorporó, para el mismo período de elecciones parlamentarias, un incentivo adicional directo a las candidatas a diputadas y a senadoras, a petición de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, equivalente a 0,0100 unidades de fomento por cada voto obtenido por cada una de ellas, sean o no elegidas, con el objeto de disminuir las barreras de entrada a las mujeres a la actividad política, especialmente a la parlamentaria.

Mayor competencia en los procesos electorales.

Se reduce el número de candidatos que cada partido político o pacto puede presentar, ya que se reemplaza el mecanismo que señalaba que el límite para ello era hasta un número de candidatos que doblara el número de cargos a elegir, por uno que señala que los partidos políticos o pactos electorales podrán presentar en cada distrito o circunscripción un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción respectiva. En resumen, se reemplaza el denominado Nx2 por N+1, de manera que donde se elijan cinco, se podrán presentar seis; donde se elijan tres, se podrán presentar 4; donde se elijan 8, se podrá presentar 9. Así, se aumentará la oferta electoral, la competencia real y la incertidumbre, base esencial de dicha competencia real.

Se rebaja el porcentaje del patrocinio exigido a las candidaturas independientes a diputado o senador, con lo que se rebaja otra barrera de entrada. En efecto, al incrementarse los electores en cada distrito y comuna, era lógico que también aumentara el número de firmas necesarias para patrocinar las candidaturas independientes.

Se establece la alternancia correlativa entre candidatos hombres y candidatas mujeres, en el orden de la lista de candidatos declarados a senadores y diputados de cada partido político, de manera de garantizar, a propuesta de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, que las mujeres no corran el riesgo, por cualquier razón, de quedar en la parte baja de las listas de las papeletas de las distintas coaliciones y partidos políticos.

También, por propuesta de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, se establece la posibilidad de votar por la lista, en forma alternativa a la votación por candidato. Quiero ser claro en este punto, en el sentido de que no se modifica el sistema de votación, sino que solo es una alternativa. Repito, se sigue votando por candidato o candidata; pero, además, el elector tiene la posibilidad de votar por la lista. Los votos de la lista se distribuyen proporcionalmente entre los candidatos, según su votación.

Se contempla la posibilidad de incluir la fotografía de los candidatos y de las candidatas en la cédula de votación.

Se introdujo una modificación a la Ley de Partidos Políticos, en el sentido de reducir el porcentaje mínimo de ciudadanos con derecho a sufragio requerido para la afiliación a un partido político en formación, y simplificar el procedimiento para la inscripción del partido político, una vez cumplidos los requisitos exigidos por la ley.

También por acuerdo y petición de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, se establece que el trámite de declaración de afiliación de un ciudadano a un partido en formación será realizado ante notario, pero será un trámite gratuito, y este estará obligado a recibir dicha declaración.

En el mismo cuerpo legal, se agrega un artículo que reduce, de 5 por ciento a 2,5 por ciento el umbral mínimo de sufragios válidamente emitidos que un partido político debe obtener en una elección para no incurrir en causal de disolución. Sin perjuicio de lo anterior, se dispone que si un partido político no alcanzare el umbral mínimo antes referido, mantendrá su calidad de tal si eligiere, a lo menos, dos parlamentarios, sean diputados o senadores.

Se eliminan las trabas para los procesos de ingreso o retiro de los pactos y para las proclamaciones de los candidatos a la Presidencia de la República, radicando dichas atribuciones en los consejos generales de las colectividades.

Procedimientos.

Se modifican los relativos a la declaración de candidaturas ante el Consejo del Servicio Electoral y de reclamo por el rechazo de las mismas, ante el Tribunal Calificador de Elecciones.

Sistema electoral.

Se elimina del sistema proporcional inclusivo, que reemplaza al binominal, la referencia a los subpactos y la posibilidad de que las candidaturas independientes sean consideradas, en su conjunto, como un partido político dentro del pacto electoral, para los efectos de la aplicación del coeficiente D’Hondt.

Redistritaje.

Se incorpora la comuna de Alto Biobío en el distrito 21, omitida en forma involuntaria.

Se establece que la asignación de los 155 escaños a diputados, entre los 28 distritos electorales, será actualizada cada diez años por el Consejo Directivo del Servicio Electoral, detallándose el procedimiento para tal efecto. El proyecto en un principio establecía que los primeros 84 escaños se asignarían de modo igualitario entre los 28 distritos, correspondiendo tres diputados a cada uno de ellos, independientemente de su número de electores. Los restantes 71 diputados se distribuían proporcionalmente entre los 28 distritos. La Comisión aprobó que los 155 escaños se distribuyan proporcionalmente entre los 28 distritos. En todo caso, ningún distrito podrá elegir menos de tres ni más de nueve diputados.

Se señala que esos escaños se distribuirán proporcionalmente entre los distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, de acuerdo con los datos proporcionados por el último censo oficial de población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas.

La primera actualización será realizada el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.

Gasto electoral.

Se incorpora un artículo nuevo que modifica la ley N° 19.884, sobre Transparencia, Límite y Control de Gasto Electoral. Cabe hacer presente que el límite del gasto electoral se calcula sobre la base del número de electores de la circunscripción o distrito. Por ello, a consecuencia de la ley que consagró la inscripción automática y el voto voluntario, el techo del gasto aumentó considerablemente. Ahora, como consecuencia del aumento del tamaño de los distritos, nuevamente se produciría una nueva alza en el techo del gasto, por lo que la Comisión estimó que era necesario aprobar la disminución de tales techos.

La ley vigente dispone que en el caso de los senadores el límite de gasto no podrá exceder de la suma de 3.000 unidades de fomento, más aquella que resulte de multiplicar por cuatro centésimos de unidad de fomento los primeros 200.000 electores; por tres centésimos de unidad de fomento los siguientes 200.000 electores, y por dos centésimos de unidad de fomento los restantes electores en la respectiva circunscripción. La Comisión aprobó disminuir esta última cifra para lograr el propósito antes señalado.

Respecto de los diputados, la ley consagra que los candidatos no podrán exceder de la suma de 1.500 unidades de fomento, más aquella que resulte de multiplicar por tres centésimos de unidad de fomento el número de electores en el respectivo distrito. La Comisión acordó disminuir esta última cifra por uno coma cinco centésimos de unidad de fomento.

Finalmente, se aclara que, en el caso de la votación por lista, el reembolso de los gastos electorales se realizará a los candidatos que las integren, a prorrata de sus votaciones individuales.

Por lo tanto, con estas modificaciones al proyecto de ley original, la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia da por informado a la Sala el proyecto que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional.

Es cuanto puedo informar.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado informante de la Comisión de Hacienda.

El señor AUTH (de pie).-

Señor Presidente , en nombre de la Comisión de Hacienda, paso a informar sobre el proyecto de ley, en primer trámite constitucional y primero reglamentario, que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional.

Por primera vez en 25 años, nos disponemos a debatir y votar en la Sala de la Cámara de Diputados una iniciativa que pone fin al sistema binominal y establece un sistema proporcional inclusivo.

El extenso y completo informe que ha entregado el colega Ricardo Rincón explica con suficiente detalle las características del cambio. Me voy a referir a los aspectos financieros, que son básicamente dos:

El primero es el costo de dos medidas que favorecen la representación de las mujeres en el Congreso Nacional:

La primera es el aumento en un tercio de la devolución fiscal por voto obtenido cuando se trate de mujeres candidatas, elevándola de 0,03 UF por voto que hoy reciben los candidatos en general a 0,04 UF, lo que representa en dinero de hoy 241 pesos adicionales por cada voto recibido por una candidata, sea o no elegida, es decir, las mismas normas que rigen para todos los candidatos de Chile.

Esta iniciativa busca rebajar el umbral de participación. Si se consideran los datos de la elección pasada, habría representado 20.550 UF adicionales para el erario. Si se considera que las normas que espero aprobaremos tendrán pleno éxito en la siguiente elección, el costo fiscal adicional podría llegar a 42.000 UF. Es decir, si las mujeres candidatas a la Cámara y al Senado obtuvieran el 40 por ciento de todos los votos, significaría, aproximadamente, 40.000 UF adicionales.

La segunda medida que tiene un costo financiero para el fisco es el establecimiento de un incentivo para los partidos políticos de 500 UF por cada candidata a la Cámara de Diputados o al Senado que resulte efectivamente elegida. Con ello se busca reforzar constructivamente el establecimiento de la obligación legal de cumplir, al menos, con el 40 por ciento de candidatas del género minoritario, sin lo cual, como bien dijo el colega Rincón , la lista no podría quedar legalmente inscrita.

Si consideráramos los datos de la elección anterior, donde se eligieron muy pocas mujeres en el Senado y también en la Cámara, el gasto sería apenas de 10.500 UF, pero podría llegar a 36.000 UF si se cumpliera el propósito que anima el establecimiento de esta futura ley, lo que supondría la elección de 62 diputadas, es decir el 40 por ciento de los 155 escaños, y al menos diez senadoras del total de cincuenta. En consecuencia, esto representaría otras 36.000 UF anuales, como señalé. Hago hincapié en esto, por cuanto el informe financiero se basa más bien en la hipótesis conservadora de que se repetiría la situación precedente. Pero es evidente que si vamos a aprobar el proyecto en debate es para modificar eso y conseguir un avance sustantivo en la representación parlamentaria de ambos géneros.

El segundo gran aspecto financiero de la iniciativa se asocia al incremento de 35 escaños en la Cámara de Diputados y de 12 escaños en el Senado, aumento que obedece al propósito de reducir la desigualdad del voto -hoy, irritante desigualdad del voto-, pero sin alterar la representación de las regiones. Con el redistritaje, todas las regiones, sin excepción, suman al menos un escaño en la Cámara de Diputados, y, en el caso del Senado, de las quince regiones en que se divide el país, por lo menos nueve aumentan uno. Naturalmente, corresponden a aquellas regiones más pobladas.

Si recordamos que en 2018 se renovará la mitad de los miembros del Senado y que la contabilización de los períodos será a partir de marzo y no de enero, en régimen el costo adicional, si se mantienen intactas las dietas de senadores y diputados, sería de 4.853 millones de pesos anuales, equivalentes al 4.7 por ciento del presupuesto total del Congreso Nacional. Es decir, el gasto adicional asignado a dietas representaría un incremento de 4.7 por ciento del aumento global. Ahora, si hacemos el ejercicio financiero de retrotraer esta cuestión al 11 de marzo de 2010, cuando asumimos nuestras funciones, con este mismo presupuesto se podrían haber solventado las dietas de 155 diputados y de 50 senadores.

Naturalmente, el proyecto de ley incluye financiamiento fiscal adicional para las medidas de promoción de participación de la mujer, y remite al presupuesto del Congreso Nacional de 2018 el costo de los nuevos escaños parlamentarios.

El señor MELERO.-

Señor Presidente, pido la palabra por un asunto reglamentario.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra, su señoría.

El señor MELERO.- Señor Presidente , he escuchado con atención la exposición del diputado informante ; sin embargo, en lugar de informar sobre el proyecto, hace una serie de afirmaciones, legítimas desde su punto de vista, pero que escapan al rol que le encomendó la Comisión de Hacienda.

Por eso, le ruego que lo conmine a que cumpla con su cometido y que evite opinar -en su momento, durante la discusión, podrá hacerlo- sobre la iniciativa. Me parece que hace un uso abusivo de su rol.

He dicho.

El señor JARAMILLO.-

Señor Presidente, pido la palabra para plantear una cuestión de Reglamento.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra, su señoría.

El señor JARAMILLO.- Señor Presidente , como miembro de la Comisión de Hacienda, debo hacer presente que los dichos del diputado informante concuerdan con lo que tratamos y acordamos en la Comisión.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Muy bien.

Le ruego al diputado informante que continúe con su cometido y se remita al texto del informe.

El señor AUTH.-

Señor Presidente , tal como dije antes de esta interrupción política, el Ejecutivo contempla gasto fiscal adicional para solventar las medidas de promoción de participación de la mujer. Al mismo tiempo, en lo referido al incremento de diputados y senadores, manifiesta expresamente su decisión de no incurrir en gasto fiscal adicional.

Ya señalé -no es una opinión, sino un dato- que el Congreso Nacional tiene un presupuesto anual de 106.000 millones de pesos y que el incremento de las dietas representa un crecimiento de 4.7 por ciento.

Conforme con lo que plantea el Ejecutivo , esto impone a ambas cámaras un esfuerzo. Sin duda, al Senado le será más fácil hacerse cargo del incremento, puesto que hasta marzo de 2006 tuvo 11 senadores adicionales, entre designados y vitalicios, que recibían dieta y asignaciones, como todos los demás miembros. Pues bien, como la eliminación de esta anacrónica institución -espero que este concepto no sea considerado como un juicio político- no fue acompañada de la correspondiente reducción presupuestaria, no debiera ser muy difícil para el Senado adaptar su presupuesto para incorporar los escaños adicionales.

Por su parte, la Cámara de Diputados deberá definir en las instancias correspondientes el itinerario y los mecanismos de adaptación presupuestaria, de modo de hacerse cargo de los costos adicionales.

Para concluir mi informe, quiero decir que se presentaron cuatro indicaciones, pero el Reglamento de la Cámara de Diputados no permitió que las abordáramos por no corresponder a los puntos que estaban en discusión y votación.

La primera de ellas se refiere a la extensión de la aplicación del criterio de paridad a la ley de primarias; la segunda, a la obligación de hacer públicos todos los aportes a las campañas políticas; la tercera, a prohibir el aporte de personas jurídicas -léase empresas- a las campañas políticas, y la cuarta, a la renovación del propósito de la Cámara de Diputados de limitar la reelección, tanto de diputados como de senadores.

Como dije, aunque no pudimos tratarlas, contaron con la simpatía mayoritaria de la Comisión.

Es cuanto puedo informar.

He dicho.

El señor CORNEJO (Presidente).-

En discusión el proyecto de ley.

Tiene la palabra el diputado señor Ramón Barros.

El señor BARROS.- Señor Presidente , hoy nos corresponde discutir la iniciativa impulsada por el actual gobierno, de la denominada Nueva Mayoría, bajo el título de “reforma al actual sistema binominal”.

Al respecto, observo una modificación mucho más profunda que el mero cambio de la fórmula matemática conocida como “sistema binominal”, pues, además del cambio del actual régimen por uno proporcional, considera dos elementos adicionales: suma 35 diputados a los 120 actuales y genera 28 distritos de mayor tamaño que los 60 existentes.

Considero que el cambio del actual sistema mayoritario por uno proporcional es la menor de las modificaciones planteadas. Durante los doce años en que he ejercido mi cargo de diputado , pocas personas me han sugerido transformaciones de esta naturaleza, pues considero que el común de los chilenos no entiende mayormente este sistema, así como creo que tampoco entenderán el que propone el actual proyecto de ley.

Sin embargo, en honor a la verdad, estimo necesario discutirlo para homologar los sistemas de elección parlamentaria a los que hoy rigen la elección de concejales y consejeros regionales.

Asimismo, hecha la revisión histórica del sistema binominal, he podido concluir que el actual sistema ha beneficiado prácticamente por igual a ambos bloques predominantes debido a su esencia, en el sentido de que es un sistema mayoritario. No obstante, la última elección quebró esta tendencia, por lo cual puedo sostener con certeza que el sistema favoreció a la actual coalición gobernante.

Despejada la fórmula matemática, conocida como binominal, entremos a las partes más importantes del resto del proyecto.

Creo que la población ve con estupor que esta reforma es de los políticos para los políticos y que la entenderán y se interesarán por ella solo los políticos y los partidos para su propio beneficio y contra el sentir de los chilenos.

Resulta cómico ver la forma en que se pretende fundamentar el famoso costo cero que tendrá el aumento del número de parlamentarios; pero, más allá de las caricaturas, el Congreso Nacional sabe perfectamente que, más temprano que tarde, es obvio y de certeza absoluta que la incorporación de nuevos parlamentarios irrogará un mayor costo para todos los chilenos, que, en conjunto, será en torno a los 100 millones de dólares cada cuatro años. Sin duda, esto es rechazado tajantemente por una mayoría abrumadora de chilenos que solo esperan que los que ya estamos en el Congreso Nacional nos ganemos su respeto y su aprecio con más trabajo y más cercanía.

Más grave aún que lo anteriormente expuesto es el redistritaje que se propone, realizado con calculadora y en beneficio de la mayoría circunstancial gobernante, en circunstancias de que la clase política, dentro de la cual me incluyo, debiera ir exactamente en la dirección contraria. Según mi experiencia y después de haber sido elegido en cuatro oportunidades con altas votaciones, nunca fui beneficiado por el sistema binominal. En la última elección obtuve la primera mayoría de mi distrito, y no tengo duda alguna de que quienes votaron por mí lo hicieron por el hecho de que formo parte de una comunidad, porque vivo en el distrito que represento y permanezco en él, aparte de realizar mi trabajo parlamentario.

El redistritaje planteado desvirtúa absolutamente lo que he señalado, porque el aumento del tamaño geográfico de los distritos generará menos contacto de los parlamentarios con la gente, toda vez que, obviamente, dedicarán más tiempo a aquellas comunas con mayor número de electores, lo que considero un grave daño para vastos sectores del país, sobre todo para aquellas localidades rurales geográficamente amplias pero con menor densidad poblacional.

Nuestro Congreso Nacional es la institución peor evaluada por la ciudadanía -reitero: la institución peor evaluada por la ciudadanía-, y con esta reforma nuestra lejanía será aún mayor, con todas las consecuencias que ello traerá.

Una de las razones esgrimidas para aumentar el número de parlamentarios y para efectuar el redistritaje sería una sobrerrepresentación parlamentaria en regiones mayor que la de la Región Metropolitana y las capitales regionales. Esto es cierto, pero responde al hecho del inmenso centralismo que observamos en el país, según el cual el Gobierno Central, es decir, el Poder Ejecutivo , el Poder Judicial , los ministerios, las subsecretarías y todos los organismos del Estado funcionan en Santiago. También se observa un comportamiento similar en las regiones, en las cuales los intendentes, los seremis y los organismos del Estado funcionan en las capitales regionales.

Por lo tanto, esta discriminación positiva tenía por objeto corregir la desproporción abismante que produce el centralismo de Santiago y de las capitales regionales en desmedro del resto del país.

El resultado del redistritaje y el aumento del número de parlamentarios significarán, entonces, que las capitales regionales y Santiago tendrán un peso aún mayor sobre el resto del territorio nacional. Adicionalmente, en ninguna parte del proyecto se plantea exigencia alguna sobre la residencia real de los postulantes. Esto traerá como consecuencia mayor número de representantes con sesgo capitalino en regiones, lo que hará que el centralismo existente sea mayor que el actual.

No puedo dejar de mencionar la dura realidad a la que quedará expuesto mi actual distrito, formado por las provincias de Colchagua y de Cardenal Caro. Está compuesto por 14 comunas, todas ellas rurales y alejadas de la capital de la Región del Libertador General Bernardo O’Higgins. Así, la consecuencia del redistritaje y el cero aumento del número de parlamentarios en la misma determinarán la nula presencia de nuevos diputados en esta nueva realidad, lo que es tremendamente injusto.

Lo anterior va mucho más allá de quienes resulten elegidos o de los partidos a los cuales representen. No puedo dejar de mencionar esto porque traicionaría a muchas personas que me han elegido en los últimos cuatro períodos parlamentarios y que ahora sí me lo mencionan constantemente y con creciente preocupación.

(Hablan varios señores diputados a la vez)

Señor Presidente , ¿los ministros vinieron a escuchar el debate o a realizar un conciliábulo? ¿Vamos a escuchar o a tener reuniones partidistas en la Sala? Todos escuchamos al diputado Rincón con mucha atención durante su informe; espero que tenga el mismo respeto por los demás parlamentarios.

El señor CARMONA ( Vicepresidente ).-

Puede continuar, señor diputado .

El señor BARROS.-

Señor Presidente , hablo con absoluta libertad, pues con anterioridad ya había manifestado mi deseo de no repostular al cargo de diputado , porque creo que somos nosotros quienes debemos dar el ejemplo estableciendo una limitación para las reelecciones. Sin embargo, el proyecto tampoco dice absolutamente nada al respecto.

La política es una actividad noble y todos los actores que participamos en ella debemos procurar prestigiarla con nuestras actuaciones. A mi entender y por todas las razones que he esgrimido, nada de esto procuran estas bases esenciales; muy por el contrario, habrá poca o nula pertenencia, representará mayor gasto fiscal y se lesionará injustamente a las regiones, en particular al mundo rural. Por otra parte, al aumentarse el número de parlamentarios capitalinos y de las capitales regionales se profundizará el centralismo.

No estaré en este hemiciclo para vivir la profundización del distanciamiento de los políticos de la gente y estoy seguro de que, en general, las regiones repudiarán con fuerza esta reforma, de lo cual dará cuenta nuestra historia.

Sé que la gran mayoría de los parlamentarios presentes en la Sala están felices con este proyecto, en particular algunos grupos que han negociado en su propio beneficio, sin mirar el interés de su sector o del país. Están felices porque saben que con este proyecto que aumenta el número de parlamentarios asegurarán sin problemas su reelección a cualquier evento, lo que contrasta absolutamente con las verdaderas preocupaciones de la ciudadanía. Al aumentar el número de parlamentarios, estos se alejarán definitivamente de las bases, en circunstancias de que la población esperaría mayor cercanía y trabajo. Con ello se recuperaría la credibilidad y el respeto por esta noble institución, como debe ser la Cámara de Diputados y que hoy definitivamente no lo es.

He dicho.

El señor CARMONA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Matías Walker.

El señor WALKER.-

Señor Presidente , en primer lugar, saludo al ministro del Interior y Seguridad Pública , a la ministra secretaria general de la Presidencia , al ministro secretario general de Gobierno y a la ministra directora del Servicio Nacional de la Mujer . Asimismo, al alcalde y a los concejales de la comuna de La Higuera, Región de Coquimbo, que nos acompañan en este momento y que vienen a luchar por conseguir mejoras para sus comunas, anhelo que, por cierto, todos compartimos.

(Aplausos)

Como jefe de la bancada democratacristiana, conformada por 22 diputados, para mí es un honor intervenir en esta sesión.

Ha pasado mucha agua bajo el puente. Durante su gobierno, el Presidente Ricardo Lagos hizo el primer intento por terminar con el sistema electoral binominal. Quiero recordar también que durante los últimos 24 años diversos diputados han presentado más de veinte proyectos de ley de y reforma constitucional que apuntaban a terminar con este sistema, en particular nuestro querido exdiputado Gabriel Ascencio , que en 2005 presentó un proyecto con tal propósito.

Asimismo, valoro el trabajo realizado por la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, presidida por el diputado Ricardo Rincón , que desarrolló un gran trabajo para sacar adelante este proyecto. Así lo ratifica el completo informe que rindió.

Este es un día histórico porque vamos a terminar con el último vestigio de la llamada democracia protegida, que intentó consagrar la Constitución Política de 1980 y que se inspira en el fascismo europeo y en el franquismo español. Hoy, después de 24 años, estamos terminando con ese vestigio.

Eso es algo que nos debe unir a todos los que realmente tenemos verdadera vocación democrática en Chile. Por eso, felicito al movimiento político Amplitud y a los independientes que se han sumado a este esfuerzo y se han puesto a la altura de la historia. Ellos nos acompañan en lo que será -estoy seguro- una histórica votación.

Reitero, vamos a terminar con este último vestigio en que la minoría intenta protegerse de la mayoría ciudadana.

Queremos que el Congreso Nacional sea un fiel reflejo de lo que es Chile, queremos que sea una fotografía del país, con toda su diversidad. Queremos un Congreso Nacional con más mujeres. Por eso aprobaremos la propuesta de un mínimo de 40 por ciento de candidatas al Congreso Nacional.

Queremos más jóvenes en el Congreso Nacional para que puedan desafiar a los incumbentes con más primarias, con más renovación. Al respecto, quiero recordar -para quienes lo han olvidado- que la Cámara de Diputados ya aprobó un proyecto de reforma constitucional, que está hace dos años en el Senado, el cual establece un límite para la reelección de todos los cargos de elección popular, no solo de los parlamentarios, sino también de los alcaldes, concejales y consejeros regionales.

La UDI lleva 24 años buscando todo tipo de excusas, todo tipo de pretextos para aferrarse al sistema electoral binominal. Hoy están desconcertados, porque les hemos quitado el último argumento que tenían para oponerse a efectuar cambios al sistema electoral binominal: que el cambio iba a significar mayor gasto fiscal.

El informe financiero que hemos aprobado en la Comisión de Hacienda es muy claro respecto de este punto. Este cambio va a involucrar mayor costo para la partida Congreso Nacional por el aumento de parlamentarios; pero, en lo global, el año 2018 -es el compromiso que hemos asumido- no va a importar mayor gasto fiscal. Ese es el compromiso que estamos refrendando. Ahora bien, eso no quiere decir que el Congreso Nacional dejará de funcionar; por el contrario, mantendrá las facultades que le confieren la Constitución Política de la República y la ley.

La Ley de Presupuestos de la Nación del año 2018 y las sucesivas deberán resguardar que se mantengan los deberes de legislación, fiscalización y representación que debe tener el Congreso Nacional.

El sistema electoral binominal no da para más y así quedó demostrado en las últimas elecciones. En San Bernardo, la candidata que obtuvo la primera mayoría individual -la señora Marisela Santibáñez , candidata del Partido Progresista, PRO-no resultó elegida.

Imaginamos la enorme desazón que sufrieron los ciudadanos que eligieron a esa candidata para que los representara, quien, a pesar de que obtuvo la primera mayoría individual, hoy no está en la Cámara de Diputados. Por eso, debemos terminar con este sistema. El Congreso Nacional debe ser más representativo de la diversidad de Chile.

Señor Presidente, por su intermedio les pido a los colegas de la UDI, que están un poco nerviosos, que respeten las opiniones de los demás.

El señor CARMONA (Vicepresidente).-

Señores diputados, pido escuchar con respeto todas las intervenciones.

Continúe, señor diputado .

El señor WALKER.-

Muchas gracias.

Señor Presidente, por su intermedio quiero decir a los diputados de la UDI, que están un poco nerviosos, que todos tendremos derecho a hacer uso de la palabra, porque el Congreso Nacional está hecho para debatir ideas.

No hay nada más cómodo para los actuales diputados y senadores que el sistema actual. Por eso, la campaña publicitaria de los diputados de la UDI -me parece que van a tener que cambiar de publicista- nos da la razón. ¿Qué dice la campaña publicitaria? Dice “estamos bien en la Cámara los 120”. ¡Nadie duda de aquello! Los actuales diputados estamos muy bien, porque es muy difícil que perdamos las reelecciones, pues administramos distritos relativamente pequeños, por lo cual es más fácil para los incumbentes mantener el actual sistema, con los actuales distritos, con las asignaciones y con todas las prerrogativas que tienen los parlamentarios. Es muy difícil que otros candidatos más jóvenes puedan el día de mañana retarnos y terminar con nuestra reelección. Por eso, fui uno de los autores del proyecto que termina con la reelección indefinida de los parlamentarios.

Lo digo porque el año pasado, con mi compañero de lista, fui capaz de romper el sistema electoral binominal y lograr el doblaje en la Región de Coquimbo. Por eso, siento que tengo la autoridad moral para opinar de este tema.

Los 22 diputados de la Democracia Cristiana vamos a concurrir con nuestro voto favorable, sin condiciones, para aprobar este proyecto en su integridad, con todas las indicaciones de su excelencia la Presidenta de la República. Nosotros honramos nuestra palabra y dijimos que íbamos a estar con la Presidenta Bachelet en las buenas y en las malas. Hoy estamos honrando el compromiso que asumimos con la ciudadanía.

He dicho.

El señor CARMONA ( Vicepresidente ).-

Tiene la palabra el diputado señor Marcelo Schilling.

El señor SCHILING.-

Señor Presidente , hoy vamos a dejar atrás el llamado sistema electoral binominal y daremos paso a un sistema electoral proporcional moderado.

Este cambio deriva de razones de necesidad y de urgencia. Es evidente el deterioro de la legitimidad de las instituciones democráticas, en particular del Parlamento, por lo que ahora, con la evidencia de la disminución de la participación en las elecciones y el aumento de la adhesión ciudadana al cambio institucional, es cuando debemos proceder a hacerlo.

Necesitamos aumentar el respaldo a la democracia y a sus instituciones. El informe de la corporación Latinobarómetro es la prueba de que este aprecio por la vida en democracia se ha erosionado debido al desprestigio de la actividad política y de sus instituciones.

Necesitamos un sistema político que favorezca la inclusión y la creación de comunidad, y que mejore la representatividad de todos los sectores sociales, no solo de ciertas elites.

Necesitamos en el Congreso Nacional la presencia de los mapuches, de los jóvenes, de los trabajadores, de las mujeres; en fin. Necesitamos más protección de la ciudadanía frente a los abusos.

El sistema electoral binominal ha conducido a distintos gobiernos a la parálisis y a la imposibilidad de impulsar procesos de cambios necesarios y evidentes para el país, porque conduce invariablemente al empate, muchas veces reforzado artificialmente con la extinguida institución de los senadores designados.

Todo cambio o reforma significa incertidumbre, pero también oposición.

Respecto de la desafortunada frase que parodia la del rescate de los 33 mineros, cuando dice: “estamos bien los 120”, no me cabe ninguna duda de que es así: calentitos, bien remunerados y seguros de sus sucesivas y eternas reelecciones, ¡cómo no van a estar bien los 120!

El problema es que el Parlamento y la salud de las instituciones democráticas no están bien.

La UDI no siempre ha tenido la misma opinión. Cuando le fue mal frente a Renovación Nacional, quiso cambiar el sistema binominal. Al retorno de la democracia, la UDI era el estigma de la dictadura representada en el Congreso Nacional. Como la gente votaba en su contra, poco a poco se fue favoreciendo Renovación Nacional, que aparentemente era un partido más democrático y liberal. Ahí, los llamados “coroneles” conversaban bajo cuerda para ver si sería conveniente cambiar el sistema binominal.

¡Qué fuerza de convicción, señor Presidente , la de quienes hoy dicen “estamos bien los 120”!

Ahora bien, es evidente que existe una impopularidad en aumento de los parlamentarios y de la labor parlamentaria, que se traduce también en la impopularidad de la idea de que reemplacemos el sistema binominal por uno proporcional, aumentando el número de diputados y de senadores.

Sin embargo, los partidos políticos están para conducir y liderar los cambios que reclama la sociedad y no para solazarse en la comodidad del statu quo. Por eso, a riesgo de ser impopular, hay que apoyar esta reforma.

Es preciso superar la resistencia y la inercia del llamado sentido común dominante, que no es otra cosa que un pensamiento vulgar que busca consolidar las posiciones de poder y de privilegio que hoy existen, sin modificarlas y eliminar toda posibilidad de riesgo de la élite. Y cuando hablo de la élite, no me refiero solo a los de enfrente, sino a todos quienes estamos sentados en este hemiciclo.

Se arguye que no debemos hacer esto porque implica un mayor gasto. Asimismo, se dice que independientemente de que el Gobierno y la mayoría parlamentaria se hayan comprometido a que no habrá un mayor gasto, es decir, que se hará con los mismos recursos que existen hoy, reasignando partidas presupuestarias del propio Congreso Nacional, de todas maneras esto va a significar un gasto.

Personalmente, no concuerdo con esta nueva versión del pensamiento vulgar y del sentido común ramplón. Así como vamos a cumplir con eliminar el sistema binominal, también necesitamos cumplir con el compromiso de que esto no irrogue un mayor gasto fiscal, porque ambas cosas son un binomio indisoluble si queremos hacer una contribución al prestigio de las instituciones.

En otras materias, se alega que vamos a tener menos distritos y más grandes, que esto va a significar distanciarse de los ciudadanos. Los que se distancian de los ciudadanos son los que nunca han tenido un verdadero interés en representarlos. Estar cerca de ellos no es estar en el living de sus casas o andar regalando objetos para los bingos; no es andar haciendo clientelismo electoral, sino representarlos en sus intereses fundamentales y en la dirección que le quieran dar a sus vidas personales y a la vida en sociedad.

Entender la política como politiquería o como venta de servicios y regalos de baratijas, como se hacía para conquistar a los pueblos originarios, conduce a la distorsión de la política y no a lo que verdaderamente tiene de noble, que es contribuir a la conducción de la sociedad.

En estos distritos más grandes, supuestamente más distantes de los ciudadanos, se van a necesitar menos votos para elegir a un diputado . Por ello, podrán estar representadas acá las mujeres, los mapuches, los trabajadores y los jóvenes, que hoy, afortunadamente, han llegado en una pequeña oleada a la Cámara. Por lo tanto, tendrán más importancia el pensamiento y la acción política; habrá un ambiente más favorable al desarrollo y al fortalecimiento de los partidos políticos; prevalecerá el sentido de colaboración y comunidad sobre la competencia y el individualismo, y tendremos menos caudillos+ y partidos políticos que pesarán más que sus fulgurantes figuras.

Señor Presidente , en el preproyecto se hizo un intento por hacer efectivo lo que establece la Constitución: un hombre, un voto, tratando de igualar el peso específico de cada ciudadano. Este es un ideal que vamos a tener que seguir persiguiendo, porque para hacer viable política y parlamentariamente el proyecto y eliminar el sistema binominal en todo el país, hubo que dar mayor importancia a las regiones extremas y menos pobladas, como Arica, Tarapacá, Atacama , Aysén y Magallanes . Ello, para romper el sistema binominal y por razones de carácter estratégico y geopolítico. Así, estas zonas pasarán de 12 a tener 17 diputados, y también verán aumentado el número de senadores representados en el Congreso Nacional.

Con el propósito de permitir el florecimiento y expresión de toda la riqueza de la sociedad chilena, se ha favorecido que los independientes también puedan llegar al Congreso Nacional, al igual que nuevos partidos políticos. Sin embargo, nos hubiese gustado -apoyaremos que así sea- que dentro de los pactos se pudieran establecer subpactos, con el propósito de facilitar la expresión de las afinidades, de los acuerdos políticos y del afianzamiento de las coaliciones, por los acuerdos que se construyen al interior de ellas.

Por último, cabe destacar que es primera vez en la historia de Chile que un Parlamento se reforma a sí mismo. Es una virtud de la cual vale la pena vanagloriarse.

He dicho.

El señor CARMONA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Bernardo Berger.

El señor BERGER.-

Señor Presidente , en primer lugar, saludo respetuosamente a las señoras ministras y señores ministros que nos acompañan.

Quiero dejar muy en claro que siempre he sido de la idea de que hay que perfeccionar el sistema electoral chileno, siempre y cuando esos cambios vayan en la línea de mejorar la representatividad y fortalecer la democracia, pero no para hacer trajes a la medida a uno u otro sector político o para aumentar la burocracia, como si la política fuera una agencia de empleo.

Es necesario que Chile evolucione hacia un sistema que dé reales garantías de representatividad, capaz de reflejar las distintas formas de pensar y sentir nuestro desarrollo actual y futuro.

En ese sentido, soy partidario de cambiar el actual sistema; por lo tanto, en general, estoy a favor de legislar sobre la materia.

Este era un tema en el cual Renovación Nacional ya tenía un preacuerdo con la Democracia Cristiana, por lo que me alegra que el Gobierno se haya hecho eco de esas conversaciones nacidas desde el centro político de Chile. No obstante, estimados colegas, no veo qué tiene que ver mejorar la democracia con aumentar de forma desproporcionada y antojadiza el número de honorables en el Congreso Nacional. Una cosa es perfeccionar el sistema de elecciones, pero otra muy distinta es abultar el aparataje legislativo para dejar contentos a algunos y pagar favores a otros.

A mi juicio, y según millones de ciudadanos que nos están observando con atención, la reforma puede hacerse perfectamente sin aumentar el número de diputados y senadores, sin generar un entuerto, como la redistribución distrital, y, en definitiva, sin aumentar en más de 13.000 millones de pesos anuales el gasto fiscal, por más que el Gobierno se esfuerce en desmentir lo indesmentible.

Por eso, con el objeto de que no quede ninguna duda, anuncio que para una reforma al sistema electoral estoy plenamente disponible y, por tanto, votaré a favor la idea de legislar. Pero cuando llegue el momento de aumentar el gasto fiscal para crear más cupos de diputados y senadores, para enredos territoriales que lesionen la representatividad regional -lo digo con todas sus letras-, no estoy disponible.

La redistribución y concentración de los distritos propuesta por el Ejecutivo solo replica y confunde los alcances entre senadores, diputados y consejeros regionales; aumenta el gasto territorial, despersonaliza el trabajo y debilita la representatividad de los actuales distritos.

El haber adosado estos aspectos al proyecto carece de todo sentido; pareciera que en el Ejecutivo hubiera una intención premeditada de llevar la iniciativa al fracaso.

Finalmente, quiero subrayar que, desde el regionalismo, estaremos atentos a que las modificaciones propuestas no signifiquen distorsiones a la representatividad ni un desmedro a las regiones respecto del centro, y que la propuesta electoral sea un real aporte a la democracia y a la participación y no un traje a la medida de un bloque político.

He dicho.

El señor CARMONA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Enrique Jaramillo.

El señor JARAMILLO.-

Señor Presidente, saludo a la ministra directora del Servicio Nacional de la Mujer y le doy la bienvenida a esta importante sesión.

Seguramente, repetiremos los discursos o se escucharán versiones muy parecidas. Pero al hacerlo con la verdad, tiene otro valor y, por eso, no importa la hora ni el momento, puesto que es por el bien de Chile.

Hoy, por primera vez, comenzamos a estudiar el término de un sistema electoral que no ha permitido que las mayorías y las minorías se expresen con realismo en cuanto a la representación en ambas Cámaras del Congreso Nacional. Quiero dejar en claro que ello ocurrió en las últimas elecciones parlamentarias.

Hasta hoy contamos con un sistema segregador, altamente discriminatorio, que favorece a sectores que, aunque sean minoritarios en el sentir ciudadano, logran obtener representación similar a la de la mayoría y deja fuera del Congreso Nacional a minorías importantes que no forman parte de los dos grandes bloques.

A su vez, el alto quorum exigido prohíbe su modificación, pues cuesta mucho obtenerlo, ya que una parte de esos sectores, que se ven favorecidos por el sistema binominal, se han negado persistentemente a comprometer sus votos para hacerlo, ya que saben que cualquiera modificación pone en riesgo la situación de privilegio que han obtenido gracias a dicho sistema electoral.

Además, la iniciativa beneficia a las mujeres, por lo que pido a las colegas que escuchen el planteamiento de un varón que quiere que las mujeres tengan el 40 por ciento de representatividad.

(Aplausos)

El texto en discusión no es el óptimo, aunque, de aprobarse, permitirá una mayor representación. Aún estamos por debajo de los estándares que plantea una organización mundial como la OCDE, que vela por que los países que la integran logren ciertos niveles de calidad en los distintos ámbitos de su quehacer nacional, ya sean económicos o de representatividad democrática.

Sin embargo, como un primer intento, debe valorarse, ya que la profundización democrática debe ser un valor a cautelar en todas las sociedades del orbe. Esto es sí o sí. Mientras más diversa sea la representación en el Parlamento, será también más representativa del sentir ciudadano y serán mejores las leyes que de ahí surjan.

Por ello, me alegro de que con este proyecto de ley, por primera vez en la historia de nuestro país, las mujeres tendrán el 40 por ciento de la representación, un logro que seguramente las llenará de alegría.

Es cierto que, al haber mayor competencia en los distritos, habrá mayor incertidumbre en los resultados; pero eso es bueno para el sistema, ya que el actual binominal permite, incluso, que de forma extraña, pero legal, se reserven los distritos y circunscripciones para algunas personas favorecidas por la voluntad de quienes toman las decisiones en los partidos. Que alguien me diga lo contrario. Insisto en que las reservas de cupos existen. Por ejemplo, en el sur tenemos representantes, personas respetables, que viven en la Región Metropolitana. ¡Jamás han residido en el distrito, pero representan a las personas que sí residen ahí!

Por otra parte, esta modificación seguramente permitirá que los movimientos y partidos compitan más con las ideas que con la calculadora, puesto que hoy algunas alianzas no se realizan sobre la base de la coincidencia ideológica o programática, sino, más bien, en virtud del rendimiento electoral de la coalición que se integra, lo cual ha producido un efecto contrario a lo que se ha publicitado como una de las fortalezas del sistema binominal, como se ha escuchado aquí: que permitiría la construcción de dos grandes bloques.

Gracias a la exclusión que se ha producido en dichos bloques, no solo respecto de partidos, sino también de sectores dentro de los partidos, se ha provocado la proliferación de movimientos y nuevos partidos, lo que continúa, a tal grado que hoy deben existir más grupos políticos que los que existieron antes de la pérdida de la democracia.

Creo que este proyecto permitirá un avance sustancial en nuestra historia republicana y significará una maduración de nuestra democracia; planteará nuevos desafíos y tareas, que estamos dispuestos a afrontar por el bien de nuestro país, por una mayor participación de ciudadanas y ciudadanos, que hoy miran perplejos a quienes se eligen, y por poner fin a la exclusión de grupos y sectores que, aunque son minoritarios, también tienen algo que decir a nombre de los ciudadanos que representan.

Con este proyecto aprobado, la democracia plena quedará con la frente en alto después de 24 años de dudas.

Por lo tanto, anuncio que votaré a favor, por Chile y su futuro.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CARMONA ( Vicepresidente ).-

Tiene la palabra el diputado Guillermo Teillier.

El señor TEILLIER.-

Señor Presidente , han pasado 41 años desde que la dictadura cerró el Parlamento y clausuró la posibilidad de que el pueblo eligiera a sus representantes al Congreso Nacional con un sistema electoral proporcional.

Con ello, se puso fin a una parte sustancial de nuestra democracia, a un Parlamento centenario que fue testigo y protagonista de la conformación de nuestras leyes, muchas de ellas de alto contenido de justicia social, las que, además, refrendaban la lucha de los trabajadores, campesinos, empresarios, intelectuales, jóvenes, mujeres y pueblos originarios por sus derechos.

Era común ver a diputados y senadores obreros, con la tradición que creó Luis Emilio Recabarren , así como a campesinos, mapuches, intelectuales, mujeres, como las que lucharon e impusieron el derecho a voto, en 1949, para participar en las elecciones parlamentarias y presidenciales.

Lamentablemente, tan simbólica destrucción de uno de los pilares de nuestra democracia fue acompañada por la terrible entronización del terrorismo de Estado, con todas las secuelas que conocemos.

Tuvieron que transcurrir 17 años de menosprecio hacia la democracia, hacia el Congreso Nacional y hacia los partidos políticos para que, de nuevo, se instaurara un sistema electoral que abría camino hacia una democracia imperfecta, con senadores designados y vitalicios y con un sistema binominal que perduró por veinte años, que era excluyente y que estableció, por largo tiempo, un virtual empate en el número de parlamentarios elegidos, lo que, por medio de los quorum calificados, impidió muchas veces que se expresara la voluntad mayoritaria del pueblo y generó la insatisfacción, la falta de confianza y la decisión de no asistir a las urnas en millones de chilenos, porque no se llevó adelante a plenitud, durante un par de décadas, lo que todos esperaban de un sistema democrático.

A lo anterior se debe agregar que los dirigentes sociales no podían aspirar a ser diputados y senadores si no renunciaban a sus cargos de representación social.

Los chilenos que vivían en el exterior ni siquiera tenían derecho a ejercer su voto. También se ha mantenido por largo tiempo la discriminación hacia la presencia de la mujer y de los pueblos originarios en el Congreso Nacional.

Hoy, después de 41 años, se ha conformado una nueva mayoría ciudadana y parlamentaria que posibilita llevar adelante reformas estructurales, largamente exigidas por nuestro pueblo, entre ellas la que pone fin al sistema electoral binominal y lo reemplaza por un sistema electoral proporcional, con ley de cuotas que, además, permite la conformación de nuevas agrupaciones partidarias, con menos trabas y mayores facilidades. Lo mismo ocurre con los independientes.

Este es un hecho histórico, de reparación histórica, en cuya concreción concurren muchos actores de manera transversal. Dan ganas de expresar -lo digo con todas mis fuerzas- que hoy es necesario valorar el ejemplo digno y patriótico del Presidente Salvador Allende , que ofrendó su vida en defensa de la democracia y la institucionalidad vigente al momento del golpe militar.

(Aplausos en la Sala)

Por algo su gesto es reconocido en todo el mundo. Podemos decir que hoy recuperamos parte de nuestra dignidad, que fue atropellada pero que nunca perdimos.

También me gustaría rendir un homenaje a los que lucharon contra la dictadura y por restablecer la democracia, algunos de los cuales, incluso, dieron su vida en ello. Me refiero a los diversos actores políticos, sociales y religiosos, a todas y todos los que durante años lucharon por cambiar el sistema electoral binominal, a nuestra compañera Gladys Marín , quien ya en 1996 propuso a la entonces Concertación unir fuerzas en un pacto instrumental para, entre otras reformas, cambiar el sistema electoral.

Quiero resaltar nuestro apoyo a Michelle Bachelet en la segunda vuelta presidencial, para su primer período, para el cual pusimos como condición principal el envío de un proyecto de reforma electoral al Congreso Nacional, cuya aprobación fue impedida por la minoría, que se amparó en los quorum calificados, la misma que hoy se opone a esta reforma trascendental.

También deseo agradecer a las diputadas y los diputados, las senadoras y los senadores que nos acogieron en aquellos años de exclusión y que presentaron proyectos de reforma electoral.

Asimismo, deseo agradecer a la CUT y a las organizaciones sociales y estudiantiles, que desde hace muchos años incorporaron en sus plataformas, como algo esencial para el futuro del país, el cambio del sistema binominal y que, además, lucharon por ello en las calles con justa razón.

También me gustaría agradecer a quienes hicieron posible, mediante un pacto electoral, que rompiéramos la impronta exclusionista del sistema binominal, lo que hizo posible que tres diputados comunistas llegaran a esta Cámara, lo que, al mismo tiempo, abrió las puertas para que nuestros partidos convergieran en un programa común y mostraran su disposición a avanzar hacia una democracia más inclusiva y participativa.

Del mismo modo, quiero agradecer especialmente a aquellos que, sin ser de gobierno, hoy se suman a esta iniciativa, lo que da cuenta de que es una auténtica mayoría nacional la que impone este cambio, que no debiera ser patrimonio de ningún partido ni de un grupo de partidos, sino del pueblo, para que ejerza de mejor forma su soberanía, como corresponde en una democracia.

Igualmente, me gustaría agradecer a los chilenos que en el exterior lucharon por el derecho a voto durante tanto tiempo y que, al fin, durante este gobierno de la Nueva Mayoría, lograron culminar con éxito.

De la misma manera, quiero agradecer a la Presidenta Michelle Bachelet por mantener en alto la voluntad política de llegar a este cambio sustancial de nuestra institucionalidad.

Como presidente del Partido Comunista, puedo declarar que el solo hecho de llevar adelante este cambio trascendental justifica que nuestro partido sea incorporado a la Nueva Mayoría y al gobierno que encabeza la Presidenta Bachelet.

¡Al fin se rompen los candados que mantienen a la democracia cautiva de una institucionalidad todavía anclada en la época dictatorial!

Se está introduciendo en nuestra institucionalidad un factor que augura en Chile un cambio cultural en la forma de hacer política y de aquilatar el valor de la democracia, y se abren espacios para avanzar hacia el cambio de la Constitución, que deberá refrendar el sentimiento mayoritario de que es necesario reconocer y garantizar los derechos, aumentar la participación ciudadana en espacios que vayan más allá del solo acto de participar en elecciones, con una concepción de país más igualitario, a lo que indudablemente contribuyen las reformas estructurales que lleva adelante el gobierno de la Nueva Mayoría.

Nuestro empeño nunca ha sido el de solo pensar en la representación partidaria. Por ello, valoramos profundamente el proyecto presentado al Congreso Nacional por la Presidenta Michelle Bachelet, representada en este momento por el ministro del Interior y Seguridad Pública, por la ministra secretaria general de la Presidencia y la ministra directora del Servicio Nacional de la Mujer.

Con la aprobación de este nuevo sistema electoral, Chile tendrá la posibilidad de ser más democrático, más justo, más representativo y, por sobre todo, el pueblo estará mejor representado.

La bancada del Partido Comunista y de la Izquierda Ciudadana expresa con convicción y entusiasmo su apoyo a este proyecto, y proclama el fin del sistema binominal.

Por último, decimos: adelante con el sistema proporcional; la lucha de muchas y muchos no ha sido en vano.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CARMONA ( Vicepresidente ).-

Tiene la palabra el diputado Joaquín Godoy.

El señor GODOY.-

Señor Presidente , al escuchar al diputado Guillermo Teillier hacer un pequeño análisis respecto de la historia, recordé un momento muy relevante para mí, que me hizo sentir muy orgulloso de ser parte del Congreso Nacional y entender lo que representa. Mi padre, diputado de la república por la Quinta Agrupación Departamental “ San Felipe , Petorca y Los Andes”, que fue preso político de Allende, el 11 de septiembre, día del golpe militar, fue a sesionar al Congreso Nacional. Llegaron solo dos parlamentarios, uno de los cuales era él.

Quería traer a colación esa historia, que, en lo personal, me enorgullece mucho, porque eso demuestra el maravilloso rol republicano que le corresponde a esta institución.

Cuando se analiza el sistema electoral, la primera pregunta que nos formulamos es la siguiente: ¿Por qué lo queremos cambiar? He escuchado a muchos parlamentarios, entre ellos los diputados Barros , Berger y algunos de la Nueva Mayoría, que han planteado su intención de mejorar la calidad de esta institución, para que haya una mejor percepción ciudadana respecto de lo que representa. Es ahí justamente cuando se responde la pregunta esencial: ¿Por qué debemos cambiar el sistema?

El sistema binominal ha subsidiado a los dos grandes bloques políticos y, por lo tanto, de alguna manera, ha servido para doblarle la mano a la ciudadanía. En consecuencia, es menos representativo. Me parece que una de las razones por las cuales el Congreso Nacional cuenta con poca adhesión es que no siempre representa fidedignamente el sentir popular y la opinión de la ciudadanía. Por eso conocemos muchos casos de candidatos que postularon al Parlamento, obtuvieron grandes votaciones, pero no están sentados aquí. También podemos encontrar a parlamentarios que obtuvieron votaciones muy pequeñas, muy minoritarias, pero que sí están sentados aquí. Eso ocurre gracias al sistema binominal.

Creo en la libertad, y una de sus características debiera ser que se pueda ejercer, para que el poder popular, la soberanía popular, esté representada en el Congreso Nacional. Esa es una de las primeras reflexiones de fondo que me planteo.

El sistema electoral actual, que pudo haber cumplido un objetivo en su momento, en la sociedad democrática en que vivimos hoy ya no lo cumple. Por lo tanto, se hace muy necesario modificarlo para permitir que la ciudadanía se sienta mejor representada o que, por lo menos, su voto esté fidedignamente representado en el Congreso Nacional.

A diferencia de lo que expresaron algunos parlamentarios, que piensan que los electores no entienden qué significa el sistema binominal o el cambio que se busca respecto de cómo elegir a sus parlamentarios, los electores sí entienden perfectamente que si hay votaciones y una persona obtiene la mayoría, debería estar sentada acá; pero el sistema vigente no lo garantiza.

En consecuencia, cae de cajón que lo que tenemos que hacer es cambiar el sistema binominal por uno más representativo. Pero no entiendo -lo digo con mucho respeto y afecto- los argumentos de algunos parlamentarios. Escuché que el diputado Berger dijo que le gustaría un sistema más representativo, pero que, al mismo tiempo, no aumentara el número de parlamentarios. Pero Renovación Nacional ha planteado una propuesta que considera más diputados y más senadores. Por lo tanto, me gustaría que en este debate hubiera más coherencia, porque, de lo contrario, se confunde a la ciudadanía.

La razón por la cual estamos discutiendo este proyecto, por lo menos como Amplitud, es que siempre hemos querido que sean los ciudadanos quienes tomen las decisiones, los que elijan a sus representantes, como corresponde en democracia, y la mejor manera de hacerlo es con un sistema más representativo.

(Aplausos)

Desde Amplitud hemos hecho un esfuerzo enorme, nada de fácil, porque formamos parte de una coalición, de una alianza política que tiene diferencias; las entendemos de esa manera y las respetamos. No queremos hacer escarnio ni validar nuestro proyecto político a partir de las diferencias que tenemos con otros partidos, pero sí pedimos respeto y coherencia en cuanto a lo que es relevante.

Sé que todos los partidos de la Alianza estaban dispuestos a aumentar el número de parlamentarios, porque entendían que era la mejor manera de establecer un sistema más representativo, sobre todo para que nuestras regiones no perdieran representatividad, en especial las más extremas, que tienen menos población. Es muy importante que Santiago no se vea sobrerrepresentado, porque la diferencia con el resto de las regiones es muy grande. Este proyecto incorpora ese aspecto y no da sobrerrepresentación; muy por el contrario, más bien empareja la cancha al posibilitar una mejor representatividad.

Entonces, nuestro llamado es a que discutamos el fondo y lo que realmente queremos, y que no centremos la discusión en que el Congreso Nacional gastará más recursos mayores o en defender el sistema que tenemos. Me parece increíble que algunos diputados afirmen que no es necesario tener más parlamentarios, porque es una forma de denostar su propio cargo. Yo me siento muy orgulloso de ser diputado y de representar a Valparaíso, Isla de Pascua y al archipiélago de Juan Fernández .

(Aplausos)

Me siento muy orgulloso de ser parlamentario; creo que es un privilegio. También me siento muy orgulloso de que mi familia siempre haya sido muy republicana.

Insisto en que debemos discutir el tema de fondo, de manera que hago un llamado a ceñirnos a esa discusión, para que finalmente sean los ciudadanos los que, con su voto, elijan a quienes deben formar parte del Congreso Nacional. Eso dignificaría muchísimo más la política. Siento que una de las grandes razones por las cuales este Parlamento tiene tan baja adhesión es que los chilenos creen que sus diputados y senadores son elegidos a dedo por los partidos políticos. ¿Cuántas veces hemos visto que se resten candidaturas y que se cierren distritos? No se suma la competencia. ¿Qué genera eso? Que finalmente se le tuerza la mano a la ciudadanía.

Por eso, hago un llamado a mi alianza para que vote, ojalá en su gran mayoría, a favor este proyecto, por lo menos en general.

Entendemos que puedan existir diferencias, pero me parece que el ministro del Interior y Seguridad Pública tiene la mejor voluntad para analizar alternativas y encontrar el número adecuado de parlamentarios a elegir. En cualquier caso, lo importante es que haya un cambio de fondo que permita lo que nos interesa, por lo menos a quienes formamos parte de Amplitud: que sean los ciudadanos quienes elijan a sus representantes.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Fernando Meza.

El señor MEZA.-

Señor Presidente , en primer lugar, saludo con afecto a la ministra secretaria general de la Presidencia , señora Ximena Rincón ; al ministro secretario general de Gobierno , señor Álvaro Elizalde , y a la ministra directora del Servicio Nacional de la Mujer , señora Claudia Pascual .

Estamos discutiendo un proyecto de ley que busca sustituir el actual sistema electoral binominal por uno proporcional inclusivo.

Los griegos debatían y parlamentaban en un sitio trascendental para el desarrollo de la democracia: el ágora. Allí nació la democracia griega: demos, pueblo; cracia, gobierno. Gobierno del pueblo.

Chile aspira a contar nuevamente con una democracia inclusiva y plena, como la que tuvo en el pasado, pero que fue interrumpida por los hechos que todos conocemos. Hoy, en presencia de una mayoría parlamentaria con distintos colores políticos, con distintos colores ideológicos, es posible alcanzar ese objetivo.

Es preciso que los ciudadanos, que las chilenas y los chilenos, comprendan que la democracia es un valor indispensable para alcanzar las libertades individuales y colectivas. Sin ella nos podríamos sumergir, una vez más, en el desencanto y en la tristeza.

Por ello, tenemos este cambio que se avizora dentro de las próximas horas en esta Cámara, que reemplazará un sistema electoral marchito, que ha acarreado muchas injusticias de representatividad y ha impedido el desarrollo y la aprobación de muchos cambios imperativos en nuestra sociedad. Pero cada vez que hemos hecho ver la necesidad de tales cambios, en el Congreso Nacional hemos encontrado que sesenta y tres es igual a treinta y tres.

De manera que los diputados radicales nos congratulamos hoy de estar presentes en un momento histórico para nosotros y para todo Chile.

La democracia plena que estamos buscando exige costos económicos, y también, para muchos, costos en lo personal. Pero es la única manera de fortalecer la representatividad en el país.

A propósito de fortalecer la representatividad, como diputado de La Araucanía y representante de una bancada que tiene su origen en las provincias, quiero romper una lanza -nunca mejor dicho- en favor de la necesidad de que los pueblos originarios también estén presentes en el Congreso Nacional y de que la democracia se abra e incluya a los nueve pueblos indígenas que viven en Chile, que se sienten postergados y que no están auténticamente representados, como merecen, por uno de los suyos. Ojalá que este cambio se haga realidad en un futuro próximo. De esta manera vamos a conseguir que haya mucha más paz social y mucha más tranquilidad que la que existe hoy.

En el nuevo escenario electoral, el Partido Radical adhiere con júbilo a este trascendental momento, porque, a fin de cuentas, el arte de gobernar excluye los intereses personales. En el Congreso Nacional no puede haber un solo diputado o diputada, senador o senadora que piense, primero, en cómo va en tal o cual desarrollo legal antes de aprobarlo o rechazarlo.

Tenemos que seguir la línea de pensamiento que siempre beneficie el bien común; tenemos que volver a conseguir la confianza de la ciudadanía en sus representantes; tenemos que evitar toda acción que se muestre como un interés exclusivamente personal o partidista.

Por otro lado, los radicales apoyamos hoy, como ayer, con fuerza, la participación de la mujer en política. Por eso, vamos a votar favorablemente todo cambio que implique aumentar la presencia femenina en el Congreso Nacional, tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado. El aporte de la mujer es fundamental y trascendente. Por ello, como partido, vamos a cumplir con la mayor participación posible de mujeres radicales candidatas con posibilidades de ser elegidas, porque no vamos a presentar mujeres candidatas en distritos en los que no tienen ninguna posibilidad de alcanzar un escaño, para así cumplir, mirando hacia el techo, con una de las promesas que hicimos a la ciudadanía.

Los radicales vamos a exigir transparencia máxima y fiscalización total respecto del gasto electoral. No queremos ver más declaraciones de gastos electorales donde pareciera que un candidato o candidata solo compró diez o veinte palomas o gigantografías, en circunstancias de que vemos que las calles están sembradas de cientos o miles de elementos propagandísticos mediáticos que no guardan relación con el mínimo gasto que declaran al Servicio Electoral.

Por lo tanto, el Servel tiene una tarea fundamental para rescatar la credibilidad ciudadana. También tenemos que dotar al Servel de todos los medios necesarios para que fiscalice como corresponde a quienes inundan las mentes, las calles y los medios de comunicación con propaganda y con dinero, porque sabemos bien de donde viene y cómo compromete el voto de muchos de los que se encuentran aquí.

El gasto electoral debe ser absolutamente transparente, y el dinero y la política deben ser completamente fiscalizados. ¡Nunca más el dinero debe prevalecer por sobre las ideas y principios que todos decimos defender en este hemiciclo!

La ciudadanía exige hoy estar bien representada. Quienes estamos en el Congreso Nacional debemos tener como primer y único objetivo el servir a nuestros conciudadanos, más allá de las diferencias ideológicas, porque, como he dicho, el bien común es lo más importante.

El llamado a que los pueblos originarios estén presentes en el Congreso Nacional debe ser escuchado por todos. Solo la inclusión nos hará un país más desarrollado y más democrático.

La bancada del Partido Radical votará favorablemente este proyecto, que devuelve al Chile republicano la representatividad electoral que merece.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Patricio Melero.

El señor MELERO.-

Señor Presidente , hoy vamos a votar en la Cámara de Diputados una reforma a nuestro sistema electoral, en la perspectiva de que esta discusión también la han tenido muchos otros parlamentos y países, que son variados los sistemas que conviven en las democracias, lo que incluye a sistemas proporcionales, uninominales y binominales.

Desde luego, en nuestro país tenemos la convivencia de todos ellos. Tenemos un sistema uninominal en las elecciones de alcaldes; uno proporcional, en las elecciones de concejales, y uno binominal, en las elecciones parlamentarias. Son sistemas electorales democráticos que han sido aplicados y defendidos en todas partes del mundo, salvo en los países de la órbita comunista. Por eso sorprende tanto ver que los parlamentarios del Partido Comunista defiendan sistemas democráticos que no se conocen en Cuba, en Corea del Norte, ni en otras dictaduras donde estos temas ni siquiera se conversan o discuten. Pero, en fin, debemos entender como un paso positivo que el comunismo chileno quiera desvincularse, al menos en ese aspecto, del comunismo internacional, que sigue defendiendo los regímenes totalitarios.

El Gobierno nos ha planteado una reforma que ha calificado como moderada, con el objetivo de buscar la igualdad del voto, de abrir un espacio a la mayoría y de que haya una mayor diversidad. Pensemos si eso va a ser así.

Partamos por decir que esta reforma no tiene nada de moderada. ¿Cómo podría ser moderada una reforma que implica un aumento de 47 parlamentarios y que, según un informe de la Biblioteca del Congreso Nacional, de mantenerse las actuales dietas y asignaciones, representará un costo de 13.601 millones de pesos? ¿Qué tiene de moderada una reforma de esa magnitud? No utilicemos adjetivos que no corresponden.

Veamos si cumple algunas de las premisas que el proyecto señala. En cuanto a la proporcionalidad, tengo la convicción de que no es necesario el aumento de 47 parlamentarios para lograr tal proporcionalidad. Desde luego, la UDI respaldó una reforma al sistema binominal presentada por el gobierno anterior, que permite una proporcionalidad sin aumentar en ni un solo diputado o senador.

La Democracia Cristiana, en un acuerdo con Renovación Nacional, que después no prosperó, también propuso un sistema que aumentaba la proporcionalidad en cifras muy por debajo de los 47 parlamentarios que hoy se mencionan. Además, como consecuencia de esta reforma, se generarán megadistritos, que disminuirán de sesenta o veintiocho en el país. Vamos a pasar del orden de los 200.000 electores por distrito, que es el promedio actual, a 477.000 electores por distrito, en promedio, según lo que se está planteando. Sin duda, esto va a producir un cambio en la lógica de la elección y también en las campañas, porque constituye una variación radical respecto al sistema que hoy impera en el país.

Con estos megadistritos y con este promedio de sobre 400.000 electores, indudablemente se producirá un alejamiento entre los parlamentarios y los electores. Además, se generará, inevitablemente, una mayor concentración del poder político en los grandes centros urbanos, que desplazará a las regiones y a las comunas más pequeñas.

Si a eso sumamos el costo de las campañas, potenciado por las listas que se están planteando, los megadistritos serán una verdadera barrera de entrada para los candidatos de los partidos más pequeños o para los independientes, que quedarán fuera de los grandes pactos. Es decir, se está aprobando una reforma electoral que va a generar menor diversidad y mayor concentración.

Obviamente, los objetivos esgrimidos por el Gobierno, en el sentido de buscar una mayor igualdad de votos y abrir espacios a una mayor diversidad, van exactamente en la dirección contraria a lo planteado en la reforma que se está discutiendo, ya que habrá menor diversidad, mayor concentración en los grandes centros urbanos y menor posibilidad de que los independientes y los más pequeños resulten elegidos.

Además, ¿qué duda cabe de que esta reforma es, además, un traje a la medida, hecho entre cuatro muros de La Moneda con expertos electorales, con el fin de fortalecer a la Izquierda y perjudicar a la Democracia Cristiana y al centro político? ¿Qué duda cabe de que es un verdadero traje a la medida, lo que se demuestra por el hecho de que en la Región de Atacama se elegirán los mismos cinco diputados que en la Región de Antofagasta, que casi duplica en número de electores a la de Atacama?

¿Qué ocurrirá con la Región de Tarapacá? Elegirá a tres diputados, en circunstancias de que tiene casi el mismo número de electores que la Región de Atacama, que elegirá a cinco. ¡Gran triunfo, señor Presidente , del Partido Comunista en la Región de Atacama! ¡Gran triunfo del diputado señor Lautaro Carmona , quien logrará con menos habitantes elegir a más diputados! ¡Un traje a la medida para fortalecer y perpetuar a la Izquierda en el Parlamento, en perjuicio del centro y de la Democracia Cristiana, partido que con la presencia de los pactos y de los subpactos volverá a pagar el costo más alto en la Nueva Mayoría!

En fin, el cambio del sistema mayoritario por uno proporcional afectará, como ha ocurrido en todas partes del mundo, la estabilidad política, generará un mayor multipartidismo, fortalecerá la creación de partidos regionales en desmedro de las grandes mayorías nacionales y creará una capacidad de chantaje de dos o tres diputados en contra de las grandes mayorías del Parlamento. Es lo que ha ocurrido siempre con los sistemas proporcionales.

En los últimos minutos que me restan, quiero referirme al financiamiento de la reforma electoral y al informe técnico complementario presentado a última hora en la Comisión de Hacienda, al que no pudo tener acceso la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia.

El aumento de parlamentarios implicará a todo evento un mayor costo al erario; irrogará un mayor gasto, independientemente de si será financiado por el Congreso Nacional o por el Ejecutivo a través de una indicación al proyecto de Ley de Presupuestos, que se niega a presentar.

El propio Gobierno reconoce un costo de 4.800 millones de pesos en el informe complementario; sin embargo, deja de lado el tema de las asignaciones. Para que nadie se engañe, el informe de la Biblioteca del Congreso Nacional señala que el costo real de esta modificación al sistema electoral significará 13.600 millones de pesos para el erario, si se mantienen las actuales asignaciones y dietas, respecto de las cuales en estos veintitantos años no he escuchado a nadie decir que no les son necesarias.

El Gobierno sabe que esta reforma es impopular y que el 60 por ciento de los chilenos rechaza el aumento de parlamentarios. Si a lo anterior se agrega que el Estado deberá destinar recursos para financiarla, resultará más impopular. En consecuencia, el Gobierno ha diseñado toda una estrategia para esquivar la impopularidad y para evitar decir a los chilenos la verdad de frente. Al Gobierno de la Presidenta Bachelet y de la Nueva Mayoría le falta coraje y convicción para defender su propia reforma y para decir la verdad a los chilenos, cual es que se deberán entregar más recursos, los que se dejarán de invertir en otras áreas, para financiar una reforma que tiene un mayor costo fiscal que el que señala el Gobierno.

Señor Presidente, aceptar lo que dice el Gobierno es admitir que hemos tenido un presupuesto abultado durante décadas, mal administrado, mal gastado y que sobran recursos en el Parlamento.

Más sorprendente resulta leer en el informe financiero que el Gobierno invoca la existencia de un acuerdo político para financiar esta reforma con platas del Congreso, que los dirigentes de la Nueva Mayoría me acaban de decir que jamás sostuvieron. Es decir, el Ejecutivo endosa al Congreso Nacional la responsabilidad de esa forma de financiamiento.

Al respecto, señor Presidente , debo señalar que nunca he visto un Parlamento más pusilánime y más obsecuente, que se autoinfiere daños a su potestad y a su independencia respecto del Poder Ejecutivo , lo cual es algo que tendrá que pagar en el futuro.

Hoy trasladan la decisión respecto del gasto al Presupuesto de 2017. Probablemente, el diputado Fidel Espinoza , quien dice que será Presidente de esta Corporación en esa época, tendrá que defender ese aumento en el financiamiento de esta reforma a todo evento. Es decir, ahora ocultan el financiamiento que tendrán que aprobar a todo evento en el Presupuesto de 2017.

Finalmente, hago reserva de constitucionalidad de la iniciativa, ya que considero que vulnera los artículos 67 de la Constitución Política, y 14 y 17 de la ley orgánica constitucional del Congreso Nacional, al no establecer el origen de los recursos ni la forma como se financiará la reforma al sistema electoral.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Roberto León.

El señor LEÓN.-

Señor Presidente , después de escuchar al diputado Melero , no puedo iniciar mi intervención sin hacerme cargo de algunas cosas que señaló.

En verdad, me emociona casi hasta las lágrimas su preocupación por la Democracia Cristiana. No obstante, le quiero decir al diputado Melero , por intermedio del señor Presidente , que la unanimidad de los diputados democratacristianos apoyaremos la reforma, porque sabemos que no es un traje a la medida. Sabemos que corremos riesgos; pero la profundización de la democracia chilena nos obliga a correr riesgos.

Se acabaron los tiempos en que se establecían soluciones que nos acomodaran a todos. El Congreso Nacional ha adoptado muchas medidas para lograr más participación de la ciudadanía. Por ejemplo, nos jugamos por el voto voluntario y por ser el único Parlamento del mundo que externaliza la administración de sus recursos. No obstante, la gente nos dice: “¿Para qué vamos a votar, si en definitiva van a salir los mismos de siempre: uno de la Alianza y uno de la Nueva Mayoría?”. Por eso la gente se resta. Debemos hacer un esfuerzo verdadero para convencer a las personas, particularmente a los jóvenes, de que vayan a votar.

Con el proyecto en discusión, estaremos abriendo las puertas. No se está creando un traje a la medida para nadie. No me gusta el redistritaje; pero no puedo pensar en mí, sino en que exista una alternativa que sirva al resto de la gente.

Existe incoherencia en el planteamiento del diputado Melero sobre el proyecto, ya que primero señala que las minorías no van a tener representación, pero después dice que el cambio del sistema electoral permitirá que dos o tres parlamentarios de partidos pequeños chantajeen a las grandes mayorías del Parlamento. En verdad, no se entiende.

Lo último que él plantea es verdad: aquí habrá más movimiento, ya que los pueblos originarios seguramente también tendrán espacios para ello.

Asimismo, es importante resaltar que el proyecto cumple con el compromiso de la Presidenta Bachelet de incorporar a más mujeres a la política y al Parlamento. Eso se debe hacer.

(Aplausos)

Para eso necesitamos el redistritaje.

Sin embargo, en verdad, uno no sabe qué pensar cuando escucha a los diputados de la UDI, que son los únicos que van quedando en contra del proyecto en discusión, decir que quieren mirar hacia adelante y pedir que no los relacionen más con la dictadura militar; pero luego, cuando llega el momento de los “quiubos”, ¡oh, sorpresa!, uno se encuentra con que son los únicos que quieren seguir anclados a la barrera que la dictadura militar dejó para que los chilenos no pudieran expresarse como en verdad es necesario que lo hagan.

Sobre la base de lo que propone la iniciativa, la gente fijará las mayorías. En consecuencia, los que estamos en el Congreso Nacional no sabemos si seremos capaces de enfrentar los nuevos distritos. Pero de todos modos tenemos que jugarnos por ello, así como por la participación de las mujeres.

Por lo tanto, invito a los colegas de la UDI a que tengan más cuidado cuando hablen para tratar de poner a la ciudadanía en contra nuestra. Lo digo por una razón muy simple: este proyecto será ley de la república, y no hay país alguno en el que la democracia no tenga costos. Si nos fijamos bien, lo que dijo el diputado Melero lo podríamos extrapolar a lo siguiente: como la democracia tiene costos, y como el Congreso Nacional representa un costo para el Presupuesto de la nación, entonces eliminemos el Parlamento. A lo mejor habrá gente que lo va a aplaudir; a los mejor los colegas de la UDI también lo van a aplaudir, porque están acostumbrados al “dedazo”, no a la democracia. Eso hay que decirlo con fuerza y transparencia.

(Aplausos)

Tal como señalé, la democracia tiene costos. En ese sentido, no hay que olvidar lo que dijo en la Comisión de Hacienda el Presidente de la Corporación, en cuanto a que se harán todos los esfuerzos que sean necesarios para el financiamiento de la reforma. De hecho, se está conformando una comisión de expresidentes de la Cámara de Diputados, con el objeto de que estudien y determinen de qué manera se pueden administrar mejor nuestras funciones parlamentarias, que son legislar, fiscalizar y representar. Por lo tanto, no sé cómo el diputado Melero , que fue Presidente de la Corporación , puede decir que a lo mejor aquí se ha estado malgastando la plata, en circunstancias de que cuando él ocupó ese cargo administró los recursos en forma muy eficiente y no malgastó la plata.

Sabemos que se debe avanzar en esa línea. Pero si esa línea demuestra que faltan recursos, en torno al 4 por ciento del presupuesto, como planteó el diputado Pepe Auth , habrá que asumir como país lo que falta.

Por otra parte, no es cierto lo que dijo el diputado Melero en cuanto a que nuestro Gobierno y el ministro del Interior y Seguridad Pública no han sido capaces de plantear con claridad el respeto por la función parlamentaria. En tal sentido, quiero leer solo un párrafo de lo que el ministro del Interior dijo en la Comisión de Hacienda. De acuerdo con el informe de dicha Comisión, el ministro “recalcó que tiene la más alta consideración por el Parlamento, parlamentarios y la función parlamentaria, y manifestó, desde la perspectiva del financiamiento de esta reforma, la disposición del Gobierno para trabajar en conjunto y colaborar con esta tarea y la calidad del trabajo parlamentario en las nuevas condiciones del sistema político electoral.”. Si alguien no lo entiende, que lo lea de nuevo; pero para nosotros está absolutamente clara la película: el Gobierno ha sido coherente, ha sido transparente, y la Mesa de la Corporación está siendo muy clara respecto de lo que debe hacer.

En consecuencia, invito a los colegas de la UDI -a lo mejor, voy a perder el tiempo- a que voten a favor la idea de legislar, a que no se queden anclados en la dictadura militar y a que se sumen a la mayoría que quiere que el Congreso Nacional tenga mayor representación y más diversa. Si hacemos eso, poco a poco nos iremos ganando el respeto de la gente.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra la diputada Clemira Pacheco.

La señora PACHECO (doña Clemira).-

Señor Presidente , quiero saludar a los ministros que nos acompañan en el debate.

En 1973, nuestra democracia se vio quebrada a sangre y fuego por la fuerza. Hoy es un día histórico, pues estamos convocados a terminar, en forma democrática, con el sistema electoral binominal.

Ese sistema es un legado violento de la dictadura, un traje a la medida del dictador, diseñado a espaldas del pueblo, que fue perseguido y torturado, en una época en la que no había debate político, y cuyo pensamiento crítico se intentó eliminar.

La dictadura logró implantar un esquema integrado por dos grandes bloques políticos, bajo la lógica del empate técnico. Además, la dictadura forzó la aprobación de una Constitución Política ilegítima y antidemocrática. La voluntad soberana del pueblo no se ve expresada en la Carta Fundamental que aún nos rige, la cual, por lo mismo, debemos cambiar. Es una tarea pendiente que tenemos en el Gobierno, puesto que el sistema electoral que en virtud de ella se creó ha dañado la calidad de la democracia en el país.

El proyecto de ley que hoy discutimos propicia el cambio de un sistema electoral binominal a uno proporcional moderado. Mediante el presente mensaje, la Presidenta Bachelet terminará con el empate técnico y buscará facilitar la expresión de las mayorías y la representación de las minorías. Además, promueve la conformación de un Congreso Nacional que refleje la diversidad de la sociedad y que permita la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas.

Lo que más nos importa a las mujeres es que el mensaje incorpora medidas de equidad de género, puesto que hoy las mujeres solo tenemos una representación de 16 por ciento en el Congreso Nacional, en circunstancias de que somos mayoría en la población de Chile, una mayoría escondida y silenciada a la fuerza. Nuestra visión no se ve reflejada en las decisiones. Ninguna pide que se nos regale nada. Las que somos hijas del rigor, exigimos que se nos permita practicar y participar en un plano de equilibrio con los hombres en las decisiones que afectan a todo el país.

(Aplausos)

Por ello, la Presidenta Bachelet , con convicción, asumió el compromiso de cambiar este nefasto sistema binominal y el panorama que él establece, para lo cual propuso la inclusión de medidas de equidad de género, a través de la incorporación de un criterio de paridad flexible en la lista de las candidaturas parlamentarias. Esta es la única herramienta que acelera la incorporación de las mujeres en el Congreso Nacional.

En los partidos políticos muchas mujeres hemos trabajado en forma ardua en las campañas políticas de los candidatos, lo cual saben muy bien todos los hombres que están sentados aquí. Hay muchas mujeres que se desempeñan en cargos públicos, pero que no llegan nunca a ser candidatas. No podemos mantener esa situación tan injusta y desigual.

Las diferencias entre los hombres y las mujeres deben ser públicas, valoradas y propiciadas por el Estado. Una sociedad que se dice democrática debe saber considerar las diferencias como un valor, no como un defecto. Eso trae consigo la idea de que las mujeres ya no seremos las que marchan atrás de los compañeros, sino las que estamos al lado, incluso, adelante, llevando la batuta.

(Aplausos)

Las mujeres somos autónomas, diversas y únicas. Por esa razón, nuestra inclusión mayoritaria en la sociedad puede significar empezar a recorrer un camino mucho más justo, igualitario y equitativo.

En definitiva, las mujeres queremos aportar, con nuestra mirada, a la vida política pública. Seguiremos luchando por eliminar todas las barreras de entrada a la actividad política. Trabajaremos unidas con mucha fuerza, decisión y convicción. Sabemos que las mujeres unidas y coordinadas somos capaces de desarrollar los cambios que nuestra democracia necesita para perfeccionarse.

Tal como lo hemos dicho en innumerables oportunidades, esta iniciativa no es para nosotras, que hemos tenido la posibilidad de ser parlamentarias, sino para todas las mujeres chilenas, a fin de que puedan trabajar en política sin discriminación, y puedan aportar y concretar sus ideas en las decisiones relevantes del país.

Por todo lo anterior, anuncio que votaré a favor el proyecto, pero solicito votación separada del inciso quinto, nuevo, que se agrega al artículo 3° bis de la ley N° 18.700 a través del artículo 1°, número 1), letra b) del proyecto.

No quiero dejar pasar esta oportunidad para saludar y agradecer a las mujeres que hoy se encuentran en las tribunas, que apoyaron nuestro trabajo legislativo. Me refiero a las representantes de la Corporación Humanas, de la Comunidad Mujer, del PNUD y, especialmente, de la Corporación Mujeres Líderes para Chile.

He dicho.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Lautaro Carmona.

El señor CARMONA.-

Señor Presidente , qué duda cabe de que estamos en un debate histórico en el que se confrontan dos posiciones: o nos resguardamos, defendiendo una Constitución validada bajo dictadura, con el control de las armas, sin registros electorales y sin ninguna posibilidad de promover planteamientos distintos o alternativos, o avanzamos en la democratización de las instituciones de nuestro país.

Qué duda cabe de que este planteamiento, que a algunos llama la atención porque piensan que afectaría el prestigio que tienen las instituciones, en este caso, de la Cámara y del Senado, el cual fue presentado en la propuesta programática de la Presidenta Michelle Bachelet , concita el respaldo y la adhesión de la inmensa mayoría de la ciudadanía.

Quienes creen que la ciudadanía no entiende y que estos no son sus temas, sino otros, deben preguntarse por qué, ante la convocatoria a apoyar una propuesta programática en el plano institucional que pedía terminar con el excluyente y antidemocrático sistema binominal, se tuvo la adhesión que todos conocemos a nivel presidencial, parlamentario y de consejeros regionales.

Plantear lo contrario es una forma solapada, no transparente y no directa de defender un sistema electoral que evidentemente es más preciado por quienes se benefician directamente de él.

El Partido Comunista -lo dijo el diputado Teillier , presidente de nuestra colectividad-, en sus más de cien años de existencia, siempre ha bregado por profundizar la democracia en Chile. Lo hizo a favor del voto de la mujer, lo hizo a favor del voto de los analfabetos, lo hizo a favor del voto de los no videntes y lo hizo a favor del voto de la juventud cuando, en el gobierno del Presidente Salvador Allende, se amplió el cuerpo ciudadano con derecho a voto por la vía de bajar, para esos efectos, la edad de 21 a 18 años.

En sus más de cien años de vida, no hay un solo acto que pueda vincular al Partido Comunista con una actividad que no sea luchar por ampliar y ensanchar la democracia y, por tanto, ensanchar el cuerpo soberano. Hizo bien la Presidenta en traer este debate al Congreso Nacional, encabezado por los ministros que participaron en las distintas comisiones, porque está cumpliendo con su compromiso programático. Es un programa sin letra chica -cualesquiera que sean las contracampañas-, que se fija como una cuestión sustantiva tener una democracia plena a nivel de las instituciones. Esa es la propuesta del sistema electoral proporcional que está hoy en debate. Es decir, cada una de las corrientes de opinión y políticas que existen en la sociedad chilena debe tener presencia en el Congreso Nacional de acuerdo con su influencia electoral, y no ser excluida por un mecanismo que iguala la minoría con la mayoría, y limita la posibilidad de que terceras fuerzas sean representadas en forma directa.

Lo que está en debate es un mecanismo que permitirá tener un país mucho más democrático, con una representación más completa.

Asimismo, por primera vez en nuestro sistema electoral se contempla la preocupación por una representación política de género, en virtud de la cual ninguna candidatura masculina o femenina podrá tener menos del 40 por ciento o más del 60 por ciento. Ello da cuenta de la presencia que tienen las mujeres en la sociedad y de los aportes que hacen en todos los planos de las actividades económicas, intelectuales, de servicio, artísticas, etcétera. Se hace justicia para tener un debate con visiones, sensibilidades y opiniones que representen a toda la sociedad chilena.

Entre los temas que complementan este debate, debo señalar que tenemos grandes expectativas de que se termine con la prohibición para los dirigentes sindicales, hombres o mujeres, de ser candidatos a parlamentario, porque sencillamente es una mirada clasista de quienes están en la comodidad de lo establecido.

¿Dónde se forman los grandes dirigentes de los trabajadores si no es mediante la validación que de ellos hacen sus pares en la lucha que realizan por alcanzar mejores condiciones de vida? Ese es otro paso de justicia profundamente democratizador que debemos dar.

Se pone como antítesis o cuestionamiento a la reforma al sistema electoral lo que significaría para la opinión pública que se incremente el presupuesto de funcionamiento de la Corporación. Ya se han comprometido diligencias por parte de la Mesa y existe voluntad en todos quienes integramos esta Corporación en abordar esa materia. Pero más importante que eso es que no puede haber algo que, a conciencia, limite la soberanía ciudadana, la cual, como su nombre lo indica, la entregan los ciudadanos en forma libre, cuando optan por ser representados por tal o cual corriente de opinión.

Como bancada del Partido Comunista, recogemos un legado y una bandera. Recuerdo, como si fuera hoy, tantas argumentaciones formuladas por grandes dirigentes, no solo del Partido Comunista, sino también de la Izquierda y de la sociedad en general, como Luis Corvalán , Volodia Teitelboim o Gladys Marín . Esta última impulsó, luego de entrevistas que sostuvo con distintas bancadas, que se elaboraran iniciativas para destrabar este candado, para terminar con este enclave antidemocrático y dictatorial como es el sistema binominal.

Pero vienen días mejores, porque la palabra autorizada de la soberanía ciudadana tenrá presencia propia en el debate parlamentario futuro. No hay que temer al pronunciamiento que realicen los ciudadanos en forma organizada. Hay que respetarlos desde adentro; hay que asumir que es de la esencia de un espacio democrático el hecho de que hoy se esté discutiendo sobre si la composición parlamentaria que se busca reflejará una diversidad real, sin excluir a nadie por decreto. Dicha composición será determinada por los mismos ciudadanos organizados, conscientes e informados, a través de una elección el día de mañana.

Como ya se dijo, nuestra bancada aprobará el proyecto, porque tiene una connotación profundamente democratizadora, y su puesta en marcha constituirá un hecho histórico que marcará la recuperación plena de la democracia en Chile.

He dicho.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Felipe Kast.

El señor KAST (don Felipe).-

Señor Presidente, en primer lugar, agradezco la presencia de los ministros que nos acompañan en este debate.

Sin lugar a dudas, hoy tenemos motivos para estar contentos, pero también para estar no tan contentos.

El motivo para celebrar es que hoy sea patrimonio del Congreso Nacional llevar adelante la reforma al sistema binominal, iniciativa positiva, pues avanza en la proporcionalidad del sistema electoral. En buen chileno, ello significa que no solo los grandes conglomerados políticos podrán acceder a la democracia y participar activamente desde el mundo parlamentario, sino también aquellos movimientos o partidos de menor tamaño.

Dicho esto, siento que el proyecto ha equivocado algunas cuestiones de forma y de fondo.

En la forma, dada la trascendencia que conlleva un cambio en el sistema electoral, me parece perjudicial que este no haya sido desarrollado con el consenso del amplio espectro político, y que su aprobación se haya conseguido con votos marginales. En otras palabras, el hecho de que solo cuente con el apoyo de un sector del espectro político no habla bien de su sustentabilidad en el tiempo, ni permite que en la ciudadanía no quede la sensación de que no es ecuánime ni hecho a la medida de nadie.

Sin lugar a dudas, habría sido mejor que la iniciativa hubiese sido elaborada en una comisión independiente, con lo cual habríamos evitado esa sensación de que es un traje a la medida, no solo de la Nueva Mayoría, sino de todos quienes conformamos la Cámara de Diputados. Fue lo que se hizo para reformar el sistema de pensiones: se convocó a personas que no tenían conflictos de intereses para que conformaran una comisión independiente que diseñara esa reforma.

¿Por qué en este caso no? Pues bien, no lo hicimos porque, quizá, no quisimos delegar tal responsabilidad en una comisión independiente. ¿Y a qué llevó aquello? A que, desgraciadamente, hiciéramos un traje a la medida nuestra, para quienes votaremos hoy, y eso hay que decirlo con todas sus letras. ¡Dejémonos de cosas! El aumento en el número de parlamentarios tiene un solo propósito: conseguir los votos, conseguir que quienes estamos acá no tengamos riesgos. Lo dijo el autor de este proyecto, Patricio Zapata , en un medio radial. Le preguntaron directamente por qué era necesario aumentar el número de parlamentarios, a lo que respondió: “Muy simple: si no, no están los votos.”.

Un señor DIPUTADO .-

¿Cuándo lo dijo?

El señor KAST (don Felipe).-

Hace un mes, colega, por su intermedio, señor Presidente .

De hecho, creo que la Nueva Mayoría y el ministro del Interior , en esta materia se equivocan, pues habría sido impresentable votar en contra este proyecto aun sin el aumento de parlamentarios. Me habría gustado ver quién habría tenido la cara de votar en contra la iniciativa si no hubiera considerado la modificación en el número de parlamentarios.

Por lo mismo, creo que es la mejor oportunidad para demostrar a la ciudadanía que no hacemos trajes a la medida de quienes estamos en el Congreso Nacional.

Insisto, es una buena noticia que avancemos en un sistema proporcional, pero es una mala noticia la forma como lo estamos haciendo, por cuanto representa cero riesgo para quienes estamos acá. De hecho, el aumento en el tamaño de los distritos, desgraciadamente, se transforma en una “muralla china” para que postule su candidatura al Parlamento aquel dirigente social que no es conocido más que en su localidad, o aquel alcalde que ha hecho una buena gestión. Nosotros no corremos ese riesgo, pues tenemos acceso a los medios de comunicación y la gente nos conoce.

En este mismo sentido, el diputado Gaspar Rivas lanzó una propuesta bastante interesante: que salieran elegidas las dos primeras mayorías, es decir, quienes sacaran mayor votación. Sin embargo, fue descartada, pues el diputado no formaba parte de la mesa negociadora que podría haber mejorado el proyecto.

Con todo -insisto-, hay elementos positivos, entre otros, que habrá mayor proporcionalidad. Pero la mala noticia es que esta propuesta tiene dos carencias: ser un traje a la medida de quienes lo elaboraron, por lo cual no cuenta con el respaldo transversal en todo su articulado, y ser un traje a la medida de quienes estamos en el Congreso Nacional.

Hay un elemento que tal vez sea el más importante y que también está ausente en el proyecto, respecto del cual repondremos una indicación que ha contado con apoyo transversal: establecer un límite a la reelección indefinida de diputados y senadores. De hecho, no es primera vez que se plantea esta cuestión. La Cámara aprobó una iniciativa que abordaba esa materia, la cual lamentablemente duerme en el Senado. Más aun, se han presentado catorce proyectos de ley que apuntan a lo mismo, pero ninguno ha llegado a puerto. Por lo mismo, pido a la Sala, aprovechando este impulso legislativo y este espíritu republicano para perfeccionar nuestra democracia, que apruebe la indicación señalada, de manera que lo que en ella se plantea sea parte de la iniciativa. De esa manera, ningún ciudadano podrá decir que todos los componentes del proyecto están hechos a la medida de quienes conformamos el Congreso Nacional.

Para finalizar mi intervención, anuncio que vamos a votar a favor la idea de legislar, pero que votaremos en contra aquellos elementos que lo único que hacen es desprestigiar a nuestra honorable Cámara de Diputados.

He dicho.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Guillermo Ceroni.

El señor CERONI.-

Señor Presidente , me provoca impresión escuchar las intervenciones de algunos sectores de la Alianza, especialmente de la UDI, por cuanto lo que aquí perseguimos es perfeccionar nuestro sistema democrático. Digo que me impresiona, porque ellos no quieren cambiar un sistema que elaboraron a puertas cerradas. Al respecto, no debemos olvidar que el sistema electoral que nos rige, así como los distritos que se establecieron, se crearon con posterioridad a 1988, una vez que la dictadura y algunos parlamentarios que trabajaron con ella conocían los resultados del plebiscito de 1988. Por lo tanto, algunos diputados que están aquí tuvieron alguna vinculación con la generación del sistema binominal, de manera que podríamos pedirles que explicaran el verdadero traje a la medida que se confeccionaron para proteger sus intereses. Si en aquella época hubiera existido un debate democrático, no me cabe la menor duda de que la ciudadanía jamás habría estado de acuerdo con este sistema electoral.

Algunos diputados que han intervenido han desprestigiado la política -hecho que considero muy grave-, al decir que el sistema que proponemos fue ideado por los políticos para los políticos y que no le interesa a la gente. Si no explicamos claramente para qué sirve el sistema, tal vez podrían rechazarlo; pero ahora lo hacen más bien debido a la campaña del terror impulsada por la UDI. Se han referido a los gastos que podría involucrar la modificación del sistema binominal, pero no han dicho que un sistema proporcional permitirá que los parlamentarios representemos realmente los intereses de los ciudadanos en el Congreso Nacional.

También hay que tener en cuenta que la existencia de grandes distritos -es una de las objeciones que se hacen al proyecto- implicará mayor educación del electorado, lo que nos obligará a cumplir nuestro verdadero rol. Los diputados debemos dedicarnos a fiscalizar, a representar y a legislar; así, iremos terminando poco a poco con las funciones que no nos corresponden. No somos asistentes sociales ni deberíamos serlo; tampoco somos y jamás deberíamos ser proveedores de recursos, porque ello ha desvirtuado la labor parlamentaria. Los ciudadanos deben ser educados para que puedan evaluar el costo que representa el cambio del sistema binominal, que más bien los perjudica.

Asimismo, quiero expresar en forma enfática que el sistema binominal fue creado en su momento precisamente para proteger los intereses de la Derecha. Es un sistema perverso, toda vez que la designación de los candidatos es el resultado de negociaciones políticas. En muchas ocasiones, las coaliciones determinan qué parlamentarios deben ser elegidos, utilizando este sistema que les permite hacerlo. Cabe recordar que en la elección senatorial de 2011 -lo hizo la Derecha-, cuando correspondía elegir senadores en nueve circunscripciones, en la lista parlamentaria de la Derecha -escuchen lo que voy a decir- solo se permitió que compitieran dos candidatos en dos regiones: en la de Tarapacá, Julio Lagos con Jaime Orpis , y en la Novena Sur, José García con Eduardo Díaz . En las siete restantes, la Derecha presentó candidatos únicos. Es decir, en esos casos se dejó de lado la opinión de la ciudadanía. Esto es lo perverso del sistema.

Debo insistir en que esta manipulación que permite el sistema binominal significa la destrucción de todo vestigio de libertad para elegir, porque las decisiones que debe adoptar el Congreso Nacional quedan radicadas en las minorías.

La reforma del sistema electoral binominal también implica terminar con algo que es absolutamente curioso en el mundo. Este sistema es absolutamente anormal, porque en todos los países existen, por lo general, solo dos sistemas: el de representación proporcional y el de representación mayoritaria. El sistema binominal no está presente en otros países, porque, en el fondo, no refleja la voluntad del electorado, como lo hace un sistema de representación proporcional, porque electoralmente no es justo.

Lo que pretendemos es que en nuestro país haya un sistema proporcional, de manera que se reduzca la desigualdad del voto; es decir, que no haya distritos con 532.000 electores que elijan dos diputados, y otros con 120.000 que elijan el mismo número de parlamentarios. Actualmente existe diferencia en el valor del voto; según el lugar donde se emita puede ser demasiado alto. Ello obstaculiza la igualdad del mismo, que es esencial para que exista una verdadera democracia. Para lograr la igualdad del voto es imprescindible incrementar el número de diputados y de senadores.

En 1973, la Cámara de Diputados tenía 150 diputados, y el Senado, 50 senadores, a pesar de que el número de electores era muy inferior al actual. Tener un sistema proporcional y distritos más grandes permitirá la inclusión de todas las corrientes políticas importantes. Creo que es algo muy importante para tener un Congreso Nacional que represente realmente a los ciudadanos.

Con un sistema proporcional evitaremos que queden fuera del Congreso Nacional candidatos que hayan obtenido importantes votaciones. El sistema perverso que hoy tenemos permite que candidatos que han obtenido 20 o 25 por ciento de los votos queden fuera. Incluso, muchas veces ha ocurrido que candidatos que han obtenido la segunda mayoría son desplazados por otros que han alcanzado solo la tercera mayoría, lo que demuestra que el sistema binominal no es democrático. Por eso, es necesario eliminarlo.

Además, el proyecto pretende lograr que la mujer tenga mayor participación en el Congreso Nacional. Para ello se establece claramente que no podrá haber menos del 40 por ciento ni más del 60 por ciento de parlamentarios de cada género. No es posible que las mujeres queden marginadas del Congreso Nacional. Actualmente, a pesar de representar la mitad de los ciudadanos con derecho a voto, solo tenemos 15 por ciento de parlamentarias, situación que no podemos seguir permitiendo. Quien se opone al aumento del número de parlamentarios, en la práctica también se está oponiendo a cambiar el sistema binominal.

Hoy, el Congreso Nacional tiene la oportunidad histórica de perfeccionar nuestro sistema democrático y de lograr que la ciudadanía esté debidamente representada, cosa que no ocurre en la actualidad. Por eso, los ciudadanos ya no tienen interés en participar en las elecciones.

He dicho.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Por haber cumplido con su objeto, se levanta la sesión.

1.14. Discusión en Sala

Fecha 13 de agosto, 2014. Diario de Sesión en Sesión 56. Legislatura 362. Discusión General. Se aprueba en general y particular.

SUSTITUCIÓN DE SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UNO DE CARÁCTER PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECIMIENTO DE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL (Primer trámite constitucional. Boletín N° 9326-07) [Continuación]

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde continuar la discusión del proyecto de ley, en primer trámite constitucional, iniciado en mensaje y con urgencia calificada de “suma”, que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional.

Antecedentes:

-La discusión del proyecto se inició en la sesión 55ª de la presente legislatura, en miércoles 13 de agostoo de 2014.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Pedro Browne.

El señor BROWNE.-

Señor Presidente , hoy empezamos a enterrar un sistema electoral que no le hace bien a nuestra democracia. Hoy ponemos fin a la democracia protegida, a una mirada de sociedad donde hay ciertos temas tan importantes que parece que deben ser custodiados para que la gente no los toque. ¿Cómo? Con un sistema electoral que genera un empate permanente y una Constitución Política que establece altos quorum, lo cual impide que las mayorías realmente se puedan manifestar. Es un sistema excluyente, poco representativo, que nos ha obligado a seguir funcionando bajo la lógica del pasado y no con la visión de futuro con que debemos enfrentar nuestra tarea legislativa.

Amplitud tiene la convicción de que Chile se merece un sistema electoral participativo y representativo, donde cada fuerza política tenga posibilidades ciertas de competir. No queremos que a nadie se le regale un cupo; lo que queremos es que cada chileno sienta que puede competir y que al hacerlo tenga una posibilidad cierta de alcanzar un escaño parlamentario para representar a la ciudadanía en el Congreso Nacional, como nosotros lo hacemos ahora.

Durante años se usó como eslogan de campaña el cambio al sistema electoral, y se culpó permanentemente a la Derecha por la imposibilidad de hacerlo. De una vez por todas, saquémonos las caretas. Este no es solo un problema de la Derecha; también lo es de la Izquierda, porque el sistema acomoda y protege a los incumbentes, y porque de esa manera se bloquea cualquier fuerza que no esté bajo el alero de las dos grandes coaliciones.

Afortunadamente, hoy se ha generado una mayoría para terminar con esta realidad y para tener un sistema electoral nacido en democracia y no impuesto por una dictadura.

Desde Amplitud hacemos un llamado a dejar los cálculos pequeños y a no mirar el interés personal. A quienes han dicho que están por cambiar el sistema electoral binominal, les pido que lo demuestren hoy con sus votos en esta Sala.

Este sistema representa el miedo que ciertos grupos sienten por la ciudadanía, por que la gente se exprese y reclame con fuerza lo que considera justo. Pero también es la encarnación de una minoría que quiere mantener un statu quo porque le acomoda, ya que es mucho más fácil atrincherarse en un nicho cautivo, que ya conoce de memoria, en lugar de salir a conquistar corazones, voluntades, con ideas, con propuestas y con soluciones. Por eso, la invitación es a romper esos miedos y a abrirnos a un sistema que nos garantice participación.

En esta Sala, algunos han dicho que este es un traje a la medida de la Izquierda. A ellos les pregunto: ¿Cómo puede haber un traje a la medida para la fuerza mayoritaria del país, la Nueva Mayoría, y, al mismo tiempo, para grupos independientes y emergentes? Es imposible lograr eso. Invito a quienes hacen esa afirmación a que realicen la ingeniería política correspondiente y lo expliquen.

También se ha afirmado que lo único que busca este sistema es tener más parlamentarios, lo que es completamente falso. Estamos buscando un sistema más representativo. Permítanme agregar un dato: los países de la OCDE tienen un promedio de 82.000 habitantes por parlamentario. Hoy, en Chile, esa cifra es de 145.000. Si usamos los parámetros de la OCDE -índice con el que nos gusta tanto compararnos- para garantizar una representación ideal, en Chile los diputados debiésemos ser doscientos.

Por lo tanto, con la realidad actual, con la desproporcionalidad del voto que existe, era necesario aumentar el número de parlamentarios, le guste a quien le guste. Con cariño les digo a mis amigos de la UDI que vi letreros de ellos, tanto aquí en la Sala como en las carreteras. Al principio me impactaron, pero finalmente lo considero una muestra de honestidad, el fiel reflejo de los que quieren mantener este statu quo.

Digan lo que digan, manifestar públicamente que “estamos bien los 120 en la Cámara” es simplemente decir lo siguiente a los chilenos: “No queremos movernos porque estamos cómodos acá, porque queremos que nadie nos saque, porque queremos tener un sistema electoral que siempre favorezca a los incumbentes. ¡Y no se les vaya a ocurrir tocar nuestra dieta y nuestras asignaciones, viajes o cualquier otro beneficio, porque, así, pucha que estamos bien los 120 en el Congreso!”.

Una segunda frase decía: “Chile no necesita más parlamentarios, UDI”. Sí estoy de acuerdo con esa afirmación, porque Chile no necesita más parlamentarios UDI, no necesita más parlamentarios DC, no necesita más parlamentarios PS. Necesita parlamentarios que puedan representar a esas minorías que no se pueden expresar, para que le den un colorido distinto a la política de nuestro país: humanistas, independientes, regionalistas, ecologistas, pueblos originarios, estudiantes, tantas y tantas agrupaciones de nuestra sociedad que hoy no tiene cabida, porque solo la tienen los partidos tradicionales que han monopolizado la política en el país.

Muchos dicen también que estos temas no interesan a la gente. Sin embargo, está claro que le interesan; por algo estamos debatiendo el tema en el Congreso Nacional y ha sido bandera de lucha y promesa de campaña, al menos, durante los últimos diez años. La gente sabe que cada una de las decisiones que tomamos acá dependen del sistema electoral, y cada una de las ilusiones, necesidades y sueños que tienen los chilenos dependen de cómo se conforme el Congreso Nacional.

Por eso, mientras no tengamos un sistema electoral que garantice no solo mayor participación, sino también igualdad de condiciones a la hora de competir, no podemos sentirnos tranquilos. Debemos terminar con el sistema binominal, porque no representa lo que Chile quiere y porque, como sociedad, estamos lo suficientemente maduros como para cortar los lazos de la democracia protegida.

El país nos exige un sistema electoral que asegure una representación real, entregando un Congreso que sea el fiel reflejo de un país moderno y democrático.

Amplitud reafirma hoy su compromiso y sus votos para terminar definitivamente con el sistema electoral binominal.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CARMONA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Marcos Espinosa.

El señor ESPINOSA (don Marcos).-

Señor Presidente , hoy discutimos una de las reformas que van en la línea de perfeccionar nuestro sistema democrático y que, además, forma parte central del compromiso de la Presidenta de la República Michelle Bachelet cuando presentó una agenda transformadora y modernizadora al país.

Estamos ad portas de sustituir el sistema electoral binominal después de 24 años de vigencia de uno de los enclaves que distorsiona grave y profundamente cualquier sistema que aspira a ser democrático. Entendemos por democracia cuando las mayorías están adecuadamente representadas en un Estado de derecho; cuando en un Poder del Estado que es la base de la representación del pueblo, están efectivamente los que deben estar, es decir, aquellos en quienes la ciudadanía depositó su confianza a través del sufragio.

Hoy, como parlamentarios radicales, confirmamos nuestro inquebrantable y entusiasta respaldo al programa de Gobierno de la Nueva Mayoría liderado por la Presidenta Michelle Bachelet , quien plasmó en su propuesta programática una demanda planteada por la mayoría de los ciudadanos y ciudadanas de nuestro país. Con la transición de un sistema electoral binominal a uno proporcional moderado e inclusivo, estamos cumpliendo con un compromiso con el país y estamos otorgando a la democracia chilena mayores niveles de representatividad y perfeccionamiento a través de una simétrica representatividad de sus legisladores.

No tenemos duda de que cuando aprobemos este proyecto de reforma al sistema electoral binominal, iniciaremos un nuevo ciclo en la evolución institucional de nuestro país. De ese modo, el Congreso Nacional retomará el rol gravitante que ha tenido en la construcción republicana.

Aplaudimos también la incorporación de cuotas en la presentación de candidatas a parlamentarias. Con esa medida, sin lugar a dudas, el Estado va a incentivar la participación de las mujeres en la cosa pública.

Como radicales, celebramos y apoyamos la participación de las mujeres en el Parlamento, coherentes con nuestra historia de más de 150 años, en el transcurso de la cual promovimos la ley que permitió el voto femenino, lo que también posibilitó la llegada de la primera mujer diputada al Congreso Nacional. Me refiero a nuestra correligionaria Inés Enríquez Frödden .

Nuestro apoyo para esta reforma nace de la convicción de que nuestra democracia debe ser perfeccionada y vigorizada. Este es el inicio, el primer paso de un conjunto de reformas que van a permitir un Chile más equilibrado, un Chile de todos.

He dicho.

El señor CARMONA ( Vicepresidente ).-

¿Habría acuerdo para que ingrese a la Sala el subsecretario del Interior , señor Mahmud Aleuy?

No hay acuerdo.

Tiene la palabra el diputado señor Felipe de Mussy.

El señor DE MUSSY .-

Señor Presidente , en primer lugar, saludo a las ministras que se encuentran presentes en la Sala. Me habría gustado que también estuviera presente el ministro del Interior y Seguridad Pública .

Quiero ser bastante enfático al señalar que quien habla y mi partido estamos a favor de cambiar el sistema electoral binominal.

Viví en carne propia la posibilidad de no resultar elegido debido al sistema binominal, a pesar de obtener, por lejos, la segunda mayoría en el distrito que represento. Por pocos votos, estuve a punto de quedar fuera y que el cargo lo ocupara un candidato que obtuvo apenas el 5,5 por ciento de los sufragios. Eso va en contra de la esencia de la política y de la democracia. Otro ejemplo es que en otro distrito no resulte elegida la primera mayoría. Creo que esto se debe corregir y, probablemente, con un cambio al sistema electoral se hubiera podido hacer de buena forma.

Estamos perdiendo la oportunidad de hacer un cambio real al sistema electoral, porque en nuestro país tenemos un Congreso Nacional bicameral y lo lógico es que una cámara represente a la cantidad de habitantes, y la otra, a las regiones. En la actualidad no se cumple con ello.

Además, el alma de este proyecto -lo digo claramente- no es solo el cambio del sistema electoral binominal, sino también el aumento en la cantidad de diputados y de senadores.

Todos los expertos dicen que perfectamente se puede cambiar el sistema binominal por uno proporcional o por otro que se estime conveniente sin aumentar la cantidad de parlamentarios.

(Aplausos)

Además, quiero refutar a algunos colegas de nuestro sector. Por ejemplo, si en un redistritaje se pasara de 60 a 120 distritos, si se eligiera a la primera mayoría, los independientes podrían competir de igual a igual.

Otro diputado propuso que se eligieran la primera y segunda mayorías, lo que también hubiera solucionado el problema, sin aumentar el número de diputados y de senadores.

Me parece complejo que el redistritaje que se propone pretenda que la mayoría de los miembros de la Cámara de Diputados y del Senado, en la mayoría de los casos, resulten reelegidos. ¿Por qué no hacemos un redistritaje de verdad? Con este proyecto, cada uno sigue con su distrito y se junta con otro. Les aseguro que si se hubiera buscado un redistritaje real, con la misma cantidad de diputados y de senadores que los existentes en la actualidad, po-dríamos alcanzar la misma representatividad que existe hoy.

El aumento de parlamentarios y el redistritaje generan ciertos problemas. En este sentido, comparto lo que sostuvo el diputado Fidel Espinoza , en el sentido de que esto va a aumentar la barrera de entrada a otros candidatos. Digamos las cosas como son: si se debe representar al doble de personas, la campaña política -sabemos que no es barata- deberá llegar al doble de votantes, lo que va a costar mucho más a un candidato independiente.

Los diputados elegidos deberán representar al doble de ciudadanos y, por el escaso tiempo con que se cuenta, en las semanas legislativas y en la semana distrital, el parlamentario compartirá menos con la gente que representa y, por lo tanto, tendrá menos capacidad de entender y solidarizar con sus problemas.

Un tema no menor es el aumento de los recursos. Algunos ministros han afirmado que esta reforma tendrá costo cero; pero ahora sí se reconoce que para implementarla se requieren recursos. Al respecto, en la Comisión de Hacienda -lo expreso con mucho respeto a los miembros de esa Comisión- comenté que el debate había sido sucio y poco transparente. La palabra “sucio” no les gustó a muchos y me lo hicieron ver de buena forma. Cuando se dice que un vidrio es poco transparente se debe a que está sucio.

Esta no es la manera de discutir esta reforma, porque deja mucho que desear. Ningún diputado de la Nueva Mayoría ha fundamentado sobre el aumento de parlamentarios; todos se refieren a la cuota para las mujeres y al cambio del sistema binominal, pero nadie menciona el aumento en el número de diputados y de senadores.

Hay varios informes que afirman que esta reforma implicará recursos, y muchos. Uno de ellos -probablemente es el más independiente- es el de la Biblioteca del Congreso Nacional, que sostiene que costará 13.000 millones de pesos. Si el Congreso Nacional puede ahorrar esa cifra, que así se haga, pero eso indicaría que esos recursos se pueden destinar a un mejor objetivo, especialmente a los temas que afectan a nuestro país, sobre todo a las regiones.

Desgraciadamente, la política está desprestigiada. Una encuesta de la Universidad Diego Portales preguntó por la confianza en las instituciones. El primer lugar lo obtuvo Carabineros de Chile; luego, la radio, las municipalidades, las Fuerzas Armadas, la Iglesia, los diarios, la televisión, el Gobierno, las grandes empresas, los tribunales de justicia, etcétera. ¿Saben quiénes ocupan los últimos lugares? El Congreso Nacional y los partidos políticos.

Llevar la reforma de la manera en que se ha hecho no ayuda en nada a que realmente hagamos bien el trabajo y representemos bien a nuestra gente.

Para finalizar, quiero repetir una pregunta formulada en la última encuesta CEP: “Independiente de su posición política, ¿usted aprueba o desaprueba la forma como la Nueva Mayoría está desarrollando su labor?”. Solo el 20 por ciento del país aprueba la manera en que se están desarrollando las reformas -no el fondo de tales reformas- en el país.

He dicho.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Se suspende la sesión por cinco minutos.

-Transcurrido el tiempo de suspensión:

El señor CORNEJO (Presidente).-

Continúa la sesión.

El señor Secretario dará lectura a los acuerdos de los Comités.

El señor LANDEROS ( Secretario ).-

Reunidos los jefes de los Comités parlamentarios, bajo la presidencia del diputado señor Cornejo, acordaron, por unanimidad, el siguiente procedimiento para la discusión y votación del proyecto en estudio:

1.- Otorgar hasta diez minutos a un diputado por bancada, el que será designado por el respectivo jefe de Comité .

2.- Terminada esa ronda, los discursos se limitarán a 5 minutos por diputado, conforme al orden fijado por los jefes de bancada.

3.- Cerrar el debate a las 22.00 horas y proceder a la votación del proyecto.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Conforme a los acuerdos de los Comités, tiene la palabra, hasta por diez minutos, el diputado Arturo Squella.

El señor SQUELLA.-

Señor Presidente , respecto del proyecto en discusión, que tratamos por varios meses en las comisiones de Constitución, Legislación y Justicia, y de Hacienda, lamentablemente no podemos sino concluir que se está faltando a la verdad. Si no se estuviera faltando a la verdad, el Gobierno debería reconocer que se está siendo muy ineficiente.

¿Por qué lo afirmo? Porque uno de los principales objetivos que plantea el mensaje presidencial que busca cambiar el sistema binominal es dotar al sistema electoral o a nuestra representación parlamentaria de mayor proporcionalidad. En palabras simples, esto se entiende como que los grupos chicos y los partidos políticos en formación tengan representación en el Congreso Nacional.

Es sabido que parte de los mitos del sistema binominal dice relación con que este, aparentemente, ha favorecido más a la Alianza en las elecciones parlamentarias que se han desarrollado desde los años 90 en adelante, en circunstancias de que ello no es así. Si tomamos los datos de las elecciones anteriores, la sobrerrepresentación de las listas grandes versus las chicas -es decir, la Concertación y la Alianza versus las listas chicas- es de 9,5 por ciento en todas las votaciones anteriores ponderadas. ¿Cómo se distribuye tal sobrerrepresentación? Un 4,7 por ciento para la Alianza y un 4,8 por ciento para la antigua Concertación , hoy Nueva Mayoría.

¿Qué pasará con este sistema nuevo que, supuestamente, nos dotará de mayor proporcionalidad? Que la sobrerrepresentación bajará apenas a 9,1 por ciento. Es decir, con este tremendo esfuerzo y despliegue que está haciendo el Gobierno, la sobrerrepresentación bajará apenas cuatro décimas.

Ahora, la gran diferencia -ahí está la trampa- es cómo se distribuye esa sobrerrepresentación. Ese 9,1 por ciento le da escasamente un 3,2 a la Alianza y un 5,9 a la Nueva Mayoría. Es decir, con los mismos votos, la Nueva Mayoría pretende tener a la fuerza, atropellando con los votos mayoritarios que tiene en la Cámara de Diputados y en el Senado, una sobrerrepresentación.

¿Qué pasa con las listas chicas? Siguen teniendo subrepresentación. Si alguien está convencido de que con esto los grupos chicos y los partidos en gestación tendrán una mejor representación, le digo al tiro que está equivocado.

Voy a plantear un segundo punto sobre la proporcionalidad.

Se nos ha dicho que este sistema actual ha generado la participación de pocos partidos políticos. Desmiento tajantemente esa afirmación. En la actualidad, existen doce partidos políticos inscritos en Chile, de los cuales nueve tienen representación en el Congreso Nacional. El 75 por ciento de esos partidos tiene representación parlamentaria. Entonces, ese argumento tira por la borda la lógica de que este proyecto, este cambio tan esperado, generaría mayor proporcionalidad.

También se habla de la igualdad del voto, lo cual no se logra con la iniciativa propuesta por la Presidenta de la República . Al respecto, daré un ejemplo. Con la reforma, Aysén tendrá 90.000 electores, mientras que el nuevo distrito de Maipú y Pudahuel juntará 950.000 electores. Habrá una gran desproporción.

Ahora, si esto lo corregimos por la cantidad de escaños, se genera una desproporción de 3,8 veces. Si quisiéramos lograr una igualdad perfecta, por un senador en Aysén, por ejemplo, deberíamos tener 57 en la Región Metropolitana. Es absurdo, es otro argumento falso.

El proyecto contiene una serie de inconsistencias, y es importante que todos los parlamentarios lo tengan presente. Así, se le entrega directamente al Servel una atribución que, de acuerdo con la Carta Fundamental, debiera establecerse mediante una ley orgánica, por lo que desde ya hago reserva de constitucionalidad. Según dicha atribución, en diez años se deberá hacer una reasignación automática, una redistribución de los cupos parlamentarios en relación con el número de electores que haya en cada distrito.

Por su intermedio, señor Presidente , pregunto al ministro del Interior y Seguridad Pública: ¿Por qué no se adopta ese criterio inmediatamente, en lugar de seguir el camino totalmente antojadizo que propone el proyecto en debate, que cae en el absurdo de que al nuevo distrito de Iquique se le asignarán menos escaños que al de Copiapó, de donde es representante uno de los vicepresidentes de esta Corporación, no obstante que este último distrito tiene menos electores. Hechos como este no se entienden. Es una desproporción que deja claro que están haciendo con trampa esta reforma.

Otra inconsistencia es que se dice que se quiere establecer mayor diversidad, pero se debe tener claro que con el nuevo sistema desaparecerán del Congreso Nacional los parlamentarios independientes, pues será imposible que un candidato independiente logre ganar a los candidatos de una lista que se inscribe en pacto, tal como viene planteado en el proyecto. También tienen que hacerse cargo de eso.

Por otra parte, se darán más casos de candidatos que lograrán ser elegidos con pocos votos, en desmedro de otros que, dada su votación, sí deberían ser elegidos. Es decir, algo que ocurre en la actualidad y que la ciudadanía le critica al sistema binominal se producirá con mayor frecuencia, y me atrevería a decir que en gran número, tal como ocurre en las elecciones de concejales. Eso también se esconde. Nuevamente, se intenta confundir a la ciudadanía al decirle que el nuevo sistema corregirá esa situación.

Se ha despotricado durante años en contra del binominal; pero el nuevo sistema que vamos a votar en un momento más mantiene el binominal en la mitad del país respecto del Senado. Me gustaría que el ministro del Interior se hiciera cargo de esa crítica y nos explicara cómo un sistema tan perverso -es el adjetivo que se ha utilizado para calificar al binominal- se mantiene en la mitad del país para la elección de senadores.

Es importante que quienes están siguiendo este debate sepan por qué se aumenta tan groseramente el número de parlamentarios: porque la Concertación, hoy Nueva Mayoría, tiene un historial de fracasos al interior de sus filas, durante los últimos veinte años, en su intento por cambiar el sistema binominal. Son ustedes mismos -por su intermedio, señor Presidente - quienes han puesto obstáculos cada vez que ha habido intentos para modificarlo. La única manera que encontraron para hacerlo y perpetuar las mayorías de la Izquierda en el Congreso Nacional es diciéndoles a los incumbentes: “No se preocupen, porque van a salir elegidos sin mayor dificultad”. Esto no se hace. No es necesario el aumento de parlamentarios para lograr una mejor proporcionalidad, un voto más igualitario o para cambiar el sistema binominal.

Como bancada de la UDI, estuvimos disponibles para cambiar el sistema; de hecho, nos sumamos a un proyecto de ley que presentó en su momento el Presidente Piñera , que terminaba con este mecanismo sin aumentar un solo parlamentario. Como Cámara de Diputados, tendremos la posibilidad de votar una indicación que hemos repuesto, mediante la cual se busca mejorar la igualdad del voto, mayor proporcionalidad y terminar con el binominal, pero sin aumentar el número de parlamentarios. Espero que todos los diputados la voten en conciencia.

En esta Sala no hay absolutamente nadie razonable que pueda sostener que se necesitan 47 parlamentarios más para mejorar nuestro trabajo legislativo o de representación, o para darle más democracia al país. Eso es insólito. La única razón es buscar la trampa que permita perpetuar a la Izquierda, particularmente al Partido Comunista, dentro de la Nueva Mayoría, con una mayor cantidad de escaños, …

(Manifestaciones en las tribunas)

…dándole todas las garantías a los parlamentarios que temerosamente deberán votar a favor este proyecto, porque el Gobierno les asegura que no correrán riesgos. Es importante que eso quede claro.

Por último, si hay algo en lo que coincidimos, …

-Manifestaciones en las tribunas.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Pido a los asistentes a las tribunas que guarden silencio y respeten el uso de la palabra del diputado que está interviniendo.

Puede continuar, diputado Squella.

El señor SQUELLA.-

Señor Presidente , decía que si hay algo en lo que coincidimos es en que todos quienes han intervenido en este debate han manifestado que la bancada de la UDI votará en contra. Nosotros también lo decimos, en forma clara y nítida: no nos prestamos para un arreglín político que pretende aumentar en 47 el número de parlamentarios del Congreso Nacional. Que se escuche fuerte y claro desde Arica a Punta Arenas: ¡La bancada de la UDI no será parte de este arreglín político que pretende sumar al club de los políticos a 47 parlamentarios más!

(Manifestaciones en la tribuna)

Por último, a quienes se dicen de centroderecha, que salieron elegidos con votos de la centroderecha y que, en gran medida, le deben el puesto en esta Corporación a las bancadas de Renovación Nacional y de la UDI, les digo que piensen muy bien si les corresponde estar sentados en el lado de la centroderecha, porque, si llegan a acuerdos con el Gobierno y le facilitan la vida a la Izquierda, no están formando parte de este sector político.

He dicho.

-Aplausos y manifestaciones en las tribunas.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Fuad Chahin.

El señor CHAHIN.-

Señor Presidente, valoro la franqueza y la sinceridad con que ha expresado sus planteamientos el diputado que me antecedió en el uso de la palabra.

No me cabe ninguna duda de que la UDI no quiere más diputados ni más senadores; de hecho, si de ellos dependiera, ninguno de nosotros estaría acá, porque en su opinión todavía debería estar legislando una junta de gobierno, porque no les gusta la democracia.

Ellos no querían democracia, no les gusta la participación de la gente, no les gustan instituciones como esta, que deben reflejar la realidad política y social del país. Sin lugar a dudas, se valdrán de cualquier excusa para seguir defendiendo esta camisa de fuerza, este candado autoritario que dejaron sus mentores, el general Pinochet y Jaime Guzmán , para tener una democracia entrampada, …

(Aplausos y manifestaciones en las tribunas)

…para evitar que aquí se expresen las mayorías y las minorías que decida el pueblo de Chile. Ellos quieren mantener su poder de veto para evitar los cambios que con urgencia demanda la sociedad chilena.

En ese contexto, quiero destacar con mucha fuerza a quienes desde la centroderecha, particularmente desde Renovación Nacional y Amplitud, han dicho con claridad que votarán a favor este proyecto -algunos lo harán solo en general y otros íntegramente-, porque eso demuestra que aquí hay sectores de la Derecha que tienen madurez política y quieren desvincularse de esa Derecha atada al autoritarismo de la dictadura de Pinochet.

Me alegro de que estemos discutiendo este proyecto histórico, que es fruto de la voluntad política real, seria de la Presidenta de la República , Michelle Bachelet , y de su Gobierno; pero también, como lo reconoce el mensaje, de un proceso político que ha vivido nuestra sociedad. Son varias las iniciativas de parlamentarios que recibieron reconocimiento en el mensaje, mediante las cuales intentaron cambiar el sistema electoral, pero no pudieron avanzar. También fueron varios los esfuerzos de diversos gobiernos por alcanzar ese objetivo. Destaco especialmente el encabezado por una figura de nuestras filas, don Edgardo Boeninger , que buscó terminar con este sistema electoral perverso, el binominal. Sin embargo, ese objetivo no pudo ver la luz.

Gracias a un esfuerzo de diálogo político amplio, dentro de la entonces Oposición, hoy Nueva Mayoría, pero también con sectores de la Derecha, como Renovación Nacional, pudimos llegar a acuerdos por el bien del país, primero, para eliminar el guarismo “120” de la Constitución, y hoy, para cambiar este sistema electoral.

Tenemos un deber político y ético con la sociedad chilena, a fin de no darle la espalda a nuestra democracia y a quienes esperan que seamos capaces de mejorar la representatividad y la legitimidad de nuestras instituciones, para que el Congreso Nacional sea un mejor reflejo de la sociedad chilena desde el punto de vista político y social.

Por lo tanto, no podemos restarnos a apoyar esta iniciativa a que nos convoca la Presidenta de la República . Todos los que piensan en el bien del país deben ser capaces de ceder posiciones y de sumarse para decir, de una vez por todas, que el sistema binominal ya no da para más y que queremos una auténtica democracia.

Efectivamente, este proyecto no resuelve completamente la desigualdad del voto -lo dijo muchas veces el diputado Osvaldo Andrade -, pero significa un avance importante respecto de lo que hoy tenemos. ¿Por qué no resuelve completamente el problema? Porque si tuviéramos un sistema en que el voto de los chilenos fuera exactamente igual, probablemente -se lo digo al diputado Squella , por su intermedio, señor Presidente - deberíamos tener una Cámara con 300 diputados y no con 155, como hoy se propone, algo que claramente no le gusta. O quizás dejaríamos sin representación a regiones importantes, como las extremas, donde hay pocos chilenos, pero que hacen soberanía y trabajan por el bien del país, que también merecen tener una mejor representación. El proyecto busca un equilibrio entre la igualdad del voto y la adecuada representación de las regiones, especialmente de las extremas. Eso es bueno para la democracia y el desarrollo de las regiones.

El proyecto también avanza en incertidumbre. Sabemos que algunos van a buscar cualquier excusa para votar en contra, porque un cambio en las reglas del juego genera incertidumbre y, por cierto, al mantener el statu quo, muchos de nosotros tenemos más posibilidades de elegirnos. Esta es una oportunidad para demostrar que legislamos pensando en el bien común de Chile y no en nuestros intereses particulares. De lo contrario, no estaríamos dispuestos a cambiar este sistema. Tenemos que demostrarle al país que lo hacemos pensando en la democracia, en nuestras instituciones, en Chile y no en cómo nos aseguramos la reelección. Se genera una enorme incertidumbre, pues habrá más competencia, porque cambian los distritos y se incorporan elementos nuevos, como la cuota de género.

Sin duda, este proyecto quiere avanzar en proporcionalidad, es decir, en que se refleje lo que ocurre en la sociedad chilena. La democracia necesita que en el Congreso Nacional estén representadas las fuerzas mayoritarias y también las minoritarias; nadie debe sentirse excluido y ninguna fuerza política o social relevante debe quedar fuera del Parlamento.

Por eso, creemos que fue una buena iniciativa del Gobierno -es accesorio a lo principal, pero ¡por Dios que es importante!- que no existieran subpactos entre partidos, porque eso permite una mayor proporcionalidad y, por lo tanto, se alcanzan de mejor manera los objetivos del proyecto.

Además, quiero decir con mucha claridad que nuestro Congreso requiere de manera urgente una mayor participación de las mujeres, que tienen barreras de entrada objetivas para participar en política. Todos sabemos que constituyen un aporte muy significativo, como lo demuestran las mujeres que forman parte de la Cámara, independientemente de la bancada en que se encuentren. Por eso es obligación de los partidos políticos inscribirlas en sus listas, so pena de tenerlas por no inscritas, para que ningún sexo supere el 60 por ciento. Nos parece que es un paso relevante.

Esta iniciativa va acompañada de otros incentivos. Sabemos que, desde el punto de vista del acceso al financiamiento, las mujeres no corren en igualdad de condiciones. Por eso, se establece un bono a los partidos por candidata electa, para que vayan por distritos en que pueden resultar ganadoras y para que los partidos hagan el esfuerzo para que ganen las elecciones.

Además, habrá una mayor devolución fiscal para todas las candidatas, independientemente de si ganan o pierden. Eso fue fruto del debate legislativo que tuvo lugar en la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia. Pero tenemos que seguir dando pasos significativos.

Por eso, agradezco que el Gobierno -aunque no está en este proyecto como una cuota, porque requiere consulta- se haya comprometido para presentar un proyecto de ley de participación política de nuestros pueblos originarios, porque así como nosotros queremos mayor representación de las mujeres, un país, que se debe reconocer como pluriétnico y multicultural, debe contar con la presencia de sus pueblos originarios en el Congreso Nacional y de manera garantizada. Es un paso que debemos dar.

Tenemos que seguir avanzando en la modernización de nuestros partidos políticos. Algo hicimos para bajar las barreras de entrada a la constitución de partidos. Se mejora la transparencia y la fiscalización del financiamiento y del gasto electoral.

Se ha hecho mucha cuestión respecto de los gastos. Creo que ese es el pasamontaña con que quieren esconder el rostro autoritario quienes no quieren cambiar el sistema: el mayor gasto que puede implicar esta modificación. Tenemos que hacer los ajustes y reasignaciones que sean necesarios. Pero eso se debe hacer -quiero que quede registrado- sin menoscabar nuestra labor parlamentaria de representación, porque si cambiamos el sistema electoral, pero desmejoramos la capacidad de responder a los ciudadanos en nuestro rol de fiscalización, de legislación y de representación, le vamos a estar haciendo un flaco favor a esta Corporación y a la democracia.

Por eso, en nombre de todos los camaradas de bancada que no han podido intervenir, anuncio que vamos a respaldar íntegramente el proyecto, por el bien de Chile y de nuestra democracia.

He dicho.

-Aplausos y manifestaciones en las tribunas.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Giorgio Jackson.

El señor JACKSON.-

Señor Presidente, la discusión de hoy es de vital importancia, porque estamos hablando de cómo queda representado el pueblo en una institución como el Congreso Nacional.

En nombre de la estabilidad, durante muchos años se mantuvo un sistema absolutamente excluyente. Con vergüenza ajena, muchas veces vimos desde afuera, como ciudadanos, cómo se esgrimían distintas razones y excusas de último minuto para no generar un cambio en este sistema.

Como Comité Independiente, en conjunto, tuvimos la voluntad y estamos disponibles para lograr cambiar este sistema electoral tan perverso y, por lo mismo, lo empujamos más allá de lo que propuso el Ejecutivo . Lo hicimos para aumentar aún más la inclusión, primero, en cuanto a la constitución de nuevos referentes políticos. Hemos visto que, después de las últimas elecciones, fuerzas políticas que hicieron el esfuerzo para constituirse lamentablemente tuvieron que ser disueltas. Nosotros queremos fomentar la diversidad que existe en nuestro país, que hoy solo aparece representada en dos bloques políticos, conformados por distintos partidos, con el objeto de que este Parlamento sea efectivamente representativo de las diversas fuerzas y no solamente de los que han sustentado el poder durante tanto tiempo.

A la vez, creemos que el proyecto avanza adecuadamente en incorporar y fomentar la participación de las mujeres, en una equidad de género, lo cual saludamos. Además, creemos que el sistema proporcional que se propone, añadirá representación y representatividad a nuestro Congreso Nacional.

Ahora, lejos de pensar que es el proyecto perfecto, quiero poner el acento en una cosa fundamental, en la cual también podemos percibir un gran avance hacia la profundización de nuestra democracia, que tiene que ver con la transparencia y con la influencia del dinero en la política.

No nos vamos a ver la suerte entre gitanos, porque sabemos que una de las grandes barreras de entrada para acceder a un puesto en el Parlamento tiene que ver con los recursos involucrados en las campañas electorales, con el uso o el abuso de la legislación vigente relacionada con la transparencia y con la regulación de la propaganda electoral.

Si el objetivo del proyecto es tener un sistema más inclusivo y que permita mayor representatividad, consideramos de vital importancia avanzar desde ya en un tema que está incorporado en un protocolo que hemos acordado varios diputados de distintas bancadas con el ministerio, cual es hacer públicos los aportes a las campañas políticas, los que hoy son reservados, lo que impide saber quiénes financian, con grandes montos, las campañas políticas en nuestro país.

También podemos avanzar en mejorar la actual definición de propaganda electoral, ya que existe un vacío, pues solo se considera propaganda electoral cuando se pide el voto directamente, lo que genera un vicio en el sistema.

Hemos presentado indicación para impedir las donaciones reservadas y las de las empresas, porque las empresas no tienen derecho a voto. En consecuencia, las personas naturales sí pueden realizar donaciones, mas no las empresas.

Por eso, presentamos una indicación, que repusimos en la Sala con la firma de treinta diputados, para redefinir el concepto “propaganda electoral”, que podría constituir un gran avance.

Les pido a todos los parlamentarios y a las parlamentarias que han luchado por combatir el sistema binominal durante tantos años que no se resten de apoyar esta señal potente respecto de la inclusión y del término del lobby y de la influencia del dinero en la política. Quienes estamos de acuerdo con eliminar el sistema binominal tenemos también la oportunidad de terminar con una de las mayores formas de exclusión, sin perjuicio de que después podemos avanzar en otros temas incluidos en el protocolo de acuerdo.

Señor Presidente, el resto del tiempo de nuestro Comité lo utilizará el diputado Gabriel Boric.

He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

En pocos minutos más le daré la palabra al diputado Boric , con el objeto de alternar las intervenciones de diputados de distintas corrientes políticas.

Tiene la palabra el diputado señor Osvaldo Andrade.

El señor ANDRADE .-

Señor Presidente , el sello de este gobierno es la lucha contra la desigualdad y el abuso, tal como lo definió la Presidenta Bachelet desde el comienzo de su campaña. Para eso estructuró una idea básica: que este es un gobierno de transformaciones, no de mera administración.

Lo que se intenta es luchar efectivamente contra la desigualdad a través de un proyecto que es claramente transformador, ya que reemplaza el sistema electoral binominal por uno proporcional.

No cabe ninguna duda de que esto genera dificultades en algunos parlamentarios, porque con este cambio se termina con el veto, con la concentración de la representación en dos grandes bloques y con la posibilidad de que la minoría valga lo mismo que la mayoría, lo que atenta contra un principio básico de la democracia.

Entiendo los adjetivos y las diatribas que recibimos desde las bancadas de enfrente, porque se está terminando con el veto, lo único que les queda de poder.

Quiero decir a los diputados más jóvenes de enfrente que, como muchos saben, fui alumno de Jaime Guzmán , y les puedo garantizar que él no habría estado de acuerdo con ustedes. Se lo digo con absoluta certeza, porque tuve la oportunidad de conocerlo. Pónganse al día, porque de eso se trata la política: de ponerse al día.

Por eso hemos escuchado tantas diatribas y expresiones altisonantes y grandilocuentes, como de circo, que emplean algunos porque se está terminando el veto, lo único que sostenía a la Derecha en el país, porque aunque era minoría, podía ejercer el poder de veto.

La Presidenta de la República ha iniciado este proceso de transformaciones y le ha dado un ritmo acelerado, porque tenemos que responder a un contrato que suscribimos con la sociedad durante la campaña presidencial.

¿Cuál es el sello del proyecto? Precisamente, el sello del Gobierno: un proceso transformador que termine con la desigualdad que viven los ciudadanos. Por ejemplo, los ciudadanos de mi distrito, los puentealtinos, los cajoninos, los pircanos, los pintaninos, representan un sexto de lo que representan los votantes de otros distritos, lo que no es justo en cualquier democracia. En consecuencia, avanzar en un proceso de mayor representatividad y proporcionalidad es básico para regularizar el sistema democrático.

Créanme que Jaime Guzmán también estaría de acuerdo con esto; no tengan ninguna duda al respecto. Para quienes lo conocieron y no quieren contarlo a los más jóvenes, me permito contárselo desde aquí, para que sepan cómo eran las cosas.

Los elementos del proyecto son, primero, avanzar en proporcionalidad; es decir, solo se busca que los ciudadanos valgan lo mismo, que el votante de aquí y el de allá tengan el mismo poder. Es verdad que no lo logramos plenamente.

Para avanzar en proporcionalidad -sobre esto no cabe ninguna duda- hay que aumentar el número de escaños, al igual que las dimensiones de los distritos. Eso es evidente; no hay otra alternativa, y lo hemos dicho infinidad de veces.

Surgió la tesis de un sistema uninominal, con distritos más chicos, pero no duró nada, porque ni siquiera quienes lo propusieron lo pudieron sostener, porque estaban conscientes de que no resolvía el problema.

Se trata de avanzar en proporcionalidad para que los ciudadanos chilenos valgan lo mismo. Por lo demás, la ampliación de los distritos genera otro efecto interesante: los parlamentarios se tienen que dedicar a lo que están llamados a hacer, a plantear puntos de vista, opiniones y proyectos de ley, en lugar de actuar permanentemente como asistentes sociales.

Sin duda, se avanza también en la ley de cuotas. Esto podría parecer contradictorio en un sistema proporcional, en que todos valemos lo mismo, pero es innegable que tenemos una deuda histórica con el mundo de las mujeres. Por eso resulta obvia y evidente la necesidad de generar condiciones para que ellas puedan participar. La Presidenta tiene un mandato de esa naturaleza, que emana, además, de su condición de exdirectora ejecutiva de ONU Mujeres. Por eso la ley de cuotas establece esta proporción de 40/60, que constituye una mayor contribución a todas las candidatas.

La iniciativa genera otro incentivo interesante: incertidumbre. Los sistemas electorales no están hechos para que algunos candidatos se sientan seguros de que serán elegidos. Los sistemas electorales deben tener grados de incertidumbre, tiene que haber un riesgo y debe existir la posibilidad de que a uno le pueda ganar otro. Los sistemas electorales no pueden garantizar a nadie que va a salir elegido antes de que se realice la votación, como sí ocurre con el actual sistema electoral, que resuelve el problema al interior del pacto correspondiente, pero no lo hace la ciudadanía. ¡Y vaya que es así, porque tenemos diputados y senadores cuasi designados con este sistema, que rememora a los parlamentarios designados de antaño! Seguramente, algunos se acordarán de eso, aunque no los más jóvenes; pero los mayores están para informarles, porque la experiencia tiene que ponerse al servicio de los más jóvenes.

Entonces, la incertidumbre es un dato básico. Les garantizo que Jaime Guzmán estaría de acuerdo con que hubiese incertidumbre. Por lo menos el que yo conocí habría estado de acuerdo con esta propuesta.

Además, se genera otro dato básico: deberemos asumir los costos. Aquí se ha hablado mucho de los gastos que representará el nuevo sistema electoral. Bueno, hagamos el esfuerzo de asumir los costos involucrados. Algunos encontrarán que esto es raro e inconstitucional. ¿Qué se ha hecho cuando en la Sala hemos aprobado proyectos de ley que entregan nuevas atribuciones a las municipalidades? ¿Se les ha asegurado el financiamiento? Todos hemos alegado por esas situaciones, pero ¿es inconstitucional?

Entonces, no inventemos chamullos ni cuentos por este tema, porque las cosas no son como algunos las han planteado. Ahora, ¡qué duda cabe de que el cambio que se propone significará un esfuerzo! De repente, a la política le hace bien apretarse el cinturón, así como a instituciones como la nuestra, que deben tener la capacidad de reorganizar su funcionamiento, para asumir nuevos costos. Eso es lo que propone este proyecto, de manera que les pido que, con el permiso de todos, hagamos un esfuerzo. Todos estamos en condiciones de acreditar que hay aspectos que se pueden mejorar desde el punto de vista del gasto.

Respecto de los subpactos, el Partido Socialista ha tomado hoy la decisión de no persistir en ese esfuerzo en este trámite, porque no queremos enturbiar la tramitación de un proyecto de esta naturaleza, decisión que he informado al ministro del Interior y Seguridad Pública, el que la ha recibido de muy buen tono. No obstante, insistiremos en ello, porque creemos que es bueno para la democracia que exista la posibilidad de que se agrupen fuerzas políticas afines. Lo hemos hecho en el pasado, de modo que no veo razón alguna para no hacerlo de nuevo. En todo caso, insistiremos respecto de ese punto en el segundo trámite constitucional, pero en esta etapa dejaremos las cosas como lo acabo de señalar.

No obstante lo planteado, la iniciativa contiene subpactos. De hecho, la asociación entre un partido y los independientes es un subpacto, así como la posibilidad de que dos candidatos del mismo partido acumulen su votación. De manera que no se deben demonizar instituciones que ya existen y que hemos aprobado.

Por otra parte, quiero agregar que es muy interesante el protocolo que hemos firmado con el Gobierno en materia de transparencia y control del gasto, entre otras. En ese sentido, solicito al ministro del Interior y Seguridad Pública que nos señale que habrá un compromiso objetivo, a lo que quiero agregar -perdone mi sesgo, señor ministro - que en este protocolo se debe insistir en que los dirigentes sindicales no estén inhabilitados constitucionalmente para ser candidatos a parlamentarios, lo que me parece una atrocidad muy propia de los antiguos vetos establecidos en el artículo 8° de la Constitución Política y de otros mecanismos y nudos autoritarios que heredamos.

(Aplausos)

Nos hemos encontrado con otra novedad, puesto que algunos han anunciado reservas de constitucionalidad, porque un órgano como el Servel determinará en el futuro la nueva reorganización de los escaños, a propósito de la proporcionalidad ante eventuales aumentos. Sin embargo, pregunto: ¿Qué hicimos con los core? ¿A qué organismo se entregó la facultad en el caso de los cambios en los core? En esta Cámara, los amigos de enfrente votaron para otorgar la misma facultad. Entonces no era inconstitucional, pero ahora consideran que lo es.

Por lo tanto, ¿en qué quedamos? ¿Cómo nos podemos entender cuando hay tanta incoherencia? Los diputados de enfrente están por cambiar el sistema, pero manteniéndolo igual. El carácter de la Coalición por el Cambio es que no quiere cambios, a pesar de que en su nombre señala que está por él. En todo caso, doy excusas a los compañeros de Renovación Nacional por lo señalado, los que están en un proceso de inflexión interesante.

(Aplausos y manifestaciones)

Para terminar, quiero señalar que el Partido Socialista valora y felicita al Gobierno por este proyecto, así como a la Nueva Mayoría. ¿Por qué? Porque con el sistema binominal hoy tenemos mayoría en la Cámara de Diputados y en el Senado. Aunque para nosotros sería más cómodo preservar este sistema, porque nos permitió tener mayoría en ambas Cámaras, estamos dispuestos a cambiarlo, porque los compromisos se honran. Si hay algo que caracteriza a este Gobierno y a la Presidenta , que también es socialista, es que honran sus compromisos.

He dicho.

-Aplausos y manifestaciones en las tribunas.

El señor CARMONA ( Vicepresidente ).-

Tiene la palabra el diputado señor Cristián Monckeberg.

El señor MONCKEBERG ( don Cristián) .-

Señor Presidente , luego de escuchar atentamente la intervención de varios diputados, así como la del Presidente del Partido Socialista , diputado Osvaldo Andrade , quiero señalar que si hay un partido que ha estado convencido de avanzar en reformas al sistema electoral ha sido Renovación Nacional, lo que ha sido reflejado y refrendado, de manera permanente, en distintas votaciones y decisiones, así como en los planteamientos que hemos hecho en forma constante.

Sin ir más lejos, cabe recordar las propuestas de reformas de 1995, que buscaban perfeccionar la Constitución Política de 1980. Si vamos un poco más atrás, puedo mencionar el Acuerdo Nacional. Con posterioridad, en 2005, avanzamos en reformas que ya en 1995 habíamos planteado, respecto de las cuales se nos decía que eran cambios que echarían por tierra la institucionalidad política que se había construido durante años en el país. Tuvieron que pasar diez años para que, finalmente, hubiera acuerdo en el Congreso Nacional respecto de reformas relevantes en esa materia.

Hace un año se produjo el acuerdo de Renovación Nacional con la Democracia Cristiana, que tenía por objeto hacer cambios importantes al sistema electoral, en momentos en que estaba al mando de la nación un gobierno de nuestra coalición. Si ese cambio no se efectuó, se debió a que muchos integrantes de nuestro conglomerado no se atrevieron a avanzar en esa reforma. ¡Y vaya que fue un error! Lo considero así porque podríamos haber tenido esa materia resuelta en el gobierno del Presidente Piñera. Pero no podemos vivir de errores, sino que hay que sacar lecciones de aquello y seguir avanzando en mejoras a la institucionalidad, en este caso, al sistema electoral.

He escuchado a algunos que plantean que Renovación Nacional tiene una actitud zigzagueante. Al respecto, quiero dejar absolutamente claro que el partido que me toca presidir quiere avanzar en cambios al sistema electoral, de modo que votará a favor la idea de legislar. No habrá ningún diputado que se reste de esa votación. Lo haremos convencidos de que el actual sistema electoral generó beneficios y estabilidad, pero que está absolutamente agotado. Esa votación a favor en general no será solamente un gesto, sino que reflejará nuestro convencimiento respecto de que el sistema electoral debe sufrir modificaciones importantes.

Algunos se preguntan por qué existe el deseo de cambiarlo. Al reflexionar al respecto se pueden señalar varias razones. Una de ellas es que estamos convencidos de que cumplió un ciclo. Es cierto que dio estabilidad, pero ella se ha ido acabando y agotando. Los diputados díscolos y los independientes han roto la estabilidad que dio el sistema binominal, en virtud del cual predominaban dos grandes coaliciones.

Además, el sistema no genera competencia. El partido que encabezo y quien habla estamos convencidos de que la lógica de dos coaliciones -centroizquierda y centroderecha- no seguirá existiendo en forma exclusiva. El sistema electoral proporcional invita a la “aventura electoral”. Repito, no podemos pensar que siempre habrá una coalición de centroizquierda y otra de centroderecha, como hasta ahora.

En ese escenario, no es de extrañar que mañana exista una coalición de centro. Hemos planteado, en forma permanente, que no es de extrañar que la Democracia Cristiana tenga acercamientos con nuestro partido, con la finalidad de generar nuevas coaliciones, aunque eso moleste a la Izquierda. Sabemos que existen muchas coincidencias, las que, necesariamente, se reflejarán en la conformación de nuevas coaliciones, porque así lo señala el cambio al sistema electoral que propone el proyecto en discusión. Hay que avanzar, razón por la que -repito- votaremos a favor el proyecto en general, lo que no significa que al tratarlo en particular no hagamos presente nuestras diferencias.

Por su intermedio, señor Presidente , quiero decir al ministro del Interior y Seguridad Pública algo que ya sabe, porque lo hemos conversado muchas veces, debido a lo cual él nos ha tirado muchas flores, muy merecidas algunas, pero otras a lo mejor no tanto: es necesario buscar grandes acuerdos. Estamos perdiendo una oportunidad tremenda, situación que, reitero, he planteado en forma permanente. Se lo he dicho a la Presidenta de la República y al ministro del Interior y Seguridad Pública , y lo he manifestado en forma pública: estas reformas tienen que responder a grandes acuerdos. Si buscamos los votos justos que se necesitan para aprobar una reforma, por ejemplo, 71 o 72 votos, ello puede cumplir con la legitimidad que exige la Constitución Política y los quorum respectivos, pero no con la legitimidad que espera y a que aspira el Congreso Nacional, así como la Oposición. Además, ese procedimiento genera sufrimientos innecesarios. Como se deben juntar los votos se debe impedir la autorización de viajes y pareos.

Un acuerdo transversal amplio e inclusivo debe aspirar a que el cambio al sistema electoral perdure por treinta o cuarenta años, no a discutirlo de nuevo el próximo año. Así como hay muchos en el Congreso Nacional que han argumentado que el sistema electoral lo diseñó el gobierno de Pinochet y que, por lo tanto, ha sido ilegítimo durante 25 años, si este sistema electoral pasa todo el proceso legislativo y se aprueba con los votos justos, muchos de los que estamos aquí vamos a decir que nació en democracia, pero que no incluyó a todas las fuerzas políticas que deberían sentirse representadas. Queremos un sistema electoral que refleje el resultado de las urnas. En eso queremos avanzar.

También me quiero hacer cargo del tema relacionado con el número de parlamentarios. Lamentablemente, en muchas oportunidades la discusión se ha centrado en si serán 120, 140 o 150. Si discutimos y ponemos sobre la mesa exclusivamente el número de diputados o el número de senadores, no vamos a avanzar hacia ningún lado. Tenemos que ser capaces de avanzar hacia un sistema electoral que sea bueno para Chile y no reducir la discusión a si deben ser 120, 125 o 130 diputados, o si ello va a generar más o menos costo. Esa discusión necesariamente se habría dado si hubiésemos estado todos sentados a la mesa. Por eso he dicho en innumerables ocasiones que me encantaría que mis socios de la Unión Demócrata Independiente, a quienes tengo mucha estima, también estuvieran sentados en esta mesa para poder avanzar en cambios al sistema electoral consensuados entre todos y que no reduzcamos la discusión exclusivamente a si deben ser 120 diputados, porque así -repito- no vamos a llegar a ningún lado.

Señor Presidente , por su intermedio le quiero decir al ministro que, después de la votación que se va a producir en un rato más, el partido que presido le solicitará encarecidamente que nos reunamos el jueves, el viernes, el lunes o el día que disponga, con el objeto de reanudar las negociaciones y las conversaciones necesarias para llegar a un buen entendimiento en materia electoral. Le aseguro que en 24 horas seremos capaces de ponernos de acuerdo y de cerrar una discusión que le hará muy bien al país.

He dicho.

El señor CARMONA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Gabriel Boric.

El señor BORIC.-

Señor Presidente , hoy nos reunimos para enfrentar una crisis. No se trata de una crisis que provoca una catástrofe repentina, como, por ejemplo, cuando golpea un terremoto; esta es más subterránea. Nuestra crisis se produce por el lento desgaste de una situación crecientemente adversa que se elude y se parcha, sin enfrentarla directamente. Así como la erosión puede convertir un terreno fértil en un desierto, la deslegitimación de la política puede convertir la participación y el espíritu democrático de un país en apatía, desconfianza, abstención y, finalmente, desborde institucional.

Los chilenos y chilenas hemos construido una manera de referirnos a este problema: hablamos del “problema del sistema binominal”. En este punto la ciudadanía es clara: hay que cambiar el sistema binominal. Pero una cosa -para que no nos pasemos “rollos”- es el sistema binominal y otra es la política binominal que se ha instalado en Chile. La política binominal no se sustenta solo en la regla binominal, sino, primero, en un sistema electoral que premia la integración en grandes bloques, entregando poder de veto y control para ser elegido a quienes administran los cupos de estos conglomerados; segundo, en un sistema de partidos que permite conglomerados que son administrados por cúpulas que no están sujetas al control de sus bases, y, por último, en un débil sistema de financiamiento público a la política y un sumamente opaco, turbio y poco transparente sistema de financiamiento privado de la política. Espero que la indicación que se presentó hoy para terminar con los aportes reservados se vote favorablemente, para dar una señal clara en esa dirección.

Esta tríada se traduce en una altísima colonización de parte de los intereses económicos sobre las dirigencias de los partidos políticos, lo cual no puede ser contrarrestado al interior de los mismos, y entrega a estas dirigencias la llave de entrada y de salida de la política institucional.

Hoy vamos a votar un proyecto de ley que cumple el compromiso presidencial de acabar con el sistema binominal. Los chilenos quieren saber si se acabará o no la política binominal. Lamentablemente, debemos afirmar que, a pesar de ciertas mejoras importantes, este proyecto no acabará, por sí mismo, con la lógica binominal. Fueron rechazadas las indicaciones para transparentar los aportes de privados y controlar los gastos en campaña; no representa ningún avance en la democracia de los partidos, pero fiscalizaremos para que el protocolo que se firmó con varios independientes se lleve a efecto y pueda complementarse.

Por otra parte, no se cambia el sistema de listas ni se atenúan sus efectos, y el mayor tamaño de los distritos, junto con la posibilidad de llevar más candidatos en las listas que los escaños disponibles, hace pensar que, salvo algunas situaciones puntuales, la posición dominante y controladora de los dos grandes bloques políticos existentes se mantendrá. Así, al menos, lo han señalado la mayoría de las simulaciones disponibles. Cambiar la lógica “bicoalicional” heredada de la dictadura seguirá siendo una tarea pendiente para las fuerzas democratizadoras del país.

En particular, creemos que una reforma al sistema electoral necesariamente debe incluir mecanismos para posibilitar e incentivar una mayor igualdad de género. Por eso estamos de acuerdo con medidas afirmativas que permitan avanzar, valga la redundancia, en la igualdad de género. Sin embargo, tenemos serios reparos respecto de la efectividad de la reforma tal como está. El porcentaje de cuotas debe aplicarse a nivel distrital y no nacional, para que los partidos no pasen gato por liebre mediante arreglos truchos que sigan excluyendo a las mujeres. Ojalá, esto se arregle en el Senado.

Lo que resulta impresentable es que se haya optado por no debatir abiertamente la redefinición del mapa de distritos a través de un proceso transparente y democrático. Sin embargo, ciertas reformas que se votarán hoy son, sin duda, un avance para nuestra democracia. Por eso, votaré a favor el proyecto de manera íntegra, porque me parece crucial que se elimine la distorsión de la voluntad popular que representa la regla del doblaje en el actual sistema. Además, me parecen tremendamente importantes las normas que facilitan la constitución de nuevas fuerzas políticas emergentes y elevan su barrera de salida.

Por último, la UDI, en un mensaje de muy mal gusto, dice en sus carteles: “Estamos bien aquí los 120”, comparando a los diputados con los mineros que estuvieron durante semanas enterrados bajo tierra a consecuencia de un sistema explotador de trabajo que hasta hoy no ha mejorado. Claro que estamos bien aquí los 120, mientras ganamos más de 8.000.000 de pesos mensuales y mantenemos todos los privilegios que se nos asignan.

Si para mejorar la democracia es necesario aumentar el gasto, estoy de acuerdo con ello, pero que eso no sea a costa de apretar a nuestros funcionarios, sino de rebajar los sueldos que hoy tenemos, que equivalen a cuarenta veces el sueldo mínimo. Ojalá que el proyecto que apunta en ese sentido se vote en la Comisión de Constitución tal como lo presentamos.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CARMONA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Pepe Auth.

El señor AUTH.-

Señor Presidente , muchos hablan de la tremenda injusticia del sistema binominal, que dejó fuera del Congreso a Ricardo Lagos Escobar en 1989, a pesar de haber obtenido 399.721 votos, el 29,2 por ciento de la zona poniente de la Región Metropolitana. Por su puesto, es tremendamente injusto. Se eligió como senador a don Jaime Guzmán con…

-Manifestaciones en las tribunas.

El señor CARMONA (Vicepresidente).-

Ruego guardar silencio a las personas que están en las tribunas.

Continúa con la palabra el diputado señor Pepe Auth.

El señor AUTH.-

Señor Presidente , repito, se eligió como senador a don Jaime Guzmán con el 16,4 por ciento de los votos. Votó por la Derecha el 31 por ciento de los ciudadanos de la zona poniente, por lo que habría sido igualmente injusto que se quedara sin representación en el Senado. Lo que ocurre es que el binominal nos obliga a elegir entre dos injusticias: una, según la cual la mayoría, por mayoritaria que sea, empata con la minoría. ¡Qué injusto es eso! La otra injusticia es que si la mayoría gana por un poquito más, es decir, logra doblar al adversario, lo deja completamente borrado del territorio. Naturalmente, es completamente injusto que un sector que representa el 20, 25 o 30 por ciento quede sin representación

El proyecto que pone fin del sistema binominal viene a reparar, entre otras, esa injusticia, y da paso a un sistema proporcional inclusivo. ¿Qué significa eso? Que pasamos del empate como regla general -empatamos en el 90 por ciento del territorio- al empate como excepción.

En las elecciones va a ocurrir lo que pasa en todo el mundo: va a haber alguien que gane y otro que pierda. Hoy -repito-, el empate es la regla general en el 90 por ciento de los casos. No hay democracia que resista, por atractiva o vigente que parezca, cuando, sin importar el resultado electoral, se da un empate. El punto es que con este sistema el que pierde siempre tendrá representación. Yo, que no estoy de acuerdo con las ideas de ustedes, defiendo que ustedes tengan representación en la Cámara de Diputados y en el Senado; pero la representación que merecen, la que les dé la ciudadanía, no la que les da el arreglo cupular, no la que les da un sistema completamente ilegítimo que los sobrerrepresenta.

Con el cambio, también estamos devolviendo el poder a los ciudadanos, porque hoy estos se ven obligados a elegir de un menú limitado de opciones. Los ciudadanos son quienes van a elegir; incluso, van a tener que decidir a cuál UDI eligen como diputado . Hoy, ustedes se ponen de acuerdo y designan al candidato, y lo único que tienen que conseguir es ganarle por un voto a su compañero de Renovación Nacional. Pues bien, ahora van a tener que llevar dos, tres, cuatro o cinco candidatos UDI. ¿Quién va a decidir qué integrante de la UDI se va a sentar aquí en la Cámara? ¡La gente, la gente! ¡No serán Ernesto Silva ni Javier Macaya los que decidirán qué diputado deberá sentarse en esta Cámara!

El binominal es el paraíso de los expertos electorales. Yo, en cada elección, puedo hacer un listado prácticamente total de los candidatos que van a volver a sentarse acá. Por el contrario, este nuevo régimen le devuelve la incertidumbre y la competencia al sistema. Piensen bien: si una fuerza política, como la Nueva Mayoría o la Alianza, obtiene el 30 por ciento de los votos en un distrito, elige un diputado ; si le va bien y saca el 40 por ciento de los votos, elige al mismo diputado ; si resulta que le va estupendo y sube a 50 por ciento su votación, sigue eligiendo un diputado , y si le va extraordinariamente bien y logra 60 por ciento de la votación, también elige un diputado. En consecuencia, no hay diferencia entre sacar 30 o 60 por ciento de los votos. Eso reduce la competencia, reduce la incertidumbre.

Ustedes tienen que pelear para ser mayoría y no refugiarse en un sistema que los sobrerrepresenta como minoría. Ya es hora de que piensen con vocación de mayoría. Por eso se resisten al cambio de sistema, porque mantiene calentita a la minoría: sobrerrepresentada y

con poder de bloqueo de reformas. Bueno, pues bien, eso se acaba, como diría el ideólogo. ¡Se acaba! ¡Adiós, binominal!

(Aplausos)

Nunca más ocurrirá en la Cámara -se lo digo a los colegas de Renovación Nacional- lo que pasó en 2009. Ese año apenas hubo cuatro puntos de diferencia -280.000 votos- entre la UDI y Renovación Nacional. ¿Saben cuántos diputados eligió la UDI? Cuarenta. ¿Saben cuántos diputados eligió Renovación Nacional? Dieciocho. Es decir, veintidós diputados de diferencia con solo cuatro puntos porcentuales. Esa es la distorsión de proporcionalidad a la que se va a poner término con este cambio histórico.

No me voy a referir a la enorme desigualdad del voto, porque ya lo hizo muy bien mi colega Osvaldo Andrade; tampoco a la necesidad de la diversidad en el Parlamento, en particular a la feminización del Congreso Nacional, que, obviamente, no es el espejo de la sociedad. La sociedad chilena no se puede mirar en este espejo, porque no están todas las paletas multicolores de la sociedad. Este nuevo sistema que se propone está hecho para que se exprese toda la diversidad de la sociedad.

A la UDI le queda el argumento de las platas. Bueno, su expresidente Patricio Melero , que abundó en esa tesis, tendrá que explicar a la ciudadanía por qué cuando le correspondió presidir la Cámara de Diputados aumentó las asignaciones en 3.700 millones de pesos anuales, exactamente lo que se requiere para pagar las dietas de los treinta y cinco diputados adicionales. ¡Repito, 3.700 millones de pesos anuales introducidos por aquellos que hoy claman por los costos! ¡El único costo que se va a pagar acá es el de que la UDI termine de estar sobrerrepresentada en el Congreso Nacional!

(Aplausos)

Lo que le pasa a la Derecha es que se piensa como eterna minoría, y su búsqueda es tener un sistema que permita a la minoría empatar con la mayoría y ejercer poder de veto. Ya es hora de que cambien el switch y se sumen al régimen que permite que se exprese la mayoría, y también las minorías, pero en la dimensión exacta de su respaldo ciudadano.

Qué duda cabe de que este es un hito histórico. Después de veinticinco años ponemos fin al binominal y se abre un nuevo ciclo político: el de una democracia sin restricciones, en la que participen y estén representados todos los chilenos, sin excepción.

Todos los diputados del Partido por la Democracia, sin excepción -me refiero a los compañeros Tucapel Jiménez , Ramón Farías, Marco Antonio Núñez , Enrique Jaramillo , Cristián Campos , Felipe Letelier , Guillermo Ceroni , Loreto Carvajal , Joaquín Tuma , Jorge Insunza ; mi presidente , Jaime Quintana , que no vota, pero que está aquí, acompañándonos, y otros que se me escapan-, vamos a votar, con entusiasmo y emoción, íntegramente a favor el proyecto.

Felicitamos a la Presidenta de la República , señora Michelle Bachelet , y, por su intermedio, señor Presidente , al ministro del Interior , Rodrigo Peñailillo , y a las ministras Rincón y Pascual , por la valentía y decisión de poner al Congreso Nacional ante esta decisión histórica.

(Aplausos)

Por último, quiero expresar -junto con esta corbata, que me puse especialmente para la ocasión, en la que dice con toda claridad en chino mandarín que “no estamos bien los 120 en la Cámara de Diputados”-: ¡Adiós sistema binominal!

He dicho.

-Aplausos.

El señor ULLOA .-

¡Mentiste hasta en la traducción, Auth!

El señor CARMONA (Vicepresidente).-

En el tiempo de la bancada del Partido Comunista, tiene la palabra, hasta por diez minutos, el diputado señor Hugo Gutiérrez.

El señor GUTIÉRREZ (don Hugo).-

Señor Presidente , solo quiero traer a colación algunos antecedentes que, sin duda, siempre serán pertinentes, como lo son ahora, cuando acometemos una discusión tan trascendente.

Me remitiré a dos reportajes, uno publicado por La Segunda, y otro, por La Tercera.

Pero antes quiero leer un párrafo de un tratado de Derecho Constitucional, porque siempre es bueno refrescar la memoria en momentos como este. La historia siempre aclara el presente para enfrentar mejor el futuro.

El tratado, cuyo autor es don Alejandro Silva Bascuñán , se titula: “La Constitución de 1980. Antecedentes y génesis”, y el párrafo que quiero relevar señala lo siguiente:

“Por decreto supremo N°362, del Ministerio del Interior, de marzo de 1983, se designó una Comisión Asesora para el estudio de las Leyes Orgánicas Constitucionales -entre ellas el sistema electoral- que quedó presidida por Sergio Fernández Fernández ”. Es decir, Sergio Fernández encabezó una comisión que iba a elaborar un informe sobre lo que debería ser una ley tan relevante como la Ley Electoral.

Pues bien, en un reportaje de La Segunda, diario no proclive a las ideas de quien habla, publicado el viernes 4 de julio de 2014, titulado “Quiénes fueron y cómo trabajaron los ideólogos de la fórmula binominal”, se señala lo siguiente: “En 1983, Pinochet encargó avanzar en nuevas normas, incluido el sistema electoral. Esto quedó en manos de la llamada “comisión Fernández”, presidida por el entonces ex ministro del Interior , Sergio Fernández . Tras tensiones con el Consejo de Estado se formó un subcomité, conformado por varios juristas, entre ellos Jaime Guzmán , Juan Antonio Coloma y Arturo Marín , quien se convirtió en el secretario del equipo.”. Por supuesto, se señala la forma en que la Comisión Fernández logró avanzar en el sistema electoral binominal, la cual estaba encabezada por el señor Sergio Fernández Fernández .

En el reportaje del diario La Tercera “La historia y los verdaderos padres del binominal”, se señala: “Entre 1973 y 1976, Marín ejerció como asesor de la Comisión de la Nueva Constitución, que presidía el ex ministro de Alessandri Enrique Ortúzar (…) se fraguó un diagnóstico crítico del esquema parlamentario de antes de 1973 al que culpaban de la crisis que derivó en el Golpe Militar.”. Y continúa el reportaje: “A juicio de Coloma, hoy senador UDI, hubo tres actores clave detrás del diseño del binominal: Juan de Dios Carmona , Sergio Fernández y Marín , quien, a su juicio, “llevó este conjunto de ideas para mezclar estabilidad con representatividad”.”

Es decir, el senador Coloma nos esclarece que uno de los que llevó adelante estas ideas tan valiosas para crear el sistema electoral binominal fue don Sergio Fernández.

El reportaje continúa: “En marzo de 1985, el subcomité delegó su trabajo a la Comisión Fernández. El ex ministro del Interior , que en entrevistas se ha atribuido la autoría del binominal, aparentemente quería mantener el control de la propuesta, según testimonios que recogió Ricardo Gamboa en su investigación.”.

Estos sendos reportajes nos esclarecen quién fue el autor del binominal, es decir, quién se atribuye ser el autor de este sistema electoral: Sergio Fernández Fernández.

¡Qué curioso! Hace algunos días, en una conferencia de prensa, me referí a varios temas y, precisamente, hablaba de una guarida en la cual se escondía Sergio Fernández Fernández . Y resulta que quien ahora sale de su guarida es, nada más y nada menos, el creador del sistema binominal, reconocido por él mismo, con decretos firmados en la Comisión que lleva su nombre. Él fue quien fraguó el sistema electoral binominal.

¡Fíjense qué paradoja! Sergio Fernández Fernández , imputado por crímenes de lesa humanidad, imputado por los peores crímenes que se pueden cometer en contra del ser humano, es el autor del sistema electoral que hoy discutimos. Un criminal que cometió delitos de lesa humanidad es el autor del sistema electoral binominal que hoy nos convoca. El mismo que debe responder por los detenidos desaparecidos en nuestro país es quien inventó este sistema que hoy traemos a la palestra. El autor del redistritaje también fue Sergio Fernández Fernández . Lo reitero: un imputado por crímenes de lesa humanidad es quien inventó, quien diseñó, este sistema electoral binominal.

Uno se pregunta si un sujeto que no fue capaz de respetar la vida humana, ¿podría respetar la voluntad popular al diseñar un sistema electoral? Una persona a la cual le importaba un bledo si los detenidos morían encarcelados, si había personas desaparecidas; a alguien a quien no le importaba nada, ¿podía diseñar un sistema electoral cuyo centro fuera la voluntad popular? Por supuesto que no. Si no le interesaban la vida humana y la libertad, menos le iba a interesar la participación ciudadana.

¡Vaya paradoja! Precisamente después de todo lo que hemos discutido durante los últimos días, hemos logrado descubrir no solo al responsable de los crímenes de Neltume, sino también al autor del sistema electoral binominal. Algunos que representan a un sector minoritario en esta materia no quieren decirnos la verdad; quieren mantener una institucionalidad pinochetista creada nada menos que por un genocida, por un exterminador de ideas. Pero esto no puede continuar; debemos superarlo de una vez por todas, debemos atrevernos a competir. Nos hablan de libertad comercial, de libertad económica, pero no se atreven a competir, a conseguir los votos que necesitan.

¿Qué crea el sistema electoral binominal? Un mercado cautivo. ¿Acaso no quieren que haya libertad y competencia? ¿Dónde está la libertad que quieren? Cuando pueden optar por la libertad, prefieren un mercado cautivo, un mercado que les asegure sobrerrepresentación en el Congreso Nacional. Es algo que no podemos tolerar.

Quiero agradecer a la Presidenta de la República por el envío de este proyecto. Ella sabe que esta no es una reforma popular, que no es una reforma que sacará muchos aplausos; sin embargo, tuvo la hidalguía, la valentía y el coraje de presentar al Congreso Nacional este proyecto que cambia el sistema electoral binominal, cumpliendo así con un compromiso que contrajo con el pueblo: terminar, de una vez por todas, con un sistema inventado por un exterminador, y reemplazarlo por otro sistema, que devuelva al pueblo la posibilidad de elegir a sus representantes, de manera que nunca más esté sentado en el Congreso Nacional alguien que no sea elegido por votación popular, o, lo que es lo mismo, alguien que haya sido elegido por las cúpulas políticas, que son las que alimentan la sobrerrepresentación.

Hoy tenemos la gran posibilidad de avanzar en la democracia, de terminar con la institucionalidad que nos heredó un dictador, que nos impuso una tiranía. ¡Terminemos con él! ¡Superémoslo! De lo contrario, estaremos a merced de una institucionalidad que siempre penderá sobre nuestras cabezas, de una institucionalidad que queremos superar de una vez por todas.

¿Por qué el Congreso Nacional tiene mala aceptación ciudadana? Precisamente, por el sistema binominal. ¿Qué dicen las encuestas? Que casi el 70 por ciento de los chilenos y chilenas quieren terminar con él. La pregunta es, ¿quieren o no quieren terminar con el sistema electoral binominal? Sin duda, hay otros problemas: el distritaje, el número de parlamentarios. Todos estamos de acuerdo en ello; pero la interrogante principal es la siguiente: ¿Queremos o no queremos empatar con lo que desea la ciudadanía? ¿Qué quiere la ciudadanía? Terminar con el binominal. ¿Qué quiere el 70 por ciento de los encuestados? Terminar con el binominal. Eso es lo que todos queremos. Es posible que esto tenga un costo; pero lo importante es devolver a los ciudadanos la posibilidad de elegir a quienes ocupen los escaños del Congreso Nacional.

Hoy tenemos la gran oportunidad de cambiar la historia y de pensar en el futuro, de terminar con los miedos y de dar al pueblo la posibilidad de que elija a sus representantes, que transformarán el país. En suma, tenemos la gran oportunidad de decir no más a esta institucionalidad pinochetista que hoy sigue vigente en el país.

He dicho.

-Aplausos y manifestaciones en las tribunas.

El señor CARMONA ( Vicepresidente ).-

Ruego a los asistentes a las tribunas guardar silencio.

Tiene la palabra, hasta por cinco minutos, el diputado Carlos Abel Jarpa.

El señor JARPA.-

Señor Presidente, estimados ministros y ministras:

Hasta el quiebre de la democracia, ocurrido en 1973, el Congreso Nacional estaba integrado por 150 diputados y 50 senadores, y la población de entonces, según el censo de 1970, alcanzaba a 8 millones 884.000 habitantes. Así, un diputado representaba a 60.000 habitantes, distribuidos en 29 agrupaciones departamentales que elegían entre dos y ocho diputados, lo que daba un promedio de cinco diputados por agrupación. Es decir, algo similar a la modificación que se propone en el proyecto en estudio.

Chile economizó con la dictadura militar y con el cierre del Congreso Nacional; logró una disminución de los gastos del Congreso, ya que hasta marzo de 1981 la dictadura gobernó mediante decretos con fuerza de ley. Desde esa fecha hasta 1990, quienes legislaron fueron los cuatro comandantes en jefe de las Fuerzas Armadas .

Al iniciarse la transición a la democracia, la Cámara Alta quedó integrada por 38 senadores elegidos y nueve institucionales. Con posterioridad, se incorporaron dos senadores vitalicios; es decir, se llegó a 49 senadores. Por su parte, la Cámara Baja tenía 120 diputados, que eran elegidos por distrito, número que se ha mantenido hasta hoy. Ello ha favorecido, como ya se ha dicho, a los dos grandes bloques políticos que hemos estado sobrerrepresentados y ha impedido la elección de candidatos de otros partidos políticos, como ocurrió durante cinco períodos con el Partido Comunista, que, a pesar de tener el 5 por ciento de la votación, no logró tener representación parlamentaria hasta 2010. Este sistema ha sido también un escollo para los candidatos independientes.

Por lo tanto, es imprescindible cambiar este sistema electoral binominal por uno proporcional que permita que el Congreso Nacional sea representativo de todas las colectividades políticas, organizaciones sociales y gremiales. En otras palabras, nuestro norte es tener un Congreso inclusivo que, junto con los partidos políticos, constituya el pilar fundamental de la democracia. Esa es la única manera de asegurar una sociedad integrada, inclusiva, solidaria y fraterna.

Para fortalecer la democracia es necesario entregar los recursos humanos y físicos a nuestra institucionalidad y fortalecer los partidos políticos para que permitan la capacitación de las personas, con el objeto de tener ciudadanos conscientes que puedan actuar con libertad y con responsabilidad.

Por este motivo, los diputados firmamos un protocolo de acuerdo con el ministro del Interior , don Rodrigo Peñailillo , y con la ministra secretaria general de la Presidencia , señora Ximena Rincón , para que prontamente el Ejecutivo envíe al Congreso Nacional una serie de proyectos de ley destinados a mejorar y a profundizar el acervo democrático de nuestras instituciones, que es parte del quehacer político republicano de nuestra patria. Entre estos proyectos, podemos mencionar uno sobre los partidos políticos, otro sobre la propaganda y transparencia electoral, y otros relacionados con el voto ciudadano y con la ampliación de la democracia.

Hoy estamos reafirmando el compromiso que adquirimos con nuestra Presidenta Michelle Bachelet durante la campaña presidencial y parlamentaria. Este nuevo sistema electoral permitirá transparentar las campañas políticas, saber cómo se financian y limitar los recursos, que en ocasiones son desproporcionados y que atentan contra una contienda electoral igualitaria.

Finalmente, quiero señalar que muchos pusieron en duda nuestro voto favorable al proyecto. A todos ellos quiero decirles que cumplimos y que estamos demostrando que la Nueva Mayoría, a través del diálogo, está realizando una transición social participativa para lograr las bases de un Chile más igualitario, con mayores oportunidades para todos los chilenos y chilenas.

He dicho.

El señor CARMONA (Vicepresidente).-

Para completar los diez minutos del tiempo de la bancada del Partido Radical Social Demócrata, tiene la palabra, por cinco minutos, la diputada señora Marcela Hernando.

La señora HERNANDO (doña Marcela).-

Señor Presidente , sin duda, hoy estamos viviendo una jornada histórica para nuestro país. Cada uno de los diputados que vote a favor el proyecto estará acompañando la procesión del sistema electoral binominal hacia el cementerio. Terminaremos así con un sistema que no es inclusivo, que beneficiaba a dos grandes bloques y que solo en casos excepcionales permitió que una minoría accediera a un cupo en la Cámara de Diputados o en el Senado.

Hoy tenemos la oportunidad de ofrecer a la ciudadanía un sistema que reduce la desigualdad del voto, que permite la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas y que aumenta la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resultarán elegidos.

El proyecto facilita la expresión de la mayoría y la representación de las minorías y, además, promueve la conformación de un Congreso Nacional que refleje la diversidad de nuestra sociedad.

Seguramente, en la jornada de hoy, muchos de nosotros con nuestro voto a favor estaremos cumpliendo con una promesa que hicimos durante la campaña. En mi caso, me comprometí con los ciudadanos de mi distrito a dar mi voto para terminar con este sistema, y eso es lo que voy a hacer.

Quiero destacar que en el espíritu de esta ley en proyecto, la Presidenta de la República ha dejado clara su intención de mejorar la participación femenina y que la ley represente mejor no solo a la población y al territorio, sino también al género femenino. Por ello, la bancada del Partido Radical Social Demócrata apoyará esta reforma con todas sus fuerzas.

Pediremos votar separadamente la disposición relacionada con la exención de la cuota de cálculo en aquellos lugares donde se efectúen primarias, porque a mi parecer y al de muchas de mis colegas parlamentarias eso pasa a llevar el espíritu de la ley. ¿Cómo vamos a resolver la contradicción entre el criterio de paridad de género que intenta impulsar la Presidenta Bachelet en este proyecto de ley y la ley de primarias? La bancada femenina estima pertinente revisar la ley de primarias y hacer las modificaciones que correspondan a ese cuerpo legal.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente ).-

Tiene la palabra el diputado señor Javier Hernández.

El señor HERNÁNDEZ.-

Señor Presidente , por su intermedio, me gustaría pedir al diputado Hugo Gutiérrez que tuviera la misma hombría para decir fuera de esta Sala lo que aquí ha señalado con protección del fuero parlamentario. Él desprestigia a personas, pero, lamentablemente, afuera no dice lo mismo.

Hay otra situación que me llama la atención. En conversaciones durante el transcurso de la mañana, en el día de ayer y durante todos estos días he escuchado que treinta o cuarenta parlamentarios de la Nueva Mayoría -otros hablan de 50 por ciento- no quieren el cambio del sistema binominal. Entonces, ¿por qué están votando y apoyando este cambio? ¿Están presionados por La Moneda? Así parece.

La discusión que hoy tenemos es histórica, pero no porque se vaya a terminar con un sistema electoral, sino porque al presentar una propuesta con aumento de parlamentarios, en un momento en que tenemos una pésima valoración pública, por las más diversas razones -muchas de ellas se han gatillado por actuaciones colectivas o individuales de ambas cámaras del Congreso-, lo poco de prestigio y credibilidad que aún tenemos va a bajar a niveles históricos. Digo esto por la imagen, por la baja en los indicadores de la economía, la cual se ha visto afectada desde el momento en que se vislumbró que iba a ganar la actual coalición de Gobierno; porque las reformas que ha presentado la Nueva Mayoría claramente son improvisadas, lo que queda demostrado por sus fuertes diferencias internas tanto en lo tributario como en materia educacional, y por esta reforma al sistema electoral, que arrastra anuncios que después no logran encontrar la fórmula para implementarse.

Soy un convencido de que de aprobarse este llamado sistema proporcional tal como está planteado, es decir, con un innecesario aumento de parlamentarios, será un hecho de lamentables consecuencias para este Parlamento, en particular, y para la clase política, en general.

A los que están por esta reforma les puedo asegurar que no tienen, por ejemplo, la solución para compatibilizar la ley de cuotas con el sistema de elecciones primarias. Es imposible hacerlo, salvo que se hagan primarias segregadas por sexo, lo que sería una burla para un sistema democrático que se precia de serio.

Además, veo el peligro de que, de imponerse la ley de cuotas, las primarias solo sirvan para la elección de cargos unipersonales, o sea, para alcaldes y presidentes de la nación. Plantear eso es una inconsecuencia y una burla para quienes se la juegan por participar en actos democráticos que permitan elegir sus candidatos. También vemos diferencias dentro de la Nueva Mayoría en cuanto a los subpactos, al redistritaje. Así, suma y sigue.

Otro gran tema de esta reforma es que disminuye la relevancia y representación de las regiones en ambas cámaras, lo que va en contra del discurso permanente de dar más poder a las regiones. Eso es grave, más aún si el Senado debe tener una representación territorial y las cifras de aumento de los senadores nos dicen lo contrario. Por ello, emplazo a los que representan a las regiones en el Congreso Nacional y que están por aprobar este nuevo sistema electoral a que justifiquen este nuevo atentado a la regionalización.

En síntesis, no apoyaré un cambio al sistema binominal con más parlamentarios.

Como dije, el redistritaje también provoca discrepancias en el bloque de Gobierno. Si quieren un nuevo sistema proporcional, deben agrandar aún más los nuevos distritos, lo que no tiene costo para el país. De esa forma, no aumentaremos el número de parlamentarios.

Señoras y señores diputados, este no es el camino. Trabajemos para mejorar la imagen del Parlamento y de la política, no para aumentar el desprecio y las burlas de la ciudadanía, que es lo que vamos a lograr si aprobamos un nuevo sistema electoral con aumento de parlamentarios. Nadie cree que ello no significará un mayor gasto para las arcas fiscales. Más temprano que tarde sí significará un mayor gasto, y eso no tendrá justificación.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Rincón.

El señor RINCÓN.-

Señor Presidente , vamos a concurrir con nuestro voto favorable al proyecto.

La Presidenta Michelle Bachelet ha tenido no solo la convicción de sustituir y eliminar el sistema electoral binominal, sino también de abordar el tema de la representación de género en un Parlamento que, a nivel mundial, tiene una de las peores representaciones si se considera ese parámetro. No estoy hablando solo de Latinoamérica, sino -repito- del mundo.

Perfectamente podría haberse evitado ese tema y concentrar la reforma exclusivamente en el sistema electoral binominal; sin embargo, la Presidenta ha decidido asumir los dos desafíos, lo que además de hablar muy bien de ella, justifica con mayor fuerza su elección como Presidenta de la República , y legitima, con mayor razón, el rol de las mujeres en política. A pesar de que representa a más de la mitad de las electoras, ellas aún no tienen la representación parlamentaria que corresponde, la que hoy no llega siquiera al 17 por ciento.

Estas normas que se otorgan con carácter transitorio para cuatro elecciones, permitirán, con sus incentivos de reembolso electoral a los partidos y a las cuotas de género, que la mujer, de una vez por todas, tenga el rol que le corresponde en términos de representación en la vida nacional y en las mayores instancias de decisión, como la Cámara de Diputados y el Senado.

Por otra parte, luego de 24 años vamos a eliminar un sistema electoral binominal. Se nos dice que defendemos el cambio de sistema, pero no el aumento de parlamentarios. ¡Eso es falso! No es un tema de números. Si fuera por eso, significaría que algunos se olvidaron que les gustó tener solo a cuatro legisladores. ¡Y cuánto sufrimiento y terror padeció Chile durante casi 17 años! Por lo tanto, aquí no es cosa de números. Evidentemente, queremos más parlamentarios para tener una mejor democracia; queremos más parlamentarios para que regiones que no tienen senadores tengan la posibilidad de elegirlos. Si la UDI no quiere senadores, entonces que vote en contra el proyecto, al igual como lo hizo en relación con el que proponía senadores para la Región de Arica y Parinacota. ¡Vamos a defender que Arica tenga senadores porque no corresponde que una región no esté representada como debiera!

Aquellos que dicen que se trata de un tema de números y que quieren volver a la usanza de tener menos parlamentarios -ojalá solo cuatro legisladores, como sucedió en las décadas del setenta y ochenta-, votarán en contra porque no quieren Parlamento. Nosotros vamos a defender más diputados y más senadores.

Reitero, este no es un tema de costos. Debemos legislar para que de una vez por todas no se siga jugando al empate. Un tercio no es igual a dos tercios; un tercio no puede propender a ser la mitad del Parlamento; un tercio no puede tener derecho a veto y obstaculizar los programas de Gobierno sancionados favorablemente por el voto popular de la ciudadanía. ¡Eso queremos con la eliminación del sistema electoral binominal!

Agradezco la presencia del ministro del Interior , de la ministra del Sernam y de la ministra Rincón, como también a la Presidenta de la República por darnos la oportunidad de discutir este proyecto que elimina el sistema binominal. Lo haremos con votos; no vamos a imponer un sistema electoral como lo hizo la Derecha en su momento, la UDI en particular, con la bota militar y con el señor Pinochet , oportunidad en la cual no hubo ningún espacio para discutir. ¡Se impuso un sistema! En cambio nosotros, repito, lo haremos con los votos y el respaldo de la gente, debatiendo en el Parlamento como corresponde, con la convicción y la razón de los argumentos. Eso es radicalmente distinto y tremendamente importante. Incluso, lo hacemos garantizando la presencia permanente de las minorías, porque vamos a seguir resguardando este sistema proporcional moderado para que la minoría tenga una adecuada representación. Eso lo hacen solo quienes son demócratas por convicción.

Repito, no se trata de un tema de gastos, como pretende señalar el diputado Barros en una farragosa intervención, tratando de desviar la atención respecto de lo que está en juego. ¡Son las reglas del juego democrático, para que sea todo verdaderamente representativo y más participativo, pero en democracia y no impuesto -repito- por la bota militar! Si aquellos que creyeron que los incumbentes no íbamos a ser capaces de hacerlo, precisamente los incumbentes nos vamos a poner más competencia; los incumbentes vamos a agrandar los distritos; los incumbentes nos vamos a relacionar con electores que nunca han sido nuestros votantes, porque queremos más democracia, más competencia y un sistema electoral que sea más representativo y sancionado por el Congreso Nacional.

He dicho.

-Aplausos-.

El señor GONZÁLEZ (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Diego Paulsen.

El señor PAULSEN.-

Señor Presidente , no quiero ser redundante en relación con los argumentos que he escuchado de mis colegas de la Alianza y del Presidente de mi partido, los que comparto plenamente. Sin embargo, quiero dejar establecido en el boletín de sesiones un aspecto que resulta grave y que atenta contra lo que hoy se dice defender.

En la tramitación y discusión del proyecto se degrada y desprecia una vez más a esta Cámara y al Congreso Nacional. Está fresco y aún pendiente en la memoria de todos los chilenos lo que ocurrió con la reforma tributaria, cuando el Ejecutivo , en forma aplastante, hizo lo que quiso en la Comisión de Hacienda: aprobó a tontas y a locas una reforma a la cual hoy se presentaron doscientas indicaciones en el Senado. Con ello, queda demostrado que nos ocupan solo como buzón y dejan a sus parlamentarios realmente con la boca abierta.

La Cámara de Diputados soportó estoicamente la soberbia de los ministros, quienes entendieron que lo que nosotros digamos o hagamos es un estorbo inútil frente a sus argumentos iluminados, a veces con tintes de fanatismo. Como vemos, es una lección que la Cámara de Diputados aún no ha aprendido, pues con urgencia estamos celebrando una sesión que solo cumple con una formalidad, que sirve más para las cuñas de la prensa que para sancionar los objetivos de quienes sostienen perseguir una bien inspirada reforma electoral.

Pregunto a la Nueva Mayoría y a sus aliados qué van a votar. ¿Van a obedecer sin cuestionamientos la cartilla que les leyeron en Cerro Castillo? ¿Qué asunto de tanta importancia lograron en esa reunión? ¿Cómo no hay ninguno que tenga los pantalones bien puestos y se atreva a repetir aquí lo que se escucha en muchos pasillos y reuniones? Solo pido que cuando haya que asumir la responsabilidad respecto de perjuicios provocados por decisiones atolondradas, lo hagan como corresponde y no se escondan como lo hacen hoy.

Por otra parte, se habla de un sistema diseñado en la dictadura militar del general Pinochet; se han llenado la boca por más de veinte años hablando del traje a la medida y del diseño del actual sistema electoral. Al parecer, a varios de mis colegas les gusta seguir utilizando y difundiendo en diferentes partes del mundo las cosas hechas en dictadura. Corrijo: no solo a mis colegas diputados, sino también a senadores, ministros e incluso a la actual Presidenta. Solo por nombrar algunos países, Venezuela y Cuba los siguen bien de cerca.

Pero esto va más allá. Repito, los mismos que se han llenado la boca durante más de veinte años hablando del traje a la medida, hoy actúan de esa manera, sin ninguna convicción ideológica personal, sino que, más bien, impulsados casi por una dictadura política desde La Moneda.

Señor Presidente , veo a mis colegas de la Nueva Mayoría por los pasillos asustados por la reforma que van a aprobar, pero no son capaces de alzar la voz por temor, pues, como dije, no sé qué habrá pasado en Cerro Castillo.

Lamentablemente, no está el diputado Auth , porque me gustaría saber quién lo eligió. En lo personal, no me eligió una cúpula de RN, pues fue el único partido que eligió a sus candidatos a través de una primaria. Como dije, no sé quién eligió al diputado Auth .

Por otra parte, el diputado Rincón se refirió a los recursos. En verdad, para mí ese tema no es importante, pero quiero que se diga la verdad a la gente sobre los recursos que se van a destinar a la reforma.

Acabo de leer un titular que recoge las siguientes palabras del ministro Peñailillo : “Lo central es poner fin a un sistema perverso”. Pero si hoy todos nos estamos asegurando el cupo. Si en el próximo período se eligieran 120 diputados, con este sistema no resultaría elegido ningún nombre distinto de los aquí presentes. Proporcionalmente, no se elegirá a nuevos parlamentarios que no sean parte de nuestras coaliciones.

Me llama la atención la cerrada defensa de los ministros y de la actual Presidenta, quienes han puesto todo su capital político sobre la mesa al mentir a la ciudadanía respecto de que no se van a generar mayores costos. El señor ministro le está mintiendo a la gente, y el diputado Auth también falta a la verdad respecto de las palabras en chino mandarín escritas en su corbata. Hoy se llenan la boca al hablar de muchas cosas y no avanzamos en nada.

Quiero que se tome en serio a la Cámara de Diputados y no se la utilice solo como buzón.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Fidel Espinoza.

El señor ESPINOZA (don Fidel).-

Señor Presidente , el sistema político chileno vive un día clave. Se pretende, como se ha dicho, modificar el sistema electoral, el cual -qué duda cabe- ha provocado fuertes distorsiones en la voluntad popular. Ejemplos hay de sobra y no es necesario ratificarlos.

Seguramente el sistema electoral que se votará en esta Cámara marcará la política de nuestro país por el próximo medio siglo.

Como diputado de la Nueva Mayoría -lo digo con absoluta franqueza-, he expresado mis fuertes aprensiones al proyecto con la ética y la moral que me otorga el respaldo ciudadano, ya que no resulté elegido por diez votos más o diez votos menos, sino por amplia mayoría.

Algunas de las inquietudes que me genera la iniciativa se relacionan con los siguientes aspectos: la existencia de megadistritos, que pueden limitar la barrera de entrada a la política; el financiamiento de las campañas, que puede hacer más difícil el acceso de nuevos aspirantes al Parlamento, no de los que hoy ocupan un escaño. También he señalado que fusionar distritos de capitales regionales con distritos más pequeños puede generar un centralismo al interior de las regiones.

He expresado con fuerza que encuentro incomprensible la posición de algunos actores políticos de nuestra propia coalición que actuaron a favor de los subpactos en las elecciones municipales, pero no hicieron lo propio en las elecciones parlamentarias.

He hablado con mucha fuerza respecto del poder del dinero en la política. Aquí me quiero detener un minuto, pues honorables diputados de la UDI han señalado que este proyecto se ha generado en el marco de la suciedad; pero nada dicen en cuanto a que por la poca transparencia del sistema actual, el financiamiento de campañas muchas veces proviene de actores empresariales, que son los que, en definitiva, han torcido con mucha fuerza la voluntad de los ciudadanos. Me refiero, por ejemplo, a quienes se coludieron en el caso de las farmacias, que tienen familiares en la Oposición, que le robaron a millones de chilenos, sobre todo a los adultos mayores, y que son los que con el actual sistema permiten financiar de manera poco transparente la política del país.

He dicho con especial énfasis al Gobierno que no votaría a favor este proyecto sin un compromiso formal para que, de una vez por todas, contemos con transparencia total en materia de aporte a las campañas electorales, porque ahí sí están la suciedad y los beneficios de algunos, pues muestran ante el Servel gastos electorales que no son tales y ocultan los verdaderos.

Tenemos un sistema de financiamiento de las campañas electorales que debemos mejorar ostensiblemente, pues es arcaico y oculta a quienes verdaderamente las apoyan económicamente. Luego, los parlamentarios elegidos defienden los intereses de quienes aportan a sus campañas y no los de la ciudadanía. Los aportes anónimos no pueden seguir existiendo.

Por eso, voy a creer en nuestro Gobierno y en el compromiso que la Presidenta Bachelet adquirió durante la campaña para terminar con el sistema binominal; pero también en el compromiso asumido de que vamos a contar con un protocolo que, durante el segundo semestre, va a establecer una agenda que va a terminar con lo más sucio que hoy tiene la política: no permitir que cualquier ciudadano sepa quién aporta a las campañas electorales, como ocurre en los países modernos.

Con mucho entusiasmo, los ministros de nuestro Gobierno nos han pedido comprometernos a aprobar el proyecto. Por su intermedio, señor Presidente , les pido que tengan el mismo entusiasmo y compromiso para que durante los próximos meses el Gobierno saque adelante proyectos que Chile está esperando: la nacionalización del agua, el reconocimiento de los pueblos originarios, no privatizar más la salud, una reforma educacional que termine con lo que todos hemos denunciado: el lucro, la selección y el copago. Por último, con algo tremendamente importante para Chile: una reforma laboral que proteja a los trabajadores.

Voy a votar a favor el proyecto, porque considero que es necesario para el país.

He dicho.

-Aplausos.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente ).-

Tiene la palabra la diputada Karla Rubilar.

La señora RUBILAR (doña Karla).-

Señor Presidente , por su intermedio, quiero saludar al ministro del Interior y a las ministras que lo acompañan.

Me tocó el honor de ingresar a la política muy joven. Junto a quienes me acompañan, construimos Amplitud, de Arica a Magallanes, y soñamos con una centroderecha moderna, liberal y con un profundo compromiso social.

Ingresé para dar batallas como la de hoy y como muchas otras que ya hemos dado. ¡Por Dios que ha sido difícil! Hoy las podemos defender sin tapujos desde Amplitud; no con grandes titulares ni con votos aislados, como en el pasado, sino con una defensa clara, de cara al país, que sabe en lo que creemos.

Soñaba con una centroderecha profundamente comprometida con la democracia y los derechos humanos. Aquello que parecía imposible, hoy se traduce en una UDI que tiene un debate activo sobre la dictadura de Pinochet y en que RN conversa sobre sacar de sus principios la gesta heroica.

Soñaba con una centroderecha que permitiera a las personas no solo tener libertad económica, sino, además, vivir su vida según sus profundas convicciones personales. Hoy existen miembros de RN y de la UDI que apoyan el AVP. Muchos de ellos condenan la discriminación; incluso, algunos dieron sus votos para aprobar la entrega de la píldora del día después.

Soñé con una centroderecha que permitiera la participación y no le tuviera miedo a la gente.

Soñar con permitir el voto de los chilenos que viven en el extranjero era completamente impensado cuando ingresé al Congreso Nacional. Sin embargo, como Amplitud concurrimos a ese acuerdo histórico.

El hecho de pensar en sacar adelante iniciativas para promover la participación política femenina, con apoyo transversal desde la UDI hasta el Partido Comunista, era simplemente eso: un sueño. Hoy, para esta Cámara es de lo más normal.

Estamos viviendo el fin del sistema binominal. ¡No saben la emoción que eso nos genera! El hecho de que haya habido un voto aislado de la centroderecha a favor de la reforma al sistema binominal presentada en 2008 fue una locura, algo que me había convertido de inmediato en díscola. Seis años después existe una mayoría clara en ese sentido, con votos de Renovación Nacional; incluso, la UDI sostiene que el sistema binominal no da para más.

Quiero ser muy clara en este punto: nos alegra inmensamente que Renovación Nacional, al final, haya resuelto hacer lo correcto, lo mismo que decidió hacer Amplitud, cual es cumplir con la palabra empeñada, es decir, transformar las palabras en votos no por cálculo político ni por negociaciones de última hora, sino por una profunda convicción y consecuencia con lo que hemos dicho durante tantos años.

Hoy contribuiremos a cambiar el sistema binominal -con votos que son claves, lo sabemos-, sistema que perdió legitimidad para la gente, aspecto muy importante a considerar para hacer buena política.

Hoy decimos a los chilenos y chilenas que su voto importa, que vale; que construiremos, entre todos, un sistema más democrático, más inclusivo y más competitivo, con más mujeres y más espacio para los pueblos originarios; que cuidaremos nuestras regiones; que los independientes realmente podrán actuar como tales y salir elegidos sin transar esa independencia.

Creemos en un protocolo para cambiar los actuales partidos políticos, para transparentar las campañas y para generar mejores acciones.

Porque creemos en las ideas que conquistan corazones y no en sistemas electorales que aseguran cupos, y porque estamos seguros de que sintonizando con la gente volveremos a ser mayoría, Amplitud, con orgullo, anuncia su votación favorable a la eliminación del sistema binominal.

He dicho.

-Aplausos.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente ).-

Tiene la palabra el diputado Jorge Insunza.

El señor INSUNZA .-

Señor Presidente , de este debate va quedando una cosa meridianamente clara: la única fuerza política del Congreso Nacional que votará en contra el proyecto, en su integridad o por partes, será la UDI.

La nueva generación de ese partido, que ha elegido al diputado Ernesto Silva -presente en la Sala- como su nuevo presidente, tiene la oportunidad de superar una de las herencias de la dictadura; sin embargo, lo que hace es más bien mantenerla, reivindicarla y seguir anclada a esa penosa tradición.

Quiero referirme a ese punto. El binominal es un sistema electoral concebido en dictadura, diseñado para mantener una tutela sobre el sistema político democrático. Su establecimiento rompió con la tradición democrática que tenía Chile de ir ampliando su sistema electoral. Vale la pena recordarlo, porque muchos hitos de esa tradición no son de larga data.

Cabe puntualizar que recién en 1931 se permitió, mediante decreto, que las mujeres pudieran votar en las elecciones municipales, derecho que pudieron concretar en los comicios municipales de 1935. Asimismo, recién en 1949 se estableció por ley el voto universal de la mujer. Esas reformas se complementarán con la que hoy estamos discutiendo.

Antes existía el voto censitario, el que posteriormente fue modificado para que pudieran tener derecho a sufragio quienes supieran leer y escribir. Las reformas que permitieron que existiera un sufragio universal real se llevaron a cabo en los años 50. El derecho a voto para los mayores de 18 años se estableció recién en 1970.

Con esta información quiero resaltar que la presente reforma nos permitirá recuperar una tradición que se perdió con el quiebre institucional de 1973 y con la instalación de la dictadura. Hasta ese entonces, teníamos un sistema electoral proporcional, que reconocía la existencia de partidos de diversas características y conformaciones, que podían formar coaliciones, pero respetando las diferencias entre las distintas fuerzas políticas.

El sistema binominal fue un invento creado por la dictadura para permitir que solo existieran dos partidos políticos, lo que no formaba parte de la tradición democrática del país. Más bien, se quiso reproducir la historia británica o la norteamericana, en la que conviven solo dos partidos, incluso muy similares entre sí. Pero nada de ese intento sobrevivió. Hoy, después de veinticinco años, existe una multiplicidad de fuerzas que representan a la sociedad chilena. La participación de dichas fuerzas es lo que este proyecto busca plasmar.

Por lo tanto -reitero-, la presente reforma nos permitirá retomar una tradición democrática y expresarla, con el voto, a través de un sistema que respetará la diversidad y que, al mismo tiempo, permitirá conformar mayorías que den gobernabilidad.

El actual sistema electoral restringe la participación de las minorías y restringe la competencia, pues propicia que se produzcan exclusiones para representar a los partidos. La competencia que se instala mediante este sistema se produce más bien al interior de las coaliciones; incluso, se generan listas adversarias, lo cual debilita la gobernabilidad de los partidos, como ha quedado demostrado en distintos episodios. Todo lo anterior impide la incertidumbre. Ese es el mayor temor que debemos romper, porque la democracia consiste precisamente en que exista incertidumbre respecto de los resultados electorales, de modo que la voluntad popular se pueda expresar.

Me siento orgulloso de que la Presidenta Michelle Bachelet haya enviado a tramitación este proyecto y de que tengamos la posibilidad de votarlo, pues permitirá que nos deshagamos de una negra historia vinculada a la dictadura, y que el Congreso Nacional resuelva un sistema electoral mediante reglas democráticas y abra un nuevo camino en el país.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente ).-

Tiene la palabra la diputada Karol Cariola.

La señorita CARIOLA (doña Karol).-

Señor Presidente , agradezco al diputado Sergio Aguiló por cederme su espacio para hacer uso de la palabra.

En nombre de la bancada del Partido Comunista y de la Izquierda Ciudadana, quiero dirigirme, en primer lugar, a mis compañeros, en los que incluyo a todos aquellos que han luchado incansablemente, incluso arriesgando su vida, a aquellos que la perdieron por querer para Chile una verdadera democracia. Muchos de ellos ya no están y, lamentablemente, hasta la fecha no conocemos su paradero. Hoy, los homenajeamos con este paso que estamos dando.

Quiero mencionar en forma especial a los compañeros Guillermo Teillier , Lautaro Carmona y Hugo Gutiérrez , quienes luego de innumerables esfuerzos colectivos y pese a toda la intencionalidad por evitarlo, enfrentando a la maquinaria económica y política de la Derecha, fueron capaces de derrotar la exclusión política a la que nos condenó esta débil democracia.

Quiero representar en ellos a todos los que han sido marginados por una de las peores y más injustas herencias de la brutal dictadura, que impuso a sangre y fuego un sistema pensado justamente para dejar fuera a quienes creían y soñaban con una libertad real y una verdadera democracia; me refiero al llamado sistema electoral binominal.

En forma particular, quiero recordar y homenajear a la más incansable y ejemplar luchadora por la recuperación de la democracia y, con posterioridad, contra la exclusión. Me refiero a Gladys Marín , diputada legítimamente elegida mediante un sistema de elección justo. Formó parte de esa Cámara de Diputados que fue truncada en 1973 y que contaba en aquel entonces con 150 diputados, aunque algunos se escandalicen por la cifra. Representó a algunas de las comunas del distrito por el que tengo el inmenso orgullo de ser diputada.

Gladys Marín sostenía con fuerza y claridad lo siguiente: “Una sociedad democrática tiene que respetar todas las expresiones. Una expresión no se mide por la cantidad de votos, sino por el valor de las ideas, y las ideas son necesarias para conformar una sociedad distinta.”.

Por estas convicciones se convirtió en un peligro para la estabilidad pactada, para la añeja política de los consensos, para todos aquellos que jugando a ser cocineros, se encerraban a planificar cómo pasar por encima de la sociedad, del pueblo, queriendo excluir al resto, pero que terminaban excluyéndose a sí mismos del derecho y la justicia.

Un peligro para el partido del señor Melero , un partido que confunde democracia con tiranía, que quiere hacernos creer que el asesinato, la tortura, el secuestro y la desaparición son ejercicios de participación.

El Partido Comunista de Chile jamás -lo reitero: jamás- ha formado parte de una dictadura o ha participado en un golpe de Estado.

Es ridículo ver cómo aquellos que avalaron instituciones tan antidemocráticas y dictatoriales como los senadores vitalicios y designados, quieren darnos lecciones de democracia.

Que no se llenen la boca aquellos que se burlaron de todo un país, dando el triste espectáculo de sentar en un escaño al brutal dictador Pinochet, aplaudido a rabiar por la UDI, con su vergonzosa historia de ataque a la democracia.

¡Cómo le explicamos hoy al país y a las futuras generaciones que tuvimos que esperar 24 años para terminar con este sistema injusto! Durante ese tiempo solo dos fuerzas gobernaron a todo el país y tomaron decisiones por todos nosotros.

Estamos dando un paso histórico que da cuenta de un Chile que avanza, que crece y se organiza. Hoy comenzamos a destruir uno de los pilares más emblemáticos de un aparato estatal edificado para sostener a la minoría económica y aplastar la voluntad de las grandes mayorías. Hoy damos otro paso para traer a estos salones a quien siempre debió estar acá: nuestro pueblo.

El partido, del que formo parte, siempre dijo con certeza: “El pueblo es el único soberano; él debe estar representado en toda su diversidad y pluralidad. Ello exige un sistema proporcional. Un parlamento que no es representativo de todos los pensamientos y de todos los sectores sociales, culturales, étnicos, sexuales no es un parlamento democrático y legítimo.”.

Terminar con el sistema binominal también es un tremendo incentivo para la participación, es una manera de abrir puertas.

Quiero resaltar la gran contradicción que existe en nuestro país. Me refiero a la deuda en que aún estamos con la paridad de género. En esta Corporación, las mujeres constituimos solo el 16 por ciento de los parlamentarios, en circunstancias de que en el país somos el 51 por ciento de la población.

Queremos que haya más mujeres en el Congreso, pero no solo por ser mujeres; queremos más mujeres luchadoras, trabajadoras, dirigentes sociales, constructoras de futuro. Queremos, solo por ahora, que en virtud de la indicación que se ha presentado, las candidaturas no excedan del 60 por ciento de un mismo género, y llamo a rechazar la indicación que relativiza esa determinación.

Estamos convencidos de que si nos ponemos de acuerdo, amparados en la consistencia del programa de la Presidenta Bachelet y su Gobierno, y en el cumplimiento de sus compromisos, podremos seguir luchando para desmantelar, aunque sea pieza por pieza, la obra de la dictadura militar.

Por todo lo expuesto, anuncio que nuestra bancada votará a favor la iniciativa en debate.

He dicho.

-Manifestaciones en las tribunas.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente ).-

Pido silencio a quienes están en las tribunas; si no callan, nos veremos en la obligación de desalojar a quienes no permiten la participación de las parlamentarias y de los parlamentarios.

Tiene la palabra el diputado Ernesto Silva.

El señor SILVA .-

Señor Presidente , ¿sabe cuál es la diferencia entre los diputados de la UDI y los de la Nueva Mayoría? Que los de la UDI decimos la verdad. Nosotros decimos que estamos en contra y votamos en contra. Los de la Nueva Mayoría, en cambio, corren por los pasillos, escondidos, diciendo: “Sálvennos; que no se apruebe el proyecto; ojalá que en el Senado se arregle.”. Sin embargo, hoy, en la Sala, usan su verborrea para llamar a votar a favor la iniciativa.

Hablemos con la verdad; digamos la verdad. Veamos lo que está sucediendo en los pasillos: los diputados de la Nueva Mayoría piden, por favor, que el Senado los salve.

La UDI, de frente a la ciudadanía, a todo Chile, dice: “No queremos ni un parlamentario más, porque no se necesita para mejorar la democracia.”. Esa es la verdad y la defendemos con convicción.

Creemos que los sistemas mayoritarios son positivos para Chile y hemos planteado la necesidad de modificar el binominal, pero resguardando la idea de las mayorías, porque nos parece bien. Por ello, hemos traído una propuesta alternativa a la que se debate.

La Nueva Mayoría, tal como hizo antes la Concertación, sueña con miles de fantasías sobre el futuro del país y la democracia. ¿Le digo algo, señor Presidente ? No se necesita ningún diputado más para cumplir esos sueños. ¿O alguien en la Sala piensa que los chilenos, que somos inteligentes, creemos que con algunos diputados más mejorará la calidad de la democracia o la calidad de las leyes que aprobamos? ¿Treinta y cinco diputados más para hacer mejores leyes? ¿Alguien en la Sala piensa que con más parlamentarios mejorará la evaluación del Congreso o que este se transformará en el Disneylandia de la felicidad? ¡Por favor! ¡Qué tienen en su mirada de las cosas!

A la UDI le va bien con cualquier sistema electoral. Le va bien en las elecciones para alcalde, para concejales, para consejeros regionales, para parlamentarios. Somos el partido más grande y no tenemos miedo. Pongan las reglas que quieran. ¡Pero defenderemos lo que sea bueno para Chile!

(Manifestaciones en las tribunas)

Y lo defenderemos con convicción.

Cuando partió el sistema binominal, elegimos once diputados; hoy somos treinta. Enfrentamos la adversidad, porque encarnamos lo que la gente quiere. Y lo que la gente quiere hoy -lo digo por su intermedio, señor Presidente , al señor ministro - es que no haya ni un diputado más de los que hoy tenemos, porque no se necesitan.

Señor Presidente , ¿usted cree que los adultos mayores que están esperando una pensión digna quieren que haya más diputados? ¿O lo que esperan es que nos sentemos a mejorar las pensiones y a trabajar en unidad?

¿Usted cree, señor Presidente , que las familias que están en los campamentos, que esperan una nueva vivienda mientras los diputados de la Nueva Mayoría aplauden en una fiesta por aumentar la cantidad de diputados, quieren que el Congreso aumente? ¿O lo que quieren es que se dé solución a sus problemas? ¿Quieren que se gasten más de diez mil millones en esta reforma, de donde sea que salgan: de un bolsillo, de otro o del propio Congreso? ¿O quieren que esa plata se gaste en políticas sociales?

¿En qué minuto pensaron que los chilenos, que somos inteligentes, estaríamos de acuerdo con un aumento de diputados como el que se propone, cuando los problemas de la gente son otros?

Quiero ir más allá. Con problemas como el robo ocurrido ayer, como los atentados con bombas y otros de similar gravedad, ¿cree que las familias que tienen miedo, están preocupadas de aumentar el número de diputados? ¿O están esperando que el ministro y el Gobierno actúen con fuerza para enfrentar esos problemas? No se pierda ni un segundo en eso.

Hoy muchos dicen que la UDI está sola. Lo estamos, pero respecto de la Nueva Mayoría, que cree que el país necesita más diputados; sin embargo, estamos muy cerca de los valores de los chilenos, de lo que la gente quiere.

(Manifestaciones en las tribunas)

Agradezco el entusiasmo del presidente del Partido Socialista por tratar de explicarnos qué consejos debemos seguir; pero le pido, por su intermedio, señor Presidente , que no se preocupe, porque lo tenemos claro. Sabemos qué necesita Chile, y lo vamos a explicar: los chilenos no quieren más diputados, porque saben que eso no cambiará el país para bien. Se necesitan cambios, pero en la dirección correcta.

La UDI tiene una postura clara y la defiende con nitidez: representar lo que Chile quiere, que es avanzar con cambios que apunten en la dirección correcta.

Los invitamos a salir a la calle para saber qué dice la gente sobre el aumento de diputados.

(Manifestaciones en la tribuna)

Defenderemos lo que consideramos bueno para el país, porque, además, es lo que quiere la gente: ni un diputado más.

He dicho.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Pablo Lorenzini.

El señor LORENZINI.-

Señor Presidente , como dijo la diputada Karol Cariola , llevamos veinticinco años discutiendo sobre algo que a la gente no le interesa.

¡Claro! Pregúntenle a la gente sobre los pactos, las cuotas, la cantidad de candidatos; sobre la lista abierta; la presentación, el orden de los candidatos, las listas, el sistema electoral nuevo, los nuevos distritos, la reducción del límite electoral, las facultades del consejo directivo del Servel , etcétera. ¡Para qué sigo!

A la gente le importa un comino lo que estamos haciendo aquí.

Siguiendo la línea del diputado Silva , ¿saben qué quiere la ciudadanía? ¡No que vayamos a la calle, pues nos eligieron para legislar! Alguien dijo que somos un buzón. ¡No hemos sido un buzón en la Cámara de Diputados!

¡En la Cámara aprobamos la reforma tributaria contenida en el programa presidencial como correspondía! ¿Pero qué pasó en el Senado? ¡Los senadores de la UDI recibieron el llamado de los grandes empresarios de este país! Y allá están ahora “cocinando”.

Le pregunto al ministro , por su intermedio, señor Presidente : ¿Usted va a respetar lo que aprobemos en la Cámara, o irá a los departamentos de los asesores del Senado a “cocinar” otra reforma?

Si tenemos la mayoría -para eso nos eligió la gente- es para aplicarla. Espero que en este tema la apliquemos y nos dejemos de discutir. ¿Dónde está el temor? Lo que la mayoría de la gente quiere es que nos preocupemos de otras cosas. Por ejemplo, ¿saben cuánto han ganado las isapres? Hasta ahora, ¡50.000 millones de pesos! Sobre esa situación, que es una ridiculez, deberíamos estar legislando.

¿Saben cuánto ganó la banca al 30 de junio? ¡Tres mil millones de dólares! Y son ellos quienes están mandando durante la tramitación de la reforma tributaria. Ni FUT, ni “Futito”, ni renta atribuida, ni nada. ¡Están mandando! Eso quiere la UDI. Están trabajando con los expertos y con los asesores.

¿Qué pasa con las leyes laborales? Eso es lo que se necesita: protección de nuestros trabajadores.

En cuanto a la educación, en eso estamos. Espero que la reforma a la educación tampoco termine en otro “Futito”.

La verdad es que hay temas que no nos atrevemos a abordar. ¿Quién toca a las AFP? Reitero: las mayorías son para ejercerlas, con respeto; pero es eso lo que debemos hacer.

En cuanto a este proyecto, ¡votémoslo y chao! Si estamos de acuerdo en cambiar el sistema electoral, ¡se acabó!

Lo que quiero, ministro , es comprometerlo a mirar hacia adelante. Esta democracia de los parlamentarios la quiero en regiones. ¿Qué pasa con la ley de consejeros regionales? ¿Dónde está el consejo regional activo y potente en las regiones? ¿Qué pasa con los intendentes? ¿Por qué no los elegimos en forma directa, al igual como se hace con nosotros, en vez de que sean nominados por el gobierno de turno?

Se requieren más recursos para regiones. Más de cuarenta diputados de todos los sectores que conformamos la bancada regionalista nos acabamos de reunir, y acordamos exigir en la tramitación del proyecto de reforma tributaria que se aclare dónde están los recursos para las regiones. ¿Dónde están las platas para que el consejo regional, el intendente, los alcaldes y las autoridades comunales y vecinales puedan decidir en qué invertirlas? ¿Por qué todo tiene que ser dirigido desde Santiago? Eso es lo que la gente espera que discutamos; no que aquí haya un diputado más o un diputado menos. Hace veinticinco años que este asunto pasó a la historia. Que se ponga a los diputados que se quiera. Este no es tema para la ciudadanía. Por eso, me preocupa. Pasan las horas, pasan los minutos, y seguramente estamos en el top: todos hablando de los nuevos diputados, de los antiguos diputados o de más diputados.

Cuando tuvimos a los senadores designados, ¿qué pasó? ¿Cuánto se gastó? ¡Diez mil millones de pesos -que me desmientan en la UDI- gastamos en gente designada a dedo! Pero en ese caso nadie alegaba, nadie protestaba. Ahí daban la cara. Ahora dicen: “Vamos a la calle”. ¡Qué vamos a la calle! Dejemos de seguir “cocinando”.

Tenemos que hacer reformas de verdad en los próximos tres años. No perdamos el tiempo con esto. ¡Usemos la mayoría, con el respeto adecuado! La mayoría se usa. ¿Acaso no la usaron ellos durante treinta, cuarenta o cincuenta años? La mayoría se usa; la gente lo decide así.

Estoy aquí representando a mi distrito con más de 40 por ciento de los votos. Y en mi distrito, la Presidenta sacó 72 por ciento de la votación.

¿Qué me dijo la gente? “ Diputado Lorenzini, respalde el programa presidencial de la Presidenta Bachelet.”. Así lo hicimos: aprobamos una reforma tributaria de verdad, no la “reformita” que vamos a recibir del Senado. También me dijeron: “Termine con el binominal”, “haga una reforma de verdad a la salud”, “atrévase con las isapres”, “atrévase con las AFP”, “pónganle lineamientos a la banca”, “cóbrenle los impuestos”. “Hay 280.000 millones de dólares que están volando por el mundo, y no se atreven a cobrarles nada”.

Por favor, señor Presidente ; por favor, señor ministro : entiendan que la gente nos dio un respaldo, y ese respaldo se expresa aquí, votando, pero preocupándonos de los problemas de la ciudadanía, no de estas tonteras.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Christian Urízar.

El señor URÍZAR .-

Señor Presidente , hoy estamos frente a un momento histórico, porque derrotar el sistema binominal fue parte del compromiso adquirido durante la campaña. Eso es lo que la ciudadanía nos exige y espera.

No obstante, quiero manifestar que en la Nueva Mayoría pudimos haber hecho mucho más, pudimos haber acordado más, pudimos haber conversado más.

No puedo dejar de plantear algunas cosas que estimo que pudieron haberse hecho de otra forma.

¿Por qué negarnos a la posibilidad de los subpactos? ¿A qué le tememos? ¿Qué nos complica?

Hemos elegido a miles de concejales en todas las regiones de Chile con subpactos, trabajando en conjunto como Nueva Mayoría, antiguamente como Concertación.

Los socialistas estamos por más libertades; estamos por no poner cortapisas.

¿Por qué nos pusimos esta complicación? ¿Por qué no pudimos haber avanzado?

El mensaje original disponía que el número de candidatos fuera el doble del de los cupos a elegir. Sin embargo, terminamos acordando que dicho número será solo de un candidato más que la cantidad de cupos a elegir. Nuevamente se establecieron restricciones. Nos faltó conversar, nos faltó debatir, nos faltó discutir.

Los megadistritos nos van a alejar del contacto con la ciudadanía; ese contacto que tanto hemos beneficiado, que tanto hemos resaltado. En consecuencia, como dijo mi colega Fidel Espinoza, cobrará mucho más valor el poder del dinero.

Quiero dar un ejemplo: en la Tercera Región de Atacama se elegirán cinco diputados y dos senadores, en exactamente la misma extensión territorial. Se puede dar la paradoja de que un diputado obtenga más votos que un senador. Alguien me podrá decir que esto ya ocurría. Por eso digo: pudimos haber trabajado más, pudimos haber hecho más; en la Nueva Mayoría pudimos haber logrado una mejor reforma al binominal.

Pero aquí estamos para cumplir los compromisos.

A los socialistas, este tema nos ha tenido con mucho debate, y hemos tenido muchas complicaciones. Pero lo más importante es que los ciudadanos nos han dicho claramente: “El binominal no da para más. Ustedes no pueden seguir siendo elegidos con ese sistema.”. Fue lo que escuchamos en cada uno de los lugares donde estuvimos haciendo campaña con la Presidenta Bachelet .

Por eso, vamos a concurrir con nuestros votos favorables a cada uno de los artículos del proyecto, artículos que esperamos que, con el nuevo sistema que se establecería y con la presencia de más parlamentarios, cada vez se vayan reformando más. Esta va a ser la primera de, quizá, muchas reformas al sistema de elección. Cada reforma dará como resultado un sistema mejor que el actual binominal, que ha defendido la Derecha por veinticinco años; el binominal en el cual se han escudado los diputados de la Derecha.

El presidente de la UDI , con tranquilidad, dijo: “Nosotros hemos ganado.”. Como sé harto de matemáticas, le quiero decir que en la última elección me parece que perdieron la Presidencia de la República y muchos diputados y senadores. La Nueva Mayoría los dobló en un montón de distritos y de circunscripciones.

El sistema electoral que aprobaremos será representativo y permitirá elegir a más ciudadanos que quieran integrarse al Congreso Nacional, a más gente que está por la lógica más democrática. No se sigan escudando en un sistema perverso que ha hecho que una minoría instalada pese lo mismo que la mayoría.

Por lo tanto, anuncio que vamos a votar favorablemente el proyecto, con sus complicaciones y déficits, porque entendemos que termina, de una vez por todas, con el sistema binominal dictatorial que quedó instalado a causa de la dictadura de Pinochet. Vamos a cumplir con cada una de las propuestas de campaña de la Presidenta Bachelet. Eso digo y de esa forma lo haremos.

He dicho.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado René Manuel García.

El señor GARCÍA (don René Manuel).-

Señor Presidente , he escuchado con mucha atención a todos los colegas. Me alegra mucho que se hayan democratizado en este último tiempo.

La verdad es que me preocupa cada día más la futura composición de la Cámara, porque ninguno de los diputados aquí presentes, que tanto defienden que exista representación popular, representa proporcionalmente a los electores del país. Lo digo porque por primera vez en una elección votó solo el 40 por ciento de los chilenos. O sea, los que no votaron forman parte del partido más grande de Chile, que representa el 60 por ciento del padrón electoral, pero que tampoco tiene representación parlamentaria.

En consecuencia, en vez de echarnos tantas tallas y de darnos tantos puyazos, deberíamos buscar la forma de encantar a la gente para que vote, con el objeto de que el sistema sea realmente representativo. Para que un Parlamento y una Presidenta tengan una verdadera representación popular, deben ser elegidos con una votación superior al 70 u 80 por ciento de las personas que conforman el padrón electoral.

Podemos estar toda la noche discutiendo sobre esta materia; pero, ¿qué le interesa a la gente? ¿Más parlamentarios o mejores pensiones o mejores casas? Vemos que la gente está devolviendo los subsidios de 10 millones o de 12 millones de pesos, porque las casas valen mucho más. No hemos sido capaces de abordar con la seriedad que corresponde las verdaderas preocupaciones de la gente.

El problema que tenemos es que la Cámara de Diputados no va a mejorar su prestigio si los propios diputados se dedican a desacreditarla; no hay peor pájaro que el que empuerca su propio nido. En consecuencia, debemos tener la fuerza necesaria para encantar a las personas.

¿Por qué no planteamos otra propuesta, ya que estamos democratizando más el país? ¿Por qué no suprimimos el Senado y establecemos una sola Cámara compuesta por 205 parlamentarios? Sería mucho mejor y nos ahorraríamos problemas. Yo estoy disponible. Veamos si se aprueba ese proyecto en el Senado.

Algunos diputados hablan de lo mucho que quieren más democracia, pero parece que es más interesante ser senador que diputado . O sea, la aspiración máxima de los señores que se declaran antipolíticos es ser senadores, y la aspiración máxima que tiene cualquier persona es llegar a la Cámara de Diputados, en circunstancias de que ambas son las instituciones más desprestigiadas de Chile. El 90 por ciento de los chilenos quiere ser diputado o senador de la república. ¡Miren qué curioso! Entre más desprestigio tienen estas instituciones, más gente quiere llegar a ellas.

Señor Presidente, tenemos una tarea importantísima: encantar a la gente para que concurra a las urnas a votar, para que podamos decir que realmente somos importantes porque sacamos un alto porcentaje de votación.

Nadie cuestiona que la Presidenta Bachelet fue elegida legítimamente; habría que ser de una gran estrechez de mente para cuestionar su elección. Pero solo obtuvo el 18 por ciento de los votos. Como votó tan poca gente, sacó el 60 por ciento de los votos. ¿No es preocupante eso? ¿Tampoco es preocupante que quienes obtuvimos el 25, 30 o 40 por ciento de los votos para estar aquí, en realidad fuimos elegidos por el 12 o el 15 por ciento del total de las personas que pueden votar en nuestros distritos? ¿No les dice algo eso? ¿O son más interesantes los veinticinco años en que hemos trabajado y seguido funcionando igual?

Por lo tanto, cuando estamos en esta encrucijada nos damos cuenta de que hay temas mucho más importantes por discutir.

Mi partido, Renovación Nacional, suscribió un compromiso respecto del proyecto, y la palabra es para honrarla. En ese sentido, la palabra del Presidente de mi partido, Cristián Monckeberg , y la de nosotros vale más que un documento firmado.

En consecuencia, votaré favorablemente la idea de legislar, porque tenemos ese compromiso; pero deseo que nos dejemos de dar puyazos y que nos preocupemos todos de mejorar las pensiones y las jubilaciones, así como de entregar todo lo que la gente necesita.

Ningún profesor me ha preguntado por la modificación del binominal, pero todos me dicen: “¡Cómo voy a dejar de trabajar! Ahora gano 800.000 pesos, pero si me voy para la casa jubilado, ¡voy a ganar 200.000 pesos! Además, cuando esté en los últimos años de mi vida y se me acabe la pensión, voy a recibir 75.000 pesos.”. Esas son las preocupaciones de las personas. Sus ingresos apenas les alcanzan para pagar las cuentas de luz y de agua.

Por lo tanto, señor ministro , por intermedio del señor Presidente , tenemos una tarea pendiente: mientras no arreglemos los problemas sociales, no habrá paz ni estabilidad en el país. Vea cómo estamos en la Región de La Araucanía, uno de cuyos distritos represento, donde tenemos conflictos en forma permanente. Por primera vez no hay ni una sola voz disidente en La Araucanía, porque todos estamos tratando de hacer lo mejor para sacar adelante a nuestra región.

¿Es tan difícil hacer eso aquí y respetarnos democráticamente? ¿Acaso creen que la UDI va a convencer al Partido Comunista para que vote por un candidato de la UDI, o que el Partido Comunista convencerá a la UDI para que vote por uno comunista? No. Voten por el que les dé la gana, pero tengan como norte el bien común de nuestra patria.

Por eso, preocupémonos de los verdaderos problemas de la gente, de lo que realmente interesa a las personas. Esas preocupaciones no tienen color político.

¡No se juega con la gente en nombre de la democracia!

He dicho.

-Aplausos.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra la diputada señora Denise Pascal.

La señora PASCAL (doña Denise).-

Señor Presidente , junto con saludar a los ministros y ministras presentes, quiero nombrar a mis compañeras que no alcanzarán a intervenir en relación con el proyecto: Loreto Carvajal , Cristina Girardi , Maya Fernández , Jenny Álvarez , Daniella Cicardini , Yasna Provoste y Marcela Hernando . Con estas mujeres hemos luchado para recuperar la democracia.

Por intermedio del señor Presidente , quiero decir al diputado Silva , quien llamó a que salgamos a la calle, que durante dieciocho años estuvimos en la calle para recuperar la democracia que permite que él esté sentado allí. Perdimos a mucha gente nuestra en esa lucha. Incluso, todavía no sabemos dónde están 1.198 compañeros y compañeras nuestros. Queremos saber dónde los dejaron.

Esa es la realidad que tuvimos durante dieciocho años, período en el cual existió un parlamento de cuatro generales que dictaron decretos sin pensar en que había un pueblo detrás, al cual la Derecha dice hoy representar.

Estamos orgullosas y contentas por cumplir una promesa que nuestra Presidenta Michelle Bachelet suscribió durante su campaña, que la llevó a ganar con una gran mayoría. Nosotros seguiremos luchando para cumplir las promesas que hicimos en esa época.

Llevamos veinticuatro años tratando de cambiar el sistema binominal. Hoy estamos logrando esa meta.

¿Por qué lo hacemos? Cuando Chile tenía 9 millones de habitantes, la Cámara de Diputados estaba constituida por 150 parlamentarios y parlamentarias. En la actualidad, somos 16 millones de chilenos -si le podemos creer al censo que se hizo durante el gobierno anterior-, por lo que no costará nada tener 155 diputados. De esa forma se representará realmente el voto equitativo de todos los chilenos.

Es triste ver a nuestros compañeros o colegas de enfrente escudarse en una mezquindad, en pensar que pueden ser afectados o que podrían no ser reelegidos.

Un Parlamento es democrático cuando el voto de todos vale lo mismo, no cuando se establece un sistema binominal o uninominal que permitiría mantenernos en nuestros cargos. Eso no sirve en la vida. Queremos trabajar mucho para ejercer nuestros cargos de pleno derecho y para que nuestro pueblo se sienta realmente representado por nosotros. De esa manera podremos convocar a la gente a votar, no con el sistema que tenemos hoy.

Las mujeres estamos muy orgullosas y agradecidas de que la Presidenta Michelle Bachelet haya incluido en el proyecto una disposición con la que cumple el compromiso que suscribió en su campaña, cual es la que establece la paridad de género de 60 y 40 por ciento respectivamente. De esa forma se romperá con la situación actual de que las mujeres ocupemos solo el 15,8 por ciento de los escaños en ambas cámaras, lo que es nada, en circunstancias de que el 55 por ciento de los habitantes del país son mujeres. Ese porcentaje debe estar reflejado en el Parlamento.

Los diputados de enfrente hablan de las necesidades sociales que tienen nuestras comunidades, de los problemas de vivienda y de otros temas similares. Ojalá, durante los dieciocho años en que estuvieron en el poder se hubiesen preocupado de los hospitales que nos heredaron, de la falta de viviendas, de las pavimentaciones que no se realizaban en las poblaciones y de otras necesidades que no se abordaron. Durante estos veinticuatro años hemos avanzado; pero, desgraciadamente, no hemos podido romper el blindaje impuesto por la dictadura. Ahora lo haremos y seguiremos trabajando como Nueva Mayoría para lograr romper todas las herencias que nos dejaron.

Una nueva Constitución cerrará el camino de dichos blindajes y nos dejará abiertas las puertas para reconstruir el país en la democracia que todos queremos. Más vinculación con la gente, más representatividad, más diversidad, más estabilidad democrática es lo que nos lleva a cambiar el sistema binominal y, el día de mañana, la Constitución Política. Entre todos queremos llegar a eso.

Ojalá la UDI reaccione y aborde lo que propone el proyecto sin la mezquindad de querer conservar el sistema que le permite elegir el número de parlamentarios que hoy tiene. Desgraciadamente, eso se ha hecho a costa de otro partido, el cual se encuentra a su lado: Renovación Nacional, el que se ha ido jibarizando día a día, porque la UDI, con la mezquindad que tiene, ha logrado comérselo.

Esa no es la democracia que queremos. Deseamos una democracia representativa, en la que todos tengamos el mismo derecho, no un “parlamento” como el que rigió durante dieciocho años, entre 1973 y los primeros meses de 1990, en el que cuatro generales hacían las leyes. Seguramente para algunos ese número de personas era bueno; pero no sabemos cuánto gastaron, porque nunca hemos podido saber en qué lo hicieron.

Con alegría y con fuerza, con la voluntad de terminar con este sistema, de acabar con una deuda histórica, clara y precisa, así como con el deseo de que se establezca la democracia que necesitamos, las mujeres que aquí estamos votaremos a favor el proyecto, porque queremos que en el país exista paridad.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Joaquín Tuma.

El señor TUMA.-

Señor Presidente, quiero saludar a las ministras y a los ministros que nos acompañan.

Me siento muy contento de estar en la Sala de la Corporación en un momento histórico, en el que procederemos a cambiar el modelo de elección popular de los parlamentarios, lo que abrirá la puerta para tener otro Chile.

Agradezco a la Presidenta Bachelet por cumplir con las promesas que hizo durante la campaña presidencial, en la que trabajamos con intensidad para que fuera elegida. En ese sentido, el proyecto en discusión es parte de la transformación que ella está haciendo en todo Chile con su programa.

Sin embargo, quiero pedir al ministro del Interior y Seguridad Pública que ratifique su compromiso con los que no están incluidos en el proyecto: los pueblos originarios. Lo señalo porque represento a un distrito que forma parte de una región en la que durante 130 años ha estado pendiente la participación de los pueblos originarios; la sociedad mayor ha hecho todo sin su presencia. Hoy llegó el momento, a partir de la consulta indígena que estamos implementando, de sacar adelante una iniciativa que hace dos años presenté a tramitación legislativa, la que se encuentra en la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, cuya idea matriz es el establecimiento de un cupo supernumerario para los pueblos originarios, para que entre sus integrantes puedan ser elegidos no solo diputados y senadores, sino también consejeros regionales, así como para que tengan un cupo asegurado en muchas comunas, en las que, a pesar de que hay un número importante de pueblos originarios, no son capaces de elegir concejales, debido al sistema electoral que nos rige.

Por eso, quiero señalar al ministro del Interior y Seguridad Pública que votaré a favor, en forma entusiasta, la iniciativa en debate, pero solicito que ratifique el compromiso del Gobierno de llevar adelante las transformaciones que se requieren en favor de los pueblos originarios. Más de 1.200.000 personas son parte de ese mundo, pero no participan de ninguna de las instituciones en las que se definen las políticas públicas, situación que, como es natural, las afecta.

Por último, quiero recordar que hace cinco años ratificamos el Convenio 169 de la OIT, el cual tiene carácter vinculante, de manera que los derechos de los pueblos originarios se pueden garantizar a través de la aplicación de ese instrumento. Por lo tanto, se requiere el compromiso del ministro del Interior y Seguridad Pública , como representante del Ejecutivo , en tal sentido.

He dicho.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Gaspar Rivas.

El señor RIVAS.-

Señor Presidente , agradezco a la diputada señora Alejandra Sepúlveda por haberme cedido el tiempo destinado a su intervención.

Esta es una Cámara política, de manera que en ella todos podemos hablar y opinar lo que sentimos por convicción.

Hoy, quiero solicitar que levanten su mano, al igual que yo, las personas que en esta Sala desean que se acabe el sistema binominal. Asimismo, quiero solicitar que levanten su mano quienes quieren que se acabe ese sistema, pero sin letra chica.

(Varias señoras diputadas y varios señores diputados levantan sus manos)

Sé que existe el mejor espíritu en todos los sectores, pero a pesar de que hace algunos meses difundí un video en el que expliqué, prácticamente con palitos -me faltó hacerlo con manzanitas-, cuáles serían las distorsiones que el proyecto del Gobierno tendría respecto de la sustitución del sistema electoral binominal, parece que nadie lo entendió.

Cuando uno sale a la calle y pregunta a la gente qué es el binominal, esta responde, en forma invariable, que no sabe qué es, pero que lo único que tiene claro es que es injusto que salgan elegidos parlamentarios el primero y el tercero más votados.

Hace un año presenté un proyecto de ley, el que se encuentra durmiendo el sueño de los justos, cuyo objeto es que tengamos un sistema mayoritario, en el cual, de manera democrática, gane el candidato que obtenga más votos.

No estoy de acuerdo con que se mantenga el sistema binominal. Por eso no me gusta que en el proyecto en debate se mantenga la misma distorsión con la cifra repartidora.

Al respecto, quiero hacer una diferencia, porque a lo mejor muchos dirán que el diputado Rivas votará como lo hará la UDI. ¡No! ¡Por favor! No me metan en el mismo saco, porque no tengo nada que ver con la Unión Demócrata Independiente. He estado aquí durante cuatro años y he visto cómo han torpedeado todos los intentos que se han hecho por terminar con el sistema binominal, porque saben que el día en que se termine, se van a las pailas. ¡A mí no me vienen a contar cuentos!

Desgraciadamente, aquí, en forma transversal, ha primado lo que tengo en mis manos en estos momentos: la calculadora. La UDI nunca ha querido cambiar el sistema binominal. Cuando están acorralados, dicen que quieren cambiarlo. Lo reitero: ¡A mí no me vienen con esos cuentos!

Por otra parte, Renovación Nacional, mi expartido, dice: “No nos conviene que en algunas circunscripciones senatoriales se elija un número impar de senadores”. Entonces, algunos sacan la calculadora y plantean que se debe elegir un número par.

Por otro lado, la Democracia Cristiana señala que no le gustan los subpactos y pide al Gobierno que presente una indicación para eliminar la posibilidad de subpactar, mientras que el Partido Socialista dice: “Quiero subpactos”.

Por lo tanto, todos están con la calculadora en la mano. Se trata de un proceder del que en verdad no puedo hacerme cómplice, porque no quiero formar parte de un Congreso que se transforme en un sastre que haga trajes a la medida de todos los partidos políticos, puesto que todos han pasado a tomarse las medidas respecto de la cantidad de diputados y senadores que les conviene que haya. Prácticamente todos han procedido igual. Un diputado señaló que se debía devolver el poder a la ciudadanía, para que la gente fuera la que decidiera y eligiera, de modo que los partidos políticos no tuvieran capturada esa facultad mediante cifras repartidoras, chorreos y doblajes.

Soy partidario de que sea elegido parlamentario el que más votos saque, sin necesidad de más distritos, de más gasto y de tener que pasar veinte años torpedeando el cambio, porque cuando están acorralados muchos señalan que quieren cambiar el sistema electoral, pero eso no es efectivo. Se debe actuar con la verdad, no con la calculadora, y devolver a los ciudadanos el poder del voto y de decisión. Eso es lo que quiero.

En consecuencia, no puedo ser cómplice de lo que establece la iniciativa sometida a nuestra consideración, porque aunque su espíritu es correcto, no soy un modista, sino un diputado de la república, de manera que no puedo estar de acuerdo con decisiones que sé que son acomodos para uno u otro sector.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra la diputada señora Yasna Provoste.

La señora PROVOSTE (doña Yasna).-

Señor Presidente , hago uso de la palabra para sumarme y manifestar mi apoyo al fin del sistema binominal, el que se encuentra establecido en una de las leyes verdaderamente de amarre de la dictadura, de tan triste memoria en nuestra historia política reciente. De hecho, hoy recordamos a quienes perdieron la vida en la defensa de la democracia.

La Nueva Mayoría ha manifestado su voluntad de cambiar el rostro a Chile, mediante el cambio en el sistema electoral, lo cual producirá, junto con otras leyes impulsadas en este nuevo ciclo político, un rostro nuevo para nuestra sociedad, que, como todos tenemos claro, necesita de un fortalecimiento democrático a todo nivel. La educación, la salud y todos los derechos sociales deben reconfigurarse en el sentido de la justicia, la no discriminación y la igualdad de trato, sin importar la cuna en la cual se nace. Junto con esos derechos sociales, un cambio en las reglas del juego político también producirá que la sociedad en su conjunto pueda identificarse mejor con sus representantes.

Esta es la primera vez en la historia del Congreso Nacional que vamos a modificar un sistema electoral, lo que hará para nosotros mismos mucho más complejo el proceso de reelección; pero entendemos que el propósito es noble y justo. Por eso concurrimos con decisión a apoyar este cambio.

Con toda convicción vamos a apoyar las iniciativas de este nuevo ciclo político, impulsado por la Nueva Mayoría, porque el rostro de Chile también debe cambiar en las reglas institucionales que nos damos para fortalecer la democracia. Por eso, hoy votaremos un tema tan relevante como la equidad de género, haciéndonos cargo de la subrepresentación de mujeres en el Congreso.

Ante los ministros que nos acompañan, queremos reconocer y valorar el compromiso y la coherencia expresados por nuestra Presidenta Michelle Bachelet , al haber incorporado las cuotas de género en este proyecto de ley de cambio del sistema electoral, en virtud de las cuales se asegura que los partidos políticos elaboren listas equilibradas de candidatos en términos del sexo de los postulantes, lo que impedirá que predominen solo hombres, como ha ocurrido históricamente en el caso chileno. La subrepresentación de las mujeres en los sistemas de representación política ha sido un tema de largo debate y se ha constituido en una demanda importante del movimiento de mujeres alrededor del mundo. La constatación de que en cargos de elección popular y en puestos de decisión, las mujeres constituyen un bajo porcentaje en la mayoría de los países, impulsó la búsqueda de estrategias y mecanismos, como el que hoy nuestro país está discutiendo.

Chile es un país muy desigual y esa desigualdad tiene mayoritariamente rostro de mujer. Las mujeres enfrentamos mayores dificultades en el acceso al trabajo. Dicha desigualdad también está instalada en el Congreso Nacional, como lo han señalado todos nuestros colegas, al punto de que no más del 14 por ciento de los escaños son ocupados por mujeres.

Las mujeres hemos recorrido un largo camino en nuestra historia política republicana, desde el derecho a voto hasta la posibilidad de ser verdaderamente consideradas como candidatas. Sin embargo, la indicación introducida para excluir candidaturas en distritos y circunscripciones donde se hayan celebrado primarias abre un espacio para que la ley contenga una trampa en su propia redacción, que la transforme en letra muerta.

En términos simbólicos, esto es negativo, en primer lugar, porque refuerza la idea de que unos pueden llegar a ser candidatos porque ganaron su nominación a través de un proceso democrático competitivo, mientras que otros podrían llegar a serlo sin competir por cuotas. Ello genera un potencial cuestionamiento a la legitimidad de origen de las candidatas.

En segundo lugar, es negativo, porque entrega un mecanismo de escape para que aquellos partidos que declaren no tener candidatas o no quieran esforzarse en buscar candidatas competitivas en algún determinado distrito, puedan saltarse las cuotas.

Por eso, quiero agradecer el apoyo y la voluntad del Gobierno y de las mujeres que, transversalmente, desde la Nueva Mayoría a la Alianza, hemos denunciado esta situación. También quiero agradecer a los compañeros que han apoyado esta causa y a las organizaciones de mujeres que también nos han acompañado.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Juan Antonio Coloma.

El señor COLOMA.-

Señor Presidente , hablo como un orgulloso miembro del partido más votado de Chile: la UDI. Aunque a algunos les duela, es el partido que tiene más senadores, más diputados, más alcaldes, más concejales y más consejeros regionales.

Me referiré a este proyecto que considero mentiroso y tramposo, y voy a explicar por qué.

Es un proyecto mentiroso, porque se argumenta que se termina con un empate que no existe y que nunca ha existido. En las siete elecciones, la más favorecida ha sido la Concertación o Nueva Mayoría.

Es un proyecto mentiroso, porque se dice que pretende mejorar la proporcionalidad del voto. Con el proyecto que presentó la UDI, con 120 diputados, teníamos mejor proporcionalidad.

Es un proyecto mentiroso, porque se dice que tiene costo cero. Eso es falso y violenta el sentido común. Si es verdad, les pedimos que lo expliquen y empecemos a hacer ahora los ahorros. Le podemos ahorrar al país 46.000 millones de pesos si lo que se dice es verdad.

Es un proyecto mentiroso, porque el centralismo va a ser brutal, no solo en Santiago, sino en las capitales regionales. Vamos a olvidarnos de las zonas rurales, vamos a dejar botado el campo y no vamos a permitir que un parlamentario de una zona extrema venga a pelear de igual forma presupuestos, como lo puede hacer uno que representa, por ejemplo, a Puente Alto.

Es un proyecto mentiroso, porque, en las más de cincuenta intervenciones que he escuchado, todavía nadie ha defendido el aumento de los diputados. Se escudan en el fin del binominal.

Es un proyecto tramposo, porque debilita los partidos políticos y nada se dice de ello. De alguna forma, esto refleja la votación del diputado Andrade en la Comisión de Constitución, en la que señaló: “Ojalá no me estén viendo los miembros del Partido Socialista”. Se rebajan los umbrales de la constitución de un partido político para pagar un favor político. Esa fue la negociación de los votos.

Es un proyecto tramposo, porque tendremos los diputados del 1 por ciento, los arrastrados, y seguiremos viendo cómo la gente se aleja de la política.

Es un proyecto tramposo, porque aleja a la gente de la política. Es un proyecto con distritos gigantes, donde lo importante va a ser tener televisión y no un contacto con la gente.

Es un proyecto tramposo, porque nadie explica lo que se ha establecido respecto del voto por lista, que es una forma de seguir alejando a la gente de la política. Se va a poder votar por los partidos políticos, pero la gente no va a saber quiénes son sus parlamentarios. Simplemente, nos vamos a seguir alejando.

Es un proyecto tramposo, porque se establece que habrá más candidatos que cupos a elegir, pero se omite señalar el verdadero motivo, el porqué. Eso ocurre por una razón simple: porque evita peleas dentro de la Nueva Mayoría. Se permite a un partido tener un candidato y, de esa forma, no tener que llegar a negociaciones.

Hace pocos días, a través de la red social Twitter, vimos cómo un diputado del Partido Socialista escribió lo siguiente: “Si no voto a favor de la reforma tributaria, me expongo a una expulsión del Partido Socialista. Así lo determina la resolución del pleno. No lo acepto, no estoy en una secta.”.

Lamentablemente, hace pocos minutos el mismo parlamentario habló y, al parecer, va a votar a favor. No fue capaz de aguantar la presión que ejercieron el Gobierno, el partido y la Presidenta sobre él.

Para finalizar, cuando uno analiza el motivo por el cual se produce el desprestigio de la política, piensa en que mientras acabamos de tener un grave temblor en el norte, paralizaciones en el Metro, el robo más grande de los últimos tiempos, tenemos a los ministros políticos y al Vicepresidente de la República tramitando un proyecto de ley para aumentar el número de diputados, cuyo costo ascenderá a 13.000 millones de pesos al año, pero no mejorará en nada la política en nuestro país.

He dicho.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Germán Becker.

El señor BECKER.-

Señor Presidente , sin duda, estamos ante un proyecto muy importante, al igual como ocurrió el año pasado, cuando permitimos que se eligieran por votación popular los consejeros regionales, lo que para nosotros, los regionalistas, era un proyecto que esperábamos desde hacía mucho tiempo.

En verdad, no iba a hablar sobre el sistema binominal; sin embargo, después de escuchar a colegas argumentar, en mi opinión, de manera falaz, no puedo menos que referirme a esas afirmaciones.

La primera falsedad, que se sigue repitiendo como real cantinela, es que un tercio vale lo mismo que dos tercios. Pero lo cierto es que el sistema binominal -esto lo saben todos, incluido el diputado Auth , que es quien más conoce aquí de este tema- ha sido extraordinariamente proporcional en los grandes números. Incluso, en la última elección, la Nueva Mayo-ría, con 48 por ciento de los votos, obtuvo el 56 por ciento de los escaños, es decir, se vio favorecida con 8 por ciento. Por su parte, la Alianza, con 36 por ciento de los votos, logró el 40 por ciento de los escaños, la mitad del porcentaje que favoreció a la Nueva Mayoría. La cuestión es que se benefician en desmedro de las minorías. Eso sí es efectivo.

La segunda falsedad es que se señala que no se volverán a producir casos como el de Frank Sauerbaum o el de Marisela Santibáñez. Eso es falso, pues en un sistema proporcional la probabilidad de que se produzcan casos como esos es mayor.

Aquí tengo los datos de la elección de senadores en 1965, de Biobío, Malleco y Cautín . Se elegían cinco senadores y eran 18 candidatos. Pues bien, don José García González , con el 0.9 por ciento de los votos -menos del 1 por ciento- fue elegido en desmedro de la tercera mayoría, don Miguel Huerta Muñoz , quien obtuvo una votación que superaba prácticamente en doce veces la alcanzada por don José García . Por consiguiente, mientras más proporcional sea el sistema, lo más probable es que se produzcan más casos como el de Marisela Santibáñez o el de Frank Sauerbaum.

La tercera falsedad es que se dice que va a haber más recambio de diputados. Eso es falso, puesto que los sistemas proporcionales de todo el mundo presentan prácticamente la misma tasa de recambio que tiene la Cámara de Diputados de Chile, que equivale al 33 por ciento: se recambian, aproximadamente, cuarenta diputados en cada elección. Es lo que se da en todas partes y con sistemas mucho más proporcionales.

Señor Presidente , no obstante los planteamientos que he realizado, anuncio que vamos a votar a favor la iniciativa en general, por cuanto queremos terminar con el sistema binominal, pero no arguyendo con las falsedades que se han deslizado en esta Sala, no con esos argumentos, sino con argumentos reales, porque creemos que no le hace bien al país seguir excluyendo a los grupos minoritarios; es bueno incluirlos en el sistema democrático, y el binominal impide que los electores decidan entre una variedad de candidatos. Aquí, las cúpulas eligen a los candidatos.

Asimismo, queremos sustituir el sistema binominal para avanzar hacia una mayor proporcionalidad en el voto, especialmente en las elecciones de diputados. Por eso estuvimos cerca de dos meses en negociaciones con el gobierno para pasar a un sistema proporcional que diera garantías a todos. Lamentamos que el Ejecutivo haya desechado continuar las conversaciones con Renovación Nacional y privilegiara a grupos minoritarios. Creemos que es importante que acuerdos de este tipo se lleven a cabo con grupos importantes de diputados.

Nuestra propuesta era avanzar en proporcionalidad, pero con un incremento reducido de diputados. Así, en nuestra última propuesta, en la que sugeríamos 144 diputados, la proporcionalidad era mucho mayor que aquella que plantea la iniciativa que vamos a votar; el voto era mucho más proporcional.

Además, este proyecto adolece de varios problemas.

¿Cómo explica el señor ministro -se lo pregunto por intermedio del señor Presidente - que en el distrito 4, de Caldera y Copiapó , se elija a cinco diputados, en tanto que en el 22, de La Araucanía -una de las regiones más pobres del país-, donde están las comunas de Angol, Victoria y Lautaro , se elija cuatro diputados, pese a contar con 50.000 electores más que en el distrito 4? ¿Cómo se explican esas alteraciones en la proporcionalidad?

¿Cómo explicará el diputado Mario Venegas a sus electores que su voto vale la mitad que el de la gente del norte?

Como dije, anuncio que vamos a votar a favor el proyecto de ley en general, así como respecto de algunos artículos, pero en lo relativo a la distribución de escaños y al redistritaje, votaremos en contra.

Por último,, esperamos que el Senado haga bien su trabajo y mejore la iniciativa.

He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Tiene la palabra el ministro del Interior y Seguridad Pública , señor Rodrigo Peñailillo.

El señor PEÑAILILLO ( ministro del Interior y Seguridad Pública ).-

Señor Presidente , en primer lugar, en nombre del gobierno de la Presidenta de la República , señora Michelle Bachelet, quiero agradecer muy sinceramente a esta honorable Cámara el debate que ha habido en torno a esta iniciativa. Aquí ha existido un trabajo serio, comprometido y responsable en las comisione que analizaron la iniciativa, así como en esta Sala, para sacar adelante una reforma que ha esperado más de veinticuatro años.

Estamos dando un paso clave para, de una vez por todas, contar con un sistema electoral que mejore la calidad y representatividad de nuestra democracia, y permita que este Parlamento sea expresión fidedigna del sentir de los ciudadanos y de las distintas sensibilidades presentes en nuestra sociedad.

Cuando presentamos este proyecto, señalamos que teníamos la convicción de que este cambio es posible, que el país estaba maduro para avanzar en una mejor democracia y que ya no era posible ni justificable seguir con un régimen electoral que ha dañado la confianza de los chilenos y chilenas en la política y sus representantes.

El sistema binominal constituye uno de los últimos enclaves institucionales dejados por la dictadura. En muchas ocasiones se dijo que él permitía dar estabilidad política al país, pero al favorecer solo a dos grandes bloques políticos, es claro para todos que ese sistema ya no es fuente de estabilidad, sino de divergencia y de exclusión.

Se ha dicho que a la gente no le interesa la política ni el cambio del sistema electoral. Permítanme señalar con toda claridad que esa argumentación no puede estar más alejada de la realidad.

Nos quejamos de la distancia y de la desconfianza de la ciudadanía respecto de la política. Al respecto, quienes nos dedicamos a la actividad política somos los primeros obligados a represtigiar nuestro trabajo y las instituciones.

Lo que la gente no quiere es una mala política; no quiere que para conseguir un voto se asuman compromisos y después no se cumplan. La ciudadanía no quiere continuar con un sistema de elecciones que excluye a importantes sectores de la sociedad. Así lo han demostrado consistentemente distintos estudios de opinión pública realizados en los últimos años. El sistema binominal ha tenido efectos perversos: anula la competencia electoral verdadera, concentra el poder de decisión en las cúpulas partidarias, en vez de abrir la democracia a nuevos actores; ha puesto más trabas que facilidades para la llegada de los independientes y nuevas fuerzas; ha limitado la participación política de las mujeres, y se ha transformado en una camisa de fuerza para los propios partidos políticos. En definitiva, ha contribuido a acrecentar la desconfianza ciudadana en la política y sus instituciones.

Claramente, Chile es hoy un país más diverso y pluralista que hace tres décadas, y el Congreso Nacional debe ser reflejo de esta diversidad.

Como gobierno, creemos profundamente en la democracia, en la fortaleza de sus instituciones, en el rol fundamental de los partidos políticos y del Congreso Nacional para canalizar las demandas y aspiraciones ciudadanas, y transformarlas en buenas leyes. Ese es el sentido más profundo de la reforma que será aprobada hoy en esta Cámara.

Como país podemos exhibir con orgullo altos estándares en una serie de materias en el concierto internacional: somos miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, somos parte de la OCDE, tenemos un prestigio bien ganado en la región y estamos avanzando en una agenda de reformas sociales de gran relevancia.

Ha llegado el momento de que nuestro sistema de representatividad política se ponga a la altura de las democracias del mundo.

El restablecimiento de un sistema proporcional en Chile va de la mano con nuestra tradición democrática; es el sistema que mejor integra los objetivos de representación y gobernabilidad que son propios de la democracia.

Hoy hemos dado un paso fundamental con la discusión realizada en esta Sala, a fin de tener una mejor democracia, más inclusiva y más competitiva, en la cual estén representadas las corrientes más significativas de la sociedad, porque ello permitirá terminar, en parte, con la desigualdad de género que persiste en nuestro sistema político.

Valoro el aporte y esfuerzo realizados durante la tramitación de este proyecto y la lealtad programática de los partidos y de los parlamentarios de la Nueva Mayoría. De esta forma se cumple la palabra empeñada durante la campaña.

Esta noche tan especial quiero recordar a algunos actores relevantes, entre otros, a don Edgardo Boeninger, al ex-Presidente Ricardo Lagos, a Gladys Marín, …

(Aplausos)

… y a tantos otros que durante casi 25 años lucharon por el término de este sistema. Asimismo, valoro la decisión política de Amplitud, movimiento de derecha liberal democrática moderna, y su compromiso de terminar con el sistema binominal, y el aporte y la decisión de los diputados independientes, que son muy importantes para fortalecer esta propuesta de un sistema proporcional inclusivo.

En el mismo sentido, debo destacar el protocolo de acuerdo que suscribimos con los parlamentarios de la Nueva Mayoría, en particular de los partidos Socialista, PPD, Demócrata Cristiano, Radical Social Demócrata, Comunista, de los movimientos MAS e Izquierda Ciudadana y de los diputados independientes. Dicho protocolo apunta a seguir avanzando en emparejar la cancha de la democracia para hacerla más competitiva, más inclusiva y más participativa. Tenemos la decisión de trabajar y de legislar sobre transparencia del gasto, mejoramiento de la calidad de los partidos políticos y en hacer voz el voto de la ciudadanía, entre otras materias.

Más allá de la votación, también quiero destacar el aporte de otros sectores que han anunciado que van a aprobar en general el proyecto, en especial de Renovación Nacional. Más allá de algunas diferencias, sabemos que sus parlamentarios han estado y estarán por el término de este sistema electoral.

La Presidenta Michelle Bachelet señaló que tenía la firme voluntad de que la elección pasada de 2013 fuera la última con el sistema electoral binominal. Y será la última elección con el sistema electoral binominal.

(Aplausos)

Esta es una jornada histórica, de la cual todos ustedes han sido parte importante.

Por lo tanto, en nombre de la Presidenta Bachelet, les agradezco a todos porque con su voto aportarán para que el país dé un salto muy relevante para el fortalecimiento de nuestra democracia.

Gracias, señor Presidente.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Cerrado el debate.

El señor JIMÉNEZ.-

¿Me permite, señor Presidente?

El señor CORNEJO (Presidente).- Tiene la palabra su señoría.

El señor JIMÉNEZ.-

Señor Presidente , solo para solicitarle, aparte de la inserción de nuestros discursos, que como esta será una votación histórica, se sirva nombrar a los diputados que no tuvimos la posibilidad de hacer uso de la palabra.

Gracias, señor Presidente.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tal como se solicitó en su momento, se insertarán los discursos de los diputados que estaban inscritos y que no alcanzaron a intervenir.

En el tablero electrónico figuran los nombres de los diputados que estaban inscritos; pero si lo desea, el señor Secretario los nombrará.

El señor LANDEROS ( Secretario ).-

Las diputadas y los diputados inscritos son los siguientes: Celso Morales, Javier Macaya, Claudio Arriagada, Sergio Ojeda, Juan Enrique Morano, Marcelo Chávez, Ignacio Urrutia, Roberto Poblete, Luis Rocafull, Raúl Saldívar, Maya Fernández, Leonardo Soto, Jenny Álvarez, José Manuel Edwards, Felipe Letelier, Tucapel Jiménez, Loreto Carvajal, Ramón Farías, Daniel Núñez, Camila Vallejo, Sergio Aguiló, Alejandra Sepúlveda, Alberto Robles, Felipe Ward, Daniela Cicardini, Leopoldo Pérez, Alejandro Santana, Marcela Sabat, Cristián Campos, Rodrigo González, Jorge Rathgeb, Iván Flores, Gustavo Hasbún, Jorge Ulloa, Sergio Espejo, Luis Lemus, Paulina Núñez, Daniel Melo, José Miguel Ortiz, Issa Kort, Jorge Sabag, Jaime Pilowsky, Marisol Turres, David Sandoval, Iván Fuentes, Manuel Monsalve, Juan Luis Castro, Renzo Trisotti, María José Hoffmann, Sergio Gahona, Joaquín Lavín, Osvaldo Urrutia, Jaime Bellolio, Andrea Molina, Claudia Nogueira e Iván Norambuena.

-En conformidad con el artículo 85 del Reglamento, se incluye la siguiente intervención no pronunciada en la Sala y que cumple con lo dispuesto en el artículo 10 del mismo cuerpo reglamentario:

La señora ÁLVAREZ (doña Jenny).-

Señor Presidente , formar parte de la discusión de este proyecto de ley que tiene por objeto sustituir el sistema electoral binominal es un hecho relevante que, sin duda, marcara nuestra historia, porque durante décadas hemos tratado de superar este sistema electoral que ha dañado la participación y la democracia de nuestro país, ya que, cuando fue creado, buscaba perpetuar el empate electoral sin importar las diferencias básicas entre mayorías y minorías que existen en los países verdaderamente democráticos.

Sin embargo, este proyecto no ha tenido una discusión fácil, puesto que se han planteado diversos puntos de vista entre quienes estamos por impulsar este cambio; además, legítimamente, tenemos miradas distintas sobre algunos temas.

Las discusiones se han centrado en el número de candidatos a presentar, en el número de parlamentarios a elegir, el incremento del número de legisladores, la existencia o no de subpactos, las barreras de entrada que se pueden generar a partir de la unificación de distritos, el financiamiento de campañas y de lo complejo que sería un “centralismo regional” en este nuevo escenario, y, por supuesto, se ha generado una valorada discusión respecto a la importancia que tiene la equidad de género en este nuevo escenario electoral.

Personalmente, comparto las aprensiones respecto del eventual fortalecimiento de las zonas de mayor concentración de población, que tendrían la posibilidad de elegir un mayor número de parlamentarios, en claro desmedro de aquellas zonas con mayor ruralidad, zonas extremas o aisladas, lugares donde, además de tener una población siempre menor, ir o no a votar no depende solo de la voluntad de las personas, sino del acceso a medios de transporte, de las largas distancias, del clima y de la disponibilidad de recursos económicos para hacerlo. De estas realidades adversas también tenemos que hacernos cargo.

Con respecto a lo que va a significar la extensión territorial de los distritos y a los recursos que se deberán utilizar para hacer campaña, se debería acompañar esta modificación con una serie de medidas que permitan transparentar el origen de los recursos que se utilizan para financiar las campañas, para evitar que el Parlamento lo integren solo aquellos que cuenten con mayores recursos económicos, lo que al final se traduce en una desigualdad de oportunidades al momento de competir en un proceso eleccionario.

A pesar de todo lo mencionado, tengo la convicción de que no podemos dar ni un paso atrás en esta tarea que nos hemos impuesto. Los ciudadanos y las ciudadanas que han confiado en el gobierno de la Nueva Mayoría nos dieron un mandato claro, que es cambiar el sistema electoral binominal que heredamos de la dictadura, lucha en la muchas mujeres y hombres que creían en la democracia perdieron la vida. Por ello, tenemos hoy la gran responsabilidad de caminar y avanzar hacia una democracia donde todos tengan la oportunidad de participar.

Y en esta nueva oportunidad de participación, las mujeres tienen que tener un papel relevante. Queremos equidad de género.

En América Latina, en 1991, hace 23 años, Argentina se convirtió en el primer país del mundo en adoptar una ley de cuotas. Posteriormente, once países latinoamericanos han adoptado mecanismos similares en sus legislaciones internas. Claramente, Chile está al debe en esta materia.

Fui una de las parlamentarias que suscribió las indicaciones que proponen introducir el principio de equidad de género de este proyecto, pero nos preocupa enormemente lo que suceda con la ley de primarias, ya que no queremos que ocurra lo mismo que sucedió en México, donde se aprobaron cuotas de candidatas al Parlamento, pero se estableció que aquello solo era obligatorio para los partidos que no realizaban elecciones primarias internas. ¿Qué ocurrió en ese país? Lo previsible: ahora todos los partidos realizan primarias y, por lo tanto, el principio de equidad de género quedó, en muchos casos, convertido en letra muerta. Esto no puede suceder en Chile.

Confiamos en lo que propone este proyecto, esto es, que no haya más de 60 por ciento de candidatos de un mismo género, y que esta proporción se respete a todo evento y no seamos testigos de futuras propuestas para modificar, flexibilizar o relativizar ese criterio, porque no podemos volver a los viejos argumentos que afirman que “no hay mujeres interesadas en postular” o porque “las mujeres prefieren optar por la familia o el desarrollo profesional”. Eso no es así; las mujeres si quieren participar en política y tenemos que darles las mismas oportunidades.

Perdón por ser autorreferente en esta materia, pero sé por experiencia propia lo difícil que es para una mujer superar las barreras que hoy existen dentro de los partidos y en los sistemas políticos, en general, para llegar a ser candidatas.

En 2009, fui candidata a diputada por el distrito N° 58, que abarca las comunas de las provincias de Chiloé y Palena , que me honro en representar. En aquella oportunidad perdí la elección por un margen de 1 por ciento, pero pensé que esa realidad se iba a valorar y sentí que me había ganado el derecho para ser la candidata en la próxima elección. Pero ese esfuerzo no fue considerado y me di cuenta de que las frases que creía verdaderas, como “las mujeres son importantes en política”, “las mujeres deben participar en política”, “los partidos respaldamos a las mujeres en política”, eran simplemente letra muerta, porque después trataron de impedir que yo fuera candidata. No conformes con aquello, tuve que participar en unas muy difíciles elecciones primarias y competir con otros dos compañeros de partido.

Pero hoy estoy sentada en este hemiciclo, porque creo que sin las mujeres no hay democracia y porque las mujeres sí podemos.

He dicho.

La señora CICARDINI (doña Daniella).-

Señor Presidente , tras una larga historia de luchas, de una veintena de intentos fallidos y obstaculizados en algo más de veinte años desde el regreso de la democracia, hoy hemos sido convocados nuevamente para definir el futuro del país en materia de democracia, de participación ciudadana y de representatividad.

Esta vez, a través de este proyecto de ley enviado por el gobierno de la Presidenta Bachelet, debemos pronunciarnos sobre la sustitución del sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y el fortalecimiento de la representatividad del Congreso Nacional.

Yo no podría decir si la aprobación de este proyecto -espero que sea aprobado- será efectivamente el punto de inflexión o el momento que marque finalmente ese cierre de la transición hacia una democracia plena en nuestro país, que tantas veces se ha querido ver y buscar en distintos hitos a lo largo de estos años tras el fin de la dictadura.

Aún quedan muchas otras batallas que dar en ese sentido, como entregarle a nuestro país una nueva Constitución Política, legitimada por y a través del pueblo. Repito y subrayo: a través del pueblo.

Sin embargo, lo que sí puedo decir hoy -de lo que sí estoy segura- es que esa democracia real, plena, participativa, representativa y legítima jamás llegará a nuestro país mientras siga existiendo ese verdadero enclave autoritario que es el sistema electoral binominal, uno más de los tantos enclaves de nuestra democracia que nos heredó la dictadura con la intención de regirnos perpetuamente y de imponer una ideología y un modelo, como en su minuto también lo fueron los senadores designados o la inamovilidad de los comandantes en jefe de las Fuerzas Armadas, entre tantos otros.

Afortunadamente, nos hemos hecho cargo y hemos ido removiendo, lentamente, pero con grandes dificultades, parte de esos males y hoy ha llegado el turno del sistema electoral binominal, que, como ya dije, espero que sea la antesala para abordar el cambio de la Constitución Política, para quitarnos esta verdadera camisa de fuerza a la que nos hemos visto sometidos por décadas. Parte de dicha camisa de fuerza es este sistema electoral, que excluye a las minorías políticas, que no representa a los jóvenes del país, no sólo porque obstaculiza el ingreso a la política de muchos de nosotros, al eternizar a otros en sus cargos, sino porque impide los cambios, y los jóvenes, por definición, buscan el cambio.

Además, ha permitido que muchas veces una minoría imponga su visión a la voluntad de la mayoría, lo que ha impedido avanzar hacia donde realmente queremos.

También ha obstaculizado, durante todos estos años, la presencia y representación adecuada de la mujer en la política, aunque seamos más de la mitad de la población y del electorado del país. Ello ha ocurrido porque no se ha considerado que el Parlamento debiera ser el reflejo de la sociedad a la que representa. Es decir, ¡el sistema electoral actual no nos representa!

Entonces, es imposible para mí no valorar y apoyar la voluntad de cambio de nuestro sistema electoral que ha manifestado el actual gobierno a través de este proyecto sustitutivo que hoy discutimos, para darle legitimidad a nuestra democracia.

Aunque expreso mi apoyo a esta iniciativa y a la mayor parte del contenido del proyecto, sin embargo me es imposible no poner el foco sobre algunos aspectos puntuales en los que me parece necesario manifestar ciertas precisiones.

1. Megadistritos

En primer lugar, en lo referido a los denominados nuevos megadistritos y tomando como ejemplo mi Región de Atacama, es necesario decir que esta medida significará la fusión de dos distritos, de manera que solo habrá un distrito del tamaño de la región, que corresponderá al distrito Nº 4, con 5 cupos para diputados o diputadas.

Para el caso del Senado, la III Región de Atacama será la 4ª circunscripción y se mantendrá con dos escaños.

Aunque entiendo que esta medida de redistritaje apunta a alcanzar una necesaria mayor representatividad de la población, en mi opinión el problema principal es que se iguala el distrito con la circunscripción senatorial y, por lo tanto, tendrán los mismos costos de campaña y no existirá mayor diferencia política respecto a quién representa un senador o senadora y un diputado o diputada .

Además, quiero plantear las dificultades que implicará el focalizar nuestros esfuerzos de manera efectiva, para recoger y dar respuesta a las inquietudes de las comunidades de distritos incluso de menor tamaño, como los que ya existen. De allí mi inquietud respecto a la manera en que serán atendidas esas necesidades en un escenario geográfico y de población eventualmente mayor, con el riesgo que implica la posibilidad de que por cálculos meramente electorales algunos prefieran centrar su atención en las ciudades con una mayor cantidad de votantes, lo que dejará olvidadas o relegadas a las comunas o localidades de menor tamaño.

Además, podría producirse una menor relación entre los diputados y las personas a quienes representa, ya que tendrá que hacerse cargo de los problemas de una zona mayor a la que establece la legislación actual. A lo anterior se agrega que se nos pedirá hacer más con menos, ya que las asignaciones para diputados disminuirán y el número de comunas se triplicará, en el caso de la Tercera Región, por lo que no se podrá tener sede distrital en cada una de las comunas que abarcará el distrito.

También hay que considerar los gastos en las campañas electorales. Al ser un distrito de mayor tamaño, una campaña política para elegir un diputado o diputada tendrá mayores costos, puesto que abarcará una zona más amplia.

Finalmente, se mantendrá la elección de dos senadores para la región, lo que significa que se seguirá con el sistema binominal para este tipo de cargo de elección directa en la circunscripción electoral a la que pertenezco.

2. Criterio de paridad de género

Sin duda la incorporación de un criterio de paridad de género es un gran avance en la búsqueda de la equidad, de garantizar una mayor participación en la política y para abrir espacios a la mujer en los cargos de representación popular. Pero también es relevante subrayar que abrir estos espacios no es en desmedro de un género respecto a otro, ya que con esta paridad simplemente recién estamos emparejando la cancha de las oportunidades en este tema.

Por eso esta es una medida tremendamente relevante, ya que viene a romper la exclusión de la mujer en la política y en la participación en el Parlamento, de la que ha sido víctima desde siempre en nuestro país.

La literatura académica respalda la idea de que, en un sistema proporcional, al aumentar el número de escaños por distrito y circunscripción, así como aprobar una ley de paridad de género, se estaría dando mayor oportunidad a las mujeres para ser diputadas o senadoras.

Hay que dejar en claro que las llamadas cuotas de género obligan a los partidos a nominar como candidatos y candidatas un máximo de 60 por ciento y un mínimo de 40 por ciento de personas de cada sexo.

Esto no significa, entonces, que las mujeres tengan un escaño reservado, sino que la ley de paridad de género simplemente resguarda el derecho a participar como candidata a un cargo público, en este caso para senadora o diputada.

Permítanme detenerme en la principal dificultad que observo en este punto, que es el hecho de que el proyecto indica que para el cálculo de la proporción de hombres y mujeres se excluirán aquellas candidaturas proclamadas por el Tricel donde se hayan celebrado elecciones primarias.

Lo anterior es un problema ya que son las cúpulas de los partidos políticos quienes nominan a los candidatos, tanto para primarias como para las otras elecciones. Como los integrantes de las cúpulas de los partidos políticos son, en su mayoría, hombres, existe el riesgo de que se reproduzca el modelo y se nomine solo a hombres. Y si este mecanismo es reproducido en muchos distritos o circunscripciones, no se logrará llegar a la ansiada equidad de género dentro del Poder Legislativo . Es decir, esto sería como plantar el árbol de la paridad de género, pero luego cortar sus raíces para no ver el fruto de ese árbol.

Por ello, si queremos tener mayor presencia de mujeres en el Congreso Nacional, es importante eliminar la indicación que exime a las primarias del criterio de paridad de género. Por esto, solicito votación separada del inciso quinto del artículo 3º bis, contenido en el número 1 del artículo 1° del proyecto de ley que estamos discutiendo.

3. Subpactos

En materia de subpactos, me gustaría hacer notar nuestra inquietud por la indicación y modificación que se ha incorporado al proyecto, en el sentido de la eliminación de los subpactos al interior de las listas electorales.

Si bien esta es una materia discutible y sobre la que pueden existir diversas opiniones y matices, a mi juicio, la posibilidad de creación de subpactos podría haber tenido un efecto positivo en el fortalecimiento de nuestra democracia y en la participación ciudadana, por la vía de despertar el interés en corrientes y movimientos interesados en participar, así como por el interés de sus simpatizantes por votar, porque mucha gente sentiría que su voto realmente adquiere valor y peso, y que sus ideas efectivamente pueden ser representadas.

Es decir, se podría haber aportado a revertir parte de la sensación de lejanía de la gente con la política y la falta de interés de la ciudadanía por participar en nuestro sistema electoral.

4. Ley de transparencia

La actual legislación sobre el financiamiento de los partidos y las campañas políticas no permite conocer quién paga por la publicidad y los demás gastos en que incurren los candidatos a elecciones directas o populares.

Por esto, diputados de mi bancada presentaron una indicación a este proyecto de ley, que fue rechazada, sobre la ley de transparencias en campañas electorales, que buscaba dar claridad sobre quién o quiénes financian las campañas políticas. Esta habría sido una medida de la mayor relevancia para hacer al Congreso Nacional más representativo, además de más confiable ante la ciudadanía, porque esta debiese ser una de las grandes metas de todos los que estamos aquí: recuperar la confianza de la gente en esta Corporación y en el legislativo como uno de los poderes fundamentales del Estado.

A pesar de todo lo dicho, yo espero que nadie se equivoque en relación a mi respaldo a este proyecto, porque para mí esta es la oportunidad en que finalmente ha llegado la hora de que los integrantes de esta Cámara le demos un fin al sistema electoral que hoy existe y honremos el consenso nacional para dar por superado este esquema y le entreguemos a Chile las herramientas para que su voz sea realmente escuchada, para que por fin se cumpla efectivamente en nuestro país aquello de que la democracia es la voz del pueblo.

Por todo lo expuesto, apoyaré esta iniciativa.

He dicho.

El señor OJEDA.-

Señor Presidente , esta es la oportunidad; sin pretextos ni disculpas, por nada.

Nos costó modificar el artículo 47 de la Constitución Política, para eliminar el guarismo “120”, que era el gran obstáculo para establecer un sistema electoral democrático. Desde hace 25 años venimos intentando transformar nuestra institucionalidad electoral: un sistema binominal perverso, antidemocrático y nada de representativo, que no guarda relación con la correlación de fuerzas políticas del país.

El establecimiento de un rededistritaje, la readecuación de los distritos y un número de diputados proporcional a la población y senadores por regiones es aceptable.

En el caso del distrito 25°, permite la recuperación de cuatro comunas de la provincia de Osorno que antes estaban en el distrito 56 y las demás en el distrito 55, que incluye la comuna de Osorno, con candidatos que sean superiores en número a la cantidad de diputados y senadores, no como en el nominal. Los nuevos distritos y circunscripciones son readecuaciones; no deben ser reacomodos que pudieran ser estructurados malamente conforme al interés de cada partido o parlamentario. Si fuera así, habría 120 formas de distribución distrital, según el parecer o interés de cada diputado .

El nuevo sistema debe ser ecuánime y objetivo, y representar a la ciudadanía en la mejor forma posible, a la diversidad, para dar mayor representatividad a nuestro Congreso Nacional.

Somos diputados de la república, autoridades nacionales y nuestro ámbito de acción es todo el país. Si nos eligen en los distritos, es simplemente una forma de distribuir la representatividad. La cancha debe rayarse para todos y todos deben aceptar y jugar en esa cancha.

Este proyecto debe ser capaz de provocar un vuelco en la desmotivación y desinterés de la ciudadanía por participar en las grandes decisiones ciudadanas. En la apatía e indiferencia de la ciudadanía por la participación política ha influido mucho la existencia del sistema binominal. Entonces, esta es una forma de corregir y perfeccionar la participación ciudadana en nuestro sistema republicano de representación popular. Se trata de revertir la abstención de las últimas elecciones, sobre todo del porcentaje registrado en la última elección presidencial.

Comunas nuevas, caras nuevas. La extensión del ámbito territorial de los actuales parlamentarios es algo muy positivo. Se reduce la desigualdad del voto, permite la inclusión de todas corrientes políticas, se facilita la expresión de las mayorías y la representación de las minorías. Así, en el Congreso Nacional se reflejará la diversidad de la sociedad y se evitará que queden fuera candidatos con grandes votaciones.

La crisis de representatividad tiene mucha relación con la existencia de un sistema electoral como el binominal. Con 60 distritos y dos diputados por distrito, se produce un engaño, un verdadero fraude. Ahora tendremos 28 distritos y 15 circunscripciones senatoriales, con 155 diputados y 50 senadores, donde cada distrito no puede elegir menos de 3 diputados ni más de 8.

En el sistema binominal se sabe quiénes saldrán electos, uno del gobierno y otro de oposición. A la gente le interesa que haya incertidumbre en la elección, pero no certeza y seguridad absoluta de los que serán elegidos, y que haya verdadera competencia entre las listas y candidatos antagónicos y no entre los candidatos de una misma lista. Este proyecto garantiza lo anterior, porque establece un sistema proporcional, donde el método para determinar a los elegidos será el sistema electoral de coeficiente D’Hondt.

Si los distritos son grandes y requieren de mayores gastos, readecuemos también el presupuesto y limitemos los gastos electorales, para impedir que los que tengan mayores recursos puedan estar en ventaja frente a los demás. Las instituciones democráticas deben reforzarse y los recursos deben proveerse para este fin. Quienes se oponen a este proyecto son los mismos que impusieron el sistema vigente; son los mismos que se han opuesto a los cambios durante 24 años. Su oposición al aumento del número de diputados y senadores, debido a que irrogará mayores gastos, es uno de los tantos pretextos o justificaciones para oponerse a un proyecto democrático como este.

Lo mismo argumentaron cuando se modificó la Constitución Política. Antes decían que este sistema binominal había dado estabilidad política al país. ¡Mentira! Solo ha habido una falaz representación de diputados y senadores.

Voy a votar favorablemente este proyecto de ley, porque creo que establece un marco democrático, da mayores posibilidades de elección a candidatos de minorías, a los independientes y a los regionalistas, y porque ofrecerá a la ciudadanía mayores alternativas de candidatos a elegir.

Ya no saldrá electo un parlamentario con obtuvo menos votación que otro que no salió electo.

Votaré también por establecer las cuotas en favor de las mujeres, porque este país ampliamente machista no tolera que las mujeres tengan más derechos. Solo con una ley podremos hacerlo. Queremos que más mujeres lleguen al Congreso Nacional.

¡Bienvenido el sistema proporcional; adiós al sistema binominal!

He dicho.

El señor ROCAFULL .-

Señor Presidente , hoy más que nunca asisto con la mayor convicción a apoyar con toda la fuerza la reforma al sistema binominal, mecanismo que ha tenido reprimida la verdadera expresión de representatividad en el Parlamento.

Refuerza mi seguridad en este proyecto el hecho de que, con mi voto y con el de la mayoría de mis colegas, haremos justicia con la región que represento: Arica y Parinacota, única región de Chile que no tiene circunscripción senatorial, lo que constituye una contradicción ideológica, política e, incluso, constitucional.

Recuerdo muy bien las palabras del entonces ministro del Interior , señor Andrés Zaldívar , quien señaló que, pese a la creación de la región, no podía aprobarse una circunscripción senatorial para Arica, pues sería “validar el sistema electoral actual” que se deseaba corregir, que estaba en vías de modificarse.

Pues bien, la misma Presidenta que hace siete años promulgó la Ley que dio vida a la Región de Arica y Parinacota, hoy propone, en este proyecto, la nueva circunscripción senatorial para esta región y aumenta a 3 el número de diputados.

En lo general, el proyecto propone un modelo proporcional moderado que impide la construcción de mayorías parlamentarias artificiales, facilitando la representatividad de las mino-rías y el compromiso político entre las diversas fuerzas sociales. El redistritaje y el aumento en los escaños evitarán una posible desproporcionalidad o sobrerrepresentación, fenómeno creado por el actual sistema de elección y que algunos partidos políticos utilizan para autoproclamarse como “el partido más grande de Chile”, pero que daña el principio de igualdad de voto y, por lo tanto, a la democracia.

Todo esto refuerza el proceso de crecimiento en autonomía regional por el que venimos luchando desde hace décadas, porque esta región extrema está cansada que desde Santiago , y de otras partes del mundo, mentes iluminadas alumbren el camino por donde debemos transitar.

Pero no solamente queremos mayor descentralización para poder ser protagonistas de la construcción de nuestro destino, sino también tener presencia en el Parlamento, aportando con nuestra historia, identidad y cosmovisión, siendo activos partícipes de la construcción de nuestro país, tal y como lo hicieron dos personajes ariqueños, originarios de esta ciudad, nacidos, educados y mal criados en ella, cuyo único defecto fue amar a la ciudad de la eterna primavera. Me refiero a los senadores Luis Valente Rossi, desterrado por la dictadura y que murió añorando volver a su tierra, y Humberto Palza Corvacho , fiel representante de la “corvachada”, término propio de nuestra identidad. Fueron hombres valientes, intelectuales y comprometidos con la ciudad de Arica, pero, por sobre todo, dignos representantes de su gente, entre otras cosas, porque siempre contaron con el respaldo de la ciudadanía.

En definitiva, con esta reforma se termina la dependencia senatorial con la Región de Tarapacá, medida que buscaré que se replique en lo tributario, económico y administrativo, porque somos región, la puerta norte de Chile y tenemos demandas propias que en ocasiones tensionan esquemas o derechos adquiridos por otras regiones.

Espero que el respaldo que hoy obtenga esta propuesta se replique en el Senado y no venga entremedio un aprendiz de cocina que trunque el sueño de los ariqueños y parinacotenses.

He dicho.

El señor PILOWSKY .-

Señor Presidente , el gobierno encabezado por la Presidenta Michelle Bachelet nos ha puesto un desafío ineludible: reformar el sistema electoral binominal vigente desde 1989. Se han hecho varios intentos por modificarlo, pero por diversas razones no se ha llegado a buen puerto. Hoy estamos mandatados para hacer este importante cambio. No solo fue un compromiso de campaña de la Nueva Mayoría. En lo particular, me comprometí con los vecinos de Peñalolén y de La Reina a no ir a la reelección en 2017, si no éramos capaces de establecer un nuevo sistema electoral que reemplazara el binominal. Vecinos y vecinas: mi compromiso con lo señalado se expresa en mi voto favorable a este proyecto que pone fin al binominal.

Como es sabido, los sistemas electorales tienen una función “legitimadora, representativa, reclutadora, productora de dirección política y de socialización” (Hernández: 1997. Manual de Ciencia Política, de Rafael del Águila ). Hoy diremos: “Chao al binominal”, y pasaremos a un sistema proporcional, que permitirá no solo establecer una distribución de la representación razonablemente proporcional a los votos obtenidos por cada una de las candidaturas, sino también que sean los menores votos posibles los que no alcancen su traducción en representación.

En efecto, el nuevo sistema electoral no solo mejorará la proporcionalidad entre el porcentaje de votos y de escaños que obtiene cada partido, sino que se apegará más al principio de “una persona, un voto”. Los distritos serán más grandes y habrá mayor oferta de candidatos para ciudadanos que, alejados de la política, demandan más variedad de opciones y más competencia.

Parte de la Oposición ha dicho que no necesitamos más diputados y que con los 120 actuales es suficiente. Incluso, algunos analistas han sostenido que con menos diputados es posible mejorar la representación.

Ese argumento solo considera una base cuantitativa de análisis. Imaginen una cámara de 100 diputados que se elige en un distrito único nacional. Evidentemente, en un distrito como ese todos los ciudadanos “pesaríamos” lo mismo, respetando de manera cabal el principio de “una persona un voto”. Tendríamos una representación perfecta.

Sin embargo, una propuesta de este tipo esconde serias limitaciones que atentan contra la calidad de esa representación. Voy a señalar el siguiente ejemplo: la propuesta del Gobierno fusiona los distritos 30 y 31. El distrito 30 agrupa las comunas de San Bernardo, Buin, Paine y Calera de Tango. El distrito 31, en tanto, agrupa las comunas de Melipilla, Talagante, el Monte, Peñaflor , Alhué , Isla de Maipo, María Pinto , Curacaví, San Pedro , y Padre Hurtado . La propuesta del Gobierno es elegir seis diputados en este nuevo distrito. ¿Qué sucedería si en lugar de seis, seguimos la recomendación de la Oposición de no subir el número de diputados y terminamos eligiendo cuatro diputados en ese distrito? Claramente, en un distrito de esta magnitud solo los partidos grandes y con alto volumen de recursos podrían hacer una campaña con serias aspiraciones de éxito. Los partidos pequeños y los independientes quedarían totalmente marginados. Por último, ¿dónde harían campaña los candidatos? Seguramente, se concentrarían en las comunas más grandes como San Bernardo , Melipilla , Peñaflor , Buin, Paine y Talagante, que totalizan el 78 por ciento de la población del distrito. ¿Para qué hacer campaña en Curacaví, en Calera de Tango o en Alhué?

Este ejemplo ayuda a entender que la representación no solo hay que mirarla en función del número de escaños y del volumen poblacional de cada distrito. Es necesario preguntarse por la calidad de esa representación.

Siguiendo con el ejemplo, en el caso de elegir seis diputados en el distrito que mencioné, los candidatos tendrán los suficientes incentivos para hacer campaña en pequeños nichos electorales, es decir, en las comunas chicas. Los electores de esas comunas sentirán que su voto es relevante y que perfectamente podría incidir en la elección de algún candidato. Con ello podremos mejorar la calidad de la representación y de la política en general. Si la gente siente que su voto es valioso, es muy probable que asistirá con más entusiasmo a votar. Adicionalmente, a mayor oferta de candidatos y mayor competencia, mayor será la participación.

Un segundo tema relevante de esta reforma consiste en la eliminación de los subpactos entre partidos. Esta es una buena noticia para la democracia. Hay que recordar que los subpactos entre partidos atentan contra el corazón de la reforma, es decir, contra la proporcionalidad del sistema electoral. Es incorrecto decir que los subpactos sean irrelevantes. Es probable que dentro de un pacto exista un subpacto compuesto por varios partidos pequeños capaces de superar a otro subpacto compuesto por un partido y sus independientes. El escaño asignado, si la lista obtiene un solo cupo, pertenecerá a alguno de esos partidos pequeños. ¿Qué sucederá con el partido grande? Muy simple: quedará sin representación. ¿Es justo eso? Ciertamente no.

Por tanto, espero que la propuesta del Ejecutivo, de la Presidenta Bachelet y del ministro Peñailillo , se respete. La idea es que los partidos compitan por el voto en la calle y que luchen de igual a igual para obtener representación. Si dejamos que algunos partidos sumen dentro del pacto, estaremos estimulando una representación truncada que premia la coordinación estratégica de los partidos dentro de un pacto y no la fuerza electoral real de esos partidos. La opción es sencilla: ¿queremos privilegiar la “ingeniería electoral” o el “poder de los ciudadanos”? Si optamos por lo segundo, estaremos aprobando la opción correcta al eliminar los subpactos.

Otro tema relevante es el financiamiento de la reforma. Algunos han criticado este aspecto que, a todas luces, es secundario en función del objetivo buscado. No parece razonable esgrimir como argumento el precio de la reforma. Lo que estamos proponiendo es una mejor representación y una mejor democracia. Para eso, el Estado debe redoblar esfuerzos. Ojalá, parte de la Oposición reconsidere sus argumentos. ¿Por qué no dijeron absolutamente nada cuando por dieciséis años se financió a senadores designados y vitalicios?, ¿Por qué el tema monetario no se alzó en la discusión? Esos senadores le costaron al fisco más de 54.000 millones de pesos. ¡Sí, señor Presidente : 54.000 millones de pesos, que todos los chilenos debimos pagar de nuestro propio bolsillo! El Estado desembolsó esa suma de dinero por senadores que jamás enfrentaron un proceso de elección democrático. Claro, algunos de ellos sí lo hicieron, pero en otro momento histórico.

Quiero subrayar que este argumento no apunta a la lógica del empate. Créanme que hay grandes diferencias entre financiar a senadores designados y vitalicios que a representantes legítimamente electos. Lo que estamos impulsando es una reforma que va más allá de una simple sumatoria de gastos. La Oposición quiere convencer a la ciudadanía de que con los recursos que se gastarán para financiar el aumento de parlamentarios se podrían construir más hospitales, más comisarías y más colegios. Ese es un argumento mezquino, un argumento fácil. ¿Qué les parece si discutimos con otra evidencia en mano la forma de abordar lo relativo al financiamiento? ¿Qué me diría usted, señor Presidente , si le menciono que un partido gastó casi 4.400 millones de pesos en la última elección de diputados, lo que significa que cada candidato le costó, en promedio, 77 millones de pesos, y que ese gasto corresponde solo a los 60 días de campaña? ¿Qué me diría usted si el partido que le sigue apenas superó los 2.000 millones de pesos? Si vamos a discutir de financiamiento, discutamos sobre todas sus dimensiones. Es inaceptable que los representantes que cuentan con más recursos para hacer campaña hoy aleguen contra una reforma que producirá una mejor democracia.

Finalmente, quiero señalar la importancia de que nuestra legislación establezca los mecanismos para que la mujer se pueda incorporar, en proporciones mayores, a la vida política en general y al Congreso en particular. No es posible que nuestro sistema tenga las bajas tasas de representación femenina que hoy se expresan. Por ello, aprobaremos la normativa sobre cuotas y perfeccionaremos y modificaremos aquellos aspectos que no permiten que esa representación se exprese en plenitud.

Termino diciendo que nuestra labor parlamentaria está cuestionada; debemos revertir esa percepción. El cambio al sistema binominal es condición necesaria, pero no suficiente. En los próximos meses deberemos profundizar este proceso y elaborar reformas que den legitimidad a la política y proyectos que apunten a mejorar nuestro trabajo legislativo. Por ejemplo, se requieren iniciativas que establezcan la rendición de cuenta de los parlamentarios a los ciudadanos, el límite a la reelección, las iniciativas populares de ley, entre otras materias.

Por ello, solicito a todos mis colegas diputados y diputadas, y a todos los senadores de la República, que apoyen decididamente esta reforma. Lo que está en juego es la calidad de la democracia chilena. No olvidemos que en la última elección presidencial apenas participó el 49,9 por ciento de todos los habilitados para votar. ¿Qué estamos esperando para avanzar en las reformas políticas que el país necesita?, ¿Qué debe ocurrir para que parte de nuestra Oposición se convenza de que es indispensable cambiar nuestro sistema electoral? Señor presidente , es ahora o nunca. Sí, ahora o nunca.

He dicho.

El señor JIMÉNEZ.-

Señor Presidente , nuestro deber como diputados es representar a la ciudadanía y aportar para profundizar la democracia en Chile.

Con la reforma al sistema binominal se está haciendo caso al clamor de la gente por cambiar un sistema electoral que produce en la ciudadanía más descontento que acuerdo. Cómo no recodar el famoso caso de la candidata a diputada por el distrito N° 30, Marisela Santibáñez , quien obtuvo la primera mayoría, pero que no pudo obtener un cupo parlamentario debido al sistema binominal.

La reforma que estamos llevando a cabo también profundiza la democracia, ya que busca, a diferencia del sistema binominal, lograr mayor equilibrio, competencia y estabilidad. Dicho objetivo se consigue por medio de la proporcionalidad, de respetar el principio de “una persona un voto” y de avanzar a que más mujeres puedan representar a la ciudadanía en el Congreso Nacional.

Mucho se ha dicho que esta reforma es un “traje a la medida”. Permítanme señalar que con los resultados del plebiscito de 1988, el régimen de Pinochet no solo instauró una fórmula electoral “a la medida”, que es el binominal, sino que también dibujó los distritos con un criterio evidentemente político. Se sobrerrepresentaron comunas en las que la opción “Sí” había ganado, y se subrepresentaron comunas en las que la opción “No” había logrado una significativa mayoría.

Lamentablemente, se estableció un sistema electoral para la democracia bajo lógicas autoritarias y del pasado, que dividen a los chilenos y que no apuntaban a consolidar seria y comprometidamente la democracia a través de algo tan relevante como es el sistema electoral.

Al respecto, no es de extrañarse que la UDI sea el partido más sobrerrepresentado, en desmedro de Renovación Nacional. Actualmente, la UDI está sobrerrepresentada en 5,2 puntos. En cambio, RN está subrepresentada en 0,92; es decir, en casi un punto. Esto se traduce en la diferencia entre la cantidad de representantes de la UDI y la de representantes de RN en el Congreso Nacional, que es relevante.

Con estos datos ya podemos comenzar a entender claramente por qué la UDI no está de acuerdo con esta reforma y por qué dice que es un traje a la medida. La razón es que esta reforma democrática no les conviene. Pero déjenme decirles algo importante: a Chile sí le conviene esta reforma, pues comunas que estaban subrepresentadas contarán con más representantes, pero, sobre todo, con mayores candidatos para elegir. Ese será el caso de la Región Metropolitana.

Esta reforma también fomenta la participación de la mujer en la vida política, toda vez que establece un piso mínimo para ellas de un 40 por ciento, lo cual es algo muy positivo.

Actualmente tenemos una mujer como primera autoridad del país: la Presidenta Michelle Bachelet Jeria ; tenemos a una mujer Presidenta de la CUT , quien representa a muchas trabajadoras y a muchos trabajadores: Bárbara Figueroa . Y no podemos olvidar a los miles de mujeres líderes de Comités de Vivienda y a las dirigentas sociales que luchan por un futuro mejor para sus familias. Actualmente, las condiciones de las mujeres en la política son mucho mejores que antes; pero con esta reforma se consolidarán avances más positivos.

La evolución en cuanto a la cantidad de candidatas a la Cámara de Diputados es relevante. En las elecciones de 1989 participaron 34 mujeres y 385 hombres. En la última elección, en 2013, participaron 91 mujeres y 379 hombres. En cuanto al número de candidatas vencedoras, en 1989 había siete mujeres en la Cámara de Diputados. Actualmente hay diecinueve.

Esas cifras demuestran que con los años ha aumentado el número de candidatas y de diputadas, situación muy positiva, pero que aún es insuficiente.

Por ello, apoyo totalmente establecimiento de un piso de 40 por ciento para las candidatas, ya que abre mayores espacios para su participación en la vida política.

Como podemos darnos cuenta, esta reforma se justifica en la cantidad de falencias importantes que tiene el sistema binominal y en el altísimo desencanto de la gente hacia este sistema electoral. Recordemos una vez más el caso de la candidata Marisol Santibáñez . Todos los electores que votaron por ella pudieron constatar cómo el sistema binominal la dejó fuera, en circunstancias de que había logrado la primera mayoría.

También quisiera señalar lo siguiente. Actualmente, la ciudadanía siente un profundo malestar frente a ciertas situaciones en la política. Por ello, no deberían extrañarnos los bajos porcentajes de participación en las pasadas elecciones. No obstante, la ciudadanía está cada vez más empoderada y tiene mayor conocimiento de los aspectos que determinan su vida, como la educación, la salud, las pensiones, entre otros. Por tanto, es importante entregarle mayores y mejores posibilidades de participación.

Con su voto en las elecciones la gente castiga o premia a los candidatos por su trayectoria y su compromiso con el distrito y sus representados.

En consonancia con lo anterior, es importante que la gente decida con mayor frecuencia qué le conviene o no y quién es el candidato que mejor los puede representar. De eso se trata la democracia. Mientras más se utilice el voto, más se fortalece la democracia.

Por tanto, es importante debatir sobre la frecuencia con que nuestros ciudadanos y ciudadanas pueden hacer uso del voto y controlar la elección de candidatos que resultaron ser representantes positivos o negativos.

En los próximos días, voy a proponer, mediante un proyecto, que se reduzca la duración del cargo de senador a cuatro años, ya que no se justifica que dicho cargo dure más que el de Presidente de la República . Esta iniciativa entregaría la posibilidad de que las personas elijan más seguido a los senadores y, por tanto, los fiscalicen con mayor frecuencia mediante el voto. Si el senador cumple su trabajo y la gente está contenta, lo reelegirá. Pero si ocurre lo contrario, las personas no tendrán que esperar dos gobiernos -ocho años- para cambiar a un senador que finalmente no los representaba, por uno que los represente de mejor manera.

No hay nada más democrático que las elecciones libres y competitivas, y no hay nada más sano para la democracia que el empoderamiento de las personas, esto es, que tengan conocimiento y poder de decisión. De eso se trata la democracia y la libertad, conceptos que valoro y a los que adhiero profundamente.

Para finalizar, cómo no recordar que muchos de los que están sentados en un escaño de la Cámara apoyaron la dictadura y el establecimiento de una Constitución Política que dejó amarrado el sistema social, económico y político, pues contempla quorums altísimos y un sistema electoral hecho a la medida para que el Congreso Nacional viviera empatado. Tanto se aseguraron de que la Constitución Política garantizara que no se produjesen cambios, que también instituyeron los senadores designados -nueve durante dos periodos legislativo: 1990-1998 y 1998-2006- y los vitalicios, y se dieron el lujo de sentar en esta casa de la democracia a un dictador, a su líder: el criminal Pinochet .

He dicho.

El señor LAVÍN.-

Señor Presidente , si bien estoy de acuerdo con que debemos modificar nuestro sistema electoral parlamentario y hacerlo más inclusivo y representativo, me parece que el proyecto es una muy mala manera de hacerlo, no solo por el proyecto en sí mismo, sino también por la forma en que se ha tratado de comunicar. Se intenta hacer creer a los chilenos que el nuevo sistema solucionará los problemas de la democracia y que se acabarán las quejas ciudadanas respecto de los políticos. Pero sabemos que los problemas son mucho más de fondo y tienen más que ver con la renovación de las personas, con la renovación de las ideas y con terminar con las malas prácticas que cada cierto tiempo impactan a los chilenos a través de algún medio de prensa nacional.

Hoy, el Parlamento es la institución peor evaluada por los chilenos, y creo que con el nuevo sistema que se quiere establecer esa evaluación podría ser aún peor. Me parece que el proyecto es una señal más de la gran desconexión que existe entre las ideas del Gobierno y las necesidades que tienen las personas.

Esta reforma a la mayoría de los chilenos le da exactamente lo mismo. Evidentemente no le va a cambiar la vida a las personas que llegan con dificultad a fin de mes y que se levantan a las 5 de la mañana para ir a trabajar en un transporte público insuficiente. En mi distrito, que es el que tiene más habitantes en todo Chile, todavía no me encuentro con nadie que me diga que quiere tener más diputados. Créanme que converso diariamente con muchos de mis vecinos.

Aumentar en 35 el número de diputados es totalmente antojadizo, ya que perfectamente se puede modificar el sistema electoral sin aumentar el número de parlamentarios. Si se va a aumentar el número de parlamentarios, debería hacerse con transparencia. No debería decírseles a los chilenos que esta reforma tendrá costo cero, ya que eso es faltar a la verdad.

Según el informe que entregó la Biblioteca del Congreso Nacional, el aumento en 47 parlamentarios tendrá un costo de 13.000 millones de pesos. ¿Está dispuesta la ciudadanía a gastar esa cantidad de dinero para tener más parlamentarios? Me parece que el costo de oportunidad es demasiado alto, sobre todo en un país donde aún tenemos grandes carencias.

Según el Informe de Política Social 2013, en Chile existen 472.000 personas que viven en extrema pobreza. De aprobarse este proyecto, el día de mañana tendremos que explicar que deberemos hacer esfuerzos económicos para financiar a más parlamentarios, en vez de usar esos dineros para desarrollar políticas que ayuden a esos 472.000 chilenos y chilenas a salir de la extrema pobreza.

Es preocupante el mensaje que envía el Gobierno con este proyecto. Finalmente los chilenos se quedan con la idea de que esta es una reforma hecha por políticos, para políticos, que solo preocupa a los políticos, y que es un traje a la medida para quienes hoy estamos en el Parlamento.

He dicho.

El señor FLORES.-

Señor Presidente , tuvieron que pasar 24 años para que por fin la ciudadanía pudiese romper la barrera impuesta por un sistema perverso que distorsionó sus deseos y necesidades, y que obligó a Chile a la búsqueda de caros acuerdos para poder avanzar en algo, respecto de la urgente y necesaria justicia social y de la reposición de derechos fundamentales e incluso cotidianos.

La democracia es tan simple de definir y a veces tan difícil de poner en práctica y de aplicar que bien merece que se evalúe el porqué.

Los oscuros deseos personales de más poder, los cálculos electorales por asegurar la perpetuidad, la búsqueda de privilegios, entre otras conductas, parecieran ser cuestiones inherentes a los comportamientos básicos de la especie humana.

Sin embargo, y en contraposición a aquello, la ciudadanía, que sistemáticamente ha venido no solo alejándose de la práctica política, sino también acrecentando la mala evaluación que hace de ella, aún tiene la voluntad de devolver la confianza a quienes ejercemos la actividad política, y tiene la esperanza de que estemos a la altura de lo que espera de nosotros.

Señor Presidente , independientemente de algunos reparos que legítimamente pudiera tener y expresar respecto del proyecto del Gobierno, tengo la más clara conciencia del hito histórico que estamos gestando hoy, así como del más profundo e inclaudicable compromiso con el mejoramiento de nuestra democracia.

Cuando guardemos las calculadoras y dejemos que cada chilena y chileno emita un voto de igual valor, cuando gane limpia, sencilla y claramente el candidato o candidata que la gente quiera, cuando el peso del simple voto se establezca sin distorsión, sin cálculo y sin más que la evaluación y decisión de los ciudadanos, podremos enorgullecernos de haber aportado a construir más democracia y participación.

Ojalá que Chile logre comprometerse; ojalá que nos acerquemos cada vez más a las uto-pías de la democracia plena y a la descentralización verdadera en todo el territorio. Ojalá que exista mayor cariño y respeto por las regiones, mayor respeto por la opinión individual y colectiva de los ciudadanos que no vivimos en Santiago, mayor consideración por los parlamentarios y representantes de todas las regiones de Chile, y no solo por los que están físicamente más cerca del Ejecutivo. La falta a ese principio también distorsiona la democracia. Los parlamentarios de regiones también podemos y debemos ser considerados en el mismo equipo.

El término del sistema binominal es parte fundamental en el proceso de recuperación de la confianza y del cariño perdidos por la comunidad. Así lo entiendo. Ya no podrá haber excusas entre electores y elegidos, porque con la decisión que hoy tomaremos, electores y elegidos tendremos que asumir nuevos compromisos y responsabilidades en virtud de la representación que nos entrega y obliga la ciudadanía.

Hoy, Chile tiene una esperanza distinta. Mañana tendremos nuevos y más generosos compromisos con la comunidad, porque el último enclave del autoritarismo desaparecerá con el proyecto que debatimos hoy.

Señor Presidente , comprometo mi voto con la democracia, comprometo mi voto por las chilenas y chilenos, ¡comprometo mi voto favorable a este proyecto que pone fin al binominal!

He dicho.

El señor BELLOLIO.-

Señor Presidente , hoy se aprobará el cambio al sistema binominal. Sin duda se trata de un cambio relevante, pero dista mucho de lo que algunos quieren hacer creer, como si este fuera el principal tema de conflicto en Chile. La verdad es que este cambio no es prioridad para nadie excepto para los políticos. En Chile se eligen 2.170 concejales, 345 alcaldes, 268 Cores, 120 diputados y 38 senadores. Sólo un 5,4 por ciento de las 2.941 autoridades de nuestro país se eligen a través del sistema binominal. En Chile se utilizan casi todos los sistemas de elección: proporcional, uninominal con dos vueltas y con una vuelta, y binominal que es semimayoritario.

Es difícil creer que esta va a ser la revolución que por si misma cambiará todos los problemas de la democracia o de representatividad del congreso. Esto no quiere decir, obviamente, que no sea importante como elegimos a nuestros diputados y senadores, pero ¡por favor!, bajémosle la grandilocuencia al cambio de este mecanismo electoral. Como dice el politólogo Giovanni Sartori : “Las instituciones y constituciones no pueden hacer milagros. Pero difícil será que tengamos buenos gobiernos sin buenos instrumentos institucionales.”.

Hablemos de gobernabilidad, de institucionalidad.

¿Es este proyecto un avance en estas materias? Mi impresión es que reducirá la gobernabilidad y podría teóricamente fortalecer la institucionalidad. Ningún sistema electoral es perfecto. El que tenemos hoy privilegia la estabilidad, la gobernabilidad la creación de bloques mayoritarios que permitan mas fácilmente llegar a un acuerdo beneficioso para el país.

Se ha dicho aquí, falsamente, que este es un sistema que subsidia a la centroderecha. Podemos tener distintas interpretaciones, distintos gustos, pero no distintos números. Y los números son elocuentes: es la Nueva Mayoría la que ha sido más veces beneficiada y en mayor magnitud. En 1989 sacaron una sobrerrepresentación de 6,01 por ciento y un 0,2 por ciento de subsidio comparado con la Alianza. En 1997, 6,98 por ciento de sobrerrepresentación y 4,07 por ciento de subsidio en comparación con la Alianza. En 2001, 3,7 por ciento de sobrerrepresentación y un 0,5 por ciento de subsidio. Y en 2014 un 8,1 por ciento de sobrerrepresentación y un 3,5 por ciento de subsidio. Es decir, de las últimas 7 elecciones, 4 veces el subsidio fue para la Nueva Mayoría.

¿A quién le quita mayor representación el sistema binominal? Cito al diputado Auth en su estudio de 2006: “Las dos coaliciones se benefician del hecho que las fuerzas menores e independientes no logren superar el umbral de acceso que impone el sistema”. ¿Cambia este punto el sistema propuesto por el gobierno? Prácticamente nada.

Habiendo despejado el mito, creo que el principal factor que hace sentido para cambiar el sistema binominal es que este cumplió un ciclo. “Sirvió para resolver las inquietudes de los 90 y del primer decenio del siglo XXI. Para no seguir pegados en el pasado podemos buscar un sistema mejor.”. Ese es el argumento institucional.

El problema, señor presidente , es que el sistema que hoy propone el gobierno no es mejor, sino peor. No mejora la gobernabilidad. Basta con leer a Ackerman y la literatura sobre la combinación de sistemas presidencialistas y sistemas electorales proporcionales para darse cuenta que con este cambio se reducen los incentivos para formar coaliciones estables que faciliten la agenda del gobierno, fomenta la fragmentación y aparición de partidos y finalmente traslada las decisiones mayoritarias a grupos pequeños y poco representativos. Es decir, subsidia a los que representan a pocos, no en la elección, sino en el ejercicio de sus funciones en el congreso. Y muy probablemente tampoco mejore la institucionalidad.

Uno de los mayores reclamos ciudadanos tiene que ver con que las prioridades políticas son diametralmente distintas a las urgencias sociales. Es decir, que estamos lejos, tanto en las discusiones como físicamente. Este proyecto solo exacerba ese punto. ¡Estaremos aún mas lejos!

En mi caso, al juntar el distrito de la provincia del Maipo con la provincia de Melipilla y Talagante se duplican los electores, llegando a más de 650.000, y con más de un millón de habitantes. Es imposible, entonces, tener contacto más permanente con los ciudadanos. Lo lamento por las comunas más pequeñas que no serán consideradas, como sí ocurre hoy.

En segundo lugar, quienes más han atacado la legitimidad del sistema binominal son las personas de la Nueva Mayoría. Para poder seguir subsistiendo como coalición necesitan oxígeno a la vena. Están muy tensionados por factores como los subpactos, el número de diputados, los distritos y el voto por lista. ¡Qué decir de la reforma educacional y tributaria!

Aquello que une a la izquierda y a la Nueva Mayoría es sólo el pasado. Cada vez que tienen un problema deben volver a lo tribal, a aquello que los hizo nacer como concertación. Entonces retroceden. Una y otra vez.

El problema, entonces, es que ya no tienen relato. Todo tiempo pasado fue mejor. El programa de gobierno que han elevado a la categoría de sagrado es lo mismo que escribió en 2009 Marco Enríquez Ominami, solo que ahora pusieron otra firma.

Como es eso es lo único que tienen en común -no tienen una relación política de confianza-, necesitan apegarse al programa de gobierno como si fuese un contrato entre ellos mismos. Un diputado dijo que no podía ser como la biblia, porque esta es interpretable. El programa no. Como ya no son capaces de unirse en torno a ideas de futuro y no hay cooperación, necesitan un contrato. Como quien arrienda una casa y le teme a quienes vienen a vivir a ella. Por eso hicieron este arreglo; por eso se agregó un diputado la noche antes de ingresar el proyecto; por eso no quieren reconocer el mayor gasto; por eso aumentan en 35 los diputados. ¿Para qué? Para lograr ponerse de acuerdo.

Señor presidente, este es un proyecto acordado entre los partidos de la Nueva Mayoría con tal de poder seguir unidos durante estos 4 años, un arreglo que nada tiene que ver con mayor calidad de la democracia o del Congreso.

Aunque a algunos no les guste, la UDI es el partido más grande con cualquier sistema de elección. Seguiremos trabajando para que más ciudadanos vuelvan a elegirnos, con humildad, con trabajo y con visión de futuro.

Por todo esto quiero manifestar que sí quiero un cambio al binominal. Siempre he sido partidario de un sistema uninominal, que es un sistema que ayudaba a la gobernabilidad, a la estabilidad y a la competencia. Aun más, era apropiado discutir sobre la necesidad de tener una o dos cámaras. Eso lo podríamos haber discutido, pero en cambio tenemos un simple arreglín para la Nueva Mayoría.

No apoyaremos el aumento de diputados. No apoyaremos un traje a la medida. Anuncio que votaré en contra el proyecto.

He dicho.

El señor MELO.-

Señor Presidente , quisiera expresar mi satisfacción por votar el proyecto que pone fin al sistema electoral binominal. Hoy, después de 25 años de recuperada la democracia, este Congreso Nacional le dice chao al sistema binominal, con lo que damos un paso significativo en pos de fortalecer la representatividad y la calidad de nuestra democracia.

Este proyecto establece un sistema electoral más democrático, de carácter proporcional, inclusivo y representativo. Con este cambio, se abre la oportunidad más concreta en 30 años de renovar nuestra democracia y sus instituciones. Tengo la certeza de que la calidad de nuestra política, la emergencia de nuevos liderazgos y los desafíos de prestigiar el quehacer de la política se beneficiaran de este necesario cambio en nuestro sistema político.

También estamos orgullosos de que la coalición liderada por nuestra presidenta Michelle Bachelet hoy dará cumplimiento a uno de los compromisos ejes que suscribimos con el pueblo de Chile, avanzando en esta reforma política transcendente para el país.

Así, con fuerza y convicción, reafirmamos lo dicho en campaña, en cuanto a que la elección de 2013 será la última bajo el sistema binominal.

Señor presidente , la discusión no solo tiene que ver con el cambio de un sistema, o de las reglas que nos damos; es también un debate sobre los principios democráticos, sobre el valor profundo de la soberanía popular y la legitimad de nuestra democracia; tiene que ver con la igualdad del voto, con la inclusión social y el término de la exclusión del parlamento de vastos sectores sociales que hoy por el efecto perverso de este sistema están fuera.

El debate ha mostrado el verdadero rostro de una Derecha que se aferra con desesperación a un sistema electoral que le permitió durante décadas, con tan solo un tercio de los votos, bloquear y vetar no solo toda alternativa de democratización en nuestro país; también, mediante este artilugio siniestro, se nos ha vedado legislar en pos de una mayor justicia social y derechos para las mayorías.

Hoy, en este hemiciclo, los discursos de la Derecha, en particular de la UDI, persisten en la idea de resguardar sus privilegios de clase mediante un mecanismo infame, único en el mundo, cuyo norte declarado explícitamente es que nada del legado de la dictadura pueda ser modificado sustancialmente.

A la UDI y a la Derecha les cuesta la democracia, el valor de la soberanía popular y el pluralismo democrático. Por eso persisten en escudarse en este sistema injusto que perpetúa por la vía de la representación política la desigualdad social de nuestro país.

Asistimos a la superación de este sistema electoral y a la emergencia de un sistema proporcional que recupere el vigor de nuestras instituciones democráticas.

Señor Presidente , la mayoría de Chile eligió un nuevo gobierno con una tarea clara: enfrentar las desigualdades sociales y transformar las actuales condiciones de vida de los chilenos y chilenas. Para eso tenemos el deber ético de prestigiar el quehacer cotidiano de la actividad pública y la calidad de la política. El fin del sistema binominal se enmarca en esta premisa ética y de principios.

Antes de terminar, permítanme una última reflexión.

El distrito N° 27, que represento, esto es las comunas de El Bosque, La Cisterna y San Ramón , como consecuencia del redistritaje, se verá ampliado hacia las comunas de Lo Espejo, San Miguel y Pedro Aguirre Cerda , aumentando con esto el número de representantes de 4 a 5. Hubiéramos querido que esta propuesta tuviera mayor proporcionalidad y equivalencia en relación con el redistritaje de comunas del barrio alto, que con universos electorales equivalentes con esta propuesta eligen 6 diputados.

Serán estos nuevos amarres y cotos a la democracia los que deberemos afrontar en los próximos años. Serán estas batallas las que me comprometo públicamente a librar, para que quienes nos sucedan en estos asientos nunca más sean elegidos como consecuencia de fórmulas alambicadas y anquilosadas, cuyo único norte ha sido coartar el mandato del pueblo de Chile.

He dicho.

El señor URRUTIA (don Osvaldo).-

Señor Presidente , es paradójico, extraño, chocante que los representantes en esta Cámara de aquellos partidos políticos que contribuyeron significativamente a la destrucción de la democracia en nuestro país, los que apoyaron y apoyan en la actualidad a gobiernos de Izquierda que tienen sometidos y subyugados a pueblos como Venezuela, Cuba o Corea, donde existen desde hace más de 55 años tiranías comunistas, que se han enquistado y transformado en dinastías feudales, hoy hablen de mejorar la democracia.

El proyecto ingresó el 6 de mayo de 2014. Se encuentra en primer trámite constitucional y ya cuenta con informe de la Comisión de Hacienda.

Según lo que dispone el mensaje, el proyecto de ley tiene por objeto sustituir el actual sistema electoral binominal por un sistema electoral proporcional, con la finalidad de fortalecer la representatividad en el Congreso Nacional y de esa forma posibilitar el ingreso a dicha institución de las corrientes más significativas de la sociedad. Para lo anterior se propone reducir en número de distritos y circunscripciones para que se elijan más escaños en cada uno de ellos, favoreciendo el ingreso al Parlamento de sectores de menor votación, pero suficientemente significativos de la sociedad.

Cualquier reforma debe llevarse adelante porque un sistema no cumple con los objetivos que se tuvieron a la vista en el momento de su implementación, o bien, porque surgen nuevas necesidades y requerimientos que apelan a su modificación. Sin embargo, las razones que el Ejecutivo esgrime en el mensaje no se hacen cargo de esta premisa básica y sólo hacen referencias odiosas que pretenden borrar todo lo que nuestro país avanzó durante 24 años con los acuerdos políticos entre la Concertación y la Alianza que el sistema binominal propició.

Dicho esto, ahora estamos discutiendo la reforma al sistema electoral con un proyecto que ha presentado la coalición ganadora en democracia. Modificar el sistema no es un dogma para nosotros: siempre apoyaremos una reforma positiva, pero en los términos en que está planteada genera muchas inquietudes en la ciudadanía y en todo el espectro político.

No quiero ahondar en temas que ya se han hablado en esta Sala, tales como el costo real que el proyecto tiene para las arcas fiscales por el aumento del número de parlamentarios, o las cuotas de género.

Un tema que me preocupa sobremanera es el distanciamiento que este sistema generará entre la ciudadanía y sus políticos. Esto no es menor, ya que según lo que argumentan quienes defienden este proyecto, uno de sus principales objetivos es corregir la sobre o nula representación que el sistema binominal genera en ciertos sectores políticos. Analicemos esta afirmación.

La disminución de 60 a 28 distritos electorales llevará a la creación de megadistritos. Con nuevos distritos de hasta 23 comunas aumentará de manera considerable la extensión territorial que cada candidato deberá representar. Los efectos de esta modificación implicarán, por una parte, mayores gastos de campaña, generando mayores barreras de entrada para que un ciudadano común y corriente pueda acceder a un escaño en esta Cámara. Nuevamente, la clase política se sigue protegiendo a sí misma y aumenta el descontento que la ciudadanía tiene con sus representantes.

El nuevo sistema electoral es antirregionalista. Nuevamente el centralismo exacerbado se impone a la voz de las regiones, aumentando la representación de la capital tanto en senadores como en diputados. Parece que varios colegas de la Nueva Mayoría están muy contentos con esta modificación, puesto que no tendrán que moverse de Santiago para ejercer sus funciones. Con la aprobación de esta reforma me gustaría saber cuántos de los actuales parlamentarios que representan a regiones se postularán por Santiago en las próximas elecciones. Estoy seguro que varios colegas que están en esta Sala optarán por las bondades que este nuevo sistema les ofrece.

En otro orden de cosas, en la Comisión de Constitución se discutió latamente sobre la proporcionalidad, razón fundamental para sustituir el sistema electoral, en atención a la desproporcionalidad que tendría el actual sistema. En palabras de Andrés Tagle , el aumento significativo de 35 diputados no mejora la desproporcionalidad. Incluso, en otras propuestas, como la del gobierno anterior que no contemplaba aumento de parlamentarios, se alcanzan cifras similares de proporcionalidad.

En el mensaje se esgrime que la igualdad en el voto es el principio rector del proyecto. Hoy, nuestro sistema privilegia la representación regional con el 73 por ciento en la Cámara de Diputados y con el 90 por ciento en el Senado, dado que las regiones solo representan el sesenta por ciento de la población. Por ello se produce la fuerte desigualdad de voto que hoy existe. Otorgar mayor representación a territorios, en algunos casos extremos, con una baja población electoral, es lo que provoca la distorsión a la que se hizo referencia. Esa distorsión se puede medir de varias formas; sin embargo, la forma más sencilla de hacerla consiste en medir la diferencia de electores por diputado , entre el que tiene más electores por diputado y el que tiene menos. El sistema binominal tiene una diferencia de 6,3 veces. La propuesta del gobierno del ex-Presidente Piñera, sin aumentar diputados, baja a 4,6, por el solo hecho de fusionar distritos. La propuesta del Gobierno de la Presidenta Bachelet la baja a 3,9 veces, pero con un aumento significativo de diputados. El acuerdo Renovación Nacional-Democracia Cristiana la bajaba mucho más aún, pero con el aumento de solo catorce diputados.

Así, en la propuesta del Gobierno actual, el aumento de diputados no se está utilizando para mejorar la igualdad del voto, como se ha sostenido especialmente en el mensaje. Además, no se está repartiendo correctamente ese incremento hacia los distritos que tienen mayor número de electores y, por lo tanto, tienen mayores méritos para recibir este aumento.

Por todo lo anterior, creo que esta reforma al sistema binominal no es buena para Chile. Sólo debilitará la democracia y la participación ciudadana en la actividad política, aumentando el descontento que nuestros compatriotas sienten por esta Cámara. Si queremos sustituir el sistema binominal hagámoslo en serio, escuchando a todos los actores y consensuando un sistema que fortalezca nuestras instituciones republicanas.

Diputados de la Nueva Mayoría abrirán la puerta para que personas de la farándula y con mucho dinero lleguen al Parlamento. Espero que se hagan responsables de esa decisión.

He dicho.

El señor SOTO .-

Señor presidente , hace ya 25 años el pueblo de Chile nos entregó un mandato claro, directo y explícito: democratizar nuestra sociedad y enfrentar los cerrojos o candados que reflejan el verdadero espíritu de la constitución de 1980, que aún rige los destinos de nuestro país.

“Una Constitución que no importe quien gobierne porque nadie podría hacer algo distinto a lo que haríamos nosotros”, decía Jaime Guzmán para perpetuar los diferentes enclaves autoritarios.

Como piedra fundamental de este modelo tramposo se erige el sistema electoral binominal, que sobrerrepresenta a la minoría y subrepresenta a la mayoría. De hecho, otorga a quienes obtienen no más que un tercio más uno de los votos el artificial poder de empatar a la mayoría. De esta manera, se impide a la mayoría alcanzar los altos quorum exigidos para modificar la institucionalidad, estableciendo un subsidio o privilegio antidemocrático a la minoría, ejercido mediante el veto o bloqueo de reformas importantes en todos los ámbitos.

Ha sido la Derecha, persistente y poderosa minoría, aislada y aferrada en este poder de bloqueo, quien determinó qué cambios y cuándo se hacían. Como resultado, para millones de chilenos el acto de votar fue perdiendo todo sentido, porque entienden que nada importante se juega en una elección parlamentaria.

Ello explica que la participación ciudadana en las elecciones haya bajado considerablemente y descendido a niveles dramáticos. El gráfico de participación electoral es descendente: esta bajó de aproximadamente 86 por ciento en 1989 a 44 por ciento en 2013. Como consecuencia de ello, Chile es el segundo país con mayor abstención electoral de América Latina y el cuarto de todos los que conforman la OCDE. Si a ello le sumamos la sostenida baja del nivel de confianza de los ciudadanos en los partidos políticos, en el Congreso y en nuestras instituciones democráticas, tenemos una combinación que puede ser explosiva.

La vieja Concertación sin duda tiene responsabilidades que asumir respecto a este tema. Primero porque al final del día hubo cierta resignación, una cierta conformidad, ya que a pesar de haber contado con varias mayorías, nunca obtuvo el apoyo de parlamentarios suficientes para eliminar el régimen binominal y los quorum supramayoritarios.

Pero, debemos reconocer que, también, hubo asimilación al modelo y en algunos ámbitos las políticas de la Concertación se hicieron gemelas de la mirada de la Derecha, a tal punto que a muchos les costaba distinguir -y a algunos les cuesta todavía- entre la mirada de país que tuvo la vieja Concertación y la que tiene la Derecha conservadora.

Millones de chilenos y chilenas nos apuntaron con el dedo diciendo que daba lo mismo quien gobernara.

Ahora, en cambio, la Nueva Mayoría, de manera explícita y coherente, nace para realizar las tareas pendientes que dejó la vieja Concertación , para realizar los cambios que no quiso o no pudo hacer. Para ello se nos entregó una mayoría para realizar estos cambios, mayoría nunca vista en nuestro Parlamento en los últimos 25 años.

Hoy, nos hemos decidido a dar el paso. Tal y como se prometió en nuestro programa de gobierno, de aprobase esta reforma, la elección de 2013 será la última realizada bajo el sistema binominal.

Hoy, apoyados por más del 60 por ciento de los electores, con 3/5 de la Cámara de Diputados, enfrentamos con decisión y convicción el cerrojo maestro del control del sistema político y económico implantado por la dictadura, los cuales han sido protegidos y cultivados por la Constitución.

Quiero invitar a todos los colegas a que le digamos sí a construir una democracia más representativa, más legítima y más pluralista, que refleje la diversidad del pueblo chileno, con la inclusión de más mujeres, más jóvenes, más debate y participación; quiero invitar a que digamos, en nombre de millones de chilenos excluidos, desafectados y decepcionados de nuestra democracia, “chao binominal”.

El sistema proporcional, moderado e inclusivo que lo sustituye tiene varias ventajas y mejoras; sobre ellas ya se ha dicho mucho en esta Sala. Solo quisiera destacar dos avances importantes que contempla el nuevo sistema proporcional.

Una es la acción positiva respecto de las mujeres que contempla esta ley, en cumplimiento de los acuerdos de la Convención sobre la Eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer (Cedaw), de Naciones Unidas. Tenía que ser una mujer, nuestra Presidenta Bachelet , la que propusiera a esta Corporación una ley de cuotas para asegurar por fin la participación de las mujeres en la actividad política y promover la inclusión de las mujeres en todas las áreas de la sociedad.

Chile será más justo y diverso con la mayor presencia de mujeres en los espacios donde se toman decisiones.

Finalmente, en materia de votaciones, hemos logrado, por la vía de indicaciones, afrontar uno de los grandes problemas que enfrentan los sistemas proporcionales con voto personalizado. En ellos se produce una competencia muy fuerte dentro de las listas para obtener un mayor número de votos y así poder resultar electo. Lamentablemente, lo que se suele resaltar son atributos personales, sonrisas y simpatías, relaciones personales directas con su electorado, lo que incentiva relaciones clientelares que tan mal le hacen a nuestra democracia. Para evitar aquello, proponemos un sistema de votación alternativo, que permita al elector mediante un único voto, un único sufragio -así, además, se amplía su libertad electoral-, optar por un candidato, o bien por la lista. Las ventajas de un sistema de votaciones como el descrito se traducirán en el incentivo a las coaliciones, partidos y candidatos a relevar la cooperación dentro de la lista y poner el foco y acento de la competencia en el programa y en las ideas matrices que sustentarán en su gestión. Esta innovación lo que hará, es ampliar la libertad del elector e incentivar el debate de ideas.

Señor presidente , el proyecto, que espero que aprobemos, quizás constituye una revolución electoral en nuestra democracia. Un cambio de esta magnitud solo puede ser comparado con el fin de los senadores designados, proyecto que también fue objeto de una crítica brutal, falaz y descomedida por parte del sector político que profitó por más de 15 años de ese subsidio electoral, obtenido por la fuerza o por mecanismos que cuesta mucho que se califiquen como democráticos.

Nos hemos demorado 25 años. Muchos de quienes contribuyeron a la recuperación de la democracia nos miran ya desde el otro mundo. Después de votar esta reforma podremos parafrasear a Martin Luther King y decir: “de esta montaña de exclusión y autoritarismo, que es la Constitución de 1980, hemos logrado labrar una piedra de esperanza.”.

He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

En votación general la letra b) del número 1), y los números …

(Manifestaciones en las tribunas)

(Suenan los timbres silenciadores)

(Manifestaciones en las tribunas)

Advierto a los asistentes a las tribunas que durante el proceso de votación no permitiremos ningún tipo de manifestación.

Corresponde votar en general la letra b) del número 1), y los números 5), 6), 7), 8), 9) y 16) del artículo 1°, y los artículos 2° y 3°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras y señores diputados.

También se entenderá aprobado el artículo 4°, por ser materia propia de ley simple o común.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 86 votos; por la negativa, 28 votos. No hubo abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobados.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Becker Alvear Germán; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Sommerhoff Felipe; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Gahona Salazar Sergio; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hoffmann Opazo María José; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Rivas Sánchez Gaspar; Sandoval Plaza David; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Ward Edwards Felipe.

-Aplausos en la Sala y en las tribunas.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar en general el artículo 1°, número 1), letras a), c) y d); números 2), 3), 4), 10), 11), 12), 13), 14), 15), 17) y 18), que requieren para su aprobación el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 88 votos; por la negativa, 27 votos. Hubo 2 abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobados.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Becker Alvear Germán; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Edwards Silva José Manuel; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Sommerhoff Felipe; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Gahona Salazar Sergio; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hoffmann Opazo María José; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Sandoval Plaza David; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvieron los diputados señores:

Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Rivas Sánchez Gaspar.

El señor CORNEJO (Presidente).-

A continuación, corresponde iniciar la votación particular del proyecto.

Corresponde votar los números 3), 15), 17) y 18) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 100 votos; por la negativa, 13 votos. Hubo 2 abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobados.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Coloma Alamos Juan Antonio; Cornejo González Aldo; De Mussy Hiriart Felipe; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Gahona Salazar Sergio; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hernando Pérez Marcela; Hoffmann Opazo María José; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Molina Oliva Andrea; Monsalve Benavides Manuel; Morales Muñoz Celso; Morano Cornejo Juan Enrique; Nogueira Fernández Claudia; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Sandoval Plaza David; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Silva Méndez Ernesto; Soto Ferrada Leonardo; Squella Ovalle Arturo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Trisotti Martínez Renzo; Tuma Zedan Joaquín; Ulloa Aguillón Jorge; Urízar Muñoz Christian; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías; Ward Edwards Felipe.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Becker Alvear Germán; Berger Fett Bernardo; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; García García René Manuel; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Sabat Fernández Marcela; Santana Tirachini Alejandro; Verdugo Soto Germán.

-Se abstuvieron los diputados señores:

Núñez Urrutia Paulina; Rivas Sánchez Gaspar.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar la letra a) del número 1) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados, respecto de la cual se ha solicitado votación separada.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 115 votos; por la negativa, 0 voto. Hubo 1 abstención.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Aprobada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Coloma Alamos Juan Antonio; Cornejo González Aldo; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hernando Pérez Marcela; Hoffmann Opazo María José; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morales Muñoz Celso; Morano Cornejo Juan Enrique; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Silva Méndez Ernesto; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Trisotti Martínez Renzo; Tuma Zedan Joaquín; Ulloa Aguillón Jorge; Urízar Muñoz Christian; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvo el diputado señor Rivas Sánchez Gaspar.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el inciso primero de la letra b) del número 1) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 88 votos; por la negativa, 1 voto. Hubo 28 abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Becker Alvear Germán; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Edwards Silva José Manuel; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Sommerhoff Felipe; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Se abstuvieron los diputados señores:

-Votó por la negativa el diputado señor Ulloa Aguillón Jorge. Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Gahona Salazar Sergio; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hoffmann Opazo María José; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Rivas Sánchez Gaspar; Sandoval Plaza David; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el inciso segundo de la letra b) del número 1) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados, respecto del cual se ha solicitado votación separada.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 12 votos; por la negativa, 74 votos. Hubo 31 abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Rechazado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Becker Alvear Germán; Berger Fett Bernardo; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; García García René Manuel; Kast Sommerhoff Felipe; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Santana Tirachini Alejandro.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Cicardini Milla Daniella; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Rivas Sánchez Gaspar; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Se abstuvieron los diputados señores:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Chávez Velásquez Marcelo; Coloma Alamos Juan Antonio; Cornejo González Aldo; De Mussy Hiriart Felipe; Gahona Salazar Sergio; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hoffmann Opazo María José; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Urrutia Paulina; Sandoval Plaza David; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado señor José Manuel Edwards.

El señor EDWARDS .-

Señor Presidente , quiero pedir que agregue mi voto favorable en la primera votación en general. Como no me dio la palabra, no pude decirlo antes.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Señor diputado , no puedo agregar su voto, pero dejaré constancia en el acta. Lo mismo sucede con el diputado Leopoldo Pérez y la diputada Paulina Núñez.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar la letra c) del número 1) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados, respecto de la cual se ha solicitado votación separada.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 116 votos; por la negativa, 0 voto. Hubo 1 abstención.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Aprobada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Coloma Alamos Juan Antonio; Cornejo González Aldo; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hernando Pérez Marcela; Hoffmann Opazo María José; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morales Muñoz Celso; Morano Cornejo Juan Enrique; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Silva Méndez Ernesto; Soto Ferrada Leonardo; Squella Ovalle Arturo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Trisotti Martínez Renzo; Tuma Zedan Joaquín; Ulloa Aguillón Jorge; Urízar Muñoz Christian; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvo el diputado señor Rivas Sánchez Gaspar.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar la letra d) del número 1) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados, respecto de la cual se ha solicitado votación separada.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 114 votos; por la negativa, 0 voto. Hubo 2 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Aprobada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Coloma Alamos Juan Antonio; Cornejo González Aldo; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hernando Pérez Marcela; Hoffmann Opazo María José; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monsalve Benavides Manuel; Morales Muñoz Celso; Morano Cornejo Juan Enrique; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Silva Méndez Ernesto; Soto Ferrada Leonardo; Squella Ovalle Arturo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Trisotti Martínez Renzo; Tuma Zedan Joaquín; Ulloa Aguillón Jorge; Urízar Muñoz Christian; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvieron los diputados señores:

Rathgeb Schifferli Jorge; Rivas Sánchez Gaspar.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el número 2) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados, respecto del cual se ha solicitado votación separada.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 90 votos; por la negativa, 26 votos. No hubo abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Becker Alvear Germán; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Edwards Silva José Manuel; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Sommerhoff Felipe; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Rivas Sánchez Gaspar; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Gahona Salazar Sergio; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hoffmann Opazo María José; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Sandoval Plaza David; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Ward Edwards Felipe.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el número 4) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados, respecto del cual se ha solicitado votación separada.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 116 votos; por la negativa, 0 voto. Hubo 1 abstención.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Coloma Alamos Juan Antonio; Cornejo González Aldo; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hernando Pérez Marcela; Hoffmann Opazo María José; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morales Muñoz Celso; Morano Cornejo Juan Enrique; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Silva Méndez Ernesto; Soto Ferrada Leonardo; Squella Ovalle Arturo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Trisotti Martínez Renzo; Tuma Zedan Joaquín; Ulloa Aguillón Jorge; Urízar Muñoz Christian; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvo el diputado señor Rivas Sánchez Gaspar.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el número 5) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados, respecto del cual se ha solicitado votación separada.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 115 votos; por la negativa, 0 voto. Hubo 1 abstención.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Coloma Alamos Juan Antonio; Cornejo González Aldo; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hernando Pérez Marcela; Hoffmann Opazo María José; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morales Muñoz Celso; Morano Cornejo Juan Enrique; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Silva Méndez Ernesto; Soto Ferrada Leonardo; Squella Ovalle Arturo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Trisotti Martínez Renzo; Tuma Zedan Joaquín; Ulloa Aguillón Jorge; Urízar Muñoz Christian; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvo el diputado señor Rivas Sánchez Gaspar.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar la letra a) del número 6) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 90 votos; por la negativa, 27 votos. No hubo abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Aprobada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Becker Alvear Germán; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Edwards Silva José Manuel; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Sommerhoff Felipe; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Rivas Sánchez Gaspar; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Gahona Salazar Sergio; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hoffmann Opazo María José; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Sandoval Plaza David; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Ward Edwards Felipe.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar la letra b) del número 6) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados, respecto de la cual se ha solicitado votación separada.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 117 votos. No hubo votos por la negativa ni abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Aprobada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Coloma Alamos Juan Antonio; Cornejo González Aldo; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hernando Pérez Marcela; Hoffmann Opazo María José; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morales Muñoz Celso; Morano Cornejo Juan Enrique; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Rivas Sánchez Gaspar; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Silva Méndez Ernesto; Soto Ferrada Leonardo; Squella Ovalle Arturo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Trisotti Martínez Renzo; Tuma Zedan Joaquín; Ulloa Aguillón Jorge; Urízar Muñoz Christian; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías; Ward Edwards Felipe.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el número 7), nuevo,

Indicación renovada de los diputados señores Jackson y Mirosevic, para intercalar en el artículo 1° un número 7), nuevo, cuyo tenor consta en sus pupitres electrónicos. Para su aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 74 votos; por la negativa, 39 votos. Hubo 4 abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Lemus Aracena Luis; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Rivas Sánchez Gaspar; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hoffmann Opazo María José; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvieron los diputados señores:

Kast Sommerhoff Felipe; León Ramírez Roberto; Núñez Urrutia Paulina; Sabat Fernández Marcela.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el número 7) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 73 votos; por la negativa, 41 votos. Hubo 3 abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hoffmann Opazo María José; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Sabat Fernández Marcela; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvieron los diputados señores:

Núñez Urrutia Paulina; Rivas Sánchez Gaspar; Silber Romo Gabriel.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el número 8) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 72 votos; por la negativa, 42 votos. Hubo 3 abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Ma-tías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hoffmann Opazo María José; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Urrutia Paulina; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Sabat Fernández Marcela; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvieron los diputados señores:

Chahin Valenzuela Fuad; Rivas Sánchez Gaspar; Silber Romo Gabriel.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el número 9) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 74 votos; por la negativa, 42 votos. No hubo abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hoffmann Opazo María José; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Urrutia Paulina; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Sabat Fernández Marcela; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el número 10) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 115 votos; por la negativa, 1 voto. Hubo 1 abstención.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Coloma Alamos Juan Antonio; Cornejo González Aldo; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hernando Pérez Marcela; Hoffmann Opazo María José; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morales Muñoz Celso; Morano Cornejo Juan Enrique; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Silva Méndez Ernesto; Soto Ferrada Leonardo; Squella Ovalle Arturo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Trisotti Martínez Renzo; Tuma Zedan Joaquín; Ulloa Aguillón Jorge; Urízar Muñoz Christian; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías; Ward Edwards Felipe.

-Votó por la negativa la diputada señora Sabat Fernández Marcela.

-Se abstuvo el diputado señor Rivas Sánchez Gaspar.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar la indicación renovada que sustituye el artículo 178 de la ley N° 18.700, del número 11) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados.

Cabe señalar que si se rechaza la indicación se debe votar el artículo.

El señor Secretario va a dar lectura a la indicación.

El señor LANDEROS ( Secretario ).-

Señor Presidente , la indicación, presentada por varios diputados de la Unión Demócrata Independiente, tiene por objeto sustituir el artículo 178 de la ley N° 18.700, por el siguiente:

“Artículo 178.- La Cámara de Diputados se compone de 120 miembros.

Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá 30 distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”.

El señor CORNEJO (Presidente).-

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 31 votos; por la negativa, 81 votos. Hubo 4 abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Rechazada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Castro González Juan Luis; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Farías Ponce Ramón; Gahona Salazar Sergio; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hoffmann Opazo María José; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Sandoval Plaza David; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Se abstuvieron los diputados señores:

Becker Alvear Germán; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Rivas Sánchez Gaspar; Sabat Fernández Marcela.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el número 11) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 74 votos; por la negativa, 40 votos. Hubo 2 abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Urrutia Paulina; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Sabat Fernández Marcela; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvieron los diputados señores:

Edwards Silva José Manuel; Rivas Sánchez Gaspar.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Corresponde votar el número 12).

En votación la indicación renovada que sustituye el artículo 179 de la ley N° 18.700, del número 12) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados.

El señor Secretario va a dar lectura a la indicación.

El señor LANDEROS (Secretario).-

Señor Presidente, se refiere a los treinta distritos que fueron propuestos, con motivo de la indicación anterior que fue rechazada.

El señor CORNEJO (Presidente).-

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 27 votos; por la negativa, 86 votos. Hubo 2 abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Rechazada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Gahona Salazar Sergio; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Sandoval Plaza David; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Ward Edwards Felipe.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías.

-Se abstuvieron los diputados señores:

Becker Alvear Germán; Rivas Sánchez Gaspar.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el número 12) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 73 votos; por la negativa, 41 votos. No hubo abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Urrutia Paulina; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Sabat Fernández Marcela; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el número 13) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados.

Tiene la palabra el diputado señor Nicolás Monckeberg.

El señor MONCKEBERG (don Nicolás).-

Señor Presidente , solo para dejar constancia de mi reserva de constitucionalidad respecto de este artículo.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Muy bien, señor diputado.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 72 votos; por la negativa, 41 votos. Hubo 2 abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Urrutia Paulina; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Sabat Fernández Marcela; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvieron los diputados señores:

Boric Font Gabriel; Rivas Sánchez Gaspar.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar la indicación renovada que sustituye el artículo 180 de la ley N° 18.700, del número 14) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados.

Cabe señalar que el artículo 180 a que se refiere la indicación es respecto de la composición del Senado.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 26 votos; por la negativa, 88 votos. Hubo 1 abstención.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Rechazada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Gahona Salazar Sergio; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Sandoval Plaza David; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Ward Edwards Felipe.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Becker Alvear Germán; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Sommerhoff Felipe; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías.

-Se abstuvo el diputado señor Rivas Sánchez Gaspar.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el número 14) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 73 votos; por la negativa, 41 votos. Hubo 1 abstención.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Urrutia Paulina; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Sabat Fernández Marcela; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvo el diputado señor Rivas Sánchez Gaspar.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el número 16) del artículo 1°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 113 votos; por la negativa, 0 voto. Hubo 1 abstención.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Coloma Alamos Juan Antonio; Cornejo González Aldo; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Espejo Yaksic Sergio; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morales Muñoz Celso; Morano Cornejo Juan Enrique; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Silva Méndez Ernesto; Soto Ferrada Leonardo; Squella Ovalle Arturo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Trisotti Martínez Renzo; Tuma Zedan Joaquín; Ulloa Aguillón Jorge; Urízar Muñoz Christian; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvo el diputado señor Rivas Sánchez Gaspar.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el artículo 2° del proyecto, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 72 votos; por la negativa, 40 votos. Hubo 1 abstención.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kast Sommerhoff Felipe; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Urrutia Paulina; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Sabat Fernández Marcela; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvo el diputado señor Rivas Sánchez Gaspar.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Número nuevo al artículo 2°.

Indicación renovada de los diputados señores Jackson y Mirosevic, para sustituir el artículo 16 de la ley N°19.884, de cuyo tenor dará lectura el señor Secretario .

El señor LANDEROS ( Secretario ).-

“Artículo 16.- Los aportes de campaña electoral serán públicos y se consignará la identidad del aportante, salvo las excepciones que señale esta ley.”.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Arturo Squella.

El señor SQUELLA.-

Señor Presidente , quiero cuestionar la admisibilidad de esta y de las próximas dos indicaciones, pues están totalmente fuera de la idea matriz del proyecto.

Si fueron declaradas admisibles las indicaciones, pido que se vote dicha declaración de admisibilidad.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

En votación la declaración de admisibilidad de la indicación.

Quienes voten a favor apoyan la declaración de admisibilidad de la indicación, y quienes voten en contra, apoyan la inadmisibilidad.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 72 votos; por la negativa, 39 votos. Hubo 1 abstención.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Aprobada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Sommerhoff Felipe; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Rivas Sánchez Gaspar; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Urrutia Paulina; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvo la diputada señora Sabat Fernández Marcela.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Se confirma la admisibilidad de la indicación.

El señor SQUELLA.-

Hago reserva de constitucionalidad en lo que respecta a esta indicación y a las siguientes.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Muy bien, señor diputado.

Corresponde votar la indicación de los diputados señores Jackson y Mirosevic, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 73 votos; por la negativa, 33 votos. Hubo 4 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Aprobada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Sommerhoff Felipe; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Rivas Sánchez Gaspar; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Coloma Alamos Juan Antonio; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvieron los diputados señores:

De Mussy Hiriart Felipe; Núñez Urrutia Paulina; Sabat Fernández Marcela; Sandoval Plaza David.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Número nuevo al artículo 2°.

Indicación renovada de los diputados señores Jackson y Mirosevic, para sustituir el artículo 17 de la ley N°19.884, de cuyo tenor dará lectura el señor Secretario .

El señor LANDEROS ( Secretario ).-

La indicación dice lo siguiente:

“Artículo 17.- Podrán ser anónimos todos los aportes privados en dinero cuyo importe no supere el equivalente en pesos a diez unidades de fomento. No obstante, cualquier aportante podrá solicitar se consigne su identidad y el monto de su contribución.

En todo caso, durante el período de campaña electoral, ningún candidato o partido político podrá recibir, por concepto de aportes anónimos, más del veinte por ciento del límite de gastos electorales definido en esta ley.

No podrán existir aportes reservados.”.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Arturo Squella.

El señor SQUELLA.-

Señor Presidente , cuestiono la admisibilidad de esta indicación y de la siguiente. Por lo tanto, sugiero que se vote en conjunto la declaración de admisibilidad de ambas indicaciones.

El seño CORNEJO (Presidente).-

Muy bien, señor diputado.

En votación la declaración de admisibilidad de esta indicación y de la siguiente.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 72 votos; por la negativa, 38 votos. Hubo 2 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Aprobada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Rivas Sánchez Gaspar; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Urrutia Paulina; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvieron los diputados señores:

Sabat Fernández Marcela; Sandoval Plaza David.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar la indicación renovada de los diputados señores Jackson y Mirosevic, para sustituir el artículo 17 de la ley N°19.884.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 72 votos; por la negativa, 35 votos. Hubo 4 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Aprobada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Rivas Sánchez Gaspar; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Urrutia Paulina; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvieron los diputados señores:

De Mussy Hiriart Felipe; Kast Sommerhoff Felipe; Sabat Fernández Marcela; Sandoval Plaza David.

El señor SQUELLA.-

Señor Presidente, hago reserva de constitucionalidad.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Muy bien, señor diputado.

Tiene la palabra el diputado José Antonio Kast .

El señor KAST (don José Antonio).-

Señor Presidente , ruego tomar nota de los diputados que no están votando y aplicarles multa o pasarlos a la Comisión de Ética. En efecto, varios están en la Sala y no votaron.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Así se hará.

Indicación renovada de los diputados señores Jackson y Mirosevic, para sustituir el artículo 24 de la ley N° 19.884, de cuyo tenor dará lectura el señor Secretario .

El señor LANDEROS ( Secretario ).-

La indicación tiene por objeto sustituir el artículo 24 de la ley N°19.884, por el siguiente:

“Artículo 24.- Prohíbense los aportes de campaña electoral provenientes de personas naturales extranjeras, con excepción de los efectuados por extranjeros habilitados legalmente para ejercer en Chile el derecho a sufragio. Prohíbense también los aportes de campaña electoral provenientes de toda persona jurídica a excepción del Fisco, de acuerdo a lo prescrito en el párrafo 2° de la presente ley, y de los partidos políticos.”.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar la indicación, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 70 votos; por la negativa, 32 votos. Hubo 8 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Aprobada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Rivas Sánchez Gaspar; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; Edwards Silva José Manuel; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Urrutia Paulina; Paulsen Kehr Diego; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvieron los diputados señores:

Bellolio Avaria Jaime; De Mussy Hiriart Felipe; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Kast Sommerhoff Felipe; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Sabat Fernández Marcela; Sandoval Plaza David.

El señor KAST (don José Antonio).-

Señor Presidente , ruego tomar nota de los diputados que no votaron y pasarlos a la Comisión de Ética.

La señora CARVAJAL (doña Loreto).-

Señor Presidente , pido que se agregue mi voto, ya que no se reflejó en el tablero.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Señora diputada , no puedo agregar votos, pero quedará constancia en acta de su petición.

El señor SQUELLA.-

Señor Presidente, hago reserva de constitucionalidad.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar la letra a) del número 1) del artículo 3°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados, respecto de la cual se pidió votación separada.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 75 votos; por la negativa, 40 votos. No hubo abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Aprobada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Sommerhoff Felipe; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Urrutia Paulina; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Sabat Fernández Marcela; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

El señor KAST (don José Antonio).-

Señor Presidente , insisto en que haga votar a los diputados presentes en la Sala, porque en esta votación de nuevo algunos no votaron. Por lo tanto, le ruego aplicar el artículo respectivo.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Señor diputado , la Mesa ha tomado nota de su solicitud.

Corresponde votar la letra b) del número 1) del artículo 3°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados, respecto de la cual se ha solicitado votación separada.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 87 votos; por la negativa, 26 votos. Hubo 1 abstención.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Aprobada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Edwards Silva José Manuel; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Sommerhoff Felipe; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Rivas Sánchez Gaspar; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Sandoval Plaza David; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvo el diputado señor Rathgeb Schifferli Jorge.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el número 2) del artículo 3°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados, respecto del cual se ha solicitado votación separada.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 76 votos; por la negativa, 40 votos. No hubo abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Sommerhoff Felipe; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Rivas Sánchez Gaspar; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Urrutia Paulina; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Sabat Fernández Marcela; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el número 3) del artículo 3°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 89 votos; por la negativa, 26 votos. No hubo abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Becker Alvear Germán; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Sommerhoff Felipe; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Rivas Sánchez Gaspar; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Verdugo Soto Germán; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Gahona Salazar Sergio; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Sandoval Plaza David; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Ward Edwards Felipe.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar la letra a) del número 4) del artículo 3°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 86 votos; por la negativa, 29 votos. Hubo 1 abstención.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Aprobada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Edwards Silva José Manuel; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Sommerhoff Felipe; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rathgeb Schifferli Jorge; Rincón González Ricardo; Rivas Sánchez Gaspar; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Sandoval Plaza David; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvo la diputada señora Núñez Urrutia Paulina.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar la letra b) del número 4) del artículo 3°, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 85 votos; por la negativa, 29 votos. Hubo 2 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Aprobada.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Berger Fett Bernardo; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; García García René Manuel; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Sommerhoff Felipe; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Núñez Urrutia Paulina; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Paulsen Kehr Diego; Pérez Arriagada José; Pérez Lahsen Leopoldo; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Rivas Sánchez Gaspar; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Sabat Fernández Marcela; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Santana Tirachini Alejandro; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Becker Alvear Germán; Bellolio Avaria Jaime; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Sandoval Plaza David; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

-Se abstuvieron los diputados señores:

Edwards Silva José Manuel; Rathgeb Schifferli Jorge.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Corresponde votar el artículo 4°, que trata materias propias de ley simple o común.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 75 votos; por la negativa, 39 votos. No hubo abstenciones.

El señor CORNEJO (Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio; Álvarez Vera Jenny; Andrade Lara Osvaldo; Arriagada Macaya Claudio; Auth Stewart Pepe; Boric Font Gabriel; Browne Urrejola Pedro; Campos Jara Cristián; Cariola Oliva Karol; Carmona Soto Lautaro; Carvajal Ambiado Loreto; Castro González Juan Luis; Ceroni Fuentes Guillermo; Chahin Valenzuela Fuad; Chávez Velásquez Marcelo; Cicardini Milla Daniella; Cornejo González Aldo; Espejo Yaksic Sergio; Espinosa Monardes Marcos; Espinoza Sandoval Fidel; Farcas Guendelman Daniel; Farías Ponce Ramón; Fernández Allende Maya; Flores García Iván; Fuentes Castillo Iván; Girardi Lavín Cristina; Godoy Ibáñez Joaquín; González Torres Rodrigo; Gutiérrez Gálvez Hugo; Hernando Pérez Marcela; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge; Jackson Drago Giorgio; Jaramillo Becker Enrique; Jarpa Wevar Carlos Abel; Jiménez Fuentes Tucapel; Kast Sommerhoff Felipe; Lemus Aracena Luis; León Ramírez Roberto; Letelier Norambuena Felipe; Lorenzini Basso Pablo; Melo Contreras Daniel; Meza Moncada Fernando; Mirosevic Verdugo Vlado; Monsalve Benavides Manuel; Morano Cornejo Juan Enrique; Núñez Arancibia Daniel; Núñez Lozano Marco Antonio; Ojeda Uribe Sergio; Ortiz Novoa José Miguel; Pacheco Rivas Clemira; Pascal Allende Denise; Pérez Arriagada José; Pilowsky Greene Jaime; Poblete Zapata Roberto; Provoste Campillay Yasna; Rincón González Ricardo; Robles Pantoja Alberto; Rocafull López Luis; Rubilar Barahona Karla; Sabag Villalobos Jorge; Saffirio Espinoza René; Saldívar Auger Raúl; Schilling Rodríguez Marcelo; Sepúlveda Orbenes Alejandra; Silber Romo Gabriel; Soto Ferrada Leonardo; Tarud Daccarett Jorge; Teillier Del Valle Guillermo; Torres Jeldes Víctor; Tuma Zedan Joaquín; Urízar Muñoz Christian; Vallejo Dowling Camila; Vallespín López Patricio; Venegas Cárdenas Mario; Walker Prieto Matías.

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo; Barros Montero Ramón; Bellolio Avaria Jaime; Berger Fett Bernardo; Coloma Alamos Juan Antonio; De Mussy Hiriart Felipe; Edwards Silva José Manuel; Fuenzalida Figueroa Gonzalo; Gahona Salazar Sergio; García García René Manuel; Gutiérrez Pino Romilio; Hernández Hernández Javier; Kast Rist José Antonio; Kort Garriga Issa; Lavín León Joaquín; Macaya Danús Javier; Melero Abaroa Patricio; Molina Oliva Andrea; Monckeberg Bruner Cristián; Monckeberg Díaz Nicolás; Morales Muñoz Celso; Nogueira Fernández Claudia; Norambuena Farías Iván; Núñez Urrutia Paulina; Paulsen Kehr Diego; Pérez Lahsen Leopoldo; Rathgeb Schifferli Jorge; Sabat Fernández Marcela; Sandoval Plaza David; Santana Tirachini Alejandro; Silva Méndez Ernesto; Squella Ovalle Arturo; Trisotti Martínez Renzo; Ulloa Aguillón Jorge; Urrutia Bonilla Ignacio; Urrutia Soto Osvaldo; Van Rysselberghe Herrera Enrique; Verdugo Soto Germán; Ward Edwards Felipe.

El señor CORNEJO ( Presidente ).-

Se deja constancia de que el diputado señor Felipe Kast, junto con otros parlamentarios, presentaron una indicación para modificar el artículo 47 de la Constitución Política de la República, la cual fue declarada inadmisible por la Mesa por tratar materias propias de una reforma constitucional.

Despachado el proyecto.

Por haber cumplido con su objeto, se levanta la sesión.

1.15. Oficio de Cámara Origen a Cámara Revisora

Oficio de Ley a Cámara Revisora. Fecha 13 de agosto, 2014. Oficio en Sesión 40. Legislatura 362.

VALPARAÍSO, 13 de agosto de 2014

Oficio Nº 11.421

A S.E. LA PRESIDENTA DEL H. SENADO

Con motivo del mensaje, informes y demás antecedentes que tengo a honra pasar a manos de V.E., la Cámara de Diputados ha aprobado el proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por un sistema electoral proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional, correspondiente al boletín N°9326-07, del siguiente tenor:

PROYECTO DE LEY:

“Artículo 1°.- Modifícase la ley N°18.700, orgánica constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, de la manera que a continuación se señala:

1) En el artículo 3° bis:

a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, pasando el actual inciso segundo a ser tercero:

“En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.”.

b) Intercálase el siguiente inciso quinto, nuevo, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.”.

c) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “que hubieren constituido un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

d) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “Se podrá dejar sin efecto un pacto electoral”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 4° por el siguiente:

“Artículo 4°.- En el caso de las declaraciones de candidaturas para la elección de diputados y senadores, los partidos políticos o pactos electorales podrán presentar en cada distrito o circunscripción un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción de que se trate.”.

3) Reemplázase, en el artículo 10, el guarismo “0,5” por “0,25”.

4) Sustitúyese el artículo 17 por el siguiente:

“Artículo 17.- El Consejo del Servicio Electoral, dentro de los diez días siguientes a aquel en que venza el plazo para efectuar la declaración de candidaturas, deberá dictar una resolución que se notificará al correo electrónico que los partidos políticos y candidatos independientes deberán informar en el momento de la declaración, la que se pronunciará sobre:

a) La aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 25, 48 y 50 de la Constitución Política de la República, o que se encuentren en alguna de las situaciones previstas en su artículo 57. Asimismo, deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los párrafos 1° a 3° de este título.

b) La aceptación o rechazo de la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, declaradas por cada partido político, en conformidad a lo dispuesto en los incisos cuarto y quinto del artículo 3° bis. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con el porcentaje de sexos establecido en el inciso quinto de dicho artículo.

Los partidos políticos cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, sean rechazadas en conformidad a lo dispuesto en la letra b) de este artículo, podrán corregirlas ante el Servicio Electoral dentro de los cuatro días hábiles siguientes a la fecha del despacho del correo electrónico que notifica la resolución a que alude el inciso primero, con el fin de ajustarse al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso quinto del artículo 3° bis, ya sea retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas.

Dentro de los cinco días siguientes de vencido el plazo para reclamar de la resolución del Consejo del Servicio Electoral, éste dictará una nueva resolución aceptando o rechazando las declaraciones nuevas y rechazando o aceptando, según proceda, la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputados o a senadores, según corresponda, la que deberá ser publicada dentro de tercer día en el Diario Oficial. En tal oportunidad también se publicarán en el mismo medio la aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente.”.

5) Sustitúyese el artículo 18 por el siguiente:

“Artículo 18.- Los partidos políticos y los candidatos independientes podrán reclamar ante el Tribunal Calificador de Elecciones por los rechazos de declaraciones fundadas en el incumplimiento de los requisitos establecidos en la letra a) del artículo 17, dentro de los siete días hábiles siguientes al despacho del correo electrónico que notifique la resolución a que se refiere el inciso primero del artículo anterior. Este tribunal fallará en el término de diez días, contado desde la interposición del reclamo, y su resolución se notificará al Director del Servicio Electoral y a los interesados por carta certificada.

El plazo para interponer la reclamación ante el Tribunal Calificador de Elecciones, cuando se funde en el incumplimiento de los requisitos del artículo 17, letra b), se contará desde el día de la publicación de la resolución que dicta el Servicio Electoral en conformidad a lo dispuesto en el inciso final del artículo 17, respecto de los partidos políticos que corrijan ante el Servicio Electoral la proporción de sexos de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador.”.

6) En el artículo 24:

a) Sustitúyese su inciso cuarto por el siguiente:

“Los partidos políticos, dentro de cada lista, pondrán los nombres de los candidatos ordenando a sus integrantes con alternancia entre los candidatos y las candidatas, asignándoles un número correlativo desde el uno hasta la cantidad total de candidatos declarados para la misma circunscripción senatorial o distrito electoral, comenzando la numeración con los candidatos a senadores y siguiendo con los candidatos a diputados.”.

b) Sustitúyese su inciso final por el siguiente:

“Al lado izquierdo del número de cada candidato y del nombre de la lista respectiva, habrá una raya horizontal destinada a que el elector pueda marcar su preferencia completando una cruz con una raya vertical. Asimismo, al lado izquierdo del número de cada candidato, también habrá una fotografía de éste, si la hubiese acompañado en su declaración, en el tamaño y colores de impresión que determine el Servicio Electoral.”.

7) En el artículo 30:

a) Sustitúyese el inciso primero por los siguientes, pasando el inciso segundo a ser tercero y así sucesivamente:

“Artículo 30.- Se entenderá por propaganda electoral toda aquella manifestación pública, escrita o audiovisual, que promocione el nombre, apellido o partido político al que pertenezcan candidatos determinados o que utilice cualquier otro medio de identificación, que esté dirigida a obtener apoyo electoral. También lo será la que induzca a apoyar alguna de las proposiciones sometidas a plebiscito. Dicha propaganda sólo podrá efectuarse en las oportunidades y en la forma prescrita en esta ley.

No se entenderá como propaganda electoral la difusión de información sobre actos políticos y actividades habituales del funcionamiento de los partidos y autoridades políticas, así como la realización de entrevistas periodísticas.”.

b) Reemplázase el inciso tercero, que ha pasado a ser cuarto, por el siguiente:

“El financiamiento de los gastos que se realicen en propaganda electoral o plebiscitaria sólo podrá provenir de personas naturales con derecho a voto en Chile.”.

8) Intercálase en el artículo 65, inciso primero, entre las expresiones “lado izquierdo” y “del número” la siguiente: “de la lista, o al lado izquierdo”.

9) Intercálase en el artículo 71, número 6), entre la expresión “por” y la frase “cada uno de los candidatos” la siguiente frase: “cada lista y por”.

10) Intercálase en el artículo 87, inciso primero, entre la expresión “candidato” y la preposición “en”, la frase “o por cada lista, cuando corresponda,”.

11) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme a las reglas establecidas en el procedimiento que a continuación se detalla:

1.- El Tribunal Calificador de Elecciones determinará las preferencias emitidas a favor de cada lista y de cada uno de los candidatos que la integran.

2.- Se aplicará el sistema electoral de coeficiente D´Hondt, para lo cual se procederá de la siguiente manera:

a) Los votos de cada lista se dividirán por uno, dos, tres y así sucesivamente hasta la cantidad de cargos que corresponda elegir.

b) Los números que han resultado de estas divisiones se ordenarán en orden decreciente hasta el número correspondiente a la cantidad de cargos que se eligen en cada distrito electoral o circunscripción senatorial.

c) A cada lista o pacto electoral se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b).

3.- En el caso de las listas conformadas por un solo partido político, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará electos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada lista, de acuerdo al número de cargos que le correspondan a cada una de ellas, luego de aplicar las reglas descritas precedentemente.

4.- En el caso de los pactos electorales, se aplicarán las siguientes reglas para determinar cuántos escaños le corresponden a cada uno de ellos:

a) Se calculará el total de los votos de cada partido político o, en su caso, de la suma de cada partido político y las candidaturas independientes asociadas a ese partido.

b) Se dividirá por uno, dos, tres y así sucesivamente, hasta la cantidad de cargos asignados al pacto electoral.

c) A cada partido político o, en su caso, a cada partido y las candidaturas independientes asociadas a éste, se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b) precedente.

d) El Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada partido político o, en su caso, de cada partido, considerando las candidaturas independientes asociadas éste dentro de un pacto electoral, de acuerdo a los cupos obtenidos por cada uno de ellos.

En caso de empate entre candidatos de una misma lista, o entre candidatos de distintas listas que a su vez estén empatadas, el Tribunal Calificador de Elecciones procederá en audiencia pública a efectuar un sorteo entre ellos, y proclamará elegido al que salga favorecido.”.

12) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”.

13) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos, que elegirá 3 diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte, que elegirá 3 diputados.

3er distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal, que elegirá 5 diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen, que elegirá 5 diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela, que elegirá 7 diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué, que elegirá 8 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca, que elegirá 8 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú, que elegirá 8 diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia, que elegirá 7 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín y La Granja, que elegirá 8 diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén, que elegirá 6 diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana, que elegirá 7 diputados.

13° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo, que elegirá 5 diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué, San Pedro y Padre Hurtado, que elegirá 6 diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa, que elegirá 5 diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones, que elegirá 4 diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael, que elegirá 7 diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco, que elegirá 4 diputados.

19° distrito, constituido por las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ránquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel, que elegirá 5 diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana, que elegirá 8 diputados.

21er distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja, que elegirá 5 diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino, que elegirá 4 diputados.

23er distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén, que elegirá 7 diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco, que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos, que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena, que elegirá 5 diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel, que elegirá 3 diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica, que elegirá 3 diputados.”.

14) Agrégase el siguiente artículo 179 bis:

“Artículo 179 bis.- Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con el siguiente procedimiento:

a) Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consistirá en distribuir a prorrata los cargos entre los distritos electorales, de acuerdo a la fórmula dispuesta en el artículo 109 bis de esta ley.

b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 9 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al de la realización del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con aquel en que se celebran elecciones de diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.

d) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes.

Dentro de los cinco días siguientes a la publicación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral aplicó las letras a) y b) de este artículo.

Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de febrero del año de que se trate. En caso de producirse algún cambio en la distribución de diputados, el texto del artículo 179 de esta ley se entenderá modificado en lo pertinente, de pleno derecho y se aplicará en su forma así corregida en la elección inmediatamente siguiente.”.

15) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 50 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

1a circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, 2 senadores.

2a circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, 2 senadores.

3a circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 2 senadores.

4a circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, 2 senadores.

5a circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, 3 senadores.

6a circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, 5 senadores.

7a circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 7 senadores.

8a circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, 3 senadores.

9a circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, 5 senadores.

10a circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, 5 senadores.

11a circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 5 senadores.

12a circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 2 senadores.

13a circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, 3 senadores.

14a circunscripción, constituida por la XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, 2 senadores.

15a circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 2 senadores.”.

16) Derógase el artículo 181.

17) Agrégase el siguiente artículo 23 transitorio:

“Artículo 23.- La regla especial del artículo 3° bis, inciso quinto, sólo tendrá aplicación en los procesos electorales parlamentarios de 2017, 2021, 2025 y 2029.”

18) Agrégase el siguiente artículo 24 transitorio:

“Artículo 24.- Para los efectos de completar la nueva integración del Senado de la República, en las elecciones parlamentarias que deben celebrarse en noviembre de 2017 corresponderá que se renueven completamente las circunscripciones que corresponden a regiones impares.

En el caso de las circunscripciones que corresponden a las regiones pares y Metropolitana, los parlamentarios elegidos en 2013 seguirán en sus funciones hasta completar su período de ocho años. En las elecciones de 2021, estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde.”.

19) Agrégase el siguiente artículo 25 transitorio:

“Artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.”.

Artículo 2°.- Modifícase la ley N°19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, de la manera que a continuación se señala:

1) En el artículo 4°:

a) Sustitúyese en su inciso segundo la expresión “dos centésimos de unidad de fomento”, por la expresión “un centésimo de unidad de fomento”.

b) Sustitúyese en el inciso tercero, la expresión “tres centésimos de unidad de fomento” por la expresión “uno coma cinco centésimos de unidad de fomento.”.

2) Agrégase en el artículo 14 bis el siguiente inciso final:

“Tratándose de votaciones a listas a las que se refiere el artículo 65, inciso primero, de la ley N°18.700, el derecho al reembolso se hará a los candidatos que las integren, a prorrata de sus votaciones individuales.”.

3) Sustitúyese su artículo 16 por el siguiente:

“Artículo 16.- Los aportes de campaña electoral serán públicos y se consignará la identidad del aportante, salvo las excepciones que señale esta ley.”.

4) Reemplázase su artículo 17 por el siguiente:

“Artículo 17.- Podrán ser anónimos todos los aportes privados en dinero cuyo importe no supere el equivalente en pesos a diez unidades de fomento. No obstante, cualquier aportante podrá solicitar que se consigne su identidad y el monto de su contribución.

En todo caso, durante el período de campaña electoral, ningún candidato o partido político podrá recibir, por concepto de aportes anónimos, más del 20 por ciento del límite de gastos electorales definido en esta ley.

No podrán existir aportes reservados.”.

5) Reemplázase el artículo 24 por el siguiente:

“Artículo 24.- Prohíbense los aportes de campaña electoral provenientes de personas naturales extranjeras, con excepción de los efectuados por extranjeros habilitados legalmente para ejercer en Chile el derecho a sufragio. Prohíbense también los aportes de campaña electoral provenientes de toda persona jurídica, a excepción del Fisco, de acuerdo a lo dispuesto en el párrafo 2° del Título II de esta ley, y de los partidos políticos.”.

6) Intercálase entre el artículo 58 y el artículo transitorio el siguiente epígrafe: “Disposiciones transitorias.”.

7) Agrégase el siguiente artículo segundo transitorio, pasando el actual artículo único transitorio, a ser Artículo primero:

“Artículo segundo.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y sólo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hayan sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a los que pertenezcan tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento por cada una de ellas.

Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.”.

8) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a senadoras y diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 unidades de fomento por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.”.

Artículo 3°.- Modifícase la ley N° 18.603, orgánica constitucional de Partidos Políticos, de la manera que a continuación se señala:

1) En el artículo 6°:

a) Sustitúyese en el inciso primero la cifra “0,5” por el guarismo “0,25”.

b) Agrégase en el inciso segundo, a continuación del punto aparte, que ha pasado a ser punto seguido, la siguiente oración: “Los notarios no podrán negarse a recibir la declaración a que hace referencia este artículo bajo circunstancia alguna y no podrán cobrar por este servicio.”.

2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 7° por el siguiente:

“Artículo 7°.- Cumplidos los requisitos a que se refieren los artículos 5° y 6°, y reunido el número de afiliados a que alude este último artículo en una de las regiones en que se divide políticamente el país, se solicitará al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos. La solicitud deberá ser firmada por el presidente y por el secretario del partido en formación.”.

3) En el artículo 26:

a) Suprímese en el literal d) la oración “la aprobación de un pacto electoral en elecciones de Parlamentarios o su retiro del mismo, y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal”.

b) Incorpórase el siguiente literal e), pasando los actuales literales e) y f) a ser f) y g) respectivamente:

“e) Aprobar un pacto electoral en las elecciones de parlamentarios o su retiro del mismo y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal;”.

4) En el artículo 42:

a) Sustitúyese su número 2° por el siguiente:

“2°.- Por no alcanzar en la región en que está legalmente constituido el 2,5 por ciento de los sufragios válidamente emitidos en la última elección de diputados. En el caso de los partidos que se encuentren inscritos en más de una región, la disolución procederá cuando no hayan alcanzado el indicado umbral del 2,5 por ciento en más de la mitad de dichas regiones.”.

b) Sustitúyese el inciso final por los siguientes incisos:

“No obstante, si un partido político incurre en la situación prevista en el número 2° de este artículo, pero elige al menos dos parlamentarios, sean diputados o senadores, conservará su calidad de tal.

Si incurre en la situación prevista en el número 4° en una o más regiones, pero mantiene el mínimo de ellas exigido por la ley, conservará su calidad de tal, pero no podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2° en aquellas donde su número de afiliados haya disminuido en más del 50 por ciento. El Director del Servicio Electoral anotará esta circunstancia al margen de la respectiva inscripción en el Registro de Partidos Políticos.”.

Artículo 4°- Esta ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la partida 02, Congreso Nacional, de la ley de Presupuestos para el Sector Público.

Lo dispuesto en el artículo 2° de esta ley se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la ley de Presupuestos respectiva.”.

***

Hago presente a V.E. que el artículo 1°, en sus números 1, letras a), c) y d); 2, 3, 4, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 18 y 19, fue aprobado en general con el voto favorable de 88 diputados, de un total de 119 en ejercicio.

En particular, en tanto, la aprobación de las referidas normas se produjo de la siguiente manera:

-El artículo 1°, número 1, letra a), por 115 votos a favor.

-El artículo 1°, número 1, letra c), por 116 votos a favor.

-El artículo 1°, número 1, letra d), por 114 votos a favor.

-El artículo 1°, número 2, por 90 votos a favor.

-El artículo 1°, número 3, por 100 votos a favor.

-El artículo 1°, número 4, por 116 votos a favor.

-El artículo 1°, número 11, por 115 votos a favor.

-El artículo 1°, número 12, por 74 votos a favor.

-El artículo 1°, número 13, por 73 votos a favor.

-El artículo 1°, número 14, por 72 votos a favor.

-El artículo 1°, número 15, por 73 votos a favor.

-El artículo 1°, números 16, 18 y 19, por 100 votos a favor.

En todos estos casos, la votación se realizó sobre un total de 119 diputados en ejercicio.

De esta manera, se ha dado cumplimiento a lo dispuesto en la disposición decimotercera transitoria de la Constitución Política de la República.

Por otra parte, el artículo 1°, números 1, letra b); 5, 6, 8, 9, 10 y 17, así como los artículos 2° y 3°, fueron aprobados, en general, con 86 votos favorables, de un total de 119 diputados en ejercicio.

En particular, en tanto, la aprobación de las normas indicadas se produjo de la siguiente manera:

-El artículo 1°, número 1, letra b), por 88 votos a favor.

-El artículo 1°, número 5, por 115 votos a favor.

-El artículo 1°, número 6, letra a), por 90 votos a favor.

-El artículo 1°, número 6, letra b), por 117 votos a favor.

-El artículo 1°, número 7, nuevo, introducido durante la discusión particular, por 74 votos a favor.

-El artículo 1°, número 8, por 73 votos a favor.

-El artículo 1°, número 9, por 72 votos a favor.

-El artículo 1°, número 10, por 74 votos a favor.

-El artículo 1°, número 17, por 113 votos a favor.

-El artículo 2°, números 1, 2, 7 y 8, por 72 votos a favor.

-El artículo 2°, número 3, nuevo, introducido durante la discusión particular, por 73 votos a favor.

-El artículo 2°, número 4, nuevo, introducido durante la discusión particular, por 72 votos a favor.

-El artículo 2°, número 5, nuevo, introducido durante la discusión particular, por 70 votos a favor.

-El artículo 3°, número 1, letra a), por 75 votos a favor.

-El artículo 3°, número 1, letra b), por 87 votos a favor.

-El artículo 3°, número 2, por 76 votos a favor.

-El artículo 3°, número 3, por 89 votos a favor.

-El artículo 3°, número 4, letra a), por 86 votos a favor.

-El artículo 3°, número 4, letra b), por 85 votos a favor.

En todos estos casos, la votación se realizó sobre un total de 119 diputados en ejercicio.

De esta manera, se ha dado cumplimiento a lo prescrito en el artículo 66, inciso segundo, de la Constitución Política de la República.

Dios guarde a V.E.

ALDO CORNEJO GONZÁLEZ

Presidente de la Cámara de Diputados

MIGUEL LANDEROS PERKIČ

Secretario General de la Cámara de Diputados

2. Segundo Trámite Constitucional: Senado

2.1. Informe de Comisión de Constitución

Senado. Fecha 24 de octubre, 2014. Informe de Comisión de Constitución en Sesión 61. Legislatura 362.

INFORME DE LA COMISIÓN DE CONSTITUCIÓN, LEGISLACIÓN, JUSTICIA Y REGLAMENTO recaído en el proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional.

BOLETÍN Nº 9.326-07

HONORABLE SENADO:

La Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento tiene a honra informar el proyecto de ley señalado en el epígrafe, con urgencia calificada de suma.

Hacemos presente que durante el estudio de esta iniciativa ejerció, en una oportunidad, el cargo de Presidente de la Comisión el Honorable Senador señor Alfonso de Urresti.

A una o más sesiones que celebró la Comisión concurrieron, además de los integrantes de la Comisión, los Honorables Senadores señores Alejandro Guillier, Carlos Bianchi, Jorge Pizarro y Patricio Walker, y los Honorables Diputados señores Giorgio Jackson y Vlado Mirosevic.

Igualmente, asistieron, especialmente invitados, el Ministro del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo Peñailillo; la Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón; la Subsecretaria de esa Cartera de Estado, señora Patricia Silva; la Ministra Directora del Servicio Nacional de la Mujer, señora Claudia Pascual; el Honorable Diputado, señor Pepe Auth; el Subdirector Ejecutivo del Centro de Estudios Públicos, señor Lucas Sierra; la Oficial de Gobernabilidad del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, señora Marcela Ríos Tobar; el Director Ejecutivo del Instituto Libertad, señor Antonio Horvath Gutiérrez; el asesor legislativo de la Fundación Jaime Guzmán, señor Máximo Pavez; el Presidente del Centro Democracia y Comunidad, señor Patricio Zapata; el Presidente del Instituto Igualdad, exsenador señor Camilo Escalona; el Coordinador del Programa Sociedad y Política del Instituto Libertad y Desarrollo, señor Jorge Ramírez; la Directora Ejecutiva de la ONG Comunidad Mujer, señora Alejandra Sepúlveda; la Coordinadora de la Corporación Humanas, señora Camila Maturana; el Coordinador de Democracia Regional, señor Elson Bórquez y su asesor legislativo, señor Manuel José Benítez; la Presidenta de la Corporación Mujeres Líderes de Chile, señora Gianina Figueroa y la Directora Académica, señora Javiera Arce; la Directora de la Fundación Ciudadano Inteligente, señora María Jaraquemada; el abogado constitucionalista, señor Francisco Zúñiga; el economista, señor Eduardo Engel, y el experto electoral señor Andrés Tagle.

Igualmente concurrieron la Coordinadora de la División Jurídica del Ministerio Secretaría General de la Presidencia, señora Valeria Lübbert y los asesores de dicha Secretaría de Estado, señoras Francisca Soto y Julia Urquieta y señores Hermes Ortega, Héctor Valladares y Diego Calderón; los asesores del Ministro del Interior y Seguridad Pública, señoras Lorena Díaz y Ana María Araneda y señores Rodrigo González y Gabriel Osorio; el asesor de la Subsecretaría de Prevención del Delito, señor Mauricio Embry; la asesora del Servicio Nacional de la Mujer, señora Claudia Sarmiento; el investigador del Centro de Estudios Públicos, señor Ricardo González; la Oficial de Gobernabilidad del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, señora Valentina Salas y el consultor de este organismo, señor Exequiel Gaete; el Director Corporativo del Instituto Libertad, señor Aldo Cassinelli y el asesor legislativo de este Instituto, señor Pablo Rodríguez; el experto del Instituto Igualdad, señor Roberto Cárcamo y el asesor, señor Erwin Asenjo; la Directora de Proyectos de la ONG Comunidad Mujer, señora Jessica González; la Directora de Estudios de la Corporación Mujeres Líderes de Chile, señora Evelyn Horning.

Finalmente, también estuvieron presentes la Vicepresidenta del Partido Socialista, señora Violeta Reyes; el Secretario General del Partido Liberal, señor Iván Morán; el funcionario de la Oficina de Informaciones de la Cámara de Diputados, señor Germán Arriagada; El asesor del Honorable Senador señor Harboe, señor Sebastián Abarca; el asesor del Honorable Senador señor Araya, señor Robert Angelbeck; el asesor del Honorable Senador señor Bianchi, señor Claudio Barrientos; el asesor de la Honorable Senadora señora Goic, señor Gerardo Bascuñán; el asesor del Honorable Senador señor De Urresti, señor Claudio Rodríguez; el asesor del Honorable Senador señor Horvath, señor Arturo Rodríguez, el asesor del Honorable Senador señor Larraín, señor Héctor Mery; el asesor del Honorable Diputado señor Mirosevic, señor Luis Felipe Ramos; el asesor del Honorable Diputado señor Mirosevic, señor Patricio Morales; la asesora del Honorable Diputado señor Paulsen, señora Constanza Castillo; el asesor del Honorable Diputado señor Jackson, señor Pablo Parada; el asesor del Comité PC de la Cámara de Diputados, señor Ignacio Cárcamo, y los asesores de la Biblioteca del Congreso Nacional, señor Juan Pablo Cavada y señora Annette Hafner.

OBJETIVO DEL PROYECTO

Sustituir el sistema electoral binominal por uno proporcional inclusivo y fortalecer la representatividad del Congreso Nacional.

Para ello, se propone reducir la desigualdad del voto, permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas, aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos, facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías, promover un Congreso Nacional que refleje la diversidad de la sociedad, y evitar que queden fuera del mismo candidatos con grandes votaciones.

NORMAS DE QUÓRUM ESPECIAL

El artículo 1°, en sus números 1, letras a), c) y d); 2, 3, 4, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 18 y 19 requiere para su aprobación del voto conforme de los tres quintas partes de los Senadores en ejercicio, de conformidad a lo prescrito en el inciso segundo de la disposición decimotercera transitoria de la Constitución Política de la República. El artículo 1º números 1, letras b); 5, 6,7, 8, 9 10 y 17, así como los artículos 2º y 3° tienen el carácter de normas orgánicas constitucionales, en virtud lo dispuesto en los artículos 18 y 19 n° 15, respectivamente, y 66, inciso segundo, de la Carta Fundamental.

ANTECEDENTES

1.- De Derecho

1.1.- De la Constitución Política

1.1.1.- El inciso primero del artículo 5º que dispone que la soberanía reside esencialmente en la Nación. Su ejercicio se realiza por el pueblo a través del plebiscito y de elecciones periódicas y, también, por las autoridades que esta Constitución establece. Ningún sector del pueblo ni individuo alguno puede atribuirse su ejercicio.

1.1.2.- Los incisos primero, segundo y tercero del artículo 18 que prescribe que habrá un sistema electoral público. Una ley orgánica constitucional determinará su organización y funcionamiento, regulará la forma en que se realizarán los procesos electorales y plebiscitarios, en todo lo no previsto por esta Constitución y garantizará siempre la plena igualdad entre los independientes y los miembros de partidos políticos tanto en la presentación de candidaturas como en su participación en los señalados procesos. Dicha ley establecerá también un sistema de financiamiento, transparencia, límite y control del gasto electoral.

Una ley orgánica constitucional contemplará, además, un sistema de registro electoral, bajo la dirección del Servicio Electoral, al que se incorporarán, por el solo ministerio de la ley, quienes cumplan los requisitos establecidos por esta Constitución.

1.1.3.- El inciso segundo de la disposición decimotercera transitoria que establece que las modificaciones a la Ley Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios que digan relación con el número de senadores y diputados, las circunscripciones y distritos existentes, y el sistema electoral vigente, requerirán del voto conforme de las tres quintas partes de los diputados y senadores en ejercicio.

2.- La ley Nº 18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios.

3.- La ley Nº 19.884, Orgánica Constitucional sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral.

4.- La ley Nº 18. 603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos.

2.- de Hecho

2.1. Mensaje.

En el Mensaje que antecede a esta iniciativa, S.E. la Presidenta de la República recuerda que el Congreso Nacional es una institución fundamental de nuestra democracia. Agrega que es en ella donde se deben plantear las discrepancias políticas y gestarse los verdaderos acuerdos nacionales.

Seguidamente, hace presente que durante el régimen autocrático se diseñó un Congreso Nacional disminuido en sus atribuciones y fundado en un sistema de elección excluyente.

Manifiesta que a pesar de las diversas reformas que se han introducido al texto constitucional existe una distancia entre el actual Parlamento y el que Chile desea y necesita.

Añade que este problema se plantea pues, para una amplia mayoría del país, el sistema electoral binominal es uno de los factores que afecta negativamente la representatividad del Congreso Nacional.

A continuación, recuerda que durante la legislatura precedente, se produjo un valioso acuerdo entre los sectores de la entonces oposición y el partido Renovación Nacional. Puntualiza que esa convergencia se expresó en la eliminación del guarismo 120 del artículo 47 de la Ley Fundamental.

Añade que en este período legislativo se abre la oportunidad de profundizar esos acuerdos, con el fin de superar el sistema electoral binominal e impulsar un conjunto de reformas que permitan fortalecer la representatividad del Congreso Nacional.

Luego, manifiesta que para elaborar esta iniciativa de ley se consideraron los estudios que sobre el particular se han publicado en las últimas décadas y, en especial, las conclusiones que en el año 2006 planteó la comisión de estudios que encabezó el exministro y senador señor Edgardo Böeninger.

Agrega que también se tuvieron en cuenta otras iniciativas que a lo largo de las últimas décadas presentaron los expresidentes de la Repúblicas señores Aylwin, Frei y Lagos y diversas mociones que perseguían el mismo objetivo, entre las cuales destacan las que formularon las señoras Isabel Allende y Lily Pérez y los señores Francisco Chahuán, Eugenio Tuma, Patricio Walker, Carlos Cantero, Carlos Bianchi, Antonio Horvath, Ricardo Lagos Weber, Jaime Quintana, Juan Pablo Letelier, Alberto Espina, Fulvio Rossi y el ex senador señor Carlos Larraín.

Asimismo, menciona que se consideraron los proyectos que en su oportunidad elaboraron los Honorables Diputados señores Pedro Araya (hoy senador), Gabriel Ascencio, Pepe Auth, Pedro Browne, Aldo Cornejo, Felipe Harboe (hoy senador), Gustavo Hasbún, Fernando Meza, Cristián Monckeberg, Nicolás Monckeberg, Ricardo Rincón, Alberto Robles, Marcelo Schilling, Carlos Montes (hoy senador), Guillermo Tellier y el exdiputado y actual Ministro señor Jorge Burgos.

Puntualiza que, de la enumeración antes indicada, se puede concluir que el empeño por sustituir el sistema electoral binominal constituye un objetivo transversal que convoca a líderes de muy distintas filiaciones políticas.

Finalmente, sobre este punto, recuerda que esta convergencia se expresó con mucha fuerza durante el año 2013, con ocasión de las reflexiones y debates producidos en el seno de esta Comisión.

A continuación, el mensaje detalla los seis objetivos específicos que se pretende alcanzar con el cambio al sistema electoral vigente. Ellos son los siguientes:

1.- Reducir la desigualdad del voto.

2.- Permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas.

3.- Aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos.

4.- Facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías.

5.- Promover un Congreso Nacional que refleje la diversidad de la sociedad.

6.- Evitar que queden fuera del parlamento candidatos con grandes votaciones

En relación con el primero objetivo, puntualiza que la diferencia en la incidencia del voto en Chile, según el lugar donde se emite, es demasiado alta y obstaculiza el logro el ideal de la igualdad. Añade que no se puede emprender una reforma en esta materia sin reducir significativamente esa diferencia.

Precisa que para alcanzar este propósito es imprescindible incrementar el número de diputados y senadores, para no verse obligados a disminuir la representación de algunos territorios escasamente habitados.

Seguidamente, recuerda que el año 1973 Chile tenía una Cámara de Diputados integrada por 150 diputados y un Senado conformado por 50 miembros, a pesar de que el número de electores era significativamente menor al actual. Manifiesta que el rediseño de distritos y circunscripciones permitiría reducir de manera muy significativa la actual desigualdad entre ciudadanos de distintos territorios. Agrega que la propuesta considera, además, que los distritos correspondientes a zonas extremas en el Norte y en el Sur Austral merecen un criterio especial de sobrerrepresentación, más allá de su población electoral, todo ello en con el fin de propugnar su mayor integración.

En relación con el segundo objetivo mencionado, manifiesta que para permitir y facilitar el ingreso al parlamento de las corrientes más significativas de la sociedad es necesario reducir el número de distritos y circunscripciones. Agrega que aumentando el número de escaños que se eligen por distrito o circunscripción se permitirá que al Congreso Nacional ingresen sectores políticos de menor votación.

Con el propósito de aumentar la competitividad entre los candidatos, explica que esta iniciativa persigue también que los electores recuperen la decisión respecto de quiénes son sus representantes. Añade que para alcanzar este propósito es indispensable que todas las formaciones políticas puedan concursar con sus propios candidatos y que las grandes competencias internas en los partidos y entre partidos se resuelvan de cara a la ciudadanía en las mismas elecciones. Explica que lo anterior se puede lograr definiendo distritos que elijan un número mayor de diputados, pero también permitiendo que las listas electorales presenten más candidatos que los que se eligen en cada territorio electoral. Añade que esta medida traerá probablemente una mayor participación electoral de la ciudadanía.

Seguidamente, añade que mediante este proyecto se busca también facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías.

Explica que la conformación de un sistema de distritos y circunscripciones que mayoritariamente eligen un mínimo de tres parlamentarios y un máximo de ocho, propende a que los partidos más votados obtengan una representación parlamentaria equivalente. Al mismo tiempo, se asegura que en todos los territorios la minoría pueda ser representada.

Puntualiza que mediante esta reforma también se busca promover un Congreso Nacional que refleje la diversidad de opiniones que existe en la sociedad

Para alcanzar este objetivo se propone que el sistema electoral aliente a los partidos políticos y a los pactos a presentar nóminas de candidatos que reflejen toda la diversidad ideológica, de género, edad, origen étnico, social y cultural del país. Esto, junto con la representación de todas las corrientes políticas, es el mejor antídoto contra el distanciamiento ciudadano de la política. Sostiene que si se logra lo anterior el Congreso Nacional volverá a ser un lugar de encuentro y debate de todos los puntos de vista y posiciones relevantes en la sociedad.

Añade que también se promueve una ley de cuotas que obligue a las listas a presentar elencos de candidatos con la proporción de mujeres que permitan cambiar la desigual representación de género que hoy tiene el Congreso Nacional.

Finalmente, hace presente que mediante esta reforma se pretende evitar que queden fuera candidatos con grandes votaciones

Al respecto, precisa que uno de los defectos más visibles del sistema electoral binominal es que candidatos con altas votaciones (sobre 20 o 25%) pueden quedar fuera del Congreso, provocando gran frustración de sus electores.

En su segundo acápite, el mensaje detalla los contenidos de la propuesta de reforma electoral.

En primer lugar, explica que en el plano de los principios el proyecto se inscribe en el contexto de la tradición republicana chilena, en el sentido que cada una de las Cámaras responderá, principalmente, a un principio de representación particular. En el caso del Senado, el criterio básico es el equilibrio entre los distintos territorios. Tratándose de la Cámara de Diputados, el criterio rector debe ser la igualdad en el voto de todos los chilenos.

Sostiene que el criterio del equilibrio territorial no obsta a que, en el Senado, se consulte –de manera complementaria- una mayor representación relativa para las zonas más pobladas.

En cuanto a la integración de la Cámara de Diputados, afirma que esta iniciativa pretende conciliar el principio de igualdad de voto con el objetivo de no castigar la representación política de las zonas menos habitadas del país.

A continuación, indica que el Senado elegirá 50 senadores y cada región pasará a ser una sola circunscripción. Agrega que cinco de las regiones mantienen el número actual de 2 senadores a elegir, mientras las otras 10 lo incrementan, reduciendo así la desmesurada desigualdad en la incidencia del voto, pero garantizando también la representación de la minoría.

Añade que uno de los principios que rige la distribución de escaños en el Senado de la República es la igualdad política entre las 15 regiones del país. Explica que 3/5 de sus escaños se distribuyen de manera igualitaria, con el fin de garantizar que cada región, con independencia de su número de electores, tendrá un mínimo de dos representantes en el Senado.

Agrega que los restantes 20 senadores se elegirán en las regiones con mayor número de ciudadanos, evitando que una asignación muy alta a la Región Metropolitana pueda poner en cuestión el carácter esencialmente territorial de la representación en esta Corporación.

En síntesis, el mensaje precisa que se mantiene la elección de dos senadores en las regiones menos pobladas (Tarapacá, Antofagasta, Atacama, Los Ríos, Aysén y Magallanes, agregándose la circunscripción Arica-Parinacota, que también elegirá 2 senadores);

Agrega que en las regiones del Libertador Bernardo O’Higgins, de Coquimbo y de Los Lagos se incrementa en un escaño los cargos a elegir. Precisa que las regiones de Valparaíso, del Maule, del Biobío y de La Araucanía, elegirían 5 senadores cada una. Finalmente, que los ciudadanos de la Región Metropolitana elegirán 7 senadores.

En consecuencia, explica que de los doce nuevos escaños senatoriales, tres se asignarían a la Región Metropolitana, dos a la nueva región de Arica y Parinacota. Asimismo, se agregaría un senador adicional en cada una de las otras siete regiones más pobladas. Precisa que con esta medida, la gran mayoría de los senadores (76%) serán electos en circunscripciones de 3, 5 o 7 escaños.

Seguidamente, se refiere a la integración de la Cámara de Diputados. Al respecto, propone que ella este conformada por 155 Diputados.

Para alcanzar este objetivo, explica que el territorio nacional se divide en distritos plurinominales que eligen un número variable de diputados que se determina en atención al número de electores. Con esta reforma, explica, se persigue garantizar el principio de igualdad de voto, teniendo presente, sin embargo, las siguientes restricciones estructurales.

a) La extensión territorial de los distritos no excederá los márgenes de una Región.

b) Los nuevos distritos se constituyen a partir de la agregación de distritos que actualmente existen, y

c) La asignación del número de escaños no reducirá, en términos absolutos, la representación que tienen hoy los distintos territorios.

Agrega que el proyecto plantea la creación de 28 distritos en los que se elige entre 3 y 8 diputados cada uno (con un promedio de 5.53). Añade que esta propuesta se conjuga con los sistemas proporcionales moderados.

A continuación, recuerda que hasta el año 1973, los 150 diputados se escogían en base a 27 agrupaciones departamentales (con un promedio de 5.55). Puntualiza que el promedio de diputados por distrito, por lo mismo, era muy parecido al que considera esta iniciativa. La diferencia estriba, sin embargo, en su distribución. Explica que hasta ese año existían 4 agrupaciones territoriales que elegían más de 9 diputados (una de ellas elegía 18) y había otras 2 que elegían sólo 2. Como se ha indicado, esta fórmula reduce el rango de variación o los límites de distribución, pues todos los distritos eligen entre 3 y 8.

Precisa que a la luz de estos antecedentes seguirán existiendo incentivos para que los partidos políticos se agrupen en grandes conglomerados y no se produzca una fragmentación excesiva en la representación política.

Indica que de los 35 escaños adicionales que este proyecto añade, 23 se asignan para corregir la subrepresentación de los grandes centros urbanos del país (15 a la Región Metropolitana, 4 a la Región de Valparaíso y 4 a la Región del Biobío).

Los otros 12 se asignan, a razón de uno por región, a todas y a cada una de estas zonas del país. Explica que no se ha querido, en este punto, establecer discriminaciones entre regiones.

Agrega que si bien esta reorganización electoral no garantiza plenamente la igualdad del voto de los ciudadanos, ella se justifica por las siguientes razones:

Primero: Al interior de algunas de esas 12 regiones, la actual división electoral castiga a determinadas zonas en relación a otras. La adición de un escaño, añade, permite corregir ese defecto, sin reducir un diputado a un área geográfica.

Segundo: En el caso de otras regiones, de menor población, explica que han pesado consideraciones geopolíticas y de integración nacional, como en el caso de las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Aysén y Magallanes.

Puntualiza que de esta manera se pueden conciliar dos aspectos que se relacionan con el principio de la igualdad. Por un lado, aquel que toma en cuenta este principio en relación al peso del voto y, por otro, aquel que busca la representación más cabal y precisa de mayorías y minorías.

Finalmente, se refiere a la propuesta para aumentar la inclusión y representatividad.

Para alcanzar estos objetivos propone, en primer lugar, que los partidos o pactos puedan presentar hasta un número de candidatos que doble el número de cargos a elegir. Esta idea, añade, permitirá aumentar las opciones políticas de los electores y facilitará la renovación de los representantes.

Seguidamente, y con el objeto de avanzar hacia un Congreso que represente adecuadamente a hombres y a mujeres, se propone incorporar una cuota de género, requiriendo a cada partido político, que integre o no un pacto electoral, que su nómina total de postulantes a la Cámara y al Senado cumpla el requisito de que ningún género esté representado por sobre 3/5 ni por debajo de los 2/5 del total de candidatos que presenta. Este proyecto propone este criterio como una disposición transitoria, que será aplicable a las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el entendido que su propósito es romper una situación inicial en la que operan fuertes e invisibles barreras de entrada.

Asimismo, se establece un mayor aporte fiscal para los partidos políticos en función del número de mujeres que elijan, tanto a la Cámara de Diputados como al Senado. Esta regla también se aplicaría transitoriamente a las próximas 4 elecciones parlamentarias.

Finalmente, explica que esta iniciativa contempla un mecanismo de actualización de la distribución de escaños que opere cada 12 años, en función de las variaciones en el número de electores de cada territorio.

Concluye el mensaje señalando que el actual Gobierno presentará un proyecto de reforma constitucional que complementa los contenidos de esta iniciativa. En la referida iniciativa se propondrá que las vacantes de parlamentarios, serán provistas por el partido al que pertenecía el representante, con una persona seleccionada por medio de una elección abierta en que podrán participar todos los militantes de esa colectividad y los ciudadanos independientes de la circunscripción o distrito, la que será regulada y administrada por el Servicio Electoral.

Asimismo, que se eliminará la inhabilidad que impide a dirigentes sindicales y gremiales ser candidatos al Parlamento.

2.2. Estructura del proyecto aprobado por la Cámara de Diputados.

El texto aprobado en primer trámite constitucional se divide en cuatro artículos.

El primero modifica, mediante diecinueve números, la ley Nº 18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios.

A modo de síntesis, se pueden destacar las siguientes:

1.- Se establece que en las elecciones de diputados y senadores los partidos políticos podrán, al interior de cada pacto electoral, asociarse con candidatos independientes.

2.- Se limita el porcentaje de candidatos varones o mujeres que pueden declarar los partidos políticos. Este no puede superar el sesenta por ciento del total de candidatos que declare el partido.

3.- Se permite que los partidos o pactos electorales incluyan en sus declaraciones de candidaturas a diputados y senadores, un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al número de parlamentarios que corresponde elegir en un determinado distrito o circunscripción.

4.- Se disminuye en un 50 % el número de firmas requeridas para patrocinar una candidatura independiente.

5.-Se otorgan nuevas facultades al Consejo del Servicio Electoral para aceptar o rechazar la declaración de candidaturas. Asimismo, se establece un procedimiento al que puede acogerse el partido político cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador hubieren sido rechazadas. Igualmente, se prescriben nuevos plazos para que los partidos y los candidatos independientes puedan reclamar, ante el Tribunal Calificador de Elecciones, de las resoluciones adoptadas por el referido Consejo.

6.- Se precisa que en el lado izquierdo del número que se asigna a candidato en cada voto habrá una fotografía del mismo.

7.- Se establece una nueva definición de propaganda electoral. Al respecto se precisa que ella incluirá toda manifestación pública, escrita o audiovisual, que promocione el nombre, apellido o partido político al que pertenezcan los candidatos o que utilicen cualquier otro medio de identificación, dirigido a obtener apoyo electoral. Se precisa que el financiamiento de los gastos que se realicen con este objeto solo podrá provenir de personas naturales con derecho a voto en Chile.

8.- Se señala que tratándose de una elección de Presidente de la República y de Parlamentarios, se sumarán separadamente los votos obtenidos por cada lista y por cada uno de los candidatos.

9.- Se determina la fórmula electoral que se utilizará para determinar los candidatos a diputados y senadores que han resultado presuntivamente electos. Al respecto, se precisa que para realizar tal determinación se utilizará el método D´Hont.

10.- Se prescribe que para la elección de los diputados el país se dividirá en 28 distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá un mínimo de tres y un máximo de ocho diputados, según la nueva división distrital establecida en el artículo 179.

11.- Se establece que corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los veintiocho distritos establecidos en la ley. Se prescribe que ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 9 diputados.

12.- Se establece que el Senado se compone de 50 miembros. Se indica, además, que cada región constituirá una circunscripción y que cada una de ellas elegirá un mínimo de 2 senadores y un máximo de 7, atendiendo al número de sus habitantes. Se dispone una norma específica para poner en ejecución en los próximos años esta regla.

El artículo 2º modifica, en ocho números, la ley Nº 19.884, Orgánica Constitucional sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral.

Sus principales enmiendas son las siguientes:

1.- Se reduce el límite del gasto electoral en que pueden incurrir Senadores y Diputados, cuando se supera un número determinado de electores.

2.- Se prescribe que, tratándose de votaciones a listas, el derecho al reembolso se hará a los candidatos que las integren, a prorrata de sus votaciones individuales.

3.- Se dispone que los aportes de campaña electoral serán públicos, debiéndose consignar la identidad del aportante, salvo las excepciones que señala la ley.

4.- Se establece que solo podrán ser anónimos los aportes privados cuyo importe no supere el equivalente a diez unidades de fomento. (241.510).Se prohíben los aportes de personas jurídicas, a excepción del fisco, los aportes reservados y los que provienen de personas naturales extranjeras.

5.- Se dispone que los partidos políticos cuyas candidatas hayan sido proclamadas electas en las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento por cada una de ellas. Con cargo a dichos recursos los partidos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.

6.- En las elecciones ya indicadas las candidatas a senadoras y diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales (0,01 UF) por cada voto obtenido.

El artículo 3º modifica, mediante cuatro números, la ley Nº 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos.

En síntesis, se efectúan las siguientes enmiendas:

1.- Se disminuye en un cincuenta por ciento el número de electores requeridos a un partido político en formación para que pueda constituirse. (Disminuye de 0,5 a 0,25 el porcentaje del electorado que hubiere sufragado en la última elección de Diputados en la región donde esté constituyéndose).

2. Se precisa que los notarios no podrán cobrar por recibir la declaración de un ciudadano en que manifiesta su voluntad de afiliarse a un partido político.

3.- Establece que un partido político podrá constituirse en una región si reúne el número mínimo de afiliados exigidos por la ley.

4.- Se elimina la exigencia de que el Consejo General de un partido someta a la aprobación de sus afiliados la celebración de un pacto electoral en elecciones de parlamentarios o su retiro del mismo y la persona del candidato a la Presidencia de la República.

5.- Se reducen las exigencias que autorizan la disolución de un partido político que no ha obtenido un número determinado de votos.

Finalmente, el artículo 4º transitorio prescribe que esta ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la partida 02, correspondiente al Congreso Nacional, de la Ley de Presupuestos para el Sector Público. Añade que lo establecido en el artículo 2º (que se refiere a las modificaciones a la Ley sobre de Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral) se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la ley de presupuestos vigente.

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DISCUSIÓN EN GENERAL

A continuación, presentamos una síntesis de los planteamientos formulados durante la discusión en general de esta iniciativa.

Al iniciarse el estudio de este asunto, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe, ofreció el uso de la palabra a la Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, quien agradeció la invitación que se le formuló para exponer sobre el proyecto de ley en análisis.

Comenzó señalando que en el actual sistema electoral binominal los ciudadanos tienen una limitada oferta de candidatos entre los cuáles pueden elegir. Agregó que este sistema impone a los partidos políticos la obligación de negociar entre ellos, antes de cada elección, quien será el candidato del conglomerado, debido a los restringidos cupos que otorga. Lo anterior, sostuvo, limita la diversidad de la oferta y traslada la decisión a los partidos políticos y no a la gente.

Manifestó que este sistema, con su restringida oferta, vuelve poco atractivo ir a votar y participar en los actos electorales. Expresó que al trasladar la decisión de la oferta de candidatos a los partidos, el ciudadano siente que solo confirma una decisión que ha sido adoptada exclusivamente por las cúpulas de los partidos políticos. Añadió que en un contexto de voto voluntario, lo anterior, pone en riesgo el sistema democrático.

Luego, afirmó que el sistema electoral binominal deja fuera a fuerzas políticas con importante apoyo ciudadano pero que no están integradas a las dos grandes coaliciones que se han organizado en las últimas décadas.

Declaró que al dejar fuera del Parlamento a sectores políticos relevantes de la sociedad, el Congreso Nacional pierde relevancia porque ya no es el punto de encuentro donde las distintas visiones de la sociedad debaten y acuerdan las cuestiones esenciales de la vida en común.

Adujo que esta característica del actual sistema electoral empuja a las fuerzas políticas no representadas a buscar expresión extra institucional y a radicalizar su posición contra el sistema que los excluye.

Seguidamente, recordó que la diferencia de valor del voto en Chile, según el lugar donde se emite, es demasiado alta y obstaculiza la igualdad del mismo. Agregó que no se puede emprender una reforma sin reducir significativamente esta desigualdad inaceptable en cualquier democracia.

Puntualizó que en el año 1973 Chile tenía una Cámara de 150 diputados y un Senado de 50 miembros, con mucho menos de la mitad de electores que hoy día. Consideró que con esos números, el rediseño de distritos y circunscripciones permitiría reducir de manera muy significativa la desigualdad actual del valor del voto entre ciudadanos de distintos territorios.

Luego, se refirió a la justificación de la idea de aumentar el número de diputados y de senadores.

En este sentido, destacó que todo esfuerzo de igualación del valor del voto hace imprescindible incrementar el número de diputados y senadores del país, para no verse obligados al imposible de disminuir la representación de algunos territorios escasamente poblados.

Sostuvo que se busca que los electores recuperen totalmente la decisión respecto de quiénes son sus representantes, para lo cual es indispensable que todas las formaciones políticas puedan concursar con sus propios candidatos y que las grandes competencias internas en los partidos y entre partidos se resuelvan de cara a la ciudadanía en las mismas elecciones.

Aseveró que al elegirse más diputados por distrito, baja el umbral o línea de corte con la que una fuerza política puede integrarse al Parlamento. Esto asegura, afirmó, que fuerzas que no son mayoritarias, pero que cuentan con apoyo ciudadano, tengan expresión en el Congreso Nacional que es el foro natural de la comunidad política chilena.

Remarcó que cuando se critica el aumento de parlamentarios para defender la mantención del sistema binominal, lo que se está negando es darle diversidad y mayor representatividad a nuestro Parlamento.

Añadió que la vía para posibilitar el ingreso al Congreso Nacional de las corrientes más significativas de la sociedad es la de reducir el número de distritos y circunscripciones para que se elijan más escaños en cada uno de ellos. Solo así, sostuvo, podrán ingresar al Parlamento sectores de menor votación pero suficientemente significativos de la sociedad, que sin duda merecen estar representados.

Manifestó que mientras más escaños del total de diputados se elijan en distritos grandes, menor será la barrera de ingreso al Parlamento y mayor será la inclusión.

Seguidamente, reiteró que el Congreso Nacional debe ser el lugar donde se exprese la diversidad del pueblo de Chile, el espacio de encuentro y el foro natural donde se resuelvan los disensos. Un Parlamento representativo e inclusivo, argumentó, será la piedra sobre la descansen el resto de las instituciones de la República.

Señaló que para alcanzar ese objetivo es necesario definir distritos que elijan un número mayor de diputados, pero también permitir que las listas electorales presenten más candidatos que los que se eligen en cada territorio electoral.

Insistió que con la reforma que se propone, son los ciudadanos los que deciden sobre la base de una oferta diversa y rica en candidatos.

Hizo presente que ella asegurará que candidatos con buena votación no queden fuera del sistema político. Precisó que la reforma facilitará la expresión de la mayoría y la representación de las minorías.

Destacó que con la conformación de un sistema de distritos y circunscripciones que mayoritariamente eligen un mínimo de tres parlamentarios y en su mayoría, cinco a ocho, se propende a que la ventaja de votos de un sector sobre otro se traduzca en ventaja equivalente en la representación parlamentaria. Al mismo tiempo, se asegura que en todos los territorios la minoría tenga también expresión parlamentaria.

Luego, consignó que con el proyecto de ley en estudio crecerá la competencia, la diversidad y la incertidumbre respecto de quiénes serán electos. Asimismo, explicó que como consecuencia de esta reforma resultará ganador el partido o sector político que obtenga más apoyo en una competencia abierta, lo que motivará una mayor participación electoral, que hoy es voluntaria.

Precisó que en relación a la Cámara de Diputados, se propone una integración de 155 miembros. Explicó que el sentido fundamental de esta medida es pasar de distritos binominales, que eligen solo 2 escaños, a distritos plurinominales, que eligen entre 3 a 9 escaños según el número de ciudadanos que agrupen. Como no se afectan o dividen los distritos actuales, a ninguno de ellos se le quitan diputados y se respeta la región como unidad territorial representada.

Añadió que se establecen 28 distritos que eligen entre 3 y 8 diputados cada uno (con un promedio de 5.53).

Remarcó que esta nueva configuración tiene las siguientes características:

- La extensión territorial de los distritos no excederá los márgenes de una Región.

- Los nuevos distritos se constituyen a partir de la agregación de distritos hoy existentes;

- La asignación del número de escaños no reducirá, en términos absolutos, la representación que tienen hoy los distintos territorios;

Subrayó que de los 35 escaños adicionados a la actual integración de la Cámara, un total de 23 se asignaron para corregir la sub representación de los grandes centros urbanos del país (15 a la Región Metropolitana, 4 a la Región de Valparaíso y 4 a la Región del Biobío).

Añadió que los otros 12 escaños nuevos se asignan, a razón de uno por región, a todas y cada una de las demás regiones del país. No se ha querido, en este punto, discriminar entre esas regiones.

A continuación, se refirió a los cambios que se proponen en la actual configuración del Senado.

En primer lugar, explicó que se elegirán 50 senadores y cada región pasará a ser una sola circunscripción.

Agregó que cinco de las regiones mantienen el número actual de dos senadores, mientras las otras diez lo aumentan, reduciendo así la desmesurada desigualdad en el valor del voto según el lugar donde se emita, permitiendo que se exprese la mayoría y que siempre esté representada también la minoría.

Uno de los principios que rige la distribución de los asientos en esta Corporación es la igualdad política entre las 15 regiones del país. Por ello, 3/5 de los escaños se distribuyen de manera igualitaria, de manera que cada región, con independencia de su número de electores, tendrá un mínimo de dos representantes en el Senado.

Manifestó que los restantes 20 senadores se elegirán en las regiones con mayor número de electores, evitando que una asignación muy alta a la Región Metropolitana pueda poner en cuestión el carácter esencialmente territorial de la representación en esta Corporación.

Añadió que se mantiene la elección de dos senadores en las regiones menos pobladas (Tarapacá, Antofagasta, Atacama, Los Ríos, Aysén y Magallanes, agregándose la nueva circunscripción Arica-Parinacota, también con 2 senadores)

Luego, explicó que las regiones de O’Higgins, Coquimbo y Los Lagos pasan de 2 a 3 senadores cada una. Precisó que las regiones de Valparaíso, Maule, Biobío y de La Araucanía, que hoy día eligen 4, pasarán a elegir 5 senadores cada una. Por último, señaló que la Región Metropolitana elegirá 7 senadores.

Al detallar estos cambios, hizo presente que de los 12 nuevos escaños senatoriales, 3 irían a la Región Metropolitana, 2 a la nueva región de Arica y Parinacota, se agregaría uno adicional en cada una de las otras 7 regiones más pobladas. Con esto, sostuvo, la gran mayoría de los senadores (76%) serán electos en circunscripciones de 3, 5 o 7 escaños.

A continuación, destacó que la propuesta reduce las diferencias en el valor del voto, pero también asigna un valor fundamental a la necesidad de representación de todas las regiones.

En este sentido, manifestó que hay que considerar que el 75% de los nuevos senadores –es decir, 9 de los 12 adicionales – se asignan a regiones. Explicó que la Región Metropolitana solo obtiene tres senadores adicionales. Este cambio que esta región representará un 15% del total del total de integrantes de esta Corporación, a pesar de que en ella habita el 39% de los ciudadanos del país.

Seguidamente, precisó que se propone que los partidos o pactos puedan presentar hasta un número de candidatos equivalente al número de cargos a elegir + 1. Esta idea, afirmó, permitirá aumentar las opciones a disposición de los electores y facilitará la renovación de los representantes al existir distritos más grandes y más escaños a elegir. En la idea original del proyecto se contemplaba un diferencial de NX2 que fue modificado en la Cámara de Diputados hasta llegar a la fórmula del N+1.

Connotó que en relación a la entrada en vigencia, para completar la nueva integración del Senado, el proyecto de ley establece que, en las elecciones parlamentarias de 2017 se renovarán completamente las circunscripciones de las regiones impares. En el caso de las regiones pares y Metropolitana, los parlamentarios electos el 2013 seguirán en funciones hasta completar su período. En las elecciones de 2021 estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde.

Precisó que el cambio al binominal es una reforma de un gradualismo político razonable para tener un Parlamento con el sistema proporcional moderado para el año 2022.

En materia de financiamiento, puntualizó que el aumento del número de parlamentarios se financiará con cargo al Presupuesto del Congreso para el año 2018.

Manifestó que crear nuevos escaños tiene un costo, pero consideró que dicho costo no irroga gasto fiscal y puede hacerse con cargo a los recursos de ambas Corporaciones.

En este sentido, explicó que se trata de un costo que no es actual, sino diferido para 2018 y para 2022, de acuerdo al calendario en que se irán completando los nuevos escaños.

Expresó que se trata de costos que el Congreso puede asumir, haciendo con tiempo los ahorros y ajustes necesarios. Consignó que a partir de ahora y en un plazo de tres años, el Congreso podrá analizar y decidir de manera autónoma las diversas modalidades de ahorro y reasignación presupuestaria que permitan llevar adelante esta reforma a partir del 2018.

Enfatizó la alta valoración de la función del Parlamento y de los parlamentarios, por lo mismo en dicha perspectiva de financiamiento de la reforma hacia el 2017, como Gobierno se trabajará junto al Congreso para velar y asegurar la dignidad del cargo y la calidad del trabajo parlamentario en las nuevas condiciones del sistema político electoral.

A continuación, se refirió al fortalecimiento de la participación política de la mujer. En esta materia, indicó que nuestro sistema político limita el espacio a la participación de la mujer. Chile, afirmó, está bajo el promedio de participación de la mujer en los parlamentos en América Latina y en los países de la OCDE.

Recalcó que en nuestro país actualmente solo 15% de nuestros diputados y senadores son mujeres. Lo anterior, aseveró, forma parte de la desigualdad de género de nuestra democracia que esta iniciativa pretende corregir.

Hizo presente que con el objeto de avanzar hacia un Congreso que represente adecuadamente a hombres y a mujeres, se propone incorporar una cuota de género, requiriendo a cada partido político, integre o no un pacto, que su nómina total de postulantes a la Cámara y al Senado cumpla el requisito de que ningún género esté representado por sobre 3/5 ni por debajo de los 2/5 del total. Al calcularse el porcentaje de la cuota (60/40%), si tal decimal sobrepasa 39 se aproximará a 40. Por ejemplo, si el número diera 39,2 se aproximará a 40 y se entenderá que se cumple con el porcentaje exigido.

Remarcó que dicha norma se propone como transitoria, aplicable a las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el entendido que su propósito es romper una situación inicial en la que operan fuertes e invisibles barreras de entrada.

Consignó que se establece un incentivo de 500 UF por candidata, para los partidos cuyas mujeres resulten electas.

Agregó que se establece un reembolso adicional para las candidatas mujeres. En total se reembolsarán 950 pesos aprox. por voto.

Indicó que el no cumplimiento de las cuotas acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a Diputada/o o Senador/a, según sea el caso.

Concluyendo su exposición, consideró que hoy el país está maduro y se ve un consenso más amplio para una reforma que mejore nuestro sistema electoral.

Se mostró optimista para que podamos terminar con un régimen electoral agotado y que no contribuye a que tengamos una democracia moderna y más representativa. Lo anterior quedó demostrado en la tramitación en la Cámara de Diputados.

Agradeció el trabajo de los diputados y diputadas que incorporaron un conjunto de mejoras e indicaciones al proyecto, y que fueron aprobadas. Entre ellas, la alternación de nombres de candidatos y candidatas en las listas o pactos; la posibilidad de incorporar una fotografía del candidato a la cédula electoral si éste así lo quiere, las modificaciones en materia de gasto electoral, entre otras.

Manifestó que éste es el ánimo que inspira al Ejecutivo, que no es otro que buscar entre todos el máximo acuerdo posible para llevar adelante las transformaciones comprometidas ante la ciudadanía.

Valoró la disposición favorable de los parlamentarios independientes, así como también de nuevas fuerzas como es el caso de Amplitud, que respaldaron esta iniciativa en la Cámara. Y por cierto, el hecho de que Renovación Nacional ha estado desde hace mucho tiempo por cambiar el binominal.

Concluyó señalando que Chile es un país maduro para este tipo de cambios. Enfatizó que se puede y se debe avanzar hacia un sistema electoral proporcional moderado, que permita volver a prestigiar la actividad política y mejorar la calidad y representatividad de nuestra democracia.

Invitó a todos los senadores a apoyar este proyecto y así poner fin al sistema electoral binominal y avanzar, de una vez, hacia un nuevo régimen electoral acorde a una democracia moderna e inclusiva.

En una sesión posterior, la Comisión escuchó, en primer lugar, al señor Lucas Sierra, quien intervino en representación del Centro de Estudio Públicos (C.E.P.).

Manifestó que el Centro de Estudios que representa tiene una opinión positiva respecto del objetivo de esta reforma. Explicó que el sistema binominal ha cumplido un ciclo y por diversas razones, debe ser reemplazado.

Planteado lo anterior, señaló que la pregunta que debe hacerse la Comisión es la siguiente: cuál es el método electoral más idóneo para substituir el binominal.

Aseveró que en la medida que se mantenga el presidencialismo como forma de gobierno en Chile, el sistema electoral debe tener un carácter mayoritario, antes que proporcional.

Agregó que si el sistema de gobierno se aproximara más al parlamentarismo, el sistema electoral parlamentario mayoritario no sería un problema. Ejemplificó señalando que Gran Bretaña funciona con un sistema mayoritario uninominal; Alemania posee un sistema mixto; en Israel rige un sistema proporcional.

Expresó que las únicas democracias estables en el mundo, tienen un sistema electoral mayoritario.

Recordó que la única virtud que tiene el sistema binominal es que corresponde a un tipo de sistema mayoritario, por lo que reduce el peligro de fragmentación del Congreso Nacional.

Consignó que el presidencialismo tiene, como ninguna otra forma de gobierno, el problema de las dos soberanías. Explicó que el Congreso se elige de una manera separada del Ejecutivo pero ambos deben trabajar coordinadamente. Si no lo hacen así y surgen conflictos entre ellos. Por lo anterior, aseveró, deben existir mecanismos de solución adecuados. Indicó que el mecanismo existente en Chile es escaso y deficitario, porque lo único que existe al respecto son las acusaciones constitucionales. Criticó a la institución antes mencionada, porque solo está en manos del Parlamento y son traumáticas. Ella constituye un mecanismo para resolver el conflicto político que es cuasi jurisdiccional, e implica una imputación de conducta anti normativa, por el cual, el condenado es eliminado del juego de la política por un período de tiempo considerable.

Se mostró partidario de aplicar los mecanismos de los gobiernos parlamentarios, como por ejemplo la censura; los votos de confianza o la disolución del Congreso. Cuando en ellos cae un gobierno o un miembro del gabinete, no queda excluido del mundo político.

Connotó que en nuestro país debemos evitar que se acreciente el conflicto político y ello se logra, afirmó, a través de diversas herramientas, como por ejemplo, la disciplina partidaria, partidos políticos profesionales y robustos y, por sobre todo, mediante un sistema electoral adecuado.

Consignó que sistemas electorales más proporcionales aumentan el riesgo de fragmentación del Congreso, y este fenómeno acrecienta el peligro de conflicto entre las dos mencionadas soberanías. Precisó que sistemas electorales mayoritarios reducen dicho riesgo.

Agregó que el Centro de Estudios Públicos es partidario de un sistema de carácter mixto mayoritario.

A continuación, hizo uso de la palabra el investigador del Centro de Estudios Públicos, señor Ricardo González quien explicó que en su intervención se referiría al sistema electoral propuesto por el C.E.P.

Explicó que su propuesta tiene las siguientes características:

1.- Se sugiere estructurar 100 distritos uninominales. 50 parlamentarios se eligen en una lista nacional cerrada. En ella los ciudadanos votan por el candidato de su distrito y por el partido o coalición de su preferencia.

2.- El mismo candidato puede competir en distritos uninominales y en la lista nacional.

3.- Los partidos o coaliciones que obtengan, a lo menos, un 5 por ciento de los votos por lista podrían a optar a escaños en la lista nacional.

4.- Los independientes (fuera de pacto) pueden competir por escaños en distritos uninominales y en la lista nacional.

5.- Un partido o pacto no puede obtener un número de diputados tal que el porcentaje de escaños total en la Cámara alcanzado por dicho partido o pacto, exceda en 8 puntos a los votos obtenidos en la lista nacional.

Precisó que el sistema propuesto beneficiaría a las mayorías y fomentaría la formación de grandes coaliciones. Puntualizó que esto implicaría que pactos con alta votación obtendrían una proporción de los escaños superior a la fracción de votos conseguida. En este modelo coexiste un sistema mayoritario y uno proporcional, y éste último permite que los partidos políticos pequeños puedan acceder a escaños en caso que no puedan obtenerlos a través de distritos uninominales.

Advirtió que respecto a la ley de cuotas, es acomodable al sistema que se propone porque no genera conflicto con elecciones primarias.

Luego, manifestó que el ideal para el diseño de los distritos es que cada uno de ellos tenga una cantidad similar de personas y el mismo número de representantes en la Cámara. Constató que en la práctica hay restricciones geográficas, administrativas y algunas fallas en el diseño de los distritos, que producen cierta discrepancia entre los escaños asignados y la cantidad de personas que representa cada uno de ellos. Agregó que para elaborar los distritos debe considerarse a la población y no solo al número de electores.

Para explicar esta última idea, señaló que excluir a los jóvenes menores de dieciocho años; los condenados a pena aflictiva y los extranjeros sin residencia afectaría la representación de una parte relevante de la población. Enfatizó que el criterio para determinar el tamaño de los distritos debiesen ser los habitantes.

Explicó que la propuesta supone actualizar los distritos cada diez años, en función de los censos poblacionales, de manera que queden recogidos los cambios demográficos y migratorios. Agregó que tanto el Servicio Electoral como el Instituto Nacional de Estadísticas deben ser las instituciones que se hagan cargo de la definición de los distritos.

Destacó que en el modelo ideal, cada distrito debería tener aproximadamente un 1% de la población del país.

En este modelo, agregó, las catorce comunas más grandes del país tendrán más de un distrito en su interior, en tanto que las comunas más pequeñas deberían agruparse de forma tal que en el conjunto de ellas habite un 1% de la población nacional.

Enfatizó que los distritos que propone el centro de estudios que él representa, son más pequeños que los de la reforma y que los del binominal. Consignó que lo anterior favorece una mayor identificación de los electores con sus representantes y genera la posibilidad de una mejor rendición de cuentas. De esta manera, sostuvo, se afianza la legitimidad de la representación democrática. Cabría esperar además, que los costos de las campañas disminuyan si los distritos son más reducidos.

Explicó que no se ha elaborado una propuesta específica respecto al Senado, sin embargo el esquema planteado para la Cámara de Diputados es adaptable a la Cámara Alta.

Luego, manifestó que en cuanto a la representación indígena, la ley de cuotas es moldeable al sistema electoral que se elija, pero no asegura representación.

Finalmente, hizo presente estructurar un distrito de representación indígena constituye una alternativa mucho más compleja porque involucra una serie de consideraciones, como por ejemplo, quienes serán los electores.

A continuación, intervino la señora Marcela Ríos, quien intervino en representación del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. Al comenzar su presentación, explicó que su exposición se centrará en una serie de aspectos que no fueron considerados en la discusión de este proyecto en la Cámara de Diputados.

Señaló que esta iniciativa procura resolver algunos de los problemas más serios que tiene el sistema electoral binominal. Ellos dicen relación con bajos niveles de representatividad, escasa competencia, incentivos que tienden a disuadir o inhibir la participación de mujeres y otros grupos históricamente excluidos. Agregó que es un sistema que tiene problemas de legitimidad y bajo apoyo en la ciudadanía.

Expuso que el número de parlamentarios que se quiere implementar, está por debajo del promedio mundial de escaños que tienen los parlamentos, de acuerdo al Informe Mundial de Congresos elaborados por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y la Unión Interparlamentaria, del año 2013. Dicho informe señala que el promedio mundial es de 245 parlamentarios y existe una fórmula elaborada, donde se determina el tamaño ideal de los mismos respecto a su población. Según dicha fórmula matemática, el tamaño ideal de la cámara de representantes debiese incorporar 260 parlamentarios.

Advirtió que hay países con democracias consolidadas, con poblaciones menores a las de Chile, que cuentan con Congresos de 300 o 400 integrantes. Todavía el tamaño del Congreso en términos de ampliación de escaños está dentro de los parámetros internacionales.

Luego, sostuvo que el segundo tema a abordar dice relación con la distribución de los escaños. Explicó que actualmente la discusión que se ha dado en términos de principios de representación que debería aplicarse en ambas Cámaras. Señaló que el indicador de malapportionment se usa a nivel internacional en la ciencia política para tratar de evaluar cuan bien o mal distribuidos están los escaños de acuerdo a la cantidad de electores por distrito. Enfatizó que el proyecto de ley, tal como está hoy, avanza de manera importante en la idea de mejorar la distribución de escaños por electores, sobre todo en la Cámara de Diputados.

Para explicar este fenómeno presentó el siguiente cuadro:

Remarcó, en relación al gráfico acompañado, que el proyecto de ley en discusión provoca una mejoría respecto a la sub representación. A pesar de ello, manifestó que todavía los distritos de la Región Metropolitana están sub representados. A ésta le faltan 14 escaños para tener una representación que acerque a los electores a una igualdad del voto. En todo caso, enfatizó que en otros distritos hay sobrerrepresentación.

Manifestó que en ambas Cámaras se ha tratado de complementar el principio de representación poblacional con el de representación territorial.

Señaló que respecto al Senado se busca avanzar en generar una igualdad entre todas las regiones y manteniendo en alguna medida el criterio poblacional.

Para explicar detalladamente lo anterior, acompañó a su exposición, el siguiente cuadro:

Respecto al anterior gráfico, explicó que todas las regiones, con excepción de la Región Metropolitana, están cerca del ideal de representación que les corresponde. Agregó que el problema radica en esta última, pues a pesar de aumentar de 4 a 7 senadores, sigue teniendo 13 senadores menos de lo que le corresponde de acuerdo a su población.

Recalcó que la octava región también está sub representada, ya que tiene un senador menos de lo que le correspondería según su población.

Sostuvo que lo que se sugiere es acercar al Senado a una representación más estrictamente territorial, pero haciéndose cargo de la sub representación de la Región Metropolitana.

Añadió que en los congresos bicamerales donde se respeta un principio estricto de representación territorial en el Senado, la característica esencial de dichos parlamentos es que se refieren a países federales donde existe autonomía de los estados o regiones.

Precisó que aumentar el número de senadores en las regiones no es un mecanismo eficaz para resolver los temas de descentralización que tiene el país, es decir, incrementar su número, agregó, sin desconcentrar recursos, poder, y facultades a los gobiernos regionales no resolverá por sí solo los problemas de poca autonomía que tienen las regiones para gobernar los asuntos de dicha zona geográfica.

Luego, se refirió al tema de las cuotas para incrementar el número de mujeres en el Congreso Nacional. Al respecto, señaló que Chile tiene una de las peores representaciones femeninas en América Latina. Lo anterior, afirmó, se explica porque los partidos políticos tienden a nominar a hombres. Remarcó que el promedio total entre los años 1989 y 2013, de todos los partidos que participaron en las elecciones parlamentarias, el 90% de candidatos fueron hombres.

Para detallar lo anterior, acompañó el siguiente gráfico:

Manifestó que la modificación del sistema electoral implicará un aumento en la magnitud de los distritos y en la presencia de un candidato más por lista, compitiendo en cada distrito (N+1) Una opción razonable, sería congelar la aplicación de primarias transitoriamente mientras se aplican las cuotas, esto es por cuatro elecciones, o en su defecto, aplicar las cuotas a las primarias.

Sostuvo que en cuanto al financiamiento, sería un avance aprobar el límite o eliminar los aportes reservados a las campañas electorales. Igualmente, agregó que el voto por lista podría contribuir a mejorar los niveles de identificación de los electores con los partidos políticos, ya que ésta ha ido disminuyendo según se muestra en el siguiente grafico, titulado “Distancia entre ciudadanía y partidos”.

Finalmente, explicó que un solo partido hizo primarias legales

Seguidamente, el Presidente accidental de la Comisión, Honorable Senador señor De Urresti precisó que no solo Renovación Nacional efectuó primarias, sino que también el Partido Socialista.

A continuación, se otorgó el uso de la palabra al Instituto Libertad, representado por el señor Antonio Horvath Gutiérrez, quien comenzó su exposición preguntándose qué lógica debe cumplir cualquier modificación a un sistema electoral. Sostuvo que el primer objetivo que ella debe cumplir es dar estabilidad y gobernabilidad; en segundo lugar, lograr representación e inclusión de las fuerzas políticas que son relevantes en el país; finalmente, debe asegurar la competencia entre los distintos actores y encontrar una adecuada conversión de votos y escaños.

Señaló que no existe un sistema que sea perfecto en una adecuada conversión entre votos y escaños.

Citó al cientista político Dieter Nohlen, quien “aboga por cambios y reformas incrementales de magnitud moderada en los sistemas electorales, tanto por la posibilidad cierta que ofrecen de resolver los déficits del sistema político, como por las posibilidades de éxito de llevarlas a cabo, teniendo en cuenta que estas discusiones son entorno a relaciones de poder, aspecto fundamental para entender cualquier modificación electoral”.

Asimismo, citó a la socióloga Carla Perelli quien ha expresado:

•“Los sistemas electorales no son inmutables. Deben acompañar el cambio societal e histórico, las nuevas formas de estructuración de la vida política, la incorporación de nuevos actores, corrientes y procesos”.

•“Si hay un rasgo que la política (y la gobernabilidad) comparten con los mercados, es la necesidad de una visión de futuro, un pensar el mediano y el largo plazo, que se traduzca en un marco de reglas de juego claras y estables. No se pueden cambiar las reglas para responder a circunstancias variables y coyunturales, a problemas del momento exclusivamente, si bien la existencia de dichos problemas debe ser reconocida y aquilatada en su justo valor”.

•“Las reglas electorales no son parches a los que se recurre cada vez que el tejido político y social de un país tiene un pinchazo”.

•“El sistema electoral es una herramienta poderosa, pero no mágica. No se puede dar respuesta exclusivamente desde la ingeniería electoral a complejos problemas societales”.

•“Una cosa es la intencionalidad detrás de la propuesta, otra la realidad de la implementación de las reformas en el sistema”.

Aludió también al Doctor en Ciencias Políticas, señor Gabriel Negretto quien ha planteado lo siguiente:

•“Los partidos políticos y sus líderes no se hallan motivados principalmente por el deseo de lograr el sistema electoral más eficiente, sino el que mejor les permita sobrevivir políticamente”.

•Por lo anterior, “las reformas electorales se producen cuando los partidos políticos perciben que un sistema alternativo les permite preservar el poder adquirido o minimizar una derrota, y cuando perciben que una reforma puede mejorar su imagen ante los votantes o impedir una sanción electoral”.

Agregó que el Instituto Libertad ha sido actor propositivo del debate, junto al partido político que está ligado al Instituto, a saber, Renovación Nacional.

Respecto al proyecto en discusión, manifestó que los objetivos de éste son los siguientes:

1. Reducir la desigualdad del voto.

Señaló que en promedio, con el binominal se elegía 1 diputado cada 113.110 electores y con el nuevo sistema 1 diputado cada 87.569 electores.

Manifestó que se mejora la diferencia de electores por diputado entre el mayor y menor distrito. Con el binominal la diferencia era de 6,3 veces y con el nuevo sistema de 3,9 veces. Aunque la propuesta RN-DC es aún mejor: 3,1.

Observó que, sin embargo, la reagrupación de los actuales distritos puede generar un aumento en la distancia entre electores y candidatos. Esto, por ejemplo, dificultará la rendición de cuentas, la identificación ciudadano-parlamentario y aumentará el costo de las campañas.

Sostuvo que se generan incentivos para que los candidatos concentren su atención en las comunas más grandes y dejen de lado las comunas más pequeñas de sus distritos, debido a que en un sistema proporcional para salir electo no necesitas la mayoría de los votos, sino solo una fracción de ellos.

Destacó que debido a la reagrupación en los nuevos distritos tenemos más comunas y más electores en ellos, pasando en promedio de 5,8 a 12,4 comunas y de 226.219 a 484.755 electores.

Enfatizó que con el sistema binominal, el 28,6% de las comunas del país representaban desde el 0,2% hasta el 5% del total de electores del distrito, es decir, no eran relevantes para los candidatos. Con el nuevo sistema electoral, ahora el 60,4% del total de comunas del país representarán desde el 0,1% hasta el 5% del total de electores del distrito.

Agregó que lo anterior significa pasar de 99 a 209 comunas y de 589.371 a 2.205.677 electores en esta condición, los cuales representan el 16,25% del total. En otras palabras, se duplica la cantidad de comunas y se cuadruplica la cantidad de electores en comunas de “poca relevancia”. Mediante este cambio en los distritos no se está entregando mayor poder a la ciudadanía.

Consignó que son distintos los tipos de representación que tienen la Cámara de Diputados (electores) y el Senado (regiones). ¿Es necesario aumentar el número de senadores? La propuesta original del Instituto Libertad en 2012 era sólo agregar dos senadores a la región de Arica y Parinacota (de 38 a 40).

A continuación, se refirió al segundo objetivo que se menciona en el mensaje, esto es, permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas.

Expuso que en el análisis de las elecciones de diputados desde 1989-2013, las dos principales coaliciones políticas del país se han sobre-representado (relación votos/escaños) en desmedro de otras fuerzas políticas e independientes.

Añadió que en promedio, durante estos 24 años la Concertación (Nueva Mayoría) se ha visto favorecida levemente más que la Alianza: 4,77% contra 4,68%. Es un mito que el sistema binominal ha favorecido más a la Alianza.

Precisó que la Concertación (Nueva Mayoría) se vio más beneficiada en 1989, 1997, 2001 y 2013 y la Alianza en 1993, 2005 y 2009.

Manifestó que el problema real del binominal es que para las demás fuerzas políticas es muy difícil llegar al Congreso. Éstas en promedio desde 1989-2013 han sacado el 11,6% de los votos, pero sólo el 2,14% de los escaños. Es decir, sub-representadas en 9,45%.

Consideró que con todas las salvedades de las simulaciones, los resultados de las últimas elecciones de diputados indican que la situación no habría cambiado.

En relación con el objetivo de aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos, aseveró que al aumentar la oferta de candidatos no queda claro que pueda subir la competitividad de la elección. La competencia, afirmó, sigue estando principalmente al interior de los pactos electorales.

Advirtió que al bajar el umbral para ser electo se está facilitando la reelección de los incumbentes, lo cual disminuye la competitividad y la incertidumbre de la elección.

Seguidamente, se refirió al objetivo de facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías.

Expuso que este sistema es más proporcional que el binominal, pero de todas formas genera distorsión en la expresión de la mayoría. El sistema que sí la facilitaría es uno mayoritario, aunque no está en la tradición del país para este tipo de elecciones.

Enfatizó que como ya se señaló precedentemente si se observa la simulación de este nuevo sistema con los resultados de la elección de diputados 2013 no se detectan cambios significativos.

Agregó que en términos generales mientras mayor magnitud tenga el distrito, menor es el porcentaje de votos que se necesita para resultar ganador, aunque con poca diferencia en la medida que crece el tamaño del distrito. Esto podría provocar el efecto contrario (o combinado) de lo que había denominado como comunas “poco relevantes”.

Indicó que distritos más grandes y con bajos umbrales para acceder al Congreso, podría focalizar a los candidatos en territorios determinados (no necesariamente los de más electores) y podrían ser elegidos sin el conocimiento total de su distrito.

Acompañó un gráfico que muestra qué porcentaje de votos necesitaría una persona para ser electa, de acuerdo a la magnitud del distrito:

En cuanto al objetivo de promover un Congreso que refleje la diversidad de la sociedad, recalcó que la democracia chilena tiene un problema innegable de baja representación de la mujer en política. Sin embargo, aseveró, lo anterior no implica necesariamente que la única solución sea una ley de cuotas de género.

Consignó que las elecciones de diputados del año 2013 constituyeron un hito importante en la presencia de la mujer en la política. En esa ocasión se presentó la mayor cantidad de candidatas (91), el porcentaje más alto de mujeres en relación al total de candidatos (19,36%), la mayor cantidad de diputadas electas (19), la representación más elevada de mujeres en relación al total de diputados (15,83%), la mayor cantidad de votos conseguidos por mujeres (1.264.225) y el mejor porcentaje de votos hacia mujeres en relación al total de votos válidamente emitidos (20,32%). Sin embargo, estos números están lejos de lo que se podría denominar como equidad de género en la participación y representación política.

Se preguntó si ante los datos recién entregados, una ley de cuotas realmente va a corregir este problema, o más bien es el resultado una voluntad política, o bien una combinación de ambos factores. Hizo presente que el actual gobierno en su propia nominación de ministerios, subsecretarías, intendencias y gobernaciones tampoco se acerca a la ley de cuotas. Precisó que en los ministerios hay un 60% de hombres, en las subsecretarías casi un 70% del sexo masculino y en las intendencias un 80%.

Frente a lo anterior se preguntó si la mejor solución era una ley de cuotas o voluntad política para incrementar el porcentaje de mujeres a cargo de Ministerios, Subsecretarías, Intendencias y Gobernaciones.

Hizo presente que para observar lo anterior, era importante observar el siguiente cuadro:

Añadió que si revisamos cómo es la composición de los militantes de los partidos políticos, se constata que la mitad de ellos son hombres.

Respecto a las primarias, se preguntó si este tipo de elecciones serían incompatibles con una ley de cuotas. ¿Haría inútiles incluso algunos ejercicios de primarias respecto a la cantidad de candidatos que podría haber en el nuevo pacto? Agregó que no considerar la ley de primarias dentro de la actual propuesta también puede dejar un flanco abierto.

Finalmente, se refirió al sexto objetivo que señala el Mensaje del Ejecutivo, cual es evitar que queden fuera del parlamento candidatos con grandes votaciones.

Lo anterior, señaló no se lograría necesariamente con el proyecto de ley en discusión.

Para concluir, formuló las siguientes consideraciones:

Enfatizó que el gran tema de cualquier reforma electoral tiene que ver con posibilitar la entrada al Congreso de fuerzas significativas que hoy están fuera pero valorando el rol que tienen los partidos políticos. Estimó que el sistema propuesto en el proyecto no permite alcanzar ese objetivo.

Subrayó que sería impresentable que se aumente el número de diputados de los dos grandes bloques y las demás fuerzas no cambien su posición. Sostuvo que se deben evitar los “trajes a la medida”.

Expresó que ver la reforma al sistema electoral como “la” solución a los problemas de la democracia, constituiría una seria ingenuidad.

Finalmente, Aseveró que deben llevarse a cabo otro tipo de reformas, que dicen relación con el financiamiento de los partidos políticos y su democracia interna y revisar los efectos de la flexibilización de las actuales coaliciones y posible fragmentación partidaria.

A continuación, expuso el representante de la Fundación Jaime Guzmán, señor Máximo Pavez, quien agradeció la invitación formulada por la Comisión.

Comenzó su exposición preguntándose si la reforma al sistema electoral tal como está propuesta, cumple los objetivos que se pretenden alcanzar.

Al respecto señaló que el sistema electoral binominal es un sistema proporcional de magnitud 2. Algunos lo describen como un sistema en que hay elecciones y primarias en forma simultánea.

Agregó que este modelo ha ayudado a las dos grandes coaliciones políticas, aunque no de un modo tan desproporcionado. Precisó que benefició a la Concertación más que a la Alianza en las elecciones de diputados de 1989, 1997, 2001 y 2013. Favoreció a la Alianza más que a la Concertación en las elecciones de diputados de 1993, 2005 y 2009. Subrayó que la diferencia promedio es de menos del 5%.

Para fundamentar esta aseveración, presentó el siguiente cuadro

A partir de estos antecedentes, recordó las palabras del Honorable Diputado, señor Pepe Auth quien señaló que: “La verdad es que después de cuatro elecciones no existen ni el empate de la minoría con la mayoría ni la pretendida desproporcionalidad que subsidiaria a la segunda fuerza en desmedro del bloque mayoritario…” “El sistema binominal es, en rigor, un sistema que distribuye escaños entre los principales pactos con alto grado de proporcionalidad...”.

Se preguntó si el sistema binominal ayuda o no a establecer “caras nuevas”. Al respecto, subrayó que Chile tiene un alto porcentaje de renovación en ambas Cámaras.

Para ratificar lo anterior presentó el siguiente cuadro:

En relación a los fundamentos que avalan la propuesta de reforma, el representante de la Fundación Jaime Guzmán, señor Pavez, advirtió que una encuesta del CEP del año 2013, constató que dentro de los tres problemas que debe resolver el gobierno no se menciona la reforma al sistema electoral actual. Por otra parte, explicó que en una encuesta realizada en julio de 2014 no se pregunta por el sistema binominal, pero sí por la nueva Constitución, y el resultado es aún más bajo.

A continuación, presentó un gráfico que refleja los resultados de la primera encuesta que mencionó.

Sostuvo que el año 2012 el Instituto Nacional de la Juventud elaboró una encuesta en que se buscaba determinar de qué manera los jóvenes conocen la democracia. Resaltó que hay poco conocimiento de parte de dicho sector de la población respecto al sistema binominal.

Dicho estudio concluye también:

- El 54% de los encuestados no sabe cuál es el sistema electoral que se aplica en las elecciones Presidenciales, mientras un 22% dijo que para éstas elecciones –las Presidenciales- se aplica el sistema binominal.

- Casi el 60% de los encuestados declara no saber el sistema electoral que rige para las elecciones del Poder Legislativo. Menos del 30% sabe que se usa para elegir a los parlamentarios.

- Casi el 60% de los encuestados declara no saber el sistema electoral que rige para las elecciones municipales. Un 15% declara que se usa el Binominal

- Solo el 12% de los encuestados sabe que su comuna (distrito) es representada por dos diputados.

- El 73% de los encuestados no es capaz de nombrar a cinco Diputados de la República.

Se preguntó si de verdad existe un clamor por el cambio al sistema electoral como una arista fundamental para el mejoramiento de la democracia.

Sostuvo que los cuestionamientos que la Fundación le hace al proyecto de ley, son los siguientes:

En primer lugar, se refirió a la fórmula que contiene el proyecto aprobado por la Cámara de Diputados y que se expresa en la fórmula N+1. Es decir, que cada lista esté integrada por un candidato adicional al número de cargos a elegir.

Sobre esta propuesta advirtió que no hay razón para aplicarla, porque generará más confusión entre las personas, más gasto (público y privado) y más campañas. Señaló que con la legislación actual existen distritos con 10 o más candidatos. Con el cambio, podría haber más de 50 candidatos, lo que traerá como consecuencia que se elijan parlamentarios con votaciones muy bajas. A partir de este antecedente, se pregunto si ella ¿contribuye a la legitimidad del sistema?

Explicó que, a su juicio, esta propuesta causará un perjuicio directo a los candidatos a independientes. Agregó que la elección de diputados se parecerá más a la elección de concejales que a la de alcaldes.

En relación a la propuesta de garantizar una cuota a favor del sexo femenino señaló que lo lógico sería descontar de la base para el cálculo del porcentaje de la cuota quienes vayan a primarias.

En relación al incremento en el número de parlamentarios, explicó que esta propuesta asegurará la reelección de prácticamente todos los incumbentes, pues el umbral de votación para elegir un diputado disminuirá.

Estimó que esta medida elevará los gastos en dieta y en asignaciones que recibe el conjunto de los parlamentarios. Explicó que un diputado que hoy representa a dos o tres comunas pasará a representar nueve comunas, lo que implicará un aumento de los gastos.

Luego, puso en duda que este modelo aumente la competencia entre las listas. Sostuvo que la única competencia será al interior de las listas.

Seguidamente, señaló que el proyecto presenta problemas de Constitucionalidad.

Explicó que, a su juicio, el primero dice relación con la igualdad del voto. Se preguntó cuál es el argumento para que la tercera región que teniendo 221.606 electores elija 5 diputados, y la primera región, que tiene 222.024, elija solo 3. Con el fin de respaldar esta aseveración, presentó el siguiente cuadro.

Añadió que esta iniciativa presenta una inconstitucionalidad formal en materia de gastos, porque el artículo 67 de la Constitución establece, en su inciso cuarto, que “No podrá el Congreso aprobar ningún nuevo gasto con cargo a los fondos de la Nación sin que se indiquen, al mismo tiempo, las fuentes de recursos necesarios para atender dicho gasto.” Señaló que el último informe financiero que presentó el Gobierno establece el gasto por concepto de dieta y no el referido a asignaciones parlamentarias.

Explicó que según los antecedentes que han reunido un cargo de diputado implica los siguientes gastos:

Finalmente, sugirió que Chile debiese tener un sistema mayoritario, ya que es mejor que uno proporcional; una división territorial más pequeña para aumentar cercanía y el accountability ciudadano; campañas austeras y más competitivas y propender al fortalecimiento del proceso de primarias para evitar fraccionamiento al interior de los bloques.

Terminada la intervención precedente, el Honorable Senador señor Larraín agradeció las exposiciones efectuadas.

Solicitó la opinión del Centro de Estudios Públicos respecto del tema del financiamiento electoral, y sobre la indicación que se presentó en la Cámara de Diputados sobre esta materia.

Agregó que en relación a lo señalado por el CEP, éstos se refieren a un Congreso unicameral o si fuese bicameral, cuál sería su propuesta para el Senado. Asimismo, consultó su opinión por las cuotas indígenas.

Seguidamente, requirió a los representantes del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) su opinión respecto al financiamiento del nuevo sistema electoral.

Igualmente, inquirió al Instituto Libertad por el sistema que proponen, o si insiste en la propuesta a la que arribó Renovación Nacional junto a la Democracia Cristiana. Preguntó, al mismo Instituto, por la expresión utilizada de “traje a la medida” cuando se refirieron al sistema electoral que se propone en el presente proyecto de ley.

Finalmente, solicitó al profesor Máximo Pavez que ahondara más sobre los problemas de inconstitucionalidad que podrían afectar al proyecto.

El Presidente accidental de la Comisión, Honorable Senador señor De Urresti sostuvo que le pareció interesante la propuesta entregada por el CEP, pero se encuentra alejada del acuerdo mayoritario que se logró en la Cámara de Diputados. Manifestó que no está de acuerdo en lo planteado por dicho Centro de Estudios, especialmente en lo relacionado con los diputados nacionales.

Consultó si existe vinculación entre la propuesta presentada y el plan de descentralización que está preparando el Gobierno.

Hizo presente su disconformidad respecto al número de senadores que elegiría la Región Metropolitana, lo anterior lo consideró un atentado en contra de la descentralización administrativa del país. Preguntó si era necesario cambiar el tipo de Estado para tener una igualdad respecto a las unidades regionales.

Seguidamente, consultó a los representantes del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) por el programa de descentralización que no fue considerado por los expositores.

Inquirió a los invitados a que dieran su opinión sobre los distritos indígenas. Consideró que era un error no abordar en la presente discusión la incorporación de los pueblos originarios.

A continuación, intervino el señor Lucas Sierra, Subdirector Ejecutivo del Centro de Estudios Públicos, quien señaló que en cuanto al financiamiento de las campañas, su presentación se elaboró con anticipación a la formulación de la indicación presentada por los Honorables Diputados, señores Jackson y Mirosevic. Connotó que la posición del Centro en el tema del financiamiento, ha sido publicada y es relativamente conocida.

Agregó que el CEP analizó la ley 19.884, sobre transparencia, límite y control del gasto electoral, con su componente de mecanismo formalizado entre donaciones anónimas, reservadas y públicas, por una parte, y el financiamiento público de las campañas electorales con el subsidio a los votos, como un gran avance.

Precisó que el mecanismo es mejorable. Consignó que la propuesta original del CEP en estas materias fue equiparar el papel de los donantes a las campañas electorales de las personas jurídicas y de las naturales, sin embargo, la ley se ha inclinado por las personas jurídicas. Estimó que la solución a esto no consiste en eliminar o prohibir el aporte de las personas jurídicas a la política, sino que complementarlas con incentivos importantes a la donación de personas naturales, bajo un principio compuesto que consiste en que muchas donaciones pequeñas son mejores que pocas donaciones grandes y el mecanismo de la reserva funciona mejor mientras más donaciones pequeñas hayan, porque la reserva no es solo respecto del público, sino que también para el candidato.

Recalcó que el secreto, si está bien regulado, tiene un papel virtuoso, es por eso, que defienden las donaciones reservadas. Agregó que ellas no deben ser prohibidas, sino que mejoradas, a través del incentivo a la participación de las personas naturales en las donaciones reservadas. Lo anterior, sostuvo, se puede lograr con un mecanismo que consiste en que una donación de una persona natural sea complementada por un porcentaje determinado por el Fisco.

Señaló que prohibir las donaciones de las personas jurídicas y las donaciones reservadas significará un enorme retroceso.

Agregó que la descentralización geográfica del poder en Chile es un desafío de política pública de primera magnitud, sin embargo, consideró que el ejercicio de la potestad legislativa no es el primer lugar para pensar en la descentralización. Ésta se juega a nivel de la potestad administrativa.

Finalmente, consignó que Centro de Estudios Públicos no respalda la idea de un Congreso unicameral.

Luego, el investigador del Centro de Estudios Públicos, señor Ricardo González manifestó que dentro del esquema que se propone para la Cámara de Diputados se puede aplicar una lógica similar en el caso del Senado. Ejemplificó señalando que se pueden construir 30 distritos uninominales, lo que obligaría a redefinir las circunscripciones senatoriales e implementar 20 cupos a una lista nacional o por macro zonas.

Indicó que, en cuanto a las cuotas indígenas, el Centro al cual representa no tiene una propuesta, sino que más bien consideraciones generales. Añadió que instaurar cuotas es complejo, primero por la relación que éstas tendrían con las primarias, pero calzan, de alguna manera, con el sistema electoral vigente. Se preguntó: ¿Quiénes van a votar en este distrito indígena, solo los indígenas? Si, por el contrario, pueden votar todos, no solo los indígenas, los elegidos no serían auténticamente representantes de esas comunidades porque electores que no pertenecen a los pueblos indígenas podrían votar por ellos. ¿Los indígenas podrán votar por el distrito indígena y por el distrito territorial, es decir, votarán dos veces? Lo anterior es complejo, ya que contraviene el artículo 15 de la Constitución que consagra el sufragio igualitario. Otra pregunta que se debe responder es si incluimos el distrito indígena en el Senado o en la Cámara de Diputados. Precisó que para saber cuántos escaños asignar, debe saberse cuántos indígenas hay, y como no hay un censo vigente, no existe una cifra oficial.

Finalmente, hizo presente que de acuerdo al Convenio Nº 169, cualquier asunto que se disponga, debe ser consultado y deberá contar con el respaldo de los pueblos indígenas.

El Honorable Senador señor Espina alabó la propuesta del Centro de Estudios Públicos. Estimó que ella no ha sido analizada por los actores políticos con la profundidad que se requiere. Consignó que el hecho de que una mayoría en la Cámara de Diputados, haya aprobado un proyecto de ley, no implica que el Senado pueda analizarla y enmendarla.

Respecto a los pueblos originarios se preguntó, por qué ellos debieran tener representación, a lo menos en la Cámara de Diputados. Recordó que en la Araucanía se vive un conflicto que lleva más de cien años de data, respecto del cual ningún gobierno ha sido capaz de resolver. Hizo referencia a un programa elaborado por él, que contiene una propuesta por la paz de la Araucanía, a través de éste se pretende solucionar los problemas de entrega de tierras; la pobreza rural y asegurar la indemnización de las víctimas de la violencia, sean o no de origen mapuche.

En relación a la representación de los pueblos originarios, la representación política que hace imprescindible que ellos sean incorporados, resulta de la misma naturaleza del pueblo mapuche, donde no existe una interlocución con autoridades elegidas democráticamente, que permitan incorporarlos dentro de la institucionalidad.

Valoró la iniciativa y enfatizó que es un tema que la Comisión debe profundizar, porque de lo contrario no existirá una interlocución válida.

A continuación, intervino la señora Marcela Ríos en representación del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, quien lamentó no haber desarrollado en su presentación la cuestión de la representación de los pueblos indígenas, que es un tema de la esencia del trabajo de las Naciones Unidas en Chile.

Manifestó que el PNUD posee un informe mundial, elaborado conjuntamente entre el organismo ya mencionado y la Unión Interparlamentaria analizando los mecanismos de representación de los pueblos indígenas a nivel mundial. Dicho informe muestra que en todos los países, excepto uno, el esquema de representación que se está utilizando para los pueblos antes mencionados, son los escaños reservados. Añadió que las cuotas no son un buen mecanismo de acción afirmativa para representar a los pueblos indígenas, porque ellas están pensadas en grupos de la población que están distribuidos de una manera homogénea en todos los partidos. Agregó que las minorías étnicas no necesariamente están distribuidas de la misma manera. En algunos casos, precisó, tienen arraigos territoriales, o mayor cercanía con algunos partidos que con otros. Aseveró que el único país donde se están implementando las cuotas es en Perú, y la experiencia ha sido bastante negativa porque se ha prestado para prácticas clientelistas, de inscribir a indígenas en las listas de los partidos, sin que ellas tengan un arraigo, o legitimidad de origen respecto a sus pueblos, sino que más bien cada partido busca a la persona con apellido indígena para cumplir con la cuota.

Hizo presente que respecto a los escaños reservados, éstos tienen dificultades prácticas, en términos de su implementación. Añadió que el resultado tiende a fortalecer las identidades colectivas y la representación de los pueblos indígenas.

Sostuvo que el actual sistema de financiamiento de la política está funcionando de una manera deficiente. Prácticamente la mitad de los aportes que reciben los partidos y los candidatos al Parlamento son aportes reservados, pero en la práctica, la reserva de ellos es respecto a la ciudadanía, porque tanto los que reciben, como los que donan, tienen bastante información.

Agregó que tanto la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción, como la autoevaluación que se hizo en Chile de la implementación de dicha Convención, plantearon que un punto que podía generar espacios para corrupción y tráfico de influencias es la reserva de los aportes a las campañas políticas.

Connotó que en una muestra de 180 países realizada por Ideas International, se constató que no existe otro país en el mundo que tenga un sistema de financiamiento reservado como el que existe en Chile.

Estimó que eliminar los aportes reservados no resuelve los problemas de financiamiento de la política. Consideró como fundamental fortalecer la fiscalización. Precisó que las normas que existen hoy son vulneradas, ya que no se cumplen ni los límites de tiempo, ni del gasto.

Advirtió que la indicación de los Honorables Diputados señores Mirosevic y Jackson, aprobada en la sala de la Cámara de Diputados es positiva, pero claramente insuficiente, ya que debe llevarse a cabo una revisión más profunda de la legislación y sobre todo del rol del Servicio Electoral.

Respecto al tema de la estructura del Estado y los senadores regionales, manifestó que el planteamiento del PNUD sobre este punto es que es impopular y políticamente incorrecto. Recalcó que el Programa no está diciendo que no se deben resolver los temas de la descentralización, sino que se plantea avanzar en términos orgánicos y coherentes, donde vayan de la mano reformas políticas, administrativas y financieras. Sostuvo que lo que ha ocurrido hasta ahora es que ha habido descoordinación y no se han potenciado entre sí. Agregó que la medida de aumentar senadores a las regiones es ineficaz para descentralizar e impone un sistema de representación que no está de acuerdo con la estructura del Estado.

Destacó que si se inicia un proceso de reforma de los gobiernos regionales, tendría sentido hacer que el Senado tuviese una representación territorial. Si en la representación en la Cámara Alta solo se utilizara como criterio el antes mencionado, no es presentable que no se respete la igualdad del voto en la Cámara Baja. En ese sentido, indicó que a la Región Metropolitana le faltarían 14 diputados para alcanzar dicha igualdad. Lo anterior, explicó, es más agudo que la sobre representación que tiene la tercera región.

Expresó que si se va seguir en la lógica de representación territorial en el Senado, ella debe estar acompañada de un respeto efectivo del valor del voto, por lo menos en la Cámara de Diputados.

A continuación, en representación del Instituto Libertad, intervino el señor Aldo Cassinelli, quien aseveró que respecto al tema del financiamiento, el Instituto está efectuando un estudio sobre la materia. Ofreció entregar a la Comisión el resultado del mismo una vez que concluya.

Anticipó que el financiamiento debe ser mixto, permanente, transparente (sea público o privado) y fiscalizable.

Reconoció que el sistema electoral binominal tiene algunas falencias, partiendo por la representación del voto. Señaló que la propuesta original que tenía el Instituto partía de no tocar lo que ya existía, es decir, los distritos existentes no perdían representación y las zonas extremas quedaban, reconocidamente, con sobre representación. Agregó que se sugería una uniformidad en el resto del país con 134 diputados y 50 senadores, incluyendo dentro de estos últimos a los 2 senadores de la región de Arica y Parinacota. Hizo presente que ella fue sobrepasada por la realidad y debe ser modificada.

Subrayó que en los estudios realizados por el Instituto se han analizado también la descentralización y la asimetría de poder que se da entre el Ejecutivo y el Poder Legislativo.

Asimismo hizo uso de la palabra el señor Pablo Rodríguez, asesor del Instituto Libertad. Se refirió a la pregunta sobre si el sistema electoral que se propone es un traje a la medida o no. Su preocupación consiste en determinar cómo el sistema político es capaz de hacer ingresar a todas las demás fuerzas políticas que siendo electoralmente relevantes, actualmente están quedando fuera del parlamento. Lo anterior, explicó, podría solucionarse a través de distritos con menor magnitud o se requiere otro mecanismo, como asignar escaños nacionales, o crear distritos compensatorios.

A continuación, el señor Antonio Horvath, se refirió a lo expresado por el señor Máximo Pavez respecto a la primera y tercera región. Puntualizó que lo señalado por el profesor Pavez habla por sí solo y da la impresión de que esta reforma al sistema electoral podría considerarse un traje a la medida. No existe ninguna razón bajo la cual se pueden explicar más diputados en el caso de la tercera región, salvo que reconocer que es una región que siempre ha privilegiado a cierto sector político. Lo anterior, explicó, constituye un vicio formal. Sostuvo que la legitimidad del sistema actual padece del mismo vicio.

Seguidamente, en representación de la Fundación Jaime Guzmán, volvió a intervenir el señor Máximo Pavez, quien expresó que en cuanto a la constitucionalidad del proyecto, y específicamente respecto a la igualdad del voto, el artículo 15 de la Constitución establece las características del sufragio en Chile: Una de ellas, recordó, es que el voto debe ser igualitario. Agregó que en el mismo cuerpo legal, en el artículo 19 número 2, se dispone que: “Ni la ley ni autoridad alguna podrán establecer diferencias arbitrarias”. Connotó que el estándar de igualdad está referido no solo a toda persona, sino que también al legislador, es decir, en la ley no puede haber diferencias que sean arbitrarias o caprichosas. Sostuvo que estamos en presencia de una arbitrariedad, cuando hay ausencia de razonabilidad.

Añadió que si el proyecto de ley en discusión se transforma en ley, tal como está, el legislador está haciendo una discriminación arbitraria, que no da cuenta de una razonabilidad y eso, afirmó, evidentemente violenta a la Constitución.

Consignó que el proyecto de ley es una norma orgánica constitucional y está sujeta a control preventivo del Tribunal Constitucional, por lo tanto, no es necesario que los parlamentarios realicen un requerimiento de constitucionalidad. Reiteró el ejemplo de la primera y tercera región, donde la primera tiene más electores y elige 2 diputados menos. Lo anterior, puntualizó, no logra traspasar ningún estándar en materia de igualdad.

Apuntó que respecto a los distritos indígenas, éstos serían una nueva forma de cuotas. Sostuvo que el problema es que uno puede establecer tantas cuotas, como comisiones en el Parlamento hay. Con lo anterior se corre el riesgo de transformarnos en una democracia corporativista.

Precisó que en el caso de la mujer, la cuota se justifica porque corresponderá a una situación transitoria.

Añadió que en relación a los pueblos indígenas, siempre existirá un argumento para el cual, algún sector de la población requiera una atención especial, y en la lógica de la democracia el voto debe ser igualitario para todos.

Manifestó que a su juicio existe una discriminación que atenta contra la libertad económica y la desigualdad. Si una empresa privada puede donar para fines sociales, por qué no puede hacerlo en favor de la política. Debe regularse que dicho financiamiento sea transparentarse, pero estimó que es una prohibición odiosa que un cuerpo intermedio en aras de la libre iniciativa económica no pueda realizar un aporte a las campañas siempre que dicho aporte esté adecuadamente regulado.

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En una sesión posterior, la Comisión escuchó al profesor universitario y abogado constitucionalista señor Patricio Zapata Larraín, quien concurrió en representación del Centro Democracia y Comunidad.

Al comenzar su intervención agradeció la invitación a participar en el estudio de esta iniciativa. Manifestó que el Centro que dirige, ya elaboró en el año 2012 un documento que se refiere al cambio del sistema electoral binominal.

Asimismo, hizo presente que le correspondió colaborar en la preparación del proyecto de ley que ahora analiza la Comisión.

Luego, resaltó la enorme dificultad implícita en un cambio de sistema electoral por parte de un Congreso en funciones. Lo anterior, sostuvo, plantea una restricción ineludible, cuando es el propio cuerpo de incumbentes quien debe abordar la tarea de un nuevo sistema electoral. Esta circunstancia, explicó, introduce condicionamientos.

Agregó que cuando se hace una revisión de las reformas electorales en el Derecho Comparado o en el Derecho Nacional, siempre hay ciertos riesgos. Por un lado, está la reforma electoral que hace un sector político que ha ganado las elecciones, que tiene la mayoría para hacer un cambio y la usa para mejorar las posibilidades de ese sector con la finalidad de obtener resultados aún superiores en el futuro. Lo anterior sucedió, por ejemplo, en la última reforma electoral italiana, en que el Pueblo de la Libertad, encabezado por Silvio Berlusconi, ganó las elecciones del año 2006, con un sistema proporcional, y lo primero que hizo, con sus nuevas mayorías, fue cambiar el sistema electoral por un sistema que entregaría un bono a las fuerzas más votadas, con la convicción que ello le reportaría a dicha fuerza política, un dividendo en la elección siguiente. Lo anterior no ocurrió, ya que la fuerza política contraria a Berlusconi triunfó.

Añadió que en otras ocasiones la hace un sector que ve inminente una derrota, aprovecha su presente para hacer una reforma que amortigüe la caída. La situación antes descrita ocurrió con la última reforma electoral en Francia, en 1986. Especificó que todas las encuestas mostraban que el Partido Socialista se encaminaba a un desastre. El cambio a un sistema proporcional mitigó dicha situación.

Señaló que es difícil pensar una reforma electoral que haga completa abstracción de los intereses de los actores.

Agregó que se ha planteado la posibilidad de establecer un sistema mayoritario, y también se ha sugerido, por el Centro de Estudios Públicos, un modelo mixto. Advirtió que el problema con alguna de esas propuestas es que la única posibilidad de que se aprueben es en el contexto de una Asamblea Constituyente.

Sostuvo que si será el Congreso Nacional el que apruebe la reforma, desde el inicio ella estará, en cierta medida, condicionada por su actual integración. Hizo presente que lo importante es que ella no sea tan fuerte como para que vulnere los principios y los valores constitucionales.

Expresó que no está de más señalar hasta qué punto el elemento fáctico está presente, cuando son los propios parlamentarios en ejercicio los que hacen un cambio que va terminar, de algún modo, favoreciendo o perjudicando a algunos de ellos.

Manifestó que debe tenerse en cuenta dicha realidad. Por eso, explicó, el proyecto de ley en discusión se presenta cuando se inicia una nueva legislatura, cuando aún estamos a tres años y medio de la próxima elección parlamentaria. Esta iniciativa, puntualizó, no se puede discutir a seis meses o a doce meses o a dieciocho meses de una elección de ese tipo. Por eso resulta razonable discutirlo al inicio del período legislativo.

Añadió que estableciendo desde el origen una especie de doble régimen, ya que hay una confección de distritos para la Cámara de Diputados para el año 2017 y otra para ocho años más. Los distritos que se proponen para la próxima elección efectivamente está condicionado por la realidad actual, porque no era posible introducir una reingeniería radical que pudiera significar redistribuciones de escaños dramáticas entre una zona y otra, y pretender que los representantes de dichas zonas pudieran fácilmente concurrir con sus votos a esa reasignación.

Luego, precisó que el artículo 179 bis de esta iniciativa establece un sistema permanente que se irá reajustando cada diez años en base al censo, sin que tengan injerencia en esa reestructuración los intereses de corto plazo.

Recordó que lo que se propone es redistribuir los 155 escaños de acuerdo al sistema de cifra repartidora, estableciendo un mínimo de tres diputados y un máximo de nueve, para evitar que la Región Metropolitana pudiere absorber la representación ciudadana en la Cámara.

Seguidamente, recordó que desde el punto de vista de los principios, se ha dicho que cuando existen dos Cámaras, hay buenas razones para que la Cámara política represente ciudadanos y la otra Cámara represente territorios. Lo anterior es más evidente en el caso de los estados federales.

Manifestó que en el proyecto de ley en estudio, en una de las dos Cámaras el elemento poblacional será más fuerte, sin ser el único, y en el Senado, el elemento territorial predominará por sobre el criterio del número de habitantes.

Recalcó que por lo anterior, en el Senado no se propone una fórmula de igualdad absoluta o perfecta.

Reseñó que en la historia de Chile, la idea de que la Cámara de Diputados representa habitantes es una noción muy fuertemente instalada desde la convocatoria al primer Congreso Nacional en 1811, ya en ese entonces se estableció que Santiago elegiría a seis y las demás comunidades elegirían a tres, a dos o a uno. Con respecto al Senado, cada una de las agrupaciones departamentales que elegían cinco senadores antes del año 1973, era una especie de unidad territorial igual. Aún en dicho esquema, Santiago era una provincia y las demás agrupaciones reunían cuatro, cinco, seis o siete provincias, de manera, que no estábamos en presencia de una Cámara Alta que se construyera en base a la igualdad entre las provincias.

Hizo presente que el argumento de que una de las dos Cámaras refleja mejor el factor poblacional, y la otra el territorial, es correcto, a la luz de la historia constitucional chilena, pero no debiera ser llevado a un extremo.

Apuntó que la facticidad explica que tengamos una Cámara que no se hace cargo en un cien por ciento del principio de igualdad del voto. Explicó que el artículo 179 bis propuesto se hace mejor cargo de este principio. Lo anterior, sostuvo, ha dado lugar a críticas, incluso constitucionales al distritaje. Se ha señalado que se vulnera la Constitución Política con un sistema de diputados donde no se respeta estrictamente la igualdad de peso del voto.

Valoró que el argumento anterior se plantee, ya que refleja un nivel de conciencia respecto de la importancia del principio de igualdad del voto. Sostuvo que el año 1989 la oposición de la época planteó que el proyecto de reforma binominal que propuso la Junta de Gobierno, vulneraba la Constitución. En relación a ello se hizo llegar un escrito de téngase presente al Tribunal Constitucional de la época, firmado entre otros, por los profesores Verdugo, Cumplido, Andrade, Nogueira, etc. Indicó que el Tribunal desestimó dicha presentación sobre la base de una argumentación literal, ya que como la Constitución señalaba que habrá 120 diputados y se elegirán como lo señale la ley orgánica, el Tribunal estimó que dicha ley podía libremente establecer un mecanismo de elección.

Advirtió que nunca compartió dicha mirada, ya que no es partidario de que el legislador orgánico pueda distribuir los 120 o 155 escaños de diputados a su arbitrio.

Estimó que tampoco cree que una correcta interpretación constitucional implique que si el proyecto que se aprueba no responde completamente a la igualdad de voto, significa que estamos en presencia de una inconstitucionalidad.

Al respecto, precisó que se aplicaría la teoría del jurista alemán Robert Alexy, según el cual, los principios son mandatos de optimización que ordenan que algo se haga en la mayor medida de lo posible, jurídica y fácticamente.

Señaló que el proyecto de ley avanza en la dirección de la igualdad del voto. Advirtió que no es capaz de comprender que personas que durante 25 años no han cuestionado el sistema binominal en materia de igualdad del voto, hoy critiquen el proyecto en estudio, ya que este último mejora, radicalmente el principio antes mencionado.

Manifestó que en el Centro Democracia y Comunidad se planteó que el sistema proporcional recoge la historia de Chile. Sostuvo que uno de los problemas de las reformas electorales es que pueden ser ejercicios de ingeniería, de reconstrucción, de cómo hacer el país que nos gustaría que fuera. Agregó que el sistema binominal fue un ejercicio de ingeniería desde arriba, fue un intento de reconfigurar nuestra historia política dándole fuerza y poder a dos grandes fuerzas moderadas.

Consignó que a pesar que el sistema binominal fue hecho para evitar, entre otras cosas que hubiese independientes en nuestro Parlamento, o que existiesen otras fuerzas distintas a las dos grandes fuerzas, incluso ello no pudo derrotar la realidad. De las mil personas que han ganado elecciones desde el año noventa, solo existen nueve casos de candidatos que han sido elegidos fuera de pacto, con un veinticinco por ciento de piso.

A continuación, se preguntó cuán respetuoso debe ser el legislador de la realidad y hasta qué punto debe intentar seguir forzándola.

Recalcó que ha llegado el momento de asumir un sistema electoral que sea más respetuoso de esa tradición política, lo que no significa un sistema proporcional que haga imposible la gobernabilidad, tampoco que existan quince partidos políticos con representación.

Reiteró que la fórmula de distritos que se propone, con el promedio que se sugiere, está lejos de la proporcionalidad exagerada de Brasil, donde hay distritos que eligen ochenta diputados.

Apuntó que el riesgo de tener una infinidad de partidos políticos no se compadece con la realidad. Señaló que se retomará una moderada representación de las cinco, seis o siete fuerzas importantes, no muy distinta a la que se ha producido durante los últimos veinticinco años, pero más fruto de la voluntad de los ciudadanos y menos de la capacidad negociadora de los secretarios generales de los partidos políticos.

Hizo presente que es importante, al momento de escuchar las distintas reflexiones, mirar la literatura y la realidad política. Se ha dicho que si lo que se busca es competencia debiésemos optar por el sistema mayoritario, tal como existe en Estados Unidos o el Reino Unido. Advirtió que si uno le pregunta a los norteamericanos y a los británicos qué lo que piensan de este tipo de sistema, ellos están preocupados por la falta de competencia que ha terminado por producir.

Destacó que si se pensara tener un sistema mayoritario uninominal habría que poner mucho cuidado en quién hace el diseño de los distritos.

Seguidamente, manifestó que es partidario de fortalecer el Servicio Electoral, aumentar las sanciones en caso de infracción a las normas sobre gasto electoral, no descartando como sanción la pérdida del escaño. Subrayó que se debe diferenciar entre el aporte que hacen las personas naturales y el que hacen las personas jurídicas. Advirtió que debe revisarse lo de las donaciones.

Concluyó su intervención señalando que tiene dudas de que las empresas puedan hacer donaciones electorales, pero le parece complicado hacer la discusión sin contar con una propuesta integral del Ejecutivo, que se haga cargo de la revisión del financiamiento público. Estimó que reconsiderar el financiamiento privado sin abordar el público puede ser complejo.

A continuación, intervino el exsenador señor Camilo Escalona, en su calidad de Presidente del Instituto Igualdad. Comenzó su intervención agradeciendo la invitación que le formuló la Comisión. Aclaró que atendida la naturaleza del Instituto Igualdad, a saber, una Corporación sin fines de lucro del Partido Socialista, no es su función opinar sobre los aspectos específicos de la ingeniería electoral, sino que su presencia obedece a ratificar su compromiso con el reemplazo del sistema electoral binominal.

Agregó que una razón profunda del fortalecimiento de la estabilidad democrática, dice relación con hacerse cargo como sistema político, de la distancia que tiene la ciudadanía respecto a la política, que en muchos aspectos está asociada al sistema electoral.

Advirtió que la sociedad está convencida que el actual sistema electoral que nos rige es excluyente, y señaló que es un convencido de que el sistema político debe hacerse cargo de dicha situación, de lo contrario se estaría incurriendo en un grave error.

Valoró la propuesta de incluir en el proyecto en estudio, la cuota de género. Añadió que la disparidad en perjuicio de la representación femenina en el Congreso Nacional hace indispensable tener que legislar sobre mecanismos que permitan resolver la situación planteada.

Sostuvo que en cuanto al financiamiento y el mal manejo de las campañas políticas, todo avance en dicha materia es útil, aún cuando sea limitado. Manifestó que el nudo del problema está en colocar un límite efectivo al gasto de las campañas.

Agregó que los aportes reservados se inauguraron en la elección del 2005. Recalcó que en muchos casos, el financiamiento se originaba en aportes anónimos entregados directamente a los candidatos. Demostró su preocupación por el término de los aportes reservados, ya que ello puede incrementar exponencialmente los aportes de campaña no registrados, anónimos y oscuros, acentuando la disparidad de recursos que unos u otros puedan tener en una competencia electoral.

Reiteró que la solución viene dada por limitar los gastos de campañas. Explicó que para alcanzar ese objetivo es indispensable dotar al Servicio Electoral de las facultades respectivas. Finalmente, enfatizó que este último tema debe detallarse de mejor manera en el proyecto de ley en discusión.

A continuación, hizo uso de la palabra la señora Camila Maturana quien intervino en representación de la Corporación Humanas, quien agradeció la invitación de la Comisión.

Manifestó que desde la recuperación de la democracia, uno de los debates políticos más complejos que el Parlamento chileno ha enfrentado es la reforma al sistema electoral aplicable a la elección de parlamentarias o parlamentarios. Diversos sectores políticos y sociales concuerdan en la necesidad y prioridad de esta reforma y el amplio acuerdo alcanzado en la Sala de la Cámara de Diputados el pasado 13 de agosto así lo reafirma, confirmándose el compromiso parlamentario asumido al dictarse la Ley N° 20.725 que reformó la Constitución Política para habilitar este debate.

Expuso que además de su origen inconsulto, el sistema binominal ha sido cuestionado por la insuficiente representación de las distintas fuerzas políticas existentes en el país, la preponderancia de dos coaliciones que resultan sobre representadas y por obstaculizar la participación de las mujeres. Ello, aseveró, ha contribuido al deterioro de la legitimidad de la clase política y la creciente insatisfacción ciudadana frente a los representantes y la clase política en su conjunto. La disminución de la participación de la ciudadanía en los procesos electorales, especialmente en los últimos años, obliga a revisar los mecanismos políticos que rigen la relación entre representantes y representados y la toma de decisiones públicas.

Expresó que el proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal, en lo fundamental plantea: aumentar el número de parlamentarios o parlamentarias, incrementar el tamaño de gran parte de los distritos y circunscripciones, un sistema proporcional moderado para la elección de los y las congresistas, y un conjunto de medidas para la participación política paritaria de hombres y mujeres.

Indicó que uno de los aspectos fundamentales del proyecto es la incorporación de la paridad como una dimensión clave de la representación política. Los derechos civiles y políticos de las mujeres y los principios de igualdad de derechos y no discriminación, reconocidos internacionalmente e incorporados como obligación de los órganos del Estado por mandato constitucional (Constitución Política de la República, Artículo 5° inciso 2) son aspectos sustantivos de la democracia y deben incorporarse a cualquier debate político y particularmente en la propuesta sobre reforma al sistema electoral.

Declaró que es imposible avanzar en la profundización de la democracia sin incluir como uno de los factores clave en toda reforma la participación política de las mujeres y la adecuada representación de los intereses de las mujeres en las decisiones públicas. Precisamente, uno de los problemas del sistema político chileno que debilita la calidad de la democracia es la baja participación de mujeres en espacios de toma de decisión pública, tanto en cargos de elección popular como de designación.

Adujo que la insuficiente representación de las mujeres en posiciones de poder político evidencia que el sistema democrático tal como está definido no está siendo capaz de cumplir adecuadamente el mandato de representación igualitaria de los y las ciudadanas, propio de un Estado democrático de derecho.

Hizo presente que la sobre representación de las mujeres en puestos de poder expresa la discriminación estructural que afecta a las mujeres en el ejercicio de sus derechos humanos y constituye un déficit del sistema político por cuanto obstaculiza la adecuada representación de sus intereses en las decisiones públicas y dificulta alcanzar la igualdad de derechos en diversos ámbitos.

Apuntó que la insuficiente participación de mujeres en espacios de decisión no solo ha sido motivo de preocupación para las autoridades nacionales, sino especialmente para numerosos organismos internacionales, los que desde hace 15 años vienen reprochando al Estado de Chile los bajísimos niveles de participación de las mujeres en diversos ámbitos de la vida nacional y la inexistencia de medidas adoptadas para revertir este problema y así garantizar los derechos humanos de las mujeres sin discriminación.

Advirtió que la Constitución Política de la República vigente en el país dispone que “Las personas nacen libres e iguales en dignidad y derechos” (Artículo 1° inc. 1) y asegura a todas las personas “La igualdad ante la ley. En Chile no hay persona ni grupos privilegiados (…) Hombres y mujeres son iguales ante la ley” (Artículo 19 N° 2 inciso 1) y “La igual protección de la ley en el ejercicio de sus derechos” (Artículo 19 N° 3 inciso 1).

Señaló que por expreso mandato constitucional, los órganos del Estado tienen el deber de respetar y promover los derechos humanos, incluyendo aquellos reconocidos en los tratados internacionales vigentes (CPR, Artículo 5° inc. 2).

Destacó que a nivel internacional –como se ha señalado–, se multiplican los reproches al Estado de Chile por su incapacidad para garantizar debidamente los derechos y libertades fundamentales de las mujeres, en particular sus derechos civiles y políticos como el derecho a ser elegidas y tomar parte en las decisiones públicas.

Agregó que en esta deficitaria participación política de las mujeres confluyen diversas razones, destacando a juicio de los organismos internacionales:

1. Las características del sistema electoral.

2. El funcionamiento de los partidos políticos, y

3. La falta de medidas de acción afirmativa, entre las más significativas.

Precisó que en marzo de 1999, el Comité de Derechos Humanos, organismo que vigila el cumplimiento del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, reprochó al Estado de Chile “la notable insuficiencia de la participación de la mujer en la vida política, el servicio público y el poder judicial”; por lo que recomendó “que el Estado tome medidas para mejorar la participación de las mujeres, si es preciso mediante la adopción de programas de acción afirmativa”.

Añadió que ese mismo año (1999), el Comité para la Eliminación de la Discriminación Contra la Mujer también se manifestó preocupado por la baja “participación de la mujer en la política y la administración gubernamental, en particular en puestos de adopción de decisiones”, recomendando la implementación de una estrategia amplia, incluyendo medidas especiales.

Sostuvo que las medidas de paridad contenidas en el proyecto de reforma al sistema binominal propuestas por la Presidenta de la República y mejoradas durante su tramitación ante la Cámara de Diputados, se enmarcan en las recomendaciones formuladas por los organismos internacionales al Estado de Chile en los últimos años. Además, resultan imprescindibles para avanzar en garantizar los derechos civiles y políticos de las mujeres y mejorar la calidad de la democracia en el país.

Ratificó que es ampliamente conocido que Chile se encuentra por debajo del promedio regional de participación política de mujeres (15,8% frente al 25,6%), ubicándose en el lugar 95 de 189 países.

Connotó que igualmente es sabido que los países no avanzan espontáneamente en la superación de la discriminación contra las mujeres. Para ello se requiere de medidas especiales, de acuerdo a lo señalado por los organismos internacionales y la experiencia comparada lo confirma.

Consignó que los países que han buscado y alcanzado –en grados diversos– revertir el déficit de participación de las mujeres han adoptado mecanismos especiales para ello. Reformas constitucionales y medidas legislativas sobre paridad o cuotas para el acceso a puestos de decisión resultan fundamentales para avanzar a niveles más equitativos de representación política de las mujeres, asegurar el ejercicio de los derechos humanos sin discriminación y mejorar la calidad de la política.

Manifestó que el proyecto de reforma al sistema binominal aprobado por la Cámara de Diputados contempla un conjunto de medidas tendientes a asegurar la igualitaria participación de hombres y mujeres en el proceso electoral, aunque definidas con carácter transitorio para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029.

1. En primer lugar se contempla el mandato obligatorio a los partidos políticos de conformar sus listas de candidaturas a las elecciones de senadores/as y diputados/as respetando una proporción equilibrada entre hombres y mujeres.

2. En segundo lugar, se resguarda el cumplimiento de esta proporción 60%-40% en las listas de candidaturas a congresistas que los partidos presenten, disponiendo como sanción frente al eventual incumplimiento, el rechazo de la totalidad de las candidaturas a senadores/as o diputados/as de ese partido por parte del Servicio Electoral.

3. A fin de facilitar el cumplimiento de la proporción equilibrada en las listas de candidaturas se permite a los partidos cuyas listas sean rechazadas por el Servicio Electoral, dar cumplimiento a la proporción retirando declaraciones o declarando otras nuevas, dentro del plazo de cuatro días hábiles a la notificación de la resolución que dispone el rechazo.

4. Además se mandata a los partidos a incluir a sus candidatos y candidatas en las listas de manera alternada entre hombres y mujeres.

5. Se plantea –inadecuadamente, según se comenta más adelante– que esta medida obligatoria de incluir en proporción equilibrada a hombres y mujeres en las listas de candidaturas lo será únicamente en las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029.

Expresó que estas medidas no aseguran la elección de mujeres en cargos de elección popular sino únicamente que tanto hombres como mujeres puedan postular y competir a los cargos de diputados/as y senadores/as. La obligatoriedad de incluir mujeres en las listas de candidaturas es la medida mínima que los países adoptan para garantizar, al menos, el derecho de las mujeres a participar de los procesos electorales. Por ello se espera que el amplio apoyo con que esta medida contó en la Cámara de Diputados, se mantenga en el Senado y que se adopten todos los resguardos necesarios para asegurar el cumplimiento efectivo del principio de paridad que esta reforma busca instituir, evitando cualquier mecanismo que posibilite eludirlo.

Agregó que en relación al financiamiento y las modificaciones incorporadas por la Cámara de Diputados, se enmarcan en lo que han sido las recomendaciones internacionales, que señalan que, entre otras medidas, se promuevan incentivos a los partidos políticos para que designen un número igual de mujeres y hombres en las candidaturas, así como la financiación adecuada de las campañas de las mujeres que sean candidatas.

Hizo presente que el proyecto aprobado por la Cámara de Diputados plantea, en primer término, un aporte de 500 unidades de fomento (UF) a los partidos políticos a que pertenezcan las candidatas a diputadas y senadoras que sean proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones.

Se precisa que con dichos recursos los partidos pueden implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.

Criticó, la señora Maturana, que dicha medida sea facultativa, ya que lo anterior es insuficiente para modificar la cultura partidaria.

Advirtió que la norma dice relación con las mujeres que pertenezcan a partidos políticos, y no incluye a mujeres independientes que sean electas como parlamentarias. Aclaró que los partidos políticos que hayan apoyado estas últimas candidaturas, debiesen recibir el aporte estatal.

Puntualizó que, en cuanto a la transitoriedad que se plantea, está inadecuadamente prevista en el proyecto de ley, porque el estándar internacional señala que las medidas de acción afirmativa de carácter temporal, cesan cuando se cumplen los objetivos de igualdad de oportunidades y de trato que se han buscado. Recalcó que tras cuatro elecciones se modifique el comportamiento de los partidos, más mujeres sean elegidas por la ciudadanía, pero nada asegura que el solo transcurso del tiempo, sin otras medidas, efectivamente se traduzca en este cambio cultural y político, por lo tanto, lo aconsejable no es simplemente cesar con ellas una vez que ha pasado el tiempo, sino establecer mecanismos de revisión que permitan incorporar las correcciones que sean necesarias, de manera de cumplir el objetivo por el cual fueron dictadas.

Agregó que por otra parte es relevante insistir en que uno de los mayores aportes de la propuesta consiste en relevar la paridad como una dimensión necesaria de la representación política. Por ello resulta fundamental que las medidas de paridad se extiendan a las elecciones de alcaldes/as, concejales/as y consejeros/as regionales, así como a los órganos de los partidos políticos.

Asimismo, se espera que la paridad sea considerada para la conformación del Gabinete, de autoridades regionales, para la designación de embajadores/as y representantes ante organismos internacionales, así como en los directorios de empresas públicas.

Sostuvo que en complemento de lo anterior, resulta de la mayor relevancia legislar para disminuir el impacto del dinero en la política, que debilita la democracia y afecta aun mayormente a las mujeres. Añadió que deben reducirse los límites de gasto electoral actuales.

Además, recalcó que los ítems que la ley actualmente define como gasto electoral deben ser revisados a fin de incorporar como gasto a rendir aquellos que afectan en mayor medida a las candidatas, como por ejemplo, los derivados del cuidado infantil.

Manifestó que la limitación al gasto electoral y el cumplimiento efectivo de dicha normativa resultan fundamentales para mejorar la calidad de la democracia, como asimismo esfuerzos serios y medidas contundentes para transparentar el financiamiento de la política. Por ello se considera adecuado que la propuesta en debate plantee la eliminación de los aportes reservados a las campañas electorales y que se rebaje el monto de los aportes anónimos.

Consignó, con respecto a la participación política de los pueblos indígenas, que cualquier iniciativa que se adopte debe contemplar medidas para que tanto hombres como mujeres indígenas puedan participar y ejercer plenamente sus derechos civiles y políticos, además de ser debidamente consultada a los pueblos indígenas.

Aseveró que resulta necesario comentar la aparente tensión que existiría entre las medidas de paridad que la reforma contempla, con otras normas legales referidas a mecanismos de selección de candidaturas como las elecciones primarias.

Agregó que lo que cabe señalar al respecto es que la paridad es una manifestación o concreción del principio constitucional de igualdad de derechos entre hombres y mujeres contenido en el Artículo 1°, Artículo 19 N° 2 y Artículo 19 N° 3 de la Constitución Política de la República; y que además se encuentra consagrado en un conjunto de tratados internacionales de derechos humanos vigentes en el país que por disposición de la propia Constitución Política corresponde a los órganos del Estado respetar y promover (Artículo 5° inciso 2), obligación que ciertamente compromete al Poder Legislativo.

Enfatizó que las elecciones primarias constituyen uno de los diversos mecanismos de definición de candidaturas existentes, distinto de la nominación directa por los partidos políticos, y se encuentra regulado por la Ley N° 20.640 que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, parlamentarios y alcaldes, de 6 de diciembre de 2012.

Recalcó que todas las normas que regulan la participación política y el ejercicio de los derechos políticos, particularmente las que rigen los procesos eleccionarios, deben dictarse y reformarse cautelando las garantías constitucionales y los derechos humanos, y en especial dar cumplimiento al principio constitucional de igualdad de derechos y no discriminación.

Hizo presente que corresponde al Poder Legislativo –tanto al Congreso Nacional como al Ejecutivo en su rol colegislador– dictar las normas constitucionales y legales necesarias para asegurar el pleno ejercicio de los derechos y libertades que corresponden a todas las personas sin discriminación de ninguna clase. Así se establece en la Convención Americana de Derechos Humanos18 y en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos19, entre otros, y lo recoge la propia Constitución Política en el Artículo 5° inciso 2.

Expresó que de allí que la decisión adoptada por la Cámara de Diputados –que en definitiva rechazó la norma introducida por la Comisión de Constitución para excluir de la obligatoriedad de incluir en proporción equilibrada candidatos y candidatas de ambos sexos aquellos distritos y circunscripciones en que se hubieren realizado primarias– se considere acertada. De este modo se resguarda que el principio de paridad debe cumplirse en las listas de candidaturas con independencia de los mecanismos que los partidos políticos utilicen para la definición de sus candidatos y candidatas a las elecciones parlamentarias.

Agregó que con ocasión del debate legislativo sobre primarias, Corporación Humanas y otras organizaciones plantearon diversos cuestionamientos a este mecanismo pero en definitiva no llegaron a resolverse y se dictó la Ley N° 20.640.

Sostuvo que la reforma electoral aprobada por la Cámara de Diputados en primer trámite constitucional resguarda la posibilidad de que los partidos políticos puedan definir la realización de elecciones primarias en algunos distritos o circunscripciones, pero sin que ello modifique ni disminuya la obligatoriedad legal de no superar el 60% de candidatos o candidatas de un mismo sexo en el total nacional de la lista de candidaturas a diputados/as o senadores/as. De lo contrario, se incentivaría a los partidos a realizar más elecciones primarias que las necesarias a fin de no tener que cumplir estrictamente la paridad que la reforma electoral plantea.

Recalcó que otras alternativas propuestas a discusión consisten en la supresión de las elecciones primarias, por una parte, en atención a las falencias de fondo que presentan y en razón a la inconsistencia de mantener un mecanismo como este en sistema electoral reformado, de carácter proporcional moderado, a diferencia del sistema binominal que es el contexto en que fue dictada la Ley.

Además, señaló, se ha planteado que si no se suprimen las elecciones primarias, deben suspenderse temporalmente, por el período en que la propuesta plantea, las medidas de paridad, es decir, en las elecciones de 2017, 2021, 2025 y 2029.

Finalizó señalando que más allá de los argumentos de fondo que sustentan la primacía de la paridad por sobre las primarias, lo cierto es que en el sistema electoral reformado las primarias presentarán menor relevancia y probablemente sean aún menos requeridas y utilizadas. Tras el aumento del tamaño de distritos y circunscripciones y con la regla N+1 se incrementa considerablemente el número de candidatos/as que bloques y partidos pueden presentar en cada unidad territorial, con lo que la competencia se traslada naturalmente al proceso eleccionario mismo, disminuyendo la presión partidaria por primarias.

A continuación, intervino el señor Jorge Ramírez, en representación del Instituto Libertad y Desarrollo, quien manifestó que si bien el proyecto avanza en una serie de objetivos que este mismo se traza, como por ejemplo, la desigualdad del voto, o la inclusión de nuevas fuerzas políticas, estimó que carece de un enfoque sistémico. Esto último significa, de acuerdo a la literatura en ciencias políticas, que existe una difícil combinación entre sistemas presidencialistas y fórmulas electorales de naturaleza proporcional, según ha mostrado el profesor de ciencias políticas Scott Mainwaring.

En relación a la propuesta aprobada por la Cámara de Diputados, sostuvo que ella se funda en la idea de que al aumentar la magnitud del distrito, entiéndase por magnitud el número de escaños a repartir por unidad electoral, se reduce la desproporcionalidad.

Agregó que la evidencia indica que no necesariamente al aumentar exponencialmente el número de escaños a repartir, se reduce la desproporcionalidad electoral, entendiendo por ella a la diferencia que se produce entre el porcentaje de votos y el de escaños.

Acompañó un gráfico donde se destaca que en el eje Y la desproporcionalidad estimada y en el eje X se precisa la magnitud del distrito.

Agregó que la desproporcionalidad, que corresponde a la curva, cae de manera significativa en el aumento del distrito aproximadamente hasta el número 4, pero en adelante, lo que gana el sistema en reducción de la desproporcionalidad es muy poco.

Precisó que se podría haber llegado a un sistema con una corrección de desproporcionalidad igual o mejor, con un aumento de magnitud de distrito más acotado.

Al respecto, indicó que el profesor John Carey ha señalado: “El aumento de magnitud de los distritos disminuye el incentivo que tienen los políticos y los partidos para establecer coaliciones, y complica los mecanismos electorales para otorgar recompensas y castigos a cada uno de los políticos” El mismo autor agrega: “Un ligero incremento de la magnitud del distrito que dejara intacto el resto del sistema electoral proporcionaría ventajas considerables en cuanto a representatividad, quizá limitando al mismo tiempo las concesiones relativas a los otros ideales”

En relación a los mega-distritos, recordó que el profesor de ciencias políticas Gary Cox ha planteado que: “Con los mega-distritos se pueden generar problemas de rendición de cuentas: La rendición de cuentas de los legisladores con su circunscripción electoral es una de las tres dimensiones cruciales de promover en un sistema electoral”

A continuación, se refirió al aumento de diputados, e indicó que por definición no está en desacuerdo a dicho incremento, pero debe ser instrumental a un objetivo y dicho objetivo es la reducción de la desigualdad del voto. Sin perjuicio de lo anterior, planteó que otras propuestas corrigen de mejor manera la desigualdad del voto sin un aumento tan amplio de representantes (tal como lo hacía la denominada Propuesta RN-DC).

Enfatizó que hay criterios poco claros en la asignación de nuevos escaños. Explicó que al nuevo distrito 4 se le asignan 5 escaños con menos electores que los distritos 2, 16, 18, 22 y 25, siendo todos de regiones.

Acompañó un cuadro que muestra la desigualdad del voto. En éste se compara la propuesta RN-DC y el proyecto actual del Ejecutivo:

Expresó que de este cuadro se desprende que en la propuesta del Ejecutivo el distrito con menos electores está 3,88 veces sobre-representado respecto del distrito con más electores. En propuestas con un aumento de diputados menor esta diferencia es de 2,96 veces.

Agregó que en relación al Malapportionment, en la propuesta del Ejecutivo, el 10% de los escaños se asignan mal frente a un criterio de perfecta distribución territorial. Ese número en la propuesta RN-DC es de un 7%.

Indicó que el proyecto que reforma al binominal puede generar sobre expectativas, ya que el efecto “arrastrados”, que es lo que más se ha cuestionado del binominal por parte de la ciudadanía, seguirá produciéndose, incluso a mayor nivel. Basta que la ciudadanía se percate de lo anterior para que el nuevo sistema comience a ser cuestionado.

Añadió que como respuesta natural a la configuración de los mega distritos, la reducción del límite del gasto en los nuevos distritos solo beneficiará a los incumbentes.

Enfatizó que distritos excesivamente grandes, como los que se proponen en el proyecto de ley en estudio, terminarán alejando más a los ciudadanos de la política, y se puede generar peligro de mayor abstención.

En relación al financiamiento de la política, expresó que la experiencia internacional sugiere que los diseños mixtos, es decir, con fuentes de financiamiento tanto públicas como privadas, han permitido una sana conjugación entre los principios de transparencia, participación, autonomía y competencia en el sistema político.

Recalcó que contrario a lo planteado por visiones más maximalistas desde el punto de vista de la regulación, las normativas draconianas no han dado buenos resultados en términos de los principios señalados anteriormente. Como señalan Casas y Zovatto, a partir de este tipo de regulaciones "entre más difícil se haga a los partidos y candidatos recaudar fondos por vías legales, más probable será que recurran a procedimientos oscuros y cuestionables".

En cuanto a las donaciones reservadas consideró que la reserva de la identidad del donante es un instrumento que permite frenar intercambios de carácter corrupto.

Especificó que tal y como el voto secreto fue la mejor herramienta para hacer de la compra de votos una práctica difícil de verificar para el oferente de clientela, las donaciones reservadas y anónimas permiten a los políticos “desentenderse de una deuda con el donante, alegando incertidumbre respecto a su cuantía o inexistencia (…) para que esta restricción sea efectiva, se requiere impedir que el beneficiario pueda comprobar que un donante le aportó la suma que dice haber aportado (Valdés, Salvador. 2008).

Advirtió que aunque parezca contra intuitivo, si el donante efectivamente cuenta con medios verificables de presión hacia el accionar político por la vía de grandes donaciones, la posibilidad de captura será mayor, y como en tantos otros ámbitos de política pública, de eliminarse las donaciones anónimas y reservadas, en aras de perseguir un fin A (en este caso transparencia), se podría maximizar un resultado no esperado B (aumentar la corrupción).

Presentó un cuadro que detalla el escenario de la OCDE (2014)

Precisó que las donaciones reservadas son un instrumento que permite la salvaguardia del legítimo derecho a la discreción de la preferencia política.

Agregó que la evidencia muestra que si las donaciones (pequeños montos inclusive) fueran completamente públicas, éstas decaerían (persecución, acoso, etc.)

En relación a los aportes de las empresas, recalcó que la experiencia comparada muestra que disposiciones tales como la total prohibición de aportes de empresas a la actividad política vía financiamiento, es una regulación que no constituye un estándar en el concierto democrático.

Añadió que solo un 22% (36 casos) de los países considerados por la ONG Idea International (Institute for Democratic and Electoral Assistance) en el catastro sobre mecanismos de financiamiento de la política, prohíben las donaciones de empresas.

Enfatizó que el 65% de los países de la OCDE permiten el aporte de las empresas a la política.

Agregó que un argumento comúnmente utilizado para restringir las donaciones de empresas apunta a que éstas son carentes de ciudadanía: "las empresas no votan, ergo, no debieran financiar la actividad política".

Hizo presente que se trata de una argumentación poco atingente, bajo esa lógica no se debería permitir que estas mismas instituciones donen dineros a instituciones culturales, educacionales o deportivas, puesto que ellas no participan del ejercicio de esa propia actividad.

Propuso que se podría pensar en fórmulas de financiamiento corriente a partidos siempre y cuando éstas correspondan a una cifra limitada dentro del total de ingresos de la colectividad, y sea exigible una contraprestación en términos de buenas prácticas orientadas a la formación de cuadros y reclutamiento de candidatos jóvenes.

Sostuvo que la disposición que establece beneficios tributarios a la donaciones de empresas a la actividad política, parece una cuestión que podría ser revisable, sin embargo, a efectos de fomentar el aporte ciudadano a la política, se podrían pensar en fórmulas que permitan -a lo menos- equiparar las condiciones de beneficios tributarios que se le otorgan a empresas a las donaciones de personas naturales.

Concluyó señalando que otra alternativa es establecer un sistema de matching funds donde sea el Estado quien complemente con un aporte marginal el aporte que realizan los ciudadanos a los partidos, a través de sus cuotas de militancia, homologando lo que acontece en la experiencia alemana.

A continuación, hizo uso de la palabra la señora Alejandra Sepúlveda, Directora Ejecutiva de la ONG Comunidad Mujer, quien comenzó agradeciendo la invitación que le formuló la Comisión.

Manifestó que en Chile existe una gran paradoja, pues a pesar que el 50,5% de la población son mujeres, y que constituyen el grupo mayoritario de militancia en partidos políticos, lo anterior no se ve reflejado en un porcentaje equivalente en los cargos de dirección política.

Acompaño el siguiente cuadro que muestra, además, otros indicadores:

Igualmente destacó, mediante el gráfico siguiente la representación de mujeres en el Congreso Nacional entre los años 1990-2018.

Precisó que actualmente solo hay 6 senadoras en ejercicio. Cuando uno representa los números, se detecta una gran ausencia de mujeres en el Parlamento.

Subrayó que en materia de participación de la mujer en política, tanto a nivel mundial como sudamericano, Chile está por debajo del promedio.

Estimó que en nuestro sistema político el fenómeno de las cuotas de género tiene que ver con el comportamiento de la nominación de mujeres en las listas de candidaturas de los partidos políticos. Agregó que ellas permiten introducir una obligación a los partidos políticos en la nominación para poder asegurar la igualdad de oportunidades en la competencia.

A continuación, presentó un cuadro que muestra el porcentaje de candidaturas a la Cámara de Diputados presentadas por partidos políticos que corresponden a mujeres entre los años 1999-2013:

Asimismo, entregó un cuadro de los países con sistema de cuotas e impacto en la conformación del Parlamento:

Explicó que como se puede observar en el cuadro precedente, salvo la excepción de Brasil y Panamá, el resto de los países ha experimentado un salto importante en representación política de las mujeres después de aplicarse una ley de cuotas.

Señaló que ella permite aumentar en un 20 o 25% de representación de las mujeres en un cargo de elección popular.

Consideró como factores positivos del proyecto actual, los siguientes:

1.- Sistema electoral proporcional. El sistema binominal constituye una barrera de entrada para las mujeres en política.

2.- Mayor número de candidatos.

3.- Equilibrio de género (40/60) y que no sean cuotas para mujeres.

4.- Principio de la paridad. Explicó que éste debe ser un bien superior a resguardar en la legislación que se discute.

5.- Sanción al no cumplimiento. Lo consideró como fundamental, ya que aquellos países que han impuesto cuotas sin sanciones ante el incumplimiento han fracasado. Ejemplo: Brasil.

6.- Incentivos económicos por mujeres electas. Recalcó que poder destinar un incentivo económico como el que se plantea en el proyecto de ley en estudio va en la dirección correcta.

Destacó que respecto a los factores negativos del proyecto, ellos se observan en una incongruencia entre cuotas y primarias, ya que constituyen mecanismos opuestos de selección de candidaturas, tienen diferentes objetivos políticos.

Agregó que las primarias no permiten asegurar el cumplimiento de la cuota y generan dudas sobre qué mecanismo debe prevalecer.

Precisó que las primarias no favorecen una mayor participación política de las mujeres ni la pretendida igualdad de oportunidades en el acceso a cargos de elección popular.

Añadió que las candidaturas de primarias se definen en las cúpulas partidarias (que no favorecen a mujeres).

Recalcó que las mujeres cuentan con menos recursos y redes (mayor tiempo de campaña).

Presentó un gráfico con el porcentaje de mujeres candidatas en primarias, en las elecciones municipales del año 2012, en los partidos de la Nueva Mayoría.

Destacó la ausencia de mujeres en dichas elecciones.

Sostuvo que las alternativas de solución a la incongruencia de cuotas y primarias son dos:

1.- Suspender transitoriamente las primarias plurinominales por mismo periodo de vigencia Ley de Cuotas (4 elecciones), ya que al aumentar la magnitud del distrito, aumenta la cantidad de candidatos/as, por lo que son menos necesarias las primarias.

Precisó que la dificultad puede estar en la viabilidad política.

2.- Aplicar cuotas a primarias.

Consiste en modificar la ley, incorporando el requisito de que ningún sexo supere el 60% de la lista. Lo complejo consistiría en que para realizar primarias debe haber un candidato/a instalado/a, que demanda el mecanismo. El agregar las cuotas, lleva a exigir nombres que no están instalados en el territorio.

Advirtió que hay otras consideraciones que estima pertinentes de aplicar en esta normativa tales como las siguientes:

a.- Aumentar recursos para mujeres candidatas. Destacó la brecha salarial y las dificultades que tienen las mujeres para acceder al financiamiento y a créditos. Subrayó que sería interesante vislumbrar un mecanismo que permita aumentar los recursos a las mujeres que deciden ser candidatas.

b.- Límite a la reelección. Connotó que debe ser analizado en su real dimensión, para asegurar que la política tenga una renovación y que efectivamente se pueda conectar con la diversidad que compone nuestra sociedad.

c.- Perfeccionar la Ley de Partidos Políticos y financiamiento. Sugirió un financiamiento público y un límite al mismo con el fin de favorecerlas perspectivas de las mujeres.

d.- Formación de mujeres candidatas. Señaló que desde el año 2008, Comunidad Mujer lleva a cabo un programa transversal, donde han participado mujeres de todo el espectro político y resulta decidor a cómo ellas se terminan empoderando y terminan convenciéndose que efectivamente pueden enfrentar una candidatura.

Agregó que la ONG que representa, actualmente están efectuando un programa de formación de mujeres líderes jóvenes.

Manifestó que de acuerdo a un estudio realizado el año 2014, la ciudadanía se pronuncia ampliamente a favor de las cuotas de género. Acompañó el siguiente gráfico:

Finalizó su intervención señalando que debe asegurarse que la implementación de la ley de cuotas sea la correcta, porque no puede ocurrir lo que sucedió con la ley Nº 20.348 que Resguarda el Derecho a la Igualdad en las Remuneraciones, que ha sido inoperante, dado que no contempló un mecanismo de aplicación que tuviera que ver con la realidad de las empresas y sus trabajadores.

Solicitó que en la discusión entre cuotas y primarias se tomen en consideración las propuestas técnicas ya señaladas.

Luego, intervino la Directora Académica de la Corporación Mujeres Líderes para Chile, señora Javiera Arce, quien comenzó su exposición señalando que el objeto de esta iniciativa es avanzar desde el sistema binominal a uno de proporcionalidad inclusivo.

Agregó que para lograr ese objetivo el proyecto incrementa el número de parlamentarios (155 diputados, 50 Senadores) y contempla medidas de acción afirmativa para mujeres. Connotó que se propone una nueva planificación y organización de los distritos.

Destacó como otros objetivos, los siguientes:

1.- La lógica de la Cámara de Diputados se vuelve demográfica mientras que el Senado se vuelve territorial-regional.

2.- Se cambia de 60 distritos a 28 (aumenta la proporcionalidad) y se modifica de 19 circunscripciones a 15.

3.- Los umbrales para ingresar al sistema bajan y se busca evitar resultados injustos para altas votaciones con el aumento de proporcionalidad de los distritos.

4.- Aumenta competitividad e incertidumbre de los candidatos-as.

5.- Aumentar el número de mujeres en el cuerpo legislativo.

En relación al diagnóstico del sistema binominal, recalcó que éste ha generado sistemáticamente una política del empate generando cierto estanco en los cambios sociales que apuntaba la ciudadanía; existe escasa incertidumbre de la competencia política y ha provocado un sistema de partidos estable, pero carece de enraizamiento social.

Precisó que según un informe de Auditoría a la Democracia señala que la democracia chilena posee áreas grises, si bien pocos la cuestionan como forma de gobierno, otros sí la cuestionan por su déficit en funcionamiento.

Agregó que el sistema binominal ha castigado con severidad la presencia de las mujeres en el Congreso (15,8%).

Acompañó los siguientes cuadros que muestran la participación actual de las mujeres en política en Chile:

A continuación, presentó un gráfico que refleja la situación de las mujeres que se dedican a la política y su relación con el Poder Legislativo.

Seguidamente, mostró dos gráficos donde se precisa la distribución de mujeres en la composición de la Cámara de Diputados y en el Senado

Presencia de Mujeres mesas directivas Partidos Políticos

Recalcó que las mujeres militan más en política que los hombres, por lo tanto, no es válido el argumento de que no haya mujeres para llevar candidatas.

Citó a la cientista política Pippa Norris quien señala: “Las reglas electorales representan tal vez el más poderoso de los instrumentos que sustentan los acuerdos de reparto de poder, con potencialmente de largo alcance consecuencias para la competencia entre partidos, la inclusión de las legislaturas, y la composición de los gobiernos, todo lo cual puede influir en los procesos de consolidación democrática"

Respecto a las barreras de entrada de las mujeres a la política observó que existen factores socioeconómicos, como la tasa de participación económica de las mujeres, la disparidad en los niveles educacionales y las remuneraciones inciden fuertemente en generar condiciones propicias para el acceso igualitario de las mujeres y hombres a cargos de representación política.

Advirtió que otros aspectos a considerar son los siguientes:

1.- Naturalización de barreras de entrada en las culturas políticas partidarias: masculinización procesos internos;

2.- Desregulación de la actividad política: Ley de Partidos Políticos es insuficiente, horarios inadecuados para las reuniones, toma de decisión en espacios informales, inexistencia de cuotas de género obligatorias;

3.- Falta de capacitación y oportunidades en materia educacional, provoca inseguridad. Las mujeres se sitúan en el ámbito local de participación y se resisten a estar en la jerarquía nacional. El liderazgo en estas estructuras provoca menos resistencia de parte de los hombres.

Agregó que en la nominación de candidaturas a Diputado-as y mesas directivas en partidos políticos más representativos, la brecha es enorme entre los candidatos hombres y mujeres.

En relación a las cuotas de género, éstas, según palabras de Pippa Norris: “Representan un instrumento que introduce un criterio formal de selección, en la forma mínima o máxima de umbrales otorgados a determinados grupos en el proceso de selección, ya sea para cargos electivos o designados en la esfera pública o para la contratación de personal en el sector privado, también para los sindicatos. Las cuotas pueden ser específicas para mujeres y hombres, o también para otros sectores relevantes como los grupos étnicos, sectores sociales o religiosos”.

Agregó que existen tres tipos de cuotas, a saber:

1) Cuotas voluntarias/ de partido: los partidos en sus reuniones, nominan a un cierto número de candidatas en sus listas electorales.

2) Cuotas para candidaturas/ legislativas: Requieren de una ley que pone a las mujeres en posiciones reservadas y preferentes en las listas.

3) Bancas/escaños reservados: sólo las candidatas mujeres pueden competir directamente para llenar estas bancas, asegura un piso mínimo y máximo (también se ocupan para minorías étnicas).

Destacó los siguientes avances alcanzados en el primer trámite:

a.- Cuota de Inscripción 40% en las listas por partido;

b.- Incentivo al resultado de 500 UF al partido;

c.- Mandato de Posición: alternancia entre los sexos para inscribir las candidaturas y

d.- Reembolsos adicionales para las candidatas, 0,04 UF (normalmente se devuelve 0,03)

Sostuvo que existen asuntos pendientes que deben ser mejorados en la reforma electoral, y esos serían los que a continuación se mencionan:

a.- Primarias: cuotas y transparencia;

b.- No se regula la transparencia, fiscalización y límite del gasto electoral, es demasiado alto. Fiscalización durante y después del proceso electoral, con fuertes sanciones.

Respecto de este último punto, respaldó la propuesta de los Honorables Diputados señores Jackson y Mirosevic.

c.- Inclusión de cuotas en elecciones: Municipales y CORES.

d.- Integrar el Principio Constitucional de Igualdad Sustancial entre Hombres y Mujeres y

e.- Reformar la Ley de Partidos Políticos.

Destacó que la Corporación Mujeres Líderes para Chile, elaboró las siguientes propuestas de indicaciones:

1) Reinvertir fondos obtenidos por incentivo al resultado (500 UF), para programas de reclutamiento y capacitación de candidaturas de mujeres. Partido que no lo realice ni publique su plan, será penalizado;

2) Delimitar las elecciones primarias para distritos y circunscripciones de menores magnitudes;

3) Cuotas en distritos/circunscripciones en que se realicen primarias, debe replicar la lógica del 40%, y

4) Transporte público gratuito el día de la elección primaria para evitar el acarreo. Con altas multas al dueño del transporte contratado (iniciativa exclusiva Ejecutivo).

Advirtió que respecto a la Ley Orgánica Constitucional de los Partidos políticos deben mejorarse aspectos como la escasa democracia interna; el déficit en la transparencia de su funcionamiento interno; escaso liderazgo de mujeres y pueblos originarios; procesos de nominación de candidaturas deficitarios y la escasa capacidad de ejercer control sobre las autoridades partidarias.

A modo de conclusión celebró la reforma electoral y el buen ánimo político que existe para cambiar el sistema actual, lo que incluye medidas de acción afirmativa en favor de las mujeres.

Señaló que la reforma aún es perfectible en las medidas de acción afirmativa (primaria, partidos políticos y transparencia)

Advirtió que la inscripción del 40% por partido a nivel nacional, no logrará alcanzar los resultados esperados, por lo que se sugiere incluir la cuota de inscripción en distritos/circunscripciones.

Destacó que una democracia de calidad, tiene costos y hay que financiarlos y por supuesto avanzar hacia una mejor regulación, por lo que la transparencia y el financiamiento público de la actividad política son fundamentales.

Concluyó su exposición señalando que el reconocimiento de las diferencias entre hombres y mujeres, es la puerta de entrada a otros tipos de reconocimientos como la identidad de género, las minorías étnico-culturales e inmigrantes. El reconocer la diferencia pasa a convertirse en un precepto ético, para alcanzar la igualdad y la justicia, como nuevos desafíos propuestos a la democracia de los modernos y las modernas.

Seguidamente, intervino, en representación del Movimiento Democracia Regional, el señor Elson Bórquez, quien comenzó su intervención señalando que hoy existe una crisis de representatividad política en nuestro país.

Agregó que el voto voluntario ha contribuido a la abstención y a la baja participación de la ciudadanía.

Asimismo, indicó que respecto a la participación electoral, el rango etario que más vota es aquel comprendido entre los 40 y 59 años.

Añadió que cualquier reforma política que se quiera abordar debe considerar generar un punto de inflexión de los fenómenos de desafección con la actividad política.

Advirtió que el sistema electoral por sí solo no corrige nuestra crisis de fondo.

Manifestó que la crisis de desafección e identidad política se ha producido no solo en Chile, sino que también en países de Europa y de África.

En lo que respecta a nuestro país, las necesidades y demandas de los chilenos no se encuadran en el tradicional eje Izquierda-Derecha. Nuestros partidos aún se comportan de esa forma.

Precisó que los movimientos sociales han comenzado a desplazar a los partidos políticos como canalizadores de demandas. Subrayó que un sistema electoral debe estar alineado con estos desafíos.

En relación al proyecto de ley, respecto al Senado, se propone un sistema mixto con representación territorial y poblacional (7 senadores para Región Metropolitana, 5, 3 y 2 senadores para regiones)

Se preguntó si con dicha composición ayudaremos a tener un Chile más descentralizado.

Explicó que Democracia Regional entiende a la Cámara Diputados, como la Cámara de representación poblacional donde tienen cabida las diversas expresiones político-ideológicas de la sociedad chilena.

Asimismo, puntualizó que el Senado debe responder a una representación territorial del país, donde todos los ciudadanos gozan de una representación igualitaria.

En este punto, propuso una nueva distribución senatorial entendida no como la suma de simples cupos, sino que como forma de preservar uno de los principios que consagra la tenencia de la bicameralidad, a saber, la territorialidad.

Sugirió la creación de 11 circunscripciones que incluyen 4 macro zonas con similares identidades territoriales.

A continuación, hizo uso de la palabra, el señor Manuel José Benítez, asesor legislativo del Movimiento Democracia Regional quien comenzó su intervención preguntando si el nuevo sistema electoral incorporará nuevas fuerzas políticas.

Para responder esta inquietud, acompañó el siguiente cuadro elaborado por el Instituto Libertad:

A partir de este antecedente, explicó le parecía que a la Nueva Mayoría el sistema proporcional le permitiría crecer, sin considerar que en los Pactos, las listas podrán llevar un candidato más (N+1) lo que generará que las coaliciones más fuertes puedan imponer sus condiciones. Manifestó que queda la duda de si se generará un nuevo Congreso con inclusión de nuevas fuerzas.

Señaló que Democracia Regional tiene una propuesta distinta que consiste en establecer un Sistema electoral Mayoritario.

Aseveró que lo que exige la ciudadanía es el fin del control de los partidos sobre los candidatos que les presentan.

Recordó que el artículo 18 de la Constitución prescribe: “Habrá un sistema electoral público. Una ley orgánica constitucional determinará su organización y funcionamiento, regulará la forma en que se realizarán los procesos electorales y plebiscitarios, en todo lo no previsto por esta Constitución y garantizará siempre la plena igualdad entre los independientes y los miembros de partidos políticos tanto en la presentación de candidaturas como en su participación en los señalados procesos. Dicha ley establecerá también un sistema de financiamiento, transparencia, límite y control del gasto electoral.

Subrayó que el sistema binominal vulnera el artículo antes transcrito. Agregó que el sistema proporcional que se propone es aún más gravoso, ya que en éste la competencia será aún mayor.

Luego, enfatizó que el sistema propuesto tiene riesgos de inconstitucionalidad. Para evitar lo anterior, se podría modificar el artículo 18 de la Constitución y eliminar de pleno el principio de igualdad consagrado.

Agregó que otra salida sería permitirle a los independientes formar listas entre ellos, y no obligarlos a formar parte de una lista conformada por partidos políticos.

En relación al financiamiento a la política, determinó que la crisis es de conocimiento público. Señaló que el objetivo que se debe perseguir propender a que las campañas y sus actos giren en tornos a las ideas y programas de Gobierno.

Subrayó que debe ponerse fin al financiamiento privado a partidos y candidaturas.

Propuso crear el Fondo Nacional de la Democracia que se compondrá de dineros públicos y por donaciones que efectúen privados, las que podrán ser imputadas contra el pago de impuesto a la Renta. Dicho Fondo debe ser administrado por SERVEL.

Concluyó señalando que al Servicio Electoral debe otorgársele estatus de Superintendencia y conferírsele más atribuciones.

A continuación, la Comisión escuchó al abogado y profesor de Derecho Constitucional, señor Francisco Zúñiga, quien agradeció la invitación que le envió la Comisión.

Comenzó su intervención señalando que mediante mensaje de S.E la Presidenta de la República se inició la tramitación de un proyecto de ley que sustituye el actual sistema electoral binominal por uno proporcional. Mediante esta reforma se busca un sistema electoral más inclusivo y representativo que el actual.

Explicó que mediante ella, el Gobierno se hace cargo de una de sus más comentadas promesas de campaña, contenida expresamente en el Programa de Gobierno, a la vez que de una vieja aspiración del discurso de la antigua Concertación e incluso de ciertos sectores de la actual oposición. Así, el Ejecutivo señala haber considerado los resultados de la Comisión Böeninger, convocada por la Presidenta Bachelet en 2006, así como los proyectos de ley presentados por los gobiernos anteriores y por mociones parlamentarias.

Agregó que el sistema que se propone es uno del tipo proporcional corregido, es decir, similar al utilizado en nuestro país para la elección de concejales y consejeros regionales. Tal propuesta permitirá la representación en el Congreso Nacional de todas las corrientes políticas relevantes. Aseveró que con fin de hacer posible el uso de un sistema de estas características, se propone aumentar el número de diputados y senadores, para permitir que las listas estén compuestas por más de dos candidatos por distrito o circunscripción. Además, se establece una ley de cuotas temporal que permita aumentar la presencia de mujeres en el Parlamento.

Manifestó que el proyecto ya fue despachado en su primer trámite constitucional por la Cámara de Diputados, encontrándose actualmente pendiente su segundo trámite constitucional ante el Senado.

Expuso que el proyecto consta de cuatro artículos:

a) El primero modifica de la Ley Orgánica Constitucional de Votaciones Populares y Escrutinios:

Expresó que este precepto modifica la Ley N° 18.700, Orgánica Constitucional de Votaciones Populares y Escrutinios. Se conforman nuevos distritos electorales y circunscripciones senatoriales. En los distritos se elegiría un mínimo de tres parlamentarios cada una y, en su mayoría, cinco. A través de estos números, explicó, se busca evitar que candidatos con grandes votaciones queden fuera del Parlamento, situación que solo podría ocurrir en distritos que eligen 3 o 4 parlamentarios.

Indicó que una innovación importante se encuentra en el establecimiento de una ley de cuotas de vigencia temporal, que obliga a las listas a presentar un porcentaje mínimo de 40% de candidatas mujeres y que, además, establece un premio a los partidos que logren elegir candidatas mujeres. Esta norma tendría vigencia en las elecciones parlamentarias previstas para los años 2017, 2021, 2025 y 2029, esperando que su fin de agilizar la inclusión de la mujer en política se pudiese haber cumplido a esa fecha. Esta disposición es complementada por la reforma a la Ley N°19.884 planteada en el mismo proyecto.

b) El segundo modifica la Ley sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral

En esta disposición se agrega un artículo segundo transitorio a la Ley N° 19.884, sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral. Aseveró que mediante este cambio se busca complementar la cuota temporal a favor de las mujeres mediante la instauración de un premio, que busca que los partidos no solo incluyan mujeres en sus planillas de candidatos con el fin de cumplir con la ley pero sin reales posibilidades de elección, sino que elijan candidatas que efectivamente puedan, si cuentan con la venia popular, integrarse al Parlamento. El premio regiría también de forma temporal, en las mismas elecciones parlamentarias desde 2017 a 2029, y consistirían en un monto adicional de hasta 500 UF para efectos de reembolso.

c) El tercero modifica a la Ley Nº 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos para adecuarla a los presupuesto de esta reforma.

Seguidamente, se refirió a los argumentos que justifican la reforma del sistema electoral a nivel parlamentario

Precisó que todo sistema electoral tiene “requisitos funcionales”, de forma tal que el Parlamento resultante refleje la diversidad de la sociedad, guardando proporcionalidad entre votos y escaños; concentración y efectividad, de suerte que la agregación de intereses y opiniones permita la adopción de decisiones y la acción estatal con sólidos partidos; participación, permitiendo a los ciudadanos elegir entre partidos y candidatos (voto personalizado); simplicidad en la comprensión de los actores del sistema; y legitimidad. En relación a estos “requisitos funcionales” el sistema binominal vigente resulta deficitario.

Declaró que así las cosas, mediante la reforma propuesta por el Poder Ejecutivo se buscan los objetivos de representación y participación y permitir dar gobernabilidad en el país, en congruencia con los principios de representación y decisión subyacentes a ellos. Afirmó que la finalidad de representación proporcional se mide a partir de la relación entre votos y escaños, y el equilibrio que se produce entre las diversas unidades territoriales del país. Pero, además, explicó, incluye lo asociado a que los diversos sectores de la sociedad se vean representados en el sistema político: hombres, mujeres, pueblos indígenas, colectivos identitarios, entre otros. La representación, en su ideal máximo, busca reflejar a la sociedad, busca ser un “espejo social” materializado en las instituciones representativas (Fuentes, 2013a, 2013b, 2013c; ATRIA el al., 2013).

Luego, explicó que la finalidad de posibilitar gobernabilidad dice relación con la construcción de coaliciones o alianzas sólidas de partidos para poder gobernar, y que suponen una mayoría en ambas cámaras del Parlamento: un gobierno será eficaz sólo si logra construir coaliciones que sean estables en el tiempo para aprobar sus iniciativas en el Congreso Nacional y permita llevar a cabo políticas públicas a través de su Administración.

Añadió que la introducción del sistema electoral binominal durante la dictadura respondió a la intención de forzar el bipartidismo, objetivo expresado en la historia de la ley (Comisión Fernández de la Junta de Gobierno). Se trata, así, de una innovación en la larga experiencia chilena de representación proporcional. Luego, el producto es un sistema electoral, si se le compara a nivel internacional, “empírico” o “sui generis”, pues no es mayoritario (no favorece al partido o pacto mayoritario en votos), y a la vez siendo su efecto votos/escaños medianamente proporcional, pero excluyendo a partidos pequeños o sin alianzas o pactos, por lo que tampoco es, en rigor, proporcional (Nohlen, 1994; Nohlen, 2013). En sus efectos, cumple con ser un cerrojo electoral-institucional, que quiebra el principio de igualdad constitucional y produce distorsiones en la representación.

Advirtió que son a lo menos tres los problemas que afectan directamente al sistema y que guardan relación con estos “requisitos funcionales”:

a) Crisis de legitimidad: Sobre este punto, sostuvo que existen estudios de opinión, en especial cualitativos, que muestran bajos niveles de confianza social en los partidos y las Cámaras del Congreso Nacional; a ello se agrega una fuerte caída en la participación electoral, lo que hace que nuestros legisladores representen a una fracción relativamente baja de la población nacional.

b) Brecha votos-escaños: Respecto de este aspecto, hizo presente que desde el punto de vista del derecho comparado, Chile presenta índices globales más bien moderados de “desproporcionalidad” (la diferencia entre el número de votos obtenidos y el de escaños); pero cuando se analizan la diferencias por partidos, se observan consecuencias significativas.

Añadió que el actual sistema electoral chileno tiende a favorecer o premiar a algunos partidos más que a otros, en particular a la UDI y al PPD, por sobre RN o el PS; partidos sometidos a “matrimonios por conveniencia”, que se expresan en coaliciones. Recordó que por lo incentivos del sistema, los parlamentarios en sus cargos suelen ser acompañados por candidatos que les presentan un bajo desafío, observándose una alta tasa de permanencia de los parlamentarios en título y produciéndose un efecto que no permite medir verdaderamente las fuerzas en competencia.

Seguidamente, se refirió a la relación escaños/territorios (malapportionment): Explicó que en Chile el 39,1% del electorado nacional se encuentra en la Región Metropolitana, mientras el 69,9% en las demás regiones. Sin embargo, puntualizó, el 26,7% de los diputados y el 10,5% de los senadores es representante de la Región Metropolitana. Las diferencias de sobre y sub representación son demasiado pronunciadas, sobre a todo a nivel del Senado. Además, explicó, la relación representantes/electorado es medianamente alta si la comparamos con otros países.

Mencionó que en tal contexto, se han presentado en el pasado una multitud de proyectos que buscaron o la reforma constitucional o la reforma de la Ley Orgánica Constitucional de Votaciones Populares y Escrutinios. Así, el proyecto Boletín Nº 9023-07, iniciado por moción de los senadores Walker (Patricio), Chahuán, Rossi y Tuma; el proyecto Boletín Nº 9031-07, iniciado por mensaje del Presidente de la República; el proyecto Boletín Nº 9038-07, iniciado por mociones de los senadores Lagos, Letelier y Quintana; y el proyecto Boletín Nº 9078-07, iniciado por moción de los senadores Espejo, Larraín Peña, Rossi, Tuma y Walker, que dio lugar a la Ley Nº 20.725, publicada en el Diario Oficial el 15 de febrero de 2014, y por el que se eliminó el guarismo 120 del artículo 47 de la Constitución –en referencia al número de integrantes de la Cámara de Diputados- disponiendo que sea una ley orgánica constitucional la que determine dicho número, los distritos electorales y la forma de elección de los diputados.

Sostuvo que para continuar con estos comentarios, se hace necesario hacer una precisión conceptual sobre los sistemas electorales. Un sistema electoral es un conjunto de reglas y principios que traducen votos en escaños. Tales reglas y principios se diseñan tomando definiciones en cuatro áreas:

a) Delimitación territorial de “jurisdicciones electorales”: estos territorios (en nuestro país, distritos y circunscripciones senatoriales) pueden ser, dependiendo del número de escaños que elijan, uninominales (1 escaño por territorio), binominales (2 escaños por territorio) o plurinominales. De ser plurinominales, los territorios pequeños eligen entre 2 y 5 escaños; los medianos, entre 6 y 10; y los grandes, 10 y más escaños cada uno.

b) Candidaturas: pueden ser individuales y de plancha. En el caso de las candidaturas en plancha, ésta puede ser rígida, cerrada flexible y libre.

c) Votación: el voto puede manifestarse de muchas formas, según como se defina por el legislador electoral. Así, puede ser voto único, voto preferencial, voto múltiple, voto alterno, de acumulación, o doble voto.

d) Traducción de votos en bancas (la “fórmula electoral”): Al respecto, el legislador electoral debe tomar varias decisiones: (

i) los umbrales de representación que permiten limitar los partidos que participan en la distribución de escaños;

(ii) los umbrales que lleva a la concentración partidista;

(iii) y las fórmulas electorales aplicables a los resultados (divisor y cociente).

Señaló que el proyecto de ley en cuestión propone adoptar, para la elección de diputados y senadores, un sistema proporcional corregido, que permite una concordancia relativa entre los porcentajes de votos y los escaños obtenidos por los diversos partidos (Nohlen). Mediante el sistema propuesto, el Ejecutivo pretende superar los problemas identificados más arriba producidos por la vigencia del sistema binominal vigente.

Manifestó que en términos comparados, el sistema proporcional produce resultados electorales que otorgan a cada partido un peso proporcional al número de votos obtenidos: “los votos son iguales en cuanto al resultado, al menos dentro de lo posible”. De esta forma, su implementación cumpliría con los siguientes objetivos:

Recordó que el sistema proporcional produce más competencia y es más ajustado al pluralismo: esto pues, por una parte, produce mayor incertidumbre sobre las candidaturas victoriosas que el sistema binominal actual, lo que obliga a los partidos y a los candidatos a esforzarse más por sintonizar con el electorado al que pretenden representar en el Congreso Nacional: y, por la otra, porque permite la inclusión de fuerzas políticas minoritarias pero relevantes, que actualmente, es muy difícil que se encuentren representadas en proporción a su importancia electoral real.

Puntualizó que el sistema proporcional produce más participación de la ciudadanía: esto pues, al producir mayor incertidumbre sobre las candidaturas ganadoras, hace más relevante el voto de cada ciudadano, por sobre las negociaciones y decisiones de las cúpulas partidarias, como sucede hoy día o, al menos, según la impresión general de la ciudadanía.

Igualmente, aseveró que el sistema proporcional produce más influencia del partido en la selección del candidato: pues, existiendo más espacio para la competencia, no se estaría ya ante parlamentarios en título a los que difícilmente se les puede vencer, permitiendo una mayor igualdad de condiciones entre los parlamentarios en sus cargos y sus desafiantes.

Añadió que el sistema proporcional fuerza negociación y coaliciones estables, y modera el sistema político: pues, dado que se basa con mayor fuerza en las listas que el sistema binominal, requiere de coaliciones que permitan generar mayorías significativas.

Con todo, presenta sus propios problemas: En determinadas condiciones, por ejemplo, una fórmula mayoritaria (uninominal o binominal pura) puede producir una representación proporcional, y a la inversa, en el caso de jurisdicciones electorales pequeñas, un sistema proporcional es de hecho un sistema de representación de mayorías.

Seguidamente, entregó algunas observaciones puntuales a este proyecto de ley.

Consignó que cabe hacer algunos comentarios sobre determinas modificaciones propuestas en el proyecto de ley en cuestión.

En primer lugar, se refirió a las enmiendas a la Ley Nº 18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios

Explicó que mediante el artículo 1º del proyecto de ley, se agregan dos incisos al artículo 3º bis. El nuevo inciso segundo, sería del siguiente tenor: “Las declaraciones de candidaturas que presente el pacto electoral, sólo podrán incluir candidatos de los partidos políticos que se encuentren legalmente constituidos en la respectiva región”.

Agregó que, por su parte, el nuevo inciso cuarto pretende favorecer la inclusión de mujeres en el Congreso Nacional, disponiendo lo siguiente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito”.

Señaló que dicha disposición debe ser concordada con lo dispuesto en el nuevo artículo 23 transitorio, contenido en el proyecto de ley, que señala que este último inciso sólo operará respecto de las elecciones parlamentarias previstas para las de los años 2017, 20212, 2025 y 2029. De esta forma, se permite explícitamente e incentiva la participación de independientes en un sistema proporcional basado en listas y, por el otro, se establece una ley de cuotas en favor de la participación femenina que cumple con el estándar constitucional debido al ser una norma excepcional, proporcional y temporal.

En segundo lugar, precisó que el artículo 4º del proyecto asegura una relativa apertura de candidaturas al señalar el número de candidaturas que cada pacto puede presentar (el número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción de que se trate”. Sin embargo, a la vez se convierte en un coto débil al transfuguismo en su inciso 3º y siguientes, al disponer que los pactos solo pueden integrar militantes de los partidos que los conforman, con una antigüedad en su militancia de al menos dos meses de anticipación al vencimiento del plazo para presentar las declaraciones de candidaturas. De la misma forma, exige que los candidatos independientes no pueden haber estado afiliados a algún partido político dentro de los nueve meses anteriores al vencimiento del plazo para presentar las declaraciones de candidaturas.

En tercer lugar, hizo presente que el artículo 10 reformado por el proyecto rebaja la barrera de inscripción de candidaturas independientes, bajando el porcentaje de electores que deben patrocinar sus postulaciones del 0,5 por ciento de los ciudadanos que hubiesen sufragado en la anterior elección en el respectivo territorio, a un 0,25%.

Seguidamente, explicó que el artículo 17 inciso 3º reformado por el proyecto en análisis señala un plazo de 5 días de vencido el plazo para reclamar de la resolución del Consejo del Servicio Electoral que se pronuncie sobre la aceptación o rechazo de las candidaturas declaradas; sin embargo, el artículo 18 propuesto establece un plazo de 7 días hábiles para reclamar de dicha resolución ante el Tribunal Calificador de Elecciones. Sería conveniente concordar dicho plazo, para evitar dilaciones y dificultades fruto de las resoluciones dictadas por el TRICEL en conocimiento de estos reclamos.

Luego, hizo presente que el artículo 30 cuya reforma se propone realiza una definición de propaganda electoral. Sin embargo, esta definición es insuficiente. No contempla la “propaganda preparatoria”: por ejemplo, encuestas, sondeos, muestras y pronósticos. Tampoco integra la propaganda que se realiza actualmente a través de redes virtuales.

Asimismo, explicó que el artículo 109 bis que el proyecto propone sustituir señala, en su número 2, que se “aplicará un sistema electoral de coeficiente D’Hondt, para lo cual se procederá de la siguiente manera”. Siendo el coeficiente planteado por D’Hondt uno definido y particular, conviene reemplazar en dicho artículo dicha expresión por “la siguiente fórmula electoral” o referirse simplemente a un “método”. Además, en la letra b) de dicho número 2, debería reemplazarse la mención a “cargos” elegidos por una expresión más adecuada, como “asientos”, “curules” o “escaños”.

Añadió que los artículos 178 y 179 cuya sustitución pretende esta iniciativa, establece distritos electorales pequeños y medianos para un sistema de representación proporcional. Si lo que se busca es que se cumpla la proporcionalidad esperada del sistema, es necesario que los territorios electorales sean medianos o grandes. Por ello, el antiguo sistema electoral chileno, vigente hasta 1973, se basaba en departamentos y agrupaciones de departamentos (y de provincias, en el caso del Senado.

Explicó que, además, se propone agregar a la ley un nuevo artículo 179 bis, por el cual encarga al Consejo Directivo del SERVEL actualizar, cada 10 años, la asignación de los escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos por la ley, de acuerdo a la variación que se observe en el censo nacional, procedimiento que se debería llevar a cabo cada 10 años. Por su parte, el artículo 25 transitorio señala que la primera ejecución de este mandato se realizaría en 2022.

Aseveró que así como está planteada la regla, quedan desacoplados: la actualización de los escaños con los procesos electorales (que no se celebran cada 10, sino cada 4 años). Ello, afirmó, puede producir ciertas distorsiones ocasionadas por la evolución demográfica del país.

Seguidamente, se refirió a las modificaciones a la Ley Nº 19.884, sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral

Explicó que párrafo 3 de la Ley, formado por el artículo 16 y siguientes, destinado a la regulación de la transparencia del financiamiento, establece que existirán aportes personales y públicos, consignándose la identidad del aportante, salvo en las excepciones señaladas en la misma ley. Los aportes anónimos quedan limitados a un máximo de 10 UF, monto que sigue siendo muy alto. Además, se suprimen los aportes reservados, que se prestan para fomentar la corrupción política.

Precisó que el artículo 2º transitorio añadido por el proyecto consiste en una acción afirmativa complementaria de la cuota de participación de mujeres propuesta por el proyecto como modificación a la Ley Nº 18.700. Por esta disposición, y para los mismos procesos electorales que regiría esa cuota –de los años 2017, 2021, 2025 y 2029- se da derecho a los partidos a los que pertenezcan las candidatas electas diputadas y senadoras, a un monto de 500 UF por cada una de ellas. Con cargo a dichos recursos, los partidos podrán implementar programas y actividades de omento a la inclusión de las mujeres en política. Como toda acción afirmativa, implica una diferencia entre los ciudadanos, en este caso, hombres y mujeres, pero no puede entenderse como una vulneración la garantía de igualdad ante la ley, toda vez que se trata de una norma temporal, racional y proporcionada.

Finalmente, recordó que el artículo 3º transitorio que se propone añadir propone, para las mismas elecciones parlamentarias, el derecho a cada senadora y diputada electa a un reembolso adicional de sus gastos electorales, con cargo fiscal, de 0,0100 UF por voto obtenido. Tal acción afirmativa se encuadra, de la misma manera, en lo comentario anteriormente.

Luego, pasó a comentar las modificaciones que la iniciativa introduce a la ley Nº 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos

Hizo presente, que el artículo 6º cuya modificación propone el proyecto rebajaría la barrera de constitución de los partidos políticos, pasando de exigir la afiliación de un 0,5% a sólo un 0,25% del electorado de cada región en que pretende constituirse.

Explicó que consecuentemente con lo anterior, se propone modificar el artículo 42, rebajando también el umbral de subsistencia de los partidos, pasándose de un 5% al 2,5% de los sufragios válidamente emitidos en la última elección de diputados; y en el mismo artículo, para el caso del partido que no obtuviese esa cantidad de votos, se rebaja además el mínimo de parlamentarios electos, pasándose de 4 a sólo 2.

Concluyó su intervención señalando que ambas modificaciones significan un incentivo a la atomización del sistema de partidos; por lo que estimamos más razonable mantener los guarismos actuales o incluso aumentarlos.

A continuación, hizo uso de la palabra el Presidente de la Fundación Espacio Público, el señor Eduardo Engel, quien agradeció la invitación formulada por la Comisión.

Señaló que en esta oportunidad, centraría su exposición en las dos enmiendas que este proyecto realiza a las normas que regula el gasto electoral.

Dividió su presentación en tres puntos:

1.- Dinero y Política: ¿Por qué importa?

Manifestó que algunos países enfatizan nivelar la cancha en la competencia política y electoral. Lo anterior, explicó, significa acercarse lo más posible al ideal de que “un ciudadano sea igual a un voto” y alejarse lo más posible de que “un peso sea igual a un voto”.

Destacó que ello tiene un objetivo normativo, pero también tiene un objetivo bien pragmático que es evitar la influencia indebida, de grupos de interés particulares en las decisiones políticas.

Agregó que el interés colectivo debe primar al momento de legislar y de formular las políticas públicas.

Sostuvo que en otros países se ha justificado el gasto privado pues se señala que ello se relaciona o garantiza la libertad de expresión.

Puntualizó que en base a lo anterior algunos afirman, por ejemplo, “si quiero dedicar recursos a promover mis puntos de vista, por qué debo limitar mi derecho a hacerlo”.

Hizo presente que un caso extremo de este criterio, en que mi bien prima por sobre los demás, corresponde a la realidad de Estados Unidos. En dicho país se limita la contribución, exclusivamente a personas naturales y tienen un límite de USD 2600 por candidato. Dicha información es transparente. Sin embargo, un fallo de la Corte Suprema, el año 2010, conocido como Citizens United vs. FEC (ente regulador de elecciones en Estados Unidos) produjo que la legislación de gasto electoral dejó de ser relevante, porque en virtud de dicho fallo se abre la posibilidad para que fundaciones sin fines de lucro, financiadas de manera no transparente, promuevan los mismos temas que interese a un candidato, y en la medida que no haya una coordinación explícita entre el candidato y las fundaciones de la naturaleza antes mencionada, pueden tener derecho a un gasto ilimitado.

2.- Legislación Actual

Connotó que en Chile, antes de la legislación del año 2003 existía un acceso bastante limitado a la televisión, hoy en día ésta constituye la principal fuente de propaganda electoral.

Precisó que la reforma del año 2003 (leyes números 19.884 y 19.885) legaliza el financiamiento privado de campañas y partidos; establece financiamiento público de campañas y pone límites al gasto en campañas.

En relación a las campañas electorales, la legislación actual, permite personas naturales o jurídicas con fines de lucro pueden aportar dinero a partidos políticos (en cualquier momento) y a los candidatos (solo en períodos de campaña).

Agregó que actualmente existen tres alternativas para hacer aportes privados:

a.- Anónimo: candidato sabe, ciudadanía no sabe, menos de 20UF;

b.- Reservado: candidato (supuestamente) no sabe, más de 20UF, menos de 10%, y

c.- Público: todos saben, prohibido para donaciones mayores que 20UF.

Destacó que solo los aportes reservados y los públicos tienen ventajas tributarias.

3.- Dos Indicaciones

Explicó que en el primer trámite constitucional la Cámara de Diputados había aprobado dos enmiendas a la ley que establece límites a gasto electoral.

a.- La primera de ellas elimina los aportes reservados y la segunda suprime el financiamiento de la política por personas jurídicas.

Manifestó que la Fundación que dirige lanzará una propuesta para reformar la regulación de la relación entre dinero y política. En ella se sugiere:

• Eliminar los aportes reservados.

• Eliminar los aportes de personas jurídicas.

Señaló que es partidario de eliminar los aportes reservados porque no han funcionado. Recalcó que muchos candidatos saben quién los financió (sobre todos los financistas más importantes) De tal modo, la ciudadanía desconoce el aporte, pero el candidato y su financista sí saben. Lo anterior facilita la captura del interés público por el interés privado.

Propondrán como Fundación que se permita donaciones anónimas para montos pequeños (inferior a 20 UF)

Expresó que Edgardo Böeninger el año 2009 señaló: “No estoy de acuerdo con mantener la categoría de donaciones reservadas: no creo en ellas porque siempre podrán comunicarse donante y donatario. Se introdujo esta categoría para precaver posibles revanchas del parlamentario elegido contra quienes le negaron donaciones como posibles conflictos de intereses al aquilatar proyectos de ley que afecten a alguno de los donantes. Me parece que estos riesgos no son significativos.”

Respecto a la disposición que suprime el financiamiento de la política por personas jurídicas, argumentó que quienes votan son los ciudadanos, luego quienes financian también debieran ser los ciudadanos.

Agregó que se presta para abusos respecto de los propietarios minoritarios. Consideró que si los privados quieren contribuir a una campaña, que éste retire de la empresa y luego contribuya.

Previno que si se aprueban las mencionadas disposiciones, se debe fortalecer al Servicio Electoral, en caso contrario es probable que aumente el financiamiento ilegal. En la actualidad el Servel no fiscaliza el gasto durante las campañas, luego no tiene como detectar “platas negras”.

Enfatizó que se requiere fortalecer el Servel para que tenga las atribuciones y recursos para fiscalizar gasto en terreno.

Comentó que desde el punto de vista de la estrategia legislativa, sugirió aprobar las disposiciones que ya acordó la Cámara de Diputados. Lo anterior, no se opone a que a la idea de que posteriormente se complemente dicha normativa. La otra opción, que no comparte, consiste en no aprobar las normas sobre gasto electoral que ya acordó la Cámara de Diputados y abordar el problema de manera integral, más adelante.

Concluyó su intervención señalando que las dos indicaciones apuntan en la dirección correcta y ambas deben ser complementadas con un proyecto de ley que fortalezca al Servicio Electoral.

Seguidamente, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, ofreció el uso de la palabra al experto electoral señor Andrés Tagle quien agradeció la invitación de la Comisión.

Señaló que el primer tema a tratar dice relación con la Constitucionalidad de cuotas de candidatos de partidos por sexo.

Manifestó que la Constitución establece que: “La calidad de ciudadano otorga los derechos de sufragio, de optar a cargos de elección popular y …..”. (Inciso 2° Art 13.)

Expresó que en el caso de los cargos parlamentarios las restricciones o requisitos para postular, están todas contenidas en la Constitución: ciudadanía, derecho a sufragio, estudios, residencia y edad. (Artículos 48 y 50).

Agregó que el cumplimiento de cuotas por sexo para los candidatos de un partido, y el eventual rechazo de las candidaturas, implica un nuevo requisito o condición para postular a cargo de elección popular en el parlamento que se establece por ley y no directamente en la Constitución.

Indicó que, al respecto deben revisarse los considerandos de la Sentencia del Tribunal Constitucional en Rol N° 433.01-005 de 16 de febrero del 2005 que señalan lo siguiente:

“TRIGÉSIMO SÉPTIMO. Que, en relación con una materia de tanta importancia para el adecuado funcionamiento del régimen democrático constitucional como son las prohibiciones para ejercer los cargos de Diputado y Senador -carácter que en esencia tienen las inhabilidades que les son aplicables-, éstas han de interpretarse restrictivamente, no pudiendo el legislador establecer otras diferentes a aquellas comprendidas en la Constitución;

CUADRAGÉSIMO PRIMERO. Que, de lo que se termina de expresar, se desprende que el artículo 71 del proyecto (declarado inconstitucional) agrega un nuevo requisito de elegibilidad para ser candidato a Diputado o Senador a aquellos establecidos por la propia Carta Fundamental, lo cual, como ha quedado demostrado, al legislador le está vedado hacer, salvo que ésta última lo autorizare expresamente, lo que no ocurre respecto de los cargos antes mencionados;”

Añadió que por otra parte también está en la Constitución la condición de igualdad entre candidaturas de partidos y de independientes:

“Habrá un sistema electoral público. Una ley orgánica constitucional determinará su organización y funcionamiento, regulará la forma en que se realizarán los procesos electorales y plebiscitarios, en todo lo no previsto por esta Constitución y garantizará siempre la plena igualdad entre los independientes y los miembros de partidos políticos tanto en la presentación de candidaturas como en su participación en los señalados procesos. (Inciso 1° del artículo 18).”

Precisó que como la norma de cuotas por sexo afecta solo a candidatos de partidos y no a los candidatos independientes, la igualdad mencionada no se cumple.

Señaló que sin entrar a la discusión del mérito de las cuotas por sexo, debería considerarse una reforma constitucional que faculte a la ley a establecer cuotas por sexo a las candidaturas de partidos y rechazarlas cuando no se cumplan.

Seguidamente, se refirió al plazo que se establece para que los partidos corrijan las listas de candidatos que ha sido rechazada por no cumplir cuotas por sexo.

Hizo presente que los incisos segundo y tercero del nuevo texto del artículo 17 de la ley 18.700 regula la posibilidad de corregir las declaraciones de candidaturas rechazadas por el Servicio Electoral que no cumplen con la norma de las cuotas por sexo. Se otorgan nuevos plazos para la corrección y revisión por el Servel, alargando peligrosamente los plazos por sobre los 30 días para que las candidaturas queden ejecutoriadas considerando los procesos de apelación. Este puede afectar seriamente el tiempo que requiere el Servel para el diseño, confección y distribución de los votos y paquetes de materiales electorales.

Sostuvo que resulta sorprendente que la posibilidad de corrección se aplique solo a las cuotas de sexo y no a otros requisitos señalados en la letra a) del inciso primero del artículo 17. El porcentaje de candidatos de uno u otro sexo es demasiado fácil de comprobar por los partidos que presentan candidaturas, como para prevenir en forma categórica el cumplimiento de la norma y anticipar la aceptación o el rechazo. Es previsible que la norma pueda ser violada expresamente por los partidos políticos en sus primeras declaraciones, con el objeto y ardid de ganar tiempo para resolver nuevas candidaturas cuya decisión o documentación no estuvo lista en el plazo legal.

Para enmendar esta situación sugirió la siguiente indicación: Eliminar los incisos segundo y tercero del nuevo art. 17 sustituyéndolos por una disposición que establezca la forma de medir las cuotas por sexo:

“Para determinar el porcentaje que corresponde a cada sexo se considerará la totalidad de las candidaturas declaradas por el partido político, sin restar aquellas que pudieren ser objeto de rechazo según la letra a) del inciso anterior.”

Asimismo, sugirió eliminar el nuevo texto del artículo 18 de la ley 18.700 manteniendo el vigente.

En relación con la conformación de la Cédula Electoral, destacó que se debe incorporar una disposición que establezca el orden en que se detallaran los candidatos de los partidos políticos y sus candidatos asociados en los casos de un pacto electoral. Hay un vacío legal al respecto que queda más de manifiesto al ordenar las candidaturas alternadas según el sexo. El orden de los partidos dentro del pacto electoral debería ser el señalado por el pacto en la declaración de candidaturas para cada territorio electoral o en su defecto por sorteo.

Sobre esta materia, sugirió que durante la discusión en particular se incorpore el siguiente inciso tercero al artículo 23 de la ley 18.700:

“En el caso de un pacto electoral el orden de precedencia de los partidos dentro de la cédula electoral para cada circunscripción senatorial o distrito, será el señalado por el pacto electoral en la declaración de candidaturas y a falta por este resuelto por el Servicio Electoral por sorteo.”

Agregó que el orden de los candidatos de un partido y sus independientes asociados debería ser el señalado por el partido en la declaración de candidaturas para cada territorio electoral o en su defecto por sorteo. En cualquiera de estos casos, declaración o sorteo, el orden deberá alternar a los candidatos según su sexo.

Consideró como incorrecto el nuevo inciso cuarto que se incorpora al artículo 24 de la ley 18.700, ya que le entrega la función a los partidos políticos de colocar, no solo el orden de los candidatos, sino que también el número de ellos, cuando este es correlativo para todo el territorio electoral (Región) y debe ser puesto por el Servel después del sorteo del orden de las listas y de las asignaciones de la letreas a cada una de ellas. Además es contradictorio con el actual inciso tercero del artículo 23.

Sobre este aspecto, planteó que debería posteriormente aprobarse una indicación que elimine el nuevo inciso cuarto del artículo 23 e incorpore el siguiente inciso cuarto al artículo 23 de la ley 18.700:

“El orden de precedencia los candidatos de un partido y sus independientes asociados dentro de la cédula electoral para cada circunscripción senatorial o distrito, será el señalado por el partido en la declaración de candidaturas y a falta por este resuelto por el Servicio Electoral por sorteo. En todo caso dicho orden deberá alternar los candidatos según su sexo”

En relación a la foto de los candidatos, remarcó que se pretende incorporar una foto a color de los candidatos en el voto. Esto corresponde a una disposición agregada en la Cámara de Diputados sin consulta al Servel.

Constató que esta innovación podría presentar serios problemas que deben considerarse, a saber:

a.- Problemas de espacio en el voto, ya que con la reforma que se propone, habrá más candidatos producto de la fusión de distritos actuales y el aumento de su número. Podría haber cifras de 27 candidatos en algunos distritos de 8 cupos si se presentan tres listas.

b.- Problemas de espacio en voto en las elecciones de Concejales y Cores ya que la disposición queda también aplicable a dichos actos electores por la coordinación existentes entre las leyes.

c.- Problemas de imprenta (factibilidad y tiempo) por la impresión de foto y el color.

d.- Tamaño de la cédula electoral puede generar mayores inconvenientes que los que resuelve la foto.

Recomendó dejar el tema como una facultad del Servel para cuando lo considere factible. Explicó que por ejemplo esta norma se podría aplicar en las elecciones presidenciales.

Propuso incorporar el siguiente nuevo inciso final al artículo 23 de la ley 18.700: “El Servicio electoral podrá incorporar a la cédula electoral una foto de los candidatos que la hubieren acompañado en la declaraciones de candidaturas, en aquellas elecciones donde el número de candidatos en la cédula, el tamaño de la misma y otras consideraciones técnicas lo hagan aconsejable, con el objeto de facilitar la identificación.”

A continuación, se refirió a las normas que permiten las elecciones por listas.

Advirtió que el proyecto sigue la tradición electoral chilena, anterior y posterior al año 1973, de elegir los cuerpos colegiados (Senado, Cámara de Diputados, Concejos Municipales y Consejos Regionales) en una elección por listas abiertas de candidatos (presentadas por pactos electorales o partidos), donde la suma de los votos de la lista se usa para determinar los electos por el método de D’Hondt.

Precisó que se entiende por lista abierta cuando el elector puede elegir un candidato de la lista como en el caso chileno. Se entiende por lista cerrada, cuando elector vota por un pacto electoral o por un partido sin elegir el candidato determinándose los electos en base a la prioridad de inscripción del partido (España).

Aseveró que el sistema de lista abierta puede producir inequívocamente, que candidatos con menor votación individual de una lista o partido, resulten electos (arrastrados por la votación de la lista) respecto de candidatos de otras listas o partidos que se pierden con mayores votos personales. El sistema entiende que el voto no solo es por una persona, sino que también por una lista de pacto o partido que representa una posición, filosofía o programa, y que ella debe quedar representada en el parlamento en proporción a su votación total. De allí que se llamen sistemas proporcionales.

Connotó que la elección de candidatos con menor votación ha sido denominada por la prensa como “efecto binominal”. Ello es un equívoco ya que el mismo efecto se produce en cualquier sistema proporcional de lista abierta, donde se considera la suma de los votos de la lista para determinar lo ganadores.

Manifestó que se equivocan por tanto quienes sostienen que se va a eliminar el llamado “efecto binominal” al cambiar el sistema. Incluso se equivocan cuando sostienen que este efecto se va aminorar con el aumento de los electos por distrito, que disminuye los umbrales mínimos de votación para ser elegido. Ello debido a que el aumento de los electos, conlleva también un incremento de los candidatos (además hay uno más respecto de los cupos) y de los que tienen posibilidad de salir, repartiéndose la misma votación entre más personas, lo que debería disminuir la votaciones individuales (en porcentaje) en concordancia con la caída del umbral para salir electo.

Enfatizó que se erraban también quiénes quieren combinar sistemas proporcionales y de listas con determinación de electos solo en base a votación individual. El error proviene en no considerar la adecuación de los pactos o partidos al sistema en lo que se conoce como ingeniería electoral. En efecto, ante un sistema como el descrito, los pactos y partidos reducirían sus candidatos al mínimo estrictamente necesario de lo que creen que puedan elegir y tratarían de repartir los votos entre ellos en la forma más pareja posible. Ello reduciría la cantidad de candidatos donde los electores puedan elegir haciendo más previsibles sus resultados, problemas ciertos hoy tiene el sistema binominal y que el cambio quiere corregir con más candidatos y opciones para los electores.

Agregó que por otra parte los candidatos con fuerte liderazgo o votación perderían el sobrante de votos, que identificándose con una posición política no se traduciría en debida representación proporcional en el Parlamento. Un sistema así sería mucho menos proporcional en la representación de las fuerzas políticas en el Parlamento. Adicionalmente dicho sistema haría absolutamente innecesaria la existencia de pactos y eventualmente de partidos, habiendo simplemente lista de candidaturas individuales que se eligen por simples mayoría, algo totalmente contradictoria con la idiosincrasia de nuestro sistema actual que tiende a unir pacto electorales para elección presidencial y parlamentaria, elecciones primarias y programa común de gobierno.

Sostuvo que es normal en los sistemas electorales mayoritarios o uninominal, que la determinación de los electos (uno solo) se haga en función de la primera mayoría en votos. Es también normal que en los sistema electorales proporcionales, la determinación de los electos se haga en función de los votos de lista (sea abierta o cerrada) bajo un método como D’Hondt o similar. Lo que es anormal es tratar de mezclar elementos de ambos sistema, ya que estos no conjugan.

Luego, señaló que en la Cámara de Diputados se incorporó la posibilidad de que el elector pudiera, como alternativa al voto por un candidato, sufrague por una de las listas de candidatos, incorporando para estos efectos en la cédula una raya a lado izquierdo del nombre de la lista.

Advirtió que debe considerarse que ningún partido ni candidato va a promover este tipo de votación, toda vez que la determinación de los candidatos ganadores se hace en base a los votos recibidos por los candidatos. Nadie del mundo político debería promover, fomentar y hacer campaña por este tipo de voto.

Destacó que hay un riesgo muy alto de incremento de los votos nulos. En efecto es muy posible de que los electores marquen dos preferencias en el voto, la de la lista y la del candidato. De acuerdo al texto del proyecto eso significará anular el voto. La sola presencia de las dos opciones puede inducir al error.

Añadió que aún en el evento de que no se considerara nulo el voto que tiene dos preferencias, la primera por la lista y la segunda por un candidato de la lista, solo se consideraría la preferencia del candidato para los recuentos, lo cual demuestra la inutilidad de la preferencia por la lista. Adicionalmente, precisó, que habría otros problemas operativos para los recuentos y sus actas, al no cuadrar los números de votantes efectivos con los votos, preferencias y colillas.

Consignó que debe tenerse en cuenta que el cambio de sistema aumenta en todos los casos el número de candidatos donde podrá elegir el elector. Si se le están dando más opciones es lógico también obligarlo a optar por un candidato.

Sugirió, por tanto, eliminar la opción del voto por la lista.

Como consecuencia, propuso a la Comisión considerar durante la discusión en particular la siguiente indicación: Eliminar la expresión “y del nombre de la lista respectiva” del nuevo inciso final que se incorpora al artículo 24. Además eliminar las modificaciones a los artículos 65, 71 y 87 de la ley 18.700 y la modificación al artículo 14 bis de la ley 19.884

Seguidamente, se refirió a la regla para la determinación de candidatos electos.

Manifestó que el proyecto innova en la aplicación de la fórmula D’Hondt con una nueva redacción, diferente de la que existe ya normada en otras leyes para las elecciones de concejales y consejeros regionales. La redacción actual vigente en las leyes mencionadas viene desde el año 1992 que se creó el sistema de elección municipal, pero ha tenido que ser corregida y clarificada en dos oportunidades por el Parlamento, a raíz de interpretaciones propias e incorrectas del método por parte de algunos Tribunales Electorales Regionales.

Destacó que la nueva redacción propuesta es muy simplista y vaga en la descripción de algunos pasos del método que podrían generar nuevas interpretaciones equívocas. Entre otros, no hay una definición precisa del concepto de lista. El concepto de atribuir escaños en función de números de la lista en una escala es muy vago y poco preciso. No se resuelve la situación de una lista que presenta menos candidato de los que puede elegir.

Sostuvo que se trata de un tema donde debería haber completa claridad y exactitud en cómo se determinan los candidatos electos, sin abrir puertas a nuevas interpretaciones. En este sentido es del todo aconsejable que exista una redacción única y común en toda nuestra legislación electoral cuando se trata de la misma materia. Para lo cual sugerimos utilizar la redacción contenida en la ley 18.695 de Municipalidades (artículos 120 al 124) o en la ley 19.175 de Gobierno y Administración Regional (artículos 96 al 98) que más completas y precisas.

Luego, señaló que el proyecto opta por solucionar los empates que se pueden producir, tanto cuando dos listas tienen el mismo derecho de elegir un candidato, o cuando dos candidatos dentro de una misma lista tienen igual derecho, por la fórmula de un sorteo. Este criterio es diferente del que se ha aplicado para el caso de los Concejales (también para consejeros regionales) de recurrir al mayor caudal de votación individual de los candidatos que disputan el mismo cargo y sólo en el caso de que este criterio no resuelva el cargo, lo que es muy poco probable, usar el sorteo.

Estimó que es más correcto recurrir a la votación individual antes de aplicar el sorteo.

En esta materia propuso a la Comisión considerar, durante el debate en particular de este proyecto, una indicación que sustituye el artículo 109 bis por los siguientes:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme al procedimiento de cifra repartidora que se señala en los incisos siguientes.

Se considerará que constituyen una lista los pactos electorales, los partidos que participen en la elección sin formar parte de un pacto electoral, y cada una de las candidaturas independientes que no estén asociadas a un partido.

Se determinarán los votos de listas sumando las preferencias emitidas a favor de cada uno de los candidatos integrantes de una misma lista.

Se determinará el cuociente electoral, para lo cual los votos de lista se dividirán sucesivamente por uno, dos, tres, cuatro y así sucesivamente, hasta formar tantos cuocientes por cada lista como senadores o diputados corresponda elegir. Todos esos cuocientes se ordenarán en forma decreciente y el que ocupe la posición ordinal correspondiente al número de senadores o diputados que le corresponder elegir a la circunscripción senatorial o distrito será el cuociente electoral.

Para determinar cuántos son elegidos en cada lista, se dividirá el total de votos de la lista por el cuociente electoral. Se considerará la parte entera del resultado de la división, sin aproximar y despreciando cualquier fracción o decimal.

Para determinar los candidatos a senadores o diputados elegidos dentro de cada lista, se observarán las siguientes reglas:

1) Si a una lista corresponde elegir igual número de senadores o diputados que el de candidatos presentados, se proclamará elegidos a todos estos.

2) Si el número de candidatos presentados es mayor que el de los senadores o diputados que a la lista le corresponde elegir, se proclamarán elegidos los que hubieren obtenido las más altas mayorías individuales, a menos que la lista corresponda a un pacto electoral, caso en el cual se aplicará la norma del artículo siguiente.

3) Si el número de candidatos presentados es inferior al de los senadores o diputados que a la lista le corresponda elegir, se proclamarán elegidos todos los candidatos de la lista, debiendo reasignarse el cargo sobrante recalculando el número de cargos elegidos por las demás listas. Para ello, se repetirá el cálculo del inciso quinto, utilizando como cuociente electoral aquel que ocupe la posición ordinal que siga en el orden decreciente de los cuocientes determinados según el inciso cuarto. Si fuesen más de uno los cargos sobrantes, para determinar el cuociente se avanzará en el orden decreciente de los cuocientes del inciso cuarto, tantas posiciones ordinales como cargos sobrantes existan.

4) Si dentro de una misma lista un cargo correspondiere con igual derecho a dos o más candidatos, resultará elegido aquel que haya obtenido el mayor número de preferencias individuales y, en caso de que persista la igualdad, se procederá por el Tribunal al sorteo del cargo, en audiencia pública.

5) Si el último cargo por llenar correspondiere con igual derecho a dos o más listas o candidaturas independientes, resultará elegido el candidato de la lista o el independiente que haya obtenido mayor número de preferencias individuales y, en caso de que persista la igualdad, se procederá por el Tribunal al sorteo del cargo en audiencia pública.”

“Artículo 109 ter.- Para determinar los candidatos elegidos en una lista que corresponda a un pacto electoral, se procederá a sumar las preferencias de los candidatos de un mismo partido incluidos los candidatos independientes asociados a dicho partido.

Posteriormente, se repetirá el procedimiento descrito en el artículo anterior, considerando, para este efecto, como si fueran una lista a cada partido integrante del pacto electoral, todo ello con el objeto de determinar el número de candidatos que elige cada partido integrante del pacto.

Determinado el número de senadores o diputados que elige cada partido integrante del pacto electoral, se repetirá el procedimiento descrito en el artículo precedente, para determinar cuáles son los candidatos electos de cada partido integrante del pacto. En el caso de un partido que incluya candidatos independientes asociados, estos candidatos tendrán igual derecho de preferencia dentro del partido que los candidatos afiliados, proclamándose electos a quienes obtengan las más altas mayorías considerando únicamente su votación individual.”

Seguidamente, pasó a referirse a las normas que se refieren a la aplicación de la ley de primarias a parlamentarios.

Advirtió que existe una omisión grave en el proyecto de ley al no considerar las necesarias adaptaciones de la ley 20.640 de Elecciones Primarias.

Agregó que en efecto, la ley de primarias solo considera para el caso parlamentario y de acuerdo a lo señalado en el inciso segundo del artículo 7, la realización de elecciones primarias parlamentarias para resolver solo dos candidatos como máximo, ya sea por un partido o por un pacto electoral. Explicó que no es posible su aplicación para resolver un número mayor de cargos, como existirá en todos los nuevos distritos y en algunas de las nuevas circunscripciones senatoriales.

Al respecto, recordó que el inciso segundo artículo 7º de la ley 20.640 de Elecciones Primarias dispone:

“En la elección primaria para la nominación de candidatos a los cargos de Parlamentarios, para cada territorio electoral, los partidos políticos podrán participar:

a) En forma individual, sin haber suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar sus dos candidatos.

b) En forma individual, habiendo suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar su propio candidato dentro del pacto.

c) En conjunto con otros partidos con los cuales ha suscrito un pacto electoral, y con el objeto de determinar los dos candidatos de dicho pacto.”

Señaló que por otra parte, también debe considerarse la eventualidad de que un partido resuelva un alto número de sus candidatos parlamentarios por medio de primarias, ya que podría llegar a tener serias dificultades o incluso la imposibilidad de cumplir con las cuotas por sexo, debido a los propios resultados de las elecciones primarias.

Manifestó que es legítimo plantearse si se justifican las elecciones primarias parlamentarias organizadas por el Servel, toda vez que en el nuevo sistema dispone de muchos más cargos por territorio electoral que en sistema binominal antiguo. También se debe considerar el poco uso que se les ha dado a las elecciones primarias por los partidos en el caso de parlamentario. Si podría considerar que ellas fueran organizadas por los partidos o pacto sin participación del Servel y sin efecto legales vinculantes.

Recalcó que de no considerarse lo anterior se hace absolutamente necesario hacer las modificaciones pertinentes a la ley de elecciones primarias.

Seguidamente, se refirió a la asignación del número de escaños a los distritos que crea este proyecto.

Hizo presente que en el caso de los diputados el proyecto de ley contempla dos procedimientos de asignación del número de diputados a los distritos. El primero de carácter permanente y el segundo de carácter transitorio.

Seguidamente, explicó que hay una asignación de escaños por el Servel cada 10 años. (Art. 179 bis)

El Servel actualizará cada 10 años, la asignación de los 155 diputados a los distritos en base a la población del último censo mediante el método proporciona de D’Hondt. Sin embargo se establece que ningún distrito puede elegir menos de 3 ni más de nueve.

Consignó que el mínimo de tres diputados, conlleva que 84 diputados sean asignados en forma fija a los distritos, lo que representa el 54% del total. De esta forma más de la mitad de los diputados se asigna sin considerar la población, lo cual aleja la propuesta de un correcto cumplimiento del principio de igualdad del voto. Debería considerar un mínimo de 2 diputados lo que representa un 36% del total asignado en forma fija.

Expuso que la asignación se hace en base a población censal (modificación introducida en la Cámara de Diputados) y no en base a electores como fue el proyecto original. Consideramos más correcto usar las cifras de electores.

Agregó que el principio de la igualdad del voto se debe aplicar respecto de los electores, que son los que tiene derecho a voto, no respecto de los que no lo tienen. Por otra parte, desde el avenimiento de la inscripción automática, el SERVEL debe confeccionar padrones electorales para cada elección con todos los electores con derecho a voto. El último de la elección del 2013 tenía 13.573.143 electores, todos plenamente identificados con su nombre, RUT y lugar de votación. Padrones que además se auditan, son públicos y reclamables ante tribunales electorales. Esta información es muchísimo más confiable, certera, actualizada y regular que la población censal, que también es estimada y se hace cada 10 años o más.

Apuntó que se ha señalado que el uso de electores, podría implicar acarreos de inscripciones para influir en los cálculos como ha sucedido en municipios de muy poca población. Estimó que en este caso ello es una exageración y es muy poco probable que suceda, dado la mayor magnitud de electores que tendrán los distritos, las distancias involucras y al hecho de que puede evitarse recurriendo al uso de un padrón elaborado para una elección anterior (uno o dos años de atraso).

Añadió que la diferencia entre uno u otro concepto no son sustanciales, se debería principalmente a la presencia de menores de edad. Los cuales se deberían distribuir proporcionalmente en forma pareja entre los distintos distritos, con diferencias estadísticamente poco significativas. De esta forma parece más aconsejable utilizar la información de electores del propio Servel, más regulada, regular y confiable.

En virtud de lo anterior, propuso una indicación para modificar el artículo 179 bis de la siguiente forma:

1. Reemplazar en la letra a) del inciso primero la expresión “en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas.” por “en consideración a los electores de cada uno de ellos, en base a el padrón electoral definitivo elaborado por el Servicio Electoral y utilizado en la última elección de carácter nacional”.

2. Reemplazar la letra b) del inciso primero por la siguiente: “b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 2 ni más de 9 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos queden por debajo o superen dichos límites, se les asignará el límite inferior o superior que corresponda, repitiéndose, al efecto, el proceso de asignación de escaños, señalado en la letra a) anterior, considerando para ello sólo al resto de los distritos y los escaños que queden por asignar.”.

3. Reemplazar la letra c) del inciso primero por la siguiente: “c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de marzo del año que corresponda la actualización.”.

4. Reemplazar el inciso final por el siguiente:

“En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de abril del año de que se trate. En caso de producirse algún cambio en la distribución de diputados, el texto del artículo 179 de esta ley se entenderá modificado en lo pertinente, de pleno derecho y se aplicará en su forma así corregida en la elección inmediatamente siguiente.”.

Asimismo, sugirió modificar el artículo 25 transitorio por el siguiente:

“artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año 2023.”.

Finalmente, se refirió a la asignación Ad-hoc transitoria de escaños (Art. 179).

Explicó que el artículo 179 hace una asignación ad-hoc de los 155 escaños a los distritos de diputados, rigiendo temporalmente para las elecciones de los años 2017 y 2021.

Connotó que dicha asignación contiene un conjunto de inconsistencias graves y arbitrarias que violan el principio de la Igualdad del Voto contenido en la Constitución.

A continuación, intervino la Directora de la Fundación Ciudadano Inteligente, la señora María Jaraquemada quien comenzó su intervención agradeciendo la invitación de la Comisión.

Manifestó que la Fundación que dirige está especialmente interesada en promover una normativa que regule la relación entre dinero y política.

Precisó que el objetivo de la propuesta de Fundación Ciudadano Inteligente es establecer un nuevo marco regulatorio para la relación entre “dinero y política“, particularmente en el ámbito de las campañas electorales y del financiamiento de los partidos políticos. De este modo se plantea la modificación de diversos cuerpos legales para fomentar una mayor transparencia, rendición de cuentas y fiscalización en esta materia, así como propender a una mayor igualdad entre los distintos candidatos ya sean incumbentes o desafiantes.

Reseñó que si bien el año 2003 las disposiciones que regulan estas materias fueron un gran avance hacia la transparencia de las donaciones en campañas, para combatir la corrupción electoral, para garantizar una mayor fiscalización de gastos e impedir la incidencia de grupos de interés y de reclamo de favores políticos, estimó que en muchos aspectos estos objetivos ya no se cumplen y se requiere una modernización de la actual legislación.

Detalló una serie de propuestas de modificaciones a la actual legislación que junto con las iniciativas que se encuentran en actual tramitación, pueden mejorar nuestra legislación en esta materia. Al respecto, planteó las siguientes:

1. Donaciones y financiamiento a campañas y partidos (Leyes N°s 19.884, 19.885 y 18.603):

a. Prohibición de donaciones anónimas. Se estima que este tipo de donaciones en las cuales los candidatos/partidos que las reciben conocen quién es el donante, no se condicen con los estándares de transparencia necesarios en la materia. Además, si bien se autorizan solo en caso de montos bajos inferiores a 20 UF y en suma no pueden constituir más del 20% del límite al gasto electoral, no se cumple con el objetivo de este tipo de regulaciones en cuanto a impedir que la autoridad electa vele por el interés particular de quien realizó la donación en lugar de por el interés general y que no se cobren favores políticos o se exija la donación por parte del partido/candidato.

b. Reformulación de donaciones reservadas: hoy las donaciones reservadas solo las conocen ciertos funcionarios del Servel y en teoría no son conocidas por los candidatos/partidos que las reciben. No obstante, tal como han señalado algunos estudios, las cantidades de donaciones reservadas que se realizan son bajas y de montos mayores a $5.000.000, lo que permite una mayor identificación del donante y no evita el objetivo buscado por la norma: impedir la incidencia de grupos de interés o empresas y de reclamo de favores políticos.

Agregó que urge una reformulación de este tipo de donaciones, la que debe perseguir los siguientes objetivos:

i. Asegurar y fortalecer el que solo sean conocidas por el Servel, ya que esto último permite su fiscalización y evita la corrupción o tráfico de influencias. De este modo, si bien el monto puede ser público, la identidad del donante solo será conocida por el Servel y no por la ciudadanía en general ni por el que recibe la donación.

ii. Rebajar su monto actual de modo que no puedan constituir un riesgo de reclamo de favores políticos. El monto actual es de más de 20 UF y menores al 10% del total del límite de gasto electoral con ciertas limitaciones por autoridad a elegir. Estimó que el monto máximo debiese ser el que actualmente existe para las donaciones anónimas (20 UF y en total no superar el 20%6 del límite al gasto electoral)

iii. Facilitar las donaciones de este tipo, para que así sea mayor el número de ciudadanos que contribuyen a los partidos y campañas, lo que genera un doble efecto: mayor afección de éstos con la actividad política y se disminuye el riesgo de identificar a los donantes y las posibles influencias de éstos en las autoridades. Esto se puede realizar simplificando el procedimiento actual que es algo engorroso, por ejemplo permitiendo las donaciones a través de cajeros o por transferencias por las páginas web de los Bancos (webpay)

iv. Mantener el sistema de aleatoriedad de entrega actual de las donaciones recibidas semanalmente con el fin de que no sea posible para el candidato o partido identificar al donante que la realizó.

v. Por otra parte, permitir la retractación del donante en un determinado plazo para así evitar casos de personas que sean presionadas a donar a determinados candidatos/partidos. Asimismo, las donaciones siempre quedan sujetas a la aceptación por parte del beneficiado.

vi. El donante siempre podrá optar porque estas donaciones sean públicas.

c. Donaciones públicas: todas las que no sean reservadas y mayores a las anteriores, son públicas y quedarán en un registro a cargo del Servel, que se publica en internet. Aquéllas que no sean mayores a 10 UF se pueden realizar directamente al candidato/partido, quien las informa al Servel y éste las incorpora al registro público de donantes (bingo, comidas, colectas, etc.). Éstas no pueden superar el 10% del límite del gasto electoral. Las que sean mayores a 10 UF o superen dicho límite, deben hacerse siempre a través del Servel, también se facilitan vía webpay u otros, pero no aplica el sistema de aleatoriedad. En este caso, también están sujetas a que las acepte el beneficiario.

d. Se mantienen las normas actuales de anticipos y reembolsos estatales de acuerdo a las votaciones obtenidas por los partidos o candidatos en las elecciones anteriores.

e. Prohibición de donaciones de personas jurídicas. Dado que éstas no votan y no puede asociarse su derecho a la libertad de expresión con su facultad de realizar donaciones, consideramos que debe eliminarse esta posibilidad en nuestra regulación. Siempre quedará a salvo el derecho de las personas naturales que hoy las conforman de poder realizar donaciones, ya sean reservadas o públicas. Asimismo, existe evidencia que los montos que éstas donan son bastante altos lo cual permite que éstas luego puedan influir en la toma de decisiones de las autoridades electas según sus intereses particulares. Cabe señalar que en un 42% de los países de las Américas se prohíben este tipo de donaciones.

f. Posibilidad de identificar donantes: salvo casos excepcionales en que se permitan las donaciones reservadas, de acuerdo a lo señalado en el literal b) precedente, total publicidad de esta información, la que constará en un registro público creado para estos efectos, que será administrado y actualizado por el Servel y que estará a permanente disposición del público en su sitio web. En época de campaña electoral, esta información debiese actualizarse lo más inmediatamente posible a la realización de la donación y, al menos, semanalmente.

g. En caso que se supere el monto máximo de aportes privados establecidos en la ley, éstos serán devueltos a los aportantes. Si los aportantes no pudiesen ser identificados, el exceso recibido deberá entregarse, por los administradores electorales, al momento de la presentación de las correspondientes cuentas de ingresos y gastos, al Servicio Electoral, a favor del Fisco.

h. Equiparar normas sobre donaciones a la ley de partidos políticos (Ley N° 18.603), para así evitar que se burlen las normas sobre financiamiento a las campañas a través de las donaciones directas a los partidos políticos. La actual regulación en la materia es bastante más permisiva que la relativa al financiamiento de campañas. Lo mismo con los institutos de formación política inscritos por los partidos políticos. Esta normativa será aplicable tanto en períodos de campaña como fuera de ella (es decir, los límites a las donaciones reservadas y la cifra del límite al gasto electoral que establezca el Servel por resolución anualmente, reajustando la cifra establecida para el período electoral)

i. Regular la entrega de créditos para el financiamiento de campañas y partidos y su pago, así como la publicidad de esta información. De este modo, establecer de modo expreso en la ley que debe acreditarse el uso de los dineros percibidos a través de créditos de instituciones financieras en gastos de campaña, así como también acreditarse el modo en que éstos son posteriormente pagados, de modo tal que se respete la normativa general sobre donaciones y que el Servel pague directamente con el reembolso a la institución financiera que acredite dicho préstamo. Prohibir expresamente la condonación de este tipo de deudas.

j. Prohibir la donación a campañas o partidos por parte de personas naturales con contratos con el Estado y asimilarlas a las normas de prohibiciones respecto de personas jurídicas que reciben subvenciones o aportes del Estado o que contratan con el Estado, así como las que postulan a licitaciones públicas o privadas.

k. Establecer que la provisión de bienes y servicios para las campañas electorales deba realizarse a través del portal de Chilecompras a los proveedores allí registrados. De este modo, se permite una mayor transparencia y fiscalización en esta materia, y se inhiben los actos de corrupción o de fraude. Se pueden establecer ciertas excepciones, tal como gastos menores, candidatos en zonas menos pobladas y casos especiales autorizados por el Servel.

l. Facultar expresamente al Servel fiscalizar que las donaciones en especies se ajustan al “precio de mercado” o “justiprecio” para así no burlar las disposiciones relativas a sus montos máximos, de un modo “casuístico”.

m. Establecer un sistema de financiamiento público permanente a los partidos políticos. Esto propende a su fortalecimiento, lo que incide en una mejora en la calidad de nuestra democracia y además evita que éstos deban recurrir 100% a los privados para obtener financiamiento para sus actividades permanentes, lo que, a su vez, inhibe su captura política. En este caso, también se pueden evaluar diversos sistemas de financiamiento mixto, como el de matching fund (igualar lo que el partido percibe en donaciones/cuotas, etc) o el de otorgar ciertos fondos para incentivar ciertas prácticas (incorporación de militantes jóvenes/mujeres/pueblos indígenas; cursos de formación de líderes o formación cívica; etc). Esta reforma debe ir acompañada de ciertas exigencias a los partidos, tales como mayor transparencia de sus actividades, ingresos y gastos; fortalecer los mecanismos de democracia interna; y, realización de actividades de capacitación y formación política, entre otras. Órgano a cargo de la fiscalización de dichas normas y de aplicar las sanciones respectivas (Servel en primera instancia, Tricel en segunda instancia). Los recursos provenientes de este financiamiento no pueden ser utilizados en campañas electorales, sino en sus actividades ordinarias, capacitación, formación política, think tank, trabajo legislativo, etc.

Luego presentó a la Comisión una serie de medidas que habría que adoptar en materia de regulación de los gastos electorales regulados en la ley N° 19.884. Explicó que ellos eran básicamente los siguientes:

a. Rebajar el tope al límite al gasto electoral, especialmente considerando el efecto de la Ley de Inscripción Automática y del proyecto de ley que reforma el sistema binominal-redistritaje, los que elevan considerablemente su límite. Esto implica que los candidatos/partidos tienen un mayor incentivo a buscar donaciones altas y, además, le dificulta el acceso a candidatos desafiantes. Una de las opciones es que se mantenga el monto actual pero de acuerdo al número de personas que efectivamente hayan votado en la elección respectiva anterior y no de acuerdo al número de personas inscritas en el registro electoral.

b. Redefinir el concepto de campaña o publicidad política. Incorporar en éste cualquier mensaje a la ciudadanía por cualquier medio aunque no llame directamente a votar y cualquiera sea el mensaje que informe, pero que incluya la imagen, nombre o apodo del candidato independiente de que posteriormente no sea candidato y que esté destinada a la promoción de candidatos o partidos políticos.

c. Aumentar el período de control de gastos efectivos. Actualmente son solo 3 meses antes de la fecha de las elecciones, lo que en la práctica no es así. Por esto, se propone que el Servel pueda fiscalizar en cualquier momento los gastos en publicidad política, sancionando en caso que se realice fuera del período autorizado e imputando dichos gastos, a los del período de campaña.

3. Rendición de cuentas (Leyes N°s 19.884, 20.285, 18.556 y 18.603):

a. Información a disposición de la ciudadanía: plazos y formatos. Los candidatos/partidos deben hacer entrega al Servel de su rendición de gastos e ingresos en un plazo de hasta 30 días después de las elecciones, lo que dificulta el control social por parte de la ciudadanía durante el proceso eleccionario. Por eso, se propone que dicha rendición deba realizarse en tiempo real en un software abierto a la ciudadanía con formato único, de open data y fácil de entender para los ciudadanos y la auditoría final que se realice en el plazo legal (30 días después de las elecciones). De este modo, que los ciudadanos puedan acceder a esta información al menos dentro de las 48 horas de haberse realizado, y en su caso, aceptado, la donación. El impacto de la transparencia en esta materia disminuye cuando esta información se hace pública con posterioridad a las elecciones.

b. Creación de software único para rendición de cuentas, a cargo del Servel. La ley actual establece que el Servel podrá establecer el formato electrónico para la rendición de cuentas de los candidatos/partidos. Consideramos que esta norma debe fortalecerse, siendo obligatorio para el Servel realizarlo y no facultativo, y además otorgarse al Servel los recursos humanos y económicos para poder realizarlo.

c. Datos abiertos. Para un efectivo control social de esta información y dado el desarrollo de las tecnologías, es imprescindible que esta información se entregue y se encuentre disponible en un formato procesable por computadores.

d. En caso de que se le dé financiamiento permanente a los partidos, normas de transparencia activa/pasiva aplicables a éstos.

Seguidamente, sugirió a la Comisión considerar las siguientes ideas para introducir modificaciones a los sistemas de fiscalización del gasto electoral y las sanciones que hay que aplicar cuando dichos limites se trasgreden.

Sobre esta materia, postuló lo siguiente:

a. Se debe revisar normas sobre gobierno corporativo del Servel, particularmente la incidencia de la sociedad civil en el nombramiento. De este modo, puede establecerse que los miembros del Consejo Directivo del Servel sean designados por el Presidente de la República, previa consulta pública (no vinculante) o consulta -no vinculante- de los Consejos de la Sociedad Civil del Servel o en un proceso participativo antes de su 27 ratificación por parte del Senado.

b. Se deben examinar normas de atribuciones y facultades para fiscalizar gasto efectivo, en terreno. Necesidad de mayor capacidad de fiscalización activa28, lo que requiere de una mayor dotación de personal calificado y de recursos financieros para llevar a cabo esta labor. Se puede establecer que el Servel realice auditorías aleatorias a candidatos/partidos, lo que disminuye su costo e incentiva la autorregulación por parte de éstos. Existen tecnologías comparadas para chequear el gasto electoral efectivo. Asimismo, otorgarle competencias para hacer cruces o solicitudes de información a otros órganos (Servicio de Impuestos Internos, Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras, etc), para corroborar la veracidad de la información que se le rinde (por ej., veracidad de las boletas, costo real del servicio boleteado o facturado), ya que hoy solo pueden verificar la existencia de la información pero no su veracidad.

c. Agregó que es necesario establecer facultades al Servel para fiscalizar los balances de los partidos políticos y el cumplimiento de éstos de sus obligaciones derivadas de la Ley Orgánica de Partidos Políticos e imponer sanciones en caso de incumplimiento, las que puedan ser revisables por el Tribunal Calificador de Elecciones.

d. Explicó que es necesario otorgar a este Servicio los recursos financieros y humanos necesarios para llevar a cabo sus funciones de fiscalización, particularmente en terreno.

e. Asimismo, explicó que es necesario modernizar el sistema de contabilidad.

f. Abogó por la creación de un software único, que estandarice el proceso y que se poble en tiempo real, en línea con lo ya señalado en el numeral anterior, particularmente en los literales a) y b).

g. Añadió que era indispensable reformular sanciones: Explicó que actualmente las sanciones son sólo multas al administrador electoral. Explicó que se debe elevar el costo de infringir estas normas, lo que puede realizarse elevando el reproche a la infracción de aquéllas más graves con sanciones penales, las que pueden conllevar la pérdida del cargo en el caso que la pena sea aflictiva, se pierde el derecho a sufragio y, por tanto, un requisito para el cargo. Por tanto, en caso de conductas graves, tales como, recepción de donaciones ilegales, presentar cuentas maliciosamente falsas, presentar documentación falsa para acreditar gastos, establecer una sanción penal al responsable.

h. Concluyó su intervención haciendo presente la importancia de establecer sanciones a los candidatos, donantes y directivas de partidos políticos en caso de infracción a esta normativa. Explicó que para no diluir responsabilidades e involucrar más a los candidatos/partidos en el cumplimiento de la normativa electoral, éstos debiesen ser solidariamente responsables junto con el administrador electoral. Lo mismo, sostuvo, con los donantes que infrinjan estas disposiciones.

A continuación, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, ofreció el uso de la palabra al Honorable Diputado, señor Pepe Auth, quien señaló que su exposición se basará en la lógica del diseño que se está planteando en el proyecto de ley que presentó el Ejecutivo.

Recordó que el sistema electoral binominal se basa en la existencia de dos nombres en cada territorio electoral, y esa lógica se repite en los 60 distritos y en las 19 circunscripciones.

Aclaró que no es la existencia de uno o varios distritos, que elijan dos escaños, lo que define el carácter binominal. Reseñó que en el sistema proporcional que rigió en Chile, había distritos uninominales, y también binominales. Precisó que los senadores se elegían en circunscripciones de 5 escaños agrupando regiones, de manera que cada representación de 5 fuera equivalente a las otras en término de representación de personas. No hubo en el pasado un criterio que estableciera exclusivamente una representación territorial para el Senado y poblacional para la Cámara de Diputados.

Hizo presente que en la composición de ambas Cámaras está articulada la dimensión territorial y la representación de personas, porque de lo contrario, otra sería la atribución de escaños para cada distrito y para cada circunscripción.

Señaló que le gustaría un sistema electoral en que se eligiera a un diputado por cada 100.000 habitantes y definiría distritos en que se eligieran entre 5 y 8 diputados, agrupando territorios. Constató que pese a sus intenciones, la reforma parte de la realidad actual, y ella apunta a aprobarse como está actualmente planteada. Lo anterior, sostuvo, permite que ésta tenga viabilidad política.

Asimismo, aseveró que como el proyecto de ley toma como base para construir esta iniciativa las reglas que actualmente existen, ningún territorio va tener en esta propuesta, menos parlamentarios que los que tiene hoy en el sistema vigente.

Destacó que si uno analiza la propuesta en materia de integración de la Cámara de Diputados, se percata que ella considera 35 diputados adicionales. De ese número, 15 se asignan a la Región Metropolitana, para equilibrar la representación poblacional. Lo propio se hace respecto a las otras dos regiones que se encuentras sub representadas, agregando diputados a la V y a la VIII regiones (4 a cada una). Añadió que los 12 diputados restantes obedecen a la decisión del Gobierno de asignarle un escaño adicional a cada una de las regiones de Chile.

Luego, respecto al Senado, explicó que se parte de la idea de una Corporación que esté integrada por 50 senadores. Mediante este número se corrige, en primer lugar, la deuda constitucional que actualmente existe con la región de Arica y Parinacota. Apuntó que no se descarta agrupar regiones teniendo una misma representación. Explicó que el proyecto agrega tres senadores a la Región Metropolitana y uno a cada una de las siete regiones más grandes.

Destacó que el carácter dominante del nuevo sistema propuesto, es el proporcional, a pesar de que 14 de los 50 senadores se elija todavía en circunscripciones binominales.

Recalcó que lo anterior se debe a la voluntad de no escalar al infinito en el número de senadores y porque se asume que en la representación senatorial también se articula la lógica de representación de territorios y la de representación de personas.

Seguidamente, señaló que desde el punto de vista legislativo, el rol de la Cámara de Diputados y del Senado prácticamente no tiene diferencias.

Enfatizó que en otros países los criterios de representación política están claramente definidos en cada Cámara.

Luego, manifestó que suscribió la indicación presentada por los Honorables Diputados señores Jackson y Mirosevic, a pesar de que en la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia de la Cámara de Diputados se declaró su inadmisibilidad, a partir del compromiso del Gobierno de enviar un proyecto de ley de reforma integral a la ley N° 19.884 sobre transparencia, límite y control del gasto electoral y a la Ley Orgánica Constitucional de Partidos Políticos.

Valoró en la indicación, el descenso significativo del límite de gasto y de las donaciones. Agregó que la mayor dependencia de la donación, con respecto a la mayor dependencia del aporte fiscal establece el nivel de influencia de terceros sobre el proceso democrático. Declaró que no era partidario de reducir todo al aporte fiscal, sino que persistir en la idea de que haya aporte privado, pero también de limitarlo a los ciudadanos y otorgarle a éstos beneficios tributarios.

Aseveró que simpatizaba con la iniciativa del CEP de premiar las donaciones personales con un correlato estatal.

Concluyó su presentación señalando que el tema mencionado debe tratarse integralmente, reformando tanto la Ley de Partidos Políticos, así como la que establece los límites y controles al gasto electoral.

A continuación hizo uso de la palabra el Honorable Senador señor Larraín quien le preguntó al profesor señor Zúñiga sobre el planteamiento realizado por don Andrés Tagle, en relación a la búsqueda de la igualdad del voto. Hizo presente que en el proyecto de ley hay un incremento de parlamentarios que pareciese ser un “traje a la medida” más que un ajuste derivado de aplicación del referido principio.

Seguidamente, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe consultó por la aplicación del principio de igualdad del voto, de acuerdo al redistritaje que plantea el proyecto.

El Honorable Diputado señor Auth señaló que hay 35 escaños nuevos que son asignados a los distintos territorios en función de la reducción de la desigualdad del voto. Agregó que el Gobierno tomó la decisión de asignarle a cada uno de las regiones un escaño adicional. Lo anterior, explicó se fundó en la idea de que en ningún distrito siga eligiendo 2 diputados. Si hubiese sido un traje a la medida, se le habría asignado un parlamentario adicional a las regiones con mejor resultado electoral para la Nueva Mayoría. Recalcó que dicho diseño se hizo con posterioridad a la reducción de la desigualdad del voto.

Opinó que es partidario de agregar escaños solo para disminuir la desigualdad del voto, pero esa idea es menos viable que la que propone el proyecto que se está discutiendo.

A continuación, el Honorable Senador señor Espina sostuvo que se ha hablado mucho de la necesidad de alcanzar la mayor proporcionalidad entre el número de electores y del número de diputados a elegir. Sostener que se modifica el sistema electoral, entre otras cosas, para corregir la desigualdad del voto, es un argumento que cae por su propio peso, ya que de acuerdo a lo expuesto por el señor Tagle, dicho principio se vulnera flagrantemente.

Preguntó por la relación entre las cuotas de participación y las primarias.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe preguntó al profesor Zúñiga por la constitucionalidad de la facultad que se le confiere al Consejo Directivo del Servicio Electoral, de actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos.

El profesor Zúñiga manifestó que el análisis de los sistemas electorales es una cuestión compleja. Precisó que la definición que ha seguido la Cámara de Diputados como el Gobierno no parte de cero, sino que considera la actual división político electoral. Agregó que si lo que se busca es la representación proporcional estricta, para ello, debiesen crearse grandes distritos.

Recalcó que la extensión de los distritos es determinante al definir la proporcionalidad.

Expresó que la jurisprudencia en materia electoral es muy escasa. Señaló que don Andrés Tagle recordaba la prevención de los ministros del Tribunal Constitucional con motivo del proyecto de ley establece la elección directa de los consejeros regionales. Ante ello hizo presente que la primera decisión del Tribunal en esta materia surgió como consecuencia de una presentación hecha por un grupo de profesores encabezada por Francisco Cumplido y Mario Verdugo, al dictarse las primeras leyes electorales por la Junta de Gobierno, en que el Tribunal desestimó la presentación, señalando que no había una desigualdad relevante del voto, desde el punto de vista constitucional, en razón del reparto que hizo el legislador electoral de la época, antes de la reforma de 1989.

Enfatizó que si uno examina la jurisprudencia constitucional, no existe argumento que permita sostener que este tipo de distorsiones, desde el punto de vista del principio de la igualdad son inconstitucionales.

Añadió que todos los tribunales admiten márgenes de sub representación y sobre representación tolerables, dentro del marco del principio de igualdad constitucional, por lo tanto, el óptimo desde el punto de vista de la representación en base poblacional, es decir, asignar tantos números de escaños en función de la variable demográfica, no es una exigencia constitucional per se.

Expresó que como el proyecto de ley en discusión parte de la realidad que tenemos, y busca corregir los problemas de sobre representación y sub representación.

Agregó que si aumenta el tamaño de un distrito, disminuye la barrera de la asignación de los escaños y mejora la competencia política.

El señor Andrés Tagle sostuvo que el principio de la igualdad del voto es inherente a la democracia. Ella no se cumple cuando la potencialidad de un voto para elegir parlamentarios es mayor que la de otro ciudadano.

Agregó que los países que quieren representación territorial recurren a tener dos Cámaras, una en que se aplique el factor poblacional y en la otra, el territorial. Señaló que la voluntad del pueblo en la Cámara que tiene la representación poblacional, está representada equitativamente. Lo anterior no está claramente establecido en el proyecto de ley, pero el principio, recordó, sí está consagrado en la Constitución.

Señaló que el Honorable Diputado, señor Auth mencionó que el proyecto propone aumentar el número de diputados para reparar la desigualdad del voto. Sin embargo, sostuvo, el proyecto no le da la importancia a lo que dispone el Mensaje en esa materia. Agregó que la asignación de 1 o más diputados a cada una de las regiones va en contra del principio antes mencionado.

Recalcó que la propuesta elaborada por la Democracia Cristiana y Renovación Nacional, tenía mejores niveles de igualdad del voto que la actual propuesta del Gobierno.

Aseveró que no se puede lograr una igualdad del voto perfecta, pero ésta debe ser tolerable.

En relación a la reasignación y su constitucionalidad, precisó que lo que la ley hace es establecer una fórmula para que el Servel aplique un regla, y no para que adopte decisiones que corresponde al legislador, por lo tanto, afirmó, no habría problemas de constitucionalidad.

Respecto a las cuotas y las primarias, si un partido político realizara primarias, los candidatos que salgan elegidos en ellas, deberán respetar la cuota respectiva.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe manifestó que para efectos de compatibilizar el principio de inclusión que persigue la ley de cuotas y el de la participación, se podría establecer una fórmula intermedia, en virtud de la cual se disponga que cada partido o coalición podrá hacer un máximo de primarias, de tal forma de asegurar el respeto a las cuotas.

El profesor Zúñiga coincidió con lo señalado por el señor Tagle respecto a las facultades que se le otorgan al Servel en virtud del artículo 179 bis. Discrepó respecto al principio de la igualdad del voto, consagrado en el artículo 15 de la Constitución, porque éste no refiere de manera directa a la conformación del sistema electoral, sino que excluye de la organización electoral el denominado voto censitario, capacitario, plural, funcional o corporativo.

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En una sesión posterior, la Comisión recibió al Ministro del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo Peñailillo, quien comenzó su intervención señalando que esta sesión marca un día muy relevante para el Gobierno, ya que estamos ad portas de la aprobación en general de un proyecto que transformará a Chile en un país más representativo e inclusivo.

Explicó que para lograr dicho objetivo se debe terminar con el sistema electoral binominal y para ello el Gobierno propone una nueva división político electoral que supone configurar 28 distritos para elegir 150 diputados. Respecto al Senado, recordó que el proyecto que aprobó la Cámara de Diputados sugiere establecer 15 circunscripciones, una por cada región, eligiéndose entre 2 y 7 senadores, dependiendo de la población de cada región.

Agregó que también se busca terminar con la baja participación de la mujer en política, para lo cual se ha incorporado un sistema de cuotas.

Destacó que el problema que genera el sistema binominal es que la competencia se produce al interior de las listas y no entre los diferentes proyectos políticos.

Luego, intervino el Honorable Senador señor De Urresti quien felicitó al Gobierno por la presentación de esta iniciativa, ya que mediante ella se está dando un paso importante para suprimir un sistema electoral injusto e inequitativo y que ha regido por demasiado tiempo a nuestro país.

Señaló que va votar a favor de la iniciativa, pero consignó que tiene ciertas observaciones. Estimó como preocupante que en una reforma de esta naturaleza no se incluya a los pueblos originarios. Solicitó que el Ejecutivo se pronuncie al respecto. Recordó que cuando era diputado, presentó una moción en donde se promovía la idea de asegurar la participación política de los pueblos originarios.

Seguidamente, requirió la opinión del señor Ministro respecto a los sub pactos. Consignó que no le parece adecuado que éstos se prohíban. Recalcó que insistirá en que se permita la existencia de ellos. Enfatizó que si se implementará un sistema democrático, participativo, que nace de un consenso político, le parece inadecuado que la ley los prohíba.

Manifestó que bajo ninguna circunstancia permitirá un sistema en que la Región Metropolitana tenga siete senadores.

Finalmente, expresó que 50 senadores es un buen número, no hay que olvidar que esa era la cantidad de parlamentarios de la Cámara Alta el año 1973.

El Honorable Senador señor Bianchi adhirió a lo planteado por el Honorable Senador señor De Urresti y consideró absolutamente necesario cambiar el sistema electoral. Se mostró contrario a que la Región Metropolitana cuente con 7 senadores.

Recordó que el artículo 18 de la Constitución establece la igualdad entre partidos políticos e independientes, y tal como está presentado el proyecto de ley, no permite que un candidato independiente pueda competir. Aseveró que si uno analiza el sistema D’Hont, unido a la regla de N+1, la eventualidad de que ingrese un independiente en la Cámara de Diputados o en el Senado es nula. Subrayó que lo que hace la mencionada regla es fortalecer a los partidos.

Preguntó al señor Ministro si se tiene proyectado que los independientes puedan incorporarse a un pacto tal como lo hacen los partidos políticos. Lo anterior, explicó, resolvería el problema que mencionó precedentemente. Recalcó que si no se permite esta posibilidad se vulneraría la Constitución.

Expresó que todos anhelan un Congreso amplio y representativo, pero no se están considerando, dentro de éste, a los pueblos originarios, a las minorías sexuales, y en definitiva a muchas personas que no tienen la posibilidad de participar de la actividad política desde el Parlamento.

Luego, consultó si lo que se acordó en la Cámara de Diputados respecto a su estructura y composición, puede ser objeto de discusión en el Senado.

Añadió que en la condición que está la actividad política, ésta necesita de estructuras más sólidas, de mayor credibilidad, con mayor articulación.

Finalmente, manifestó que la creación de partidos regionales contribuye en el sentido antes expresado y al respecto solicitó la opinión del Ejecutivo.

El Honorable Senador señor Araya sostuvo que el proyecto que reforma al sistema binominal es absolutamente necesario. Manifestó que dicho sistema cumplió un ciclo y hoy existe una demanda creciente de avanzar a un sistema proporcional representativo que permita la inclusión de los independientes, y de nuevas fuerzas políticas que no necesariamente van a estar en los nuevos pactos electorales.

Agregó que rechaza la posibilidad que la Región Metropolitana elija siete senadores. Reseñó que el Senado hasta antes del 1973 representaba a las regiones con independencia al número de electores.

Asimismo, consultó al Gobierno si está dispuesto a avanzar en una redistribución del Senado distinta a la que se establece en el proyecto en estudio.

Inquirió al Poder Ejecutivo para que se pronuncie respecto al conflicto que puede haber entre las cuotas y las primarias. Solicitó que el Gobierno opine sobre el financiamiento, porque estimó que las indicaciones presentadas por los Honorables Diputados Mirosevic y Jackson, si bien van en el sentido correcto, son incompletas en lo que dice relación con el control del financiamiento electoral.

Finalmente, preguntó al señor Ministro del Interior y Seguridad Pública si también se tiene pensado presentar un proyecto de ley que abarque de manera global y específica a los partidos políticos, o solo se pretende solucionar el tema a través del presente proyecto de ley y sus indicaciones.

A continuación, el Honorable Senador señor Espina manifestó que en Renovación Nacional han sido partidarios de cambiar el sistema binominal, a pesar de que existe la convicción de que el mencionado sistema es absolutamente democrático.

Expresó que ninguna de las personas que han asistido a la Comisión a entregar sus puntos de vista, planteó que el sistema electoral binominal no fuera democrático.

Recordó que en ciertos sistemas uninominales, con el 51% de los votos se puede obtener el 100% de los cargos.

Seguidamente, precisó que los sistemas electorales son mayoritarios o proporcionales. Los primeros tienden a elegir la menor cantidad de representantes por circunscripción o distrito y sobre dicha base, lo que se obtiene es la formación de grandes coaliciones. Lo anterior, aseveró, permite lograr estabilidad y grandes bloques políticos.

Recalcó que Chile ha progresado gracias a las dos grandes coaliciones políticas que se formaron a partir de nuestro sistema electoral.

Enfatizó que la debilidad de los sistemas mayoritarios impide que grupos emergentes que no sean parte de las grandes coaliciones puedan tener representación en el Parlamento. Acotó que el sistema proporcional permite que grupos emergentes puedan incorporarse a la vida parlamentaria y tener representantes en el Parlamento, pero no fomenta la formación de grandes coaliciones.

Consignó que es partidario de reformar el sistema electoral actual, porque las sociedades evolucionan y porque hoy es relevante que las minorías ingresen al Congreso.

Valoró especialmente la propuesta que el año pasado fue elaborada por Renovación Nacional y la Democracia Cristiana y lamentó profundamente que ella no haya llegado a puerto.

Precisó que en ella se elevaba el número de senadores a 44 y el de diputados a 134. Recalcó que dicho acuerdo tenía una mayor proporcionalidad que el proyecto presentado por el actual Gobierno.

Luego, planteó que insistirá en esta última propuesta, mediante el mecanismo de las indicaciones.

Expresó que uno de los principios que el Gobierno ha señalado como fundamental, es el de cautelar la igualdad del voto. Agregó que el proyecto en la Cámara de Diputados vulnera dicho principio. Ejemplificó con el caso de la tercera región donde se elegirían 5 diputados, con una población de 221.000 habitantes y en el distrito número 2 de la primera región, teniendo 222.000 habitantes, se elegirán solo tres diputados. Constató que, con este ejemplo, se puede concluir que el proyecto tiene por objeto favorecer a la coalición política gobernante, lo que rompe el principio de neutralidad de los sistemas electorales.

Recordó que el Gobierno ha dicho por el Gobierno que el aumento de parlamentarios no significa gasto. Enfatizó que lo anterior es falso y se está engañando a la opinión pública. Recalcó que los recursos actuales están correctamente asignados y utilizados, por lo tanto no se puede recurrir a ellos para solventar el aumento de los parlamentarios.

A continuación, hizo presente que uno de los elementos esenciales para poner fin al conflicto en la Araucanía, dice relación con la representación en el Congreso Nacional de los pueblos indígenas.

Por otra parte, estimó que disminuir el porcentaje de ciudadanos para permitir que un independiente se presente como candidato a diputado o a senador, va significar una proliferación de pequeños partidos políticos que debilitará la institucionalidad partidaria.

Se mostró partidario de las reglas sobre cuotas, siempre que éstas no afecten la realización de las primarias.

Seguidamente, el Honorable Senador señor Larraín expresó que es la primera vez que se da esta discusión en esta Comisión. Constató que ha escuchado, de parte de los senadores que la integran, muchas críticas al proyecto de ley, pero anuncian que concurrirán con su voto favorable para aprobarlo. Opinó que siempre ha pensado que los momentos para poder resolver los temas son en las votaciones en general, porque en la discusión en particular se torna más difícil corregir los aspectos concretos que contiene un proyecto de ley.

Expuso que el acuerdo alcanzado entre Renovación Nacional y la Democracia Cristiana constituía una buena propuesta y estaba dispuesto a apoyarla.

A continuación, indicó que es de la idea de hacerle ajustes al sistema actual. Reconoció que el sistema binominal fue necesario y ha hecho una gran contribución al desarrollo del país. Estimó que sin éste probablemente la Concertación no hubiese existido.

Recordó que el sistema binominal opta por favorecer la conformación de grandes bloques políticos, en desmedro de grupos más pequeños que no tienen la posibilidad de acceder al Parlamento, a menos que adhieran a los grandes bloques políticos. Lo anterior, sostuvo, favorece la constitución de partidos y conglomerados políticos más poderosos.

Agregó que los sistemas proporcionales producen el efecto inverso, favoreciendo a los grupos más pequeños, pero también conducen a la multiplicación de los partidos políticos.

Lo anterior, expresó, no significa que la mayor representatividad implique una mayor gobernabilidad, porque la atomización de los partidos políticos no es señal de seguridad en la gobernanza de las sociedades.

Enfatizó que con el sistema electoral binominal han surgido grupos pequeños que a veces son la llave que articula los acuerdos políticos. Recalcó que dicho sistema no es un obstáculo a la representación real.

Añadió que los sistemas electorales tienden a representar en el tiempo, los cambios que hay en las coaliciones o en las configuraciones políticas de un país, de ahí la importancia de tener un solo sistema.

Luego, hizo presente que el sistema electoral actual debe cambiarse, porque ha fallado en la competitividad y en la representatividad.

Manifestó, a los demás integrantes de la Comisión, que el sistema que se elija perdurará por un largo plazo. Advirtió que el mismo no debe incurrir en los defectos que hoy se advierten respecto al binominal.

Consignó, respecto al sistema que se propone, que el Senado no puede evitar debatir, discutir y eventualmente cambiar la estructura propuesta por la Cámara de Diputados. Fue enfático en señalar que no porque se haya llegado a un acuerdo político en dicha corporación, el Senado debe inhibirse de pronunciarse sobre este asunto. Explicó que los senadores no legislan sobre los intereses del Senado, sino que lo hacen sobre un sistema electoral.

Aseveró que tampoco se le puede pedir a la Cámara de Diputados que no formule observaciones o modificaciones respecto a la estructura del Senado. Se rebeló ante la idea de abdicar de la soberanía que tiene cada una de las Cámaras.

Destacó que el sistema electoral que se apruebe debe representar a todos. No debe elaborarse pensando en la próxima elección, ya que si así lo hiciéramos caeríamos en el riesgo de crear un traje a la medida.

Consignó que la ciudadanía no se explica que queramos aumentar el número de políticos sin una justificación real. Opinó, asimismo, que no se puede decir que el aumento de parlamentarios no acarreará costos. Esta iniciativa, afirmó, supone gasto público.

Al respecto, señaló que dada la nueva estructura de los distritos, los parlamentarios van a incurrir en mayores gastos, porque los territorios que deberán abarcar serán más extensos.

En cuanto al redistritaje, estimó que la extensión de los nuevos distritos va a distanciar la relación del parlamentario con el elector. Destacó que en el contacto con el ciudadano, es el lugar donde más se aprende de la realidad de la circunscripción o distrito, según sea el caso. Agregó que los líderes locales se verán limitados en su posibilidad de llegar a ocupar cargos políticos.

Manifestó que era partidario de las primarias, pero la forma en que se está proponiendo el sistema de cuotas, debilita dicho mecanismo.

Luego, se refirió a la figura de los partidos regionales. Sostuvo que sus candidatos deberán presentarse por la región que representan, independiente que formen una alianza con un grupo político de carácter nacional.

Advirtió que la competencia interna en los bloques persistirá, porque van existir más candidatos que cupos a elegir. Señaló que también subsistirá la circunstancia de que un candidato que obtenga muchos votos arrastre a otro de menor votación, y ello no es responsabilidad del binominal, sino que del sistema de listas.

Representó que su mayor inquietud respecto a este proyecto lo constituye el principio de la igualdad del voto, porque si uno analiza tanto la configuración de la Cámara de Diputados como la del Senado, hay nuevos escaños que carecen de justificación si se aplica dicho principio. Enfatizó que si se critica el binominal porque sería un traje a la medida, no podemos cometer el mismo error en el proyecto de ley en estudio.

Reiteró que es partidario de cambiar el sistema electoral vigente y se mostró disponible para consensuar uno que represente a todos.

Anunció que no votará en contra del proyecto de ley. En todo caso, hizo un llamado a la Comisión a discutir un proyecto que sea bueno para los ciudadanos. Lo peor sería, aseveró, aprobar una iniciativa que favorezca a un bloque por sobre otro.

Finalizó señalando que no compartía el acuerdo de la Cámara de Diputados de incorporar ciertas normas de financiamiento de las campañas. Explicó que esa idea le parecía mal estructurada y extemporánea. Se sumó a la idea de que el Gobierno presente un proyecto de ley que regule dicho tema. En todo caso, precisó que respaldaba la idea de que el financiamiento de la política debe ser transparente y fiscalizable.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe destacó la valentía del Gobierno en presentar un proyecto que modifica el sistema electoral actual.

Señaló que actualmente tenemos un Parlamento con escasas atribuciones, debido al fuerte presidencialismo y a la Constitución imperantes. Unido a lo anterior, recalcó, se establecen los altos quórums para aprobar los cambios que la sociedad está demandando. Estas reglas han generado una descalificación de la política y particularmente del Parlamento. Ello, aseveró, hace necesario generar una reflexión profunda respecto de cambios al sistema.

Reseñó que tal como lo expresó el profesor Patricio Zapata, el sistema binominal buscó agrupar en dos grandes coaliciones a visiones políticas distintas. En Chile, recordó, existe la derecha liberal, y la conservadora y el sistema binominal busca juntarlas, lo mismo respecto a la izquierda. El sistema electoral vigente termina evitando que prolifere la expresión de esos legítimos matices. Propende, añadió, a que se formen dos grandes coaliciones y esto genera que no se puedan lograr grandes transformaciones.

Agregó que el politólogo italiano, Giovanni Sartori decía que los sistemas electorales son trajes a la medida de la sociedad. Señaló que el sistema electoral binominal fue diseñado para un objetivo determinado y éste era agrupar a los partidos en dos grandes coaliciones, para sobre representar a las mayorías y sub representar a las minorías, con el argumento de la estabilidad política.

Manifestó que el proyecto de ley en estudio, no se basa en un purismo electoral. Añadió que los sistemas electorales son reglas o mecanismos y éstos no son puros. Precisó que no hay un sistema proporcional absoluto.

Destacó que cualquier propuesta de sistema electoral requiere de un elemento de realismo político. Advirtió que son escasos los ejemplos en que democracias con parlamentos en ejercicio han podido hacer cambios a los sistemas electorales. Lo anterior, afirmó, debido a que los congresistas son incumbentes en los procesos de reforma.

Hizo presente que cuando uno revisa las estructuras de los parlamentos a nivel mundial, donde hay congresos bicamerales, en general, una de las Cámaras tiene una representación poblacional y la otra territorial.

Consideró que la existencia de siete senadores en la Región Metropolitana no tiene, a su juicio, lógica territorial. Estimó que debe ser atenuada en virtud de la aplicación del criterio antes mencionado. La fijación de los criterios debe ser transparente y abierta, descartando que ella sea fruto de una negociación.

Reseñó que en el primer Senado de la República de Chile, en el año 1812 ya se respetaba el principio de territorialidad.

Sostuvo que en la distribución de los nuevos senadores es importante que se consagre el criterio territorial y que éste se atenúe por el criterio poblacional.

Recalcó que es importante sustituir el concepto de circunscripción por el de región, ya que hoy está cambiando el universo electoral. Lo anterior aseguraría, en el futuro, que si se crea una nueva región, ésta siempre tendrá representantes en el Parlamento.

En relación a la regla de cuotas, se declaró un defensor de las mismas. Recalcó que en Chile tenemos una participación femenina en el Parlamento que asciende a la cifra de un 15,8%. Explicó que dicha cifra está muy por debajo del promedio mundial. Consignó que cuando uno analiza el impacto de la aplicación de la ley de cuotas en otras legislaciones, se observa que ellas han producido un incremento cercano al 25% en la participación de la mujer en los cargos parlamentarios y ejecutivos.

Respecto a la incompatibilidad de las cuotas y las primarias, estimó que hay alternativas intermedias absolutamente viables.

Luego, y en relación al financiamiento de esta iniciativa, apuntó que debe darse un debate serio y profundo. Precisó que las indicaciones presentadas son insuficientes.

Por lo anterior, solicitó al señor Ministro del Interior y Seguridad Pública, que el Gobierno presente un proyecto de ley que regule acuciosa y completamente lo del financiamiento, antes de la discusión en particular del presente proyecto de ley.

Hizo presente que el aumento en la extensión territorial de los distritos y circunscripciones generará una cierta lejanía del elector con el parlamentario. No obstante lo anterior, explicó que esta situación r permitirá volver a ubicar al legislador donde debe estar, esto es en la función legislativa y no tanto en la labor de gestor, tarea que corresponde a las autoridades regionales o locales.

Concluyó señalando que la propuesta presentada por el Gobierno puede ser perfectible, pero ello se hará en la discusión en particular.

El Honorable Senador señor Espina manifestó que la Comisión siempre ha cumplido un papel muy relevante en la generación de acuerdos.

Solicitó que el señor Ministro del Interior y Seguridad Pública se pronuncie sobre un proyecto de ley de financiamiento de la política.

El Ministro del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo Peñailillo agradeció el debate que se ha desarrollado en la Comisión. Señaló que hay preocupaciones que son compartidas por el Gobierno.

Sostuvo que la participación política de los pueblos originarios debe ser regulada, ya que ello constituye un derecho para ellos y una obligación que el Gobierno debe observar. Lo anterior, aseveró, se plasmará en un proyecto de ley distinto y que no dice relación con el cambio en el sistema electoral.

En relación al financiamiento electoral planteó que compartía la idea de que se requiere una ley que regule cabalmente este tema.

Seguidamente, la Ministra de la Secretaría General de la Presidencia, señora Rincón precisó que el tema del financiamiento de la política se está estudiando junto al Ministerio del Interior y Seguridad Pública. Sostuvo que de acuerdo a la planificación hecha, se pretende tener un borrador de proyecto de ley, la segunda semana de noviembre del presente año.

El Ministro del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo Peñailillo agregó que, además, debe reformarse la Ley Orgánica Constitucional de los Partidos Políticos.

Sostuvo que el Gobierno se compromete a revisar la composición de la Cámara Alta respecto a la Región Metropolitana.

Igualmente, hizo presente que lo que ha ocurrido en la Cámara de Diputados, respecto al acuerdo de que el Senado no intervenga en su composición, responde a un acuerdo político entre la Nueva Mayoría, Amplitud y el mundo independiente.

Concluyó su intervención remarcando que uno de los temas centrales del proyecto de ley es que éste posee viabilidad política.

El Honorable Senador señor Larraín solicitó que no se vote en la presente sesión el proyecto de ley, porque para respaldarlo necesita saber si existe la voluntad de incorporar cambios a esta iniciativa.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe se mostró dispuesto a llegar a acuerdos, pero recordó que esta sesión estaba convocada para pronunciarse acerca de la idea de legislar sobre esta iniciativa. Agregó que varias de las inquietudes planteadas por los Honorables Senadores deberían ser consideradas durante el estudio en particular de este proyecto.

Concluido el análisis del proyecto, el señor Presidente de la Comisión sometió a votación la idea de legislar acerca del mismo.

IDEA DE LEGISLAR

Teniendo en consideración los antecedentes expuestos, la Comisión, por mayoría de votos, aprobó la idea de legislar sobre esta iniciativa. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina y Harboe. Se abstuvo el Honorable Senador señor Larraín.

El Honorable Senador señor Espina fundamentó su voto, señalando que vota a favor porque de esta manera se abre un espacio para cambiar el sistema electoral binominal. Hizo presente que si el proyecto no es mejorado, votará en contra en la discusión en particular, lo relativo a la composición de ambas Cámaras. Asimismo, solicitó que el Gobierno haga un estudio respecto al tema del financiamiento electoral.

El Honorable Senador señor Larraín fundamentó su voto, indicando que es necesario introducirle cambios al sistema binominal y ellos deben ser producto de un acuerdo lo más amplio posible. Señaló que ha manifestado su voluntad de avanzar en ese sentido, lo que sin embargo no se puede lograr con la actual redacción del presente proyecto de ley. Sostuvo que hubiese preferido postergar la votación para intentar que se acogieran algunas de las ideas que garanticen un acuerdo más amplio se van a recoger en la discusión en particular.

Expresó que no participa de la idea de que se limite la posibilidad de que el Senado se pronuncie sobre lo que acordó la Cámara de Diputados, porque el referido acuerdo vulnera el principio de la igualdad del voto.

Explicó que como no es partidario de rechazar la posibilidad de cambiar el sistema electoral, opta por abstenerse. Recalcó que su ánimo es construir un sistema que sea bueno para el conjunto del país y no para favorecer a un sector determinado.

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En virtud del acuerdo precedente la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento, tiene a honra proponer a la Sala la aprobación en general del siguiente:

PROYECTO DE LEY:

“Artículo 1°.- Modifícase la ley N°18.700, orgánica constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, de la manera que a continuación se señala:

1) En el artículo 3° bis:

a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, pasando el actual inciso segundo a ser tercero:

“En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.”.

b) Intercálase el siguiente inciso quinto, nuevo, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.”.

c) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “que hubieren constituido un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

d) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “Se podrá dejar sin efecto un pacto electoral”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 4° por el siguiente:

“Artículo 4°.- En el caso de las declaraciones de candidaturas para la elección de diputados y senadores, los partidos políticos o pactos electorales podrán presentar en cada distrito o circunscripción un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción de que se trate.”.

3) Reemplázase, en el artículo 10, el guarismo “0,5” por “0,25”.

4) Sustitúyese el artículo 17 por el siguiente:

“Artículo 17.- El Consejo del Servicio Electoral, dentro de los diez días siguientes a aquel en que venza el plazo para efectuar la declaración de candidaturas, deberá dictar una resolución que se notificará al correo electrónico que los partidos políticos y candidatos independientes deberán informar en el momento de la declaración, la que se pronunciará sobre:

a) La aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 25, 48 y 50 de la Constitución Política de la República, o que se encuentren en alguna de las situaciones previstas en su artículo 57. Asimismo, deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los párrafos 1° a 3° de este título.

b) La aceptación o rechazo de la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, declaradas por cada partido político, en conformidad a lo dispuesto en los incisos cuarto y quinto del artículo 3° bis. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con el porcentaje de sexos establecido en los incisos cuarto y quinto de dicho artículo.

Los partidos políticos cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, sean rechazadas en conformidad a lo dispuesto en la letra b) de este artículo, podrán corregirlas ante el Servicio Electoral dentro de los cuatro días hábiles siguientes a la fecha del despacho del correo electrónico que notifica la resolución a que alude el inciso primero, con el fin de ajustarse al porcentaje de sexos dispuesto en los incisos cuarto y quinto del artículo 3° bis, ya sea retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas.

Dentro de los cinco días siguientes de vencido el plazo para reclamar de la resolución del Consejo del Servicio Electoral, éste dictará una nueva resolución aceptando o rechazando las declaraciones nuevas y rechazando o aceptando, según proceda, la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputados o a senadores, según corresponda, la que deberá ser publicada dentro de tercer día en el Diario Oficial. En tal oportunidad también se publicarán en el mismo medio la aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente.”.

5) Sustitúyese el artículo 18 por el siguiente:

“Artículo 18.- Los partidos políticos y los candidatos independientes podrán reclamar ante el Tribunal Calificador de Elecciones por los rechazos de declaraciones fundadas en el incumplimiento de los requisitos establecidos en la letra a) del artículo 17, dentro de los siete días hábiles siguientes al despacho del correo electrónico que notifique la resolución a que se refiere el inciso primero del artículo anterior. Este tribunal fallará en el término de diez días, contado desde la interposición del reclamo, y su resolución se notificará al Director del Servicio Electoral y a los interesados por carta certificada.

El plazo para interponer la reclamación ante el Tribunal Calificador de Elecciones, cuando se funde en el incumplimiento de los requisitos del artículo 17, letra b), se contará desde el día de la publicación de la resolución que dicta el Servicio Electoral en conformidad a lo dispuesto en el inciso final del artículo 17, respecto de los partidos políticos que corrijan ante el Servicio Electoral la proporción de sexos de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador.”.

6) En el artículo 24:

a) Sustitúyese su inciso cuarto por el siguiente:

“Los partidos políticos, dentro de cada lista, pondrán los nombres de los candidatos ordenando a sus integrantes con alternancia entre los candidatos y las candidatas, asignándoles un número correlativo desde el uno hasta la cantidad total de candidatos declarados para la misma circunscripción senatorial o distrito electoral, comenzando la numeración con los candidatos a senadores y siguiendo con los candidatos a diputados.”.

b) Sustitúyese su inciso final por el siguiente:

“Al lado izquierdo del número de cada candidato y del nombre de la lista respectiva, habrá una raya horizontal destinada a que el elector pueda marcar su preferencia completando una cruz con una raya vertical. Asimismo, al lado izquierdo del número de cada candidato, también habrá una fotografía de éste, si la hubiese acompañado en su declaración, en el tamaño y colores de impresión que determine el Servicio Electoral.”.

7) En el artículo 30:

a) Sustitúyese el inciso primero por los siguientes, pasando el inciso segundo a ser tercero y así sucesivamente:

“Artículo 30.- Se entenderá por propaganda electoral toda aquella manifestación pública, escrita o audiovisual, que promocione el nombre, apellido o partido político al que pertenezcan candidatos determinados o que utilice cualquier otro medio de identificación, que esté dirigida a obtener apoyo electoral. También lo será la que induzca a apoyar alguna de las proposiciones sometidas a plebiscito. Dicha propaganda sólo podrá efectuarse en las oportunidades y en la forma prescrita en esta ley.

No se entenderá como propaganda electoral la difusión de información sobre actos políticos y actividades habituales del funcionamiento de los partidos y autoridades políticas, así como la realización de entrevistas periodísticas.”.

b) Reemplázase el inciso tercero, que ha pasado a ser cuarto, por el siguiente:

“El financiamiento de los gastos que se realicen en propaganda electoral o plebiscitaria sólo podrá provenir de personas naturales con derecho a voto en Chile.”.

8) Intercálase en el artículo 65, inciso primero, entre las expresiones “lado izquierdo” y “del número” la siguiente: “de la lista, o al lado izquierdo”.

9) Intercálase en el artículo 71, número 6), entre la expresión “por” y la frase “cada uno de los candidatos” la siguiente frase: “cada lista y por”.

10) Intercálase en el artículo 87, inciso primero, entre la expresión “candidato” y la preposición “en”, la frase “o por cada lista, cuando corresponda,”.

11) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme a las reglas establecidas en el procedimiento que a continuación se detalla:

1.- El Tribunal Calificador de Elecciones determinará las preferencias emitidas a favor de cada lista y de cada uno de los candidatos que la integran.

2.- Se aplicará el sistema electoral de coeficiente D´Hondt, para lo cual se procederá de la siguiente manera:

a) Los votos de cada lista se dividirán por uno, dos, tres y así sucesivamente hasta la cantidad de cargos que corresponda elegir.

b) Los números que han resultado de estas divisiones se ordenarán en orden decreciente hasta el número correspondiente a la cantidad de cargos que se eligen en cada distrito electoral o circunscripción senatorial.

c) A cada lista o pacto electoral se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b).

3.- En el caso de las listas conformadas por un solo partido político, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará electos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada lista, de acuerdo al número de cargos que le correspondan a cada una de ellas, luego de aplicar las reglas descritas precedentemente.

4.- En el caso de los pactos electorales, se aplicarán las siguientes reglas para determinar cuántos escaños le corresponden a cada uno de ellos:

a) Se calculará el total de los votos de cada partido político o, en su caso, de la suma de cada partido político y las candidaturas independientes asociadas a ese partido.

b) Se dividirá por uno, dos, tres y así sucesivamente, hasta la cantidad de cargos asignados al pacto electoral.

c) A cada partido político o, en su caso, a cada partido y las candidaturas independientes asociadas a éste, se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b) precedente.

d) El Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada partido político o, en su caso, de cada partido, considerando las candidaturas independientes asociadas éste dentro de un pacto electoral, de acuerdo a los cupos obtenidos por cada uno de ellos.

En caso de empate entre candidatos de una misma lista, o entre candidatos de distintas listas que a su vez estén empatadas, el Tribunal Calificador de Elecciones procederá en audiencia pública a efectuar un sorteo entre ellos, y proclamará elegido al que salga favorecido.”.

12) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”.

13) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos, que elegirá 3 diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte, que elegirá 3 diputados.

3er distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal, que elegirá 5 diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen, que elegirá 5 diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela, que elegirá 7 diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué, que elegirá 8 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca, que elegirá 8 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú, que elegirá 8 diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia, que elegirá 7 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín y La Granja, que elegirá 8 diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén, que elegirá 6 diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana, que elegirá 7 diputados.

13° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo, que elegirá 5 diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué, San Pedro y Padre Hurtado, que elegirá 6 diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa, que elegirá 5 diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones, que elegirá 4 diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael, que elegirá 7 diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco, que elegirá 4 diputados.

19° distrito, constituido por las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ránquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel, que elegirá 5 diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana, que elegirá 8 diputados.

21er distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja, que elegirá 5 diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino, que elegirá 4 diputados.

23er distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén, que elegirá 7 diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco, que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos, que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena, que elegirá 5 diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel, que elegirá 3 diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica, que elegirá 3 diputados.”.

14) Agrégase el siguiente artículo 179 bis:

“Artículo 179 bis.- Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con el siguiente procedimiento:

a) Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consistirá en distribuir a prorrata los cargos entre los distritos electorales, de acuerdo a la fórmula dispuesta en el artículo 109 bis de esta ley.

b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 9 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al de la realización del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con aquel en que se celebran elecciones de diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.

d) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes.

Dentro de los cinco días siguientes a la publicación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral aplicó las letras a) y b) de este artículo.

Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de febrero del año de que se trate. En caso de producirse algún cambio en la distribución de diputados, el texto del artículo 179 de esta ley se entenderá modificado en lo pertinente, de pleno derecho y se aplicará en su forma así corregida en la elección inmediatamente siguiente.”.

15) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 50 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

1a circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, 2 senadores.

2a circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, 2 senadores.

3a circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 2 senadores.

4a circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, 2 senadores.

5a circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, 3 senadores.

6a circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, 5 senadores.

7a circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 7 senadores.

8a circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, 3 senadores.

9a circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, 5 senadores.

10a circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, 5 senadores.

11a circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 5 senadores.

12a circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 2 senadores.

13a circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, 3 senadores.

14a circunscripción, constituida por la XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, 2 senadores.

15a circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 2 senadores.”.

16) Derógase el artículo 181.

17) Agrégase el siguiente artículo 23 transitorio:

“Artículo 23.- La regla especial del artículo 3° bis, inciso cuarto, sólo tendrá aplicación en los procesos electorales parlamentarios de 2017, 2021, 2025 y 2029.”

18) Agrégase el siguiente artículo 24 transitorio:

“Artículo 24.- Para los efectos de completar la nueva integración del Senado de la República, en las elecciones parlamentarias que deben celebrarse en noviembre de 2017 corresponderá que se renueven completamente las circunscripciones que corresponden a regiones impares.

En el caso de las circunscripciones que corresponden a las regiones pares y Metropolitana, los parlamentarios elegidos en 2013 seguirán en sus funciones hasta completar su período de ocho años. En las elecciones de 2021, estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde.”.

19) Agrégase el siguiente artículo 25 transitorio:

“Artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.”.

Artículo 2°.- Modifícase la ley N°19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, de la manera que a continuación se señala:

1) En el artículo 4°:

a) Sustitúyese en su inciso segundo la expresión “dos centésimos de unidad de fomento”, por la expresión “un centésimo de unidad de fomento”.

b) Sustitúyese en el inciso tercero, la expresión “tres centésimos de unidad de fomento” por la expresión “uno coma cinco centésimos de unidad de fomento.”.

2) Agrégase en el artículo 14 bis el siguiente inciso final:

“Tratándose de votaciones a listas a las que se refiere el artículo 65, inciso primero, de la ley N°18.700, el derecho al reembolso se hará a los candidatos que las integren, a prorrata de sus votaciones individuales.”.

3) Sustitúyese su artículo 16 por el siguiente:

“Artículo 16.- Los aportes de campaña electoral serán públicos y se consignará la identidad del aportante, salvo las excepciones que señale esta ley.”.

4) Reemplázase su artículo 17 por el siguiente:

“Artículo 17.- Podrán ser anónimos todos los aportes privados en dinero cuyo importe no supere el equivalente en pesos a diez unidades de fomento. No obstante, cualquier aportante podrá solicitar que se consigne su identidad y el monto de su contribución.

En todo caso, durante el período de campaña electoral, ningún candidato o partido político podrá recibir, por concepto de aportes anónimos, más del 20 por ciento del límite de gastos electorales definido en esta ley.

No podrán existir aportes reservados.”.

5) Reemplázase el artículo 24 por el siguiente:

“Artículo 24.- Prohíbense los aportes de campaña electoral provenientes de personas naturales extranjeras, con excepción de los efectuados por extranjeros habilitados legalmente para ejercer en Chile el derecho a sufragio. Prohíbense también los aportes de campaña electoral provenientes de toda persona jurídica, a excepción del Fisco, de acuerdo a lo dispuesto en el párrafo 2° del Título II de esta ley, y de los partidos políticos.”.

6) Intercálase entre el artículo 58 y el artículo transitorio el siguiente epígrafe: “Disposiciones transitorias.”.

7) Agrégase el siguiente artículo segundo transitorio, pasando el actual artículo único transitorio, a ser Artículo primero:

“Artículo segundo.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y sólo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hayan sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a los que pertenezcan tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento por cada una de ellas.

Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.”.

8) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a senadoras y diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 unidades de fomento por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.”.

Artículo 3°.- Modifícase la ley N° 18.603, orgánica constitucional de Partidos Políticos, de la manera que a continuación se señala:

1) En el artículo 6°:

a) Sustitúyese en el inciso primero la cifra “0,5” por el guarismo “0,25”.

b) Agrégase en el inciso segundo, a continuación del punto aparte, que ha pasado a ser punto seguido, la siguiente oración: “Los notarios no podrán negarse a recibir la declaración a que hace referencia este artículo bajo circunstancia alguna y no podrán cobrar por este servicio.”.

2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 7° por el siguiente:

“Artículo 7°.- Cumplidos los requisitos a que se refieren los artículos 5° y 6°, y reunido el número de afiliados a que alude este último artículo en una de las regiones en que se divide políticamente el país, se solicitará al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos. La solicitud deberá ser firmada por el presidente y por el secretario del partido en formación.”.

3) En el artículo 26:

a) Suprímese en el literal d) la oración “la aprobación de un pacto electoral en elecciones de Parlamentarios o su retiro del mismo, y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal”.

b) Incorpórase el siguiente literal e), pasando los actuales literales e) y f) a ser f) y g) respectivamente:

“e) Aprobar un pacto electoral en las elecciones de parlamentarios o su retiro del mismo y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal;”.

4) En el artículo 42:

a) Sustitúyese su número 2° por el siguiente:

“2°.- Por no alcanzar en la región en que está legalmente constituido el 2,5 por ciento de los sufragios válidamente emitidos en la última elección de diputados. En el caso de los partidos que se encuentren inscritos en más de una región, la disolución procederá cuando no hayan alcanzado el indicado umbral del 2,5 por ciento en más de la mitad de dichas regiones.”.

b) Sustitúyese el inciso final por los siguientes incisos:

“No obstante, si un partido político incurre en la situación prevista en el número 2° de este artículo, pero elige al menos dos parlamentarios, sean diputados o senadores, conservará su calidad de tal.

Si incurre en la situación prevista en el número 4° en una o más regiones, pero mantiene el mínimo de ellas exigido por la ley, conservará su calidad de tal, pero no podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2° en aquellas donde su número de afiliados haya disminuido en más del 50 por ciento. El Director del Servicio Electoral anotará esta circunstancia al margen de la respectiva inscripción en el Registro de Partidos Políticos.”.

Artículo 4°- Esta ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la partida 02, Congreso Nacional, de la ley de Presupuestos para el Sector Público.

Lo dispuesto en el artículo 2° de esta ley se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la ley de Presupuestos respectiva.”.

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Acordado en sesiones celebradas los días 23 y 29 de septiembre y 6, 13 y 21 de octubre, todas del año 2014, con asistencia de sus miembros, Honorables Senadores señores Felipe Harboe Bascuñán (Presidente), Pedro Araya Guerrero; Alfonso De Urresti Longton, Alberto Espina Otero, y Hernán Larraín Fernández.

Sala de la Comisión, a 24 de octubre de 2014.

RODRIGO PINEDA GARFIAS

Secretario

RESUMEN EJECUTIVO

INFORME DE LA COMISIÓN DE CONSTITUCIÓN, LEGISLACIÓN, JUSTICIA Y REGLAMENTO, RECAÍDO EN EL PROYECTO DE LEY QUE SUSTITUYE EL SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UNO DE CARÁCTER PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL.

(Boletín Nº 9.326-07)

I.- PRINCIPALES OBJETIVOS DEL PROYECTO PROPUESTO POR LA COMISIÓN: El objetivo central de esta iniciativa es sustituir el sistema electoral binominal por uno proporcional inclusivo y fortalecer la representatividad del Congreso Nacional.

II.- ACUERDOS: La Comisión, por mayoría de votos, aprobó en general el proyecto de ley. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina y Harboe. Se abstuvo el Honorable Senador señor Larraín.

III.- ESTRUCTURA DEL PROYECTO APROBADO POR LA COMISIÓN: Consta de tres artículos permanentes y uno transitorio.

IV.- NORMAS DE QUÓRUM ESPECIAL: El artículo 1°, en sus números 1, letras a), c) y d); 2, 3, 4, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 18 y 19 requiere para su aprobación del voto conforme de los tres quintas partes de los Senadores en ejercicio de conformidad, al inciso segundo la disposición decimotercera transitoria de la Constitución Política de la República. El artículo 1º números 1, letras b); 5, 6, 7, 8, 9 10 y 17, así como los artículos 2º y 3° tienen el carácter de normas orgánicas constitucionales, en virtud lo dispuesto en los artículos 18 y 19 n° 15, respectivamente, y 66, inciso segundo, de la Carta Fundamental.

V.- URGENCIA: Suma (21/10/2014)

VI.- ORIGEN E INICIATIVA: Mensaje de S.E. la Presidenta de la República.

VII.- TRÁMITE CONSTITUCIONAL: Segundo trámite constitucional.

VIII.- APROBACIÓN POR LA CÁMARA DE DIPUTADOS: El artículo 1°, en sus números 1, letras a), c) y d); 2, 3, 4, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 18 y 19, fue aprobado en general con el voto favorable de 88 diputados, de un total de 119 en ejercicio.

En particular, en tanto, la aprobación de las referidas normas se produjo de la siguiente manera:

-El artículo 1°, número 1, letra a), por 115 votos a favor.

-El artículo 1°, número 1, letra c), por 116 votos a favor.

-El artículo 1°, número 1, letra d), por 114 votos a favor.

-El artículo 1°, número 2, por 90 votos a favor.

-El artículo 1°, número 3, por 100 votos a favor.

-El artículo 1°, número 4, por 116 votos a favor.

-El artículo 1°, número 11, por 115 votos a favor.

-El artículo 1°, número 12, por 74 votos a favor.

-El artículo 1°, número 13, por 73 votos a favor.

-El artículo 1°, número 14, por 72 votos a favor.

-El artículo 1°, número 15, por 73 votos a favor.

-El artículo 1°, números 16, 18 y 19, por 100 votos a favor.

En todos estos casos, la votación se realizó sobre un total de 119 diputados en ejercicio.

De esta manera, se dio cumplimiento a lo dispuesto en la disposición decimotercera transitoria de la Constitución Política de la República.

Por otra parte, el artículo 1°, números 1, letra b); 5, 6, 8, 9, 10 y 17, así como los artículos 2° y 3°, fueron aprobados, en general, con 86 votos favorables, de un total de 119 diputados en ejercicio.

En particular, en tanto, la aprobación de las normas indicadas se produjo de la siguiente manera:

-El artículo 1°, número 1, letra b), por 88 votos a favor.

-El artículo 1°, número 5, por 115 votos a favor.

-El artículo 1°, número 6, letra a), por 90 votos a favor.

-El artículo 1°, número 6, letra b), por 117 votos a favor.

-El artículo 1°, número 7, nuevo, introducido durante la discusión particular, por 74 votos a favor.

-El artículo 1°, número 8, por 73 votos a favor.

-El artículo 1°, número 9, por 72 votos a favor.

-El artículo 1°, número 10, por 74 votos a favor.

-El artículo 1°, número 17, por 113 votos a favor.

-El artículo 2°, números 1, 2, 7 y 8, por 72 votos a favor.

-El artículo 2°, número 3, nuevo, introducido durante la discusión particular, por 73 votos a favor.

-El artículo 2°, número 4, nuevo, introducido durante la discusión particular, por 72 votos a favor.

-El artículo 2°, número 5, nuevo, introducido durante la discusión particular, por 70 votos a favor.

-El artículo 3°, número 1, letra a), por 75 votos a favor.

-El artículo 3°, número 1, letra b), por 87 votos a favor.

-El artículo 3°, número 2, por 76 votos a favor.

-El artículo 3°, número 3, por 89 votos a favor.

-El artículo 3°, número 4, letra a), por 86 votos a favor.

-El artículo 3°, número 4, letra b), por 85 votos a favor.

En todos estos casos, la votación se realizó sobre un total de 119 diputados en ejercicio.

IX.- INICIO DE LA TRAMITACIÓN EN EL SENADO: 19 de agosto de 2014.

X.- TRÁMITE REGLAMENTARIO: Primer informe.

XI.- LEYES QUE SE MODIFICAN O QUE SE RELACIONAN CON LA MATERIA:

1.- Constitución Política de la República.

1.1. El inciso primero del artículo 5º.

1.2.- Los incisos primero, segundo y tercero del artículo 18.

1.3.- El inciso segundo de la disposición Decimotercera transitoria.

2.- La ley Nº 18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios.

3.- La ley Nº 19.884, Orgánica Constitucional sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral.

4.- La ley Nº 18. 603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos.

RODRIGO PINEDA GARFIAS

Secretario de la Comisión

ÍNDICE

1.- Constancias reglamentarias…3

2.- Antecedentes…3

a) De Derecho…3

b) De Hecho…4

3.- Discusión en general…15

4.- Aprobación de idea de legislar…133

5.- Texto propuesto al Senado…134

6.- Resumen Ejecutivo…150

- - - - - - -

2.2. Discusión en Sala

Fecha 11 de noviembre, 2014. Diario de Sesión en Sesión 62. Legislatura 362. Discusión General. Pendiente.

SUSTITUCIÓN DE SISTEMA BINOMINAL

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Corresponde tratar el proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional, con informe de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento, y urgencia calificada de "suma".

--Los antecedentes sobre el proyecto (9.326-07) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican:

Proyecto de ley:

En segundo trámite, sesión 40ª, en 19 de agosto de 2014.

Informe de Comisión:

Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento, sesión 61ª, en 5 de noviembre de 2014.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ ( Secretario General ).-

El objetivo de la iniciativa es sustituir el sistema electoral binominal por uno proporcional inclusivo y fortalecer la representatividad del Congreso Nacional.

Para ello, se propone reducir la desigualdad del voto; permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas; aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos; facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías; promover un Congreso Nacional que refleje la diversidad de la sociedad, y evitar que queden fuera del Parlamento candidatos con grandes votaciones.

La Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento discutió el proyecto solamente en general y aprobó la idea de legislar con los votos a favor de los Senadores señores Araya, De Urresti, Espina y Harboe. Se abstuvo el Honorable señor Hernán Larraín.

Cabe tener presente que los números 1, letras a), c) y d); 2, 3, 4, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 18 y 19 del artículo 1° requieren, para su aprobación, el voto conforme de las tres quintas partes de los Senadores en ejercicio, de conformidad con lo prescrito en el inciso segundo de la disposición transitoria decimotercera de la Constitución.

Por otra parte, el artículo 1°, números 1, letra b); 5, 6, 7, 8, 9, 10 y 17, así como los artículos 2° y 3° tienen el carácter de normas orgánicas constitucionales.

Las referidas normas precisan, para su aprobación, el voto afirmativo de 23 y 22 señores Senadores, respectivamente.

El texto que se propone aprobar se transcribe en las páginas 134 a 148 del primer informe de la Comisión y en el boletín comparado que Sus Señorías tienen a su disposición.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Antes de ofrecer la palabra, saludo -y me disculpo por no haberlo hecho antes- a la señora Ministra del Servicio Nacional de la Mujer, que muy pronto será el Ministerio de la Mujer.

¡Bienvenida a la Sala del Senado!

En discusión general.

Tiene la palabra el Presidente de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento, Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta , el Congreso Nacional es una institución fundamental para la democracia. Es aquí donde los diversos partidos políticos y las corrientes de opinión ciudadana deben plantear sus discrepancias y gestar los verdaderos acuerdos nacionales.

Lamentablemente, dado el talante autocrático del régimen que encabezó el General Pinochet, se diseñó un Parlamento disminuido en sus atribuciones y fundado en un sistema de elección excluyente.

Como bien sabe la ciudadanía, en las últimas décadas tanto parlamentarios de Gobierno, como una parte importante de la actual Oposición han hecho intentos legítimos por cambiar este estado de cosas y perfeccionar nuestro sistema de elección.

Hoy, señora Presidenta , tenemos la gran oportunidad de dar un paso fundamental para recuperar lo que ha sido la larga tradición republicana, representativa y popular de nuestro país y que inspiró a los padres de la patria.

Asimismo, hoy constatamos que amplios sectores de la ciudadanía reclaman una profunda reforma a nuestro sistema electoral y político en general. Tal cambio se expresa, entre otras materias, en la necesidad de sustituir el sistema electoral, que se ha constituido en uno de los principales factores que afecta negativamente la representatividad del Congreso Nacional.

En este período legislativo se abre la oportunidad de profundizar los acuerdos que alcanzamos en el pasado, todo ello con el objetivo inequívoco de dejar atrás el sistema binominal, el cual fue diseñado con el claro propósito de producir un empate político en el Parlamento y garantizar que una minoría política pueda impedir los cambios profundos que el país necesita.

Es el tiempo de impulsar una reforma que nos permita competir libremente, sin los amarres autoritarios, y construir mayorías amplias e inclusivas que sean capaces de llevar adelante los cambios que Chile requiere.

Según nos recuerda el mensaje, en la elaboración de este proyecto se tuvieron en vista las conclusiones que planteó en el año 2006 la comisión de estudios que encabezó el ex Ministro y Senador señor Edgardo Boeninger . Asimismo, se tuvieron en consideración las ideas que en su oportunidad formularon diversos ex Presidentes de la República y parlamentarios de Gobierno y de Oposición que hoy se encuentran en esta Sala.

El empeño por sustituir el sistema electoral binominal constituye, en consecuencia, un objetivo transversal que convoca a líderes de muy distintas filiaciones políticas, anteponiendo siempre los intereses de la democracia y del Estado.

Por tanto, esta iniciativa propone sustituir el sistema electoral binominal por uno proporcional inclusivo, que fortalezca la representatividad del Congreso Nacional.

Para alcanzar este objetivo es fundamental reducir la desigualdad del voto, permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas, aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos, facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías, promover un Congreso Nacional que refleje la diversidad de la sociedad y, finalmente, evitar que queden fuera de él candidatos con grandes votaciones populares.

Me detendré, brevemente, en el examen de cada uno de los mencionados propósitos.

-Primero: reducir la desigualdad del voto.

Cabe recordar que actualmente la diferencia en la incidencia del voto en Chile, según el lugar donde este se emite, es demasiado alta y obstaculiza el logro del ideal de la igualdad. No se puede emprender una reforma en esta materia sin reducir significativamente esa diferencia. Es un imperativo ético, de equidad territorial.

Obviamente, no se trata de establecer una igualdad absoluta o identidad perfecta entre los ciudadanos, cuestión que nos resultaría prácticamente imposible de alcanzar, sino de evitar distorsiones electorales que castiguen a determinados ciudadanos con menor representatividad, según el lugar donde viven.

Para alcanzar esa mayor igualdad es necesario incrementar el número de Diputados y Senadores. Negarse a esta medida implicaría disminuir la representación de algunos territorios escasamente habitados.

Como Sus Señorías saben, en el año 1973 nuestro país, con una población muy menor a la actual, ya tenía una Cámara Baja integrada por 150 Diputados y un Senado conformado por 50 miembros.

Obviamente, el rediseño de distritos y circunscripciones propuesto puede ser perfeccionado durante la discusión en particular de este proyecto.

-Segundo: permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas.

Mediante este objetivo se persigue facilitar el ingreso al Parlamento de las corrientes más significativas de la sociedad. Para alcanzarlo es necesario reducir el número de distritos y permitir que en ellos y en cada circunscripción se elija un número mayor de parlamentarios. Esta medida posibilitará que al Congreso Nacional ingresen nuevos actores políticos, ampliando su base de representación y, por tanto, de legitimidad social.

-Tercero: aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resultarán elegidos.

Esta iniciativa persigue que los electores recuperen la decisión respecto de quiénes son sus representantes. Para alcanzar este propósito es indispensable que todas las formaciones políticas puedan concursar con sus propios candidatos o candidatas y que las grandes competencias internas en los partidos y entre partidos se resuelvan de cara a la ciudadanía y no en una negociación cupular.

Lo anterior se puede lograr definiendo distritos que elijan un número mayor de Diputados, pero también permitiendo que las listas electorales presenten más candidatos que los que se eligen en cada territorio electoral.

-Cuarto: facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías.

La conformación de un sistema de distritos que mayoritariamente eligen un mínimo de tres parlamentarios y un máximo de ocho, propende a que los partidos más votados obtengan una representación parlamentaria equivalente. Al mismo tiempo, se asegura que la minoría estará representada.

-Quinto: promover un Congreso Nacional que refleje la diversidad de la sociedad.

Para alcanzar este objetivo se propone que el sistema electoral aliente a los partidos políticos y a los pactos a presentar nóminas de candidatos que reflejen toda la diversidad ideológica, de género, edad, origen étnico, social y cultural del país. Esto, junto con la representación de todas las corrientes políticas, es el mejor antídoto contra el distanciamiento ciudadano de la política y la deslegitimización del sistema democrático.

Por lo mismo, se postula una ley de cuotas que obligará a los partidos a presentar listas de candidatos que garanticen un cupo a mujeres, con el fin de cambiar la desigual representación de género que hoy ostenta el Congreso Nacional. Muy lejos del promedio mundial de 21,6 por ciento de representación femenina, nuestro Congreso Nacional alcanza solo un 15,8 por ciento, situación que debemos corregir y de la que este proyecto se hace cargo.

Finalmente, de aprobarse esta iniciativa, se evitará que queden fuera del Parlamento candidatos que han obtenido grandes votaciones populares.

En efecto, una de las distorsiones más visibles del sistema electoral binominal es que candidatos con altas votaciones (superiores al 20 por ciento) pueden quedar fuera del Congreso, provocando gran frustración de sus electores.

En el plano de los principios el proyecto se inscribe, tal como ya lo indiqué, en el contexto de la tradición republicana chilena. De acuerdo con ella, cada Cámara responderá, principalmente, a un criterio de representación particular. En el caso del Senado, será el del equilibrio entre los distintos territorios, y en el de la Cámara de Diputados, el de la mayor igualdad en el voto de todos los chilenos.

El criterio del equilibrio territorial no obsta a que en el Senado se consulte -de manera complementaria- una mayor representación relativa para las zonas más pobladas. Esta será probablemente una de las cuestiones que deberemos revisar en detalle durante el estudio en particular de esta iniciativa.

En cuanto a la integración de la Cámara de Diputados, se pretende conciliar el principio de igualdad de voto con el objetivo de no castigar la representación política de las zonas menos pobladas del país.

De acuerdo con estos antecedentes, el Senado estaría integrado por 50 Senadores y Senadoras y cada región pasaría a ser una sola circunscripción. Cinco regiones mantendrían el número actual de 2 Senadores, mientras que las otras diez lo incrementan, reduciendo así la desmesurada desigualdad en la incidencia del voto, pero garantizando también la representación de la minoría.

En síntesis, el proyecto mantiene la elección de dos Senadores en las Regiones menos pobladas (Tarapacá, Antofagasta, Atacama , Los Ríos, Aysén y Magallanes , agregándose la circunscripción de Arica y Parinacota, que también elegirá 2 Senadores). Y en las Regiones del Libertador Bernardo O'Higgins, Coquimbo y Los Lagos se incrementan en un escaño los cargos a elegir, mientras que las Regiones de Valparaíso, del Maule, Biobío y La Araucanía, elegirían 5 Senadores cada una. Finalmente, los ciudadanos de la Región Metropolitana elegirían 7 Senadores.

En consecuencia, de los doce nuevos escaños senatoriales, tres se asignarían a la Región Metropolitana, dos a la nueva Región de Arica y Parinacota, y se agregaría un Senador adicional en cada una de las otras siete regiones más pobladas.

Con esta medida, la gran mayoría de los Senadores (76 por ciento) serían electos en circunscripciones de 3, 5 o 7 escaños; es decir, circunscripciones impares.

Seguidamente, en cuanto a la Cámara Baja, se precisa que ella estará integrada por 155 Diputados o Diputadas.

Para alcanzar este objetivo, el territorio nacional se divide en 28 distritos plurinominales que eligen un número variable de Diputados o Diputadas que se determina en atención al número de electores. Con esta reforma se persigue garantizar el principio de igualdad de voto, teniendo presente, sin embargo, las siguientes restricciones estructurales.

a) La extensión territorial de los distritos no excederá los márgenes de una Región.

b) Los nuevos distritos se constituyen a partir de la agregación de distritos que actualmente existen, y

c) La asignación del número de escaños no reducirá, en términos absolutos, la representación que tienen hoy los distintos territorios.

El proyecto precisa que en cada distrito se elige entre tres y ocho Diputados, dependiendo de la población cada uno de ellos.

De esta manera, se establece un sistema proporcional moderado.

A la luz de estos antecedentes, seguirán existiendo incentivos para que los partidos políticos se agrupen en grandes conglomerados y no se produzca una fragmentación excesiva en la representación política.

Finalmente, el proyecto procura aumentar la inclusión y la representatividad del Congreso Nacional.

Tal como lo indiqué precedentemente, esta iniciativa busca avanzar hacia un Congreso Nacional que represente adecuadamente a hombres y a mujeres. Para ello se propone incorporar una cuota de género, requiriendo a cada partido político que su nómina total de postulantes a la Cámara y al Senado cumpla el requisito de que ningún género esté representado por sobre tres quintos ni por debajo de los dos quintos del total de candidatos que presenta. Esta regla constituye una disposición transitoria, que será aplicable a las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el entendido de que su propósito es romper una situación inicial en la que operan fuertes e invisibles barreras de entrada.

Por último, se considera un mecanismo de actualización de la distribución de escaños que operaría cada doce años, en función de las variables del número de electores de cada territorio.

Las ideas señaladas precedentemente implican modificar las leyes de votaciones populares y escrutinios, de transparencia, de límite y control de gasto electoral, y de partidos políticos.

Antes de pronunciarse en general, la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento escuchó a las autoridades de Gobierno, a representantes de diversos centros de estudios y expertos electorales, según da cuenta el informe que Sus Señorías tienen a su disposición.

Luego de un amplio debate, la Comisión, por mayoría de votos y una abstención, acordó aprobar en general este proyecto, en el entendido de que durante la discusión en particular se podrá analizar pormenorizadamente cada una de sus disposiciones y alcanzar los acuerdos que garanticen que ellas acogen los planteamientos de una amplia mayoría del país.

En consecuencia, señora Presidenta , invito a los señores Senadores y señoras Senadoras a aprobar en general este proyecto de ley, lo que nos permitirá recuperar nuestra tradición republicana y representativa y hacer que el Congreso Nacional refleje de mejor manera la realidad política de nuestro país y, así, dar inicio a la discusión en particular y perfeccionar las normas que contiene esta iniciativa legal.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra la señora Ministra.

La señora RINCÓN ( Ministra Secretaria General de la Presidencia ).-

Señora Presidenta , Honorables Senadoras y Senadores, tal como lo ha señalado el Presidente de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento, don Felipe Harboe , hoy la República nos convoca.

Creo que la discusión de este proyecto, después de veinticuatro años desde la recuperación de la democracia, es un hito importante.

Estamos en el segundo trámite constitucional y es, sin lugar a dudas, una fecha histórica.

Este proyecto de ley busca contribuir a mejorar la representatividad, la participación de la ciudadanía y la legitimidad del sistema político.

En el último Informe Auditoría a la Democracia, este tema salta como uno de los más relevantes desde el punto de vista de la recuperación de la confianza de la ciudadanía en sus instituciones.

¿Por qué avanzar en este sentido? No voy a ir al detalle, porque creo que el Presidente de la Comisión ha relatado de manera exhaustiva cada una de las normas que contempla el proyecto, así como las modificaciones que se introdujeron en la Cámara de Diputados. Más bien, quiero señalar, en términos generales, los siguientes beneficios de la proporcionalidad:

Primero, es necesaria, pues asigna a cada partido los curules o asientos correspondientes a la votación obtenida.

Segundo, reduce los efectos de la sub y sobrerrepresentación de algunos partidos, distritos, circunscripciones, y entre regiones.

Tercero, aumenta la competitividad entre los candidatos, presionando hacia un mejoramiento y diferenciación de la oferta programática de cada uno de ellos.

Cuarto, incrementa la representación de minorías y del pluralismo de la sociedad, y

Quinto, tiende a igualar el voto entre sectores más y menos poblados, al introducir nuevos escaños en algunas circunscripciones senatoriales y mantener los escaños en otras.

¿Cuáles son las fortalezas del proyecto en el perfeccionamiento de la democracia?

a) Permite reducir la desigualdad del voto, al apuntar a que el voto en los territorios tenga una mejor relación entre la cantidad de electores y el número de Diputados que se elegirán. De esta forma, también se mejora la representatividad parlamentaria sobre los distritos electorales.

b) Permite la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas, ya que al aumentar la cantidad de escaños, incrementa la posibilidad de ser electos de aquellos candidatos con una votación significativa, y no como ocurre en el presente en que segundas mayorías quedan fuera de la representación parlamentaria.

c) Aumenta la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos. Al incrementar el número de candidatos se agranda la oferta electoral, lo que impulsa a una mayor competencia e incertidumbre respecto a quiénes serán electos, a diferencia de lo que ocurre actualmente, donde en algunos distritos se sabe de antemano quiénes serán ganadores, y ello provoca -el Informe Auditoría a la Democracia así lo señala- que el electorado, la ciudadanía tenga poco interés en participar, pues las reglas y los resultados están echados.

d) Facilita la expresión de la mayoría y la representación de las minorías. Se asegura que quienes tienen mayor cantidad de votos cuenten con una mayor representación parlamentaria, pero a la vez se permite que aquellas minorías sean representadas en el Congreso en la justa proporción.

e) Promueve un Congreso que refleje la diversidad de la sociedad, ya que al permitir un mayor número de candidatos, se alienta la presentación de candidaturas que reflejen la diversidad del país, pero además, al establecer un criterio de paridad de género, se permite que los distintos géneros estén representados en el Parlamento, lo que constituye un compromiso de la Presidenta Michelle Bachelet . Y

f) Evita que queden fuera del Parlamento candidatos con grandes votaciones. Al disminuir el umbral para resultar electo, permitirá que aquellos candidatos que tengan una alta votación, ocupen un lugar en él.

¿Cuáles son los elementos de cambio?

En materia de Senadores, pasamos de treinta y ocho escaños a cincuenta.

Una región equivale a una circunscripción. Ya no tendremos dos circunscripciones en una región, como ocurre en varios lugares de nuestro país. Se contará con quince circunscripciones senatoriales. Como lo ha explicado el Presidente de la Comisión , cinco regiones mantienen el número actual de dos Senadores por elegir, mientras que las otras diez lo aumentan, reduciendo así la desmesurada desigualdad en el valor del voto según el lugar donde se emita, permitiendo que se exprese la mayoría y que siempre esté representada también la minoría.

La distribución de escaños por región será distinta: siete regiones tendrán dos Senadores; tres tendrán tres; cuatro serán de cinco y la Región Metropolitana contará con siete.

Uno de los principios que rigen la distribución de los asientos en el Senado de la República es la igualdad política entre las quince regiones del país. Por ello, tres quintos de los escaños se distribuyen de manera igualitaria, de manera que cada región, con independencia de su número de electores, tendrá un mínimo de dos representantes en el Senado.

Los restantes veinte Senadores se elegirán en las regiones con mayor número de electores.

En materia de Diputados, señora Presidenta, pasamos de ciento veinte a ciento cincuenta y cinco.

Se establecen veintiocho distritos que eligen entre tres y ocho Diputados cada uno (un promedio de 5,53).

Esta nueva configuración tiene las siguientes limitaciones:

Primero, la extensión territorial de los distritos no excederá los márgenes de una Región.

Segundo, los nuevos distritos se constituyen a partir de la agregación de distritos hoy existentes.

Y tercero, la asignación del número de escaños no reducirá, en términos absolutos, la representación que tienen hoy los distintos territorios.

De los treinta y cinco escaños adicionados a la actual integración de la Cámara, un total de veintitrés se asignaron para corregir la subrepresentación de los grandes centros urbanos del país (quince a la Región Metropolitana, y ocho entre las Regiones de Valparaíso y del Biobío).

Los otros doce escaños nuevos se asignan, a razón de uno por región, a todas y cada una de las demás regiones del país.

Señora Presidenta , esas son, a grandes rasgos, las modificaciones que se introducen en el sistema electoral de nuestro país. Pero hay que agregar otras: la alternancia en el voto de las candidaturas de hombre y mujer; la constancia en el voto de la foto de los candidatos, para que tengamos un electorado informado; la limitación del gasto en materia de campañas, y hay que sumar una serie de planteamientos recogidos durante la discusión en la Cámara de Diputados y que la Comisión de Constitución del Senado ha revisado y observado, en algunos casos de manera positiva, y en otros, obviamente, como elementos para el debate particular.

Creemos que después de estos 24 años, durante los cuales todos y cada uno de los distintos candidatos presidenciales han ido comprometiendo su apoyo al término del binominal como el sistema electoral vigente en nuestro país, es importante que hoy la Presidenta Michelle Bachelet traduzca su respaldo en un proyecto que ha dado por primera vez, en todo este tiempo, un paso significativo en el Parlamento.

Queremos agradecer el apoyo de los Senadoras y las Senadores que nos han acompañado en este trabajo, y esperamos que muchos de quienes han manifestado sus dudas se sumen a respaldar esta iniciativa y que durante el trabajo en particular podamos recoger los perfeccionamientos necesarios para tener un sistema electoral que se condiga con una democracia que nos exige la representación de la ciudadanía y que -reitero lo que dijo el Presidente de la Comisión - nos convoca a recordar nuestras tradiciones y nuestro alto valor republicano.

Gracias, señora Presidenta.

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La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Está en las tribunas otra delegación parlamentaria de la República de México, que ha venido con el objeto de analizar la reforma procesal penal en Chile y su implementación. Entiendo que están trabajando con la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento.

Saludo a la Senadora María del Pilar Ortega Martínez , a la Diputada Esther Quintana Salinas y al Diputado Jorge Francisco Sotomayor Chávez .

¡Muy bienvenidos a nuestro Senado!

¡Muchas gracias por estar aquí con nosotros!

--(Aplausos en la Sala y en tribunas).

)---------(

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Tiene la palabra el Senador señor Hernán Larraín.

El señor LARRAÍN .-

Señora Presidenta , la discusión sobre los sistemas electorales es, ciertamente, de mucho interés.

Los sistemas electorales son instrumentos que las democracias tienen para escoger a sus representantes.

La doctrina y el Derecho comparado nos enseñan que existen casi tantos sistemas electorales como países. Tan así es que en Chile tenemos cinco sistemas electorales diferentes, según los objetivos que en cada elección se buscan para nominar a los representantes de la ciudadanía.

Por lo tanto, más que proclamar la superioridad de un sistema por sobre otro, hay que buscar ciertos objetivos, que algunos logran de manera más adecuada que otros.

Así, los sistemas proporcionales favorecen la representación de todos los grupos en forma muy exacta. Por ejemplo, en el Parlamento israelí (la Knesset) hay 120 parlamentarios, elegidos en forma nacional: si un sector alcanza 3 por ciento de los votos tiene 3 parlamentarios; el que logra 20 por ciento, 20, y así sucesivamente.

Eso tiene ciertas ventajas.

Otros países, como el Reino Unido y Estados Unidos, tienen un sistema mayoritario uninominal, en el cual para ser elegido hay que conseguir más de 50 por ciento de los votos.

Son sistemas distintos. Nadie podría decir que uno es mejor que otro. Pero se consiguen objetivos diferentes.

En Chile el sistema binominal, existente hasta la fecha, es una especie de sistema proporcional mayoritario -no es exactamente mayoritario-, y ha logrado propósitos bastante positivos: estabilidad (gracias a que favorece la formación de grandes bloques y no da espacios muy amplios para los pequeños grupos); gobernabilidad (eso ha permitido que en estos 24 años hayamos tenido gobiernos que han podido llevar adelante sus tareas políticas sin mayores contratiempos); y, finalmente, proporcionalidad (porque, salvo los pequeños grupos que no llegan a tener representación, los que son representados sí, de alguna forma, son extraordinariamente proporcionales).

Ahora, como nadie clava la rueda de la fortuna, nos ha ocurrido que con ese mismo sistema se han registrado vuelcos.

En nuestro sector, inicialmente Renovación Nacional obtuvo más parlamentarios que la UDI; con el tiempo, la diferencia se dio vuelta.

Y también hay que dimensionar lo que ha significado en la Nueva Mayoría, que en la última elección logró una cantidad de votos muy relevante y, por ende, una representación parlamentaria que le permite el control de ambas Cámaras, e incluso, con un plus de beneficio por sobre lo anterior. No ha beneficiado a unos, sino a quienes la mayoría ha querido.

Sin embargo, admito que el proyecto requiere cambios.

Por eso, porque adolece de falta de competitividad y de falta de representatividad, ha sido una constante la búsqueda de un sistema distinto, que permita un electorado que se sienta representado por él.

Para esa finalidad, yo y muchos de los integrantes de estas bancadas manifestamos nuestra disposición total para llegar a un acuerdo que posibilite un sistema electoral justo, adecuado, representativo y que nos permita tener una democracia efectiva y en la que los ciudadanos sientan que sus representantes son los que ellos eligen debidamente.

Para lo que no estamos dispuestos es para tener un sistema electoral que sea un traje a la medida de un grupo político determinado. Porque con un mismo sistema electoral, según la composición de los distritos y conforme a los escaños adjudicados a cada uno de ellos, podemos tener un resultado u otro.

De hecho, el año pasado hubo un acuerdo, llamado "RN-DC" (lo firmaron también los jefes de comités de los distintos sectores de la entonces Concertación), que yo suscribía, mas no así mi partido; y por eso no participamos en él. Pero considero que un proyecto como el planteado en aquella oportunidad estaría llamado hoy a concitar acuerdos de manera muy vasta.

Sí, quiero señalar que no es admisible que durante la discusión tengamos límites en lo que el Senado puede hacer.

Se ha sostenido, por ejemplo, que no estamos en condiciones de revisar la composición y estructura de la Cámara de Diputados.

Yo quiero decir que eso atenta contra la soberanía de la Cámara Alta y que los acuerdos políticos que puedan haber existido en la Cámara Baja no pueden significar amarrarle las manos al Senado. Y quien lo haga, a mi entender, le causará un grave daño a esta Corporación.

Lo que queremos, entonces, es trabajar. Y estamos disponibles para hacerlo durante la discusión particular, mientras haya disponibilidad para entrar a debatir de verdad los problemas de fondo.

¿Cuáles son los problemas de fondo que tiene el proyecto que estamos analizando?

Son dos los problemas principales: uno, la desigualdad del voto, y dos, el número excesivo e injustificado de parlamentarios.

En lo personal, el problema esencial es el primero.

Por mucho que se ha dicho que se busca la igualdad del voto, lo cierto es que esta iniciativa no logra tal objetivo.

La Constitución establece que el sufragio es personal, igualitario, secreto y voluntario.

En consecuencia, el legislador tiene como límite el respeto al principio de igualdad del voto.

La propia Presidenta de la República, en su mensaje, declara expresamente que "La diferencia del valor del voto en Chile, según el lugar donde se emite, es demasiado alta y obstaculiza la igualdad del voto. No se puede emprender una reforma sin reducir significativamente esta desigualdad inaceptable en cualquier democracia.".

Hasta aquí vamos bien. Estamos de acuerdo.

De hecho, el propio Tribunal Constitucional ha determinado en sus fallos que se pueden establecer distinciones, pero que ellas "no podrán ser arbitrarias ni indebidas, por lo que deben fundamentarse en presupuestos razonables y objetivos y su finalidad como sus consecuencias deben ser adecuadas, necesarias, proporcionadas.".

En el caso del Senado, la proporcionalidad no se exige enteramente, porque la propia Carta dispone que la representación debe considerar también las regiones representadas por sus miembros. Por consiguiente, el principio de identificación territorial no rige de la misma manera que para la Cámara Baja; pero en esta última sí rige.

A mi entender, el proyecto de la Cámara de Diputados violenta en forma grosera el principio de igualdad del voto.

Yo les he hecho llegar a Sus Señorías una hoja -está en los escritorios de todos- de un documento. Quiero que la vean muy rápidamente. Es parte de un estudio que les pedimos a Max Pavez y a Andrés Tagle para los efectos de ver con precisión la igualdad del voto.

Los distritos creados por el proyecto aparecen ordenados de mayor a menor, según la cantidad de electores.

Al lado Sus Señorías pueden ver el número de los Diputados elegidos en cada uno de esos distritos.

De inmediato empiezan a aparecer las inconsistencias del proyecto.

En la quinta fila, tomemos primero a los Diputados correspondientes a los distritos 8 y 10: 8 y 8; y luego, a los de los distritos 9 y 12: 7 y 7.

En los nuevos distritos 9 y 12, con la misma cantidad de electores ambos (810 mil y 790 mil, respectivamente), se eligen menos parlamentarios que en los distritos siguientes, que tienen, por ejemplo, 760 mil, 744 mil, 712 mil: estos distritos cuentan con menos electores y, sin embargo, eligen un Diputado más que los distritos 9 y 12.

Ahí se rompe la igualdad del voto en forma clara y violenta.

Sigamos más abajo.

El distrito de San Bernardo y Melipilla y el de Las Condes y Peñalolén, con 663 mil y 643 mil electores, respectivamente, eligen 6 Diputados. Pero ambos tienen un Diputado menos que los distritos IX Región Sur, IV Región y VII Región Norte, que cuentan con menos electores (543 mil, 530 mil y 527 mil, respectivamente) y eligen 7 Diputados.

El distrito de La Cisterna y San Miguel elige 5 Diputados, pese a que tiene más electores (585 mil) que los distritos IX Región Sur, IV Región y VII Región Norte.

Aquello da cuenta de una inconsistencia carente de explicación.

Por cierto, la mayor inconsistencia tiene lugar más abajo.

El nuevo distrito 4, III Región, elige 5 Diputados, pese a que tiene la misma cantidad de electores que el distrito I Región, que elige solo 3 y cuenta con más electores que otros distritos que eligen una cantidad similar a esta.

Aquello emana de una mera revisión del proyecto de composición de la Cámara de Diputados presentado por el Gobierno y que dicha Corporación aprobó.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Su Señoría dispone de un minuto adicional para redondear su idea.

El señor LARRAIN .-

Necesito dos, señora Presidenta .

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Conforme.

Debo recordarle a la Sala que acordamos diez minutos por Senador, tanto para hoy cuanto para mañana.

El señor LARRAÍN .-

Señora Presidenta , este sistema provoca desigualdad en el voto. Y, ciertamente, eso es contrario a la Constitución. Pero lo peor, revisado en la mayoría de los casos, es que se hace para beneficiar a ciertos partidos, los que, según los últimos resultados electorales, van a quedar privilegiados con un subsidio electoral antes de empezar a correr.

Algunos dicen que eso es lo que produce el sistema binominal.

Si fuera cierto, constituiría un pecado del sistema binominal.

Pero, entonces, ¿queremos repetir un sistema que se está cambiando precisamente porque daría lugar a tales injusticias y desventajas?

Creo que aquí está la médula del problema de este proyecto, que genera desigualdad en el voto y, por ese hecho, constituye un traje a la medida electoral de ciertos sectores políticos.

El "no cambio" a la Cámara de Diputados tiene que ver precisamente con el hecho de que tales sectores políticos ya no quieren tocar a esa rama del Parlamento: quedaron contentos, quedaron felices, pues les están regalando parlamentarios.

¿Es eso lo que queremos para Chile?

Señora Presidenta, pienso que ello sería francamente injusto. Y espero que así no ocurra.

El número de parlamentarios es excesivo e innecesario: se está creando una verdadera tercera Cámara.

Y hay otros problemas: el inevitable aumento de partidos políticos que va a generar el sistema propuesto, lo cual amenazará a nuestra gobernabilidad; el distanciamiento de los parlamentarios con respecto a sus electores, por la existencia de distritos mucho más grandes; el mayor costo de las campañas; las dificultades de los candidatos locales para competir, en fin.

Hay hechos objetivos que nos llevan a pensar que no es posible.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

¿Terminó, Su Señoría?

Porque ya usó dos minutos adicionales.

Si la Sala está de acuerdo, podemos darle un minuto más al Honorable señor Larraín . Yo no tengo inconveniente. Creo que lo justo es que pueda redondear sus argumentos.

Conforme.

Prosiga, señor Senador.

El señor LARRAÍN .-

Muchas gracias.

Señora Presidenta , el conjunto de estas normas, más algunas cuestiones menores -el problema de la cuota de género, en fin-, provocan una distorsión.

Por ejemplo, queda la sensación de que se impide la realización de primarias.

En mi concepto, no podemos evitar las primarias. Yo no soy partidario de suprimirlas. Y eso obliga a una norma distinta de la que viene en el proyecto.

De otra parte, estimo que no podemos incluir en esta iniciativa el financiamiento de las campañas. Para tal efecto se requiere un proyecto completo sobre financiamiento de la política. Y en eso estamos de acuerdo con el Ejecutivo.

En resumen, señora Presidenta , considero que es necesario tener un nuevo sistema electoral; que el sistema de remplazo debe ser justo, pero para todos, a los fines de que rija en los próximos 20 a 30 años, sin que debamos esperar un cambio de mayorías para volver a modificarlo; y que eso debe construirse aquí, en el Senado, para lo que manifiesto nuestra más absoluta disposición.

Nosotros queremos un sistema que nos haga sentir bien a todos; que evite la sensación de que unos están beneficiados y otros perjudicados; que haga sentir que es verdaderamente democrático, que representa a la ciudadanía y que es proporcional a la fuerza de cada cual.

E incluso, adelanto mi juicio personal.

Yo considero que el número de parlamentarios que se plantea es excesivo. Pero creo que podría aumentarse la cantidad existente en la actualidad si eso permitiera un ajuste electoral y un acuerdo, por supuesto con cierto criterio y cierta racionalidad.

No olvidemos el enorme desprestigio que tiene hoy el mundo parlamentario. Por lo tanto, no parece aconsejable seguir aumentando la cantidad de Senadores y Diputados sobre la base de que, además, eso no implica mayor costo como se dijo inicialmente. Ya se determinó en la Cámara Baja que iba a ser necesario incrementar al menos la dieta. Sin embargo, los gastos de funcionamiento de los parlamentarios y los de campaña son adicionales; por ende, también deben incluirse.

El proyecto tiene mayor costo. Por lo tanto, deberemos trabajar con ese antecedente en vista.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Prokurica.

El señor PROKURICA.-

Señora Presidenta , en materia medioambiental la historia se llama "trazabilidad", "huella de carbono".

En política también tenemos una historia.

En mi caso y en el de Renovación Nacional, hemos estudiado y propuesto al país modificaciones al sistema electoral. Nadie nos puede acusar de no haber colaborado para perfeccionarlo.

Lo hicimos en noviembre del 2006. En su oportunidad le entregamos a la Presidenta Bachelet una propuesta de modificación integral al sistema binominal, pero no tuvimos respuesta.

Lo hicimos también el 2012, en una comisión que me tocó presidir, con un grupo que recibió a más de cien personas que participaban en distintos sectores políticos para opinar respecto a lo que se necesitaba en materia de modificaciones a nuestro sistema electoral.

Nos adecuamos a los tiempos. Y con el informe pertinente, incluso, llegamos a un acuerdo con la Democracia Cristiana. En él hacíamos ajustes para establecer aumentos racionales en la cantidad de parlamentarios. Pero no solo considerábamos el incremento del número de parlamentarios: aparte modificar el sistema electoral, agregábamos los planteamientos que la gente nos formula habitualmente en el día a día, en la calle.

En mi concepto, las enmiendas al sistema electoral que nos propone este proyecto de ley están pensadas solo en los políticos y en quienes procuran conservar un cargo parlamentario.

Lo explicaba recién el Senador Hernán Larraín: al promoverse que donde hay 2 se elijan 3 se le está diciendo al que ya está elegido que con menos votos conservará su cargo.

Por eso el llamado a "no tocar el acuerdo de la Cámara de Diputados". Porque ahí está todo consumado: ¡no se modifique eso...!

A quienes permanentemente sostienen que hay que escuchar a la gente, que tal cosa está en el programa, en fin, les pregunto si le han consultado a la ciudadanía si quiere un aumento desmedido de parlamentarios.

¿Es necesario para Chile un incremento de tal índole? Se trata casi de una Cámara completa: 35 Diputados y 12 o 17 Senadores más, dependiendo de la propuesta. O sea, ¡47 parlamentarios adicionales!

¿Es eso lo que Chile necesita?

Yo creo que no.

¡Nunca me lo han planteado en una junta de vecinos! ¡Jamás me lo han expresado en la calle!

Yo les digo: "Salgan a la calle y pregúntenle a la gente qué cosas, a su juicio, se necesitan en nuestra democracia".

Se trata, como señalé, de una especie de Cámara extra.

Y, ¡por favor!, no me vengan con el argumento de que no va a haber más gasto, porque no resiste el menor análisis.

Yo llevo veintitantos años en este Parlamento, y sé cómo funcionan estas cosas.

No engañemos a la gente: ¡los gastos del Congreso Nacional van a crecer en un cuarto, en un 25 por ciento!

Desafío a mis colegas a salir a la calle y preguntarle a todo el que pase, y seguramente recibirán la respuesta de que se quiere mejor salud, mejor educación, mejor seguridad ciudadana, menos droga y una democracia con más transparencia, de características diferentes de lo que se está planteando aquí.

A mi juicio, el proyecto no va por buen camino, no es de aquellos en que se escucha a la calle.

La tendencia en países con los que nos gusta compararnos es a reducir parlamentarios. Es lo que ocurre en Italia.

No soy de aquellos que se enamoran de sus ideas, señora Presidenta, pero creo que esta propuesta no tiene nada que ver con la que hicimos junto con la Democracia Cristiana en 2012, en la que se incluía:

-Más regionalización, con más recursos y atribuciones para las regiones.

-Término de las prácticas que desprestigian a nuestra democracia, que son muchas.

Se contemplaba, por ejemplo, el establecimiento de un límite a la reelección: dos períodos para los Senadores, tres para los Diputados, tres para los alcaldes y tres para los concejales. Nada de eso se encuentra en la iniciativa.

-Prohibición de nombramiento de parlamentarios como ministros.

Le presento mis excusas a la señora Ministra Secretaria General de la Presidencia , quien nos acompaña. Sé que lo ha hecho muy bien. Pero creo que cada vez que la gente elige a un parlamentario, lo hace para que esté aquí, no para que después se vaya a un Ministerio y su colectividad, a través de un sistema que también desprestigia a la política, nombre un remplazante.

-En la elección de las directivas partidistas corresponde aplicar el principio "cada militante, un voto".

Solo en uno o dos casos se aplica este mecanismo. La gente no quiere participar por esa razón, no por el sistema binominal.

-La ley de trasparencia debe ser aplicable a las colectividades políticas.

-Nombramiento de embajadores con acuerdo del Senado.

-Exigencia de domicilio durante dos años en las regiones para los postulantes.

Leí hoy un artículo en La Segunda en el sentido de que una multiplicidad de candidatos que han vivido toda la vida en Santiago se han encantado ahora con las regiones y se quieren ir allá para postular. ¿No les parece a mis Honorables colegas que eso las violenta?

Sinceramente propongo volver al requisito en la Constitución. Perfeccionemos nuestra democracia.

-Término de los candidatos "blindados".

-Y, finalmente, también planteamos un régimen semipresidencial, aplicable en el largo plazo.

Me parece que el proyecto, además de no contener los elementos que nuestra democracia necesita, agrega otros que no ayudan a la gobernabilidad y que, más que afectar a un sector político, a mi partido o a los del frente, generarán un cuadro que Chile ya vivió y que nadie quiere, que es el multipartidismo.

Se contempla la posibilidad, en efecto, de formar partidos con el 0,25 por ciento del resultado de la última elección, e incluso, de que se subpacte en otras regiones. En la Región que represento, por ejemplo, se va a poder constituir una colectividad con 500 firmas ¡y subpactar con otra de Punta Arenas para llevar candidatos allá!

Si hoy día, con dos bloques y el sistema binominal, es difícil para los gobiernos sacar adelante los proyectos -la señora Ministra tiene que dirigirse a veces a uno u otro para ello-, imagino lo que será con 30 partidos.

Esta es una experiencia que Chile ya vivió.

Los políticos y el Congreso han llegado a un desprestigio casi total -es algo que no digo nunca, para que no aumente, pero me veo en la obligación de hacerlo-, lo que ha traído una cada vez más baja participación ciudadana en los procesos electorales. Tal como lo he repetido, menos gente en las urnas y más gente en la calle. Eso es lo que está ocurriendo con estos mecanismos.

Y ello no es por el binominal, sino porque el prestigio de la actividad política ha caído en forma vertiginosa.

El proyecto, señora Presidenta, va a incrementar el descrédito del Congreso y de la política. Todo el mundo se da cuenta de que se trata de un traje a la medida.

Mi amigo y vecino de asiento, el Senador señor Bianchi, me decía recién: "Este es un traje de buzo, porque queda muy ajustado de acuerdo con la necesidad de cada candidato".

Creo que no nos encontramos ante lo que Chile necesita. Estimo que quienes conducen el proceso no se han dado cuenta del daño que le están haciendo.

No voy a votar a favor de una iniciativa que no beneficia al país. Por el contrario, estimo que va a generar ingobernabilidad y menos participación. Y pienso que eso no es lo que se requiere.

He dicho.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Tiene la palabra el Honorable señor Ignacio Walker.

El señor WALKER (don Ignacio).-

Señora Presidenta , estimados colegas, siempre hay un argumento, una excusa, un pretexto para mantener el binominal.

Y no soy peyorativo, porque, obviamente, existen argumentos a favor y en contra de un sistema electoral. El tema es muy opinable.

No hay sistemas electorales democráticos o antidemocráticos. Tan democrático es un mecanismo de representación proporcional como uno de mayoría. Y los ejemplos abundan.

Tan democrático es un diseño uninominal como uno plurinominal. Y los ejemplos abundan.

En ese sentido, mi objeción al binominal, como lo explicaré, no es que sea antidemocrático, porque los sistemas electorales son la forma de distribuir los escaños y en que se expresan los votos. Pero lo cierto es que, durante 24 años, siempre ha habido un argumento, una excusa, un pretexto para mantenerlo, con las mejores intenciones y a veces con buenos argumentos, tratándose de un tema que insisto que es opinable.

¿Cuál es la excusa o pretexto ahora? Los ha expuesto el Senador señor Larraín . Y se lo digo con todo respeto.

Su Señoría manifiesta que aquí hay dos "trampas", por así decirlo. No empleó, sí, esa palabra.

Una de ellas es la desigualdad del voto.

Desde luego, esta es una cuestión de pareceres. El principio de la igualdad del voto es relativo, no absoluto: varía de país a país. Cada uno tiene un sistema electoral distinto.

Pero aquí habría una desigualdad del voto. Por lo tanto, el mecanismo carecería de legitimidad.

Añade: "Este es un traje a la medida". Y nosotros lo estaríamos aprobando como Nueva Mayoría, o Concertación, o Centroizquierda, o lo que fuere.

Y argumenta en un sentido u otro.

Lo cierto es que llevamos 24 años -repito- escuchando excusas, pretextos, argumentos para en definitiva mantener el binominal.

Mi Honorable colega dice: "Queremos un sistema que nos siente bien a todos".

No, pues. Si no se trata de eso: tiene que ser un mecanismo que exprese las mayorías y las minorías, no que les siente bien a todos.

El Senador señor Prokurica agrega -por supuesto, respeto mucho a ambos- que no es lo que la gente quiere.

Evidentemente, la gente nunca va a querer que aumente el número de parlamentarios, o bien, el gasto, que seguramente se tendrá que incrementar. Es algo que no tiene arreglo. Estas son causas impopulares.

Si se hace un plebiscito, este planteamiento a lo mejor gana.

"¿Quiere usted más parlamentarios?". ¡No!

"¿Quiere usted más gasto para financiar a más parlamentarios?". ¡No!

No hagamos una encuesta. Adivino el resultado.

Insisto: argumentos, excusas, pretextos para mantener el sistema electoral binominal. Eso es lo que hemos visto durante 24 años.

¿Alguien puede pensar en la Sala que don Edgardo Boeninger , que en paz descanse -¡y por Dios que lo echamos de menos!, o por lo menos el Senador que habla-, era una especie de extremista? ¿O una persona sin equilibrio o moderación en sus visiones? El proyecto en debate es el informe Boeninger sobre el sistema electoral. Fue su último acto público.

¿Qué propuso? Exactamente lo que estamos diciendo aquí: Cámara de Diputados con distritos de tres a ocho parlamentarios.

En la iniciativa planteamos un sistema, a lo Boeninger, de representación proporcional moderado o corregido, no de dieciocho Diputados, como tenía el primer distrito en 1973, sino de ocho, como máximo, y de tres, como mínimo, porque queremos terminar con el sistema electoral binominal, por lo menos en términos absolutos, en la otra rama del Congreso.

Se contemplan 155 Diputados. Hace 40 años eran 150. ¿Y quién se movió a escándalo por ello?

Y queremos una circunscripción de dos a siete Senadores.

O sea, se trata de distritos y circunscripciones de una magnitud moderada, no de veinte o treinta parlamentarios. En Sao Paulo , los Diputados son como setenta en un distrito. Repito que aquí se determinan, como máximo, ocho Diputados y siete Senadores. De hecho, una sola circunscripción es con siete. Ahí, claro, no nos dan los números. Y hay siete circunscripciones con dos.

Entonces, esta es la cuadratura del círculo, evidentemente. Todo sistema electoral lo es. ¿Qué número de Diputados? ¿Qué número de Senadores? ¿En cuántos distritos y cuántas circunscripciones? Por supuesto que es algo opinable.

Podría formularle muchas críticas a lo que viene de la Cámara, pero me las voy a saltar, pues, por fin, por primera vez en 24 años, logramos un acuerdo, ya despachado por la otra rama del Congreso. Hubo mayoría para ponerle término al sistema electoral binominal, con 155 Diputados y distritos de tres a ocho, y 50 Senadores y circunscripciones de dos a siete.

Mis objeciones son varias. Me gustaría cambiar muchas cosas y dibujar los distritos de otra manera. Pero hubo un acuerdo.

Por lo tanto, entre hoy y mañana se verá aquí la voluntad real, en los hechos, de acuerdo con la forma como se manifiesta en el Congreso: con argumentos y votos. El pronunciamiento de cada uno, en una votación en general, va a manifestar la verdadera disposición a terminar con un sistema electoral binominal que es perverso.

Todos sabemos cómo fue creado este último: gobernaba Pinochet, postrimerías de la dictadura, resultados del plebiscito y dibujo de los distritos. ¡Si fue hecho así!

¿Y por qué elegir dos? Porque es la forma de subsidiar a la segunda fuerza política.

¡Punto!

Felicito la inteligencia y la sapiencia de los asesores del general. ¡Fueron maestros: la mayoría vale lo mismo que la minoría y se subsidia a la segunda fuerza política! ¡Genial! Les habría dado un premio, desde el punto de vista de la sagacidad de una dictadura para mantener una fórmula que permite empatar la democracia.

¿Qué hemos estado tratando de hacer durante 24 años? Desempatar la democracia: que la mayoría sea mayoría y la minoría sea minoría. Hoy valen lo mismo, porque para elegir a los dos candidatos es preciso doblar. Claro, ello se ha logrado en algunos distritos y circunscripciones en algunos períodos de la historia, en un sentido u otro.

Entonces, este es un homenaje a Edgardo Boeninger . Se tiende a una representación proporcional moderada o corregida, con distritos de magnitud razonable que, frente a la democracia empatada, congelada, en que la mayoría vale lo mismo que la minoría, permitan dos cosas de la esencia de la democracia: primero, competencia; segundo, representación. Nada más.

Hay gente que quiere competencia en lo económico, pero no en lo político; que desea vivir del subsidio político en materia electoral y conservar el binominal. Porque siempre hay argumentos -y algunos de ellos, buenos-, excusas y pretextos para mantenerlo.

Nosotros queremos economía social de mercado -cada uno verá- y competencia en lo económico, pero también en lo político; ¡que exista competencia real! Hoy día no es así. Hay cartas marcadas. Hay sandías caladas. Hay negociaciones tortuosas. Llevo cuatro años de presidente de una colectividad política. Todos sabemos lo que es negociar una lista parlamentaria. Claro, entre dos partidos es más fácil; entre 7, más difícil. Pero ello es tortuoso, porque hay que omitirse, o sea, rehusar la competencia.

En la última elección, los democratacristianos llevamos 39 candidatos a Diputado . No pudimos llevar 60, porque, con el sistema, no es posible competir.

Vamos erosionando, por lo tanto, las bases de legitimidad de la competencia.

¡Si no estamos pidiendo nada que no esté en los textos sagrados de los liberales clásicos! ¡Que se compita sin cartas marcadas, sin sandías caladas, y que la gente pueda elegir! ¿Para qué? Para sentirse adecuadamente representado.

No creo en una democracia participativa, y menos, plebiscitaria, o cesarista, o populista, sino representativa clásica, lo que no es nada revolucionario.

El señor NAVARRO .-

Eso lo sabemos...

El señor WALKER (don Ignacio).-

No es mucho pedir.

¿Para qué? Para que no exista un veto de la minoría.

Porque modificamos la Carta en 2005, es cierto -la ley lleva mi modesta firma, como Ministro de Relaciones Exteriores-, pero conservamos el binominal y las 20 materias de ley orgánica constitucional, la cual contempla la exigencia de que concurran cuatro séptimos de los parlamentarios en ejercicio.

¿Qué es el binominal? ¿Qué son los cuatro séptimos? Un veto de la minoría.

Y mantuvimos, por si acaso, el control preventivo del Tribunal Constitucional tratándose de los asuntos de quórum calificado.

Eso es lo que tenemos. No nos engañemos.

Lo relativo a una nueva Constitución será objeto de discusión el próximo año. Ese sí que tiene que ser un traje a la medida del país, que nos siente bien a todos o a la gran mayoría. Pero, en lo electoral, no tiene que ser un sistema que nos siente bien a todos; implica que la mayoría sea mayoría y la minoría sea minoría.

Desde luego, están los pactos electorales.

Y, como Chile es diverso en materia de género, "ni la cantidad de candidatas ni de candidatos podrá superar el 60 por ciento". Llegó la hora. La diversidad también se extiende a ese aspecto. ¡Muy bien!

Ojalá Renovación Nacional pueda entrar en el acuerdo. Nosotros llevamos dos o tres años conversando y pactando con ellos.

Voy terminando con esto, señora Presidenta.

Enero 2012. ¿Qué dijimos con ese Partido? Que se sustituiría el sistema electoral binominal por uno de representación proporcional moderado. Llegó la hora.

El señor ALLAMAND .-

¡Aprobemos eso!

El señor WALKER (don Ignacio).-

Y discutiremos en particular. Pero este es el compromiso.

Lo que estamos haciendo aquí es muy sencillo, pero muy radical, desde el punto de vista de un sistema que no da para más, que es un engaño, que es una de las formas de explicar que vote solo un 40 por ciento de gente.

Espero que reinstauremos el voto obligatorio, lo que es harina de otro costal. Algunos vamos a proponerlo.

Me da envidia Brasil. Me da envidia Uruguay . Me da envidia el sistema electoral de Argentina, donde participa el 80 o 90 por ciento del electorado.

El señor ALLAMAND .-

Con 60 partidos 

El señor WALKER (don Ignacio).-

Podemos hacer mofa, reírnos, pero llegó el momento de la decisión.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Ruego no interrumpir y respetar al Senador que tiene el uso de la palabra.

El señor WALKER (don Ignacio).-

Estamos con el binominal o por sustituirlo. He ahí el dilema. Una compañía inglesa¿

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Se agotó su tiempo, Su Señoría. Puede concluir.

El señor WALKER (don Ignacio).-

¿presentará Hamlet en los próximos días: ¡ser o no ser! ¡Estamos o no estamos! Han transcurrido 24 años de argumentos.

Espero, sinceramente, que el apoyo necesario se logre más allá de la Nueva Mayoría y que en la votación en particular podamos llegar a un acuerdo con Renovación Nacional.

Con la UDI lo veo muy difícil, y la respeto, porque estamos ante uno de los pilares del sistema político al que se ha aferrado por muchos años, incluso más allá de la reforma de 2005.

Los democratacristianos vamos a votar a favor.

Quiero creer que le llegó la hora al sistema electoral binominal. Y será un homenaje póstumo a don Edgardo Boeninger , un moderado entre los moderados.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta , tengo en mis manos un proyecto de reforma del sistema electoral, presentado el 12 de marzo de 2014, y que corresponde al acuerdo político de la Democracia Cristiana con Renovación Nacional, al que se sumó el Senador señor Rossi .

El señor ROSSI .-

Y nuestro Honorable colega Tuma .

El señor ESPINA.-

También.

Se terminaba con el binominal, que se transformaba en uno proporcional.

Esa iniciativa eleva el número de Senadores a 44 -bastante menos de los que plantea el proyecto en análisis- y a 134 el de los Diputados.

El distinguido y Honorable colega Ignacio Walker sostuvo que respetaba la palabra empeñada en la Cámara de Diputados. Pues bien, quiero pedirle que haga lo mismo en el Senado: que respete la palabra empeñada, en memoria de Edgardo Boeninger. Me tocó negociar muchas veces con él. Aquí está el Senador Allamand . Juntos negociamos la "democracia de los acuerdos". Y nunca vi a Edgardo Boeninger desconocer un acuerdo al que se hubiera llegado en una materia de alta relevancia.

La propuesta que menciono fue analizada por los técnicos de Renovación Nacional y de la Democracia Cristiana. Y se consideró que el sistema establecía cuotas de proporcionalidad que se ajustaban a un modelo que permitía no solo terminar con el sistema binominal, sino también incorporar al Parlamento a partidos o fuerzas emergentes.

Entonces, ¡cuidado cuando se pretende pontificar sobre las conductas que se tienen en esta materia! Porque no puedo creer que, después de siete meses -de abril a octubre-, lo que se anunció que se iba a votar a favor hoy se deseche, argumentándose que en la Cámara de Diputados se respeta el acuerdo de la Nueva Mayoría. A mí me gustaría saber cómo se va a pronunciar el Senador Ignacio Walker cuando esta propuesta se presente como indicación y llegue a la Sala. Tendrá que responder si la palabra del Presidente del Partido Demócrata Cristiano respeta o no los acuerdos. Lo digo con toda deferencia, sin querer ofender a nadie.

En segundo lugar, todas las críticas que se han formulado al sistema binominal en términos de que es ilegítimo y no democrático no corresponden a la verdad. Quizás se le puede hacer la crítica, correcta, en cuanto a que no se originó dentro de un sistema democrático. Esa crítica es válida. Pero no se digan falsedades como que fue un sistema que terminó favoreciendo a un sector y perjudicando al otro.

Fíjense, Sus Señorías, que en el promedio total en la Cámara de Diputados el sistema binominal significó un beneficio para la Alianza de 4,7 puntos, y para la Concertación, de 4,8. Por lo tanto, señora Presidenta , no se puede sostener que el sistema binominal conduce, per se, a desvirtuar el voto ciudadano.

En los sistemas electorales existen dos grandes tendencias.

Están los sistemas mayoritarios, según los cuales se elige a un parlamentario. Su objetivo es, finalmente, constituir grandes alianzas. Su defecto radica en impedir a veces que minorías relevantes se incorporen a estas grandes alianzas, porque se disputa un solo escaño y, por lo tanto, hay que juntar fuerzas para ganarlo. En consecuencia, con el 50,1 por ciento es posible obtener el cien por ciento de los cargos. Y si hay cuatro candidatos, con el 25,1 por ciento de los votos una coalición se puede quedar con el cien por ciento de los escaños.

Ese es el sistema mayoritario, uninominal, que existe en países democráticos como Estados Unidos e Inglaterra. Y no he visto a nadie viajar al País del Norte a levantar banderas frente a la Casa Blanca para decir que su sistema no es democrático.

La debilidad del sistema -reitero- está en que no favorece la incorporación de fuerzas emergentes. Ello no ocurre, salvo que ingresen a las grandes coaliciones.

Su fortaleza, como ya mencioné, es que genera dos grandes bloques.

Y quiero hacer presente que ello ayudó mucho a Chile, porque permitió tener una democracia estable, sólida, y llegar a acuerdos que hoy algunos pretenden negar, los que, en mi opinión, han sido claves para que nuestro país se encuentre en el umbral del desarrollo.

¿Por qué queremos modificar el sistema binominal?

Por una razón muy sencilla: porque en la actualidad hay fuerzas políticas emergentes que pueden no pertenecer a los dos grandes bloques y que merecen estar dentro del Parlamento, porque la diversidad de la sociedad chilena hace razonable que participen en el Congreso.

Ambos sistemas -proporcional y binominal- son democráticos. Sin embargo, hay momentos en la historia en que uno ve que van surgiendo distintas fuerzas emergentes, que hoy pueden ser significativas, y mañana, mayoritarias. Y lo razonable es permitirles que se incorporen al Parlamento. Por eso hicimos la propuesta con la Democracia Cristiana.

Votaré a favor de la idea de legislar. Pero, como está el proyecto actualmente, lo votaré entero en contra en la discusión particular.

Entre otras cosas, no solo contiene el error mencionado por el Senador Prokurica, sino que plantea una situación verdaderamente escandalosa.

Fíjense, Sus Señorías, que el distrito de la Quinta Región Costa, con 760 mil electores, elegiría ocho Diputados, mientras que el distrito de La Florida y Puente Alto, con más electores, elegiría siete.

No lo entiendo. Si el sentido era la proporcionalidad, ¿por qué la rompen?

Y en el norte se llega a una situación increíble. Y esto es para favorecer al Partido Comunista. ¡Digamos las cosas como son! Así que esta prédica tan prístina de cómo se defiende la democracia y de "un hombre, un voto" no es verdad.

Tarapacá tiene 222 mil electores y elegiría tres Diputados. Y Atacama , con menos electores, elegiría cinco.

¿Por qué será? Yo empecé a leer los diarios. ¡Claro! ¡Para que todos los que están en el cargo sean electos!

Nosotros estamos dispuestos a construir un buen cambio para el sistema binominal con una regla muy simple: el que saca más votos en una elección, obtiene más escaños, pero manteniendo la proporcionalidad de la población, particularmente en la Cámara de Diputados.

En la Cámara Alta la situación es totalmente distinta, porque ahí la representación dice relación con el territorio. Si se construye un Senado sobre la base de la población, ¿quién defenderá a las regiones? Y un país que quiere regionalizarse debe robustecer su fuerza en las regiones.

Es el caso de Estados Unidos, donde existen dos Senadores por Estado, elegidos mediante un sistema uninominal. Allí hay Estados que tienen el triple de habitantes que otros y, sin embargo, eligen la misma representación. La idea es que las zonas australes, las regiones del norte o del sur, que son más pequeñas, cuenten con una representación con fuerza política suficiente para que sus propuestas y programas puedan llevarse adelante.

Eso es lo razonable, eso es lo criterioso.

Sin embargo, la forma como se ha construido aquí la composición de la Cámara de Diputados es una vergüenza -lo digo con todas sus letras-, pues presenta deformaciones gigantescas.

La propuesta para la constitución del Senado no cuenta para su aprobación ni siquiera con los votos de los propios parlamentarios de la Concertación.

Yo voy a votar a favor de la idea de legislar. Lo señalo por segunda vez. Y estamos abiertos a construir una fórmula razonable.

Termino con lo siguiente, en el minuto que me va quedando.

Si se quiere establecer un sistema proporcional, se debe aumentar el número de parlamentarios. Afirmar que se hará sin incrementarlos es ser demagogo. No se puede. No alcanza, pues, si se mantiene el número, se produce tal distancia entre el parlamentario y el electorado que aquello se hace muy difícil.

Sin embargo, tan demagógico como lo anterior es decir que no se necesita un peso más para financiar el Parlamento. Perdóneme, señora Presidenta , ¡pero cómo podemos faltar a la verdad de manera tan descarada! Si con la misma plata vamos a tener treinta y tantos Diputados más y doce Senadores más, ¡explíquenme quién se quedó con la plata en todos estos años, con menos parlamentarios! ¡Porque alguien se quedó con ella! No logro entender por qué se dice que con los mismos recursos podemos tener muchos más parlamentarios, pues entonces la crítica de que nosotros recibimos platas excesivas pasa a ser cierta. Y yo no creo que sea verdad, por lo menos en el caso de los Senadores de mi partido.

En suma, señora Presidenta, vamos a votar a favor del proyecto, esperando que el Gobierno tenga la capacidad de gestar un acuerdo en la discusión particular.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Antes de seguir ofreciendo la palabra, deseo pedir el asentimiento de la Sala -tenemos quórum suficiente- para prorrogar la discusión en una hora más. El Orden del Día concluye a las 19:30 y podríamos extenderlo hasta las 20, que es la hora real de término de la sesión.

Quedan muchos inscritos; estamos ante un tema relevante, y tenemos que avanzar.

Mañana vamos a continuar, por supuesto, pero creo que tenemos que dar esa oportunidad, además con el grado de flexibilidad con que lo estamos haciendo. No estamos limitando las intervenciones a diez minutos justos. Más de algún Senador se ha pasado dos o tres y me parece razonable.

Entonces, ¿habría acuerdo para prorrogar el Orden del Día hasta las 20, hora hasta la que está citada la sesión?

Acordado.

A continuación, le corresponde hacer uso de la palabra al Senador señor Moreira.

El señor MOREIRA.-

Gracias, señora Presidenta .

Digamos las cosas por su nombre: ¡Lo único que faltaba ahora es que le echaran la culpa a Pinochet del sistema binominal!

¡Por favor! ¡Eso es lo último que faltaba en esta discusión!

Hoy se afirma que es un sistema perverso, que engaña. ¡Pero durante cuántos años lo aprovecharon cuando les convenía y callaron! Y, hoy, aparece como la cosa más nefasta.

Yo quiero reivindicar aquí el sistema binominal con todos sus defectos.

Y quiero partir señalando que desde el retorno a la democracia Chile logró un salto importante en materia de desarrollo económico y social. Son conocidas por el mundo entero las cifras que demuestran el avance en materia de disminución de la pobreza, crecimiento sostenido de la clase media, aumento en el per cápita, pasando este a ser el más alto de Latinoamérica, y logrando, por otra parte, una envidiable estabilidad política y social en medio de un continente que no goza de muy buena reputación en estos ámbitos.

Todo lo anterior no fue producto de la casualidad, sino que es el resultado de un sistema político que le dio las garantías al país para que se pudiera desarrollar en armonía, libertad y paz social.

Y el sistema binominal forma parte de este modelo político exitoso, el que, sin ser perfecto -pues ningún sistema lo es-, cumplió con lograr una exitosa transición del gobierno militar a la democracia y ha servido para generar bloques políticos fuertes que han desarrollado visiones distintas de la sociedad, pero que, a la vez, han sabido actuar con altura de miras para ir construyendo un país entre todos, cosa que nadie puede desconocer.

De esta manera, se le ha dado estabilidad política al país y se ha evitado que se polarice el debate a extremos que dañan su convivencia cívica.

En este mismo sentido, el sistema binominal ha impedido que las minorías más radicales del país pongan en jaque la posibilidad de llegar a grandes acuerdos políticos, que son los que muchas veces la ciudadanía demanda a sus autoridades electas del Congreso.

Sin embargo, las imperfecciones del sistema binominal -e insisto: todo sistema tiene las suyas- fueron exacerbadas y llevadas al punto de desprestigiar el modelo.

Sin duda, el sistema es corregible, pero otra cosa muy distinta es que un gobierno, con una mayoría parlamentaria circunstancial, aproveche este momento para imponer un nuevo sistema electoral, hecho con cálculos electorales que benefician a la Izquierda para perpetuar su mayoría en el Congreso Nacional.

Pretender este propósito es una conducta antidemocrática que debe ser expuesta ante la opinión pública y la ciudadanía. La actitud que está teniendo el Gobierno junto a la Nueva Mayoría arriesga que este proyecto de ley sea impugnado por inconstitucionalidad. Y algunos, de seguir así, nos están forzando a presentar un requerimiento ante el Tribunal Constitucional, pues se afecta la igualdad del voto.

En efecto, la arbitrariedad con que se ha diseñado el número de parlamentarios que se elegiría por cada uno de los nuevos distritos únicamente obedece a criterios obtenidos de análisis hechos sobre los votos que obtuvo la Nueva Mayoría en las elecciones parlamentarias pasadas, quedando irracionalmente diseñado un modelo que solo persigue beneficiar a la Izquierda.

De aprobarse la sustitución al sistema binominal por un proyecto de ley como el que se ha ingresado al Senado, se afectará seriamente la imparcialidad que debe tener el diseño de todo sistema electoral que pretende que se midan las distintas fuerzas políticas en igualdad de condiciones.

Se han hecho una serie de análisis, con cifras de las distintas regiones del país, sobre los resultados de una elección y su desigualdad.

Adicionalmente a la arbitrariedad con que analistas políticos de la Nueva Mayoría diseñaron este proyecto para perpetuar a una mayoría circunstancial de parlamentarios de Izquierda en el Congreso, también el proyecto adolece de otros defectos que son de la mayor gravedad:

-La excesiva centralización en favor de la Región Metropolitana. El proyecto aumenta de dos a siete los Senadores para la Región Metropolitana, lo que es una excesiva sobrerrepresentación de Santiago en la Cámara Alta en desmedro de las regiones. En mi calidad de Senador de la Región de Los Lagos , rechazo de plano este perjuicio que se les irroga a las regiones. Si estamos hablando permanentemente de descentralización del país, esperamos que exista mayor coherencia por parte del Gobierno.

-Promueve también mayor centralismo en las grandes ciudades de las regiones en perjuicio de las ciudades más pequeñas, localidades y el sector rural. Muchas de las fusiones de distritos afectarán considerablemente la presencia de los parlamentarios en los lugares menos poblados.

El excesivo territorio que cubrirán los distritos impedirá una adecuada presencia de los Diputados con todos los habitantes de su jurisdicción, debiendo concentrar su trabajo en los centros de mayor densidad poblacional. Esto afectará aún más el prestigio de los parlamentarios en aquellas zonas más aisladas y de poca concentración habitacional, afectando un desarrollo armónico a lo largo de todo el territorio nacional.

Es lo que va a ocurrir, por ejemplo, en la Región de Los Lagos respecto a Chiloé al fusionarse el distrito 57 (Puerto Montt) con el distrito 58 ( Chiloé ). La sola ciudad de Puerto Montt representará un 43,2 por ciento del total del nuevo distrito. En cambio, la suma de las dos principales ciudades de Chiloé -Ancud y Castro - llegará a tan solo un 19,5 por ciento.

De este modo, está claro dónde se concentrará el trabajo territorial y legislativo de quienes representen al eventual nuevo distrito.

¡Un Senador más! ¡Para qué queremos un Senador más en la Región de Los Lagos si los dos que estamos hacemos bien la pega! ¡No es necesario!

Por último, las críticas que se le pueden hacer al sistema binominal no justifican en ningún caso que la solución tenga que ir por el aumento del número de parlamentarios.

Son perfectamente corregibles las deficiencias del binominal que se han enunciado en esta Sala durante el debate en general, con modificaciones o sustituciones que no impliquen un aumento en el número de parlamentarios. Así, por lo demás, lo demostró la UDI mediante una propuesta que hizo.

Por otra parte, da la impresión de que el Gobierno de la Nueva Mayoría no tiene conciencia de aumentar el gasto público en materias relacionadas con la política. Prefiere gastar en política en vez de invertir más en otras áreas que son de mayor sensibilidad y respecto de las cuales muchas veces se hacen gárgaras, como la delincuencia, la salud, la vivienda y otros beneficios que apuntan a una mejor calidad de vida de las personas.

Por último, señora Presidenta , todas las consideraciones que he expuesto hacen que sea imposible discutir seriamente la sustitución del sistema electoral binominal, que nos ha brindado una democracia estable por 24 años, con este proyecto de ley, que es un vergonzoso traje a la medida para la Izquierda, y que además promueve el centralismo en las regiones y, a nivel nacional, en Santiago, pues concentra una sobrerrepresentación senatorial desmedida en favor de la Región Metropolitana, en perjuicio de las regiones.

La UDI actuará con coherencia frente a esta iniciativa. No vamos a convertirnos -que se escuche bien- en el sastre de un traje a la medida electoral para la Nueva Mayoría, ni menos le haremos ajustes de último minuto.

Anuncio mi voto en contra.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Quintana.

El señor QUINTANA.-

Señora Presidenta , durante la pasada campaña, la Presidenta de la República , Michelle Bachelet , recorrió el país. Y dentro de los múltiples compromisos políticos, sociales y de toda índole que asumió -desde luego, nadie abriga dudas, a estas alturas, de que se están cumpliendo-, había uno que decía relación precisamente con la materia que nos ocupa.

La Mandataria sostuvo, a lo largo de Chile: "Esta es la última campaña parlamentaria que vamos a enfrentar con el actual sistema binominal". Y en medio de un conjunto de reformas que hoy día se despliegan para tener un país más inclusivo, también se presenta un proyecto de ley para contar con un sistema electoral, proporcional en este caso, más inclusivo.

Como sostenía el Senador Ignacio Walker: "Siempre va a haber pretextos, excusas y falta de argumentos" -como escuchamos recién- "para no superar un sistema que tanto daño le ha hecho a la democracia"; que tan pálida la mantiene hasta ahora.

Efectivamente, hay un sistema democrático en el país. Pero no existe una democracia plena, donde nos hagamos cargo de reducir -se ha manifestado en otras intervenciones; lo señalaba el Senador Harboe en la presentación del informe de la Comisión- la desigualdad en el voto. Aquí decimos representar a regiones, pero no actuamos en consecuencia.

Por lo tanto, considero relevante el paso que damos hoy, después de 24 años de múltiples intentos. Se citaba el del año 2006: la Comisión Boeninger, que llegó a un ejercicio distributivo muy similar al que ahora las Senadoras y los Senadores tienen en su poder, fruto de una discusión que ha tomado ya algunos meses, con un redistritaje que se hace cargo de reducir el número de distritos y de aumentar el de parlamentarios. Porque, como bien señalaba el Senador Espina, pensar en cambiar el sistema binominal sin aumentar el número de legisladores es demagogia pura. ¡Eso es demagogia!

Me alegra que sostengamos un debate en serio, con altura de miras, tendiente a llegar a un punto de consenso: un sistema electoral proporcional inclusivo.

Ahora, lo anterior no lo va a conseguir la Nueva Mayoría sola.

En tal contexto, también me sumo a quienes creen que este tipo de reglas del juego, particularmente las electorales, porque somos todos incumbentes -hay que asumirlo acá-, requieren espacios, acuerdos, ojalá lo más amplios posibles.

Por eso, quiero valorar la disposición que desde el primer minuto en que se puso la presente discusión sobre la mesa manifestó Amplitud (nuevo movimiento de Centroderecha liderado por la Senadora Lily Pérez ) y los Diputados que concurrieron a este acuerdo con sus votos y con la convicción de que el sistema binominal, dada la situación actual, más allá de la defensa un tanto febril que un Senador hacía de él en la Sala, no da para más. Y no se puede seguir manteniendo.

A mi juicio, los objetivos planteados en este proyecto que establece un sistema electoral de carácter proporcional inclusivo, al cual nos ha convocado la Presidenta Bachelet , bajo el liderazgo del Ministro del Interior , Rodrigo Peñailillo , buscan reducir -como se señalaba- la desigualdad del voto.

Eso va a permitir defender los territorios, las regiones; incorporar otras corrientes, otras formas de pensamiento que, bajo el actual sistema binominal, se hallan completamente excluidas; aumentar la incertidumbre.

Todo ello, al final, generará mayor participación y que los ciudadanos sientan que su voto importa, que sí deciden cosas el día de la elección y no se trata de un mero trámite, como muchas veces ocurre hoy. En fin, que tengamos un Congreso Nacional que refleje la diversidad social, cultural, política -por cierto- del país.

Escuchaba al Senador Prokurica hace un rato, quien sostenía que nadie pide este cambio en las calles. Por supuesto. No hay ninguna marcha, no hay ningún bloqueo de camino solicitando más Senadores, más Diputados. Eso está claro.

Pero debemos hacernos cargo de por qué nos encontramos acá.

¿Cuál es la consecuencia de no disponer hoy de un sistema electoral proporcional; de que se manifieste una alta desigualdad en el valor del voto; de no poder incorporar otras corrientes de pensamiento; de los grados de falta de incertidumbre; de que no haya diversidad?

Hace pocos días, en una encuesta de la Universidad Diego Portales (2014) -seguramente la mayoría de los señores Senadores y Senadoras la pudieron estudiar-, en una parte titulada "Evolución de la confianza", se mostraba que todas las instituciones del país caen en la percepción de confianza de la gente, en los últimos cinco años: las grandes empresas, de manera importante; la Iglesia Católica; las Fuerzas Armadas; Carabineros: poco pero cae; el Gobierno; el Congreso; los partidos políticos son los que menos bajan, en realidad, ¡porque ya estamos muy bajos...!

El señor PROKURICA .-

¡Ya no podemos caer más...!

El señor QUINTANA.-

Bajan los tribunales.

Y llama la atención que también lo haga la televisión. La caída de la televisión abierta, en general de los medios de comunicación, es estrepitosa: una de las más grandes. Es impresionante.

Además caen la prensa escrita, las radios.

¿Qué reflejan los datos de ese informe? Que nos encontramos en un ciclo distinto, que el país cambió. Y de eso tenemos que hacernos cargo. Más allá de que sea efectivo que cuando uno llega al distrito, a la circunscripción, no nos esperan los electores para pedirnos: "Queremos más Senadores, más Diputados".

Señora Presidenta , el poder del Senado, por ejemplo, en un país centralista como Chile, uno lo puede ver reflejado en la discusión de hace algunos años sobre incremento de recursos para el Transantiago. Más allá de los cuestionamientos que se le puedan hacer como política pública al Transantiago, los recursos espejo para regiones fueron gestionados -yo no estaba aún acá- por la Cámara Alta.

Y eso proyecta la mirada de las regiones en un sistema bicameral. Como se sabe, en los sistemas bicamerales, la representación popular -y, por tanto, la reducción casi total de la desigualdad del voto- se expresa en la Cámara, pero la representación de los territorios se expresa en el Senado. Y por eso tendremos circunscripciones que corresponden a regiones que eligen entre dos y siete Senadores.

Entonces, si queremos entrar en serio al debate, debemos hacernos cargo de que en 1973 (hace 42 años) teníamos en Chile -con 9 millones de habitantes- una Cámara de 150 Diputados y un Senado de 50 Senadores. Y que durante gran parte de la transición hubo 49 Senadores.

A mi entender, señora Presidenta -y en buena hora-, aquí ha habido un Gobierno muy criticado por distintas razones, también por esto. En verdad, creo que se acerca el fin de varios clivajes, de varios enclaves de la dictadura. El sistema electoral binominal es uno de ellos.

El año 2014 será recordado por el término de enclaves propios de la dictadura, como fue el poder aprobar -y usted lo sabe muy bien, señora Presidenta , porque encabezó dicha discusión- el voto de los chilenos en el exterior.

El fin al lucro: siempre he creído que un sector importante de la Derecha va a preferir dejar caer el binominal antes de terminar con el lucro.

Es otra discusión que viene, pero vinculada con lo que un Senador recién defendía a rajatabla: la esencia del modelo de Pinochet, de la dictadura, el modelo neoliberal.

Por supuesto, ahí sí hubo un traje a la medida. Porque los distritos se diseñaron entre gallos y medianoche con posterioridad al plebiscito. Y se hizo un ejercicio para dejar este sistema empatado y a la minoría con poder de veto.

De eso hablamos.

Estamos terminando con laboratorios sociales únicos en el mundo. El sistema binominal: único en el mundo. El lucro: único en el mundo. Y el 2014 es el año de los cambios.

De ahí que me alegro por el importante avance que se manifestó en la Cámara de Diputados.

En efecto -lo señalaba un Senador-, hubo un acuerdo relevante durante el año pasado con un sector de la Derecha. Y aquí hago la distinción entre Renovación Nacional y la UDI. Recién habló el vocero "de verano" -perdón-, el vocero de esta última, el Senador Moreira, quien explicó claramente cuál será la postura del Partido, que es la misma -se ha mantenido inalterable- que le hemos escuchado en las últimas décadas.

Por eso, valoro la disposición, la apertura que ha mostrado Renovación Nacional. Es rara, sí, la situación que atraviesa, porque el presidente del Partido , Cristián Monckeberg , ha sostenido reuniones (entiendo que son públicas) con el Ministro Peñailillo , donde ha entregado propuestas formales, por escrito, y la mayoría de sus Senadores -salvo uno, entiendo- le ha quitado el piso. Esa debe ser la razón de que entrara y saliera rápidamente de la Sala. Porque no ha de ser nada grato, para un presidente de Partido , que le quiten el piso de esa manera, cuando entrega formalmente una propuesta.

Señora Presidenta, considero que esta es la oportunidad para buscar argumentos. Y hemos conversado con varios Senadores, también, el costo de otra discusión que se puede hacer. A mi entender, el presente cierre de ciclo no solo debe traducirse en el fin al sistema electoral binominal, sino asimismo en el hecho de entrar a plantearnos el cambio, en el futuro, de la sede legislativa.

Algo que quedó en evidencia en los últimos incendios en la Región de Valparaíso es que sacamos el Congreso y no pasa nada.

Este Parlamento lamentablemente se ha ido divorciando de la cultura, de la realidad, de la vida cotidiana de la Región de Valparaíso, y en particular de esta ciudad. Pienso que es otra anomalía, otro experimento -único en el mundo-: un Congreso a 130 kilómetros del Poder Ejecutivo .

Hoy existe una gran oportunidad para avanzar en terminar con este sistema que tanto daño le ha hecho a la democracia, a fin de remplazarlo por uno proporcional inclusivo donde las regiones se encuentren bien equilibradas.

Más allá de la minuta que nos hizo llegar el Senador Larraín, donde nos señala que hay una alteración en uno o dos distritos, seamos claros, lo que tenemos hoy con el actual sistema binominal es una alteración total, brutal, sin precedentes.

Entonces, en buena hora se ha avanzado y se ha llegado hasta este momento histórico, y simplemente quiero señalar que para esto, por supuesto se va a contar, con naturalidad, con los votos del Partido Por la Democracia.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Guillier.

El señor GUILLIER .-

Señora Presidenta , este es uno de los proyectos más importantes de la Presidenta Bachelet , que busca mejorar la institucionalidad política del país mediante la aprobación de una reforma al sistema electoral que haga más justa la representación de las mayorías y de las minorías.

Este tema se originó incluso antes del comienzo de la transición a la democracia y se forjó en múltiples compromisos que hasta ahora no se han podido cumplir.

Creo que aprobar el término del binominal nos va a permitir eliminar en parte uno de los "cerrojos" que tiene nuestra institucionalidad, donde, de una manera simple, un tercio de la votación equivale a dos tercios, lo que distorsiona la legitimidad en la composición del Parlamento.

No obstante, tengo algunos matices que quiero plantear para el debate.

Primero, esta reforma no modifica el sistema bicameral del Congreso Nacional. Y mientras ello no sea así, no puede ignorarse o relativizarse que la conformación de la Cámara de Diputados y del Senado se fundamenta en principios políticos complementarios, pero distintos.

Los distritos de la Cámara Baja se conforman en función de la población, y el Senado representa territorios. Principio que este proyecto relativiza, si bien lo considera como parte de la tradición republicana chilena, al incorporar una mayor representación relativa para las circunscripciones ubicadas en la zona central del país, que cuentan con no solo mayor concentración de electores sino también de recursos, y donde opera, físicamente, la toma de decisiones.

La reforma en discusión, por lo tanto, diluye este principio bicameral y afecta el peso político, particularmente de las regiones extremas y/o rezagadas. No coincide con el propósito de fortalecer las zonas extremas del país, que también deben tener a la vista consideraciones de orden geopolítico, como lo hacen nuestros países vecinos.

Segundo, tampoco me parece correcto relativizar principios rectores de nuestra institucionalidad anteriores a la Constitución de 1980, sin un debido fundamento doctrinario. Por coherencia institucional, un sistema político no debería apoyarse en dos sistemas electorales diferentes en el territorio. Se trata de dos principios -binominal para unos, representativo proporcional para otros- que generan una discriminación frente a las regiones, de por sí ya alejadas de la toma de decisiones. Más aún, gran parte del territorio nacional, prácticamente el cincuenta por ciento, continuaría bajo la vigencia de un sistema binominal, sin visos de reconsideración legislativa a futuro.

Por lo tanto, por cuestión de principios y no de cálculos partidarios, reitero que todas las circunscripciones del territorio nacional deben atender a la representación de los territorios.

Tercero, la reforma al sistema electoral que debemos aprobar debe diseñarse de manera coherente con otros cambios que impulsa el Gobierno de la Presidenta Bachelet . En particular, con la agenda de regionalización y descentralización anunciada por la propia Mandataria hace solo algunas semanas acá, en el Congreso Nacional.

Necesitamos una visión integradora de todas las grandes reformas que impulsa la Presidenta Bachelet , y cuyo norte es potenciar un Chile más democrático, más inclusivo, participativo y con un auténtico sentido de equidad y justicia social y territorial.

La Presidenta Bachelet ha escuchado a las regiones. Se ha propuesto responder a sus demandas históricas, postergadas por el centralismo autoritario de nuestras sucesivas Constituciones y de los estilos políticos jerárquicos y centralistas.

En este proceso de descentralización y regionalización se desencadenan las siguientes necesidades:

a) Delegar competencias a las autoridades regionales y locales elegidas por voto popular;

b) Generar capacidades y competencias políticas, administrativas y financieras de los gobiernos regionales y locales;

c) Atraer y retener profesionales destacados dispuestos a hacer su vida profesional en las regiones;

d) Crear espacios de generación de pensamiento crítico, materia prima imprescindible para nutrir los procesos de planeación del uso del territorio, según sus particularidades geográficas, climáticas, sociales, económicas, étnicas y culturales;

e) Y, desde luego, supone reconocer a las regiones como partes de un mismo país, con similar significación política. Además -insisto-, en el caso de las regiones extremas es válido incorporar consideraciones geopolíticas y estratégicas, como lo hacen nuestros vecinos de Argentina y Perú, que nos dan largas lecciones sobre esta materia.

Señores Senadores y Senadoras, creo que perdimos la oportunidad de haber enviado una señal clara de empoderamiento regional, con sentido de urgencia y visión estratégica de largo plazo, cuando discutimos la reforma tributaria.

Ahora veo con preocupación que en la discusión del Presupuesto 2015 tampoco se muestra una especial consideración por la variable de fortalecimiento de las regiones en materias de tanta importancia como educación, salud, ciencia y tecnología, obras públicas y educación superior.

No debemos seguir dejando pasar las oportunidades.

Hemos de asumir que estamos en deuda con la ciudadanía, que mira con desconfianza y distancia el trabajo que aquí realizamos.

El financiamiento de la política, violando las de por sí débiles restricciones que nos hemos dado para el caso, nos colocan en cuestión a todos. Por ello, adhiero firmemente a la moción presentada por los diputados Jackson y Mirosevic , que elimina los aportes reservados de las empresas, en tanto no se presente formalmente un proyecto más completo en esta materia que, sobre todo, ponga límites y fiscalice el gasto electoral y el financiamiento de los partidos políticos.

Además, es imperativo sincerar el debate. No tengamos temor de decirle al país que una democracia de calidad tiene un costo y que este debe ser financiado por los chilenos. Prefiero tener que salir a explicar aquello, aunque pueda ser mal entendido, antes que señalar que estamos aprobando una reforma que considera más Diputados y Senadores, sin que signifique mayores recursos del Estado, lo cual no es así.

Asimismo, estoy a favor de eliminar la incompatibilidad entre el ejercicio de la representación sindical y la opción de postular al Congreso Nacional; del sistema de cuotas para favorecer la incorporación de la mujer y de las minorías étnicas a la política.

Pienso que nos falta definir criterios de participación en materia de consultas y plebiscitos vinculantes a nivel local, regional y nacional, como también poner límite a la reelección de las autoridades políticas y asegurar mecanismos de participación ciudadana para movimientos regionales o partidos políticos anulados por otras fórmulas que, finalmente, terminan por concentrar las oportunidades en los partidos políticos.

Igualmente, creo necesario reflotar el debate sobre las primarias y su compatibilidad con la ley de cuotas, de manera de generar un ente coherente en esta materia institucional.

Señora Presidenta, estimados colegas, el Gobierno puede contar con mi voto favorable a la idea de legislar, pero espero que en la tramitación en particular de este proyecto se consideren los temas aquí planteados.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Orpis.

El señor ORPIS.-

Señora Presidenta , en este debate uno puede llegar a la conclusión de que, efectivamente, el sistema binominal ha cumplido un ciclo. Y que, por lo tanto, sería importante remplazarlo.

Y aquí nace la primera pregunta. Finalizado o terminado el sistema binominal, ¿por cuál podría ser sustituido?

El binominal es un sistema mayoritario. Este persigue generar grandes alianzas políticas en que las divergencias de distinta naturaleza se den, precisamente, al interior de las grandes alianzas políticas.

Con el sistema de remplazo lo que se persigue es terminar con lo que muchos han llamado un "empate político", y que estén representadas las mayorías en determinado momento. Y para efectos de lograr ese objetivo hay dos alternativas: optar por un sistema proporcional o mantener un sistema mayoritario.

Tales opciones tienen que ver con el tipo de país que queremos construir, pues los distintos mecanismos electorales simplemente son un instrumento de representación, en este caso del Parlamento.

El Centro de Estudios Públicos hizo un análisis bastante profundo de la materia en la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento. Considerando el régimen presidencial que nos rige, de manera categórica y luego de una serie de reflexiones, que comparto, dicha entidad se pronunció a favor de remplazar el sistema binominal por uno mayoritario. De hecho, plantea una fórmula muy concreta en el propio informe.

En lo personal, cuando analizo los sistemas electorales, observo que estos no son indiferentes respecto del desarrollo de los países. Este termina consolidándose cuando no hay conflicto y cuando existe estabilidad. Tan así es que el representante del CEP, según el informe de la Comisión, manifestó que "las únicas democracias estables en el mundo tienen un sistema electoral mayoritario".

Eso es obvio porque el sistema mayoritario evita la fragmentación política. Y, tal como lo señalé, las diferencias deben producirse al interior de las grandes alianzas políticas.

El Centro de Estudios Públicos precisó también que, en un régimen presidencial como el que rige en Chile, que a la luz de los distintos debates no se pretende cambiar por un sistema parlamentario, lo que corresponde para evitar conflictos es establecer un mecanismo electoral de carácter mayoritario. Porque, en la práctica, conviven dos soberanías: tanto el Parlamento como el Ejecutivo se eligen de manera diferente.

Señora Presidenta , anuncio que me voy a abstener o votaré en contra del proyecto, debido a que -admitiendo que a lo mejor el sistema binominal ya cumplió un ciclo- la iniciativa en debate propone una fórmula de tipo proporcional.

Tengo la firme convicción de que un sistema proporcional generará fragmentación política y dificultará la tarea de gobernar, en circunstancias de que nuestro país requiere estabilidad. Y esta se logra con un sistema de carácter mayoritario; se logra con grandes alianzas políticas; se logra con amplios acuerdos políticos.

Ello no se alcanza necesariamente con la aplicación del binominal. En el mundo hay distintas fórmulas electorales mayoritarias que rompen el empate y que a la larga se orientan a establecer grandes conglomerados políticos.

En todo caso, tanto los mayoritarios como los proporcionales son mecanismos plenamente válidos, del todo legítimos.

Basta recordar nuestra experiencia reciente con el sistema binominal: los distintos sectores políticos que se han ido formando deben enfrentar diversas dificultades para alcanzar grandes acuerdos en el Parlamento, sea en la Cámara de Diputados o en el propio Senado.

Por consiguiente, para mí el sistema electoral es muy determinante a la hora de lograr la estabilidad institucional del país y de dar las facilidades para gobernar. Esto se consigue con grandes alianzas políticas.

Ese, a mi juicio, es el objetivo político prioritario.

En consecuencia, como el contenido de este proyecto es radicalmente distinto de la postura que defiendo, por cuanto este tiende a la fragmentación política y no a la creación de grandes alianzas, me voy a abstener o votaré en contra.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor De Urresti.

El señor DE URRESTI.-

Señora Presidenta , Honorable Sala, después de casi 24 años, estamos en presencia de un debate de fondo: la sustitución del sistema binominal, mecanismo electoral que claramente consagró en nuestro país un eterno empate.

Hay que decirlo de manera clara y precisa. Y así lo demuestran distintos gráficos que tenemos a la vista.

Por ejemplo, en 1989, en la circunscripción Santiago Poniente, no obstante haber superado por más de 170 mil votos el excandidato Ricardo Lagos a quien lo seguía, el señor Jaime Guzmán , resultó electo este último.

Esa es una de tantas situaciones que grafican la naturaleza del sistema. Y, a lo largo del tiempo, ello se fue reproduciendo en diferentes lugares. Cito este primer caso por ser de las diferencias más representativas en materia de cantidad de votos.

Insisto: tal efecto se ha ido reiterando a través de los años en los distintos procesos electorales.

La ciudadanía comenzó a conocer dicha situación como el "eterno empate": uno de la coalición de Gobierno y otro de la Oposición. Pese a que la Concertación o, ahora, Nueva Mayoría obtuvo en prácticamente todas las elecciones parlamentarias la primera mayoría de manera contundente, se produjo un empate en cantidad final de senadores y diputados casi siempre, salvo en aquellos casos en que se pudo doblar en votación.

Aquí están disponibles los gráficos, que muestran cómo el binominal ha afectado a un sector y ha beneficiado a otro en la elección de diputados y senadores. En ellos se aprecia claramente que la Alianza se ha visto favorecida en más del 50 por ciento de los casos.

Por cierto, no quiero un sistema electoral que beneficie a un sector y no a otro. Aspiro a que haya un mecanismo que represente de manera proporcional las diferentes fuerzas políticas del país y a que la mayoría que se expresa consustancialmente en la elección del Presidente o la Presidenta de la República tenga su correlato en materia parlamentaria, a fin de que no haya más ese eterno empate, que afectaba a nuestro conglomerado, pues, no obstante ganar por amplia mayoría las elecciones presidenciales, el correlato en el Senado y en la Cámara de Diputados nos era claramente desfavorable.

No olvidemos, señora Presidenta -esto es importante para generar la discusión-, que en esta Cámara Alta, el Senado de Chile, tuvimos la institución de nueve Senadores designados. Y muchos de los aquí presentes aceptaron eso sin ningún inconveniente. Pero se realizaron reformas y logramos eliminar dicha institución.

Hoy existe una representación total en esta Corporación, al menos en el origen, producto de una elección democrática, popular, directa de cada uno de los 38 Senadores.

Sobre esa base, resulta fundamental discutir y aprobar el proyecto que hoy se somete a nuestra consideración.

Quiero ver cómo se van a manifestar las fuerzas políticas; cómo va a pronunciarse la Oposición; cómo van a actuar quienes han señalado que el sistema electoral actual está agotado, razón por la cual será sustituido por otro, pero sin hacer el cálculo para determinar si esto me sobrerrepresenta o no me sobrerrepresenta.

¡Proporcionalidad! No pedimos otra cosa, sino proporcionalidad en materia de representación en el Parlamento. Así, quien resulte electo Presidente de la República contará con una mayoría parlamentaria para llevar adelante su programa.

Hago esta primera reflexión porque es relevante que la ciudadanía entienda que estamos remplazando un sistema establecido en dictadura -o sea, con más de 24 años de funcionamiento-, que claramente está agotado.

Con respecto al detalle del proyecto, pienso que es necesario introducir algunas modificaciones.

¡Qué bueno que esté -por su intermedio, señora Presidenta - la Ministra Rincón en la Sala!

Claramente, la sobrerrepresentación en el Gran Santiago es inaceptable, señora Ministra . Siete Senadores ahí es una situación que no corresponde. Más encima, para que quede sobrerrepresentada la Región Metropolitana, se establecen dos Senadores en una importante cantidad de regiones.

El Senado es una cámara territorial, que representa -según la iniciativa- a las regiones. En efecto, se plantea que la circunscripción pasará a ser exclusivamente la región. Por ello, entendemos que no es posible admitir la sobrerrepresentación de la Región Metropolitana, con siete Senadores. Prácticamente se sugiere duplicar los cuatro cupos que hoy existen. Sobre el particular, resulta claro que debe haber un análisis en pos de encontrar una solución que equilibre la Capital con el resto del territorio.

Además, estoy absolutamente de acuerdo en introducir una norma de cuotas para incentivar, motivar y fomentar la incorporación de más mujeres al Parlamento.

Aunque estamos sobre los estándares internacionales, la presencia de más mujeres en el Congreso debiera ser un compromiso transversal y prioritario de todas las fuerzas políticas, junto con la reforma al sistema político.

Creo que en eso no debiéramos equivocarnos, sobre todo si valoramos otra conquista que logramos en el Parlamento: la Ley de Primarias, que representa la voluntad de los ciudadanos en el territorio para determinar quiénes serán los candidatos.

Por lo tanto, estimo importante compatibilizar de manera adecuada la incorporación en las listas de la mayor cantidad posible de mujeres, la oportunidad y la ubicación en el territorio, aprovechando el proceso de las elecciones primarias como un ejercicio democrático, claro y preciso, en el cual los ciudadanos definen a los postulantes parlamentarios.

Hay otros dos asuntos relevantes que quiero plantear y que, cuando el proyecto vuelva a la Comisión de Constitución para su análisis en particular, tendrán implicancia en el resultado final del trámite legislativo.

El primero de ellos, señora Ministra , se refiere a la representación de los pueblos originarios. Hace varios años un conjunto de Diputados presentamos una moción transversal con este mismo propósito.

Si estamos abordando una reforma de tanta magnitud, con tal cantidad de modificaciones, no es posible que perdamos la oportunidad para generar una discusión al respecto o, al menos, establecer un protocolo o lograr un avance.

Se podría hacer un censo de las comunidades indígenas para identificarlas claramente, con el objeto de alcanzar una mayor participación de los pueblos originarios.

Me abro a cualquier fórmula sobre el particular.

La OIT ha propuesto distintas iniciativas en tal sentido. Ahí está el ejemplo neozelandés, el canadiense, etcétera.

Creo que la discusión está abierta. Pero es importante dar una señal y no dejar postergado o simplemente olvidado el asunto: representación de los pueblos originarios, posibilidad de integrar el Parlamento.

La otra cuestión se refiere al financiamiento de las campañas, aspecto tremendamente importante y fundamental.

Hemos presenciado en el último tiempo situaciones que no prestigian la política.

Por eso debe haber igualdad de condiciones para que cualquier ciudadano pueda competir, y no sea la cantidad de recursos o la infraestructura lo que determine la elección de uno u otro candidato. Para ello, propongo transparencia en el financiamiento de las campañas y término de los aportes reservados.

La situación actual claramente no resiste más.

Hay que ser responsables y plantear un proyecto transparente sobre financiamiento no solo de las campañas, sino también de los partidos políticos.

Estos conglomerados tienen que ser centros de pensamiento, de ideas; transparentes y auditables. La ciudadanía debe saber cómo se financian y cómo funcionan.

Eso, a mi juicio, representa un avance hacia una mejor política, una mejor calidad de democracia.

Por último, también es importante consignar en este debate, dado que vamos a modificar absolutamente el sistema binominal -al menos yo votaré a favor del proyecto-, lo referente a la elección complementaria de parlamentarios ante el fallecimiento de uno de ellos.

No estoy de acuerdo con un sistema donde decide la directiva de un partido político quién ocupa el cargo vacante o con la aplicación de un criterio que escape a la voluntad popular.

La elección complementaria, siempre que no se haya cumplido la mitad de su período, es perfectamente posible. Ya existió en nuestras Constituciones anteriores. La idea es devolver a los ciudadanos la posibilidad de elegir a un nuevo parlamentario, en remplazo del que ha fallecido.

Señora Presidenta, dejo planteadas esas materias para retomarlas en la discusión en particular.

Voy a votar afirmativamente la idea de legislar.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Letelier.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Ha llegado la hora de término del Orden del Día. Como hemos convenido, la discusión general del proyecto continuará en la sesión de mañana.

El señor LETELIER.-

Señora Presidenta , desde hace diez mil años que el ser humano habita las tierras que hoy son Chile.

Hace apenas unos 230 años, el mundo campesino -enojado, bravo- hizo una revuelta que terminó con la decapitación en ese tiempo del rey de España. Entonces comenzó un proceso de transformación institucional, conocido como la "Revolución Francesa".

Desde ese momento se fijó un criterio: que el poder no puede estar concentrado en una mano, en una persona. Un gobernante no puede administrar la justicia y, a la vez, ser quien fija las reglas de la sociedad.

Nuestro país posee el cuarto Parlamento más antiguo de occidente. Hay muchas naciones que todavía carecen de un sistema democrático y de un congreso.

En 200 años nuestro sistema político ha evolucionado. Hoy nos regimos por un sistema presidencial -exacerbado, a juicio de algunos-, donde el Parlamento cumple la función democrática de representación.

Recién, hace unos 65 años, a las mujeres se les dio derecho a voto. Hasta ese entonces los hombres de nuestro país consideraban que las mujeres eran incapaces.

Y hace unos 44 años que los analfabetos tienen derecho a sufragio en Chile.

Indico lo anterior, porque el debate de hoy se relaciona con un perfeccionamiento democrático.

Sistemas electorales hay muchos. Nos ha regido uno solo durante los últimos 24 años. Dicho mecanismo ha sido defendido, en particular, por quienes fueron partidarios de la dictadura. Ellos creen que garantiza estabilidad la sobrerrepresentación relativa de las minorías mayoritarias. Algunos, hasta el día de hoy, piensan que es bueno para el país.

El gran debate que hay detrás del cambio del sistema electoral es si en una democracia, donde queremos que haya diferenciación de poderes, deben o no mandar las mayorías, o si las mayorías deben verse reflejadas o no en las instancias de representación, sea la Cámara de Diputados o el Senado.

Por eso, los socialistas, junto con nuestros aliados de la Nueva Mayoría, hace tiempo venimos proponiendo poner fin al sistema binominal.

Constituye un hecho histórico sustituir el régimen electoral actual por uno proporcional, pues permite a las mayorías quedar plenamente representadas.

Esa es la importancia de este proyecto de ley, a mi juicio.

Por experiencia propia, ya que la primera vez fui electo Diputado rompiendo el sistema binominal, al ir de candidato por fuera -por así decirlo- por el Partido Amplio de Izquierda Socialista (PAIS), puedo señalar que resultan evidentes las distorsiones que se producen.

Tengo la convicción, luego de largos años de permanencia en el Parlamento, de que este paso que vamos a dar no significa inestabilidad. Por el contrario, introduce mayor competitividad, permite mayor diversidad y, a la larga, soluciona el gran problema de nuestro sistema político: la falta de legitimidad.

La legitimidad de nuestro sistema político está cuestionada, por diversas razones: por la falta de representatividad de las instituciones, como el Parlamento; por la competitividad que existe en los procesos electorales.

Señora Presidenta, lo perfecto es enemigo de lo bueno.

Este proyecto se logra sacar adelante no como a mí me hubiese gustado. En lo personal, habría preferido que los Senadores de las bancas de enfrente, de la UDI y Renovación Nacional, hubieran tenido la voluntad de perfeccionar el sistema político de nuestro país y que hubieran concurrido a este debate desde el principio.

Y hablo en particular de Renovación Nacional, porque acompañé, escuché, y estuve presente cuando se armaron los acuerdos de 1989 para el plebiscito de ese año. Yo fui testigo de cómo, después del plebiscito del "sí" y el "no" y del plebiscito del 89, que permitió realizar las primeras modificaciones constitucionales, quienes hoy forman parte de Renovación Nacional se comprometieron a avanzar de inmediato, en el período democrático, en el cambio del sistema binominal.

Lamento que a lo largo de veinticuatro años esa palabra nunca haya sido cumplida. Y espero que cuando se vote en general este proyecto el día de mañana, a lo menos los Senadores de Renovación Nacional concurran a aprobar la idea de legislar. Después veremos si están de acuerdo en el sistema específico que se plantea. Pero creo que es un tema pendiente; fue parte de su última campaña presidencial. Me gustaría ver que eso se materializara.

Señora Presidenta , el proyecto propuesto recupera el número de Diputados y de Senadores que hubo en otro momento de nuestra historia, cuando la población del país era la mitad de la actual. Entiendo que este aumento era la única forma viable de generar un sistema proporcional, adecuado para la realidad existente. Pero no quiero entrar en esa discusión, sino decir tres cosas.

Primero, yo he escuchado a algunos afirmar que en aquellas regiones que van a elegir un número par de Senadores se mantendría el sistema binominal.

Deseo dejar consignado, para efectos de la historia de la ley, que eso es absolutamente falso.

Sistemas electorales hay muchos. El que se elijan dos Senadores por un territorio no es el problema del sistema binominal. Pero, si alguien creyera que lo es, podemos perfectamente reducir a uno el candidato que se elija en una circunscripción. Y quedaría en evidencia que ese no es el tema.

En Inglaterra -un sistema parlamentario de mayor data que el nuestro- se elige un parlamentario por territorio, por circunscripción o por distrito electoral. Es un sistema electoral distinto. El que se elijan dos no es el problema; el problema es cómo se eligen, con qué proporcionalidad. Y lo importante es que aquí cambia el sistema de proporcionalidad. No se requiere que una lista que lleva dos candidatos doble a la otra lista para lograr elegirlos a los dos.

No quiero entrar en detalles, pero sí me interesa dejar consignado que es una falsedad absoluta que aquellas regiones que quedan con dos Senadores mantienen el sistema binominal. El sistema electoral depende de cómo se eligen los parlamentarios o candidatos, no de cuántos se eligen.

En segundo término, entiendo la inquietud de los independientes, que plantearon en la Cámara de Diputados -y también algunos en el Senado- la importancia de facilitar su participación.

Quiero dejar constancia, sin embargo, de mi duda razonable respecto de los umbrales que se están proponiendo.

Chile tuvo una experiencia, en los años cuarenta y a principios de los cincuenta, de un multipartidismo exacerbado. Yo creo en la importancia de los partidos políticos. Yo creo que son instituciones fundamentales para la democracia. Yo creo que fortalecerlos es vital. Y el equilibrio en esta materia, sin que ello signifique cerrar las puertas a los independientes, es muy importante, y se refleja, entre otras cosas -en esto a veces tendremos discrepancias al interior de las bancadas-, en lo que pasa cuando alguien electo en la lista de un partido se cambia de colectividad.

En la gran mayoría de los sistemas parlamentarios, quien se cambia de partido, pierde su escaño; no lo mantiene, lo pierde. Y quien remplaza, cuando alguien fallece, es el partido, por cuanto el electorado vota no solo por la persona, sino también por la colectividad política o las ideas o el programa que representa.

Mi impresión es que este equilibrio está mal reflejado en el proyecto de ley. Mañana se va a aprobar la idea de legislar, pero esperaría que actores de Renovación Nacional se sumaran a una normativa que contenga no solo un sistema electoral con mayor estabilidad en el tiempo, sino también un sistema donde los partidos tengan un peso específico, de manera que no quedemos atrapados por mayorías circunstanciales, porque eso no es bueno para nuestra democracia.

El último concepto, señora Presidenta .

Yo creo que el debate sobre el financiamiento de los partidos no se debe realizar en el marco de este proyecto de ley; eso es harina de otro costal. Es un punto muy importante, pero sería muy malo que lo tratáramos al calor de los acontecimientos recientes, porque los sistemas de financiamiento de la política, como los sistemas electorales, tienen que ver con instituciones que deben poseer una durabilidad en el tiempo.

El "Caso Penta" no puede, no debe generar pasiones innecesarias al abordar esta materia. Hoy le pasó a partidos de la Oposición; en otro momento le puede suceder a otros actores, respecto a temas de transparencia y financiamiento de la política.

En esto necesitamos todos avanzar hacia mayor transparencia, hacia el fortalecimiento de los partidos, porque creo que de esa forma se perfecciona la democracia.

Voy a votar a favor, señora Presidenta . Espero que tengamos la capacidad, después de aprobar en general el proyecto, de generar las condiciones para un acuerdo más amplio en torno al sistema electoral de nuestro país.

He dicho.

Procederé a levantar la sesión, sin perjuicio de dar curso reglamentario a las peticiones de oficios que han llegado a la Secretaría.

2.3. Discusión en Sala

Fecha 12 de noviembre, 2014. Diario de Sesión en Sesión 63. Legislatura 362. Discusión General. Se aprueba en general.

SUSTITUCIÓN DE SISTEMA BINOMINAL

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Corresponde en primer término votar en general el proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional, con informe de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento y urgencia calificada de "suma".

--Los antecedentes sobre el proyecto (9.326-07) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican:

Proyecto de ley:

En segundo trámite, sesión 40ª, en 19 de agosto de 2014.

Informe de Comisión:

Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento, sesión 61ª, en 5 de noviembre de 2014.

Discusión:

Sesión 62ª, en 11 de noviembre de 2014 (queda pendiente la discusión en general).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ ( Secretario General ).-

Debo hacer presente a Sus Señorías que, por acuerdo de Comités adoptado ayer, terminada esta relación se abrirá la votación.

Cabe recordar que el proyecto contiene normas para cuya aprobación se requieren, en algunos casos, 23 votos favorables, y en otros, 22.

El texto que se propone aprobar en general se transcribe en las páginas 134 a 148 del primer informe de la Comisión de Constitución y en el boletín comparado que Sus Señorías tienen a su disposición.

En la sesión de ayer quedaron inscritos para hacer uso de la palabra, en el mismo orden que se indicará, y ahora ya como fundamento de voto tras abrirse la votación, los Senadores señores Harboe, Araya, señora Lily Pérez y señores Rossi, Pizarro y Bianchi, quienes dispondrán de 10 minutos, así como los Senadores que, según el acuerdo de ayer, no habiendo hecho uso de la palabra, se inscriban a continuación. Los Senadores que usaron de la palabra, conforme a ese acuerdo, tienen de todas maneras cinco minutos para fundar su voto.

Nada más, señora Presidenta .

El señor WALKER (don Patricio).-

No entendí bien.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Le clarifico, señor Senador.

Ayer se acordó que había 10 minutos para intervenir. Pero hoy, en la prosecución del debate, los Senadores que no hicieron uso de la palabra ayer tendrán 10 minutos, y aquellos que sí usaron de la palabra en esa oportunidad, solo 5, para fundamentar el voto.

El señor Secretario ya leyó la lista de oradores. Se han seguido inscribiendo señoras y señores Senadores.

Tiene la palabra el Honorable señor Bianchi.

El señor BIANCHI.-

A lo que dijo Su Señoría, debo agregar que ayer los oradores hicieron uso de los diez minutos establecidos, pero hubo dos o tres minutos adicionales.

Solo quiero pedir que hoy la situación sea la misma.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Efectivamente, en la sesión de ayer fuimos bastante flexibles: casi todos los Senadores se extendieron por dos o tres minutos.

Yo no tengo ningún problema para aplicar ahora la misma norma.

En votación la idea de legislar.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Para fundar su voto, tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta , estamos en un momento verdaderamente histórico, toda vez que, después de 24 años y tras 21 iniciativas de ley destinadas a modificar el sistema electoral, por primera tenemos una con real viabilidad política.

Nos hallamos ante un proyecto que busca terminar con el sistema binominal, generar un sistema electoral más inclusivo y establecer un sistema de representación territorial adecuado a la nueva realidad de nuestro país.

Por ello, primero, considero importante destacar la capacidad de articulación política que tuvo el señor Ministro del Interior para lograr en la Cámara de Diputados una aprobación mayoritaria. Y espero que en el Senado sean iguales de mayoritarias las votaciones en general y en particular.

La democracia representativa supone que el ciudadano, en su pacto social, le delega a un representante el derecho a decidir la forma como debe organizarse nuestra sociedad. Y es ese representante -Senador o Senadora, Diputado o Diputada - quien ha de intentar representar en el Parlamento los intereses generales de sus electores.

Pero no es una representación como la que ostenta el Presidente de la República , quien es el encargado de conducir la política pública y de ejecutar los programas: se trata de la representación vinculada con la labor legislativa, esa labor que no se limita a la construcción de un plan, de un programa, de una infraestructura, y que tiene por objetivo plasmar en la ley, más allá del gobierno de turno, una visión de sociedad.

El trabajo legislativo supone capacidad y visión de futuro; supone la existencia de una forma de mirar la sociedad conforme a la cual el parlamentario es capaz de interpretar a sus electores al momento de aprobar o rechazar los proyectos encaminados a generar leyes permisivas, prohibitivas o imperativas. Es lo que nos somete todos los días a escrutinio en este Hemiciclo.

Por eso para el ciudadano común y corriente es tan relevante la función legislativa, muchas veces incomprendida, mal evaluada probablemente. Pero la verdad es que ella resulta determinante para la consagración de visiones de sociedad, de derechos fundamentales y, también, de obligaciones cívicas.

De ahí que la forma como el Estado determina la modalidad de elección de los representantes es fundamental, pues de ello dependerá que lleguen al Parlamento personas que tengan o no tengan la visión mayoritaria de sus electores.

En consecuencia, el sistema electoral es determinante para la conformación de la visión de la sociedad en el Congreso Nacional.

Sin embargo, el mecanismo imperante desde la Constitución de 1980 fue concebido, diseñado, organizado, estructurado para que el Parlamento se transformara en una institución que mantuviera el

statu quo, que conservara el orden vigente, que no alterara la visión consignada en el Texto Fundamental. Por ello, territorialmente y desde el punto de vista de la fórmula para la toma de decisiones, se pensó de tal modo que no alterara el estado de cosas existente al momento de dictarse la Carta del 80.

El sistema binominal tiene como objetivo principal, bajo el argumento de algunos, la estabilidad. Empero, no es otra cosa que un sistema electoral que busca establecer la sobrerrepresentación de las minorías y la subrepresentación de las mayorías.

De consiguiente, plantear que este proyecto solo influye en la política o en los políticos implica hallarse muy lejos de la realidad. Porque si hubiese un sistema mayoritario o un sistema proporcional corregido podríamos tener sentadas diferentes visiones de la sociedad y plasmar, en los distintos planes y programas de transformación o en los proyectos de ley, alternativas mucho más cercanas a los ciudadanos.

Por eso, señora Presidenta , voy a aprobar en general este proyecto, que cambia el binominal por un sistema más democrático, más inclusivo.

No obstante lo anterior, considero importante tener en cuenta (y se lo hemos manifestado al señor Ministro del Interior ) que esta iniciativa requiere ciertos perfeccionamientos.

En un sistema bicameral, tradicionalmente una de las Cámaras (Cámara de Representantes, Cámara de los Comunes, en fin), la de Diputados, tiende a ser el órgano de representación poblacional. Es decir, desde el punto de vista de la representación ciudadana, se elige mayor o menor cantidad de Diputados en función generalmente del criterio de la población. Y es el Senado de la República el que, en la estructura bicameral, representa mayoritariamente a los territorios.

Empero, esos no son principios absolutos.

Veamos el caso de Estados Unidos. En este país se aplica el principio absoluto en materia del Senado: el estado de Alaska, por ejemplo, tiene exactamente los mismos Senadores que el de California.

El proyecto en debate contempla un principio de representación territorial, pero también aminorado por el efecto poblacional, para establecer cierta proporción. Y por eso se establecen cantidades de Senadores distintas, dependiendo también de un criterio poblacional.

Señora Presidenta , yo estoy de acuerdo en que avancemos hacia la mayor cantidad de circunscripciones de carácter impar, para que haya más competencia, pero también para que exista la posibilidad de que los electores manifiesten abiertamente sus diferencias y se expresen las mayorías.

Sin embargo, me parece importante señalar que no existe justificación alguna para que, en el concepto de institución bicameral, el Senado deba recibir en su Hemiciclo a siete representantes de la Región Metropolitana. Creo que es una sobrerrepresentación injustificada desde el punto de vista territorial. Por ende, a este respecto se requiere una modificación durante la discusión particular. La hemos planteado, y lo seguiremos haciendo, en la Comisión de Constitución.

De igual forma, quiero valorar que esta iniciativa incorpore una ley de cuotas. Chile está muy lejos del promedio de 21,8 por ciento de integración de mujeres en el Parlamento.

¡La visión femenina es fundamental en la política! ¡Debemos incorporarla!

El 15,8 por ciento de representación es todavía muy escaso. Considero adecuado elevar el porcentaje. Porque cuando se hacen acciones afirmativas o discriminaciones positivas, ellas son de carácter temporal, tal como las establece este proyecto, que celebro también desde el punto de vista de su técnica.

Señora Presidenta , no puedo dejar pasar esta oportunidad sin señalar en esta Sala algo que le he manifestado al señor Ministro del Interior : es relevante que en este proyecto desaparezcan las circunscripciones y se consagre la elección de Senadores por región, para que nunca más ocurra lo sucedido con la Región de Arica y Parinacota, que tras su creación, hace ya varios años, sigue esperando para tener sus propios Senadores.

La idea es que la sola creación de una nueva región haga aparecer inmediatamente a sus representantes en el Senado, pues hay representación territorial. Y así lo he planteado para la creación de la futura Región de Ñuble.

Señora Presidenta , concurro con mi voto favorable. Espero que tengamos hoy una mayoría comprometida con un sistema inclusivo, territorialmente centralizado y más democrático.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

No es muy usual, señor Senador, pero le manifiesto desde ya que va a quedar en acta su muy positiva valoración sobre la contribución de las mujeres en la política.

Tiene la palabra el Honorable señor Araya.

El señor ARAYA.-

Ante todo, saludo a nuestro colega el doctor Víctor Torres .

Sin duda, señora Presidenta , este es uno de los proyectos más esperados. Sobre esta materia se han discutido varias iniciativas, en distintos gobiernos de la entonces Concertación y de la ahora Nueva Mayoría. Y es parte importante del Programa de Gobierno de la Presidenta de la República avanzar en un sistema proporcional representativo.

Considero del caso reconocer el esfuerzo hecho por el Gobierno, a través del Ministro del Interior, para buscar el consenso y saltar la primera valla, que fue conseguir los votos necesarios para aprobar la iniciativa en la Cámara de Diputados.

Deseo consignar que voy a votar a favor, pero entiendo que se requiere una serie de correcciones. Por lo pronto, pensamos que se deben mantener ciertos criterios en cuanto a la composición del Senado, y, en esa lógica, vamos a seguir insistiendo, en la discusión particular, en la necesidad de poder avanzar en una representación más proporcional e igualitaria entre las regiones.

Históricamente, nuestra Corporación ha representado a estas últimas o a agrupaciones territoriales. No se ha elegido conforme a la cantidad de habitantes. Como consecuencia de ello, nos parece bastante perjudicial, especialmente para las regiones extremas, la cantidad de Senadores que se asignan a la Región Metropolitana: siete.

Quienes estamos dispuestos a aprobar la fórmula de una mayor proporcionalidad e igualdad vamos a insistir, en las conversaciones y en la discusión particular que sostendremos en la Comisión de Constitución, en la conveniencia de progresar en su materialización.

El proyecto aborda aspectos importantes. Comparto la idea defendida por un grupo de parlamentarias en el sentido de adelantar hacia una ley de cuotas. Estimo justo contar con políticas que permitan la inclusión de la mujer en la actividad pública. Pero, dicho eso, creo que no puede generarse una dicotomía entre un cuerpo legal de esa índole y las primarias. En consecuencia, me parece fundamental, para que el asunto pueda prosperar, solucionar adecuadamente algo que el texto no resuelve y que es cuál va a ser la validez o la efectividad de ese último proceso frente a las cuotas que pueden asignar los partidos políticos.

En lo personal, juzgo que se han agregado otros puntos bastante interesantes, como el perfeccionamiento y mejoramiento de la ley de financiamiento del gasto electoral, la que, a la luz del tiempo de su vigencia, requiere, sin duda, una modificación urgente. Por eso, antes de aprobar o rechazar determinado artículo en la materia estamos a la espera de conocer cuál va a ser la posición del Gobierno.

A nuestro juicio, ello tiene que ser objeto de una regulación y venir también de la mano con otras enmiendas legales, de las cuales por lo menos el Ministro del Interior se ha responsabilizado: por ejemplo, mantener lo atinente a los cambios en la participación de los independientes en una elección y a su forma de inscripción, a lo que se agrega el compromiso que adquirió en la Cámara de Diputados en cuanto a la creación de los partidos regionales y a un fortalecimiento de la actividad política.

En mi opinión, es la hora de una nueva Ley de Partidos Políticos, que recoja la realidad de la democracia del Chile del siglo XXI. El cuerpo legal vigente se dictó en plena dictadura, en los años ochenta, cuando el régimen militar no creía en la participación política. Entonces, hoy día es anacrónico, y los ciudadanos no manifiestan interés justamente por la cantidad de trabas que presenta.

Por eso, se precisa una normativa en la que expresamente se reconozca lo que se está haciendo hoy día en regiones. Sé que este es un aspecto que ha sido muy resistido por varios actores, los que sostienen que puede ser una desventaja para el equilibrio político, para el funcionamiento del sistema en su conjunto, pero es necesario comprender que los ciudadanos están dispuestos a agruparse en otra forma, a no intervenir en la actividad pública en la forma tradicional en que lo han hecho.

Me parece sumamente importante, en consecuencia, que los compromisos adquiridos por el Ministro del Interior en la Cámara de Diputados, en orden a la creación de partidos regionales, a una nueva Ley de Partidos Políticos, se puedan materializar a la brevedad.

Termino expresando mi confianza, señora Presidenta , en que esta Corporación, después de largos veintitantos años, va a aprobar hoy día una iniciativa que permita avanzar en un sistema proporcional representativo y en que el Gobierno, en la discusión particular venidera, se abrirá y entenderá que lo que nos preocupa es que los ciudadanos efectivamente estén bien representados, como consecuencia de lo cual se requiere mejorar la composición del Senado que fue aprobada en la Cámara de Diputados.

Gracias.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Tiene la palabra el Honorable señor Rossi.

El señor ROSSI.-

Señora Presidenta , hoy es un día bastante importante. Ayer se dijo, por quienes intervinieron en la Sala, que después de 24 años estábamos ad portas de lograr un cambio trascendental en nuestro sistema político electoral.

Quisiera partir haciendo una breve reflexión respecto de ciertos discursos que escuchamos a menudo y que se han planteado durante décadas, desde el retorno a la democracia, con relación al intento de cambiar el sistema que heredamos de la dictadura.

Uno de ellos es el de que el sistema electoral no está dentro de las prioridades de la gente. Si a la mayoría de los ciudadanos les preguntamos qué asuntos son prioritarios para ellos, efectivamente mencionarán la salud, la educación, la seguridad pública. Pero resulta que la calidad de la política y de la democracia tiene que ver, finalmente, con la salud, la educación, la seguridad pública. Si contamos con una mejor política y una mejor democracia, es evidente que vamos a lograr mayores niveles de desarrollo humano y a mejorar la calidad de vida de todos.

Por eso, es un discurso un poco tramposo el de señalar que el binominal no es un tema de la calle, que no está dentro de las prioridades de la gente. Muy por el contrario, disponer de un régimen electoral que fomente la participación, que genere las condiciones para la existencia de una oferta diversa de candidatos, indudablemente que ayudará a que nuestra democracia sea de mejor calidad y a que nuestro sistema político esté más legitimado. De esa manera, vamos a acercar la ciudadanía a la política.

Estimo, por lo tanto, que todos debiésemos respaldar hoy día, con mucho entusiasmo, el proyecto de ley.

Es una materia que, por lo demás, no resulta fácil debatir, porque somos todos incumbentes, como es obvio: tanto los Diputados que participaron en el primer trámite, como nosotros, en el segundo, ya que nos vemos directamente afectados por las consecuencias de las transformaciones en el régimen electoral. Quizás es el único momento en el que uno no se inhabilita por un conflicto de interés; pero es claro que todos tenemos, cual más, cual menos, alguna inclinación del ánimo en relación con el régimen electoral. Por tanto, eso complica mucho más el debate.

Estimo fundamental, por otro lado, aprovechar la ocasión para transparentar, sobre la base de mi planteamiento inicial, el financiamiento de la política, para establecer un financiamiento público de los partidos, de las campañas. Si contamos con mejores colectividades políticas, vamos a tener un mejor sistema político; si contamos con un mejor sistema político, tendremos una mejor democracia, y si contamos con una mejor democracia, Chile avanza, progresa, se desarrolla.

Es preciso comprender que esta es la lógica que hay detrás del cambio tan importante, tan sustantivo, del régimen electoral, modificación que hoy día estamos iniciando con la votación en general. Así que ojalá hubiera un amplio acuerdo en respaldar el proyecto.

Respecto del estudio en particular, se requiere, desde luego, un análisis de la iniciativa de acuerdo con cuáles son los principios que rigen los sistemas electorales y considerando la legislación comparada, nuestra historia y nuestras raíces, tanto a nivel de Diputados como de Senadores.

En la otra rama del Congreso, por ejemplo, un criterio fundamental es el de la igualdad del voto, o sea, que el sufragio en Arica valga lo mismo que el que se emita en la Región Metropolitana o en Aysén.

La verdad es que tengo reparos importantes a la distribución de los cargos por distrito. El Senador que habla representa dos Regiones: la de Tarapacá y la de Arica y Parinacota. Fíjense Sus Señorías que, en la primera de ellas, el que vendría siendo el segundo distrito, con 222 mil 24 electores, elegiría tres Diputados. Sin embargo, en la Tercera Región, el que sería el cuarto distrito, con 221 mil 606 electores -esto es, menos que el anterior-, elegiría cinco. Quisiera que el Ejecutivo me explicara por qué en Atacama, con menos población, se elegirían cinco Diputados, y en Tarapacá, tres. No hay una explicación lógica para ello.

Se encuentran ejemplos de otras regiones en que se eligen ocho Diputados en circunstancias de que registran menos población electoral que en otras que eligen siete.

Ahí hay un problema, entonces, porque el elemento central en la Cámara Baja efectivamente es la igualdad del voto y la proporcionalidad entre los cargos que se eligen y los electores. En la discusión particular es preciso efectuar la corrección pertinente.

Vamos al caso del Senado.

La verdad es que hemos hecho bastante referencia a la descentralización. Esta tiene que ver con la elección democrática de las autoridades y la autonomía política; con la independencia de gestión, para lo cual se requiere un financiamiento adecuado, y con atribuciones claras, a fin de evitar contiendas de competencia o facilitar que el Tribunal Constitucional, en su minuto, pueda resolverlas.

Muy bien. A ello se refiere el informe de la Comisión Asesora Presidencial para la Descentralización. Nos encontramos a la espera de los proyectos respectivos y estamos muy disponibles para avanzar en esa materia.

Mas es contradictorio extendernos acerca de la descentralización y la equidad territorial en el mismo momento en que estamos debilitando la expresión de las zonas extremas en esta Corporación, elemento que, por razones geopolíticas, estratégicas, de brechas socioeconómicas, de aislamiento, debiera ser importante, especialmente considerando que la mayoría de los Senados en el mundo representan territorios. En Estados Unidos, por ejemplo, Alaska elige los mismos Senadores que Nueva York.

Si se analiza el panorama electoral después de la reforma, nos encontramos con que cada una de las Regiones de Arica y Parinacota, de Tarapacá, de Antofagasta, de Atacama, de Los Ríos, de Aisén y de Magallanes elige dos Senadores. Son siete circunscripciones. Es decir, la mitad del país mantiene el sistema electoral binominal. Pero no se trata solo de eso: baja su incidencia en la toma de decisiones en el Congreso.

Por lo tanto, la anterior es una medida contraria a la descentralización, ya que dos Senadores de Magallanes o dos de Aisén -esta última es la circunscripción en que fue elegido el Honorable señor Patricio Walker - tienen menos poder entre cincuenta y cuatro, cincuenta y dos, o cincuenta, que entre treinta y ocho. O sea, con la reforma, como está, se registra una subrepresentación, respecto del actual ámbito senatorial, en las zonas extremas y en un total de siete Regiones.

Lo que pido, entonces, es un esfuerzo por lograr un Senado cien por ciento sin binominal, sobre la base de un sistema proporcional que genera inclusión, participación y una mayor oferta, y que traslada la competencia al ámbito entre las listas y no al de una de ellas.

Estos son los planteamientos que quería hacer, señora Presidenta , comprendiendo que es fundamental votar ahora en general y respaldar el cambio. Pero en la discusión particular indudablemente que vamos a defender los puntos mencionados, porque me parecen esenciales, tanto en lo que dice relación con la igualdad del voto en la elección de la Cámara de Diputados -y ya he dado ejemplos claros de errores que es preciso corregir- como en lo que ocurre en el Senado respecto de la subrepresentación de las zonas extremas, lo que profundiza la inequidad territorial y va en la dirección contraria a lo que queremos como país, que es avanzar en la descentralización.

He dicho.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Saludo al Centro de Adulto Mayor "Nueva Ilusión Candelaria San Pedro de la Paz", cuya delegación nos visita.

Bienvenida.

Tiene la palabra la Honorable señora Lily Pérez.

La señora PÉREZ ( doña Lily).-

¡Qué bueno que está la gente de San Pedro de la Paz con nosotros!

Señora Presidenta, estamos felices. Para la centroderecha liberal, se comienza a concretar hoy un sueño político, que comienza por el camino de un cambio del sistema electoral.

Más allá de los ajustes posteriores que necesariamente se requieran, en términos de números, con relación a muchas de las cosas que aquí se han planteado -sobre todo, en puntos que comparto con Senadores regionalistas-, estimo muy relevante el asunto de fondo.

Como país, no solo tenemos que hacer dicho cambio: es preciso terminar con un régimen binominal mental, que nos divide, que nos separa, que nos fragmenta, que nos acorrala en bandos irreconciliables, que determina que el país todavía siga bailando políticamente al ritmo del posplebiscito, algo que a muchos de nosotros nos parece tan lejano.

Por esa razón, estoy convencida, junto a nuestro movimiento Amplitud, de que en el mes de junio llevamos a cabo algo realmente trascendental cuando suscribimos un acuerdo con el Gobierno, porque nos jugamos por un principio, por un valor en el cual creemos, que es el de mejorar nuestra democracia.

Y hoy llegó el momento de la verdad -la hora de los "quiubos", como decimos en nuestro país-, de ver cómo progresamos en la democracia que tenemos y que tanto ha costado construir, pero que es necesario perfeccionar, sin duda.

El acuerdo que firmamos con el Gobierno comprende la transparencia y buena fiscalización de los recursos que se dirigen a las campañas, el rol del Estado respecto del financiamiento de estas y el papel que en ellas desempeñan los privados. Por eso, días atrás entregamos un documento conjunto de los movimientos Amplitud, Fuerza Pública y Red Liberal para ayudar y apoyar esta discusión.

También se incluye la limitación de las reelecciones de los parlamentarios, que hoy día son eternas. Estoy convencida de que es preciso "darle tiraje a la chimenea". Y lo he pensado siempre.

El acuerdo contiene muchos elementos adicionales, que van más allá de los números y de la calculadora, porque no podemos hacer un Senado a la carta, con relación al cual todos probablemente queden contentos por la forma como va a irles conforme a los números de los bloques políticos.

Hoy es un día importante, en consecuencia, ya que estamos dando un paso adelante quienes creemos que nuestra democracia tiene que ser mucho más inclusiva y representativa, en la que demos un impulso adicional, no por Secretaría, a que más mujeres capaces y que quieran participar en política cuenten con una oportunidad para poder ser candidatas.

Ello se extiende a que los miembros de los pueblos originarios puedan tener cabida en el Congreso Nacional, no por una concesión graciosa, sino porque realmente creemos que es muy importante fomentar y promover la participación de todos.

También, la idea es que el mundo independiente, que hoy día escasamente se puede ver representado -son casos excepcionales los que lo logran-, realmente tenga más posibilidades de llegar a ocupar un escaño.

Y sobre todo, señora Presidenta , se trata de acortar esa lejanía enorme y la tremenda frustración que experimentan tantos electores, a lo largo del país, al sufragar por alguien que no alcanza a ser elegido por ganar un candidato, gracias al sistema binominal, que saca poquísimos votos. Ello ha favorecido a unos y a otros, porque, en las elecciones parlamentarias de 2009 y de 2013, cinco Diputados de la Alianza y cinco de la Nueva Mayoría se encontraron en esa situación. No se ha beneficiado un sector más que el otro.

Por estos motivos, porque es un asunto de fondo y ha sido un sueño de nuestro sector de la centroderecha liberal y parte de nuestro ideario político, concurro hoy muy satisfecha a decir: "Sí, queremos cambiar el sistema electoral binominal".

He dicho.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Puede intervenir el Honorable señor Pizarro.

El señor PIZARRO.-

Señora Presidenta , la cuestión en debate tal vez ha sido de las más discutidas y analizadas en los últimos veinticuatro años, e incluso desde antes que se iniciara la transición de la dictadura a la democracia.

Varios de los señores Senadores que me han antecedido en el uso de la palabra han manifestado que este fue un sistema sui géneris, muy especial, adecuado al resultado del plebiscito del año 1988 con el objetivo de que el binominal constituyera uno de los enclaves autoritarios dejados por la dictadura para impedir la expresión de las mayorías.

Efectivamente, se trata de un régimen excluyente, que genera la sobrerrepresentación de las minorías y tiende a configurar una situación de empate entre al menos las dos fuerzas, o coaliciones, o alianzas electorales o políticas que, por la forma de implementación, terminan llevándose toda la representación del Congreso.

Lo anterior le ha hecho mal a nuestro sistema político. Le ha ido quitando, progresivamente, representatividad; le ha ido quitando legitimidad; ha ido generando desconfianzas en quienes llegan al Congreso Nacional en cuanto a su representación.

Si a eso le agregamos, además, el modo como fueron conformados los distritos en cada una de las regiones del país, la situación de falta de representatividad, de deslegitimidad es muchísimo mayor.

Parte de lo anterior se ha usado dentro de los argumentos para justificar el no estar de acuerdo con la modificación que significa el término del sistema binominal y cuestionar la propuesta que ahora se somete a nuestra consideración, la que, sin duda, avanza hacia un sistema proporcional moderado, llamémoslo así.

A mí me habría encantado una propuesta proporcional en serio, bastante más representativa de lo que es la realidad del país y donde se conjugaran bien la representatividad de la población, en el caso de la Cámara de Diputados, y la necesaria representación combinada territorio con población, en el caso del Senado.

Sin duda, la propuesta en debate no es perfecta ni mucho menos, más aún cuando quienes han posibilitado este acuerdo somos todos incumbentes, ya sea que pertenezcamos a una u otra rama legislativa del Congreso.

Lamentablemente, se produce una tergiversación natural, lógica. Yo no quiero emitir un juicio que pueda hacer sentir mal a alguien, pero me llama bastante la atención, por ejemplo, que se dé como argumento, para no estar de acuerdo con la idea de avanzar hacia un sistema proporcional, el hecho de que el proyecto atentaría contra el principio de igualdad en el voto.

Ayer escuché atentamente a un Senador que puso mucha fuerza en dicho argumento. Incluso, algunos plantean que, como no hay igualdad en el voto, porque hay distritos que exhiben una sobrerrepresentación, porque el número de electores no coincide con el de otros distritos, podrían presentar un recurso de constitucionalidad.

Deseo realizar un par de afirmaciones al respecto.

La primera es que este proyecto avanza sustancialmente en el principio de igualdad del voto frente al sistema electoral binominal que tenemos ahora, mejorándolo muchísimo,

Ese es un hecho cierto.

Es indudable que esta iniciativa, con la propuesta actual -que ojalá pudiera perfeccionarse-, avanza sustancialmente en la igualdad del voto, sobre todo en el caso de la Cámara de Diputados. Pero, más importante todavía, termina con la desigualdad del voto dentro de las regiones, a propósito de la descentralización de la que hablaba recién un colega, pues corrige la arbitraria formulación de distritos que se planteó al interior de esas unidades territoriales.

De manera que a uno le llama la atención que quienes han defendido y siguen manteniendo la existencia del sistema binominal, que ha sido perverso para nuestro régimen político, hoy día, para oponerse a su término, usen el argumento de que el mecanismo que se crea no genera una justa proporcionalidad ni una adecuada relación entre electores y cargos a elegir.

Son contradicciones de los argumentos que uno escucha.

La razón para la situación que se da en las Regiones Tercera y Séptima, usadas como ejemplo por algunos colegas, incluido un señor Senador que me antecedió en el uso de la palabra, es muy sencilla. Y es que, para lograr un entendimiento, se tuvo que llegar al acuerdo político de que en las regiones el número de Diputados no disminuiría, sino que aumentaría al menos en uno.

Ese es el motivo por el cual en la Tercera Región, teniendo menos habitantes hoy día, habría cinco Diputados. La pregunta es por qué cinco Diputados sería arbitrario cuando, en la relación correcta, deberían ser solo tres. Y la respuesta es que la dictadura, arbitrariamente, cuando decidió los distritos, sacó la cuenta de que, dividiendo la Región de Atacama, aunque esta tenía muy pocos habitantes, debía elegir cuatro Diputados: dos en el distrito de Copiapó y dos en el distrito de Vallenar.

Ahí es donde se produce el mal de origen. No le vengan a cargar a la actual propuesta el que haya una sobrerrepresentación. Y lo mismo sucede en el Maule.

En el caso del Senado, señora Presidenta , lo que se busca -y hay que decirlo derechamente, pues estos siempre son acuerdos políticos- es una fórmula mixta, donde se mezcle la representación territorial con una justa representación electoral.

Aquí, algunos Senadores de zonas más extremas han planteado el argumento de que se estaría atentando contra el proceso de descentralización al no considerarse a las regiones.

A mi juicio, ese es un argumento muy debatible. Con la forma como se han creado regiones en este Congreso en los últimos años, uno se encuentra con que ciudades, por importantes que sean -todas las ciudades son importantes-, van a tener dos Senadores, en tanto que regiones completas también podrán tener dos Senadores. ¡Completas!

Se me dice: "Es que en el Senado la representación es solo territorial". A mí no me parece justo, ni bueno para una democracia, que, por el principio de la territorialidad, demos una sobrerrepresentación a determinadas ciudades.

También se da el argumento de que se atenta contra la descentralización porque a unas regiones se las deja con dos y a otras se les da más. ¡Por Dios! ¡Si son varias aquellas a las que se les da más! ¿O el Maule, que también aumenta, no es región? ¿O el Biobío, que queda en la misma situación, tampoco es región? ¿O la Novena, o la Cuarta, o la Quinta? O sea, ¿solo valen las regiones extremas?

Pienso que ahí hay una contradicción más que evidente. Y lo penoso, a veces, es quedarse solamente con el argumento del incumbente.

A mí no me parece que podamos analizar un proyecto de esta envergadura sobre la base de lo que puede ser la incumbencia de cada cual.

Creo, señora Presidenta, que el proyecto representa un avance; un avance gigantesco. Y además constituye un compromiso que tenemos con la ciudadanía. Es un compromiso que tenemos con los chilenos.

Es un compromiso por el cual venimos luchando y peleando desde hace muchísimos años. Y yo me alegro de que hoy día haya fuerzas y representantes políticos en este Senado dispuestos a sumarse a dar un paso para consolidar una democracia mucho más participativa y representativa.

Y como última cosa, señora Presidenta -porque no puedo dejarla pasar-, nuestra bancada va a intentar reponer la obligatoriedad del voto. Hay que ser consecuentes. Si queremos mayor representatividad en el Congreso, tiene que haber mayor participación ciudadana. Y la participación ciudadana, expresada en el voto, constituye un derecho, pero también una obligación. De ahí la inscripción automática que nosotros siempre hemos planteado.

Nos parece que una democracia que pretende ser representativa necesita de mayor participación de los ciudadanos en el momento de elegir, porque, si no, vamos a estar fomentando una mayor deslegitimidad de nuestro régimen político.

Creo que esta es una oportunidad para, junto con encarar otros temas, corregir esa anomalía que generó la inscripción automática y el voto voluntario y que hoy nos tiene frente a una situación de falta de participación, sobre todo en los segmentos más jóvenes y más populares de nuestro país, francamente preocupante.

Pienso, señora Presidenta, que nadie se debe restar de este esfuerzo.

Ojalá aquellos que han tenido dudas o aquellos que siguen convencidos de la mantención del sistema binominal se den cuenta de que este es un paso fundamental para lograr una democracia más consolidada, más participativa y con mayor legitimidad frente a nuestros compatriotas.

Por todas estas razones, señora Presidenta, vamos a votar a favor del proyecto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Bianchi.

El señor BIANCHI.-

Señora Presidenta , primero quisiera señalar quiénes somos los que estamos en esta Sala debatiendo el fin del sistema binominal.

Por un lado, tenemos a los herederos políticos e ideológicos de la dictadura, que se han favorecido con dicho sistema. Y, por otro lado, tenemos a los herederos por conveniencia del mismo sistema, los cuales, estando dentro de él, han impedido la emergencia de nuevos grupos y actores en la política. Y además está el Senador que habla, al que, revistiendo carácter absolutamente independiente, le ha correspondido romper el sistema binominal en dos oportunidades.

Por ello, señora Presidenta , considero absolutamente necesario, en primer lugar, decirle al país quiénes somos los que estamos aquí debatiendo el cambio del sistema binominal.

Es cierto que este no es el primer intento. Historia hay mucha. Pero también es cierto que la necesidad de las aberraciones electorales del actual sistema nos tienen hoy -espero- con una voluntad transversal de generar cambios en beneficio del nuevo Chile que desde hace un tiempo a esta parte se ha ido dibujando.

Sin duda, el actual sistema binominal debe ser reemplazado por uno más justo e inclusivo. Mi inquietud surge en si con este proyecto dichos objetivos serán alcanzados o si no estaremos profundizando aún más el centralismo, la concentración del poder y la exclusión de más del 80 por ciento de las personas independientes de nuestro país.

Por esto, creo necesario que en la discusión particular se efectúen profundas modificaciones al texto actual, de manera de no acrecentar el grave error de cambiar un mal sistema por otro peor.

El primer tema sobre el cual quisiera reflexionar, señora Presidenta , es si el sistema electoral proporcional inclusivo que nos presenta el Ejecutivo , ya aprobado por la Cámara de Diputados, es realmente lo que el país y todos los ciudadanos, de Arica a Magallanes, necesitan para mejorar y facilitar la expresión nacional en nuestro Congreso.

Es mi deber anticipar algunas reflexiones en esta Sala.

Lo primero es señalar que el sistema electoral binominal será reemplazado por un sistema matemático de repartición de escaños denominado "D'Hondt", que es idéntico al sistema utilizado en la actualidad en la elección de concejales, en donde lo que se contabiliza, finalmente, no es la votación por el candidato de la preferencia del elector, sino la votación de la lista, la cual, en función del apoyo obtenido y bajo la fórmula D'Hondt, reparte los cupos entre sus integrantes. Esta resultante muchas veces elige a candidatos con muy poca votación, que son arrastrados por los más potentes de la lista, excluyendo, en múltiples ocasiones, a candidatos con enorme apoyo popular individual, pero integrados en una lista o posiciones independientes que no le permiten sumar.

¿Es justo y lógico que a líderes locales emergentes, por no contar con las espaldas de un gran conglomerado político, les cueste mucho más insertarse en nuestro sistema político?

Otro mal aspecto digno de destacar es el impulso a que las listas puedan llevar más candidatos que cargos a elegir, es decir, el comentado "N+1". ¿A quién permitirá completar los cupos? Solo a los grandes partidos y bloques que posean más aspirantes y que, para resolver líos internos, dan un cupo más ¿Y a quién perjudica? Obviamente, a los movimientos y partidos más pequeños y a las personas independientes.

Es cierto que quienes creemos en los pilares de la República sabemos que se necesitan instituciones y, en este caso, partidos políticos para llevar adelante las ideas y los programas. Pero también es cierto que no podemos subyugar esta situación solo al establecimiento de dos coaliciones predominantes que prácticamente obliguen al candidato a someterse a ellas solo por el imperio de un sistema que prácticamente no entrega alternativas a partidos o movimientos de menor dimensión o de naciente vida.

No volvamos a hacernos trampa nuevamente, pues, si realmente queremos un pluralismo ordenado e institucional, estamos a tiempo de corregir todo.

En esto me preocupa especialmente la situación en que quedarán las personas independientes y, junto con ello, los problemas de constitucionalidad que podría presentar el proyecto a la luz de lo establecido en el artículo 18 de la Constitución Política, que consagra la igualdad entre independientes y partidos políticos.

Frente a ello, señora Presidenta , propongo que nos hagamos cargo de este asunto y le demos una solución, ya sea derogando el artículo 18 o instaurando mejores condiciones para los independientes. De lo contrario, temo que este proyecto tendrá problemas de constitucionalidad en el Tribunal Constitucional.

¿Queremos cambiar el binominal? ¡Por supuesto que queremos cambiarlo! Quién más que este Senador, que ha podido derrotar este sistema en dos oportunidades. Yo conozco perfectamente lo perverso de sus efectos y lo duro que es ser una excepción dentro de la regla. Pero no por eso guardaré silencio cuando tenemos a la vista tales aberraciones, que no harán más que concentrar y seguir monopolizando nuestro sistema político a costa de ilusiones en cupos y reembolsos electorales, pero sin un real acceso a la deliberación nacional de todos los grupos y movimientos que deseen hacer un aporte a nuestro país.

Por eso es que, anticipando este escenario desfavorable que se viene para el mundo independiente, hemos comenzado un proyecto que permite crear una plataforma, una casa de acogida para todas las personas independientes. Este proyecto ya está en marcha y se llama "Democracia Regional", para reunir a todas las personas que, siendo regionalistas independientes, tengan la oportunidad de participar en la actividad política.

Ahora bien, entrando en otro aspecto central de la iniciativa en discusión, debemos modificar de raíz el centralismo del texto que se plantea, el cual claramente empodera, en el Senado -que tiene una representación territorial-, a las regiones más pobladas en desmedro de la gran mayoría del territorio nacional.

Es así que, como naciente proyecto político, denominado "Democracia Regional", proponemos la creación de circunscripciones compuestas por macrozonas que agrupen dos regiones y que elijan, cada una, 5 Senadores.

En este punto central, crucial y transversal, espero que los Senadores que se han declarado regionalistas concurran con su voto favorable para modificar este aspecto del proyecto.

En lo que concierne a la crisis del sistema de financiamiento de la política que hoy se vive, creo que esto no puede dejarse para otra discusión y debe aprovecharse la coyuntura crítica actual para terminar con el cáncer de la relación dinero-política. Al respecto, he presentado un proyecto de reforma constitucional que propone la creación de un Fondo de Fortalecimiento de la Democracia, compuesto por recursos que aporten el Estado y privados que recibirían beneficios tributarios por sus aportes. Este fondo debería ser administrado por el SERVEL, repartiéndolo equitativamente entre todas las fuerzas políticas, de manera que exista una competencia justa y de ideas y no una de propaganda y publicidad.

Lo otro que se ha señalado insistentemente, señora Presidenta, es que la actual propuesta no va a generar aumento de gasto para el Congreso.

¡Excúseme! A mí me tocó participar en la Testera, ser Vicepresidente de esta noble institución, y no puedo decirle al país que ella no va a significar ni un centavo más. El presupuesto para el próximo año es de 113 mil millones de pesos, aproximadamente. De incrementarse el número de parlamentarios en más de cuarenta, esa cifra aumentará en más de 25 por ciento. Y esa situación no puede esconderse.

Uno de los aspectos favorables de esta iniciativa, que vamos a aprobar en general, es la cuota de mujer, que le permitirá a esta incorporarse a la actividad y la participación políticas. No solo lo celebramos; como Democracia Regional, una de nuestras mayores aspiraciones es incorporar al máximo de mujeres, al máximo de personas adultas mayores, al máximo de personas de distintas etnias, al máximo de personas que piensen distinto en materia de sexualidad. Esa es la única forma de tener un Congreso mucho más inclusivo y de no mantener esta misma estructura por los próximos 30 años.

Finalmente, quiero señalar que hoy voy a concurrir con mi voto favorable a la aprobación del proyecto, en la convicción absoluta de que los partidos más pequeños, los nacientes movimientos, el Ejecutivo y los dos grandes bloques han entendido que se necesita una nueva mirada, como país, una mirada mucho más inclusiva, de mucho más respeto hacia toda la diversidad que he señalado, ya que es la única manera de lograr que un proyecto de esta magnitud sirva como verdadero instrumento. De lo contrario, temo que todo lo que hagamos aquí quedará en letra muerta.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Terminó su tiempo, señor Senador.

Le voy a dar un minuto más, para que concluya.

El señor BIANCHI.-

Gracias, señora Presidenta .

Voy a votar favorablemente.

Gracias a la Región de Magallanes, me ha correspondido el honor de poder romper dos veces el sistema binominal, siendo el único Senador en esta condición. ¡Es un verdadero honor!

Ya vendrán otros tiempos. Por ahora nos sumamos a esta iniciativa, con la convicción de que en el futuro se fortalecerán nuevas estructuras políticas.

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La señora ALLENDE (Presidenta).-

Quiero saludar a los integrantes del Liceo Federico Heise Marti, de Parral, que están con nosotros, en las tribunas.

¡Muy bienvenidos al Senado!

--(Aplausos en la Sala y en tribunas).

También deseo saludar a una delegación del Liceo Oriente, de Rengo.

¡Sean bienvenidos!

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La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Quinteros.

El señor QUINTEROS.-

Estimados colegas, he seguido con mucha atención este debate. Los argumentos de una y otra parte han sido expuestos con convicción y hasta con pasión. Pese a que todos somos incumbentes, pues debatimos precisamente sobre la función legislativa, me siento con la libertad para hablar desde la posición de alguien que acaba de llegar a esta responsabilidad después de una larga trayectoria en el servicio público regional.

Lo primero que llama la atención es el amplio consenso respecto del diagnóstico de nuestro sistema político, caracterizado por un progresivo deterioro en la confianza en las instituciones y en la participación ciudadana, y que una causa de estos fenómenos se encuentra en el sistema binominal que rige en Chile desde hace 25 años.

Sin embargo, advertimos que no hay voluntad política de parte de algunos para modificar este sistema. ¿Qué se pretende con esto? ¿Acaso se plantea mantener la situación vigente, que todos estamos de acuerdo en que es insostenible? ¿Acaso resiste otro proceso electoral en que se conozca de antemano qué sectores seguirán siendo representados?

Se reivindica que el sistema binominal le ha dado estabilidad al país y que debemos cuidarlo, en circunstancias de que todos somos conscientes de que está agotado y no da para más.

Se argumenta, con estadística en mano, que el actual sistema binominal ha traído beneficios a ambas coaliciones, como si el espectro político se agotara en estas dos agrupaciones, como si no existieran los independientes, como si los que no han sido favorecidos no importaran.

Algunos sostienen que este proyecto es un traje a la medida y reclaman porque el nuevo sistema nos sienta bien a todos quienes estamos aquí, en circunstancias de que lo importante es que esta iniciativa les sienta bien a los que no se hallan acá.

Así como en materia social legislamos para los más humildes, en materia política debemos legislar para los que hasta ahora han sido excluidos, a fin de que otras fuerzas, nuevos grupos, partidos emergentes tengan la posibilidad real de acceder a este espacio.

Cualquiera que sea la razón por la cual no se han incorporado, sea por desconfianza hacia el sistema, por pertenecer a partidos pequeños o a ninguno, o por simple apatía, lo relevante es reencantar y convocar a todos los que por la vía de la abstención o las barreras que existen para crear partidos, o como resultado de este sistema mayoritario, no se sienten representados.

Lo importante es sumar nuevos actores, enriquecer el debate. Del mismo modo como se defiende el valor de la competencia en el mercado, debemos darle mayor competitividad a la política.

Se argumenta que somos muchos Senadores y Diputados, pero se omite que este Congreso es uno de los más pequeños en relación con la población. Se dice que otros Parlamentos están disminuyendo su número y se da como ejemplo a Italia, que tiene seis veces el número de nuestros parlamentarios y solo el triple de población.

Se señala que somos un número suficiente de Senadores, y se rechaza que aumentemos en doce su número, pero antes se defendió la existencia de Senadores designados más los vitalicios. Si esto se mantuviera hoy, seríamos más de cincuenta.

Se dice que esta reforma aumentará el gasto, pero se niega el mayor costo que significa la presencia del Congreso en Valparaíso.

Se declama que esta reforma no está dentro de las prioridades de la población: la seguridad ciudadana, la salud o la educación, desmereciendo el rol de la política misma. Esta tiene que preocuparse no solo de dar solución a los problemas concretos, sino además de lograr legitimidad y concitar la adhesión de la gente a estas respuestas, que es lo que en definitiva asegura la paz social.

Es decir, cuando legislamos sobre determinada política pública no solo interesa que esta sea eficaz, sino también que la ciudadanía perciba que refleja la opinión de la mayoría. Y eso no lo asegura el sistema electoral actual.

Se sostiene que el proyecto afecta la igualdad del voto y se da el ejemplo de un par de distritos, pero se olvidan las decenas de casos de escandalosa desigualdad que se presentan en el sistema actual.

Los que siempre propugnan la gradualidad en los procesos de las reformas, de la noche a la mañana son partidarios de la igualdad completa y total del sufragio. ¿En verdad se persigue una mayor proporcionalidad o se intenta bloquear el cambio?

Se arguye que la Cámara Alta debilita su representación territorial porque aumentan los Senadores por Santiago, en circunstancias de que 9 de los doce nuevos Senadores serán de regiones y tres de ellos provendrán de los territorios extremos.

Por supuesto, el sistema que se apruebe no será perfecto. La desigualdad no será eliminada por completo; no obstante, disminuirá, y la representación será sustancialmente más igualitaria que la actual.

La Cámara de Diputados no será estrictamente representativa ni este Senado será conformado con un criterio exclusivamente territorial, pero sin duda la Cámara reflejará más fielmente la diversidad y pluralidad de la población y este Senado seguirá siendo la expresión privilegiada de la diversidad territorial.

De igual modo, en materia de igualdad de género quizás no se llegará a la paridad. Con todo, indudablemente habrá mayor equilibrio en la representación, teniendo presente que la participación femenina hoy alcanza solo al 15 por ciento de los congresistas.

El sistema electoral no será estrictamente proporcional, pero minorías que hoy se consideran al margen del sistema político tendrán acceso a este Congreso Nacional y, por esta vía, aumentará su compromiso y adhesión con los canales democráticos.

En definitiva, nuestra democracia se perfeccionará y la composición del Congreso tendrá la posibilidad de reflejar la evolución de la opinión pública. Con el sistema binominal una mayoría de 65 por ciento de hace 25 años podía descender a 40 por ciento y seguir teniendo la misma representación. De la misma manera, una minoría de 2 por ciento podía crecer hasta 10 o 20 por ciento y seguir sin presencia en el Parlamento.

No podemos seguir dilatando el cambio. No se puede seguir negociando hasta el infinito. Ojalá el proyecto pueda perfeccionarse o sea posible incorporar otras normas necesarias en una nueva iniciativa, como la limitación de la reelección.

Sin embargo, el gran mérito de la Presidenta Bachelet y de su equipo político es haber presentado una propuesta viable de modificación del sistema electoral que hace suyo el sentir ciudadano. No será un proyecto perfecto, pero lo importante es que esta ley regirá en la próxima elección parlamentaria de 2017.

Ya no habrá más promesas que se queden en el camino o acuerdos que se firmen sin contar con los votos. Ya no más excusas. Ya no más elecciones sin competencia real. Ya no más desigualdad aberrante en el valor del sufragio según el lugar donde se vote.

Nuestro país es diverso. No le tengamos miedo a la democracia, que es de todos. En ella deben estar recogidas las distintas visiones y formas de vida, desde el punto de vista conservador, que no quiere cambiar nada, hasta la expresión del malestar y del descontento que se expresa en la calle; desde los millones que viven concentrados en la Capital hasta el último colono que hace soberanía en las regiones aisladas. Todos deben quedar representados. Chile es de todos.

Voto por la aprobación de este proyecto. Voto por un Congreso de todos para un Chile de todos.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Solicito autorización para que ingrese a la Sala la Subsecretaria de la Secretaría General de la Presidencia, doña Patricia Silva.

--Se autoriza.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Patricio Walker.

El señor WALKER (don Patricio).-

Señora Presidenta , este es un día histórico.

Se ha hablado tanto tiempo de una democracia empatada, en que dos tercios es igual a un tercio, en que por la supramayoría de los quórums que se exigen para las leyes orgánicas constitucionales no basta tener la mayoría para hacer cambios, sino que se requiere un quórum de cuatro séptimos para modificar algunos aspectos importantes de nuestra legislación.

Tenemos, por lo tanto, una oportunidad histórica para contar con un sistema electoral competitivo, más representativo, que tenga mayor legitimidad, con el objeto de que este Parlamento sea sentido como propio por la ciudadanía.

Nobleza obliga. Quiero recordar que no podríamos tener esta discusión si entre Renovación Nacional y la Nueva Mayoría no hubiésemos llegado a un acuerdo en el pasado. Este se produjo después de 17 sesiones en la Comisión de Constitución, que me tocó presidir, el año 2013.

Y también concordamos en aumentar el número de Diputados a 134, y el de Senadores a 44.

¿Por qué no se implementó en el Gobierno anterior? Es muy simple. Cuando nosotros anunciamos ese acuerdo entre la Nueva Mayoría y Renovación Nacional, al día siguiente el Presidente de la República de la época habló en red voluntaria de televisión -antes llamada "cadena nacional"- y despotricó contra su texto. Según algunos, ello obedeció básicamente a que el entonces presidente de Renovación Nacional no le había avisado al Ejecutivo ; y, según otros, a que la UDI le dijo al Gobierno que no era partidaria de este proyecto y, por lo tanto, que iba a tener problemas si se sumaba a él.

En mi opinión, esa reacción, esa actitud reactiva, poco pensada, poco meditada hizo que no se pudiera aprobar, por falta de apoyo de ese Ejecutivo , el acuerdo alcanzado en la Comisión de Constitución y entre la Nueva Mayoría y Renovación Nacional.

Se nos dijo que era muy importante que el Gobierno estuviera conforme con la iniciativa.

Quiero recordar que todos los integrantes de la Comisión de Constitución fuimos a hablar con el Presidente de la República en La Moneda. Y tratamos de llegar a un acuerdo.

Sin embargo, parece que hubo un partido dentro de la Alianza que efectivamente se manifestó en contra (se lo dijo al Gobierno), y eso imposibilitó que se aprobara lo propuesto por nosotros.

Valoro lo realizado por Amplitud, lo que han dicho la Senadora Lily Pérez y algunos independientes. Espero que Renovación Nacional se sume.

Lo digo no solamente por un tema de gratitud con ese acuerdo, sino también porque es bueno para el país que exista un horizonte de largo plazo, y que no se modifique el día de mañana conforme a las votaciones que se vayan registrando. Así lo ha dicho el Ministro de Interior , Rodrigo Peñailillo . Está reiterada la invitación. Ojalá que aquellos se puedan sumar, pero obviamente no los podemos obligar, y a lo imposible nadie está obligado.

Quiero señalar, señora Presidenta , que algunos han criticado que vaya a haber un aumento irracional del número de parlamentarios. ¡Esto es absolutamente falso!

En 1973, con la mitad de la población que hoy existe en Chile había 50 Senadores y 150 Diputados. ¡Con la mitad de la población!

Ese incremento no es antojadizo. Si no tuviéramos una disminución en el número de distritos y de circunscripciones para elegir más Diputados y Senadores por ellos, no podríamos bajar el umbral de acceso al Congreso. Y si no bajamos este límite, ¿qué ocurrirá? Que las fuerzas políticas minoritarias relevantes (¡las relevantes!, no estamos hablando de cualquier fuerza, una que saca 2 o 3 por ciento) no podrían estar en el Congreso y no existiría la suficiente representatividad ni diversidad.

Señora Presidenta, igualmente creo que hay que destacar el hecho de que se pueda elegir más candidatos por cargos: el N+1. Porque esto permite ampliar la oferta electoral. Que en vez de que un partido o una coalición lleven un candidato cuando se eligen dos, lleven tres. Y, si se eligen 5, que puedan presentarse 6, en fin.

Ello, a fin de que los distritos y las circunscripciones no sean "cotos de caza" -perdónenme la expresión- de los parlamentarios en ejercicio.

Asimismo, quiero destacar los principios que están en juego.

El principio que rige en la Cámara de Diputados -eso lo dijeron todos los expertos electorales que escuchamos en las 17 sesiones de la Comisión de Constitución- es el de la igualdad del voto.

En el caso del Senado, en todos los Parlamentos del mundo los Senadores representamos territorios; en Chile, regiones.

¿Qué significa esto? Que el proyecto ya aprobado por la Cámara de Diputados tiene un defecto -lo decía muy bien en una conversación ayer el Senador Alejandro Guillier y también lo manifestaron el Senador Rossi y otros más-, porque mantiene el binominal en 7 regiones, en 7 circunscripciones.

Entonces, en la Cámara Baja decíamos: "chao al binominal en 100 por ciento". En el Senado solo lo hacemos de manera parcial. Es perfectamente posible con 50 Senadores, con 53 Senadores y con 55 Senadores (las tres fórmulas han sido estudiadas por expertos) eliminar en 100 por ciento el binominal. Si no, la gente de Arica, de Tarapacá, de Atacama -que usted representa, señora Presidenta -, de Los Ríos, de Aisén, de Magallanes van a seguir eligiendo con el binominal.

Ahí tenemos una dificultad. Espero que podamos convencer a otros actores políticos acá presentes a fin de que no piensen que este es un cálculo electoral. Lo digo con nombre y apellido, pues soy Senador por Aisén -elegimos dos-, acá hay otros Senadores de Magallanes , en fin. No lo decimos con calculadora. Si quieren que rija en la elección subsiguiente, no tenemos problema, ¡no tenemos problema! Pero vamos a dejar un lastre llamado "sistema electoral binominal" en varias regiones de Chile. Y eso es lamentable. Porque estamos haciendo un acuerdo en la medida de lo posible por las autolimitaciones que nos imponemos.

Y eso, reitero, ¡lo considero lamentable!, señora Presidenta .

Quiero señalar, a su turno, que algunos dicen que este tema no le interesa a la gente. Que el binominal y la supramayoría no tienen nada que ver con lo que a ella le importa. ¡Falso! Los temas de educación, de salud, de justicia y muchos otros hoy se resuelven por un Parlamento poco legitimado, empatado. Por una democracia empatada.

Para que las mayorías sean mayorías, y no estén sujetas al veto de las minorías, hay que realizar cambios institucionales: eliminar, ojalá, la supramayoría (los cuatro séptimos) -no me refiero a los quórums de las reformas constitucionales, que en todos los países del mundo son superiores a los de mayoría simple o absoluta- y terminar con el binominal.

Eso es fundamental.

No basta con modificar el binominal -reitero- en la supramayoría también hay que hacer un cambio.

Quiero valorar -acá están la Ministra del SERNAM , Claudia Pascal ; la Ministra Secretaria General de la Presidencia , Ximena Rincón ; el Ministro Secretario General de Gobierno , Álvaro Elizalde - lo relativo a las cuotas de las mujeres. En Chile, hoy solo el 15 por ciento de las integrantes del Parlamento son mujeres. Y eso no es aceptable. Lo digo como padre de tres hijas. Las mujeres merecen más espacio en el Parlamento. No es que esté proclamando anticipadamente a alguna hija como candidata. Son muy chicas todavía.

El señor BIANCHI .-

¡Una Walker más¿!

El señor WALKER (don Patricio).-

¡No quiero más Walker en el Parlamento¿! Aunque todos fuimos elegidos democráticamente por distintas regiones de Chile, sin ser nominado por alguien.

Quiero decir que es muy importante la propuesta que se hace. Además, es transitoria: 2017, 2021, 2025, 2029, y tiene incentivos económicos. Me parece bien.

Finalmente, en cuanto a la obligatoriedad del voto, señora Presidenta , yo me jugué por el voto voluntario. Con incentivos, eso sí, no con lo que aprobamos. Y fue un fracaso. Dijimos: "no, si los jóvenes ahora van a votar y se dinamizará la democracia, al rejuvenecerce el padrón electoral". ¡Falso! Los jóvenes ni siquiera votan en elecciones de federaciones de estudiantes. En la FECH votaron el 45 por ciento de los estudiantes.

El señor PIZARRO.-

Menos del 45 por ciento.

El señor WALKER (don Patricio).-

O menos del 45 por ciento, me dice el Senador Pizarro. O sea, no se trata solamente de que no quieran participar para elegir Presidente, parlamentarios, sino que no votan ni siquiera para elegir sus federaciones de estudiantes.

Y ahí nos equivocamos.

Porque lo que produce el voto voluntario es la elitización. Hay estudios que lo demuestran: en Las Condes vota la inmensa mayoría; en La Pintana, casi nadie.

Y quiero decir otra cosa: se va a modificar el financiamiento a la política, a los Partidos y a las campañas. Parece que ya no van a donar más las empresas; que se sabrá qué personas naturales donan, etcétera, etcétera.

¿Qué va a producir esto? Un riesgo. ¿Cuál? Que vuelvan los maletines, que vuelvan los sobrecitos. ¿A quién beneficia eso? A los que tienen recursos para acarrear personas, para trasladar personas a votar.

Esos son los vicios del voto voluntario.

Debemos recordar que los ciudadanos tienen no solo derechos, sino también obligaciones. Dado que los jóvenes solicitan crédito fiscal universitario -el día de mañana espero que solo sean becas-, subsidios para la vivienda, etcétera, lo mínimo es pedirles que una vez cada cuatro años, en el caso de las elecciones parlamentarias y presidenciales, y un año antes, para las municipales, vayan a sufragar, para que el día de mañana tenga legitimidad que exijan derechos al Estado.

Vamos a votar a favor, naturalmente.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Tiene la palabra el Senador señor Moreira. Como Su Señoría intervino ayer, solo dispone de hasta cinco minutos.

El señor MOREIRA.-

Señora Presidenta , he hecho una estadística: en esta sesión 15 veces les han echado la culpa a Pinochet y a la dictadura del sistema electoral; 10 veces han dicho que este es un sistema perverso; 12 veces han hablado de que estamos haciendo historia, y 3 veces han opinado que el voto debiera ser obligatorio.

Les pregunto: ¿saben cuándo se hace historia? Cuando somos capaces de construir un país mucho más justo; cuando mejoramos la salud, la calidad de la educación, el empleo; cuando le damos seguridad a la gente.

¡Así se hace historia!

Ahora manifiestan que el sistema es perverso. ¡Más perverso es haberlo utilizado por largos años! Cuando les convenía, lo aprovechaban y entonces callaban sus opiniones al respecto.

Son cosas que uno verdaderamente no entiende.

Yo reivindico el sistema binominal aquí, en esta Sala.

He sido elegido democráticamente y en una circunscripción donde la Izquierda doblaba. Ahí gané. Me tuve que ir a la Región de Los Lagos. ¡Muy bonita Región! Hay mucho por hacer. Y créanme que la experiencia de vivir en una región me ha hecho sentir verdaderamente lo que es el centralismo, que es un poco de lo que habla este proyecto de ley.

¿Por qué reivindico este sistema? Por una razón tremendamente importante: porque le dio estabilidad democrática a nuestro país, le dio solidez.

Lo reivindico con mucho orgullo.

Puede haber tenido muchos defectos, pero cumplió un ciclo y una finalidad: permitió que en Chile hubiera estabilidad, tranquilidad, paz social, acuerdos.

Entonces, ¡no nos lavemos las manos y no sigamos echándole la culpa a la dictadura!

Además, señora Presidenta, el sistema binominal brindó las condiciones necesarias para que Chile progresara y se desarrollara. Yo dudo que eso pase con el mecanismo propuesto.

Durante muchos años el país progresó, y en democracia también. Así que ojo con lo que se dice.

¡Aquí todos se olvidaron de mi General, pues! ¡Ahora todos se lavan las manos!

No se olviden de que en Chile hubo un Gobierno militar. Con todos los defectos que se quieran señalar, este permitió paz en el país y una transición pacífica hacia la democracia, proceso que en el mundo entero nunca se había dado.

Lamentablemente, no partimos bien con este proyecto de ley.

Algunos han sostenido que respaldarán la idea de legislar, pero rechazarán las normas del articulado. Yo prefiero votar todo en contra de una vez por todas, a no ser que la Nueva Mayoría presente una iniciativa distinta.

Claramente, para mí aquí no hay igualdad de voto. Podrán algunos opinar lo contrario. Pero así es.

En otro ámbito, me parece un contrasentido bajar los requisitos para constituir un partido político justo en los momentos en que la institucionalidad política del país no goza de buena evaluación. En efecto, este proyecto aumentará el debilitamiento del prestigio de los partidos políticos, porque cualquier grupo podrá constituirse en uno, sin contar con legitimidad social a nivel nacional para ejercer adecuadamente el rol propio de aquellos conglomerados. Así, cualquier grupo de interés podrá terminar constituyéndose en partido, desordenando el debate político que debe existir y exponiéndonos innecesariamente a un ambiente de inestabilidad e ingobernabilidad.

Yo agradezco al sistema binominal por permitir que Chile tenga la democracia que vive hoy.

Si se trata de avanzar, ¡avancemos!, pero con una iniciativa de verdad, una en la cual el voto obedezca a un principio de igualdad y no a las conveniencias electorales.

Por último, señora Presidenta , cabe señalar que el proyecto es un traje a la medida -¡por supuesto!-, porque con él ustedes, la Nueva Mayoría y otros sectores de Izquierda, se van a perpetuar en el poder aquí. Habrá una proporción de 3 a 1.

La UDI -soy consciente de ello- no está por aprobar un traje a la medida ni para hacerle ajustes. No vamos a convertirnos en sastres -porque no lo somos- de una iniciativa que es mala. Podría haberse mejorado, pero no hubo voluntad política.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta , más allá de los deseos, más allá de las esperanzas, más allá de las convicciones, este proyecto, tal como está hoy, será recordado como uno de los peores diseñados en la historia de este Parlamento. No recuerdo uno sobre otros asuntos políticos con un desarrollo final tan pobre como el que nos ocupa. Incluso, los más férreos y fanáticos defensores de un cambio de esta naturaleza han tratado de justificar un anhelo. Pero nadie está convencido de que la forma propuesta sea la indicada.

La razón de por qué ocurre esto es muy simple: la iniciativa está basada en tres mitos y en tres trampas.

Eso es lo que hoy estamos percibiendo y desarrollando, de alguna manera.

El primer mito para tratar de destruir el sistema binominal -aunque son igual de legítimos el uninominal, el binominal y el proporcional, ya que los tres existen en nuestra legislación- es instalar la idea de que produce un problema de participación y desarrollo de la política. Tal fundamento aparece incluso en parte del mensaje.

Pero ese planteamiento nada tiene que ver con lo que ha ocurrido. Por ejemplo, en las elecciones parlamentarias, regidas por el sistema binominal, se vota más que en las elecciones municipales, donde opera uno proporcional.

¿Qué tiene que ver el porcentaje de participación ciudadana con el cambio de régimen electoral? ¡Nada! Pero se instala como un mito, como si automáticamente la participación de la gente fuera a aumentar con el establecimiento de un nuevo sistema.

Un segundo mito tiene que ver con la representación.

Se dice que el binominal encapsula movimientos, que limita la libertad de acción y que imposibilita que haya una diversidad adecuada dentro del desarrollo político. Sin embargo, hoy siete partidos políticos se encuentran representados y, además, hay independientes. Estos han podido salir elegidos perfectamente. Por tanto, ningún estudio serio ni razonable puede argumentar que en el sistema actual hay un problema de diversidad. Nuestro Congreso hoy cuenta con la diversidad que exhibe cualquier otro parlamento en el mundo.

Pese a ello, este segundo mito trata de instalarse y desarrollarse. Pero es solo un mito.

Y el tercero señala que el binominal dificulta la renovación.

Curiosamente, se ha planteado que el esquema actual impide modernizar y renovar la política, pues dificulta que nuevos rostros puedan participar activamente en las elecciones. Pero lo cierto es que, gracias a este vilipendiado sistema, hoy contamos con una de las tasas de renovación más importantes de Latinoamérica y del mundo. De hecho, se llegó casi al 40 por ciento de renovación en la última elección.

Es curioso cómo la obsesión va tratando de mitificar. De esta manera, si uno equivoca el análisis, también equivocará la solución.

El motivo por el cual el proyecto está muy mal desarrollado radica en una concepción muy equivocada de los problemas de la política y, por ende, de Chile. Al confundir esto con las conveniencias particulares de algunos sectores, se termina asumiendo que un bien personal es el bien del país.

Por eso estamos discutiendo este engendro de iniciativa, que resulta muy difícil explicar a alguien que quiera entenderlo de buena fe.

Esos son los tres mitos y ahora me referiré a las tres trampas.

La primera es tratar de resolver los problemas de participación, representación y renovación con el aumento de parlamentarios.

¿Qué tienen que ver los problemas de la política en cualquiera de sus esquemas con el hecho de que, eventualmente, falten parlamentarios?

Les cuento que hace poco ha salido un libro de la Unión Interparlamentaria -quienes han tenido acceso a foros internacionales lo sabrán- que muestra el número de congresales por países y por regiones. Según dicho texto, el promedio es un parlamentario cada cien mil personas, casi exactamente lo que pasa en Chile.

Con el esquema propuesto en la iniciativa, seremos de los países con más parlamentarios por personas.

¿Por qué se sugiere tal cambio? Porque se asume que el problema guarda relación con la cantidad de miembros del Congreso.

No conozco un argumento serio -porque todo se puede plantear- que honestamente permita decir: "Sí, faltan diputados". De repente alguien señala: "Faltan senadores". Pero ¿en qué se traduce eso? ¿En qué se nota? ¿Qué hace concluir que tal propuesta implica un mejor desarrollo legislativo?

No he visto un solo argumento de verdad en ese sentido.

La trampa consiste en calzar los problemas internos con los del país. Como algunos PPD se suman a ciertas circunscripciones, como unos democratacristianos coinciden en determinadas zonas, etcétera, la única forma de hacer viable este sistema, en teoría, es confundir los problemas de Chile con los de quienes gobiernan, motivo por el cual se propone aumentar el número de parlamentarios.

Respecto de tal incremento, señor Presidente , no veo hoy ninguna argumentación inteligente, serena, reflexiva.

La única explicación es una trampa: confundir los conflictos del país con los de una coalición política.

La segunda trampa -lo dijo el Senador Moreira- tiene que ver con lo relativo a la constitución de partidos. Este asunto es superdelicado. Al parecer, otro problema de Chile sería la existencia de pocas tiendas políticas.

Una de las conclusiones que recuerdo haber leído hace ya varios años de un documento sobre reforma constitucional del Grupo de los 24 se refería a la importancia de entender que el pluripartidismo era una gran dificultad en ese entonces. Y se propusieron fórmulas indispensables para la formación y mantenimiento de los partidos.

La proliferación de estos implica no solo un desarrollo de la diversidad, sino también una pérdida de la estabilidad, lo cual es bastante complejo. Pienso en los partidos bisagra, en los que en determinado momento pueden generar una suerte de dominio de las minorías sobre las mayorías. Esto no es deseable en ninguna perspectiva de ciencia política, según lo que he leído.

Al contrario, los países tratan de reunir algunos pocos y sólidos partidos, con estructuras amplias, para integrar a personas de distinta naturaleza.

Sin embargo, la iniciativa propone bajar el requisito para formar un partido político a 0,25 por ciento de las personas que votaron en una elección.

Tal vez 93 personas en Aisén cumplan esa condición. No sé. Quizás con 450 personas distribuidas a lo largo del país sea posible constituir un partido en tres regiones, conforme a la disposición que se plantea. Y este nuevo conglomerado podrá llevar candidatos en todas partes. No tengo idea cuántos (uno, diez, cien, mil). Es ilimitado.

Tal sistema, dada la correlación en materia de votos, evidencia una perversión en sí mismo: implica un debilitamiento de la institucionalidad partidaria.

Objetivamente, eso no le conviene a nadie. No ha habido un desarrollo intelectual o formativo que permita entender por qué resultará necesario que en Chile existan cien partidos.

Si alguien me convence con fundamentos -igual que en lo relativo al número de parlamentarios- de que el problema de Chile es la escasa cantidad de partidos, veamos cómo lo hacemos: constituyamos cien partidos y desarrollemos ideas bastante más originales en esa lógica.

Y la tercera gran trampa es la del traje a la medida.

Para ser franco, el traje se quedó corto. Se trata de un diseño a la venezolana, en el que se van estructurando, bordando, cuidadosamente los pliegues del sistema para lograr un único resultado final: un éxito electoral importante para la Nueva Mayoría .

El ejemplo más grotesco -algunos han realizado grandes esfuerzos intelectuales para intentar desvirtuarlo- se observa en la diferencia entre la Región de Atacama y la de Tarapacá.

En la primera, pese a registrar menos personas que en la segunda, se eligen cinco diputados. Y tiene una característica: ahí están más concentrados -algún día esto puede cambiar- los votos de la Concertación.

Pero en Tarapacá se da la situación opuesta: con más electores, se eligen tres diputados.

Entiendo que se sostenga que el sistema binominal otorgaba incentivos. Asimismo, alguien me podrá decir que impedía la diversidad, porque era factible que una minoría se asimilara mucho a lo que una mayoría pudiera lograr. Sin embargo, en la práctica, nunca se dio un resultado así.

Pero esto otro es muy distinto. No es incentivar. Es darle un valor predeterminado al sistema: en algunos lugares, por su extracción política, se eligen cinco y en otros, que son más malos para el Gobierno, se eligen tres.

Díganme en qué democracia del mundo se plantea algo similar, sobre todo si el sistema considera un número de candidatos variable: pueden ser tres, cuatro, cinco, seis, ocho.

Al menos, en el binominal la lógica era permanente. Y al final, curiosamente, se produjo muy poca distorsión.

Sin embargo, lo propuesto en el proyecto es diferente: un traje a la medida.

No sé si el sastre fue Auth o alguien distinto. Como sea, en el diseño planteado claramente se observa un ánimo a la venezolana, como lo que realizó Chávez: con muchos menos votos que la Oposición sacó muchos más parlamentarios, elaborando estos bordados a la medida, propios de actividades distintas de lo que es el áspero ejercicio de hacer que las cosas funcionen bien dentro de la institucionalidad de un país.

Señor Presidente , una cosa es reflexionar acerca de la naturaleza de los sistemas electorales. Ello es perfectamente discutible, y entiendo que haya opiniones legítimas en un sentido y en otro. Pero algo muy diferente es sustentarse en mitos, en materias de participación, representación y renovación, para legislar en función de trampas con relación al número de parlamentarios, a la cantidad de partidos y al resultado esperado de una elección.

Supuse que este debate iba a llegar algún día y he sido parte de muchos otros. De hecho, colaboré en su minuto en algunos acuerdos en materia electoral. En el plano municipal también me tocó una activa participación.

Pero, para ser franco, nunca imaginé que un asunto de esta envergadura iba a estar inspirado no en lo que objetivamente le conviniera al país, sino en el cálculo bordado, que es propio de otro tipo de hemisferios políticos y que, lamentablemente, veo que ha llegado a Chile.

En consecuencia y con convicción, voto que no. Este proyecto es demasiado malo como para aprobarlo.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador señor Zaldívar.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

Señor Presidente , creo que uno no puede guardar silencio en este debate, menos aun cuando a uno le ha tocado participar desde hace mucho tiempo en esta materia, con un juicio muy crítico sobre el sistema electoral vigente.

Cuando se impuso la Constitución de 1980, este ya era un asunto de alta tensión y objeto de crítica por parte de quienes en ese minuto estábamos en la disidencia.

Fue una de las causas de lucha más importantes. Cuando se derrotó a la dictadura gracias al plebiscito del 88, se planteó que este sería uno de los principales puntos por solucionar.

En el año 89, cuando se produjo la negociación política y se lograron algunos avances, nos encontramos con una absoluta cerrazón respecto de esa reforma.

Recuerdo -porque fui parte de esas conversaciones- que un sector de la Derecha que había apoyado a la dictadura, encabezado por el Senador Jarpa, se comprometió a abordar este asunto a futuro. Dicho sector corresponde a lo que hoy es Renovación Nacional.

En los diarios de ese entonces constaron las declaraciones públicas en torno al compromiso de corregir el sistema binominal, aunque ello quedaba pendiente para otra oportunidad.

No sucedió lo mismo con quienes representaban a la UDI. Este conglomerado -hay que reconocerlo- ha sido un defensor implacable del actual régimen electoral.

Al respecto, no voy a expresar prejuicios. Eso sí, me referiré a algunas cosas que señaló el Senador que me antecedió en el uso de la palabra.

El sistema binominal fue creado por dicho partido para recibir un premio permanente. Ello es indiscutible. Si se revisa la representación obtenida por la UDI con relación a la que alcanzó Renovación Nacional en las últimas elecciones, se observará que la proporcionalidad de uno y otro es desigual, pese a pertenecer a la misma alianza.

Por lo tanto, no corresponde sostener que aquí se están creando distritos para arreglar a algunos. Invito al colega que me precedió a que revise cómo se formaron los distritos el año 89. Entonces se hicieron muchos recovecos para lograr cierto resultado.

Con todo, ese no es el asunto importante.

Lo relevante es que, luego de 24 años, recién estamos votando la idea de legislar para reformar el sistema binominal. Después habrá que entrar al análisis en particular para lograr el objetivo.

Y yo me alegro, porque es un paso más.

La negociación que hicimos el año 2005 la empezamos -yo era Presidente del Senado - el año 2000. Y ese proceso, en el que después participó también el Senador Hernán Larraín , quien me sucedió a mí en la Presidencia de esta Corporación, culminó en las reformas constitucionales de ese tiempo.

Y nuevamente ese fue un tema que salió.

Yo voy a hacer una confesión hoy día. Nosotros tuvimos la posibilidad de lograr una cierta mayoría, con la reforma que se estaba haciendo el 2005, si no hubiéramos eliminado los Senadores institucionales y los Senadores vitalicios. Y hubo algunos que sintieron esa tentación. Porque, indiscutiblemente, con el sistema binominal, sin la eliminación de los Senadores institucionales -la nominación de los nuevos Senadores institucionales iba a corresponder a nuestros gobiernos-, podríamos haber armado una mayoría.

Sin embargo, fuimos consecuentes y eliminamos los Senadores institucionales y los Senadores vitalicios.

Bueno, pero lo único que logramos, en relación con una posible reforma electoral -en esto participó el Ministro Insulza-, fue eliminar el número de Senadores que estaba en la Constitución -no me acuerdo exactamente cuál era-, y pasarlo a la Ley Orgánica. Y se nos quedó el número de "120" Diputados, que no pudimos sacarlo.

Hace poco tiempo, en virtud de un acuerdo a que llegamos con Renovación Nacional, logramos sacar el número "120" en el caso de los Diputados. Y eso nos permitió dar otro paso más para arribar a la discusión en que hoy día estamos.

Y, por supuesto, con la última elección se han dado las condiciones, porque Senadores del mundo independiente se han sumado también a la convicción de que resulta necesario modificar el sistema. Incluso, yo creo que la votación de hoy día va a demostrar que, en general, va a haber un aporte importante de todos los sectores políticos -no sé si de la UDI- en términos de abrir el espacio para poder hacer la reforma.

Y eso es un avance.

Por otra parte, nosotros como Democracia Cristiana, con el respaldo de la Concertación en su tiempo, llegamos a un acuerdo con Renovación Nacional para avanzar nuevamente en esa reforma.

En un momento dado yo creí que algunos Senadores de Renovación Nacional podrían rebelarse en contra de la propuesta que le entregó, oficialmente -es lo que yo he sabido-, el Presidente de su Partido al Ministro del Interior , con miras a hacer una modificación al sistema binominal y establecer un sistema proporcional limitado.

Eso me recuerda lo que pasó el año 2003 en este mismo Senado. Siendo Presidente del partido Sebastián Piñera -después llegaría a la Presidencia de la República -, Renovación Nacional se reunió en Temuco y tomó el acuerdo de modificar el sistema binominal. Y me recuerdo que cuando llegó el momento de la votación se produjo una situación bien inverosímil: casi la totalidad de los Senadores de Renovación Nacional se rebelaron en contra del acuerdo de su partido y de quien después sería el Primer Mandatario.

Y no hubo posibilidad de hacer la reforma.

Eso me trajo a la memoria un dicho muy popular que me citó una vez el entonces Presidente del Senado , Fernando Alessandri , cuando yo le fui a pedir una votación importante. Él me dio el apoyo -yo iba como Ministro de Hacienda -, pero yo le dije: "Bueno, ¿y cómo se va a entender usted con su partido, que está en contra?". Él me respondió algo que, al parecer, era cierto: "Donde mandan cardenales, no mandan sacristanes". Y, efectivamente, los Senadores, que eran los "cardenales", tomaban las decisiones con mayor fuerza que su propia directiva.

Bueno, hoy día vamos a poder dar un paso más.

Tal vez no es lo que todos quisiéramos, pero nos permitirá dejar atrás el hecho de que este sistema siga siendo una camisa de fuerza para nuestra democracia.

Aquí hay también un tema muy delicado: el sistema binominal no solo altera la proporcionalidad, sino que incluso produce situaciones de injusticia inmensa.

Yo me recuerdo que el año 89, cuando fui candidato a Senador por Santiago junto con el ex Presidente Lagos , sacamos el 64 por ciento de los votos. Ricardo Lagos sacó la segunda mayoría nacional. Y Jaime Guzmán , persona muy respetable, obtuvo solo el 21 por ciento de los votos. Y resultó elegido Jaime Guzmán y no Ricardo Lagos .

Esa es una experiencia personal, de una campaña pasada.

El sistema binominal actual tiene otro problema: el hecho de la cerrazón de las listas, que no permite la promoción de nuevas candidaturas. Porque el número de candidatos está siempre limitado. Y, muchas veces, los que tenemos los cargos nos encontramos en una posición privilegiada para los efectos de la reelección, lo que lleva también al desprestigio de la política. Y por eso a menudo se oye hablar de la conveniencia de limitar las reelecciones. Porque se produce ese efecto; este sistema lo permite.

Por todas esas razones, con mucha alegría, yo voy a votar a favor de la idea de legislar. E invito a todos los Senadores, de todos los sectores, a aportar en la discusión particular para que saquemos una ley que termine con un sistema que no es representativo en su esencia; que realmente nos permita elegir a quienes corresponden, de acuerdo con la representación popular que se les dé por la vía del voto; y, además, que le dé espacio a otras personas también, para que haya más posibilidades de acceder al Parlamento.

Señora Presidenta , voto que sí, y espero que en la discusión en particular podamos mejorar el proyecto, para recoger todos aquellos aportes que lleven a perfeccionar nuestra legislación electoral.

Muchas gracias.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Tiene la palabra el Senador señor Hernán Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, la verdad es que me va a faltar tiempo para poder hacerme cargo de muchas afirmaciones equivocadas que se han hecho en este debate.

Por ejemplo, el Senador que me antecedió en el uso de la palabra se refirió a la pérdida de Ricardo Lagos. Bueno, ella no tuvo que ver con el efecto del binominal, como equivocadamente se dice, sino con el efecto de los sistemas de lista.

Esa situación se ha producido, por ejemplo, en las elecciones municipales, en innumerables oportunidades.

Recién me recordaba el Senador Coloma que hace dos elecciones municipales hubo diez concejales que sacaron la primera mayoría en su lugar, y se perdieron.

¿Es eso efecto del binominal, cuando las elecciones de concejales son sistemas proporcionales?

Yo les pido que no culpemos al binominal de lo que no es responsable. Porque una cosa no tiene que ver con la otra.

Y tampoco le echen la culpa solamente a la Oposición por el hecho de que no haya habido cambios en el sistema binominal.

Efectivamente, parte de responsabilidad ha habido. Pero quiero recordar, por ejemplo, que en la primera Administración de la Presidenta Bachelet se puso a Edgardo Boeninger a cargo de una comisión para proponer un cambio al sistema electoral. Lo propuso. ¿Y quién lo desahució? Los presidentes de los partidos de la Concertación: Camilo Escalona , Sergio Bitar , Alejandro Foxley -no recuerdo quiénes más- dijeron que ese sistema no les gustaba.

Entonces, no mistifiquemos las cosas más de lo necesario.

Yo voy a abstenerme de darle mi apoyo a este proyecto. Ello, para dar la señal, precisamente, de que estamos disponibles para cambiar el actual sistema. Pero no puedo apoyar un sistema malo, inconveniente para Chile, como el que se está proponiendo.

Este sistema, señora Presidenta, es injusto y es excesivo.

Es injusto, porque, rompe la igualdad del voto para hacer un traje a la medida para la Nueva Mayoría.

Y yo creo que es bueno que lo admitan, porque no hay peor sordo que el que no quiere oír.

Voy a dar ejemplos.

Quiero preguntarles cómo van a explicar lo que les está pasando en sus circunscripciones.

Por ejemplo, ¿cómo van a explicar los Senadores Rossi y Orpis que en la Primera Región , con 222 mil electores, se elijan tres Diputados, en circunstancias de que en la Tercera Región, con menos, con 221.606, se elegirían cinco?

¿Cómo van a explicar los Senadores Espina y Quintana que en la Novena Región Norte, con 268 mil electores, se elijan cuatro Diputados?

¿Cómo vamos a explicar con el Senador Matta que, con 281 mil electores, en la Séptima Región Sur se elijan cuatro Diputados?

¿Cómo van a explicar el Senador Moreira y el Senador Quinteros que en la Décima Región Norte, con 293 mil electores, se elijan cuatro Diputados?

¿Cómo van a explicar el Senador García-Huidobro y el Senador Letelier que en la Sexta Región Sur, con 299 mil electores, se elijan cuatro Diputados, y en la Tercera Región, con 221 mil -es decir, bastantes menos votos-, cinco?

Yo quiero preguntarles a los Senadores de Santiago cómo van a explicar que en Conchalí, Recoleta y Cerro Navia , con 810 mil votos, o en el distrito nuevo que se crea en La Florida y Puente Alto, con 790 mil votos, se elijan siete Diputados, mientras en la Quinta Región Costa, con menos electores, 760 mil; o en la Octava Región Centro, con 744 mil, o en la Quinta Región Cordillera, con 712 mil -es decir, menos que en los dos distritos de Santiago mencionados-, se elijan ocho.

¡Se eligen más Diputados en distritos que tienen menos electores!

Y, en otros distritos de Santiago, cómo se va a explicar que en San Bernardo y Melipilla , con 663 mil electores, o en Las Condes y Peñalolén, con 643 mil electores, se elijan seis Diputados; o que, en el caso de La Cisterna y San Miguel , con 585 mil, se elijan cinco, y, sin embargo, en la Novena Región Sur, con 543 mil electores -es decir, menos que en los tres distritos antes mencionados-; o en la Cuarta Región, con 538 mil, o en la Séptima Región Norte, con 527 mil, se elijan siete.

Aquí hay diez -¡diez!- distritos con alteración flagrante de la igualdad del voto.

Yo entiendo que no se puede conseguir una igualdad del voto total. Pero esto es burdo, inaceptable.

El proyecto, además, es excesivo: no se requieren tantos parlamentarios. Y genera una atomización del poder político que va a impedir la gobernabilidad futura, porque se van a poder crear múltiples partidos, como ya se ha señalado. Hay distritos grandes donde la relación de los parlamentarios con sus electores será muy difícil, o que van a ser muy costosos, o que van a impedir que los dirigentes locales puedan ser parlamentarios.

En suma, el proyecto despierta muchas inquietudes.

Señora Presidenta , ¿es mucho pedir que revisemos la estructura de la Cámara -y, por cierto, la del Senado-, para alcanzar un acuerdo justo para todos? ¿Por qué se impide que aquí, en nombre de un acuerdo político en la Cámara, podamos revisar la estructura de esa Corporación, cuando se ha demostrado que no responde a la igualdad del voto?

Quiero decir que no es justo, y anuncio nuestra disposición para trabajar en un nuevo sistema electoral, racional y equitativo, en la Comisión de Constitución o donde sea necesario.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Tuma.

El señor TUMA.-

Señora Presidenta , ¡tantos años esperando este debate! ¡Se han cumplido más de dos décadas desde que se recuperó la democracia y recién ahora estamos discutiendo si aprobamos en general o no el cambio al sistema binominal!

El camino institucional que decidimos transitar y que heredamos nos obligó a avanzar a través de una larga transición pactada.

Impulsamos cambios graduales, fuimos reponiendo el sistema democrático; paso a paso y capa a capa, fuimos desmontando el intrincado sistema político diseñado para perpetuar el modelo económico y social instaurado por la dictadura militar - Senador Moreira , para que la contabilice, acabo de citar a la "dictadura" en mi intervención- y los entusiastas colaboradores civiles de ese régimen.

Era un complejo engranaje autoritario, que comprendía el deleznable artículo 8°; la inamovilidad de los Comandantes en Jefe; la tutela de las Fuerzas Armadas, con poder de autoconvocarse a través del COSENA; los Senadores designados que la Concertación eliminó, pudiendo haber usado esa figura en su favor; los quórums especiales para las reformas de las principales normas, y un sistema electoral que distorsiona hasta ahora la voluntad popular.

Dos décadas es un corto plazo para hacer un juicio político, histórico sobre la transición. Y es claro que el país presentó avances sustantivos en ámbitos claves como la disminución de la pobreza y la eliminación de los enclaves autoritarios.

Pero esta valoración no debe cegarnos respecto a las tareas pendientes que tenemos, a las nuevas demandas de la ciudadanía y, en especial, ante el agotamiento que presenta nuestra institucionalidad.

Chile evidencia un desajuste entre una sociedad que ha experimentado cambios económicos, sociales, políticos y culturales por un lado, y estructuras y liderazgos políticos que aparecen más y más distantes de la población, por el otro.

En los últimos cinco años las movilizaciones han puesto en jaque al sistema político, cuestionando la capacidad de representar las problemáticas de la sociedad. Esa brecha entre la ciudadanía, el Gobierno y los representantes políticos se agrava aún más porque los canales de participación no son suficientes y porque mantenemos intacta buena parte de la institucionalidad heredada de la dictadura -las Isapres, las AFP, el Código Laboral, el Código de Aguas-, que afecta directamente al ejercicio de los derechos.

Aquí no se trata de partir de cero, de hacer borrón y cuenta nueva. Pero tampoco podemos perpetuar una institucionalidad que corresponde a una mirada neoliberal extrema, que no da cuenta de las necesidades de la población.

Revisar la institucionalidad y adaptarla a los nuevos tiempos es inherente al sistema democrático. La democracia representativa no es capaz de responder a las expectativas de los ciudadanos en la nueva era de la información y de la desconfianza que hemos creado. Tenemos que dar un paso importante hacia una democracia deliberativa, que extienda la participación y la decisión de los ciudadanos más allá del sufragio para la elección de los representantes. Debe incorporarlos a la toma de decisiones en los diversos ámbitos de la vida pública, especialmente en los que dicen relación con la vida cotidiana en los ámbitos territoriales, regionales y comunales.

Todos coincidimos -y lo reiteramos demasiadas veces- en la necesidad de perfeccionar la democracia. Pero son escasas las iniciativas que aportan a este propósito. Por eso, es urgente que aprobemos, de una vez por todas, la reforma electoral, que será un avance, pero está lejos de ser suficiente.

Desde luego, es fundamental terminar con la distorsión del sistema binominal e incorporar normas de equidad de género. Del mismo modo, tenemos que avanzar en la creación de una institucionalidad política para la representación de los pueblos indígenas de Chile, y garantizar su representación en los cuerpos colegiados y en el Poder Legislativo .

Solo de este modo podremos establecer un diálogo político, legítimo y representativo para buscar una salida institucional a un conflicto que ha transformado en víctimas a todos los habitantes de la Región de La Araucanía, mapuches y no mapuches, debido a la incapacidad del Estado de Chile de ofrecer una respuesta a la deuda histórica con los pueblos originarios en más de doscientos años de vida republicana.

Respaldo la propuesta del Gobierno, y respaldaré todos los perfeccionamientos que se deban introducir en materia electoral, porque la democracia no tiene precio y porque, al contrario de lo que algunos plantean, el país requiere extender su sistema democrático, ampliar los espacios de participación y representación, aumentar los ámbitos de sufragio, promover la organización de la sociedad civil, estimularla y otorgar los recursos e institucionalidad para el funcionamiento de los organismos intermedios.

Seamos claros: fortalecer la democracia, sea a través de la creación de un ministerio, de nuevas comunas o de una región, tiene costos. Y no estoy disponible para sumarme a discursos eufemísticos o poco claros que eluden el tema del financiamiento de los nuevos parlamentarios.

Otra cosa es que revisemos el sistema de financiamiento e incorporemos cada día mayor transparencia y mayores controles públicos y ciudadanos. Pero no es sano para la democracia promover los discursos populistas que cuestionan el funcionamiento y el financiamiento de las instituciones públicas so pretexto del desprestigio de la política. Ampararse en esta excusa para oponerse a este cambio político es profundizar ese desprestigio.

La propuesta de reforma electoral presentada por el Gobierno aumenta los Diputados de 120 a 155, y los Senadores de 38 a 50. Sin embargo, estoy abierto a discutir las inquietudes planteadas por los Senadores independientes y de las zonas extremas para perfeccionar el sistema de cuotas de género que, en hora buena, incorporó la Presidenta Bachelet en esta reforma, y mejorar la competitividad de los candidatos independientes.

El proyecto disminuye considerablemente las distorsiones de subrepresentación y sobrerrepresentación parlamentaria que impone el sistema binominal. No las elimina del todo. Porque no existe el sistema electoral perfecto que busca el Senador Larraín .

De los 28 distritos actuales, con este proyecto 22 mejoran la relación entre el porcentaje de escaños asignados a cada uno y el porcentaje de la población representada.

Se ha planteado que esta reforma es un traje a la medida, que no mejora la proporcionalidad o que el incremento de parlamentarios es excesivo.

La verdad es que no hacemos otra cosa que reponer la tradición electoral de nuestra democracia, que mantuvimos por muchos años sin apelaciones y sin reclamos con respecto a falta de representación.

A partir de la dictación del decreto ley N° 343, de marzo de 1925, la legislación pertinente estableció la elección de un Diputado por cada 30 mil habitantes o fracción superior a 16 mil, y el número de escaños a ser electos se reajustaba con los resultados del Censo. Es decir, cada diez años la composición de la Cámara de Diputados variaba con relación a la demografía de nuestro país.

Entre las elecciones de 1925 a 1973 la Cámara Baja aumentó de 132 a 150 Diputados, y la Cámara Alta, de 45 a 50 Senadores.

Desde 1989 a 2013, es decir a lo largo de siete elecciones parlamentarias, se ha mantenido la misma cantidad de escaños en la Cámara de Diputados y en el Senado, con tres censos de por medio, en los cuales la población varió considerablemente (no sabemos exactamente cuántos habitantes somos, pues hubo una falla sustantiva en el conteo).

Por tanto, aumentar los escaños tal como establece este proyecto de ley no es una novedad en la historia electoral de nuestro país. Tampoco constituye un traje a la medida. Sí lo fue la Constitución del 80, con toda su institucionalidad al servicio de los grupos económicos y con su correlato político.

La reforma al sistema electoral permitirá mejorar la representatividad y gobernabilidad de nuestro sistema democrático; expresará de manera más nítida las mayorías y las minorías que representan las demandas y expectativas de los ciudadanos; dará cuenta de la diversidad del país, y mejorará la valoración del Congreso Nacional, Poder del Estado que registra la menor valoración en su historia.

La reforma planteada es un claro avance para perfeccionar la democracia. Nos permite destrabar un debate que lleva más de dos décadas, y luego, avanzar hacia la revisión de otros ámbitos de nuestra institucionalidad, como la Constitución, el régimen político, el perfeccionamiento del sistema de partidos y el financiamiento de la política, para terminar con la relación incestuosa entre el dinero y la política y ampliar los ámbitos de deliberación y control social de los ciudadanos.

Apruebo estas modificaciones al sistema electoral, y con el mismo entusiasmo espero que logremos impulsar las otras reformas políticas que requiere nuestro país. Porque, al final, un sistema político débil solo beneficia a los más poderosos; a aquellos que no requieren los bienes públicos, pues no les importan; a quienes ponen por delante los intereses personales o corporativos por sobre el bien público.

Por tanto, señora Presidenta, voy a apoyar con entusiasmo esta reforma.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Girardi.

El señor GIRARDI.-

Señora Presidenta, bastante se ha dicho que esta es una reforma durante muchos años acariciada, anhelada, y en la que por fin podremos avanzar.

Hay muchas interrogantes que uno podría responder. Tal vez la razón no es únicamente el sistema binominal.

Por qué Chile, después de tantos años de haber recuperado la democracia, recién se encuentra haciendo reformas profundas.

Por qué nuestro país, a pesar de que la democracia se recuperó en 1989, recién se encuentra discutiendo si la salud es un bien público o un bien privado, cuando en torno de ella los ciudadanos, mayoritariamente, han demandado y exigido más derechos.

Por qué, luego de tanto tiempo, recién se está discutiendo si la educación es un bien de consumo o un derecho.

Por qué, transcurridos tantos años, nuestra sociedad no tiene establecido como una garantía, como un derecho el reconocimiento constitucional a los pueblos indígenas.

Por qué, después de tantos años, todavía no hemos podido recuperar el derecho al agua, que es planetario, universal. Es un derecho humano que el agua le pertenezca a la sociedad y no se privatice y quede en manos de unos pocos, porque es el recurso más escaso y del cual depende la vida.

Por qué -como dice el Senador Pizarro- no hay un reconocimiento en el sentido de que nosotros no estamos fuera de la naturaleza, sino que somos parte de la naturaleza, que se reconoce a sí misma.

Por qué no existen en Chile derechos reproductivos de la mujer.

Por qué en esta nación, a pesar de lo que tuvimos en 1931, cuando existió el aborto terapéutico, hemos vivido una verdadera regresión. Porque, aquí, una mujer que ha sido violada y producto de ello quedó embarazada o una mujer con un embarazo no viable no pueden tomar la decisión de interrumpir su embarazo, so pena de ir a la cárcel.

Uno de los factores ha sido, efectivamente, el sistema binominal, pues, conforme a él, un sector del país ha impedido la expresión de la mayoría. Así, en vez de ser los ciudadanos quienes resuelven, un sector de la sociedad se ha arrogado el poder y -por así decirlo- el privilegio de decidir por todos.

Pero eso, no solo en aquello que se hace todos los días.

La cuestión valórica tiene que ver con el mismo principio: una minoría ha establecido que los valores que la identifican son superiores (por tanto, habría valores inferiores) y que, en nombre de tal supremacía, bien puede decidir por la mayoría en el ámbito valórico.

Esa minoría ha pretendido, a través del sistema binominal, resolver por la mayoría en materias fundamentales. Claramente, hay falta de relación entre las aspiraciones de la sociedad chilena por justicia, igualdad, derechos y la forma como su votación mayoritaria se distribuye en la representación tanto en el Senado cuanto en la Cámara de Diputados.

Además, como es evidente, se trata de una fórmula muy inteligente. Porque, tendiendo el sistema a la igualación, al final somos todos responsables, pues en ella no se permite la identidad, ya que, pese a contarse con votación mayoritaria, no se tiene capacidad para llevar adelante las transformaciones encomendadas por la comunidad.

Entonces, ocurren dos cosas: todos somos responsables de que en Chile no haya más igualdad, no existan derechos; pero, al mismo tiempo, eso deriva en la irrelevancia del Congreso, parte de la cual significa que no solucione los problemas que le encomendó la ciudadanía.

Al no ser posible ni que las mayorías se expresen ni que se concreten los cambios demandados por la mayoría, que puede ser circunstancial, nuestra institucionalidad pasa a ser totalmente irrelevante desde el punto de vista de la ciudadanía. Y una institucionalidad así concebida -como institucionalidad de empate y que bloquea los cambios, pues solo se pueden efectuar los que permite la minoría a través de un peaje- hace que la política devenga en una institución totalmente terciaria desde la perspectiva del cumplimiento de las demandas y del mejoramiento de la calidad de vida de la gente al cambiarse situaciones que, desde su punto de vista, pueden ser aberrantes.

Ahora, creo que hay que agregar otro elemento.

Me parece que los cambios que estamos haciendo son totalmente transicionales. Porque las transformaciones que se están operando en la sociedad van mucho más rápido que la política. Es decir, la respuesta al binominal ya es arcaica: lo que vamos a hacer ahora podría haber tenido mayor sentido hace veinte años; pero hoy es insuficiente.

La sociedad cambió. Algunos piensan que ella debe moldearse a la política. O sea, la política ha de mantenerse incólume. Los equivocados son los ciudadanos. Por lo tanto, estos tienen que acomodarse al modelo y al sistema político.

Eso no va a ser así.

Por consiguiente, debemos entender que este es el inicio de un proceso de relegitimación de la política. La política hoy es vertical, es elitista. Somos una elite; somos un mundo vertical que toma decisiones, muchas veces inconsultas, por los ciudadanos. Y el mundo que estamos viviendo, paradójicamente, viene en el sentido contrario: es un mundo en redes, colaborativo; un mundo -ya lo he señalado- más bien de abajo arriba, no de arriba abajo.

Por lo tanto, eso genera una crisis de las instituciones del siglo XX: Parlamento -Senado y Cámara de Diputados-, entre otras, pero también de la concepción del Estado; de la concepción de la educación; de la concepción de nuestra relación como especie con las otras especies; de la concepción de la economía; de la concepción del poder financiero.

El mundo que viene es otro: es el mundo colaborativo, de los contenidos, de las redes. Y ello motivará que lo que estamos haciendo (tengo convicción al respecto) muy pronto deba ser revisado. Porque están en cuestión las instituciones de élite: la televisión vertical; las iglesias; las instituciones políticas, en fin, todas las instituciones que no dan cuenta de la nueva sociedad.

Esto de que la sociedad deba adecuarse a la política, en mi concepto, es hoy totalmente ingenuo. El mundo va a cambiar en el sentido que quiere la ciudadanía. Y esta producirá las transformaciones, quiéralo o no la política.

Por consiguiente, hemos de hacer otra reflexión.

Esto es como la discusión que uno tiene cuando habla de la reforma educacional. Está muy bien el fin del lucro; está muy bien el fin de la selección; está muy bien la gratuidad. Son condiciones necesarias, urgentes, mas no suficientes, porque el problema estriba en que la educación es arcaica y está enseñando para el siglo XX y no para el siglo XXI.

De otro lado, se han dado muchos argumentos en el sentido de que en el proyecto que nos ocupa habría sobrerrepresentación y subrepresentación.

A mi entender, es muy importante tener claro que estamos corrigiendo un sistema: el que consagró las sobrerrepresentaciones y las subrepresentaciones.

Se dijo que el distrito de Copiapó se halla sobrerrepresentado. ¡Está sobrerrepresentado porque fue la lógica de Pinochet que, por razones políticas, tuviera 4 Diputados, e Iquique , 2!

Hay que reparar. Y se podría hacerlo en algo dejando a Iquique con 3 Diputados, y a Copiapó -seguramente no habría más solución-, con 5.

Pero son herencias.

Y lo mismo sucede con los distritos pequeños.

En el pasado, cuando se hizo el dibujo, el "Sí" ganaba en los distritos pequeños y perdía en los grandes.

¿Qué se hizo? Se aplicó una política de mera compensación. Así, se crearon distritos pensando solo en el juego electoral. Por lo tanto, había distritos chicos y distritos grandes: el "Sí" ganaba en aquellos y perdía en estos.

Esta reforma se hace cargo de que no podemos empezar de cero, sino que es menester mejorar lo que hay. Y, a la luz de las carencias existentes, me parece que lo que estamos haciendo es totalmente razonable, constituye una clara mejoría.

Empero, yo no quisiera dejar de señalar lo central.

Hoy estamos ante una transición. No es el puerto de llegada. Estamos muy lejos de tener un estándar democrático de participación y de inclusión respecto a lo que sucede con la ciudadanía.

Yo siento que estamos frente a una medida paliativa, tardía, un tanto anacrónica. Porque la sociedad cambió, y muy profundamente, e incluso de una manera que la política jamás concibió.

Por lo tanto, es un primer paso. Pero vendrán otros, y otros, y muchos más.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador señor Pérez Varela.

El señor PÉREZ VARELA.-

Señor Presidente , sin duda, la discusión sobre el sistema electoral es legítima.

Hoy se ha establecido en Chile una mayoría que busca un sistema electoral proporcional.

Algunos creemos que lo mejor para nuestro país es un sistema mayoritario.

Pero ese es un debate absolutamente legítimo.

Lo que no resulta adecuado, a mi juicio, es cargarle como acá se ha hecho al sistema binominal, vigente en la actualidad, una serie de defectos de que no adolece, una serie de trancas que no tiene.

Aquí, entre otras cosas, se ha dicho que el binominal impide la aparición de nuevas figuras políticas, que impide la presencia de nuevos actores en la vida política.

Para constatar que aquello no es efectivo basta ver en las oficinas y en las galerías las fotos de la Cámara de Diputados que asumió el 11 de marzo de 1990 y las actuales; basta ver las fotos del Senado de hace un año y las de hoy.

La renovación habida en cada elección alcanza a más de un tercio. Ello ha permitido, por ende, la emergencia en el escenario político nacional de figuras nuevas, distintas.

Por lo tanto, no le carguemos al sistema binominal como aquí se ha hecho efectos imaginarios que lo transforman en un verdadero demonio.

En mi concepto, como sistema mayoritario, el binominal ha sido adecuado para generar estabilidad en nuestro país. Y en eso se ha trabajado adecuadamente.

Ahora, todo sistema electoral puede perfeccionarse, modificarse. Y era eso lo que uno esperaba.

Sin embargo, aquí se optó por pasar a un sistema proporcional, el que ya está en la elección de concejales y en la de consejeros regionales, procesos en los cuales hay una serie de situaciones que llaman profundamente la atención de la ciudadanía, pues, como todo mecanismo electoral, el mencionado tiene virtudes y defectos.

Por ejemplo, en la provincia de Biobío, durante la última elección, en una lista un candidato a consejero regional sacó 8 mil votos, pero salió electo otro, que obtuvo 4 mil.

¿Es aberrante el sistema proporcional? ¿Es algo dramático? No: se trata de ejemplificar en cuanto a que también presenta dificultades serias, que pueden limitar el derecho a la actuación política en el futuro.

No hay sistema perfecto.

Aquí se ha expresado también que el sistema binominal podría ser uno de los responsables del desprestigio de la política, de que la gente se aleje de ella.

Considero que eso es tratar de echarle la culpa al empedrado.

No hay duda de que las dificultades que enfrentamos actualmente en política tienen que ver mucho con nuestras conductas, con la acción que desarrollamos en ese ámbito, más que con los procedimientos y los instrumentos existentes.

Hoy mismo un dirigente político, Secretario General de un Partido , insultó a otros dirigentes políticos, y el Gobierno lo respaldó.

Hemos sido notificados: ¡El Gobierno apoya a quien insulta! ¡El Gobierno respalda a quien usa garabatos para referirse a sus adversarios políticos!

¿Es el sistema binominal o son esas actitudes lo que aleja a la gente de la política?

¿Es el sistema electoral existente o son tales actitudes lo que degrada la política?

¡El Gobierno respalda a quien insulta!

Ese y otros casos reflejan con claridad que se está buscando un fantasma donde no existe.

El sistema binominal podrá tener defectos (por cierto, los tiene), pero, sin duda, acciones políticas como la descrita provocan que las personas pierdan credibilidad en las instituciones.

Si fuera por el sistema electoral, los municipios estarían liderando la acción de la ciudadanía e interpretándola adecuadamente; nuestros consejeros estarían interpretando eficazmente a la gente. Sin embargo, no es así.

En la situación expuesta no tiene incidencia el sistema electoral, sino la acción política. Y, al respecto, todos debemos hacer un mea culpa.

Señor Presidente , considerando legítimo el debate; estimando legítimo que algunos piensen que es bueno para nuestro país un sistema proporcional, y pareciéndome legítimo sostener que es mejor un sistema mayoritario, ello no me impide creer que este proyecto es malo para Chile.

Aquí se han dado ejemplos abundantes sobre la desigualdad del voto entre distritos que tienen 200 mil habitantes, por ejemplo, y eligen más Diputados que otros con mayor cantidad de población.

No voy a profundizar al respecto, porque los ejemplos que dieron los Senadores Coloma y Larraín explicitan con absoluta claridad el daño que esta iniciativa le causa al elemento fundamental que es la igualdad del voto popular.

De otra parte, no se ha hablado de qué es el redistritaje.

Yo quiero leer aquí declaraciones que formularon sobre la materia Diputados de la Concertación, quienes, lamentablemente, las hicieron públicamente en nuestra zona ¡después de haber votado a favor del redistritaje...!

Pero son opiniones, y creo que es bueno recordarlas, porque en mi zona se unirían el distrito 46, que comprende Lota y las comunas de Arauco, y el 47, correspondiente a la mayoría de las comunas de la provincia de Biobío.

¿Qué manifiesta el Diputado del Partido Radical por la zona? "Están juntos desde el punto de vista numérico, pero el 46 está en Lota y Arauco; entonces, es una estupidez".

¿Qué expresa el otro Diputado , independiente pro Partido Socialista, ya que, lamentablemente, nos doblaron en la última elección? Que lo único que se va a favorecer con un redistritaje y un distrito grande es que los que tengan plata puedan enfrentar las campañas electorales. Con siete ciudades a una distancia de 130 o 150 kilómetros, el gasto sin duda será extraordinariamente mayor.

No lo decimos nosotros, sino parlamentarios elegidos con los votos del oficialismo y que se pronunciaron a favor, por desgracia, uno de los cuales, cuando la gente pregunta cómo es posible que el Diputado de Los Ángeles además lo sea de Curanilahue, responde en la prensa local que "es una estupidez".

Es algo que se hizo "entre cuatro paredes".

Resulta indiscutible, por lo tanto, que el redistritaje va a afectar claramente la cercanía entre el ciudadano y su Diputado .

Sin embargo, a mi juicio lo más grave del proyecto de ley -espero explicarlo en dos minutos, y haciendo mías también las palabras del Senador señor Larraín - es la facilidad en la constitución de los partidos y la casi imposibilidad de su disolución.

Los países que crecen, que avanzan, cuentan con colectividades políticas fuertes en las que se expresa la ciudadanía. Los sistemas electorales de Estados Unidos, Francia, Inglaterra, España, incluso promueven la fortaleza de dichas entidades.

El de España es un buen ejemplo: están el Partido Socialista Obrero Español y el Partido Popular, y ahora existe un tercero, que igualmente tiene la oportunidad de expresarse. Pero ha debido exhibir solidez.

Aquí, con un 2,5 por ciento del electorado en una región, será posible transformarse en un partido nacional, porque se podrá subpactar y presentar candidatos.

Además, se rebajan absolutamente -repito- los requisitos para la disolución.

¿La proliferación de colectividades políticas es una buena señal para la participación, para la estabilidad, para el desarrollo del país?

En Chile ya tenemos una experiencia. La democracia colapsó con un sistema proporcional que fue incapaz de salvarla en la década de los setenta y dividió al país hasta el extremo. Había partidos con un Senador o un Diputado . Teníamos diecisiete. Ello hacía imposible, para quien lo quisiera, generar una política de desarrollo, de unidad nacional, de objetivo común de la nación, a fin de sacar adelante la solución de los grandes problemas.

Por eso, reconociendo la legitimidad de creer en un sistema proporcional o en uno mayoritario, juzgo que, por algunas de las razones expuestas y otras que aquí se han manifestado, la iniciativa en debate es mala, y espero que en la discusión particular pueda ser revisada.

A mí me ha notificado el Gobierno que todo lo acordado en la Cámara de Diputados es inamovible respecto de esa rama del Congreso.

¿Qué significa lo anterior?

O sea, al Senado, como Cámara revisora, ¿le está vedado discutir sobre normas?

¿Está impedido de razonar sobre aspectos cuya modificación puede ser absolutamente relevante o que, como dice un Diputado del propio Oficialismo , constituyen "una estupidez"?

Por mi parte, estimo que tenemos la posibilidad real de enmendar bastante y de despachar un nuevo régimen electoral que verdaderamente permita, sobre la base del sentido común y de un sistema razonable, el desarrollo político que el país requiere para enfrentar sus grandes desafíos en el siglo XXI.

Voy a votar en contra, porque este es un mal proyecto para Chile. Abrigo la convicción de que, de imponerse, va a causar más daño que el beneficio que reportarían los valores de inclusión y de participación, aquí mencionados.

He dicho.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador señor Chahuán.

El señor CHAHUÁN.-

Señor Presidente, Honorable Sala, en la materia que nos ocupa, como en todas, vamos a ser coherentes.

A mi juicio, hoy día nos encontramos en un momento importante. Nosotros nos hemos comprometido con la modificación del sistema electoral binominal y la adopción de uno de representación proporcional corregida.

En ese mismo sentido, deseamos consignar que hemos avanzado al respecto, no porque el régimen vigente no sea legítimo, sino porque creemos que cumplió un ciclo en la vida política y que es preciso abrir canales para que toda la diversidad de Chile efectivamente se exprese en el Congreso.

Para avanzar en tal dirección, me correspondió presentar en el Senado la primera iniciativa con una fórmula concreta para contemplar un mecanismo de representación proporcional corregida, que fue, básicamente, lo acordado con la Democracia Cristiana después de varios meses de trabajo, al término de los cuales le hicimos una propuesta al país.

El Honorable señor Tuma , quien estaba haciendo las veces de Presidente , pidió un plazo para que la Comisión de Constitución comenzara a revisar todos los proyectos sobre reforma electoral que se encontraban en el Congreso. Dicho órgano técnico sesionó durante largos meses, convocó a analistas y pudo considerar todas y cada una de las visiones y fórmulas presentadas para efectos de avanzar en una modificación del binominal.

Sin lugar a dudas, el acuerdo entre Renovación Nacional y la Democracia Cristiana rompió el dique de contención para los efectos de abrirnos a la discusión de un sistema electoral no menos legítimo que el anterior, pero que abría los canales de participación y representación a sectores del país que estaban haciendo política en la calle. La invitación era justamente a que la política volviera a hacerse en los canales institucionales y en el Congreso.

Me gustaría interpelar a la Democracia Cristiana: ¿qué ocurrió con ese acuerdo?

Lamentablemente, no hay en la Sala ningún parlamentario de ese Partido, pero me gustaría preguntar qué pasó con nuestro compromiso de progresar, primero, en la descentralización efectiva, fiscal, administrativa, política; en el cambio desde un régimen presidencial a uno semipresidencial, con un mayor contrapeso de los poderes públicos.

¿Qué pasó con la idea de adelantar en la dirección de establecer un límite a la reelección indefinida de Diputados, Senadores, alcaldes, concejales y consejeros regionales, iniciativa en segundo trámite constitucional a la que solo le falta para ser aprobada que el Presidente de la Comisión de Constitución la ponga en tabla?

¿Qué pasó con otras materias que también se consideraron, como la posibilidad de avanzar en que la designación de un embajador se haga con la concurrencia de dos tercios del Senado y, en definitiva, se impida que, cuando se concrete el voto de los chilenos en el extranjero, se transforme en agente de una campaña determinada?

¿Qué pasó con las normas tendientes a impedir la intervención electoral y evitar inauguraciones en los noventa días previos a los comicios?

¿Qué pasó con el propósito de prevenir el ingreso de reformas constitucionales en esos mismos noventa días previos y que pudiera entenderse que obedecen a un afán proselitista?

¡Esos son los temas pendientes!

Más allá de aprobar, por lo tanto, la iniciativa -como voy a hacerlo, porque seré coherente en cuanto a la idea de legislar en la materia-, me gustaría pedirle a la Democracia Cristiana que el acuerdo con Renovación Nacional, representativo de la ruptura del dique con mucha audacia e hidalguía, contribuya a que podamos mejorar sustantivamente el texto.

¡Son inaceptables, señor Presidente, los chantajes de plazo provenientes del Ministerio del Interior!

¡Es inaceptable, señor Presidente, que al Senado en definitiva se le impida pronunciarse -para que los televidentes lo sepan- acerca del redistritaje o del número de Diputados!

Y hay algo más que no se le ha dicho al país. ¿Qué va a pasar con los cupos de los pueblos originarios? No van a ser, como dice el proyecto, 155 Diputados y 50 Senadores: serán al menos 55 Senadores, con cinco cupos para los pueblos originarios, y diez Diputados más, para el mismo efecto.

Es importante que el debate se dé ante la ciudadanía.

Sin lugar a dudas, hemos avanzado en la materia. En 2006 le entregamos el primer informe a la Presidenta Bachelet, con la fórmula -para este efecto, nos juntamos con Guillermo Teillier, entonces Secretario General del Partido Comunista- de los cupos compensatorios. Han pasado muchos años y nunca hemos recibido respuesta.

Hace ocho años, entonces, Renovación Nacional ya demostró disposición para modificar el sistema electoral.

En 2011 dimos otro paso adelante con el informe Prokurica 2.0, que apuntaba al establecimiento de normas en orden a impedir la intervención electoral; a determinar el límite de la reelección de Senadores, Diputados, alcaldes, concejales y consejeros regionales; a designar embajadores; a lograr claridad en el financiamiento de la política, y a dotar de mayor transparencia y democracia interna a los partidos, sobre la base de que todos eligieran a sus representantes conforme al principio "un militante, un voto".

Esos temas están todavía pendientes.

La Comisión sobre Intervención Electoral, que me tocó presidir, en 2006, abordó también materias que justamente iban en la misma dirección.

Entonces, quiero decirle al Ejecutivo que voy a aprobar -repito- la idea de legislar, porque seré coherente; pero espero que nos explique cuáles son las ideas matrices.

Si me dicen que una de ellas es la representación proporcional de la población, me vería en la necesidad de preguntar: "¿Y qué pasa con Copiapó, frente a Iquique?". Copiapó tiene menos electores y más Diputados. Parece que constituye un traje a la medida para un Diputado , en particular, que pidió un cupo adicional.

Entonces, ¿cuál es el diseño? Si es la representación proporcional de los habitantes en la otra rama del Congreso, hemos de avanzar en ello.

La bancada de la descentralización tendrá que manifestar algo. Porque no podemos constituirnos, hacer la parafernalia y finalmente no decir nada respecto al menos de la conformación del Senado. Hemos afirmado que esta Corporación expresa una representación territorial y que no estamos dispuestos a sobrerrepresentar a la Región Metropolitana frente a las demás. ¿Es cierto? Así es. Pero entonces avancemos con coherencia, porque es lo que vamos a exigir en el debate.

¿Qué está pasando en Chile? ¿Van a modificarse la disposición de la ciudadanía y la opinión sobre la política por el cambio de sistema? El Senador que habla era de los que creían que sí, y la verdad es que ahora opina lo contrario. No va a variar la imagen del Congreso per se. Se trata, sí, de un elemento importante, porque implicará invitar a los actores políticos, a los actores sociales, justamente a involucrarse en la toma de decisiones, a ser partes, a ser incumbentes, y, por tanto, a plantear una candidatura a un cupo parlamentario para lograr representación.

Es preciso resolver también la situación de los independientes, a los que se tiene que dar igualdad de posibilidades para presentarse.

¿Pero va a cambiar -insisto- la imagen del Congreso Nacional y de la política solo por la modificación del sistema electoral? La respuesta bien la conoce la señora Presidenta por la opinión en todos los países iberoamericanos respecto de los Congresos.

En los gobiernos presidencialistas, quien finalmente aparece con los logros es el Primer Mandatario de turno y el Congreso se encuentra reducido a la discusión pequeña, de trinchera, sin posibilidad de generar acuerdos nacionales acerca de las grandes materias.

Por eso, asimismo es necesario avanzar en el cambio del sistema presidencial por uno semipresidencial.

Entonces, media el problema de una desconfianza interpersonal e institucional instalada. Vivimos en un país absolutamente individualista, donde la distribución de las oportunidades lamentablemente depende del sector en que se habita. Es distinto nacer en Vitacura que en Viña del Mar, o en Reñaca Alto que en Huara.

¡Eso es inaceptable!

Y además enfrentamos otra dificultad: una distribución vergonzosa de la riqueza.

Por tanto, se requiere avanzar de una manera distinta. Diría que es preciso restablecer las confianzas. Y ello también parte de la forma como hacemos política. Igualmente, el punto se refiere a cómo nos enfrentamos, cómo nos relacionamos, cómo somos capaces de generar una mirada de mediano y de largo plazo. Eso es lo que le hace falta al país.

Reitero que aprobaré la idea de legislar, pero voy a condicionar el apoyo al Gobierno a que adicionalmente se establezca una prioridad para el límite a la reelección indefinida de Diputados, Senadores, alcaldes, concejales y consejeros regionales.

Voy a pedirle que la designación de embajadores sea con el acuerdo de dos tercios de esta Corporación.

Voy a pedirle que avance en evitar la intervención electoral.

Y voy a pedirle que agilice la modificación de la Ley Orgánica Constitucional de los Partidos Políticos y la transparencia en el financiamiento de esas colectividades.

He dicho.

El señor TUMA ( Vicepresidente ).-

Puede intervenir la Honorable señora Muñoz.

La señora MUÑOZ.-

Que lo haga primero la señora Presidenta, quien tiene que viajar a la Capital.

El señor TUMA ( Vicepresidente ).-

No hay inconveniente.

La señora ALLENDE.-

Señor Presidente , iré a Santiago, en efecto, mas no de inmediato. Por eso, no tengo inconveniente en respetar el turno de la señora Senadora.

La señora MUÑOZ.-

Insisto.

La señora ALLENDE.-

Este es un ejemplo de que las mujeres sabemos ser generosas en política. Le agradezco a Su Señoría.

Señor Presidente , creo que hoy día efectivamente estamos haciendo historia. Llevamos muchos años de numerosas frustraciones. Basta recordar los intentos por cambiar el sistema binominal efectuados durante los gobiernos de los Presidentes Aylwin, Frei y Lagos. Puede corregirme la señora Ministra presente, pero creo que fueron más de dieciséis.

Nunca lo logramos, porque no contábamos con los votos suficientes, ya que se exige un alto quórum, o porque los propios incumbentes, en algún momento -y es preciso decir las cosas como son-, a lo mejor no se sintieron representados por el proyecto respectivo, como fue el caso del correspondiente al entonces Ministro Edgardo Boeninger. Y claramente mediaron compromisos que no se cumplieron: hubo partidos que no cumplieron su palabra.

Por eso, no comparto lo que se ha manifestado en el sentido de que nosotros nunca criticamos el sistema y nos beneficiamos de este. ¡Lo criticamos siempre! Sostuvimos desde un comienzo que era poco democrático.

Es cierto que existen diversos regímenes electorales y que ninguno es perfecto, pero el vigente en nuestro país es probablemente uno de los más imperfectos. Aunque aquí se ha aseverado, una y otra vez, que ha permitido la estabilidad, la verdad es que ha favorecido a dos grandes coaliciones. Pero ¿sabe algo, señor Presidente ? Siempre ha implicado una camisa de fuerza para los propios partidos políticos: la imposición de no poder llevar más candidatos.

Y ha significado que los electores crecientemente se hayan ido decepcionando, porque todos hemos conocido de antemano el resultado, que ha estado prácticamente predeterminado, salvo escasísimas excepciones. Hemos sabido que los elegidos van a ser de una coalición y de la otra: uno y uno en cada Región.

¡Qué puede ser menos motivador en la política que la falta de una verdadera competencia; que la imposibilidad de llevar más candidatos; que dejar fuerzas fuera!

Algunas de ellas estuvieron excluidas más de veinte años. Todavía hay algunas que, con un porcentaje a nivel del país e incluso candidaturas nacionales, no han podido llegar al Congreso. ¡Qué puede ser menos representativo que en este quede excluida una corriente emergente!

¡Qué puede ser menos representativo que un Congreso en el que la participación de las mujeres escasamente ha llegado al 15 por ciento!

¡Qué puede ser menos representativo que la actual desigualdad del voto, que estamos intentando corregir, si bien no en su totalidad, por supuesto!

Aquí voy a abrir un paréntesis.

Tenemos claro que estamos votando en general y que será preciso dialogar y corregir. Evidentemente, en un momento dado se van a plantear varios temas, en tanto que otros mencionados aquí corresponden a leyes distintas. Pero parece que se nos olvida que nuestro país ya tiene más de 17 millones de habitantes, si ese es el número exacto, porque, con el censo que se llevó a cabo, ni siquiera sabemos cuántos somos. En 1973 había 50 Senadores y 150 Diputados. Sin embargo hoy, con -aparentemente- 17 millones de habitantes, se hace un tremendo escándalo porque se quiere elevar a 50 el número de miembros de esta Corporación.

Además, muchos de los colegas de las bancadas de enfrente no alegaban cuando existían los Senadores designados. Estaban muy contentos porque significaban una imposición al Senado; porque distorsionaban la voluntad mayoritaria; porque impedían reunir los quórums para cambiar numerosas ataduras. Recién el año 2005, como bien recordó nuestro señor Vicepresidente , pudimos terminar con esa institución. ¡Recién ahí, a partir de la siguiente elección, el Senado pudo convertirse en un órgano plenamente democrático!

¡Qué duda cabe, entonces, de que el que estamos dando es un paso tremendamente importante!

¡Cómo no voy a estar contenta de que la Presidenta Bachelet haya sido capaz de cumplir su compromiso! Durante la campaña, dijo que esperaba que aquella fuera la última vez que se utilizara el sistema binominal.

Y yo quiero reconocer a los parlamentarios que se han atrevido a dar este paso.

Quiero reconocer a Amplitud, que no vaciló en llegar a un acuerdo.

Quiero reconocer a quienes hoy están disponibles -ojalá que mañana también, cuando votemos en particular- para dar su apoyo.

De que vamos a perfeccionar el proyecto, no hay ninguna duda. Que a lo mejor algunas fórmulas no nos satisfacen del todo, es evidente. Que hubiésemos querido que todas las regiones fueran impares, desde luego. A mí me parece que lo razonable es que cada una tenga, al menos, tres Senadores, porque creo que esa sería una forma de cortarle el carácter binominal al sistema, que siempre ha sido un impedimento.

Que hubiésemos deseado ocupar la modalidad "N+2" y no la de "N+1", por cierto. Es más democrático que haya más candidatos. Así, la competencia es más real y le damos oportunidad a gente que de otra manera a lo mejor nunca la va a tener. Hoy, aun aumentando el tamaño de los distritos, pero conservando el mismo número de Diputados, se mantendría un umbral que tal vez haría imposible llegar al Parlamento.

Yo no entendí el argumento del Senador Larraín cuando sacó el ejemplo de Ricardo Lagos Escobar. Dijo que era responsabilidad de la lista. No sé lo que quiso decir con eso. Pero una cosa tengo clara: Ricardo Lagos superó en más de 130 mil votos a quien, estando en tercer lugar, finalmente resultó elegido.

Y la pregunta que uno se hace: ¿Es razonable aquello? ¿Es razonable que siga ocurriendo?

Obtuvo la segunda mayoría nacional. Y resulta que no fue elegido, sino la persona que tenía el 21 por ciento de los votos.

Ricardo Lagos y Andrés Zaldívar obtuvieron más del 64 por ciento de los votos y, sin embargo, no pudieron llegar los dos al Parlamento. ¿Alguien me puede decir que eso era democrático, que era representativo, que el sistema no era un traje a la medida, como ahora tanto le gusta señalar a un Senador? ¡Por favor!

¡Todos sabemos que esta fue una herencia de la dictadura de Pinochet! ¡Todos sabemos que se diseñaron distritos incluso con regla de cálculo! ¡Y todos sabemos que hay irracionalidades!

Y aquí yo también tengo que confesar algo.

A mí no me queda claro por qué, en el caso de la Región de Atacama, los Diputados van a pasar a ser cinco, habiendo allí menor número de electores. Efectivamente, habrá que verlo. No tengo idea qué lo justifica ni qué lo fundamenta. Estoy dispuesta a revisarlo. No corresponde a una iniciativa mía, bajo ninguna condición.

Sí me gustaría que en las regiones hubiera de tres Senadores para arriba, porque así dejaríamos completamente atrás el binominalismo y se abrirían más opciones.

Eso me parece más representativo.

Y seamos claros.

Si nosotros decepcionamos a los electores, si no les ofrecemos real competencia, si el sistema no es transparente, ¿cómo creen que se van a sentir más deseosos de acudir a votar?

Es cierto, soy de las que siempre han creído en el voto voluntario y lo apoyé. No tuve dudas al respecto. No obstante, también estoy dispuesta a revisarlo.

El voto voluntario me parece importante. Pero creo que debiera haber suficiente educación cívica para que nuestros jóvenes entendieran que la democracia no va a estar mejor si ellos se restan. Y me gusta que la gente vote por conciencia. No me gusta que se gane un voto porque se regala un par de anteojos o porque se promete tal o cual cosa. Ese clientelismo, hoy casi enfermizo, que se observa en nuestras campañas, francamente no le hace bien a la democracia.

Sí le hace bien una educación cívica fortalecida, que la gente joven comprenda que con su participación puede expresar una voz que incida en las políticas públicas, en las legislaciones que se dicten.

Pero, como digo, estoy dispuesta a revisar si vamos a seguir o no con el voto voluntario si existe certeza del lamentable fenómeno que aquí se ha mencionado.

Nosotros señalamos que había que financiar el transporte de aquellas personas que viven más lejos. El Gobierno del Presidente Piñera, sin embargo, nunca dio su aceptación. Yo me acuerdo que se lo planteamos muchas veces al entonces Ministro Secretario General de la Presidencia . Y lamento que no se haya aceptado porque, claramente, manifiesta un cierto elitismo.

Señor Presidente, voy a ser muy sintética, para no abusar del tiempo que corresponde a otros parlamentarios.

Sin lugar a dudas, algunos temas tendrán que ser objeto de leyes.

En cuanto al financiamiento público de los procesos electorales, de procesos democráticos de elecciones, del funcionamiento de los partidos, me gustaría que hubiera un sistema claro, transparente; terminar con aquellos financiamientos cuyo origen se ignora y que favorecen más a unos que a otros; que la posibilidad de éxito de un candidato no dependiera de las redes con que cuente o del apoyo que reciba de ciertas personas. Porque no me vengan a decir a mí que cada uno ha financiado el costo de sus campañas con plata de su bolsillo.

Aquí debemos tener un mínimo de honestidad, si no queremos seguir desprestigiando la política. Todos sabemos -es evidente- que existen aportes. Y yo creo que un financiamiento público le hace bien a un país que entiende que la democracia tiene costos.

Quiero terminar diciendo que el Congreso debe ser, en cierta manera, un espejo de la sociedad. Pero, para ello, nosotros necesitamos no solo mayor equilibrio respecto a nuestras regiones y al número de habitantes; también necesitamos que haya mayor participación. ¿De los más jóvenes? Por cierto. Y ojalá representación del pueblo originario.

Sin embargo, quiero detenerme en el elemento que me hace sentir orgullosa de que la Presidenta lo haya planteado: que ninguna lista pueda inscribirse si tiene menos del 40 por ciento de un género o más del 60 por ciento del otro. Me parece que es el paso más notable que podemos dar en cuanto a implementar una política proactiva para facilitar la participación de las mujeres.

Estamos cansadas de que se nos diga que lo único que queremos aquí son sandías caladas, cuando lo único que estamos pidiendo son más oportunidades para que haya más mujeres candidatas. Nadie está afirmando que van a tener asegurada su elección.

Sí queremos dejar atrás, evidentemente, los obstáculos que impiden aquello, muchas veces provenientes de las propias directivas de los partidos políticos.

Queremos que las mujeres estén presentes.

Creemos que las mujeres significan, realmente, un aporte.

Por eso, siento una tremenda identificación con lo que ha planteado la Presidenta, que yo espero que respetemos y que aparezca en el texto final.

Serán materia de otras leyes el financiamiento, la transparencia, la modernización de los partidos políticos, la rendición de cuentas, las auditorías, la capacitación, en fin, todo lo que haga necesario alcanzar una política más moderna.

Con todo, señor Presidente, pienso que hoy estamos dando un paso inédito. Tuvimos que esperar 24 años para poder aprobar, al menos en general, un proyecto de esta naturaleza, tal como hoy lo estamos haciendo.

Yo espero que el Congreso tenga la opción de votarlo también en particular, para que se convierta en ley de la República y, como dijo nuestra Presidenta Bachelet , el día de mañana ningún candidato presidencial o a parlamentario tenga que postularse bajo el sistema binominal.

He dicho.

El señor TUMA ( Vicepresidente ).-

Gracias, señora Senadora.

A continuación, le ofrezco la palabra a la Senadora señora Muñoz.

La señora MUÑOZ.-

Señor Presidente , la gran mayoría de las intervenciones que hemos escuchado en este debate hacen referencia al momento histórico que representa para la democracia chilena eliminar el sistema binominal.

Con razón se ha dicho -y aunque a algunos les moleste, lo voy a repetir- que aquel sistema fue diseñado como parte de diversas amarras institucionales orientadas a evitar modificaciones sustantivas al modelo económico y social implantado durante la dictadura.

En lo político, constituyó además un factor de exclusión que afecta la pluralidad y representatividad del Parlamento.

Sin embargo, esa no es la única distorsión que produce.

Las particularidades de dicho sistema, caracterizado por una fuerte incidencia de las cúpulas políticas en la designación de candidatos, el escaso número de postulantes y umbrales elevados de elegibilidad, han contribuido a dificultar, además, la incorporación de mujeres al Congreso Nacional.

Si hay una grosera distorsión de la representación popular, esa es la casi invisible presencia de mujeres en este Parlamento.

Hoy, pese a conformar el 53 por ciento del electorado y constituir algo que nadie puede negar (la otra mitad de la humanidad), solo entre el 15 y el 16 por ciento de los legisladores en este Parlamento somos mujeres, muy por debajo del promedio latinoamericano y mundial. En América Latina y el Caribe, las parlamentarias llegan, en promedio, al 23 por ciento, destacándose los casos de Argentina, Nicaragua y Costa Rica, que tienen entre un 35 y un 40 por ciento de mujeres. A nivel internacional, por cierto, la delantera la llevan los países nórdicos, con un 42 por ciento.

El actual Gobierno, cumpliendo con su programa, presentó a tramitación el proyecto que hoy día debatimos y en cuyo marco se busca impulsar también un mejoramiento de la participación de la mujer en el Poder Legislativo , recogiendo precedentes a nivel internacional -que acabo de señalar- como también propuestas de reformas legales que hemos venido presentando diversas parlamentarias, desde hace largos años, en nuestro Congreso.

Este proyecto propone dos mecanismos como estímulo a la participación de las mujeres:

Primero, la creación de una cuota mínima de postulantes de un mismo género, evitando que cualquiera de ellos disponga de un porcentaje mayor al 60 por ciento en sus postulantes a la Cámara de Diputados o al Senado. Esta norma se propone como transitoria, aplicable a las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029.

El otro mecanismo es la incorporación, en esos procesos electorales, de dos estímulos económicos, que son: devoluciones adicionales para las candidatas y premio a los partidos por candidatas electas.

Esta iniciativa, señora Presidenta , ha llegado a ser debatida y aprobada ya en la Cámara de Diputados solo por decisión de la Presidenta Michelle Bachelet . Iniciativas anteriores fueron siempre y rigurosamente rechazadas en nuestro Parlamento.

El debate realizado en la Cámara de Diputados reveló la existencia de una tensión entre las elecciones primarias y las cuotas.

Surgieron en la discusión diversas ideas para conciliar primarias y cuotas. La principal es aquella que plantea no computar los candidatos surgidos de primarias para efectos de determinar el cumplimiento de la obligación de la cuota, replicando la formula existente en México.

Ello significaría aceptar la posibilidad de que, si el resultado de las primarias desfavorece a las mujeres, puedan mantenerse elevados índices de masculinidad en las postulaciones, resultando, las cuotas de género, letra muerta.

La Cámara de Diputados, señora Presidenta , no resolvió este problema. Entiendo que el Gobierno presentara acá, en el Senado, una propuesta en ese sentido.

En mi opinión, nuestros esfuerzos deberían estar orientados a definir un mecanismo sustentado en los siguientes principios:

1.- Participación efectiva de las mujeres, reduciendo las trabas y obstáculos que hoy enfrentamos, uno de los cuales son las primarias.

2.- Elección efectiva de las mujeres al Parlamento, no solo como un número para cumplir con la cuota. Vale decir, la posibilidad real de ser elegidas.

3.- Por último, territorialidad: candidaturas de mujeres distribuidas en todo el territorio para garantizar elegibilidad.

Cuota garantizada y condiciones de elección efectiva de mujeres al Parlamento no es una ecuación fácil de resolver al interior de los partidos políticos, donde existen fuertes barreras culturales a la participación y empoderamiento de las mujeres.

A mi juicio, primarias y cuotas muestran una tensión entre dos principios: la inclusión y la legitimidad de las candidaturas.

Las mujeres, casi ausentes históricamente de los partidos y más aún de los cargos de conducción y poder del sistema político, serán, con este sistema, incentivadas a participar en elecciones parlamentarias a través de un sistema de cuotas. Tenemos que entusiasmar a las mujeres para que participen en las elecciones. ¡Primera tarea!

Una vez que acepten ser candidatas, deben legitimar su candidatura ganando el cupo en primarias.

En este intento, señora Presidenta, es probable que en muchos casos la inclusión de las mujeres se diluya en la derrota de la elección primaria a la cual se deban someter para otorgar legitimidad a sus candidaturas.

En mi opinión, el desafío es facilitar el camino para el desarrollo de nuevos liderazgos femeninos, minimizando obstáculos y haciendo retroceder barreras culturales que marginan a las mujeres de la política.

Mi opción, por tanto, es apostar a la inclusión de muchas más mujeres candidatas al Parlamento.

En este camino puede existir como alternativa la suspensión temporal de las primarias, coincidiendo con los períodos electorales en que se aplicará el sistema de cuotas.

Considerando que este debate se da en el marco de un cambio del sistema binominal por uno proporcional, la suspensión temporal de primarias no afectará la participación ciudadana ni la legitimidad de las candidaturas, toda vez que el sistema de primarias tenía particular relevancia en el marco de un sistema binominal que limitaba las candidaturas competitivas a las principales fuerzas políticas.

Quien era nominado por una de ellas tenía, evidentemente, mayor posibilidad de resultar electo o electa, dejando en las cúpulas un margen decisorio relevante.

Con el sistema proporcional propuesto, buena parte de los territorios elegirán una cantidad tal de parlamentarios, que los umbrales se reducen considerablemente.

Ello, en mi opinión, minimiza la necesidad de primarias como garantía de participación ciudadana y más bien las reorienta como fórmula para que los partidos zanjen sus disputas internas.

Por eso, señora Presidenta , si desde la ley no se resuelve bien esta tensión entre cuotas y primarias, mi temor es que esta normativa pueda transformarse en letra muerta y en una nueva fuente de discriminación de las mujeres en política.

Con estas aprensiones, que entiendo que formarán parte de nuestro debate particular, felicito la presentación de este proyecto, lo mismo que la decisión de la Presidenta , pues, así como es un momento histórico para nuestra democracia, también lo es para las mujeres, pues representa la decisión de la mujer que hoy conduce el país para abrir espacios reales de presencia y participación de más mujeres en este Parlamento.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Le agradezco nuevamente su gesto, señora Senadora. La verdad es que hubo un malentendido. Yo tengo que esperar al Vicepresidente, que en este momento se halla votando el Presupuesto, pero después, efectivamente, tengo que cumplir un compromiso.

Ahora sí, tiene la palabra la Senadora señora Goic.

La señora GOIC.-

Gracias, señora Presidenta .

No sé si es casualidad que justo las mujeres hablemos juntas en este debate; digo seguidas, las mujeres de la Nueva Mayoría. Probablemente, también voy a enfatizar un tema común, que es cómo esta iniciativa nos permite incorporar a más mujeres en el Parlamento.

Dicho eso, quiero partir reafirmando algo que igualmente señaló la Senadora Muñoz y hacer un poco de historia. Lo considero necesario cuando estamos ante la votación de una propuesta tan emblemática, como se ha señalado en todos los discursos.

Efectivamente, la disposición que establece el régimen electoral binominal fue incorporada, a través de la Ley de Votaciones Populares y Escrutinios, en mayo de 1989, con posterioridad al resultado, ya conocido, del plebiscito realizado el 5 de octubre de 1988.

Se concibió bajo la conducción de la Junta de Gobierno, en medio de un régimen dictatorial, cuando ya se sabía que se iniciaba el proceso de recuperación de la democracia.

Y, sin duda, se hizo con una intencionalidad. Aquí ya se ha señalado que ha permitido dar estabilidad, pero una estabilidad en términos de no permitir la manifestación de los cambios legítimos que busca y ha buscado nuestra sociedad, en un modelo político y económico que tiende a mantenerse, en la medida en que tenemos una representación empatada de las dos coaliciones que se expresan a través del sistema binominal, el cual, además, pone el acento, más que en la ciudadanía, en las definiciones previas de las candidaturas que hacen los partidos.

Todos sabemos, más o menos, o anticipamos el resultado, sin que exista la competencia necesaria, en un sistema donde justamente queremos incentivar la participación por la vía de la incertidumbre en cuanto al resultado, al revés de lo que sucede hoy en muchos casos.

Por suerte vivo en una región donde en los tres procesos electorales en que me ha tocado participar los resultados han dado proporcionalidad: salió el primero y el segundo. Pero no es lo que sucede en todas las regiones, en todos los distritos y circunscripciones.

Por eso, después de 29 mociones, más o menos -puede que me equivoque en el número-, después de muchos intentos de distintos parlamentarios que hoy son reconocidos en este proyecto, considero superimportante que tengamos la posibilidad real de avanzar en la votación general y, posteriormente, en la discusión particular, respecto de un sistema que logre mayor representatividad, mayor proporcionalidad y -ya lo señalé- una mejor expresión de la democracia y de la ciudadanía.

Y cómo no va a ser relevante que la primera mujer Presidenta de nuestro país, Michelle Bachelet , y además en su segundo mandato, deje claramente expresada su decisión de dejar aquí un legado que nos permita avanzar en una mayor representación de mujeres en el Parlamento.

Los resultados son tristes. Si revisamos desde la legislatura pasada a esta, vemos que solo avanzamos en dos mujeres en la Cámara de Diputados y una en el Senado. Algunos dicen que, al ritmo que vamos, nos demoraremos cincuenta años en lograr algo más parecido a lo que somos en representación ciudadana, o sea, más cercano al cincuenta por ciento.

Dudo mucho de esos datos si no hacemos efectivamente un esfuerzo adicional, como hoy se propone: la participación equilibrada de hombres y mujeres en la candidatura, que ninguno de los dos sexos supere el cuarenta por ciento y en forma transitoria por cuatro elecciones.

Ello, porque hoy nos encontramos a nivel de los países árabes con nuestro magro quince por ciento de representación de mujeres en el Parlamento. Por lo tanto, este es efectivamente un objetivo de la democracia, y es justo reconocer aquí a todas las mujeres, a los movimientos que han puesto esto permanentemente en el tapete de la discusión.

Nunca ha sido fácil para las mujeres obtener conquistas. Basta recordar que recién en 1949 tuvimos derecho a voto. Y de eso, que parece tan lógico y fundamental, no ha pasado tanto.

La modificación al sistema binominal, ya como sistema electoral, sin duda va a permitir mayor incorporación de mujeres.

Es acertado que se incorporen incentivos para los partidos. La tarea aquí no solo es permitir que existan candidatas, sino también -ojalá- acompañarlas para que obtengan buenos resultados. Eso no lo garantiza el incentivo económico propuesto, pero me parece que es una buena señal.

También es conveniente que en la Cámara de Diputados se haya cambiado el que se premiara solamente a las candidatas que resultaran elegidas con un mayor reembolso por voto, a fin de que sea para todas las que compiten, considerando que queremos incentivar a más mujeres a competir y reconocer las barreras existentes en términos de la generación de recursos.

Solo quiero entregar un dato que habla bien de las mujeres que compiten, porque lo que deseamos -como se ha señalado acá- es tener posibilidades de competir, no que nos designen en el cargo.

En general, hay bastante buena elegibilidad. Del 18,8 por ciento de candidaturas en las últimas elecciones en 2013, hoy tenemos 15,8 por ciento de participación en el Senado y en la Cámara. Esto da cuenta de que hay un buen porcentaje de mujeres que salen electas.

Esperamos, por lo tanto, que esto efectivamente nos permita avanzar a que exista un resultado más cercano a la representación de mujeres en la militancia en los partidos y, también, en nuestra sociedad.

Sin duda, esto significa un desafío para los partidos, en términos de potenciar desde ya la presencia de mujeres en los distintos espacios donde puedan foguearse y prepararse para ser candidatas.

Por otro lado, en cuanto a la colisión de normas con la normativa referida a las primarias, hemos avanzado en buscar una solución en cómo conciliar el principio de inclusión representado en las cuotas y el de la participación en las primarias.

Quizás no nos deja a todos contentos, pero creo que es una buena alternativa el que para cumplir, sí o sí, la existencia de un cuarenta por ciento de candidatas mujeres, independiente de la forma de nominación de candidaturas, se pueda limitar el número de distritos y circunscripciones en donde se realicen primarias al cuarenta por ciento. Con eso se deja espacio para que los partidos definan -poniéndome en un extremo- que, si en el 40 por ciento de los distritos y circunscripciones se realizaran primarias y salieran hombres, habría un espacio de 60 por ciento para alcanzar la cuota, a diferencia del resultado obtenido en la propuesta en la Cámara de Diputados, que incluso utilizaba, en algunos casos, la primaria como una vía para no cumplir con la incorporación de mujeres que persigue la presente propuesta.

Esto representa un tremendo avance. Nos queda todavía la discusión en particular, y ahí espero que seamos capaces finalmente de aprobar un texto que reconozca nuestra idiosincrasia, la realidad de nuestro sistema electoral, en que efectivamente estamos muy ligados al territorio que representamos. Y eso se da tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado.

Yo quiero hablar aquí como Senadora por Magallanes . No me gustan las propuestas de fundir regiones o de hablar de macrozonas. Podemos tener distintitas opiniones y será parte del debate en particular, sin duda. Sin embargo, creo que en Magallanes, en particular, hay una realidad territorial, geográfica, pero también de conformación de identidad que hace necesario contar con nuestros propios Senadores. No me imagino fundiéndonos con nuestros vecinos de Aysén, a pesar de todas las posibilidades de trabajo conjunto que tenemos en la Patagonia, que de hecho hemos utilizado en proyectos birregionales, en la conformación de planes de zonas extremas, en trabajar como una bancada patagónica.

Es muy importante reconocer en esto nuestra historia, el cómo hemos sido capaces de visibilizar a nivel nacional zonas extremas. Lo digo hoy, que acogemos la demanda de las zonas extremas del norte, porque además está consagrado en nuestra Constitución que tengan sus propios Senadores. Pienso que eso nos ayuda en un proceso que avanza en profundizar la regionalización, el reconocimiento de nuestras diversidades, pero también de nuestras potencialidades como país.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Quintana.

El señor QUINTANA.-

Resulta claro que el sistema binominal tiene sus horas contadas.

Finalmente, se convirtió en una camisa de fuerza para contener la verdadera expresión ciudadana. Ya era hora de zafarse de estas amarras que tanto daño y desprestigio le han causado a nuestra política, a nuestra democracia. Ya era hora de terminar con este sistema tan perverso cuyo principal objetivo es mantener un Estado inmóvil ante eventuales reformas estructurales.

Efectivamente, este sistema binominal o "UDI-nominal" -como han señalado algunos- llega a su fin. Se trata de un traje a la medida. No olvidemos que esto fue elaborado con posterioridad al plebiscito de 1988, con resultados en la mano, y agrupó territorios, comunas con la finalidad de concentrar ahí determinado poder político.

Eso termina hoy. ¡Y en buena hora!

Tardíamente, por cierto, como recordaba la Ministra señora Rincón ayer.

Esto es el resultado de veinticuatro años de intentos, durante los cuales se presentaron más de veinte mociones, y también iniciativas de Gobiernos de la Concertación. Sin embargo, nunca hubo buena disposición.

En verdad, apena conocer ahora los argumentos entregados, especialmente por la UDI, pues claramente este sistema binominal representa el corazón de ese partido, que fue construido a base de ese subsidio. Y, por lo tanto, hoy deben estar con una suerte de respiración artificial.

Y también preocupa ver parlamentarios, como el Senador Chahuán, que, si bien ha votado favorablemente este proyecto en general, se nota que lo hace a regañadientes, porque no hay convicción en sus palabras.

Incluso plantean acá temas de cuotas indígenas.

¡Por favor! ¡Aquellos sectores que durante los mismos veinticuatro años no estuvieron dispuestos siquiera a legislar en favor del reconocimiento constitucional de los pueblos indígenas, hoy nos piden una cuota para ellos...!

Simplemente, seamos coherentes -por su intermedio, señora Presidenta-, Senador Chahuán.

Aquí hago distingos, y destaco que Senadores de Renovación Nacional hayan votado ahora a favor en esta histórica votación.

No obstante, claramente, dejaron sin piso durante una larga discusión al Presidente de ese partido, a Cristián Monckeberg . Él entregó propuestas oficiales, formales al Gobierno.

Entonces, a veces se habla mucho de acuerdos. Pero ¿acuerdos de esa manera, en que se entregan propuestas y, finalmente, un grupo de Senadores les quita el piso?

Por eso, una vez más quiero valorar la actitud firme, valiente y de convicción que desde el principio tuvieron en esto la Senadora Lily Pérez , Amplitud y sus Diputados, que en gran medida va a quedar para la historia fidedigna de esta iniciativa, junto con la voluntad firme, decidida del Gobierno de la Presidenta Bachelet , que una vez más cumple sus compromisos con el país. Igualmente, valoro la actitud del Ministro Peñailillo , quien condujo esta discusión entre las grandes voluntades que se manifestaron aquí, y naturalmente, de la Nueva Mayoría que, como ustedes saben, una vez más está dando una muestra de unidad en un proyecto tan importante como este.

Yo intervine ayer en la discusión en general, pero me animé a hacerlo ahora, porque acá se han dado argumentos totalmente falaces: este sistema proporcional inclusivo generaría -son argumentos de la UDI- condiciones para la ingobernabilidad, en la medida que estimularía el surgimiento de partidos pequeños.

Si eso ocurriese, no veo cómo el que existieran más partidos causaría ingobernabilidad.

Es bueno recordar que el binominal ha generado una formación que supera la docena de partidos, con algún grado de expresión legal o parlamentaria. En este Parlamento hay militantes de doce formaciones políticas con expresión legal.

Entonces, eso claramente es una falacia.

Aquí, lo que vamos a tener, a lo más, es la llegada de terceras fuerzas políticas. ¡Y en buena hora! Porque no sé si Pinochet y sus asesores más cercanos imaginaron el daño que generaría al país la lógica del empate que diseñaron deliberada y maliciosamente.

Ayer me refería a encuestas que revelan la baja en la credibilidad de muchas instituciones.

Bueno, creo que la causa de muchos males de nuestra sociedad, más allá de la política -desde luego, esto tiene incidencia en la política-, es el sistema binominal.

Por lo tanto, señora Presidenta , ahora tenemos la posibilidad de mejorar la calidad de la política. Esto va acompañado -lo expresaba usted misma en su intervención- de otros proyectos, como el relativo al financiamiento de la política, para transparentar y regular, de una vez por todas, la relación oscura entre política y dinero.

Y, por cierto...

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Terminó su tiempo, Senador señor Quintana.

Tiene un minuto adicional.

El señor QUINTANA.-

Gracias, señora Presidenta .

Decía que, por cierto, esto también va acompañado de temas dentro de esta misma iniciativa, a los cuales se refirieron profusamente las Senadoras Goic y Muñoz, concernientes a las cuotas.

Quiero señalar en este Senado que el fin de semana pasado en el Cuadragésimo Consejo Nacional del PPD nosotros reafirmamos nuestro compromiso y, por eso, todos los Senadores del PPD han apoyado con convicción este proyecto, y en particular el tema de la cuota, que la Presidenta ha enfatizado tanto como el término del perverso sistema binominal.

Haremos todos los esfuerzos para que en la discusión en particular realicemos todas las correcciones necesarias para que esta cuota efectivamente se pueda cumplir y no tengamos los problemas ocurridos en Brasil, como señalaron algunas parlamentarias, donde finalmente la fórmula se aplica con posterioridad a la preselección de los candidatos.

Por tanto, señora Presidenta , con mucha convicción, en este día histórico terminaremos con este enclave de la dictadura que tanto daño le ha provocado al país durante décadas.

Voto a favor.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Tiene la palabra al Senador señor García-Huidobro.

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

En primer lugar, quiero aprovechar la presencia de la Ministra para manifestar nuestra molestia por las expresiones vertidas por un funcionario de Gobierno al Diputado José Antonio Kast .

Esto no le ayuda a la democracia, y este tipo de ejemplos lo único que hacen es desprestigiar la política. La convivencia democrática no se puede expresar de esta forma, y menos por un funcionario de Gobierno.

Por eso, lamento esta situación y espero que no se repita, porque no le hace bien al país, no le hace bien al ambiente existente en el Senado al analizar este proyecto.

Pasando a referirme a la iniciativa en debate, señora Presidenta , en cuanto al aumento del número de Diputados de 120 a 155, es interesante analizar cómo se distribuirá la Cámara de Diputados.

Iquique y Alto Hospicio , por ejemplo, con un padrón electoral de 222 mil habitantes van a elegir tres Diputados, teóricamente. Y Chañaral elegirá cinco con un padrón inferior: 221 mil personas.

Sería importante tener una explicación racional de esto, pues cuesta entender que con similar cantidad de habitantes se elijan dos Diputados más, y así sucesivamente, tal como lo han expresado algunos parlamentarios que me han antecedido en el uso de la palabra.

Quiero valorar lo que usted ha dicho, señora Presidenta , cuando afirmó que era interesante y relevante reestudiar el redistritaje que se estaría haciendo a la Cámara de Diputados, y que se encontraba dispuesta a hacerlo.

Lo destaco, ya que es una manera de empezar a trabajar como Cámara revisora respecto de un proyecto que, a la larga, no le hace bien al país y, sobre todo, constituye una discriminación a otros distritos.

Señora Presidenta , conversé con numerosos Diputados de la Nueva Mayoría y muchos me manifestaron que no están de acuerdo con este redistritaje, porque al ampliarse los distritos estarán más lejos de la gente; no podrán realizar un trabajo como la comunidad quiere: cercano a ella.

Y ello alejaría más a los Diputados de su gente.

Por lo tanto, tal como está el proyecto no le hará bien a la democracia y alejará más al pueblo de sus representantes.

Lo digo porque varios me dijeron: "Mire, lo que pasa es que si yo no aprobaba esto en la Cámara de Diputados no me aseguraban la posibilidad de ir a la reelección". Y, en consecuencia, se sintieron amenazados.

Esto lo señalan en privado. En algunos casos, como mencionó el Senador Pérez, lo hacen en público. Alguien afirmó que este redistritaje era una estupidez. Y así sucesivamente.

En cuanto al aumento de la cantidad de Senadores, creo que el país no lo quiere. Los que sí lo quieren son algunos partidos políticos.

¡Esa es la verdad y hay que decirla aquí!

Lo otro que encuentro impresentable son los requisitos para formar un partido político.

En el caso de Aysén se necesitarían 92 personas.

Creo que esa cifra, estimada Presidenta, se puede exigir para una junta de vecinos, pero aquí estamos hablando de partidos políticos que, haciendo pactos, pueden tener candidatos en distintas partes del país.

Esa cantidad realmente dice que cualquier conglomerado humano puede crear un partido político. Esto de alguna manera le falta el respeto a lo que significa ser un partido político, porque se prestaría para que un grupo muy pequeño de personas los formaran y tuvieran posibilidades de celebrar pactos y tener candidatos a nivel nacional.

Eso debiera analizarse profundamente.

Por otro lado, cuando hablo de que el sistema binominal no es democrático, lo hago como la persona que fue capaz de romperlo en mi segunda elección y salir elegido como Diputado .

Y muchos lo han hecho aquí, como el Senador Letelier en su primera elección.

El señor BIANCHI.-

Dentro de un pacto.

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

No. En su primera elección como Diputado rompió el sistema binominal fuera de pacto.

El señor LETELIER.-

Por el partido PAIS.

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

Así fue. No iba en la Concertación.

Es bueno recordarlo. Por lo menos dos candidatos en esta Región fuimos capaces de romper el sistema binominal.

Y, cuando se afirma que no es democrático, ¿Estados Unidos no es un país democrático? Ahí queda el 49,9 por ciento muchas veces sin representatividad, porque eligen un candidato -¡eligen uno!- y el resto, que no tiene el 50 por ciento más uno, no es elegido.

Es un sistema de representación tal como lo ha sido el sistema que hoy opera en el país.

De otra parte, señora Presidenta , es muy importante que este proyecto sea completamente revisado en la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia. Pienso que lo que se propone no le va a hacer bien al país. Alejará a la ciudadanía más del mundo político. Se crearán, con todo el derecho que tienen, pequeños grupos que pueden poner en jaque a cualquier Gobierno.

Y ya tenemos experiencia de los problemas que existen muchas veces para reunir las mayorías parlamentarias necesarias.

Soy partidario de tener grandes bloques en que se puedan insertar distintos partidos políticos, tal como ocurre hoy. Pero perder la posibilidad de tener estabilidad en el país, a la larga, hará mal.

Ojalá esta iniciativa se pueda reestructurar. Espero que, como siempre ha ocurrido en el Senado, se llegue a un acuerdo en ese sentido.

Sin embargo, con su redacción actual me es imposible respaldar la idea de legislar. Voto en contra, señora Presidenta, porque lo propuesto no le hará bien a Chile.

Este es un mal proyecto, pues aleja a la ciudadanía de sus representantes. Además, es irritante el que se plantee elegir más diputados en zonas que tienen la misma cantidad de habitantes o menos que otras.

¡Y para qué hablar de la situación del Senado!

Mi región, por ejemplo, que posee prácticamente el mismo número de electores que la Séptima -hay una pequeña diferencia-, elige dos senadores menos. ¿Por qué? Me encantaría que el Ejecutivo nos diera una explicación racional sobre tal situación. No veo cuál puede ser.

Señora Presidenta , hago reserva de constitucionalidad por los problemas de representación que originará el redistritaje que se está proponiendo. Este asunto tiene que ser analizado por el Tribunal Constitucional.

En mi opinión, debe ser proporcional la representación a nivel de diputados. Espero que esto se solucione en el trámite posterior de la iniciativa.

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La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Antes de seguir ofreciendo la palabra, quiero dar la bienvenida con mucho afecto a quienes nos acompañan hoy en las tribunas.

Saludo a Soledad García, Coordinadora de la Oficina Regional Sudamericana del Instituto Interamericano de Derechos Humanos (IIDH).

Le cuento a la Sala que la delegación que acompaña a la señora García se encuentra cursando el II Diplomado Internacional "Derechos Humanos y Seguridad Ciudadana en el Marco de la Labor Policial". Participan ahí la Policía de Investigaciones de Chile, Carabineros y representantes de las policías nacionales de Nicaragua, Colombia, Uruguay, Brasil, El Salvador, Ecuador, Guatemala y Perú.

Cabe explicarles a nuestras ilustres visitas que este Hemiciclo se ve un poco vacío porque, en paralelo, está funcionando la Comisión Especial Mixta de Presupuestos.

Les doy la más cordial bienvenida en nombre del Senado.

Valoramos la tremenda labor que ustedes están haciendo.

Muchas gracias.

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La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor García.

El señor GARCÍA .-

Señora Presidenta , voté a favor de la reforma que eliminaba de nuestra Carta Fundamental el guarismo 120, referido al número de miembros que componen la Cámara de Diputados. Lo hice en la esperanza de que se presentara un proyecto de cambio al sistema binominal que pensara en Chile; que pensara en su gobernabilidad; que pensara en un sistema electoral representativo, respetando cada una de las regiones y, por supuesto, un principio central -particularmente, para la Cámara de Diputados-: la proporcionalidad del voto.

Sin embargo, hoy me encuentro con una iniciativa que no respeta dicho criterio. Como se ha dicho, esta parece más bien un traje a la medida para la actual coalición de Gobierno, la Nueva Mayoría.

A mi juicio, el diseño de un proyecto de esta magnitud, de esta naturaleza y de esta trascendencia, debió quedar entregado a una comisión de personas no incumbentes, porque, al final de cuentas, todos nosotros somos parte interesada.

Estamos pensando en la próxima elección presidencial y también en las parlamentarias, y en cómo el sistema propuesto se acomoda a las pretensiones electorales de nuestras coaliciones, de nuestros partidos y de nosotros mismos. Pero no necesariamente lo que es bueno para uno o para los conglomerados a los que adscribimos es lo que requiere el país para asegurar un mejor Gobierno, para procurar mayor estabilidad o para tener más progreso.

Es tan patético lo que estoy señalando que leeré unas declaraciones del Diputado Pepe Auth , a quien la prensa sindica como uno de los redactores de la iniciativa, sin que ello jamás haya sido desmentido. Cito: "Es ahora o nunca, están dadas las condiciones. Estamos lo más cerca de tener los quórum que requieren 72 Diputados y 23 Senadores".

¡Eso es lo que se busca!

Por eso no se respeta la proporcionalidad del voto. Muchos colegas que me antecedieron en el uso de la palabra han mostrado que, con el nuevo distritaje, algunos distritos salieron favorecidos en desmedro de otros.

En consecuencia, el objetivo es lograr los quórums especificados: 72 Diputados y 23 Senadores. De esta manera, se podrá llevar adelante una serie de reformas sin que sea necesario conversar con otros sectores políticos, que representan también a una parte importante de la sociedad chilena.

Por esa razón, señalo que este es un traje a la medida de la Nueva Mayoría.

No se trata de cambiar el sistema binominal por uno proporcional inclusivo ni de fortalecer la representatividad del Congreso Nacional, como expresan los objetivos de esta reforma.

Una fórmula proporcional no significa necesariamente que sea más inclusiva y, tampoco, más representativa.

Habrá distritos más grandes en el caso de los diputados y circunscripciones mucho más amplias en el de los senadores. Por lo tanto, tendremos parlamentarios más lejanos a la gente, y eso no ayudará a que la ciudadanía se sienta más representada por quienes están llamados a ser su voz en el Congreso Nacional.

Durante mucho tiempo se ha pretendido hacer creer a la opinión pública que todos los males de nuestra democracia están en el sistema binominal. Yo, al menos, no lo pienso así.

Una de las ventajas de nuestro régimen electoral es permitir que la inmensa mayoría de las ciudadanas y los ciudadanos conozca a sus representantes, entre otras razones porque estos recorren las distintas comunas con bastante frecuencia. Con el nuevo sistema, eso será muy difícil de realizar.

Por otro lado, se dice que el sistema binominal deja fuera a sectores de la sociedad que carecen de representatividad por no alcanzar la votación suficiente.

Pues bien, eso no se corrige con un mecanismo proporcional. Este, probablemente, va a hacer que aumente el número de parlamentarios electos con los votos de otro candidato o de otros candidatos. La suma de tales votos permitirá que salga elegido uno. Tal resultado no necesariamente significará que la ciudadanía ha querido elegir a esa persona para que la represente.

Llevamos ya varios años con la experiencia de un sistema proporcional en la elección de los concejales. No por eso la gente se siente más representada en los municipios. Por el contrario, es cosa de ver la prensa: son cada vez más frecuentes las consultas, los plebiscitos, los cabildos, en fin, distintas denominaciones para preguntar más directamente la opinión a la ciudadanía. El objetivo de ello es que las autoridades estén más cerca de la gente, que es lo que, a mi juicio, quiere la ciudadanía.

Sin embargo, aquí se plantea algo enteramente distinto.

Por eso, señora Presidenta, tengo la convicción de que el proyecto que se nos propone no es bueno para Chile.

No es algo positivo disminuir los porcentajes de firmas para inscribir nuevos partidos políticos. Con ello habrá una proliferación de tales conglomerados, lo cual hará mucho más difícil la gobernabilidad, las negociaciones políticas, los acuerdos.

Repito: este proyecto no le hace bien a nuestro país. Va a dificultar las cosas en lugar de facilitarlas.

Espero que en las conversaciones que todavía quedan pendientes, a propósito de la discusión en particular, se pueda construir un acuerdo favorable, no para una coalición ni para otra, sino para el progreso y la estabilidad de Chile.

En definitiva, eso es lo que nos debe preocupar, no la cuota de las alianzas o de los partidos. Así, contaremos con una democracia mucho más estable y desarrollada.

Me abstengo.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Letelier.

El señor LETELIER.-

Señora Presidenta , estimados colegas, quiero partir refiriéndome a un hecho reciente: las acusaciones de que ha sido objeto un dirigente del Partido Comunista, quien recibió una agresión hace unos días.

Me hubiese gustado escuchar una condena unánime de parte de todos por la brutal golpiza de que fue víctima este dirigente.

Uno de los Senadores que me antecedieron señaló que dicha persona habría insultado o agredido verbalmente al Diputado José Antonio Kast .

Tengo en mi poder el texto de la entrevista. En ningún momento él se refiere directamente al parlamentario. Pero lo que más destaco es que el dirigente comunista, a quien efectivamente se le salió un garabato, pidió disculpas en medio de la misma entrevista. Posteriormente, entregó una declaración pública en la que expresó sus excusas. Y lo propio hizo su partido, que practica un criterio de tolerancia permanente.

Considerando que dicha persona ha estado sometida a acusaciones múltiples -se dijo que era asesor del Ministerio de Educación, y no lo ha sido-, que se la ha tratado de involucrar en situaciones que no corresponden y que ha sufrido una situación de agresión, uno entiende el cuadro emocional por el que está pasando.

Quiero dejar constancia de ello, porque no me parece adecuado que se distorsionen las cosas.

Entrando al proyecto que nos ocupa, señora Presidenta , cabe manifestar que nuestro sistema electoral es pésimo. Con lo propuesto se avanza en terminar solo una de sus principales distorsiones.

Hay muchos mecanismos electorales. Ninguno es perfecto.

Además, ninguno es cien por ciento proporcional.

Inglaterra, que es una democracia consolidada, se rige por un sistema en el que sale electo, entre todos los candidatos, el que obtiene más votos. Punto.

¿Eso garantiza proporcionalidad exacta? No, no la garantiza.

Y hay muchas otras alternativas con distintos mecanismos.

Como sea, nuestro sistema actual permite la sobrerrepresentación de las minorías mayoritarias. Suena raro, pero así es.

Esa fue una ventaja para la UDI, que era el partido mayoritario de la Oposición y que estaba sobrerrepresentado.

Pese a ello, la Nueva Mayoría encontró, en la unidad de la diversidad, la fórmula para romper el binominal.

Eso fue lo que ocurrió en la última elección: se quebró el sistema en los distritos suficientes para generar un debate, cuyo propósito es que en el Parlamento mande la mayoría. Porque este es el sentido de una democracia, y no que una minoría pueda imponer su visión e impedir transformaciones sociales.

En el sistema político chileno hay un doble candado: uno, el sistema electoral binominal; el otro, los quórums.

Aquí estamos discutiendo sobre la primera dimensión de este candado, la que impide que mande la mayoría. En otra oportunidad analizaremos lo relativo a los quórums.

No cabe duda de que el argumento que han presentado las bancas de enfrente se basa en el estudio que sobre la materia hizo la Fundación Jaime Guzmán . De ahí son algunos de los ideólogos del actual sistema, ¡y hoy vienen a discutir acerca de la proporcionalidad¿!

El mecanismo en vigor, sin duda, es peor que cualquier propuesta que se haga, pues, sea cual sea, va a generar una mejor ponderación del peso del voto de los ciudadanos.

Es cierto, la fórmula planteada podría ser mejor. Pero hasta ahora las bancas de Oposición no han estado dispuestas a ser parte de un acuerdo mayor. Se han restado, porque quieren defender el sistema binominal.

Digamos las cosas como son y de frente: cuando el Presidente de Renovación Nacional hizo una propuesta en esta materia, la mayoría de sus Senadores la rechazó. Y no es la primera vez. En diferentes ocasiones los representantes de RN en el Senado se han resistido a legislar sobre el particular.

Esperamos que el sistema se corrija. Al menos existe conciencia de que hay una mayoría -demostrada ya en la votación de la Cámara Baja; por demostrarse en los próximos minutos en esta Corporación- con voluntad de cambio.

Señora Presidenta , en cuanto a los números, cabe señalar que la región que puede alegar que va a quedar desequilibrada en la ponderación final de los votos es la Metropolitana. En efecto,¿

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Terminó su tiempo, señor Senador.

Le doy un minuto adicional para que redondee su idea.

El señor LETELIER.-

Gracias, señora Presidenta .

Se requerirá un poco más de 100 mil votos para elegir un parlamentario en la Capital. En cambio, en otras regiones, como en las ubicadas en los extremos norte y sur, se precisarán entre 30 y 50 mil.

Sin embargo, la opción por los extremos del país guarda relación con razones geopolíticas. En esos casos no buscamos proporcionalidades perfectas.

Y esa subrepresentación -entre comillas- de la Región Metropolitana tiene que ver con un privilegio al desarrollo territorial del resto del país.

Los sistemas electorales nunca son de una proporcionalidad completa. Y se pueden perfeccionar. Por lo mismo, invito a las bancas de enfrente a sumarse al debate de una mejor propuesta. La que viene de la Cámara de Diputados no tiene por qué ser inamovible.

Hay aspectos posibles de mejorar, como lo relativo al número de firmas para constituir un partido político. Yo soy partidario de fortalecer a estos conglomerados. Pero hoy la prioridad es cambiar el sistema binominal.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Horvath.

El señor HORVATH.-

Señora Presidenta , estamos ante una materia de la mayor relevancia, tal vez no desde el punto de vista ciudadano, pero sí bajo la lógica de los efectos que va a producir, siempre y cuando legislemos bien en particular.

Si uno mira todas las expresiones de la vida, se da cuenta de que la biodiversidad es lo que mayor enriquecimiento otorga. Si en el sistema político, en cambio, tenemos algo que es blanco o negro, se producirá una bipolaridad que claramente resulta poco sana. Por tanto, en la medida en que aumentemos la diversidad en las opciones, en las candidaturas, en la representación de nuestra realidad natural y cultural, ¡en hora buena!

Además, el actual sistema se da en un modelo que tiene su historia, que nos ha conducido a un centralismo exacerbado en lo público y a una concentración muy alta en lo económico. Esta se refleja en la propiedad de los medios de comunicación y en las influencias que se ejercen en la actividad política, entre ellas, en las campañas.

Por lo tanto, los distintos temas que aborda este proyecto de ley se van tocando dentro de una configuración de carácter general.

Todo lo que evite el centralismo y empodere a las localidades, a la gente, ¡bienvenido sea! Todo lo que impida la concentración económica y corte su influencia en la política y en la acción pública, ¡bienvenido sea!

En consecuencia, esta iniciativa, que se refiere a votaciones populares y escrutinios, a transparencia y límite en el gasto electoral, y que modifica a la Ley de los Partidos Políticos, bajo este prisma, nos parece positiva.

En primer lugar, con relación a la configuración del Congreso Nacional, se propone una suerte de principio: la Cámara de Diputados se convierte en una entidad más cercana a la cantidad de población. Eso la acerca más a lo que se denomina en otros países "Cámara de Representantes". Como principio, desde luego, está bien.

En el caso del Senado, se ha planteado -y obviamente la respaldamos- una representación más territorial. No tenemos por qué valer según la cantidad de personas, pues hay otros puntos, y no solamente geopolíticos, que permiten una armonización y, también, darles un destino mejor a las futuras generaciones de nuestro país.

La Cámara de Diputados aumenta sus miembros de 120 a 150. Por lo tanto, la proporcionalidad mejora. Sin embargo, es preciso tomar algunas precauciones, porque al aumentar la superficie de los distritos se va a producir una concentración regional. Es decir, las localidades más pequeñas, y algunas con importante significado, como trataremos de mostrar, van a quedar de alguna manera debilitadas. Es un asunto que se debe revisar con mayor cuidado.

En el caso del Senado, hay un aumento lógico: de los 38 que somos se suman 2 que corresponden a la Región de Arica y Parinacota, y se proponen 10 más. Pero estos últimos vienen a aumentarse en las regiones que tienen más población. Por lo tanto, se están confundiendo principios. Me refiero, fundamentalmente, a la Región Metropolitana, al Gran Valparaíso y a Concepción.

Hago un llamado a corregir esta materia en el Senado; en buena hora si se logra. Porque muchos países que aquí se han mencionado tienen, en un sistema bicameral, estas dos características.

Por lo demás, el Senado, de acuerdo a su etimología, requiere más experiencia, más años, más canas o como se lo quiera llamar. Uno que ha sido Diputado y también Senador nota cómo ambas Cámaras analizan las materias bajo prismas distintos, lo que produce una buena sinergia, que beneficia al país.

En Estados Unidos, Alaska vale lo mismo que California o Nueva York, y, en el caso de nuestros vecinos argentinos, Tierra del Fuego vale lo mismo que Buenos Aires. Los países de Europa se las han arreglado de alguna manera para lograr este fin.

Hay muchos elementos que permiten fundamentar este punto.

Y uno puede parecer parte interesada, pero lo importante es, de alguna manera, mantener y perfeccionar el equilibrio territorial.

En el caso de los Diputados -y aquí hay Senadores de la Región de Valparaíso-, se producen algunas situaciones que, a mi juicio, es conveniente revisar.

Años atrás propuse una reforma para que Rapa Nui tenga un representante en el Congreso Nacional.

De acuerdo al Censo de 2012, hay casi un millón 800 mil habitantes en esta Región. Rapa Nui tiene 5 mil 167 habitantes. Por lo tanto, sobre la base de lo que se nos propone es imposible -a menos que sea una figura, como se ha intentado- que tenga una repercusión regional o nacional y pueda llegar a este Congreso Nacional.

Sin embargo, si uno mira Rapa Nui y configura el espacio geográfico que nosotros ocupamos en el Océano Pacífico, se da cuenta de su importancia. Los franceses han sido bastante inteligentes y tienen un representante de la Polinesia en su Asamblea Nacional. Yo creo que es un tema que conviene estudiar.

En segundo lugar, vamos a proponer en su minuto que haya una mejor representación territorial en el Senado. Eso significaría, en buen romance, por ejemplo, subir de 50 a 55 los Senadores, eligiendo 3 en las regiones menos numerosas y 5 en las más numerosas, cosa que no es nada del otro mundo.

Se ha criticado el gasto que significa generar más parlamentarios. La verdad es que esto hay que ponerlo en su sano equilibrio, porque en comparación con el poder Ejecutivo y el Poder Judicial la verdad es que nosotros estamos no solamente disminuidos en facultades, sino también en medios.

Hay una campaña de desprestigio de la política -es un fenómeno que sucede a nivel mundial- y existe gente interesada en que eso ocurra, porque justamente es el poder político el que le pone freno, entre otros, al poder económico.

Otro punto muy importante es el de la transparencia. Es clave que podamos separar en esta ley -¡en esta ley!- la política y la influencia económica. Todo lo que apunte a hacer esa separación va a beneficiar la mejor representación y, también, el buen uso de los fondos públicos.

Si uno revisa, por ejemplo, el techo electoral, advierte que el gasto de las campañas ha disminuido muy poco. Un gasto máximo de campaña a Senador por Santiago podría llegar a 3 mil 739 millones de pesos, más un porcentaje que antes era de 0,02 respecto a lo que supere las 200 mil personas. Esa cifra se ha reducido a 0,01. Eso es bajar muy poco el techo del gasto electoral. Ahí yo creo que tenemos que hacer esfuerzos importantes.

De la misma manera, es necesario eliminar los aportes reservados, porque eso es bueno para la transparencia. Es mejor saber de dónde provienen. No basta con reducir el gasto; también hay que evitar este tipo de aportes.

La indicación que en su minuto presentaron los Diputados Vlado Mirosevic y Giorgio Jackson debemos valorarla en plenitud, porque le hace bien a la transparencia, a las facilidades y a la igualdad de oportunidades que deben tener las personas para aspirar a ocupar cargos en el Congreso Nacional.

El tercer punto es el que se refiere a la participación vinculante, que llega por la vía de facilitar la creación de nuevos partidos políticos en las regiones.

No tenemos que temerle en absoluto a la diversidad. En buena hora si ella crece, porque va a haber mayor enriquecimiento de ideas, mejores debates; se van a producir asociaciones entre las distintas regiones y vamos a salir de este modelo bipolar.

Estimo que, en términos generales, estamos avanzando en la línea correcta. Tenemos la oportunidad, en este Congreso, de hacer los mejoramientos que, de alguna manera, hemos propuesto.

Por eso, desde luego votaré a favor.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Navarro.

El señor NAVARRO.-

Señora Presidenta, ha llegado la hora de la verdad para la UDI: es el partido mayoritario de Chile, el más grande, y tiene muchos Diputados, muchos Senadores subsidiados.

Y está claro que en la próxima elección van a tener que correr sin sistema binominal y sin el financiamiento de las grandes empresas.

¡Ahí los quiero ver!

Vamos a asistir a una elección más competitiva en el plano de las ideas. Y yo espero, también, que el peso del dinero en las campañas disminuya.

He sido parlamentario en cinco oportunidades. Las primeras tres veces, con Edmundo Salas, doblamos en la elección de Diputados. La cuarta vez doblamos también, y rompimos el binominal en el Senado.

Yo llegué el 2006 a esta Corporación, y rompimos el binominal -dimos 20/18- en base a esfuerzo, a trabajo.

Entonces, siento que cuando hoy día nos proponemos terminar con el binominal estamos mandando una señal a mucha gente que nos criticó y que nos preguntaba por qué no hacíamos las cosas que teníamos que hacer. ¡Porque no teníamos mayoría!

Este Senado estuvo empatado -19 a 19-, y se expresaba en la testera: dos años la Concertación, dos años la Derecha. Era miti y miti. ¡Todo era por consenso! No había mayorías.

Yo siento que hay que acostumbrarse a la democracia, que es respeto para las minorías, pero ejercicio de la mayoría.

Y lo que se propone hoy día es lo más democrático que existe: el ejercicio de las mayorías con el respeto de las minorías.

Esta reforma ha sido muy resistida, y lo va a seguir siendo.

El Senador García señalaba: "Esta reforma no le hace bien a la democracia". Yo diría que no le hace bien a la UDI. Y está claro el porqué: desde el 89 a la fecha, 60 parlamentarios de la Alianza, Senadores y Diputados, han sido electos por el binominal. Es decir, salieron terceros en la elección, pero resultaron elegidos igual. Ello solo puede decirse de 24 parlamentarios de la Concertación. ¡Tres veces menos!

O sea, la Alianza triplicó el número de los electos por el beneficio del binominal, que mucha gente no entendía.

El ex Presidente Ricardo Lagos tenía pedagogía, y dijo dos cosas muy importantes:

Primero, que el binominal es el cáncer de la política, porque el adversario no está al frente, sino al lado. Y vino el desangramiento de los partidos por pelear el cupo: tu compañero de lista era tu competencia, no tu aliado.

Y, segundo, que 33 por ciento era igual a 66 por ciento.

¡Eso es hoy el binominal: 33 por ciento es igual a 66 por ciento!

Es el único país del mundo que tiene este sistema. ¡No hay otro!

Me ha tocado viajar mucho en estos 21 años de parlamentario, al igual que la señora Presidenta y muchos otros colegas. Y la verdad es que cuando uno trata de explicar qué es el binominal, a todo el mundo le cuesta entender cómo funciona este sistema donde 33 es igual a 66.

Bueno, eso pasa en Chile: 16 Senadores binominales de la Alianza, desde el año 89, y 3 Senadores binominales de la Concertación. ¡De 16 a 3!

¿Quiénes son los beneficiarios? La Alianza, y particularmente la UDI, por sobre Renovación Nacional, ya que, con solo cuatro o cinco puntos más que este último partido el 2009, lo superaba ampliamente en Diputados.

Claramente, para RN la alianza con la UDI fue un mal negocio.

Quiero señalar que este término del binominal -parcial, porque no es absoluto- deja pendiente lo que hemos llamado "el fin de la transición". La transición desde la dictadura a la democracia concluirá cuando haya una nueva Constitución.

Hoy día reformamos el sistema binominal. Es un proyecto de mi Gobierno. No ha sido fruto de una concesión, sino de una batalla electoral -de ahí su mérito- en que hemos ido doblando y doblando, con el máximo esfuerzo.

La UDI ha argumentado que no hay exactamente una representación territorial. En Estados Unidos -se ha dicho ya- hay cien Senadores, dos por Estado. Alaska, Nueva York o California tienen dos cada uno. Eso es representación territorial.

Señora Presidenta, este proyecto va a suscitar más debate.

Y lo hemos dicho quienes integramos partidos llamados "pequeños": todos los partidos tradicionales están subsidiados, incluyendo los de la Nueva Mayoría. Esta iniciativa establece el pacto intrapartidos: que cuando compitan con dos los votos se sumen. Por lo tanto, hay un elemento distorsionador, porque todos están subsidiados. Si aplicáramos un método

ceteris paribus -es decir, si todos partieran de un mismo punto-, uno diría "No importa, veamos quién puede llevar dos". Pero, como hay subsidio anticipado para la Alianza y la Concertación -ya lo hemos dicho-, el pacto intrapartidos va a arrojar una pérdida de diversidad.

Yo he planteado estas observaciones en el seno de la Nueva Mayoría. Queremos terminar con el binominal, pero confiamos en que se respete la diversidad. Y eso no está totalmente garantizado. Si los partidos más grandes se ponen de acuerdo, o hacen ejercicio de su poder -entre comillas-, la diversidad se verá amenazada.

Ahora, la solución no es crear y crear partidos, como se propone. Tiene que haber una barrera de entrada y facilidades para subsistir. Es como la universidad: cuesta mucho llegar, pero si haces bien la pega te puedes quedar. Hay barreras de entrada. Pero no puede haber barreras de entrada y ejercicio permanente para la expulsión de los más pequeños.

Señora Presidenta , el financiamiento va a ser abordado también. Porque sinceremos las cosas: esto tiene costo financiero, pues implica contar con más Diputados, más Senadores.

La pregunta es de dónde vamos a sacar la plata.

Yo quiero señalar que podemos apretar el cinturón del Congreso, de la Cámara de Diputados y del Senado, para ahorrar. Y podemos cubrir parte importante de los costos. Pero no será suficiente.

Y no parece justo que, si vamos a aumentar la plata para las campañas -si bien se disminuyen los costos, el Estado va a gastar más, porque va a haber menos publicidad privada, pero más pública-, más plata para los candidatos y más plata para los partidos políticos, este proyecto de ley no contemple a la ciudadanía.

Hay una crisis de legitimidad, de representación y de participación hoy día -y este proyecto no la corrige-, producto de la Constitución, del sistema binominal. En Chile vota el 40 por ciento de los ciudadanos, cuatro de cada diez. Existe, pues, una crisis.

Entonces, yo digo: "Es injusto, impresentable que busquemos financiar la política, a los políticos, a sus partidos, y no digamos nada de la sociedad civil".

Yo estoy por incorporar el financiamiento de la sociedad civil. Hagamos plebiscitos vinculantes; hagamos plebiscitos regionales; creemos el

ombudsman; tengamos referéndum revocatorio; tengamos presupuestos participativos; tengamos iniciativa popular de ley; tengamos porcentaje para los pueblos originarios y para las mujeres, y tengamos voto a los 16 años.

Y digámosle a la ciudadanía que estamos arreglando el sistema, pero no para nosotros, sino para que haya más participación, más legitimidad, más transparencia, más representación.

En ese sentido -lo hemos conversado en el MAS-, tiene que haber plata para la sociedad civil, no solo para los partidos, no solo para los candidatos, no solo para las campañas. Hay que fortalecer la sociedad civil: deberes y derechos.

Y, si me apuran, si tenemos una lista de diez derechos -los que he señalado y otros-, no debemos volver al voto obligatorio. Porque con qué cara vamos a pedirles a los jóvenes que voten si no estamos ofreciendo ningún mecanismo que subsane los déficits de la Constitución del 80, la Constitución de Pinochet.

Una de las maneras de ahorrar dinero -creo que es el momento de plantearlo- es trasladar el Congreso a Santiago. Su permanencia en Valparaíso no tiene ningún sentido; solo provoca miles y miles de millones de gasto adicional. En ningún país del mundo -y usted lo sabe, señora Presidenta -, el Ejecutivo está separado del Legislativo. Aquí hay una razón política: la dictadura, que eligió Valparaíso . Pero en nada ha favorecido el Congreso Nacional a esta ciudad.

Yo estoy disponible para que abramos el debate, no solo porque el traslado permitiría un ahorro económico enorme, sino porque se restituiría el curso normal de la democracia republicana. Porque, si no, el resto de los países haría lo mismo que Chile. Tenemos un sistema binominal único en el mundo y tenemos el Congreso separado del Ejecutivo, experiencia también única en el mundo, a excepción de Sudáfrica, donde ambos poderes funcionaban, uno en Pretoria y el otro en Johannesburgo. ¡Pero ahí estaba el

apartheid, ahí estaban los negros separados de los blancos!

Creo que es un buen minuto para enfrentar este tema.

El año 70, en el Congreso en Santiago había 150 Diputados y 50 Senadores. Ahí cabemos perfectamente. A este edificio venimos seis días al mes, señora Presidenta ; usted lo sabe. Los otros veinticuatro días no ocupo la oficina que tengo en la torre. ¡Veinticuatro días pasa desocupada, con uno que otro asesor!

Por lo tanto, el tema de las oficinas no es una excusa. Y creo que hay una dilapidación de recursos muy importante, además de un daño a la política.

En lo personal, siento que el Gobierno tiene el deber de escucharnos y de abrirse al debate político de fondo. Los parlamentarios de la Quinta Región se opondrán, legítimamente. Pero ¿qué les decimos? Que aquí, en este edificio, estarán el Ministerio del Mar -habrá que crearlo, porque Chile es un país con 4 mil 500 kilómetros de costa-, el Ministerio de la Cultura; y, si avanzamos más, el Ministerio de Turismo.

¡Eso es descentralización: descentralizar el Ejecutivo ! Sacar el Legislativo, separarlo es una anomalía democrática que es necesario corregir.

Ahora, este proyecto de ley va en la dirección correcta, pero tiene debilidades.

Una de ellas es el financiamiento.

La segunda es el control y la fiscalización.

Yo quiero pérdida del cargo para el parlamentario que gane violando la ley, como propusimos el 2003 en el acuerdo Longueira-José Miguel Insulza . No es coherente que alguien vulnere la ley y gane el puesto para hacer leyes. ¡Ahí estuvieron las indicaciones del Diputado Navarro, que no fueron escuchadas y que resultaron rechazadas¿!

Yo quiero que haya una contraloría electoral. El SERVEL está agotado. No sirve. Es un perro sin dientes, sin olfato, sin fuerza, viejo, achacoso. Sus funcionarios son gente valiosa. Pero no sirve como institución, no fiscaliza. Aquí hay parlamentarios que han gastado tres, cuatro, cinco veces lo que permite la ley, y nada, ¡ni por curado¿! Entonces, necesitamos una contraloría electoral, un organismo con fuerza, capaz de fiscalizar e, incluso, de supervisar las elecciones internas de los partidos.

Voy a votar a favor de la idea de legislar, señora Presidenta, pero vamos a presentar indicaciones en la línea que hemos señalado.

¡Patagonia sin represas!

¡Nueva Constitución, ahora!

¡No más AFP!

El señor LABBÉ ( Secretario General ).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Terminada la votación.

--Se aprueba en general el proyecto (28 votos a favor, 6 en contra y 4 abstenciones).

Votaron a favor las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Allamand, Araya, Bianchi, Chahuán, De Urresti, Espina, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Ossandón, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa las señoras Van Rysselberghe y Von Baer y los señores Coloma, García-Huidobro, Moreira y Pérez Varela.

Se abstuvieron los señores García, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

--(Aplausos en la Sala).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra la señora Ministra Secretaria General de la Presidencia.

La señora RINCÓN ( Ministra Secretaria General de la Presidencia ).-

Señora Presidenta , en nombre del Ministro Secretario General de Gobierno , Álvaro Elizalde , quien nos acompaña; en nombre de la Ministra del próximo Ministerio de la Mujer , Claudia Pascual ; en nombre de nuestra Subsecretaria General de la Presidencia , Patricia Silva ; en nombre del Ministro Rodrigo Peñailillo , que no ha podido estar acá porque está actuando como Vicepresidente de la República , pero que ha liderado este proceso; y en nombre de la Presidenta y de todo el Gobierno, quiero dar las gracias a este Senado de la República y al Congreso.

Hoy hemos dado un paso gigantesco hacia la democratización del país y la igualdad entre hombres y mujeres. El sistema binominal es uno de aquellos enclaves que no dejan que la democracia se desenvuelva libremente, donde gobierne una mayoría clara con respeto a las minorías, donde el consenso y el disenso sean reales y no se diluyan por el poder de veto de una minoría. Hoy, señora Presidenta , se marca un hito en la historia de la república.

Amartya Sen ha señalado que las oportunidades de cambio y desarrollo económico dependen en gran medida de las instituciones que existen y de cómo funcionan. Es decir, mejores instituciones conllevan más desarrollo, y en eso estamos avanzando hoy día.

Las instituciones políticas, como el sistema electoral, tienen un impacto directo en la vida de las personas. Una democracia más competitiva lleva a mayor legitimidad del sistema político. O sea, más apoyo a la democracia significa mayor estabilidad política, económica y social de largo plazo.

La democracia es un método para resolver pacíficamente nuestras diferencias; canaliza las preferencias ciudadanas, resolviéndolas por medio del juego de mayorías y minorías. Ello, con el objetivo de generar políticas públicas acordes a las necesidades de la ciudadanía, velando siempre por representar a las principales corrientes políticas en un contexto de gobernabilidad.

Este Congreso Nacional tiene una responsabilidad y una oportunidad históricas.

El sistema electoral no es el único factor para revitalizar la actividad política, pero, sin lugar a dudas, reviste importancia; porque, como se ha dicho, el actual sistema desincentiva la participación de los ciudadanos en política, pues los electores estiman, correctamente, que su voto tiene poca injerencia en la selección de sus representantes y en las mayorías parlamentarias.

Honorables Senadoras y Senadores, este Parlamento tiene una oportunidad histórica: no existe sistema electoral perfecto, ya que todo depende de la cultura política del país; pero lo que nos demuestra la política comparada es que reformar el sistema electoral en democracia es un desafío mayor.

Son pocos los países y parlamentos que logran reaccionar institucionalmente y se autoimponen nuevas reglas del juego en beneficio de mayor representatividad e inclusión de la política, de mayor legitimidad del sistema y del prestigio de esta noble actividad.

En Chile se han dado las circunstancias para hacerlo y se ha tenido voluntad para avanzar en ello.

Tal y como fuimos ejemplo mundial por nuestra transición democrática, hoy podemos volver a sorprender al mundo generando, a través del diálogo y en el mismo Congreso Nacional, un sistema electoral más democrático.

¡No dejemos pasar esta oportunidad!

Quiero hacer un reconocimiento a la labor de todos los parlamentarios, y en especial, a los parlamentarios de la Nueva Mayoría; a los independientes; a los de Amplitud, y a los cuatro Senadores de Renovación Nacional que nos han apoyado hoy.

Creo que es un tremendo momento en nuestro país.

¡La patria y la república lo agradecen!

Gracias, señora Presidenta.

La señora ALLENDE ( Presidenta ).-

Señores Senadores, el próximo martes fijaremos plazo para formular indicaciones -espero que sea de dos semanas-, porque en este momento no existe quórum para tomar acuerdos.

)---------(

2.4. Boletín de Indicaciones

Fecha 05 de diciembre, 2014. Boletín de Indicaciones

BOLETÍN Nº 9.326-07

INDICACIONES

05.12.2014

INDICACIONES FORMULADAS DURANTE LA DISCUSIÓN EN GENERAL DEL PROYECTO DE LEY, EN SEGUNDO TRÁMITE CONSTITUCIONAL, QUE SUSTITUYE EL SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UN SISTEMA ELECTORAL PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL.

ARTÍCULO 1°

Número 1)

Letra a)

1.- Del Honorable Senador señor Bianchi, para reemplazarla por la siguiente:

“a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, pasando el actual a ser tercero:

“De la misma forma dos o más candidaturas independientes podrán acordar entre sí un pacto electoral; igualmente, una o más candidaturas independientes podrán celebrar pactos electorales con un partido político que se encuentre constituido en la región respectiva.”.”.

oooo

2.- Del Honorable Senador señor Bianchi, para agregar la siguiente letra b), nueva:

“b) Intercálase el siguiente inciso cuarto, nuevo, pasando el actual a ser quinto:

“En caso de un pacto electoral entre dos candidaturas independientes o entre una candidatura independiente y un partido político, el pacto electoral regirá en la región del país donde se encuentren inscritas dichas candidaturas y constituido el partido político respectivamente.”.”.

oooo

Letra b)

3.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y 4.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para suprimirla.

5.- Del Honorable Senador señor Ossandón, para reemplazar la frase “ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo” por la frase “a lo menos el cuarenta por ciento del total respectivo deberá corresponder a mujeres, discapacitados o personas pertenecientes a alguna etnia indígena”.

6.- De los Honorables Senadores señoras Allende, Goic, Muñoz y Pérez San Martín, y señor Harboe, para agregar después del primer punto seguido, la siguiente oración: "Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas.".

oooo

7.- Del Honorable Senador señor Bianchi, para incorporar la siguiente letra c), nueva:

“c) Intercálase el siguiente inciso quinto, nuevo:

“El pacto electoral en caso de que este constituido por candidaturas independientes o entre una candidatura independiente y un partido político, deberá formalizarse ante el Director de Servicio electoral antes del vencimiento del plazo para efectuar las declaraciones de candidaturas, mediante la presentación de los siguientes documentos:

Declaración suscrita por el Presidente y Secretario del Partido Político integrante del pacto y del candidato integrante de la candidatura independiente, o declaración conjunta de las candidaturas independientes que constituyen el pacto entre si, que deberá indicar la decisión de concurrir en lista conjunta en una elección de Parlamentarios.”.

oooo

Número 2)

8.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, 9.- del Honorable Senador señor Bianchi, y 10.- de los Honorables Senadores señores García-Huidobro y Moreira, para eliminarlo.

oooo

11.- Del Honorable Senador señor Bianchi, para agregar el siguiente número, nuevo:

“…) Suprímese el inciso quinto del artículo 4º.”.

oooo

12.- Del Honorable Senador señor Bianchi, para agregar el siguiente número, nuevo:

“…) Intercálase, en el inciso segundo del artículo 5º, entre la expresión “partidos políticos” y “que los integren”, la frase “y de candidaturas independientes”.”.

oooo

13.- Del Honorable Senador señor Bianchi, para agregar el siguiente número, nuevo:

“…) Agrégase en el inciso tercero del artículo 5º, a continuación de la expresión “partidos”, la frase “y candidaturas independientes”.”.

oooo

Número 3)

14.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, 15.- de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín; y 16.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para suprimirlo.

Número 4)

Artículo 17

Inciso primero

Letra b)

17.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y 18.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminar la oración que señala: “El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con el porcentaje de sexos establecido en los incisos cuarto y quinto de dicho artículo.”.

Inciso segundo

19.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y 20.-de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para suprimir la frase “, con el fin de ajustarse al porcentaje de sexos dispuesto en los incisos cuarto y quinto del artículo 3° bis, ya sea retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas”.

Incisos segundo y tercero

21.- De los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para sustituirlos por el siguiente:

“Para determinar el porcentaje que corresponde a cada sexo se considerará la totalidad de las candidaturas declaradas por el partido político conforme al párrafo 1 del título I de esta ley, sin considerar aquellas candidaturas ya inscritas en el registro señalado en el artículo 19 de la ley N° 18.700 que hayan sido nominadas en virtud de una elección primaria, y sin restar aquellas que pudieren ser objeto de rechazo según la letra a) del inciso anterior.”.

Número 5)

22.- De los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para suprimirlo.

oooo

23.- Del Honorable Senador señor Bianchi, para incorporar el siguiente número, nuevo:

“…) Agrégase antes del punto final del inciso segundo del artículo 19 la siguiente expresión: “, en caso de no conformar un pacto electoral en la respectiva Región”.

oooo

24.- Del Honorable Senador señor Bianchi, para incorporar el siguiente número, nuevo:

“…) Incorpórase en el inciso cuarto del artículo 20, a continuación de la expresión “candidaturas independientes,” la frase “en caso de no encontrarse en un pacto electoral en su respectiva región,”.

oooo

25.- De los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para consultar un numeral nuevo, del siguiente tenor:

“…) Agrégase al artículo 23 el siguiente inciso tercero nuevo:

“En el caso de un pacto electoral, el orden de precedencia de los partidos dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito, será el señalado por el pacto electoral en la declaración de candidaturas, y a falta de este, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.”.

oooo

26.- Del Honorable Senador señor Bianchi, para incorporar el siguiente número, nuevo:

“…) Incorpórase en el inciso tercero del artículo 23, a continuación de la expresión “independiente a diputado o senador” lo siguiente: “, que no haya celebrado pacto electoral en la respectiva región,”.

oooo

Número 6)

27.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y 28.-de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarlo.

29.- Del Honorable Senador señor Bianchi, para sustituirlo por el siguiente:

“6) Sustitúyese el inciso cuarto del artículo 24 por el siguiente:

“Los partidos políticos y los pactos electorales entre independientes, dentro de cada lista, pondrán los nombres de los candidatos ordenando a sus integrantes con alternancia entre los candidatos y las candidatas, asignándoles un número correlativo desde el uno hasta la cantidad total de candidatos declarados para la misma circunscripción senatorial o distrito electoral, comenzando la numeración con los candidatos a senadores y siguiendo con los candidatos a diputados.”.”.

Letra a)

30.- De los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para reemplazarla por la que se indica:

“a) Sustitúyese el inciso cuarto por el siguiente:

“El orden de precedencia los candidatos de un partido y sus independientes asociados dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito, será el señalado por el partido en la declaración de candidaturas, y a falta de este, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.”.

Letra b)

31.- De los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para suprimir en el inciso final propuesto la locución “y del nombre de la lista respectiva”.

32.- Del Honorable Senador señor Larraín, para suprimir en el inciso final que propone la oración que señala: “Asimismo, al lado izquierdo del número de cada candidato, también habrá una fotografía de éste, si la hubiese acompañado en su declaración, en el tamaño y colores de impresión que determine el Servicio Electoral.”.

Número 7)

Letra a)

33.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y 34.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para suprimirla.

35.- Del Honorable Senador señor Guillier para sustituirla por la siguiente:

“a) Sustitúyese el inciso primero por los siguientes, pasando el inciso segundo a ser tercero y así sucesivamente:

“Se entenderá por propaganda electoral toda aquella manifestación pública, escrita, radiofónica o audiovisual, que promocione el nombre, apellido o partido político, alianza o coalición, al que pertenezcan candidatos determinados o que utilice cualquier otro medio de identificación, que esté dirigida a promover a un candidato, sea que la respectiva declaración de candidatura se haya realizado o no. También lo será la que induzca a apoyar alguna de las proposiciones sometidas a plebiscito. Dicha propaganda sólo podrá efectuarse en las oportunidades y en la forma prescrita en esta ley.

No se entenderá como propaganda electoral la difusión de información sobre actos políticos y actividades habituales del funcionamiento de los partidos y autoridades políticas, así como la realización de entrevistas periodísticas.

Para los plebiscitos comunales la propaganda sólo podrá comprender las materias sometidas a consideración de los vecinos, sin aludir a asuntos ideológicos, de carácter partidista o de política contingente.”.”.

Letra b)

36.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, 37.- de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y 38.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarla.

39.- Del Honorable Senador señor Ossandón, para agregar a continuación de la palabra “Chile”, la siguiente frase: “y de aquellas personas jurídicas señaladas en el artículo 24 de la ley 19.884”.

oooo

40.- Del Honorable Senador señor Bianchi, para incorporar el siguiente número nuevo:

“…) Sustitúyense los incisos cuarto y quinto del artículo 31 por el siguiente:

“En las elecciones de diputados y senadores, a cada región le corresponderá un tiempo por día que será dividido semanalmente entre las distintas regiones, pares o impares que se encuentren en periodo de elección de sus representantes. En cada día de propaganda se distribuirá el tiempo en forma equivalente entre los distintos candidatos que se presenten.”.”.

Número 8)

41.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, 42.- de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y 43.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para suprimirlo.

Número 9)

44.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, 45.- de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y 46.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarlo.

Número 10)

47.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, 48 .- de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y 49.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para suprimirlo.

Número 11)

50.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y 51.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarlo.

52.- De los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para reemplazarlo por el siguiente:

“11) Sustitúyese el artículo 109 bis por los siguientes artículos 109 bis y 109 ter nuevos:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme al procedimiento de cifra repartidora que se señala en los incisos siguientes.

Se considerará que constituyen una lista los pactos electorales, los partidos que participen en la elección sin formar parte de un pacto electoral, y cada una de las candidaturas independientes que no estén asociadas a un partido.

Se determinarán los votos de listas sumando las preferencias emitidas a favor de cada uno de los candidatos integrantes de una misma lista.

Se determinará el cuociente electoral, para lo cual los votos de lista se dividirán sucesivamente por uno, dos, tres, cuatro y así sucesivamente, hasta formar tantos cuocientes por cada lista como senadores o diputados corresponda elegir. Todos esos cuocientes se ordenarán en forma decreciente y el que ocupe la posición ordinal correspondiente al número de senadores o diputados que le corresponder elegir a la circunscripción senatorial o distrito será el cuociente electoral.

Para determinar cuántos son elegidos en cada lista, se dividirá el total de votos de la lista por el cuociente electoral. Se considerará la parte entera del resultado de la división, sin aproximar y despreciando cualquier fracción o decimal.

Para determinar los candidatos a senadores o diputados elegidos dentro de cada lista, se observarán las siguientes reglas:

1) Si a una lista corresponde elegir igual número de senadores o diputados que el de candidatos presentados, se proclamará elegidos a todos estos.

2) Si el número de candidatos presentados es mayor que el de los senadores o diputados que a la lista le corresponde elegir, se proclamarán elegidos los que hubieren obtenido las más altas mayorías individuales, a menos que la lista corresponda a un pacto electoral, caso en el cual se aplicará la norma del artículo siguiente.

3) Si el número de candidatos presentados es inferior al de los senadores o diputados que a la lista le corresponda elegir, se proclamarán elegidos todos los candidatos de la lista, debiendo reasignarse el cargo sobrante recalculando el número de cargos elegidos por las demás listas. Para ello, se repetirá el cálculo del inciso quinto, utilizando como cuociente electoral aquel que ocupe la posición ordinal que siga en el orden decreciente de los cuocientes determinados según el inciso cuarto. Si fuesen más de uno los cargos sobrantes, para determinar el cuociente se avanzará en el orden decreciente de los cuocientes del inciso cuarto, tantas posiciones ordinales como cargos sobrantes existan.

4) Si dentro de una misma lista un cargo correspondiere con igual derecho a dos o más candidatos, resultará elegido aquel que haya obtenido el mayor número de preferencias individuales y, en caso de que persista la igualdad, se procederá por el Tribunal al sorteo del cargo, en audiencia pública.

5) Si el último cargo por llenar correspondiere con igual derecho a dos o más listas o candidaturas independientes, resultará elegido el candidato de la lista o el independiente que haya obtenido mayor número de preferencias individuales y, en caso de que persista la igualdad, se procederá por el Tribunal al sorteo del cargo en audiencia pública.

Artículo 10

9 ter.- Para determinar los candidatos elegidos en una lista que corresponda a un pacto electoral, se procederá a sumar las preferencias de los candidatos de un mismo partido incluidos los candidatos independientes asociados a dicho partido.

Posteriormente, se repetirá el procedimiento descrito en el artículo anterior, considerando, para este efecto, como si fueran una lista a cada partido integrante del pacto electoral, todo ello con el objeto de determinar el número de candidatos que elige cada partido integrante del pacto.

Determinado el número de senadores o diputados que elige cada partido integrante del pacto electoral, se repetirá el procedimiento descrito en el artículo precedente, para determinar cuáles son los candidatos electos de cada partido integrante del pacto. En el caso de un partido que incluya candidatos independientes asociados, estos candidatos tendrán igual derecho de preferencia dentro del partido que los candidatos afiliados, proclamándose electos a quienes obtengan las más altas mayorías considerando únicamente su votación individual.”.”.

53.- Del Honorable Senador señor Bianchi, para reemplazarlo por el siguiente:

“11) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de Parlamentarios, el Tribunal proclamará elegidos Senadores o Diputados a los candidatos que obtengan las más altas mayorías individuales, según sea el número de cargos a elegir.”.”.

54.- Del Honorable Senador señor Ossandón, para reemplazarlo por el siguiente:

“11) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegido al candidato que obtenga la más alta mayoría relativa”.”.

oooo

55.- Del Honorable Senador señor Horvath, para consultar como inciso final del artículo 109 bis propuesto, el siguiente:

“Tratándose de la elección de diputados en el distrito 29º de Isla de Pascua, resultara electo el candidato que hubiese obtenido las más alta mayoría relativa.”.

oooo

Número 12)

56.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y 57.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para suprimirlo.

58.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, para reemplazarlo por el que sigue:

“12) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- La Cámara de Diputados se compone de 120 miembros.

Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá 30 distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”.”.

59.- Del Honorable Senador señor Ossandón, para reemplazarlo por el siguiente:

“12) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá ciento veinte distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá un diputado.”.”.

60.- Del Honorable Senador señor Espina, para sustituir en el artículo 178 que propone el vocablo “veintiocho” por “treinta”.

61.- Del Honorable Senador señor Horvath, para reemplazar en el artículo 178 que propone el vocablo “veintiocho” por “veintinueve”.

62.- Del Honorable Senador señor De Urresti, para agregar en el artículo 178 que se propone, la siguiente oración final, nueva: “A ellos se sumarán los miembros que será elegidos por los pueblos indígenas en elecciones simultáneas a las parlamentarias, de conformidad a lo dispuesto en el articulado transitorio de esta ley.”.

Número 13)

63.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y 64.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarlo.

65.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, para reemplazarlo por el que sigue:

13) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er. distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos; que elegirá 2 diputados;

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Huara, Alto Hospicio, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte; que elegirá 2 diputados;

3º distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal; que elegirá 4 diputados;

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen; que elegirá 4 diputados;

5º distrito, constituido por las comuna de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela; que elegirá 6 diputados;

6º distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay y Catemu; que elegirá 4 diputados;

7º distrito, constituido por las comunas de Olmué, Limache, Villa Alemana Quilpué, Viña del Mar y Concón; que elegirá 4 diputados;

8º distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua; San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca; que elegirá 4 Diputados;

9º distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Conchalí, Huechuraba, Independencia y Recoleta; que elegirá 4 Diputados;

10º distrito, constituido por las comunas de Quinta Normal, Cerrillos, Estación Central, Cerro Navia y Santiago; que elegirá 4 diputados;

11º distrito, constituido por las comunas de San Ramón, San Miguel, San Joaquín, Macul, Ñuñoa y Providencia; que elegirá 4 diputados;

12º distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén; que elegirá 4 diputados;

13º distrito, constituido por las comunas de Pirque, Puente Alto, San José de Maipo y la Florida; que elegirá 4 diputados;

14º distrito, constituido por las comunas de La Pintana, El Bosque, La Cisterna, Pedro Aguirre Cerda, La Granja y Lo Espejo; que elegirá 4 diputados;

15º distrito constituido por la comuna de Buin, Calera de Tango, Paine, San Bernardo y Maipú; que elegirá 4 diputados;

16º distrito, constituido por las comunas de Melipilla, Alhué, Curacaví, María Pinto, San Pedro, Talagante, El Monte, Isla de Maipo, Padre Hurtado, Peñaflor, Pudahuel, Lo Prado y Renca; que elegirá 4 diputados;

17º distrito, constituido por la comuna de Rancagua; Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa; que elegirá 4 diputados;

18º distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones; que elegirá 4 diputados;

19º distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro, San Rafael; que elegirá 6 diputados;

20º distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco; que elegirá 4 diputados;

21º distrito, constituido por las comunas de Chillán, Chillán Viejo, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco Yungay, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ranquil, Quillón, Bulnes, Cabrero, Yumbel, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana; que elegirá 6 diputados;

22º distrito, constituido por la comuna de Talcahuano, Hualpén, Concepción, Chiguayante y San Pedro de la Paz; que elegirá 4 diputados;

23º distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Alamos, Cañete, Contulmo, Tirúa; Alto Biobío, Los Angeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja; que elegirá 4 diputados;

24º distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino; que elegirá 4 diputados;

25º distrito, constituido por la comuna de Padre Las Casas, Temuco, Carahue, Cholchol, Nueva Imperial, Saavedra, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén; que elegirá 6 diputados;

26º distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco; que elegirá 4 diputados;

27º distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo; Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos; elegirá 4 diputados;

28º distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco; Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena; que elegirá 4 diputados;

29º distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel; que elegirá 2 diputados;

30º distrito, constituido por las comunas de Natales, Cabo de Hornos, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Navarino y La Antártica; que elegirá 2 diputados.”.”.

66.- Del Honorable Senador señor Espina, para reemplazarlo por el siguiente:

“13) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er. distrito electoral, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos. Este distrito elegirá dos Diputados;

2° distrito electoral, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte. Este distrito elegirá dos Diputados;

3er. distrito electoral, constituido por las comunas de Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda, Taltal, Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe y San Pedro de Atacama. Este distrito electoral cuatro Diputados;

4° distrito electoral, constituido por las comunas de Copiapó, Chañaral, Diego de Almagro, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen. Este distrito electoral cuatro Diputados;

5° distrito electoral, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela. Este distrito electoral seis Diputados;

6° distrito electoral, constituido por las comunas de Quillota, La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay y Catemu. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

7° distrito electoral, constituido por las comunas de Viña del Mar, Concón, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué. Este distrito elegirá seis Diputados;

8º distrito electoral, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

9° distrito electoral, constituido por las comunas de Pudahuel, Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Cerro Navia, Quinta Normal y Lo Prado. Este distrito elegirá seis Diputados;

10° distrito electoral, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Recoleta, Independencia y Santiago. Este distrito elegirá seis Diputados;

11° distrito electoral, constituido por las comunas de Maipú, Estación Central y Cerrillos. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

12º distrito electoral, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, Providencia y Ñuñoa. Este distrito elegirá seis Diputados;

13er. distrito electoral, constituido por las comunas de Macul, San Joaquín, La Granja, La Florida, La Reina y Peñalolén. Este distrito elegirá seis Diputados;

14° distrito electoral, constituido por las comunas de San Miguel, Pedro Aguirre Cerda, Lo Espejo, El Bosque, La Cisterna y San Ramón. Este distrito elegirá seis Diputados;

15° distrito electoral, constituido por las comunas de Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

16° distrito electoral, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué, Padre Hurtado y San Pedro. Este distrito elegirá seis Diputados;

17° distrito electoral, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

18° distrito electoral, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

19° distrito electoral, constituido por las comunas de Talca, Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, San Rafael, Pelarco y Río Claro. Este distrito elegirá seis Diputados;

20° distrito electoral, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

21er. distrito electoral, constituido por las comunas de Chillán, Chillán Viejo, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ranquil, Quillón, Bulnes, Cabrero, Yumbel, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana. Este distrito elegirá seis Diputados;

22º distrito electoral, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, Chiguayante y San Pedro de la Paz. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

23er. distrito electoral, constituido por las comunas de Los Angeles, Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Alamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Tucapel, Antuco, Quilleco, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo, Alto BíoBío y Laja. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

24° distrito electoral, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

25° distrito electoral, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Teodoro Schmidt, Freire, Cholchol, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén. Este distrito elegirá seis Diputados;

26° distrito electoral, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

27º distrito electoral, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

28º distrito electoral, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

29° distrito electoral, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel. Este distrito elegirá dos Diputados, y

30° distrito electoral, constituido por las comunas de Punta Arenas, Natales, Torres del Paine, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica. Este distrito elegirá dos Diputados.”.”.

67.- Del Honorable Senador señor Ossandón, para reemplazarlo por el siguiente:

“13) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán determinados en un reglamento que al efecto dicte el Congreso Nacional en base a una propuesta técnica que haga el Consejo Directivo del Servicio Electoral.”.”.

68.- Del Honorable Senador señor Horvath, para eliminar en el 7° distrito la expresión “Isla de Pascua,”.

69.- Del Honorable Senador señor Horvath, para agregar al final del artículo 179 que se propone el siguiente texto:

“29º distrito, constituido por la comuna de Isla de Pascua, que elegirá un diputado.”.

Número 14)

70.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, 71.- del Honorable Senador señor Ossandón, y 72.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarlo.

Artículo 17

9 bis

Inciso primero

73.- Del Honorable Senador señor Espina, para sustituir el guarismo “155”, las dos veces que aparece, por “134”.

74.- Del Honorable Senador señor Horvath, para reemplazar los guarismos “155” y “28” por “156” y “29”, respectivamente, todas las veces que aparece.

75.- De los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para reemplazar la frase “en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas”, por “en consideración a los electores de cada uno de ellos, en base a el padrón electoral definitivo elaborado por el Servicio Electoral y utilizado en la última elección de carácter nacional”.

Letra b)

76.- De los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para sustituirla por la que sigue:

“b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 2 ni más de 6 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos queden por debajo o superen dichos límites, se les asignará el límite inferior o superior que corresponda, repitiéndose, al efecto, el proceso de asignación de escaños, señalado en la letra a) anterior, considerando para ello sólo al resto de los distritos y los escaños que queden por asignar.”.

77.- Del Honorable Senador señor Horvath, para agregar la siguiente oración final: “Tratándose del distrito 29º de Isla de Pascua, este distrito no podrá elegir menos de 1 diputado.”.

Letra c)

78.- De los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para reemplazarla por la siguiente:

“c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de marzo del año que corresponda la actualización.”.

Inciso cuarto

79.- De los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para sustituirlo por otro, del tenor que se indica:

“En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de abril del año de que se trate. En caso de producirse algún cambio en la distribución de diputados, el texto del artículo 179 de esta ley se entenderá modificado en lo pertinente, de pleno derecho y se aplicará en su forma así corregida en la elección inmediatamente siguiente.”.

Número 15)

80.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y 81.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para suprimirlo.

82.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, para reemplazarlo por el que sigue:

“15) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 40 miembros.

Para la elección de los miembros del Senado, cada región constituirá una circunscripción senatorial y elegirá la cantidad de Senadores que a continuación se indican:

1a. Circunscripción, constituida por la XV Región Arica y Parinacota, que elegirá 2 senadores;

2ª. Circunscripción, constituida por la I Región, de Tarapacá; que elegirá 2 senadores;

3a. Circunscripción, constituida por la II Región, de Antofagasta; que elegirá 2 senadores;

4a. Circunscripción, constituida por la III Región, de Atacama; que elegirá 2 senadores;

5a. Circunscripción, constituida por la IV Región, de Coquimbo; que elegirá 2 senadores;

6a. Circunscripción, constituida por la V Región, de Valparaíso, que elegirá 4 senadores;

7a. Circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, que elegirá 4 senadores;

8a. Circunscripción, constituida por la VI Región, del Libertador General Bernardo O'Higgins; que elegirá 2 senadores;

9a. Circunscripción, constituida por la VII Región, del Maule; que elegirá 4 senadores;

10a. Circunscripción, constituida por la VIII Región, del Biobío; que elegirá 4 senadores;

11a. Circunscripción, constituida por la IX Región, de la Araucanía; que elegirá 4 senadores;

12a. Circunscripción, constituida por la XIV Región, de los Ríos; que elegirá 2 senadores;

13a. Circunscripción, constituida por la X Región, de los Lagos, que elegirá 2 senadores

14a. Circunscripción, constituida por la XI Región, Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo; que elegirá 2 senadores y,

15a. Circunscripción, constituida por la XII Región, de Magallanes y de la Antártica Chilena; que elegirá 2 senadores.”.

83.- Del Honorable Senador señor Espina, para reemplazarlo por el que sigue:

“15) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 44 miembros.

Para la elección de los Senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial, con excepción de la Región Metropolitana que dará lugar a la formación de dos circunscripciones, según el detalle que se indica.

Cada Circunscripción elegirá el número de Senadores que se indica a continuación.

1a. circunscripción senatorial, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

2a. circunscripción senatorial, constituida por la I Región, de Tarapacá. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

3a. circunscripción senatorial, constituida por la II Región, de Antofagasta. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

4a. circunscripción senatorial, constituida por la III Región, de Atacama. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

5a. circunscripción senatorial, constituida por la IV Región, de Coquimbo. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

6a. circunscripción senatorial, constituida por la V Región, de Valparaíso. Esta circunscripción elegirá cuatro Senadores;

7a. circunscripción senatorial, constituida por los distritos electorales Nº 9, 10, 11 y 16, de la Región Metropolitana de Santiago y que elegirá cuatro Senadores;

8a. circunscripción senatorial, constituida por los distritos electorales Nº 12, 13, 14 y 15, de la Región Metropolitana de Santiago que elegirá cuatro Senadores;

9a. circunscripción senatorial, constituida por la VI Región, del Libertador General Bernardo O'Higgins. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

10a. circunscripción senatorial, constituida la VII Región, del Maule. Esta circunscripción elegirá cuatro Senadores;

11a. circunscripción senatorial, constituida por la VIII Región, del Bíobío. Esta circunscripción elegirá cuatro Senadores;

12a. circunscripción senatorial, constituida por la IX Región, de La Araucanía. Esta circunscripción elegirá cuatro Senadores;

13a. circunscripción senatorial, constituida por la XIV Región, de Los Ríos. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

14a. circunscripción senatorial, constituida por la X Región, de Los Lagos. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

15a. circunscripción senatorial, constituida por la XI Región, Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo. Esta circunscripción elegirá dos Senadores, y

16a. circunscripción senatorial, constituida por la XII Región, de Magallanes y de la Antártica Chilena. Esta circunscripción elegirá dos Senadores.”.

84.- Del Honorable Senador señor Bianchi, para reemplazarlo por el siguiente:

“15) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 47 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

1a circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota y la I Región de Tarapacá 5 Senadores.

2a circunscripción, constituida por la Región de Antofagasta y de Atacama 5 Senadores.

3a circunscripción, constituida Región de Coquimbo 3 Senadores

4a circunscripción, constituida la Región de Valparaíso, 5 Senadores.

5a circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 5 Senadores.

6a circunscripción, constituida las VI Región de O`Higgins, 3 Senadores.

7a circunscripción, constituida por la VII Región del Maule 3 Senadores VII Región del Maule 5 Senadores.

8a circunscripción, constituida por la VIII Región del Biobío 5 senadores 5 Senadores.

9a circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 3 senadores.

10a circunscripción, constituida XIV Región de Los Ríos y X Región de Los Lagos 5 Senadores.

11a circunscripción, constituida XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo y por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 5 Senadores.”.”.

85.- Del Honorable Senador señor Ossandón, para reemplazarlo por el que sigue:

“15) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 38 miembros. Las circunscripciones senatoriales serán determinadas en un reglamento que al efecto dicte el Congreso Nacional en base a una propuesta técnica que haga el Consejo Directivo del Servicio Electoral.”.”.

86.- Del Honorable Senador señor Guillier, para reemplazarlo por el siguiente:

“15) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 55 miembros.

Para la elección de los Senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada Circunscripción elegirá el número de Senadores que se indica a continuación.

1a., Circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, elegirá 3 Senadores.

2a. Circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, elegirá 3 Senadores.

3a. Circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, elegirá 3 Senadores.

4a. Circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, elegirá 3 Senadores.

5a. Circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, elegirá 3 Senadores.

6a. Circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, elegirá 5 Senadores

7a. Circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, elegirá 5 Senadores.

8a. Circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, elegirá 3 Senadores.

9a. Circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, elegirá 5 Senadores.

10a. Circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, elegirá 5 Senadores.

11a. Circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, elegirá 5 Senadores.

12a. Circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, elegirá 3 Senadores.

13a. Circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, elegirá 3 Senadores.

14a. Circunscripción, constituida por la XI Región Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, elegirá 3 Senadores.

15a. Circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, elegirá 3 Senadores.”.”.

87.- Del Honorable Senador señor Walker, don Patricio, para reemplazarlo por el que sigue:

“15) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 57 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

1a circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, 3 senadores.

2a circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, 3 senadores.

3a circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 3 senadores.

4a circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, 3 senadores.

5a circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, 3 senadores.

6a circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, 5 senadores.

7a circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 7 senadores.

8a circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, 3 senadores.

9a circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, 5 senadores.

10a circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, 5 senadores.

11a circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 5 senadores.

12a circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 3 senadores.

13a circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, 3 senadores.

14a circunscripción, constituida por la XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, 3 senadores.

15a circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 3 senadores.”.”.

88.- De los Honorables Senadores señores Guillier, Horvath, Quinteros, Rossi y Walker, don Patricio, y 89.- de los Honorables Senadores señora Muñoz y señor Horvath, para reemplazar los incisos primero y segundo del artículo 180 propuesto, por el siguiente:

“Artículo 180.- Para la elección de los miembros del Senado, cada región en que se divida políticamente el país, constituirá una circunscripción, que elegirá al menos tres senadores cada una.”.

90.- Del señor Vicepresidente de la República, y 91.- del Honorable Senador señor Harboe, para introducir las siguientes modificaciones en el inciso tercero del artículo 180 propuesto:

1) Reemplazar la frase “3ª circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 2 senadores.”, por “3ª circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 3 senadores.”.

2) Sustituir la frase “7ª circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 7 senadores.”, por “7ª circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 5 senadores.”.

3) Reemplazar la frase “12ª circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 2 senadores.”, por “12ª circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 3 senadores.”.

92.- Del Honorable Senador señor De Urresti, para agregar en el artículo 180 propuesto el siguiente inciso final nuevo:

“A ellos se sumarán los senadores que serán electos por los pueblos indígenas en elecciones simultáneas a las parlamentarias, de conformidad a lo dispuesto en el articulado transitorio de esta ley.”.

Número 16)

93.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y 94.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarlo.

Número 17)

95.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y 96.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para suprimirlo.

Número 18)

97.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, 98.- del Honorable Senador señor Ossandón, y 99.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarlo.

Número 19)

100.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, 101.- del Honorable Senador señor Ossandón, y 102.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para suprimirlo.

103.- De los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para reemplazar en el artículo 25 transitorio que propone, la expresión “subsiguiente al del censo oficial del año 2022”, por “2023”.

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104.- Del Honorable Senador señor Harboe, para incorporar el siguiente número nuevo:

“…) Agrégase el siguiente artículo …. transitorio:

“Artículo…..- La creación de una nueva región aparejará de pleno derecho la creación de su correspondiente circunscripción electoral. El número de Senadores elegido será determinado en conformidad a la cantidad de electores de dicha circunscripción electoral.”.”.

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105.- Del Honorable Senador señor De Urresti, para introducir el siguiente número nuevo:

“…) Agrégase el siguiente artículo…. transitorio:

“Artículo …..- La elección de los parlamentarios representantes de los pueblos indígenas se realizará a partir del año 2021, según establezca la ley respectiva, que deberá estar promulgada a lo menos con dos años de anticipación a la fecha de los comicios.”.”.

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ARTÍCULO 2°

Número 1)

106.- De los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para suprimirlo.

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107.- Del Honorable Senador señor Horvath, para introducir un numeral nuevo, del siguiente tenor:

“…) En el artículo 5°:

a) Sustitúyese en el inciso primero la expresión “un tercio” por “un cuarto”.

b) Reemplázase en el inciso segundo la expresión “el tercio” por “el cuarto”.”.

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108.- Del Honorable Senador señor Montes, para incorporar el siguiente número nuevo:

“…) Agrégase en el artículo 5º bis el siguiente inciso final:

“Sin perjuicio de las sanciones pecuniarias precedentes, en caso de incurrirse en un exceso de gasto superior al 30% o de percibirse aportes prohibidos por la ley, los candidatos que incurrieren en dicha infracción y hubieren resultado electos serán inhabilitados para ejercer el cargo de acuerdo a lo establecido en el numeral 14) del artículo 93° de la Constitución Política de la República. En el caso de los partidos políticos, éstos serán privados de recibir el financiamiento público que les correspondiere.”.”.

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109.- Del Honorable Senador señor Guillier, para introducir el siguiente numeral nuevo:

“…) Sustituyese el artículo 9º por el siguiente:

“Artículo 9º.- Las personas naturales podrán efectuar donaciones o aportes en dinero a partidos políticos, campañas electorales y/o a candidatos independientes, en cualquier tiempo o en periodos electorales. En el primer caso, podrán realizarlos en sus declaraciones anuales de impuestos, siendo dichos emolumentos afectados a gasto para los efectos tributarios respectivos.

Las donaciones o aportes antes mencionados no podrán exceder al 1% de la renta líquida imponible del impuesto de primera categoría.

En los periodos electorales las donaciones y aportes efectuadas por personas naturales a campañas electorales o candidatos independientes, no podrán exceder a 20 Unidades Tributarias Mensuales por candidaturas y hasta un máximo de tres candidaturas en una misma elección.”.”.

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110.- Del Honorable Senador señor Horvath, para incorporar un numeral nuevo, del siguiente tenor:

“…) Reemplázanse, en el inciso primero del artículo 9°, las expresiones “mil unidades de fomento” por “setecientas cincuenta unidades de fomento”; “mil doscientas cincuenta unidades de fomento” por “mil unidades de fomento”; “dos mil unidades de fomento” por “mil setecientas cincuenta unidades de fomento”; “seiscientas unidades de fomento” por “quinientas unidades de fomento”, y “diez mil unidades de fomento” por “siete mil quinientas unidades de fomento”.”.

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111.- Del Honorable Senador señor Guillier, para introducir el siguiente numeral nuevo:

“…) Deróganse los artículos 10, 11 y 12.”.

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Número 2)

112.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, 113.- de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y 114.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarlo.

Número 3)

115.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, 116.- de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y 117.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para suprimirlo.

118.- Del Honorable Senador señor Ossandón, para reemplazarlo por el siguiente:

“3) Sustitúyese el artículo 16 por el siguiente:

“Artículo 16.- El origen, destino y monto o especie de los aportes de campaña electoral serán públicamente conocibles y se consignará la identidad del aportante, salvo las excepciones que señale esta ley.”.”.

119.- Del Honorable Senador señor Montes, para suprimir en el artículo 16 propuesto la frase “, salvo las excepciones que señale esta ley”.

Número 4)

120.- De los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para eliminarlo.

Artículo 17

Inciso primero

121.- Del Honorable Senador señor Montes, para reemplazar la expresión “anónimos” por “entregados directa o indirectamente al administrador electoral del respectivo candidato o partido político”.

122.- Del Honorable Senador señor Montes, para sustituir la frase “cualquier aportante podrá solicitar que se consigne su identidad y el monto de su contribución” por “deberá consignarse y declararse la identidad del aportante y el monto de la contribución”.

Inciso segundo

123.- Del Honorable Senador señor Montes, para reemplazar la expresión “aportes anónimos” por “los aportes a que se refiere el inciso anterior”.

Inciso tercero

124.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y 125.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarlo.

oooo

126.- Del Honorable Senador señor Montes, para agregar el siguiente número, nuevo:

“…) Elimínase el artículo 18.”.

127.- Del Honorable Senador señor Horvath, para introducir un numeral nuevo, del siguiente tenor:

“…) Reemplázase el artículo 18 por el siguiente:

“Artículo 18.- Todo aporte que supere el monto indicado en el artículo anterior, será público.

Sin embargo, cualquier aportante tendrá derecho a solicitar que se consigne su identidad y el monto de su contribución.”.”.

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128.- Del Honorable Senador señor Montes, para incorporar el siguiente numeral, nuevo:

“…) Reemplázase el artículo 19 por el siguiente:

“Artículo 19.- Los aportes que excedan los montos o porcentajes sobre el total dispuestos en el artículo 17 serán siempre públicos y se realizarán en una cuenta única que deberá mantener al efecto el Servicio Electoral.

El Servicio establecerá un sistema electrónico mediante el cual el donante pueda destinar su aporte a uno o más candidatos o partidos, dentro de los límites establecidos en la presente ley y hasta el monto de su donación. Para destinar su aporte, el donante que esté imposibilitado de concurrir al Servicio, podrá efectuarlo mediante mandato especial autorizado ante notario.

La respectiva donación, junto con los datos necesarios para identificar al donante, será puesta en conocimiento del candidato o partido y sus respectivos administradores, en las siguientes veinticuatro horas, los que deberán aceptarla antes de que sea efectivamente transferida. Transcurridos diez días desde dicha notificación se entenderá que el aporte ha sido rechazado.

Una vez que los fondos han quedado acreditados, el donante recibirá del Servicio Electoral un certificado electrónico de la donación que detallará el monto total donado y los candidatos o partidos políticos beneficiados.

El Servicio Electoral deberá iniciar la transferencia electrónica, el primer día hábil de cada semana, a la cuenta designada por el respectivo Administrador Electoral, de la suma de los aportes que les hayan sido destinados en la semana anterior. Efectuado el depósito electrónico, el nombre del aportante, el monto y el partido o candidato destinatario se incluirán en un registro público en el sitio web del Servicio Electoral.

Las normas sobre secreto bancario contenidas en el artículo 154 de la Ley General de Bancos, le serán aplicables a los funcionarios del Servicio Electoral.

Las cuentas bancarias a las cuales se transferirán los aportes, deberán corresponder al candidato que tenga el carácter de titular de las mismas.”.”.

oooo

129.- Del Honorable Senador señor Horvath, para consultar un número nuevo, del siguiente tenor:

“…) Suprímese en el inciso primero del artículo 19 la siguiente oración: “La destinación de los aportes hechos por personas jurídicas solo podrá hacerse por mandato especial.”.”.

oooo

130.- Del Honorable Senador señor Montes, para agregar el siguiente número nuevo:

“…) Elimínase el inciso primero del artículo 20.”.

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131.- Del Honorable Senador señor Horvath, para introducir un nuevo numeral, del siguiente tenor:

“…) Sustitúyese el inciso primero del artículo 20 por el que sigue:

“Artículo 20.- Los aportes que no tengan el carácter de anónimos en conformidad a lo establecido por la ley, serán públicos.”.”.

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132.- Del Honorable Senador señor Horvath, para incorporar el siguiente número, nuevo:

“…) En el artículo 21:

a) Reemplázase en el inciso primero la expresión “cien unidades de fomento” por “ciento cincuenta unidades de fomento”.

b) Sustitúyese el inciso segundo por el que sigue:

“Los aportes mensuales, cuyo importe, por aportante, sea inferior a cincuenta unidades de fomento, podrán tener, a solicitud del aportante, el carácter de anónimo y se aplicara a su respecto lo previsto en el artículo 19, debiendo el Servicio, para estos efectos, hacer las trasferencias en las cuentas que indiquen los respectivos tesoreros de los partidos políticos.”.”.

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133.- Del Honorable Senador señor Horvath, para introducir el siguiente numeral, nuevo:

“…) Reemplázase en el inciso primero del artículo 21 bis el vocablo “cien” por “cincuenta”.”.

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Número 5)

134.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, 135.- de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y 136.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para suprimirlo.

137.- Del Honorable Senador señor Ossandón, para sustituirlo por el que sigue:

“5) Reemplázase el artículo 24 por el siguiente:

“Artículo 24.- Prohíbense los aportes de campaña electoral provenientes de personas naturales extranjeras, con excepción de los efectuados por extranjeros habilitados legalmente para ejercer en Chile el derecho a sufragio. Prohíbense también los aportes anónimos de campaña electoral provenientes de toda persona jurídica, a excepción de aquellas que publiquen el origen, destino y los montos o especie de los aportes, incluidos los partidos políticos y el Fisco, de acuerdo a lo dispuesto en el párrafo 2º del Título II de esta ley. El Ministerio del Interior podrá definir la forma y oportunidad en la que dicha publicación sea realizada.”.”.

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138.- Del Honorable Senador señor Montes, para consultar el siguiente número nuevo:

“…) Agrégase el siguiente inciso final al artículo 41:

“Además, de la cuenta general referida, los administradores respectivos, deberán entregar cuentas parciales por cada de treinta días que dure la campaña, las que se sujetarán a las mismas disposiciones precedentes y deberán ser presentadas en los quince días siguientes a la conclusión de cada uno de dichos períodos. Dicha obligación no regirá para el último lapso de treinta días, que sólo deberá incluirse en la cuenta general.”.”.

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139.- Del Honorable Senador señor Montes, para añadir el siguiente número nuevo:

“…) Agrégase el siguiente artículo 48, nuevo:

"Artículo 48.- Los candidatos a cargos de representación popular deberán presentar junto con la declaración respectiva, una declaración jurada ante el Servicio Electoral, con un presupuesto que contenga los montos aproximados de ingresos y gastos que utilizará en su campaña y una estimación de los principales ítems o componentes de ambos.

Los candidatos podrán modificar esta declaración con ocasión de la entrega de cuentas parciales a que se refiere en inciso final del artículo 41°. Esta información estará disponible para el público en todo momento durante el proceso electoral. Para ello, el Director del Servicio Electoral publicará en el sitio internet de la entidad la referida información que proporcionen los candidatos, dentro de los diez días siguientes a su presentación.”.”.

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Número 7)

Artículo segundo transitorio

Inciso primero

140.- De los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para intercalar entre la coma (,) que sigue al guarismo “2029” y la preposición “en”, la siguiente frase: “y las elecciones de alcaldes, concejales y consejeros regionales que tengan lugar entre la primera y la última de las elecciones parlamentarias mencionadas,”.

141.- Del Honorable Senador señor Ossandón, para reemplazar la frase “las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hayan sido proclamadas electas”, por “los candidatos a diputados y a senadores mujeres, discapacitados o candidatos pertenecientes a una etnia indígena que hayan sido proclamados electos”.

Inciso segundo

142.- De la Honorable Senadora señora Goic, para sustituirlo por los siguientes:

“Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos deberán implementar programas de capacitación y formación política de mujeres candidatas, dentro del plazo de dos años contado desde la fecha de la respectiva elección.

El partido político que no implementare estos programas, o implementándolos, no los ejecutare, deberá restituir los recursos que hayan recibido con ocasión de lo dispuesto en el inciso primero.”.

143.- Del Honorable Senador señor Ossandón, para reemplazar la expresión “de las mujeres en política” por “en política de las personas mencionadas en el inciso anterior”.

Número 8)

Artículo tercero transitorio

144.- De los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para reemplazarlo por el siguiente:

“Artículo tercero.- Para las elecciones parlamentarias, de 2017, 2021, 2025 y 2029, y de alcaldes, concejales, y consejeros regionales que tenga lugar entre la primera y la última de las elecciones parlamentarias mencionadas, las candidatas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 unidades de fomento por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.”.

145.- Del Honorable Senador señor Ossandón, para intercalar entre la expresión “candidatas a senadoras y diputadas” y la voz “tendrán” la frase “, así como los candidatos discapacitados o personas pertenecientes a alguna etnia indígena,”.

ARTÍCULO 3°

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146.- Del Honorable Senador señor Horvath, para introducir el siguiente numeral, nuevo:

“…) Intercálase en el inciso primero del artículo 3°, a continuación de la locución “en que se divide políticamente el país”, lo siguiente: “o en una de ellas, conforme al artículo 7° de esta ley”.”.

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Número 1)

Letra a)

147.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, 148.- de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y 149.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarla.

Número 2)

150.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, 151.- de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y 152.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para suprimirlo.

Número 4)

153.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, 154.- de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y 155.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarlo.

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156.- De los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para consultar un ARTÍCULO nuevo, del siguiente tenor:

“Artículo ….- Modifícase la ley N° 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, en el siguiente sentido:

1) Sustitúyese el inciso segundo del artículo 7° por el siguiente:

“En la elección primaria para la nominación de candidatos a los cargos de Parlamentarios, para cada territorio electoral, los partidos políticos podrán participar:

a) En forma individual, sin haber suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos.

b) En forma individual, habiendo suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos dentro del pacto.

c) En conjunto con otros partidos con los cuales ha suscrito un pacto electoral, y con el objeto de determinar la totalidad de los candidatos de dicho pacto.”.

2) Reemplázase el artículo 11 por el siguiente:

“Artículo 11.-Será requisito para participar en las elecciones primarias para los cargos de Presidente de la República y de Alcalde que el partido político o pacto electoral declare, al menos, un número superior de candidatos a los cargos a definir.

En el caso de las elecciones primarias parlamentarias, cuando los partidos políticos participen de la forma señalada en la letra c) del inciso segundo del artículo 7, deberán presentar para cada territorio electoral un número de candidatos superior al máximo señalado en el inciso primero del artículo 4 de la ley N° 18.700.”.

3) Reemplázase el inciso primero del artículo 16 por el siguiente:

“Artículo 16.- Junto con cada declaración de candidatura, el partido político o el pacto electoral deberá adjuntar una norma para determinar el padrón electoral que se señala en el artículo 20, que podrá ser diferente según se trate de elecciones presidenciales, parlamentarias o municipales. Adicionalmente cuando el partido político participe de la forma señalada en las letras a) o b) del inciso segundo del Artículo 7, deberá señalar para cada territorio electoral el número de cargos que serán determinados como nominados por medio de la elección primaria, número que sumado al de otros partidos integrantes del pacto cuando corresponda, deberá ser en todo caso no superior al máximo señalado en el inciso primero del artículo 4 de la ley N° 18.700.”.

4) Incorpórase el siguiente artículo 16 bis nuevo:

“Artículo 16 bis.- De la totalidad de declaraciones de candidaturas parlamentarias con ocasión de las elecciones primarias, declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. La infracción de los señalado precedentemente acarreará el rechazo, por parte del Servicio Electoral, de todas la candidaturas declaradas a cargos parlamentarios para las elecciones primarias del partido que no haya cumplido con este requisito.”.

5) Reemplázase el inciso segundo del artículo 30 por el siguiente:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen de la forma señalada en las letras a) o b) del inciso segundo del artículo 7, serán nominados como candidatos para la elección definitiva en cada territorio electoral, las mayores votaciones individuales hasta completar el número de cargos definido en la declaración de candidaturas conforme al inciso primero del artículo 16.”.

6) Incorpórase al artículo 30 el siguiente inciso final:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen en pacto electoral de la forma señalada en la letra c) del inciso segundo del Artículo 7, los candidatos nominados para la elección definitiva en cada territorio electoral, serán determinados conforme el procedimiento señalado en el artículo 109 bis de la ley N° 18.700, considerando para estos efectos que constituyen una lista los candidatos de un mismo partido y sus candidaturas independientes asociadas.”.”.

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157.- De los Honorables Senadores señoras Allende, Goic, Muñoz y Pérez San Martín y señor Harboe, para agregar un ARTÍCULO nuevo, del siguiente tenor:

“Artículo ….- Incorpórase a la ley N° 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, el siguiente artículo transitorio, nuevo:

“Artículo transitorio.- El partido político que decidiere someterse al sistema de elecciones primarias contemplado en el artículo 3º y siguientes de la presente para los períodos electorales parlamentarios de los años 2017, 2021, 2025 y 2029, solo podrá someter a dicho procedimiento hasta un cuarenta por ciento del total de candidaturas a diputado o senador que este pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral.”.”.

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OTRAS DISPOSICIONES

158.- Del Honorable Senador señor De Urresti, para introducir las siguientes enmiendas a la Constitución Política de la República:

1. Reemplázase el artículo 4º, por el siguiente:

"Artículo 4º.- El Estado reconoce y garantiza el ejercicio de los derechos colectivos de los pueblos indígenas, su representación política y su participación efectiva en las decisiones que los distintos órganos de la Administración adopten referidas a sus derechos colectivos.".

2. Sustitúyese el inciso primero del artículo 47 por el siguiente:

"Artículo 47.- La Cámara de Diputados está integrada por miembros elegidos en votación directa por los distritos electorales que establezca la ley orgánica constitucional respectiva. A estos integrantes se sumarán los miembros que serán elegidos por los pueblos indígenas en elecciones simultáneas a las parlamentarias, de conformidad a lo dispuesto en la ley orgánica constitucional respectiva." .

3. Agrégase el siguiente inciso segundo, nuevo, al artículo 48:

"Para ser elegido diputado representante de los pueblos indígenas se deberá además acreditar ser parte del pueblo indígena que se representa según lo disponga la correspondiente ley orgánica constitucional".

4. Reemplázase el inciso primero del artículo 49 por el siguiente:

"Artículo 49.- El Senado se compone de miembros elegidos en votación directa por circunscripciones senatoriales. A estos miembros se sumarán los senadores que serán electos por los pueblos indígenas en elecciones simultáneas a las parlamentarias, de conformidad a lo dispuesto en la ley orgánica constitucional respectiva." .

5. Agrégase el siguiente inciso segundo nuevo al artículo 50:

"Para ser elegido senador representante de los pueblos indígenas se deberá además acreditar ser parte del pueblo indígena que se representa, según lo disponga la ley orgánica constitucional respectiva.".

6. Reemplázase el inciso final del artículo 51 por el siguiente:

"En caso de vacancia de un senador o diputado representante de los pueblos indígenas se realizará una elección complementaria.".

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159.- Del Honorable Senador señor Ossandón, para incorporar las siguientes modificaciones a la Constitución Política de la República:

1. Agrégase el siguiente inciso segundo nuevo al artículo 47:

“Los Diputados no podrán ser reelectos por más de tres períodos consecutivos.”.

2. Incorpórase el siguiente inciso tercero al artículo 49:

“Los Senadores no podrán ser reelectos por más dos períodos consecutivos.”.

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2.5. Informe de Comisión de Constitución

Senado. Fecha 05 de enero, 2015. Informe de Comisión de Constitución en Sesión 79. Legislatura 362.

SEGUNDO INFORME DE LA COMISIÓN DE CONSTITUCIÓN, LEGISLACIÓN, JUSTICIA Y REGLAMENTO recaído en el proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que sustituye el sistema electoral binominal por un sistema electoral proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional.

BOLETÍN Nº 9.326-07

HONORABLE SENADO:

La Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento tiene el honor de presentar su segundo informe sobre el proyecto señalado en el epígrafe, iniciado en Mensaje de S.E. la señora Presidenta de la República, con urgencia calificada de “discusión inmediata”.

A una o más sesiones que celebró la Comisión concurrieron, además de sus integrantes, los Honorables Senadores señores Antonio Horvath, Juan Pablo Letelier y Alejandro Navarro, y los Honorables Diputados señores Pepe Auth, Giorgio Jackson y Vlado Mirosevic. En la primera sesión que celebró la Comisión, el Honorable Senador señor Pizarro reemplazó al Honorable Senador señor Araya.

Igualmente, asistieron, especialmente invitados, la Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón; el Ministro Secretario General de Gobierno, señor Álvaro Elizalde; la Ministra Directora del Servicio Nacional de la Mujer, señora Claudia Pascual; el Director Nacional del Servicio Electoral de Chile, señor Eduardo Charme, y la Subdirectora del referido servicio, señora Elizabeth Cabrera.

Asimismo, concurrieron la coordinadora de la División Jurídica del Ministerio Secretaría General de la Presidencia, señora Valeria Lübbert; el jefe de la División de Relaciones Políticas e Institucionales de dicha Secretaría de Estado, señor Gabriel de la Fuente y el coordinador de la misma, señor Nicolás Mena, y sus asesores, señoras Andrea Bórquez, Francisca Soto y Julia Urquieta y señores Diego Calderón, Octavio Del Fávero, Tomás Jordán, Nicolás Mena, Miguel Osorio, Nicolás Torrealba y Héctor Valladares; los asesores del Ministro del Interior y Seguridad Pública, señores Rodrigo González y Gabriel Osorio; el jefe de comunicaciones del Servicio Nacional de la Mujer, señor Claudio Pérez; la encargada de comunicación estratégica del Sernam, señora Carolina Muñoz y las asesoras jurídicas del mismo Servicio, señoras Catalina Lagos y Elisa Walker.

Finalmente, también estuvieron presentes el funcionario de la Oficina de Informaciones de la Cámara de Diputados, señor Germán Arriagada; el asesor del Honorable Senador señor Harboe, señor Sebastián Abarca; el asesor del Honorable Senador señor De Urresti, señor Claudio Rodríguez; los asesores del Honorable Senador señor Espina, señores Pablo Celedón, Tomás Duval y Cristián Pertuzé; los asesores del Honorable Senador señor Larraín, señores Héctor Mery, Sergio Morales y Jorge Ramírez; los asesores del Honorable Senador señor Horvath, señores Fernando Navarro y Arturo Rodríguez; el asesor del Honorable Senador señor Montes, señor Luis Díaz; el asesor del Comité PC de la Cámara de Diputados, señor Ignacio Cárcamo; la asesora del Diputado señor Fuenzalida, señora Érica Freire, la jefa de prensa del Comité PS, señora María José León, y el asesor de la Biblioteca del Congreso Nacional, señor Juan Pablo Cavada.

OBJETIVO DEL PROYECTO

Sustituir el sistema electoral binominal por uno proporcional inclusivo y fortalecer la representatividad del Congreso Nacional.

Para ello, se propone reducir la desigualdad del voto, permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas, aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos, facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías, promover un Congreso Nacional que refleje la diversidad de la sociedad, y evitar que queden fuera del mismo candidatos con grandes votaciones.

NORMAS DE QUÓRUM

El artículo 1° de esta iniciativa, en sus números 1, letras a), c) y d); 2, 3, 6, 7, 8, 9, 10, 11, 13 y 14 requieren para su aprobación del voto conforme de las tres quintas partes de los Senadores en ejercicio, de conformidad a lo prescrito en el inciso segundo de la disposición decimotercera transitoria de la Constitución Política de la República. El artículo 1º números 1, letra b); 4, 5, y 12, así como los artículos 2º, 3° y 4º, nuevo, tienen el carácter de normas orgánicas constitucionales, en virtud de lo dispuesto en los artículos 18 y 19 n° 15, respectivamente, y 66, inciso segundo, de la Carta Fundamental.

- - -

Para los efectos de lo dispuesto en el artículo 124 del Reglamento del Senado, se deja constancia de lo siguiente:

1.- Artículos que no fueron objeto de indicaciones ni de modificaciones: artículo 4° (nuevo artículo 5°).

2.- Indicaciones aprobadas sin modificaciones: números 6, 14, 15, 16, 22, 25, 30, 31, 32, 33, 34, 36, 37, 38, 41, 42, 43, 44, 45, 46, 47, 48, 49, 90, 106, 112, 113, 114, 115, 116, 117, 120, 124, 125, 134, 135, 136 y 157.

3.- Indicaciones aprobadas con modificaciones: números: números 146 y 156.

4.- Indicaciones rechazadas: números 1, 2, 3, 4, 5, 7, 8, 9, 10, 11, 12, 13, 17, 18, 19, 20, 21, 23, 24, 26, 27, 28, 29, 35, 39, 40, 50, 51, 52, 56, 57, 58, 60, 61, 63, 64, 65, 66, 68, 70, 71, 72, 73, 75, 76, 78, 80, 81, 82, 83, 88, 89, 93, 94, 95, 96, 97, 98, 99, 100, 101, 102, 103, 107, 110, 111, 118, 119, 121, 122, 123, 126, 127, 129, 130, 131, 132, 133, 138, 142, 147, 148, 149, 150, 151, 152,153, 154 y 155.

5.- Indicaciones retiradas: números 79, 91, y 104.

6.- Indicaciones declaradas inadmisibles: números 53, 54, 55, 59, 62, 67, 69, 74, 77, 84, 85, 86, 87, 92, 105, 108, 109, 128, 137, 139, 140, 141, 143, 144, 145, 158, y 159.

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CONSIDERACIONES PRELIMINARES

Antes de iniciar el estudio en particular de esta iniciativa, el Presidente de la Comisión, el Honorable Senador señor Felipe Harboe, ofreció el uso de la palabra a la Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, quien agradeció la invitación de la Comisión y explicó que para el Gobierno era muy relevante la pronta aprobación de este proyecto.

Seguidamente, hizo presente que en forma adicional a esta iniciativa, el Ejecutivo se encuentra elaborando otro proyecto de ley cuyo objetivo es complementar la materia en estudio. Indicó que ella tiene por propósito contribuir a fortalecer la democracia y la transparencia. Explicó que el mismo se referirá al financiamiento de la política y al control del gasto electoral. Añadió que esa iniciativa ha sido elaborada en un contexto de amplia difusión política y académica.

Agregó que una reforma política de esta naturaleza requiere, sin lugar a dudas, un amplio consenso que permita avanzar en materias de interés ciudadano, con el fin de aumentar la legitimidad y transparencia de las elecciones y el trabajo de los partidos políticos y de la política en general.

Enfatizó que todos los actores políticos consultados han estado de acuerdo con los tres ejes que la Presidenta de la República ha definido para dicho proyecto, a saber, la equidad en la competencia política; la transparencia y el control democrático.

Detalló que han efectuado talleres con centros de estudios y expertos sobre financiamiento de la política y los partidos políticos, incluidos dentro de estos últimos a aquellos que representan a la Nueva Mayoría, a la Alianza, a Amplitud, a Revolución Democrática y a los independientes.

Asimismo, precisó que el Ejecutivo ha conversado con los presidentes de los partidos políticos, con los jefes de bancada de ambas Cámaras del Congreso Nacional y ha trabajado coordinadamente con el Ministerio del Interior y Seguridad Pública, y con la Dirección de Presupuesto. Igualmente, hizo presente que en la preparación de la mencionada iniciativa han tenido reuniones con el Servicio Electoral.

Luego, indicó que en el mensaje respectivo no se incluirá lo relativo a la institucionalidad del Servicio Electoral, ya que esa materia formará parte de un proyecto de ley distinto, cuyo objeto es fortalecer la estructura administrativa y el funcionamiento del mencionado servicio.

A continuación, destacó que también se han reunido con la Asociación de Radiodifusores de Chile (ARCHI) y con la Fundación Idea, para discutir las reglas que se refieren a buenas prácticas internacionales, en un marco de cooperación técnica.

Agregó que sobre este mismo tópico han sostenido reuniones de trabajo en España, México, Francia y Uruguay.

Sostuvo que los fundamentos del mencionado proyecto de ley serán los siguientes:

1.- Mejorar la calidad de la política;

2.- Promover una ciudadanía que debate sobre ideas y contenidos;

3.- Mayor transparencia en la política;

4.- Prevención y control de conflictos de intereses;

5.- Relevar el rol de los partidos en la búsqueda del bien común, y

6.- Fortalecer el rol del Estado en el fomento de la democracia.

Consignó que los ejes del proyecto están constituidos por la equidad, la transparencia y el control democrático.

Advirtió que en materia de modificaciones a la Ley N° 19.884 sobre gasto electoral, se establecerá una disminución del 50% del límite del gasto electoral para cada elección.

A continuación, presentó un cuadro donde se encuentra individualizado este criterio, según el cargo a elegir.

Sobre esta propuesta, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe, consultó por el caso de la Región Metropolitana, que se transformará en una sola circunscripción senatorial. Preguntó por lo que sucederá en dicha región, si se reduce el límite de gasto y se amplía al doble el número de comunas.

La Ministra de la Secretaría General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, advirtió que se entenderá por gasto electoral todo aporte cuantificable en dinero, realizado por el candidato o un tercero en su favor. Precisó que se eliminan los recursos provenientes de personas jurídicas, y se mantiene el aporte de personas naturales.

Añadió que las donaciones de éstas últimas no podrá exceder de determinado monto, sea que se realicen al partido o a uno o más candidatos (La discusión del monto en la etapa pre legislativa ha variado desde 50 hasta 1000 UF).

Destacó que los aportes personales de los candidatos no podrán ser superiores al 10% del gasto electoral permitido.

Hizo presente que los aportes que no excedan de X unidades de fomento podrán tener el carácter de reservados si así lo solicitan sus aportantes. Manifestó que esta regla es necesaria para proteger a los donantes que son dependientes laborales.

Luego, precisó que se duplica el aporte público inicial a las campañas electorales y se mantiene el monto de reembolso y no se procederá a éste mientras existan procedimientos sancionatorios administrativos pendientes en contra del candidato o del partido.

Expresó que ningún partido político podrá contratar servicios con empresas que hayan sido condenadas por prácticas antisindicales o infracción a los derechos fundamentales del trabajador, dentro de los anteriores dos años, o bien, tengan saldos insolutos de remuneraciones o cotizaciones de seguridad social con sus actuales trabajadores o con trabajadores contratados en los últimos dos años.

Indicó que los aportes de campaña electoral se efectuarán a través del sitio electrónico que proveerá el Servicio Electoral y serán públicos. Cada candidato y cada partido, indicará al Servicio Electoral la cuenta corriente única que usará para estos efectos. También serán públicos los aportes mensuales que reciban los partidos políticos fuera del período de campaña electoral.

Declaró que respecto de los aportes que reciban los institutos de formación política inscritos por los partidos políticos ante el Servicio Electoral, éstos serán siempre públicos y deberán constar por escrito.

Luego, hizo presente que se establece que no podrán ser Administradores Electorales y Administradores Generales Electorales quienes hayan sido condenados por delitos tributarios o contra la fe pública.

Apuntó que esos administradores deberán registrar todos los aportes en dinero, especies o servicios que se destinen a una campaña electoral o se reciban para el financiamiento de los gastos electorales, debidamente valorizados. Este registro se encontrará a disposición del público en el sitio electrónico que para el efecto deberá llevar cada candidato y sus partidos.

Advirtió que las cuentas de los ingresos y gastos electorales se encontrarán disponibles en el sitio electrónico del Servicio.

Señaló que los candidatos no estarán obligados a rendir documentadamente gastos menores que no excedan el 20% de su gasto total. La ley establecerá que se entenderá por gastos menores y frecuentes.

A continuación, aseveró que los aportes que reciban los candidatos o los partidos con infracción a lo prescrito en la ley, así como los que excedan los gastos en que hubieren incurrido serán entregados a beneficio fiscal, sin perjuicio de las otras sanciones.

Consignó que en materia de sanciones, el candidato o Administrador General de los Fondos de un partido político que obtenga los aportes mediante falsedad, engaño o maliciosa omisión será castigado con presidio menor en su grado mínimo a medio.

Agregó que las mismas penas se impondrán al candidato o Administrador General de los Fondos de un partido político que invierta los recursos obtenidos del Estado en una finalidad distinta a la cual están destinados, así como al tercero que, a sabiendas, se haya beneficiado de tales actos.

Enfatizó que si el monto de lo defraudado o desviado excede de 500 unidades de fomento, se aplicará la pena de presidio menor en su grado máximo a presidio mayor en su grado mínimo.

Añadió que las personas naturales que efectúen aportes en campañas electorales a candidatos o partidos, con infracción a lo dispuesto en esta ley, serán sancionadas con multa de 20 a 100 unidades tributarias mensuales.

Asimismo, subrayó que si el monto de lo ilegalmente aportado es superior a 500 unidades de fomento, se aplicará la pena de presidio menor en su grado máximo a presidio mayor en su grado mínimo, tanto a quien efectúe el aporte como al candidato.

Manifestó que en materia de modificaciones a la ley orgánica constitucional de los partidos políticos, ley N° 18.603, los partidos no podrán recibir aportes de personas jurídicas.

Agregó que el Estado, a través del Servicio Electoral, otorgará a los partidos que cuenten con representación parlamentaria, aportes trimestrales.

Seguidamente, declaró que el aporte del Estado se hará con cargo a un fondo constituido por el equivalente a X UF multiplicado por el número de votos válidamente emitidos en la última elección de diputados. Dicho valor se distribuirá en aportes basales y variables. Los aportes basales son para cubrir gastos esenciales de su funcionamiento ordinario, desarrollo de actividades de fomento a la participación de jóvenes, mujeres y de formación cívica, y los aportes variables se otorgarán en función del rendimiento electoral de cada partido.

Luego, remarcó que se establecen mecanismos de control y transparencia respecto del uso de esos fondos.

Añadió que en materia de modificaciones a la Ley Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios se amplía el concepto de propaganda electoral, incluyendo en ella a la dirigida a promover a candidatos o proposiciones sometidas a plebiscitos.

Manifestó que el candidato deberá efectuar declaración de patrimonio e intereses al momento de inscribir su candidatura y solo podrá realizar propaganda electoral mediante elementos móviles o avisos luminosos o proyectados en los lugares que, de acuerdo a la Ordenanza General de la Ley General de Urbanismo y Construcciones, puedan ser calificados como plazas, parques o bandejones, expresamente autorizados por el Servicio Electoral, previo informe del Concejo Municipal respectivo o de la SEREMI de Vivienda que corresponda.

A continuación, precisó que se mantiene la franja electoral de televisión, y no se crean nuevas en otros medios de comunicación.

Consignó que solo podrán efectuar propaganda electoral, los medios de prensa escrita o radioemisoras que, a más tardar al momento del vencimiento del plazo para inscribir candidaturas, informen al Servicio Electoral sus tarifas.

Seguidamente, añadió que las tarifas que cobren las radioemisoras a los candidatos y partidos políticos en período de campaña deberán ser pagadas por intermedio de una plataforma electrónica provista por el Servicio Electoral.

Apuntó que las radioemisoras tendrán el deber de destinar un espacio al desarrollo de debates entre los candidatos, de conformidad a las instrucciones generales que disponga el Servicio Electoral. Asimismo, deberán transmitir, entre las 07:00 y las 22:00 horas, al menos dos veces, un spot publicitario con información electoral de utilidad para la ciudadanía que determinará el Servicio Electoral. Este aviso informativo no podrá tener una extensión superior a 3 minutos de duración y no podrá favorecer a ningún candidato o partido en particular.

En relación con las sanciones, explicó que, en la Ley Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios se castigará al que contravenga las normas de propaganda electoral con una multa de 10 a 100 UTM.

Agregó que cualquier persona podrá concurrir ante el Director Regional del Servicio Electoral respectivo, con el fin de que ordene el retiro o supresión de los elementos de propaganda.

Luego, puntualizó que caerán en comiso los elementos que se hayan utilizado para efectuar dicha propaganda. El costo de retirar dichos elementos será rebajado de la devolución electoral.

Detalló que la fiscalización corresponderá al Servicio Electoral, de conformidad a su ley orgánica.

En relación a las modificaciones a ley N° 18.556, sobre Sistema de Inscripciones Electorales y Servicio Electoral, indicó que para velar por el cumplimiento de las normas sobre transparencia, control y límites de los gastos, corresponderán al Director, sin perjuicio de las facultades de investigación que competan al Ministerio Público, las siguientes atribuciones:

1.- Fiscalizar que los candidatos y los administradores generales de los fondos de los partidos políticos cumplan con la normativa electoral y de financiamiento.

2.- Fiscalizar la rendición de cuenta pública del uso de todos los recursos públicos y privados.

3.- Publicar dichos antecedentes en el sitio web del servicio.

4.- Realizar y ordenar auditorías al estado anual de resultados.

5.- Ingresar a las sedes de candidaturas o partidos políticos y dependencias de candidatos o administradores generales de los fondos de los partidos políticos que tengan relación con la administración de las candidaturas o de los partidos.

6.- Requerir y acceder a cualquier documento, libro o antecedente que sea necesario para fines de fiscalización.

7.- Citar a declarar a los candidatos, representantes legales, administradores y dependientes de las instituciones fiscalizadas.

8.- Efectuar salidas a terreno para fiscalizar el cumplimiento de las normas sobre propaganda electoral en lugares públicos.

9.- Formular cargos, sustanciar su tramitación y resolver los procesos que se sigan, y

10.- Imponer las sanciones correspondientes.

Finalizó su intervención señalando que el proyecto de ley incluirá un artículo transitorio que obligará al Ejecutivo a ingresar, a más tardar el 15 de abril de 2015, un proyecto de ley que modifique la institucionalidad del Servicio Electoral.

Una vez concluida la exposición de la señora Ministra de la Secretaría General de la Presidencia, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe, agradeció la presentación de la señora Ministra. Seguidamente, ofreció el uso de la palabra a los señores parlamentarios.

En primer lugar, intervino el Honorable Senador señor Horvath quien señaló que en la Cámara de Diputados ya se avanzó en la idea de reducir el gasto de las campañas políticas. Agregó que hubo campañas senatoriales que, de acuerdo a los cálculos vigentes, alcanzaron los $ 3.000.000.000 millones de pesos en la Región Metropolitana.

Advirtió que es conveniente que se tome conocimiento de los gastos reservados. Valoró el avance que tuvo el proyecto de ley en estudio en la Cámara Baja y solicitó que las indicaciones que van en esa línea sean analizadas en profundidad por la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento del Senado.

A continuación, el señor Presidente de la Comisión indicó que era relevante contar con un proyecto de ley que se haga cargo de modificar el sistema de financiamiento de la política, y que no solo vaya en la lógica de eliminar un aporte determinado, sino que se cree un sistema alternativo donde se busque tener mayor nivel de transparencia, pero que otorgue una opción real que busque evitar los perjuicios nefastos del sistema antiguo, donde no existía ningún tipo de regulación.

Estimó importante que en el mencionado anteproyecto se haya incorporado un límite efectivo al gasto electoral y asimismo que se le otorgue al Servel las facultades para fiscalizar.

La Ministra de la Secretaría General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, precisó que lo que la Comisión se encuentra discutiendo es una reforma al sistema electoral y no al sistema de financiamiento.

El Honorable Senador señor De Urresti manifestó que paralelamente a la discusión del presente proyecto deben presentarse otras iniciativas que fortalezcan la democracia y la transparencia y que establezcan límites al gasto, con un Servel con atribuciones suficientes.

El Honorable Senador señor Araya sostuvo que es necesaria una modificación integral al sistema electoral, y dentro de eso, se debe contemplar las enmiendas a la ley de partidos políticos y de financiamiento de la política.

La Ministra de la Secretaría General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, precisó que en materia de partidos políticos, el compromiso del Ejecutivo es que antes del 21 de mayo ingrese un proyecto de ley que trate a fondo dicha materia.

Luego, el Honorable Diputado señor Jackson consignó que dado el escándalo que está viviendo nuestro país a raíz del caso Penta, es fundamental en política seguir el principio de oportunidad.

Ratificó que el anuncio que realiza la señora ministra sirve para poder complementar las indicaciones presentadas y aprobadas por más de setenta diputados.

Señaló que en el proyecto de ley en discusión, así como se modifican normas de partidos y financiamiento, debe ponerse término a los escándalos a que hizo referencia.

A continuación, el Honorable Senador señor Espina consultó cómo operan los mecanismos de financiamiento de la política en la legislación comparada, específicamente en lo relacionado con los aportes públicos o reservados. Igualmente, preguntó por el financiamiento que realizan las personas naturales y jurídicas en el derecho comparado.

Luego, el Honorable Senador señor Larraín expresó que hay situaciones que han generado inquietud pública, lo que exige una revisión exhaustiva de la normativa en materia de financiamiento de las actividades políticas. Agregó que hoy en día los dineros de las campañas son fiscalizados por el Servel, pero solo respecto de las cuentas que hacen los parlamentarios, lo que no corresponde necesariamente a los gastos totales que se efectúan en las campañas.

Estimó que el tema es delicado por la sensibilidad pública que existe en la materia, pero es necesario e impostergable de tratar. Destacó que hay normas en materia de campaña, pero no existen disposiciones que regulen el financiamiento de los partidos.

Señaló que los partidos políticos son los entes menos transparentes de la política chilena, ya que, entre otras cosas, no se sabe realmente cómo funcionan, cómo operan, o cómo se financian.

Recalcó que es fundamental abordar esta materia, pero de manera integral. Estimó que la lógica del sistema electoral es distinta a la del financiamiento, responden a propósitos que dicen relación con temas que tienen su propia especificidad y confundirlos hace tener una legislación innecesariamente compleja. Precisó que en estos asuntos, las leyes deben ser simples, fáciles de aplicar y de desarrollar.

Agregó que en relación al proyecto de ley sobre financiamiento de la política, debe incluir reglas referidas a los partidos y a las campañas electorales; la reestructuración del Servicio Electoral, como órgano autónomo, que cumpla funciones de supervisión, de fiscalización, de capacitación, etc.

Enfatizó que adicionalmente se requiere de normas que permitan asegurar que las autoridades también se comprometan a tener una actitud de transparencia, y no injerencia en las actividades electorales.

Finalmente, connotó que el mejor camino en esta materia es que el Ejecutivo presente un proyecto distinto sobre de financiamiento de la política.

A continuación, intervino el Honorable Diputado señor Mirosevic, quien sostuvo que su presencia en esta sesión de la Comisión tiene por objetivo hacer un llamado a que se voten las normas sobre gasto electoral, más allá de la iniciativa que pudiese presentar el Gobierno.

Recalcó que no porque el Ejecutivo esté abocado a elaborar un proyecto que limite el gasto electoral, se deben rechazar las disposiciones que sobre la materia aprobó la Cámara de Diputados. Explicó que las indicaciones que acordó la mencionada Corporación constituyen la única garantía de que se va perfeccionar el sistema.

Expresó que ellas van en el camino de buscar un acuerdo republicano, democrático, para mejorar un sistema totalmente superado.

Seguidamente, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe manifestó que estamos ante un momento complejo y éste no tiene que ver con los últimos acontecimientos que no dicen relación con las normas electorales sobre financiamiento de campaña, sino que es de competencia de la justicia penal.

Agregó que las disposiciones que surgieron de las indicaciones que presentaron los Honorables Diputados señores Mirosevic y Jackson, no solucionan el caso Penta.

Advirtió que el momento difícil que, en parte vive actualmente la política, tiene que ver con las reducidas facultades del Parlamento en una democracia eminentemente presidencialista, que no otorga suficientes atribuciones a diputados y senadores.

Adujo que lo anterior incide en la incapacidad de los parlamentarios para dar soluciones a problemas estructurales de los cuales reclama la ciudadanía.

Agregó que ello va unido a la falta de educación cívica y de formación política, que influye en la errada comprensión de la función del Parlamento en el régimen de gobierno imperante.

Hizo presente que otro aspecto que conspira con la mala percepción ciudadana respecto al Congreso Nacional, dice relación con el sistema electoral binominal, porque la sobre representación de la minoría y el establecimiento del empate como una forma de administración política, ha generado que las principales reformas que hoy en día reclama la ciudadanía hayan requerido, durante muchos años, alcanzar quórums que de acuerdo a la propia Carta Fundamental, son imposibles de obtener. En consecuencia, argumento, también se advierte una inoperancia de parte del Parlamento en reformas importantes.

Añadió que incrementa el descrédito de esta actividad, la opacidad de los partidos, así como el financiamiento de la política. Indicó que el año 2003 se aprobó un estándar que buscaba fijar algún grado de regulación, limitando el gasto electoral y estableciendo una modalidad de financiamiento mixto.

Enfatizó que uno de los factores que incide negativamente en la actividad parlamentaria, es que se legisla “para la galería”, es decir, en hacer leyes que son populares, importantes para un grupo de ciudadanos, pero que no tienen la consistencia necesaria.

Precisó que los senadores y los diputados tienen la obligación de admitir que hay formas de perfeccionar los proyectos de ley. Consignó que se puede compartir el fondo de un conjunto de indicaciones presentadas al proyecto en discusión, pero si se aprueban las treinta indicaciones presentadas en materia de financiamiento y no se establece un sistema de fortalecimiento efectivo del Servicio Electoral, dotándolo de facultades para fiscalizar, se transformarán en letra muerta, tal como sucedió con el límite al gasto electoral del año 2003.

Finalmente, sostuvo que debe regularse el tema del financiamiento de manera integral, y valoró que exista un ante proyecto del Ejecutivo en materia de transparencia y cambio de sistema de financiamiento de la política.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, consignó que hay un estudio de la organización Idea Internacional, que incluyó a 180 países, en que se concluyó que el único país que tiene donaciones reservadas es Chile. Agregó que el 51% del financiamiento de la elección del año 2013 corresponde a dicho tipo de aportes.

Asimismo, recalcó que las observaciones hechas por la OCDE dicen relación con la transparencia, y con la existencia de un órgano fiscalizador y sancionador.

A continuación, el Director Nacional del Servicio Electoral, señor Eduardo Charme ratificó que el Consejo Directivo del Servel asumió, con la Ministra señora Rincón, el compromiso de trabajar a marcha forzada en una propuesta de reformulación integral del Servicio Electoral, con el fin de que dentro de los tres o cuatro primeros meses del próximo año, se pueda contar con una propuesta de reorganización administrativa de esta institución. Lo anterior, explicó, obedece a que desde el año 1987 y de manera creciente, todas las modificaciones normativas en materia electoral, han significado atribuir nuevas responsabilidades y facultades al Servel.

Añadió que lo anterior genera la obligación de administrar procesos cada vez más complejos. Precisó que la estructura actual del Servicio que dirige no soporta que se le otorguen más atribuciones sin que se realice una profunda reforma administrativa de esta entidad.

Luego, consignó que nada de lo que se pueda discutir en materia de institucionalidad electoral va tener un efecto práctico, si el organismo encargado de administrar los procesos electorales no cuenta con los medios suficientes para cumplir adecuadamente con su labor.

Destacó que el Servicio Electoral representa un capital para la institucionalidad democrática de este país. Enfatizó que nadie ha cuestionado la credibilidad de la tarea que desarrolla el servicio antes mencionado.

Hizo presente que si se quiere estar preparado para el ciclo electoral que comienza el año 2016, el tiempo que se da a esta institución para llevar adelante estas reformas es muy acotado.

Seguidamente, el Honorable Senador señor Larraín manifestó que era partidario de asumir el desafío de manera integral. Agregó que el gran dilema que tiene la política chilena, es decirle al país que vamos a entrar en una etapa de transparencia y fiscalización total del financiamiento de toda la actividad política. Precisó que era partidario de buscar un acuerdo formal y público, en términos de tener un compromiso del Gobierno, en orden a que va a ingresar un proyecto que recoja cabalmente un sistema de financiamiento de la actividad política.

El Honorable Senador señor Araya compartió lo expresado por el Honorable Senador señor Larraín. Agregó que el tema del financiamiento debe tratarse con la tranquilidad suficiente para no cometer errores.

El Honorable Senador señor Espina solicitó a la Biblioteca del Congreso Nacional que realice un estudio respecto a cómo funciona el financiamiento de las campañas electorales en la legislación comparada.

Agregó que era partidario de firmar un protocolo de acuerdo con los miembros de la Comisión que contenga un compromiso de contenido y una fecha de presentación del proyecto de ley que deberá presentar el Ejecutivo en materia de gasto electoral y financiamiento de la actividad política.

Seguidamente, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe precisó que por un intento de “quedar bien” se puede terminar aprobando un par de indicaciones que no va a resolver el tema de fondo. Para ello, insistió, debe hacerse una modificación integral de la legislación vigente.

La Ministra de la Secretaría General de la Presidencia, señora Ximena Rincón precisó que el texto del proyecto de ley existe, solo falta la firma de S.E. la señora Presidenta de la República.

Añadió que el Gobierno está disponible para firmar un protocolo de acuerdo en los términos planteados.

El Honorable Senador señor Navarro sugirió que se discutan las disposiciones que inciden en el financiamiento de las campañas electorales, sin perjuicio, de lo que se avance en el proyecto de ley antes mencionado.

La Ministra señora Ximena Rincón recalcó que la palabra del Poder Ejecutivo es garantía suficiente de que el proyecto anunciado se presentará en el corto plazo.

El Honorable Senador señor Horvath manifestó que el avance importante que significaron las indicaciones presentadas por los Honorables Diputados señores Jackson y Mirosevic hace recomendable seguir adelante en su discusión y, paralelamente, empezar el trabajo respecto al proyecto que anunció el Gobierno.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe precisó que las señales políticas que espera la ciudadanía tienen que ver con hechos concretos y no solo con algunas normas aisladas que se aprobaron en el primer trámite constitucional.

En el marco de estas consideraciones, la Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, propuso suscribir un protocolo de acuerdo, con el fin de dejar constancia de la voluntad del Gobierno y de los integrantes de la Comisión de avanzar en una legislación que, con un carácter integral, trate el tema del financiamiento de la política, regulación y control del gasto electoral y las nuevas atribuciones del Servicio Electoral.

En virtud de lo anterior, propuso a los integrantes de la Comisión firmar el siguiente texto:

“Protocolo de Acuerdo Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento del Senado Ministerio Secretaría General de la Presidencia

En Valparaíso, a 10 de diciembre de 2014, con ocasión de la discusión en particular, en segundo trámite constitucional ante el Senado, del proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal (Boletín N° 9326-07), la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento del Senado y la Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón González, acuerdan lo siguiente:

1.- Que el Gobierno ingresará a tramitación legislativa, a más tardar el 17 de diciembre de 2014, un proyecto de ley que aborde de forma integral las normas sobre gasto electoral, financiamiento de campañas políticas y partidos, regulación de la propaganda electoral, establecimiento de sanciones eficaces para quienes vulneren esas disposiciones y fortalecimiento de las atribuciones y recursos del Servicio Electoral.

2.- Que los ejes que orientarán esa iniciativa son dar mayor transparencia al financiamiento de la política, asegurar la equidad en la competencia electoral, permitir un mayor control democrático de aquella por parte de la ciudadanía y asegurar su efectiva fiscalización por parte de los órganos competentes del Estado.

3.- Que todas las materias descritas en el punto anterior merecen un tratamiento integral y sistemático en un proyecto de ley autónomo. Su regulación en forma parcial puede generar resultados inconvenientes.

4.- La Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento, por su parte, dará una tramitación expedita al proyecto que sustituye el sistema electoral binominal, en actual discusión legislativa en esta Comisión. Las disposiciones referidas al gasto electoral, financiamiento de campañas políticas y atribuciones del Servicio Electoral no se abordarán en esta discusión, pero serán consideradas en su integridad por el proyecto de ley indicado en el número 1, que entrará a trámite legislativo a más tardar el 17 de diciembre de 2014.”.

Los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín, conjuntamente con la señora Ministra Secretaria General de la Presidencia, suscribieron el documento transcrito.

Como consecuencia de la firma de este protocolo, el día 16 de diciembre de 2014 el Ejecutivo presentó a tramitación en la Cámara de Diputados, el proyecto de ley para el fortalecimiento y transparencia de la democracia (Boletín N° 9.790-07).

Hacemos presente que a partir de este antecedente la Comisión acordó, con las mayorías que en cada caso se indican en un acápite posterior de este informe, suprimir diversos números del artículo 2° de esta iniciativa, con el fin que ellos sean nuevamente analizados durante la discusión del mencionado Boletín N° 9.790-07.

DISCUSIÓN EN PARTICULAR

A continuación, se efectúa una relación de las indicaciones presentadas al texto aprobado en general por el Senado, y de los acuerdos adoptados a su respecto por la Comisión.

Artículo 1°

Este precepto modifica, mediante diecinueve números, la ley N° 18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios.

Número 1)

Este número introduce, en cuatro letras, igual número de enmiendas al artículo 3° bis de la referida ley.

Cabe hacer presente que dicha norma establece que en las elecciones de Parlamentarios dos o más partidos políticos podrán acordar un pacto electoral.

En su inciso segundo se agrega que el pacto electoral regirá en todas las regiones del país en que uno o más de los partidos políticos integrantes del mismo se encuentren legalmente constituidos.

El inciso tercero precisa que las declaraciones de candidaturas que presente el pacto electoral, solo podrán incluir candidatos de los partidos políticos que se encuentren legalmente constituidos en la respectiva región.

El inciso cuarto dispone que el pacto electoral deberá formalizarse ante el Director del Servicio Electoral, en forma previa al vencimiento del plazo y a las declaraciones de candidaturas, mediante la presentación de una declaración suscrita por los presidentes y secretarios de los partidos políticos integrantes del pacto, que deberá indicar la decisión de concurrir en lista conjunta en una elección de Parlamentarios y que existe afinidad entre sus declaraciones programáticas.

Finalmente, se prescribe que el pacto electoral se entenderá constituido a contar de la fecha de su formalización. Añade que los partidos políticos que hubieren constituido un pacto no podrán acordar otro a menos que aquél fuere dejado sin efecto. Se podrá dejar sin efecto un pacto electoral cuando los partidos que lo integren hayan dado cumplimiento a lo dispuesto en el artículo 29, inciso primero, de la ley N° 18.603, y exista acuerdo unánime entre ellos. Finalmente establece que este acuerdo deberá ser comunicado al Director del Servicio Electoral, mediante una declaración suscrita por los presidentes y secretarios de los partidos políticos de que se trate, antes del vencimiento del plazo para presentar candidaturas.

El texto aprobado en general por el Senado propone cuatro enmiendas, en igual número de letras, a este precepto.

Letra a)

Mediante ella se intercala un inciso segundo, nuevo, al artículo 3º bis. En él se dispone que: “En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.”.

En relación con esta propuesta se presentó la indicación número 1, del Honorable Senador señor Bianchi, que sugiere reemplazar esta letra por la siguiente:

“a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, pasando el actual a ser tercero:

“De la misma forma dos o más candidaturas independientes podrán acordar entre sí un pacto electoral; igualmente, una o más candidaturas independientes podrán celebrar pactos electorales con un partido político que se encuentre constituido en la región respectiva.”.”.

Al iniciarse el debate de esta indicación, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, hizo presente que se habían planteado un conjunto de indicaciones que dicen relación con pactos electorales.

Agregó que esta indicación apunta a permitir que candidatos independientes puedan celebrar pactos entre ellos, sin estar sujetos a las obligaciones y exigencias que la ley impone a los partidos políticos.

Finalmente, aclaró que no habían indicaciones referidas a reponer la figura de los subpactos.

El Honorable Senador señor Araya solicitó que la Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón precisara cuál fue el criterio que adoptó el Gobierno en materia de pactos y subpactos. Hizo presente que tuvo conocimiento de un acuerdo del Ejecutivo con el Comité Independiente y Amplitud de la Cámara de Diputados en orden a disminuir el número de firmas que se requieren para constituir un partido y permitir los pactos de independientes con partidos políticos. Asimismo, que ese acuerdo comprendería la creación de partidos regionales.

Agregó que si se sigue ese criterio, habría que rechazar la posibilidad de que se celebren pactos entre independientes.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia manifestó que lo que había señalado el Honorable Senador señor Araya era efectivo.

Seguidamente, el Honorable Senador señor De Urresti precisó que respaldaría el acuerdo alcanzado en la Cámara de Diputados. Sin perjuicio de ello, solicitó al Ejecutivo que aclare la situación respecto de los subpactos entre partidos políticos dentro de coaliciones.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe reiteró que no habían indicaciones presentadas en ese sentido.

El Honorable Senador señor De Urresti precisó que quería dejar planteado un principio en esta discusión. Recordó que en el primer trámite constitucional se generó un amplio debate sobre la posibilidad de suscribir subpactos. Señaló que, a su juicio, no se deberían impedir dentro de las coaliciones que celebran los partidos políticos. Precisó que no correspondía aprobar una norma restrictiva en esta materia.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe sostuvo que el tema planteado en la indicación no se refiere a los subpactos.

Puntualizó que el debate dice relación con la posibilidad de que los candidatos independientes puedan celebrar pactos entre sí.

Finalmente, aclaró que su rechazo no cerraría la posibilidad que tienen los candidatos independientes de celebrar pactos con los partidos políticos.

Concluido el debate, el señor Presidente de la Comisión sometió a votación esta indicación.

La Comisión, por la unanimidad de sus miembros presentes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó esta indicación.

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A continuación, la Comisión consideró la indicación número 2, también del Honorable Senador señor Bianchi, que propone agregar a este número la siguiente letra b), nueva:

“b) Intercálase el siguiente inciso cuarto, nuevo, pasando el actual a ser quinto:

“En caso de un pacto electoral entre dos candidaturas independientes o entre una candidatura independiente y un partido político, el pacto electoral regirá en la región del país donde se encuentren inscritas dichas candidaturas y constituido el partido político respectivamente.”.”.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó esta indicación.

Al adoptar este acuerdo, la Comisión tuvo en cuenta que ella se relacionaba directamente con lo propuesto en la indicación número 1 y, en consecuencia, correspondía rechazarla.

Letra b)

Ella intercala en el artículo 3° bis un inciso quinto, nuevo, mediante el cual se prescribe que: “De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.”.

En relación con esta letra se formularon las indicaciones números 3, 4, 5 y 6 del boletín.

En primer lugar, se consideraron las indicaciones número 3, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y número 4, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, que proponen suprimir esta letra b).

Al iniciarse su estudio, el Honorable Senador señor Larraín manifestó que los problemas por los cuales las mujeres no tienen mayor presencia en política no dicen relación con la falta de cupo, sino que más bien con la estructura cultural de nuestro país.

Agregó que en el ejercicio de su labor, el parlamentario tiene que desplazarse del lugar de donde vive, y la realidad en Chile supone que muchas mujeres tienen la calidad de jefas de hogar.

Finalmente, hizo presente que si se aprueba una norma de este tipo, ella debiera aplicarse gradualmente, porque no es fácil conseguir candidatas.

El Honorable Senador señor Espina advirtió que por regla general no es partidario de las normas sobre cuotas de género, pero para permitir que las mujeres tengan mayor participación en política está dispuesto a incorporarlas.

Constató que el porcentaje expresado por la disposición no será posible de cumplir con candidatas efectivamente competitivas. Precisó que los cupos se completarán con aquellas que ni siquiera realizarán campañas y de esta manera se vulnerará el espíritu de la ley.

Sugirió disminuir a un 30% el porcentaje asignado a las mujeres.

En esta parte del debate, se tuvo presente que en diversos países se han incorporado, con un carácter transitorio, normas de este tipo, las que han contribuido a elevar el número de mujeres que participan en la actividad político parlamentaria.

Concluido el debate sobre este punto, el señor Presidente de la Comisión sometió a votación las indicaciones números 3 y 4 del boletín.

La Comisión, por la unanimidad de sus miembros, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó ambas indicaciones.

A continuación, se consideró la indicación número 5, del Honorable Senador señor Ossandón, que reemplaza en esta letra la frase: “ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo” por la de: “a lo menos el cuarenta por ciento del total respectivo deberá corresponder a mujeres, discapacitados o personas pertenecientes a alguna etnia indígena”.

Al iniciarse su estudio, el Honorable Senador señor Espina manifestó que dicha indicación incorpora a la actividad política no solo a las mujeres, sino que también a discapacitados o personas pertenecientes a alguna etnia indígena. Se mostró partidario de aprobar esta indicación.

A continuación, la Ministra Directora del Servicio Nacional de la Mujer, señora Claudia Pascual, expresó que el proyecto de ley en discusión busca introducir un criterio de paridad de género, debido a la sub representación de las mujeres en el espacio de toma de decisión de la política. Remarcó que es efectivo que existen una serie de condicionantes que impiden una mayor incorporación de la mujer en este ámbito.

Aseveró que la propuesta de que ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total busca que las colectividades políticas hagan un esfuerzo desde ya y no un mes antes de la inscripción de las candidaturas.

Respecto a la indicación del Honorable Senador señor Ossandón, recalcó que en ella se incluye a personas que son minoría, situación que no corresponde a la realidad de las mujeres. Por lo tanto, aseveró, no es conveniente mezclar ambas realidades en una indicación.

La Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera precisó que este tipo de normativa dicen relación con proyectos más completos. Consignó que lo que se consagra a través de las cuotas es fomentar la participación de la mujer en política.

Recalcó que respecto a la discapacidad, no hay datos exactos en relación al número de electores que se encuentran en esta situación.

Concluido el debate, el señor Presidente de la Comisión, puso en votación la indicación número 5.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó esta indicación. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Por la afirmativa lo hicieron los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

El Honorable Senador señor Espina fundamentó su voto señalando que la regla referida a cuotas debería tener por finalidad permitir que sectores de nuestra sociedad que no han tenido la oportunidad de incorporarse en determinadas actividades, lo puedan hacer.

El Honorable Senador señor Araya fundamentó su voto en contra advirtiendo que el Gobierno en un proyecto distinto debería abordar, de manera integral, la incorporación efectiva de las etnias indígenas al Parlamento.

El Honorable Senador señor De Urresti señaló que la participación de representantes de los pueblos indígenas en el Parlamento era muy importante. Por lo mismo, solicitó que el Gobierno se haga cargo de la representación de los pueblos originarios en el Congreso Nacional.

Luego, la Comisión trató la indicación número 6, de los Honorables Senadores señoras Allende, Goic, Muñoz y Pérez San Martín, y señor Harboe, que agrega en la letra b) aprobada en general, después del primer punto seguido, la siguiente oración: "Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas.".

Al iniciarse su estudio, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe, señaló que la indicación viene a ratificar que el porcentaje que se establece en el texto aprobado en general por el Senado es de carácter obligatorio e independiente de la forma de nominación de candidaturas.

En contra de este planteamiento, el Honorable Senador señor Larraín sostuvo que la norma en discusión altera el sentido de las primarias. Ejemplificó señalando que si un partido político tiene primarias en 10 distritos y en ellas se cumple la cuota, pero los ciudadanos, a través de su voto, la alteran, no se puede volver a exigir en dichos distritos que se cumpla con el porcentaje de participación de candidatos hombres y mujeres que establece el nuevo inciso quinto del artículo 3º bis.

Subrayó que hay que defender las primarias. Consideró que ellas son importantes para evitar que las directivas de los partidos políticos designen a su voluntad quiénes serán sus candidatos.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe remarcó que es autor de otra indicación en la que se busca hacer compatible el principio de la participación, que se expresa a través de las primarias, con él de inclusión que busca garantizar la participación efectiva de la mujer.

Agregó que la cuota es temporal y no tiene lógica plantear la incompatibilidad absoluta de los principios antes mencionados. Éstos se compatibilizan logrando que cada partido político pueda realizar elecciones primarias hasta en un 40% de los cupos a determinar. Sostuvo que el 60% restante se reserva a la decisión de los partidos políticos.

El Honorable Senador señor Espina planteó que si hay primarias, el porcentaje de la cuota deberá respetarse al realizarse la misma y debe mantenerse el resultado de ella. Si así no fuere, las primarias carecen de todo sentido. Enfatizó que la norma en discusión es inconstitucional.

Precisó que hacía reserva de constitucionalidad sobre este aspecto.

El Honorable Senador señor Araya recordó que hoy en día los partidos políticos deciden dónde se hacen las primarias.

El Honorable Senador señor Larraín advirtió que si se aprueba la indicación en discusión se acaban las primarias.

Concluido el debate sobre la indicación número 6, el Presidente de la Comisión la sometió a votación.

La Comisión, por mayoría de votos, aprobó esta indicación. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Votaron en contra los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

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A continuación, la Comisión trató la indicación número 7, del Honorable Senador señor Bianchi. En ella se propone incorporar una letra c), nueva, en el número 1) del artículo 1.

Su propósito es que el artículo 3° bis contenga el siguiente inciso quinto, nuevo.

“c) Intercálase el siguiente inciso quinto, nuevo:

“El pacto electoral en caso de que esté constituido por candidaturas independientes o entre una candidatura independiente y un partido político, deberá formalizarse ante el Director de Servicio Electoral antes del vencimiento del plazo para efectuar las declaraciones de candidaturas, mediante la presentación de los siguientes documentos: Declaración suscrita por el Presidente y Secretario del Partido Político integrante del pacto y del candidato integrante de la candidatura independiente, o declaración conjunta de las candidaturas independientes que constituyen el pacto entre sí, que deberá indicar la decisión de concurrir en lista conjunta en una elección de Parlamentarios.”.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó esta indicación.

Al adoptar este acuerdo, la Comisión tuvo en cuenta que ella se relacionaba directamente con lo propuesto en la indicación número 1 y, en consecuencia, procedía su rechazo.

Número 2)

El texto aprobado en general por el Senado sustituye el inciso primero del artículo 4° de la ley N° 18.700. El texto vigente dispone que las declaraciones de candidaturas a senadores o diputados que presenten los partidos políticos o los pactos electorales podrán incluir hasta dos candidatos por circunscripción electoral o distrito, según corresponda.

La norma aprobada en general sustituye el mencionado artículo por el siguiente:

“Artículo 4°.- En el caso de las declaraciones de candidaturas para la elección de diputados y senadores, los partidos políticos o pactos electorales podrán presentar en cada distrito o circunscripción un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción de que se trate.”.

En relación con este número se presentaron las indicaciones número 8, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela; número 9, del Honorable Senador señor Bianchi, y número 10, de los Honorables Senadores señores García-Huidobro y Moreira, todas destinadas a suprimir este número del proyecto.

Al iniciarse el estudio de esta disposición, la Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, destacó que el Poder Ejecutivo no comparte el propósito de estas indicaciones, ya que si se aprueban, se vuelve al texto vigente. Agregó que mediante la norma aprobada en general por el Senado se busca aumentar los niveles de competencia dentro de nuestro sistema electoral y dar a los ciudadanos la posibilidad de escoger entre un mayor número de candidatos.

El Honorable Senador señor Araya consignó que el texto aprobado en general era conveniente pues daba la posibilidad que candidatos menos conocidos pudieran participar y que sean respaldados por los partidos.

Concluido su análisis, el Presidente de la Comisión, sometió a votación las tres indicaciones mencionadas.

La Comisión, por mayoría de votos rechazó las indicaciones número 8, 9 y 10. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, Espina y Harboe. Votó por su aprobación el Honorable Senador señor Larraín.

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A continuación, la Comisión consideró la indicación número 11, del Honorable Senador señor Bianchi, para agregar el siguiente número, nuevo:

“…) Suprímese el inciso quinto del artículo 4º.”.

En lo que interesa a este informe, corresponde precisar que dicho inciso establece que las declaraciones de candidaturas independientes solo podrán contener el nombre de un candidato, cualquiera sea el número de cargos que se trate de proveer.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó esta indicación.

Al adoptar este acuerdo, la Comisión tuvo en cuenta que ella se relacionaba directamente con lo propuesto en la indicación número 1 y, en consecuencia, correspondía rechazarla.

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Seguidamente, la Comisión trató la indicación número 12, del Honorable Senador señor Bianchi, para agregar el siguiente número, nuevo:

“…) Intercálase, en el inciso segundo del artículo 5º, entre la expresión “partidos políticos” y “que los integren”, la frase “y de candidaturas independientes”.”.

El inciso segundo del artículo 5º de la ley Nº 18.700 dispone que las declaraciones de candidaturas de los pactos electorales, solo podrán ser sustituidas o modificadas por acuerdo unánime de los partidos políticos que los integren.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó esta indicación.

Al adoptar este acuerdo, la Comisión tuvo en cuenta que ella se relacionaba directamente con lo propuesto en la indicación número 1, que previamente fue rechazada por esta instancia.

Se recordó que su objeto es eliminar la idea de que los partidos políticos son los únicos que pueden suscribir pactos.

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Luego, la Comisión estudió la indicación número 13, del Honorable Senador señor Bianchi, para añadir el siguiente número, nuevo:

“…) Agrégase en el inciso tercero del artículo 5º, a continuación de la expresión “partidos”, la frase “y candidaturas independientes”.”.

Dicho inciso del artículo 5º de la ley Nº 18.700 prescribe que las declaraciones de candidaturas podrán ser retiradas hasta antes de su inscripción en el registro especial a que se refiere el artículo 19. El retiro de una declaración se hará por el presidente y el secretario de la directiva central del respectivo partido. Sin embargo, el retiro de una declaración de candidatura incluida en un pacto electoral requerirá el acuerdo de todos los partidos que lo integren. El retiro de una candidatura independiente se hará ante el Director del Servicio Electoral o el Director Regional respectivo mediante solicitud suscrita personalmente por el interesado o firmada por éste ante notario.

Al iniciarse su estudio, se recordó que esta indicación se relacionaba con otras indicaciones que había presentado previamente el Honorable Senador señor Bianchi cuyo objeto es permitir que los candidatos independientes puedan celebrar pactos entre sí y, por tanto, convenir pactos con los partidos políticos.

De aceptarse lo anterior, resultaría necesario enmendar el inciso tercero del artículo 5º.

La Comisión, tal como lo resolvió al pronunciarse sobre la indicación número 1, no compartió este criterio.

En consecuencia, y por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, se rechazó esta indicación.

Número 3)

Este número modifica el artículo 10 de la ley N° 18.700.

Dicho precepto prescribe, en lo que interesa a este informe, que las candidaturas independientes a diputados o senadores requerirán del patrocinio de un número de ciudadanos igual o superior al 0,5 por ciento de los que hubieren sufragado en el distrito electoral o en la circunscripción senatorial.

El texto aprobado en general reemplaza, en el mencionado artículo, el guarismo “0,5” por “0,25”.

En relación con esta letra se presentaron las indicaciones número 14, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, número 15, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín; y número 16, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira. Todas ellas proponen suprimir este número.

Al iniciarse el estudio de estas indicaciones, el asesor del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo González expuso que con el objeto de no dar curso a la idea de los pactos entre candidatos independientes, se discurrió en los términos de rebajar el umbral de firmas requeridas para presentar una candidatura independiente, de tal manera que fuere más fácil, para los candidatos ya mencionados, reunir este porcentaje de firmas al momento de declarar candidaturas.

El Honorable Senador señor Larraín consultó por el número de firmas que se requerirían para presentar candidaturas a senador en las distintas circunscripciones, si se reemplaza el guarismo 0,5 por 0,25.

El Honorable Senador señor Espina dio cuenta de las cifras solicitadas por el Honorable Senador señor Larraín. Señaló que en el caso de la región de Arica y Parinacota, para ser candidato independiente se requiere de 178 firmas; en Tarapacá, 215, etc.

El asesor del Ministro del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo González advirtió que en regiones grandes, como Valparaíso, o la Región Metropolitana, reunir las firmas constituye un gran esfuerzo para los candidatos independientes.

El Honorable Senador señor Espina solicitó que no se interprete su indicación como un propósito de impedir el acceso de los independientes al Congreso Nacional, pero estimó que el porcentaje de 0,25 generaría una proliferación muy grande de nombres.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe sostuvo que rebajar el porcentaje de firmas que se requiere puede beneficiar a un grupo de independientes que quiera postular, pero también debe pensarse en el nivel de representatividad que se requiere para optar a un cargo de representación popular.

Recalcó que todos los candidatos, independiente de su votación, tendrán financiamiento público, por tanto, puede producirse el hecho que una persona postule con la finalidad de obtener dicho financiamiento.

El Honorable Senador señor Larraín apuntó que las firmas que actualmente se exigen para presentar candidaturas independientes no son elevadas.

Concluido el debate de estas indicaciones, el Presidente las sometió a votación.

La Comisión, por mayoría de votos, aprobó las indicaciones números 14, 15 y 16. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Espina, Harboe y Larraín. Votó en contra el Honorable Senador señor Araya. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

Número 4)

Sustitúyese el artículo 17 de la ley N°18.700. La disposición vigente otorga al Consejo del Servicio Electoral la facultad para aceptar o rechazar las declaraciones de candidaturas. Puntualiza que deberá rechazar las que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 28, 48 y 50 de la Constitución Política, o que se encuentren en algunas de las situaciones previstas en el artículo 57 de la Constitución. Finalmente, prescribe que rechazará las declaraciones que no se ajusten a las exigencias o requisitos establecidos en los párrafos 1° a 3° del Título I de la ley Nª 18.700.

La norma aprobada en general, reemplaza este precepto por el siguiente:

“Artículo 17.- El Consejo del Servicio Electoral, dentro de los diez días siguientes a aquel en que venza el plazo para efectuar la declaración de candidaturas, deberá dictar una resolución que se notificará al correo electrónico que los partidos políticos y candidatos independientes deberán informar en el momento de la declaración, la que se pronunciará sobre:

a) La aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 25, 48 y 50 de la Constitución Política de la República, o que se encuentren en alguna de las situaciones previstas en su artículo 57. Asimismo, deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los párrafos 1° a 3° de este título.

b) La aceptación o rechazo de la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, declaradas por cada partido político, en conformidad a lo dispuesto en los incisos cuarto y quinto del artículo 3° bis. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con el porcentaje de sexos establecido en el inciso quinto de dicho artículo.

Los partidos políticos cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, sean rechazadas en conformidad a lo dispuesto en la letra b) de este artículo, podrán corregirlas ante el Servicio Electoral dentro de los cuatro días hábiles siguientes a la fecha del despacho del correo electrónico que notifica la resolución a que alude el inciso primero, con el fin de ajustarse al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso quinto del artículo 3° bis, ya sea retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas.

Dentro de los cinco días siguientes de vencido el plazo para reclamar de la resolución del Consejo del Servicio Electoral, éste dictará una nueva resolución aceptando o rechazando las declaraciones nuevas y rechazando o aceptando, según proceda, la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputados o a senadores, según corresponda, la que deberá ser publicada dentro de tercer día en el Diario Oficial. En tal oportunidad también se publicarán en el mismo medio la aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente.”.

En relación con este precepto se presentaron las indicaciones números 17, 18, 19, 20 y 21 del boletín.

Las indicaciones número 17, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y número 18, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, proponen eliminar en la letra b) del inciso primero del artículo 17 propuesto la oración que señala: “El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con el porcentaje de sexos establecido en el inciso quinto de dicho artículo.”.

Al iniciarse el debate de esta disposición, el señor Presidente de la Comisión recordó que esta atribución del Consejo del Servicio Electoral era fundamental para que la disposición relativa a cuotas de género efectivamente se cumpla. Añadió que ella era concordante con lo que previamente había resuelto la Comisión.

Luego de un breve intercambio de opiniones, el Presidente de la Comisión puso en votación ambas indicaciones.

La Comisión, por la unanimidad de sus miembros presentes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina y Harboe, rechazó ambas indicaciones.

Las indicaciones número 19, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y número 20, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, proponen suprimir en el inciso segundo del artículo 17 aprobado en general la frase “, con el fin de ajustarse al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso quinto del artículo 3° bis, ya sea retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas”.

Al iniciarse su análisis, se hizo presente que respondían al mismo objetivo que las indicaciones previamente rechazadas.

Teniendo en cuenta este antecedente, la Comisión, por la unanimidad de sus miembros presentes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina y Harboe, rechazó ambas indicaciones.

Finalmente, la indicación número 21, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para sustituir los incisos segundo y tercero del artículo 17 aprobado en general, por el siguiente:

“Para determinar el porcentaje que corresponde a cada sexo se considerará la totalidad de las candidaturas declaradas por el partido político conforme al párrafo 1 del título I de esta ley, sin considerar aquellas candidaturas ya inscritas en el registro señalado en el artículo 19 de la ley N° 18.700 que hayan sido nominadas en virtud de una elección primaria, y sin restar aquellas que pudieren ser objeto de rechazo según la letra a) del inciso anterior.”.

Al iniciarse el estudio de esta indicación, el Presidente de la Comisión expresó que ella contradecía criterios previos que había adoptado la Comisión en materia de primarias, cuando se pronunciaron sobre la indicación número 6.

En virtud de lo anterior, puso en votación esta indicación.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó esta indicación. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Por la afirmativa lo hicieron los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

Finalmente, la Comisión acordó, a sugerencia del Servicio Electoral, y por la unanimidad de sus miembros presentes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina y Harboe, sustituir en el inciso tercero del artículo 17 la frase: “reclamar de la resolución del Consejo del Servicio Electoral, éste” por “presentar la corrección, el Consejo del Servicio Electoral”.

Para adoptar este acuerdo se tuvo presente lo dispuesto en el inciso final del artículo 121 del Reglamento del Senado.

La norma aprobada se incorpora como nuevo número 3) del artículo 1°.

Número 5)

Sustituye el artículo 18 de la ley N° 18. 700. En lo que interesa a este informe, el mencionado artículo prescribe que los partidos políticos y los candidatos independientes podrán, dentro de los cinco días siguientes a la publicación de la resolución a que se refiere el artículo 17, reclamar ante el Tribunal Calificador de Elecciones. El mismo deberá fallar en el término de diez días.

Durante el debate en general la Sala del Senado aprobó su sustitución por el siguiente:

“Artículo 18.- Los partidos políticos y los candidatos independientes podrán reclamar ante el Tribunal Calificador de Elecciones por los rechazos de declaraciones fundadas en el incumplimiento de los requisitos establecidos en la letra a) del artículo 17, dentro de los siete días hábiles siguientes al despacho del correo electrónico que notifique la resolución a que se refiere el inciso primero del artículo anterior. Este tribunal fallará en el término de diez días, contado desde la interposición del reclamo, y su resolución se notificará al Director del Servicio Electoral y a los interesados por carta certificada.

El plazo para interponer la reclamación ante el Tribunal Calificador de Elecciones, cuando se funde en el incumplimiento de los requisitos del artículo 17, letra b), se contará desde el día de la publicación de la resolución que dicta el Servicio Electoral en conformidad a lo dispuesto en el inciso final del artículo 17, respecto de los partidos políticos que corrijan ante el Servicio Electoral la proporción de sexos de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador.”.

En relación con este número se presentó la indicación número 22, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín. Mediante ella se propone suprimir este número.

Al iniciarse su estudio, el Honorable Senador señor Larraín consignó que la norma del artículo 18 es inadecuada pues permite inscribir una lista que no será la definitiva, a la espera de conocer las que presenten los demás partidos políticos y así poder modificarla en el plazo que esta disposición señala.

La Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera advirtió que el SERVEL ve con preocupación la posibilidad de modificar declaraciones de candidaturas y la ampliación de los plazos que surgen de la reclamación ante el Servicio.

El Honorable Senador señor Felipe Harboe consultó a la Subdirectora si la eliminación del artículo ya citado, mantiene la seguridad jurídica.

La Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera expresó que la normativa vigente es suficiente.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón defendió el texto aprobado en general por el Senado, porque la notificación es privada, y por lo tanto, arguyó, los partidos no podrían ajustar sus listas. Agregó que la norma aprobada solo se refiere al cumplimiento de las cuotas.

El Honorable Senador señor Espina sostuvo que los partidos políticos se comunican las listas respectivas. Añadió que el porcentaje de la cuota es fácil de determinar, es un cálculo matemático simple.

Concluido el debate, el señor Presidente de la Comisión, puso en votación la indicación número 22.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, aprobó esta indicación.

Concluida la votación, el Honorable Senador señor Araya destacó que si lo que se quiere evitar es el error que puedan cometer los partidos políticos al determinar el porcentaje de candidatos y de candidatas exigido, el Gobierno puede enviar una indicación que le imponga al Servel la obligación de fijar los mencionados porcentajes, antes de la inscripción de las candidaturas.

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A continuación, la Comisión trató las indicaciones números 23, 24, 25 y 26 del boletín.

La indicación número 23, del Honorable Senador señor Bianchi, propone incorporar el siguiente número, nuevo:

“…) Agrégase antes del punto final del inciso segundo del artículo 19 la siguiente expresión: “, en caso de no conformar un pacto electoral en la respectiva Región”.

El mencionado inciso del artículo 19 de la ley Nº 18.700 señala que si el rechazo de la candidatura por parte del Servicio Electoral, conforme al artículo 17, se hubiere fundado en no ser el candidato declarado ciudadano con derecho a sufragio, y el fallo del Tribunal hubiere ordenado su inscripción como candidato, el Servicio Electoral deberá también incorporar al candidato dentro del Padrón de Electores. Si, por el contrario, el Tribunal rechazare una candidatura aceptada por el Servicio Electoral, al considerar que el candidato no es ciudadano con derecho a sufragio, el Servicio Electoral deberá excluir al candidato del Padrón de Electores.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó esta indicación.

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Luego, la Comisión consideró la indicación número 24, del Honorable Senador señor Bianchi, que propone incorporar en el artículo 1° de esta iniciativa el siguiente número, nuevo:

“…) Incorpórase en el inciso cuarto del artículo 20, a continuación de la expresión “candidaturas independientes,” la frase “en caso de no encontrarse en un pacto electoral en su respectiva región,”.

En lo que interesa a este informe, dicho inciso prescribe que si un candidato a Diputado o Senador fallece entre las cero horas del octavo día anterior a la elección y el momento en que el Tribunal Calificador de Elecciones proclame a los elegidos, no podrá ser reemplazado, y los votos que obtenga se entenderán emitidos en favor del otro candidato de su lista si lo hubiere. A falta de otro candidato en la lista o en el caso de candidaturas independientes, los votos serán considerados nulos.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó esta indicación.

Al adoptar este acuerdo se tuvo presente que ella es concordante con otras que previamente formuló el Honorable Senador señor Bianchi y que apuntaban a la idea de permitir los pactos de candidatos independientes y de éstos con los partidos políticos.

Dado que esa idea fue rechazada previamente, la Comisión adoptó el acuerdo precedente.

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Seguidamente, la Comisión trató la indicación número 25, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para consultar un numeral nuevo, del siguiente tenor:

“…) Agrégase al artículo 23 el siguiente inciso tercero nuevo:

“En el caso de un pacto electoral, el orden de precedencia de los partidos dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito, será el señalado por el pacto electoral en la declaración de candidaturas, y a falta de este, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.”.

A este respecto cabe recordar que el mencionado artículo 23 de la ley Nº 18.700 atribuye al Director del Servicio Electoral la facultad para determinar el orden de precedencia de los candidatos en la respectiva cédula electoral.

Agrega que tratándose de elecciones de Senadores y Diputados, se realizará un sorteo con letras del abecedario en número igual al de las listas declaradas por los partidos políticos o pactos electorales. La primera letra que arroje el sorteo se asignará a la lista primeramente declarada y las restantes letras a las demás en el orden de su recepción. Añade que atribuidas las letras a cada lista, el orden de éstas se ajustará al que tienen en el abecedario. Finalmente, precisa que la letra que se asigne a la lista de un partido o pacto electoral será la misma para todas sus declaraciones en las diferentes circunscripciones senatoriales y distritos del país.

Al iniciarse el debate de esta indicación, el señor Presidente de la Comisión hizo presente que este era un tema que no estaba regulado en el mencionado artículo 23.

El Honorable Senador señor Larraín advirtió que el proyecto de ley aprobado por la Cámara de Diputados obliga a los partidos, en el nuevo inciso cuarto del artículo 24, a que en las listas de candidatos que presentan al Servicio Electoral se siga un orden alternado entre candidatos hombres y mujeres. En contra de este planteamiento, expresó que debieran ser los partidos los que definan ese orden. Enfatizó que hay razones internas de estas entidades que justifican la forma en que se presentan las candidaturas. Por lo mismo, respaldó la idea de que los partidos definan el orden de sus candidatos.

Añadió que si ellos no ejercen dicha facultad, deberá hacerse un sorteo, pero sin privilegiar a algún género o sexo por sobre otro.

La Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera señaló que en la declaración de candidaturas, el orden que el Servel lleva para efectos del sorteo es el que establece el partido político respectivo. Lo mismo sucede con los pactos. Consignó que la indicación viene a llenar un vacío legal.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón manifestó estar de acuerdo con el texto aprobado por la Cámara de Diputados.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe sugirió a la Comisión aprobar la indicación, dada la precisión que señaló la Subdirectora del Servicio Electoral.

Puesta en votación la indicación número 25, fue aprobada con el voto favorable de los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín.

La norma aprobada se incorpora como nuevo número 4) del artículo 1° del proyecto.

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Finalmente, la Comisión analizó la indicación número 26, del Honorable Senador señor Bianchi. Mediante ella se sugiere agregar el siguiente número, nuevo, al artículo 1° de este proyecto de ley.

“…) Incorpórase en el inciso tercero del artículo 23, a continuación de la expresión “independiente a diputado o senador” lo siguiente: “, que no haya celebrado pacto electoral en la respectiva región,”.

En lo que interesa a este informe, cabe recordar que el inciso tercero de dicha disposición de la ley Nº 18.700 prescribe que a cada candidatura independiente a Diputado o Senador el Director le asignará un número cardinal correlativo de acuerdo con el orden de su recepción. La numeración que se dé a las nóminas será la que siga al último número asignado a los candidatos declarados en listas, de acuerdo con lo dispuesto en el inciso cuarto del artículo 24.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó esta indicación.

Al adoptar este acuerdo se tuvo presente que ella es concordante con otras que previamente formuló el Honorable Senador señor Bianchi y que apuntaban a la idea de permitir los pactos de candidatos independientes.

Teniendo en consideración que esa idea fue rechazada previamente, la Comisión resolvió rechazar esta indicación.

Número 6)

Introduce dos enmiendas al artículo 24 de la ley N° 18.700. Esta disposición establece que cuando se trate de elecciones de Senadores y Diputados o sólo de Diputados, a continuación de la palabra con que se encabece la cédula, se colocará la letra o número que haya correspondido a cada lista o nómina en el sorteo a que se refiere el artículo anterior, y frente a esa letra o número el nombre del partido político o del pacto de partidos que la patrocine o las palabras "Candidatura Independiente", según corresponda. Sobre el nombre de la lista o nómina se colocará el símbolo del partido, pacto o candidatura independiente, impreso en tinta negra y en el tamaño que determine el Servicio Electoral. Para estos efectos, cada pacto electoral y cada candidatura independiente señalarán, en su declaración, la figura o símbolo que los distingan. Si el partido político no tuviere símbolo; o si el pacto o la candidatura independiente no lo señalaren; o si el símbolo propuesto se prestare a confusión con el de otra lista o nómina; o si los partidos integrantes de un pacto no hubieren señalado nombre a éste, el Director del Servicio Electoral le asignará la figura geométrica y el nombre que él determine, en su caso.

Precisa que, a continuación del nombre de cada candidato incluido en una lista correspondiente a un pacto electoral, deberá indicarse el nombre del partido político a que pertenezca o su condición de independiente.

Añade, en su inciso tercero, que las listas se colocarán en el orden alfabético que corresponda a las letras que les hayan sido asignadas, y luego se colocarán las nóminas de acuerdo con los números que les hayan correspondido.

En su inciso cuarto prescribe que dentro de cada lista, se pondrán los nombres de los candidatos en el orden indicado en la declaración, asignándoles un número correlativo desde el uno hasta la cantidad total de candidatos declarados para la misma circunscripción senatorial o distrito, comenzando la numeración con los candidatos a Senadores y siguiendo con los candidatos a Diputados.

Finalmente, en su inciso quinto o final se señala que al lado izquierdo del número de cada candidato, habrá una raya horizontal a fin de que el elector pueda marcar su preferencia completando una cruz con una raya vertical.

El texto aprobado en general introduce, en dos letras, igual número de modificaciones al artículo 24.

Letra a)

Esta letra reemplaza el mencionado inciso cuarto por el siguiente: “Los partidos políticos, dentro de cada lista, pondrán los nombres de los candidatos ordenando a sus integrantes con alternancia entre los candidatos y las candidatas, asignándoles un número correlativo desde el uno hasta la cantidad total de candidatos declarados para la misma circunscripción senatorial o distrito electoral, comenzando la numeración con los candidatos a senadores y siguiendo con los candidatos a diputados.”.

Letra b)

En ella se sustituye su inciso final o quinto del artículo 24 por el siguiente: “Al lado izquierdo del número de cada candidato y del nombre de la lista respectiva, habrá una raya horizontal destinada a que el elector pueda marcar su preferencia completando una cruz con una raya vertical. Asimismo, al lado izquierdo del número de cada candidato, también habrá una fotografía de éste, si la hubiese acompañado en su declaración, en el tamaño y colores de impresión que determine el Servicio Electoral.”.

Tal como se indicó el inciso final del artículo 24 de la ley Nº 18.700 prescribe que al lado izquierdo del número de cada candidato, habrá una raya horizontal a fin de que el elector pueda marcar su preferencia completando una cruz con una raya vertical.

En relación con este número se presentaron las indicaciones números 27, 28, 29, 30, 31 y 32 del boletín.

Las indicaciones número 27, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y número 28, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, proponen eliminar este número.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, rechazó ambas indicaciones como consecuencia, según se dirá más adelante, de la aprobación de la indicación número 30. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín.

Luego, la Comisión trató la indicación número 29, del Honorable Senador señor Bianchi, que sugiere sustituir este número por el siguiente:

“6) Sustitúyese el inciso cuarto del artículo 24 por el siguiente:

“Los partidos políticos y los pactos electorales entre independientes, dentro de cada lista, pondrán los nombres de los candidatos ordenando a sus integrantes con alternancia entre los candidatos y las candidatas, asignándoles un número correlativo desde el uno hasta la cantidad total de candidatos declarados para la misma circunscripción senatorial o distrito electoral, comenzando la numeración con los candidatos a senadores y siguiendo con los candidatos a diputados.”.”.

Cabe recordar que actualmente el mencionado inciso prescribe que dentro de cada lista, se pondrán los nombres de los candidatos en el orden indicado en la declaración, asignándoles un número correlativo desde el uno hasta la cantidad total de candidatos declarados para la misma circunscripción senatorial o distrito, comenzando la numeración con los candidatos a Senadores y siguiendo con los candidatos a Diputados.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó esta indicación.

Al adoptar este acuerdo se tuvo presente que ella es concordante con otras indicaciones que previamente formuló el Honorable Senador señor Bianchi y que tenían por objetivo permitir los pactos de candidatos independientes.

Teniendo en consideración que esa idea fue previamente denegada, la Comisión resolvió rechazar la indicación número 29.

La indicación número 30, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, propone reemplazar la letra a) de este número por la siguiente:

“a) Sustitúyese el inciso cuarto por el siguiente:

“El orden de precedencia de los candidatos de un partido y sus independientes asociados dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito, será el señalado por el partido en la declaración de candidaturas, y a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.”.

Al iniciarse su estudio, el Honorable Senador señor Larraín señaló que la norma en discusión dice relación con la composición interna de la lista que presenta un Pacto. Estimó que lo anterior debe obedecer a una determinación libre del partido o del pacto electoral.

La Ministra Directora del Servicio Nacional de la Mujer, señora Claudia Pascual, manifestó que la norma aprobada por la Cámara de Diputados se justifica ya que en muchas ocasiones se ha cumplido la cuota a favor de las mujeres, pero en la conformación de las listas se las ubica en el último lugar, por lo tanto, arguyó, tienen pocas posibilidades de ser electas.

El Honorable Senador señor Espina se mostró partidario de que los partidos políticos sean los que deciden el orden dentro de la lista y contrario a que la ley les fije un criterio rígido para presentar sus candidatos.

El Honorable Senador señor Araya respaldó la indicación número 30 de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín. Enfatizó que el orden de los candidatos no asegura que sean elegidos los ubicados en los primeros lugares.

Concluido el debate de la indicación número 30, el señor Presidente la sometió a votación.

La Comisión, por mayoría de votos, aprobó esta indicación. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

A continuación, la Comisión trató las indicaciones números 31 y 32. Ambas recaen en la letra b) de este número.

La indicación número 31, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, suprime en la letra b) de este número la locución “y del nombre de la lista respectiva”.

Al iniciarse su estudio, el Honorable Senador señor Larraín manifestó que hay modelos electorales donde existe el sistema de listas y se les da a los partidos políticos gran fuerza. Ello resiente la relación de los parlamentarios con la ciudadanía, porque la elección de ellos dependerá del lugar donde la directiva del partido político lo ubique al interior de la lista.

Precisó que es muy relevante mantener la relación del ciudadano con el candidato, ya que el elector vota por este último. Concluyó que incorporar el voto de lista, como concepto, es un error.

Los miembros presentes de la Comisión concordaron con este planteamiento.

Concluido el debate sobre este asunto, el Presidente lo sometió a votación.

La Comisión, por la unanimidad de su miembros presentes, Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín aprobó esta indicación.

En una sesión posterior, el Honorable Senador señor De Urresti, discrepó con lo acordado por la Comisión en orden a suprimir el denominado “voto de lista”.

Recordó que muchos ciudadanos, al momento de sufragar, manifiestan su adhesión a un partido político porque representa o defiende determinada doctrina o ideología.

Al permitirse el voto de lista se resguarda la libertad de los electores para manifestar ese voto “ideológico”, que persigue dar un respaldo más que a una persona determinada a las ideas y valores que sirven de sustento a la actividad que realiza el partido.

Por todo lo anterior, solicitó dejar constancia de que él apoya expresamente la posibilidad de consagrar en nuestro sistema electoral el voto de lista.

Finalmente, la indicación número 32, del Honorable Senador señor Larraín, suprime en el inciso final que se propone la oración que señala: “Asimismo, al lado izquierdo del número de cada candidato, también habrá una fotografía de éste, si la hubiese acompañado en su declaración, en el tamaño y colores de impresión que determine el Servicio Electoral.”.

Al iniciarse el estudio de esta indicación, el Honorable Senador señor Larraín consignó que la inclusión de la foto tiene distintos tipos de inconvenientes. En primer lugar, puede generar una discriminación, debido al aspecto físico de una persona. Asimiló lo anterior a la prohibición de incorporar la fotografía al currículum vitae.

Agregó que presenta un problema en cuanto a la calidad de la fotografía y a la resolución que se le pueda otorgar a ésta en la imprenta respectiva.

Destacó que la foto ayuda a la reelección de los incumbentes y no a la incorporación de figuras nuevas.

El Honorable Senador señor Espina hizo presente que muchas personas identifican a través de la fotografía al candidato, pero no retienen su nombre. Apuntó que los detalles técnicos relacionados con aquella podrán ser resueltos por el Servel.

La Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera señaló que el Servicio ha tomado conocimiento de la posibilidad de incorporar la fotografía en el voto y dada la forma en que la legislación establece la confección de la cédula, advierten que puede haber inconvenientes en el control de calidad del voto.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón estimó que si queremos tener a una ciudadanía informada al momento de votar, la norma aprobada en general por el Senado viene a fortalecer aquello.

Luego, el Honorable Senador señor Espina preguntó si la inclusión de la fotografía en el voto está reglamentada.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe señaló que respecto a ello se refirió expresamente la señora Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera, donde manifestó la inconveniencia de mantener la fotografía en el voto, por la imposibilidad del Servicio Electoral de controlar las características técnicas de la misma.

Concluida la discusión de esta indicación, el Presidente de la Comisión la sometió a votación.

La Comisión, por mayoría de votos, aprobó la indicación número 32. Votaron a favor los Honorables Senadores señores Araya, Harboe y Larraín. En contra lo hizo el Honorable Senador señor Espina.

La norma aprobada se consigna como nuevo número 5) del artículo 1°.

Número 7)

Introduce dos enmiendas al artículo 30 de la ley N° 18.700.

El artículo 30 vigente prescribe que se entenderá por propaganda electoral la dirigida a inducir a los electores a emitir su voto por candidatos determinados o a apoyar alguna de las proposiciones sometidas a plebiscito. Dicha propaganda sólo podrá efectuarse en las oportunidades y en la forma prescrita en esta ley.

Agrega su inciso segundo que para los plebiscitos comunales la propaganda sólo podrá comprender las materias sometidas a consideración de los vecinos, sin aludir a asuntos ideológicos, de carácter partidista o de política contingente.

En su inciso tercero se establece que el financiamiento de los gastos que se realicen en propaganda electoral o plebiscitaria sólo podrá provenir de fuentes de origen nacional.

En el inciso siguiente prescribe que la propaganda electoral por medio de la prensa, radioemisoras y canales de televisión sólo podrá efectuarse desde el trigésimo y hasta el tercer día anterior al de la elección o plebiscito, ambos días inclusive.

En los incisos finales dispone que tratándose del caso previsto en el inciso segundo del artículo 26 de la Constitución Política, la propaganda electoral sólo podrá efectuarse desde el decimocuarto y hasta el tercer día anterior al de la votación, ambos días inclusive. Asimismo, que se prohíbe la propaganda electoral en cinematógrafos y salas de exhibición de videos y la que en cualquier lugar o forma se realice por altoparlantes fijos o móviles, con la única excepción de la transmisión de discursos pronunciados en concentraciones públicas.

El texto aprobado en general por el Senado introduce, mediante dos letras, las siguientes enmiendas al transcrito artículo.

Letra a)

Mediante esta letra se reemplaza el inciso primero del artículo 30 por los siguientes:

“Artículo 30.- Se entenderá por propaganda electoral toda aquella manifestación pública, escrita o audiovisual, que promocione el nombre, apellido o partido político al que pertenezcan candidatos determinados o que utilice cualquier otro medio de identificación, que esté dirigida a obtener apoyo electoral. También lo será la que induzca a apoyar alguna de las proposiciones sometidas a plebiscito. Dicha propaganda sólo podrá efectuarse en las oportunidades y en la forma prescrita en esta ley.

No se entenderá como propaganda electoral la difusión de información sobre actos políticos y actividades habituales del funcionamiento de los partidos y autoridades políticas, así como la realización de entrevistas periodísticas.”.

Letra b)

En esta letra se sustituye el inciso tercero, que ha pasado a ser cuarto, por el siguiente:

“El financiamiento de los gastos que se realicen en propaganda electoral o plebiscitaria sólo podrá provenir de personas naturales con derecho a voto en Chile.”.

En relación con este número se presentaron las indicaciones números 33, 34, 35, 36, 37, 38 y 39 del boletín.

La indicaciones número 33, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y número 34, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, sugieren suprimir la letra a) de este número.

Al iniciarse el estudio de estas indicaciones se tuvo presente que el tema de la propaganda electoral se relaciona directamente con la competencia electoral y el financiamiento de las elecciones.

Respecto de este asunto, la Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera manifestó que para el Servicio, el tema de la propaganda no deja de ser una fuente de preocupación permanente en cada proceso electoral.

Seguidamente, la Coordinadora de la División Jurídica del Ministerio Secretaría General de la Presidencia, señora Valeria Lübbert, destacó que la norma y las indicaciones que sustituyen el artículo 30 de la ley Nº 18.700, son materias abordadas en el proyecto de ley sobre el fortalecimiento y transparencia de la democracia (Boletín Nº 9.790-07), el cual ingresó a la Cámara de Diputados el día 16 de diciembre de 2014.

Sin perjuicio de lo anterior, el Honorable Senador señor De Urresti consideró que para resolver sobre esta materia debían ser escuchados por la Comisión los jueces de policía local, porque son ellos los encargados de aplicar las sanciones en caso de incumplimiento de la normativa que regula la propaganda electoral.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe precisó que, tal como se indicó precedentemente, todo lo relativo a la propaganda electoral va a ser regulado de manera integral en el proyecto de ley antes mencionado. Agregó que el Servicio Electoral será el encargado de fiscalizar dicha materia.

El Honorable Senador señor De Urresti sostuvo que no podía votar a favor o en contra de estas indicaciones sin tener conocimiento del contenido del proyecto de ley antes mencionado.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón indicó que tal como se había comprometido el Gobierno, a través del Protocolo de Acuerdo que se consigna en este informe, el día 16 de diciembre de 2014 se ingresó a la Cámara de Diputados el proyecto de ley para el fortalecimiento y transparencia de la democracia y no puede darse a conocer su contenido sino hasta que la Cámara de Diputados dé cuenta del mismo.

Concluido el análisis de este asunto, el señor Presidente de la Comisión puso en votación las mencionadas indicaciones.

La Comisión, por mayoría de votos, aprobó las indicaciones números 33 y 34. Votaron a favor los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

Seguidamente, la Comisión trató la indicación número 35, del Honorable Senador señor Guillier, que reemplaza la letra a) por la siguiente:

“a) Sustitúyese el inciso primero por los siguientes, pasando el inciso segundo a ser tercero y así sucesivamente:

“Se entenderá por propaganda electoral toda aquella manifestación pública, escrita, radiofónica o audiovisual, que promocione el nombre, apellido o partido político, alianza o coalición, al que pertenezcan candidatos determinados o que utilice cualquier otro medio de identificación, que esté dirigida a promover a un candidato, sea que la respectiva declaración de candidatura se haya realizado o no. También lo será la que induzca a apoyar alguna de las proposiciones sometidas a plebiscito. Dicha propaganda sólo podrá efectuarse en las oportunidades y en la forma prescrita en esta ley.

No se entenderá como propaganda electoral la difusión de información sobre actos políticos y actividades habituales del funcionamiento de los partidos y autoridades políticas, así como la realización de entrevistas periodísticas.

Para los plebiscitos comunales la propaganda sólo podrá comprender las materias sometidas a consideración de los vecinos, sin aludir a asuntos ideológicos, de carácter partidista o de política contingente.”.”.

Dado que la Comisión aprobó las indicaciones que suprimen las normas sobre propaganda electoral, materia que será tratada en el proyecto de ley indicado precedentemente, por mayoría de votos se acordó rechazar esta indicación. Votaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor de Urresti.

Letra b)

Las indicaciones número 36, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, número 37, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y número 38, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, proponen eliminar esta letra.

Dado que la Comisión rechazó, por las razones antes dichas, las normas sobre propaganda electoral, el Presidente de la Comisión propuso acoger estas indicaciones.

La Comisión, por mayoría de votos, aprobó las indicaciones números 36, 37 y 38. Votaron a favor los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

La indicación número 39, del Honorable Senador señor Ossandón, agrega en la letra b), a continuación de la palabra “Chile”, la siguiente frase: “y de aquellas personas jurídicas señaladas en el artículo 24 de la ley 19.884”.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó esta indicación.

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Luego, la Comisión trató la indicación número 40 del Honorable Senador señor Bianchi, que reemplaza los incisos cuarto y quinto del artículo 31 de la ley Nº 18.700 por el siguiente:

“…) Sustitúyense los incisos cuarto y quinto del artículo 31 por el siguiente:

“En las elecciones de diputados y senadores, a cada región le corresponderá un tiempo por día que será dividido semanalmente entre las distintas regiones, pares o impares que se encuentren en periodo de elección de sus representantes. En cada día de propaganda se distribuirá el tiempo en forma equivalente entre los distintos candidatos que se presenten.”.”.

Al iniciarse su estudio, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe, sostuvo que la idea contenida en esta indicación será recogida en el proyecto de ley para el fortalecimiento y transparencia de la democracia. Por lo tanto, sugirió a la Comisión su rechazó.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó la indicación número 40.

Número 8)

Intercala en el artículo 65, inciso primero, entre las expresiones “lado izquierdo” y “del número” la siguiente: “de la lista, o al lado izquierdo”.

En relación con este numeral se presentaron las indicaciones número 41, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, número 42, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y número 43, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, que proponen suprimir este número.

La Comisión, por la unanimidad de sus miembros presentes, Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín, aprobó estas tres indicaciones.

Para adoptar esta decisión se tuvo en cuenta que previamente la Comisión había rechazado, también por unanimidad, la idea de considerar los votos de lista.

Número 9)

Intercala en el número 6) del artículo 71, entre la expresión “por” y la frase “cada uno de los candidatos” la siguiente frase: “cada lista y por”.

Respecto de este numeral se presentaron las indicaciones número 44, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, número 45, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y número 46, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarlo.

La Comisión, por la unanimidad de sus miembros presentes, Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín, aprobó estas tres indicaciones.

Para adoptar esta decisión se tuvo en cuenta que previamente la Comisión había rechazado, también por unanimidad, la idea de considerar los votos de lista.

Número 10)

Mediante este número se intercala en el artículo 87, inciso primero, entre la expresión “candidato” y la preposición “en”, la frase “o por cada lista, cuando corresponda,”.

Este numeral fue objeto de las indicaciones números 47, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, número 48, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y número 49, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira. Todas ellas proponen suprimirlo y eliminar la posibilidad de que existan votos de lista.

La Comisión, por la unanimidad de sus miembros presentes, Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín, aprobó estas tres indicaciones.

Para adoptar esta decisión se tuvo en cuenta que previamente la Comisión había rechazado, también por unanimidad, la idea de considerar los votos de lista.

Número 11)

En este número se reemplaza el artículo 109 bis de la ley N° 18. 700.

Esta disposición prescribe que en el caso de elecciones de Parlamentarios, el Tribunal proclamará elegidos Senadores o Diputados a los dos candidatos de una misma lista, cuando ésta alcanzare el mayor número de sufragios y tuviere un total de votos que excediere el doble de los que alcanzare la lista o nómina que le siguiere en número de sufragios.

Agrega que si ninguna lista obtuviere los dos cargos, elegirá un cargo cada una de las listas o nóminas que obtengan las dos más altas mayorías de votos totales de lista o nómina, debiendo el Tribunal proclamar elegidos Senadores o Diputados a aquellos candidatos que, dentro de cada lista o nómina, hubieren obtenido las más altas mayorías.

Añade, en su inciso tercero, que si el segundo cargo por llenar correspondiere con igual derecho a dos o más listas o nóminas, el Tribunal proclamará electo al candidato que hubiere reunido mayor cantidad de preferencias individuales.

En su inciso final se establece que en caso de empate entre candidatos de una misma lista o entre candidatos de distintas listas o nóminas, que a su vez estuviesen empatadas, el Tribunal procederá, en audiencia pública, a efectuar un sorteo entre ellos, y proclamará electo al que salga favorecido.

La norma aprobada en general por el Senado sustituye este precepto por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme a las reglas establecidas en el procedimiento que a continuación se detalla:

1.- El Tribunal Calificador de Elecciones determinará las preferencias emitidas a favor de cada lista y de cada uno de los candidatos que la integran.

2.- Se aplicará el sistema electoral de coeficiente D´Hondt, para lo cual se procederá de la siguiente manera:

a) Los votos de cada lista se dividirán por uno, dos, tres y así sucesivamente hasta la cantidad de cargos que corresponda elegir.

b) Los números que han resultado de estas divisiones se ordenarán en orden decreciente hasta el número correspondiente a la cantidad de cargos que se eligen en cada distrito electoral o circunscripción senatorial.

c) A cada lista o pacto electoral se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b).

3.- En el caso de las listas conformadas por un solo partido político, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará electos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada lista, de acuerdo al número de cargos que le correspondan a cada una de ellas, luego de aplicar las reglas descritas precedentemente.

4.- En el caso de los pactos electorales, se aplicarán las siguientes reglas para determinar cuántos escaños le corresponden a cada uno de ellos:

a) Se calculará el total de los votos de cada partido político o, en su caso, de la suma de cada partido político y las candidaturas independientes asociadas a ese partido.

b) Se dividirá por uno, dos, tres y así sucesivamente, hasta la cantidad de cargos asignados al pacto electoral.

c) A cada partido político o, en su caso, a cada partido y las candidaturas independientes asociadas a éste, se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b) precedente.

d) El Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada partido político o, en su caso, de cada partido, considerando las candidaturas independientes asociadas éste dentro de un pacto electoral, de acuerdo a los cupos obtenidos por cada uno de ellos.

Finalmente, se prescribe que en caso de empate entre candidatos de una misma lista, o entre candidatos de distintas listas que a su vez estén empatadas, el Tribunal Calificador de Elecciones procederá en audiencia pública a efectuar un sorteo entre ellos, y proclamará elegido al que salga favorecido.

En relación con este número 11), se presentaron las indicaciones 50 a 54 del boletín.

Las indicaciones número 50, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y número 51, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, proponen eliminar este número.

La indicación número 52, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, sugiere reemplazar este número 11), por el siguiente:

“11) Sustitúyese el artículo 109 bis por los siguientes artículos 109 bis y 109 ter nuevos:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme al procedimiento de cifra repartidora que se señala en los incisos siguientes.

Se considerará que constituyen una lista los pactos electorales, los partidos que participen en la elección sin formar parte de un pacto electoral, y cada una de las candidaturas independientes que no estén asociadas a un partido.

Se determinarán los votos de listas sumando las preferencias emitidas a favor de cada uno de los candidatos integrantes de una misma lista.

Se determinará el cuociente electoral, para lo cual los votos de lista se dividirán sucesivamente por uno, dos, tres, cuatro y así sucesivamente, hasta formar tantos cuocientes por cada lista como senadores o diputados corresponda elegir. Todos esos cuocientes se ordenarán en forma decreciente y el que ocupe la posición ordinal correspondiente al número de senadores o diputados que le corresponder elegir a la circunscripción senatorial o distrito será el cuociente electoral.

Para determinar cuántos son elegidos en cada lista, se dividirá el total de votos de la lista por el cuociente electoral. Se considerará la parte entera del resultado de la división, sin aproximar y despreciando cualquier fracción o decimal.

Para determinar los candidatos a senadores o diputados elegidos dentro de cada lista, se observarán las siguientes reglas:

1) Si a una lista corresponde elegir igual número de senadores o diputados que el de candidatos presentados, se proclamará elegidos a todos estos.

2) Si el número de candidatos presentados es mayor que el de los senadores o diputados que a la lista le corresponde elegir, se proclamarán elegidos los que hubieren obtenido las más altas mayorías individuales, a menos que la lista corresponda a un pacto electoral, caso en el cual se aplicará la norma del artículo siguiente.

3) Si el número de candidatos presentados es inferior al de los senadores o diputados que a la lista le corresponda elegir, se proclamarán elegidos todos los candidatos de la lista, debiendo reasignarse el cargo sobrante recalculando el número de cargos elegidos por las demás listas. Para ello, se repetirá el cálculo del inciso quinto, utilizando como cuociente electoral aquel que ocupe la posición ordinal que siga en el orden decreciente de los cuocientes determinados según el inciso cuarto. Si fuesen más de uno los cargos sobrantes, para determinar el cuociente se avanzará en el orden decreciente de los cuocientes del inciso cuarto, tantas posiciones ordinales como cargos sobrantes existan.

4) Si dentro de una misma lista un cargo correspondiere con igual derecho a dos o más candidatos, resultará elegido aquel que haya obtenido el mayor número de preferencias individuales y, en caso de que persista la igualdad, se procederá por el Tribunal al sorteo del cargo, en audiencia pública.

5) Si el último cargo por llenar correspondiere con igual derecho a dos o más listas o candidaturas independientes, resultará elegido el candidato de la lista o el independiente que haya obtenido mayor número de preferencias individuales y, en caso de que persista la igualdad, se procederá por el Tribunal al sorteo del cargo en audiencia pública.

Artículo 109 ter.- Para determinar los candidatos elegidos en una lista que corresponda a un pacto electoral, se procederá a sumar las preferencias de los candidatos de un mismo partido incluidos los candidatos independientes asociados a dicho partido.

Posteriormente, se repetirá el procedimiento descrito en el artículo anterior, considerando, para este efecto, como si fueran una lista a cada partido integrante del pacto electoral, todo ello con el objeto de determinar el número de candidatos que elige cada partido integrante del pacto.

Determinado el número de senadores o diputados que elige cada partido integrante del pacto electoral, se repetirá el procedimiento descrito en el artículo precedente, para determinar cuáles son los candidatos electos de cada partido integrante del pacto. En el caso de un partido que incluya candidatos independientes asociados, estos candidatos tendrán igual derecho de preferencia dentro del partido que los candidatos afiliados, proclamándose electos a quienes obtengan las más altas mayorías considerando únicamente su votación individual.”.”.

La indicación número 53, del Honorable Senador señor Bianchi, reemplaza el número 11) por el siguiente:

“11) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de Parlamentarios, el Tribunal proclamará elegidos Senadores o Diputados a los candidatos que obtengan las más altas mayorías individuales, según sea el número de cargos a elegir.”.”.

Finalmente, la indicación número 54, del Honorable Senador señor Ossandón, para reemplazarlo por el siguiente:

“11) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegido al candidato que obtenga la más alta mayoría relativa”.”.

Al iniciarse el estudio de estas indicaciones, el Honorable Senador señor Larraín apuntó que la norma del artículo 109 bis posee una arista técnica muy precisa y debe discutirse en ese mérito. Añadió que el texto aprobado por la Cámara de Diputados, habiéndose suprimido los votos de lista, debería ser rechazado, porque está construido sobre una lógica distinta.

Sostuvo que la indicación número 52, de la cual es coautor, corrige la norma actual. Sugirió que el Servicio Electoral se pronuncie al respecto.

Seguidamente, el asesor del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo González expresó que la indicación de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín sigue la misma lógica del sistema D’Hondt. Agregó que el voto de lista lo único que hacía era permitir que se computaran votos no personales al partido o a la lista. Precisó que el artículo que viene aprobado en general por el Senado fue concebido sin consideración a que existiese o no, voto de lista.

Manifestó que en el inciso segundo de dicha indicación se establece, qué es lo que se entenderá por lista para los efectos de la aplicación del sistema D’Hondt, sin embargo ello ya está determinado en el artículo 3° bis, porque quien define la lista son los partidos políticos al momento de declarar sus candidaturas. Explicó que introducir una definición en el artículo 109 bis, existiendo otra en el 3° bis, puede ser fuente de controversia.

Sin perjuicio de lo anterior, preguntó a los autores de la indicación número 52 cuáles serían los aspectos que no estarían bien resueltos en el artículo ya aprobado en general por el Senado.

El Honorable Senador señor De Urresti preguntó la opinión del Ejecutivo en relación al voto lista. Se mostró partidario del voto lista, porque constituye un voto ideológico, que amplía la libertad del ciudadano.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe recordó que el voto de lista ya fue rechazado.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón reiteró lo dicho por el Honorable Senador señor Harboe. Precisó que el Poder Ejecutivo no presentó indicación respecto al artículo 109 bis, ni se opuso a la presentada por los Honorables Diputados.

La Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera consignó que la indicación de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín clarifica la forma en que el Tribunal Calificador de Elecciones pueda realizar su trabajo, desde el punto de vista técnico.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe preguntó si existen diferencias desde el punto de vista de las consecuencias de la elegibilidad.

La Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera ratificó que no hay diferencias entre la norma aprobada en general y lo que propone la indicación número 52.

El asesor electoral del Honorable Senador señor Espina, señor Tomás Duval, advirtió que la indicación en discusión está basada en la aplicación de la norma del sistema proporcional en materia de elección de concejales y de consejeros regionales, donde las imprecisiones han tenido que ser corregidas con leyes sucesivas.

Agregó que la indicación implementa un procedimiento claro y establece las preferencias individuales como la resolución primera de cualquier empate. Ante esta situación, se le da preferencia al voto ciudadano, por sobre un sorteo.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe preguntó al Ejecutivo si la indicación corrige positivamente la norma actual, o adolece de defectos que podrían generar algún grado de alteración en materia de elegibilidad.

El asesor del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo González hizo presente que las dos metodologías conducen a los mismos resultados.

El Honorable Senador señor Larraín precisó que estamos ante una cuestión eminentemente técnica. Sugirió que los expertos trabajen en una redacción adecuada y clarificadora.

El Honorable Senador señor Espina destacó que en la norma aprobada en general por el Senado, el empate se resuelve por sorteo, y en la indicación, con el candidato que obtiene más votos.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe sugirió que debido a la importancia del artículo, los expertos propongan una redacción que cumpla los objetivos planteados, teniendo como principio fundamental, el respeto de la soberanía popular.

Seguidamente, el señor Presidente de la Comisión puso en votación las indicaciones números 50 y 51.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó ambas indicaciones.

Seguidamente, el señor Presidente de la Comisión declaró inadmisible las indicaciones número 53 y 54, pues ellas se alejan de la idea matriz de este proyecto, cuyo objetivo es establecer un sistema electoral proporcional en la elección de los parlamentarios. Añadió que las mencionadas indicaciones se orientan a configurar un sistema distinto, que favorece una forma de elección de carácter mayoritario.

En una sesión posterior, la Comisión retomó la discusión de la indicación número 52.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe recordó que esta indicación dice relación con la forma de configurar el método electoral. Añadió que la norma aprobada en el primer trámite constitucional es apoyada por el Ejecutivo y plantea que en caso de empate entre candidatos de una misma lista, o entre candidatos de distintas listas que a su vez estén empatadas, el Tribunal Calificador de Elecciones procederá en audiencia pública a efectuar un sorteo entre ellos, y proclamará elegido al que salga favorecido, en cambio la indicación número 52, presentada por los Honorables Senadores señores Espina y Larraín propone que si dentro de una misma lista, un cargo correspondiere con igual derecho a dos o más candidatos, resultará elegido aquel que haya obtenido el mayor número de preferencias. En caso que persista la igualdad, se procederá al sorteo del cargo por parte del Tribunal Calificador de Elecciones.

El experto electoral y asesor del Honorable Senador señor Espina, señor Tomás Duval manifestó que el sistema D´Hondt se aplica en el sistema municipal y en la elección de Cores. La indicación número 52 busca emular el mismo procedimiento.

Agregó que en ella se explica, paso a paso, dicho sistema para evitar cualquier interpretación que los tribunales electorales pudiesen hacer. Consignó que con ella se busca que el nuevo artículo 109 bis sea coherente con las normas electorales ya existentes.

Añadió que en ella, se acota la cifra repartidora a un número entero, como una manera de facilitar la distribución.

Luego, el señor Presidente de la Comisión ofreció el uso de la palabra al Honorable Diputado señor Auth, quien manifestó que el coeficiente D’ Hondt que se aplica en la elección de concejales obliga a dividir el número total de votos de una lista por 1, 2 o 3, según sea el número de candidatos y escaños a elegir. Luego, para cada una de las listas, el sistema determina, si son 6 los electos, dónde están los 6 números más altos. Agregó que si en la lista “A”, hay tres números más altos, esa lista elije 3, y así sucesivamente.

Añadió que en la indicación en discusión, solo si hay empate entre los candidatos, se resuelve por los votos.

El Honorable Senador señor Larraín solicitó al Honorable Diputado, señor Auth que dé su opinión respecto a ambas alternativas. Preguntó si es suficiente lo propuesto en el texto aprobado en general por el Senado, o si la indicación mejora la redacción ya acordada.

El Honorable Diputado, señor Auth expresó que la indicación propone un método distinto de cifra repartidora, en cambio en el texto aprobado se consagra el coeficiente D´Hondt.

El experto electoral y asesor del Honorable Senador señor Espina, señor Tomás Duval declaró que el procedimiento de la cifra repartidora es el mismo del sistema D’Hondt. Agregó que el resultado no varía.

El Honorable Senador señor Espina destacó que el Servicio Electoral ya se pronunció por una de las dos alternativas en estudio.

La Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera recalcó que las dos alternativas propuestas llevan al mismo resultado, ya que corresponde al mismo sistema con una forma de redacción distinta. Mostró su inclinación por la indicación porque pormenoriza el trabajo a realizar por el Tribunal Calificador de Elecciones.

Concluido el debate, el Presidente de la Comisión, puso en votación la indicación número 52.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó la indicación número 52. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Votaron a favor de ella los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

La norma aprobada pasa a ser el nuevo número 6) del artículo 1° del proyecto.

-.-.-

Luego, la Comisión trató la indicación número 55, de Honorable Senador señor Horvath, que sugiere introducir como inciso final del artículo 109 bis propuesto, el siguiente:

“Tratándose de la elección de diputados en el distrito 29º de Isla de Pascua, resultara electo el candidato que hubiese obtenido las más alta mayoría relativa.”.

El señor Presidente de la Comisión declaró inadmisible esta indicación, pues al igual que las dos anteriores se alejan de la idea matriz de este proyecto, ya que se orientan a configurar un sistema distinto, que establece una elección de carácter mayoritaria y uninominal en un distrito determinado.

Número 12)

Mediante este numeral se sustituye el artículo 178 de la ley N° 18.700.

Esta norma prescribe que para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá sesenta distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá dos Diputados.

El texto aprobado en general por el Senado sustituye el mencionado artículo por el siguiente:

“Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”.

En relación con este numeral se presentaron las indicaciones números 56, 57, 58, 59, 60, 61, y 62.

Las indicaciones número 56, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y número 57.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, suprimen este número.

Puestas en votación las indicaciones números 56 y 57, fueron rechazadas con los votos en contra de los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín.

Seguidamente, la Comisión trató la indicación número 58, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, que reemplaza este número por el que sigue:

“12) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- La Cámara de Diputados se compone de 120 miembros.

Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá 30 distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”.”.

Al iniciarse su estudio, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, manifestó que ella estaba en directa relación con la indicación número 65, cuyos autores son los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela.

Luego, el Honorable Senador señor Larraín manifestó que en materia de configuración de los distritos electorales hay varias propuestas alternativas. Una de ellas corresponde a la de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, otra al Honorable Senador señor Espina y una tercera pertenece al Honorable Senador señor Horvath.

Sugirió abordar el tema en su globalidad y definir los criterios para la composición y distribución de escaños en la Cámara de Diputados.

El Honorable Senador señor Espina señaló que sus indicaciones sobre la materia (número 66, 76 y 83) replica la fórmula que trabajó Renovación Nacional con la Democracia Cristiana.

Agregó que el proyecto de ley que surgió de dicho acuerdo entre ambos partidos fue presentado durante el Gobierno de S.E. la señora Presidenta de la República, Michelle Bachelet.

Sostuvo que la propuesta cambia el sistema binominal por un sistema proporcional. En ella se aumenta el número de Senadores a 44 y el de Diputados a 134.

Añadió que también se incrementa el número de parlamentarios de acuerdo a la población que corresponda a cada distrito.

Expresó que no considera prudente ni necesario elevar, más allá de 134, el número de diputados. Consignó que incrementar a 155 su número provocará un gran rechazo en la ciudadanía. Finalmente, puntualizó que el proyecto de ley del Gobierno vulnera flagrantemente el principio de igualdad del voto.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón hizo presente que el acuerdo que se firmó entre los partidos antes mencionados por el Honorable Senador señor Espina no solo abarcaba al partido del que ella forma parte, sino que también participaron en él, los Honorables Senadores señores Tuma y Rossi. Precisó que el Acuerdo se logró en octubre del año 2013 y el proyecto de ley, que derivó del mismo, fue presentado en marzo de 2014.

El Honorable Senador señor Espina señaló que efectivamente el referido acuerdo abarcó no solo a la Democracia Cristiana, sino que también a los jefes de bancada de otros partidos de la Concertación. Agregó que se anunció la presentación del proyecto durante el Gobierno del señor Sebastián Piñera, pero se materializó, se firmó y se presentó a tramitación en el Congreso Nacional el día 12 de marzo de 2014.

El Honorable Senador señor Larraín aseveró que el proyecto de ley antes mencionado fue fruto de un arduo trabajo. Acotó que, pese a su opinión, no obtuvo el respaldo de su partido político.

Agregó que dicho testimonio político debe ser recogido. Destacó que debe ajustarse el sistema actual, terminando con el binominal y reemplazándolo por un proporcional corregido.

Precisó que un sistema proporcional no dice relación con un número determinado de parlamentarios, sino que dependerá de la forma en que ellos se elijan. Planteó que forzar un aumento en su número, bajo el pretexto que se está cambiando el sistema electoral no es efectivo.

Añadió que para construir un sistema proporcional, que corrija las distorsiones que actualmente existen, no es necesario incrementar a 155 el número de diputados.

Asimismo, recalcó que esta iniciativa no respeta el principio de igualdad del voto. Destacó que en el Mensaje se señala que uno de los objetivos de este proyecto es establecer la mayor igualdad del voto. Hizo presente que la igualdad del voto constituye un principio constitucional que debe ser respetado. Agregó que el mensaje del Ejecutivo recogía parcialmente dicho objetivo. Advirtió que con los cambios introducidos en la Cámara de Diputados, dicho principio se vio gravemente alterado y ello se debe a los acuerdos políticos tendientes a beneficiar a un sector determinado.

Hizo referencia a los distritos de Arica y de Atacama, situación donde la desproporción es grave. Reseñó que ello se debe a un acuerdo político para beneficiar la reelección de un Diputado del Partido Comunista.

Manifestó que se ha criticado al sistema binominal porque no respeta la igualdad del voto, y porque favorece a determinados sectores de la política. En contra de esta idea, aseveró que en la última elección quien se vio favorecido por la aplicación del sistema binominal fue la Nueva Mayoría.

Se remitió a lo expresado por el experto electoral, señor Andrés Tagle, en la discusión en general del proyecto de ley cuando demostró la desigualdad del voto en numerosos distritos.

Consignó que el acuerdo alcanzado en la Cámara de Diputados tiene un valor político para quienes lo firmaron, pero desde el punto de vista ético y jurídico no es sostenible.

Luego, afirmó que se comete un grave error al diseñar un sistema electoral que en una de las Cámaras es un traje a la medida de una coalición.

Recalcó que lo que se necesita es un sistema electoral que dure treinta años o más, para que con la misma vara se midan momentos políticos distintos.

Estimó que el proyecto que proviene de la Cámara de Diputados es políticamente inaceptable; éticamente injusto y constitucionalmente inadmisible.

Expuso que se le está causando un grave daño a la ciudadanía, se está alterando su voluntad, se está creando una mayoría artificial, que causará un profundo perjuicio al país.

Connotó que hay una propuesta de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, que mantienen el número de 120, pero los distribuye de otra manera.

Finalmente, se manifestó disponible para abrir un debate que pueda conducir a una integración de la Cámara de Diputados que mantenga el criterio de la igualdad del voto; que mejore la competitividad y proporcionalidad, aunque ello signifique aumentar el número de Diputados.

El Honorable Senador señor De Urresti consignó que con el sistema binominal, la coalición más beneficiada fue la Alianza, a pesar de que en todas las elecciones parlamentarias siempre ha ganado la Concertación.

Manifestó que lo avanzado en la Cámara de Diputados corresponde a un acuerdo, al que no se han sumado Renovación Nacional ni la Unión Demócrata Independiente.

Agregó que su deseo es que este tipo de reformas no vaya en beneficio de uno u otro sector. Explicó que él era partidario de un sistema democrático y para ello, todos deben concurrir a esta reforma.

El Honorable Senador señor Larraín replicó que ambos sectores políticos se han visto beneficiados por el actual sistema.

Agregó que en la última elección, la Nueva Mayoría obtuvo una gran ganancia electoral gracias al sistema binominal.

Advirtió que independiente de lo anterior, la pregunta que surge es cómo enfrentamos el sistema que viene. Consultó si la Comisión está disponible para modificar una estructura injusta como la que viene de la Cámara de Diputados.

El Honorable Senador señor Espina enfatizó que no se puede afirmar que Renovación Nacional no ha tenido una propuesta.

Concluido el debate el señor Presidente de la Comisión, manifestó que en la Cámara de Diputados se había hecho un amplio debate sobre la materia y que se buscó alcanzar el más amplio acuerdo posible. Agregó que en el Senado también se habían hecho esfuerzos pero lamentablemente ese consenso no se logró. Sin perjuicio de lo anterior, explicó que esta iniciativa mejora considerablemente el respeto del principio de igualdad del voto, permitirá que nuevos actores políticos tengan representación en el Parlamento en proporción al respaldo que tienen en la ciudadanía y contribuirá a fortalecer nuestra democracia, la que se ha visto dañada por el sistema electoral binominal.

Seguidamente, puso en votación la indicación número 58.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó esta indicación. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Votó a favor el Honorable Senador señor Larraín y se abstuvo el Honorable Senador señor Espina.

A continuación, la Comisión consideró la indicación número 59, del Honorable Senador señor Ossandón, que reemplaza este número por el siguiente:

“12) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá ciento veinte distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá un diputado.”.”.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, procedió a declarar inadmisible esta indicación pues contradice la idea matriz de esta iniciativa, cual es establecer un nuevo sistema electoral proporcional e inclusivo. La indicación número 59 se aparta de esta idea pues establece un modelo que sirve para constituir un sistema mayoritario y uninominal.

Seguidamente, la indicación número 60, del Honorable Senador señor Espina, sustituye en el artículo 178 aprobado en general el vocablo “veintiocho” por “treinta”.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó esta indicación. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Votaron a favor los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

La indicación número 61, del Honorable Senador señor Horvath, reemplaza en el artículo 178 aprobado en general el vocablo “veintiocho” por “veintinueve”.

La Comisión, por la unanimidad de sus miembros, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó esta indicación.

Finalmente, la Comisión trató la indicación número 62, del Honorable Senador señor De Urresti. Mediante ella se agrega, en el artículo 178 aprobado en general, la siguiente oración final, nueva: “A ellos se sumarán los miembros que serán elegidos por los pueblos indígenas en elecciones simultáneas a las parlamentarias, de conformidad a lo dispuesto en el articulado transitorio de esta ley.”.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, procedió a declarar inadmisible esta indicación, pues su aprobación implicaría incrementar el gasto público, materia que corresponde a la iniciativa exclusiva de S.E. el Presidente de la República, de conformidad a lo dispuesto en el inciso tercero del artículo 65 de la Constitución Política de la República.

La norma aprobada pasa a ser el nuevo número 7) del artículo 1°.

Número 13)

En este numeral se reemplaza el artículo 179 de la ley N° 18. 700.

La disposición vigente establece los siguientes distritos electorales:

1er. distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos;

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte;

3er. distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollague y San Pedro de Atacama;

4° distrito, constituido por las comunas de Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal;

5° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro y Copiapó;

6° distrito, constituido por las comunas de Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen;

7° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano y Andacollo;

8° distrito, constituido por las comunas de Coquimbo, Ovalle y Río Hurtado;

9° distrito, constituido por las comunas de Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela;

10° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota e Hijuelas;

11er. distrito, constituido por las comunas de Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay y Catemu;

12° distrito, constituido por las comunas de Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué;

13er. distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández e Isla de Pascua;

14° distrito, constituido por la comuna de Viña del Mar;

15° distrito, constituido por las comunas de San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca;

16° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura y Pudahuel;

17° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca y Huechuraba;

18° distrito, constituido por las comunas de Cerro Navia, Quinta Normal y Lo Prado;

19° distrito, constituido por las comunas de Recoleta e Independencia;

20° distrito, constituido por las comunas de Estación Central, Cerrillos y Maipú;

21er. distrito, constituido por las comunas de Providencia y Ñuñoa;

22° distrito, constituido por la comuna de Santiago;

23er. distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura y Lo Barnechea;

24° distrito, constituido por las comunas de La Reina y Peñalolén;

25° distrito, constituido por las comunas de Macul, San Joaquín y La Granja;

26° distrito, constituido por la comuna de La Florida;

27° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna y San Ramón;

28° distrito, constituido por las comunas de Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo;

29° distrito, constituido por las comunas de Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana;

30° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine y Calera de Tango;

31er. distrito, constituido por las comunas de Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué y San Pedro;

32° distrito, constituido por la comuna de Rancagua;

33er. distrito, constituido por las comunas de Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa;

34° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua y Las Cabras;

35° distrito, constituido por las comunas de Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones;

36° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén y Rauco;

37° distrito, constituido por la comuna de Talca;

38° distrito, constituido por las comunas de Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco y Río Claro;

39° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre y Yerbas Buenas;

40° distrito, constituido por las comunas de Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco;

41er. distrito, constituido por las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco y Yungay;

42° distrito, constituido por las comunas de San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ranquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel;

43er. distrito, constituido por la comuna de Talcahuano;

44° distrito, constituido por la comuna de Concepción;

45° distrito, constituido por las comunas de Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana;

46° distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo y Tirúa;

47° distrito, constituido por las comunas de Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja;

48° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco y Traiguén;

49° distrito, constituido por las comunas de Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino;

50° distrito, constituido por la comuna de Temuco;

51er. distrito, constituido por las comunas de Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Teodoro Schmidt, Freire y Pitrufquén;

52° distrito, constituido por las comunas de Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén;

53er. distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil y Corral;

54° distrito, constituido por las comunas de Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco;

55° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa y San Pablo;

56° distrito, constituido por las comunas de Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos;

57° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín y Calbuco;

58° distrito, constituido por las comunas de Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena;

59° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel;

60° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Navarino y La Antártica.

El texto aprobado en general por el Senado sustituye el artículo 179 transcrito, por otro que crea veintiocho distritos electorales. Su texto es el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos, que elegirá 3 diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte, que elegirá 3 diputados.

3er distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal, que elegirá 5 diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen, que elegirá 5 diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela, que elegirá 7 diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué, que elegirá 8 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca, que elegirá 8 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú, que elegirá 8 diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia, que elegirá 7 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín y La Granja, que elegirá 8 diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén, que elegirá 6 diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana, que elegirá 7 diputados.

13° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo, que elegirá 5 diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué, San Pedro y Padre Hurtado, que elegirá 6 diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa, que elegirá 5 diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones, que elegirá 4 diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael, que elegirá 7 diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco, que elegirá 4 diputados.

19° distrito, constituido por las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ránquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel, que elegirá 5 diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana, que elegirá 8 diputados.

21er distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja, que elegirá 5 diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino, que elegirá 4 diputados.

23er distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén, que elegirá 7 diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco, que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos, que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena, que elegirá 5 diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel, que elegirá 3 diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica, que elegirá 3 diputados.”.

En relación con este numeral se presentaron las indicaciones números 63, 64, 65, 66, 67, 68 y 69 del boletín.

Las indicaciones número 63, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y, número 64.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, proponen eliminar este número del artículo 1º.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazaron estas indicaciones. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Votaron a favor los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

La indicación número 65, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, remplaza este número por el siguiente:

“13) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er. distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos; que elegirá 2 diputados;

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Huara, Alto Hospicio, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte; que elegirá 2 diputados;

3º distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal; que elegirá 4 diputados;

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen; que elegirá 4 diputados;

5º distrito, constituido por las comuna de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela; que elegirá 6 diputados;

6º distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay y Catemu; que elegirá 4 diputados;

7º distrito, constituido por las comunas de Olmué, Limache, Villa Alemana Quilpué, Viña del Mar y Concón; que elegirá 4 diputados;

8º distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua; San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca; que elegirá 4 Diputados;

9º distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Conchalí, Huechuraba, Independencia y Recoleta; que elegirá 4 Diputados;

10º distrito, constituido por las comunas de Quinta Normal, Cerrillos, Estación Central, Cerro Navia y Santiago; que elegirá 4 diputados;

11º distrito, constituido por las comunas de San Ramón, San Miguel, San Joaquín, Macul, Ñuñoa y Providencia; que elegirá 4 diputados;

12º distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén; que elegirá 4 diputados;

13º distrito, constituido por las comunas de Pirque, Puente Alto, San José de Maipo y la Florida; que elegirá 4 diputados;

14º distrito, constituido por las comunas de La Pintana, El Bosque, La Cisterna, Pedro Aguirre Cerda, La Granja y Lo Espejo; que elegirá 4 diputados;

15º distrito constituido por la comuna de Buin, Calera de Tango, Paine, San Bernardo y Maipú; que elegirá 4 diputados;

16º distrito, constituido por las comunas de Melipilla, Alhué, Curacaví, María Pinto, San Pedro, Talagante, El Monte, Isla de Maipo, Padre Hurtado, Peñaflor, Pudahuel, Lo Prado y Renca; que elegirá 4 diputados;

17º distrito, constituido por la comuna de Rancagua; Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa; que elegirá 4 diputados;

18º distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones; que elegirá 4 diputados;

19º distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro, San Rafael; que elegirá 6 diputados;

20º distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco; que elegirá 4 diputados;

21º distrito, constituido por las comunas de Chillán, Chillán Viejo, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco Yungay, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ranquil, Quillón, Bulnes, Cabrero, Yumbel, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana; que elegirá 6 diputados;

22º distrito, constituido por la comuna de Talcahuano, Hualpén, Concepción, Chiguayante y San Pedro de la Paz; que elegirá 4 diputados;

23º distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa; Alto Biobío, Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja; que elegirá 4 diputados;

24º distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino; que elegirá 4 diputados;

25º distrito, constituido por la comuna de Padre Las Casas, Temuco, Carahue, Cholchol, Nueva Imperial, Saavedra, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén; que elegirá 6 diputados;

26º distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco; que elegirá 4 diputados;

27º distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo; Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos; elegirá 4 diputados;

28º distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco; Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena; que elegirá 4 diputados;

29º distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel; que elegirá 2 diputados;

30º distrito, constituido por las comunas de Natales, Cabo de Hornos, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Navarino y La Antártica; que elegirá 2 diputados.”.”.

Por las mismas razones que se tuvieron en cuenta para reprobar la indicación número 58, la Comisión, por mayoría de votos, rechazó la indicación número 65. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Votó a favor el Honorable Senador señor Larraín y se abstuvo el Honorable Senador señor Espina.

Luego la Comisión trató la indicación número 66, del Honorable Senador señor Espina, que reemplaza el número 13) por el siguiente:

“13) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er. distrito electoral, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos. Este distrito elegirá dos Diputados; 2° distrito electoral, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte. Este distrito elegirá dos Diputados;

3er. distrito electoral, constituido por las comunas de Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda, Taltal, Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe y San Pedro de Atacama. Este distrito electoral cuatro Diputados;

4° distrito electoral, constituido por las comunas de Copiapó, Chañaral, Diego de Almagro, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen. Este distrito electoral cuatro Diputados;

5° distrito electoral, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela. Este distrito electoral seis Diputados;

6° distrito electoral, constituido por las comunas de Quillota, La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay y Catemu. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

7° distrito electoral, constituido por las comunas de Viña del Mar, Concón, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué. Este distrito elegirá seis Diputados;

8º distrito electoral, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca. Este distrito elegirá cuatro Diputados; 9° distrito electoral, constituido por las comunas de Pudahuel, Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Cerro Navia, Quinta Normal y Lo Prado. Este distrito elegirá seis Diputados; 10° distrito electoral, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Recoleta, Independencia y Santiago. Este distrito elegirá seis Diputados; 11° distrito electoral, constituido por las comunas de Maipú, Estación Central y Cerrillos. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

12º distrito electoral, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, Providencia y Ñuñoa. Este distrito elegirá seis Diputados;

13er. distrito electoral, constituido por las comunas de Macul, San Joaquín, La Granja, La Florida, La Reina y Peñalolén. Este distrito elegirá seis Diputados; 14° distrito electoral, constituido por las comunas de San Miguel, Pedro Aguirre Cerda, Lo Espejo, El Bosque, La Cisterna y San Ramón. Este distrito elegirá seis Diputados; 15° distrito electoral, constituido por las comunas de Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana. Este distrito elegirá cuatro Diputados; 16° distrito electoral, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué, Padre Hurtado y San Pedro. Este distrito elegirá seis Diputados; 17° distrito electoral, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa. Este distrito elegirá cuatro Diputados; 18° distrito electoral, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones. Este distrito elegirá cuatro Diputados; 19° distrito electoral, constituido por las comunas de Talca, Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, San Rafael, Pelarco y Río Claro. Este distrito elegirá seis Diputados; 20° distrito electoral, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

21er. distrito electoral, constituido por las comunas de Chillán, Chillán Viejo, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ranquil, Quillón, Bulnes, Cabrero, Yumbel, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana. Este distrito elegirá seis Diputados;

22º distrito electoral, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, Chiguayante y San Pedro de la Paz. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

23er. distrito electoral, constituido por las comunas de Los Ángeles, Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Tucapel, Antuco, Quilleco, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo, Alto BíoBío y Laja. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

24° distrito electoral, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

25° distrito electoral, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Teodoro Schmidt, Freire, Cholchol, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén. Este distrito elegirá seis Diputados;

26° distrito electoral, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

27º distrito electoral, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

28º distrito electoral, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena. Este distrito elegirá cuatro Diputados;

29° distrito electoral, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel. Este distrito elegirá dos Diputados, y

30° distrito electoral, constituido por las comunas de Punta Arenas, Natales, Torres del Paine, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica. Este distrito elegirá dos Diputados.”.”.

Por las mismas razones que no se aprobó la indicación número 60, la Comisión, por mayoría de votos, rechazó esta indicación. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Votaron a favor los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

Seguidamente, se analizó la indicación número 67, del Honorable Senador señor Ossandón, que reemplaza el número 13) por el siguiente:

“13) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán determinados en un reglamento que al efecto dicte el Congreso Nacional en base a una propuesta técnica que haga el Consejo Directivo del Servicio Electoral.”.”.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, declaró inadmisible esta indicación, dado que esta norma contradice el texto constitucional, ya que dispone que mediante un reglamento se establecerán los distritos electorales, materia que corresponde al ámbito del legislador orgánico constitucional.

A continuación, la Comisión trató las indicaciones número 68 y 69, ambas del Honorable Senador señor Horvath.

La primera, elimina, en el 7° distrito establecido en la norma aprobada en general, la expresión “Isla de Pascua,”.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó la indicación número 68.

La segunda, agrega al final del artículo 179 que se propone, el siguiente texto:

“29º distrito, constituido por la comuna de Isla de Pascua, que elegirá un diputado.”.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, declaró inadmisible esta indicación pues ella contradice la idea matriz de esta iniciativa, cual es establecer un sistema electoral proporcional. La indicación número 69, al establecer que en el distrito 29 se elegirá un solo diputado, configura un sistema mayoritario y uninominal.

Finalmente, la Comisión, por la unanimidad de sus miembros presentes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina y Harboe, acordó agregar un inciso final del artículo 179 que dispone:

“El número de diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis”.

Para adoptar este acuerdo se tuvo presente lo que autoriza el inciso final del artículo 121 del Reglamento del Senado.

La norma aprobada se consigna como nuevo número 8) del artículo 1° del proyecto.

En una sesión posterior, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, hizo presente que la norma sobre conformación de los distritos deberá ser modificada cuando se apruebe la creación de nuevas regiones, por ejemplo, la futura región de Ñuble.

Indicó que en la actualidad hay algunas comunas de la provincia del Bío bío, como son Yumbel y Cabrero, que se encuentran asignadas al distrito de Ñuble.

Cuando se cree la región de Ñuble será necesario definir si ellas permanecerán en la provincia del Bío bío, para fines electorales, o se incorporarán a la nueva región.

Esta situación tiene que ser aclarada, pues lo que no puede ocurrir es que la futura circunscripción senatorial tenga carácter inter regional.

Número 14)

Mediante este numeral se agrega a la ley Nº 18.700 el siguiente artículo 179 bis, nuevo:

“Artículo 179 bis.- Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con el siguiente procedimiento:

a) Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consistirá en distribuir a prorrata los cargos entre los distritos electorales, de acuerdo a la fórmula dispuesta en el artículo 109 bis de esta ley.

b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 9 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al de la realización del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con aquel en que se celebran elecciones de diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.

d) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes.

Dentro de los cinco días siguientes a la publicación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral aplicó las letras a) y b) de este artículo.

Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de febrero del año de que se trate. En caso de producirse algún cambio en la distribución de diputados, el texto del artículo 179 de esta ley se entenderá modificado en lo pertinente, de pleno derecho y se aplicará en su forma así corregida en la elección inmediatamente siguiente.”.

En relación con este número del artículo 1º se presentaron las indicaciones números 70, 71, 72, 73, 74, 75, 76, 77, 78 y 79.

Las indicaciones número 70, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, número 71, del Honorable Senador señor Ossandón, y número 72, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, proponen eliminar este número.

Al iniciarse su estudio, la Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera manifestó que la facultad que se le otorga al Consejo Directivo del Servicio Electoral busca ajustar el número de parlamentarios que corresponden a cada distrito, a la población del mismo.

Agregó que el electorado está mal distribuido y los ciudadanos no han actualizado su domicilio.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe expresó sus dudas acerca de constitucionalidad acerca de la facultad que se le entrega a un órgano administrativo, como es el Consejo Directivo del Servicio Electoral, para determinar la distribución de los escaños parlamentarios entre distritos.

La Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera expuso que no tiene claro si la atribución que se le otorga al Consejo pueda adolecer de algún problema de constitucionalidad.

El Honorable Senador señor De Urresti estimó que la norma aprobada en general por el Senado no da certeza. Expresó que la representación y la proporcionalidad vienen dadas por un acuerdo político y no por el censo. Agregó que establecer variables desde el punto de vista demográfico, efectuado a través del Consejo, para la asignación de escaños, no solo es inconstitucional sino que no corresponde.

Enfatizó que el Parlamento debe decidir y determinar la proporcionalidad. Recalcó que no era partidario de que el Consejo pueda modificar los distritos.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón señaló que existen precedentes en esta materia. Explicó que ya se han aprobado normas de este tipo, como por ejemplo, las que dicen relación con la determinación del número de concejales que le corresponden a una comuna o consejeros regionales a una región.

Añadió que la norma en discusión no crea más escaños parlamentarios, sino que permitirá su redistribución dentro del marco que fija la ley Nº 18.700. Además, explicó, que para realizar esta labor se fija un criterio objetivo como es el de la población del distrito. Enfatizó que esta disposición era constitucional.

El Honorable Senador señor Larraín manifestó que esta norma es muy relevante. Aseveró que las asignaciones de escaños de diputados que establece la norma permanente se ajustará posteriormente con el ejercicio de la atribución que se le confiere al Consejo Directivo del Servicio Electoral. Ese organismo, aclaró, va a definir la forma en que se van a redistribuir los 155 Diputados que establece esta iniciativa, todo ello de acuerdo a las variaciones de la población.

Precisó que solo en ese momento se podrán corregir las desigualdades que establece la norma permanente.

Luego, destacó que no está de acuerdo en el criterio poblacional para hacer tal asignación. Enfatizó que la población constituye un antecedente variable, e indeterminado. Por otro lado, aseveró que los electores constituyen un dato fijo y fácilmente determinable.

El Honorable Senador señor Araya consignó que la norma le merece dudas. Recalcó que la cantidad de escaños asignados por distrito electoral debieran estar determinados por ley, ya que hay una serie de factores que afectan la representatividad de los ciudadanos, como lo es el de la población flotante. Añadió que es reticente a la idea de entregar al Consejo Directivo la distribución de los escaños.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón sostuvo que la ley que sirve de base a la norma en comento es el artículo 29 de la ley Nº 19.175, Orgánica Constitucional sobre Gobierno y Administración Regional.

En dicha disposición se estableció un procedimiento similar al que se prevé en el artículo 179 bis de esta iniciativa.

El Honorable Senador señor De Urresti subrayó que desde el punto de vista político, la norma aprobada en general por el Senado tenderá a concentrar el redistritaje en las grandes unidades electorales.

El Honorable Senador señor Larraín manifestó que el artículo 179 bis no es inconstitucional, porque el artículo 47 de la Constitución Política de la República de Chile dispone que la Cámara de Diputados está integrada por miembros elegidos en votación directa por distritos electorales. La ley orgánica constitucional respectiva determinará el número de diputados, los distritos electorales y la forma de elección.

En otras palabras, la disposición constitucional citada le entrega a la ley orgánica constitucional la determinación del número de diputados; la fijación de los distritos electorales y su forma de elección. En todo caso, reiteró que el procedimiento tendrá más certidumbre si se hace tomando como base a los electores y no a la población.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón coincidió con el Honorable Senador señor Larraín respecto a que no estamos en presencia de un problema de constitucionalidad. Precisó que el artículo 179 bis consagra, con toda claridad, los criterios para realizar la redistribución de parlamentarios y un sistema de reclamación para evitar abusos o errores.

Añadió que la Constitución de 1925 contemplaba la obligación de los legisladores de actualizar cada diez años el número de escaños. Dicha carga nunca se hizo efectiva, porque eran los incumbentes quienes tenían que cumplir con ella.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe hizo presente que puede ocurrir que una región aumente su población drásticamente. Lo anterior, precisó, llevaría a que dicha región incremente su número de diputados.

El Honorable Senador señor De Urresti reiteró que no está de acuerdo que el Consejo Directivo del Servicio Electoral establezca un redistritaje. Lo anterior significa castigar a un territorio artificialmente. Ello podría beneficiar a la tendencia centralista que caracteriza al país.

El asesor del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo González, precisó que la norma en discusión solo es aplicable en la Cámara de Diputados, porque en ella se representa a la población. Agregó que esta disposición busca que en el transcurso del tiempo se mantenga actualizado el principio de representación de la población. Insistió que el artículo 179 bis fija un mecanismo objetivo para efectuar la redistribución de los escaños parlamentarios.

En todo caso, destacó que tiene que producirse un desplazamiento demográfico muy importante para que se aplique la norma en estudio.

Finalmente, agregó que la letra b) del artículo 179 bis, fija un mínimo y un máximo de diputados por distritos, lo que impide que se produzcan graves desproporciones entre los centros o ciudades más pobladas y aquellas con menor población.

El Honorable Senador señor De Urresti reiteró que es el Parlamento el órgano que debe decidir cómo se distribuyen los escaños parlamentarios. Se preguntó con qué autoridad se le va restar un Diputado a una región que corresponde a una de las zonas del país más carenciadas, con el único objetivo de beneficiar a los mega distritos de la Región Metropolitana. Anunció su voto en contra respecto a esta disposición.

El Honorable Senador señor Espina manifestó que si se producen alteraciones en la proporcionalidad corresponde que una institución realice los ajustes necesarios. Situación distinta ocurre en el Senado, donde la representación es territorial.

Por lo mismo, expresó su conformidad con la norma en discusión, y consideró que es de toda lógica que el Consejo Directivo asuma dicha función.

En todo caso, estimó que el criterio a utilizar para realizar los cambios en el número de diputados que se asignan a un determinado distrito, debe ser el del electorado y no el de la población.

Seguidamente, el asesor del Honorable Senador señor Espina, señor Cristián Pertuzé, recordó que en la asignación de escaños para concejales se utiliza el criterio de los electores. Añadió que en la legislación comparada de sistemas electorales y democráticos consolidados dicha asignación siempre sigue el criterio de los electores y esto obedece al principio de la igualdad del voto. Precisó que si aplicamos el criterio de la población, puede producirse la situación de que una gran parte de ésta no sean electores.

Finalmente, expresó que el censo corresponde a una variable que no es necesariamente controlable. Sí lo es el padrón electoral.

El Honorable Senador señor Larraín indicó que en la discusión sobre el criterio a utilizar, hay mejores razones para seguir el principio de los electores.

Luego, recordó que en la configuración de la estructura de la Cámara de Diputados y del Senado se utilizan criterios distintos. La Cámara representa a los habitantes del país. Añadió que el artículo 49 de nuestra Carta Fundamental señala que el Senado se compone de miembros elegidos en votación directa por circunscripciones senatoriales, en consideración a las regiones del país.

Adujo que el riesgo que plantea el Honorable Senador señor De Urresti, no es tal, porque hay una cantidad de distritos que queda fijo y una franja que tiene un límite determinado por ley. Ni menos de 3 ni más de 9 diputados por distrito.

Señaló que junto al Honorable Senador señor Espina presentaron una indicación para que el límite de Diputados por distrito no exceda de seis.

Finalmente, puntualizó que está de acuerdo en entregarle al Consejo Directivo la función que se le confiere, porque de lo contrario se rigidiza la actual propuesta de estructura de la Cámara de Diputados.

Concluido el análisis de estas indicaciones, el Presidente de la Comisión las sometió a votación.

En una primera votación, se pronunciaron a favor de la aprobación de las indicaciones números 70, 71 y 72 los Honorables Senadores señores Araya y de Urresti. Votó en contra el Honorable Senador señor Espina. Se abstuvieron los Honorables Senadores señores Harboe y Larraín.

De conformidad con ese resultado, se hizo presente que era indispensable repetir la votación de conformidad a lo preceptuado por el artículo 178 del Reglamento de la Corporación.

El Honorable Senador señor Larraín aseveró que si se aprueban estas indicaciones no habrá norma permanente y solo existirá una norma transitoria. Lo anterior significa dejar a una disposición sin contenido.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe consignó que la asignación de escaños está consagrada en una norma de carácter permanente, y añadió que si se aprueban las indicaciones, solo se elimina la facultad que se le otorga al Consejo Directivo del Servicio Electoral para actualizar la asignación de los escaños de diputados.

Repetida la votación de las indicaciones números 70, 71 y 72, fueron rechazadas con los votos en contra de los Honorables Senadores señores Espina, Harboe y Larraín. Votaron por su aprobación los Honorables Senadores señores Araya y De Urresti.

La indicación número 73, del Honorable Senador señor Espina, sustituye en el inciso primero del artículo 179 bis propuesto, el guarismo “155”, las dos veces que aparece, por “134”.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó esta indicación. Votaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

La indicación número 74, del Honorable Senador señor Horvath, reemplaza, en el referido inciso primero, los guarismos “155” y “28” por “156” y “29”, respectivamente, todas las veces que aparece.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, declaró inadmisible esta indicación pues lo propuesto en ella corresponde a una materia de la iniciativa exclusiva de S.E. el Presidente de la Republica, toda vez que implica un mayor gasto público.

Seguidamente, la Comisión trató la indicación número 75, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, que reemplaza en el inciso primero del artículo 179 bis propuesto la frase “en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas”, por “en consideración a los electores de cada uno de ellos, en base a el padrón electoral definitivo elaborado por el Servicio Electoral y utilizado en la última elección de carácter nacional”.

Al iniciarse su análisis, el Honorable Senador señor Espina reiteró que utilizar el criterio de la población para fijar el número de diputados que le corresponden a un distrito es muy relativo, no así el de los electores que constituye un parámetro objetivo.

El señor Presidente de la Comisión manifestó que ya se habían planteado precedentemente los argumentos relativos a este punto, por lo que puso en votación esta indicación.

En una primera votación, se pronunciaron por su aprobación los Honorables Senadores señores Espina y Larraín. En contra lo hicieron los Honorables Senadores señores Araya y Harboe. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

De conformidad a lo dispuesto por el artículo 178 del Reglamento del Senado, se procedió a repetir la votación.

En la segunda votación, se pronunciaron en contra de la indicación número 75, los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Votaron por su aprobación los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

Luego, la Comisión examinó la indicación número 76, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, que sustituye la letra b) del artículo 179 bis propuesto, por la siguiente:

“b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 2 ni más de 6 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos queden por debajo o superen dichos límites, se les asignará el límite inferior o superior que corresponda, repitiéndose, al efecto, el proceso de asignación de escaños, señalado en la letra a) anterior, considerando para ello sólo al resto de los distritos y los escaños que queden por asignar.”.

Al iniciarse su estudio, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, explicó que la norma aprobada en general garantiza que el ejercicio de la facultad que se otorga al Consejo Directivo del Servicio Electoral se ajustará a unos parámetros de carácter acotado, esto es que ningún distrito podrá elegir menos de tres ni más de nueve diputados.

Seguidamente, puso en votación esta indicación.

En una primera votación, se pronunciaron por su aprobación los Honorables Senadores señores Espina y Larraín. En contra lo hicieron los Honorables Senadores señores Araya y Harboe. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

De conformidad a lo establecido en el artículo 178 del Reglamento del Senado, se procedió a repetir la votación.

En segunda votación, la Comisión, por mayoría de votos, rechazó la indicación número 75. Votaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

Luego, el Honorable Senador señor De Urresti preguntó si el Ejecutivo estaba dispuesto a alterar el rango de diputados que se podrían elegir por distrito, según prescribe la letra b) del nuevo artículo 179 bis. Al respecto, planteó que debía disminuirse de “9” a “8” el número máximo de diputados que se pueden elegir.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, manifestó que para analizar esta propuesta que se formula como indicación, se requiere de la unanimidad de los miembros presentes de la Comisión, según lo prescribe el inciso final del artículo 121 del Reglamento del Senado.

En virtud de lo anterior, puso en votación la idea de someter a discusión la nueva indicación formulada por el Honorable Senador señor De Urresti, para modificar la letra b) del artículo 179 bis.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, aceptó someter a votación la nueva indicación del Honorable Senador señor de Urresti.

Seguidamente, el Presidente de la Comisión puso en votación la referida indicación, cuyo objetivo es sustituir el guarismo “9” por “8” en la letra b) del artículo 179 bis.

La Comisión, por mayoría de votos, aprobó esta enmienda. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Votaron en contra los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

A continuación, la indicación número 77, del Honorable Senador señor Horvath, agrega en la mencionada letra b), la siguiente oración final: “Tratándose del distrito 29º de Isla de Pascua, este distrito no podrá elegir menos de 1 diputado.”.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, declaró inadmisible esta indicación ya que ella contradice la idea de establecer un sistema de elección de los diputados de carácter proporcional. Esta indicación se vincula, además, con las de los numeroso 55 y 74 que previamente fueron declaradas inadmisibles por establecer que la Isla de Pascua constituirá un distrito de carácter uninominal y mayoritario.

Por su parte, la indicación número 78, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, reemplaza la letra c) del artículo 179 bis, por la siguiente:

“c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de marzo del año que corresponda la actualización.”.

Al iniciarse el estudio de esta indicación, la Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera, consignó que la constitución del Consejo Directivo del Servicio Electoral debiese producirse en el mes de marzo del año que corresponde al de la actualización de los distritos.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón sostuvo que la indicación en discusión es inadmisible porque afecta facultades del Poder Ejecutivo.

El Honorable Senador señor Larraín precisó que no es inadmisible porque no está alterando la facultad sino que solo la referencia al mes en que debe constituirse el Consejo Directivo.

El señor Presidente de la Comisión estimó que esta indicación era admisible y la sometió a votación.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó la indicación número 78. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Votaron por su aprobación los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

Finalmente, se analizó la indicación número 79, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, sustituye el inciso cuarto del artículo 179 bis propuesto, por el siguiente:

“En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de abril del año de que se trate. En caso de producirse algún cambio en la distribución de diputados, el texto del artículo 179 de esta ley se entenderá modificado en lo pertinente, de pleno derecho y se aplicará en su forma así corregida en la elección inmediatamente siguiente.”.

Al iniciarse el estudio de esta indicación, el asesor del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo González manifestó que la fecha de la reasignación depende del censo. Añadió que la fecha del mes de febrero se establece con el solo objeto de que los partidos tengan la suficiente información antes de presentar sus candidaturas.

Preguntada por el señor Presidente de la Comisión, la Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera, señaló que no tenía observaciones a lo que establece el texto aprobado en general por el Senado.

Seguidamente, los Honorables Senadores señores Espina y Larraín retiraron la indicación número 79.

Finalmente, la Comisión, por la unanimidad de sus miembros presentes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina y Harboe, acordó suprimir la última oración del inciso final del artículo 179 bis, al estimar que no corresponde que como consecuencia de una resolución administrativa se modifique una norma de una ley orgánica constitucional.

Al concluir el estudio de las normas referidas a la composición e integración de la Cámara de Diputados, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, ofreció el uso de la palabra a los integrantes de la Comisión para que expresaran las razones y argumentos que los habían llevado a apoyar o rechazar dichas disposiciones.

En primer lugar, intervino el Honorable Senador señor Larraín consideró necesario dejar constancia de su disconformidad respecto a la votación que se ha producido.

Agregó que no cabe la menor duda de que el sistema binominal ha contribuido a dar estabilidad política al país y que ha consolidado dos bloques políticos mayoritarios. Asimismo, que este sistema ha tenido limitaciones, lo que ha obligado a su revisión. Detalló que la falta de representatividad en algunos lugares y de competitividad en otros, hace que el sistema binominal pierda su efectividad y genere una cierta distancia con los electores.

Consignó que la voluntad de cambiar este sistema tiene que ver con la idea de buscar un nuevo modelo que corrija esas dificultades y que genere los objetivos que normalmente se le adjudican a los sistemas electorales, a saber, que representen debidamente a la ciudadanía, que permitan un funcionamiento razonable de las instituciones, que faciliten la gobernabilidad, que fortalezcan los órganos democráticas, de manera que la ciudadanía sienta que mediante el voto pueda expresar sus preferencias en forma debida.

Añadió que el sistema que ha aprobado la Cámara de Diputados se aleja en muchos aspectos de los objetivos antes mencionados. Explicó que es comprensible tratar de implementar un sistema proporcional, pero teniendo siempre en cuenta que no existen sistemas perfectos, ya que éstos son simples instrumentos técnicos para alcanzar determinados objetivos.

Enfatizó que el planteamiento que ha hecho el Poder Ejecutivo, particularmente en lo que dice relación con la composición de la Cámara de Diputados, es particularmente errado, porque rompe con uno de los aspectos centrales que debe tener el ordenamiento democrático y que persigue garantizar la debida representatividad de la población en el Parlamento.

Consignó que en contraposición a lo que sucede con la Cámara Baja, la composición del Senado apunta a reflejar la estructura regional del país. Solo en este último caso, arguyó, se puede defender como legítimo algún grado de diferenciación del voto, dada la estructura de representación que se le asigna Senado. Lo que se busca en este caso, continuó, es privilegiar la división política administrativa del país y así otorgar a todas las regiones una cierta presencia equivalente en esta Corporación.

Recalcó que no encuentra justificada la composición y distribución de escaños que se han definido para la Cámara de Diputados. Recordó que nuestro orden constitucional ha establecido que el sufragio en las votaciones populares tiene como característica el ser personal, igualitario, secreto y voluntario. Lo anterior, supone que el legislador, cuando establece un sistema electoral, tiene como límite el respetar el principio de la igualdad del voto. Lo anterior, explicó, significa que el número de los votos necesarios para elegir a un representante debe ser similar.

Explicó que el principio antes mencionado es recogido en el Mensaje que da origen al proyecto de ley en estudio. Agregó que la diferencia del valor del voto en Chile, según el lugar donde se emite, es demasiado alta y obstaculiza la igualdad del mismo. Precisó que no se puede emprender una reforma sin reducir significativamente esta desigualdad. Reiteró que el ordenamiento constitucional establece la igualdad del voto.

Hizo presente que el Tribunal Constitucional ha planteado que se pueden hacer, en materia de igualdad jurídica, algún tipo de diferencias, pero en lo fundamental, ellas no podrán ser arbitrarias, ni indebidas, por lo que deben fundamentarse en presupuestos razonables y objetivos y su finalidad como sus consecuencias deben ser adecuadas, necesarias, y proporcionadas. Lo que la Constitución prohíbe no es hacer diferencias, sino hacer diferencias arbitrarias. No se prohíbe dar trato igual a situaciones diferentes sino hacerlo arbitrariamente, esto es, sin un fin lícito que lo justifique. Lo prohibido es hacerlo sin una razonable justificación.

Destacó que al analizar el proyecto de ley, en lo que respecta a la fórmula de composición de la Cámara de Diputados, que es la que ha aprobado la mayoría de la Comisión, se observan desigualdades arbitrarias, que no corresponden bajo ningún concepto a una diferenciación que se pudiera justificar, por lo tanto debieran ser corregidas.

Advirtió que ello es lo que ha planteado reiteradamente en la Comisión. Subrayó que el aumento de parlamentarios que se propone es excesivo, pero en todo caso, así y todo lo que se ha hecho, es instalar un sistema que tiene en la asignación de nuevos Diputados, inconsistencias graves y arbitrarias.

Para demostrar lo anterior, presentó el siguiente cuadro:

Manifestó que en 10 distritos se produce el problema planteado. Detalló que en el nuevo distrito 2, en la primera región, que cuenta con 222.024 electores, elige 3 Diputados, mientras que en el nuevo distrito 4, con 221.000 electores elige 5 Diputados. Lo anterior es sinónimo de una violenta alteración de la igualdad del voto y no existe una justificación razonable, sino que obedece a una razón política.

Añadió que hay 4 distritos que eligen 4 Diputados y que tienen una cantidad de electores que fluctúa aproximadamente entre los 270.000 y los 300.000. Ellos son los nuevos distritos 16, 18, 22 y 25, que eligen 4 Diputados, mientras que el nuevo distrito 4, con menos electores, elige 5 Diputados. Finalmente, expresó que hay distritos que eligen 5 Diputados, como es el caso del distrito 13, con 585.000 electores, versus los distritos 5, 17 y 23 que con menos población, eligen 7 Diputados.

Subrayó que del análisis hecho se desprende lo que se ha querido manifestar. Advirtió que se está diseñando un sistema electoral a la medida de los intereses políticos de la mayoría gobernante. Lo anterior es particularmente injusto, porque uno de los cuestionamientos que se le ha hecho al sistema binominal es que favorece a un sector político determinado, y se ha demostrado que eso no es efectivo.

Por lo anterior, formuló expresa reserva de constitucionalidad respecto de las normas que configuran la composición de la Cámara de Diputados.

Manifestó su rechazo a lo propuesto por el proyecto y reiteró su disposición para establecer un sistema electoral que sea justo para todos. Señaló que existe la voluntad para lograr un modelo que garantice el principio de la igualdad del voto y que permita que los ciudadanos, de cualquier lugar, sientan que tienen el mismo peso político y no injustas ni arbitrarias diferencias.

Concluyó señalando que por las consideraciones expuestas rechaza el proyecto de ley en discusión y reiteró la mejor voluntad para poder abrir el espacio político necesario que permita tener un sistema electoral que perdure en el tiempo.

El Honorable Senador señor Espina adhirió a lo señalado por el Honorable Senador señor Larraín. Agregó que los argumentos entregados previamente constituyen un análisis objetivo respecto de las deficiencias que tiene la propuesta del Gobierno.

Constató que los sistemas electorales son mayoritarios o proporcionales. Recalcó que el efecto que se produce con los sistemas mayoritarios es formar amplias coaliciones y eso genera estabilidad. Por otro lado, sostuvo, que la dificultad que éste puede generar es que las minorías, que no se incorporan a los bloques mayoritarios, queden al margen del Parlamento.

Expresó que los sistemas proporcionales tienen como fortaleza que las mayorías significativas pueden incorporarse al Parlamento. La dificultad de los mismos consiste en la proliferación de partidos políticos que pueden ocasionar inestabilidad política.

Agregó que el sistema binominal no es contrario a los principios de la democracia. Consignó que cuando uno analiza los resultados electorales que se han producido desde el año 1989 a la fecha, se observa que el sistema imperante no ha provocado una distorsión significativa respecto a los porcentajes de votos que han obtenido las coaliciones más importantes.

Para demostrar lo anterior, presentó el siguiente cuadro:

Destacó que los defectos que se le han atribuido al sistema binominal no son efectivos. Recalcó que son otras las razones por las cuales este sistema tiene que ser modificado.

Añadió que en el sistema mayoritario puro se puede dar la situación de que vayan 4 candidatos, y uno de ellos obteniendo el 25,1% de los votos se lleve el 100% de los escaños.

Consignó que el sistema electoral binominal ha sido un factor de estabilidad en Chile.

Luego, manifestó que era partidario de cambiar el sistema binominal porque los países tienen ciclos y las grandes coaliciones ya están instaladas. Expuso que la dificultad actual consiste en que los grupos minoritarios o emergentes, se están quedando al margen del Congreso Nacional.

Debido a lo expuesto, señaló que participó en la elaboración de una propuesta de reforma al sistema electoral que obedeció a un acuerdo político inicial entre Renovación Nacional y la Democracia Cristiana. Dicho acuerdo fue trabajado por los equipos técnicos de ambas colectividades, durante varios meses, y a éste, se incorporaron las bancadas de la Concertación.

Añadió que el proyecto de ley, fruto de dicho acuerdo, fue ingresado al Congreso Nacional el día 12 de marzo de 2014. Dicha iniciativa proponía lo siguiente:

a) La Cámara de Diputados pasará de estar conformada por 120 miembros, a tener una integración de 134.

b) Estos ya no serían electos en 60 distritos de magnitud electoral “dos”, sino que se estructuraría en 30 distritos, de magnitud electoral variable, en los se elegirían dos, cuatro y seis diputados (dependiendo de la cantidad de electores en cada distrito).

c) El Senado, a la vez, quedaría conformado por 44 senadores, lo que implica sumar seis senadores a los actuales 38.

d) Esta rama del Congreso se dividiría en 16 territorios, constituyendo cada región una sola circunscripción, salvo la Región Metropolitana de Santiago, que sería dividida en dos, debido a su gran población, para otorgar una mayor proporcionalidad al voto.

e) Las circunscripciones correspondientes a las regiones V de Valparaíso, VII del Maule, VIII del Biobío y IX de la Araucanía, elegirán cuatro senadores cada una. El resto de las circunscripciones senatoriales debería elegir dos senadores.

f) La fórmula elegida, en todo los casos previstos, es la de un sistema proporcional bajo la fórmula de la cifra repartidora, en su variante D’Hont.

De esta manera, sostuvo, se logra aumentar considerablemente la proporcionalidad del voto, especialmente en la Cámara de Diputados, como lo muestra el cuadro siguiente:

Manifestó que la propuesta fue desechada sin explicaciones, con el solo argumento de que los tiempos políticos han cambiado.

Añadió que con el proyecto antes mencionado se ponía fin al sistema binominal, y se daba paso a un sistema proporcional, que tenía el valor de establecer un aumento prudente en el número de parlamentarios.

Constató que la iniciativa aprobada por la Comisión, será ampliamente repudiada por la ciudadanía. Sostuvo que actualmente la actividad política sufre, por distintas causas, un gran desprestigio. Enfatizó que lo anterior se agudizará al elevar el número de diputados de 120 a 155.

Insistió que con estos cambios la credibilidad del sistema político se verá gravemente afectada. Además, recalcó que el alza en el número de parlamentarios es imposible que se realice sin que signifique gasto para el Estado.

Hizo presente que el monto que se percibe en materia de asignaciones es el adecuado para desarrollar la actividad parlamentaria y que, por tanto, no se puede reducir para financiar el incremento de parlamentarios.

Aseveró que el proyecto no vela por el principio de la igualdad del voto, porque hay distorsiones claras y evidentes en ciertas regiones que ya fueron mencionadas por el Honorable Senador señor Larraín y que buscan satisfacer las aspiraciones de algunos partidos políticos que conforman la Nueva Mayoría.

Detalló que hay distritos que tienen menos población y mayor número de diputados, y otros que tienen más población y eligen un número menor.

Finalizó agradeciendo a los miembros de la Comisión por intentar llegar a un acuerdo y responsabilizó directamente al Gobierno del fracaso del mismo. Agregó que éste, está imponiendo un sistema que le hará daño a la política y al propio Ejecutivo.

Reiteró que el sistema electoral que se está creando en virtud del presente proyecto es deficiente, fue construido por una mayoría transitoria. Detalló que éste rompe el principio de la igualdad del voto y eleva innecesariamente el número de parlamentarios y disminuye los requisitos para constituir partidos políticos, lo que implicará su proliferación, sin una representación adecuada de la ciudadanía, lo que se traducirá en una mayor inestabilidad de nuestro sistema político.

Luego, intervino el Honorable Senador señor Araya quien compartió lo expresado por los Senadores que le antecedieron en el uso de la palabra, en el sentido de que no existe un sistema electoral perfecto.

Precisó que a lo largo de la historia, se han impuesto sistemas proporcionales con distintas variantes.

Expresó que en el sistema binominal se han producido graves distorsiones en relación con la igualdad del voto. Enfatizó que sin el sistema binominal, la transición que se inició el año 90’ hubiese sido aún más compleja. Dicho sistema cumplió un ciclo, ya no es representativo de la diversidad de la sociedad chilena, y desincentiva la participación ciudadana.

Añadió que el proyecto de ley en estudio busca dar cuenta de la sociedad actual y de su diversidad. Argumentó que es necesario que las nuevas fuerzas obtengan sus espacios a través de la conformación de partidos regionales y que éstos tengan presencia en el Congreso. Lo anterior, arguyó, no puede ser sinónimo de inestabilidad política, sino que representa un desafío para futuros Gobiernos al momento de formar alianzas estratégicas que le permitan llevar a cabo su programa.

Reseñó que esta iniciativa se construyó a partir de los criterios electorales que entrega el sistema binominal, lo que explica en parte su configuración.

Agregó que este proyecto refleja como debiera estar compuesta la próxima Cámara de Diputados, en orden a mantener las actuales representaciones, con las correcciones efectuadas.

Hizo presente que en el programa de gobierno se señaló que se llevaría adelante una reforma al sistema binominal. Subrayó que los parlamentarios, que hoy día son oposición, estaban en conocimiento de aquello.

Recalcó que estamos en presencia de una reforma necesaria, ya que parte importante de la crisis que vive el sistema político, está dado por el sistema electoral.

Se mostró partidario de un sistema que perdure en el tiempo para que haya estabilidad política. Aseveró que la composición de la Cámara de Diputados recoge una construcción electoral que es adecuada. En relación al Senado, valoró la indicación del Ejecutivo de rebajar el número de Senadores en la Región Metropolitana.

Llamó a los Senadores de la Alianza a sumarse al presente acuerdo, para poder alcanzar un sistema electoral que le de representatividad al sistema chileno. Hizo presente que el número de parlamentarios propuestos por esta reforma no supera al que existía el año 1973, cuando nuestro país tenía mucho menos población. Por esta razón, afirmó que no le parecía desproporcionado el aumento de parlamentarios que propone esta iniciativa.

El Honorable Senador señor De Urresti consignó que cuando un sector del Parlamento niega permanentemente una realidad, se opone persistentemente a un cambio y, por otro lado, hay un Gobierno que cumple un programa, se producen este tipo de situaciones. Lamentó que no se haya logrado acuerdo más amplio para cambiar nuestro sistema electoral.

Expuso que la Alianza nunca pensó que se modificaría el sistema electoral vigente.

Constató que el proyecto de ley en discusión no es perfecto, pero que tiene el mérito en haber diseñado una fórmula que, mediante la fusión de distritos, evita crear nuevas unidades territoriales.

Valoró que esta iniciativa no genere una representación elevada a la Región Metropolitana en la integración del Senado. Reconoció la voluntad del Gobierno para que, dos Senadores que originalmente se asignaban a dicha Región se distribuyan en las dos regiones más grandes, de las consideradas pequeñas, como son las de Antofagasta y De los Ríos.

Expresó que como consecuencia del binominal, ambas coaliciones han estado en un eterno empate, a pesar de que en todas las elecciones, tanto la Concertación, como posteriormente la Nueva Mayoría han superado en votos a la Alianza.

Remarcó que tener en el Senado a nueve Senadores designados fue indigno para una sociedad democrática.

Hizo presente que con el proyecto de ley en discusión se aspira a tener un Senado de 50 Senadores, que representen a las distintas regiones del país.

Precisó que no era partidario de un sistema electoral que beneficie a un sector determinado. Explicó que el mismo debe ser lo más representativo de la realidad nacional. Enfatizó que el presente proyecto avanza en dicha perspectiva.

Se mostró disconforme con la disminución en el umbral para la constitución de partidos políticos.

Concluyó señalando que hubiese querido alcanzar un gran acuerdo nacional con todos los partidos políticos con representación parlamentaria, con el fin de construir un sistema electoral que tienda a perdurar en el tiempo.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe señaló que había llegado el momento de dar por finalizada la discusión relativa a la composición de la Cámara de Diputados. Enfatizó que la argumentación que se ha escuchado tiene que ver con las legítimas diferencias que existen respecto del sistema electoral vigente y no solo con la estructura de la Cámara de Diputados.

Agregó que el sistema binominal imperante generó durante todos sus años de vigencia una alteración de las mayorías soberanas, con una escasa representación de las minorías y una sobre representación de las mayorías.

Expuso que más allá del binominal, lo más anti democrático del sistema no tenía que ver con que éste fuese una derivación del sistema proporcional, sino que tenía un componente que impedía que aquellos candidatos que obtenían las terceras preferencias pudiesen llegar al Parlamento en contra de aquellos a los cuales los ciudadanos le habían otorgado la segunda preferencia. Lo anterior constituye una alteración violenta de la voluntad soberana.

Consignó que el sistema binominal ha permitido que personas que no tenían el respaldo mayoritario de los ciudadanos accedieran al Parlamento. Explicó que la voz de las minorías debe ser respetada y otorgársele la representación que corresponde a su peso electoral dentro de la población.

Hizo presente que el sistema de democracia representativa requiere que su Parlamento sea un reflejo de la opinión de la sociedad y ello no se ha producido con el sistema binominal, ni con las variantes del mismo que ha presentado la oposición. Añadió que las implicancias de esta situación han sido que este sistema electoral y la determinación de sus elegidos, sumados a las normas de quórum establecidas en nuestra Carta Fundamental, ha implicado que en el Congreso Nacional se hayan creado, por más de veinte años, empates artificiales. Dicha situación ha impedido hacer las transformaciones que la sociedad ha estado demandando. Lo anterior, afirmó, ha incrementado la distancia entre el sistema político y los ciudadanos.

Remarcó que en los últimos veinticinco años, nuestra sociedad ha ido evolucionando en niveles de educación, de conciencia de derechos, en madurez democrática, en fortalecimiento de las instituciones y como consecuencia de ello, viene reclamando por transformaciones sociales. Sostuvo que el Parlamento ha sido incapaz, producto del ya mencionado empate, de materializar dichas demandas.

Hizo presente que actualmente el Congreso Nacional es observado no solo como un lugar donde no se realizan cambios profundos, sino también como un escenario donde existe una realidad paralela, que no se hace cargo de la demanda ciudadana. Lo anterior, sostuvo, no tiene que ver con los anhelos legítimos y las aspiraciones de cada uno de sus integrantes, sino que es responsabilidad del actual engranaje constitucional electoral y de los quórums consagrados por dicho cuerpo normativo.

Expuso que resulta de toda lógica que el sistema vigente sea reemplazado, aunque sea con veinte años de retraso. Agregó que la modificación que debe hacerse, tiene profundas limitaciones, y una de ellas, quizás la más delicada, consiste en que un Parlamento legisle sobre cómo se va construir un futuro Congreso.

Expresó que se hace muy difícil para el colegislador, en este caso para el Gobierno, presentar un proyecto con un Parlamento de incumbentes, donde cada vez que se plantea la posibilidad de modificar las reglas de las elecciones se tienen dos columnas, a saber, la de lo perfecto técnicamente y la de lo viable políticamente, y en dicho cruce de viabilidad con perfección se genera la imposibilidad de avanzar.

Consignó que en materia de composición de la Cámara de Diputados es importante señalar que si bien se busca terminar con el sistema binominal, lo fundamental viene dado por la fórmula de decisión de quiénes serán los elegidos. Con la regla aprobada no va ocurrir que solo existan dos grandes coaliciones, sino que se generará la posibilidad de que aquellos candidatos independientes o que pertenecen a partidos políticos menores, o a movimientos, puedan participar. Agregó que resulta fundamental que en la modificación del sistema binominal, el elector pueda elegir entre más de dos coaliciones.

Para resolver lo anterior, se puede instaurar un sistema uninominal, que representa de manera perfecta, desde el punto de vista mayoritario, a quien obtiene más escaños, pero deja fuera del sistema a las minorías, o se consagra un sistema plurinominal, en que se busca el equilibrio entre las mayorías y las minorías.

Resaltó que tampoco resulta justo que la cúpula partidista tome la decisión respecto de quién será el candidato, circunscribiendo el poder ciudadano a la elección de aquél que el consejo del partido determinó.

Consignó que se ha dado una discusión respecto a la disminución del umbral para la conformación del partido político. Manifestó que no era partidario de bajarlo, porque lo anterior va aportar al proceso de desintegración de los mismos. Subrayó que la descomposición de ellos no será resultado del proyecto de ley en discusión, ya que ella está en curso.

Expresó que el sistema de partidos existente responde a la lógica del año 1988 y no a la evolución política, social, cultural e ideológica de la sociedad del año 2014.

Hizo presente que las coaliciones tienen actualmente su sustento en el sistema electoral binominal. Basta ver las profundas diferencias que existen en los dos conglomerados.

Remarcó que si queremos que la sociedad se sienta representada por su Parlamento y éste recupere su rol histórico, deben abrirse las puertas para que ingresen aquellos que, aun pensando de manera diversa, representan la diversidad social y política de nuestro país.

Agregó que en tal sentido, el proyecto contempla 155 escaños para diputados, los que se asignan, según su población, de 3 a 8 representantes por distrito.

Hizo referencia a un informe electoral de la Biblioteca del Congreso Nacional donde se consigna que en la actualidad hay un distrito que tiene 40.000 habitantes y elige dos Diputados. Por otro lado, hay otro distrito que también elige dos Diputados y su población asciende a los 240.000 habitantes.

Advirtió que el sistema electoral binominal vulnera flagrantemente el principio de igualdad del voto. Reconoció que el proyecto de ley en discusión no es perfecto, pero claramente no aumenta la desigualdad del voto.

Asimismo, se remitió a un informe del Instituto Libertad (número 47) que reconoce que esta iniciativa mejora la igualdad del voto en comparación con el sistema electoral vigente.

Enfatizó que será tarea del Gobierno mejorar sustancialmente este proyecto de ley. Sostuvo que probablemente el número de escaños pudo ser menor y mejor distribuido, pero señaló que comprendía la decisión del Ejecutivo en buscar la viabilidad política del mismo, para evitar que este proyecto forme parte de aquellos que hoy duermen en el Congreso Nacional.

Añadió que la viabilidad política tiene las limitaciones de que se legisla por incumbentes, con mayorías relativas que obligan a buscar acuerdos con otros sectores y que, además, en este caso se tuvo que construir esta propuesta a partir de los distritos que actualmente existen.

Expuso que en su programa de gobierno, el Ejecutivo se comprometió a reemplazar el sistema binominal. Agregó que uno de los cambios sociales que se ha enfrentado en el último tiempo es que los ciudadanos están exigiendo el cumplimiento de los compromisos, y este proyecto de ley es uno de ellos.

Sostuvo que se ven limitados por la incapacidad política de quienes no fueron capaces de concurrir a un acuerdo amplio en la Cámara de Diputados. Recalcó que la responsabilidad no está en el Gobierno, la irresponsabilidad está en los presidentes de los partidos políticos de la Alianza, que no fueron capaces de entender que el programa de gobierno se cumple.

Insistió que la Nueva Mayoría ha tenido que hacer concesiones en este proyecto de ley para darle viabilidad al mismo.

Luego, citó a Giovanni Sartori, quien señaló que los sistemas electorales son o deben ser trajes a la medida de la sociedad. Al respecto, señaló que no era partidario de algunas decisiones que se han tomado en este proyecto, pero lo que no puede ocurrir es que el sistema electoral que se apruebe, tenga algunas inconsistencias. Remarcó que ellas deben ser corregidas.

Consignó que si en la próxima elección se producen mayorías suficientes, deben hacerse las adecuaciones que correspondan.

Señaló que no comprendía la decisión de aumentar los escaños en un distrito con menor población, pero sí lo entendía desde el punto de vista de la viabilidad política.

Seguidamente, manifestó que algunos de los Senadores que le han antecedido en el uso de la palabra han señalado que esta iniciativa será muy impopular y criticada. Apuntó que compartía dicha opinión. Destacó que es muy impopular aumentar el número de escaños en el Parlamento, pero con la misma fuerza que comparte dicha opinión, recordó que los líderes políticos no pueden circunscribir su accionar a lo que es popular. Ellos deben velar por el país, no por lo que saca más aplausos.

Concluyó sus palabras señalando que este proyecto puede ocasionar un costo político, pero el beneficio de lograr un sistema electoral más inclusivo, más transparente, implica velar por el interés general y no buscar el aplauso fácil de la galería.

Numero 15)

Mediante el mismo se sustituye el artículo 180 de la ley Nº 18.700.

La norma vigente prescribe que para la elección de los miembros del Senado, cada región constituirá una circunscripción senatorial, excepto las regiones V, de Valparaíso; Metropolitana de Santiago; VII, del Maule; VIII, del Biobío, y IX, de la Araucanía, que se dividirán en dos circunscripciones senatoriales, respectivamente. Cada circunscripción senatorial elegirá dos Senadores.

El texto aprobado en general sustituye el referido artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 50 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

1a circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, 2 senadores.

2a circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, 2 senadores.

3a circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 2 senadores.

4a circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, 2 senadores.

5a circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, 3 senadores.

6a circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, 5 senadores.

7a circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 7 senadores.

8a circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, 3 senadores.

9a circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, 5 senadores.

10a circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, 5 senadores.

11a circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 5 senadores.

12a circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 2 senadores.

13a circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, 3 senadores.

14a circunscripción, constituida por la XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, 2 senadores.

15a circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 2 senadores.”.

En relación con esta disposición se presentaron las indicaciones números 80, 81, 82, 83, 84, 85, 86, 87, 88, 89, 90, 91 y 92.

Las indicaciones número 80.- De los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y número 81.- de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, proponen suprimir este número.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó ambas indicaciones. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Votó a favor el Honorable Senador señor Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor Espina.

La indicación número 82, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, reemplaza el número 15) por el que sigue:

“15) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 40 miembros.

Para la elección de los miembros del Senado, cada región constituirá una circunscripción senatorial y elegirá la cantidad de Senadores que a continuación se indican:

1a. Circunscripción, constituida por la XV Región Arica y Parinacota, que elegirá 2 senadores;

2ª. Circunscripción, constituida por la I Región, de Tarapacá; que elegirá 2 senadores;

3a. Circunscripción, constituida por la II Región, de Antofagasta; que elegirá 2 senadores;

4a. Circunscripción, constituida por la III Región, de Atacama; que elegirá 2 senadores;

5a. Circunscripción, constituida por la IV Región, de Coquimbo; que elegirá 2 senadores;

6a. Circunscripción, constituida por la V Región, de Valparaíso, que elegirá 4 senadores;

7a. Circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, que elegirá 4 senadores;

8a. Circunscripción, constituida por la VI Región, del Libertador General Bernardo O'Higgins; que elegirá 2 senadores;

9a. Circunscripción, constituida por la VII Región, del Maule; que elegirá 4 senadores;

10a. Circunscripción, constituida por la VIII Región, del Biobío; que elegirá 4 senadores;

11a. Circunscripción, constituida por la IX Región, de la Araucanía; que elegirá 4 senadores;

12a. Circunscripción, constituida por la XIV Región, de los Ríos; que elegirá 2 senadores;

13a. Circunscripción, constituida por la X Región, de los Lagos, que elegirá 2 senadores

14a. Circunscripción, constituida por la XI Región, Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo; que elegirá 2 senadores y,

15a. Circunscripción, constituida por la XII Región, de Magallanes y de la Antártica Chilena; que elegirá 2 senadores.”.

Sometida a votación la indicación número 82, fue rechazada con los votos en contra de los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina y Harboe. Se pronunció a favor de ella el Honorable Senador señor Larraín.

Por su parte, la indicación número 83, del Honorable Senador señor Espina, reemplaza este numeral por el que sigue:

“15) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 44 miembros.

Para la elección de los Senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial, con excepción de la Región Metropolitana que dará lugar a la formación de dos circunscripciones, según el detalle que se indica.

Cada Circunscripción elegirá el número de Senadores que se indica a continuación.

1a. circunscripción senatorial, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

2a. circunscripción senatorial, constituida por la I Región, de Tarapacá. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

3a. circunscripción senatorial, constituida por la II Región, de Antofagasta. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

4a. circunscripción senatorial, constituida por la III Región, de Atacama. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

5a. circunscripción senatorial, constituida por la IV Región, de Coquimbo. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

6a. circunscripción senatorial, constituida por la V Región, de Valparaíso. Esta circunscripción elegirá cuatro Senadores;

7a. circunscripción senatorial, constituida por los distritos electorales Nº 9, 10, 11 y 16, de la Región Metropolitana de Santiago y que elegirá cuatro Senadores;

8a. circunscripción senatorial, constituida por los distritos electorales Nº 12, 13, 14 y 15, de la Región Metropolitana de Santiago que elegirá cuatro Senadores;

9a. circunscripción senatorial, constituida por la VI Región, del Libertador General Bernardo O'Higgins. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

10a. circunscripción senatorial, constituida la VII Región, del Maule. Esta circunscripción elegirá cuatro Senadores;

11a. circunscripción senatorial, constituida por la VIII Región, del Bíobío. Esta circunscripción elegirá cuatro Senadores;

12a. circunscripción senatorial, constituida por la IX Región, de La Araucanía. Esta circunscripción elegirá cuatro Senadores;

13a. circunscripción senatorial, constituida por la XIV Región, de Los Ríos. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

14a. circunscripción senatorial, constituida por la X Región, de Los Lagos. Esta circunscripción elegirá dos Senadores;

15a. circunscripción senatorial, constituida por la XI Región, Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo. Esta circunscripción elegirá dos Senadores, y

16a. circunscripción senatorial, constituida por la XII Región, de Magallanes y de la Antártica Chilena. Esta circunscripción elegirá dos Senadores.”.

Sometida a votación la indicación número 83, fue rechazada con los votos en contra de los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Se pronunciaron a favor de su aprobación los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

Luego, la Comisión trató la indicación número 84, del Honorable Senador señor Bianchi, que reemplaza el numeral 15) por el siguiente:

“15) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 47 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

1a circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota y la I Región de Tarapacá 5 Senadores.

2a circunscripción, constituida por la Región de Antofagasta y de Atacama 5 Senadores.

3a circunscripción, constituida Región de Coquimbo 3 Senadores

4a circunscripción, constituida la Región de Valparaíso, 5 Senadores.

5a circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 5 Senadores.

6a circunscripción, constituida las VI Región de O`Higgins, 3 Senadores.

7a circunscripción, constituida por la VII Región del Maule 3 Senadores VII Región del Maule 5 Senadores.

8a circunscripción, constituida por la VIII Región del Biobío 5 senadores 5 Senadores.

9a circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 3 senadores.

10a circunscripción, constituida XIV Región de Los Ríos y X Región de Los Lagos 5 Senadores.

11a circunscripción, constituida XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo y por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 5 Senadores.”.”.

Al iniciarse su estudio se planteó la duda acerca de su admisibilidad, pues al reagrupar dos regiones para crear una circunscripción, se vulneraría el artículo 49 de la Constitución Política de la República.

Al respecto, se recordó que el inciso primero del mencionado artículo dispone que el Senado se compone de miembros elegidos en votación directa por circunscripciones senatoriales, en consideración a las regiones del país, cada una de las cuales constituirá, a lo menos, una circunscripción. La ley orgánica constitucional respectiva determinará el número de Senadores, las circunscripciones senatoriales y la forma de su elección.

De lo anterior, se deduce que si bien es posible que al interior de una región pueda existir más de una circunscripción senatorial, no es factible conformar circunscripciones que agrupen a varias regiones, dado que cada región debe, a lo menos, constituir una circunscripción.

Teniendo en cuenta este antecedente, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, declaró inadmisible la indicación número 84.

Seguidamente, se consideró la indicación número 85, el Honorable Senador señor Ossandón, que reemplaza este numeral por el que sigue:

“15) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 38 miembros. Las circunscripciones senatoriales serán determinadas en un reglamento que al efecto dicte el Congreso Nacional en base a una propuesta técnica que haga el Consejo Directivo del Servicio Electoral.”.”.

El Presidente de la Comisión declaró inadmisible esta indicación pues el artículo 49 de la Ley Fundamental señala que corresponderá al legislador orgánico constitucional determinar las circunscripciones senatoriales, cuestión que no puede quedar entregada a un reglamento aprobado por el Congreso Nacional.

Luego, se analizó la indicación 86, del Honorable Senador señor Guillier, que reemplaza el numeral 15) por el siguiente:

“15) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 55 miembros.

Para la elección de los Senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada Circunscripción elegirá el número de Senadores que se indica a continuación.

1a., Circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, elegirá 3 Senadores.

2a. Circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, elegirá 3 Senadores.

3a. Circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, elegirá 3 Senadores.

4a. Circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, elegirá 3 Senadores.

5a. Circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, elegirá 3 Senadores.

6a. Circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, elegirá 5 Senadores

7a. Circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, elegirá 5 Senadores.

8a. Circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, elegirá 3 Senadores.

9a. Circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, elegirá 5 Senadores.

10a. Circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, elegirá 5 Senadores.

11a. Circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, elegirá 5 Senadores.

12a. Circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, elegirá 3 Senadores.

13a. Circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, elegirá 3 Senadores.

14a. Circunscripción, constituida por la XI Región Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, elegirá 3 Senadores.

15a. Circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, elegirá 3 Senadores.”.”.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, declaró inadmisible esta indicación, toda vez que implica aumentar el número de Senadores, lo que supone un mayor gasto público para el erario fiscal. Esta materia está reservada a la iniciativa exclusiva de S.E. el Presidente de la República, según prescribe el inciso tercero del artículo 65 de la Constitución Política de la República.

La indicación número 87, del Honorable Senador señor Walker, don Patricio, reemplaza este número 15) por el que sigue:

“15) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 57 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

1a circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, 3 senadores.

2a circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, 3 senadores.

3a circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 3 senadores.

4a circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, 3 senadores.

5a circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, 3 senadores.

6a circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, 5 senadores.

7a circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 7 senadores.

8a circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, 3 senadores.

9a circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, 5 senadores.

10a circunscripción, constituida por la VIII Región del BíoBío, 5 senadores.

11a circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 5 senadores.

12a circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 3 senadores.

13a circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, 3 senadores.

14a circunscripción, constituida por la XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, 3 senadores.

15a circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 3 senadores.”.”.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, declaró inadmisible esta indicación, toda vez que implica aumentar el número de Senadores, lo que supone un mayor gasto público para el erario fiscal. Esta materia está reservada a la iniciativa exclusiva de S.E. el Presidente de la República, según prescribe el inciso tercero del artículo 65 de la Constitución Política de la República.

Seguidamente, la Comisión trató las indicaciones número 88, de los Honorables Senadores señores Guillier, Horvath, Quinteros, Rossi y Walker, don Patricio, y número 89.- de los Honorables Senadores señora Muñoz y señor Horvath, reemplazan los incisos primero y segundo del artículo 180 propuesto, por el siguiente:

“Artículo 180.- Para la elección de los miembros del Senado, cada región en que se divida políticamente el país, constituirá una circunscripción, que elegirá al menos tres senadores cada una.”.

Sometidas a votación las indicaciones números 88 y 89, fueron rechazadas por la unanimidad de los integrantes de la Comisión, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín.

Seguidamente, la Comisión consideró las indicaciones número 90, del señor Vicepresidente de la República, y número 91, del Honorable Senador señor Harboe, para modificar el inciso tercero del artículo 180 propuesto, en el siguiente sentido:

1) Reemplazar la frase “3ª circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 2 senadores.”, por “3ª circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 3 senadores.”.

2) Sustituir la frase “7ª circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 7 senadores.”, por “7ª circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 5 senadores.”.

3) Reemplazar la frase “12ª circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 2 senadores.”, por “12ª circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 3 senadores.”.

Al iniciarse su estudio, el Honorable Senador señor Harboe, manifestó que retiraba la indicación número 91.

Seguidamente, el Presidente de la Comisión puso en votación la indicación número 90.

La Comisión, por mayoría de votos, aprobó esta indicación. Votaron a favor los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

Finalmente, la indicación número 92, del Honorable Senador señor De Urresti, sugiere agregar, en el artículo 180 propuesto, el siguiente inciso final nuevo:

“A ellos se sumarán los senadores que serán electos por los pueblos indígenas en elecciones simultáneas a las parlamentarias, de conformidad a lo dispuesto en el articulado transitorio de esta ley.”.

El Presidente de la Comisión declaró inadmisible esta indicación, pues ella supone incrementar el número de parlamentarios y, en consecuencia, el gasto público. Esta materia corresponde a la iniciativa exclusiva de S.E el Presidente de la República, de conformidad a lo que dispone el inciso tercero del artículo 65 de la Constitución Política de la República.

Esta norma pasa a ser el nuevo número 10) del artículo 1° del proyecto.

En una sesión posterior, el Honorable Senador señor Bianchi manifestó su desacuerdo con el criterio adoptado por la Comisión al momento de definir el parámetro que se aplica para definir el número de Senadores y su distribución entre regiones.

Precisó que la norma aprobada rompe con el carácter unitario del Estado y desconoce el principio territorial que debiera primar en la conformación de esta Corporación.

Aseveró que se ha introducido el criterio del número de habitantes para asignar los escaños de Senadores entre regiones. Lamentó que la Comisión no hubiere aprobado la indicación N° 84, de su autoría.

A continuación, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, señaló que la indicación N° 84 era inadmisible pues se contrapone a lo que prescribe el artículo 49 de la Constitución Política.

Afirmó que en la determinación del número de Senadores que se asigna a una región se ha seguido, fundamentalmente, el criterio territorial pero matizado con el factor número de habitantes.

Finalmente, recordó que actualmente algunas regiones están sobre representadas en el Senado, lo que vulnera la idea de igual representación en esta Corporción.

Número 16)

Este numeral deroga el artículo 181 de la ley Nº 18.700, disposición que determina las circunscripciones senatoriales vigentes.

En relación con este numeral se presentaron las indicaciones numero 93, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y número 94, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarlo.

Puestas en votación las indicaciones números 93 y 94, fueron rechazadas con los votos en contra de los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. A favor lo hicieron los Honorables Senadores señor Espina y Larraín.

Esta norma se consigna como nuevo número 11) del artículo 1° del proyecto.

Número 17)

En este numeral se agrega el siguiente artículo 23 transitorio, nuevo, a la ley Nº 18.700:

“Artículo 23.- La regla especial del artículo 3° bis, inciso quinto, sólo tendrá aplicación en los procesos electorales parlamentarios de 2017, 2021, 2025 y 2029.”

En relación con este número se presentaron las indicaciones número 95, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y número 96, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para suprimirlo.

Luego de un breve intercambio de opiniones, donde se recordó que esta norma era concordante con lo que la Comisión había aprobado en materia de cuotas de género que los partidos políticos debían respetar en las elecciones de los años ya indicados, el Presidente de la Comisión sometió a votación ambas indicaciones.

La Comisión, por la unanimidad de su miembros presentes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina y Harboe, rechazó ambas indicaciones.

Esta norma pasa a ser número 12), sin enmiendas.

Número 18)

Mediante este numeral se incorpora el siguiente artículo 24 transitorio, nuevo, a la mencionada ley:

“Artículo 24.- Para los efectos de completar la nueva integración del Senado de la República, en las elecciones parlamentarias que deben celebrarse en noviembre de 2017 corresponderá que se renueven completamente las circunscripciones que corresponden a regiones impares.

En el caso de las circunscripciones que corresponden a las regiones pares y Metropolitana, los parlamentarios elegidos en 2013 seguirán en sus funciones hasta completar su período de ocho años. En las elecciones de 2021, estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde.”.

Respecto de este numeral se presentaron las indicaciones número 97, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, número 98, del Honorable Senador señor Ossandón, y número 99, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarlo.

Puestas en votación estas indicaciones fueron rechazadas por mayoría de votos. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Larraín y Harboe. A favor lo hizo el Honorable Senador señor Espina.

Esta norma pasa a ser número 13), sin enmiendas.

Número 19)

Mediante este numeral se agrega en la ley N°18.700 el siguiente artículo 25 transitorio, nuevo:

“Artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.”.

En relación a este número se presentaron las indicaciones número 100, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, número 101, del Honorable Senador señor Ossandón, y número 102, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para suprimirlo.

Sometidas a votación estas indicaciones, fueron rechazadas con los votos en contra de los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

Asimismo, se consideró la indicación número 103, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para reemplazar en el artículo 25 transitorio que propone, la expresión “subsiguiente al del censo oficial del año 2022”, por “2023”.

Sometida a votación la indicación número 103, fue rechazada con los votos en contra de los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

Esta norma pasa a ser número 14), sin enmiendas.

-.-.-

A continuación, la Comisión trató las indicaciones números 104 y 105.

La indicación número 104, del Honorable Senador señor Harboe, propone incorporar el siguiente número nuevo, al artículo 1º de esta iniciativa:

“…) Agrégase el siguiente artículo transitorio:

“Artículo…..- La creación de una nueva región aparejará de pleno derecho la creación de su correspondiente circunscripción electoral. El número de Senadores elegido será determinado en conformidad a la cantidad de electores de dicha circunscripción electoral.”.”.

Al iniciarse su estudio, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe, advirtió que esta indicación contiene un error, porque en ella se hace referencia a los electores y no a la población.

Agregó que busca evitar que cuando se cree una región, no se instituya la circunscripción.

El Honorable Senador señor Larraín precisó que hay un error en la indicación, porque los Senadores no se eligen en relación a la población, ni a los electores.

El Honorable Senador señor Espina expresó que la indicación aumentará el número de Senadores, porque puede ocurrir que el día de mañana se cree una región y ello inevitablemente, de acuerdo al texto de la indicación, traerá como consecuencia la creación de una nueva circunscripción.

El Honorable Senador señor De Urresti sugirió agregar un inciso en que se precise que el número de Senadores a elegir, se deduzca de la región que dio origen a la nueva unidad territorial.

El Honorable Senador señor Larraín advirtió que la segunda parte de la propuesta del Honorable Senador señor Felipe Harboe es impropia por lo ya señalado. Propuso que lo que se debe hacer, es modificar el artículo 49 de la Carta Fundamental, eliminando en su primer inciso la expresión “a lo menos”.

Concluido su análisis, el Honorable Senador señor Harboe retiró la indicación número 104.

Luego, la Comisión trató la indicación número 105, del Honorable Senador señor De Urresti, que sugiere introducir el siguiente número nuevo al artículo 1º:

“…) Agrégase el siguiente artículo…. transitorio:

“Artículo …..- La elección de los parlamentarios representantes de los pueblos indígenas se realizará a partir del año 2021, según establezca la ley respectiva, que deberá estar promulgada a lo menos con dos años de anticipación a la fecha de los comicios.”.”.

Esta indicación fue declarada inadmisible por el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, dado que ella supone un aumento en el número de parlamentarios y consecuentemente en el gasto público, materia que corresponde a la iniciativa exclusiva de S.E. el Presidente de la República.

Artículo 2°

Este precepto modifica, mediante siete números, la ley N°19.884, sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral.

Número 1)

Este numeral introduce dos enmiendas en el artículo 4° de la ley Nº 19.884.

En lo que interesa a este informe, cabe recordar que el artículo 4º establece que ninguna candidatura a Presidente de la República, senador, diputado, alcalde, consejero regional o concejal podrá sobrepasar, por concepto de gastos electorales, los límites que se indican en los incisos siguientes.

En su inciso segundo se prescribe que tratándose de candidaturas a senador, el límite de gasto no podrá exceder de la suma de tres mil unidades de fomento, más aquella que resulte de multiplicar por cuatro centésimos de unidad de fomento los primeros doscientos mil electores, por tres centésimos de unidad de fomento los siguientes doscientos mil electores y por dos centésimos de unidad de fomento los restantes electores en la respectiva circunscripción.

El inciso siguiente señala que los candidatos a diputado no podrán exceder de la suma de mil quinientas unidades de fomento, más aquella que resulte de multiplicar por tres centésimos de unidad de fomento el número de electores en el respectivo distrito.

El inciso cuarto determina que el límite de gasto de los candidatos a alcalde no podrá exceder de la suma de ciento veinte unidades de fomento, más aquella que resulte de multiplicar por tres centésimos de unidad de fomento el número de electores en la respectiva comuna. Cada candidato a concejal podrá gastar una suma no superior a la mitad de aquella que se permita al correspondiente candidato a alcalde.

El inciso siguiente precisa que el límite de gasto de los candidatos a consejeros regionales no podrá exceder de la suma de setecientas unidades de fomento, más aquella que resulte de multiplicar por dos centésimos de unidad de fomento los primeros doscientos mil electores, por un centésimo y medio de unidad de fomento los siguientes doscientos mil, por un centésimo de unidad de fomento los restantes electores de la respectiva circunscripción provincial.

En el inciso quinto se indica que en el caso de las candidaturas a Presidente de la República, el límite de gasto será equivalente a la cantidad que resulte de multiplicar por tres centésimos de unidad de fomento el número de electores en el país. No obstante, tratándose de la situación prevista en el inciso segundo del artículo 26 de la Constitución Política, dicho límite se calculará considerando como factor multiplicador un centésimo de unidad de fomento.

El inciso sexto prescribe que para los efectos de lo dispuesto en el presente artículo, el Director del Servicio Electoral establecerá por resolución que se publicará en el Diario Oficial, con ciento veinte días de anticipación a la respectiva elección, los máximos de gastos electorales permitidos.

Por último, el inciso final señala que para todos los efectos de esta ley, el valor de la unidad de fomento será el vigente a la fecha de la resolución a que se refiere el inciso precedente.

El texto aprobado en general por el Senado introduce, mediante dos letras, igual número de enmiendas al transcrito artículo 4º.

Letra a)

Esta letra sustituye en el inciso segundo del artículo 4° la expresión “dos centésimos de unidad de fomento”, por la expresión “un centésimo de unidad de fomento”.

Letra b)

Por su parte, en esta letra se reemplaza, en el inciso tercero del artículo 4º, la expresión “tres centésimos de unidad de fomento” por la expresión “uno coma cinco centésimos de unidad de fomento.”.

En relación con este número se presentó la indicación número 106, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, que suprime este número del artículo 2º.

La Comisión, por mayoría de votos, aprobó esta indicación. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

Al adoptar esta decisión, se tuvo en cuenta que la materia tratada en este número será considerada en el proyecto de ley para el fortalecimiento y transparencia de la democracia (Boletín Nº 9.790-07).

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A continuación, la Comisión trató las indicaciones números 107, 108, 109, 110, y 111 del boletín.

La indicación número 107, del Honorable Senador señor Horvath, sugiere introducir un numeral nuevo, que modifica el artículo 5º de la ley Nº 19.844.

Cabe recordar que el mencionado artículo dispone que el límite de gastos electorales que podrá efectuar cada partido político será el equivalente a un tercio de la suma total de los gastos electorales permitidos a sus candidatos, incluidos los independientes que vayan en pacto o subpacto con él, según lo establecido en el artículo anterior.

En su inciso segundo, prescribe que en el evento que dos o más partidos políticos celebren un pacto o subpacto electoral, el tercio de gastos a que se refiere el inciso precedente se distribuirá a prorrata de los candidatos respectivos, incluidos los independientes, entre los partidos que integran el pacto o, en su caso, el subpacto.

Finalmente, su inciso tercero señala que se presumirá gasto electoral de un partido político el efectuado dentro del período indicado en el artículo 3º, en aquella parte que exceda al promedio de gastos incurridos por el respectivo partido durante los seis meses anteriores a dicho período, cualquiera sea la fecha de contratación o pago efectivo de dichos gastos, y aun cuando se encuentren pendientes de pago.

La enmienda propuesta por el Honorable Senador señor Horvath introduce dos modificaciones a este artículo. Su texto es el siguiente:

“…) En el artículo 5°:

a) Sustitúyese en el inciso primero la expresión “un tercio” por “un cuarto”.

b) Reemplázase en el inciso segundo la expresión “el tercio” por “el cuarto”.”.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó esta indicación.

Al adoptar esta decisión, se tuvo en cuenta que la materia tratada en este número será considerada en el proyecto de ley sobre fortalecimiento y transparencia de la democracia (Boletín Nº 9.790-07).

A continuación, la Comisión consideró la indicación número 108, del Honorable Senador señor Montes, que propone incorporar el siguiente número nuevo:

“…) Agrégase en el artículo 5º bis el siguiente inciso final:

“Sin perjuicio de las sanciones pecuniarias precedentes, en caso de incurrirse en un exceso de gasto superior al 30% o de percibirse aportes prohibidos por la ley, los candidatos que incurrieren en dicha infracción y hubieren resultado electos serán inhabilitados para ejercer el cargo de acuerdo a lo establecido en el numeral 14) del artículo 93° de la Constitución Política de la República. En el caso de los partidos políticos, éstos serán privados de recibir el financiamiento público que les correspondiere.”.”.

Cabe recordar que el artículo 5º bis, en síntesis, establece que el candidato o partido político que exceda el límite de gastos electorales, calculado de conformidad con lo dispuesto en los artículos precedentes, será sancionado con multa a beneficio fiscal, de acuerdo a una determinada escala.

El señor Presidente de la Comisión declaró inadmisible esta indicación pues establece una nueva causal, no prevista en la Ley Fundamental, para inhabilitar a un parlamentario. Se recordó que esta materia corresponde al estatuto de los parlamentarios, y, en consecuencia, debe estar establecida en la Constitución y no en la ley.

Seguidamente, la indicación número 109, del Honorable Senador señor Guillier, sugiere introducir el siguiente numeral nuevo:

“…) Sustituyese el artículo 9º por el siguiente:

“Artículo 9º.- Las personas naturales podrán efectuar donaciones o aportes en dinero a partidos políticos, campañas electorales y/o a candidatos independientes, en cualquier tiempo o en periodos electorales. En el primer caso, podrán realizarlos en sus declaraciones anuales de impuestos, siendo dichos emolumentos afectados a gasto para los efectos tributarios respectivos.

Las donaciones o aportes antes mencionados no podrán exceder al 1% de la renta líquida imponible del impuesto de primera categoría.

En los periodos electorales las donaciones y aportes efectuadas por personas naturales a campañas electorales o candidatos independientes, no podrán exceder a 20 Unidades Tributarias Mensuales por candidaturas y hasta un máximo de tres candidaturas en una misma elección.”.”.

El señor Presidente de la Comisión declaró inadmisible esta indicación pues, al incidir en materias de carácter tributario, corresponde a un asunto que el inciso cuarto del artículo 65 de la Constitución ha reservado a la iniciativa exclusiva de S.E el Presidente de la República.

A continuación, se consideró la indicación número 110, del Honorable Senador señor Horvath, que propone incorporar un numeral nuevo al artículo 2º, que modifica el artículo 9º de la ley Nº 19. 884.

Cabe recordar que esta norma prescribe que ninguna persona podrá aportar a un mismo candidato, y en una misma elección, una suma que exceda al equivalente en pesos de mil unidades de fomento en el caso de candidatos a alcalde, consejero regional o concejal; de mil doscientas cincuenta unidades de fomento tratándose de candidatos a diputado o senador y de dos mil unidades de fomento en el caso de candidatos presidenciales. No obstante, en el caso de la situación prevista en el artículo 26, inciso segundo, de la Constitución Política de la República, ésta será entendida como otra elección, pudiendo aportar hasta setecientas unidades de fomento en la misma. En todo caso, el total de aportes que una misma persona podrá hacer a distintos candidatos o a un partido político en una misma elección no podrá exceder, del equivalente en pesos, de diez mil unidades de fomento.

Agrega que para los efectos de este artículo, se presumirá que el pago de los gastos electorales a que se refiere el Título I, efectuado directa o indirectamente a través de terceras personas, constituye aporte de campaña electoral sujeto a las mismas restricciones señaladas en los incisos precedentes.

Añade que los candidatos podrán destinar al financiamiento de los gastos electorales en que incurran su propio patrimonio, así como los sueldos, asignaciones u honorarios que perciban en el ejercicio de cualquier actividad lícita, sin sobrepasar lo establecido como límite de gasto electoral por esta ley.

Finalmente, prescribe que los candidatos y los partidos políticos podrán rechazar cualquier aporte de campaña electoral.

En relación con esta disposición el Honorable Senador Horvath propone los siguientes cambios:

“…) Reemplázanse, en el inciso primero del artículo 9°, las expresiones “mil unidades de fomento” por “setecientas cincuenta unidades de fomento”; “mil doscientas cincuenta unidades de fomento” por “mil unidades de fomento”; “dos mil unidades de fomento” por “mil setecientas cincuenta unidades de fomento”; “seiscientas unidades de fomento” por “quinientas unidades de fomento”, y “diez mil unidades de fomento” por “siete mil quinientas unidades de fomento”.”.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó esta indicación.

Al adoptar esta decisión, la Comisión tuvo en cuenta que la materia que trata esta indicación debiera ser considerada en la discusión del proyecto de ley sobre fortalecimiento y transparencia de la democracia.

Finalmente, la Comisión trató la indicación número 111, del Honorable Senador señor Guillier, que propone introducir un numeral nuevo, mediante el cual se derogan los artículos 10, 11 y 12 de la ley Nº 19.884.

En lo que interesa a este informe, dichos preceptos establecen que los aportes de campaña electoral que efectúen personas jurídicas con fines de lucro requerirán decisión expresa de quienes tengan las facultades de administración, de conformidad con los acuerdos que sobre esta materia haya adoptado previamente el órgano social competente.

Añade el artículo 10, que si el órgano de administración resuelve que los aportes deban efectuarse bajo la forma de reserva establecida en el artículo 19, le estará prohibido a los administradores o representantes de la persona jurídica, divulgar la identidad del partido o candidato donatario.

Por su parte, el artículo 11 señala que las donaciones que se efectúen con arreglo a este Párrafo estarán liberadas del trámite de insinuación y exentas del pago del impuesto a las herencias y donaciones establecido por la ley Nº 16.271. Los aportes que reciban los candidatos en virtud de las disposiciones de esta ley, no constituirán renta para todos los efectos legales.

Finalmente, el artículo 12 precisa que los aportes que reciban los candidatos de los partidos que excedan los gastos en que hubieren incurrido serán devueltos a los aportantes, si éstos pudieren ser identificables, en la oportunidad a que se refiere la letra c) del artículo 31. En caso contrario dichos excesos deberán ser entregados por los administradores electorales, en la misma oportunidad, a los respectivos administradores generales electorales, y se considerarán hechos a los partidos políticos, en cuanto no superen el monto de los gastos que éstos hubieren efectuado.

Si una vez aplicada la regla establecida en el inciso anterior quedare aún un remanente, éste deberá entregarse, por los administradores generales electorales respectivos, al momento de la presentación de las correspondientes cuentas de ingresos y gastos, al Servicio Electoral, en favor del Fisco.

Finalmente, este artículo dispone que las mismas reglas se apliquen, en lo que corresponda, tratándose de los excedentes que se produzcan a los candidatos independientes.

Al iniciarse el debate de la indicación número 111, el Honorable Senador señor Larraín señaló que en el proyecto de ley para el fortalecimiento y transparencia de la democracia se regulará en un solo cuerpo, todas las materias relacionadas con gasto electoral y transparencia y financiamiento de las campañas, y es ahí donde deben concentrarse todas las normas relacionadas.

El señor Presidente de la Comisión reiteró que, sin perjuicio del planteamiento de fondo de esta indicación, ese había sido el criterio que mayoritariamente había adoptado esta instancia en el debate de este tipo de indicaciones.

Puesta en votación la indicación número 111, fue rechazada con los votos en contra de los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se pronunció por su aprobación el Honorable Senador señor De Urresti.

Al fundamentar su voto, el Honorable Senador señor De Urresti señaló que el propósito de la indicación número 111 es acertado, y no contradice lo que se desea regular en el proyecto de ley sobre fortalecimiento y transparencia de la democracia.

El Honorable Senador señor Felipe Harboe señaló que votaba en contra de esta indicación no porque no esté abierto a considerar su contenido o su conveniencia, sino porque cree que el financiamiento de la actividad política y las medidas de control que hay que adoptar respecto del mismo, deben ser reguladas de manera integral en la iniciativa sobre transparencia de la democracia.

Número 2)

Este numeral modifica el artículo 14 bis de la ley Nº 19.884.

La disposición vigente señala textualmente que “los endosos se regirán bajo las reglas generales aplicables a éstos. Agrega que los candidatos podrán ceder su derecho a reembolso a sus partidos cuando éstos hubieren asumido el pago correspondiente a los proveedores por bienes y servicios prestados en la campaña electoral.

En el inciso tercero determina que los candidatos y los partidos políticos que contraten créditos con instituciones del sistema financiero, registradas ante la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras, podrán otorgar a éstas un mandato por el cual el Servicio Electoral autorizará el pago de los créditos con el reembolso que se determine, ciñéndose al efecto a las instrucciones que dicte el Director del Servicio Electoral. Para ello, el Administrador Electoral o el Administrador General Electoral respectivo, deberán acreditar la obtención del crédito y la efectividad del uso de éste en la campaña electoral.

El inciso final, señala que lo dispuesto en los dos incisos precedentes deberá ser comunicado al Servicio Electoral para su pago preferente, en conformidad al procedimiento del artículo siguiente.

El texto aprobado en general por el Senado agrega el siguiente inciso final, nuevo, al mencionado artículo 14 bis:

“Tratándose de votaciones a listas a las que se refiere el artículo 65, inciso primero, de la ley N°18.700, el derecho al reembolso se hará a los candidatos que las integren, a prorrata de sus votaciones individuales.”.

Respecto de este número se presentaron las indicaciones número 112, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, número 113, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y número 114, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminarlo.

La Comisión, por mayoría de votos, aprobó estas indicaciones. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Votó en contra el Honorable Senador señor de Urresti.

La mayoría de la Comisión tuvo presente que previamente se había acordado no aceptar la idea del voto de lista, razón por la que resultaba concordante rechazar esta indicación.

Número 3)

Este numeral reemplaza el artículo 16 de la ley N° 19.884.

En lo que interesa a este informe, la norma vigente prescribe que los aportes de campaña electoral serán anónimos, reservados o públicos, de conformidad con lo que se señala en los artículos siguientes.

El texto aprobado en general por el Senado sustituye esta disposición por la siguiente:

“Artículo 16.- Los aportes de campaña electoral serán públicos y se consignará la identidad del aportante, salvo las excepciones que señale esta ley.”.

En relación con este número se presentaron las indicaciones números 115, 116, 117, 118, y 119 del boletín.

Las indicaciones número 115, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, número 116, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y número 117, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, suprime este número.

Sometidas a votación estas indicaciones fueron aprobadas con los votos a favor de los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

El Honorable Senador señor Espina fundamentó su voto señalando que es partidario de la norma aprobada en general por el Senado, pero se pronuncia a favor de estas indicaciones porque comparte la idea de que todo lo relacionado con el financiamiento sea tratado en otro cuerpo legal.

La indicación número 118, del Honorable Senador señor Ossandón, sugiere reemplazarlo por el siguiente:

“3) Sustitúyese el artículo 16 por el siguiente:

“Artículo 16.- El origen, destino y monto o especie de los aportes de campaña electoral serán públicamente conocibles y se consignará la identidad del aportante, salvo las excepciones que señale esta ley.”.”.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó esta indicación.

La indicación número 119, del Honorable Senador señor Montes, suprime en el artículo 16 propuesto la frase “, salvo las excepciones que señale esta ley”.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, rechazó también esta indicación.

Número 4)

Reemplázase el artículo 17 de la ley Nº 19.884.

La disposición vigente establece que podrán ser anónimos todos los aportes privados en dinero cuyo importe no supere el equivalente en pesos a veinte unidades de fomento. No obstante, cualquier aportante podrá solicitar se consigne su identidad y el monto de su contribución.

Agrega en su inciso segundo que, en todo caso, durante el período de campaña electoral, ningún candidato o partido político podrá recibir, por concepto de aportes anónimos, más del veinte por ciento del límite de gastos electorales definido en esta ley.

La norma aprobada en general por el Senado reemplaza el artículo 17 por otro que, en su inciso primero, establece que podrán ser anónimos todos los aportes privados en dinero cuyo importe no supere el equivalente en pesos a diez unidades de fomento. No obstante, cualquier aportante podrá solicitar que se consigne su identidad y el monto de su contribución.

Agrega, en su inciso segundo, que en todo caso, durante el período de campaña electoral, ningún candidato o partido político podrá recibir, por concepto de aportes anónimos, más del 20 por ciento del límite de gastos electorales definido en esta ley.

No podrán existir aportes reservados.”.

Respecto de este número se presentaron las indicaciones números 120, 121, 122, 123, 124 y 125 del boletín.

La indicación número 120, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, que propone suprimir este número.

Sometida a votación esta indicación fue aprobada con los votos a favor de los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

La indicación número 121, del Honorable Senador señor Montes, para reemplazar la expresión “anónimos” por “entregados directa o indirectamente al administrador electoral del respectivo candidato o partido político”.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó esta indicación. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

La indicación número 122, del Honorable Senador señor Montes, para sustituir la frase “cualquier aportante podrá solicitar que se consigne su identidad y el monto de su contribución” por “deberá consignarse y declararse la identidad del aportante y el monto de la contribución”.

La indicación número 123, del Honorable Senador señor Montes, para reemplazar en el inciso segundo del artículo propuesto la expresión “aportes anónimos” por “los aportes a que se refiere el inciso anterior”.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó ambas indicaciones. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

Las indicaciones número 124, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y número 125, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, para eliminar el inciso tercero del artículo 17 propuesto.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, aprobó ambas indicaciones, que son concordantes con la idea de la indicación número 120.

-.-.-

Seguidamente, la Comisión trató las indicaciones números 126 a 133 del boletín.

La indicación número 126, del Honorable Senador señor Montes, para agregar el siguiente número, nuevo:

“…) Elimínase el artículo 18.”.

En lo que interesa a este informe, el mencionado artículo prescribe que todo aporte que supere el monto indicado en el artículo anterior y que represente menos del diez por ciento del total de gastos que la ley autoriza a un candidato o partido político, tendrá el carácter de reservado, siempre y cuando no exceda de seiscientas unidades de fomento para un candidato a alcalde, consejero regional o concejal; de ochocientas unidades de fomento para un candidato a diputado o senador; y de mil quinientas unidades de fomento para un candidato presidencial o de tres mil unidades de fomento para un partido político o el conjunto de sus candidatos en la respectiva elección.

Agrega que no obstante lo anterior, cualquier aportante tendrá el derecho de solicitar que se consigne su identidad y el monto de su contribución.

La indicación número 127, del Honorable Senador señor Horvath, propone introducir un numeral nuevo, que reemplaza el mencionado artículo 18, por el siguiente:

“…) Reemplázase el artículo 18 por el siguiente:

“Artículo 18.- Todo aporte que supere el monto indicado en el artículo anterior, será público.

Sin embargo, cualquier aportante tendrá derecho a solicitar que se consigne su identidad y el monto de su contribución.”.”.

Luego de un breve intercambio de opiniones, la Comisión, por mayoría de votos estimó que lo que plantean las indicaciones número 126 y 127 deberían ser consideradas en el proyecto de ley sobre fortalecimiento y transparencia de la democracia que recientemente ha sido ingresado por el Gobierno a la Cámara de Diputados.

Por estas razones, la Comisión, por mayoría de votos, rechazó ambas indicaciones. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

A continuación, la indicación número 128, del Honorable Senador señor Montes, sugiere incorporar numeral, nuevo, cuyo propósito es reemplazar el artículo 19 de la ley Nº 19.884.

En lo que interesa a este informe el mencionado artículo 19 dispone que los aportes a que se refiere el artículo anterior se realicen directamente en una cuenta única que deberá mantener al efecto el Servicio Electoral. El donante recibirá del Servicio Electoral, una vez que los fondos hayan quedado acreditados en la referida cuenta corriente, un certificado, que a solicitud del donante deberá ser electrónico, de la donación que sólo acreditará el monto total donado. El Servicio establecerá un sistema electrónico mediante el cual el donante pueda destinar su aporte a uno o más candidatos o partidos, dentro de los límites establecidos en la presente ley y hasta el monto de su donación. Para destinar su aporte, el donante que sea persona natural y que esté imposibilitado de concurrir al Servicio, podrá efectuarlo mediante mandato especial autorizado ante notario. La destinación de los aportes hechos por personas jurídicas sólo podrá hacerse por mandato especial. El sistema electrónico que establezca el Servicio deberá, además, asegurar tanto la reserva de la identidad del donante, como garantizar que éste no obtendrá documento alguno que permita identificar su donación ante el donatario o terceros. El Servicio Electoral deberá iniciar la transferencia electrónica, el primer día hábil de cada semana, a la cuenta designada por el respectivo Administrador Electoral, de la suma de los aportes que les hayan sido destinados en la semana anterior. Una fracción aleatoria de dicha suma, que no podrá ser superior a 30%, no será transferida de inmediato y sólo se tendrá por destinada en dicho día, con el objeto de ser transferida a partir del primer día hábil de la semana siguiente. El Director del Servicio definirá modelos matemáticos para determinar la fracción aleatoria con el fin de que la transferencia a los Administradores Electorales de los montos destinados ocurra con la mayor celeridad que sea compatible con su obligación de asegurar la reserva dela identidad del donante.

Agrega que las normas sobre secreto bancario contenidas en el artículo 154 de la Ley General de Bancos, le serán aplicables a los funcionarios del Servicio Electoral.

Asimismo, precisa que las cuentas bancarias a las cuales se transferirán los aportes reservados, deberán corresponder al candidato que tenga el carácter de titular de las mismas.

La mencionada indicación número 128 reemplaza dicho artículo 19, por el siguiente:

“Artículo 19.- Los aportes que excedan los montos o porcentajes sobre el total dispuestos en el artículo 17 serán siempre públicos y se realizarán en una cuenta única que deberá mantener al efecto el Servicio Electoral.

El Servicio establecerá un sistema electrónico mediante el cual el donante pueda destinar su aporte a uno o más candidatos o partidos, dentro de los límites establecidos en la presente ley y hasta el monto de su donación. Para destinar su aporte, el donante que esté imposibilitado de concurrir al Servicio, podrá efectuarlo mediante mandato especial autorizado ante notario.

La respectiva donación, junto con los datos necesarios para identificar al donante, será puesta en conocimiento del candidato o partido y sus respectivos administradores, en las siguientes veinticuatro horas, los que deberán aceptarla antes de que sea efectivamente transferida. Transcurridos diez días desde dicha notificación se entenderá que el aporte ha sido rechazado.

Una vez que los fondos han quedado acreditados, el donante recibirá del Servicio Electoral un certificado electrónico de la donación que detallará el monto total donado y los candidatos o partidos políticos beneficiados.

El Servicio Electoral deberá iniciar la transferencia electrónica, el primer día hábil de cada semana, a la cuenta designada por el respectivo Administrador Electoral, de la suma de los aportes que les hayan sido destinados en la semana anterior. Efectuado el depósito electrónico, el nombre del aportante, el monto y el partido o candidato destinatario se incluirán en un registro público en el sitio web del Servicio Electoral.

Las normas sobre secreto bancario contenidas en el artículo 154 de la Ley General de Bancos, le serán aplicables a los funcionarios del Servicio Electoral.

Las cuentas bancarias a las cuales se transferirán los aportes, deberán corresponder al candidato que tenga el carácter de titular de las mismas.”.”.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, declaró inadmisible esta indicación pues modifica las atribuciones de un órgano público, como es el Servicio Electoral, materia que corresponde a la iniciativa exclusiva de S.E. el Presidente de la República, tal como dispone el número 2º del inciso cuarto del artículo 65 de la Constitución Política de la República.

La indicación número 129, del Honorable Senador señor Horvath, propone agregar un número nuevo al artículo 2º, cuyo objeto es suprimir en el inciso primero del referido artículo 19, la siguiente oración: “La destinación de los aportes hechos por personas jurídicas solo podrá hacerse por mandato especial.”.”.

Al iniciarse el debate de esta indicación, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe sugirió rechazarla dado que se refiere al destino de los fondos aportados por personas jurídicas y ello estará considerado en el proyecto de ley sobre fortalecimiento y transparencia de la democracia.

Puesta en votación esta indicación, fue rechazada por la unanimidad de los integrantes de la Comisión, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín.

La indicación número 130, del Honorable Senador señor Montes, sugiere agregar un número nuevo al artículo 2º, cuyo propósito es eliminar el inciso primero del artículo 20 de la ley Nº 19.884.

El inciso primero del artículo 20 prescribe que los aportes que no tengan el carácter de anónimos o reservados de conformidad con lo establecido por los artículos 17 y 18, serán públicos.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó esta indicación. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

La indicación número 131, del Honorable Senador señor Horvath, sustituye el mencionado inciso primero del artículo 20, por el siguiente:

“Artículo 20.- Los aportes que no tengan el carácter de anónimos en conformidad a lo establecido por la ley, serán públicos.”.”.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó esta indicación. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

A continuación, se trató la indicación número 132, del Honorable Senador señor Horvath, que propone incorporar al artículo 2º, un numeral nuevo que introduce diversas modificaciones al artículo 21 de la ley Nº 19.884.

En lo que interesa a este informe el mencionado artículo 21 establece, en su inciso primero, que tendrán el carácter de públicos los aportes mensuales que reciban los partidos políticos fuera del período señalado en el artículo 3º, cuando éstos sean de un monto igual o superior a las cien unidades de fomento por cada aportante.

Agrega, en su inciso segundo, que los aportes mensuales cuyo importe, por aportante, sea superior a veinte unidades de fomento e inferior a cien unidades de fomento tendrán el carácter de reservados, y se aplicará a su respecto lo previsto en el artículo 19, debiendo el Servicio, para estos efectos, hacer las transferencias en las cuentas que indiquen los respectivos tesoreros de los partidos políticos.

La referida indicación número 132, propone realizar dos modificaciones al artículo 21. Ellas son las siguientes:

a) Reemplazar en el inciso primero la expresión “cien unidades de fomento” por “ciento cincuenta unidades de fomento”.

b) Sustituir el inciso segundo por el que sigue:

“Los aportes mensuales, cuyo importe, por aportante, sea inferior a cincuenta unidades de fomento, podrán tener, a solicitud del aportante, el carácter de anónimo y se aplicara a su respecto lo previsto en el artículo 19, debiendo el Servicio, para estos efectos, hacer las trasferencias en las cuentas que indiquen los respectivos tesoreros de los partidos políticos.”.”.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó esta indicación. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

Seguidamente, la indicación número 133, del Honorable Senador señor Horvath, propone reemplazar en el inciso primero del artículo 21 bis el vocablo “cien” por “cincuenta”.”.

El inciso primero de dicho artículo prescribe que los aportes que reciban los institutos de formación política inscritos por los partidos políticos ante el Servicio Electoral, serán públicos, siempre que excedan de cien unidades de fomento mensuales por cada aportante.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó esta indicación. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

Número 5)

Este numeral reemplaza el artículo 24 de la ley N° 19.884.

El actual artículo 24 de la indicada ley, se ubica en su párrafo 4º que se refiere a las prohibiciones. Impide los aportes de campaña electoral provenientes de personas naturales o jurídicas extranjeras, con excepción de los efectuados por extranjeros habilitados legalmente para ejercer en Chile el derecho a sufragio.

La norma aprobada en general sustituye esta disposición por la siguiente:

“Artículo 24.- Prohíbense los aportes de campaña electoral provenientes de personas naturales extranjeras, con excepción de los efectuados por extranjeros habilitados legalmente para ejercer en Chile el derecho a sufragio. Prohíbense también los aportes de campaña electoral provenientes de toda persona jurídica, a excepción del Fisco, de acuerdo a lo dispuesto en el párrafo 2° del Título II de esta ley, y de los partidos políticos.”.

En relación con esta disposición se presentaron las indicaciones números 134 a 137.

Las indicaciones número 134, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, número 135, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y número 136, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, suprimen este número.

La Comisión, por mayoría de votos, aprobó esta indicación. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Se abstuvo el Honorable Senador señor De Urresti.

La indicación número 137, del Honorable Senador señor Ossandón, sustituye este número por el siguiente:

“5) Reemplázase el artículo 24 por el siguiente:

“Artículo 24.- Prohíbense los aportes de campaña electoral provenientes de personas naturales extranjeras, con excepción de los efectuados por extranjeros habilitados legalmente para ejercer en Chile el derecho a sufragio. Prohíbense también los aportes anónimos de campaña electoral provenientes de toda persona jurídica, a excepción de aquellas que publiquen el origen, destino y los montos o especie de los aportes, incluidos los partidos políticos y el Fisco, de acuerdo a lo dispuesto en el párrafo 2º del Título II de esta ley. El Ministerio del Interior podrá definir la forma y oportunidad en la que dicha publicación sea realizada.”.”.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, declaró inadmisible esta indicación pues otorga nuevas atribuciones a un órgano público, como es el Ministerio del Interior y Seguridad Pública, materia que corresponde a la iniciativa exclusiva de S.E. el Presidente de la República, tal como dispone el número 2º del inciso cuarto del artículo 65 de la Constitución Política de la República.

A continuación, la indicación número 138, del Honorable Senador señor Montes, propone un número nuevo que agrega un inciso final al artículo 41 de la ley Nº 19.884.

En lo que interesa a este informe, el mencionado artículo 41 prescribe que dentro de los treinta días siguientes a una elección presidencial, parlamentaria o municipal, los Administradores Generales Electorales deberán presentar al Director del Servicio Electoral una cuenta general de los ingresos y gastos electorales directamente recibidos y efectuados por el respectivo partido político.

Asimismo, y conjuntamente, deberán presentar una cuenta general de los ingresos y gastos electorales de la totalidad de los candidatos inscritos en representación del partido político correspondiente, que hubieren sido enviados por los Administradores Electorales.

La cuenta general de ingresos y gastos electorales deberá, además, precisar el origen de la totalidad de los ingresos y el destino de todos los gastos del partido político y candidatos respectivos, de conformidad con las anotaciones consignadas, cualquiera sea la fecha de contratación o pago efectivo de dichos gastos, y aun cuando se encuentren pendientes de pago.

Agrega que cuando resulte inaplicable lo establecido en el inciso primero por tratarse de candidatos independientes, corresponderá a sus Administradores Electorales presentar la cuenta general de ingresos y gastos electorales.

Finalmente, establece que la presentación de cuentas referidas en los incisos precedentes, podrá realizarse en forma electrónica, vía internet, para lo cual el Servicio Electoral oportunamente establecerá el sistema a aplicar.

La indicación número 138 agrega a esta norma el siguiente inciso final al artículo 41:

“Además, de la cuenta general referida, los administradores respectivos, deberán entregar cuentas parciales por cada de treinta días que dure la campaña, las que se sujetarán a las mismas disposiciones precedentes y deberán ser presentadas en los quince días siguientes a la conclusión de cada uno de dichos períodos. Dicha obligación no regirá para el último lapso de treinta días, que sólo deberá incluirse en la cuenta general.”.”.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó esta indicación. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín. Votó a favor el Honorable Senador señor De Urresti.

Seguidamente, la indicación número 139, del Honorable Senador señor Montes, añade a la ley Nº 19. 884, el siguiente precepto, nuevo:

"Artículo 48.- Los candidatos a cargos de representación popular deberán presentar junto con la declaración respectiva, una declaración jurada ante el Servicio Electoral, con un presupuesto que contenga los montos aproximados de ingresos y gastos que utilizará en su campaña y una estimación de los principales ítems o componentes de ambos.

Los candidatos podrán modificar esta declaración con ocasión de la entrega de cuentas parciales a que se refiere en inciso final del artículo 41°. Esta información estará disponible para el público en todo momento durante el proceso electoral. Para ello, el Director del Servicio Electoral publicará en el sitio internet de la entidad la referida información que proporcionen los candidatos, dentro de los diez días siguientes a su presentación.”.”.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, declaró inadmisible esta indicación pues otorga nuevas atribuciones a un órgano público, como es el Servicio Electoral, materia que corresponde a la iniciativa exclusiva de S.E. el Presidente de la República, tal como dispone el número 2º del inciso cuarto del artículo 65 de la Constitución Política de la República.

Este número pasa a ser número 1) del artículo 2º.

Número 7)

Mediante este número se agrega un artículo segundo transitorio, nuevo, pasando el actual artículo único transitorio, a ser artículo primero. Su texto es el siguiente:

“Artículo segundo.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y sólo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hayan sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a los que pertenezcan tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento por cada una de ellas.

Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.”.

En relación a este número se presentaron las indicaciones números 140, 141, 142 y 143 del boletín.

La indicación número 140, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, intercala, en el inciso primero del artículo propuesto, entre la coma (,) que sigue al guarismo “2029” y la preposición “en”, la siguiente frase: “y las elecciones de alcaldes, concejales y consejeros regionales que tengan lugar entre la primera y la última de las elecciones parlamentarias mencionadas,”.

La indicación número 141, del Honorable Senador señor Ossandón, reemplaza, en el mencionado inciso, la frase “las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hayan sido proclamadas electas”, por “los candidatos a diputados y a senadores mujeres, discapacitados o candidatos pertenecientes a una etnia indígena que hayan sido proclamados electos”.

Al iniciarse el estudio de estas indicaciones, se hizo presente que ellas inciden en materias que corresponden a la iniciativa exclusiva de S.E el Presidente de la República, toda vez que se relacionan con la utilización y destino de recursos públicos.

En consideración a lo anterior, el Presidente de la Comisión procedió a declararlas inadmisible, de conformidad a lo que establece el inciso tercero del 65 de la Ley Fundamental.

La indicación número 142, de la Honorable Senadora señora Goic, sustituye el inciso segundo del artículo 2º transitorio propuesto, por los siguientes:

“Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos deberán implementar programas de capacitación y formación política de mujeres candidatas, dentro del plazo de dos años contado desde la fecha de la respectiva elección.

El partido político que no implementare estos programas, o implementándolos, no los ejecutare, deberá restituir los recursos que hayan recibido con ocasión de lo dispuesto en el inciso primero.”.

Al iniciarse su estudio, la Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón expresó que la indicación dice relación con el empleo de los recursos derivados del incentivo para que las mujeres participen en elecciones parlamentarias.

Agregó que ella impone una obligación a los partidos políticos, quienes deberán emplear los recursos que se señalan en implementar programas de capacitación y formación política de mujeres candidatas. Además, aseveró, impone una sanción a los partidos que no cumplan con esa carga.

La Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera precisó que no se establece la forma de controlar la utilización de dichos recursos.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón admitió que no se establece quien lo controla, pero en el proyecto de ley de financiamiento de la política se determinará que es el Servel el llamado a fiscalizar lo planteado.

El Honorable Senador señor Espina estimó que se está legislando sobre una materia en que no se tiene conocimiento de quién estará facultado para controlar que se cumpla esta disposición. Por lo mismo, indicó que una norma de este tipo debiera estar considerada en un proyecto de ley distinto.

La Ministra señora Ximena Rincón expuso que la norma surge en el debate parlamentario producto de las decisiones de los partidos de llevar candidatas mujeres en aquellos lugares donde no son competitivas. A raíz de ello, se establece el incentivo, para que dicha definición sea en lugares donde tengan posibilidades de ser elegidas. Añadió que las mujeres solicitan que el premio esté enfocado en seguir incentivando la participación de las mujeres en política.

Destacó que existirá un triple control, en primer lugar la auditoría interna del partido político, la fiscalización del Servicio Electoral, y de determinarse el incumplimiento por este último, es el Consejo de Defensa del Estado quien deberá perseguir la restitución de los fondos entregados.

La Ministra Directora del Servicio Nacional de la Mujer, señora Claudia Pascual ratificó que las Honorables señoras Diputadas manifestaron que el incentivo por candidaturas electa de mujeres, debe ir encaminada a promover nuevos liderazgos y a fortalecer a las mujeres al interior de los partidos.

El Honorable Senador señor Larraín consignó que está de acuerdo con la norma, ya que incentiva a las mujeres a incorporarse en política. No obstante lo anterior, hizo presente que en el inciso primero de la indicación, circunscribe en exceso el objetivo al cual se pueden destinar los recursos. Destacó que la norma que proviene de la Cámara Baja es más amplia.

Agregó que el inciso segundo de la indicación señala: “El partido político que no implementare estos programas, o implementándolos, no los ejecutare”. Estimó que no existe diferencia entre los términos implementar y ejecutar.

Abogó por la idea de que en la ley se haga una mención a la facultad del Servel para fiscalizar el cumplimiento de la norma.

Concluido el debate sobre esta indicación, el señor Presidente de la Comisión la puso en votación.

La Comisión, por la unanimidad de sus miembros presentes, Honorables Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín, rechazó esta indicación.

Finalmente, la Comisión trató la indicación número 143, del Honorable Senador señor Ossandón, que reemplaza en el mencionado inciso la expresión “de las mujeres en política” por “en política de las personas mencionadas en el inciso anterior”.

El Presidente de la Comisión la declaró inadmisible pues ella está en directa relación con la indicación número 141. Al igual que aquella, incide en la distribución de recursos públicos, materia que el la Constitución Política reserva a la iniciativa exclusiva del Jefe de Estado.

Este número se consigna como nuevo número 2) del artículo 2º.

Número 8)

Finalmente, mediante este numeral, se añade un artículo tercero transitorio, nuevo, a la ley N° 19.884. Su texto es el siguiente

“Artículo tercero.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a senadoras y diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 unidades de fomento por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.”.

Respecto de este numeral se presentaron las indicaciones número 144 y 145.

La indicación número 144, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, reemplaza este artículo transitorio por el siguiente:

“Artículo tercero.- Para las elecciones parlamentarias, de 2017, 2021, 2025 y 2029, y de alcaldes, concejales, y consejeros regionales que tenga lugar entre la primera y la última de las elecciones parlamentarias mencionadas, las candidatas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 unidades de fomento por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.”.

Por su parte, la indicación número 145, del Honorable Senador señor Ossandón, intercala entre la expresión “candidatas a senadoras y diputadas” y la voz “tendrán” la frase “, así como los candidatos discapacitados o personas pertenecientes a alguna etnia indígena,”.

Al iniciarse el estudio de ambas indicaciones, el Honorable Senador señor Espina consultó cuál es el fundamento para que las candidatas mujeres tengan un reembolso adicional de sus gastos electorales.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón connotó que S.E. la señora Presidenta de la República decidió incorporar en la reforma al sistema electoral, un incentivo a la participación de las mujeres en política. Agregó que con ese mismo objetivo se contempla una disposición sobre el financiamiento de sus campañas.

Consignó que hay diversos estudios que dan cuenta de la dificultad de las mujeres de conseguir recursos para las campañas electorales. Agregó que esta norma tiene carácter transitorio. Finalmente, solicitó a la Comisión apoyar esta norma en los mismo términos en que fue aprobada por la Cámara de Diputados.

El Honorable Senador señor Larraín puntualizó que esta disposición tiene mucho sentido, ya que implica un incentivo a las candidatas mujeres. Agregó que este precepto promueve que se produzca la referida nivelación mediante incentivo. Consideró más discutible la norma transitoria que dice relación con las cuotas y su forma de implementación. Insistió en la idea que ella debiera ponerse en ejecución en forma gradual.

A continuación, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, hizo presente que ambas indicaciones eran inadmisibles toda vez que implican gastos públicos, materia que corresponde a la iniciativa exclusiva del Jefe de Estado, tal como lo dispone el inciso tercero del artículo 65 de la Constitución Política.

En concordancia con lo anterior, procedió a declararlas inadmisibles.

Este número pasa a ser el nuevo número 3) del artículo 2º.

Artículo 3°

Esta disposición introduce, en cuatro números, diversas modificaciones a la ley N° 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos.

-.-.-

Antes de tratar las indicaciones que se formularon a los números en que se divide este artículo, la Comisión trató la indicación número 146, del Honorable Senador señor Horvath, que modifica el artículo 3º de la Ley de Partidos Políticos.

Dicha disposición prescribe, en su inciso primero, que los partidos políticos existirán como tales cuando se hubieren constituido legalmente en a lo menos ocho de las Regiones en que se divide políticamente el país o en un mínimo de tres de ellas, siempre que estas últimas fueren geográficamente contiguas.

Agrega, en su inciso segundo que el ámbito de acción de los partidos políticos se circunscribirá, en lo relativo a las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2°, sólo a las Regiones donde estén legalmente constituidos.

La referida indicación agrega un número nuevo que intercala en el inciso primero del artículo 3° de la mencionada ley, a continuación de la locución “en que se divide políticamente el país”, y “o en un mínimo de tres” lo siguiente: “o en una de ellas, conforme al artículo 7° de esta ley”.”.

El asesor del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo González, aseveró que la indicación del Honorable Senador señor Horvath busca armonizar que el partido regional pueda existir como tal en una sola región y no como se exige actualmente.

Agregó que ella busca facilitar la formación de partidos políticos nuevos o emergentes. La indicación no es contradictoria con las presentadas por el Poder Ejecutivo.

El Honorable Senador señor Araya manifestó que lo que se propone es la creación de los partidos regionales, que no está actualmente recogida en la estructura de la Ley Orgánica Constitucional de Partidos Políticos. Solicitó que el Gobierno se pronuncie si en la nueva ley de partidos políticos anunciada en sesiones pasadas, se recoge la opción de que se constituyan partidos regionales.

El Honorable Senador señor Letelier destacó que esta discusión no constituye la idea matriz del proyecto de ley en estudio. Recomendó que este debate se realice en otro cuerpo legal. Añadió que la proliferación de partidos no ayuda a las estructuras democráticas permanentes de la sociedad.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón hizo presente que la indicación en discusión es de autoría de un Senador de la República, y la ley de partidos políticos es un proyecto que se presentará en el corto plazo a tramitación por el Gobierno.

El Honorable Senador señor Espina compartió lo expresado por la Ministra, señora Rincón. El proyecto de ley en estudio busca reemplazar el sistema electoral actual y originalmente no contenía normas relacionadas con los partidos políticos.

El Honorable Senador señor De Urresti precisó que si se aprueba la indicación se estarían debilitando los partidos políticos nacionales. Destacó que está por fortalecer a estos últimos.

Puesta en votación la admisibilidad de la indicación 146, fue declarada admisible con los votos favorables de los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. En contra lo hicieron los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

Puesta en votación la indicación número 146, fue rechazada por la unanimidad de los integrantes de la Comisión, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón connotó que está de acuerdo en la conformación de partidos regionales, a pesar de que es una norma que el Gobierno no respaldó en el primer trámite legislativo. Manifestó que sí se apoyaron las normas que dicen relación con el sistema electoral y con el porcentaje del electorado que requieren los partidos políticos para constituirse. Anunció su rechazo de las indicaciones números 147, 148 y 149.

Según se consignará posteriormente, la Comisión reabrió debate sobre la indicación número 146, la que, según se explicará, se dio por aprobada con modificaciones.

Número 1)

Este número del artículo 3º introduce dos enmiendas al artículo 6° de la ley de partidos políticos.

En lo que interesa a este informe, el inciso primero del mencionado artículo 6º señala que el partido político en formación podrá proceder a la afiliación de sus miembros, para lo cual dispondrá de un plazo de doscientos diez días. Será necesario que se afilie al partido un número de ciudadanos con derecho a sufragio equivalente, a lo menos, al 0,5 por ciento del electorado que hubiere sufragado en la última elección de Diputados en cada una de las Regiones donde esté constituyéndose, según el escrutinio general practicado por el Tribunal Calificador de Elecciones.

Letra a)

En esta letra se reemplaza, en el inciso primero de la mencionada disposición, la cifra “0,5” por el guarismo “0,25”.

Letra b)

Mediante esta letra se agrega en el inciso segundo, a continuación del punto aparte, que ha pasado a ser punto seguido, la siguiente oración: “Los notarios no podrán negarse a recibir la declaración a que hace referencia este artículo bajo circunstancia alguna y no podrán cobrar por este servicio.”.

En relación con la letra a) se formularon las indicaciones número 147, 148 y 149 del boletín.

Las indicaciones número 147, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, número 148, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y número 149, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, proponen eliminar esta letra.

Al iniciarse su estudio, el Honorable Senador señor Larraín señaló que el número de firmas que actualmente se exige para constituir un partido político son bastante modestas y para nada inalcanzables. Agregó que esta exigencia no ha sido lo que ha impedido la existencia de los partidos políticos. Enfatizó que rebajar el porcentaje viene a atomizar aún más la estructura política del país. Explicó que si se aprueba esta disposición se producirá una proliferación de partidos que no ayudará a la gobernabilidad del país.

Luego, el Honorable Senador señor Espina manifestó que para ser candidato independiente se requerirá del patrocinio de un número de ciudadanos igual o superior al 0,5 por ciento de aquellos que hubieren sufragado en el distrito electoral o en la circunscripción senatorial, de acuerdo con el escrutinio general realizado por el Tribunal Calificador de Elecciones. Agregó que para ser coherente con esa disposición debía mantenerse el porcentaje de 0,5 que se exige actualmente para la constitución de un partido político.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, dio por concluido el debate y sometió a votación las mencionadas indicaciones.

La Comisión, por mayoría de votos, rechazó las indicaciones números 147, 148 y 149. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Votaron por su aprobación los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

Finalmente, la Comisión por la unanimidad de sus miembros presentes, Honorables Senadores Araya, Espina y Harboe, acordó suprimir en la letra b) la frase “bajo circunstancia alguna”.

Al adoptar este acuerdo se tuvo presente que pueden presentarse situaciones de carácter excepcional que, por ejemplo, impliquen que una notaría esté impedida de funcionar, lo que justifica que un notario pueda negarse a recibir la declaración a que hace mención este artículo.

Para adoptar este acuerdo se tuvo presente lo dispuesto en el inciso final del artículo 121 del Reglamento del Senado.

Número 2)

En este numeral se sustituye el inciso primero del artículo 7° de la ley de partidos políticos.

El mencionado inciso prescribe que cumplidos los requisitos a que se refieren los artículos 5° y 6°, y reunido el número de afiliados a que alude este último artículo en a lo menos ocho de las Regiones en que se divide políticamente el país o en un mínimo de tres de ellas, siempre que fueren geográficamente contiguas, se solicitará al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos. La solicitud deberá ser firmada por el presidente y por el secretario del partido en formación.

El texto aprobado en general por el Senado sustituye esta norma por la siguiente.

“Artículo 7°.- Cumplidos los requisitos a que se refieren los artículos 5° y 6°, y reunido el número de afiliados a que alude este último artículo en una de las regiones en que se divide políticamente el país, se solicitará al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos. La solicitud deberá ser firmada por el presidente y por el secretario del partido en formación.”.

Respecto de esta disposición se formularon las indicaciones número 150, 151, y 152 del boletín.

Las indicaciones número 150, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, número 151, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y numera 152, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, que sugieren suprimir este número 2).

Al iniciarse el estudio de estas indicaciones, el Honorable Senador señor Larraín consignó que con el rechazo de la indicación del Honorable Senador señor Horvath, la número 146, el inciso primero, del artículo 3° de la Ley Orgánica Constitucional de Partidos Políticos, ha quedado de la siguiente manera: “Los partidos políticos existirán como tales cuando se hubieren constituido legalmente en a lo menos ocho de las Regiones en que se divide políticamente el país o en un mínimo de tres de ellas, siempre que estas últimas fueren geográficamente contiguas.” Agregó que de acuerdo a lo que dispone el artículo 7° del texto aprobado en general por el Senado, podría constituirse un partido político en una de las regiones en que se divide políticamente el país, lo que no es concordante con lo recientemente acordado por la Comisión. Atendido lo anterior, lo que corresponde es rechazar el artículo 7° antes mencionado.

Solicitó que de acuerdo a lo expresado, se aprueben las indicaciones número 150, 151 y 152.

La Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera sostuvo que con el rechazo de la indicación anterior no es posible considerar esta norma. El artículo 7° lo único que hace es proceder al registro del partido cuando existe. No le da la existencia legal de acuerdo a la norma previa. El artículo antes mencionado se refiere solo a la formalidad de la inscripción.

El Honorable Senador señor Araya remarcó que si uno da lectura a lo que prescriben los artículos 5 y 6 de la Ley Orgánica Constitucional de los Partidos Políticos, éstos se refieren a los requisitos formales de la constitución de los partidos políticos. Lo que permite el artículo 7° es que cumplido el número mínimo de afiliados en una región, se inicie el procedimiento formal sin necesidad de cumplir el mínimo de tres regiones contiguas, lo que no implica que el partido tendrá presencia nacional o supra regional. Consideró que no hay incongruencia con lo que previamente resolvió la Comisión.

El Honorable Senador señor Larraín insistió en que al rechazarse la indicación del Senador señor Horvath, el artículo 7° del texto aprobado en general por el Senado, es incompatible con lo que prescribe el artículo 3° de la Ley Orgánica Constitucional de los Partidos Políticos. En consideración a lo anterior, sostuvo, debe entenderse rechazado el artículo 7°. Como consecuencia de lo anterior, deben darse por aprobadas las indicaciones número 150, 151 y 152.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe manifestó que el artículo 7° del texto aprobado en general por el Senado no hace referencia al artículo 3°, sino al 5° y 6°.

La Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera apuntó que el artículo 3° establece la forma de constituirse de los partidos políticos, y para que tengan existencia legal deben cumplir con el requisito de estar constituidos en tres regiones contiguas o en ocho regiones discontinuas. Una vez presentada la escritura de constitución de un partido, en las tres u ocho regiones, el Servel procede a revisar y es en ese momento que el partido entra en una etapa de formación. Cuando cumple los requisitos de los artículos 5 y 6 se procede a la inscripción del partido en el Registro respectivo. Cuestión distinta es cuando empieza la ampliación del partido que ya existe.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe insistió en que el artículo 7° en discusión, no dice relación con el artículo 3°.

El Honorable Senador señor Espina advirtió que la contradicción es evidente. Para que exista el partido debe reunir el número de afiliados en tres regiones contiguas u ocho no contiguas. Por lo tanto, pretender que se constituya como tal reunido el número de afiliados en una sola región, carece de todo sentido.

El Honorable Senador señor Larraín señaló que cuando hay contradicción entre dos normas, la que contraría lo ya aprobado, se da por rechazada. En este caso, una norma exige que para que un partido pueda funcionar o existir deberá constituirse en tres regiones continuas u ocho discontinuas. Dicho precepto está siendo vulnerado por otro, que permitirá, la formación de un partido que reúna el número de afiliados que exige la ley en una sola región.

Planteó reserva de constitucionalidad de la disposición y la forma como se está procediendo en esta materia.

El Honorable Senador señor Espina estimó que la interpretación del Presidente de la Comisión es equivocada. Agregó que se ha producido una flagrante violación a la norma actual, ya que el eventual rechazo de las indicaciones 150, 151 y 152 contradice lo acordado por la Comisión en relación con la indicación del Honorable Senador señor Horvath.

El Honorable Senador señor De Urresti discrepó con lo expresado por el Honorable Senador señor Espina. Estimó que el Presidente de la Comisión ha dado una opinión válida.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe expresó que lo no puede ocurrir es que se imputen ilegalidades, o actitudes reñidas con la tradición. Reconoció que tiene una interpretación de las normas en cuestión y mantiene dicho criterio.

Puestas en votación las indicaciones números 150, 151 y 152, fueron rechazadas con los votos en contra de los Honorables Senadores señores Araya, de Urresti y Harboe. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe manifestó que el artículo 7°, que se entiende aprobado si se rechazan las indicaciones 150, 151 y 152, se refiere a inscripción y el artículo 3° a existencia legal de los partidos políticos. Precisó que ambos artículos tratan temas distintos.

No obstante lo anterior, reseñó que puede darse el caso que se solicite la inscripción de un partido político, habiendo reunido los requisitos establecidos en los artículos 5 y 6 de la Ley Orgánica Constitucional de los Partidos Políticos, y que el Servicio Electoral lo inscriba, pero el partido no tenga existencia legal de acuerdo al artículo 3°.

En vista de lo anterior, resulta necesario reabrir la discusión de la indicación número 146, de manera de configurar un texto del todo coherente.

El Honorable Senador señor Larraín consignó que no era partidario de reabrir la votación de la indicación número 146, ya que ella fue rechazada por la unanimidad de los integrantes de la Comisión. Sugirió que se debe revisar la votación de las indicaciones 150, 151 y 152.

Expuso que debe corregirse la votación del artículo 7°, porque ella es incoherente con la votación unánime de la indicación número 146.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón hizo presente que hay normas aprobadas que son incompatibles. Propuso que se revisen las votaciones de las indicaciones números 146, 150, 151 y 152 para lograr coherencia en el texto.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe solicitó, por aplicación del artículo 125 del Reglamento del Senado, la reapertura del debate.

Puesta en votación la reapertura del debate, fue aprobada con los votos favorables de los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. En contra lo hizo el Honorable Senador señor Espina. Se abstuvo el Honorable Senador señor Larraín.

El Honorable Senador señor Larraín fundamentó su voto señalando que hubo un error en la votación de la indicación número 146. Si se aplicaran los criterios reglamentarios, habría que revisar las indicaciones 150, 151 y 152, porque lo que aprobó la mayoría de la Comisión es incoherente con respecto a lo votado en la indicación 146.

Seguidamente, el señor Presidente de la Comisión puso nuevamente en discusión la indicación número 146.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe sostuvo que la indicación, de aprobarse, debe ser con enmiendas, ya que la idea que ella propone es que un partido político pueda constituirse en “al menos una región del país.”

En esta parte del debate, los representantes del Ejecutivo propusieron aprobar la indicación número 146, enmendada en los siguientes términos:

“…) Sustitúyese el inciso primero del artículo 3º por el siguiente:

“Artículo 3º.- Los partidos políticos existirán como tales cuando se hubieren constituido legalmente en al menos una de las regiones en que se divide políticamente el país.”.

Sometida a votación la indicación número 146, enmendada en los términos ya indicados, fue aprobada por mayoría de votos. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Votaron en contra los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

La norma aprobada se incorpora como nuevo número 1), del artículo 3º.

Número 4)

Este número modifica el artículo 42 de la Ley de Partidos Políticos.

Esa norma señala las causales por las que se puede disolver un partido político. Entre ellas destacan las siguientes: (1°) Por acuerdo de los afiliados, a proposición del Consejo General, de conformidad con el artículo 29; (2°) Por no alcanzar el cinco por ciento de los sufragios válidamente emitidos en una elección de Diputados, en cada una de a lo menos ocho Regiones o en cada una de a lo menos tres Regiones contiguas, en su caso; (3°) Por fusión con otro partido; (4°) Por haber disminuido el total de sus afiliados a una cifra inferior al cincuenta por ciento del número exigido por la ley para su constitución, en cada una de a lo menos ocho Regiones o en cada una de a lo menos tres Regiones contiguas, en su caso. El número mínimo de afiliados deberá actualizarse después de cada elección de Diputados; (5°) Por no haber constituido, dentro del plazo de seis meses contado desde la inscripción del partido, los organismos internos que se señalan en los artículos 24, 26, 27 y 28; (6°) En los casos previstos en los artículos 47 y 50, inciso segundo, de esta ley, y (7°) Por sentencia del Tribunal Constitucional que declare inconstitucional al partido político, de acuerdo con lo dispuesto en los artículos 19, número 15, inciso sexto y 82, número 7°, de la Constitución Política.

Agrega que, en caso de pacto electoral, y para los efectos previstos en el número 2° del inciso precedente, los votos obtenidos por los candidatos sólo favorecerán al partido político al cual éstos se encuentren afiliados.

Añade, en su inciso final, que no obstante, si un partido político incurriere en la situación prevista en el número 2° de este artículo en una o más Regiones, pero eligiere al menos cuatro parlamentarios, sean Diputados o Senadores, conservará su calidad de tal y podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2° en las mismas Regiones donde se encontraba legalmente constituido con anterioridad. Si incurriere en la situación prevista en el número 4° en una o más Regiones, pero mantuviere el mínimo de ellas exigido por la ley, conservará su calidad de tal, pero no podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2° en aquellas donde su número de afiliados hubiere disminuido en más de un cincuenta por ciento. El Director de Servicio Electoral anotará esta circunstancia al margen de la respectiva inscripción en el Registro de Partidos Políticos.

El texto aprobado en general por el Senado introduce dos modificaciones al artículo 42.

La primera, contenida en una letra a), sustituye el número 2° del artículo 42 por el siguiente:

“2°.- Por no alcanzar en la región en que está legalmente constituido el 2,5 por ciento de los sufragios válidamente emitidos en la última elección de diputados. En el caso de los partidos que se encuentren inscritos en más de una región, la disolución procederá cuando no hayan alcanzado el indicado umbral del 2,5 por ciento en más de la mitad de dichas regiones.”.

En su letra b) se reemplaza el inciso final por los siguientes:

“No obstante, si un partido político incurre en la situación prevista en el número 2° de este artículo, pero elige al menos dos parlamentarios, sean diputados o senadores, conservará su calidad de tal.

Si incurre en la situación prevista en el número 4° en una o más regiones, pero mantiene el mínimo de ellas exigido por la ley, conservará su calidad de tal, pero no podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2° en aquellas donde su número de afiliados haya disminuido en más del 50 por ciento. El Director del Servicio Electoral anotará esta circunstancia al margen de la respectiva inscripción en el Registro de Partidos Políticos.”.

En relación con este número se presentaron las indicaciones números 153, 154 y 155 del boletín.

Las indicaciones número 153, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela, número 154, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, y número 155, de los Honorables Senadores señores García Huidobro y Moreira, proponen eliminar este número del proyecto.

Al iniciarse el debate de estas indicaciones, el Honorable Senador señor Larraín advirtió que ha sido consistente en plantear la necesidad de que el sistema político y las inscripciones de candidatos o de listas, tengan un respaldo real en la ciudadanía. Agregó que uno de los efectos que tendrá la aplicación del sistema proporcional corregido en la elección de parlamentarios será la creación de un mayor número de partidos políticos.

Añadió que una de las exigencias que tiene la actual ley está contenida en el artículo 42 de la Ley Orgánica Constitucional de Partidos Políticos. Un partido se disuelve si en una elección de Diputados no alcanza el 5% de los sufragios válidamente emitidos. Precisó que en el texto aprobado en general por el Senado, dicho umbral desciende a 2,5, con lo que se facilita la mantención de partidos sin un respaldo ciudadano real.

Subrayó que la normativa vigente dispone que si no se alcanza el 5%, pero si elige 4 Diputados, conservará su calidad de partido. El texto que proviene de la Cámara, reduce a 2 el número de Diputados electos para que el partido subsista como tal.

Insistió que el texto aprobado en general no facilita la gobernabilidad del país. Ella, explicó, requiere de partidos robustos y de instituciones sólidas.

Finalmente, manifestó que hay que mantener niveles mínimos de adhesión ciudadana para poder subsistir como partido político.

El Honorable Senador señor Araya consignó que los partidos políticos tradicionales no dan respuestas adecuadas a la ciudadanía, prueba de ello lo constituye la baja permanente en las encuestas. Enfatizó que han surgido movimientos regionales que representan un interés común y que agrupan a los ciudadanos y que no pueden participar porque se encuentran con los límites establecidos en la ley antes mencionada. Precisó que el texto aprobado en general por el Senado abre la posibilidad de que dichos movimientos puedan inter intervenir formalmente en la actividad política.

El Honorable Senador señor Espina aseveró que el proyecto de ley busca cambiar el sistema binominal por uno proporcional. Agregó que las disposiciones en discusión están fuera de las ideas matrices, porque no dicen relación con el sistema proporcional.

Connotó que se está discutiendo el sistema de partidos porque se busca lograr que un sistema basado en grandes coaliciones, se transforme en otro que esté constituido por una gran proliferación de partidos políticos.

Recalcó que las cifras para constituir un partido político disminuyen considerablemente. Lo anterior, explicó, implicará que Chile tendrá una multiplicidad de partidos y todos ellos con financiamiento estatal.

Enfatizó que se le está provocando un daño al sistema, que el debate es irreversible, porque obedece a una decisión política ya tomada.

Luego, el Honorable Senador señor De Urresti manifestó que se ha llegado a esta instancia porque hay una incapacidad política de la Alianza de llegar a un acuerdo mayoritario. Señaló que no es partidario de la proliferación de partidos en la política. Consignó que no está de acuerdo con el artículo en discusión. Consideró que dicha norma ha sido improvisada.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón sostuvo que lo que se está votando es fruto de un esfuerzo al que se arribó con los que estuvieron dispuestos a suscribir el término del sistema electoral binominal. Consignó que en la ley para el fortalecimiento y transparencia de la democracia, los partidos políticos tendrán financiamiento solo en la medida que tengan representación.

El Honorable Senador señor Larraín insistió que la disposición que a 2,5% el número de firmas para constituir partidos políticos, facilitará su proliferación. Compartió lo señalado por el Honorable Senador señor De Urresti, de que este no es un buen proyecto, pero es posible corregirlo.

Agregó que es cierto que no ha habido facilidades de la Alianza para cambiar el sistema, pero la propia Nueva Mayoría también ha puesto trabas en dicho sentido. Recordó la propuesta elaborada por el ex Ministro señor Boeninger, que fue desahuciada por los propios partidos del conglomerado político del cual formaba parte.

Finalmente, hizo presente que el proyecto aprobado por la Cámara de Diputados rompe, en forma contundente, la igualdad proporcional del voto.

El señor Presidente de la Comisión recordó que durante meses el actual Gobierno buscó un acercamiento con los partidos de la oposición para concordar un texto. Se hicieron esfuerzos considerables pero ellos lamentablemente no se alcanzaron. Lo que corresponde ahora es resolver este asunto, para contribuir a la democratización de nuestras instituciones y a fortalecer el derecho de las personas a participar en la toma de decisiones.

Concluido el debate, el señor Presidente de la Comisión puso en votación las mencionadas indicaciones.

La Comisión, por la mayoría de sus integrantes, rechazó las indicaciones número 153, 154 y 155. Se pronunciaron en contra los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Votaron por su aprobación los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

El Honorable Senador señor Espina fundamentó su voto señalando que se han reducido considerablemente los requisitos para constituir partidos políticos. Expresó que resulta absurdo que se pueda constituir un partido político en la Región Metropolitana con 6.600 personas. Reiteró que su proliferación terminará erosionando el sistema democrático. Cuando se disminuyen los requisitos para disolver los partidos políticos, subsistirán aquellos que no tienen representación popular.

Agregó que no es efectivo que el sector al que representa no haya formulado una propuesta para reemplazar el sistema binominal. Recordó que junto a los Honorables Senadores señores Walker, don Patricio; Rossi y Chahuán, presentó, el día 12 de marzo del 2014, una iniciativa en este sentido. Recalcó que en ella se aumenta a 134 el número de Diputados y a 44 el de Senadores.

Insistió que el sistema que se construyó en la Cámara de Diputados no es proporcional, porque hay distritos, como el de Arica, que elige 3 Diputados con 222.000 habitantes y Atacama con menos habitantes, elige 5 Diputados. Lo anterior, reiteró, obstaculiza la proporcionalidad del sistema.

Formuló reserva de constitucionalidad respecto a los artículos relacionados con la Ley Orgánica de Partidos Políticos porque no forman parte de las ideas matrices del proyecto de ley en discusión.

Finalmente, remarcó que la aprobación del proyecto de ley significará la atomización del sistema electoral chileno, el debilitamiento de nuestra democracia, y la construcción de un sistema impuesto por una mayoría transitoria.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe fundamentó su voto señalando que se ha planteado la inconveniencia de la proliferación de partidos políticos como elemento provocador de una eventual falta de gobernabilidad futura. Hizo presente que lo que se intenta esconder es una crisis profunda del actual sistema de partidos. Agregó que éstos subsisten porque tienen las herramientas jurídicas para poder establecer diferencias vergonzosas al momento de presentar candidaturas parlamentarias. Enfatizó que resulta muy difícil a un independiente tener la posibilidad de llegar al Congreso Nacional o a una alcaldía.

Sostuvo que la actual la arquitectura electoral está hecha para que los partidos políticos tengan un conjunto de beneficios. A pesar de lo anterior, los partidos se han ido dividiendo, han formado movimientos. No se sabe quién financia dichos movimientos, cuáles son sus estructuras de representación interna, cómo se adoptan las decisiones, etc. Recalcó que lo que se quiere es que ellos se incorporen dentro del proceso y se regulen como partidos.

Criticó el carácter centralista de los partidos, ya que son los Consejos Generales quienes toman las decisiones.

Hizo presente que son muy escasas las posibilidades de que un Parlamento democráticamente elegido reforme los sistemas de elección, porque los parlamentarios son incumbentes.

Abogó por un sistema electoral más participativo, más democrático y más inclusivo.

Concluyó reiterando que la fragmentación de los partidos políticos no es consecuencia de la modificación legal, sino que de la falta de representatividad y de transparencia de los mismos.

-.-.-

A continuación, la Comisión consideró las indicaciones números 156 y 157 del boletín.

La indicación número 156, de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín, para consultar un ARTÍCULO nuevo, mediante el cual introduce seis modificaciones a la ley Nº 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, en el siguiente sentido:

Mediante su número 1) sustituye el inciso segundo del artículo 7° por el siguiente:

“En la elección primaria para la nominación de candidatos a los cargos de Parlamentarios, para cada territorio electoral, los partidos políticos podrán participar:

a) En forma individual, sin haber suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos.

b) En forma individual, habiendo suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos dentro del pacto.

c) En conjunto con otros partidos con los cuales ha suscrito un pacto electoral, y con el objeto de determinar la totalidad de los candidatos de dicho pacto.”.

Cabe recordar que el mencionado inciso actualmente establece que “en la elección primaria para la nominación de candidatos a los cargos de Parlamentarios, para cada territorio electoral, los partidos políticos podrán participar:

a) En forma individual, sin haber suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar sus dos candidatos.

b) En forma individual, habiendo suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar su propio candidato dentro del pacto.

c) En conjunto con otros partidos con los cuales ha suscrito un pacto electoral, y con el objeto de determinar los dos candidatos de dicho pacto.”.

El número 2) de esta indicación sustituye el artículo 11 de la ley Nº 20.640.

Dicho precepto establece que será requisito para participar en las elecciones primarias que el partido político o pacto electoral declare, al menos, un número superior de candidatos a los cargos a definir.

La indicación de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín reemplaza este precepto por el siguiente:

“Artículo 11.-Será requisito para participar en las elecciones primarias para los cargos de Presidente de la República y de Alcalde que el partido político o pacto electoral declare, al menos, un número superior de candidatos a los cargos a definir.

En el caso de las elecciones primarias parlamentarias, cuando los partidos políticos participen de la forma señalada en la letra c) del inciso segundo del artículo 7, deberán presentar para cada territorio electoral un número de candidatos superior al máximo señalado en el inciso primero del artículo 4 de la ley N° 18.700.”.

El número 3) de la indicación número 156 reemplaza el inciso primero del artículo 16 de la ley Nº 20.640.

El referido artículo prescribe que junto con cada declaración de candidatura, el partido político o el pacto electoral deberán adjuntar una norma para determinar el padrón electoral que se señala en el artículo 20, que podrá ser diferente según se trate de elecciones presidenciales, parlamentarias o municipales.

En su inciso segundo señala que los partidos políticos cuyos estatutos dispongan medidas de acción afirmativa procederán conforme a ellas al seleccionar sus candidaturas para las elecciones primarias.

Los Honorables Senadores señores Espina y Larraín proponen remplazar este precepto por el siguiente:

“Artículo 16.- Junto con cada declaración de candidatura, el partido político o el pacto electoral deberá adjuntar una norma para determinar el padrón electoral que se señala en el artículo 20, que podrá ser diferente según se trate de elecciones presidenciales, parlamentarias o municipales. Adicionalmente cuando el partido político participe de la forma señalada en las letras a) o b) del inciso segundo del Artículo 7, deberá señalar para cada territorio electoral el número de cargos que serán determinados como nominados por medio de la elección primaria, número que sumado al de otros partidos integrantes del pacto cuando corresponda, deberá ser en todo caso no superior al máximo señalado en el inciso primero del artículo 4 de la ley N° 18.700.”.

A continuación, en el número 4) de la indicación número 156, los mencionados Honorables Senadores sugieren incorporar a la ley Nº 20. 640 el siguiente artículo 16 bis nuevo:

“Artículo 16 bis.- De la totalidad de declaraciones de candidaturas parlamentarias con ocasión de las elecciones primarias, declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. La infracción de los señalado precedentemente acarreará el rechazo, por parte del Servicio Electoral, de todas la candidaturas declaradas a cargos parlamentarios para las elecciones primarias del partido que no haya cumplido con este requisito.”.

En el número 5) de la indicación 156, se propone reemplazar el inciso segundo del artículo 30 de la ley Nº 20.640.

Dicho precepto establece que resultará nominada para la elección definitiva, en el caso de las elecciones Presidenciales o de Alcalde, aquella o aquellas candidaturas que hubieren obtenido la mayor votación individual.

Su inciso segundo señala que en el caso de las elecciones parlamentarias, será elegida la o las mayores votaciones individuales, según corresponda

Este último inciso se reemplaza por el siguiente:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen de la forma señalada en las letras a) o b) del inciso segundo del artículo 7, serán nominados como candidatos para la elección definitiva en cada territorio electoral, las mayores votaciones individuales hasta completar el número de cargos definido en la declaración de candidaturas conforme al inciso primero del artículo 16.”.

El número 6) de esta indicación propone incorporar al mencionado artículo 30 el siguiente inciso final:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen en pacto electoral de la forma señalada en la letra c) del inciso segundo del Artículo 7, los candidatos nominados para la elección definitiva en cada territorio electoral, serán determinados conforme el procedimiento señalado en el artículo 109 bis de la ley N° 18.700, considerando para estos efectos que constituyen una lista los candidatos de un mismo partido y sus candidaturas independientes asociadas.”.”.

Al iniciarse su estudio, el señor Presidente de la Comisión sugirió analizar en forma separada cada uno de los números en que se divide esta indicación.

En consecuencia, sometió a discusión su número 1).

El Honorable Senador señor Larraín manifestó que la actual ley Nº 20.640, que establece el Sistema de Elecciones Primarias para la Nominación de Candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, está redactada sobre la base del sistema binominal, por lo tanto, lo que se busca con la indicación es adecuar esta normativa a los cambios que propone este proyecto de ley.

El asesor del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo González, señaló que las letras a), b) y c) del número 1), efectivamente readecúan el artículo 7º de la ley 20.640 al cambio del sistema binominal.

El Honorable Senador señor Espina preguntó qué ocurre en una elección parlamentaria en que un partido político lleva 3 candidatos, pero se resuelve hacer primaria respecto de uno de ellos. En relación con este punto, se mostró partidario de flexibilizar el sistema.

El Honorable Senador señor Felipe Harboe consultó si el sistema que se propone consiste en permitir que puedan algunos de los candidatos ir a primarias y otros no. Propuso que en la letra a) de la indicación se elimine la expresión “uno o más”, con la finalidad de evitar arbitrariedades.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, consideró adecuada la indicación propuesta por los Honorables Senadores señores Espina y Larraín. Hizo presente que hoy en día las primarias son voluntarias, y su definición está entregada a los consejos generales de los partidos políticos.

El Honorable Senador señor Larraín connotó que la primaria no tiene que ser para todos los cupos a llenar. Se mostró partidario de flexibilizar el mecanismo. Remarcó que no eliminaría la expresión “uno o más” porque cumple con el objetivo planteado de otorgar flexibilidad.

El Honorable Senador señor Araya indicó que el punto de discusión no es cómo se hacen las primarias, sino que solo viene adecuar la normativa vigente al cambio del sistema electoral.

El asesor del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo González enfatizó que el actual artículo 10 de la Ley Nº 20.640, refuerza la voluntariedad de las primarias. Dicha disposición, recordó, le permite a cada partido someter a primarias solo algunos de los cupos.

Concluido el debate, la Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, aprobó el número 1) de la indicación número 156.

N° 2)

El asesor del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo González, manifestó que el artículo 11 de la ley N° 20.640 es aplicable a lo ya aprobado.

El asesor del Honorable Senador señor Espina, señor Cristián Pertuzé manifestó que la indicación que reemplaza el artículo 11 de la ley antes mencionada, pretende mantener que, en primarias, la cantidad de candidatos sea mayor a los cargos a elegir.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe señaló que cuando los partidos políticos voluntariamente se someten a una elección primaria es para dirimir las diferencias que existen cuando hay más candidatos que el número de cargos a elegir.

Sugirió que la modificación del inciso primero del artículo 11 puede inducir a error, porque la lógica enseña que siempre habrá primarias cuando hay más candidatos que cargos por llenar.

Los Honorables Senadores señores Espina y Larraín retiraron este número de la indicación número 156.

N° 3)

Seguidamente, los Honorables Senadores señores Espina y Larraín retiraron también este número de la indicación número 156.

N° 4)

Al iniciarse el estudio de este número de la indicación número 156, el Honorable Senador señor Espina señaló que la indicación dice relación con el efecto que se produce si se infringe la cuota.

El Honorable Senador señor Larraín manifestó que si en las primarias de un partido político hubo solo candidatos hombres, el partido deberá compensar en otros distritos con candidatas mujeres para cumplir con los mínimos establecidos.

El Honorable Senador señor Espina consultó si la segunda parte de la indicación, que se refiere a la sanción en caso de incumplimiento de la cuota, está contemplada en otra norma.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe respondió que la letra b) del nuevo artículo 17 de la ley Nº 18.700, regula esta materia.

Puesto en votación el número 4) de la indicación 156, fue rechazada con los votos en contra de los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Por su aprobación votaron los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

Nº s 5) y 6)

Al iniciarse su estudio, el Honorable Senador señor Larraín sostuvo que las indicaciones en estudio vienen a ajustar la forma en que se resuelve la nueva redacción del artículo 7° de la ley Nº 20.640.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe manifestó su duda respecto a las indicaciones retiradas y la mención que hace el número 5) de esta indicación al inciso primero del artículo 16 de la ley antes citada.

El asesor del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo González aseveró que el inciso primero del artículo 16 no se modifica.

El Honorable Senador señor Espina solicitó la opinión del Servicio Electoral respecto a la redacción del número 5) de la indicación 156, ya que se puede interpretar que al hablar de mayores votaciones individuales, se esté refiriendo a candidatos que han perdido en una primaria.

La Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera connotó que no advierte la dificultad, porque en ella se establece el sistema de votación individual hasta completar el número de cargos definidos en la declaración de candidaturas, conforme al inciso primero del artículo 16 de la Ley de Primarias. Precisó que no corresponde a la disposición de declaración general que se aplica 90 días previos a la elección.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe enfatizó que lo que despeja la duda es la referencia que se hace al inciso primero del artículo 16.

Consultó si la norma vigente es más clara que la que se propone.

El experto electoral y asesor del Honorable Senador señor Espina, señor Tomás Duval advirtió que el número 5 de la indicación 156 se entiende si se relaciona con el número 6 de la misma indicación.

Agregó que puede que al interior de un pacto, los partidos políticos tengan distintas votaciones, y no necesariamente la primera mayoría individual resulte elegida.

El asesor del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo González hizo presente que el Poder Ejecutivo respalda esta parte de la indicación, en el sentido de que corresponde a una adecuación a la modificación anterior, cuando se aprobó que en las primarias se elijan cupos plurinominales. También debe entenderse relacionada con los artículos 10 y 13 de la Ley de Primarias que establecen que es el partido el que determina cuántos cupos se ponen en disputa en la primaria.

La Comisión, por la unanimidad de sus integrantes, Honorables Senadores señores Araya, De Urresti, Espina, Harboe y Larraín, aprobó sin enmiendas los números 5) y 6) de la indicación número 156.

A continuación, la indicación número 157, de los Honorables Senadores señoras Allende, Goic, Muñoz y Pérez San Martín y señor Harboe, propone agregar un ARTÍCULO nuevo a este proyecto, del siguiente tenor:

“Artículo ….- Incorpórase a la ley N° 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, el siguiente artículo transitorio, nuevo:

“Artículo transitorio.- El partido político que decidiere someterse al sistema de elecciones primarias contemplado en el artículo 3º y siguientes de la presente para los períodos electorales parlamentarios de los años 2017, 2021, 2025 y 2029, solo podrá someter a dicho procedimiento hasta un cuarenta por ciento del total de candidaturas a diputado o senador que este pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral.”.”.

Al iniciarse el debate de esta indicación, el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, recordó que ella se relacionaba con la indicación número 6 que previamente ya había aprobado la Comisión. Añadió que se trata de una disposición de carácter transitorio que es perfectamente compatible con la idea de garantizar la participación de la mujer en política y con el principio de la igualdad de géneros.

El Honorable Senador señor Larraín aseveró que la indicación restringe la libertad de los partidos políticos para tomar decisiones por medio de elecciones primarias y afecta la igualdad en materia de designación de candidatos y genera una discriminación arbitraria.

Advirtió que, si se aprueba la indicación, formula reserva de constitucionalidad sobre su contenido.

El Honorable Senador señor Espina destacó que la indicación no solo discrimina arbitrariamente, sino que constituye un flagrante atentado a la participación ciudadana en las elecciones. Remarcó que con ella se impide que los partidos políticos, de manera autónoma, resuelvan hacer primarias donde ellos lo estimen conveniente.

El Presidente de la Comisión, discrepó de este planteamiento y sometió a votación la indicación número 157.

La Comisión, por mayoría de votos, aprobó esta indicación. Se pronunciaron a favor los Honorables Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe. Votaron en contra los Honorables Senadores señores Espina y Larraín.

La Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera precisó que las cuotas dicen relación con la declaración de candidaturas para la elección definitiva. En el proyecto de ley no está contemplado aplicar las cuotas en las primarias, por lo tanto, los candidatos que resulten electos por el TRICEL en primarias, pasan por derecho propio al registro de candidaturas. Estos últimos no pueden ser considerados dentro del porcentaje que debe cumplirse para efectos de cuota.

El Honorable Senador señor Larraín manifestó que en el análisis hecho por la señora Subdirectora, no se está considerando el valor que tienen las primarias. Agregó que si hay primarias, y a partir de éstas se altera la proporción de candidatos, porque la ciudadanía así lo determinó, en la declaración deberían considerarse aquellos distritos y circunscripciones que no incluyeron primarias para cumplir la cuota.

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Finalmente, la Comisión conoció las indicaciones número 158 y 159.

La indicación número 158, del Honorable Senador señor De Urresti, propone introducir las siguientes enmiendas a la Constitución Política de la República:

1. Reemplázase el artículo 4º, por el siguiente:

"Artículo 4º.- El Estado reconoce y garantiza el ejercicio de los derechos colectivos de los pueblos indígenas, su representación política y su participación efectiva en las decisiones que los distintos órganos de la Administración adopten referidas a sus derechos colectivos.".

2. Sustitúyese el inciso primero del artículo 47 por el siguiente:

"Artículo 47.- La Cámara de Diputados está integrada por miembros elegidos en votación directa por los distritos electorales que establezca la ley orgánica constitucional respectiva. A estos integrantes se sumarán los miembros que serán elegidos por los pueblos indígenas en elecciones simultáneas a las parlamentarias, de conformidad a lo dispuesto en la ley orgánica constitucional respectiva.”.

3. Agrégase el siguiente inciso segundo, nuevo, al artículo 48:

"Para ser elegido diputado representante de los pueblos indígenas se deberá además acreditar ser parte del pueblo indígena que se representa según lo disponga la correspondiente ley orgánica constitucional".

4. Reemplázase el inciso primero del artículo 49 por el siguiente:

"Artículo 49.- El Senado se compone de miembros elegidos en votación directa por circunscripciones senatoriales. A estos miembros se sumarán los senadores que serán electos por los pueblos indígenas en elecciones simultáneas a las parlamentarias, de conformidad a lo dispuesto en la ley orgánica constitucional respectiva.”.

5. Agrégase el siguiente inciso segundo nuevo al artículo 50:

"Para ser elegido senador representante de los pueblos indígenas se deberá además acreditar ser parte del pueblo indígena que se representa, según lo disponga la ley orgánica constitucional respectiva.".

6. Reemplázase el inciso final del artículo 51 por el siguiente:

"En caso de vacancia de un senador o diputado representante de los pueblos indígenas se realizará una elección complementaria.".

A continuación, la indicación número 159, del Honorable Senador señor Ossandón, incorpora las siguientes modificaciones a la Constitución Política de la República:

1. Agrégase el siguiente inciso segundo nuevo al artículo 47:

“Los Diputados no podrán ser reelectos por más de tres períodos consecutivos.”.

2. Incorpórase el siguiente inciso tercero al artículo 49:

“Los Senadores no podrán ser reelectos por más dos períodos consecutivos.”.

Ambas indicaciones fueron declaradas inadmisibles por el Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Harboe, dado que no se pueden presentar conjuntamente proyectos de ley y de reforma constitucional, tal como lo dispone el artículo 15 de la Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional.

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Al concluir el análisis de las indicaciones, el Honorable Senador señor Larraín insistió en la necesidad de implementar gradualmente las reglas que fijan las cuotas de candidatos hombres y mujeres, con el objetivo de que sea viable su puesta en práctica.

Asimismo, el Honorable Senador señor De Urresti señaló que el Ejecutivo había asumido la responsabilidad de hacer una propuesta en relación a la representación parlamentaria de los pueblos originarios.

Agregó que el proyecto de ley en estudio tiene un serio déficit en dicha materia.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón sostuvo que hay un compromiso del Gobierno en avanzar en la creación del Ministerio y del Consejo Indígena.

En relación a la gradualidad en la implementación de las cuotas, sostuvo que es incrédula respecto a la imposibilidad de buscar candidatas para el Parlamento.

Precisó que las disposiciones sobre cuotas supone un cambio cultural, y estimó que era injusto señalar que son las mujeres las que tienen que hacerse cargo de ciertas tareas y, como consecuencia de ello, es muy difícil lograr contar con un número suficiente para asumir otras.

Recalcó que todos deben hacer esfuerzos, y destacó que no está considerada la gradualidad en el proyecto de ley.

En relación a lo señalado por el Honorable Senador señor Espina, en que responsabiliza al Gobierno de la incapacidad de llegar a un acuerdo global para reemplazar el sistema electoral, precisó que existen innumerables testimonios de los esfuerzos que hizo el Ejecutivo a dicho respecto.

Agregó que el proyecto de ley en discusión debe ser complementado, y para reforzar aquello se presentarán proyectos de ley encaminados a lograrlo, como por ejemplo aquél que robustece las atribuciones del Servicio Electoral.

Destacó que cuando se revisa el informe de auditoría a la democracia del PNUD, y se percata que uno de los temas que más reclama la ciudadanía es la falta de legitimidad del Parlamento, debe asumirse la tarea de enmendar el sistema electoral que nos rige, lo que trae aparejado un costo. Advirtió que el mismo engrandece a la democracia y a la República.

Agradeció el trabajo de la Comisión, y el esfuerzo de todos sus integrantes.

El Honorable Senador señor Espina lamentó que no se haya podido incorporar en el presente proyecto de ley la propuesta de su autoría que establecía las bases para la participación de los pueblos indígenas.

Recalcó que desconoce cómo se va financiar el proyecto de ley.

El Honorable Senador señor Larraín lamentó la poca disposición del Ejecutivo de ver con poco realismo la forma como se incorporan las mujeres en política y la creencia de que los cambios culturales se hacen por cambios legales.

Precisó que las candidatas son potentes, pero difíciles de conseguir. Advirtió que las cuotas se van a cumplir, pero no significa que se completen con candidatas reales. Agregó que los cambios culturales son paulatinos.

Manifestó que el hecho de que en la Cámara de Diputados no se haya llegado a acuerdo no le resta al Senado la capacidad de hacerlo. Lo que se ha producido es la limitación de la soberanía del Senado por razones políticas.

Agregó que el sentido del bicameralismo consiste en que hay instituciones que tienen responsabilidades propias.

Indicó que si no hay un acuerdo político en el Senado no es por la voluntad negativa de los Senadores de la Alianza que integran la Comisión, porque no ha sido así, sino que por responsabilidad del Gobierno.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón precisó que el acuerdo que se obtuvo en la Cámara fue un pacto político, que no tenía por objeto perjudicar a ciertos partidos por parte del Gobierno. La decisión de éste era lograr un acuerdo que permitiera cambiar el sistema electoral y para ello se conversó con todos presidentes de los partidos, pero no fue posible alcanzar un consenso con todos ellos.

El Presidente de la Comisión, Honorable Senador señor Felipe Harboe lamentó que no se haya podido llegar a un acuerdo más amplio.

Destacó que lo anterior no es responsabilidad ni del Gobierno, ni de los Senadores de la Alianza que integran esta Comisión.

Finalmente, agradeció la disposición de todos los integrantes de la Comisión para tramitar esta iniciativa, y por la voluntad de buscar puntos de encuentro, más allá de las diferencias.

MODIFICACIONES

En conformidad a los acuerdos adoptados precedentemente, la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento tiene el honor de proponer las siguientes enmiendas al texto del proyecto aprobado en general por el Honorable Senado:

Artículo 1°

Número 1)

Letra b)

Intercalar entre la palabra “respectivo.”, y la expresión “La infracción” la siguiente oración: “Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas.”.(Mayoría de votos. 3 x 2. Indicación número 6.)

Número 3)

Suprimirlo

(Mayoría de votos 3 x 1 x 1 abstención. Indicaciones números 14, 15 y 16).

Número 4)

Pasa a ser número 3.

Artículo 17

En el inciso tercero, sustituir la frase “reclamar de la resolución del Consejo del Servicio Electoral, éste” por “presentar la corrección, el Consejo del Servicio Electoral” (Artículo 121 del Reglamento del Senado. Unanimidad 4 x 0).

Número 5)

Suprimirlo

(Unanimidad 5 x 0. Indicación número 22).

A continuación, intercalar el siguiente número 4), nuevo:

“4) Agrégase al artículo 23 el siguiente inciso tercero nuevo:

“En el caso de un pacto electoral, el orden de precedencia de los partidos dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito, será el señalado por el pacto electoral en la declaración de candidaturas, y a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.”. (Unanimidad. 5 x 0. Indicación número 25).

Número 6)

Pasa a ser número 5)

Letra a)

Reemplazarla por la siguiente:

“a) Sustitúyese el inciso cuarto por el siguiente:

“El orden de precedencia de los candidatos de un partido y sus independientes asociados dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito, será el señalado por el partido en la declaración de candidaturas, y a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.”. (Mayoría 4 x 1 abstención. Indicación número 30).

Letra b)

Reemplazarla por la siguiente:

b) Sustitúyese en su inciso final la expresión “a fin de que” por “destinada a que” (Unanimidad. 4 x 0. Indicación número 31, y Mayoría de votos 3 x 1. Indicación número 32).

Número 7)

Letra a)

Suprimirla

(Mayoría de votos 4 x 1 abstención. Indicaciones números 33 y 34.)

Letra b)

Suprimirla

(Mayoría de votos 4 x 1 abstención. Indicaciones números 36, 37 y 38)

Número 8)

Suprimirlo

(Unanimidad 4 x 0. Indicaciones números 41, 42 y 43).

Número 9)

Suprimirlo

(Unanimidad 4 x 0. Indicaciones números 44, 45 y 46).

Número 10)

Suprimirlo

(Unanimidad. 4 x 0. Indicaciones números 47, 48 y 49).

Número 11)

Pasa a ser número 6), sin enmiendas.

Número 12)

Pasa a ser número 7), sin enmiendas.

Número 13)

Pasa a ser número 8).

Artículo 179

Agregar el siguiente inciso final, nuevo:

“El número de diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis”. (Artículo 121 del Reglamento del Senado. Unanimidad 4 x 0)

Número 14)

Pasa a ser número 9).

Letra b)

Sustituir el guarismo “9” por “8”. (Unanimidad 5 x 0. Artículo 121 del Reglamento. Texto aprobado por mayoría de votos 3 x 2.).

Inciso final

Suprimir la siguiente oración:

“En caso de producirse algún cambio en la distribución de diputados, el texto del artículo 179 de esta ley se entenderá modificado en lo pertinente, de pleno derecho y se aplicará en su forma y así corregida en la elección inmediatamente siguiente.”. (Artículo 121 del Reglamento del Senado. Unanimidad 4 x 0).

Número 15)

Pasa a ser número 10).

Inciso tercero

En la 3a circunscripción

Reemplazar el número “2” por “3”

(Mayoría de votos 3 x 2. Indicación número 90).

En la 7a circunscripción

Reemplazar el número “7” por “5”

(Mayoría de votos 3 x 2. Indicación número 90).

En la 12a circunscripción

Reemplazar el número “2” por “3”

(Mayoría de votos 3 x 2. Indicación número 90).

Número 16)

Pasa a ser número 11), sin enmiendas.

Número 17)

Pasa a ser número 12), sin enmiendas.

Número 18)

Pasa a ser número 13), sin enmiendas.

Número 19)

Pasa a ser número 14), sin enmiendas.

Artículo 2°

Número 1)

Suprimirlo

(Mayoría de votos. 4 x 1 abstención. Indicación número 106).

Número 2)

Eliminarlo.

(Mayoría de votos 4 x 1. Indicaciones números 112, 113 y 114).

Número 3)

Suprimirlo

(Mayoría de votos 4 x 1 abstención. Indicaciones números 115, 116 y 117).

Número 4)

Suprimirlo

(Mayoría de votos. 4 x 1 abstención. Indicación número 120 y Unanimidad 5 x 0. Indicaciones números 124 y 125).

Número 5)

Suprimirlo

(Mayoría de votos. 4 x 1 abstención. Indicaciones números 134, 135 y 136).

Número 6)

Pasa a ser número 1), sin enmiendas.

Número 7)

Pasa a ser número 2), sin enmiendas.

Número 8)

Pasa a ser número 3), sin enmiendas.

Artículo 3°

Incorporar el siguiente número 1), nuevo:

“1) Sustitúyese el inciso primero del artículo 3° por el siguiente:

“Artículo 3°.- Los partidos políticos existirán como tales cuando se hubieren constituido legalmente en al menos una de las regiones en que se divide políticamente el país.”.”. (Mayoría de votos. 3 x 2. Indicación número 146).

Número 1)

Pasa a ser número 2).

Letra b)

Suprimir la frase: “bajo circunstancia alguna”. (Artículo 121 del Reglamento del Senado. Unanimidad 3 x 0).

Número 2)

Pasa a ser número 3), sin enmiendas.

Número 3)

Pasa a ser número 4), sin enmiendas.

Número 4)

Pasa a ser número 5), sin enmiendas.

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A continuación, intercalar el siguiente artículo, nuevo:

“Artículo 4°- Modifícase la ley N° 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, en el siguiente sentido:

1) Sustitúyese el inciso segundo del artículo 7° por el siguiente:

“En la elección primaria para la nominación de candidatos a los cargos de Parlamentarios, para cada territorio electoral, los partidos políticos podrán participar:

a) En forma individual, sin haber suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos.

b) En forma individual, habiendo suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos dentro del pacto.

c) En conjunto con otros partidos con los cuales ha suscrito un pacto electoral, y con el objeto de determinar la totalidad de los candidatos de dicho pacto.”. (Unanimidad 5 x 0. Número 1) de la indicación número 156).

2) Reemplázase el inciso segundo del artículo 30 por el siguiente:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen de la forma señalada en las letras a) o b) del inciso segundo del artículo 7, serán nominados como candidatos para la elección definitiva en cada territorio electoral, las mayores votaciones individuales hasta completar el número de cargos definido en la declaración de candidaturas conforme al inciso primero del artículo 16.”. (Unanimidad 5 x 0. Número 5) de la indicación número 156).

3) Incorpórase al artículo 30 el siguiente inciso final:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen en pacto electoral de la forma señalada en la letra c) del inciso segundo del Artículo 7, los candidatos nominados para la elección definitiva en cada territorio electoral, serán determinados conforme el procedimiento señalado en el artículo 109 bis de la ley N° 18.700, considerando para estos efectos que constituyen una lista los candidatos de un mismo partido y sus candidaturas independientes asociadas.”. (Unanimidad 5 x 0. Número 6) de la indicación número 156).

4) Agrégase el siguiente artículo 3° transitorio.

“Artículo 3° transitorio.- El partido político que decidiere someterse al sistema de elecciones primarias contemplado en el artículo 3º y siguientes de la presente ley para los períodos electorales parlamentarios de los años 2017, 2021, 2025 y 2029, solo podrá someter a dicho procedimiento hasta un cuarenta por ciento del total de candidaturas a diputado o senador que este pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral.”.”. (Mayoría de votos. 3 x 2. Indicación número 157).

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Artículo 4°

Pasa a ser artículo 5°, sin enmiendas.

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TEXTO DEL PROYECTO

En virtud de la modificación anterior, el proyecto de ley queda como sigue:

PROYECTO DE LEY:

“Artículo 1°.- Modifícase la ley N° 18.700, orgánica constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, de la manera que a continuación se señala:

1) En el artículo 3° bis:

a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, pasando el actual inciso segundo a ser tercero:

“En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.”.

b) Intercálase el siguiente inciso quinto, nuevo, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.”.

c) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “que hubieren constituido un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

d) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “Se podrá dejar sin efecto un pacto electoral”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 4° por el siguiente:

“Artículo 4°.- En el caso de las declaraciones de candidaturas para la elección de diputados y senadores, los partidos políticos o pactos electorales podrán presentar en cada distrito o circunscripción un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción de que se trate.”.

3) Sustitúyese el artículo 17 por el siguiente:

“Artículo 17.- El Consejo del Servicio Electoral, dentro de los diez días siguientes a aquel en que venza el plazo para efectuar la declaración de candidaturas, deberá dictar una resolución que se notificará al correo electrónico que los partidos políticos y candidatos independientes deberán informar en el momento de la declaración, la que se pronunciará sobre:

a) La aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 25, 48 y 50 de la Constitución Política de la República, o que se encuentren en alguna de las situaciones previstas en su artículo 57. Asimismo, deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los párrafos 1° a 3° de este título.

b) La aceptación o rechazo de la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, declaradas por cada partido político, en conformidad a lo dispuesto en los incisos cuarto y quinto del artículo 3° bis. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con el porcentaje de sexos establecido en el inciso quinto de dicho artículo.

Los partidos políticos cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, sean rechazadas en conformidad a lo dispuesto en la letra b) de este artículo, podrán corregirlas ante el Servicio Electoral dentro de los cuatro días hábiles siguientes a la fecha del despacho del correo electrónico que notifica la resolución a que alude el inciso primero, con el fin de ajustarse al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso quinto del artículo 3° bis, ya sea retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas.

Dentro de los cinco días siguientes de vencido el plazo para presentar la corrección, el Consejo del Servicio Electoral dictará una nueva resolución aceptando o rechazando las declaraciones nuevas y rechazando o aceptando, según proceda, la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputados o a senadores, según corresponda, la que deberá ser publicada dentro de tercer día en el Diario Oficial. En tal oportunidad también se publicarán en el mismo medio la aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente.”.

4) Agrégase al artículo 23 el siguiente inciso tercero nuevo:

“En el caso de un pacto electoral, el orden de precedencia de los partidos dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito, será el señalado por el pacto electoral en la declaración de candidaturas, y a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.

5) En el artículo 24:

“a) Sustitúyese el inciso cuarto por el siguiente:

“El orden de precedencia de los candidatos de un partido y sus independientes asociados dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito, será el señalado por el partido en la declaración de candidaturas, y a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.”.

b) Sustitúyese en su inciso final la expresión “a fin de que” por “destinada a que”

6) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme a las reglas establecidas en el procedimiento que a continuación se detalla:

1.- El Tribunal Calificador de Elecciones determinará las preferencias emitidas a favor de cada lista y de cada uno de los candidatos que la integran.

2.- Se aplicará el sistema electoral de coeficiente D´Hondt, para lo cual se procederá de la siguiente manera:

a) Los votos de cada lista se dividirán por uno, dos, tres y así sucesivamente hasta la cantidad de cargos que corresponda elegir.

b) Los números que han resultado de estas divisiones se ordenarán en orden decreciente hasta el número correspondiente a la cantidad de cargos que se eligen en cada distrito electoral o circunscripción senatorial.

c) A cada lista o pacto electoral se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b).

3.- En el caso de las listas conformadas por un solo partido político, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará electos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada lista, de acuerdo al número de cargos que le correspondan a cada una de ellas, luego de aplicar las reglas descritas precedentemente.

4.- En el caso de los pactos electorales, se aplicarán las siguientes reglas para determinar cuántos escaños le corresponden a cada uno de ellos:

a) Se calculará el total de los votos de cada partido político o, en su caso, de la suma de cada partido político y las candidaturas independientes asociadas a ese partido.

b) Se dividirá por uno, dos, tres y así sucesivamente, hasta la cantidad de cargos asignados al pacto electoral.

c) A cada partido político o, en su caso, a cada partido y las candidaturas independientes asociadas a éste, se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b) precedente.

d) El Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada partido político o, en su caso, de cada partido, considerando las candidaturas independientes asociadas éste dentro de un pacto electoral, de acuerdo a los cupos obtenidos por cada uno de ellos.

En caso de empate entre candidatos de una misma lista, o entre candidatos de distintas listas que a su vez estén empatadas, el Tribunal Calificador de Elecciones procederá en audiencia pública a efectuar un sorteo entre ellos, y proclamará elegido al que salga favorecido.”.

7) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”.

8) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos, que elegirá 3 diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte, que elegirá 3 diputados.

3er distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal, que elegirá 5 diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen, que elegirá 5 diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela, que elegirá 7 diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué, que elegirá 8 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca, que elegirá 8 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú, que elegirá 8 diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia, que elegirá 7 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín y La Granja, que elegirá 8 diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén, que elegirá 6 diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana, que elegirá 7 diputados.

13° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo, que elegirá 5 diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué, San Pedro y Padre Hurtado, que elegirá 6 diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa, que elegirá 5 diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones, que elegirá 4 diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael, que elegirá 7 diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco, que elegirá 4 diputados.

19° distrito, constituido por las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ránquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel, que elegirá 5 diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana, que elegirá 8 diputados.

21er distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja, que elegirá 5 diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino, que elegirá 4 diputados.

23er distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén, que elegirá 7 diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco, que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos, que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena, que elegirá 5 diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel, que elegirá 3 diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica, que elegirá 3 diputados.”.

El número de diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis.”.

9) Agrégase el siguiente artículo 179 bis:

“Artículo 179 bis.- Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con el siguiente procedimiento:

a) Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consistirá en distribuir a prorrata los cargos entre los distritos electorales, de acuerdo a la fórmula dispuesta en el artículo 109 bis de esta ley.

b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 8 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al de la realización del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con aquel en que se celebran elecciones de diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.

d) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes.

Dentro de los cinco días siguientes a la publicación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral aplicó las letras a) y b) de este artículo.

Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de febrero del año de que se trate.”.

10) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 50 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

1a circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, 2 senadores.

2a circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, 2 senadores.

3a circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 3 senadores.

4a circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, 2 senadores.

5a circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, 3 senadores.

6a circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, 5 senadores.

7a circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 5 senadores.

8a circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, 3 senadores.

9a circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, 5 senadores.

10a circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, 5 senadores.

11a circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 5 senadores.

12a circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 3 senadores.

13a circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, 3 senadores.

14a circunscripción, constituida por la XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, 2 senadores.

15a circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 2 senadores.”.

11) Derógase el artículo 181.

12) Agrégase el siguiente artículo 23 transitorio:

“Artículo 23.- La regla especial del artículo 3° bis, inciso quinto, sólo tendrá aplicación en los procesos electorales parlamentarios de 2017, 2021, 2025 y 2029.”

13) Agrégase el siguiente artículo 24 transitorio:

“Artículo 24.- Para los efectos de completar la nueva integración del Senado de la República, en las elecciones parlamentarias que deben celebrarse en noviembre de 2017 corresponderá que se renueven completamente las circunscripciones que corresponden a regiones impares.

En el caso de las circunscripciones que corresponden a las regiones pares y Metropolitana, los parlamentarios elegidos en 2013 seguirán en sus funciones hasta completar su período de ocho años. En las elecciones de 2021, estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde.”.

14) Agrégase el siguiente artículo 25 transitorio:

“Artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.”.

Artículo 2°.- Modifícase la ley N°19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, de la manera que a continuación se señala:

1) Intercálase entre el artículo 58 y el artículo transitorio el siguiente epígrafe: “Disposiciones transitorias.”.

2) Agrégase el siguiente artículo segundo transitorio, pasando el actual artículo único transitorio, a ser Artículo primero:

“Artículo segundo.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y solo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hayan sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a los que pertenezcan tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento por cada una de ellas.

Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.”.

3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a senadoras y diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 unidades de fomento por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.”.

Artículo 3°.- Modifícase la ley N° 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos, de la manera que a continuación se señala:

“1) Sustitúyese el inciso primero del artículo 3° por el siguiente:

“Artículo 3°.- Los partidos políticos existirán como tales cuando se hubieren constituido legalmente en al menos una de las regiones en que se divide políticamente el país.”.”.

2) En el artículo 6°:

a) Sustitúyese en el inciso primero la cifra “0,5” por el guarismo “0,25”.

b) Agrégase en el inciso segundo, a continuación del punto aparte, que ha pasado a ser punto seguido, la siguiente oración: “Los notarios no podrán negarse a recibir la declaración a que hace referencia este artículo y no podrán cobrar por este servicio.”.

3) Sustitúyese el inciso primero del artículo 7° por el siguiente:

“Artículo 7°.- Cumplidos los requisitos a que se refieren los artículos 5° y 6°, y reunido el número de afiliados a que alude este último artículo en una de las regiones en que se divide políticamente el país, se solicitará al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos. La solicitud deberá ser firmada por el presidente y por el secretario del partido en formación.”.

4) En el artículo 26:

a) Suprímese en el literal d) la oración “, la aprobación de un pacto electoral en elecciones de Parlamentarios o su retiro del mismo, y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal”.

b) Incorpórase el siguiente literal e), pasando los actuales literales e) y f) a ser f) y g) respectivamente:

“e) aprobar un pacto electoral en las elecciones de parlamentarios o su retiro del mismo y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal;”.

5) En el artículo 42:

a) Sustitúyese su número 2° por el siguiente:

“2°.- Por no alcanzar en la región en que está legalmente constituido el 2,5 por ciento de los sufragios válidamente emitidos en la última elección de diputados. En el caso de los partidos que se encuentren inscritos en más de una región, la disolución procederá cuando no hayan alcanzado el indicado umbral del 2,5 por ciento en más de la mitad de dichas regiones.”.

b) Sustitúyese el inciso final por los siguientes incisos:

“No obstante, si un partido político incurre en la situación prevista en el número 2° de este artículo, pero elige al menos dos parlamentarios, sean diputados o senadores, conservará su calidad de tal.

Si incurre en la situación prevista en el número 4° en una o más regiones, pero mantiene el mínimo de ellas exigido por la ley, conservará su calidad de tal, pero no podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2° en aquellas donde su número de afiliados haya disminuido en más del 50 por ciento. El Director del Servicio Electoral anotará esta circunstancia al margen de la respectiva inscripción en el Registro de Partidos Políticos.”.

Artículo 4°.- Modifícase la ley N° 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, en el siguiente sentido:

1) Sustitúyese el inciso segundo del artículo 7° por el siguiente:

“En la elección primaria para la nominación de candidatos a los cargos de Parlamentarios, para cada territorio electoral, los partidos políticos podrán participar:

a) En forma individual, sin haber suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos.

b) En forma individual, habiendo suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos dentro del pacto.

c) En conjunto con otros partidos con los cuales ha suscrito un pacto electoral, y con el objeto de determinar la totalidad de los candidatos de dicho pacto.”.

2) Reemplázase el inciso segundo del artículo 30 por el siguiente:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen de la forma señalada en las letras a) o b) del inciso segundo del artículo 7, serán nominados como candidatos para la elección definitiva en cada territorio electoral, las mayores votaciones individuales hasta completar el número de cargos definido en la declaración de candidaturas conforme al inciso primero del artículo 16.”.

3) Incorpórase al artículo 30 el siguiente inciso final:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen en pacto electoral de la forma señalada en la letra c) del inciso segundo del Artículo 7, los candidatos nominados para la elección definitiva en cada territorio electoral, serán determinados conforme el procedimiento señalado en el artículo 109 bis de la ley N° 18.700, considerando para estos efectos que constituyen una lista los candidatos de un mismo partido y sus candidaturas independientes asociadas.”.

4) Agrégase el siguiente artículo 3° transitorio.

“Artículo 3° transitorio.- El partido político que decidiere someterse al sistema de elecciones primarias contemplado en el artículo 3º y siguientes de la presente ley para los períodos electorales parlamentarios de los años 2017, 2021, 2025 y 2029, solo podrá someter a dicho procedimiento hasta un cuarenta por ciento del total de candidaturas a diputado o senador que este pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral.”.”.

Artículo 5°- Esta ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la partida 02, Congreso Nacional, de la ley de Presupuestos para el Sector Público.

Lo dispuesto en el artículo 2° de esta ley se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la Ley de Presupuestos respectiva.”.

.-.-.-.

-

Acordado en sesiones celebradas los días 9, 10, 11, 15, 16, 17, y 18 de diciembre, todas del 2014, y 5 de enero de 2015, con la asistencia de sus miembros, Honorables Senadores señores Felipe Harboe Bascuñan (Presidente), Pedro Araya Guerrero (Jorge Pizarro Soto), Alfonso De Urresti Longton, Alberto Espina Otero, y Hernán Larraín Fernández.

Sala de la Comisión, a 5 de enero de 2015.

RODRIGO PINEDA GARFIAS

Secretario

RESUMEN EJECUTIVO

SEGUNDO INFORME DE LA COMISIÓN DE CONSTITUCIÓN, LEGISLACIÓN, JUSTICIA Y REGLAMENTO RECAÍDO EN EL PROYECTO DE LEY, EN SEGUNDO TRÁMITE CONSTITUCIONAL, QUE SUSTITUYE EL SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UN SISTEMA ELECTORAL PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL.

(Boletín Nº 9.326-07)

I.- OBJETIVO DEL PROYECTO PROPUESTO POR LA COMISIÓN: Sustituir el sistema electoral binominal por uno proporcional inclusivo y fortalecer la representatividad del Congreso Nacional.

Para ello, se propone reducir la desigualdad del voto, permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas, aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos, facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías, promover un Congreso Nacional que refleje la diversidad de la sociedad, y evitar que queden fuera del mismo candidatos con grandes votaciones.

II.- ACUERDOS: Indicaciones:

1 rechazadaunanimidad5x0

2 rechazadaunanimidad5x0

3 rechazadaunanimidad5x0

4 rechazadaunanimidad5x0

5 rechazadamayoría de votos3x2

6 aprobadamayoría de votos3x2

7 rechazadaunanimidad5x0

8 rechazadamayoría de votos3x1

9 rechazadamayoría de votos3x1

10 rechazadamayoría de votos3x1

11 rechazadaunanimidad5x0

12 rechazadaunanimidad5x0

13 rechazadaunanimidad5x0

14 aprobadamayoría de votos3x1x1 abstención

15 aprobadamayoría de votos3x1x1 abstención

16 aprobadamayoría de votos3x1x1 abstención

17 rechazadaunanimidad4x0

18 rechazadaunanimidad4x0

19 rechazadaunanimidad4x0

20 rechazadaunanimidad4x0

21 rechazadamayoría de votos3x2

22 aprobadaunanimidad5x0

23 rechazadaunanimidad5x0

24 rechazadaunanimidad5x0

25 aprobadaunanimidad5x0

26 rechazada unanimidad 5x0

27 rechazadaunanimidad5x0

28 rechazadaunanimidad5x0

29 rechazadaunanimidad5x0

30 aprobadamayoría de votos4x1 abstención

31 aprobadaunanimidad4x0

32 aprobadamayoría de votos3x1

33 aprobadamayoría de votos4x1 abstención

34 aprobada mayoría de votos4x1 abstención

35 rechazada mayoría de votos4x1 abstención

36 aprobadamayoría de votos4x1 abstención

37 aprobadamayoría de votos4x1 abstención

38 aprobadamayoría de votos4x1 abstención

39 rechazadaunanimidad5x0

40 rechazadaunanimidad5x0

41 aprobadaunanimidad4x0

42 aprobadaunanimidad4x0

43 aprobadaunanimidad4x0

44 aprobadaunanimidad4x0

45 aprobadaunanimidad4x0

46 aprobadaunanimidad4x0

47 aprobadaunanimidad4x0

48 aprobadaunanimidad4x0

49 aprobadaunanimidad4x0

50 rechazadaunanimidad5x0

51 rechazadaunanimidad5x0

52 rechazadamayoría de votos3x2

53 inadmisible

54 inadmisible

55 inadmisible

56 rechazadaunanimidad5x0

57 rechazadaunanimidad5x0

58 rechazadamayoría de votos3x1x1 abstención

59 inadmisible

60 rechazada mayoría de votos 3x2

61 rechazadaunanimidad5x0

62 inadmisible

63 rechazada mayoría de votos 3x2

64 rechazada mayoría de votos 3x2

65 rechazadamayoría de votos3x1x1 abstención

66 rechazada mayoría de votos 3x2

67 inadmisible

68 rechazadaunanimidad5x0

69 inadmisible

70 rechazada mayoría de votos 3x2

71 rechazada mayoría de votos 3x2

72 rechazada mayoría de votos 3x2

73 rechazada mayoría de votos 3x2

74 inadmisible

75 rechazada mayoría de votos 3x2

76 rechazada mayoría de votos 3x2

77 inadmisible

78 rechazada mayoría de votos 3x2

79 retirada

80 rechazadamayoría de votos3x1x1 abstención

81 rechazadamayoría de votos3x1x1 abstención

82 rechazada mayoría de votos4x1

83 rechazada mayoría de votos 3x2

84 inadmisible

85 inadmisible

86 inadmisible

87 inadmisible

88 rechazadaunanimidad5x0

89 rechazadaunanimidad5x0

90 aprobadamayoría de votos3x2

91 retirada

92 inadmisible

93 rechazada mayoría de votos 3x2

94 rechazada mayoría de votos 3x2

95 rechazadaunanimidad4x0

96 rechazadaunanimidad4x0

97 rechazada mayoría de votos 4x1

98 rechazada mayoría de votos 4x1

99 rechazada mayoría de votos 4x1

100 rechazada mayoría de votos 3x2

101 rechazada mayoría de votos 3x2

102 rechazada mayoría de votos 3x2

103 rechazada mayoría de votos 3x2

104 retirada

105 inadmisible

106 aprobadamayoría de votos4x1 abstención

107 rechazadaunanimidad5x0

108 inadmisible

109 inadmisible

110 rechazadaunanimidad5x0

111 rechazada mayoría de votos 4x1

112 aprobadamayoría de votos4x1

113 aprobadamayoría de votos4x1

114 aprobadamayoría de votos4x1

115 aprobadamayoría de votos4x1 abstención

116 aprobadamayoría de votos4x1 abstención

117 aprobadamayoría de votos4x1 abstención

118 rechazadaunanimidad5x0

119 rechazadaunanimidad5x0

120 aprobadamayoría de votos4x1 abstención

121 rechazada mayoría de votos 4x1 abstención

122 rechazada mayoría de votos 4x1 abstención

123 rechazada mayoría de votos 4x1 abstención

124 aprobadaunanimidad5x0

125 aprobadaunanimidad5x0

126 rechazada mayoría de votos 4x1 abstención

127 rechazada mayoría de votos 4x1 abstención

128 inadmisible

129 rechazadaunanimidad5x0

130 rechazada mayoría de votos 4x1 abstención

131 rechazada mayoría de votos 4x1 abstención

132 rechazada mayoría de votos 4x1 abstención

133 rechazada mayoría de votos 4x1 abstención

134 aprobadamayoría de votos4x1 abstención

135 aprobadamayoría de votos4x1 abstención

136 aprobadamayoría de votos4x1 abstención

137 inadmisible

138 rechazada mayoría de votos 4x1

139 inadmisible

140 inadmisible

141 inadmisible

142 rechazadaunanimidad4x0

143 inadmisible

144 inadmisible

145 inadmisible

146 aprobada con modificaciones mayoría de votos 3x2

147 rechazada mayoría de votos 3x2

148 rechazada mayoría de votos 3x2

149 rechazada mayoría de votos 3x2

150 rechazada mayoría de votos 3x2

151 rechazada mayoría de votos 3x2

152 rechazada mayoría de votos 3x2

153 rechazada mayoría de votos 3x2

154 rechazada mayoría de votos 3x2

155 rechazada mayoría de votos 3x2

156 aprobada con modificaciones

156 número 1 aprobada unanimidad 5x0

156 número 2 retirada

156 número 3 retirada

156 número 4 rechazada mayoría de votos 3x2

156 número 5 aprobada unanimidad 5x0

156 número 6 aprobada unanimidad 5x0

157 aprobadamayoría de votos3x2

158 inadmisible

159 inadmisible

III.- ESTRUCTURA DEL PROYECTO APROBADO POR LA COMISIÓN: Esta iniciativa se estructura en cinco artículos permanentes.

IV.- NORMAS DE QUÓRUM ESPECIAL: El artículo 1° de esta iniciativa, en sus números 1, letras a), c) y d); 2, 3, 6, 7, 8, 9, 10, 11, 13 y 14 requieren para su aprobación del voto conforme de las tres quintas partes de los Senadores en ejercicio, de conformidad a lo prescrito en el inciso segundo de la disposición decimotercera transitoria de la Constitución Política de la República. El artículo 1º números 1, letra b); 4, 5, y 12, así como los artículos 2º, 3° y 4º, nuevo, tienen el carácter de normas orgánicas constitucionales, en virtud de lo dispuesto en los artículos 18 y 19 n° 15, respectivamente, y 66, inciso segundo, de la Carta Fundamental.

V.- URGENCIA: “Discusión Inmediata”.

VI.- ORIGEN E INICIATIVA: Mensaje de S.E. la Presidenta de la República.

VII.- TRÁMITE CONSTITUCIONAL: Segundo.

VIII.- INICIO TRAMITACIÓN EN EL SENADO: 19 de agosto de 2014.

IX.- TRÁMITE REGLAMENTARIO: segundo informe.

X.- LEYES QUE SE MODIFICAN O QUE SE RELACIONAN CON LA MATERIA:

1.- Constitución Política de la República.

1.1. El inciso primero del artículo 5º.

1.2.- Los incisos primero, segundo y tercero del artículo 18.

1.3.- El inciso segundo de la disposición Decimotercera transitoria.

2.- Ley Nº 18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios.

3.- Ley Nº 19.884, Orgánica Constitucional sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral.

4.- Ley Nº 18. 603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos.

5.- Ley Nº 20.640, Orgánica Constitucional que establece el Sistema de Elecciones Primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes.

Sala de la Comisión, a 5 de enero de 2015.

Rodrigo Pineda Garfias

Secretario

2.6. Informe de Comisión de Hacienda

Senado. Fecha 12 de enero, 2015. Informe de Comisión de Hacienda en Sesión 79. Legislatura 362.

INFORME DE LA COMISIÓN DE HACIENDA, recaído en el proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que sustituye el sistema electoral binominal por un sistema electoral proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional.

BOLETÍN Nº 9.326-07

__________________________________

HONORABLE SENADO:

La Comisión de Hacienda tiene el honor de emitir su informe acerca del proyecto de ley individualizado en el epígrafe, iniciado en Mensaje de Su Excelencia la señora Presidenta de la República, con urgencia calificada de “discusión inmediata”.

A las sesiones en que la Comisión consideró este proyecto de ley asistieron, además de sus miembros, del Ministerio Secretaría General de la Presidencia, la Ministra, señora Ximena Rincón; la Coordinadora de la División Jurídica, señora Valeria Lübbert; y los asesores, señora Julia Urquieta, y señores Giovanni Semería y Nicolás Torrealba.

De la Dirección de Presupuestos, el Director, señor Sergio Granados, y el Jefe de Sector, señor Héctor Gallegos.

Del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, los asesores, señores Rodrigo González y Gabriel Osorio.

Del Instituto Igualdad, la asesora, señorita Lía Arroyo.

El asesor del Honorable Senador García, señor Tomás Zamora.

El asesor del Honorable Senador Horvath, señor Arturo Rodríguez.

- - -

NORMAS DE QUÓRUM ESPECIAL

En lo relativo a las normas de quórum especial, la Comisión de Hacienda se remite a lo consignado en el segundo informe de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento.

- - -

De conformidad con su competencia, vuestra Comisión de Hacienda se pronunció acerca de los artículos 1°, numerales 8) 9) y 10); 2°, numerales 2) y 3), y 5°, en los términos en que fueron aprobados por la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento, como reglamentariamente corresponde.

- - -

OBJETIVO DEL PROYECTO DE LEY

Sustituir el sistema electoral binominal por uno proporcional inclusivo y fortalecer la representatividad del Congreso Nacional.

- - -

Para los efectos de lo dispuesto en el artículo 124 del Reglamento del Senado, cabe dejar constancia de que la Comisión de Hacienda no introdujo modificaciones respecto del texto que propone la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento.

- - -

DISCUSIÓN

A continuación se describen o reproducen, según el caso, en el orden del articulado del proyecto, las citadas disposiciones de competencia de vuestra Comisión:

Artículo 1°

Modifica, mediante 14 numerales, la ley N° 18.700, orgánica constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios.

Numeral 8)

Sustituye el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos, que elegirá 3 diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte, que elegirá 3 diputados.

3er distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal, que elegirá 5 diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen, que elegirá 5 diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela, que elegirá 7 diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué, que elegirá 8 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca, que elegirá 8 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú, que elegirá 8 diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia, que elegirá 7 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín y La Granja, que elegirá 8 diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén, que elegirá 6 diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana, que elegirá 7 diputados.

13° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo, que elegirá 5 diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué, San Pedro y Padre Hurtado, que elegirá 6 diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa, que elegirá 5 diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones, que elegirá 4 diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael, que elegirá 7 diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco, que elegirá 4 diputados.

19° distrito, constituido por las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ránquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel, que elegirá 5 diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana, que elegirá 8 diputados.

21er distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja, que elegirá 5 diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino, que elegirá 4 diputados.

23er distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén, que elegirá 7 diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco, que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos, que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena, que elegirá 5 diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel, que elegirá 3 diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica, que elegirá 3 diputados.

El número de diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis.”.

El Honorable Senador señor Coloma expresó que el numeral en discusión y el 10) constituyen el núcleo de la reforma al sistema electoral.

Señaló que cambiar el sistema binominal es legítimo y no responde a principios, sino que los sistemas electorales deben analizarse según los efectos que provocan, y se elige uno de entre aquellos que respeten el voto libre, secreto e informado.

Añadió que en nuestro país, actualmente, coexisten tres sistemas electorales, uninominal para la elección de Presidente de la República y Alcalde, binominal para la elección de parlamentarios y proporcional para la elección de concejales, y no existe ninguna evidencia o informe que muestre que, por ejemplo, la participación ciudadana es mayor en un sistema proporcional que en un sistema binominal.

Asimismo, observó que, siendo legítimo estimar necesario cambiar el sistema binominal, lo que no comprende es que eso haga indispensable y obligatorio establecer un aumento de 35 diputados, lo que lo lleva a considerar el artículo 179 que se propone como el más sorprendente del proyecto de ley.

Refirió un estudio de la Unión Interparlamentaria que muestra que existe un promedio de representatividad a nivel mundial de 1 parlamentario cada 100.000 habitantes, lo que se corresponde con bastante exactitud con el promedio que tenemos en Chile. Indicó que con las modificaciones que se proponen –para un total de 205 parlamentarios-, se sobrepasará ese promedio internacional.

También se ha dicho, manifestó, que el número que se propone responde a razones históricas, dado que en 1969 se había llegado a tener 150 diputados y 50 senadores.

Siguiendo con los argumentos sobre el punto, sostuvo que podría pensarse en un mayor número de parlamentarios si se demostrara que faltan integrantes para que las comisiones funcionen correctamente, pero ese argumento no ha sido esgrimido y, mucho menos, demostrado.

Su opinión, en definitiva, es que no existe la necesidad de un aumento en el número de parlamentarios, y el problema de representatividad se puede superar por otras vías que no impliquen el referido aumento de cargos.

Sobre la conformación de los distritos electorales, la consideró arbitraria y con una estructura favorable al apoyo electoral del actual Gobierno, debido a las zonas con menor población que eligen más parlamentarios respecto de otras más pobladas.

Observó que, cuando se habla de las alteraciones del sistema binominal en cuanto a representatividad, no se considera que existen evidencias en el sistema proporcional aplicado en las elecciones municipales, que muestra –en la elección del año 2008- a 10 candidatos a concejales que obtuvieron la primera mayoría de su comuna y que no resultaron electos, y otros 10 concejales electos con menos del 1% de la votación.

Por lo mismo, consultó al Ejecutivo cuál es el origen del aumento de parlamentarios que se propone y la forma de dividirlos en distritos.

Asimismo, adelantó que, con el nuevo sistema que se propone, existirá una mayor distorsión entre el porcentaje de votos que obtenga un candidato y quién resulta electo, respecto de lo que ocurre en el sistema binominal.

La Ministra Secretaria General de la Presidencia, señora Ximena Rincón, manifestó que las materias señaladas precedentemente fueron debatidas en la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento del Senado.

Sobre el diagnóstico del sistema electoral binominal, explicó que:

- En dicho sistema los ciudadanos tienen una limitada oferta de candidatos entre los cuáles elegir y se fuerza a que los partidos tengan que negociar entre ellos quién será candidato, por los restringidos cupos que otorga el sistema (2). Esto limita la diversidad de la oferta y traslada la decisión a los partidos políticos y no a la gente.

- El sistema binominal con su restringida oferta vuelve poco atractivo el ir a votar. En un contexto de voto voluntario esto pone en riesgo el sistema democrático (en la última elección concurrió a las urnas el 38% del electorado).

- El sistema binominal deja fuera a fuerzas políticas con importante apoyo ciudadano pero que no están en las dos grandes coaliciones.

- Al dejar fuera del Parlamento a sectores políticos relevantes de la sociedad el Congreso Nacional pierde relevancia.

- La exclusión parlamentaria empuja a las fuerzas políticas no representadas a buscar expresión extra institucional y a radicalizar su posición contra el sistema que los excluye.

- La diferencia de valor del voto en Chile, según el lugar donde se emite, es demasiado alta y obstaculiza la igualdad del voto. No se puede emprender una reforma sin reducir significativamente esta desigualdad inaceptable en cualquier democracia.

- Chile tenía en 1973 una Cámara de 150 diputados y un Senado de 50 miembros, con mucho menos de la mitad de electores que hoy día. Con esos números, el rediseño de distritos y circunscripciones permitiría reducir de manera muy significativa la desigualdad actual del valor del voto entre ciudadanos de distintos territorios.

¿Por qué más diputados y senadores?

- Todo esfuerzo de igualación del valor del voto hace imprescindible incrementar el número de diputados y senadores del país, para no verse obligados al imposible de disminuir la representación de algunos territorios escasamente poblados. Por ello, se parte de un número mínimo de 3 diputados hasta llegar a un máximo de 8.

- Se busca que los electores recuperen totalmente la decisión respecto de quiénes son sus representantes, para lo cual es indispensable que todas las formaciones políticas puedan concursar con sus propios candidatos.

- Al elegirse más diputados por distrito, baja el umbral o línea de corte con la que una fuerza política puede integrarse al parlamento. Esto asegura que fuerzas que no son mayoritarias, pero que cuentan con apoyo ciudadano, tengan expresión en el lugar que es el foro natural de la comunidad política.

- La vía para posibilitar el ingreso al Congreso Nacional de las corrientes más significativas de la sociedad es la de reducir el número de distritos y circunscripciones para que se elijan más escaños en cada uno de ellos. Sólo así podrán ingresar al Parlamento sectores de menor votación pero suficientemente significativos de la sociedad, que sin duda merecen estar representados.

- Tanto más escaños del total de diputados se elijan en distritos grandes, menor será la barrera de ingreso al Parlamento y mayor será la inclusión.

- El parlamento debe ser el lugar donde se exprese la diversidad del pueblo de Chile, el lugar de encuentro y el foro natural donde se resuelvan los disensos. Un parlamento representativo e inclusivo será la piedra sobre la que descansen el resto de las instituciones de la República.

- Esto se logra definiendo distritos que elijan un número mayor de diputados, pero también permitiendo que las listas electorales presenten más candidatos que los que se eligen en cada territorio electoral.

- Con la reforma son los ciudadanos los que deciden sobre la base de una oferta diversa y rica en candidatos.

- La reforma asegura que candidatos con buena votación no queden fuera del sistema político.

Agregó que, en los últimos 24 años, se han intentado al menos 29 iniciativas de ley en la materia, las que no han logrado ser aprobadas.

El Honorable Senador señor Coloma insistió en dos de sus consultas, relativas a: la afirmación de que existirá una mayor votación y participación con el sistema que se propone –teniendo en cuenta que en elecciones municipales proporcionales han votado menos ciudadanos que en las parlamentarias binominales, incluso en aquellas que no tuvieron elección presidencial conjunta-, y por qué se propone una distribución de escaños que no tiene que ver con una proporcionalidad respecto de los habitantes de cada distrito.

Manifestó su rechazo a que la preferencia por la proporcionalidad, respecto de la estabilidad, se traduzca, además, en arbitrariedad en el diseño de los distritos y los parlamentarios a elegir.

La señora Ministra señaló que si se revisa el ejercicio que se ha hecho para corregir la desproporción que se verifica con el sistema binominal, claramente mejora el valor del voto con el sistema proporcional moderado que se propone.

Acotó que si se revisa el diseño de las provincias o territorios para la elección de los consejeros regionales, se puede efectuar la misma objeción de falta de proporcionalidad en las áreas definidas para ello.

El Honorable Senador señor Coloma sostuvo que no se puede comparar la elección de los consejeros regionales con la elección parlamentaria, porque no existe una instancia común en que deliberen y voten todos los consejeros del país, como sí ocurre en el Congreso Nacional.

Agregó que no se han dado explicaciones plausibles sobre lo que ha preguntado.

El Honorable Senador señor Lagos manifestó que, con el sistema que se propone, se aumenta la oferta política respecto de lo actualmente existente.

Respecto de la afirmación sobre un diseño de los distritos arbitraria, indicó que, pasados 25 años desde el regreso de la democracia al país, lo que se está proponiendo como sistema debe hacerse cargo de lo ya existente, y que es un sistema diseñado entre los años 1988 y 1989, que fue dispuesto con una intención clara de obtener un resultado electoral en cierto sentido, y por lo mismo carecía de toda lógica en varios aspectos.

Debido al modelo ya existente, en que se dividieron provincias arbitrariamente, el sistema que se propone está obligado a hacerse cargo de esa realidad y no puede partir de cero, por lo que seguramente no alcanza un resultado óptimo, afirmó.

Señaló que, como en todas las cosas, existen aspectos perfectibles de la iniciativa legal, y podría preferirse un sistema como el de Estados Unidos -proporcional para una cámara e igualitario respecto de cada región para la otra-, pero el sistema que se propone mejora lo que está vigente.

Observó que en el sistema vigente antes del año 1973 existía la obligación de ajustar los distritos después de cada censo, y la clase política lo que hacía era no aprobar los censos y de ese modo no provocar el ajuste de los distritos.

Recapitulando, estimó que el proyecto de ley es mucho mejor en cuanto a representatividad que el sistema binominal vigente, además de que atempera las falencias e injusticias que contiene el sistema binominal en que un tercio de los votos es igual a los otros dos tercios.

El Honorable Senador señor Zaldívar manifestó que el sistema de elección de parlamentarios lo vienen discutiendo desde poco antes del regreso a la democracia, y nunca han podido lograr una modificación del mismo.

Planteó que es muy difícil lograr un sistema que sea más estrictamente proporcional respecto de la población de cada distrito, y destacó que, en el artículo 179 bis que propone el número 9), se establece un mecanismo de actualización de los distritos de acuerdo a la población que se verifique cada 10 años después del respectivo censo –con límites de 3 y 8 diputados como mínimo y máximo para cada distrito-.

En el caso del Senado, señaló que se produce una situación un poco ambigua porque, por un lado, se piensa que los senadores representan a cada región y, por otro lado, se estima que los senadores tienen una representación nacional y no están tan avocados a representar el territorio por el que fueron elegidos.

Añadió que están aprobando el mejor sistema electoral que es posible en las condiciones actuales, y que es mejor que el que actualmente rige.

Sobre el sistema actual, recordó que en la elección senatorial de 1989 resultó electo con el 31,2% de los votos, su compañero de lista, el ex Presidente de la República Ricardo Lagos, no resultó electo con el 30,6% de los votos, y sí resultó electo Jaime Guzmán, con el 17,2% de los sufragios. Agregó que Ricardo Lagos fue la tercera mayoría nacional de esa elección y no fue elegido, lo que demuestra las inequidades del sistema binominal.

Otra de las bondades del sistema electoral que se propone, observó, es que permitirá la aparición de más candidatos en las elecciones, debido a que se podrá llevar un candidato más respecto de los cupos a elegir.

El Honorable Senador señor García señaló coincidir en que no existe necesidad de aumentar el número de parlamentarios, y particularmente en la forma que se propone. Consideró que 155 diputados sería excesivo, y en el caso de los senadores también, con la salvedad de estimar que se deben agregar 2 senadores elegidos en la región de Arica y Parinacota.

Agregó que, revisando el trabajo que se efectúa en las comisiones de las cámaras, no se detecta un problema generado por falta de parlamentarios y, por el contrario, podría ocurrir que los parlamentarios deleguen sus labores y se desentiendan del trabajo de comisiones.

Observó que, aunque comprende la intención que se persigue con el proyecto de ley, no lo entusiasma, porque cree que los parlamentarios se harán más lejanos para las personas debido a que los distritos y circunscripciones crecerán en tamaño. Indicó que, actualmente, en los distritos o circunscripciones pequeños o rurales, las personas saben quienes son sus diputados y senadores, aunque no sean de una figuración mediática relevante, y esto se debe a que los parlamentarios recorren y visitan las zonas que representan. Agregó que, probablemente, aumente el interés por tener presencia en los medios de comunicación por sobre favorecer el contacto personal con los ciudadanos.

Además, señaló que la forma de hacer campaña visitando a los electores ha permitido que personas de pocos recursos puedan llegar al Congreso Nacional, y eso se hará más complejo con el nuevo sistema con zonas electorales más extensas. Predijo que las campañas electorales subirán en su monto de gasto y eso conlleva algunos problemas.

Asimismo, estimó que se hará más difícil que aparezcan nuevos candidatos que renueven la política, debido a que será más difícil que logren conocimiento de la población en distritos más grandes.

Añadió el problema de que las mayorías en el Congreso Nacional dependan de uno o dos parlamentarios independientes, lo que genera riesgos para la gobernabilidad del país.

Refiriéndose a otro aspecto de la iniciativa legal, expresó que el informe financiero original, N° 41, de 23 de abril de 2014, establecía que el proyecto de ley “no irrogará un mayor gasto fiscal en lo que respecta a la composición del Parlamento”.

Posteriormente, continuó, el último informe financiero, N° 69, de 4 de agosto de 2014, en su número 3, contiene un cuadro que muestra los desembolsos incrementales por concepto de dietas parlamentarias, que llega a más de $4.000 millones en el año 2019, y párrafo seguido se consigna que “En virtud del acuerdo político, de no incurrir en un mayor gasto fiscal por estos conceptos, será necesario efectuar los ajustes para adecuar los presupuestos de ambas corporaciones a los nuevos requerimientos, en consonancia con lo previsto por el artículo 68 de la Ley N° 19.918 Orgánica Constitucional del Congreso Nacional. Consecuentemente, será necesario que el Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias incorpore a contar del año 2018 estas adecuaciones en sus futuras Resoluciones.”, de lo que debiera entenderse que el aumento de dietas y asignaciones por nuevos senadores y diputados se financiará con disminución de las asignaciones de los actuales parlamentarios, más allá del hecho de no conocer el referido “acuerdo político”. En virtud de ello, y aunque puedan efectuarse algunos ajustes y ahorros, inevitablemente se resentirá el nivel de las asesorías que reciben, las que ya muestran algunas debilidades como para hacer frente al Ejecutivo en cuanto colegislador, y dejan a los congresistas en una posición desmedrada en cuanto a información.

Además, relevó la contradicción de que un informe financiero exprese que no existe mayor gasto fiscal y en otro posterior se establezca que en realidad sí existe ese mayor gasto.

Puesto en votación el numeral, el Honorable Senador señor Coloma consignó que votaría en contra de la disposición, debido a la falta de una explicación razonable acerca de la necesidad del aumento en el número de diputados y senadores.

Consideró válido cambiar el sistema electoral, pero lo deseable es que se haga sin que implique un incremento en el número de parlamentarios.

A pesar de entender que es complejo establecer proporcionalidades exactas en la materia, señaló considerar que las que se proponen en el proyecto de ley para los nuevos distritos caen en lo arbitrario y no encuentran ninguna justificación.

Por último, planteó que le merece dudas la afirmación de que vaya a existir una mayor participación –por argumentos como los que consignó, acerca de que ha existido mayor participación en elecciones parlamentarias binominales que en municipales proporcionales-, además de que existirá una mayor distancia entre los parlamentarios y sus electores. Además, muchos diputados y senadores resultarán elegidos con votaciones mucho más bajas que las actuales, lo que les resta cierta legitimidad en su rol.

El Honorable Senador señor Montes expresó su voto favorable respecto del numeral. En su fundamentación, indicó considerar preferible contar con más representantes que con menos representantes, y por ello también es partidario de que los concejos municipales crezcan en el número de concejales.

Manifestó que existen otros aspectos a considerar en la materia, adicionales a los ya planteados, y en cuanto a la cercanía o distancia de los congresistas con la ciudadanía, observó que el nuevo sistema obligará a fortalecer los partidos políticos y las ideas que defienden, disminuyendo el peso de la gestión de intereses individuales como mecanismo de acción, lo que potencialmente puede generar un espacio para que se haga política en el mejor de los sentidos. Añadió que deberán esperar para saber si dicho potencial se concreta o no.

Sobre el sistema binominal, sostuvo que el mismo no resistía más en su vigencia y aplicación, dado que la ciudadanía debe decidir entre pocas opciones y los partidos políticos deben ajustar sus planillas al máximo sin poder llevar candidatos en muchos lugares.

Expresó saber que lo que se propone no aborda completamente los problemas del sistema político, porque se circunscribe al sistema electoral, y quedan temas pendientes como un rediseño de las relaciones entre el Congreso Nacional y el Gobierno, pero después de intentarlo por 25 años, no queda más que avanzar en lo que se plantea en el presente proyecto de ley.

El Honorable Senador señor Lagos votó a favor de la disposición. Entregó como argumentos de su decisión su preferencia por un poder legislativo que se dedique a legislar, con partidos políticos fuertes que se dedican a defender sus ideas, y no que su labor propenda a un rol más propio de un concejal.

Concordó en que el sistema binominal no resistía más tiempo como aquel que se aplica en las elecciones parlamentarias. Lo demuestra el hecho que sólo podía transformarse en una noticia de interés el que se produjera un “doblaje” en las elecciones, y en mucho casos se formaban listas en que un candidato sólo acompañaba al otro que resultaría electo, pero realmente no competía por un cupo en el Congreso Nacional. A lo anterior, afirmó, se suma el hecho de que existan altos quórums para la aprobación de muchas materias de ley, lo que termina produciendo un desinterés de la ciudadanía por votar y manifestar cuáles son los programas políticos o las ideas de su preferencia.

Acotó que, no obstante su acuerdo con la iniciativa legal, lamenta que para lograr el quórum necesario para que se apruebe el proyecto de ley se hicieron concesiones como, por ejemplo, que se rebajan los porcentajes de ciudadanos con derecho a sufragio necesarios para formar un partido político, dándose casos como los de la región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo en que, con 60.000 ciudadanos que sufragaron en la última elección, se requieren 125 afiliados para formar un partido político.

Por otro lado, observó que si antes del año 1973 eran 150 los diputados con 9 millones de habitantes, no es nada dramático que ahora sean 155 los diputados con más de 16 millones de habitantes, pero sí hubiera preferido que el cambio se produjera con un acuerdo logrado con todos los partidos políticos más grandes del país.

El numeral 8) resultó aprobado con tres votos a favor de los Honorables Senadores señores Lagos, Montes y Zaldívar, y dos votos en contra de los Honorables Senadores señores Coloma y García.

Terminada la votación, el Honorable Senador señor Coloma acotó que, contra lo que se piensa, con el sistema binominal se ha producido una de las mayores alternancias en cuanto a quiénes ocupan los cargos de diputados y senadores, con una tasa de renovación de cerca del 40%, que es superior a la de la mayoría de los sistemas electorales.

El Honorable Senador señor García destacó que la cercanía con las personas permite entender los problemas sociales que afectan realmente a la gente, y el modo en que lo hacen.

Asimismo, señaló que en las elecciones bajo el sistema binominal, existen muchísimos casos en que el nuevo parlamentario derrotó al incumbente con un alto grado de competencia entre los candidatos.

El Honorable Senador señor Montes señaló que la confusión entre los roles de parlamentario y concejal a la que se hacía mención precedentemente, ha evolucionado mucho con el desarrollo institucional, y puso como ejemplo los cambios verificados en pensiones asistenciales o las operaciones por enfermedades graves.

Observó que la distancia de las personas respecto de la actividad política se debe en parte a que los parlamentarios no pueden resolver muchos de los problemas que afectan a la población, pero también por la incapacidad de poner en el debate temas de interés general, o como planteaba Lionel Jospin por “la falta de utopías concretas”, esto es, la capacidad de construir un sentido de comunidad, de sociedad y de país.

Numeral 9)

Agrega el siguiente artículo 179 bis:

“Artículo 179 bis.- Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con el siguiente procedimiento:

a) Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consistirá en distribuir a prorrata los cargos entre los distritos electorales, de acuerdo a la fórmula dispuesta en el artículo 109 bis de esta ley.

b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 8 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al de la realización del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con aquel en que se celebran elecciones de diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.

d) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes.

Dentro de los cinco días siguientes a la publicación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral aplicó las letras a) y b) de este artículo.

Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de febrero del año de que se trate.”.

El Honorable Senador señor Coloma consultó si existen simulaciones que permitan visualizar lo que podría ocurrir con la actualización de la asignación de los 155 diputados entre los 28 distritos que se proponen, considerando los requisitos que se contemplan.

El asesor del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, señor Rodrigo González, señaló que la facultad de actualizar y reasignar los escaños entre los 28 distritos, se entrega, cada 10 años, al Consejo Directivo del Servicio Electoral, con las limitaciones de que no se crean más escaños y que ningún distrito puede bajar de 3 ni exceder de 8 diputados, por lo cual debería existir un movimiento demográfico muy fuerte para que se verifique un cambio. Agregó que se estima que, de ocurrir un cambio en la asignación, esta se daría con mayor probabilidad entre distritos pertenecientes a una misma región, favoreciendo a las ciudades más grandes.

El Honorable Senador señor Montes consideró interesante el mecanismo que se propone como forma de provocar ajustes de acuerdo a cambios poblacionales.

Puesto en votación el numeral 9), fue aprobado con tres votos a favor de los Honorables Senadores señores Lagos, Montes y Zaldívar, y dos votos en contra de los Honorables Senadores señores Coloma y García.

Numeral 10)

Sustituye el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 50 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

1a circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, 2 senadores.

2a circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, 2 senadores.

3a circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 3 senadores.

4a circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, 2 senadores.

5a circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, 3 senadores.

6a circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, 5 senadores.

7a circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 5 senadores.

8a circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, 3 senadores.

9a circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, 5 senadores.

10a circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, 5 senadores.

11a circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 5 senadores.

12a circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 3 senadores.

13a circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, 3 senadores.

14a circunscripción, constituida por la XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, 2 senadores.

15a circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 2 senadores.”.

El Honorable Senador señor Coloma expresó que en el caso del Senado se aplican varios de los mismos argumentos que consignó al mostrarse contrario al aumento en el número de diputados.

Pero, además, en el caso del Senado, consideró que no puede aceptarse el aumento de 2 a 3 senadores en dos circunscripciones del país, que se aprobó en la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento, sólo por negociaciones con parlamentarios de las circunscripciones correspondientes.

En virtud de lo anteriormente expuesto, consultó al Ejecutivo qué explicaciones puede dar al respecto.

El asesor, señor González, señaló que en la Comisión a la que se hace referencia se quiso establecer normas objetivas para la asignación de los escaños de senadores –entendiendo que en esa Cámara no existe ni una representación demográfica, ni una representación paritaria- y, por ello, las regiones más pobladas cuentan con 5 senadores, las otras cuentan con 3 senadores y las de zonas extremas y de menor población con 2.

El Honorable Senador señor Montes manifestó no poder dejar de señalar que la situación en la que queda la Región Metropolitana en el Senado, con 5 senadores, es casi inaceptable, e incomprensible, porque también se ve perjudicada o queda en desmedro del resto de las regiones en cuanto a número de diputados en relación a su población total.

Añadió que no hace más cuestión del asunto sólo porque prefiere privilegiar el resultado global que implica poder cambiar el sistema existente.

El Honorable Senador señor Coloma suscribió lo precedentemente expresado por el Honorable Senador señor Montes.

El Honorable Senador señor Lagos señaló su preferencia por un sistema como el de Estados Unidos en que una Cámara tiene una representación casi exacta con la población de los territorios, y la otra elige 2 senadores cada una sin importar el tamaño, a lo que le agregaría la variante de que cada senador se elija alternadamente en elección uninominal.

Puesto en votación el numeral 10), fue aprobado con tres votos a favor de los Honorables Senadores señores Lagos, Montes y Zaldívar, y dos votos en contra de los Honorables Senadores señores Coloma y García.

Artículo 2°

Modifica la ley N° 19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, de la manera que se señala en 3 numerales.

Numeral 2)

Agrega el siguiente artículo segundo transitorio, pasando el actual artículo único transitorio, a ser artículo primero:

“Artículo segundo.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y solo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hayan sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a los que pertenezcan tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento por cada una de ellas.

Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.”.

El Honorable Senador señor Coloma consultó el motivo de que la medida propuesta rija sólo por 4 elecciones y de que vaya en beneficio de los partidos políticos.

La señora Ministra señaló que se trata de otorgar un incentivo a los partidos políticos para que presenten candidatas en las elecciones parlamentarias que tengan reales posibilidades de ser electas.

Agregó que la disposición fue recogida de una propuesta de las diputadas Molina y Sabat, que busca que los partidos no sólo cumplan con la obligación de llevar un cierto número de mujeres como candidatas, sino que hagan todo lo posible para que resulten electas.

Asimismo, explicó que se hace por cuatro elecciones con el objetivo de provocar un cambio cultural, el que, concretado –mediante la mayor presencia de mujeres en cargos de elección popular y de directivas de partidos políticos-, debiera perder su justificación original.

Finalmente, expuso que la otra disposición sobre la materia aumenta en un tercio el porcentaje de lo que se devuelve de gasto electoral por cada voto que obtengan las candidatas.

El Director de Presupuestos, señor Sergio Granados, manifestó que en el informe financiero se contiene una estimación de gasto por la norma que se discute, basada en una simulación respecto de lo que hubiera ocurrido de aplicarse la disposición en la última elección parlamentaria del año 2013, con 20 candidatas electas, de las que se contabilizan 18 por ser 2 independientes.

Puesto en votación el numeral 2), fue aprobado con cuatro votos a favor de los Honorables Senadores señores García, Lagos, Montes y Zaldívar, y una abstención del Honorable Senador señor Coloma.

Numeral 3)

Agrega el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a senadoras y diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 unidades de fomento por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.”.

El Honorable Senador señor Coloma consultó cuál fue el criterio utilizado para determinar que el aumento del reembolso adicional sea de un tercio de lo actualmente existente.

Además, observó que la experiencia del partido político al que pertenece ha sido la más exitosa hasta ahora en cuanto a aumentar el número de parlamentarias electas, y sin la necesidad de recurrir a diferenciaciones normativas o económicas. Indicó preferir la creación de una conciencia ciudadana en la materia y no recurrir a los incentivos económicos.

La señora Ministra expresó que el fundamento de la disposición descansa en estudios de Comunidad Mujer y otros internacionales, que demuestran que las mujeres obtienen menos recursos económicos para financiar sus campañas electorales respecto de los hombres, a pesar de que cuentan con una mayor elegibilidad –por cada 4 candidatas mujeres, 3 resultan electas, y por cada 4 candidatos sólo 2 resultan electos, en el caso de los hombres-.

Explicó que uno de los objetivos del proyecto de ley es que aumente el número de candidatas, y esa prescripción debe acompañarse de mayores recursos para financiar las campañas electorales. El monto del reembolso adicional surgió de una negociación con el Ministerio de Hacienda, acotó.

Añadió que este incentivo también es transitorio debido a que también se busca lograr un cambio de conducta cultural y se recoge la experiencia internacional en la materia.

Puesto en votación el numeral 3), fue aprobado con cuatro votos a favor de los Honorables Senadores señores García, Lagos, Montes y Zaldívar, y una abstención del Honorable Senador señor Coloma.

Artículo 5°

Dispone lo siguiente:

“Artículo 5°.- Esta ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la partida 02, Congreso Nacional, de la ley de Presupuestos para el Sector Público.

Lo dispuesto en el artículo 2° de esta ley se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la Ley de Presupuestos respectiva.”.

El Director de Presupuestos, señor Granados, explicó que acompañan al proyecto de ley cuatro informes financieros. Agregó que, los otros tres son resumidos y complementados por el último de ellos, de 4 de agosto de 2014.

Indicó que el primer informe financiero da cuenta de que no existe un mayor gasto fiscal, sin embargo, en la discusión producida en el primer trámite constitucional en la Cámara de Diputados, se les solicitó dar cuenta de los mayores costos para el Congreso Nacional respecto de los gastos obligatorios en razón del aumento de diputados y senadores.

Por ello, el referido informe financiero N° 69, de 4 de agosto de 2014, consigna, para el año 2018, en que se incorporan 5 nuevos senadores y, para el año 2022, en que se incorporan los otros 7 nuevos senadores, un gasto de $430 millones y $1.118 millones, respectivamente. En el caso de los diputados, que aumentan su número en 35, existirá un mayor desembolso por dieta parlamentaria de $3.614 millones en régimen.

Agregó que, en régimen, lo indicado precedentemente, implicará un mayor gasto de 3,4% para el Senado y 6,2% para la Cámara de Diputados, respecto del presupuesto para el año 2014.

Señaló que, tanto el Senado como la Cámara de Diputados, deberán definir cómo se financian estos nuevos gastos, en consonancia con lo dispuesto en el artículo 68 de la ley N° 19.918 orgánica constitucional del Congreso Nacional.

Observó que los gastos que se generarán por concepto de infraestructura y habilitación son perfectamente financiables con los recursos normales del presupuesto del Congreso Nacional.

El Honorable Senador señor García solicitó que, si existen informes de las secretarías de la Cámara de Diputados y del Senado, o de la Biblioteca del Congreso Nacional, se tengan a la vista para considerar los mayores gastos fiscales o mayores desembolsos que requerirán el aumento de parlamentarios.

Señaló que parece muy sencillo decir que el mayor gasto se financiará con reasignaciones presupuestarias o ahorro, pero, debido a los montos involucrados, consideró que ello es improbable.

Asimismo, observó que en el informe financiero sólo se mencionan los desembolsos incrementales por dietas de diputados y senadores, pero nada se dice de los recursos necesarios para el funcionamiento y la operación.

Estimó que podría pensarse que los gastos operacionales relacionados al aumento de parlamentarios pueden solventarse con reasignaciones presupuestarias internas de cada cámara, pero lo que parece muy difícil es que, además, se paguen las nuevas dietas con el mismo presupuesto.

El Honorable Senador señor Zaldívar expuso que, durante los años 1990 a 2006, el Senado contó con un número que varió entre 47 y 49 senadores, y se cumplía sin problemas con los ejercicios presupuestarios respectivos.

Agregó que en el año 1992 se planteó el traslado del Congreso Nacional, y se estableció que podrían ahorrarse un 20% del presupuesto total, aunque ese no es un tema que se encuentre en debate, pero sirve para ilustrar las posibilidades de efectuar reasignaciones y ajustes.

En todo caso, hubiera preferido que se explicitaran los mayores costos asociados al mejor funcionamiento del sistema democrático, manifestó.

Observó que el aumento de parlamentarios implica un mayor gasto, y en caso que no exista un acuerdo para aumentar el presupuesto, se verán obligados a efectuar ajustes. Señaló que para financiar este cambio o se aumentan los ingresos o se disminuyen los gastos, en materia presupuestaria no existe otra fórmula.

El Honorable Senador señor Coloma consultó al Director de Presupuestos a cuánto ascienden los presupuestos de la Cámara de Diputados y del Senado, y qué parte de ese total representan las dietas parlamentarias.

El Director de Presupuestos, señor Granados, señaló que el presupuesto para el año 2015 de la Cámara de Diputados es de $61.814 millones y las dietas suman $12.362 millones, y en el caso del Senado el presupuesto para el año 2015 es de $38.748 millones y las dietas suman $4.041 millones.

El Honorable Senador señor Zaldívar observó que el pago a los Ex Presidentes de la República (aplicación ley N° 19.672) sigue siendo de cargo del Senado y, en el futuro, eso debería trasladarse a otra parte del presupuesto de la Nación, liberando así esos recursos para que el Senado los destine a nuevos desembolsos.

El Honorable Senador señor Lagos quiso dejar expresada su opinión respecto que, desde el inicio de la tramitación del proyecto de ley, le ha costado entender y aceptar que un aumento significativo en el número de senadores y diputados no implique un incremento del presupuesto del Congreso Nacional, con la salvedad de que el Senado, hasta el año 2006, contaba con entre 47 y 49 senadores, y una vez que el número bajó a 38, los recursos que se liberaron se distribuyeron entre los senadores en ejercicio.

Agregó comprender que sea impopular el aumento de gastos relacionados con la actividad política y parlamentaria, pero el costo de imagen se trasladará de todas formas al Congreso Nacional, cuando en el año 2018 se deba concretar dicho aumento y la opinión pública termine pensando que los congresistas aprobaron un alza en su presupuesto.

Añadió que, en cuanto a gastos operacionales, varios senadores y diputados representarán a circunscripciones y distritos que crecerán de tamaño.

Finalmente, compartió lo expresado en cuanto a que se saque del Senado lo referido al gasto en los Ex Presidentes de la República.

El Honorable Senador señor Coloma reiteró su opinión de que el proyecto de ley no es bueno para el país, pero particularmente serio es el problema de que no se sincere cuánto es el mayor gasto que implica la iniciativa legal.

Indicó que las dietas parlamentarias representan el 20% del presupuesto de la Cámara de Diputados, y eso sin considerar ninguna asesoría, las que sólo podrían eliminarse si se quiere tener un Congreso Nacional sin ninguna capacidad de análisis y que sólo se dedique a aprobar los proyectos de ley del gobierno de turno.

Manifestó que la propuesta del Ejecutivo en la materia, sólo deja dos alternativas en cuanto al mayor gasto, o el dinero se gasta sin ninguna eficiencia en el Congreso Nacional, por lo que se puede financiar sin problema un aumento significativo de parlamentarios, o se está diciendo que no existe un mayor gasto asociado pero, en realidad, más adelante será necesario aumentar el presupuesto de ambas corporaciones.

Sostuvo que no considera real y verdadero que los 35 nuevos diputados y los 12 nuevos senadores se puedan financiar con el presupuesto actual del Congreso Nacional.

Planteó que los argumentos del Ejecutivo no son intelectualmente aceptables, y la Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional, en su artículo 24, prescribe que no podrán admitirse indicaciones contrarias a la Constitución Política ni que importen nuevos gastos con cargo a los fondos del Estado, sin crear o indicar las fuentes de recursos necesarios para atender tales gastos. Añadió que no parece razonable que pueda cumplirse la obligación de señalar las fuentes de recursos necesarios para atender nuevos gastos diciendo que 35 diputados adicionales se financiarán con reasignaciones.

Agregó que la norma constitucional obliga a que el Congreso no apruebe ningún nuevo gasto con cargo a los fondos de la Nación sin que se indiquen, al mismo tiempo, las fuentes de recursos necesarios para atender dicho gasto.

Por lo anteriormente planteado, solicitó al Ejecutivo que no se vulnere la Constitución Política y la Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional, y se diga cuánto va a costar realmente el aumento de senadores y diputados, y cuánto deberá financiarse con nuevos recursos, porque con reasignaciones no alcanzará.

Señaló que decisiones como no decir claramente que existirá un mayor costo por una medida que aumenta el número de parlamentarios, desprestigia a la actividad política.

El Honorable Senador señor Montes manifestó que debe decirse con claridad en el informe financiero cuánto es el mayor gasto por el aumento de diputados y senadores, tal como han planteado los senadores Coloma y Lagos.

Acotó que siempre han pedido que los informes financieros expresen con precisión los mayores gastos fiscales y su respectivo financiamiento.

Observó que sobre el mayor costo asociado y su financiamiento existe una discusión política, en que la oposición quiere argumentar que se trata de una reforma cara y que implica cuantiosos recursos que podrían invertirse en otro sector, y la coalición gobernante quiere plantear que se puede financiar con reasignaciones y ahorros con los recursos existentes.

Expresó que, por su experiencia presidiendo la Cámara de Diputados, estima perfectamente posible financiar los nuevos gastos con los recursos que se cuentan actualmente en las instituciones. Indicó que se pueden disminuir varios gastos que actualmente se efectúan en ambas cámaras.

Planteó que debe decirse cuánto será el mayor gasto y debe asegurarse que el financiamiento se proveerá de la manera que se indica por el Ejecutivo, dado que no sería presentable y aceptable que en el futuro se deba recurrir a un suplemento del presupuesto del Congreso para cubrir el referido aumento de gasto.

Concluyó manifestando que, si efectivamente el mayor gasto presupuestario se financia con racionalización y reasignación al interior del Congreso Nacional -lo que él estima que puede ocurrir efectivamente-, es partidario de aprobar el artículo en discusión.

La señora Ministra indicó que la afirmación de estar violando la Constitución no es justa. Explicó que una iniciativa legal puede traer aparejada nuevos costos que asumir, pero ello no necesariamente debe implicar un nuevo gasto o desembolso fiscal asociado. Añadió que en el Gobierno anterior se aprobaron cuatro proyectos de ley que utilizaron la misma fórmula del informe financiero cuestionado para indicar como se financiaría el costo asociado –relativos a creación de tribunales ambientales; cierre de juzgados del trabajo en Santiago; protección de los trabajadores de las empresas de aseo y modificación a la ley orgánica constitucional sobre gobierno y administración regional-, siendo el más similar el que se refiere a las municipalidades y los proveedores del servicio de extracción de basura, en donde se crearon nuevos cargos y su costo se imputa a los presupuestos vigentes y las reasignaciones respectivas.

El Honorable Senador señor Coloma expresó que en esos casos los informes financieros también pueden haber sido errados, y agregó que, en al menos dos de ellos, se trataba de la creación de un par de cargos en los servicios, lo que no es comparable con la magnitud de lo que se discute con el aumento significativo de senadores y diputados.

Reiteró que es obligación del Congreso no aceptar proyectos de ley en que no se indique cómo se financia el mayor costo fiscal.

Advirtió que se producirá un escándalo cuando, en el presupuesto que corresponda, se verifique que el aumento porcentual más alto de todas las partidas presupuestarias sea la del Congreso Nacional.

Destacó que es tarea fundamental de la Comisión de Hacienda velar por que las iniciativas que se aprueben se encuentren debidamente financiadas si son de cargo del Estado.

El Honorable Senador señor Lagos manifestó que, compartiendo parte de la argumentación precedente, discrepa de que no se sepa cómo se van a financiar los nuevos costos, porque las dietas parlamentarias están consignadas y se sabe cuál será su costo. Por el contrario, no comparte el criterio del informe financiero por el cual todos los otros gastos asociados a un nuevo parlamentario no se sabe a cuánto ascienden y se dispone que se financie por reasignaciones presupuestarias del propio Congreso Nacional.

El Director de Presupuestos, señor Granados, detalló que el informe financiero consigna el mayor costo por dietas de diputados y senadores dado que son rubros de pago obligatorio, pero, en el caso de las asignaciones parlamentarias, no existe obligatoriedad, y cada cámara las determina y asigna discrecionalmente, por lo que el Ejecutivo no pude entrar en definiciones al respecto.

Agregó que, en base al cálculo de que el pago obligatorio de dietas en el Senado y en la Cámara de Diputados representan el 10% y el 20% del total del presupuesto, respectivamente, se puede argumentar que en cada cámara existe un 90% y un 80% del presupuesto que se puede reasignar.

El Honorable Senador señor García consultó al Director de Presupuestos, acerca del punto 3 del informe financiero N° 69 al que vienen refiriéndose, en el sentido que primero se detalla el mayor gasto por dietas parlamentarias, pero en el segundo párrafo se indica que “En virtud del acuerdo político, de no incurrir en un mayor gasto fiscal por estos conceptos, será necesario efectuar los ajustes para adecuar los presupuestos de ambas corporaciones a los nuevos requerimientos,”, si ello implica, en opinión del Ejecutivo, que tanto el aumento de dietas, como las asignaciones y los gastos operacionales relativos a los nuevos parlamentarios se financiarán con cargo a lo que denominan “ajustes para adecuar los presupuestos”, porque eso pareciera colegirse de la redacción de dicho párrafo.

Asimismo, consultó cuál es el monto de todo dicho mayor gasto.

El Director de Presupuestos, señor Granados, señaló que las asignaciones las fija el Congreso Nacional y no el Ejecutivo.

El Honorable Senador señor García solicitó votación separada del inciso primero del artículo 5°.

Puesto en votación el inciso primero del artículo 5°, el Honorable Senador señor Coloma manifestó que la disposición le parece inconstitucional y efectuó reserva de constitucionalidad en consideración a que vulnera el artículo 67 de la Constitución Política de la República, debido a que el Congreso no puede aprobar ningún nuevo gasto con cargo a los fondos de la Nación sin que se indiquen, al mismo tiempo, las fuentes de recursos necesarios para atender dicho gasto.

Agregó que la Comisión de Hacienda debe ser rigurosa en exigir que los proyectos de ley que implican nuevos gastos fiscales cuenten con el debido financiamiento.

Argumentar que un aumento de 120 a 155 diputados no generará ningún gasto que no sea el pago de más dietas, no le parece correcto, señaló.

Además, que el informe financiero haga referencia a que no se incurrirá en un mayor gasto fiscal en virtud de “un acuerdo político” le parece preocupante. Manifestó no conocer el referido acuerdo y criticó que el mismo pueda formar parte de un instrumento técnico del Estado como es un informe financiero. Adicionalmente, observó que debe considerarse que el supuesto acuerdo político no ha sido suscrito por los parlamentarios de oposición.

Reiteró su apreciación de que también se vulnera la ley orgánica del Congreso, dado que no se fija el gasto total que implica el proyecto de ley y no se indica cómo se financiará.

Concluyó afirmando que votaría en contra del inciso y que lo expuesto acerca del informe financiero constituye un pésimo precedente respecto de la seriedad con que los países deben afrontar sus desafíos políticos.

El Honorable Senador señor García votó en contra del inciso primero, y planteó que se está despachando un proyecto de ley desfinanciado, lo que está expresamente vedado por la Carta Fundamental.

El Honorable Senador señor Montes votó a favor. Observó que durante el Gobierno anterior la mayoría de los informes financieros no se encontraban bien fundados y mostraban ambigüedad respecto del financiamiento. Sostuvo que existe una tendencia de la Dirección de Presupuestos a ser genérica en la manera de presentar el costo de las iniciativas y pocas veces se explica cómo se llega a la cifra que presentan, de lo que no escapa el presente informe financiero.

Añadió que vienen intentando que los informes financieros se funden adecuadamente desde que fue Director de Presupuestos Alberto Arenas.

Reiteró creer que racionalizando gastos se puede cumplir lo que plantea el informe financiero y, por lo mismo, pidió que eso se cumpla, caso contrario sería inaceptable que se estuvieran autoengañando para terminar con un suplemento del presupuesto en unos años más.

El Honorable Senador señor Zaldívar votó a favor del inciso dejando constancia, además, de que se ha dado cumplimiento a la norma constitucional que se invocó precedentemente sobre financiamiento, más allá de que se pueda cuestionar el mecanismo de reasignación presupuestaria como el más indicado, ya que deja al Congreso con menos recursos para cumplir sus funciones.

Agregó que, en el futuro, si el Congreso Nacional considera que debe cambiarse la situación de restricción presupuestaria para poder cumplir sus labores adecuadamente, deberá pronunciarse en ese sentido.

El Honorable Senador señor Lagos manifestó que su voto es favorable respecto del inciso primero. Observó que no se está vulnerando ninguna norma constitucional, pero sí compartió que no se está reconociendo que va a existir un mayor costo, aunque debe tomarse en cuenta que la Constitución Política no obliga a fijar las asignaciones parlamentarias y su monto. Recordó que en el año 2006, cuando se redujo el número de senadores a 38, los recursos existentes quedaron dentro del presupuesto del Senado y se reasignaron.

Planteó que si Gobierno y parlamentarios están de acuerdo en cambiar el sistema binominal y en aumentar el número de senadores y diputados, deben ser solidarios en reconocer que se generará un mayor gasto y que ese es el costo de tener un mejor sistema político.

Agregó que, tomando en cuenta que la Carta Fundamental sólo hace referencia a las dietas y eso se consigna en el informe financiero, puede proponerse que el Congreso regule y reasigne sus asignaciones y gastos, incluso podría eliminar dichas asignaciones, pero la pregunta que surge es si haciendo los recortes y rebajas en sus gastos podrá efectuar de buena manera sus labores.

Estimó que, probablemente, en el año 2017, cuando se discuta el presupuesto para el año 2018 se deberá efectuar un aumento considerable para el Congreso Nacional y la noticia que trascenderá a la opinión pública será que los parlamentarios se “aumentaron el sueldo”, por lo que el costo político será soportado por los parlamentarios y no por el Gobierno que presentó el proyecto de ley.

El inciso primero resultó aprobado por tres votos a favor de los Honorables Senadores señores Lagos, Montes y Zaldívar, y dos votos en contra de los Honorables Senadores señores Coloma y García.

Puesto en votación el resto del artículo 5°, esto es, su inciso segundo, fue aprobado con cuatro votos a favor de los Honorables Senadores señores García, Lagos, Montes y Zaldívar, y una abstención del Honorable Senador señor Coloma.

El Honorable Senador señor Coloma acotó que, cuando se produjo la reducción del número de senadores a 38, en el año 2006, y se liberaron recursos que fueron reasignados por el Senado, en el presupuesto siguiente lo que ocurrió fue que se efectuó un incremento para la Cámara de Diputados.

Señaló que no se ha querido reconocer en el informe financiero el mayor costo que implica el proyecto de ley por un temor político del Gobierno.

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FINANCIAMIENTO

- El informe financiero elaborado por la Dirección de Presupuestos del Ministerio de Hacienda, de 23 de abril de 2014, señala, de manera textual, lo siguiente:

“I.- Antecedentes

El proyecto de ley tiene por objeto sustituir el actual sistema electoral Binominal por un sistema electoral Proporcional, con la finalidad de fortalecer la representatividad en el Congreso Nacional y de esa forma posibilitar el ingreso a dicha Institución de las corrientes más significativas de la sociedad. Para lo anterior, se propone reducir el número de distritos y circunscripciones para que se elijan más escaños en cada uno de ello, favoreciendo el ingreso al Parlamento de sectores de menor votación pero suficientemente significativos de la sociedad.

La propuesta, implica modificar la Ley N° 18.700 Orgánica Constitucional de Votaciones Populares y Escrutinios, aumentando el número de Senadores y Diputados.

Junto a lo anterior, se incluye un artículo que modifica la Ley N° 19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, para dar vida a la propuesta de reembolsar a los partidos políticos, por cada mujer electa como Diputada y Senadora, con UF 500 a partir de las elecciones del año 2017.

II.- Efecto del Proyecto sobre los Gastos Fiscales

El presente proyecto de ley no irrogará un mayor gasto fiscal en lo que respecta a la composición del Parlamento.

No obstante, existirá un mayor gasto por lo dispuesto en el artículo 2°, que a modo ilustrativo considerando las mujeres electas como Parlamentarias en el último proceso eleccionario, habría significado un mayor gasto de UF 10.500 (M$ 250.000 aproximadamente), de haberse aplicado esta norma.

El presente proyecto de ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la Ley de Presupuestos, para la partida 02 Congreso Nacional y en lo que respecta a lo dispuesto en el artículo 2°, se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la respectiva Ley de Presupuestos.”.

- Posteriormente, se presentó un informe financiero complementario elaborado por la Dirección de Presupuestos del Ministerio de Hacienda, de 15 de julio de 2014, que señala, de manera textual, lo siguiente:

“Antecedentes

La presente indicación agrega un artículo segundo transitorio nuevo, pasando a ser el actual “Artículo Transitorio único, Artículo Primero Transitorio.

En este artículo segundo transitorio, se establece que para los efectos de las elecciones parlamentarias de los años 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las candidatas electas a Diputadas y Senadores, los partidos políticos a que ellas pertenecieren tendrán derecho a un monto de UF 500, por cada una de ellas.

Esta indicación no irroga gasto fiscal adicional a lo informado en el IF N° 41 de 23 de abril del presente año.”.

- A continuación, figura otro informe financiero complementario, de 23 de julio de 2014, que señala, de manera textual, lo siguiente:

“La presente indicación agrega el literal d) al artículo 2° del Proyecto, con un texto que agrega un nuevo artículo tercero transitorio.

Este artículo tercero transitorio establece que, para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a Senadoras y Diputadas, tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, equivalente a 0,01 unidades de fomento, por cada voto obtenido por cada candidata a Senadora o Diputada.

La actual indicación irrogará un gasto adicional respecto a lo informado en el IF N° 41 de 23 de abril pasado, equivalente a 0,01 UF multiplicada por el número de votos que obtengan las candidatas en las elecciones correspondientes. A modo ilustrativo, considerando el número de candidatas a Parlamentarias en el último proceso eleccionario, la aplicación de esta norma habría significado un gasto de UF 20.557.

Dicho mayor gasto será financiado con cargo a los recursos que se provean en la Ley de Presupuestos del año respectivo.”.

- Finalmente, se acompañó un informe técnico complementario (A los informes financieros N°s 41, 66 y 67), de 4 de agosto de 2014, que señala, de manera textual, lo siguiente:

“1. El proyecto de ley sustituye el artículo 180 de la Ley N° 18.700, disponiendo que el Senado se compondrá de 50 Senadores, aumentando en 12 los cupos de Senadores que se incorporarán al Parlamento, como resultado de la nueva configuración de las circunscripciones senatoriales y la cantidad que se elegirá en cada una de ellas.

En el año 2018, se incorporarán los primeros 5 senadores y en 2022 los restantes 7 senadores.

Por efecto de lo dispuesto en el artículo 62 de la Constitución Política de la República, existirá un mayor desembolso por concepto de Dieta Parlamentaria, estimándose en M$ 430.274 para el año 2018 y en régimen para el año 2019 la suma de M$ 516.329. Para el año 2022, el gasto se incrementaría en M$ 602.383 y para el año 2023, el gasto adicional en régimen se estima en M$ 722.860.

2. Por otra parte, al sustituirse los artículos 178 y 179 de la Ley N° 18.700, se dispone que la composición de la Cámara de Diputados estará integrada por 155 Diputados, aumentando en 35 los actuales cupos de Diputados, derivado de la configuración de los distritos electorales y la cantidad que se elegirá en cada uno de ellos, los cuales se incorporarán en el año 2018.

Por efecto de lo dispuesto en el artículo 62 de la Constitución Política de la República, existirá un mayor desembolso por concepto de Dieta Parlamentaria, estimándose en M$ 3.011.917 para el año 2018 y en régimen para el año 2019 la suma de M$ 3.614.300.

3. El siguiente cuadro muestra los desembolsos incrementales por concepto de Dietas, que se generan en los años respectivos:

En virtud del acuerdo político, de no incurrir en un mayor gasto fiscal por estos conceptos, será necesario efectuar los ajustes para adecuar los presupuestos de ambas corporaciones a los nuevos requerimientos, en consonancia con lo previsto en el artículo 68 de la Ley N° 19.918 Orgánica Constitucional del Congreso Nacional. Consecuentemente, será necesario que el Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias incorpore a contar del año 2018 estas adecuaciones en sus futuras Resoluciones.

4. Adicionalmente, por lo dispuesto en el artículo segundo transitorio y la incorporación del literal d) al artículo 2o, de la Ley N° 19.884, se estima para el año 2018, sobre la base del último proceso eleccionario, un mayor gasto fiscal de UF 31.057, recursos que se proveerán en la ley de Presupuestos respectiva.5. Finalmente, la nueva composición del Parlamento generará gastos de habilitación e infraestructura, por una vez, los que se pueden financiar con los recursos que anualmente se consultan en los presupuestos de ambas Corporaciones.”.

Se deja constancia de los precedentes informes financieros en cumplimiento de lo dispuesto en el inciso segundo del artículo 17 de la Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional.

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TEXTO DEL PROYECTO

En mérito de los acuerdos precedentemente expuestos, vuestra Comisión de Hacienda tiene el honor de proponeros la aprobación de la iniciativa legal en trámite, en los mismos términos en que fue despachado por la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento, cuyo texto es del siguiente tenor:

PROYECTO DE LEY

“Artículo 1°.- Modifícase la ley N° 18.700, orgánica constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, de la manera que a continuación se señala:

1) En el artículo 3° bis:

a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, pasando el actual inciso segundo a ser tercero:

“En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.”.

b) Intercálase el siguiente inciso quinto, nuevo, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.”.

c) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “que hubieren constituido un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

d) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “Se podrá dejar sin efecto un pacto electoral”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 4° por el siguiente:

“Artículo 4°.- En el caso de las declaraciones de candidaturas para la elección de diputados y senadores, los partidos políticos o pactos electorales podrán presentar en cada distrito o circunscripción un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción de que se trate.”.

3) Sustitúyese el artículo 17 por el siguiente:

“Artículo 17.- El Consejo del Servicio Electoral, dentro de los diez días siguientes a aquel en que venza el plazo para efectuar la declaración de candidaturas, deberá dictar una resolución que se notificará al correo electrónico que los partidos políticos y candidatos independientes deberán informar en el momento de la declaración, la que se pronunciará sobre:

a) La aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 25, 48 y 50 de la Constitución Política de la República, o que se encuentren en alguna de las situaciones previstas en su artículo 57. Asimismo, deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los párrafos 1° a 3° de este título.

b) La aceptación o rechazo de la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, declaradas por cada partido político, en conformidad a lo dispuesto en los incisos cuarto y quinto del artículo 3° bis. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con el porcentaje de sexos establecido en el inciso quinto de dicho artículo.

Los partidos políticos cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, sean rechazadas en conformidad a lo dispuesto en la letra b) de este artículo, podrán corregirlas ante el Servicio Electoral dentro de los cuatro días hábiles siguientes a la fecha del despacho del correo electrónico que notifica la resolución a que alude el inciso primero, con el fin de ajustarse al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso quinto del artículo 3° bis, ya sea retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas.

Dentro de los cinco días siguientes de vencido el plazo para presentar la corrección, el Consejo del Servicio Electoral dictará una nueva resolución aceptando o rechazando las declaraciones nuevas y rechazando o aceptando, según proceda, la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputados o a senadores, según corresponda, la que deberá ser publicada dentro de tercer día en el Diario Oficial. En tal oportunidad también se publicarán en el mismo medio la aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente.”.

4) Agrégase al artículo 23 el siguiente inciso tercero nuevo:

“En el caso de un pacto electoral, el orden de precedencia de los partidos dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito, será el señalado por el pacto electoral en la declaración de candidaturas, y a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.

5) En el artículo 24:

“a) Sustitúyese el inciso cuarto por el siguiente:

“El orden de precedencia de los candidatos de un partido y sus independientes asociados dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito, será el señalado por el partido en la declaración de candidaturas, y a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.”.

b) Sustitúyese en su inciso final la expresión “a fin de que” por “destinada a que”.

6) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme a las reglas establecidas en el procedimiento que a continuación se detalla:

1.- El Tribunal Calificador de Elecciones determinará las preferencias emitidas a favor de cada lista y de cada uno de los candidatos que la integran.

2.- Se aplicará el sistema electoral de coeficiente D´Hondt, para lo cual se procederá de la siguiente manera:

a) Los votos de cada lista se dividirán por uno, dos, tres y así sucesivamente hasta la cantidad de cargos que corresponda elegir.

b) Los números que han resultado de estas divisiones se ordenarán en orden decreciente hasta el número correspondiente a la cantidad de cargos que se eligen en cada distrito electoral o circunscripción senatorial.

c) A cada lista o pacto electoral se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b).

3.- En el caso de las listas conformadas por un solo partido político, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará electos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada lista, de acuerdo al número de cargos que le correspondan a cada una de ellas, luego de aplicar las reglas descritas precedentemente.

4.- En el caso de los pactos electorales, se aplicarán las siguientes reglas para determinar cuántos escaños le corresponden a cada uno de ellos:

a) Se calculará el total de los votos de cada partido político o, en su caso, de la suma de cada partido político y las candidaturas independientes asociadas a ese partido.

b) Se dividirá por uno, dos, tres y así sucesivamente, hasta la cantidad de cargos asignados al pacto electoral.

c) A cada partido político o, en su caso, a cada partido y las candidaturas independientes asociadas a éste, se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b) precedente.

d) El Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada partido político o, en su caso, de cada partido, considerando las candidaturas independientes asociadas éste dentro de un pacto electoral, de acuerdo a los cupos obtenidos por cada uno de ellos.

En caso de empate entre candidatos de una misma lista, o entre candidatos de distintas listas que a su vez estén empatadas, el Tribunal Calificador de Elecciones procederá en audiencia pública a efectuar un sorteo entre ellos, y proclamará elegido al que salga favorecido.”.

7) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”.

8) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos, que elegirá 3 diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte, que elegirá 3 diputados.

3er distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal, que elegirá 5 diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen, que elegirá 5 diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela, que elegirá 7 diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué, que elegirá 8 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca, que elegirá 8 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú, que elegirá 8 diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia, que elegirá 7 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín y La Granja, que elegirá 8 diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén, que elegirá 6 diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana, que elegirá 7 diputados.

13° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo, que elegirá 5 diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué, San Pedro y Padre Hurtado, que elegirá 6 diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa, que elegirá 5 diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones, que elegirá 4 diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael, que elegirá 7 diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco, que elegirá 4 diputados.

19° distrito, constituido por las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ránquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel, que elegirá 5 diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana, que elegirá 8 diputados.

21er distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja, que elegirá 5 diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino, que elegirá 4 diputados.

23er distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén, que elegirá 7 diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco, que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos, que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena, que elegirá 5 diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel, que elegirá 3 diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica, que elegirá 3 diputados.

El número de diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis.”.

9) Agrégase el siguiente artículo 179 bis:

“Artículo 179 bis.- Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con el siguiente procedimiento:

a) Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consistirá en distribuir a prorrata los cargos entre los distritos electorales, de acuerdo a la fórmula dispuesta en el artículo 109 bis de esta ley.

b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 8 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al de la realización del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con aquel en que se celebran elecciones de diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.

d) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes.

Dentro de los cinco días siguientes a la publicación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral aplicó las letras a) y b) de este artículo.

Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de febrero del año de que se trate.”.

10) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 50 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

1a circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, 2 senadores.

2a circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, 2 senadores.

3a circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 3 senadores.

4a circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, 2 senadores.

5a circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, 3 senadores.

6a circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, 5 senadores.

7a circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 5 senadores.

8a circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, 3 senadores.

9a circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, 5 senadores.

10a circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, 5 senadores.

11a circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 5 senadores.

12a circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 3 senadores.

13a circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, 3 senadores.

14a circunscripción, constituida por la XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, 2 senadores.

15a circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 2 senadores.”.

11) Derógase el artículo 181.

12) Agrégase el siguiente artículo 23 transitorio:

“Artículo 23.- La regla especial del artículo 3° bis, inciso quinto, sólo tendrá aplicación en los procesos electorales parlamentarios de 2017, 2021, 2025 y 2029.”

13) Agrégase el siguiente artículo 24 transitorio:

“Artículo 24.- Para los efectos de completar la nueva integración del Senado de la República, en las elecciones parlamentarias que deben celebrarse en noviembre de 2017 corresponderá que se renueven completamente las circunscripciones que corresponden a regiones impares.

En el caso de las circunscripciones que corresponden a las regiones pares y Metropolitana, los parlamentarios elegidos en 2013 seguirán en sus funciones hasta completar su período de ocho años. En las elecciones de 2021, estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde.”.

14) Agrégase el siguiente artículo 25 transitorio:

“Artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.”.

Artículo 2°.- Modifícase la ley N°19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, de la manera que a continuación se señala:

1) Intercálase entre el artículo 58 y el artículo transitorio el siguiente epígrafe: “Disposiciones transitorias.”.

2) Agrégase el siguiente artículo segundo transitorio, pasando el actual artículo único transitorio, a ser Artículo primero:

“Artículo segundo.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y solo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hayan sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a los que pertenezcan tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento por cada una de ellas.

Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.”.

3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a senadoras y diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 unidades de fomento por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.”.

Artículo 3°.- Modifícase la ley N° 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos, de la manera que a continuación se señala:

“1) Sustitúyese el inciso primero del artículo 3° por el siguiente:

“Artículo 3°.- Los partidos políticos existirán como tales cuando se hubieren constituido legalmente en al menos una de las regiones en que se divide políticamente el país.”.”.

2) En el artículo 6°:

a) Sustitúyese en el inciso primero la cifra “0,5” por el guarismo “0,25”.

b) Agrégase en el inciso segundo, a continuación del punto aparte, que ha pasado a ser punto seguido, la siguiente oración: “Los notarios no podrán negarse a recibir la declaración a que hace referencia este artículo y no podrán cobrar por este servicio.”.

3) Sustitúyese el inciso primero del artículo 7° por el siguiente:

“Artículo 7°.- Cumplidos los requisitos a que se refieren los artículos 5° y 6°, y reunido el número de afiliados a que alude este último artículo en una de las regiones en que se divide políticamente el país, se solicitará al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos. La solicitud deberá ser firmada por el presidente y por el secretario del partido en formación.”.

4) En el artículo 26:

a) Suprímese en el literal d) la oración “, la aprobación de un pacto electoral en elecciones de Parlamentarios o su retiro del mismo, y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal”.

b) Incorpórase el siguiente literal e), pasando los actuales literales e) y f) a ser f) y g) respectivamente:

“e) aprobar un pacto electoral en las elecciones de parlamentarios o su retiro del mismo y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal;”.

5) En el artículo 42:

a) Sustitúyese su número 2° por el siguiente:

“2°.- Por no alcanzar en la región en que está legalmente constituido el 2,5 por ciento de los sufragios válidamente emitidos en la última elección de diputados. En el caso de los partidos que se encuentren inscritos en más de una región, la disolución procederá cuando no hayan alcanzado el indicado umbral del 2,5 por ciento en más de la mitad de dichas regiones.”.

b) Sustitúyese el inciso final por los siguientes incisos:

“No obstante, si un partido político incurre en la situación prevista en el número 2° de este artículo, pero elige al menos dos parlamentarios, sean diputados o senadores, conservará su calidad de tal.

Si incurre en la situación prevista en el número 4° en una o más regiones, pero mantiene el mínimo de ellas exigido por la ley, conservará su calidad de tal, pero no podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2° en aquellas donde su número de afiliados haya disminuido en más del 50 por ciento. El Director del Servicio Electoral anotará esta circunstancia al margen de la respectiva inscripción en el Registro de Partidos Políticos.”.

Artículo 4°.- Modifícase la ley N° 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, en el siguiente sentido:

1) Sustitúyese el inciso segundo del artículo 7° por el siguiente:

“En la elección primaria para la nominación de candidatos a los cargos de Parlamentarios, para cada territorio electoral, los partidos políticos podrán participar:

a) En forma individual, sin haber suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos.

b) En forma individual, habiendo suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos dentro del pacto.

c) En conjunto con otros partidos con los cuales ha suscrito un pacto electoral, y con el objeto de determinar la totalidad de los candidatos de dicho pacto.”.

2) Reemplázase el inciso segundo del artículo 30 por el siguiente:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen de la forma señalada en las letras a) o b) del inciso segundo del artículo 7, serán nominados como candidatos para la elección definitiva en cada territorio electoral, las mayores votaciones individuales hasta completar el número de cargos definido en la declaración de candidaturas conforme al inciso primero del artículo 16.”.

3) Incorpórase al artículo 30 el siguiente inciso final:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen en pacto electoral de la forma señalada en la letra c) del inciso segundo del Artículo 7, los candidatos nominados para la elección definitiva en cada territorio electoral, serán determinados conforme el procedimiento señalado en el artículo 109 bis de la ley N° 18.700, considerando para estos efectos que constituyen una lista los candidatos de un mismo partido y sus candidaturas independientes asociadas.”.

4) Agrégase el siguiente artículo 3° transitorio.

“Artículo 3° transitorio.- El partido político que decidiere someterse al sistema de elecciones primarias contemplado en el artículo 3º y siguientes de la presente ley para los períodos electorales parlamentarios de los años 2017, 2021, 2025 y 2029, solo podrá someter a dicho procedimiento hasta un cuarenta por ciento del total de candidaturas a diputado o senador que este pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral.”.”.

Artículo 5°- Esta ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la partida 02, Congreso Nacional, de la ley de Presupuestos para el Sector Público.

Lo dispuesto en el artículo 2° de esta ley se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la Ley de Presupuestos respectiva.”.

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Acordado en sesiones celebradas los días 6 y 8 de enero de 2015, con asistencia de los Honorables Senadores señores Ricardo Lagos Weber (Presidente), Juan Antonio Coloma Correa, José García Ruminot, Carlos Montes Cisternas y Andrés Zaldívar Larraín.

Sala de la Comisión, a 12 de enero de 2015.

ROBERTO BUSTOS LATORRE

Secretario de la Comisión

RESUMEN EJECUTIVO

INFORME DE LA COMISIÓN DE HACIENDA, RECAÍDO EN EL PROYECTO DE LEY, EN SEGUNDO TRÁMITE CONSTITUCIONAL, QUE SUSTITUYE EL SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UN SISTEMA ELECTORAL PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL.

(Boletín Nº 9.326-07)

I.- OBJETIVO(S) DEL PROYECTO PROPUESTO POR LA COMISIÓN: sustituir el sistema electoral binominal por uno proporcional inclusivo y fortalecer la representatividad del Congreso Nacional.

II.- ACUERDOS:

Artículo 1°. Numerales 8), 9) y 10). Aprobados por mayoría de votos, tres a favor y dos en contra (3x2).

Artículo 2°. Numerales 2) y 3). Aprobados por mayoría de votos, cuatro a favor y una abstención (4x1).

Votación separada artículo 5°, inciso primero. Aprobado, mayoría de votos, tres a favor y dos en contra (3x2).

Artículo 5°, inciso segundo. Aprobado por mayoría de votos, cuatro a favor y una abstención (4x1).

III.- ESTRUCTURA DEL PROYECTO APROBADO POR LA COMISIÓN: consta de cinco artículos permanentes.

IV.- NORMAS DE QUÓRUM ESPECIAL: el artículo 1° de esta iniciativa, en sus números 1, letras a), c) y d); 2, 3, 6, 7, 8, 9, 10, 11, 13 y 14 requieren para su aprobación del voto conforme de las tres quintas partes de los Senadores en ejercicio, de conformidad a lo prescrito en el inciso segundo de la disposición decimotercera transitoria de la Constitución Política de la República. El artículo 1º números 1, letra b); 4, 5, y 12, así como los artículos 2º, 3° y 4º, nuevo, tienen el carácter de normas orgánicas constitucionales, en virtud de lo dispuesto en los artículos 18 y 19 n° 15, respectivamente, y 66, inciso segundo, de la Carta Fundamental.

V.- URGENCIA: discusión inmediata.

VI.- ORIGEN INICIATIVA: Cámara de Diputados. Mensaje de S.E. la Presidenta de la República.

VII.- TRÁMITE CONSTITUCIONAL: segundo.

VIII.- INICIO TRAMITACIÓN EN EL SENADO: 19 de agosto de 2014.

IX.- TRÁMITE REGLAMENTARIO: informe de la Comisión de Hacienda.

X.- LEYES QUE SE MODIFICAN O QUE SE RELACIONAN CON LA MATERIA:

1.- Constitución Política de la República.

1.1. El inciso primero del artículo 5º.

1.2.- Los incisos primero, segundo y tercero del artículo 18.

1.3.- El inciso segundo de la disposición Decimotercera transitoria.

2.- Ley Nº 18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios.

3.- Ley Nº 19.884, Orgánica Constitucional sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral.

4.- Ley Nº 18. 603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos.

5.- Ley Nº 20.640, Orgánica Constitucional que establece el Sistema de Elecciones Primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes.

Valparaíso, 12 de enero de 2015.

ROBERTO BUSTOS LATORRE

Secretario de la Comisión

2.7. Discusión en Sala

Fecha 13 de enero, 2015. Diario de Sesión en Sesión 83. Legislatura 362. Discusión Particular. Pendiente.

SUSTITUCIÓN DE SISTEMA BINOMINAL

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Esta sesión especial ha sido convocada para tratar el proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que sustituye el sistema electoral binominal por un sistema electoral proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional, con segundo informe de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento e informe de la Comisión de Hacienda, y urgencia calificada de "discusión inmediata".

--Los antecedentes sobre el proyecto (9.326-07) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican:

Proyecto de ley:

En segundo trámite, sesión 40ª, en 19 de agosto de 2014.

Informes de Comisión:

Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento: sesión 61ª, en 5 de noviembre de 2014.

Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento (segundo): sesión 79ª, en 13 de enero de 2015.

Hacienda: sesión 79ª, en 13 de enero de 2015.

Discusión:

Sesión 62ª, en 11 de noviembre de 2014 (queda pendiente la discusión en general), y 63ª, en 12 de noviembre de 2014 (se aprueba en general).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La iniciativa fue aprobada en general en sesión de 19 de noviembre pasado.

La Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento deja constancia para efectos reglamentarios de que el artículo 4° del proyecto (que pasa a ser 5°) no fue objeto de indicaciones ni de modificaciones. Esta disposición debe darse por aprobada, salvo que alguna señora Senadora o algún señor Senador, con acuerdo unánime de los presentes, solicite su discusión y votación.

El órgano técnico efectuó diversas enmiendas al texto aprobado en general, algunas de las cuales fueron acordadas por unanimidad y otras por mayoría de votos.

La Comisión de Hacienda, por su parte, se pronunció acerca de las normas de su competencia: artículos 1°, numerales 8), 9) y 10); 2°, numerales 2), 3) y 5), y no introdujo enmiendas al texto despachado por la de Constitución.

Cabe recordar que las modificaciones unánimes deben ser votadas sin debate, salvo que alguna señora Senadora o algún señor Senador manifiesten su intención de impugnar la proposición de la Comisión respecto de alguna de ellas o existieren indicaciones renovadas. De estas enmiendas unánimes, las recaídas en el número 4) del artículo 1° y en los números 1), 2) y 3) del artículo 4°, nuevo, requieren 22 votos favorables para su aprobación, por incidir en normas de rango orgánico constitucional.

Hay que hacer presente, asimismo, que con excepción del artículo 4° -pasó a ser 5°- todas las disposiciones del proyecto requieren quórum especial para ser aprobadas en particular, ya sea de las tres quintas partes de los Senadores en ejercicio, esto es, de 23 votos favorables, o de las cuatro séptimas partes de los Senadores en ejercicio, o sea, de 22 votos a favor.

La Comisión de Constitución deja constancia de que el artículo 1°, en sus numerales 1, letras a), c) y d); numerales 2, 3, 6, 7, 8, 9, 10, 11, 13 y 14 requieren para su aprobación el voto conforme de las tres quintas partes de los Senadores en ejercicio, según lo dispuesto en el inciso segundo de la disposición decimotercera transitoria de la Constitución, mientras que el artículo 1°, números 1, letra b); 4, 5 y 12, así como los artículos 2°, 3° y 4°, nuevo, tienen el carácter de normas orgánicas constitucionales, en virtud de lo dispuesto en los artículos 18 y 19, número 15, respectivamente, y 66, inciso segundo, de la Carta Fundamental.

Sus Señorías tienen a la vista un boletín comparado que transcribe el texto aprobado en general, las enmiendas realizadas por la Comisión de Constitución, y como quedaría de aprobarse estas modificaciones.

Además, se han presentado sinnúmero de indicaciones renovadas con las firmas reglamentarias correspondientes; se ha pedido votación separada de algunas normas (igual debe hacerse por tratarse de disposiciones de quórum especial), y se ha solicitado la revisión de la declaración de inadmisibilidad de dos indicaciones en la Comisión.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Quiero saludar al señor Ministro del Interior, señor Rodrigo Peñailillo, y al señor Ministro de Hacienda, don Alberto Arenas.

¡Bienvenidos a la Sala!

En la discusión particular, tiene la palabra el Senador señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, tal como lo planteó el señor Secretario, pido votación separada de cada uno de los artículos. Creo que es lo que corresponde.

¡Estoy en mi derecho a hacerlo!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Senador García, ¿usted pidió la palabra para un asunto reglamentario? Porque si no, se la voy a otorgar al Presidente de la Comisión de Constitución.

El señor GARCIA.-

Señora Presidenta, en nombre del Comité Renovación Nacional solicito que se suspenda la sesión por diez minutos.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Vamos a acceder a su petición.

Se suspende la sesión por diez minutos.

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--Se suspendió a las 12:42.

--Se reanudó a las 13:31.

)----------(

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Continúa la sesión.

Le doy la palabra al Senador señor Harboe, Presidente de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento, para que informe sobre la iniciativa en debate.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, corresponde discutir en particular el proyecto de ley que sustituye nuestro sistema electoral binominal por uno proporcional inclusivo.

Se trata de una propuesta que recoge los principios y las convicciones que durante más de veinte años han defendido las fuerzas democráticas de nuestro país. Mediante ella se busca terminar con un sistema electoral que fue construido con el propósito de garantizar que los sectores políticos afines al Gobierno militar retuvieran una cuota de poder que les sirviera para impedir los cambios legislativos, sociales y económicos que desde hace años demanda la ciudadanía.

Asimismo, el sistema electoral que hoy se pretende sustituir ha contribuido a aumentar la distancia entre la ciudadanía y los parlamentarios.

En muchas ocasiones ha permitido que se perpetúe un largo empate electoral, que, en nombre de la estabilidad política, ha impedido mejorar y hacer más democrático nuestro sistema político.

La iniciativa en análisis es el resultado de una larga negociación política, a la que fueron convocados todos los partidos políticos y movimientos con representación parlamentaria. A pesar de los esfuerzos que hizo el Gobierno por alcanzar un acuerdo lo más amplio posible en esta materia, lamentablemente una parte de la Oposición no se sumó a él.

Algunos han perdido la oportunidad histórica de sumarse al cambio y contribuir con su voluntad política a construir un sistema más inclusivo y participativo.

Somos conscientes de que no se trata de un proyecto perfecto. Este requerirá ser complementado con la aprobación de otras propuestas legislativas, referidas a la transparencia y al límite del gasto electoral y a las nuevas atribuciones fiscalizadoras del Servicio Electoral. Esas iniciativas constituirán un complemento indispensable de las disposiciones que hoy aprobaremos.

Teniendo presente esa realidad, el Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet presentó en la Cámara de Diputados un proyecto de ley que, de manera integral, abordará las materias que ya indiqué.

Resalto este último punto, pues, como se observa en el texto comparado que Sus Señorías tienen a su disposición, hemos planteado suprimir en el artículo 2° algunas de las disposiciones sobre gasto electoral que había aprobado la Cámara Baja. Lo hemos hecho no porque discrepemos de los principios que ellas establecen, sino porque nos pareció adecuado y responsable estudiar una modificación integral al sistema de financiamiento y control de los gastos electorales, especialmente a la luz de las gravísimas situaciones que en el último tiempo los medios de comunicación han dado a conocer.

¿Cuáles son los cambios que la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento propone?

A modo de síntesis, cabe recordar que la iniciativa que nos ocupa modifica la Ley Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, la Ley sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, la Ley de los Partidos Políticos y la Ley de Primarias.

En primer lugar, se mantiene la idea de fomentar la inclusión de las mujeres en la actividad política. Para alcanzar este objetivo, se propone una disposición que establece que ni los candidatos ni las candidatas que llevarán los partidos políticos o pactos electorales podrán superar el 60 por ciento del total respectivo.

En todo caso, cabe precisar que dicha medida será transitoria, que no tendrá un carácter permanente, pues dejará de aplicarse el año 2029. Su objetivo, como toda acción afirmativa, es crear una cultura de inserción y dar las facilidades para ello.

Por otra parte, se conserva la idea de que los partidos políticos y los pactos electorales podrán presentar, en cada distrito o circunscripción, un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al de parlamentarios que corresponde elegir en el distrito o circunscripción pertinente.

También se atribuye al Consejo Directivo del Servicio Electoral la labor de vigilar el cumplimiento de las normas sobre declaración de candidaturas y la facultad de rechazar las que no den cumplimiento a la regla que obliga a los partidos y pactos a presentar determinado número de candidatas mujeres.

Asimismo, se ha acogido el planteamiento de los señores Senadores de Oposición en cuanto a precisar que el orden de precedencia de los candidatos dentro de la cédula electoral será establecido por el respectivo pacto o partido político.

Se han eliminado las normas sobre limitaciones a la propaganda electoral en el entendido de que ellas deberán ser consideradas en las iniciativas que complementarán este proyecto de ley. De hecho, hoy el Gobierno, luego de un protocolo de acuerdo con la Comisión -lo discutieron durante el mes de diciembre-, ha ingresado a trámite en la Cámara de Diputados una propuesta legislativa sobre el particular.

Por otra parte, se han suprimido todas las disposiciones que se referían a los votos de lista. La mayoría de la Comisión estima que los ciudadanos, a pesar de tener distintas orientaciones ideológicas, siguen votando por candidatos o candidatas determinados, es decir, por personas naturales.

Igualmente, se ha ratificado la norma que establece el sistema D'Hont para asignar los escaños parlamentarios. El nuevo artículo 109 bis consagra y detalla cómo ellos se distribuirán entre los candidatos y las listas que presenten los partidos o pactos electorales.

De esta manera se dispone, al igual que en el ámbito de las elecciones comunales y regionales, que la distribución de escaños parlamentarios se hará en proporción a los votos obtenidos.

En materia de composición de la Cámara Baja, se mantiene lo que acordó dicha Corporación, que fue aprobado en general por esta Sala.

Yo sé que este es uno de los aspectos que han generado mayor controversia con la Oposición, especialmente respecto de la configuración de determinados distritos.

En relación con este punto, cabe recordar que la actual desproporción del peso del voto de los ciudadanos es simplemente impresentable y atenta contra todos los parámetros mínimamente serios y justos que se utilizan para configurar distritos.

El cambio que propone la Cámara de Diputados, si bien no es perfecto, resuelve considerablemente la inequidad de nuestro sistema electoral.

Las dudas que pueden generar algunas situaciones se explican por el hecho de que los nuevos distritos se construyeron a partir de dos limitaciones fundamentales: en primer lugar, se utilizan los territorios electorales que actualmente establece el sistema binominal y, en segundo término, se trata de un proyecto que será discutido y votado por incumbentes.

Lo primero se corrige a través de la facultad que se otorga al Consejo Directivo del Servicio Electoral para ejercer las atribuciones que entrega el artículo 179 bis, norma que indica que, cada diez años y de conformidad con la información proporcionada por el censo, se podrá actualizar el número de candidatos o candidatas a elegir en cada distrito, según los fenómenos migratorios poblacionales que se produzcan en nuestro país.

Respecto a la composición del Senado, se mantiene el número de integrantes que consideraba el texto aprobado en general: cincuenta. La única enmienda que hemos introducido consiste en incrementar a tres el número de Senadores en las circunscripciones tercera y duodécima, y disminuir de siete a cinco la cantidad de escaños en la Región Metropolitana, como lo había aprobado la Cámara Baja.

A ese respecto, debo señalar que la renovación senatorial será parcial: el año 2017 se actualizará su composición en las regiones impares, en tanto que las pares se ajustarán en 2021. En otras palabras, solo este último año el Senado de la República tendrá cincuenta miembros.

En relación con las modificaciones a la Ley sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, reitero que se han suprimido todas las disposiciones, aprobadas por la Cámara de Diputados, que imponían nuevas limitaciones al gasto electoral y mejoraban la transparencia sobre la materia. Lo hemos hecho no porque estemos en desacuerdo con los principios inspiradores que las animan, sino porque queremos establecer una regulación integral. Para esto se necesita un proyecto de ley específico, como el que ha sido presentado recientemente en la Cámara de Diputados, que se encuentra en tramitación en la Comisión de Constitución de dicha Corporación.

En esa materia solo se mantienen las disposiciones que fijan incentivos monetarios a los partidos y pactos cuyas candidatas a Diputadas o a Senadoras fueran elegidas los años 2017, 2021, 2025 y 2029. Se trata, entonces, de un estímulo a la inclusión femenina en la actividad legislativa.

Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar planes y programas y desarrollar actividades de fomento para la inclusión y participación de las mujeres en política.

Finalmente, señora Presidenta, se modifica la Ley de Partidos Políticos y la normativa que establece el sistema de primarias.

En primer lugar, se plantea que los partidos políticos existirán cuando se hubieren constituido legalmente -esto es, cumplir todos los requisitos que consagra la ley- en al menos una de las regiones en que se divide políticamente el país. Asimismo, se propone disminuir el número de firmas requeridas para constituir un partido y las condiciones para decretar su cancelación del registro respectivo.

Este es un asunto que genera debate no pacífico en esta Corporación y en la legislación comparada.

Actualmente, los partidos pasan por una seria crisis.

Los movimientos ciudadanos y otras agrupaciones espontáneas pretenden canalizar esas inquietudes, sin que exista respecto de ello ningún sistema de control democrático.

No se sabe cómo se financian las tiendas políticas o a qué intereses responden.

Por eso se busca que más ciudadanos puedan organizar entidades de representación política de carácter permanente, mediante las cuales difundan sus planteamientos, tengan domicilio conocido y estén sujetos a los actuales y futuros controles que se impondrán a los partidos. Facilitar su creación significará un desafío para los partidos de carácter nacional, los que deberán ajustar sus estrategias y prácticas con el fin de sintonizar y representar los intereses de más ciudadanos.

Finalmente, y a instancia de los Senadores señores Espina y Larraín, la Comisión aprobó una indicación que modifica la ley Nº 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias, con el fin de adecuar dicha normativa a los cambios que se introducen al sistema electoral.

Señora Presidenta, estamos en un momento histórico, ya que después de 25 años podremos remplazar el sistema binominal, creado a los albores del Gobierno militar. Aprobaremos disposiciones que nos permitirán consagrar un sistema electoral más proporcional, inclusivo y democrático.

Por último, reconozco en el actual Gobierno -y en tanto otros que en el pasado propusieron un cambio en esta materia- la voluntad de poner término a un sistema electoral que dañó nuestra democracia; que permitió que una minoría opusiera su permanente veto a los anhelos de cambio de la ciudadanía, y que tanto mal ha causado a la percepción que la gente tiene de la actividad política.

Hoy le devolvemos al pueblo la posibilidad de escoger con mayor libertad quiénes serán sus parlamentarios o parlamentarias, y a las minorías, la de saber que sus representantes estarán en el Congreso Nacional.

Estamos construyendo un sistema más democrático y más inclusivo.

Por todo lo anterior, señora Presidente, pido a esta Honorable Sala el respaldo para la pronta aprobación de esta iniciativa.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Señoras y señores Senadores, les recuerdo que se pidió votación separada para cada uno de los artículos del proyecto. En todo caso, correspondía proceder de esa forma porque todas las enmiendas son de quórum especial. Además, se renovaron indicaciones en muchos numerales, etcétera.

Lo primero que corresponde tratar es la letra a) del número 1) del artículo 1° del proyecto, mediante la cual se propone intercalar, en el artículo 3° bis de la Ley sobre Votaciones Populares y Escrutinios, un inciso segundo nuevo del siguiente tenor: "En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.".

Esta modificación requiere, para su aprobación, el voto favorable de los tres quintos de los Senadores en ejercicio.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En discusión la enmienda referida.

Tiene la palabra el Honorable señor Letelier, para plantear un punto de Reglamento.

El señor LETELIER.-

Señora Presidenta, faltan informes comparados en los bancos de algunos colegas. Pido a la Secretaría que los hagan llegar para seguir el debate.

Adicionalmente, quiero precisar que existe un acuerdo de Comités -vale la pena reiterarlo- para tratar esta iniciativa hasta su total despacho, ante lo cual el derecho de pedir segunda discusión, reglamentariamente, queda limitado.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

No hay posibilidad de solicitarlo siquiera.

El señor COLOMA.-

Exacto.

El señor LARRAÍN.-

No hay derecho a segunda discusión en este caso, señor Senador. ¡Quédese tranquilo!

El señor LETELIER.-

Estaba precisando el tema reglamentario solamente.

Como la discusión se hará artículo por artículo y existe un acuerdo de Comités de despachar el proyecto hoy, entiendo que el derecho a pedir segunda discusión no corre.

Quería dejar la constancia.

El señor LARRAÍN.-

¡No era necesario!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Es exactamente como indica el Senador -ya todos lo sabemos-: el debate es hasta el total despacho y se hará, tal como se ha pedido, artículo por artículo.

Tiene la palabra el Honorable señor Bianchi.

El señor BIANCHI.-

Señora Presidenta 

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Perdón. El Senador señor Harboe iba a plantear una consulta.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, entiendo que estamos en la discusión en particular; en consecuencia, corresponde argumentar solo respecto del artículo 1°.

Hago la precisión para que no haya discursos orientados hacia aspectos más bien genéricos del articulado.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Es así. Pero la discusión es más acotada aún, pues se refiere a la letra a) del número 1) del artículo 1º del proyecto.

Como ustedes saben, se ha presentado una cantidad enorme de indicaciones renovadas y se ha pedido votar por separado todos los artículos. Por tanto, vamos a atenernos estrictamente a lo que debe ser un debate particular.

Tiene la palabra el Senador señor Bianchi.

El señor BIANCHI.-

Señora Presidenta, creo que cada uno de nosotros sabe perfectamente bien qué debe o no debe decir.

Agradeciendo la sugerencia del colega, me voy a referir específicamente al artículo 1°, número 1), letra a), que es la enmienda que está en comento.

En ella queda de manifiesto la absoluta indisposición que se tuvo desde un comienzo en este proyecto para resolver un problema de nuestro país.

En el Congreso -tanto en la Cámara Baja como en el Senado- existen personas que no militan en una tienda política. En mi caso, hago presente que he postulado en dos elecciones a formar parte de esta Corporación, y en ambos procesos le gané al sistema binominal. ¡Y me mantengo en la misma posición de total independencia!

Yo voté a favor de la idea de legislar respecto de esta iniciativa, pensando que en la discusión particular habría un ánimo para acoger indicaciones que permitieran, en alguna medida, compensar, igualar la situación de las personas independientes con la de los partidos políticos, tal cual lo establece el artículo 18 de la Constitución.

En esta enmienda queda de manifiesto la completa y total imposibilidad de que dicha norma constitucional se cumpla. Así como se permite la realización de pactos entre partidos políticos, nosotros suponíamos que, en respeto al principio consagrado en la Carta, se contemplaría la opción de hacer pactos entre candidatos independientes.

Anuncio que presentaré un requerimiento ante el Tribunal Constitucional por esa situación.

Aquí queda absolutamente claro la indisposición para que existan parlamentarios independientes. Este proyecto elimina toda posibilidad de que ello ocurra.

Hoy hay que decirle la verdad al país, más allá de lo que han señalado aquí los integrantes de la Comisión de Constitución, que llevaron adelante este proceso: el proyecto se quiere presentar como si democratizara de mejor manera, o se abriera a una mayor participación, pero vamos a ir descubriendo que hay artículos que hacen exactamente todo lo contrario, pues en ellos se busca -y no me parece mal- el fortalecimiento de las estructuras hoy existentes en la política, más allá de las críticas que reciban o no, o de cómo el país observa a los partidos políticos en la actualidad, y eliminar de cuajo toda posibilidad de que una persona independiente tenga alguna opción de presentarse como candidato a Diputado o a Senador.

Nosotros tratamos de llevar adelante una propuesta para lograr la igualdad, la equidad, y espero que el Tribunal Constitucional acoja nuestro requerimiento.

La Carta Fundamental establece en su artículo 18, de manera clara, la igualdad entre los miembros de partidos políticos y las personas independientes.

Aquí, la Comisión que revisó este proyecto no solo hizo caso omiso de la Constitución, sino que eliminó toda posibilidad de los independientes, tal cual lo he señalado.

Por eso, voto en contra de la norma propuesta, pues me parece que desenmascara el objetivo final. Todos queremos un cambio del sistema binominal, pero todos queremos también una mayor participación. Sin embargo, se pretende que el país no vea que aquí, en el fondo, se trata de fortalecer estas estructuras, que están fuertemente criticadas por toda la ciudadanía. Pero hoy hay que decir la verdad, y la verdad es que se elimina la posibilidad de los candidatos independientes.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

No quedan más inscritos.

En votación el inciso segundo, nuevo, de la letra a), del numeral 1), del artículo 1°.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Hernán Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, entendiendo la inquietud planteada por el Senador Carlos Bianchi, quiero manifestar que hay una diferencia, porque nosotros pensamos que efectivamente los independientes deben tener los mismos derechos que los partidos políticos, competir en igualdad de condiciones, tal cual lo establece la Constitución. Eso es lo que procuramos efectuar en cada oportunidad, y si hay algo que esté mal habrá que corregirlo.

Sin embargo, cuando se trata de pactos, es posible entender los que puedan hacer los partidos entre sí, pero resulta muy difícil comprender los que puedan realizarse entre independientes, porque estos, precisamente por sus características, no responden a una coordenada política definida.

Un partido político, para inscribirse, tiene que presentar un planteamiento, un conjunto de principios, un proyecto político; refleja algo claro y contundente. Y los pactos son entre partidos que tienen afinidades entre sus distintas declaraciones de principios y proyectos políticos.

Así es como funciona el sistema democrático.

En relación con los independientes, si bien puede buscarse la mayor igualdad posible, en este caso no nos pareció que debería existir la posibilidad de abrir pactos entre ellos, sino entre independientes y partidos políticos, porque podría haber afinidades por los sectores que representan. Pero hacer pactos de independientes entre sí no tiene la misma similitud que los de los partidos entre sí, porque ahí pueden darse esas semejanzas.

Los independientes tienen una mirada autónoma, personal, individual, porque, si no fuera así, estarían en un partido, o configurarían con otros independientes un partido, que es lo que está haciendo el Senador señor Bianchi, por lo demás, lo cual va a permitir que ese partido, de llegar a formarse, pueda constituirse en una alternativa de acuerdos y de pactos.

Pero la posibilidad de subpactos entre independientes nos parece que no corresponde.

Lo anterior no limita los derechos de los independientes, sino que simplemente les da su proyección natural y lógica.

Por eso, nosotros no aprobamos esas indicaciones, pero sí acogimos el texto que se propone, que a mi juicio responde a la realidad.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Está inscrito a continuación el Honorable señor Letelier, pero no se encuentra en la Sala.

Tiene la palabra el Senador señor Horvath.

El señor HORVATH.-

Señor Presidente, en términos generales, quiero señalar que un sistema electoral más transparente para el elector es aquel en que las personas que individualmente obtienen el mayor número de votos resultan electas, pertenezcan a partidos políticos o no, de manera que el votante lo sepa de antemano. Esta situación se corrigió en el caso de la elección de alcaldes. Antes se elegía como autoridad edilicia al concejal de la lista más votada y que obtuvo más votos dentro de la lista o el subpacto. Porque, finalmente, el alcalde es el que tiene que encabezar una comuna y es mejor que transparentemente conozca con anticipación el procedimiento.

No obstante, ese sistema que hemos propuesto, hasta la fecha no ha prosperado.

Sin embargo, lo que esta reforma nos propone en otro punto es la creación de partidos regionales, pues si un independiente tiene la capacidad de convocar a una cantidad importante de electores en una región, resulta relevante que también los convoque a través de un programa y de un compromiso de trabajo, al objeto de evitar el caudillismo, el populismo, en fin.

Por lo tanto, ese independiente tendrá la posibilidad de generar un acuerdo con un partido regional, si no lo quiere hacer con algún partido de carácter nacional, y gozará de las mismas oportunidades que el resto de los candidatos.

Es decir, el problema se resuelve más adelante. Por eso, voy a votar a favor de la norma propuesta.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señor Presidente, entiendo que estamos votando el inciso segundo, nuevo, del artículo 3° bis.

En ese caso, quiero hacer, en primer lugar, un comentario de carácter general.

Lamentablemente, el proyecto que estamos votando es, a mi juicio, un mal proyecto -quiero decirlo derechamente, sin perjuicio de lo que vamos a ir explicando en cada uno de sus artículos-, porque en vez de permitir una mayor competencia, una acción política que represente un claro avance en cuanto a la construcción de un sistema electoral que posibilite que las minorías significativas participen en el Parlamento, para que no solo se expresen en la calle, lo que hace es construir un sistema electoral que, en definitiva, apunta simplemente a aumentar de manera absolutamente desmedida, desproporcionada e injustificada el número de Diputados y también, en segundo lugar, a establecer normas que no permiten una competencia leal, como lo vamos a demostrar.

Pero, respecto de la disposición que nos ocupa -y hago esta introducción para iniciar el debate-, cabe señalar que ella determina que los subpactos solo pueden realizarse entre un partido e independientes; es decir, que no puede haberlos si se trata de dos coaliciones políticas. Los pactos son entre partidos, lo cual significa que dos o más de ellos se ponen de acuerdo.

La referida norma señala que, dentro del pacto, el subpacto no es posible entre dos partidos políticos, sino entre un partido y candidatos independientes. Por eso establece que "En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.".

O sea, un partido político compite dentro de un pacto, no puede efectuar subpactos con otro partido político, y solo puede incorporar a su nómina de candidatos a independientes que no militen en él.

A nosotros nos parece que esa disposición es de sentido común, porque está construida en la lógica de que, dentro de un pacto, los partidos políticos compitan al interior de él, lo cual abre una puerta importante para que un partido político lleve a un independiente en un momento determinado, porque lo considera buen candidato, y, por lo tanto, se halla autorizado a considerar candidatos independientes dentro de su lista.

Por esa razón, votaremos a favor esta norma.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Letelier.

El señor LETELIER.-

Señora Presidenta, a lo largo de la primera parte del proyecto probablemente hablaremos en varias ocasiones sobre el tema de los pactos y subpactos.

Entiendo que en esta oportunidad alguien lo diga de diferente forma, pero el precepto en cuestión habilita a un partido a llevar a un independiente en su lista, en términos prácticos. Lo pone bajo el paraguas de su partido para sumar los votos de ese independiente, y de un posible militante, al caudal electoral de la colectividad.

Eso, de hecho, ha ocurrido y va a ser el efecto práctico.

Después podremos discutir la reflexión que formuló el Senador Bianchi y si dos independientes pueden pactar, o lo que indicó el Senador que me antecedió en el uso de la palabra: si debe haber subpactos entre partidos.

Pero la práctica de que un partido pueda llevar a un independiente y sumar sus votos, es algo que hasta ahora se ha permitido. Y es algo que entendemos que puede contribuir, sin duda, a que los partidos alleguen personas que quizás no quieran asumir todos los compromisos militantes de una institución, pero que sí, evidentemente, se identifican con ese partido.

Por eso, señora Presidenta, nosotros vamos a votar a favor de esta norma, sin perjuicio de que en el tema de los subpactos plantearemos una opinión específica, porque consideramos que lo que ocurrirá de hecho -y adelanto el juicio- es que se van a usar otros caminos legales, que van a ser las federaciones de partidos, como una posibilidad de hacer formalmente pactos o subpactos. Ese va a ser el instrumento legal que probablemente se va a utilizar en lo futuro.

En todo caso, señora Presidenta, nosotros que somos partidarios de que haya la mayor flexibilidad, sin perder el rol relevante de los partidos políticos, vamos a votar a favor de esta norma.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba la letra a) del número 1) del artículo 1° (32 votos contra uno).

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Allamand, Araya, Chahuán, De Urresti, Espina, García, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Hernán Larraín, Letelier, Matta, Montes, Moreira, Navarro, Orpis, Ossandón, Pizarro, Prokurica, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votó por la negativa el señor Bianchi.

2.8. Discusión en Sala

Fecha 13 de enero, 2015. Diario de Sesión en Sesión 84. Legislatura 362. Discusión Particular. Se aprueba en particular con modificaciones.

SUSTITUCIÓN DE SISTEMA BINOMINAL

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Corresponde proseguir la discusión particular del proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que sustituye el sistema electoral binominal por un sistema electoral proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional, con segundo informe de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento e informe de la Comisión de Hacienda y urgencia calificada de "discusión inmediata".

--Los antecedentes sobre el proyecto (9.326-07) figuran en los Diarios de Sesiones que se indican:

Proyecto de ley:

En segundo trámite, sesión 40ª, en 19 de agosto de 2014.

Informes de Comisión:

Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento: sesión 61ª, en 5 de noviembre de 2014.

Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento (segundo): sesión 79ª, en 13 de enero de 2015.

Hacienda: sesión 79ª, en 13 de enero de 2014.

Discusión:

Sesiones 62ª, en 11 de noviembre de 2014 (queda pendiente la discusión en general); 63ª, en 12 de noviembre de 2014 (se aprueba en general); 83ª, en 13 de enero de 2015 (queda pendiente la discusión particular).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Señores Senadores, en la página 2 del boletín comparado aparece la letra b) del número 1) del artículo 1°, mediante la cual se propone una enmienda para cuya aprobación se requiere el voto conforme de cuatro séptimos de los Senadores en ejercicio.

La Comisión de Constitución introdujo una modificación, la que fue acordada por mayoría: 3 votos a favor y 2 en contra.

Se renovaron las indicaciones números 3 y 4, de los Senadores señores Coloma y Pérez Varela y García-Huidobro y Moreira, respectivamente, para suprimir esa letra b).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Qué se vota primero, en todo caso?

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Las indicaciones, por su carácter supresivo. Y ambas buscan suprimir el texto aprobado en el primer informe por el Senado para la mencionada letra b).

La proposición aprobada en general dice:

"Intercalar el siguiente inciso quinto, nuevo, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

"De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito".

La Comisión de Constitución, por su parte, aprobó una enmienda consistente en agregar entre la palabra "respectivo." y la expresión "La infracción" la siguiente oración: "Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas".".

Las indicaciones renovadas -reitero- tienen como objetivo suprimir derechamente la letra b) del número 1) del artículo 1°.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En discusión.

Tiene la palabra la Senadora señora Von Baer.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En discusión.

Tiene la palabra la Senadora señora Von Baer.

La señora VON BAER.-

Señora Presidenta, obviamente, me declaro a favor de que mujeres y hombres tengamos participación igualitaria en política y en todas las actividades de nuestra sociedad: no solo en las colectividades y en las representaciones políticas, sino también en las empresas, en el área laboral, en el ámbito del empleo.

En tal sentido, la UDI ha hecho un esfuerzo importante para tener más mujeres involucradas en política. Sin ir más lejos, al observar esta Sala comprobamos que pocos partidos tienen dos Senadoras.

En mi concepto, uno de los esfuerzos significativos que tienen que hacerse para que las mujeres participen más en el ámbito político debe venir de las colectividades partidarias, para abrirles las puertas a aquellas y darles los apoyos necesarios.

La actuación de la mujer en política es tan baja porque los tiempos son complejos, porque la combinación con la vida privada resulta complicada. Entonces, quizás de pronto debiéramos pensar por ese lado: cómo hacer más fácil la participación femenina.

Sin embargo, señora Presidenta, más allá de que uno esté de acuerdo con la finalidad de la norma planteada, me parece que imponer que cierta cantidad de mujeres de todas maneras tengan que figurar en la papeleta no es el camino adecuado.

Incluso, esa vía es bastante mala si se piensa que con la imposición de una cuota vamos a saltarnos las elecciones primarias.

Estimo que, lejos, lo más relevante es que exista participación desde la ciudadanía en la definición de los candidatos. Por eso se aprobó una ley de primarias. Pero ahora la imposición de que cierta cantidad de mujeres estén en la papeleta nos llevará a saltarnos esa instancia en ciertos lugares, pues algunos partidos no podrán realizar elecciones primarias en ellos.

Hay mecanismos mucho mejores para ayudar a las mujeres a ganar elecciones: mayor apoyo del Estado, en fin.

A mi entender, el camino nunca puede ser el de privilegiar a una mujer por el solo hecho de que se necesita completar una cuota.

Comparto la finalidad que se persigue, pero de ningún modo el mecanismo propuesto. La imposición nunca es el camino apropiado.

En tal sentido, yo por lo menos voy a votar en contra de la disposición que se nos sugiere. Y pienso que lo más grave es que de aceptarla estaremos yendo contra las elecciones primarias.

Las primarias son un mecanismo importante, que ayuda a la participación y a la democratización de la definición de las candidaturas a parlamentario.

La imposición de una cuota atenta contra la posibilidad de que en todas partes donde haya más de un candidato se hagan primarias. Eso no va en la dirección correcta. Lo significativo es que exista participación y no imposición.

Como la norma que se nos plantea envuelve más imposición que participación, al menos mi voto irá contra ella.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra la Senadora señora Muñoz.

La señora MUÑOZ.-

Señora Presidenta, de verdad, considero vergonzoso imponer cuotas. Yo diría que, más bien, es doloroso para más del cincuenta por ciento de la humanidad, para más del cincuenta por ciento del electorado de una nación.

Sin embargo, hemos llegado a esta situación debido a la profunda desigualdad existente en esta Sala y en el resto de nuestro país con relación a la presencia de mujeres en los cargos de decisión, que tiene un sustrato muy profundo: hay un sistema patriarcal que ha reproducido una cultura en que lo femenino es inferior a lo masculino.

Eso es lo que hoy estamos intentando enfrentar con una cirugía, con una corrección a ese sistema patriarcal, que ha determinado que las mujeres hayamos quedado en desventaja en numerosos aspectos.

De verdad, resulta vergonzoso que en Chile, luego de sobre 200 años de república y de más de veinticinco años de la recuperación de la democracia, mujeres y hombres no tengamos igualdad para competir.

Aquí no es cuestión de que nos van a hacer diputadas, senadoras, alcaldesas o concejalas por arte de magia: se trata de la posibilidad de abrirnos un espacio en los partidos, a través de un sistema de cuotas, para competir a los efectos de ocupar cargos de representación popular.

De verdad, lamento que en este conflicto que nos abre el debate con relación al sistema de cuotas -un conflicto entre dos principios sumamente importantes: la participación que representan las primarias y la inclusión que significa el sistema de cuotas- tengamos que optar.

Como mujer, me parece deplorable que el mecanismo de participación para concretar una candidatura, que está revestido de plena legitimidad, entre en tensión con un sistema más importante, en mi concepto: el que permite que cincuenta por ciento de la población de nuestro país se incorpore y tenga posibilidad de actuar en las decisiones políticas y de representación.

Mi primera posición fue la de abrir un proceso también gradual, como el de la cuota, en cuatro períodos legislativos (o sea, de elecciones parlamentarias), y determinar para las primarias una suspensión. Vale decir, resolver la tensión haciendo que las mujeres no participemos en primarias; que la cuota se aplique sin necesidad de intervenir en ese proceso. Así estaríamos remediando el problema y emparejando realmente la cancha.

Cuando una mujer entra en competencia por una candidatura no parte de la misma línea que el hombre. Nosotras comenzamos con una mochila bastante más pesada, que arranca desde lo que la cultura ha instalado como algo natural, cual es hacernos cargo del trabajo en el hogar, preocuparnos de los hijos.

Partimos asimismo con las barreras que nos pone el patriarcado en el sistema financiero. Para la mujer -al menos para la de sectores medios, poco acomodados, y sobre todo para la que está sola- resulta muy difícil conseguir recursos que le permitan financiar una candidatura.

Entonces, cuando se nos obliga a señalar qué es más importante, si primarias o inclusión, es decir participación o inclusión, entramos en un debate complejo, que yo proponía resolver con la gradualidad de que aquellas fueran desde hoy día, cero, hasta el año 2024, procurando que no hubiera coincidencia entre primarias y gradualidad de la cuota.

Sin embargo, como eso no fue posible, estoy de acuerdo con la propuesta que hace el Gobierno en el sentido de establecer primarias en el cuarenta por ciento de las candidaturas, pues ello logra adecuar esa situación compleja y tensa.

Sin embargo, considero que la indicación de los colegas de la Alianza constituye un retroceso en cuanto a la posibilidad de conciliar primarias y cuotas, vale decir participación e inclusión, pues se achica el universo y la primaria le pasa por encima a la cuota. O sea, aquí no logramos hacer un equilibrio entre esos dos principios, sino que se reduce la importancia de la inclusión y se hace prevalecer la primaria.

Por eso, voy a votar en contra de la indicación. Creo que va contra todo el esfuerzo que hemos hecho. Llevamos veinticinco años de lucha. Hoy la Presidenta Bachelet, con su liderazgo, ha logrado instalar este debate en el marco del cambio del sistema electoral. Pero la propuesta que se formula por aquella vía deja a las mujeres en la misma condición.

Además, quiero llamar la atención sobre el origen de las primarias.

Ellas tuvieron su origen como forma¿

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Un minuto para redondear, señora Senadora.

La señora MUÑOZ.-

Gracias.

El mecanismo que estamos cambiando, señora Presidenta, limita enormemente la cantidad de postulantes. El sistema binominal es terriblemente cupular para la designación de candidaturas.

Muchos de los problemas vinculados con la selección de candidatos quedan resueltos con la modificación planteada. Pero creo que las primarias van a perder legitimidad, validez, y dejarán de ser un mecanismo corrector de un sistema exageradamente cupular en la decisión de candidaturas.

Por eso, creo que la propuesta de la Alianza constituye un retroceso. La voy a votar en contra. Respaldo la propuesta del Ejecutivo.

De esta manera podemos ir avanzando en un poquito de igualdad para la presencia de las mujeres en los cargos de decisión.

Gracias.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Que la Senadora señora Goic intervenga primero, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Según el orden de inscripción, le correspondía a usted, Su Señoría, pero no hay ningún inconveniente en el cambio.

La señora GOIC.-

Le agradezco a mi Honorable colega Harboe.

En verdad, lo que hacen las indicaciones en debate es eliminar del texto un tremendo avance, como se ha planteado, en términos de la incorporación de las mujeres a la posibilidad de competir en elecciones, dentro de un proyecto que busca no solo terminar con el sistema binominal, sino también fortalecer la representatividad del Congreso. Para este último efecto, ellas tienen que ser consideradas en una proporción mayor, a fin de lograr una mayor similitud con la realidad de la población, donde conforman más del cincuenta por ciento.

Más que apuntarse a una ley de cuotas, lo que se busca es la participación equilibrada de ambos sexos en las candidaturas y que ninguno de ellos pueda superar el sesenta por ciento de los inscritos para competir.

Además, la medida es transitoria, recogiéndose la experiencia de varios otros países, la cual demuestra que si no se aplica este criterio, el proceso, por la vía de la cantidad de mujeres que tradicionalmente se incorporan, al final resulta muy lento. Producto de la última elección, llegaron una más al Senado y dos a la Cámara de Diputados. A este ritmo, es muy difícil alcanzar tasas más cercanas al cuarenta por ciento.

Lo anterior se complementa con otros mecanismos. Es preciso destacar cómo en la propuesta se rescatan incentivos económicos a los partidos por la elección de mujeres. Una de las dificultades que se señalaban dice relación con que para ellas es más difícil contar con recursos para el financiamiento de una campaña. Por lo tanto, la devolución por voto será mayor. Quisiera respaldar lo anterior.

Logramos resolver, asimismo, un problema en el texto aprobado en la otra rama del Congreso, cual era la incompatibilidad de las primarias. En algún momento, estas aparecían como una vía para eludir el cumplimiento de la cuota de género, en la medida en que si se llevaban a cabo, podía quedar fuera el sesenta o el cuarenta por ciento. Lo que se ha hecho es compatibilizar. Tal como se ha expresado, el territorio donde los partidos pueden efectuarlas se restringe al cuarenta por ciento, con el objetivo de recurrir al sesenta restante si es necesaria la incorporación de mujeres.

Las últimas primarias no correspondieron a más del diez por ciento de los distritos y las circunscripciones. Entonces, el cuarenta por ciento parece absolutamente razonable y permite que ambos mecanismos de alguna manera converjan y se concilien dos principios: el de inclusión, en el caso de las mujeres, y el de participación, que ha sido bien valorado por la ciudadanía en las definiciones de candidaturas a través de elecciones primarias. Ello, si así lo decide el partido.

En consecuencia, cabe respaldar el texto tal como ha sido presentado y consignar que no se trata solo de un beneficio para las mujeres, sino también para la representatividad de la Cámara de Diputados y del Senado. Es algo que le hace bien a la democracia y, de alguna manera, a la conexión de nuestros debates, de nuestras decisiones, con la ciudadanía.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Puede intervenir el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, creo que el artículo, en los términos en que quedó redactado finalmente en la Comisión, comienza a construir uno de los graves y reiterados errores que contiene la reforma del sistema electoral.

Cuando se dice lo anterior y alguien sostiene: "Es que la Derecha quiere que se mantenga el sistema binominal", este último miente. ¡ Anótelo, por favor, Su Señoría! Porque nosotros planteamos una propuesta, por debatir en su momento, suscrita por los jefes de bancada de la Concertación y de Renovación Nacional -asimismo le cupo un papel destacado a la Democracia Cristiana-, demostrativa de que no solo queríamos un cambio del sistema electoral, sino también un mecanismo bastante más proporcional que el finalmente sometido a discusión y que probablemente se aprobará en el día de hoy, sin que vaya a cumplir con los requisitos básicos para ser conveniente.

Cabe considerar los siguientes aspectos. En primer lugar, ¿debe o no existir una cuota en favor de las mujeres? A pesar de que es para uno u otro sexo, ha sido considerada en la lógica de estas últimas. Nosotros estimamos que la respuesta es afirmativa.

Y la medida es de carácter transitorio, porque las mujeres efectivamente enfrentan hoy una dificultad para postular a cargos de elección popular. Por lo tanto, en una primera etapa es positivo exigir transitoriamente, con el propósito de "emparejar la cancha", una cantidad de cupos para que se puedan incorporar más de ellas a la política. Así que no estoy a favor de las indicaciones que eliminan las cuotas.

Mas deseo consignar que en seguida se va a votar una proposición que resuelve lo que en el proyecto quedó y que a mí me parece, con el mayor respeto por Sus Señorías, una muy mala fórmula, pues lo que en definitiva resolvió la mayoría de la Comisión de Constitución es que el cuarenta por ciento será obligatorio respecto de la cantidad final de candidatos de cada colectividad política y limita las primarias a esa proporción. O sea, si candidatos quieren ir a una primaria en un uno por ciento adicional, eso no será posible -significa borrar con el codo lo que se escribe con la mano-, porque los partidos, en forma arbitraria, tendrán que resolver que en el cuarenta por ciento del total de sus distritos o circunscripciones puede realizarse una de ellas, pero no en el sesenta restante, aun cuando haya más candidatos.

Sinceramente, insisto en que este es uno de los peores mecanismos que he visto para determinar lo relativo a las cuotas, porque si en el sesenta por ciento de los distritos se quiere ir a una primaria democrática para competir, participar y definir quiénes serán los candidatos, la colectividad tendrá que rechazarlo y precisar que ello solo puede tener lugar en el cuarenta. ¿Y quién va a resolver el cuarenta?

Señora Presidenta, ¡esta es una muy mala solución!

Lo que nosotros planteamos es que el cuarenta por ciento del cupo sea inicial y que el partido lo cumpla en el momento en que presente toda su plantilla de candidatos a parlamentarios. Y si después se efectúa una primaria, quedará el que la haya ganado, sea hombre o mujer. Pero no se puede proceder al final, lo que francamente provoca una grave distorsión de la competencia leal en democracia, porque va a significar que en algunos distritos los candidatos de una colectividad no podrán competir entre ellos si se está por sobre el cupo de cuarenta por ciento.

Ya expresamos que estamos construyendo un sistema electoral competitivo, participativo, democrático, y le estamos diciendo al sesenta por ciento que ahí no corre la democracia, pues los candidatos son nombrados a dedo. Por este motivo, no voy a aprobar la proposición.

La siguiente, que hemos presentando junto a un grupo de Senadores de la Alianza, sí nos parece que corrige el error con que el proyecto finalmente quedó.

Gracias.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, cuando mencionamos las cuotas, aludimos a un imperativo ético para poder revertir una situación de rezago de un grupo importante de nuestros compatriotas. Me refiero a la mayoritaria población femenina, la cual, en la práctica, ve con mayor dificultad la posibilidad de participar de la actividad política. Como se ha demostrado, el aporte, la diversidad, la forma de mirar la actividad pública y el rol social difieren mucho en el caso de los hombres.

En consecuencia, se requiere la incorporación de cuotas, denominadas también "acciones afirmativas", con el objetivo de nivelar la cancha.

Hay una clara colisión entre el principio de inclusión, que busca incorporar a la mujer en la actividad política, y el de participación, que inspiró la ley de primarias. Siendo ambos muy importantes, tenemos que ser capaces de compatibilizarlos.

La imposición del segundo podría significar que solo se realizaran dichas elecciones, sin que necesariamente hubiese algún tipo de apoyo para la inclusión de la mujer.

Una segunda alternativa es que el principio de inclusión pase por encima del de participación y se establezca obligatoriamente una cantidad determinada de candidatos, con la eliminación del proceso de primarias.

El artículo apunta a la compatibilidad y establece que la cuota femenina se aplicará a los candidatos independientemente del sistema de nominación. ¿Y por qué lo dice, disponiéndose más adelante la transitoriedad, etcétera? Porque lo que se busca es evitar la utilización de las primarias como una excusa para no incorporar mujeres.

Por lo demás, ¿por qué vienen hoy día a enarbolar la bandera de las primarias si, cuando se observa la experiencia recién pasada, no más de un 30 por ciento de los candidatos al Congreso fue definido en esa forma? El resto de los candidatos fueron designados por las directivas de los partidos políticos.

Lo que hace la norma es decir: "Necesitamos, como sociedad, incorporar la presencia femenina en la actividad legislativa, ya que la valoramos, y no queremos que por la vía de primarias se deje sin efecto la inclusión". Y la hacemos compatible. Decimos: "¿Sabe? Usted, partido político, tiene el legítimo derecho de seguir verificando ese tipo de elección hasta en relación con un cuarenta por ciento de sus candidatos por definir". Alguien expresará: "¡Ese porcentaje es muy poco, pues!". Bueno, ¡ninguno de los partidos políticos representados acá eligió en esa forma -repito- más del treinta por ciento en la elección anterior! ¡Ninguno! En consecuencia, existe una realidad práctica.

En segundo lugar, la disposición se traduce al final del día en permitir -insisto- la compatibilidad entre los dos principios.

Por eso, llamo a aprobar el artículo despachado por la Comisión de Constitución y a rechazar las indicaciones tendientes a la supresión, porque, más allá de la retórica y de los discursos, lo que se busca es evitar la existencia de una ley de cuotas. Y es legítimo. Somos distintos y pensamos distinto. Pero es preciso transparentarlo y manifestarlo.

Aquí vamos a ver quiénes estamos a favor de la inclusión de la mujer en la actividad política a través de una acción afirmativa, denominada "ley de cuotas", y transitoria, para cuatro elecciones, con el objetivo de crear la cultura necesaria.

¿Y una vez que ello se logre desaparecerá la obligación legal, porque se supone que existirá una cultura de inclusión, o intervendrán aquellos que exponen: "¿Sabe? Dejémosle solo a los directivos de los partidos políticos el que eventualmente puedan incorporar mujeres en la actividad política"? Esta es nuestra definición de hoy día.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Puede intervenir el Senador señor Rossi.

El señor ROSSI.-

Señora Presidenta, la participación de la mujer en política es muy relevante para la democracia.

Hace doce años, más menos, presentamos un proyecto de ley de cuotas que pretendía, un poco a semejanza de lo hecho en Argentina, establecer un piso de un treinta por ciento de candidatas. Fue algo tímido si se compara con la iniciativa en debate, que pretende alcanzar la paridad, es decir, que ningún género supere el sesenta por ciento o esté representado en menos del cuarenta.

Fíjense Sus Señorías que la formula funcionó en el país vecino y que la representación de mujeres en el Congreso pasó de un cinco por ciento al treinta y uno en la elección siguiente. Básicamente, eso se debe a que es posible romper ciertas estructuras sociales, culturales, que condicionan la participación de la mujer al ámbito de la vida privada, del cuidado de los hijos y del hogar, restringiendo la posibilidad de desarrollo en otros, como el económico o el político, que es el caso que nos convoca.

Efectivamente, en nuestra sociedad existen, como aquí se ha dicho, una estructura patriarcal, una dominación masculina, que cercena las posibilidades de desarrollo pleno de las mujeres, si bien es cierto que ha tenido lugar un proceso de "inclusión por abajo", como podríamos llamarlo, ya que si se analiza la representación femenina en el tejido social, se observa que incluso resulta mayoritaria en juntas de vecinos, en organizaciones comunitarias.

Aún queda por resolver la ausencia en espacios de poder, en donde se toman las decisiones: lo que podríamos llamar la "inclusión por arriba". Por eso, el proyecto, entre otras virtudes, exhibe la de hacerse cargo de un problema de género, que es la exclusión y la discriminación de la mujer en ese ámbito, y legitima su presencia.

Recordemos que hace no mucho tiempo se mencionaba que Chile no estaba preparado para una Presidenta de la República. Y lo decían hasta integrantes de la entonces Concertación. Hoy día, el país tiene una Primera Mandataria que, además, volvió a ocupar el cargo: es su segundo período. Y, sin duda alguna, eso ha permitido generar un cambio cultural en el sentido de que se ve de otra manera la intervención de la mujer en la política.

Mas justamente son necesarias estas medidas de ajuste, que pueden ser transitorias, para lograr la paridad, la igualdad de participación, lo que tiene relación con el régimen democrático. No hay democracia plena si no existe igualdad de género, y, por tanto, es fundamental aumentar la presencia femenina en la actividad mencionada.

Ahora, me llama la atención, sí, en la línea de lo que manifestaba el Honorable señor Harboe, que quienes permanentemente han estado en contra de la ley de cuotas -¡qué bueno que en las bancadas de enfrente haya personas que reconozcan su rechazo al mecanismo transitorio para lograr una mayor participación de la mujer!- también se opusieron, en su minuto, a las primarias. Y hoy día reclaman que ese tipo de elecciones se estaría disminuyendo, en circunstancias de que ningún partido, ninguna coalición, las llevó a cabo más allá del cuarenta por ciento de los cargos en disputa.

Quiero consignar algo más: son bastante escasos los lugares en el mundo donde se practican las primarias a nivel parlamentario. En Chile eran necesarias por el sistema electoral binominal, que reducía tremendamente la oferta de candidatos a la comunidad. Pero, con un sistema distinto, como el proporcional corregido que estamos planteando -y espero que lo aprobemos esta tarde -, no se requieren.

Al Senador que habla le gustaba más la fórmula 2n, es decir, la posibilidad de la lista de postular exactamente el doble de candidatos por cupo. Lamentablemente, al final quedó N+1, o sea, si se elegirán dos, se presentan tres candidatos, y si se trata de tres, se plantean cuatro. Pero eso de alguna manera permite disminuir bastante la necesidad de primarias.

Creo que la forma como ha sido aprobado el artículo en la Comisión de Constitución responde a la necesidad de una inclusión y de la participación y presencia de las mujeres en política.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Puede intervenir el Honorable señor Quintana.

El señor QUINTANA.-

Señora Presidenta, en opinión del Partido por la Democracia, esta es una de las materias más importantes del proyecto. En su declaración de principios señala expresamente que es una colectividad política paritaria.

Esta es una gran oportunidad para hacer justicia con las mujeres; para establecer incentivos y mecanismos a fin de promover su participación. El proyecto contempla ese objetivo para las elecciones, pero también para impulsar la actuación femenina al interior de los partidos, lo cual hoy no resulta nada de fácil. De los partidos con representación parlamentaria, todos tienen en su presidencia a un hombre, lo que constituye una dificultad.

Por lo tanto, estamos frente a una materia donde los hombres tenemos mucho que decir. Este ámbito no queda solo para el liderazgo feminista, ya que la Organización de las Naciones Unidas ha interpelado al mundo masculino de la política para que tome acciones. Y me parece que, como nunca antes, se están llevando a cabo acciones de manera muy responsable para que esta normativa no quede en letra muerta y no tengamos que experimentar situaciones como la ocurrida en Brasil, donde, si bien la ley contemplaba la inclusión de candidatas, por la vía de los mecanismos de definición de los partidos e incluso por la forma de presentación del voto, las mujeres finalmente quedaban fuera de la participación.

En tal sentido, el Presidente de la Comisión de Constitución, Senador señor Harboe, ya explicó con claridad que en este caso se logra un buen equilibrio entre dos bienes a proteger importantes: la inclusión, para la promoción de la participación de mujeres, y la participación propiamente tal, que tiene que ver con las primarias.

Como ya lo manifestaron el colega Rossi y varios otros señores Senadores, incluida la señora Adriana Muñoz, a los sectores que ahora enarbolan las banderas de la participación en primarias nunca los vi defendiendo con fuerza ese mecanismo. Sí debo reconocer el rol que, por ejemplo, cumplió Renovación Nacional en la elección de Diputados, pues tuvo primarias legales. Hay que reconocerlo.

Hubo una cantidad importante de primarias convencionales que, por diversas razones, no pudieron ser legales, tanto dentro de los distintos partidos de la Nueva Mayoría como en la coalición misma.

Con toda claridad, se trató de un número muy reducido, de un porcentaje que no superó el 20 o 25 por ciento del total de los distritos.

Por tanto, como tendremos un sistema de inscripción con N+1, es decir, con mayor cantidad de candidatos, nada hace pensar que las primarias serán el gran mecanismo demandado en la próxima elección parlamentaria. Constituirán un mecanismo; la ley que las introdujo constituyó un gran avance, y están contempladas en la legislación.

Pero insisto, señora Presidenta: hoy estamos dando un paso importantísimo en orden a resguardar la participación de las mujeres mediante este equilibrio del 40 por ciento -ningún género va a tener un predominio tan superior al otro- y, de esa manera, abordar un tema en el cual Chile había innovado muy poco. Y hoy lo hace a través de una normativa que representa un cambio histórico tan relevante como el fin del sistema binominal.

Por lo tanto, voto a favor de la letra b) propuesta por la Comisión de Constitución y, naturalmente, en contra de las indicaciones renovadas por sectores que no quieren avanzar en la materia.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Pérez Varela.

El señor PÉREZ VARELA.-

Señora Presidenta, al leer en detalle el proyecto sometido a discusión, tengo la impresión de que esta fórmula es bastante improvisada, como analizada a última hora. Porque, sin duda, uno de los temas pendientes en nuestra sociedad es la participación de la mujer en política. Y todos hacemos un esfuerzo -nosotros hemos dado muestras de ello- para fomentar esa participación en distintas instancias.

Por consiguiente, no se trata de que algunos quieran que las mujeres participen y otros no, sino de cuáles son los mejores mecanismos para ello. Y el que se nos plantea es, claramente, uno improvisado.

Porque la próxima elección en nuestro país será de alcaldes y concejales. ¿Y existe alguna iniciativa en trámite en el Congreso para impulsar la participación de la mujer en los gobiernos comunales, dada la cercanía de esa elección? Ninguna.

La Presidenta de la República mandó hace pocos días un proyecto para la elección de los intendentes. No contiene ningún precepto sobre la participación de la mujer. Y no hay duda de que el verdadero poder está en los gobiernos regionales y comunales, que es donde debería producirse una mayor posibilidad de participación ciudadana.

Sin embargo, aquí se ha enviado una fórmula absolutamente improvisada; tanto, que echa por tierra algo que se nos dijo durante mucho tiempo: que las primarias habían llegado para quedarse, que eran el mecanismo para que los partidos no eligieran a dedo. No obstante, hemos visto varios ejemplos en que se predica de una manera y se practica de otra.

El gran conflicto que se produjo en el Partido Socialista en las últimas elecciones senatoriales fue precisamente porque se decidió no hacer primarias.

Y ahora nos dicen: "¿Saben? En el 60 por ciento de los distritos y circunscripciones no habrá primarias. Los partidos elegirán a quién llevan".

Considero que lo anterior no es coherente y manifiesta una clara improvisación.

En consecuencia, el camino a seguir debe ser necesariamente otro.

¿Por qué una institución tan democrática como las primarias vendría a constituir un obstáculo para la participación de la mujer?

¡Cómo alguien puede argumentar que las primarias impiden esa participación!

Me parece que eso no resiste ningún análisis. Porque, frente al argumento dado por el Senador que me antecedió en el uso de la palabra en cuanto a que las primarias pueden ser un engaño, un ardid para evitar la participación de la mujer, uno podría preguntarse: ¿quién dice que la designación a dedo de las directivas de los partidos no pueden ser también un ardid?

Por lo tanto, aquí claramente estamos ante un mecanismo improvisado, que no resuelve el conjunto de la participación de la mujer en política, que es a lo que deberíamos estar dedicados. El mensaje es que en la elección municipal del 2016 el tema no va a estar resuelto ni se sabe cómo se va a resolver, al igual que en la eventual elección de intendentes.

Por consiguiente, llamo a analizar en serio este asunto y a encontrar una solución de carácter global para el conjunto de las instituciones políticas de nuestro país. Porque aquí se afirma que, por el hecho de incorporar a la mujer en una o dos elecciones, se creará una cultura en tal sentido que permitirá incluirla para siempre.

Señora Presidenta, el 2006 nos dijeron que los gabinetes eran paritarios.

¿Qué pasó el 2014? ¡Se acabó la paridad!

En consecuencia, creo que ese no es el camino.

El mecanismo que propone el Gobierno no es el correcto. Por eso, votaremos a favor de las indicaciones que suprimen la letra b), la cual no avanza en la dirección correcta.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, hay un par de temas a discutir a propósito de las cuotas. Uno es si tener o no un porcentaje de ellas, y otro, cuánto se considerarán las primarias en esta materia.

Al igual que la Senadora Von Baer, creo que cuando las mujeres quieren y pueden se incorporan a la vida política con éxito. Por lo tanto, no necesitan subsidios para seguir avanzando.

Sin embargo, advierto que la situación no ha sido exitosa, en el sentido de que, particularmente en el Parlamento, no hemos podido incorporar a una cantidad razonable o suficiente de mujeres.

Yo entiendo que estamos dentro de un proceso.

Me ha tocado participar, por mi partido, en comités electorales de búsqueda en procura de los mejores candidatos. Y tenemos clara conciencia de que las mujeres son muy buenas candidatas. Probablemente, nosotros hemos tenido una de las más altas proporciones de mujeres candidatas entre todos los partidos políticos chilenos, y en diversos ámbitos (concejales, alcaldes y parlamentarios), muy superior a las de otros. Hacemos un esfuerzo, pero muchas veces no logramos conseguir buenos resultados debido a las dificultades objetivas que existen.

En la Comisión de Constitución voté a favor de las indicaciones en debate, que son supresivas, y voy a mantener mi posición.

Quiero advertir, como ya lo hice allí, sobre algunos riesgos que implica la norma.

En primer término, la falta de una candidata se puede traducir en la improvisación de una postulante y en que se inscriban mujeres solo para el efecto de cumplir el requisito, a sabiendas de que no se está más que llenando un cupo para satisfacer una obligación legal.

Por lo mismo, planteé la necesidad de buscar una gradualidad en la implementación de esta medida.

Lamentablemente, no hubo oídos para eso. Porque muy distinto sería empezar con 20, 25 por ciento y seguir aumentando el porcentaje elección tras elección. Y hacerlo, además, en todos los ámbitos: en el de los concejales, en el de los alcaldes.

Me parece que sería bastante más razonable, para así cumplir con el requisito con verosimilitud, con realismo, y no simplemente tratando de llenar los cupos, lo que, al final, puede significar un mayor castigo.

Hay otro tema involucrado, pues la norma ya aprobada considera que, no obstante que se hayan realizado primarias para la designación de los candidatos, la nómina final que presente un partido o un pacto debe cumplir, por cada partido, el porcentaje correspondiente.

Esto significa que las primarias pierden valor. ¿Por qué? Porque, si un partido realiza diez primarias y cumple con el requisito en todas, pero los ciudadanos no eligen a las candidatas mujeres, aquellas perderán su valor para los efectos del cumplimiento de las cuotas. En tal caso, se le exigirá al partido que las cumpla en otros distritos, lo cual demuestra que, para poder satisfacer el requisito, no podrá llevar a cabo primarias, por el riesgo de tener que complementar en otros distritos la falencia de candidatas mujeres que pueda presentarse en aquellos donde sí se efectúen.

En mi opinión, eso es francamente inaceptable.

Nosotros hemos presentado una indicación para que, si un partido realiza primarias, el requisito de los porcentajes se exija en el distrito o circunscripción donde ellas se verifiquen -me parece que eso es lo justo y lo correcto-, de modo que el porcentaje del resto sea requerido en los otros distritos o circunscripciones, de acuerdo a los porcentajes nacionales respectivos, excluido lo que allí haya ocurrido, si verdaderamente se ha cumplido con el requisito en las postulaciones iniciales.

Finalmente -me alcanza el tiempo-, se expresa voluntad para terminar con las primarias no solamente aquí, sino también con el hecho de que se establezca la restricción del 40 por ciento. Eso, claramente, es inaceptable; rompe la igualdad, como bien lo planteaba el Senador Espina, y es de manifiesto orden inconstitucional, al restringir más allá de lo correspondiente la norma consagrada en nuestra Carta Política.

¿Me concede un minuto más, para redondear, señora Presidenta?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Sí, señor Senador.

El señor LARRAÍN.-

Gracias.

Por lo tanto, creemos que aquí se abre un foco. Desde la perspectiva política, se está desvalorizando y desahuciando las primarias, que en su minuto fueron consideradas un gran avance para la democracia, a fin de que los candidatos no fueran designados por los partidos a través de sus cúpulas o de comités manejados por mayorías partidarias, sino mediante la participación ciudadana.

Lo que se dijo ayer, hoy día se olvida. Y se olvida en nombre de las cuotas. Nosotros no estamos pensando en evitar el cumplimiento de estas, sino en que se entiendan cumplidas si se realizan primarias. Ahora, si los ciudadanos eligen ahí, en lugar de una candidata mujer, a un candidato hombre, la democracia ya habrá hablado, por lo que no se podría inculpar a una cúpula sobre tal decisión.

En ese sentido, creemos que hay que respetar el valor de las primarias, que en estas normas se está perdiendo.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor García.

El señor GARCÍA.-

Señora Presidenta, soy partidario de la norma que establece las cuotas. A mi juicio, hay dificultades reales y ciertas para una mayor incorporación de las mujeres en la actividad política.

En más de una oportunidad escuché decir -y con toda razón- que, por ejemplo, nuestros horarios de funcionamiento ya son un obstáculo para que las que son mamás puedan participar en esta actividad. Porque, estando en el Congreso, no es fácil atender las distintas inquietudes y necesidades de los hijos, dados los horarios en que nosotros trabajamos. De hecho, hoy mismo se proyecta una jornada que, al parecer, será bastante larga, lo cual, muchas veces, resulta incompatible con el doble rol que cumple la mujer, quien, además de madre, tiene que desarrollar una actividad profesional, remunerada, de servicio público y de índole política.

Entiendo que lo que se busca es que esta norma sea efectiva y que las candidaturas de mujeres resulten fuertemente competitivas. El propósito no es que haya más mujeres candidatas, sino que lleguen más mujeres al Senado y a la Cámara de Diputados.

Entonces, pienso que de aquí al año 2017 será muy difícil que los partidos políticos puedan cumplir adecuadamente con disposición.

Al final, como los partidos políticos normalmente van en bloque a las elecciones, esta norma implica que podrán llevar uno o dos candidatos por distrito o por circunscripción senatorial. En buen castellano, significa que las listas deberán conformarse mitad varones mitad damas, por lo que veo muy difícil que esa proporción, en listas de candidatos a parlamentarios que tienen que estar disponibles a comienzos del 2017, se pueda cumplir.

Por eso, solicito al señor Ministro del Interior, a la señora Ministra Secretaria General de la Presidencia y a la señora Ministra del Servicio Nacional de la Mujer, que, si nosotros queremos que esta legislación sea efectiva y eficaz, se comience a aplicar en forma gradual. Es lo razonable. No costaría nada rebajar la exigencia, para el año 2017, de 40 a 20 o 25 por ciento, tal como lo planteó el Senador Larraín.

Lo importante es que -insisto- la norma sea eficaz, que iniciemos un camino. Por consiguiente, en la medida en que ese camino dé resultado y en que, efectivamente, la próxima elección parlamentaria signifique una mayor elección de mujeres, estaremos cumpliendo dicho propósito.

Así como está la disposición, dificulto mucho que sea posible darle cumplimiento. No me sorprendería nada que, a última hora, tuviéramos que estar modificando y adecuando la normativa porque los partidos políticos se han dado cuenta de que existen enormes dificultades para cumplirla.

Pienso que, si se efectúa un análisis al interior de cada partido político, veremos que para todos -para unos más, para otros menos- resultará bastante difícil aplicar la norma desde comienzos del año 2017.

Por lo tanto, considero indispensable introducir una disposición transitoria que le dé gradualidad a su cumplimiento.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, en este artículo, que es simple, hay varias ideas.

Solo quiero dejar constancia de que yo no soy partidario de las cuotas, porque, al final, no resuelven el tema de fondo, que es cómo mejorar la participación real de la mujer en política.

Dicho sea de paso, hoy día, sin el sistema de cuotas, tenemos una Presidenta de la República y una Presidenta del Senado que no sé si irá a ser también Presidenta de su partido. Por tanto, hay espacios que demuestran que, cuando la gente tiene ganas, capacidad y se dan los escenarios, es posible salir adelante. Y, a mi juicio, le hace bien a Chile que haya pluralidad.

La UDI tomó una decisión distinta, por ejemplo, a la del PPD, que es otra colectividad que ha considerado el tema. Este partido tiene cuotas; nosotros, no. Sin embargo, tenemos más parlamentarias que ellos. De hecho, aquí tenemos a dos Senadoras. ¿Y por qué? Porque se da un espacio real y se hace un esfuerzo especial para que ello sea posible.

Yo no tengo objeción a que se realice un mejoramiento, por ejemplo, en las condiciones de financiamiento, porque me he ido convenciendo de que se trata de un problema real. Pero, a mi juicio, dar artificialmente un espacio no genera ningún resultado, sino que más bien produce la búsqueda de lugares donde no sea posible ganar para cumplir teóricamente con la regla.

Dicho lo anterior, señora Presidenta, deseo hacerle, por su intermedio, un planteamiento al Ministro del Interior.

Más allá del contenido de esta materia, se agrega que el "porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas.".

La única manera de entenderlo es en función del artículo 3º transitorio, que establece que solo es posible efectuar primarias hasta en el 40 por ciento de los cargos.

En cuanto a la aplicación práctica, no sé si el Gobierno -por intermedio de la Mesa- nos puede decir qué se busca. Tomo el caso de las senatoriales, por ejemplo. En la próxima elección se consideran la Primera, la Tercera, la Quinta, la Séptima, la Novena y la Undécima Región (ya no están divididas las regiones), es decir, son seis. O sea, conforme a la ley en proyecto, solo podría haber primarias en dos circunscripciones.

No sé si esa es la idea, tomando en cuenta que aquí nos devanamos los sesos durante años con el tema de las primarias para establecerlo como el mecanismo priorizado para elegir candidatos. Esta norma nos indica que, de seis senatoriales, en dos circunscripciones se pueden realizar primarias. En las otras no, conforme al artículo en análisis y al 3º transitorio.

Creo que este es un problema muy absurdo, y que además violenta el sentido común.

A la vez -he querido manifestarlo a la Mesa-, violenta, a mi juicio, la Carta Fundamental.

Quiero plantear un tema constitucional, en el siguiente sentido.

El artículo 19, número 15º, dispone que "Una ley orgánica constitucional establecerá un sistema de elecciones primarias que podrá ser utilizado por dichos partidos para la nominación de candidatos a cargos de elección popular".

Eso nos dice la Carta. La ley en proyecto señala que eso no es así, que aquel mecanismo puede ser utilizado en cierto porcentaje de casos. Pero la normativa vulnera el derecho -no soy devoto de las primarias- de los partidos a buscar un sistema más participativo para la elección de sus candidatos.

Entonces, señora Presidenta, creo -por eso quería hacerle la consulta de constitucionalidad- que esta norma violenta el artículo 19, número 15º.

Y me gustaría, si es del caso, que el Ministro nos señalara -no está obligado a decir nada, es un derecho- si estoy leyendo bien o mal el efecto real de la norma en análisis.

En el caso de los Diputados, entiendo que son 28 distritos, por lo que no podrían celebrarse primarias en más de 11, si no, se vulneraría el 40 por ciento.

No comprendo la filosofía del esquema político, del esquema de Estado que se trata de construir.

Tengo entendido que esto responde a una indicación de algunas parlamentarias para que tuviera más realismo la declaración de principios. Una cosa es recoger una inquietud. Pero aquí estamos construyendo una estructura arquitectónica institucional del poder político en Chile, y en el primer artículo establecemos una norma que en sí misma considera un cambio en las reglas del juego de las primarias -nunca se planteó en la ley, ni en la reforma constitucional ni en la Ley Orgánica- que supone, como decía, señora Presidenta, que de seis circunscripciones¿

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene un minuto para redondear, señor Senador.

El señor COLOMA.-

Gracias, señora Presidenta.

Señalaba que de seis circunscripciones solo en dos se podrían efectuar primarias, porque si se realizaran en tres se superaría el 50 por ciento. O sea, estamos restringiendo a que solo sea posible llevarlas a cabo en dos de seis. Pienso que eso no tiene nada que ver con la racionalidad o la estructura del sistema.

Este es un cambio muy radical. Y adicionalmente, desde mi perspectiva, ajeno a la Constitución. Porque, si usted lo quiere hacer -puede ser buena o mala idea, pero es posible-, debe indicar en la Constitución y en la Ley de Primarias que el mecanismo podrá ser utilizado parcialmente. Es lo que se nos dice en esta norma.

A la vez, creo que el efecto práctico de este artículo es simplemente demoler otra estructura que lleva solo dos años de funcionamiento, que fue objeto de una amplia discusión y la estamos pulverizando.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor De Urresti.

El señor DE URRESTI.-

Señora Presidenta, quiero hacerme cargo de las últimas intervenciones de los colegas, que señalan que este es un cambio radical. Sí, es un tremendo cambio en nuestro sistema electoral, a fin de abrir los espacios de representación de las mujeres. Y claro que va a cambiar. Y esperamos -por eso discutimos en la Comisión- compatibilizar estos dos principios, de las primarias y de la cuota.

Sobre esa base tendremos más participación, más posibilidad de que las primarias definan los liderazgos internos en cada circunscripción, en cada distrito. Pero también aseguraremos claramente que ingresen más mujeres al Parlamento.

Hoy día no resistimos ninguna prueba internacional en materia de la representación parlamentaria en ambas Cámaras. Superar eso constituye un desafío transversal en nuestro país y debe ser un principio básico en nuestra sociedad.

Me parece muy bien que hoy se ponga el foco de discusión en las primarias. Puedo hablar con propiedad de ellas porque soy el único Senador que logró su cupo producto de una elección primaria¿

El señor COLOMA.-

No legal.

El señor DE URRESTI.-

Y dentro de la disputa les ganamos no solo a un adversario, sino también al centralismo y a la aristocracia que también estaba instalada dentro de este partido¿

El señor PROKURICA.-

¡Ese es mi candidato¿!

El señor DE URRESTI.-

Y ahí vencimos, y con ese porcentaje pudimos obtener la votación que me da la posibilidad de estar en el Senado.

Entonces, por favor, no hagamos la discusión en cuanto a que las primarias son la panacea y que eso no se puede compatibilizar con la necesidad de tener efectivamente representación de mujeres. Discutimos la materia en la Comisión y doy fe de que los cinco integrantes pudimos compatibilizar estos dos instrumentos: tener representación importante de mujeres -asegurar que al menos el 40 por ciento de un género esté representado, es decir, que ninguno esté sobrerrepresentado- y la legítima facultad de los partidos para generar primarias.

Entonces, vamos en un camino adecuado. De seguro en los próximos períodos habrá más parlamentarias. Y eso lo debemos valorar.

Además, hay incentivos para que participen más mujeres. Ha de existir una campaña que permita a los partidos buscar, formar y promover a más mujeres.

Hemos ido rompiendo barreras. Digámoslo también con franqueza. Tenemos Presidenta de la República elegida en dos períodos, con enorme votación. Tenemos Presidenta del Senado. En más de 200 años ello no se había dado.

El señor MONTES.-

Y futura Presidenta del Partido.

El señor DE URRESTI.-

Y en los próximos meses esperamos que ello también ocurra dentro de los partidos políticos. Al menos hablo por el Partido Socialista. Luego de 82 años de historia tendremos también una mujer de Presidenta.

El señor COLOMA.-

Pero sin cuotas.

El señor DE URRESTI.-

El Partido Socialista posee cuotas, tiene paridad en esta materia.

Sobre esa base iremos ganando posiciones para que nuestro país sea más inclusivo, sin barreras de entrada. Eso sí, con competencia, obviamente, sin regalar nada. A ninguna mujer de las que están sentadas aquí le han regalado su cargo, y tampoco en la Cámara de Diputados.

Pero abramos oportunidades, generemos una cultura, una sociedad que permita efectivamente incorporar a más mujeres.

La discusión dentro de la Comisión de Constitución se dio precisamente para armonizar estos dos principios.

Y no saquemos cuentas en abstracto, porque la cantidad de primarias que se realizaron en el país, con Ley de Primarias vigente e incluso con primarias convencionales dentro de los partidos, no se acerca para nada al 40 por ciento.

Contaremos con dos instrumentos que permitirán asegurar la inclusión de más mujeres, generar una diversidad a lo largo del país, cumplir con las normas internacionales y tener un Parlamento efectivamente representativo, con mayor cantidad de mujeres.

Por eso, señora Presidenta, vamos a apoyar este artículo.

Además, solicito la clausura del debate respecto de la norma en análisis.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señores Senadores, ha transcurrido bastante más de media hora, que es el tiempo que consigna el artículo 142.

Por lo tanto, si lo pide un Comité, hay que proceder a votar la clausura del debate.

El señor TUMA.-

"Si le parece".

El señor COLOMA.-

¿Qué va a pasar con el aspecto constitucional?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Plantéelo en el Tribunal Constitucional.

La Mesa no se va a pronunciar.

Si Su Señoría lo desea, puede llevar este asunto al Tribunal Constitucional.

El señor COLOMA.-

Se entiende que la Mesa no lo considera inconstitucional.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Se pondrá en votación la clausura del debate.

El señor PROKURICA.-

Pero que primero hablen quienes estaban inscritos.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Se votará la clausura del debate solicitada por un Comité. De acuerdo al artículo 142, es perfectamente posible. Y lo siento mucho por quienes estaban inscritos.

Y quiero decir algo más: si se aprueba la clausura comenzará la votación y cada señor Senador o señora Senadora tendrá cinco minutos para fundamentar el voto.

Así que ¡por favor! ¡Por favor! Está bien que quieran dilatar esto, pero ya estamos llegando al extremo. Me obligan a tomar esta decisión.

En votación la clausura del debate de la letra b) del N° 1 del artículo 1°.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Quienes estén de acuerdo deben votar que sí y quienes no, en contra.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba la clausura del debate de la letra b) del N° 1 del artículo 1° (20 votos a favor y 9 en contra).

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Montes, Navarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa la señora Von Baer y los señores Allamand, Chahuán, Coloma, García, Hernán Larraín, Ossandón, Pérez Varela y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Entonces, procederemos a votar las indicaciones.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Corresponde votar, en primer lugar, las indicaciones renovadas números 3 y 4, porque son supresivas.

La supresión no requiere quórum especial. De rechazarse, correspondería votar en seguida la modificación que acordó la Comisión de Constitución.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Quienes estén de acuerdo con las indicaciones votan que sí.

Ya señalé que se trata de las indicaciones N°s 3 y 4, que son iguales, para suprimir la letra b) del número 1) del artículo 1°.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe, quien desea que se le clarifique un punto.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, solo deseo hacerle una pregunta al señor Secretario, porque en el listado de indicaciones renovadas se pasa de la número 3 a la 8.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Voy a proceder a leer el texto.

"Indicación número 3, de los Honorables Senadores señores Coloma y Pérez Varela y número 4 de los Honorables Senadores señores García-Huidobro y Moreira, para suprimirla".

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señor Secretario, vuelva a explicar el procedimiento para que no haya ninguna duda en la votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Votan que sí quienes estén de acuerdo con suprimir la letra b), y que no, quienes no coinciden con ello.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Coloma.

El señor MONTES.-

¡A ver si dice algo nuevo...!

El señor COLOMA.-

Dentro del sagrado derecho a fundar el voto, que no sé si ahora algunos quieren conculcar, lamento que el Ministro del Interior -tiene todo el derecho, no estoy haciéndole un cargo, pero sí un lamento- no haya confirmado si la interpretación que hago de esta norma es correcta o no.

O sea, que quede claro, de aprobarse este artículo, de las seis elecciones senatoriales que se van a realizar en el período correspondiente, solo en dos habrá primarias. Y de las veintiocho elecciones de Diputados, solo en once, porque es la única forma de entender la exigencia del 40 por ciento.

En lo personal, considero que esta es una forma de construir Estado, de construir Derecho, de construir política equivocada, pues una cosa es buscar el objetivo de que haya mayor proporcionalidad -digámoslo de esa manera- de hombres y mujeres en el Parlamento. Y otra muy distinta restringir una ley, que acabamos de dictar, en términos de desvirtuarla totalmente.

Insisto: no soy un adorador de las primarias, pero siempre dije que eran un mecanismo legítimo y que cada partido tenía el derecho de evaluar dónde se podían plantear.

Lo que nos dice esta iniciativa es que eso ya se termina porque, cualquiera que sea la decisión del partido, solo en dos circunscripciones podrá haber primarias.

Así se entiende lo del 40 por ciento, Senador Harboe. No hay otra forma.

Adicionalmente, ya que usted, señora Presidenta, señaló que no le parecía que su ejercicio vulnerara la Constitución, también quiero hacer expresa reserva de constitucionalidad porque el artículo 19, N° 15 establece un sistema de elecciones primarias que no se limita a señalar donde se puede usar y donde no. Esto trato de transmitir.

Y, al no hacerlo, restringe lo que constitucionalmente dispone. Cualquier restricción tiene que ser a la Ley de Primarias, no a una legislación de una naturaleza completamente diferente.

También quiero agregar que, desde mi perspectiva, la forma correcta de entender esto es usando otro tipo de mecanismo. Yo sugeriría algunos perfeccionamientos que veremos después, vinculados con los rembolsos.

Creo que ahí hay una cosa activa distinta, que, obviamente, mejora la situación objetiva tanto de los partidos que llevan candidatas como de la candidata misma en la medida que resulta electa.

Eso apunta en un sentido adecuado, que es utilizado en muchos países. Sin embargo, no conozco otra nación donde exista esta mezcla que tratamos de generar: un sistema de cuotas y con una restricción del ejercicio de las primarias en un artículo transitorio.

Creo que es una forma de ir construyendo a retazos un país.

Pienso que las naciones se tienen que construir con un modelo, con una estructura. Uno puede estar de acuerdo o no. Pero no me gusta hacer esto pegoteándolo. ¡Como surgió un problema hay que pegarle un parche sin importar que ello cambie el esquema!

Lo planteo como el deseo que uno debería tener al momento de legislar en esta materia.

Voto a favor de las indicaciones.

Hago expresa reserva de constitucionalidad de esta norma en función del artículo 19, N° 15, de la Constitución.

Repito: lamento que el modelo político se esté construyendo a retazos, a pedazos, cuestión que en general no funciona en ninguna parte.

Las cosas tienen que hacerse con una estructura.

Y les quiero decir que nos está pasando algo parecido con los municipios, con los consejeros regionales: se busca una fecha, se cambia la fecha; se busca la facultad, se cambia la facultad; se vota de una forma, después se vota de otra.

Quiero hacer una advertencia sincera, franca: aquí estamos embarcándonos en un sistema destinado, a mi juicio, a fallar. Y eso es malo para todos.

Este artículo 1° es una muestra, un pequeño resumen de las incoherencias indeseadas que se producen al tratar de solucionar problemas diferentes con un esquema sin un vaso comunicante.

Por eso, estoy en contra de él.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra la Senadora señora Von Baer.

La señora VON BAER.-

Señora Presidenta, me llama la atención que no podamos debatir sobre determinados asuntos. Es como si se criticara el querer hacerlo.

Nosotros no hemos discutido este proyecto de ley en particular en la Sala. Y es importante que en este Hemiciclo se pueda hacer el debate.

No me parece adecuado que se nos descalifique por querer discutir las distintas materias del proyecto, pues se supone que estamos aquí para analizar las propuestas y ponerlas en perspectiva.

Me resulta increíble que se nos diga: "Miren, la única manera de hacer lo correcto es votar como lo hace la mayoría y no argumentar la postura propia". Como las bancadas de Gobierno ya se pusieron de acuerdo, ¡nosotros nos debiéramos quedar callados para salir rápido del trámite¿!

¡Eso no es aceptable!

Tenemos que poner sobre la mesa lo que nos preocupa respecto de la forma como se está tramitando esta iniciativa.

Lo propuesto es un verdadero patchwork, porque se juntan cosas diversas que no van a funcionar de la manera en que están planteadas.

Sobre la enmienda que nos ocupa, estimo inaudito -no había reparado en ello- que se pretenda aplicar un criterio de cuotas solo para ciertas elecciones. No entiendo por qué, si la mayoría considera que esta es una buena medida, se exige únicamente para las elecciones de diputados y senadores. ¿Por qué no se aplica también para las de alcaldes y concejales,¿

El señor LAGOS.-

¡Porque estamos discutiendo sobre las parlamentarias!

La señora VON BAER.-

¿o para las de cores?

Todos esos cargos podrían estar regidos por el mismo criterio. No comprendo por qué se impone solo para los diputados y los senadores.

En segundo lugar, me parece increíble que, luego de legislar sobre las primarias -todos celebramos el despacho de esa ley-, ahora se plantee restringir el territorio de tales elecciones para viabilizar las cuotas. ¡Restringir el ámbito de las primarias para posibilitar las cuotas!

Cuando los partidos políticos tengan que nominar a sus candidatos se producirá un enredo gigantesco.

Podría no realizarse primarias en un lugar del norte donde se esperaba efectuarlas, debido a que el partido no ha reunido aún la cantidad de mujeres que debe inscribir. Los candidatos que querían competir por esa zona -quizás, ambos hombres- no podrán hacerlo porque se precisa designar a una mujer. Y si en alguna parte del sur esa misma tienda política sí lleva adelante elecciones primarias en virtud de no sé qué arreglo, van a quedar todos enojados en el norte, pues ellos no pudieron concretarlas.

Al final del día, la ciudadanía no va a entender por qué en algunos lugares es factible hacer primarias, mientras que en otros no.

Quizás en determinado distrito se imponga la candidatura de una mujer, pese a no ser la preferencia que concita la adhesión ciudadana mayoritaria, solo por el hecho de que el partido pertinente no ha alcanzado a nivel nacional la cuota de candidatas mujeres que se le exige.

En el fondo, se pasará por encima de la voluntad que se expresa en cada territorio. En vez de que los partidos se acerquen a los deseos de las bases en las distintas zonas del país, se van a alejar de ellos, y todo por reunir el porcentaje mínimo de mujeres en la lista total de candidatos.

Ni siquiera la Presidenta de la República pudo lograr la paridad en su gabinete y les estamos exigiendo a los partidos políticos alcanzar cierta cuota.

Si realmente queremos conseguir más participación de mujeres en política, debemos buscar otros mecanismos. La fórmula propuesta no es el modo correcto de hacerlo, especialmente si esta choca con la realización de las elecciones primarias.

Yo siempre he estado en contra de las cuotas como concepto. No me parece adecuado que se imponga un porcentaje mínimo de postulantes mujeres y -más grave aún- que se pase por encima de un instrumento muy bueno y democrático, como es el de primarias.

Creo que esta legislación terminará siendo una tremenda mezcolanza. La gente no va a comprender cómo funciona, y eso es malo para el sistema político. No se entiende cómo se realizará la designación de los candidatos y tampoco cómo se hará la elección.

En consecuencia, se propone un sistema que va a carecer de legitimidad.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, está en debate la pertinencia o no de dos indicaciones renovadas que buscan suprimir la norma sobre cuotas.

Se ha argumentado en la Sala que ella es una modificación parcial y que no responde a una arquitectura coherente.

Pues bien, quien emitió tal juicio debiera citar el constructo jurídico, constitucional y legal que se ideó a fines de los 80. Porque las disposiciones que consagraron el sistema electoral binominal no surgieron de modo aislado.

Dicho modelo se pensó premeditadamente para que exista un empate artificial en el Parlamento.

Además, se establecieron circunscripciones sobre la base de un estudio electoral que permitía disminuir o subrepresentar a la Oposición de entonces.

Adicionalmente, se incorporaron normas que fijaron quórums altos para realizar modificaciones estructurales.

Es resumen, el sistema binominal tendió a generar un empate artificial; se exigen altas mayorías para hacer cambios profundos, y los dibujos de las circunscripciones electorales estaban pensados para subrepresentar a la Oposición de ese momento.

En consecuencia, efectivamente había un constructo.

Hoy, un día histórico, iniciamos la destrucción de esa arquitectura.

No nos parece adecuado que hayan transcurrido veinticinco años de empates artificiales, lo que impidió al Congreso Nacional llevar a cabo reformas estructurales. En ese tiempo carecimos de los quórums exigidos en las disposiciones constitucionales para efectuar grandes transformaciones.

En tal sentido, es efectivo que queremos hacer modificaciones estructurales. Y este proyecto inicia el cambio.

Dentro de las enmiendas al sistema electoral, ahora discutimos la incorporación de un elemento adicional: una acción positiva para incentivar la participación política de la mujer en el Parlamento.

Sin embargo, aquí se ha argumentado que no es bueno imponer cuotas porque ellas limitan el libre ejercicio de las elecciones primarias. ¡Bienvenidas sean estas! Pero que levante la mano el representante del partido que haya superado el 15 por ciento de participación en las últimas primarias.

Ningún partido -¡ninguno!- con representación parlamentaria llegó al 15 por ciento.

Debemos ser capaces de compatibilizar el principio de participación en las primarias con el principio de inclusión. De lo contrario, se seguirá argumentando en contra de la disposición -a mi juicio, es un avance perfectible- que fija una cuota positiva de al menos 40 por ciento para las candidatas mujeres en las elecciones parlamentarias, tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados.

Por eso, rechazaré las indicaciones supresivas y aprobaré el texto despachado por la Comisión de Constitución.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Le corresponde intervenir al Honorable señor Chahuán, pero no se encuentra en la Sala en este momento.

Tiene la palabra el Senador señor Navarro.

El señor NAVARRO.-

Señora Presidenta, siempre llega la hora de la verdad en todo ámbito y esta es la ocasión en que veremos la coherencia de discurso con relación a la incorporación de las mujeres en política.

Muchos dicen: "Esto ya lo hacemos, no hay para qué reglamentarlo"; "Esto ocurre de manera natural"; "Esto se da de forma espontánea"; "Esto va en ascenso".

Sin embargo, cuando se pretende establecer una norma para garantizar ese proceso, surgen diez explicaciones para no hacerlo, todas ellas con una buena base argumentativa, pero ocultando el tema de fondo.

El objetivo es instalar, a instancias de la Nueva Mayoría, un mecanismo que permita la inclusión de las mujeres en el Parlamento de manera gradual y progresiva.

Las primarias son un paso; después viene la elección popular. Ese espacio se gana trabajando.

La enmienda en comento plantea solo una oportunidad de acceso, porque la elección la garantiza el trabajo popular, el trabajo político, el trabajo social. No se compra un cupo en el Congreso con el hecho de otorgar la posibilidad de competir en una primaria. Hay que ganar la primaria y, luego, la elección definitiva.

La modificación recaída en la letra b) del número 1) del artículo 1º pone a las candidatas en igualdad de condiciones frente al electorado. Lo único que asegura es la opción de competir. Esto es necesario, porque hasta ahora las barreras de entrada, que son objetivas, van en desmedro absolutamente de las mujeres.

Digámoslo francamente -todos los partidos lo saben-: no basta con la meritocracia. Si así fuera, habría una proporción de 50/50 o de 60/40 en muchos partidos.

Entiendo que el 60/40 que se plantea en la norma que nos ocupa busca resguardar a aquellos partidos -club de Tobi muchos de ellos, y por largos años- donde prima la condición de la herencia y la historia.

El MAS es partidario de una proporción 50/50.

La relación 60/40 está en debate en el mundo. En México, entre otros países, se recuerda que poco más de la mitad de la población del mundo (en torno al 53 por ciento) son mujeres. Ante ello, ¿qué mecanismo debiera sostenerse?

Además, el ámbito político es un aspecto más donde se presentan barreras de entrada y situaciones de discriminación en perjuicio de la mujer.

En materia de sueldos, a igual trabajo debiera corresponder igual retribución. Sin embargo, la diferencia salarial es alrededor de 42 por ciento.

También debe procurarse igualdad de oportunidad para acceder a cargos públicos, particularmente por la doble condición de la mujer: madre y trabajadora.

En esto hay un machismo que se supera día a día. ¿Cuántos de los Senadores presentes de modo regular cambiaron pañales a sus hijos en el proceso de ser padres?

El señor ARAYA.-

Yo.

El señor NAVARRO.-

¿Cuántos han cocinado y¿

El señor ARAYA.-

Yo.

El señor NAVARRO.-

¿se han quedado en la casa para facilitar la participación en política de sus esposas o parejas?

En definitiva, ¿cuándo hemos hecho praxis y realidad el objetivo de favorecer la inclusión de la mujer?

En el MAS estamos tranquilos, señor Ministro. Tenemos a la Ministra del Deporte, a la Subsecretaria de Deportes, a una gobernadora. La mayoría de quienes militan en mi partido y ocupan cargos en direcciones regionales son mujeres. La proporción en como de 80/20.

Esa es la realidad del MAS, lo que da cuenta de que, cuando los partidos en formación y crecimiento abren sus puertas para la participación política, se produce un proceso vertiginoso de personas altamente calificadas que ocupan los espacios por mérito. ¡Por mérito!

Hablo de los partidos emergentes, no de los tradicionales, que tienen establecida ya cierta lógica o cultura excluyente.

Por lo tanto, señora Presidenta, vamos a rechazar las indicaciones renovadas y a apoyar lo propuesto por el Gobierno.

La Ministra del SERNAM, la Ministra Secretaria General de la Presidencia y el Ministro del Interior han avalado la construcción de este nuevo sistema, que abre las puertas para la participación de la mujer, pero sin dejar de exigir el mérito. De hecho, muchas mujeres en Chile, por capacidades propias, hace mucho tiempo deberían ocupar cargos de Senadora u otros de elección popular.

¡Patagonia sin represas!

¡Nueva Constitución, ahora!

¡No más AFP!

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Prokurica.

El señor PROKURICA.-

Señora Presidenta, ¿es bueno que haya más mujeres en la actividad política? Sí. Pero ¿por qué hay que buscar fórmulas para aumentar su participación en ella?

A mi juicio, la discusión de fondo no se ha dado.

La inclusión de la mujer en política es algo bueno no solo para la mujer, sino también para la democracia. Creo que la letra b) en comento no resguarda tal principio; por tanto, no es la mejor fórmula.

Aquí claramente se genera una colisión de intereses entre la participación de la mujer, la representatividad del voto y la realización de las elecciones primarias.

Es efectivo lo planteado por el Senador Coloma respecto del impacto que la medida en análisis producirá en el proceso de primarias, en el cual se representa la voluntad popular. Dudo que alguien aquí pueda hablar en contra de dicho instrumento democrático.

Y algunas tiendas políticas han dado muestras concretas. RN es un partido donde la participación de las mujeres es notoria.

De hecho, propusimos una fórmula distinta hace un año: premiar mediante un sistema de financiamiento a los partidos que hayan obtenido el mayor número de candidatas elegidas.

Tal planteamiento evitaría lo que, a mi juicio, va a ocurrir si se aprobara la enmienda en estudio: los partidos van a llenar los cupos con mujeres, pero no se preocuparán necesariamente de postular a personas que puedan ganar o aportar a mejorar la calidad de la política y la democracia. En la práctica, esta medida, en vez de beneficiar a las mujeres, va a causar un perjuicio a la participación política.

Nosotros hemos presentado indicaciones para asegurar la inclusión de la mujer en política y, por supuesto, esas las vamos a aprobar.

En cuanto a las indicaciones renovadas, que buscan suprimir la letra b) propuesta por la Comisión, votaremos a favor, porque pensamos que tal norma, sin duda, no cumplirá el objetivo planteado en esta discusión.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra la Senadora señora Lily Pérez.

La señora PEREZ ( doña Lily).-

Señora Presidenta, anuncio que voy a rechazar las indicaciones renovadas números 3 y 4.

Hago presente que durante muchos años sostuve una posición similar a la de quienes hoy argumentan que las mujeres no necesitan un impulso, una concesión, una cuota para desarrollarse en política.

Admito que ese asunto me llenó de contradicción por mucho tiempo, hasta que experimenté de cerca -más que en carne propia- lo que a otras mujeres les costará. No quiero que ninguna pase por todo lo que yo tuve que sufrir para llegar, por mérito propio, a ser Senadora. Deseo que para otras mujeres las cosas sean un poco más simples, más fáciles.

No todas las mujeres encuentran padrinos, financistas o amigos que las ayuden a llegar adonde quieren llegar.

El señor PIZARRO.-

¿Algunas sí?

La señora PÉREZ ( doña Lily).-

Señora Presidenta, creo que es muy complejo restarse de apoyar una ley de cuotas transitoria. Me costaría hacerlo. De hecho, no concibo el liderazgo de una mujer sin conciencia de género. Para mí al menos es muy importante respaldar esta norma.

Esta fue una de las medidas que Amplitud conversó con el Gobierno, cuando acordamos cambiar el sistema electoral binominal.

Y quiero agregar otra cosa.

Uno de los argumentos que más he escuchado en esta materia -y es una falacia- es que, si se va a otorgar un criterio de cuotas, se debe procurar que las mujeres que lleguen sean las más capaces y preparadas. Me llama profundamente la atención ese planteamiento, porque en política ¡pucha que hay hombres poco capaces y poco preparados! Lo digo con todo respeto, pero es la verdad.

En realidad, en cargos públicos y políticos se ven mujeres y hombres idóneos y, también, mujeres y hombres poco idóneos. Por tanto, no es efectivo que, por el solo hecho de fijar una cuota de mujeres, se contará con las más capacitadas.

Quisiera que nos preocupáramos de que toda la gente que entre a la política sea la más preparada, la más capaz y la más honesta siempre, a todo evento.

Por esa razón, considero muy importante votar en contra de las indicaciones renovadas que buscan suprimir la enmienda que dispone dicha cuota transitoria.

Por otra parte, obviamente debemos conciliar tal modificación con el sistema de las elecciones primarias.

Tal como se recordó, en la elección parlamentaria pasada solo un partido efectuó primarias: Renovación Nacional. Y lo hizo únicamente respecto del 10 o 12 por ciento del total de sus candidatos. Considerando ese dato y el hecho de que se plantea el 40 por ciento para cumplir la cuota de mujeres, parece sumamente alejado de la realidad el argumento de que aquí se produce una coalición de intereses.

En consideración de lo expuesto, señora Presidenta, voto en contra de las indicaciones renovadas, porque estimo que sí debemos contar con una ley de cuotas para facilitar la participación de las mujeres.

A propósito, en el ámbito municipal, también habría que introducir algunas mejoras. Como el sistema electoral -el binominal ya no existirá- va a ser proporcional inclusivo, que es muy parecido al que se aplica en las elecciones municipales, debiéramos presentar indicaciones para que en el futuro haya más candidatas mujeres a alcaldesa y concejala.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

El Senador señor Lagos pidió que se borrara su nombre de la lista de inscritos.

El señor LAGOS.-

Es una forma de no extender el debate.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Muchas gracias, Su Señoría.

Tiene la palabra el Honorable señor Chahuán.

El señor CHAHUÁN.-

Señora Presidenta, Honorable Sala, en lo que dice relación con el punto que nos ocupa la reforma está hecha a la medida.

Parece poco coherente que al estar habilitando un sistema de primarias, a través del cual se busca que la ciudadanía participe activamente en la elección de los candidatos a parlamentarios, terminemos restringiendo y estableciendo un tope.

Y hablamos con propiedad, pues Renovación Nacional fue el único partido en Chile que generó primarias voluntarias¿

El señor PROKURICA.-

¡Once!

El señor CHAHUÁN.-

¿-fueron once, efectivamente-, incorporando incluso a un movimiento que no era parte del partido -me refiero a Evópoli (Evolución Política)- a los efectos de la designación por parte de la ciudadanía, a través de una elección popular, de los candidatos.

Lo anterior, porque estamos convencidos de que hay que airear la política. Estamos convencidos, además, de que los candidatos deben dejar de ser elegidos entre cuatro paredes en la Región Metropolitana y de que tienen que volver a elegirse y legitimarse con fuerza mediante el voto ciudadano. Renovación Nacional ya lo hizo así en la elección pasada.

Me gustaría saber -por su intermedio, señora Presidenta-, qué ocurrió para que la Nueva Mayoría esté haciendo un recorte a la Ley de Primarias y estableciendo un cupo máximo para los candidatos elegidos a través de este sistema, porque lo que ella quería, precisamente, era abrir y legitimar nuevamente la política.

Un segundo aspecto que me parece complejo es la contradicción evidente entre dos normas. Hubo falta de preparación o, quizás, no se ha realizado un estudio consistente para precisar qué pasa con el sistema de primarias versus la Ley de Cuotas. Y me gustaría que la Ministra del SERNAM o el Ministro del Interior -por su intermedio, señora Presidenta- se hicieran cargo de ese aspecto. Quisiera oírlos para saber qué va a pasar con lo que, en definitiva, podría ocurrir: si las candidatas mujeres pierden una elección primaria, finalmente la Ley de Cuotas les podría restablecer su participación en dicho proceso electoral.

Entonces, hay una contradicción evidente y sería interesante escuchar a los Ministros, porque, si no, vamos a tener un problema de interpretación en ese punto.

Por lo tanto, creemos que este tema debe ser revisado. Nos gustaría contar con un sistema de primarias abierto, ciudadano, habilitado, sin ponerle tope a la voluntad ciudadana como pretende la Nueva Mayoría y, adicionalmente, con la posibilidad de terminar con la contradicción que se da entre estas dos normas a fin de evitar interpretaciones futuras.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor García-Huidobro.

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

Señora Presidenta, en primer lugar quiero valorar el esfuerzo que hacen las mujeres en política.

Cuando una mujer llega al servicio público aporta un cariz, un ejemplo distinto que habla de lo que necesita nuestra sociedad: su inclusión en todas las áreas. Y uno comprende la dura situación que afecta a nuestras colegas Senadoras por el hecho de tener que dejar sus hogares, a sus niños pequeños. Ellas hacen un esfuerzo tremendo por el país, por sus regiones.

Por eso, valoro la decisión que tomaron de ser candidatas, sobre todo tratándose de mujeres jóvenes y con hijos pequeños.

De otro lado, quiero hacer algunas consultas, señora Presidenta, aunque no veo al Presidente de la Comisión de Constitución en la Sala.

La señora MUÑOZ.-

Sí está.

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

Quiero consultar respecto de la Ley de Cuotas y los independientes. ¿Va a existir alguna norma para obligar a estos últimos a contar con un porcentaje importante? Aún más, al formar parte de un pacto, cuando se postulen en su condición de independientes, ¿se les va a exigir también dicho porcentaje? Esa es la segunda interrogante.

Por otra parte, he visto que las mujeres concejalas realizan un trabajo extraordinario. En la comuna de Requínoa, donde vivo, mi partido tiene tres mujeres concejalas, sin necesidad de una Ley de Cuotas, solo por su liderazgo, por su capacidad de enfrentar los problemas de la comuna. Los liderazgos se dan en forma natural, no artificialmente, ni por cuotas.

Por lo tanto, tal como manifestó el Senador Prokurica -por su intermedio, señora Presidenta-, al imponerse un cuoteo lo más probable es que muchas veces les vayan a pedir por favor el carné de identidad a las mujeres para inscribirlas, para los rellenos que tengan que hacer donde no existan posibilidades para muchos partidos. Eso puede ser, inclusive, una falta de respeto hacia la mujer. Porque cuando hay mujeres con ganas de ser candidatas los partidos políticos las llevan. Y cuando tienen opciones, con mayor razón, les dan todas las posibilidades. Pero el hecho de establecer mediante una ley un porcentaje para las mujeres, les puede ocasionar un daño o la posibilidad de que las utilicen para cumplir con dicha normativa el día de mañana.

Me gustaría ver qué va a pasar con las inscripciones de los próximos candidatos.

Por eso, habría sido interesante que este proyecto hubiera partido con una marcha blanca en la próxima elección de concejalas. ¿Por qué no lo hacemos? Veamos si funciona. Porque en ese caso la mujer no tiene que salir de su casa o debe estar muy cerca de su trabajo en su comuna. Es distinta la actividad a realizar. Eso no significa que no queramos el máximo de mujeres en la política. Pero imponer este sistema a la larga no va a resultar.

Por otro lado, hemos hablado de primarias y hay muchas visiones, muchas situaciones en torno a ellas: unas fueron convencionales, otras legales. Y la verdad es que cada día dicho sistema se incorpora más en nuestra sociedad. Hoy día la decisión, por lo menos de la Alianza, según la información que ya poseemos, es que en los lugares donde no tenemos alcaldes y contamos con buenos liderazgos vamos a realizar primarias. Es fundamental utilizar ese mecanismo. Pero ¡ojo!: un Senador que me antecedió en el uso de la palabra manifestó que las primarias de su partido habían sido un éxito: de diez que hicieron solamente sacaron dos candidatos electos.

Por lo tanto, cuidado con ese tipo de situaciones, porque de repente, como ocurrió en mi Región y en algunos distritos, ese mismo partido también realizó primarias presidenciales y las personas podían votar¿

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminó su tiempo, señor Senador.

Dispone de un minuto adicional para que pueda concluir su intervención.

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

Gracias, señora Presidenta.

Decía que las personas podían votar por partidos distintos. Es decir, todos los independientes de la Concertación en esa época votaban por el candidato más débil de la Oposición. Esa situación se dio muchas veces.

Lo menciono, porque fue una realidad en mi Región.

Voto a favor de la indicación que presentamos.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Orpis.

El señor ORPIS.-

Señora Presidenta, un Honorable colega llamó a transparentar la visión que uno tenía respecto del tema de las cuotas. Y la verdad es que yo acepto ese desafío. Yo no he sido partidario de las cuotas en ninguna materia y no lo voy a ser nunca. Por lo tanto, es la ocasión de reafirmar tal principio.

Creo que, más que el otorgamiento de cuotas para que la mujer participe en política, deberían existir incentivos para que ella tenga opciones más competitivas, pero en un ambiente de mucha mayor participación, donde en definitiva quienes elijan a los candidatos no sean las cúpulas, sino la ciudadanía.

He escuchado en el debate de esta tarde que una de las formas de justificar esta norma sería decir: "Mire, prácticamente nadie realizó primarias durante las últimas elecciones".

Bueno, aquí estamos frente a una disyuntiva: si las primarias fueron débiles -son el mecanismo que se ideó para incentivar la participación-, a mí me habría gustado que esta reforma política las hubiese fortalecido. Esa era la lógica, y no debilitarlas como hace esta disposición.

Es decir, la idea es otorgar incentivos para que la mujer participe en términos muy competitivos. Y una manera de garantizarlo es, precisamente, fortalecer el mecanismo de las primarias. Sin embargo, lo que estamos haciendo acá -tal como lo señalaba- es debilitarlo.

Por eso, señora Presidenta, voy a votar a favor de esta indicación, por estar en contra de las cuotas.

Además, creo que estamos sentando un precedente para que el día de mañana no solamente se contemplen cuotas parlamentarias para la mujer, sino que, por motivos muy justificados, se vayan estableciendo para otros sectores, como ocurre en muchos países del mundo.

Al revés: mi mirada respecto al tema es fortalecer profundamente la participación, estableciendo primarias obligatorias, no voluntarias. Y, respecto de aquellos sectores que tienen desventajas, como puede ser el caso de la mujer, otorgar los incentivos para que puedan participar en igualdad de condiciones en las primarias.

Aquí, al limitar el mecanismo de primarias, estamos restringiendo aún más la participación.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se rechazan las indicaciones renovadas números 3 y 4 (27 votos contra 7).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Allamand, Araya, Bianchi, De Urresti, Espina, García, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Ossandón, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa la señora Von Baer y los señores Chahuán, Coloma, García-Huidobro, Orpis, Pérez Varela y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Corresponde ahora votar lo que aprobó la Comisión de Constitución.

El señor PROKURICA.-

¿Se vota la indicación?

El señor LABBÉ (Secretario General).-

No. El texto aprobado en general más la modificación que le introdujo la Comisión de Constitución.

El señor COLOMA.-

Hay que votar la indicación 21 primero, señora Presidenta.

El señor ESPINA.-

Así es.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

No, esa viene después.

Le voy a dar la palabra al Secretario. Pero seamos claros: no hemos pasado a otro punto. Estamos aún en la página 2 del boletín comparado.

Señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La indicación 21 se refiere al número 4). Estamos aún en el número 1), letra b).

Lo que pasa es lo siguiente: al haberse rechazado la supresión de esta letra b), corresponde ahora votar el texto aprobado en general para ella, con la modificación que le introdujo la Comisión de Constitución.

Esta votación es de quórum orgánico constitucional.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe, quien parece que tiene otra interpretación.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, yo entendí -me puedo haber equivocado- que acabamos de rechazar las indicaciones 3 y 4. Así lo dijo el señor Secretario.

El Senador Espina está planteando una observación distinta.

Entonces, que quede absolutamente claro. Eso fue lo que se sometió a votación: las indicaciones 3 y 4. En consecuencia, corresponde votar el texto aprobado en la Comisión de Constitución.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Es lo que acabo de decir. Hemos votado la supresión de las indicaciones 3 y 4. Y ahora debo poner en votación el texto aprobado por la Comisión de Constitución.

El señor HARBOE.-

Eso es.

El señor LAGOS.-

¡Toquen los timbres!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Sí, se van a tocar los timbres.

Tiene la palabra el Senador señor Hernán Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, nosotros presentamos una indicación que procura modificar, precisamente, este criterio, de manera que la computación de las cuotas se haga teniendo en consideración a lo que ocurrió en las primarias. Es la número 21. Y, a nuestro juicio, no tiene sentido votar la letra b) sin antes habernos pronunciado sobre esa indicación.

Se rechazaron las indicaciones 3 y 4, que eran otras. Estoy hablando de la indicación 21, no de la indicación al número 4) a que se refirió el Senador Harboe, quien la confundió con la indicación número 4.

Las indicaciones que votamos tenían por propósito suprimir las cuotas. La indicación 21 no pretende eso. Su objetivo es que se considere que cuando ha habido candidaturas en primarias, allí se exija el cumplimiento de las cuotas. Ese es un concepto distinto, y queremos que se vote.

No sé si queda claro el punto, señora Presidenta, sobre todo para la Secretaría.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Voy a darle la palabra al señor Secretario y después, al Senador señor Harboe, Presidente de la Comisión.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

A ver. Yo solo puedo decir que es evidente que la indicación sí está relacionada con la letra que corresponde votar. Pero estamos en la discusión particular de un proyecto en que se va norma por norma.

Ahora bien, si la Sala acordare votar primero la indicación 21, eso es otra cosa. Pero en el orden del proyecto, una vez que se rechazan las indicaciones supresivas, hay que votar la modificación que está proponiendo la Comisión, en este caso, con el quórum de ley orgánica constitucional.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, lo que pasa es que ese fue el sentido de mi consulta antes de la votación. Cuando pregunté qué indicación íbamos a votar, me contestaron que las números 3 y 4. Luego yo dije: "Perdón. Aquí está la 3 y después viene la 8. ¿Dónde está la 4?". Y el señor Secretario me respondió: "Hay un segundo set". Y el segundo set se encabeza con el numeral 4), pero es la indicación 21 a que hace referencia el Senador Larraín.

En consecuencia, lo que se sometió a votación fueron las indicaciones 3 y 21.

El señor LARRAÍN.-

¡No es así!

El señor COLOMA.-

¡No!

El señor HARBOE.-

¡Eso fue lo que se votó!

El señor COLOMA.-

¡Está equivocado!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Me da la impresión de que hay una confusión.

Tiene la palabra el señor Secretario para aclarar el punto.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Señores Senadores, no hay que confundir numerales con indicaciones.

Lo que se puso en votación fueron las indicaciones números 3 y 4.

Lo que pasa es que los señores Senadores que presentaron un conjunto de indicaciones lo hicieron en dos documentos separados. En uno de ellos está la indicación 21.

Yo he dicho que no niego que está relacionada con la letra b).

Si la Sala así lo desea, puede votar ahora la indicación 21, lo que no obsta a que después tengamos que volver atrás y votar la letra con la modificación de la Comisión.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Bien. No vamos a seguir eternamente en esto. La Mesa se queda con la interpretación recién dada por el señor Secretario. No podemos destinar otra media hora a discutir si estamos en la indicación 3 u otra.

Tiene la palabra el Senador señor Hernán Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, yo solo quiero confirmar la última expresión del Secretario: que se vota primero la indicación 21 y, si se rechaza, se vota el texto de la Comisión. Ese es el orden que deberíamos seguir.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Muy bien. Como la indicación 21 está relacionada con la norma propuesta por la Comisión, es perfectamente posible votarla primero.

Naturalmente, se podrá fundamentar el voto.

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

A ver. La indicación renovada número 21 se refiere al número 4), y tiene por propósito sustituir los incisos segundo y tercero del artículo 17 por el siguiente: "Para determinar el porcentaje que corresponde a cada sexo se considerará la totalidad de las candidaturas declaradas por el partido político conforme al párrafo 1 del título I de esta ley, sin considerar aquellas candidaturas ya inscritas en el registro señalado en el artículo 19 de la ley N° 18.700 que hayan sido nominadas en virtud de una elección primaria, y sin restar aquellas que pudieran ser objeto de rechazo según la letra a) del inciso anterior.".

Quienes están de acuerdo con la indicación renovada votan que sí, y aquellos que se encuentran en desacuerdo, que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Voy a abrir la votación.

Senador señor Espina, ¿quiere fundamentar su voto?

El señor ESPINA.-

No, señora Presidenta: deseo hacerle una consulta.

Yo no logro entender por qué vamos a fundamentar el voto antes de debatir la indicación.

En el caso anterior Su Señoría hizo la discusión y solo después de que ella estuvo concluida abrió la votación.

Quiero saber por qué en esta ocasión deberemos fundamentar el voto sin tener previamente un debate en torno a la indicación.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Le contesto de inmediato: porque la Mesa estima que la indicación N° 21 está relacionada y la materia ya se ha discutido ampliamente. Lo planteó el propio Senador señor Larraín, consciente de ello.

En consecuencia, solo daré la palabra para fundamentar el voto. Y partiré por el Honorable señor Larraín.

El señor ESPINA.-

Yo también quiero fundamentar mi pronunciamiento.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Su Señoría dijo que iba a hacer una consulta.

En todo caso, podrá intervenir a continuación, pues está inscrito en primer lugar el Senador señor Larraín.

En votación la indicación N° 21.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Para fundamentar su voto, tiene la palabra el Honorable señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

En efecto, señora Presidenta, yo entendí que se trataba de la misma discusión, y por eso quería pedir que votáramos esta indicación antes de pronunciarnos sobre el artículo, porque era lo que correspondía.

Ahora, muy brevemente -porque la fundamentación ya está hecha-, deseo señalar que esta indicación tiene un objetivo muy preciso.

Si en una elección parlamentaria un partido realiza primarias, la exigencia de las cuotas debe ser hecha incluyendo las candidaturas presentadas en ellas. De no procederse de esta forma, cualquiera que fuere el resultado de las primarias, se obligaría a esa colectividad, en el evento de que por ejemplo las mujeres perdieran, a revisar la estructura de candidatos en los distritos donde no hubo primarias, lo que podría alterar el sentido estratégico del partido, que cumplió con las cuotas incorporando las primarias.

Si no se consideran las primarias se está impidiendo que ellas tengan lugar.

Ese es el resultado práctico que origina la norma aprobada por la Comisión. En tanto, con esta indicación estamos permitiendo que haya primarias legales -no estoy hablando de las voluntarias-, las que están previstas para eso. En ellas votan los ciudadanos. Y si en el distrito pertinente se elige candidato a un hombre y no a una mujer, ya se cumplió el requisito, el que no se puede exigir por segunda vez.

En tal sentido, se les está diciendo a los partidos: "No hagan primarias".

¿Es mejor que los partidos designen a dedo y armen a su gusto las listas de candidatos o deseamos que los ciudadanos participen realmente en aquello? ¿Queremos democratizar las decisiones ciudadanas de los partidos o deseamos que las cúpulas sigan manejando las decisiones partidarias?

Eso es lo que estamos haciendo: validar la realización de primarias. Pero para que haya primarias y no se altere el resto de la propuesta parlamentaria del partido, que se cumpla el requisito, incluidas las primarias.

Tal es el propósito de esta indicación. Por eso, quienes quieren cumplir con las cuotas y además validar el mecanismo de las primarias están invitados a apoyarla con entusiasmo.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, en primer término, hago expresa reserva de constitucionalidad, porque esta norma constituye claramente una discriminación arbitraria. Y quiero fundarlo en lo que manifestaré en seguida.

Les pido por favor a Sus Señorías que pongan un poco de atención, para ver si logro persuadir a alguien.

La Constitución establece el principio de igualdad ante la ley y señala que él se rompe cuando se registra una discriminación arbitraria. No es cualquier discriminación: tiene que ser arbitraria.

Cuando se dispone que solo el 40 por ciento de los candidatos (lean la página 75 del informe) pueden participar en primarias se está estableciendo una discriminación absolutamente arbitraria respecto del 60 por ciento que no puede hacerlo.

No hay ninguna justificación para ello, pues todos están puestos en las mismas condiciones: todos son candidatos.

Distinto es el caso de las cuotas, porque ahí se expresa: a las mujeres, en su conjunto, se les permite 40 por ciento de candidaturas.

Aquí se está diciendo "hombres o mujeres".

Si un partido lleva 100 candidatos, solo 40 van a poder participar en primarias, aunque pertenezcan teóricamente a un distrito.

Podría darse el hecho de que hubiese un distrito y 40 candidatos interesados. Es una cifra alta. Pero cuando uno quiere someter a prueba las normas debe ponerlas en las situaciones en que sería absurdo que el legislador las colocara.

Esta disposición -reitero- es contraria a la Carta Fundamental. Nos obligará a recurrir al Tribunal Constitucional, pues rompe arbitrariamente un principio básico: hay primarias para todos o no hay primarias para ninguno. Pero aquí, arbitrariamente, se dice 40 por ciento. Y el resto de los candidatos de los otros distritos o de un mismo distrito no va a tener primarias si excede ese porcentaje.

A los efectos de votar a favor esta disposición, aquello no resiste ningún análisis.

De otro lado, se argumenta que los partidos han llevado menos candidatos en las primarias.

Ya hubo una primera experiencia de primarias. Pero es evidente que con el transcurso del tiempo irá aumentando la cantidad de distritos y circunscripciones donde ellas se desarrollarán.

Por ejemplo, en la última elección presidencial se registraron casos de primarias reguladas, distintas. Y en el de los penúltimos comicios hubo incluso mayores limitaciones. Recuerdo la primaria de Eduardo Frei con el actual Ministro Gómez.

Hoy sería difícil entender que no existieran primarias en las elecciones presidenciales. ¿Por qué? Porque el mecanismo se va culturizando: se va estableciendo una cultura de las primarias.

Aquí, derechamente, se está estableciendo que va a haber primarias solo para 40 por ciento de los candidatos.

¡Explíquenme qué argumento hay para decirle al 60 por ciento restante por qué no puede participar en un proceso de tal índole!

¿Qué hacemos nosotros para resolver el conflicto de las cuotas?

Entre paréntesis, no es efectivo que nosotros no seamos partidarios de las cuotas. Incluso votamos contra la norma que las suprimía.

Al respecto, decimos lo siguiente. En una primera etapa, el partido presenta el 40 por ciento del total de sus candidatos; vayan o no a primarias, se presenta la nómina y se cumple ahí el 40 por ciento, para hombres o para mujeres. Y en los procesos de primarias que se registren se va a producir la alteración. Podría ser que ganaran más mujeres y, por tanto, que quedara un número más alto de ellas; o bien, que ganaran más hombres. ¡Pero se resolvió democráticamente!

Entonces la fórmula que les estamos proponiendo no es para afectar al 40 por ciento de las cuotas de las mujeres, sino para señalar que lo justo y razonable es que ese porcentaje se dé al inicio de la presentación de las candidaturas. Y luego, donde haya primarias, la cifra final será la derivada de la votación democrática.

Esa es la indicación que estamos sometiendo a la consideración de Sus Señorías. Y les pedimos aprobarla, para los efectos de que se transforme en una norma de buena aplicación, pues no altera el principio de las cuotas.

Yo les pido que mediten

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Por favor, termine su intervención, señor Senador.

El señor ESPINA.-

¿respecto a lo que hemos dicho, porque la norma que se nos plantea está mal construida, es absurda, va a generar la interposición de recursos por los militantes de los partidos en el momento en que los dejen sin participar en una primaria por una cuestión absolutamente arbitraria.

Por esas consideraciones, solicitamos que se acoja la indicación que renovamos con el Senador Larraín y otros colegas, cuyo único propósito es que las cuotas se cumplan realmente y no se apliquen en la forma errónea en que se hará de no aprobarse nuestra propuesta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Como el Senador señor Orpis está señalando que no intervendrá, tiene la palabra el Senador señor Allamand.

El señor ALLAMAND.-

Señora Presidenta, intervengo en este debate, pienso yo, con la autoridad que me da el hecho de haber estado abogando durante muchos años para que se introdujera la institución de las primarias en nuestra legislación electoral y, fundamentalmente, en nuestro sistema político.

Yo he sido partidario de las elecciones primarias desde hace harto tiempo, y me he preocupado no solo de predicarlo, sino también de practicarlo, pues creo que tienen un gran efecto oxigenador en el conjunto del sistema político.

Quienes hemos sido presidentes de partido sabemos perfectamente que al momento de la designación de las candidaturas habitualmente las burocracias partidistas imponen, al margen de los propios afiliados o de los eventuales interesados, a postulantes que no siempre recogen ni el sentir verdadero de los afiliados a la colectividad respectiva ni el interés general.

Las primarias contribuyen precisamente a lo que pretende la ley de cuotas, cual es, en positivo, incentivar la participación de las mujeres en los procesos eleccionarios y, desde el punto de vista inverso, que no se coarten indebidamente sus posibilidades en tal sentido.

Por lo tanto, si hay algo que hace más transparente el sistema electoral, que incentiva la participación de hombres y mujeres, son precisamente las primarias.

Los Senadores Espina y Larraín han sido enfáticos en algo que en esta Sala debiera ser casi consensual: cómo vamos a justificar que las primarias, que son un gran avance, queden mutiladas a un 40 por ciento; por qué algunos candidatos van a tener derecho a postular en primarias y otros no; con qué razón un partido podrá determinar que en el 40 por ciento de las candidaturas de los distritos haya estas primarias, que son benéficas, y en el 60 por ciento restante, no.

La verdad es que no existe ninguna razón medianamente cercana a la racionalidad para establecer una discriminación tan arbitraria.

Por lo tanto, esta norma está resolviendo muy mal el problema.

Señora Presidenta, mi amigo el Senador Harboe hacía ver que la razón para establecer la norma en comento era que no se utilizaran las primarias para evadir el 40 por ciento.

Pero quiero hacer presente lo siguiente: para que lo que Su Señoría planteaba con algún fundamento funcionara -es decir, que las primarias se utilizaran para defraudar a las mujeres- se requeriría que un número importante de ellas aceptaran ser utilizadas para tal propósito.

En consecuencia, el argumento no funciona, salvo que alguien presuma que va a haber un conjunto de mujeres dispuestas a prestar sus nombres para participar en una primaria y en definitiva defraudar el interés del género para finalmente tener candidaturas.

En consecuencia, quien piensa que las primarias pueden utilizarse torcidamente para inhibir a las mujeres está diciendo que algunas se prestarían para una martingala de tal naturaleza.

Pero quiero plantear un punto mucho más de fondo: si vamos a cerrarles el camino a las primarias -con todos los beneficios que envuelven- porque se presume que los partidos pondrán mujeres en elecciones que van a ser truchas, el argumento vale exactamente igual para las candidaturas definitivas.

Me explico.

Si un partido quiere burlar esta norma, ¿qué hace? Coloca el 40 por ciento de candidaturas femeninas sin ninguna opción electoral.

El señor LAGOS.-

En la primaria.

El señor ALLAMAND.-

En la primaria o en la elección definitiva: en ambos casos.

Lo que estoy diciendo es lo siguiente: si al coartar las primarias se pretende evitar la utilización mañosa del mecanismo, ese argumento es idéntico para la lista definitiva; porque también, con la misma lógica de un partido que utiliza mañosamente las primarias para defraudar el propósito de la ley, a la hora de la lista definitiva el partido que fue mañoso para poner candidaturas falsas de mujeres en aquellas puede hacer exactamente lo mismo. Y si puede hacer lo mismo en la postulación definitiva, entonces no hemos resuelto el problema.

En síntesis: el efecto de mutilar las primarias es gravísimo para todo el sistema político. Es malo para las mujeres. Y el único¿

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Treinta segundos para terminar, Su Señoría.

El señor ALLAMAND.-

¿argumento que se ha dado es el de decir: "Las primarias pueden ser usadas fraudulentamente por los partidos".

Hago presente que ese mismo argumento, idéntico, vale a la hora de la confección definitiva de las listas. Entonces, debe ser desechado.

Por lo tanto, abogo de verdad para que no aprobemos esta norma, que es equivocada, adolece de inconstitucionalidad y (¡fíjense!) va a terminar perjudicando a las mujeres.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra la Senadora señora Von Baer.

La señora VON BAER.-

Señora Presidenta, cuando votamos la indicación anterior lo dije con mucha claridad: estoy en contra de las cuotas; no me gustan; no creo que sean el camino adecuado para aumentar la participación de la mujer en política, porque eso significa imponer y yo creo que hay que ayudar a las mujeres no solo a participar en ese ámbito sino también a ser electas.

Es factible que se ponga a un montón de mujeres, pero no en lugares que les permitan salir electas, sino para rellenar.

Pero en fin: dado que perdimos la indicación anterior, hay que solucionar bien el problema -estimo que en el proyecto se resuelve mal- derivado de la colisión entre la normativa de las primarias y la de las cuotas. Porque qué prima: ¿los candidatos electos por la ciudadanía a través de las primarias o las candidatas elegidas por la cúpula partidaria porque hay que cumplir con la cuota?

Yo creo -y así se entendía cuando se votó el proyecto de ley de primarias- que en nuestro país existe una visión en el sentido de abrir las decisiones de los partidos políticos a la ciudadanía, acercar a la gente las resoluciones de las colectividades partidarias, oxigenar la política. Pero en este proyecto se está haciendo exactamente lo contrario, y de una manera que la ciudadanía ignora: la gente no sabe que hoy estamos restringiendo la cantidad de primarias al 40 por ciento de los candidatos.

¡Esto es increíble! En las próximas elecciones de parlamentarios la gente de base de los partidos políticos va a decir: "En este lugar, donde tenemos más de un candidato, vamos a hacer primarias". Pero no podrán realizarlas. ¿Por qué? Porque ellas solo serán factibles respecto de 40 por ciento de los candidatos.

A mi entender, pasar por encima de las decisiones de los ciudadanos; restringir la democracia, hacerla menos transparente y alejarla de la gente no es el camino que en este momento debemos seguir en la política.

Esta discusión está siendo poco transparente, pues la ciudadanía no sabe que con el voto la mayoría emite hoy acá se restringe la participación de los electores en la definición de los candidatos.

¡Esta es una mala noticia para Chile!

Aunque no estoy de acuerdo con las cuotas, me parece que la indicación propuesta al menos soluciona de mejor manera la problemática planteada. Porque la solución a que llegaron el Gobierno y la Nueva Mayoría es restringir las primarias. Eso lo considero pésimo para la democracia. Me sorprende que los paladines de esta última, los que siempre declaran hallarse a favor de más participación, de mayor inclusión, digan hoy día: "¿Sabe? Ese tipo de elecciones no se puede hacer en todas partes". Y quien define dónde se realizan es la cúpula partidaria.

Ello no está saliendo en los medios de comunicación, pero lo estimo increíble. Me sorprende profundamente.

A mi juicio, es más conveniente lo propuesto por los Senadores señores Espina y Larraín. Porque ¿qué están expresando? "Si el partido político va a presentar cien candidatos antes de las primarias, cuarenta tienen que ser mujeres". Y la ciudadanía, a través de estas elecciones, opta libremente entre ellos.

El principio de la cuota, que no me gusta, se halla resguardado al comienzo, en la proposición de candidatos: de cien, cuarenta tienen que ser mujeres. Y después se elige mediante la primaria. Pero no se restringe de entrada la cantidad de estas elecciones que se pueden realizar.

Lo más increíble de todo: ¿quién define -repito- dónde se realizan o no primarias? Las cúpulas partidarias.

¿Buena noticia para la ciudadanía? ¡Pésima!

¿Más apertura? ¿Más inclusión? No. Menos participación. Menos inclusión. Menos transparencia.

Con el presente proyecto de ley se está logrando alejar la política de los ciudadanos.

¿Y ello se está haciendo con los votos de quién? Con los de aquellos que siempre afirman defender la democracia y la participación y que siempre sostuvieron encontrarse a favor de las primarias. Hoy día están votando en contra de ellas.

Gracias.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma.

El señor LAGOS.-

¡Pero que diga algo nuevo...!

El señor COLOMA.-

Señor Presidente, quiero reflexionar sobre los efectos que acarreará la eventual aplicación de la norma si no incorporamos la indicación.

No soy partidario de las cuotas. Lo dije. Pero se salvaría, a mi juicio, un problema constitucional descrito debidamente respecto de limitar el número 15° del artículo 19 de la Carta Fundamental sin ninguna argumentación y, adicionalmente, el funcionamiento de las colectividades políticas.

Lo expuse a raíz del asunto anterior. Al existir la normativa, el presidente de un partido se verá sometido al siguiente debate: decidir dónde sí y dónde no se realizan primarias, con la diferencia de que la ley en proyecto le está diciendo: "De las seis senadurías, usted puede elegir solo dos para que se lleven a cabo, y únicamente once de las veintiocho"...

El señor LAGOS.-

¡De nuevo lo mismo....!

El señor COLOMA.-

Así es, Su Señoría. Se establece específicamente al separarse el número de candidatos y al emplearse la conjunción disyuntiva "o": diputados o senadores. Es la única forma de entenderlo.

Entonces, vamos a tener a aquellos que querrán ser nombrados en forma directa, lo que es perfectamente legítimo, y aquellos que desearán competir, a quienes se les explicará: "Sería estupendo que hubiera una primaria, pero la ley impide efectuar más de dos". Y como en una Región se llevará a cabo una de ellas por la razón A, B o C, lamentablemente será preciso esperar ocho años más para ver si puede corresponder o no.

Pero más delicado¿

El señor MONTES.-

¿Se puede pedir el cierre del debate?

El señor COLOMA.-

Como Su Señoría está interesado en el tema, le hago presente lo que se plantea en la decisión de una candidata. Sobrevendrá un problema bastante complejo: ¿a una mujer le conviene medirse en una primaria o guardarse para el cupo? Será un asunto muy complicado, sobre todo porque la primaria, contra lo que algunos pensaban, cuenta con financiamiento público y significa una forma de validación para darse a conocer en una candidatura emergente.

Obviamente, si se trata de alguien que ocupa el cargo, del incumbente, la situación es distinta. Pero si queremos renovar y que haya personas nuevas, hace años se dijo aquí mismo que era el lugar para poder instalarse es la primaria.

¿Qué tendrá que hacer una mujer en ese caso? Estará tironeada por dos cuestiones. Primero, según si vaya o no, puede afectar el derecho de otras mujeres, sobre la base de la misma lógica. Y segundo, si va por la vía de la primaria considerando el financiamiento o de la no primaria para asegurar la elegibilidad, por cierto tiene lugar una distorsión en la forma en que funciona el sistema político.

No sé si hay ánimo de abrirse a entender los argumentos. Cinco personas, con distintos modos de plantearse, de distintos partidos, hemos tratado de convencer de que esta ya no es una cuestión ideológica, sino práctica, de cómo va a funcionar el sistema.

De persistir la norma original, vamos a instalar un gigantesco conflicto, que se obvia si se aprueba la indicación, la cual resuelve el problema de manera anticipada. Dice: "Ahí se dará la instancia del cuarenta por ciento y se abrirá la posibilidad de validarse frente al electorado".

De lo contrario, se verificará una discusión al interior de los partidos, con una tensión adicional, y existirá la encrucijada permanente en que se encontrará una mujer que quiera optar por sus méritos, la que será tironeada para un lado u otro: ir a la primaria, con el financiamiento y un grado de conocimiento -y eventualmente perjudicar a otra persona que pueda no hacerlo-, o exponerse a ser sujeta de una cuota final.

Cuando originalmente se planteó el punto de la cuota, siempre lo entendí orientado conforme a la lógica expuesta. Pienso que nadie imaginó un entramado que, al final, en vez de clarificar, enreda, y antes que construir, deshace.

Gracias.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Puede intervenir el Senador señor Pérez Varela.

El señor PÉREZ VARELA.-

Señora Presidenta, seré muy breve. Hago uso de la palabra para reafirmar lo planteado por el colega que me precedió.

De no aprobarse la indicación y de acogerse el artículo remitido por el Ejecutivo, habrá una invitación a la arbitrariedad y a la discriminación por los partidos. Porque, cualquiera que sea la fórmula -una de ellas es la que planteaba el señor Senador, en el sentido de dividir por circunscripción o por distrito-, las colectividades van a elegir dónde habrá o no primarias. Será una decisión política que sin duda alterará absolutamente la igualdad ante la ley y que constituye un acto arbitrario. ¿Por qué un candidato a Senador deberá ir a primarias en una determinada circunscripción y otro no en una distinta?

Algunos han rechazado que sea esa la interpretación.

La otra es aún peor, porque incide el número de candidatos a Senadores o a Diputados que tenga la colectividad política. Por lo tanto, se podría dar el absurdo de que, dentro de cierto distrito o circunscripción, el partido decida quién va a una primaria y quién no.

Cuando se cuenta con una ley de primarias, que dice relación con el traspaso de atribuciones de los partidos a la ciudadanía, con el mecanismo para que esta participe en la elección de candidatos, necesariamente es preciso actuar de manera coherente y que todos tengan el derecho, no solo los postulantes, sino también los ciudadanos de las circunscripciones o los distritos.

Por lo tanto, sin gustarme la fijación de cuotas, la indicación presentada por los Senadores señores Espina y Larraín resulta clave, una vez aprobado el proyecto, para evitar alguna arbitrariedad y discriminación.

Aquí hay presidentes de partido. Y no los veo determinando, en distritos y circunscripciones: "Tú vas a primarias y tú no", "Para tu candidatura, tienes que pasar por ese paso previo" o "Tu candidatura la decide la directiva o los comités electorales del partido".

Es un absurdo, claramente. Y cuando se legisla desde la perspectiva del absurdo, lo que se generan son profundos conflictos al interior de los partidos y de la ciudadanía. Porque esta última entiende ya que la participación en las primarias es un derecho ciudadano, que no puede ser constreñido por una decisión partidaria.

En consecuencia, creo que los argumentos que hemos dado hacen absolutamente indispensable, necesario, para evitar conflictos futuros, aprobar la indicación que está sobre nuestros escritorios y que han firmado los Honorables señores Larraín y Espina.

Gracias.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Por 24 votos contra 13, se rechaza la indicación 21, renovada.

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, Bianchi, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa la señora Von Baer y los señores Allamand, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Larraín, Moreira, Orpis, Ossandón, Pérez Varela y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Corresponde votar ahora el texto, aprobado en general, de la letra b) del número 1), con la modificación acordada por la Comisión de Constitución.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La norma es de rango orgánico constitucional.

Quienes estén de acuerdo con la disposición y la enmienda a que se ha hecho referencia tienen que votar que sí y quienes no lo estén se pronunciarán en contra, naturalmente.

El señor DE URRESTI.-

Que se abra la votación, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Ha vuelto a funcionar el sistema.

En votación.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Tuma.

El señor TUMA.-

Señora Presidenta, solo deseo consignar, al margen de las indicaciones presentadas para intentar corregir el proyecto, que sin duda hemos tomado decisiones que pueden parecer arbitrarias. Es el caso de cualquier porcentaje: el cuarenta, el cuarenta y cinco, el treinta y cinco, al lado del esfuerzo que estamos haciendo para permitir que la mujer intervenga de manera proporcional, mínima, en las próximas elecciones de órganos de decisión como la Cámara de Diputados y el Senado.

Es cierto que vamos a tener que sacrificar algunos valores. El punto de que se trata se halla en pugna con las primarias. Por mi parte, he sido un defensor permanente de que la ciudadanía pueda elegir a los candidatos. Pero tenemos que optar entre objetivos tan importantes el uno como el otro: el equilibrio en la sociedad para la participación de la mujer y la actuación de los ciudadanos en las decisiones de designación de candidaturas.

Creo que el proyecto no es perfecto, pero constituye la forma en que hemos podido hacer viable una reforma que contribuya de verdad a una mayor actuación femenina. Y los ciudadanos también tendrán derecho a intervenir en una proporción que sin duda les tenemos que reconocer. Una cosa por la otra.

Lo que estamos haciendo aquí, entonces, dice relación con hacer posible algo que nunca hemos realizado: la ley de cuotas, para asegurar que la mujer también tenga derecho a participar en la representación popular.

Por tanto, voy a votar a favor.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba la letra b) del número 1), con la modificación acordada por la Comisión de Constitución, dejándose establecido, para los efectos del quórum constitucional exigido, que 23 señores Senadores se pronuncian a favor y 9 en contra.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic y Muñoz y los señores Araya, Bianchi, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa la señora Von Baer y los señores Allamand, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Larraín, Orpis y Prokurica.

La señora ALLENDE ( Presidenta).-

La Honorable señora Lily Pérez hace constar su intención de voto a favor.

El señor LAGOS.-

¡Tres horas para quedar igual¿!

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La letra c) del número 1) no fue objeto de modificaciones, pero sí de indicación, y la letra d) se encuentra en la misma condición. Ambas normas requieren el quórum de tres quintos de los Senadores en ejercicio. Si Sus Señorías lo estiman conveniente, se pueden llevar a cabo una sola discusión y votación.

El señor COLOMA.-

Quiero hacer una pregunta, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra.

Pero no sé si se entendió el planteamiento del señor Secretario, que comparte la Mesa.

El señor COLOMA.-

Me parece bien un solo pronunciamiento.

Mi consulta es de carácter técnico y se dirige al señor Presidente de la Comisión. Al término del inciso final del artículo 3° bis que quedaría si se aprobara la iniciativa se observa lo que no sé si obedece a un error de transcripción o tiene algún sentido. La disposición vigente finaliza con las palabras "antes del vencimiento del plazo para presentar candidaturas" y la que se despacharía llega solo hasta "vencimiento", habiéndose borrado los vocablos "del plazo para presentar candidaturas". Ello puede dar lugar a un problema de interpretación.

El señor LAGOS.-

Ni siquiera está especificado.

El señor WALKER (don Ignacio).-

Parece que tiene razón.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Así es.

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).- Constituye un error del comparado que se elaboró en la última Comisión que trató el proyecto.

Si los señores Senadores están de acuerdo, se pueden votar las letras c) y d).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En efecto. Ya se aclaró la situación en la que reparó el Honorable señor Coloma.

Tiene la palabra el señor Presidente de la Comisión de Constitución.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, el que se acaba de exponer es un error de transcripción de la Comisión de Hacienda. Tengo el comparado que se preparó de la Comisión de Constitución y el texto no presenta el problema.

Lo único que se hace en la disposición es reconocer algo que ya aprobamos en la primera enmienda, con relación al artículo 1°, número 1), letra a), que es la posibilidad de asociación de partidos políticos e independientes.

Entonces, sería una norma adecuatoria. Nada más que eso.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Queda aclarado el punto entonces. Y podríamos pronunciarnos sobre las letras c) y d).

Tenía razón el Senador Coloma en que había un problema de forma.

¡Muy bien, Su Señoría¿! ¡La Mesa se lo reconoce, hidalgamente¿!

¡En realidad, se ha portado bastante difícil¿! Pero está bien. Hay que reconocer. ¡Al César lo que es del César¿!

Queda abierta la votación.

¿Senador Harboe?

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, como se trata de una norma adecuatoria respecto de otra que ya aprobó la Sala, sugiero votarla inmediatamente, sin fundamento de voto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Si les parece, podríamos aprobarla con la misma votación anterior.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Ambas letras son de quórum especial, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Entonces, hay que votar.

En votación.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Senador Navarro, ¿va a justificar su voto?

El señor NAVARRO.-

No, señora Presidenta.

Intervengo nada más que para señalar que, cuando existan dos informes, sería muy bueno que hubiera una revisión final de los artículos. Porque lo que acabamos de ver ha ocurrido otras veces; por ejemplo, en la discusión del proyecto que modificó la Ley de Pesca.

En el proceso de transcripción de textos, cuando se trabaja bajo presión, a pesar del enorme esfuerzo de todos nuestros funcionarios, siempre se presentan este tipo de inconvenientes.

Por tanto, en votaciones milimétricas, como esta, en donde claramente hay una presión respecto de todas las normas, una comparación de ambos textos -sea en cuanto a las letras, a las comas- es bastante necesaria, de tal manera de evitar un debate como este. De lo contrario, se genera un cuestionamiento al principio de fe. Y nuestro Secretario -podemos dar cuenta de ello- es un ministro de fe permanente que cuenta con el respaldo de todos nosotros.

La idea es que ambos secretarios de Comisión garanticen la conformidad de los dos informes antes de que ingresen a la Sala. Es un trabajo de coordinación que debe hacerse al finalizar el estudio la Comisión que emite el último informe.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, las letras c) y d) contienen normas absolutamente adecuatorias. Simplemente, señalan que cuando haya un pacto electoral y este lo integren partidos políticos e independientes, no podrá acordarse otro. Es una cuestión de sentido común.

La letra c) señala: "El pacto electoral se entenderá constituido a contar de la fecha de su formalización. Los partidos políticos que hubieren constituido un pacto o una asociación con candidaturas independientes" -porque ya se autorizó que los partidos políticos puedan tener una asociación con independientes- "no podrán acordar otro a menos que aquél fuere dejado sin efecto.".

Se trata de una norma absolutamente adecuatoria.

Uno puede tener mil diferencias, como yo las tengo en este proyecto, pero siempre se debe tratar de que el contenido de los textos sea coherente.

Por lo tanto, voto a favor.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Ofrezco la palabra al Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, la letra c) es una adecuación de lo que aprobamos al principio, y la letra d), lo mismo.

¿Por qué no aprovechamos de votarlas juntas?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Es lo que estamos haciendo, Su Señoría.

El señor HARBOE.-

¡Ah, perdón! Estupendo.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Así lo hablamos y estuvo de acuerdo el Senador Coloma, a quien le reconocimos su acierto.

Consulte, señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueban las letras c) y d) del número 1) del artículo 1° del proyecto (28 votos a favor, 7 en contra y una abstención), dejándose constancia de que se reúne el quórum constitucional exigido.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Allamand, Araya, Bianchi, De Urresti, Espina, García, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Ossandón, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa la señora Von Baer y los señores Coloma, García-Huidobro, Moreira, Orpis, Pérez Varela y Prokurica.

Se abstuvo el señor Hernán Larraín.

El señor MONTES.-

¡Faltó la explicación del Senador Coloma¿!

El señor COLOMA.-

¡Ahora voy a hablar, en castigo¿!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

A continuación, se han renovado las indicaciones números 8, 9 y 10, que inciden en el número 2) del artículo 1°. La 8 es de los Senadores señores Coloma y Pérez Varela; la 9, del Honorable señor Bianchi, y la 10, de los Senadores señores García-Huidobro y Moreira. Las tres son iguales y su objetivo es eliminar el número 2) del artículo 1°.

Cabe señalar que, si se llegare a rechazar esta eliminación, habría que pronunciarse sobre la norma misma, la cual requiere para su aprobación el voto conforme de los tres quintos de los señores Senadores en ejercicio.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Como las tres indicaciones persiguen el mismo objetivo, podemos votarlas en conjunto, independiente de que hayan sido formuladas por diferentes señores Senadores.

En votación.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, yo quiero debatir.

El señor LAGOS.-

¡Pero hágalo con usted mismo¿! ¡No espere que le debatan¿!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, en el número 2) también se está proponiendo un cambio muy sustancial al sistema político.

Quiero hacer presente que va a generar que pueda haber más candidatos que cargos a elegir.

Ese es, en el fondo, el principio que se construye a partir de este cambio. Algunos lo llaman "N+1", pero ese es el concepto.

Aquí hay un tema conceptual. Y les quiero señalar a quienes tienen amplia experiencia internacional en materia público-política (hay algunos que son doctores en ese sentido y hacen grandes referencias), que lo que se plantea no está acorde con ninguna legislación que yo conozca en lo que respecta a sistemas electorales.

Me podrán señalar que es necesario innovar en el mundo. Claro, pero cuando uno innova, ustedes reclaman: "¡Cómo Chile va a ser el único país que tenga un sistema bla-bla-bla!". Pero, cuando ustedes son los que innovan, dicen: "¡Oye, qué extraordinaria la modernización de la política! ¡Extraordinaria!". Y eso es porque son cuatro o seis más.

¡No, pues! Yo les solicito que vayamos al mérito.

Lo que se propone no existe desde el punto de vista político-electoral. Siempre se presentan como candidatos el mismo número de postulantes a elegir. ¡A lo mejor hasta la OCDE tiene cifras sobre el particular! Las pueden chequear. Y es algo, a mi juicio, de la naturaleza de una elección.

El único objetivo de lo que se plantea -porque me imagino que uno tiene que pensar- obedece a que hay coaliciones que, por su búsqueda de diversidad -lo estoy expresando en términos bien anodinos, para que nadie se sienta afectado-, quieren tener más candidatos, necesitan más candidatos.

Creo que eso implica adaptar, a la problemática personal de un bloque, la legislación política de un país.

Esto nunca ha sido propuesto por alguien: ni por el Presidente Frei, ni por el Presidente Lagos, ni por el Presidente Allende, ni por ninguno de aquellos a los que suele recurrirse para efectos de fundar lógicas de este tipo. Es una adaptación o un traje a la chilena, porque, aparentemente, les faltan candidatos, o bien tienen muchos candidatos. Si es bueno o malo, no lo sé. Pero el principio rector, motor de un sistema político -lo digo en base a todos los libros que yo por lo menos he leído; si ustedes me dicen que hay autores que han innovado en la materia, me gustaría conocerlos; de hecho, he pedido informes de legislación comparada- es el principio de limitar el número de candidatos a los cargos a elegir. Es lo que existe en todas las democracias. Y tiene un sentido, señora Presidenta, que no es tan casual, como es el de dar algún grado de mayor representatividad a quienes resulten electos.

Y les digo otra cosa. Con el sistema que se está planteando -algunos lo vamos a discutir después- se produce un efecto claro: que quien sea elegido lo será con muchos menos votos que los que hoy se obtienen, versus un sistema uninominal donde el Presidente captará gran cantidad de sufragios.

Creo que ahí hay un argumento objetivo. Es algo que pasará; es un efecto. En la medida en que haya más candidatos, ocurrirá en forma más clara. Y eso no le hace bien -es mi impresión personal- al sistema político. Además, no tiene otra justificación que no sea la de buscar una adaptación. Distinto sería si me dijeran: "Mire, es un modelo mundial". Pero no existe; es una adaptación.

Es por eso que yo, con humildad -para que después no me digan quién sabe qué cosa-, estoy actuando con sentido de interés público, tratando de preservar una institución en la forma que siempre ha existido en Chile. A alguien podrá no gustarle un sistema electoral -estamos cambiándolo-, pero nunca ha habido más candidatos que cargos a elegir. ¡Nunca!

El señor LETELIER.-

¡Antes, sí!

El señor COLOMA.-

Y cambiar eso me parece un error.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Bianchi.

El señor BIANCHI.-

Señora Presidenta, esto no es ni más ni menos que la lápida para sepultar toda posibilidad de que un candidato resulte electo de manera independiente.

Esta es una defunción. Hoy día se está anunciando la muerte absoluta de las candidaturas independientes en nuestro país.

Y esto lo digo porque, en definitiva, se quiso hacer ver al país que lo que se estaba haciendo con el N+1 -algunos pidieron incluso Nx2- era abrir la posibilidad para que hubiera más candidatas y candidatos, abrir una instancia para que existiera mayor participación.

Pero yo no puedo ir contra lo que represento, contra mi esencia, porque, si hay algo en la vida que tiene un valor imposible que alguien pueda pagar o cambiar, es la moral, la ética, la consecuencia.

Por lo tanto, señora Presidenta, esto es ni más ni menos que la lápida para que no haya ninguna posibilidad de que una persona independiente pueda ser electa.

Y voy a explicar por qué.

Si en una circunscripción o distrito existen tres cupos por llenar, los partidos o pactos políticos llevarán cuatro candidatos o candidatas; uno más que los cupos por llenar.

Si con el sistema binominal -al que me honro de haber roto y haberle ganado en dos oportunidades- ya era muy difícil de lograr un éxito final, con el sistema que se propone ello resultará imposible, pues los partidos o pactos políticos llevarán -repito- un candidato más que los cupos por llenar.

¿Por qué se plantea un nuevo sistema -y creo que es muy bueno decir la verdad-? Se plantea para que, por un lado, en el país nos obliguemos a tener partidos políticos. A mí no me parece malo. De hecho, estoy haciendo el intento de poder lograr aquello, porque ya tengo claro y asumido que no voy a tener ninguna posibilidad de reelegirme en la situación en la que me encuentro, de una independencia verdadera, no ficticia.

Por lo tanto, la igualdad establecida en el artículo 18 de la Constitución, da la impresión de que, a estas alturas, nadie la vio, a nadie le interesa, no sirve de nada.

Aquí existe una brutal desigualdad. Y una desigualdad que estoy obligado a hacer notar, señora Presidenta, porque el país debe entender que los partidos políticos van a llevar un candidato más que los cupos por llenar, y no, como se ha querido hacer ver al país, para que se abra la posibilidad de que haya más candidatas o más candidatos.

¿Saben por qué se ha escogido esa alternativa? Simplemente, porque hay demasiados interesados. Muchas veces los partidos no tienen cómo satisfacer el deseo de hombres y mujeres que desean ser candidatos y candidatas en determinada elección. Y aquí, con esto, no solo se cumple tal objetivo, sino que además se cumple el verdadero propósito que hay detrás: llevar un candidato más a fin de que la dificultad de tener alguna opción para un candidato o candidata independiente sea aún mayor.

En estas circunstancias, me allano a respaldar el cambio del sistema binominal. No estoy en la lógica de no querer cambiarlo, señora Presidenta. Estoy actuando bajo la lógica -espero que se entienda, por favor-de mi condición transparente, honesta, independiente, exhibida por años, al menos en este Congreso, y hay pruebas creíbles de lo que estoy diciendo. En el fondo, todo aquello queda eliminado, porque uno de los objetivos ocultos es suprimir cualquier posibilidad de un candidato independiente.

Si los colegas estiman que eso es lo que hay que hacer para fortalecer sus estructuras políticas, bueno, ¡háganlo! Pero el país debe saber que esto de un candidato más que cupos por llenar no es ni más ni menos que el objetivo que se persigue para que las candidaturas independientes desaparezcan absolutamente en Chile. Le han puesto la lápida final a cualquier opción de un candidato independiente.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, creo que, más allá de las diferencias que podamos tener, siempre es importante ser rigurosos en las opiniones que se vierten sobre las normas que estamos discutiendo.

Lo digo porque el artículo 4°, materia de esta votación, consagra efectivamente un sistema en virtud del cual cada partido o pacto electoral puede presentar un número de candidatos inmediatamente superior al de cargos por elegir.

¿Cuál es la diferencia con el actual sistema? En que en el actual sistema, como su nombre lo indica (binominal), los pactos o partidos solo pueden llevar dos candidatos, que es el número de cargos que se ha de llenar.

En primer lugar, con esta alternativa, desde el punto de vista de la decisión ciudadana, se democratiza ya no solo el poder de selección, sino también el poder de elección. Es decir, lo que ocurrirá es que los ciudadanos van a poder elegir entre más alternativas de cada pacto electoral o de cada partido político que se presente.

Dicho de otra forma, en las recientes elecciones parlamentarias, en ciertas circunscripciones los ciudadanos pudieron elegir entre un máximo de cuatro postulantes, dos por cada una de las listas. Con el nuevo sistema, cada lista, de elegirse tres cargos, podría llevar hasta tres candidatos. O sea, el ciudadano tendrá la posibilidad de elegir en hasta seis alternativas distintas.

Eso, en primer lugar, le devuelve el poder de elección a la ciudadanía.

En segundo lugar, permite la posibilidad de que ingresen personas que pertenezcan a partidos políticos menores e incluso independientes. Y, al respecto, solo me resta recomendar al Senador que me antecedió en el uso de la palabra que al menos tenga la rigurosidad de leerse el Párrafo 2°, que en el comparado viene a continuación del precepto que estamos viendo (artículo 10 y siguientes), donde se habla específicamente de las candidaturas independientes, porque esta fórmula permite que los partidos políticos pacten no solo entre sí, sino también con independientes. Es más, se habla incluso de la formación de candidaturas independientes. Y, como veremos más adelante, se baja el umbral para determinadas candidaturas que tengan ese carácter.

Es decir, lejos del sentido planteado por el Senador que me antecedió en el uso de la palabra, lo que hace el proyecto, adicionalmente a dar mayor poder de elección a los ciudadanos, es incorporar a los independientes como alternativa para pactar con los partidos políticos.

En consecuencia, señora Presidenta, voy a concurrir con mi voto favorable, por cuanto esta iniciativa, al contrario de lo que se ha planteado con anterioridad, permite las candidaturas independientes e incorpora en la fórmula N+1 tanto a militantes de partidos políticos como a candidatos independientes.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor De Urresti.

El señor DE URRESTI.-

Señora Presidenta, no quiero dejar pasar algunas intervenciones de Senadores que no formaron parte de la Comisión de Constitución.

Se ha planteado acá que este sistema no existe en ninguna parte del mundo y que no se conocen situaciones similares.

Hay una serie de países en los cuales incluso existe la institución del parlamentario suplente, que acompaña al titular.

Es importante entender la discusión y las distintas exposiciones que se dieron en la Comisión de Constitución, que se tomó el tiempo necesario para hacerlo.

Obviamente, va a cambiar el principio rector del sistema electoral. Acá, de una vez por todas, estarán representadas las mayorías y, proporcionalmente, el Parlamento obedecerá a ese sentimiento de que voten los ciudadanos y romperemos el empate permanente que ha habido en el Congreso Nacional, en que con una cantidad de prácticamente el doble de los votos se obtenía uno y otro parlamentario.

Eso va a cambiar. El principio rector claramente va a cambiar.

Pero, ¡por favor!, entendamos que no se trata de hacer un traje para que puedan ingresar todos los adherentes de determinada coalición, sino precisamente de ampliar la capacidad de integración de distintos partidos de una coalición y también de los independientes. Y en esto no hagamos una caricatura -lo digo con mucho respeto- acerca de los independientes.

El artículo 3° de la Ley de Votaciones, modificado por el artículo 1° del proyecto aprobado por la Comisión, establece la posibilidad de incorporar independientes, principio fundamental para poder tener mayor amplitud, mayor oferta de ciudadanos en una región en el ámbito de circunscripciones o distritos.

Por eso, reitero que aquí se innova en la proporcionalidad, en la capacidad de representación y en el respeto a los independientes para que participen en los procesos electorales.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, escuché atentamente los argumentos del Senador señor Bianchi. Y, si bien voté distinto en la Comisión, ahora lo haré a favor de lo que él señala pues le encontré razón. Y para eso está el debate en la Sala.

Es así pues, de verdad, se produce lo que él dice: un candidato independiente va a tener mayores dificultades para ser electo, porque va a competir con un número superior de candidatos que integren su respectivo pacto.

Esta es la discusión llamada "con N+1 o sin N+1". No considero que en esto se juegue la vida o la muerte, sino el número de cupos a elegir, si estos coinciden con los candidatos o derechamente se permite que haya un candidato más.

Nosotros lo discutimos en la Comisión. Pero, al analizar las condiciones en que quedan los candidatos independientes, que corren solos, se observa que no solo tendrán que competir contra un pacto que va a llevar el número de cargos a elegir, sino también con un candidato más.

Por tal razón, debo expresar que los argumentos del Senador Bianchi me parecen razonables. Y por eso votaré a favor de sus indicaciones.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Lagos.

El señor LAGOS.-

Señora Presidenta, seré extremadamente breve.

Creo que los argumentos dados respecto al tema de los independientes están claros: se bajan los umbrales, pueden participar, etcétera.

Yo solo quiero decir una cosa: pueden estar en su derecho a venir a la hora nona a plantear una serie de argumentaciones respecto a que no corresponde técnicamente, a que hay sistemas mejores, etcétera. Sin embargo, pasó el momento de hacerlo. Renovación Nacional y la UDI hoy no están legislando; están de comentaristas o analistas del próximo sistema electoral, porque se restaron de la discusión.

Todos los argumentos vertidos podrían haber sido válidos si los hubiéramos discutido como corresponde, cuando se planteó esta reforma.

¿Qué ha habido? Un rechazo.

Y hoy se dice: "que a esto le falta un párrafo; que el N+1; que la cuota; que el tema de las primarias¿".

Me parece muy bien. Pero quiero decirles que, si tenían el legítimo interés de modificarlo -como lo dijeron algunos señores Senadores-, podríamos habernos sentado a discutir la reforma.

¿Y qué tenemos? Que hoy, hasta antes de las 14 horas, corrían algunos en los pasillos y hacían reuniones a fin de analizar si presentaban una contraoferta para ver si mejorábamos, cruzábamos la vereda y llegábamos a un acuerdo.

Creo que, lamentablemente, se ha perdido la tremenda oportunidad de lograr un acuerdo más amplio. Y no me cabe duda de que, aunque tengamos los votos, si lo conversáramos, este proyecto podría ser mejor. No obstante, para hacerlo necesitamos un interlocutor. Y este no se quiso sentar nunca a la mesa a conversar y llega a la hora nona a identificar problemas y situaciones de distinta naturaleza.

Nosotros no vamos a extender este debate innecesariamente, pues ya hubo esa oportunidad.

En consecuencia, los dejamos con la responsabilidad de que tal vez algunas de sus contribuciones podrían haber sido buenas. Pero creo que desde ese punto de vista es un poco tarde. Porque esperamos mucho tiempo para tener esta oportunidad y creo que debemos aprovecharla.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Horvath.

El señor HORVATH.-

Señora Presidenta, en primer lugar, haciendo eco de las últimas palabras del Senador que me antecedió, creo que nunca es tarde para hacer buenos acuerdos, y para eso estamos en la Sala. Y, obviamente, al calor de la discusión y considerando los antecedentes y los argumentos, es posible que se tomen decisiones nuevas.

Sin embargo, este punto tiene que ver con los independientes.

Tengo el mayor respeto por los independientes. Y hoy como independiente puede ser elegido el Presidente o la Presidenta de la República, basta que saque la mayoría de los votos. De la misma manera, los alcaldes. Y, en el próximo futuro, los intendentes o las intendentas. Es decir, a los independientes no se les ha puesto una lápida. Quiero ser bien clarito en esto.

En segundo lugar, cuando se presenta una candidatura independiente, esta tiene que juntar las firmas, ser capaz de convencer a una cantidad importante de potenciales electores, independiente de las primarias, porque en estas vota el otro bando y de alguna manera se influye en él. Tenemos un espectro bastante amplio en esto.

Sin embargo, lo que sí influye, desde luego, es el programa, la trayectoria, los hechos que finalmente constituyen una candidatura independiente.

Siempre he patrocinado un sistema en el cual las personas sean más valoradas por su trayectoria que solo por el partido al cual pertenecen -respeto mucho a los partidos-, y que exista la posibilidad de que quien obtenga el mayor número de votos resulte realmente electo.

Eso es lo más transparente. Pero no lo hemos logrado.

Entonces, esto de hacer pactos con partidos políticos, que son las reglas del juego, hoy tiene la contraparte -lo vamos a ver más adelante- de que se puedan gestar partidos políticos regionales.

Si un independiente es capaz de juntar firmas para ser candidato independiente, con la misma cantidad será capaz de formar un partido regional.

En consecuencia, él tiene la opción de colocar en su lista a las personas que integrarán su equipo de trabajo, que le van a ampliar el espectro en correlación con su comunidad para completar el N+1.

Por lo tanto, no lo quiero dramatizar. Creo que verdaderamente los proyectos hay que mirarlos en su contexto general.

Por eso, creo que los independientes no solamente van a sobrevivir, sino que serán bien valorados en el futuro con esta ley.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador Pérez Varela.

El señor PÉREZ VARELA.-

Señora Presidenta, sin duda, el Senador Bianchi ha puesto el tema del debate de los independientes en una elección, como la que estamos discutiendo, de Diputados y Senadores con un sistema proporcional.

A esa discusión se nos ha invitado.

Y el elemento de colocar un candidato adicional al número de cupos por llenar, sin duda le coloca a los independientes una dificultad adicional.

Y seamos claros

El señor BIANCHI.-

¡A los verdaderos! ¡No a los travestis!

El señor PÉREZ VARELA.-

¿cuántos independientes están en los consejos municipales?

Por lo tanto, la argumentación entregada, que da a conocer la realidad, demuestra que el Senador Bianchi tiene absoluta razón.

Es más, señora Presidenta, en la elección municipal del año 2008, diez candidatos independientes a concejales obtuvieron la primera mayoría y, sin embargo, no fueron elegidos.

Por consiguiente, reconozcamos que cuando uno coloca un candidato adicional a los cupos, está poniendo un obstáculo adicional.

El señor PROKURICA.-

¡Así es!

El señor PÉREZ VARELA.-

Y ante la respuesta que se da en cuanto a que se puede pactar con un partido, con una alianza, debo decir que quienes integramos partidos políticos sabemos que esa decisión, más que del independiente, es de las colectividades políticas.

En consecuencia, esta norma obstaculiza la participación de los independientes en las elecciones de Diputados y Senadores. No obstante, no cabe duda de que en las elecciones presidenciales, es decir, en las unipersonales, la situación es absolutamente distinta.

Pero aquí estamos discutiendo en cuanto a las elecciones de Diputados y Senadores, porque en las de concejales, e incluso en las de consejeros regionales -por lo menos en la Región del Biobío no fue elegido ningún candidato independiente-, ya tienen los obstáculos suficientes.

A mi juicio, colocar un candidato adicional implica poner un impedimento que, sin duda, hará imposible que al Senado o a la Cámara de Diputados llegue un independiente sin el beneplácito de un partido. Podría hacerlo, pero luego de pactar con uno de ellos.

He revisado los discursos de muchos de quienes están en la Sala, y jamás en sus campañas ofrecieron a la ciudadanía eliminar o cambiar el binominal por otro sistema que incluyera a más parlamentarios. Indudablemente, esta norma tiene como objetivo claro impedir que un independiente que quiera mantener su independencia y no pactar con algún partido pueda llegar al Senado o a la Cámara de Diputados.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Allamand.

El señor ALLAMAND.-

Señora Presidenta, he pedido intervenir para hacer una breve acotación respecto del sentido general del N+1. Sin embargo, la verdad es que la intervención del Senador Lagos me obliga a formular un pequeño comentario.

Pocas veces he visto tanto menosprecio por el rol de la Oposición.

El señor LAGOS.-

¡Todo lo contrario!

El señor ALLAMAND.-

Aquí se ha señalado que, por ser minoría, simplemente somos verdaderos comentaristas.

El señor LAGOS.-

¡No!

El señor ALLAMAND.-

Y se ha planteado, con una arrogancia digna de mejor causa, cuando, en su opinión, se pueden hacer aportes y cuando no.

Más aún, para aclarar lo que pasa, yo por lo menos nunca había visto que quienes son mayoría consideraran tan despreciables las opiniones de las minorías al punto de calificarlas de ser simples comentarios.

¡Aquí está la mejor expresión democrática¿! La mayoría entiende que la minoría no tiene ningún rol que jugar y todo se encuentra resuelto fuera de la Sala. Dan lo mismo los argumentos; da lo mismo tener la razón o no tenerla; da lo mismo que las normas sean constitucionales o inconstitucionales; da lo mismo que sean correctas o incorrectas.

Se aplica el criterio de la aplanadora.

En verdad, señora Presidenta, eso contribuye muy poco a un debate.

Incluso, se menciona el acuerdo. Y nos vamos a referir un poco más adelante en la sesión a los acuerdos en materia de sistema electoral que se respetan y a los que no.

Pero quiero hacer presente que desde que llegó este proyecto a la Sala del Senado, todos los intentos de arreglo -de los cuales yo he sido siempre escéptico- tuvieron un pie forzado: aquello que se resolvió en la Cámara de Diputados no se toca.

En consecuencia, desde el punto de vista del Gobierno, nunca ha existido disposición para buscar un entendimiento. ¡Nunca ha existido! Lo que se acordó en la Cámara Baja, en el Senado no se toca. ¡Punto!

Entonces, señora Presidenta, pienso que eso que no ayuda. Y lo menciono para efectos de que quede claro.

Ahora, deseo ir al tema de fondo.

Tengo la siguiente impresión, señora Presidenta. Creo que el N+1 de alguna manera es una reminiscencia de algo que quizás podría haber sido útil en la lógica de un sistema mayoritario. Porque, tal como señaló el Senador Harboe, uno podría decir: "Mire, si es uno el candidato en un sistema mayoritario uninominal, ¿por qué no permitir que se presenten dos y ampliamos razonablemente la oferta?".

La pregunta correcta sería, en este caso, ¿por qué se requiere N+1 en distritos en que hay nueve u ocho candidatos? La verdad es que no tiene justificación alguna.

Si estamos pensando en una postulación -como las que han existido- de 4, 5 o 6 listas, en un distrito que tenga 8 candidatos -6 por 8, 48-, resulta una cantidad de candidatos más que suficiente. Pero ello no tiene ninguna justificación en distritos en que hay 7, 8 o 9 candidatos -no sé cómo quedaron al final-. La verdad es que -repito- no tiene ninguna justificación.

¿Quién podría sostener que en distritos de un número grande de candidatos se requiere ese N+1? No se justifica. Más aún, entiendo que va a generar cierta perturbación. Sin embargo, ello sí podría tener sentido en la lógica de los distritos o de las circunscripciones más pequeñas. No obstante, en ese caso, lo razonable habría sido que fuera Nx2. Es decir, donde compiten dos, ampliemos la oferta mediante la posibilidad de que existan pactos y, en consecuencia, que vayan cuatro candidatos, lo que apuntaría al objetivo correcto.

Si se presentan tres, en la práctica se dificultan precisamente los pactos entre partidos. Por lo tanto, no tiene sentido la norma.

Si quisiéramos ampliar la oferta en circunscripciones o distritos pequeños, lo lógico habría sido hacerlo con un N+2. Pero en los distritos grandes no tiene ninguna justificación.

Por consiguiente, señora Presidenta, estimo que esa es otra razón para rechazar una norma, la cual constituye una reminiscencia de las lógicas de los sistemas mayoritarios más que de los sistemas proporcionales que estamos aprobando.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra la Senadora señora Von Baer.

La señora VON BAER.-

Señora Presidenta, en primer lugar, me llama mucho la atención que en esta y en otras discusiones, al parecer, se piensa que la única verdad es la propia y que no hay opción ni espacio para tener una opinión distinta. Y si uno la quiere expresar, significa que está tratando de frenar el debate. Además, si uno no quiere concurrir con el voto a favor de una idea en que no está de acuerdo, entonces, no tiene derecho ni siquiera a hablar.

A mi juicio, eso es lo menos democrático que hay.

Acá la mayoría no se puede quedar con la palabra, ni decir cuándo los votos son correctos o incorrectos. La democracia no funciona así.

Los defensores de la democracia siempre debieran escuchar a los que opinan distinto, porque, por último, quizás en alguna parte del argumento hay algo en que quizás se puede estar cometiendo un error.

La arrogancia de no escuchar, puede llevar al país a cometer errores graves. Pero, en fin, esa no es nuestra responsabilidad.

Los responsables del sistema electoral hoy en votación, y también de su resultado, son los integrantes de la Nueva Mayoría.

Me sorprende la forma en que está construido este proyecto. Cuando uno habla de sistemas electorales, lo primero que debiera hacer -como dice la literatura sobre el tema- es plantear cuál es la meta del sistema electoral. ¿Qué queremos lograr? Después, el sistema electoral propiamente tal es una simple fórmula. Y hay distintas fórmulas, cuyos efectos están superestudiados.

Entonces, cuando uno pretende tener más partidos en el Congreso y que estén representados los grupos más chicos, elige un sistema más proporcional. Y cuando uno quiere conglomerados grandes, que se deban poner de acuerdo, escoge un sistema mayoritario. Y, en general -como también señala la literatura especializada en el tema, particularmente con respecto a países latinoamericanos-, los regímenes presidenciales funcionan mejor con sistemas electorales mayoritarios.

Eso es así.

Entonces, la Nueva Mayoría ha dicho que desea establecer un sistema más proporcional. ¡Perfecto! Pero yo por lo menos no estoy de acuerdo con eso. Considero que no le hará bien al país, sino que le va a dificultar más el funcionamiento de nuestro sistema presidencial. En fin, ¡allá la Nueva Mayoría!

Sí me llama la atención que cuando uno observa las distintas fórmulas del proyecto, no se distingue cuál es la meta que tiene la iniciativa de ley. Porque cuando uno mira el tema de las cuotas, advierte que ello choca con la realización de elecciones primarias. Por tanto, el proyecto no es congruente.

Además, lo relativo al aumento de candidatos tampoco es consistente con la cualidad de un sistema proporcional. Al respecto, está en lo cierto el Senador Allamand: lo propuesto podría ser mucho más lógico si se buscara establecer un sistema más mayoritario que el binominal. Entonces uno podría decir: "En realidad sería bueno incluir otros candidatos".

Entonces, uno se pregunta por qué se plantea algo que no ayuda a lograr la meta que supuestamente persigue la Nueva Mayoría. Y la única explicación que encuentro es el pragmatismo político: la Nueva Mayoría requiere más cupos, pues son muchos partidos los que la conforman.

Han incluido más colectividades: ¡necesitan más cupos!

Les cuesta llegar a acuerdo: ¡necesitan más cupos!

Para aumentar el número de estos, se propone una mayor proporcionalidad y, también, el incremento de candidatos.

El resultado nada tiene que ver con buscar un sistema electoral que sea clarito y que la gente entienda. Es superimportante -también lo dice la literatura- que los ciudadanos comprendan cómo su voto se transforma en un escaño. Pero eso será muy difícil con las enmiendas planteadas. En un sistema en el que puede haber primarias o no; en el que puede haber cuota o no; en el que habrá más candidatos pero en el contexto de un modelo más proporcional, ¡la gente no va a entender! Y eso le quitará legitimidad al nuevo sistema electoral.

Señora Presidenta, por último, es posible que uno no comparta el cambio hacia un instrumento electoral más proporcional, pero hay una cosa que es clara¿

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Concluyó su tiempo, señora Senadora.

Termine la idea.

La señora VON BAER.-

Gracias, señora Presidenta.

Hay una cosa que es clara: cuando un sector político absolutamente solo vota a favor de un sistema electoral, este no va a durar mucho tiempo, pues no contará con la legitimidad que implica un acuerdo amplio.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Hernán Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, seré muy breve, pues ya se ha dicho lo sustantivo.

Quiero manifestar

El señor LAGOS.-

Pido la clausura del debate, señora Presidenta.

El señor LARRAÍN.-

Si me lo permite el Senador Lagos 

El señor LAGOS.-

Ha pasado más de media hora.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Una vez que concluya la intervención del Honorable señor Larraín, terminará la discusión y procederemos a votar, pues efectivamente llevamos media hora en esta materia.

El señor LARRAÍN.-

¡Agradezco la comprensión de los estimados Senadores de las bancas de enfrente...!

Señora Presidenta, el sistema que se está diseñando, por las características propias de un modelo proporcional, más la rebaja de exigencias para crear partidos, conducirá a una proliferación muy significativa de colectividades políticas.

Si a eso agregamos la creación de distritos con una mayor cantidad de candidatos -recordemos que se subirán los cupos de Diputados de 120 a 155, si se aprueba el texto de la Cámara Baja- y la posibilidad de que los partidos presenten por distrito o circunscripción un máximo de candidatos igual al número de cargos por llenar más uno, estamos yendo hacia el lado contrario del péndulo. Es decir, de un sistema que quizás era muy circunscrito y tenía poca competitividad -por eso había que corregirlo- pasaremos a uno que puede fraccionar en exceso el cuadro político y dificultar la gobernabilidad.

Por esas consideraciones, pienso que es una mala noticia el que se incremente el número de candidatos. Además, ello implicará un problema de carácter económico, pues tal medida conllevará gastos adicionales.

Por consiguiente, no me parece prudente ni necesario, en el esquema que se está perfilando, la propuesta de agregar un candidato más en cada distrito o circunscripción por sobre los cupos disponibles.

Por eso votaré a favor de las indicaciones renovadas que suprimen dicha enmienda.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Señores Senadores, corresponde votar las indicaciones renovadas números 8, 9 y 10 -son iguales-, para suprimir el número 2) del artículo 1º. La supresión no requiere quórum especial.

Quienes estén de acuerdo con las indicaciones votan que sí y quienes estén en desacuerdo votan que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación las indicaciones renovadas señaladas.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, quiero fundar mi voto, especialmente ante las exiguas respuestas de quienes han tratado de defender lo que yo considero indefendible.

Se ha llegado al extremo de decirnos, luego de muchos circunloquios de parte de un Senador con quien tengo buena amistad, que damos lo mismo. Yo no creo que demos lo mismo, y tampoco pienso que esta sea la hora nona. Es el momento de debatir los proyectos, de votar las enmiendas y de tomar decisiones.

Además, lamento que los ejes de la discusión no hayan sido asumidos por ningún parlamentario de las bancas de enfrente.

El primer aspecto no lo planteé yo, sino el Senador Bianchi. Y le encuentro toda la razón. Objetivamente, este subsidio a los pactos electorales dificulta que un independiente por sí solo pueda ser elegido. ¡Es obvio! Resulta difícil para este enfrentar a una lista que lleva un máximo de candidatos correspondiente al número de cargos más uno, alternativa que la ley en proyecto entrega a quienes van en pacto.

No sé si el Senador Pérez Varela alcanzó a mencionar lo relativo a las elecciones municipales.

El señor HARBOE.-

Sí.

El señor COLOMA.-

Al respecto, quiero dar dos datos. Él aportó uno. Lo acabo de chequear.

En las elecciones municipales de 2008, hubo diez candidatos independientes que obtuvieron la primera mayoría pero no resultaron electos. Además, otros diez candidatos dentro de pacto sacaron menos del 1 por ciento y fueron electos.

Lo propuesto en la iniciativa, dentro del marco de un sistema proporcional, abre una posibilidad mayor para que menos independientes -soy miembro de un partido, pero respeto el derecho de los independientes- matemáticamente resulten elegidos. Adicionalmente, habrá más opciones para que gente que saque muy pocos votos salga electa.

Esa es la ecuación final que da esta norma: fomenta la alternativa de que haya gente elegida con muy poco sufragio y dificulta que independientes con buena votación ganen el escaño.

El señor PROKURICA.-

¡Es lo que le critican al binominal!

El señor COLOMA.-

Para ustedes, eso es bueno para una democracia; para mí, resulta perturbador.

En segundo lugar, a pesar de algunas amenazas -amenazas simpáticas, no estoy diciendo nada grave-, no he podido corroborar la información de que este sistema se hallaría replicado en el mundo.

En verdad, no hay otro lugar en que se presenten más candidatos que cupos a llenar. Ello, porque se afectaría la representatividad. Al parecer, aquí se pretende diluir el voto de las personas. En efecto, cada vez será más difícil sacar electo al candidato por el cual se vota. Obviamente, mientras más candidatos compitan, menos votos obtendrá cada cual.

En todas partes del planeta, indudablemente, se entiende que esa lógica debilita la representación, ¡menos en Chile! Ahora queremos ser diferentes en esto, no en otras materias. No hay ningún problema en debilitar la representatividad de manera agónica, si conviene al cuadro político contar con más candidatos para generar mayor acceso.

El señor LAGOS.-

¡Como pasó durante quince años con los Senadores designados!

El señor COLOMA.-

Los efectos finales que producirá la enmienda en comento no se traducen en un inocente principio N+1, sino en una apertura para ir debilitando el legítimo mundo independiente; para disminuir la representatividad de quienes salgan electos en el Congreso; para lograr que personas representen a la ciudadanía con porcentajes de votación inferiores -me atrevo a adelantarlo- al 1 por ciento.

Este asunto no es para decir: "Apurémonos, porque son las 19:44. Despachemos luego esto". Estamos elaborando una ley para treinta años, teóricamente. Espero que dure harto menos.

Honestamente, creo que lo planteado en el proyecto no es consistente.

En una perspectiva institucional, no es serio que, por acomodar el traje ante una coyuntura, se termine generando un debilitamiento de la representatividad como el que estamos viendo.

Entonces, no da lo mismo lo que se apruebe.

¡Este es un tema no menor, sino sustancial!

Veo la actitud de las bancas de enfrente. Es como si dijeran: "Bueno, sea correcto o no, vamos a apoyar igual esta enmienda. Tenemos los votos para ello. ¡Y qué!".

A mi juicio, esa es la peor forma de legislar en favor de un país. Yo prefiero, con dignidad y representando a quienes me eligieron, votar en contra de lo planteado en el número 2) del artículo 1º.

Perderé las veces que sea necesario, pero estoy convencido de que lo propuesto no es bueno.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Bianchi.

El señor BIANCHI.-

Señora Presidenta, un señor Senador señaló que fui poco prolijo al leer determinado texto. En respuesta, hago presente que se puede ser poco acucioso cuando no se explica bien el principal objetivo de la disposición que estamos discutiendo.

En realidad, no se trata de prolijidad, sino de la interpretación que cada uno da a lo que estamos votando.

Mi interpretación es muy simple. Deseo hacer ver a ese señor Senador o a cualquier persona que esté mirando esta sesión que, con la norma propuesta, un candidato absolutamente independiente que quiera participar en la elección fuera de pacto no tendrá ninguna opción de ganar. ¡Ninguna opción!

Aquel ya no solo deberá competir contra tres, cuatro, cinco o seis, según sea el número de escaños a elegir por distrito o circunscripción, porque los partidos políticos podrán presentar un candidato más en cada caso. Y todos suman: si son tres y se agrega uno, se llega a cuatro. ¡Y el independiente va a tener que ganarle a la suma de todos ellos!

Ese es el fondo del asunto.

Se dijo que he sido poco prolijo. Bueno, puedo entender la intencionalidad de ese planteamiento. Pero no acepto que se insinúe que lo que he sostenido no es verdad, porque sí lo es, tal cual como lo estoy explicitando.

La otra persona podrá no compartir mi criterio y yo tampoco el de él. Da igual.

En todo caso, no estoy hablando del independiente trucho-¡no!-, sino del independiente de verdad: ¡de la persona que ha sido electa en esa condición, de la persona que no tranza y que vota en conciencia, de la persona que es capaz de mantener una consecuencia y que no da volteretas!

¡De eso estoy hablando, señora Presidenta! De la candidata o el candidato que no está dispuesto a hacer un pacto con un partido político, ¡que quiere competir contra los partidos políticos!

¡Eso es!

La norma en comento simplemente obliga al independiente. Le dice: "O efectúas pacto con los partidos -y así suman uno más, tal vez como número cuatro, seis o el que sea- o compite en grado de desigualdad".

¡De eso estamos hablando, señora Presidenta!

Pido disculpas si en algún momento ofendí a personas por las que siento estima. No fue mi intención. Esto no es para que uno termine enemistado con todo el mundo.

Se trata de que el punto de vista que uno defiende sea respetado como el que sostienen quienes integran un partido político.

Ahora, me doy cuenta de que a eso vamos a llegar todos. Tan así lo entiendo que ya estoy trabajando en la conformación precisamente de un partido. Creo que esa será la nueva forma en que tendremos que expresarnos, ya que se elimina la posibilidad del mundo independiente.

Algunas argumentaciones señalan: "No se le pone la lápida a las candidaturas independientes".

¡Sí se la pone! Y está bien. Nos obliga a buscar nuevas fórmulas para participar. Eso no me parece malo. Puede ser a través de los partidos regionales, como planteó el Senador Horvath.

Lo que quiero que quede claro, señora Presidenta, es que con este numeral se sugiere al candidato independiente: o sumarse a un pacto -ahí el cupo que se ofrezca dependerá de la generosidad del partido respectivo-, o simplemente competir de manera absolutamente desigual.

Eso es el N+1.

A mi juicio, es bueno que se transparente el punto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Prokurica.

El señor PROKURICA.-

Señora Presidenta, en esta materia concuerdo con mi compañero de banco el Senador Bianchi, quien nos ha dicho muchas veces que salir electo como independiente no es fácil con el sistema actual.

Para analizar bien este proyecto, cabe revisar los objetivos que se fijaron en el mensaje.

En primer lugar, se habla de "reducir la desigualdad del voto".

Pues bien, si uno analiza el número de cupos que se entrega por distrito o circunscripción en comparación con la cantidad de votantes, se da cuenta de que dicha finalidad no se logra.

El segundo objetivo es "Permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas".

Lo ha manifestado muy bien el Senador Bianchi: la norma del N+1 retrata de cuerpo entero el propósito de la iniciativa. La disposición debiera decir: "Aquí yacen las candidaturas independientes". Ningún independiente logrará salir elegido, pues se le hará mucho más difícil competir.

Tercer objetivo: "Aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos".

¡Esto me da risa, señora Presidenta!

¡Si el aumento de cupo en la Cámara Baja -por algo se señala que la medida es inamovible- es para que los Diputados en ejercicio vuelvan a salir elegidos!

Por eso se hizo. ¡Así de simple!

Que el mensaje de este proyecto no hable de aumentar la representatividad, la competitividad y la incertidumbre, si lo único que se hace es establecer un seguro de vida para que quienes estamos aquí dentro volvamos a ser electos.

No hay una sola palabra sobre el límite a la reelección. Al respecto, nosotros hicimos una propuesta en el marco del acuerdo con la DC, que lamentablemente no se cumplió, no se materializó.

Otra finalidad: "Facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías".

En verdad, señora Presidenta, después del discurso de un señor Senador a quien aprecio, pareciera que las minorías no valen nada y la opinión, mucho menos.

Luego, se agrega: "Promover un Congreso que refleje la diversidad de la sociedad".

Es difícil conseguir este propósito cuando a las minorías, representadas por los independientes, muchas veces se les cierra la puerta de modo definitivo para llegar al Parlamento.

El último objetivo que dispone el mensaje es algo absolutamente imposible de lograr: "Evitar que queden fuera candidatos con grandes votaciones".

La mayor crítica que se le formula al sistema binominal es que salen elegidos candidatos con menos votos que otros.

Pues bien, con el sistema que se nos propone -lo han dicho muy bien los Senadores García-Huidobro, Pérez Varela, Coloma y Allamand-, la situación va a empeorar. ¡Va a empeorar! Y con el N+1, con mayor razón, porque habrá grupos que juntarán una cantidad mayor de votos para competir contra los independientes, que van a quedar definitivamente fuera del Parlamento.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Le corresponde intervenir al Senador Chahuán, quien no está en estos momentos en la Sala.

Tiene la palabra el Honorable señor Patricio Walker.

El señor WALKER (don Patricio).-

Señora Presidenta, seré muy breve.

Cuando formé parte de la Comisión de Constitución, algo me tocó trabajar con relación a este proyecto.

Hago presente que el asunto que nos ocupa fue un tema central en la discusión. De hecho, la iniciativa original planteaba el Nx2. Después se habló del N+2, y ahora, del N+1. O sea, la norma en comento es bastante más modesta que la sugerida al principio.

¿De qué se trata?

Acá se ha sostenido que este es un traje a la medida de los parlamentarios; que con esto estamos asegurando la reelección. Pero no es así. Es totalmente lo opuesto, lo contrario.

A partir de esta disposición, deberemos enfrentar competencia al interior de nuestros partidos, y nos podrían ganar. Eso permitirá darles espacio a los jóvenes, a los indígenas, a las mujeres -por algo está la norma de cuotas-, etcétera. O sea, ¡estamos ampliando la oferta electoral!

En vez de que los partidos designen, la gente va a decidir entre más candidatos (alternativas mayores).

Por lo tanto, no entiendo por qué se dice que esta norma es un traje a la medida y que apunta a asegurar los cargos.

Si existe la sensación de que nosotros somos dueños de los cargos, con este precepto se elimina y se combate esa sensación, toda vez que tendremos competencia incluso en nuestro partido.

Por lo tanto, desmiento categóricamente esas afirmaciones.

A mí me da lo mismo si los argumentos son de la mayoría o de la minoría. Las minorías no solamente comentan, sino que también tienen derecho a proponer ideas. Y las buenas ideas, sean presentadas por una mayoría o una minoría, deben ser recogidas.

Ronald Dworkin dice en que en una democracia los derechos de la mayoría están suficientemente protegidos, por lo que debemos asegurar y respetar los derechos de las minorías. En ese libro Dworkin decía: "O los derechos son de las minorías o no son derechos", tal como me enseñó mi profesor Carlos Peña en el ramo Filosofía del Derecho en quinto año de universidad.

Los derechos en serio

Gracias, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Chahuán.

El señor CHAHUÁN.-

Señora Presidenta, antes de iniciar mi intervención quiero referirme a un punto de reglamento y pedir...

El señor LETELIER.-

Estamos en votación, colega.

El señor CHAHUÁN.-...

una ampliación del plazo para presentar indicaciones al proyecto de ley sobre etiquetado de bebidas alcohólicas.

Ocurre, señora Presidenta, que tenemos una...

El señor LETELIER.-

¡Estamos en votación! ¡Aprendan el Reglamento!

El señor COLOMA.-

Después de la votación.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Su Señoría, nos hallamos en votación.

Una vez terminada ella, puede hacerlo; ahora no.

El señor CHAHUÁN.-.

Okay

Entonces, quiero hacerme cargo de las palabras del Senador señor Patricio Walker -por su intermedio, señora Presidenta- cuando Su Señoría se refiere al ejercicio de una democracia en la que se respeta a las minorías.

A mí me parece que lo que hace el N+1, por el contrario, es establecer -y coincido con el Senador Bianchi- un obstáculo para que las personas del mundo independiente, aquellos que no pueden pactar con otros independientes, puedan competir en igualdad de condiciones con los independientes que pacten con los partidos políticos.

El señor WALKER (don Ignacio).-

Los que pactan con los partidos.

El señor CHAHUÁN.-

En ese mismo sentido, el N+1 no es sino un traje a la medida de la coalición de Gobierno, la cual sufre de exceso de candidatos, dada su amplitud, que va desde la Democracia Cristiana hasta el Partido Comunista, y que necesita representar a todas sus corrientes en una elección para los efectos de evitar los conflictos internos.

En consecuencia, para dejarlos a todos tranquilos...

El señor HARBOE.-

¡Y a todas!

El señor CHAHUÁN.-

... y contentos, y para que la coalición logre ir consolidándose, se establece un número mayor de candidatos.

Por las razones expuestas, vamos a votar a favor de las indicaciones.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Allamand.

El señor ALLAMAND.-

Señora Presidenta, rescato las expresiones del Senador Patricio Walker que, de alguna manera, vienen a reivindicar la lógica del debate democrático y de la deliberación, y que existan palabras de respeto hacia las opiniones que sostenemos los opositores, pues no viene mal cuando la tónica es exactamente la opuesta.

Con relación al fondo del tema, dos reflexiones.

La primera -y lo digo con el mayor respeto hacia los Honorables colegas- es que, de alguna manera, la tónica de este debate va a condicionar la tramitación futura de diversas iniciativas en el siguiente sentido.

Cuando llega a la Sala un proyecto, sea de iniciativa del Ejecutivo o del Parlamento, se produce siempre, pienso yo, un debate positivo. Y de pronto señores Senadores que no han participado en los debates al interior de las respectivas Comisiones efectúan aportes y plantean puntos de vista que habían sido tomados en consideración en el trabajo de ellas.

En consecuencia, siempre existe disposición a acoger los buenos argumentos, flexibilizar las redacciones y a veces llegar a un cierto acuerdo para que un texto tenga una forma diferente. Y, finalmente, ese proceso, en su conjunto, resulta positivo.

Sin embargo, en este debate -y esto es premonitorio para lo que viene- esa lógica deliberativa ha desaparecido.

Y digamos las cosas como son: estamos aprobando disposiciones que los propios colegas saben que están mal construidas y, una vez terminada la votación, en los comentarios de pasillo unos a otros nos decimos: "Esto no quedó bien resuelto", "Esto lo podríamos haber solucionado de mejor manera", "Había una forma más inteligente de abordar este problema".

En consecuencia, nos estamos mutilando esa posibilidad en una lógica que no se condice con la tradición del Senado.

Entonces, lo que quiero plantear, no para obtener una respuesta sino para levantar una reflexión, es que si esta va a ser la tónica de las próximas semanas o de los futuros meses le haremos un flaco favor al proceso deliberativo, ya que si nadie está dispuesto, cualquiera sea el peso de los argumentos, a mover una coma de lo que llega a este Hemiciclo parece mejor explicitar esa voluntad y asumir que la discusión particular en el Senado no tiene sentido alguno, que dan lo mismo los argumentos, que si las razones son correctas o incorrectas no importa porque ya se adoptó una decisión sobre la materia y, por tanto, la discusión en la Sala del Senado, cualquiera sea la fuerza de los argumentos, da exactamente lo mismo.

A mí me parece que este es un pésimo precedente, un precedente equivocado.

Ahora bien, en lo que respecta al tema concreto, considero muy importante el planteamiento del Senador Patricio Walker, aun cuando yo pienso en un sentido opuesto, pues Su Señoría ha dicho que el N+1 amplía la posibilidad de participación democrática y, en consecuencia, los partidos se ven obligados a presentar más candidatos para incrementar la posibilidad de elección de los ciudadanos.

Sin embargo, si esa hubiese sido la lógica, entonces por qué restringir las primarias en la forma como lo hemos hecho, a sabiendas de que ellas producen el mismo efecto.

Si uno dice "quiero un sistema más participativo desde el punto de vista de las personas", es completamente incoherente, equivocado e inconstitucional mutilar las primarias, que son el mejor mecanismo existente para terminar con las oligarquías o las burocracias partidistas que le restan poder a las personas para decidir quiénes y cuántos son sus candidatos.

Si fuéramos coherentes no habríamos aprobado la norma que mutila las primarias ni tampoco este N+1 en la forma indiscriminada en que lo estamos haciendo, aun para distritos o circunscripciones de gran tamaño.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor García-Huidobro.

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

Señora Presidenta, deseo insistir en algunas consultas, aprovechando la presencia del Presidente de la Comisión de Constitución.

Suponiendo una primaria que es ganada por un candidato, ¿el N+1 se va a meter como contrabando? Quiero saber cómo lo van a hacer, cómo se va a incorporar el N+1.

Entendemos plenamente que en el caso de las elecciones municipales la Concertación llevaba dos listas porque no tenía más cupos. Esa es una manera de evitar que vayan candidatos por fuera en las elecciones parlamentarias.

Sin embargo, mi consulta es qué pasa con la persona que ganó la primaria y le ponen un candidato del mismo partido o de otros; eso se verá en las negociaciones que correspondan.

Hago esta consulta al Ejecutivo, al Ministro del Interior, porque me parece importante saber cómo va a operar este mecanismo.

En segundo lugar, el planteamiento del Senador Bianchi es efectivo -y quiero ser superfranco-, porque él rompió el sistema binominal como muchos aquí -yo lo rompí como Diputado- y, al existir mayor cantidad de competidores, obviamente las posibilidades de triunfo son menores. Y si a uno le ponen un competidor del perfil del Senador Bianchi, ¡para la casa!

En el fondo, ese es el objetivo.

Por otra parte, el Senador Horvath dice: "No te preocupes. Te vamos a bajar la exigencia a 0,25 por ciento para que tú puedas formar un partido".

¡Todo hecho a la medida de las personas que quieren mantenerse en el Parlamento!

Esa es la conclusión que uno saca de este tipo de legislación.

Por otro lado, no puedo dejar pasar las aseveraciones que hizo el Senador Lagos, a quien le tengo mucho aprecio, cuando nos dijo que, en el fondo, nosotros estábamos de más aquí, que éramos solo opinólogos...

El señor LAGOS.-

¡No me tergiverse! ¡Yo no dije eso!

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

No sé. Yo le pido -por su intermedio, señora Presidenta- que me deje hablar. Yo no lo interrumpí.

Él, en el fondo, nos planteó que había pasado la hora. Esta es una Cámara revisora; su propósito es, justamente, revisar lo que viene de la Cámara de Diputados. Y aquí, por acuerdos políticos, hay temas intocables: no se puede tocar la composición de esa Cámara.

Es decir, con este acuerdo que ha alcanzado la Nueva Mayoría se impide que el Senado sea una Cámara revisora. Y eso es lamentable, porque de alguna manera implica renunciar a las facultades que tenemos. Y renunciar sobre todo en temas que son de importancia para la ciudadanía.

Se aumenta el número de parlamentarios, obviamente para satisfacer más las candidaturas de los partidos, pero, por otro lado, se liquida la posibilidad de los independientes.

Yo lamento esta situación.

Señora Presidenta, voy a votar a favor de esta indicación, porque creo que la manera de volver a lo que debe ser este Senado es teniendo la posibilidad de dialogar, de confrontar ideas y hacer un debate, y no solamente aprovechando la mayoría circunstancial que existe hoy día con el fin de llevar adelante este proyecto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Seré muy breve, señora Presidenta, porque sé que tenemos todavía un largo debate por delante.

En primer lugar, quiero hacer presente que me extraña la forma y el modo como el Senador Lagos Weber hizo referencia a la Oposición. Y lo señalo porque le tengo bastante respeto y afecto, pero sobre todo por lo siguiente: porque lo que dice no es correcto.

Ya lo veremos en el momento en que discutamos las propuestas de cambio del sistema binominal que nosotros presentamos a este Senado el 12 de marzo, un día después de que asumiera la Presidenta Bachelet. Se trataba de una reforma pactada y convenida con el Partido Demócrata Cristiano, y firmada por el jefe de bancada del Partido Socialista en ese momento, el Senador Rossi.

Uno podrá decir que le gusta o no le gusta, podremos entrar al debate sobre cuáles eran sus características, pero sostener que nosotros hemos venido a trabajar de comentaristas aquí me parece un profundo error.

En segundo lugar, me alegra la afirmación que ha hecho el Senador Walker en este debate porque, efectivamente, en la Comisión nosotros colaboramos con el despacho de la iniciativa. Pueden preguntarle al Presidente de la Comisión si como Oposición pusimos obstáculos, entrabamos, quisimos dilatar el debate. Nada de eso. Hicimos un trabajo serio, mantuvimos nuestras diferencias y, si hubo momentos de aspereza, posteriormente logramos dejarlos atrás. En resumen, tratamos de despachar, dentro de un tema tan sensible, el mejor proyecto posible, a lo menos desde el punto de vista de la técnica legislativa. Y si hemos propuesto correcciones ha sido con el ánimo de que esos aspectos, que son técnicos, puedan llevarse adelante.

Cuando nosotros llamamos la atención, por ejemplo, sobre el tema de las cuotas, no lo hacemos porque estemos en contra de ellas, sino porque creemos que la fórmula que se establece no va a funcionar. Pero bueno, eso la experiencia lo dirá.

En este caso puntual, yo en principio dije: "Claro, parece bien que exista N+1" -y lo discutimos en su momento con el Senador Walker en la Comisión de Constitución-, porque con eso se daba una mayor opción de que la gente tuviese más candidatos. Lo que ocurre es que, mirado desde la perspectiva de lo que ha señalado el Senador Bianchi, hay tres elementos que hoy día representan una desventaja para los independientes.

A todo esto, yo soy militante de un partido político y fui Presidente de él. Por lo tanto, no tengo nada contra los partidos políticos. Me parece muy bien que la gente pertenezca y trabaje en ellos, que los modernice y fortalezca.

La primera desventaja es que los independientes no tienen pacto. Porque ¿cómo se puede establecer la afinidad entre dos independientes?

La segunda deriva del hecho de que nosotros en la Comisión de Constitución acogimos una indicación por la cual se mantiene en 0,5 por ciento la cantidad de firmas que se requieren para ser candidato independiente, pero se bajó, contra el voto nuestro, a 0,25 por ciento las que se necesitan para formar un partido. O sea, si se es independiente, se enfrentan más dificultades que si se pertenece a un partido político.

Yo soy partidario de mantener las dos exigencias en 0,5 por ciento, porque creo que, si no, la proliferación de partidos que se produce y la proliferación de candidatos independientes, sin tener un mínimo de adhesión ciudadana, termina dañando el buen funcionamiento del sistema democrático.

Y la tercera desventaja es aquella a la cual ha hecho mención el Senador Bianchi. Porque, imaginémonos una circunscripción en donde compiten cinco candidatos. Pues bien, los pactos hoy día van a llevar cinco candidatos, más uno: seis. Y el independiente va a tener que enfrentar seis candidatos. Un señor Senador señaló que el N+1 lo teníamos pensado más bien por la poca cantidad de oferta ciudadana que se producía en el binominal. Pero, si uno lo analiza en el sistema proporcional, donde hay más candidatos, la oferta es alta. Pensemos que si hay a lo menos cuatro listas en una circunscripción donde se eligen cinco Senadores, va a haber veinte candidatos para que la ciudadanía pueda elegir. Si antes existían cuatro listas en un sistema binominal, había solo ocho candidatos. Por lo tanto, se está más que duplicando la cantidad de opciones electorales, supuesta la misma cantidad de pactos.

Entonces, señora Presidenta, no me arrepiento de haber defendido este punto, porque creo que el debate en la Sala debe poder convencer a los demás. No tengo ningún acuerdo con el Senador Bianchi ni nada que se le parezca. Solo digo que me pareció que su argumento¿

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Ha concluido su tiempo, señor Senador.

Le doy un minuto más para que pueda redondear su idea.

El señor ESPINA.-

Gracias, señora Presidenta.

Termino señalando que el N+1 -o sea, un candidato más- es una dificultad mayor que se pone para los candidatos independientes, y creo que eso no es bueno. El sistema debe buscar la equidad entre el militante de un partido y el independiente.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se rechazan las indicaciones renovadas números 8, 9 y 10 (23 votos contra 14).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa la señora Von Baer y los señores Allamand, Bianchi, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín, Moreira, Orpis, Ossandón, Pérez Varela y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Por lo tanto, corresponde votar el texto propuesto por la Comisión de Constitución.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Es el número 2), del artículo 1°, que modifica el artículo 4° de la legislación vigente y requiere para su aprobación de los tres quintos de los señores Senadores en ejercicio, esto es 23 votos.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Cómo se vota?

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Quienes están de acuerdo con el artículo 4° del texto aprobado en general por el Senado votan que sí, y quienes no lo están, votan que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación el número 2) del artículo 1°.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tengo varios inscritos para fundamentar el voto: Senadores señores Lagos, Araya, Navarro, Zaldívar y Harboe.

Tiene la palabra el Senador señor Lagos.

El señor LAGOS.-

Señora Presidenta, entiendo el afecto con que muchos de mis colegas se han referido a mi intervención anterior. Varios han comenzado su exposición señalando que me aprecian harto, pero hacen una interpretación muy injusta de mis palabras, porque, por mi carácter, no tiendo a mirar en menos a nadie en esta Sala. Y considero un exceso que infieran de mis expresiones que no tengo respeto por la Oposición.

Lo que he querido señalar -muchos de ustedes lo saben, y lo tienen en la parte de atrás de sus cabezas- es que esta reforma lleva en el Parlamento diez meses, durante los cuales no hubo disposición -es mi parecer- para llegar a un entendimiento.

El señor LARRAÍN.-

¡No hubo disposición del Gobierno!

El señor PROKURICA.-

Cierre el debate, señora Presidenta.

El señor LAGOS.-

Cuando alguien dice "No hay que modificar el binominal", mi único punto es ese. Y tomo la palabra porque considero muy injusto que se sostenga que quiero decir que la opinión de Sus Señorías no vale. ¡Vale mucho! Pero hay que expresarla y hay que sentarse a conversar para tener un mejor proyecto.

Eso es lo que he planteado. Y los eché de menos en la discusión sobre el N+1 durante aquellos diez meses. Pero no pueden plantearlo aquí o en una Comisión por un ratito: había espacio para más.

Ese era mi punto político más global. Sé que lo conocen. Pero me entretiene decírselo, porque saben que yo, habiendo sido minoría durante un gobierno oprobioso, jamás les desearía que fueran menospreciados en esta democracia que tanto nos costó conseguir, a pesar de muchos de ustedes.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Los Senadores señores Araya, Zaldívar y Harboe han manifestado que no harán uso de la palabra.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, no habría intervenido de no haber sido por las expresiones del colega Lagos, quien hizo un planteamiento que obliga a rectificar.

En este período la voluntad que hemos tenido los Senadores de la Oposición que integramos la Comisión de Constitución -pueden dar fe de ello los demás miembros de ese órgano técnico- ha sido no solo para promover el más amplio debate, sino además para buscar acuerdos.

También puede dar fe de aquello el señor Ministro del Interior, aquí presente.

Desde el principio hemos procurado lograr acuerdos, pues no nos parece razonable ni conveniente para nuestro país que haya sistemas electorales que se impongan por una mayoría que al final puede ser circunstancial: el tiempo lo dirá.

Necesitamos un sistema político que dure, ojalá, 20 o 30 años. Pero eso vamos a conseguirlo si lo concordamos. Si se impone por una mayoría, lo más probable es que con el tiempo se produzca la misma situación que se registró en los últimos años: una búsqueda permanente para cambiar el sistema electoral. Y eso no da estabilidad en las reglas democráticas, ni tampoco en el mantenimiento de las instituciones como uno las quiere: seguras, que den certeza en el tiempo.

Lamentablemente, no llegamos a acuerdo. Pero no es aceptable que se diga que en estos diez meses hemos estado perdiendo el tiempo, mirando para el techo o sin intentar colaborar para resolver la situación del mejor modo posible.

Aun más: no solo lo hicimos en los últimos diez meses, sino que lo volvimos a decir ahora. Y precisamente a propósito de las dificultades que se han suscitado, sobre todo ante la opinión pública, por el financiamiento de las campañas, a raíz de las investigaciones en curso, hemos planteado la conveniencia -se lo hemos dicho al Gobierno- de tener un acuerdo amplio que se refiera no solo al financiamiento de la política, sino también al sistema electoral y a otros aspectos que nos permitan tener en la materia una agenda de calidad.

Quiero decir que sobre la agenda de calidad de la política también hemos tenido iniciativa. En períodos anteriores, con la Senadora Soledad Alvear formulamos muchos planteamientos en esa dirección. Hace cinco meses o más, con el Senador Felipe Harboe hicimos asimismo un planteamiento sobre agenda de la calidad de la política. Y creo que hoy, más que nunca, se requiere un pronunciamiento autocrítico, capaz de reformular no solo el sistema electoral, sino además el mecanismo de financiamiento y todo aquello que le permita a la ciudadanía recuperar la credibilidad y la confianza en los parlamentarios y en la política en general.

Por consiguiente, más testimonios de voluntad para resolver estas materias no se pueden acreditar. Los hay, los ha habido y seguiremos buscándolos, porque creemos que ese es el camino.

En tal sentido, considero que las expresiones del Senador Lagos no corresponden a la verdad y son injustas.

Yo no le oí las palabras que usó, según dicen, para calificarnos de opinólogos, señalando que nuestras opiniones son inútiles o ineficaces. Como no estaba presente, no sé exactamente qué dijo.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Usó la palabra "comentaristas".

El señor LARRAÍN.-

Bueno.

Es muy lamentable ese tipo de comentarios. Y resulta injusto que no se reconozca la voluntad que hemos tenido.

Podrá decirse que es tardía: lo admito. Probablemente, deberíamos haberlo hecho antes. Algunos lo intentamos sin éxito.

Bueno: así es la realidad política.

Pero cuando se dan las circunstancias, si verdaderamente prima el interés del país, siempre debe haber espacio para los acuerdos.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, a usted le consta que yo no había pedido la palabra para fundar el voto hasta que habló el Senador Lagos. Y, obviamente, uno no puede dejar que las cosas queden instaladas de manera inadecuada.

Yo quiero dejar claro, al menos para la historia de la ley, que siempre en estas bancadas ha habido voluntad para llegar a acuerdos importantes en muchas materias.

No nos desconocemos mutuamente. No es primera vez que estamos enfrentados a la necesidad de un entendimiento. Lo que ocurre es que, desde mi perspectiva, en esta materia nos hallamos ante un Gobierno muy insensible, que básicamente nos plantea que los 155 miembros de la Cámara de Diputados no se tocan.

Como Sus Señorías comprenderán, estén en la Oposición o en el Gobierno, una declaración de ese tipo es del todo inaceptable cuando uno quiere reflexionar.

Saben de la cantidad de indicaciones -están en la Comisión- que se presentaron para tratar de llegar a entendimiento.

Les consta que había fórmulas para elegir de forma diferente de la actual a los mismos 120 Diputados y 38 Senadores existentes hoy.

El sistema electoral no obedece a una cuestión de principios: uno debe tratar de buscar los efectos.

Algunos sistemas, como el binominal o el uninominal, generan más estabilidad. Otros pueden provocar más diversidad, dependiendo del grado de proporcionalidad que uno se plantee. Pero nosotros estuvimos dispuestos siempre, desde el primer minuto, a buscar un espacio de entendimiento.

Al Senador Larraín le resultan especialmente ofensivas las palabras vertidas desde las bancadas del frente, porque hizo un esfuerzo (y lo desplegó también con nuestras bancadas) para tratar de abrir espacios. Y él mismo señaló que había imposibilidad física de entenderse con el Gobierno de la Nueva Mayoría, pues estaba obsesionado en basarse en cambios que no se encontraban disponibles para ningún grado de conversación.

Esas cosas son parte del debate.

Ahora, lo que más le sorprende a uno es que, adicionalmente a votar una legislación que claramente atenta contra un sistema electoral razonable, se argumenta con cierto desgano o con algún desprecio.

Cuando nos dicen que simplemente somos comentaristas -no tengo nada contra estos-, me imagino cómo habrían reaccionado ellos si hubieran sido objeto de tales expresiones. Pero no creo que para estos efectos sean comentaristas: son legítimos actores de la vida pública y de la vida política.

Y las explicaciones dadas hacen incluso más compleja la aprobación de lo que estamos votando. Esto va en un sentido muy contrario a lo que nuestro país necesita, a lo que la ciudadanía quiere. Y se hace un enfoque que a uno le permite darse cuenta de por qué hay tan poco espacio para los acuerdos.

No sé si a ustedes les resulta sorprendente ver que con las mismas personas con las que en otro momento han sido capaces de llegar a acuerdos de pronto todo se nubla. Y se puso una barrera que impide avanzar: la que levantó el Presidente del PPD, quien la llamó "retroexcavadora". Ella fue utilizada, lamentablemente, en distintos espacios.

Creo que el Senador Quintana tenía razón cuando planteaba aquello y, como ideólogo de la Nueva Mayoría, señalaba su parecer sobre cómo debía ser el modelo.

¡Por favor!

¡No puede el mismo partido que postuló la retroexcavadora reclamar luego por la falta de acuerdo!

¡Los mismos que sostienen "Hay que arrasar" después se lamentan públicamente, ahora a través de otro Senador, para decir "Qué pena que no hayamos llegado a acuerdo"!

Eso no es coherente, no resulta concordante, no calza. Y es lo que, lamentablemente, hemos visto en este proyecto, en cada uno de sus artículos.

Por cierto, eso es lo que a uno lo justifica para votar en contra del cambio propuesto, que en mi concepto hace un profundo daño, sobre todo por su fundamento político, que es aún más equivocado a medida que pasan las horas y se intenta explicar lo inexplicable.

Voto en contra.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Pizarro.

El señor PIZARRO.-

Señora Presidenta, creo que el debate que se ha generado nos debe ayudar para explicarles la situación a la opinión pública y a los medios de comunicación. Porque, siguiendo esta lógica de trincheras, en que se dicen cosas de un lado y otro, no se entiende qué estamos tratando de hacer.

Con todo el respeto del mundo, le digo a la Oposición que con el Gobierno de la Presidenta Bachelet estamos cumpliendo un compromiso de campaña que apoyaron los chilenos en las últimas elecciones presidenciales y parlamentarias.

Nosotros le dijimos a la gente que necesitábamos mayoría en el Congreso Nacional para posibilitar el término del sistema electoral binominal, entre otras reformas. ¿Por qué? Porque nos interesa profundizar nuestra democracia, que el Parlamento (Cámara y Senado) puedan ser más representativos de la diversidad de nuestra sociedad actual y de la expresión del pensamiento de las distintas corrientes.

Ese es el objetivo de este proyecto.

¡Si aquí no se trata de abusar de nadie!

Reitero: pedimos los votos de la ciudadanía a los efectos de tener mayoría en el Congreso para, entre otras cosas, terminar con el sistema binominal.

La Oposición, por cierto, tiene pleno derecho a pedir respeto. Pero nosotros también pedimos que se respete la expresión de las mayorías, la expresión de quienes sufragaron para que algunos pudiéramos constituir un quórum altamente calificado.

El sistema electoral, por ejemplo, se cambia por ¡tres quintos de los parlamentarios en ejercicio! Y no es tan sencillo lograr ese quórum especial.

Por consiguiente, al revés de lo que se ha sostenido acá, no se trata de una mayoría circunstancial que va a cambiar de la noche a la mañana. Y si en lo futuro es distinta la correlación de fuerzas, indudablemente que podrá haber otras opciones para mejorar o perfeccionar el sistema en comento.

Pero digamos las cosas como son: este es un acuerdo posible.

No es lo que queríamos: avanzar hacia un sistema proporcional completo. Se trata de un sistema proporcional moderado. Algunos quieren más, y dicen: "No: es un sistema binominal corregido".

Entonces, no perdamos el sentido de las proporciones en cuanto a aquello de lo que estamos hablando acá y a los objetivos que perseguimos. No nos quedemos en el detalle, pues, en definitiva, los chilenos esperan del Congreso Nacional que seamos capaces de generar un sistema electoral que se transforme en un instrumento eficiente para que la participación ciudadana y la diversidad existente en nuestra sociedad se puedan expresar de manera plural y democrática mediante la representación en el Parlamento.

Ese es el objetivo de esta iniciativa.

Entonces, me parecen importantes todos los acuerdos posibles.

Sin embargo, las democracias deben tener también sentido de la oportunidad.

La búsqueda de los acuerdos fue incansable. Llevamos, sin pausa, ¡más de 24 años! buscando terminar con el sistema binominal.

Hace algunos años conseguimos ciertos avances, muy pequeños. A lo menos, eliminamos los Senadores designados; ampliamos de dos a cuatro las circunscripciones binominales, en fin.

Hoy tenemos un avance mayor con quienes han estado dispuestos a poner término al referido sistema.

El mecanismo de remplazo garantiza la posibilidad de que minorías distintas de los dos bloques mayoritarios accedan al Senado y a la Cámara de Diputados.

Tal es la importancia de este proyecto.

Por eso lo han apoyado movimientos emergentes.

Por lo mismo lo han respaldado Senadores independientes, pues al concretarse nuestra propuesta no van a depender más del chantaje a que son sometidos a raíz de que en el sistema binominal solo se pueden llevar dos candidatos por lista y la competencia para dos cargos tiene lugar entre cuatro candidatos, lo que les veda a los ciudadanos la posibilidad de elegir.

Aquí se ha hablado mucho de la cantidad de candidatos.

¡Mientras mayor número de candidatos en la lista, más diversidad, más pluralidad, más posibilidades de que la ciudadanía elija a los que considera mejores!

Entonces, señora Presidenta, con respeto a todas las opiniones, pongamos las cosas en su lugar: este proyecto es ¡imprescindible! para ir mejorando las condiciones de participación ciudadana en una democracia que está siendo cuestionada fuertemente por problemas de falta de credibilidad, de desconfianza y de mal manejo inherentes a quienes estamos participando en la vida política.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Bianchi.

El señor BIANCHI.-

Señora Presidenta, voté a favor de la idea de legislar para cambiar el sistema binominal.

Uno tiene que preguntarse cuál es el mecanismo de remplazo.

El binominal se está sustituyendo por un sistema proporcional, de lista, denominado "D'Hondt". Y este sistema -aquí no se ha descubierto el café con leche, ni la coca-cola, ni la lapicera: nada nuevo- es el mismo que se aplica en las elecciones de concejales y en las de consejeros. O sea, las personas van a votar por una lista.

Pero ahora no estamos hablando solo del voto de lista, que yo, no estando dentro de una estructura política -y se lo decía al Ministro Peñailillo hace un rato-, comparto: estamos hablando también de que hoy se agrega a aquello una cuña, denominada "N+1", respecto de la cual, durante toda esta discusión, Senadoras y Senadores han señalado que es para abrir más espacios, más participación, y para que haya mayor cantidad de candidatos.

Y eso es cierto. Pero es una parte de la verdad. La otra parte es que el mayor número de candidatos dentro de la lista es precisamente para que mientras más postulantes existan menos posibilidad tenga un independiente de ganarle a aquella.

¡Tal es el problema! ¡Eso es lo que he venido señalando insistentemente!

Y voy a tener que referirme al artículo 18 de nuestra Constitución, que dice: "Habrá un sistema electoral público. Una ley orgánica constitucional determinará su organización y funcionamiento, regulará la forma en que se realizarán los procesos electorales y plebiscitarios, en todo lo no previsto por esta Constitución y garantizará siempre la plena igualdad entre los independientes y los miembros de partidos políticos¿".

Entonces, nosotros estamos señalando, a mi entender con justa razón, que el N+1 es contrario a lo que dice nuestra Carta Fundamental. Y por eso hago reserva de constitucionalidad frente al artículo que nos ocupa.

¡Por favor! No estoy renegando de mi aprobación a la idea de legislar para sustituir el mecanismo vigente, pues nadie más que yo (puede haber muchas otras experiencias al respecto; lo decía el Senador García-Huidobro, quien también le ganó al binominal) sabe cuán complejo es intentar vencer a un sistema brutalmente perverso. Pero hoy lo estamos cambiando por un sistema de lista, el D'Hondt, al que se le agrega el N+1. Algunos quisieron el Nx2: "¡Asegurémonos!", dijeron.

Entonces, se sostiene que ahora habrá mayor apertura para movimientos emergentes, pequeños grupos, etnias, diversidad.

¡Suena hermoso! ¡Si hasta yo estoy que me lo creo...!

El problema radica en que, como se está asegurando a través de más candidatos dentro de la lista que no existan adversarios que compitan con ella, la situación es inentendible.

Entonces, algunos -como me señalan- van a poder participar, sí, pero sin ninguna opción de ganar. Tendrán la satisfacción de haber intentado competir. "¡Siga participando!". "¡Siga concursando en las próximas elecciones!".

Con el sistema, incluso habrá parlamentarios elegidos con menos votos que los obtenidos por algunos de los que nos encontramos hoy día sentados acá. Y esa es una verdad absoluta.

Conforme a la lógica expuesta, he señalado insistentemente que creo en el cambio del sistema binominal. ¡Sí! Lo estimo absolutamente urgente y necesario. ¡Sí! Pero lo que hace el sistema N+1 es impedir toda participación que no sea la de los grandes conglomerados, la de los poderosos partidos políticos, cuyo triunfo en las futuras elecciones obviamente se busca asegurar.

Gracias.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Honorable señor Navarro.

El señor NAVARRO.-

Señor Presidente, se pidió el término del debate, ¿no es cierto? ¿Ya transcurrió media hora?

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Estamos en votación, Su Señoría.

El señor NAVARRO.-

Conforme.

Dado que intervino el colega Lagos y nueve Senadores de la Oposición le respondieron, no pretendo incentivar una respuesta. Solo quiero hacer un poco de historia.

La negativa a modificar el binominal, tan ferviente, tan avasallante, tan dogmática, tan firme, solo se fundamenta en un hecho claro y categórico: en las próximas elecciones parlamentarias, las bancadas de enfrente, pero en particular la Unión Demócrata Independiente, no van a contar con el subsidio del binominal ni con los aportes reservados y secretos de las empresas. Por primera vez van a tener que competir, en democracia, con las reglas de la democracia. Eso significa que se van a pesar electoralmente frente al país. Y para el partido de cuarenta Diputados y nueve Senadores -el más grande de Chile- viene la hora de la verdad. Regirá un sistema -reitero- en que el subsidio electoral termina.

En ese sentido, el binominal claramente distorsionó la política: el adversario no ha sido el del frente, sino el del lado. Nos condenaron a vivir conforme a ese esquema durante veinticuatro años. ¿Quién me ha competido? No el antagonista.

En virtud del modelo, único en el mundo, el treinta y tres por ciento es igual a sesenta y seis.

Dicho mecanismo electoral, no existente en ninguna parte del mundo, obligó, durante veinticuatro años, al interior tanto de la Concertación -hoy la Nueva Mayoría- como de la Alianza, a competir con el compañero, a que el adversario fuera quien compartía un proyecto de vida, un proyecto político. Forzó, en definitiva, a confundir de quién se trataba.

A mi juicio, el fondo de la discusión se vincula con determinar si estamos disponibles para acoger la proposición del Gobierno, que no nos gusta del todo. Fue necesario hacer concesiones. Mediaron matices y un conjunto de elementos. Y dijeron: "Bueno, esto es lo que tenemos".

Después de harnear todos los artículos de la normativa en examen, el resultado por lo menos permite inaugurar un nuevo período político-electoral, con variables como las mencionadas por el Senador señor Bianchi u otras. En virtud de la regulación que nos ocupa, va a entrar, como manifestó el colega Chahuán, aire fresco al sistema, que se va a orear.

Y, por favor, se requiere fe en el futuro, confianza. Con quienes se incorporen podremos propender a efectuar modificaciones, ante las rígidas exigencias de quorum existentes. Por tanto, confío en que aquellos elementos que no compartimos, en relación con los cuales no hay cien por ciento acuerdo, serán mejorados por el próximo Congreso. Gracias al cambio que tiene lugar, vamos a cambiar las estáticas y compartimentadas mayorías existentes.

Lo que diría es: "Que no se tema al futuro, a la democracia, al electorado, a la ciudadanía". Dispondremos de un mecanismo no perfecto, al igual que el binominal, pero sustantivamente mejor. ¿Cuánto? Vamos a ver.

En cuanto al N+1, lo que hace es facilitar la coherencia política de los conglomerados, para que puedan participar sin fagocitarse, sin enfrentarse, sin autodestruirse. La idea es que todos puedan encontrar cabida. Es un número, no mágico, sino realista, pero que permite instalar una competencia regulada al interior de las coaliciones.

Por eso, vamos a votar a favor de la sustitución del inciso primero del artículo 4° de la ley. Espero que el proyecto pueda ser perfeccionado por quienes resulten elegidos en 2017. Esto es lo que podemos adelantar hoy día. Lo mejor es enemigo de lo bueno, y la iniciativa, sin ser adecuada, nos permite avanzar.

¡Patagonia sin represas!

¡Nueva Constitución, ahora!

¡No más AFP!

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Puede intervenir el Honorable señor Pérez Varela.

El señor PÉREZ VARELA.-

Señor Presidente, parto por precisarle al colega Navarro que la UDI fue un partido minoritario. En 1990 teníamos dos Senadores y trece Diputados, y con los votos de los chilenos, no con otra cosa, nos constituimos en el principal partido político. Y eso no es algo estático ni permanente, sino que dice relación con el debate ante la ciudadanía.

Su Señoría puede abrigar la seguridad de que en el futuro seguiremos, con la misma fuerza, tratando de conquistar el corazón de nuestros compatriotas para que cuenten con nosotros. Y trabajaremos para ello. Fuimos minoría y llegamos a ser mayoría ganando los votos y la confianza de todos ellos.

Me parece que el Gobierno tiene el legítimo derecho, como lo expresaba el Honorable señor Pizarro, de presentar un proyecto de ley ofrecido a la ciudadanía. Y así lo exponían los discursos: "Se terminará con el binominal". Juzgo legítima esta discusión, como asimismo que algunos estimemos que un sistema mayoritario es mejor para el país, en tanto que otros -fue la mayoría- se inclinen por uno proporcional. Pero la pregunta es si a los chilenos les dijeron que para resolver los problemas había que tener más parlamentarios, que para solucionar las dificultades del sistema era preciso restringir las primarias, que para mejorar el mecanismo electoral se requería bloquear a los independientes.

Considero que estos aspectos dicen relación con un debate igualmente legítimo y que uno tiene igualmente el legítimo derecho de plantear aquí, en la Sala del Senado, para dar a conocer, no solo nuestro pensamiento, nuestras posturas, sino también tratar de hacer ver que claramente es un error, un camino equivocado, lo propuesto en cada una de las materias sobre las cuales he hecho cuestión.

Aquí se ha expuesto, de manera peyorativa, que nosotros no hemos querido sentarnos a conversar. Donde mejor se puede discutir y concordar -y ello se ha hecho muchas veces- es en el Senado. Mas cuando el proyecto fue recibido en la Corporación se nos hizo presente que era inamovible todo lo relativo a la Cámara de Diputados. El redistritaje no se podía mover. ¿Quién está impidiendo el acuerdo? ¿Quién está dificultando la conversación?

Si hasta los propios parlamentarios del Gobierno, como los de mi zona, Los Ángeles, afirman que el redistritaje es una estupidez. Sin embargo, esta materia no se puede tratar. Y así lo expresó el Ministro del Interior.

¿Quién está obstaculizando el diálogo? ¿Quién está entorpeciendo los acuerdos? ¿Quién está evitando el establecimiento de un sistema electoral proporcional que verdaderamente les proporcione un cauce adecuado a las distintas fuerzas políticas?

Nosotros reconocemos que nuestra posición fue minoritaria en las elecciones de noviembre de 2013. Pero no hay duda de que el proyecto que se encuentra sobre la mesa genera problemas adicionales. En los discursos de campaña jamás se incluyó lo de bloquear a los independientes. Ello nunca se le dijo a la gente. Tampoco se le anunció -todo lo contrario- que las primarias se iban a restringir. ¡Jamás!

Sus Señorías contarán con los votos suficientes para aprobar el proyecto, pero nosotros tenemos el legítimo derecho a formularle nuestro planteamiento al país, a expresarle nuestra posición con absoluta claridad, sin ser, por ello, menospreciados ni mencionados de una manera peyorativa, como aquí ha ocurrido.

La única forma de contribuir todos al progreso de Chile es respetándonos, y, sobre todo, reconociendo posibilidades de acuerdo, y el Gobierno y el Oficialismo impidieron una coincidencia cuando al Senado llegaron con algo inamovible, cerrando el camino para debatir, como cámara revisora, sobre algo tan elemental, tan básico, como los distritos en la elección de la Cámara de Diputados.

Por lo tanto, es preciso tener mucho cuidado al hacer referencia a quien bloqueó los acuerdos, a quien los evitó e impidió.

Gracias.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra la Honorable señora Von Baer.

La señora VON BAER.-

Señor Presidente, aquí se ha aseverado que la mayoría de los chilenos se pronunció por el nuevo sistema electoral. Estimo necesario preguntarse qué fue aquello por lo cual votaron.

Efectivamente, se inclinaron por el cambio del binominal. Ello es correcto. ¿Pero optaron por el mecanismo que nos ocupa? Porque ya no se trata de la idea de legislar, sino de la normativa en particular.

Realmente me pregunto si nuestros compatriotas votaron por un proyecto de este tipo. Porque cuando se pregunta qué molesta del binominal, lo primero que se responde, en general, es que le falta competencia y resulta bastante fácil predecir, si bien no en todos los casos, quién va a ganar la elección. Y eso a las personas no les gusta. El problema es que el modelo propuesto hoy día y que recibe la preferencia de la Nueva Mayoría va a registrar menos competencia por una razón obvia: se necesitarán menos sufragios para ganar una elección.

El sistema más competitivo -y eso está demostrado en la literatura especializada- es el uninominal. Es el que se aplica en el caso de los alcaldes. Porque gana el que obtiene un voto más.

Entonces, no cabe ahora andar ponderando. Lo que tendrá lugar es una representación más grande de los grupos más chicos dentro de los partidos. Eso sí. Pero no habrá más competencia. Los mecanismos electorales no pueden hacer dos cosas al mismo tiempo. O sea, no es posible cuadrar el círculo. Cuando se cuenta con más parlamentarios, que es a lo que se apunta, se verifica menos competencia -y el resto no es cierto-, porque se necesitan menos sufragios para ganar un escaño.

Lo otro que le molesta a la gente -quienes nos están viendo en su casa quizás creen que lo estamos cambiando- es que en el binominal no necesariamente gana el que logra más sufragios. Bueno, eso pasa en todos los sistemas de lista. Y si sostenemos que ahora sí triunfarán los que reciban más preferencias, no estamos diciendo la verdad, ya que el mecanismo sometido al pronunciamiento de la Sala es de lista, de modo que los votos se sumarán. Y puede pasar en el binominal, como en la elección de concejales y en el modelo en debate, que no sea elegido el candidato que individualmente consigue más sufragios.

De hecho, el efecto puede empeorar con el mecanismo en votación. ¿Y por qué? Porque los candidatos serán más.

No solo es correcto lo que se decía respecto a los independientes. ¡Es más! La gente no va a comprender por qué no gana el candidato con la mayor cantidad de votos. Va a ser peor que en el binominal.

Entonces, los dos problemas que rápidamente se identifican con este último no son resueltos por el proyecto del Gobierno y que la Nueva Mayoría está votando a favor: se agravan. Y no solo porque se expresa que se quiere aumentar la competencia con un sistema más proporcional, lo que no pasa nunca, sino porque adicionalmente tendrá lugar un empeoramiento con la proposición de aumentar el número de candidatos. Con la cantidad de ellos por lista, será muy probable que no gane el más votado.

Y ahí nosotros no vamos a dar las explicaciones. Tendrá que proporcionarlas la Nueva Mayoría. Porque quienes optaron por un cambio del binominal para aumentar la competencia o para que gane el que obtiene más votos no van a ver su anhelo reflejado en la aplicación de la política pública cuando se verifique la primera elección.

La pregunta va a ser, entonces: "¿Por qué elevamos la cantidad de parlamentarios?". La gente no quiere que se incrementen. Quizás piensa: "Bueno, si aumentamos la cantidad, solucionaremos los problemas del binominal". Se va a dar cuenta de que eso no es así.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Redondee la idea, por favor, señora Senadora.

La señora VON BAER.-

Y los parlamentarios de la Nueva Mayoría, frente al resultado de los comicios, van a tener que responder por qué no se materializó lo que prometieron. Porque así ocurrirá.

Vamos a tener menos competencia y no van a ganar los candidatos con más votos.

He dicho.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Puede intervenir el Senador señor Quintana.

El señor QUINTANA.-

Señor Presidente, es increíble cómo a ratos el doble estándar se apodera de la discusión. Ahora han aparecido los defensores de las primarias, a quienes nunca antes, en el debate correspondiente, les escuchamos decir una sola palabra respecto de este mecanismo de participación.

Ahora han aparecido los defensores de los independientes, en circunstancias de que en pactos y subpactos electorales muy pocas veces los llevaron.

Incluso ahora aparecen algunos defensores de la competencia electoral.

¡Francamente, esto es increíble!

Y eso muestra un cierto grado de consecuencia, porque la Derecha -o gran parte de ella, por lo menos- está muriendo con las botas puestas en un debate acerca de aquello en lo cual cree firmemente. Y creo que preciso reconocerlo.

Pensé que algunos iban a seguir el camino de Cristián Monckeberg; de Lily Pérez, de Amplitud; de Horvath, quienes claramente comprendieron que este es el fin del binominal. En el nuevo ciclo político del país, había que terminarlo.

A mi juicio, el artículo de que se trata, en particular, es de la mayor importancia para la materialización del cambio.

No se da un salto al vacío: se contempla un mecanismo proporcional, como se ha señalado, que además cumple con los estándares doctrinarios de los sistemas bicamerales en el mundo: el principio de territorialidad en el Senado, con un número no muy diferente de integrantes, entre tres y cinco por circunscripción, y la representación popular en la Cámara de Diputados.

Pero sinceramente no se comprende, de verdad, en especial este último debate, en el que algunos señores Senadores han cuestionado el mayor número de candidatos. La esencia de un sistema electoral es darle mayores alternativas a la ciudadanía, y el cuestionamiento formulado en este rato ha estado marcado por controvertir la cantidad. O sea, "¿Por qué llevan tantos?". Ojalá hubiéramos tenido la posibilidad de que fueran muchos más todavía. El binominal no tiene que ver solo con la cantidad que se elige, sino también con la forma, con el sistema, con el "paraguas" bajo el cual ello se hace.

En definitiva, felicito el esfuerzo de algunos colegas en orden a dilatar la discusión hasta el infinito, casi de una manera escandalosa.

¡Pero quiero anunciarles que el binominal no sale vivo esta noche de la Sala¿!

Voto a favor.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Honorable señor Zaldívar.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

Señor Presidente, en realidad, no iba intervenir y me estaba limitando en el debate, porque considero que todo lo que se está manifestando lo he escuchado ya durante veinticuatro años. Llevamos todo ese tiempo discutiendo sobre el asunto.

Haré una excepción fundamentalmente para levantar un cargo en relación con la Oposición. Porque se ha expresado que no ha hecho propuestas, y realmente creo que ello no es tan efectivo.

En 1989 me tocó participar, al igual que el Senador Allamand, en la negociación de las reformas constitucionales. Llegamos a un acuerdo con el partido Renovación Nacional, presidido entonces por el señor Jarpa, quien fuera después Senador. Y en tales negociaciones -están publicados los acuerdos en los diarios- RN y nosotros, como Concertación, tomamos el compromiso de reformar el sistema binominal una vez instalado el Parlam ento que se iba a elegir ese mismo año.

Pero no se hizo nada.

El señor PROKURICA.-

¡El 2006 planteamos una propuesta propia!

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

No se hizo nada. Se desconoció ese acuerdo, o no se lo recordó, a pesar de que se hicieron varios esfuerzos por tratar de modificar el binominal.

En 1997, mi amigo el Senador Andrés Allamand -se debe acordar porque en ese tiempo era presidente de Renovación Nacional- suscribió en Temuco un documento, en nombre de su partido, oficialmente, en el cual se comprometían a reformar el sistema, cosa que transmitió -yo era miembro de la Cámara Alta- a su bancada. Y recuerdo que Senadores de su propia colectividad le dijeron "No", y desconocieron el acuerdo. Fue algo realmente increíble.

Podríamos haber terminado el debate ahí. Sin embargo, no fue posible.

No voy a contar otras cosas.

Después, sostuvimos negociaciones, como Democracia Cristiana, con Renovación Nacional, presidido ahora por Carlos Larraín, y sacamos algunas aproximaciones para impulsar reformas constitucionales.

¿Qué ha pasado luego?

El Diputado Cristián Monckeberg, hoy presidente del Partido Renovación Nacional, formuló una propuesta -oficial, aprobada por su directiva-, que entregó por escrito al Ministro del Interior, presente ahora en la Sala.

Yo he escuchado, de parte de gente nuestra, que, si la propuesta entregada por Cristián Monckeberg al titular del Interior se hacía efectiva, nosotros estábamos dispuestos a llevarla adelante. Se habría producido un acuerdo que se hubiera aprobado por amplia mayoría y ahora no estaríamos en este debate.

Sin embargo, al igual que en 1990, al igual que en 1997, el señor Allamand, ahora como Senador, y el presidente de su partido no estuvieron dispuestos a hacer efectiva la misma propuesta que habían presentado.

Todo esto, estimados colegas, me recuerda lo que me dijo hace muchos años un Senador cuando, con motivo de que tampoco se cumplían las órdenes de un partido -creo que era el Partido Nacional-, le pregunté que cómo no iban a cumplir los acuerdos. Él me dijo: "Mire, Ministro, donde mandan cardenales no mandan sacristanes".

Bueno, estamos en este debate y creo que hay que aprobar esta reforma. Llevamos 24 años tratando de hacerla. Ojalá que la despachemos con menos palabras y más hechos.

Por eso, voto que sí.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador señor Orpis.

El señor ORPIS.-

Señor Presidente, Honorable Senado, el debate que realizamos respecto de un artículo ha ido generando una discusión más amplia y más profunda sobre la reforma al sistema político.

Creo que la Cámara Alta tiene experiencia en lo que se refiere a errores que se cometen al tomar decisiones políticas, concretamente a propósito del voto voluntario. Este se aprobó por la convicción de que iba a generar más participación, más actividad. Ahora, sin embargo, muchos señores Senadores quieren modificarlo. Yo fui de los que rechazaron, en forma permanente, el voto voluntario.

En este caso, a mi juicio, se está cometiendo un error. Se cuenta con los votos para terminar el sistema binominal. Sin embargo, la gran pregunta siempre fue -pues nunca se planteó en el programa- por cuál se lo reemplazaba. Puede que el binominal haya tenido muchos defectos, pero, en mi concepto, poseía una gran virtud: generaba estabilidad política al aglutinar la participación en grandes alianzas.

Entonces, si la estabilidad política fue determinante para que el país pudiese desarrollarse y aspirar a expectativas distintas, uno hubiese esperado que el binominal fuera sustituido por un sistema equilibrado, moderado, que no generara atomización política, la cual dificulta la gobernabilidad de una nación.

Pienso, sinceramente, que en el Senado se ha perdido toda sensatez, todo equilibro al modificar el sistema político, y creo que el país lo va a pagar muy caro.

He dicho.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador señor Allamand.

El señor ALLAMAND.-

Señor Presidente, la intervención del Honorable señor Zaldívar, quien ha hecho diversas referencias a Renovación Nacional y a mi persona en particular, me obliga a formular unas pequeñas aclaraciones.

En primer lugar, el Senador Zaldívar hace bien al recordar los fructíferos acuerdos que han existido históricamente, en materia de transición política, entre Renovación Nacional y la Democracia Cristiana.

La transición en Chile habría sido muy distinta si, por ejemplo, el 30 de diciembre de 1988 no se hubiera generado una comisión conjunta entre la DC y RN para gatillar un proceso de reformas a la Constitución, las que, entre otras cosas, permitieron una transición a la democracia efectiva, pacífica y, desde mi punto de vista, muy positiva.

Ya habrá oportunidad para referirse a quiénes estaban de acuerdo y a quiénes no lo estaban en cuanto a la forma como debía encauzarse el camino institucional chileno.

Mi amigo el Senador Zaldívar incurre, eso sí, en un error cuando señala que los compromisos de Renovación Nacional en esta materia comprendían el sistema electoral.

El compromiso que Renovación Nacional asumió, que su consejo general aprobó, y que efectivamente no fue cumplido en esta Corporación, fue aquel orientado a eliminar la figura de los Senadores designados.

En ese punto, el Senador Zaldívar tiene razón.

Ciertamente, nadie tiene por qué recordar en detalle las cosas, pero su Señoría se encuentra totalmente equivocado en lo relativo al sistema electoral. El acuerdo de los años 88 y 89 nunca se refirió al sistema electoral; sí a los Senadores designados. Así que en esto último mi colega tiene razón, pero en aquello otro, no.

Sin embargo, la trayectoria de Renovación Nacional en favor de la modificación del sistema binominal es muy clara. Desde hace mucho tiempo que venimos impulsando estas enmiendas. Como me señala el Senador Prokurica, un ejemplo es el trabajo que se realizó el año 2006.

Pero -lo menciono principalmente porque se trata de refutar la crítica que se le hace a Renovación Nacional en cuanto a que no habría cumplido su palabra en lo que atañe al cambio del sistema electoral-, aquí hay un partido que no está cumpliendo la suya en esta materia: la Democracia Cristiana.

Porque resulta que el 12 de marzo del 2014 -hace muy poco- se acordó, entre las directivas de Renovación Nacional y de la DC, un cambio al sistema binominal de las siguientes características: 44 Senadores y 134 Diputados. El documento fue suscrito -repito- por las directivas de ambos partidos, e incluso por parlamentarios que no formaban parte de ninguna de esas dos colectividades.

Este compromiso, suscrito solemnemente en marzo del año pasado, ¿quién no lo ha cumplido?

El señor PIZARRO.-

¡Este es mejor!

El señor ALLAMAND.-

Le ruego al Senador Pizarro que no me interrumpa. Yo nunca lo he interrumpido a él.

El señor PIZARRO.-

¡Pero si no lo he hecho!

El señor ALLAMAND.-

Pregunto: ¿quién dejó sin efecto ese pacto solemne?

¿Por qué se deja sin efecto un acuerdo suscrito por dos directivas, que específicamente señalan que la modificación al sistema electoral consistirá, como contenido, en 134 Diputados y 44 Senadores?

Cuando una fuerza política alcanza un acuerdo, ¿no compromete su honor para darle cumplimiento o al menos hacer todo lo posible para que ello ocurra?

¿Por qué un acuerdo bilateral es unilateralmente dejado sin efecto por una colectividad y reemplazado por otro?

Con todo cariño, le digo a mi amigo el Senador Zaldívar que, en estas materias, para reprochar incumplimientos, hay que tener menos tejado de vidrio. Y, en lo que se refiere a la reforma al sistema binominal -que vamos a discutir durante toda esta noche-, la Democracia Cristiana no ha honrado la palabra empeñada. Si la honrase, estaríamos votando un cambio al sistema electoral binominal para reemplazarlo por otro que contemplara 134 Diputados y 44 Senadores.

Si eso no está ocurriendo, no es porque Renovación Nacional no esté cumpliendo, sino porque la Democracia Cristiana, unilateralmente, dejó sin efecto un compromiso que debió honrar.

He dicho.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador señor Moreira.

El señor MOREIRA.-

Señor Presidente, digan lo que digan, la Nueva Mayoría va a imponer su mayoría y, obviamente, va a imponer el nuevo sistema electoral que aquí se ha analizado y se ha desmenuzado una y otra vez. Independiente del resultado final, que todos sabemos cuál será, y aunque sea a las cinco de la mañana, la Nueva Mayoría, cansada, lo va a terminar aprobando.

Yo solo quiero dejar constancia, en la fundamentación de mi voto, de que no me arrepiento de haber sido electo, durante veinte años, en un distrito de izquierda, por un sistema que muchos no olvidan que, de una u otra forma, ayudó a fortalecer la democracia que hoy día tenemos.

Indudablemente, el sistema binominal cumplió su ciclo. Podemos discutir si debió haber sido cambiado algunos años atrás y habérsele introducido las modificaciones que ahora se plantean. Pero le dio estabilidad democrática a nuestro país. Los Senadores y los Diputados fueron elegidos a través de él. Y es importante no olvidar que fue esa estabilidad, lograda mediante dos coaliciones, la que permitió el desarrollo y el crecimiento de nuestro país. Por eso hoy tenemos una democracia totalmente sólida.

Hubo una proposición de la Alianza, de uno u otro partido. No se concretó. Sin embargo, lo importante es que hoy la mayoría, que nosotros no tenemos, y la incapacidad para haber generado un diálogo fructífero con el Gobierno y con quienes nos están gobernando impidieron que pudiésemos haberle hecho modificaciones.

Por eso, señor Presidente, no hay que olvidar el pasado y sí reivindicar un sistema que le dio -reitero- estabilidad democrática a nuestro país.

De ahí que, consecuente con lo que he dicho, voy a votar que no.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador señor Ignacio Walker.

El señor WALKER (don Ignacio).-

Señor Presidente, solo deseo precisar algunos hechos en aras de la verdad y de la historia.

Yo quiero decir que si algo fue auspicioso en su momento fue el acuerdo formal que suscribimos en enero del año 2012. Las directivas de la Democracia Cristiana y de Renovación Nacional, presidida por el entonces Senador Carlos Larraín, conversaron sobre un nuevo régimen político para Chile, que contemplaba diversas medidas, como descentralización, cambio del régimen político, instauración de la figura del primer ministro o semipresidencialismo, y -abro comillas- "el compromiso de sustituir el actual sistema electoral binominal por uno de representación proporcional moderado o corregido" -cierro comillas-.

Me estoy refiriendo a un acuerdo logrado en enero de 2012 entre las directivas de la Democracia Cristiana y de Renovación Nacional.

Pues bien, señor Presidente, en la tarde de ese día, cuando la prensa recién comenzaba a informar de su existencia, en la noche de ese día y al día siguiente, tal acuerdo fue destruido, aniquilado desde La Moneda, desde la UDI y desde sectores de Renovación Nacional, contradiciendo y quitándoles el piso al Presidente y al resto de la directiva de dicha colectividad, con los cuales lo habíamos suscrito. Destruyeron al Senador Carlos Larraín, desde sus propias filas, en una operación gatillada desde La Moneda.

Por lo tanto, la verdad de los hechos importa.

Segundo, se equivoca el Senador Andrés Allamand -se lo digo, por supuesto, con mucho respeto- cuando señala que el 12 de marzo del 2014 hubo un acuerdo entre las dos directivas. Lo que hubo fue una moción parlamentaria, patrocinada por Senadores de Renovación Nacional, de la Democracia Cristiana, de la Izquierda -los colegas Fulvio Rossi y Eugenio Tuma-, muy transversal 

El señor CHAHUÁN.-

¡Sobre la base del proyecto anterior!

El señor WALKER (don Ignacio).-

¿Me permite continuar, señor Senador? Yo no interrumpí a nadie.

Repito: no fue un acuerdo de las dos directivas, sino una moción parlamentaria transversal, enmarcada -tiene razón en esto el Senador señor Chahuán- en el auspicioso acuerdo alcanzado en enero de 2012, que fue destruido en su momento por el propio sector de la directiva de Renovación Nacional.

Es evidente, entonces, que esa moción parlamentaria tuvo, al menos tácitamente, el respaldo de las dos directivas y de la Nueva Mayoría. Recuerdo que lo conversamos en las reuniones habituales que celebramos en el comedor. Construimos un acuerdo de las bancadas para darle piso a ese inédito consenso para elaborar una moción parlamentaria, con Senadores de Renovación Nacional y de la Nueva Mayoría, con el objeto de poner fin al sistema binominal.

Lo que se le olvida al Senador Allamand -no tiene por qué recordarlo todo; no es una imputación- es que siete meses antes, a mediados del 2013, hubo un intento de presentar una moción parlamentaria por un grupo similar de Senadores, transversal, para poner fin al binominal.

¿Sabe lo que ocurrió, señor Presidente? Lo digo porque la memoria es frágil. Al día siguiente de que se insinuara la presentación de aquella moción, el Presidente de la República en ejercicio, don Sebastián Piñera, en cadena nacional, impidió que ella prosperara. Y eso, digitado desde La Moneda, con la UDI y un sector de Renovación Nacional, en contra de una parte de la directiva encabezada por el Senador Carlos Larraín.

Por lo tanto, en aras de la verdad, del récord histórico, tengo que señalar que los hechos ocurrieron exactamente de la forma como los he mencionado.

Y termino con lo siguiente.

El acuerdo alcanzado por las directivas de la DC y RN en enero del 2012 fue un avance. Y no solo eso, porque yo considero que está plenamente vigente.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Terminó su tiempo, señor Senador.

Le voy a dar un minuto adicional para que concluya su intervención.

El señor WALKER (don Ignacio).-

Gracias.

La moción parlamentaria del 12 de marzo de 2014 fue un avance, pero hoy es casi un lugar común considerar que era insuficiente; tanto, que Renovación Nacional, a través de su Presidente, tal como lo indicó el Senador Zaldívar, presentó hace algunos meses una propuesta por escrito, formal, para la elección de 54 Senadores.

No es que la DC esté incumpliendo un acuerdo. Tanto la Democracia Cristiana como el presidente de RN, el Diputado señor Cristián Monckeberg, consideraron que aquello era insuficiente, al punto de que él mismo le presentó al Ministro del Interior una propuesta para elegir 54 Senadores y 155 Diputados.

He dicho.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

A continuación, 

El señor MONTES.-

¿Qué se está discutiendo, señor Presidente?

El señor LETELIER.-

¡Estamos en la discusión particular!

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Estamos en votación. Y lo que se está haciendo es uso del derecho a fundamentar el voto.

Tiene la palabra el Senador señor Chahuán.

El señor CHAHUÁN.-

Señor Presidente, porque considero necesario hacer un récord histórico, quiero contarles que efectivamente durante tres largos meses las directivas de Renovación Nacional y de la Democracia Cristiana estuvimos negociando un acuerdo. Nos reunimos en nuestras casas, y finalmente logramos llegar a un acuerdo sustantivo para realizar un cambio al régimen político de nuestro país. En él se incluían -como señaló el Senador Ignacio Walker- temas de descentralización; la posibilidad de avanzar en un régimen semipresidencial; el término del sistema electoral binominal por uno de representación proporcional moderado.

Lo que olvida el Senador Ignacio Walker es que, después de ese anuncio de acuerdo, presenté un proyecto de ley al Congreso Nacional con todos y cada uno de sus antecedentes.

Y le quiero recordar al Honorable colega lo siguiente: eran 136 Diputados y 44 Senadores.

Eso fue parte del acuerdo.

Luego, iniciado el mes de marzo, el Senador Tuma pidió que la Comisión de Constitución evaluara la iniciativa presentada por quien habla. Y, finalmente, se trajeron a colación todos los proyectos que estaban en el Parlamento.

Ahora bien, el Senador Tuma solicitó un plazo de 90 días, que el entonces Senador Escalona le concedió.

A partir de aquello comenzaron finalmente a resolverse los puntos en un comparado, en un trabajo auspicioso de la Comisión de Constitución, donde se recibió a especialistas de cada uno de los partidos. Y se avanzó en la materia.

Le quiero pedir a la Democracia Cristiana que cumpla la palabra empeñada, ¡que cumpla la palabra empeñada!

El que se analizó era un tema que decía relación no solamente con un cambio del sistema electoral binominal, con el compromiso de considerar 136 Diputados y 44 Senadores, sino además con avanzar en otras normas, como las que impedían la intervención electoral o las que establecían un límite para la reelección indefinida de Diputados, Senadores, Alcaldes y Concejales.

¡Y, vaya, es un proyecto que está en segundo trámite constitucional en la Comisión de Constitución, y lo único que falta es que el Presidente de la instancia lo ponga en tabla!

¡Pero no lo hace, no lo pone en tabla!

El señor LETELIER.-

¡Reglamento, señor Presidente!

El señor MONTES.-

¡Qué estamos discutiendo!

El señor CHAHUÁN.-

Entonces, quiero manifestar lo siguiente.

Acá no ha habido cumplimiento de la palabra empeñada. Y deseo hacer un llamado a la Democracia Cristiana a actuar en consecuencia.

De ahí que los Senadores de Renovación Nacional resolviéramos poner a disposición de la Sala las indicaciones que revivían el acuerdo de Renovación Nacional con la DC.

¡Vaya, qué pasa! ¡Hoy día la DC no está disponible a respetar ese acuerdo!

Sin embargo, insistimos y logramos presentar un nuevo proyecto de ley con Senadores de la DC y los Senadores Tuma y Rossi. Pero hubo reparos del Senador Tuma, quien intentó retirar su firma.

¡Hagamos recuento efectivo de los hechos, pues! Porque vemos que existen verdades a medias.

Y hay que decirlo como corresponde: ¡hacemos un llamado a la DC a que cumpla con la palabra empeñada!

Finalmente, debo mencionar que eso forma parte de la fe pública. ¡Se ha afectado seriamente la fe pública en este Congreso Nacional!

He dicho.

El señor LETELIER.-

Asunto de Reglamento, señor Presidente.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Estamos en votación, señor Senador. No le puedo conceder la palabra.

El señor LETELIER.-

¡Solo era para señalar que la fundamentación del voto debe apuntar a la materia que se está votando! ¡Es obligación hacerlo!

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Quedan tres oradores inscritos: los Senadores señores Espina, Letelier y Patricio Walker.

Tiene la palabra el Honorable señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señor Presidente, no quiero hacer historia porque creo que el debate ha sido muy ilustrativo. Pero como la historia fidedigna de la ley comprende esta sesión, deseo agregar un antecedente y formular dos consultas.

El antecedente es que nosotros, mediante una reforma constitucional del 15 de febrero del 2014, eliminamos el número "120" de la Carta Fundamental. Y eso se votó, según me lo recuerda la Secretaría, a fines del año 2013 o a comienzos del 2014.

Ahora bien, quiero expresar que al acuerdo suscrito con la Democracia Cristiana le doy un gran valor pues, además, lo firmó el Senador Rossi como jefe de bancada del Partido Socialista. El Senador Tuma adhirió a él en su calidad de jefe de bancada del PPD, y en su momento lo suscribió también el Senador Patricio Walker, quien presidía la Comisión de Constitución.

Dicho documento fue firmado una vez que asumió el Gobierno de la Presidenta Bachelet. No se hizo con anterioridad.

Por lo tanto, cuando se argumenta que nosotros preparamos esta propuesta, que perdió vigencia con el Gobierno de la Nueva Mayoría, no es efectivo, pues se elaboró una vez que ese conglomerado ya estaba gobernando.

Sin embargo, la pregunta que yo les planteo a ustedes es la siguiente: ¿por qué desechar ahora tal propuesta?

No lo logro entender. Escuché decir al Senador Ignacio Walker que esta propuesta estaba vigente. Y la pregunta que formulo es por qué la desechan.

¿Por qué nosotros no votamos por el proyecto de ustedes? Porque se eleva a 155 el número de Diputados de manera absolutamente innecesaria. La nuestra los aumenta a 134. O sea, en vez de 35, considera 14 Diputados. Además -espero que el Ministro del Interior, que ha guardado riguroso silencio, pueda explicarlo-, ¿cómo se va a financiar a 35 Diputados? Si alguien me dice que ello se hará con los mismos recursos que se han utilizado para 120 Diputados, le quiero decir que entonces han sido absolutamente válidas todas las críticas de la opinión pública referidas a que tanto los Diputados como los Senadores han recibido más recursos de los que legítimamente necesitaban.

Por lo demás, no sé cómo se va a financiar hoy día a los 50 Senadores versus los 38 que existen.

Entonces, me gustaría saber -ya que a lo mejor puede haber un espacio de diálogo- por qué no se puede aprobar una propuesta de esta naturaleza. Es más proporcional, ¡más proporcional!, que la contenida en el proyecto del Gobierno. Basta ver todos los estudios técnicos que hicimos en su momento.

La nuestra representa mejor proporcionalidad; no eleva el número de Senadores ni de Diputados. Y si ella está vigente, señor Presidente, lo vamos a ver en el momento en que se vote como indicación en el Senado, en un rato más. Porque, por cierto, se votará como tal.

De otro lado, aprovecho de señalar que todos los argumentos invocados en el sentido de que nosotros queremos mantener el sistema binominal no son verdad, pues tenemos una propuesta presentada.

Por lo tanto, señor Presidente, solo quiero pedir que cuando se vote nuestra propuesta se entreguen los fundamentos de por qué algunos de los que la firmaron la desconocen hoy. Y vamos a esperar a que pueda ser votada.

De esa forma quedará para la historia fidedigna de la ley la expresión y voluntad de cada uno de nosotros.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

El último orador inscrito es el Honorable señor Patricio Walker. Después se suspenderá la sesión por 35 minutos, como máximo, para que los señores Senadores puedan reponerse.

Tiene la palabra Su Señoría.

El señor WALKER (don Patricio).-

Señora Presidenta, me alegro del tono dialogado del Senador Espina. Pero deseo hacer algunas precisiones que me parecen importantes.

Yo no formo parte del acuerdo -por supuesto, soy democratacristiano- que hubo entre las directivas de la DC y de Renovación Nacional el 2012 y que el Presidente de mi partido ha dicho que RN no cumplió. Pero sí lo soy del trabajo que realizamos el 2013 y del compromiso que se suscribió.

Siendo Presidente de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento, los miembros de esa instancia acogimos el mandato de la Sala, a petición del Senador Tuma, de trabajar una propuesta para el binominal.

Después de quince sesiones llegamos a un entendimiento con Renovación Nacional. Por decirlo de otra manera, a un acuerdo con ese partido¿

¡Señora Presidenta, no puedo hablar si me interrumpen! ¡Si hay otros temas más interesantes, que los conversen fuera de la Sala!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Solicito silencio, por favor.

El señor WALKER (don Patricio).-

Renovación Nacional quería llegar a un acuerdo con la Democracia Cristiana, y le respondimos que para nosotros era imposible hacerlo solo, como partido, que teníamos que llevarlo a la Nueva Mayoría para ese efecto. Y así se hizo. Prueba de ello es que en la conferencia de prensa los integrantes de la Comisión de Constitución aparecemos con el Senador Fulvio Rossi, jefe de la bancada socialista; con el Senador Tuma, jefe de la bancada del PPD.

Fue un acuerdo de la Nueva Mayoría.

¿Por qué ocurrió eso? Porque le dijimos a Renovación Nacional que para nosotros no era factible ni viable un acuerdo con ellos sin el apoyo de la Nueva Mayoría.

Y suscribimos el acuerdo.

Presentamos la reforma constitucional para eliminar el guarismo "120", que se atrasó en la Cámara de Diputados al faltar quórum -se rechazó-, y por eso no alcanzó el tiempo para aprobar esa reforma y después ver el proyecto de ley pertinente. Y tampoco se pudo aprobar, pues el Presidente Sebastián Piñera, molesto con el titular del partido, Carlos Larraín, no quiso apoyar esa iniciativa debido a que no se le había consultado; y, además, porque tenía la presión fundamentalmente de la UDI y de parte de Renovación Nacional, que no estaban de acuerdo con el proyecto.

¿Por qué era importante hablar con el Presidente Piñera? Porque era colegislador.

Los cinco integrantes de la Comisión de Constitución fuimos a La Moneda a conversar con él -el Senador Espina lo debe recordar-, y le planteamos la necesidad de que el Gobierno apoyara la iniciativa.

Todos sabemos que la UDI -legítimamente- no era partidaria de ese proyecto. Y el Gobierno no quiso romper los huevos, pagar costos con la UDI, y no lo apoyó, pues no le habían preguntado ni informado, etcétera.

Cuando hablamos con Renovación Nacional -prueba de ello fue el acuerdo con la Nueva Mayoría, no solo con la DC- siempre mencionamos que ese compromiso era fundamentalmente con la Nueva Mayoría, y que era importante aprobarlo. Que si no se acordaba en el Gobierno anterior, por las causas que ya dije, en la próxima Administración se correría un riesgo: que apareciera un nuevo colegislador, que ya no era Sebastián Piñera, sino Michelle Bachelet. Y esta sacó otras mayorías en el Congreso, y dijo: "Sabe que yo quiero algo más ambicioso", legítimamente, porque ellos no eran parte del acuerdo.

Efectivamente, nosotros presentamos un proyecto el 12 de marzo, y no lo niego. Y si el Gobierno de la Presidenta Bachelet hubiera dicho: "Apoyamos esto", nosotros lo habríamos votado a favor, no teníamos ningún problema.

El proyecto que nos llega de la Comisión de Constitución es otro.

¿Qué quiero decir, señora Presidenta? Siempre en las conversaciones con Renovación Nacional -la Nueva Mayoría y Renovación Nacional, porque fue acuerdo de la Nueva Mayoría, de los 20 Senadores- le dijimos que este es un acuerdo con la Nueva Mayoría.

Recuerdo que cuando discutimos la iniciativa relativa al voto de los chilenos en el extranjero, el Senador Hernán Larraín -Senador de Renovación Nacional- reclamó que no estábamos cumpliendo un compromiso sobre el cual él había votado a favor, ya que se le hizo un cambio. ¿Por qué? Porque el Senador de Renovación Nacional de la Comisión de Constitución dijo: "Hay un nuevo Gobierno, que quiere cambiar lo referido a la inscripción elección por elección y, por lo tanto, como hay nuevas circunstancias, nuevo colegislador, se mantiene el espíritu, pero le hicimos una modificación y se vota a favor".

Y el Senador Hernán Larraín dijo. "No se está cumpliendo el compromiso de Renovación Nacional".

Yo defiendo a ese Senador de Renovación Nacional, porque había un nuevo colegislador. Y era legítimo que el nuevo Gobierno dijera: "Quiero un cambio en el proyecto sobre voto de los chilenos en el extranjero".

Entonces, es la misma discusión que estamos desarrollando.

Así como no dudo de la buena fe de ese Senador de Renovación Nacional, que no estaba incumpliendo un compromiso, sino que mantenía su espíritu, nosotros hacemos exactamente lo mismo.

Lo único que tenemos en la vida, señora Presidenta, es el honor. Y, personalmente, nunca he dejado de actuar conforme a él.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

El Senador señor Tuma ha pedido que se le otorgue la palabra, pues fue aludido.

Se la voy a conceder por esa circunstancia, y para que funde su voto, porque después suspenderemos la sesión.

Tiene la palabra el Senador señor Tuma.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Señora Presidenta, quiero expresar que me siento muy orgulloso de haber participado en un proceso en el cual se descongeló un proyecto de reforma constitucional que tenía por finalidad cambiar la cantidad de 120 Diputados.

En gran medida estamos donde estamos gracias a que este Congreso modificó ese guarismo.

Después, en mi calidad, en ese entonces, de jefe de la bancada del PPD, firmé un acuerdo en el que participó la Nueva Mayoría para viabilizar el cambio del sistema binominal, y también me siento muy orgulloso de eso.

Pero suscribo absolutamente lo que plantearon los Senadores Ignacio y Patricio Walker respecto a la historia de este proceso y a las razones de por qué ahora tenemos un proyecto distinto.

Quiero decir con franqueza que estamos aprobando esta iniciativa gracias, además de la Nueva Mayoría, a tres Senadores independientes: la Senadora Lily Pérez, de Amplitud, y los Senadores Bianchi y Horvath. Si no fuera por ellos, no tendríamos los votos necesarios para hacer esta transformación.

Y deseo agregar que en todos los alegatos mi amigo el Senador Chahuán y su bancada, y con mayor razón la UDI, no han querido apoyar este proyecto. Y no lo van a hacer. Ya se quedaron afuera, bajo la mesa respecto de esta transformación histórica que realiza el Parlamento.

En consecuencia, con todo lo que significa el orgullo de participar en la Nueva Mayoría, más los Senadores independientes que han apoyado esta transformación, quiero aplaudir a los ciudadanos que se encuentran esperanzados en que efectivamente la mayoría que constituimos para realizar esta transformación haga realidad las otras que los ciudadanos anhelan. Porque esto va a gatillar que más adelante tengamos otras transformaciones que satisfagan las aspiraciones de los ciudadanos en materia de educación, en materia de salud, en materia de AFP, en materia de concentración del mercado, en materia de cambiar el modelo de mercado en uno también de Derecho, en materia de reforma laboral.

Es decir, tenemos un conjunto muy grande de demandas ciudadanas que dependen de que seamos capaces de transformar este sistema electoral.

Así que, señora Presidenta, estoy muy muy orgulloso de pertenecer a esta coalición y a una mayoría dispuesta a transformar a Chile y al sistema electoral ilegítimo que no hemos sido capaces de cambiar durante 25 años.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Prokurica.

El señor PROKURICA.-

Señora Presidenta, como hemos sido actores de lo ocurrido con los cambios al binominal, no puedo dejar de mencionar los esfuerzos que mi partido Renovación Nacional ha hecho en esta materia.

A algunos que han intervenido anteriormente se les olvida que el año 2006, en el marco de una Comisión que me tocó presidir, le llevamos a la Presidenta Bachelet una proposición para modificar el sistema binominal.

Lo que pasa es que cuando aquí se hacen precisiones se olvida que tanto en la propuesta de Renovación Nacional del 2006, como en el acuerdo con la Democracia Cristiana -en esto contradigo al Senador Patricio Walker, con quien siempre coincido-, el pacto fue RN-DC, no RN-Concertación. El proyecto de ley que se presentó fue de autoría RN-DC y Concertación.

Nunca me junté, estimado Senador -yo presidía esa Comisión- con Carlos Larraín o con alguien que no fuera de la Democracia Cristiana, ¡nunca!

Siempre estuve con usted, con el Presidente del partido, con el Senador Zaldívar, con el Senador Gutenberg Martínez, y con la directiva de Renovación Nacional. Y nunca esta directiva, como alguien planteó aquí -no usted- le sacó el piso a ese acuerdo. Este fue de la directiva y creo que de buena fe. La única diferencia con este proyecto, que hoy día algunos llaman "histórico", es que modifica el sistema binominal, pero no contiene ninguna de las aspiraciones de la gente en general con respecto a la modificación al binominal.

No está en ninguna parte la limitación a la reelección de los parlamentarios.

Les digo una cosa: salgan a la calle y pregúntenle a la gente quién quiere aumento de parlamentarios.

¿Este es un acuerdo histórico? ¡Por favor!

Será histórica la repulsa de la opinión pública cuando vea que con el voto de ustedes, de la Nueva Mayoría y de algunos independientes, se aumenta su número en el equivalente a otra Cámara. Aquí se incrementa, entre la Cámara de Diputados y el Senado, en otra rama legislativa.

Y, además, se dice que ello no implicará gasto, ¡por favor, quién puede creer que no habrá más gasto!

En segundo lugar, se aumenta en forma desconsiderada e innecesaria el número de parlamentarios con un solo objetivo: obtener su voto. ¿Por qué? Porque en el redistritaje lo que va a hacer este proyecto de ley es que ese parlamentario salga con la mitad de los votos que sacó en la elección pasada. ¡Así de simple!

¡Y dónde hay una palabra, señora Presidenta, acerca de la intervención electoral! ¡En ninguna parte!

¡En dónde hay una palabra sobre regionalización! ¡En ninguna parte!

¡En dónde hay una palabra respecto de gobernabilidad! ¡En ninguna parte!

Les digo una cosa: este proyecto de ley adolece de una serie de elementos que le van generar al país un problema muy serio.

Un error es establecer que se podrán crear partidos políticos con la firma de un número de personas equivalente al menos al 0,25 por ciento de los votos emitidos en la última elección de Diputados. Como nuestro sistema es de voto voluntario, adelanto que van a surgir partidos como callampas; más aún, si se ven incentivados con financiamiento estatal.

¡Habrá una fila de interesados tratando de constituir partidos políticos para optar a esos beneficios! Así lo han consignado los medios de comunicación.

Sinceramente, a todos los que aspiran a ser candidatos presidenciales -veo en la Sala a algunos-, les sugiero que piensen: si en la actualidad resulta difícil alcanzar acuerdos entre dos bloques políticos, ¡imaginen como será habiendo 30 o 35 partidos operando!

No sé si han calculado eso.

Este no es un problema que perjudique a la Derecha, a la Izquierda o al Centro, sino que afecta gravemente la gobernabilidad del país. Por esta situación atraviesan todas las democracias con multipartidismo.

Lo logrado en Chile durante los últimos 30 años se debió a que tuvimos un sistema ordenado, gracias al cual los Presidentes de la República pudieron sacar adelante sus proyectos.

La presente iniciativa no mejora la gobernabilidad: ¡la empeora considerablemente!

En esta materia no ganan ni las regiones, ni los electores, ni la gente que quería terminar con el binominal.

Les hago una apuesta: considerando que con el binominal sufragaba el 30 a 35 por ciento del electorado, estoy seguro de que con el nuevo sistema la participación será aún más baja.

Y hoy en todas las encuestas el Parlamento figura último, porque¿

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Lo siento, señor Senador, pero terminó su tiempo.

El señor PROKURICA.-

Deme unos segundos y termino.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Denante no otorgué minutos adicionales al Senador señor Patricio Walker. No me parece justo hacerlo ahora.

Todos han tenido cinco minutos para fundamentar el voto.

Lo lamento mucho, pero debo ser justa.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba el numeral 2) del artículo 1° del proyecto (23 votos a favor y 14 en contra), dejándose constancia de que se cumplió el quórum constitucional requerido.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa la señora Von Baer y los señores Allamand, Bianchi, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín, Moreira, Orpis, Ossandón, Pérez Varela y Prokurica.

La señora ALLENDE ( Presidenta).-

Se suspende la sesión.

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--Se suspendió a las 21: 37.

--Se reanudó a las 22:15.

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La señora ALLENDE (Presidenta).-

Continúa la sesión.

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Señoras y señores Senadores, ruego dirigirse a la página 6 del informe comparado, donde se encuentra el número 3), que modifica el artículo 10 de la normativa vigente.

El texto aprobado en general por el Senado dice: "Reemplázase, en el artículo 10, el guarismo `0,5' por `0,25'.".

Por su parte, la Comisión de Constitución, por tres votos a favor (Senadores señores Espina, Harboe y Hernán Larraín), un voto en contra (Senador señor Araya) y una abstención (Senador señor De Urresti), propone eliminar el citado numeral.

Dicha supresión no necesita quórum especial para ser aprobada. En caso de que se rechace, corresponderá votar el texto acordado en general por el Senado, el cual se acogerá si se consigue el voto conforme de las tres quintas partes de los señores Senadores en ejercicio.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En discusión.

Tiene la palabra el Honorable señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, solo deseo explicar esta norma.

La Cámara de Diputados acordó disminuir el umbral de firmas requeridas para levantar candidaturas independientes a Senadores y Diputados. De igual modo fue aprobado en general en el Senado.

La Comisión de Constitución consideró necesario mantener el actual porcentaje de 0,5 por ciento. Y eso es lo que propone a la Sala.

Por esa razón, solicito no cambiar el artículo 10 vigente, que establece un mínimo de 0,5 por ciento de firmas para presentar candidaturas independientes.

He dicho.

El señor MONTES.-

Muy bien. Votemos.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

Señor Secretario, explique cómo se debe votar.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La señora Presidenta puso en votación la enmienda de la Comisión para suprimir el número 3) del artículo 1º, aprobado en general por el Senado.

Quienes estén de acuerdo con la eliminación aludida votan que sí y quienes están en desacuerdo, que no.

El señor LETELIER.-

¿Vamos a votar la supresión, señora Presidenta?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Sí, señor Senador.

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma, para fundar el voto.

--(Durante la votación).

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, quiero explicar por qué voy a votar a favor de lo que propone el órgano técnico, que no es otra cosa que mantener la norma vigente.

A mi juicio, la Cámara de Diputados se equivoca al querer cambia este criterio.

Considero que apunta en sentido correcto el planteamiento de dejar el mínimo, para patrocinar una candidatura independiente a Diputados o Senadores, en 0,5 por ciento de los que hubieren sufragado en el distrito o circunscripción, respectivamente.

Más allá de cualquier otra consideración y sin prejuicio de los debates que vendrán más adelante, obviamente este pronunciamiento refleja un espíritu constructivo, como siempre ha sido.

Voto a favor.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Navarro.

El señor NAVARRO.-

Señora Presidenta, cabe consignar que el artículo 10 de la ley habla del 0,5 por ciento de "los que hubieren sufragado". No se trata del total del universo electoral, sino solo de quienes votaron. Y en este ámbito la tendencia es a la baja.

Quiero llamar la atención sobre lo siguiente: si se mantiene la disposición relativa al 0,5 por ciento de los que han sufragado para inscribir candidaturas independientes a Senadores o Diputados y, a su vez, se acoge la enmienda que viene más adelante que fija en 0,25 por ciento el piso para la creación de un partido político regional, se producirá una contradicción. En efecto, será más exigente, más difícil, presentarse como independiente a una elección parlamentaria que crear un partido político.

Eso no tiene coherencia. Al independiente se le exige el doble.

Respecto de la norma que plantea el 0,25 por ciento para formar un partido político -a mí no me gusta-, hemos advertido en la Sala -y lo hemos conversado con el Gobierno- lo que sucederá si se aprueba.

La situación que se abre es trágica para la política. Pero es parte del acuerdo adoptado, razón por la cual voy a respetarlo. Sin embargo, debo hacer la advertencia.

La contradicción entre ambas disposiciones no soporta ningún análisis: para inscribir una candidatura independiente a Senador o Diputado se exige el doble que para constituir un partido regional. Esto va a llevar a que todos los independientes se interesen en crear una colectividad política, y se va a generar un efecto multiplicador inadecuado.

Esa es mi crítica a la propuesta de fijar en 0,25 por ciento el umbral para constituir partidos.

¡No hay dónde perderse! Es más, un independiente con capacidad de inscripción suficiente (0,5 por ciento) podrá crear hasta dos partidos (0,25 por ciento).

Entonces, se plantea un sistema perverso para crear partidos políticos instrumentales y no de contenido, no de fuerza ideológica, no de representación.

Algunas personas han dicho que quienes apoyan la Asamblea Constituyente fuman opio. Yo no fumo opio y creo en la Asamblea Constituyente.

No me parece bueno que se introduzcan cambios de tal naturaleza a la base institucional de la tradición democrática del país, cuya sustancia son los partidos políticos. A pesar de que estos cuentan con un 9, 10 u 11 por ciento de aprobación ciudadana, lo que equivale al 89 por ciento de rechazo, subsisten y sobreviven porque se insertan en la base fundamental de la estructura institucional. No se puede concebir una democracia, en la Constitución de 1980 o en cualquiera otra, sin los partidos.

Sin embargo, con esta propuesta estamos dinamitando las bases de la constitución, mantención y estructuración de las colectividades políticas.

Si a la enmienda que nos ocupa le sumamos la norma del 0,25 por ciento para formar partidos políticos regionales, entonces tenemos un coctel peligroso. Vamos a terminar estableciendo una legislación donde el remedio (un nuevo sistema electoral) va a ser más grave que la enfermedad (el sistema binominal).

En consecuencia, aunque el acuerdo es no aumentar el debate, sugiero al Presidente de la Comisión buscar una solución. Si no, cuando se produzca el debate ciudadano, se dará una crítica cruel y feroz contra el Parlamento.

Siento que la contradicción descrita es insalvable.

Luego analizaremos la disposición referida al 0,25 por ciento para crear partidos políticos de carácter regional.

El Gobierno nos ha pedido que votemos en pos del acuerdo, aun cuando tengamos diferencias profundas sobre el particular. Pero, en esta ocasión, lo relativo a los independientes es insoslayable. ¡No es posible que la exigencia para inscribir una candidatura independiente sea el doble que para constituir un partido!

El porcentaje sugerido para la creación de una colectividad política de índole regional agravará de manera infinita la situación.

En todo caso, en esta situación no sé cuál es el acuerdo. Lo voy a consultar con el Gobierno y con la Nueva Mayoría. Porque una cosa es concordar sobre un asunto de fondo, cual es lo concerniente a la constitución de partidos políticos, pero otra distinta es este hecho, que termina de desvirtuar total y absolutamente el artículo que viene más adelante.

Hago esta advertencia con mucha responsabilidad, señora Presidenta.

¡Patagonia sin represas!

¡Nueva Constitución, ahora!

¡No más AFP!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, seré muy breve, para no dilatar.

Lo que ha expresado el Senador Navarro -creo que tiene razón- se arregla de una manera distinta.

Me parece que rebajar el umbral para la constitución de partidos al 0,25 es un profundo error.

El señor WALKER (don Patricio).-

Pero esta no es la norma.

El señor ESPINA.-

Lo sé.

El Senador Navarro plantea por qué hay una diferencia entre las firmas que se requieren para presentar una candidatura a Senador o Diputado siendo independiente y las exigencias para constituir un partido político, pues quienes integran una colectividad pueden presentarse sin ninguna firma como candidatos a parlamentarios. El colega Navarro hace presente que el militante de un partido puede ser candidato dentro de una entidad a la que se le rebajó a 0,25 la exigencia para formarse, mientras que en el caso de un independiente se mantiene en 0,5.

Lo que corresponde es acoger la propuesta que la Comisión de Constitución aprobó unánimemente, pero discutir en su momento el mérito de aquella que rebaja la exigencia para la constitución de partidos a 0,25, que considero un profundo error. Porque con ese porcentaje formar un partido en Tarapacá requiere 215 firmas; en Atacama, 248; en Los Ríos, 400. Eso es lo que se planteó en el debate sobre esa norma.

Entonces, soy partidario de mantener este porcentaje, el 0,5, que me parece razonable, y cuando analicemos la constitución de los partidos volver a la norma actual, que establece el 0,5, que es una exigencia bastante pequeña para formar un partido político.

Por esa razón, voto a favor.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Allamand.

El señor ALLAMAND.-

Señora Presidenta, en una intervención anterior hice presente respetuosamente el efecto que tenía la degradación del debate parlamentario precisamente por la aplicación en forma del todo irreflexiva de los criterios de mayoría, que conducen, por una parte, a que algunos señores Senadores menosprecien la opinión de la Oposición, a la que se le atribuye solo el carácter de comentarista; y por otra, a que en las filas de la propia mayoría la deliberación termine por desaparecer, con un extremo preocupante para el proceso legislativo.

El Honorable señor Navarro ha formulado una completa argumentación que hasta ahora absolutamente nadie en esta Sala ha controvertido¿

El señor DE URRESTI.-

Se hizo en la Comisión.

El señor ALLAMAND.-

ni mucho menos lo ha hecho el representante del Gobierno, el señor Ministro del Interior, que ha estado presente en forma no particularmente locuaz durante toda esta sesión.

El Senador Navarro planteó que esta es una norma aberrante, incoherente, absurda, que no es consistente y que tendrá gravísimos efectos, pero acto seguido señaló que la votará a favor. En verdad, señora Presidenta, esta es la incongruencia máxima. ¿Cómo se puede argumentar que una disposición es aberrante, incongruente, injustificada y acto seguido sostener que se va a votar a favor de ella?

El señor WALKER (don Ignacio).-

¡La vida es dura!

El señor GIRARDI.-

¡No conoce a Navarro!

El señor ALLAMAND.-

Esto solo se explica simplemente como otra expresión de la aplanadora legislativa, que esta vez aplasta no solo a la Oposición, sino que al criterio de sus propios partidarios.

Me encantaría escuchar una sola opinión de algún representante del Gobierno de la Nueva Mayoría que refute los argumentos mencionados por el Senador Navarro. Porque cómo vamos a dejar establecido que en una Corporación con una más que centenaria tradición de racionalidad y respetabilidad se admita que las normas incongruentes, aberrantes, incorrectas deben votarse a favor. Esta es una forma de degradar la política, el debate parlamentario. Esta es una manera absurda de conducir el proceso legislativo.

En consecuencia, modestamente llamo a un mínimo de racionalidad. Cuando alguien sostiene que una norma es aberrante, absurda, incorrecta, equivocada, lo coherente es que vote en contra. Y si el que propicia la norma es el Gobierno, lo coherente es que este explique en qué está equivocado el Senador NavarroDe lo contrario, continuamos degradando el proceso legislativo. ¿O alguien considera que es correcto lo que se va a hacer en pocos minutos más?

Hago presente esto simplemente como un intento más para que vuelva al debate legislativo la racionalidad que ha caracterizado al Senado desde siempre.

El señor PIZARRO.-

¡Pido que se suspenda la sesión para reflexionar¿!

La señora MUÑOZ.-

¡Nos dejó pensando¿!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra la Senadora señora Von Baer.

La señora VON BAER.-

Señora Presidenta, el Senador Navarro dijo: "Va a ser peor el remedio que la enfermedad".

Creo que el problema de la legislación que estamos discutiendo hoy día es que no es el remedio para la enfermedad. Producirá otra enfermedad, que el mismo Senador Navarro mencionó: una proliferación de partidos políticos. Eso es correcto. Y ello generará problemas de gobernabilidad, lo que resulta especialmente grave en un sistema presidencial. Porque los sistemas parlamentarios son mucho más flexibles, y cuando se pierde la mayoría, el Primer Ministro cae y se elige otro. En los sistemas presidenciales, cuando no existe la posibilidad de flexibilizar las coaliciones, es mucho más complejo el proceso legislativo. Por eso en general funcionan mal los sistemas presidenciales con los sistemas proporcionales de elección.

Pero eso es más grave aun cuando una norma rebaja la cantidad de firmas que se requieren para formar un partido político. Porque no solo se abren los cupos, sino que adicionalmente se hace más fácil constituir una colectividad política. Y, además, vamos a entregar financiamiento público para los partidos.

Entonces, habrá efectivamente un incentivo muy fuerte para formar partidos políticos.

Y, en verdad, es bastante raro que la cantidad de firmas exigidas para que un independiente se presente sea mayor que las que se necesitan para formar una colectividad política.

Esto es algo muy raro, como otras cosas de la ley en proyecto: que solucionemos el problema de las cuotas limitando las primarias; que aumentemos la cantidad de candidatos por lista, aunque estamos en un sistema más proporcional. En fin, son rarezas de esta iniciativa.

Y lo anterior se debe a que nos encontramos ante un proyecto que no tiene una lógica. Lo que hace es arreglar un problema con un sector para tener los votos aquí; arreglar otro problema con otro sector para tener los votos acá, y arreglar un tercer problema para tener los votos con otro sector allá. Y esto termina en lo que se llama un "patchwork", como esas tapas que se ponen arriba de la cama, que son un pegoteo de distintas cosas.

Este proyecto no tiene coherencia.

El señor PIZARRO.-

¿Cómo se llama?

La señora VON BAER.-

Es un patchwork: usted saca un pedacito de una parte y lo junta con uno de otro lado -es lo mismo que hace este proyecto- y hace una colcha al final. Es como una pegatina, una melcocha, un collage. Eso hace esta iniciativa. Y la razón radica en que el Ministro del Interior tuvo que ir a buscar un voto aquí, y debió conceder una cosa aquí; después tuvo que ir a buscar un voto allá, y debió entregar otra cosa acá. Entonces, le quedó un proyecto que es una mezcolanza, porque hace distintos tipos de concesiones.

El problema es que este es el sistema electoral que generará efectos sobre nuestro sistema político. Y, dado este collage que tuvo que hacer el Ministro del Interior, los efectos serán contradictorios.

En tal sentido, yo creo que el remedio no solo será peor que la enfermedad, sino que generará una enfermedad distinta, adicional, a nuestro sistema político, que se manifestará, entre otras cosas, en la proliferación de partidos políticos. Por lo tanto, para los futuros Presidentes será más complejo.

Y yo en eso -es raro- coincido con el Senador Navarro. Pero, la verdad es que, Senador Navarro -por su intermedio, señora Presidenta-, a nosotros no nos van a preguntar después: les van a preguntar a ustedes.

Les van a preguntar por qué aumentaron la cantidad de parlamentarios.

Les van a preguntar por qué no se solucionan los problemas reales del binominal, como la competencia, como que no ganan los que tienen más votos.

Y les van a preguntar también por qué es más fácil formar un partido político que inscribir una candidatura independiente, lo que es muy raro.

A nosotros no nos van a preguntar, porque nosotros no estamos votando a favor de estas cosas.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Bianchi.

El señor BIANCHI.-

Señora Presidenta, en todo este largo debate hemos venido sosteniendo que el país tenía que observar qué había detrás de este cambio al binominal.

Y recuerdo que voté a favor de la idea de legislar, porque creo absolutamente necesario reemplazarlo por otro.

Pero ¿por qué sistema?

Entonces, dijimos que se le colocaba una lápida al mundo independiente, a las mujeres y hombres que no quieren estar dentro de un partido político, sino llevar su candidatura por cuenta propia.

Y este Congreso tiene parlamentarias o parlamentarios que poseen esa condición: de completa y absoluta independencia.

Independencia, señora Presidenta -y esto es bueno que quienes pueden estar presenciando esta sesión lo escuchen y ojalá lo comenten-, que es distinta a tener que recibir la instrucción de un Gobierno para saber cómo votar.

¡Aunque uno piense lo contrario, primero le pregunta al Gobierno si tiene permiso para votarlo de la forma como su conciencia le dicta!

Entonces, señora Presidenta, se quiere eliminar algo que hoy día se manifiesta en personas como yo y otras, que -aunque le dé risa a algún parlamentario- existimos, estamos y hemos sido respetuosos de los procesos democráticos de nuestro país.

Hemos tratado de contribuir de manera seria, responsable.

Tanto es así, señora Presidenta, que al darnos cuenta de que esta iniciativa efectivamente elimina al mundo independiente, nos estamos exigiendo al máximo para crear un partido que a lo menos se obligue a estar en tres regiones contiguas -¡a lo menos!-, y cumpliendo con el 0,5 por ciento que establece hoy día la ley.

Ahora se quiere reducir a 0,25 por ciento el requisito para crear partidos regionales.

Yo no puedo estar más de acuerdo en que se creen estructuras regionales para el fortalecimiento de la democracia. Se exige el 0,25. En el caso de Aisén, Coihaique, van a ser 98, creo¿

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

90.

El señor BIANCHI.-

90 personas las que van a poder conformar un partido político.

Yo me estoy obligando a hacerlo con el doble de las votaciones en tres regiones contiguas, porque creo que tenemos que fortalecer nuestra democracia.

Pero eso no es lo más grave.

Hoy día el país tiene que entender que para quienes somos independientes la situación se complica. Porque el artículo 10 señala: "Las candidaturas independientes a Diputados o Senadores requerirán del patrocinio de un número de ciudadanos igual o superior al 0,5".

¡Pero a las personas que creen un partido regional les van a exigir la mitad: el 0,25!

Yo sé que esto puede no ser del agrado de muchas personas que ven esta intervención probablemente como algo muy lejano, porque tienen una lógica partidaria distinta. Y lo respeto. Pero está la Constitución, señora Presidenta. ¡La Constitución que todos hemos jurado respetar! Y ella, en su artículo 18, establece claramente la igualdad entre partidos políticos y personas independientes. ¿Y qué dice el artículo 10 propuesto aquí?: para el independiente, el doble de castigo; para el partido, la mitad.

Entonces, ¡cómo se entiende esto, señora Presidenta!

Solamente se explica por el deseo de eliminar a quienes estamos en la condición de absoluta independencia.

Voten en conciencia, voten cómo quieran, pero hoy día este articulado lo que hace es eliminar de raíz a los independientes. Nos está obligando al doble. ¡Al doble, señora Presidenta!

Los colegas, las colegas, ¿pueden entender que esto tenga algo de lógica?

¡Ninguna! Salvo terminar con el mundo independiente.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Hernán Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, yo a veces tengo diferencias con el Senador Bianchi, porque en su fuerte ensalzamiento de los independientes quizá se olvida de lo que significa trabajar en grupo, en equipo, hacer partido y, sobre esa base, sostener un sistema democrático.

Los sistemas democráticos no se sustentan en los independientes: se sustentan en los partidos políticos.

Y a muchos de nosotros, que tenemos a lo mejor un alma más personalista, más independiente, nos cuesta a veces estar en los partidos políticos. Pero creo que anteponer los intereses de grupo por un proyecto común es lo que los justifica y dignifica.

Con todo, a Dios gracias en este país no existen las órdenes de partido y se puede votar con independencia. Y yo, cada vez que puedo, ejerzo mi independencia, si lo estimo necesario, porque las prioridades las tengo claras.

Sin embargo, hecha esta diferenciación, yo creo que en algo tiene razón el Senador Bianchi: no es coherente que exijamos el 0,5 para inscribirse como candidato independiente y el 0,25 para constituir un partido.

Eso me parece inconstitucional, porque la Carta establece las mismas garantías para lograr mantener un equilibrio entre los independientes y los partidos políticos.

Ello no obstante, difiero de él en que donde debemos exigir más es en los otros aspectos: para inscribir un partido debe pedirse el 0,5 por ciento y para mantenerlo vigente después de una elección tiene que exigirse el 5 por ciento.

A mí me parece que nosotros no podemos bajar los estándares, porque eso significa fomentar la partitocracia. Y esta última, donde se ha establecido, amenaza la gobernabilidad de los países y su estabilidad institucional.

No es conveniente ese sistema.

En consecuencia, nosotros vamos a votar a favor de la proposición de la Comisión, y buscaremos que en aquellas disposiciones en que se han reducido los estándares, ello se corrija, de manera que la exigencia para constituir un partido se mantenga en 0,5 y aquella para la existencia de un partido luego de una elección, sea, a lo menos, de 5 por ciento, porque eso es lo que les da solidez institucional a las colectividades políticas.

Ya hemos comentado que aquí se están abriendo muchas puertas para que se multiplique la creación de partidos. Pero tengamos cuidado, porque eso al final no es ningún buen negocio para el país ni para el orden democrático.

En consecuencia, tenemos que revertir lo que viene en el proyecto: la facilidad para crear partidos. Porque no se trata de hacerlo imposible, de impedir la renovación o la emergencia de nuevas inquietudes.

Ello está ocurriendo en España, por ejemplo, con la nueva agrupación Podemos, que ha irrumpido con mucha fuerza porque los partidos no supieron darse cuenta de los cambios que venían. Y eso ha hecho que un grupo haya logrado instalar un partido y que en las encuestas se anuncie con un gran respaldo e, incluso, con un gran favoritismo.

Bueno, eso es algo que nosotros también tenemos que leer. Debemos entender que, si no nos hacemos cargo de los problemas que enfrentamos, algo así nos puede ocurrir.

Pero no fomentemos el partidismo excesivo, porque daña al final a la democracia.

Hagamos instituciones sólidas. Y cuando hay fuerza para algo nuevo, bueno, ello surgirá, así no lo quieran los partidos tradicionales.

Por eso, votamos a favor.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba la supresión del número 3) despachado en general por el Senado (31 votos a favor, 1 en contra y una abstención).

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz, Lily Pérez y Von Baer y los señores Allamand, Araya, Chahuán, Coloma, De Urresti, Espina, García, García-Huidobro, Girardi, Harboe, Horvath, Lagos, Hernán Larraín, Letelier, Matta, Montes, Orpis, Pizarro, Prokurica, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votó por la negativa el señor Bianchi.

Se abstuvo el señor Guillier.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Lo recién acordado significa, señor Secretario, que se mantiene el artículo 10 de la ley vigente.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Así es, señora Presidenta.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

En la página 7 del comparado figura el número 4) del artículo único.

Para aprobar la disposición pertinente se requieren tres quintos de los Senadores en ejercicio.

Aquí no hay modificaciones de la Comisión.

Primero deben votarse el encabezamiento y la letra a) de ese artículo.

Después, separadamente, hay indicaciones renovadas: las números 17 y 18 y 19 y 20. La 21 ya se votó.

Eso, hasta llegar a la página 9.

De consiguiente, en primer lugar -reitero- hay que pronunciarse sobre el encabezamiento y la letra a) de la disposición.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Por favor, señor Secretario, explique brevemente cómo debe votarse.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Se pidió votar en forma separada cada una de estas disposiciones. Por eso señalé que en primer término había que pronunciarse sobre el encabezamiento y la letra a): páginas 7 y comienzo de la 8.

El quórum de aprobación es de tres quintos de los Senadores en ejercicio.

Después viene la letra b). Mediante las indicaciones 17 y 18 se pide eliminar su segunda oración -página 8-: desde donde dice "El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar" hasta "inciso quinto de dicho artículo.".

Luego vienen las indicaciones renovadas números 19 y 20 (página 9), que tienen por objeto suprimir la frase final (página 9) "con el fin de ajustarse al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso quinto del artículo 3° bis, ya sea retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas.".

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Gracias, señor Secretario.

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, le propongo a la Mesa, y por su intermedio a la Sala, que el encabezamiento del artículo 17, numeral 4), y la letra a), que en la Comisión no fueron objeto de indicaciones ni de modificaciones, sean aprobados, toda vez que se trata del mismo texto que el Senado aprobó en general.

El señor COLOMA.-

Sí hubo indicaciones.

El señor LARRAÍN.-

Se presentaron cuatro.

El señor HARBOE.-

En el encabezamiento del artículo 17 no existen modificaciones. La indicación número 17...

El señor LARRAÍN.-

Nuestras indicaciones fueron rechazadas, y por eso las renovamos.

El señor HARBOE.-

... dice relación con la letra b).

Por eso yo proponía aprobar el encabezamiento y la letra a), que no fueron objeto de indicaciones ni de enmiendas.

La indicación renovada se relaciona con la letra b).

Por ello, sugiero que las dos primeras las demos por aprobadas, si les parece, porque se trata del mismo texto que el Senado aprobó en general.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Sí: la Mesa acogería aquello en la medida que no existieran indicaciones renovadas.

Entonces, el encabezamiento y la letra a) podrían resolverse en una sola votación.

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

En verdad, señora Presidenta, este artículo deberíamos aprobarlo entero como está, porque no tiene ningún sentido debatirlo.

Yo no veo problema en que discutamos las propuestas del sistema electoral y todo lo que quieran. Pero aquí hay una cuestión de coherencia.

Ya se aceptaron las cuotas.

Nosotros suscribimos muchas indicaciones -algunas nuestras y otras del Senador Coloma y otro colega- a los fines de reunir las diez firmas requeridas para su renovación.

Pero si queremos ser coherentes y despachar un proyecto con un mínimo de conexión, ¡cómo vamos a rechazar una norma que establece cuotas habiendo aprobado ya la existencia de estas!

En nuestro trabajo, que es serio, podemos tener diferencias de fondo, pero no respecto de cómo debemos votar para despachar un texto coherente.

Por lo tanto, este artículo 17 debe aprobarse íntegramente como viene de la Comisión. Si no, la desconexión va a ser total.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Me parece muy razonable su planteamiento, señor Senador.

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, nosotros presentamos nuestra indicación antes de conocer el resultado anterior.

No pretendo generar un debate -ello no tiene mucho sentido-, pero sí a lo menos quiero dejar constancia de que me parece coherente, ya que he estado en contra de las disposiciones pertinentes, votar también negativamente en esta ocasión, aunque no tengo ninguna esperanza de derrotar al oficialismo en esta materia.

La otra fórmula es simplemente -resulta más económico- repetir la votación atinente a las cuotas, lo que nos evitaría un conflicto.

Pero no quiero aparecer aprobando por unanimidad algo respecto de lo cual conceptualmente tengo una legítima discrepancia.

Si quieren hacerlo más fácil, no veo inconveniente en proceder como lo planteó el Senador Harboe: se puede repetir la votación, entendiendo que es parte del otro escenario.

El señor LARRAÍN.-

"Si le parece", señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

No hay problema. Pero debería hacerse una sola votación.

Tiene la palabra el Honorable señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, los Senadores Espina y Coloma sugirieron que el artículo que nos ocupa se dé por aprobado íntegramente con la misma votación con que se sancionó la "ley de cuotas". De este modo queda consignada la oposición manifestada por aquellos a quienes no les parece adecuada la redacción sugerida, que en todo caso es absolutamente coherente.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Conforme. Pero se puede hacer una sola votación, pronunciándose a favor o en contra.

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Solo debo aclarar que eso incluiría la modificación que la Comisión hace en el inciso tercero, la cual se consigna en la página 9.

El señor HARBOE.-

Por cierto.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Porque está dentro del artículo.

O sea, si se quiere hacer una sola votación, tiene que incluirse aquello. De lo contrario, deberá votarse separadamente la modificación.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Debemos hacer una sola votación, como lo propuso la Mesa.

Tiene la palabra el Senador señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, en realidad, son dos situaciones distintas: el encabezamiento y la letra a).

Eso yo lo daría aprobado por unanimidad.

En cuanto a la letra b), se puede votar o repetir la votación de lo relativo a las cuotas. Porque ese literal se refiere a las cuotas.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Vamos a votar el encabezamiento y la letra a).

El quórum de aprobación es de 23 votos.

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueban el encabezamiento y la letra a) del artículo 17 (29 votos a favor y 3 en contra).

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Allamand, Araya, Chahuán, De Urresti, Espina, García, Girardi, Guillier , Harboe, Horvath, Lagos, Hernán Larraín, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Prokurica, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron en contra los señores Coloma, García-Huidobro y Orpis.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Las indicaciones números 17 y 18, de los Senadores señores Coloma y Pérez Varela y García-Huidobro y Moreira,

respectivamente (página 8), son para eliminar la segunda oración de la letra b): desde "El Consejo del Servicio Electoral deberá" hasta "establecido en el inciso quinto de dicho artículo.".

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Se requiere quórum especial de aprobación, señor Secretario?

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Sí, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Entonces, pondremos en votación las indicaciones vinculadas con la letra b).

Tiene la palabra el Senador señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, este es un caso, como bien explicó el Senador Larraín, distinto del primero.

Nosotros sugerimos repetir la votación vinculada con las cuotas y las primarias, que es lo que más nos afecta.

En este caso vemos una contradicción de fondo derivada de establecer una restricción a las primarias en función de la obtención de resultados basados en cuotas.

Si a la Mesa le parece más fácil, podemos seguir dos vías: o se vota nuevamente o se repite, para estos efectos, la votación registrada en el caso de las cuotas y las primarias, que el señor Secretario tiene anotada.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Pronunciémonos sobre las indicaciones, y así simplificamos.

Votaremos, pues, las indicaciones números 17 y 18, de los Senadores señores Coloma y Pérez Varela y García-Huidobro y Moreira, respectivamente.

¿Cómo se vota, señor Secretario?

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Quienes están de acuerdo con las indicaciones números 17 y 18, que son para suprimir la oración que individualicé, votan que sí, y aquellos que desean rechazarlas, que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se rechazan las indicaciones números 17 y 18 (28 votos contra 5).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Allamand, Araya, Bianchi, De Urresti, Espina, García, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Prokurica, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa la señora Von Baer y los señores Chahuán, Coloma, García-Huidobro y Orpis.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Corresponde votar la letra b) propiamente tal, salvo que se dé por repetida la votación verificada en el caso de las cuotas.

El señor COLOMA.-

Votemos.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación la letra b).

El señor LABBÉ (Secretario General).-

El quórum de aprobación es de tres quintos de los Senadores en ejercicio.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Para fundar su pronunciamiento, tiene la palabra el Senador señor Navarro.

El señor NAVARRO.-

Señora Presidenta, si vamos a votar a favor el texto tal como está, yo pregunto por qué cuatro días hábiles para corregir.

Solo digo que los plazos estrechos conllevan a dificultades mayores respecto de los partidos regionales y de las colectividades llamadas "grandes".

Cuatro días hábiles a contar de la resolución pueden resultar insuficientes.

Tal vez hubo en la Comisión algún motivo que llevó a poner ese exiguo plazo.

Lo que interesa es el resultado final, no la exigencia precipitada de cuatro días.

Quizá puede aclararlo el Presidente de la Comisión de Constitución.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

No le va a aclarar nada, porque estamos votando.

El señor NAVARRO.-

No votaré a favor.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Espina para fundamentar su voto.

El señor ESPINA.-

Solo quiero precisar lo siguiente, señora Presidenta.

Por una razón de coherencia, nosotros vamos a votar a favor en este caso.

Ya perdimos lo de las primarias y lo de la regulación de las cuotas con anterioridad a aquellas.

No podemos despachar un proyecto incoherente.

Ese es el argumento. Y queremos señalarlo, porque vamos a recurrir de inconstitucionalidad en el caso de las primarias.

Para que no haya un malentendido, simplemente en razón de la coherencia del proyecto votaremos a favor de la letra b). Si no, quedará un texto inconexo, pues en un artículo se dice A y en otro B.

El Senado, más allá de las diferencias, no puede despachar una iniciativa desconectada en su redacción.

Por eso votaremos a favor en esta ocasión.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor De Urresti.

El señor DE URRESTI.-

Señora Presidenta, simplemente quiero absolver la consulta del colega Navarro señalándole que en la Comisión el SERVEL sostuvo que el plazo fijado para hacer las correcciones es más que suficiente.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, yo respeto la forma como cada cual entiende la coherencia, pero creo que se trata de algo discutible.

En este caso tengo una visión distinta: creo que, en general, se le va a hacer un daño brutal al sistema político.

Al igual que otros parlamentarios, pienso que aquí se está yendo en el sentido exactamente inverso.

Alguien podrá decir: "Prefiero esto a otra cosa".

Yo prefiero explicitar lo equivocado de todo el sistema nuevo planteado, que será objeto de una pugna permanente entre cuotas y primarias, aparte que se está facultando al Consejo del SERVEL para discernir respecto a cuestiones de extraordinaria complejidad.

Entonces, no quiero que alguien aparezca el día de mañana diciendo: "¡Pero usted votó a favor de que definiera el Consejo del SERVEL!".

Ahora, me surgen dudas como las del Senador Navarro en cuanto a la importancia de los plazos a esa altura.

Como he estado en procesos de inscripción de candidaturas, sé que estas cosas no son tan sencillas ni tan fáciles: suelen surgir conflictos en materia de interpretación de las normas, de verificación de los resultados en cada lugar, en fin.

Recordemos que, además, se trata de una normativa de carácter nacional con complejidades regionales.

Por lo mismo, quiero ser preciso para plantear que, en mi concepto, estamos ante un error de punta a cabo: esto no tiene que ver con el cambio del sistema electoral -y lo digo porque de repente se caricaturiza-, sino con una alteración de la forma de activar las primarias para buscar un efecto en las cuotas. Nada tiene que ver con lo que se planteó originalmente como elemento central de la discusión.

Así que, en tal lógica, con esa convicción, tal como lo planteé en mi indicación y considerando incorrecto el contenido de lo que se pretende regular mediante la letra b), sostengo que al final la tarea de la institucionalidad será cumplir con algo que, desde mi perspectiva, está profundamente equivocado.

Por eso, respetando a quien haga algo distinto -esto no envuelve conflicto alguno: es una forma de entender lo que corresponde en un caso y otro-, yo por lo menos voy a votar en contra de la letra b).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe, a quien le pido precisar lo que estamos votando.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, solo quiero hacer presente que estamos votando la letra b) del artículo 17 y que hay dos indicaciones, signadas con los números 19 y 20, que recaen en ella.

Por lo tanto, yo sugiero terminar con la votación de la letra b) y, de aprobarse esta, entender rechazadas con la misma votación las indicaciones 19 y 20, de los Senadores señores Coloma y Pérez Varela y García-Huidobro y Moreira, respectivamente.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

A la Mesa le parece que eso es lo razonable.

¿Habría acuerdo?

Acordado.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Por 24 votos contra 5 y 4 abstenciones, se aprueba la letra b), y, con la misma votación, se dan por rechazadas las indicaciones 19 y 20, renovadas.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, Bianchi, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa la señora Von Baer y los señores Chahuán, Coloma, García-Huidobro y Orpis.

Se abstuvieron los señores Allamand, Espina, García y Prokurica.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Respecto del inciso tercero del artículo 17, la Comisión de Constitución propone sustituir la frase: "reclamar de la resolución del Consejo del Servicio Electoral, éste" por "presentar la corrección, el Consejo del Servicio Electoral".

El señor LETELIER.-

Eso se acordó por unanimidad.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Me da la impresión de que no es nada más que una adecuación.

Tiene la palabra el Honorable señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, hubo consenso en la modificación, dado que corresponde a un ajuste solicitado por el Servicio Electoral.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Hay acuerdo en aprobarla?

El señor LARRAÍN.-

Por unanimidad.

El señor ALLAMAND.-

Que se vote.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Deseo explicar que la Comisión plantea una modificación al inciso tercero. Lo que se vota es este último, con la enmienda, y se requiere un de tres quintos de los Senadores en ejercicio.

quorum

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Se procederá a la votación, entonces.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Quienes estén de acuerdo con el texto aprobado en general para la disposición, incluida la enmienda, tienen que pronunciarse a favor.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba el inciso tercero del artículo 17, con la enmienda propuesta por la Comisión, dejándose constancia, para los efectos del quórum constitucional exigido, de que 33 señores Senadores se pronuncian a favor.

Votaron las señoras Allende, Goic, Muñoz, Lily Pérez y Von Baer y los señores Allamand, Araya, Bianchi, Chahuán, Coloma, De Urresti, Espina, García, García-Huidobro, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Larraín, Letelier, Montes, Navarro, Orpis, Pizarro, Prokurica, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La Comisión, por unanimidad, sugiere suprimir el número 5), en el que se sustituye el artículo 18 de la ley.

Ello no requiere un quórum especial.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Si le parece a la Sala, se aprobará.

--Se aprueba la supresión del número 5) del artículo 1°.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La Comisión propone agregar un inciso tercero, nuevo, en el artículo 23 de la ley. Es una norma de rango orgánico constitucional.

Ello fue acordado por unanimidad.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Si le parece a la Sala, se aprobará.

--Se aprueba el inciso tercero, nuevo, del artículo 23, dejándose constancia, para los efectos del quórum constitucional exigido, de que 35 señores Senadores se pronuncian a favor.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

A continuación, las indicaciones números 27 y 28, renovadas, son para suprimir el número 6), que pasó a ser 5).

El señor HARBOE.-

¿Me permite, señora Presidenta?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Sí, Su Señoría.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, la Cámara de Diputados aprobó una norma en el sentido de que los partidos políticos, dentro de cada lista, debían ordenar los nombres de los integrantes con alternancia de candidatos y candidatas. Es decir, se disponía que en la cédula electoral fueran hombres y mujeres.

A su vez, la Comisión de Constitución, por una mayoría de cuatro por uno, eliminó dicha obligación y les devolvió a los partidos políticos o los pactos electorales la facultad para determinar el orden de precedencia de sus candidatos o candidatas, según lo estimen pertinente. Esta es la disposición en vigencia.

Lo que corresponde más bien es aprobar el criterio del órgano técnico, que es el de conservar la atribución actual de partidos políticos y pactos electorales.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Si le parece a la Sala, se mantendrá la norma en la materia.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La aprobación de las indicaciones renovadas no necesita quórum, por tratarse de una eliminación, de modo que quedará el texto vigente.

Si se resuelve la eliminación de todo el número 6), sus letras a) y b), propuestas por la Comisión, quedarán rechazadas. Ese es el resultado.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, lo que corresponde es desechar las indicaciones y recoger lo determinado por el órgano técnico. Lo que este hizo fue conservar el texto actual de la ley. O sea, no hay alternancia entre nombre y nombre, sino que se resuelve como ahora.

Entonces, si hay indicaciones para echar abajo lo que dispone el cuerpo legal vigente, es preciso rechazarlas. Eso es lo que Su Señoría tiene que dar por hecho.

El señor CHAHUÁN.-

Así es.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Es la conclusión a la que llegué.

Puede intervenir el Senador señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, efectivamente, las indicaciones fueron preparadas en función de lo que originalmente planteó la Cámara de Diputados, corregido adecuadamente por la Comisión de Constitución del Senado.

El señor LAGOS.-

O sea, están de más.

El señor COLOMA.-

Así ocurre ahora.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

Su Señoría puede retirar la suya.

El señor COLOMA.-

Creo que es mucho más fácil hacerlo.

¡Ello no significa que no se llevará a cabo una discusión bastante más firme en relación con otras disposiciones¿!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Es claro que si se retiran las indicaciones se mantendrá el texto vigente.

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Retiradas las indicaciones para suprimir el número 6), quedaría aprobado -entiendo que ese es el acuerdo- el texto con las enmiendas propuestas por la Comisión.

Los votos ya se contaron: son 34.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Estamos de acuerdo.

Tiene la palabra el Honorable señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, la Comisión se ocupó en los dos aspectos incluidos en la norma que venía de la Cámara: la votación por lista y la inclusión de la foto del candidato en la cédula.

Lo primero fue rechazado por unanimidad, por lo que no se requiere votación. Pero lo segundo fue aprobado por mayoría, ya que hay un pronunciamiento en contra, de modo que ello se debería votar, salvo que este último se retirara.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Puede intervenir el Senador señor Navarro.

El señor NAVARRO.-

Señora Presidenta, la letra a) contenida en las modificaciones planteadas por la Comisión deja de lado lo aprobado en general: "Los partidos políticos, dentro de cada lista, pondrán los nombres de los candidatos ordenando a sus integrantes con alternancia entre los candidatos y las candidatas, asignándoles un número orden correlativo desde el uno hasta la cantidad total de candidatos declarados".

El señor LARRAÍN.-

Eso ya se votó.

El señor NAVARRO.-

¡Las mujeres quedarán arrinconadas al final de la lista! Eso es lo que va a pasar. Porque el orden de los candidatos¿

El señor LARRAÍN.-

Eso ya se votó. Nos pronunciamos ahora sobre otra cosa.

El señor NAVARRO.-

Está bien. Solo quiero exponer el punto. Porque se trata de la misma letra que vamos a votar y se ha ido variando.

No lo entiendo. Si estamos por establecer igualdad en el trato, no sé por qué se renuncia a la alternancia en la lista de los nombres de hombres y mujeres. Porque lo que van a hacer los partidos -y todos lo sabemos- es relegarlas a ellas al lugar menos visible, al más inadecuado. ¡Eso es lo que va a pasar!

Me parece de toda justicia, como decía el acuerdo de la Sala que voté a favor, que se contemple un candidato y una candidata de manera alternada, porque, si no, este va a ser otro instrumento para privilegiar a unos respecto de otros.

Aunque se haya votado, como nos ocupamos en la misma letra y aquello sobre lo cual me pronuncié en general fue lo que señalo, lo menciono porque es lo que estoy dispuesto a aprobar. Lo otro, no.

El señor LAGOS.-

Su Señoría ya lo aprobó.

El señor LARRAÍN.-

Repito que es algo sobre lo cual la Sala ya se pronunció.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, en aras del orden que se debe seguir -porque uno tiene derecho a discutir todas las disposiciones, pero no las que ya se votaron-, deseo consignar que el artículo ha sido votado dos veces. Por lo tanto, quedó una redacción distinta de la actual.

Me refiero al inciso cuarto, que empieza con las palabras "El orden de precedencia". Eso está votado y sacramentado.

En cuanto a la existencia o no de una foto en la cédula, el inciso final aprobado en general expresa: "Al lado izquierdo del número de cada candidato , habrá una raya horizontal destinada a que el elector pueda (¿) " -leeré lo subrayado- ".".

y del nombre de la lista respectiva

Asimismo, al lado izquierdo

del número de cada candidato, también habrá una fotografía de éste, si la hubiese acompañado en su declaración, en el tamaño y colores de impresión que determine el Servicio Electoral

Ello se votó en la Comisión. La mayoría estimó que la foto no era necesaria, porque el propio Servicio Electoral explicó que resultaba muy difícil incluirla. Mediaban factores técnicos: la calidad del papel y de la imagen, el color. Solicito acoger, para ser franco, lo aprobado por el órgano técnico, que es la eliminación de ese elemento.

Entonces, para facilitar las cosas, retiro mi voto -me había pronunciado por mantener la foto-, con lo cual la disposición quedaría aprobada por unanimidad.

El señor ALLAMAND.-

¡Cómo va a hacer eso, Su Señoría! No se puede.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Entiendo que el Honorable señor Espina ha dejado sin efecto su oposición.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Sobre esa base, entiendo que quedarían también retiradas la indicaciones 36, 37 y 38, tendientes a eliminar la letra b) del número 6).

La aprobación sería, entonces, por 34 votos a favor, con lo cual se cumple de más con los tres quintos.

La letra b) quedaría aprobada como la propone la Comisión, es decir, sin contemplar justamente lo mencionado por el Honorable señor Espina, que es la fotografía del candidato.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Cuál es la duda, Senador señor Allamand?

El señor ALLAMAND.-

Señora Presidenta, simplemente pido que se me explique qué es eso de poder retirar un voto. Entiendo que ello no es posible respecto de un pronunciamiento ya formulado en la Comisión.

Quiero saber exactamente qué se estaría aprobando.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, el retiro de una indicación es una cosa distinta. Tratándose de alguien que votó en contra, como es el caso del Honorable señor Espina, quien era partidario de mantener la foto, con el retiro del rechazo está diciendo que da la unanimidad. Y así se evita¿

El señor ALLAMAND.-

¡No se puede!

El señor LARRAÍN.-

En la votación que corresponde verificar ahora no se puede cambiar el voto en la Comisión -no es posible cambiar el acta-, pero en la Sala se está manifestando que se retira ese pronunciamiento.

El señor ALLAMAND.-

¡Eso no se puede hacer!

El señor LARRAÍN.-

¡Pero cómo! ¡Si es su voluntad hacerlo! El señor Senador expone que se suma ahora a la mayoría de la Comisión, y, por lo tanto, da la unanimidad.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Solicito la opinión del Honorable señor Harboe, Presidente de la Comisión de Constitución.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, comprendo la buena voluntad del Honorable señor Espina en el sentido de anunciar, sobre la base de la discusión en la Sala, que otorga la unanimidad; pero no puede retirar su voto ya emitido en la Comisión,¿

El señor ALLAMAND.-

Eso es.

El señor HARBOE.-

¿pues la sesión respectiva terminó y existe un informe. Lo que se propone es aprobar la parte que nos ocupa.

Nuestro colega, quien se pronunció a favor en su oportunidad, hoy día dice: "Voy a cambiar mi votación". Eso es lo que está planteando.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Entonces, está bien lo que hemos señalado.

Señores Senadores, ¡por favor!

La Mesa entiende, y lo acaba de ratificar el Presidente de la Comisión de Constitución, que el Senador Espina no puede cambiar lo que votó en su momento en dicho órgano técnico, pero que aquí sí puede manifestar su voluntad de sumarse a la unanimidad.

De esa forma, se aprobaría la norma con el quórum correspondiente.

¿Estamos claros? Para que no haya duda.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, a mí me importa el precedente planteado por el Senador Allamand.

Entiendo que el colega Espina lo que hace es dar la unanimidad en la Sala, que es distinto.

Ese es el precedente.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Dijimos con toda claridad que él estaba dando la unanimidad en la Sala.

Así lo manifesté.

Para terminar de aclarar y no quede ninguna duda: se trata de que la Sala cuente con la unanimidad.

Tiene la palabra el Senador señor Navarro.

El señor NAVARRO.-

Señora Presidenta, el debate me pareció algo largo y absurdo. Todos quieren avanzar en la discusión y lo que hacen es alargarla de manera innecesaria.

Yo tengo una observación de fondo sobre el particular.

Para quienes hemos tenido la posibilidad de participar en procesos electorales efectuados en América Latina y en otros países del mundo, la foto en la cédula es un elemento esencial que facilita la tarea de los electores.

Es tremendamente positivo. No hay impedimento técnico para poner una foto. Los candidatos se sacan miles de ellas para colocarlas en afiches. El que se ha dado es un argumento burdo.

La pregunta es por qué el Senado de la República, pudiendo mejorar las condiciones para que la gente participe, como la de la tercera edad, la que no puede leer adecuadamente, no lo hace. La foto solo tiene ventajas a la hora de cumplir fielmente con la voluntad del elector. Además, significa un doble refuerzo, porque figuraría el nombre del candidato y su imagen.

Por lo tanto, era una extraordinaria oportunidad para incorporar la foto en la papeleta, pues ello solo garantiza el fiel cumplimento de la voluntad del elector.

No he escuchado argumentos técnicos; tampoco argumentos políticos; no he oído ningún argumento. Y el debate es si el voto del Senador Espina puede ser anulado en la Sala. ¡Un debate absurdo, aburrido, irrelevante!

La cuestión de fondo es que la foto debería estar en la cédula, porque efectivamente contribuye a los fines que hemos señalado: incrementar la participación de la gente.

Si hubiera argumentos que me explicaran por qué no puede incluirse una foto, los podría escuchar. Pero me quedo con lo que votamos en la Sala del Senado: que en el voto se incluya la foto del candidato.

El señor LAGOS.-

¿Pero qué le dice la foto de un candidato?

El señor NAVARRO.-

El candidato puede mandar la foto que le guste, aunque esté "fotoshopeada".

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Se acabó su tiempo, Su Señoría.

Por favor, ruego silencio a los señores Senadores.

Tiene la palabra el Honorable señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, sin ánimo de entrar en el debate de fondo, le recomendaría al Senador Navarro que se diera una vuelta por la Comisión de Constitución y leyese los documentos mediante los cuales el Servicio Electoral acreditó la imposibilidad técnica para incluir las fotos en la cédula.

Además, se entregaron varios argumentos

El señor NAVARRO.-

¡No sirve el Servicio!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Senador Navarro, no interrumpa.

A usted ya se le escuchó. Ahora está interviniendo el Honorable señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, adicionalmente al tema técnico, se mencionó la existencia de un conjunto de estudios, que pueden ser discutibles o no, que señalaban la presencia de elementos discriminatorios al momento de publicar las fotos en la papeleta.

Se discutió largamente la materia. Hubo diferencias en la Comisión, pero, finalmente, con la opinión del Servicio Electoral, decidió no incluir la foto en el voto.

El señor NAVARRO.-

¡Corrobora lo añejo, lo arcaico del Servicio!

El señor HARBOE.-

Sin embargo, señora Presidenta, entiendo que esta norma ya está votada y aprobada, según el texto establecido en la Comisión de Constitución.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

¡La foto es para el 2022!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Así también lo entiende la Mesa, Senador Harboe, salvo que el Senador Navarro quiera dejar constancia de su voto en contra.

El señor ORPIS.-

¡Somos dos!

El señor CHAHUÁN.-

¡Somos tres!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Pero ya está aprobada la norma.

Como no hubo votación electrónica, consulté sobre el particular. Y todos entendimos que se aprobaba, tal como se planteó.

El señor LARRAÍN.-

Quiero fundamentar mi voto, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, quiero fundamentar mi voto, porque lo señalado por el Senador Alejandro Navarro no corresponde a la realidad.

Como expresó el Presidente de la Comisión, muchos de los antecedentes que teníamos en dicho organismo, y que fueron corroborados por el Servicio Electoral, daban cuenta de la existencia de un problema técnico en la impresión de las fotos, en cuanto a que no siempre se puede garantizar la misma calidad en todos los lugares.

Por lo tanto, había un problema de impresión, materia que figura en el informe, en el cual se recoge la opinión de la representante del SERVEL sobre el particular.

Pero no es la única razón, señora Presidenta.

Hay varios otros antecedentes que me parece importante tener en cuenta.

Uno de ellos se relaciona con lo que está ocurriendo, por ejemplo, en la presentación de los curriculum vitae, con esta vieja idea de que cuando las personas postulaban a un cargo debían acreditar buena presencia. Hoy no se pide fotografía en esos documentos, porque la apariencia física que se busca muchas veces puede entenderse como un factor de discriminación para algunas personas.

En ese sentido, no sería lo más conveniente.

Y hay otros antecedentes más.

Cuando se piensa en las personas que van a una elección, el hecho de que algunas sean conocidas, y otras no, hace que la fotografía se convierta en un elemento que ayude más a los conocidos que a los desconocidos.

El señor NAVARRO.-

¡Depende de la figura!

El señor LARRAÍN.-

Pero esa es la regla general. Uno habla del promedio, no de situaciones excepcionales. Claro, si se presenta de candidato " Don Francisco", no habrá un problema de desconocimiento. Pero, normalmente, los candidatos que van a la reelección ya llevan cuatro, ocho o más años trabajando en sus zonas y, en consecuencia, tienen mayores posibilidades de ser conocidos.

Por eso, me parece que la incorporación de la fotografía puede favorecer a las personas que están en el ejercicio del cargo y no a los demás incumbentes.

Es ese conjunto de situaciones la que nos hizo reflexionar sobre una materia que parece muy obvia, pero en donde existe un problema técnico que no es fácil resolver. Nos encontramos aquí frente a un tema de mucha complejidad, mayor de la que uno se imagina.

Nosotros llevamos décadas de experiencia con el voto impreso y nunca ha habido dificultades. Distinto sería si alguien me dijera: "Es que la gente no sabe". Pero no es así: la gente sabe leer en Chile; sabe distinguir; sabe de números. Y, por lo tanto, no hay un problema de equivocación al momento de emitir el voto, como los que sí podrían producirse en un país analfabeto, inculto, en el que, probablemente, sería necesario incorporar la fotografía. Sin embargo, tampoco es el caso.

En consecuencia, señora Presidenta, hay muchas razones que, a nuestro juicio, hacen pensar en la conveniencia de no incorporar la foto en el voto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

La Mesa considera que este tema ya está zanjado.

Se acordó que al rechazarse las indicaciones la norma quedaba en la misma forma propuesta por la Comisión.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

Ya está aprobada.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Ese fue el acuerdo.

No hubo votación electrónica, pero es lo que se resolvió.

El señor LETELIER.-

Pido clausura del debate y que se abra la votación.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Bueno, en ese caso, hay que votar, para mayor claridad.

Señor Secretario.

El señor BIANCHI.-

¡Sin debate, por favor!

El señor CHAHUÁN.-

Quiero fundamentar, señora Presidenta.

El señor COLOMA.-

Yo también.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Sin debate, evidentemente, porque ya se hizo, y extensamente.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La señora Presidenta pone en votación la letra b) en la forma propuesta por la Comisión de Constitución, que la reemplaza por la siguiente: "b) Sustitúyese en su inciso final la expresión `a fin de que' por `destinada a que'".

El señor CHAHUÁN.-

Presidenta, quiero fundamentar mi voto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señor Secretario, por favor indique cómo se vota.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Quienes estén de acuerdo con el reemplazo de la letra b), votan que sí, y los que no estén de acuerdo, votan que no.

La norma requiere cuatro séptimos de los Senadores en ejercicio, es decir, 22 votos a favor.

El señor COLOMA.-

Quiero fundamentar el voto.

El señor CHAHUÁN.-

Yo también.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Ya hicimos la discusión.

En votación.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Para fundamentar el voto, tiene la palabra el Senador señor Tuma.

El señor TUMA.-

Señora Presidenta, yo sé que estamos todos cansados, que queremos despachar luego este proyecto, pero de verdad no va a haber otra oportunidad, quizás en varios años, para perfeccionar el modo en que los chilenos eligen a sus representantes.

Yo no veo por qué solo la Comisión respectiva debate un tema y los parlamentarios, en la Sala, no tenemos derecho a opinar siquiera sobre un asunto que, a nuestro juicio, mejora las condiciones de participación del electorado.

De verdad, señora Presidenta, no considero creíble el argumento del SERVEL en cuanto a que existen problemas técnicos. No creo que los haya, cuando en otros países hace rato que ya superaron todos estos inconvenientes y los votos van acompañados de la correspondiente fotografía.

Ahora, alguien me podrá plantear: "Mire, es que la calidad no será la misma en todos los casos". Bueno, será distinta según el candidato de que se trate, pero no pueden decirme que la fotografía será nítida solo para un candidato y no para los otros.

También se señala: "Mire, mostrar la fotografía constituiría una ventaja respecto de aquellos candidatos que sean poco conocidos". Bueno, con el mismo argumento, el Servicio Electoral podría no tolerar apellidos demasiado conocidos porque también significarían una ventaja.

En realidad, los argumentos para oponerse a perfeccionar la elección colocando la fotografía de cada candidato son absurdos.

Señora Presidenta, me gustaría que la Sala debatiera el punto y emitiera un pronunciamiento sobre el particular, pues no solo se está votando la inclusión de la fotografía, sino el conjunto de un articulado que no permite votar separadamente.

Yo pido claridad y que los Senadores en la Sala tengan oportunidad de discutir el tema. Algunos queremos que se considere la fotografía, a pesar de la opinión del SERVEL, que aduce problemas técnicos. Eso no se lo cree nadie. En mi concepto, la foto es una buena manera de identificar de mejor forma a los candidatos. Sí me parece discriminatorio que Chile no tenga un avance tecnológico en su proceso electoral.

Por lo tanto, señora Presidenta, no sé cómo debo votar para que en la cédula se consigne la fotografía de cada uno de los candidatos.

¿Me lo puede aclarar el señor Secretario?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Señores Senadores, se está votando la letra b), con la modificación introducida por la Comisión de Constitución. Se requiere, para su aprobación, del voto favorable de los tres quintos de los Senadores.

--(Manifestaciones en la Sala).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Por favor, silencio.

Dejemos que el señor Secretario termine su explicación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

En el fondo, se está votando el reemplazo que sugiere la Comisión para la letra b).

Si este reemplazo fuese rechazado, habría que votar la letra b) del texto aprobado en general.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Cómo se vota, señor Secretario?

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Los que estén de acuerdo con la proposición de la Comisión, votan que sí, y los que estén en desacuerdo, votan que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

En fácil, señora Presidenta: los que quieran que la cédula incluya la foto, tienen que votar que no, y los que quieran que la cédula no incluya la foto, deben votar que sí.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Muy bien.

Tiene la palabra el Senador señor Chahuán.

El señor CHAHUÁN.-

Simplemente, señora Presidenta, deseo hacer un poco de historia.

Durante la primera Administración de la Presidenta Bachelet, un grupo de Diputados presentamos un proyecto de ley para que las cédulas incorporaran la foto de los candidatos.

Cuando asumió el Gobierno del Presidente Piñera, fuimos a hablar con el director del Servicio Electoral y con Cristián Larroulet, entonces Ministro Secretario General de Gobierno. En esa oportunidad, el único argumento que se esgrimió para no incluir la fotografía fue el costo.

Por nuestra parte, consideramos muy importante generar las condiciones que permitan que los electores puedan identificar a los candidatos. En ese sentido, llamo a votar que no para que haya foto, además de otros medios identificatorios, como los números y las letras. Sabemos que es difícil para los ciudadanos identificar a su respectivo candidato, y nos parece que la foto es un buen elemento diferenciador.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Bien.

Se han inscrito para intervenir diversos señores Senadores.

Se ha abierto la discusión.

¿Senador Orpis?

El señor ORPIS.-

Señora Presidenta, 

El señor PIZARRO.-

¡Abra la votación, señora Presidenta, para que se pueda fundamentar el voto!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

La votación está abierta desde hace rato, Su Señoría. Y estoy dando la palabra justamente para que se fundamente el voto.

Puede continuar, Senador Orpis.

El señor ORPIS.-

Seré muy breve, señora Presidenta.

La verdad es que me hace mucha fuerza incorporar la foto ante la proliferación de candidatos que va a haber. Será mucho más difícil identificar a una persona en la tremenda lista de postulantes que habrá. Y en ese sentido creo que la fotografía puede ser un elemento adicional que ayude a identificar la preferencia de los votantes.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Voy a dar un solo argumento, señora Presidenta.

Uno le cree o no le cree al Servicio Electoral. Yo entiendo el planteamiento del Vicepresidente señor Tuma, pero el SERVEL señaló reiteradamente en la Comisión que había dos dificultades. Una es la que indicó el Senador Chahuán, en cuanto al costo más alto que significaría incluir la fotografía, lo que no se vislumbra importante cuando se trata de lograr una mejor decisión de la gente. Y la segunda es la existencia de un conjunto de problemas técnicos.

Yo no puedo creer que eso se haya dicho por comodidad, porque la sesión fue larguísima. Yo voté a favor de la incorporación de la foto porque me parece bien. Sin embargo, después llamé al Servicio Electoral, que me dio una serie de argumentos técnicos, frente a los cuales hay dos alternativas: alternativa A, no le creo; alternativa B, le creo.

Por eso, si bien en la Comisión voté a favor de la inclusión de la fotografía en la cédula, ahora considero que no puedo estar en contra de los nuevos argumentos que me dio el SERVEL. Eso es todo.

Ahora, si los señores Senadores ponen en duda sus argumentos y son partidarios de la foto, deben votar que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra la Senadora señora Muñoz.

La señora MUÑOZ.-

Señora Presidenta, quiero referirme a la letra a) del número 6), donde no se hizo ningún debate en relación con la lista de prelación de los candidatos y las candidatas.

Está apasionante el debate sobre el tema de la foto, pero en realidad no me di cuenta de que se tomó el acuerdo de aprobar la letra a). Y deseo dejar constancia de que estoy en contra. Quiero manifestar mi rechazo a la revisión que hizo la Comisión de Constitución respecto del texto aprobado por la Cámara de Diputados.

A mí no me apasiona tanto el debate de la foto; sí la situación de las mujeres en la papeleta electoral. Esa mi preocupación. Yo sé que ya se vio el tema, pero no quiero aparecer aprobando la disposición despachada por la Comisión de Constitución.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Entiendo su argumento, señora Senadora, pero eso ya se votó. Así que lo único que podemos hacer es dejar constancia en el acta de la situación planteada por usted.

La señora MUÑOZ.-

Se vio tan rápido, señora Presidenta, que no lo alcancé a percibir. Pero estoy de acuerdo en que se deje una constancia.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, el punto expuesto por la Senadora Muñoz y el debate instalado por el Senador Navarro me parecen superrazonables.

Quizás el vértigo que existe por tratar de aprobar el proyecto, cualesquiera que sean las circunstancias, genera que temas importantes, como el mencionado por la Senadora Muñoz, pasen por una especie de fast-track, aunque casi no hay capacidad de admitirlo. Mi colega lo ha planteado en esos mismos términos y el Senador Navarro ha instalado un asunto bastante interesante. Hay ideas discutibles.

Le pido al Senador Lagos que no me hasta gestos, porque me impide concentrarme.

El señor LAGOS.-

¡Por lo menos actúe lo que señala...!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Por favor, que no haya interrupciones.

Senador señor Coloma, continúe.

El señor COLOMA.-

Aquí hay dos temas.

Por una parte, el aspecto teórico. Y entiendo a los Senadores Navarro y Orpis cuando dicen: "Cómo podemos dar más elementos para poder definir qué tipo de persona es el candidato". Eso se busca. Pero, honestamente, siento que con los medios de comunicación existentes hoy se trata de un problema menor, sin perjuicio de lo cual tiendo a pensar que, de darse tal aspecto teórico, constituiría una ventaja efectiva y muy relevante para los candidatos conocidos.

O sea, más allá de la cuestión conceptual, que hace pensar: "Mientras mayor información -es el principio que debe prevalecer-, más capacidad de decidir bien", se choca con una realidad respecto de qué significa incluir en la votación una foto, que sirve a la capacidad de recordación.

Y ahí me parece que es menos interesante y válido el concepto.

En tal sentido, quiero plantear una experiencia que me viví en una elección en un país centroamericano donde los votos consideraban la fotografía.

De partida, en una elección parlamentaria con más candidatos que cargos a elegir (en algunos casos con cerca de sesenta aspirantes), pues se trata de distritos grandes, y, además, con la foto del candidato en el voto, la papeleta es una sábana realmente gigantesca.

Y allí había una gran controversia -me tocó presenciarla- por dos razones.

Primero, por la calidad y la naturaleza de la fotografía, porque no primaba el principio "cada uno elige la suya", pues en ese caso se habría seleccionado una imagen distinta.

Así, en la nación a que me refiero -no quiero identificarla, pero es centroamericana, seria, con tradición política-, donde estaban innovando con este procedimiento, se les produjo el problema de las distintas calidades de las fotos.

Obviamente, ese hecho generó una controversia política interna, porque se le atribuían a quien editaba las papeletas, en este caso al organismo que debía imprimir, intenciones respecto de qué significaba que la imagen de un candidato apareciera con diferencias de calidad en comparación con el resto.

Y había otra cuestión, que recordaba con un señor Senador, derivada -parece hasta gracioso mirar el asunto desde esta perspectiva- de cómo le tocaba a un candidato aparecer en un voto predoblado. Imagínense una cara con un ojo por un lado...

El señor BIANCHI.-

¡Pero cómo!

El señor COLOMA.-

Es lo que vi. No estoy diciendo nada distinto de la experiencia que me tocó vivir.

Entonces, entiendo el legítimo interés de alguien por mejorar en este aspecto. Creo que es un tema por debatir. No se trata simplemente de una cuestión electoral, sino de cómo generar condiciones para dar mejor información y tener una democracia más adecuada.

Pero por lo que yo vi por lo menos, y si adicionalmente se considera que los Senadores Larraín, Espina y Harboe señalan que el SERVEL, que es el organismo destinado a dirigir una elección, plantea la misma objeción, me parece que, más allá de la intención, podría cometerse un grave error y después tendríamos que lamentar las distorsiones que se pudieran producir.

Además, atendiendo a la advertencia del SERVEL, ellos manifestaron que la inclusión de la foto no era viable, por lo menos desde un punto de vista técnico, en términos de garantizar a todos los sectores que implicaría una contribución y no que sería una fuente de problemas dentro del sistema electoral.

Por eso, valoro que el asunto se discuta. Y quiero insistir en el hecho de que relevo que el Senador Navarro haya instalado el tema, a pesar de que estuvo a punto de aprobarse rápidamente.

Voto a favor de que no se incluya la fotografía en el voto, por las distorsiones que se pueden producir.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Pizarro.

El señor PIZARRO.-

Señora Presidenta, hay un elemento político que no se ha tomado en consideración en este debate vinculado con la igualdad de oportunidades para competir.

El texto aprobado en general por la Cámara de Diputados establece que al lado izquierdo del número del candidato y del nombre de la lista respectiva habrá una raya vertical para marcar la preferencia al completar una cruz. Y punto seguido señala: "Asimismo, al lado izquierdo del número de cada candidato, también habrá una fotografía de éste, si la hubiere acompañado en su declaración, en el tamaño y colores de impresión que determine el Servicio Electoral".

Esto, que aparece como una cosa linda, principista: "la foto que identifique al candidato" se puede transformar en un elemento muy distorsionador de la voluntad de los ciudadanos. Porque no olvidemos que en Chile la gente vota por las personas: no por los partidos, no por la lista, no por plancha.

Y, si uno hace un recuento de las características de nuestras campañas electorales, no cabe duda de que el que más recursos económicos posee para instalar fotos en cada poste, calle, afiche, paseo; gigantografías, etcétera, tendrá siempre más posibilidades de que al momento de abrir la papeleta, pues se vota por las personas, sea recordado por ese elector sin siquiera saber a qué partido representa, a qué coalición pertenece, cuál es su nombre.

Entonces, tengamos claridad y sepamos lo que estamos haciendo. A veces, lo ideal es enemigo de lo bueno. ¿A quién vamos a favorecer con lo propuesto acá?: al que dispone de más recursos económicos para generarse la posibilidad de ser recordado al momento en que un elector no tan bien informado mire la foto y diga: "Ah, este me gusta".

Y no quiero ni siquiera entrar a los factores técnicos que ha mencionado el Senador Coloma, que son absolutamente ciertos.

Me ha tocado estar en varios procesos electorales, donde, efectivamente, los votos se transforman en verdaderas sábanas. Por supuesto, por razones técnicas y de espacio las fotos que se colocan son de muy dudosa calidad, y el problema recaerá en aquel candidato al que le quede mal impresa la foto, quien quedará liquidado para siempre, porque no tendrá ninguna posibilidad de corregirlo después.

Entonces, vuelvo a insistir: lo ideal es enemigo de lo bueno. La buena idea que pueda significar que nos reconozcan mediante una imagen se contradice con las experiencias de que hablamos.

Sin duda, es más fácil reconocer a un candidato -como dice el Senador Zaldívar- por el número con que aparece en el voto, por el nombre, por el apellido y no por un asunto de cosmética o de pinta o de facha. Yo entiendo a las colegas. Todas saldrán muy buenasmozas en las fotos que les pondrán en los distintos sufragios. No cabe duda. Porque así son. ¡Pero, bueno, no todos tienen la misma posibilidad ni la misma suerte, querida Presidenta...!

Entonces, más allá de lo anecdótico del debate, el asunto tiene una implicancia política enorme y conlleva una implicancia asimismo respecto a los recursos con que cuenta cada candidato.

Y mientras en el país estamos en la línea de limitar el gasto electoral, de transparentar el financiamiento de la política -para qué vamos a hacer cuestión de lo que ocurre en estos momentos-, nosotros, con lo propuesto aquí, vamos a agregar otro elemento claramente distorsionador.

Y según la experiencia de otros países donde se ha utilizado esto de la fotografía, su implementación ha significado más problemas que beneficios para que los electores puedan decidir conscientemente y no solo influidos por una bonita imagen o una espectacular campaña publicitaria.

El señor NAVARRO.-

Pido la palabra.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Usted ya fundamentó su voto.

No hay más oradores inscritos.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba la enmienda a la letra b) del número 6) propuesta por la Comisión de Constitución (24 votos a favor y 10 en contra), dejándose constancia de que se reúne el quórum constitucional requerido.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Von Baer y los señores Araya, Coloma, De Urresti, Espina, García, Girardi, Harboe, Horvath, Hernán Larraín, Letelier, Matta, Montes, Pizarro, Prokurica, Quintana, Quinteros, Rossi, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa la señora Lily Pérez y los señores Allamand, Bianchi, Chahuán, García-Huidobro, Guillier, Lagos, Navarro, Orpis y Tuma.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

A continuación hay que abocarse a las modificaciones al párrafo 6° (De la Propaganda y Publicidad) de la ley vigente.

El texto aprobado en general por el Senado introdujo dos modificaciones al artículo 30 mediante las letras a) y b) del número 7).

La Comisión de Constitución acordó dos enmiendas, las cuales buscan suprimir las letras a) y b). La proposición obtuvo 4 votos a favor (Senadores señores Araya, Espina, Harboe y Larraín) y la abstención del Senador señor De Urresti.

Se podría realizar una sola votación si Sus Señorías lo estimaran pertinente.

No requiere quórum especial porque se trata de supresiones.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación la eliminación de las letras a) y b) del número 7).

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Solo deseo clarificar el criterio de la Comisión.

El órgano técnico excluyó de este proyecto de ley las normas relativas a la propaganda electoral y al financiamiento electoral, toda vez que el Ejecutivo se comprometió a ingresar una iniciativa bastante más amplia en que se recogieran gran parte de las indicaciones aprobadas en la Cámara de Diputados. Ello se cumplió y hoy día se encuentra en tramitación en la Cámara Baja, razón por la cual solicito a la Honorable Sala, por su intermedio, señora Presidenta, aprobar el informe de la Comisión de Constitución.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Habría acuerdo para aprobar lo que propone la Comisión, ya que hay una iniciativa que entró a la otra rama legislativa?

Tiene la palabra el Senador señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, muy brevemente, cuando se planteó esta votación muchos tenían la inquietud de que aquí se buscaba eludir lo relativo al financiamiento, o contradecir o rechazar las propuestas que venían de la Cámara.

Nosotros estimamos que este proyecto tenía una finalidad determinada no compatible con algunas normas que cambiaban el sistema de financiamiento. Y eso hacía que este, además, quedara trunco, parchado, mal diseñado.

Por eso, planteamos -llegamos a acuerdo con el Gobierno como Comisión- que hubiera un planteamiento global del financiamiento de la política que incluyera no solamente a las campañas, sino también a los partidos, cuestión que se cumplió. Y ello nos permitió mantener esto.

Tengo la impresión de que el Senador De Urresti -que se encuentra por ahí dando vueltas- se opuso a esta norma un poco por su escepticismo a que ella fuera modificada por una iniciativa, pero probablemente ahora, habiéndose presentado esta iniciativa, ya tenemos la unanimidad que justifica que aprobemos lo obrado por la Comisión.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Habría acuerdo en aprobar por unanimidad la supresión de las letras a) y b) del número 7 propuesta por la Comisión de Constitución?

El señor DE URRESTI.-

No.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Entonces, proseguiremos con la votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Por 33 votos a favor, se aprueba la supresión de las letras a) y b) del número 7), propuesta por la Comisión de Constitución, dejándose constancia de que se cumple el quórum constitucional exigido.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz, Lily Pérez y Von Baer y los señores Allamand, Araya, Bianchi, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Hernán Larraín, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Orpis, Pizarro, Prokurica, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Se abstuvo el señor De Urresti.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, también con ánimo de ayudar a la Mesa, hay unas indicaciones coherentes con una propuesta anterior, que fue rechazada por la Sala del Senado, referida al voto por lista.

Solo se trata de normas adecuatorias para establecer el voto por lista. Y como fueron rechazadas por unanimidad por la Comisión, solicito a la Mesa que recabe la autorización de la Sala para dar por aprobado el informe de la Comisión que suprime estas normas adecuatorias.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Qué indicaciones son?

El señor HARBOE.-

Las números 41, 42, 43, 44, 45, 46, 47, 48 y 49.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señor Secretario, ¿puede explicar el procedimiento?

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La petición del Senador señor Harboe es para aprobar la supresión de los textos aprobados en general por el Senado, propuesta por la Comisión, que figuran en los números 8, 9 y 10, respectivamente.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Habría acuerdo, entonces, en el entendido de que se trata de una adecuación?

--Se aprueba por unanimidad.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

En seguida, para eliminar el N° 11, se han renovado las indicaciones números 50, de los Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y 51, de los Honorables señores García-Huidobro y Moreira.

Respecto a este número, el Senador señor Bianchi pidió votación separada.

Además, hay otra indicación renovada para reemplazar la indicación N° 52.

Lo que primero se tiene que discutir y votar, señora Presidenta, son las indicaciones números 50 y 51, por cuanto proponen eliminar el N° 11.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En discusión las indicaciones números 50 y 51.

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, se trata de un tema técnico, pero quiero hacer una distinción.

En el número 11) se establece un procedimiento conforme al método D'Hondt.

Y la aprobación de las indicaciones presentadas por los Senadores Coloma y Pérez Varela más los Senadores García-Huidobro y Moreira, respectivamente, implicaría que no se aplicara tal método.

No obstante, se va a acoger un sistema proporcional, y nosotros tenemos indicaciones respecto a él. Por lo tanto, las indicaciones en discusión las vamos a votar en contra, porque la propuesta que hicimos, que corresponde al acuerdo a que se hizo mención antes -de Renovación Nacional, más la Democracia Cristiana, el Senador Fulvio Rossi y otro-, igual conduce a la existencia de un método D'Hondt.

Por consiguiente, votaremos en contra de las indicaciones números 50 y 51, porque eliminan la aplicación del método D'Hondt. Y eso es incompatible con tener un sistema proporcional.

Terminada esa votación, vendrá una segunda, relativa a la indicación número 52, recaída en el número 11. Y se trata de un tema exclusivamente técnico: si hay o no método D'Hondt.

Repito que las indicaciones del Senador Coloma y otros las votaremos en contra, pues ellos no quieren que haya método D'Hondt. Y si no lo hay, no puede haber sistema proporcional.

En cambio, la indicación siguiente tiene que ver con cómo se redacta el método D'Hondt. En nuestra opinión -esto es un tema técnico- nuestra redacción es más clara, más precisa y más exacta, y es igual al sistema que existe actualmente para los concejales.

El texto que presenta el Gobierno es distinto. Este es un tema de los especialistas. Nosotros creemos que se explica de mejor manera el desarrollo de cómo se aplica el método D'Hondt en la indicación que formulamos con el Senador Larraín.

Por lo tanto, para no dilatar esto, señora Presidenta, si usted pone en votación las indicaciones a que me referí, las vamos a votar en contra, porque resulta imposible tener un sistema proporcional -sea con la fórmula del Gobierno o la de Renovación Nacional presentada en su momento con la DC-, sin el método D'Hondt.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Bianchi.

El señor BIANCHI.-

Señora Presidenta, voy a retirar la petición de votación por separado de este número.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Entonces, de acuerdo a lo que nos explica el Senador Espina, lo primero sería votar las indicaciones 50 y 51, que eliminan el método D'Hondt.

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Quienes estén de acuerdo con las indicaciones 50 y 51, que proponen eliminar el número 11) del artículo 1°, votan que sí, y quienes estén en desacuerdo, que no.

No requieren quórum especial.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Hay problemas con el sistema de votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Está listo.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¡Yo no tengo sistema!

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Señora Presidenta, estoy llamando a alguien del Departamento de Informática para que lo revise.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En la Mesa hay problemas con el sistema informático. No sé si los señores Senadores tienen algún inconveniente.

Les pido un momentito mientras se soluciona esta dificultad.

El señor COLOMA.-

¿Me permite, señora Presidenta?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Ahora volvió el sistema.

¿A todos les aparece la pantalla de votación?

El señor LETELIER.-

A mí no.

El señor HARBOE.-

A mí tampoco.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Hay varios con problemas.

Personal de Informática ayudará a los señores Senadores.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Quiénes no han podido votar?

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

Yo.

El señor COLOMA.-

Pido la palabra, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Disculpe que no le conceda la palabra, Senador señor Coloma. Estamos solucionando el problema del sistema.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Seguramente, el Senador señor Larraín está en el mismo caso del Senador García-Huidobro.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Pudo votar, Su Señoría?

El señor LARRAÍN.-

No he votado.

El señor LAGOS.-

Yo voté, pero ahora no aparezco.

La señora VON BAER.-

¡Eso es grave¿!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¡Es un problema existencial del cual la Mesa no se va a preocupar!

Bien. Ya se han solucionado las dificultades técnicas.

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, quiero hacerme cargo de un error involuntario que cometió el colega Espina al explicar el alcance de las indicaciones renovadas.

No se trata de que nos quedaremos sin sistema D'Hondt. No sé cómo alguien puede imaginar -lo digo con todo respeto- que uno no quiere un mecanismo para determinar los resultados en las elecciones.

Si ustedes analizan el detalle de la proposición, notarán que la diferencia sustancial radica en cómo se evalúan las candidaturas independientes. Ello guarda relación con lo que votamos anteriormente, referido a cómo llevar a cabo los pactos entre partidos políticos e independientes. En dicha materia el Senador Bianchi se pronunció en contra y nosotros nos abstuvimos.

Entonces -¡por favor!- no es que yo no quiera que exista un sistema para definir el resultado final de una elección. Eso sería de la máxima gravedad y una tontera.

Pido que no se señale que estoy actuando en esa lógica.

Hay una disposición en vigor que no ha presentado mayores inconvenientes. Pese a ello, el SERVEL hizo un planteamiento, lo cual generó la indicación de los Senadores Espina y Larraín y, además, los cambios que introdujo la Comisión.

Pero la diferencia fundamental entre una postura y otra radica en lo relativo a los independientes y en entender si el sistema actual -en esto surgen dudas- ha provocado o no conflicto. Nosotros entendemos que no. Al respecto, obviamente uno debe reflexionar acerca de por qué se pretende cambiarlo.

En lo medular, si leen la página 29 del texto comparado, se darán cuenta de las diferencias. Ahí se termina asumiendo una nueva realidad, que nació a partir de lo que se votó hace mucho rato -creo que fue la primera o segunda votación- respecto de las candidaturas independientes.

Cuando uno plantea una indicación en ese sentido es para ser coherente con el establecimiento de un sistema razonable para determinar elegidos. No se trata de dejar el asunto al azar, porque ya existe un mecanismo: el que está en vigor.

Ahora bien, surgen argumentos conforme a los cuales se plantea la necesidad de introducir cambios. Entiendo que esa es la discusión que vamos a tener con motivo de la indicación de los Senadores Larraín y Espina y de lo que aprobó en su momento la mayoría de la Comisión de Constitución.

Por eso, señora Presidenta, respaldaré las indicaciones renovadas 50 y 51. Lo hago no porque no quiera que haya sistema -insisto-, sino porque creo que la innovación que se ha formulado respecto de los candidatos independientes no es coherente con lo que debería ser.

La discusión que vendrá posteriormente sobre cuál planteamiento elegir -si la indicación o lo otro- será un tema de naturaleza distinta.

En consecuencia, voto a favor.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, lamento discrepar profundamente de lo que ha expresado el Senador Coloma.

El asunto lo he revisado incluso con el Secretario de la Comisión de Constitución.

El numeral 11), aprobado por la Comisión, está en la página 26 del texto comparado y busca sustituir el artículo 109 bis. Por su parte, la indicación renovada del Senador Coloma busca eliminar dicha enmienda.

Lo propuesto por el órgano técnico es el método D'Hondt. Si se suprime, queda la norma actual, que se refiere al sistema binominal.

Reitero: si se aprueba la eliminación del nuevo artículo 109 bis, rige el precepto que contempla la ley, que señala: "En el caso de elecciones de Parlamentarios, el Tribunal proclamará elegidos Senadores o Diputados a los dos candidatos de una misma lista, cuando ésta alcanzare el mayor número de sufragios y tuviere un total de votos que excediere el doble de los que alcanzare la lista o nómina que le siguiere en número de sufragios.". Esto es del sistema binominal.

Creo que mi distinguido amigo el Senador Coloma está en un error: si votamos en contra de la enmienda propuesta, quedará en vigor la disposición actual. Por ende, seguirá aplicándose una norma propia de la lógica binominal.

Como los Senadores de Renovación Nacional presentamos una indicación para sustituir el sistema binominal por uno mayoritario -lo discutiremos después-, no podemos aprobar las indicaciones renovadas en comento porque nos quedaríamos sin sistema proporcional y sin sistema electoral, pues no habría un mecanismo para contar los votos.

Esa es la razón por la cual rechazamos las indicaciones del Senador Coloma y otros colegas.

Es absolutamente incompatible mantener la forma de elegir del sistema binominal con otras normas de un mecanismo proporcional, salvo que finalmente se rechacen todas las fórmulas y quedara rigiendo la ley actual.

Como nosotros queremos dejar constancia de que somos partidarios de cambiar el binominal, votaremos en contra de estas indicaciones renovadas, sin perjuicio de las diferencias que haya entre nosotros en cuanto a qué sistema proporcional se va a resolver. Ello lo veremos en el debate de la norma siguiente.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, aquí estamos frente a lo que se denomina técnicamente "la fórmula de selección".

Hábilmente, el Senador Coloma ha planteado que las indicaciones renovadas buscan suprimir el artículo 109 bis aprobado por la Comisión. Pero lo que no nos dice -pero es obvio- es que en tal caso, como indicó el colega Espina, quedaría vigente la fórmula de selección del sistema binominal.

Es la práctica, al suprimir el referido artículo lo que buscan estas indicaciones es mantener el actual sistema, gracias al cual, para que una lista le gane a la otra los dos escaños, debe doblarla en cantidad de votos. He ahí la fórmula de selección.

Esa es la lógica que plantea el Senador Coloma.

En consecuencia, dado que él ha manifestado que debe mantenerse el sistema binominal, me parece de toda lógica que pida que se aprueben estas indicaciones.

En cambio, debemos rechazarlas quienes queremos cambiar el binominal, incluyendo también a los Senadores de Renovación Nacional, como lo ha planteado el colega Espina.

En la materia que discutiremos después, que es muy legítima, se reflejará una diferencia de redacción técnica entre quienes deseamos remplazar el sistema binominal. Por eso se renovó otra indicación, que propone sustituir la propuesta de la Comisión.

Pero ese es un debate posterior.

Ahora debemos resolver las indicaciones 50 y 51, cuyo objetivo es mantener la fórmula de selección del binominal, en virtud de la cual los dos candidatos de una lista son elegidos si doblan a la otra lista.

A mi juicio, debemos rechazar tal planteamiento.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Lo que acaban de explicar el Senador Espina y el Presidente de la Comisión de Constitución le hace sentido a la Mesa. Está claro: los que desean cambiar el sistema binominal votan que no y los que quieren mantenerlo, que sí.

El señor COLOMA.-

¿Me permite, señora Presidenta?

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

Estamos fundamentando el voto, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Sí, pero el Senador Coloma ha pedido aclarar un punto. Tiene el derecho a hacerlo.

A lo mejor retira la indicación.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

Está bien.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, mi interpretación sobre este asunto es distinta: creo que el sistema sigue siendo el D'Hondt, aunque requiere obviamente un desarrollo diferente.

Pero no voy a discutir al respecto porque no quiero que se malinterprete mi posición.

Ahora, si la Comisión entiende que lo propuesto es una alteración del método D'Hondt, que no es, no tengo inconveniente en retirar las indicaciones para entrar a debate acerca del tema de fondo, que es una fórmula más fácil de avanzar.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En realidad, ya no se puede retirar la indicación pues la votación está en curso.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

El señor BIANCHI.-

He pedido la palabra, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Perdón, señor Senador.

Con la confusión que se armó, no me di cuenta.

Tiene la palabra, Su Señoría.

El señor BIANCHI.-

Señora Presidenta, hace rato solicité intervenir para dar mi opinión sobre estas indicaciones renovadas, que obviamente rechazo. Deseo dejar constancia que por qué me pronuncio en contra.

La razón es la misma por la que voté negativamente lo relativo al N+1: pienso que afecta a quienes somos independientes. Por tanto, debe haber un cambio.

Yo quiero eliminar el sistema binominal. Como ya señalé, voy a rechazar estas indicaciones y a respaldar el sistema D'Hondt. Así habrá un mecanismo distinto del binominal.

Voto en contra.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Le pido disculpas nuevamente, señor Senador. Con la confusión, no vi que estaba inscrito.

El señor BIANCHI.-

Está bien, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se rechazan las indicaciones renovadas 50 y 51 (29 votos en contra, 4 a favor, una abstención y ningún pareo).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Allamand, Araya, Bianchi, Chahuán, De Urresti, Espina, García, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Prokurica, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa la señora Von Baer y los señores Coloma, García-Huidobro y Orpis.

Se abstuvo el señor Hernán Larraín.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Corresponde tratar la indicación renovada número 52, de los Senadores señores Espina y Larraín, que propone un nuevo numeral 11), el cual busca sustituir el artículo 109 bis aprobado en general por los artículos 109 bis y 109 ter, nuevos, cuyo texto consta de dos páginas.

Si Sus Señorías lo desean, la Secretaría puede leerlo.

Esta indicación sustitutiva requiere, para su aprobación, el voto conforme de las tres quintas partes de los Senadores en ejercicio.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Como todos tienen la indicación a la vista, no es necesario que el señor Secretario la lea íntegramente; así nos ahorramos dos páginas de lectura.

Tiene la palabra el Honorable señor Espina, uno de los autores, para explicar la proposición.

El señor PROKURICA.-

¿En qué página del informe comparado se encuentra esta materia?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En ninguna. Se trata de una indicación renovada, señor Senador.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

En la página 26 se halla la norma que esta indicación pretende remplazar.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, este es un aspecto técnico.

Nuestra propuesta la elaboramos sobre la base del sistema que rige para las elecciones municipales.

Las dos fórmulas sugeridas (la nuestra y la del Gobierno) buscan establecer un mecanismo de selección.

Nosotros creemos que los pasos que se deben dar y la forma en que se describen quedan mejor resueltos en nuestra indicación.

Si mal no recuerdo -pueden corregirme los miembros de la Comisión si estoy equivocado-, el Servicio Electoral consideró que nuestra proposición reproducía de forma más exacta y técnicamente mejor la realidad del nuevo sistema que la indicación del Ejecutivo.

Me acuerdo de que la Subdirectora del SERVEL dijo que le parecía mejor redactada nuestra indicación -la Secretaría de la Comisión podrá corroborarlo -, porque su texto consideraba, paso a paso, los distintos niveles de un sistema complejo para determinar qué candidato resulta electo.

Si el propio Servicio Electoral reconoce que la redacción de la indicación 52 es mejor que la de la proposición del Gobierno, a efectos de contar con una fórmula de selección más clara, transparente y que contemple las distintas hipótesis, pido a los señores Senadores que la aprueben.

La indicación renovada aborda un tema técnico. Pero me quedo con la opinión de la Subdirectora del SERVEL, quien señaló que prefería la redacción de nuestra proposición, dada su mayor claridad al establecer, paso a paso, cómo se determinan los resultados electorales.

Aquí no se trata de una cuestión de capricho ni de una discusión política, sino simplemente de apoyar lo que el propio Servicio Electoral recomienda como la mejor opción para asegurar un buen sistema de decisión, basado en la experiencia de las elecciones municipales y, también, en la de cores, que son los procesos que se han realizado con una fórmula proporcional.

Esa es la razón por la que queremos una mejor ley en este punto y por la que presentamos esta indicación, respecto de la cual recuerdo perfectamente -vuelvo a repetirlo- que el SERVEL consideró que era la mejor descripción sobre la materia.

Simplemente eso.

Los miembros de la Comisión y el Secretario a cargo de esta recordarán lo que estoy señalando.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Si le pareciera a la Sala, abriríamos la votación, y quien quiera puede fundar su voto.

¿Está de acuerdo, Senador señor Larraín?

El señor LARRAÍN.-

Quería explicar la indicación antes de fundamentar mi voto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Puede hacer uso de la palabra.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, efectivamente se trata de un problema técnico que probablemente resulta complejo de entender, en particular a esta hora de la noche y después de este largo debate. Pero no por eso es algo sin importancia.

La indicación que presentamos recoge la experiencia que se adquirió con el cambio de la forma en que el Tribunal Calificador de Elecciones debía efectuar su labor e ir determinando los procedimientos luego de la aplicación de estas normas en las elecciones municipales y de cores.

Tal como manifestó el Senador Alberto Espina, respecto del mecanismo que planteamos se señala textualmente en el informe: "La Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera consignó que la indicación de los Honorables Senadores señores Espina y Larraín clarifica la forma en que el Tribunal Calificador de Elecciones pueda realizar su trabajo, desde el punto de vista técnico.".

Lo que ocurre es que, si ustedes miran la indicación, se van a dar cuenta de que preparamos la secuencia siguiendo paso a paso cómo deberían ser los métodos para ir definiendo qué candidatos deben ser elegidos según los votos que correspondan por listas y otras diferentes subdistinciones interiores.

Y se estima que la indicación del Ejecutivo, por la forma como aborda ese proceso, es equívoca, conduce a error.

Como era un problema técnico, se intentó buscar una sola fórmula. Pero, por razones que nunca pudimos entender, en la Comisión no se llegó a acuerdo sobre el particular, lo que habría sido deseable, pues reitero que se trata de una cuestión técnica.

Pero, precisamente por la sugerencia del Servicio Electoral, creemos que la experiencia demuestra que los caminos planteados en el texto aprobado en general se van a prestar a errores de interpretación en el Tribunal Calificador de Elecciones. Ello, porque no siguen la secuencia ordenada en la metodología presentada en nuestra indicación, que consideramos más adecuada.

Además, hay otros temas, quizá menores, que nos diferencian. En caso de empate, el texto del Ejecutivo señala que se resuelve por sorteo, mientras que en nuestra indicación se dirime, primero, a favor del candidato que alcance más votos en la elección, ya que puede haber dos personas elegidas por subpactos distintos.

Repito: en el texto aprobado en general se va a sorteo y en nuestra indicación se ve dentro del subpacto quién obtuvo más votos. Por eso, creemos que tiene, incluso desde el punto de vista democrático, un efecto de mayor consecuencia.

Por tales consideraciones, pensamos insistir en esta indicación; por eso la hemos renovado.

Está fundada en el sistema D'Hondt, pues es el que más se aplica en las elecciones municipales y de cores.

Ese método también está considerado en el sistema electoral binominal, pero de forma distinta. Porque se aplica cuando hay listas de varios candidatos. Y en la metodología para ir definiendo los candidatos elegidos también se computaba siguiendo el D'Hondt, pero no en forma completa, porque esta metodología supone sistemas con mayores candidatos, lo cual es más propio de los sistemas proporcionales que de los mayoritarios.

Existen muchos métodos electorales para hacer los cálculos. En Chile en general se ha seguido en este tipo de situaciones el D'Hondt, que inspira nuestra propuesta.

Por todo lo anterior, señora Presidenta, creemos conveniente aprobar esta indicación renovada, en especial si se considera la opinión del SERVEL. Es técnicamente mejor, más clarificadora y ayuda al Servicio Electoral a tomar una mejor definición.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Vamos a abrir la votación, sin perjuicio de que se fundamente el voto.

El señor COLOMA.-

¿Pero por qué?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Porque así se acordó.

El señor COLOMA.-

¡Pero si estamos debatiendo!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Su Señoría quiere más debate?

El señor COLOMA.-

Sí.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Habíamos acordado abrir la votación, pero el Senador señor Larraín me pidió explicar la indicación -ya lo había hecho el Honorable señor Espina- y le di la oportunidad porque me pareció justo.

Por eso, a mi entender, ya correspondía abrir la votación.

El señor COLOMA.-

Eso ocurre una vez terminado el debate, señora Presidenta.

El señor LETELIER.-

Cuando dijeron "en votación" el Senador Coloma no estaba en la Sala.

El señor COLOMA.-

Sí estaba.

El señor LETELIER.-

Ya se tomó la decisión.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En verdad, Su Señoría, cuando hablé de abrir la votación el Senador señor Larraín pidió intervenir "antes de". Pero yo entendí que habíamos acordado iniciar la votación inmediatamente después.

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Si lo señaló, señora Presidenta, no voy a poner objeción. Pero quiero dejar claro, para que no nos equivoquemos de aquí para adelante, que la votación se abre cuando se termina el debate, a menos que haya unanimidad para iniciarla. Y yo no la voy a dar.

Si ya se había dicho "en votación" y la Mesa considera que no hubo una reacción rápida de nuestra parte, se lo concedo y estamos Okay. Pero que por lo menos quede establecido que la votación se inicia cuando termina el debate, a menos que haya unanimidad para comenzarla.

Y deseo manifestar que no voy a dar la unanimidad después de esta situación en que había pedido la palabra para participar en el debate.

No voy a discutir el tema, pero al menos dejo clara mi posición.

Gracias.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Está bien eso, señor Senador. Pero cuando expresé que se abría la votación no hubo ninguna objeción y ahí el Honorable señor Larraín pidió intervenir. Y le di la palabra precisamente por ser uno de los autores de la indicación.

Dejo en claro que yo entendí que había acuerdo.

Muy bien.

En votación la indicación 52.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La indicación renovada número 52 requiere quórum de tres quintos de los Senadores en ejercicio.

Quienes estén de acuerdo con ella votan que sí; los que estén en desacuerdo, que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Prokurica.

El señor PROKURICA.-

Señora Presidenta, uno puede ser partidario de uno u otro sistema. Pero lo que no puede hacer es decirle a la opinión pública que este sistema produce un efecto que no produce.

De hecho, votaré a favor de esta indicación, porque considero que perfecciona de alguna manera el texto original del proyecto del Gobierno.

Pero quiero advertir que el sistema que estamos votando va a ser objeto exactamente de la misma crítica -incluso, puede agravarla- que se le hizo por mucho tiempo al binominal: que mediante él pueden salir elegidos candidatos con menos votos que otros. Así de simple.

Eso ocurrirá.

Es más: voy a poner el ejemplo de los candidatos independientes a concejales, porque este sistema es exactamente igual al que se usa para la elección municipal.

Con este método de elección los resultados son los siguientes: en 2004 se eligieron 532 concejales independientes; en 2008, 203; en 2012, 134.

Lo que ocurre con este sistema es que los independientes electos empiezan a desaparecer.

En el caso de los que postularon fuera de pacto, en 2004 se eligieron 20; en 2008, 12, y en 2012, 5.

En el caso de los cores, que fueron elegidos por primera vez, hubo un solo independiente en todo el país.

O sea, en el sistema que se pretende aprobar los independientes no tienen cabida.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra la Senadora señora Von Baer.

La señora VON BAER.-

Señora Presidenta, creo que se debe mirar esta indicación de la misma forma que la anterior.

Lo que manifestó el Senador Espina es correcto: técnicamente, la indicación renovada es mejor que la norma propuesta por el Gobierno.

Sin embargo, genera un cambio que va a empeorar la situación actual. Una de las críticas que se le hacen al binominal -no solo por lo que señaló el Senador Prokurica, que es correcto- es que es un sistema que no siempre permite que gane el candidato que obtiene más votos. Y eso pasa porque es un sistema de listas. Por lo tanto, primero se suman los votos de la lista y luego los cupos se reparten según la lista.

Entonces, un candidato independiente puede ir por fuera de una lista, por ejemplo, y obtener más votos que otro que vaya dentro de ella. O puede pasar que un candidato que esté en una lista con un compañero más débil reciba más votos que el candidato que finalmente termina ganando porque su lista obtuvo más preferencias.

Todo ello hace que la gente no entienda cómo se traducen los votos en escaños. Y eso mismo ocurre hoy día con el binominal. Porque este sistema es el menos mayoritario de los proporcionales, pero tiene lógica de sistema proporcional, pues se reparte por D´Hondt y ofrece dos escaños y no uno como el uninominal.

Una de las críticas que recibe el binominal es que en él no resulta elegido quien tiene más sufragios. Bueno, esto ahora va a ser peor. Porque no solamente seguirá ocurriendo lo mismo que hoy día, que no gana necesariamente el candidato más votado, sino que la situación se va a agravar. Porque, como probablemente vamos a tener listas con muchos candidatos, incluso pueden salir elegidos dos candidatos de una lista y que ambos obtengan menos votos que los de otras listas.

¡Ahí sí que la gente no va a entender nada!

Entonces, ¿qué pasa? Que este no es el camino correcto.

Aquí se dice: "Quienes están votando en contra están a favor del binominal".

¿Saben lo que ocurre? Que uno puede estar a favor de otro sistema, que nadie más apoya en la Sala: el sistema uninominal, que es aún más mayoritario, que genera más competencia, que claramente traduce los votos en escaños, y que a mi juicio funciona mejor con el sistema presidencial.

Pero, en fin. Es algo que no tiene mayoría.

Como sea, establecer un método que profundice el sistema de lista, incluso con más candidatos, con mayor número de parlamentarios y con más cupos, no creo que sea el camino. Porque no ganará necesariamente el que tenga más votos, lo cual va a disminuir la competencia electoral. Y yo estimo que los sistemas proporcionales, mientras más proporcionales sean, peor efecto tienen para la gobernabilidad dentro de un sistema presidencial. Sobre el particular se ha escrito mucho, especialmente, en Latinoamérica.

Así que, señor Presidente, no estoy de acuerdo con ninguna de las dos alternativas, porque no me parece que debamos avanzar en esta línea.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señor Presidente, efectivamente, la redacción de ambos textos fue hecha por técnicos, en un caso, del Ejecutivo y, en el otro, de los Centros de Estudios de la Oposición.

Sin embargo, más allá de la discusión técnica, las indicaciones no son similares. Por de pronto, la norma que se aprobó en general, que fue redactada por el Ejecutivo, plantea como solución, en caso de empate entre candidatos de una misma lista, que el Tribunal Calificador de Elecciones proceda, en audiencia pública, a efectuar un sorteo. En cambio, la indicación número 52, presentada por los Senadores señores Espina y Larraín, postula que si dentro de una misma lista, para ocupar un cargo con igual derecho, hay dos o más candidatos, resulta elegido el que haya obtenido el mayor número de preferencias individuales.

Es decir, cuando existe empate, la solución que plantean ambas indicaciones es distinta.

Yo no soy experto electoral, pero en la Comisión tuvimos la preocupación de invitar a personas que dominan esta materia. Concurrieron el Profesor Tomás Duval, quien nos explicó latamente la indicación de la Oposición, y también el Diputado Pepe Auth, que maneja muy bien estos temas.

Y surgió este punto como la principal diferencia.

Es cierto que la señora Subdirectora del Servicio Electoral señaló que prefería la indicación número 52. Dijo, textualmente, que "las dos alternativas propuestas llevan al mismo resultado, ya que corresponde al mismo sistema con una forma de redacción distinta". Y, según señala el informe, "Mostró su inclinación por la indicación porque pormenoriza el trabajo a realizar por el Tribunal Calificador de Elecciones".

Es decir, se inclina por la redacción de la indicación no por un elemento de carácter técnico, sino solo porque podría pormenorizar el trabajo del TRICEL.

En consecuencia, dada la explicación de los técnicos, los miembros de la Comisión, por mayoría, aprobamos el texto del Ejecutivo, toda vez que se trata de un elemento técnico y que tiene esta diferencia en cómo dirimir los resultados en caso de empate, y rechazamos, por tanto, la indicación presentada por los Senadores Espina y Larraín.

He dicho.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador señor Hernán Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señor Presidente, seré muy breve, porque ya expliqué un poco el sentido de la indicación que hemos presentado.

En esta ocasión, deseo referirme a dos temas que se han mencionado recientemente.

Al primero de ellos ya aludió el Senador Prokurica, cuando señaló que esto iba a mantener el problema o la crítica que se le hace al sistema binominal en el sentido de que resultan elegidas personas con menos votos que otras. Y algunos hablan de los Diputados o Senadores "binominales" para designar a los que fueron elegidos así.

Sin embargo, esa es una expresión de desconocimiento de lo que implica esta situación. Ocurre que, por la aplicación de los sistemas de lista que se calculan con el método D'Hondt, una lista de personas que tengan votos divididos puede juntar una mayor cantidad de votos que otra lista que incluye menos candidatos, pero que tiene alguno con más votos que los de la otra lista.

Y, obviamente, en un sistema de lista, en los cómputos, elige la lista que recibe mayor cantidad de votos. Y, dentro de ella, aquel que tenga más sufragios que el otro.

Por lo tanto, puede darse la misma situación que se da en el sistema binominal, porque el cálculo aplica -como decía yo anteriormente- el método D'Hondt.

Ocurre lo mismo en las elecciones a concejales, en que de repente hay quienes resultan elegidos arrastrados por otro que obtiene una gran votación, y se pierden candidatos que logran más votos que el electo en definitiva. A lo mejor, uno sale elegido con 10 votos y otro tenía 500 o mil. Se producen esas situaciones.

Con el sistema que estamos aprobando va a ocurrir exactamente lo mismo. Y se va a demostrar que este efecto de lista no tiene nada que ver con el binominal, contrariamente a lo que algunos equivocadamente sostienen. Yo he oído decir: "Ahora se va a terminar este problema". No. Va a seguir exactamente igual, porque no tiene nada que ver con el binominal, sino con un sistema que está fundado en lista y que se calcula con métodos electorales como el D'Hondt, que prefiere esta situación.

Bueno o malo, es lo que hay. Es lo que tenemos y lo que hemos aprobado.

No está ahí la diferencia entre ambas alternativas, que plantean lo mismo. Por lo tanto, el efecto a que alude el Senador Prokurica se va a preservar en el nuevo sistema.

Y yo creo que es muy importante señalarlo, porque muchos han dicho que una de las razones por las cuales prefieren el sistema propuesto es que va a acabar con ese efecto perverso. ¡No se va a acabar! Se mantiene, porque no tiene que ver con el binominal.

Por otra parte, está nuestro sistema. Y, efectivamente, hay diferencias.

El Senador Harboe destacaba una diferencia entre la indicación nuestra y lo que aprobó la Comisión: que en caso de empate, el sistema que viene en el proyecto resuelve por sorteo, en circunstancias de que puede haber, entre dos personas que tienen en la misma lista el derecho a participar, una que ha obtenido más votos. Y a mí me parece mejor que se pueda aplicar, antes del sorteo -porque cabe la posibilidad de que incluso dentro de una misma lista dos candidatos tengan la misma votación y haya que elegir entre uno de ellos-, el sistema más democrático, que es el de la elección.

Por lo tanto, creo yo que hay en eso una ventaja mayor.

Ahora, respecto a la opinión del SERVEL, tiene razón el Senador Harboe cuando señala que la Subdirectora, después de haber dicho -lo había expresado primero- que prefería nuestra indicación, tras ser consultada en la Comisión "recalcó que las dos alternativas propuestas llevan al mismo resultado, ya que corresponde al mismo sistema con una forma de redacción distinta.". Y el informe agrega a continuación (esto no lo leyó el colega Harboe): "Mostró su inclinación por la indicación porque pormenoriza el trabajo a realizar por el Tribunal Calificador de Elecciones.".

Lo que hace la diferencia es precisamente eso.

La indicación que presentamos, que fue redactada por expertos en la materia, está basada en las experiencias habidas en la aplicación de este mismo método en las elecciones municipales y de cores. Dichos especialistas recogieron tales experiencias y redactaron paso a paso la forma como debe operar el Tribunal. Si Sus Señorías leen nuestra indicación, verán que refleja eso claramente. Y por ello la representante del SERVEL dijo que era mejor y que iba a permitir un trabajo más pormenorizado del Tribunal Calificador de Elecciones.

Si esa es la opinión de una experta y si existen otras ventajas, parece razonable, entonces, aprobar nuestra indicación.

Voto que sí.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señor Presidente, esta materia, desde mi perspectiva, no es solo técnica: tiene además una connotación política.

Por consiguiente, yo no entro en la lógica de que se trata de un problema únicamente de expertos: aquí hay envueltas definiciones políticas, de las que quiero hacerme cargo.

En primer lugar, coincido plenamente con lo que plantearon los colegas Prokurica y Von Baer, y también con la referencia hecha por el Senador Larraín, en el sentido de que toda la lógica de establecer un sistema para corregir problemas del anterior no tiene otro propósito que lograr un efecto comunicacional, el que en último término, a mi juicio, no se va a conseguir.

¿Cuál era uno de los reclamos más persistentes y extendidos de la gente contra el binominal? Que en determinadas situaciones no se elegía al segundo -y el caso se usaba mucho- sino al tercero si quien llegaba primero sacaba muchos votos y lo arrastraba, lo cual generaba distorsiones que provocaban molestia en la ciudadanía.

Se ha explicado cómo va a agudizarse ahora la situación, porque, tal como dijo el colega Larraín, ese problema no es del sistema binominal sino del proporcional, cuyo efecto resulta bastante menor en la medida que es más mayoritario; o sea, a medida que se amplía da lugar a muchas más distorsiones si en vez del segundo se elige no solo al tercero sino además al cuarto, al quinto, al sexto, al séptimo o al octavo, según los cupos del distrito. En algunos casos, por efecto de las listas, se elegirá a personas que hayan obtenido el lugar 16, 17, 18, con uno por ciento de los votos, como ha ocurrido, según explicaba yo anteriormente, en las elecciones municipales.

Paradójicamente, los defectos del binominal se van a generalizar, y será más importante, por ende, ir bien acompañado en una lista que presentar una candidatura particular, que es uno de los elementos naturales del referido sistema.

Entonces -quiero dejarlo claro-, si alguien cree que con un D'Hondt corregido -lo otro seguía siendo D'Hondt-, que con este nuevo esquema de fortalecimiento de las listas se va a mejorar la distorsión alegada, quiero darle una mala noticia: gran cantidad de postulantes que hayan obtenido altas votaciones no van a ser electos. Ello, básicamente por un efecto que Sus Señorías entenderán: el de la proporcionalidad extensiva del sistema. Y si alguien lo duda, puede hacer una proyección del mecanismo aplicado para elegir a los concejales, en que se produce precisamente esa diferencia tan abrupta.

El segundo punto, señor Presidente, se vincula con la otra opción que tuvo el Gobierno -si la hubiera tomado me habría parecido bastante más razonable; y también podría haber servido para corregir las eventuales perversidades del binominal-: gana quien consigue más votos. Estoy seguro de que eso habría tenido un sentido de justicia harto mayor y habría sido más comprendido en la lógica de validar la política. Era supersimple. Y habría permitido corregir lo que tanto se critica: que 33 y 66 son equivalentes.

Con mucho mayor razón la elección de las dos primeras mayorías podría proyectarse en el nuevo sistema, que permite elegir en la forma que explicité. Sería un cambio sustancial.

Señora Presidenta, más allá de determinarse cuál de los dos esquemas es mejor -yo pienso que es mejor la indicación de los Senadores Larraín y Espina-, se agudiza el problema y no se innova en la materia.

Hubo la gran oportunidad de decirle a la gente "Ganan los que sacan más votos". Pero se optó por depender de la lista. Y eso, a mi juicio, constituye un error.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Bianchi.

El señor BIANCHI.-

Señora Presidenta, a lo largo de esta prolongada discusión ha quedado demostradísimo que, en el fondo, el proyecto que se nos propuso está hecho, ideado, pensado para, por un lado, fortalecer las actuales estructuras de los partidos políticos, y por otro, desfavorecer completamente a los independientes y extinguirlos.

A los efectos de que conste en la historia de la ley, quiero señalar que durante los años que llevo como Senador he hecho dos o tres presentaciones para establecer algo que parece de toda lógica y que nadie se ha atrevido a discutir en las Comisiones especializadas, donde los proyectos respectivos duermen -ellas apunta a lo que han planteado varios Senadores y Senadoras-: que estén en el Congreso Nacional quienes saquen más votos, y punto; que lleguen al Senado y a la Cámara de Diputados los candidatos que obtengan la mayor votación, las primeras mayorías.

Lo que ocurre, señora Presidenta, es que no se desea eso: no se atreven. No ha habido en nadie que esté hoy en las distintas Comisiones que debieron abocarse a esta situación el ánimo de defender o llevar adelante¿

¡Es imposible hablar, señora Presidenta!

Con mucho respeto, pido que se me permita desarrollar mis ideas.

Muchas gracias.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene toda la razón, señor Senador.

Les ruego a Sus Señorías no conversar mientras interviene el Honorable señor Bianchi.

Prosiga, señor Senador.

El señor BIANCHI.-

Sé que ya es muy tarde y que todos deseamos avanzar el máximo posible, pero reclamo mi derecho.

Señora Presidenta, decía que no ha habido ningún interés en defender o sacar adelante el proyecto que postula, simplemente, que se sienten en este Hemiciclo, y también en el de la Cámara Baja, quienes obtengan las primeras mayorías. Y se buscan fórmulas: el sistema D'Hondt, en fin.

Yo estoy por cambiar el binominal. Y por eso mi disposición a aceptar la fórmula que entregó el Gobierno: mala, buena, más o menos; da lo mismo. Pero he presentado indicaciones -y lo pongo de manifiesto-, incluso en esta iniciativa -obviamente, la Comisión las rechazó-, mediante las cuales propongo lo que piden todos los chilenos: que en el Congreso Nacional estén quienes deben estar: los candidatos que obtengan las primeras mayorías. Ello, en vez de esta cosa disfrazada, que permitirá que lleguen al Parlamento, probablemente, postulantes que serán arrastrados dentro de las listas.

Porque hoy, señora Presidenta, estamos votando para que haya un sistema de listas, no para que en el Congreso Nacional estén las primeras mayorías. Estamos votando, pues, para que en una lista, con la suma de todos los votos, algunos sean arrastrados y tengan representación en el Parlamento.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Allamand.

El señor ALLAMAND.-

Señora Presidenta, un solo comentario con relación al argumento de que hacía mención el Presidente de la Comisión, Senador Harboe.

A mi entender, todos estamos de acuerdo en que, si hay algo que debe preservarse -y ha sido desde siempre una de las características notables de nuestro sistema electoral-, es la forma como el Servicio Electoral formula -por así decirlo- el cálculo correspondiente para aplicar el sistema D'Hondt. Eso nadie lo discute. Se podrá ver quién ganó, quién no ganó; hay recuento de votos. Pero hasta ahora por lo menos yo no tengo recuerdo de que alguien haya dicho "Este cálculo se ejecutó de mala manera".

Pues bien, hay dos indicaciones, y respecto de una de ellas el propio Servicio Electoral sostiene: "Aquí está mejor pormenorizado cómo debe aplicarse la fórmula".

En esta materia, señora Presidenta, ¡la pormenorización hace toda la diferencia!

Entonces, si el propio SERVEL nos está diciendo "Ojo: hay dos formas para hacer el cálculo del D'Hondt; las dos apuntan a lo mismo," (no podría ser de otra forma, porque ambas pretenden materializar dicho sistema) "pero una pormenoriza mucho mejor cómo debe ser el cálculo", ¡qué razón hay para no escuchar esa advertencia!

Si con motivo de esta norma se produce un problema reglamentario y, por ejemplo, se comienza a cuestionar que el SERVEL no efectuó adecuadamente los cálculos, se le hará un reproche al Senado: ¡Pero si el Servicio Electoral advirtió esto!

Yo no entro a las consideraciones generales efectuadas sobre la indicación. Pero esta es una cuestión de sentido común.

Si hay algo que cuidar durante la implementación de un sistema es su pormenorización adecuada.

El Servicio Electoral -insisto- ha dicho con todas sus letras: "Ojo: aquí hay dos indicaciones que apuntan a lo mismo; no difieren sustantivamente, pero una clarifica mejor que la otra".

¡Cómo no va a ser razonable, entonces, recoger eso!

Yo llamo a mis colegas de la Oposición a que en este punto no incurramos en un error absolutamente no forzado.

El propio Servicio Electoral -reitero- le está diciendo al Senado: "Hay una fórmula que pormenoriza mejor; en consecuencia, es más fácil, es más transparente, va a generar menos inconvenientes".

¡Qué razón hay para no hacerle caso! ¡Qué argumento existe para no escucharlo!

En esta materia, y siguiendo la explicación que dio el Presidente de la Comisión, opino que deberíamos aceptar la indicación que recoge el pensamiento del SERVEL y no, sin haberse aducido ninguna razón para ello, mantener la posición opuesta, pues esto carece de sentido.

Si no hay diferencias fundamentales y el propio SERVEL sostiene que una indicación pormenoriza mejor que la otra, creo que todos deberíamos recoger el criterio de dicho Servicio.

Esa es mi invitación, señora Presidenta.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se rechaza la indicación renovada número 52 (22 votos contra 10 y una abstención).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic y Muñoz y los señores Araya, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa la señora Von Baer y los señores Allamand, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

Se abstuvo la señora Lily Pérez.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Hay que votar el precepto que el Senado aprobó en general.

Podríamos repetir la votación.

No hay acuerdo.

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

En la segunda columna del comparado figura el artículo 109 bis aprobado en general por el Senado a los fines de sustituir el precepto vigente. Para su aprobación se requieren tres quintos de los Senadores en ejercicio.

Quienes están de acuerdo con dicha norma votan que sí, y quienes la rechazan, que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación el artículo 109 bis de remplazo.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra la Senadora señora Von Baer.

La señora VON BAER.-

Señora Presidenta, yo quiero explicar la votación.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Ya está abierta, Su Señoría.

La señora VON BAER.-

En la primera votación que efectuamos sobre esta parte del proyecto había una indicación para suprimir la proposición del Gobierno. Y yo la aprobé, pues no estoy de acuerdo en que exista un sistema más proporcional que el actual, ya que la proliferación de partidos políticos y el efecto de un sistema más proporcional no permiten una buena gobernabilidad en el sistema presidencial.

Es lo mismo que argumenté a propósito de la indicación de los Senadores Espina y Larraín, a la que le di mi aprobación por considerar que era mejor que la del Gobierno y contribuía al funcionamiento adecuado del sistema.

Empero, siendo consistente con mi votación anterior, voy a votar en contra de la indicación del Gobierno, pues no avanza en la dirección correcta al propiciar un mecanismo que significará proliferación de partidos y probablemente, a la larga, la pérdida de las coaliciones que le dan gobernabilidad a nuestro sistema político.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Por favor, señor Secretario, explique lo que estamos votando.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Se está votando el artículo 109 bis de remplazo que, mediante el número 11) del proyecto, el Senado aprobó en general (páginas 26 a 29). El quórum de aprobación es de 23 Senadores en ejercicio.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Está inscrito para fundamentar su voto el Honorable señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, nosotros nos vamos a abstener en esta norma. Y quiero dejar constancia de la responsabilidad que en esta materia va a tener el Ministerio del Interior.

Nosotros formulamos una propuesta para corregir los problemas que se presentan no solo en el Servicio Electoral sino también en el Tribunal Calificador cada vez que hay una elección. Y eso ha derivado en muchas presentaciones al TRICEL.

Hemos tenido la paciencia de hacer un trabajo precisamente para darle mayor transparencia al sistema electoral.

Alguien dirá que nuestra posición perjudica al sistema.

Sin embargo, curiosamente, enfrentado a la propuesta del Gobierno y a la realizada por nuestro equipo técnico, el SERVEL, órgano independiente, señaló su parecer en el sentido de que la indicación que presentamos nosotros expresa de mejor manera el mecanismo de selección de los candidatos y resuelve problemas que se han suscitado con el tiempo para elegir a los parlamentarios.

El Ministerio del Interior -quiero dejar constancia de ello- le dijo a cada Senador oficialista que debía aprobar la fórmula del Gobierno no obstante que el Servicio Electoral haya señalado con claridad que nuestra indicación pormenoriza mejor el trabajo a realizar por el Tribunal Calificador de Elecciones. Por consiguiente, cuando durante la aplicación del nuevo sistema se susciten conflictos, la responsabilidad va a ser de dicha Secretaría de Estado.

Nadie ha declarado no concordar con un sistema. No estamos discutiendo la fórmula del régimen proporcional, sino un problema de transparencia respecto de cómo se redacta un mecanismo destinado a seleccionar. Y frente a una discrepancia entre el Gobierno y quienes estudiaron la materia, el SERVEL toma una decisión y dice: "Prefiero lo que presentó la Oposición, porque resuelve"...

El señor LETELIER.-

¡Eso ya lo escuchamos!

El señor ESPINA.-

Señor Senador, nunca lo interrumpo. ¡Con gritos y a lo barrabrava, no caminamos¿!

El señor LETELIER.-

¡Los mismos argumentos de siempre!

El señor ESPINA.-

¡Los expondré las veces que se me ocurra! ¡No estoy sentado en esta banca por el favor de usted, sino porque me gané mis votos!

El señor LETELIER.-

¡También el Senador que habla!

El señor ESPINA.-

¡Entonces, cállese mientras intervengo y sea respetuoso!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

No se aceptarán las interrupciones,¿

El señor ESPINA.-

Ellas han corrido a cuenta del señor Senador.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿pero es necesario cuidar el lenguaje.

El señor ESPINA.-

Por mi parte, no lo he interrumpido jamás, ni tampoco le he faltado el respeto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Puede proseguir, Su Señoría.

El señor ESPINA.-

Deseo consignar, señora Presidenta, que nos encontramos abocados a una discusión que no es menor, porque si por algo tenemos que velar es la forma como en nuestro país se evita que no exista claridad cuando se trata de elegir un candidato. Y el Servicio Electoral expresó que nuestra fórmula aclara aspectos que han generado dificultades en el Tribunal Calificador de Elecciones con motivo de la interpretación en la materia.

Ahora se está escogiendo otra fórmula, respecto de la cual el propio SERVEL ha señalado que no es la que presenta mayor pormenorización y detalle. En el segundo informe de la Comisión de Constitución se incluye expresado por la Subdirectora del Servicio Electoral, señora Elizabeth Cabrera. Ello ya lo citó reiteradamente el Honorable señor Larraín.

Simplemente deseo subrayar que, cuando surjan dificultades, el señor Ministro del Interior será el responsable por no haber querido ceder en nada.

El problema no dice relación con un simple capricho. Un Gobierno tiene que buscar el mejor sistema. Deseo preguntarle al titular de la Cartera por qué resolvió decirles a todos sus parlamentarios que no aprueben la fórmula hacia la cual el propio Servicio Electoral se inclina porque "pormenoriza el trabajo a realizar por el Tribunal Calificador de Elecciones" de mejor manera.

Ya no estamos frente a un debate sobre la política, sino en cuanto a la transparencia en el mecanismo de conteo de votos en una elección.

Por esa razón, nos abstendremos.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Allamand.

El señor ALLAMAND.-

Señora Presidenta, francamente no puedo comprender la lógica de las bancadas de Gobierno. Se quejan de que al formular una argumentación supuestamente se pretende dilatar, en circunstancias de que el asunto en debate se podría haber resuelto hace muchos minutos si hubiera mediado un mínimo de consideración por algo de sentido común. Lo que estamos pidiendo es simplemente que, frente a una cuestión técnica, sigamos el consejo del Servicio Electoral.

Por otra parte, tengo la impresión de que estamos llegando a un extremo en que el Ejecutivo no cumple con una mínima condición de deferencia hacia el debate en el Congreso. ¿En qué consiste la discusión en nuestro ámbito? En que los parlamentarios pueden exponer sus argumentos y la mayoría ciertamente puede rechazarlos. Mas se debe mantener con el Senado una consideración que significa hacerse cargo de los comentarios y razonamientos que se formulan.

Se está sentando una forma de debatir que en esta Corporación no existía. ¿Cuál es? Que el Ejecutivo, arropado en una mayoría ocasional, estima que no debe hacerse cargo de ningún planteamiento. Entonces, se deja en evidencia un error, pero el diálogo de sordos se materializa, sencillamente.

El Honorable señor Navarro asimismo representa la existencia de una norma incongruente: no se expresa observación alguna para hacerse cargo del aporte.

Si esa es la lógica que el Gobierno de la Nueva Mayoría quiere imponer respecto del debate parlamentario, cabe subrayar que no tiene precedentes.

Lo único que estamos pidiendo es que, cuando se formula un argumento -en este caso, avalado en la opinión técnica del SERVEL-, se tenga una mínima deferencia con el Congreso Nacional y el Ejecutivo diga qué razón existe para rechazar algo a todas luces razonable.

¿Cómo vamos a dejar sentado el precedente de que el debate parlamentario consiste en que se mira al techo cuando se expresa una observación?

¡Esa es una falta de deferencia hacia el Senado!

Si se institucionaliza esta forma de debatir, estaremos causando un tremendo daño. ¿Porque qué estamos dejando establecido? Que un Gobierno que cuenta con mayoría ni siquiera se hace cargo de los aportes que se le dirigen.

¡Cómo va a ser eso razonable! ¡Los Senadores de las bancadas de enfrente han sido Oposición! ¡Cómo van a validar esta forma de proceder!

Señora Presidenta, nos hallamos ante algo que está mal, que es incorrecto, que nada tiene que ver con la tradición de la Corporación, que degrada el debate parlamentario y que es poco deferente con nuestra institución. En consecuencia, con todo respeto, la insto a colaborar para resolver la situación, porque, si no, el precedente para los futuros debates será que, cualquiera que sea el planteamiento, el Ejecutivo puede mantener un hermético silencio, en circunstancias de que lo único que se le pide es manifestar una opinión, ya sea a favor o en contra.

Estamos solicitando el mínimo de deferencia democrática hacia el Senado: que, cuando medie un aporte, el Ejecutivo se haga cargo, dé a conocer su punto de vista y exponga sus argumentos, y posteriormente se vote.

Gracias.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Pizarro.

El señor PIZARRO.-

Señora Presidenta, las dos últimas intervenciones reflejan una cierta soberbia o arrogancia en el sentido de que, o se les da en el gusto a esos colegas y se les hace caso -y eso sería de sentido común-, o no. Por lo tanto, se evita el debate parlamentario y pareciera que los demás Senadores fuéramos monigotes o estuviésemos aquí "de prestado".

Es una falta de respeto hacia la mayoría de la Comisión especializada que discutió largamente el asunto sostener que no puede ejercer una opción técnica legítima que tiene un sentido político porque no se les hace caso a esos colegas y no se acepta la solución que se les ocurrió.

¿Desde cuándo el SERVEL tiene que determinar lo que se decide en el Senado acerca de lo que a ese organismo le facilita la vida para supuestamente cumplir con sus objetivos? ¡Si es esta Corporación la que cuenta con una facultad en la materia! Aquí decidimos sobre la base de un análisis técnico y de una visión política.

A mí no me gusta la arrogancia con que se amenaza al Ministro del Interior o al Gobierno por las posibles consecuencias de la eventual ineficacia o impericia de un servicio técnico.

Menos puedo aceptar que los Senadores participantes en el debate no podamos mayoritariamente tomar una opción.

El Presidente de la Comisión de Constitución fue extraordinariamente claro y la versión que dio sobre la misma opinión del SERVEL es distinta de la expresada por los colegas de Oposición.

¿Desde cuándo este últimos son poseedores de la verdad total y absoluta? ¿Desde cuándo sobrevienen las amenazas si no se les da en el gusto, como niños malcriados?

Uno escucha con atención los argumentos. Y, seguramente, desde el punto de vista técnico, los institutos que les entregan a ellos minutas para redactar las indicaciones, como ocurre en el caso de nosotros o en el del Ejecutivo, estudiarán mucho y tendrán un parecer sobre la materia. Pero de ahí a afirmar que se le falta el respeto al Senado porque no se les escucha o no se les contesta cuando quieren, en la forma que quieren o respecto del tema que quieren, la distancia es muy grande.

Además, es preciso tener cuidado, porque nos encontramos en votación. No puede intervenir nadie más que los Senadores que fundamentan su pronunciamiento.

Entonces, pido un poquito de respeto y de altura de miras. Porque uno tiene que escuchar los argumentos majaderamente -¡majaderamente!- expresados por los colegas de la Oposición, cuya estrategia consiste en dilatar el despacho de la iniciativa, pues se oponen al término del sistema binominal. Y algunos lo han dicho con mayor transparencia, y otros, de manera más camuflada o ambigua.

He escuchado a un colega reclamar majaderamente que el proyecto apunta a la eliminación de los independientes y lanzar una diatriba respecto del rol de las colectividades políticas. Mas estas son instituciones fundamentales en un sistema democrático.

Caer en la caricatura en la que majaderamente se incurre frente a cada indicación me parece que también resulta lesivo.

El Senador que habla podría hacerla al revés y manifestar que hay gente a la que le gustaría que no existieran partidos. Se configuraría, entonces, una verdadera montonera de individualidades, que llegarían acá sin saber bien qué idea de sociedad y qué proyecto colectivo representan.

El Honorable señor Larraín hizo una muy buena intervención en la línea de por qué tiene sentido que en una iniciativa como la que nos ocupa se establezca una lista de candidatos pertenecientes a una colectividad o a una misma idea o visión política de sociedad, en la cual puedan participar varios que sumen los votos que consiguen de los electores y representen una diversidad.

Esa es la diferencia de un proyecto colectivo, respecto de un proyecto individual. Y aquí se respeta a los independientes de la misma manera, obviamente, que las opiniones expresadas a través de los partidos políticos.

Así que no me gusta el tono del debate ni creo que sea bueno a esta altura de la noche insistir majaderamente en que, o se da en el gusto, o la discusión no sirve, o se les falta el respeto a algunos colegas o al Senado. Este último lo somos todos. Y las decisiones son adoptadas de acuerdo con el reglamento. Ojalá concurran acuerdos máximos, y si no, las mayorías democráticamente elegidas, lo que nos ha permitido estar acá.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, me sorprende la intervención que acabo de escuchar.

Además, no sé quién le da el derecho al Senador señor Pizarro -lo conozco hace muchos años- de determinar quiénes son arrogantes y majaderos.

El debate podrá gustar o no, pero ha sido razonado. La discusión del asunto se ha llevado a cabo durante mucho tiempo -es verdad- e involucra aspectos que no tienen solo que ver con el sistema electoral. Se trata de muchos otros elementos. Y lo que se ha planteado es obtener del Ejecutivo alguna explicación que pueda existir.

Agradezco la presencia del señor Ministro del Interior, pero no comprendo mucho su silencio, en la medida en que se ha intentado que participe, que argumente, porque puede mediar un buen motivo para preferir la posición del Ejecutivo, frente a la indicación de los Senadores de Oposición, pero lo desconocemos. Y no se razona, porque se acusa de arrogancia a quien plantea un punto de vista diferente.

Se ha explicado que el SERVEL, por un lado, y los técnicos, por el otro, coinciden en un criterio de más sentido común, de más racionalidad, para el país, no para un sector político. Porque no es cuestión de que sea mejor para un Gobierno u otro, o para la Oposición. ¡Y es preciso escuchar que algunos lo califiquen a uno de comentarista, y otros, de arrogante¿! Y da lo mismo, porque al final se vota sin un fundamento. ¿Cuál es la explicación para argumentar que una posición es mala, frente a otra, que es la buena?

A mi juicio, las bancadas de Oposición han sido extraordinariamente respetuosas en el tono. A algunos podrán no gustarles las razones ni la lógica, pero nadie ha pretendido plantear de un modo arrogante o majadero algo que es de interés público.

¿Cómo no va a ser de interés público la forma en que se eligen -existen diferentes opciones- los parlamentarios? ¿Cómo no va a ser de interés público el rol de los partidos, de los independientes, de los pactos? ¿Qué se requiere para materializar uno de estos acuerdos? ¿Qué se necesita para ser candidato? ¿Cómo se distribuyen -y vamos a verlo después- los distritos? ¿Por qué sectores con menos población eligen más representantes?

Lo anterior obviamente forma parte del interés público. Entonces, si nos estamos encontrando permanentemente con un silencio, no nos digan, ¡por favor!, que somos arrogantes por pedir una explicación. ¿Desde cuándo la arrogancia es sinónima de racionalidad o de un intento de lograrla para no aparecer como dueños de la verdad? Se están buscando respuestas coherentes con el cambio estructural de un modelo, lo que es mucho más importante que simplemente una forma de elegir.

Por eso, me sorprende la intervención de mi Honorable colega Pizarro, la cual origina la pregunta de en qué debate ha estado. No he visto a ningún parlamentario que se haya manifestado en los términos expuestos. Y si no hay razones, si no hay argumentos, que no se descalifique a quién piensa distinto. Si no, es refácil: "No me gustó lo que usted dijo. Es un arrogante"; "No me gustó lo que usted dijo. Es un majadero".

Uno tendrá que formular su planteamiento las veces que sea necesario hasta obtener alguna respuesta. Y si no la hay, bueno, cada cual se someterá a lo que eso significa, desde una perspectiva personal o desde una perspectiva pública, porque se van generando efectos en el debate.

Entonces, la situación es sorprendente. Creo que el silencio no le hace bien a la argumentación. No es posible dar por supuesto, simplemente por votar sí o no, que se tiene o no razón.

Por mi parte, retiré dos indicaciones por estimar que se expresaba una fundamentación y que era mejor actuar de esa manera a originar un malentendido. Uno razona, pero lo hace cuando al otro lado media un intento similar, no simplemente un frontón, una pared, lo que no es la forma de trabajar -por lo menos, la tradicional o histórica- en el Senado. Por eso, hago presentes los inconvenientes de los comentarios.

Voy a manifestarlo con humildad: me gustaría saber, si el señor Ministro del Interior lo tuviere a bien, cuál es el sentido de insistir en una norma que, a todas luces, parece peor que otra que, buscando objetivos similares, parece mejor. No sé si será mucho pedir. Pero es lo mínimo que se puede hacer cuando uno está debatiendo en el Senado.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Puede intervenir el Honorable señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, se ha destacado la necesidad de la coherencia. Con el eventual rechazo de la norma, lo que se hará es dejar vigente un texto que dice relación con el binominal. En consecuencia, es una posición que no presenta ninguna lógica, salvo para aquellos que efectivamente quieren preservar ese mecanismo tal como lo planteó el señor Senador que me antecedió en el uso de la palabra.

Porque, al final del día, y después de varias horas de debate y de veinticinco años de discusión sobre la materia, lo que está detrás y se esconde en intervenciones llenas de adjetivos es la mantención del sistema.

Algunos de los señores Senadores sentados acá fueron elegidos conforme a este último en alguna etapa de su vida y probablemente desean agradecerlo, y, en orden a argumentar en función de la estabilidad política, lo quieren conservar. Ello me parece muy legítimo, mas es preciso transparentarlo. Pero de ahí a tener el derecho a afirmar que lo que algunos de ellos han planteado es lo correcto y no lo del resto, de modo que aprobar una norma que no proponen es un error que le va a hacer mal al país, a mí me parece, primero, de una arrogancia que no corresponde en el Hemiciclo.

En segundo lugar, se han escuchado intervenciones que no tienen nada que ver. Hay aquí gente que no ha leído el proyecto. Se han dado opiniones en el sentido de que el binominal es de tipo mayoritario. ¡Por favor! Se ha argumentado, a propósito de las candidaturas independientes, aspectos relativos a la formación de partidos políticos.

Entonces, al final se va viendo que en cada artículo, en cada número de cada artículo, en cada letra de cada número de cada artículo, se exponen exactamente los mismos argumentos con el objetivo de dilatar la discusión.

Hemos demorado veinticinco años en cambiar el sistema y tardaremos veinte horas más, probablemente, en la tramitación, pero es una obligación ética el ponerle término de una vez por todas y evitar que sigan los empates artificiales que han significado la lejanía del Congreso con la realidad ciudadana. Las grandes transformaciones a las que este último ha estado llamado no las ha verificado, y ello, producto de dicha situación.

Entonces, comprendo que algunos se quieran poner aquí, para la imagen de su sector, como que defendieron el sistema binominal y murieron con las botas puestas.

Está bien, lo tienen que hacer. Pero el daño que se ha provocado al país al alejar al Parlamento de la ciudadanía, al no ser capaz de constituirse en una entidad transformadora, es enorme. Porque hoy se buscan las transformaciones del país, no a través del Congreso Nacional, sino por otros lados.

Creo que aquí tenemos que actuar con coherencia y consistencia. Si quienes han planteado la idea de terminar con el sistema binominal, que corresponden a una parte importante de la Oposición, efectivamente quieren materializarla, van a votar a favor de esta norma. De lo contrario, el proyecto va a quedar completamente incoherente.

En consecuencia, los llamo a actuar de manera seria y responsable; a evitar los adjetivos y, finalmente, pasar al debate de fondo. Vamos a discutir acerca de si les gusta o no la composición de la Cámara de Diputados, del Senado. El tema de las cuotas ya lo debatimos. Está bien. Pero utilizar cada número de cada uno de los artículos para dilatar el despacho de este proyecto no me parece adecuado. Efectivamente, se recurre al ejercicio de una facultad, pero resulta bastante vergonzoso que, tras 25 años de debate, le tengamos que explicar a la gente que seguimos dilatando una discusión que, a mi juicio, debe quedar zanjada hoy, o mañana, o en las próximas 20 horas.

Lo importante, señora Presidenta, en este caso, es aprobar la norma dispuesta por el Ejecutivo, que ya fue acogida en la Comisión de Constitución tras un largo debate. A nuestro juicio, ella no afecta el sistema electoral, sino que, por el contrario, lo beneficia.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Chahuán.

El señor CHAHUÁN.-

Señora Presidenta, no puedo entender.

Hemos discutido largamente acerca de la necesidad de que el principal colegislador de nuestro país, que es el Ejecutivo, finalmente nos dé su opinión respecto de una norma. Es lo que han pedido varios miembros de este Congreso Nacional.

Se valora la presencia de los Ministros de Estado. En este momento, contamos con tres de ellos a los efectos de poder entregar una opinión. ¿Cuánto rato, cuántos debates parlamentarios hemos perdido, simplemente porque el Ministro del Interior no da a conocer la opinión del Ejecutivo con relación a una norma que, a nuestro juicio, puede generar un asunto de responsabilidad? Efectivamente, algunos organismos técnicos señalan que para la operación del sistema D'Hondt es mejor la redacción que han presentado los parlamentarios de nuestro partido.

Quiero decirle al Senador Harboe -por su intermedio, señora Presidenta- que nosotros ni siquiera vamos a votar en contra; nos vamos a abstener.

Pero le quiero pedir al Ejecutivo que no sea silente en esta materia. Y lo digo con todo respeto, sin la arrogancia que denotan algunas expresiones que vienen de enfrente. Conocer la opinión del Ejecutivo (solamente estamos solicitando una opinión) contribuiría a un mejor debate parlamentario. Y creo que para eso vienen los Ministros a la Sala.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Lagos.

El señor LAGOS.-

Señora Presidenta, puedo entender que se quiera ejercer un derecho, dilatar el debate. Y lo han explicado. En las Comisiones de Educación y de Hacienda, unidas, el Senador Coloma fue muy claro; creo que el Senador Larraín también. Hay molestia con el Ejecutivo y con la Nueva Mayoría por el tratamiento de ciertas materias, por cómo se lleva adelante el trabajo legislativo. Y en consecuencia señalan: "Vamos a usar el Reglamento y vamos a dilatar todo lo que sea posible". Lo dijeron: está en actas, está grabado, apareció en el Canal del Senado.

Y no se les puede desconocer ese derecho: está en el Reglamento y es legítimo ejercerlo. Piden un debate razonado. Creo que fue el Senador Coloma quien lo pidió. Yo no tengo dificultad en que haya un debate razonado, pero nadie está obligado a escuchar tres o cuatro veces el mismo argumento elíptico para cumplir los cinco minutos de fundamentación del voto o llenar los treinta minutos de debate hasta que alguno de nosotros pida su clausura. Si creen que eso enaltece la discusión, déjenme decirles que no lo hace. Pero, por último, se estaba actuando en un tono razonable, desde el punto de vista de la forma. Sin embargo, considero que mi muy buen amigo el Senador Espina, con su intervención -no sé si estaba enojado, cansado, o si actuó- logró generar un cuadro malo dentro de ese esquema.

Se manifiesta mucha preocupación por el sistema electoral, mucha preocupación por lo que se le haga al sistema de partidos políticos. Y uno entonces se pregunta si esa misma preocupación la han tenido en todas y en cada una de las circunstancias de sus carreras políticas. Lo digo por la coyuntura que nos toca vivir.

Entonces, uno piensa: "Tal vez no ha habido la misma preocupación en todo momento".

Se plantea acá una inquietud respecto de un informe y respecto de una opinión entregada por el Servicio Electoral. Hacen gárgaras con ese documento. El Servicio Electoral ha pedido más plata, más atribuciones, más control. En el pasado, nada. Los de ese lado, nada. La Derecha chilena, nada. No están por eso.

Hay algunas recomendaciones del SERVEL, como la de incorporar un detalle pormenorizado. A juicio de ustedes, sería correcto. Pero se ha pasado por arriba de lo que sostuvo la mayoría de los miembros de la Comisión.

Volvamos al tema de fondo.

Este proyecto -corríjanme si estoy equivocado- creo que ingresó en abril al Congreso. ¡En abril! Pasaron mayo, junio, julio, agosto, septiembre, octubre, noviembre, diciembre, enero. ¡Nueve meses!

Por lo tanto, me parece que ha habido tiempo para el debate y los razonamientos.

Considero injusto, y además no muy elaborado, sostener: "Queremos la opinión del Ejecutivo, como colegislador". Lo hizo, creo, el Senador Chahuán.

El Ministro del Interior se ha reunido en innumerables oportunidades con las fuerzas de Oposición para llegar a un entendimiento. La última fue hoy día en la mañana. O sea, reuniones, ¡todas!; discusiones, ¡muchísimas!

Hay un partido de enfrente que rechazó la idea de legislar. Toda la UDI votó en contra, salvo el Senador Hernán Larraín. O sea, no querían discutir el proyecto.

Y, en el caso de RN, a su presidente lo dejaron solo con la propuesta de 54 Senadores y no sé qué otro tipo de reformas.

Entonces, ¿hay voluntad para cambiar el sistema? ¡No! Y están en su derecho al decirlo así.

Me pongo en sus zapatos y debe ser muy duro estar presenciando, después de 25 años, el funeral del sistema binominal. Debieron haber pensado: "Parece que tienen los votos y, en consecuencia, se van a aprobar los 155 Diputados y los 50 Senadores". Además, producto de que necesitábamos los votos, llegamos a acuerdo con Amplitud y con Senadores independientes. Pero, en vez de decir "¿Saben qué más? Voy a cruzar; va a haber 155 Diputados y 50 Senadores, pero voy a tratar de tener un proyecto aún mejor", hasta última hora no se hacen cargo ni siquiera de lo comprometido en 1989. Acá hay personas que participaron en esas reuniones, como el Senador Allamand, de las cuales se cumplieron 25 años. Y resulta que ahora reclaman que "no hay debate". ¡Por favor! Han pasado dos décadas y media y hoy tenemos la oportunidad de hacer algo por un sistema político más representativo y de tratar de mejorar nuestra alicaída imagen¿

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Se terminaron sus cinco minutos, señor Senador, y no estoy dando más. Discúlpeme.

Tiene la palabra el Honorable señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, creo que aquí se están extremando las cosas. La pasión y la hora -ya estamos en la madrugada- contribuyen a que se sigan agitando las aguas, en lugar de avanzar con más rapidez en un proyecto que queremos despachar.

Yo quiero referirme a dos aspectos, muy brevemente.

Uno: se le pide al Ministro del Interior que se refiera al tema porque, cuando se discutió la materia en la Comisión, su representante, don Rodrigo González, planteó la tesis de que la hipótesis del Gobierno, no obstante las expresiones técnicas del Servicio Electoral, era mejor que la indicación que nosotros habíamos presentado.

En mi opinión, es importante que el Senado recoja esa inquietud. El Ministro tiene todo el derecho a hablar o no, pero a mí me parece conveniente que lo haga, particularmente a propósito de este punto. ¿Por qué? Porque los otros ya se discutieron y el resultado obedeció a debates realizados entre nosotros mismos. Pero en esta materia, que era muy técnica, y a pesar del esfuerzo de buscar una solución común, fue el Ejecutivo quien planteó que no era razonable, que no se justificaba, en fin -no quiero equivocarme en la palabra-. La cuestión es que no se arribó a algo porque esa fue la voluntad del Gobierno. Y las razones que aquí se han dado no han logrado contradecir la opinión clara y contundente del Servicio Electoral.

Yo entiendo que en muchas materias podamos tener diferencias políticas, porque el sistema electoral genera miradas distintas. Pero esta es una materia técnica.

Y la verdad es que nosotros hemos realizado una labor muy seria. Quienes trabajaron en esta indicación son expertos electorales que estudiaron mucho el tema y, en particular, los efectos complejos que trae para el Tribunal Calificador la aplicación de la norma vigente en lo que respecta a las elecciones municipales y de cores.

De ahí surgió la indicación y, sin embargo, se dice que no.

Entonces, uno se pregunta cuál es el verdadero espíritu de diálogo que hay aquí. Yo entiendo que en algunas materias pueda ser más rígida y más difícil la discusión, por consideraciones políticas. Pero en este otro asunto, que es técnico, ¿por qué no se puede hacer un esfuerzo? ¿Cuál es la razón de fondo? Yo, para ser franco, todavía no entiendo cuál es. Tampoco la entendí en la Comisión,

Por eso es que hemos insistido en esta indicación, porque todos nos dijeron que era mejor. Bueno, yo no me hago responsable de lo que resulte, porque la idea era facilitarle el trabajo al Tribunal Calificador. No se va a poder.

Ese es un aspecto.

El otro, al cual se han referido algunos colegas, como los Senadores Pizarro y Lagos, es que se plantea que, a esta altura de la discusión, nuestros puntos de vista tienen que ver con la voluntad de la Oposición de mantener el sistema binominal. Eso es desinformar a la ciudadanía y faltar a la verdad de lo que estamos tratando de hacer.

Aquí hay voluntad de cambio. Y no solamente en algunos sectores de la Oposición, pues, al final, aunque con diferencias, hemos concordado un planteamiento común. Y el Ministro del Interior y la Ministra Secretaria General de la Presidencia pueden dar fe de haber recibido propuestas concretas para dar paso a un incremento parlamentario bajo un sistema proporcional corregido, porque creemos que lo que estábamos proponiendo era mejor.

El que se está aprobando, el que vamos a pasar a discutir en pocos minutos más, es un muy mal sistema -ya vamos a referirnos a él en su momento-; pero no digan que aquí estamos trabajando para mantener el binominal, porque eso es engañar a la gente.

Ese sistema ya terminó. La pregunta es cómo construimos uno que le sirva al país y no a un sector político determinado. Porque, al final, la impresión con que uno se queda es que aquí se ha faltado al pudor, pues se está buscando un sistema que favorezca a ciertos sectores políticos. Se están regalando cupos o escaños parlamentarios a sectores políticos para lograr su apoyo. Es lo que ha ocurrido con la Cámara, y también con el Senado. Como dije, ya nos referiremos a esto en su momento.

¿Por qué se está planteando una determinada asignación en ciertas regiones? Para favorecer a ciertos sectores políticos de la Nueva Mayoría y no pensando en el bien de Chile.

Entonces, no confundamos a la opinión pública. Aquí no existe interés por mantener el sistema actual; existe la voluntad de construir otro, pero que sea justo para todos. Y el que se propone no lo es.

He dicho.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba el número 11), que sustituye el artículo 109 bis de la ley, conforme al texto aprobado en general (24 votos a favor, 3 votos en contra y 7 abstenciones).

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, Bianchi, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa la señora Von Baer y los señores García-Huidobro y Orpis.

Se abstuvieron los señores Allamand, Chahuán, Coloma, Espina, García, Hernán Larraín y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

A continuación, señores Senadores, en la página 30 del comparado, aparece el número 12), que pasa a ser número 7), sin enmiendas.

No fue objeto de modificaciones en la Comisión, pero a su respecto se han renovado las siguientes indicaciones:

-La número 56, de los Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y la número 57, de los Senadores señores García-Huidobro y Moreira, ambas para suprimir el referido número 12).

-Y las números 58 y 60, para sustituir (con una diferencia formal), en el artículo 178, la palabra "veintiocho" por "treinta". Se refiere a la cantidad de distritos. La diferencia formal consiste en que, mientras la indicación 58 cambia la palabra "veintiocho" -que está en letras- por "30", con número, la indicación 58 la reemplaza también por "treinta", pero con letras.

De consiguiente, la Sala debe pronunciarse primero sobre las indicaciones 56 y 57, que plantean suprimir el número 12).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En discusión.

Tiene la palabra el Senador señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, no cabe duda de que aquí estamos ante uno de los temas centrales y ejes de toda la discusión del sistema electoral y del proyecto que hoy estamos analizando.

Me parece bastante curioso el procedimiento de intentar despachar un articulado de esta naturaleza en una larga sesión, en circunstancias de que los mismos Senadores de la Nueva Mayoría pidieron, en su momento, quince sesiones, ¡quince!, por lo importante que era, para legislar en materia de televisión digital.

O sea, la televisión digital mereció quince sesiones, por la incidencia que iba a tener en la sociedad. Y resulta que todo el cambio del sistema de representación política, por la obsesión que existe en cuanto a despacharlo sin debatir a fondo, se pretende sacarlo en forma exprés. Y se reclama a quienes hacen uso del Reglamento para discutir los diferentes temas.

Esta es la primera cosa absurda de una tramitación absurda, la que, desde mi perspectiva, es el problema matriz, el pecado original de la forma de tratar el proyecto en cuestión. Es distinto que uno pueda haber discutido durante años respecto de los conceptos, porque aquí estamos frente a un proyecto específico.

Lo que hace el Ejecutivo es cambiar el guarismo "sesenta" - digámoslo con franqueza-, eliminándolo y generando la necesidad de reemplazarlo por "veintiocho", para después explicar en qué consiste.

¿Dónde está el tema de fondo? En que -voy a ser práctico- se sube de 120 a 155 el número de Diputados. Es para ese efecto que se establecen los veintiocho distritos.

Este es el primer problema que tenemos que abordar.

En la perspectiva de cambiar el sistema electoral -y en esto me sumo a lo planteado por el Senador Larraín-, nosotros presentamos una indicación para que, en base a la misma cantidad, los 120 Diputados fueran elegidos de una forma distinta. Lo hemos dicho muchas veces: el sistema electoral binominal es una opción -que, a mi juicio, ha logrado éxitos muy importantes-, pero no es la única. Es perfectamente posible cambiar la forma de distribución.

Sin embargo, el problema de fondo es otro.

Aquí el Gobierno está diciendo que cree que parte del problema político es que faltan Diputados (todavía no quiero hacerme cargo de la situación del Senado). Y yo considero que esa primera afirmación es absolutamente equivocada.

Me dicen que ello forma parte de la historia del país.

Les quiero decir -ya lo hice en la discusión general, pero deseo reiterarlo- que en el informe de la Unión Interparlamentaria Mundial se indica que el promedio de representantes en el mundo es de uno por cada 100 mil votantes. Si usted compara esa proporción con el Chile de hoy, es más o menos lo que corresponde.

Entonces, aquí no hay ningún argumento, señora Presidenta, para explicar por qué se pasa de 120 a 155 diputados. Porque si alguien me dijera: "Sabe, Senador, es que faltan miembros de una Comisión"; o hay una deficiente representatividad por A, B o C razones, me parecería un motivo razonable, una discusión legítima.

No obstante, solo nos expresan que no van a ser 120, sino 155. Después vamos a ver por qué se propone ese número mágico y cómo se distribuye el mapa de la representatividad, a mi juicio, en forma absolutamente arbitraria.

Sin embargo, el primer punto que uno debe analizar es cómo cambiar la forma de elegir parlamentarios sin alterar su número, tratando de evitar, obviamente, el alza en los costos que ello supone, y, sobre todo, aclarando de dónde nace la cifra propuesta.

Si alguien me dice: "Mire, a modo de ejemplo, este es el modelo utilizado en el mundo". Lo entiendo. Pero aquí no ha habido ni una explicación. Simplemente, se cambia el guarismo.

Esa primera decisión, desde mi perspectiva, es equivocada. Y lo planteo con franqueza. Es perfectamente posible, si así se quiere -por eso presentamos una indicación al respecto-, cambiar el sistema electoral sin cambiar el número de diputados.

Entonces, señora Presidenta, esta indicación busca revisar ese primer criterio que el Gobierno ha planteado, el cual, a mi juicio, es muy equivocado.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra la Senadora señora Von Baer.

La señora VON BAER.-

Señora Presidenta, solo dos puntos respecto a la indicación.

Primero, reforzar lo que decía el Senador Coloma.

En efecto, lo que busca la Nueva Mayoría -en lo que están de acuerdo varios parlamentarios- es que transitemos hacia un sistema más proporcional que el binominal, y me parece una posición válida.

Por eso, a diferencia de lo dicho aquí en la Sala, yo considero que hemos sido supercoherentes. Nosotros creemos que es mejor un sistema mayoritario, y el binominal es un mecanismo más mayoritario que cualquiera de los otros sistemas proporcionales. Eso lo hemos dicho siempre. Entonces, no sé por qué acá se señala que no somos coherentes. Es al revés.

No obstante, eso no significa que el sistema binominal sea el único. También se puede optar por otro mecanismo, como el uninominal.

En verdad, los sistemas electorales son fórmulas. Lo único que uno debe preguntarse es qué desea alcanzar. Y luego se elige la fórmula. Como eso ocurre después, no necesariamente se requiere tener más parlamentarios para conseguir ese fin. Porque si uno dijera: "Mire, lo que quiero lograr es que la elección sea más proporcional". Perfecto. Eso se puede hacer con 120 parlamentarios. Es posible. No hay problema. Y la elección sería más proporcional, más representativa, con grupos más pequeños, y habría más partidos políticos en el Congreso.

Lo anterior es factible sin tener más Diputados.

La pregunta es por qué se necesitan más Diputados si se puede lograr lo mismo sin aumentar su cantidad. La razón la debemos buscar en otra parte.

¿Por qué se requieren más parlamentarios? Porque se precisan más cupos, debido a que se deben buscar acuerdos en una coalición que hoy es más grande y tiene más partidos.

Esa es la verdad. Se puede tener un sistema que logre la misma finalidad: ser más proporcional, sin aumentar la cantidad de parlamentarios. Es factible. Las fórmulas están sobre la mesa.

Entonces, no es necesario aumentar la cantidad de parlamentarios. Pero la Nueva Mayoría lo estima así. En fin, cada uno tendrá que explicárselo luego a la ciudadanía.

Pero más allá de eso, creo que también hay que ser transparentes ¡al revés¿! pues así como nos piden transparencia a nosotros, yo también se las solicito a las bancadas del frente. Porque aquí se aumenta la cantidad de parlamentarios y la verdad es que resulta innecesario si se desea tener un sistema más proporcional.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Navarro.

El señor NAVARRO.-

Señora Presidenta, quería hacer, en mi calidad de vocero de la Nueva Mayoría, a los Senadores Coloma y Hernán Larraín un ofrecimiento de rendición, con algunas garantías, dado lo avanzado de la noche.

No obstante, como veo que todavía siguen con ánimo de continuar debatiendo -lo que considero correcto-, debo recordarles que no hay que ir muy lejos en el pasado (los del frente lo saben muy bien) para saber cuál es el origen de los 150 Diputados y los 50 Senadores. Sin embargo, parece que no leen la historia.

En el Congreso Nacional, el año 70 -aquí hubo parlamentarios que estuvieron en esa época-, con la mitad de la población que tenía Chile, había 150 diputados y 50 senadores, y, por cierto, no estaba la Alianza ni la Nueva Mayoría, sino que existía otro contexto político. Pero había un consenso transversal en que esa cantidad representaba una fórmula adecuada de integración del Parlamento.

Por ende, el alegato sobre el mayor número de Diputados y Senadores debido a algún recóndito motivo no creo que se deba a lo avanzado de la noche.

Hay que aumentar el número de parlamentarios. Ello forma parte de un acuerdo político necesario para derrotar el binominal, dada la tozudez, la resistencia de los creadores de la criatura, de este engendro -no fuimos nosotros-, que se niegan a reconocer a su vástago. Claramente, ustedes crearon el sistema binominal y usufructuaron de él.

En la antepenúltima elección, la UDI obtuvo 40 Diputados y RN 17, con solo 5 puntos de diferencia.

En esa relación, hubo alguien que utilizó el sistema en contra de su socio. El perverso sistema binominal convierte a los aliados en competidores.

Por lo tanto, estamos tratando de corregir un sistema con las armas que tenemos, con todos los defectos y las externalidades que provocó. Y existe coincidencia en que se debe cambiar el binominal.

Algunos sostienen que el binominal es el mejor sistema mayoritario que existe. Sin embargo, quiero decirles que hay voluntad de hacer todo lo necesario para remplazarlo, pues se trata de un cambio histórico, respecto al cual apostamos que traerá aparejadas externalidades positivas.

Recuerdo que, en alguna oportunidad, en la más álgida de las discusiones al interior del Comité Central del Partido Socialista, decíamos: "Todas las vicepresidencias que fueren necesarias, por la unidad del Socialismo". ¿Cuántas vicepresidencias? Todas las necesarias. Hoy día, decimos: "Cuánto tendremos que sacrificar para cambiar el binominal? Al parecer, deberemos hacer todos los sacrificios posibles. Y estamos en eso.

Tres enclaves de la dictadura quedan en el camino -espero poder eliminarlos-: el primero es el binominal, que fue ideado para perpetuar una de sus obras: la Constitución del 80 (el segundo), que está agotadísima y no da para más. Y el tercero es el Congreso Nacional en Valparaíso.

Somos el único país del mundo donde el Ejecutivo está separado del Legislativo. O el mundo entero está equivocado, o aquí somos brillantes, excelentes y number one, por mantener a dos Poderes del Estado separados. ¡El único país del planeta!

En cuanto al primer enclave, vamos a derrotar el binominal hoy, aunque sea de madrugada.

Respecto del segundo, vamos tras una nueva Constitución, porque esperamos que el resultado de la derrota del binominal -es lo único que me convence, pues hay muchas cosas que no me gustan de este proyecto de ley- nos dé la mayoría necesaria para terminar con la Constitución del 80.

Y acerca del tercero, hay que acabar con el Congreso Nacional en Valparaíso, burda representación que nos mantiene lejos del Ejecutivo, en una falsa dicotomía o, más bien, una falsa representación de la descentralización y el regionalismo. Es absurdo, es un falso ídolo buscar la regionalización mediante el Congreso en Valparaíso.

Por eso, les decimos a quienes nos plantean esta noche que pretendemos pasar la aplanadora, traicionar la voluntad de las mayorías, generar más gastos al país, que no nos dieron otra oportunidad de generar cambios sino a través este proyecto, con los apoyos que se han conseguido.

En tal sentido, creo que el sistema que estamos aprobando va a permitir una renovación importante en el Senado y en la Cámara de Diputados.

Y entiendo la preocupación al respecto. ¡El Senador Coloma nos ha gratificado toda la noche con sus intervenciones reiteradas...!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, quiero hacer dos comentarios.

Primero, nosotros votaremos en contra de estas indicaciones.

Y aquí empieza a derrumbarse el argumento absolutamente erróneo formulado en muchas oportunidades -yo diría- con el propósito de distorsionar la posición de Renovación Nacional ante la opinión pública.

Ello, porque nosotros hemos sido partidarios desde el año 2006 de terminar con el sistema binominal a través de propuestas concretas, como la que entregó, en esa época, el Senador Baldo Prokurica a la Presidenta Bachelet y que fue un trabajo completo respecto al cual nunca se le contestó.

Luego, el año 2012, envió una segunda propuesta que terminaba con el sistema binominal, y tampoco se le contestó.

Después, durante esta Administración, presentamos un proyecto de ley -vamos a ver unas indicaciones más adelante- que termina con el sistema binominal. Y, de igual forma, el Gobierno -ya entraremos al debate en las indicaciones siguientes- tampoco lo acogió.

Quiero señalar que votaremos en contra pues, en definitiva, las indicaciones conducen a mantener la norma actual de los 120 Diputados y Renovación Nacional a la proporcionalidad, que requiere -ya voy a explicar por qué- un aumento muy inferior en el número de Senadores y Diputados que la de Gobierno.

Por lo tanto, vamos a votar en contra.

Solo pido que cuando las autoridades de Gobierno y las demás hablen no falten groseramente a la verdad señalando que nuestro partido no ha querido cambiar el sistema binominal.

Entonces, si vamos a competir ante la opinión pública respecto a quién falta más a la verdad, terminaremos degradando un sistema político ya suficientemente desprestigiado, al punto que según las encuestas esta es la institución peor evaluada por la ciudadanía y con la fórmula del cambio al sistema electoral que el Gobierno quiere aprobar lo va a ser todavía más.

Pero hay un segundo argumento que no puedo dejar pasar en este momento: me ha tocado integrar la Cámara de Diputados y el Senado, y debo comentar lo que mencionó el Senador Ignacio Walker.

Nosotros pedimos que el Ministro del Interior contestara una pregunta. Yo recuerdo que cuando venían los Ministros Hinzpeter y Chadwick y los de los anteriores Gobiernos de la Concertación, el Parlamento les hacía preguntas y, si ellos las contestaban si decían relación con un tema que, en su opinión, tenía por objeto hacer una aclaración.

Fíjense que, en el caso anterior, Renovación Nacional le preguntó al Ministro del Interior una cosa tan sencilla como esta: hay una discusión respecto al método de selección de los candidatos. Nosotros creemos en una, esta Administración en otra. ¿Podría explicarnos cuáles son sus fundamentos?

Y resulta que no hablan. Es de una prepotencia y de una arrogancia -se lo digo con toda franqueza al Senador Pizarro- que no recuerdo haber visto. Porque yo fui opositor en varios de los Gobiernos de ustedes, pero no conocí nunca nunca a un Ministro del Interior que no hablara frente a un requerimiento de esta naturaleza en un tema obviamente no político respecto al cual pudiera decir: "Aquí me están preguntando para generarme un conflicto".

Lo peor es que hay un Senador que rompe con una tradición histórica aquí: la existencia del debate. Él dice: "No tiene por qué hablar. Nuestra orden es venir aquí a votar. Simplemente no vamos a hablar".

¿Ustedes piensan que eso prestigia el trabajo del Parlamento? ¿Dignifica el trabajo del Congreso que se le formule una pregunta a un Ministro y no conteste?

Recuerdo que, cuando venía aquí un Secretario de Estado del Gobierno de Sebastián Piñera, los Senadores lo criticaban hasta el infinito si salía de la Sala en algún momento cuando le hacían una pregunta y, al volver, le decían que tenía que contestar la pregunta.

Entonces, yo les digo una cosa: es cierto, son mayoría. Es cierto, gobiernan. Sin embargo, también lo es que han ido perdiendo enormemente el respaldo ciudadano. No se equivoquen: el poder es transitorio y la gente los está castigando por no escuchar. Y el ejemplo que dan aquí es exactamente ese¿

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Perdón, señor Senador, pero no le estoy dando tiempo adicional a nadie.

He sido muy justa. A todo el mundo le he dado cinco minutos. Discúlpeme.

Quiero saber si me autorizan para abrir la votación a fin de que puedan fundamentar el voto durante cinco minutos. Porque la verdad es que nos estamos repitiendo.

Acordado.

En votación las indicaciones números 56 y 57, para eliminar el número 12).

--(Durante la votación).

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Quienes estén de acuerdo, votan que sí. Los que se opongan, que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, hemos iniciado la discusión de la composición de la Cámara de Diputados: del redistritaje. Se trata de uno de los puntos más relevantes, probablemente, de esta discusión.

Lo primero que hay que señalar es que el sistema binominal, al cual hoy le estamos dando su certificado de defunción¿

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Perdón, Senador señor Harboe. Disculpe la interrupción.

Por favor, Sus Señorías, está interviniendo el Presidente de la Comisión de Constitución y no logramos oírlo. Les ruego no interrumpir.

Puede continuar, Honorable señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Muchas gracias, señora Presidenta.

Decía que el sistema electoral binominal que hoy estamos terminando obliga a presentar solo dos candidatos por coalición o por partido en cada distrito electoral.

Si queremos eliminar el sistema binominal tenemos dos alternativas.

La primera es tener un sistema uninominal. Es decir, que cada distrito elija un solo Diputado o Diputada, con lo cual respetamos la mayoría pero pulverizamos a la minoría. Y esta no tendría representación en el Parlamento, por cuanto solo habría un representante.

La segunda es contar con un sistema plurinominal. O sea, que se elijan más de dos candidatos en cada distrito, en proporción al número de habitantes en general o de electores, según se establezca.

Lo que hace este proyecto de ley justamente es optar por la segunda alternativa.

Entonces, aquí se dice: "Mire, la verdad es que no se justifica la existencia de mayor número de Diputados". Pero, si queremos terminar -insisto- con el sistema binominal, necesitamos una fórmula. Y una de ellas es la que se propone en la presente iniciativa.

En tal sentido, señora Presidenta, algunos han dicho: "Mire, el sistema electoral que se plantea en materia de la Cámara de Diputados empeora la proporción del voto ciudadano".

Al respecto, señora Presidenta, creo importante señalar algunos conceptos: no he escuchado a ningún parlamentario de la Alianza -a ninguno- durante los últimos 25 años, reclamar porque hoy día tenemos un distrito con 40 mil habitantes y otro con 240 mil, y ambos eligen dos Diputados.

No he escuchado a ningún Diputado ni a ningún Senador de la Alianza reclamar porque hoy día existe un distrito electoral con cien mil habitantes y otro con un millón de habitantes, y ambos eligen dos Diputados. Ahí tenemos una falta de proporción vergonzosa.

Basta citar el informe número 47 del Instituto Libertad -que no es de este lado, sino del otro-, el cual señala: "Aunque se mejora la igualdad del voto pasando de un diputado cada 113.110 electores a un diputado por cada 87.569 electores". Es decir, es el propio Instituto Libertad el que, a pesar de que legítimamente no le gusta el sistema, nos dice: "¿Sabe qué? El sistema que se propone baja la desigualdad del voto".

En consecuencia, vamos en el camino correcto de disminuir la desigualdad.

¿Es un proyecto perfecto? No.

¿Es perfectible? Sí, absolutamente.

¿Cuál es el punto? Que, a diferencia de las veinte iniciativas presentadas anteriormente en el Parlamento, esta tiene viabilidad política. Y ello supone acuerdos políticos.

Alguien dijo por ahí: "Están aumentando el número de Diputados solo para beneficiar a tal o cual grupo". Perdónenme, pero lo que se busca es darle viabilidad política a la propuesta. De lo contrario, se transformará en una de las veinte iniciativas que siguen durmiendo en el Congreso.

La segunda limitación del proyecto es que parte de un distritaje ya realizado, vale decir, de un modelo de desarrollo de distritos vigente.

Y la tercera restricción -la más relevante y difícil de soslayar- es que esta reforma electoral la hacen incumbentes. Aquí hay 120 Diputados incumbentes, que obviamente están velando por su eventual continuidad, por los riesgos electorales que los afectaran.

Con todo, la virtud de esta propuesta legislativa, que -insisto- es perfectible, radica en que le da viabilidad política al sistema y, tal como lo sostiene el Instituto Libertad, disminuye la falta de proporcionalidad del voto.

Señora Presidenta, reitero: es factible mejorar la iniciativa, pero no podemos esperar, después de 25 años, algo perfecto y...

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Ha concluido su tiempo, señor Senador.

No estoy concediendo minutos adicionales.

El señor HARBOE.-

Pero a mí me interrumpió, señora Presidenta, al comienzo de mi intervención.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Cierto. Le concedo diez segundos adicionales.

El señor HARBOE.-

Gracias, señora Presidenta.

Al final del día, no cabe esperar un texto técnicamente perfecto o que, por los próximos 25 años, sigamos aguardando una modificación al sistema electoral.

En consecuencia, creo que rechazar las indicaciones que se han renovado, destinadas a suprimir el artículo 178, es fundamental para la continuidad de la presente iniciativa.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Zaldívar.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

No voy a intervenir.

La señora ALLENDE (Presidenta).- .

Okay

El señor PIZARRO.-

¡Yo tampoco voy a hablar, para que se queden tranquilos...!

El señor PROKURICA.-

¡Va a copiarle al Ministro...!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor García-Huidobro.

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

Señora Presidenta, forzar el aumento de Diputados para cambiar el sistema electoral no es adecuado. Es cierto que la Presidenta Bachelet prometió en su campaña sustituir el binominal, pero no le dijo a la ciudadanía que ello implicaría incrementar la cantidad de miembros de ambas Cámaras.

Es cosa de mirar las encuestas para saber si efectivamente el país quiere que crezca el número de parlamentarios. La gente señala que no son necesarios más Senadores y Diputados.

El señor LETELIER.-

¡Después de Penta, por supuesto que no!

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

Pero hubo una negociación política en la Cámara Baja en virtud de la cual la Nueva Mayoría, con sus nuevos socios, acordó que el aumento de Diputados era una medida intocable y que, por ende, el Senado no podía cambiarla.

Lo planteé hace unos minutos: aquí cada una de las Cámaras está legislando respecto del futuro y de las conveniencias de los distintos parlamentarios. Y eso es más impresentable todavía.

Me parece inadecuado lo que se hizo en la otra rama del Congreso al presionar por un redistritaje. ¿Qué ocurrirá a partir de esto? Se dice que los políticos y los Dipurados están lejos de la gente. Pues bien, con los nuevos distritos, aumentará la superficie territorial electoral de estos últimos. En consecuencia, ¡más se alejarán de los electores!

Es cosa de ver cómo los Diputados ya están peleándose los votos del distrito vecino. La campaña ya partió.

Considero que el sistema electoral propuesto no le hará bien al país. La gente se alejará más de los políticos, por el aumento del número de Diputados, por el crecimiento de la superficie distrital y por el incremento de la cantidad de electores.

Por otro lado, es bueno señalar que ustedes dicen una cosa en público y otra distinta en privado. La verdad es que nos obligaron a este acuerdo, porque, de lo contrario -nos dijeron-, no tendríamos cupo para la próxima elección.

Eso no es correcto, porque, a la larga, es como decir: "Ustedes están cautivos de esta votación y deberán protegerse. Si no, les pondremos otros candidatos en el sector".

¿Qué otra cosa pretende el proyecto? Proveer cupos a los nuevos socios de la Nueva Mayoría: al Partido Comunista.

El señor NAVARRO.-

¡El gran PC de Chile!

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

¡Eso se está haciendo!

¿O no es así? Es cosa de mirar algunos distritos, donde se está asegurando la posible reelección de sus representantes.

¿Para qué? Para mantener un acuerdo que, a la larga, solo beneficia el cuoteo político permanente.

La coalición de Gobierno ha dicho que el sistema actual es espurio. Pero ¿a quién benefició la última elección? ¡A la Nueva Mayoría! Efectivamente en otras elecciones ha favorecido más a la Alianza. O sea, esto se ha ido equilibrando. Con todo, ustedes tienen hoy más parlamentarios que los que hubieran obtenido con un sistema proporcional.

Lo que están haciendo es utilizar el nuevo sistema a su favor, estableciendo un redistritaje a la medida de cada uno de los grupos políticos que componen la Nueva Mayoría.

Pero les quiero expresar lo siguiente: las mayorías son muy cambiantes. Lo saben bien. Lo más probable es que tras la próxima elección ustedes mismos estén reclamando por el sistema. Y muchos Diputados que se manifiestan contentos con el nuevo redistritaje se van a perder, porque la reacción...

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Disculpe, señor Senador. Ha terminado su tiempo.

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

Sigo después, entonces.

El señor LAGOS.-

¡Vuelva a participar...!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, me quiero hacer cargo de las expresiones con las que algunos Senadores me han contestado. Si bien les asiste todo el derecho a ello -me parece bien; es parte del debate-, estimo que esta materia no se puede caricaturizar.

La indicación apunta, básicamente, a cuestiona por qué borrar el guarismo 120, que se deduce de 60 por 2.

Pensamos que se cae en un error de concepción al creer que el cambio del sistema binominal supone variar el número de parlamentarios. Nosotros, en una indicación posterior, proponemos una fórmula distinta de distribución con los mismos 120 Diputados, manteniendo el criterio de proporcionalidad, que es un derecho perfectamente legítimo y razonable.

Ahora me haré cargo de dos comentarios que se plantearon -insisto- legítimamente.

Primero, se hace referencia a la historia para pretender modificar el número 120.

Yo entiendo la lógica del Gobierno. Sin embargo, más que un deseo de reformar las cosas, veo un ánimo de volver al Chile de antes. En todo lo que se propone (en materia educacional, en materia laboral, en materia tributaria y ahora en materia política) subyace la añoranza del Chile de los sesenta, cosa que para algunos puede ser razonable.

Yo no anhelo ese tiempo, pues estimo que no fue la mejor época de la historia del país.

No creo en el estatismo en educación; no creo que la forma de crecer sea subiendo los impuestos; no creo que los números sean mágicos.

Ese es mi razonamiento.

Entonces, habría que preguntarse cómo eran las cosas en 1969, cuando había 150 Diputados. Entiendo que entonces quedó estructurada esa cifra, aunque cabe recordar que esta cambiaba periódicamente. De hecho, el número de Senadores varió muy al final. Como sea, no tengo conciencia de que ese tiempo haya sido favorable para el país.

He estado revisando estudios de esa época de distintos analistas, y observé que ellos consideran que el número de parlamentarios no fue el adecuado. Incluso, muchos sostienen que parte del problema del quiebre del sistema democrático se relaciona con el pluripartidismo y con la forma de acceder a los miembros del Congreso.

Yo no puedo dar fe de aquello, porque era un niño en esa época. En esta Sala hay un solo parlamentario de ese tiempo, ¡y todos sabemos quién es...!

Pero, desde el punto de vista conceptual, no concuerdo con el argumento de que, porque en Chile ya hubo cierta cantidad de Diputados o Senadores, lo adecuado es reponerla.

Prefiero basarme en los esquemas comparados modernos. Yo los invito a revisarlos.

En general, se busca lograr una representación más o menos adecuada, la cual siempre puede ser arbitraria, pero los indicadores mundiales señalan lo que yo les he explicado: cada cien mil personas, un representante.

Sin embargo, aquí se hace una propuesta porque sí. Por eso no me compro el cuento de que hay que mantener y aceptar el número mágico aprobado por la Cámara de Diputados. No existe ningún fundamento histórico que indique que ello es adecuado, ni moderno, que nos diga que ayuda a la representatividad o al trabajo parlamentario.

Respecto de lo que indicó el Senador Harboe, quien tiene todo el derecho a plantear su punto de vista, quiero contraargumentar.

Él dijo: "Por años se ha visto falta de equilibrio en el hecho de que dos distritos, uno que representa a un millón de personas y otro a cien mil, elijan la misma cantidad de escaños, y ahora ustedes reclaman que puede haber diferencias al interior de la distribución de número propuesta". Creo que ese fue el ejemplo que dio.

Pero hay una distinción sustancial: el Senado, en particular, cumple un rol regional por naturaleza. Por tanto, a menos que uno quiera una Región Metropolitana gigantesca, tenderá a haber una diferencia en el número de votantes por territorio electoral. Ante ello, se debe tratar de igualar los criterios. De otra manera, este sería un país centralizado.

En todo caso, deseo advertir sobre algo que, a mi juicio, no resiste análisis: la iniciativa permite que lugares más chicos con relación a otros elijan más parlamentarios. Eso lo considero una incongruencia.

Puedo entender que se intente igualar el parámetro. Pese a ello, la Región Metropolitana -por poner un ejemplo- no contará con treinta Senadores, aunque correspondería en una lógica estrictamente proporcional. Por lo demás, creo que ella quedó muy castigada en materia de representación. Esa es mi impresión.

Con todo, en la fórmula de distribución no resiste análisis que lugares más pequeños, por razones políticas-electorales, elijan más parlamentarios que otros.

Pero no caricaturicemos. Las indicaciones renovadas buscan hacer presente que no es necesario cambiar el guarismo¿

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Concluyó su tiempo, señor Senador.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se rechazan las indicaciones renovadas 56 y 57 (28 votos en contra, 4 votos a favor).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Allamand, Araya, Bianchi, Chahuán, De Urresti, Espina, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Prokurica, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa la señora Von Baer y los señores Coloma, García-Huidobro y Orpis.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la pal el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Corresponde ahora tratar la indicación renovada número 58, de los Senadores señores Coloma y Pérez Varela, que proponer remplazar el artículo 178 por el siguiente:

"La Cámara de Diputados se compone de 120 miembros.

"Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá 30 distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.".

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Le voy a dar la palabra al Senador Coloma pero, en opinión de la Mesa, esta discusión es exactamente la misma que acabamos de efectuar.

En lugar de reiterar el debate, podríamos perfectamente pasar a la votación y otorgar los cinco minutos correspondientes para fundar el voto.

El señor COLOMA.-

Quiero argumentar, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra, Su Señoría.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, la presente indicación es distinta de las anteriores.

Las que se votaron recién se referían al guarismo 120 y la que nos ocupa busca distribuir dicho total en 30 distritos electorales y no ya en 60, como lo consignaba el sistema actual.

Esta es la mejor demostración de que las caricaturas no resultan. No son lo que estamos planteando.

Luego discutiremos cómo se distribuyen los distritos. La explicación pertinente la daremos posteriormente, dependiendo de hacia dónde gire el debate. El punto es que con 120 Diputados es posible lograr un sistema perfectamente proporcional. Imagino que ustedes han visto detenidamente la propuesta.

Entonces, no es cierto que no haya otras opciones. ¡No lo es!

Me parece bien la forma como se dio la discusión, porque así se disipa la caricatura. Ahora quedó claro que hay otra fórmula: los mismos 120 distribuidos con una proporcionalidad mucho más amplia.

Considero legítimo que alguien piense que la diversidad es más importante que la estabilidad. Entiendo que ambos conceptos tienen que jugar. Además, no siempre deben ser iguales: a veces los países -y esto lo dice la ciencia política- requieren más escenarios de estabilidad, y en otros momentos, más escenario de diversidad. Ello es parte de la lógica política y la ciencia lo estudia.

Aquí se está demostrando -y con esto termino, señora Presidenta- que los 120 cupos de Diputado no necesariamente se deben dividir en 60 distritos. Es factible repartirlos de otra manera para que resulte proporcional.

El señor QUINTANA.-

¿Cómo?

El señor COLOMA.-

Está explicado.

Iba a terminar ahora, pero, ya que el Senador Quintana me pregunta cómo se hará la distribución, continuaré.

La indicación número 65 explicita cómo se configurará cada uno de los 30 distritos. Conforme al tamaño de las comunas que los conforman, se establece un número de parlamentarios. A diferencia de la fórmula del Gobierno, sugiero una distribución en 30 distritos. Usted, señor Quintana, puede leer el detalle en la indicación referida.

Se asignan hasta 6 cupos conforme a los trazos de proporcionalidad que se estimen adecuados. En todo caso, nunca en esta propuesta se plantea que un distrito pequeño elija más parlamentarios que otro mayor, como sucede en la enmienda del Ejecutivo.

Aquí se trata de busca la máxima igualdad posible en la proporcionalidad. Sabemos que nunca va a ser exacta, aunque existe un sistema que lo ha logrado: el israelí. Es el único que elige parlamentarios en todo el país con una proporcionalidad exacta. Los otros no son así; por tanto, siempre se debe procurar un grado de estabilidad en la materia.

Lo que se está demostrando aquí, señora Presidenta -y por eso es distinta esta indicación-, es que los 120 Diputados pueden ser distribuidos de manera diferente en una modalidad proporcional y no binominal. He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Procederemos a votar.

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Se pondrá en votación la indicación renovada número 58, que propone remplazar el artículo 178 de texto aprobado en general por el Senado.

Tal indicación sustitutiva requiere, para su aprobación, el voto conforme de los tres quintos de los Senadores en ejercicio.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se rechaza la indicación renovada número 58 (28 votos en contra, 3 a favor y una abstención).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Allamand, Araya, Bianchi, Chahuán, De Urresti, Espina, García, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa la señora Von Baer y los señores Coloma y García-Huidobro.

Se abstuvo el señor Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

A continuación, la indicación renovada número 60, del Senador señor Espina, es para sustituir, en el artículo 178 que se propone en el proyecto, el vocablo "veintiocho" por "treinta".

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Es la misma indicación o no?

El señor LABBÉ (Secretario General).-

No, señora Presidenta, es diferente, porque la del Senador señor Espina solo cambia el número de distritos; no está señalando taxativamente que los Diputados sean 120, como lo hacía la indicación 58, que se acaba de votar.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Muy bien.

En discusión.

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, la verdad es que aquí comienza el debate del sistema electoral que va a reemplazar al binominal.

Lo primero que quiero señalar es que esta indicación y la que viene a continuación¿

Señora Presidenta, si pide un poquito de silencio en la Sala, se lo agradecería.

¿Cuánto es el tiempo de las intervenciones en la discusión particular? ¿Cinco minutos?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Así es, Su Señoría.

El señor ESPINA.-

Gracias.

Esta indicación lo que busca es iniciar el debate respecto de la propuesta que Renovación Nacional ha hecho para reemplazar el sistema binominal.

Lo primero que debo decir es que resulta necesario tener en cuenta dos cosas respecto del sistema binominal.

Nosotros queremos reemplazarlo porque consideramos que los sistemas electorales cumplen ciclos en los países, y creemos que en una sociedad que requiere más participación, en que cada vez puede haber más fuerzas políticas que no se sienten representadas por las dos mayores coaliciones, tales fuerzas tienen derecho a participar en el Parlamento.

Por esa razón, somos partidarios de que aquellos grupos que hoy día pueden ser minoritarios, pero que tienen un respaldo ciudadano significativo,¿

El señor NAVARRO.-

¡Como el MAS!

El señor ESPINA.-

¿tengan la posibilidad de participar y el día de mañana, quién sabe, transformarse en grupos mayoritarios.

Por lo tanto, resueltamente -como señalé hace un rato-, desde el año 2006 Renovación Nacional no se ha conformado con criticar el sistema binominal, sino que ha hecho propuestas concretas, iniciadas en aquel entonces con la que lideró el Senador Prokurica.

Y ahora estamos discutiendo una propuesta que fue presentada durante este Gobierno, originada en un informe de la Comisión de Constitución, y que surgió de un acuerdo con el Partido Demócrata Cristiano, suscrito -como ya hemos señalado- por los jefes de bancada de los partidos de la Concertación.

Lo segundo que deseo señalar brevemente, a propósito del sistema binominal, tiene que ver simplemente con rebatir un argumento que se ha dado y que no es correcto: que la Alianza habría sido más subsidiada que la Concertación con ese mecanismo.

¡Eso no es verdad!

En el informe de la Comisión de Constitución se deja constancia de que durante todos estos años la Alianza obtuvo, en promedio, una sobrerrepresentación respecto de sus votos equivalente a 4,7 por ciento. Pero, en el caso de la Nueva Mayoría o la Concertación, la sobrerrepresentación fue de 4,8 por ciento.

Es decir, si uno analiza a quién ha favorecido más el sistema binominal -en el documento respectivo figura el detalle año por año-, debe concluir que ha sido a la Concertación y no a la Alianza.

Sin embargo, ese no es el argumento de fondo, sino que queremos cambiar el binominal por un sistema proporcional. Y lo estamos haciendo sobre la base de ser realistas. Nosotros no creemos que con 120 Diputados sea realmente posible alcanzar el grado de proporcionalidad que se requiere en la Cámara Baja.

Y es por eso que nuestra propuesta, elaborada por los equipos técnicos de la Democracia Cristiana y Renovación Nacional, eleva el número de Diputados de 120 a 134, y el de Senadores, de 38 a 44.

Lo hicimos conscientes de dos cosas: que era necesario aumentar el número de parlamentarios si queríamos lograr una proporcionalidad, pero que había que hacerlo en el menor número posible, en el entendido de que es perfectamente factible contar con un sistema proporcional sin necesidad de incrementar excesivamente la cantidad de Diputados, especialmente.

En virtud de ello, yo le quisiera preguntar al señor Ministro del Interior, con el mayor respeto, qué justifica que una propuesta como la nuestra, que tiene mayores grados de proporcionalidad que la planteada por el Gobierno -según los informes que tengo a la vista; los puedo leer en la próxima intervención-, y que permite alcanzar una adecuada proporcionalidad con 134 Diputados, se deseche para elevar de 14 a 35 Diputados más.

Ahí es donde considero que la propuesta del Gobierno no tiene ninguna justificación, salvo el querer satisfacer intereses personales o de los grupos de su coalición. Y no creo que sea bueno que las aspiraciones de un grupo de políticos en un momento determinado, por legítimas que ellas puedan ser, se traduzcan en la construcción de un mecanismo como este, que, probablemente, va a durar por muchas décadas.

Por lo tanto, señora Presidenta, siendo este el primer debate, solo me resta señalar que nosotros votamos a favor de la indicación que reemplaza el número de distritos propuesto por la Concertación.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Allamand.

El señor ALLAMAND.-

Señora Presidenta, quiero aprovechar esta oportunidad para dejar sentado el pensamiento que uno tiene respecto de esta materia, más allá de las caricaturas o las descalificaciones que puedan surgir.

Hace unos minutos estaba pensando cuándo los países cometen errores históricos -porque aquí se habla mucho de la historia-, y tengo la impresión de que los errores históricos se cometen de muchas maneras, pero a lo menos de dos.

Primero, cuando se tiene una orientación equivocada en una política pública. Cito un ejemplo: en el pasado algunos consideraban que eran soluciones correctas la estatización de la economía, las trabas al emprendimiento o la transformación del Estado en un gran agente empresario.

En definitiva, se demostró que eso estaba equivocado.

Pero hay una segunda forma de equivocarse: cuando se impulsa una política pública pensando en que va a tener determinados efectos y, sin embargo, estos resultan completamente distintos. Ciertamente, el mejor ejemplo de ello es el Transantiago.

¿Por qué hago esta reflexión? Porque aquí se está cometiendo un grave error. ¿En qué sentido? Cualquier análisis serio sobre la gobernabilidad en democracia conduce a admitir que hay, a lo menos, un triple engranaje que es necesario cuidar, particularmente. Y ese engranaje es la relación entre régimen político, sistema electoral y sistema de partidos.

Los sistemas parlamentarios, señora Presidenta, tienden a funcionar con sus mismas ventajas o desventajas de manera indiferente al mecanismo electoral.

El sistema parlamentario del Reino Unido opera enmarcado en un sistema mayoritario clásico. Y funciona bien.

Por su parte, el sistema parlamentario español tiende a funcionar relativamente bien enmarcado en un esquema proporcional.

La pregunta correcta es cuál es la combinación virtuosa para un sistema presidencial.

El Senador Zaldívar se refirió al trabajo que hicimos en el proceso de transición a la democracia.

Al respecto, conviene tener presente que la tercera ola de democratización se inició, por lo menos en América Latina, en 1978, año en que solo había tres países en el continente que no tenían dictaduras militares. Y la gran reflexión académica y política que se hizo en ese tiempo fue que uno de los elementos que más habían contribuido al derrumbe de los sistemas democráticos había sido, precisamente, la mala combinación entre sistema presidencial y regímenes proporcionales.

Señora Presidenta, las democracias presidenciales tienden a funcionar mal desde el punto de vista de la gobernabilidad, con una sola excepción: Estados Unidos. Casualmente, la de ese país es la única democracia presidencial longeva que funciona bien, y ello se explica porque funciona en el marco de un sistema mayoritario.

No hay experiencia alguna que acredite que la combinación correcta deba ser régimen presidencial y sistemas proporcionales.

Más aún, a los que se están anticipando a festejar quiero señalarles lo siguiente: uno de los rasgos positivos que ha tenido la democracia que recuperamos el año 90 es que, en el marco de un sistema presidencial, hemos operado con dos coaliciones.

Señora Presidenta, ¡no festejen tanto!

No hay ningún país en el mundo que tenga un sistema proporcional que funcione conforme a una lógica de dos grandes coaliciones, que es lo que permite el mejor funcionamiento del régimen presidencial.

Aquí ustedes, la Nueva Mayoría, están cometiendo un tremendo error histórico. Se están equivocando, porque el problema no es reemplazar el binominal, sino de qué forma hacerlo.

Y cuando en pocos años más ustedes se pregunten en qué minuto sembraron la semilla que hizo posible que la política de dos coaliciones, en la cual yo veo muchas más ventajas que desventajas, desapareciera del firmamento, deberán recordar cómo votaron hoy día. Porque hoy día ustedes mismos están votando el cambio del sistema electoral, que va a conducir a que en el futuro no tengamos el sistema estable de dos coaliciones que ha permitido gobernabilidad democrática y progreso en el país.

Por lo tanto, como no hay ningún país que tenga esta combinación correcta en forma adecuada, quedará en evidencia cuál fue el error histórico que se cometió: no remplazar el sistema electoral binominal por el cual algunos abogamos hace mucho tiempo, sino la naturaleza del remplazo que ustedes equivocadamente están formulando.

No van a contribuir a la gobernabilidad. No van a mejorar la representatividad. Y están sembrando las semillas de la destrucción de su propia coalición.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Chahuán.

El señor CHAHUÁN.-

Señora Presidenta, el Senador Espina ya se refirió a la historia y el compromiso que ha tenido Renovación Nacional en términos de modificar el sistema electoral.

El año 2006 le entregamos una propuesta a la Presidenta de la República, que comenzó con la Comisión Prokurica. Y recibimos en nuestro Partido a los distintos actores. Tuvimos las reuniones pertinentes con el entonces Presidente del Partido Comunista, Guillermo Tellier, en el ánimo de buscar una fórmula que nos permitiera establecer cupos compensatorios. Y esa fue la primera proposición de Renovación Nacional: 12 cupos compensatorios para que todas las minorías relevantes estuvieran integradas en el Parlamento.

Lo hicimos porque estábamos convencidos de que la política debía dejar de realizarse en la calle y volver a los canales institucionales.

Y ese diagnóstico que teníamos se fue profundizando con el tiempo.

Nos tocó, también, ser actores de las conversaciones. Los diagnósticos compartidos con la Democracia Cristiana, que después de tres meses confluyeron en este acuerdo entre ambos partidos, no solamente se referían, como bien se ha dicho, al cambio del sistema electoral, sino también a la necesidad de flexibilizar los sistemas de alianza.

Esa frase fue bastante bien pensada para los efectos de establecer no barreras de contención entre una u otra coalición, sino escenarios que permitieran una flexibilidad en los sistemas de alianza en el futuro.

Además, la propuesta abordaba temas que decían relación fundamentalmente con los peligros de una atomización de las fuerzas políticas.

Por eso siempre hablamos, con palabras muy bien pensadas también, de un "sistema proporcional moderado".

La idea era ir poniendo las condiciones para establecer un aumento moderado de parlamentarios que permitiera, justamente, esa proporcionalidad.

Y hablamos de 44 Senadores y 134 Diputados.

Luego se redactaron los proyectos de ley que se presentaron en el Parlamento.

Pero, además, el acuerdo incluía otro elemento determinante, que tomaba en cuenta la tesis que ha planteado el Senador Allamand: que los sistemas presidenciales se avienen bien con sistemas mayoritarios.

Y un tema que abordamos con los interlocutores de la DC fue cómo cambiar el sistema político en Chile, de manera de pasar de un presidencialismo que efectivamente ahoga la iniciativa del Parlamento a un sistema semipresidencial donde hubiera un mayor contrapeso de los poderes públicos y un mejor control ciudadano de la actividad pública.

Pues bien, finalmente no pudimos avanzar en ese acuerdo.

Creo -y coincido con el Senador Allamand en esto- que el cómo estamos cambiando el sistema electoral es un tema no menor.

El Senador Harboe -por su intermedio, señora Presidenta- señalaba que hoy día estábamos resolviendo una reforma entre los incumbentes. Efectivamente, eso es una dificultad. Pero existe una dificultad aún mayor: estamos sembrando la semilla de una atomización del sistema electoral, donde la llave finalmente la van a tener los pocos que lleguen al Parlamento, quienes deberán generar los grandes acuerdos.

Por tanto, el llamado que nosotros hacemos es, básicamente, a apoyar, reivindicar, respetar, la palabra empeñada. Y por eso hemos presentado las indicaciones: para instar a la DC a honrar esa palabra empeñada, con el propósito de avanzar en lo que fue el acuerdo inicial.

Y dijimos, además, que esto debía ser complementado con otras medidas que acá se olvidan: normas que impidan la intervención electoral; normas que no permitan inauguraciones en los tres meses finales de una Administración; normas que prohíban la propaganda de los gobiernos de turno en los últimos días o presentar reformas constitucionales los días previos a una elección presidencial.

Pero también abogamos por una nueva ley de partidos políticos; por la democratización de estas colectividades; por el límite a la reelección no solamente de los parlamentarios, alcaldes, cores, diputados y senadores, sino también de los dirigentes de los partidos políticos; por permitir el surgimiento de savia nueva.

¿En qué quedó todo eso? En nada.

Lamentablemente, creímos que se iba a cumplir la palabra empeñada, pero parece que pecamos de ingenuos.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación la indicación número 60.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Los señores Senadores que estén de acuerdo con la indicación votan que sí, y quienes estén en desacuerdo, votan que no.

La indicación requiere, para su aprobación, los tres quintos de los Senadores en ejercicio.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se rechaza la indicación renovada número 60 (25 votos contra 6).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, Bianchi, De Urresti, García-Huidobro, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa los señores Allamand, Chahuán, Espina, García, Hernán Larraín y Prokurica.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Señores Senadores, ahora corresponde votar la norma del texto aprobado en general por el Senado. Es el número 12), que sustituye el artículo 178 por el siguiente: "Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.".

Esta disposición requiere, para su aprobación, tres quintos de los Senadores en ejercicio.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba el artículo 178 aprobado en general por el Senado (24 votos contra 9), dejándose constancia de que se cumple con el quórum constitucional exigido.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, Bianchi, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa la señora Von Baer y los señores Allamand, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Orpis y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señor Secretario, seguimos.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Señores Senadores, corresponde ahora pronunciarse sobre el número 13), que pasa a ser 8). Aquí se han presentado las indicaciones números 63 y 64, para eliminarlo.

Estas indicaciones son de los Senadores señores Coloma y Pérez Varela, y de los Senadores señores García-Huidobro y Moreira, respectivamente.

Esa es la primera de las indicaciones renovadas.

Después está la indicación renovada número 66, del Senador señor Espina, cuyo objetivo es remplazar el número 13).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, aquí tenemos dos situaciones distintas.

Por un lado, las indicaciones números 63 y 64 buscan eliminar el distritaje propuesto por el Ejecutivo y aprobado en general por la Sala del Senado.

Yo sugiero votar esas dos indicaciones primero, haciendo abstracción de lo otro, porque se acaba de rechazar la indicación del Senador Espina que proponía treinta distritos electorales.

El rechazo de la indicación que sugería treinta distritos electorales hace inviable la indicación número 66, que materializa esa cantidad de distritos, la hace caer.

Reitero: es inviable el redistritaje planteado por el colega Espina habiendo caído ya la indicación que fijaba el número de distritos.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Primero vamos a votar las indicaciones números 63 y 64.

Tiene la palabra el Senador señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, este es uno de los artículos más equivocados del proyecto en debate. Tiene que ver, ya no con el número de distritos, sino con la forma de distribuir estos de tal manera que el resultado sea 155. No se dice expresamente, pero es cosa de sumar.

Zanjado ya lo concerniente al número de Diputados, que subió a 155 sin ninguna explicación, ahora el problema es diferente: cómo se distribuyen a la largo de nuestro país los distintos distritos electorales.

Yo sostengo con franqueza, señora Presidenta, que esto es una gran arbitrariedad, pues no hay un criterio que a uno le permita decir "A tanto número de personas, tanto número de parlamentarios" o "Voy a hacer una distribución emanada de la racionalidad".

Desde mi perspectiva, esta norma es absolutamente arbitraria e irracional. Y el único objetivo que puede perseguir es hacer un traje a la medida de quienes la plantearon.

La mejor demostración es la simple comparación entre dos distritos.

El distrito 4°, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen, según este proyecto, elige 5 Diputados.

Conforme a las cifras que acabo de ver -otros parlamentarios podrán complementarlas-, sumadas esas comunas, se trata de algo más de 165 mil electores, quienes, como señalé, eligen a 5 Diputados.

El 2° distrito, conformado por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte, donde votan algo más de 220 mil personas -25 por ciento más que en el 4° distrito-, elige 3 Diputados.

Yo entiendo la búsqueda sobre la base de la actual distribución parlamentaria. Pero ¡la magia tiene un límite...!

Desde mi perspectiva -solo he dado un ejemplo; sin embargo, hay muchos casos parecidos-, esto está mal diseñado, no es justo, no tiene sentido.

Yo entendería que, haciendo cálculos, se eligieran 4. Pero no entiendo que se suba a 5, máxime si existen distritos más grandes que eligen 3.

No sé si puedo pedir una explicación racional sin que me acusen de arrogante o de majadero como ya se ha hecho.

Esto, señora Presidenta, ¡no tiene sentido!

¿Y cuál es la ecuación, según veo yo la cuestión? El 4° distrito, históricamente -y podrán decirlo Senadores de la zona-, ha tenido una connotación más de Izquierda (eso no es ningún pecado). En cambio el distrito 2° tiene probablemente una votación más de la Alianza o al menos más estable. No calza una cosa con la otra.

Si ese fuera el único caso, yo podría entender la existencia de un error. Pero si vamos al de Arica veremos que la situación es incluso peor. Puente Alto, otra complicación.

Insisto: esto no tiene ya que ver con el número de distritos, sino con la distribución.

Señora Presidenta, proporcionalmente, ¿algunos votos van a valer mucho más que otros?

Esto, además, puede provocar todo tipo de distorsiones: acarreo, fijación del lugar de votación, en fin.

Yo entiendo que, conceptualmente, hay un error.

En consecuencia, apelo al sentido común y pido hacer algo que calce.

Ese es mi planteamiento, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Orpis.

El señor ORPIS.-

Señora Presidenta, Honorable Senado, yo habría esperado que el paso desde un régimen binominal mayoritario hacia un sistema proporcional hubiese sido sobre la base de un número de parlamentarios proporcional al de habitantes.

Sin embargo, debo señalar en forma categórica que las zonas más castigadas con el redistritaje son la Región de Arica y Parinacota y la Región de Tarapacá.

La Región de Arica y Parinacota tiene 173 mil 855 electores: elige 3 Diputados. La de Tarapacá, 22 mil 24: elige 3.

En cambio, la Región de Atacama tiene 165 mil electores: elige 5 Diputados.

En esos casos no hay ninguna proporción entre el número de habitantes y los cargos a elegir.

El señor CHAHUÁN.-

¡Un traje a la medida¿!

El señor ORPIS.-

Si uno revisa el resto de los distritos que eligen 5 Diputados comprueba que ninguno tiene menos de 324 mil electores: La Región Metropolitana, con 585 mil electores, elige 5; Rancagua, con 399 mil, elige 5; Biobío, con 435 mil, elige 5; Los Ríos, con 324 mil, elige 5, y Los Lagos, con 375 mil, elige 5.

Atacama, con 165 mil electores, elige 5 Diputados, mientras Tarapacá, con 222 mil, elige 3, y Arica, con 173 mil, elige 3.

Por lo tanto, para la asignación no hay ninguna lógica entre el número de Diputados y la cantidad de electores, de habitantes.

El señor WALKER (don Ignacio).-

En la Región de Atacama hay actualmente dos distritos.

El señor ORPIS.-

Después podrá contrargumentar, señor Senador.

Lo concreto, señora Presidenta, es que en los sistemas proporcionales debe existir relación entre el número de habitantes y el de representantes. Aquí no hay ninguna.

Adicionalmente, quiero señalar que, a raíz de todos los problemas limítrofes que se están viviendo, una vez más se castiga a zonas geopolíticamente estratégicas.

Aquí se perjudica en forma sensible a las dos regiones extremas del norte, que son las más castigadas con el redistritaje que se nos propone.

Por lo tanto, no estoy de acuerdo con el sistema proporcional, sino con el mayoritario. Creo que se está cometiendo un error histórico. Pero se incurre en un segundo error al establecer el redistritaje, por el efecto distorsionador que va a tener en las dos regiones extremas del norte.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Podemos abrir la votación?

El señor ESPINA.-

No, señora Presidenta.

El señor LARRAÍN.-

No en esta materia.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Ante todo, señora Presidenta, debo aclararle que nuestra negativa no obedece a mala voluntad sino al propósito de hacer constar nuestra argumentación en la historia fidedigna de la ley.

Ahora bien, la propuesta de 155 Diputados que hace el Gobierno, y que nosotros vamos a votar en contra, no tiene ninguna explicación a la luz del principio que la Nueva Mayoría ha dicho defender durante todos estos años: el de terminar con el sistema binominal, particularmente en la Cámara de Diputados, para incorporar un sistema proporcional que apunte a lo que se denomina "igualdad del voto", que significa que los distritos con más población tengan mayor representación parlamentaria.

¡En 15 de los 28 distritos que sugiere el Ejecutivo no se respeta el principio de la igualdad del voto! ¡Es la mayor contradicción que veo en la propuesta gubernativa!

En efecto, resulta incomprensible que, siendo toda la línea argumental seguida para terminar con el binominal precisamente la existencia de mayor proporcionalidad, cuando esta se construye lisa y llanamente se cae en contradicciones que no tienen ninguna justificación.

Ya se han mencionado algunos casos.

El distrito de la Región de Tarapacá, que elige 3 Diputados, tiene 222 mil electores, versus el 4° distrito, de la Región de Atacama, que con 221 mil electores elige 5.

Lo mismo ocurre con los distritos 16, 18, 22, 25, de O'Higgins, Maule, La Araucanía y Los Lagos, respectivamente; en el distrito 9°, de Conchalí; en el distrito 12°, de La Florida, Puente Alto, etcétera.

Entonces, tras reflexionar, lo primero que uno debe preguntar es por qué un Gobierno que tiene mayoría política suficiente construye un sistema proporcional que rompe el principio que la Nueva Mayoría ha defendido permanentemente: el de la igualdad del voto.

Y aquí caen en la mayor de sus contradicciones: simplemente, aquello obedece a que se hace primar el interés de los partidos políticos portener en el Parlamento una representación por sobre la que legítimamente les corresponde.

Si uno ve los distritos del norte, es evidente que el propósito fue privilegiar al Partido Comunista.

El señor LAGOS.-

¿Le tiene miedo al Partido Comunista...?

El señor ESPINA.-

No le temo al Partido Comunista, distinguido colega. Y desde hace muchos años no le tengo miedo a ningún partido político. Pero quiero decirles a usted, que ha sido tan riguroso en los principios, en los valores, y a las bancadas del frente que en esta oportunidad muestran una inconsecuencia que lamentamos, pues están construyendo distritos de forma tal que, sin razón ni justificación, rompen el primer valor que defendían: el de la igualdad del voto.

Alguien dirá: ¡Es que no había otra alternativa!

Pero la había. Y fue elaborada con ustedes mismos. Porque con el equipo técnico de la Democracia Cristiana y con la participación de los Senadores Rossi y Tuma se construyó una fórmula que establecía una proporcionalidad muy superior a esta, con la ventaja adicional de no incorporar 35 nuevos Diputados, sino solo los 14 que eran necesarios.

Señor Presidente, uno sabe cómo votan los parlamentarios en las Comisiones.

Al pronunciarnos sobre la fórmula del Gobierno en la Comisión de Constitución sabían que era mala. Nunca tuvieron voluntad real para decir "Busquemos un equilibrio en la conformación de la Cámara de Diputados".

Cuando quisimos discutir la fórmula para la integración de la Cámara Baja se nos dijo que el Senado no tenía derecho alguno a debatirla.

¡Cómo va a ser razonable que nosotros debamos limitarnos a ver lo del Senado y no podamos analizar lo de la Cámara de Diputados, y a aceptar respecto de esta la construcción de una proposición que rompe el principio de la igualdad del voto; aumenta, de manera injustificada, en 35 la cantidad de Diputados -ello, a sabiendas de que se obtiene mayor proporcionalidad con solo 14-, y echa por la borda el mayor capital que tenían ustedes en esta materia: el deseo de una proporcionalidad que permitiera resguardar el principio de la igualdad del voto!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Pizarro.

El señor PIZARRO.-

Señora Presidenta, cuando durante este debate se escucha que la mayor crítica que se le hace al mecanismo diseñado para la distribución de distritos es la desproporción que se genera entre los electores y los cupos a elegir debido a que en el caso de la Cámara de Diputados se pierde la relación que supuestamente debe existir a ese respecto, uno queda con la sensación de que se olvida que la propuesta que se está trabajando es la que posibilita un acuerdo hecho sobre la base de una realidad concreta: la de que Chile tiene hoy un sistema electoral binominal establecido de manera arbitraria en 1989.

Aquí se dice, por ejemplo: "No se respeta la proporcionalidad entre la cantidad de votos y la de escaños a elegir". Y se arma toda una teoría en el sentido de que se busca favorecer a determinado sector político, señalándose casi con escándalo al Partido Comunista y a las demás fuerzas de Izquierda.

En el caso de Atacama, la razón por la cual aparecen cinco escaños es que en el sistema binominal esa Región elige hoy cuatro. Sin embargo, nunca le he escuchado yo a la Derecha decir "¡Es un escándalo: se eligen cuatro Diputados en Atacama, que es más chica que Arica!", como señaló acertadamente un Senador. Pero por qué sucede eso. ¡Por la arbitrariedad con que se armaron los distritos en los tiempos de la dictadura...

El señor LAGOS.-

¡Traje a la medida...!

El señor WALKER (don Ignacio).-

¡Después del plebiscito!

El señor PIZARRO.-

... tras el plebiscito!

Entonces, no nos engañemos.

Además, en la zona en comento nos encontramos con un distrito (recién estaba aquí el Senador Prokurica, pero parece que salió) en el que figura la comunas de Vallenar, entre otras. Es una cosa rara.

Geográficamente, esos distritos son los más extraños. ¿Por qué? Porque se buscó una fórmula para en la elección siguiente al plebiscito favorecer con la mayor cantidad de escaños a la Derecha. Y no lo voy a olvidar nunca, pues en esos años tuve la suerte de ser invitado con el ahora Senador Coloma a una visita especial a Estados Unidos.

En el caso de mi Región, la propuesta de la dictadura que se conocía era que iba a haber dos distritos: uno, toda la provincia de Elqui, y otro, las provincias de Limarí y de Choapa juntas.

Por esas cosas de la vida, y debido a los cálculos electorales (¡nadie sabe quién los hizo!), después del plebiscito aparecieron tres distritos. Partieron un distrito: juntaron Ovalle con Coquimbo, que no tenían nada que ver, y la provincia de Choapa con una comuna chica, porque calcularon que el sistema binominal podría provocar un empate.

Entonces, no exageremos los argumentos. Porque aquí tenemos un acuerdo posible sobre la base de una realidad concreta: la existencia del binominal. Y el objetivo es avanzar todo lo posible hacia un sistema proporcional, pero partiendo de un hecho cierto: el de que, además, quienes estamos decidiendo sobre la materia, tanto Diputados cuanto Senadores, somos incumbentes.

En el caso del Senado, cuando entremos al punto vamos a poder discutir con mayor calma.

¿Por qué no podemos avanzar hacia una expresión territorial pero que a la vez junte determinadas regiones, evitando que algunas muy chiquitas aparezcan eligiendo a igual número de Senadores con una cantidad pequeñita de votos, en circunstancias de que la Región Metropolitana, por ejemplo, tiene que hacerlo con millones?

Entonces, en esta materia, yo pido por favor un acto de sinceridad.

La propuesta sobre la Cámara Baja se aprobó mayoritariamente, más allá de la Nueva Mayoría, con muchos votos de Diputados de Renovación Nacional y del resto de la Derecha. Y es difícil moverla, porque fue complicado lograrla.

¿Cómo se llega al número establecido? Porque se registra un aumento por lo menos en uno de todos los distritos que se han puesto como ejemplo, para establecer una proporcionalidad y no romper ese equilibrio extraño que se generó con el sistema binominal. Claro, en una Región que ya elige cuatro, de la noche a la mañana no le van a decir que ahora son tres, o bien, dos.

Así que pido un poquito más de realismo y comprender que se trata de un acuerdo posible, que se busca avanzar a un sistema proporcional y que la mayoría de las veces lo ideal es enemigo de lo bueno. No inventemos teorías conspirativas, que no corresponden.

Gracias.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, a mi juicio, aquí está lo medular del proyecto, más allá de otras consideraciones, muy relevantes. El nuevo artículo 179 es lo que nos hace pensar que la iniciativa es políticamente inaceptable, éticamente injusta y constitucionalmente inadmisible. Y me parece que el nudo de la crítica dice relación con esta parte.

Deseo referirme a esos tres conceptos.

Lo que hace inaceptable el proyecto es que se trata de un diseño hecho para beneficiar a un sector político determinado, aunque ello no se quiera admitir públicamente. No dispongo de tiempo para entregar muchos ejemplos, pero solo haré referencia al último caso. El Senador señor Pizarro se encuentra en lo cierto cuando dice que Atacama tiene cuatro Diputados, mientras que Arica elige ahora a dos y sube a tres. Sin embargo, ¿por qué aumentan de cuatro a cinco los Diputados en el nuevo 4° distrito? Por una sola razón: porque necesitan darle un cupo al Partido Comunista. Y si se quieren más ejemplos, podemos darlos.

Cuando lleguemos al Senado, también los proporcionaremos, porque aquí hay sectores interesados en la materia.

El segundo motivo por el cual la normativa es políticamente inaceptable dice relación con que el incremento resulta a todas luces excesivo, no en comparación con otros momentos de nuestra historia, sino con lo que es el Congreso y cómo funciona hoy. En la actualidad lo hace con 120 Diputados y le estamos agregando 35: ¡una Cámara entera! El Senado cuenta con 38 miembros. ¿Cuál es la justificación? Para ajustar, se podría pensar que es preciso crecer -está bien-, pero 130 o 140 integrantes habrían sido con creces suficientes para permitir una mejor proporcionalidad. Ello no se hace.

Y, por último, pienso que aquí tiene lugar una aplicación abusiva de una mayoría, que no ha querido aceptar acuerdos. Me dirán que en la Cámara de Diputados ello no fue posible porque nosotros no concurrimos, pero, desde que entró el proyecto al Senado y en los meses que lleva, una y otra vez nos hemos abierto a todas las fórmulas, sobre todo para modificar la estructura de la otra rama del Congreso. Y eso ha sido imposible, porque la conveniencia política prima sobre el interés del país.

Por eso, la iniciativa es no solo políticamente inaceptable, sino también éticamente injusta, porque se ha construido sobre la base de la desproporcionalidad, del desequilibrio, de la idea de lograr un fin: obtener el poder por medios espurios y acomodar la estructura distrital de manera que, con los escaños que se entregan, lograr los objetivos que se persiguen.

Se dice: "¡Ah, esto es lo que hizo la dictadura!". ¿Estamos haciendo lo mismo?

El señor LAGOS.-

Estamos tratando de desarmar.

El señor LARRAÍN.-

¿Es esa la justificación ética de la construcción en examen?

Si la primera aseveración es cierta, me parece que se está incurriendo en el mismo error. Ello carece de justificación, a mi juicio, y da lugar a un reproche moral sustantivo.

No hay que olvidar que se deben considerar distintos aspectos en el ámbito constitucional, como ya lo hemos señalado en la fundamentación general. En el punto específico de que se trata, el artículo 15 de la Carta establece las características del sufragio, que debe ser personal, igualitario, secreto y voluntario. Es decir, el legislador orgánico constitucional tiene como límite el respeto del principio de la igualdad.

La Presidenta Bachelet expresa en su mensaje que el proyecto apunta a lograr la mayor igualdad de voto posible. Porque esta probablemente nunca es perfecta ni absoluta.

El Tribunal Constitucional establece la necesidad de que las distinciones arbitrarias no sean justificadas y aceptables. Se entenderá, por ejemplo, que el principio de regionalización puede influir en una modificación en la estructura del Senado y en que no haya una proporcionalidad, pero eso no se aplica en relación con la Cámara de Diputados. Sin embargo, en la estructura propuesta no hay uno, sino diez distritos incorporados nominativamente en la discusión general -los leí en el informe pertinente-, hechos a mano para alterar groseramente el principio de igualdad del voto.

Por eso, el proyecto es inconstitucional, y formulo la reserva correspondiente para ante el Tribunal Constitucional.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

Que se vote.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Quintana.

El señor QUINTANA.-

Pido el cierre del debate, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Ello se someterá al pronunciamiento de la Sala.

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE ( Presidenta).-

Terminada la votación.

--Por 23 votos contra 9, se aprueba el cierre del debate.

Votaron a favor las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron en contra la señora Von Baer y los señores Allamand, Chahuán, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación las indicaciones números 63 y 64, que proponen la eliminación del número 13), que pasa a ser 8).

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Orpis.

El señor ORPIS.-

Señora Presidenta, creo que los términos del debate respecto de las distorsiones en el redistritaje agudizan la falta, en definitiva, porque precisamente se trata de corregir el sistema y no de profundizar la desigualdad, en particular en las dos regiones del norte. Quisiera detenerme en la aberración y el castigo que ellas sufren con relación al número de electores que elige a cada Diputado.

Esta situación no solo se presenta respecto de las Regiones de Tarapacá y de Arica y Parinacota. Para efectos comparativos, deseo entregar los siguientes antecedentes. En el caso de Atacama, que elige cinco Diputados, la relación entre electores y un parlamentario es de 33 mil. Hay distritos que eligen cuatro, y el número de electores por Diputado es inferior a los de Tarapacá y de Arica. En cuanto a Rancagua, se eligen cuatro, en razón de un Diputado por cada 74 mil electores. En Maule son 70 mil electores por Diputado y se eligen cuatro; en Los Lagos son 73 mil y se eligen cuatro, y en Tarapacá son 74 mil y se eligen tres.

Ello no presenta ninguna lógica, señora Presidenta. Aquí no solo se ha corregido el sistema, sino que también se ha profundizado la desigualdad en materia de proporcionalidad. Y las regiones más afectadas y castigadas son las dos del norte, lo que resulta inaceptable.

He dicho.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Puede intervenir la Senadora señora Von Baer.

La señora VON BAER.-

Señor Presidente, quiero hacer referencia a dos puntos.

Profundizando en lo manifestado por el Honorable señor Larraín, cabe considerar que una de las críticas ha sido que el binominal se diseñó para favorecer a un sector político. Creo que el modelo en estudio presenta igual característica. Los mismos cálculos que se hacen ahora respecto a quién beneficia el mecanismo en estudio vamos a hacerlos después, seguramente. Ahí veremos los resultados. Eso se observará en la primera elección y probablemente en la segunda. Y la interrogante va a ser: ¿qué tanta legitimidad exhibe un sistema electoral que se inclina fuertemente hacia un sector y se ha dibujado de esta manera?

Cuando se formulan reparos, se espera que un cambio implique la búsqueda de soluciones para los problemas que se observan y no la comisión de los mismos errores que se atribuyen. Pero eso no es lo que se ve, sino justamente lo contrario.

Se ha dicho, por ejemplo, en el caso del 4° distrito, en el norte, que se juntan dos y ahora suman cinco Diputados. Pero la pregunta que uno se hace es por qué el 16° distrito, que también reúne a dos y registra más población, queda en cuatro. La respuesta -creo que lo mencionó el Senador señor Pizarro- es que, si no, no están los votos.

El señor LAGOS.-

¡Es lo mismo que les interesó a ustedes¿!

La señora VON BAER.-

Entonces, se llegó a un acuerdo político, como decía anteriormente, a un collage, donde se entregó un poquitito acá, un poquitito allá. Y, así, se desvirtuó el motivo por el cual se modifica el sistema electoral, porque la que expresa el mensaje, que se repite a la opinión pública, es que se quiere mejorar la proporcionalidad, y finalmente eso no se hace. Ello obedece a razones políticas, al propósito de favorecer a un sector político. ¡Es un traje a la medida!

La otra razón que se invoca es que hay que cambiar el binominal. Da lo mismo si las consecuencias son mejores o peores. La cosa es que hay que cambiarlo. Y como se tienen los votos y se logró un acuerdo en los términos expuestos, aunque se desfavorezca a las regiones del norte, no importa el resultado. Lo relevante es decir que lo cambiamos.

Y las consecuencias para el país tampoco importan, porque se va a favorecer a un cierto sector político.

Deseo poner sobre la mesa, asimismo, un aspecto que aquí no se ha mencionado. Quiero ejemplificarlo en los distritos de la Región de Los Ríos y en lo que va a pasar, no solo allá, sino también en todas las regiones.

Lo que se está haciendo es juntar distritos. Sobre esa base, los parlamentarios obviamente se van a centrar en las ciudades de más población y van a ir menos -y los Senadores lo sabemos, porque es así- a los demás lugares. Entonces, ¿qué sucederá en la Región que represento? Los Diputados se van a concentrar en Valdivia, en La Unión, probablemente en Río Bueno, y van a llegar muy poco a localidades más pequeñas, como Corral, Futrono, Lago Ranco. Eso es una pena, porque es gente que también necesita cercanía con ellos, y va a perderla.

¡Y el Gobierno habla tanto de descentralización, pero centraliza la política, en el interior de las regiones, hacia las ciudades más grandes! Da la sensación de que una cosa es la que se dice y otra la que se hace. Hoy día se está votando en contra de la descentralización dentro de las regiones. Ello resulta doloroso, porque lo que se necesita -repito- son parlamentarios ojalá lo más cerca posible de los lugares más pequeños. Y aquí se está se está centralizando hacia Valdivia, alejándose de¿

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Se agotó su tiempo, señora Senadora.

Tiene la palabra el Honorable señor Rossi.

El señor ROSSI.-

Señor Presidente, una crítica puede ser muy legítima, y voy a referirme a la que se ha hecho respecto de la situación de Tarapacá y de Arica, pero que ni siquiera se pretenda argumentar, sobre esa base, que el sistema actual presenta mayores bondades que aquel que le estamos ofreciendo a la ciudadanía.

Claramente, el régimen electoral que se aplicará en las próximas elecciones será mucho más proporcional. Esa característica no se encuentra hoy día presente.

También es importante consignar -porque se hace referencia a la participación- que el mecanismo vigente fue elaborado en dictadura, sin Congreso, de espalda a la ciudadanía e impuesto. Ahora, en cambio, estamos discutiendo un nuevo sistema electoral, y la gente puede ver en la televisión el transcurso de las sesiones. Parlamentarios elegidos tienen la posibilidad de plantear sus puntos de vista y, finalmente, de que se voten, y una mayoría está dispuesta a aprobar la iniciativa.

Por otro lado, es evidente que aumenta la oferta, que es más diversa. Y eso indudablemente va a generar una mayor participación de distintos sectores, en particular de grupos emergentes y de la juventud, que habitualmente se automargina de los procesos electorales. Esto último es una consecuencia del binominal.

Existirán mayores incentivos para votar, porque se registrará más competencia. Y ella no va a estar centrada dentro de la lista, sino entre las listas, que es lo que se busca en cualquier mecanismo de esta índole.

Estoy de acuerdo en que no hay ningún modelo perfecto, ni el uninominal, en Inglaterra; ni el de Alemania, que es completamente proporcional, ni otros de carácter mixto, como los de España o Francia. Cada uno presenta fortalezas y debilidades y sirve a una determinada idiosincrasia. Pero, sin duda alguna, el binominal está agotado. Es preciso cambiarlo. Y hoy día hemos reunido los votos necesarios para ello. Para lograrlo, se requieren ciertos acuerdos.

Evidentemente, el proyecto contiene errores. Hay problemas. Soy de los que piensan que en la Cámara de Diputados debiera existir una absoluta proporcionalidad. En cambio, la representación en el Senado -y de eso nadie ha dicho mucho- debiera ser más bien territorial. Porque, con el argumento -que comparto- de que el parlamentario representa un territorio y de que el sistema electoral también tiene que ser una herramienta de desarrollo en ese ámbito, todas las regiones, incluidas las extremas, deberían contar con al menos tres Senadores. Ello, a diferencia de lo que ocurre hoy día con las de Aisén, de Magallanes, de Atacama, de Tarapacá y de Arica.

Existe un problema a mi juicio serio, porque la Región de Arica registra 170 mil electores, y la de Tarapacá, 220 mil, y cada una de ellas elegirá tres Diputados. Atacama, en cambio, cuenta con 160 mil electores y elegirá cinco. Alguien podrá decir que las primeras decían relación con dos distritos. Sin embargo, ambos sumaban cuatro Diputados y ahora cada uno de ellos aumenta en uno.

Soy crítico de esa situación, pero si pongo en la balanza las infinitas bondades del proyecto, que avanza en democracia, en profundizar justamente los mecanismos de participación de la ciudadanía, con un sistema electoral legitimado, además, por el Congreso Nacional, sin duda alguna voy a votar a favor de la norma correspondiente y, por tanto, en contra de las indicaciones renovadas, para respaldar los cambios que hoy le estamos proponiendo a la ciudadanía.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Honorable señor Chahuán.

El señor CHAHUÁN.-

Señor Presidente, hoy día el Ministerio del Interior y el Gobierno perdieron una oportunidad histórica para impulsar una reforma al sistema electoral que estuviera concordada con todos los actores políticos.

A poco de iniciada la sesión de la mañana, al mediodía, concurrimos a hablar con el Jefe del Gabinete y le señalamos que tanto en Renovación Nacional como en la UDI existía disposición para posibilitar una reforma al sistema electoral que fuera concordada por todos los actores políticos con el objeto de darle legitimidad.

Sin embargo, finalmente aquí se optó por un cambio al sistema electoral con unos pocos, pasando no solo la retroexcavadora, como afirmó un señor Senador, sino que además, como después agregó, la "motoniveladora".

Sin lugar a dudas, perdimos una oportunidad histórica.

Evidentemente, el sistema electoral binominal cumplió un ciclo político en la vida nacional y, por tanto, era imprescindible impulsar cambios profundos. No obstante, nos encontramos con la imposibilidad de que el Senado, como cámara revisora, se pronuncie acerca de la asignación de cupos realizada por la Cámara de Diputados.

Por lo tanto, esta Alta Corporación de alguna manera cercenó su propia capacidad de legislar y de generar un mejor sistema electoral desde el momento en que el Gobierno nos dijo: "Miren, no hay viabilidad política de sacar adelante una reforma al sistema electoral si se altera el equilibrio, precario, alcanzado por los incumbentes en la Cámara de Diputados".

Y yo ya me explico por qué el Senado cercenó su propia capacidad de legislar para lograr un mejor sistema electoral.

Los Senadores Orpis, Larraín y otros ya han destacado que el dibujo de los distritos fue hecho a la medida de determinadas fuerzas políticas. Si el criterio era el de la proporcionalidad territorial, lamentablemente con este proyecto no se va a cumplir.

Y quiero ofrecer disculpas, porque, como bancada regionalista -este tema lo veremos cuando nos toque analizar la composición del Senado-, levantamos la posibilidad cierta de defender la capacidad de las regiones. Se dijo: "Miren, cuando se discuta la composición del Senado vamos a imponer el criterio territorial. Le señalaremos al Gobierno que en las regiones se puede generar una distribución distinta y que bajo ningún respecto vamos a votar alineados con él".

Nuevamente, pecamos de ingenuos. ¡Pero ya nunca más! Algunos que van a dar hoy día sus votos para esta reforma se van a arrepentir a poco andar. Y se van a arrepentir porque, cuando la historia revele la atomización que genera el sistema y la sobrerrepresentación de determinadas fuerzas políticas en desmedro de otras, los propios electores los van a castigar.

Por eso, sostengo que hoy día el Gobierno perdió una oportunidad histórica para llegar a un acuerdo transversal con todos los actores y contar con todos los votos, desde los de la UDI hasta los del Partido Socialista.

Sin duda, la capacidad de diálogo, la disposición a escuchar, hoy, lamentablemente, no estuvieron presentes.

Por ello, cuando se levante una nueva bancada regionalista, cuando nos digan que se va a luchar por la descentralización, la verdad es que ello quedará en entredicho, porque, cuando hay que trabajar en la materia y votar, algunos colegas terminan mirando al Ministro más que escuchándolo y, en definitiva, cuadrándose con el poder.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Allamand.

El señor ALLAMAND.-

Señora Presidenta, tan solo quiero hacer un par de comentarios acerca de lo que estamos votando...

El señor LAGOS.-

¡Otro comentarista...!

El señor DE URRESTI.-

¡Ve que le gusta comentar, Senador...!

El señor ALLAMAND.-

¡Exactamente!

Creo haber dado algunos argumentos con relación a las consecuencias que generarán, para quienes impulsan este proyecto, la inadecuada vinculación y el mal engranaje de los tres elementos que son importantes para la gobernabilidad.

Me parece que sería un avance en términos de transparencia el que hubiera mayor claridad -como de alguna forma se ha insinuado- para explicar lo que resulta de algún modo inexplicable en este punto.

El Honorable señor Pizarro insinuó, de alguna forma, sin decirlo con todas sus letras, que lo injustificable que explica la conformación de ciertos distritos tiene una explicación: que, para llegar a la fórmula que hoy se nos presenta, se hace necesario juntar los votos y construir un acuerdo político.

En consecuencia, la opinión pública podría calibrar de mejor manera esta reforma y entenderla tanto mejor si simplemente se dijera la verdad, si se reconociera lo que todo el mundo sabe y que ignoro por qué no se admite: que no hay explicación razonable para crear una considerable cantidad de distritos cuyo número de escaños no se justifica.

La explicación respecto de por qué Atacama debe tener más parlamentarios no se sostiene ni un segundo.

Se nos dice: "Miren, es que el redistritaje tiene que quedar así, porque ya venía una desproporción del sistema anterior", en circunstancias de que toda la lógica que impulsa al proyecto es, precisamente, la corrección del sistema anterior.

La verdad es que ello no se justifica.

Entonces, ¿por qué no ser mucho más transparentes y admitir que, para llegar a un acuerdo político, fue necesario hacer determinada cantidad de concesiones que, a su vez, exigieron cuestiones que, desde el punto de vista de la lógica del proyecto, resultan absolutamente inexplicables?

A mi juicio, eso sería mucho más comprensible.

Obviamente, no es comprensible para la opinión pública un aumento de parlamentarios completamente exagerado, que no tiene justificación sino a través del peaje que fue necesario pagar para conseguir un acuerdo.

Nosotros sostenemos que esta reforma es un traje a la medida. Y, bueno, ¡eso es! Porque, como aquí se señaló, para alcanzar los votos, hubo que hacer concesiones que carecen de explicación razonable y que solo se entienden bajo la lógica de un acuerdo político.

Nuestro argumento es muy simple: el reemplazo del sistema binominal es un traje a la medida para la mayoría que lo configuró. Algunos podrán entenderlo, otros no.

Pero, ¡para qué hacer todo este ejercicio de intentar explicar lo inexplicable, de intentar asegurar que hay proporcionalidad donde no la hay, de pretender justificar aumentos o disminuciones relativas en el tamaño de los distritos!

¿Por qué simplemente no dicen la verdad: que este proyecto es un traje a la medida y que fue necesario hacerlo para conseguir los votos?

Creo que mucha gente se los agradecería.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, deseo intervenir exclusivamente porque se han hecho algunas afirmaciones y, como el debate queda registrado en la historia fidedigna de la ley, me parece conveniente que nuestras opiniones, sobre un tema tan importante como el que nos ocupa, queden consignadas.

Un señor Senador sostuvo que la única manera de conseguir un acuerdo era elevar a 155 el número de Diputados. Eso no es efectivo, porque, con un poquito de buena voluntad y a sabiendas de que tenían los votos de Renovación Nacional, tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados, se podría haber construido un acuerdo sobre la base de la propuesta de RN con la Democracia Cristiana, que además ya contaba con el apoyo de los jefes de bancada de los Senadores del Partido Socialista y el PPD.

Por lo tanto, el argumento de que solo así se conseguía un acuerdo no es cierto.

Se habría conseguido un acuerdo más amplio, más transversal, si se hubiese impulsado la propuesta que vamos a votar en el próximo artículo.

En segundo lugar, si había un argumento sólido que justificaba o justifica el cambio del sistema binominal es, precisamente, en particular para la Cámara de Diputados, que este no respeta el principio de la igualdad del voto, porque permite elegir dos Diputados por cada uno de los distritos, cualquiera que sea la cantidad de habitantes que este tenga.

Si durante todos estos años una coalición política ha impulsado el cambio del sistema electoral sobre la base de un principio que significa respetar la igualdad del voto y permitir la proporcionalidad entre el número de parlamentarios y el número de habitantes o de electores en un territorio determinado, en términos de que, a mayor cantidad de electores, se elija un mayor número de congresistas, uno esperaría que la construcción del nuevo sistema electoral respetara tal principio. Pero ustedes no lo respetan ¡en quince de los veintiocho distritos!

Entonces, el segundo argumento es que la contradicción es muy fuerte. Uno espera que una coalición política respete los principios que ha invocado durante todos estos años para cambiar el sistema binominal.

En tercer lugar, se utiliza como argumento que el sistema binominal tenía más defectos respecto del principio de la igualdad del voto. Y no cabe la menor duda de que así es, y es la razón por la cual se está cambiando. Por lo tanto, decir que se reemplaza el sistema antiguo porque es menos representativo desde el punto de vista del principio de la igualdad del voto es un mal argumento, pues justamente esa es la razón por la cual se está sustituyendo.

Finalmente, me quiero referir a un tema relacionado con el prestigio de nuestra institución.

¿Ustedes creen que la opinión pública va a considerar razonable que para aumentar la proporcionalidad del voto se eleve en treinta y cinco el número de Diputados?

Con respecto al Senado tengo una opinión distinta. Esta cámara funcionaba con cuarenta y ocho miembros y, de repente, se le sacaron ocho.

El señor MONTES.-

Eran cuarenta y nueve.

El señor ESPINA.-

Hubo hasta cuarenta y nueve.

Entonces, el tema es bastante más discutible en relación con el Senado, por el trabajo en Comisiones, por ejemplo. De hecho, a todos nos resulta difícil estar en todas ellas.

Pero, en lo que respecta a la Cámara Baja, ¿ustedes creen que, estando el Parlamento en su peor momento de prestigio -¡el peor, según todas las encuestas!-, la opinión pública va a considerar justificable que se plantee que, para que nuestro sistema democrático funcione bien, se necesitan treinta y cinco nuevos Diputados?

Y, lo que es más grave -y le pido a la Presidenta que se haga cargo de este argumento-, se afirma que nosotros vamos a poder funcionar igual con los mismos recursos económicos.

Usted ha realizado una estupenda presidencia, señora Presidenta, pese a que le ha tocado enfrentar momentos difíciles. Yo recuerdo un debate de hace poco tiempo atrás.

Sin embargo, ¿ustedes creen que vamos a quedar bien ante la opinión pública cuando de la noche a la mañana le decimos que las asignaciones que antes correspondían a ciento veinte Diputados hoy servirán para financiar a ciento cincuenta y cinco, y que la misma plata que había para treinta y ocho Senadores va a alcanzar para cincuenta?

Yo solo les advierto que ese argumento es una lápida para el prestigio del Parlamento.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, cuando alguna vez alguien revise las actas de esta sesión -alguien lo va a hacer, porque, de alguna manera, son parte de la historia-, se va a encontrar con algunas cosas sorprendentes.

La primera, a mi juicio, es el modo de tramitar una reforma estructural decisiva, en donde simplemente, por una obsesión que no es propia, creo yo, de una correcta manera de gobernar, se quiere ir más allá del debate e imponer lo que se gatilla desde La Moneda para efectos de transformar el sistema en uno distinto, sin importar la argumentación, la proporcionalidad, el sentido común y sin oír nada.

Pero quizás también va a ser sorprendente darse cuenta de lo siguiente. Este es, objetivamente, el debate político más importante que ha habido en los últimos años. Y quiero dejar claro que está presente el Ministro del Interior. Porque alguien podría pensar que, como no ha dicho una sola palabra, no está. Yo, para que los historiadores lo sepan, quiero decir que sí está. Y también hay una Ministra. Lo quiero dejar bien claro, para que nadie piense que no vinieron. ¡Están!

Sin embargo, hemos visto varios temas (el de las cuotas, el de la primarias, el del número de parlamentarios, el de la distribución de los distritos), y no se oye la voz del Gobierno, que mal que mal alguna importancia tendrá en el país respecto de los fundamentos o de hacerse cargo de una legítima crítica. Podría decir: "Mire, esto lo hago por tal razón". ¡Pero nada!

Creo que esto va a quedar como un hito para los historiadores, porque, en una reforma de esta naturaleza, no ha habido ni un solo comentario de parte de los representantes del Gobierno. ¡Y ya pasó la hora de los comentarios! Me imagino que al final, cuando culmine la tramitación del proyecto, el Ministro dirá algunas palabras. Tengo la idea de que ese debe de ser el formato.

Cuando ha importado el debate, en cuanto a si se quiere hacer las cosas en serio, cuando ha importado la historia, no ha habido comentario. Así que las personas que el día de mañana estudien lo que aquí se está haciendo -yo mismo leo a veces las actas para ver por qué se fundaron de determinada manera ciertas instituciones, para ver si han resultado exitosas o fracasadas- no van a tener forma de contrarrestar lo que verdaderamente había detrás de cada acción.

Esa va a ser, quizás -lo digo con todo respeto-, la cosa más sorprendente de este debate.

Adicionalmente, quiero plantear que, desde el punto de vista de la igualdad ante la ley, que es un principio que todos deberíamos tratar de buscar, esto claramente lo contraría. Ya lo dijo el Senador Larraín. Lo planteó también en algún momento el Senador Chahuán. Esto, obviamente, violenta la forma correcta de entender determinados principios.

Uno de repente puede encontrarle acomodo a las cosas. Aquí se ha planteado, con cifras en la mano, el modo de distribuir el número de parlamentarios según la zona. Y no hay forma de explicarlo. Además, nadie ha pretendido hacerlo tampoco. Alguien me podría decir que la única explicación es que antes había algo más o menos parecido. Pero no. No hay ninguna justificación de parte de alguien que haya estado en la "cocina" -digámoslo de esa manera-, que pueda decirnos qué pasó, qué ocurrió, cuál fue el planteamiento para llegar a tal o cual conclusión.

Aquí se ha afirmado que este es un traje a la medida, Y lo más sorprendente es que algunos han asentido -quiero dejar constancia- de que así es. Entonces, tampoco deja de llamar la atención que se trate de legislar en favor de unos cuantos y no en favor del país.

Y quiero agregar lo siguiente a una reflexión que hizo el Senador Allamand, que encontré especialmente interesante, en cuanto a en qué momento empiezan a fregarse -voy a usar esta expresión- los países. Y ello ocurre cuando se comienza a confundir el interés público con el interés propio.

Y la distribución que se plantea no es -admitámoslo- de interés público. Obedece a un interés particular, a una forma de articular un esquema de gobierno, que probablemente falle. Porque el resultado, como suele ocurrir en todas las materias políticas, es muy difícil de prever.

Lo que a mí me molesta es que se trate de hacer creer que lo que es bueno para unos -en este caso, para la Nueva Mayoría- también es bueno para el país, sin detenerse siquiera a discutir el fondo del asunto.

Por eso, señora Presidenta, me parece que aquí hay un error. Y sigo extrañando al menos la voz del Ministro del Interior.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, quizás una de las cosas que más lamento de esta discusión, sobre todo en una norma tan crucial como esta, es constatar la falta de voluntad política para llegar a acuerdos en temas trascendentales.

No cabe la menor duda de que hay materias que, por su naturaleza, exigen mayorías más significativas, las que se deben construir para que esos acuerdos puedan perdurar en el tiempo.

Aquí estamos frente a un tema crucial, pues la estructura del sistema político se funda en las elecciones. Y estas últimas implican sistemas electorales que deben responder a objetivos de representatividad, pero sobre todo de justicia, equilibrados e igualitarios para todos.

Este proyecto no lo es. Y nosotros hacemos esfuerzos aquí en el Senado para construir un acuerdo. Sin embargo, particularmente respecto de la estructura de la Cámara Baja, hemos encontrado una oposición total: la imposibilidad de revisar un acuerdo que ya se alcanzó en esa rama. Se trata de uno de la coalición política del Gobierno, no de la Cámara de Diputados en toda su amplitud, en toda su diversidad política. Y ese acuerdo que dice relación con la estructura de la Cámara Baja se ha convertido en intocable. ¿Por qué? Porque no se hizo conforme a principios de lógica que puedan justificar su forma y su resultado, sino porque se elaboró con un acomodo de piezas que, básicamente, consiste en darle y chipiar a los distintos sectores hasta que queden tranquilos y contentos.

Y eso no se puede cambiar, porque se han privilegiado los intereses políticos de los partidos que integran la Nueva Mayoría.

Eso no me parece correcto, me parece impúdico, me parece que no es la forma como se debe legislar pensando en Chile. Y me parece también una señal de enorme debilidad la incapacidad del Senado para revisar esto y buscar un mejor acuerdo.

En verdad, no considero buena la forma como se ha discutido este proyecto, o su no debate, porque se han restado de discutirlo el grueso de los parlamentarios de la Nueva Mayoría. Este no debate refleja que el Senado ha perdido una de las características centrales de su historia: la capacidad para llegar a acuerdos, para formular aquellos que resuelvan los grandes temas del país.

No hace mucho se hizo la reforma tributaria, pero no entiendo por qué hoy día no se quiere que el Senado ejerza ese rol, ni en esta materia, ni en la reforma educacional, que son dos iniciativas que se tramitan estos días. Importa más la unidad interna de la Nueva Mayoría; importa más sacar rápido estos proyectos de ley; no importa hacer buena legislación, ni legislar con sentido de futuro, ni con sentido de unidad nacional en temas que deben interesarles a todos.

Es más, estimada Presidenta, creo que le hacemos un flaco servicio al Senado, porque lo estamos convirtiendo en un buzón. Las decisiones ya no se toman en la Cámara Alta; se resuelven en La Moneda, fuera de los pasillos, fuera de la sala de reunión, fuera de las conversaciones del Senado. Se adoptan en otro lugar.

No creo que eso sea justo para el Senado. ¿Qué sentido tiene?

A lo mejor alguna razón tenía el Senador Lagos cuando sostuvo que nosotros éramos comentaristas. Su error fue no entender que ellos también lo son. Todos somos comentaristas, porque las decisiones no se toman aquí, sino en otro lugar.

Eso le causa daño institucional al Senado.

Yo lo lamento mucho.

No soy de aquellos que creen que las mayorías no se pueden ejercer en las democracias, pero sí creo que en política es muy importante buscar acuerdos. Y no tiene nada de humillante. Al contrario, eso significa anteponer el bien del país; tratar de hacer concurrir a la mayor cantidad de personas en un acuerdo determinado. Eso me parece valioso.

He visto -y la expresión "retroexcavadora" se refiere a eso- que hay quienes en la Nueva Mayoría no quieren llegar a acuerdo. He oído muchas veces al Senador Navarro y a otros decir: "No queremos acuerdos. Lo que queremos es imponer nuestras ideas porque para eso hemos ganado". Yo entiendo que cuando uno gana tiene derecho a imponer sus ideas. Pero, primero, siempre hay que buscar el acuerdo, porque eso apunta al bien de Chile.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Lagos.

El señor LAGOS.-

Señora Presidenta, espero no utilizar los cinco minutos de que dispongo para fundamentar el voto.

Tengo una convicción personal acerca de cómo voy a votar el proyecto, entendiendo que puede ser perfectible. Y lo voy a hacer en forma entusiasta, porque creo que ahora es el momento de hacerlo, porque si no, lo vamos a postergar infinitamente.

Quienes hoy argumentan sobre distintos temas, tuvieron numerosas oportunidades para hacer gestos concretos y llegar a entendimientos. Es injusto, no es cierto, no es veraz que no ha habido deseos de llegar a entendimientos. En este Gobierno al menos ha habido sinnúmero de reuniones. Lo que no entiendo, desde el punto de vista lógico, es que si yo vislumbro la posibilidad de darle viabilidad política a una reforma, que permita conformar el Parlamento con 155 Diputados y 50 Senadores, con la distribución que ya conocemos, a algunos no les guste. Y si uno dice: "Eso lo puedo hacer, porque tengo viabilidad, porque cuento con apoyo para concretarlo", ellos señalan que no es legítimo porque no se los incorporó en esa discusión.

O sea, si llego a acuerdo con ustedes, ahí es viable la cosa y legítima la reforma. ¿Se entiende el argumento?

El señor ALLAMAND.-

No.

El señor LAGOS.-

Se lo voy a explicar de nuevo al Senador Allamand, por su intermedio, señora Presidenta.

El señor ALLAMAND.-

Es que es muy mala la explicación. Debe ser por la hora.

El señor LAGOS.-

Eso puede ser.

Por qué no puede ser legítimo que yo reúna fuerzas y votos para hacer una reforma con quienes están disponibles. Según ustedes, porque el contenido no es adecuado, es feo, es una negociación política. Pero si lo hacemos juntos -tal como en el 89 para las pinches reformas que se hicieron-, entonces sí es legítimo.

No es justo decir que porque llego a acuerdo con algunos no es legítimo, pero si lo hago con ustedes, lo es.

Segundo, este no es un tema del Partido Comunista. Acá se han sumado Amplitud, la Senadora Lily Pérez, el Diputado Joaquín Godoy, la Diputada Karla Rubilar, el Diputado Browne. Y ellos hasta hace poco se sentaban al frente.

Entonces, ¿no es legítimo este acuerdo porque logré incorporar un arco más grande que el de aquellos que quieren hacer reformas?

Otra cosa es que hubo quienes pensaron que nunca íbamos a contar con esta mayoría para hacer el cambio. Yo habría preferido llegar a acuerdo con ustedes, tal como lo hice a propósito de la reforma tributaria. Y todavía me critican por hacerlo. No obstante, para eso, tendrían que haber cruzado hasta la mitad del camino y no llegaron. Esa es la verdad: ¡No llegaron! Y hoy día, a última hora, "veamos cómo lo arreglamos".

Y si de traje a la medida se trata, lo que tenemos que hacer acá lo dijo el Senador Harboe, Presidente de la Comisión de Constitución: hoy tenemos que hacernos cargo de un verdadero traje a la medida, con verdadero sastre inglés, que fue el abuso que se cometió, la suciedad que se realizó después del plebiscito cuando se implementó ese redistritaje asqueroso. Eso no justifica que haga esto; no obstante, tengo que hacerme cargo de ello.

¿Traje a la medida? Traje a la medida fueron los quórums de la Constitución; los nueve Senadores designados. Y ahora, entonces, rasgan vestiduras porque habría cinco distritos que no serían los más adecuados para ustedes y, sin embargo, pudieron convivir hasta el 2005 con Senadores designados, cuando nosotros ganábamos sistemáticamente cuanta elección parlamentaria había, con márgenes considerablemente generosos, pero llegamos acá y teníamos que pedir permiso para aprobar cualquier cosa.

Les quiero decir que hoy es cuando, y la oportunidad ya estuvo, pero no la tomaron, ¡no la tomaron! En cambio, yo conseguí tal cosa; yo y la Nueva Mayoría; nuestro Gobierno, con el apoyo de la ciudadanía, propuso algo. Y logramos no acomodar al partido comunista, sino ponernos de acuerdo en un buen espectro político, porque no todos pensamos igual, para tener un mejor sistema. Y estoy seguro de que hubiera sido infinitamente mejor si hubieran querido participar de la conversación. Estoy convencido de aquello.

A eso me refiero cuando afirmo que han sido comentaristas o analistas: no quisieron arremangarse, sentarse y decir: "No da para más el binominal y yo voy a ser parte de este acuerdo a como dé lugar". Y no quedarme el último día del otro lado, refunfuñando porque hay un distrito que representa más personas.

En lo grueso, este sistema va a ser infinitamente mejor. Esa es la convicción que tengo. Me habría encantado que ustedes hubiesen cruzado la vereda. Nadie se los impidió, porque estaba todo abierto para hacerlo. Afortunadamente, tenemos los votos justos, porque algunos pensaron que no los teníamos para hacer esto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Quintana.

El señor QUINTANA.-

Señora Presidenta, si hay alguien sigue la presente discusión a esta hora de la madrugada, en este "amanecer de la democracia" -como podríamos calificarlo-, debo decir que hace ya un par de horas se acogió el fin al binominal mediante la aprobación del artículo 109 bis. Y ahora lo que estamos viendo es el redistritaje.

Se han dicho muchas cosas aquí en relación con esta discusión. Se ha hablado de "traje a la medida"; se ha hablado de "distorsiones"; se ha hablado de que "el Gobierno no ha querido escuchar". Y la verdad es que todo eso cae por sí solo.

¿Traje a la medida? Si fue el propio Instituto Libertad en sus distintas proyecciones -que al parecer algunos señores Senadores de la Alianza no han revisado- el que sostuvo que este nuevo escenario no modifica sustantivamente la correlación actual de fuerzas. Y existen estudios públicos en esta materia que se han discutido en la Comisión de Constitución.

Entonces, se habla de "distorsiones". ¡Por favor!, si el sistema que tenemos hoy está plagado de distorsiones. Y se menciona el ejemplo de Atacama.

Se ha hablado también del "número de parlamentarios". Y parece que se nos olvida que el acuerdo suscrito por el Senador Patricio Walker con Renovación Nacional y otros miembros de la Nueva Mayoría hablaba de 134 Diputados, y con esquemas, con mapas.

No es que no haya habido mapas en esa discusión con Renovación Nacional. Los había. Probablemente no igual a este, sino, como le gusta a algunos sectores de la Derecha, con más territorios pares, con más zonas de cuatro, con más distritos de seis. Pero había un mapa.

Y en lo esencial no es muy distinto de lo que discutimos hoy.

Para que hablar de la fórmula Boeninger. Efectivamente, hubo gente de la Derecha que en algún momento la miró en serio, la estudio en serio. La fórmula Boeninger es la más parecida a esta, con distritos de entre 3 y 8 Diputados.

Porque, finalmente, todos los caminos conducen a una lógica similar. Aquí no ha habido una propuesta de la Derecha, salvo la planteada por el Senador Espina, de 30 distritos, que intentó explicar el Senador Coloma en esta sesión, pero no quedó muy claro bien en qué consistía.

Participó el propio Presidente de Renovación Nacional. Aquí se dijo que faltó disposición del Gobierno para escuchar. No sé cuántas habrán sido las reuniones que el Ministro del Interior, señor Peñailillo, habrá tenido con la directiva de Renovación Nacional. No sé si habrán sido dos, cinco o diez. No tengo idea -lo sabe la mesa de Renovación Nacional- cuántas reuniones ha habido.

Algunos decían: "Es que está aumentando mucho el número de Senadores". Pero lo cierto es que la propuesta de la mesa directiva de Renovación Nacional hablaba de 54 Senadores, cuando ya se habían aprobado los 155 Diputados.

Y entiendo que la mesa de la propia UDI planteó formalmente -es público- en los últimos intentos la cifra de 150 Diputados.

Entonces, esto de que estamos incrementando significativamente el número de parlamentarios, ¡por favor!, era algo asumido.

Finalmente, creo que esto facilita claramente la expresión de la mayoría, reduce la desigualdad del voto en gran parte del territorio. Y, por eso, pienso que no es bueno rasgar vestiduras, sino, al revés, que es una gran noticia que vamos a terminar el binominal en este -reitero- amanecer de la democracia.

Voto en contra.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor García-Huidobro.

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

Señora Presidenta, el argumento entregado por algunos Senadores, especialmente por el Senador Pizarro, respecto del aumento de parlamentarios en su propia región, en verdad -como bien dijo la Senadora Ena von Baer-, no guarda relación alguna con un distrito de mi región, San Fernando y Santa Cruz, porque mantiene el número de Diputados, pese a que ambos se juntan.

En su región, señora Presidenta, votaron 99 mil personas en la última elección, y van a elegir cinco Diputados. En la nuestra, en que se eligen igualmente 4, y se fusionan 2 distritos, votaron 156 mil personas. Hay una relación no solamente del padrón electoral, sino también de las personas que votan.

Por otro lado, quiero manifestar mi preocupación, porque escuché y leí críticas fuertes del Senador Rossi respecto al redistritaje del norte; y hoy vota a favor, cuando justamente fue uno de los más críticos. Y la excusa que da es que aquí hay un bien superior.

Ahora, pienso que el acuerdo que buscó Renovación Nacional, pues quiero valorar el esfuerzo de este partido, aunque yo no concordaba con él, la verdad es que fue dejado en el camino y se consiguieron dos Senadores, que pertenecían a RN, para llevar adelante este proyecto. ¡Así fue!

Habría sido mejor un acuerdo bastante más amplio, porque este va a ser feble, y a la larga dependerá del voto justo que se alcanzó. Y eso no es bueno para Chile, pues siempre se ha dicho que este proceso es para 30, 40 o 50 años a futuro. Y eso requiere grandes acuerdos, tal como lo hemos logrado en otras materias.

Resulta triste ver -lo digo responsablemente- que se consiguieron estos votos, con el fin de reforzar lo que acordaron en la Cámara de Diputados. Esa impresión me queda, y quiero ser superfranco con mis colegas Senadores.

No sé si efectivamente la Nueva Mayoría ha incorporado a dos nuevos Senadores. Puede ser, pues estos son dos temas fundamentales, importantísimos para el futuro democrático que requiere este país.

Las elecciones serán en tres años más. Tengan cuidado, porque este traje a la medida se les puede mojar. Y si se moja, les quedará muy apretado. Y si engordan, estando en el Gobierno, puede explotar.

Por lo tanto, lo único que les digo es que vamos a trabajar con mayor ahínco; vamos a recuperar las senadurías que hemos dejado como Alianza, y vamos a trabajar para que esta elección sea un ejemplo de lo que no se debe hacer aquí, en el Senado.

El Senado es una Cámara revisora, y se le impidió revisar un acuerdo de la Cámara de Diputados. Eso sienta un pésimo precedente respecto a la labor que tenemos y a la que la Constitución y nuestros deberes, por ser elegidos, nos obligan.

Por consiguiente, señora Presidenta, voto a favor de esta indicación, porque creo que va en el camino correcto para salvar el voto que deben tener justamente los parlamentarios libres. Hoy me da la impresión de a numerosos Diputados les habría gustado votar distinto, pues el redistritaje que se les está imponiendo los obliga a alejarse más de la gente.

Tal como han dicho algunos Senadores, preocuparse de los sectores donde hay más población y abandonar las zonas rurales más pequeñas, a la larga, generará un efecto político contraproducente con lo que se pretende.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Walker.

El señor WALKER (don Patricio).-

Señora Presidenta, en primer lugar, quiero recordar que cuando me tocó presidir la Comisión de Constitución trabajamos muy bien con los Senadores Hernán Larraín, Alberto Espina, Carlos Larraín, Soledad Alvear. En 15 sesiones escuchamos a muchos especialistas, y nunca vi -digo una palabra tan de moda- un matiz.

Todos los expertos nos dijeron que había que bajar los umbrales de acceso al Congreso para que efectivamente tuviéramos un sistema más representativo y competitivo. ¡Todos!

Y, efectivamente, hubo varias fórmulas. Lo relativo a 2, 4, 6 Diputados, que fue el acuerdo de la Nueva Mayoría con Renovación Nacional. El Gobierno de la Presidenta Bachelet mandó una fórmula más ambiciosa (distritos de 3 a 8 Diputados), que tiene como mérito que baja aún más los umbrales de acceso.

Porque hoy para asegurarse un escaño se requiere un tercio de los votos, más uno. Con esta fórmula, en algunos casos se va a poder, con 20 por ciento, 15 por ciento y según la cantidad de listas que se presenten tal vez 10 por ciento, elegir a un parlamentario, especialmente en la Cámara Baja donde se elige mayor número de Diputados. Y eso significa más diversidad, más representatividad, más competencia.

En la Cámara de Diputados, con este proyecto se elimina el cien por ciento del binominal. ¡Bingo! ¡Muy bueno!

En el Senado no ocurre lo mismo, pues en las zonas extremas seguimos con dos Senadores. Eso no nos gusta, pero prefiero mirar lo bueno de la iniciativa y no lo insuficiente.

Pero me llama la atención una cosa, señora Presidenta: acá se está planteando como si fuera un dogma o un asunto de principios el cumplimiento o no de lo acordado en torno al número de Diputados y Senadores. Se argumenta como si fuera algo intocable lo que en su minuto se concordó.

Al respecto, debo señalar que acá se observan dos problemas.

En primer lugar, en cuanto al número de parlamentarios, sobre lo cual hoy se hace un verdadero escándalo, cabe recordar que el año 73, con la mitad de la población actual, se elegían 50 Senadores y 150 Diputados.

¿Y qué se propone ahora? Aumentar a 155 Diputados y a los mismos 50 Senadores.

Si fuera una cuestión de dogma, una materia intocable, que no admite matices ni conversación ni revisión, ¿por qué el Presidente de Renovación Nacional, Diputado Cristián Monckeberg, de buena fe, como lo dijo el Ministro del Interior, le entregó en La Moneda una propuesta formal en la que se establecían 54 Senadores y se mantenía la cantidad de Diputados que se aprobó en el primer trámite constitucional?

Si es un asunto de principios y de convicciones tan profundas oponerse al incremento aludido, que sería una medida atroz que solo busca asegurarnos las pegas, ¿por qué el Presidente de RN, de buena fe, legítimamente, con convencimiento, hizo tal proposición?

Claro, otra cosa es que después no haya contado con el apoyo de los parlamentarios de su Partido.

En esta materia yo no quiero ser odioso, pero esta situación ya ha ocurrido en otras ocasiones. Recuerdo cuando Andrés Allamand, como Presidente de Renovación Nacional, logró un acuerdo en el Comité Político o Consejo General -no sé cómo se llama el órgano pertinente- para eliminar la institución de los Senadores designados. ¡Y sus Senadores no respetaron ese acuerdo!

Ahora la máxima autoridad de dicho Partido hizo una propuesta, legítima, por convicción, al Ministro del Interior. Y sus representantes en esta Corporación manifestaron sus diferencias con ella, entiendo que no respecto al guarismo 54, pero sí a la forma en que se repartían los Senadores en el país.

Entonces, señora Presidenta, no entiendo que algunos recurran a argumentos de convicción y de principios sobre algo que ellos mismos intentaron modificar mediante propuestas, mostrando flexibilidad.

Al final no llegaron a acuerdo con el Ministro del Interior, por cuanto proponían una fórmula distinta de distribución de Senadores.

Pero, ¡por favor!, no nos carguen a nosotros el que solo queremos aumentar las pegas, los cupos, los cargos, cuando ustedes realizaron proposiciones muy similares a las que hoy estamos discutiendo.

En verdad, lamento que en ese ámbito no se haya alcanzado acuerdo con Renovación Nacional, porque, sin sus votos, no se habría eliminado el guarismo 120 de la Constitución y no habríamos podido discutir esta iniciativa. Lo siento mucho, por el país. ¡Mucho!

Incluso el Senador Hernán Larraín estuvo muy dispuesto en la Comisión a llegar a acuerdo. Y eso lo quiero valorar y reconocer.

Sin embargo, seamos justos y digamos las cosas como son, en lugar de argumentar cuestiones de principios acerca de materias que son discutibles y respecto de las cuales se presentaron propuestas.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señor Secretario, consulte.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE ( Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se rechazan las indicaciones renovadas números 63 y 64 (24 votos en contra y 10 a favor).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, Bianchi, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa la señora Von Baer y los señores Allamand, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La indicación renovada número 66, del Senador señor Espina, busca sustituir el artículo 179, referido a la distribución de los distritos electorales.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

¿Me permite plantear un punto de Reglamento, señora Presidenta?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra, Su señoría.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

Señora Presidenta, podría declararse improcedente la indicación, porque sugiere un número de distritos distinto del que ya se aprobó.

No veo qué viabilidad podría tener, salvo hacer la discusión o tratar de demostrar que el redistritaje que propone es mejor.

Sabemos que no hay posibilidad de aprobar esto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

No puedo negarle su derecho al Senador señor Espina.

Tiene la palabra, Su Señoría.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, quiero explicar nuestra propuesta.

Si bien se aprobó la norma que fija 28 distritos en vez de 30, reglamentariamente -lo hablé con el señor Secretario-, podría acogerse esta indicación, lo cual reabriría el debate respecto de la disposición ya acogida, dada la incoherencia que se generaría entre ambas.

Solo estoy ejerciendo mi derecho a intervenir. Además, quiero que la Sala se pronuncie sobre la propuesta de Renovación Nacional.

Eso es lo que corresponde según el Reglamento. Así me lo indicó el señor Secretario.

El Senador Harboe me está pidiendo una interrupción. No quiero perder mi tiempo, pero tampoco ser maleducado.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

El Honorable señor Harboe desea intervenir por una materia reglamentaria.

El señor ESPINA.-

Pero aquí todos estamos actuando de buena fe.

El señor HARBOE.-

Bueno. Después intervengo mejor.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Continúe, Senador Espina.

El señor ESPINA.-

Solo pido que se me permita argumentar la propuesta de RN para que quede consignado en la historia fidedigna de la ley, y que luego se vote.

Eso es más rápido, a mi juicio.

No tengo interés, como le consta al Senador Harboe, en dilatar esta discusión. Podríamos haber puesto mil trabas en la Comisión de Constitución y no lo hicimos. Por el contrario, tratamos de corregir el proyecto.

Seré muy breve, señora Presidenta.

Para la historia de este debate, debo señalar que Renovación Nacional presentó una fórmula alternativa para terminar con el sistema binominal.

Dicha propuesta fue consensuada en el Senado de la República con el Partido Demócrata Cristiano y trabajada con un equipo técnico.

Hago notar que en ella no se buscó favorecer a RN y a la UDI, pues se elaboró -y ustedes pueden revisar el detalle- de acuerdo a criterios absolutamente objetivos.

Partidos de distintas coaliciones fuimos capaces de ponernos de acuerdo. Y eso me alegra.

Nuestra proposición, si hubiera existido buena voluntad, podría haber sido aprobada, porque tiene la virtud de establecer una adecuada representación en la Cámara Baja, basada en un principio de igualdad del voto mayor a la que propone la iniciativa. En efecto, plantea un aumento razonable de 120 a 134 Diputados, y no a 155, lo cual es excesivo y carente de justificación.

En el Senado, se sugiere elevar la cantidad de integrantes de 38 a 44. Es cierto -lo admitimos- que fue objeto de debate si el Senado precisaba o no una representación mayor. Pero, en ningún caso, lo requería la Cámara de Diputados.

La referida propuesta fue producto de un trabajo silencioso. Por eso hago un reconocimiento al Presidente de la Comisión de Constitución de ese período, don Patricio Walker; a la entonces Senadora Soledad Alvear; al propio Hernán Larraín, quien si bien no votó a favor de ella, participó en su debate; a los equipos técnicos, y a Carlos Larraín, quien trabajó activamente en este planteamiento.

Todo ello viene a testimoniar un acuerdo político que realmente permitía terminar con el sistema binominal y consagrar un mecanismo proporcional adecuado y correcto.

Nuestra fórmula dispone en el Senado un sentido de territorialidad, lo cual forma parte de la tradición chilena -en esta Corporación vale la representación del territorio-, y en la Cámara de Diputados, un sentido de representatividad en virtud del principio de la igualdad del voto.

El Presidente de nuestro Partido efectivamente hizo una propuesta de 54 Senadores, pero jamás sugirió subir a 155 la cantidad de Diputados.

En muchas oportunidades intentamos llegar a acuerdo con el Gobierno, sabiendo que no iba a ser nuestra propuesta la que se aprobaría.

Por otra parte, no me parece correcto y justo que, cuando se realiza una negociación, se invoquen parcialmente los aspectos en ella involucrados. Con esa actitud no vamos a poder negociar nunca más.

Del Gobierno siempre recibimos la imposibilidad de modificar lo relativo a la Cámara Baja, lo que cerró las puertas a un posible acuerdo. Si hubiese existido disposición de su parte, lo más probable sería que nuestra propuesta se hubiera enmendado, por cuanto nosotros siempre estuvimos abiertos a perfeccionarla. Pero nunca se nos dio la oportunidad de revisar siquiera lo acordado en la otra rama del Parlamento.

Es más, el señor Ministro el Interior asistió solo a una de esas sesiones. Posteriormente, lo hizo la Ministra Rincón. Cuando hay voluntad de un Jefe de Gabinete de llegar a un acuerdo, debe manifestarse en la Comisión, como lo hizo el Senador Patricio Walker, quien participó en más de 16 sesiones, y siempre lo vi abierto a buscar puntos de encuentro donde había diferencias.

Un Jefe de Gabinete, que es líder político de una coalición y que tiene voluntad de avanzar -y esto no constituye una descalificación personal-, se queda en la Comisión tantas horas como sean necesarias.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminó su tiempo, señor Senador.

El señor ESPINA.-

Permítame redondear la idea.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

El debate ya se agotó en esta materia; así que no voy a concederle minutos adicionales. En esto he sido rigurosa con todos.

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La señora Presidenta ha puesto en votación la indicación renovada número 66, que sustituye el artículo 179.

Dejo constancia de que, para su aprobación, aquella requiere los votos conformes de los tres quintos de los Senadores en ejercicio.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, está bien que el Senador Espina haya fundamentado su indicación.

Solo quiero hacer presente que coincido con el planteamiento formulado por el Senador Andrés Zaldívar: el hecho de que la indicación 60, que proponía fijar treinta distritos, haya sido rechazada (25 votos en contra y 6 a favor) inmediatamente hacía caer las indicaciones 66, que es la que estamos viendo ahora, y la 65, que la Mesa aún no ha puesto en votación pero que también supone la existencia de treinta distritos.

Votemos nomás. Sin embargo, en estricto rigor -a mi juicio, por lo menos-, correspondía dar por rechazadas las indicaciones referidas en función de que ya se desechó la idea de establecer treinta distritos.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene razón, señor Senador, pero ya estamos en votación.

Y hago presente que la indicación 65 fue retirada.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Reitero que lo que está en votación es la indicación renovada número 66.

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE ( Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se rechaza la indicación renovada número 66 (23 votos en contra y 6 votos a favor).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic y Muñoz y los señores Araya, Bianchi, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa los señores Allamand, Chahuán, Espina, García, Hernán Larraín y Prokurica.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Señores Senadores, corresponde ahora votar el número 13), que pasa a ser 8), mediante el cual la Comisión de Constitución propone remplazar el artículo 179 de la Ley sobre Votaciones Populares y Escrutinios, incluyendo un inciso final que se agrega.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Muy bien.

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba el número 13), que pasa a ser 8), para remplazar el artículo 179 de la Ley sobre Votaciones Populares y Escrutinios (24 votos a favor y 10 en contra), dejándose constancia de que se reunió el quórum constitucional exigido.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, Bianchi, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa la señora Von Baer y los señores Allamand, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

A continuación, corresponde tratar las indicaciones renovadas números 70, 71 y 72, que proponen eliminar el número 14), que pasa a ser 9), cuyo objetivo es agregar un artículo 179 bis.

Luego se verán otras indicaciones, como las números 73, 75 y 76, que sustituyen distintos elementos en este artículo.

Lo primero es votar las indicaciones 70, 71 y 72, que pretenden suprimir el numeral 14).

Los Senadores señores Coloma y Pérez Varela son los autores de la indicación 70; el Honorable señor Ossandón es el de la 71, y los Senadores señores García-Huidobro y Moreira, de la 72.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En discusión.

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, el debate se halla referido al artículo 179 bis, que establece la forma de actualizar la asignación de los escaños de Diputados.

A mi juicio, aquí se evidencia de forma palmaria la inconstitucionalidad que encierra el redistritaje que acabamos de votar.

¿Qué debería plantear un artículo que pretende actualizar, cada cierto tiempo, determinada disposición? El intento de reflejar en la representatividad los cambios que se produzcan con relación al número de votantes. Este principio uno podría calificarlo de correcto.

Sin embargo -y aquí apunto al asunto de fondo-, si uno aplicara hoy los criterios que se sugieren para actualizar el sistema en diez años más, la distribución obtenida sería completamente distinta.

Entonces, no calza disponer que "Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos".

Y posteriormente, se agrega: "No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 8 diputados. En el caso que (¿) uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población".

Además, se faculta al Consejo Directivo del Servicio Electoral para materializa esto.

¿Dónde radica el punto, señora Presidenta? En que el resultado hoy sería muy diferente si se aplicaran esas normas; en que la distribución cambia si uno aplica la proporcionalidad de la población.

Entonces, esto es lo más palmario que he visto para demostrar -y estoy argumentando en función del Tribunal Constitucional- lo absurdo que resulta el redistritaje, toda vez que la regla de actualización generaría hoy día un resultado completamente distinto.

Yo entendería una norma de esta naturaleza si, de alguna manera, mantuviera lo que hay ahora. Pero es tan claro lo ilógico que resulta esta distribución que el artículo 179 bis es absolutamente contradictorio con el precepto anterior, que hablaba del redistritaje.

Señora Presidenta, estas cosas no pueden pasar desapercibidas, sin más, como un comentario anecdótico.

A mí me parece que, desde una perspectiva única, si uno pudiera desagregar el artículo 179 bis de lo establecido en el anterior, tendría sentido, se lo podría considerar. Porque uno pensaría: "En realidad, hay una proporcionalidad". Y se podría decir: "Que ningún distrito sea más chico que tanto, ni más grande que tanto y si hay alguno que excede el límite, se repiensa".

Eso es correcto.

Me gustaría, sí, recibir alguna explicación de quienes formularon esta norma por parte del Gobierno -todavía no oímos su voz-, a los efectos de saber cuál es la lógica para que esa distribución resulte distinta. No sé si existe precedente en algún momento de la historia, en alguna instancia, en algún país, en algún hemisferio. No sé dónde pueda haber una norma de actualización dé un resultado distinto de lo actual.

Aquí quiero ser reflexivo. Estoy tratando de obtener una aplicación, de modo de saber por qué se valida lo primero.

Entonces, para efectos del Tribunal Constitucional, si esto se valida -y, por cierto, se remarca, porque se busca generar un apego a la norma constitucional-, lo anterior no tendría ningún sentido, ya que se descartaría exactamente en sí mismo.

Ese es el sentido de las indicaciones.

Y en el debate a uno le gustaría formular algunas preguntas, precisamente para saber por qué ocurre una contradicción vital tan importante como que el artículo 179 resulte completamente contradictorio, en la práctica, con la aplicación del 179 bis.

Si alguien quiere más antecedentes, le puedo mostrar cuál sería el resultado.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Consulto a la Sala si podemos abrir la votación, sin perjuicio de que se fundamente el voto.

¿Habría acuerdo?

El señor BIANCHI.-

Sí.

El señor QUINTANA.-

Muy bien.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Acordado.

En votación.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Siguiendo con la lista de inscritos, tiene la palabra el Senador señor Chahuán.

El señor LARRAÍN.-

¿Qué estamos votando, señora Presidenta?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Las indicaciones números 70, 71 y 72.

Le voy a dar la palabra al señor Secretario para que explique la votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Las tres indicaciones tienen por objetivo eliminar el número 14), que propone agregar un artículo 179 bis a la ley vigente.

Quienes estén de acuerdo con lo propuesto en las indicaciones votan que sí, y quienes se hallan en desacuerdo, que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Puede intervenir el Honorable señor Chahuán.

El señor CHAHUÁN.-

Señora Presidenta, para transparentar el debate, sería óptimo que el Ministro del Interior, si lo tiene a bien, respondiera una consulta.

Se sostiene que no serán 155 los Diputados.

El señor COLOMA.-

Se distribuirán de otra forma.

El señor CHAHUÁN.-

No, insisto: se dice que habrá 10 Diputados más por cupo de pueblos originarios, y otros 5 Senadores por el mismo concepto, y que esa disposición no se ingresó en este proyecto de ley porque habría requerido hacer la consulta contemplada en el Convenio N° 169, de la Organización Internacional del Trabajo.

Lo anterior me lo ha explicado gente del Gobierno. Y me gustaría que las personas dispusieran, con transparencia, del dato preciso.

¿Tendremos una Cámara de Diputados de 165 miembros y un Senado de 60?

Eso es lo que quiero saber.

Porque me encantaría que los pueblos originarios estuvieran representados en el Parlamento con cargo al número de escaños que hoy día estamos aprobando.

Pero, además de aprobar una reforma de las características de la que estamos debatiendo, al parecer viene una cartita bajo la manga del Gobierno para incorporar 10 Diputados más y 5 Senadores más, con cargo al mismo presupuesto. ¡Me parece que ni Mandrake el Mago podría hacerlo...!

He dicho.

El señor LAGOS.-

¿No quiere darle representatividad parlamentaria a Rapa Nui...?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, no merece mayor comentario la última intervención, porque no tiene ningún fundamento lo que se acaba de plantear. No existe eso. Está en la imaginación del señor Senador.

Respecto del artículo en comento, solo quiero manifestar lo siguiente.

En el derecho comparado, el organismo emisor, el Instituto Nacional de Estadísticas tratándose de los chilenos, es el encargado de establecer un factor de actualización, en este caso, de la población.

Y el artículo 179 bis es plenamente coherente con lo que acabamos de aprobar en el 179, porque el inciso final de este último señala: "El número de diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis".

En consecuencia, el artículo 179 bis que estamos votando ahora le otorga una facultad al Consejo Directivo del Servicio Electoral para actualizar cada diez años la asignación de los 155 escaños, de conformidad a determinado procedimiento.

De consiguiente, se permite al mencionado Consejo Directivo realizar esa actualización dentro de un marco que establece la ley, porque el artículo 179 aprobado especifica los distritos electorales y les asigna un límite de elección de entre tres y ocho Diputados.

De hecho, la Cámara de Diputados había aprobado una norma que permitía al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar entre tres y nueve Diputados, situación que la Comisión de Constitución consideró no adecuada, porque, en la práctica, se le estaba otorgando la facultad de aumentar ese número en algunos casos, lo cual violentaba la disposición legal antes citada.

En consecuencia, se volvió a establecer entre tres y ocho Diputados, razón por la cual lo que estamos aprobando resulta fundamental para que el Servicio Electoral pueda actualizar las asignaciones cuando se produzcan procesos migratorios internos que alteren de una u otra forma la composición de los distritos.

Entonces, no hay una contradicción, sino un factor de actualización.

¿Por qué cada 10 años? Recuerdo que en la sesión correspondiente se encontraba el Senador Bianchi y preguntó precisamente eso. Bueno, porque la ley del INE ubica los censos transcurrido dicho lapso. Y de ahí deriva el factor de actualización.

Eso explica por qué tenemos que aprobar, a mi juicio, el artículo 179 bis.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Hernán Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, se han expresado distintos comentarios al artículo en comento. Aprovecharé de referirme a él en toda su extensión, si el tiempo me lo permite.

El primer inciso busca la manera de distribuir a los 155 Diputados consignados en el proyecto dentro de 28 distritos. Aquí había una discusión, pero quedó zanjada con las votaciones anteriores.

Las letras siguientes establecen distintos criterios.

En la letra a) se dispone la necesidad de que cada diez años se actualicen proporcionalmente al número de habitantes los escaños asignados a un distrito determinado.

Y, como bien señalaba el Senador Coloma, eso demuestra que el actual sistema requiere de ajustes, porque no es proporcional. Si lo fuera, esta norma tal vez no sería necesaria.

Sin embargo, no es lo más relevante. Porque aquí lo que se busca es tratar de actualizar conforme a un dato que, para nuestro gusto, no es lo más razonable. El criterio que se está utilizando para distribuir los cargos es el censo oficial de la población. Sin embargo, nosotros pensamos, al igual que varios asesores técnicos que escuchamos en la Comisión, que el ajuste de la proporcionalidad se debe realizar contra un dato fijo conocido, que son los electores, y no contra un dato variable e indeterminado como es la población.

Nosotros tenemos, con el registro electoral automático, la precisión exacta del número de electores. Y hemos presentado una indicación para que sea ese el criterio que se siga. El criterio con el cual se estableció el número de concejales no fue el de la población: fue el de los electores. Y a nosotros nos parece que es preciso tener una cierta coherencia en el sistema legislativo y lograr que esta materia siga la misma lógica.

Esa es una primera consideración respecto de este tema, que está en la letra a).

En la letra b) se establece que el ajuste proporcional que puede, en algún distrito, aumentar el número de parlamentarios y en otro reducirlo -por el crecimiento de la población, por el decrecimiento, por razones migratorias o de otro tipo-, se ajustará con un piso de 3 y un techo de 8. Este último era de 9 en el proyecto de la Cámara, pero se cambió a 8.

Sobre el particular, nosotros hemos planteado la posibilidad de que esto tenga un margen distinto: entre 2 y 6. Nos parece que si les asignamos 3 como piso común a todos los distritos -estamos hablando de la Cámara de Diputados-, podemos establecer una diferencia tremenda en las proporciones que hay entre ellos. Y eso va a ser un elemento distorsionador en la proporcionalidad.

Por eso proponemos bajar el mínimo a 2. Y, salvo algún número (el proyecto actual establece hasta 8 Diputados), nosotros igual consideramos que logramos una distribución mejor, más adecuada a lo largo de los distritos, si esa proporción la reducimos a 6.

Por lo tanto, hay dos cambios que queremos establecer en este proyecto. Uno, en la letra a), por las razones que mencionaba, que la proporción con la cual se ajusten los datos por parte del SERVEL utilice los datos del Registro Electoral y no los del INE. Y dos, que la variable, la franja en que se mueva el Servicio Electoral para ajustar la proporción correspondiente según los cambios poblacionales sea entre 2 y 6 Diputados.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Zaldívar.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

Señora Presidenta, quiero hacer una observación muy breve.

Este proceso de ajuste en relación con el censo es algo que estaba en la legislación electoral nuestra, desde hace muchos años, y se debiera haber aplicado. Pero, normalmente, los partidos políticos se ponían de acuerdo y no aprobaban el censo. Por lo tanto, no le daban aplicación.

En seguida, esta norma, que no está hecha para lo que decía el Senador Coloma cuando señaló que el proyecto no cumplía con la proporcionalidad qué él estimaba adecuada, se halla establecida en el sistema electoral desde hace mucho tiempo. Por eso, creo que es bueno aprobarla en los términos propuestos.

Porque, actualmente, si uno ve los distritos, advierte que el mínimo son 3 diputados y el máximo, 8. Entonces, puede discutirse lo que dice el Senador Larraín.

Por otro lado, creo que la distribución efectivamente podría haberse hecho respecto del número de electores y no de la población. Pero también eso es relativo, porque, con el voto automático, la proporcionalidad es más o menos similar, o debiera serlo.

Esa es la observación que deseaba hacer. Esta es una norma que tiene tradición histórica dentro del sistema electoral chileno.

El señor COLOMA.-

¿Me permite, señora Presidenta?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Pero usted ya habló, señor Senador.

El señor COLOMA.-

Es algo muy breve.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra Su Señoría.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, si le parece mejor, después de las explicaciones que se han planteado, le sugiero no votar estas indicaciones, sino la siguiente. Porque, si no, vamos a tener que votar tres veces y lo razonable es concentrarse en lo que plantea el Senador Larraín respecto de la modificación de las letras a) y b).

Ese es el punto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Son dos cosas distintas. Ahora estamos votando las indicaciones 70, 71 y 72.

El señor COLOMA.-

Las retiramos.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Ya estamos en votación.

El señor COLOMA.-

Bueno, está bien.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señor Secretario.

--Se rechazan las indicaciones renovadas números 70, 71 y 72 (23 votos contra 7).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, Bianchi, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa la señora Von Baer y los señores Chahuán, Coloma, García-Huidobro, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

La siguiente indicación e la número 73. Si no me equivoco, no deberíamos verla porque ya se rechazó la indicación del Senador Espina relativa al número de los diputados.

El señor HARBOE.-

Así es.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Es consecuencia de lo anterior.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Por lo tanto, declarémosla 

El señor HARBOE.-

Que se repita la votación, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Con la misma votación anterior, podemos darla por rechazada, porque es completamente inoficioso discutirla.

--Con la misma votación anterior (23 votos contra 7), se rechaza la indicación renovada número 73.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señor Secretario, sigamos.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Corresponde votar la indicación número 75, de los Senadores señores Espina y Larraín, para reemplazar, en la letra a) del artículo 179 bis, la frase "en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas", por "en consideración a los electores de cada uno de ellos," -se está refiriendo a los distritos- "en base a el padrón electoral definitivo elaborado por el Servicio Electoral y utilizado en la última elección de carácter nacional".

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación la indicación 75, que ya explicó latamente el Senador señor Larraín.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La indicación requiere, para su aprobación, los tres quintos de los Senadores en ejercicio.

Quienes estén de acuerdo con su texto votan que sí, y quienes estén en contra, votan que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se rechaza la indicación renovada número 75 (24 votos contra 10).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, Bianchi, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa la señora Von Baer y los señores Allamand, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Larraín, Orpis y Prokurica.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, si le parece, con la misma votación puede rechazarse la indicación siguiente.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Sí, es enteramente lógico. La Mesa acepta la sugerencia.

Si le parece a la Sala, con la misma votación se rechazaría la indicación 76.

--Con la misma votación anterior (24 votos contra 10), se rechaza la indicación renovada número 76.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Ahora tenemos que votar el artículo.

Si hubiera acuerdo, se podría aprobar con la misma votación.

El señor HARBOE.-

Pero al revés.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Por supuesto: quienes son partidarios del precepto tendrían que votar que sí; es decir, se cambiaría el sentido de la votación.

El señor COLOMA.-

Votemos, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Mejor, para que quede clarito.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Corresponde votar el número 14), que incorpora el artículo 179 bis.

En dicho numeral, que se extiende desde la página 41 hasta la 44, la Comisión de Constitución introdujo dos modificaciones, las que se deben votarse en conjunto con el artículo.

La primera enmienda -página 42- recae en la letra b) del artículo 179 bis, y su propósito es sustituir el guarismo "9" por "8".

Mediante la segunda modificación -página 44- se suprime, en el inciso final de la letra d), el siguiente párrafo: "En caso de producirse algún cambio en la distribución de diputados, el texto del artículo 179 de esta ley se entenderá modificado en lo pertinente, de pleno derecho y se aplicará en su forma así corregida en la elección inmediatamente siguiente.".

Para aprobar el artículo 179 bis, con las dos modificaciones que explicité, se requieren tres quintos de los Senadores en ejercicio.

Quienes están de acuerdo con el artículo 179 bis y ambas modificaciones deben votar que sí, y aquellos que no lo están, que no.

La señora ALLENDE ( Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ ( Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE ( Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba el número 14) del artículo 1°, que incorpora un artículo 179 bis a la ley 18.700, con las dos modificaciones sugeridas por la Comisión de Constitución (24 votos contra 6 y 4 abstenciones), dejándose constancia de que se reúne el quórum constitucional exigido.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, Bianchi, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa la señora Von Baer y los señores Coloma, García-Huidobro, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

Se abstuvieron los señores Allamand, Chahuán, Espina y García.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ ( Secretario General).-

En seguida, corresponde pronunciarse sobre el número 15), mediante el cual la Comisión de Constitución propone sustituir por otro el artículo 180 de la ley N° 18.700.

Al respecto, se renovaron varias indicaciones. Las números 80 y 81 son para suprimir el artículo 180; las números 82 y 83, para remplazarlo, y las indicaciones números 88 y 89, para sustituir sus incisos primero y segundo.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, sugiero votar inmediatamente las indicaciones que plantean la supresión del artículo 180; que una vez despejado eso nos pronunciemos sobre las indicaciones sustitutivas, y que luego entremos a la discusión de fondo sobre la composición del Senado.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

A la Mesa le resulta completamente razonable lo que propone el señor Presidente de la Comisión de Constitución.

Así que, si hubiera acuerdo, podríamos proceder de esa manera.

Tiene la palabra el Honorable señor Harboe para complementar su planteamiento. Porque entiendo que estamos de acuerdo.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, la idea es que votemos primero las indicaciones 80 y 81, salvo que se retiren, y que después discutamos las indicaciones sustitutivas.

El señor PIZARRO.-

Conforme.

El señor WALKER (don Patricio).-

Es razonable la proposición.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Nosotros tenemos otra sugerencia, señora Presidenta: realizar el debate sobre la composición del Senado y después votar las indicaciones y el texto correspondiente.

Creemos que eso es más rápido.

El señor PIZARRO.-

Hagamos una sola discusión.

El señor HARBOE.-

Claro: una sola discusión, para todo.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Podemos discutir primero y votar después.

El señor LARRAÍN.-

Las votaciones son distintas. Pero podemos tener una sola discusión.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Para completar la información, debo señalar que respecto del artículo 180 el Senador señor Guillier solicitó revisar una declaración de inadmisibilidad que hizo la Comisión de Constitución acerca de una indicación formulada por él.

En tal sentido, la Secretaría puede señalar que el argumento figura en el informe, donde consta la resolución de dicho órgano técnico.

Si Sus Señorías estiman necesario que lo haga presente, no tengo inconveniente.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

La Mesa va a mantener el criterio de la Comisión.

En todo caso, si el Senador señor Guillier quiere argumentar, podrá hacerlo.

Tiene la palabra Su Señoría.

El señor GUILLIER.-

Señora Presidenta, la indicación que presenté se declaró inadmisible sobre la base de que irroga gasto. Empero, según entiendo, la reforma que aumenta la cantidad de Senadores y Diputados no implica gasto.

Entonces, sería interesante que se aclarara cuál es el financiamiento real para el aumento del número de parlamentarios que plantea el proyecto. Porque se formula una indicación que eleva a 55 la cantidad de miembros de la Cámara Alta y mantiene la de Diputados, y se sostiene que eso implica gasto. O sea, el aumento en cinco Senadores significa mayores recursos y el incremento a 50 Senadores y 155 Diputados no cuesta nada.

Me parece contradictorio.

Por lo tanto, creo que debe aclararse el punto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Muy bien.

En todo caso, la Mesa va a mantener el criterio de la Comisión.

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, este es uno de los aspectos centrales de la reforma en análisis, que contiene errores sustanciales.

En mi concepto, la ampliación del número de Senadores a 50 es más discutible que la planteada en el caso de la Cámara de Diputados, pues algo así es absurdo.

El colega Walker hizo un esfuerzo por explicarla. Yo no he podido entender el contexto o la lógica en que se da dicha ampliación. Y sigo insistiendo en que el cambio del sistema no tiene relación con el incremento del número de parlamentarios.

Aquí, a propósito del remplazo del sistema, se confunde y se intenta generar un aumento de parlamentarios sin la justificación consecuente.

Esa es la primera idea con relación al artículo 180: el incremento de la cantidad de parlamentarios carece de justificación.

Alguien podrá decir "Me parece mejor". Y en distintas etapas del Parlamento ha sido factible argumentar eso.

Sin embargo, no observo un esfuerzo -tampoco lo he visto en el Gobierno- para explicar el sentido del aumento que se plantea.

Ahora bien: lo más complejo en el artículo 180 es la distribución final que se hace de los 50 Senadores; ahí tampoco calza nada con nada.

No sé lo que se pretende hacer en cuanto al Senado. ¿Que represente territorio con cierta equidad, como en el sistema norteamericano?

El sistema que mencioné es supersimple: cada estado cuenta con dos Senadores; y eso tiene un contrapeso en la Cámara de Representantes.

En el caso de los Senadores, esa es una lógica relacionada más bien con la población (la otra tiene que ver con el territorio).

Ese es un escenario que bien pudo asumirse.

Sin embargo, aquí se cambió varias veces la distribución, y se terminó en algo a lo que no le veo ningún sustento desde el punto de vista lógico.

También quiero recurrir al Tribunal Constitucional por la vulneración del principio de igualdad ante la ley en que se incurre con esta norma. Por tanto, hago expresa reserva de constitucionalidad.

Y todo se marca al final con tres situaciones que no resisten un análisis serio.

Una de ellas tiene que ver con el aumento del número de Senadores a 50. Y quiero hablar particularmente del caso de la Región Metropolitana.

Yo entiendo que nuestro país no debe ser centralista. Pero que, por un ajuste final, de 50 Senadores solo 5 terminen siendo de la Región Metropolitana no me parece justificado dentro de un contexto global de incremento en la cantidad de parlamentarios. No sé dónde calza eso.

A uno de los Senadores rebajados de la Región Metropolitana se lo hace viajar inmediatamente a la Región de Antofagasta -según se dice en los medios, fue por un reclamo; y puede haber sido de procedencia parlamentaria- para lograr lo que la Nueva Mayoría está buscando, cual es, tratándose de una zona buena, tener cierta seguridad de una representación mayor que permita hacer lo que el colega Navarro quiere -y ha sido muy franco para decirlo-: una mayoría para desmembrar 

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¡Le ruego no despertar a Su Señoría¿!

El señor COLOMA.-

¡No sé cómo provocar al Senador Navarro...! ¡Estoy tratando de hacerlo, pero no lo logro...!

En la zona de Los Ríos ocurrió lo mismo. Pero no sé si en este caso medió reclamo parlamentario.

Hubo, pues, una búsqueda encaminada a ¡acomodar el traje a la medida en el último minuto...! Y entiendo que los parlamentarios de Los Ríos no eran muy conscientes de aquello.

A mí me sorprenden los cambios hechos al final, pues generan un cuadro que no calza con nada: ni con la proporcionalidad, ni con la distribución, ni con la regionalización. ¡Con nada!

Y, como en la poesía, ¡el Gobierno no dijo nada...!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Guillier.

El señor GUILLIER.-

Señora Presidenta, quiero insistir en lo concerniente a la composición de la Cámara Alta.

Desde luego, en los sistemas bicamerales el Senado representa territorio; la Cámara Baja, población. Y creo que no hay ninguna razón para romper ese esquema en nuestro país.

De hecho, se hace en términos relativos con regiones que pasan a tener cinco Senadores.

Sin embargo, el principio -y eso rige en la mayoría de las naciones con sistema bicameral- es que el Senado representa territorio. Y está el caso de Estados Unidos, donde Nueva York y Alaska tienen la misma cantidad de representantes.

En segundo lugar, hay cierta coherencia institucional.

Insisto: no podemos tener algunas regiones sometidas al sistema binominal, y otras, al sistema proporcional. Es poco estético. Además, eventualmente podría significar derechos distintos para un ciudadano y otro.

Pero también hay coincidencia con el hecho de que la distribución efectuada perjudica a las regiones extremas. Se repite lo de la Cámara de Diputados, caso en el cual, si hubiésemos llegado a un acuerdo, a lo mejor habríamos podido haber corregido la situación.

Desgraciadamente, la buena voluntad llegó un poquito tarde y el tren de la historia pasó nomás.

Sin embargo, en este caso, a mi entender, estamos muy cerca de llegar a algo que es plenamente satisfactorio para todos. Porque la regionalización es un problema del Gobierno. Por consiguiente, el impulso a las regiones, particularmente a las extremas, debe dirigirse a darles un peso político significativo.

Los países vecinos -Argentina, Perú- aplican en sus zonas extremas políticas de reafirmación de soberanía; incluso, otorgan montones de subsidios y otras ayudas por razones geopolíticas.

En el norte de Chile hay una frontera triple; tenemos problemas con los tres vecinos, y no hemos sido capaces de definir una política proactiva.

Por consiguiente, el peso político de las regiones extremas, al mismo tiempo dentro de un plan de descentralización y regionalización efectivo, podría tener un impacto enorme.

A los Senadores, pues, hay que medirlos en función no solo de población, sino también de expresión territorial.

Al respecto, quiero recordar que las regiones más pobladas de todas maneras tendrían cinco Senadores.

En mi concepto, una situación pareja de cinco y tres establecería un buen equilibrio doctrinario; mantendría relativamente, matizado, el principio de representación territorial, y, además, daría un impulso a las regiones extremas, que son las zonas de castigo del país, las zonas de frontera.

Necesitamos estrategias geopolíticas más allá de las consideraciones que puedan tener otras regiones.

Por lo tanto, soy partidario de esa fórmula.

En cuanto a mi indicación, no me convencen las razones (además, oficialmente no me han dado ninguna) por las cuales fue declarada inadmisible.

Yo hago un acto de fe en cuanto a la afirmación del Gobierno en el sentido de que en esta reforma el Congreso se las tendrá que arreglar por sí mismo reasignando recursos.

Si se pueden reasignar fondos para llegar a 155 Diputados y a 50 Senadores, no me parece que un aumento en 5 Senadores -con ello se establecería el pleno equilibrio y terminaríamos con el binominal- puedan ser objetables. No encuentro la razón.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Navarro.

El señor NAVARRO.-

Señora Presidenta, cuando se organizó la lógica del binominal y se hizo el "distritaje" no había Parlamento para debatir: se nos impuso un modelo producto de los resultados del plebiscito.

¡Fíjense: hubo una elección previa que les permitió a quienes estaban ahí ordenar el modelo de participación y votación de acuerdo a sus objetivos políticos...!

Ni la UDI ni RN se quejaron jamás, ni en el primer, ni en el segundo, ni en el tercer, ni en el cuarto, ni en el quinto, ni en el sexto Parlamento. ¡Jamás una queja por la forma como se ordenaron las regiones!

La pregunta es: ahora, cuando hay un reordenamiento de las regiones, de las circunscripciones, ¿cuál es la voluntad que va a tener la Derecha para avanzar no solo en la forma de votar sino asimismo en las cuestiones de fondo que subyacen bajo la representación: la descentralización, la regionalización y la elección directa de los intendentes?

No he escuchado un pronunciamiento sobre uno de los elementos base que van a fortalecer la regionalización.

Yo pienso que algunos Senadores tendrán cierta desconfianza en el intendente electo popularmente.

Ahí uno va a exigir coherencia en cuanto a si el argumento son la representación adecuada de las regiones y la importancia y lo vital de estas.

Cuando votemos el proyecto que firmó la Presidenta Bachelet para la elección directa de los intendentes en 2017, junto con el estreno del modelo habrá que exigir la coherencia a que me referí.

Eso vamos a verlo en los próximos meses, y particularmente cuando comience la campaña senatorial, al inscribirse los candidatos.

Creo que el esfuerzo que estamos haciendo esta madrugada para terminar con el binominal bien vale la resistencia al sueño y la capacidad de la Nueva Mayoría para tolerar a la Derecha, que ha hecho por todos los medios una oposición que ya carece de contenido: más bien, es reiterativa.

Señor Presidente, esta votación la vamos a ganar. Pero esto parece más una carrera de esfuerzo, de resistencia; parece más una lucha popular prolongada y que apuesta al desgaste.

Entonces, de repente es bueno escuchar al colega Coloma con los ojos cerrados, porque "dice lo mismo que he venido escuchando durante las ocho horas anteriores...

El señor MONTES.-

¡A lo largo de 25 años¿!

El señor NAVARRO.-

... y en los últimos 25 años...!

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señor Presidente, en esta materia presentamos una indicación: la número 83 (no voy a fundamentarla, pues ya lo hicimos).

Estamos discutiendo por cuántos miembros se compone el Senado, y nosotros formulamos una indicación para que la cantidad suba de 38 a 44.

La integración por 50 Senadores, como hemos señalado -porque lo conversamos en su momento- no nos parece que se pudiera decir que el número de cincuenta Senadores, a diferencia de la cantidad de Diputados -ello lo hemos señalado, porque lo conversamos en su momento-, carece de justificación. Lo que ocurre es que no compartimos la forma de distribución.

En consecuencia, votaremos a favor de nuestra indicación, que es la número 83. En cuanto a las demás, nos pronunciaremos en contra de aquellas con las cuales no coincidimos o nos abstendremos cuando lo estimemos conveniente.

Solo deseaba precisar nuestra opinión sobre la composición del Senado, porque ya dimos a conocer nuestra postura -no vamos a hacerlo dos veces- sobre la propuesta de Renovación Nacional.

El señor TUMA ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Honorable señor Araya.

El señor ARAYA.-

Señor Presidente, sin duda, ningún sistema electoral es perfecto. Todos presentan dificultades. Cada país adecua el suyo de acuerdo con su realidad social y política, y de esa forma se van definiendo la composición y la elección del Senado y de la Cámara de Diputados.

Tres partes del proyecto, a mi juicio, apuntan al término del binominal, dos de ellas ya aprobadas.

La primera es la elección mediante el N+1, porque, al establecerse más candidatos que cupos por elegir, se fuerza la competencia, lo cual evita situaciones vistas en comicios anteriores, en los cuales ciertos bloques políticos llevaban un solo postulante, de manera que la ciudadanía no tenía otra opción en el espectro. La fórmula contemplada ahora impulsará la competencia.

La segunda dice relación con la cifra repartidora o método D'Hondt, que sin duda ayuda a ir a una mayoría proporcional representativa, no a una absoluta, como se ha propuesto acá, porque un sistema uninominal también ofrece complejidades.

La tercera se refiere a la composición de las ramas del Congreso. Ya aprobamos la correspondiente a la Cámara de Diputados, en la cual básicamente se aplica un criterio de población y de territorio.

En el caso del Senado, se debe reconocer la existencia de conversaciones. Mucho se ha dicho que el Gobierno no ha dialogado y que el Ministro del Interior no ha querido dar explicaciones, pero durante largo tiempo se buscó un acuerdo sobre el particular.

En algún momento sostuvimos la discusión de que teníamos que avanzar a una cierta proporcionalidad de las regiones. Por eso, nos parecía impresentable que la Metropolitana contara con siete Senadores, frente a otras con dos, tres o cinco. Es la razón por la cual insistimos mucho en la necesidad de buscar la mayor representatividad del territorio regional en la composición de esta Corporación, entendiendo que había ciertos condicionamientos políticos.

Si hubiéramos alcanzado un acuerdo más amplio con la Oposición, lo que no llegó a puerto, quizás tendríamos una conformación más equitativa en regiones.

Habiéndose llegado a la fórmula de 50 Senadores, el criterio para distribuir los dos que se le sacan a la Región Metropolitana dice relación con la mezcla de territorio y población. Porque las dos circunscripciones más grandes, en cantidad de electores, son las de Antofagasta y de Los Ríos. Por ese motivo, elegirán tres.

En la Comisión de Constitución, los Honorables colegas De Urresti, Harboe, Espina y Larraín nos escucharon decir que lo que no podía haber era un traje a la medida. Debido a eso, si no había un acuerdo con la Oposición y además no se contaba con los votos necesarios para ir a lo que se había sostenido en el sentido de que cada Región tendría la misma cantidad de Senadores, en la composición del Senado se debía avanzar con criterios objetivos. Por tal motivo, se avanzó en la supresión de los dos cupos en Santiago y en su entrega a las circunscripciones con la mayor cantidad de electores.

Me habría gustado que se lograra un gran acuerdo en donde se viera reflejado el criterio de proporcionalidad y de territorio existente en 1970. Cada agrupación provincial elegía cinco Senadores y la representación de varias de ellas permitía, en el fondo, la existencia de lo que hoy podríamos denominar macrorregiones, con la misma cantidad de parlamentarios.

En cuanto a la composición de esta Corporación, el proyecto no es perfecto, sin duda, pero avanza en ponerle término al binominal. Mucho se ha dicho que algunas regiones quedarán con una cantidad par de Senadores, de modo que se mantendrá el sistema. No comparto tal apreciación, porque, como lo señalé al comienzo de mis palabras, los elementos anexos N+1 y coeficiente D'Hondt permiten, en cierta medida, desvirtuar el mecanismo actual. Y ahí sí que vamos a tener, obviamente, un sistema de mayorías más acrecentado.

Me parece que la norma, no siendo la mejor, lleva a una composición de esta Corporación mucho más democrática y a avanzar en el término del binominal.

Gracias.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Puede intervenir el Honorable señor Bianchi.

El señor BIANCHI.-

Señora Presidenta, son las 5:10, pero observo en todos ánimo para seguir interviniendo en una materia relevante para las regiones.

La nueva composición del Senado rompe el carácter unitario de nuestro país. No se hace una distribución equitativa. Excúsenme, Sus Señorías, pero, explicaciones más o explicaciones menos, nuestra Corporación debe tener representación territorial y no poblacional.

Y es tanto el daño que se nos inflige a quienes representamos a regiones que me pregunto si votaremos a favor de algo que, en definitiva, atenta contra lo que decimos reflejar.

Considero bueno aclarar -da lo mismo si son las 5 o las 6- en qué posición va a estar cada uno, porque se mantendrá un sistema binominal. O sea, quiérase o no, más allá de la justificación del N+1, que efectivamente permitirá la postulación de tres candidatos y no de dos, las Regiones de Magallanes, de Arica y Parinacota, de Tarapacá y de Aisén elegirán dos Senadores. Es decir, las regiones extremas quedarán no solo con menor representación, sino también en una absoluta desigualdad frente a las demás.

En su momento formulé una indicación para el establecimiento de macrozonas a fin de concretar una igualdad de representación en la distribución territorial que corresponde en esta Corporación: cinco, cinco, cinco. Hay Senadores que ahora declaran defender la posición de las regiones, pero la votaron en contra, en circunstancias de que incluso se traducía en menos cupos.

Además, se creó una comisión regionalista para ir a la Moneda a decirles a los Ministros: "No vamos a movernos de esta posición". Pero duró lo que dura el viento en un canasto: ¡Nada! Fue una situación tan ficticia, que terminó en lo que hoy estamos votando.

No puedo pronunciarme más que en contra de la disposición, ya que atenta contra lo que digo representar: las regiones extremas. Así como en algún momento de nuestra historia le regalamos la Patagonia a Argentina, hoy día les estamos dando la espalda, una vez más, a las regiones del sur y del norte mediante un mecanismo que se traduce en una representación disminuida. Ello no me parece adecuado.

Las regiones se distribuyeron como si fueran un botín: esta para ti; esta para mí; te dejo tres, a ti cinco, etcétera, sacrificando las extremas del sur y del norte, que quedan absolutamente disminuidas en su representación.

Como lo conversé con las autoridades de Gobierno, no tendría cara para bajar del avión en Magallanes y decir que me pronuncié en contra de la Región que represento. ¡Eso es imposible! ¡No existen argumentos para ello, por más que se inventen! ¡Nuestros electores tienen que presenciar de qué manera somos consecuentes con nuestros dichos al votar! Si nos pronunciáramos por algo que fuera contra la Región que representamos, nada podría explicarlo.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Letelier.

El señor LETELIER.-

Señora Presidenta, hay una confusión en nuestras reflexiones. Algunos quieren tratar la representación del Senado como si fuera territorial, como si fuéramos un país federado, donde diferentes zonas concurren a una unión, lo cual no es cierto. Se parte de una presunción falsa, falsísima.

Lo otro dice relación con pensar que nuestra representación territorial es proporcional. Las cinco regiones que quedarán con dos Senadores, quienes no van a ser elegidos conforme al sistema binominal, implican una población, según los datos oficiales, de un millón 100 mil habitantes y al menos el diez por ciento de la representación en el Senado. Sobre esa base, presentan una sobrerrepresentación¿

El señor BIANCHI.-

¿Qué territorio tienen?

El señor LETELIER.-

Señora Presidenta, pido que el Senador que me antecedió en el uso de la palabra sea respetuoso.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Ruego no interrumpir al Honorable señor Letelier.

El señor LETELIER.-

Por mi parte, soy partidario de esa sobrerrepresentación.

En los Regiones intermedias se registra hoy una distorsión en la representación. La mayor se observa en la del Libertador Bernardo O'Higgins, con cerca de un millón de habitantes y una sola circunscripción,¿

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

Así es.

El señor LETELIER.-

¿ a diferencia de lo que ocurre en la Novena y en otras. La situación se mantiene en la propuesta del Ejecutivo.

Eso no puede ser. Pero esta no es, en mi caso, una razón para cuestionar la proposición en examen, que construimos a partir de un mecanismo más distorsionado: el binominal. Y demoraremos diez años en lograr un sistema de un mayor equilibrio.

Lamento la distorsión por algunas regiones. Porque es evidente que los parlamentarios apalancan recursos para aquella que representan.

El señor ALLAMAND.-

¿Apalancan?

El señor LETELIER.-

Le llevan más fondos.

Ocurre que la Sexta Región tiene un veinte por ciento menos de presupuesto que la de Coquimbo y una diferencia incluso mayor con la de La Araucanía. Y ello, con la misma población. Curiosamente, es la única sin aeropuertos, sin puertos, sin pasos fronterizos. Podría mencionar varias carencias más.

A lo único que apelo es a que mi Gobierno ayude a corregir las distorsiones en el debate del Presupuesto, porque ello no ocurrirá de inmediato.

Ahora, digamos las cosas como son -ya lo expuso el Senador señor Harboe-, porque en la discusión se plantea el problema de los incumbentes, y algunos legítimamente están preocupados de "¿cómo voy ahí?" en las próximas elecciones. Esa es una de las dificultades.

Considero que lo más relevante es transformar este en un día histórico, en el que, de una vez por todas, se termine con el binominal.

He escuchado toda la noche a mis colegas de las bancas de enfrente y lo único que tengo claro es que nada de lo que han expresado -¡nada!- hubiera hecho que votaran por la eliminación del sistema electoral vigente.

Por eso se tuvo que construir el acuerdo en estos términos y la Nueva Mayoría va a dar el paso que se requiere, ya que hemos esperado veinticinco años a que esos señores Senadores se sumen al esfuerzo. Entiendo que, como incumbentes y con intereses creados, no van a hacerlo.

Más allá de las distorsiones, voy a votar a favor de la composición del Senado. Es un avance con relación a lo existente y se establece un mecanismo para¿

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Se agotó su tiempo, Su Señoría.

Tiene la palabra el Honorable señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, del debate se desprende que efectivamente no hay ninguna claridad respecto de cuál es el criterio que sustenta la estructura de la propuesta de composición del Senado y distribución de escaños. Por más que se busque, no se advierte la lógica que lo explica. Porque no es la representación por Región -como se intentó originalmente, lo que después fue rápidamente corregido-, ni tampoco el criterio estrictamente poblacional, ni una mezcla de los dos. No hay una explicación clara.

Como dice el refrán español, "piensa mal y acertarás". Entonces, a uno le baja la duda y abriga la sospecha de que, en realidad, la composición refleja un poco lo mismo que el proyecto: la búsqueda de un acomodo político, el cual lamentablemente distorsiona de manera profunda la forma de estructurar una institución como la nuestra.

El Senador señor Letelier lo anticipó bien. No me gusta la intervención de los incumbentes, pero, a mi juicio, se registra su presencia para asegurar sus cupos y reelección.

Veamos algunos ejemplos. ¿Por qué me parece absurda la distribución, que carece de explicación? La Región del Libertador Bernardo O'Higgins registra 700 mil electores y elige tres Senadores, según la propuesta. La de Los Ríos, con menos de la mitad: 324 mil, hace otro tanto. Entonces, ¿qué está pasando? Alguien está siendo castigado y alguien está siendo beneficiado.

El señor NAVARRO.-

¿Quién será?

El señor LARRAÍN.-

Por otra parte, cabe comparar la misma Sexta Región, con dichos 700 mil electores, y las del Maule y de La Araucanía, con un poco más de 800 mil, las cuales eligen, sin embargo, cinco Senadores cada una. ¿Por qué cinco? Todos lo sabemos: en la del Maule es preciso asegurar la continuidad de un determinado partido y en la de La Araucanía se debe apoyar la permanencia de otro, ambos muy importantes en la coalición de Gobierno.

Pienso que esta no es manera de legislar. Así no resolvemos los problemas del país, sino que simplemente hacemos un acomodo, ya no con relación a partidos, sino tal vez a personas. Ello no es sano.

Además, el hecho que la Región Metropolitana quede, como se recordaba, con cinco Senadores, de un total de cincuenta -el diez por ciento-, empieza también a ser un exceso de centralismo que castiga a Santiago.

¿Por qué no fueron seis? Porque entonces la Oposición sacaría tres. "No le demos tres: mejor démosle solo dos, y así, con esta composición, garantizamos la continuidad de algunos destacados Senadores" -quienes ciertamente lo merecen por sus méritos, aun cuando no sé si por sus votos: eso lo decide la gente- "y un mayor control político de la Corporación".

Eso es lo que pasará. Todos hemos realizado los estudios necesarios, tanto en relación con la Cámara como respecto del Senado. Con estas composiciones, lo que estamos haciendo es asegurar una mayoría para la Nueva Mayoría. Esa es la verdad. Y lo lamento.

En este caso, no creo que exista un problema de constitucionalidad, porque la Carta Fundamental establece que la estructura del Senado considera la población y la Región. Por lo tanto, se abre un espectro que no se da en el caso de la Cámara de Diputados, respecto de la cual el criterio es igualitario. Ahí claramente surge una violación de la norma constitucional de la igualdad del voto.

Es lamentable constatar que el Senado tendrá esta composición y lo es más el que la Corporación carezca de la fuerza y la capacidad para estructurar una institución que nos dé a todos la tranquilidad y la seguridad de que será una fiel representante de la ciudadanía y de las regiones, y no de un sector político determinado.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor García-Huidobro.

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

Señora Presidenta, no puedo estar más de acuerdo con las palabras que manifestó el Senador Letelier en cuanto a la discriminación que está sufriendo la Región de O'Higgins.

La nuestra es la primera región frutícola de Chile; aporta también, fundamentalmente, con la mina subterránea de cobre más grande del mundo; es pujante, entrega mucho trabajo y exhibe un gran desarrollo. Pero, cuando uno ve las cifras, constata que queda subrepresentada. Y, si la comparamos con nuestra región vecina, la del Maule, que tiene prácticamente la misma cantidad de habitantes, nos damos cuenta de que a esta última se le entrega una sobrerrepresentación, con dos Senadores más.

Creo que esto no va en el camino correcto. Constituye otro traje a la medida, donde más conviene, con el fin de aumentar los cupos y saciar las ambiciones de los partidos políticos.

Pienso que la situación en que queda el Senado es lamentable.

Algo similar ocurre con las regiones extremas. Estas se encuentran en una situación compleja. Chile debe preocuparse más de ellas, tanto de la Región de Magallanes como de la de Arica y Parinacota, con el fin de tener zonas pujantes.

En tal sentido, señora Presidenta, creo que el Senado no está representando como corresponde a todos los sectores que representamos nosotros, en cuanto regiones, en esta Corporación.

Anuncio mi voto en contra de la propuesta, pues estimo que es fundamental dar más equidad y mayor respeto en estos acuerdos a regiones que realmente están colaborando y tienen una potencia política fundamental para el desarrollo de nuestro país y de la democracia.

Lamentablemente, me da la impresión de que esto también es parte de un arreglo en el que no estamos incluidos. Nos habría gustado -lo manifestamos- haber llegado a un consenso bastante más amplio. Este es un acuerdo feble, que -me da la impresión- se va a aprobar en el límite de los votos que se requieren. Y no será amplio, como el que nuestro país espera, sobre todo en temas que durarán por muchos años, según lo que han planteado el Gobierno y quienes apoyan la propuesta.

Me parece que, a la larga, esto no le hará bien a nuestro país. Chile no desea más parlamentarios. Y quisiera ver, en los próximos días, cuál será la reacción de la ciudadanía, que se reflejará en las encuestas, respecto a la votación que se realiza hoy en el Senado. La mayoría de nuestros compatriotas ya rechazó el texto despachado por la Cámara de Diputados.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, no he escuchado a ningún Senador de la Alianza referirse a la desigualdad que existe hoy y a la desproporción y al traje a la medida que significó la configuración de las circunscripciones senatoriales que nos rigen en la actualidad. Nadie se ha manifestado en contra. Y hemos vivido veinticinco años con la combinación entre las circunscripciones electorales diseñadas como un traje a la medida para los adherentes al Gobierno de Pinochet y las normas del sistema binominal, más los quórums especiales, lo que en la práctica genera empates artificiales que han tenido al Senado bastante marginado de los procesos de transformación profunda que ha sufrido nuestra sociedad en los últimos veinte años.

Aquí se ha argumentado acerca de la necesidad de establecer el criterio territorial en el Senado y el poblacional en la Cámara de Diputados.

El criterio poblacional en la Cámara Baja sigue la lógica de la cámara de representantes y de un conjunto de otras instituciones.

Pero el Senado de nuestro país contempla un sistema mixto: un sistema de representación territorial con un factor de corrección poblacional. En consecuencia, no es comparable con lo que ocurre en Estados Unidos. Regularmente, se menciona que el Estado de Alaska elige la misma cantidad de Senadores que el Estado de Nueva York o el de California. Tampoco es comparable con el caso español, donde, en general, se elige un número similar de parlamentarios, salvo en Ceuta, Melilla y otros lugares, que tienen unos pocos escaños menos.

Se compara un Estado unitario con uno federal. Y no admiten comparación.

Resulta muy importante distinguir esa situación. Porque un señor Senador afirmó que aquí se estaba rompiendo la lógica del Estado unitario. ¡No tiene nada que ver! El Estado unitario dice relación con la administración del territorio, con el gobierno interior, pero en ningún caso con el sistema de elección parlamentaria.

Entonces, en primer lugar, no confundamos los conceptos.

Por otra parte, alguien mencionó por ahí que esto iba a afectar a las regiones.

Perdóneme, señor Senador -por su intermedio, señora Presidenta-, pero solo quiero recordar que la Duodécima Región tiene 163 mil 748 habitantes. Posee menos población que 58 de los actuales 60 distritos del país. Es decir, hoy existe en Magallanes una sobrerrepresentación, que es aceptada y que fue considerada en atención a la ubicación estratégica de las zonas extremas. Repito: en la actualidad tiene una sobrerrepresentación. Y es bueno que así sea, porque se requiere que las regiones extremas estén representadas debidamente en el Senado. Pero de ahí a pedir que siga aumentando su sobrerrepresentación, para que los ciudadanos de esa Región tengan en nuestra Corporación un mayor valor en tres, cuatro o cinco veces que el de los ciudadanos de otras regiones, me parece una completa desproporción.

Por eso, señora Presidenta, considero importante fijar ciertos elementos básicos.

Aquí se afirma: "Este es un traje a la medida para la Nueva Mayoría". ¡Perdónenme! Las propuestas de la Oposición hablan, en general, de circunscripciones que eligen parlamentarios en números pares, porque buscan, obviamente, el empate, mirando el legítimo interés particular de cada uno de sus partidos políticos.

Señora Presidenta, antes de que se me acabe el tiempo, deseo hacer una salvedad.

Quiero destacar la voluntad de los Senadores de Oposición miembros de la Comisión de Constitución, que siempre estuvieron llanos a llegar a un acuerdo, pero que sufrieron las consecuencias de la inexperiencia y la arrogancia política de los presidentes o dirigentes de sus partidos en la Cámara de Diputados. Ahí era el lugar para alcanzar un consenso, ahí se hicieron los esfuerzos, ahí se celebraron las reuniones con el Ministro del Interior. Porque, cuando el proyecto llegó acá, ya la buena voluntad y la disposición que había demostrado el Ejecutivo en la primera instancia se topaba obviamente con compromisos adquiridos, lo que hacía inviable efectuar un cambio estructural.

Por último, creo que vamos a corregir en la ley en proyecto un error importante que cometimos con Arica y Parinacota, cuando creamos la región y no la circunscripción correspondiente. Eso es un error que hoy se enmienda, porque el artículo 180 señala ahora que, "Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial". O sea, se corrige automáticamente esa situación a través de un elemento que servirá también para cuando se creen en el futuro otras regiones.

En consecuencia, señora Presidenta, creo que lo que aquí se requiere es aprobar el texto despachado por la Comisión de Constitución.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Montes.

El señor MONTES.-

Señora Presidenta, yo no he intervenido en el debate de este proyecto porque creo que hay voces más ilustradas y más sólidas para opinar acerca del conjunto de transformaciones que se plantean.

Está claro cuál es el bien superior. Hay que terminar con un mal sistema, el binominal, que ya no daba para más en este país. Debemos asumir que estamos viviendo una cierta crisis de la política y que se requiere elevar la calidad de esta.

Entre otras cosas, el actual mecanismo de generación de los miembros del Parlamento nos separa de la realidad y dificulta resolver los problemas. Por muchos años nos hemos encontrado en situación de empate y se hace necesario enfrentar ya ciertos temas. Sé que el binominal fue gestado para defender un determinado orden, pero ya existe voluntad para introducir cambios estructurales.

Al menos quienes queremos transformaciones pensamos que todo hay que ordenarlo en función de ese bien superior, al cual debe estar subordinado.

A diferencia de lo que acá se ha señalado, se ha alcanzado un acuerdo bien sólido. No es casualidad que hayamos estado aquí toda la noche, todos presentes, disciplinados, ordenados, votando, porque tenemos la convicción de que el bien superior es cambiar el sistema.

A mí no me gustan las intervenciones que ponen por delante su interés particular, ahora y en el proceso a través del cual se gestó lo que estamos analizando. Pero así es; es parte de la realidad y quizás refleja la debilidad de los partidos políticos, donde a veces prima más la influencia y los intereses personales que los intereses colectivos del mejor orden.

Yo creo que la rigidez limita el debate, da menos capacidad para crear respuestas más adecuadas, y genera cierto nivel de inconsistencia e incoherencia dentro del objetivo global fundamental.

En lo personal, y por distintas razones, soy mucho más partidario de un sistema unicameral, aunque creo que ahora no se dan condiciones como para discutir esa materia, que tendría que haber sido analizada dentro de un debate más global que abarcara a todo nuestro sistema político.

¿Por qué hablo? Porque han hablado todos. Y lo hago para dejar constancia de que el tratamiento que se le ha dado a la Región Metropolitana expresa una debilidad y una inconsistencia dentro de este proyecto. No puede ser que quede igual que la del Maule, igual que la de La Araucanía, con cinco representantes, a pesar de aglutinar a más del 40 por ciento de la población de Chile. Y esto manifiesta una cierta dificultad para construir un mejor sistema.

Pienso que aquello se va a notar en el futuro. Va a influir para las respuestas que dé una región con esa significación dentro del país.

Yo lo asumo, porque refleja el equilibrio y las posibilidades que aquí se han dado.

Solo quiero subrayar que, cuando en los próximos meses discutamos cómo se va a organizar interiormente el país, tendremos que asumir que la Región Metropolitana habrá perdido peso específico en el Poder Legislativo. Y debería tener mucha más capacidad para autogobernarse. Debería haber un gobierno metropolitano.

El señor PIZARRO.-

¡Está lleno de santiaguinos aquí¿!

El señor MONTES.-

¡Y de Vitacura y Lo Barnechea todavía...!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

No interrumpa, Senador Pizarro.

Continúe, Su Señoría.

El señor MONTES.-

¡Es que aquí me están provocando, señora Presidenta! ¡Un joven que es de Coquimbo¿!

El señor PIZARRO.-

¡De Ovalle!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¡No se deje provocar, Senador Montes¿!

El señor MONTES.-

Señora Presidenta, simplemente quiero decirles, al menos a los parlamentarios de la Nueva Mayoría, que está bien. Habrá que asumir aquello -la disminución del peso específico de la Región Metropolitana- como parte de una solución, como parte de un conjunto de decisiones que se deben tomar. Pero esto debe ser compensado, en alguna medida, fortaleciendo su capacidad de autoadministración, en términos de que se cree, de una vez por todas, un gobierno metropolitano.

Se ha invertido muchísimo en Santiago. Sin embargo, no es una mejor ciudad producto de que no ha habido capacidad para dar coherencia a todas las inversiones e iniciativas que se originan en ella.

Sin lugar a dudas, voy a votar a favor todas las normas de este proyecto. Lo considero un tremendo avance. En verdad, creo que estamos superando una etapa de la historia. Y pienso que deberíamos terminar esta sesión con un gran aplauso y felicitándonos mucho, porque este es un cambio que va a tener grandes repercusiones para el futuro del país y para la manera de entendernos.

Gracias.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Horvath.

El señor HORVATH.-

Señora Presidenta, en toda mi trayectoria en el Congreso Nacional, desde 1990, siempre he sido un ferviente partidario no solo de la regionalización, sino también de darles un mayor grado de autonomía a las regiones, de que se genere una planificación territorial participativa.

Ha habido votaciones. Me acuerdo que, cuando planteamos la elección directa de los alcaldes, nos ofrecieron tirarnos por el despeñadero. Y la verdad es que lo único que buscábamos era permitir que quienes llegaran a ocupar esos cargos lo hicieran con la mayoría de votos.

El principio de territorialidad tiene que aplicarse, naturalmente, respecto del Senado, no solo para generar un equilibrio entre la diversidad que existe a nivel nacional, sino también porque acá hay personas con más experiencia, que actúan más reflexivamente. ¡Con algunas excepciones, desde luego¿!

En el caso de la Cámara de Diputados, se aprecia un avance en la línea de la población, de la representación. Se observa, en alguna medida, un crecimiento en la dirección correcta.

En lo que respecta al Senado, nuestra pretensión no está exactamente reflejada en el proyecto. Sin embargo, sufrió una reducción considerando el texto aprobado por la Cámara de Diputados y el que ha llegado a la Sala. Como bien lo planteó el Senador por la Región Metropolitana, se redujo de siete a cinco, quedando igualada con otras regiones del país. Lo que yo pido es ver el conjunto.

Después, he escuchado, de algunos de los amigos de la Alianza, tal vez un poco exacerbados, amenazas: que, por el hecho de llevar a cabo un proceso de cambios, de democratización del país, vamos a sufrir duras consecuencias.

Para nosotros, no es novedad. Cuando nos opusimos tenazmente a HidroAysén, un proyecto que genera un área de sacrificio en la zona austral, no solo sufrimos amenazas, sino también ataques directos. Pero no le tenemos miedo a eso.

Por otro lado, postulamos -y presentamos indicaciones en tal sentido- a tener un piso de tres. Estas indicaciones fueron igualmente suscritas por el Senador Alejandro Guillier y otros colegas. Y el Gobierno, en este caso, sí las patrocinó en la Comisión. Es importante señalarlo, porque se advierte un avance en esa dirección. Sin embargo, no tuvimos los votos para aprobarlas en la Comisión, ni para reponerlas en la Sala. Y sabemos, por tanto, que tampoco los tenemos para aprobarlas aquí.

Lo planteé, asimismo, con la gente de Renovación Nacional, particularmente con su presidente, más de una vez. Pero siempre las propuestas de ellos consistían en un número par o en aumentar la cantidad en las regiones más concentradas, alejándose del principio que nos interesa.

Después, en la ley general, habría que establecer -y así se acordó en la otra rama del Parlamento- la separación del dinero y la política. Lo planteamos con bastantes años de anticipación. En la Cámara de Diputados se logró frenar y se fijó un techo para el gasto de las campañas. Debe haber un verdadero servicio de fiscalización para aquello y disminuirse al mínimo posible (ojalá a nada) los aportes reservados o anónimos. Existe el compromiso de avanzar en esa línea.

En seguida, el otro punto que quiero relevar es el de los partidos regionales. Por primera vez vamos a tener partidos regionales, que requerirán menos firmas que un candidato independiente. Quiero insistir en esto. En definitiva, una persona podría manejarse dentro de esa situación.

En cuanto a la Cámara de Diputados, planteé en su minuto -y presentamos indicaciones al respecto- la diversidad que existe en Chile.

Rapa Nui, la Isla de Pascua, le significa a Chile 17 millones 700 mil kilómetros cuadrados de mar presencial, una enorme zona económica exclusiva. Y no tenemos ni un congresista que provenga de ese territorio. En mi opinión, merece contar con un legislador, no solo por constituir una etnia específica, sino por el significado que posee para la proyección chilena en el Pacífico. Francia tiene dos parlamentarios por Tahití. Por lo tanto, tenemos que hacer algo por nuestras zonas extremas: por el norte, por el extremo austral y por Isla de Pascua.

Creo que estamos avanzando en la línea correcta. Y puedo decir con orgullo -sin pertenecer, como me han dicho algunos, a la Nueva Mayoría- que estamos abriendo un nuevo referente. Este "impar" no necesariamente va a ser de la Nueva Mayoría o de la Alianza. ¡Va a ser un nuevo referente!

Por eso, seguiremos trabajando con ahínco por la diversidad y por el bien de Chile.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Tuma.

El señor TUMA.-

Señora Presidenta, siendo cerca de las seis de la madrugada, nos encontramos debatiendo uno de los proyectos más importantes que se puedan discutir en el Congreso Nacional y, quizás, que se hayan discutido durante toda su existencia.

Llevo 25 años en el Parlamento, siempre con la aspiración, el sueño, el anhelo de modificar el sistema a través del cual se elige a los legisladores. Y creo que podrían haber pasado 25 años más para aquello, si no fuera porque dos Senadores de una coalición distinta de la Nueva Mayoría han estado dispuestos a dar el paso para aprobar una iniciativa que reemplaza el sistema electoral.

Y quiero volver a hacerles un reconocimiento a Lily Pérez y Antonio Horvath, por la posibilidad que le han otorgado a nuestro bloque para llevar a cabo esta transformación. De lo contrario, no estaríamos aquí.

Al mismo tiempo, quiero reconocer la decisión del Gobierno para llegar a acuerdo con ustedes; un Gobierno que ha tomado la decisión de cumplir el compromiso que adquirió la Presidenta para sustituir el sistema binominal.

Sin embargo, ello no hubiera sido posible si no hubiésemos contado con estos dos Senadores.

¡Esa es la verdad!

Quizás se hubiese eternizado el sistema binominal -estaba diseñado para eso-; sin embargo, tuvimos la suerte, la fortuna de contar con estos dos parlamentarios, con un Gobierno que tuvo la decisión y la capacidad de sentarse a conversar y de llegar a acuerdos con ellos, cuyos votos eran indispensables para hacer esta transformación.

Por lo tanto, pienso que estamos dando un paso gracias a estas circunstancias y que tenemos mucho por realizar todavía en materia de cambios al sistema electoral.

Ya lo decía el Senador Francisco Chahuán. Los pueblos originarios no fueron incluidos en este proyecto, porque nos hallamos en un proceso de consulta, en un proceso para ver cómo se relaciona con ellos el Estado para fundar un nuevo trato.

No obstante, a partir de allí, en determinado momento y al más breve plazo, esperamos que se abra un espacio para que tales etnias puedan estar presentes en el Senado y en la Cámara de Diputados.

Esta iniciativa involucra un fortalecimiento de las regiones. Es cierto que Santiago va a pesar menos en comparación con ellas, pero eso hemos perseguido siempre: la descentralización, el derecho de las regiones a competir en igualdad de condiciones, mediante el emparejamiento de la cancha con la Región Metropolitana.

Por tal razón, se le ha dado una proporcionalidad a Santiago que, desde luego, debería tener mayor número de Senadores en virtud de su cantidad de habitantes. No obstante, se ha optado por dar un equilibrio en función de las necesidades de desarrollo y de paz social.

Cuando hablamos de la representación de los pueblos originarios no solo me refiero al hecho de que estén presentes en el Parlamento, sino también a la necesidad de que las regiones con alta presencia indígena tengan la oportunidad de gozar de paz social.

Ese elemento es muy importante, y los Senadores de la Región de La Araucanía y de otras donde hay presencia indígena lo saben.

En consecuencia, este es un paso respecto del cual me siento muy orgulloso de participar. Creo que debemos felicitarnos. Los ciudadanos en Chile se acostaron anoche con un sistema binominal que no teníamos para cuándo cambiar y despertarán con un modelo distinto, a través del cual podrán saber que los escaños se elegirán de acuerdo a la misma proporción que las mayorías dieron en las urnas.

Entonces, esa fiesta democrática que tradicionalmente celebramos en Chile para elegir a nuestras autoridades se transformará efectivamente en un acontecimiento que representará los intereses de la mayoría, porque en eso se traducirán los cambios que la ciudadanía espera.

¿O me van a decir que nuestro sistema de pensiones no tiene que ver con el empate que produce el binominal? ¡Claro que se relaciona con un modelo previsional que maltrata a los trabajadores, que maltrata a los pensionados, precisamente porque hemos sido incapaces de consolidar en el Congreso una mayoría que permita modificar el decreto ley Nº 3.500, para lo cual se requieren tantas exigencias como para una reforma constitucional o un cambio al sistema electoral!

También en Chile existe una alta concentración del mercado como resultado del sistema binominal.

En consecuencia, pienso que el paso que hoy damos será una oportunidad que transformará nuestra sociedad y hará mejores a Chile y a los chilenos.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor De Urresti.

El señor DE URRESTI.-

Señora Presidenta, siendo casi las seis de la mañana del miércoles 14 de enero de 2015, vamos a consolidar -no me cabe duda- uno de los cambios más profundos a la legislación electoral del país: la eliminación de un sistema que quedará superado, el cual fue impuesto en dictadura y fue concebido a la medida para perpetuar un eterno empate en el país.

Eso será un cambio enorme y abrirá la posibilidad de redistribuir el poder y equilibrarlo territorialmente al interior de Chile. Y lo vamos a hacer, en primer lugar, sin dar una sobrerrepresentación a Santiago, a propósito del proyecto original que establecía siete Senadores para la Región Metropolitana, situación que a nuestro juicio no correspondía y resultaba inadecuada.

Estimo que el Gobierno, de manera acertada, escuchó nuestro planteamiento y fijó un criterio objetivo -es importante también consignarlo- para dejar a las cinco regiones más grandes igualadas en cinco Senadores cada una -me parece correcto establecerlo de esa manera-, cinco con tres Senadores y las cinco restantes, dada su menor densidad de población, con dos.

Todo ello, además, con la proporcionalidad que corresponde en materia de Diputados.

Creo que se logrado un equilibrio en materia regional. Se ha intervenido el proyecto a través de las indicaciones para evitar una asimetría tan grande entre determinadas regiones y Santiago.

Eso es fundamental, toda vez que sobrerrepresentar a Santiago con Senadores habría significado perder poder para las regiones y, por ello, nos sentimos contentos de que el Gobierno, entendiendo nuestro planteamiento, haya impulsado una modificación para incorporar, de acuerdo al criterio de población, un Senador más para la Región de Antofagasta y también para la de Los Ríos.

Me parece que eso constituye un acierto, desde el punto de vista del trabajo que se realizó.

También debo puntualizar -es importante consignarlo- que en la Comisión de Constitución hicimos todos los esfuerzos para lograr un acuerdo mayoritario y que los representantes de la Oposición, tanto el Senador Espina como el Senador Larraín, desplegaron ingentes esfuerzos personales como parlamentarios, en aras de llegar a un acuerdo mayoritario.

No quiero imponer nuestra tesis respecto de este sistema electoral. Pero convengamos en que no se creyó que íbamos a tener la convicción y la fuerza para llevar adelante este proyecto.

Sin embargo, lo hicimos.

Por eso, hoy tenemos una Oposición desconcertada que claramente llegó tarde a esta iniciativa, pues nunca pensó que la íbamos a sacar adelante.

Debo destacar también -aprovecho que el Ministro del Interior se halla presente en el Hemiciclo- que esta voluntad se haya plasmado en la decisión política del Gobierno, pues este tuvo el gran mérito de prometer -quienes fuimos a las elecciones recorrimos las calles apoyando a nuestra Presidenta y pidiendo los votos para ella- la realización de esta reforma al binominal. Y vamos a cumplirlo.

El Ministerio del Interior ha insistido en ese aspecto y vamos a llevar adelante esta transformación. Sabemos que no es perfecta. ¡Absolutamente! Yo presenté indicaciones para la inclusión de los pueblos originarios. Sabemos que es un tema pendiente. Se ha dicho que vendrá en una iniciativa posterior la posibilidad de que los pueblos originarios estén representados tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados.

Es un tema pendiente.

Se prometió y se cumplió. Esto va a transformar al país, porque la representación será de acuerdo a la proporcionalidad de Chile.

Entonces, no hagamos la discusión respecto del número de parlamentarios.

No olvidemos que esta Corporación tuvo 49 Senadores, con ocho designados y dos vitalicios. Uno de estos últimos era el dictador Pinochet, quien se sentaba al lado de la puerta que está al fondo del Hemiciclo, que se construyó para que ese señor, que estuvo sentado en esta Sala, pudiera arrancar rápido.

Y ahora vamos a tener cincuenta Senadores. No hagamos un punto de eso.

¡Adelante con la reforma!

Mañana será titular en los diarios que ha terminado el binominal, y eso es una buena noticia para Chile.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Orpis.

El señor ORPIS.-

Señora Presidenta, estamos llegando al final de la discusión en lo que respecta a la composición del Parlamento.

Por lo tanto, corresponde realizar un análisis global de lo ocurrido tanto en la Cámara como en el Senado.

Desde mi punto de vista lo que ha quedado claro es que ciertos criterios que se proponen en el mensaje, llevados al redistritaje de Diputados y Senadores, no son tales. Y aquí se han citado un conjunto de ejemplos.

Cuando esos criterios no son claros, a mi juicio deberían aplicarse otros, más aún si el concepto es más amplio.

Sin embargo, tras hacer un análisis global que incluye la circunscripción senatorial de Arica y Parinacota, tengo la impresión de que las regiones extremas pierden peso relativo a nivel parlamentario en ambas ramas legislativas.

¿Y eso qué refleja? Que en ciertas Regiones, que históricamente han tenido problemas limítrofes y en las cuales es imprescindible fortalecer la autoridad, pues median en ellas problemas geopolíticos, resulta un contrasentido que, al final, esas regiones terminen perdiendo peso político a nivel parlamentario. Y eso ha ocurrido, en definitiva, tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados.

Lo acontecido esta noche con las regiones extremas, en las cuales debe aplicarse una concepción geopolítica, en general ha sido un problema histórico de los gobernantes en nuestro país a través de la historia. No es una cosa de ahora: son muy pocos los Presidentes que a través de la historia han tenido visiones geopolíticas y han buscado fortalecer regiones que requieren poblamiento, desarrollo. Esta es la conclusión de este cambio al sistema.

Muchos podrán alegrarse mañana, porque lucharon durante largos años por eliminar el sistema binominal. Pero, a mi juicio, había otras variables que considerar en este punto, como lo son las geopolíticas. Y aquí las regiones extremas, en términos relativos, de acuerdo a la actual composición, van a perder peso. Este es un signo de la historia. No es una excepción, sino lo ocurrido a lo largo del tiempo con las regiones extremas.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra la Senadora señora Pérez.

La señora PÉREZ (doña Lily).-

Señor Presidente, hoy estamos cumpliendo una aspiración de muchos años de la centroderecha liberal y parte del Programa de Gobierno del entonces Presidente Piñera.

Un estadista sostuvo hace algunas décadas que la historia ha demostrado que la democracia no es una frágil flor. Pero que, aun así, necesita ser cultivada. Sin duda la democracia echa raíces profundas cada vez que se le da la oportunidad.

El sistema electoral binominal fue parte de la exitosa transición a la democracia en nuestro país. Pero es totalmente impropio de una democracia madura: obliga a los ciudadanos y las ciudadanas de una sociedad crecientemente compleja y diversa a una eterna opción entre dos coaliciones que perpetúan diferencias y disyuntivas del pasado, sin ver el futuro, y que salvo circunstancias extraordinarias tienden siempre al empate entre ellas; a obstruir el surgimiento de fuerzas políticas nuevas; a subrepresentar a nuestras mujeres y, sin lugar a dudas, a excluir a las minorías.

En resumen, es un sistema que limita las posibilidades de elección de los ciudadanos y, como consecuencia de ello, impide que resulten fielmente representados en esta Sala, como es su derecho ciudadano.

Por tal razón, a mi juicio y al de muchos chilenos y chilenas, este es un día histórico para Oposición y para Gobierno.

Hoy le decimos a la gente que confiamos en su capacidad de elección y como Amplitud estamos asumiendo una tremenda osadía básica de la democracia: atrevernos a tener un Parlamento en que la sociedad chilena pueda verse mejor y mayormente reflejada.

De ahí que suscribimos un acuerdo en el mes de junio del año 2014 con el actual Gobierno, que no solamente cambia radicalmente el sistema por un proporcional, sino que incluye la limitación de la reelección de los parlamentarios -algo que hemos anhelado también durante años-, y transparentar y cambiar drásticamente el financiamiento de la política. Y esto lo hicimos mucho antes de que estallaran los escándalos vinculados al financiamiento de la política.

Además, dice relación con impedir, por ejemplo -es una propuesta que entregamos como Amplitud hace varios meses y que el Gobierno acogió-, que las empresas no puedan entregar financiamiento a las campañas políticas.

Por ello, estamos convencidos de que hacemos lo correcto y muy satisfechos de decir que en Amplitud creemos en los chilenos y en las chilenas; en que deben ser tratados como adultos y no como niños, no solamente para pagar impuestos (a nosotros no nos gustan, por eso votamos en contra de la reforma tributaria), sino también para exigir sus derechos a elegir y a ser electos.

Esos mismos principios de nuestro movimiento, que es centroliberal, que valora a las personas y a la libertad y la convicción de emparejar la cancha de las oportunidades, nos llevan a dar nuestro apoyo a esta reforma, que ciertamente no es milagrosa, pero que sin duda nos abrirá la puerta a una mejor democracia.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Lagos.

El señor LAGOS.-

Señora Presidenta, solamente voy a usar un minuto y medio para rescatar un tema.

De todo lo dicho acá sobre este sistema, me parece muy profundamente injusto e incorrecto decir que las regiones no están bien tratadas en su representación senatorial.

Respecto a cualquier medida que tengamos, de cualquier región de Chile, salvo la Metropolitana, todas salen para adelante desde el punto de vista de su representación poblacional.

Quiero decir que la Región de Valparaíso -espero que en esto me acompañe el Senador Chahuán- ha salido fortalecida. Porque hoy se encuentra en igualdad de condiciones con la Metropolitana, el 40 por ciento de la población de Chile, con nuestros 1.000.473 electores.

Y no quiero hablar sobre el Maule del Senador Coloma u otra región.

Entonces, debo dejar constancia de que hicimos un esfuerzo real y de que la Región Metropolitana pagó un sacrificio. Creo que es una compensación producto de todo el centralismo de la Región Metropolitana en otras áreas de las políticas públicas. Pero a la hora de llegar a este entendimiento y a este acuerdo, creo que cualquier región de Chile queda bien en materia senatorial.

Segundo, efectivamente, como muchos han dicho acá, no hay gran diferencia con lo que se aprobó en la Constitución de Pinochet respecto al número de Senadores.

Otra cosa fue cuando se eliminaron los designados. Los recursos de sus asignaciones se distribuyeron entre los treinta y ocho Senadores que quedaron. Pero, desde ese punto de vista, quiero decirles que aquí no hay una variación muy significativa con respecto a lo que aprobó la propia dictadura en su oportunidad y que no se pudo modificar con posterioridad, pese a los acuerdos a que se llegó en la casa del fallecido Ricardo Rivadeneira, de Renovación Nacional, que comprometió de palabra un acuerdo esperado por veinticinco años. Y habría sido una excelente oportunidad para haberlo honrado, y que formó parte de los compromisos.

Hay que decirlo, porque así fue. Está escrito. Son muy importantes los acuerdos, y en política hay que honrarlos.

Dicho todo eso, ¿qué es lo mejor que vamos a tener hoy? Que se va a aprobar el fin del binominal en el Senado, lo cual -créanme- algunos de nosotros pensábamos que no iba llegar en el corto plazo.

Me honro de apoyar un Gobierno que presentó este proyecto en abril, a escasos meses de haber llegado el Gobierno, y que lo tramitó con ganas. Hoy vamos a tener un sistema electoral que impartirá justicia y que cambiará la forma de aprobar y hacer política.

Hasta aquí lo dejo, señora Presidenta. Me tomé la mitad del tiempo de que disponen quienes seguirán hablando.

El señor COLOMA.-

Termine su tiempo.

El señor LAGOS.-

Si siguen negociando mi minuto¿

Quiero decir que con mucha satisfacción, agradezco al Gobierno por haber empujado este acuerdo. Y estoy seguro de que antes del mediodía tendremos esto aprobado en la Sala.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Quinteros.

El señor QUINTEROS.-

Señora Presidenta, la verdad es que me alegro profundamente de ser testigo y partícipe de este hecho histórico.

La verdad, señora Presidenta, es que había perdido toda la confianza y la fe en que esto lo podríamos lograr algún día. Han pasado veinticinco años y por fin logramos un acuerdo. Y quiero reiterar mis agradecimientos a los dos Senadores que permitieron alcanzar el quórum necesario para cambiar este sistema binominal.

En un país unitario tan centralizado como el nuestro es particularmente importante asegurar la expresión de los territorios y, en especial, de las regiones de nuestro país.

Dentro de las limitaciones de un Senado de cincuenta miembros, la distribución propuesta mejora la proporcionalidad del sistema actual y la representación de la mayoría de las regiones. Por eso no comparto lo dicho aquí por algunos Senadores regionales, respecto a que nuevamente han resultado perjudicadas las regiones. Estas se fortalecen considerando que once de los nuevos doce Senadores provendrán de regiones, y tres de ellos de territorios extremos.

Sostengo que el centralismo agrava aún más la crisis actual de la política. La debilidad de los partidos políticos y los problemas de participación son particularmente evidentes en regiones.

No es casualidad que los principales conflictos de los últimos años hayan surgido en las regiones. Por ello, insisto en que la profundización de la descentralización es uno de los caminos para reencontrar a la política con la gente, porque devuelve poder a los ciudadanos. Así también, un aumento en el número de Senadores provenientes de regiones equilibrará las relaciones de poder en nuestro país y les dará mayor representación.

En verdad, sorprende la ceguera de algunos. Así como no se quiso ver las justas demandas del movimiento social cuando la gente salió a las calles hace dos años y no se tomó nota del mensaje de la ciudadanía tras los resultados electorales desastrosos de hace un año, ahora tampoco nadie se hace cargo del escándalo del financiamiento irregular de campañas por parte de ciertas empresas.

Por eso, comparto la idea de que en el financiamiento de la política debiera quedar fuera el ámbito empresarial. Estoy dispuesto, con mi voto, a apoyar una iniciativa en ese sentido.

Insisto: me alegra mucho haber sido testigo de lo que hoy ha sucedido en la Sala del Senado. Me felicito una vez más por ser parte de esta Corporación.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señores Senadores, de acuerdo a lo que hemos conversado, la Mesa sugiere a los autores de las indicaciones supresivas y sustitutivas en esta materia que las retiren. O podríamos darlas por rechazadas. De esta forma, avanzaríamos en el debate.

El señor COLOMA.-

Las retiro.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Perdón?

El señor COLOMA.-

Retiro mis indicaciones.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Quedan retiradas, entonces.

Falta una del Senador Espina, según me informa el señor Secretario.

El señor ESPINA.-

Esa pido votarla.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

La idea era retirarlas todas, pues ya sabemos exactamente cuál será el resultado de la votación. Pero si el Senador solicita votación, no hay problema.

Por de pronto, quedan retiradas las indicaciones del Honorable señor Coloma.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Son las números 80 y 82.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Deberíamos ahora pronunciarnos acerca de la indicación del Senador Espina.

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Solo para tener claridad: ¿se están retirando las indicaciones 80, 81 y 82?

El señor COLOMA.-

Sí.

El señor HARBOE.-

Y la que vamos a votar ahora es la Nº 83.

El señor ESPINA.-

Exacto.

El señor HARBOE.- .

Okay

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Así lo entiende la Mesa también.

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Se deben considerar otros aspectos relacionados con este artículo.

Primero, hago presente que a las indicaciones 88 y 89, que se habían renovado, se les retiró firma; por tanto, ahora no cumplen con la exigencia de estar suscritas por diez señores Senadores. En consecuencia, no podrán ser consideradas.

Segundo, la señora Presidenta propone, después de votar la indicación del Senador Espina, someter a pronunciamiento el texto de la segunda columna del boletín comparado.

Además, en las páginas 45 y 46 del mismo documento, hay enmiendas aprobadas con votaciones divididas, las que se refieren a las circunscripciones tercera, séptima y undécima.

Naturalmente, si se aprobara el texto de la segunda columna del informe comparado, se deberían entender rechazadas dichas modificaciones.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Exacto.

--Quedan retiradas las indicaciones Nos 80, 81 y 82.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La indicación renovada N° 83, del Senador Espina, es para sustituir el artículo 180 por el siguiente:

"Artículo 180.- El Senado se compone de 44 miembros.

"Para la elección de los Senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial, con excepción de la Región Metropolitana que dará lugar a la formación de dos circunscripciones, según el detalle que se indica.".

Luego se indica cuántos Senadores se elegirán en cada circunscripción.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, acordamos hacer la discusión de todas las indicaciones, y eso ya se efectuó. El Senador Espina ya argumentó su posición, así que solo corresponde votar.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Exactamente, ya realizamos un largo debate al respecto, según lo acordado.

En votación la indicación Nº 83.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Cabe señalar que, para aprobar esta indicación, se requiere el voto conforme de los tres quintos de los Senadores en ejercicio.

El señor ESPINA.-

Pido la palabra.

El señor NAVARRO.-

También quiero fundar mi voto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Perdón, pero esto ya lo conversamos.

La idea es votar sin fundamento de voto, porque ya hemos tenido una larga y lata discusión sobre el particular. A mi juicio, intervenir de nuevo sería sobrepasarse.

Esa es la opinión de la Mesa.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se rechaza la indicación N° 83 (22 votos en contra y 6 votos a favor).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic y Muñoz y los señores Araya, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa los señores Allamand, Chahuán, Espina, García, Hernán Larraín y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

El señor Secretario ya explicó por qué no se van a considerar las indicaciones 88 y 89. Lo reitero: no cumplen con el requisito de las diez firmas para renovarlas.

Ahora debemos pronunciarnos respecto del artículo como viene de la Comisión.

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Lo que pone en votación la señora Presidenta es el número 15), que pasa a ser 10), para sustituir el artículo 180 de la Ley de Votaciones Populares y Escrutinios. Es el texto aprobado en general por el Senado y que figura en la segunda columna del boletín comparado.

Este numeral, para ser aprobado, requiere el voto afirmativo de los tres quintos de los señores Senadores en ejercicio.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

--(Durante la votación).

El señor WALKER (don Ignacio).-

La señora Ministra pidió la palabra, señora Presidenta.

El señor COLOMA.-

Estamos en votación.

El señor WALKER (don Ignacio).-

¡Por favor! Solicitó intervenir antes de que se procediera a votar.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra la señora Ministra para hacer una precisión.

La señora RINCÓN (Ministra Secretaria General de la Presidencia).-

Señora Presidenta, antes de que concluya la votación -con nuestros asesores hemos estamos siguiendo la discusión-, quiero aclarar algo que dijo el Secretario.

Al aprobarse el artículo 180, se entiende que también se acogen las indicaciones que incorporó el Ejecutivo en su momento y que fueron votadas a favor por la Comisión de Constitución.

Esas enmiendas quedan aprobadas, no rechazadas.

Lo menciono para que quede constancia de ello.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Muy bien.

El señor COLOMA.- ¡Habló la Ministra!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¡Quedan felices esta madrugada, entonces¿!

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba el número 15), que pasa a ser 10), que sustituye el artículo 180 de la Ley sobre Votaciones Populares y Escrutinios, incluidas las tres enmiendas propuestas por la Comisión en el inciso tercero (23 votos a favor y 9 en contra), dejándose constancia de que se reunió el quórum constitucional exigido.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa los señores Allamand, Bianchi, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Prosiga, señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Señores Senadores, a juicio de la Secretaría, el número 16), que pasa a ser 11), que propone derogar el artículo 181, debiera darse por aprobado con la misma votación anterior, por haberse ya acogido una conformación de circunscripciones senatoriales.

Del mismo modo, debieran desecharse las indicaciones renovadas 93 y 94, que buscan suprimir dicho numeral.

En una consecuencia lógica de lo que recién se resolvió.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Cierto.

--Con la misma votación anterior, se aprueba el número 16), que pasa a ser 11).

El señor LABBÉ (Secretario General).-

A continuación, corresponde tratar el número 17), que pasa a ser 12), mediante el cual se agrega un artículo 23 transitorio, que dice: "La regla especial del artículo 3° bis, inciso quinto, sólo tendrá aplicación en los procesos electorales parlamentarios de 2017, 2021, 2025 y 2029.".

Las indicaciones renovadas 95 y 96 proponen suprimir dicho numeral.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En discusión.

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, esta modificación, que introduce un artículo transitorio, busca establecer que el régimen de cuotas se aplique solo en las elecciones de los años 2017, 2021, 2025 y 2029. Ello se refiere a la temporalidad de las cuotas.

De acuerdo a la votación que hicimos en su minuto para validar dicho criterio, debiéramos rechazar las indicaciones renovadas que buscan suprimir el numeral 17) y aprobar lo propuesto por la Comisión.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

De acuerdo.

Corresponde votar las indicaciones y luego la enmienda acordada por la Comisión.

Ya se ha explicado el punto. Se trata de la transitoriedad de la ley de cuotas en las elecciones individualizadas.

El señor COLOMA.-

Retiro la indicación, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Bien. Entonces, votamos directamente la proposición de la Comisión.

El señor HARBOE.-

¿Se retiran las indicaciones 95 y 96?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

El Senador Coloma ha retirado ambas indicaciones.

--Se retiran las indicaciones renovadas números 95 y 96.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

El número 17) es una norma de quórum orgánico constitucional, por lo que necesita 22 votos favorables para ser aprobado.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación el número 17).

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba el número 17), que pasa a ser 12), mediante el cual se agrega un artículo 23 transitorio a la Ley sobre Votaciones Populares y Escrutinios (24 votos a favor y 6 abstenciones), dejándose constancia de que se reunió el quórum constitucional requerido.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, Bianchi, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Se abstuvieron los señores Allamand, Chahuán, Espina, García, García-Huidobro y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Prosiga, señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

A continuación, corresponde analizar el número 18), que pasa a ser 13), con el cual se agrega un artículo 24 transitorio.

Sobre el particular, se han renovado las indicaciones 97 y 98, para eliminar dicho numeral.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, también retiro estas indicaciones.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Bien.

--Se retiran las indicaciones renovadas números 97 y 98.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Corresponde votar, entonces, el número 18).

Para su aprobación, se requiere el voto conforme de

23 señores Senadores.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba el número 18), que pasa a ser 13), para incorporar un artículo 24 transitorio a la ley (31 votos a favor).

Votaron las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Allamand, Araya, Bianchi, Chahuán, De Urresti, Espina, García, García-Huidobro, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Hernán Larraín, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Prokurica. Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

A continuación, el número 19), que pasa a ser 14), agrega un artículo 25 transitorio.

Se han renovado las indicaciones números 100, 101 y 102 para suprimir este numeral, de los Senadores señores Coloma y Pérez Varela; del Honorable señor Ossandón, y de los Senadores señores García-Huidobro y Moreira, respectivamente.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Retira la indicación, Senador Coloma?

El señor COLOMA.-

Sí.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Muy bien.

Pero no se encuentra en la Sala el Honorable señor Ossandón, autor de la indicación 101, razón por la cual habrá que pronunciarse al respecto.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La Secretaría entiende que están retiradas las números 100 y 102, no así la 101.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Así es. Esta última hay que votarla.

--Se retiran las indicaciones renovadas números 100 y 102.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación la indicación 101.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Esta propuesta es de quórum simple.

Quienes estén de acuerdo con la indicación del Senador señor Ossandón votan que sí; los que estén en desacuerdo, que no.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma, para fundar su voto.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, voy a asumir la defensa de la indicación del Senador Ossandón, cuyo contenido es equivalente a lo que varios parlamentarios habíamos propuesto en las indicaciones que retiramos para discutir sobre el artículo que se agrega.

Como aún está en pie esta indicación, habrá que debatir en torno a ella.

Lo planteado en este artículo transitorio es la mejor demostración de lo absurdo que resulta la distribución que se aprobó, la cual se actualizará en función de los resultados del censo.

Se señala que en "el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022" va a empezar el reacomodo para darle sentido proporcional a un sistema que hoy no lo es.

Porque en la actualidad no es proporcional. Nadie puede afirmar que lo sea; más aún, cuando distintos señores parlamentarios han demostrado que entre un territorio electoral y otro no existe relación alguna en materia de representatividad.

Tal dificultad se va a arreglar por la vía de esta norma transitoria, a efectos de darle un sentido normal a una legislación que es anormal, un traje a la medida, hechiza y, a mi juicio, profundamente equivocada.

Insisto en el punto porque ello es parte de la construcción que uno realiza para recurrir ante el Tribunal Constitucional con el objeto de hacer ver lo absurdo de esta proposición.

Recién se da espacio en 2024 para reparar el grave error político y constitucional que hoy estamos cometiendo.

Ese es el sentido de la indicación en comento, y me parece que apunta en la dirección correcta, sin perjuicio de lo cual después votaremos el artículo en sentido inverso al que adoptaremos en esta oportunidad.

Ese es el alcance de la indicación y yo, por lo menos, voy a aprobar lo que propone: la eliminación del artículo 25 transitorio de la iniciativa.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se rechaza la indicación renovada N° 101 (25 votos contra 3 y 5 abstenciones).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, Bianchi, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Hernán Larraín, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa los señores Coloma, García-Huidobro y Orpis.

Se abstuvieron los señores Allamand, Chahuán, Espina, García y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Ahora hay que pronunciarse sobre el precepto que el Senado aprobó en general.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

En la segunda columna del boletín comparado figura el artículo 25 transitorio, que corresponde al número 19) del artículo 1°, el cual requiere tres quintos de los Senadores en ejercicio para su aprobación.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Quienes estén de acuerdo con dicha norma votan que sí, y los que la rechazan, que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señor Secretario, consulte.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba el artículo 25 transitorio del número 19) del artículo 1° del proyecto (27 votos a favor y tres abstenciones), dejándose constancia de que su cumplió con el quórum constitucional exigido.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, Bianchi, Chahuán, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Hernán Larraín, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Prokurica, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Se abstuvieron los señores Allamand, Espina y García.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, a continuación vienen cinco numerales, que están entre las páginas 52 y 58 del boletín comparado, los cuales dicen relación con materias de financiamiento y gasto electoral.

La Comisión los rechazó (4 votos contra uno), como parte del acuerdo con el Gobierno, ya que se incorporó el asunto en el proyecto de ley que se encuentra en tramitación en la Cámara de Diputados.

Por lo tanto, sugiero a la Mesa la posibilidad de votar esos cinco numerales en conjunto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Habíamos dicho antes que era absolutamente razonable el tratamiento propuesto.

Se hará una sola votación, ya que efectivamente el tema está siendo tramitado en la Cámara de Diputados, tal como fue el compromiso.

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La Secretaría solo tiene que informar que en lo que se refiere al número 2) del artículo 2°, el Senador señor Guillier ha pedido revisar la inadmisibilidad de la indicación N° 109.

Consultado el informe de la Comisión, se puede señalar que esta indicación fue declarada inadmisible por contemplar materias de carácter tributario, lo cual es de iniciativa exclusiva del Presidente de la República.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

La Mesa respeta el criterio de la Comisión.

En cuanto a lo señalado por el Senador señor Harboe, efectuaremos una sola votación respecto de todo lo relativo a financiamiento, que ya sabemos que esa materia se aborda en el proyecto que está en la Cámara de Diputados.

El señor HARBOE.-

Habría que aprobar lo que hizo la Comisión, señora Presidenta.

El señor TUMA.-

Efectivamente.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Así es.

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La Comisión propone suprimir los numerales 1) a 5) del artículo 2° (páginas 51 a 58, segunda columna del boletín comparado).

Tal supresión no necesita quórum especial para ser aprobada.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Navarro.

El señor NAVARRO.-

Señora Presidenta, solo quiero señalar que el Gobierno ha presentado un proyecto de ley de financiamiento electoral; que hay consenso en la Nueva Mayoría para eliminar las donaciones secretas de empresas del sector privado a las campañas, y que también aspiramos a que efectivamente se introduzca la pérdida del cargo o la inviabilidad para asumirlo cuando exista una violación positiva de la ley.

Entendemos que ese es el punto, y esperamos discutirlo en la iniciativa sobre financiamiento, ya que aquí se va a eliminar todo lo que dice relación con el tema.

No se trata de eludir el problema. Lo vamos a enfrentar. Y, al menos yo, voy a plantearlo en esos términos.

Se rechazó la indicación del Diputado Jackson, que también planteaba la supresión de aportes privados. Pero entiendo que el Gobierno tiene la voluntad de eliminar los aportes secretos de las empresas privadas a las campañas.

Siendo así, y habiendo consenso al respecto, voto a favor de eliminar estos numerales de la iniciativa, porque el tema va a ser discutido en profundidad en el proyecto sobre financiamiento electoral que se encuentra en tramitación en la Cámara.

¡Patagonia sin represas!

¡Nueva Constitución, ahora!

¡No más AFP!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Estaba inscrito para intervenir el Honorable señor Espina.

No se encuentra.

Tiene la palabra el Senador señor De Urresti.

El señor DE URRESTI.-

Señora Presidenta, en la Comisión yo me abstuve en la votación de estos numerales por argumentos similares a los señalados por el colega Navarro.

Hemos solicitado que en el proyecto presentado por el Gobierno se incluya el financiamiento electoral; la transparencia, en forma amplia, y la pérdida del cargo, sobre lo cual hemos insistido.

Ello no se encuentra consignado en la iniciativa que se presentó, pero esperamos que haya una reforma constitucional que concite amplio acuerdo en materia de transparencia en el financiamiento de campañas y de las sanciones como consecuencia de su vulneración.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señor Secretario, consulte.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba la supresión de los numerales 1) a 5) del artículo 2° del proyecto (32 votos favorables y una abstención).

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Allamand, Araya, Bianchi, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Hernán Larraín, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Orpis, Pizarro, Prokurica, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Se abstuvo el señor De Urresti.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palaba el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

En la página 58 del boletín comparado se propone intercalar, entre el artículo 58 y el artículo transitorio, el siguiente epígrafe: "Disposiciones transitorias".

Ello obedece a que la ley tiene actualmente un solo artículo transitorio.

A juicio de la Secretaría, se trata de un aspecto meramente formal, porque faltaba dicho epígrafe.

Lo sugerido no requiere quórum especial de aprobación.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Si les parece, se dará por aprobado.

--Por unanimidad, se aprueba lo propuesto por la Comisión de Constitución.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Distinta es la situación en el número 7) -página 60-, porque se sugiere agregar un artículo segundo transitorio, pasando el actual artículo único a ser artículo primero.

Dicha norma requiere, para su aprobación, quórum orgánico constitucional.

El texto del artículo segundo transitorio que se adiciona se halla en la página 61 del boletín comparado.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, este artículo segundo transitorio contempla el fondo para incentivo de las candidaturas de mujeres.

Se establece que en las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, "las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hayan sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a los que pertenezcan tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento por cada una de ellas.".

Adicionalmente, se dispone: "Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política".

Eso es, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Les parece abrir la votación, sin perjuicio de fundamentar el voto?

Tiene la palabra el Senador señor Hernán Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, yo creo que podríamos votar sin fundamentar el voto, porque esta disposición nos parece razonable. Este es el tipo de incentivos que pueden realmente colaborar a la incorporación de la mujer en las actividades públicas en general, a través de recursos que estén destinados -como dice sobre todo el inciso segundo- a "implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política".

Y aprovecho de referirme también al artículo tercero transitorio, porque tiene que ver con el mismo espíritu. Aquí se contempla, para el período en que operen las cuotas para candidatas a Senadoras o Diputadas, un reembolso adicional de gastos electorales por voto obtenido, lo que también puede constituir un incentivo para ir atrayendo más mujeres que puedan tener alguna facilidad adicional y así lograr mejores resultados.

Por estas consideraciones, somos partidarios de apoyar ambas normas, y de hacerlo en una sola votación.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

La Mesa considera razonable la sugerencia.

Si le parece a la Sala, se aprobarán ambas normas por unanimidad.

Acordado.

--Por unanimidad, se aprueban los artículos segundo y tercero transitorios (33 votos), dejándose constancia de que se cumple con el quórum constitucional exigido.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Corresponde votar ahora el artículo 3° del proyecto, norma que es de quórum orgánico constitucional.

En el número 1), la Comisión propone sustituir el inciso primero del artículo 3° por el que se indica en la página 62 del boletín comparado. Votaron a favor de esta enmienda los Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe, y en contra, los Senadores señores Espina y Larraín.

Si se desea se puede leer.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, La modificación propuesta a este artículo establece que: "Los partidos políticos existirán como tales cuando se hubieren constituido legalmente en al menos una de las regiones en que se divide políticamente el país.". Y circunscribe el accionar de estas colectividades a la región en la cual se inscriban.

Este numeral no entra en el porcentaje. El porcentaje viene a continuación. En consecuencia, lo que habría que discutir aquí es la posibilidad de que los partidos políticos puedan constituirse legalmente al menos en una región y no en tres, como se exige hoy día.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, creo que esto es un profundo despropósito.

Yo quiero generar una reflexión respecto de lo que ha sido la discusión en este Parlamento, precisamente, sobre el rol de los partidos políticos.

La norma cambia sustancialmente un acuerdo a que se llegó hace años en un gobierno de la Concertación, donde de alguna manera se planteó que había que asimilar las lecciones del pasado y entender que el pluripartidismo extremo provoca inestabilidad en los países.

Y de ahí nació un conjunto de normas tendientes a asegurar una lógica de estabilidad institucional. Así fue definido cuando se discutió. Y se planteó que un partido político existe como tal cuando está constituido en ocho regiones -ese era el sentido de la disposición- o en un mínimo de tres de ellas, siempre que fueran geográficamente contiguas.

Aquí se está demoliendo eso que aquí mismo se construyó, al señalar que un partido político existe cuando se constituye en una región. ¡Una región! Conforme han explicado otros parlamentarios, en la Región de Aysén, con 94 personas se podrá constituir un partido político, con todo lo que eso significa.

Entonces, quiero generar una reflexión respecto de si estamos haciendo algo que tiene un fin público positivo o si estamos estableciendo un espacio de pluripartidismo completamente desbordado.

Yo he oído a varios parlamentarios aquí presentes, no solamente ahora, sino que en muchas intervenciones a través de la historia, destacar la importancia de preservar el rol de los partidos políticos, porque estos obligan a aunar voluntades, en la legitimidad de la diversidad; a construir espacios de entendimiento en el país.

Esa es, además, una lógica bastante universal, donde se busca que los partidos políticos tengan un rol y un espacio. Y no parece deseable que existan cientos de partidos -adicionalmente va a haber un financiamiento- para, teóricamente, representar voluntades que ya no son ideológicas, sino que pueden ser de intereses, de caudillismos, que es justamente lo que se buscó evitar a través de la conformación original de la Ley Orgánica Constitucional de los Partidos Políticos.

Entonces, yo sé que este proyecto incluye distintos aspectos. Y creo que se ha provocado ya, objetivamente, bastante daño. Pero esto es superlativo en función a las otras modificaciones. Porque va a generar -y aquí hay varios presidentes de partidos políticos que conocen la complejidad de esta materia- que en un minuto determinado, sin consideración al sentido de disciplina, de pertenencia, alguien diga: "¿Sabe qué más? Voy a formar un partido político". Y eso en una región, no es en múltiples regiones.

Entonces, yo no sé si quienes van a concurrir a la aprobación de esta iniciativa están pensando, de verdad, en el bien del país. O sea, ¿ustedes creen, con una mano en el corazón, que esto es, más allá de cualquier conveniencia del minuto, bueno para Chile? ¿Es bueno que un partido político se conforme en una región con el 0,25 por ciento que establece la norma siguiente, tal como ha dicho el Senador que me antecedió en el uso de la palabra?

Yo creo que este es un tema de conciencia, pero de máxima conciencia, porque, de aprobarse la norma como está, después va a ser extraordinariamente difícil revertir la situación.

Entonces, si el día de mañana hay cien, doscientos partidos políticos, yo creo que se va a perder el sentido de identidad que hemos buscado desde distintos lados, todos en función del beneficio del país.

Yo llamo a la reflexión, porque esto me parece un profundo error.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señor Presidente, en primer lugar, nosotros vamos a hacer reserva de constitucionalidad respecto de esta norma, porque no está considerada en las ideas matrices de la iniciativa, que tiene una finalidad absolutamente distinta. De hecho, originalmente no incluía ninguna norma sobre este asunto.

La materia de esta iniciativa -según se dice- es la proporcionalidad e inclusión para cambiar el sistema electoral. Y en la Cámara de Diputados se incorporaron normas que no se relacionaban con sus ideas matrices.

El artículo 24 de la Ley Orgánica Constitucional del Congreso expresa en el inciso primero: "Solo serán admitidas las indicaciones que digan relación directa con las ideas matrices o fundamentales del proyecto.".

Cualquiera que revise las ideas matrices de esta iniciativa verá que se vinculan con una materia absolutamente distinta de los requisitos exigidos para la constitución de partidos políticos, entre ellos el número mínimo de regiones. Tanto es así que el Gobierno nunca tuvo en consideración estos aspectos cuando envió su texto: ellos se incorporaron en la Cámara de Diputados.

Entonces, es evidente que, si uno quiere cumplir las normas constitucionales, debe concluir necesariamente que si en un proyecto vinculado con el sistema electoral se termina discutiendo disposiciones sobre constitución de partidos políticos ello no guarda relación alguna con sus ideas matrices.

Por lo tanto, hacemos reserva de constitucionalidad y pedimos que se declaren inadmisibles todos los preceptos relativos a la constitución de partidos políticos, sea en cuanto al número de regiones en que ello debe ocurrir, sea en cuanto a los diversos porcentajes que se establecen.

De otra parte, voy a explicar por qué votamos en contra.

Hoy los partidos políticos se pueden constituir en a lo menos ocho regiones no contiguas o en un mínimo de tres contiguas. Ello, sobre la base de una cantidad razonable de personas: "a lo menos, 0,5 por ciento del electorado que hubiere sufragado en la última elección de Diputados...".

Si bien ahora se está hablando de la constitución en a lo menos una región, no puede haber una desvinculación con respecto a la norma que habla de a lo menos "0,25 por ciento del electorado que hubiere sufragado...".

Con los cambios que se introducen, en Arica se constituye un partido político con 178 electores. Y en la elección de 2013 hubo 71 mil.

En Tarapacá, que registra 86 mil electores, se necesitan 215 para constituir un partido político.

En Antofagasta, que tiene 176 mil electores, se constituye un partido político con 441.

En Valparaíso, donde hay 723 mil electores, bastan 1.800 para constituir un partido político.

Y así, suma y sigue.

Con el Senador García -y seguramente Su Señoría lo complementará más adelante- tenemos datos sobre más de 15 partidos políticos.

Esta norma causará un gran daño al funcionamiento de nuestro sistema democrático.

Parece justo, razonable, correcto que se quiera la existencia de partidos en las regiones. Sin embargo, su constitución requiere esfuerzos: reunir la cantidad de firmas necesarias, en fin. Y solo después de ello es posible gozar de todos los derechos y beneficios, entre ellos el financiamiento estatal.

Con este conjunto de disposiciones, ¿en nuestro país va a haber 50, 60, 70 partidos políticos?

Les voy a decir más: cuando un militante vea que su colectividad no lo incluyó como candidato para una elección y que ello no sucederá a lo largo del tiempo, ¡va a constituir un partido nuevo...! Ello, por la reducida cantidad de electores que se requerirá para tal efecto.

Entonces, por los argumentos que se dieron antes, ya el sistema proporcional, en la forma como está estructurado, es una inducción a tener más partidos políticos.

Con estas normas, por consiguiente, le estamos haciendo un tremendo daño al sistema democrático.

Por las razones expuestas, votaremos en contra del artículo 3°.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Señores Senadores, con respecto a la solicitud de declaración de inadmisibilidad, debo puntualizar, antes de que comience a dirigir la sesión la señora Presidenta, que la Mesa seguirá el criterio de la Comisión informante, que declaró admisible el artículo 3°.

El señor ESPINA.-

Pido, entonces, que la Sala vote la admisibilidad.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

En ese caso, de acuerdo con la Ley Orgánica del Congreso, hay que votar la admisibilidad.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Así es.

Antes de abrir la votación, tiene la palabra el Senador señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, esta materia se discutió en la Comisión, pues, tal como anticipó el Senador Espina, el problema estriba en que se está abriendo un foco al aceptarse una materia ajena a la idea matriz del proyecto.

Por lo tanto, en la Comisión no nos pareció prudente incorporar el artículo 3°. Y señalamos que esta norma debería declararse inadmisible.

Además, consideramos que lo de los partidos políticos debe tratarse en una mirada global y distinta.

El Gobierno presentó un proyecto referido al financiamiento de los partidos políticos. Sin embargo, si entiendo bien, está estudiando una iniciativa más completa para revisar la regulación de aquellos.

Aquí ocurre lo mismo que pasó con el financiamiento. No se puede picotear un tema en medio de un gran proyecto. Dentro del sistema electoral, tocar en dos o tres normas lo concerniente al financiamiento causa daño. El sistema tiene debe mirarse como un todo.

Igual sucede en el caso de los partidos políticos. Aquí, como se ha dicho, estamos tomando decisiones particularmente delicadas. Porque si se aprueban estas disposiciones estaremos generando un camino descontrolado para el multipartidismo, ya que el caudillismo será el efecto de esa decisión. Debido al aumento de candidatos, tendremos muchas dificultades para frenar los ímpetus individualistas que se van a estimular, sobre todo con la rebaja de la cantidad de firmas que se requerirá. Al reducirse a la mitad (ya lo recordaba el Senador Espina) pasaremos a tener cifras absurdas: ¡para constituir un partido a nivel nacional se van a requerir 16 mil 746 firmas...!

Entonces, yo no creo que el sistema electoral, materia que sí ha sido objeto de estudio y discusión, pueda confundirse con la idea central contenida en los requisitos para constituir un partido político: si ello puede hacerse en una o en más regiones. Eso requiere una mirada conjunta y forma parte de otra iniciativa.

Así que yo creo que estamos frente a una norma inconstitucional, inadmisible, por hallarse fuera de las ideas matrices de este proyecto.

Asimismo, hay una lógica de sentido común que aconseja votar en tal línea; para tratar estas materias debidamente, con una mirada de conjunto, global.

Por consiguiente, señora Presidenta, pido que la Sala acoja el criterio que acabo de exponer y de ese modo nos evite entrar de mala forma a la regulación de la actividad de los partidos políticos, que tiene una complejidad mayor y que es clave para el funcionamiento del sistema democrático.

Ya lo decía antes: los independientes son muy importantes, pero no sustentan el sistema democrático.

Pensamos que la única manera de darle estabilidad a nuestro país es fortaleciendo las colectividades políticos y no debilitándolas o abriendo la posibilidad de crearlas de manera irrestricta.

Además, con el sistema que se establece para constituir partidos políticos y con los recursos que se les darán a estos, se genera un incentivo perverso si la situación no se mira en debida forma.

No es esta la instancia adecuada, porque el proyecto que nos ocupa tiene una finalidad distinta, la que se distorsiona con la incorporación de las disposiciones en cuestión.

Por eso, señora Presidenta, consideramos que la norma es inadmisible, y esperamos que la Sala así lo refrende.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Pizarro.

El señor PIZARRO.-

Señora Presidenta, nosotros creemos que la disposición y lo planteado en torno de ella son admisibles.

En muchos de los otros preceptos de esta iniciativa vinculados con el sistema electoral se modifica la normativa de los partidos políticos en todo sentido: desde alguno que quería ordenar la inscripción de candidatos por razones de género hasta otro que deseaba entrar en la ley de cuotas.

O sea, si el criterio hubiese sido el de que no era factible tocar nada de la Ley de los Partidos Políticos, no podríamos haber incluido ninguna de las otras normas que sí modifican sustancialmente la factibilidad de decisión de ellos en el ámbito que les es propio.

Eso, en cuanto a la admisibilidad.

Tocante al fondo, sin duda que es un tema muy opinable y que hay riesgos, por las razones aducidas aquí, aunque a veces exagerando los argumentos. Porque en muchas oportunidades lo que reclaman movimientos, o grupos emergentes, o liderazgos que se expresan en distintas regiones es facilidad para transformarse en partidos políticos regionales y después alcanzar nivel nacional.

Con aquello uno perfectamente podría argumentar al revés de como se ha hecho aquí: el incentivo de los caudillismos, de los proyectos personales se traduce reiteradamente en las candidaturas independientes que se marginan de los partidos. Cuando existe la posibilidad de formar una colectividad política hay un principio más estructurado para organizarse en torno a cierta propuesta o idea que permita una raigambre mayor.

Los partidos, como siempre, tienen fortalezas o pueden surgir o permanecer en la medida que cuenten con respaldo popular, con apoyo ciudadano.

Por consiguiente, la norma en comento también forma parte de los consensos que logramos para llevar adelante este proyecto, que permite terminar con el sistema binominal. Y es parte de lo que debemos honrar acá. Se trata de un acuerdo político dentro de lo que es posible.

¿Tiene riesgos? Sí: los tiene. Nosotros aspiramos a que, con buenas prácticas y el fortalecimiento de los partidos en otros ámbitos, este cambio, a la larga, pueda ser incluso positivo.

Por eso, vamos a apoyar la admisibilidad.

La señora ALLENDE (Presidenta).- ¿Les parece abrir la votación sobre la admisibilidad?

Acordado.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Quienes están de acuerdo con la inadmisibilidad votan que sí, y quienes están en desacuerdo, que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

No: es al revés.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Debe someterse a votación la inadmisibilidad, que es lo que pidió el señor Senador que solicitó votar.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Es a la inversa.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Conforme, señora Presidenta.

En consecuencia, quienes consideran que el inciso primero del artículo 3° es admisible votan que sí, y aquellos que estiman lo contrario, que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se declara admisible el inciso primero de remplazo propuesto para el artículo 3° de la ley N° 18.603 (22 votos contra 10).

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, De Urresti, Girardi, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa los señores Allamand, Bianchi, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Corresponde pronunciarse sobre la disposición.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La norma aprobada por la Comisión figura en la tercera columna del comparado (página 62) y es de rango orgánico constitucional, por lo cual para su aprobación se requieren 22 votos favorables.

El señor HARBOE.-

Hay indicaciones a este precepto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Habría que verlas primero.

¿Qué números tienen?

El señor HARBOE.-

Los números 147, 148 y 149.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Esas indicaciones recaen en la letra a), señor Senador, no en la norma que se está tratando en este momento.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Conforme.

Siga, señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Corresponde votar la disposición que figura en la segunda columna: artículo 3° (página 62).

Quienes están de acuerdo con el inciso que sustituye el inciso primero del artículo 3° votan que sí, y aquellos que están en desacuerdo, que no.

Para aprobar la norma de remplazo se necesitan 22 votos favorables, pues se trata de una materia orgánica constitucional.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, quiero, en forma simultánea, referirme al artículo 3° y anticipar mi criterio respecto del artículo siguiente, donde se rebaja de 0,5 a 0,25 por ciento el número de ciudadanos con derecho a voto requerido para constituir un partido político.

Como lo hemos dicho en distintos momentos -y no voy a reiterar los fundamentos-, la suma de esas dos normas, en el contexto de un sistema proporcional -aunque corregido, limitado, es proporcional-, va a generar en Chile el desarrollo ilimitado del partidismo político.

Para mi gusto, pensando en el futuro, aquello envuelve una grave irresponsabilidad política. La estabilidad de los países -sobre todo la de naciones como la nuestra, que no tienen democracias sólidas- se ve amenazada, se ve complicada cuando existen cantidades importantes de partidos sin sustento, que no tienen trayectoria, que no son suficientemente sólidos.

Me parece que al hacer aquello, probablemente movidos por otras inquietudes o por otros compromisos, no advierten el grave peligro que encierra el multipartidismo.

Este tema no es nuevo; está muy estudiado en la literatura de la ciencia política. Y resulta evidente, por lo demás, atendidas las experiencias que conocemos del pasado político de América Latina, que precisamente ese camino ha sido el que ha debilitado la institucionalidad en la región.

Creo que sumarse a tal camino, cuyo resultado se conoce, es algo francamente muy irresponsable.

Quienes votan por mantener dichos mecanismos, y en consecuencia por reducir los partidos políticos, simplificar su creación, minimizar a una cifra ridícula la cantidad de personas con que se pueden constituir, generan un enorme grado de responsabilidad política hacia el futuro. Quizás no va a ocurrir en un año ni en dos, pero no cabe la menor duda de que será un fenómeno de irradiación hacia lo futuro de proporciones insospechadas.

A mi entender, de esto hay que dar cuenta a tiempo, porque la gobernabilidad en los países cuando tienen economías todavía frágiles y se hallan en transición hacia el desarrollo requiere fortalecer las instituciones democráticas.

Lo que se está haciendo por esta vía a propósito de un cambio en el sistema electoral y sin mayor estudio es, simplemente, abrir las puertas al partidismo fácil, que -repito- les causa grave daño a la estabilidad democrática y a la gobernabilidad de los regímenes institucionales.

Por estos motivos, voy a votar en contra de las dos disposiciones, pues me parece que son una puerta para permitir en nuestro país un cambio de las que han sido quizás nuestras características fundamentales, que nos han distinguido en América Latina y han hecho posible el desarrollo económico, cuales son el apego a las instituciones y la fortaleza de nuestros partidos y de la democracia. Eso es lo que hoy día se pondrá en jaque en la medida en que se avance en la aprobación de ambos artículos.

Gracias.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Chahuán.

El señor CHAHUÁN.-

Señora Presidenta, tal como lo expresó el Senador señor Larraín, nos hallamos hoy día frente a un acto de irresponsabilidad de esta Corporación al tomarse una decisión que puede generar una atomización de las fuerzas políticas y que va a debilitar la estructura de los partidos en forma letal, diría. Fueron justamente el multipartidismo y el sometimiento a la determinación de unos pocos los que llevaron a la crisis institucional de 1973. Por eso, quiero manifestar claramente que estamos dando un paso en falso.

El cumplimiento de compromisos por la Nueva Mayoría en esta forma implica, sin lugar a dudas, pagar un precio que va a resentir nuestra democracia.

He dicho.

El señor MONTES.-

¡Este es un discurso menos extremo¿!

El señor LARRAÍN.-

¡Se ve que no entienden!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Puede intervenir el Senador señor Allamand.

El señor ALLAMAND.-

Señora Presidenta, como ha quedado en evidencia durante este largo debate, los presentes mantenemos muchos puntos de divergencia, aproximaciones disímiles a las materias que nos ocupan y, en definitiva, puntos de vista no siempre coincidentes, y aquí se ha expresado una legítima controversia.

Con el mayor respeto por quienes en la Sala han resuelto participar en las actividades públicas como independientes, creo que el resto de los Senadores presenta un rasgo en común, que es el de haber llevado una vida orientada a servir a nuestro país, a nuestras ideas, por intermedio de un partido político. Y ello no ha sido fácil, porque las colectividades, muchas veces, son objeto de campañas de desprestigio, de una muy mala imagen, de reprobación por parte de la opinión pública; pero todos hemos sido coherentes y hemos abrigado la convicción de que son la forma de encauzar la vida en democracia.

En consecuencia, pienso que el asunto no puede resultar indiferente para mis Honorables colegas, pues estoy seguro de que la inmensa mayoría de ellos saben que la norma en examen es incorrecta, equivocada y contradice todo lo que hemos hecho durante nuestra vida política.

¡Si lo que todos hemos intentado es fortalecer una acción política responsable a través de los partidos! ¡Eso es lo que tenemos en común! ¡Eso es lo que hemos hecho siempre! Entonces, ¿cómo va a ser razonable que ahora simplemente les demos vuelta la espalda a las que han sido nuestras convicciones desde jóvenes? La mayoría de nosotros registra militancias tempranas. Partimos en la vida política en los liceos, en los colegios, en las universidades, e integramos las juventudes de las colectividades.

¿Hay alguien en la Sala que se atreva a sostener que esta disposición le conviene a la democracia?

¿Hay alguien que pueda afirmar de buena fe que es positiva para los partidos, para aquello a lo cual le hemos dedicado toda nuestra vida?

No hay nadie que se aventure a expresarlo, porque todos ustedes saben que la norma es errada, inconveniente y -¿por qué no lo decimos?- constituye una contraprestación. Sería mucho más transparente, como aquí se ha insinuado, que Sus Señorías reconocieran -me parece que todos quedaríamos mejor, porque sabemos lo que están pensando- que es parte de aquellos servicios a los que la política a veces obliga. Y quizás alguien lo entendería: "Usted vota a cambio de esto y yo le devuelvo de esta otra manera"; "Usted apoya este cambio del sistema electoral y yo le facilito una formación de partidos ridícula".

Entonces, con el mayor respeto, señora Presidenta, francamente prefiero que ustedes expliciten el punto para que quede en evidencia que se trata de una contraprestación; que a ustedes les formularon una exigencia. Porque todos respetamos lo que hemos hecho en nuestras vidas y a los partidos, cuyo funcionamiento importa tanta dificultad, la cual ha sido quizás mayor en el caso de Sus Señorías, ya que los formaron en momentos en que eran perseguidos por sus convicciones y los mantuvieron y defendieron en circunstancias muy difíciles.

La verdad es que no se entiende lo que están haciendo. Por eso, modestamente los llamo a una reflexión con miras a cambiar la orientación de la votación o a explicitar que las circunstancias los han obligado a algo que ni ustedes mismos justifican.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Puede intervenir el Honorable señor Bianchi.

El señor BIANCHI.-

Señora Presidenta, creo que no puede causar ninguna sorpresa lo que estamos viendo, porque Senadores que me han antecedido en el uso de la palabra han manifestado que media un acuerdo que debe respetarse. Por lo tanto, imagino que existe la obligación de pronunciarse a favor de este para poder compensar el que alguien obviamente haya tenido que ceder en muchas de las votaciones para poder llegar a lo de ahora.

Alguien ha estimado que existen independientes que quieren continuar en su condición por ser caudillos y encontrarse fuera de las estructuras de los partidos políticos. Eso me ha tocado escucharlo por largos años. Por mi parte, he tratado de mantener un grado de consecuencia absoluto para conservar la condición conforme la cual fui elegido, pero, comprendiendo que venía un cambio en la situación política de nuestro país, quise obligarme a lo más. Ello significó el intento, con la máxima consecuencia, de proseguir con un proyecto que algunos abandonaron al comienzo y de llevarlo hasta el final, resulte o no, y me comprometí con la norma de tres regiones contiguas. Pude haber esperado la vigencia de la iniciativa en análisis, infinitamente más fácil para crear en una región un partido con ochenta, noventa, cien personas.

El Senador que habla, quien no ha militado nunca en uno de ellos, considera absolutamente necesario fortalecer las estructuras de estas colectividades, ¡máxime cuando estamos asistiendo al mayor desprestigio de la clase política en nuestro país!

Entonces, ¡el asunto no se entiende!

Sinceramente, no voy a dejar de obligarme a hacer todo el esfuerzo necesario para intentar construir Democracia Regional en las tres regiones australes contiguas. Estimo que es lo mínimo a lo que uno debe obligarse en una labor responsable, seria, de Estado.

¡Aquí no estamos para darnos gustos personales ni para intentar salir del paso armando un partido con noventa personas, porque una coalición no da un cupo! ¡Si eso es lo más irresponsable que cabe observar!

A mí también me interesan la identidad regional; los movimientos emergentes; la participación de la juventud, de los adultos mayores, de la diversidad sexual, de las etnias originarias.

Me encuentro, en consecuencia, en una posición muy compleja, porque, en lo personal, me estoy obligando a lo más. A mí no se me está dando ninguna opción de reunir el 0,25 por ciento con tres regiones contiguas. Porque estoy sujeto a la nueva ley, a pesar de que tengo hasta el 15 de febrero próximo para la presentación del partido. No importa. Vamos a obligarnos -repito- al máximo esfuerzo.

Dudo de que quienes están votando a favor abriguen una convicción al crear estas estructuras, con los grados de exigencia que ello acarrea, porque estoy seguro de que probablemente se originará una situación compleja en cuanto a la estabilidad política en nuestro país.

Me voy a abstener, señora Presidenta, porque no quiero ser contrario a lo que algunos dicen que nuestro pronunciamiento representa, pero sí quiero dejar el testimonio de que me estoy obligando a lo que debiéramos comprometernos todos: a lograr estructuras sólidas; a proceder con responsabilidad y una mirada de Estado, y a no llevar a cabo una búsqueda individual de un aprovechamiento puntual.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor García-Huidobro.

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

Señora Presidenta, tal como se ha manifestado, en la Región de Aisén se necesitarán noventa personas para inscribir un partido político, de acuerdo con lo que se plantea. ¿Por qué? Porque los votantes fueron 35 mil 989 en la última elección de Diputados.

El señor CHAHUÁN.-

¡Y con financiamiento público!

El señor GARCÍA-HUIDOBRO.-

¡Pero se necesitan 150 personas para formar una junta de vecinos en Coihaique!

Esto realmente es una chacota. Significa reírse de los partidos políticos, como institución.

Con todo respeto por las juntas de vecinos, la verdad es que las cifras permiten comprobar que le haremos un grave daño a la democracia chilena.

Quienes voten a favor van a tener que responder el día de mañana justamente de lo expuesto por los Honorables colegas que me antecedieron en el uso de la palabra.

He dicho.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Por 22 votos contra 9 y una abstención, se aprueba la sustitución del inciso primero del artículo 3° de la ley N° 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, De Urresti, Girardi, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa los señores Allamand, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

Se abstuvo el señor Bianchi.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

En cuanto al número 1) del artículo 3° del proyecto, que pasa a ser 2), la letra a) es para sustituir, en el inciso 1° del artículo 6° de la ley N° 18.603, la cifra "0,5" por "0,25". Ello hace referencia al número de ciudadanos con derecho a sufragio que será necesario que se afilie a la colectividad política en formación, equivalente al menos a dicho porcentaje del electorado que haya sufragado en la última elección de Diputados en cada una de las regiones.

Las indicaciones 147, 148 y 149, renovadas, de los Senadores señores Coloma y Pérez Varela, Espina y Larraín, y García-Huidobro y Moreira, respectivamente, son para eliminar la letra a).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En discusión.

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, sugiero pronunciarse sobre las indicaciones en conjunto, y después, si le parece a la Sala, repetir la votación, porque la argumentación es la misma.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

A la Mesa ello le parece aceptable.

Puede intervenir el Honorable señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, son dos cosas distintas. Podemos pronunciarnos sobre las indicaciones en forma conjunta, pero que después se vote el artículo en su propio mérito.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Entonces, se abriría la votación para las primeras.

El señor COLOMA.-

Antes deseo usar de la palabra acerca de su contenido.

Nos hallamos ante un segundo despropósito, que se suma al anterior, pero diferente.

El señor WALKER (don Ignacio).-

¡Todo ha sido calificado de despropósito¿!

El señor COLOMA.-

¡Los hay grandes, chicos!

¿Todo ha sido un despropósito? ¡Me gustó ese comentario!

El señor ROSSI.-

¡Hay más matices!

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, el criterio cambia en el sentido de que ahora se trata solo de una Región -algunos Senadores hemos recorrido el país para formar un partido- y, además, el requisito baja a 0,25 por ciento del electorado, lo que ya viene a ser un récord. Va a ser más difícil formar una junta de vecinos, en muchos lugares, que un partido político. No sé si este es el modelo que la Nueva Mayoría quiere para el país en que todos convivimos y que tenemos que tratar de fortalecer.

El que se contemple una sola Región ya es muy grave, pero si también se dice: "Quiero menos exigencias, para que existan muchos más partidos", ello significa deshacer un esfuerzo que todos hemos realizado.

Un Senador independiente que me antecedió en el uso de la palabra, en la lógica de generar políticas públicas más de Estado, decidió armar un partido. Se ha demorado, porque el proceso resulta difícil, farragoso, pero es muy importante. Ello da un sentido público.

Ahora estamos expresando que bastará con el 0,25 del electorado.

Y, para la mantención, varían los requisitos, para hacerlos indestructibles, en la práctica. Me acuerdo de una larga discusión, en su momento, respecto del Partido Radical, en cuanto a permitirse la subsistencia de una colectividad política con cuatro parlamentarios. Ahora se requerirán dos.

La formación y la mantención, entonces, serían mucho menos exigentes. No sé si este es el inicio de la forma como los países se van desmoronando, al confundirse el interés de una coalición en un logro determinado y el de Chile. ¿Alguien estima que este es el interés de Chile?

¿Alguien cree que estamos haciendo un bien al bajar a 0,25 por ciento del electorado la exigencia para formar un partido y generando, como se ha explicado largamente, una laxitud en este aspecto y en la mantención que no se replica en ninguna parte?

Estas son las interrogantes que es preciso hacerse.

Y ello a mí me importa, sea la hora que sea y aunque algunos parlamentarios empiecen a mirarme no sé si con devoción, o con admiración, o con preocupación,¿

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

¡Con afecto!

El señor COLOMA.-

¿ pero me interesa exponer mi planteamiento, porque estos son los aspectos que marcan los antes y los después y que llevan a preguntarse cómo pueden cambiar tanto los países.

Mañana, cada persona con un espíritu de caudillo o molesta por una decisión cualquiera de una directiva nacional, regional o local, va a decir: "¿Sabe qué más? ¿Para qué discuto? Mejor formo un partido". Y el del lado le encontrará toda la razón y también querrá tener su colectividad política. Van a ser como amuletos que podrán conseguirse.

Entonces, esto es completamente distinto de todo lo que hemos intentado durante muchos años, de todo lo que nos ha enseñado la historia. ¡Está en los libros que ustedes mismos han nombrado! Está en la historia de los 24 años la importancia de fortalecer y no debilitar los partidos políticos. Y nadie puede señalar que aquí no se está haciendo eso, probablemente con carácter irreversible.

Por eso, voto a favor de las indicaciones.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señor Presidente, seré muy breve, porque considero que lo expresado por los Senadores que me han antecedido refleja nuestra opinión.

Solo quiero formular una interrogante hacia futuro: cuál es el límite para llegar a acuerdos o pagar los precios, que a veces se dan, para obtener la aprobación de un proyecto.

Recuerdo que me tocó participar, al igual que muchos de ustedes, en la tramitación de las "Leyes Cumplido", donde introdujimos modificaciones en materia tributaria, laboral y en una serie de otros ámbitos. También efectuamos enmiendas mediante una reforma constitucional.

Sinceramente, creo que en este caso se rompe un principio que establecimos hace mucho tiempo. Porque, de todos los acuerdos alcanzados, no recuerdo uno que se haya logrado infligiendo un grave daño al sistema democrático que señalamos querer defender.

Resulta muy difícil, a esta altura, justificar que las bancas de enfrente votan a favor de esta norma por su convicción de que fortalece el sistema democrático.

Y reitero lo que dije en el sentido de pedir que los parlamentarios de Gobierno hagan una precisión. Porque aquí se rebaja a un nivel ridículo los requisitos tanto para constituir un partido como para mantenerlo después de un resultado electoral.

¿Alguien considera razonable que en Aisén se pueda constituir un partido político con 94 firmas?

¡Es ridículo!

Por eso, solo quiero dejar testimonio de que esta decisión resulta dañina para el funcionamiento de la democracia, para el prestigio de los partidos políticos y para la seriedad requerida para su constitución.

Siempre pensé que había un límite para los acuerdos a que se puede llegar y para el precio que uno está dispuesto a pagar en una transacción a fin de obtener la votación de una, dos o tres personas.

Lo digo porque siento lástima de lo que estamos haciendo. No le encuentro ninguna justificación.

Me parece que esta norma, de verdad, nos va a causar un tremendo daño. Nos vamos a llenar de pequeños partidos políticos que no van a tener la más mínima representación real de la ciudadanía.

Eso es malo para el fortalecimiento y el funcionamiento de los actuales partidos y, como bien me señala el Senador Prokurica, para la gobernabilidad de nuestro sistema.

Por tales razones, dejo testimonio de que los Senadores de Renovación Nacional -ya lo expresó con anterioridad el colega Allamand- votaremos en contra de las normas que disminuyen los requisitos para la constitución de partidos políticos y de otras que se verán más adelante, referidas también a la rebaja de las exigencias para que aquellos sigan subsistiendo.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Bien.

Procederemos a votar las indicaciones 147, 148 y 149, que proponen suprimir la letra a) del numeral 1), que pasa a ser 2), del artículo 3° del proyecto.

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Los señores Senadores que estén de acuerdo con las indicaciones supresivas deben votar que sí; los que estén en desacuerdo con ellas deben votar que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se rechazan las indicaciones renovadas números 147, 148 y 149 (23 votos en contra y 9 a favor).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa los señores Allamand, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Por lo tanto, ahora corresponde votar la letra a) del numeral 1), que pasa a ser 2), del artículo 3°, que propone sustituir, en el inciso primero del artículo 6° de la ley N° 18.603, la cifra "0,5" por el guarismo "0,25".

Los que estén de acuerdo con el texto aprobado en general por el Senado deben votar que sí; quienes estén en desacuerdo, que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba la letra a) del numeral 1), que pasa a ser 2), del artículo 3° del proyecto (23 votos a favor y 9 en contra), dejándose constancia de que se cumple el quórum constitucional requerido.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa los señores Allamand, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

A continuación, en la letra b) del numeral 2) del artículo 3° del proyecto la Comisión propone, por unanimidad, suprimir la frase "bajo circunstancia alguna".

El señor HARBOE.-

"Si le parece".

El señor QUINTANA.-

Sí.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Es una adecuación.

--Por unanimidad, se aprueba la propuesta de la Comisión de Constitución para eliminar, en la letra b) del numeral 2) del artículo 3° del proyecto, la frase "bajo circunstancia alguna", dejándose constancia de que hay 31 señores Senadores presentes en la Sala.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Luego, el número 2), que pasó a ser 3), sin enmiendas, propone sustituir el inciso primero del artículo 7° de la ley N° 18.603, por el que se indica.

Las indicaciones números 150 (de los Senadores señores Coloma y Pérez Varela), 151 (de los Senadores señores Espina y Larraín) y 152 (de los Senadores señores García-Huidobro y Moreira) proponen suprimir este numeral.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Podríamos votar juntas las tres indicaciones, que son supresivas.

¿Habría acuerdo?

Acordado.

Señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).- 

Los que se hallen de acuerdo con las indicaciones deben votar que sí; quienes estén en desacuerdo con ellas deben votan que no.

No se requiere quórum especial.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se rechazan las indicaciones 150, 151 y 152 (23 votos en contra y 9 a favor).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa los señores Allamand, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).- Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Ahora corresponde pronunciarse sobre el número 2) aprobado en general por el Senado, el cual sustituye el inciso primero del artículo 7°.

Esta modificación requiere quórum orgánico constitucional para su aprobación.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba el número 2) del artículo 3° despachado en general por el Senado, que sustituye el inciso primero del artículo 7° de la ley N° 18.603 (23 votos a favor y 9 en contra).

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa los señores Allamand, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

A continuación, el N° 3) -que pasa a ser 4)-, no tuvo modificaciones en la Comisión.

Corresponde a las letras a) y b) aprobadas en general por el Senado -segunda columna de la página 66 del comparado-, ambas normas de quórum orgánico constitucional.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, quiero destacar que las letras modifican normas ya vigentes, pero redactadas de otra forma. Y me gustaría que se dieran cuenta de lo que estamos haciendo y consolidando.

Como ya sabemos que un partido podrá formarse, con todos sus derechos, con el 0,25 por ciento del electorado, ahora se explicita algo bien especial: que ese partido, con 94 personas, tendrá, entre otras facultades, la de designar candidato a la Presidencia de la República. O sea, las primarias pasan a ser una ilusión. Ahora directamente un partido, con 94 personas, podrá proclamar un candidato a la Presidencia.

Entonces, todo lo que suponía una dificultad, porque se trataba de hacer participativo¿

El señor CHAHUÁN.-

¡Y tendrá financiamiento público!

El señor ALLAMAND.-

¡Y franja electoral!

El señor COLOMA.-

Claro, con franja y financiamiento. Y recordemos que la franja electoral es igualitaria entre los candidatos. No tiene que ver con la votación de los partidos, como ocurre en el caso de una elección parlamentaria. O sea, tendrán franja con 94 votos. ¡Con 94 votos! Y se explicita.

Esto es casi, casi -porque esto obedece a una indicación- ofensivo respecto a lo que debe ser y a lo que hemos legislado durante muchos años.

¿Para qué -digo yo- se hacían primarias?

Ahora la redacción será distinta. Porque la facultad ya está. Y quiero explicitar lo que al final representa el conjunto de acciones que un grupo de personas de la Nueva Mayoría está proponiendo. Con esto se está consolidando -y esta indicación pasa a ser como el broche de oro; ya pasa a ser casi provocativo- que algo que ya está se plantee, adicionalmente, como una norma especial.

O sea, se explicita -porque ya es una explicitación-: "Señores, en una región, con el 0,25 por ciento" -y agregan, como con saña- "se puede hacer tales y cuales cosas. Y además, ¡ojo!, si ustedes hacen todo esto, pueden elegir candidato a Presidente. Olvídense de las primarias. ¿Para qué? ¡Ustedes ya tienen el derecho!".

Yo no sé cuánto va a valer ahora la residencia en Coihaique. No sé cuál irá a ser su valor desde un punto de vista político, qué significa ese tipo de acción.

¡Imagínese! Un grupo de personas tendrá más dificultades para crear una junta de vecinos que para nombrar candidato a la Presidencia de la República. Porque, además, se han establecido normas en otras leyes para fortalecer las candidaturas presidenciales, a través de distintas iniciativas.

Yo sé que, a estas alturas, esto resulta bien impresionante. Y, más allá de lo que uno pueda haber votado, creo que no deja de impactar lo que estamos construyendo. Ahora habrá otra salida, directa, para generar una candidatura.

Con este nuevo sistema, ¿cuántos candidatos a Presidente de la República se presentarán en la próxima elección? ¿Serán cincuenta? ¿Serán cien? No sé. Pero pido que reflexionen sobre el particular.

¿Es eso lo que deseamos construir a través de esta modificación del sistema electoral?

¿Era ese uno de los objetivos o es uno de los elementos claves en el pacto que se ha suscrito?

Honestamente, señora Presidenta, la capacidad de asombro en este proyecto de ley llega a extremos. Pero ya esto, que se ha instalado, legislado, aprobado, ratificado, pugna, rehúye a un recto entendimiento de cómo se construyen las institucionalidades políticas en los países.

Lo digo de verdad. A mi juicio, esto no tiene ninguna capacidad de defensa. Esto no vale el precio de nada, si uno realmente cree que está construyendo el bienestar de un país. Y aquello lo estamos consolidando, estampando en el artículo 26.

Alguien podrá decir: "Pero ya estaba antes". Sí, pero ahora además hay una indicación. Es como para confirmarlo, para ratificarlo, para señalar que queda oleado y sacramentado. Este es el regalo que la Nueva Mayoría le tiene a Chile.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Espina.

El señor ESPINA.-

Señora Presidenta, deseo agregar un elemento a lo recién señalado por el Senador Coloma, que en el debate en la Comisión de Constitución no tuvimos en cuenta.

Se trata del efecto en cadena que producen estos artículos. Y yo quiero destacar uno en particular, relacionado con la franja electoral.

Uno de los temas que siempre hemos estado debatiendo es la forma como los candidatos presidenciales pueden difundir sus ideas. Pero, para ser candidato presidencial, hay ciertas exigencias en cuanto a un mínimo respaldo ciudadano.

Con la norma que estamos aprobando, un partido político se podrá formar con 94 personas, o con 178, si es en Arica, o 248, si es en Atacama. Su consejo general podrá designar un candidato presidencial sin necesidad de recurrir a un plebiscito entre sus bases. Por lo tanto, podrá ser nombrado prácticamente por la directiva de ese partido, por su consejo general, con un número incluso inferior a los que he señalado. Y ese candidato presidencial podrá participar en la franja electoral con el mismo espacio de tiempo que un partido político constituido con 40 mil o 50 mil personas.

Por consiguiente, la distorsión que aquí estamos produciendo es simplemente inaceptable.

Me parece que debe haber un límite. Y les pido que reflexionen respecto a la norma que estamos aprobando, porque la estimo absolutamente injustificada, dañina. Considerando todos los partidos que se podrán constituir en regiones, implica la posibilidad de que haya 40, 50 o 60 candidatos presidenciales.

Porque en una Región de 86 mil habitantes se podrá constituir un partido político con 215 personas. O sea, podría haber hasta 20 partidos. De manera que podemos llegar a tener, en una elección presidencial, 70, 80 o 90 candidatos, quienes deberán repartirse el tiempo de la franja.

Recuerdo a una candidata al Parlamento que en una franja solo alcanzaba a decir "Aric", porque tenía doce segundos, quince segundos, medio minuto para dar a conocer sus ideas.

Entonces, esta norma es francamente un abuso respecto del sistema de partidos políticos.

Uno tiene que dejar constancia de estos hechos en la historia, para cuando estas cosas empiecen a ocurrir. Esa razón me motiva a intervenir. Porque siempre he pensado que entre todos hemos intentado cuidar el sistema político. Podemos tener diferencias, pero debemos cuidarlo. Y con esta norma lo dañamos en su ADN, en su estructura, en su formación.

Por tal motivo, vamos a votar en contra. Y esperamos que ustedes tengan en cuenta lo que hacemos en este momento, porque, cuando se produzca el daño, alguien deberá asumir la responsabilidad política de lo mal que se elabora esta norma.

Anuncio mi voto en contra.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación...

El señor LARRAÍN.-

¿Qué votamos?

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Se deben votar las letras a) y b) del número 3) del artículo 3º del proyecto. Se trata de las modificaciones que se introducen al artículo 26 de la Ley Orgánica Constitucional de los Partidos Políticos.

El señor HARBOE.-

Pido la palabra.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

La tiene, Su Señoría.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, siempre es importante tener la posibilidad de mirar lo que ocurre con esta norma y su concordancia con otras.

El objetivo inicial de esta disposición -que tuvimos en vista en la Comisión- era solo cambiar desde la necesidad de efectuar un plebiscito a entregar la facultad pertinente al consejo general del partido. Esa fue la discusión. Cuando uno lee el informe se da cuenta de que el debate de la norma fue en tal sentido.

Probablemente, las concordancias de los artículos señaladas acá (léase la posibilidad de presentar candidaturas presidenciales, léase las normas que rebajan el porcentaje para formar y mantener partidos políticos) aconsejan -sería interesante que me escucharan los Senadores de Oposición y el colega Ignacio Walker- hacer propios también algunos argumentos entregados en la Sala.

Creo bueno que en esta oportunidad seamos capaces de reflexionar y plantear la posibilidad de que rechacemos esta norma, entendiendo las implicancias que puede tener, con lo cual evitaríamos las consecuencias aquí expresadas.

El señor LARRAÍN.-

No se entendió, señora Presidenta.

El señor ALLAMAND.-

¿Cómo fue?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

El Senador señor Harboe planteó que se han recogido argumentos y que existe disponibilidad para rechazar esa norma aceptando las consecuencias que ello implica. Eso entendí claramente de lo que acaba de manifestar.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

No han prestado mucha atención.

Senador señor Harboe, si gusta, reitera su planteamiento.

O puedo suspender la sesión por un par de minutos para que se pongan de acuerdo.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra, Su Señoría.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, creo que lo manifestado por el Senador Harboe no resuelve el problema.

Si el colega Harboe prestara atención, podría entender que su inquietud no corresponde.

Señalo lo anterior porque el problema planteado no se encuentra en este artículo. Este reordena la disposición vigente. De manera que si rechazáramos esta norma quedaría la redacción actual, que es idéntica. Hay un cambio de orden, pero no de contenido.

El problema se produce porque se permite la proliferación de partidos políticos, los que contarán con estos instrumentos. Por lo tanto, el reparo no se encuentra en esta disposición, sino en el conjunto de normas que favorecerán el multipartidismo.

En consecuencia, señora Presidenta -si el Senador Harboe y quienes se interesan en este tema pudieran oír-, lo que se plantea no tiene sentido, porque al rechazarse esta norma rige el texto original, que es igual.

Por lo tanto, esto debe servir como llamado de atención al Gobierno y a los parlamentarios de la Nueva Mayoría en el sentido de que el conjunto de normas propuestas significará un debilitamiento feroz de los partidos políticos. Y se van a crear colectividades con estas atribuciones. Si se trata de las atribuciones normales con las que debe contar un partido político, las de un consejo general. Van a tener financiamiento especial, como lo dispone el proyecto de ley de financiamiento; facilidad para constituirse; posibilidad de nombrar candidatos y celebrar pactos electorales; facultad para proclamar candidatos presidenciales, acceso a la franja de televisión y a otros beneficios.

Por eso hay que tener más cuidado y respeto por la creación de partidos políticos.

En tal sentido, pienso que aquí se asume una responsabilidad gigantesca que no se advierte.

Algunos piensan que se trata de una disputa ideológica enmarcada en la misma discusión de lo que creemos debe ser el sistema electoral. ¡No! Aquí hablamos de los partidos políticos como sustento de una democracia. Lo que hace este proyecto es chacrear el sistema de partidos políticos en Chile. Y ese problema tiene un grado de responsabilidad gigantesco en el futuro de la institucionalidad. ¿Cómo va a gobernar una Administración cualquiera -la Nueva Mayoría, por ejemplo- cuando existan cincuenta o sesenta partidos? ¡Estas no son cifras menores! ¡Es lo que existe en Perú, en Bolivia, en Venezuela, en Colombia!

Entonces, si no nos damos cuenta de lo que estamos aprobando, no se extrañen de sus consecuencias. Es lo que hemos venido diciendo. Pero parece que hoy no existe diálogo, no hay acuerdo, no hay voluntad para conversar, porque ustedes están taimados, calladitos. Por lo menos eso ha sido un agrado -tengo que admitirlo-: poder argumentar y verlos sufrir y contenerse para quedarse callados. Entiendo y valoro el estoicismo con que se han mantenido durante toda una noche. Pero llega el minuto del sentido común y de la responsabilidad ante el país por lo que se está aprobando.

Tienen que hacerse cargo de tal situación.

Hay que aprobar esta norma, pues no es más que un ordenamiento. Si no hay ninguna dificultad. El problema no radica aquí. Este es un efecto. El problema es la causa que origina el mal uso de esta disposición. Por lo tanto, sería bueno que entendieran el grave daño que tendrá la creación múltiple de partidos cuando empiecen a usar estas atribuciones.

El señor LETELIER.-

"Si le parece".

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señor Presidente, deseo rectificar mi planteamiento.

Efectivamente, se me produjo una confusión.

Con la argumentación del Senador Coloma, que suponía se refería a esta norma, yo me confundí.

Justamente, lo que hace esta norma es lo que habíamos discutido originalmente en la Comisión de Constitución y en la discusión en general: simplifica el procedimiento dentro de los partidos políticos para las designaciones, pasando de plebiscito al consejo general de los partidos.

Por eso, hay que aprobar la norma.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Pizarro.

Pero vamos a abrir la votación y podrán fundamentar.

El señor PIZARRO.-

Señora Presidenta, ya lo aclaró el Senador Harboe. Mi intervención iba en la misma línea.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Muchas gracias.

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Quienes estén de acuerdo con la normativa aprobada en general por el Senado votan que sí; lo que estén en desacuerdo, que no.

La normativa requiere quórum orgánico constitucional para su aprobación; esto es, 22 votos favorables.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueban las letras a) y b) del número 3) del texto aprobado en general por el Senado (23 votos a favor y 7 en contra), dejándose constancia de que se cumple el quórum constitucional exigido.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa los señores Allamand, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Orpis y Prokurica.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

A continuación, en el número 4 (que pasa a ser 5) hay una modificación al artículo 42 relativa a la disolución de los partidos políticos, que proponen suprimir las indicaciones renovadas números 153, 154 y 155.

La N° 153 de los Senadores señores Coloma y Pérez Varela; la 154de los Honorables señores Espina y Larraín; y la 155 de los Senadores señores García Huidobro y Moreira.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¿Habría acuerdo para votarlas en conjunto, ya que las tres son supresivas?

El señor LARRAÍN.-

No.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Quienes estuvieran de acuerdo con ellas votarían que sí; los que estuvieran en desacuerdo que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Todavía no abriremos la votación, porque el Senador señor Larraín ha señalado que quiere argumentar primero.

Expresamente pregunté si había acuerdo y el manifestó que no.

En discusión las indicaciones renovadas.

Tiene la palabra el Honorable señor Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, no voy a fundamentar el voto después. Pero creo que es importante entregar una explicación, que en parte ya se ha dado.

Aquí se trata de ver con qué elementos se puede mantener un partido después de una elección.

Hoy se requiere que haya obtenido en la última elección 5 por ciento de los sufragios válidamente emitidos. Y mediante la norma propuesta se rebaja a 2,5. Es decir, se mantiene la misma lógica de reducir las exigencias para la creación de partidos políticos, ahora para su subsistencia.

Sobre eso no voy a sobreabundar en argumentación, porque ya hemos hecho suficiente ejercicio de ella.

Pero aquí hay un segundo elemento: en nuestra normativa se dispone alternativamente que, si ese partido no cumple el 5 por ciento pero sí elige a cuatro Diputados, puede subsistir. Sin embargo, estos cuatro Diputados, en un universo de 120, se reducen a dos en uno de 155.

Quería subrayar ese elemento adicional para que ustedes adviertan que nuevamente se incurre en facilismo: "No importa si pasa cualquier cosa. Ustedes van a seguir siendo un partido político. Junten tres amigos, van a formar un partido político".

Insisto: aquí hay un grado de irresponsabilidad política muy grande, y por lo menos queremos llamar la atención de quienes hoy día están resolviendo acerca de que estamos configurando un cuadro de debilitamiento total, que va a constituir en el tiempo un elemento histórico.

Esto va a significar un antes y un después en la historia política de Chile si acaso no se corta el camino que sigue este proyecto.

Si no lo quieren hacer hoy, por las consideraciones que sean, hagámoslo cuando venga la ley de partidos políticos.

De otra forma, serán gravemente responsables de la desinstitucionalización, de la ingobernabilidad del país y del crecimiento como callampas de los partidos políticos.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Pizarro.

El señor PIZARRO.-

Señora Presidenta, me encanta el alegato consistente, sistemático y bien argumentado de los colegas de la Oposición, principalmente de la UDI y de Renovación Nacional.

Pero se olvidan de algo en este debate. Estamos donde estamos por la intransigencia de estos dos partidos de llegar a un acuerdo para terminar con el sistema binominal.

--(Manifestaciones en la Sala).

Esa es la verdad, porque si aquí hubiera tanta responsabilidad en estos partidos políticos, hace muchos años que deberíamos haber cambiado este sistema electoral. Hace muchos años que deberíamos haber consagrado un financiamiento público y transparente de la política. Hace muchos años que deberíamos haber establecido partidos políticos abiertos, con vida democrática interna, con participación ciudadana y con transparencia en la toma de decisiones. Hace muchos años que deberíamos haber abierto las puertas de todos nuestros partidos.

Nosotros nos hemos esforzado por avanzar en estas materias desde hace bastante tiempo.

Me alegro de que los colegas de la UDI, sobre todo, que son un partido a la antigua usanza estalinista-leninista (debe ser el último del mundo que va quedando así),...

--(Manifestaciones en la Sala).

¿ hoy esté preocupado de fortalecer las fuerzas políticas.

Porque no quiero ni siquiera entrar, como aquí lo han hecho otros Senadores, a lo que fue la persecución sistemática de las organizaciones y los partidos políticos cuando ellos eran Gobierno. No nos vamos a acordar de ese tiempo.

Entonces, cuando se argumenta aquí hasta la majadería, con razón y con argumentos sólidos, muchos de los cuales puedo compartir, hay que asumir también con un poquito de humildad, con un sentido de autocrítica por qué llegamos a esta situación.

Pero también se debe tener un poco de confianza, porque no podemos llegar a la caricatura completa. En las regiones hay posibilidades para la expresión de movimientos cada día más crecientes, y no debemos hacernos los lesos.

Si no, veamos la realidad en el norte, donde se ha producido una proliferación de movimientos. Algunos crecen, otros subsisten. Pero, ¿en torno a qué? A caudillismos, a figuras personales que no obedecen a ninguna lógica.

Cuando se intenta crear un partido político se hace en torno a algunas ideas mínimas y a algún esfuerzo colectivo. Hoy existen normas que constituyen verdaderas camisas de fuerza para el desarrollo de esos movimientos políticos, y el sistema electoral binominal es la peor de todas las camisas de fuerza para esa expresión.

Entonces, también debemos tener conciencia de que existen momentos en la historia de la democracia en que hay que dar un poco de aire, un poco de respiro.

Tal vez esto no sea lo mejor. Yo dije en una primera intervención que es producto de un acuerdo político entre la Nueva Mayoría y dos Senadores independientes (uno de un movimiento en formación) que sí creen que esto es posible y necesario.

Ellos nos han ayudado en un paso trascendental. Más importante que lo que pueda ser el riesgo -reconozco que puede existir- de la proliferación de partidos, más importante para la historia del país y más trascendente para la democracia es terminar de una vez por todas con el binominal.

Y eso forma parte también de las razones por las cuales nosotros vamos a honrar este acuerdo.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Espina.

El señor ESPINA.-

No intervendré, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Muy bien.

Tiene la palabra el Honorable señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, esta iniciativa al final esta es la tormenta perfecta para el sistema político.

Me adelanto a señalar que esta enmienda no guarda relación con el sistema electoral. Aun cuando respeto los argumentos expuestos, legítimamente, por el Senador Pizarro, lo concreto es que este numeral nada tiene que ver con la reforma que estamos analizando.

A propósito de una modificación a la legislación electoral, se incluye una contraprestación, que es triple: primero, se podrán formar partidos políticos en una región -esto lo sabíamos y se aprobó, pese a que tratamos de impedirlo-; segundo, para su constitución se exigirá la firma de un número de ciudadanos equivalente al 0,25 por ciento de los sufragios válidamente emitidos -cosa que parece absurda-, y tercero -¡la guinda de la torta!-, en esta norma se le dice a los partidos que prácticamente no van a desaparecer, pues se baja el porcentaje para su disolución del 5 al 2,5 por ciento.

¡Se disminuye el umbral a la mitad para poder subsistir!

En el proyecto original se exigían cinco diputados; luego se planteó cuatro, y ahora se baja a dos. Es como decir: "Tratemos de hacer imposible que un partido deje de existir, más allá de si tiene arraigo popular o no".

Quiero recordarles a mis distinguidos colegas, en especial al Senador Ignacio Walker, quien es un gran conocedor de Alemania, que en este país el Partido Liberal desapareció por sacar menos del 10 por ciento de los sufragios.

Las sociedades organizadas fijan como piso un umbral de 5 por ciento, aunque algunas naciones, como Alemania, suben ese porcentaje, lo que es legítimo. Esto sucede en todas las democracias del mundo que presentan estabilidad política.

Insisto en el caso alemán porque ese punto es especialmente sensible. De hecho, se le produjo un problema al momento de formar una alianza, debido a la existencia o inexistencia de un partido sin representación.

Lo que debiera tender a buscar el esquema propuesto es un sustento mínimo. Chile ya está en el rango inferior del umbral (5 por ciento) -insto a Sus Señorías a revisar la legislación de los países más desarrollados sobre el particular-, y ahora con esta enmienda parecen decir: "¡Hundámonos más!".

¡Esta es la tormenta perfecta! ¡Este es el triple acuerdo!

Y a propósito de esta reforma electoral, se nos señaló que debimos haber corrido para evitar este desastre. ¡Pero de qué desastre hablan! ¡Por favor! Esa no es forma de argumentar; más aún, cuando ustedes lo presentaron como "el caos o yo".

En consecuencia, esta fórmula no me parece razonable.

La propuesta debe tener mérito, debe tener lógica, debe obedecer a un entendimiento global.

Señora Presidenta, la disolución de los partidos políticos no es un tema menor ni anexo después de esta larga discusión. La modificación en análisis refleja un espíritu profundamente contrario incluso a lo que ustedes mismos piensan.

A muchos de ustedes los conozco bien. Hemos participado en foros sobre el fortalecimiento de los partidos políticos, y nunca habían puesto en duda los requisitos y las exigencias para formar estas colectividades y menos las condiciones mínimas para mantenerse funcionando.

Esa ha sido nuestra tónica permanente.

Sin embargo, ahora, en virtud de este acuerdo -ya no sé qué calificativo darle, pero no es bueno-, terminamos generando un espacio complejo, que ojalá sea posible mejorar en algún momento. Pero eso forma parte de una ilusión, de una esperanza, de algo que se esfuma.

En el intertanto, funcionará un esquema exactamente inverso a todo en lo que hemos creído.

¡Este es el debilitamiento total de la institucionalidad política!

¡Este es el pluripartidismo por esencia y, además, prolongado en el tiempo, pues será casi imposible terminarlo!

Por esas razones, señora Presidenta, considero que la enmienda que nos propone la Comisión es, en formato de trilogía, especialmente inadecuado, especialmente equivocado, especialmente errado.

Por eso, obviamente, votaré a favor de las indicaciones supresivas.

Estoy seguro de que, si la conciencia de los aquí presentes importara y no el interés político personal, se registraría una votación muy significativa en contra de este numeral.

Aclaro que estoy hablando en un sentido amplio, político y no haciendo un cargo personal a nadie. Estoy refiriéndome a la conciencia política, a lo que debe ser un ilustrador, más allá de las conveniencias.

¡A menos que alguien me diga que esta proposición es profundamente positiva, buena, fantástica! Eso cambiaría las cosas. Sin embargo, no he oído a nadie expresar eso.

Esto es, más bien, una contraprestación, que no refleja una forma adecuada de legislar.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Si le parece a la Sala, se abrirá la votación.

Los señores Senadores que lo deseen pueden fundamentar su voto.

Acordado.

En votación las indicaciones renovadas 153, 154 y 155.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

El objetivo de estas es eliminar el número 4), que pasa a ser 5), del artículo 3º del proyecto.

Los señores Senadores que están de acuerdo con las indicaciones supresivas deben votar que sí y quienes las rechacen, que no.

--(Durante la votación).

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Senador Lagos, ¿usted se inscribió para hacer uso de la palabra?

El señor LAGOS.-

Señora Presidenta, solo deseo señalar que, si la Oposición hubiese participado con más ganas para modificar el binominal, tal vez muchas de las deficiencias que ahora han notado se habrían podido remediar.

El señor NAVARRO.-

¡Todo se habría evitado!

El señor LAGOS.- Si ustedes hubieran mostrado más valor y coraje, habríamos llegado a acuerdos más amplios.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Chahuán.

El señor CHAHUÁN.-

Señora Presidenta, hoy el Gobierno se perdió una oportunidad, porque el Ministro del Interior tuvo la posibilidad de acoger el planteamiento de los Senadores de Renovación Nacional y de la UDI, que se sumaban al cambio del sistema electoral, y no lo hizo.

Durante esta maratónica sesión quedó clara la voluntad que siempre animó a RN para introducir cambios al sistema. De hecho, el 2006 presentó un proyecto de ley sobre la materia.

Sin embargo, aquí primó la arrogancia: hubo un gabinete silente en este Hemiciclo.

El peor daño que se le causó a nuestra democracia fue tramitar de forma apresurada esta iniciativa, que producirá multipartidismo. Como hemos dicho, con 94 habitantes en Aisén se podrá formar un partido político, el cual, además, podrá levantar un candidato presidencial.

Creemos, sin lugar a dudas, que ha habido improvisación y esperamos que, en el trámite constitucional que resta, impere la racionalidad en el Gobierno a los efectos de corregir la acelerada tramitación legislativa de un proyecto tan importante como el que nos ocupa.

Por último, manifiesto que la DC incumplió la palabra empeñada, y eso debemos subrayarlo.

El señor WALKER (don Ignacio).-

¡No es así!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Honorable señor Hernán Larraín.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, hablaré menos de treinta segundos.

El Senador Lagos Weber sostuvo que todo esto se podría haber evitado si hubiéramos tenido la posibilidad de dialogar¿

El señor LAGOS.-

¡No hubo voluntad!

El señor LARRAÍN.-

Me remito a sus palabras exactas.

Solamente deseo precisar que desde que este proyecto llegó al Senado...

El señor LAGOS.- ¡No querían hacer cambios!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Ruego a Sus Señorías guardar silencio y permitir que el Senador señor Larraín termine de hablar. De lo contrario, no avanzaremos en el despacho del proyecto.

El señor LARRAÍN.-

Si no me hubieran interrumpido, ya habría concluido, señora Presidenta.

El Senador Lagos dijo que esto se podría haber arreglado si hubiera existido voluntad para ello. Pues bien, debo puntualizar que, cuando la iniciativa ingresó a esta Corporación -incluso antes-, manifestamos nuestra total disposición para sentarnos a conversar.

Lo hicimos una y otra vez. Y no tuvimos eco ni en el Ejecutivo ni en los Senadores de las bancadas de enfrente. Obviamente, ustedes no pudieron porque el Gobierno no quiso.

Entonces, pido que no se insista en algo que no es verdadero.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, se hicieron muchos esfuerzos por llegar a un acuerdo. Era bueno para el país que lo hubiésemos concretado.

El Gobierno realizó múltiples reuniones con todos los presidentes de los partidos políticos con representación parlamentaria. Pero en la Cámara de Diputados el Ejecutivo recibió un portazo de parte de los presidentes de la UDI y de Renovación Nacional.

Cuando este último, de buena fe, se sentó a conversar con el Gobierno, hizo una propuesta formal de aumento de Senadores y Diputados, la que fue conocida públicamente. Sin embargo, sus propios Senadores -¡sus Senadores!- le quitaron el piso, situación que él mismo se encargó de informar a través de los medios de comunicación.

Ahí hubo voluntad de alcanzar acuerdo.

Reconozco que en la segunda etapa del debate, tal como lo dije anteriormente, hubo disposición positiva de parte de los Senadores Espina y Larraín. Pero ya había un acuerdo suscrito en la Cámara de Diputados.

En esa rama del Parlamento los presidentes de los partidos de Oposición no fueron capaces de entender que los compromisos adquiridos en la campaña presidencial se iban a cumplir. No creyeron que esto se materializaría.

Es lamentable que hayamos llegado a este punto. Ello pasó porque teníamos que sacar adelante un proyecto para terminar con el sistema electoral binominal.

Aquí algunos han dicho -y con cierta razón- que la flexibilización para la conformación y mantención de partidos políticos puede generar una atomización de las actuales colectividades.

Déjeme decirle, señora Presidenta, que los mismos que lo señalan no se dan cuenta de la fragmentación que hoy enfrenta la Derecha: Evópoli, Amplitud. ¿Por qué se generan esos movimientos? Porque el actual sistema de partidos nació a fines de la década de los ochenta. O sea, la actual estructura partidaria representa al Chile de los noventa, no al Chile del 2014.

¿Y qué queremos? ¿Que sigan proliferando movimientos políticos respecto de los cuales no sabemos quién los financia, cómo operan, ni siquiera cuáles son sus planteamientos de vida en la sociedad?

Si queremos fortalecer la política, debemos robustecer y flexibilizar la posibilidad de que los ciudadanos formen partidos políticos permanentes, estables, conocidos, transparentes y con financiamiento público.

Pero no hagamos de estas normas un intento por ser más populares.

Se ha señalado: "¿Qué va a decir la ciudadanía mañana cuando se sepa esto?". Pero si los líderes políticos no estamos para hacer lo popular, sino lo correcto.

Si necesitamos hoy flexibilizar las disposiciones sobre constitución de partidos políticos con el loable objetivo de terminar con el sistema electoral binominal, que ha generado un empate artificial en esta Corporación durante 25 años, ¡tendremos que hacerlo! El bien mayor detrás de esta medida es devolver a los ciudadanos la posibilidad de elegir entre más candidatos, gracias a un sistema electoral que permita la representación de las mayorías y, también, de las minorías, ¡pero proporcionalmente!

En el nuevo sistema existirá representación proporcional a los habitantes en el caso de la Cámara de Diputados, y territorial corregida en el caso del Senado.

Eso es lo que estamos haciendo, señora Presidenta.

Podemos estar en desacuerdo en muchas normas. Pero era importante lograr un acuerdo. No tuvimos esa voluntad en la Cámara de Diputados, y eso nos tiene hoy enfrascados en una discusión de más de doce horas.

Lamento lo que se ha producido.

Reconozco una buena disposición permanente en la minoría de los parlamentarios de enfrente: los Senadores Larraín y Espina. No así en otros, que durante más de diez horas lo único que hicieron fue dilatar el trámite de este proyecto, con el objetivo de que no llegue a buen puerto.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Hago la precisión de que llevamos más de veinte horas en el debate de esta iniciativa.

Tiene la palabra el Senador señor Montes.

El señor MONTES.-

Seré muy breve, señora Presidenta.

En mi opinión, no podemos terminar esta tramitación como si hubiera ocurrido algo negativo. Después de todas estas horas, después de 25 años, ¡logramos terminar con el sistema binominal en Chile!

¡Ese es el espíritu que debe quedar! ¡Eso es lo que hemos conseguido este día! Debemos felicitarnos por ello.

Esta futura normativa es perfectible. Pero no transformemos una tremenda victoria del Gobierno de la Presidenta Bachelet, de toda la Nueva Mayoría, en una derrota. ¡Hemos logrado un avance muy significativo!

Creo que Amplitud ha cumplido un rol muy importante. Y los miembros de la Comisión de Constitución, en particular Felipe Harboe, se la han jugado. A mi juicio, todos hemos estado muy ordenados y disciplinados en este debate.

Felicito a todos los colegas por el trabajo realizado esta noche.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Navarro.

El señor NAVARRO.-

Señora Presidenta, claramente la Oposición ha hecho uso de su legítimo derecho a extender la discusión y a plantear sus puntos de vista. En algunos podemos coincidir, en otros no.

Cabe resaltarlo: " Fair play en la próxima elección".

Sin el tremendo subsidio del sistema binominal, la democracia se va a ejercer de modo amplio. Cada candidato podrá competir con sus capacidades y ¡sin recursos secretos de las empresas privadas!

Con quienes han planteado que es posible coincidir en algunos aspectos nos veremos cuando se revise la Ley de Partidos Políticos. Ahí mejoraremos el sistema; cumpliremos con nuestro compromiso, con nuestra palabra, con el acuerdo político con el Gobierno, y habremos terminado, después de 25 años, con este nefasto sistema binominal.

Si hubiera existido voluntad, toda esta gran discusión sobre los umbrales para la formación de los partidos políticos se habría simplificado. Pero faltó esa disposición, en particular de la UDI, que actuó como en la fábula de la rana y el escorpión. ¡Es ineluctable! ¡Van a picar aun sabiendo que se hundirán!

En definitiva, no existió voluntad para responder.

Esperaban una actitud diferente frente al término de este sistema. En conjunto pudimos haber evitado el debate complejo que se dará en torno a los partidos políticos.

Siento que en este ámbito hay una traba de enganche con el pasado, un cordón umbilical, una cadena, un lazo, que alguna vez deberá romperse.

Tal vez sean los porfiados hechos y no la racionalidad lógica los que hagan que la UDI racionalice la certeza de que algunas cosas terminan en la vida, afortunadamente.

Lo que ha ocurrido hoy es el fin del sistema binominal, que ha sido el cáncer de la política. Porque, en verdad, el adversario no era el que estaba al frente, sino el que se hallaba a mi lado, situación que pervirtió las relaciones al interior de los partidos.

Pero eso se terminó hoy día.

¡Patagonia sin represas!

¡Nueva constitución, ahora!

¡No más AFP!

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el Honorable señor Espina.

El señor ESPINA.-

Seré muy breve, señor Presidente.

No iba a intervenir, pero cambié de opinión luego de escuchar al Senador Montes y a quien me antecedió en el uso de la palabra.

La verdad es que tienen razón: se terminó el sistema binominal, ¡pero con un pésimo proyecto!

Es cosa de mirarles las caras. Se los digo con toda franqueza. En estas últimas dos horas lo único que han hecho es dar explicaciones acerca de cómo se aprobó una mala iniciativa.

Se puso fin al binominal y se aumentó en 35 el número de Diputados, quedando el total en 155, sin que nadie en esta Sala haya explicado por qué se adoptó tal medida. Ninguna autoridad de Gobierno lo hizo. Se entiende que el propósito era lograr que los partidos de la coalición gobernante contaran con un traje a la medida. No se pensó en el interés de la ciudadanía, de la opinión pública, ni en construir un sistema proporcional razonable.

Y no solo eso. Nunca se dio la oportunidad en este Senado -¡nunca se dio esa oportunidad!- de discutir respecto de las mayorías en la Cámara Baja. Y así lo han reconocido.

Entonces, sinceramente, me pregunto: ¿cómo pueden sostener que la Oposición es la responsable de ese problema si ustedes nunca estuvieron abiertos a conversar? ¡Era intocable la propuesta de incorporar 35 Diputados adicionales!

Y nosotros presentamos nuestra fórmula. No es verdad que no la teníamos. De hecho, era más razonable y proporcional que la que se aprobó, y no planteaba un aumento de Diputados absolutamente injustificado.

Segundo, simplemente borraron de un plumazo lo que, según recuerdo, fue celebrado con bombos y platillos, que era la ley de primarias, reduciendo ese mecanismo solo al 40 por ciento de los candidatos. De aquí en adelante, el 60 por ciento va a ser nombrado cupularmente.

Y, finalmente, como la gota que rebalsa el vaso, todos han coincidido en que se pagó un precio consistente en disminuir los requisitos de constitución de partidos políticos, dejándolos en un absurdo tal que algunos de ustedes ya han dicho que van a presentar una moción para corregir lo que acabamos de aprobar.

Este es el único caso, desde el año 90, en que antes de que se despache un proyecto ya se está pensando en presentar otro para modificarlo.

Entonces, señor Presidente, siento que de verdad hoy día han utilizado mal su mayoría. Las mayorías se pueden usar bien o mal. Se usan bien, por ejemplo, si, con el propósito de cambiar un sistema electoral como el nuestro, se construye un buen sistema proporcional. Y, en este caso, por las razones que he dicho, a mi juicio se han utilizado mal. Para advertir eso basta mirar cómo reciben ustedes las normas que acaban de aprobar.

Es lamentable, pero ustedes deberán asumir la responsabilidad de haber dañado en todos estos aspectos nuestro sistema democrático.

El señor LETELIER.-

¡Chao, binominal!

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Terminada la votación.

--Se rechazan las indicaciones renovadas números 153, 154 y 155 (23 votos contra 9).

Votaron por la negativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, De Urresti, Girardi, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la afirmativa los señores Allamand, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

El señor TUMA (Vicepresidente).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Señores Senadores, corresponde votar el texto aprobado en general por el Senado: las letras a) y b) del número 4), que se encuentran entre las páginas 68 y 71 del texto comparado.

Estas normas requieren, para ser aprobadas, 22 votos afirmativos.

Quienes estén de acuerdo, deben votar que sí; quienes no lo estén, votarán que no.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueban las letras a) y b) del número 4) aprobado en general por el Senado (22 votos contra 8), dejándose constancia de que se cumple con el quórum constitucional exigido.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, De Urresti, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa los señores Allamand, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Señores Senadores, en seguida la Comisión propone intercalar un artículo 4° nuevo, que modifica la ley sobre elecciones primarias. La norma se encuentra en las páginas 71 a 75, esta última en su primera parte.

Se votan los números 1), 2) y 3). El número 4) hay que votarlo aparte, porque se aprobó solo por mayoría de votos en la Comisión.

Esta votación es de quórum de ley orgánica constitucional.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En votación.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueban los números 1), 2) y 3) del artículo 4°, nuevo, propuesto por la Comisión (25 votos contra 2), dejándose constancia de que se cumple con el quórum constitucional exigido.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Allamand, Araya, De Urresti, Espina, García-Huidobro, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa los señores Coloma y Orpis.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

A continuación, señores Senadores, corresponde pronunciarse sobre el número 4) de este artículo 4°, nuevo. Dicha norma agrega un artículo 3° transitorio cuyo texto figura en la página 75. En la Comisión se aprobó por mayoría: votaron a favor los Senadores señores Araya, De Urresti y Harboe, y, en contra, los Senadores señores Espina y Larraín.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Coloma.

El señor COLOMA.-

Señora Presidenta, este es un artículo clave respecto de algo que debatimos.

Aquí se estableció un sistema de cuotas, sistema que, al final, altera por completo el mecanismo de las primarias.

El señor LETELIER.-

¿Está en contra de las mujeres, señor Senador?

El señor COLOMA.-

Aquí es donde se produce el cóctel fatal, donde lo que uno busca por un lado¿

El señor LAGOS.-

¡Antes fue la "tormenta perfecta" y ahora es el "cóctel fatal"¿!

El señor COLOMA.-

No, la tormenta perfecta era la otra.

Si usted me sigue provocando, Senador Lagos, voy a continuar hablando.

Esto es distinto, pues no tiene que ver con los cambios al sistema de partidos, sino con la implementación del sistema de cuotas que altera por completo el tema de las primarias. Y eso se traduce en este artículo transitorio, que es el que valida -por así decirlo- la incongruencia absoluta que existe -cualquiera podrá entenderlo- entre pedir un sistema de primarias y, adicionalmente, establecer un sistema de cuotas.

El punto ya se debatió, pero esta es la votación que importa. Porque acuérdense de que la otra vez el Senador Harboe hizo referencia al artículo 3° transitorio. Este es el que interesa, el que genera la alteración y, claramente, hago reserva expresa de constitucionalidad a su respecto, porque vulnera el artículo 19, número 15°, que establece el derecho de los partidos a ir a primarias. Uno lo podrá usar o no pero con esto ustedes están limitando el uso de las primarias a un 40 por ciento de los votos. Ni siquiera sabemos cuál es el mecanismo para determinar cuándo ocurre y cuándo no, y tampoco conocemos bien la actitud esperable de una candidata que quiera recurrir a este expediente.

Esto es lo que al final produce el error, la inconstitucionalidad y el deterioro definitivo de los sistemas que se plantearon hace dos años para fortalecer la política.

Hace dos años, aquí se aprobó con entusiasmo el tema de las primarias, y se levantaron las manos para celebrarlo (yo no lo hice). Y resulta que hoy día se levantan las manos de nuevo por el término o la limitación de aquellas.

Yo no sé quién podrá entender una forma de legislar y de concebir las acciones públicas como esta.

Por eso, voto en contra.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Harboe.

El señor HARBOE.-

Señora Presidenta, solo quiero destacar la capacidad histriónica del Senador Juan Antonio Coloma y los vaticinios que hace respecto de todo este "cóctel fatal", como él lo denomina, o de esta "tormenta perfecta".

El señor COLOMA.-

¡Caló!

El señor HARBOE.-

Yo no lo interrumpí, señor Senador.

Pues bien, todo esto nos va a permitir tener un sistema electoral más democrático, más inclusivo.

Y en este caso particular la verdad es que estamos muy orgullosos, muy contentos, porque, de aprobarse esta norma, vamos a conseguir, de una vez por todas, que el género que hoy día representa la mayoría de nuestro país, las mujeres, tenga una ley de cuotas, una acción afirmativa que les permita a ellas alcanzar una representación en el Parlamento que aporte a la diversidad requerida.

Lo que hace el artículo 3° transitorio es establecer que en las elecciones de 2017, 2021, 2025 y 2029, si los partidos políticos quieren realizar primarias, podrán hacerlo máximo en un 40 por ciento del total de candidaturas, a efectos de evitar la afectación de la participación femenina.

Acá queremos consagrar la obligación de cada partido político o pacto electoral de llevar, a lo menos, el 40 por ciento de mujeres en las elecciones parlamentarias, lo que representa un avance enorme en el desarrollo de nuestra democracia. Y no me cabe ninguna duda de que eso va a significar un gran aporte para el Congreso Nacional.

Señora Presidenta, estoy tremendamente orgulloso, tremendamente feliz,¿

El señor MONTES.-

¡Aunque llore Coloma!

El señor HARBOE.-

¿porque es un momento histórico en que terminamos el binominal y les entregamos a las mujeres las herramientas prácticas para aumentar su representación en el Parlamento a partir de la próxima elección.

He dicho.

El señor LAGOS.-

¡Pedimos la clausura del debate!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Se abre la votación.

El señor ESPINA.-

¿Estamos votando el artículo?

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Se vota el número 4) del artículo 4°, nuevo. Ya se aprobaron los números 1) a 3).

Los señores Senadores que estén de acuerdo con el número 4) votan que sí; quienes estén en desacuerdo votan que no.

La norma es de rango orgánico constitucional.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba el número 4) del artículo 4°, nuevo (22 votos contra 8 y una abstención), dejándose constancia de que se reunió el quórum constitucional exigido.

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic, Muñoz y Lily Pérez y los señores Araya, De Urresti, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Matta, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa los señores Allamand, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín y Orpis.

No votó, por estar pareado, el señor Prokurica.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Señores Senadores, en la última página del boletín comparado figura el artículo 4°, que pasa a ser 5°, relativo al financiamiento del proyecto. Esta disposición no fue objeto de indicaciones ni de modificaciones en la Comisión, por lo que corresponde darla por aprobada.

El señor COLOMA.-

¡Pedimos votación separada de todo el articulado, Presidenta!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

A ver. Tiene la palabra el señor Secretario.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

Debo aclarar lo siguiente: aquellas normas que no son objeto de indicaciones ni de modificaciones, de acuerdo al artículo 124 del Reglamento, deben darse por aprobadas, salvo que alguna señora Senadora o algún señor Senador, con el acuerdo unánime de los presentes, solicite su discusión y votación.

Esa es la normativa.

El señor MONTES.-

¡No hay debate!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor García.

El señor GARCÍA.-

Señora Presidenta, nosotros no solo votamos en contra de esta norma en la Comisión de Hacienda, sino que además hicimos reserva de constitucionalidad a su respecto. Por lo tanto, como tuvo votación dividida en esa instancia, a mi juicio corresponde que la Sala la vote.

Desde luego, nosotros haremos reserva de constitucionalidad.

No sé si usted me permite fundar nuestra posición, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Por supuesto.

El señor GARCÍA.-

En primer lugar, debo decir que en lo sustancial este proyecto tiene dos informes financieros.

Uno, de fecha 23 de abril de 2014, señala:

"II. Efecto del Proyecto sobre los Gastos Fiscales

"El presente proyecto de ley no irrogará un mayor gasto fiscal", etcétera.

Curiosamente, con fecha 5 de agosto de 2014, el Ministerio de Hacienda y la Dirección de Presupuestos cambian brutalmente de opinión, y dicen: "El siguiente cuadro muestra los desembolsos incrementales por concepto de Dietas, que se generan en los años respectivos".

Voy a citar solo el año 2018: se contempla, en el caso de los Senadores, un aumento fiscal de 430 millones de pesos, y, en el de los Diputados, uno de 3 mil 11 millones de pesos.

Pero luego se agrega: "En virtud del acuerdo político, de no incurrir en un mayor gasto fiscal por estos conceptos, será necesario efectuar los ajustes para adecuar los presupuestos de ambas corporaciones a los nuevos requerimientos, en consonancia con lo previsto en el artículo 68 de la Ley N° 19.918 Orgánica Constitucional del Congreso Nacional. Consecuentemente, será necesario que el Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias incorpore a contar del año 2018 estas adecuaciones en sus futuras Resoluciones.".

En definitiva, aquí se está señalando que esto se va a pagar con cargo a las asignaciones parlamentarias.

Entonces, al darnos cuenta de que el monto de las asignaciones parlamentarias no alcanza para cubrir las mayores dietas y los gastos operacionales que tengan los nuevos Diputados, los nuevos Senadores, nos veremos obligados a incurrir en un mayor gasto fiscal, lo que no se está reconociendo hoy únicamente por razones políticas.

Y ahí mismo tendremos un nuevo problema que enfrentar como Congreso Nacional: el desprestigio de los parlamentarios. Porque finalmente la ciudadanía piensa que somos nosotros los que nos aumentamos nuestras dietas y asignaciones.

Yo creo que aquí hay un problema serio de responsabilidad. El Congreso necesita reivindicarse ante la ciudadanía. Tenemos que ganarnos la confianza de ella, y con este tipo de dificultades no lo vamos a conseguir.

Señora Presidenta, termino recordando¿

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Escuchemos, por favor.

El señor GARCÍA.-

¿que el artículo 17 de la Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional a nosotros nos obliga a señalar, como Comisión de Hacienda, "la fuente de los recursos reales y efectivos con que se propone atender el gasto que signifique el respectivo proyecto".

¿Cómo podemos señalar una fuente si aquí se está diciendo que no habrá un mayor gasto fiscal a pesar de que a todas luces sí lo va a haber?

Como se advierte, no estamos dando cumplimiento a un mandato que nos entrega la Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional.

Por eso, voto en contra, señora Presidenta.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Tiene la palabra el Senador señor Zaldívar.

El señor ZALDÍVAR (don Andrés).-

Señora Presidenta, voy a referirme a los planteamientos que ha hecho el Senador García.

En lo personal, creo que él no tiene razón, porque el proyecto establece cómo debe ser el financiamiento. Y vamos a tener que cumplirlo.

¿Qué dice el artículo 5°? Que "Esta ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la partida 02, Congreso Nacional, de la ley de Presupuestos para el Sector Público.".

Eso significa que vamos a tomar todos los recursos que sean necesarios de las asignaciones, porque no podremos tocar las remuneraciones de los Senadores, ya que ellas están establecidas por norma constitucional. Tendremos, pues, que reducir todo lo que sea recursos ordinarios o asignaciones. Esa es nuestra realidad.

Ahora, sinceramente, creo que para el funcionamiento de la democracia hay que hacer inversión. Y, por supuesto, si a mí me hubieran preguntado, habría sido más claro y habría dicho en el Senado cuántos recursos se necesitaban para financiar esta reforma.

Ahora, no siendo así, deberemos someternos a lo que nos señale la ley.

Por lo tanto, no infringimos ninguna norma constitucional, pues estamos diciendo cómo se financia la ley en proyecto. Y, además, la iniciativa del Ejecutivo en la materia ya está dada.

Entonces, aquí no hay inconstitucionalidad ni falta de financiamiento.

Por otra parte, señora Presidenta, voy a hacer una aproximación.

Recuerdo que cuando con el entonces Senador Piñera éramos miembros de la Comisión de Hacienda se planteó la posibilidad de trasladar el Congreso a Santiago; se hizo un estudio y se elaboró un informe donde se establecía que si nos íbamos a la Capital se ahorraba 20 por ciento del gasto.

Si queremos llegar a una solución de ese tipo, podemos analizarla. Pero, por el momento, aquí ya se dispone cómo se financia la ley en proyecto.

No hay inconstitucionalidad alguna; la misma iniciativa prevé la fuente de financiamiento. Y debemos tomar las decisiones del caso.

He dicho.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Voy a dar la palabra, aunque, en estricto sentido, ni siquiera deberíamos votar esta norma.

En efecto, el artículo 124 del Reglamento dice exactamente que deben darse "por aprobados todos los artículos o títulos que no hayan sido objeto de indicaciones en la discusión general o de modificaciones en el segundo informe." Y agrega: "No obstante, a petición de un Senador y por la unanimidad de los Senadores presentes, podrá acordarse someter a discusión y votación uno de los artículos o títulos.".

El señor COLOMA.- Nosotros votamos en contra.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

En consecuencia, no es necesario votar. Y si se requiere la unanimidad de la Sala al efecto que indiqué, no veo voluntad para darla.

El señor COLOMA.-

Yo voté en contra.

El señor LARRAÍN.-

Y yo pedí la palabra.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Como dije, no obstante lo que explicité, voy a dar la palabra: primero al Senador Larraín y luego al Senador Coloma.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, yo fui el primero en pedir la palabra, pues me parece que esta materia no es menor -ya lo planteó debidamente el Senador García- y, por tanto, no podemos eludirla.

El proyecto original del Gobierno no contenía financiamiento alguno, porque se estimaba que la iniciativa se solventaba con los ingresos del Congreso. Y eso, al parecer, ¡era un sueño angelical...!

Tanto es así que el propio Ejecutivo llegó a la conclusión de que debía incorporar recursos. Finalmente, el 4 de agosto del 2014 envió un oficio con un informe financiero que respaldaba el suplemento de fondos. Pero ello, únicamente para financiar los gastos derivados de las dietas de los nuevos parlamentarios.

Es de toda lógica y de sentido común que la incorporación de 35 Diputados y 12 Senadores inevitablemente significa un gasto mayor no solo en las dietas, sino también en las asignaciones parlamentarias.

Pensemos incluso que hoy el Senado acordó aumentar dichas asignaciones; ello, porque consideró que necesitaba hacerlo. Y si ahora cree que no es menester, significa que ha engañado al país cuando primero pide más recursos y luego dice que¿

El señor ROSSI.-

¡Eso no es de Reglamento, señora Presidenta!

El señor QUINTANA.-

¡Que se vote!

El señor LARRAÍN.-

¡Por favor! ¡Más respeto, señores!

El señor LAGOS.- ¡Cuando se trató lo de los designados...

El señor LARRAÍN.-

¡Ustedes no respetan a los demás cuando hablan!

El señor LAGOS.-... nadie reclamó!

El señor LARRAÍN.-

¡Es la arrogancia de la Nueva Mayoría!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¡Por favor, Sus Señorías, permitan que el Senador señor Larraín termine!

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, quiero decir¿

¡Así no puedo hablar!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¡Por favor!

El señor ROSSI.-

¡Es que el Senador Larraín está fuera de Reglamento!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

¡Por favor!

Quedan dos minutos.

El señor LARRAÍN.-

Señora Presidenta, quiero decir que si no hubiesen sido necesarias las asignaciones parlamentarias no se habrían pedido y que si se solicitaron fue porque se estimó que eran indispensables.

Sin embargo, ahora se sostiene que no.

Aumenta el número de integrantes del Congreso en 30 por ciento -en 29,7, para ser exacto- ¿y me van a decir que funcionará con las mismas asignaciones actuales...?

¡Eso reflejaría un mal uso de los actuales recursos!

Pero como yo no creo que haya un mal uso de los recursos de hoy, debo puntualizar que lo que se está afirmando ahora es falso.

Adicionalmente, señora Presidenta, no se trata solo de un problema de las asignaciones parlamentarias: es inevitable que el funcionamiento del Congreso, tanto de la Cámara cuanto del Senado, supondrá un gasto superior, por la mayor cantidad de parlamentarios que va a haber.

El Parlamento va a tener un mayor¿

Le ruego, señora Presidenta, que mantenga el orden en la Sala, porque es difícil exponer en estas condiciones.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Estoy intentándolo desde hace rato, Su Señoría.

Por favor, continúe.

El señor LARRAÍN.-

En consecuencia, no cabe duda de que el suplemento fiscal hecho por el Gobierno no cubre el aumento real del gasto que va a suponer la elevación del número de parlamentarios en 30 por ciento.

Siempre dijimos que este incremento era excesivo, entre otras cosas porque no se justificaba. Tampoco se justificaban, por lo tanto, los mayores gastos, pues los chilenos precisan los recursos para satisfacer otras necesidades.

Señora Presidenta, la Constitución dice en el artículo 67, inciso cuarto: "No podrá el Congreso aprobar ningún nuevo gasto con cargo a los fondos de la Nación sin que se indiquen, al mismo tiempo, las fuentes de recursos necesarios para atender dicho gasto.".

La referencia que se ha hecho, fundada en el informe financiero, acredita que no hay suficientes ingresos para cubrir los mayores gastos que va a tener el Congreso producto del aumento excesivo en la cantidad de parlamentarios.

Por tales consideraciones, reitero nuestra reserva de constitucionalidad, pues aquí, muy irresponsablemente, sin respaldo financiero se está elevando en forma excesiva e innecesaria la cantidad de parlamentarios.

Insisto: si se considera que esto se puede financiar con los mismos recursos actuales, quiere decir que hoy se están malgastando las platas.

Por eso, mantenemos la reserva de constitucionalidad.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Señores Senadores, para no terminar mal en eta materia, vamos a proceder a la votación.

El señor WALKER (don Patricio).-

¡No hay que votar!

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Hubo un voto en contra. Por lo tanto, no existe unanimidad. Así que vamos a votar.

El señor LABBÉ (Secretario General).-

La señora Presidenta pone en votación el artículo 4° del proyecto, que pasa a ser 5°.

Esta norma es de quórum simple.

Quienes están de acuerdo con esa disposición votan que sí; aquellos que la rechazan, que no.

El señor LAGOS.-

¿Cómo se vota?

El señor COLOMA.-

¡Como su conciencia lo diga¿!

El señor LABBÉ (Secretario General).-

¿Alguna señora Senadora o algún señor Senador no ha emitido su voto?

La señora ALLENDE (Presidenta).-

Terminada la votación.

--Se aprueba el artículo 4°, que pasa a ser 5° (20 votos contra 9).

Votaron por la afirmativa las señoras Allende, Goic y Muñoz y los señores Araya, De Urresti, Guillier, Harboe, Horvath, Lagos, Letelier, Montes, Navarro, Pizarro, Quintana, Quinteros, Rossi, Tuma, Ignacio Walker, Patricio Walker y Andrés Zaldívar.

Votaron por la negativa los señores Allamand, Chahuán, Coloma, Espina, García, García-Huidobro, Hernán Larraín, Orpis y Prokurica.

La señora ALLENDE (Presidenta).-

De esta forma, queda despachado el proyecto.

Me pidió la palabra el señor Ministro.

El señor NAVARRO.-

¡Para que lo escuchen!

El señor ALLAMAND.-

¡Ahora se digna a hablar...!

El señor PEÑAILILLO (Ministro del Interior y Seguridad Pública).-

Señora Presidenta, yo tenía 16 años -corría 1990- cuando en una ciudad del sur de Chile escuché por primera vez a algunos parlamentarios -están en esta Sala- decir que querían terminar con el sistema binominal.

Veinticinco años después, no solo he sido protagonista de lo sucedido esta noche, sino además testigo, en mi calidad de Ministro del Interior. Y me siento orgulloso de ser parte del Gobierno y de la coalición que lo sustenta, cuyos Senadores se han sumado al momento histórico que significa el cambio relevante que nuestra democracia va a tener a partir de hoy.

Quiero no solo agradecer el esfuerzo de la Senadora Lily Pérez, del Senador Horvath, de los 21 Senadores de la Nueva Mayoría y, en algunas votaciones, del Senador Bianchi, sino también hacer un reconocimiento especial al Presidente Aylwin, al Presidente Frei, al Presidente Lagos y al Ministro Edgardo Boeninger, quien luchó hasta el último día de su vida por terminar con este sistema electoral perverso.

Por lo tanto, no solo en mi calidad de Ministro del Gobierno de la Presidenta Bachelet sino también como chileno, como ciudadano, me siento orgulloso de haber sido parte el día de hoy de una jornada histórica, en la cual va a quedar grabado que se inicia un nuevo proceso en la democracia chilena.

Muchas gracias.

--(Aplausos en la Sala).

2.9. Oficio de Cámara Revisora a Cámara de Origen

Oficio Aprobación con Modificaciones . Fecha 14 de enero, 2015. Oficio en Sesión 114. Legislatura 362.

Valparaíso, 14 de enero de 2015.

Nº 12/SEC/15

A S.E. EL PRESIDENTE DE LA HONORABLE CÁMARA DE DIPUTADOS

Tengo a honra comunicar a Vuestra Excelencia que el Senado ha dado su aprobación al proyecto de ley, de esa Honorable Cámara, que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional, correspondiente al Boletín Nº 9.326-07, con las siguientes enmiendas:

ARTÍCULO 1°

Número 1)

Letra b)

Ha intercalado, en el inciso quinto que propone, a continuación de la expresión “respectivo.”, la siguiente oración: “Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas.”.

Número 3)

Lo ha suprimido.

Número 4)

Ha pasado a ser número 3), sustituyéndose en el inciso tercero del artículo 17 que contiene, la frase “reclamar de la resolución del Consejo del Servicio Electoral, éste”, por “presentar la corrección, el Consejo del Servicio Electoral”.

o o o

Ha contemplado como número 4), nuevo, el siguiente:

“4) Agrégase, en el artículo 23, el siguiente inciso tercero, nuevo, pasando los actuales incisos tercero y cuarto a ser cuarto y quinto, respectivamente:

“En el caso de un pacto electoral, el orden de precedencia de los partidos dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito será el señalado por el pacto electoral en la declaración de candidaturas y, a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.”.

o o o

Número 5)

Lo ha eliminado.

Número 6)

Ha pasado a ser número 5), reemplazándose sus letras a) y b) por las siguientes:

“a) Sustitúyese el inciso cuarto por el que sigue:

“El orden de precedencia de los candidatos de un partido y sus independientes asociados dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito será el señalado por el partido en la declaración de candidaturas y, a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.

b) Reemplázase, en el inciso final, la expresión “a fin de que” por “destinada a que”.”.

Números 7), 8), 9) y 10)

Los ha suprimido.

Números 11) y 12)

Han pasado a ser números 6) y 7), respectivamente, sin enmiendas.

Número 13)

Ha pasado a ser número 8), agregándose en el artículo 179 que propone, el siguiente inciso final, nuevo:

“El número de diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis.”.

Número 14)

Ha pasado a ser número 9), modificándose el artículo 179 bis que contiene, del modo que sigue:

Inciso primero

Ha sustituido, en su letra b), el guarismo “9” por “8”.

Inciso final

Ha suprimido la siguiente oración: “En caso de producirse algún cambio en la distribución de diputados, el texto del artículo 179 de esta ley se entenderá modificado en lo pertinente, de pleno derecho y se aplicará en su forma así corregida en la elección inmediatamente siguiente.”.

Número 15)

Ha pasado a ser número 10), modificándose el inciso tercero del artículo 180 que propone, en los siguientes términos:

- Ha reemplazado, en el apartado referido a la 3a circunscripción, el número “2” por “3”.

- Ha sustituido, en el apartado relativo a la 7a circunscripción, el número “7” por “5”.

- Ha reemplazado, en el apartado correspondiente a la 12a circunscripción, el número “2” por “3”.

Números 16), 17), 18) y 19)

Han pasado a ser números 11), 12), 13) y 14), respectivamente, sin modificaciones.

ARTÍCULO 2°

Números 1), 2), 3), 4) y 5)

Los ha eliminado.

Números 6), 7) y 8)

Han pasado a ser números 1), 2) y 3), respectivamente, sin enmiendas.

ARTÍCULO 3°

o o o

Ha incorporado el siguiente número 1), nuevo:

“1) Sustitúyese el inciso primero del artículo 3°, por el siguiente:

“Artículo 3°.- Los partidos políticos existirán como tales cuando se hubieren constituido legalmente en al menos una de las regiones en que se divide políticamente el país.”.”.

o o o

Número 1)

Ha pasado a ser número 2), suprimiéndose en el texto propuesto por su letra b) la frase “bajo circunstancia alguna”.

Números 2), 3) y 4)

Han pasado a ser números 3), 4) y 5), respectivamente, sin modificaciones.

o o o

Ha consultado, como artículo 4°, nuevo, el que sigue:

“Artículo 4°.- Modifícase la ley N° 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, en los siguientes términos:

1) Sustitúyese el inciso segundo del artículo 7°, por el siguiente:

“En la elección primaria para la nominación de candidatos a los cargos de Parlamentarios, para cada territorio electoral, los partidos políticos podrán participar:

a) En forma individual, sin haber suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos.

b) En forma individual, habiendo suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos dentro del pacto.

c) En conjunto con otros partidos con los cuales ha suscrito un pacto electoral, y con el objeto de determinar la totalidad de los candidatos de dicho pacto.”.

2) Introdúcense las siguientes modificaciones en el artículo 30:

a) Reemplázase su inciso segundo por el que sigue:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen de la forma señalada en las letras a) o b) del inciso segundo del artículo 7°, serán nominados como candidatos para la elección definitiva en cada territorio electoral, las mayores votaciones individuales hasta completar el número de cargos definido en la declaración de candidaturas conforme al inciso primero del artículo 16.”.

b) Incorpórase el siguiente inciso final:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen en pacto electoral de la forma señalada en la letra c) del inciso segundo del artículo 7°, los candidatos nominados para la elección definitiva en cada territorio electoral serán determinados conforme al procedimiento señalado en el artículo 109 bis de la ley N° 18.700, considerando para estos efectos que constituyen una lista los candidatos de un mismo partido y sus candidaturas independientes asociadas.”.

3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero transitorio.- El partido político que decidiere someterse al sistema de elecciones primarias contemplado en los artículos 3º y siguientes de la presente ley para los períodos electorales parlamentarios de los años 2017, 2021, 2025 y 2029 sólo podrá someter a dicho procedimiento hasta un cuarenta por ciento del total de candidaturas a diputado o senador que pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral.”.”.

o o o

ARTÍCULO 4°

Ha pasado a ser artículo 5°, sin enmiendas.

- - -

Hago presente a Vuestra Excelencia que este proyecto de ley fue aprobado, en general, con el voto favorable de 28 Senadores, de un total de 38 en ejercicio.

En particular, el articulado del proyecto despachado por el Senado fue aprobado como se indica a continuación:

- El artículo 1°, número 1), letra a), por 32 votos a favor.

- El artículo 1°, número 1), letras c) y d), por 28 votos favorables.

- El artículo 1°, número 2), por 23 votos afirmativos.

- El artículo 1°, número 3), en lo referente al encabezamiento y la letra a) del inciso primero del artículo 17 que este numeral contiene, por 29 votos a favor.

- El artículo 1°, número 3), en lo relativo a la letra b) del inciso primero del artículo 17 que este numeral propone, por 24 votos favorables.

- El artículo 1°, número 3), en lo que respecta a los incisos segundo y tercero del artículo 17 que este numeral contiene, por 33 votos afirmativos.

- El artículo 1°, números 6), 7), 8) y 9) por 24 votos a favor.

- El artículo 1°, números 10) y 11), por 23 votos favorables.

- El artículo 1°, número 13), por 31 votos a favor.

- El artículo 1°, número 14), por 27 votos favorables.

En todos los casos mencionados, respecto de un total de 38 Senadores en ejercicio, dándose cumplimiento de esta forma a lo preceptuado en el inciso segundo de la disposición decimotercera transitoria de la Constitución Política de la República.

Por su parte, las siguientes normas del texto despachado por el Senado fueron aprobadas como se señala:

- El artículo 1º, número 1), letra b), por 23 votos a favor.

- El artículo 1º, número 4), por 35 votos favorables.

- El artículo 1º, número 5), letra a), por 34 votos afirmativos.

- El artículo 1º, número 5), letra b), por 24 votos a favor.

- El artículo 1º, número 12), por 24 votos favorables.

- El artículo 2º, por 33 votos afirmativos.

- El artículo 3°, número 1), por 22 votos a favor.

- El artículo 3°, número 2), letra a), por 23 votos favorables.

- El artículo 3°, número 2), letra b), por 31 votos afirmativos.

- El artículo 3°, números 3) y 4), por 23 votos a favor.

- El artículo 3°, número 5), por 22 votos favorables.

- El artículo 4º, números 1) y 2), por 25 votos afirmativos.

- El artículo 4º, número 3), por 22 votos a favor.

En todos los casos señalados, respecto de un total de 38 Senadores en ejercicio, dándose así cumplimiento a lo dispuesto en el inciso segundo del artículo 66 de la Carta Fundamental.

- - -

Lo que comunico a Vuestra Excelencia en respuesta a su oficio Nº 11.421, de 13 de agosto de 2014.

Acompaño la totalidad de los antecedentes.

Dios guarde a Vuestra Excelencia.

ISABEL ALLENDE BUSSI

Presidenta del Senado

MARIO LABBÉ ARANEDA

Secretario General del Senado

3. Tercer Trámite Constitucional: Cámara de Diputados

3.1. Discusión en Sala

Fecha 20 de enero, 2015. Diario de Sesión en Sesión 116. Legislatura 362. Discusión única. Se aprueban modificaciones.

SUSTITUCIÓN DE SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UNO DE CARÁCTER PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECIMIENTO DE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL (TERCER TRÁMITE CONSTITUCIONAL. BOLETÍN N° 9326‐07)

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Corresponde tratar las modificaciones introducidas por el Senado al proyecto de ley, iniciado en mensaje, que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional.

Los Comités Parlamentarios acordaron otorgar diez minutos para cada bancada. Concluido ese tiempo, se abre un nuevo plazo de dos horas, que se distribuirán proporcionalmente entre las distintas bancadas.

Este proyecto se discutirá hoy hasta su total despacho.

Antecedentes:

-Modificaciones del Senado, sesión 114ª de la presente legislatura, en 14 de enero de 2015. Documentos de la Cuenta N° 6.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Marcelo Schilling .

El señor SCHILLING.-

Señor Presidente , hoy es un buen día para Chile, pues vamos a terminar con un sistema electoral que ha contribuido de manera significativa al desprestigio del Congreso Nacional, de la actividad política y de los partidos políticos, debido a que, de manera matemáticamente artificiosa, produce un empate, independientemente de la votación que obtengan las listas o los candidatos, que se traduce en ingobernabilidad y afecta gravemente un principio elemental de toda democracia: el derecho de la mayoría a gobernar. Además, se trata de un sistema construido de manera completamente artificiosa.

Por ejemplo, ¿qué continuidad geográfica terrestre existe entre las comunas de Caldera y de Vallenar? ¡Ninguna! Su conexión es por mar, y los peces no votan. La dictadura, teniendo a la vista los resultados del plebiscito, con el propósito de obstaculizar la reinstalación de la democracia, ideó este sistema electoral. El ejemplo de las comunas de Caldera y de Vallenar no es el único. ¿Existe alguna conexión terrestre entre las comunas de Coronel y Tomé? ¡No existe!

La resistencia de la derecha a los cambios los ha hecho argumentar que este proyecto es censurable constitucionalmente porque no da el mismo peso electoral a cada ciudadano. Pues bien, el actual sistema en vigencia no puede establecer más desigualdades al respecto. Ahí están los emblemáticos casos de Aysén, Magallanes y otros. El actual sistema implica también otros problemas, como, por ejemplo, la falta de competencia. La ciudadanía tiene la sensación de que los parlamentarios que se encuentran en funciones lo estarán por toda la vida, si así lo desean, porque no hay opciones para elegir de parte de la ciudadanía. Los partidos están obligados a pactar y a reducir sus posibilidades de representar distintos lugares de la geografía y de la población nacional.

Quienes siempre critican los subsidios económicos, porque distorsionan la realidad de la economía chilena, reciben un importante subsidio político, puesto que la minoría siempre tiene garantizado el mismo escaño que la mayoría. Quienes están en contra de los subsidios económicos y sociales que buscan producir justicia social se refocilan y se revuelcan gozosos en este subsidio político electoral. Pero esto se acabará hoy, porque vamos a aprobar el proyecto, tal como viene del Senado no vale la pena referirse a las modificaciones introducidas por este-, porque lo relevante es que dejaremos atrás el sistema binominal, que privilegia las elites que, además, tienen relaciones incestuosas con el dinero.

Vamos a aprobar un sistema más representativo, con más competencia, que le ofrece más opciones a la ciudadanía para elegir entre partidos y candidatos que los interpreten. A pesar de sus insuficiencias, habrá más igualdad en el peso del voto de cada ciudadano, sobre todo en la Cámara de Diputados, y el Congreso tendrá una mayor legitimidad institucional entre la ciudadanía.

El señor PÉREZ (don Leopoldo).-

¡Dios lo escuche!

El señor SCHILLING.-

Si usted me escucha atentamente, probablemente podrá repetir lo mismo y ayudarme a que la ciudadanía entienda mejor el mensaje, señor diputado .

Para lograr una mayor legitimidad, necesitamos impulsar otras medidas, que no están incluidas en este proyecto sin embargo, no podemos dejar de recordarlas, para no olvidarlas y retomarlas cuanto antes, como, por ejemplo, el proyecto que hace transparente, controlable, fiscalizable y sancionable los delitos que se cometan en el financiamiento de las campañas.

Aprovecho la oportunidad de felicitar a la ministra Ximena Rincón , que nos acompaña, porque ha sabido recoger el momento e interpretar las aspiraciones de las distintas fuerzas políticas y sus recomendaciones para hacer de esta iniciativa una realidad eficaz. Pero también, más allá de la demagogia y el golpe oportunista para sacar una pequeña ventaja, necesitamos revisar el tema de las dietas parlamentarias. El Parlamento, para tener el aprecio y el cariño de la ciudadanía, debe parecerse cada vez más a los ciudadanos; lo contrario produce esta sensación de distancia y desapego.

También debemos legislar sobre el límite a la reelección, tema sobre el cual lo quiero recordar ahora esta Cámara ya legisló. Acordamos no más de dos reelecciones, en el caso de los diputados y diputadas, y una para el Senado. Para las autoridades de los consejos regionales y de las municipalidades propusimos no más de dos reelecciones. ¿Quién aún está en deuda? El Senado esa Cámara tan sensata y tan prudente, que una vez más se hace el cucho con la idea de legislar lo que le llega de la Cámara de Diputados.

Tal vez lo más importante del proyecto que vamos a aprobar hoy es que se establecen reglas claras para igualar la cancha para las mujeres en la contienda política electoral. Y esto es una gran noticia para el país, porque termina con ciertas desigualdades y exclusiones.

Finalmente, este es un gran éxito del gobierno, después de veintiún intentos para eliminar el binominal y reemplazarlo por uno proporcional moderado, por fin se va a lograr. Este éxito de hoy se suma al obtenido hace muy poco con la reforma tributaria; en pocos días más terminaremos la reforma educacional y espero que alrededor de junio tengamos aprobada la reforma laboral, que nivelará la cancha en la relación entre el capital y el trabajo. Tengo la esperanza de que en los años políticos en que se realizan las elecciones municipales y parlamentarias podamos sacar adelante la tarea de una nueva Constitución Política. Así la obra reformista de este gobierno se habrá consumado en todos sus aspectos.

He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Ricardo Rincón .

El señor RINCÓN.-

Señor Presidente , Teseo, héroe de la mitología griega y de la democracia ateniense, en la obra Las Suplicantes, dice: “El que quiera hablar, se adelante y hable; cualquier ciudadano puede darse a conocer por un buen consejo o callarse.”.

Con esa frase, Teseo quiso expresar la importancia no solo de la democracia, sino de la posibilidad de cualquiera de participar en ella. Para participar, para dar un paso adelante y hablar, no solo hay que poder elegir, sino también tener la posibilidad si se quiere y si se acepta el desafío de ser elegido. Para ello, las reglas del juego deben ser, al menos, aquellas que permitan que los ciudadanos tengan la representación que merecen.

Como sabemos, el proyecto enviado por la Presidenta Michelle Bachelet podría haberse limitado única y exclusivamente al sistema binominal y su derogación. Sin embargo, la Presidenta quiso plantearse un mayor desafío y por ello incluyó la cuota para las mujeres. Y no en cualquier porcentaje: en 40 por ciento. Por eso agradezco la permanente compañía en nuestra Comisión de Constitución, Legislación y Justicia de la ministra directora del Sernam , que hoy también nos acompaña.

Por lo tanto, ahora la iniciativa consta de dos pilares fundamentales: la eliminación del sistema binominal y la determinación de una cuota mínima para mujeres que permita que nuestro Parlamento no siga siendo de los peores en el mundo en términos de representación de mujeres.

No puedo sino ratificar las reformas del Senado. Por cierto, nos habría gustado haber incluido también la foto del candidato en el voto, como una forma de facilitar, sobre todo a los adultos mayores, la participación ciudadana en las elecciones y el cumplimiento de lo que Teseo consideraba como elementos fundamentales para que hubiera democracia.

Debemos cerrar ya el ciclo de esta reforma. Los otros temas quedarán pendientes para otras legislaturas. Por cierto, el Ejecutivo ha cumplido su compromiso con nosotros, porque ya ingreso el proyecto de ley relativo al financiamiento, que se encuentra actualmente en tramitación en la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia de esta Cámara.

Evidentemente, junto con refrendar lo que el Senado ha hecho, debemos destacar los dos objetivos principales de esta iniciativa. Para ello, me quiero centrar en tres ideas fundamentales.

Primero, se ha reiterado mucho que no se quieren más parlamentarios. Quiero ser muy claro para quienes nos están viendo o escuchando: el proyecto de aumento de parlamentarios no solo busca dar más facilidades para acomodar el redistritaje. Por cierto, esa adecuación se puede hacer con cualquier número, pero es más fácil con una cantidad mayor.

No quiero dejar pasar esta oportunidad para señalar que el número óptimo de representación para un país con 17 millones de habitantes es cercano a 200 diputados; sin embargo, esta iniciativa propone solo 155. Además, este incremento busca una mejor representación de mujeres en la Cámara de Diputados, y hay que decirlo con total claridad. Cumplir una cuota de 10 por ciento es fácil, pero cumplir una de 40 por ciento, con la representación que este Congreso Nacional tiene, incluida mi bancada, que no tiene una buena representación de género, se hace difícil si no es con un aumento de parlamentarios, que tenga por objeto reformar el sistema y que haya más parlamentarias en Chile. Y quiero que haya más parlamentarias en Chile.

Les garantizo que al establecerse el período legislativo de 2018 que, como todo nuevo período, será distinto, se va a caracterizar porque habrá muchas más mujeres que en la actualidad, lo que garantizará una mejor expresión de las ideas, pensamientos y anhelos de nuestra sociedad, que mayoritariamente está compuesta por mujeres. Entonces, cuando se debatan los temas, se podrá expresar de mejor forma las ideas, pensamientos, anhelos y sueños de las mujeres, que son parte importante de la sociedad chilena.

Por otra parte, al hablar de desigualdad del voto, no puedo dejar de decir que durante 25 años nunca se habló del tema. Pido a la oposición que no recurra al Tribunal Constitucional por un tema que durante 25 años no fueron capaces de levantar. No hay igualdad del voto desde el momento en que se eligen los mismos en todos los distritos de Chile y cuando un tercio es prácticamente lo mismo que dos tercios.

En democracia no hay trajes a la medida. Los trajes a la medida solo se hacen cuando se impone por la fuerza, sin debate, sin participación y sin voto, un esquema electoral determinado, pero no al sancionar dicho sistema en democracia, con el concurso de la ciudadanía, que vota a sus representantes, con debates en ambas Cámaras del Parlamento e, incluso -quiero decirlo-, con parlamentarios escindidos del bloque opositor, para refrendar la reforma en debate.

Como dijo Teseo, el que quiera hablar, se adelante y hable; cualquier ciudadano puede darse a conocer por un buen consejo o callarse.

Aprobemos hoy esta reforma.

He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Bernardo Berger .

El señor BERGER.-

Señor Presidente , el sistema electoral es perfectible y es necesario que así se haga; eso lo he apoyado siempre, al igual que muchos colegas y gran parte de la ciudadanía.

Nunca hay que quedarse quieto si existen fórmulas que puedan perfeccionar la democracia y la representación de los ciudadanos en nuestro territorio nacional.

En este caso, la propuesta del Ejecutivo , que pretende reemplazar el sistema binominal por uno proporcional, no me pareció lo mejor, pero, a falta de otras alternativas de consenso, la apoyé. Probablemente, tal como sucede en las elecciones de concejales, se seguirán produciendo distorsiones en los resultados y no necesariamente resultarán electos los candidatos más votados, lo que será difícil de explicar a la ciudadanía.

Apoyé la iniciativa hasta ese punto porque el binominal no daba para más y se necesita un sistema a tono con un nuevo Chile. Pero tenía la esperanza de que no se lesionaría la representación de las regiones con entuertos como en el que hoy analizamos.

Lamento muy profundamente que el Ejecutivo , pese a todas las advertencias y reclamos ciudadanos, haya insistido en que para cambiar el sistema se debe aumentar el número de diputados y senadores. Nunca estuve de acuerdo y sigo en desacuerdo respecto del incremento de parlamentarios, porque el Estado, en definitiva la ciudadanía, no puede seguir asumiendo más costos innecesarios, como este.

El problema no es de más representación; es de honestidad y, además, de una fórmula matemática para que cuadre el sistema D’Hondt. A mí parecer, más razonable, más barato y más eficiente era haber buscado otro sistema matemático. Pero una vez más el gobierno puso la carreta delante de los bueyes. En fin, una vez más, estamos ante hechos consumados.

Esta medida desoye a la ciudadanía, que ha sido categórica en rechazar y condenar estos aumentos inoficiosos de cargos políticos que, al final, se terminan pagando del bolsillo de las familias chilenas a través de los impuestos.

Pero lo que más me desconcierta es la nueva distribución de los cupos por región. Así, se acrecienta brutalmente la brecha de desigualdad entre la capacidad representativa que tienen las regiones frente a la capital. Las regiones han perdido voz en el Congreso, y eso es retroceder, no uno, sino varios pasos, en materia de descentralización.

Por ejemplo, con esta iniciativa los intereses de la Región Metropolitana serán representados por 47 diputados, mientras que la Región de Los Ríos apenas tendrá 5; o sea, 47 votos contra 5. Peor es el caso de la Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, que sólo tendrá 3 contra 47; respecto de la Región de Arica Y Parinacota, la Región Metropolitana la supera en más de diez veces. Es decir, la voz de la Región Metropolitana valdrá numéricamente 9,5 veces más que la de mi región a la hora del debate en el Congreso Nacional.

Entrego otro dato a la luz de la descentralización, con la que tanto hacen gárgaras: las tres urbes más grandes del país esto es Santiago, Valparaíso y Concepción, el centro de Chile de ahí el término “centralismo”, acapararán el 52,3 por ciento de los parlamentarios. O sea, esas tres capitales regionales tendrán la hegemonía en desmedro del resto de Chile.

Entonces, ¿de qué descentralización estamos hablando con este proyecto? ¿De qué mejor representatividad territorial me están tratando de convencer con esta propuesta?

En este contexto, quedo con un sabor amargo, que me imagino es compartido por todos quienes llevamos años peleando por el equilibrio de fuerzas y por la descentralización política y administrativa de Chile, sin más alternativa que rechazar este proyecto.

Tengo la impresión de que en esta jornada estamos satisfaciendo un capricho de algunos partidos políticos por tener más diputados y senadores a la fuerza, pero no resolvemos las necesidades de desarrollo igualitario de las personas que habitan el territorio nacional.

He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Juan Antonio Coloma .

El señor COLOMA.-

Señor Presidente , hoy será recordado, una vez más, como el día en que triunfaron los eslóganes, pues estamos terminando con el sistema electoral que más estabilidad política le ha dado a nuestro país.

Lamentablemente, también será recordado como el día en que los políticos se preocuparon de los problemas de los políticos: políticos hablan de políticos.

Durante años, la izquierda aquí presente ha despotricado contra un sistema electoral, acusándolo de ser el causante de grandes daños a la política chilena, sin importar si dichos argumentos son verdaderos o falsos o si tienen o no fundamentos.

Esto es relevante, porque quienes aprueben el cambio de este sistema mañana deberán explicar por qué los problemas de la política no se solucionaron con el nuevo sistema electoral y por qué sigue la misma falta de sintonía con los problemas reales de la gente.

Ahora bien, no voy a profundizar en la falta de un titular en la cartera de Salud, en la falta de la agenda corta antidelincuencia, ni en la necesidad vehemente que se observa por estatizar la educación. Pero sí voy a profundizar en el hecho de que, lamentablemente y con mucha razón, a futuro la gente nos va a decir que, una vez más, los políticos nos estamos arreglando entre nosotros.

Pero este proyecto no solo se quedó en eso, sino que, para asegurar la aprobación del redistritaje, que es un verdadero traje a la medida de la izquierda chilena, se debió tranzar inescrupulosamente en varios asuntos de relevancia política. Los requisitos para constituir y disolver los partidos políticos, cuyas modificaciones son verdaderamente vergonzosas; la evidente desproporcionalidad en la repartición de cupos parlamentarios; la fusión antojadiza de distritos, con la única intención de favorecer a la coalición gobernante; la falsa proporcionalidad del voto y el aumento desmedido del número de diputados y senadores son una muestra de ello.

Antes de desglosar estos aspectos punto por punto, me parece importante profundizar respecto de ciertos mitos que rodearon al sistema binominal, de los cuales habrá que hacerse cargo en el futuro.

El mito 1, que mencionó el diputado Schilling en su intervención, es que el sistema binominal lleva al empate permanente. Eso es falso. Esta debe ser la gran mentira de todas las que se han dicho sobre el sistema binominal. Así lo demuestran empíricamente diversos estudios realizados, entre otros el que hizo el diputado Pepe Auth .

El sistema binominal es, como todos, perfectible, pero ha reflejado en forma sensata la proporcionalidad en los resultados electorales. En algunos casos favoreció a la centroderecha y en otros a la izquierda. De hecho, muchos de los diputados que hoy están sentados en este Hemiciclo resultaron electos gracias a este sistema, y cuando ello ocurrió, no los escuché alegar.

El mito 2 es que el sistema electoral binominal favorece y protege a la derecha. Nuevamente, falso; otra mentira. De las siete elecciones que se han realizado desde 1990 a la fecha, en tres de ellas resultó más beneficiada la centroderecha, pero en las otras cuatro fue la izquierda la favorecida. Y si no fuese por la extrema sobrerrepresentación que obtuvieron en la última elección parlamentaria, hoy no estaríamos discutiendo esta modificación al sistema electoral.

El mito 3 dice que los problemas de la política son culpa del sistema binominal. Nuevamente, falso; mentira. Durante años se ha hablado sobre los problemas aparejados al sistema, pero lo cierto es que la política es mucho más que un sistema electoral. Tanto es así que, aunque les duela, las autoridades mejor evaluadas: los Presidentes y los alcaldes, son elegidos por un sistema uninominal. ¡Sí, uninominal, pues se elije solo a uno! Además, quienes critican al binominal olvidan que el sistema proporcional ya rige para la elección de concejales. Sinceramente, nunca me han comentado que el sistema de elección de concejales sea más justo que otros.

Según el mito 4, el sistema proporcional asegura la elección de las primeras mayorías. Otra vez falso. Si analizamos el resultado de las elecciones de 2008, veremos que el sistema electoral que se propone permitió que diez candidatos a concejales que obtuvieron la primera mayoría no resultaran electos y que, por el contrario, diez candidatos que obtuvieron menos del 1 por ciento de los votos sí fueran elegidos. Esa es la verdad del sistema proporcional que estamos a punto de aprobar para la elección de parlamentarios.

Lamentablemente, aunque le duela al diputado Pepe Auth , quedaron fuera de la discusión los puntos más relevantes del sistema electoral, como analizar por qué durante los 25 años en que ha regido el sistema binominal hemos tenido como país el crecimiento más importante en materia económica, o por qué este sistema ha permitido la creación de dos grandes bloques políticos, y qué bueno que sea así. No es casualidad, además, que el crecimiento de nuestro país vaya aparejado con un sistema que busca el establecimiento de grandes bloques políticos, el centro, la estabilidad, los consensos, la conversación que hoy tanto echamos de menos y la racionalidad en el debate. Todo eso se debe, en parte importante, al sistema electoral que se intenta cambiar. Pero no ha sido suficiente. Hemos decidido volver a la política de nichos, esa que tan mal le hizo a nuestro país entre los años 50 y 70.

Al analizar el sistema que se propone en este proyecto, nos encontramos con cinco problemas que son sumamente duros.

Primero, la falsa proporcionalidad del voto. Durante la discusión en la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia, nosotros, la UDI, presentamos un proyecto de reforma al binominal que con los mismos 120 diputados era más proporcional que el que se propone en la iniciativa en debate y que probablemente se aprobará en esta sesión. No nos hicieron caso, porque la verdad es que en ese momento la proporcionalidad no era lo relevante; eso era falso. Lo que realmente importaba era aumentar del número de parlamentarios y eliminar el sistema vigente, sin considerar si era bueno o malo. Simplemente, había que cambiarlo.

Segundo, la evidente desproporcionalidad en la repartición de cupos parlamentarios a elegir. Resulta doloroso, triste y da la sensación clara de un abuso hacia las mayorías lo que se propone, por ejemplo, para el distrito de Copiapó, en la Tercera Región. Ahí se elegirán cinco diputados; no obstante, en Iquique, que tiene más población, se elegirán solo tres. En los nuevos distritos 16, 18, 22 y 25 se elegirán cuatro diputados, pero todos tienen más población que la Tercera Región.

Obviamente, las presiones, ejercidas en parte importante por el partido Comunista, nos llevan a consagrar esa sobrerrepresentación. ¡Qué decir de lo que ocurre con los distritos 9, 11, 12 y 14, que me tocará representar! Claramente, se verán perjudicados por esta excesiva necesidad de acomodar fichas para que todos los parlamentarios de la izquierda voten a favor.

Tercero, la fusión antojadiza de distritos, que es otro tema sumamente grave. Es un problema que queda de manifiesto al analizar lo que sucederá en la Región Metropolitana y en la Octava Región: se fusionarán distritos para mayor comodidad, para evitar las peleas entre amigos, aumentar el número de diputados y asegurar la elección de varios de los parlamentarios presentes en la Sala.

Pero lo más duro, lo más feo, porque es probable que deje una mancha en la tramitación de este proyecto, es la modificación a la ley de partidos políticos. Este día será recordado como aquel en que el Parlamento se puso de rodillas ante el Poder Ejecutivo , en que perdimos el pudor y se transaron principios básicos del sistema democrático por lograr un votito más. Seremos recordados como un periodo legislativo chabacano, que nos llevó al desprestigio de quienes estamos sentados en la Sala, por haber permitido la “transaca” del voto para obtener un beneficio pequeño.

Aunque suene insólito, gracias a estas modificaciones se podrán formar partidos políticos con 94 firmas; se podrán presentar candidatos presidenciales con un partido formado en una sola región. Y esas 94 personas constituidas en partido político tendrán derecho a acceder a la franja electoral. Además, una vez aprobada la ley de financiamiento para los partidos políticos, esas 94 personas contarán con financiamiento público.

Lo peor de todo es que pronto tendremos que intentar corregir este verdadero bochorno, porque, como dijo el senador Alejandro Navarro que no es precisamente una persona de derecha, el acuerdo político para permitir la creación de partidos políticos que cuenten con un número de ciudadanos afiliados equivalente al 0,25 por ciento del electorado que hubiere sufragado en la última elección de diputados en cada región en que esté constituyéndose, es dinamitar las bases del sistema democrático. Eso lo dice el senador Alejandro Navarro .

También debemos recordar las palabras del senador Felipe Harboe , quien señaló que esto es solo una pequeña ventana para la transformación de pequeños movimientos en partidos políticos.

Finalmente lo dejo para el final, porque sé que otros diputados de la UDI también se referirán al tema, resulta vergonzoso el aumento del número de parlamentarios propuesto. Tendremos que ponernos rojos para explicarle a la gente por qué habrá 47 parlamentarios más. Además, se ha pretendido ocultar el costo financiero que ello supondrá, porque nunca se ha dado una respuesta satisfactoria a las consultas sobre ese punto.

¿Alguien cree que los problemas de la política se solucionan con más diputados? ¿Alguien cree que los problemas de la política se solucionan con el aumento de cupos para los partidos políticos? Al menos nosotros, en la UDI, estamos convencidos de que no es así, y por eso votaremos en contra de esta iniciativa.

He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Gaspar Rivas .

El señor RIVAS.-

Señor Presidente , a pesar de que el año pasado expliqué con palitos cuáles serían las distorsiones que se generarían con la aprobación de este proyecto, veo que estamos en un Congreso sastre, porque se están haciendo trajes a la medida de determinados partidos políticos.

Se ha hablado de establecer un sistema proporcional moderado, pero yo creo que estamos en presencia de un proporcional acomodado. La cifra repartidora va a generar exactamente la misma distorsión que hoy tiene el binominal, es decir, que salgan electas personas con menos votos que aquellos que se pierden. Por una parte, la izquierda vende una mentira al país, y por otra, la derecha, en especial la UDI, que sintiéndose acorralada, arma una gran alharaca y dice que eso no puede ser, en circunstancias de que jamás ha querido cambiar el actual sistema de elección.

Si se quiere más democracia, tengamos un sistema realmente democrático y por el cual se elija a la primera mayoría, sin doblajes, ni redistritaje, sin aumentar el número de parlamentarios y sin ningún tipo de letra chica. En definitiva, aquí han operado las calculadoras políticas.

Por ejemplo, en enero de 2013, en el Senado se presentó un proyecto de ley de la senadora Lily Pérez y del senador Carlos Cantero , el cual establecía la creación de un sistema de elección mayoritario, para evitar las distorsiones (Boletín N° 8797-07). Sin embargo, los parlamentarios que firmaron ese proyecto hoy están a favor de esta iniciativa. ¿Por qué pasó eso? ¿Cambiaron los intereses? ¿Cambió la realidad? ¿Lo que antiguamente era razonable y cuerdo ahora ya no lo es? ¿Por qué la calculadora política actúa una vez más?

No me prestaré para aprobar con mi voto un traje a la medida, sea para este gobierno o para el que sea. Por eso, anuncio mi voto en contra.

He dicho.

El señor CARMONA ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Pepe Auth .

El señor AUTH.-

Señor Presidente , llegó la hora. Como reza el dicho, no hay plazo que no se cumpla ni deuda que no se pague. Aunque parezca increíble, en un par de horas más diremos adiós al sistema electoral binominal. Ha sido una marcha larga para llegar hasta aquí. Todos los gobiernos, desde el de Patricio Aylwin hasta el de Sebastián Piñera , intentaron, con mayor o menor convicción, cambiar un sistema mayoritariamente repudiado por los chilenos.

Sinceramente, agradezco a todas las personas que votaron por mí, porque me permiten participar de este momento histórico. En treinta años más se podrá leer en los manuales de historia la lista de quienes concurrimos a apoyar este importantísimo avance democrático. Por supuesto, también la de aquellos espero que sean pocos que votarán en contra, para que el sistema binominal continúe siendo la camisa de fuerza que impida la plena expresión de la diversidad nacional.

Se dirá que el martes 20 de enero de 2015, a 26 años de la primera elección binominal, Chile vuelve a reencontrarse con su historia y su cultura política, poniendo fin a un sistema electoral que terminó fracasando en sus objetivos de consagrar la exclusión política de la izquierda y de dejar atrás el pluripartidismo histórico de Chile. Quienes estamos aquí somos testigos y protagonistas de ese fracaso.

Cabe destacar que si hemos llegado hasta aquí se debe, primero, a que los chilenos votaron en noviembre de 2013 para que hubiera una clara mayoría a favor del cambio democrático y, segundo, porque la Presidenta Bachelet está resuelta a cumplir todos y cada uno de sus compromisos con la ciudadanía; porque el ministro del Interior y Seguridad Pública , Rodrigo Peñailillo , puso toda su energía, flexibilidad y liderazgo para conducir este proceso político legislativo, y porque las ministras Ximena Rincón y Claudia Pascual se la jugaron para que, además de cambiar el sistema binominal, diéramos un salto definitivo en materia de paridad de hombres y mujeres en el Congreso Nacional.

También debo felicitar la consecuencia de los diputados y senadores de la Nueva Mayoría, porque más allá del legítimo temor e incertidumbre que genera un cambio tan importante en el modo de elección, honraron la palabra comprometida desde 1989. Asimismo, deseo felicitar a los diputados independientes por su aporte a este cambio. En particular, debo reconocer a los tres diputados del movimiento Amplitud, por cuanto tuvieron el coraje de resistir una presión hasta lo indecible de parte de la Alianza y de todos sus personeros para impedir el cambio.

Hoy se cae el pilar fundamental del edificio político levantado por la dictadura militar y sus ideólogos para prolongar su control del país, congelar el sistema político e impedir cambios que acompañen la evolución de Chile.

Estamos en el último trámite del proyecto y hoy somos llamados a pronunciarnos sobre los cambios que el Senado introdujo al proyecto aprobado por esta Cámara. En ese sentido, la Cámara Alta tomó dos decisiones relevantes.

La primera fue cambiar la composición del Senado, de manera que el proyecto modificado establece que en diez de las quince regiones se elegirán tres o cinco senadores. ¿Qué significa eso? Qué allí se jugará la diferencia entre mayorías y minorías en el país. Y el efecto de eso es que quien gane la elección en las urnas tendrá mayoría no solo en esta Cámara, sino también en el Senado. Eso es lo más resistido por la derecha, porque su problema existencial es que se ve como eterna minoría, y cuando considera cambios en el sistema electoral, piensa en cómo mantener el empate en el Congreso aunque sea minoría en las urnas. Si hasta última hora escuchamos, a propósito del número, la propuesta de elegir 54 senadores distribuidos en pares, de manera que continuara el empate entre la mayoría y la minoría.

La segunda probablemente más relevante que la primera fue mantener la exigencia de cumplir con la discriminación positiva de género, de modo que ninguno esté representado en menos de 40 por ciento de candidatos a todo evento. Sin importar el procedimiento de selección de los candidatos, los partidos políticos deberán cumplir con el compromiso de ofrecer a la ciudadanía composiciones paritarias de sus elencos de candidatos. Eso significará, a ojos cerrados, que el próximo Congreso Nacional, cuyos integrantes asumirán el 11 de marzo de 2018, tendrá varias diferencias respecto del actual, a saber: primero, quienes ganen en las urnas tendrán mayoría en la Cámara de Diputados y en el Senado; segundo, la diversidad no se expresará de manera marginal, como ocurre hoy, sino a plenitud, no solo en la Cámara Baja sino también en el Senado, que continúa siendo un cenáculo cerrado a la diferencia; tercero, habrá más mujeres.

Muchos de ustedes probablemente han conocido la composición del Congreso Nacional en diversos períodos legislativos y habrán constatado que lo que más llama la atención es su extrema homogeneidad. Afortunadamente, han ingresado algunos parlamentarios diferentes bienvenidos sean, pero no quiero que sean un lunar en el Congreso. Mi anhelo es que el Parlamento refleje exactamente la diversidad de toda la sociedad chilena. Esa es la verdadera significación del cambio que hoy estamos experimentando, pues se acaba el sistema electoral que impide los cambios. Chile comenzará a evolucionar del mismo modo en que lo haga la sociedad chilena. El principal efecto que se verá en marzo de 2018 es que comenzará la era del deshielo y se descongelará un sistema político congelado.

Desde el primer trámite del proyecto a este momento he tenido muchos progresos en mi aprendizaje del chino mandarín. Y aunque he venido con otra corbata, les puedo decir que en la que estoy usando dice claramente que el binominal termina hoy y que las mujeres, los jóvenes y la diversidad ingresarán como se debe a la Cámara de Diputados y al Senado de Chile.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CARMONA ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Sergio Aguiló .

El señor AGUILÓ.-

Señor Presidente , felicito al diputado Auth por sus corbatas “políglotas”, porque generan un ambiente de respeto a la diversidad.

En una sesión anterior, un diputado de La Alianza se quejó y dijo que estábamos abusando del concepto “reforma histórica” y que se repetía demasiado en el Parlamento.

Sin embargo, digámoslo con franqueza: desde hace mucho tiempo que en el Parlamento no se discutían ni resolvían reformas históricas, como la que estamos a punto de votar, para terminar con uno de los enclaves más abusivos, antidemocráticos y distorsionadores de la realidad nacional, como es el sistema electoral binominal.

Permítanme, señor Presidente y estimados colegas, en este momento decisivo, rendirle un homenaje a una luchadora de causas justas, sobre todo en materias políticas, como el fin al sistema binominal: la gran Gladys Marín ,…

(Aplausos en las tribunas)

…quien dedicó sus energías, de manera incansable, a defender las causas de los trabajadores, de los derechos humanos y de lograr para Chile un sistema político auténticamente democrático.

Las voces que se levantan en esta Cámara, como la del diputado Juan Antonio Coloma , para señalar que este no es un sistema proporcional, requiere de un escrutinio de otro carácter. Es difícil imaginar actitudes tan caraduras y comprender cómo es posible que un diputado que defendió la dictadura de Pinochet, que generó un sistema electoral en que dos diputados de Aysén valían lo mismo que dos diputados por Maipú o La Florida y donde un conglomerado político que tenía el 34 por ciento de los votos aseguraba la mitad del Parlamento. Incluso, eso no fue considerado suficiente y se estableció un sistema que comprendía un conjunto de generales y almirantes que resguardaban esa igualdad en el Senado, a fin de que esta nunca se alterara. Daba lo mismo lo que opinara la ciudadanía y lo que votara el pueblo. Eso cambiará hoy de manera definitiva.

En nombre de la bancada del Partido Comunista y de la Izquierda Ciudadana, reconocemos la hidalguía, el coraje y la capacidad política de nuestro gobierno para llevar adelante una de las reformas más requeridas para democratizar efectivamente a nuestro país.

Reconocemos el coraje de nuestra Presidenta y la decisión y valentía de nuestros ministros, particularmente del señor Rodrigo Peñailillo y de las señoras Claudia Pascual y Ximena Rincón , quienes nos honran con su presencia en la Sala, y del equipo político de este gobierno, que está avanzando con decisión en estas y otras reformas de carácter histórico.

Sin embargo, quiero ocupar dos minutos a lo siguiente. Nuestra experiencia nos indica que podemos contar con el sistema electoral más proporcional del mundo, pero, si simultáneamente no regulamos con vigor la escandalosa presencia del dinero en la política y en las elecciones, podría venir alguien en este sistema proporcional que vamos a acordara comprarse un distrito, como ha ocurrido, o a comprarse una circunscripción, como también ha sucedido. Los datos de Penta y de los informes que entregó el Servel sobre aportes reservados nos indican que, en un distrito, mientras un candidato gastó 20 millones de pesos, el de la competencia, el de la UDI, el de la derecha, gastó 150 millones o 200 millones de pesos. No es posible que eso siga ocurriendo, porque no habrá justicia electoral con esa desproporción tan vergonzosa. No es posible que eso siga sucediendo, porque con esos niveles de gastos y de influencia escandalosos del dinero en la política no se sabe si las conciencias que están en esta Sala son las que están decidiendo las leyes o son los empresarios, que representan al 0,1 por ciento de la población, que ponen los recursos y son quienes, en definitiva, mandatan a los parlamentarios para que voten en una u otra dirección.

Por lo tanto, junto con felicitar al gobierno, con respaldar estas reformas y anunciar que nuestra bancada votará favorablemente cada una de las disposiciones, quiero agregar que es muy importante que el proyecto que regula la presencia del dinero en la política sea puesto en Tabla con urgencia, junto con las exigencias que la ética, la moral y los principios democráticos demandan.

He dicho.

-Aplausos en las tribunas.

El señor CARMONA ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra la diputada señora Marcela Hernando .

La señora HERNANDO (doña Marcela).-

Señor Presidente , hace algunos meses, en el primer trámite constitucional del proyecto, agradecí la fortuna de haber participado en este acontecimiento histórico para la democracia de nuestro país. Sin duda, lo voy a atesorar como uno de los hechos más trascendentales en los que tomaré parte en este Hemiciclo.

Hoy, los diputados que concurriremos con nuestros votos favorables vamos a poner la lápida a este sistema que no es inclusivo, pues beneficiaba a dos grandes bloques, y que solo en casos excepcionales permitió que la minoría accediera a un cupo en la Cámara de Diputados o en el Senado.

Estoy de acuerdo con que no tiene sentido quedarnos en críticas más o menos, o insistir en discutir las modificaciones realizadas en el Senado. Lo importante es que esta futura ley permitirá la representación e inclusión de todas las corrientes políticas, aumentará la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resultarán electos, facilitará la expresión de la mayoría y la representación de las minorías, y permitirá la conformación de un Congreso Nacional que refleje la diversidad de la sociedad.

Seguramente, en la jornada de hoy, con nuestros votos favorables, muchos estaremos cumpliendo con una promesa que hicimos en campaña. Me comprometí con los ciudadanos de mi distrito a dar mi voto para terminar con este sistema, y eso es lo que haré.

No puedo terminar sin destacar que, de aprobarse este proyecto de ley, por fin se va a poner al día la situación de las mujeres en política. Así, la ley representará mejor no solo a la población y al territorio, sino también al género femenino.

Me siento orgullosa de anunciar que la bancada del Partido Radical apoyará la reforma con toda nuestra fuerza.

He dicho.

El señor CARMONA ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Arturo Squella .

El señor SQUELLA.-

Señor Presidente , han trascurrido ocho meses desde que ingresó este proyecto de ley a tramitación, han dado su opinión muchos expertos, se ha revisado profundamente en la Cámara de Diputados y en el Senado y, hasta el momento, no se ha entregado ninguna justificación para un aumento tan significativo de parlamentarios.

Se están incorporando cuarenta y siete nuevos parlamentarios es decir, una suerte de tercera Cámara al Congreso Nacional, pero no se ha dado ni una justificación. Y le voy a decir por qué: porque no existe justificación alguna que se pueda dar a la opinión pública.

Lo que existe son explicaciones al interior de las bancadas de la Nueva Mayoría, porque, tal como ha sucedido en la historia de proyectos fracasados que intentaron modificar el sistema binominal, este no iba a prosperar si no se le garantizaba a cada uno de los parlamentarios que estamos aquí sentados que será reelecto con mayor facilidad que en su última elección. Esa es la verdadera explicación que tiene este aumento de 35 diputados y de 12 senadores; no existe otra.

Ahora, no nos tiene que sorprender que se haya hecho trampa al momento de distribuir esos nuevos escaños, porque esa es la manera que ha elegido este gobierno para perpetuarse en el poder; esa es la manera que se han pensado y diseñado desde el palacio de La Moneda para garantizar muchos años de una mayoría que podrá hacer lo que verdaderamente quiera a la hora de legislar, sin tener que responder a los intereses de la ciudadanía. Y eso lo reprochamos profundamente.

Si coincidimos en algo, de acuerdo con las intervenciones que hemos escuchado de los parlamentarios de la Nueva Mayoría, es en resaltar que existe una bancada que no ha formado parte y que no ha apoyado este cambio del sistema binominal, que aumenta la composición del Parlamento en cuarenta y siete nuevos parlamentarios. Esa es la bancada de la UDI, porque no estamos disponibles para realizar este cambio tan significativo; no estamos disponibles para decir que este aumento de parlamentarios no importará costo alguno al país, porque esa es una mentira, es una falsedad. Al menos, uno esperaría que los ministros que han sostenido eso se pusieran colorados, pero eso no ha ocurrido.

Señor Presidente , estuvimos disponibles en el gobierno del Presidente Piñera para cambiar este sistema. Por supuesto que no es nuestro principal interés, porque sabemos que existen otras prioridades. No obstante, se presentó un proyecto en esa ocasión que promovimos entusiastamente. Esa iniciativa dotaba de mayor representatividad a nuestro sistema de elección parlamentaria, cosa que no logra este proyecto de ley. Si alguien piensa que mejorará la representación de los grupos pequeños o de las candidaturas independientes luego de este cambio, debe tener presente que no ocurrirá. Incluso, será más difícil aún que un independiente logre ingresar a la Cámara de Diputados o al Senado.

Por lo mismo, señor Presidente , y entendiendo que lo que discutimos son las modificaciones del Senado, debo señalar que apoyaremos las que nos parecen adecuadas, pero siempre en el entendido de que la estructura que aumenta significativamente el número de parlamentarios ya es una lamentable realidad, a la que la UDI se opuso.

He dicho.

El señor CARMONA ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Sergio Ojeda .

El señor OJEDA.-

Señor Presidente , al modificar el artículo 47 de la Constitución Política, que sustenta el sistema binominal para elegir diputados, decimos: “Sistema binominal, descansa en paz.”

Hoy estamos dando nacimiento a una criatura distinta, a un sistema proporcional, a un sistema de verdad, cuya base será la participación real y efectiva de los ciudadanos y la elección de los que obtengan más votos.

¿Qué atracción o encanto tenía un sistema que permitía conocer el nombre de los que iban a ser elegidos? Más aún, la lista que ganaba elegía a un diputado , pero la lista que perdía elegía a otro. Un engaño, un fraude. Hasta nosotros mismos participábamos de ese engaño. Una democracia engañada, una democracia a medias. Ese sistema también ha sido la causa del desaliento de la ciudadanía por votar.

Auguramos un sistema que implique una mayor participación y legitimidad en la elección de los parlamentarios. Antes de 1973 había 150 diputados y 50 senadores. Hoy sencillamente hemos recuperado tal cantidad, con estos 155 diputados y 50 senadores. Así es que a no espantarse ni horrorizarse. No busquen pretextos, como que habrá mayor gasto o que el Estado deberá destinar más plata para financiar el proyecto, porque no será así.

Este sistema nuevo nos conducirá a una mayor representación. Quienes defienden el sistema binominal, que fue de su propia creación y conveniencia, no aceptan cambios, motivo por el cual darán débiles justificaciones y pretextos. Este sistema proporcional permitirá la inclusión de todas las corrientes políticas significativas y asegurará la participación de los independientes, cuestión que no aseguraba el sistema binominal. También nos asegurará la participación como candidatas del 40 por ciento de mujeres. Aumentará la competencia y habrá incertidumbre respecto de quienes serán elegidos. A mayor número de parlamentarios, mayor representatividad de las mayorías y de las minorías. Se evitará que queden fuera candidatos con gran votación, como ocurre con este aberrante y absurdo sistema binominal.

Respecto del redistritaje, considero que también es positivo incluir otras comunas para evitar que el parlamentario tradicional, que ha ganado y controlado su distrito y que domina sus nichos electorales, tenga asegurado su triunfo, lo que le permite proyectarse a perpetuidad. Ese vicio se terminará y corregirá con el sistema proporcional.

Aunque considero injusto que una región con más de 800 mil habitantes, como la de Los Lagos, tenga el mismo número de senadores a elegir que otras con mucho menos habitantes, incluso con menos de la mitad, no hago cuestión del asunto. Como se trata de avanzar y de cambiar, lo acepto.

Por último, señor Presidente , es falso, como afirma la derecha, que el sistema binominal haya provocado estabilidad política. Este sistema binominal ha impedido sencillamente las grandes reformas y ha promovido las desigualdades, porque no ha procurado las mayorías que exige la Constitución para hacer esas grandes reformas, que necesitan quórum muy altos.

Por lo tanto, señor Presidente , yo votaré encantado, al igual que todos los diputados de la Nueva Mayoría, a favor el proyecto de ley.

No más empate político; vivamos una verdadera democracia, en plenitud, con participación y legitimación de los parlamentarios.

He dicho.

El señor CARMONA ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Osvaldo Andrade .

El señor ANDRADE.-

Señor Presidente , este es un momento político importante, destacado; es un momento político en que se produce el término de un proceso de muchos años, lo que permite celebrar con razonable regocijo el final de un sistema, respecto del cual la sociedad política chilena, incluyendo a la derecha, coincide en que ya había entrado en obsolescencia. Es el inicio de un proceso interesante, de un cambio profundo en el sistema político en su dimensión institucional y de los actores políticos concernientes.

Se inicia una agenda política, un proceso inevitable; se inicia el proceso del término formal de un veto que nos acompaña desde hace muchos años. Se trata ahora de vincular la ética con la política, la moral con la política, de terminar con esta relación incestuosa entre el dinero y la política. Se inicia un nuevo proceso, una nueva agenda. El término del binominal es al mismo tiempo el inicio de este proceso. Es un desafío lo digo con mucha franqueza que nos convoca a todos sin excepción; nadie puede restarse de la agenda que nos ofrece el gobierno para establecer el límite adecuado en la relación entre el dinero y la política; todos estamos invitados a enfrentar el desafío. Dinero y política es el desafío que tenemos que enfrentar en el próximo período.

En este marco se debe entender el cambio del sistema electoral; es un aporte a la legitimación de la política, por una razón muy simple: incorpora algo que estaba ajeno en el sistema electoral chileno, cual es la incertidumbre, ya que sabremos quiénes serán electos o electas después de conocer el resultado de la elección, no antes, lo que era la perversión del sistema que teníamos hasta ahora. Antes de que se produjera la votación, ya se sabía indefectiblemente quiénes saldrían electos y quiénes no. La incertidumbre es el factor central que incorpora el nuevo sistema electoral.

El proyecto mismo ha sido suficientemente defendido; su contenido es conocido y ha sido objeto de debate. No vale la pena insistir en ello. Solo me permitiré hacer un par de comentarios.

No se pusieron rojos ni dieron explicaciones cuando ofrecieron un acuerdo que establecía el aumento a 50 senadores; no se pusieron rojos ni dieron explicaciones para justificar ese aumento, lo que propusieron al calor de las conversaciones y en el marco del trabajo del proyecto. Tampoco se pusieron rojos ni pidieron explicaciones cuando en el marco de ese tratamiento, que es propio de un proceso legislativo, propusieron 54 senadores. ¡Y ahora piden explicaciones acá! ¡Pregúntenles a los que nos hicieron tales propuestas! ¡Eso no fue imaginación nuestra!

No se pusieron rojos cuando ofrecieron 50 senadores para llegar a un acuerdo, ni tampoco cuando propusieron 54. ¡Hasta ayer lo estuvieron proponiendo! Y ahora vienen aquí a mostrar sorpresa. ¡Por favor, tengamos un mínimo de decoro!

Ahora el alegato es el aumento injustificado del número de parlamentarios. ¡Y no se pusieron rojos cuando ofrecieron 50!

Diputado Coloma , ¿no se puso rojo entonces?

El señor COLOMA.-

No.

El señor ANDRADE.-

Entonces, de dónde sacan eso. ¡Por favor, tengamos un poquito de decoro!

No está el parlamentario que se sienta al lado del diputado Coloma y que intervino hace algunos momentos. No se puso rojo el colega cuando ofrecieron 54 senadores para llegar a un acuerdo. ¡En qué mundo estamos! ¡Por favor, un poquito de decoro!

Por cierto, esta no es la solución perfecta. Se alega desde el punto de vista del centralismo. Con este sistema, 8.400.000 electores elegirán 15 diputados, y a los 35 restantes los va a elegir menos de la mitad de los electores en regiones. ¿Y alegan centralismo?

¡Pero, por favor! Tengamos un mínimo de razonabilidad y hagámonos cargo de lo que decimos. Esto es precisamente todo lo contrario al centralismo. A quienes representan distritos de Santiago me incluyo les puedo decir que el alegato es exactamente el contrario, y asumimos la necesidad de que las regiones tengan representación. Por eso, votaremos favorablemente el punto. Pero alegar sobre centralismo en circunstancias de que más de la mitad de los electores elegirá un tercio del Senado, me parece, a lo menos, una falta de mínima inteligencia.

Ese es el dato concreto. No es perfecto. Por supuesto que no. ¡Pero, por favor, tengamos un mínimo de decoro en nuestros alegatos!

La bancada de enfrente nos ofreció llegar a un acuerdo con 50 senadores. La bancada de enfrente hacia la derecha nos propuso llegar a un acuerdo con 54. Creo que el gran problema que ahora tenemos es el número de parlamentarios. ¿Y dónde nacieron esas ofertas? Este es un cambio histórico. Vale la pena votar favorablemente. Costó mucho.

El alegato persistirá. Lo importante es que a partir de ahora se abre una nueva etapa en la agenda política institucional del país. Se terminó el veto; se terminó el entramado. Hoy estamos todos invitados a enfrentar el debate sobre cómo vinculamos el dinero con la política y hacemos un sistema político transparente que nos convoque y nos legitime ante la sociedad chilena.

A eso estamos invitados todos, sin excepción. He dicho.

El señor CARMONA ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Guillermo Ceroni .

El señor CERONI.-

Señor Presidente , no hay duda de que este es un gran triunfo para transitar por el camino hacia una democracia fortalecida y realmente representativa de la ciudadanía. Estamos eliminando un obstáculo para la representación de nuestro Parlamento: el sistema binominal.

Hoy hemos visto que la diferencia del valor del voto, según el lugar donde se emite, es demasiado alta. Para igualar el valor del voto se hace imprescindible aumentar el número de diputados y senadores en el país, para no vernos obligados al imposible de disminuir la representación en algunos territorios escasamente poblados.

Con la elección de más diputados por distrito baja el umbral o línea de corte con el que una fuerza política puede integrarse al Parlamento. Esto asegura que fuerzas que no son mayoritarias, pero que cuentan con el apoyo ciudadano tengan expresión en el foro natural de la comunidad política: el Congreso Nacional, que es de todos los chilenos. Por tal razón, cuando una parte de la Oposición critica el aumento de parlamentarios para defender la permanencia del sistema binominal está negando darle diversidad y mayor representatividad a nuestro Congreso.

Al respecto, es bueno recordar que la democracia es esencialmente representativa. Y esto hay que recordárselo especialmente a la Unión Demócrata Independiente, porque no debemos olvidar cómo se gestó el sistema electoral binominal: entre cuatro paredes. Allí tuvo una participación muy decisiva quien fuera el líder de la UDI, Jaime Guzmán , quien le tenía miedo al sistema democrático. Así quedó reflejado en las actas de la comisión redactora de la Constitución.

¿Qué decía Jaime Guzmán ? “El sistema democrático basado en la generación de las autoridades por un sufragio popular realmente libre, constituye un ideal que sólo funciona adecuadamente en países de alto desarrollo económico, social y cultural. Implantado en otras condiciones, su estabilidad será siempre precaria, y su ejercicio puede entrañar un grave peligro para la subsistencia, la libertad y la seguridad, como asimismo para el avance hacia el progreso.”. Sostuvo: “Hemos estado esclavizados a esta concepción y no se puede seguir en esta condición.”.

Jaime Guzmán le tenía temor a la democracia, y por eso su argumento no tiene validez alguna.

Por el contrario, la Constitución de 1925 estableció, más allá de lo que Jaime Guzmán propició (un sistema electoral binominal), un sistema electoral proporcional, el que queremos reeditar.

El sistema electoral proporcional fue el que siempre se aplicó en Chile. Si hubiera existido un real debate no hay duda de que el sistema binominal jamás se habría impuesto en nuestro país. No podemos olvidar que esto se gestó como un verdadero traje a la medida para los sectores políticos minoritarios, como la Derecha.

Hoy, Hernán Larraín y otro parlamentario de la UDI dicen que esta reforma también es un traje a la medida, en circunstancias de que ellos, de acuerdo con la lectura que di del pensamiento de Jaime Guzmán , elaboraron un traje a la medida para que precisamente una minoría de treinta y tres coma y tanto por ciento, como la que hemos visto, sea igual a la mayoría real. Esos parlamentarios, que también participaron en la elaboración del sistema binominal reitero que fue un traje a la medida para ellos deberían dar hoy una explicación.

La igualdad del voto se consagra en la Corte Interamericana de Derechos Humanos contra el sistema binominal puro o maquillado. Nosotros lo afirmamos. Allí se dice que es fundamental para el sufragio universal establecer la igualdad del voto, lo que en el sistema binominal no existe. ¿Cómo va a ser aceptable que en muchas ocasiones quien obtiene la segunda mayor cantidad de votos no resulte electo, pero sí el que consigue la tercera mayoría? Eso no puede ser aceptable.

Por otra parte, aquí le estamos dando mayor participación a la mujer, lo cual es notable, porque nunca antes se había hecho. Por eso, hoy los ciudadanos debemos sentirnos contentos porque estamos perfeccionando la democracia y vamos hacia un sistema que realmente le dará valor e igualdad al voto. Con ello incentivaremos una mayor participación de quienes se sienten lejanos a la política, porque podrán elegir, de entre una gran cantidad de candidatos, a aquel que crean ellos que realmente los representa, no como ocurre en la actualidad con el sistema binominal, en el que muchas veces se produce un acomodo de los partidos políticos porque están seguros de que quien figura en las listas saldrá elegido. Eso no lo podemos seguir aceptando.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra, por dos minutos, el diputado Joaquín Godoy .

El señor GODOY.-

Señor Presidente , la primera pregunta que me gustaría aclarar en este debate es por qué Amplitud votará a favor las modificaciones del Senado al proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional. La respuesta es muy sencilla: porque Amplitud quiere profundizar la democracia.

A continuación señalaré tres razones que dejan en evidencia que lo que hace el sistema binominal no es profundizar la democracia, sino limitarla.

La primera de ellas es que doblega la voluntad popular, puesto que permite que algunos candidatos a parlamentarios que obtienen la primera mayoría no sean electos, como ocurrió en el caso de Marisela Santibáñez, y que otros que obtienen la tercera mayoría, como Fulvio Rossi , estén en el Congreso Nacional.

Aquí se ha dado un ejemplo que me parece muy mal utilizado, porque se ha señalado que esa situación también se produce cuando se utiliza el sistema proporcional, como en el caso de la elección de concejales. Eso es cierto, pero sucede en el caso de diez concejales de dos mil electos, de modo que se produce mucho menos que en el caso del sistema binominal.

Los diputados de Amplitud queremos que sean los chilenos los que elijan a sus representantes, no que se doblegue la voluntad popular de manera artificial, debido a la utilización de un sistema que nos parece arbitrario.

En segundo lugar, aquí se ha dicho que el sistema binominal genera equilibrio. Sin embargo, quienes integramos Amplitud no estamos dispuestos a aceptar que se coarten las libertades de los ciudadanos para generar un equilibrio supuesto, el cual, en la práctica, no existe porque la Alianza y la Nueva Mayoría no se hablan.

En ese sentido, lo que hay es una retroexcavadora que lo que hace es destruir y rechazar todo lo que quiere la gente de la Alianza. Los equilibrios se producen cuando se tiene un grupo humano de centro mesurado, que está dispuesto a hacer los cambios que Chile necesita. Eso es lo que está planteando Amplitud: la construcción de un centro político, que sea el que dé sentido común a la política nacional.

Por último, se ha dicho, en forma reiterada, que la gran virtud del sistema binominal es que impide que haya demasiados partidos políticos, sino grandes bloques. Sin embargo, la razón por la que la gente no participa en política es porque no puede entrar, en circunstancias de que si hay gente que quiere defender a HidroAysén, a los animales o temas particulares, ojalá que lo haga desde dentro de la política.

Por las razones señaladas, Amplitud votará a favor las modificaciones del Senado recaídas sobre el proyecto de ley que establece el cambio del sistema binominal.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra la diputada señorita Camila Vallejo .

La señorita VALLEJO (doña Camila) .-

Señor Presidente , en un muro de la Alameda, en Santiago, la Brigada Chacón escribió: “El fin al binominal es un triunfo de los movimientos sociales”. Y cómo no ha de serlo si el sistema electoral binominal fue uno de los tantos amarres institucionales heredados de la dictadura, el cual ha impedido la real representación de organizaciones populares de izquierda y de movimientos sociales en el Congreso Nacional.

El sistema binominal es un enclave autoritario de la más pura bajeza antidemocrática, porque permite distritos determinados en forma antojadiza y una minoría conservadora y reaccionaria, sobrerrepresentada en el Congreso Nacional.

Sus cómplices pasivos han contado con veinticinco años con subsidio electoral y económico, como anuncian, a diario, los titulares de prensa, exclusivamente para perpetuar el legado de los cuatro jinetes del Apocalipsis. Se llaman demócratas, con hipocresía, y se dicen populares, mientras son financiados por empresas que se enriquecen ilícitamente, a costa del trabajo de los chilenos.

Recuerdo la extenuante sesión en que aprobamos este proyecto, modificado por el Senado, en primer trámite constitucional. Recuerdo perfectamente sus discursos, mentirosos y soberbios. Cómo olvidar la intervención del presidente del gremialismo, quien nos decía, con arrogancia, que frente a cualquier sistema electoral su partido seguiría siendo el más grande. Cómo no recordarlo, justo ahora, cuando estamos por aprobar, en tercer trámite constitucional, las enmiendas introducidas por el Senado a este proyecto, justo ahora que sabemos, gracias a la olla destapada por el señor Hugo Bravo , que las razones de esa arrogancia provenían de los oscuros mecanismos de financiamiento de sus campañas electorales.

Me rebelo ante este descaro e insulto para el pueblo de Chile. Pero este no es un día para detenernos en el pasado, el que la UDI tanto añora, sino para celebrar el triunfo de la democracia.

Han pasado casi tres décadas de lucha para tener un nuevo sistema electoral, que abriera paso a la representación de la Izquierda en el Congreso Nacional. Gracias a todos los que se rebelaron ante ese abuso, a los que soportaron el largo camino hasta aquí, especialmente, gracias a todos los que dieron su vida por esa causa humilde, pero tan justa. ¡Gracias, Gladys , querida! ¡Gracias, Volodia ! ¡Su legado y ejemplo de lucha nos inspiran día a día!

Hoy es un día en que podemos celebrar la democracia como una forma en que la mayoría, de manera pacífica, logrará hacer mejor al país, porque en él forjaremos dos leyes que representan a una sociedad más democrática, mejor representada, una sociedad más igualitaria, libre y pluralista.

Al terminar este día podremos decir que el Congreso Nacional de Chile aprobó una ley de cuota de género para postular al Congreso Nacional y que la Cámara de Diputados aprobó la iniciativa que regula el Acuerdo de Vida en Pareja, norma que no distingue el sexo de los contrayentes. Hoy es un día de triunfo democrático y de los movimientos sociales, de lucha por la justicia, la igualdad y la libertad.

Este 20 de enero de 2015, las palabras que Salvador Allende dijera en sus últimos momentos parecen ser anuncios de un porvenir floreciente, porque seguimos teniendo fe en Chile y en su destino, porque nuevas mujeres y nuevos hombres abriremos, de nuevo, las grandes alamedas, para construir una sociedad mejor, por donde caminemos las mujeres y los hombres libres de esta tierra.

¡Viva Chile! ¡Viva el pueblo! ¡Vivan los trabajadores!

He dicho.

-Aplausos.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Marcos Espinosa .

El señor ESPINOSA (don Marcos).-

Señor Presidente , este no es un día cualquiera, es un día histórico para nuestro país, para la representatividad y para la ciudadanía. Hoy es el día en que triunfa la democracia, pues daremos un paso enorme hacia la igualdad de oportunidades y participación a todos los sectores de la política nacional y de la sociedad.

El proyecto de ley enmendado por el Senado, cuyas modificaciones están ad portas de ser aprobadas por la Cámara de Diputados, sustituye el actual sistema binominal selectivo y segregador por uno proporcional que está en directa relación, coherencia y armonía con las reformas que el país necesita, para avanzar hacia una sociedad más inclusiva y participativa. Asimismo, elimina una de las herencias que, a nuestro juicio, ha provocado graves daños a la democracia chilena, y permite avanzar hacia un régimen acorde con las democracias modernas y más vigorosas.

Estoy consciente de que este proceso no ha sido fácil, que el debate de la iniciativa enmendada por el Senado no ha estado exento de críticas y de conflictos con aquellos que, lisa y llanamente, no quieren esta reforma, pues prefieren mantener el beneficio para los grandes conglomerados, lo que no da la oportunidad a que la gente elija a sus representantes sin resquicios ni trabas de cálculos mezquinos.

No obstante, tengo fe y convicción en que este será un gran avance para Chile, para todos los sectores de la política, sobre todo para el perfeccionamiento de nuestro sistema democrático, porque las ideas que gobiernan esta reforma son parte de una nueva política, la de todos y todas, la política inclusiva, que se alza con fuerza y entusiasmo, dando cabida tanto a aquellos que cuentan con mayor número de adherentes como a las posturas minoritarias, a los independientes, a las nuevas alianzas y, sobre todo, a los movimientos sociales, que día a día manifiestan con voz en alto que están vivos y que merecen espacio y participación en la cuna de la democracia, en el Congreso Nacional.

No quiero especificar ni profundizar en los detalles y en los aspectos legales del articulado del proyecto modificado por el Senado, pero no puedo dejar de destacar que se trata de una de las principales reformas que desde hace mucho se buscaban en el ámbito de representatividad.

Uno de los puntos más importantes de la iniciativa enmendada, el cual esbocé con anterioridad, es que permite la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas mediante la reducción del número de distritos y circunscripciones, para que se elijan más escaños en cada uno de ellos; facilita la expresión de la mayoría y la representación de las minorías y evita que queden fuera candidatos con grandes votaciones.

Además, respalda la reducción en la desigualdad del voto, a través del incremento del número de diputados y senadores del país y aumenta la competitividad respecto de quienes resulten elegidos, definiendo distritos que elijen un mayor número de diputados y permitiendo que las listas electorales presenten más candidatos que los que se eligen en cada territorio, como forma de darle equidad al sistema y mayores oportunidades de representación a quienes deciden participar en él.

Promueve un Congreso que refleja la diversidad de la sociedad, permitiendo la aplicación de una ley de cuotas que obliga a las listas a presentar elencos de candidatos con la proporción de mujeres que se determine necesaria, la que no podrá ser menor al 40 por ciento del total de las candidaturas, independientemente de la forma de nominación.

En el ámbito local del distrito que represento, quiero desatacar la buena disposición y voluntad que ha tenido el Gobierno de la Presidenta Bachelet para acoger la solicitud de los distintos sectores sociales, en orden a presentar una indicación que aumentará, de dos a tres, el número de senadores en la Región de Antofagasta, pues se trata de una vasta zona en población y territorio, con un sinnúmero de necesidades, las que serán mayormente canalizadas mediante un aumento en su representación.

Por lo tanto, solicito a mis colegas diputados aprobar la indicación que beneficia sobremanera la participación en la Región de Antofagasta y sus distintas comunas.

Agradezco la propuesta del Ejecutivo en torno a regular el financiamiento de las candidaturas, el que se encuentra en primer trámite constitucional en esta Corporación, pues, sin lugar a dudas, permitirá concluir de forma satisfactoria el proceso de reforma a la política chilena, transparentando los recursos y privilegiando las ideas innovadoras que harán de Chile el país fuerte y democrático que todos queremos.

Por último, quiero manifestar, de forma explícita e invariable, que la bancada de Partido Radical va a aprobar este proyecto de ley.

He dicho

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Nicolás Monckeberg .

El señor MONCKEBERG (don Nicolás).-

Señor Presidente , lamentablemente, hoy no estamos frente a un buen proyecto de ley. Nos habría encantado poder decir que vamos a aprobar un proyecto para el bien de Chile. Sin embargo, no se siguió ningún parámetro de aquellos que siempre deben inspirar la legislación de un país.

Estamos cambiando el sistema binominal que se hizo en tiempos de la dictadura, probablemente, entre cuatro paredes. Aunque era un menor en aquellos años, me imagino perfectamente los diálogos en el Palacio de Gobierno, donde un posible parlamentario llegaba a golpear la mesa y decía: “Señor general, necesito que tal región aumente el número de diputados, porque de esa forma compensamos con gente más proclive a nuestro sector.”. Por consiguiente, se iba haciendo el mapa electoral de acuerdo con la medida que convenía al gobierno de turno, sin preguntar a nadie ni seguir ningún principio, sino lo que más convenía al que golpeaba más fuerte durante ese gobierno.

¡Qué curioso! Han pasado los años y aquí se usan las mismas malas prácticas para modificar el sistema electoral. Sin ir más lejos, cuando ingresó este proyecto, un día martes en la noche, se comunicó al país que se integraría un número adicional de diputados. Al día siguiente, después de una comida en donde un diputado habló más fuerte que otro, se dijo: “Muy bien, a ese diputado por el norte le agregamos un cupo más.”.

El proyecto tenía que ir al Senado. Lo hizo con el apoyo de un número determinado de senadores, pero no se sabía lo que iba a ocurrir ahí. Había una senadora independiente que no tenía claro si iba a votar a favor, también un senador por Antofagasta y una pretensión en la Región de Valdivia. ¡Qué cosa más fácil! Démosle a cada uno de ellos un cupo más y garantizamos la aprobación. Como hay un grupo de diputados y senadores independientes que tiene que asegurar su sobrevivencia política, se rebajaron al mínimo grado las exigencias para que pudieran subsistir. Es decir, antes de enfrentar la elección verdaderamente como independientes, con todas las de la ley, están pidiendo subsidios para existir.

Esas discusiones en La Moneda eran, décadas atrás, antidemocráticas, porque nadie había elegido al gobierno. Lo grave es que hoy son las discusiones, los mismos métodos, las mismas presiones y las mismas transacciones en un gobierno elegido. Hay múltiples ejemplos que demuestran que aquí no se hicieron bien las cosas. Hay distritos que tienen una gran cantidad de electores y que eligen menos diputados que aquellos con menos electores. Cuando uno empieza revisar esta situación se da cuenta de que solo prima la conveniencia.

Pero esto no termina ahí. Todos quisimos darle poder a la gente para que eligiera a sus candidatos, pero aquí había otro problema, cual es adecuar a toda carrera una norma. Se optó por decir, en forma inédita, que los partidos solo podían hacer primarias para nominar solo al 40 por ciento de sus candidatos. Por lo tanto, a pocos meses de haber aprobado la ley de Primarias, estamos diciendo que el 60 por ciento de los candidatos de un partido, necesariamente por ley, se deberá nominar a dedo. Se limitaron las primarias solo al 40 por ciento. ¿Qué principio hay detrás de eso?

Hoy, la Nueva Mayoría es dominante, situación que no sucedía hace tres años. Es probable que en tres años más todo cambie. Por consiguiente, es absolutamente inmoral usar una mayoría circunstancial para hacer proyectos de reforma electoral absolutamente a la medida de algunos. Es absolutamente inmoral que un grupo independiente, para asegurar su subsistencia, transe votos en materias de esta naturaleza.

Por eso, pese a todos los esfuerzos que hicimos para llegar a un acuerdo razonable con el gobierno que le diera estabilidad a nuestro sistema electoral, votaremos en contra el proyecto.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Ramón Barros .

El señor BARROS.-

Señor Presidente , este proyecto se despachará hoy y lo votaré en contra por las razones que a continuación voy a señalar.

En primer lugar, creo razonable el hecho de cambiar el sistema binominal, entendiendo la fórmula matemática a partir de la cual se eligen los diputados en los distintos distritos. ¡Eso es el binominal! Por lo tanto, no tendría ningún problema en modificar aquello. Nunca he sido beneficiado por el sistema binominal y, por lo tanto, no me hace ningún ruido. Sin embargo, no ocurre lo mismo con los otros dos propósitos del cambio que se propone.

Primero, el aumento de parlamentarios me parece desproporcionado. El hecho de que sea solo en las capitales regionales y en Santiago contribuye decisivamente a que vayamos profundizando el dramático centralismo que se vive, particularmente en distritos como el que represento.

Segundo, el redistritaje. La realidad de la calidad de la política en Chile y la percepción ciudadana determinan que los parlamentarios, ojalá, pudiesen estar más presentes en sus zonas.

La creación de megadistritos lo único que hará es alejar a los parlamentarios de la gente. Todo lo contrario de lo que debemos hacer si queremos ganarnos el respeto y el cariño de la ciudadanía que, por lo demás, está bastante alejada de la política. Por lo tanto, el redistritaje solo va a determinar el alejamiento de los parlamentarios de su gente, al tener que acceder a un territorio que, en muchos casos, es el doble en tamaño de lo que hoy tienen como distritos.

¿Qué ocurre respecto del centralismo y de por qué a veces se aduce que hay que nivelar la desproporcionalidad del voto? Muchos de los distritos tienen una sobrerrepresentación en razón vuelvo a reiterar del centralismo que se vive en Chile, en el que todos los ministerios y el Poder Ejecutivo se encuentran en Santiago. También en regiones se vive el mismo centralismo, donde los seremi, la Intendencia y los servicios públicos se encuentran en la capital regional. Esa es la razón por la que distritos geográficamente amplios tienen una sobrerrepresentación para compensar ese centralismo abismal que ahoga a muchos de ellos.

Hay que mencionar lo que va a ocurrir en mi distrito donde, probablemente, van a haber pocos diputados producto de que se trata de muchas comunas rurales con baja densidad de población, pero con territorios amplios. Obviamente, los parlamentarios van a centrar su labor para estar en las grandes ciudades y como consecuencia de ello se va a producir una descompensación.

Por lo tanto, veo con tristeza cómo los parlamentarios van a ser alejados de la gente y se incrementará el centralismo. Además, el costo país que se producirá al aumentar en forma desproporcionada el número de parlamentarios traerá un problema de gastos a esta Corporación.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Fuad Chahin .

El señor CHAHIN.-

Señor Presidente , hoy es un gran día para nuestro país. Se cierra una etapa oscura de nuestra vida institucional; termina un sistema electoral concebido sobre la base del temor a la participación de la gente; a que este Congreso Nacional represente a la diversidad de nuestro país; a que las minorías políticas y sociales significativas también tengan un espacio en este Congreso Nacional. Existía temor a que el voto libre y soberano de los ciudadanos se expresara en el Congreso Nacional. Eso, en gran parte, genera la distancia, la desconfianza y el descrédito de nuestras instituciones democráticas como el Congreso Nacional.

Es muy importante que hoy podamos terminar, definitivamente, con este sistema electoral. El proyecto no puede dejar a todo el mundo contento, pero sin duda marca un antes y un después en nuestro sistema electoral. Hoy podemos pasar la prueba de la blancura desde el punto de vista de la representación, la proporcionalidad y el origen democrático de nuestras instituciones.

En la Sala se ha dicho que estos temas no le interesan a la gente, como si la gente se preocupara solo de los temas materiales. Ello desnuda una visión materialista de la ciudadanía. La gente quiere y valora nuestra democracia y quiere mejorarla. Los ciudadanos creen que nuestras instituciones deben representarlos de mejor manera. Entienden que un verdadero desarrollo requiere de una democracia sólida, de una gobernabilidad, y para ello se necesita que nuestro Congreso Nacional sea elegido con un sistema más representativo.

También se ha dicho, señor Presidente , que no se justifica incorporar un número mayor de parlamentarios; que están de acuerdo con que exista un sistema más proporcional y que se expresen de mejor manera las mayorías; que existan minorías significativas en el Parlamento, pero sin aumentar los parlamentarios. Sin embargo, ello es imposible si queremos, realmente, mejorar la igualdad del voto. ¡Es el colmo de lo caradura! Quienes señalan eso son los mismos que no querían eliminar a los nueve senadores designados. No les incomodaban nueve senadores más cuando eran designados a dedo, pero ahora les incomoda tener algunos parlamentarios más cuando son elegidos democráticamente por la gente para mejorar la calidad de nuestra democracia. Son los mismos que en privado presentaban propuestas para elegir 50 senadores en un caso y 54 senadores en otro. Con un populismo y una demagogia increíbles vienen a decir que en realidad ellos votan en contra porque no les gusta que existan más parlamentarios.

Requerimos que este Congreso Nacional pueda representar de mejor manera la sociedad así lo procura este proyecto donde, sin duda, la diversidad política, social y cultural de nuestro país va a estar mejor reflejada en el Parlamento.

Esta situación es buena para Chile, para la gente y para los distritos.

También este proyecto incorpora una ley de cuotas que va a permitir una mejor representación de la mujer en nuestro Congreso Nacional. Efectivamente, hay barreras culturales y económicas que dificultan la adecuada participación de las mujeres. Por eso, señor Presidente , estoy contento de que se incluya una ley de cuotas.

Por cierto, quedan algunos temas pendientes. Quiero destacar el compromiso del gobierno de asumir en proyectos distintos el tema del financiamiento electoral, que ya se está discutiendo en la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia de la Cámara de Diputados, para darle más transparencia, pero también más racionalidad y más equidad no solo al financiamiento de las campañas, sino también al ejercicio de las mismas.

De la misma manera, señor Presidente , queda pendiente una reforma a la ley de los Partidos Políticos para garantizar una mayor democracia interna y un mejor funcionamiento de los partidos.

Quiero terminar recordando y valorando el compromiso del gobierno al enviar a consulta el proyecto de ley que garantiza la participación y representación de nuestros pueblos originarios en el Parlamento.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Leonardo Soto .

El señor SOTO.-

Señor Presidente , todos los problemas de la democracia se curan con más democracia. Hoy es un día histórico para la democracia chilena. Terminaremos con un sistema binominal que es herencia de una dictadura, que es único en el mundo y que está socavando la confianza en nuestra democracia.

Hace ya 25 años que el pueblo de Chile venía pidiendo terminar con los cerrojos o candados que limitan, coartan y desprestigian a nuestra democracia y que, como sabemos, tiene su origen en la Constitución. Como profetizaba el propio señor Jaime Guzmán , “una Constitución que no importe quién gobierne, porque nadie puede hacer algo distinto a lo que haríamos nosotros.”.

Como pilar fundamental de este modelo tramposo destaca el sistema electoral binominal que nos condena a un eterno empate electoral. Lleva más de dos décadas excluyendo a millones de chilenos de las decisiones importantes de este país, impidiendo cambios profundos y entregando, elección tras elección al igual que el Grupo Penta su generoso aporte, un potente subsidio electoral que iguala al 30 por ciento del electorado con el 60 por ciento restante; es decir, transforma por arte de magia a una minoría en mayoría.

Aferrada a esos subsidios y al poder de veto que le entrega, ha sido la derecha quien más se ha beneficiado de estos y otros subsidios y ha determinado qué cambios y cuándo se hacían. Como resultado de todo esto, para millones de chilenos el acto de votar ha ido perdiendo todo sentido porque entienden que nada importante se juega en una elección parlamentaria. Esto explica que la participación y la confianza ciudadana en la elección hayan bajado dramáticamente a niveles nunca vistos. El gráfico de participación electoral es descendente, desde el 86 por ciento de 1989 al 44 por ciento de 2013.

Como resultado de este descenso, Chile es el segundo país con mayor abstención electoral en América Latina y el cuarto de todos los países que conforman la OCDE. Si a esto le sumamos la sostenida baja y descendente nivel de confianza de los ciudadanos en los partidos políticos, en el Congreso Nacional y en todas nuestras instituciones democráticas, tenemos una combinación que hoy ya es una bomba de tiempo.

Como se puede comprobar, la gran mayoría de los chilenos ha ido perdiendo la fe en este sistema electoral binominal y también en nuestra democracia, pues trata injustamente y excluye a millones de chilenos.

Por lo tanto, son muy pocos los que en estas condiciones pueden tener interés en defender y mantener este sistema. Los únicos que defienden la mantención del sistema electoral binominal lo veremos durante la votación de la tarde son solo sus beneficiarios. Por eso nace la Nueva Mayoría, para sustituir el sistema binominal; para realizar esta y otras tareas pendientes que dejó la antigua Concertación; para realizar los cambios que no pudo o que no quiso hacer. Por ello la ciudadanía nos entregó una mayoría nunca antes vista en los últimos 25 años en nuestro Congreso Nacional. Apoyados en esa mayoría más del 60 por ciento de los electores en las urnas; tres quintas partes de la Cámara de Diputados y del Senado, los que no le tememos a la democracia enfrentamos con decisión y convicción este cerrojo maestro de otra época que vamos a reemplazar por un sistema electoral mucho más democrático. El sistema proporcional moderado e inclusivo que lo sustituye va a traer más democracia a nuestro país.

Solo quiero destacar un avance importante que contempla el nuevo sistema proporcional: la acción positiva respecto de las mujeres que contempla el proyecto. Tenía que ser una mujer, nuestra Presidenta Michelle Bachelet , la que propusiera a esta Corporación una ley de cuotas para asegurar por fin la participación de las mujeres en la actividad política y promover la inclusión de ellas en todas las áreas de la sociedad.

Nos hemos demorado 25 años y muchos de quienes contribuyeron a la recuperación de la democracia y lucharon contra este enclave autoritario nos miran desde otro mundo. Después de votar esta reforma podremos decir, parafraseando a Martin Luther King , que de esta montaña de exclusión y autoritarismo, que viene de los años 80, labraremos una mejor democracia y una piedra de esperanza para nuestro país.

En consecuencia, en nombre de millones de chilenos excluidos, desafectados y decepcionados de nuestra democracia digo: “Chao binominal; bienvenida más democracia para Chile”.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Jorge Insunza .

El señor INSUNZA.-

Señor Presidente , muchos de los que estamos aquí sentimos que este va a ser un día histórico, pues después de 25 años y de distintos intentos vamos a terminar finalmente con el sistema electoral binominal. Se trata de una gran noticia tanto para el país como para nuestra democracia. Creo que la gente lo intuye como algo valioso que ha venido a reparar la tradición histórica del país.

Fíjense que recuerdo las conversaciones que ya teníamos en los años 80, porque el sistema binominal ya estaba consagrado en la Constitución de 1980 respecto del Senado, pues establecía que se debía elegir dos senadores por cada circunscripción. Respecto de la Cámara de Diputados todavía no existía una definición similar, pues ese dibujo se hizo, como se ha señalado en el debate, después del plebiscito de 1988. La dictadura armó los distritos sobre la base de esos resultados buscando su mejor beneficio. Esa artimaña, propia de una dictadura, es la que estamos desarmando hoy.

Muchos olvidan que además de la composición binominal del Congreso existían los senadores vitalicios, cargo reservado para todos los ex Presidentes de la República o los que se tildaran como tales, como ocurrió con Pinochet, que llegó a jurar como senador de este Congreso, y los senadores designados un ex ministro de Estado , un ex rector de universidad estatal o reconocida por el estado, un ex comandante en Jefe del Ejército , un ex comandante en Jefe de la Armada , un ex comandante en Jefe de la Fuerza Aérea y un ex general Director de Carabineros , un ex contralor General de la República y dos ex ministros de la Corte Suprema. En otras palabras, estábamos hablando de 9 senadores designados. Nada dice la derecha respecto de lo que ello significaba como carga financiera para el Senado y para el Congreso.

¡Ello recién se desarmó en 2005! Hubo todo un trayecto en donde hubo distintos intentos para ir desarmando este sistema electoral binominal. Ese entramado es al que hoy se pone fin con la votación que vamos a tener en unos momentos más. Creo que es algo valioso, por cuanto nos vamos a reencontrar con la tradición del país, y eso es lo más significativo.

Detrás de la construcción de este sistema electoral binominal estaba la pretensión de llevar a Chile a un sistema de dos partidos. Reproducir el modelo norteamericano o el de otros países que tienen dos grandes partidos no tiene nada que ver con la tradición de Chile.

Nuestra tradición, desde sus orígenes, es la constitución de un sistema pluripartidista, con distintas expresiones, pero que también en distintos momentos iba siendo capaz de construir grandes coaliciones. La cultura de coaliciones es distinta, porque representa diversidades que son capaces de articularse como un proyecto común en torno de un gobierno, de un programa y de un conjunto de desafíos. Esa esencia de la historia republicana chilena es la que se está recuperando ahora, porque este sistema proporcional moderado facilita ambas cosas: la expresión de la diversidad de fuerzas políticas que existen en el país, pero, al mismo tiempo, favorece la creación de grandes coaliciones capaces de dar sustento a un gobierno.

A mi juicio, hay muchas objeciones que se caen por su propio peso. Aquí hay argumentaciones que se contradicen lógicamente unas con otras. Algunos han planteado que quieren reforma al sistema binominal, pero que van a votar en contra del proyecto. Otros, quieren una mejor representación de las regiones, pero alegan en contra de la igualdad del voto, lo que obviamente supone una contradicción, porque si queremos que más regiones, que tienen menos población, puedan tener mejor representación en el Congreso, tiene que haber una desigualdad razonable del voto respecto de las grandes ciudades que sabemos que están concentradas solo en tres regiones. En fin, hay mucha argumentación barata que quiere fijar un último refugio.

El diputado Nicolás Monckeberg recién cuestionó la forma en que se fue construyendo este acuerdo. Pues bien, su devenir fue propio de la lógica democrática. Se van construyendo conversaciones, integrando tanto fuerzas como visiones y a partir de ello se van modificando los proyectos. ¿Qué sorpresa hay de que en el debate parlamentario ese es el modo de resolver precisamente cuestiones fundamentales como estas? Hoy estamos alcanzando el quorum exigente de los tres quintos para materias que tienen esa complejidad.

Lamentablemente, Renovación Nacional, una vez más, no fue capaz de subirse y de ser parte de un acuerdo. Recuerdo muy bien el intento que hizo, en 1995, Andrés Allamand que, incluso, concurrió a conversaciones con el gobierno para buscar una solución al sistema binominal. Lo que recibió fue un portazo interno, sobre todo de sus senadores, quienes se negaron a ese acuerdo. Luego, en torno de las reformas de 2005, incluso Sebastián Piñera se declaró a favor de construir soluciones que permitieran terminar con el sistema binominal, pero de nuevo las divisiones internas de Renovación Nacional impidieron que se construyera ese acuerdo. Ahora nuevamente se repite la historia. Valoramos la disposición que tuvo el diputado Cristián Monckeberg de construir acuerdos, pero –repito de nuevo las divisiones internas en Renovación Nacional impidieron que su presidente tomara la iniciativa y fuera capaz de llegar a un acuerdo con el gobierno.

Todo cuestionamiento al proyecto hoy carece de seriedad. Valoramos el acuerdo amplio, construido más allá de la Nueva Mayoría, para que podamos asistir hoy a este momento histórico en que se desarma uno de los últimos enclaves de la dictadura, cual es el sistema binominal.

Sin embargo, queda algo pendiente y extraordinariamente medular en la Constitución. Me refiero a su núcleo ideológico. Por ello, a partir de esta reforma, debemos caminar hacia una nueva Constitución, que permita tener un ordenamiento institucional basado en concepciones democráticas y en el que nuevamente se respete la tradición democrática de Chile.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Pedro Browne.

El señor BROWNE.-

Señor Presidente , hoy es un gran día para nuestra democracia; es un día de alegría, un día en el que debemos celebrar que dejamos atrás un sistema electoral que nos ha dividido, que ha hecho que la política sea monocromática: en blanco y negro, con una lógica de agrupación y de funcionamiento que tiene que ver más bien con el pasado; una lógica que está completamente vinculada con la historia, con el Sí y el No, y no con la mirada de futuro que debemos tener para entregar respuestas a la sociedad actual.

Hoy estamos avanzando hacia un sistema electoral que empieza a romper con el miedo de la gente, con el miedo a que la ciudadanía se exprese y a que sean los chilenos los que determinen quién tendrá mayoría en el Congreso Nacional.

En los últimos días se han dicho muchas cosas que considero bueno desmentir y aclarar. En primer lugar, se ha planteado que el sistema no mejorará la proporcionalidad del voto.

Siempre se usa como ejemplo la Región de Atacama y se afirma que, pese a contar con similar número de electores que la ciudad de Iquique, quedará con cinco diputados, mientras que en Iquique se elegirán tres.

Al respecto, quiero decir que, primero, hoy aquella desproporción es doble, porque Iquique tiene dos diputados y Atacama tiene cuatro, y que, gracias al nuevo sistema, se baja 1.6. Por lo tanto, se hizo una corrección, aunque, evidentemente, se pudo haber corregido más.

Llama la atención que algunos hoy amenacen con recurrir al Tribunal Constitucional. Me pregunto: ¿por qué si durante 25 años la desproporción fue muchísimo mayor a la que se obtendrá con el nuevo sistema, ninguna de esas personas siquiera hizo el asomo de acudir al Tribunal Constitucional para terminar con esa tremenda distorsión?

También se dice que el nuevo sistema es un traje a la medida para la Nueva Mayoría. Les digo: “Este es un traje a la medida para la democracia”. En este caso, nuevamente se da el ejemplo majadero de Atacama: quieren que los chilenos creamos que, porque en esa zona hay una buena votación de la Izquierda, se quiere agregar un parlamentario para favorecer a la Nueva Mayoría. Sin embargo, las cifras son claras y, a veces, la realidad supera la teoría. Hoy, en Atacama, hay cuatro diputados elegidos a través del sistema binominal y son de la Nueva Mayoría. Probablemente, el nuevo sistema nos llevará a un resultado de tres a dos. Por lo tanto, a quien quiera pretender establecer que para la Izquierda tres a dos es mejor que cuatro a cero, le pido, ¡por favor!, un poquito de seriedad en el debate.

Por lo demás, las elecciones no se ganan con un sistema electoral, sino con votos y con la capacidad de hacer propuestas claras y concretas que convenzan y convoquen a votar a la ciudadanía. Asimismo, las elecciones se pierden con malas decisiones políticas y con mala elección de candidatos, como bien lo sabe la Alianza. Lo ocurrido en Coquimbo y Atacama en las últimas elecciones senatoriales es un ejemplo claro de que las malas decisiones llevan a malos resultados.

También hemos escuchado que no ha habido capacidad de dialogar ni espíritu para llegar a una propuesta transversal. Al respecto, quiero expresar que no se está aprobando una reforma gracias a un voto más, sino con el voto favorable de tres quintos del Congreso Nacional, es decir, con una mayoría que en 25 años no había existido. Por lo tanto, no estamos hablando de un voto más o uno menos; por el contrario, se trata de una contundente mayoría que, efectivamente, quiere cambiar el sistema binominal, porque sabe que se acabó el tiempo de los eslóganes y de las buenas intenciones. La historia nos va a juzgar y verá quiénes dimos nuestros votos para que el sistema perverso terminara.

Me constan los esfuerzos del presidente de Renovación Nacional para sacar adelante un acuerdo, pero también me consta cómo sus propios senadores le quitaron el piso, una y otra vez, para que no se lograra dicho acuerdo. Por ello, no señalemos con el dedo a los que sí estuvieron para aprobar la reforma, porque la incapacidad interna de lograr acuerdos y tener una propuesta concreta fue la que les impidió hoy votar a favor del término del binominal.

No nos quedemos en dimes y diretes. Hoy, como señalé, es un día de alegría y de celebración para nuestra democracia, porque estamos pasando a un sistema más inclusivo, más participativo, que generará competencia real, pues quienes compitan tendrán la posibilidad cierta de obtener un escaño parlamentario; en el que las mayorías deberán ejercerse de buena manera y en el que las minorías tendrán la posibilidad de estar representadas. De esa manera, el Congreso Nacional se parecerá más a Chile, pues habrá mayor representación de las regiones, habrá más mujeres y más jóvenes. Esperemos que en un futuro próximo avancemos para asegurar una representación adecuada de nuestros pueblos originarios.

Además de la reforma al sistema electoral, esperamos que el presente año se califique con urgencia el proyecto que limita las reelecciones, el cual ya fue aprobado en la Cámara de Diputados. Asimismo, esperamos que se avance en la iniciativa que perfecciona el financiamiento de las campañas políticas. Pero no podemos quedarnos solo en el financiamiento de las campañas; también debemos avanzar en la ley de partidos políticos, para lograr mayor transparencia y mayor democracia interna en cada una de las colectividades, y para transparentar, de una vez por todas, el financiamiento de las mismas, lo cual hoy es una verdadera caja negra.

Por ello, Amplitud reafirma su compromiso de terminar con el sistema binominal no solo en su discurso, no solo en la convicción que nos guió desde el primer día que formamos nuestro movimiento, sino, también, con sus votos. La idea es avanzar, de una vez, hacia una democracia moderna, sin protecciones y plena.

He dicho.

-Aplausos.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Guillermo Teillier.

El señor TEILLIER.-

Señor Presidente , con alegría, podemos decir: “Al fin un sistema electoral proporcional”.

Se acaban los privilegios que ha otorgado el sistema binominal, especialmente a la UDI. La cancha se empareja y, por lo tanto, iremos a las elecciones en un pie de mayor igualdad.

Solo falta derribar otro privilegio que también ha favorecido durante muchos años a un partido como la UDI. Me refiero a los fondos reservados, en especial, cuando son mal habidos.

Con la Ley de Transparencia esperamos evitar, para siempre, el desprestigio que para la política está significando el caso Penta y, también, los esfuerzos que hacen los involucrados para empatar y para embarrar a todos con la suciedad de su proceder.

Estamos satisfechos, porque ha culminado una lucha que iniciamos en 1996, en las calles, por la democratización del país, con Gladys Marín , quien, en nombre de nuestro partido, propuso a los entonces partidos de la Concertación llevar adelante un pacto instrumental con el objetivo principal de cambiar el sistema electoral. Estábamos conscientes de que el sistema binominal era un candado, una traba que impedía avanzar en cambios democráticos y de justicia social en nuestro país.

Se ha hecho mucho caudal a raíz del aumento de diputados y senadores, y de los gastos que aquello podría involucrar. Al respecto quiero decir dos cosas.

En primer lugar, considero que con lo que va a ahorrar el Estado cuando se ponga fin a los gastos reservados, que son recursos con los que se burla al fisco en el pago de impuestos, recuperaremos gran parte de los nuevos gastos que implique el aumento de parlamentarios.

En segundo lugar, quiero decir que si nos propusiéramos rebajar en un 10 por ciento las asignaciones, las dietas y los gastos que hoy tenemos los parlamentarios, perfectamente sería posible autofinanciar la llegada de nuevos legisladores al Hemiciclo. Ello sería posible si existiera la voluntad política. De esa forma no tendríamos que andar desprestigiando un cambio democrático tan profundo como el presente, aduciendo que se gastará más dinero del Estado.

No obstante, si así fuere, es un gasto necesario, porque la democracia es necesaria para nuestro país, sobre todo hoy que la ciudadanía exige mayor transparencia y mayor participación.

Nos alegramos de haber contribuido a la unidad y a la convergencia de los partidos que conforman la Nueva Mayoría, lo cual ha hecho posible esta reforma trascendental, propiciada por el Ejecutivo que encabeza la Presidenta Bachelet .

Es más, hay que decir con toda franqueza que los votos de la Nueva Mayoría no alcanzaban para derribar los quórum calificados impuestos en el Congreso Nacional, normativa que algún día deberemos discutir. Quiero saludar a sectores como Amplitud, que aportaron con su voto y que están contribuyendo a llevar adelante este cambio trascendental para la democracia chilena.

Estamos conformes porque se está cumpliendo aquello por lo que lucharon los detenidos desaparecidos, los ejecutados, los exiliados y los torturados. No olvidamos que nuestro país tiene una deuda con ellos. Por eso, en su nombre, votaremos a favor este proyecto y seguiremos luchando por la democracia y la justicia social en Chile.

He dicho.

-Aplausos.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado José Pérez .

El señor PÉREZ (don José).-

Señor Presidente , estamos discutiendo un proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por un sistema proporcional. Está bien, me parece más justo y adecuado. Desde hace muchos años se venía planteando. Pero también hay que ser ecuánime en reconocer que el sistema binominal ha beneficiado a unos y a otros; de hecho, no menos ha beneficiado a la Nueva Mayoría para que tenga senadores que, de otra manera, nunca habría tenido, y también diputados en un número muy importante. Así que, en cierta medida, hay que darle las gracias al binominal.

Lo que no me parece es que este cambio al sistema binominal vaya amarrado a dos cuestiones que me parecen no lo suficientemente bien consideradas, tratadas, pensadas y decididas, como son el redistritaje y el aumento de parlamentarios.

El aumento de diputados de 120 a 155 no cabe duda alguna de que es una medida impopular. Nosotros dependemos de la votación, que es voluntaria. Me parece que a la ciudadanía no le va a gustar el aumento del número de diputados; quizás sí el de senadores, porque hay muy pocos en este momento; podría ser. Pero aumentar de 120 a 155 cuando no gozamos del prestigio que deberíamos tener a nivel nacional, me parece una medida precipitada.

Para qué hablar del redistritaje, una cuestión hecha en forma un poco precipitada. Incluso, en un comienzo, en mi distrito había quedado fuera la comuna de Alto Biobío: grave error. De acuerdo con el redistritaje, el distrito 47, que actualmente represento, se une al distrito 46. Las dos comunas más cercanas entre ellos están a más de 100 kilómetros de distancia.

Con estas medidas estamos alejando a los parlamentarios de la gente, lo que me parece tremendamente grave. Hay que decirlo, porque uno tiene que expresar lo que piensa y no lo que a los demás les gusta que uno diga. Creo que con el redistritaje, efectuar su labor les va a costar a los parlamentarios el doble en recursos de lo que les costaba antes. Por eso, discrepo de algunos parlamentarios de la Alianza por Chile que han dicho que este es un traje a la medida para la Nueva Mayoría. A la larga, el redistritaje beneficiará a los sectores de más recursos del país, porque para hacer campaña en distritos que abarcan el doble de la superficie que cubrían antes, o en circunscripciones mayores a las anteriores, habrá que gastar muchos más recursos, con los cuales no cuentan los sectores de la Nueva Mayoría. ¿Acaso no se han dado cuenta de ello los expertos en esta materia?

Por eso me parece que hemos actuado en forma apresurada. En definitiva, los parlamentarios que integramos la Nueva Mayoría no vamos a obtener un buen resultado.

Lamento discrepar en este aspecto. Por cierto, ¿cómo no voy a discrepar respecto de la unión de los distritos 46 y 47, que numéricamente están juntos, pero que geográficamente están tan distantes y poseen realidades tan diferentes? Uno es cordillera y el otro es costa. El distrito 47, que tiene como capital Los Ángeles, deberá unirse con el 46, que corresponde al sector costero de Lota y Arauco, un gran distrito y con muchas necesidades, pero cuyas comunas más próximas están a más de 100 kilómetros de distancia entre sí. Es como si hiciésemos un redistritaje para unir Valparaíso con Cerrillos. Creo que eso no corresponde desde ningún punto de vista, toda vez que entorpecerá y dificultará la gestión del parlamentario, que tiene que estar cerca de la gente para conocer sus problemas y ayudar a resolverlos. Esa es la gestión del parlamentario. Pero si se establecen distritos compuestos por comunas separadas por esa distancia, se obligará al diputado a viajar horas para trasladarse de un punto a otro. Me parece que eso es no estar haciendo bien las cosas.

También tengo que disentir acerca de la gran cantidad de parlamentarios que se quedan en la Región Metropolitana. Santiago sigue siendo Chile. Se establecerán algunos distritos en Santiago que con aproximadamente 380.000 electores elegirán ocho parlamentarios, en circunstancias de que otros en regiones, que tienen más de 425.000 electores, solo elegirán cinco parlamentarios. Eso es desigualdad. Es el resultado de no haber hecho las cosas con un poco más de pausa y de estudio, a fin de hacer un redistritaje más equitativo.

El hecho de que un tercio de los parlamentarios pertenezca al Gran Santiago, no se condice con la representación de las regiones del país. Por consiguiente, me merece muchas dudas este proyecto. ¡De acuerdo! terminemos con el binominal, pero analicemos con más detención las demás materias, que son muy importantes para el futuro político del país.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Felipe Kast.

El señor KAST (don Felipe).-

Señor Presidente , la verdad es que hoy deberíamos estar celebrando. Hay un consenso nacional en que el sistema binominal debía quedar atrás. Por lo mismo, me alegra que Evolución Política lo haya planteado así desde el inicio. Votamos a favor la idea de legislar. Desgraciadamente, lo que ocurrió durante la tramitación de este proyecto no nos permite celebrar, porque lo que debió haber hecho el Ejecutivo para evitar hacer aquello que critica que ocurrió en la dictadura, era haber llamado a una comisión transversal que diseñara un nuevo sistema electoral, sin sesgo alguno. Pero no quiso. Incluso, esa comisión no tendría por qué haber estado conformada por parlamentarios. Podría haber estado integrada por un grupo de personas independientes, que miraran el asunto sin conflictos de intereses. Pero no se hizo. Y como no se hizo, finalmente terminamos con un nuevo sistema que, pese a que permite celebrar el término del binominal, nos deja con muchas tareas pendientes. Estoy seguro de que este debate del nuevo sistema electoral quedará abierto para las próximas elecciones presidenciales, lo que le hace mal a la democracia.

Digamos las cosas por su nombre: el único motivo por el cual estamos aumentando el número de parlamentarios es el conflicto de intereses que está presente, pues sabíamos perfectamente que podíamos terminar con el binominal sin aumentar el número de parlamentarios, y con la misma proporcionalidad.

Por lo tanto, dejemos de vender historias que sabemos que no son ciertas. Sabemos que este es un traje a la medida de los incumbentes, de los que estamos en esta Sala, y que los únicos que tenemos que celebrar somos nosotros. Los que están afuera, que podrían haber esperado que nosotros no actuáramos de acuerdo con este conflicto de intereses aumentando el número de parlamentarios, no tienen nada que celebrar.

Otro asunto que también nos hubiera encantado que estuviera presente en el proyecto es el siguiente. Como Evolución Política fuimos a La Moneda a visitar al ministro del Interior para pedirle una sola cosa muy simple: además de que no se aumentara el número de parlamentarios, incluir un límite a la reelección de los mismos. Tampoco se nos hizo caso. Por lo tanto reitero, el resultado de esta reforma es un traje a la medida de quienes estamos acá.

Insisto, creo que hoy podríamos estar celebrando y haber dado un ejemplo de buena política. Sin embargo, cuando se tiene una mayoría circunstancial o una mayoría suficiente para poder diseñar ciertas políticas, obviamente se cae en el conflicto de intereses de diseñar un traje a la medida de uno mismo.

Me da tristeza ver en mi primer año de ejercicio como parlamentario esta mala práctica de la política. Por eso, invito a todos a llevar este proyecto de ley a comisión mixta, a fin de que elaboremos un sistema electoral transparente y de que no se aumente el número de parlamentarios, porque ello solo nos beneficiará a nosotros.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Jorge Ulloa.

El señor ULLOA.-

Señor Presidente , en esta materia he escuchado muchas celebraciones. La verdad es que este es un día muy feliz para el mundo político, pero no para Chile.

Desde el punto de vista de lo que ha sido Chile y su historia, decir que es muy bueno volver al mismo sistema que rompió violentamente en 1973, no me parece justo para el país.

Tampoco me parece justo que se hable tan suelto de cuerpo de pluripartidismo. Hoy existe pluripartidismo. Lo que ocurrirá es que el sistema electoral que no es otra cosa que un modelo matemático que permite que los votos se conviertan en escaños que se establecerá va a generar un multipartidismo extremo. Y la verdad es que los multipartidismos extremos y el equilibrio o la permanencia democrática no se llevan de la mano. Es así de claro. La estabilidad democrática usualmente opera en pluripartidismos moderados, en bipartidismos o en bloques de a dos.

Tampoco es verdad que el sistema binominal buscaba la existencia de dos partidos. Eso es no entender nada, es no saber nada, es no haber estudiado siquiera el tema. Con él se buscaba generar acercamientos y evitar el tremendo distanciamiento ideológico que llevó a Chile al enfrentamiento de 1973 que, ojalá, no se repita. Eso es, básicamente, lo que ocurrió. Por lo tanto, estamos frente a la posibilidad de volver a colocar a la democracia en riesgo, desde mi modesto punto de vista.

Por cierto, no hay ningún sistema electoral que sea más democrático que otro. Afirmar lo contrario es otra falsedad. Desde el punto de vista de la ciencia política, es evidente que cualquier sistema electoral es útil en la medida en que la ciudadanía quiera o sistemas mayoritarios o sistemas proporcionales. Debo confesar que no me gustan los sistemas proporcionales, porque provocan distanciamiento ideológico, cada vez más acentuado, y porque, además, facilitan un multipartidismo extremo, muchas veces incompatible con la estabilidad democrática.

Me gustan los sistemas mayoritarios. Por lo demás, en esta legislatura más que en ninguna otra, hay parlamentarios, sobre todo de la izquierda, que se han visto absolutamente beneficiados con el sistema binominal; están presentes en esta Sala e, incluso, han hablado en este debate. Me parece que hablar sabiendo cómo son las cosas es una desfachatez. Pero puedo comprenderlo, porque muchos han hablado sin tener idea y solo repiten monsergas y eslóganes.

Es cierto que los sistemas electorales van a ser modificados dependiendo de lo que quiera la sociedad. Por ende, puedo aceptar que se busque un cambio sobre la base de una mayoría que, por cierto, es circunstancial. Sin embargo, no me parece justo que se demonice un sistema que, en términos prácticos, ha permitido que muchas de las señoras diputadas y de los señores diputados se paseen por el mundo mostrando a Chile como un tremendo ejemplo. Eso lo ha permitido el sistema binominal, que tampoco nació, como dijo un colega de la Alianza, entre cuatro paredes, donde se recibió a políticos de un solo lado. No, no se recibió a nadie. Se elaboró en comisiones, pensando en Chile. Es probable que a muchos no les guste, pero ningún sistema electoral por favor, revisen la historia; respeten la historia de Chile se ha hecho en democracia. Si queremos hacer un cambio, hay que decir la verdad. Hoy, en nuestro país se ha mentido. Se demonizó un sistema electoral, pero la verdad es que se demonizó con falsas acusaciones y, lo que es peor, con falsas expectativas.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Matías Walker .

El señor WALKER.-

Señor Presidente , saludo a la ministra secretaria general de la Presidencia quien, junto a la ministra del Sernam , ha liderado el trámite de este proyecto en el Congreso Nacional. Estamos en su tercer trámite y, por tanto, debemos referirnos forzosamente a los cambios introducidos por el Senado. Este es un día histórico. Los 22 diputados de la Democracia Cristiana vamos a decir fuerte y claro: ¡Chao al binominal! Luego de 25 años, estamos por reformas profundas para democratizar nuestro sistema.

Por primera vez, los incumbentes, los actuales diputados y senadores, vamos a votar por cambiar el sistema electoral. Es decir, vamos a votar por cambiar las reglas del juego, bajo las cuales hemos sido electos. Muchas veces, fue el egoísmo y el cálculo pequeño el que impidió avanzar hacia un sistema plenamente representativo. Por eso, aprobaremos esta iniciativa para tener un Congreso Nacional mucho más representativo de la diversidad de Chile; con más mujeres, porque vamos a tener una ley de cuotas, gracias al excelente trabajo de nuestra diputada Yasna Provoste ; con más jóvenes, porque habrá más oportunidades para que puedan desafiar a los incumbentes, que somos nosotros; con más independientes y con más representantes de las regiones.

Mucho se ha criticado la supuesta desproporcionalidad que se habría originado con los cambios introducidos por el Senado precisamente a la composición de la Cámara Alta, pero ha habido que compatibilizar la proporcionalidad con la debida representación de regiones, pues, de lo contrario, para tener la misma proporcionalidad, habría que fusionar regiones, como ocurría antes de 1973.

Sin embargo, cada región quiere tener sus propios representantes. Al respecto, el diputado Pedro Browne dio un muy buen ejemplo. El electorado de Oposición no tiene diputados en la Región de Atacama. La UDI y Renovación Nacional no tienen senadores en la Región de Coquimbo. ¡Qué tremenda desproporcionalidad tener un Senado que no represente a todos los sectores!

Mucho alegan, discuten y critican respecto del aumento de los senadores. Sin embargo, no tenían problema con un Senado con 54 miembros, compuesto en un tercio por senadores designados, pero sí tienen problema con uno compuesto por 50 senadores elegidos democráticamente, en que las regiones van a tener más representantes, en desmedro de la Región Metropolitana ¡Qué bueno que sea así, porque debemos tener inducción de desarrollo hacia las regiones!

Ellos critican el aumento de senadores, pero omiten que en las propuestas sobre el cambio al sistema binominal que hicieron la UDI y Renovación Nacional por escrito, contemplaban el aumento de senadores. Lo que ocurrió fue que no se aceptó exactamente la fórmula que ellos querían. Sin embargo reitero, también le propusieron al ministro del Interior un aumento de senadores. El diputado Cristián Monckeberg , presidente de Renovación Nacional , había llegado a un acuerdo con el gobierno, pero fueron los propios senadores de su partido los que le quitaron ese acuerdo y ese piso, que habría significado que se sumaran a este paso histórico que estamos dando.

Por lo tanto, luego de 25 años, se acabaron las excusas. Los diputados de la Democracia Cristiana decimos: ¡Chao al binominal!

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Luis Rocafull .

El señor ROCAFULL.-

Señor Presidente , hoy más que nunca asisto con la mayor de mis convicciones a apoyar con todas mis fuerzas este proyecto de reforma al sistema binominal, que ha tenido reprimida por tantos años la verdadera expresión de representatividad en el Congreso Nacional.

Quiero focalizar mi intervención en dos aspectos importantes. Primero, para algunos habrá una sobrerrepresentación de algunas regiones en la Cámara de Diputados, pero nadie dice que aquellas son las más lejanas, las regiones extremas, que por décadas han sido postergadas por el recalcitrante centralismo. Ahora, cada una de ellas tendrá tres diputados. En suma, tendremos un Parlamento más regionalista.

Este apoyo lo realizo con más seguridad aún al saber que, una vez aprobado el proyecto con la votación favorable de la gran mayoría de mis colegas, haremos justicia con la región que con orgullo represento.

Arica y Parinacota es la única región en Chile que hasta hoy no tiene senadores. Permítanme relatarles una curiosidad. Solo dos ariqueños en toda la historia del Congreso Nacional han llegado a ocupar un asiento senatorial. Me refiero a Luis Valente Rossi , senador comunista, muerto en el exilio, en Génova, Italia , y a Humberto Palza Corvacho , senador democratacristiano, digno representante de nuestra ciudad.

Actualmente, nadie nos representa en la Cámara Alta, lo que a mi juicio constituye un atentado contra la democracia y una violación a nuestros derechos constitucionales.

Sin embargo, el proyecto que estamos debatiendo repara esa omisión o, como alguien diría, ese error involuntario, y permitirá que en el Senado haya presencia de legítimos representantes de los ariqueños, ariqueñas, parinacotenses y parinacotensas.

El aumento en el número de legisladores no es antojadizo ni arbitrario. Es una corrección de la actual subrepresentación de las zonas más aisladas y olvidadas de nuestro país, y una medida necesaria para garantizar la mejor democracia posible, porque los habitantes de las regiones extremas estamos cansados de que mentes iluminadas de Santiago alumbren el camino por el que debemos transitar.

No solo queremos mayor descentralización para ser protagonistas de la construcción de nuestro país; también exigimos tener presencia en el Parlamento, para aportar con nuestra historia, con nuestra identidad, con nuestra cosmovisión. Queremos ser protagonistas del destino de nuestro país.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Ramón Farías .

El señor FARÍAS.-

Señor Presidente , ya se ha dicho todo sobre los aspectos técnicos del proyecto. Solo quiero manifestar que por fin estamos rompiendo con uno de los principales amarres dejados por la dictadura. Estamos rompiendo con privilegios de algunos por sobre la mayoría; estamos concretando el anhelo de contar con un Congreso Nacional totalmente representativo del voto de los ciudadanos.

Hace algunos años, cuando discutíamos sobre romper con el sistema binominal, la derecha nos decía lo mismo que hoy, pero con otras palabras: el binominal no es algo que le interese a las personas. Con eso trataban de engañar a la gente haciéndola sentir que su voto no era algo que importara, o que tampoco lo era la forma en que resultaban elegidos sus propios representantes.

Efectivamente, los que tenían menos votos salían elegidos. Tenemos el emblemático caso de San Bernardo, en el que una candidata obtuvo la primerísima mayoría, pero hoy no está en el Congreso. ¿Es eso justo? Aunque no sea de nuestro partido, consideramos que no es justo que alguien que sacó una primera mayoría, dentro de una comuna y de un distrito, no esté representado en el Parlamento.

¿Qué ocurre después?

Los ciudadanos se siente decepcionados y dicen que los políticos no representamos a nadie, pues sienten que el sistema no tiene legitimidad. Las personas se encuentran con que votan por un candidato que finalmente, debido a un sistema extraño que la gente no entiende, que arroja resultados con números complejos y complicados que se cruzan, no resulta elegido.

Eso es lo que ha ocurrido durante todos estos años: hemos tenido un Congreso binominal que no representa los intereses reales de los ciudadanos.

Hemos logrado, como señaló otro diputado , una mayoría circunstancial. Creo que la mayoría del país es la que ha elegido a los diputados que estamos en este Hemiciclo y que hemos logrado alinearnos detrás del programa de una candidata, actualmente la Presidenta Michelle Bachelet , que planteó cambiar, sí o sí, el sistema binominal.

Y no solo el sistema binominal, sino también, el sistema educacional, con educación gratuita y de calidad para todos. Por eso la derecha está desesperada, pues hoy se está cumpliendo algo que el pueblo, que la gente nos pidió que hiciéramos. Nos pidió que cambiáramos la Constitución: lo vamos a hacer; que hiciéramos una reforma tributaria: se hizo; que cambiáramos el sistema binominal: se está haciendo. Hoy se va a acabar este enclave de la dictadura. Estamos haciendo lo que la gente nos pidió.

La derecha ha logrado instalar el miedo en las personas, diciendo que la reforma tributaria hará pagar impuestos a quienes nunca lo han hecho, y que el cambio al sistema binominal será una pérdida de plata para el país, en circunstancias de que lo que traerá será más democracia y mayor representatividad del pueblo en el Congreso Nacional.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra la diputada Alejandra Sepúlveda .

La señora SEPÚLVEDA (doña Alejandra).-

Señor Presidente , quiero plantear las cosas que preocupan de este proyecto de ley. Indudablemente, todo se puede perfeccionar. Pero, sin perjuicio de que hay aspectos de esta iniciativa que deben comprenderse porque son parte de la negociación, me gustaría compartir algunas apreciaciones sobre ciertos puntos que me complican.

Más allá de que se fusionarán distritos, de las distancias que habrá entre las comunas de los nuevos distritos, y de la dificultad que tendremos algunos parlamentarios para tratar de tener conexión permanentemente con la ciudadanía, me preocupan los factores considerados para hacer el redistritaje.

Cabe recordar que el propio proyecto plantea que después de diez años los parlamentarios que estén en el Congreso deberán volver a revisar esta normativa. Muchos no estaremos en este Hemiciclo y no podremos compartir el análisis que estamos haciendo hoy. Por eso, nos habría gustado conocer los factores de análisis que se tuvieron presentes para hacer este redistritaje en 2015, de modo que en diez años más se sepa cuáles fueron. Sin embargo reitero, ni en el proyecto ni en lo que hemos podido escuchar en la presente discusión existe claridad respecto de dichos factores.

En segundo lugar, me complica quizás por la trayectoria que tengo en el Congreso Nacional que los candidatos se van a concentrar en aquellas ciudades en las que haya mayor votación. Debido al redistritaje, las ciudades más grandes serán las que originen los candidatos, y serán el lugar en el que los candidatos trabajarán para conseguir esos votos.

Por lo tanto, me preocupa que los sectores rurales, las pequeñas ciudades, los villorrios, las pequeñas comunas, pierdan fuerza electoral, pues la cantidad de votos en ellas no tendrá importancia en relación con las ciudades grandes. Sin duda, ello significará que en esta Sala los representantes de sectores rurales tendrán menor peso, y sus ideas y sus problemas tampoco estarán patentes en la discusión.

En tercer lugar, me preocupan los requisitos para la inscripción de candidatos independientes. No me gusta que se haya establecido que para dicha inscripción se requiere el patrocinio de un número de ciudadanos igual o superior al 0,5 por ciento del electorado que votó en la última elección. Creo que hay que nivelar la cancha. No puede ser que para constituir un partido los requisitos sean menores que para inscribir una candidatura independiente.

Por último, solicito a la ministra Rincón que nos aclare lo relativo a la modificación al artículo 42 de la Ley de Partidos Políticos. Una cosa es constituir el partido político regional y otra el procedimiento para disolverlos. En relación con esto último pido una aclaración al Ejecutivo .

Vamos a decir chao al binominal, pero también daremos la bienvenida a los partidos regionales, a la expresión regional y a mejorar la calidad de la política, a través de una expresión regional y local distinta.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Germán Becker .

El señor BECKER.-

Señor Presidente , soy de los diputados que siempre han estado a favor de cambiar el sistema binominal. Desde hace muchos años que trabajamos en eso. Recuerdo reuniones en la sede del Parlamento en Santiago con Edgardo Boeninger , con los entonces diputados Arturo Longton , Andrés Allamand y Esteban Valenzuela . Queríamos cambiar el sistema binominal no porque fuera antidemocrático como se señala; es un sistema tan democrático como cualquier otro, tanto como un sistema mayoritario o como cualquier sistema proporcional. No lo digo yo sino todos los expertos en sistemas electorales. Hace algunos días leí un artículo sobre Dieter Nohlen , quizá el experto más importante en la materia. En una reunión sostenida en Santiago, planteó que el sistema electoral binominal era tan democrático como cualquier otro. No fue el culpable de todos los males, como parece que creen los diputados de la Concertación, quienes han manifestado que debido a ese sistema no pudieron hacer los cambios que deseaban. Francamente, el sistema binominal no ha sido el culpable de todos los males del país.

Por eso, en Renovación Nacional votamos favorablemente este proyecto en general. Lamento que no lo hubiéramos cambiado antes, porque de haber sido así, lo habríamos hecho mucho mejor. Claramente esta iniciativa es un traje a la medida de la Nueva Mayoría no descaradamente, y tiene varios aspectos que podríamos analizar y mejorar.

Por otra parte, se ha hablado mucho del 4° distrito, que agrupa a los antiguos distritos 5° y 6° en los que había cuatro diputados. Lo mismo se verificaba en los antiguos distritos de la provincia de Malleco: tenían cuatro diputados con 270.000 votantes. El nuevo distrito que se crea en la provincia de Malleco se mantendrá con cuatro diputados. Sin embargo, el 4° distrito, que reitero agrupa a los antiguos distritos 5° y 6°, con 220 mil votantes y 4 diputados, pasará a elegir cinco diputados. Todos sabemos que fue una petición especial de un diputado. De lo contrario, su partido no votaría favorablemente la iniciativa.

Hay varios ejemplos más en relación con los senadores. En la Región de La Araucanía había cuatro senadores. Planteamos que quedaran los cuatro porque creímos que era razonable. Pero se incrementó en uno el número porque un representante de un partido político importante de la Nueva Mayoría iba a quedar fuera del Senado. Lo mismo ocurrió en la Segunda Región con el número de senadores: se incrementó de dos a tres porque se necesitaba darle un cupo a un senador actualmente en ejercicio.

Repito, este es un sistema electoral que está hecho a la medida de la Nueva Mayoría. Si lo hubiéramos consensuado y trabajado un poco más, podríamos haber elaborado un proyecto que nos satisficiera a todos, a fin de cambiar, de una vez por todas, el sistema binominal.

He escuchado durante toda la sesión a los diputados de la Nueva Mayoría. En verdad, esta discusión es bastante absurda. Al sistema binominal le echan la culpa de todos los males, con falacias, con eslóganes y repitiendo frases que ni siquiera analizan. Se dice que dos tercios son iguales a un tercio en el sistema binominal. Eso es falso; eso no ha distorsionado la proporcionalidad entre los grandes bloques. En Chile la proporción entre la Nueva Mayoría y la Alianza ha sido casi perfecta durante las siete elecciones que llevamos.

Obviamente, lo malo que tenía el sistema lo queremos cambiares que excluía a los grupos minoritarios.

Se hablaba de un eterno empate electoral y de que había un cerrojo impuesto por la dictadura. Hice un análisis aplicando el sistema electoral que vamos a aprobar, y resultó que la Nueva Mayoría nunca habría logrado el quórum de cuatro séptimos para cambiar el sistema, salvo ahora. Es decir, con cualquier sistema electoral que operara, nunca habrían obtenido los votos que requerían para cambiar el sistema electoral. Y ahora se da la paradoja de que gracias al mismo sistema binominal se terminará con el sistema binominal.

Por lo tanto, no se trata de que no hayan podido hacer cambios debido al sistema binominal, sino debido a que les faltaron votos.

Se dice lo señaló recién el diputado Ramón Farías que con el sistema binominal quedan fuera candidatos como Marisela Santibáñez y que, a veces, es elegido el tercero de la lista y que eso no puede ser. Eso pasa en todos los sistemas electorales que usan el sistema D'Hondt. En el que estamos aprobando hoy, que es el sistema proporcional, pasa mucho más.

Estaba analizando la elección de senadores de 1965. Hubo 18 candidatos inscritos y existía un sistema proporcional igual al que vamos a aprobar hoy. Ocurrió que salió elegido un señor José García González de la Democracia Cristiana con 1.500 votos, lo que constituía un 0,99 por ciento de los votos. Era el número 15 de una lista de 18, y hubo 14 que obtuvieron más votos que él, de los cuales fueron elegidos 4 más. Es decir, hubo 10 candidatos que tuvieron más votos que el señor José García González y que no fueron elegidos. Mientras más proporcional es el sistema más complejo es este tema. Ocurrirá que resultarán elegidas personas que prácticamente no tienen votos. Podría darse la paradoja de que resultara elegido un candidato con solo un voto, si es que es arrastrado por los demás candidatos.

Otro diputado de la Nueva Mayoría señalaba que la baja participación electoral era culpa del sistema binominal. Hay muchas otras razones por las que hay baja participación electoral en el país. Claramente, el sistema binominal no es el responsable de ello. De hecho, la participación en las elecciones municipales es prácticamente la misma que la de las elecciones de parlamentarios. Y las elecciones municipales todos sabemos no utilizan el sistema binominal, sino que uno proporcional para los concejales y uno mayoritario para los alcaldes.

Creemos que el sistema que aprobaremos hoy no es bueno; está hecho a la medida de la Nueva Mayoría. Repito, se podría haber hecho algo mucho mejor; incluso, algo más proporcional con menos diputados, por ejemplo, con 140. Planteamos al gobierno un sistema mucho más proporcional que este, que daba posibilidades a los grupos que están excluidos, que daba mayor representatividad. Sin embargo, el gobierno, finalmente, no quiso llegar a acuerdos con nosotros y prefirió hacerlo con grupos minoritarios que le dieron un par de votos. Lo lamentamos porque creemos que los cambios en los sistemas electorales deben ser hechos por las grandes mayorías, ojalá por un consenso generalizado. No cabe duda de que ello se pudo haber logrado.

Nuestro presidente de partido, señor Cristián Monckeberg , hizo todos los esfuerzos posibles; sin embargo, el gobierno prefirió hacer un traje a la medida y aprobarlo con votos de grupos minoritarios. Lo lamento.

Por lo expuesto, anuncio que votaremos en contra la mayoría de los cambios introducidos por el Senado al proyecto, porque creemos que son bastante negativos. De hecho, el sistema en general es muy negativo para el país.

He dicho.

El señor GONZÁLEZ ( Vicepresidente).-

Tiene la palabra el diputado Osvaldo Urrutia .

El señor URRUTIA (don Osvaldo).-

Señor Presidente , a pesar de lo que se desprende del tono de este debate, existen varios sistemas electorales actualmente en nuestro país, algunos de los cuales operan de manera simultánea.

Tenemos el sistema mayoritario de dos vueltas, en la elección presidencial; el sistema mayoritario de una vuelta, para la elección de alcaldes; el sistema proporcional, basado en el sistema D’Hont, para las elecciones de los concejales y de los cores; y el sistema binominal para los parlamentarios, sean estos diputados o senadores.

Curiosamente, algunos sectores, particularmente de la izquierda, han atribuido la causa del desprestigio de la política solo a uno de estos sistemas electorales, que se aplica concretamente en la elección parlamentaria.

En el caso chileno, el sistema binominal ha logrado una proporcionalidad más que aceptable, sobre todo respecto de los parlamentarios, ya que tanto la Alianza como la Concertación han obtenido un porcentaje de escaños similares a los votos obtenidos en todas las elecciones en que se ha utilizado el sistema binominal; es decir, desde 1989, y con una dispersión no mayor al 4,8 por ciento.

Sin embargo, es necesario detenerse para hacer un análisis con mayor visión de país. Importancia entre tener un sistema mayoritario proporcional y un sistema presidencialista o parlamentario.

Es relevante consignar que las relaciones entre el sistema electoral, en sentido estricto, y el sistema político, o forma de gobierno de un país, no es un tema menor.

El sistema presidencial se caracteriza por la preeminencia del órgano ejecutivo sobre el legislativo y, a su vez, el sistema parlamentario se caracteriza porque la preeminencia la tiene el órgano legislativo, desde donde se origina el núcleo del poder ejecutivo.

A su vez, estas miradas deben complementarse con los sistemas de bipartidismo o multipartidismo. ¿Qué sistema es mejor? En abstracto, ninguno es mejor que el otro. Sin embargo y en concreto, se podría afirmar que hay sistemas mejores que otros, dependiendo del sistema político general.

Existen estudios ampliamente difundidos que afirman que los sistemas electorales proporcionales son una mala idea en las democracias presidencialistas.

En simple, estos estudios afirman que para los regímenes presidencialistas es mejor tener un sistema mayoritario porque le asegura al Ejecutivo tener mayoría en el Parlamento.

Un sistema de gobierno presidencial combinado con un sistema electoral proporcional puede producir un cerrojo en el que el Ejecutivo debe negociar cada ley con múltiples grupos muy atomizados en el Parlamento, lo que entorpece la labor legislativa y desacelera la ejecución de las políticas de gobierno.

Scott Mainwaring , uno de los autores más citados en materia de sistemas electorales y partidos políticos, afirma que el hecho de que democracias presidenciales con multipartidismo tengan tan malos resultados, no ha recibido la debida atención y preocupación. En efecto, ninguna de las 31 democracias estables del mundo tienen esta configuración, y existe solo un ejemplo en la historia: Chile, desde 1933 a 1973, que tuvo los resultados por todos conocidos.

Asimismo, Mainwaring afirma que el presidencialismo con multipartidismo sistema proporcional no funcionan juntos. La razón es que esa mezcla produce un estancamiento entre el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo , por la incapacidad del primero para llegar a acuerdos con el Parlamento.

El presidencialismo multipartidista es más proclive que el parlamentarismo o que el presidencialismo bipartidista a llegar a un punto muerto, a producir inmovilismo, entre el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo .

A diferencia de los sistemas parlamentarios, los sistemas presidenciales no tienen mecanismos para asegurar mayoría en el Parlamento. Por ejemplo, el partido del Presidente suele tener mayoría, o casi, en sistemas bipartidistas, pero casi nunca en sistemas multipartidistas. De esta forma, el Presidente se ve obligado a formar coaliciones en el Parlamento para cada tema. En este sentido, los sistemas presidenciales multipartidistas se parecen a gobiernos de minoría parlamentaría, con la diferencia de que en la mayoría de los sistemas parlamentarios el gobierno dura mientras obtenga apoyo mayoritario en los temas claves.

Dentro de los fundamentos que ha presentado el Ejecutivo para cambiar el sistema, encontramos varias aseveraciones que no se ajustan a la realidad. Es fundamental aclarar que muchos de los pilares en que el gobierno dice basarse son falsos, o no son lo que dicen que representa esta modificación que hoy discutimos, pues lamentablemente esta iniciativa busca arreglar el problema de la Nueva Mayoría, en especial a un partido, de izquierda extrema, que no cree ni nunca ha creído en la democracia. Ejemplos son muchos en la historia mundial: Rusia, Polonia , Rumania , Checoslovaquia, Cuba , Corea y Venezuela.

En esa línea, quiero recordarle al Presidente del Partido Comunista y a sus socios en la Universidad Arcis la desfachatez que tuvieron para engañar a los estudiantes; cómo lucraron a través de empresas inmobiliarias y cómo recibieron recursos millonarios en dólares del dictador venezolano Hugo Chávez para el financiamiento de sus actividades políticas y, particularmente, de sus campañas.

Por lo anteriormente expuesto, anuncio mi voto en contra al proyecto, puesto que más allá de que debemos avanzar en perfeccionar nuestras instituciones y de que es importante dar mayor cabida a las fuerzas políticas verdaderamente democráticas de nuestro país, este no es el camino para hacerlo.

He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Alberto Robles .

El señor ROBLES.-

Señor Presidente , quiero hacer una reflexión desde el punto de vista republicano.

Estamos ad portas de eliminar el sistema binominal, pero mantenemos en nuestra estructura republicana un sistema bicameral. Es más, la creación de este nuevo sistema permitirá que el ejercicio de las potestades tanto de diputados como de senadores sean exactamente las mismas. En consecuencia, no hay razón alguna para seguir manteniendo un sistema bicameral.

Cuando el Parlamento se niega a la discusión de un cambio constitucional importante, de una forma distinta de hacer política, nos estamos negando al hecho de que en pleno siglo XXI ya no necesitamos tener un sistema bicameral como el actual.

En mi región, luego de la aprobación de este proyecto de ley, senadores y diputados compartiremos el mismo territorio y tendremos las mismas obligaciones. Es más, el Senado ha estado incursionando en materias propias de la Cámara de Diputados, al crear comisiones y al solicitar oficios de fiscalización.

¿Tiene alguna razón entonces el seguir con el sistema bicameral? Por cierto que no. Por lo tanto, que ni el Senado, ni la Cámara de Diputados, ni el gobierno discutan este tema, me parece de un conservadurismo extremo. Lo mismo ocurre con el hecho de que los cambios a la Ley Orgánica Constitucional de Partidos Políticos los tengamos que hacer en un debate posterior, en circunstancias de que hay evidencia clara, luego del caso Penta, de la necesidad de efectuar pronto dichos cambios.

En este momento, quiero exigir al Ejecutivo que envíe lo más pronto posible el proyecto que modifica la Ley Orgánica Constitucional de Partidos Políticos, pues necesitamos tener certeza de que los partidos políticos de Chile sean conglomerados fuertes y con opción de representar de verdad a la ciudadanía.

No estoy de acuerdo con lo planteado por el Senado en el artículo 3º del proyecto. Sin embargo, dados los compromisos adquiridos para eliminar el sistema binominal, anuncio que vamos a votar a favor ´sus modificaciones, porque primordialmente debemos terminar con este sistema, imperante desde la dictadura, y porque necesitamos que nuestra democracia se perfeccione.

Es bueno cambiar el sistema bicameral y es importantísimo cambiar la Ley Orgánica Constitucional de Partidos Políticos.

He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Hugo Gutiérrez .

El señor GUTIÉRREZ (don Hugo).-

Señor Presidente , hoy se acaba el régimen del terror impuesto por una dictadura militar que se ha prolongado hasta hoy por el sistema electoral binominal. Hoy se acaba una falsa democracia, con sus falsos equilibrios, sus falsas representaciones y su falsa igualdad de partidos de gobierno y de oposición.

Celebramos el regreso de la democracia al Congreso Nacional. Por fin los chilenos y chilenas decidirán sobre lo que quieren para su país, porque en las próximas elecciones el voto de cada uno de ellos se verá fielmente representado en el Parlamento. ¡Al fin conseguiremos que el Congreso Nacional se parezca a la sociedad chilena!

Hoy se inicia un nuevo camino, en el que esperamos y confiamos que se concretarán todas las demandas, exigencias y reivindicaciones de nuestro pueblo. Esta es una victoria para el pueblo de Chile, gracias a la mayoría que nos permite estar aquí para rechazar el sistema electoral binominal. Si hoy estamos votando en contra de este sistema es porque el pueblo nos dio los votos necesarios y contamos con los quórum que se requieren para terminar con este adefesio de la dictadura de Pinochet, que aún defienden aquellos que amparan la inmoralidad en nuestro país.

Podrán decir mentiras sobre nuestro partido, pero quienes deben rendir cuentas ante la justicia son aquellos que hoy defienden los privilegios que les concede el sistema electoral binominal. Quienes van a ir a parar a la justicia son los que hoy votan a favor de mantener dicho sistema.

Por eso, señor Presidente , parafraseando a nuestro Presidente mártir , el triunfo de hoy no tengo duda de que lo alcanzaremos demuestra que la historia es nuestra y que la hacen los pueblos.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra el diputado señor José Miguel Ortiz .

El señor ORTIZ.-

Señor Presidente , señoras ministras, aunque el ministro del Interior , hoy Vicepresidente de la República , no se encuentra presente en la Sala está cumpliendo su función de dirigir el país-, quiero hacerle un reconocimiento por la perseverancia y constancia que tuvo para que esta iniciativa llegara a feliz puerto.

Quiero ser claro y categórico en relación con lo siguiente: desde 1989 en adelante, un número importantísimo de candidatos a diputados siempre estuvimos en contra del sistema binominal. De los actuales 22 integrantes de nuestra bancada, dos, Sergio Ojeda y yo, hemos sido elegidos diputados siete veces desde 1989 en adelante, y de los actuales 120 diputados, seis nos encontramos en esa situación. En el caso de Sergio Ojeda y de quien habla, las siete veces hemos contado con la benevolencia y el apoyo de los electores de nuestros respectivos distritos, gracias a lo cual hemos obtenido la primera mayoría.

Por lo tanto, con bastante autoridad política podemos decir que hemos ganado las elecciones sin ningún tipo de subsidio.

Tal como lo planteamos durante la pasada elección presidencial, ¡cómo podía ser que una lista que obtenía 66,6 por ciento de los votos sacara un diputado, y la otra, que obtenía 33,4 por ciento, sacara otro! ¡Cómo que no es un empate permanente! ¡Seamos claros! ¡Seamos precisos!

Hoy es un día importantísimo. Soy de la Región del Biobío y como hoy se celebra a San Sebastián, sé que él nos está ayudando. Lo planteo porque no me cabe la menor duda de que la Nueva Mayoría y los independientes vamos a votar a favor el proyecto en su tercer trámite constitucional.

La iniciativa en estudio significa reducir la desigualdad del voto, permitir la representación e inclusión de todas las corrientes políticas significativas, aumentar la competitividad e incertidumbre respecto de quienes resulten elegidos, facilitar la expresión de la mayoría y la representación de las minorías, promover un Congreso Nacional que refleje la diversidad de la sociedad y evitar que queden fuera candidatos con grandes votaciones, como sucedía con el sistema binominal en todas la regiones.

Aquí se ha planteado que este es un proyecto hecho a la medida, y se ha mencionado de manera especial la Región del Biobío. ¡Eso es falso, de falsedad absoluta! He sido siete veces representante del distrito N°44. El nuevo distrito N°20 estará integrado por los actuales distritos N°s. 43, 44 y 45. En cada uno de ellos hay colegas que hacen esfuerzos, que son perseverantes y que creen en el servicio público. Es falso que esté decidido quiénes van a salir elegidos diputados por dicho nuevo distrito en la próxima elección. Eso se verá en casi tres años más. Será necesario llevar a cabo un trabajo intenso, porque el territorio del nuevo distrito se ampliará de manera muy significativa.

A mí me gusta el nuevo sistema. Siempre tuve la esperanza de ser elegido diputado por la provincia de Concepción, de acuerdo con el sistema electoral existente durante la vigencia de la Constitución de 1925, pero no fue así.

En esta tarde tan especial, con mucha fuerza planteo mi concordancia con el hecho de que en lugar de 60 distritos, a partir de ahora tendremos 28; con que en vez de 38 senadores, serán elegidos 50; con que cada región tendrá entre dos y cinco senadores, y con que los distritos elegirán un mínimo de tres y un máximo de ocho diputados.

¡Cómo no va a ser democrático que en un distrito como el 20, que sería el mío, en la lista en lugar de ocho candidatos, vayan nueve! Eso da una gran posibilidad a los candidatos y se adecua a la realidad que estamos viviendo actualmente.

Estoy convencido de que la indicación para formar los partidos regionales es eficiente, porque la realidad existente en regiones es diferente.

Este proyecto es un gran avance. Una vez más se está demostrando que nuestra Presidenta Michelle Bachelet va a cumplir con su programa, a lo cual nos comprometimos todos los que estuvimos a su lado durante la campaña. Esa va a ser la gran noticia de hoy.

Por todo lo anterior, anuncio que con toda nuestra fuerza y nuestra fe vamos a votar a favor todas las modificaciones del Senado.

Quiero hacer un reconocimiento a las diputadas y a los diputados de Amplitud, quienes resistieron las presiones y nos dieron los votos necesarios.

Quiero recordar que desde 1990 en adelante se presentaron 21 proyectos de ley para modificar el sistema binominal, varios de cuyos autores o suscriptores hoy estamos presentes en la Sala. Todas dichas iniciativas tuvieron enfrente un muro, porque la derecha siempre votó en contra y nunca tuvimos los quórum respectivos debido al sistema binominal. Por lo tanto, llamo a votar a favor las modificaciones del Senado a la iniciativa que le pone término.

Soy partidario de poner límite a la reelección. Tengo bastante autoridad para decirlo, pues he votado a favor los dos proyectos que se han presentado en esta materia, tal como también hicieron los diputados Sergio Ojeda y Sergio Aguiló .

Por último, tenemos claridad de que el proyecto que despacharemos hoy se convertirá en una gran reforma para el país.

He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Raúl Saldívar .

El señor SALDÍVAR.-

Señor Presidente , durante esta jornada hemos escuchado diversas intervenciones, algunas incluso apologéticas, respecto del sistema binominal, al cual hoy esperamos poner término. Sin embargo, la evidencia ha demostrado, de manera aplastante y categórica, que ha sido un pésimo sistema. No requerimos intelectualizar ni buscar respuestas tecnocráticas ante una realidad tan categórica y definitiva. Por lo demás, la ilegitimidad que lo caracteriza lo deja fuera de toda posibilidad de seguir vigente en un ambiente y en un marco democrático como el vivimos ahora. Por eso, gran parte de los chilenos ha expresado su rechazo a dicho sistema.

Por otra parte, hemos escuchado intervenciones que hacen referencia a la crisis institucional de 1973, responsabilizando al sistema electoral de aquella época y confundiendo, de algún modo, la participación ciudadana, de la sociedad civil, en los procesos sociales y políticos del país, con un sistema que dio origen a problemas mayúsculos, que naturalmente desencadenaron en el advenimiento de una dictadura.

Señor Presidente , nosotros creemos que el término del sistema binominal y la instalación de un sistema proporcional representan un fortalecimiento de la república. Los demócratas debemos velar por constituir una república sólida; una república que se proyecte con la fuerza de su ciudadanía, para ir mejorando y perfeccionando el desarrollo de su propia sociedad, a través de la creación de herramientas y elementos que permitan que la sociedad tenga capacidad de autoperfeccionarse.

Por lo tanto, debemos avanzar hacia una democracia plena, que permita tener expresión no solo en lo político. Hoy, con entera justicia y legitimidad, estamos trabajando por instalar un sistema político democrático, que dé expresión real a la voluntad ciudadana y que deje fuera las distorsiones artificiosas que hasta el día de hoy generaron una realidad política verdaderamente inconveniente para el país.

Estamos muy contentos, porque esto tiene pleno correlato con los pilares del programa de gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet . Hoy asistimos a perfeccionar y mejorar el sistema político electoral, que tiene que acompañarse de un conjunto de elementos que permitan dignificar la política.

Pero, por otro lado, hemos trabajado aquí en la discusión de una reforma educacional que busca establecer educación gratuita y de calidad para todos. Eso, desde el punto de vista social, conlleva la idea y la esencia de un sistema democrático en lo social.

A lo indicado, debemos agregar la tramitación de una reforma tributaria que, en lo económico, representa justicia y democracia.

En suma, el gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet viene avanzando con un programa sólido y amplio, que permite que Chile pueda aspirar a una democracia más plena, que no solo se centre en uno de sus ejes que, por cierto, es vital, pero que, sin duda alguna, requiere de la integración de otros elementos para vivir una democracia absolutamente plena como sociedad.

Por eso, los socialistas vamos a votar a favor las modificaciones del Senado a este proyecto. Creemos que este pilar tiene que ser concordante con los otros elementos del programa, que, sin duda alguna, van a cambiar el rostro de Chile. Vamos a dignificar y reponer los derechos de los ciudadanos; vamos a trabajar por hacer desaparecer los elementos más perniciosos de una sociedad mercantilizada, para poner derechos por sobre todas las cosas.

Para nosotros, los socialistas, el elemento que hoy está en juego, que dice relación con una democracia más plena, es importantísimo para desencadenar los otros pasos de un gran proceso social para transformar a Chile y darnos a todos la tranquilidad de vivir en una sociedad que instala sus raíces democráticas con más profundidad que nunca.

He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Giorgio Jackson .

El señor JACKSON.-

Señor Presidente , por su intermedio, deseo saludar a la ministra secretaria general de la Presidencia .

Hoy es un día importante: esperamos no solo terminar con el sistema electoral binominal, sino también aprobar en la Comisión de Educación una iniciativa de ley sobre la institucionalidad de la educación parvularia y, además, aprobar en la sesión de la tarde el proyecto de ley, en segundo trámite constitucional, que regula el acuerdo de vida en pareja o pacto de unión civil.

Hoy es uno de aquellos días en que se siente, con convicción, que vale la pena estar en este Hemiciclo al contrario de lo que ocurre otros días, en que sentimos mucha frustración para aportar a la transformación de nuestra sociedad y a la profundización de la democracia.

En tiempos donde la política está por el suelo, muy cuestionada con justa razón, debido al escándalo del caso Penta y a otros, tenemos la oportunidad de cambiar las reglas que nos permiten tener una mejor representación de la diversidad que existe en nuestro país.

Quienes están en contra, no han encontrado mejor argumento que rechazar el aumento de parlamentarios, debido a que sería un gasto injustificado en políticos. No les molestaba tener 54 senadores, como dijo el diputado señor Walker , aun cuando un tercio de ellos eran vitalicios y designados. Para quienes preguntan en la calle, vale la pena hacer este ejercicio.

Tener mayor proporcionalidad implica que los sectores políticos que hoy han estado postergados por el sistema binominal, puedan tener una chance real de competir y tener presencia en este espacio de representación. Hacer eso manteniendo los 120 diputados hubiera requerido disminuir, en algunos o varios distritos, de dos diputados a uno, es decir, quitarles representatividad a muchos de nuestros compatriotas. Eso, por supuesto, sería injusto.

Ahora, ¿significa esto un mayor gasto para las chilenas y los chilenos? Depende de nosotros, de la Cámara de Diputados y del Senado, es decir, de todos los parlamentarios.

Hay dos iniciativas que podemos tomar antes de que comience a operar el nuevo sistema: por un lado, reducir el sueldo de los parlamentarios, establecer una remuneración que no supere los veinte sueldos mínimos, en vez de los cerca de cuarenta que recibimos hoy.

Por otro lado, establecer que los reajustes del sector público sean inversamente proporcionales al monto a reajustar, idea que, según tengo entendido, está alcanzando tal nivel de transversalidad que nos debería permitir su aprobación este año.

Los colegas que se quejan del aumento de diputados, ¿estarían dispuestos a reducir los tremendos salarios que recibimos a fin de mes? Permítanme dudarlo.

Pero volviendo al fondo del proyecto, ¿es un cambio para decir que toda la política cambió? No. Creo que definitivamente cambian las reglas del juego, pero tenemos que poner énfasis en otros aspectos que nos permitirían tener una mejor democracia.

Por un lado lo advertimos durante la tramitación de la iniciativa, junto con el diputado señor Mirosevic y con el apoyo de la mayoría de la Cámara, es necesario terminar con el escandaloso sistema que permite que los poderes económicos y fácticos ataquen nuestra soberanía democrática. Terminar con los aportes reservados y de empresas sería la punta del iceberg para describir un tema fundamental que relevó el caso Penta.

Por eso, celebramos que la semana pasada, tras reunirnos, junto con el diputado Mirosevic , con la Presidenta de la República , ella haya accedido a poner suma urgencia, en marzo próximo, al proyecto de financiamiento electoral, además de anunciar el envío a tramitación, durante el primer semestre, del proyecto de reforma del Servicio Electoral, que permitirá fiscalizar y establecer una normativa para la transparencia de los partidos políticos. Con ello se busca que manden las ideas y no la billetera de los candidatos.

Quedará pendiente la representatividad de nuestros pueblos originarios en este Hemiciclo, además de la representación de nuestros compatriotas en el extranjero. Espero que el Ejecutivo considere estas sentidas demandas y las incorpore en un paquete de reformas.

En los últimos treinta segundos de que dispongo, sin perjuicio de anunciar mi aprobación a las modificaciones del Senado al proyecto que termina con el sistema binominal y de destacar la importancia de todas las reformas mencionadas, deseo enfatizar que ninguna de ellas puede restar importancia a la necesidad de que construyamos una nueva Constitución, un nuevo pacto básico de reglas del juego para nuestra democracia. La Presidenta Michelle Bachelet lo comprometió en campaña. Me refiero a una nueva Constitución, no una reforma constitucional.

Ante los escándalos políticos y económicos que han ensuciado nuestra labor, cada vez somos más los que creemos que las chilenas y los chilenos deben ser los que decidan, a través de un plebiscito, cómo se debe hacer la nueva Constitución. Ante esa disyuntiva, la Asamblea Constituyente parece ser para muchos la que mejor cumpliría con los principios democráticos que esta persigue.

He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra la diputada señora Yasna Provoste .

La señora PROVOSTE (doña Yasna).-

Señor Presidente , hago uso de la palabra para sumarme y manifestar mi apoyo para poner fin al sistema binominal, una de las leyes verdaderamente de amarre de la dictadura de tan triste memoria en nuestra historia política reciente.

Por eso, hoy recordamos a nuestros camaradas que perdieron su vida en la defensa de la democracia. ¡Cómo no recordar a Mario Martínez , a Mario Fernández López y, por cierto, a nuestro gran Eduardo Frei Montalva !

Hemos manifestado nuestra voluntad de que esta democracia se mueva con otros valores; de que la educación, la salud y todos los derechos sociales deban reconfigurarse en el sentido de la justicia, de la no discriminación, de la igualdad de trato, sin importar la cuna en la cual se nace.

Pero, junto con esos derechos sociales, un cambio en las reglas del juego político también producirá que la sociedad en su conjunto pueda identificarse mejor con sus representantes.

Por eso, deseo destacar la trascendencia de lo que hoy estamos votando en lo referido a un tema tan relevante como es la equidad de género, específicamente en relación con la subrepresentación de mujeres en el Parlamento.

Por eso, reconocemos y valoramos el compromiso y la coherencia expresados por la Presidenta Michelle Bachelet al incorporar en este proyecto de ley las cuotas de género, asegurando que los partidos políticos elaboren listas equilibradas de candidatos y candidatas en términos de sus postulantes, e impidiendo de esta forma el predominio solo de hombres, como ha ocurrido históricamente en el caso chileno. Chile es un país muy desigual; la desigualdad tiene mayoritariamente rostro de mujer.

¡Miren este Parlamento! El porcentaje que hoy aprobaremos será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas. En nuestra opinión, esta iniciativa, que hoy cumple su tercer trámite constitucional, refuerza la ley de cuotas, haciendo vinculante el porcentaje en la nominación de las candidaturas.

Como mujeres hemos recorrido un largo camino en nuestra historia político republicana, y quisiéramos recordar a tantas mujeres que nos acompañaron en esas luchas. Permítanme nombrar solo a una: María Antonieta Saa , quien nos decía que no debemos conformarnos con nada menos. La paridad hace alusión al principio de igualdad, por cuanto hombres y mujeres tendrán iguales derechos a ser elegidos.

No se trata de un tema de izquierdas o de derechas, de progresistas o de conservadores, sino de un compromiso con la democracia, con Chile y con sus mujeres.

He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra el diputado señor Renzo Trisotti .

El señor TRISOTTI.-

Señor Presidente , qué duda cabe respecto de la relevancia de la discusión que hemos tenido durante largos meses en torno de este importante proyecto de ley que, tal como se ha planteado en varios discursos, pretende fortalecer la democracia. El problema es que en gran medida esto no pasa de ser un lindo titular, pese a que en innumerables intervenciones se lo ha planteado como un hecho histórico.

El proyecto en discusión tiene una serie de inconsistencias, lo que hace que se pregonen grandes titulares, en circunstancias de que muchas de sus disposiciones se han hecho en contra de lo que la mayoría de los chilenos quieren y con un costo para la ciudadanía.

En lo personal, creo que, sin duda, el sistema binominal podía ser modificado. Por ello, aprobaremos algunas disposiciones del proyecto.

Celebro el hecho de que ahora contaremos en forma separada con las circunscripciones senatoriales de las regiones de Arica y Parinacota , y de Tarapacá. Cada una de dichas regiones tiene sus propias problemáticas y sus propios desafíos, por lo cual requiere tener sus propias autoridades.

No estoy de acuerdo con el aumento de parlamentarios. En mi opinión, se trata de una medida innecesaria y desmedida, ya que no se necesitan más parlamentarios para fiscalizar o para legislar.

La iniciativa presenta enormes errores en materia de proporcionalidad. ¿Cómo se explica que la región que represento, que tiene 222.000 electores, tendrá tres diputados con el nuevo redistritaje, y una región como la de Atacama, que tiene 221.000 electores, es decir, menos que la de Tarapacá, contará con cinco diputados?

Esta situación no ha podido ser explicada sino como un traje a la medida de la Nueva Mayoría, mayoría circunstancial de turno, con un costo que todavía no está determinado para la ciudadanía.

Este proyecto puede haber tenido muy buenas intenciones y haber recogido el sentir de un determinado sector, pero, en los términos en que quedó establecido, puede afectar la gobernabilidad, la representatividad y la cercanía de los parlamentarios con sus electores.

Tenemos que sincerar el discurso: este proyecto pretende asegurar cupos en el futuro a la Nueva Mayoría. Acá se ha hecho sentir que el actual sistema siempre ha beneficiado a un determinado sector político. Quienes plantean eso están muy equivocados, porque muchas personas están sentadas en este Hemiciclo gracias al sistema binominal, incluidos diputados del Partido Comunista.

En la discusión de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia presentamos una indicación para modificar el sistema binominal, pero manteniendo la actual cantidad de diputados, es decir, 120, por lo cual no representaba un mayor costo para el Estado. Sin embargo, fue rechazada por los diputados de la Nueva Mayoría.

Creo que este camino no es el correcto para perfeccionar la democracia. Por ello, votaré diferenciadamente unas u otras disposiciones.

Como dije, este proyecto tiene muy lindos titulares. Quizá, muchos diputados serán aplaudidos en sus distritos por los militantes de sus partidos, pero, reitero, la iniciativa va en contra de la gente y tendrá un costo para ella.

La Nueva Mayoría está institucionalizando la posibilidad de asegurarse cupos en el futuro. He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Juan Morano .

El señor MORANO.-

Señor Presidente , quiero agradecer a mis colegas Yasna Provoste e Iván Fuentes por el esfuerzo realizado para que todos pudiéramos hablar.

Durante mucho tiempo no solo en este último año hemos pedido transparencia en el financiamiento de la política, particularmente en los períodos de elecciones. Nosotros queremos que los chilenos sepan cómo se financian quienes desean representarlos. No queremos más casos Penta en la política nacional.

Esta bancada presentó un proyecto de resolución para regular la forma de reajustar las remuneraciones de los parlamentarios. No queremos que la brecha existente entre el que más gana y el que gana menos supere las diez veces. Dicho proyecto está a disposición de la Cámara de Diputados para quien desee consultarlo.

Sin duda, el proyecto en discusión, que pone fin al sistema binominal, pudo ser mejor. Nos habría gustado que el orden de las listas hubiese sido resuelto por sorteo; nos habría gustado mantener la obligación de primarias con asignación de cuotas para las mujeres; más que cuotas de cupos para postular a la elección, nos habría gustado tener cuotas de mujeres diputadas y senadoras. Sin embargo, el texto que conocemos hoy es lo que se pudo concordar mayoritariamente con el quórum necesario en la Cámara.

Hoy vamos a hacer historia; hoy, hombres y mujeres votaremos para hacer desaparecer de nuestro sistema electoral el binominal, sistema perverso que hacía que el 66,3 por ciento de los votos valiera lo mismo que el 30 por ciento de los votos. No es cierto que la democracia se distorsionará hoy; la democracia nació distorsionada en la Constitución de 1980.

Por años hemos estado en la calle pidiendo que nuestra democracia sea realmente representativa. Por ningún motivo queremos que aumente la representación parlamentaria metropolitana, principio recogido en este proyecto de ley. La Región de Magallanes y la Antártica Chilena tendrá un diputado más que ayer; Arica y Parinacota , ahora convertida en región, tendrá los senadores que nunca tuvo; la Región de Aysén también tendrá un diputado adicional. Esa es la verdad sobre el cambio que votaremos hoy.

¡No más binominal, sí más democracia con sentido de género! He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra el diputado Ernesto Silva .

El señor SILVA.-

Señor Presidente , estamos a minutos de la aprobación por el Congreso Nacional de un sistema electoral impuesto por una mayoría transitoria, el cual regirá, quizá, por mucho tiempo, y generará un desequilibrio y un abuso que no es positivo para Chile.

Durante mucho tiempo los chilenos han pedido que el actual sistema electoral cambie, y nosotros hemos hecho propuestas de cambios. Pero los chilenos han dicho a gritos que no quieren un diputado más. Hoy, sin embargo, la izquierda, para dar en el gusto a los parlamentarios de la Nueva Mayoría y asegurar su reelección, instala en Chile un sistema es importante que se sepa bienque establece 47 parlamentarios más.

Al igual que para la mayoría de los chilenos, para la UDI no se necesita un diputado más para hacer mejores leyes; no se necesita un parlamentario más para mejorar la calidad de la democracia. No obstante, lo que hace este proyecto, impuesto por algunos por una mayoría transitoria es consagrar que se aseguren cupos a muchos y crear una institucionalidad en el tiempo.

Además, este proyecto se ha instalado con información que no es cierta. El gobierno ha dicho a los chilenos, muchos de los cuales nos ven desde sus casas, que crear 47 nuevos cargos no conlleva costos, que es gratis, que los gastos se pueden reasignar.

El informe de la Biblioteca del Congreso Nacional está disponible para todos y los antecedentes que se han puesto a disposición durante la discusión, demuestran que el costo de esta medida supera los 13.000 millones de pesos anuales, más de cincuenta y tantos mil millones de pesos en un período de cuatro años, que la izquierda quiere tomar para destinarlos a la política y a los candidatos, en vez de emplearlos en temas prioritarios.

La UDI ha hecho distintas propuestas para mejorar el sistema electoral, porque tiene que haber una mejor democracia, hay que dar nuevos pasos en esta materia, pero eso no se hace imponiendo un sistema electoral, ni menos aumentando la cantidad de parlamentarios con un argumento que no es verdad: que para los chilenos no tendrá costo crear 47 nuevos cargos.

Aunque asistentes a las tribunas pifien porque les duele que diga la verdad, y usted, señor Presidente , no los llame al orden, la UDI va a levantar su voz, tal como lo han hecho muchos chilenos que sienten que es legítimo cambiar el sistema electoral, pero que es inentendible e inaceptable que se pretenda sumar 47 parlamentarios a los existentes para repartir cupos en una coalición.

Por los motivos expuestos, vamos a votar en contra las modificaciones del Senado al proyecto en estudio.

He dicho.

-Aplausos.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra la ministra secretaria general de la Presidencia , señora Ximena Rincón .

La señora RINCÓN, doña Ximena (ministra secretaria general de la Presidencia).-

Señor Presidente , y, por su intermedio, a las señoras diputadas y los señores diputados que en este día son parte protagónica en el debate del proyecto en estudio y escriben nuevamente la historia de nuestro país: quiero decirles que durante 25 años hubo distintos intentos para hacer un cambio al sistema electoral del país, que pretendieron corregir lo que una minoría había impuesto a una mayoría en una época no democrática.

Finalmente, durante el actual gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet , hemos logrado impulsar esta reforma, que verá la luz ahora, en 2015. En esta tarea, junto con la ministra del Sernam , Claudia Pascual , y el ministro secretario general de Gobierno , Álvaro Elizalde , nos ha tocado acompañar al ministro del Interior y Seguridad Pública , Rodrigo Peñailillo , quien ha liderado la tramitación de la iniciativa.

Sin lugar a dudas, el proyecto podría ser mucho mejor de lo que es y haber recogido una serie de indicaciones cuya redacción podría haberse perfeccionado. En este sentido, la diputada señora Alejandra Sepúlveda precisó un aspecto importante. Al respecto, para la historia fidedigna del establecimiento de la ley, quiero dejar constancia de lo siguiente: un partido que se ha constituido en una región no puede dejar de existir por el hecho de no cumplir con el requisito de contar con un número de militantes en tres regiones. Lo que hace la norma es justamente reconocer la existencia de partidos regionales.

Si no ha sido posible lograr mayores acuerdos en este cambio profundo, fue a consecuencia de la persistencia de un sector político del país que no quiso sumarse a esta transformación.

En todos los estudios, incluso en uno desarrollado por un instituto de la derecha, se señala que el sistema binominal es poco representativo y que, por el contrario, el que votaremos hoy recoge y corrige la inquietud que había en este ámbito en el país, no solo de los sectores políticos, sino también de la ciudadanía.

La última auditoría de calidad de la democracia, encargada durante el gobierno anterior, del Presidente Sebastián Piñera , y publicada por este gobierno, señala que uno de los aspectos causantes de la desvalorización de instituciones como el Congreso Nacional es el binominal, sistema existente solo en Chile.

Señor Presidente , probablemente hoy estamos haciendo la reforma más importante a nuestro sistema político, desde 1957 en adelante. Al respecto, como dijo el diputado señor Matías Walker , jefe del Comité del Partido Demócrata Cristiano, es por lejos destacable que esta reforma se haga por los propios incumbentes.

Se van a cambiar las normas que han permitido que muchos de ustedes lleguen al Parlamento. Habrá mayor competencia. Mujeres y hombres competirán casi en igualdad de condiciones. Se abre el espectro a una mayor cantidad de candidatos. Se posibilita que los partidos políticos se reconozcan como fuerzas regionales. En fin, se establece una serie de correcciones importantes para la democracia.

Señor Presidente , creo que hoy el Congreso Nacional debe sentirse orgulloso de su aporte al país en materia política.

Los argumentos esgrimidos respecto de costos o del número de diputados y senadores, son solo excusas para torpedear una reforma que el país reconoce como necesaria.

(Aplausos)

Señor Presidente , en este día tan especial para mi hermano Ricardo y para mí, quiero decirles que muchos hombres y mujeres no alcanzaron a ver en vida el logro que este día, con una convicción que se agradece de parte de ustedes, vamos a materializar. La Presidenta Bachelet lo comprometió durante su campaña fue un objetivo que intentó hacer realidad en su primer gobierno, y hoy tal como ocurre con muchas otras reformas, con su aprobación, se estará dando un paso decisivo en la historia de nuestro país.

Por eso, en nombre de la Presidenta de la República , señora Michelle Bachelet ; del ministro del Interior y Seguridad Pública , señor Rodrigo Peñailillo -en estos momentos Vicepresidente de la República ; de la ministra del Sernam , señora Claudia Pascual ; del ministro secretario general Gobierno , señor Álvaro Elizalde , y de todo el equipo de gobierno, les doy las gracias por hacer que este día se inscriba en la historia de Chile.

He dicho.

-Aplausos.

El señor MONCKEBERG (don Nicolás).-

Pido la palabra, señor Presidente .

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Tiene la palabra, señor diputado .

El señor MONCKEBERG (don Nicolás).-

Señor Presidente , para evitar posteriores problemas de interpretación, creo de mucha relevancia que la señora ministra haga referencia a la norma relativa a la ley de cuotas.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Con la venia de la Sala, tiene la palabra la ministra señora Ximena Rincón .

La señora RINCÓN, doña Ximena (ministra secretaria general de la Presidencia).-

Señor Presidente , en relación con la consulta del señor diputado , esto queda claro si se revisa el artículo 1°, número 1, letra b), donde el Senado ha intercalado, en el inciso quinto que propone, a continuación de la expresión “respectivo.”, la siguiente oración: “Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas.”.

Lo anterior refuerza la ley de cuotas, pues hace vinculante el 40 por ciento de las primarias no obstante la forma de nominación de las distintas candidaturas.

Gracias, señor Presidente . He dicho.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Cerrado el debate.

Corresponde votar las modificaciones introducidas por el Senado al proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional.

En primer lugar, corresponde votar las modificaciones introducidas por el Senado al número 1) del artículo 1° del proyecto, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 90 votos; por la negativa, 22 votos. Hubo 5 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Berger Fett Bernardo ; Boric Font Gabriel ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Cornejo González Aldo ; Edwards Silva José Manuel ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; Gahona Salazar Sergio ; García García René Manuel ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hernández Hernández Javier ; Hernando Pérez Marcela ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jackson Drago Giorgio ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Monsalve Benavides Manuel ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Nogueira Fernández Claudia ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Núñez Urrutia Paulina ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Pascal Allende Denise ; Paulsen Kehr Diego ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Santana Tirachini Alejandro ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Soto Ferrada Leonardo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Tuma Zedan Joaquín ; Turres Figueroa Marisol ; Urízar Muñoz Christian ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Venegas Cárdenas Mario ; Verdugo Soto Germán ; Walker Prieto Matías .

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Barros Montero Ramón ; Becker Alvear Germán ; Bellolio Avaria Jaime ; Coloma Alamos Juan Antonio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hoffmann Opazo María José ; Kast Rist José Antonio ; Lavín León Joaquín ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Morales Muñoz Celso ; Norambuena Farías Iván ; Rivas Sánchez Gaspar ; Silva Méndez Ernesto ; Squella Ovalle Arturo ; Trisotti Martínez Renzo ; Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Urrutia Soto Osvaldo ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Ward Edwards Felipe .

-Se abstuvieron los diputados señores:

De Mussy Hiriart Felipe ; Kast Sommerhoff Felipe ; Kort Garriga Issa ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Sandoval Plaza David

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Corresponde votar la supresión propuesta por el Senado del número 3) del artículo 1° del proyecto.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 110 votos; por la negativa, 3 votos. Hubo 4 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Barros Montero Ramón ; Becker Alvear Germán ; Bellolio Avaria Jaime ; Berger Fett Bernardo ; Boric Font Gabriel ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Coloma Alamos Juan Antonio ; Cornejo González Aldo ; De Mussy Hiriart Felipe ; Edwards Silva José Manuel ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; Gahona Salazar Sergio ; García García René Manuel ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hernández Hernández Javier ; Hernando Pérez Marcela ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jackson Drago Giorgio ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Kast Rist José Antonio ; Kort Garriga Issa ; Lavín León Joaquín ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Monsalve Benavides Manuel ; Morales Muñoz Celso ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Nogueira Fernández Claudia ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Núñez Urrutia Paulina ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Pascal Allende Denise ; Paulsen Kehr Diego ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Sandoval Plaza David ; Santana Tirachini Alejandro ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Silva Méndez Ernesto ; Soto Ferrada Leonardo ; Squella Ovalle Arturo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Trisotti Martínez Renzo ; Tuma Zedan Joaquín ; Turres Figueroa Marisol ; Urízar Muñoz Christian ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Venegas Cárdenas Mario ; Verdugo Soto Germán ; Walker Prieto Matías ; Ward Edwards Felipe .

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Hoffmann Opazo María José ; Kast Sommerhoff Felipe ; Rivas Sánchez Gaspar .

-Se abstuvieron los diputados señores:

Norambuena Farías Iván ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Soto Osvaldo .

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Corresponde votar las modificaciones introducidas por el Senado al número 4) del artículo 1° del proyecto, que ha pasado a ser número 3), para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 112 votos; por la negativa, 2 votos. Hubo 2 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Barros Montero Ramón ; Becker Alvear Germán ; Bellolio Avaria Jaime ; Berger Fett Bernardo ; Boric Font Gabriel ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Coloma Alamos Juan Antonio ; Cornejo González Aldo ; De Mussy Hiriart Felipe ; Edwards Silva José Manuel ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; Gahona Salazar Sergio ; García García René Manuel ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hernández Hernández Javier ; Hernando Pérez Marcela ; Hoffmann Opazo María José ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jackson Drago Giorgio ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Kast Rist José Antonio ; Kast Sommerhoff Felipe ; Kort Garriga Issa ; Lavín León Joaquín ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Monsalve Benavides Manuel ; Morales Muñoz Celso ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Nogueira Fernández Claudia ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Núñez Urrutia Paulina ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Pascal Allende Denise ; Paulsen Kehr Diego ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Sandoval Plaza David ; Santana Tirachini Alejandro ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Silva Méndez Ernesto ; Soto Ferrada Leonardo ; Squella Ovalle Arturo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Trisotti Martínez Renzo ; Tuma Zedan Joaquín ; Turres Figueroa Marisol ; Urízar Muñoz Christian ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Venegas Cárdenas Mario ; Verdugo Soto Germán ; Walker Prieto Matías ; Ward Edwards Felipe .

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Norambuena Farías Iván ; Rivas Sánchez Gaspar .

-Se abstuvieron los diputados señores:

Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Soto Osvaldo .

La señorita CICARDINI (doña Daniella) .- Señor Presidente , pido agregar mi voto a favor.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Señora diputada , quedará constancia en el acta.

Corresponde votar el número 4) del artículo 1° introducido por el Senado, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 114 votos; por la negativa, 2 votos. Hubo 2 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Barros Montero Ramón ; Becker Alvear Germán ; Bellolio Avaria Jaime ; Berger Fett Bernardo ; Boric Font Gabriel ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Coloma Alamos Juan Antonio ; Cornejo González Aldo ; De Mussy Hiriart Felipe ; Edwards Silva José Manuel ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; Gahona Salazar Sergio ; García García René Manuel ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hernández Hernández Javier ; Hernando Pérez Marcela ; Hoffmann Opazo María José ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jackson Drago Giorgio ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Kast Rist José Antonio ; Kast Sommerhoff Felipe ; Kort Garriga Issa ; Lavín León Joaquín ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Monsalve Benavides Manuel ; Morales Muñoz Celso ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Nogueira Fernández Claudia ; Norambuena Farías Iván ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Núñez Urrutia Paulina ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Pascal Allende Denise ; Paulsen Kehr Diego ; Pérez Arriagada José ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Sandoval Plaza David ; Santana Tirachini Alejandro ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Silva Méndez Ernesto ; Soto Ferrada Leonardo ; Squella Ovalle Arturo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Trisotti Martínez Renzo ; Tuma Zedan Joaquín ; Turres Figueroa Marisol ; Urízar Muñoz Christian ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Venegas Cárdenas Mario ; Verdugo Soto Germán ; Walker Prieto Matías ; Ward Edwards Felipe .

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Rathgeb Schifferli Jorge ; Rivas Sánchez Gaspar .

-Se abstuvieron los diputados señores:

Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Soto Osvaldo .

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Corresponde votar la supresión propuesta por el Senado del número 5) del artículo 1° del proyecto.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 82 votos; por la negativa, 30 votos. Hubo 4 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Becker Alvear Germán ; Berger Fett Bernardo ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Cornejo González Aldo ; Edwards Silva José Manuel ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Hernando Pérez Marcela ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monsalve Benavides Manuel ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Núñez Urrutia Paulina ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Pascal Allende Denise ; Pérez Arriagada José ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Santana Tirachini Alejandro ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Soto Ferrada Leonardo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Tuma Zedan Joaquín ; Urízar Muñoz Christian ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Venegas Cárdenas Mario ; Verdugo Soto Germán ; Walker Prieto Matías .

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Barros Montero Ramón ; Bellolio Avaria Jaime ; Boric Font Gabriel ; Coloma Alamos Juan Antonio ; De Mussy Hiriart Felipe ; Gahona Salazar Sergio ; García García René Manuel ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hernández Hernández Javier ; Hoffmann Opazo María José ; Kast Rist José Antonio ; Kort Garriga Issa ; Lavín León Joaquín ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Morales Muñoz Celso ; Nogueira Fernández Claudia ; Norambuena Farías Iván ; Rivas Sánchez Gaspar ; Silva Méndez Ernesto ; Squella Ovalle Arturo ; Trisotti Martínez Renzo ; Turres Figueroa Marisol ; Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Urrutia Soto Osvaldo ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Ward Edwards Felipe .

-Se abstuvieron los diputados señores:

Jackson Drago Giorgio ; Kast Sommerhoff Felipe ; Paulsen Kehr Diego ; Sandoval Plaza David .

El señor SCHILLING.-

Señor Presidente , pido agregar mi voto favorable.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Señor diputado , quedará constancia en acta. Corresponde votar las modificaciones introducidas por el Senado al número 6) del artículo 1° del proyecto, que ha pasado a ser número 5), para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 111 votos; por la negativa, 3 votos. Hubo 4 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Barros Montero Ramón ; Becker Alvear Germán ; Bellolio Avaria Jaime ; Berger Fett Bernardo ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Coloma Alamos Juan Antonio ; Cornejo González Aldo ; De Mussy Hiriart Felipe ; Edwards Silva José Manuel ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; Gahona Salazar Sergio ; García García René Manuel ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hernández Hernández Javier ; Hernando Pérez Marcela ; Hoffmann Opazo María José ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Kast Rist José Antonio ; Kast Sommerhoff Felipe ; Kort Garriga Issa ; Lavín León Joaquín ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Monsalve Benavides Manuel ; Morales Muñoz Celso ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Nogueira Fernández Claudia ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Núñez Urrutia Paulina ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pascal Allende Denise ; Paulsen Kehr Diego ; Pérez Arriagada José ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Sandoval Plaza David ; Santana Tirachini Alejandro ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Silva Méndez Ernesto ; Soto Ferrada Leonardo ; Squella Ovalle Arturo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Trisotti Martínez Renzo ; Tuma Zedan Joaquín ; Turres Figueroa Marisol ; Urízar Muñoz Christian ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Venegas Cárdenas Mario ; Verdugo Soto Germán ; Walker Prieto Matías ; Ward Edwards Felipe .

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Boric Font Gabriel ; Pacheco Rivas Clemira ; Rivas Sánchez Gaspar .

-Se abstuvieron los diputados señores:

Jackson Drago Giorgio ; Norambuena Farías Iván ; Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Soto Osvaldo .

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Corresponde votar la supresión propuesta por el Senado del número 7) del artículo 1° del proyecto.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 112 votos; por la negativa, 1 voto. Hubo 2 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Barros Montero Ramón ; Becker Alvear Germán ; Bellolio Avaria Jaime ; Berger Fett Bernardo ; Boric Font Gabriel ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Coloma Alamos Juan Antonio ; Cornejo González Aldo ; De Mussy Hiriart Felipe ; Edwards Silva José Manuel ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; Gahona Salazar Sergio ; García García René Manuel ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hernández Hernández Javier ; Hernando Pérez Marcela ; Hoffmann Opazo María José ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jackson Drago Giorgio ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Kast Rist José Antonio ; Kort Garriga Issa ; Lavín León Joaquín ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Monsalve Benavides Manuel ; Morales Muñoz Celso ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Nogueira Fernández Claudia ; Norambuena Farías Iván ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Núñez Urrutia Paulina ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Paulsen Kehr Diego ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Sandoval Plaza David ; Santana Tirachini Alejandro ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Silva Méndez Ernesto ; Soto Ferrada Leonardo ; Squella Ovalle Arturo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Trisotti Martínez Renzo ; Tuma Zedan Joaquín ; Turres Figueroa Marisol ; Urízar Muñoz Christian ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Venegas Cárdenas Mario ; Verdugo Soto Germán ; Walker Prieto Matías ; Ward Edwards Felipe .

-Votó por la negativa el diputado señor Kast Sommerhoff Felipe .

-Se abstuvieron los diputados señores:

Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Soto Osvaldo

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Corresponde votar la supresión propuesta por el Senado de los números 8), 9) y 10) del artículo 1° del proyecto.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 114 votos; por la negativa, 1 voto. Hubo 2 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Barros Montero Ramón ; Becker Alvear Germán ; Bellolio Avaria Jaime ; Berger Fett Bernardo ; Boric Font Gabriel ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Coloma Alamos Juan Antonio ; Cornejo González Aldo ; De Mussy Hiriart Felipe ; Edwards Silva José Manuel ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; Gahona Salazar Sergio ; García García René Manuel ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hernández Hernández Javier ; Hernando Pérez Marcela ; Hoffmann Opazo María José ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jackson Drago Giorgio ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Kast Rist José Antonio ; Kast Sommerhoff Felipe ; Kort Garriga Issa ; Lavín León Joaquín ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Monsalve Benavides Manuel ; Morales Muñoz Celso ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Nogueira Fernández Claudia ; Norambuena Farías Iván ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Núñez Urrutia Paulina ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Pascal Allende Denise ; Paulsen Kehr Diego ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Sandoval Plaza David ; Santana Tirachini Alejandro ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Silva Méndez Ernesto ; Soto Ferrada Leonardo ; Squella Ovalle Arturo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Trisotti Martínez Renzo ; Tuma Zedan Joaquín ; Turres Figueroa Marisol ; Urízar Muñoz Christian ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Venegas Cárdenas Mario ; Verdugo Soto Germán ; Walker Prieto Matías ; Ward Edwards Felipe .

-Votó por la negativa el diputado señor Rivas Sánchez Gaspar .

-Se abstuvieron los diputados señores:

Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Soto Osvaldo .

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Corresponde votar las modificaciones introducidas por el Senado al número 13) del artículo 1° del proyecto, que ha pasado a ser número 8), para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 112 votos; por la negativa, 0 voto. Hubo 4 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Barros Montero Ramón ; Becker Alvear Germán ; Bellolio Avaria Jaime ; Berger Fett Bernardo ; Boric Font Gabriel ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Coloma Alamos Juan Antonio ; Cornejo González Aldo ; De Mussy Hiriart Felipe ; Edwards Silva José Manuel ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; Gahona Salazar Sergio ; García García René Manuel ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hernández Hernández Javier ; Hernando Pérez Marcela ; Hoffmann Opazo María José ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jackson Drago Giorgio ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Kast Rist José Antonio ; Kort Garriga Issa ; Lavín León Joaquín ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Monsalve Benavides Manuel ; Morales Muñoz Celso ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Nogueira Fernández Claudia ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Núñez Urrutia Paulina ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Pascal Allende Denise ; Paulsen Kehr Diego ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Sandoval Plaza David ; Santana Tirachini Alejandro ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Silva Méndez Ernesto ; Soto Ferrada Leonardo ; Squella Ovalle Arturo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Trisotti Martínez Renzo ; Tuma Zedan Joaquín ; Turres Figueroa Marisol ; Urízar Muñoz Christian ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Venegas Cárdenas Mario ; Verdugo Soto Germán ; Walker Prieto Matías ; Ward Edwards Felipe .

-Se abstuvieron los diputados señores:

Kast Sommerhoff Felipe ; Norambuena Farías Iván ; Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Soto Osvaldo .

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Corresponde votar las modificaciones introducidas por el Senado al número 14) del artículo 1° del proyecto, que ha pasado a ser número 9), para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 114 votos; por la negativa, 0 voto. Hubo 4 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Barros Montero Ramón ; Becker Alvear Germán ; Bellolio Avaria Jaime ; Berger Fett Bernardo ; Boric Font Gabriel ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Coloma Alamos Juan Antonio ; Cornejo González Aldo ; De Mussy Hiriart Felipe ; Edwards Silva José Manuel ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; Gahona Salazar Sergio ; García García René Manuel ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hernández Hernández Javier ; Hernando Pérez Marcela ; Hoffmann Opazo María José ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jackson Drago Giorgio ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Kast Rist José Antonio ; Kast Sommerhoff Felipe ; Kort Garriga Issa ; Lavín León Joaquín ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Monsalve Benavides Manuel ; Morales Muñoz Celso ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Nogueira Fernández Claudia ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Núñez Urrutia Paulina ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Pascal Allende Denise ; Paulsen Kehr Diego ; Pérez Arriagada José ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Sandoval Plaza David ; Santana Tirachini Alejandro ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Silva Méndez Ernesto ; Soto Ferrada Leonardo ; Squella Ovalle Arturo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Trisotti Martínez Renzo ; Tuma Zedan Joaquín ; Turres Figueroa Marisol ; Urízar Muñoz Christian ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Venegas Cárdenas Mario ; Verdugo Soto Germán ; Walker Prieto Matías ; Ward Edwards Felipe .

-Se abstuvieron los diputados señores:

Norambuena Farías Iván ; Rivas Sánchez Gaspar ; Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Soto Osvaldo .

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Corresponde votar las modificaciones introducidas por el Senado al número 15) del artículo 1° del proyecto, que ha pasado a ser número 10), para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 71 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 75 votos; por la negativa, 41 votos. No hubo abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Boric Font Gabriel ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Cornejo González Aldo ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Hernando Pérez Marcela ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jackson Drago Giorgio ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monsalve Benavides Manuel ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Núñez Urrutia Paulina ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Pascal Allende Denise ; Pérez Arriagada José ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Soto Ferrada Leonardo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Trisotti Martínez Renzo ; Tuma Zedan Joaquín ; Urízar Muñoz Christian ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Venegas Cárdenas Mario ; Walker Prieto Matías .

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Barros Montero Ramón ; Becker Alvear Germán ; Bellolio Avaria Jaime ; Berger Fett Bernardo ; Coloma Alamos Juan Antonio ; De Mussy Hiriart Felipe ; Edwards Silva José Manuel ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; Gahona Salazar Sergio ; García García René Manuel ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hernández Hernández Javier ; Hoffmann Opazo María José ; Kast Rist José Antonio ; Kast Sommerhoff Felipe ; Kort Garriga Issa ; Lavín León Joaquín ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Morales Muñoz Celso ; Nogueira Fernández Claudia ; Norambuena Farías Iván ; Paulsen Kehr Diego ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Sandoval Plaza David ; Santana Tirachini Alejandro ; Silva Méndez Ernesto ; Squella Ovalle Arturo ; Turres Figueroa Marisol ; Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Urrutia Soto Osvaldo ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Verdugo Soto Germán ; Ward Edwards Felipe .

El señor ANDRADE.-

Señor Presidente , pido agregar mi voto favorable.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Señor diputado , quedará constancia en el acta.

Corresponde votar la supresión propuesta por el Senado de los números 1), 3), 4) y 5) del artículo 2° del proyecto.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 110 votos; por la negativa, 1 voto. Hubo 5 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Barros Montero Ramón ; Becker Alvear Germán ; Berger Fett Bernardo ; Boric Font Gabriel ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Coloma Alamos Juan Antonio ; Cornejo González Aldo ; De Mussy Hiriart Felipe ; Edwards Silva José Manuel ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; Gahona Salazar Sergio ; García García René Manuel ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hernández Hernández Javier ; Hernando Pérez Marcela ; Hoffmann Opazo María José ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jackson Drago Giorgio ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Kast Rist José Antonio ; Kort Garriga Issa ; Lavín León Joaquín ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Monsalve Benavides Manuel ; Morales Muñoz Celso ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Nogueira Fernández Claudia ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Núñez Urrutia Paulina ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Paulsen Kehr Diego ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Sandoval Plaza David ; Santana Tirachini Alejandro ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Silva Méndez Ernesto ; Soto Ferrada Leonardo ; Squella Ovalle Arturo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Trisotti Martínez Renzo ; Tuma Zedan Joaquín ; Turres Figueroa Marisol ; Urízar Muñoz Christian ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Venegas Cárdenas Mario ; Verdugo Soto Germán ; Walker Prieto Matías ; Ward Edwards Felipe .

-Votó por la negativa el diputado señor Kast Sommerhoff Felipe .

-Se abstuvieron los diputados señores:

Bellolio Avaria Jaime ; Norambuena Farías Iván ; Rivas Sánchez Gaspar ; Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Soto Osvaldo .

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Corresponde votar la supresión propuesta por el Senado del número 2) del artículo 2° del proyecto.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 103 votos; por la negativa, 8 votos. Hubo 5 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Barros Montero Ramón ; Becker Alvear Germán ; Bellolio Avaria Jaime ; Berger Fett Bernardo ; Boric Font Gabriel ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Coloma Alamos Juan Antonio ; Cornejo González Aldo ; De Mussy Hiriart Felipe ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Fuentes Castillo Iván ; Gahona Salazar Sergio ; García García René Manuel ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hernández Hernández Javier ; Hernando Pérez Marcela ; Hoffmann Opazo María José ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jackson Drago Giorgio ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Kast Rist José Antonio ; Kast Sommerhoff Felipe ; Kort Garriga Issa ; Lavín León Joaquín ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Monsalve Benavides Manuel ; Morales Muñoz Celso ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Nogueira Fernández Claudia ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Pascal Allende Denise ; Paulsen Kehr Diego ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Sandoval Plaza David ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Silva Méndez Ernesto ; Soto Ferrada Leonardo ; Squella Ovalle Arturo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Trisotti Martínez Renzo ; Tuma Zedan Joaquín ; Turres Figueroa Marisol ; Urízar Muñoz Christian ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Venegas Cárdenas Mario ; Walker Prieto Matías ; Ward Edwards Felipe .

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Edwards Silva José Manuel ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; Monckeberg Bruner Cristián ; Núñez Urrutia Paulina ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Sabat Fernández Marcela ; Santana Tirachini Alejandro ; Verdugo Soto Germán .

-Se abstuvieron los diputados señores:

Norambuena Farías Iván ; Provoste Campillay Yasna ; Rivas Sánchez Gaspar ; Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Soto Osvaldo .

El señor FLORES.-

Señor Presidente , pido agregar mi voto favorable.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Se dejará constancia en el acta, señor diputado . Corresponde votar el nuevo número 1) del artículo 3° introducido por el Senado, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 74 votos; por la negativa, 43 votos. Hubo 1

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Boric Font Gabriel ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Cornejo González Aldo ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Hernando Pérez Marcela ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jackson Drago Giorgio ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monsalve Benavides Manuel ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Pascal Allende Denise ; Pérez Arriagada José ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Soto Ferrada Leonardo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Tuma Zedan Joaquín ; Urízar Muñoz Christian ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Venegas Cárdenas Mario ; Walker Prieto Matías .

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Barros Montero Ramón ; Becker Alvear Germán ; Bellolio Avaria Jaime ; Berger Fett Bernardo ; Coloma Alamos Juan Antonio ; De Mussy Hiriart Felipe ; Edwards Silva José Manuel ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; Gahona Salazar Sergio ; García García René Manuel ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hernández Hernández Javier ; Hoffmann Opazo María José ; Kast Rist José Antonio ; Kast Sommerhoff Felipe ; Kort Garriga Issa ; Lavín León Joaquín ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Morales Muñoz Celso ; Nogueira Fernández Claudia ; Norambuena Farías Iván ; Núñez Urrutia Paulina ; Paulsen Kehr Diego ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Sandoval Plaza David ; Santana Tirachini Alejandro ; Silva Méndez Ernesto ; Squella Ovalle Arturo ; Trisotti Martínez Renzo ; Turres Figueroa Marisol ; Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Urrutia Soto Osvaldo ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Verdugo Soto Germán ; Ward Edwards Felipe .

-Se abstuvo el diputado señor Rivas Sánchez Gaspar .

El señor MONCKEBERG (don Nicolás).-

Señor Presidente , quiero hacer reserva de constitucionalidad respecto de este artículo y del siguiente, por apartarse de las ideas matrices del proyecto.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Muy bien, señor diputado .

Corresponde votar las modificaciones introducidas por el Senado al número 1) del artículo 3° del proyecto, que ha pasado a ser número 2), para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 96 votos; por la negativa, 15 votos. Hubo 6 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Barros Montero Ramón ; Bellolio Avaria Jaime ; Boric Font Gabriel ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Coloma Alamos Juan Antonio ; Cornejo González Aldo ; De Mussy Hiriart Felipe ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Gahona Salazar Sergio ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hernández Hernández Javier ; Hernando Pérez Marcela ; Hoffmann Opazo María José ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jackson Drago Giorgio ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Kast Rist José Antonio ; Kort Garriga Issa ; Lavín León Joaquín ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monsalve Benavides Manuel ; Morales Muñoz Celso ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Nogueira Fernández Claudia ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Pascal Allende Denise ; Pérez Arriagada José ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Silva Méndez Ernesto ; Soto Ferrada Leonardo ; Squella Ovalle Arturo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Trisotti Martínez Renzo ; Tuma Zedan Joaquín ; Turres Figueroa Marisol ; Urízar Muñoz Christian ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Venegas Cárdenas Mario ; Walker Prieto Matías ; Ward Edwards Felipe .

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Becker Alvear Germán ; Berger Fett Bernardo ; Edwards Silva José Manuel ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; García García René Manuel ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Núñez Urrutia Paulina ; Paulsen Kehr Diego ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Santana Tirachini Alejandro ; Verdugo Soto Germán .

-Se abstuvieron los diputados señores:

Kast Sommerhoff Felipe ; Norambuena Farías Iván ; Rivas Sánchez Gaspar ; Sandoval Plaza David ; Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Soto Osvaldo .

El señor CHAHIN.-

Señor Presidente , pido agregar mi voto favorable.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Se dejará constancia en el acta, señor diputado . Corresponde votar los números 1) y 2) del nuevo artículo 4° introducido por el Senado, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 113 votos; por la negativa, 1 voto. Hubo 4 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Barros Montero Ramón ; Becker Alvear Germán ; Bellolio Avaria Jaime ; Berger Fett Bernardo ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Coloma Alamos Juan Antonio ; Cornejo González Aldo ; De Mussy Hiriart Felipe ; Edwards Silva José Manuel ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; Gahona Salazar Sergio ; García García René Manuel ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hasbún Selume Gustavo ; Hernández Hernández Javier ; Hernando Pérez Marcela ; Hoffmann Opazo María José ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jackson Drago Giorgio ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Kast Rist José Antonio ; Kast Sommerhoff Felipe ; Kort Garriga Issa ; Lavín León Joaquín ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Monsalve Benavides Manuel ; Morales Muñoz Celso ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Nogueira Fernández Claudia ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Núñez Urrutia Paulina ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Pascal Allende Denise ; Paulsen Kehr Diego ; Pérez Arriagada José ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Sandoval Plaza David ; Santana Tirachini Alejandro ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Silva Méndez Ernesto ; Soto Ferrada Leonardo ; Squella Ovalle Arturo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Trisotti Martínez Renzo ; Tuma Zedan Joaquín ; Turres Figueroa Marisol ; Urízar Muñoz Christian ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Venegas Cárdenas Mario ; Verdugo Soto Germán ; Walker Prieto Matías ; Ward Edwards Felipe .

-Votó por la negativa el diputado señor Boric Font Gabriel .

-Se abstuvieron los diputados señores:

Norambuena Farías Iván ; Rivas Sánchez Gaspar ; Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Soto Osvaldo .

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Corresponde votar el número 3) del nuevo artículo 4° introducido por el Senado, para cuya aprobación se requiere el voto favorable de 68 señoras diputadas y señores diputados.

En votación.

-Efectuada la votación en forma económica, por el sistema electrónico, dio el siguiente resultado: por la afirmativa, 80 votos; por la negativa, 33 votos. Hubo 5 abstenciones.

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Aprobado.

-Votaron por la afirmativa los siguientes señores diputados:

Aguiló Melo Sergio ; Álvarez Vera Jenny ; Andrade Lara Osvaldo ; Arriagada Macaya Claudio ; Auth Stewart Pepe ; Browne Urrejola Pedro ; Campos Jara Cristián ; Cariola Oliva Karol ; Carmona Soto Lautaro ; Carvajal Ambiado Loreto ; Castro González Juan Luis ; Ceroni Fuentes Guillermo ; Chahin Valenzuela Fuad ; Chávez Velásquez Marcelo ; Cicardini Milla Daniella ; Cornejo González Aldo ; Espejo Yaksic Sergio ; Espinosa Monardes Marcos ; Espinoza Sandoval Fidel ; Farcas Guendelman Daniel ; Farías Ponce Ramón ; Fernández Allende Maya ; Flores García Iván ; Fuentes Castillo Iván ; Gahona Salazar Sergio ; Girardi Lavín Cristina ; Godoy Ibáñez Joaquín ; González Torres Rodrigo ; Gutiérrez Gálvez Hugo ; Gutiérrez Pino Romilio ; Hernández Hernández Javier ; Hernando Pérez Marcela ; Insunza Gregorio De Las Heras Jorge ; Jackson Drago Giorgio ; Jaramillo Becker Enrique ; Jarpa Wevar Carlos Abel ; Jiménez Fuentes Tucapel ; Lemus Aracena Luis ; León Ramírez Roberto ; Letelier Norambuena Felipe ; Lorenzini Basso Pablo ; Melo Contreras Daniel ; Meza Moncada Fernando ; Mirosevic Verdugo Vlado ; Monckeberg Bruner Cristián ; Monsalve Benavides Manuel ; Morano Cornejo Juan Enrique ; Nogueira Fernández Claudia ; Núñez Arancibia Daniel ; Núñez Lozano Marco Antonio ; Núñez Urrutia Paulina ; Ojeda Uribe Sergio ; Ortiz Novoa José Miguel ; Pacheco Rivas Clemira ; Pérez Arriagada José ; Pilowsky Greene Jaime ; Poblete Zapata Roberto ; Provoste Campillay Yasna ; Rincón González Ricardo ; Robles Pantoja Alberto ; Rocafull López Luis ; Rubilar Barahona Karla ; Sabag Villalobos Jorge ; Sabat Fernández Marcela ; Saffirio Espinoza René ; Saldívar Auger Raúl ; Schilling Rodríguez Marcelo ; Sepúlveda Orbenes Alejandra ; Silber Romo Gabriel ; Soto Ferrada Leonardo ; Tarud Daccarett Jorge ; Teillier Del Valle Guillermo ; Torres Jeldes Víctor ; Tuma Zedan Joaquín ; Turres Figueroa Marisol ; Urízar Muñoz Christian ; Vallejo Dowling Camila ; Vallespín López Patricio ; Venegas Cárdenas Mario ; Walker Prieto Matías .

-Votaron por la negativa los siguientes señores diputados:

Álvarez-Salamanca Ramírez Pedro Pablo ; Barros Montero Ramón ; Becker Alvear Germán ; Bellolio Avaria Jaime ; Berger Fett Bernardo ; Boric Font Gabriel ; Coloma Alamos Juan Antonio ; De Mussy Hiriart Felipe ; Edwards Silva José Manuel ; Fuenzalida Figueroa Gonzalo ; García García René Manuel ; Hasbún Selume Gustavo ; Hoffmann Opazo María José ; Kast Rist José Antonio ; Kast Sommerhoff Felipe ; Lavín León Joaquín ; Macaya Danús Javier ; Melero Abaroa Patricio ; Monckeberg Díaz Nicolás ; Morales Muñoz Celso ; Norambuena Farías Iván ; Pérez Lahsen Leopoldo ; Rathgeb Schifferli Jorge ; Santana Tirachini Alejandro ; Silva Méndez Ernesto ; Squella Ovalle Arturo ; Trisotti Martínez Renzo ; Ulloa Aguillón Jorge ; Urrutia Bonilla Ignacio ; Urrutia Soto Osvaldo ; Van Rysselberghe Herrera Enrique ; Verdugo Soto Germán ; Ward Edwards Felipe .

-Se abstuvieron los diputados señores:

Kort Garriga Issa ; Pascal Allende Denise ; Paulsen Kehr Diego ; Rivas Sánchez Gaspar ; Sandoval Plaza David .

El señor CORNEJO ( Presidente).-

Despachado el proyecto.

-Aplausos.

3.2. Oficio de Cámara Origen a Cámara Revisora

Oficio Aprobación de Modificaciones. Fecha 20 de enero, 2015. Oficio en Sesión 88. Legislatura 362.

VALPARAÍSO, 20 de enero de 2015

Oficio Nº 11.686

A S.E. LA PRESIDENTA DEL H. SENADO

La Cámara de Diputados, en sesión de esta fecha, ha aprobado las enmiendas propuestas por ese H. Senado al proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional, correspondiente al boletín N°9326-07.

Lo que tengo a honra decir a V.E., en respuesta a vuestro oficio Nº12/SEC/15, de 14 de enero de 2015.

Devuelvo los antecedentes respectivos.

Dios guarde a V.E.

ALDO CORNEJO GONZÁLEZ

Presidente de la Cámara de Diputados

MIGUEL LANDEROS PERKIĆ

Secretario General de la Cámara de Diputados

3.3. Oficio de Cámara de Origen al Ejecutivo

Oficio Ley a S. E. El Presidente de la República. Fecha 20 de enero, 2015. Oficio

S.E. La Presidenta de la República comunica que no hará uso de la facultad de Veto.

VALPARAÍSO, 20 de enero de 2015

Oficio Nº 11.685

A S.E. LA PRESIDENTA DE LA REPÚBLICA

Tengo a honra comunicar a V.E. que el Congreso Nacional ha prestado su aprobación al proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional, correspondiente al boletín N°9326-07.

Sin embargo, teniendo presente que el proyecto contiene normas propias de ley orgánica constitucional, ha de ser enviado al Tribunal Constitucional, en conformidad con lo dispuesto en el inciso segundo del artículo 93 de la Carta Fundamental, en relación con el número 1º de ese mismo precepto.

En razón de lo anterior, la Cámara de Diputados, por ser cámara de origen, precisa saber previamente si V.E. hará uso de la facultad que le confiere el artículo 73 de la Constitución Política de la República.

En el evento de que V.E. aprobare sin observaciones el texto que más adelante se transcribe, le solicito comunicarlo a esta Corporación, devolviendo el presente oficio.

PROYECTO DE LEY:

“Artículo 1°.- Modifícase la ley N°18.700, orgánica constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, de la manera que a continuación se señala:

1) En el artículo 3° bis:

a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, pasando el actual inciso segundo a ser tercero:

“En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.”.

b) Intercálase el siguiente inciso quinto, nuevo, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.”.

c) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “que hubieren constituido un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

d) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “Se podrá dejar sin efecto un pacto electoral”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 4° por el siguiente:

“Artículo 4°.- En el caso de las declaraciones de candidaturas para la elección de diputados y senadores, los partidos políticos o pactos electorales podrán presentar en cada distrito o circunscripción un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción de que se trate.”.

3) Sustitúyese el artículo 17 por el siguiente:

“Artículo 17.- El Consejo del Servicio Electoral, dentro de los diez días siguientes a aquel en que venza el plazo para efectuar la declaración de candidaturas, deberá dictar una resolución que se notificará al correo electrónico que los partidos políticos y candidatos independientes deberán informar en el momento de la declaración, la que se pronunciará sobre:

a) La aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 25, 48 y 50 de la Constitución Política de la República, o que se encuentren en alguna de las situaciones previstas en su artículo 57. Asimismo, deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los párrafos 1° a 3° de este título.

b) La aceptación o rechazo de la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, declaradas por cada partido político, en conformidad a lo dispuesto en los incisos cuarto y quinto del artículo 3° bis. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con el porcentaje de sexos establecido en el inciso quinto de dicho artículo.

Los partidos políticos cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, sean rechazadas en conformidad a lo dispuesto en la letra b) de este artículo, podrán corregirlas ante el Servicio Electoral dentro de los cuatro días hábiles siguientes a la fecha del despacho del correo electrónico que notifica la resolución a que alude el inciso primero, con el fin de ajustarse al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso quinto del artículo 3° bis, ya sea retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas.

Dentro de los cinco días siguientes de vencido el plazo para presentar la corrección, el Consejo del Servicio Electoral dictará una nueva resolución aceptando o rechazando las declaraciones nuevas y rechazando o aceptando, según proceda, la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputados o a senadores, según corresponda, la que deberá ser publicada dentro de tercer día en el Diario Oficial. En tal oportunidad también se publicarán en el mismo medio la aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente.”.

4) Agrégase, en el artículo 23, el siguiente inciso tercero, nuevo, pasando los actuales incisos tercero y cuarto a ser cuarto y quinto, respectivamente:

“En el caso de un pacto electoral, el orden de precedencia de los partidos dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito será el señalado por el pacto electoral en la declaración de candidaturas y, a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.

5) En el artículo 24:

a) Sustitúyese el inciso cuarto por el que sigue:

“El orden de precedencia de los candidatos de un partido y sus independientes asociados dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito será el señalado por el partido en la declaración de candidaturas y, a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.

b) Reemplázase, en el inciso final, la expresión “a fin de que” por “destinada a que”.

6) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme a las reglas establecidas en el procedimiento que a continuación se detalla:

1.- El Tribunal Calificador de Elecciones determinará las preferencias emitidas a favor de cada lista y de cada uno de los candidatos que la integran.

2.- Se aplicará el sistema electoral de coeficiente D´Hondt, para lo cual se procederá de la siguiente manera:

a) Los votos de cada lista se dividirán por uno, dos, tres y así sucesivamente hasta la cantidad de cargos que corresponda elegir.

b) Los números que han resultado de estas divisiones se ordenarán en orden decreciente hasta el número correspondiente a la cantidad de cargos que se eligen en cada distrito electoral o circunscripción senatorial.

c) A cada lista o pacto electoral se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b).

3.- En el caso de las listas conformadas por un solo partido político, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará electos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada lista, de acuerdo al número de cargos que le correspondan a cada una de ellas, luego de aplicar las reglas descritas precedentemente.

4.- En el caso de los pactos electorales, se aplicarán las siguientes reglas para determinar cuántos escaños le corresponden a cada uno de ellos:

a) Se calculará el total de los votos de cada partido político o, en su caso, de la suma de cada partido político y las candidaturas independientes asociadas a ese partido.

b) Se dividirá por uno, dos, tres y así sucesivamente, hasta la cantidad de cargos asignados al pacto electoral.

c) A cada partido político o, en su caso, a cada partido y las candidaturas independientes asociadas a éste, se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b) precedente.

d) El Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada partido político o, en su caso, de cada partido, considerando las candidaturas independientes asociadas éste dentro de un pacto electoral, de acuerdo a los cupos obtenidos por cada uno de ellos.

En caso de empate entre candidatos de una misma lista, o entre candidatos de distintas listas que a su vez estén empatadas, el Tribunal Calificador de Elecciones procederá en audiencia pública a efectuar un sorteo entre ellos, y proclamará elegido al que salga favorecido.”.

7) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”.

8) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos, que elegirá 3 diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte, que elegirá 3 diputados.

3er distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal, que elegirá 5 diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen, que elegirá 5 diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela, que elegirá 7 diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué, que elegirá 8 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca, que elegirá 8 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú, que elegirá 8 diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia, que elegirá 7 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín y La Granja, que elegirá 8 diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén, que elegirá 6 diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana, que elegirá 7 diputados.

13° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo, que elegirá 5 diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué, San Pedro y Padre Hurtado, que elegirá 6 diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa, que elegirá 5 diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones, que elegirá 4 diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael, que elegirá 7 diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco, que elegirá 4 diputados.

19° distrito, constituido por las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ránquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel, que elegirá 5 diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana, que elegirá 8 diputados.

21er distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja, que elegirá 5 diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino, que elegirá 4 diputados.

23er distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén, que elegirá 7 diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco, que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos, que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena, que elegirá 5 diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel, que elegirá 3 diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica, que elegirá 3 diputados.

El número de diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis.”.

9) Agrégase el siguiente artículo 179 bis:

“Artículo 179 bis.- Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con el siguiente procedimiento:

a) Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consistirá en distribuir a prorrata los cargos entre los distritos electorales, de acuerdo a la fórmula dispuesta en el artículo 109 bis de esta ley.

b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 8 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al de la realización del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con aquel en que se celebran elecciones de diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.

d) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes.

Dentro de los cinco días siguientes a la publicación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral aplicó las letras a) y b) de este artículo.

Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de febrero del año de que se trate.”.

10) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 50 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

1a circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, 2 senadores.

2a circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, 2 senadores.

3a circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 3 senadores.

4a circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, 2 senadores.

5a circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, 3 senadores.

6a circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, 5 senadores.

7a circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 5 senadores.

8a circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, 3 senadores.

9a circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, 5 senadores.

10a circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, 5 senadores.

11a circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 5 senadores.

12a circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 3 senadores.

13a circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, 3 senadores.

14a circunscripción, constituida por la XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, 2 senadores.

15a circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 2 senadores.”.

11) Derógase el artículo 181.

12) Agrégase el siguiente artículo 23 transitorio:

“Artículo 23.- La regla especial del artículo 3° bis, inciso quinto, sólo tendrá aplicación en los procesos electorales parlamentarios de 2017, 2021, 2025 y 2029.”

13) Agrégase el siguiente artículo 24 transitorio:

“Artículo 24.- Para los efectos de completar la nueva integración del Senado de la República, en las elecciones parlamentarias que deben celebrarse en noviembre de 2017 corresponderá que se renueven completamente las circunscripciones que corresponden a regiones impares.

En el caso de las circunscripciones que corresponden a las regiones pares y Metropolitana, los parlamentarios elegidos en 2013 seguirán en sus funciones hasta completar su período de ocho años. En las elecciones de 2021, estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde.”.

14) Agrégase el siguiente artículo 25 transitorio:

“Artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.”.

Artículo 2°.- Modifícase la ley N°19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, de la manera que a continuación se señala:

1) Intercálase entre el artículo 58 y el artículo transitorio el siguiente epígrafe: “Disposiciones transitorias.”.

2) Agrégase el siguiente artículo segundo transitorio, pasando el actual artículo único transitorio, a ser artículo primero:

“Artículo segundo.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y sólo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hayan sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a los que pertenezcan tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento por cada una de ellas.

Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.”.

3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a senadoras y diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 unidades de fomento por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.”.

Artículo 3°.- Modifícase la ley N° 18.603, orgánica constitucional de Partidos Políticos, de la manera que a continuación se señala:

1) Sustitúyese el inciso primero del artículo 3° por el siguiente:

“Artículo 3°.- Los partidos políticos existirán como tales cuando se hubieren constituido legalmente en al menos una de las regiones en que se divide políticamente el país.”.

2) En el artículo 6°:

a) Sustitúyese en el inciso primero la cifra “0,5” por el guarismo “0,25”.

b) Agrégase en el inciso segundo, a continuación del punto aparte, que ha pasado a ser punto seguido, la siguiente oración: “Los notarios no podrán negarse a recibir la declaración a que hace referencia este artículo y no podrán cobrar por este servicio.”.

3) Sustitúyese el inciso primero del artículo 7° por el siguiente:

“Artículo 7°.- Cumplidos los requisitos a que se refieren los artículos 5° y 6°, y reunido el número de afiliados a que alude este último artículo en una de las regiones en que se divide políticamente el país, se solicitará al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos. La solicitud deberá ser firmada por el presidente y por el secretario del partido en formación.”.

4) En el artículo 26:

a) Suprímese en el literal d) la oración “la aprobación de un pacto electoral en elecciones de Parlamentarios o su retiro del mismo, y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal”.

b) Incorpórase el siguiente literal e), pasando los actuales literales e) y f) a ser f) y g) respectivamente:

“e) Aprobar un pacto electoral en las elecciones de parlamentarios o su retiro del mismo y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal;”.

5) En el artículo 42:

a) Sustitúyese su número 2° por el siguiente:

“2°.- Por no alcanzar en la región en que está legalmente constituido el 2,5 por ciento de los sufragios válidamente emitidos en la última elección de diputados. En el caso de los partidos que se encuentren inscritos en más de una región, la disolución procederá cuando no hayan alcanzado el indicado umbral del 2,5 por ciento en más de la mitad de dichas regiones.”.

b) Sustitúyese el inciso final por los siguientes incisos:

“No obstante, si un partido político incurre en la situación prevista en el número 2° de este artículo, pero elige al menos dos parlamentarios, sean diputados o senadores, conservará su calidad de tal.

Si incurre en la situación prevista en el número 4° en una o más regiones, pero mantiene el mínimo de ellas exigido por la ley, conservará su calidad de tal, pero no podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2° en aquellas donde su número de afiliados haya disminuido en más del 50 por ciento. El Director del Servicio Electoral anotará esta circunstancia al margen de la respectiva inscripción en el Registro de Partidos Políticos.”.

Artículo 4°.- Modifícase la ley N° 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, en los siguientes términos:

1) Sustitúyese el inciso segundo del artículo 7° por el siguiente:

“En la elección primaria para la nominación de candidatos a los cargos de parlamentarios, para cada territorio electoral, los partidos políticos podrán participar:

a) En forma individual, sin haber suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos.

b) En forma individual, habiendo suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos dentro del pacto.

c) En conjunto con otros partidos con los cuales ha suscrito un pacto electoral, y con el objeto de determinar la totalidad de los candidatos de dicho pacto.”.

2) Introdúcense las siguientes modificaciones en el artículo 30:

a) Reemplázase su inciso segundo por el que sigue:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen de la forma señalada en las letras a) o b) del inciso segundo del artículo 7°, serán nominados como candidatos para la elección definitiva en cada territorio electoral las mayores votaciones individuales hasta completar el número de cargos definido en la declaración de candidaturas conforme al inciso primero del artículo 16.”.

b) Incorpórase el siguiente inciso final:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen en pacto electoral de la forma señalada en la letra c) del inciso segundo del artículo 7°, los candidatos nominados para la elección definitiva en cada territorio electoral serán determinados conforme al procedimiento señalado en el artículo 109 bis de la ley N° 18.700, considerando para estos efectos que constituyen una lista los candidatos de un mismo partido y sus candidaturas independientes asociadas.”.

3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- El partido político que decidiere someterse al sistema de elecciones primarias contemplado en los artículos 3º y siguientes de la presente ley para los períodos electorales parlamentarios de los años 2017, 2021, 2025 y 2029 sólo podrá someter a dicho procedimiento hasta el cuarenta por ciento del total de candidaturas a diputado o senador que pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral.”.

Artículo 5°.- Esta ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la partida 02, Congreso Nacional, de la ley de Presupuestos para el Sector Público.

Lo dispuesto en el artículo 2° de esta ley se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la ley de Presupuestos respectiva.”.

Dios guarde a V. E.

ALDO CORNEJO GONZÁLEZ

Presidente de la Cámara de Diputados

MIGUEL LANDEROS PERKIĆ

Secretario General de la Cámara de Diputados

4. Trámite Tribunal Constitucional

4.1. Oficio de Cámara de Origen al Ejecutivo

Oficio de Ley Consulta Facultad de Veto. Fecha 20 de enero, 2015. Oficio en Sesión 119. Legislatura 362.

S.E. La Presidenta de la República comunica que no hará uso de la facultad de Veto en fecha 22 de enero de 2015.

VALPARAÍSO, 20 de enero de 2015

Oficio Nº 11.685

A S.E. LA PRESIDENTA DE LA REPÚBLICA

Tengo a honra comunicar a V.E. que el Congreso Nacional ha prestado su aprobación al proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional, correspondiente al boletín N°9326-07.

Sin embargo, teniendo presente que el proyecto contiene normas propias de ley orgánica constitucional, ha de ser enviado al Tribunal Constitucional, en conformidad con lo dispuesto en el inciso segundo del artículo 93 de la Carta Fundamental, en relación con el número 1º de ese mismo precepto.

En razón de lo anterior, la Cámara de Diputados, por ser cámara de origen, precisa saber previamente si V.E. hará uso de la facultad que le confiere el artículo 73 de la Constitución Política de la República.

En el evento de que V.E. aprobare sin observaciones el texto que más adelante se transcribe, le solicito comunicarlo a esta Corporación, devolviendo el presente oficio.

PROYECTO DE LEY:

“Artículo 1°.- Modifícase la ley N°18.700, orgánica constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, de la manera que a continuación se señala:

1) En el artículo 3° bis:

a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, pasando el actual inciso segundo a ser tercero:

“En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.”.

b) Intercálase el siguiente inciso quinto, nuevo, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.”.

c) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “que hubieren constituido un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

d) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “Se podrá dejar sin efecto un pacto electoral”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 4° por el siguiente:

“Artículo 4°.- En el caso de las declaraciones de candidaturas para la elección de diputados y senadores, los partidos políticos o pactos electorales podrán presentar en cada distrito o circunscripción un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción de que se trate.”.

3) Sustitúyese el artículo 17 por el siguiente:

“Artículo 17.- El Consejo del Servicio Electoral, dentro de los diez días siguientes a aquel en que venza el plazo para efectuar la declaración de candidaturas, deberá dictar una resolución que se notificará al correo electrónico que los partidos políticos y candidatos independientes deberán informar en el momento de la declaración, la que se pronunciará sobre:

a) La aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 25, 48 y 50 de la Constitución Política de la República, o que se encuentren en alguna de las situaciones previstas en su artículo 57. Asimismo, deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los párrafos 1° a 3° de este título.

b) La aceptación o rechazo de la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, declaradas por cada partido político, en conformidad a lo dispuesto en los incisos cuarto y quinto del artículo 3° bis. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con el porcentaje de sexos establecido en el inciso quinto de dicho artículo.

Los partidos políticos cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, sean rechazadas en conformidad a lo dispuesto en la letra b) de este artículo, podrán corregirlas ante el Servicio Electoral dentro de los cuatro días hábiles siguientes a la fecha del despacho del correo electrónico que notifica la resolución a que alude el inciso primero, con el fin de ajustarse al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso quinto del artículo 3° bis, ya sea retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas.

Dentro de los cinco días siguientes de vencido el plazo para presentar la corrección, el Consejo del Servicio Electoral dictará una nueva resolución aceptando o rechazando las declaraciones nuevas y rechazando o aceptando, según proceda, la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputados o a senadores, según corresponda, la que deberá ser publicada dentro de tercer día en el Diario Oficial. En tal oportunidad también se publicarán en el mismo medio la aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente.”.

4) Agrégase, en el artículo 23, el siguiente inciso tercero, nuevo, pasando los actuales incisos tercero y cuarto a ser cuarto y quinto, respectivamente:

“En el caso de un pacto electoral, el orden de precedencia de los partidos dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito será el señalado por el pacto electoral en la declaración de candidaturas y, a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.

5) En el artículo 24:

a) Sustitúyese el inciso cuarto por el que sigue:

“El orden de precedencia de los candidatos de un partido y sus independientes asociados dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito será el señalado por el partido en la declaración de candidaturas y, a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.

b) Reemplázase, en el inciso final, la expresión “a fin de que” por “destinada a que”.

6) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme a las reglas establecidas en el procedimiento que a continuación se detalla:

1.- El Tribunal Calificador de Elecciones determinará las preferencias emitidas a favor de cada lista y de cada uno de los candidatos que la integran.

2.- Se aplicará el sistema electoral de coeficiente D´Hondt, para lo cual se procederá de la siguiente manera:

a) Los votos de cada lista se dividirán por uno, dos, tres y así sucesivamente hasta la cantidad de cargos que corresponda elegir.

b) Los números que han resultado de estas divisiones se ordenarán en orden decreciente hasta el número correspondiente a la cantidad de cargos que se eligen en cada distrito electoral o circunscripción senatorial.

c) A cada lista o pacto electoral se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b).

3.- En el caso de las listas conformadas por un solo partido político, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará electos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada lista, de acuerdo al número de cargos que le correspondan a cada una de ellas, luego de aplicar las reglas descritas precedentemente.

4.- En el caso de los pactos electorales, se aplicarán las siguientes reglas para determinar cuántos escaños le corresponden a cada uno de ellos:

a) Se calculará el total de los votos de cada partido político o, en su caso, de la suma de cada partido político y las candidaturas independientes asociadas a ese partido.

b) Se dividirá por uno, dos, tres y así sucesivamente, hasta la cantidad de cargos asignados al pacto electoral.

c) A cada partido político o, en su caso, a cada partido y las candidaturas independientes asociadas a éste, se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b) precedente.

d) El Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada partido político o, en su caso, de cada partido, considerando las candidaturas independientes asociadas éste dentro de un pacto electoral, de acuerdo a los cupos obtenidos por cada uno de ellos.

En caso de empate entre candidatos de una misma lista, o entre candidatos de distintas listas que a su vez estén empatadas, el Tribunal Calificador de Elecciones procederá en audiencia pública a efectuar un sorteo entre ellos, y proclamará elegido al que salga favorecido.”.

7) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”.

8) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos, que elegirá 3 diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte, que elegirá 3 diputados.

3er distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal, que elegirá 5 diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen, que elegirá 5 diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela, que elegirá 7 diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué, que elegirá 8 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca, que elegirá 8 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú, que elegirá 8 diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia, que elegirá 7 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín y La Granja, que elegirá 8 diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén, que elegirá 6 diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana, que elegirá 7 diputados.

13° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo, que elegirá 5 diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué, San Pedro y Padre Hurtado, que elegirá 6 diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa, que elegirá 5 diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones, que elegirá 4 diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael, que elegirá 7 diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco, que elegirá 4 diputados.

19° distrito, constituido por las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ránquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel, que elegirá 5 diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana, que elegirá 8 diputados.

21er distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja, que elegirá 5 diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino, que elegirá 4 diputados.

23er distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén, que elegirá 7 diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco, que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos, que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena, que elegirá 5 diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel, que elegirá 3 diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica, que elegirá 3 diputados.

El número de diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis.”.

9) Agrégase el siguiente artículo 179 bis:

“Artículo 179 bis.- Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con el siguiente procedimiento:

a) Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consistirá en distribuir a prorrata los cargos entre los distritos electorales, de acuerdo a la fórmula dispuesta en el artículo 109 bis de esta ley.

b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 8 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al de la realización del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con aquel en que se celebran elecciones de diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.

d) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes.

Dentro de los cinco días siguientes a la publicación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral aplicó las letras a) y b) de este artículo.

Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de febrero del año de que se trate.”.

10) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 50 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

1a circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, 2 senadores.

2a circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, 2 senadores.

3a circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 3 senadores.

4a circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, 2 senadores.

5a circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, 3 senadores.

6a circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, 5 senadores.

7a circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 5 senadores.

8a circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, 3 senadores.

9a circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, 5 senadores.

10a circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, 5 senadores.

11a circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 5 senadores.

12a circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 3 senadores.

13a circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, 3 senadores.

14a circunscripción, constituida por la XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, 2 senadores.

15a circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 2 senadores.”.

11) Derógase el artículo 181.

12) Agrégase el siguiente artículo 23 transitorio:

“Artículo 23.- La regla especial del artículo 3° bis, inciso quinto, sólo tendrá aplicación en los procesos electorales parlamentarios de 2017, 2021, 2025 y 2029.”

13) Agrégase el siguiente artículo 24 transitorio:

“Artículo 24.- Para los efectos de completar la nueva integración del Senado de la República, en las elecciones parlamentarias que deben celebrarse en noviembre de 2017 corresponderá que se renueven completamente las circunscripciones que corresponden a regiones impares.

En el caso de las circunscripciones que corresponden a las regiones pares y Metropolitana, los parlamentarios elegidos en 2013 seguirán en sus funciones hasta completar su período de ocho años. En las elecciones de 2021, estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde.”.

14) Agrégase el siguiente artículo 25 transitorio:

“Artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.”.

Artículo 2°.- Modifícase la ley N°19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, de la manera que a continuación se señala:

1) Intercálase entre el artículo 58 y el artículo transitorio el siguiente epígrafe: “Disposiciones transitorias.”.

2) Agrégase el siguiente artículo segundo transitorio, pasando el actual artículo único transitorio, a ser artículo primero:

“Artículo segundo.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y sólo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hayan sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a los que pertenezcan tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento por cada una de ellas.

Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.”.

3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a senadoras y diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 unidades de fomento por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.”.

Artículo 3°.- Modifícase la ley N° 18.603, orgánica constitucional de Partidos Políticos, de la manera que a continuación se señala:

1) Sustitúyese el inciso primero del artículo 3° por el siguiente:

“Artículo 3°.- Los partidos políticos existirán como tales cuando se hubieren constituido legalmente en al menos una de las regiones en que se divide políticamente el país.”.

2) En el artículo 6°:

a) Sustitúyese en el inciso primero la cifra “0,5” por el guarismo “0,25”.

b) Agrégase en el inciso segundo, a continuación del punto aparte, que ha pasado a ser punto seguido, la siguiente oración: “Los notarios no podrán negarse a recibir la declaración a que hace referencia este artículo y no podrán cobrar por este servicio.”.

3) Sustitúyese el inciso primero del artículo 7° por el siguiente:

“Artículo 7°.- Cumplidos los requisitos a que se refieren los artículos 5° y 6°, y reunido el número de afiliados a que alude este último artículo en una de las regiones en que se divide políticamente el país, se solicitará al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos. La solicitud deberá ser firmada por el presidente y por el secretario del partido en formación.”.

4) En el artículo 26:

a) Suprímese en el literal d) la oración “la aprobación de un pacto electoral en elecciones de Parlamentarios o su retiro del mismo, y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal”.

b) Incorpórase el siguiente literal e), pasando los actuales literales e) y f) a ser f) y g) respectivamente:

“e) Aprobar un pacto electoral en las elecciones de parlamentarios o su retiro del mismo y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal;”.

5) En el artículo 42:

a) Sustitúyese su número 2° por el siguiente:

“2°.- Por no alcanzar en la región en que está legalmente constituido el 2,5 por ciento de los sufragios válidamente emitidos en la última elección de diputados. En el caso de los partidos que se encuentren inscritos en más de una región, la disolución procederá cuando no hayan alcanzado el indicado umbral del 2,5 por ciento en más de la mitad de dichas regiones.”.

b) Sustitúyese el inciso final por los siguientes incisos:

“No obstante, si un partido político incurre en la situación prevista en el número 2° de este artículo, pero elige al menos dos parlamentarios, sean diputados o senadores, conservará su calidad de tal.

Si incurre en la situación prevista en el número 4° en una o más regiones, pero mantiene el mínimo de ellas exigido por la ley, conservará su calidad de tal, pero no podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2° en aquellas donde su número de afiliados haya disminuido en más del 50 por ciento. El Director del Servicio Electoral anotará esta circunstancia al margen de la respectiva inscripción en el Registro de Partidos Políticos.”.

Artículo 4°.- Modifícase la ley N° 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, en los siguientes términos:

1) Sustitúyese el inciso segundo del artículo 7° por el siguiente:

“En la elección primaria para la nominación de candidatos a los cargos de parlamentarios, para cada territorio electoral, los partidos políticos podrán participar:

a) En forma individual, sin haber suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos.

b) En forma individual, habiendo suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos dentro del pacto.

c) En conjunto con otros partidos con los cuales ha suscrito un pacto electoral, y con el objeto de determinar la totalidad de los candidatos de dicho pacto.”.

2) Introdúcense las siguientes modificaciones en el artículo 30:

a) Reemplázase su inciso segundo por el que sigue:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen de la forma señalada en las letras a) o b) del inciso segundo del artículo 7°, serán nominados como candidatos para la elección definitiva en cada territorio electoral las mayores votaciones individuales hasta completar el número de cargos definido en la declaración de candidaturas conforme al inciso primero del artículo 16.”.

b) Incorpórase el siguiente inciso final:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen en pacto electoral de la forma señalada en la letra c) del inciso segundo del artículo 7°, los candidatos nominados para la elección definitiva en cada territorio electoral serán determinados conforme al procedimiento señalado en el artículo 109 bis de la ley N° 18.700, considerando para estos efectos que constituyen una lista los candidatos de un mismo partido y sus candidaturas independientes asociadas.”.

3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- El partido político que decidiere someterse al sistema de elecciones primarias contemplado en los artículos 3º y siguientes de la presente ley para los períodos electorales parlamentarios de los años 2017, 2021, 2025 y 2029 sólo podrá someter a dicho procedimiento hasta el cuarenta por ciento del total de candidaturas a diputado o senador que pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral.”.

Artículo 5°.- Esta ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la partida 02, Congreso Nacional, de la ley de Presupuestos para el Sector Público.

Lo dispuesto en el artículo 2° de esta ley se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la ley de Presupuestos respectiva.”.

Dios guarde a V. E.

ALDO CORNEJO GONZÁLEZ

Presidente de la Cámara de Diputados

MIGUEL LANDEROS PERKIĆ

Secretario General de la Cámara de Diputados

4.2. Oficio al Tribunal Constitucional

Oficio de examen de Constitucionalidad. Fecha 22 de enero, 2015. Oficio

VALPARAÍSO, 22 de enero de 2015

Oficio Nº 11.698

A S.E. EL PRESIDENTE DEL EXCMO. TRIBUNAL CONSTITUCIONAL

Tengo a honra transcribir a V.E. el proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional, correspondiente al boletín N°9326-07.

De conformidad con lo estatuido en el inciso segundo del artículo 93 de la Constitución Política de la República, informo a V.E. que el proyecto quedó totalmente tramitado por el Congreso Nacional el día de hoy, al darse cuenta del oficio N°1207-362, cuya copia se adjunta, mediante el cual S.E. la Presidenta de la República manifiesta a esta Corporación que ha resuelto no hacer uso de la facultad que le confiere el inciso primero del artículo 73 de la Carta Fundamental.

En virtud de lo dispuesto en el N°1° del inciso primero del artículo 93 de la Constitución Política de la República, corresponde a ese Excmo. Tribunal ejercer el control de constitucionalidad respecto de los artículos 1°, 2°, 3° y 4° del proyecto de ley.

PROYECTO DE LEY:

“Artículo 1°.- Modifícase la ley N°18.700, orgánica constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, de la manera que a continuación se señala:

1) En el artículo 3° bis:

a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, pasando el actual inciso segundo a ser tercero:

“En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.”.

b) Intercálase el siguiente inciso quinto, nuevo, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.”.

c) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “que hubieren constituido un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

d) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “Se podrá dejar sin efecto un pacto electoral”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 4° por el siguiente:

“Artículo 4°.- En el caso de las declaraciones de candidaturas para la elección de diputados y senadores, los partidos políticos o pactos electorales podrán presentar en cada distrito o circunscripción un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción de que se trate.”.

3) Sustitúyese el artículo 17 por el siguiente:

“Artículo 17.- El Consejo del Servicio Electoral, dentro de los diez días siguientes a aquel en que venza el plazo para efectuar la declaración de candidaturas, deberá dictar una resolución que se notificará al correo electrónico que los partidos políticos y candidatos independientes deberán informar en el momento de la declaración, la que se pronunciará sobre:

a) La aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 25, 48 y 50 de la Constitución Política de la República, o que se encuentren en alguna de las situaciones previstas en su artículo 57. Asimismo, deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los párrafos 1° a 3° de este título.

b) La aceptación o rechazo de la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, declaradas por cada partido político, en conformidad a lo dispuesto en los incisos cuarto y quinto del artículo 3° bis. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con el porcentaje de sexos establecido en el inciso quinto de dicho artículo.

Los partidos políticos cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, sean rechazadas en conformidad a lo dispuesto en la letra b) de este artículo, podrán corregirlas ante el Servicio Electoral dentro de los cuatro días hábiles siguientes a la fecha del despacho del correo electrónico que notifica la resolución a que alude el inciso primero, con el fin de ajustarse al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso quinto del artículo 3° bis, ya sea retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas.

Dentro de los cinco días siguientes de vencido el plazo para presentar la corrección, el Consejo del Servicio Electoral dictará una nueva resolución aceptando o rechazando las declaraciones nuevas y rechazando o aceptando, según proceda, la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputados o a senadores, según corresponda, la que deberá ser publicada dentro de tercer día en el Diario Oficial. En tal oportunidad también se publicarán en el mismo medio la aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente.”.

4) Agrégase, en el artículo 23, el siguiente inciso tercero, nuevo, pasando los actuales incisos tercero y cuarto a ser cuarto y quinto, respectivamente:

“En el caso de un pacto electoral, el orden de precedencia de los partidos dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito será el señalado por el pacto electoral en la declaración de candidaturas y, a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.

5) En el artículo 24:

a) Sustitúyese el inciso cuarto por el que sigue:

“El orden de precedencia de los candidatos de un partido y sus independientes asociados dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito será el señalado por el partido en la declaración de candidaturas y, a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.

b) Reemplázase, en el inciso final, la expresión “a fin de que” por “destinada a que”.

6) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme a las reglas establecidas en el procedimiento que a continuación se detalla:

1.- El Tribunal Calificador de Elecciones determinará las preferencias emitidas a favor de cada lista y de cada uno de los candidatos que la integran.

2.- Se aplicará el sistema electoral de coeficiente D´Hondt, para lo cual se procederá de la siguiente manera:

a) Los votos de cada lista se dividirán por uno, dos, tres y así sucesivamente hasta la cantidad de cargos que corresponda elegir.

b) Los números que han resultado de estas divisiones se ordenarán en orden decreciente hasta el número correspondiente a la cantidad de cargos que se eligen en cada distrito electoral o circunscripción senatorial.

c) A cada lista o pacto electoral se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b).

3.- En el caso de las listas conformadas por un solo partido político, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará electos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada lista, de acuerdo al número de cargos que le correspondan a cada una de ellas, luego de aplicar las reglas descritas precedentemente.

4.- En el caso de los pactos electorales, se aplicarán las siguientes reglas para determinar cuántos escaños le corresponden a cada uno de ellos:

a) Se calculará el total de los votos de cada partido político o, en su caso, de la suma de cada partido político y las candidaturas independientes asociadas a ese partido.

b) Se dividirá por uno, dos, tres y así sucesivamente, hasta la cantidad de cargos asignados al pacto electoral.

c) A cada partido político o, en su caso, a cada partido y las candidaturas independientes asociadas a éste, se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b) precedente.

d) El Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada partido político o, en su caso, de cada partido, considerando las candidaturas independientes asociadas éste dentro de un pacto electoral, de acuerdo a los cupos obtenidos por cada uno de ellos.

En caso de empate entre candidatos de una misma lista, o entre candidatos de distintas listas que a su vez estén empatadas, el Tribunal Calificador de Elecciones procederá en audiencia pública a efectuar un sorteo entre ellos, y proclamará elegido al que salga favorecido.”.

7) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”.

8) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos, que elegirá 3 diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte, que elegirá 3 diputados.

3er distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal, que elegirá 5 diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen, que elegirá 5 diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela, que elegirá 7 diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué, que elegirá 8 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca, que elegirá 8 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú, que elegirá 8 diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia, que elegirá 7 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín y La Granja, que elegirá 8 diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén, que elegirá 6 diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana, que elegirá 7 diputados.

13° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo, que elegirá 5 diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué, San Pedro y Padre Hurtado, que elegirá 6 diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa, que elegirá 5 diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones, que elegirá 4 diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael, que elegirá 7 diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco, que elegirá 4 diputados.

19° distrito, constituido por las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ránquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel, que elegirá 5 diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana, que elegirá 8 diputados.

21er distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja, que elegirá 5 diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino, que elegirá 4 diputados.

23er distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén, que elegirá 7 diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco, que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos, que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena, que elegirá 5 diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel, que elegirá 3 diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica, que elegirá 3 diputados.

El número de diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis.”.

9) Agrégase el siguiente artículo 179 bis:

“Artículo 179 bis.- Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con el siguiente procedimiento:

a) Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consistirá en distribuir a prorrata los cargos entre los distritos electorales, de acuerdo a la fórmula dispuesta en el artículo 109 bis de esta ley.

b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 8 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al de la realización del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con aquel en que se celebran elecciones de diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.

d) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes.

Dentro de los cinco días siguientes a la publicación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral aplicó las letras a) y b) de este artículo.

Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de febrero del año de que se trate.”.

10) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 50 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

1a circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, 2 senadores.

2a circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, 2 senadores.

3a circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 3 senadores.

4a circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, 2 senadores.

5a circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, 3 senadores.

6a circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, 5 senadores.

7a circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 5 senadores.

8a circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, 3 senadores.

9a circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, 5 senadores.

10a circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, 5 senadores.

11a circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 5 senadores.

12a circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 3 senadores.

13a circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, 3 senadores.

14a circunscripción, constituida por la XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, 2 senadores.

15a circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 2 senadores.”.

11) Derógase el artículo 181.

12) Agrégase el siguiente artículo 23 transitorio:

“Artículo 23.- La regla especial del artículo 3° bis, inciso quinto, sólo tendrá aplicación en los procesos electorales parlamentarios de 2017, 2021, 2025 y 2029.”

13) Agrégase el siguiente artículo 24 transitorio:

“Artículo 24.- Para los efectos de completar la nueva integración del Senado de la República, en las elecciones parlamentarias que deben celebrarse en noviembre de 2017 corresponderá que se renueven completamente las circunscripciones que corresponden a regiones impares.

En el caso de las circunscripciones que corresponden a las regiones pares y Metropolitana, los parlamentarios elegidos en 2013 seguirán en sus funciones hasta completar su período de ocho años. En las elecciones de 2021, estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde.”.

14) Agrégase el siguiente artículo 25 transitorio:

“Artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.”.

Artículo 2°.- Modifícase la ley N°19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, de la manera que a continuación se señala:

1) Intercálase entre el artículo 58 y el artículo transitorio el siguiente epígrafe: “Disposiciones transitorias.”.

2) Agrégase el siguiente artículo segundo transitorio, pasando el actual artículo único transitorio, a ser artículo primero:

“Artículo segundo.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y sólo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hayan sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a los que pertenezcan tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento por cada una de ellas.

Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.”.

3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a senadoras y diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 unidades de fomento por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.”.

Artículo 3°.- Modifícase la ley N° 18.603, orgánica constitucional de Partidos Políticos, de la manera que a continuación se señala:

1) Sustitúyese el inciso primero del artículo 3° por el siguiente:

“Artículo 3°.- Los partidos políticos existirán como tales cuando se hubieren constituido legalmente en al menos una de las regiones en que se divide políticamente el país.”.

2) En el artículo 6°:

a) Sustitúyese en el inciso primero la cifra “0,5” por el guarismo “0,25”.

b) Agrégase en el inciso segundo, a continuación del punto aparte, que ha pasado a ser punto seguido, la siguiente oración: “Los notarios no podrán negarse a recibir la declaración a que hace referencia este artículo y no podrán cobrar por este servicio.”.

3) Sustitúyese el inciso primero del artículo 7° por el siguiente:

“Artículo 7°.- Cumplidos los requisitos a que se refieren los artículos 5° y 6°, y reunido el número de afiliados a que alude este último artículo en una de las regiones en que se divide políticamente el país, se solicitará al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos. La solicitud deberá ser firmada por el presidente y por el secretario del partido en formación.”.

4) En el artículo 26:

a) Suprímese en el literal d) la oración “la aprobación de un pacto electoral en elecciones de Parlamentarios o su retiro del mismo, y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal”.

b) Incorpórase el siguiente literal e), pasando los actuales literales e) y f) a ser f) y g) respectivamente:

“e) Aprobar un pacto electoral en las elecciones de parlamentarios o su retiro del mismo y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal;”.

5) En el artículo 42:

a) Sustitúyese su número 2° por el siguiente:

“2°.- Por no alcanzar en la región en que está legalmente constituido el 2,5 por ciento de los sufragios válidamente emitidos en la última elección de diputados. En el caso de los partidos que se encuentren inscritos en más de una región, la disolución procederá cuando no hayan alcanzado el indicado umbral del 2,5 por ciento en más de la mitad de dichas regiones.”.

b) Sustitúyese el inciso final por los siguientes incisos:

“No obstante, si un partido político incurre en la situación prevista en el número 2° de este artículo, pero elige al menos dos parlamentarios, sean diputados o senadores, conservará su calidad de tal.

Si incurre en la situación prevista en el número 4° en una o más regiones, pero mantiene el mínimo de ellas exigido por la ley, conservará su calidad de tal, pero no podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2° en aquellas donde su número de afiliados haya disminuido en más del 50 por ciento. El Director del Servicio Electoral anotará esta circunstancia al margen de la respectiva inscripción en el Registro de Partidos Políticos.”.

Artículo 4°.- Modifícase la ley N° 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, en los siguientes términos:

1) Sustitúyese el inciso segundo del artículo 7° por el siguiente:

“En la elección primaria para la nominación de candidatos a los cargos de parlamentarios, para cada territorio electoral, los partidos políticos podrán participar:

a) En forma individual, sin haber suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos.

b) En forma individual, habiendo suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos dentro del pacto.

c) En conjunto con otros partidos con los cuales ha suscrito un pacto electoral, y con el objeto de determinar la totalidad de los candidatos de dicho pacto.”.

2) Introdúcense las siguientes modificaciones en el artículo 30:

a) Reemplázase su inciso segundo por el que sigue:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen de la forma señalada en las letras a) o b) del inciso segundo del artículo 7°, serán nominados como candidatos para la elección definitiva en cada territorio electoral las mayores votaciones individuales hasta completar el número de cargos definido en la declaración de candidaturas conforme al inciso primero del artículo 16.”.

b) Incorpórase el siguiente inciso final:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen en pacto electoral de la forma señalada en la letra c) del inciso segundo del artículo 7°, los candidatos nominados para la elección definitiva en cada territorio electoral serán determinados conforme al procedimiento señalado en el artículo 109 bis de la ley N° 18.700, considerando para estos efectos que constituyen una lista los candidatos de un mismo partido y sus candidaturas independientes asociadas.”.

3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- El partido político que decidiere someterse al sistema de elecciones primarias contemplado en los artículos 3º y siguientes de la presente ley para los períodos electorales parlamentarios de los años 2017, 2021, 2025 y 2029 sólo podrá someter a dicho procedimiento hasta el cuarenta por ciento del total de candidaturas a diputado o senador que pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral.”.

Artículo 5°.- Esta ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la partida 02, Congreso Nacional, de la ley de Presupuestos para el Sector Público.

Lo dispuesto en el artículo 2° de esta ley se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la ley de Presupuestos respectiva.”.

*****

Para los fines a que haya lugar, me permito poner en conocimiento de V.E. lo siguiente:

A) Respecto de los preceptos para cuya aprobación la Constitución Política de la República exige el voto favorable de los tres quintos de los congresistas en ejercicio.

La Cámara de Diputados, en primer trámite constitucional, aprobó en general el artículo 1°, número 1, letras a), c) y d), y números 2, 3, 6, 7, 8, 9, 10, 11, 13 y 14, por 88 votos a favor.

En particular, en tanto, dichas normas se aprobaron con las votaciones que se señalan a continuación:

-El artículo 1°, número 1, letra a), por 115 fotos favorables.

-El artículo 1°, número 1, letra c), por 116 fotos favorables.

-El artículo 1°, número 1, letra d), por 114 fotos favorables.

-El artículo 1°, número 2, por 90 fotos favorables.

-El artículo 1°, número 3, por 116 fotos favorables.

-El artículo 1°, número 6, por 115 fotos favorables.

-El artículo 1°, número 7, por 74 fotos favorables.

-El artículo 1°, número 8, por 73 fotos favorables.

-El artículo 1°, número 9, por 72 fotos favorables.

-El artículo 1°, número 10, por 73 fotos favorables.

-El artículo 1°, números 11, 13 y 14, por 100 fotos favorables.

En todos estos casos, tanto en general como en particular, la votación se produjo respecto de un total de 119 diputados en ejercicio.

En el segundo trámite constitucional, el Senado aprobó en general las normas señaladas con el voto favorable de 38 senadores.

En particular, el Senado aprobó las normas que se señalan a continuación de la siguiente manera:

-El artículo 1°, número 1), letra a), por 32 votos a favor.

-El artículo 1°, número 1), letras c) y d), por 28 votos favorables.

-El artículo 1°, número 2), por 23 votos afirmativos.

-El artículo 1°, número 3), en lo referente al encabezamiento y la letra a) del inciso primero del artículo 17 que este numeral contiene, por 29 votos a favor.

-El artículo 1°, número 3), en lo relativo a la letra b) del inciso primero del artículo 17 que este numeral propone, por 24 votos favorables.

-El artículo 1°, número 3), en lo que respecta a los incisos segundo y tercero del artículo 17 que este numeral contiene, por 33 votos afirmativos.

-El artículo 1°, números 6), 7), 8) y 9) por 24 votos a favor.

-El artículo 1°, números 10) y 11), por 23 votos favorables.

-El artículo 1°, número 13), por 31 votos a favor.

-El artículo 1°, número 14), por 27 votos favorables.

En todos los casos anteriores, tanto en la votación general como en la particular, la votación se produjo respecto de un total de 38 senadores en ejercicio.

Finalmente, en el tercer trámite constitucional, la Cámara de Diputados aprobó las modificaciones propuestas por el Senado de la manera que se describe a continuación, siempre de un total de 119 diputados en ejercicio:

-Al artículo 1°, números 3 y 8, por 112 votos a favor.

-Al artículo 1°, número 9, con 114 votos favorables.

-Al artículo 1°, número 10, por 75 votos a favor.

De esta manera, se dio cumplimiento a lo preceptuado en el inciso segundo de la disposición decimotercera transitoria de la Constitución Política de la República.

B) Respecto de aquellas normas para cuya aprobación la Constitución Política de la República exige el voto favorable de los cuatro séptimos de los parlamentarios en ejercicio.

En el primer trámite constitucional, la Cámara de Diputados aprobó en general el artículo 1°, número 1, letra b), y sus números 5 y 12, así como los artículos 2° y 3°, por 86 votos a favor.

En particular, su aprobación se produjo de la siguiente forma:

-El artículo 1°, número 1, letra b), con 88 votos a favor.

-El artículo 1°, número 5, letra a), con 90 votos a favor.

-El artículo 1°, número 5, letra b), con 117 votos a favor.

-El artículo 1°, número 12, con 113 votos a favor.

-El artículo 2°, con 72 votos a favor.

-El artículo 3°, número 2, letra a), con 75 votos favorables.

-El artículo 3°, número 2, letra b), con 87 votos favorables.

-El artículo 3°, número 3, con 76 votos favorables.

-El artículo 3°, número 4, con 89 votos favorables.

-El artículo 3°, número 5, letra a), con 86 votos a favor.

-El artículo 3°, número 5, letra b), con 85 votos favorables.

En todos los casos anteriores, la votación se produjo respecto de un total de 119 diputados en ejercicio.

En el segundo trámite constitucional, el Senado aprobó en general las referidas nomas por 28 votos a favor.

En particular, el Senado aprobó las normas que se señalan a continuación de la siguiente manera:

-El artículo 1°, número 1, letra b), por 23 votos a favor.

-El artículo 1°, número 4, introducido por el Senado en esta etapa de la tramitación, por 35 votos favorables.

-El artículo 1°, número 5, letra a), por 34 votos a favor.

-El artículo 1°, número 5, letra b), por 24 votos a favor.

-El artículo 1°, número 12, por 24 votos a favor.

-El artículo 2°, con 33 votos favorables.

-El número 1 del artículo 3°, introducido por el Senado en la discusión en particular, por 22 votos a favor.

-El artículo 3°, número 2, letra a), por 23 votos a favor.

-El artículo 3°, número 2, letra b), con 31 votos favorables.

-El artículo 3°, números 3 y 4, por 23 votos a favor.

-El artículo 3°, número 5, con 22 votos a favor.

-El artículo 4°, introducido en la discusión particular, fue aprobado en sus números 1 y 2 por 25 votos a favor.

-El número 3 del artículo 4°, que como ya se señaló fue introducido en la discusión particular, fue aprobado por 22 votos a favor.

En todos los casos anteriores, la votación se produjo respecto de un total de 38 senadores en ejercicio.

Finalmente, en el tercer trámite constitucional, la Cámara de Diputados aprobó las modificaciones propuestas por el Senado con las siguientes votaciones, todas ellas respecto de un total de 119 diputados en ejercicio:

-Al artículo 1°, número 1, letra b), por 90 votos a favor.

-Al artículo 1°, número 4, con 114 votos favorables.

-Al artículo 1°, número 5, con 111 votos favorables.

-Al artículo 3°, número 1, por 74 votos a favor.

-Al artículo 3°, número 2, letra b), con 96 votos favorables.

-Al artículo 4°, números 1 y 2, con 113 votos favorables.

-Al artículo 4°, número 3, por 80 votos a favor.

De esta manera, se dio cumplimiento a lo preceptuado en el artículo 66, inciso segundo, de la Constitución Política de la República.

*****

La Cámara de Diputados consultó a S.E. la Presidenta de la República, mediante oficio N°11.685, de 20 de enero de 2015, si haría uso de la facultad que le confiere el artículo 73 de la Constitución Política de la República, el que fue contestado negativamente a través del señalado oficio N°1207-362.

*****

Por último, me permito informar a V.E. que se acompañan las actas respectivas, por haberse suscitado cuestión de constitucionalidad.

Dios guarde a V.E.

ALDO CORNEJO GONZÁLEZ

Presidente de la Cámara de Diputados

MIGUEL LANDEROS PERKIĆ

Secretario General de la Cámara de Diputados

4.3. Oficio al Tribunal Constitucional

Requerimiento al Tribunal Constitucional. Fecha 10 de marzo, 2015. Oficio en Sesión 3. Legislatura 363.

Santiago, 10 de marzo de 2015

OFICIO N° 142-2015

Remite resolución.

EXCELENTISIMO SEÑOR

PRESIDENTE DE LA CAMARA DE DIPUTADOS:

Remito a V.E. copia de las resoluciones dictadas por esta Magistratura con fecha 10 de marzo en curso, en el proceso Rol N° 2777-15-CPT, sobre requerimiento de inconstitucionalidad presentado por un grupo de Senadores en relación al proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional, correspondiente al Boletín N° 9326-07, a los efectos que indica. Asimismo, acompaño copia del requerimiento.

Saluda atentamente a V.E.

A S.E.EL

PRESIDENTE DE LA H. CAMARA DE DIPUTADOS DON ALDO CORNEJO GONZALEZ

HONORABLE CAMARA DE DIPUTADOS PEDRO MONTT S/N°

VALPARAISO

Santiago, diez de marzo de dos mil quince.

VISTOS Y CONSIDERANDO:

1° Que, por resolución de 5 de marzo de 2015, este Tribunal acogió a tramitación el requerimiento de inconstitucionalidad deducido por 12 señores Senadores de la República, respecto de las normas que indican del proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por un sistema electoral de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representación del Congreso Nacional (Boletín 9326-07);

2°. Que examinado el requerimiento a efectos de pronunciarse sobre su admisibilidad, se verifica que se ha dado cumplimiento a los requisitos exigidos por el artículo 93, inciso cuarto, de la Constitución Política de la República y que, en la especie, no concurre ninguna de las causales de inadmisibilidad establecidas en el inciso segundo del artículo 66 de la Ley Orgánica Constitucional de esta Magistratura.

Y TENIENDO PRESENTE lo dispuesto en el artículo 93, inciso primero, N° 3°, e inciso cuarto, de la Constitución Política de la República, y lo prescrito en los artículos 61 y siguientes de la Ley N° 17.997, Orgánica Constitucional del Tribunal Constitucional,

SE RESUELVE:

1) Que se declara admisible el requerimiento deducido a fojas uno.

2) Póngase el presente requerimiento en conocimiento de la señora Presidenta de la República, del Senado y de la Cámara de Diputados, enviándoles copia del mismo y de la presente resolución, para que, en su calidad de órganos constitucionales interesados, dentro del plazo de cinco días contados desde la fecha de la comunicación, formulen las observaciones y acompañen los antecedentes que estimen pertinentes.

Comuniquese y notifiquese.

Rol 2777-15-CPT.

Pronunciada por el Excmo. Tribunal Constitucional, integrado por su Presidente, Ministro señor Carlos Carmona Santander, y por sus Ministros señora Marisol Peña Torres, señores Francisco Fernández Fredes, Iván Aróstica Maldonado, Gonzalo Garcia Pino, Domingo Hernández Emparanza, Juan José Romero Guzmán, señora María Luisa Brahm Barril y señor Cristián Letelier Aguilar.

Autoriza la Secretaria del Tribunal Constitucional, señora Marta de la Fuente Olguin.

Santiago, diez de marzo de dos mil quince.

VISTOS Y CONSIDERANDO:

1°. Que, por resolución de esta misma fecha, este Tribunal declaró admisible el requerimiento de inconstitucionalidad deducido por 12 señores Senadores de la República, respecto de las normas que indican del proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por un sistema electoral de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representación del Congreso Nacional (Boletín 9326-07).

En la misma resolución, esta Magistratura ordenó que el presente requerimiento se pusiera en conocimiento de la señora Presidenta de la República, del Senado y de la Cámara de Diputados para que, en su calidad de órganos constitucionales interesados, dentro del plazo de cinco días contados desde la fecha de la comunicación, formularen las observaciones y presentaren los antecedentes que estimen pertinentes;

2°. Que esta Magistratura estima que puede contribuir a la mejor resolución de este proceso constitucional el oír también a aquellas instituciones y organizaciones representativas de los intereses involucrados en el asunto que debe resolver este Tribunal, que deseen acompañar información y/o exponer sobre la materia jurídico-constitucional de autos, en la forma y oportunidad que se determinarán en la presente resolución;

3°. Que conforme a lo dispuesto en el inciso primero del artículo 37 de Ley N° 17.997, Orgánica Constitucional del Tribunal Constitucional, este Tribunal "podrá decretar las medidas que estime del caso tendientes a la más adecuada sustanciación y resolución del asunto de que conozca".

Y TENIENDO PRESENTE lo dispuesto en el artículo 37 y demás normas pertinentes de la Ley N° 17.997, Orgánica Constitucional del Tribunal Constitucional,

SE RESUELVE:

1) Fórmese cuaderno especial y agréguense a él las presentaciones que formulen por escrito las instituciones y organizaciones representativas de los intereses involucrados en el asunto jurídico-constitucional que debe resolver este Tribunal -conforme al requerimiento que rola a fojas 1 y siguientes-, en las que se hagan valer observaciones o se acompañen antecedentes relacionados con la misma materia, y que sean ingresadas en la Secretaría del Tribunal hasta el día lunes 16 de marzo de 2015, a las 12.00 horas.

2) Cítase a una audiencia pública a celebrarse el día miércoles 18 de marzo de 2015 en la cual podrán ser oídas -a la hora y por el tiempo que se indicará en su oportunidad- las instituciones y organizaciones aludidas que deseen exponer sobre cuestiones relacionadas con el conflicto jurídico-constitucional de autos -conforme al requerimiento que rola a fojas 1 y siguientes-, y que así lo soliciten por escrito, dentro del mismo plazo fijado en el punto resolutivo 1) precedente.

3) A fojas 313, estese al mérito de lo resuelto precedentemente.

Comuníquese por oficio y notifíquese por carta certificada; fíjese en Un lugar visible de la Secretaría y publíquese en la Página Web del Tribunal.

Pronunciada por el Excmo. Tribunal Constitucional, integrado por su Presidente, Ministro señor Carlos Carmona Santander, y por sus Ministros señora Marisol Peña Torres, señores Francisco Fernández Fredes, Iván Aróstica Maldonado, Gonzalo García Pino, Domingo Hernández Emparanza, Juan José Romero Guzmán, señora María Luisa Brahm Barril y señor Cristián Letelier Aguilar.

Autoriza la Secretaria del Tribunal Constitucional, señora Marta de la Fuente Olguín.

EN LO PRINCIPAL: Solicitan al Excelentísimo Tribunal Constitucional que declare la inconstitucionalidad del proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por un sistema electoral de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representación del Congreso Nacional (Boletín 9326-07) y en especial de los artículos 1 número 3) letra b) (referido al artículo 3 bis de la ley 18.700); número 8) (referido al artículo 179 de la Ley 18,700); número 9) (referido al nuevo artículo 179 bis de la ley 18.700); número 14) (en cuanto al nuevo artículo 25° transitorio de la ley 18.700); artículo 3 número 2) (referido al artículo 6° de la ley 18.603), y el artículo 4° número 3) (referido al nuevo artículo tercero transitorio de la ley 20.640) por contravenir los artículos 15, 18, 19 N° 2, 19 N°15, 19 n° 26 y 67 incisos 3 y 4 de la Constitución Política de la República.

EN EL PRIMER OTROSÍ, acompañan documentos que indican.

EN EL SEGUNDO OTROSÍ, acreditan cumplimiento de las exigencias pertinentes contempladas en la Constitución y en la Ley Orgánica Constitucional del Tribunal Constitucional y la personería.

EN EL TERCER OTROSÍ, solicitan alegatos.

EN EL CUARTO OTROSÍ, designan representante de los requirentes con sujeción a la ley mencionada, fijando domicilio y otorgan patrocinio y poder

EXCELENTÍSIMO TRIBUNAL CONSTITUCIONAL

Los requirentes Allamand Zavala, Andrés; Chahuán Chahuán, Francisco: Coloma Correa, Juan Antonio; Espina Otero, Alberto; García Huidobro Sanfuentes, Alejandro; García Ruminot, José; Larraín Fernández, Hernán; Orpis Bouchón, Jaime; Pérez Varela, Víctor; Prokurica Prokurica, Baldo; Van Rysselberghe Herrera, Jacqueline; Von Baer Jahn, Ena, todos Senadores de la República, que representamos más de la cuarta parte de los miembros en ejercicio del Senado, según se acredita en la forma indicada en el segundo otrosí, recurrimos a V.E. en virtud de la facultad que nos confiere el inciso cuarto del artículo 93 de la Constitución Política de la República, en relación al numeral 3.° del mismo artículo, y de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 38 de la Ley Orgánica Constitucional N° 17.997, solicitamos que V.E. declare la inconstitucionalidad del proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por un sistema electoral de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representación del Congreso Nacional (Boletín 9326-07) y en especial de los artículos 1 número 8) (referido al artículo 179 de la Ley 18.700); número 9) (referido al nuevo artículo 179 bis); artículo 3 número 2) (referido al artículo 6° de la ley 18.603), por contravenir los artículos 15, 18, 19 N° 2, 65 inciso 3°, 67 incisos 3 y 4 de la Constitución Política de la República:

1. Capítulo primero: La contravención del números 8) del artículo 1° del proyecto de ley en relación al principio de la igualdad del voto o sufragio.

El proyecto boletín 9326-07 establece una nueva conformación de las Cámaras de la siguiente manera:

- Se establece que en el artículo 178 de la ley 18.700 que, para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados, habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente (que es el artículo 179).

- El proyecto establece en su numeral 8) del artículo 1° una reforma al artículo 179 donde se indica transitoriamente la conformación de los nuevos distritos y con los Diputados que ese elegirán en cada uno de ellos, sumando un total de 155. A su vez, el inciso final de dicha normas prescribe que el número de Diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis.

- El número 9) del artículo 1° del proyecto de ley introduce un nuevo artículo 179 bis en virtud del cual se establece que corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con un procedimiento establecido en el mismo artículo.

- Dicho artículo 179 bis adquiere plena operatividad en virtud del número 14) del artículo 1° del proyecto de ley el cual introduce un nuevo artículo 25 transitorio a la ley 18.700 que prescribe que la facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022. En este sentido, este artículo 25 transitorio nuevo hacen operativo el redistritaje y la asignación de escaños propuestos por el artículo 179 por las elecciones de los años 2017 y 2021.

- El proyecto fija las nuevas circunscripciones y los Senadores se elegirán en cada una de ellas en el numeral 10) del artículo 1° del proyecto de ley. El proyecto prescribe un Senado formado por 50 miembros y en donde cada región constituirá una circunscripción.

1.1.- Inconsistencia sobre la igualdad del voto o sufragio en la cámara de Diputados

El número 8) del artículo primero establece un nuevo distritaje de la siguiente manera:

8) Sustítúyase el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er distrito, constituido por las comunas de Anca, Camarones, Putre y General Lagos, que elegirá 3 diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiñá, Colchane, Pica y Pozo Almonte, que elegirá 3 diputados.

3er distrito, constituido por las comunas de Tocopílla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal, que elegirá 5 diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, HuascoyAtto del Carmen, que elegirá 5 diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela, que elegirá 7 diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Uaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué, que elegirá 8 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca, que elegirá 8 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú, que elegirá 8 diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchali, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia, que elegirá 1 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín y La Granja, que elegirá 8 diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Bamechea, La Reina y Peñalolén, que elegirá 6 diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana, que elegirá 7 diputados.

13° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo, que elegirá 5 diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñafíor, El Monte, Isla de Maipo, Melípilla, María Pinto, Curacaví, Aíhué, San Pedro y Padre Hurtado, que elegirá 6 diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa, que elegirá 5 diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Femando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones, que elegirá 4 diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teño, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Ucantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maulé, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael, que elegirá 7 diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco, que elegirá 4 diputados.

19° distrito, constituido por las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ránquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel, que elegirá 5 diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahüano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana, que elegirá 8 diputados.

21er distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja, que elegirá 5 diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collípullí, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautin, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino, que elegirá 4 diputados.

23er distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cuneo, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén, que elegirá 7 diputados.

24° distrito, constituido por tas comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfíl; Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Raneo, Río Bueno, La Unión y Paillaco, que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osomo, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos, que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montí, Cochamó, Mauilin, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Patena, que elegirá 5 diputados,

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibéñei, Cochrane, O'Higgins y Tortel, que elegirá 3 diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica, que elegirá 3 diputados.”.

El número de diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis.”

En et caso de la elección de diputados, el proyecto de reforma al sistema electoral establece una modificación del artículo 179 de la ley 18.700 Orgánica Constitucional de Votaciones Populares y Escrutinios, asignando a cada uno de los distritos que establece el número de diputados que le corresponderá elegir. Este número de diputados que se asigna en forma ad-hoc en virtud del nuevo texto del artículo 179 es de carácter temporal, toda vez que el inciso final de dicho artículo le da carácter transitorio, señalando que el número de diputados se actualizará en los plazo y en la forma que estable el artículo 179 bis el cual será analizado en el siguiente capítulo. A su vez, el número 14) del artículo 1° del proyecto de ley introduce un nuevo artículo 25 transitorio que establece que la facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022. De esta forma, es éste artículo 25 transitorio el que hace operativo el artículo 179 bis actualizando el número de escaños por distrito a partir de esa fecha.

Ahora bien, y a juicio de los requirentes, pese a que en el Mensaje del proyecto se afirma que “el número variables de diputados se determina en atención al número de electores, propendiendo al mayor logro posible del principio de Igualdad del voto", es posible advertir significativas diferencias en el número de electores por diputado, las que no se fundan en razones geopolíticas ni de integración nacional.

1. Algunas de estas diferencias se producen en relación a las zonas extremas del país de baja densidad poblacional, De esta forma, en el nuevo distrito 13(de la RM) son necesarios 117,187 electores para elegir un diputado, ello significa 3,88 veces más electores que en el distrito 27 (XI región) donde son necesarios 30.179 electores. Aun cuando puede ser discutible desde una perspectiva política el nivel de desviación tolerable, en este caso la relación máxima queda determinada por regiones extremas de poca población.

2. La inconsistencia, sin embargo, se expresa en que, aún excluyendo los territorios electorales de las regiones de menos de 200.000 electores, qué corresponde a las regiones extremas, persiste una relación electores y escaños dé hasta 2,6 veces entre ciertos distritos. Asimismo, pese a que en el Mensaje se afirma que el incremento de parlamentarios tiene por objetivo avanzar en la igualdad del voto, no se aprovecha efectivamente este fuerte aumento para corregir la actual situación de desigualdad diagnosticada.

3. En el siguiente cuadro se analiza la relación entre el número de electores y escaños en cada uno de los nuevos distritos propuestos en el proyecto de reforma al sistema electoral:

De esta forma, en opinión de estos requirentes es posible identificar Los siguientes casos en los que se infringe gravemente el principio de igualdad del voto, en forma no tolerable y sin que se observe un criterio razonable que justifique estas diferencias que redundan en el menoscabo del .valor sustantivo del voto de los electores de determinados territorios electorales.

a. El nuevo distrito 2 de la I región elegiría 3 diputados teniendo más electores [1] (222.024 electores) que el nuevo distrito 4 de la III Región (221.606 electores) que elegiría 5 diputados. En ambos casos hay uh aumento de un diputado respecto de lo que tenían los territorios electorales que dan origen a los nuevos distritos. Claramente el incremento no se distribuye priorizando el principio de la igualdad del voto.

b. Los nuevos distritos 16, 18, 22 y 25 que corresponden a las regiones VI sur (299.216 electores), Vil sur (281.933 electores), IX norte (268.864 electores) y X norte (293.216 electores), elegirían 4 diputados cada uno, teniendo en todo los casos más electores que el nuevo distrito 4 de la III Región (221.606 electores) que elegiría 5 diputados y cuyo incremento no respeta la igualdad del voto.

c. Los nuevos distritos 9 (Conchalí, Recoleta y Cerro Navia con 810.901 electores) y 12 (La Florida y Puente Alto con 790.029 electores) de la Región Metropolitana elegirían 7 diputados, teniendo más electores que los nuevos distritos 6 (V Región Cordillera con 712.383 electores),7 (V Región Costa con 760.668 electores) y 20 (VIII Región centro con 744.588) que elegirían 8 diputados. En todos estos casos los nuevos distritos tienen un aumento en el número de diputados respecto de lo que tenían los territorios electorales que dan origen a los nuevos distritos, sin embargo, el incremento no se distribuye priorizando el principio de la igualdad del voto.

d. Los nuevos distritos 11 (Las Condes y Peñalolén con 643.632 electores) y 14 (San Bernardo y Melipilla con 663.878 electores) de la Región Metropolitana elegirían 6 diputados, teniendo más electores que los nuevos distritos 5 (IV Región con 538.805 electores), 17 (VII Región norte con 527.595 electores) y 23 (IX Región sur con 543.614 electores) que elegirían 7 diputados. En todos estos casos los nuevos distritos tienen un aumento en el número de diputados respecto de lo que tenían los territorios electorales que dan origen a los nuevos distritos, sin embargo, el incremento no se distribuye priorizando el principio de la igualdad del voto.

e. El nuevo distrito 13 (La Cisterna y San Miguel con 585.936 electores) de la RM elegirían 5 diputados, teniendo más electores que los nuevos distritos 5 (IV Región con 538.805), 17 (VII Región norte con 527.595 electores) y 23 (IX Región sur 543.614 electores) que elegirían 7 diputados. En todos estos casos los nuevos distritos tienen un aumento en el número de diputados respecto de lo que tenían los territorios electorales que dan origen a los nuevos distritos, sin embargo, el incremento no se distribuye priorizando el principio de la igualdad del voto.

En estadísticas se usa el denominado coeficiente de variación para medir la relación de variabilidad o dispersión de una serie de datos respecto de su valor promedio. El coeficiente de variación se calcula como el porcentaje de la desviación estándar de la serie de datos respecto de su promedio. En el caso del proyecto aprobado por el parlamento el coeficiente de variación de los electores por diputados asciende a 26%. Este es un valor alto que indica una fuerte dispersión en torno a la media.

Lo anterior demuestra que el nuevo artículo 179 que introduce el proyecto de ley, contiene una asignación de diputados arbitraria, fuera de lo tolerable, que carece de fundamentos y que no se ajusta al principio de la igualdad del voto.

El análisis precedente se ha realizado sobre la base a los electores de cada nuevo distrito, en el entendido que el cumplimiento del voto igualitario debe valorarse respecto de las personas que efectivamente gozan del derecho a sufragio. El criterio aprobado por ambas cámaras, expresado en el nuevo artículo 179 bis, sé sostiene en que el número de escaños debe determinarse en relación al número de habitantes, ya que los parlamentarios son representantes de toda la población que vive en el territorio respectivo.

Si se analiza la igualdad del voto en base a la población, se incrementan algunas diferencias respecto a distritos correspondientes a zonas extremas del país. Así, en el nuevo distrito 12 son necesarios 154.088 habitantes para elegir un diputado, ello significa 5,05 veces más que en el distrito 27 (XI Región) donde son necesarios 30.497 habitantes. Si no se consideran los distritos de las regiones extremas de menos de 200.000 habitantes, la relación en veces de habitantes del mayor al menor alcanza a 3,03 veces.

Los requirentes ponen a disposición del excelentísimo Tribunal Constitucional una revisión de la relación entre el número de habitantes (sobre la base del último censo oficial de población del año 2002) y escaños en cada uno de los nuevos distritos propuestos en el proyecto de reforma al sistema electoral:

De esta forma, es posible identificar los mismos casos en que se infringe el principio de igualdad del voto al considerar habitantes, sin que se observe un criterio razonable que justifique estas diferencias:

a. El nuevo distrito 2 de la I región elegiría 3 diputados teniendo similar número de habitantes (238.950 habitantes[2]) que el nuevo distrito 4 de la III Región (254.336 habitantes) que elegiría 5 diputados. En ambos casos hay un aumento de un diputado respecto de lo que tenían los territorios electorales que dan origen a los nuevos distritos. Claramente el incremento no se distribuye priorizando el principio de la igualdad del voto.

b. Los nuevos distritos 16, 18, 22 y 25 que corresponden a las regiones VI sur (329.925 habitantes), VII sur (311.078 habitantes), IX norte (280.998 habitantes) y X norte (316.051 habitantes), elegirían 4 diputados cada uno, teniendo en todo los casos más habitantes que el nuevo distrito 4 de la III Región (254.336 habitantes) que elegiría 5 diputados y cuyo incremento no respeta la igualdad del voto.

c. Los nuevos distritos 9 (Conchalí, Recoleta y Cerro Navia con 911.183 habitantes) y 12 (La Florida y Puente Alto con 1.078.615 habitantes) de la Región Metropolitana elegirían 7 diputados, teniendo más habitantes qué los nuevos distritos 6 (V Región Cordillera con 781.774 habitantes), 7 (V Región Costa con 758.078 habitantes), 20 (VIII Región centro con 863.800) y 10 (Santiago, Providencia y San Joaquín con 827.857), que elegirían 8 diputados. En todos estos casos los nuevos distritos tienen un aumento en el número de diputados respecto de lo que tenían los territorios electorales que dan origen a los nuevos distritos, sin embargo, el incremento no se distribuye priorizando el principio de la igualdad del voto.

d. Los nuevos distritos 11 (Las Condes y Peñalolén con 718,963 habitantes) y 14 (San Bernardo y Melipilla con 737,058 habitantes) de la Región Metropolitana elegirían 6 diputados, teniendo más habitantes que los nuevos distritos 5 (IV Región con 603.210 habitantes), 17 (VII Región norte con 597,019 habitantes) y 23 (IX Región sur con 588.537 habitantes) que elegirían 7 diputados. En todos estos casos los nuevos distritos tienen un aumento en el número de diputados respecto de lo que tenían los territorios electorales que dan origen a los nuevos distritos, sin embargo, el incremento no se distribuye priorizando el principio de la igualdad del voto,

e. El nuevo distrito 13 (La Cisterna y San Miguel con 661.850 habitantes) de la RM elegirían 5 diputados, teniendo más habitantes que los nuevos distritos 5 (IV Región con 603.210), 17 (VII Región norte con 597.019 habitantes) y 23 (IX Región sur 588.537 habitantes) que elegirían 7 diputados. En todos estos casos los nuevos distritos tienen un aumento en el número de diputados respecto de lo que tenían los territorios electorales que dan origen a los nuevos distritos, sin embargo, el incremento no se distribuye priorizando el principio de la igualdad del voto.

Es por esto que los requirentes consideran que las diferencias anotadas en la distribución de los 155 escaños, tanto en relación a los electores como a los habitantes, son claras, adolecen de una innegable gravedad y no se justifican en los criterios de distinción declarados en el proyecto de ley. En efecto, estas diferencias no obedecen a evitar reducir en términos absolutos la representación actual de los distintos territorios ni a razones geopolíticas o de integración respecto de las zonas extremas. Tampoco afectan exclusivamente a la Región Metropolitana debido a su gran población, ya que se producen también entre regiones distintas a la metropolitana. El problema se genera especialmente en la asignación de los nuevos escaños en los que aumenta la Cámara de Diputados, la que se hace en base a criterios arbitrarios y en abierta contradicción a los principios que se señalan en el propio mensaje presidencial y al precepto constitucional del voto igualitario.

1.2.- Análisis al caso concreto del principio de la igualdad del voto en la Constitución de 1980 para el número 8) del artículo 1° propuesto a la luz del artículo 15 de la Constitución Política.

La Constitución de 1980 entregó al legislador orgánico constitucional la competencia para definir el sistema electoral aplicable a las elecciones parlamentarias. En este sentido, se apartó de la Constitución de 1925 que establecía que, en estas elecciones, se emplearía un procedimiento que diera por resultado una efectiva proporcionalidad en la representación de las opiniones y de los partidos políticos. En efecto, dicha Carta fundamental establecía en su artículo 25: "En las elecciones de Diputados y Senadores se empleará un procedimiento que dé por resultado en la práctica una efectiva proporcionalidad en la representación de las opiniones y de los partidos políticos.” Lo anterior se ve reforzado por las reformas constitucionales introducidas los años 2005 y 2014 a través de las leyes N°20.050 y N°20.725, por las que se eliminaron las referencias al número de senadores que se eligen en cada circunscripción y al número total de integrantes de la Cámara de Diputados.

En consecuencia, en esta materia es aplicable la libertad de configuración del legislador, quien es el llamado a evaluar la conveniencia política del número de representantes, las distintas fórmulas de asignación de escaños, la definición de los territorios electorales, entre otros aspectos relacionados con el sistema de elección de los diputados y senadores. Sin embargo, la deliberación y decisión política del legislador debe desarrollarse dentro del marco establecido por la Constitución.

El artículo 15 de la Constitución establece las características que debe contener el sufragio en las votaciones populares y que establecen un marco irrenunciable al legislador a quien está encomendada la regulación del sistema electoral. Dicha norma prescribe que el sufragio será personal, igualitario, secreto y voluntario. En consecuencia, el legislador orgánico tiene como límite respetar el principio de igualdad del voto, el que además se fundamenta en la igualdad ante la ley (artículo 19 N° 2) y en el derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional (artículo 1° inciso 5).

El principio de la igualdad de voto se garantiza a través del “cuidado en la distribución de las circunscripciones electorales con el fi n de lograr, por ejemplo, una relación igual entre la población (o el electorado) y el número de diputados que deben ser elegidos en relación con la proporción nacional [o local]. Por lo tanto, el postulado de la igualdad del voto es hoy, sin duda, el más importante de todos los principios del derecho electora” (Nohlen, Díeter (1994), Sistemas electorales y partidos políticos, México, FCE.). Tal igualdad implica no sólo que todos electores dispongan de la misma cantidad de votos (uno en nuestro caso), sino que también que para la elección de representantes y cuerpos colegiados por diferentes territorios, el número de votos necesarios para la elección de un representante sea similar. Si no existiera esta garantía, tal como lo ha dicho el profesor Alan Bronfman “la regulación electoral podría asignar idéntica representación parlamentaria a territorios con población dispar y, por esta vía, menoscabar el valor sustantivo de un voto que en lo formal es igual.” (Bronfman, Alan (2013), “Igualdad del voto y configuración del territorio electoral de los Diputados en Chile", Revista de Derecho de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso).

Lo anterior se puede lograr de dos formas: La primera, con territorios donde todos ellos elijan el mismo número de representantes o escaños, como en el sistema binominal actual, pero con la condición de que los territorios sean similares en el número de electores y con un procedimiento para corregir las diferencias naturales que se producen con el tiempo, condiciones que el actual sistema binominal vigente no cumple. La segunda, es considerar un número variable de escaños por territorio asignándolos en función de la proporción de los electores que cada uno tiene. Ello significa igualar el número de electores por escaño, opción por la que parecería haber optado el proyecto de ley.

La democracia representativa se funda en la igualdad política, por lo que la afectación de la igualdad del voto, en el sentido que el sufragio de unos vale más que el de otros al momento de asignar los escaños, impacta en la legitimidad y confianza en las instituciones democráticas. Así, de acuerdo al jurista Atan Bronfman, “si la configuración de los territorios electorales se aleja del principio una persona un voto se socavan las bases de legitimidad de la democracia representativa en la misma proporción en que se tolera dicho alejamiento (Ob. Cit.)

En el Mensaje Presidencial del proyecto de reforma del sistema electoral se declara expresamente que “la diferencia de valor del voto en Chile, según el lugar donde se emite, es demasiado alta y obstaculiza la igualdad del voto. No se puede emprender una reforma sin reducir significativamente esta desigualdad inaceptable en cualquier democracia". En consecuencia, el incremento del número de diputados y senadores se fundamenta en el "esfuerzo de igualación del valor del voto (...) para no verse obligados al imposible de disminuir la representación de algunos territorios escasamente poblados”.[3]

De esta forma, la igualdad del voto sería uno de los principios rectores de la reforma al sistema electoral, por lo que se esperaría que el número de electores por escaño -considerando los 35 adicionales que se proponen- sea similar en cada uno de los nuevos territorios electorales.

En opinión de estos requirentes, es la forma arbitraria en que se asignan tos escaños de Diputados de acuerdo a los nuevos distritos que propone el proyecto de ley, la cual se aparta de manera flagrante del principio constitucional de la igualdad del voto.

1.3.- Análisis al caso concreto del principio de la no discriminación arbitraria consagrado en el artículo 19 N° 2 en la Constitución de 1980 para el número 8) del artículo 1° propuesto a la luz del artículo 19 N° 2 de la Constitución Política.

En la visión de los requirentes, el reconocimiento del principio de igualdad del voto no se traduce necesariamente en una correspondencia matemática absoluta entre el número de electores y escaños, ésa es la razón por la cual la Carta Fundamental habla de sufragio igualitario y no de sufragio igual. Las diferencias son admisibles en la medida en exista un criterio razonable para establecerlas. Si bien se trata de una decisión de mérito que corresponde al legislador, ello no lo releva de la obligación de invocar una justificación razonable para dicha distinción.

En este sentido, el núcleo fundamental de la igualdad se encuentra en el artículo 19 N° 2 de la carta fundamental. Esta garantía justamente es una igualdad “en la ley” pues se constituye en un mandato para el legislador al momento de diseñar las normas jurídicas. En palabras del Tribunal Constitucional, “La igualdad ante la ley consiste en que las normas jurídicas deben ser iguales para todas las personas que se encuentren en las mismas circunstancias y, consecuencialmente, diversas para aquellas que se encuentren en situaciones diferentes. No se trata, por consiguiente, de una igualdad absoluta sino que ha de aplicarse la ley en cada caso conforme a las diferencias constitutivas del mismo. La igualdad supone, por lo tanto la distinción razonable entre quienes no se encuentren en la misma condición. Así, se ha concluido que la razonabilidad es el cartabón o estándar de acuerdo con el cual debe apreciarse la medida de igualdad o la desigualdad.”[4]

El Tribunal Constitucional ha señalado que la garantía de la igualdad jurídica no obsta a que la legislación contemple ciertas diferencias, en la medida en que “la discriminación no sea arbitraria ni responda a un propósito de hostilidad contra determinada persona o grupo de personas, o importe indebido favor o privilegió personal o de grupo [5]. Si bien queda sentado que el legislador en el ejercicio de sus atribuciones puede establecer regímenes diferenciados, ello no puede revestir el carácter de arbitrarios, para lo cual se debe analizar su fundamentación o razonabilidad y la circunstancia de que se aplique a todas las personas que se encuentran en la misma situación” [6]. Por lo tanto, si bien el estándar no es la igualdad absoluta, lo que es rechazado por el constituyente es desigualdad basada en la arbitrariedad. De esta forma, el tribunal constitucional ha dicho que las distinciones “no podrán ser arbitrarias ni indebidas, por lo que deben fundamentarse en presupuestos razonables y objetivos y su finalidad como sus consecuencias deben ser adecuadas, necesarias, proporcionadas. [7] Así, lo que la Constitución prohíbe no es hacer diferencias, sino hacer diferencias arbitrarias. No se prohíbe dar trato igual a situaciones diferentes, sino hacerlo arbitrariamente; esto es, sin un fin lícito que lo justifique; lo prohibido es hacerlo sin razonable justificación [8].

En definitiva, el análisis de constitucionalidad de la nueva propuesta debe hacerse bajo la lupa de la arbitrariedad. En esto el Tribunal Constitucional ha sido claro y categórico cuando dice que “por discriminación arbitraria ha de entenderse toda diferenciación o distinción realizada por el legislador o cualquier autoridad pública que aparezca como contraria a la ética elemental o a un proceso normal dé análisis intelectual; en otros términos, que no tenga justificación racional o razonable. Por discriminación arbitraria se ha entendido siempre una diferencia irracional o contraria al bien común [9].”

Los requirentes desean expresar al Excelentísimo Tribunal que en la actualidad, sin bien existe una importante desigualdad del voto, la asignación de escaños no es arbitraria pues se fija un criterio común para cada distrito, que es la elección dé 2 Diputados para cada uno de ellos. Con el proyecto aprobado, nos encontramos ante la situación que no pareciera existir un criterio estándar de razonabilidad en la asignación de escaños, lo que transforma dicha asignación en arbitraria.

En consecuencia, en el caso de la elección de diputados, donde no existe a diferencia del Senado y de los Consejos Regionales, ninguna consideración en la Constitución a los territorios y a su representación, la regla general debiera ser la aplicación del principio de igualdad del voto y de la proporcionalidad de la población, de manera de que exista un número similar de electores respecto de cada uno de los escaños, regla que sólo se podría relativizaría en un mínimo “tolerable” el caso de las zonas extremas del país. El diseño de la asignación de escaños, por tanto, debe estar establecido de manera tal que respete el criterio de la razonabilidad y la no arbitrariedad. En otras palabras, que exista un criterio que obedezca a fundamentos lógico y que no contradiga la razón. Allá donde no hay explicación racional existe el capricho y, por ende, la arbitrariedad. Donde hay arbitrariedad, se violenta la Constitución.

En el Mensaje del proyecto de reforma al sistema electoral aplicable a la elección de parlamentarios se aborda la igualdad del voto como uno de los principales objetivos que inspira la reforma, como el principio de representación de la Cámara de Diputados y como fundamento del incremento del número de parlamentarios que se propone.

Sin perjuicio de lo anterior, la asignación de escaños entre los 28 nuevos distritos que se realiza en forma transitoria en el nuevo artículo 179 de ley N°18.700, vulnera la dimensión sustantiva del principio de la igualdad del voto consagrado en los artículos 15, 19 N°2 y 1° inciso 5° de la Constitución, ya que se advierten significativas diferencias entre los distintos territorios electorales en el número de electores y habitantes por diputado.

1.4.- Reservas de constitucionalidad

En las páginas 90 y siguientes del segundo informe de la Comisión de Constitución Legislación y justicia se aprecia la opinión de algunos señores Senadores donde se hizo expresa reserva de constitucionalidad sobre este tema.

Es el caso de la intervención del Senador Hernán Larraín recogida en parte del informe de fecha 05-01-15:

El Senador "...recalcó que no encuentra justificada la composición y distribución de escaños que se han definido para la Cámara de Diputados, Recordó que nuestro orden constitucional ha establecido que el sufragio en las votaciones populares tiene como característica el ser personal, igualitario, secreto y voluntario. Lo anterior, supone que el legislador, cuando establece un sistema electoral, tiene como límite el respetar el principio de la igualdad del voto. Lo anterior, explicó, significa que el número de los votos necesarios para elegir a un representante debe ser similar.

Explicó que el principio antes mencionado es recogido en el Mensaje que da origen al proyecto de ley en estudio. Agregó que la diferencia del valor del voto en Chile, según el lugar donde se emite, es demasiado alta y obstaculiza la igualdad del mismo. Precisó que no se puede emprender una reforma sin reducir significativamente esta desigualdad. Reiteró que el ordenamiento constitucional establece la igualdad del voto.

Hizo presente que el Tribunal Constitucional ha planteado que se pueden hacer, en materia de igualdad jurídica, algún tipo de diferencias, pero en lo fundamental, ellas no podrán ser arbitrarias, ni indebidas, por lo que deben fundamentarse en presupuestos razonables y objetivos y su finalidad como sus consecuencias deben ser adecuadas, necesarias, y proporcionadas. Lo que la Constitución prohíbe no es hacer diferencias, sino hacer diferencias arbitrarias. No se prohíbe dar trato igual a situaciones diferentes sino hacerlo arbitrariamente, esto es, sin un fin lícito que lo justifique. Lo prohibido es hacerlo sin una razonable justificación.

Destacó que al analizar el proyecto de ley, en lo que respecta a la fórmula de composición de la Cámara de Diputados, que es la que ha aprobado la mayoría de la Comisión, se observan desigualdades arbitrarías, que no corresponden bajo ningún concepto a una diferenciación que se pudiera justificar, por lo tanto debieran ser corregidas.

Advirtió que ello es lo que ha planteado reiteradamente en la Comisión. Subrayó que el aumento de parlamentarios que se propone es excesivo, pero en todo caso, así y todo lo que se ha hecho, es instalar un sistema que tiene en la asignación de nuevos Diputados, inconsistencias graves y arbitrarias...

...Manifestó que en 10 distritos se produce el problema planteado. Detalló que en el nuevo distrito 2, en la primera región, que cuenta con 222.024 electores, elige 3 Diputados, mientras que en el nuevo distrito 4, con 221.000 electores elige 5 Diputados. Lo anterior es sinónimo de una violenta alteración de la igualdad del voto y no existe una justificación razonable, sino que obedece a una razón política.

Añadió que hay 4 distritos que eligen 4 Diputados y que tienen una cantidad de electores que fluctúa aproximadamente entre los 270.000 y los 300.000. Ellos son los nuevos distritos 16, 18, 22 y 25, que eligen 4 Diputados, mientras que el nuevo distrito 4, con menos electores, elige 5 Diputados. Finalmente, expresó que hay distritos que eligen 5 Diputados, como es el caso del distrito 13, con 585.000 electores, versus los distritos 5, 17 y 23 que con menos población, eligen 7 Diputados.

Subrayó que del análisis hecho se desprende lo que se ha querido manifestar. Advirtió que se está diseñando un sistema electoral a la medida de los intereses políticos de la mayoría gobernante. Lo anterior es particularmente injusto, porque uno de los cuestionamientos que se le ha hecho al sistema binominal es que favorece a un sector político determinado, y se ha demostrado que eso no es efectivo.

Por lo anterior, formuló expresa reserva de constitucionalidad respecto de las normas que configuran la composición de la Cámara de Diputados"

1.5.- Jurisprudencia del Tribunal Constitucional relevante para la materia

Los requirentes traen a colación la prevención constitucional de Prevención Constitucionalidad ley de Elección Directa CORES. Rol N° 2466-13-CPR.

Los señores Ministros Hernán Vodanovic Schnake (Presidente Subrogante), Carlos Carmona Santander, Gonzalo García Pino y Domingo Hernández Emparanza concurren a la calificación de constitucionalidad del artículo 29 que el artículo primero del proyecto de ley sometido a examen introduce en la Ley N° 19.175, Orgánica Constitucional sobre Gobierno y Administración Regional, con la siguiente prevención:

1°. Que el mandato constitucional del artículo 113 inciso segundo parte final del texto fundamental sostiene que 7a misma ley establecerá la organización del consejo regional, determinará el número de consejeros que lo integrarán y su forma de reemplazo, cuidando siempre que tanto la población como el territorio de la región estén equitativamente representados”. Por tanto, el sistema electoral aplicable en la elección de los consejeros regionales debe respetar dos principios: equidad territorial y proporcionalidad poblacional, ambos al interior de una región;

2°. Que el principio de equidad territorial para configurar el método electivo de los consejeros regionales, es un medio coherente con la finalidad del gobierno y la administración de las regiones. Lo anterior, porque en su administración “se observará como principio básico la búsqueda de un desarrollo territorial armónico y equitativo” aplicando criterios como el de solidaridad “al interior de ellas” (artículo 115 de la Constitución). Por tanto, si las decisiones públicas regionales buscan tal armonía territorial, resulta natural concebirla desde el origen del órgano que adopta tales acuerdos;

3°. Que la proporcionalidad poblacional obedece a principios aún más relevantes. Primero, al hecho de que “Chile es una república democrática” (artículo 4° de la Constitución), a que su modo organizativo del poder regional lo adopta bajo el método electivo directo de los consejeros y bajo los criterios generales de una votación popular, esto es, que “el sufragio será personal; igualitario, secreto y voluntario" (artículo 15, inciso 1°, de la Constitución). Lo anterior, no implica más ni menos que adoptar el principio de “una persona, un voto” en cada elección. De esta manera, los sistemas electorales deben respetar el principio de igualdad electoral en la ley, no sólo para otorgarle un voto a cada persona sino para que las consecuencias del resultado electoral obedezcan al mismo principio. Ello no es más que exigir la aplicación de un criterio de "trato igualitario" al interior del sistema electoral, de conformidad con el articulo 19 N° 2 de la Constitución;

4°. Que el proyecto de ley, en su artículo 29, divide las modalidades de aplicar los principios electivos: equidad territorial y proporcionalidad poblacional en literales diferentes a objeto de escoger la mitad del Consejo Regional por una vía y el resto por el otro principio. Con ello, aparentemente, cumple con el mandato del artículo 113 de la Constitución en un análisis estático;

5°. Que el criterio del “trato igualitario”, matizado, por el principio territorial, lleva a la evidente conclusión de reconocer que las regiones deben organizar sus circunscripciones provinciales adaptando sus sensibilidades territoriales. Lo anterior; sumado a una loca geografía naturalmente desproporcionada, impide configurar regiones que respeten irrestrictamente el principio de “una persona, un voto". Pero el mandato constitucional es de equidad y debe respetarse siempre” y el desajuste territorial no puede olvidar que el Estado de Chile está al servicio de las personas. De esta manera, hay una desproporción tolerable y que está en él rango y autonomía del legislador. Pero, ¿hasta dónde es tolerable? ¿Qué desproporción termina afectando el principio de igualdad de las personas en su representación regional?;

6°. Que, en esta perspectiva general, el legislador se ha movido dentro de un rango razonable para distribuir las circunscripciones provinciales al interior de cada región, con salvedades significativas como son los ejemplos de las Regiones de Antofagasta y Metropolitana. En tales casos, esta ley se ha situado en un extremo interno de la constitucionalidad al ordenar equilibrios territoriales que son superiores 4 y 3 veces, respectivamente, entre la circunscripción menor y la mayor de cada región. Con ello, la desproporción de consejero regional por habitante es muy significativa, máxime si introduce adecuadamente el censo poblacional como criterio de actualización. No es del caso examinar completamente cada una de las regiones ni atribuir al número menor de consejeros a elegir parte del efecto de la desproporción. Por ahora, se trata de constatar que se trata de un ejercicio aritmético al interior de cada región, que aislando los casos emblemáticos de baja densidad poblacional (Provincias de Antártica, Isla de Pascua, Parinacota y Palena) y que no compara una región con otra. Sólo prevenir que la matización que origina el principio de equidad territorial explica diferencias pero no puede llegar a justificar una desproporción poblacional tan relevante que llegue a afectar la representación de determinadas circunscripciones o provincias al interior de una región y pueda vulnerar el mandato del artículo 113 de la Constitución.

En este sentido, los requirentes destacan que el Tribunal constitucional acepta qué dentro de la autonomía del legislador existan márgenes de desproporción tolerables pero dicha desproporción debe tener un límite. ¿Cuál límite? Sin duda uno que se oponga a la arbitrariedad.

Del análisis del voto de prevención del Excelentísimo Tribunal, los requirentes desean poner énfasis en dos circunstancias: la primera de ellas es que, tal como lo dice el considerando número 3° de la prevención recién transcrita, la proporción de la población obedece a principios de suma relevancia al estar íntimamente ligada al concepto de la igualdad del voto establecido en el artículo 15 de la Carta Fundamental. Incluso por sobre la representación territorial. Ésta circunstancia toma aún más relevancia en este caso, pues en la representación que debe tener la Cámara de Diputados no hay una exigencia equilibrar los principios de proporcionalidad territorial con proporcionalidad poblacional. En definitiva, es la proporcionalidad la que debe servir de base para el establecimiento concreto y preciso de lo que la Constitución exige en cuanto a igualdad del voto. Esa es la jurisprudencia reciente que ha sentado el Excelentísimo Tribunal Constitucional.

La segunda circunstancia en la cual los requirentes desean hacer poner énfasis en que el Tribunal dijo en la prevención transcrita que “los sistemas electorales deben respetar el principio de igualdad electoral en la ley, no sólo para otorgarle un voto a cada persona sino para que las consecuencias del resultado electoral obedezcan al mismo principio. Ello no es más que exigirla aplicación de un criterio de “trato igualitario” al interior del sistema electoral, de conformidad con el artículo 19 N° 2 de la Constitución” Es decir, dentro de amplia libertad que se le da al legislador orgánico, debe existir “en la ley” una configuración que no implique una desigualdad injusta, arbitraria, o carente de razonabilidad.

En el proyecto aprobado por el Congreso, y de acuerdo al extenso análisis que los requirentes ponen a disposición del Tribunal en cuanto a los nuevos distritos y en cuanto al número de escaños que elige cada uno, queda de manifiesto que, de acuerdo a la doctrina que se ha fijado en cuanto al contenido del estándar que impone el artículo 19 N° 2 del texto fundamental, el número de escaños propuesto en relación al distritaje contenido en el numeral 8) del artículo 1° no se ajusta a la Constitución, produciéndose de manifiesto una vulneración a los artículo 15 y 19 N° 2 del texto fundamental.

1.6.- Análisis y Constitucionalidad de nuevo artículo 25 transitorio de la ley 18.700.

En relación estrecha con el punto anterior, los requirentes solicitan al Tribunal Constitucional el examen del nuevo artículo 25° transitorio introducido por el numeral 14) del artículo 1° del proyecto de ley, pues la norma que le entrega vigencia a la operatividad plena al nuevo artículo 179:

Dice el numeral 14) Agrégase el siguiente artículo 25 transitorio:

“Artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al dé! censo oficial del año 2022.”.

El nuevo artículo 25 transitorio establece que la facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.

Lo anterior implica que la fórmula de carácter permanente de asignación proporcional de los escaños a los distritos contenida en el artículo 179 bis sólo empezaría a regir a partir del año 2024. Por tanto la asignación ad-hoc de escaños a los distritos contenida en el artículo 179 tendría vigencia sólo para las elecciones parlamentarias de los años 2017 y 2021,

Si como hemos señalado la asignación ad-hoc del artículo 179 es considerada inconstitucional, debería considerarse también inconstitucional este nuevo artículo 25 transitorio que la otorga validez por dos elecciones parlamentarias. De considerarse así, la vigencia del artículo 179 bis con la asignación proporcional de escaños a distritos a prorrata de sus habitantes, que respeta el principio de la igualdad del voto empezaría a regir de inmediato.

1.7.- Petición concreta al excelentísimo Tribunal Constitucional

En el Mensaje del proyecto de reforma al sistema electoral aplicable a la elección de parlamentarios se aborda la igualdad del voto como uno de los principales objetivos que inspira la reforma, como et principio de representación de la Cámara de Diputados y como fundamento del incremento del número de parlamentarios que se propone.

Sin perjuicio de lo anterior, la asignación de escaños entre los 28 nuevos distritos que se realiza en forma transitoria en el nuevo artículo 179 de ley N°18.700, vulnera la dimensión sustantiva del principio de la igualdad del voto consagrado en los artículos 15, 19 N°2 y 1° inciso 5° de la Constitución, ya que se advierten significativas diferencias entre los distintos territorios electorales en el número de electores y habitantes por diputado.

El reconocimiento del principio de la Igualdad del voto no obsta a que el legislador pueda establecer ciertas diferencias en la medida en que exista una justificación razonable para dicha distinción. En el proyecto de ley se hace referencia a diversas consideraciones que pueden sintetizarse en asegurar la representación e integración de las zonas de baja densidad poblacional.

Pese a lo anterior, las diferencias no se circunscriben a una sobre representación de las zonas extremas y una sub representación de los centros urbanos del país, sino que se producen entre regiones que no se encuentran estas situaciones, sin que se observe un criterio razonable que justifique estas diferencias que redundan en el menoscabo del valor sustantivo del voto de los electores de determinados territorios electorales.

En consecuencia, las diferencias en la asignación de escaños entre los distritos constituyen una discriminación arbitraria, que además infringe el principio de la igualdad del voto, con el consecuente perjuicio a la calidad de la democracia representativa y a la legitimidad de las instituciones políticas.

Requerimos al Tribunal Constitucional para que declare inconstitucional y suprima del texto establecido en el numeral 8) del artículo 1° que establece un nuevo artículo 179 que se incorpora a la ley 18.700 la expresión “que elegirán diputados” en todas las veces que se menciona para cada uno de los 28 distritos que se detallan. Ello por estar en infracción en relación a los artículos 15 y 19 N°2 de la Constitución política de la República. Además, y para hacer coherentes todos los nuevos artículos propuestos por el Honorable Congreso Nacional, es que Requerimos al Tribunal Constitucional para que declare inconstitucional y suprima el nuevo artículo 25 transitorio que se incorpora a la ley 18.700. Ello por estar en infracción en relación al artículo 15 y 19 N°2 de la Constitución Política.

2.- Capítulo II.

La inconstitucionalidad de la fórmula propuesta por la letra b) del numeral 9) del artículo 1° del proyecto de ley

El Congreso Nacional ha aprobado en el numeral 9) del artículo 1° del proyecto de ley la introducción de un artículo 179 bis del siguiente tenor

9) Agrégase el siguiente artículo 179 bis:

Artículo 179 bis.- Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con el siguiente procedimiento:

a) Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consistirá en distribuir a prorrata los cargos entre los distritos electorales, de acuerdo a la fórmula dispuesta en el artículo 109 bis de esta ley.

b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 8 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al de la realización del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con aquel en que se celebran elecciones de diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.

d) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes.

Dentro de los cinco días siguientes a la publicación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral aplicó las letras a) y b) de este artículo.

Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de febrero del año de que se trate."

El nuevo artículo 179 bis de la ley 18.700 que se incorpora en virtud de N° 9 del artículo 1° del proyecto de ley, contiene una fórmula de carácter permanente para la determinación de los diputados que elegirá cada distrito. Se establece en su inciso primero que corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con un procedimiento.

La primera parte del procedimiento contenida en la letra a) del inciso primero, señala que los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Agrega que dicha proporcionalidad consistirá en distribuir a prorrata los cargos entre los distritos electorales, de acuerdo a la fórmula dispuesta en el artículo 109 bis de la misma ley 18.700 y que describe el algoritmo matemático de asignación proporcional conocido como de Cifra Repartidora y que fue creado por el jurista belga Víctor D’Hondt.

Al respecto debemos señalar que la formula de cifra repartidora o método D’Hondt y es sin duda uno de los mejores métodos para la asignación proporcional de los diputados a los distritos, en este caso en proporción a los habitantes. Constituye por tanto un mecanismo que procura inequívocamente la mayor igualdad del voto. Es además un mecanismo de habitual uso para los mismos efectos en muchas democracias del mundo.

Por otra parte, la asignación que recae en el Consejo Directivo del Servicio Electoral, consiste solamente en la aplicación de una fórmula matemática, usando la información actualizada de los habitantes que periódicamente van entregando los censos población. El proyecto de ley no contempla, por tanto, una determinación discrecional por parte del Consejo Directivo del Servicio Electoral, ni delega en este la asignación de los escaños. La asignación queda entregada por la ley al resultado de la aplicación de una fórmula matemática de prorrateo proporcional, y que el Consejo Directivo debe calcular periódicamente con la nueva información disponible y oficial de habitantes por distrito. La formula sólo va al alterar el número de diputados, en la medida que la proporción de habitantes de los distritos haya cambiado y esa actualización es la correcta mirada desde él principio de la igualdad del voto, ya que la aplicación de este requiere de modificaciones sistemáticas a la luz de los cambios de población en los distintos territorios que suceden con el devenir del tiempo.

2.1.- La inconstitucionalidad de la letra b) del nuevo artículo 179 bis

La cuestión de constitucionalidad surge, en opinión de estos requirentes, en la segunda parte del procedimiento contemplado en el inciso primero del nuevo artículo 179 bis ya citado, específicamente en su letra b), cuando se señala: “No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 8 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope."

El establecimiento de mínimos y máximos anula completamente la proporcionalidad que logra el método de D’Hondt y por tanto introduce una nueva discrecionalidad en la repartición de los escaños en proporción a la población de los distritos, incumpliendo así el principio de la igualdad del voto lo que se traduce en una pugna manifiesta con lo contenido en el artículo 15 de la constitución.

Cabe señalar al respecto que resulta especialmente preocupante el mínimo de 3 diputados por distritos, ya que considerando la existencia de 28 distritos haría que 84 diputados fueran asignados en forma fija a los territorios, lo que representa un 54,2% del total. La mayor parte de los diputados quedaría así asignada en forma fija a tos distritos territoriales y sin ninguna consideración a la igualdad del voto y la menor parte se distribuiría en proporción a la población.

Ni en el artículo 47 de la Constitución Política, ni en ninguna de sus disposiciones se establece una representación territorial de la Cámara de Diputados, ni aún respecto a parte de ella, ni ninguna consideración a tratar a los territorios en condiciones de igualdad. Cuando el constituyente ha querido considerar los territorios en la representación lo ha señalado expresamente y en el caso de la Cámara de Diputados esto no sucede.

En virtud de lo anterior la asignación de los diputados a los territorios debería hacerse única y exclusivamente sobre la base del principio de la igualdad del voto y no en base a ningún otro criterio que lo pueda transformar arbitrario en virtud del estándar fijado en el artículo 19 número 2) de la Carta Fundamental.

Los requirentes insisten en la prevención constitucional citada en el capítulo primero de esta presentación. El Tribunal ya dijo que “Los sistemas electorales deben respetar el principio de igualdad electoral en la ley, no sólo para otorgarle un voto a cada persona sino para que las consecuencias del resultado electoral obedezcan al mismo principio. Ello no es más que exigir la aplicación de un criterio de “trato igualitario” al interior del sistema electoral, de conformidad con el articulo 19 N° 2 de la Constitución”; En este sentido, de aplicar la fórmula tal como la establece la letra b) del nuevo artículo 179 bis contenido en el número 9) del artículo 1° del proyecto de ley, se producirá una situación totalmente contraria al concepto de “trato igualitario" que debe mantenerse al interior del sistema electoral en virtud del mencionado número 2° del artículo 19 de la Carta Fundamental. Como ya se dijo, esto pues el establecimiento de mínimos y máximos anula completamente la proporcionalidad que logra el método de D’Hondt y por tanto introduce una nueva discrecionalidad no exigida por la Carta fundamental debido a que no existe la consideración a los territorios en la conformación de la Cámara de Diputados.

2.2.- Cuestiones de constitucionalidad advertidas en la discusión en la Sala del Senado en relación al número 9) del artículo 1) del proyecto de ley.

En la sesión 84° de la Sala del Senado del 13 de Enero 2015 el Senador Señor Juan Antonio Coloma advierte sobre el problema de constitucionalidad que tiene este artículo.

El señor COLOMA.- Señora Presidenta, el debate se halla referido al artículo 179 bis, que establece la forma de actualizar la asignación de los escaños de Diputados,

A mi juicio, aquí se evidencia de forma palmaria la inconstitucionalidad que encierra el redistritaje que acabamos de votar.

¿Qué debería plantear un artículo que pretende actualizar; cada cierto tiempo, determinada disposición? El intento de reflejar en la representatividad los cambios que se produzcan con relación al número de votantes. Este principio uno podría calificarlo de correcto.

Sin embargo -y aquí apunto al asunto de fondo-, si uno aplicara hoy los criterios que se sugieren para actualizar el sistema en diez años más, la distribución obtenida sería completamente distinta.

Entonces, no calza disponer que “Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos”.

Y posteriormente, se agrega: "No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 8 diputados. En el caso que (...) uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población

Además, se faculta al Consejo Directivo del Servicio Electoral para materializa esto.

¿Dónde radica el punto, señora Presidenta? En que el resultado hoy sería muy diferente si se aplicaran esas normas; en que la distribución cambia si uno aplica la proporcionalidad de la población.

Entonces, esto es lo más palmario que he visto para demostrar -y estoy argumentando en función del Tribunal Constitucional- lo absurdo que resulta el redistritaje, toda vez que la regla de actualización generaría hoy día un resultado completamente distinto.

Yo entenderla una norma de esta naturaleza si, de alguna manera, mantuviera lo que hay ahora, Pero es tan claro lo ilógico que resulta esta distribución que el artículo 179 bis es absolutamente contradictorio con el precepto anterior; que hablaba del redistritaje.

Señora Presidenta, estas cosas no pueden pasar desapercibidas, sin más, como un comentado anecdótico.

A mí me parece que, desde una perspectiva única, si uno pudiera desagregar el artículo 179 bis de lo establecido en el anterior; tendría sentido, se lo podría considerar. Porque uno pensaría: “En realidad, hay una proporcionalidad”. Y sé podría decir “Que ningún distrito sea más chico que tanto, ni más grande que tanto y si hay alguno que excede el límite, se repiensa”.

Eso es correcto.

Me gustaría, sí, recibir alguna explicación de quienes formularon esta norma por parte del Gobierno -todavía no oímos su voz-, a los efectos de saber cuál es la lógica para que esa distribución resulte distinta. No sé si existe precedente en algún momento de la historia, en alguna instancia, en algún país, en algún hemisferio. No sé dónde pueda haber una norma de actualización dé un resultado distinto de lo actual.

Aquí quiero ser reflexivo. Estoy tratando de obtener una aplicación, de modo de saber por qué se valida lo primero.

Entonces, para efectos del Tribunal Constitucional, si esto se valida -y, por cierto, se remarca, porque se busca generar un apego a la norma constitucional-, lo anterior no tendría ningún sentido, ya que se descartaría exactamente en sí mismo.

2.3.- Petición concreta al excelentísimo Tribunal Constitucional

En virtud de los argumentos que se han esgrimido, por los cuales se estima que la letra b) del nuevo artículo 179 introduce un criterio que degeneraría en una asignación arbitraria de escaños al contravenir el artículo 15 en relación al artículo 19 N° 2 de la Constitución, es que requerimos al Tribunal Constitucional para que declare inconstitucional y suprima la letra b) del texto de del inciso primero del nuevo artículo 179 bis que se incorpora a la ley 18.700 en virtud de! numeral 9) del proyecto de ley.

3.- Capítulo III: La inconstitucionalidad de las normas contenidas en la letra b) del número 1) del artículo 1° del proyecto de ley y el número 3) del artículo 4° del proyecto de ley en relación al artículo 19 N° 15 de la Constitución política

El proyecto boletín 9326-07, aprobado por el Congreso Nacional establece una modificación a la ley 18.700 en relación a respetar una “cuota de género” al momento de inscribir las candidaturas a la elección de Diputados y Senadores. Además, establece un nuevo artículo transitorio que restringe la aplicación de las primarias a un porcentaje determinado.

3.1.- Análisis de constitucionalidad de la letra b) del número 1 del artículo 1° del proyecto de ley en relación al artículo 19 N° 15 y 26 de la Constitución Política

Dice la norma en examen:

b) Intercálese el siguiente inciso quinto, nuevo, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por ¡os partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de ¡as candidaturas. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.”.

El artículo 19 N° 15 de la Carta Fundamental establece en la segunda parte de su inciso 5° que una ley orgánica constitucional establecerá un sistema de elecciones primarias que podrá ser utilizado por dichos partidos para la nominación de candidatos a cargos de elección popular, cuyos resultados serán vinculantes para estas colectividades, salvo las excepciones que establezca dicha ley. Aquellos que no resulten elegidos en las elecciones primarías no podrán ser candidatos, en esa elección, al respectivo cargo.

Esta parte del inciso 5° se introdujo a través de una reforma constitucional la cual se materializó a través de la ley 20.414 y se encuentra dentro del capítulo que reconoce las garantías fundamentales reconocidas a todas las personas. El constituyente consideró de primerísimo orden dotar al sistema político de un procedimiento, dentro del derecho de asociación y del estatuto de los partidos políticos, que establece las primarias vinculantes. Dicho procedimiento se encuentra encargado al legislador orgánico.

Es importante señalar que, a juicio de los requirentes, el legislador no puede regular este procedimiento limitando el libre ejercicio de los derechos pues de acuerdo al artículo 19 N° 26 de la carta fundamental, ésta asegura a todas las personas la seguridad de que los preceptos legales que por mandato de la Constitución regulen o complementen las garantías que ésta establece o que las limiten en los casos en que ella lo autoriza, no podrán afectar los derechos en su esencia, ni imponer condiciones, tributos o requisitos que impidan su libre ejercicio. De esta manera, con la forma en que se encuentra redactada la norma los partidos políticos pierden toda la autonomía para poder ejercer el derecho a decidir sus candidatos por vía de primaria pues la ley está estableciendo un requisito que impide el libre ejercicio de las primarias.

Es de primerísima importancia dejar claro al excelentísimo Tribunal, que los requirentes no están cuestionando la constitucionalidad del mecanismo de cuotas de género, sino el modo en que la materialización de ese principio, afecta, en el proyecto, la posibilidad cierta de que sean los ciudadanos los que elijan libremente a sus candidatos al parlamento a través de primarias vinculantes.

En efecto, para hacer compatible la idea de la cuota de género con la garantía de la libertad de asociación en cuanto a la aplicación misma del procedimiento de las primarias, hoy establecido en nuestra Constitución, existen múltiples formas. Una de ellas podría ser que la cuota se exigiera dentro de la plantillas de candidatos que participan de una primaria o que la cuota se aplicara en cada distrito respecto de la primaria particular u otra fórmula respecto de la cual no existiera una regulación Imitatoria en el libre ejercicio del derecho contemplado dentro de la garantía de la libre asociación.

Sin embargo, asociar la cuota de género con una limitación de llevar candidaturas a una primaria, originalmente concebida como voluntaria y libre, hace, en la especie, irreconocible el derecho de los partidos políticos de aspirar con completa libertad a un mecanismo de primarias vinculantes, lo que hace que este artículo se encuentre en pugna con la norma contenida en el numeral 15° del artículo 19 en relación al numeral 26° del mismo artículo.

3.2.- Análisis de constitucionalidad del numeral 3) del artículo 4° del proyecto de ley en relación al artículo 19 N° 15 y 26 de la Constitución Política

El Congreso Nacional aprobó la incorporación de un nuevo artículo tercero transitorio a la ley N° 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes:

3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero - El partido político que decidiere someterse al sistema de elecciones primarías contemplado en los artículos 3° y siguientes de la presente ley para los períodos electorales parlamentarios de los años 2017, 2021, 2025 y 2029 sólo podrá someter a dicho procedimiento hasta el cuarenta por ciento del total de candidaturas a diputado o senador que pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral

La argumentación que los requirentes ofrecemos al Excelentísimo Tribunal Constitucional es similar a la norma contenida en la letra b) del numeral) del artículo 1° del proyecto de ley por cuanto se Introduce una limitación que derechamente contraviene el derecho a que los candidatos -en este caso al parlamento- se determinen libremente mediante el ejercicio de primarias vinculantes. En efecto, la redacción del epígrafe pertinente en el artículo 19 N° 15 de la Carta Fundamental (“Una ley orgánica constitucional establecerá un sistema de elecciones primarias que podrá ser utilizado por dichos partidos para la nominación de candidatos a cargos de elección popular, cuyos resultados serán vinculantes para estas colectividades, salvo las excepciones que establezca dicha ley. Aquellos que no resulten elegidos en las elecciones primarias no podrán ser candidatos, en esa elección, al respectivo cargo”) indica que el uso del sistema de primarias corresponde a una decisión de los partidos y que no es susceptible de seccionamientos porcentuales como se pretende en la norma que nos ocupa.

Asimismo, si se mantuviera tales criterios porcentuales, se afectaría no sólo el derecho del respectivo partido de utilizar este mecanismo, sino el de sus militantes, que sólo podrían participar en parte de la generación de candidatos, sin que haya una modalidad equivalente en el resto de éstos.

En este sentido, además, la introducción de dicho criterio es arbitrario. No hay razón que justifique al legislador orgánico a introducir un criterio que limite el ejercicio de las primarias máxime cuando el constituyente no ha establecido criterio alguno para limitar su ejercicio. En opinión de los requirentes, es perfectamente compatible concebir jurídicamente un mecanismo que contenga una “cuota de género” sin que eso implique privar a través de un criterio arbitrario como el que muestra el artículo aprobado, del mecanismo de primarias vinculantes.

Los requirentes desean traer a colación los argumentos esgrimidos a través de los cuales la falta de razonabilidad determina la existencia de una arbitrariedad y que vulnera por tanto el artículo 19 N° 2.

3.3.- Reserva de constitucionalidad

En la sesión de la Sala del martes 13 de enero (sesión 84), se registra la siguiente intervención del Diputado Señor Juan Antonio Coloma:

"...de aprobarse este artículo, de las seis elecciones senatoriales que se van a realizar en el período correspondiente, solo en dos habrá primarias. Y de las veintiocho elecciones de Diputados, solo en once, porque es la única forma de entenderla exigencia del 40 por ciento.

En lo personal, considero que esta es una forma de construir Estado, de construir Derecho, de construir política equivocada, pues una cosa es buscar el objetivo de que haya mayor proporcionalidad -digámoslo de esa manera- de hombres y mujeres en el Parlamento. Y otra muy distinta restringir una ley, que acabamos de dictar, en términos de desvirtuaría totalmente.

Insisto: no soy un adorador de las primarias, pero siempre dije que eran un mecanismo legítimo y que cada partido tenía el derecho de evaluar dónde se podían plantear.

Lo que nos dice esta iniciativa es que eso ya se termina porque, cualquiera que sea la decisión del partido, solo en dos circunscripciones podrá haber primarias.

Así se entiende lo del 40 por ciento, Senador Harboe. No hay otra forma. Adicionalmente, ya que usted, señora Presidenta, señaló que no le parecía que su ejercicio vulnerara la Constitución, también quiero hacer expresa reserva de constitucionalidad porque el artículo 19, N° 15 establece un sistema de elecciones primarias que no se limita a señalar donde se puede usar y donde no. Esto trato de transmitir.

Y, al no hacerlo, restringe lo que constitucionalmente dispone. Cualquier restricción tiene que ser a la Ley de Primarias, no a una legislación de una naturaleza completamente diferente.

También quiero agregar que, desde mi perspectiva, la forma correcta de entender esto es usando otro tipo de mecanismo. Yo sugeriría algunos perfeccionamientos que veremos después, vinculados con los rembolsos.

Creo que ahí hay una cosa activa distinta, que, obviamente, mejora la situación objetiva tanto de los partidos que llevan candidatas como de la candidata misma en la medida que resulta electa.

Eso apunta en un sentido adecuado, que es utilizado en muchos países. Sin embargo, no conozco otra nación donde exista esta mezcla que tratamos de generar: un sistema de cuotas y con una restricción del ejercicio de las primarias en un artículo transitorio”.

En la misma sesión, el Senador Señor Alberto Espina hizo también expresa reserva de constitucionalidad al respecto:

El señor ESPINA.- Señora Presidenta, en primer término, hago expresa reserva de constitucionalidad, porque esta norma constituye claramente una discriminación arbitraria. Y quiero fundarlo en lo que manifestaré en seguida.

La Constitución establece el principio de igualdad ante la ley y señala que él se rompe cuando se registra una discriminación arbitraria. No es cualquier discriminación: tiene que ser arbitraria.

Cuando se dispone que solo el 40 por ciento de los candidatos (lean la página 75 del Informe) pueden participar en primarías se está estableciendo una discriminación absolutamente arbitraria respecto del 60 por ciento que no puede hacerlo.

No hay ninguna justificación para ello, pues todos están puestos en las mismas condiciones: todos son candidatos. Distinto es el caso de las cuotas, porque ahí se expresa: a las mujeres, en su conjunto, se les permite 40 por ciento de candidaturas. Aquí se está diciendo “hombres o mujeres".

Si un partido lleva 100 candidatos, solo 40 van a poder participar en primarias, aunque pertenezcan teóricamente a un distrito.

Podría darse el hecho de que hubiese un distrito y 40 candidatos interesados. Es una cifra alta. Pero cuando uno quiere someter a prueba las normas debe ponerlas en las situaciones en que sería absurdo que el legislador las colocara.

Esta disposición -reitero- es contraria a la Carta Fundamental. Nos obligará a recurrir al Tribunal Constitucional, pues rompe arbitrariamente un principio básico: hay primarias para todos o no hay primarías para ninguno. Pero aquí, arbitrariamente, se dice 40 por ciento. Y el resto de los candidatos de los otros distritos o de un mismo distrito no va a tener primarias si excede ese porcentaje.

A los efectos de votar a favor esta disposición, aquello no resiste ningún análisis. De otro lado, se argumenta que los partidos han llevado menos candidatos en las primarias.

Ya hubo una primera experiencia de primarías. Pero es evidente que con el transcurso del tiempo irá aumentando la cantidad de distritos y circunscripciones donde ellas se desarrollarán.

Por ejemplo, en la última elección presidencial se registraron casos de primarias reguladas, distintas, Y en el de los penúltimos comicios hubo incluso mayores limitaciones. Recuerdo la primaria de Eduardo Freí con el actual Ministro Gómez.

Hoy sería difícil entender que no existieran primarías en las elecciones presidenciales. ¿Por qué? Porque el mecanismo se va culturizando: se va estableciendo una cultura de las primarías.

Aquí, derechamente, se está estableciendo que va a haber primarías solo para 40 por ciento de los candidatos.

3.4.- Petición concreta el excelentísimo Tribunal Constitucional

En virtud de los argumentos expuestos en el presente capítulos, los requirentes solicitan que el tribunal declare la inconstitucionalidad de la letra b) del número 1) del artículo 1° del proyecto de ley y del numeral 3) del artículo 4° del proyecto de ley por entrar en flagrante contradicción con las normas establecidas en el artículo 19 números 2°, 15° y 26 de la carta fundamental.

4.- Capítulo IV: Análisis de constitucionalidad en relación la desigualdad entre independientes y los partidos políticos que propone el proyecto de ley.

El Congreso Nacional aprobó el siguiente numeral 2) del artículo 3° del Proyecto de ley boletín 9326-07 modificando la ley N° 18.603 Orgánica Constitucional de Partidos Políticos:

2) En el artículo 6°:

a) Sustitúyese en el inciso primero la cifra “0,5” por el guarismo “0,25”.

De manera tal que el nuevo artículo 6° inciso primero dicha ley quedaría de la siguiente manera:

Artículo 6°.- El partido político en formación podrá proceder a la afinación de sus miembros, para lo cual dispondrá de un plazo de doscientos diez días. Será necesario que se afilie al partido un número de ciudadanos con derecho a sufragio equivalente, a lo menos, al 0,25 por ciento del electorado que hubiere sufragado en la última elección de Diputados en cada una de las Regiones donde esté constituyéndose, según el escrutinio general practicado por el Tribunal Calificador de Elecciones.

4.1.- Constitucionalidad del número 2) del artículo 3° del proyecto de ley a la luz del artículo 18 y del artículo 19 N° 2 de la Constitución Política

El Senado rechazó en el proyecto una norma aprobada por la Cámara de Diputados que modificaba el artículo 10 de la ley 18.700 que indicaba que las candidaturas independientes a Diputados o Senadores requerirán del patrocinio de un número de ciudadanos igual o superior al 0,25 por ciento de los que hubieren sufragado en el distrito electoral o en la circunscripción senatorial según se trate de candidaturas a Diputados o Senadores, respectivamente, en la anterior elección periódica de Diputados, de acuerdo con el escrutinio general realizado por el Tribunal Calificador de Elecciones. De esta manera, dicha norma continuará vigente en lo que respecta a que el patrocinio para presentarse como independiente a Diputado y Senador requerirán el patrocinio de un número de ciudadano igual o superior al 0,5% de los que hubieran sufragado en e! distrito electoral o circunscripción senatorial en la última elección respectiva.

El inciso primero del artículo 18 de la constitución política señala lo siguiente: “Habrá un sistema electoral público. Una ley orgánica constitucional determinará su organización y funcionamiento, regulará la forma en que se realizarán los procesos electorales y plebiscitarios, en todo lo no previsto por esta Constitución y garantizará siempre la plena igualdad entre los independientes y los miembros de partidos políticos tanto en la presentación de candidaturas como en su participación en los señalados procesos. Dicha ley establecerá también un sistema de financiamiento, transparencia, límite y control del gasto electoral.

La norma constitucional es clara en cuanto a garantizar la plena igualdad de los independientes y partidos políticos en la presentación de candidaturas como en su partición en elecciones.

Uno de los requisitos para participar como independiente en elecciones de diputados y senadores está contemplado en el artículo 10 de la ley 18.700 y que estable el “patrocinio de un número de ciudadanos igual o superior al 0,5 por ciento de los que hubieren sufragado en el distrito electoral o en la circunscripción senatorial, según se trate de candidaturas a Diputados o Senadores; respectivamente, en la anterior elección periódica de Diputados". Igual requisito contempla el artículo 13 de la ley 18,700 para las candidaturas a Presidente de la República, pero en este caso aplicando el porcentaje de 0,5% respecto a todo el país.

También es 0,5% el porcentaje de patrocinios de los que sufragaron en la última elección en el territorio electoral, en el caso de las candidaturas independientes de Alcaldes y Concejales según artículo 112 de la ley 18.695 de Municipalidades, y de las candidaturas a Consejeros Regionales según artículo 89 de la ley 19.175 de Gobierno y Administración Regional.

Pues bien, la afiliación del 0,5% de los ciudadanos con derecho a sufragio, de los hubieren sufragado en la última elección de Diputados en cada una de las Regiones, es también el requisito para constituirse como partido político en cada región del país, según el artículo 6 de la ley 18.603 de Partidos Políticos.

Teniendo en cuanto que uno de los derechos esenciales y principales de un partido político es el poder presentar candidaturas a los cargos de elección popular, existía en nuestro ordenamiento legal electoral una igualdad en los requisitos, en cuanto al número de patrocinios para presentar candidaturas entre independientes y el número de afiliados para constituir un nuevo partido político que le daba el derecho a presentar candidaturas de sus militantes o de independientes asociados en los casos de pactos electorales.

El proyecto de ley viene en su artículo 3 N° 2, que modifica el artículo 6 de la ley N° 18.603 orgánica constitucional de Partidos Políticos, a rebajar este porcentaje 0,5% a 0,25% sólo para la constitución de los partidos políticos.

Resulta evidente que con la modificación señalada, existirá una ventaja para la presentación de candidaturas a Presidente de la República, y para senador o diputado cuando el territorio electoral de éstos coincida con el de una región, por la vía de conformar un nuevo partido político en los territorios respectivos que el presentarse como candidatos independientes. En efecto, en el primer caso, por la vía de constituir un nuevo partido, será necesario obtener firmas de afiliación ante notario, del 0,25% de los que sufragaron en la última elección y en el caso de candidaturas independientes será necesario conseguir firmas de patrocinio ante notario del 0,5% del mismo universo.

El proyecto de ley está estableciendo una clara condición de desigualdad, entre los requisitos para presentar candidaturas independientes y los requisitos para conformar un nuevo partido político en los mismos territorios, con el objeto de obtener de esta forma el mismo derecho de presentar candidaturas: Consideramos que está desigualdad no se ajusta al estándar de constitucionalidad ya descrito en el desarrollo del artículo 19 N°2 del texto fundamental y que es contraria flagrantemente a la disposición constitucional contenida en el inciso primero del artículo 18 de la Constitución Política.

4.2.- Petición concreta al Excelentísimo Tribunal Constitucional

Por la razones expuestas, los requirentes solicitamos por tanto al Excelentísimo Tribunal Constitucional que declare inconstitucional y elimine del texto de proyecto de ley, el N° 2 del artículo 3 del Proyecto de ley que modifica el artículo 6 de la ley N 18.603 de Partidos Políticos por estar en contravenir los artículos 15, 18 y 19 N° 2 de la Constitución Política.

5.- Capítulo V: La contravención a los incisos 3 y 4 del artículo 67 de la Constitución Política de la República de parte de los numerales 8 y 10 del artículo primero del proyecto de ley

5.1.- Normas del proyecto de ley que implican un aumento de gasto al erario público.

El Congreso Nacional, en uso de sus atribuciones constitucionales, dio su aprobación a un proyecto que modifica el sistema electoral binominal por uno proporcional el cual fue ingresado el 6 de mayo de 2014. En relación a las normas que establecen (debieran establecer) aumentos de recursos de parte del erario público podemos resumir las siguientes:

1.- El aumento de 35 diputados más que establece el número 8) del artículo 1° del proyecto de ley que modifica el artículo 179 de la ley 18.700;

2.- El aumento de 12 senadores más que establece el número 10) del artículo 1° del proyecto de ley que modifica el artículo 180 de la ley 18.700;

3.- El establecimiento de una bonificación en dinero por diputada electa dirigida al partido en que sustentase su candidatura que establece el número 2) del artículo 2° del proyecto de ley;

4.- El aumento de un reembolso adicional por concepto de gasto electoral que establece el número 3) del artículo 2° del proyecto de ley.

5.2.- La norma Constitucional infringida y la historia de su establecimiento

Los incisos 3° y 4° del artículo 67 de la Constitución prescriben que “La estimación del rendimiento de los recursos que consulta la Ley de Presupuestos y de los nuevos que establezca cualquiera otra iniciativa de ley, corresponderá exclusivamente al Presidente, previo informe de los organismos técnicos respectivos.

No podrá el Congreso aprobar ningún nuevo gasto con cargo a los fondos de la Nación sin que se indiquen, al mismo tiempo, las fuentes de recursos necesarios para atender dicho gasto.”

Esta disposición fue incorporada por la Constitución de 1925 a instancias de la “Misión Kemmerer”. El debate en torno a esta disposición se inició con una propuesta del Dr. Walter Ewding Kemmerer en la que proponía incorporar a la Constitución una norma que decía: “No podrá el Congreso aprobar ningún nuevo gasto con cargo a los fondos de la nación, sin dictar, al mismo tiempo, una ley que cree las fuentes de los recursos necesarios para atender dichos gastos.” En la discusión, el Presidente Alessandri argumentó que podía suceder que existiera un “sobrante de fondos, y entonces se toma para hacer el nuevo gasto; pero Mr. Kemmerer dice que no se puede gastar ningún centavo si no se fija al mismo tiempo una contribución"[10]. Por esto, se aceptó aprobar la norma del modo como se contempló en el texto finalmente aprobado.

5.3.- Alcance la norma del artículo 67 de la Constitución

La ubicación de la norma, tanto en su versión original como en la actual, se encuentra entre aquellas vinculadas a la Ley de Presupuesto. Sin embargo, a la luz de las nuevas disposiciones constitucionales introducidas sucesivamente el año 1943, 1970 y 1980, la norma carece de sentido si se le interpreta exclusivamente en ese contexto. Por eso es necesario interpretarla como una norma reguladora de la iniciativa exclusiva del Presidente de la República en general [11]. Así lo sostiene, entre otros, el Profesor José Luis Cea quien señala que esta norma “puede entenderse en el sentido de habilitar al Congreso Nacional para aprobar gastos públicos siempre que precise, simultáneamente, cuáles son las fuentes de recursos suficientes para pagar tales desembolsos. Esta interpretación es, sin embargo, insostenible cuando se enlazan los diferentes incisos del artículo 67 [12]. Con todo, la disposición del inciso tercero del artículo 67 es también un mandato a todos los órganos colegisladores para indicar las fuentes de los recursos necesarios para atender cualquier nuevo gasto que importe un proyecto de ley. Este deber recae en el Presidente de la República quien tiene bajo su competencia la estimación del rendimiento de tos recursos y, en términos globales, la administración financiera del Estado. Si el Presidente no lo hace, el Congreso no puede aprobar un nuevo gasto y, de hacerlo, se vulnera la Carta Fundamental.

Parte de la doctrina también califica como mandato constitucional el que en la tramitación de los proyectos que importen gasto público se detallen la estimación del posible monto involucrado y la fuente de los recursos que el proyecto demanda. Esto es, señalar no solo la fuente de los recursos sino que también su estimación. Si el proyecto no lo hace, señala, “sus contenidos adolecen de un vicio constitucional, por cuanto si no se define la cantidad de dinero a invertir no será posible establecer con precisión la fuente de recursos necesarios para atender dicho gasto" exigida por el art. 67 de la Constitución[13].

Así, y en opinión de estos requirentes, el Congreso Nacional debe, ante todo, estimar los gastos de los proyectos de ley y exigir que cualquier nuevo gasto con cargo a los fondos de la Nación, esté financiado sea porque se indica la fuente de los recursos o porque se crea una nueva. Es esto lo que hacen los Informes Financieros y, además, fórmulas sacramentales que se incorporan en los proyectos de ley que importan gasto estableciendo la partida específica con cargo a la cual se financiará el respectivo proyecto de ley una vez aprobado. La falta de determinación del origen de los recursos comprometidos, importaría un vicio de constitucionalidad por vulnerar la norma que se analiza.

5.4.- Informes financieros del Proyecto de ley presentados en la Cámara de Diputados en el primer trámite constitucional.

Durante la tramitación del proyecto de ley, se presentaron 3 informes financieros: un primer informe financiero con fecha 23-04-2014 el cual fue presentado a la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia de la Cámara de Diputados (IF N° 41), el 06-05-2014; un primer informe complementario presentado23-07-2014 (IF N° 67), un segundo informe complementario presentado en la misma comisión; y un segundo informe técnico complementario (IF N° 69) con fecha 06-08-2014 a la Comisión de Hacienda de la misma Corporación.

Luego, añade que “no obstante, existirá un mayor gasto por lo dispuesto en el artículo 2que a modo ilustrativo considerando las mujeres electas como Parlamentarías en el último proceso eleccionario, habría significado un mayor gasto de UF 10.500 (M$ 250.000 aproximadamente), de haberse aplicado esta norma" (21 parlamentarias electas).

El informe concluye que “El presente proyecto de ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la Ley de Presupuestos, para la partida 02 Congreso Nacional y en lo que respecta a lo dispuesto en el artículo 2°, se financiará con tos recursos que en su oportunidad provea la respectiva Ley de Presupuestos”. Queda de manifiesto en los párrafos transcrito que, además de contradecirse, adolece de claros vicios de constitucionalidad pues no estimó el monto en que era necesario aumentar los recursos asociados a la aprobación del proyecto.

Dicho informe financiero tuvo que ser perfeccionado a través de un Informe complementario (IF N° 67) de fecha 23-07-14, producto que él Su Excelencia la Presidenta de [a República a través del oficio 312-362 presentó una indicación que aumentó el desembolso por concepto de voto obtenido de las candidatas y que terminó siendo finalmente el número 3) del artículo 2° del proyecto de ley. En el texto del informe, que propone un nuevo artículo 3° transitorio a la ley 19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, se expresa que “este artículo tercero transitorio establece que, para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a Senadoras y Diputadas, tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, equivalente a 0,01 unidades de fomento, por cada voto obtenido por cada candidata a Senadora o Diputada. La actual indicación irrogará un gasto adicional respecto a lo informado en el IF N° 41 de 23 de abril pasado, equivalente a 0,01 UF multiplicada por el número de votos que obtengan las candidatas en las elecciones correspondientes, A modo ilustrativo, considerando el número de candidatas a Parlamentarías en el último proceso eleccionario, la aplicación de esta norma habría significado un gasto de UF 20.557. Dicho mayor gasto será financiado con cargo a los recursos que se provean en la Ley de Presupuestos del año respectivo”.

Así las cosas, el proyecto no debiera haber sido admitido a tramitación pues, de acuerdo al artículo 14 de la ley Orgánica del Congreso Nacional “Los fundamentos de los proyectos deberán acompañarse en el mismo documento en que se presenten, conjuntamente con los antecedentes que expliquen los gastos que pudiere importar la aplicación de sus normas, la fuente de los recursos que la iniciativa demande y la estimación de su posible monto".

En opinión de estos requirentes el Ejecutivo, ante la evidencia de que no era sostenible alcanzar un estándar de constitucionalidad aceptable con los incisos ya mencionados del artículo 67 de la Constitución, intentó subsanar en parte el potencial vicio de constitucionalidad el 06-08-14, el mismo día en que se votaba el proyecto en la Comisión de Hacienda, Presentó así un segundo informe complementario (IF N° 69) donde reconoce en último término que existirá un aumento de gastos por concepto de aumento de parlamentarios. Dice el informe que “en el año 2018, se incorporarán ¡os primeros 5 senadores y en 2022 los restantes 7 senadores. Por efecto de lo dispuesto en el artículo 62 de la Constitución Política de la República, existirá un mayor desembolso por concepto de Dieta Parlamentaria, estimándose en M$ 430.274 para el año 2018 y en régimen para el año 2019 la suma de M$ 516.329. Para el año 2022, el gasto se incrementaría en M$ 602.383 y para el año 2023, el gasto adicional en régimen se estima en M$ 722.860.”Más adelante se indica que "por otra parte, al sustituirse los artículos 178 y 179 de la Ley N° 18.700, se dispone que la composición de la Cámara de Diputados estará integrada por 155 Diputados, aumentando en 35 los actuales cupos de Diputados, derivado de la configuración de los distritos electorales y la cantidad que se elegirá en cada uno de ellos, los cuales se incorporarán en el año 2018. Por efecto de lo dispuesto en el artículo 62 de la Constitución Política de la República, existirá un mayor desembolso por concepto de Dieta Parlamentaria, estimándose en M$ 3.011.917 para el año 2018 y en régimen para el año2019 la suma de M$ 3.614.300.”

Es por esto que, en opinión de los requirentes, se generan los siguientes vicios de constitucionalidad los cuales son desarrollados en el apartado siguiente:

5.5.- Vicios de Constitucionalidad y aplicación de la norma del artículo 67 incisos 3° y 4° al caso concreto presentado al Tribunal

5.5.1.- El proyecto no contempla financiamiento para las asignaciones parlamentarías

En opinión de los requirentes, existe una grave omisión que no cumpliría el estándar de constitucionalidad a la luz del artículo 67 de la carta fundamental. El proyecto no contempla las asignaciones parlamentarias ni de los Diputados ni de los Senadores sino solamente el concepto de dieta como ítem de remuneración, que es lo que dice el informe financiero presentado por el Ejecutivo al proyecto.

En la comisión de hacienda de la Cámara de Diputados expuso el Secretario General de la Cámara de Diputados. Consta en acta la siguiente intervención en el informe de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, evacuado el 11 de agosto de 2014.

- Señor Miguel Landeros, Secretario General de la Cámara de Diputados.

En primer lugar, recordó a los integrantes de la Comisión la forma cómo se aprueban los gastos del Congreso Nacional y particularmente, de la Cámara de Diputados. Explicó que el gasto considerado en el presupuesto vigente y en materia de dietas parlamentarias corresponde a $12.391.886.881, y en materia de asignaciones al de $ 21.179.006.912, (ambas cifras anuales). Precisó que esta última se desglosa en varios ítems.

Hizo presente que el artículo 62 de la Constitución Política de ¡a República, establece la dieta parlamentaria y que asciende al monto de $ 8.605.477, por diputado (valores brutos). Precisó que la dieta está establecida en función de la remuneración de un ministro de Estado, por lo que en la medida que el sueldo de aquél no varíe, no variará tampoco la dieta. La ley de reajuste del sector público se establece su valor y este corresponde al grado A de la escala de remuneraciones del sector público: precisamente por este aspecto y por ser de origen constitucional es que es complejo modificar este Ítem por la vía legal.

En cuanto a las consecuencias del proyecto en este ítem, señaló que tendrá un costo de $ 2.905.042.478 al año 2018 y de $3.614.300.461 al 2019. Es imposible obviar en la ley de presupuestos respectiva, ya que hay gastos establecidos en leyes permanentes que no se puede obviar.

Explicó que, en cambio las asignaciones parlamentarias son variables. En el año 2011 el Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias estableció los montos para cada ítem y precisó que de mantenerse el nivel actual, el gasto total involucrado ascendería a $7.713.682.634 en 2018 y a $ 9.596.956.320, en 2019, cifras que suponen los montos actuales. Acotó que podría suceder que durante la discusión de la Ley de Presupuestos de este año los parlamentarios pueden reducirías y en base a dicha rebaja, en diciembre el Consejo haga los ajustes procedentes.

Finalmente recordó que la Ley de Presupuestos contempla para la Cámara de Diputados la cifra de 58.504.000 millones, cifra que fue incrementada por efecto del reajuste aprobado durante el mes de mayo y por la ley de incentivo al retiro.

En este sentido, y en opinión de los requirentes, esta intervención deja en claro que una cosa es la dieta parlamentaria y otra muy distinta son las asignaciones. Es por esto, que los artículos que precisan en el aumento de Diputados y Senadores adolecen de la inconstitucionalidad formal pues no señalan con precisión cuál la fuente de los recursos por concepto de asignaciones parlamentarias que establece el proyecto de ley.

5.5.2.- la indicación de un “acuerdo político” que no precisa en el informe financiero las fuentes de los recursos

A los requirentes les llama la atención el informe financiero expresa que "en virtud del acuerdo político, de no incurrir en un mayor gasto fiscal por estos conceptos (el aumento de dieta), será necesario efectuar los ajustes para adecuar los presupuestos de ambas corporaciones a los nuevos requerimientos, en consonancia con lo previsto en el artículo 68 de la Ley N° 19,918 Orgánica Constitucional del Congreso Nacional. Consecuentemente, será necesario que el Consejo Resolutivo de Asignaciones Parlamentarias incorpore a contar del año 2018 estas adecuaciones en sus futuras Resoluciones.

Así, resulta de dudosa constitucionalidad establecer como fuente del mandamiento un “acuerdo político” -que dicho sea de paso, no suscrito por los requirentes- que pueda servir de fundamento para justificar un aumento de gasto. Además, el informe señala que eventualmente “sería necesario efectuar ajustes” en virtud de la ley orgánica del Congreso. En efecto, la norma del artículo 68 de la L.O.C del Congreso dispone que Cada Cámara establecerá la forma en que sé distribuirán los fondos que le correspondan. Las normas sobre traspasos internos y el procedimiento que regulará el examen y aprobación de las cuentas de gastos respectivas serán fijados por cada Cámara. Para estos efectos y sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 66 A cada Cámara tendrá una comisión revisora de cuentas. Las cuentas del Congreso Nacional serán públicas y una síntesis de ellas se publicará anualmente en el Diario Oficial. Cada Cámara determinará la forma en que participará en el sistema de información administrativa y financiera establecido para los órganos y servicios públicos regidos por la Ley de Administración Financiera del Estado, información que acreditará el cumplimiento de ¡as normas legales aplicables al Congreso Nacional. El servicio de tesorería correspondiente comunicará mensualmente al Ministerio de Hacienda el avance de ejecución presupuestaria”.

En otras palabras, pareciera ser que el informe financiero estaría invocando un acuerdo político para que, en el evento que se requirieran más recursos, sin establecer cuanto ni para qué fines, sea el Congreso Nacional el que asigne dicho monto, pero no con cargo al presupuesto sino con cargo a la operativa del Congreso Nacional.

Un informe de este tipo claramente no cumple el estándar de constitucionalidad descrito en la norma del artículo 67.

5.6.- Reservas de constitucionalidad

En la sesión 84 del martes 13 de Enero de la Sala del Senado, se registra la reserva de constitucionalidad hecha por el Senador Señor Hernán Laman:

El señor LARRAÍN: (...) El proyecto original del Gobierno no contenía financiamiento alguno, porque se estimaba que la iniciativa se solventaba con los ingresos del Congreso...

...Tanto es así que el propio Ejecutivo llegó a la conclusión de que debía incorporar recursos. Finalmente, el 4 de agosto del 2014 envió un oficio con un informe financiero que respaldaba el suplemento de fondos. Pero ello, únicamente para financiarlos gastos derivados de las dietas de los nuevos parlamentarios.

Es de toda lógica y de sentido común que la incorporación de 35 Diputados y 12 Senadores inevitablemente, significa un gasto mayor no solo en las dietas, sino también en las asignaciones parlamentarias...

Señora Presidenta, quiero decir que si no hubiesen sido necesarias las asignaciones parlamentarias no se habrían pedido y que si se solicitaron fue porque se estimó que eran indispensables.

Sin embargo, ahora se sostiene que no.

Aumenta el número de integrantes del Congreso en 30 por ciento -en 29,7, para ser exacto- ¿y me van a decir que funcionará con las mismas asignaciones actuales...?

¡Eso reflejaría un mal uso de los actuales recursos!

Pero como yo no creo que haya un mal uso de los recursos de hoy, debo puntualizar que lo que se está afirmando ahora es falso.

Adicionalmente, señora Presidenta, no se trata solo de un problema de las asignaciones parlamentarias: es inevitable que el funcionamiento del Congreso, tanto de la Cámara cuanto del Senado, supondrá un gasto superior, por la mayor cantidad de parlamentarios que va a haber.

En consecuencia, no cabe duda de que el suplemento fiscal hecho por el Gobierno no cubre el aumento real del gasto que va a suponer la elevación del número de parlamentarios en 30 por ciento.

Siempre dijimos que este incremento era excesivo, ente otras cosas porque no se justificaba. Tampoco se justificaban, por ¡o tanto, los mayores gastos, pues los chilenos precisan los recursos para satisfacer otras necesidades.

Señora Presidenta, la Constitución dice en el artículo 67, inciso cuarto: “No podrá el Congreso aprobar ningún nuevo gasto con cargo a los fondos de la Nación sin que se indiquen, al mismo tiempo, las fuentes de recursos necesarios para atender dicho gasto.”.

La referencia que se ha hecho, fundada en el informe financiero, acredita que no hay suficientes ingresos para cubrir los mayores gastos que va a tener el Congreso producto del aumento excesivo en la cantidad de parlamentarios.

Por tales consideraciones, reitero nuestra reserva de constitucionalidad, pues aquí, muy irresponsablemente, sin respaldo financiero se está elevando en forma excesiva e innecesaria la cantidad de parlamentarios.

Además, los requirentes hacen presente al Excelentísimo Tribunal Constitucional que en las páginas 22 y siguientes del informe de la Comisión de Hacienda de fecha 12 de enero de 2015 consta la reserva de constitucionalidad del Senador Señor Juan Antonio Coloma.

Puesto en votación el inciso primero del artículo 5°, el Honorable Senador señor Coloma manifestó que la disposición le parece inconstitucional y efectuó reserva de constitucionalidad en consideración a que vulnera el artículo 67 de la Constitución Política de la República, debido a que el Congreso no puede aprobar ningún nuevo gasto con cargo a los fondos de la Nación sin que se indiquen, al mismo tiempo, las fuentes de recursos necesarios para atender dicho gasto.

Agregó que la Comisión de Hacienda debe ser rigurosa en exigir que los proyectos de ley que implican nuevos gastos fiscales cuenten con el debido financiamiento.

Argumentar que un aumento de 120 a 155 diputados no generará ningún gasto que no sea el pago de más dietas, no le parece correcto, señaló.

Además, que el informe financiero haga referencia a que no se Incurrirá en un mayor gasto fiscal en virtud de “un acuerdo político” le parece preocupante. Manifestó no conocer el referido acuerdo y criticó que el mismo pueda formar parte de un instrumento técnico del Estado como es un informe financiero. Adicionalmente, observó que debe considerarse que el supuesto acuerdo político no ha sido suscrito por los parlamentarios de oposición.

Reiteró su apreciación de que también se vulnera la ley orgánica del Congreso, dado que no se fija el gasto total que implica el proyecto de ley y no se indica cómo se financiará.

5.7.- Petición concreta al excelentísimo Tribunal Constitucional

De acuerdo a lo que se ha expresado es que los requirentes consideran que este proyecto, en cuanto a que reforma los artículo 179 y 180 (números 8) y 10) del artículo primero del boletín 9326-07) de la ley 18.700 en relación al aumento del número de parlamentarios, adolece de un vicio de inconstitucionalidad formal al no indicarse con presión “las fuentes de recursos necesarios para atender dicho gasto", en lo referido a las asignaciones parlamentarias. Es por esto que se solicita se pronuncie sobre la constitucionalidad de dichos numerales en relación al artículo 67 de la Constitución Política de la República.

POR TANTO.

Con el mérito de lo expuesto, así como en virtud de las disposiciones constitucionales citadas, especialmente lo dispuesto en el artículo 93 N.° 3 e inciso cuarto de dicho artículo de la Constitución Política y de acuerdo a lo indicado en los artículos 38 y siguientes de la Ley N.° 17.997 Orgánica Constitucional del Tribunal Constitucional del 19 de Mayo de 1981,

A V.E. SOLICITAMOS, se sirva tener por interpuesto el presente requerimiento, darle curso y, en definitiva, acogerlo íntegramente, y:

1. Declare inconstitucional y suprima del texto establecido en el numeral 8) del artículo 1° que establece un nuevo artículo 179 que se incorpora a la ley 18,700 la expresión “que elegirá n diputados" en todas las veces que se menciona para cada uno de los 28 distritos que se detallan. Ello por estar en infracción en relación a los artículos 15 y 19 N°2 de la Constitución política de la República

2. Declare inconstitucional y suprima el nuevo artículo 25 transitorio que se incorpora a la ley 18.700 en virtud del número 14 del artículo 1° del proyecto, ello por estar en infracción en relación al artículo 15 y 19 N°2 de la Constitución Política.

3. Declare inconstitucional y suprima la letra b) del texto de del inciso primero del nuevo artículo 179 bis que se incorpora a la ley 18.700 en virtud del numeral 9) del proyecto de ley. Ello por estar en infracción en relación a los artículo 15 y 19 N° 2 de la Carta fundamental.

4. Declare la inconstitucionalidad y suprima la letra b) del número 1) del artículo 1° del proyecto de ley y del numeral 3) del artículo 4° del proyecto de ley por entrar en flagrante contradicción con las normas establecidas en el artículo 19 números 2°, 15° y 26 de la carta fundamental.

5. Declare inconstitucional y suprima del texto de proyecto de ley, el N° 2 del artículo 3 del Proyecto de ley que modifica el artículo 6 de la ley N 18.603 de Partidos Políticos por estar en contravenir los artículos 15, 18 y 19 N° 2 de la Constitución Política.

6. Se pronuncie sobre la constitucionalidad de los numerales 8) y 10) del número 1° del proyecto de ley en relación al artículo 67 de la Constitución Política de la República en cuanto a sí se indican o no en la tramitación del proyecto las fuentes de recursos necesarios para atender dicho gasto", en lo referido a las asignaciones parlamentarias.

PRIMER OTROSÍ: Rogamos a V.E. tener por acompañados los siguientes documentos:

a) Oficio de Ley N° 11.685, que da cuenta del texto, remitido a S.E. La Presidenta de la República de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 73 de la Constitución Política de la República, del proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional, correspondiente al boletín N° 9326-07.

b) Informes Financieros Números 41, 67 y 69 de la Dirección de Presupuestos del Ministerio de Hacienda presentados en el primer trámite constitucional.

c) Informe de la Comisión de Hacienda de fecha 12 de enero de 2015

d) Diario de sesiones del Senado, sesión 84° martes 13 de enero de 2015.

Segundo informe de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia del Senado de fecha 05 de enero de 2015.

SEGUNDO OTROSÍ; Sírvase V.E. tener presente que este requerimiento lo hacemos habiendo cumplido los requisitos que, al efecto, exige la Carta Fundamental y la Ley Orgánica Constitucional respectiva y que V.E. ha precisado en diversas sentencias, esto es que:

a) Se ha suscitado una cuestión de constitucionalidad, es decir, un desacuerdo, una discrepancia sobre la preceptiva constitucional, en el seno del Poder Legislativo. Las normas constitucionales respecto de las cuales hay discrepancia son artículos 15, 18, 19 N°2, 19 N° 15, 19 N° 26 y 67 de la Constitución Política de la República.

b) Dicha discrepancia se ha producido respecto de los de los artículos 1 número 3) letra b) (referido al artículo 3 bis de la ley 18.700); número 8) (referido al artículo 179 de la Ley 18.700); número 9) (referido al nuevo artículo 179 bis de la ley 18.700); número 14) (en cuanto al nuevo artículo 25° transitorio de la ley 18.700); artículo 3 número 2) (referido al artículo 6° de la ley 18.603), y el artículo 4° número 3) (referido al nuevo artículo tercero transitorio de la ley 20.640)

c) Se trata de discrepancias precisas y concretas.

d) La cuestión de constitucionalidad se ha suscitado durante el transcurso de la discusión del proyecto de ley en las Salas de la Cámara de Diputados y el Senado.

e) Que el proyecto de ley se encuentra despachado del Congreso Nacional con fecha 20 de enero de 2015.

f) Que acompañamos al final de este escrito la nómina de los Senadores firmantes del presente requerimiento, con certificado de la Secretaría del Honorable Senado sobre el hecho de encontramos en ejercicio y de constituir la proporción de diputados que exige la Constitución para presentar este requerimiento. Asimismo, hacemos presente que el Secretario del Honorable Senado ha procedido a la autorización de nuestras firmas.

TERCER OTROSÍ: Hacemos presente a V.E. que solicitamos nos sea concedida la posibilidad de alegar dada la innegable trascendencia de la materia sometida a la consideración del Excelentísimo Tribunal Constitucional

CUARTO OTROSÍ: Para todos los efectos de la tramitación de este requerimiento designamos como nuestro representante al Honorable Senador Señor Hernán Larraín Fernández, y patrocinio y poder al abogado Gustavo Rosende Salazar, abogado habilitado para el ejercicio de la profesión, ambos domiciliados para estos efectos en Capullo 2240, comuna de Providencia, para que por separado indistintamente nos representen.

[1] La cifras de electores corresponden al último padrón electoral definitivo elaborado por el Servicio Electoral para las elecciones presidenciales y parlamentarias del año 2013.
[2] Las cifras corresponden al último Censo Oficial de población del año 2002.
[3] Boletín N° 9326-07.
[4] STC Rol N° 1254-08 de 15 de octubre de 2008.
[5] STC Rol N° 755-07 de 31 de marzo de 2008.
[6] STC Rol N° 755-07 de 31 de marzo de 2008.
[7] STC Rol N° 1469-09 de 4 de noviembre de 2009.
[8] STC Rol N° 807-07 de 4 de octubre de 2007.
[9] STC Rol N° 811-07 de 31 de enero de 2008.
[10] Actas Comisión Constityuente 1925. P. 511.
[11] En igual sentido STC 242/1996 y Jorge Precht. Interpretación del Artículo 64 inciso 4 de la Constitución En Revista de Derecho Vol. I N° 1 diciembre 1990 pp 55-68. Este último tiene un completo recuento histórico del origen de la norma.
[12] José Luis Cea. Derecho Constitucional Chileno. Tomo III. P. 461.
[13] En Alan Bronfman. El Mensaje y el Fundamento de la Moción. Capítulo V. En Oeickers. La Técnica Legislativa ante la Elaboración de la Ley Osvaldo Oeickers Alan Bronfman MirkoSkarica Eduardo Aldunate Patricio Cartagena Alvaro Vidal. Centro de Estudios y Asistencia Legislativa. UCV. 1998. P. 120.

4.4. Oficio del Tribunal Constitucional

Sentencia de Requerimiento de Inconstitucionalidad. Fecha 30 de marzo, 2015. Oficio en Sesión 8. Legislatura 363.

Santiago, treinta de marzo de dos mil quince.

VISTOS:

Con fecha 24 de enero de 2015, a fojas 1, doce honorables señores Senadores de la República, siete pertenecientes al partido Unión Demócrata Independiente y cinco al partido Renovación Nacional, quienes designan para efectos de la tramitación de su presentación al Senador señor Hernán Larraín Fernández y acreditan constituir más de la cuarta parte de los miembros en ejercicio del Senado, de conformidad a lo dispuesto en el artículo 93, N° 3, de la Constitución Política de la República, deducen requerimiento de inconstitucionalidad respecto del proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por un sistema electoral de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representación del Congreso Nacional (Boletín N° 9326-07), y, en concreto, respecto de las normas del proyecto que se indicarán.

El Pleno de esta Magistratura Constitucional, por resolución de 5 de marzo de 2015 –a fojas 318-, admitió a tramitación el requerimiento y, por resolución de 10 de marzo del mismo año –a fojas 323-, lo declaró admisible y ordenó ponerlo en conocimiento de la señora Presidenta de la República, del Senado y de la Cámara de Diputados, para que, en su calidad de órganos constitucionales interesados, dentro del plazo de cinco días, formularan las observaciones y acompañaran los antecedentes que estimaran pertinentes sobre la materia.

Al efecto, con fecha 15 de marzo de 2015, a fojas 334, la señora Presidenta de la República, su Excelencia doña Michelle Bachelet Jeria, por presentación suscrita igualmente por el Ministro del Interior y Seguridad Pública y por la Ministra Secretaria General de la Presidencia, formula dentro de plazo sus observaciones, instando por el total rechazo del requerimiento, por encontrarse todas las disposiciones impugnadas del proyecto debidamente ajustadas a la Carta Fundamental.

En cuanto al fondo del asunto de inconstitucionalidad sometido al conocimiento y decisión de este Tribunal Constitucional, éste puede dividirse en cuatro capítulos, en que se consignarán las normas concretas del proyecto que se impugnan; la forma en que los señores Senadores requirentes estiman se producirían las infracciones a la Carta Fundamental que denuncian y, respecto de cada cuestionamiento, las argumentaciones vertidas por la señora Presidenta de la República para preconizar su rechazo.

- Capítulo Primero: “La igualdad del voto”.

Los requirentes solicitan que este Tribunal declare inconstitucionales y suprima el número 8), el número 14) y el número 9), en las partes que se indicarán, del artículo 1° del proyecto, disposiciones que, respectivamente, sustituyen el artículo 179 e incorporan los nuevos artículos 25 transitorio y 179 bis en la Ley N° 18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, en los siguientes términos:

“Artículo 1°.- Modifícase la Ley N° 18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, de la manera que a continuación se señala:

(…) 8) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er. distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos, que elegirá 3 diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte, que elegirá 3 diputados.

3er. distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal, que elegirá 5 diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen, que elegirá 5 diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela, que elegirá 7 diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué, que elegirá 8 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca, que elegirá 8 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú, que elegirá 8 diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia, que elegirá 7 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín y La Granja, que elegirá 8 diputados.

11er. distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén, que elegirá 6 diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana, que elegirá 7 diputados.

13er. distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo, que elegirá 5 diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué, San Pedro y Padre Hurtado, que elegirá 6 diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa, que elegirá 5 diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones, que elegirá 4 diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael, que elegirá 7 diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco, que elegirá 4 diputados.

19° distrito, constituido por las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ránquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel, que elegirá 5 diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana, que elegirá 8 diputados.

21er. distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja, que elegirá 5 diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino, que elegirá 4 diputados.

23er. distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén, que elegirá 7 diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco, que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos, que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena, que elegirá 5 diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O"Higgins y Tortel, que elegirá 3 diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica,que elegirá 3 diputados.

El número de diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis.”

9) Agrégase el siguiente artículo 179 bis:

“Artículo 179 bis.- Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con el siguiente procedimiento:

a) Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consistirá en distribuir a prorrata los cargos entre los distritos electorales, de acuerdo a la fórmula dispuesta en el artículo 109 bis de esta ley.

b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 8 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al de la realización del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con aquel en que se celebran elecciones de diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.

d) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes.

Dentro de los cinco días siguientes a la publicación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral aplicó las letras a) y b) de este artículo.

Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de febrero del año de que se trate.”

(…)14) Agrégase el siguiente artículo 25 transitorio:

“Artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.”.

Sostienen los señores parlamentarios requirentes que el nuevo artículo 179 establece la conformación de los nuevos distritos para la elección de diputados -que por disposición del artículo 178 pasan de 60 a 28- y el número de diputados que se elegirá en cada uno de ellos, que fluctúa entre 3 y 8, alcanzando un total de 155 escaños.

Esta disposición, agregan, opera en forma transitoria, para las elecciones de los años 2017 y 2021; toda vez que el nuevo artículo 179 bis dispone que corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los escaños de diputados entre los distritos aludidos, consignando un procedimiento al efecto, al tiempo que el nuevo artículo 25 transitorio hace operativa esta última norma a partir del año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.

Señalan que el nuevo artículo 179 infringe el artículo 15 de la Constitución, que consagra el sufragio igualitario en las votaciones populares, toda vez que el legislador orgánico constitucional, al aumentar el número de diputados que se elegirán por distrito, no respetó este principio de la igualdad del voto, advirtiéndose significativas diferencias en el número de electores por diputado. Añaden que estas distinciones son arbitrarias, ya que, sin perjuicio de que puedan existir diferencias que alteren la regla general de determinación del número de escaños de acuerdo al número de habitantes, éstas deben estar razonablemente fundadas, por ejemplo, por causas geopolíticas o de integración nacional, lo que no concurre en la especie, en que no existe una relación debidamente proporcional entre el número de electores y, por tanto, de votos que se requiere para elegir un diputado, lo que determina en definitiva que el sufragio de algunas personas valga más que el de otras.

Lo expuesto, importa, además, la infracción al principio de igualdad ante la ley, asegurado en el artículo 19, N° 2°, constitucional; y del derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional, establecido en el artículo 1°, inciso quinto, de la Carta Fundamental.

En relación con lo expuesto, también es inconstitucional el nuevo artículo 25 transitorio, pues esta norma hace operable la distribución transitoria del artículo 179, consignando que la facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral de asignar los escaños por distrito -de acuerdo al artículo 179 bis- comenzará a partir del año 2024.

Por tanto, solicitan se declaren inconstitucionales y se supriman del proyecto la expresión "que elegirá N diputados" todas las veces en que aparece en el artículo 179, así como el artículo 25 transitorio en su totalidad.

A consecuencia de esta declaración, señalan, podría operar desde ya el artículo 179 bis, esto es, la fórmula permanente de asignación proporcional de escaños por distrito a prorrata del número de habitantes, por parte del Consejo Directivo del Servicio Electoral, cada diez años, respetándose así la igualdad del voto.

Por otra parte, respecto del artículo 179 bis, los actores solicitan se declare inconstitucional únicamente su letra b), que, en cuanto al procedimiento que debe seguir el Consejo Directivo del Servicio Electoral para la asignación de escaños, dispone que ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 8 diputados.

Señalan que la letra a) del mismo artículo dispone la distribución de escaños por distrito en forma proporcional y a prorrata del número de habitantes, según los datos del último censo, y de acuerdo al sistema electoral de coeficiente D’Hondt (dispuesto en el nuevo artículo 109 bis); sistema que procura la igualdad del voto, mediante la aplicación de una fórmula matemática, que no puede quedar sujeta a la discrecionalidad del Consejo Directivo del Servicio Electoral.

En consecuencia, estiman que la letra b) del artículo 179 bis, al establecer mínimos y máximos de diputados a elegir por distrito, anula el método D’Hondt, introduciendo discrecionalidad en la repartición de los escaños e infringiendo, asimismo, la igualdad del voto y la igualdad ante la ley (artículos 15 y 19, N° 2°, de la Constitución), por lo que piden se declare inconstitucional y se suprima del texto del proyecto la aludida letra b).

En su escrito de observaciones de fojas 334 y siguientes, la señora Presidenta de la República, a título de exordio, se refiere a los diferentes sistemas electorales en el derecho comparado y a la justificación de sustituir el sistema electoral binominal por uno proporcional; postula como cuestión previa el rechazo del requerimiento por carecer de fundamento razonable y por plantear cuestiones de mérito legislativo, respecto de las cuales no procede pronunciamiento de esta Magistratura, y resalta que la Constitución no consagra un sistema electoral determinado, sino que encarga ello al legislador orgánico constitucional.

A continuación, entrando al fondo del asunto, el gobierno señala que los referidos artículos 179, 25 transitorio y 179 bis, letra b), que se incorporan a la Ley N° 18.700, no vulneran el principio de igualdad del voto ni la igualdad ante la ley, por lo que debe rechazarse en todas sus partes este primer capítulo de inconstitucionalidad.

Sostiene que estas normas del proyecto no son arbitrarias, sino que obedecen a criterios objetivos y razonables, ajustados a los artículos 15 y 19, N° 2°, de la Constitución.

En este sentido indica que el carácter igualitario del sufragio implica que, en un gobierno democrático, el voto debe ser universal, sin excluir a nadie, y que los distritos electorales se configuren de forma tal que se cumpla en el mayor grado posible con dar el mismo peso a cada voto, esto es, con el ideal de que cada distrito contemple el mismo número de habitantes, garantizándose así una efectiva representatividad. Sin embargo, el principio de igualdad del voto admite atenuaciones, pudiendo consignarse ciertas asimetrías entre el número de habitantes por escaño en algunos territorios electorales, en la medida que ello obedezca, como ocurre en la especie, a criterios razonables, justificados y proporcionados, lo cual, además, es perfectamente acorde con el principio democrático. En consecuencia, por razones de equidad y justicia, pueden generarse estas asimetrías, entre otros que indica, por motivos geográficos, de descentralización y de regionalización.

En consecuencia, el proyecto, al contrario de lo que postulan los requirentes, maximiza el principio de igualdad del voto, reduciendo la desigualdad del sistema binominal actual. En efecto, el nuevo artículo 179, al distribuir el número de diputados a elegir por cada distrito, considera criterios razonables y concordantes con la geografía del país.

Es por ello, agrega, que se redujo el número de distritos y se aumentó el número de escaños en cada uno de ellos, con el fin de que puedan ser representados en la Cámara de Diputados aquellos territorios que no lo estaban siendo debidamente, y sin que ello obedezca a razones de conveniencia política, sino que a evitar la discriminación de algunas regiones por sobre otras. Así, por ejemplo, se asegura que las regiones extremas del país, por razones geopolíticas y de integración nacional, no reduzcan el número de diputados a elegir, garantizándose una representación más cabal de las mayorías y minorías en la Cámara de Diputados.

Agrega que el redistritaje establecido por el artículo 179 mejora la relación entre el porcentaje de escaños asignados a cada distrito y el porcentaje de población, favoreciendo una representación más proporcional y reduciendo la sobrerepresentación y sub-representación propias de las distorsiones que implicaba el sistema binominal.

Con todo, esta distribución opera sólo de manera transitoria para las elecciones de los años 2017 y 2021, conforme dispone el artículo 25 transitorio.

Por otro lado, la señora Presidenta de la República señala que el artículo 179 bis, letra b), también se encuentra ajustado a la Constitución, pues no confiere atribuciones discrecionales al Consejo Directivo del Servicio Electoral para actualizar la asignación de los escaños, sino que aquél debe regirse por los parámetros objetivos y proporcionales del método D"Hondt.

Concluye que al establecer la norma cuestionada que el Consejo Directivo del Servicio Electoral no podrá asignar más de 8 ni menos de 3 escaños por distrito, no hace sino garantizar que todos los sectores de la población puedan verse representados en el Parlamento, especialmente los habitantes de las zonas extremas a las que se les asegura un mínimo de 3 escaños. Lo anterior obedece a razones justificadas y no arbitrarias, y no distorsiona el método D"Hondt como pretenden los actores.

- Capítulo Segundo: “Las cuotas de género”.

Los señores Senadores requirentes solicitan se declaren inconstitucionales y se supriman la letra b) del número 1) del artículo 1° y el número 3) del artículo 4° del proyecto, que, respectivamente, intercalan un nuevo inciso quinto al artículo 3° bis de la Ley N° 18.700 e incorporan un nuevo artículo tercero transitorio a la Ley N° 20.640, sobre sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, en los siguientes términos:

“Artículo 1°.- Modifícase la Ley N° 18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, de la manera que a continuación se señala:

1) En el artículo 3° bis:

a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, pasando el actual inciso segundo a ser tercero:

“En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.”.

b) Intercálase el siguiente inciso quinto, nuevo, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.”.

c) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “que hubieren constituido un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

d) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “Se podrá dejar sin efecto un pacto electoral”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

Artículo 4°.- Modifícase la ley N° 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, en los siguientes términos:

(…) 3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- El partido político que decidiere someterse al sistema de elecciones primarias contemplado en los artículos 3º y siguientes de la presente ley para los períodos electorales parlamentarios de los años 2017, 2021, 2025 y 2029 sólo podrá someter a dicho procedimiento hasta el cuarenta por ciento del total de candidaturas a diputado o senador que pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral.”.

Señalan los senadores requirentes que estas disposiciones del proyecto incorporan una “cuota de género”, en orden a que en las declaraciones de candidaturas para diputados y senadores, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres puedan superar el 60% del total; y a que el partido político que opte por el sistema de elecciones primarias para los períodos 2017, 2021, 2025 y 2029, no podrá someter a dicho procedimiento más del 40% del total de candidaturas a diputado o senador que pueda declarar para la elección definitiva.

Aclaran los requirentes que no cuestionan per se el mecanismo de cuotas de género, pero que la forma en que ello se materializa en el proyecto infringe el artículo 19, N° 15°, de la Constitución que, en el marco de la libertad de asociación y del estatuto constitucional de los partidos políticos, estableció en su inciso quinto un sistema de elecciones primarias.

Las normas cuestionadas implican que por ley se impide a los partidos políticos someterse al mecanismo de elecciones primarias, no obstante que éstas fueron concebidas por la Constitución como voluntarias, libres y vinculantes; afectando así la autonomía de los partidos políticos y su derecho a nominar a sus candidatos a parlamentarios por la vía de las elecciones primarias. Añaden que el uso de este sistema de elecciones primarias corresponde a una decisión libre y autónoma de los partidos que no es constitucionalmente susceptible de seccionamientos porcentuales como pretende el proyecto.

Además, estiman que se afectan de modo arbitrario los derechos de los afiliados al partido respectivo, o de los ciudadanos con derecho a sufragio, según el caso, que sólo podrán elegir parte de sus candidatos a través de elecciones primarias.

Estas disposiciones del proyecto infringen, asimismo, la igualdad ante la ley y el libre ejercicio de los derechos que la misma Constitución establece, conculcando su artículo 19, N°s 2° y 26°.

La señora Presidenta de la República solicita, igualmente, el rechazo de esta impugnación.

Sostiene el Ejecutivo que estas disposiciones buscan asegurar la participación de una cuota de 40% de mujeres como candidatas a cargos parlamentarios, en forma congruente con el artículo 1°, inciso cuarto, de la Constitución, conforme al cual el Estado debe contribuir a generar condiciones sociales que faciliten el mayor desarrollo de sus integrantes, en términos de igualdad. Así, las normas en comento buscan superar la infrarepresentación de las mujeres en la política, y constituyen una acción afirmativa que remedia la desigual condición en que se encuentran actualmente, compensando las barreras estructurales que afectan a las mujeres en los procesos electorales.

Agrega que estas normas no fijan nuevas condiciones o requisitos para ser candidato a diputado o senador, por lo que se encuentran conformes con la Constitución. Tampoco importan una discriminación arbitraria respecto de los hombres, por lo que no se vulnera la igualdad ante la ley, y responden al cumplimiento de compromisos internacionales suscritos por Chile. Al efecto se cita, entre otras, la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, que en su artículo 4° consagra medidas especiales temporales para lograr la igualdad de facto entre hombres y mujeres.

Por otra parte, señala el Gobierno que la Constitución establece las elecciones primarias como voluntarias y vinculantes, encargando al legislador orgánico constitucional su regulación, pudiendo así la ley incorporar esta exigencia de cuotas en el mediano plazo, lo que, en todo caso, envuelve una cuestión de mérito legislativo y no de constitucionalidad.

- Capítulo Tercero: “La igualdad entre los candidatos pertenecientes a partidos políticos y los candidatos independientes”.

Los señores parlamentarios requieren se declare inconstitucional y se suprima la letra a) del número 2) del artículo 3° del proyecto, que modifica el inciso primero del artículo 6° de la Ley N° 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos, en los siguientes términos:

Artículo 3°.- Modifícase la ley N° 18.603, orgánica constitucional de Partidos Políticos, de la manera que a continuación se señala:

(…) 2) En el artículo 6°:

a) Sustitúyese en el inciso primero la cifra “0,5” por el guarismo “0,25”.

b) Agrégase en el inciso segundo, a continuación del punto aparte, que ha pasado a ser punto seguido, la siguiente oración: “Los notarios no podrán negarse a recibir la declaración a que hace referencia este artículo y no podrán cobrar por este servicio.”.

Señalan los actores que esta norma rebaja a un "0,25" por ciento del electorado que hubiere votado en la última elección de Diputados, el número de ciudadanos con derecho a sufragio que se requiere para constituir un partido político en una región, modificación que sin embargo no se aplica a las candidaturas independientes, que requieren conseguir las firmas del 0,5% del mismo universo electoral.

Como antecedente, agregan que el Senado rechazó una norma del proyecto que modificaba el artículo 10 de la Ley N° 18.700, en orden a que las candidaturas independientes a Diputados o Senadores requerirían, igualmente, del patrocinio de un 0,25 por ciento.

Luego, se configura una ventaja para la presentación de candidaturas a diputado o senador cuando el territorio electoral de éstos coincida con el de una región, por la vía de conformar un nuevo partido político en los territorios respectivos, para lo cual se requerirá un patrocinio inferior que para presentarse como candidato independiente.

Estiman los actores que esta disposición del proyecto vulnera la plena igualdad entre los independientes y los miembros de los partidos políticos en la presentación de sus candidaturas y en la participación en los procesos electorales, garantizada por el artículo 18 de la Constitución; así como la igualdad ante la ley, asegurada por el artículo 19, N° 2°, de la Carta Fundamental y el artículo 15 de la misma, que se limitan a enunciar.

La señora Presidenta de la República, en su escrito de observaciones, insta por el rechazo de esta impugnación, en atención a que no se verifica la infracción a la igualdad entre los independientes y los miembros de partidos políticos denunciada.

Señala que el hecho de que se rebaje el porcentaje del padrón necesario para constituir un partido político y no se rebaje igualmente para las candidaturas independientes, no importa una vulneración a los artículos 18 y 19, N° 2°, de la Constitución pues, como lo ha señalado esta Magistratura, la igualdad entre candidatos independientes y candidatos miembros de partidos políticos debe aplicarse en el contexto de las obvias distinciones que se dan por el solo hecho de tratarse de unos y otros, pudiendo el legislador establecer diferencias en la medida que no sean arbitrarias, como ocurre en la especie, en que se trata de una medida que busca fortalecer la formación de partidos políticos, dentro de la autonomía que la Constitución entrega al legislador orgánico constitucional en el mismo artículo 18.

La norma impugnada no vulnera la igualdad entre candidatos independientes y de partidos políticos, pues se refiere a la constitución de los partidos políticos y no al estatuto electoral de ambos tipos de candidatos. Así, no se afecta la igualdad en la presentación de candidaturas ni en la participación en los procesos electorales, que es lo garantizado por el artículo 18 constitucional.

Además, como señalan los actores, el Senado rechazó la modificación al artículo 10 de la Ley N° 18.700, que disminuía en el mismo porcentaje el patrocinio requerido para las candidaturas independientes. Lo anterior obedece a cuestiones de mérito legislativo que escapan a la competencia del Tribunal Constitucional. En fin, señala el Gobierno que los requirentes están impugnando el rechazo de una modificación legal y, en consecuencia, una norma legal vigente, lo que es improcedente.

- Capítulo Cuarto: “El financiamiento de las asignaciones parlamentarias”.

Por último, los señores Senadores requirentes solicitan a este Tribunal que declare la inconstitucionalidad formal de los numerales 8) y 10) del artículo 1° del proyecto de ley, esto es, los preceptos que sustituyen los artículos 179 y 180 de la Ley N° 18.700, en relación con el aumento del número de Diputados a 155 y de Senadores a 50, por no indicarse con precisión “las fuentes de recursos necesarios para atender dicho gasto”, en lo referido a las asignaciones parlamentarias, infringiéndose consecuencialmente el artículo 67, incisos tercero y cuarto, de la Constitución.

Señalan los actores que el proyecto aumenta en 35 el número de diputados y en 12 el de senadores, lo cual implica un aumento del gasto fiscal, al tiempo que el artículo 67 constitucional exige que cualquier nuevo gasto con cargo a los fondos de la Nación esté debidamente financiado, debiendo indicarse por el Presidente de la República la fuente de los recursos, como requisito para su posterior aprobación por el Congreso Nacional.

En la especie, sostienen, los informes financieros presentados durante la tramitación del proyecto no indican el monto en que es necesario aumentar los recursos asociados a la aprobación del proyecto, para el financiamiento de las asignaciones parlamentarias, acarreando el vicio de inconstitucionalidad formal denunciado.

La señora Presidenta de la República solicita se rechace esta alegación de inconstitucionalidad formal pues, sin perjuicio de que nada dicen los actores respecto del artículo 5° del proyecto, que establece el financiamiento con cargo a la partida del Congreso Nacional de la Ley de Presupuesto, la administración financiera y presupuestaria del Estado corresponde en forma exclusiva al Presidente de la República, pudiendo el Congreso solo aceptar, disminuir o rechazar los gastos que aquel proponga. En consecuencia, el Tribunal Constitucional no puede tener injerencia alguna en el financiamiento de los proyectos de ley, más allá de verificar si existen o no los respectivos informes financieros.

No obstante, agrega que no se infringe el artículo 67 constitucional, toda vez que se emitieron cuatro informes financieros que fueron debidamente aprobados por las comisiones de Hacienda de las cámaras durante la tramitación del proyecto. En ellos se indicó que el aumento del número de diputados no constituirá un mayor gasto fiscal, sino un “mayor desembolso por concepto de dieta parlamentaria”, que se podía financiar con los recursos que anualmente se consultan en la ley de presupuesto.

Añade el Ejecutivo que este Tribunal Constitucional no es competente para resolver cuestiones financieras, relativas a discrepancias sobre los montos involucrados en una iniciativa legal, cuestión que es de naturaleza económica y política, mas no un asunto constitucional; concluyendo, en todo caso, que las nuevas asignaciones parlamentarias no significan que exista un mayor gasto fiscal, pues deberán adecuarse al presupuesto anual del Congreso Nacional.

En cuanto a otras cuestiones relacionadas con el presente proceso constitucional, cabe consignar que en el requerimiento de fojas 1 y siguientes se alude a las reservas de constitucionalidad que fueron planteadas durante la tramitación del proyecto respecto de las normas del mismo que se impugnan, salvo respecto a la modificación del artículo 6° de la Ley Orgánica Constitucional de Partidos Políticos. Al efecto, se cumple también con acompañar las actas de las sesiones de sala o comisión en las que se formularon dichas reservas, parte de las cuales fueron agregadas a un cuaderno separado, conforme a lo resuelto a fojas 311.

Por otra parte, mediante resolución de 10 de marzo de 2015, a fojas 325, el Pleno del Tribunal ordenó abrir cuaderno especial para agregar las presentaciones recibidas con ocasión de este proceso y convocó a audiencia pública para oír a las instituciones y organizaciones representativas de los intereses involucrados en el asunto jurídico-constitucional materia de autos, verificándose dicha audiencia el día 18 de marzo de 2015, en que fueron oídos el honorable Diputado señor Pedro Browne, por el Movimiento Político “Amplitud”; el señor Máximo Pavez Cantillano, por la Fundación Jaime Guzmán; el señor Roberto Cárcamo Tapia, por la Corporación Fundamental; la señora Camila Maturana Kesten, por la Corporación Humanas, y la señora Javiera Arce Riffo, por la Fundación Chile 21.

El presente proceso constitucional quedó en estado de relación con fecha 16 de marzo de 2015, y con fecha 19 de marzo de 2015, conforme se certifica a fojas 508, se verificó la vista de la causa, oyéndose la relación y los alegatos de los abogados Ángela Vivanco Martínez, por los honorables señores Senadores requirentes, y Patricio Zapata Larraín, por su Excelencia la señora Presidenta de la República.

Con la misma fecha 19 de marzo de 2015, la presente causa quedó en estado de acuerdo, y el Pleno del Tribunal, en ejercicio de la facultad que le confiere el artículo 93, inciso quinto, de la Constitución, resolvió prorrogar por diez días el plazo para dictar sentencia.

Y CONSIDERANDO:

Capítulo Primero: “La igualdad del voto”.

I.- SISTEMA ELECTORAL Y CONSTITUCIÓN.

PRIMERO.- Que la construcción de un sistema electoral propiamente tal requiere la adopción de un conjunto de decisiones acerca de la modalidad jurídica del voto, del factor territorial que demarca distritos y circunscripciones senatoriales, el factor de conversión de votos a escaños (o sistema electoral estricto), la actualización demográfica y los objetivos del sistema en su conjunto, orientados a producir resultados en una gradiente que va desde la máxima gobernabilidad con mínima representación a la máxima representatividad con mínimos de eficacia gubernativa (NOHLEN, Dieter (1995): Sistemas electorales y partidos políticos, reimpresión, Fondo de Cultura Económica, UNAM, México, y VALLÉS, Josep y BOSCH, Agusti (1997), Sistemas electorales y gobierno representativo, Ariel, Barcelona);

SEGUNDO.- Que esta Magistratura sostuvo en 1989 que el legislador tiene amplia libertad de configuración o margen de discrecionalidad para la determinación de los distritos y del sistema electoral en general. A saber, “la Constitución dejó, así, amplia facultad al legislador para determinar los distritos electorales. Ni siquiera consideró conveniente fijarle criterios o pautas, de modo que el legislador ha tenido libertad para considerar factores de carácter geográfico, territorial, poblacional, socioeconómicos, estratégicos, etc.” (STC Rol 67, considerando 10°);

TERCERO.- Que, sin embargo, en el examen del control preventivo del proyecto de ley sobre elección democrática de los Consejos Regionales (STC Rol 2.466), esta Magistratura, por la vía de prevenciones, manifestaba que tal libertad tiene matices puesto que debe vincularse a criterios constitucionales sustanciales que enmarcan decisiones legislativas no arbitrarias;

CUARTO.- Que, asimismo, el propio constituyente ha adoptado nuevas decisiones reseñadas por las leyes de reforma constitucional N°s 20.050, 20.337 y 20.725 en los años 2005, 2009 y 2014, respectivamente, las que modifican diversos aspectos atingentes a la cuestión electoral. Todo lo anterior nos lleva a preguntarnos acerca del estado actual de las reglas del sistema electoral, que son delimitadas y condicionadas por la Constitución. La adecuada determinación de estos criterios permitirá examinar, con posterioridad, el cuestionamiento planteado al proyecto de ley que “sustituye el sistema electoral binominal por un sistema electoral de carácter proporcional inclusivo y [que] fortalece la representación del Congreso Nacional (Boletín N° 9.326-07)”;

QUINTO.- Que, por lo anterior, cabe identificar dos tipos de normas en la Constitución. Primero, aquellas que regulan directamente cuestiones electorales, tales como los artículos 13, 14, 15, 16, 17, 18, 19, N° 15°, 47, 48, 49, 50 y 51. En segundo lugar, están las reglas que inciden en las cuestiones electorales, tales como los artículos 1°, 4°, 5°, 19, N° 2°, 113, etc. Las normas regulatorias enmarcan directamente al legislador para los efectos de su desarrollo y concreción. En cambio, las normas incidentales operan como principios orientadores en la adopción de tales decisiones normativas;

SEXTO.- Que, sin embargo, un examen pormenorizado de tales normas constitucionales excede el propósito natural de esta sentencia; por lo mismo, adoptaremos como guía el estudio de los elementos integrantes del sistema electoral y veremos cómo se produce el condicionamiento constitucional de la libertad del legislador para definir el mismo;

SÉPTIMO.- Que, en lo relativo a los objetivos de un sistema electoral, esto es, a las finalidades buscadas por el legislador en la regulación del sistema político, la Constitución no contiene ninguna referencia. No es posible deducir, directa o indirectamente, de alguna norma un criterio que apunte a dotar al sistema político democrático de mayor representatividad o, por el contrario, que sacrifique grados de inclusión política por adoptar un criterio fuerte de gobernabilidad. Lo anterior es muy relevante porque contrasta con una regla de la Constitución de 1925 que disponía que “[E]n las elecciones de Diputados y Senadores se empleará un procedimiento que dé por resultado en la práctica una efectiva proporcionalidad en la representación de las opiniones y de los partidos políticos” (artículo 25 de la Constitución de 1925). Este criterio ya lo había indicado el Tribunal Constitucional en 1989 para identificar la libertad del legislador en esta materia (STC Rol N° 67, considerando 10°);

OCTAVO.- Que el factor territorial de los distritos y circunscripciones senatoriales sí predetermina algunas normas constitucionales que orientan la decisión del legislador orgánico constitucional. Lo primero es indicar que la Constitución preceptúa que “[L]a Cámara de Diputados está integrada por miembros elegidos en votación directa por distritos electorales. La ley orgánica constitucional respectiva determinará el número de diputados, los distritos electorales y la forma de su elección” (artículo 47 de la Constitución). Asimismo, respecto del Senado dispone que éste “se compone de miembros elegidos en votación directa por circunscripciones senatoriales, en consideración a las regiones del país, cada una de las cuales constituirá, a lo menos, una circunscripción. La ley orgánica constitucional respectiva determinará el número de Senadores, las circunscripciones senatoriales y la forma de su elección” (artículo 49 de la Constitución). Por ende, es resorte exclusivo del legislador orgánico determinar los distritos y las circunscripciones senatoriales, con la salvedad, en este último caso, de que debe hacerlo “en consideración a las regiones del país”, de tal manera que queden representadas, diríamos, “con consideración”. Adicionalmente, una norma que implica indirectamente al factor territorial es el artículo 113, inciso final, de la Constitución, que dispone que “los senadores y diputados que representen a las circunscripciones y distritos de la región podrán, cuando lo estimen conveniente, asistir a las sesiones del consejo regional y tomar parte de sus debates, sin derecho a voto”. Con ello, se deduce que los distritos deben ser configurados territorialmente al interior de una misma región;

NOVENO.- Que, en cuanto al sistema electoral en un sentido estricto, esto es, al método de conversión de votos en escaños, el constituyente le ha entregado total libertad al legislador orgánico, puesto que la “forma de su elección” es de resorte exclusivo de éste (artículos 47 y 49 de la Constitución). Adicionalmente, lo esencial es que la conversión se realice sobre la base de un número constitucionalmente indeterminado de senadores y diputados, delegando en el legislador su fijación;

DÉCIMO.- Que en lo relativo a la modalidad del voto, esto es, al ejercicio ciudadano en la materialización del derecho al sufragio, la Constitución identifica, en su artículo 15, el hecho de que “en las votaciones populares, el sufragio será personal, igualitario, secreto y voluntario”. Con ello, adopta principios y reglas que se traducen en modalidades que derivan en el sistema electoral público. Justamente, “una ley orgánica constitucional determinará su organización y funcionamiento, regulará la forma en que se realizarán los procesos electorales y plebiscitarios, en todo lo no previsto por esta Constitución y garantizará siempre la plena igualdad entre los independientes y los miembros de partidos políticos tanto en la presentación de candidaturas como en su participación en los señalados procesos (…)” (artículo 18 de la Constitución). Por tanto, las modalidades del voto tendrán un margen de expresión regulado por el legislador orgánico. Y lo anterior no es novedad para este Tribunal, puesto que, por ejemplo, le ha correspondido conocer cuestiones como la constitucionalidad del “voto asistido” para discapacitados en relación con el carácter “secreto” del sufragio (STC Rol N° 745/2007);

DECIMOPRIMERO.- Que, finalmente, en cuanto a la actualización del sistema electoral para incluir criterios demográficos que lo adecuen a los cambios poblacionales al interior de las circunscripciones o distritos, no existe ninguna norma constitucional de la cual pueda deducirse la obligación de representación conforme a unos u otros factores. Por tanto, el legislador tiene libertad para disponer dicha actualización;

II.- LOS ELEMENTOS DEL JUICIO DE IGUALDAD EN MATERIA ELECTORAL.

DECIMOSEGUNDO.- Que el requerimiento planteado por diversos senadores cuestiona ciertas dimensiones del sistema electoral propuesto, pero sin impugnarlo en su integralidad. En primer lugar, manifiesta su acuerdo con el sistema electoral aprobado en un sentido estricto, tanto respecto del número de futuros parlamentarios definido por el Congreso Nacional, como respecto de la modalidad de convertir votos en escaños, esto es, con la fórmula D’Hondt para realizar tal operación. En segundo lugar, la impugnación se refiere a la distribución territorial de escaños de diputados, que los requirentes juzgan desproporcionada y atentatoria del principio de igualdad solamente en algunos distritos que estiman arbitrarios en su configuración. Tercero, el fundamento de tal inequidad lo matizan en varios sentidos. Por una parte, entienden que en el Senado no opera el principio del voto igualitario porque éste ha de formarse “en consideración a las regiones del país”, limitando la desproporción sólo a la Cámara de Diputados. Y, adicionalmente, no aplican el principio del voto igualitario plenamente porque lo condicionan a un criterio territorial, ya que “en el proyecto de ley se hace referencia a diversas consideraciones que pueden sintetizarse en asegurar la representación e integración de las zonas de baja densidad poblacional. Pese a lo anterior, las diferencias no se circunscriben a una sobre- representación de las zonas extremas y una subrepresentación de los centros urbanos del país, sino que se producen entre regiones que no se encuentran en estas situaciones, sin que se observe un criterio razonable que justifique estas diferencias que redundan en el menoscabo del valor sustantivo del voto de los electores de determinados territorios electorales” (fs. 23 del requerimiento y expediente). Este cuestionamiento está referido al régimen transitorio diseñado por el legislador en el artículo 1°, numeral 8, del proyecto de ley. Finalmente, estas vulneraciones constitucionales alcanzarían a todos los distritos, con el objeto de que el reconocimiento de alguna de estas infracciones impondría la obligación al Tribunal Constitucional de declarar éstas “suprimiendo del texto (…) la expresión ’que elegirá n diputados´ en todas las veces que se menciona para cada uno de los 28 distritos que se detallan. Ello por estar en contradicción con los artículos 15 y 19, N° 2°, de la Constitución Política de la República” (fs. 49, parte petitoria). Ello importaría realizar un juicio interno de la proporcionalidad de los distritos y declarar la inconstitucionalidad de aquellos que tengan configuración arbitraria afectando al conjunto de todos ellos;

DECIMOTERCERO.- Que, para el evento de asumir el ejercicio de construir una comparación que revele la reprochada desproporción intolerable del sistema electoral definido en el proyecto de ley, hay dos modalidades para resolverlo. Primero, un camino es el juicio de igualdad formal que verifique la modalidad de escrutinio que le compete al Tribunal Constitucional, en el sentido de que especifique de quién es la carga de la prueba respecto de la discriminación y que especifique sobre la base de qué reglas construye la comparación para probar la desproporción acusada. Un segundo camino es el juicio sustancial resultante del ejercicio del sufragio igualitario, verificando las reglas del valor numérico que objetivan las naturales distorsiones de un sistema electoral que no toma en consideración a todo el país como una circunscripción o distrito (como sería el ejemplo de Israel);

III.- EL JUICIO DE IGUALDAD FORMAL NO ARROJA UNA DESPROPORCIÓN NO JUSTIFICADA EN ALGÚN OBJETIVO CONSTITUCIONAL.

DECIMOCUARTO.- Que cualquiera invocación relativa a la infracción al principio de igualdad importa un ejercicio formal de un test o juicio de igualdad. El primer elemento a identificar es la concurrencia de un criterio sospechoso en el término de comparación. En tal sentido, cabe recordar que las normas constitucionales que directamente regulan el sistema electoral (artículos 47 y 49 de la Constitución) no contienen un mandato específico de realización o promoción de la igualdad o proporcionalidad en la construcción del sistema electoral. La impugnación de autos se fundamenta en normas incidentales a la construcción del sistema electoral, relativas a la modalidad del voto, y que se reducen al principio del “voto igualitario” y su aplicación en el derecho a la igualdad ante la ley, especialmente en cuanto a que “ni la ley ni autoridad alguna podrán establecer diferencias arbitrarias” (inciso final del numeral 2° del artículo 19 de la Constitución). La contrastación entre la libertad de configuración del legislador respecto del sistema electoral y su supuesta contradicción con normas incidentales, los requirentes la han reafirmado como una vulneración de la dimensión sustancial del voto igualitario, esto es, que “dentro de la autonomía del legislador existan márgenes de desproporción tolerables, pero dicha desproporción debe tener un límite. ¿Cuál límite? Sin duda uno que se oponga a la arbitrariedad” (fs. 21 del requerimiento y expediente);

DECIMOQUINTO.- Que cabe preguntarse si el criterio de igualdad aplicado a reglas electorales es uno de aquellos que exige un tipo especial de examen constitucional. Como se sabe, nuestra Constitución no contiene un listado taxativo de factores que predeterminen un ejercicio especialmente cauteloso a la hora de hacer diferencias o distinciones en decisiones públicas o en leyes propiamente tales o en reglas de trato. Por tanto, esos criterios hay que encontrarlos, en conjunción con los deberes estatales de respeto y promoción reconocidos en el artículo 5°, inciso segundo, de la Constitución. Es así como el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos reconoce que es deber de los Estados respetar “los derechos reconocidos en el presente Pacto, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición social” (artículo 2° del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos). A su vez, el artículo 26 del propio Pacto reconoce a todas las personas que “son iguales ante la ley y tienen derecho sin discriminación a igual protección de la ley. A este respecto, la ley prohibirá toda discriminación y garantizará a todas las personas protección igual y efectiva contra cualquier discriminación por motivos de raza, color, sexo, idioma, religión, opiniones políticas o de cualquier índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquiera otra condición social”. Asimismo, normas similares se repiten en los artículos 1° y 24 de la Convención Americana de Derechos Humanos. En síntesis, desde la Constitución y desde el estándar propio de los tratados internacionales de los derechos humanos no existe ninguna obligación específica que cautele en contra de regulaciones electorales que manifiesten distorsiones territoriales como las alegadas en el requerimiento, salvo que ellas estuvieren construidas como una modalidad de discriminación de determinadas “opiniones políticas o de cualquier índole”. Sin embargo, ésa es una cuestión no reclamada en autos por los requirentes y respecto de la cual se planteó el desafío –por parte de la defensa del proyecto de ley- de que este sistema estaba construido sin sesgos de esa naturaleza, cuestión no refutada en el presente proceso constitucional. Por tanto, el estándar de la legislación electoral debe sortear un escrutinio simple de igualdad, apuntando a las razones que legitiman las diferencias y siendo obligación del requirente probar las diferencias arbitrarias;

DECIMOSEXTO.- Que, como paso siguiente del juicio de igualdad, es deber del requirente construir un término de comparación que demuestre la exigencia de igualdad, que construya con precisión la situación jurídica de quién se considera discriminado y que verifique los términos de la comparación. En tal sentido, el requerimiento en este punto expresa que el sistema electoral está construido con una desviación estándar ascendiente a 26% por sobre la media, constituyendo una distorsión fuerte de valor alto. Visto así, los sujetos perjudicados son los electores de aquellos distritos en donde el valor sustancial de su voto tiene un peso extraordinariamente menor. El requerimiento realiza comparaciones estáticas adicionales, enjuiciando las decisiones de otorgar un número de diputados superior en distritos con un número de electores menor. ¿Es plausible construir el término de comparación del juicio de igualdad sólo en el valor sustancialmente igual del voto de los electores con derecho a sufragio? ¿Es el estándar que la Constitución exige para la construcción y diseño del sistema electoral?;

DECIMOSÉPTIMO.- Que aun sin responder la pregunta acerca del déficit del término de comparación, los propios requirentes se dan cuenta de que no es posible construir un término de comparación en materia electoral reducido a un solo criterio: el de igualdad sustancial del voto. Lo anterior, porque asumen que una de las principales conclusiones de las distorsiones resultantes radica en que hay territorios, como los extremos norte y sur, así como los centros poblados (especialmente Santiago), que pueden ser sobrerepresentados o subrepresentados, respectivamente. Lo anterior nos recuerda que el sistema electoral es un complejo mecanismo que equilibra objetivos, principios, derechos, reglas y prácticas que han de satisfacer la condición de que Chile es una república democrática (artículo 4° de la Constitución) y donde periódicamente la soberanía popular se expresa mediante votaciones populares (artículo 5° de la Constitución). Por lo tanto, ha de construirse desde el territorio;

DECIMOCTAVO.- Que el juicio de igualdad exige establecer que la delimitación territorial electoral se ha restringido, en la impugnación de los requirentes, sólo a los distritos de la Cámara de Diputados y no comprende a las circunscripciones senatoriales, pues estiman que estas últimas se ajustan a la Constitución por ser delimitadas “en consideración a las regiones” del país (artículo 49 de la Constitución). Queda planteada, entonces, una impugnación relativa a la desproporción de los 28 distritos configurados por el nuevo sistema electoral válido para la Cámara de Diputados. Sin embargo, éstos tienen limitaciones estructurales que se gobiernan desde una perspectiva diferente a la proyección del voto igualitario. En primer lugar, se trata de una delimitación que se realiza sobre la base de los 60 distritos existentes, que se fusionan, pero sin alterar su actual configuración territorial. En segundo lugar, ese territorio está predeterminado por la regla constitucional del artículo 113 en orden a configurarse al interior de la misma región. En tercer lugar, no es una construcción ad hoc para el sistema electoral sino que utiliza las divisiones político administrativas existentes a partir de las comunas del país. Todos estos criterios territoriales no pueden ser calificados como “gerrymandering”, esto es como una delimitación política de los distritos, efectuada ad hoc con el objeto de valorar resultados político-electorales conocidos, privilegiando zonas que favorecen y debilitando áreas desfavorables. En el caso chileno, parece concurrir lo que la doctrina ha denominado “gerrymandering natural”. Esto es, aquel diseño electoral que no resulta de una redistribución deliberadamente orientada, sino que es fruto de efectos combinados de ciudades fuertemente concentradas y, a la vez, de lugares aislados y de escasa población [Commission Europeenne pour la democratie par le droit (2004): Rapport sur les systemes electoraux, Etude N° 250, Strasbourg, p.10). Esta construcción teórica permite explicar que el sistema electoral chileno tiene deficiencias aritméticas naturales para la proyección de la igualdad sustancial del voto porque hay una decisión política adoptada con anterioridad: todos los distritos electorales tendrán un mínimo de 3 diputados, lo que genera que en zonas de baja densidad poblacional se produzca una natural sobrerepresentación. En tal sentido, podría adoptarse el criterio de “proyección sustantiva del voto igualitario” para la construcción de esos distritos, generando una representación proporcional de 1 ó 2 diputados por cada uno de los distritos 1, 2, 27 y 28. Sin embargo, con ello el efecto constitucional que se busca (mayor igualdad) deviene en una severa infracción constitucional, puesto que es deber del Estado “promover la integración armónica de todos los sectores de la Nación y asegurar el derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional” (artículo 1°, inciso quinto, de la Constitución);

DECIMONOVENO.- Que lo anterior deviene en una matización del término de comparación: no toda proyección proporcional de la igualdad del voto es constitucional. La aplicación aritmética del principio importa un sacrificio de representación política para las zonas extremas que resultaría inconstitucional. Sin embargo, no es la única matización que se ha de realizar al principio de proyección proporcional de la igualdad. Éste está construido sobre un supuesto que ha desaparecido de la Constitución. Si se proyecta proporcionalmente la igualdad del voto de todos los electores es porque todos tienen un derecho y un deber de participar en el ejercicio democrático electoral. Pero todos tienen un derecho hipotético que ejercen eventualmente porque existe, con la ley de reforma constitucional N° 20.390, el voto “voluntario”. Y sobre la base de este criterio, se distingue entre electores potenciales y votantes reales. Sirve como criterio para habilitar un conjunto mínimo de firmas para ser candidato independiente o para inscribir un partido político. En fin, es un factor que, al proyectarse sobre los distritos, da resultados diferentes. La desproporción se desplaza hacia los distritos con mayor votación efectiva. Con esto no se pretende desconocer la relevancia de la proyección sustantiva del voto igualitario, pero se ha de configurar como principio que es matizado por las dimensiones territoriales y las libertades de los individuos al ejercer su derecho de voto. En síntesis, el sistema electoral debe ser construido primariamente determinando sus objetos, en este caso, proporcional moderado como una decisión entregada en exclusividad al legislador. En segundo lugar, a partir de estas consideraciones la delimitación geográfica ha de tener en cuenta criterios primariamente demográficos y secundariamente territoriales. En tercer lugar, estas razones tienen por finalidad permitir elecciones periódicas, que den cuenta de la voz de los soberanos y en donde razones de bien común podrían llevar a considerar otros criterios de especial protección a minorías segregadas;

VIGÉSIMO.- Que, dicho lo anterior, resulta central relacionar el juicio formal de igualdad con la determinación de las razones que apuntan a criterios constitucionalmente legítimos para el diseño del sistema electoral concreto planteado por el legislador. En primer lugar, es deber de los requirentes identificar las razones por las cuales la aplicación del principio de la proyección sustancial del voto igualitario, como un voto del mismo peso por cada elector, no resulta del todo observada. Ellos mismos introdujeron criterios que matizan el principio por consideraciones geográficas. Sin embargo, lo que resulta medianamente explicado para los extremos del país no deviene en una justificación razonable para debilitar la representación de los grandes núcleos urbanos, especialmente en Santiago. La capital debe pagar un precio por su centralismo consustancial a un volumen enorme de actividades, pero no se entiende hasta dónde lo debe hacer. En segundo lugar, el proyecto de ley justifica bien el tránsito de su modificación desde un sistema electoral binominal a uno proporcional moderado. Lo anterior, porque para la viabilidad de esta transformación se apoyó en criterios prácticos que permitieron un acuerdo político con un quórum más exigente, propio de una reforma constitucional (tres quintos de senadores y diputados en ejercicio, según la Disposición Decimotercera Transitoria de la Constitución). Estos criterios los justificó el Ejecutivo en una representación geográfica mínima (3 diputados a lo menos), en el incremento de a lo menos un diputado para cada región; en la introducción de competitividad electoral aumentando los escaños en distritos más grandes; reducir la desigualdad del voto incrementando el número de escaños a elegir; determinando mayorías y minorías con una representación significativa en una variante de 3 a 8 diputados y 3 a 5 senadores como piso y techo, respectivamente; en la mejora paulatina de la diversidad de la sociedad a través de cuotas para candidaturas femeninas y con la sobrerepresentación de zonas extremas. Para ello, la Constitución habilita un conjunto de objetivos legítimos que están dentro del marco constitucional, sin que a este Tribunal corresponda calificar su bondad sino que únicamente su perfecta concordancia con el texto fundamental. En particular, porque la “forma de su elección” de los diputados (artículo 47 de la Constitución) y senadores (artículo 49 de la Constitución) es un ámbito de amplia libertad de configuración legislativa, dentro de los límites genéricos descritos en la primera parte de esta sentencia. Por tanto, no cabe continuar en un examen formal de igualdad puesto que estuvo lejos de satisfacer las exigencias que permitieran probar la desproporción;

IV.- A MAYOR ABUNDAMIENTO, UN JUICIO SOSTENIDO EN EL PRINCIPIO DE IGUAL PESO DEL VOTO NO DEMUESTRA EMPÍRICAMENTE QUE EL SISTEMA ELECTORAL APROBADO SEA INJUSTO.

VIGESIMOPRIMERO.- Que, a mayor abundamiento y como un ejercicio obiter dicta, realizaremos una ponderación valorativa del peso de la desproporción del voto, visto en una escala planteada por los propios requirentes, pero antes partiremos ofreciendo un marco comparativo que permita apreciar criterios más que números;

VIGESIMOSEGUNDO.- Que diversos tribunales constitucionales y magistraturas similares han ponderado, en sus respectivos países, el ejercicio del peso igualitario del voto, pero aplicado a sistemas electorales muy diversos, mayoritarios o proporcionales, en la tarea interpretativa de ver cómo la conversión de votos en escaños produce una auténtica “representación del pueblo”. Lo que aquí nos debe interesar es verificar qué desproporción puede ser entendida como razonable, aislando todos los demás factores que ya vimos juegan un papel justificatorio central. Es así como en Reynolds v. Sims (1964), la Corte Suprema de los Estados Unidos había verificado la inconstitucionalidad de la aplicación del principio de igualdad del sufragio por su utilización mediante un sistema desproporcionado de división de distritos al interior de un Estado. Pero, a efectos de lo que nos interesa, en el Caso Karcher v. Dagget (1983) la misma Corte Suprema calificó que la decisión de la Legislatura de Nueva Jersey que verificó las distorsiones de los distritos implicó la declaración de inconstitucionalidad de una variación porcentual de 0,6984%. Por su parte, el Consejo Constitucional francés, mediante la Decisión 86 – 218 DC, del 18 de noviembre de 1986, sostuvo que “el corte de circunscripciones electorales debe ser realizado sobre bases esencialmente demográficas. En la práctica, esto significa que las brechas de representatividad entre los diputados deben ser también lo más reducidas posibles. El Consejo Constitucional admitió en 1986 brechas máxima de más o menos 20 %” (Pactet, Pierre, y Mélin-Soucramanien, Ferdinand (2011), Derecho constitucional, Legis, Colombia, p. 399). Estas decisiones son un reflejo simbólico de un criterio que algunas democracias estiman debe ser el más importante para configurar un distrito. Esto es, establecerlo mediante reglas lo más proporcionales posibles sobre un equilibrio demográfico y no sobre proporcionalidad demográfica estricta, porque pueden existir límites por consideraciones de interés general, siempre teniendo a la vista realidades geográficas y, en particular, con el objeto de evitar todo riesgo de arbitrariedad partisana [Benelbaz, Clément (2010), “Le redécoupage electoral sous la V° République”, Revue du Droit Public, N° 6 – 2010, Paris, pp. 1662-1689]. Nuevamente, hay que matizar que este criterio sea definitivo. Es así como, en una perspectiva contraria, el Tribunal Supremo de Canadá, en Reference Re Provincial Electoral Boundaries (Saskatchewan), 1991, y el Tribunal Supremo de Australia, en Attorney – General of Commonwealth (ex rel McKinlay v. Commonwealth of Australia (1975), entendieron que un sistema electoral debe lograr una “representación eficaz”, esto es, una que logre una debida cuenta de la geografía, la historia, los intereses comunitarios y la representación de la minoría. Por supuesto, se trata de casos con especiales consideraciones hacia minorías étnicas;

VIGESIMOTERCERO.- Que, asumiendo como hipótesis de trabajo de este argumento obiter dicta que las varianzas porcentuales que marcan un límite de la desproporción poco razonable son del orden de un 20 a un 30%, cabe mostrar las desproporciones acusadas, según tabla presentada por los requirentes (fs. 7), válida para los 28 distritos:

Esta tabla nos muestra distorsiones aplicables a 7 distritos respecto de los cuales los requirentes dan por justificadas las desproporciones en 6 distritos, por cuestiones geográficas, quedando el dilema planteado en torno al distrito 4. Si bajamos aún más los criterios y los llevamos a un 25 %, sólo cabría agregar los distritos restantes de Santiago y el de la XIV Región. Por tanto, sin entrar a ponderar criterios adicionales, si bien hay desproporciones, éstas “nacen” justificadas internamente por los propios requirentes. Si aislamos y comparamos el distrito 4, por ejemplo, respecto de la Región XIV, cabe consignar que en el primero se cumple en mejor medida uno de los objetivos nuevos del sistema electoral, esto es, introducir competitividad frente a los incumbentes. En el caso de la Región XIV, los futuros 4 diputados calzan con los actuales representantes de los distritos 53 y 54. Allí la única incertidumbre nueva la agregan las cuotas de candidaturas femeninas, satisfaciendo uno de los objetivos del cambio electoral. Por tanto, el distrito 4 está plenamente justificado por competitividad, igualdad de oportunidades e inclusión social. En síntesis, éste es un mero ejercicio adicional del juicio de igualdad, pero que verifica que la demostración de la inconsistencia desproporcionada de algún distrito debía acreditarse sólida y contundentemente, siendo los factores geográficos los que anulan y explican razonablemente tales diferencias;

V.- LA ACTUALIZACIÓN DEL REDISTRITAJE ES UNA CUESTIÓN DE LEGALIDAD.

VIGESIMOCUARTO.- Que los requirentes formulan un segundo cuestionamiento a las modalidades de actualización del distritaje que es limitado por la fórmula que impone topes a la redistribución proporcional, fijando en 3 y 8 los pisos y techos de los escaños por distrito. ¿Es este un problema constitucional? A juicio de los impugnadores, es una extensión del problema del sufragio igualitario porque el proyecto de ley “no contempla una determinación discrecional por parte del Consejo Directivo del Servicio Electoral, ni delega en éste la asignación de los escaños. La asignación queda entregada por la ley al resultado de la aplicación de una fórmula matemática de prorrateo proporcional, y que el Consejo Directivo debe calcular periódicamente con la nueva información disponible y oficial de habitantes por distrito. La fórmula sólo va a alterar el número de diputados, en la medida que la proporción de los habitantes de los distritos haya cambiado y esa actualización es la correcta mirada desde el principio de la igualdad del voto (…)” (fs. 26 del requerimiento). Pero la consideración de los límites de la actualización implica que “el establecimiento de mínimos y máximos anula completamente la proporcionalidad que logra el método de D’Hondt y por tanto introduce una nueva discrecionalidad en la repartición de escaños en proporción a la población de los distritos, incumpliendo así el principio de la igualdad del voto, lo que se traduce en una pugna manifiesta con lo contenido en el artículo 15 de la Constitución”(fs. 26 del requerimiento y del expediente);

VIGESIMOQUINTO.- Que los requirentes cuestionan por extensión esta determinación del Congreso Nacional. Sin embargo, cabe detenerse en un juicio de igualdad por supuesta inconstitucionalidad, ya que se trata de un asunto de manifiesta legalidad. Lo anterior, por dos tipos de razones. Primero, porque es competencia del legislador orgánico definir la “fórmula electoral”. En ello, ya vimos que la Constitución no le impone límites al legislador, en la medida que sea la ley la que determine o haga determinable el número de los diputados (artículo 47 de la Constitución) y configure la “fórmula electoral”. El cuestionamiento no radica en las modalidades de una actualización progresiva, basada en el factor demográfico, sino que simplemente impugna la modalidad de “proporcionalidad moderada” del sistema electoral. Los ocurrentes no están de acuerdo con la fórmula adoptada, pero ello es un juicio de mérito y no de constitucionalidad. Lo anterior se refuerza por el hecho de que el parámetro de enjuiciamiento es simplemente legal. No se puede invocar un parámetro de adaptación demográfica continua porque la Constitución no lo exige. Asimismo, sería contraproducente respecto de los criterios que defiende porque importaría un desmedro a determinadas zonas del territorio y una recentralización del sistema electoral. Y, finalmente, porque utiliza un baremo de crítica que es puramente legal. El sistema de conversión de escaños bajo la fórmula de D’Hondt es una fórmula puramente legal y que el legislador tiene pleno derecho a limitar. Por tanto, no existe un término de comparación claro que permita realizar un juicio de igualdad porque las fórmulas requeridas son parte de la propia libertad de configuración del legislador.

Capítulo Segundo: “Las cuotas de género”.

LAS NORMAS SOBRE CUOTAS DE CANDIDATAS FEMENINAS A LAS PRIMARIAS NO VULNERAN LA CONSTITUCIÓN.

VIGESIMOSEXTO.- Que los requirentes objetan, como segundo aspecto de su requerimiento, dos normas destinadas a establecer una cuota de género para las primarias de candidatos a diputados y senadores. Por una parte, se objeta la letra b) del número 1) del artículo 1° del proyecto de ley, que modifica, de modo permanente, la Ley N° 18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios en términos de establecer que en la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputados o senadores de los partidos, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el 60% del total respectivo. Dicho porcentaje es obligatorio. Y se calcula con independencia de la forma de nominación de las candidaturas. La infracción de esta regla acarrea el rechazo de todas las candidaturas. Por otra parte, el requerimiento impugna el numeral 3 del artículo 4° del proyecto de ley, que modifica la Ley N° 20.640, que Establece el Sistema de Elecciones Primarias. Dicho numeral establece una disposición transitoria en la referida ley. Esta preceptúa que para las elecciones parlamentarias de los años 2017, 2021, 2025 y 2029, sólo puede someterse al procedimiento de primarias hasta el 40% del total de candidaturas a diputados o senadores que se puede declarar en la elección definitiva;

VIGESIMOSÉPTIMO.- Que los requirentes objetan dicha regulación porque asocia la cuota de género con una limitación para llevar candidaturas a una primaria, haciendo irreconocible el derecho de los partidos de aspirar con completa libertad a un mecanismo de primarias vinculantes;

VIGESIMOCTAVO.- Que, antes de hacernos cargo del cuestionamiento, debemos formular una serie de precisiones sobre el mismo. Por de pronto, no se cuestiona el mecanismo de cuotas. Se cuestiona que éstas afecten el sistema de primarias.

Dicho sistema de cuotas está destinado a reservar determinados cupos a grupos o sectores de personas que han sido históricamente minusvalorados. Son mecanismos de acción afirmativa orientados a asegurar la efectiva igualdad ante la ley (artículo 19, N° 2°, de la Constitución). Existen respecto de grupos o colectivos cuya subordinación es histórica o prolongada, situación que los ha debilitado severamente, obligando a corregir o compensar dicha secular desventaja. La acción afirmativa supone un beneficio para ese colectivo, que sin el mismo permanecería en su situación de subordinación.

Estas medidas buscan que las personas tengan las mismas oportunidades en el punto de partida (artículo 1°, inciso final, de la Constitución). De una u otra manera, ellas promueven sistemas de inclusión social, que el Estado debe contribuir a crear (artículo 1°, inciso cuarto, constitucional). En este caso particular, dichas cuotas se fundan también en el postulado del artículo 19, N° 2°, de la Carta Fundamental, que establece que hombres y mujeres son iguales ante la ley.

Es un hecho que las mujeres no tienen una representación adecuada en la política. En el año 1951, había una mujer diputado; el año 1993, había 9; el año 1997, había 14; el 2001, 15; el 2006, 18; el 2014, 19.

Dicho mecanismo puede perfectamente establecerlo el legislador, toda vez que regula un ámbito entregado por el Constituyente a la definición de éste. Tanto el artículo 47 como el artículo 49 de la Constitución establecen que “la forma de su elección” (de diputados y senadores) la debe definir la ley orgánica constitucional respectiva. Eso es precisamente lo que el proyecto lleva a efecto.

Asimismo, tampoco se introduce en el ámbito de los requisitos para ser diputado o senador. Estos siguen siendo los mismos. Sea hombre o mujer, el candidato debe cumplir los requisitos que los artículos 48 y 50 constitucionales establecen para ser candidato a diputado o senador, respectivamente;

VIGESIMONOVENO.- Que tampoco el proyecto establece un porcentaje de diputados o senadores hombres o mujeres. Establece sólo una cuota de candidatos;

TRIGÉSIMO.- Que, dado que lo que se impugna es el impacto que la cuota de candidatos puede tener en el mecanismo de elección de éstos vía primarias, es necesario analizar brevemente su regulación.

Las primarias se encuentran reguladas en dos normas. De un lado, la Constitución establece el procedimiento de primarias en su artículo 19, N° 15°. Dicho precepto previene que esta materia debe ser regulada en una ley orgánica constitucional; que dicho mecanismo es voluntario; que es utilizable por los partidos políticos para la nominación de candidatos a cargos de elección popular y que, finalmente, sus resultados serán vinculantes, salvas las excepciones que establezca dicha ley;

TRIGESIMOPRIMERO.- Que, por otra parte, la regulación de este mecanismo se encuentra contenida en la Ley N° 20.640. Ahí se conciben las elecciones primarias como voluntarias (artículos 2°, 4°, 8°, 9°, 11, 14 y 15); oficiales, porque participan organismos públicos (artículos 3° y 19); se utiliza el padrón electoral (artículo 21); existe calificación pública (artículos 30 y 31); son además únicas, porque se realizan conjuntamente para todos los cargos y de modo simultáneo para todos los interesados (artículo 3°); nacionales (artículo 3°) y vinculantes (artículos 35 y 36);

TRIGESIMOSEGUNDO.- Que todos esos preceptos fueron examinados por este Tribunal Constitucional en las STC 2324/2012 y considerados como orgánico constitucionales y constitucionales;

TRIGESIMOTERCERO.- Que consideramos que el proyecto no vulnera el mecanismo de primarias que la Constitución manda regular. En primer lugar, porque este mecanismo es voluntario. Sin acuerdo de los organismos internos del respectivo partido, éste no puede participar en dicho sistema. Por lo mismo, si el partido no está de acuerdo con el porcentaje de candidatos a diputados o senadores que puede someterse a tal mecanismo, por las razones que fuere, simplemente se puede marginar de él.

En segundo lugar, el proyecto establece reglas que atenúan un impacto superior. Por de pronto, la norma transitoria establece que el 40% de los candidatos a diputados o senadores pueda elegirse bajo este mecanismo. No es una prohibición total. En el resto se debe aplicar la cuota, de modo que ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres superen el 60% del total. Enseguida, dicha restricción es temporal, pues dura para las elecciones de los años 2017, 2021, 2025 y 2029.

En tercer lugar, porque el efecto de toda acción afirmativa es siempre afectar los procesos de selección, beneficiando a un grupo para compensar o corregir su situación histórica de discriminación. Por lo mismo, para garantizar el mecanismo de cuotas que el proyecto establece, no puede darse cauce libre a la aplicación de las primarias, porque eso podría implicar poner en peligro la cuota.

En cuarto lugar, tampoco consideramos que exista un peligro para el efecto vinculante de las primarias. Por una parte, porque los partidos saben con anticipación, lo mismo que la ciudadanía, que los candidatos hombres y las candidatas mujeres no pueden superar el 60% del total. Por la otra, la Constitución expresamente establece que el efecto vinculante puede tener las excepciones que establezca la ley. La Ley N° 20.640 consideró el fallecimiento o la renuncia dentro de estas causales de excepción (artículo 38). El proyecto establece otra causal de ajuste: el respeto a la cuota;

TRIGESIMOCUARTO.- Que no consideramos, en consecuencia, que se vulnere la regulación de las primarias que hace la Constitución por la incorporación de las cuotas para candidatos a diputados y senadores que establece el proyecto de ley.

Capítulo Tercero: “La igualdad entre los candidatos pertenecientes a partidos políticos y los candidatos independientes”.

DESIGUALDAD ENTRE INDEPENDIENTES Y PARTIDOS POLÍTICOS.

TRIGESIMOQUINTO.- Que los requirentes impugnan el numeral 2) del artículo 3° del proyecto de ley, que modifica el artículo 6° de la Ley N° 18.603, Orgánica Constitucional de los Partidos Políticos. Este precepto cambia uno de los requisitos para constituir partidos políticos, disminuyendo el porcentaje de afiliación requerido para su formación, desde el 0,5% de los electores que efectivamente hubieren sufragado en la última elección de Diputados en cada una de las regiones en que se constituye, a un 0,25% del mismo universo. Los requirentes sostienen que la modificación descrita es inconstitucional a la luz de los artículos 18 y 19, N° 2°, de la Constitución. Afirman que “¨[r]esulta evidente que con la modificación señalada, existirá una ventaja para la presentación de candidaturas a Presidente de la República, y para senador o diputado cuando el territorio electoral de éstos coincida con el de una región, por la vía de conformar un nuevo partido político en los territorios respectivos, que el presentarse como candidatos independientes.” (fs. 38);

TRIGESIMOSEXTO.- Que esta Magistratura se ha pronunciado en varias oportunidades sobre el alcance de la igualdad que debe existir entre independientes y miembros de partidos políticos, garantizada por mandato constitucional respecto de la presentación de candidaturas y su participación en procesos electorales y plebiscitarios. En particular, se ha encargado de precisar que el deber de garantizar “siempre la plena igualdad” supone verificar si los supuestos normativos son los mismos. Es así como en la sentencia Rol N° 53 se declaró que “naturalmente es distinta la situación en que un ciudadano independiente y un miembro de un partido político enfrentan una elección. El primero está libre de todo compromiso político y estatutario, pero, a su vez, no dispone del apoyo de una organización jurídica que lo respalde; el miembro de un partido político, en cambio, está subordinado a una estructura política y a normas que se ha obligado a respetar, pero, al propio tiempo, cuenta con la ventaja que entraña pertenecer a una colectividad política, una de cuyas finalidades es, precisamente, la participación organizada en los actos electorales y plebiscitarios” (c. 15°). Asimismo se concluyó: “1) que los independientes y los miembros de partidos políticos deberán tener en los procesos electorales igualdad de oportunidades para elegir y ser elegidos y para gozar de las facultades inherentes a esos derechos en sus aspectos básicos, sin que obsten a ello las diferencias que puedan producirse, en lo accidental, como consecuencia de la natural situación de unos y otros, según ha quedado demostrado; 2) que las reglas que se den en materia de elecciones no pueden ser exactamente iguales a las que rijan en los plebiscitos, por la diferencia jurídica sustantiva que existe entre ellos, y 3) que la ley no puede crear privilegios en favor de unos y en perjuicio de otros que rompan el necesario equilibrio que debe existir entre los participantes de los actos electorales y plebiscitarios.” (STC 53, c. 17°; en el mismo sentido, STC 228, c. 26°, STC 232, c. 13°, STC 2487, c. 58° y 59°). En la sentencia Rol N° 56 el Tribunal estimó conforme a la Constitución que el legislador estableciera menos requisitos que los exigidos para la constitución de partidos políticos, “habida consideración del escaso tiempo de que éstos dispondrán para cumplir con las exigencias legales y de su carácter eminentemente transitorio, ya que ellos se forman con el solo objeto de ejercer estos derechos en el proceso plebiscitario que tendrá lugar conforme a la disposición vigesimaséptima transitoria de la Constitución Política.” (C. 14°). En sentencia Rol N° 141 se declaró inconstitucional la regulación de los subpactos para acumular votaciones en las elecciones de Concejales, que restringía esta posibilidad sólo a ciertos candidatos. Se afirmó que “es conveniente destacar que la igualdad a que se hace referencia es la que corresponde que se aplique a las personas que, como independientes o miembros de partidos políticos, participan en un proceso electoral, para ser candidatos y para ser elegidos. No debe confundirse, por ello, con las obvias distinciones que se dan entre independientes y los partidos políticos mismos […] El proyecto dispone, por el contrario, que a la posibilidad de beneficiarse con esas sumas de votos no podrán acceder los candidatos de una lista en igualdad de oportunidades, al restringirse el derecho a sumar o acumular sus votos exclusivamente a los de partidos políticos o independientes subpactantes entre sí, todo lo cual contraviene las disposiciones constitucionales del ya citado artículo 18 de la Carta Fundamental, así como la igualdad que consagra el inciso segundo del Nº 2 del artículo 19 de la misma Carta y la garantía establecida en el Nº 15 del mismo artículo 19 al prohibir que los partidos políticos puedan tener privilegio alguno o monopolio de la participación ciudadana.” (C. 10° y 11°). En la sentencia Rol N° 228 el Tribunal declaró inconstitucional el proyecto de reforma que establecía “en caso de empate se prefiere al miembro de un partido político por sobre el independiente que obtuvo un número igual de sufragios. Esta discriminación arbitraria violenta los artículos 1°, inciso quinto, 18, 19, N° 2°, y 108 de la Constitución Política, motivo por el cual en esta parte se acogerá el requerimiento.” (C. 30°). En sentencia Rol N° 232 se declaró que “en el caso de la disposición cuya constitucionalidad se analiza, aparece claramente de manifiesto que el introducir al sistema vigente una desigualdad entre candidatos independientes y candidatos afiliados a partidos políticos, al exigir a los primeros 90 días de antigüedad en su condición de tales, y a los segundos sólo 60 días en la suya, constituye una diferencia que resulta arbitraria, dada su carencia de razón, fundamento, explicación u objetivo entendimiento.” (C. 12°). En la sentencia Rol N° 301 se afirmó que “basta un simple examen de la norma del proyecto antes transcrita, a la luz de lo expuesto en los considerandos anteriores, para concluir que dicha norma es inconstitucional, por infringir lo dispuesto en los artículos 1º, inciso final, 18, inciso primero, y 19, Nº 2º, de la Carta Fundamental, pues permite y regula el reemplazo del candidato fallecido a Presidente de la República en el caso de que la declaración de su candidatura hubiere sido efectuada por un partido político y, en cambio, prohíbe el reemplazo del candidato fallecido, tratándose de candidaturas independientes. Lo propio ocurre, también, con la disposición del inciso segundo de esta norma, ya que ella autoriza la sustitución del candidato fallecido a senador o diputado por las respectivas directivas del partido político o del pacto electoral y perentoriamente, a reglón seguido, agrega que “tratándose de candidaturas independientes, el candidato fallecido no podrá ser reemplazado”. En suma, el precepto dispone que es posible el reemplazo por fallecimiento del candidato a Presidente de la República, senador o diputado, en el evento de que su candidatura hubiese sido declarada por un partido político; pero lo prohíbe tratándose de candidaturas independientes, sin que exista una justificación razonable de esta manifiesta desigualdad.” (C. 9°). En la sentencia Rol N° 376, el Tribunal aclaró que “el artículo 15, inciso cuarto, del proyecto es constitucional, en cuanto debe interpretarse que la limitación respecto de los gastos imputables al financiamiento público que contiene resulta aplicable tanto a los partidos políticos como, igualmente, a los candidatos independientes, con plena sujeción a lo que disponen los artículos 18, inciso primero, y 19, Nº 2°, inciso segundo, de la Constitución.” (C. 25°). Finalmente, en la sentencia Rol N° 2487, reiterando la jurisprudencia existente respecto de las diferencias evidentes entre partidos políticos e independientes, declaró conformes a la Constitución las reglas de participación de independientes en los procesos de primarias, en la medida en que sean invitados por un partido político o configuren con éstos un pacto electoral; “[p]rimero, porque las elecciones primarias han sido definidas por el constituyente para los partidos políticos. Es así como el artículo 19, numeral 15°, inciso quinto, establece que “una ley orgánica constitucional establecerá un sistema de elecciones primarias que podrá ser utilizado por dichos partidos para la nominación de candidatos de elección popular, cuyos resultados serán vinculantes para estas colectividades, salvo las excepciones que establezca dicha ley”. Segundo, porque las elecciones primarias satisfacen un objetivo constitucional directamente establecido. Las elecciones primarias son uno de los mecanismos que contribuyen a la efectiva realización de la democracia interna de los partidos. En tercer lugar, el hecho de que algunos partidos convoquen a candidatos independientes resulta de un valor fundamental y guarda armonía con la autonomía que la Constitución les preserva en cuanto cuerpos intermedios. Y, por otro lado, porque refleja una de las modalidades que permiten y a su vez exige el diálogo con la sociedad que deben representar.” (C. 61°);

TRIGESIMOSÉPTIMO.- Que, como se ha descrito, la jurisprudencia del Tribunal ha sostenido reiteradamente que los miembros de partidos políticos y los independientes tienen diferencias naturales y evidentes, pues los primeros son miembros de una estructura política con vocación de permanencia, con derechos y obligaciones, y con una titularidad jurídica que pone hincapié en su oferta ideológica y programática. En cambio, los segundos están libres de todo compromiso político y estatutario específico, lo que resulta connatural a su autonomía para participar en las cuestiones públicas y electorales, según su voluntad. Los primeros tienen la fuerza del apoyo de una organización y una historia que los identifica ante el electorado. Los segundos tienen la plena libertad de no cargar con una historia que no les pertenece. Los primeros, presentándose a la ciudadanía en contextos que pueden ser favorables o desfavorables a los partidos políticos; en cambio, los últimos, libres de contextos culturales de sospecha. Estas diferencias, inherentes a la situación de cada uno de ellos, permiten afirmar que no toda desigualdad es contraria a la Constitución, siempre y cuando se garantice la igualdad en la presentación de candidaturas y en la participación en procesos electorales y plebiscitarios;

TRIGESIMOCTAVO.- Que la norma del proyecto impugnada no introduce cambios en los requisitos para inscribir candidaturas electorales, ni en el caso de los partidos políticos, ni tratándose de independientes. En este sentido, en principio, el precepto impugnado no tiene la aptitud necesaria para generar desigualdades en la presentación de candidaturas. Las modificaciones al estatuto de los partidos políticos, sea disminuyendo el porcentaje de afiliados para su constitución, como asimismo el favorecimiento de su existencia con la rebaja del requisito de su cobertura territorial, en términos de tener que constituirse a lo menos en una región del país, son formas legítimas de promover la formación de partidos políticos, que no implican necesariamente una discriminación en contra de los candidatos independientes;

TRIGESIMONOVENO.- Que, sin perjuicio de lo anterior, la presentación de candidaturas es uno de los muchos fines y facultades de los partidos políticos; por lo tanto, habrá que determinar si la modificación aludida afecta indirectamente a la igualdad que debe existir entre independientes y miembros de partidos políticos en este aspecto;

CUADRAGÉSIMO.- Que el reemplazo de la cifra 0,5% por el guarismo 0,25% de los electores que sufragaron en la última elección, según lo dispone el artículo 6° de la Ley N° 18.603, considerado aisladamente, no influye de manera determinante en las condiciones de presentación de candidaturas. Es la modificación introducida en el artículo 3° de la Ley 18.603, en el sentido de que baste constituirse como partido en una región del país, la que podría producir el problema denunciado por los requirentes. Para determinar si estas modificaciones afectan o no la igualdad en la presentación de candidaturas, primero habrá que diferenciarse el análisis entre las elecciones parlamentarias y presidenciales;

CUADRAGESIMOPRIMERO.- Que tratándose de la presentación de candidaturas para Diputado y Senador, el artículo 10 de la Ley N° 18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, exige que los candidatos independientes tengan el patrocinio de un número de ciudadanos igual o superior al 0,5% de los que hubieren sufragado en el distrito o circunscripción en la anterior elección periódica. En un análisis puramente numérico, en los nuevos distritos 1°, 2°, 3°, 4°, 24°, 27° y 28°, y en todas las circunscripciones senatoriales, sería aparentemente más ventajoso constituir un partido político que presentar una candidatura independiente;

CUADRAGESIMOSEGUNDO.- Que para determinar si esa supuesta ventaja genera una desigualdad en la presentación de candidaturas entre independientes y miembros de partidos políticos, es preciso realizar un análisis no reduccionista, considerando otros factores más allá del porcentaje de patrocinadores. En este sentido, la ley regula la presentación de candidaturas independientes, mas no interviene en las actividades que un independiente o una agrupación independiente realiza más allá del proceso electoral o plebiscitario. Los partidos políticos, en cambio, son organizaciones intensamente reguladas, tanto a nivel constitucional como legal. El artículo 19, N° 15°, de la Constitución describe una serie de conductas y actividades permitidas y prohibidas para los partidos políticos, y mandata a una ley orgánica constitucional su regulación y el establecimiento de sanciones ante incumplimientos. El artículo 23 constitucional, por su parte, declara incompatibles los cargos de directivos superiores de organizaciones gremiales con los cargos directivos superiores, nacionales y regionales, de los partidos políticos, y mandata a la ley el establecimiento de sanciones. Por su parte, la Ley N° 18.603, Orgánica Constitucional de los Partidos Políticos, en su Título II establece en detalle los requisitos para constituir un partido político, además de la afiliación del 0,5% de los votantes de la última elección: (1) deben organizarlo al menos 100 ciudadanos con derecho a sufragio, que no pertenezcan a otro partido político constituido o en formación; (2) deben extender escritura pública con las siguientes menciones: individualización completa de los comparecientes, declaración de la voluntad de constituir un partido político, nombre del partido y, si los tuviere, sigla, lema y descripción literal del símbolo, declaración de principios del partido, estatuto del mismo, y nombres y apellidos de las personas que integran la Directiva Central y el Tribunal Supremo provisionales, constitución de un domicilio común para todas esas personas y normas para reemplazarlas o subrogarlas en caso de fallecimiento, renuncia o imposibilidad definitiva o transitoria que se produzcan antes de la inscripción del partido; (3) dentro de tercer día hábil de otorgada la escritura, una copia autorizada de ella y un proyecto de extracto deberán ser entregados por la Directiva Central provisional del partido al Director del Servicio Electoral; (4) cumpliendo los requisitos anteriores, el Director del Servicio Electoral publicará en el Diario Oficial, dentro de quinto día hábil de haber recibido los antecedentes, un extracto de la escritura pública de constitución, un resumen de la declaración de principios del partido y el lugar, fecha y notaría de su otorgamiento; (5) tienen un plazo de 210 días para proceder a la afiliación de sus miembros; (6) luego de obtenido el número de afiliados necesario, deben solicitar al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos; (7) el Director del Servicio Electoral, dentro de los cinco días hábiles siguientes a la presentación de la solicitud de inscripción, dispondrá la publicación de aquélla en el Diario Oficial, a costa del partido en formación, con mención de su nombre, y si los tuviere, de su sigla, símbolo y lema, de la notaría y de la fecha en que se haya otorgado la escritura de constitución; (8) cualquier partido político inscrito o en formación puede deducir oposición a la formación de otro, a través de un procedimiento regulado;

CUADRAGESIMOTERCERO.- Que, como es evidente, si se considerara como única finalidad de los partidos políticos la presentación de candidaturas, claramente sería más simple presentar candidaturas independientes, aun considerando la disminución del porcentaje de afiliados introducida por el proyecto de ley en cuestión. Sin embargo, como ya ha sostenido la jurisprudencia de este Tribunal, los partidos políticos y la presentación de candidaturas independientes son cuestiones diametralmente distintas, que no pueden compararse o examinarse como situaciones iguales, y que por tanto presentan diferencias obvias que no por eso son inconstitucionales. En definitiva, respecto de las elecciones parlamentarias, la modificación introducida por el proyecto no es contraria a la igualdad, y por tanto, no infringe los artículos 18 y 19, N° 2°, de la Constitución;

CUADRAGESIMOCUARTO.- Que tratándose de las elecciones presidenciales la comparación es mucho más simple, pues en este caso la Ley N° 18.700 exige condiciones para la presentación de candidaturas tanto a independientes como a miembros de partidos políticos. A los independientes, el artículo 13 les exige el patrocinio, ante notario, de al menos el 0,5% de los electores que hubieren sufragado en la anterior elección periódica de Diputados, de acuerdo al escrutinio general practicado por el Tribunal Calificador de Elecciones. Respecto de los partidos políticos, el artículo 14 diferencia dos situaciones: si el partido está constituido en todas las regiones del país, puede presentar candidaturas sin mayores requisitos; si no está constituido en todas las regiones, puede presentar una candidatura presidencial acreditando una cantidad de afiliados, en las regiones en que se encuentra constituido, no inferior al 0,5% de los que hubieren sufragado en la anterior elección periódica de Diputados, de acuerdo con el escrutinio general practicado por el Tribunal Calificador de Elecciones. Considerando que ninguno de estos artículos fue modificado por el proyecto de ley en cuestión, y aplicando las modificaciones introducidas en la constitución de partidos políticos, si un partido que presentó un 0,25% de afiliados en una región del país para su constitución legal quiere presentar una candidatura presidencial, deberá acreditar que sus afiliados representan no menos que el 0,5% de los que hubieren sufragado, a nivel regional, en la última elección de Diputados. Como deja en evidencia el caso de las presentaciones de candidaturas presidenciales, la constitución de un partido político nada se relaciona con la presentación de candidaturas, y en este punto, tanto independientes como miembros de partidos políticos deben cumplir con igual número mínimo de patrocinadores, y aún más, el candidato independiente podrá obtener patrocinadores de todas las regiones del país, mientras el candidato de un partido deberá lograr tal cifra en la región en que se hubiere constituido;

CUADRAGESIMOQUINTO.- Que, en síntesis, el numeral 2) del artículo 3° del proyecto de ley impugnado no genera diferencias arbitrarias entre independientes y miembros de partidos políticos, en cuanto a la presentación de candidaturas y a su participación en procesos electorales; por tanto, es declarado conforme a la Constitución.

Capítulo Cuarto: “El financiamiento de las asignaciones parlamentarias”.

NO HAY VULNERACIÓN DE LA CONSTITUCIÓN EN MATERIA DE FINANCIAMIENTO.

CUADRAGESIMOSEXTO.- Que el gasto asociado al incremento del número de parlamentarios es la última objeción que los requirentes formulan al proyecto. La impugnación en esta materia recae en los numerales 8 y 10 del artículo 1° del proyecto de ley. El primero aumenta el número de diputados en 35; el segundo, el número de senadores en 12.

Los requirentes sostienen que dicho incremento lleva asociado un aumento en el desembolso por concepto de dieta parlamentaria, que podría sufragarse con reasignaciones internas en el presupuesto del Congreso Nacional. Sin embargo, en su opinión, el proyecto no contiene financiamiento para las asignaciones parlamentarias que se pagan en adición a la dieta. No se establece con precisión las fuentes de los recursos necesarios para atender dichos gastos. Con ello se vulneraría el artículo 67 de la Constitución;

CUADRAGESIMOSÉPTIMO.- Que, antes de hacernos cargo de esta impugnación, debemos tener en cuenta lo siguiente respecto del Presupuesto de la Nación. En primer lugar, el presupuesto es anual (artículo 67 de la Constitución). En segundo lugar, el Presidente de la República tiene la iniciativa exclusiva en materia de gasto (artículo 67 constitucional). En tercer lugar, en su elaboración se debe procurar mantener un cierto equilibrio entre los ingresos y los gastos. A eso apunta una serie de instituciones que regula la Constitución. Desde luego, la iniciativa exclusiva del Presidente de la República, que restringe al Congreso en términos de no poder aumentar ni disminuir la estimación de los ingresos, sino sólo reducirlos. Y ni aun así, respecto de gastos establecidos por leyes permanentes (artículo 67, inciso segundo, de la Constitución). Tampoco el Congreso puede aprobar ningún nuevo gasto sin que se indique, al mismo tiempo, las fuentes de los recursos para atender dicho gasto (artículo 67, inciso tercero, de la Constitución). Además, si el Congreso aprueba un gasto sin financiamiento suficiente, el Presidente puede, bajo ciertos supuestos, reducir proporcionalmente dichos gastos (artículo 67, inciso cuarto, de la Constitución);

CUADRAGESIMOCTAVO.- Que, para garantizar la observancia del mandato en orden a que el Congreso no puede aprobar ningún gasto sin indicar la fuente de los recursos necesarios para atenderlo, el artículo 14 de la Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional establece un mecanismo de evaluación de impacto regulatorio. Este consiste, por una parte, en que los proyectos de ley deben acompañar un informe financiero. Es decir, “antecedentes que expliquen los gastos”, “la fuente de los recursos” y “la estimación de su posible monto”. Por la otra, la Comisión de Hacienda de cada Cámara debe indicar en su informe “la fuente de los recursos reales y efectivos con que se propone atender el gasto” (artículo 17);

CUADRAGESIMONOVENO.- Que, por otra parte, de acuerdo al artículo 68 de la Ley Orgánica del Congreso Nacional, cada Cámara debe establecer la forma en que se distribuyen los fondos que le corresponden de acuerdo a la Ley de Presupuestos, al igual que las normas sobre traspasos internos;

QUINCUAGÉSIMO.- Que lo primero que cabe señalar es que en la STC 242/1996, respecto de un proyecto de ley que trasladaba el Congreso Nacional a Santiago, se discutió una situación parecida a la reprochada.

Sin embargo, existen algunas diferencias entre aquella situación y ésta. Por de pronto, aquí se reconoce la existencia de un gasto y hay una referencia explícita a su financiamiento de acuerdo a la Ley de Presupuestos. Ello no ocurrió en el proyecto del traslado del Congreso. El reproche que le formuló el Tribunal Constitucional, en aquella ocasión, fue que no se contemplaba en su texto indicación de especie alguna respecto de las fuentes de financiamiento.

Enseguida, el organismo técnico del Ejecutivo encargado de elaborar el informe financiero del proyecto de ley, reconoce la existencia del mayor gasto. Cosa que no sucedió en aquella ocasión.

Además, hay que considerar que el presente proyecto es de iniciativa del Ejecutivo, a diferencia de lo que sucedía con el proyecto de traslado del Congreso, que se originó en una moción parlamentaria.

Por tanto, no estimamos que este precedente sea aplicable a la presente situación;

QUINCUAGESIMOPRIMERO.- Que, entrando a analizar el fondo de la objeción, debemos señalar que durante la tramitación del proyecto de ley se acompañaron los informes financieros correspondientes. Estos constan a fojas 458 y siguientes. En dichos informes se contempla el mayor desembolso por concepto de dieta parlamentaria que genera la incorporación de nuevos diputados y senadores;

QUINCUAGESIMOSEGUNDO.- Que, enseguida, en dichos informes financieros se deja constancia de un acuerdo político de no incurrir en un mayor gasto fiscal por estos conceptos. Por lo mismo, el informe señala que ello debe hacerse en el marco de la facultad que le da la Ley Orgánica del Congreso al propio órgano legislativo para establecer la forma en que se distribuirán los fondos que le corresponden (artículo 68, Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional). En tal sentido, se trata de transferencias internas de recursos. Esta es una precisión que el Congreso Nacional puede perfectamente llevar a cabo y que es recogida por el Ejecutivo;

QUINCUAGESIMOTERCERO.- Que, por otra parte, el proyecto de ley contiene un artículo específico en materia de financiamiento, el que no se ha impugnado en estos autos. Este indica que el aumento de gasto por dieta se financiará con cargo a los recursos contemplados en la Partida del Congreso Nacional de la Ley de Presupuestos;

QUINCUAGESIMOCUARTO.- Que no se observa, en consecuencia, que el proyecto no indique la fuente de los recursos necesarios para financiar el mayor gasto por dietas y asignaciones, pues ellos provendrán del presupuesto del Congreso Nacional, mediante ajustes internos que esta Corporación puede perfectamente llevar a cabo, dada su autonomía y la facultad expresa que en tal sentido le confiere la ley orgánica del propio Congreso.

Y TENIENDO PRESENTE lo dispuesto en el artículo 93, inciso primero, N° 3°, e incisos cuarto y siguientes, y las demás disposiciones citadas y pertinentes de la Constitución Política de la República, y en los artículos 61 y siguientes de la Ley N° 17.997, Orgánica Constitucional del Tribunal Constitucional,

SE RESUELVE: QUE SE RECHAZA EN TODAS SUS PARTES EL REQUERIMIENTO DE INCONSTITUCIONALIDAD DEDUCIDO A FOJAS UNO.

Se previene que la Ministra señora Marisol Peña Torres concurre a la decisión de rechazar íntegramente el requerimiento deducido a fojas 1, compartiendo únicamente los Capítulos III y IV de la sentencia, y teniendo especialmente presentes las siguientes consideraciones para fundamentar el aludido rechazo:

I.- La competencia específica del Tribunal Constitucional.

1°. Que cada vez que el Tribunal Constitucional –como cualquier otro tribunal- se enfrenta a decidir un conflicto jurídico que le ha sido sometido debe definir, en forma muy precisa, su competencia específica para resolver dicho conflicto.

La competencia específica ha sido definida por el profesor Juan Colombo como “la facultad que tiene el tribunal para conocer de las materias que conforman un proceso determinado. Es la singularización de la jurisdicción al caso concreto. El Tribunal asume competencia específica para conocer el proceso y resolver el conflicto que en él se ventila y de su ejercicio surgirá el efecto de cosa juzgada, y la ultra y extra petita cuando el tribunal la extralimite.” El respeto irrestricto a la competencia específica constituye una garantía para quienes intervienen en el proceso, pues el Tribunal sólo podrá conocer lo que se le pide y resolver solamente lo debatido (“El debido proceso constitucional”. Cuadernos del Tribunal Constitucional, N° 32 (2006), p. 68);

2°. Que, en el mismo sentido anotado, este Tribunal ha sentenciado que ”en ejercicio de la atribución que le confiere el artículo 93, N° 3°, de la Constitución Política para resolver las cuestiones de constitucionalidad que se susciten durante la tramitación de un proyecto de ley, el Tribunal Constitucional tiene únicamente competencia para conocer de la cuestión de constitucionalidad que contenga el requerimiento respectivo, la que sólo puede afectar a disposiciones incluidas en dicho proyecto, sin que pueda esta Magistratura, con motivo del ejercicio de su atribución de control preventivo de constitucionalidad, extender el examen, de conformidad con la Carta Fundamental, a preceptos legales vigentes.” (STC Rol N° 2160, c. 8°);

3°. Que el respeto a la competencia específica del Tribunal frente a cada conflicto que resuelve no sólo es una garantía para las partes del proceso sino que constituye, al mismo tiempo, una forma de asegurar la plena vigencia del Estado de Derecho si se atiende al tenor del inciso segundo del artículo 7° de la Carta Fundamental: “Ninguna magistratura, ninguna persona, ni grupo de personas pueden atribuirse, ni aun a pretexto de circunstancias extraordinarias, otra autoridad o derechos que los que expresamente se les hayan conferido en virtud de la Constitución o las leyes.”;

4°. Que, en esta oportunidad, 12 senadores que representan más de la cuarta parte de los miembros en ejercicio del Senado han deducido un requerimiento de inconstitucionalidad respecto del proyecto de ley, aprobado por el Congreso Nacional, que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional (Boletín N°9326-07). Lo anterior, en virtud de la atribución que otorga el artículo 93, inciso primero, N° 3° de la Constitución Política, en relación con los artículos 61 y siguientes de la ley orgánica constitucional que rige a esta Magistratura.

En su libelo, los parlamentarios aludidos han impugnado diversas disposiciones del proyecto de ley indicado, estimando que ellas infringen diversos principios y derechos constitucionales: a) el rasgo “igualitario” del sufragio, contenido en el artículo 15; b) la igualdad entre partidos políticos e independientes, consagrada en el artículo 18; c) el derecho a la igualdad ante la ley que, conforme al artículo 19 N° 2°, prohíbe al legislador y a cualquier autoridad establecer diferencias arbitrarias, d) la posibilidad de que, conforme lo que disponga una ley orgánica constitucional, los partidos políticos puedan utilizar un sistema de primarias para nominar a sus candidatos a los cargos de elección popular conforme asegura el artículo 19 N° 15°, inciso quinto; e) la prohibición que se impone al legislador, a la hora de regular o complementar los derechos garantizados por la Constitución, de no afectar la esencia de los mismos como ordena el artículo 19 N° 26°; y f) la prohibición que pesa sobre el Congreso Nacional- de acuerdo al artículo 67- de no aprobar ningún nuevo gasto con cargo a los fondos de la Nación sin que se indiquen, al mismo tiempo, las fuentes de recursos necesarios para atender dicho gasto;

5°. Que sólo los vicios de inconstitucionalidad denunciados en el requerimiento de los 12 senadores –y que se relacionan con las normas indicadas de la Carta Fundamental- pueden ser objeto de la decisión del Tribunal, pues la extensión a otros vicios podría importar que esta Magistratura excediese su competencia específica lesionando, además, el Estado de Derecho. Por lo demás, son esos vicios los que han motivado la respuesta de S.E. la Presidenta de la República, en su calidad de órgano legitimado, según escrito que rola a fojas 334 y siguientes;

6°. Que las precisiones anotadas no revisten la obviedad que pudiera sugerir una primera lectura. Sobre todo, cuando se trata de una materia en que, como ha quedado en evidencia, en las intervenciones desarrolladas en la audiencia pública convocada por el Tribunal, como en la misma vista de la causa, se esgrimieron argumentos que exceden los vicios de inconstitucionalidad denunciados en el requerimiento.

Así sucede con las supuestas incongruencias que existirían entre el texto del articulado aprobado por ambas Cámaras del Congreso Nacional con el Mensaje que dio origen al proyecto de ley cuestionado. Así afirman los senadores requirentes que “pese a que en el Mensaje del proyecto se afirma que “el número de variables de diputados se afirma en atención al número de electores, propendiendo al mayor logro posible del principio de igualdad del voto”, es posible advertir significativas diferencias en el número de electores por diputado, las que no se fundan en razones geopolíticas ni de integración nacional” (fojas 6). Más adelante agregan que “los requirentes consideran que las diferencias anotadas en la distribución de los 155 escaños, tanto en relación a los electores como a los habitantes, son claras, adolecen de una innegable gravedad y no se justifican en los criterios de distinción declarados en el proyecto de ley” (fojas 12).

Como puede advertirse, las referidas argumentaciones inciden en una supuesta vulneración o exceso respecto de las ideas matrices del proyecto de ley sin que el requerimiento haya denunciado específicamente una transgresión al artículo 69 de la Constitución Política, lo que, a juicio de la Ministra que suscribe, impide a este sentenciador razonar sobre el punto;

7°. Que habiendo acotado la competencia específica del Tribunal, en razón de los vicios denunciados en el requerimiento de autos, parece necesario –a quien suscribe este voto- efectuar algunas consideraciones sobre la atribución del Tribunal Constitucional para dirimir un conflicto de constitucionalidad de la naturaleza del que en esta ocasión se le ha formulado.

II.- Justicia constitucional y control de la obra del legislador.

8°. Que, usualmente, ha solido criticarse la intervención que le cabe al Tribunal Constitucional, en ejercicio del control preventivo de constitucionalidad, en la revisión de un proyecto de ley que, como el de la especie, ha sido ya aprobado por las Cámaras y no vetado por el Presidente de la República. En estos casos, se llama a esta Magistratura a no constituirse en una “tercera Cámara” y a no torcer la voluntad de los legítimos representantes de la soberanía popular que actúan en ejercicio de las facultades que les confiere el artículo 5°, inciso primero, de la Carta Fundamental. El requerimiento que el Tribunal debe decidir en esta oportunidad también ha estado rodeado de esos comentarios que, por lo demás, se han hecho ver en estrados;

9°. Que si bien las críticas que envuelven esos comentarios a la actuación del Tribunal Constitucional trasciende la acción deducida a fojas 1, resulta necesario efectuar algunas puntualizaciones que enmarquen el pronunciamiento al que se concurre, a fin de dar plena legitimidad a la sentencia que se expide y de dimensionar debidamente la custodia del principio de supremacía constitucional que ha sido confiada a este órgano del Estado;

10°. Que, en ese orden de ideas, debe recordarse que la justicia constitucional implica que el poder, particularmente el del gobierno, está limitado por las normas constitucionales y que se han creado procedimientos para hacer cumplir dichas limitaciones (Capeletti, Mauro. “Necesidad y legitimidad de la justicia constitucional”. En: Capeletti, Mauro: La Justicia Constitucional. Dimensiones de la justicia en el mundo contemporáneo. Editorial Porrúa, México, 2004, pp. 307-351).

Así, la idea de justicia constitucional –una de cuyas expresiones es la existencia de una jurisdicción constitucional concentrada como la que ejerce este Tribunal- obedece a la necesidad de controlar y limitar el ejercicio del poder, objetivo que ha constituido el telos o fin de la Constitución desde los inicios del proceso constitucionalista.

En este contexto, cabe preguntarse si existen razones justificadas y potentes para excluir de dicho control a quienes ejercen el poder desde los Parlamentos si, precisamente, son los parlamentarios los llamados a dar vida a las normas de carácter general y obligatorio por las que se va a regir la vida cotidiana de la sociedad. Expresado en otros términos, ¿es infalible el legislador por el solo hecho de representar la voluntad de la ciudadanía? ¿O, es que el legislador representa y traduce siempre esa voluntad en forma acorde con el pacto social plasmado en la Carta Fundamental?;

11°. Que el surgimiento de la jurisdicción constitucional concentrada en el mundo –como máxima expresión de la justicia constitucional- estuvo asociado al abandono de la idea predominante hasta comienzos del siglo XX en orden a que el legislador era infalible y, por ende, sólo a él le correspondía corregir los eventuales errores o excesos en que incurriera. Por eso mismo fue que Kelsen tituló su obra como “La garantía jurisdiccional de la Constitución” afirmando que “no existe hipótesis de garantía de la regularidad en que se pueda estar tentado de confiar la anulación de los actos irregulares al propio órgano que los ha realizado, que la de la garantía de la Constitución”. Más adelante puntualiza que “debe reconocerse que la Constitución regula, en definitiva, el procedimiento legislativo exactamente de la misma manera en que las leyes regulan el procedimiento de los tribunales y el de las autoridades administrativas; que la legislación se encuentra subordinada a la Constitución absolutamente, de la misma forma en que la jurisdicción y la administración lo están a la legislación, y, por tanto, que el postulado de la constitucionalidad de las leyes es teórica como técnicamente, idéntico, por completo al postulado de la legalidad de la jurisdicción y de la administración.” Por último, indica que “sería una ingenuidad política contar con que el Parlamento anularía una ley votada por él en razón de que otra instancia lo hubiera declarado inconstitucional” (pp. 23, 24). En estas últimas reflexiones radica la fuerza de la sentencia emanada del Tribunal Constitucional que, por sí misma, expulsa la norma que, de convertirse en ley, consolidaría la transgresión de la Carta Fundamental;

12°. Que lo expresado no significa que el Tribunal Constitucional pueda suprimir arbitrariamente preceptos de un proyecto que- como el de la especie- ha sido aprobado por los órganos colegisladores. Por el contrario, en el examen de conformidad con la Constitución deberá tener presentes los siguientes criterios fundamentales:

a) La presunción de constitucionalidad o de legitimidad de la ley cuyo alcance fue explicitado en la sentencia de esta Magistratura recaída en el Rol N° 309: “[..] cualquiera que sea la denominación, lo fundamental de este principio consiste en que se presumen válidas y legítimas las normas aprobadas por los Poderes del Estado y que sólo resulta prudente y aconsejable declarar su inconstitucionalidad cuando los sentenciadores lleguen a la íntima convicción que la pugna entre la norma en análisis y la Constitución es clara, resultando imposible armonizarla con ella. Este principio tiene muchos fundamentos, pero, por ahora, cabe solo señalar dos: la separación de Poderes y el recíproco respeto que los distintos órganos del Estado se deben entre sí y, tratándose de leyes, lo difícil que resulta reemplazar la norma expulsada del ordenamiento jurídico por la declaración de inconstitucionalidad, por las complejidades propias del proceso de formación de la ley.” (C. 2°) (Énfasis agregado);

b) La deferencia razonada que merece la obra legislativa, precisamente por provenir de los representantes de la soberanía popular y porque constituye una forma concreta de tutelar una adecuada separación de las funciones del Estado, aunque con frenos y contrapesos. Tal deferencia ha sido conceptualizada como aquel principio que “consiste en reconocer al órgano responsable de la producción de preceptos jurídicos la potestad de buscar de manera flexible las fórmulas normativas que, ajustadas a la Carta Fundamental, le parezcan necesarias o convenientes para la mejor consecución del Bien Común.” (Énfasis agregado). (Zapata, Patricio. “La jurisprudencia del TC. Parte General.” Editorial Biblioteca Americana, Santiago, 2002, p. 70).

Necesario corolario del criterio antes enunciado es el respeto al mérito de la obra legislativa. En este sentido, este sentenciador ha sostenido que “es necesario reiterar que el Tribunal Constitucional es el principal órgano encargado de velar porque la ley, o más bien su aplicación a un caso concreto, efectivamente no vulnere los límites constitucionales, lo que significa, a la vez, la garantía de cierta esfera de autonomía del legislador, que comprende, básicamente, el conjunto de apreciaciones de mérito, conveniencia y oportunidad que lo llevan a la adopción de una u otra fórmula normativa orgánica. De este modo, como se ha consignado por esta Jurisdicción Constitucional, sólo cuando el Congreso Nacional excede su ámbito de atribuciones, infringiendo los márgenes contemplados en el texto, principios o valores esenciales de la Carta Fundamental, o violente el proceso de formación de la ley, el Tribunal Constitucional puede intervenir para reparar los vicios de inconstitucionalidad en que éste haya incurrido.” (Énfasis agregado).(STC roles N°s 616, c. 42° y 664, c. 22°);

c) La necesidad de declarar la inconstitucionalidad de una norma sólo si ninguna interpretación posible permite ajustarla a la Constitución, corolario del principio anterior. Este principio fue reconocido expresamente por esta Magistratura en sentencia Rol N° 2433 cuando, citando al Tribunal Constitucional alemán, recordó que “una ley no debe ser declarada nula si puede ser interpretada en consonancia con la Constitución.” (C. 23°);

d) La decisión de declarar la inconstitucionalidad del precepto de que se trata no debe acarrear efectos aún más nocivos que los que produce la supervivencia del precepto cuestionado. Así se afirmó por este Tribunal en sentencia roles N°s 558 y 590 (acumulados): “el ordenamiento constitucional es un sistema normativo, que regula poderes públicos, reconoce y ampara derechos subjetivos y fundamentales, en fin, la cohesión y equilibrio político y social. La exclusión de una norma legal es consecuencia de la ruptura de ese ordenamiento, para restablecerlo en plenitud. Dicha finalidad no se logra si la expulsión del precepto legal puede acarrear efectos aún más nocivos que los que produce su supervivencia. Una decisión de tal envergadura requiere, pues, la ponderación de su conveniencia para el orden constitucional que esta Magistratura debe cautelar. El criterio más adecuado para calificarlo es la determinación de las consecuencias de la desaparición del precepto legal. Si deviene una situación más perjudicial o negativa que la preexistente a su anulación, no resulta conveniente para el interés público y la plena vigencia del Estado de Derecho la derogación de la norma.” (Énfasis agregado).(C. 19°);

e) La exigencia de efectuar una interpretación de las normas legales cuestionadas a luz del principio pro homine, favor persona o favor libertatis, pues, tal como ha sostenido esta Magistratura, “(…) toda interpretación constitucional debe tender, por una parte, al máximo respeto y promoción de los derechos y libertades fundamentales, en consideración al principio favor libertatis, derivado de que éstos son anteriores al Estado, pero igualmente garantizar el adecuado funcionamiento del Estado democrático de Derecho, constituido precisamente para su resguardo y legítimo ejercicio.” (STC Rol N° 1191, c. 19°).

III.- Incumplimiento de estándares fijados por la jurisprudencia constitucional para modificar a dejar sin efecto la obra del legislador.

13°. Que, sin perjuicio de las razones consignadas en los Capítulos III y IV de la sentencia –que esta Ministra comparte- existen fundamentos para sostener que los vicios de inconstitucionalidad denunciados por los senadores requirentes carecen de la densidad suficiente para que el juez constitucional, en ejercicio del deber de inexcusabilidad que le asiste, los acoja eliminando del texto del proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal, los preceptos impugnados, en la forma que se explica a continuación;

1. En lo relativo a la presunción de constitucionalidad de la obra del legislador.

14°. Que, en efecto, y como ya se explicó, un primer criterio para corregir lo obrado por el legislador tiene que ver con la imposibilidad de aplicar la presunción de constitucionalidad de las normas que ha aprobado. Esto es, sólo puede declararse la inconstitucionalidad de las mismas cuando su contradicción con la Carta fundamental es clara, resultando imposible armonizarla con ella;

15°. Que, en el sentido explicado, basta tener presente que, desde la perspectiva doctrinal y jurisprudencial, la determinación del sistema electoral específico que se escoja representa más un problema de equilibrio de fuerzas políticas que de normativa constitucional.

Así lo expresa Dieter Nohlen: “Son las cuestiones de las relaciones políticas de fuerza las que deciden el problema del sistema electoral. La importancia y el juicio que merezcan los sistemas electorales, dependen de las relaciones sociales bajo las cuales se aplican.” (“Sistemas electorales del mundo”, Centro de Estudios Constitucionales, Madrid, 1981, p. 19).

Por su parte, y como bien recuerda la sentencia, esta Magistratura ha afirmado que el diseño específico del sistema electoral es una decisión confiada al legislador orgánico constitucional, pues la Carta Fundamental no estableció criterios específicos sobre esta materia. Esta afirmación se encuentra contenida en sentencia recaída en el Rol N° 67, del año 1989, a propósito del control obligatorio de constitucionalidad de las leyes orgánicas constitucionales de partidos políticos y de votaciones populares y escrutinios, donde un grupo de profesores de Derecho Público planteó objeciones de constitucionalidad muy similares a las que hoy formulan los senadores requirentes en relación con la relación entre electores y escaños en la nueva distribución de distritos electorales. En esta oportunidad se ha argumentado que dicha distribución infringe el principio de la igualdad del voto en forma no tolerable y sin una justificación razonable de las diferencias que genera entre electores de los diferentes distritos (artículos 1° N° 8), 1° N° 14) y artículo 1° N° 9), letra b), del proyecto).

En la aludida sentencia, Rol N° 67, el Tribunal Constitucional sentenció que en lo que respecta a la conformación de los distritos electorales, “el reparo de constitucionalidad en referencia, carece de todo fundamento, ya que el constituyente entregó al legislador de la ley orgánica constitucional respectiva la determinación de los distritos electorales.” Agregó que “ni siquiera consideró conveniente fijarle criterios o pautas de modo que el legislador ha tenido libertad para considerar factores de carácter geográfico, territorial, poblacional, socioeconómico, estratégicos, etc.” Luego de avalar la existencia del sistema electoral (binominal) consagrado en la Constitución -que se apartaba del establecido en el artículo 25 de la Constitución de 1925-, esta Magistratura reafirmó su tesis en el sentido de que “este Tribunal no estima del caso ni le corresponde entrar al detalle del sistema que sigue el proyecto para determinar los candidatos elegidos.” (C. 10°). (Énfasis agregado).

En consecuencia, y a la luz, exclusivamente, del criterio que limita la acción del Tribunal Constitucional en función del respeto a la presunción de constitucionalidad de la ley, no existe base para sostener que la sola sustitución del sistema electoral vigente –de carácter binominal- por uno proporcional, que establezca un rediseño de los distritos electorales y de los diputados que cada uno elija, pugne con la Carta Fundamental ni contravenga lo afirmado previamente por este sentenciador.

Se tiene especialmente presente –para arribar a esta conclusión- que, después de la reforma introducida al artículo 47 de la Constitución por la Ley N° 20.725, ni siquiera está señalado, en la Constitución, el número total de diputados que conforman la Cámara, los que se elevarían –acorde al proyecto analizado- desde 120 a 155, lo que viene a confirmar que la configuración específica del sistema electoral es una materia confiada al legislador orgánico constitucional. La ley indicada sólo modificó la Disposición Decimotercera Transitoria de la Constitución exigiendo que las modificaciones a la ley orgánica constitucional sobre votaciones populares y escrutinios, referidas al número de senadores y diputados, las circunscripciones y distritos existentes, y el sistema electoral vigente, requerirán del voto conforme de las tres quintas partes de los diputados y senadores en ejercicio.

Los antecedentes consignados vienen a demostrar que la configuración de los sistemas electorales –así como los criterios en que se funde- es una materia de libre decisión del legislador orgánico constitucional que no puede ser enmendada por este órgano de control constitucional, sin perjuicio de que pueda revisar el respeto de los límites relacionados con el respeto a la esencia de los derechos fundamentales y a la competencia de otros órganos del Estado –como el Poder Ejecutivo- según se analizará más adelante;

16°. Que, conforme a lo razonado en el considerado que precede, no resultando del análisis de las disposiciones impugnadas del proyecto de ley de que se trata, una pugna clara entre ellas y la Constitución al punto que torne imposible su armonización, corresponde, a juicio de quien suscribe este voto, desechar los vicios de inconstitucionalidad imputados al proyecto, referidos a la forma de distribución de los escaños en la Cámara de Diputados respecto de cada distrito electoral (artículo 1° N° 8), así como a las facultades que le corresponderán en esta materia al Consejo Directivo del Servel a partir del año 2022 (artículo 1° N° 14) y a los límites para la redefinición del redistritaje en el sentido de que cada distrito no puede elegir menos de 3 ni más de 5 diputados (artículo 1° N° 9), letra b));

17°. Que un razonamiento y una conclusión similares merece la impugnación de los artículos 1° N° 1, letra b) y 4° N° 3) del proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representación del Congreso Nacional.

Las referidas normas introducen el criterio de la “cuota de género” para propender a que el Congreso Nacional represente adecuadamente a la población masculina y femenina del país. Para estos efectos, el proyecto: a) declara que, de la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador presentadas por los partidos políticos, hayan o no pactado, así como la cantidad de candidatos hombres y candidatas mujeres no podrán superar el 60% el total respectivo, porcentaje que será obligatorio y que se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas; y b) establece que los partidos políticos que decidieren someterse al sistema de elecciones primarias para los períodos electorales de los años 2017, 2021, 2025 y 2029 sólo podrán someter a dicho procedimiento hasta el 40% del total de candidaturas a diputado o senador que pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral;

18°. Que la impugnación de los preceptos reseñados se hace residir en la infracción al derecho a la igualdad ante la ley, a la posibilidad que la Constitución Política le reconoce a los partidos políticos de definir sus candidatos mediante el sistema de elecciones primarias y al imperativo de seguridad jurídica que supone que el legislador no lesione la esencia de los derechos al momento de regularlos, complementarlos o limitarlos.

19°. Que tal como ocurre con el primer grupo de reproches que se han analizado, en este caso, ellos tampoco revisten la densidad o el peso suficientes para desvirtuar la presunción de constitucionalidad de la obra del legislador.

En efecto, la introducción de “cuotas de género” en el ordenamiento jurídico tiende, sin duda, a favorecer la mayor inclusión y representatividad de las mujeres en la vida pública de nuestros países, aún cuando los cambios culturales y de actitudes sean los que, en definitiva, consolidan el cambio que se anhela.

En este sentido, debe tenerse presente que la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) consigna, en su Preámbulo, la importancia de la participación de la mujer en las decisiones públicas, indicando su finalidad: “Convencidos de que la máxima participación de la mujer en todas las esferas, en igualdad de condiciones que con el hombre, es indispensable para el pleno desarrollo de un país, el bienestar del mundo y la causa de la paz”.

Congruente con ello, el artículo 2 de la Convención indica que: “Los Estados Partes condenan la discriminación contra la mujer en todas sus formas, convienen en seguir por todos los medios apropiados y sin dilaciones, una política encaminada a eliminar la discriminación contra la mujer y, con tal objeto, se comprometen a: a) Consagrar, si aún no lo han hecho, en sus constituciones nacionales y en cualquier otra legislación apropiada el principio de la igualdad del hombre y de la mujer y asegurar por la ley u otros medios apropiados la realización práctica de ese principio.” Por su parte, el artículo 7° de la misma Convención precisa que: “Los Estados Partes tomarán todas las medidas apropiadas para eliminar la discriminación contra la mujer en la vida política y pública del país y, en particular, garantizarán, en igualdad de condiciones con los hombres, el derecho a: Votar en todas las elecciones y referéndums públicos y ser elegible para todos los organismos cuyos miembros sean objeto de elecciones públicas (…).”

Chile es parte de la mencionada Convención desde el año 1989 (Decreto Supremo, del Ministerio de Relaciones Exteriores, de 9 de diciembre de 1989), por lo que le es aplicable la Recomendación N° 23, de 1997, del Comité de dicha Convención, que considera que “el sistema electoral, la distribución de escaños en el Parlamento y la elección de la circunscripción inciden de manera significativa en la proporción de mujeres elegidas al Parlamento. Los partidos políticos deben adoptar medidas para traducir los principios de igualdad de oportunidades y democracia e intentar lograr un equilibrio entre el número de candidatos y candidatas.” (N° 22) (Énfasis agregado);

20°. Que por otra parte, la reforma constitucional del año 1999 (Ley N° 19.611) consagró la igualdad jurídica entre hombres y mujeres modificando el inciso primero del artículo 1° de la Constitución Política en los siguientes términos: “Las personas (en lugar de los hombres) nacen libres e iguales en dignidad y derechos”, así como su artículo 19 N° 2° agregando que: “Hombres y mujeres son iguales ante la ley”. Con ello, Chile dio cumplimiento a las recomendaciones derivadas del Comité de la CEDAW para el rediseño permanente de las instituciones y normas a fin de hacer realidad la igualdad entre hombres y mujeres en Chile. La “cuota de género” que establece el proyecto de ley que sustituye el sistema binominal, sin duda, coadyuva a esa finalidad, aunque no sea el único factor determinante;

21°. Que, en consecuencia, los artículos 1° N° 1), letra b) y 4° N° 3) del proyecto de ley que se analiza no plantean una pugna clara o patente con el artículo 19 N° 2° de la Carta Fundamental, desde el momento en que la referida cuota está llamada, precisamente, a contribuir a la eficacia del valor constitucional de la igualdad de hombres y mujeres ante la ley, en este caso, en lo que se refiere a su participación en la vida pública del país;

22°. Que, por otra parte, tampoco se aprecia una contradicción nítida entre las normas que se impugnan –vinculadas a la cuota de género en las candidaturas parlamentarias- con la posibilidad que el artículo 19 N° 15°, inciso quinto, les reconoce a los partidos políticos para definir sus candidatos mediante el sistema de elecciones primarias.

En primer lugar, porque tal mecanismo de elecciones primarias constituye sólo una posibilidad a la que pueden acceder, en forma voluntaria, las mencionadas colectividades conforme a lo regulado en la Ley N° 20.640 que tiene carácter orgánico constitucional. Precisamente el artículo 19 N° 15° de la Constitución Política fue modificado por Ley N° 20.414 a fin de señalar que: “Una ley orgánica constitucional establecerá un sistema de elecciones primarias que podrá ser utilizado por dichos partidos para la nominación de candidatos a cargos de elección popular, cuyos resultados serán vinculantes para estas colectividades, salvo las excepciones que establezca dicha ley.” (Énfasis agregado).

Si un partido quisiera excluirse del sistema de primarias para definir a sus candidatos, igualmente tendría que respetar la cuota de incluir un porcentaje que supere el 60% de los candidatos o candidatas respecto del total. Luego, la existencia de “cuotas de género” en el proyecto que se impugna no impide ni coarta las elecciones primarias por las que pudiera optar un partido político, pues la obligación de incluir un determinado porcentaje de mujeres, entre los candidatos, apunta, sin duda, a la posibilidad de fortalecer su inclusión en cargos de representación popular en las elecciones definitivas;

23°. Que por las razones antes invocadas, esta Ministra previniente considera que no existe una contradicción clara y meridiana que autorice dejar sin efecto la presunción de constitucionalidad que ampara a los artículos 1° N° 1), letra b) y 4° N° 3) del proyecto de ley examinado, y que autorice que esta Magistratura declare su inconstitucionalidad expulsándolos del ordenamiento jurídico;

B.- En lo que respecta a la deferencia razonada que merece la obra del legislador.

24°. Que corresponde examinar ahora el segundo criterio, recordado en el considerado 12° de este voto, que limita el accionar del Tribunal Constitucional en función del respeto a la obra del legislador. Se trata del principio de “deferencia razonada”, que le reconoce al órgano productor de normas la flexibilidad necesaria para buscar –entre distintas fórmulas normativas- aquéllas que, ajustadas a la Carta Fundamental, le parezcan necesarias o convenientes para la mejor consecución del Bien Común como fin del Estado;

25°. Que en función del criterio aludido cabe señalar que la sentencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación de México, de 18 de octubre de 2010 (Expedientes SX-JRC-135/210, SX-JRC-143/2010 a SX-JRC-146/2010 y SX-JDC-350/2010 a SX-JDC-353/2010 acumulados) señala que los principios rectores de la representación proporcional para cualquier interpretación de normas son, esencialmente, los siguientes: a) Una fase de traducción proporcional de votos en escaños y b) Una segunda fase que permita ajustar la equivalencia entre votos obtenidos y la integración total de la Cámara (Fs. 70).

Por su parte, Dieter Nohlen ha puntualizado que “en cuanto a principios de representación, la elección mayoritaria y proporcional se distinguen mutuamente según la desproporción que establecen u ocasionan entre votos y escaños”. De esta forma, la manera de obtener mayorías de votos, en un sistema proporcional, no solamente dependerá de la votación (earned majority), sino que se consigue también a través del sistema electoral y a través de su efecto de desproporción más o menos fuerte en la relación entre votos y escaños (manufactured majority). (Ob. cit, pp. 640-641).

Así, los sistemas proporcionales buscan asegurar representaciones más amplias e inclusivas de las diversas fuerzas políticas e independientes sin que las mayorías absolutas o más fuertes desplacen a quienes obtienen menor representación en la elección y que igualmente pueden optar a escaños producto de la configuración específica del sistema electoral. La mejor demostración de que no existe una fórmula única para lograr este propósito es la diferencia que se hace, en doctrina, entre fórmulas proporcionales puras y fórmulas proporcionales atenuadas o moderadas;

26°. Que de lo antes señalado se desprende que efectivamente el legislador puede escoger entre distintas fórmulas normativas aquélla que, en su concepto, traduzca mejor el propósito que se persigue con el sistema electoral. Si la opción es por el sistema de representación proporcional, lo importante es que se expliciten los criterios conforme a los cuales se efectúa la distribución de escaños y su relación con los distritos electorales para efectos de analizar la razonabilidad de la misma en forma congruente con el principio de la igualdad del voto que es una clara manifestación de la igualdad de toda persona ante la ley.

Desde el punto de vista explicado, no yerran los senadores requirentes cuando advierten al Tribunal Constitucional sobre la necesidad de examinar el pleno respeto a dicho principio, pues, como se ha dicho, la deferencia razonada supone que el legislador pueda elegir -entre distintas fórmulas normativas- el sistema electoral por el que se rija el Estado, pero respetando los derechos fundamentales de las personas al momento de verificarse una elección, básicamente el derecho a la privacidad del sufragio, a la igualdad del mismo, y a la igualdad entre partidos políticos e independientes en lo que respecta a la presentación de candidaturas como a su participación en los procesos electorales. Entre nosotros, los dos primeros derechos están consagrados en el artículo 15, inciso primero, de la Carta Fundamental mientras que el último, lo está en el artículo 18, inciso primero, de la misma;

27°. Que, en lo que respecta a la igualdad del sufragio, expresada en la Carta Fundamental, como “sufragio igualitario”, el profesor Alan Bronfman postula que los términos utilizados por el Constituyente, en el artículo 15 de la Carta Fundamental, indican que “la exigencia de igualdad del sufragio debiera proteger, al menos, la equivalencia en naturaleza, forma, calidad o cantidad de los votos emitidos por los ciudadanos. La doctrina, siguiendo la experiencia histórica, sostiene que los ámbitos en los que puede erigirse la igualdad son dos. El primero es el formal o numérico, que impone el otorgamiento del mismo número de votos a cada uno de los ciudadanos que emite su sufragio. El segundo es el sustancial o de igual valor de resultado, que exige proporcionalidad entre la cantidad de votos y el resultado obtenido, esto es, igualdad cuantitativa e igualdad de posibilidades de eficacia. Cabe aquí notar que si no existiese la garantía de la igualdad sustancial, la regulación electoral podría asignar idéntica representación parlamentaria a territorios con población dispar, y por esta vía, menoscabar el valor sustantivo de un voto que en lo formal es igual. La igualdad sustancial exige utilizar una dimensión cuantitativa para distinguir la situación de vulneración del principio de igualdad de la mera imperfección matemática inherente a la aplicación de las reglas de cualquier sistema electoral no proporcional.” (“Igualdad del voto y configuración del territorio electoral de los diputados en Chile.” En: Revista de Derecho de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso XL, Valparaíso, 2013, pp. 368-369);

28°. Que en el debate que dio origen al establecimiento de la norma contenida en el artículo 15, inciso primero, de la Carta Fundamental se expresaron las siguientes ideas para precisar el alcance del rasgo “igualitario” del sufragio.

En Sesión N° 74, de 30 de septiembre de 1974, el comisionado Jaime Guzmán consignó que por sufragio igualitario, debe entenderse “la expresión más adecuada para excluir toda fórmula que pondere de manera distinta el sufragio de un ciudadano respecto del de otro.” (Énfasis agregado). Añadió que ”igualitario” es una palabra que tiene un tenor literal, que, a su juicio, apunta solamente a la interpretación que se le quiere dar y excluye toda otra.” En la misma sesión, el comisionado Jorge Ovalle concordó con esta explicación sosteniendo que “el término igualitario debe entenderse en el sentido de que todos los votos valen lo mismo. Cada persona un voto.” Agregó, más adelante, que “el voto igualitario es el único democráticamente aceptable.” El Presidente de la Comisión, Enrique Ortúzar añadió, por su parte, que “vale lo mismo el voto del más humilde de los obreros que el del más distinguido profesional. Ese es su opinión del significado de “igualitario””.

En la misma sesión que se viene recordando, el comisionado Alejandro Silva Bascuñán propuso cambiar la expresión sufragio “igualitario” por la de sufragio “singular” argumentando que “con la palabra “igualitario” deben adoptarse toda clase de precauciones, porque la igualdad siempre cabe considerarse entendida como una calidad que ocupan individuos que están en un mismo nivel, en una misma situación, de donde se deriva que pueden existir distintos niveles, lo que haría que el sufragio tuviera la misma ponderación para quienes se encuentren en una situación determinada. En cambio, la palabra “singular” da la idea de que va a tener una sola influencia en el resultado (…).” (Énfasis agregado).

En suma, y aun cuando no prosperó la proposición del comisionado Silva Bascuñán, puede colegirse que, el espíritu del Constituyente se asocia a la comprensión de que el sufragio igualitario importa que todos los votos valen igual, pero que si las personas están en una situación distinta –por ejemplo, porque pertenecen a comunas menos pobladas o más aisladas- no se infringiría el carácter igualitario del sufragio por establecer diferencias en la asignación de escaños. Lo importante es que los criterios de distinción en la distribución de escaños se encuentren explicitados para eliminar cualquier asomo de arbitrariedad que importe favorecer indebidamente a unos electores por sobre otros (“gerrymandering”);

29°. Que, teniendo a la vista las explicaciones reproducidas, es conveniente recordar que el Mensaje N° 076-362, que dio origen al proyecto de ley que reemplaza el sistema electoral vigente, precisa que “el proyecto se inscribe en el contexto de la tradición republicana chilena, en el sentido que cada una de las Cámaras responderá, principalmente, a un principio de representación particular. En el caso del Senado, el criterio básico es el equilibrio entre los distintos territorios. Tratándose de la Cámara de Diputados, el principio rector debe ser la igualdad en el voto de todos los chilenos.” Aclara, sin embargo, que no se trata de principios que se apliquen de modo absoluto. Así, en el caso de la Cámara de Diputados, “el proyecto propone conciliar el principio de igualdad de voto con el propósito de no castigar en demasía la representación política de las zonas extremas del territorio.” (Pág. 6) (Énfasis agregado).

Congruente con lo expresado, el Mensaje aclara, más adelante, que la nueva distribución de escaños por distritos electorales trata de corregir la subrepresentación de los grandes centros urbanos del país (a los cuales se asignan 23 de los nuevos escaños adicionados a los actuales), pero sin descuidar a cada una de las demás regiones del país (a las cuales se asignan, en total, 12 de los nuevos escaños). (Pág. 7).

Justificando S.E. la Presidenta de la República el impacto que tal forma de distribución pudiera tener en cuanto a la igualdad del voto indica que:

• “Al interior de algunas de esas 12 regiones, el distritaje actual castiga una zona en relación a la otra. La adición de un escaño permite corregir ese defecto, sin reducir un diputado a un área geográfica.”

• “En el caso de otras regiones, de menor población, han pesado consideraciones geopolíticas y de integración nacional. Es el caso de las zonas extremas de nuestra República, tanto en el norte como en el sur (…).” (Página 11 del Mensaje).

Concluye la Jefa de Estado agregando que se ha procurado conciliar dos aspectos del valor de la igualdad: el que toma en cuenta la igualdad en el peso del voto y el que busca proporcionar a todos nuestros compatriotas la posibilidad de que, tratándose de la Cámara Política, opere una fórmula que permita la representación más cabal y precisa de mayorías y minorías. (P. 9);

30°. Que, en consecuencia, la sola lectura del Mensaje que dio origen al proyecto de ley examinado demuestra que las “supuestas” excepciones al principio de la igualdad del voto susceptibles de tornar en inconstitucionales algunas de sus normas, se encuentran justificadas. Y lo están no sólo desde la perspectiva de un sistema proporcional moderado o atenuado –que es una opción legítima para el legislador- sino que, también, desde la óptica del cumplimiento de ciertos deberes que la propia Constitución asigna al Estado como el de asegurar el derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional (artículo 1°, inciso final) y el de promover el fortalecimiento de la regionalización del país, así como el desarrollo equitativo y solidario entre las regiones, provincias y comunas del territorio nacional (artículo 3°, inciso final).

Expresado en otros términos, como el principio de la igualdad del voto (o más propiamente del sufragio) asegurado en la Carta Fundamental, no es absoluto, resulta perfectamente posible que pueda ser equilibrado con otros principios que, sin sacrificio de la esencia del derecho de sufragio (pues no lo impide ni le impone trabas que coarten su libre ejercicio), permitan el logro de finalidades que constituyen deberes del Estado en el logro de las metas que derivan de la consecución del bien común como fin del Estado;

31°. Que, de esta forma, la Ministra que suscribe este voto no ve razón suficiente para apartarse de la deferencia razonada que merece la obra del legislador, expulsando del ordenamiento jurídico chileno los artículos del proyecto de ley analizado y que inciden en la forma de distribución de los escaños en la Cámara de Diputados respecto de cada distrito electoral (artículo 1° N° 8), en las facultades que le corresponderán en esta materia al Consejo Directivo del Servel a partir del año 2022 (artículo 1° N° 14) y en los límites para la redefinición del redistritaje en el sentido de que cada distrito no puede elegir menos de 3 ni más de 5 diputados (artículo 1° N° 9), letra b)). Lo anterior por no importar discriminaciones arbitrarias que carezcan de razonabilidad y porque, por el contrario, expresan la idea de un sistema de representación proporcional atenuada o moderada compatible con el pleno respeto al principio del sufragio igualitario en la forma consagrada en el artículo 15, inciso primero, de la Carta Fundamental;

32°. Que los argumentos vertidos precedentemente permiten afirmar, además, que si el Tribunal Constitucional entrara a examinar –y, eventualmente, a corregir- las fórmulas numéricas que constituyen la base del redistritaje contenido en el proyecto de ley que se examina estaría vulnerando, a nuestro juicio, un principio que ha sido muy importante en su jurisprudencia histórica y que lo ha llevado a no revisar el conjunto de apreciaciones de mérito, conveniencia u oportunidad que lo llevan a adoptar una u otra fórmula normativa. Ya se ha sostenido que el único límite que tiene tal actitud de respeto hacia la obra legislativa consiste en que el Congreso Nacional pudiese exceder sus atribuciones, infringiendo los márgenes contemplados en el texto, principios o valores esenciales de la Carta Fundamental, o violentando el proceso de formación de la ley. En la especie, ello no ha ocurrido. El redistritaje que será la base de conformación de la nueva Cámara de Diputados se ha establecido sobre bases razonables que, lejos de infringir valores constitucionales, tienden a su plena realización, por lo que este razonamiento es un argumento adicional para rechazar el requerimiento de autos en lo que se refiere a la impugnación de los artículos detallados en el considerando anterior;

33°. Que el principio de deferencia razonada hacia la obra del legislador también lleva a rechazar las impugnaciones a los demás artículos impugnados por los senadores requirentes, pues, tal como se argumentó en la letra A.- del presente Capítulo, los artículos 1°, N° 1, letra b) y 4° N° 3), no importan una infracción a la igualdad ante la ley y, específicamente, a la facultad que la Constitución le reconoce a los partidos políticos de desarrollar elecciones primarias para definir sus candidatos, lo que constituye una opción, esto es, un acto facultativo para los partidos políticos, que no se ve obstaculizado por la existencia de cuotas de género que deben ser respetadas en las candidaturas definitivas, y sobre las cuales nuestro Estado está honrando sus compromisos internacionales. Así, se ha buscado, por el legislador, una fórmula legítima que no vulnera derechos fundamentales;

C. Consideraciones finales relativas a los estándares para dejar sin efecto la obra del legislador.

34°. Que los razonamientos que preceden permiten a esta jueza previniente efectuar algunas consideraciones finales en relación al rechazo del requerimiento de autos, las que tienen relación con los dos últimos estándares recordados en el considerando 12° de este voto que autorizan al tribunal Constitucional a dejar sin efecto la obra del legislador democrático;

35°. Que la declaración de inconstitucionalidad, con efectos erga omnes, sólo puede pronunciarse cuando no exista ninguna interpretación posible que permita ajustar el o los preceptos cuestionados a la Carta Fundamental. Esta es una forma racional de respetar la supremacía constitucional en forma compatible con el principio de separación de funciones del Estado, aunque sujeto a frenos y contrapesos.

En los Capítulos III y IV de la sentencia –que compartimos- ha quedado claramente demostrado que, en lo que respecta a la igualdad entre partidos políticos e independientes en los procesos electorales, asegurada por el artículo 18 de la Carta Fundamental, el precepto del proyecto que se ha impugnado respecto de esta materia, admite otra interpretación que se concilia perfectamente con la Ley Suprema. Lo mismo ocurre con los numerales 8) y 10) del artículo 1° del proyecto de ley que inciden en el financiamiento del mayor número de diputados y senadores consultado en él.

Por su parte, este voto ha analizado –desde una perspectiva similar aunque no idéntica a la de la sentencia- la conformidad con la Constitución Política de las normas del proyecto del proyecto de ley referidas a la introducción de cuotas de género en las candidaturas parlamentarias como a la posibilidad que asistía al legislador orgánico constitucional de definir –con libertad- la configuración precisa de los nuevos distritos electorales. Todas esas normas también son susceptibles de interpretarse conforme a la Carta Fundamental, según se ha razonado;

36°. Que, así, no existen razones para declarar inconstitucional ninguna de las normas impugnadas por los senadores requirentes en la medida que todas ellas admiten una interpretación que las conforma a la Ley Suprema;

37°. Que, finalmente, esta Ministra ha tenido presente, para rechazar el requerimiento en su integridad, que un último estándar que debe observar el juez constitucional ante una solicitud de inconstitucionalidad es que no puede efectuarse tal declaración cuando de ella se van a derivar efectos más perjudiciales que los que traería la subsistencia de las normas impugnadas dentro del ordenamiento jurídico.

En este sentido, estimamos que ninguna de las argumentaciones de los requirentes ha tenido la contundencia para dejar sin efecto la obra del legislador. Los efectos sobre los que se ha llamado la atención dicen relación con temas de legalidad y de mérito mas no de constitucionalidad como ocurre con la preocupación sobre cómo se financiarán las asignaciones parlamentarios al producirse un aumento de los escaños en ambas Cámaras, lo que no se divisa pueda, por ejemplo, impedir el ejercicio de la función parlamentaria. Al menos, el requerimiento no lo menciona y el juez debe juzgar conforme al mérito del proceso.

Similar ejercicio argumental puede realizarse respecto de las demás impugnaciones contenidas en el libelo de los senadores requirentes;

38°. Que, por lo tanto, tampoco se ha dado satisfacción a este estándar -relacionado con los efectos de la declaración de inconstitucionalidad- para dejar sin efecto la obra del legislador.

Acordada con el voto en contra de los Ministros señor Iván Aróstica Maldonado, señora María Luisa Brahm Barril y señor Cristián Letelier Aguilar, quienes estuvieron por acoger el requerimiento de autos, sobre la base de las consideraciones generales y particulares que enseguida exponen:

CONSIDERACIONES GENERALES

1°) Que el artículo 4° de la Constitución Política de la República señala que Chile es una república democrática, en la cual el sistema de gobierno se basa en la soberanía entendida como la voluntad suprema decisoria.

Ello se concreta, entre otras manifestaciones, en que el pueblo elige a los integrantes de los órganos básicos del poder estatal, lo que se expresa en el artículo 5° del texto constitucional en vigor, que establece que la soberanía reside esencialmente en la nación y que su ejercicio se realiza por el pueblo a través del plebiscito y elecciones periódicas;

2°) Que, conforme a lo anterior, el electorado, como órgano soberano más directo y concreto, no puede menos que quedar en una posición de jerarquía superior a la que compete a las autoridades, las cuales están subordinadas a la voluntad del pueblo en cuanto éste es titular de la soberanía, teniendo como límite el respeto a los derechos que emanan de la naturaleza humana.

“El pueblo o la Nación como soberano se concreta, pues en el electorado a través del plebiscito y de elecciones periódicas” (Alejandro Silva Bascuñán, “Principios que informan la Constitución Política, Revista Chilena de Derecho, vol. 10 N° 2, p. 439);

3°) Que, junto con definir y dejar meridianamente claro que el ejercicio de la soberanía corresponde al pueblo, la Constitución establece otro presupuesto en su artículo 1°, al asegurar el derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional.

Lo cual se traduce en el ejercicio de los derechos políticos de hombres y mujeres, entendiendo por tales “aquellos derechos fundamentales que tienen por finalidad proteger la participación de los ciudadanos en la gestión de los asuntos públicos y, en consecuencia, están más inmediatamente relacionados con el funcionamiento de las instituciones democráticas.” (Luis María Díez Picazo, “Sistema de derechos fundamentales”, Thompson Civitas, tercera edición, cap. XIV, p. 395). Entre los cuales está el derecho de sufragio, como manifestación palmaria del ejercicio de la soberanía;

4°) Que este Tribunal Constitucional ha señalado que “el artículo 1° de la Carta Fundamental, constituye uno de los preceptos más fundamentales en que se basa la institucionalidad, ya que por su profundo y rico contenido doctrinario refleja la filosofía que inspira nuestra Constitución y orienta al intérprete en su misión de declarar y explicar el verdadero sentido y alcance del resto de la preceptiva constitucional”.

El inciso final de este artículo señala como uno de los deberes fundamentales del Estado “asegurar el derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional”. “Esta norma es de vastas proyecciones, pero sin duda adquiere especial relevancia en los procesos electorales y plebiscitarios, ya que, a través de ellos, el pueblo ejerce la soberanía nacional manifestando su parecer sobre las personas que estarán a cargo de llevar adelante las funciones básicas del Estado en procura de obtener su finalidad primordial” (STC Rol N° 53-1988, considerando 12°);

5°) Que, conforme a lo precedentemente expuesto, el establecimiento de un sistema electoral para el Congreso Nacional impone a los poderes del Estado obligaciones que permitan garantizar los principios referidos en orden a dar plenitud a los derechos políticos, particularmente al ejercicio del derecho de voto que tienen los ciudadanos en nuestro país.

En este sentido, útil es recordar que los sistemas electorales, siendo técnicas que tienen por fin determinar los cargos que corresponden a los diversos partidos políticos e independientes, sobre la base de los votos obtenidos en una elección, deben reflejar y recoger en forma fidedigna y lo más ajustado que se pueda, lo expresado por la Constitución Política en la materia a que se refiere el requerimiento interpuesto ante este Tribunal Constitucional;

6°) Que no es discutido que el legislador orgánico constitucional tenga “competencia” en la materia, pues ésta se la otorga el artículo 18 de la Carta Fundamental. Tampoco se disputa que el legislador orgánico constitucional posea en ella una amplia “competencia discrecional” (STC 67-1989).

Mas, discrecionalidad no es sinónimo de arbitrariedad en el ejercicio de dicha potestad; ni puede confundirse con exención de control de constitucionalidad. Dado que la Ley sobre Votaciones Populares y Escrutinios está llamada a materializar una de las Bases de la Institucionalidad, comoquiera que a través de las elecciones periódicas -según se ha dicho- el pueblo ejerce nada menos que la soberanía nacional (artículo 5° inciso primero constitucional), al amparo de libertades e igualdades esenciales, entonces las normas del proyecto cuestionadas deben ser examinadas conforme al más alto estándar de juridicidad, a fin de despejar toda sombra de iniquidad o de menoscabo a los valores y principios que inspiran a la Carta Fundamental;

7°) Que los principios de probidad y de publicidad recogidos en el artículo 8° de la Carta Fundamental, y que han de tener cabida en todas las actuaciones del Estado, se expresan -entre otros aspectos- en lo razonable e imparcial de sus decisiones, de modo que tiendan a hacer primar el bien común general por sobre cualquier interés particular.

En materia legislativa electoral, la aplicación de tales principios obliga a ser especialmente cuidadoso, en orden a no provocar situaciones disímiles que podrían mal percibirse por la ciudadanía, como inspiradas en el propósito indebido de conservar el control del Congreso Nacional por la vía de maximizar la representación parlamentaria futura de quienes aprobaron el proyecto;

8°) Que no es lícito debilitar la fuerza normativa de tales garantías y postulados constitucionales básicos, acá comprometidos, aduciendo que -como simples principios y no reglas jurídicas- implicarían meros mandatos de optimización, cuya plenitud y eficacia real habrían de quedar supeditadas a ulteriores apreciaciones coyunturales o utilitaristas del legislador.

Tales fundamentos y derechos en que se asienta el régimen patrio, son exigibles y justiciables, porque si -como plantea el presente requerimiento senatorial- vienen amagados por el legislador, éste incumpliría desde ya la prohibición de lesión que pesa directa e inmediatamente sobre el Estado (artículos 5° y 6° de la Constitución), lo que a esta Magistratura corresponde sin excusa sentenciar (artículo 93, inciso primero, N° 3, constitucional).

Conviniendo reiterar que cuando la Constitución asegura con máximo vigor un catálogo superlativo de derechos esenciales, lo ha hecho precisamente con el afán de salvaguardarlos de los altibajos legislativos y de la discrecionalidad administrativa, derivados de mudables coyunturas políticas;

9°) Que, apartándose de la exposición seguida en la precedente sentencia, estos disidentes se ceñirán estrictamente al orden en que las impugnaciones fueron planteadas en el requerimiento de autos.

Es decir, este voto abordará los siguientes cinco capítulos: I. Régimen transitorio para la elección de diputados en lo referente a distritos y escaños; II. Límite máximo y mínimo de parlamentarios a elegir en régimen permanente; III. Cuotas de género en las primarias; IV. Desigualdad entre partidos políticos e independientes en la presentación de candidaturas, y V. Gastos fiscal por asignaciones parlamentarios;

CAPÍTULO I: RÉGIMEN TRANSITORIO SOBRE ELECCIÓN DE DIPUTADOS, DISTRITOS Y ESCAÑOS

1. Conformación transitoria de los nuevos distritos y diputados que se elegirán en cada uno de ellos, sumando un total de 155 (modifica el artículo 179 de la ley 18.700)

10°) Que los senadores requirentes fundan, en esta parte, la impugnación al “Proyecto de ley que sustituye al Sistema Electoral Binominal por un sistema electoral de carácter proporcional e inclusivo que fortalece la representación del Congreso Nacional”, porque a su juicio existiría desigualdad del voto en la elección de diputados en al menos diez distritos, los cuales consideran desiguales al asignarse diputados, sin que exista una razonable justificación.

Se hace presente que estos sentenciadores no tienen objeción constitucional acerca del régimen permanente en materia de elección de diputados. No obstante, la distribución que el legislador hace en el número de diputados en relación con los electores en determinados distritos, merece los reparos de constitucionalidad que se expresan en los considerando siguientes;

11°) Que resulta conveniente recordar, sobre la igualdad de voto, la discusión que tuvo lugar en la Comisión redactora de la actual Constitución sobre la materia, donde el comisionado Jaime Guzmán deja constancia que “Por sufragio igualitario debe entenderse la expresión más adecuada para excluir toda fórmula que pondere de manera distinta el sufragio de un ciudadano respecto del de otro” agregando “Si es igualitario, queda subentendido que el efecto del voto en su ponderación es igual para todos los ciudadanos” (Actas de la Comisión de Estudios de la Nueva Constitución, sesión N° 74 de 30 de septiembre de 1974);

12°) Que el principio de igualdad de voto implica que cada votante tenga la misma cantidad, esto es, una persona un voto, pero que además tenga la misma influencia en el resultado de la elección, lo que significa que un voto de una persona, verbigracia, de la zona norte tenga el mismo valor que el ciudadano que sufraga en la zona sur, pero además pueda concretar la posibilidad de ser elegido, lo que se traduce en que su voto tenga el mismo valor y la misma posibilidad de éxito.

La doctrina constitucional denomina a ello la vertiente activa y la vertiente pasiva del sufragio, siendo la primera el derecho de voto o condición de elector y la segunda, el derecho a ser candidato o condición elegible;

13°) Que las ideas expresadas precedentemente se traducen en “el principio que el voto de una persona emitida en una elección debe tener un valor equivalente al voto emitido por cualquier otro integrante de la comunidad política” (Alan Bronfman, “Igualdad del voto y configuración del territorio electoral de los diputados en Chile”, Revista de Derecho PUC de Valparaíso, año 2013, p. 369).

De tal manera que, el legislador para actuar conforme al principio enunciado al establecer un sistema electoral tiene que buscar parámetros objetivos que permitan acercarse lo más posible a dicho principio, dado que es imposible alcanzar una igualdad matemática;

14°) Que constituyen parámetros esenciales el uso de la división política o administrativa como zona electoral, el asignar los escaños en proporción a los habitantes de esa zona electoral o bien conforme a los electores de la misma, que la proporción esté dentro de un marco tolerable.

Sobre este aspecto, interesante resulta mencionar que la oficina para instituciones democráticas y derechos humanos de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa señala que la variación no puede ser mayor a un 10% y la Comisión de Venecia establece un tope tolerable de un 15%. Resulta esencial que la Ley Electoral contenga los fundamentos de la división electoral y su respectiva asignación de escaños;

15°) Que no se divisa en el sistema electoral que se instaura, una proporcionalidad en los términos referidos y, lo que es más evidente, no contiene el proyecto de ley justificaciones razonadas, respecto a determinados distritos donde se configura una especie de privilegio al establecer una mayor cantidad de diputados en una zona en desmedro de otra que tiene similar cantidad de electores, siendo el más palmario y evidente el nuevo distrito 4 en relación al distrito 2, donde teniendo ambos similar número de habitantes, uno elegirá cinco diputados y el otro tres diputados, sin que el proyecto de ley justifique la razón de esta desproporción.

La misma desigualdad se observa en otros distritos que eligen solamente cuatro diputados (N°s 16, 18, 22 y 25), teniendo más habitantes que el mencionado distrito 4, imponiéndose así un criterio nominalista arbitrario por sobre el respeto al principio de igualdad en el voto;

16°) Que, a la luz de la garantía de igualdad ante la ley que asegura a todas las personas la Carta Fundamental (artículo 19, N° 2, inciso segundo), y con no menos énfasis a los votantes en materia electoral (artículo 15, inciso primero), este reclamo debió ser atendido, comoquiera que las diferencias acusadas no se explican con algunos criterios objetivos y pertinentes que forzaran hacer la discriminación.

Siendo de advertir que tales criterios o factores de diferenciación -en el caso de los distritos que motivan el actual reclamo senatorial- debieron individualizarse transparentemente en el mensaje presidencial que dio inicio al proyecto de que se trata o durante la discusión parlamentaria que le siguió, con arreglo al artículo 8° de la Constitución, lo que no se hizo. No procediendo que tales motivos o causas de justificación se brinden a posteriori, en forma genérica, en las observaciones al requerimiento hechas por la Presidencia de la República (fs. 454), ni menos en la sentencia precedente; tal como no puede un tribunal superior completar un fallo que es reclamado ante él por el vicio de carecer de fundamentos bastantes;

17°) Que, la vulneración del principio de igualdad de votos, no solo tiene efectos jurídico-constitucionales, en que un distrito con similar población elija menos diputados que otro, sino que además provoca un perjuicio a los ciudadanos que como consecuencia del sistema electoral tienen menos representantes, atendido que la función parlamentaria contemporánea, particularmente en el caso de los diputados, no sólo se limita a las atribuciones establecidas en el artículo 52 de la Constitución Política y de las legislativas propiamente tales, ya que un diputado es un agente permanente que representa ante las demás autoridades los problemas de su distrito, y de aquellas diversas organizaciones sociales existentes en él, constituyéndose así en un catalizador y conductor de las inquietudes de sus electores.

Por consiguiente, si un distrito tiene 6 diputados y otro tiene 4, en la realidad se provoca una desigualdad palmaria, en desmedro del que tiene menos diputados en relación con las inquietudes y problemas que afecten a las comunas que conforman cada distrito. Tan claro es lo descrito, que existe la denominada “Semana Distrital”, que consiste en que en una semana completa ambas ramas del Congreso Nacional suspenden sus actividades legislativas para que senadores y diputados comparezcan a las zonas territoriales que representan a fin de atender y escuchar a sus mandantes;

18°) Que, cuando el legislador ha establecido que el distrito 4, con 221.206 electores, elija 5 diputados, y que el distrito 2, con 222.024 electores elija 3 diputados, está privilegiando a las comunas que conforman aquel distrito 4 y perjudicando a las comunas componen este distrito 2, no solo por la desigualdad del voto explicado precedentemente, sino que también por las razones prácticas de la función parlamentaria reseñada en el numeral anterior.

Lo que vulnera, con mayor evidencia, el artículo 19, N° 2, de la Constitución;

2. Artículo 25° transitorio que dispone la aplicación del artículo 179 bis a partir del año 2024

19°) Que el requerimiento solicita la declaración de inconstitucionalidad del nuevo Artículo 25 Transitorio, que se incorpora a la Ley N° 18.700 en virtud del N° 14 del artículo 1° del proyecto, el cual textualmente expresa: “Artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.”.

Por considerar que infringe los artículos 15 y 19, N° 2, de la Constitución Política de la República;

20°) Que de la disposición transitoria transcrita se colige: a) que el procedimiento contemplado en el artículo 179 bis que se agrega a la Ley N° 19.700 tendrá aplicación a partir de la elección de diputados del año 2025, y b) que la elección de diputados correspondiente a los años 2017 y 2021 se aplicará el nuevo artículo 179 introducido en la Ley N° 19.700 que establece 28 distritos electorales determinando el número de diputados que cada distrito elige, con lo cual se hace palmario la desigualdad en el voto que exige el artículo 15° de la Constitución Política al establecer que las votaciones populares el sufragio será personal, igualitario, secreto y voluntario;

21°) Que ni el Mensaje del proyecto de ley ni las observaciones de S.E. la Presidenta de la República, formuladas al requerimiento de los senadores, contiene fundamentos o justificación alguna acerca de los motivos que tuvo el legislador para aplazar el sistema de distribución de escaños permanentes por dos elecciones parlamentarias consecutivas, aplicando la distribución de diputados efectuada en el artículo 179.

Sobre este aspecto, con los datos actualmente existentes, puede aplicarse el régimen permanente establecido en el artículo 179 bis;

22°) Que se podría esgrimir, no con pocas razones, que el legislador tiene plena facultad para determinar la fecha de vigencia de una norma jurídica. No obstante, no se establece con claridad el fundamento de la posposición en la vigencia del sistema permanente, establecido en el artículo 179 bis incorporado a la Ley N° 18.700, y que por aplicar la referida disposición por dos elecciones el sistema temporal, al sostener, este voto de minoría la inconstitucionalidad del nuevo artículo 179, consecuencialmente también lo sea esta disposición transitoria, por vulnerar los artículos 15 y 19, N°2, del Código Político;

CAPITULO II: REGIMEN ELECTORAL QUE ESTABLECE UN LIMITE MINIMO (3) Y OTRO MAXIMO (8) EN LA ELECCION DE DIPUTADOS (Artículo 179 bis de la Ley N° 18.700)

23°) Que el legislador, al momento de instaurar un nuevo sistema electoral, no puede preterir la historia constitucional del país. Por esto resulta pertinente recordar lo que en materia de número de diputados y su elección establecían las Constituciones de 1833 y 1925, así como el texto primitivo de la Carta Fundamental vigente.

Los artículos 18 y 19 de la Constitución Política de 1833 establecían que la Cámara de Diputados se componía de miembros elegidos por los departamentos en votación directa y en la forma determinada en la Ley de Elecciones y establecían la elección de un diputado “por cada veinte mil almas, i por una fracción que no baje de diez mil”. Cabe recordar que la división política y administrativa del país en aquellos años se configuraba por provincias y cada provincia por departamentos.

La Constitución Política de 1925, en su artículo 37, consagraba un sistema similar, refiriendo que “Se elegirá un Diputado por cada treinta mil habitantes y por una fracción que no baje de quince mil”.

Como se podrá observar, el constituyente de las dos Cartas Fundamentales citadas tuvo en consideración la cantidad de habitantes para determinar el número de diputados y la proporcionalidad en la representación del soberano.

El texto primitivo de la Constitución Política de 1980, en su artículo 43, estableció que “La Cámara de Diputados está integrada por 120 miembros elegidos en votación directa por los distritos electorales que establezca la ley orgánica constitucional respectiva.”;

24°) Que, se consignan las disposiciones constitucionales precedentes, con el objeto de destacar que el Sistema Electoral para la elección de diputados contemplado en el Proyecto de Ley impugnado por los senadores requirentes, no se aviene a nuestra tradición jurídica constitucional, dado que configura un procedimiento conforme al cual se hará la asignación de escaños en los 28 distritos en un rango en que se podrán elegir no menos de 3 ni más de 8 diputados, hasta completar los 155 diputados, cantidad que establece el artículo 179 del proyecto. Así lo instaura la letra b) del artículo 179 bis incorporado a la Ley N° 18.700;

25°) Que el procedimiento referido, a juicio de estos sentenciadores, vulnera la igualdad ante la ley consagrada en el artículo 19, N° 2 de la Constitución Política de la República, y particularmente la prohibición que tiene el legislador de establecer diferencias arbitrarias.

En este sentido, la Ley N° 20.609 (Ley Zamudio) ha definido la discriminación arbitraria como toda distinción, exclusión o restricción que carezca de justificación razonable, y ciertamente el establecimiento de mínimos y máximos de diputados a elegir por distrito, conlleva a una discrecionalidad en la repartición de escaños, discrecionalidad que el Proyecto de Ley no argumenta racionalmente, más bien no hay fundamento alguno, aduciéndose en el mensaje ideas muy generales sobre el método eleccionario referido;

26°) Que el sistema que se viene a instaurar en el artículo 179 bis de la Ley N° 18.700, junto con establecer diferencias arbitrarias, vulnera el principio de igualdad de voto, ya latamente explicado en los considerandos precedentes. Pero además vulnera el trato igualitario, que es un criterio que el legislador siempre debe considerar para que su obrar se ajuste a los requerimientos de la Carta Fundamental. Al respecto, “siguiendo una tradición de pensamiento que se remonta a Aristóteles, los posibles criterios de la igualdad de trato son sustancialmente dos, denominados respectivamente igualdad numérica e igualdad proporcional. La igualdad numérica se resume en la fórmula “lo mismo a todo” y exige dar idénticos beneficios o cargas a todos los miembros del grupo” y es el ejemplo más claro de la igualdad del voto, en virtud del cual cada sufragio vale lo mismo “la igualdad proporcional, por su parte, responde a la fórmula “lo mismo a los iguales; es decir debe tratarse de modo igualar a quienes se hallan en idéntica situación y de modo desigual a quienes están en situación distinta” (Luis María Díez-Picazo, “Sistema de derechos fundamentales” citado, cap. XIV, p. 203-204);

27) Que, como ha expresado este Tribunal Constitucional, “las normas jurídicas deben ser iguales para todas las personas que se encuentren en las mismas circunstancias y, consecuencialmente, diversas para aquellas que se encuentren en situaciones diferentes, no se trata, de una igualdad absoluta si no ha de aplicarse la Ley en cada caso conforme a las diferencias constitutivas del mismo. La igualdad supone, por lo tanto, la distinción razonable entre quienes no se encuentren en la misma condición” (Rol N° 1.254 considerando 46°).

Conforme a ello, el sistema electoral de elección de diputados establecido en los artículos 179 y 179 bis del Proyecto de Ley no se ajusta al criterio de igualdad de trato, específicamente en lo que se refiere a la igualdad numérica, y que el legislador debió respetar en mérito a los artículos 15 y 19 N° 2 de la Constitución Política de la República;

28°) Que, respecto al voto igualitario, en esta parte, cabe recordar lo expresado por los ministros de este Tribunal Constitucional, señores Carlos Carmona Santander, Domingo Hernández Emparanza y Gonzalo García Pino en una reciente prevención:

“Que la proporcionalidad poblacional obedece a principios aún más relevantes. Primero al hecho de que “Chile es una república democrática”, a que su modo organizativo del poder regional lo adopta bajo el método electivo directo de los consejeros y bajo los criterios generales de una votación popular, esto es, que “el sufragio será personal, igualitario, secreto, y voluntario” (artículo 15, inciso 1°, de la Constitución). Lo anterior, no implica más ni menos que adoptar el principio de “una persona, un voto” en cada elección. De esta manera, los sistemas electorales deben respetar el principio de igualdad electoral en la ley, no sólo para otorgarle un voto a cada persona sino para que las consecuencias del resultado electoral obedezcan al mismo principio. Ello no es más que exigir la aplicación de un criterio de trato igualitario al interior del sistema electoral, de conformidad con el artículo 19 N° 2 de la Constitución” (Rol N° 2.466-2013);

29°) Que, aunque se afirmó en estrados que el sistema electoral que instaura la reforma a la Ley N° 18.700 constituye un avance en la igualdad de voto, la asignación de escaños en relación con el número de electores con los distritos diseñados denota exactamente lo contrario, dado que no está justificada debidamente la diferencia entre un distrito y otro, de aquellos impugnados en el requerimiento, faltando así al imperativo constitucional de asegurar la igualdad de voto, a que tienen derecho todos los ciudadanos en Chile;

CAPITULO III: CUOTA DE GÉNERO Y PRIMARIAS

30°) Que, en esta materia, se impugnan dos normas: el artículo 1°, N° 1), letra b), y el artículo 4°, N° 3) del proyecto de ley.

La primera modifica el artículo 3 bis de la Ley N° 18.700, que en síntesis establece que, de la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo.

La segunda incorpora un artículo 3° transitorio a la Ley N° 20.640, que establece que el partido que decide someterse al sistema de primarias, para los períodos electorales parlamentarios de 2017, 2021, 2025 y 2029, sólo podrá hacerlo hasta el 40% del total de candidaturas a diputado o senador que pueda declarar en la elección definitiva;

31°) Que estos Ministros estiman que dichas normas son inconstitucionales, por cuanto, en primer lugar, contravienen lo preceptuado por el artículo 19, N° 15, de la Constitución, específicamente su inciso quinto y, adicionalmente, lo prescrito en el artículo 19, números 2° y 16, inciso tercero, y en el artículo 13, inciso segundo, en relación a los artículos 48 y 50, de la Constitución Política.

Y, además, por cuanto dichos preceptos del proyecto infringen el artículo 1° de la Constitución, al afectar la autonomía que, en su carácter de cuerpos intermedios, tienen los partidos políticos;

a) Se infringe el Artículo 19, N° 15, de la Constitución Política

32°) Que, en la primera impugnación se objeta la norma que modifica la ley N° 18.700, orgánica constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, intercalando “el siguiente inciso quinto, nuevo, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito”;

33°) Que la impugnación de esta norma se hace en relación al artículo 19, N° 15, de la Carta Fundamental, específicamente por vulnerar su inciso 5°.

Señala el requerimiento que el constituyente derivado de la Ley N° 20.414 consideró de primerísimo orden dotar al sistema político de un procedimiento, dentro del derecho de asociación y del estatuto de los partidos políticos, tendiente a establecer un sistema de primarias vinculantes, cuyo desarrollo se encargó al legislador orgánico. Considera que el legislador no puede regular este procedimiento limitando el libre ejercicio de los derechos involucrados, por impedírselo así el artículo 19, N° 26, de la Carta;

34°) Que la norma reprochada importa necesariamente que los partidos políticos pierden autonomía para ejercer el derecho a decidir sus candidatos por vía del sistema de primarias, pues la ley establece un nuevo requisito, que impide el libre ejercicio de ese régimen de selección de candidatos, tal como fue prevista por el constituyente;

Asociar la cuota de género con una limitación de llevar candidaturas a una primaria, constitucionalmente concebida como voluntaria y libre, hace, en la especie, menos reconocible el derecho de los partidos políticos de aspirar con completa libertad a un mecanismo de primarias vinculantes, lo que pone a este artículo en pugna con la norma contenida en el numeral 15° del artículo 19 constitucional, en relación al numeral 26° del mismo artículo;

35°) Que, en la segunda impugnación, se objeta el numeral 3) del artículo 4° del proyecto que agrega el siguiente artículo tercero transitorio a la Ley N° 20.640:

“El partido político que decidiere someterse al sistema de elecciones primarias contemplado en los artículos 3° y siguientes de la presente ley para los períodos electorales parlamentarios de los años 2017, 2021, 2025 y 2029 sólo podrá someter a dicho procedimiento hasta el cuarenta por ciento del total de candidaturas a diputado o senador que pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral”.

El precepto entraña una limitación a la “amplitud” de las primarias, para los períodos electorales que indica. Los requirentes razonan de modo similar al anterior cuestionamiento “por cuanto se introduce una limitación que derechamente contraviene el derecho a que los candidatos -en este caso al Parlamento- se determinen libremente mediante el ejercicio de primarias vinculantes”;

36°) Que el artículo 19, N° 15, en el inciso aludido, parte pertinente, de la Constitución, dispone que “Una ley orgánica constitucional establecerá un sistema de elecciones primarias que podrá ser utilizado por dichos partidos para la nominación de candidatos a cargos de elección popular, cuyos resultados serán vinculantes para estas colectividades, salvo las excepciones que establezca dicha ley. Aquellos que no resulten elegidos en las elecciones primarias no podrán ser candidatos, en esa elección, al respectivo cargo”.

Sobre el particular, esta Magistratura ya se ha pronunciado, en STC 2487, del año 2012 (considerandos 12° y 13°), en cuanto a que la primaria es un mecanismo que puede ser utilizado únicamente por los partidos. No es, en consecuencia, una institución a la que pueda acudirse por cualquier organización. Enseguida, la Constitución señala que este mecanismo puede ser usado por los partidos voluntariamente. Usa la expresión “podrá ser utilizado”.

Asimismo, el mecanismo puede ser utilizado únicamente para “la nominación de candidatos a cargos de elección popular”. Por otra parte, la Constitución se encarga de establecer que los efectos del resultado de la elección primaria son doblemente vinculantes, pues el que resulte ganador, será el candidato al cargo correspondiente; y el que resulte perdedor, no puede ser candidato en esa elección al cargo en que postuló y perdió. Finalmente, la Carta prescribe que una ley orgánica constitucional debe establecer un “sistema de elecciones primarias”;

37°) Que la utilización del mecanismo de primarias, calificado como un mecanismo que profundiza la democracia, corresponde a una decisión de los partidos, no susceptible de ser aplicado por parcialidades, sin afectar su esencia, como se pretende en la norma impugnada;

38°) Que “Las primarias son instancias pre electorales a través de las cuales los partidos o coaliciones someten la decisión respecto a la designación de candidatos presidenciales, parlamentarios o municipales a la ciudadanía. En efecto, el sistema de primarias constituye un mecanismo participativo y directo de selección de candidatos, para el sistema político chileno. En consecuencia, la decisión sobre los candidatos ya no estaría en manos de las elites de los partidos. De esta manera, se limitan las barreras de entrada aumentando por esa vía la competencia del sistema político. Por otra parte, la decisión sobre los candidatos quedaría en manos de la propia ciudadanía. Por tanto, hay una mayor legitimidad en la designación de los candidatos y por esa vía también, de la política en general. Es un sistema que permite la competencia con antelación siendo, por lo tanto, más legítimo que recurrir a las encuestas. Por último, sería una forma de limitar las dificultades propias de una negociación en torno a la designación de los candidatos, que afecta la actividad política” (Estudios constitucionales años 5 N°2, 2007 P. 365-380, por Mariela Rubano Lapasta);

39°) Que la posibilidad de celebrar elecciones primarias además de ser una manifestación del ejercicio del derecho de asociación política asegurado en el inciso quinto del Nº 15 del artículo 19, también se relaciona con el deber del Estado de “asegurar el derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional” (artículo 1º inciso quinto).

Asimismo, tal como se señaló en las consideraciones generales, es de recordar que Chile es una república democrática, forma de gobierno en que el ejercicio de la soberanía se realiza por el pueblo a través de las elecciones periódicas y plebiscitos a que se refiere el inciso primero del artículo 5º de la Carta, sino que también, a través del ejercicio en elecciones primarias;

40°) Que las primarias, sin restricciones de ninguna especie, como lo son las cuotas de género, fomentan una mayor transparencia en el proceso de selección de quienes lleguen a ser candidatos de un partido a una elección popular;

b) Se infringe el inciso 3° del Artículo 19, N° 16, de la Constitución

41°) Que, adicionalmente a lo ya razonado, los preceptos impugnados en este capítulo se aprecian incompatibles con la norma constitucional establecida en el artículo 19, N° 16, de la Constitución, en cuya virtud “Se prohíbe cualquiera discriminación que no se base en la capacidad o idoneidad personal, sin perjuicio de que la ley pueda exigir la nacionalidad chilena o límites de edad para determinados casos”.

La determinación de cuotas máximas-mínimas a los representantes de un determinado sexo -y sólo en razón del sexo- para acceder a un cargo público resulta inconstitucional, por simple aplicación de la norma recién transcrita.

Ello, pues ante todo, los cargos públicos -independiente de su forma de generación- constituyen un trabajo. Se trata de actividades remuneradas y lícitas. Constatado lo cual, no puede desatenderse que las labores de un parlamentario constituyen un trabajo, lo que torna aplicable la disposición constitucional precitada.

Por lo tanto, cuando se trata de un cargo público, independiente de si son o no de elección popular, no se podría –pues la Constitución lo prohíbe– discriminar por un motivo diverso a la capacidad e idoneidad personal. Resulta indudable que la sola pertenencia a un género determinado -que es lo que el proyecto considera- nada tiene que ver con la idoneidad o capacidad para desempeñar el trabajo, en este caso el parlamentario, motivos éstos que son los únicos que pueden fundamentar una diferencia constitucionalmente lícita en la materia;

c) Se infringe el Artículo 13 de la Constitución, en relación con sus artículos 48 y 50

42°) Que, en otro orden de materias, también se ha de considerar la regulación de la ciudadanía, consagrada y normada de manera directa por la Carta Fundamental. Aquella otorga, además del derecho a votar para elegir a otro, el derecho a postular a cargos de elección popular. En este sentido, la Constitución Política establece que “La calidad de ciudadano otorga los derechos de sufragio, de optar a cargos de elección popular y los demás que la Constitución o la ley confieran” (inciso 2°, artículo 13).

Lo anterior es relevante, pues consideramos que las normas sobre cuotas inciden en el ejercicio de este derecho, que sólo se encuentra sometido a requisitos establecidos directamente por la Constitución. Específicamente en el caso de los parlamentarios, los requisitos exigibles son los establecidos en los artículos 48, para los Diputados, y 50, para los Senadores;

43°) Que el nuevo inciso que se agrega al artículo 3° bis asocia un serio efecto al incumplimiento de lo prescrito por él: “La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito”. En definitiva, las postulaciones quedan absolutamente excluidas.

La inconstitucionalidad, a nuestro juicio, se produce pues en virtud de lo dispuesto por las normas que establece el proyecto, en esta materia, se termina exigiendo requisitos o condiciones adicionales a la postulación de los parlamentarios, excediendo de las que establece la Constitución. Ya no bastará cumplir lo prescrito por la Constitución para ejercer el derecho antedicho, pues el proyecto establece un requisito legal adicional, como sería encontrarse dentro del porcentaje respectivo;

44°) Que, en relación a lo anterior, esta Magistratura ha reconocido que el establecimiento de aquellos requisitos -en relación a los cargos de Diputado o Senador- es una cuestión que sólo puede hacer la Constitución Política de la República, razón por la cual, las normas legales que obran en contrario resultan inconstitucionales.

En STC Rol N° 433, de 25 de enero de 2005, por medio de la cual controló la Ley N° 20.000, declaró inconstitucional una norma que en lo sustancial – modificando el artículo 3° de la Ley N° 18.700-exigía que a las declaraciones de candidaturas de Senadores y Diputados se acompañe una declaración jurada del candidato respectivo en la cual “acredite que no tiene dependencia de sustancias o drogas estupefacientes o sicotrópicas ilegales”. Se estimó que al obrar de tal manera, “el proyecto agrega un nuevo requisito de elegibilidad para ser candidato a Diputado o Senador a aquellos establecidos por la propia Carta Fundamental, lo cual, como ha quedado demostrado, al legislador le está vedado hacer, salvo que ésta última lo autorizare expresamente, lo que no ocurre respecto de los cargos antes mencionados” (considerando 41°).

Lo anterior, por cuanto asentó en aquella ocasión que “en relación con un tema de tanta importancia para el adecuado funcionamiento del régimen democrático constitucional como son las prohibiciones para ejercer los cargos de Diputado y Senador -carácter que en esencia tienen inhabilidades, exigencias y prohibiciones que les son aplicables-, éstas han de interpretarse restrictivamente, no pudiendo el legislador establecer otras diferencias a aquellas comprendidas en la Constitución” (considerando 37°), refrendando un pronunciamiento del Tribunal, en orden a que las prohibiciones parlamentarias son “limitaciones de derecho público que afectan la elección de diputados y senadores y el ejercicio de los cargos parlamentarios, cuyas infracciones aparejan sanciones como la nulidad de la elección, la cesación en el cargo de congresal y la nulidad del nombramiento, según los casos. Por ello, la aplicación de estas normas prohibitivas debe dirigirse solamente a los casos expresa y explícitamente contemplados en la Constitución, toda vez que se trata de preceptos de derecho estricto, y no puede hacerse extensiva a otros, sea por similitud, analogía o extensión, conforme al principio de la interpretación restrictiva de los preceptos de excepción unánimemente aceptado por la doctrina, aplicado reiteradamente por este Tribunal (Rol N° 190, considerando 10°)” (Considerando 38°);

d) Se infringe el Artículo 19, N° 2, de la Constitución

45°) Que, por otra parte, la propuesta sobre cuotas, como mecanismo de acción afirmativa de la máxima intensidad, vulnera el principio de igualdad reconocido en nuestra Carta Fundamental, que constituye una importante base de nuestro sistema democrático, por establecer un trato desigual.

No existe justificación constitucional para una discriminación a favor del determinado grupo constituido por mujeres, respecto de los hombres, o viceversa, cuando a las personas, nuestra Carta Fundamental, en su artículo 1°, les ha reconocido igualdad en su dignidad y derechos, reforzando, en el N° 2 de su artículo 19, la igualdad de mujeres y hombres;

46°) Que la introducción de porcentajes de participación es también arbitraria, pues no hay norma constitucional que permita al legislador orgánico introducir un criterio que limite el ejercicio de las primarias cuando el constituyente no estableció criterio alguno para su ejercicio, por lo que se vulnera el artículo 19, N° 2, de la Carta Fundamental;

e) Se infringe la debida autonomía de los Partidos Políticos

47°) Que, asimismo, evidente vulneración al texto constitucional es imponer porcentajes de participación por sexo en la declaración de candidaturas de los respectivos partidos políticos, bajo sanción de tener por rechazada las restantes candidaturas. El legítimo ejercicio de la libertad política permite a las respectivas colectividades presentar los candidatos que ellos estimen más idóneos para ocupar los respectivos cargos de elección popular. Se impide, entonces, que sean los propios partidos políticos los que legítimamente y sin presiones escojan entre una gama de posibilidades a quienes consideren como sus mejores representantes, lo cual hoy ocurre con prescindencia del sexo del candidato.

Elección que se limita severamente cuando a través de las normas reprochadas se exige de manera coactiva que todos los partidos políticos respeten un determinado porcentaje, vulnerando con ello su autonomía constitucionalmente reconocida, y respecto de la cual el estado tiene el imperativo de reconocer y amparar, conforme lo dispone el artículo 1°, inciso tercero, constitucional;

48°) Que no debe perderse de vista que existe un nexo evidente entre el mecanismo de primarias y el derecho de asociación de los partidos políticos, como también respecto de la autonomía de los mismos. La posibilidad de celebrar primarias, además de ser una manifestación del ejercicio del derecho de asociación (artículo 19, N° 15), como ya se ha señalado, se vincula directamente con artículo 1° inciso tercero de nuestra Carta, que garantiza a los grupos intermedios la adecuada autonomía para cumplir sus propios fines específicos;

49°) Que lo anterior, apoyado por doctrina que aborda las primarias, señalando que la posibilidad de celebrarlas es una manifestación del ejercicio del derecho de asociación vinculada también autonomía de los cuerpos intermedios.

Se afirma que “La libertad que ha de reconocerse a las tiendas partidistas para seleccionar a quienes participarán en las campañas electorales con miras a ocupar cargos de elección popular forma parte, por lo tanto, del derecho mismo de asociación que la Carta les asegura” (María Pía Silva Gallinato, “Naturaleza de las elecciones primarias”, Revista de Derecho Público, Vol. 76, p. 269);

CAPÍTULO IV: DESIGUALDAD ENTRE INDEPENDIENTES Y PARTIDOS POLÍTICOS

50°) Que esta impugnación atañe al artículo 3°, N° 2), del proyecto, que substituye la cifra “0,5” por el guarismo “0,25”, en el inciso primero del artículo 6° de la Ley N° 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos, referida al electorado requerido para la formación de un partido político.

Por otra parte, uno de los requisitos para participar como independiente en elecciones de diputados y senadores está contemplado en el artículo 10 de la Ley N° 18.700 y que establece el “patrocinio de un número de ciudadanos igual o superior al 0,5 por ciento de los que hubieren sufragado en el distrito electoral o en la circunscripción senatorial, según se trate de candidaturas a Diputados o Senadores, respectivamente, en la anterior elección periódica de Diputados”;

51°) Que el precepto impugnado rebaja este porcentaje 0,5% a 0,25% sólo para la constitución de los partidos políticos, resultando evidente que con esta modificación existirá una ventaja para los señalados partidos, en lo relativo a la presentación de candidaturas, cuando el territorio electoral de éstos coincida con el de una región, por la vía de constituir un partido político en los respectivos territorios.

Es decir, con el expediente de constituir un nuevo partido, bastará obtener firmas de afiliación ante notario del 0,25% de los que sufragaron en la última elección, mientras que las candidaturas independientes deberán conseguir firmas de patrocinio ante notario del 0,5% del mismo universo;

52°) Que, conforme a la nueva configuración de los distritos para la Cámara de Diputados, se encuentran en la situación descrita –una región un distrito– los siguientes:

53°) Que el proyecto de ley, en la norma impugnada en este capítulo, a juicio de los requirentes, vulnera la igualdad entre independientes y partidos políticos que la Constitución Política consagra, infringiendo sus artículos 15, sobre el derecho de asociación; 18 sobre sistema electoral, y 19, N° 2, sobre igualdad;

54°) Que, teniendo en cuenta que uno de los derechos esenciales y principales de un partido político es el poder presentar candidaturas a los cargos de elección popular, ha existido en nuestro ordenamiento legal electoral igualdad en los requisitos, respecto al número de patrocinios para presentar candidaturas entre independientes y el número de afiliados para constituir un nuevo partido político, que le daba el derecho a presentar candidaturas de sus militantes o de independientes asociados en los casos de pactos electorales;

Si bien los partidos políticos son asociaciones encaminadas a desarrollar un amplio conjunto de actividades que les son propias, conforme al artículo 2°, inciso segundo de la Ley Orgánica Constitucional de Partidos Políticos, ello no permite desconocer que su cometido primordial consiste en obtener para sus candidatos el acceso constitucional a los cargos públicos de elección popular, para lo cual, y con el objeto de poner en práctica los principios y postulados de sus programas, podrán participar en los procesos electorales y plebiscitarios en la forma que determine la ley orgánica constitucional respectiva. Los partidos tienen, por consiguiente, una marcada vocación electoral;

55°) Que, en el mismo sentido, es importante tener presente que las reformas introducidas por el proyecto de ley, se hicieron en el marco de un proyecto que reforma el sistema “electoral”;

56°) Que una simple comparación entre las modificaciones introducidas por el proyecto respecto de los requisitos necesarios para constituir un partido, y los requisitos para presentar una candidatura independiente, es concluyente que los partidos políticos resultan beneficiados respecto de los independientes: para existir y poder participar en un proceso eleccionario –vocación esencial según el artículo 2° de su ley orgánica constitucional– los partidos políticos requieren una afiliación del 0,25% del electorado que sufragó en la región en la que pretende constituirse.

En cambio, el independiente que se presenta como candidato en un distrito que coincide con una región, requiere del patrocinio del 0,5% de los electores que hubieren sufragado en el distrito electoral;

57°) Que, tanto el independiente como los miembros de los partidos políticos buscan ejercer su derecho a sufragio pasivo, ser electos en un cargo, a través de una elección popular;

58°) Que el proyecto de ley beneficia a los partidos en relación al ejercicio del derecho a sufragio pasivo, pues rebaja los requisitos para constituirse como tal, permitiendo así que uno de sus miembros postule a un cargo de elección popular. De esta forma es más fácil intervenir en el proceso eleccionario al miembro de un partido, el cual podría crearse de modo meramente instrumental, para participar en la elección respectiva

El independiente, en cambio, requiere un patrocinio mayor, lo que implica una carga superior para formar parte del proceso eleccionario, en comparación con el candidato que es miembro del partido, en los 8 distritos que coinciden con una región. El independiente, para corregir esta diferencia, se podrá ver tentado a constituir un partido –instrumental- para participar en el proceso eleccionario como candidato, ya no como independiente, sino como “miembro de un partido”. Requiere para tal efecto “menos” que lo que se le exige como “independiente”. La reforma, ciertamente, desincentiva las candidaturas independientes y beneficia al miembro del partido político, no habiendo por consiguiente igualdad entre los miembros de los partidos y el independiente en lo que respecta a sus candidaturas (artículo 18 de la Carta Fundamental);

59°) Que, en la misma línea del requerimiento, en la Sesión 84ª Legislatura 362ª (13.01.2015) el Senador Navarro señaló: “Respecto de la norma que plantea el 0,25 por ciento para formar un partido político -a mí no me gusta-, hemos advertido en la Sala -y lo hemos conversado con el Gobierno- lo que sucederá si se aprueba. La situación que se abre es trágica para la política. Pero es parte del acuerdo adoptado, razón por la cual voy a respetarlo. Sin embargo, debo hacer la advertencia. La contradicción entre ambas disposiciones no soporta ningún análisis: para inscribir una candidatura independiente a Senador o Diputado se exige el doble que para constituir un partido regional. Esto va a llevar a que todos los independientes se interesen en crear una colectividad política, y se va a generar un efecto multiplicador inadecuado”;

60°) Que esta Magistratura ha señalado que el artículo 1° de la Carta Fundamental constituye uno de los preceptos más fundamentales en que se basa la institucionalidad, ya que por su profundo contenido doctrinario refleja la filosofía que inspira nuestra Constitución y orienta al intérprete en su misión de declarar y explicar el verdadero sentido y alcance del resto de la preceptiva constitucional.

El inciso final de este artículo indica, como uno de los deberes fundamentales del Estado, “asegurar el derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional”. Esta norma es de vastas proyecciones, pero sin duda adquiere especial relevancia en los procesos electorales y plebiscitarios, ya que, a través de ellos, el pueblo ejerce la soberanía nacional manifestando su parecer sobre las personas que estarán a cargo de llevar adelante las funciones básicas del Estado en procura de obtener su finalidad primordial: “contribuir a crear las condiciones sociales que permitan a todos y a cada uno de los integrantes de la comunidad nacional su mayor realización espiritual y material posible, con pleno respeto a los derechos y garantías que esta Constitución establece”;

61°) Que la Carta Fundamental, después de establecer esta norma rectora y vital, va encarnándola en preceptos concretos: enumera los derechos que se les asegura a las personas, fija los distintos poderes y órganos que constituyen la estructura del Estado, el régimen de gobierno, sus atribuciones, sus limitaciones y, en fin, las normas conforme a las cuales podrá enmendarse o modificarse la Constitución misma.

Entre este conjunto de normas básicas es necesario destacar, ahora, por su directa vinculación con el tema en estudio, la contenida en el artículo 19, N° 2, que expresa que la Constitución asegura a todas las personas “La igualdad ante la ley”. “En Chile no hay persona, ni grupo privilegiados.” “Ni la ley ni autoridad alguna podrán establecer diferencias arbitrarias”;

62°) Que, es tal la importancia que la Constitución de 1980 le atribuye al ejercicio de la soberanía nacional por el pueblo, que dio un encargo especial al legislador sobre este aspecto, disponiendo en su artículo 18 que la ley orgánica constitucional que regule el sistema electoral público, deberá garantizar siempre la plena igualdad entre los independientes y los miembros de los partidos políticos, tanto en la presentación de las candidaturas como en su participación en los procesos electorales y plebiscitarios;

63°) Que, junto con identificar los sujetos del juicio de igualdad en materia electoral, esta Magistratura ha definido un conjunto de criterios para juzgar la constitucionalidad, tanto en lo referente a la plena igualdad en la presentación de candidaturas como en la participación de los independientes y los miembros de los partidos políticos en todas las etapas de los procesos electorales.

Esta equiparación se ha de dar en relación a: 1) una “igualdad de oportunidades para elegir y ser elegidos y para gozar de las facultades inherentes a esos derechos en sus aspectos básicos, sin que obste a ellos las diferencias que puedan producirse, en lo accidental, como consecuencia de la natural situación de unos y otros”. 2) “Que la ley no puede crear privilegios a favor de unos y en perjuicio de otros que rompa el necesario equilibrio que debe existir entre los participantes de los actos electorales y plebiscitarios” (STC Rol 53, c.17). 3) Que los textos sometidos a control no contengan “desigualdades arbitrarias en el tratamiento de los independientes con respecto a miembros de partidos políticos.” (STC Rol 228, c. 27).

Con idénticos fundamentos, este Tribunal declaró inconstitucional un precepto donde se disponía que es posible el reemplazo por fallecimiento del candidato a Presidente de la República, senador o diputado, en el evento de que su candidatura hubiese sido declarada por un partido político; pero lo prohibía tratándose de candidaturas independientes, por no existir una justificación razonable de esta manifiesta desigualdad (STC Rol N° 301 1999);

64°) Que, la diferenciación que provoca la norma impugnada, contradice manifiestamente lo preceptuado en el artículo 18 de la Constitución Política, el cual exige con especial énfasis, que la ley orgánica que determine la organización y funcionamiento del sistema electoral público, garantice “siempre la plena igualdad entre los independientes y los miembros de partidos políticos tanto en la presentación de candidaturas como en su participación en los señalados procesos”.

Como asimismo, la indicada diferenciación por el proyecto de ley, vulnera lo dispuesto en el numeral 2°, del artículo 19, de la Constitución Política que asegura “La igualdad ante la ley” y agrega que “Ni la ley ni autoridad alguna podrán establecer diferencias arbitrarias”.

En el caso de la disposición cuya constitucionalidad se impugna, aparece claramente de manifiesto que el introducir al sistema vigente una desigualdad entre candidatos independientes y candidatos afiliados a partidos políticos, exigiendo a los primeros el doble de firmas para la presentación de candidaturas en que el distrito o circunscripción coincide con el territorio de una región, constituye una diferencia que resulta arbitraria, dada su carencia de razón, fundamento, explicación u objetivo entendimiento;

CAPÍTULO V: GASTO FISCAL POR ASIGNACIONES PARLAMENTARIAS

65°) Que el requerimiento objeta el hecho de que -durante la tramitación del proyecto- no se diera estricto cumplimiento al artículo 67 de la Constitución Política, explicitado en el artículo 14 de la Ley N° 18.918, orgánica constitucional del Congreso Nacional: se crean 47 nuevos cargos de congresistas, pero sin explicitar el posible monto de los gastos que ello acarrearía para el erario nacional, por concepto de “Asignaciones Parlamentarias”;

El artículo 67, inciso cuarto, de la Constitución Política expresa: “No podrá el Congreso aprobar ningún nuevo gasto con cargo a los fondos de la Nación sin que se indiquen, al mismo tiempo, las fuentes de recursos necesarios para atender dicho gasto”;

66°) Que, conforme al precepto referido, al fortalecer la representación del Congreso Nacional, el proyecto de Ley aumenta el Senado de 38 senadores a 50 y de 120 diputados a 155, con lo cual efectivamente, tratándose de estos últimos, se produce un incremento sustancial en el costo del presupuesto de ese poder del Estado, dado que, como expresan los requirentes, el monto por concepto de dieta de los nuevos parlamentarios podrá estar justificado, pero no así las asignaciones que le corresponden por ítems referidos a arrendamiento de oficinas parlamentarias en sus distritos, personal que atiende en esas oficinas y otros “gastos operacionales” de significativo monto, y que son esenciales para la gestión de cada diputado, por lo tanto, gasto imperativo que el presupuesto de la Nación debe contemplar;

67°) Que, el defecto objetado en este requerimiento consiste en que el Ministerio de Hacienda (fs. 80 y 463) sólo cuantificó el mayor desembolso por concepto de “Dietas Parlamentarias”, que es otra parte de la suma total que, con cargo al erario nacional, perciben los diputados y senadores según han interpretado el artículo 62 de la Carta Fundamental.

Siendo así, se incurre en un error de refutación al sostener que en la especie el Tribunal Constitucional estaría incursionando en la ponderación de factores económicos, que incumben exclusivamente al Ejecutivo, puesto que aquí no se discute la suma o cantidad a que alcanzaría dicho egreso, lo que efectivamente no es controvertible en esta sede jurisdiccional, sino el hecho de faltar la evaluación de tal gasto por parte, precisamente, del Ministerio de Hacienda.

Trámite éste que exige la Constitución, a propósito de reglar el proceso de formación de la ley (artículo 67), así como al imponer a todos los órganos del Estado, sin excepción, el respeto irrestricto a los principios de transparencia y de probidad (artículo 8°);

CONCLUSIONES

68°) Que por las razones precedentes, estos Ministros están por acoger el requerimiento, en todas sus partes, por estimar que los Artículos 1° N°s 1) letra b), 8), 9) letra b), 14) y 19); Artículo 3° N° 2), y Artículo 4° N° 3) del proyecto de ley, en los términos en que han sido impugnados en el escrito de los senadores, infringen las disposiciones de la Carta Fundamental, que en cada Capítulo de este voto se pormenorizan.

El Ministro señor Juan José Romero Guzmán previene lo siguiente: a) que concurre al rechazo del requerimiento en lo concerniente a las cuotas de género para inscribir candidaturas a las primarias por las razones esgrimidas en los considerandos 21º, 22º y 23º de la prevención de la Ministra señora Marisol Peña Torres; b) que concurre al rechazo del requerimiento en lo referente al tema del financiamiento del aumento del gasto por los razonamientos expresados en los considerandos 51º, 52º, 53º y 54º de la sentencia; c) que concurre a acoger el requerimiento en lo que respecta a la desigualdad en las candidaturas entre independientes y partidos políticos por las argumentaciones proporcionadas en el capítulo IV del voto disidente; y d) que concurre a acoger parcialmente el requerimiento respecto de la materia referida a la igualdad del voto en los siguientes términos y por las consideraciones que se indican a continuación:

I) DELIMITACIÓN DE LA CONTROVERSIA CONSTITUCIONAL.

I.A.- ASPECTOS QUE NO SE DISCUTEN.

1. (i) Que el legislador goza de un amplio margen de apreciación para determinar la forma general que adoptará el sistema electoral. Salvo las consideraciones respecto del sufragio igualitario, cualquier otra consideración respecto de las virtudes o defectos del sistema electoral propuesto, así como del actualmente vigente, son materias de mérito sobre las cuales no corresponde que este Tribunal se pronuncie;

2. (ii) Que el ámbito de controversia dice relación con una de varias dimensiones de un sistema electoral (la del mecanismo de asignación de escaños), la cual no tiene una vinculación necesariamente determinante con el tipo de sistema electoral. En otras palabras, la manera en que se asignan los escaños a cada distrito en atención al principio de proporcionalidad del voto (es decir, en relación con el número de habitantes de cada territorio o con el número de electores) no está necesariamente vinculado con la existencia de un sistema electoral general de carácter binominal o con uno de orientación más proporcional;

3. (iii) Que, sin perjuicio de ciertas limitaciones constitucionales que se desarrollarán más adelante, existen distintos criterios que pueden ser combinados por el legislador para determinar el número de escaños parlamentarios que serán asignados a cada territorio electoral;

4. (iv) Que no es objeto de discusión o reproche constitucional el dibujo o delimitación geográfica de los distritos electorales;

5. (v) Que no existe (ni podría existir) objeción constitucional respecto del número de diputados que compone la Cámara de Diputados. De hecho, con anterioridad a la reforma constitucional introducida por la Ley Nº 20.725, el número de diputados estaba definido por la Constitución (artículo 47), lo que hoy no ocurre;

6. (vi) Que, en cuanto a la igualdad en el valor del voto, no se discute que es imposible alcanzar un estado de proporcionalidad matemática ideal entre el número de diputados que se puede elegir en un determinado distrito y el número de habitantes o electores por distrito;

7. (vii) Que, por lo que se explicará con posterioridad, en opinión de este Ministro no merece reparo de constitucionalidad la regla de asignación de escaños posterior y permanente (es decir, aquella que según lo dispuesto en el artículo 1º, número 9), del Proyecto de Ley, que agrega el nuevo artículo 179 bis a la ley Nº 18.700, Orgánica Constitucional sobre votaciones populares y escrutinios, comenzaría a regir el año 2024). En particular, no se aprecia inconstitucionalidad en el número máximo y mínimo de escaños por distrito;

8. (viii) Que no existe un vicio de constitucionalidad en el mecanismo de asignación de escaños para el Senado. En efecto, y tal como se desprende del requerimiento: “el problema se genera especialmente en la asignación de los nuevos escaños en los que aumenta la Cámara de Diputados. […] [E]n consecuencia, en el caso de la elección de diputados, donde no existe a diferencia del Senado y de los Consejos Regionales, ninguna consideración en la Constitución a los territorios y a su representación, la regla general debiera ser la aplicación del principio de la igualdad del voto y de la proporcionalidad de la población” (fojas 12 y 16);

9. (ix) Que, por último, no se ha argumentado en base a consideraciones respecto de a qué fuerzas políticas beneficiaría el mecanismo de asignación de escaños y, por lo tanto, no es uno que corresponda ser considerado.

I.B.- ALGUNOS ASPECTOS NO CONTROVERTIDOS DADO EL RECONOCIMIENTO DE LOS INTERVINIENTES.

10. (a) Que el voto de algunos electores tiene mayor valor o peso que el de otros. Los datos, como se podrá apreciar, lo demuestran. Además, la Presidencia de la República, a través de su abogado, lo ha reconocido en estrados de la siguiente manera: “Pero el proyecto tiene defectos. Hay desproporciones matemáticas. Efectivamente, hay muchas. Yo diría, a las que apunta el escrito de los señores requirentes yo podría agregar más porque conozco bien el Proyecto. Hay situaciones que no son perfectamente matemáticas. Hay distritos que quedan con más diputados que electores, otros con menos electores que diputados” (ver video, 17’: 16”);

11. (b) Que el proyecto de ley contempla dos reglas de asignación de escaños diferentes: una inicial y provisoria, y otra posterior y permanente;

12. (c) Justiciabilidad: no se trata de una materia puramente reservada al legislador. Que se ha reconocido por las partes que este Tribunal es competente para evaluar la compatibilidad con la Constitución del mecanismo de asignación de escaños parlamentarios que contempla el Proyecto de Ley. Es decir, se trata de una materia justiciable o en que existe cierto espacio para que este Tribunal realice un examen de constitucionalidad sin que, por ello, necesariamente se estime que hay una intromisión en decisiones sobre materias en que el margen de apreciación de los órganos co-legisladores es elevado;

13. Que, en efecto, la Presidencia de la República, a través de su abogado, ha reconocido en la vista de la causa la justiciabilidad de estas materias y la competencia de este Tribunal para controlar, a la luz de la Constitución, las disposiciones del Proyecto. Al respecto se ha señalado lo siguiente: “No comparto la teoría de las ‘political questions’ en virtud de la cual habrían ciertas cuestiones ideológicas que escapan al alcance de la mirada o escrutinio del Tribunal Constitucional. No lo comparto. [ver video, 12’: 09”] […] Si hay una materia en que se produce el abuso de las mayorías políticas es ésta. El estudio de la Ciencia Política revela cómo una y otra vez las mayorías políticas, si es que hay un tema en el que pueden aprovechar para abusar, es en la configuración de los sistemas electorales. [ver video, 12’: 20”] […] Mal podría venir a defender este Proyecto sobre la base que ustedes –Excelentísimos Ministros del Tribunal- no tienen competencia para escrutarlo.” [ver video, 12’: 35”]. […] Es indispensable para la democracia que los cambios electorales sean revisados por el Tribunal Constitucional.” [ver video, 12’: 46”];

14. Que la procedencia de un examen de compatibilidad constitucional de las disposiciones del proyecto de ley asume que efectivamente existen principios o reglas constitucionales respecto a los cuales deben contrastarse las estipulaciones objeto de control. Al respecto, son los artículos 15 y 49 de la Constitución los que, fundamentalmente, establecen los estándares constitucionales que deben tenerse presente para efecto del análisis de constitucionalidad;

15. Que, sin perjuicio de la existencia de parámetros constitucionales como los aludidos, existe un amplio espacio reservado al legislador para el diseño del sistema electoral. Así es como, por ejemplo, en los artículos 47 y 49 de la Constitución (referidos a la elección de diputados y senadores, respectivamente) se dispone que “[l]a ley orgánica constitucional respectiva determinará(…) la forma de su elección”;

16. Que, no obstante, se incurriría en un error si se estimara que la referencia a “la forma de su elección” transfiere por completo la potestad en materia electoral al legislador como si no subsistiera cierta regulación constitucional esencial que el mismo legislador debe respetar. De hecho, y a modo ilustrativo, la referencia destacada previamente se encuentra, en el caso de la elección de senadores, incorporada en la Constitución a continuación de una regla constitucional específica referida a cierto criterio territorial que debe imperar en el sistema de elección del Senado. Lo anterior demuestra que la expresión “la forma de su elección” no agota o abarca toda la regulación sobre la materia.

II) ¿EXISTEN CRITERIOS CONSTITUCIONALES PARA LA ASIGNACIÓN DE ESCAÑOS QUE DEBAN SER PRIORIZADOS?

II.1.- COMBINACIÓN DE CRITERIOS DE ASIGNACIÓN Y PRIORIZACIÓN DE AQUELLOS QUE TIENEN RECONOCIMIENTO A NIVEL CONSTITUCIONAL.

17. Que pueden existir variados criterios para la asignación de escaños distritales, entre los cuales cabe mencionar, a modo ilustrativo, el poblacional (sea por habitantes o por electores) y el territorial (incluyendo aspectos geopolíticos y delimitaciones administrativas). De acuerdo al primer criterio precedentemente señalado, en los distritos electorales el número de diputados que puede elegirse debiera ser proporcional al tamaño de la población de los mismos. Al aplicarse, a su vez, un criterio territorial, se puede favorecer a zonas geográficas extremas o, bien, promover mayores niveles de simetría entre distintos territorios electorales, teniendo presente, por ejemplo, la actual división administrativa del país;

18. Que debe reconocerse que los diferentes criterios no necesariamente son compatibles entre sí. Ante esta realidad podría sostenerse que en la aplicación combinada de criterios que realice el legislador no hay ninguno que deba ser prioritario. Dicha apreciación podría ser correcta sólo si los diferentes criterios tienen un reconocimiento normativo de igual jerarquía o si ninguno de ellos la tiene. Por el contrario, si entre diversos criterios existe uno que se diferencia del resto por tener reconocimiento constitucional, es de toda lógica sostener que en la aplicación combinada de los diferentes factores aquel especialmente reconocido debe gozar de prioridad;

19. Que, como se explicará, en el caso de la elección de diputados el criterio poblacional - proporcional, sustentado en el principio de la igualdad del sufragio, debe tener una aplicación prioritaria. Para la repartición de escaños entre los distintos distritos el único criterio que cuenta con reconocimiento constitucional es el recién mencionado. Por consiguiente, sí existe un criterio rector;

20. Que, en contraste, en el caso del Senado la situación amerita ser matizada. En efecto, no cabe duda que el principio de la igualdad del voto también debe recibir aplicación, pero si –a diferencia de las elecciones de diputados- también existe un reconocimiento constitucional para otro criterio (el territorial), la intensidad de la prioridad que debe recibir el primero de los criterios mencionados será menor.

II.2.- RECONOCIMIENTO CONSTITUCIONAL DE LA IGUALDAD DEL VOTO (CRITERIO POBLACIONAL - PROPORCIONAL).

21. Que el inciso primero del artículo 15 de la Constitución Política de la República establece que “[e]n las votaciones populares el sufragio será personal, igualitario, secreto y voluntario” (énfasis agregado). Esta disposición constitucional está relacionada con el sistema democrático de representación (artículo 4º) y con el principio de igualdad general (artículo 19, Nº 2º);

22. Que el sufragio igualitario o igualdad en el voto significa, básicamente, dos cosas: (i) la igualdad en el derecho a voto, lo cual se refiere a que cada votante tiene derecho a un voto y que cuando el sistema electoral otorga a los electores más de un voto, cada uno tiene el mismo número de votos y (ii) la igualdad en el poder de voto, lo que significa que el voto emitido por cada elector debe tener el mismo valor o peso en términos de su influencia en el resultado general de la elección. Esta segunda noción más sustantiva del principio de igualdad del voto enfatiza, expresado de otra manera, que cada escaño parlamentario debe ser obtenido en virtud de un número similar de votos. En conclusión, el principio de la igualdad del voto o sufragio igualitario no se satisface solamente con la prohibición del voto censitario.

II.3.- RECONOCIMIENTO CONSTITUCIONAL DEL CRITERIO DE TERRITORIALIDAD.

23. Que, sin perjuicio que nada impide que el legislador tome en consideración el criterio relativo a la territorialidad (geográfico), sólo para el caso del Senado tiene un reconocimiento constitucional, gozando, por ende, de cierta preeminencia junto con el criterio central general de la igualdad del voto;

24. Que, en efecto, el criterio territorial (especialmente aplicable para la elección de senadores) se encuentra consagrado en el artículo 49 de la Constitución, el cual dispone que “[e]l Senado se compone de miembros elegidos en votación directa por circunscripciones senatoriales, en consideración a las regiones del país, cada una de las cuales constituirá, a lo menos, una circunscripción” (énfasis agregado);

25. Que, al respecto, resulta ilustrativo lo manifestado por el PNUD: “el Senado tiene atribuciones a nivel nacional que requerirían una representación similar en la Cámara Alta de todas las regiones, de modo de equilibrar los intereses de todo el territorio. La distorsión del voto, en este caso, estaría justificada por una lógica distinta de representación (geográfica más que por electores). Sin embargo, si ese fuera el caso no se justifica una distorsión similar en la Cámara de Diputados, en la que el principio de ‘una persona, un voto’ debería prevalecer” (Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo –PNUD-, 2014: Auditoría a la democracia: más y mejor democracia para un Chile inclusivo. Santiago, Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, p. 210);

26. Que, con algún grado de coincidencia con lo anterior (y tal como se constató con anterioridad), en el requerimiento se reconoce que las objeciones de constitucionalidad dicen relación, básicamente, con la asignación de escaños distritales.

II.4.- PARA LA ASIGNACIÓN DE ESCAÑOS DE DIPUTADOS SÍ EXISTE UN CRITERIO RECTOR.

27. Que, como se adelantara, el estándar constitucional referido al sufragio igualitario (cuyo contenido dice relación con la igualdad en el poder o valor del voto y, consiguientemente, con el criterio de proporcionalidad de la población) debe gozar de prioridad al momento de combinarse los diferentes criterios por parte del legislador. Así, pues, lo que permite evaluar el poder de influencia de cada voto para elegir un diputado es la proporción entre la cantidad de habitantes o electores y el número de escaños que se puede elegir en un determinado distrito. Éste es un criterio rector y, como tal, restringe el ejercicio legislativo basado en consideraciones de mérito y conveniencia política;

28. Que el criterio poblacional – proporcional (igualdad del voto) también es reconocido en el Mensaje del Ejecutivo como el criterio rector para la asignación de escaños en la Cámara de Diputados: “[t]ratándose de la Cámara de Diputados, el principio rector debe ser la igualdad en el voto de todos los chilenos” (Mensaje de S.E. la Presidenta de la República con el que inicia un proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por un sistema electoral proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional, p. 6);

29. Que, no obstante el propósito del Ejecutivo aludido precedentemente, el criterio basado en la igualdad del voto no resulta ser un parámetro orientador claro y preeminente en la asignación de escaños para la Cámara de Diputados. Esta circunstancia se puede apreciar tanto de las explicaciones que dan origen a la regla inicial y temporal de asignación de escaños por distritos (en adelante, regla 1), como de las diferencias y desviaciones que los datos muestran entre la regla 1 que se propone para las próximas elecciones de diputados y lo que constituiría una regla de carácter más puramente proporcional de acuerdo al sistema D’Hondt no corregido (regla “ideal”) y al sistema D’Hondt corregido (regla 2) y que comenzaría a regir, sin mediar justificación, a partir de las elecciones correspondientes al año 2024.

III) ¿CUÁLES SON LOS DIFERENTES CRITERIOS DE ASIGNACIÓN DE ESCAÑOS EN EL PROYECTO DE LEY?

30. Que una mayor proporcionalidad se puede lograr por medio de una redefinición de los territorios distritales, una modificación del número total de diputados a se eligen y en el mecanismo específico de asignación de escaños por distrito. En el Proyecto de Ley cuya constitucionalidad se evalúa se colocará atención al mecanismo de asignación de escaños distritales. El número de diputados que se elige es una materia que ha dejado de estar contemplada en la Constitución y los criterios utilizados para la determinación o dibujo de los distritos en el Proyecto de Ley resultan razonables (y no son objeto de reproche en el requerimiento). Los criterios utilizados por el legislador para la determinación de los territorios distritales son los siguientes: (a) la extensión territorial máxima es la de una región según la actual división política-administrativa, y (b) los nuevos distritos se configuran a partir de los existentes;

31. Que, a su vez, los criterios utilizados en el Proyecto de Ley para la asignación de escaños (en lo referente a la regla inicial y provisoria –regla 1) son los que se indican a continuación: (i) ningún distrito o suma de distritos tendrá menos diputados de los que actualmente posee; (ii) las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Aysén y Magallanes serán sobrerrepresentadas; (iii) las regiones más pobladas (RM, V y VIII) recibirán escaños adicionales para intentar corregir la subrepresentación a la que están afectas; y, finalmente, (iv) se entrega un escaño a cada región en atención, quizás, a un cierto criterio de equidad territorial;

32. Que los criterios precedentemente mencionados para la regla 1 de repartición de escaños se modifica respecto de la regla posterior y permanente (regla 2), la cual entrega la potestad de actualización al Servicio Electoral a partir del año 2024. En efecto, para la regla 2 se tendrá como único parámetro la proporcionalidad (como efecto del principio de igualdad en el voto), con la excepción de un número mínimo y máximo de diputados por distrito (tres y ocho escaños respectivamente).

IV) ¿EXISTEN DISTORSIONES (DIFERENCIAS) SIGNIFICATIVAS EN RELACIÓN AL CRITERIO DE LA IGUALDAD DEL VOTO?

33. Que, en coincidencia con el mandato constitucional referido al sufragio igualitario, el Mensaje del Proyecto de Ley enviado por la Presidente de la República señala, como primer objetivo del Proyecto, “reducir la desigualdad del voto” y hace un reconocimiento general de la situación actual. En efecto, en dicho Mensaje se manifiesta que: “[l]a diferencia de valor del voto en Chile, según el lugar donde se emite, es demasiado alta y obstaculiza la igualdad del voto. No se puede emprender una reforma sin reducir significativamente esta desigualdad inaceptable en cualquier democracia.” (Mensaje, p. 3, énfasis agregado);

34. Que no se discute que el sistema electoral vigente presenta distorsiones o diferencias muy significativas en términos de la igualdad del voto. No obstante, las reglas de asignación de escaños objeto de control de constitucionalidad son aquellas que se proponen en el Proyecto, no aquella que impera en la actualidad. No se puede sostener válidamente que cualquier mejora que las reglas propuestas experimenten en comparación a la regla actual tiene el efecto de sanear cualquier vicio de inconstitucionalidad que aquellas puedan tener.

IV.A.- PARÁMETROS APROXIMADOS ACERCA DE CUÁN SIGNIFICATIVA ES UNA DIFERENCIA (O DESVIACIÓN).

35. Que en relación a la igualdad del voto (igual poder de voto), la Comisión Europea para la Democracia a través del Derecho (Comisión de Venecia) expresa que “la desviación máxima admisible respecto de la norma de repartición no debería ser superior al 10% y, en todo caso, no debería exceder el 15%, salvo en circunstancias especiales (protección de una minoría concentrada, entidad administrativa con baja densidad de población).” (Comisión de Venecia, 2003: Código de Buenas Prácticas en Materia Electoral. Directrices e Informe Explicativo. CDL-AD(2002)023rev, pp. 8-9);

36. Que, por su parte, el umbral de desviación máximo utilizado por el Tribunal Constitucional Alemán es de un 25%, lo cual ha sido objeto de precisión por vía legislativa (Bundewahlgesetz, BGW: artículo 3, número 2). De acuerdo al mencionado Tribunal, las diferencias deben ser justificadas en “razones específicas, objetivamente legítimas y poderosas” (Bundesverfassungsgericht, 2 BvC 1/07, 7/07 2 BvC, 3 de julio de 2008);

37. Que, como se verá, la constatación de diferencias relevantes en la igualdad del voto en razón de que sobrepasan determinados parámetros aproximados no significa que éstas sean incompatiblesper se con la Constitución. No obstante, cuando se verifica la circunstancia anterior es el legislador quien debe demostrar la existencia de una justificación fuerte para la diferencia anotada.

IV.B.- SÍ EXISTEN DIFERENCIAS O DESVIACIONES SIGNIFICATIVAS EN CUANTO AL CRITERIO DE LA IGUALDAD DEL VOTO (POBLACIONAL – PROPORCIONAL).

38. Que para analizar si existen diferencias de valor del voto en Chile de magnitud significativa, se realizarán dos tipos generales de comparaciones. En primer lugar, se analizará la cantidad de escaños asignados a cada distrito en relación a su población. Luego, en segundo lugar, se examinarán las diferencias en términos de la igualdad o desigualdad del voto que derivan de la comparación entre las diferentes reglas de asignación de escaños distritales que establece el Proyecto de Ley (regla 1 y regla 2) y la regla D’Hondt pura o sin ajustes (la cual constituye un mecanismo altamente proporcional y, por ende, respetuoso del principio de la igualdad del voto). Como se apreciará, cualquiera sea la base de análisis existen diferencias significativas desde el punto de vista de la igualdad en el valor del voto. Es decir, para los habitantes o electores de determinados distritos del país su voto vale más o vale menos en cuanto a su capacidad para elegir un diputado que el de habitantes o electores de otros distritos del país. En el análisis anterior es irrelevante la voluntariedad del voto y las distinciones respecto de la cantidad efectiva de personas que hicieron uso de su derecho a sufragar. Lo relevante es si se tiene o no la posibilidad jurídica de emitir un sufragio que tenga el mismo peso que el de la población de otros distritos electorales.

a) Análisis de la asignación de escaños por distrito en comparación con su población o número de electores.

39. Que el siguiente cuadro (tabla Nº 1) muestra los escaños asignados a cada distrito según el Proyecto de Ley, de acuerdo a su población (variable que fue la que estableció, en definitiva, el Proyecto):

40. Que, desde un punto de vista desagregado, y sólo a modo ilustrativo, es posible constatar que la regla 1 da lugar a que a distritos con población similar se les asigne un número muy distinto de escaños a diputados (distritos 2 y 5); que a distritos con menos población se les asigne más distritos que a otros con más población (distritos 9 y 12 en relación al 10 o al 20, respectivamente); o que a distritos con similar población se les asigne diferente número de escaños (24 y 25; 7, 6 y 14; 16 y 23, etc.);

41. Que, a su vez, para verificar la existencia de desigualdades en el valor del voto de la población de un distrito en relación a los otros (en cuanto al mecanismo de asignación de escaños) debe calcularse el porcentaje de aumento o disminución que deriva de la cantidad de habitantes por distrito necesarios para optar a elegir un diputado en relación a la cantidad de habitantes promedio a nivel nacional necesarios para ser beneficiados con la asignación de un escaño de diputado. De los datos poblacionales incorporados en la tabla Nº1 se construyó un gráfico (gráfico Nº 1) que permite visualizar nítidamente las diferencias o desviaciones en relación al promedio ideal de habitantes por escaño, lo cual da cuenta de distritos con niveles relevantes de sobrerrepresentación y subrepresentación.

42. Que del gráfico Nº 1 precedente es posible constatar que 18 de los 28 distritos (es decir, el 64% de los distritos del país) presentan desviaciones porcentuales de más de un 15%. Incluso, si se utilizara como parámetro un 25% de variación porcentual máxima, el resultado es que 11 de 28 distritos igualan o superan dicho umbral (es decir, el 39% de los distritos del país);

43. Que, en síntesis, tanto del análisis individual de cada distrito, como del sistema en su conjunto, se aprecian diferencias muy significativas que, a lo menos, requieren de una exigente justificación de interés público de por qué debiera admitirse una excepción al mandato constitucional del sufragio igualitario.

b) Análisis de la asignación de escaños por distrito en comparación con la asignación proporcional ideal.

44. Que una segunda vía de análisis consiste en comparar opciones concretas de asignación de escaños. Para este efecto, es posible analizar tres escenarios. El primero es la asignación (transitoria o provisoria) de escaños por distritos que contiene el artículo 179 del proyecto de ley – a la cual llamamos “regla 1”. El segundo escenario es la aplicación de la regla del artículo 179 bis, que asigna los escaños en función de la población de cada distrito – que se denomina “regla 2”. El tercer escenario – y que en este caso ocuparemos como grupo de control – es la asignación de escaños utilizando el método de D’Hondt sin la distorsión que significa el mínimo de tres y máximo de ocho por distrito - que sería la “regla ideal”;

45. Que la comparación de las reglas 1 o 2 con la regla ideal permite determinar cuál es la desviación que se produce con un sistema de asignación de escaños de mayor proporcionalidad. Así, asumiremos que la óptima igualdad de voto – desde el punto de vista de la proporcionalidad - se produce cuando la diferencia entre la asignación de escaños propuesta por las reglas 1 y 2 y la repartición proporcional ideal es igual o más cercana a cero;

46. Que la siguiente tabla (tabla Nº 2) busca realizar la comparación entre escaños de diputados asignados por la regla del artículo 179 (regla 1), 179 bis (regla 2) y la asignación proporcional ideal.

47. Que una forma gráfica de mostrar la diferencia en los datos anteriores puede verse en la siguiente figura:

48. Que, en términos de las opciones concretas de mecanismos para la asignación de escaños, como se manifestó, la desigualdad en el voto es intensa. Esto se puede apreciar claramente del gráfico Nº 3:

V) CARENCIA DE JUSTIFICACIONES DE INTERÉS PÚBLICO PARA EXPLICAR CIERTAS DIFERENCIAS.

49. Que, como se ha planteado con anterioridad, es el criterio de poblacional – proporcional el que debiera tener una clara preeminencia, tanto a nivel particular como desde una óptica agregada, para satisfacer el mandato de la igualdad del voto;

50. Que en presencia de desigualdades muy significativas, como las que derivan del mecanismo de asignación de escaños que regiría a partir de la próxima elección parlamentaria (regla 1), el legislador tiene la carga de justificar (con una alta exigencia de racionalidad desde el punto de vista del interés público) las desviaciones que impactan en el mandato de la igualdad del voto o sufragio igualitario. En este sentido, el margen de apreciación o de deferencia con el legislador debe ser menor. El escrutinio debe ser más estricto;

51. Que, al respecto, corresponde realizar algunas precisiones: justificar en razón del interés público no es necesariamente lo mismo que explicar en base a qué criterios (cuando los hay) se ha efectuado la asignación de escaños distritales. En efecto, una explicación intenta descubrir los motivos o razones en virtud de los cuales una determinada legislación o propuesta legislativa existe. Una justificación (de interés público) intenta decir por qué una determinada legislación o propuesta legislativa es una idea buena o, al menos, una razonable. En algunos casos una explicación constituye, a veces, una justificación de interés público. Sin embargo, también puede ocurrir que la explicación o motivación no necesariamente coincida (en todo o en parte, como en este caso) con una justificación de interés público. Consideraciones de “realismo político”, tal como el criterio de asignación de escaños fundado en que ningún distrito o suma de distritos tendrá menos diputados que los que actualmente posee, no constituye, en los términos manifestados, una justificación de interés público para construir (en parte) la regla 1 de repartición de escaños. Igualmente, y ante la ausencia de razones explícitas, una explicación basada en consideraciones de viabilidad política para no aplicar inmediatamente la regla 2 (la posterior y definitiva) no justifica tal situación, particularmente considerando la magnitud de las distorsiones relacionadas con el principio de la igualdad en el valor del voto;

52. Que, tal como ya se ha manifestado, sí se permiten excepciones o justificaciones respecto de distorsiones significativas en relación al criterio de poblacional-proporcional. Sin embargo, dichas excepciones deben ser sustentadas en razones especiales, objetivamente legítimas y poderosas. Como se ha explicado en el considerando precedente con los dos ejemplos proporcionados, el diseño de la regla 1 no se sustenta en justificaciones de interés público y, por lo tanto, no se fundan en razones que cumplan con el estándar exigido;

53. Que, además de los dos ejemplos manifestados precedentemente, la ausencia de justificación para la asignación de escaños de acuerdo a la regla 1 se puede constatar en la distribución de los treinta y cinco escaños nuevos entre las regiones (salvo la asignación de un escaño extra para las regiones extremas): Siendo el principio rector la igualdad del voto (proporcionalidad) ¿Por qué se asignan veintitrés escaños a las regiones más pobladas y doce al resto, con distribución pareja entre ellas? ¿Por qué de los veintitrés escaños asignados a las regiones más pobladas, quince son para la RM, cuatro para la VIII región y cuatro para la V región? ¿Por qué se utilizó un criterio nominalista para repartir un escaño para cada región y se difuminó el efecto de sobrerrepresentación relativa de las regiones extremas? Incluso en la aplicación aislada y sucesiva de los criterios se incurre en una arbitrariedad al asignar ocho escaños al distrito diez y sólo siete cupos al distrito doce;

54. Que, a diferencia de la regla 1 (inicial y provisoria), la regla 2 (posterior y permanente) obedece a un criterio claro de proporcionalidad según la población de cada distrito, salvo el límite mínimo de tres escaños y el máximo de ocho escaños, lo cual presenta un espacio razonable para concretar diferencias necesarias para alcanzar niveles de proporcionalidad aceptables.

VI.- INCONSTITUCIONALIDAD.

55. Que, por tanto, y en los términos que se señalarán, este Ministro está por acoger el requerimiento declarando la inconstitucionalidad, por violación del inciso primero del artículo 15 de la Constitución, de las siguientes frases del Proyecto, según la individualización indicada:

a) la frase: “cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente” del artículo 1 N° 7), que sustituye el artículo 178 de la ley N° 18.700;

b) las siguientes expresiones del inciso segundo del artículo 1 N° 8), que sustituye el artículo 179 de la ley N° 18.700: “que elegirá 3 diputados”, de los incisos segundo, tercero, veintiocho y veintinueve; “que elegirá 4 diputados”, de los incisos decimoséptimo, decimonoveno, vigesimotercero y vigesimosexto; “que elegirá 5 diputados”, de los incisos cuarto, quinto, decimocuarto, decimosexto, decimonoveno, vigesimosegundo, vigesimoquinto y vigesimoséptimo; “que elegirá 6 diputados”, de los incisos decimosegundo y decimoquinto; “que elegirá 7 diputados”, de los incisos sexto, décimo, decimotercero, decimoctavo y vigesimocuarto; “que elegirá 8 diputados”, de los incisos séptimo, octavo, noveno, decimoprimero y vigesimoprimero;

c) las expresiones “que” y “se actualizará en los plazos y” del inciso final del artículo 1 N° 8), que sustituye el artículo 179 de la ley N° 18.700;

d) la palabra “actualizar” del inciso primero del artículo 179 bis, que agrega el artículo 1° N° 9 del proyecto de ley; y

e) el artículo 1° N° 19) del proyecto de ley, que agrega un artículo 25 transitorio, nuevo, a la ley N° 18.700.

Redactó los capítulos primero y tercero de la sentencia, el Ministro señor Gonzalo García Pino, y los capítulos segundo y cuarto, el Ministro señor Carlos Carmona Santander (Presidente); la primera prevención, la Ministra señora Marisol Peña Torres; la disidencia, los Ministros señor Iván Aróstica Maldonado, señora María Luisa Brahm Barril y señor Cristián Letelier Aguilar, y la segunda prevención, el Ministro señor Juan José Romero Guzmán.

Notifíquese, comuníquese, regístrese y archívese.

Rol N° 2777-15-CPT.

Sr. Carmona

Sra. Peña

Sr. Fernández

Sr. Aróstica

Sr. García

Sr. Hernández

Sr. Romero

Sra. Brahm

Sr. Letelier

Sr. Pozo

Pronunciada por el Excmo. Tribunal Constitucional, integrado por su Presidente, Ministro señor Carlos Carmona Santander, y por sus Ministros señora Marisol Peña Torres, señores Francisco Fernández Fredes, Iván Aróstica Maldonado, Gonzalo García Pino, Domingo Hernández Emparanza, Juan José Romero Guzmán, señora María Luisa Brahm Barril y señores Cristián Letelier Aguilar y Nelson Pozo Silva.

Autoriza la Secretaria del Tribunal Constitucional, señora Marta de la Fuente Olguín.

4.5. Oficio del Tribunal Constitucional

Sentencia del Tribunal Constitucional. Fecha 21 de abril, 2015. Oficio

Santiago, veintiuno de abril de dos mil quince.

VISTOS Y CONSIDERANDO:

I. PROYECTO DE LEY REMITIDO.

PRIMERO.- Que, por oficio Nº 11.698, de 22 de enero de 2015 -ingresado a esta Magistratura el día 23 del mismo mes y año-, la Cámara de Diputados transcribe el proyecto de ley, aprobado por el Congreso Nacional, que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional (Boletín N° 9326-07), con el objeto de que este Tribunal Constitucional, en conformidad a lo dispuesto en el artículo 93, inciso primero, Nº 1º, de la Constitución Política de la República, ejerza el control de constitucionalidad respecto de sus artículos 1°, 2°, 3° y 4°;

SEGUNDO.- Que el Nº 1º del inciso primero del artículo 93 de la Carta Fundamental establece que es atribución de este Tribunal Constitucional: “Ejercer el control de constitucionalidad de las leyes que interpreten algún precepto de la Constitución, de las leyes orgánicas constitucionales y de las normas de un tratado que versen sobre materias propias de estas últimas, antes de su promulgación;”;

TERCERO.- Que, de acuerdo al precepto invocado en el considerando anterior, corresponde a esta Magistratura pronunciarse sobre las normas del proyecto de ley remitido que versen sobre las materias que el Constituyente ha reservado a una ley orgánica constitucional;

II. NORMAS DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA QUE ESTABLECEN EL ÁMBITO DE LAS LEYES ORGÁNICAS CONSTITUCIONALES RELACIONADAS CON EL CONTENIDO DEL PROYECTO DE LEY REMITIDO.

CUARTO.- Que el artículo 18, incisos primero y segundo, de la Constitución Política dispone:

“Habrá un sistema electoral público. Una ley orgánica constitucional determinará su organización y funcionamiento, regulará la forma en que se realizarán los procesos electorales y plebiscitarios, en todo lo no previsto por esta Constitución y garantizará siempre la plena igualdad entre los independientes y los miembros de partidos políticos tanto en la presentación de candidaturas como en su participación en los señalados procesos. Dicha ley establecerá también un sistema de financiamiento, transparencia, límite y control del gasto electoral.

Una ley orgánica constitucional contemplará, además, un sistema de registro electoral, bajo la dirección del Servicio Electoral, al que se incorporarán, por el solo ministerio de la ley, quienes cumplan los requisitos establecidos por esta Constitución.”;

QUINTO.- Que el artículo 19, N° 15, inciso quinto, de la Constitución Política establece:

“Los partidos políticos no podrán intervenir en actividades ajenas a las que les son propias ni tener privilegio alguno o monopolio de la participación ciudadana; la nómina de sus militantes se registrará en el servicio electoral del Estado, el que guardará reserva de la misma, la cual será accesible a los militantes del respectivo partido; su contabilidad deberá ser pública; las fuentes de su financiamiento no podrán provenir de dineros, bienes, donaciones, aportes ni créditos de origen extranjero; sus estatutos deberán contemplar las normas que aseguren una efectiva democracia interna. Una ley orgánica constitucional establecerá un sistema de elecciones primarias que podrá ser utilizado por dichos partidos para la nominación de candidatos a cargos de elección popular, cuyos resultados serán vinculantes para estas colectividades, salvo las excepciones que establezca dicha ley. Aquellos que no resulten elegidos en las elecciones primarias no podrán ser candidatos, en esa elección, al respectivo cargo. Una ley orgánica constitucional regulará las demás materias que les conciernan y las sanciones que se aplicarán por el incumplimiento de sus preceptos, dentro de las cuales podrá considerar su disolución. Las asociaciones, movimientos, organizaciones o grupos de personas que persigan o realicen actividades propias de los partidos políticos sin ajustarse a las normas anteriores son ilícitos y serán sancionados de acuerdo a la referida ley orgánica constitucional.”;

SEXTO.- Que el artículo 47, inciso primero, de la Constitución Política indica:

“La Cámara de Diputados está integrada por miembros elegidos en votación directa por distritos electorales. La ley orgánica constitucional respectiva determinará el número de diputados, los distritos electorales y la forma de su elección.”;

SÉPTIMO.- Que el artículo 49 de la Constitución Política establece:

“El Senado se compone de miembros elegidos en votación directa por circunscripciones senatoriales, en consideración a las regiones del país, cada una de las cuales constituirá, a lo menos, una circunscripción. La ley orgánica constitucional respectiva determinará el número de Senadores, las circunscripciones senatoriales y la forma de su elección.

Los senadores durarán ocho años en su cargo y se renovarán alternadamente cada cuatro años, en la forma que determine la ley orgánica constitucional respectiva.”;

OCTAVO.- Que los incisos primero y sexto del artículo 95 de la Constitución Política disponen:

“Un tribunal especial, que se denominará Tribunal Calificador de Elecciones, conocerá del escrutinio general y de la calificación de las elecciones de Presidente de la República, de diputados y senadores; resolverá las reclamaciones a que dieren lugar y proclamará a los que resulten elegidos. Dicho Tribunal conocerá, asimismo, de los plebiscitos, y tendrá las demás atribuciones que determine la ley.

(…) Una ley orgánica constitucional regulará la organización y funcionamiento del Tribunal Calificador.”;

NOVENO.- Que la disposición decimotercera transitoria de la Constitución Política establece:

“El Senado estará integrado únicamente por senadores electos en conformidad con el artículo 49 de la Constitución Política de la República y la Ley Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios actualmente vigentes.

Las modificaciones a la Ley Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios que digan relación con el número de senadores y diputados, las circunscripciones y distritos existentes, y el sistema electoral vigente, requerirán del voto conforme de las tres quintas partes de los diputados y senadores en ejercicio.”;

III. NORMAS DEL PROYECTO DE LEY SOMETIDAS A CONTROL PREVENTIVO DE CONSTITUCIONALIDAD.

DÉCIMO.- Que las normas del proyecto de ley sometidas a control de constitucionalidad disponen:

“Artículo 1°.- Modifícase la ley N° 18.700, orgánica constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, de la manera que a continuación se señala:

1) En el artículo 3° bis:

a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, pasando el actual inciso segundo a ser tercero:

“En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.”.

b) Intercálase el siguiente inciso quinto, nuevo, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.”.

c) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “que hubieren constituido un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

d) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “Se podrá dejar sin efecto un pacto electoral”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 4° por el siguiente:

“Artículo 4°.- En el caso de las declaraciones de candidaturas para la elección de diputados y senadores, los partidos políticos o pactos electorales podrán presentar en cada distrito o circunscripción un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción de que se trate.”.

3) Sustitúyese el artículo 17 por el siguiente:

“Artículo 17.- El Consejo del Servicio Electoral, dentro de los diez días siguientes a aquel en que venza el plazo para efectuar la declaración de candidaturas, deberá dictar una resolución que se notificará al correo electrónico que los partidos políticos y candidatos independientes deberán informar en el momento de la declaración, la que se pronunciará sobre:

a) La aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 25, 48 y 50 de la Constitución Política de la República, o que se encuentren en alguna de las situaciones previstas en su artículo 57. Asimismo, deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los párrafos 1° a 3° de este título.

b) La aceptación o rechazo de la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, declaradas por cada partido político, en conformidad a lo dispuesto en los incisos cuarto y quinto del artículo 3° bis. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con el porcentaje de sexos establecido en el inciso quinto de dicho artículo.

Los partidos políticos cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, sean rechazadas en conformidad a lo dispuesto en la letra b) de este artículo, podrán corregirlas ante el Servicio Electoral dentro de los cuatro días hábiles siguientes a la fecha del despacho del correo electrónico que notifica la resolución a que alude el inciso primero, con el fin de ajustarse al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso quinto del artículo 3° bis, ya sea retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas.

Dentro de los cinco días siguientes de vencido el plazo para presentar la corrección, el Consejo del Servicio Electoral dictará una nueva resolución aceptando o rechazando las declaraciones nuevas y rechazando o aceptando, según proceda, la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputados o a senadores, según corresponda, la que deberá ser publicada dentro de tercer día en el Diario Oficial. En tal oportunidad también se publicarán en el mismo medio la aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente.”.

4) Agrégase, en el artículo 23, el siguiente inciso tercero, nuevo, pasando los actuales incisos tercero y cuarto a ser cuarto y quinto, respectivamente:

“En el caso de un pacto electoral, el orden de precedencia de los partidos dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito será el señalado por el pacto electoral en la declaración de candidaturas y, a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.

5) En el artículo 24:

a) Sustitúyese el inciso cuarto por el que sigue:

“El orden de precedencia de los candidatos de un partido y sus independientes asociados dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito será el señalado por el partido en la declaración de candidaturas y, a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.

b) Reemplázase, en el inciso final, la expresión “a fin de que” por “destinada a que”.

6) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme a las reglas establecidas en el procedimiento que a continuación se detalla:

1.- El Tribunal Calificador de Elecciones determinará las preferencias emitidas a favor de cada lista y de cada uno de los candidatos que la integran.

2.- Se aplicará el sistema electoral de coeficiente D´Hondt, para lo cual se procederá de la siguiente manera:

a) Los votos de cada lista se dividirán por uno, dos, tres y así sucesivamente hasta la cantidad de cargos que corresponda elegir.

b) Los números que han resultado de estas divisiones se ordenarán en orden decreciente hasta el número correspondiente a la cantidad de cargos que se eligen en cada distrito electoral o circunscripción senatorial.

c) A cada lista o pacto electoral se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b).

3.- En el caso de las listas conformadas por un solo partido político, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará electos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada lista, de acuerdo al número de cargos que le correspondan a cada una de ellas, luego de aplicar las reglas descritas precedentemente.

4.- En el caso de los pactos electorales, se aplicarán las siguientes reglas para determinar cuántos escaños le corresponden a cada uno de ellos:

a) Se calculará el total de los votos de cada partido político o, en su caso, de la suma de cada partido político y las candidaturas independientes asociadas a ese partido.

b) Se dividirá por uno, dos, tres y así sucesivamente, hasta la cantidad de cargos asignados al pacto electoral.

c) A cada partido político o, en su caso, a cada partido y las candidaturas independientes asociadas a éste, se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b) precedente.

d) El Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada partido político o, en su caso, de cada partido, considerando las candidaturas independientes asociadas a éste dentro de un pacto electoral, de acuerdo a los cupos obtenidos por cada uno de ellos.

En caso de empate entre candidatos de una misma lista, o entre candidatos de distintas listas que a su vez estén empatadas, el Tribunal Calificador de Elecciones procederá en audiencia pública a efectuar un sorteo entre ellos, y proclamará elegido al que salga favorecido.”.

7) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”.

8) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos, que elegirá 3 diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte, que elegirá 3 diputados.

3er distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal, que elegirá 5 diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen, que elegirá 5 diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela, que elegirá 7 diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué, que elegirá 8 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca, que elegirá 8 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú, que elegirá 8 diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia, que elegirá 7 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín y La Granja, que elegirá 8 diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén, que elegirá 6 diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana, que elegirá 7 diputados.

13er distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo, que elegirá 5 diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué, San Pedro y Padre Hurtado, que elegirá 6 diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa, que elegirá 5 diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones, que elegirá 4 diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael, que elegirá 7 diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco, que elegirá 4 diputados.

19° distrito, constituido por las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ránquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel, que elegirá 5 diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana, que elegirá 8 diputados.

21er distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja, que elegirá 5 diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino, que elegirá 4 diputados.

23er distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén, que elegirá 7 diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco, que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos, que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena, que elegirá 5 diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O Higgins y Tortel, que elegirá 3 diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica, que elegirá 3 diputados.

El número de diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis.”.

9) Agrégase el siguiente artículo 179 bis:

“Artículo 179 bis.- Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con el siguiente procedimiento:

a) Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consistirá en distribuir a prorrata los cargos entre los distritos electorales, de acuerdo a la fórmula dispuesta en el artículo 109 bis de esta ley.

b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 8 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al de la realización del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con aquel en que se celebran elecciones de diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.

d) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes.

Dentro de los cinco días siguientes a la publicación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral aplicó las letras a) y b) de este artículo.

Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de febrero del año de que se trate.”.

10) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 50 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

1a circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, 2 senadores.

2a circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, 2 senadores.

3a circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 3 senadores.

4a circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, 2 senadores.

5a circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, 3 senadores.

6a circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, 5 senadores.

7a circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 5 senadores.

8a circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, 3 senadores.

9a circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, 5 senadores.

10a circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, 5 senadores.

11a circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 5 senadores.

12a circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 3 senadores.

13a circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, 3 senadores.

14a circunscripción, constituida por la XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, 2 senadores.

15a circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 2 senadores.”.

11) Derógase el artículo 181.

12) Agrégase el siguiente artículo 23 transitorio:

“Artículo 23.- La regla especial del artículo 3° bis, inciso quinto, sólo tendrá aplicación en los procesos electorales parlamentarios de 2017, 2021, 2025 y 2029.”

13) Agrégase el siguiente artículo 24 transitorio:

“Artículo 24.- Para los efectos de completar la nueva integración del Senado de la República, en las elecciones parlamentarias que deben celebrarse en noviembre de 2017 corresponderá que se renueven completamente las circunscripciones que corresponden a regiones impares.

En el caso de las circunscripciones que corresponden a las regiones pares y Metropolitana, los parlamentarios elegidos en 2013 seguirán en sus funciones hasta completar su período de ocho años. En las elecciones de 2021, estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde.”.

14) Agrégase el siguiente artículo 25 transitorio:

“Artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.”.

Artículo 2°.-

Modifícase la ley N° 19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, de la manera que a continuación se señala:

1) Intercálase entre el artículo 58 y el artículo transitorio el siguiente epígrafe: “Disposiciones transitorias.”.

2) Agrégase el siguiente artículo segundo transitorio, pasando el actual artículo único transitorio, a ser artículo primero:

“Artículo segundo.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y sólo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hayan sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a los que pertenezcan tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento por cada una de ellas.

Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.”.

3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a senadoras y diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 unidades de fomento por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.”.

Artículo 3°.-

Modifícase la ley N° 18.603, orgánica constitucional de Partidos Políticos, de la manera que a continuación se señala:

1) Sustitúyese el inciso primero del artículo 3° por el siguiente:

“Artículo 3°.- Los partidos políticos existirán como tales cuando se hubieren constituido legalmente en al menos una de las regiones en que se divide políticamente el país.”.

2) En el artículo 6°:

a) Sustitúyese en el inciso primero la cifra “0,5” por el guarismo “0,25”.

b) Agrégase en el inciso segundo, a continuación del punto aparte, que ha pasado a ser punto seguido, la siguiente oración: “Los notarios no podrán negarse a recibir la declaración a que hace referencia este artículo y no podrán cobrar por este servicio.”.

3) Sustitúyese el inciso primero del artículo 7° por el siguiente:

“Artículo 7°.- Cumplidos los requisitos a que se refieren los artículos 5° y 6°, y reunido el número de afiliados a que alude este último artículo en una de las regiones en que se divide políticamente el país, se solicitará al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos. La solicitud deberá ser firmada por el presidente y por el secretario del partido en formación.”.

4) En el artículo 26:

a) Suprímese en el literal d) la oración “la aprobación de un pacto electoral en elecciones de Parlamentarios o su retiro del mismo, y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal”.

b) Incorpórase el siguiente literal e), pasando los actuales literales e) y f) a ser f) y g) respectivamente:

“e) Aprobar un pacto electoral en las elecciones de parlamentarios o su retiro del mismo y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal;”.

5) En el artículo 42:

a) Sustitúyese su número 2° por el siguiente:

“2°.- Por no alcanzar en la región en que está legalmente constituido el 2,5 por ciento de los sufragios válidamente emitidos en la última elección de diputados. En el caso de los partidos que se encuentren inscritos en más de una región, la disolución procederá cuando no hayan alcanzado el indicado umbral del 2,5 por ciento en más de la mitad de dichas regiones.”.

b) Sustitúyese el inciso final por los siguientes incisos:

“No obstante, si un partido político incurre en la situación prevista en el número 2° de este artículo, pero elige al menos dos parlamentarios, sean diputados o senadores, conservará su calidad de tal.

Si incurre en la situación prevista en el número 4° en una o más regiones, pero mantiene el mínimo de ellas exigido por la ley, conservará su calidad de tal, pero no podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2° en aquellas donde su número de afiliados haya disminuido en más del 50 por ciento. El Director del Servicio Electoral anotará esta circunstancia al margen de la respectiva inscripción en el Registro de Partidos Políticos.”.

Artículo 4°.-

Modifícase la ley N° 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, en los siguientes términos:

1) Sustitúyese el inciso segundo del artículo 7° por el siguiente:

“En la elección primaria para la nominación de candidatos a los cargos de parlamentarios, para cada territorio electoral, los partidos políticos podrán participar:

a) En forma individual, sin haber suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos.

b) En forma individual, habiendo suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos dentro del pacto.

c) En conjunto con otros partidos con los cuales ha suscrito un pacto electoral, y con el objeto de determinar la totalidad de los candidatos de dicho pacto.”.

2) Introdúcense las siguientes modificaciones en el artículo 30:

a) Reemplázase su inciso segundo por el que sigue:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen de la forma señalada en las letras a) o b) del inciso segundo del artículo 7°, serán nominados como candidatos para la elección definitiva en cada territorio electoral las mayores votaciones individuales hasta completar el número de cargos definido en la declaración de candidaturas conforme al inciso primero del artículo 16.”.

b) Incorpórase el siguiente inciso final:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen en pacto electoral de la forma señalada en la letra c) del inciso segundo del artículo 7°, los candidatos nominados para la elección definitiva en cada territorio electoral serán determinados conforme al procedimiento señalado en el artículo 109 bis de la ley N° 18.700, considerando para estos efectos que constituyen una lista los candidatos de un mismo partido y sus candidaturas independientes asociadas.”.

3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- El partido político que decidiere someterse al sistema de elecciones primarias contemplado en los artículos 3º y siguientes de la presente ley para los períodos electorales parlamentarios de los años 2017, 2021, 2025 y 2029 sólo podrá someter a dicho procedimiento hasta el cuarenta por ciento del total de candidaturas a diputado o senador que pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral.”;

IV. NORMAS DEL PROYECTO DE LEY REMITIDO SOMETIDAS A CONTROL PREVENTIVO DE CONSTITUCIONALIDAD QUE REVISTEN NATURALEZA DE LEY ORGÁNICA CONSTITUCIONAL.

DECIMOPRIMERO.- Que las disposiciones contenidas en los numerales 1), 2), 3), 4), 5), 6), 7), 8), 9), 10), 11), 12), 13) y 14) del artículo 1° del proyecto de ley sometido a control de constitucionalidad, que modifica la Ley N° 18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, son propias de las leyes orgánicas constitucionales sobre Sistema Electoral Público, y sobre Votaciones Populares y Escrutinios a que se refiere el inciso primero del artículo 18 de la Constitución Política;

DECIMOSEGUNDO.- Que las disposiciones contenidas en los numerales 1), 2), 3), 4), 5), 9), 12) y 14) del artículo 1° del proyecto son, además, propias de la Ley Orgánica Constitucional sobre Sistema de Inscripciones Electorales y Servicio Electoral a que se refiere el inciso segundo del artículo 18 de la Constitución Política, y sobre Partidos Políticos a que se refiere el artículo 19, N° 15, inciso quinto, de la Constitución Política;

DECIMOTERCERO.- Que las disposiciones contenidas en los numerales 7), 8), 9), 10) y 13) del artículo 1° del proyecto son, además, propias de la Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional a que se refieren los artículos 47, inciso primero, y 49 de la Constitución Política;

DECIMOCUARTO.- Que la disposición contenida en el numeral 6) del artículo 1° del proyecto es, además, propia de la Ley Orgánica Constitucional sobre el Tribunal Calificador de Elecciones a que se refieren los incisos primero y sexto del artículo 95 de la Constitución Política;

DECIMOQUINTO.- Que en el mismo sentido, respecto del carácter orgánico constitucional de las normas contenidas en el artículo 1° del proyecto referidas en los cuatro considerandos precedentes, se ha pronunciado este Tribunal Constitucional en sus sentencias roles N°s 53, 56, 67, 70, 71, 72, 77, 172, 202, 229, 301, 355, 376, 745, 1472, 2062, 2128 y 2152;

DECIMOSEXTO.- Que las disposiciones contenidas en los numerales 1), 2) y 3) del artículo 2° del proyecto de ley sometido a control de constitucionalidad, que modifica la Ley N° 19.884, sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, son propias de las leyes orgánicas constitucionales sobre Sistema Electoral Público y sobre Sistema de Financiamiento, Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, a que se refiere el inciso primero del artículo 18 de la Constitución Política, y de la Ley Orgánica Constitucional sobre Partidos Políticos a que se refiere el artículo 19, N° 15, inciso quinto, de la Constitución Política.

En el mismo sentido se ha pronunciado este Tribunal en sus sentencias roles N°s 53, 376, 415, 416, 454 y 2324;

DECIMOSÉPTIMO.- Que las disposiciones contenidas en los numerales 1), 2), 3), 4) y 5) del artículo 3° del proyecto de ley sometido a control de constitucionalidad, que modifica la Ley N° 18.603, Orgánica Constitucional de Partidos Políticos, son propias de las leyes orgánicas constitucionales sobre Sistema Electoral Público y sobre Sistema de Inscripciones Electorales y Servicio Electoral, a que se refieren los incisos primero y segundo del artículo 18 de la Constitución Política; y de la Ley Orgánica Constitucional sobre Partidos Políticos a que se refiere el artículo 19, N° 15, inciso quinto, de la Constitución Política.

En el mismo sentido se ha pronunciado este Tribunal en sus sentencias roles N°s 43, 67, 90, 261 y 2152;

DECIMOCTAVO.- Que las disposiciones contenidas en los numerales 1), 2) y 3) del artículo 4° del proyecto de ley sometido a control de constitucionalidad, que modifica la Ley N° 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, son propias de las leyes orgánicas constitucionales sobre Sistema Electoral Público y sobre Votaciones Populares y Escrutinios, a que se refiere el inciso primero del artículo 18 de la Constitución Política; de las leyes orgánicas constitucionales sobre Partidos Políticos y sobre Elecciones Primarias a que se refiere el artículo 19, N° 15, inciso quinto, de la Constitución Política, y de la Ley Orgánica Constitucional del Congreso Nacional a que se refieren los artículos 47, inciso primero, y 49 de la Constitución Política.

En el mismo sentido se ha pronunciado este Tribunal en sus sentencias roles N°s 2324 y 2487;

V. NORMAS ORGÁNICAS CONSTITUCIONALES DEL PROYECTO DE LEY REMITIDO QUE EL TRIBUNAL DECLARARÁ CONSTITUCIONALES.

DECIMONOVENO.- Que las disposiciones contenidas en los artículos 1°, numerales 1), 2), 3), 4), 5), 6), 7), 8), 9), 10), 11), 12), 13) y 14); 2°, numerales 1), 2) y 3); 3°, numerales 1), 2), 3), 4) y 5), y 4°, numerales 1), 2) y 3) del proyecto de ley sometido a control de constitucionalidad, no son contrarias a la Constitución Política;

VI. NORMA DEL PROYECTO DE LEY REMITIDO SOBRE LA CUAL ESTA MAGISTRATURA NO EMITIRÁ PRONUNCIAMIENTO.

VIGÉSIMO.- Que el artículo 5° del proyecto de ley remitido dispone:

“Esta ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la partida 02, Congreso Nacional, de la ley de Presupuestos para el Sector Público.

Lo dispuesto en el artículo 2° de esta ley se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la ley de Presupuestos respectiva.”.

Esta Magistratura no emitirá pronunciamiento, en examen preventivo de constitucionalidad, respecto de esta disposición del proyecto, por no ser propia de ley orgánica constitucional;

VII. CUESTIONES DE CONSTITUCIONALIDAD SUSCITADAS DURANTE LA TRAMITACIÓN DEL PROYECTO DE LEY Y PRONUNCIAMIENTO ANTERIOR DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL EN CONTROL FACULTATIVO DE CONSTITUCIONALIDAD A INSTANCIA PARLAMENTARIA.

VIGESIMOPRIMERO.- Que, en el oficio remisor individualizado en el considerando primero de esta sentencia, se consigna que se suscitó cuestión de constitucionalidad durante la tramitación del proyecto, por lo que se acompañan las actas respectivas;

VIGESIMOSEGUNDO.- Que el inciso final del artículo 48 de la Ley N° 17.997, Orgánica Constitucional del Tribunal Constitucional, dispone que “si durante la discusión del proyecto o del tratado se hubiere suscitado cuestión de constitucionalidad de uno o más de sus preceptos, deberán enviarse al Tribunal, además, las actas de las sesiones, de sala o comisión, o el oficio del Presidente de la República, en su caso, donde conste la cuestión de constitucionalidad debatida o representada.”.

Por su parte, el inciso quinto del artículo 49 de la misma ley orgánica constitucional establece que “si el Tribunal encontrare que el proyecto es constitucional y se hubiere producido la situación prevista en el inciso final del artículo anterior, el Tribunal deberá declarar la constitucionalidad del proyecto fundándola respecto de los preceptos que, durante su tramitación, hubieren sido cuestionados.”;

VIGESIMOTERCERO.- Que, del estudio de las actas del proyecto de ley bajo análisis, se aprecia que, tanto en su estudio en la Comisión de Constitución del Senado como en la discusión en la Sala del mismo, se efectuaron reservas expresas de constitucionalidad;

VIGESIMOCUARTO.- Que, sin perjuicio de la referencia que se efectuará a las cuestiones de constitucionalidad que se plantearon, desde ya debe tenerse presente que, en autos Rol 2777-15-CPT, con fecha 24 de enero de 2015, doce honorables señores Senadores de la República, representados por el señor Hernán Larraín Fernández, dedujeron requerimiento de inconstitucionalidad respecto de ciertas normas del mismo proyecto de ley que en estos autos se examina en control preventivo obligatorio de constitucionalidad (artículo 93, N° 1, de la Constitución).

Al efecto, los parlamentarios ejercieron en dicha oportunidad la facultad que les confiere el artículo 93, N° 3, de la Constitución Política de la República, en orden a que, constituyendo la cuarta parte de los miembros en ejercicio del Senado, sometieron a la resolución de esta Magistratura Constitucional la constitucionalidad de ciertas disposiciones de un proyecto de ley, antes de su promulgación;

VIGESIMOQUINTO.- Que, por sentencia de 30 de marzo de 2015, recaída en la referida causa Rol 2777-15-CPT, este Tribunal Constitucional rechazó en todas sus partes el requerimiento de inconstitucionalidad aludido. En dicha sentencia, esta Magistratura emitió pronunciamiento respecto de alegaciones de inconstitucionalidad que junto con formularse en el requerimiento sometido al conocimiento de este Tribunal, se plantearon igualmente como reservas de constitucionalidad durante la tramitación del proyecto.

Al respecto, existen dos reservas de constitucionalidad efectuadas durante la tramitación del proyecto, que fueron resueltas por este Tribunal en la sentencia ya aludida y que inciden en normas que revisten carácter de orgánicas constitucionales respecto de las cuales este Tribunal debe pronunciarse en examen preventivo obligatorio de constitucionalidad, conforme se hará referencia a continuación;

VIGESIMOSEXTO.- Que, en primer lugar, se suscitó cuestión de constitucionalidad en relación con las normas del artículo 1°, N°s 8) y 9), del proyecto de ley remitido, que modifican el artículo 179 y la letra b) del nuevo artículo 179 bis de la Ley N° 18.700; y en relación con el artículo 1°, N° 14), del proyecto, que incorpora un nuevo artículo 25 transitorio a la misma Ley N° 18.700.

Estas normas del proyecto se refieren a la conformación de los nuevos 28 distritos para la elección de Diputados, y al número de escaños que se elegirá en cada uno de ellos (temporalmente), que fluctúa entre 3 y 8, alcanzando un total de 155; así como al sistema que se establece para la distribución de los escaños por distrito, por parte del Consejo Directivo del Servicio Electoral, que operará a partir del año subsiguiente al del censo oficial del año 2022 (permanente);

VIGESIMOSÉPTIMO.- Que, respecto a estas normas, los Senadores señores Larraín, Espina y Coloma formularon reserva expresa de constitucionalidad, por estimar que infringían los principios de igualdad del voto y de igualdad ante la ley, consagrados en los artículos 15 y 19, N° 2°, de la Carta Fundamental (Segundo Informe de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento del Senado, de 5 de enero de 2015, páginas 91 y siguientes, y 94 y siguientes; y Diario de Sesiones del Senado correspondiente a la Sesión 84ª, de 13 de enero de 2015, en que consta discusión particular del proyecto en segundo trámite constitucional, páginas 589 y siguientes, y 656 y siguientes);

VIGESIMOCTAVO.- Que, en la sentencia Rol N° 2777-15-CPT, este Tribunal analizó el asunto, concluyendo que las normas del proyecto aludidas precedentemente se encuentran ajustadas a la Constitución, pues no vulneran los principios del voto igualitario ni de igualdad ante la ley, ya que en el proyecto el legislador orgánico constitucional ha configurado un sistema electoral que cumple, en cuanto a la distribución de los distritos y la asignación de escaños, con la proporcionalidad exigida por la Carta Fundamental, sin que se constituya una distribución arbitraria.

Asimismo, se concluye que el establecimiento de un régimen transitorio por el legislador para la asignación de escaños por distrito, no infringe la Carta Fundamental (Sentencia Rol N° 2777-15-CPT, considerandos 1° a 25°);

VIGESIMONOVENO.- Que, en segundo lugar, se suscitó cuestión de constitucionalidad en relación con las normas del artículo 1°, N° 1), letra b), del proyecto, que modifica el artículo 3° bis de la Ley N° 18.700; y del artículo 4°, N° 3), del proyecto, que incorpora un nuevo artículo tercero transitorio a la Ley N° 20.640.

Estas normas incorporan “cuotas de género”, en orden a que en las declaraciones de candidaturas para Diputados y Senadores, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres pueden superar el 60% del total; y a que el partido político que opte por el sistema de elecciones primarias para los períodos 2017, 2021, 2025 y 2029, no podrá someter a dicho procedimiento más del 40% del total de las candidaturas para la elección definitiva de Diputados o Senadores;

TRIGÉSIMO.- Que, respecto a estas normas, los Senadores señores Coloma y Espina formularon reserva expresa de constitucionalidad, por estimar que afectaban la autonomía de los partidos políticos y su derecho a someterse sin limitaciones al mecanismo de elecciones primarias, infringiendo de ese modo el artículo 19, N° 15, inciso quinto, de la Constitución (Segundo Informe de la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento del Senado, de 5 de enero de 2015, página 25; y Diario de Sesiones del Senado correspondiente a la Sesión 84ª, de 13 de enero de 2015, páginas 88 y siguientes; 138 y siguientes, y 883 y siguientes);

TRIGESIMOPRIMERO.- Que, en la sentencia Rol N° 2777-15-CPT, este Tribunal, asimismo, analizó el asunto, concluyendo que las normas del proyecto referidas precedentemente se encuentran ajustadas a la Constitución, considerando que no se impugna el mecanismo de cuotas de género propiamente tal, sino la limitación del 40% que se establece respecto a las elecciones primarias, en circunstancias que el legislador orgánico constitucional puede, legítimamente, establecer esa limitación, pues sólo restringe temporal y parcialmente el sistema de primarias al tiempo que el mecanismo de cuotas de género asegura la igualdad de oportunidades y la igualdad ante la ley (Sentencia Rol N° 2777-15-CPT, considerandos 26° a 34°);

TRIGESIMOSEGUNDO.- Que, respecto a las dos cuestiones de constitucionalidad suscitadas durante la tramitación del proyecto, arriba referidas, y que inciden en normas que en la presente sentencia se declararán como propias de ley orgánica constitucional, se constata que este Tribunal ya emitió pronunciamiento justificando su constitucionalidad, en su reciente sentencia Rol 2777-15-CPT (de 30 de marzo de 2015).

En consecuencia, encontrándose ya debidamente fundamentada la constitucionalidad de dichas normas, esta Magistratura ha dado cumplimiento a lo prescrito en el artículo 49, inciso quinto, de su Ley Orgánica Constitucional, desestimando las cuestiones de constitucionalidad planteadas;

TRIGESIMOTERCERO.- Que, en las actas en que consta la discusión de la iniciativa de ley bajo análisis, tanto en la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento como en la Sala del Honorable Senado, se contienen otras referencias o alusiones a cuestiones o reservas de constitucionalidad. Sin embargo, algunas de éstas se esgrimen de modo genérico, bien sin aludir a normas concretas del proyecto de ley o bien sin hacer referencia a normas específicas de la Carta Fundamental, al tiempo que otras reservas son más bien alocuciones de mérito o políticas, propias de la discusión legislativa en el Congreso Nacional.

En consecuencia, este Tribunal Constitucional no emitirá pronunciamiento a su respecto, por no constituir propiamente cuestiones de constitucionalidad de aquellas sobre las cuales debe resolver al tenor de lo preceptuado en los artículos 48 y 49 de la Ley Orgánica Constitucional de esta Magistratura;

VIII. CUMPLIMIENTO DE LOS QUÓRUM DE APROBACIÓN DE LAS NORMAS DEL PROYECTO DE LEY EN EXAMEN.

TRIGESIMOCUARTO.- Que consta en autos que las normas sobre las cuales este Tribunal emite pronunciamiento fueron aprobadas en ambas Cámaras del Congreso Nacional con las mayorías requeridas por la disposición decimotercera transitoria y por el inciso segundo del artículo 66 de la Carta Fundamental, respectivamente.

Y TENIENDO PRESENTE lo dispuesto por los artículos 18, incisos primero y segundo; 19, N° 15, inciso quinto; 47, inciso primero; 49; 66, inciso segundo; 93, inciso primero, Nº 1º, e inciso segundo; 95, incisos primero y sexto, y en la disposición decimotercera transitoria de la Constitución Política de la República, y lo prescrito en los artículos 48 a 51 de la Ley Nº 17.997, Orgánica Constitucional de esta Magistratura,

SE RESUELVE:

1º.- Que las disposiciones contenidas en los numerales 1), 2), 3), 4), 5), 6), 7), 8), 9), 10), 11), 12), 13) y 14) del artículo 1° del proyecto de ley remitido, son constitucionales.

2°.- Que las disposiciones contenidas en los numerales 1), 2) y 3) del artículo 2° del proyecto de ley remitido, son constitucionales.

3°.- Que las disposiciones contenidas en los numerales 1), 2), 3), 4) y 5) del artículo 3° del proyecto de ley remitido, son constitucionales.

4°.- Que las disposiciones contenidas en los numerales 1), 2) y 3) del artículo 4° del proyecto de ley remitido, son constitucionales.

5°.- Que no se emite pronunciamiento, en examen preventivo de constitucionalidad, respecto de la disposición contenida en el artículo 5° del proyecto de ley remitido, por no versar sobre materias propias de ley orgánica constitucional.

Los Ministros señores Carlos Carmona Santander (Presidente), Francisco Fernández Fredes, Gonzalo García Pino, Domingo Hernández Emparanza y Nelson Pozo Silva previenen que concurren a la presente sentencia, pero bajo las siguientes consideraciones:

1°. Que esta Magistratura ya ejerció el control de constitucionalidad de ciertas normas del proyecto de ley que nos corresponde analizar ahora en el control obligatorio, mediante la STC N° 2777/2015.

Algunas de estas normas tienen la naturaleza de ley orgánica constitucional. Por tanto, ahora debemos examinar el alcance adicional de ese control;

2°. Que el punto es relevante, porque respecto del control preventivo obligatorio, la ley orgánica del Tribunal Constitucional resolvió el problema. Por una parte, al establecer que no cabe otro requerimiento (artículo 51). Por la otra, que no cabe recurso de inaplicabilidad por el mismo vicio (artículo 51). Lo mismo sucede respecto del control preventivo facultativo con la inaplicabilidad, pues la misma ley establece que si el Tribunal lo declara constitucional, no puede ser declarado inaplicable por el mismo vicio materia del proceso y de la sentencia respectiva (artículo 71).

Sin embargo, no existe una regla expresa que vincule el control preventivo facultativo con el control preventivo obligatorio, si éste sucede después;

3°. Que, sin embargo, esta falta de regulación es sólo aparente. En primer lugar, porque debemos rechazar que el control preventivo facultativo sea inútil, en el sentido que no vincule a nadie. La Constitución establece en esta materia que al Tribunal le corresponde “resolver las cuestiones sobre constitucionalidad que se susciten”. Resolver significa solucionar un asunto, decidirlo. Y eso no sucedería, si lo que el Tribunal estableció en la STC N° 2777/2015, no lo vincula en su decisión de control obligatorio. Por lo mismo, no puede declarar inconstitucional lo que ya declaró constitucional ni menos revisar su decisión de declarar inconstitucional en esta nueva “oportunidad procesal”;

4°. Que, en segundo lugar, no tiene sentido que la ley orgánica del Tribunal haya establecido que el control preventivo facultativo y el control preventivo obligatorio son vinculantes para el Tribunal cuando conoce de la inaplicabilidad, y no cuando ejerce, sobre los mismos preceptos, un control preventivo obligatorio después de uno facultativo. No guardaría coherencia interna el sistema;

5°. Que, en tercer lugar, todo el sistema apunta a que los asuntos sean zanjados por el Tribunal Constitucional. Por eso contra sus decisiones no procede recurso alguno (artículo 94 de la Constitución).

La posibilidad de que el Tribunal pudiera fallar cosas distintas en el control preventivo obligatorio de lo resuelto en el control preventivo facultativo, implica generar una incertidumbre jurídica. También la posibilidad de que el mismo Tribunal revise sus propias decisiones, generando duplicidad de controles;

6°. Que, en cuarto lugar, la lógica del control preventivo facultativo es que se zanje un asunto que, de prosperar como normativa legal, afecte el ordenamiento jurídico. Cuando el Congreso, a través de sus cámaras, o una cuarta parte de diputados, o senadores, o el Ejecutivo, recurren al Tribunal Constitucional, porque se ha suscitado una cuestión de constitucionalidad, es para que éste la resuelva, y no quede latente.

No tiene sentido que las sentencias dictadas en esta materia sean vinculantes para los órganos requirentes y no para el propio Tribunal. Con ello, debilitaría el control preventivo facultativo que la Constitución preserva para esos órganos constitucionales;

7°. Que, sin embargo, el hecho de haber emitido un pronunciamiento en el control preventivo facultativo sobre el fondo de las normas, declarando su constitucionalidad o inconstitucionalidad, no lo libera de ejercer el control preventivo obligatorio. Consideramos que el Tribunal en este caso, desde luego, debe verificar la naturaleza orgánica constitucional de los preceptos, aun respecto de aquellos que fueron objeto de requerimiento. Esa es una competencia ineludible, que le manda la Constitución (artículo 93, N° 1). También puede controlar otras normas distintas a las requeridas, pronunciándose sobre si son orgánicas o no, o sobre si son constitucionales o no. Asimismo, puede examinar los preceptos respecto de otros vicios de inconstitucionalidad de que puedan adolecer. Lo que no puede hacer es controlar las mismas normas y los mismos vicios. Eso quedó resuelto en el control preventivo facultativo;

8°. Que sobre ese marco realizamos el control preventivo obligatorio, respecto de las normas cuya constitucionalidad ya fue resuelta en la STC N° 2777/2015.

La Ministra señora Marisol Peña Torres previene que concurre a la decisión de declarar constitucionales las normas sometidas a control preventivo obligatorio de constitucionalidad en esta oportunidad por las razones ya consignadas en su voto particular en la sentencia Rol N° 2777 de este Tribunal. Específicamente, porque los principios de presunción de constitucionalidad y de deferencia razonada que merece la obra del legislador democrático no logran ser desvirtuados por ningún vicio de constitucionalidad que pudiere imputárseles. Al mismo tiempo, todas las normas sometidas a control en esta oportunidad admiten una interpretación que las conforma con la Carta Fundamental, especialmente, en lo que dice relación con la nueva distribución de escaños electorales y la introducción de cuotas de género en las candidaturas parlamentarias que, al tenor de los antecedentes que fundan el proyecto de ley, tienden a la plena realización de valores constitucionales como el derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional, el fortalecimiento de la regionalización del país y la plena igualdad de hombres y mujeres ante la ley, en forma compatible con las obligaciones que Chile ha adquirido como Estado Parte de la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW).

En otro orden de consideraciones, quien suscribe este voto previene que concurre a la decisión contenida en la sentencia de autos firmemente convencida que el control preventivo facultativo que se ejerció por este Tribunal, respecto de idénticas materias, no inhibe ni impide el ejercicio del presente control obligatorio de constitucionalidad en plenitud. Lo anterior, porque el sentido del control previsto en el artículo 93, inciso primero, N° 3°, de la Constitución Política radica en la protección de las minorías parlamentarias que, representadas por una cuarta parte de los miembros de cualquiera de las Cámaras, puede requerir el pronunciamiento del Tribunal Constitucionalidad respecto de normas de un proyecto de ley que las mayorías pretendan imponer en forma contraria al pleno respeto del principio de supremacía constitucional. Ello es plenamente conforme con el principio democrático plasmado en el artículo 4° de nuestra Carta Fundamental que supone que las decisiones se adoptan por las mayorías con pleno respeto a las minorías en forma compatible con el valor del pluralismo consustancial a esta forma de gobierno.

Por lo demás, así se desprende inequívocamente de lo dispuesto en el artículo 71 de la Ley Orgánica Constitucional de este Tribunal, según el cual: “Declarado por el Tribunal que un precepto legal impugnado de conformidad a este Párrafo es constitucional, no podrá ser declarado posteriormente inaplicable por el mismo vicio materia del proceso y de la sentencia respectiva.”. El párrafo en que se inserta dicha norma es el que se refiere a “Cuestiones de constitucionalidad sobre proyectos de ley, de reforma constitucional y tratados en tramitación legislativa”, esto es, a controles de constitucionalidad facultativos y preventivos de proyectos de ley, entre otras normas. De acuerdo a la norma transcrita, el único impedimento que produce una sentencia expedida en el ejercicio de dicho control dice relación con la imposibilidad de deducir una acción de inaplicabilidad en control posterior de constitucionalidad de una norma que ya fue declarada constitucional en el ejercicio del control preventivo facultativo (por requerimiento parlamentario). En consecuencia, extender el impedimento de controles diferentes, confiados asimismo al Tribunal Constitucional –como es el caso del control preventivo obligatorio del artículo 93, inciso primero, N° 1, de la Carta Fundamental- a otras materias no consultadas en la ley orgánica constitucional constituye, a nuestro juicio, una grave infracción del principio contenido en el artículo 7°, inciso segundo, de la misma Ley Suprema, que esta Ministra previniente no puede suscribir.

Finalmente, para confirmar lo aseverado, debe tenerse presente lo dispuesto en el artículo 49, inciso tercero, de la Ley Orgánica Constitucional de esta Magistratura, en el sentido que “resuelto por el Tribunal que el proyecto respectivo es constitucional (en el control preventivo obligatorio), y no habiéndose producido en la etapa de discusión del proyecto la situación prevista en el inciso final del artículo anterior (reservas de constitucionalidad durante la tramitación del proyecto), el Tribunal así lo declarará y su Presidente lo comunicará a la Cámara de origen.” No hay, en consecuencia, ninguna mención a un eventual control facultativo previo que ya haya motivado una sentencia de este órgano constitucional.

El Ministro señor Juan José Romero Guzmán previene lo siguiente:

a) Que concurre a la declaración de constitucionalidad de los numerales 1), 2), 3), 4), 5), 6), 10), 11), 12), 13) y 14) del artículo 1° del proyecto de ley;

b) Que concurre a la declaración de constitucionalidad de los numerales 7), 8) y 9) del artículo 1° del proyecto de ley, con la excepción de las partes que se indicarán a continuación;

c) Que estuvo por declarar inconstitucional la frase “cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente” del artículo 1°, N° 7), por los argumentos desarrollados en su voto particular de la sentencia Rol N° 2777-15-CPT;

d) Que estuvo por declarar inconstitucionales las siguientes expresiones del inciso segundo del artículo 1°, N° 8), que sustituye el artículo 179 de la ley N° 18.700: “que elegirá 3 diputados”, de los incisos segundo, tercero, veintiocho y veintinueve; “que elegirá 4 diputados”, de los incisos decimoséptimo, decimonoveno, vigesimotercero y vigesimosexto; “que elegirá 5 diputados”, de los incisos cuarto, quinto, decimocuarto, decimosexto, vigesimosegundo, vigesimoquinto y vigesimoséptimo; “que elegirá 6 diputados”, de los incisos decimosegundo y decimoquinto; “que elegirá 7 diputados”, de los incisos sexto, décimo, decimotercero, decimoctavo y vigesimocuarto; “que elegirá 8 diputados”, de los incisos séptimo, octavo, noveno, decimoprimero y vigesimoprimero, por los argumentos desarrollados en su voto particular de la sentencia Rol N° 2777-15-CPT;

e) Que estuvo por declarar inconstitucionales las expresiones “que” y “se actualizará en los plazos y” del inciso final del artículo 1°, N° 8), por los argumentos desarrollados en su voto particular de la sentencia rol N° 2777-15-CPT;

f) Que estuvo por declarar inconstitucional la palabra “actualizar” del inciso primero del artículo 179 bis, que agrega el artículo 1°, N° 9), del proyecto de ley, por los argumentos desarrollados en su voto particular de la sentencia rol N° 2777-15-CPT;

g) Que estuvo por declarar el carácter orgánico constitucional del numeral 14) del artículo 1° del proyecto de ley, por tratarse de materias propias de la ley orgánica constitucional señalada en el artículo 18 de la Constitución, y declararlo inconstitucional, por los argumentos desarrollados en su voto particular de la sentencia Rol N° 2777-15-CPT; y

h) Que concurre a no emitir pronunciamiento sobre la disposición del artículo 5° del proyecto de ley, por no tratarse de materias propias de ley orgánica constitucional.

Acordada la sentencia con el voto en contra de los Ministros señor Iván Aróstica Maldonado, señora María Luisa Brahm Barril y señor Cristián Letelier Aguilar, por las razones que enseguida exponen:

REITERA DISIDENCIA.

1°) Que, en primer término, corresponde hacer presente que mientras la Constitución establezca la obligación de este Tribunal de controlar la constitucionalidad de las leyes orgánicas constitucionales antes de su promulgación (artículo 93, N° 1), función cuya crucial finalidad es evitar que entren en vigor leyes contrarias a la misma Constitución, ejercerá dicha facultad en plenitud, como todas las demás que competen a esta Magistratura.

Hacen presente estos disidentes, también, que es su deber como jueces constitucionales velar siempre por la vigencia de la supremacía de la Constitución, incluso desde la minoría, dando a conocer en tal caso su disenso frente a una mayoría que consideran equivocada. Recuerdan, finalmente, que el deber de disentir está regulado por el inciso segundo del artículo 39 de la Ley Orgánica Constitucional de este Tribunal, el cual imperativamente ordena que “los ministros que discrepen de la opinión mayoritaria del Tribunal deberán hacer constar en el fallo su disidencia”;

2°) Que, en esta línea, disienten del fallo precedente, por las mismas razones que expusieron desde la minoría en la sentencia Rol N° 2777, recaída en un anterior requerimiento parlamentario contra este proyecto de ley que ahora se controla (Boletín N° 9326-07). Tanto más cuando los reparos que la motivaron subsisten y las argumentaciones jurídicas vertidas en esa minoría, que se dan por reproducidas, no aparecen desvirtuadas hasta ahora en derecho constitucional.

Por lo tanto, cabe reiterar las inconstitucionalidades que presenta el artículo 1° del proyecto examinado, en el numeral 8), que establece un nuevo artículo 179 en la Ley N° 18.700, cuando dispensa un número arbitrario de escaños para diputados en los distritos electorales que señala; en el número 14), cuando incorpora un nuevo artículo 25 transitorio a la citada Ley N° 18.700; en el número 9), referido a la letra b) del nuevo artículo 179 bis que se agrega a la misma ley; en el número 1), letra b), que modifica el artículo 3° bis de la Ley N° 18.700, así como en el número 3) del artículo 4° del proyecto, que incorpora un artículo 3° transitorio a la Ley N° 20.640. Siendo inconstitucionales, asimismo, el número 2) del artículo 3° del proyecto, que modifica la letra a) del artículo 6° de la Ley N° 18.603, y los numerales 8) y 10) del artículo 1° en revisión, estos dos últimos por los allá reseñados vicios constitucionales cometidos durante su tramitación;

OTRAS INCONSTITUCIONALIDADES

SOBRE LAS CUOTAS DE GÉNERO.

3°) Que, sin perjuicio de las inconstitucionalidades sostenidas en la aludida disidencia, son también inconstitucionales los numerales 2) y 3) del artículo 2° del proyecto bajo examen, que agregan unos nuevos artículos segundo y tercero transitorios, respectivamente, a la Ley N° 19.884, sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral. Estas normas no fueron impugnadas en el requerimiento parlamentario que dio origen al indicado proceso Rol N° 2777.

En el primero, se incorpora un artículo segundo transitorio a la referida ley, mediante el cual, para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y senadoras que hayan sido electas, los partidos políticos a que éstas pertenezcan tendrán derecho a un monto de 500 unidades de fomento por cada una de ellas.

En el segundo, se incorpora un artículo transitorio a la referida ley, el que, para los mismos períodos eleccionarios ya señalados, establece para las candidatas a senadoras y diputadas un reembolso “adicional” a sus gastos electorales, por cada voto que hayan obtenido. Lo “adicional” del reembolso destaca, claramente, el carácter de beneficio que para las candidatas mujeres entraña la norma en análisis.

Ambos preceptos buscan mejorar la situación de un colectivo -las mujeres- en relación a su participación en la política, mediante incentivos pecuniarios que no se generan cuando se trata de un candidato varón;

4°) Que las disposiciones señaladas introducen una discriminación o diferenciación entre los candidatos hombres y las candidatas mujeres, beneficiando a éstas. Ello, ya sea respecto a su situación en el seno de los partidos, buscando que éstos las privilegien al momento de elegir qué candidatos presentan, mediante la posibilidad de un beneficio, circunstancia que constriñe dicha elección (N° 2 del artículo 2°) o, bien, estableciendo un beneficio adicional pagadero directamente a la candidata (N° 3 del artículo 2°).

Ambos mecanismos se aplican exclusivamente cuando intervienen candidatas mujeres, por el solo hecho de ser tales, lo que contraría el principio de igualdad, al establecer un trato desigual entre hombres y mujeres, sin contar para ello con algún fundamento constitucional;

5°) Que, en efecto, comoquiera que el ordenamiento vigente asegura la igualdad de las “personas”, individualmente consideradas o en asociación con otras, según su específica situación, procurar la paridad de un colectivo respecto de otro implica establecer una discriminación a favor de un determinado grupo, en este caso en razón de su solo género.

En circunstancias que el artículo 1°, inciso primero, de la Constitución es en extremo enfático y claro, en orden a que todas “las personas” son iguales en dignidad y derechos, lo que luego, respecto de hombres y mujeres, plasma expresamente en su artículo 19, N° 2, inciso primero. En este último precepto, el Constituyente, a la par de establecer que en Chile “no hay persona ni grupo privilegiados”, dispone de manera consistente con lo anterior que “hombres y mujeres son iguales ante la ley”;

6°) Que, por lo demás, las referidas cuotas u otros incentivos pecuniarios favorables a un colectivo, aun si inspiradas en el bien común, en cuanto correlativamente perjudican a todas aquellas personas concretas que no integran dicho grupo, sólo por no compartir el mismo género, resultan jurídicamente intolerables, desde que el propio texto supremo ordena al Estado alcanzar ese bien común “con pleno respeto a los derechos y garantías que esta Constitución establece”, en su artículo 1°, inciso cuarto, esto es, sin sacrificios o males individuales.

Menos puede justificarse esta clase de medidas, que vienen a constituir a las mujeres en un grupo privilegiado, si se observa lo prescrito en el citado artículo 1° de la Constitución, cuyo inciso cuarto resguarda -en consonancia con su inciso primero- a la persona humana y “a todos y a cada uno de los integrantes de la comunidad nacional”, sin distinguir entre grupos, en armonía con su inciso final, donde nuevamente se preceptúa que el Estado debe asegurar el derecho “de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional”. Estas normas son coherentes, por cierto, con el artículo 19, N° 2, inciso primero, de la Constitución, cuyo alcance ha sido revisado precedentemente;

7°) Que, así las cosas, cualquier pretensión interpretativa tendiente a dotar de fundamento constitucional a medidas que terminan por constituir a las mujeres como un grupo privilegiado, por su pertenencia a un género determinado, sobre la base de invocar parcialmente lo que preceptúan los incisos destacados del mencionado artículo primero, no puede soslayar un criterio rector de hermenéutica constitucional, cual es la necesaria interpretación armónica de todas las normas de la Carta Fundamental.

Ninguno de los deberes puestos al Estado en uno y otro de los incisos referidos puede ser entendido de manera aislada y con prescindencia de los demás, ni en desmedro de lo que prístinamente emana del artículo 19, N° 2, inciso primero, de la Constitución. Pues, como ha reconocido este Tribunal, es un principio de hermenéutica constitucional reiteradamente enfatizado en sus fallos el que las normas de la Carta Fundamental deben interpretarse de modo que exista entre todas ellas la debida correspondencia y armonía, siendo dable presumir que el constituyente elaboró la Carta con un predicamento sistémico y articulado, velando por la coherencia de los distintos preceptos que la componen (STC N° 1410, considerando 6°. En el mismo sentido, STC N° 452, considerando 10°);

8°) Que las disposiciones que contempla el proyecto, en relación a las cuotas de género (artículo 1°, N° 1, letra b), que modifica el artículo 3° bis de la Ley N° 18.700; y artículo 4°, N° 3), que modifica la Ley N° 20.640, sobre primarias), si bien han sido formuladas por el legislador en un pretendido tono “neutral”, con respecto a los hombres y las mujeres, al igual que las normas sobre financiamiento que consideramos inconstitucionales en los motivos anteriores de este voto, persiguen mejorar la situación de la mujer en la arena política, en cuanto a su postulación a cargos de elección popular, particularmente, los de Diputado y Senador.

Ello es algo que se puede extraer no sólo del debate legislativo que hubo en el Congreso al discutirse las mismas, sino que también emana de una lectura conjunta con las otras medidas que contiene el proyecto, y que son llamadas a aplicarse en los períodos eleccionarios de 2017, 2021, 2025 y 2029, en los que están destinadas a incidir las normas sobre cuotas (numerales 2 y 3 del artículo 2°). Además, ello también ha sido revelado por la defensa que se hiciere de las normas sobre cuotas en el proceso Rol N° 2.777, por distintos actores, en cuya visión había de considerarse, por ejemplo, la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW).

Y sin perjuicio de lo anterior, y aun si compartiéramos la pretendida neutralidad de las reglas sobre cuotas, ello tampoco permite sortear su inconstitucionalidad, toda vez que la Constitución alude a lo masculino y lo femenino, hombres y mujeres, para establecer que aquéllos son iguales ante la ley;

9°) Que, además de las inconstitucionalidades reseñadas, las cuotas de género colisionan con otros preceptos fundamentales, especialmente con aquellos que configuran la ciudadanía e inciden en el ejercicio de uno de los derechos inherentes a dicha condición, cual es el derecho a sufragio en su vertiente pasiva, es decir, el derecho a ser elegido en cargos de elección popular.

Según asentamos en nuestra disidencia en la Sentencia Rol N° 2777, la regulación de la ciudadanía es una materia consagrada y normada de manera directa por la Carta Fundamental. Dicha calidad otorga, además del derecho a votar para elegir a otro, el derecho a postular a cargos de elección popular. En este sentido, la Constitución Política establece que “la calidad de ciudadano otorga los derechos de sufragio, de optar a cargos de elección popular y los demás que la Constitución o la ley confieran” (inciso segundo del artículo 13).

Las normas sobre cuotas afectan este derecho, cuyo ejercicio sólo se encuentra supeditado al cumplimiento de los requisitos establecidos directamente por la Constitución (artículo 13 en relación a los artículos 48 y 50), ya que terminan exigiendo condiciones adicionales para la postulación a los cargos de parlamentarios, excediendo aquellas que establece la Carta Fundamental. Nada hay en ella que permita interponer el género de los candidatos al ejercicio de los derechos que confiere la ciudadanía. Y bien, por mérito del proyecto, ya no bastará cumplir lo prescrito por la Constitución para ejercer el derecho antedicho, pues el proyecto establece un requisito legal adicional, como sería encontrarse dentro del porcentaje respectivo del género al que pertenece el candidato. La introducción de un requisito tal, por disponerlo una ley, es inconstitucional, pues ello sólo puede hacerse reformando la Constitución;

10°) Que, sin perjuicio de lo anterior, conviene agregar que de las disposiciones constitucionales citadas, resulta claro que la calidad de ciudadano habilita para el ejercicio del derecho a voto y para ser elegido en cargos de elección popular, en condiciones idénticas para todos aquellos que cumplan con los requisitos constitucionalmente exigidos, sin que para ello importe el género, femenino o masculino, al que pertenezca el ciudadano.

El proyecto exige la pertenencia a un género, en una proporción determinada, para poder ejercer el derecho a sufragio pasivo, siendo que hombres y mujeres son sujetos indiferenciados en el texto constitucional, a efectos de ejercitar tal derecho a sufragio pasivo. Esta cuestión termina dividiendo a los ciudadanos, respecto de uno de los derechos más esenciales que entrega dicha condición, según al género al que pertenezcan.

Las cuotas de género, que en el caso del proyecto de ley -pese a su formulación neutra- persiguen mejorar la situación de las mujeres en la política, no pueden consentirse o tolerarse en cuanto éstas suponen afectar directamente un derecho que se le reconoce en igual medida a todos los ciudadanos, sin consideración de su pertenencia al género masculino o femenino, ni menos en una proporción determinada.

Lo anterior, por cuanto por aplicación de estas normas existirán ciudadanos –titulares del derecho a sufragio pasivo– que devendrán lesionados en cuanto al ejercicio de éste, por ejemplo, al rebasar el límite para el género al que pertenecen, resultando ellos en definitiva excluidos de participar en el proceso electoral respectivo. Aquello puede ocurrirle incluso a las mujeres candidatas, a las que el proyecto pretende beneficiar. La aplicación rigurosa de las normas sobre cuotas puede redundar en que candidatas mujeres resulten excluidas, sin perjuicio de lo mucho que lo puedan merecer por sus propios méritos y condiciones;

11°) Que, según venimos sustentando, la existencia de estos múltiples reparos a la introducción de cuotas de género por vía simplemente legal, torna necesaria una previa reforma constitucional. En este sentido, es ilustrativo lo acontecido en países como Francia, Alemania, Italia, Portugal o Bélgica, donde la incorporación de normas sobre cuotas o, posteriormente, paridad ha requerido de explícitas enmiendas constitucionales.

En Francia, el Consejo Constitucional dictó dos sentencias en las cuales consideró que la introducción de cuotas era inconstitucional: la sentencia 82/146 (respecto de la Ley N° 82-974, del año 1982) y la 98/407 (respecto de la Ley N° 99-36, del año 1999). Ambas decisiones son previas a la Ley 99-569, mediante la cual se aprobaron las pertinentes enmiendas a la Constitución francesa. Se incorporó un párrafo final a su artículo 3° (ahora en el artículo 1°), estableciendo que la ley favorecerá el igual acceso a las mujeres y los hombres a los mandatos electorales y cargos electivos, y complementariamente y asimismo se modificó el artículo 4° de la Constitución, estableciéndose que los partidos políticos deben contribuir a la implementación del principio de igual acceso, ya descrito;

12°) Que, en el primero de los fallos aludidos, 82/146, el Consejo Constitucional francés sostuvo que:

“6. Considerando que, en los términos del artículo 3 de la Constitución: la soberanía nacional le pertenece al pueblo, quien la ejerce a través de sus representantes y por medio del referéndum. Ningún sector del pueblo ni ningún individuo podrán arrogarse su ejercicio. El sufragio puede ser directo o indirecto en las condiciones previstas en la Constitución. Es siempre universal, igualitario y secreto. Son electores, de acuerdo con las condiciones dispuestas por la ley, todos los nacionales franceses mayores de edad de ambos sexos que tengan el pleno goce de sus derechos civiles y políticos. Y que en los términos del artículo 6 de la Declaración de Derechos del Hombre y el Ciudadano: Todos los ciudadanos, siendo iguales ante la ley, son igualmente elegibles para todos los honores, colocaciones y empleos públicos, conforme a sus capacidades, sin otra distinción que aquella dada por sus virtudes y talentos.

“7. Considerando que de la lectura conjunta de estos textos resulta que la calidad de ciudadano habilita para el ejercicio del derecho a voto y para la elegibilidad en condiciones idénticas para todos quienes no estén excluidos por razones de edad, incapacidad o nacionalidad, o por una razón tendiente a preservar la libertad del elector o la independencia del elegido; y que estos principios de valor constitucional se oponen a toda división en categorías de votantes o de candidatos; lo que es así para todo sufragio político (…).” (Considerandos 6° y 7°, traducción libre).

En el posterior fallo 98/407, refrendó su decisión previa, pero con posterioridad a la reforma introducida a la Constitución francesa, por la Ley 99-569. El Consejo Constitucional mutó de criterio, basado especialmente en las nuevas normas constitucionales que dicha reforma introdujo, dándole sostén constitucional a esa clase de medidas. Así, dice la decisión 2000/429: “(…) se desprende del quinto párrafo del artículo 3 de la Constitución (…) que la intención del Constituyente fue la de empoderar al legislador cualquier mecanismo que le diera entero efecto al principio de igual acceso para mujeres y hombres a los mandatos electorales y cargos electivos; para tal fin, el legislador a partir de ahora tiene el poder de adoptar disposiciones para alcanzar ese objetivo (…). Las disposiciones impugnadas de la ley se por las que se establecen las normas imperativas para la presencia de candidatos de cada sexo en las listas de candidatos en las elecciones proporcionales, están dentro de las medidas que el legislador puede adoptar a partir de ahora bajo las nuevas disposiciones del artículo 3 de la Constitución; y no violan ninguna de las reglas constitucionales o principios de que la Ley Constitucional no tenía la intención de establecer una excepción” (traducción libre).

Una postura semejante adoptó la Corte Constitucional italiana, en la Sentencia N° 422/1995, declarando inconstitucional la introducción de un sistema de cuotas. Si bien dicha Corte cambió posteriormente su criterio, al dictar la sentencia N° 43/2003, dicho cambio, como ha asentado la doctrina, “es un “revirement” en relación con la sentencia de 1995, y que en parte es consecuencia de un parámetro constitucional modificado por las leyes constitucionales No. 2 y 3 de 2001” (Olivetti, Marco (sin fecha). “Las cuotas de género en Italia, entre legislación y jurisprudencia”. Disponible en:http://www.te.gob.mx/ccje/Archivos/ponencias/marco_olivetti.pdf).

Las sentencias extranjeras y otros antecedentes sobre las cuotas de género en el derecho comparado han sido objeto de diversos estudios, destacando, entre ellos, la Tesis Doctoral de José Manuel Díaz de Valdés Juliá, titulada, “The constitutionality of electoral quotas for women”, presentada a la Universidad de Oxford, el año 2013;

ALCANCE FINAL.

13°) Que el nuevo artículo 179 bis que el proyecto agrega a la Ley N° 18.700, Orgánica Constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, se inicia como sigue: “Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo al siguiente procedimiento” (cursivas agregadas).

Lo cual implicaría remitir a un acto de la Administración una materia indelegable y que sólo puede ser objeto exclusivo de ley, toda vez que el artículo 47 de la Constitución -a propósito de la composición y generación de la Cámara de Diputados- previene cabalmente que “la ley orgánica constitucional respectiva determinará el número de diputados, los distritos electorales y la forma de su elección”;

14°) Que, sin embargo, concurrimos a declarar su constitucionalidad en el entendido que el señalado órgano colegiado del Servicio Electoral carece en este caso de competencias decisorias que le permitan sustituirse discrecionalmente al legislador, al habérsele atribuido potestades para expedir un acto de mera constancia y adecuación tras un procedimiento reglado de elaboración. No cabe, tampoco, abrigar duda alguna de que tales competencias serán rectamente ejercidas, por tal alta institución.

Al operar de esta forma, tampoco dicho Consejo Directivo aparece derogando una norma permanente de la ley, como sería la contenida en el artículo 179 anterior, que determina un número de asientos para diputados por cada distrito electoral, habida cuenta de que esta última regulación se entiende concebida como un mecanismo provisional de adjudicación.

Redactaron la sentencia, sus prevenciones y su disidencia, los Ministros que, respectivamente, las suscriben.

Comuníquese a la Cámara de Diputados, regístrese y archívese.

Rol N° 2776-15-CPR.

Sr. Carmona

Sra. Peña

Sr. Fernández

Sr. Aróstica

Sr. García

Sr. Hernández

Sr. Romero

Sra. Brahm

Sr. Letelier

Sr. Pozo

Pronunciada por el Excmo. Tribunal Constitucional, integrado por su Presidente, Ministro señor Carlos Carmona Santander, y por sus Ministros señora Marisol Peña Torres, señores Francisco Fernández Fredes, Iván Aróstica Maldonado, Gonzalo García Pino, Domingo Hernández Emparanza, Juan José Romero Guzmán, señora María Luisa Brahm Barril y señores Cristián Letelier Aguilar y Nelson Pozo Silva.

Autoriza el Secretario subrogante del Tribunal Constitucional, señor Rodrigo Pica Flores.

5. Trámite Finalización: Cámara de Diputados

5.1. Oficio de Cámara de Origen al Ejecutivo

Oficio Ley a S.E. La Presidenta de la República. Fecha 23 de abril, 2015. Oficio

VALPARAÍSO, 23 de abril de 2015

Oficio Nº 11.851

A S.E. LA PRESIDENTA DE LA REPÚBLICA

Tengo a honra poner en conocimiento de V.E. que la Cámara de Diputados, por oficio Nº11.698, de 22 de enero de 2015, remitió al Excmo. Tribunal Constitucional el proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional, correspondiente al boletín N°9326-07, en cumplimiento de lo dispuesto en el artículo 93, N°1, de la Constitución Política de la República, con el fin de someter a control preventivo de constitucionalidad los artículos 1°, 2°, 3° y 4° del proyecto de ley.

En virtud de lo anterior, el Excmo. Tribunal Constitucional, por oficio N°302-2015, de 21 de marzo de 2015, recibido el día de hoy, ha remitido la sentencia recaída en la materia, cuya copia se adjunta, señalando que los artículos 1°, 2°, 3° y 4° del proyecto de ley sometido a control, son propios de ley orgánica constitucional y constitucionales.

Por tanto, y habiéndose dado cumplimiento al control de constitucionalidad establecido en el artículo 93, Nº 1, de la Constitución Política de la República, corresponde a V.E. promulgar el siguiente:

PROYECTO DE LEY:

“Artículo 1°.- Modifícase la ley N°18.700, orgánica constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, de la manera que a continuación se señala:

1) En el artículo 3° bis:

a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, pasando el actual inciso segundo a ser tercero:

“En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.”.

b) Intercálase el siguiente inciso quinto, nuevo, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

“De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.”.

c) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “que hubieren constituido un pacto”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

d) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase “Se podrá dejar sin efecto un pacto electoral”, la frase “o una asociación con candidaturas independientes”.

2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 4° por el siguiente:

“Artículo 4°.- En el caso de las declaraciones de candidaturas para la elección de diputados y senadores, los partidos políticos o pactos electorales podrán presentar en cada distrito o circunscripción un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción de que se trate.”.

3) Sustitúyese el artículo 17 por el siguiente:

“Artículo 17.- El Consejo del Servicio Electoral, dentro de los diez días siguientes a aquel en que venza el plazo para efectuar la declaración de candidaturas, deberá dictar una resolución que se notificará al correo electrónico que los partidos políticos y candidatos independientes deberán informar en el momento de la declaración, la que se pronunciará sobre:

a) La aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 25, 48 y 50 de la Constitución Política de la República, o que se encuentren en alguna de las situaciones previstas en su artículo 57. Asimismo, deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los párrafos 1° a 3° de este título.

b) La aceptación o rechazo de la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, declaradas por cada partido político, en conformidad a lo dispuesto en los incisos cuarto y quinto del artículo 3° bis. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con el porcentaje de sexos establecido en el inciso quinto de dicho artículo.

Los partidos políticos cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, sean rechazadas en conformidad a lo dispuesto en la letra b) de este artículo, podrán corregirlas ante el Servicio Electoral dentro de los cuatro días hábiles siguientes a la fecha del despacho del correo electrónico que notifica la resolución a que alude el inciso primero, con el fin de ajustarse al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso quinto del artículo 3° bis, ya sea retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas.

Dentro de los cinco días siguientes de vencido el plazo para presentar la corrección, el Consejo del Servicio Electoral dictará una nueva resolución aceptando o rechazando las declaraciones nuevas y rechazando o aceptando, según proceda, la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputados o a senadores, según corresponda, la que deberá ser publicada dentro de tercer día en el Diario Oficial. En tal oportunidad también se publicarán en el mismo medio la aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente.”.

4) Agrégase, en el artículo 23, el siguiente inciso tercero, nuevo, pasando los actuales incisos tercero y cuarto a ser cuarto y quinto, respectivamente:

“En el caso de un pacto electoral, el orden de precedencia de los partidos dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito será el señalado por el pacto electoral en la declaración de candidaturas y, a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.

5) En el artículo 24:

a) Sustitúyese el inciso cuarto por el que sigue:

“El orden de precedencia de los candidatos de un partido y sus independientes asociados dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito será el señalado por el partido en la declaración de candidaturas y, a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.”.

b) Reemplázase, en el inciso final, la expresión “a fin de que” por “destinada a que”.

6) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

“Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme a las reglas establecidas en el procedimiento que a continuación se detalla:

1.- El Tribunal Calificador de Elecciones determinará las preferencias emitidas a favor de cada lista y de cada uno de los candidatos que la integran.

2.- Se aplicará el sistema electoral de coeficiente D´Hondt, para lo cual se procederá de la siguiente manera:

a) Los votos de cada lista se dividirán por uno, dos, tres y así sucesivamente hasta la cantidad de cargos que corresponda elegir.

b) Los números que han resultado de estas divisiones se ordenarán en orden decreciente hasta el número correspondiente a la cantidad de cargos que se eligen en cada distrito electoral o circunscripción senatorial.

c) A cada lista o pacto electoral se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b).

3.- En el caso de las listas conformadas por un solo partido político, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará electos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada lista, de acuerdo al número de cargos que le correspondan a cada una de ellas, luego de aplicar las reglas descritas precedentemente.

4.- En el caso de los pactos electorales, se aplicarán las siguientes reglas para determinar cuántos escaños le corresponden a cada uno de ellos:

a) Se calculará el total de los votos de cada partido político o, en su caso, de la suma de cada partido político y las candidaturas independientes asociadas a ese partido.

b) Se dividirá por uno, dos, tres y así sucesivamente, hasta la cantidad de cargos asignados al pacto electoral.

c) A cada partido político o, en su caso, a cada partido y las candidaturas independientes asociadas a éste, se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b) precedente.

d) El Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada partido político o, en su caso, de cada partido, considerando las candidaturas independientes asociadas éste dentro de un pacto electoral, de acuerdo a los cupos obtenidos por cada uno de ellos.

En caso de empate entre candidatos de una misma lista, o entre candidatos de distintas listas que a su vez estén empatadas, el Tribunal Calificador de Elecciones procederá en audiencia pública a efectuar un sorteo entre ellos, y proclamará elegido al que salga favorecido.”.

7) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

“Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.”.

8) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

“Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

1er distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos, que elegirá 3 diputados.

2° distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte, que elegirá 3 diputados.

3er distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal, que elegirá 5 diputados.

4° distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen, que elegirá 5 diputados.

5° distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela, que elegirá 7 diputados.

6° distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué, que elegirá 8 diputados.

7° distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca, que elegirá 8 diputados.

8° distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú, que elegirá 8 diputados.

9° distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia, que elegirá 7 diputados.

10° distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín y La Granja, que elegirá 8 diputados.

11° distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén, que elegirá 6 diputados.

12° distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana, que elegirá 7 diputados.

13° distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo, que elegirá 5 diputados.

14° distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué, San Pedro y Padre Hurtado, que elegirá 6 diputados.

15° distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa, que elegirá 5 diputados.

16° distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones, que elegirá 4 diputados.

17° distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael, que elegirá 7 diputados.

18° distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco, que elegirá 4 diputados.

19° distrito, constituido por las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ránquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel, que elegirá 5 diputados.

20° distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana, que elegirá 8 diputados.

21er distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja, que elegirá 5 diputados.

22° distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino, que elegirá 4 diputados.

23er distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén, que elegirá 7 diputados.

24° distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco, que elegirá 5 diputados.

25° distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos, que elegirá 4 diputados.

26° distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena, que elegirá 5 diputados.

27° distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel, que elegirá 3 diputados.

28° distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica, que elegirá 3 diputados.

El número de diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis.”.

9) Agrégase el siguiente artículo 179 bis:

“Artículo 179 bis.- Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con el siguiente procedimiento:

a) Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consistirá en distribuir a prorrata los cargos entre los distritos electorales, de acuerdo a la fórmula dispuesta en el artículo 109 bis de esta ley.

b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 8 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al de la realización del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con aquel en que se celebran elecciones de diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.

d) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes.

Dentro de los cinco días siguientes a la publicación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral aplicó las letras a) y b) de este artículo.

Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de febrero del año de que se trate.”.

10) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

“Artículo 180.- El Senado se compone de 50 miembros.

Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

1a circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, 2 senadores.

2a circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, 2 senadores.

3a circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 3 senadores.

4a circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, 2 senadores.

5a circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, 3 senadores.

6a circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, 5 senadores.

7a circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 5 senadores.

8a circunscripción, constituida por la VI Región de O´Higgins, 3 senadores.

9a circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, 5 senadores.

10a circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, 5 senadores.

11a circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 5 senadores.

12a circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 3 senadores.

13a circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, 3 senadores.

14a circunscripción, constituida por la XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, 2 senadores.

15a circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 2 senadores.”.

11) Derógase el artículo 181.

12) Agrégase el siguiente artículo 23 transitorio:

“Artículo 23.- La regla especial del artículo 3° bis, inciso quinto, sólo tendrá aplicación en los procesos electorales parlamentarios de 2017, 2021, 2025 y 2029.”

13) Agrégase el siguiente artículo 24 transitorio:

“Artículo 24.- Para los efectos de completar la nueva integración del Senado de la República, en las elecciones parlamentarias que deben celebrarse en noviembre de 2017 corresponderá que se renueven completamente las circunscripciones que corresponden a regiones impares.

En el caso de las circunscripciones que corresponden a las regiones pares y Metropolitana, los parlamentarios elegidos en 2013 seguirán en sus funciones hasta completar su período de ocho años. En las elecciones de 2021, estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde.”.

14) Agrégase el siguiente artículo 25 transitorio:

“Artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.”.

Artículo 2°.- Modifícase la ley N°19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, de la manera que a continuación se señala:

1) Intercálase entre el artículo 58 y el artículo transitorio el siguiente epígrafe: “Disposiciones transitorias.”.

2) Agrégase el siguiente artículo segundo transitorio, pasando el actual artículo único transitorio, a ser artículo primero:

“Artículo segundo.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y sólo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hayan sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a los que pertenezcan tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento por cada una de ellas.

Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.”.

3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a senadoras y diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 unidades de fomento por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.”.

Artículo 3°.- Modifícase la ley N° 18.603, orgánica constitucional de Partidos Políticos, de la manera que a continuación se señala:

1) Sustitúyese el inciso primero del artículo 3° por el siguiente:

“Artículo 3°.- Los partidos políticos existirán como tales cuando se hubieren constituido legalmente en al menos una de las regiones en que se divide políticamente el país.”.

2) En el artículo 6°:

a) Sustitúyese en el inciso primero la cifra “0,5” por el guarismo “0,25”.

b) Agrégase en el inciso segundo, a continuación del punto aparte, que ha pasado a ser punto seguido, la siguiente oración: “Los notarios no podrán negarse a recibir la declaración a que hace referencia este artículo y no podrán cobrar por este servicio.”.

3) Sustitúyese el inciso primero del artículo 7° por el siguiente:

“Artículo 7°.- Cumplidos los requisitos a que se refieren los artículos 5° y 6°, y reunido el número de afiliados a que alude este último artículo en una de las regiones en que se divide políticamente el país, se solicitará al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos. La solicitud deberá ser firmada por el presidente y por el secretario del partido en formación.”.

4) En el artículo 26:

a) Suprímese en el literal d) la oración “la aprobación de un pacto electoral en elecciones de Parlamentarios o su retiro del mismo, y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal”.

b) Incorpórase el siguiente literal e), pasando los actuales literales e) y f) a ser f) y g) respectivamente:

“e) Aprobar un pacto electoral en las elecciones de parlamentarios o su retiro del mismo y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal;”.

5) En el artículo 42:

a) Sustitúyese su número 2° por el siguiente:

“2°.- Por no alcanzar en la región en que está legalmente constituido el 2,5 por ciento de los sufragios válidamente emitidos en la última elección de diputados. En el caso de los partidos que se encuentren inscritos en más de una región, la disolución procederá cuando no hayan alcanzado el indicado umbral del 2,5 por ciento en más de la mitad de dichas regiones.”.

b) Sustitúyese el inciso final por los siguientes incisos:

“No obstante, si un partido político incurre en la situación prevista en el número 2° de este artículo, pero elige al menos dos parlamentarios, sean diputados o senadores, conservará su calidad de tal.

Si incurre en la situación prevista en el número 4° en una o más regiones, pero mantiene el mínimo de ellas exigido por la ley, conservará su calidad de tal, pero no podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2° en aquellas donde su número de afiliados haya disminuido en más del 50 por ciento. El Director del Servicio Electoral anotará esta circunstancia al margen de la respectiva inscripción en el Registro de Partidos Políticos.”.

Artículo 4°.- Modifícase la ley N° 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, en los siguientes términos:

1) Sustitúyese el inciso segundo del artículo 7° por el siguiente:

“En la elección primaria para la nominación de candidatos a los cargos de parlamentarios, para cada territorio electoral, los partidos políticos podrán participar:

a) En forma individual, sin haber suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos.

b) En forma individual, habiendo suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos dentro del pacto.

c) En conjunto con otros partidos con los cuales ha suscrito un pacto electoral, y con el objeto de determinar la totalidad de los candidatos de dicho pacto.”.

2) Introdúcense las siguientes modificaciones en el artículo 30:

a) Reemplázase su inciso segundo por el que sigue:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen de la forma señalada en las letras a) o b) del inciso segundo del artículo 7°, serán nominados como candidatos para la elección definitiva en cada territorio electoral las mayores votaciones individuales hasta completar el número de cargos definido en la declaración de candidaturas conforme al inciso primero del artículo 16.”.

b) Incorpórase el siguiente inciso final:

“En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen en pacto electoral de la forma señalada en la letra c) del inciso segundo del artículo 7°, los candidatos nominados para la elección definitiva en cada territorio electoral serán determinados conforme al procedimiento señalado en el artículo 109 bis de la ley N° 18.700, considerando para estos efectos que constituyen una lista los candidatos de un mismo partido y sus candidaturas independientes asociadas.”.

3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

“Artículo tercero.- El partido político que decidiere someterse al sistema de elecciones primarias contemplado en los artículos 3º y siguientes de la presente ley para los períodos electorales parlamentarios de los años 2017, 2021, 2025 y 2029 sólo podrá someter a dicho procedimiento hasta el cuarenta por ciento del total de candidaturas a diputado o senador que pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral.”.

Artículo 5°.- Esta ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la partida 02, Congreso Nacional, de la ley de Presupuestos para el Sector Público.

Lo dispuesto en el artículo 2° de esta ley se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la ley de Presupuestos respectiva.”.

*****

Adjunto a V.E. copia de la sentencia respectiva.

Dios guarde a V.E.

MARCO ANTONIO NÚÑEZ LOZANO

Presidente de la Cámara de Diputados

MIGUEL LANDEROS PERKIĆ

Secretario General de la Cámara de Diputados

6. Publicación de Ley en Diario Oficial

6.1. Ley Nº 20.840

Tipo Norma
:
Ley 20840
URL
:
http://www.leychile.cl/N?i=1077039&t=0
Fecha Promulgación
:
27-04-2015
URL Corta
:
https://bcn.cl/WKmayG
Organismo
:
MINISTERIO DEL INTERIOR Y SEGURIDAD PÚBLICA
Título
:
SUSTITUYE EL SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UNO DE CARÁCTER PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL
Fecha Publicación
:
05-05-2015

LEY NÚM. 20.840

     

SUSTITUYE EL SISTEMA ELECTORAL BINOMINAL POR UNO DE CARÁCTER PROPORCIONAL INCLUSIVO Y FORTALECE LA REPRESENTATIVIDAD DEL CONGRESO NACIONAL

     

    Teniendo presente que el H. Congreso Nacional ha dado su aprobación al siguiente

     

    Proyecto de ley:

     

    "Artículo 1º.- Modifícase la ley Nº18.700, orgánica constitucional sobre Votaciones Populares y Escrutinios, de la manera que a continuación se señala:

     

    1) En el artículo 3º bis:

     

    a) Intercálase el siguiente inciso segundo, nuevo, pasando el actual inciso segundo a ser tercero:

    "En las elecciones de diputados y senadores, al interior de cada pacto electoral, los partidos políticos integrantes de dicho pacto podrán, cada uno, asociarse con candidatos independientes.".

    b) Intercálase el siguiente inciso quinto, nuevo, pasando los actuales incisos cuarto y quinto a ser sexto y séptimo, respectivamente:

    "De la totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador declaradas por los partidos políticos, hayan o no pactado, ni los candidatos hombres ni las candidatas mujeres podrán superar el sesenta por ciento del total respectivo. Este porcentaje será obligatorio y se calculará con independencia de la forma de nominación de las candidaturas. La infracción de lo señalado precedentemente acarreará el rechazo de todas las candidaturas declaradas a diputados o a senadores, según corresponda, del partido que no haya cumplido con este requisito.".

    c) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase "que hubieren constituido un pacto", la frase "o una asociación con candidaturas independientes".

    d) Agrégase en el inciso final, a continuación de la frase "Se podrá dejar sin efecto un pacto electoral", la frase "o una asociación con candidaturas independientes".

     

    2) Sustitúyese el inciso primero del artículo 4º por el siguiente:

     

    "Artículo 4º.- En el caso de las declaraciones de candidaturas para la elección de diputados y senadores, los partidos políticos o pactos electorales podrán presentar en cada distrito o circunscripción un máximo de candidatos equivalente al número inmediatamente superior al del número de parlamentarios que corresponda elegir en el distrito o circunscripción de que se trate.".

     

    3) Sustitúyese el artículo 17 por el siguiente:

     

    "Artículo 17.- El Consejo del Servicio Electoral, dentro de los diez días siguientes a aquel en que venza el plazo para efectuar la declaración de candidaturas, deberá dictar una resolución que se notificará al correo electrónico que los partidos políticos y candidatos independientes deberán informar en el momento de la declaración, la que se pronunciará sobre:

    a) La aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los artículos 25, 48 y 50 de la Constitución Política de la República, o que se encuentren en alguna de las situaciones previstas en su artículo 57. Asimismo, deberá rechazar las declaraciones de candidaturas que no cumplan con los requisitos establecidos en los párrafos 1º a 3º de este título.

    b) La aceptación o rechazo de la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, declaradas por cada partido político, en conformidad a lo dispuesto en los incisos cuarto y quinto del artículo 3º bis. El Consejo del Servicio Electoral deberá rechazar la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, realizadas por los partidos políticos, estén o no en pacto electoral, que no cumplan con el porcentaje de sexos establecido en el inciso quinto de dicho artículo.

    Los partidos políticos cuya totalidad de declaraciones de candidaturas a diputado o senador, según corresponda, sean rechazadas en conformidad a lo dispuesto en la letra b) de este artículo, podrán corregirlas ante el Servicio Electoral dentro de los cuatro días hábiles siguientes a la fecha del despacho del correo electrónico que notifica la resolución a que alude el inciso primero, con el fin de ajustarse al porcentaje de sexos dispuesto en el inciso quinto del artículo 3º bis, ya sea retirando declaraciones de candidaturas o declarando otras nuevas.

    Dentro de los cinco días siguientes de vencido el plazo para presentar la corrección, el Consejo del Servicio Electoral dictará una nueva resolución aceptando o rechazando las declaraciones nuevas y rechazando o aceptando, según proceda, la totalidad de las declaraciones de candidaturas a diputados o a senadores, según corresponda, la que deberá ser publicada dentro de tercer día en el Diario Oficial. En tal oportunidad también se publicarán en el mismo medio la aceptación o rechazo de cada una de las declaraciones de candidaturas a parlamentarios declaradas por cada partido político, pacto electoral o candidatura independiente.".

     

    4) Agrégase, en el artículo 23, el siguiente inciso tercero, nuevo, pasando los actuales incisos tercero y cuarto a ser cuarto y quinto, respectivamente:

     

    "En el caso de un pacto electoral, el orden de precedencia de los partidos dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito será el señalado por el pacto electoral en la declaración de candidaturas y, a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.".

     

    5) En el artículo 24:

     

    a) Sustitúyese el inciso cuarto por el que sigue:

    "El orden de precedencia de los candidatos de un partido y sus independientes asociados dentro de la cédula electoral para cada circunscripción o distrito será el señalado por el partido en la declaración de candidaturas y, a falta de éste, será resuelto por el Servicio Electoral mediante sorteo.".

    b) Reemplázase, en el inciso final, la expresión "a fin de que" por "destinada a que".

     

    6) Sustitúyese el artículo 109 bis por el siguiente:

     

    "Artículo 109 bis.- En el caso de elecciones de diputados y senadores, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos, conforme a las reglas establecidas en el procedimiento que a continuación se detalla:

    1.- El Tribunal Calificador de Elecciones determinará las preferencias emitidas a favor de cada lista y de cada uno de los candidatos que la integran.

    2.- Se aplicará el sistema electoral de coeficiente D'Hondt, para lo cual se procederá de la siguiente manera:

    a) Los votos de cada lista se dividirán por uno, dos, tres y así sucesivamente hasta la cantidad de cargos que corresponda elegir.

    b) Los números que han resultado de estas divisiones se ordenarán en orden decreciente hasta el número correspondiente a la cantidad de cargos que se eligen en cada distrito electoral o circunscripción senatorial.

    c) A cada lista o pacto electoral se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b).

    3.- En el caso de las listas conformadas por un solo partido político, el Tribunal Calificador de Elecciones proclamará electos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada lista, de acuerdo al número de cargos que le correspondan a cada una de ellas, luego de aplicar las reglas descritas precedentemente.

    4.- En el caso de los pactos electorales, se aplicarán las siguientes reglas para determinar cuántos escaños le corresponden a cada uno de ellos:

    a) Se calculará el total de los votos de cada partido político o, en su caso, de la suma de cada partido político y las candidaturas independientes asociadas a ese partido.

    b) Se dividirá por uno, dos, tres y así sucesivamente, hasta la cantidad de cargos asignados al pacto electoral.

    c) A cada partido político o, en su caso, a cada partido y las candidaturas independientes asociadas a éste, se le atribuirán tantos escaños como números tenga en la escala descrita en la letra b) precedente.

    d) El Tribunal Calificador de Elecciones proclamará elegidos a los candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías individuales de cada partido político o, en su caso, de cada partido, considerando las candidaturas independientes asociadas éste dentro de un pacto electoral, de acuerdo a los cupos obtenidos por cada uno de ellos.

    En caso de empate entre candidatos de una misma lista, o entre candidatos de distintas listas que a su vez estén empatadas, el Tribunal Calificador de Elecciones procederá en audiencia pública a efectuar un sorteo entre ellos, y proclamará elegido al que salga favorecido.".

     

    7) Sustitúyese el artículo 178 por el siguiente:

     

    "Artículo 178.- Para la elección de los miembros de la Cámara de Diputados habrá veintiocho distritos electorales, cada uno de los cuales elegirá el número de diputados que se indica en el artículo siguiente.".

     

    8) Sustitúyese el artículo 179 por el siguiente:

     

    "Artículo 179.- Los distritos electorales serán los siguientes:

    1er distrito, constituido por las comunas de Arica, Camarones, Putre y General Lagos, que elegirá 3 diputados.

    2º distrito, constituido por las comunas de Iquique, Alto Hospicio, Huara, Camiña, Colchane, Pica y Pozo Almonte, que elegirá 3 diputados.

    3er distrito, constituido por las comunas de Tocopilla, María Elena, Calama, Ollagüe, San Pedro de Atacama, Antofagasta, Mejillones, Sierra Gorda y Taltal, que elegirá 5 diputados.

    4º distrito, constituido por las comunas de Chañaral, Diego de Almagro, Copiapó, Caldera, Tierra Amarilla, Vallenar, Freirina, Huasco y Alto del Carmen, que elegirá 5 diputados.

    5º distrito, constituido por las comunas de La Serena, La Higuera, Vicuña, Paihuano, Andacollo, Coquimbo, Ovalle, Río Hurtado, Combarbalá, Punitaqui, Monte Patria, Illapel, Salamanca, Los Vilos y Canela, que elegirá 7 diputados.

    6º distrito, constituido por las comunas de La Ligua, Petorca, Cabildo, Papudo, Zapallar, Puchuncaví, Quintero, Nogales, Calera, La Cruz, Quillota, Hijuelas, Los Andes, San Esteban, Calle Larga, Rinconada, San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Llaillay, Catemu, Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué, que elegirá 8 diputados.

    7º distrito, constituido por las comunas de Valparaíso, Juan Fernández, Isla de Pascua, Viña del Mar, Concón, San Antonio, Santo Domingo, Cartagena, El Tabo, El Quisco, Algarrobo y Casablanca, que elegirá 8 diputados.

    8º distrito, constituido por las comunas de Colina, Lampa, Tiltil, Quilicura, Pudahuel, Estación Central, Cerrillos y Maipú, que elegirá 8 diputados.

    9º distrito, constituido por las comunas de Conchalí, Renca, Huechuraba, Cerro Navia, Quinta Normal, Lo Prado, Recoleta e Independencia, que elegirá 7 diputados.

    10º distrito, constituido por las comunas de Providencia, Ñuñoa, Santiago, Macul, San Joaquín y La Granja, que elegirá 8 diputados.

    11º distrito, constituido por las comunas de Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea, La Reina y Peñalolén, que elegirá 6 diputados.

    12º distrito, constituido por las comunas de La Florida, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Pintana, que elegirá 7 diputados.

    13º distrito, constituido por las comunas de El Bosque, La Cisterna, San Ramón, Pedro Aguirre Cerda, San Miguel y Lo Espejo, que elegirá 5 diputados.

    14º distrito, constituido por las comunas de San Bernardo, Buin, Paine, Calera de Tango, Talagante, Peñaflor, El Monte, Isla de Maipo, Melipilla, María Pinto, Curacaví, Alhué, San Pedro y Padre Hurtado, que elegirá 6 diputados.

    15º distrito, constituido por las comunas de Rancagua, Mostazal, Graneros, Codegua, Machalí, Requínoa, Rengo, Olivar, Doñihue, Coinco, Coltauco, Quinta de Tilcoco y Malloa, que elegirá 5 diputados.

    16º distrito, constituido por las comunas de San Fernando, Chimbarongo, San Vicente, Peumo, Pichidegua, Las Cabras, Placilla, Nancagua, Chépica, Santa Cruz, Lolol, Pumanque, Palmilla, Peralillo, Navidad, Litueche, La Estrella, Pichilemu, Marchigüe y Paredones, que elegirá 4 diputados.

    17º distrito, constituido por las comunas de Curicó, Teno, Romeral, Molina, Sagrada Familia, Hualañé, Licantén, Vichuquén, Rauco, Talca, Curepto, Constitución, Empedrado, Pencahue, Maule, San Clemente, Pelarco, Río Claro y San Rafael, que elegirá 7 diputados.

    18º distrito, constituido por las comunas de Linares, Colbún, San Javier, Villa Alegre, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral, Cauquenes, Pelluhue y Chanco, que elegirá 4 diputados.

    19º distrito, constituido por las comunas de Chillán, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay, Chillán Viejo, San Fabián, Ñiquén, San Carlos, San Nicolás, Ninhue, Quirihue, Cobquecura, Treguaco, Portezuelo, Coelemu, Ránquil, Quillón, Bulnes, Cabrero y Yumbel, que elegirá 5 diputados.

    20º distrito, constituido por las comunas de Talcahuano, Hualpén, Concepción, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Tomé, Penco, Florida, Hualqui, Coronel y Santa Juana, que elegirá 8 diputados.

    21er distrito, constituido por las comunas de Lota, Lebu, Arauco, Curanilahue, Los Álamos, Cañete, Contulmo, Tirúa, Los Ángeles, Tucapel, Antuco, Quilleco, Alto Biobío, Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Negrete, Nacimiento, San Rosendo y Laja, que elegirá 5 diputados.

    22º distrito, constituido por las comunas de Angol, Renaico, Collipulli, Ercilla, Los Sauces, Purén, Lumaco, Traiguén, Victoria, Curacautín, Lonquimay, Melipeuco, Vilcún, Lautaro, Perquenco y Galvarino, que elegirá 4 diputados.

    23er distrito, constituido por las comunas de Temuco, Padre Las Casas, Carahue, Nueva Imperial, Saavedra, Cholchol, Teodoro Schmidt, Freire, Pitrufquén, Cunco, Pucón, Curarrehue, Villarrica, Loncoche, Gorbea y Toltén, que elegirá 7 diputados.

    24º distrito, constituido por las comunas de Valdivia, Lanco, Mariquina, Máfil, Corral, Panguipulli, Los Lagos, Futrono, Lago Ranco, Río Bueno, La Unión y Paillaco, que elegirá 5 diputados.

    25º distrito, constituido por las comunas de Osorno, San Juan de la Costa, San Pablo, Puyehue, Río Negro, Purranque, Puerto Octay, Fresia, Frutillar, Llanquihue, Puerto Varas y Los Muermos, que elegirá 4 diputados.

    26º distrito, constituido por las comunas de Puerto Montt, Cochamó, Maullín, Calbuco, Castro, Ancud, Quemchi, Dalcahue, Curaco de Vélez, Quinchao, Puqueldón, Chonchi, Queilén, Quellón, Chaitén, Hualaihué, Futaleufú y Palena, que elegirá 5 diputados.

    27º distrito, constituido por las comunas de Coihaique, Lago Verde, Aisén, Cisnes, Guaitecas, Chile Chico, Río Ibáñez, Cochrane, O'Higgins y Tortel, que elegirá 3 diputados.

    28º distrito, constituido por las comunas de Natales, Torres del Paine, Punta Arenas, Río Verde, Laguna Blanca, San Gregorio, Porvenir, Primavera, Timaukel, Cabo de Hornos y Antártica, que elegirá 3 diputados.

    El número de diputados que se elegirá por distrito se actualizará en los plazos y en la forma que prescribe el artículo 179 bis.".

     

    9) Agrégase el siguiente artículo 179 bis:

     

    "Artículo 179 bis.- Corresponderá al Consejo Directivo del Servicio Electoral actualizar, cada diez años, la asignación de los 155 escaños de diputados entre los 28 distritos establecidos en el artículo anterior, de acuerdo con el siguiente procedimiento:

    a) Los 155 escaños se distribuirán proporcionalmente entre los 28 distritos en consideración a la población de cada uno de ellos, en base a los datos proporcionados por el último censo oficial de la población realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas. Dicha proporcionalidad consistirá en distribuir a prorrata los cargos entre los distritos electorales, de acuerdo a la fórmula dispuesta en el artículo 109 bis de esta ley.

    b) No obstante lo anterior, ningún distrito podrá elegir menos de 3 ni más de 8 diputados. En el caso que, en virtud del cálculo dispuesto en la letra a), uno o más distritos superen dicho límite, los cargos excedentes volverán a distribuirse en forma proporcional a la población entre los distritos que no hubieren alcanzado el tope.

    c) Para los efectos de proceder a la actualización indicada, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año subsiguiente al de la realización del último censo oficial. En caso que el año de esta actualización coincidiera con aquel en que se celebran elecciones de diputados, el Consejo Directivo del Servicio Electoral se constituirá especialmente el tercer día hábil del mes de abril del año inmediatamente anterior a dicha elección.

    d) El Consejo Directivo del Servicio Electoral tendrá un plazo de diez días para decidir la nueva distribución de escaños. Adoptado el acuerdo, éste se publicará en el Diario Oficial y se notificará a la Cámara de Diputados, todo ello dentro de las cuarenta y ocho horas siguientes.

    Dentro de los cinco días siguientes a la publicación señalada, cualquier ciudadano podrá recurrir ante el Tribunal Calificador de Elecciones objetando la forma en que el Consejo Directivo del Servicio Electoral aplicó las letras a) y b) de este artículo.

    Requerido, el Tribunal dispondrá de diez días para resolver si confirma o modifica el acuerdo del Consejo Directivo del Servicio Electoral. Contra esta decisión no procederá recurso alguno.

    En cualquier caso, con o sin recurso, la determinación definitiva de la asignación de escaños deberá publicarse en el Diario Oficial en los primeros diez días del mes de febrero del año de que se trate.".

     

    10) Sustitúyese el artículo 180 por el siguiente:

     

    "Artículo 180.- El Senado se compone de 50 miembros.

    Para la elección de los senadores, cada región constituirá una circunscripción senatorial.

    Cada circunscripción elegirá el número de senadores que se indica a continuación:

    1ª circunscripción, constituida por la XV Región de Arica y Parinacota, 2 senadores.

    2ª circunscripción, constituida por la I Región de Tarapacá, 2 senadores.

    3ª circunscripción, constituida por la II Región de Antofagasta, 3 senadores.

    4ª circunscripción, constituida por la III Región de Atacama, 2 senadores.

    5ª circunscripción, constituida por la IV Región de Coquimbo, 3 senadores.

    6ª circunscripción, constituida por la V Región de Valparaíso, 5 senadores.

    7ª circunscripción, constituida por la Región Metropolitana de Santiago, 5 senadores.

    8ª circunscripción, constituida por la VI Región de O'Higgins, 3 senadores.

    9ª circunscripción, constituida por la VII Región del Maule, 5 senadores.

    10ª circunscripción, constituida por la VIII Región del Bío Bío, 5 senadores.

    11ª circunscripción, constituida por la IX Región de La Araucanía, 5 senadores.

    12ª circunscripción, constituida por la XIV Región de Los Ríos, 3 senadores.

    13ª circunscripción, constituida por la X Región de Los Lagos, 3 senadores.

    14ª circunscripción, constituida por la XI Región de Aisén del General Carlos Ibáñez del Campo, 2 senadores.

    15ª circunscripción, constituida por la XII Región de Magallanes y de la Antártica Chilena, 2 senadores.".

     

    11) Derógase el artículo 181.

     

    12) Agrégase el siguiente artículo 23 transitorio:

     

    "Artículo 23.- La regla especial del artículo 3º bis, inciso quinto, sólo tendrá aplicación en los procesos electorales parlamentarios de 2017, 2021, 2025 y 2029."

     

    13) Agrégase el siguiente artículo 24 transitorio:

     

    "Artículo 24.- Para los efectos de completar la nueva integración del Senado de la República, en las elecciones parlamentarias que deben celebrarse en noviembre de 2017 corresponderá que se renueven completamente las circunscripciones que corresponden a regiones impares.

    En el caso de las circunscripciones que corresponden a las regiones pares y Metropolitana, los parlamentarios elegidos en 2013 seguirán en sus funciones hasta completar su período de ocho años. En las elecciones de 2021, estas circunscripciones elegirán al total de los senadores que les corresponde.".

     

    14) Agrégase el siguiente artículo 25 transitorio:

     

    "Artículo 25.- La facultad del Consejo Directivo del Servicio Electoral a que se refiere el artículo 179 bis se ejercerá por primera vez el año subsiguiente al del censo oficial del año 2022.".

 

    Artículo 2º.- Modifícase la ley Nº19.884 sobre Transparencia, Límite y Control del Gasto Electoral, de la manera que a continuación se señala:

     

    1) Intercálase entre el artículo 58 y el artículo transitorio el siguiente epígrafe: "Disposiciones transitorias.".

     

    2) Agrégase el siguiente artículo segundo transitorio, pasando el actual artículo único transitorio, a ser artículo primero:

     

    "Artículo segundo.- Sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley, y sólo para los efectos de las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, en el caso de las mujeres candidatas a diputadas y a senadoras que hayan sido proclamadas electas por el Tribunal Calificador de Elecciones, los partidos políticos a los que pertenezcan tendrán derecho a un monto de quinientas unidades de fomento por cada una de ellas.

    Con cargo a dichos recursos, los partidos políticos podrán implementar programas y desarrollar actividades de fomento a la inclusión y participación de las mujeres en política.".

     

    3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

     

    "Artículo tercero.- Para las elecciones parlamentarias de 2017, 2021, 2025 y 2029, las candidatas a senadoras y diputadas tendrán derecho a un reembolso adicional de sus gastos electorales, de cargo fiscal, de 0,0100 unidades de fomento por cada voto obtenido, en conformidad al procedimiento dispuesto en el artículo 15 de esta ley.".

   

    Artículo 3º.- Modifícase la ley Nº 18.603, orgánica constitucional de Partidos Políticos, de la manera que a continuación se señala:

     

    1) Sustitúyese el inciso primero del artículo 3º por el siguiente:

    "Artículo 3º.- Los partidos políticos existirán como tales cuando se hubieren constituido legalmente en al menos una de las regiones en que se divide políticamente el país.".

     

    2) En el artículo 6º:

     

    a) Sustitúyese en el inciso primero la cifra "0,5" por el guarismo "0,25".

    b) Agrégase en el inciso segundo, a continuación del punto aparte, que ha pasado a ser punto seguido, la siguiente oración: "Los notarios no podrán negarse a recibir la declaración a que hace referencia este artículo y no podrán cobrar por este servicio.".

     

    3) Sustitúyese el inciso primero del artículo 7º por el siguiente:

     

    "Artículo 7º.- Cumplidos los requisitos a que se refieren los artículos 5º y 6º, y reunido el número de afiliados a que alude este último artículo en una de las regiones en que se divide políticamente el país, se solicitará al Director del Servicio Electoral que proceda a inscribir el partido en el Registro de Partidos Políticos. La solicitud deberá ser firmada por el presidente y por el secretario del partido en formación.".

     

    4) En el artículo 26:

     

    a) Suprímese en el literal d) la oración "la aprobación de un pacto electoral en elecciones de Parlamentarios o su retiro del mismo, y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal".

    b) Incorpórase el siguiente literal e), pasando los actuales literales e) y f) a ser f) y g) respectivamente:

    "e) Aprobar un pacto electoral en las elecciones de parlamentarios o su retiro del mismo y la persona del candidato a la presidencia de la República, proclamándola oportunamente como tal;".

     

    5) En el artículo 42:

     

    a) Sustitúyese su número 2º por el siguiente:

    "2º.- Por no alcanzar en la región en que está legalmente constituido el 2,5 por ciento de los sufragios válidamente emitidos en la última elección de diputados. En el caso de los partidos que se encuentren inscritos en más de una región, la disolución procederá cuando no hayan alcanzado el indicado umbral del 2,5 por ciento en más de la mitad de dichas regiones.".

    b) Sustitúyese el inciso final por los siguientes incisos:

    "No obstante, si un partido político incurre en la situación prevista en el número 2º de este artículo, pero elige al menos dos parlamentarios, sean diputados o senadores, conservará su calidad de tal.

    Si incurre en la situación prevista en el número 4º en una o más regiones, pero mantiene el mínimo de ellas exigido por la ley, conservará su calidad de tal, pero no podrá desarrollar las actividades señaladas en el inciso primero del artículo 2º en aquellas donde su número de afiliados haya disminuido en más del 50 por ciento. El Director del Servicio Electoral anotará esta circunstancia al margen de la respectiva inscripción en el Registro de Partidos Políticos.".

 

    Artículo 4º.- Modifícase la ley Nº 20.640, que establece el sistema de elecciones primarias para la nominación de candidatos a Presidente de la República, Parlamentarios y Alcaldes, en los siguientes términos:

     

    1) Sustitúyese el inciso segundo del artículo 7º por el siguiente:

    "En la elección primaria para la nominación de candidatos a los cargos de parlamentarios, para cada territorio electoral, los partidos políticos podrán participar:

    a) En forma individual, sin haber suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos.

    b) En forma individual, habiendo suscrito un pacto electoral con otros partidos, y con el objeto de determinar uno o más de sus candidatos dentro del pacto.

    c) En conjunto con otros partidos con los cuales ha suscrito un pacto electoral, y con el objeto de determinar la totalidad de los candidatos de dicho pacto.".

     

    2) Introdúcense las siguientes modificaciones en el artículo 30:

     

    a) Reemplázase su inciso segundo por el que sigue:

    "En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen de la forma señalada en las letras a) o b) del inciso segundo del artículo 7º, serán nominados como candidatos para la elección definitiva en cada territorio electoral las mayores votaciones individuales hasta completar el número de cargos definido en la declaración de candidaturas conforme al inciso primero del artículo 16.".

    b) Incorpórase el siguiente inciso final:

    "En el caso de las elecciones parlamentarias y cuando los partidos políticos participen en pacto electoral de la forma señalada en la letra c) del inciso segundo del artículo 7º, los candidatos nominados para la elección definitiva en cada territorio electoral serán determinados conforme al procedimiento señalado en el artículo 109 bis de la ley Nº 18.700, considerando para estos efectos que constituyen una lista los candidatos de un mismo partido y sus candidaturas independientes asociadas.".

     

    3) Agrégase el siguiente artículo tercero transitorio:

     

    "Artículo tercero.- El partido político que decidiere someterse al sistema de elecciones primarias contemplado en los artículos 3º y siguientes de la presente ley para los períodos electorales parlamentarios de los años 2017, 2021, 2025 y 2029 sólo podrá someter a dicho procedimiento hasta el cuarenta por ciento del total de candidaturas a diputado o senador que pueda declarar en la elección definitiva, vayan o no en pacto electoral.".

   

    Artículo 5º.- Esta ley se financiará con cargo a los recursos contemplados en la partida 02, Congreso Nacional, de la ley de Presupuestos para el Sector Público.

    Lo dispuesto en el artículo 2º de esta ley se financiará con los recursos que en su oportunidad provea la ley de Presupuestos respectiva.".

   

    Habiéndose cumplido con lo establecido en el Nº 1º del Artículo 93 de la Constitución Política de la República y por cuanto he tenido a bien aprobarlo y sancionarlo; por tanto promúlguese y llévese a efecto como Ley de la República.

     

    Santiago, 27 de abril de 2015.- MICHELLE BACHELET JERIA, Presidenta de la República.- Rodrigo Peñailillo Briceño, Ministro del Interior y Seguridad Pública.- Alberto Arenas de Mesa, Ministro de Hacienda.- Ximena Rincón González, Ministra Secretaria General de la Presidencia.

    Lo que transcribo a Ud. para su conocimiento.- Atentamente, Mahmud Aleuy Peña y Lillo, Subsecretario del Interior.

   

    Tribunal Constitucional

     

    Proyecto de ley que sustituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo y fortalece la representatividad del Congreso Nacional, correspondiente al Boletín Nº 9326-07

     

    El Secretario subrogante del Tribunal Constitucional, quien suscribe, certifica que la Cámara de Diputados envió el proyecto de ley enunciado en el rubro, aprobado por el Congreso Nacional, a fin de que este Tribunal ejerciera el control preventivo de constitucionalidad respecto de los artículos 1º, 2º, 3º y 4º del proyecto y por sentencia de 21 de abril de 2015, en los autos Rol Nº 2776-15-CPR,

     

    Se resuelve:

     

    1º.- Que las disposiciones contenidas en los numerales 1), 2), 3), 4), 5), 6), 7), 8), 9), 10), 11), 12), 13) y 14) del artículo 1º del proyecto de ley remitido, son constitucionales.

    2º.- Que las disposiciones contenidas en los numerales 1), 2) y 3) del artículo 2º del proyecto de ley remitido, son constitucionales.

    3º.- Que las disposiciones contenidas en los numerales 1), 2), 3), 4) y 5) del artículo 3º del proyecto de ley remitido, son constitucionales.

    4º.- Que las disposiciones contenidas en los numerales 1), 2) y 3) del artículo 4º del proyecto de ley remitido, son constitucionales.

    5º.- Que no se emite pronunciamiento, en examen preventivo de constitucionalidad, respecto de la disposición contenida en el artículo 5º del proyecto de ley remitido, por no versar sobre materias propias de ley orgánica constitucional.

     

    Santiago, 21 de abril de 2015.- Rodrigo Pica Flores, Secretario (S).